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Cuando el tango fue cabalmente tal –ya alejado de su nacimiento impreciso entre los negros
africanos llegados esclavos, que pusieron la primera piedrita–, se creó un ámbito dominado
por los hombres que habitaban los suburbios, el bajo, los prostíbulos; unos hombres
marginales, excluidos, cargando mucho resentimiento, prepotentes, identificados en la figura
estereotipada pero real del compadrito. Fue, por tanto, la expresión de un arte popular muy
básico REFUGIO DE UN MACHISMO un machismo que HIZO a la mujer objeto, de su
vulgaridad y procacidades.
Los propios escenarios parecían demandar ese adueñamiento patriarcal: ranchos, las
tristemente famosas ‘casitas’, antepasadas del mundo prostibulario, donde aparecieron los
primeros focos rojos y, al final de esta etapa, los oscuros, brumosos cabarets. Allí la mujer
era una presa para el tigre, un motivo de burla y denostación o, como grosera concesión,
una partenaire de segunda, la hembra que completaba el cuadro diseñado por el macho:
muñeca de trapo para exhibir, bailarina o pupila.
Y qué decir de los títulos de los tangos de moda en aquel preámbulo de la aparición de la
Guardia Vieja: ‘La clavada’, ‘La franela’, ‘Sacámele el molde’, ‘Correle la mano al negro’,
‘Con qué tropieza que no dentra’, ‘El serrucho’, ‘Siete pulgadas’, ‘Cachucha pelada’, ‘Concha
sucia’ o ‘La concha de la lora’.
No obstante semejante realidad, que a grandes rasgos sería repetida, entre 1897 y 1920,
aparecen heroicas mujeres que, de distintas formas, tratan de abrirse paso forzando
grietas en aquel machismo exacerbado, a la búsqueda de consideración y respeto.
Una de ellas fue Pepita Avellaneda que en 1880 se instaló en Buenos Aires como
cupletista y tonadillera. No tembló al presentarse en cafetines del bajo, donde se hizo muy
popular, ni en decentes teatros a los que llegó por su tenacidad, Su única concesión fue
vestirse de hombre para actuar.
María Luisa Carnelli QUE ESCRIBIÓ LETRAS DE TANGO Siempre usó pseudonimo de
hombre
Hubo otra mujer , que dejó una huella imborrable Ada Falcón,
Tita Merello
Nelly Omar, Nelly fue la verdadera inspiradora del tango ‘Malena’ con cuyo autor, el
enorme Homero Manzi, mantuvo un complicada relación
Eladia Blázquez, la primera mujer que, ya con el tango clásico evolucionado en su música
y sus letras, peleó con tantísimos poetas y se destacó, aportando a través de sus obras un
aire fresco, renovado, limpio e influyente. ‘Sueño de barrilete’, en 1960, tema que popularizó
Susana Rinaldi.
Susana Rinaldi. Con ella, con su calidad vocal, con su selecto repertorio, con su
personalidad, ocurrió al fin el fenómeno por el que tantas lucharon: el tango se hizo mujer.
Llegó el reconocimiento, el respeto y hasta el entusiasmo.
Quizás por eso, Julio Cortázar, cuando aún no la conocía, le escribió este poema,
increíblemente poco conocido:
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texto definitivo 8 MARZO
8 MARZO
Mañana será 8 de Marzo y queremos conmemorar este día con la selección de hoy. Va por
todas!!!
Cuando nació el tango, se creó un ámbito dominado por los hombres REFUGIO DE UN
MACHISMO que HIZO a la mujer objeto,
Asdí pues hemos elegio tres momentos en la historia : Los años 20, los años 70 y la
actualidad. Casi cinco décadas separan estos hitos entre sí, lo que demuestra que el
tango sigue vivo y el papel de las mujeres en él también
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Maria Luisa , amó el tango siempre a escondidas,ya sus padres no querían oír hablar
de aquel génro musical en su casa.
Tan a escondidas lo amó que firmó sus composiciones con nombre de varón Mario
Caro, Su padre nunca llegó a saber que escribía tangos no quería que ella fuera
demasiado libre
Fue una mujer culta y luchadora: Además de letras de tango, escribíó cuentos y
poemas,; fue corresponsal para un diario argentino desde España durante la guerra
civil.
Interpreto por Ada Falcón con la orquesta de Francisco Canaro
El siguiente tema tiene como protagonistas absolutas a dos grandes mujeres del tango Eladia
Blazquerz y Susa a Rinaldi
Eladia Blázquez, la primera mujer que con sus músicas y letras destacó, aportando al
tango través de sus obras un aire fresco y renovado
Los tradicionalistas la recibieron fríamente, aunque sin la agresividad que reservaron para
otras propuestas más heterodoxas.
El tango veía disgregarse la popularidad de la que había gozado hasta mediados de los
años '50, y aunque una vanguardia de músicos renovadores, con Astor Piazzolla a la
cabeza, buscaba abrirle nuevos rumbos, era muy escaso su eco en el público masivo
Allí surgió Susana Rinaldi, con un estilo nuevo, una voz delicada y un decir sutil o rotundo,
Susana dejó de lado los temas machistas y arrabaleros apelando a un repertorio variado
pero cuidadosamente elegido, que mezclaba romanticismo y mensaje
Atrajo así a un público intelectualizado, incluyendo a una franja universitaria, que a través de
ella revalorizó el tango.
Con ella, con su calidad vocal, con su selecto repertorio, con su personalidad, ocurrió al fin
el fenómeno por el que tantas lucharon: el tango se hizo mujer. Llegó el reconocimiento, el
respeto y hasta el entusiasmo
El tema propuesto,
.Sueño de barrilete”, presenta a un personaje frustrado, que no alcanzó la altura de su ideal.
Hay dos términos que debemos traducir del lunfardo para que se entienda bien: Barrilete es
cometa y piolín es cuerda.
Y parafraseando a Eladia, Cuántas entre nosotras quisieron ser barrilete y les faltó piolín
¿Cuántas quisieron ser cometa y les faltó cuerda para volar alto
. Este es el caso de China Cruel, un grupo de mujeres tangueras que posee un repertorio
musical propio y ha logrado desarrollar una fuerte identidad y una impronta marcadamente
femeninas.
Se trata del primer grupo femenino en la historia del tango con estas características. Tomando
el humor y la ironía como eje central, China Cruel aborda temáticas de género y refleja la
realidad de este siglo en un amplio repertorio de nuevas canciones que recorren el tango, la
milonga, valses.
Veronica Belline, la vocalista del conjunto, dice la propia Verónica Bellini que lo que hacen
es un tango escrito y tocado por mujeres, y las letras tienen que ver con lo que a éstas les
pasa. Se puede considerar tango , feminista porque, de algún modo, es una respuesta a
muchos tangos en los que el machismo está muy presente.
Quizá, en réplica a todos los versos misóginos de la cultura tanguera, China Cruel parió el
tango de Ni una Menos, que apela justamente a la posibilidad de que otra vida es posible y
que se puede romper el círculo de la violencia que sufren las mujeres:
Escuchemos Ni una menos, música y letra de China Cruel, en la voz de Susana Bellini