Está en la página 1de 5

EL PERDÓN

Mat 6:12-15 ¿Qué significa perdonar?


Perdonar significa disculpar a alguien
que nos ha ofendido o no tener en cuenta su
falta. En la Biblia, la palabra griega que se
traduce “perdonar” significa literalmente
“dejar pasar”, como cuando una persona
deja de exigir que se le pague una deuda.
Perdón El perdón es el acto
deliberado de pasar completamente por
alto una ofensa, como si nunca hubiese
existido Es un concepto central de la fe
cristiana,
Una de las enseñanzas más grande que
nos dejó nuestro Señor Jesús es el amor y el
perdón al prójimo.

Los  versículos sobre el perdón al


prójimo, le ayudan a sanar su corazón, y a
propiciar una reconciliación con su
hermano o con una persona.

Nosotros como cristianos y seguidores


de Jesucristo debemos vivir según las
enseñanzas de Jesús. Muchas veces las
personas que nos rodean nos lastiman
inmensamente con o sin intención y es
normal  y de humanos, sentir dolor e
incluso rabia. Sin embargo, no podemos
permitir que esto se apodere de nuestra
vida.
Cuando decidimos dejarnos llevar por
el rencor y el dolor, nuestro corazón
comienza a endurecerse llevándonos a la
venganza contra el prójimo.

En la biblia se nos exhorta a perdonar


para ser perdonados y así encontrar la
gracia y favor de nuestro amado Señor
Jesucristo.

Jesús no nos dijo que no seríamos


ofendidos. Tampoco nos prometió que no
nos dolerían algunas acciones o palabras
que fueran dirigidas a nuestra persona.

MATEO 18:21-22 Entonces se le


acercó pedro y le dijo: señor, ¿cuántas
veces perdonaré a mi hermano que
peque contra mí? ¿Hasta siete?  Jesús le
dijo: no te digo hasta siete, sino aun hasta
setenta veces siete.

MARCOS 11:25 Y cuando estéis


orando, perdonad, si tenéis algo contra
alguno, para que también vuestro padre
que está en los cielos os perdone a
vosotros vuestras ofensas.

Dios cuando ve nuestro corazón


contristo y humillado Él nos perdona. Deja
pasar nuestras faltas y las arroja al fondo
del mar
Un verdadero cristiano sabe que el
perdón no es una emoción o sentimiento, es
una decisión. Perdonar muchas veces
requiere de la intervención de Dios.

PRO_17:9 El que perdona la ofensa


cultiva el amor; el que insiste en la ofensa
divide a los amigos.
En muchos casos, perdonar no es tan
sencillo por la ofensa o el daño que
realmente nos pudieron haber causado. Por
eso, es necesario entrar en oración y pedirle
al Señor que nos limpie de todo rencor y
que nos ayude a perdonar.

Tomar esta decisión es la más acertada


y poderosa para nuestra vida espiritual y
terrenal. Es un proceso que puede llevar su
tiempo, pero al ver el Rey de reyes y Señor
de señores, que nuestra intención de
perdonar es real, nos ayuda en nuestra
debilidad.

El gozo, la paz, la tranquilidad y las


bendiciones que se manifestarán sobre
nuestra vida por perdonar, serán mucho más
maravillosas, grandes y poderosas, que
vivir bajo el rencor y la amargura.

Perdonamos a otros cuando dejamos


de guardar resentimiento y no insistimos en
pedir una compensación por el daño que
nos hayan hecho o por la pérdida que
hayamos podido sufrir.
Qué nos puede ayudar a perdonar:
1. Recordar qué implica el
perdón. No significa que consideramos que
está bien lo que sucedió ni que nunca pasó.
Sencillamente lo pasamos por alto.

2 Pensemos en los beneficios de


perdonar. Dejar de sentirnos enojados o de
guardar rencor nos ayudará a estar más
calmados, mejorará nuestra salud y nos
permitirá ser más felices (Proverbios
14:30; Mateo 5:9).
2.  Seamos comprensivos. Todos somos
imperfectos (Santiago 3:2). Puesto que
deseamos que los demás perdonen nuestros
errores, nosotros también debemos
perdonar los suyos (Mateo 7:12)

3.  Actuemos de
inmediato. Esforcémonos por perdonar
enseguida en vez de dejar que se
intensifique la ira (Efesios 4:26, 27).

“¿Qué? ¿Acaso significa que debo


perdonar aun cuando mi enemigo
permanezca frío e indiferente y mal
intencionado? No hay ninguna duda.
CONCLUCIONES
El perdón es una de las características
principales de nuestro Creador.

“El perdón es el ingrediente milagroso


que asegura la armonía y el amor en el
hogar o en el barrio”.

Durante toda la historia de la humanidad,


las acciones humanas guiadas por el
pecado, realmente han menospreciado la
misericordia y amor del Altísimo.

Sin embargo ante toda esta rebeldía y


estas abominaciones contra el Creador, Él
por su gran amor a nosotros, deseaba darnos
un perdón absoluto y eterno. Este perdón lo
obtuvimos por la gracia y obra de Jesucristo
en la cruz.

También podría gustarte