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JUVENTUD REBELDE DE COLOMBIA

Documentos Base:

1. Carácter Juventud Rebelde ……………………………………….. Pág. 2


2. Principios Organizativos y Estructura …………………………….. Pág. 6
3. Plataforma …………………………………………………………… Pág. 13
 

1. Carácter Juventud Rebelde

A LA JUVENTUD REBELDE DE COLOMBIA


Somos Juventud Rebelde, respuesta digna y garantía de cambio. Sentimos el llamado a la
rebeldía y la necesidad de participar en la transformación de nuestro país; somos las y los
jóvenes del campo, de la ciudad, del barrio, del parche, el estadio, la cancha, del colegio,
de la Universidad, artistas, indígenas, afro-descendientes; todas y todos aquellos que
soñamos con una Patria Nueva, quienes nos vestimos de alegría y apelamos a la
memoria para tomar nuestro camino, el que el Pueblo nos ha trazado: ser la generación
que lucha contra el olvido por la memoria futura de una Nueva Patria. Rendimos honor a
la memoria de todas y todos los jóvenes caídos en la lucha social y política por una nueva
sociedad en Colombia. A ellas y ellos la vida les fue negada, más no su esperanza,
dignidad y su sueño de construir una Colombia Nueva. Su camino y legado marcan en
nuestros corazones el compromiso de la Juventud Rebelde: forjar el ímpetu juvenil que
asuma su papel en la revuelta de la digna lucha por mejores condiciones de vida para
todas y todos.

Frente a una Colombia que nos condena a la misería, la guerra; que niega nuestra voz,
nos persigue y asesina, continuamos construyendo el futuro: La rebeldía organizada es la
única respuesta digna de una juventud que no tiene ningún futuro en este sistema y que
está llamada a transformarlo todo.

¡Basta ya! Es la hora de reconocer que no tenemos nada que perder, pues todo nos ha
sido negado; seremos victoriosas y victoriosos si juntamos nuestras rebeldías y hacemos
de nuestra indignación el motor para la transformación. Vamos a construir un nuevo país;
vamos a darnos un buen vivir como jóvenes del común. Por eso nos organizamos como
Juventud Rebelde. Somos una organización política juvenil de masas que recoge diversas
expresiones juveniles en su proyección hacia la construcción de un orden socialista en
Colombia, entendido éste como un nuevo sistema económico, político, social y cultural, un
nuevo paradigma a crear que niegue a plenitud el orden del capital y que transforma el
conjunto de la vida social.

La juventud se organiza, se reconoce como colectivo, como comunidad que avanza a


construir un país del tamaño de nuestros sueños desde sus territorios. Ésta es la
generación de la segunda y definitiva independencia, somos la generación de la
esperanza que le presenta al pueblo colombiano, un aporte para la construcción de la
Colombia Nueva basada en estos principios y características.

1. La Juventud Rebelde de Colombia es una organización política juvenil de


masas que lucha por la construcción en nuestro país de un nuevo orden
social al servicio de los intereses del pueblo trabajador: Es política porque
buscamos convocar a la “Generación de la Segunda Independencia” a la lucha
contra el régimen oligárquico, antidemocrático y mafioso que impera en la
actualidad. Como sujetos fundamentales en su desarrollo entendemos la política
como el ejercicio de lucha, movilización y organización que busca construir poder
en favor de la juventud y el pueblo. Para la Juventud Rebelde de Colombia la
política nace, se hace y se construye en la discusión, la acción, disputa y la
organización colectiva.

Es socialista porque consideramos que el país requiere una transformación


estructural radical en lo económico, político, cultural y social. Hacemos parte de las

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luchas por un nuevo proyecto de sociedad que supere el injusto orden social que al
día de hoy padecemos; proponemos el socialismo como un nuevo sistema
económico, político, social y cultural, un nuevo paradigma de organización social a
concebir y construir, que niegue a plenitud el orden del capital y que transforme el
conjunto de la vida social.

Es de masas, pues reconocemos que nuestra lucha se debe hacer partiendo de


las múltiples formas de resistencia y de movilización social con la que las y los
jóvenes hoy nos enfrentamos al sistema capitalista. Como organización damos
cabida a la participación individual, colectiva, urbana, rural, étnica, gremial,
comunal, social y política. Estas formas de lucha y resistencia se asientan y
desarrollan territorial y regionalmente convergiendo en una fuerza nacional que
disputa el poder, lo construye y avanza hacia una Colombia Nueva.

2. La Juventud Rebelde tiene por principio la unidad, como base del nuevo
Poder y el Nuevo gobierno: El reconocimiento de las diversas expresiones y
formas organizativas que comparten con nosotros aspiraciones y acumulados
hacia una patria nueva, nos exige mantener un ánimo de unidad, encuentro y
convergencia con ellas. Asistir como Juventud Rebelde a todo espacio donde se
construya y vislumbre la unidad, aportando nuestra lucha, ideas y capacidad para
construir –desde la fraternidad y la hermandad– el camino de la unidad como
premisa de victoria. La unidad que apostamos construir es la unidad para la
acción, la organización y el encuentro programático de objetivos políticos a corto,
mediano y largo plazo, mediante la construcción de un bloque popular, con visión
estratégica de reconstruir una Colombia para el Buen Vivir de las gentes del
común y el socialismo.

3. La Juventud Rebelde camina hacia el socialismo, apuesta por construir una


nueva sociedad como alternativa al capitalismo: Reconocemos en el
capitalismo la causa profunda de las penurias que padece la amplia mayoría de los
jóvenes y de la población colombiana, por ello somos una organización que se
enmarca en la creciente lucha anticapitalista a nivel mundial, y que proclama su
apuesta por el SOCIALISMO como auténtica alternativa, que florece ante la aguda
crisis de un sistema decadente y depredador. Nuestra idea de socialismo implica la
superación de la expropiación de las riquezas producidas por las y los trabajadores
y con ello, de la alienación de nuestro pueblo; la construcción de una democracia
directa como base de un Nuevo Estado de y para las gentes del común; reivindica
una relación no depredadora ni destructiva con la naturaleza y el ambiente, al
identificarlo como parte esencial de nuestros territorios, comunidades, cultura y
futuro. Llamamos a construir un socialismo basado en un nuevo sentido común,
una nueva cultura para la liberación, la realización plena de una sociedad que
humanice a Colombia. Nuestro Socialismo, niega toda relación de dominación y,
combate el fascismo en todas sus expresiones, pues promueve una nueva idea de
lo social afirmada en lo común y lo colectivo.

La Juventud Rebelde reivindica para ello la rica tradición de las luchas


revolucionarias libradas por nuestro pueblo; apelamos a sus experiencias, aportes
y conocimientos para impulsar y continuar nuestra lucha. Nos reconocemos como
continuadores y partícipes de las justas luchas de los revolucionarios en todo el
mundo y especialmente en la histórica firmeza que han expresado en nuestro país,

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pasando por las décadas de resistencia campesina y popular que hoy se


mantienen firmes y avanzando hacia un futuro de esperanza.

Retomamos el legado del marxismo y sus reflexiones sobre la necesidad de


construir un nuevo orden mediante el ejercicio del poder sustentado en la
organización y la lucha política. Asumimos el pensamiento dialéctico y una
concepción histórica y materialista de la sociedad como base de nuestro análisis
de la realidad como colombianas y colombianos.

4. La Juventud Rebelde asume y apuesta por superar las estructuras


patriarcales de la dominación capitalista, desde una perspectiva de clase
como respuesta histórica necesaria en el camino hacia el socialismo.
Recogemos los ideales de las miles de mujeres que creen que las
transformaciones del gobierno deben darse desde las nuevas formas de hacer
política, de construir poder con las voces de quienes sufren en mayor medida los
embates del capitalismo y el imperialismo.

Entendemos y asumimos la necesidad de superar la alienación y dominación por


parte del patriarcado que permite legitimar las violentas acciones culturales,
sociales, políticas, económicas y sobre los derechos del pueblo, lo cual se
recrudece entre las mujeres, quienes en conjunción con sus lugares étnicos y de
clase, se ven aislados de su reconocimiento pleno como sujetas que aportan y
transforman. Asumimos en nuestro ejercicio transformador la praxis anti patriarcal
en las labores cotidianas de la organización.

5. La Juventud Rebelde, como parte de ésta generación avocada a la


generación de la Segunda y Definitiva Independencia, reivindica su carácter
patriótico, antiimperialista e internacionalista: Reconocemos que las y los
patriotas de hoy, debemos culminar el camino de la independencia; y esta lucha,
pasa por la construcción de soberanía nacional y popular en contra del capital
transnacional, el imperialismo y toda intervención neocolonial.

Revindicamos nuestra dignidad como pueblo históricamente expoliado por las


potencias extranjeras y sus cómplices locales, no creemos en patrioterismos y
pensamos que nuestra independencia y soberanía, significan la decidida lucha
contra el imperialismo en todas sus formas, mediante una gesta inexorablemente
continental en toda nuestra Patria Grande, como ya lo advirtiese Bolívar hace 200
años. En eso consiste nuestra vocación latinoamericanista; hacemos de Nuestra
América un proyecto político.

Como organización antiimperialista rechazamos la dominación neocolonial y las


agresiones imperiales en cualquiera de sus formas; apoyamos las diversas formas
de resistencia lucha de los pueblos del mundo para combatirlas. Nos
consideramos patriotas e internacionalistas y asumimos un sentimiento solidario
con todos aquellos que libran la batalla por su libertad y con los oprimidos y
oprimidas de todas las naciones que enfrentan al capital.

6. La Juventud Rebelde reconoce como fuente fundamental de su acción


política la cultura y pensamiento emancipador Nuestroamericano: La
literatura, música, arte, gastronomía, y conocimiento los saberes propios de

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Nuestra América, acompañan nuestra identidad, en una fuerza histórica y política


intercultural, contrahegemónica. Hacemos nuestros esa cultura y ese pensamiento
de resistencia e identidad Nuestroamericana, para incorporarla en el nuevo sentido
común que interpreta al bloque popular, el nuevo Poder y como base del Nuevo
Estado.

Reconocemos vigencia fundamental en los postulados y sueños del Libertador,


para una Patria Grande libre y soberana. Reivindicamos en Bolívar y en su
ejército de hombres y mujeres del pueblo, un punto de unidad de los demócratas
revolucionarios y patriotas del continente en pos de su proyecto de integración
continental y de liberación social de las gentes del común. Denunciamos la traición
y truncamiento de su apuesta libertadora por parte de las oligarquías de la región y
convocamos a nuestra generación a blandir nuevamente la espada y el
pensamiento de Bolívar por todo el continente. La vida y obra de Martí, de Ernesto
Che Guevara y Mariátegui; el ejemplo de heroicas mujeres como Manuelita Sáenz,
Policarpa Salavarrieta, Antonia Santos; la templanza de Jaime Pardo Leal, Manuel
Cepeda Vargas, entre tantos otros revolucionarios de nuestra Patria Grande,
inspiran nuestra lucha por el socialismo, el nuevo poder y la Segunda y Definitiva
Independencia, en medio de la más férrea unidad latinoamericana.

Llamamos a todas y todos los JÓVENES REBELDES de Colombia que hoy combaten
desde las múltiples trincheras de la lucha popular a juntar nuestras luchas por una nueva
sociedad. La historia nos llama a hacerla parir una Colombia Nueva como gesta de
nuestra generación. A la Juventud Rebelde, soñadora, beligerante, alegre y
transformadora a tomar su lugar en las luchas que vienen, las luchas de las que nacerá la
Patria Nueva.

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2. Principios Organizativos y Estructura

PRINCIPIOS ORGANIZATIOS Y ESTRUCTURA


JUVENTUD REBELDE

Sobre la organización y sus principios

La JR es una organización nacional que adopta formas organizativas, acordes a las


condiciones concretas de lucha y resistencia de los jóvenes colombianos. Esta enraizada
en los procesos juveniles locales, municipales, departamentales, regionales y nacionales;
así mismo, se nutre de las particularidades de cada uno de estos escenarios territoriales y
sectoriales para la definición de su estructura y el funcionamiento de la misma. Busca la
unidad política, el dialogo y la decisión colectiva desde las bases.

Los jóvenes rebeldes concebimos la organización como la herramienta indispensable que


proyecta la actividad de las y los jóvenes en su quehacer político; así como el escenario
propicio que agrupa los acumulados políticos y organizativos existentes a nivel regional y
nacional. Propende por llegar a nuevos espacios y escenarios del espectro de la vida
juvenil.

La JR y sus militantes actúan con responsabilidad basada en principios éticos y virtudes


revolucionarias: la sencillez, modestia, solidaridad, honestidad, el respeto a la diversidad y
diferencia, etc. Eliminando las viejas prácticas y vicios políticos que durante siglos ha
mantenido este sistema opresor y respondiendo a las exigencias de la realidad juvenil de
nuestra Patria.

Es una organización que propende por mantener relaciones fraternales entre sus
militantes, en la que sus divergencias serán tramitadas en todas las instancias necesarias
y se superarán con el desarrollo de argumentos sólidos y luego sustentados en decisiones
colectivas. El cumplimiento general de las decisiones y delegación de responsabilidades
colectivas e individuales, será principio necesario para nuestro accionar político.

Para la construcción, desarrollo y cumplimiento de los objetivos, la Juventud Rebelde


fundamenta su actuar en los siguientes principios:

a) Principio de Unidad e identidad política de la Juventud Rebelde en cuanto al


desarrollo de su actuar político y organizativo a través del trabajo de Base, el
reconocimiento de las bases, del Carácter político e ideológico de la Juventud
Rebelde y su articulación con el Plan de Trabajo Nacional aprobado por el
Congreso.

b) Principio de Organización de base para la construcción de un nuevo poder


alternativo y popular a través de escenarios de base amplios, flexibles y
autónomos, que reconozcan todas las expresiones organizativas de los Jóvenes
del país y le permitan su vinculación individual o colectiva.

c) Principio de participación y construcción de las decisiones de la organización

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desde la bases a la dirección, asumiendo las decisiones adoptadas en consenso o


por la mayoría, después de examinar todos los argumentos.

d) El principio de la crítica y autocrítica, practicado en las decisiones y actuaciones


de la organización y sus militantes.

e) El principio de Dirección colectiva y el trabajo colectivo de la organización para


garantizar el cumplimiento de los planes y las responsabilidades individuales y
colectivas.

f) Principio de Planeación, en todas las actividades, iniciativas, acciones y tareas que


adelante la organización. Jamás se improvisa.

g) El cumplimiento general de las decisiones y delegación de responsabilidades


colectivas e individuales, constituyen un criterio necesario para nuestro accionar
político.

h) Impulsar la incorporación de una disciplina consciente fruto del desarrollo


formación permanente de sus militantes, que permita el cumplimiento adecuado de
las responsabilidades individuales y colectivas para alcanzar nuestros objetivos.

Podrán ser militantes de JR todas y todos los jóvenes que acepten los presentes
principios orgánicos, la plataforma de lucha y su carácter y principios políticos e
ideológicos. Los jóvenes se vincularán a de manera voluntaria e individual a los Núcleos
Rebeldes de Base, o de manera colectiva para aquellas organizaciones de jóvenes que
decidan conformar un Núcleo Rebelde; y recibirán la formación necesaria para conocer
los principios: políticos, ideológicos y organizativos, la plataforma de lucha, y demás
disposiciones reglamentarias que la JR construya.

ESTRUCTURA Y FUNCIONAMIENTO DE JUVENTUD REBELDE

Sobre las Instancias de Base:

Núcleo Rebelde de Base (NRB)

El Núcleo Rebelde de Base es la expresión organizativa fundamental, es de carácter


amplio, flexible y autónoma, en la que los miembros de la JR desarrollan su actividad
política. Realizaran reuniones periódicas donde acordarán un plan de trabajo de acuerdo
a la realidad de su ámbito de acción. Se reunirán para elegir su delegado a los diferentes
órganos de dirección y coordinación.

Sobre las Instancias de Dirección Nacional:

- Congreso Nacional Rebelde (CNR)

El Congreso Nacional Rebelde es la instancia máxima de dirección y decisión de la


Juventud Rebelde, responsable de definir su línea política y programática. Se reunirá
cada dos (2) años, o de manera extraordinaria, cuando así lo determine el ENR. En este
debe haber participación de toda la diversidad de expresiones organizativas de todos los
departamentos y debe conocer y representar la realidad y la dinámica que se vive en las

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distintas regiones de nuestro país.

Dentro de las funciones del Congreso Nacional, se encuentra:

-­‐ Definir las líneas gruesas de la política de la Juventud Rebelde para un periodo de
dos (2) años.

-­‐ Establecer el plan nacional de trabajo a dos (2) años.

-­‐ Actualizar la plataforma nacional en caso de ser necesario.

-­‐ Definir los lineamientos generales de la política internacional de la JR y la


perspectiva del relacionamiento nacional e internacional de la misma.

-­‐ Armar el programa político de la JR.

-­‐ Elegir el Directorio Nacional Rebelde para un periodo de (2) años.

- Encuentro Nacional Rebelde (ENR)

El Encuentro Nacional Rebelde es la máxima instancia de dirección y decisión, entre cada


Congreso. Esta constituido por 2 (Dos) delegados elegidos democráticamente por cada
Encuentro Departamental Rebelde, mas los miembros del Directorio Nacional Rebelde.
Tendrá el carácter de Dirección Nacional de JR y las funciones de interlocución política
nacional e internacional. Se reunirá cada seis (6) meses para construir y evaluar al Plan
Nacional de Trabajo.

Dentro de las funciones del Encuentro Nacional Rebelde, se encuentra:

-­‐ Realizar el seguimiento de la política de la Juventud Rebelde emanada del


Congreso para un periodo de dos (2) años.

-­‐ Realizar el seguimiento y evaluación del plan nacional de trabajo a dos (2) años.

-­‐ Realizar la evaluación de desempeño de las secretarias del Directorio Nacional.

-­‐ Conformar las comisiones de trabajo de las secretarias del Directorio Nacional
Rebelde.

-­‐ Trabajar para coordinar y dinamizar el cumplimiento de las decisiones del


Congreso en todo el territorio nacional.

-­‐ Apoyar a los Encuentros Departamentales y a los Núcleos Rebeldes de Base.

-­‐ Podrán ser removidos y remplazados por las bases de acuerdo al cumplimiento de
las responsabilidades.

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- Directorio Nacional Rebelde (DNR)

El Directorio Nacional Rebelde es un grupo destacado de compañeras(os), que deberá


promover la ejecución y la gestión del plan nacional de JR, y sesionará permanentemente.
Estará integrado por 9 jóvenes, que serán postulados para cada una de las siguientes
responsabilidades:

a. Secretaria Política: Representar la organización ante otras


organizaciones. Presidir las sesiones del Directorio Nacional Rebelde,
del Comité Nacional Rebelde y el Congreso. Representar a Juventud
Rebelde en todos los espacios en la que ella participe o en su caso,
delegar a quien participe. Crear las comisiones de apoyo necesarias
para el buen funcionamiento de la JR. Promover el crecimiento y
posicionamiento de la organización. Rendir informe semestral de
actividades.

b. Secretaria de Relaciones Internacionales: Representar la


organización ante organizaciones internacionales o en los eventos en
que sea convocada. Mantener y promover una estrecha relación con las
organizaciones juveniles del mundo. Colaborar con el secretario general
con las funciones de secretaria política. Rendir informe semestral de
actividades.

c. Secretaria de Formación: Dirigir y promover la política formativa e


investigativa y pedagógica de Juventud Rebelde. Elaborar un programa
de constante formación para la militancia. Elaborar y diseñar junto con
la secretaría de comunicaciones material de difusión con las opiniones y
los documentos de Juventud Rebelde. Organizar escenarios de debate
que promuevan y eleven el nivel de formación de la militancia. Rendir
informe semestral de actividades.

d. Secretaria de Organización: Velar por la ejecución de los planes y


orientaciones emanadas por las estructura de Juventud Rebelde. Dirigir
y Orientar la política de crecimiento de Juventud Rebelde. Presentar un
manual de organización a la militancia. Proponer al Directorio Nacional
Rebelde y al Comité Nacional Rebelde los acuerdos que considere
necesarios para la mejor organización de JR, teniendo en cuenta el
contexto político y de seguridad que vive el país. Elaborar los
dictámenes de afiliación y censo de las estructuras para su
presentación a Juventud Rebelde. Velar por las condiciones para el
desarrollo de las reuniones del Directorio Nacional Rebelde y el Comité
Nacional Rebelde. Rendir informe semestral de actividades.

e. Secretaría de Finanzas: Llevar la contabilidad de los fondos de la


organización con la exactitud y el rigor necesario. Elaborar y
promocionar proyectos que permitan la consecución de recursos para la
organización. Manejar la caja menor de la organización con la cantidad
máxima que el Directorio Nacional Rebelde defina. Presentar un plan
anual de finanzas. Elaborar el presupuesto para las actividades de

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orden nacional y las secretarias, con el plan de gestión correspondiente.


Rendir informe semestral de actividades.

f. Secretaría de Comunicaciones y Propaganda: Elaborar e


implementar las estrategias de difusión periódica y permanente de las
tareas de la organización hacia su militancia y el pueblo en general,
promoviendo su posicionamiento y crecimiento. Ejecutar la política
editorial y de unidad gráfica adscrita a la organización. Difundir las
convocatorias, disposiciones y orientaciones de los órganos de
dirección. Rendir informe semestral de actividades.

g. Secretaria de masas: Garantizar relaciones políticas con


organizaciones sociales, étnicas, artísticas y de masas. Elaborar
propuestas de acompañamiento y desarrollo de trabajo sectorial, que
permitan el cumplimiento de los objetivos de la organización. Rendir
informe semestral de actividades.

h. Secretaria de Derechos Humanos: Garantizar la protección de los


derechos humanos de las y los integrantes de la Organización.
Promover entre los y las integrantes de JR el conocimiento de estos y
los mecanismos de defensa de los mismos. Denunciar públicamente y
ante los organismos respectivos toda violación en contra de los
derechos humanos de cualquier integrante de la JR . Rendir informe
semestral de actividades.

Dentro de las funciones del Comité Ejecutivo Rebelde se encuentran:

-­‐ Dirigir, coordinar, impulsar, organizar y desarrollar la actividad política de la


Juventud Rebelde emanada de sus Congresos y Comités Nacionales.

-­‐ Fortalecer los Comités de Base y apoyar los procesos de la Juventud Rebelde en
las regiones; crear otras nuevas allí donde no existan.

-­‐ Elaborar, impulsar, coordinar y supervisar el funcionamiento interno en todos los


niveles de la Organización.

-­‐ Organizar y dirigir las áreas y comisiones necesarias para contribuir a la


coordinación, elaboración y aplicación de la línea política de la organización en
todos sus aspectos.

-­‐ Dirigir la política internacional de Juventud Rebelde.

-­‐ Establecer canales de comunicación y relaciones políticas con las organizaciones


y movimientos sociales de su territorio con los cuales la Juventud Rebelde pueda
desarrollar sus objetivos políticos.

-­‐ Generar permanentemente producción escrita y otro tipo de pronunciamientos de


opinión política.

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-­‐ Impulsar y coordinar equipos departamentales de apoyo que garanticen el


cumplimiento de las tareas y objetivos de la JR.

-­‐ El ENR podrá sugerir el cambio o remoción de la responsabilidad, de acuerdo al


cumplimiento de las tareas y responsabilidades emanadas del cargo. Sujeto a un
ejercicio de diálogo y discusión previo con los procesos departamentales.

-­‐ Rendir informe semestral de actividades en el Encuentro Nacional Rebelde.

Sobre las Instancias Departamentales de Coordinación y Dirección:

- Encuentro Departamental Rebelde (EDR)

El Encuentro Departamental Rebelde es el espacio constituido por los delegados de cada


uno de los Núcleos Rebeldes de Base que desarrollen su actividad en el territorio del
departamento. Los delegados serán elegidos democráticamente por su respectivo
escenario y también podrá ser de carácter regional en donde las dinámicas territoriales lo
ameriten.

Tendrán el papel de coordinar las acciones, desarrollar la plataforma y los principios de la


JR decididos en su congreso nacional y apoyar a los comités de base en el cumplimiento
de sus agendas de trabajo. Se reunirá de manera periódica, dados los planes y dinámicas
locales. Será convocado por el Directorio Departamental Rebelde.

Los Encuentros Departamentales elegirán sus directorios con criterios de Autonomía


garantizando dos condiciones mínimas: un escenario asambleario y discusión de las
bases para la elección de dirección.

- Directorio Departamental Rebelde (DDR)

El Directorio Departamental Rebelde es un grupo destacado por el Encuentro


Departamental Rebelde, que deberá promover la ejecución y la gestión del plan nacional y
departamental de la JR. Sesionará permanentemente y estará integrado por jóvenes
pertenecientes a los Escenarios Rebeldes de Base, elegidos democráticamente.
Adicionalmente, impulsaran la conformación de equipos de apoyo para las secretarias que
lo ameriten según tareas y dinámicas propias. Tendrá como funciones:

-­‐ Asegurar el cumplimiento de los acuerdos de los órganos superiores así como
mantener un permanente contacto con estos.

-­‐ Aprobar y aplicar la política de Juventud Rebelde en su ámbito de actuación dentro


de los acuerdos nacionales.

-­‐ Apoyar el trabajo de las organizaciones y Comités de Base que actúan en su


demarcación territorial.

-­‐ Promover el desarrollo organizativo de Juventud Rebelde a través de la creación


de nuevos Escenarios Rebeldes de Base o procesos organizativos que desarrollen
nuestros principios y la plataforma.

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-­‐ Publicar y distribuir a la militancia, en el más breve plazo posible, los documentos
aprobados tanto en congresos como en demás actividades nacionales o
internacionales en las que participe Juventud Rebelde.

-­‐ Establecer canales de comunicación y relaciones políticas con las organizaciones


y movimientos sociales de su territorio con los cuales Juventud Rebelde pueda
desarrollar sus objetivos políticos.

-­‐ Podrán ser removidos y remplazados por las bases de acuerdo al cumplimiento de
las responsabilidades.

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3. Plataforma de Lucha

PLATAFORMA DE LUCHA JUVENTUD REBELDE

INTRODUCCIÓN

La Juventud Rebelde convoca a los más amplios y diversos sectores juveniles de


Colombia a cerrar el puño contra el origen de los padecimientos de nuestro pueblo, que
no es otro que el yugo del capital que dio origen a un régimen político excluyente y
terrorista que nos niega la posibilidad de desarrollarnos plena y libremente para alcanzar
una sociedad diversa y pluralista, en la que quepamos todos y todas, sin odiosos distingos
políticos, sociales, económicos, étnicos, culturales, sexuales, de género; trazando el
camino hacia la superación de las clases sociales. Nuestra propuesta de país reivindica la
diversidad y busca potenciarla como base de una sociedad de nuevo tipo socialista, en la
cual, se haga realidad el principio: “de cada quien según sus capacidades, a cada cual
según sus necesidades”.

Nuestra lucha por una sociedad de nuevo tipo, socialista, enmarca nuestro reclamo por el
derecho a ser joven: el conjunto de condiciones materiales y “espirituales” para un
desarrollo, integración, reconocimiento político y buen vivir de los jóvenes: trabajo,
educación de calidad en todo nivel, territorio, salud, vivienda, autonomía sobre su cuerpo
– aborto y sexualidad- consumo consciente, deporte, y contra el consumismo. Con el
derecho a ser joven buscamos unificar trayectorias dispersas de lucha juvenil en una
pelea global para integrar al movimiento juvenil a la disputa política.

Inspirados por el más profundo sentimiento de amor por la Patria, jóvenes del campo y la
ciudad, convencidos de nuestro compromiso con la vida y la historia, decidimos juntar
esfuerzos y rebeldías en la construcción de un país donde impere la paz con justicia
social, la hermandad y solidaridad, asumiendo una plataforma de lucha con profundo
contenido anticapitalista, antiimperialista, contra el fascismo, por el socialismo.

1. SOLUCIÓN POLÍTICA AL CONFLICTO SOCIAL, POLÍTICO, ECONÓMICO Y


ARMADO: PAZ COMO JUSTICIA SOCIAL.

La Juventud colombiana reclama poner fin al extenso conflicto económico, social, político
y armado impuesto por las élites del país. Su superación no es otra que la SOLUCION
POLITICA, entendiendo ésta como la resolución de las causalidades estructurales de esta
confrontación: el inveterado problema de la acumulación de la tierra en pocas manos, el
excluyente sistema económico que condena al hambre a la mayoría de la población y el
antidemocrático régimen de terrorismo de Estado que niega el pleno ejercicio de
construcción de alternativas políticas.

Entendemos que la salida política incluye escenarios de diálogo y movilización que


involucre al Estado, la insurgencia, los diferentes sectores y expresiones sociales del
pueblo, que propicie las condiciones necesarias para hablar de paz con justicia social, sin

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limitar el conflicto al aspecto militar, pues todos somos actores políticos claves para
solución. La arrogante propuesta gubernamental de la desmovilización y la rendición de
las guerrillas no es ninguna solución política, ya que deja inalterada la esencia del
conflicto social.

Reivindicamos el derecho a la objeción de conciencia al servicio militar obligatorio, porque


no apoyamos la sevicia del Estado de decretar la guerra como única alternativa para los
hijos de los trabajadores. Exigimos el desmonte de la doctrina de seguridad nacional que
promueve la política del terrorismo de Estado, el narco-paramilitarismo y la necesaria
reforma estructural de las apátridas FFMM oficiales, sí como la libertad de todos los
presos políticos. Nuestra lucha reclama el fin de la militarización de la vida juvenil dando
lugar a una sociedad para la reconciliación y la paz con justicia social.

Fieles a nuestra visión de participación popular, respaldamos e impulsamos múltiples


iniciativas de movilización social para la solución política, buscando construir un mandato
del pueblo colombiano por la salida política del conflicto y la paz con justicia social,
respaldada por el accionar de las grandes mayorías del pueblo para dar fin a la guerra,
por medio de las profundas transformaciones que requiere nuestro país.

2. PODER JUVENIL Y POPULAR: DEMOCRACIA DIRECTA, PLENA PARA UN NUEVO


ORDEN SOCIAL.

Desde la invasión de los europeos en nuestra América hace más de 500 años, la
imposición cultural, religiosa y la esclavitud, resultado del racismo y la hegemónica
concepción eurocéntrica de civilización; trajo consigo el exterminio sistemático de miles de
pueblos nativos, cazándolos, evangelizándolos y explotando su fuerza de trabajo,
desconociendo su riqueza y diversidad cultural, acaparando sus territorios,
desplazándolos y condenándolos a la desaparición. Esa historia de violencia, exclusión y
explotación a los sectores populares ha sido la constante en el origen y desarrollo del
régimen político actual, y un aspecto que configura el Estado colombiano: la violencia
abierta, estatal y paraestatal, la corrupción y clientelismo afincado en formas de tenencia
de la tierra mediante el despojo legal e ilegal, han sido los motores que reproducen un
sistema político fuertemente cerrado a cualquier alternativa popular.

Denunciamos el carácter asesino, mafioso, violento y antidemocrático del Estado de la


burguesa nacional. Como Juventud Rebelde clamamos la construcción de un Estado de
nuevo tipo, socialista, que permita canalizar las reales demandas de las clases
desposeídas y explotadas; un nuevo Estado basado en formas de participación política
que promuevan la democracia directa y plena, es decir, que garanticen que la sociedad
colombiana defina, controle, ejecute y decida ante toda decisión política. Un nuevo
régimen político que reconozca las formas de asociación y acción política popular sin
recurrir a su persecución, señalamiento y aniquilamiento.

Exigimos la libertad de todos los dirigentes sociales prisioneros por participar en la lucha
popular; rechazamos el trato de la movilización social como problema de orden público y
nos enfrentamos de forma beligerante a cualquier forma de autoritarismo, despotismo o
fascismo.

Desde la Juventud Rebelde promovemos el ejercicio del nuevo poder, como fundamento
de la auténtica democracia directa, plena, popular. Deben ser las comunidades las que
participen y decidan su rumbo, y asuman en sus manos las riendas de su historia,

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construyendo un nuevo poder con el pueblo organizado atendiendo sus problemáticas y


construyendo sus sueños de liberación. La Juventud Rebelde ubica el auténtico camino
para la democratización efectiva de nuestro país, trabajando por una democracia directa y
popular y por la construcción de un nuevo poder que supere los estrechos marcos de los
simulacros participativos de la democracia burguesa, haciendo efectivo un gobierno del
pueblo; un gobierno del pueblo sustentado en las formas organizativas populares y sus
mecanismos de acción y participación.

3. REFORMA AGRARIA Y DEMOCRATIZACIÓN DE LA TIERRA:


TERRITORIALIZACIÓN DE LA PAZ Y EL BUEN VIVIR.

La deplorable situación del campo colombiano, producto de una política de desarrollo


anticampesino de desigualdad, abandono y guerra, requiere urgentemente una política
que encare estos problemas para hacer del agro un motor para el bienestar de nuestro
pueblo, que aporte a una economía dirigida al bien común, dentro de un Estado que
proporcione la mayor suma de felicidad a sus habitantes. El problema de la tierra en
Colombia ha sido la génesis de una guerra que alcanza niveles cada vez más alarmantes,
situación que aún persiste siendo mayor la concentración de la tierra productiva en pocas
manos, a través de prácticas criminales auspiciadas por la clase política que patrocina
bandas paramilitares que desplazan a sangre y fuego a campesinos humildes, entre ellos
millones de jóvenes, que son arrojados de sus terruños huyendo del ruido tenebroso de la
motosierra, para adornar deplorablemente los semáforos y esquinas de ciudades que no
brindan ninguna oportunidad de empleo ni educación. Por siglos la oligarquía ha sido
incapaz de resolver nuestra cuestión agraria, pese a querer disfrazar su desinterés con
repetidas leyes, que buscan maquillar la problemática sin atacarla realmente.

Juventud Rebelde invita a los jóvenes a organizarse y luchar por la solución política del
conflicto, para poder avanzar en la implementación de una profunda reforma agraria
integral que democratice y distribuya la tierra entre quienes deseen trabajarla, erradicando
el latifundio y la contaminante agroindustria capitalista; tecnifique el campo y lo dote con
electrificación y demás servicios, así como con la construcción de vías y carreteras;
implemente políticas de crédito y subsidios, que permitan mejorar la producción y
comercialización de los productos agrícolas; promueva la producción orgánica y la
agroecología, limpiando el agro colombiano de los transgénicos y fungicidas que
promueven las transnacionales; ponga en marcha planes de educación y salud, que
redunden en el bienestar de nuestro campesinado, todo en función de la consecución de
la soberanía alimentaria y nuestra propuesta alternativa al agro capitalista; en este
sentido, respaldamos y promovemos todas las formas organizativas, políticas y modos de
resistencia que las comunidades rurales han construido en defensa de sus territorios,
como las zonas de Reserva Campesinas, los consejos comunitarios, los territorios
interculturales y los resguardos indígenas.

4. LEGALIZACION DE PLANTAS DE USO ILÍCITO: NUEVO MANEJO DEL CONSUMO


DE SUSTANCIAS PSICOACTIVAS.

La situación de pobreza que aqueja los sectores rurales del país ha forzado por décadas
a sustituir los cultivos tradicionales por cultivos declarados por el Estado como cultivos de
uso ilícito; condenando a las comunidades campesinas e indígenas a la estigmatización y
persecución; se desconoce el hecho de que la concentración de tierra en Colombia, y una
economía anticampesina hace que quienes al no tener alternativas agrícolas de desarrollo
económico, les quede como única opción la siembra y producción de drogas,

  15  
 

incrustándose en la cadena de comercialización en el eslabón más bajo, siendo esta


población la que menores ingresos y beneficios obtiene de ello.

Juventud Rebelde reclama la sustitución de cultivos de uso ilícito de manera gradual,


concertada, democrática, y con acompañamiento desde el Estado como parte de una
reforma agraria integral. Reconoce el uso ancestral de plantas declaradas ilícitas por el
Estado, como parte fundamental de sus cosmovisiones y culturas; de ello que
reclamamos la legalización del cultivo de plantas como marihuana y coca. Este aspecto
permite además tratar el consumo desde la perspectiva de salud pública, rechazando el
tratamiento criminal y punitivo al mismo y promoviendo en su lugar un consumo
responsable y consciente de dichas sustancias como parte del desarrollo sociocultural de
distintos grupos étnicos y poblacionales.

5. MODELO ECONÓMICO AL SERVICIO DEL INTERES NACIONAL Y POPULAR

Vivimos en el contexto de una economía completamente desnacionalizada, debido a que


ningún renglón de la actividad económica en Colombia responde completamente a los
intereses y necesidades de nuestro pueblo, dado el control de los renglones sustanciales
por parte del capital transnacional. Los Jóvenes Rebeldes luchamos por una política
económica que persiga la suprema felicidad social y busque satisfacer las necesidades
más sentidas de nuestro pueblo. La Juventud es el sector social con más fuerza
productiva material y económica; sin embargo, se encuentra completamente relegada y
sumida en grandes carencias y dificultades, lo cual, ha ocasionado una sociedad atrofiada
en lo económico y convulsionada en el campo sociopolítico.

Propendemos por el desarrollo de una nueva economía en función de la satisfacción de


nuestras necesidades y no del lucro, una economía para el desarrollo de las fuerzas
productivas del país; la construcción y fortalecimiento de proyectos socio-productivos
desarrollados por las comunidades, que busquen satisfacer su derecho al buen vivir, e
integrados a la economía nacional por medio de una verdadera planificación; la
complementariedad de las economías regionales y locales; y el establecimiento de una
política económica que se priorice en lo social y colectivo, en contraposición a la
satisfacción de necesidades individuales y egoístas.

Luchamos por la reapropiación social de los bienes públicos, la socialización de los


medios de producción en los sectores estratégicos de la economía, la redistribución social
de la riqueza y la concreción material de los derechos económicos y sociales, como fase
inicial para la construcción del socialismo en nuestro país.

Juventud Rebelde lucha por una política soberana de aprovechamiento de los bienes
naturales, que minimice los daños ambientales y construya una nueva visión en la
relación entre los seres humanos y la naturaleza. Hasta el momento la explotación de
nuestros recursos naturales se ha realizado buscando satisfacer los intereses de los
grandes monopolios multinacionales, que de manera desaforada y descarada,
mancillando nuestra soberanía y dignidad, han irrespetado la naturaleza, nuestros
territorios y las comunidades que los habitan. Esta forma de explotación de los recursos
que nos pertenecen a todos los colombianos, incluyendo a las generaciones venideras, ha
producido pobreza, miseria, desplazamiento y desolación en nuestros campos y ciudades,
además del desangre continuo y permanente de nuestra economía, pues no solo se
permite impunemente la expoliación de nuestras riquezas sino que se expande ésta, con
la promoción a la llegada de nuevas empresas multinacionales que actúan bajo los

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intereses del imperialismo, eximiéndolas del pago de impuestos y regalías, mientras se


niegan los mínimos servicios básicos a las comunidades que habitan estos territorios.

El aprovechamiento de nuestros recursos naturales debe realizarse según las


necesidades del pueblo colombiano, con el objetivo supremo de aportar al desarrollo
nacional y cerrar las grandes brechas de desigualdad imperantes en nuestra sociedad,
con la participación decisoria de las comunidades y la necesaria armonía con el medio
ambiente. Por otra parte, es un compromiso histórico de Juventud Rebelde la defensa
férrea de nuestras riquezas naturales, buscando legar a las y los colombianos un país
supremamente rico en biodiversidad.

EL BUEN VIVIR DE LA JUVENTUD: JUNTAR TRAYECTORIAS DE LUCHA JUVENIL


POR UNA NUEVA PATRIA

Rechazamos la idea paternalista y estrecha de la juventud como etapa, negándonos voz y


poder de decisión; es por ello que luchamos por el derecho a ser joven: que implica
reconocer a la Juventud como sujeto colectivo titular de derechos; lo cual choca con la
noción liberal y su idea de derechos individuales; ante los derechos de cada joven,
reclamamos hoy los derechos de toda la juventud, el ser joven como actor colectivo y
social. El Joven como colectivo reclama garantías que el Estado debe dar, sean o no
exigidas, pues es el joven como sujeto quien posee el derecho y es obligación del Estado
garantizarlo. Como parte de esa lucha reivindicamos:

6. GÉNERO Y DISIDENCIA SEXUAL

Juventud Rebelde exige una política de género desde un enfoque clasista, que se
promueva desde la educación garantizando que este aspecto constituya una realidad en
todos los aspectos de la vida social. Es necesario que la mujer sea valorada en su plena
dimensión, reconociendo su trascendencia en las luchas titánicas de nuestro pueblo y su
aporte valioso al equilibrio de una sociedad plural, que supere el machismo despótico y
todas las formas de patriarcado afianzadas por el modo de producción capitalista.

Asumimos la tarea por la des-estigmatización de las disidencias sexuales , sumando sus


reivindicaciones a nuestras luchas, permitiéndole escenarios de participación dignificantes
y llenos de respeto, en los cuales, pueda desarrollarse cada cual como sujetos
transformadores y revolucionarios.

Los Jóvenes Rebeldes exigimos la despenalización del aborto, el auténtico desarrollo de


políticas públicas de salud, al igual que educación sexual y reproductiva que garanticen a
la mujer colombiana el derecho de decidir; y cualquier persona, que en su camino
necesite del cumplimiento de estos derechos específicos. Propugnamos por claras
políticas de inclusión de mujeres, hombres y población LGBTI, en todos los ámbitos de la
vida social y acompañamos las luchas y reivindicaciones en pro de la superación de la
opresión patriarcal y capitalista.

7. EDUCACIÓN COMO BIEN COMUN PARA LA TRANSFORMACIÓN SOCIAL

La educación ha sido utilizada desde los albores de la Republica por las clases
dominantes como medio para someter y esclavizar mentes y espíritus, convirtiéndola al
mismo tiempo en jugoso negocio que en nada aporta al desarrollo de nuestra sociedad,
mientras sí contribuye a enriquecer sus arcas y a generar mano de obra técnica barata

  17  
 

que engrosa las filas del inmenso ejército de reserva laboral juvenil, y de los trabajadores
precarizados, mal pagos y sobreexplotados. Hacia estas pretensiones van dirigidos los
afanes privatizadores de lo que queda de público en la educación y a la inserción de la
formación de las nuevas generaciones en los circuitos especulativos del capital financiero,
medidas funestas que afortunadamente encuentran la resistencia heroica y patriótica de
los estudiantes que se han constituido en un bastión de rebeldía y piedra en el zapato
para la oligarquía.

Desde Juventud Rebelde enfilamos baterías para continuar en la brega por la defensa,
fortalecimiento y expansión de la educación como bien común, planteando además la
necesidad de una transformación pedagógica y de orientación critica: una educación para
la emancipación y la democracia, de carácter gratuito, de calidad, incluyente, diversa y
pluralista, que sirva para desentrañar nuestra verdadera historia de pueblo luchador y
Rebelde, que se erija como instrumento para subvertir el injusto orden establecido, hacia
la liberación y el desarrollo nacional, a través de la investigación, la ciencia y el arte, como
elementos forjadores de hombres y mujeres nuevas, que alimente las virtudes, el
patriotismo, la sensibilidad, la solidaridad y la fraternidad, dibujando el mapa espiritual de
una Colombia nueva.

8. DEMOCRATIZACION TECNOLÓGICA Y DEL CONOCIMIENTO.

La Juventud Rebelde lucha por la democratización del conocimiento y las creaciones


tecnológicas como requerimiento contemporáneo para la inclusión en el mundo cultural,
educativo y de ocio creativo. Rechazamos las taras impuestas por el capital para el libre
acceso a la información y las creaciones colectivas, y propendemos por una política
democrática de acceso de la mayoría de la población a la tecnología, la información y las
comunicaciones, que garantice el acceso de la inmensa masa de jóvenes a estos medios.
Promovemos una investigación al servicio del pueblo colombiano, y proponemos una
política de desarrollo científico y tecnológico nacional y popular que garantice nuestra
soberanía e independencia.

9. TRABAJO DIGNIFICANTE

Los sectores juveniles en Colombia nos encontramos sumidos en una total falta de
oportunidades. Son muchos los problemas que nos agobian, pero quizás dentro de éstos,
el desempleo y la precarización laboral son unos de los más preocupantes y complejos.
Esta situación es consecuencia de más de 20 años de políticas neoliberales, de
flexibilización laboral que han moldeado un inmenso ejército de reserva laboral juvenil y
de trabajadores precarizados mal pagos y sobreexplotados, que son muchas veces
sumergidos a la informalidad o al delito en busca de medios para sobrevivir, o a las
Fuerzas Militares en busca de estabilidad laboral.

Los jóvenes, que somos el sector que más puede aportar en la dinamización de la
economía, estamos subyugados y obligados a perder nuestra potencialidad productiva por
la guerra impuesta por las elites, al vincularnos de forma precaria al aparato productivo;
en la informalidad, que no es más que el desempleo disfrazado bajo la cara del rebusque;
o que en últimas, somos excluidos de la vida laboral condenados a la marginalidad o el
delito. Es justamente esta situación de los jóvenes una condición necesaria para la
acumulación de capital por parte de las transnacionales y de sus lacayos en las elites
nacionales.

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Juventud Rebelde se levanta en pie de lucha para rechazar el trabajo infantil y el trabajo
gratuito al que son obligados muchos niños y jóvenes; reivindicar el derecho al trabajo de
los jóvenes con estabilidad laboral, derecho a la asociación, acceso a la seguridad social,
y remuneraciones justas que les permitan ser incluidos de pleno en la vida productiva y
económica de la nación, aprovechando al máximo todas sus potencialidades,
fortaleciendo sus virtudes y procurando cualificar sus conocimientos en el campo teórico,
científico y técnico. No obstante planteamos que solo con la destrucción del capitalismo
es posible superar las condiciones de esclavitud y desempleo a las que son sometidos los
jóvenes y las grandes mayorías de nuestro pueblo. Por ello no abogamos únicamente por
las oportunidades en el marco del capitalismo. Solo con la construcción del socialismo se
puede fortalecer nuestra Patria, con la inserción plena de los sectores juveniles en la tarea
urgente de enrumbarnos por los caminos del desarrollo de las fuerzas productivas del
país, de cerrar la brecha entre los que lo tienen todo y los que nada poseen, y de
consolidar una verdadera economía socio-productiva al servicio de los intereses más
sentidos del pueblo colombiano.

10. TIEMPO LIBRE PARA LA EMANCIPACIÓN: OCIO, DEPORTE, ARTE Y


ENTRETENIMIENTO PARA LA NUEVA CULTURA.

El ocio y el entretenimiento han caído en la lógica del capital; convertidos en meros


negocios para lucro de las clases dominantes, y deformando el entretenimiento como
derecho al convertirlo en perversión, individualismo, egoísmo y consumismo
desenfrenado.

La Juventud Rebelde rechaza la noción del arte, el deporte y el entretenimiento como


negocios. Reclamamos y luchamos por la construcción de una nueva cultura basada en
formas de creación, relacionamiento social y disfrute, que reivindiquen lo colectivo y
aporten a construir hombres y mujeres nuevos. Reclamamos el derecho al trabajo digno,
que humanice, del mismo modo reclamamos el derecho al ocio creativo, socializador,
edificante y base de una sociedad libre.

11. JÓVENES: SEMILLA DE NUESTRA NUESTRA AMERICA

La Juventud Rebelde considera como asunto de máxima importancia el rescate y


fortalecimiento de la cultura populares y del pensamiento emancipatorio de nuestra
América. La explotación y dominación que hemos sufrido por parte de las élites
politiqueras minoritarias en connivencia con las orientaciones y órdenes de las potencias
imperialistas, no sólo se ha expresado en el campo político, social y económico, sino
también y de forma fundamental en el plano artístico y cultural. Esta situación, que
desafortunadamente ha ocasionado la transgresión e inversión total de los principios y
valores que primaban en la vida social de nuestras comunidades ancestrales, en las
cuales, la felicidad y el beneficio colectivo eran el objetivo supremo, completamente
antagónicos a la ambición e individualismo que reinan en el contexto de una sociedad
capitalista.

Teniendo en cuenta que el campo cultural atraviesa todo el espectro de la vida humana y
social, es imperativo rescatar, consolidar y fortalecer nuestra cultura popular, recreada en
los ricos aportes que construyen hoy los pueblos como alternativas civilizatorias al
capitalismo. Una visión de nuestra América, sustentada en la diversidad y pluralidad que
es característica del espacio geográfico que habitamos, y que reivindique los valores de la
solidaridad, el bien común, la igualdad y la justicia social: una transformación cultural del

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modo de vida y de producción caduco del capitalismo.

Luchamos incansablemente por articular las expresiones juveniles y resistencias


culturales, que hasta ahora permanecen dispersas y atomizadas, bajo los principios de la
inclusión, el anticapitalismo, el antifascismo, el antiimperialismo, y la necesidad de gestar
un nuevo orden cultural de raigambre popular para nuestro socialismo en Colombia.

Los pueblo indígena y comunidad afro se ven afectadas por las nefastas políticas
económicas capitalistas e imperialistas, que buscan despojarlas de sus territorios y
someterlas a la explotación multinacional, avalada por la clase dirigente arrodillada y
cobarde que antepone intereses foráneos a los de los dueños seculares de estas tierras.
Con el desalojo y arrasamiento de estos territorios continua la masacre cultural, que
pretende eliminar alternativas de desarrollo solidarias y armónicas con la naturaleza,
despreciándolos por no corresponder a los intereses mercantiles de los organismos
financieros internacionales y a los intereses imperialistas, entroncándose con la tradición
racista y centralista de la oligarquía que mal gobierna el país desde hace más de 200
años.

Asumimos como propia la resistencia del pueblo indígena y afro, cuya lucha es por demás
legítima y necesaria dentro de una nación culturalmente diversa; propendemos por el
reconocimiento de la sabiduría de las comunidades ancestrales, el aprovechamiento de
su desarrollo armónico como insumo para proyectar una nación que recoja el conjunto de
la diversidad de Nuestra América.

Reconociendo esta diversidad de pueblos, como parte integrante de la clase oprimida y


explotada. Somos jóvenes antifascistas y antirracistas y no claudicaremos en nuestro
combate contra cualquier forma de discriminación y exclusión hacia los componentes de
nuestra patria.

Constitutivo Juventud Rebelde Colombia


Universidad Nacional de Colombia, Bogotá. 8 de abril de 2015.

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