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Tema 4: BIODIVERSIDAD: CONCEPTO Y SUS PRINCIPALES AMENAZAS

Biodiversidad es un término acuñado en los años 80 como contracción de “diversidad biológica”, y se refiere a la
variedad y variabilidad de todos los organismos vivos y sus hábitats, así como a las relaciones entre los organismos y
entre estos y sus ecosistemas.

Por lo tanto, el término comprende varias escalas biológicas, y da lugar a los tres tipos de biodiversidad:

- Diversidad genética: Variabilidad en el contenido genético de las especies.


- Diversidad de especies: Variabilidad en el conjunto de especies que integran grupos funcionales y
comunidades completas (entre especies vaya).
- Diversidad de ecosistemas: en el conjunto de comunidades de un paisaje o región.

Como unidad de medida de la biodiversidad se utiliza el número de especies debido a varias razones:

- La riqueza de especies refleja directamente la biodiversidad.


- Especie es un término prácticamente universal, que todo el mundo entiende.
- Las especies son, en su mayoría, fáciles de detectar y cuantificar.
- Existen datos sobre el número de especies de casi todos los seres, aunque para el caso de algunos hongos,
insectos y otros invertebrados no se conozca su taxonomía completa (se conocen las especies, pero no las
familias, por ejemplo)

Diversidad genética:

Este tipo de biodiversidad se refiere directamente a la variación hereditaria dentro de poblaciones de una misma
especie o grupo de especies.

Cada miembro de una especie, animal o vegetal, difiere de los otros individuos de la misma especie en su
composición genética. Todos los individuos varían genéticamente en algún grado.

Esto es debido al gran número de combinaciones posibles que pueden formarse entre los genes, cuyo resultado es
la exteriorización de características específicas e individuales.

Además, la diversidad genética es la base de la adaptación a las condiciones locales, ya que dependiendo de las
variaciones que tenga cada ser, estos serán capaces de adaptarse o no a su entorno. Por lo tanto, es una condición
necesaria para la evolución y, a mayor variabilidad genética, mayor cambio evolutivo.

Diversidad de especies:

Es la variedad de especies que existe dentro de un hábitat o una región, es decir, los tipos de animales, plantas, etc.,
que existen en un territorio.

Como ya se ha mencionado, las especies son la medida de la diversidad biológica. Al número de especies diferentes
en un área determinada se le conoce como riqueza de especies.

Dependiendo de las características que compartan, estas especies se agrupan en familias.

Dentro de este tipo de biodiversidad toman parte diferentes procesos:

- Especiación: Proceso mediante el que se generan nuevas especies en un largo periodo de tiempo. Esto
puede ser causado por la separación geográfica, la mutación, etc.
- Extinción: Disminuye la diversidad de especies.
- Inmigración/Emigración: Puede aumentar o disminuir la diversidad local.
Diversidad de ecosistemas:

Se refiere a la variación en los tipos de hábitats de especies.

En nuestro planeta existe una gran variedad de ecosistemas, cada uno de ellos con su propio grupo de especies,
vinculadas a las características del hábitat y al papel que juegan dentro de este.

La diversidad de ecosistemas se puede describir para una región geográfica específica, o una entidad política como
un país o estado. Por lo tanto, es difícil de medir, ya que los ecosistemas no tienen fronteras específicas que dividan
unos de otros.

Otros tipos de biodiversidad:

Aparte de los tres tipos básicos de biodiversidad, existen los definidos por Led Whittaker en 1960:

- Diversidad alfa: Se define como la riqueza de especies en un hábitat determinado (o una unidad
paisajística)

Ejemplo: Un bosque caducifolio templado y un bosque tropical, de 100 hectáreas cada uno.

- Diversidad beta: Se define como la diversidad a lo largo de un gradiente o entre distintos hábitats, y se
mide como la tasa de reemplazo de especies entre hábitats.

Ejemplo: Un hábitat que cambie de invierno a verano es más biodiverso que uno que se
mantie.ne igual todo el año: Doñana en verano se seca y en invierno está lleno de especies

- Diversidad gamma: Se define como la riqueza de especies de una región determinada, englobando los dos
tipos anteriores.

Ejemplo: Kenya, localizado en la parte ecuatorial de África, tiene más especies de aves (aprox.
1,000) que Inglaterra (200 especies) a pesar de que tienen casi la misma extensión.

Importancia de la biodiversidad:

Importancia cultural: Tras siglos de constantes cambios, cada organismo vivo actual contiene en sus genes una gran
cantidad de información, que en conjunto resume la historia de la vida y le otorga un valor incalculable a cada
organismo.

Importancia social: La biodiversidad nos permite vivir vidas saludables y plenas. Nos proporciona gran variedad de
alimentos y materiales que contribuyen a mantener nuestra salud y al crecimiento de nuestras economías. Sin una
diversidad de polinizadores, plantas y suelos, nuestros supermercados estarían desprovistos de alimentos.

- Permite que los ecosistemas se adapten a condiciones extremas como incendios e inundaciones.
- Evita enfermedades y ayuda a las especies a adaptarse a los cambios de su medio ambiente.
- Gran parte de los descubrimientos en el campo de la medicina han surgido debido a la investigación de
componentes genéticos de la diversidad de la flora y la fauna.

Importancia ecológica: La biodiversidad nos proporciona Servicios Ecológicos que son indispensables para nuestra
supervivencia.

Los ecosistemas sanos aportan: Y las áreas naturales nos ofrecen:

- Absorben CO2 - Recreo y turismo


- Purifican el agua - Identidad cultural
- Polinizan las cosechas
- Un ambiente sano
- Frenan la erosión
- Controlan las inundaciones
- Tranquilidad y descanso
- Purifican el aire - Aprendizaje y descubrimiento
- Mantienen fértiles los suelos - Vida silvestre
- Ayudan a regular el clima - Paisajes hermosos
- Reciclan deshechos
Servicios ecosistémicos

Aun contando con toda la tecnología del siglo XXI, no ha sido posible replicar un sistema ecológico de forma
artificial, que sustente la vida de los humanos como lo ha hecho la Tierra durante nuestra existencia. Es por esto por
lo que tenemos absoluta dependencia de los ecosistemas de los que somos parte.

La humanidad, lejos de ser propietaria o controladora de la naturaleza, solamente es un componente más de este
sistema y debe asumir una actitud de cautela y respeto frente a esta condición, valorando los servicios
ecosistémicos.

Servicios ecosistémicos: Bienes, fenómenos y procesos que se derivan del funcionamiento de los ecosistemas y que
resultan benéficos para la humanidad, a través de su uso directo o indirecto. Existen 4 tipos principales:

- Servicios ecosistémicos de provisión: bienes y recursos que pueden ser extraídos del ecosistema para su
uso.
Ejemplos: Diferentes fuentes alimentarias o medicinales, extracción de diversos materiales;
agua, alimentos, medicinas y leña.

- Servicios ecosistémicos de soporte: manutención de los sistemas ecológicos y, con ello, de la producción
de nuevos bienes o servicios.

Ejemplos: Mantenimiento de los ciclos de nutrientes, la formación del suelo o la polinización.

- Servicios ecosistémicos de regulación: control de los procesos ecológicos que permiten el normal
funcionamiento de los ecosistemas.

Ejemplos: Regulación del clima, control de la erosión de los suelos y el control biológico de
plagas.

- Servicios ecosistémicos culturales: beneficios otorgados mediante el goce espiritual o estético, la


transmisión de tradiciones e identidad, la creación de conocimiento y el valor educacional y recreativo,
entre otros.

Debido a los procesos de desarrollo del ser humano en las últimas décadas se ha desarrollado una insostenibilidad
ambiental. Los recursos renovables están dejando de serlo debido a que las tasas de uso de estos superan la
capacidad que tiene el medio ambiente de recuperarlos.

La pérdida de biodiversidad puede observarse en sus componentes (ecosistemas y especies) debido a la


degradación de sus funciones, la disminución de la calidad de los bienes y servicios ambientales y el cambio de la
diversidad genética en especies domésticas.

Crisis del medio ambiente

La humanidad consume más de lo que Tierra produce, lo que se traduce en una rápida declinación de la biomasa
silvestre. Realmente, se necesitarían 1,7 planetas para satisfacer las necesidades humanas.

Esta crisis puede notarse en los siguientes ámbitos:

- Cambio climático: La concentración media de CO2 en la atmósfera en 2019 fue la más alta nunca antes
alcanzada en la historia de la humanidad.

- Degradación de suelos: el 65 % de tierras de cultivo están degradadas y el 40% de ellas, fuertemente


degradadas.

- Pérdida de biodiversidad: a finales del 2019, el 27% del total de especies se encontraban amenazadas (la
Lista Roja de la UICN incluía 105.732 especies, de las cuales más de 28.000 están amenazadas de
extinción).
El actual modelo global de desarrollo está basado en la
producción desmedida a costa del consumo
desenfrenado de recursos.

Causas de la pérdida de biodiversidad

Las principales amenazas se resumen en el acrónimo HIPPO:

- H: Pérdida del hábitat a causa del cambio climático y acciones humanas.


- I: Especies invasoras.
- P: Contaminación (pollution)
- P: Sobrepoblación humana.
- O: Explotación excesiva (caza, comercio ilegal, tala, etc)´

Pérdida y fragmentación del hábitat:

Cuando se divide un hábitat se forman pequeños claros rodeados por el hábitat


original, los cuales se van volviendo cada vez más grandes y las especies se ven
limitadas a vivir en los pequeños fragmentos restantes del hábitat original,
mientras que las partes claras tienden a perder biodiversidad.

Esto es causado por el cambio de uso del suelo, la eliminación de los bosques,
sustitución del sustrato, construcción de caminos, etc.

Esta pérdida o cambio de hábitat es en la actualidad la mayor causa de pérdida de


biodiversidad.

Explotación excesiva:

Algunos ejemplos de esto son el furtivismo, el mascotismo, la Bushmeat y la sobreexplotación de recursos.

Conservación de la naturaleza

En pos de luchar contra la pérdida de biodiversidad, se ha desarrollado el concepto de conservación natural.

Con esta conservación se pretende:

- Representar, en un sistema de protección de espacios, la variabilidad de todos los ecosistemas nativos. (Es
decir, preservar de manera protegida ejemplares de todas las especies y ecosistemas existentes)

- Mantener poblaciones viables de todas las especies conservando sus patrones naturales de abundancia y
distribución.

- Mantener los procesos evolutivos y ecológicos como las perturbaciones, ciclos hidrológicos, ciclos de los
nutrientes, interacciones bióticas…

- Responder a los cambios ambientales y mantener el potencial evolutivo de todos los genes.
Si no se frenan estos fenómenos destructivos, a finales del siglo se habrán perdido la mitad de las especies de la
Tierra. Es por esto por lo que la conservación trata de definir unas buenas estrategias para proteger especies
amenazadas y reducir impactos negativos sin afectar a los derechos de los habitantes para aprovechar los recursos
naturales.

Para esto se precisa de un nuevo código ético transmitido por la educación.

Conceptos importantes en la conservación

Individuo: Cualquier ser vivo de cualquier especie.

Especie: Conjunto de individuos que contienen el mismo genoma.

Genoma: Conjunto de genes que determinan las características fenotípicas de una especie

Población: Conjunto de individuos que pertenecen a la misma especie y ocupan el mismo hábitat.

Hábitat: Territorio en el que una especie encuentra un complejo de condiciones de vida a las que está adaptado.

Comunidad: Conjunto de poblaciones interactuando entre sí y ocupando un mismo hábitat

Ecosistema: Es un sistema en el que se presentan interacciones entre los factores bióticos y abióticos en la
naturaleza

Nicho ecológico: Espacio físico ocupado por un organismo y su papel funcional como miembro de una comunidad.

Área de campo o espacio vital: Es más amplia que el territorio, y es la zona por donde el animal se mueve
frecuentemente, sobre una base diaria en busca de alimento, cobijo o pareja.

Territorio: Porción de terreno que es defendida con agresividad por un animal.

Pirámide trófica: Es un modo de representar las relaciones tróficas de un ecosistema en el que cada eslabón o nivel
trófico se representa con un rectángulo de área proporcional a la biomasa y al número de individuos del nivel.

Ecotipo: Es una población de una especie determinada que vive en un hábitat concreto, con unas condiciones
ambientales muy particulares y aisladas. Estas condiciones específicas le conceden una genética concreta,
diferenciada del resto de individuos de su misma especie

Clina: Cambio gradual de rasgos fenotípicos de una misma especie por influjos y condiciones medioambientales

Indicadores ecológicos: Elemento, proceso o propiedad de un ecosistema a través del cual se puede estudiar y/o
cuantificar, de manera precisa y sencilla, los elementos y el funcionamiento de este.

Se utilizan como herramientas para el estudio y monitorización de objetivos de conservación como la biodiversidad,
la integridad ecológica, o la salud de un ecosistema. Para ello deben cumplir las siguientes características:

- Proporcionar respuestas tempranas sobre la presencia de una amenaza.


- Señalar la causa de la amenaza.
- Proporcionar una respuesta continua y poco variable sobre el impacto de la amenaza.
- Ser efectiva, eficiente y fácil de medir.

Pueden darse y actuar a diferentes niveles jerárquicos, desde un gen hasta una comunidad o paisaje. Entre los más
utilizados se encuentran los indicadores ecológicos a nivel de especie, basados en el estudio de las poblaciones y
sus dinámicas.
Especies sucedáneas: Son indicadores ecológicos a nivel de especie que actúan solo si:

- Su abundancia está relacionada con la presencia de un gran número de especies de otros taxones,
(principalmente taxones relacionados).
- Si la riqueza de especies y diversidad de hábitat están relacionadas con presencia de amenazas.

Estas especies cumplen diferentes funciones:

- Señalar cambios ambientales causados por la actividad humana.


- Señalar cambios poblacionales de especies particulares.
- Identificar áreas con una alta riqueza de especies.
- Identificar áreas prioritarias para la conservación.
- Atraer la atención pública o el apoyo para el desarrollo de programas de conservación.

Hay varios tipos de especies sucedáneas, las más conocidas son las siguientes:

- Especies indicadoras: Son aquellas que por sus características (sensibilidad a perturbación o
contaminantes, distribución, abundancia, dispersión, éxito reproductivo, entre otras) pueden ser
utilizadas como estimadoras del estado de otras especies o condiciones ambientales de interés que
resultan difíciles de medir directamente.

Es interesante utilizar estas especies como indicadoras de cambios, ya que son individuos con una
biología bien documentada, fáciles de estudiar, sensibles a las perturbaciones humanas, muy
distribuidas y poco longevas.

Existen 3 subtipos:

o Especies indicadoras de cambios ambientales o de salud ecológica: Están relacionadas con


unas condiciones ambientales particulares, por lo que el hecho de que estén presentes señala la
existencia de dicha condición.

Inicialmente eran utilizadas para evaluar la presencia de contaminantes o sustancias tóxicas en


el ambiente, como es el caso del uso de líquenes, invertebrados y peces. Sin embargo, su uso se
ha expandido a la determinación del efecto de otros sucesos como la pérdida de hábitat, siendo
ampliamente utilizadas aves, insectos y otros grupos.

Ejemplo: lechuza moteada (Strix occidentalis), utilizada como indicadora del efecto de la pérdida
de bosques maduros por explotación encontrándose una relación entre pérdida de hábitat y
disminución en el tamaño poblacional de esta ave.

o Especies indicadoras que señalan cambios en las poblaciones: Permiten estimar las variaciones
poblacionales de otras especies con las que coexisten.

Son utilizadas en la evaluación de especies pertenecientes a un mismo grupo funcional, o


especies que están relacionadas de alguna forma (depredador-presa, por ejemplo).

Ejemplo: La estrella de mar (Pisaster ochraceus) considerada indicadora de las poblaciones de


sus presas naturales y de su competidor natural, el mejillón Mytilus californianus.

o Especies indicadoras de biodiversidad que señalan áreas de alta riqueza de especies: se


consideran un estimador del número de especies o taxones con las que se halla en simpatría
(viven juntos y se solapan, no tienen problemas al coexistir).

Existen muchos ejemplos del uso de especies o grupos de especies indicadoras de biodiversidad,
entre las que destacan aves, mariposas, escarabajos y plantas.

Ejemplo: Escarabajo Osmoderma eremita, cuya presencia está altamente relacionada con la
presencia y riqueza de otras especies de escarabajo
- Especies bandera o carismáticas: Son especies que, por su gran atractivo y cualidades, se utilizan como un
símbolo para llamar la atención del público, de posibles donantes y del apoyo gubernamental, para la
implementación y desarrollo de programas de conservación de dicha especie y de otras menos llamativas
con las que pudiera estar asociada asociadas a su hábitat.

Suelen ser animales mamíferos que aparecen en campañas publicitarias, logos y películas infantiles.

Para lograr metas y que cale el mensaje en sus destinatarios, se muestran imágenes duras que evidencian
de manera explícita los problemas de la conservación. Por ejemplo, osos polares, una especie bandera
bella y “amable”, sufriendo de manera cruel las consecuencias drásticas del cambio climático.

Características de las especies bandera:

o Contar con un nivel alto de amenaza.


o Tener un valor ecológico fundamental para el correcto funcionamiento del hábitat al que
pertenece.
o Contar con conocimientos biológicos previos por parte de la comunidad científica.
o Tener un tiempo generacional largo.
o Caracterizarse por un tamaño corporal grande que facilite su conocimiento.
o Garantizar la supervivencia del resto de especies con las que comparte su hábitat natural.
o Ser sensible a perturbaciones ambientales y/o poblacionales.
o Necesitar un hábitat concreto.

Ejemplos: Lince ibérico, Chu-Lin (primer oso panda nacido en cautividad en el zoo de Madrid), Copito de
Nieve (gorila albino del zoo de Barcelona).

- Especies paraguas o sombrilla: Al protegerlas también se protegen de forma indirecta a otras muchas que
comparten su hábitat, ya que tienen requerimientos de hábitats muy grandes y complejos. La protección
de especies paraguas automáticamente extiende la protección a otras especies.

El beneficio más destacado de estas especies es la capacidad de definir inventarios de flora, fauna y
espacios que requieran de una estrategia de conservación urgente.

Ejemplos:
o Mamíferos: Ñu, Lince ibérico, Oso andino, Tapir…
o Aves: Búho moteado, Águila real, Pájaro carpintero gigante…
o Reptiles: Cocodrilo del Orinoco, Tortugas charapa y carey.

- Especies clave: Aquellas cuya actividad genera un gran efecto sobre otras especies de la comunidad, la
estructura y/o función del sistema natural, produciendo un efecto desproporcionado sobre su medio
ambiente en relación con su abundancia. (Unos pocos pueden liarla pardísima).

Son especies muy sensibles (aunque estables) a los cambios ambientales de su entorno, y tienen una
función básica dentro de su hábitat, al que llevan mucho tiempo perteneciendo.

Un ecosistema puede experimentar un cambio dramático si desaparece una especie clave, incluso
aunque esta simbolice solo una pequeña parte del ecosistema en medidas de biomasa o productividad.

Además, estas especies pueden servir como “bioindicadoras”, es decir, actuar como indicadoras de la
salud y la calidad de un área o ambiente natural.
Características del ecosistema en la que pueden darse cambios dramáticos:

o Modificación del paisaje: ya sea de su flora o de la estructura del lugar, pudiendo crear áreas
abiertas.
o Fuente de alimento: por ejemplo, para depredadores.
o Generadoras de refugio: para otras especies, como es el caso del elefante africano.
o Modificar o alterar procesos ecológicos: como el intercambio de nutrientes, por ejemplo,
algunas aves que se alimentan en el mar y luego en la tierra realizan sus deposiciones.

Hay dos medios mediante los que una especie puede convertirse en una especie clave:

1. Especies depredadoras que generan una cascada trófica: La presencia de especies clave
depredadoras, nos lleva a una mayor riqueza en los ecosistemas.

Ejemplos: Nutrias (se comen a los erizos marinos y esto favorece al kelp (algas, alimento de
los erizos), evitando que este desaparezca y favoreciendo así a los peces.

Jaguares (se comen alrededor de 87 especies diferentes)

2. Especies ingenieras ecológicas: Alteran recursos del sistema con su actividad. No obstante,
esto suele resultar difícil de identificar.

Ejemplos: Castores (transforman los arroyos en lagunas) (¡VIVA PONTEVEDRA Y SUS


CASTORES INGENIEROS!)

Ñus (En sus migraciones se comen las hierbas y mantienen una baja cobertura, evitando
incendios) (Son bomberos ^^)

Ejemplo de conservación: PRIMATES

De acuerdo con el estudio internacional de 31 invest publicado en enero de 2017, de las 517 especies de primates
existentes, el 75% se encuentran en declive y el 60% están amenazadas.

Esto, combinado con los datos de la Lista Roja de la UICN + Naciones Unidas, nos lleva a la conclusión de que
muchas especies de primates se extinguirán de aquí a 25-50 años, lo que hace que la conservación se convierta en
prioridad global.

Estos animales son altamente importantes:

- Ecológicamente, ya que controlan las plagas de insectos, polinizan y dejan caer frutos al suelo que más
tarde sirven como alimento para especies frugívoras terrestres.

- Social, cultural y evolutivamente, ya que son modelos para estudio del comportamiento (por sus
similitudes al humano y antepasados comunes). Además, son patrimonio cultural de muchos países.

- Investigación médica (a pesar del conflicto ético).

Para conservarlos se deben aportar soluciones desde la comunidad científica, los gobiernos y las ONU, de forma
urgente. Y estas soluciones deben tener como pilar la educación.

La formación de una conciencia ambiental y ecológica requiere que las personas conozcan y valoren su entorno, por
lo que se debe sensibilizar a las generaciones jóvenes basándose en un conocimiento previo, despertando interés e
incitando a las acciones.

Para ello debemos utilizar las herramientas de las que disponemos:

- Ex situ: Investigación y Programas de enriquecimiento en cautividad.


- In situ: Proyectos de conservación y Educación mediante cursos de campo.

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