ESTUDIANTE: MARIA FERNANDA GUTIERREZ ROSALES

PARCIAL II

DESARROLLO

Artículo 384. Restitución de inmueble arrendado. -CGP

Si bien es cierto un arriendo es un contrato bilateral donde cada una de las partes
tiene unas obligaciones que si faltare a ellas la ley establece algunos mecanismos
para hacerla cumplir.

En este sentido, nos encontramos con la restitución de inmueble arrendado, el

cual se encuentra contemplado en el Artículo 384 del Código General del Proceso
-CGP- y nos detenemos en el numeral 4.

En este caso, cuando el arrendatario incumple con alguna de las obligaciones que
nacen y que so n propias del contrato de arrendamiento (el pago del canon de
arrendamiento, servicios públicos, administración).

Ahora bien, la Ley 820 de 2003 y el Código General del Proceso:

En su artículo 22 numeral 1 y 2 le impone la carga procesal al arrendatario y la

justifica en la medida en que no se le exige nada distinto de aquello que, si no ha
incumplido el contrato, estaría en plenas condiciones de acreditar: El pago de
aquello a lo que se ha obligado.

Ahora ahondado en el tema del principio de contradicción probatoria: es una

concreción del principio procesal de contradicción, en donde
la contradicción probatoria tiene una relación íntima con el derecho de
contradicción, hasta el punto de que no se entiende materializado el derecho de
defensa sin contradicción, como bien lo expone en la tesis el docente, este es uno
de los fundamentos del debido proceso en el cual debe primar el interés visible de
la norma que se está implementado en donde la protección de este por encima de
cualquier x concepto, para garantizar el cumplimento de la democracia en general,
ya que estamos en un país con estado social de derecho, que busca asegurar el
respeto, la garantía y la realización integral de los derechos humanos, los cuales
se convierten en el fundamento y la razón última de ser del Estado. La cual ha
generado profundos cambios sobre la organización del Estado que, en esta nueva
concepción, adopta el propósito de fortalecer la realización de la democracia en
sus aspectos sociales, económicos y políticos, dentro de un contexto de
pluralismo, participación y respeto por la dignidad humana.

Por otro lado, si bien es cierto y como está contemplado en la norma el debido
proceso es un derecho fundamental de aplicación inmediata que faculta a toda
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PARCIAL II

persona para exigir “un proceso público y expedito en el cual se reconozcan todas

las garantías sustanciales y procesales, desarrollado ante una autoridad
competente que actúe con independencia e imparcialidad, así como está
contemplado en el artículo 29, de nuestra Carta Magna. Donde se refiere que este
se aplicara a toda clase de actuaciones judiciales y administrativas. Nadie podrá
ser juzgado sino conforme a leyes preexistentes al acto que se le imputa, ante
juez o

tribunal competente y con observancia de la plenitud de las formas propias de

cada juicio.

Concluyendo de esta manera que la norma debe estar hecha para proteger los
derechos visibles de nuestra carta magna, apoyando esto en la base de que los
derechos fundamentales y su protección están por encima de todo y son estos los
que deben reinar por cuanto estamos en un estado democrática, que pregona el
estado social de derecho.