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Fernanda Ducuara, Paula González, Pilar Henao, Marco Muñoz, Viviana Reyes, Felipe
Salguero.
Estudiantes
2022
TALLER No. 2
El principio de la honradez está regulado por la Ley 1123 de 2007. “Por la cual se
establece el código disciplinario del abogado”, artículo 35, el cual refiere a las conductas
con las que se constituyen falta de honradez del mismo:
En el numeral 1° se identifica una de las faltas con las que el sr. Díaz vulnera el
ejercicio de la abogacía en contra de su cliente, la señora Guío. Al obtener de esta, un
beneficio desproporcionado a su trabajo, con aprovechamiento de la necesidad, la
ignorancia e inexperiencia de aquella.
Asimismo, se obtuvieron con cargo a los honorarios de este abogado, dineros que
superan la participación correspondiente de la señora Guío, al apropiarse de su parte, como
lo señala el numeral 2°.
De la misma forma, el abogado Díaz, cobró y recibió el dinero de las resultas del
fallo emitido por el juzgado, sin informar y entregarle a su mandante en tiempo real, en
virtud de la gestión profesional, tal como refiere el numeral 4°, de este mismo artículo.
De acuerdo con lo anterior el abogado Díaz debió haber obrado con justicia,
transparencia y debida forma como lo exige el comportamiento del abogado, conforme los
principios de dignidad y decoro profesional, desinterés y de corrección
Así las cosas se puede decir que los principios objetivos de la profesión se
convierten en conductas morales e individuales del profesional que ejerce el derecho y este
debe ser encaminado al interés y bien comunitario. Pues se entiende que la carrera está
enfocada en la cooperación o colaboración con las autoridades con el fin de lograr el
perfeccionamiento del orden jurídico del país y la administración de justicia.
(...)
8. Obrar con lealtad y honradez en sus relaciones profesionales. En desarrollo de este deber,
entre otros aspectos, el abogado deberá fijar sus honorarios con criterio equitativo,
justificado y proporcional frente al servicio prestado o de acuerdo a las normas que se
dicten para el efecto, y suscribir recibos cada vez que perciba dineros, cualquiera sea su
concepto.
Asimismo, deberá acordar con claridad los términos del mandato en lo concerniente al
objeto, los costos, la contraprestación y forma de pago”