EXPERIENCIA DE “ASUMIMOS ACCIONES RESPONSABLES EN NUESTRO ENTORNO PARA EL

APRENDIZAJE N° 05 CUIDADO DEL AMBIENTE Y LA SALUD”

GRADO.4°4ªF,A,
GRADOS: G B. FECHA: del 19 al 23 de setiembre del 2022

ACTIVIDAD 17: “La Conciencia y la práctica de las virtudes cardinales y teologales”

COMPETENCIA CAPACIDAD DESEMPEÑO PROPOSITO PRODUCTO
PARCIAL INTEGRADOR
CONSTRUYE su identidad como CONOCE a Dios y CONFRONTA el mensaje de RECONOCEN y VALORAN Elaboran en su cuaderno de JORNADAS DE:
persona humana amada por Dio, ASUME su identidad Jesucristo y las enseñanzas de la concepto, tipo, importancia apuntes a través de ejemplos
digna, libre y trascendente, -LIMPIEZA: VIERNES 07 DE
religiosa y espiritual Iglesia con sus vivencias de LA CONCIENCIA y las las REGLAS para decidir una
OCTUBRE
comprendiendo la doctrina de su BUENA CONCIENCIA y a través
como persona digna, personales y comunitarias VIRTUDES CARDINALES y
propia religión y abierto al diálogo
libre y trascendente. demostrando una actitud de TEOLOGALES para vivirla y de GRAFICOS indica las -RECUPERACIÓN DE ÁREAS
con las personas que le son VERDES.
permanente conversión. ponerla en práctica en su VIRTUDES CARDINALES Y
cercanas. -CAMPAÑA DE RECICLAJE.
vida diaria. TEOLOGALES.

ORACION: Señor gracias por cada momento de nuestras vidas…gracias por darnos a conocer y sobre todo entender y comprender que
cada día tenemos un nuevo ACTUAR, una MISION que a cada uno nos toca realizar así dar cumplimiento a tu mensaje, a tu palabra y
sobre todo estar al servicio de los demás. AMEN

De poco habría servido el haber grabado Dios en la naturaleza humana la ley moral, que dirige y salvaguarda la libertad, si al mismo tiempo no le hubiera dado una
capacidad connatural de conocerla; de modo que los imperativos morales son realmente y orientan la conducta del hombre hacia Dios, que es el autor de la ley.
Pero la Providencia no falla y, como enseña la CONSTITUCIÓN PASTORAL GAUDIUM ET SPES del CONCILIO VATICANO II, "en lo profundo de su conciencia el
hombre descubre una ley que él no se da a sí mismo, sino a la que debe obedecer y cuya voz resuena, cuando es necesario, en los oídos de su corazón,
llamándole siempre a amar y a hacer el bien y a evitar el mal: haz esto, evita aquello. Porque el hombre tiene una ley escrit a por Dios en su corazón, en cuya
obediencia está la dignidad humana y por la cual será juzgado. La conciencia es el núcleo más secreto y el sagrario del hombre, en el que está solo con Dios,
cuya voz resuena en lo más íntimo de ella" (n. 16).

Entonces se les abrieron los ojos y ambos se dieron cuenta de que estaban desnudos. Cosieron pues unas hojas de higuera,
y se hicieron unos taparrabos. Oyeron después la voz de Yavé Dios que se paseaba por el jardín, a la hora de la brisa de la
tarde. El hombre y su mujer se escondieron entre loa arboles del jardín para que Yavé Dios no los viera. (Gn 3: 7-8)

LA CONCIENCIA
DEFINICION: La conciencia es la voz interior que manifiesta al hombre la bondad o malicia de una acción, para que haga el bien y evite el mal; es el juicio de
la razón por el que la persona humana reconoce la cualidad moral de un acto concreto que piensa hacer, está haciendo o ha hecho. La conciencia resuena
y avisa, y si se ha hecho algo que la conciencia reprueba, remuerde; si se ha obrado bien, muestra su aprobación y alabanza.
ESTADOS DE CONCIENCIA: Para orientarnos en el uso de la libertad y conforme al dictamen de la conciencia, es útil conocer los diversos estados de la
conciencia:
- CONCIENCIA CIERTA: Aquella que, al discernir la moralidad del acto, tiene seguridad de que es tal y como la conciencia le dicta.
- CONCIENCIA DUDOSA: Es la que se conoce al juicio moral con el temor de que sea de otra manera. En atención al objeto puede ser:
a) Conciencia recta o verdadera: Es cuando el juicio moral se ajusta a la norma objetiva, de modo que la acción es realmente buena o mala, como
se dicta la conciencia.
b) Conciencia errónea: Es cuando el juicio moral no se ajusta a la norma, sino que lo que se dicta como bueno es malo, o lo que se indica como malo
es bueno; este juicio naturalmente procede del error.

LA FORMACION DE LA CONCIENCIA DESDE NUESTRO PUNTO CRISTIANO: La necesidad del hombre de formar su conciencia se da mayormente por la
necesidad de realizar actividades o acciones de acuerdo al comportamiento moral. Nosotros como cristianos por ejemplo actuamos de acuerdo a la
voluntad de Dios. La conciencia se nos ha dado para conocer la norma y cumplirla, como contrafuerte de la libertad, no para obrar mal.

LOS MEDIOS PARA FORMAR LA CONCIENCIA: Son:

a) CONOCER LA DOCTRINA CRISTIANA donde se enseñan los misterios de la fe, junto con las exigencias morales que reclama la condición de criaturas de Dios, y,
en el caso de los cristianos, la condición de hijos adoptivos y discípulos de Jesucristo. En este sentido viene muy bien estar atentos a lo que dicen los
Pastores de la Iglesia: el Papa, los Obispos y los sacerdotes.
b) NO ACTUAR PRECIPITADAMENTE sino pensar con serenidad la determinación que se va a tomar, para que el juicio de la conciencia sea recto y
verdadero, y además seguro, es decir, como pide una buena conciencia que transmite la ley de Dios. Para eso ayuda mucho hacer cada día un breve examen
de conciencia, viendo cómo hemos actuado durante la jornada.
c) PEDIR CONSEJO o saber preguntar a las personas que nos pueden ayudar, como padres, sacerdotes, catequistas, maestros o un buen amigo.
d) DIRECCIÓN ESPIRITUAL con el sacerdote es sin duda un medio excelente (por no decir el mejor) donde se concreta de forma personalizada la formación de
la conciencia, a fin de que esté siempre orientada hacia el bien.

IMPORTANCIA DE LA FORMACION DE LA CONCIENCIA: Pocos somos conscientes de la importancia de la formación de conciencia y con frecuencia orientan
requerimientos morales a sortear peligros o a no escandalizar. La responsabilidad es mucho más: de padres, de autoridades, del maestro, de formadores, del
sacerdote…El hombre es un animal social, decía Aristóteles, y es responsable se su propia conducta y de la influencia (positiva o negativa) en la conducta de
los demás.

REGLAS PARA DECIDIR SIEMPRE UNA BUENA CONCIENCIA: Normalmente, cuidando la formación de conciencia no será difícil conocer y hacer el bien; y cuando
sobreviene alguna dificultad, la actitud interior de buscar con empeño el discernimiento de la voluntad de Dios, facilitará la solución. Son út iles estas reglas:
- Nunca se puede hacer el mal para obtener un bien.
- Tratar a los demás como queremos que nos traten a nosotros.
- Actuar siempre respetando al prójimo y su conciencia.
Viviendo y poniendo en práctica las virtudes corporales, las virtudes
teologales, los mandamientos y demás normas de la urbanidad en nuestra
sociedad con nuestras familias, vecinos, compañeros y amigos nos hace y
podemos decir que reconocemos lo que significa la MORAL y la
CONCIENCIA en el desarrollo de la vida diaria del ser humano.
En esta oportunidad tendremos también como parte del tema de hoy
recordar revisando las VIRTUDES CARDINALES y TEOLOGALES.
VIRTUDES CARDINALES, son aquellas virtudes que son esenciales para
las relaciones humanas y el orden social. Estas virtudes, asociadas también
a las virtudes teologales, son punto de referencia para la orientación de la
conducta de la persona hacia una plena humanización, así como también la
construcción de una sociedad más justa y sana.
Las virtudes cardinales son la prudencia, la justicia, la fortaleza y la
templanza. Se complementan con las virtudes teologales, que son la fe, la
esperanza y la caridad.
PRUDENCIA: Virtud que tiene como propósito enmendar o sanar la
ignorancia de entendimiento. La prudencia es la capacidad de reflexionar
antes de hablar o actuar, así como de evaluar el modo y los medios
adecuados para intervenir en una situación.
La práctica de la prudencia implica seguir al menos tres elementos: pensar
con madurez, decidir con sabiduría y actuar para el bien.
JUSTICIA: Virtud que surge para contraponerse la malicia de la voluntad.
Así, la justicia se comprende como la voluntad manifiesta de una persona
de que cada quien reciba lo que merece y es justo, es decir, que cada quien
reciba lo que le corresponde.
Por lo tanto, el justo respeta los derechos adquiridos del otro. Por ejemplo,
respeta la autoridad que corresponde a cada quien según el rol que cumpla,
respeta también la autoridad de padres hacia hijos.
FORTALEZA: Virtud que se contrapone a la debilidad. Se trata de tener
fuerza para luchar por el bien difícil, es decir, por aquellas metas o
principios nobles que requieren esfuerzo. Asimismo, la fortaleza ayuda a la
persona a moderar su audacia cuando esta es excesiva.
La fortaleza implica actuar en dos sentidos: atacar y resistir. Atacar se
refiere a actuar de inmediato para conquistar lo deseado. Junto a esto es
necesario resistir a la desesperanza y al temor.
TEMPLANZA: Es una respuesta al desorden de la concupiscencia. Se trata
de moderar los apetitos desordenados, así como las tentaciones de los
sentidos. Para ello, la persona antepone el uso de la razón. Mediante el
ejercicio racional, la persona logra el dominio de sus pasiones para
preservar el bien común.
Los medios de la templanza son la abstinencia, la sobriedad, la castidad y
la continencia. Otras virtudes que suelen acompañar a la templanza son la
humildad y la mansedumbre.
VIRTUDES TEOLOGALES, conjunto de valores y actitudes
que facultan al ser humano acercarse a Dios y relacionarse con
él. Anima a practicar las virtudes cardinales, por lo cual se
complementan. Esto se fundamenta en la II carta del apóstol
Pedro: “Con ellas, Dios nos ha otorgado las promesas más
grandes y valiosas, para que por ellas participen de la naturaleza
divina” (2 Pedro 1, 4).
Las virtudes teologales son inspiradas en el entendimiento del
ser humano por el Espíritu Santo, lo que les permite a las
personas actuar como “hijos de Dios”. Las virtudes teologales
fueron resumidas por San Pablo en la I carta a los corintios: “En
una palabra, ahora existen tres cosas: la fe, la esperanza y la
caridad, pero la más grande de todas es la caridad” (1 Corintios
13, 13).
FE: Es creer en Dios y confiar en su revelación. Supone, la
apertura espiritual de reconocer la manifestación de Dios en la
vida cotidiana y en la comunidad de creyentes, ósea, en la Iglesia.
Nuestro Catecismo define la fe como “la virtud teologal por la
que creemos en Dios y en todo lo que Él nos ha dicho y revelado”
(artículo 1814).
La fe anima a actuar de acuerdo a principios espirituales
inspirados por Dios y motiva a profesarla abiertamente, esto es,
dar testimonio de ella y difundirla.
ESPERANZA: Es la espera en el cumplimiento de un determinado
horizonte que se refiere al cumplimiento de las promesas de
Jesús: el reino de los cielos y la vida eterna. El Catecismo
sostiene que la esperanza “corresponde al anhelo de felicidad
puesto por Dios en el corazón de todo hombre” (artículo 1818).
La esperanza, animada por la fe, permite al ser humano
comprometerse con los cambios necesarios para construir el
reinado de Dios, así como encontrar sentido al trabajo, fuerzas
para enfrentar las dificultades y paciencia para esperar.
CARIDAD: Es el centro del corazón cristiano. En ella expresa
plenamente la fe y la esperanza y, por ende, ordena y articula
todas las virtudes. La caridad (amor) se define como la virtud que
permite a las personas amar a Dios por sobre todas las cosas y,
en nombre de este vínculo, amar al prójimo como a sí mismo.
Sus frutos son el gozo, la paz y la misericordia.
La caridad corresponde al mandamiento fundamental que Jesús
comunica a sus apóstoles: “Les doy un mandamiento nuevo:
ámense los unos a los otros. Así como yo los he amado, ámense
también ustedes los unos a los otros” (Juan 13, 34). Para San
Pablo, la caridad es la más importante de las virtudes teológicas,
como se ve en el siguiente versículo: "Aunque repartiera todo lo
que poseo e incluso sacrificara mi cuerpo, pero gloriarme, si no
tengo amor, de nada me sirve" (1 Corintios 13, 3).

De lo aprendido del tema de hoy, tenemos como PRODUCTO PARCIAL, realizar la siguiente actividad:
1.-A TRAVÉS de EJEMPLOS utilizando tu CREATIVIDAD muy libremente trabajar en tu CUADERNO de APUNTES las REGLAS
para desarrollar una BUENA CONCIENCIA. Luego transcribirlo EN UN PAPELOTE Y TRAERLO LA PROXIMA SEMANA.

2.-INDICAR en tu CUADERNO DE APUNTES a través de GRÁFICOS o PEGADOS DE IMÁGENES Y/O LÁMINAS las VIRTUDES
CARDINALES y VIRTUDES TEOLOGALES.

Ahora, evaluamos nuestro aprendizaje, respondiendo el siguiente cuadro:

METACOGNICIÓN:
¿QUÉ HE APRENDIDO DEL TEMA? ....................................................................................................................................................................
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¿COMO HE APRENDIDO EL TEMA? …………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….

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¿PARA QUE ME VA A SERVIR EN MI VIDA CONOCER ESTE TEMA?
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MI COMPROMISO DE HOY ES: ……………………………………………………………………………………………………………………………………

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. Agradecemos a DIOS en una ORACION por lo aprendido y la practica a desarrollar del tema de hoy.