Está en la página 1de 2

ENSAYO.....

¿POR QUE DECIDI SER DOCENTE


Publicado por Yocellyn Lopez en 18:00
Fueron diferentes circunstancias que me llevaron a elegir la docencia como
carrera profesional. Esto se enlaza con la idea de Tenti (1999 p.184-185) donde se
le adjudica al hecho de ser maestro una fuerza mística, es decir, el resultado de un
proceso complejo donde intervienen múltiples determinaciones sociales e
individuales.
Recuerdo que desde pequeña a mí me gustaba jugar con mis hermanos y primos
a la escuelita y yo ser la maestra, considero que de ahí nació mi vocación por esta
carrera, ya que me preguntaban que quería ser de grande y yo decía, ¡Quiero ser
maestra! Esta idea se vincula con la perspectiva de que la familia constituye el
primer transmisor de pautas culturales y educativas, ya que busca que sus hijos
adquieran una cosmovisión fundamental, dentro de la cual vayan integrando el
resto de los logros que conformarán paulatinamente su personalidad. Martínez
(1984 p.84).
En algún momento de mi vida, cruzo por mi mente elegir ser aeromoza o abogada,
pero diferentes decisiones y hechos me hicieron desertar de esta idea.
Otra de las razones para tomar esta decisión, fue que gran parte de mi familia se
dedica a esta profesión, y al verlos laborar y realizar su trabajo con tanta
dedicación y gusto, me hizo comprender que estaba tomando la decisión correcta.
Esto se relaciona, cuando se dice que es verdad que ninguna persona se forma a
través de sus propios medios, es necesario tener mediaciones sociales. Ferry
(1990 p.43).
Aún recuerdo, cuando estaba cursando el tercer año de secundaria, y se
acercaban los exámenes de admisión para educación media superior, tenía que
decidir en cual de ellas iba a estudiar, así que opte por elegir como mi primera
opción la Escuela Preparatoria Anexa a la Normal de Cuautitlán Izcalli, porque era
lo más optimo para ingresar a la Normal.
En ese tiempo, tuve la oportunidad de trabajar en una Estancia Infantil, donde tuve
gratas experiencias con los pequeños, que me ayudaban a definir cada vez más
mi vocación. Por eso se dice, que en la elección de la docencia como profesión,
uno de los factores que influye en la decisión del individuo, es el gusto por convivir
y trabajar con niños, el deseo de propiciar aprendizajes, de someter a prueba
conocimientos, de transmitirlos, de construirse en guías en el proceso de
enseñanza. Ibarrola (2007 p.33).
Al concluir la preparatoria seguí con la misma convicción de estudiar la
Licenciatura en Educación Preescolar, así que realice los exámenes de admisión a
la Escuela Normal de Cuautitlán Izcalli y  a la Escuela Nacional para maestras de
Jardines de Niños (ubicada en San Ángel Inn, D.F), por fortuna fui aceptada en las
dos escuelas, algo que me dio mucha emoción y una gran satisfacción personal.
Después de consultarlo con mis padres, al ver mis planes y propósitos sobre la
carrera, elegí la Escuela Normal de Cuautitlán Izcalli porque la institución está más
cerca de mi domicilio y me gusta el tipo de formación que se imparte en esta.
En este momento me encuentro cursando el primer semestre de dicha
licenciatura, han sido muchos sentimientos, emociones y hechos que han
transcurrido, uno de ellos fue que al ingresar a la institución nos avisaron que ya
no iban a ser 4 años de carrera profesional, sino que por distintas necesidades
educativas se aumentaba a 5 años el grado de Licenciatura.
En lo particular esta idea no me pareció muy grata al principio, pero después me di
cuenta que este hecho seria para bien ya que tendríamos una formación más
completa con conocimientos de Inglés y Computación.
Durante este tiempo, también llegue a pensar, si esta era la decisión correcta y si
en verdad era lo yo quería estudiar.
Al conocer más de la formación que se me va a impartir y la responsabilidad que
adquiría al ser docente, supe que si era esto lo que yo deseaba y es a lo que me
quiero dedicar la mayor parte de mi vida, dando lo mejor de mí, siendo una
maestra responsable, eficaz y competente para formar niños capaces, autónomos
y con valores para que se desarrollen fructíferamente en sociedad.
Esto se relaciona con la idea, de que los propósitos de la educación preescolar
deben concentrarse en el desarrollo de las competencias intelectuales, en la
capacidad de aprender permanentemente, y en la formación de valores y
actitudes, que permitan avanzar en la democratización social, haciendo
sustentable el desarrollo humano. PEP (2004 p.15).  
Coincido con la perspectiva de Navarrete (2004 p.13) de que en esta profesión se
presta un servicio a la comunidad, tal vez no reconocido la mayoría de las veces,
pero tendría la satisfacción de forjar con mis propias manos, el futuro de México.
Por consiguiente, considero que la educación es un pilar fundamental en la
formación y desarrollo de un individuo. Por esta razón, se dice que los profesores
somos los protagonistas en el proceso educativo, que de la educación que
nosotros impartamos depende el desarrollo económico, político y social del país.
Ibarrola (2007 p.26).
Sé que queda mucho camino por recorrer, que la enseñanza es un proceso
complejo en cual se necesita una formación continua, una relación integral con los
alumnos y la elaboración de estrategias didácticas para el proceso educativo,
ofreciendo un servicio de calidad. Por lo tanto, se menciona que la enseñanza por
conjunto de tareas consiste en tres fases: Preactiva: Aquella donde se idea el
método de enseñanza, Interactiva: Se encarga de la interacción maestro- alumno
en el proceso de aprendizaje y Postactiva: En la cual se evalúan los aprendizajes
obtenidos por el alumno, para su posterior corrección. Saint (1997 p.57).
Sé que esta profesión me dará muchas experiencias buenas y malas, pero tendré
que aprender de cada una de ellas, para ser mejor día a día, propiciando en los
niños el interés por aprender, apoyándolos para que tengan una escolarización
exitosa, estando consiente del compromiso que he adquirido de la profesión.

Fueron diferentes circunstancias que me llevaron a elegir la docencia como


carrera profesional. Esto se enlaza con la idea de Tenti (1999 p.184-185) donde se
le adjudica al hecho de ser maestro una fuerza mística, es decir, el resultado de un
proceso complejo donde intervienen múltiples determinaciones sociales e
individuales.

También podría gustarte