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Conforme al respeto de los derechos humanos, practicar la tolerancia no

significa tolerar la injusticia social ni renunciar a las convicciones personales o


atemperarlas. Significa que toda persona es libre de adherirse a sus propias
convicciones y acepta que los demás se adhieran a las suyas. Significa aceptar
el hecho de que los seres humanos, naturalmente caracterizados por la
diversidad de su aspecto, su situación, su forma de expresarse, su
comportamiento y sus valores, tienen derecho a vivir en paz y a ser como son.
También significa que uno no ha de imponer sus opiniones a los demás.

LA TOLERANCIA NACE EN LA FAMILIA

La tolerancia nace en la familia y es necesario que como padres y madres


reflexionemos al respecto y nos hagamos responsables del ejemplo que damos.

- ¿Cuanta tolerancia hay en nuestra familia?

Educando en la tolerancia

La lección continúa fuera de la casa educando a los menores en el respeto a las


diferencias de aspecto físico, carácter, forma de vestir y actividad que
desempeñan las demás personas.

Sin importar si se trata de una familia grande o pequeña, la convivencia diaria y


el hecho de vivir bajo el mismo techo, multiplica las posibilidades de que
ocurran malos entendidos, desavenencias y rivalidad entre los miembros. Los
padres estamos obligados a crear en casa una atmósfera de tolerancia basada
en el respeto, el afecto y la comunicación.

Para pensar

¿Cómo es el ambiente en tu casa?

¿Consideras que en tu hogar reina la tolerancia?

¿Expresas frente a tus hijos opiniones intolerantes o fanáticas en relación con


temas como la religión, el sexo o la política?

Juega con los prejuicios y los estereotipos.

Con imágenes

El primer momento donde nuestros prejuicios y estereotipos se ponen a


funcionar es con una imagen. Cuando conocemos a una persona, antes de hablar
con ella nuestros mapas mentales ya se ponen a funcionar y componen una idea
sobre la persona que tenemos delante, sin haber tenido ninguna conversación y
sin conocerla de nada. También ocurre lo mismo con una imagen que nos
muestran en la televisión u otro medio.

En familia tenemos que vivir juntos y a veces cuesta aguantar los defectos de
los demás.Tal vez porque nos recuerdan los nuestros? De vez en cuando
podemos también sentirnos atacados o tener celos... ¿Es porque creemos que
nos quieren menos? Al empeñarnos en ser los más fuertes nos volvemos
intolerants y, en lugar de ser los mejores, nos acaban dejando.

Pero, cómo puede uno llegar a ser tolerante? En primer lugar, siéndolo consigo
mismo, teniendo buen humor, aceptando los propios errores y defectos. ¿Es
esto difícil? No, porque uno puede progresar cada día, como el bebé que está
aprendiendo a andar. Si uno es tolerante consigo mismo, llega a ser tolerante
con los demás y entonces los acepta con más facilidad.

DINAMICAS

BUSQUEMOS QUE NOS HACE IGUALES Y DIFERENTES ( a partir de 6


años)

Haz grupos de cinco chicos/as y retales a que encuentren cinco cosas que
tengan en común y cinco cosas que les diferencien a todos/as. No es un reto
imposible pero no será fácil, seguramente les cueste mucho menos encontrar
cinco similitudes que cinco diferencias.

EXPRESA TU OPINIÓN, ESCUCHA Y RESPETA LA DE  OTRO/A ( a


partir de 14 años)

Tenemos que aprender a discutir, a exponer nuestras opiniones respetando las


de los demás. Es la base para resolver los conflictos de forma pacífica.

Busca un tema del que pueden surgir varias opiniones y posiciones para que se
pueda discutir. Coloca frases sobre este tema por toda el aula y pídeles a
los/as participantes que se posicionen con la frase con la que estén de acuerdo.
Después que ellos/as cuenten porque se han colocado en ese lugar, y defiendan
esa posición. Así podrán entablar una discusión. Sobre el tema puedo darte
varios ejemplos: veganismo, tauromaquia, igualdad de género, religión, etc.
Antes de comenzar establece unas normas: respeto del turno de palabra,
expresarse con respeto y sin gritar.

Palabras que denoten intolerancia al interior del hogar.

■ El color rosado es muy femenino.

■ Los negocios son cosa de hombres.

■ Las mujeres manejan mal.

■ Los extranjeros tienen costumbres raras.

■ Cada persona es diferente.

■ No es necesario que las niñas estudien.

■ Las niñas y niños deben ayudar en las labores de la casa.

■ Las mujeres no saben jugar fútbol.

■ En la cocina no deben trabajar los varones.

■ Las novelas son cosas de mujeres.

■ Los niños y niñas tienen los mismos derechos.

■ Los hombres no deben llorar nunca.

Ser tolerante es lo mismo que ser respetuoso, indulgente y considerado con los
demás. Es una cualidad personal que se define como el respeto a las ideas,
creencias o prácticas de los demás, aunque sean diferentes o contrarias a las
nuestras.

Carrera de tres

Objetivo: Coordinarse para llegar los primeros a la meta juntos.

Juego: Haremos grupos de tres alumnos que tendrán que colocarse tocando


espalda con espalda y entrelazando sus brazos para quedar bien unidos, ¡está
prohibido separarse!
La carrera comenzará cuando todos los equipos estén situados en la salida. Los
grupos tendrán que trabajar juntos para llegar los primeros a la meta.

Busca-palabras

Objetivo: Trabajar en
equipo para conseguir encontrar el máximo de palabras y ganar.

Material: Folios y lápices.

Juego: Formaremos equipos de 3 o 4 estudiantes y los situaremos alrededor de


un folio. Escogeremos una palabra larga de unas 9 letras o más; como, por
ejemplo, murciélago, acantilado, cabellera o calabacín. Les pediremos que
busquen todas las palabras que se pueden formar ordenando de forma distinta
las letras. Ganará el equipo que más palabras consiga encontrar.

Realizar un acróstico.

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