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ESTANBUL
PROTOCOLO SERIE DE CAPACITACIÓN PROFESIONAL No. 8/Rev. 2

Manual de la Eficacia
Investigación y
Documentación de
tortura y otros tratos o
penas crueles, inhumanos
o degradantes

Nueva York y Ginebra, 2022

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© 2001, 2004, 2022 Naciones Unidas

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Publicación de las Naciones Unidas, emitida por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).

HR/P/PT/8/Rev. 2
Número de venta: E.22.XIV.4
ISBN: 978-92-1-154241-7
e-ISBN: 978-92-1-001232-4
ISSN: 1020-1688
eISSN: 2412-1398

Crédito de la imagen de portada: © Adobe Stock, ref. 466867062, imagen de Mr. Music.
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CONTENIDO
PRÓLOGO .................................................. .................................................... ............................ viii

NOTA DE ANTECEDENTES ............................................. .................................................... ................ X

COLABORADORES Y PARTICIPANTES ............................................... ............................................. xi

INTRODUCCIÓN ............................................... .................................................... ...................... XX

I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES .................. 1

A. Derecho internacional de los derechos humanos ............................................. ............................................. 2

1. Normas y estándares desarrollados en las Naciones Unidas ........................................... ......... 2
2. Sistemas regionales de derechos humanos ............................................. ..................................... 12

B. Derecho internacional de los refugiados y no devolución ........................................... .................. 21

C. Derecho internacional humanitario .............................................. ..................................... 23
D. Justicia penal internacional .............................................. ............................................. 24

II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES ............................................... ............................................. 27

A. Ética relevante de los profesionales del derecho ........................................... ............................... 28

1. Principios comunes a todos los códigos deontológicos de la profesión jurídica .................................. ..... 28
2. Principios que guían la conducta de los jueces ........................................... .......................... 29
3. Principios que guían la conducta de los fiscales ........................................... ................... 29
4. Principios que guían la conducta de los abogados ....................................... ......................... 30

B. Obligaciones éticas de los profesionales de la salud ........................................... ....................... 31

1. Declaraciones de las Naciones Unidas pertinentes para los profesionales de la salud ............................... .. 32
2. Declaraciones de organismos profesionales internacionales ........................................... ............ 34
3. Códigos nacionales de ética profesional de la salud ........................................... ..................... 35

C. Aplicación de los principios éticos en las evaluaciones clínicas de la tortura y los malos tratos ........ 36
1. Beneficencia y no maleficencia ............................................... .................................... 36
2. Consentimiento informado .............................................. .................................................... ... 37
3. Confidencialidad ............................................... .................................................... ..... 39

D. Profesionales de la salud con obligaciones en conflicto ........................................... .............. 39

1. Principios que guían a los profesionales de la salud con obligaciones en conflicto .................................. 39
2. Dilemas derivados de obligaciones en conflicto ........................................... .................. 40

tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS ............................... 43

A. Propósitos de una investigación sobre tortura o malos tratos ............................................... ........ 45

B. Principios sobre la Investigación y Documentación Eficaces de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes ............... ............................ 46
1. Elementos del delito de tortura ............................................... ..................................... 46

iii
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

2. Investigaciones prontas, independientes y eficaces ........................................... ................ 46

3. Recursos, capacidad y competencia adecuados ........................................... .................. 47

4. Medidas de protección .............................................. .................................................... 47

5. Derechos de las víctimas en el marco de las investigaciones .................................. .................. 47

6. Comisión de investigación independiente ............................................... ............................... 48

7. Informe pericial médico ............................................... .......................................................... 48

C. Procedimientos involucrados en una investigación de tortura o malos tratos .................................. 49

1. Determinación del organismo de investigación apropiado ........................................... ........... 49

2. Planificación y preparación de una investigación ........................................... ......................... 50

3. Realización de una investigación .............................................. ........................................ 50

D. Comisiones de investigación .............................................. ................................................ 59

1. Definición del alcance de la investigación ........................................... ..................................... 59

2. Poder de la comisión .............................................. ............................................. 59

3. Criterios de afiliación .............................................. .................................................... 59

4. Personal de la Comisión ............................................... .................................................... .. 60
5. Protección de testigos .............................................. .......................................................... 60

6. Procedimientos ............................................... .................................................... .......... 60

7. Aviso de consulta .............................................. .................................................... ..... 60

8. Recepción de pruebas .............................................. .................................................... .. 60

9. Derechos de las partes .............................................. .................................................... ...... 60

10. Evaluación de la evidencia .............................................. ................................................ 61

11. Informe de la comisión ............................................... ............................................ 61

E. Papel de los fiscales, jueces, instituciones nacionales de derechos humanos y otros actores en la
investigación de la tortura ............................... .................................................... .............. 61
1. Fiscales .................................................... .................................................... .......... 62

2. Jueces .............................................................. .................................................... .................. 62

3. Instituciones nacionales de derechos humanos y mecanismos nacionales de prevención .................. 64

4. Otros actores ............................................... .................................................... .......... 64

F. Uso de pruebas de tortura o malos tratos en otros procedimientos legales .................................. 64

IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA ENTREVISTAS ............................................... ..... 67

A. Consideraciones preliminares .............................................. .......................................... 68

1. Finalidad de la indagación, el examen y la documentación ....................................... ........... 68

2. Condiciones esenciales y habilidades para la entrevista .................................. .......................... 69
3. Revelación de torturas o malos tratos sexuales ........................................... ....................... 70
4. Riesgo de retraumatización del entrevistado ........................................... ....................... 70

5. Género, orientación sexual e identidad de género ....................................... ................... 71

6. Entrevistar a los niños .............................................. .......................................................... 72

7. Conciencia cultural, religiosa y sociopolítica ............................................... .................. 73

8. Uso de intérpretes .............................................. .................................................... .... 74

9. Reacciones emocionales y sus efectos potenciales ........................................... ................... 74

B. Realización de entrevistas .............................................. .......................................................... 75

1. Cualificaciones clínicas .............................................. .......................................................... 75

2. Integración de evaluaciones físicas y psicológicas ............................................... ......... 76

3. Escenarios de la entrevista .............................................. .................................................... .... 76

4. Garantías procesales con respecto a los detenidos ........................................... .................. 77

IV
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

5. Visitas oficiales a los lugares de detención ........................................... .................................... 78

6. Preparación para la entrevista ............................................... ........................................ 79
7. Barreras de comunicación .............................................. ............................................ 79
8. Construir una relación .............................................. .................................................... ..... 79
9. Nivel de detalle en la historia ............................................... .......................................... 80
10. Técnicas de interrogatorio .............................................. .......................................... 80
11. Dificultad para recordar y contar ............................................... .................................. 81
12. Variabilidad e inconsistencias en la historia ............................................... ...................... 81
13. Abordar la variabilidad y las inconsistencias ........................................... ....................... 83

C. Contenido de las entrevistas .............................................. .................................................... .. 83

1. Introducción e identificación .............................................. ..................................... 84
2. Antecedentes/información del caso ........................................... ............................................. 85
3. Antecedentes psicosociales antes del arresto ............................................... .................................... 85
4. Denuncias de tortura y malos tratos ............................................... ............................... 85
5. Revisión de los métodos de tortura ............................................... .......................................... 87
6. Valoraciones de las pruebas físicas y psicológicas ............................................... ............ 88
7. Clausura e indicaciones de derivación ............................................... .................................. 88

D. Consideraciones posteriores a la entrevista ........................................... ............................................. 89

1. Interpretación de los hallazgos ............................................. ............................................ 89
2. Conclusiones y recomendaciones .............................................. ............................... 89
3. Autoimposición y simulación .................................................. ............................................. 90
4. Fiabilidad de la evidencia clínica y credibilidad ........................................... ..................... 90
5. Limitaciones, mala interpretación o uso indebido deliberado del Protocolo de Estambul .................. 91

V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS .................................... 93

A. Antecedentes médicos .............................................. .................................................... ......... 94

1. Síntomas agudos .............................................. .................................................... .... 94
2. Síntomas crónicos .............................................. .................................................... .. 95
3. Importancia de la historia clínica ............................................... ............................................. 95

B. Exploración física .............................................. .................................................... . 95

1. Piel ............................................... .................................................... ..................... 96
2. Rostro ............................................... .................................................... ..................... 96
3. Pecho y abdomen .............................................. .................................................... . 98
4. Sistema musculoesquelético ............................................... ............................................................. 98
5. Sistema genitourinario ............................................... .......................................................... 98
6. Sistemas nerviosos central y periférico ............................................... .......................... 98

C. Interpretación de los hallazgos .............................................. ............................................................. 99

D. Conclusiones y recomendaciones .............................................. ................................ 100

E. Examen y evaluación después de formas específicas de tortura .................................. 101

1. Palizas y otras formas de traumatismo cerrado .................................. .......................... 101
2. Golpe de pies ............................................... .................................................... ..... 104
3. Suspensión ............................................... .................................................... ............ 105
4. Otra tortura posicional ............................................... ............................................. 106
5. Tortura con descargas eléctricas .............................................. .......................................................... 106
6. Tortura dental .............................................. .................................................... ........ 107
7. Asfixia .............................................................. .................................................... ........ 107
8. Tortura sexual, incluida la violación ............................................... ............................................. 107

v
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

F. Pruebas diagnósticas especializadas ............................................. .......................................... 113

G. Valoración de la incapacidad funcional ............................................... .................................. 114

H. Niños .............................................................. .................................................... .................. 114

VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS ..................... 115

A. Consideraciones generales .............................................. .......................................................... 116

1. Rol central de la evaluación psicológica ............................................... ...................... 116

2. Contexto de la evaluación psicológica ............................................... .......................... 117

B. Consecuencias psicológicas de la tortura y los malos tratos ............................................... ...... 118

1. Observaciones de precaución .............................................. .......................................................... 118

2. Respuestas psicológicas comunes .............................................. .................................. 118

3. Clasificaciones diagnósticas ............................................... ............................................ 121

C. Evaluación psicológica/psiquiátrica .................................................. ............................ 124

1. Consideraciones éticas y clínicas ............................................... ................................ 124

2. Proceso de la entrevista .............................................. .................................................... .... 125

3. Componentes de la evaluación psicológica/psiquiátrica ............................................... ...... 125

4. Evaluación neuropsicológica ............................................... .................................... 129

5. Los niños y la tortura .............................................. .......................................................... 133

D. Personas lesbianas, gais, bisexuales, transgénero e intersexuales y tortura y malos tratos 140

VIII. EL PAPEL DE LOS PROFESIONALES DE LA SALUD EN LA DOCUMENTACIÓN DE LA TORTURA Y

MALOS TRATOS EN DISTINTOS CONTEXTOS ............................................... ............... 143

A. Obligaciones del Estado y obligaciones éticas de los profesionales de la salud .................................. 144

B. Contextos en los que puede ser necesaria la documentación .................................. ........... 145

C. Desafíos .............................................................. .................................................... .............. 146

1. Miedo a las represalias .............................................. .................................................... ...... 146

2. Falta de formación .............................................. .................................................... ....... 146

3. Falta de tiempo, gran carga de trabajo y número inadecuado de profesionales de la salud .................. 147

4. Falta de espacio o condiciones profesionales adecuadas ............................................... .............. 147

5. Confidencialidad .............................................. .................................................... ....... 147
6. Trauma vicario y agotamiento ............................................... ..................................... 147

D. Implementación de obligaciones éticas ............................................... .................................... 147

1. Obligaciones reales o percibidas frente a terceros ............................................... ..................... 148

2. Sesgo implícito y explícito ............................................... ............................................................. 148

3. Oportunidades limitadas para derivación ............................................... .................................... 148

E. Orientación y procedimientos ............................................... ............................................ 148

1. Evaluaciones clínicas en contextos legales ........................................... ............................... 148

2. Evaluaciones clínicas en contextos no legales ............................................... .......................... 149

F. Información y regulación .............................................. ............................................. 150

G. Seguimiento y garantía de la calidad de todas las evaluaciones oficiales .................................. 151

VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL ............................................... . 153

vi
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

A. Condiciones para la implementación efectiva del Protocolo de Estambul .................................. 154

1. Reconocimiento oficial de las normas del Protocolo de Estambul .................................. ............ 154
2. Voluntad política .............................................. .................................................... ........... 155
3. Un sistema de justicia penal eficaz ........................................... .................................. 155
4. Recursos financieros y humanos adecuados ............................................... ......................... 156
5. Buena gobernanza .............................................. .................................................... .... 156
6. Cooperación ............................................... .................................................... ......... 156
7. Participación activa de la sociedad civil .............................................. .................................... 156

B. Hacia la implementación efectiva del Protocolo de Estambul ............................................... .. 157

1. Fase I .................................................... .................................................... .............. 157
2. Fase II .................................................... .................................................... ............. 157
3. Fase III .................................................... .................................................... ............ 157

C. Reformas legales, administrativas y judiciales ............................................... ......................... 157

D. Reforma estatal de la profesión forense y de la salud .................................. ...................... 159

E. Implementación del Protocolo de Estambul: monitoreo y rendición de cuentas .................. 161

F. Cooperación, coordinación y asistencia técnica ............................................... ......... 162

G. Sociedad civil ............................................... .................................................... .............. 162

GLOSARIO .................................................. .................................................... ............................. 164

ANEXOS .................................................. .................................................... ............................ . . 167

I. Principios sobre la Investigación y Documentación Eficaces de la Tortura y Otros Tratos o Penas

Crueles, Inhumanos o Degradantes ............... ............................ 167

II. Directrices para documentar la tortura y los malos tratos a los niños .................................. 171

tercero Dibujos anatómicos para la documentación de la tortura y los malos tratos ....................... 179
IV. Directrices para la evaluación clínica de la tortura y los malos tratos ....................................... 209

viii
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PREFACIO

En 2001, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos
(ACNUDH) publicó la primera edición del Protocolo de Estambul, que posteriormente se actualizó en
2004. Desde entonces, se ha utilizado en contextos médico-legales y de otro tipo en todo el mundo
como una valiosa herramienta práctica. herramienta para guiar de manera efectiva la investigación y
documentación de la tortura y los malos tratos, la protección de las víctimas y el trabajo de incidencia
de la sociedad civil en nombre de las víctimas. Sobre la base de años de experiencia en el uso del
Protocolo de Estambul en la práctica, profesionales y académicos de todo el mundo ahora han
recopilado sus experiencias, identificado buenas prácticas y resaltado las lecciones aprendidas de
su uso, limitaciones, mala interpretación o incluso mal uso deliberado. Este rico esfuerzo colectivo ha
ayudado a reflejar aún más los avances en la comprensión de las prácticas y los efectos de la tortura
y los malos tratos, lo que ha dado como resultado una actualización integral del Protocolo de Estambul.

Por lo tanto, me complace presentar la edición de 2022 del Protocolo de Estambul, que se basa en
la edición anterior de 2004. Esta hoja de ruta multidisciplinaria y de múltiples partes interesadas se
basa en una consulta internacional a gran escala realizada por más de 180 expertos, incluidos
profesionales de la salud, del derecho y de los derechos humanos de todas las regiones del mundo.
Sobre la base de las disposiciones pertinentes del derecho internacional, proporciona directrices aún
más concretas, claramente definidas y bien entendidas para ayudar a los Estados miembros, las
instituciones nacionales de derechos humanos, los mecanismos nacionales de prevención, la
sociedad civil, los profesionales del derecho y la salud y otros expertos pertinentes en la aplicación
de la Declaración de Estambul. Normas de protocolo.

Esta nueva edición es el resultado de la cooperación entre la sociedad civil, profesionales, académicos
y miembros de todos los mecanismos contra la tortura de las Naciones Unidas, a saber, el Comité
contra la Tortura, el Subcomité para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes, el Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes y el Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para las
Víctimas de la Tortura. Las preocupaciones de las víctimas y el enfoque de género se sitúan en el
centro de la versión revisada.

A pesar de los buenos ejemplos de progreso legal, político e institucional en la ley y la práctica, el
trabajo para combatir y prevenir la tortura está lejos de terminar. Se requiere un compromiso continuo
de todos los Estados para garantizar que las salvaguardias legales que previenen la tortura y los
malos tratos se implementen de manera completa y adecuada, que se garantice la rendición de
cuentas por tales violaciones y que las víctimas reciban una reparación completa y adecuada. La
nueva edición del Protocolo de Estambul es una herramienta valiosa para combatir y prevenir la
tortura y una referencia esencial para elaborar e implementar políticas, así como para capacitar y
orientar a un amplio espectro de actores que trabajan con víctimas de tortura.

viii
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

El ACNUDH mantiene su compromiso de ayudar a los Estados a erradicar la tortura y los malos tratos,
implementar las normas internacionales de derechos humanos de manera efectiva y colocar la reparación de
las víctimas, incluida la rehabilitación, en el centro de sus esfuerzos. Por lo tanto, animo a los actores estatales
y no estatales, la sociedad civil, los profesionales individuales y todos los involucrados en la prevención y
protección contra la tortura y los malos tratos a utilizar la nueva edición del Protocolo de Estambul. En
particular, invito a los Estados a que hagan del Protocolo de Estambul una parte esencial de la capacitación
de todos los funcionarios públicos y profesionales médicos pertinentes que participen en la custodia, el
interrogatorio y el tratamiento de personas sujetas a cualquier forma de arresto, detención o prisión. Espero
que, a través de esfuerzos colaborativos y colectivos, podamos combatir y superar uno de los mayores
desafíos de nuestro tiempo y construir un futuro mejor y más seguro para la humanidad.

Michelle Bachelet

Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

ix
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NOTA DE ANTECEDENTES

Esta es una edición actualizada del Manual sobre la investigación y documentación eficaces
de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes (Protocolo de
Estambul). El Protocolo de Estambul establece estándares internacionales sobre cómo deben
llevarse a cabo investigaciones legales y médico-legales efectivas sobre denuncias de tortura
o malos tratos. El Protocolo de Estambul fue desarrollado por 75 expertos en derecho, salud
y derechos humanos de 40 organizaciones en 15 países. Fue aprobado oficialmente por la
ex Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Mary Robinson,
el 9 de agosto de 1999 e incluido en la Serie de Capacitación Profesional de la Oficina del
Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en 2001 y
posteriormente actualizado en 2004. El Protocolo de Estambul contiene una serie de
“Principios de Estambul”, que articulan normas mínimas para el cumplimiento por parte de
los Estados a fin de garantizar la investigación y documentación efectivas de la tortura y los
malos tratos, que se desarrollan más detalladamente en el manual. Los Principios de
Estambul fueron promovidos en resoluciones de la Asamblea General1 y la antigua Comisión
de Derechos Humanos en 20002 y se exhortó a los Estados a difundir ampliamente los
Principios y utilizarlos en los esfuerzos para combatir la tortura.

El Protocolo de Estambul y sus Principios se utilizan habitualmente como punto de referencia

para medir la eficacia de las investigaciones sobre la tortura por parte del Comité contra la
Tortura, el Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes y el Subcomité para la Prevención de la Tortura. y Otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes. Además, los estándares establecidos en el Protocolo de Estambul
han sido aplicados por órganos regionales de derechos humanos, incluida la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la
Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos y la Tribunal Europeo de Derechos
Humanos, así como muchas instituciones nacionales. En su informe anual a la Asamblea
General de octubre de 2014, el Relator Especial sobre tortura, Juan E. Méndez, reconoció el
papel fundamental de las ciencias médicas y forenses en la investigación y prevención de la
tortura y otros malos tratos. Afirmó que “los estándares del Protocolo de Estambul sirven
como estándar para la evaluación de la evidencia médica, como una herramienta de
referencia para los expertos que emiten opiniones de expertos, como un punto de referencia
para evaluar la eficacia de la determinación de los hechos a nivel nacional y como un medio
de reparación para las víctimas”. y que: "Los informes forenses de calidad están
revolucionando la investigación de la tortura" . otros contextos a nivel mundial. Durante los
últimos 20 años, el Protocolo de Estambul y sus Principios han sido utilizados cada vez más
por actores estatales y no estatales para guiar sus investigaciones sobre tortura y malos
tratos.

1 Resolución de la Asamblea General 55/89.

2 Resolución 2000/43 de la Comisión de Derechos Humanos.

3 A/69/387, párrs. 59 y 64.

X
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL

La presente publicación busca actualizar y fortalecer el Protocolo de Estambul, a través de un

proyecto que involucra a más de 180 participantes de 51 países. El proyecto fue dirigido por
representantes de cuatro organizaciones de la sociedad civil (Médicos por los Derechos Humanos,
el Consejo Internacional de Rehabilitación de las Víctimas de la Tortura, la Fundación de Derechos
Humanos de Turquía y Redress Trust) y cuatro órganos fundamentales contra la tortura de las
Naciones Unidas (el Comité contra la Tortura, el Subcomité para la Prevención de la Tortura, el
Relator Especial sobre la tortura y el Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas
para las Víctimas de la Tortura). El Comité Editorial del Protocolo de Estambul de este proyecto
está formado por representantes de las cuatro organizaciones de la sociedad civil y los cuatro
organismos principales contra la tortura de las Naciones Unidas. El proyecto recibió el apoyo de
Dignity – Instituto Danés contra la Tortura y el Fondo de Contribuciones Voluntarias de las
Naciones Unidas para las Víctimas de la Tortura, pero por lo demás fue apoyado por el
compromiso y el tiempo dedicados de los expertos individuales y las organizaciones involucradas.

Este esfuerzo internacional a gran escala se llevó a cabo para actualizar el Protocolo de Estambul
a fin de reflejar los avances en nuestra comprensión de las prácticas y los efectos de la tortura y
los malos tratos, así como las experiencias prácticas y las lecciones aprendidas en el uso del
Protocolo de Estambul durante los últimos 20 años. años. Incluyó reuniones de coordinación
regional en Bishkek, Ciudad de México y Copenhague y una encuesta de más de 200 personas
que tienen una experiencia sustancial en el uso del Protocolo de Estambul en actividades contra
la tortura. Además de actualizar los seis capítulos originales del Protocolo de Estambul, esta
edición incluye dos capítulos nuevos: el capítulo VII brinda orientación sobre el papel de los
profesionales de la salud en varios contextos en los que puede ser necesaria la documentación y
el capítulo VIII brinda orientación sobre los pasos necesarios para implementación del Protocolo
de Estambul por parte de los Estados.

La edición de 2022 del Protocolo de Estambul estará disponible en los seis idiomas
oficiales de las Naciones Unidas en el sitio web de la Oficina del Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos (www.ohchr.org).

xi
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COLABORADORES Y PARTICIPANTES
COMITÉ EDITORIAL DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
el Dr. Vincent Iacopino ex Asesor Médico Principal,
Médicos por los Derechos Humanos; Profesor Adjunto de
Medicina, Facultad de Medicina de la Universidad de
Minnesota
Programa de Protocolo de Estambul James Lin
Coordinador, Consejo Internacional de Rehabilitación para
víctimas de tortura; Profesor Adjunto de Derecho, Nacional
Universidad Yang Ming Chiao Tung
Dr. ÿebnem Korur Fincancÿ Presidente, Asociación Médica
Turca; Miembro de la Junta Ejecutiva, Fundación de Derechos
Humanos de Turquía; Profesor emérito de Medicina Forense,
Facultad de Medicina de la Universidad de Estambul
Chris Esdaile Asesor Legal/Abogado, Redress Trust
Dr. Jens Modvig Director, Departamento de Salud, Dignidad
– Instituto Danés contra la Tortura; Jefe de la Plataforma
Internacional de Rendición de Cuentas de Bielorrusia; expresidente
del Comité contra la Tortura
Nora Sveaass Profesora Emérita, Universidad de Oslo;
Miembro, Subcomité para la Prevención de la Tortura y
Otros Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes
Tratamiento o Castigo
Nils Melzer ex relator especial sobre la tortura y otros tratos o
penas crueles, inhumanos o degradantes
Dra. Vivienne H. Nathanson Presidenta del Fondo de Contribuciones
Voluntarias de las Naciones Unidas para las Víctimas de la Tortura;
ex Director de Actividades Profesionales, Asociación Médica Británica
EDITORES DE LOS CAPÍTULOS DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Juan E. Méndez , ex relator especial sobre la tortura y
otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes
(2010-2016); Profesor de Derecho, American University Washington
College of Law
xi
el Dr. Vincent Iacopino ex Asesor Médico Principal,
Médicos por los Derechos Humanos; Profesor Adjunto de
Medicina, Facultad de Medicina de la Universidad de
Minnesota
Dr. Lutz Oette Profesor de Derecho Internacional de
los Derechos Humanos, Centro de Derecho de los Derechos
Humanos, Escuela de Estudios Orientales y Africanos, Universidad
de Londres
Dra. Rohini J. Haar Profesora Adjunta, Escuela de Salud
Pública, Universidad de California, Berkeley; Asesor Médico,
Médicos por los Derechos Humanos
Dra. Juliet Cohen , ex directora de médicos, Freedom
from Torture
Felicitas Treue Psicóloga, Colectivo contra la Tortura y la
Impunidad, México; Independiente
Grupo de expertos forenses
Nora Sveaass Profesora Emérita, Universidad de Oslo;
Miembro, Subcomité para la Prevención de la Tortura y
Otros Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes
Tratamiento o Castigo
Dr. Rusudan Beriashvili Profesor asociado, Universidad
Estatal de Medicina de Tbilisi
FUNCIONAMIENTO DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
MIEMBROS DEL GRUPO
Dr. Uju R. Agomoh Director Ejecutivo, Rehabilitación
de Prisioneros y Acción de Bienestar; Fundador, Voz de
Desarrollo
Dra. Ameena T. Ahmed Médica, Grupo Médico Permanente
Dr. Ahmed Mohammed Amin Ahmed Director, Organización
Wchan para Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos;
Profesor, Universidad Politécnica Sulaimani - Facultad Técnica de
Salud, Región del Kurdistán de Irak
la Dra. Joanne Ahola , directora médica emérita del Centro
de Derechos Humanos Weill Cornell; Formadora, Médicos por
los Derechos Humanos
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COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Dra. Dina A. al–Shafie, psiquiatra y consultora forense psicosocial,
Synergy for Justice; Experto e Investigador sobre violencia sexual y
tortura en áreas de posconflicto y formador del Protocolo de
Estambul, Médicos Sin Fronteras, Egipto
Dra. Aida S. Alayarian Presidenta y directora clínica del Centro
de Terapia para Refugiados, Royal Society of Medicine; Miembro,
Consejo de Psicoterapia del Reino Unido y Sociedad Británica de
Psicología
Djordje Alempijevic Profesor de Medicina Forense
Medicina, Facultad de Medicina, Universidad de Belgrado;
Miembro Fundador, Facultad de Ciencias Forenses y Legales
Medicina, Royal College of Physicians, Londres
Federico Allodi Profesor Asociado, Universidad de Toronto;
expresidente del Centro Canadiense para las Víctimas de la
Tortura
Dr. Yahya Alrahal Asesor médico, Abogados y Médicos
por los Derechos Humanos
Dr. Kerem Altiparmak Presidente, Centro de Derechos
Humanos, Colegio de Abogados de Ankara; Vicepresidente,
Asociación de Derechos Humanos, Turquía
George J. Annas Warren Profesor Distinguido, Universidad de
Boston; Director, Centro de Leyes de Salud, Ética y Derechos
Humanos, Escuela de Salud Pública de la Universidad de Boston
Jorge G. Aroche Director Ejecutivo, Servicio de Nueva
Gales del Sur para el Tratamiento y Rehabilitación de
Sobrevivientes de Tortura y Trauma; Presidente, Consejo
Internacional de Rehabilitación para Víctimas de Tortura,
Australia
Ulugbek Azimov ex Presidente, Nacional Preventivo
Consejo de Coordinación del Mecanismo; Experto legal,
Kirguistán
Ioanna Babassika Abogada, Colegio de Abogados de Atenas;
Experto en derechos humanos, Grecia
Dr. Kenneth Daniel Bagonza Médico, Centro Africano para
el Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de Tortura;
Universidad de Ciencia y Tecnología de Mbarara, Uganda
Dr. Metin Bakkalcÿ Médico, Fundación de Derechos Humanos de
Turquía
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Dr. Turkcan Baykal Médico, Fundación de Derechos Humanos de
Turquía; Psicólogo Clínico, Turquía
Dr. Smadar Ben-Natan Doctor, Universidad de Tel Aviv
Dr. Ahmed Benasr Médico forense, Nebras, Túnez
Barbara Bernath Secretaria General, Asociación para la
Prevención de la Tortura, Ginebra
Dr. Jonathan Beynon Experto independiente sobre
documentación de tortura y condiciones de detención, Ginebra
Moritz Birk Jefe de Departamento, Dignidad Humana y Seguridad
Pública, Instituto Ludwig Boltzmann de Derechos Fundamentales
y Humanos, Viena
Dra. Bettina Birmanns Neuróloga, Comité Público
contra la Tortura en Israel
Jean-Sébastien Blanc Asesor científico, Suiza
Centro de Especialización en Prisión y Libertad Condicional; anterior
Director, Programas Temáticos, Asociación para la
Prevención de la Tortura, Ginebra
Dra. Anissa Bouasker Psiquiatra y Profesora Asistente,
Facultad de Medicina de Túnez
Dra. Marie Brasholt Oficial médico sénior, Dignidad –
Instituto Danés contra la Tortura; Miembro, Subcomité para la
Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes
Dra. Nicole Bürli Asesora Principal de Derechos Humanos,
Organización Mundial contra la Tortura, Ginebra
Sofia C. Candeias Equipo de Expertos en Estado de Derecho
y Violencia Sexual en Conflicto
Lotta Carlsson Administradora de Casos, Consejera,
Centro de Psicotraumatología, Helsinki
Fundación Diaconisa; Consultor independiente,
Red de Concientización sobre la Radicalización y Consejo
de Europa, Finlandia
Jim Cavallaro Profesor de Derecho, Stanford
Derechos humanos internacionales y resolución de conflictos
Clínica y Centro de Derechos Humanos de Stanford; anterior
Comisionado y Presidente, Interamericana
Comisión de Derechos Humanos
XIII
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Sirikan Charoensiri Abogados tailandeses por los derechos humanos
Tatiana Chernobil Experta Jurídica Independiente,
Kazajstán
Elena Olga Christidi Psicóloga, ex Científica
Coordinador, Certificación de Víctimas de Tortura,
METAdrasi; Director científico, Orlando LGBT+
Salud mental más allá del estigma, Grecia
Guy Coffey Psicólogo Clínico y Abogado,
Fundación Victoriana para Sobrevivientes de la Tortura,
Australia
Dr. Keren Cohen Profesor titular, Goldsmiths, Universidad
de Londres; Psicóloga Consejera, Reino Unido
Dra. Sondra S. Crosby Profesora Asociada de
Medicina y Salud Pública, Universidad de Boston;
Experto médico y asesor de documentación de torturas,
Physicians for Human Rights,
Dra. Malabika M. Das Consultora de Trabajo Social
Integrativo, Profesora Asistente Adjunta, Universidad
Nacional de Taiwán
María de Lezcano-Mújica González ex
Consultor, International Bar Association's
Instituto de Derechos Humanos
Clarisse Delorme Asesora sénior de políticas,
Asociación Médica Mundial
Ana Deutsch Psicóloga, Programa contra la Tortura
Víctimas, Los Ángeles
Dra. Carole Dromer ex Coordinadora del Programa
de Atención Médica en Detención, Comité Internacional
de la Cruz Roja
Vanessa Drummond Subdirectora de Proyectos,
Iniciativa Anti-Tortura, Centro de Derechos Humanos y
Derecho Humanitario, Universidad Americana de Washington
facultad de derecho
Helen Duffy Directora, Derechos Humanos en la Práctica;
Profesor, Universidad de Leiden, Países Bajos
Dr. Máximo Alberto Duque Piedrahita Doctor en Medicina,
Universidad CES; Especialista en Medicina Legal, Universidad
Nacional, Colombia
xiv
COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Dr. Pierre Duterte Psicoterapeuta, Francia
Dra. Alice J. Edwards Jefa de Secretaría, Iniciativa
de la Convención contra la Tortura, Ginebra
Dra. Ingrid Elliott Experta en justicia penal internacional y
violencia sexual y de género, Synergy for Justice; Equipo de
Expertos sobre Estado de Derecho y Violencia Sexual en
Conflicto
Chris Esdaile Asesor Legal/Abogado, Redress Trust
Sir Malcolm D. Evans Profesor de Derecho
Internacional Público, Universidad de Bristol;
expresidente del Subcomité para la Prevención de la Tortura y
Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes
Ravindra Fernando Profesor Emérito, Universidad de
Colombo; Profesor Principal, General Sir John
Universidad de Defensa de Kotelawala, Sri Lanka
Dra. Carla Ferstman Profesora Titular,
Universidad de Essex
Dr. ÿebnem Korur Fincancÿ Presidente, Asociación
Médica Turca; Miembro de la Junta Ejecutiva, Fundación
de Derechos Humanos de Turquía; Profesor emérito de
Medicina Forense, Facultad de Medicina de la Universidad
de Estambul
Barbara A. Frey Directora, Programa de Derechos Humanos,
Universidad de Minnesota; Profesor titular, Instituto de Estudios
Globales, Universidad de Minnesota
Christy C. Fujio Asesora Técnica Principal, Acceso a la
Justicia y Protección, Heartland Alliance International;
Director, Synergy for Justice, Estados Unidos de América
Sarah Fulton Abogada y Derechos Humanos
Consultor, Sídney; ex Jurídico Internacional
Asesor, Redress Trust
Fiona Gabbert Profesora de Psicología,
Goldsmiths, Universidad de Londres; Director, Forense
Unidad de Psicología, Goldsmiths, Universidad de Londres
Felice Gaer Director, Instituto Jacob Blaustein para el
Avance de los Derechos Humanos; anterior
Miembro y Vicepresidente, Comité contra la Tortura
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COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Katherine Gallagher Abogada sénior del personal,
Centro de Derechos Constitucionales, Estados Unidos
Dr. Andrés Gautier Médico, Instituto de Terapia e
Investigación sobre las secuelas de la tortura y violencia
estatal, Bolivia (Estado Plurinacional de)
Dr. Yuval Ginbar Asesor Jurídico, Amnistía
Internacional, Reino Unido
Maartje L. Goudswaard Médico Forense,
Departamento Forense de Ámsterdam; Doctor en Medicina
Edith Escareño Granados Psicóloga,
Experto independiente, México
Dr. Peter G. Green , médico designado para la protección
infantil, Wandsworth Clinical Commissioning Group, Reino
Unido
Charles W. Greenbaum Profesor de Psicología Social,
Universidad Hebrea de Jerusalén
Dr. Dadimos Haile Profesor Asociado de Derecho,
Universidad de Bahir Dar, Etiopía
Dra. Sana Hamzeh Asesora clínica, Restart Center for
Rehabilitation of Victims of Violence and Torture, Líbano
Dr. Steen Holger Hansen Patólogo forense, Universidad de
Copenhague
Dra. Lilla Hárdi Doctora, Fundación Cordelia para la
Rehabilitación de Víctimas de Tortura, Hungría
Dra. Karin Helweg-Larsen Investigadora sénior,
Universidad de Copenhague
Edeliza Pescante Hernández Directora Ejecutiva,
Grupo de Acción Médica; Miembro del Consejo para Asia,
Consejo Internacional de Rehabilitación de la Tortura
Víctimas, Filipinas
Verónica Hinestroza Arenas Experta independiente en
derecho internacional de los derechos humanos, Colombia; ex
abogado sénior del programa, Colegio de Abogados Internacional
Instituto de Derechos Humanos de la Asociación
Jonathan Horowitz Oficial Jurídico Senior, Nacional
Seguridad y contraterrorismo, Open Society Justice
Iniciativa, Estados Unidos
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Andrea Huber Jefa del Departamento de Derechos Humanos y
Jefa Adjunta de la Unidad de Estado de Derecho de la Oficina de
Instituciones Democráticas y Derechos Humanos de la
Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa,
Polonia
el Dr. Vincent Iacopino ex Asesor Médico Principal,
Médicos por los Derechos Humanos; Profesor Adjunto de
Medicina, Facultad de Medicina de la Universidad de
Minnesota
Dr. Bayazit Ilhan Expresidente de la Asociación Médica
Turca
Dr. Jim Jaranson Consultor, Estados Unidos
Dr. Amar Jesani Editor, Diario Indio de Ética Médica; Consultor
independiente y docente en salud pública y bioética, India
Carlos A. Jibaja Psicólogo, Centro de Atención Psicosocial;
Psicoterapeuta Psicoanalítica, Asociación de Psicoterapia
Psicoanalítica, Perú
Dra. Mariam Jishkariani Médica, Directora, RCT/EMPATHY;
Psiquiatra, Universidad Médica Estatal de Tbilisi, Georgia
Nuriana A. Kartanbaeva Directora, Programa de
Derecho, Fundación Soros-Kirguistán
Dra. Marianne C. Kastrup Consultora, Dinamarca
Dr. Allen S. Keller Profesor Asociado, Facultad de Medicina
de la Universidad de Nueva York; Fundador, Bellevue/
Programa de la Universidad de Nueva York para sobrevivientes de la tortura
Pornpen Khongkachonkiet Directora, Cross
Fundación Cultural, Tailandia
Coleen Kivlahan Profesor, Medicina Familiar y
Director Ejecutivo, Servicios de Atención Primaria, Universidad
de California, San Francisco
Asger Kjaerum Director de Defensa, Internacional
Consejo de Rehabilitación para Víctimas de Tortura
Vincent O. Kodongo Director, Fundación Shield for Justice,
Kenia
Elsbeth J. Kors Psicóloga clínica, Instituto de Derechos
Humanos y Evaluación Médica, Países Bajos
XV
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Dr. Debabrata R. Laifungbam Director, Centro Transcultural
Humano a Humano para Víctimas de Tortura, Centro de
Investigación y Educación sobre Organizaciones; Miembro,
Comité Asesor de Salud, Consejo Internacional de
Rehabilitación para Víctimas de Tortura, India
Josephine Acuña Lascano Directora Ejecutiva,
Centro de Rehabilitación de Balay, Filipinas
Peter M. Leth Profesor, Universidad del Sur de
Dinamarca; Médico Forense Jefe, Instituto de Medicina
Forense
Iain Levine , exdirector ejecutivo adjunto de Programas,
Human Rights Watch, Estados Unidos
Dr. Birgit Lie Clínica de Psicosomática, Trauma y Salud de
Inmigrantes, Hospital Sørlandet, Kristiansand, Noruega
Programa de Protocolo de Estambul James Lin
Coordinador, Consejo Internacional de Rehabilitación
para Víctimas de Tortura
Dra. Elizabeth Lira Decana, Facultad de Psicología,
Universidad Alberto Hurtado; Psicólogo, Pontificia
Universidad Católica de Chile
Maria Lisitsyna Directora Jurídica Sénior,
Iniciativa de Justicia de la Sociedad Abierta, Estados Unidos
Dra. Nicole Littenberg Doctora en Medicina, Pacific
Survivor Center; Examinador forense, Centro de
Tratamiento de Abuso Sexual, Estados Unidos
Dra. June Caridad Pagaduan López Médica ,
Subcomisión para la Prevención de la Tortura y Otros
Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes;
Profesor jubilado de Psiquiatría, Universidad de Filipinas
Said Louahlia Patólogo forense, Casablanca
Dra. Frances A. Lovemore Directora, Unidad de Servicios
de Consejería, Zimbabue
Dr. Stuart L. Lustig Ejecutivo Médico Nacional para la
Salud del Comportamiento, Cigna; Asesora legal y médica,
Facultad de Derecho Hastings de la Universidad de California,
Centro de Estudios de Género y Refugiados
Andreas Malm Psicólogo, Cruz Roja Sueca
xvi
COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Elisa C. Massimino Senior Fellow, Carr Center for
Human Rights Policy, Harvard Kennedy School; Practicante
residente, Walsh School of Foreign Service, Universidad de
Georgetown
Nils Melzer ex relator especial sobre la tortura y otros tratos
o penas crueles, inhumanos o degradantes
Niv Michaeli Coordinador del Proyecto, Médicos por
los Derechos Humanos Israel
Dr. Ranit Mishori Profesor de Medicina Familiar, Facultad
de Medicina de la Universidad de Georgetown; Asesor
Médico Principal, Médicos por los Derechos Humanos
Dr. Jens Modvig Director, Departamento de Salud,
Dignidad – Instituto Danés contra la Tortura; Jefe,
Plataforma Internacional de Rendición de Cuentas para
Bielorrusia; expresidente del Comité contra la Tortura
Dr. Sergey Nikolayevich Molchanov Director del fondo
público "Doctor SN"; Psiquiatra, Kazajistán
Dr. Benito E. Molino Médico, Grupo de Acción Médica,
Filipinas
Dra. María Dolores Morcillo Méndez Especialista en
Medicina Legal y Patología Forense y Coordinadora
Forense, Comité Internacional de la Cruz Roja
Dr. Alejandro Moreno Decano Asistente de Integración de
Habilidades Clínicas y Profesor Asociado de Medicina y
Educación Médica, Facultad de Medicina de la Universidad de
Texas en Austin Dell
Valeria Moscoso Urzúa Independiente Psicosocial
Experto, Coordinador, Red Nacional de
Expertos Independientes contra la Tortura, México
Programa de Abogacía Annah Yvonne Moyo
Gerente, Centro de Estudios de la Violencia y
Reconciliación, Sudáfrica
Dra. Maya Mukamel Psicóloga Consejera, Directora de
Estudios, Instituto Metanoia, Reino Unido
Lia Mukhashavria Abogada de derechos humanos,
Abogado, LLM; Director Ejecutivo ONG
Prioridad de derechos humanos, Georgia
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COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Karen Naimer Directora de Programas y
Directora del Programa sobre Violencia Sexual en
Zonas de Conflicto, Médicos por los Derechos Humanos
Dra. Yadira M. Narváez Doctora en Medicina, Ecuador
Parvina Navruzova Jefa, Acceso a la Justicia y
Programa de Reforma Judicial, Centro de Derechos Humanos,
Tayikistán
Dra. Anne Nesbitt Pediatra, Freedom from Torture, Reino
Unido
Andra Nicolescu Asesora sénior, Leyes y Políticas,
Asociación para la Prevención de la Tortura, Ginebra
Manfred Nowak Profesor de Internacional
Derechos Humanos, Universidad de Viena; Secretario
General, Centro Interuniversitario Europeo de
Derechos humanos y democratización, Viena
Samuel H. Nsubuga Director Ejecutivo, Centro Africano
para el Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de Tortura,
Uganda
Dr. Janus Oomen Médico antropólogo, Instituto Holandés
de Derechos Humanos y Evaluación Médica
Gabriel Oosthuizen Director de programa, Instituto de
Investigaciones Criminales Internacionales, Países Bajos
Dr. Resmiye Profesor Oral de Pediatría Clínica, Escuela de
Medicina Geisel; Director, Centro de Defensa y Protección Infantil,
Children's Hospital at Dartmouth-Hitchcock, Estados Unidos
Dr. Önder Özkalipci Médico Forense, Experto
Independiente; Profesor Asociado de Medicina Forense, Consultor
Temporal del ACNUDH, Ginebra
Dimitrios Pantazis Psicólogo clínico, Chipre
Nimisha Patel Profesora de Psicología Clínica,
Universidad del Este de Londres; Directora Internacional
Centro para la Salud y los Derechos Humanos, Reino Unido
Dra. Beatrice M. Patsalides Hofmann Psicóloga Clínica,
Centro Primo Levi; Psicoanalista, París
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Jason Payne-James Consultor en ciencia forense y
Medicina Legal, Servicios Sanitarios Forenses; Guiar
Médico forense, Universidad de Norfolk y Norwich
Hospitales NHS Foundation Trust, Reino Unido
Dr. Michael Peel Doctor, médico general, Somerset, Reino
Unido
Dr. Clifford P. Perera Profesor Titular y Director del
Departamento de Medicina Forense de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Ruhuna; Consultor en temas
forenses y derechos humanos, Comisión Asiática de Derechos
Humanos, Hong Kong, China
Dr. Pau Pérez-Sales Psiquiatra, Director Clínico, SiR[a], Miembro
del Consejo Internacional de Rehabilitación de Víctimas de Tortura;
Editor en jefe, Tortura
Dr. Hans Draminsky Petersen ex miembro y vicepresidente del
Subcomité para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos o Penas
Crueles, Inhumanos o Degradantes
Mikolaj Pietrzak ex presidente de las Naciones Unidas
Fondo Voluntario para las Víctimas de la Tortura; Decano, Varsovia
Colegio de Abogados, Polonia
Laura Pitter Directora Adjunta, Programa de EE. UU.,
Human Rights Watch, Estados Unidos
Dra. Katherine A. Porterfield Psicóloga, Bellevue/
Programa de la Universidad de Nueva York para Sobrevivientes
de la Tortura; Instructor Clínico, Facultad de Medicina de la
Universidad de Nueva York
Dr. José Quiroga ex Director Médico, Programa para
Víctimas de Tortura; ex vicepresidente, Consejo Internacional de
Rehabilitación para Víctimas de Tortura
Dr. Steven Reisner Co-Fundador, Coalición por una Psicología
Ética; Asesor en psicología y ética, Médicos por los Derechos
Humanos
Dr. Ricardo Restrepo-Guzmán Profesor Clínico Asociado,
Universidad de California, Irvine
Centro de Derechos Humanos Dr. Hernán Reyes , Universidad de
California, Berkeley; Obstetra-Ginecólogo, Asociación Médica Suiza
Profesor Sidsel Rogde , Universidad de Oslo; Forense
Patólogo, Médico Principal, Universidad de Oslo
Hospital
xvii
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Dr. Barry H. Roth Doctor en Medicina, Programa de
Psiquiatría y Derecho, Facultad de Medicina de Harvard;
Miembro vitalicio distinguido, Asociación Americana de
Psiquiatría
Leonard S. Rubenstein Científico Principal, Facultad de
Salud Pública Johns Hopkins Bloomberg; Director, Programa de
Derechos Humanos, Salud y Conflicto, Centro de Salud Pública y
Derechos Humanos
Olga Sadovskaya Vicepresidenta, Comité contra
Tortura, Federación Rusa
Antti Sajantila Profesor, Departamento de Medicina Forense
Medicina, Universidad de Helsinki; médico superior
Oficial, Unidad de Medicina Forense, Instituto Finlandés de
Salud y Bienestar
Yubaraj Sangroula Director Ejecutivo, Katmandú
Escuela de leyes
Caroline Schlar Psicóloga-Psicoterapeuta,
Ginebra
Stephanie Selg ex asesora sobre prevención de la
tortura, Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos
Humanos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación
en Europa, Polonia
Mandira Sharma Practicante de derechos humanos,
Foro de Incidencia, Nepal
Dr. Julian Sheather Asesor especialista en ética y derechos
humanos, Asociación Médica Británica
Derrick Michael Silove Profesor emérito,
Universidad de Nueva Gales del Sur y visitas
Miembro de la cátedra, Phoenix Australia, Universidad de
Melbourne
Susannah Sirkin Directora de Políticas/Asesora Principal,
Médicos por los Derechos Humanos
Elna Søndergaard Asesora Jurídica Principal,
Dignidad – Instituto Danés contra la Tortura; Asociado
Profesor, Dinamarca
Ruth Ssekindi Directora de Quejas, Investigaciones y Servicios
Legales; Derechos humanos en Uganda
Comisión
Eric Stover Director de la Facultad, Centro de Derechos Humanos,
Facultad de Derecho, Universidad de California, Berkeley
xviii
COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Dr. Wilder Tayler Director, Institución Nacional de Derechos
Humanos; Comisionado, Comisión Internacional de Juristas,
Uruguay
Jørgen L. Thomsen Profesor, Universidad del Sur de
Dinamarca; Doctor en Ciencias Médicas, Departamento de
Medicina Forense
Dr. Morris V. Tidball Binz Relator Especial sobre
ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias; Profesor
invitado, Universidades de Coimbra y Milán; Gerente Forense,
Proyecto de Personas Desaparecidas, Comité Internacional de
la Cruz Roja
Lela Tsiskarishvili Directora Ejecutiva, Georgiana
Centro de Rehabilitación Psicosocial y Médica de
víctimas de tortura; Psicólogo Clínico, Salud Mental
Programa de Maestría, Universidad Estatal de Ilia, Georgia
Hulya Ucpinar Abogada, Fundación de Derechos Humanos de
Turquía
Danaé L. van der Straten Ponthoz Asesor principal, Global
Survivors Fund, Suiza
Dr. Adriaan Van Es Médico, Federación Internacional
de Organizaciones de Salud y Derechos Humanos,
Países Bajos
Peter Vanezis Profesor de Medicina Forense
Ciencias, Universidad Queen Mary de Londres
Dr. Homer Drae Venters Profesor Clínico Asociado,
Facultad de Salud Pública Global de la Universidad de Nueva
York; Becario sénior de Salud y Justicia, Servicios de Salud
Correccionales Orientados a la Comunidad, Estados Unidos
Alejandra Vicente Jefa de Derecho, Redress Trust
Duarte Nuno Vieira Profesor Titular, Facultad de
Medicina, Universidad de Coimbra; Silla,
Centro Universitario de Coimbra para Asuntos Humanitarios y
Investigación y Capacitación Forense en Derechos Humanos
Ravi Prakash Vyas Profesor asistente, Katmandú
Escuela de leyes
Steven M. Watt Abogado sénior, Unión Estadounidense de
Libertades Civiles
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COLABORADORES Y PARTICIPANTES
Dra. Mechthild Wenk-Ansohn Médica, Psicoterapeuta,
Supervisora; ex Jefe, Sector Ambulante, Centre Überleben, Berlín;
Consultor Independiente, Centro Europeo de Derechos
Constitucionales y Humanos, y en el campo de la cooperación
internacional, Alemania
Thomas Wenzel Psiquiatra, Sección de
Aspectos psicológicos de la persecución y la tortura,
Asociación Mundial de Psiquiatría; Profesor, Médico
Universidad de Viena
Dr. Zeev Wiener Psiquiatra y médico de familia, Physicians for
Human Rights Israel
Dra. Cynthia Willard Directora, Clínica de Derechos Humanos
Keck, Universidad del Sur de California
ÿahika Yüksel Psiquiatra, Derechos Humanos
Fundación de Turquía; Profesor, Universidad de Estambul
(retirado)
CONTRIBUYENTES ADICIONALES
Sarah Bakir Candidata a Maestría en Salud Pública,
Escuela de Salud Pública, Universidad de California,
berkeley
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Josina Bothe Consultora, Internacional
Consejo de Rehabilitación para Víctimas de Tortura, Alemania
Alice Chin-Huei Chiu Abogada, Oficina Legal de Huang; ex
Consultor, Rehabilitación Internacional
Consejo para las Víctimas de la Tortura
Makaila Heifner ex asistente de investigación,
Centro de Derechos Humanos, Facultad de Derecho,
Universidad de California, Berkeley
Una Marquard-Busk Gerente de Proyecto,
Dignidad – Instituto Danés contra la Tortura
Julia Nee ex Asistente de Investigación, Derechos Humanos
Center, Facultad de Derecho, Universidad de California,
Berkeley; Candidato a Licenciatura en Artes, Gallatin School of
Individualized Study, Universidad de Nueva York
También se reconoce a varios colegas del ACNUDH cuyos
esfuerzos contribuyeron a la realización de esta publicación. De
conformidad con la política del ACNUDH, las contribuciones a
sus publicaciones no se atribuyen a los empleados de la Oficina.
xix
Machine Translated by Google
INTRODUCCIÓN
La Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas
Crueles, Inhumanos o Degradantes, que fue aprobada por la
Asamblea General en 1984, ha sido ratificada por casi todos los
países del mundo. La Convención contra la Tortura proporciona, en
su artículo 1, una definición legal de tortura acordada internacionalmente,
a saber:
cualquier acto por el cual se inflige intencionalmente a una
persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o
mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero
información o una confesión, castigarla por un acto que él o un
tercero ha cometido o es sospechosa de haber cometido, o
intimidado o coaccionado a él o a un tercero, o por cualquier
motivo basado en discriminación de cualquier tipo, cuando tal
dolor o sufrimiento es infligido por o por instigación de o con el
consentimiento o aquiescencia de un funcionario público o otra
persona que actúe a título oficial.
No incluye el dolor o sufrimiento que surja únicamente
de, inherente o incidental a las sanciones legales.
La tortura es uno de los crímenes más atroces conocidos por
humanidad no solo porque implica el infligir intencionalmente
un dolor físico y mental severo, sino porque es cometido por
funcionarios o con la aquiescencia de un Estado y, a menudo, se
oculta de manera efectiva para evitar la justicia y la rendición de
cuentas. Como resultado de la tortura, las víctimas soportan
profundos dolores y sufrimientos físicos y mentales, mientras que la
realidad del crimen perpetrado en su contra a menudo se desestima
en procedimientos judiciales y administrativos y queda impune. La
tortura es una profunda preocupación para la comunidad mundial
porque busca destruir no solo el bienestar físico y emocional de las
personas sino también, en algunos casos, la dignidad y la voluntad
de las familias y comunidades enteras. Concierne a todos los
miembros de la
familia humana porque impugna el significado mismo de nuestra
existencia y nuestras esperanzas de un futuro mejor.4
Aunque el derecho internacional de los derechos humanos y el
derecho internacional humanitario prohíben sistemáticamente la
tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes
(“tortura y malos tratos”) en cualquier circunstancia (véase el capítulo
I), estos actos siguen practicándose con impunidad en todo el mundo.
4 Vincent Iacopino, “Tratamiento de sobrevivientes de tortura política: comentario”, Journal of Ambulatory Care Management, vol. 21, núm. 2 (1998), págs. 5 a 13.
5 Amnistía Internacional, Tortura en 2014: 30 años de promesas rotas (Londres, 2014), pág. 10. Véase también A/73/207, párr. 76.
6 Los Principios sobre la Investigación y Documentación Eficaces de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes se adjuntan a la Asamblea General
resolución 55/89.
7 Rohini Haar y otros, “El Protocolo de Estambul: una encuesta de partes interesadas sobre experiencias pasadas, prácticas actuales y establecimiento de normas adicionales”, Revista sobre Rehabilitación de
Víctimas de Tortura y Prevención de Tortura, vol. 29, núm. 1 (2019).
XX
el mundo.5 La sorprendente disparidad entre la prohibición
absoluta de la tortura y su predominio en el mundo actual
demuestra la continua necesidad de que los Estados identifiquen
e implementen medidas efectivas para proteger a las personas de
la tortura y los malos tratos. este manual
fue desarrollado para permitir a los Estados abordar una de
las preocupaciones más fundamentales en la protección de las
personas contra la tortura: la investigación y documentación efectivas.
La documentación saca a la luz pruebas de tortura y malos tratos para
que los perpetradores rindan cuentas por sus acciones y se sirvan los
intereses de la justicia.
Durante los últimos 20 años, los estándares de
investigación y documentación del Protocolo de Estambul han
sirvió para cerrar la brecha entre las obligaciones de los Estados en
virtud de la Convención contra la Tortura y el derecho internacional
de investigar y documentar la tortura y los malos tratos y la falta de
orientación normativa, en particular en relación con la investigación
médico-legal y la documentación de la tortura. El Protocolo de Estambul
es un instrumento eficaz
para hacer frente a la impunidad de la tortura y los malos tratos,
ya que establece disposiciones específicas sobre cómo debe
llevarse a cabo una investigación y documentación legal y clínica
efectiva de las denuncias de tortura o malos tratos, lo cual es
necesario para llevar a los perpetradores ante la justicia. El Protocolo
de Estambul contiene una serie de Principios que articulan normas
mínimas para el cumplimiento por parte de los Estados a fin de
garantizar la investigación y documentación efectivas de la tortura y
los malos tratos, que se desarrollan más detalladamente en el manual.6
Los estándares de investigación y documentación contenidos en el
Protocolo de Estambul no se presentan como un protocolo inflexible
o exhaustivo, sino que representan estándares mínimos que deben
aplicarse teniendo en cuenta contextos específicos.
Si bien el Protocolo de Estambul inicialmente sirvió para elaborar las
obligaciones de los Estados en virtud de la Convención contra la
Tortura y el derecho internacional de investigar y documentar la tortura
y los malos tratos, se ha utilizado en una amplia gama de actividades
contra la tortura durante los últimos 20 años, incluida la promoción ,
capacitación y desarrollo de capacidades, reforma de políticas,
prevención y tratamiento y rehabilitación de sobrevivientes de tortura.7
Es importante señalar que los métodos de documentación contenidos
en el Protocolo de Estambul son aplicables a muchos contextos, tales
como investigaciones de derechos humanos y
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL

seguimiento, evaluaciones de asilo, defensa de los derechos de
las personas que son obligadas a confesar mediante tortura o
malos tratos, y evaluación de necesidades para la atención de
víctimas de tortura. Además, los estándares y métodos de
investigación y documentación del Protocolo de Estambul son
aplicables ya sea que las actividades se realicen en persona o de
forma remota. Este manual también proporciona un punto de
referencia internacional para prevenir el descuido, la mala
interpretación, el mal uso deliberado o la falsificación de pruebas
de tortura por parte de profesionales de la salud, ya sea de forma voluntariatratos.
o bajo coacción.
Es importante que todos los actores utilicen el Protocolo de
Estambul de buena fe y tomen medidas para evitar su mal uso,8
incluyendo exonerar a los perpetradores sobre la base de
la ausencia de hallazgos físicos y/o psicológicos de tortura o
malos tratos, descalificar arbitrariamente a expertos clínicos
no gubernamentales independientes para testificar en
procedimientos judiciales y tergiversar su orientación sobre la
formulación de interpretaciones de los resultados y sus
conclusiones con respecto a la posibilidad de tortura o malos

8 El Protocolo de Estambul no pretende ser un método para excluir la posibilidad de tortura y malos tratos. Véase, por ejemplo, CAT/C/MEX/CO/7, párrs. 26–27.

xxx
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Normas y
estándares
jurídicos
internacionales pertin
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

1. El derecho a no ser torturado está firmemente establecido en A. Derecho internacional de los derechos humanos
el derecho internacional.1 También tiene sus raíces en el
derecho internacional humanitario, el derecho penal 1. Normas y estándares desarrollados en las
internacional y el derecho internacional consuetudinario. Naciones Unidas
Además, la prohibición de la tortura es una norma de jus
cogens2 del derecho internacional, vinculante para todos 2. Los Estados Miembros de las Naciones Unidas han tratado durante muchos años de

los Estados, incluso si no son parte en tratados que desarrollar normas de aplicación universal para garantizar una protección

contienen esta disposición. Debido a su condición de jus adecuada de todas las personas contra la tortura y los malos tratos. Los tratados,

cogens , la prohibición de la tortura es absoluta e inderogable declaraciones, resoluciones y otros instrumentos adoptados por los Estados

y no puede limitarse bajo ninguna circunstancia.3 El carácter miembros establecen claramente que no hay excepción a la prohibición de la

absoluto e inderogable de la prohibición de la tortura se ve tortura y los malos tratos y establecen otras salvaguardias contra estos abusos,

reforzado por las disposiciones del artículo 2 de la Convención incluidos instrumentos aplicables a poblaciones específicas como mujeres,

contra la tortura. Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, personas con discapacidad y niños.6

Inhumanos o Degradantes4, que fueron desarrollados en la

Observación general No. 2 (2007) del Comité contra la
Tortura. La Convención contra la Tortura también reconoce
la jurisdicción universal para el delito de tortura. La prohibición 3. El artículo 1 de la Convención contra la Tortura define la tortura (a los efectos

de la tortura se aplica extraterritorialmente, y las obligaciones de la Convención) como:

de los Estados que se derivan del carácter absoluto de la

prohibición, incluidas las obligaciones de investigar, enjuiciar cualquier acto por el cual se inflige intencionalmente a
y sancionar los actos de tortura, son normas del derecho una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean
internacional consuetudinario. La prohibición de tratos o físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un
penas crueles, inhumanos o degradantes (malos tratos) es tercero información o una confesión, castigarla por un
igualmente absoluta tanto en virtud de los tratados como del acto que él o un tercero ha cometido o es sospechosa
derecho internacional consuetudinario.5 Los Estados que de haber cometido, o intimidado o coaccionado a él o a
siguen el Protocolo de Estambul evalúan las denuncias de un tercero, o por cualquier motivo basado en
tortura o malos tratos durante una investigación de buena fe discriminación de cualquier tipo, cuando tal dolor o
y con la debida diligencia indican que se esfuerzan por sufrimiento es infligido por o por instigación de o con el
cumplir con sus obligaciones de examinar tales alegaciones consentimiento o aquiescencia de un funcionario público
adecuadamente. o otra persona que actúe a título oficial. No incluye el
dolor o sufrimiento que surja únicamente de, inherente
o incidental a las sanciones legales.

1 Declaración Universal de Derechos Humanos, art. 5; Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, art. 7; Convención contra la Tortura, art. 2; Convención sobre los Derechos del
Niño, art. 37; Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares, art. 10; y Convención sobre los Derechos de las
Personas con Discapacidad, art. 15, todos prohíben expresamente la tortura y los malos tratos. Los instrumentos regionales que establecen el derecho a no ser torturado incluyen:
Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, art. 1; Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de
Belém do Pará), art. 4; Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José), art. 5; Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, art. 5; y Convenio para la
Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales (Convenio Europeo de Derechos Humanos), art. 3. Adicionalmente, la Convención Internacional para la Protección
de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas y la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas prohíben las desapariciones forzadas, que varios
tribunales regionales e internacionales han concluido que constituyen tortura, y obligan a los Estados a investigar, enjuiciar y castigar tales actos.

2 A/74/10, págs. 146 y 147, conclusión 23 del proyecto de conclusiones sobre las normas imperativas de derecho internacional general (ius cogens), aprobado por la Comisión de Derecho
Internacional en primera lectura, y su anexo.
3 El carácter absoluto e inderogable de la prohibición de la tortura se establece expresamente en la Declaración sobre la Protección de Todas las Personas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas
Crueles, Inhumanos o Degradantes, art. 3; la Convención contra la Tortura, art. 2 (2); y la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, art. 5. Además, el derecho a no
ser torturado es inderogable durante los estados de excepción (Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, art. 4; Convenio Europeo de Derechos Humanos, art. 15; y Convención
Americana sobre Derechos Humanos, art. . 27).
4 La Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (Nueva York, 10 de diciembre de 1984), Naciones Unidas, Treaty Series, vol. 1465,
n.° 24841, pág. 85, entró en vigor el 26 de junio de 1987.
5 En su Observación general No. 2 (2007), párr. 6, el Comité contra la Tortura explica que las prohibiciones contra la tortura se aplican igualmente a los malos tratos, incluidos los artículos
de la Convención que establecen la jurisdicción universal (arts. 5 a 9).

6 Estos instrumentos incluyen: Declaración Universal de los Derechos Humanos; Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes; Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos; Código de conducta para funcionarios encargados de hacer cumplir la ley; Principios de Ética Médica Relativos a la Función
del Personal de Salud, en particular los Médicos, en la Protección de Reclusos y Detenidos contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes; Convención contra
la Tortura; Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión; Principios básicos para el tratamiento de los reclusos;
Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes; Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los
Reclusos (Reglas Nelson Mandela); Reglas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de las Reclusas y Medidas No Privativas de la Libertad para las Mujeres Delincuentes (Reglas de
Bangkok); Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad; Convención de los Derechos del Niño; Reglas de las Naciones Unidas para la Protección de los Menores
Privados de Libertad (Reglas de La Habana); y las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para la Administración de la Justicia de Menores (Reglas de Beijing).

2
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

La lista de otros propósitos no es exhaustiva y los incluido el mínimo estándar de las Naciones Unidas
propósitos relevantes no se limitan a declaraciones Reglas para el tratamiento de los reclusos (Nelson
coercitivas o confesiones. Reglas de Mandela), las Reglas de las Naciones Unidas para la
Tratamiento de mujeres reclusas y sin custodia

4. Responsabilidad del Estado por tortura y malos tratos Medidas para las mujeres delincuentes (Reglas de Bangkok) y las
se extiende a las personas que actúan a título oficial, así como a Reglas mínimas estándar de las Naciones Unidas

los agentes no estatales que actúan con el consentimiento o la
aquiescencia del Estado. Como se establece en el artículo 1, la
tortura implica actos “por o bajo la instigación de o con el
consentimiento o aquiescencia de un funcionario público u otra
persona que actúe en el ejercicio de funciones oficiales”. El término
aquiescencia requiere una interpretación bastante amplia, según la
cual los Estados son responsables de las acciones de los funcionarios
públicos y los actores no estatales que “tienen conocimiento de tal
actividad y, posteriormente, incumplen [su] responsabilidad legal de
interferir para prevenir tal actividad” .7 Por lo tanto, el principio de
capacidad oficial hace que los Estados rindan cuentas por algo más
que los funcionarios del Estado y crea una comprensión más amplia
de la definición de tortura.8 El Comité contra la Tortura ha explicado
que cuando los funcionarios:
saben o tienen motivos razonables para creer que
funcionarios no estatales o agentes privados están
cometiendo actos de tortura o malos tratos y no ejercen
la diligencia debida para prevenir, investigar, enjuiciar y
castigar a dichos funcionarios no estatales o agentes
privados de forma sistemática con la Convención, el
Estado es responsable y sus funcionarios deben ser
considerados autores, cómplices o responsables de otro
modo en virtud de la Convención por consentir o tolerar
tales actos inadmisibles.9
5. Si bien la definición de tortura en la Convención
contra la Tortura excluye “el dolor o sufrimiento que surja
únicamente de, inherente o incidental a las sanciones legales”,
la legalidad de una sanción bajo la ley nacional en sí misma es
insuficiente para hacerla legal bajo el artículo 1 de la Convención.10
El Comité contra la Tortura aplica esta disposición al determinar la
legalidad de una sanción con referencia tanto a
para la Administración de Justicia Juvenil (Reglas de Beijing).11 La
legalidad de cualquier sanción se determinará por referencia al
derecho nacional e internacional, prevaleciendo el derecho
internacional en caso de conflicto con la legislación nacional.12 Este
requisito explica por qué el castigo corporal y Podría decirse que la
pena de muerte está prohibida por la Convención contra la Tortura
según la interpretación del Comité y el Relator Especial sobre la
tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, a
pesar de ser aceptable en la legislación interna de ciertos Estados.13
6. De conformidad con el artículo 1 de la Convención
contra la Tortura, el concepto sustantivo de "tortura"
comprende, en particular, la imposición intencional
y deliberada de dolores o sufrimientos graves "ya
sean físicos o mentales". Por tanto, todos los métodos de
tortura están sujetos a la misma prohibición y dan lugar a
las mismas obligaciones jurídicas, independientemente de
que el dolor o sufrimiento infligido sea de carácter “físico” o
“mental”, o una combinación de ambos.
7. El artículo 16 de la Convención contra la Tortura se refiere a la prevención
de “actos de tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes que no
equivalgan a tortura tal como se define en el artículo 1”. Como
disposición escrita en términos generales, el artículo 16 cubre formas
de malos tratos que no equivalen a tortura, ya que carecen de
elementos de la definición de tortura, ya sea que se relacionen con el
propósito, la intención o el dolor o sufrimiento que difieren en
gravedad.14 Mientras que el El término “tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes” no está definido en la Convención contra
la Tortura ni en otros instrumentos internacionales (o regionales),
según las normas internacionales, “debe interpretarse de modo que
extienda la protección más amplia posible contra los abusos”.15

leyes y normas nacionales e internacionales,

7 Manfred Nowak y Elizabeth McArthur, La Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura: un comentario (Oxford y Nueva York, Oxford University Press, 2008), pág. 78.
Véase A/74/148, párr. 6; y A/HRC/22/53, párr. 17
8 Sobre el concepto de “aquiescencia”, véase Comité contra la Tortura, Dzemajl et al. c. Yugoslavia (CAT/C/29/D/161/2000), párr. 9.2.
9 Observación general No. 2 (2007), párr. 18
10 Las sanciones lícitas se refieren a prácticas legítimas ampliamente aceptadas por la comunidad internacional. Véase E/CN.4/1997/7.
11 Resoluciones de la Asamblea General 70/175, 65/229 y 40/33, respectivamente.
12 Comité de Derechos Humanos, Osbourne v. Jamaica, comunicación No. 759/1997, párr. 9.1. Véase también CAT/C/AFG/CO/2, párr. 24 (e); CAT/C/PAK/CO/1, párr. 39; y CAT/C/MNG/CO/2, párr. 26

13 E/CN.4/1997/7, párrs. 7–8; y A/67/279, párrs. 26–27. Véase también CAT/C/ATG/CO/1, párr. 44; CAT/C/KOR/CO/3-5, párr. 30; y CAT/C/TLS/CO/1, párr. 23

14 Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párr. 10; y Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 20 (1992), párr. 3.
15 El Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 6, nota al pie.

3
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

8. El énfasis en la prevención de tratos crueles, inhumanos o
degradantes se explica por su interrelación con la
tortura. Como observó el Comité contra la Tortura, “en la
práctica, el umbral definitorio entre malos tratos y
la tortura a menudo no es clara… [y] las condiciones
que dan lugar a malos tratos frecuentemente facilitan la
tortura y, por lo tanto, las medidas requeridas para
prevenir la tortura deben aplicarse para prevenir los
malos tratos.”16 En ese sentido, otras formas de malos
tratos también están absolutamente prohibidos.
o cualquier estatuto de limitación o indultos, amnistías o
inmunidades;19
d) Comprometerse a ejercer la jurisdicción universal, es decir,
investigar a los sospechosos bajo su jurisdicción y, si es
necesario, enjuiciarlos o extraditarlos, independientemente del
lugar donde se haya cometido la tortura y de la nacionalidad del
perpetrador o de la víctima, incluso mediante la tipificación de la
tortura como delito que dé lugar a extradición. y ayudar a otros
Estados partes en relación con procesos penales iniciados con
respecto a la tortura;20

9. Varios mecanismos de derechos humanos de las Naciones
Unidas han tomado medidas para desarrollar normas para
la prevención de la tortura, incluida la aclaración de la
obligación de los Estados de investigar las denuncias de tortura.
a) Obligaciones relacionadas con la prevención de la tortura
10. Los instrumentos internacionales antes citados establecen
ciertas obligaciones que los Estados deben
cumplir para garantizar la prevención de la tortura y
otras formas de malos tratos. Éstos incluyen:
e) Aplicar, en la legislación y en la práctica, salvaguardias
jurídicas fundamentales desde el comienzo de la detención,
garantizando, entre otras cosas, que todas las personas
detenidas puedan, en la práctica, tener acceso rápido a un
abogado independiente cualificado o a asistencia letrada
gratuita , si es necesario, especialmente durante los
interrogatorios policiales; notificar a un familiar u otra persona
de la elección del detenido los motivos y el lugar de la detención;
impugnar, en cualquier momento durante la detención, la
legalidad o necesidad de la detención ante un juez que pueda
ordenar la liberación inmediata del detenido y a

recibir una decisión sin demora; y ejercer el derecho a

a) Adoptar medidas legislativas, administrativas, judiciales o de
otra índole eficaces para prevenir los actos de tortura, ya sean
cometidos por agentes estatales o privados en cualquier
territorio bajo su jurisdicción. No podrán invocarse circunstancias
excepcionales de ningún tipo, incluido el estado de guerra o
amenaza de guerra, la inestabilidad política interna o cualquier
otra emergencia pública, como justificación de la tortura o los
malos tratos;17
(b) No expulsar, devolver (refouler) o extraditar por la
fuerza a una persona a un país en el que existan motivos
fundados para creer que la persona sería torturada o
maltratada.18 Véase más abajo (párrs. 112 a 116) para una
explicación más completa no devolución;
c) tipificar como delito los actos de tortura, incluida la
complicidad o la participación en ellos, punibles con penas que
correspondan a la gravedad del acto; y asegurar que los actos
de tortura no estén sujetos a prescripción
solicitar y recibir un examen médico por un médico
independiente. Además, los Estados deben establecer
garantías procesales tales como asegurar que los detenidos
sean mantenidos en lugares de detención oficialmente
reconocidos, manteniendo un registro completo de la hora,
duración y lugar del arresto y la detención; asegurar que los
nombres de las personas responsables de la detención se
mantengan en registros fácilmente disponibles y accesibles
para los interesados, incluidos familiares y amigos; y registrar
la hora y el lugar de todas las entrevistas de sospechosos,
testigos o víctimas, junto con los nombres de los presentes21;
(f) Establecer un sistema de visitas periódicas realizadas por
organismos internacionales y nacionales independientes a los
lugares en los que se encuentren personas privadas de libertad,
incluidos lugares tales como prisiones, comisarías, hospitales,
instituciones de atención social, centros cerrados de migración,
etc., con el objetivo de prevenir la tortura y los malos tratos y

dieciséis
Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párr. 3.
17 Convención contra la Tortura, art. 2 (1) y (2); Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes art. 3; y Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, arts. 4 y 7.
18 Convención contra la Tortura, art. 3; Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párrs. 15–16 y 26; y Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,
Arte. 7.
19 Convención contra la Tortura, art. 4; Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 7;
Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, art. 7; y Comité contra la Tortura,
Observación general No. 3 (2012), párr. 40, y observación general No. 2 (2007), párr. 5, “el Comité considera que las amnistías u otros impedimentos que impiden o
indican falta de voluntad para enjuiciar y castigar con prontitud y justicia a los autores de torturas o malos tratos violan el principio de inderogabilidad”.
20 Convención contra la Tortura, arts. 5–9. Específicamente, el deber de establecer jurisdicción y jurisdicción por parte del Estado parte (arts. 5 y 6); la obligación de juzgar o extraditar (arts. 5
y 7); el deber de extraditar (art. 8); y asistencia judicial recíproca (art. 9).
21 CAT/C/RUS/CO/6, párr. 11 (a)–(b).

4
Machine Translated by Google
I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

informar a los Estados sobre el trato y las condiciones en
violación de los derechos humanos;22
(g) Garantizar que los materiales relacionados con la prohibición de la tortura se
incluyan en la capacitación del personal encargado de hacer cumplir la ley (civil
y reparación. La reparación integral se refiere al alcance total de
las medidas necesarias para reparar las violaciones de la
Convención contra la Tortura e incluye “restitución, indemnización,
rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición”;29

y militar), personal médico, funcionarios públicos y otras personas apropiadas;23

m) Garantizar que los presuntos infractores estén sujetos

h) Velar por que los Estados partes mantengan bajo revisión sistemática las
normas, métodos y prácticas de interrogatorio relativos a la custodia y el trato
de las personas privadas de libertad24;
(i) Garantizar la inadmisibilidad de cualquier prueba obtenida como
resultado de la tortura. Cualquier declaración que se establezca que ha sido
hecha como resultado de tortura
a procesos penales si una investigación establece que parece
haberse cometido un acto de tortura y proporciona pruebas
suficientes y admisibles de la culpabilidad individual. Si las
denuncias de actos que involucran tortura o malos tratos se
consideran fundadas, los infractores deben estar sujetos a
sanciones administrativas y judiciales que tengan en cuenta la
gravedad de sus actos30 sin estatutos de limitaciones.31

no podrá ser invocada como prueba en ningún proceso, b) Mecanismos de las Naciones Unidas
excepto contra una persona acusada de tortura como prueba de
que se hizo la declaración (esto se conoce como la “regla de 11. Los mecanismos de derechos humanos de las Naciones Unidas

exclusión”);25 incluyen órganos basados en tratados, como el Comité contra la

Tortura, así como órganos basados en la Carta, como el Consejo

j) Asegurar que las autoridades competentes realicen investigaciones de Derechos Humanos y sus procedimientos especiales32.

prontas e imparciales y garanticen el derecho a presentar una denuncia26;

12. El Protocolo de Estambul ha sido citado en varias

(k) Asegurar que se establezcan mecanismos de denuncia
imparciales y efectivos, conocidos y accesibles al público,
incluidas las personas privadas de libertad y las personas
pertenecientes a grupos vulnerables o marginados o que
tengan capacidades limitadas de comunicación27. Además de
garantizar que los denunciantes y testigos estén protegidos contra
actos de represalia o intimidación como consecuencia de sus
denuncias o cualquier prueba proporcionada;
de decisiones adoptadas por los órganos de tratados
de las Naciones Unidas en virtud de comunicaciones
individuales, incluido el Comité contra la Tortura y el Comité
de Derechos Humanos, sobre temas de tortura, malos
tratos, no devolución y arresto y detención arbitrarios, entre
otros.33
(i) Órganos de tratados

13. Los órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos de las

(l) Garantizar que las víctimas de la tortura tengan acceso Naciones Unidas son comités de expertos independientes encargados

a una reparación y un derecho exigible a una compensación de supervisar la aplicación de los tratados de derechos humanos por los

justa y adecuada;28 la reparación debe incluir una reparación efectiva Estados partes. Cada órgano creado en virtud de un tratado se establece

22 Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura, arts. 2–4; y Reglas Nelson Mandela, reglas 83—85.
23 Convención contra la Tortura, art. 10; Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes art. 5; Comité
contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párr. 18 (f)–(g); y Reglas Nelson Mandela, regla 76; Ver también Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007),
párrs. 6 y 25.
24 Convención contra la Tortura, art. 11
25 La información extraída mediante tortura no es confiable y prohibir su uso como prueba elimina un incentivo importante para el uso de la tortura. Véase Convención contra la Tortura,
art. 15; y Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, art. 12. Véanse también A/61/259; y A/
HRC/25/60.
26 Convención contra la Tortura, art. 13; Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principios 33 y 34;
Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes art. 9; y Reglas Nelson Mandela, regla 71.
27 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 23
28 Convención contra la Tortura, arts. 13–14; y Declaración sobre la protección de todas las personas contra la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes
o Castigo, art. 11
29 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 2.
30 A/HRC/28/68/Add.4, párr. 109 (a).
31 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 40; CAT/C/LVA/CO/6, párr. 9; y CAT/C/UZB/CO/5, párrs. 25–26.
32 Véase www.ohchr.org/EN/HRBodies/Pages/HumanRightsBodies.aspx.
33 Véase, por ejemplo, Comité contra la Tortura, Rakishev c. Kazakhstan (CAT/C/61/D/661/2015), párr. 8.2; Asfari c. Marruecos (CAT/C/59/D/606/2014), párr. 15; y
Elaïba c. Túnez (CAT/C/57/D/551/2013), párr. 5.5.

5
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
y actúa de conformidad con el mandato definido en el
tratado específico que supervisa.
una. Comité contra la Tortura
14. El Comité contra la Tortura monitorea
aplicación por los Estados partes de la Convención contra la Tortura.
Las principales funciones del Comité incluyen: examen de los
informes periódicos;34
consideración de denuncias individuales y comunicaciones
interestatales;35 procedimiento de investigación;36 y adopción de
comentarios generales, que brindan una interpretación importante de
las disposiciones de la Convención contra la Tortura y establecen una
amplia jurisprudencia sobre la tortura y los malos tratos.
15. Entre las preocupaciones abordadas por el Comité contra la
Tortura en sus observaciones finales y decisiones sobre
denuncias individuales está la necesidad de que los
Estados partes cumplan con los artículos 12 y 13 de la
Convención contra la Tortura para asegurar que se lleven
a cabo investigaciones prontas e imparciales de todas las
denuncias de tortura. se llevan a cabo. El Comité ha tomado nota
que el artículo 13 no requiere la presentación formal de una denuncia
de tortura, sino que: “Es suficiente que la tortura haya sido denunciada
por la víctima para que [un Estado parte] tenga la obligación de
examinar la denuncia con prontitud e imparcialidad .”37 En efecto, aun
sin denuncia, el Estado está obligado a investigar de oficio si existen
indicios razonables de que
se ha producido un acto de tortura. La jurisprudencia del Comité
también destaca que de conformidad con los artículos 12 y 13 de la
Convención, las investigaciones sobre tortura deben incluir un
examen médico que cumpla con el Protocolo de Estambul38;
examinar la posible complicidad del personal médico;39
llevar ante la justicia a los responsables de la tortura; y
proporcionar reparación y reparación a las víctimas.40
16. Al comentar sobre la regla de exclusión, el Comité
ha afirmado que: “Uno de los medios esenciales en
prevenir la tortura es la existencia, en la legislación procesal, de
disposiciones detalladas sobre la inadmisibilidad
34 Convención contra la Tortura, art. 19
35 Ibíd., arts. 21–22.
36 Ibíd., art. 20
37 A/50/44; y Comité contra la Tortura, Parot c. España, comunicación No. 6/1990, párr. 10.4.
38 Comité contra la Tortura, Elaïba c. Túnez (CAT/C/57/D/551/2013), párr. 7.10.
39 Comité contra la Tortura, Rakishev v. Kazakhstan (CAT/C/61/D/661/2015), párr. 10
40 Comité contra la Tortura, EN c. Burundi (CAT/C/56/D/578/2013), párrs. 7.7–9.
41 A/54/44, párr. 45.
42 Comité contra la Tortura, GK c. Suiza (CAT/C/30/D/219/2002), párr. 6.10.
43 CAT/C/RUS/CO/4, párr. 21. El Comité de Derechos Humanos ha declarado además que la regla de exclusión se aplica en todo momento, incluso en situaciones de emergencia. Ver también
Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 32 (2007), párr. 6.
6
I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
de confesiones obtenidas ilícitamente y otras pruebas contaminadas”41.
El Comité también ha confirmado que corresponde al Estado en
cuestión “determinar si las declaraciones admitidas o no como prueba
en los procesos en los que tiene competencia... se han realizado
como resultado de tortura”42 y se deben dar instrucciones claras
a los tribunales para que puedan decidir que la declaración es
inadmisible.43
b. Subcomité de Prevención de la Tortura
y Otros Crueles, Inhumanos o Degradantes
Tratamiento o Castigo
17. El Subcomité para la Prevención de la Tortura y
Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes es
un órgano de tratado establecido en el marco del Protocolo
Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o
Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.
El objetivo del Protocolo Facultativo es prevenir la tortura y los malos
tratos mediante visitas periódicas de organismos internacionales y
nacionales independientes a todos los lugares en los que las
personas estén o puedan estar privadas de libertad, incluidas las
comisarías, las prisiones, los centros de detención preventiva, centros
de detención de inmigrantes, establecimientos de justicia juvenil,
instalaciones militares e instituciones de atención social y de salud
mental.
18. La naturaleza del mandato del Subcomité le permite
realizar visitas sin previo aviso, tener acceso sin restricciones a todos
los lugares de detención y tener pleno acceso a toda la documentación,
incluida la documentación médica.
El Subcomité tiene la capacidad de acceder a lugares que de otro
modo estarían fuera del alcance, incluso para el personal médico.
19. Durante las visitas, las delegaciones deberán incluir médicos
miembros calificados que pueden, y lo hacen, con su consentimiento,
realizar exámenes físicos de personas que presuntamente han sido
sometidas a tortura u otros malos tratos. Miembros del Subcomité
también debe tener acceso sin restricciones a los lugares
de detención y pleno acceso a las entrevistas
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
en privado (sin funcionarios presentes) con personas
privadas de libertad y con el personal pertinente.
20. El mandato del Subcomité también incluye asesorar
y ayudar a los Estados partes en el establecimiento de sus mecanismos
nacionales de prevención, que son órganos de visita independientes a
nivel nacional.
Al igual que el Subcomité, los mecanismos nacionales de
prevención pueden realizar visitas sin previo aviso y tener
acceso irrestricto a todos los lugares en los que las personas
estén o puedan estar privadas de su libertad, y debe tener pleno
acceso a toda la documentación.
C. Comité de Derechos Humanos
21. El Comité de Derechos Humanos se estableció de
conformidad con el artículo 28 del Pacto Internacional
de Derechos Civiles y Políticos y tiene el mandato de
supervisar la aplicación del Pacto por los Estados
partes.
22. En sus comentarios generales, el Comité, entre otras cosas, ha
reforzado su lectura del artículo 7 del Pacto, que dispone que
“nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles,
inhumanos o degradantes”, al afirmar que “las denuncias deben
ser investigadas con prontitud e imparcialidad por las autoridades
competentes a fin de hacer efectivo el recurso”44. Ha esbozado las
normas y reglas aplicables al trato humano de las personas privadas
de libertad, señalando que: “Artículo 10, inciso 1 [ del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos], impone a los Estados
partes una obligación positiva hacia las personas que se encuentran
en una situación de especial vulnerabilidad por su condición de
personas privadas de libertad, y complementa para ellas la prohibición
de la tortura u otros tratos crueles, inhumanos o degradantes o pena
contenida en el artículo 7 del Pacto”45. El Comité también ha
explicado cómo la detención arbitraria genera riesgos de tortura y
malos tratos y ha enumerado va varias salvaguardias que son
esenciales para prevenir la tortura.46
Además, ha señalado que los efectos psíquicos y físicos de la tortura
y los malos tratos pueden generar una
44 Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 20 (1992), párr. 14
45 Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 21 (1992), párr. 3.
46 Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 35 (2014), párrs. 56–58.
47 Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 36 (2018), párrs. 54–58.
48 Comité de Derechos Humanos, Amarasinghe c. Sri Lanka (CCPR/C/120/D/2209/2012), párr. 8; y Khelifati c. Argelia (CCPR/C/120/D/2267/2013), párr. 8.
49 Comité de Derechos Humanos, El-Megreisi c. Libia, comunicación No. 440/1990, párr. 5.4.
50 CEDAW/C/BDI/CO/5-6, párr. 27
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
riesgo de privación de la vida y ha relacionado la tortura y los
malos tratos con las desapariciones forzadas.47
23. Entre la jurisprudencia establecida por la
Comité de Derechos Humanos bajo la primera Facultativa
Protocolo del Pacto Internacional de Derechos Civiles
y Derechos Políticos, que otorga al Comité competencia para
examinar denuncias individuales de violaciones del Pacto, el
Comité ha subrayado y/o explicado que, en virtud del artículo
7, los Estados están obligados a realizar investigaciones
exhaustivas y efectivas de las denuncias de tortura, incluidas
investigaciones médicas , seguido del enjuiciamiento y castigo de los
responsables y el pago de una indemnización al autor de la queja.48
Además, el Comité ha reconocido que la detención en régimen de
incomunicación durante períodos prolongados implica un grado
significativo de sufrimiento y que esto puede equivaler a tortura o
malos tratos. -tratamiento.49
d. Comité para la Eliminación de la Discriminación contra
la Mujer
24. El Comité para la Eliminación de la Discriminación
contra la Mujer supervisa el cumplimiento por parte de los
Estados partes de la Convención sobre la eliminación de todas las
Formas de Discriminación contra la Mujer.
25. En sus observaciones finales, el Comité ha abordado la
obligación de investigar, enjuiciar y sancionar a los autores
estatales y no estatales de actos que constituyan tortura o
malos tratos, incluidas la violencia sexual y la mutilación.
También ha considerado la
obligación de proporcionar a las víctimas de violencia sexual
acceso a tratamiento médico integral y apoyo psicosocial
proporcionado por profesionales de la salud debidamente
capacitados para detectar la violencia sexual.50 Además, el Comité
ha expresado su preocupación por la detención arbitraria, la tortura
y los malos tratos y la violencia sexual. en prisiones; la estigmatización
de las mujeres al denunciar violencia sexual y de género y violación
u otras formas de tortura o malos tratos; y la obligación de brindar a
las víctimas de violencia sexual acceso a tratamiento médico integral
y psicosocial.
7
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

apoyo brindado por profesionales de la salud debidamente
capacitados para detectar la violencia sexual.51
26. Las recomendaciones generales del Comité han
profundizado en cuestiones como la violencia contra la
mujer52 y el acceso a la justicia, en las que reiteró que los
sistemas de justicia deben estar disponibles, ser accesibles,
justiciables, responsables, de buena calidad y brindar
reparación a las víctimas53.
de niños no acompañados y separados fuera de su país de
origen, el Comité afirmó que un niño no debe ser devuelto a un país
donde haya motivos fundados para creer que existe un riesgo real
de daño irreparable para el niño.57 Al examinar denuncias individuales,
de conformidad con el Protocolo Facultativo de la Convención sobre
los Derechos del Niño relativo a un procedimiento de comunicaciones,
el Comité ha determinado que deportar a una niña a un Estado en el
que corre el riesgo de ser sometida a la mutilación genital femenina
viola la Convención.58

27. En su examen de las comunicaciones individuales

de conformidad con el Protocolo Facultativo de la Convención sobre
la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
contra la Mujer, el Comité ha encontrado violaciones
de los derechos consagrados en la Convención, incluidos
casos relacionados con la esterilización forzada, la violencia
doméstica, la violencia en las cárceles, la continuación forzada
del embarazo y la falta de disposiciones para castigar efectivamente
la violación y la violencia sexual.54
F. Comité sobre los Derechos de las Personas
con Discapacidad
31. El Comité sobre los Derechos de las Personas
con Discapacidad fue establecido de conformidad
con el artículo 34 de la Convención sobre la
Derechos de las Personas con Discapacidad.

mi. Comité de los Derechos del Niño
28. El Comité de los Derechos del Niño
fue establecido de conformidad con el artículo 43 de la
Convención sobre los Derechos del Niño.
29. En sus observaciones finales, el Comité
ha abordado reiteradamente la tortura y los malos tratos en
virtud del artículo 37 de la Convención, que dispone que “ningún
niño será sometido a torturas u otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes”. Al hacerlo, el Comité ha expresado su
preocupación por la tortura, las ejecuciones extrajudiciales y la
desaparición forzada de niños a manos de la policía y las fuerzas
armadas y ha recomendado registrar, investigar y enjuiciar todas
las denuncias de tortura o malos tratos a los niños.55
32. El Comité ha abordado aspectos de la tortura y los malos tratos como
parte de su mandato. Por ejemplo, el Comité concluyó que las
autoridades argentinas no se aseguraron de que un recluso con
discapacidad pudiera utilizar las instalaciones y los servicios
penitenciarios en igualdad de condiciones con otros detenidos y que
el Estado estaba obligado a tomar medidas para rectificar la
situación.59 El Comité también enfatizó la obligación del Estado de
prevenir la tortura cuando descubrió que la República Unida de
Tanzania no había investigado ni enjuiciado a los presuntos autores
de un ataque contra una persona con albinismo; el Comité observó
que esta falla resultó en una revictimización de la persona agredida,
quien habría sufrido malos tratos psicológicos y una violación a la
integridad física de la persona60.

gramo. Comité sobre Desapariciones Forzadas

30. El Comité ha publicado comentarios generales sobre los 33. El mandato del Comité de Derechos Coercitivos
castigos corporales y otras formas de castigo crueles o Desapariciones es monitorear la implementación de la
degradantes, así como sobre la justicia de menores56. Convención Internacional para la Protección

En su Observación general No. 6 (2005) sobre el tratamiento de Todas las Personas contra la Desaparición Forzada por

51 CEDAW/C/IRQ/CO/4-6, párrs. 48–49; CEDAW/C/MLI/CO/6-7, párrs. 13–14; y CEDAW/C/BDI/CO/5-6, párrs. 26–27.

52 Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, recomendación general No. 12 (1989); recomendación general núm. 19 (1992); y generales
recomendación núm. 35 (2017).
53 Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, recomendación general No. 33 (2015).
54 Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, Szijjarto c. Hungría, comunicación 4/2004; AT c. Hungría, comunicación No. 2/2003; Centro de Intervención de
Viena contra la Violencia Doméstica y la Asociación para el Acceso de las Mujeres a la Justicia en nombre de Akbak et al. c. Austria (CEDAW/C/39/D/6/2005); Abramova c.
Bielorrusia (CEDAW/C/49/D/23/2009); LC c. Perú (CEDAW/C/50/D/22/2009); y VPP c. Bulgaria (CEDAW/C/53/D/31/2011).
55 CRC/C/SLV/CO/5-6 y Corr.1, párr. 24; y CRC/C/ARG/CO/5-6, párrs. 21–22.
56 Comité de los Derechos del Niño, Observación general No. 8 (2006) y Observación general No. 10 (2007).
57 Comité de los Derechos del Niño, Observación general No. 6 (2005), párr. 27
58 Comité de los Derechos del Niño, KYM c. Dinamarca (CRC/C/77/D/3/2016).
59 Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, X c. Argentina (CRPD/C/11/D/8/2012), párr. 8.5.
60 Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, X c. República Unida de Tanzania (CRPD/C/18/D/22/2014), párrs. 8.6–8.7.

8
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

Estados partes. El Comité también puede recibir solicitudes de recomendaciones hechas en informes de visitas; estudiar, de manera

acciones urgentes de los familiares de personas desaparecidas o integral, las tendencias, desarrollos y desafíos en relación con el

de sus representantes legales u otros autorizados, así como combate y la prevención de la tortura y los malos tratos, y hacer

denuncias de personas que aleguen ser víctimas de una violación de recomendaciones y observaciones sobre las medidas apropiadas para

los derechos consagrados en la Convención61. prevenir y erradicar tales prácticas; identificar, intercambiar y promover

las mejores prácticas sobre medidas para prevenir, sancionar y

erradicar la tortura y los malos tratos; integrar una perspectiva de

ii) Procedimientos especiales del Consejo de Derechos Humanos género y un enfoque centrado en las víctimas en todo el mandato; y

promover la cooperación con actores nacionales, regionales e

34. El Consejo de Derechos Humanos es un órgano intergubernamental responsable internacionales.62

de promover y proteger los derechos humanos internacionales y de tomar

medidas para hacer frente a las violaciones de los derechos humanos.

39. En su informe de 1995, el Relator Especial sobre la tortura, Sir

35. El Consejo administra un sistema de procedimientos especiales de Nigel Rodley, formuló una serie de recomendaciones, entre

expertos independientes que trabajan a título individual con ellas:

mandatos para informar y asesorar sobre derechos humanos

desde una perspectiva temática o específica de un país. Cuando un detenido, un familiar o un abogado presenta una

denuncia de tortura, siempre se debe realizar una investigación.

… Autoridades nacionales independientes, como una comisión

36. Los relatores especiales investigan los derechos humanos nacional o un defensor del pueblo

situaciones alrededor del mundo desde un punto de vista temático o con facultades de investigación y/o acusación, deben establecerse

perspectiva específica del país, independientemente de la ratificación para recibir e investigar denuncias. Las denuncias sobre tortura deben

de un Estado de los tratados de derechos humanos pertinentes. ser atendidas de inmediato y deben ser investigadas por una autoridad

independiente sin relación con la que está investigando o procesando

37. Los grupos de trabajo transmiten llamamientos urgentes a los un caso contra la presunta víctima [de tortura]63.

gobiernos, realizan visitas para desarrollar una comprensión

integral de las situaciones prevalecientes en relación con sus

mandatos en los países, realizan deliberaciones sobre cuestiones

generales para ayudar a los Estados a prevenir violaciones y emiten informes 40. Sir Nigel Rodley señaló posteriormente que “tanto en virtud del derecho

anuales. internacional general como de la Convención contra la Tortura y Otros

Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, los Estados están

una. Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, obligados a investigar las denuncias de tortura”. 64 Posteriormente, su sucesor,
inhumanos o degradantes Manfred Nowak, señaló que “uno de los mayores desafíosimpunidad
en la luchadecontra
la la

tortura es que las autoridades lleven a cabo investigaciones efectivas;

38. El Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos investigaciones que sean independientes, exhaustivas y exhaustivas.”65 Con

o degradantes examina cuestiones relacionadas con la tortura y otros este fin, el Relator Especial enfatizó la importancia de los médicos forenses

tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. para documentar e investigar la tortura y combatir la impunidad, recomendando

que: “Un experto forense independiente debe ser parte de cualquier hecho

De conformidad con la resolución 43/20 del Consejo de Derechos Humanos, creíble- mecanismo de detección o prevención.”66

el Relator Especial sobre tortura tiene el mandato de buscar, recibir, examinar

y actuar sobre información relacionada con cuestiones y presuntos casos de

tortura o malos tratos; realizar visitas a los países para mejorar el diálogo

con los gobiernos y dar seguimiento a

61 CED/C/COL/CO/1, párrs. 29 y 30 (acordando con el Comité contra la Tortura que el Estado debe garantizar el acceso inmediato a un abogado y todas las garantías asociadas
para las personas privadas de libertad como una forma de prevenir las desapariciones forzadas); y A/HRC/45/13, párrs. 61 (discutiendo las denuncias de que las víctimas
de desapariciones forzadas habían sido sometidas a tortura durante la desaparición y luego reaparecieron frente a un fiscal) y 93 (señalando la relación entre desaparición
forzada, detención arbitraria y tortura).
62 Los titulares de mandatos hasta la fecha son: Peter Kooijmans (1985–1993), Nigel Rodley (1993–2001), Theo van Boven (2001–2004), Manfred Nowak (2004–2010), Juan E.
Méndez (2010–2016) y Nils Melzer (2016–2022).
63 E/CN.4/1995/34, párr. 926 (g).
64 E/CN.4/1996/35, párr. 136.
65 A/62/221, párr. 46.
66 Ibíd., párr. 53 (e).

9
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

41. Los respectivos Relatores Especiales sobre la tortura han subrayado la estándar de salud física y mental, Paul Hunt, informó que: “Donde

importancia de la investigación y documentación de las denuncias de hay servicios de atención y apoyo de salud mental disponibles, los

tortura, de conformidad con el Protocolo de Estambul, como herramienta usuarios son vulnerables a violaciones de sus derechos humanos dentro

necesaria para luchar contra la impunidad y reforzar el estado de derecho.
También han identificado situaciones, como el confinamiento solitario,
y prácticas, como confesiones forzadas, que representan un mayor
riesgo de tortura y malos tratos y han recomendado medidas preventivas
contra tales situaciones y prácticas en sus informes temáticos y de visitas
a países. Elaboraciones recientes sobre normas relacionadas con la
de estos entornos. Esto es particularmente cierto en los sistemas de
servicios segregados e instituciones residenciales, como hospitales
psiquiátricos, instituciones para personas con discapacidad intelectual,
hogares de ancianos, centros de atención social, orfanatos y prisiones.”77
En 2017, el Relator Especial, Dainius Pÿras, concluyó que : “La salud
mental muchas veces ha sido descuidada y cuando recibe recursos, se
vuelve dominada por modelos, actitudes y desequilibrios ineficaces y

tortura y los malos tratos han incluido comisiones de investigación,67 dañinos. … Las personas de todas las edades, cuando tienen necesidades
condiciones de detención y las Reglas Nelson Mandela,68 la regla de de salud mental, con demasiada frecuencia sufren por la falta de atención
exclusión,69 perspectivas de género sobre la tortura,70 y apoyo o por servicios que son ineficaces y dañinos.”78

tortura en establecimientos de salud,71 confinamiento solitario,72

el papel de la pericia forense en la lucha contra la impunidad de la
tortura73 y el uso de la fuerza fuera de la privación de libertad.74 d. Relator Especial sobre la promoción y
protección de los derechos humanos y las libertades
b. Relatora Especial sobre la violencia contra la mujer, fundamentales en la lucha contra el terrorismo
sus causas y consecuencias
44. El mandato del Relator Especial sobre la promoción y protección de los

42. En un informe de 2013, la Relatora Especial sobre la violencia contra la mujer, derechos humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra

sus causas y consecuencias, Rashida Manjoo, escribió sobre el "fuerte vínculo el terrorismo fue establecido en abril de 2005 por la Comisión de

entre la violencia contra la mujer y el encarcelamiento de las mujeres, ya sea Derechos Humanos. Los titulares de mandatos han hecho hincapié

antes, durante o después del encarcelamiento".75 sistemáticamente en la prohibición absoluta de la tortura y los malos

tratos, incluso cuando los Estados se enfrentan al terrorismo.79

En un informe de 2015 relató la influencia de la Convención

Interamericana para Prevenir y

Castigar la Tortura en la “conceptualización de la violación como

tortura”, afirmando la influencia de los mecanismos regionales e mi. Relator Especial sobre ejecuciones extrajudiciales,
internacionales de derechos humanos en la interpretación sumarias o arbitrarias y el Protocolo de Minnesota
progresiva de la violación como tortura.76 sobre la investigación de muertes potencialmente ilícitas

C. Relator Especial sobre el derecho de todos 45. El Relator Especial sobre procedimientos extrajudiciales, sumarios

al disfrute del más alto nivel posible de salud física y o ejecuciones arbitrarias a menudo se refiere a Minnesota

mental Protocolo sobre la Investigación de Conductas Potencialmente Ilícitas

Muerte80 al cumplir el mandato de proteger el derecho a la vida y

43. En 2005, el Relator Especial sobre el derecho de promover la justicia, la rendición de cuentas y el derecho a la
todos al disfrute de lo más alto posible reparación, y al garantizar

67A /HRC/19/61.
68A /64/215; y A/68/295.
69 A/HRC/25/60.
70A /HRC/7/3; y A/HRC/31/57.
71A /HRC/22/53.
72 A/63/175; y A/66/268.
73A /62/221; y A/69/387.
74 A/72/178.
75 A/68/340, párr. 2.
76 A/HRC/29/27, párrs. 54 y 58.
77 E/CN.4/2005/51, párr. 8.
78 A/HRC/35/21, párr. 84.
79 A/73/361, párr. 40 (expresando preocupación de que la regulación antiterrorista pueda dañar el derecho humano a no ser torturado); y A/HRC/40/52, párr. 55 (señalando
que múltiples comunicaciones individuales alegan el uso de la tortura como parte de los esfuerzos antiterroristas).
80 Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Protocolo de Minnesota sobre la investigación de muertes potencialmente ilícitas (2016):
Manual revisado de las Naciones Unidas sobre la prevención e investigación eficaces de ejecuciones extralegales, arbitrarias y sumarias ( Nueva York y Ginebra, 2017).

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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
se llevan a cabo investigaciones en casos de muertes
potencialmente ilícitas o desapariciones forzadas. El Protocolo
de Minnesota facilita el trabajo de los Estados, así como de
instituciones y personas, en la realización de estas
investigaciones y contiene información que va desde el marco
legal pertinente a los casos de muerte ilícita y desaparición
forzada hasta las mejores prácticas y estándares para la
recuperación de restos humanos, realización de autopsias ,
entrevistando a testigos, excavando tumbas y analizando restos
óseos.
F. Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria
46. El Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria
investiga los casos de privación de libertad impuesta
arbitrariamente o de manera incompatible con los estándares
jurídicos internacionales aplicables. Las personas detenidas
arbitrariamente suelen ser objeto de diversas formas de tortura
o malos tratos, un punto que ha subrayado el Grupo de
Trabajo. Por ejemplo, en 2009 el Grupo de Trabajo afirmó que
“los exámenes anales forzados contravienen la
prohibición de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos y
degradantes, ya sea que... se empleen con el fin de
castigar, forzar una confesión o fomentar la discriminación”.81
gramo. Grupo de Trabajo sobre Coacción Forzosa o Involuntaria
desapariciones
47. El Grupo de Trabajo sobre Derechos Forzados o Involuntarios
Desapariciones tiene el mandato de examinar las cuestiones
pertinentes a las desapariciones forzadas o involuntarias de
personas buscando y recibiendo información de gobiernos,
organizaciones intergubernamentales, organizaciones
humanitarias y otras fuentes fiables.
48. El Grupo de Trabajo ha contribuido a la
desarrollo de estándares internacionales sobre el tema
de las desapariciones forzadas, incluyendo la
Declaración sobre la protección de todas las personas contra
Desaparición Forzada. Ha elaborado una serie de comentarios
generales sobre la Declaración y ha elaborado su propia doctrina
sobre una serie de cuestiones, incluida la conexión entre las
desapariciones forzadas y la tortura. En su comentario general
sobre la definición de desaparición forzada, el Grupo de Trabajo
afirmó:
81 A/HRC/16/47/Add.1 y Corr.1, opinión No. 25/2009, párr. 28
82 A/HRC/7/2, párr. 26 (párr. 9 del comentario general).
83 Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias, comentario general sobre el derecho a la verdad en relación con las desapariciones forzadas, párr. 4 (A/HRC/16/48,
paraca. 39).
84 A/73/152, párr. 18
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
El Grupo de Trabajo considera que cuando el cadáver
de la víctima se encuentra mutilado o con claros signos
de haber sido torturado o con los brazos o las piernas
atados, esas circunstancias muestran claramente que la
detención no fue seguida inmediatamente por una
ejecución, sino que la privación de libertad tenía alguna
duración, incluso de al menos unas pocas horas o días.
Una situación de tal naturaleza, no sólo constituye una
violación al derecho a no ser desaparecido, sino también
al derecho a no ser sometido a tortura, al derecho al
reconocimiento de la personalidad jurídica y al derecho a
la vida, como previsto en el artículo 1, párrafo 2, de la
Declaración.82
49. Sobre el derecho a la verdad, el Grupo de Trabajo se explayó sobre
el impacto de las desapariciones forzadas en los familiares de la
víctima, afirmando que el derecho a la verdad sobre el destino
de la persona desaparecida es un derecho absoluto, no sujeto a
limitación o suspensión.
Este carácter absoluto resulta del hecho de que
la desaparición forzada genera un sufrimiento a los
familiares que llega al umbral de la tortura83.
H. Experto independiente en protección contra la violencia y discriminación
por orientación sexual e identidad de género
50. El Experto Independiente sobre la protección contra la violencia
y discriminación basada en la orientación sexual
e identidad de género evalúa la implementación de los
instrumentos internacionales de derechos humanos con
respecto a las formas de superar la violencia y la discriminación
contra las personas por su orientación sexual o identidad de
género. En un informe de 2018, el experto independiente,
Víctor Madrigal-Borloz, señaló que “la falta de reconocimiento
de la identidad de género puede… dar lugar a violaciones de
los derechos humanos en otros contextos, como tortura y
malos tratos en entornos médicos y de detención, violencia
sexual y procedimientos médicos bajo coacción.”84
i. Relator Especial sobre los derechos de las personas con
discapacidad
51. El Relator Especial sobre los derechos de las personas con
discapacidad investiga los obstáculos que
11
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
personas con discapacidad que impiden su plena
participación como miembros iguales de la sociedad.85
52. Las personas con discapacidad privadas de libertad se encuentran
en una posición de extrema vulnerabilidad y corren un mayor
riesgo de ser sometidas a torturas o malos tratos, incluidos
medicamentos forzados, electrochoques, uso de medios de
sujeción y aislamiento86 . Se les puede negar atención médica.
y a menudo son despojados formalmente de su capacidad
legal.87 En un informe de 2021, el relator especial, Gerard Quinn,
expresó su preocupación por la representación excesiva de
personas con discapacidad en la población detenida y la
necesidad de considerar ajustes razonables con respecto a sus
condiciones de vida. 88 El Relator Especial expresó especial
preocupación por los problemas de salud mental que afectaban a
muchos reclusos con discapacidades y el impacto de la detención
en la salud mental, que están relacionados con las normas
mínimas de detención y el trato inhumano o degradante.89
53. Una evaluación de 2019 de la acción de las Naciones Unidas para
incorporar la accesibilidad y la inclusión de la discapacidad
llegó a la conclusión de que la inclusión necesitaba un enfoque
basado en los derechos humanos, que requería adherirse y
promover todas las normas internacionales de derechos humanos.90
Tal enfoque requiere alejarse de un enfoque caritativo o mediático
para las personas con discapacidad como titulares de derechos.
j. Grupo de trabajo sobre discriminación
contra mujeres y niñas
54. El Grupo de Trabajo sobre la discriminación contra las mujeres y las
niñas tiene el mandato de aplicar un enfoque integral y coherente
basado en los derechos humanos para garantizar que las mujeres y las
niñas estén en el centro de los esfuerzos para hacer que los Estados
rindan cuentas.
para la implementación de estándares internacionales de
derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales.
55. El Grupo de Trabajo se centra en defender las garantías legales para
proteger a todas las mujeres y niñas y trata de responder a las
intersecciones de la discriminación basada en el género con otros
motivos de discriminación. El Grupo de Trabajo reconoce
85 Los titulares de mandatos hasta la fecha incluyen a Gerard Quinn (2020-presente) y Catalina Devandas Aguilar (2014-2020).
86 A/HRC/40/54, párrs. 24 y 38.
87 Ibíd., párr. 24
88 A/HRC/46/27, párr. 110.
89 Ibíd., párr. 111.
90 A/75/186, párrs. 6, 12 y 26.
91 A/HRC/41/33, párr. 74.
12
I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
que las mujeres y las niñas no son un grupo uniforme.
Las mujeres y las niñas, en su diversidad y en muchas
circunstancias diferentes, se ven afectadas de manera
diferente por leyes y prácticas discriminatorias.
56. El Grupo de Trabajo ha señalado que: “La privación de libertad… tiene
consecuencias devastadoras para la vida de las mujeres, las pone en riesgo
de tortura, violencia y abuso, condiciones inseguras e insalubres, falta de
acceso a los servicios de salud y mayor marginación.
Aísla a las mujeres de la educación y la economía.
oportunidades, de sus familias y amigos, y de la posibilidad
de tomar sus propias decisiones y dirigir el curso de sus vidas
como mejor les parezca”91.
k. Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para las
Víctimas de la Tortura
57. El Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para las
Víctimas de la Tortura recibe contribuciones voluntarias, en su mayoría de
los Estados, y las distribuye a las organizaciones de la sociedad civil que
brindan asistencia psicológica, médica, social, económica, jurídica y humanitaria
a las víctimas de la tortura y a los miembros de organizaciones de la sociedad
civil.
sus familias. El Fondo promueve en particular un enfoque
centrado en la víctima destinado a marcar la diferencia a nivel
individual; es una herramienta para promover y abordar la
rendición de cuentas como un elemento crucial en el proceso de
recuperación de las víctimas de la tortura. De hecho, las secuelas
físicas y psicológicas de la tortura pueden ser devastadoras y durar
años, afectando no solo a los sobrevivientes sino también a sus
familias. La falta de una rehabilitación efectiva puede dejar a las
víctimas traumatizadas
y destruir familias y comunidades. El artículo 14 de la Convención
contra la Tortura estipula que los Estados partes deben garantizar
que una víctima de tortura bajo su jurisdicción obtenga reparación,
incluidos los medios para una rehabilitación lo más completa
posible. La asistencia para la recuperación del trauma sufrido se
puede obtener de las instituciones del Estado y de las
organizaciones de la sociedad civil que se especializan en asistir
a las víctimas de la tortura.
2. Sistemas regionales de derechos humanos
58. Los órganos regionales de derechos humanos han hecho importantes
contribuciones a la elaboración de normas para la
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

la prevención de la tortura. Estos órganos incluyen la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos, la Corte Interamericana
de Derechos Humanos, el Tribunal Europeo de Derechos
Humanos, el Comité Europeo para la Prevención de la Tortura y
los Tratos Inhumanos.
o Penas o Tratos Degradantes, la Comisión Africana de Derechos
Humanos y de los Pueblos y la Corte Africana de Derechos
Humanos y de los Pueblos.
(a) Sistema Interamericano
Estados partes en la Convención93 . Tal como lo establece su
reglamento, la función principal de la Comisión es promover la
observancia y defensa de los derechos humanos y servir como
órgano consultivo de la Organización de los Estados Americanos
en esta materia94 . función, la Comisión ha recurrido a la
Convención Interamericana para
Prevenir y Sancionar la Tortura para orientar su interpretación de lo
que se entiende por tortura en virtud del artículo 5 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos.

59. Artículo I de la Declaración Americana de los Derechos 62. Artículo 2 de la Convención Interamericana para
y Deberes del Hombre92 establece que: “Todo ser humano tiene Prevenir y Sancionar la Tortura define la tortura como:

derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona”. El

artículo XXV de la Declaración establece que: “Toda persona que cualquier acto realizado intencionalmente por el cual
haya sido privada de su libertad… tiene derecho a la integridad se inflija a una persona dolor o sufrimiento físico o
personal durante el tiempo que se encuentre bajo custodia”. Esto se mental con fines de investigación criminal, como medio de
complementa con la prohibición del artículo XXVI de “castigos crueles, intimidación, como castigo personal, como medida
infamantes o inusuales”. En 1959, la Organización de los Estados preventiva, como pena o con cualquier otro propósito.
Americanos creó la Comisión Interamericana También se entenderá por tortura el uso de

Comisión de Derechos Humanos, que recibió el mandato de
examinar casos individuales
contra los Estados miembros de la organización en 1965.
60. Artículo 5 de la Convención Americana
de Derechos Humanos establece que:
1. Toda persona tiene derecho a que se respete su
integridad física, psíquica y moral.
2. Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos
crueles, inhumanos o degradantes. Toda persona privada
métodos sobre una persona destinados a anular la
personalidad de la víctima o a disminuir sus capacidades
físicas o mentales, aunque no causen dolor físico o angustia
psíquica95.
63. De conformidad con el artículo 1 de la Convención Interamericana de
Prevenir y Sancionar la Tortura, los Estados partes se comprometen
a prevenir y sancionar la tortura en los términos de la Convención.
El artículo 6 establece que los Estados también deben tomar
medidas efectivas para prevenir y sancionar los malos tratos dentro
de su jurisdicción. La Convención Interamericana para Prevenir y
Sancionar

de libertad será tratada con el respeto debido a la Sin embargo, la tortura no proporciona una definición de tal
dignidad inherente a la persona humana. conducta ni indica las circunstancias que

distinguir los malos tratos de la tortura. La Corte Interamericana

de Derechos Humanos ha señalado que la distinción descansa en
… parte en la severidad del trato,96 pero ha sostenido que la distinción
no es rígida y podría evolucionar a la luz de las crecientes demandas
61. Artículo 33 de la Convención Americana sobre de protección de los derechos y libertades fundamentales.97 El
Derechos Humanos otorga competencia a la Inter artículo 6 también establece que los Estados
Comisión Americana de Derechos Humanos y la Corte
Interamericana de Derechos Humanos respecto del cumplimiento debe asegurarse de que la tortura sea un delito penal

de las obligaciones contraídas por

92 Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre (Bogotá, 2 de mayo de 1948).
93 La Corte Interamericana de Derechos Humanos es un órgano judicial con un mandato más limitado que el de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ya que la primera sólo puede decidir
casos presentados contra los Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos que hayan aceptó expresamente la competencia contenciosa de la Corte y tales casos deben ser
tramitados previamente por la Comisión. Además, sólo los Estados partes en la Convención y la Comisión pueden remitir casos a la Corte.
94 Reglamento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, art. 1 (1).
95 La definición de tortura provista en la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura difiere de la definición provista en la Convención contra la Tortura en tres aspectos: (a) no hace
referencia a la “gravedad” como calificación de la tortura; (b) hace referencia a “cualquier otro fin” sin calificarlo como basado en discriminación; y (c) incluye métodos destinados a anular la
personalidad de las víctimas o disminuir sus capacidades, independientemente de que tales métodos causen dolor o sufrimiento. Los Estados que son parte de ambos tratados están obligados
a aplicar las normas que más o mejor protegen el derecho a no ser torturado.
96 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Loayza-Tamayo c. Perú, Sentencia, 17 de septiembre de 1997, párr. 57.
97 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Cantoral-Benavides c. Perú, Sentencia, 18 de agosto de 2000, párrs. 99–104.

13
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

ley y que todos los actos de tortura, y los intentos de
cometer tortura, se castigan con penas severas.
64. Artículo 8 de la Convención Interamericana para
Prevenir y Sancionar la Tortura establece que los
Estados están obligados a realizar una investigación
inmediata y adecuada de cualquier denuncia de tortura
dentro de su jurisdicción y garantizar que cualquier persona
otras medidas diseñadas para eliminar la responsabilidad
por violaciones graves de los derechos humanos, incluida
la tortura, ya que tales disposiciones tienen por objeto
impedir la investigación y el castigo de las personas
responsables de tales violaciones y están prohibidas como
violaciones de las disposiciones inderogables del derecho
internacional de los derechos humanos.102 Además , la Corte
ha encontrado que la ejecución de sentencias en casos de graves daños

que presente una acusación de haber sido sometida a tortura
dentro de dicha jurisdicción tenga derecho a un examen
imparcial. del caso El deber de investigar surge tan pronto
como las autoridades estatales toman conocimiento de las
denuncias o motivos para creer que se ha producido tortura98.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha
reiterado que los principios de independencia, imparcialidad,
competencia, diligencia, meticulosidad y prontitud deben ser el
sello distintivo de una investigación de presuntos actos de
tortura99 . Además, la investigación debe tener en cuenta las
normas internacionales
violaciones de derechos humanos es parte integrante de
los derechos de acceso a la justicia de las víctimas y que
la obligación internacional de sancionar a los responsables
de graves violaciones de derechos humanos, incluida la
tortura, “no puede verse indebidamente afectada o tornarse
ilusoria durante la ejecución de la pena que impuso la sanción”. ,
de conformidad con el principio de proporcionalidad”.103
La Corte también ha establecido principios para asegurar la
integridad de la investigación y sanción de los responsables
de violaciones de derechos humanos en los sistemas de
justicia transicional104.

documentar e interpretar elementos de prueba forense 67. En su jurisprudencia, la Corte Interamericana de Derechos
sobre la comisión de actos de tortura.100 Humanos ha citado el Protocolo de Estambul en varias
decisiones sobre tortura y malos tratos, para llamar la
65. La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha atención sobre la necesidad de adoptar marcos legales
abordado la necesidad de investigar denuncias de apropiados y fortalecer las capacidades institucionales que
violaciones a la Convención Americana faciliten la investigación efectiva. de graves violaciones a los
de Derechos Humanos. En Velásquez Rodríguez derechos humanos.105
vs. Honduras, la Corte señaló que:
68. Artículos 12, 13 y 14 de la Convención Interamericana
El Estado está obligado a investigar toda Convención para Prevenir y Sancionar la Tortura establece

situación de violación de los derechos protegidos
por la Convención. Si el aparato estatal actúa de
tal manera que la violación quede en la impunidad y
no se restablezca a la brevedad el pleno goce de tales
derechos por parte de la víctima, el Estado ha incumplido
con su deber de garantizar el libre y pleno ejercicio de
dichos derechos. las personas dentro de su jurisdicción.101
66. La Corte Interamericana de Derechos Humanos
rechazó explícitamente la aplicabilidad de todas las
disposiciones sobre prescripción, amnistía y
jurisdicción universal para el delito de tortura, lo que
significa que los Estados están obligados a extraditar a los
sospechosos o realizar investigaciones y, en su caso,
enjuiciamientos penales, independientemente de la nacionalidad
del sospechoso y de si el delito se cometió dentro de la
jurisdicción del Estado. La Corte Interamericana de Derechos
Humanos ha considerado que solicitar la extradición de
sospechosos por el delito de tortura es una obligación bajo el
derecho internacional consuetudinario.106
69. La Corte Interamericana de Derechos Humanos también ha
señalado que las meras amenazas de recurrir a la conducta

98 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Servellón García y otros. v. Honduras, Sentencia, 21 de septiembre de 2006, párr. 119.
99 Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Instituciones Democráticas, Estado de Derecho y Derechos Humanos en Venezuela: Informe de País (2017), párr. 251; y Graves Violaciones a los
Derechos Humanos en el Contexto de las Protestas Sociales en Nicaragua (2018), párr. 192. Ver también Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe sobre los Derechos Humanos
de las Personas Privadas de Libertad en las Américas (2011), párr. 345; y Corte Interamericana de Derechos Humanos, Bueno-Alves c. Argentina, Sentencia, 11 de mayo de 2007, párr. 108.
100 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Vargas Areco v. Paraguay, Sentencia, 26 de septiembre de 2006, párr. 93. 101
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Velásquez-Rodríguez v. Honduras, Sentencia, 29 de julio de 1988, párr. 176.

102 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Barrios Altos c. Perú, Sentencia, 14 de marzo de 2001, párr. 41.
103 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Barrios Altos y La Cantuta c. Perú, Decisión de Supervisión, 30 de mayo de 2018, párr. 47 (traducción no oficial del español).
104 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Barrios Altos v. Perú, párr. 41.
105 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Cárcel Miguel Castro-Castro Vs. Perú, Sentencia, 25 de noviembre de 2006, párr. 326; González et al. (“Campo Algodonero”) c. México, Sentencia,
16 de noviembre de 2009, párrs. 502 y 542; Rosendo Cantu et al. c. México, Sentencia, 31 de agosto de 2010, párrs. 239–243; y Vélez Loor c. Panamá, Sentencia, 23 de noviembre de 2010,
párr. 270.
106 Corte Interamericana de Derechos Humanos, La Cantuta c. Perú, Sentencia, 29 de noviembre de 2006, párrs. 159–160. Ver también Corte Interamericana de Derechos Humanos, Goiburú et al.
v. Paraguay, Sentencia, 22 de septiembre de 2006, párrs. 128–132.

14
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

prohibido por el artículo 5 de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, si es suficientemente real e
inminente, puede constituir tortura. Además, el sufrimiento
psíquico y moral también debe ser considerado al evaluar si se
ha violado el artículo 5107. En consecuencia, la Corte ha
determinado que la incomunicación o el aislamiento prolongado
constituye un trato cruel e inhumano108. La Corte también ha
estipulado que una persona puede ser recluido en régimen de
incomunicación únicamente en circunstancias excepcionales;
y, aun así, el Estado debe garantizar los derechos mínimos e
inderogables de los detenidos y defender su derecho a
cuestionar la legalidad de la detención y a la defensa efectiva
durante la detención109 . En varios casos, la Corte se basó en
la definición de tortura del artículo 1 de la Convención contra la
Tortura para establecer que se infligió tortura.110
al Estado a brindar una explicación satisfactoria y
fehaciente de lo ocurrido y desvirtuar los alegatos sobre
su responsabilidad115.
72. En numerosas decisiones, la Corte Interamericana de
Derechos Humanos ha reconocido que ciertas personas en
situación de vulnerabilidad enfrentan un mayor riesgo de
abusos contra los derechos humanos y tortura y, por lo tanto,
tienen derecho a ciertas protecciones y recursos efectivos que
tengan en cuenta sus circunstancias individuales.116 La
Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha señalado
que el monitoreo independiente, la inspección pública y el
acceso a los sitios en los que las personas se encuentran
privadas de libertad son efectivos para prevenir la tortura.117

73. Para proteger a los detenidos más vulnerables, incluidos

personas que han sido detenidas ilegalmente, la Corte
Interamericana de Derechos Humanos ha establecido que

70. La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha
también sostuvo que las autoridades estatales no deben
clasificar u ocultar información sobre violaciones de derechos
humanos a las autoridades judiciales o administrativas por
motivos de interés público, secretos oficiales o seguridad
nacional.111 Además, la Corte ha condenado enérgicamente
cualquier participación de personal militar del Estado en
investigaciones y juicios. de violaciones de derechos humanos;
en cambio, tales investigaciones y procesamientos deben ser
realizados por entidades civiles.112
los centros policiales de detención deben cumplir con ciertos
estándares mínimos que aseguren, entre otras cosas, el
derecho a la integridad personal y a ser tratados con respeto
a su dignidad118. La Corte también ha establecido que los
Estados deben regular y supervisar los establecimientos de
salud bajo su jurisdicción, tanto públicos como privados, a
fin de proteger la vida e integridad de todas las personas
bajo su jurisdicción119.
74. La cuestión de la tortura y los malos tratos fue
abordado por la Comisión Interamericana de Derechos

71. La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha Humanos en los Principios y Buenas Prácticas sobre la
también estableció que el Estado es responsable del Protección de las Personas Privadas de Libertad en las
derecho a la integridad personal de toda persona bajo su Américas en 2008 y en un extenso informe sobre los
custodia113. Al respecto, existe una presunción de que el derechos humanos de las personas privadas de libertad
Estado es responsable por las torturas, tratos crueles, en las Américas en 2011. Entre otras salvaguardias, los
inhumanos o degradantes sufridos por una persona bajo su Principios garantizan a todas las personas privadas de
custodia. de agentes del Estado si las autoridades no han libertad el derecho a presentar denuncias sobre actos de
realizado una investigación seria de los hechos114 . Por lo tortura, ya sea que lo hagan en nombre propio o en nombre
tanto, la carga de la prueba recae sobre de otros.120

107 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Cárcel Miguel Castro-Castro Vs. Perú, párr. 279.
108 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Godínez-Cruz v. Honduras, Sentencia, 20 de enero de 1989, párr. 164. Véase también Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Luis Lizardo Cabrera v.
República Dominicana, Caso 10.832, Informe No. 35/96, 19 de febrero de 1998, párrs. 86–87.
109 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Suárez-Rosero c. Ecuador, Sentencia, 12 de noviembre de 1997, párr. 51. 110
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Maritza Urrutia v. Guatemala, Sentencia, 27 de noviembre de 2003, párr. 90.
111 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Gomes Lund y otros. (“Guerrilha do Araguaia”) c. Brasil, Sentencia, 24 de noviembre de 2010, párr. 202.
112 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Fernández Ortega y otros. c. México, Sentencia, 30 de agosto de 2010, párrs. 172 y 176.
113 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Baldeón-García c. Perú, Sentencia, 6 de abril de 2006, párr. 120; Ximenes-Lopes c. Brasil, Sentencia, 4 de julio de 2006, párr. 138; y López
Álvarez c. Honduras, Sentencia, 1 de febrero de 2006, párrs. 104–106.
114 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Cárcel Miguel Castro Castro Vs. Perú, párr. 273.
115 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Juan Humberto Sánchez c. Honduras, Sentencia, 7 de junio de 2003, párr. 111; y Baldeón-García c. Perú, párr. 120.
116 Véase, por ejemplo, Corte Interamericana de Derechos Humanos, Ximenes Lopes c. Brasil, Sentencia, 4 de julio de 2006, párr. 103; Baldeón-García c. Perú, párr. 119; y Furlan y
familia c. Argentina, Sentencia, 31 de agosto de 2012, párrs. 284–288.
117 Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Verdad, Justicia y Reparación: Informe de País Colombia (2013), párr. 1121.
118 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Baldeón García Vs. Perú, párr. 119; Ximenes-Lopes c. Brasil, párrs. 125–130; Furlan y familia Vs. Argentina, párrs. 131–132; y Bulacio c.
Argentina, Sentencia, 8 de septiembre de 2003, párr. 132.
119 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Ximenes Lopes v. Brasil, párr. 141.
120 Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas, principio V.

15
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

75. La Corte Interamericana de Derechos Humanos
también ha reconocido los efectos psicológicos negativos
que el confinamiento solitario puede tener en las madres
separadas de sus hijos y reconoció que los Estados
deben brindar atención especial a las mujeres embarazadas
detenidas y garantizar que las madres puedan visitar a sus
hijos.121
76. En 1996, la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos se convirtió en el primer órgano judicial
internacional en reconocer la violación como tortura, afirmando
que la violación es un método de tortura psicológica que a menudo
tiene como objetivo la humillación de la víctima, así como su
familia y comunidad122 . Desde entonces, la Comisión y la Corte
Interamericana de Derechos Humanos han desarrollado una
amplia jurisprudencia que aclara las obligaciones de los Estados
de ejercer la debida diligencia en la prevención, investigación y
sanción de los casos de violencia basada en género,123 y tortura
y malos tratos de manera más general.124 La Corte ha desarrollado
importantes estándares sobre la obtención de pruebas en casos
de violencia sexual,125 el valor probatorio de las declaraciones de
las víctimas126 y la necesidad de considerar que las discrepancias
en dichas declaraciones no deben considerarse per se como
denotando la falsedad del testimonio127 . Además, la Corte ha
responsabilizado a Estados por la violencia sexual como forma de
tortura cometida d por actores no estatales cuando las autoridades
no previnieron e investigaron el crimen.128
77. En 1994, la Organización de los Estados Americanos adoptó la
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar
la Violencia contra la Mujer (Convención de Belém do Pará)129.
La Convención de Belém do Pará establece que las mujeres
tienen derecho a vivir una vida libre de violencia y obliga
a los Estados partes a tomar las medidas apropiadas para
enmendar o derogar las leyes y reglamentos existentes y
modificar las prácticas legales o consuetudinarias que
perpetúan y toleran la violencia contra la mujer.
78. El artículo 1 de la Convención de Belém do Pará define
La violencia contra la mujer es “cualquier acto o conducta,
por razón de género, que cause la muerte o un daño o
sufrimiento físico, sexual o psíquico a la mujer, ya sea en el
ámbito público o privado”. El artículo 2 reconoce que la violencia
puede ocurrir dentro de la familia o unidad doméstica, así como
dentro de otras relaciones interpersonales. El artículo 6 reconoce
que las mujeres tienen derecho a ser valoradas y educadas libres
de estereotipos y prácticas sociales y de comportamiento basadas
en la inferioridad o la subordinación y el artículo 7 obliga a los
Estados a abstenerse de cometer o practicar violencia contra las
mujeres y a ejercer la debida diligencia para prevenir, investigar y
sancionar los actos de violencia contra la mujer.
79. También en 1994, la Organización de los Estados Americanos
adoptó la Convención Interamericana sobre Desaparición
Forzada de Personas, que establece salvaguardias adicionales
que contribuyen a garantizar la investigación y sanción de los
actos de desaparición forzada130.
80. En 2004, la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos estableció el mandato del Relator Especial
sobre los derechos de las personas privadas de libertad en las
Américas. El Relator Especial realiza visitas de investigación a
los Estados miembros de la Organización de los Estados
Americanos, supervisa el trato de las personas privadas de
libertad y las condiciones de detención, publica informes temáticos
y por países y emite recomendaciones para mejorar la situación
de las personas privadas de su libertad. libertad y acciones
urgentes cuando sea necesario.131
(b) Consejo de Europa – Tribunal Europeo de
Derechos humanos
81. Artículo 3 del Convenio para la Protección de
Derechos Humanos y Libertades Fundamentales (European
Convención sobre Derechos Humanos) establece que:
“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos inhumanos o

121
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Cárcel Miguel Castro Castro Vs. Perú, párr. 330.
122 Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Raquel Martí de Mejía vs. Perú, Caso 10.970, Informe No. 5/96, 1 de marzo de 1996.
123 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Azul Rojas Marín c. Perú, Sentencia, 12 de marzo de 2020 (sobre tortura cometida con intención discriminatoria basada en la identidad de género de la
víctima), párrs. 178–205 (solo en español; resumen oficial disponible en inglés); Fernández Ortega et al. c. México, párr. 193; Cabrera García y Montiel Flores c. México, Sentencia, 26 de
noviembre de 2010, párrs. 213–215; J. c. Perú, Sentencia, 27 de noviembre de 2013, párr. 344; López Soto et al. v. Venezuela, Sentencia, 26 de septiembre de 2018, párrs. 273–287; y Cárcel
Miguel Castro Castro Vs. Perú, párr. 378.
124 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Espinoza Gonzáles c. Perú, Sentencia, 20 de noviembre de 2014, párr. 237–240; y J. c. Perú, párr. 341–343.
125 Corte Interamericana de Derechos Humanos, González y otros (“Campo Algodonero”) Vs. México; y Velásquez Paiz et al. v. Guatemala, Sentencia, 19 de noviembre de 2015.
126 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Fernández Ortega y otros. c. México, párr. 100.
127 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Espinoza Gonzáles vs. Perú, párr. 149.
128 Corte Interamericana de Derechos Humanos, López Soto y otros. contra Venezuela.
129 La Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (“Convención de Belém do Pará”) (9 de junio de 1994) entró en vigor
el 5 de marzo de 1995.

130 La Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas (Belém do Pará, 6 de septiembre de 1994) entró en vigor el 28 de marzo de 1996.
131 Ver www.oas.org/en/iachr/jsForm/?File=/en/CIDH/r/DPPL/mandato.asp.

dieciséis
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

tratos o penas degradantes”. Todas las víctimas tienen
acceso directo al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
82. En su jurisprudencia, el Tribunal Europeo de
Derechos Humanos ha sostenido que la garantía
consagrada en el artículo 3, que es un elemento esencial
del estado de derecho, ocupa un lugar destacado en el
sistema de protección del Convenio Europeo de Derechos
Humanos, como lo subraya el hecho de que ninguna
derogación está permitido en virtud del artículo 15 en
tiempo de guerra u otra emergencia pública.132 Para estar
dentro del alcance del artículo 3, la Corte ha dicho que
“los malos tratos deben alcanzar un nivel mínimo
de gravedad”, que se determina evaluando todas las
circunstancias del caso (por ejemplo, duración del
tratamiento, efectos físicos o mentales, y sexo, edad y
estado de salud de la víctima)133. La Corte también señaló
que, en ausencia de Las lesiones o sufrimientos físicos o
mentales, los actos que supongan humillación, la
disminución de la dignidad humana, incluida la fuerza física
innecesaria por parte de los agentes del orden, o que
despierten en las víctimas temor, angustia o inferioridad
84. En Gäfgen c. Alemania, el Tribunal Europeo de
Derechos Humanos sostuvo que “amenazar a una
persona con tortura puede constituir al menos un trato
inhumano” y violar el artículo 3.137 La Corte luego
determinó que la gravedad es un factor distintivo clave
entre la tortura y el trato o castigo inhumano o
degradante, al igual que el propósito y la intención;
aproximando la comprensión de lo que es la tortura a la
de la definición contenida
en la Convención contra la Tortura, la cual ha sido
citada por la Corte138 . Sin embargo, la Corte no
calificó estos elementos como exhaustivos139.
85. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos también reconoció
que la violación puede constituir tortura en virtud del artículo
3 de la Convención. En Aydin c. Turquía, el Tribunal sostuvo
que “la acumulación de actos de violencia física y mental
infligidos a la demandante y el acto especialmente cruel de
violación al que fue sometida equivalían a tortura en violación
del artículo 3 de la Convención”.140
86. En sus decisiones, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos también se ha

capaces de quebrantar su resistencia moral y física, podrán basado en la definición de tortura utilizada

calificarse de degradantes y pueden caer dentro de las
prohibiciones establecidas en el artículo 3.134
83. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos destacó la importancia del artículo
3 y abordó la distinción entre conducta que constituye conducta inhumana
o trato degradante y tortura en Aksoy v.
Turquía, donde el demandante había sido sometido a
suspensión inversa, palizas, descargas eléctricas en los
genitales, exacerbadas al arrojarle agua, y abuso verbal;
la Corte señaló que la conducta del caso fue “de tal
gravedad y crueldad que sólo puede ser calificada como
tortura”135.
La Corte también ha sostenido que para constituir tortura
según el artículo 3, un acto deliberado de trato inhumano
debe causar “sufrimientos graves y crueles”.136
en la Convención contra la Tortura para llegar a
una conclusión de tortura. En Selmouni c. Francia,
el Tribunal estableció que el dolor y el sufrimiento
infligidos al demandante eran graves y que su propósito
era obtener una “confesión”, estableciendo así
firmemente que los tribunales deben considerar tanto la
gravedad como el propósito del sufrimiento infligido. al
determinar si un acto constituye tortura.141
Posteriormente, el Tribunal aclaró que, si bien el propósito
era un factor, “la ausencia de dicho propósito no puede
descartar de manera concluyente la conclusión de una
violación del artículo 3”.142 Además, el Tribunal afirmó
que, al considerar si una forma de tratamiento era “
degradantes” en el sentido del artículo 3, la Corte tendría
en cuenta si su propósito era “humillar y envilecer a la
persona en cuestión”; sin embargo, volvió a afirmar que la
falta de propósito no descartaba la constatación de una
violación del artículo 3.143

132 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Öcalan c. Turquía, solicitud No. 46221/99, Sentencia, 12 de mayo de 2005, párrs. 179–183.
133 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Bouyid c. Bélgica, solicitud No. 23380/09, Sentencia, 28 de septiembre de 2015, párr. 86.
134 Ibíd., párrs. 87–88.
135 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Aksoy c. Turquía, solicitud No. 21987/93, Sentencia, 18 de diciembre de 1996, párrs. 60 a 64, en el párr. 64.
136 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Irlanda v. Reino Unido, solicitud No. 5310/71, Sentencia, 18 de enero de 1978, párr. 167.
137 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Gäfgen c. Alemania, solicitud No. 22978/05, Sentencia, 1 de junio de 2010 (rectificada el 3 de junio de 2010), párr. 91.
138 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Cestaro v. Italy, aplicación No. 6884/11, Sentencia, 7 de abril de 2015, párrs. 172–176.
139 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Bouyid c. Bélgica, párrs. 100–102.
140 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Aydin c. Turquía, solicitud No. 23178/94, Sentencia, 25 de septiembre de 1997, párr. 86.
141 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Selmouni c. Francia, solicitud No. 25803/94, Sentencia, 28 de julio de 1999, párrs. 97–105. La Corte también aplicó el concepto de “instrumento vivo”
en Selmouni, lo que la llevó a concluir que lo que podría no haber sido considerado tortura en 1979 cuando se decidió el caso de Irlanda contra el Reino Unido, definitivamente se consideró
tortura en 1999 en ese momento. Selmouni estaba decidido.
142 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, V. c. Reino Unido, solicitud No. 24888/94, Sentencia, 16 de diciembre de 1999, párr. 71.
143 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Kalashnikov c. Rusia, solicitud No. 47095/99, Sentencia, 15 de julio de 2002, párr. 95. Véase también Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Peers v.
Grecia, solicitud No. 28524/95, Sentencia, 19 de abril de 2001, párr. 74.

17
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

87. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha establecido que
la falta de realización de una investigación efectiva puede dar
lugar a una violación de la prohibición de tortura o malos tratos
prevista en el artículo 3 en casos de violencia doméstica144,
violencia cometida contra lesbianas, gays, personas bisexuales
y transgénero,145 esterilización de mujeres romaníes,146
brutalidad policial147 y desaparición forzada.148
Asimismo, la Corte ha concluido que “un 'recurso
efectivo' implica, además del pago de una indemnización en
su caso,... el acceso efectivo del denunciante al procedimiento
de instrucción”149.
88. Adicionalmente, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos
ha encontrado violaciones de la Convención con respecto a la
regla de exclusión150 y ha reiterado la naturaleza absoluta e
inderogable del artículo 3 en casos relacionados con presuntos
actos de terrorismo, afirmando que los solicitantes sospechosos
o acusados de actividades relacionadas con el terrorismo tienen
derecho a estar libre de tortura y trato inhumano o degradante
mientras se encuentre bajo custodia.151 En El-Masri c. la ex
República Yugoslava de Macedonia, el Tribunal sostuvo que
una entrega secreta y la subsiguiente detención secreta por
parte de la ex República Yugoslava de Macedonia eran ilegales
y una violación del artículo 3.152 La Corte también ha sostenido
consistentemente que los Estados tienen la obligación de no
extraditar o expulsar a personas, incluidos presuntos terroristas,
a países donde
se enfrentan a un riesgo real de ser sometidos a tortura o
malos tratos (véase también el párr. 112 y ss. infra).153
89. En su jurisprudencia, el Tribunal Europeo de
Derechos Humanos también ha determinado que la
interferencia con los derechos de salud reproductiva puede
constituir malos tratos154 y que la falta de supervisión médica
adecuada para los reclusos con tendencias suicidas u otras
discapacidades psicosociales podría dar lugar a una violación
de la prohibición de la tortura y los malos tratos en el artículo
3.155 Los procedimientos médicos considerados de necesidad
terapéutica (p. ej., la alimentación forzada destinada a salvar
vidas) no pueden, en principio, considerarse inhumanos o
degradantes; debe establecerse la necesidad médica, deben
seguirse las garantías procesales y el procedimiento médico
debe administrarse de manera que se minimice el sufrimiento.156
Si no se respetan estas garantías, aún puede ocurrir una
violación del artículo 3.
90. Las condiciones de vida deplorables en los centros de detención en casos de
expulsión, extradición y migración también pueden constituir una violación
del artículo 3. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha sostenido que
exponer a menores a malas condiciones en los centros de detención equivale a
una violación del artículo 3 y no ha hecho ninguna distinción en
estos casos en función de si el menor en cuestión estaba
acompañado157 o no acompañado158 . En ambos casos,
la Corte consideró que el factor determinante era

144 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Opuz c. Turquía, solicitud No. 33401/02, Sentencia, 9 de junio de 2009, párr. 176; Eremia c. República de Moldavia, solicitud No. 3564/11,
Sentencia, 28 de mayo de 2013, párr. 67; MG c. Turquía, solicitud No. 646/10, Sentencia, 22 de marzo de 2016, párr. 107 (versión oficial disponible en francés); Talpis c. Italia,
demanda No. 41237/14, Sentencia, 2 de marzo de 2017 (rectificada el 21 de marzo de 2017), párrs. 129–131; y Bÿlÿan v. Romania, solicitud No. 49645/09, Sentencia, 23 de mayo
de 2017, párrs. 71 y 89.
145 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Identoba and Others v. Georgia, aplicación No. 73235/12, Sentencia, 12 de mayo de 2015, párr. 71; y MC y AC c. Rumania,
demanda No. 12060/12, Sentencia, 12 de abril de 2016, párrs. 124–125.
146 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, VC v. Slovakia, aplicación No. 18968/07, Sentencia, 8 de noviembre de 2011, párrs. 109 y 120; e IG y Otros. contra Eslovaquia,
demanda No. 15966/04, Sentencia, 13 de noviembre de 2012, párrs. 124, 126 y 134.
147 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Jasar c. la ex República Yugoslava de Macedonia, solicitud No. 69908/01, Sentencia, 15 de febrero de 2007, párr. 60; Petropoulou Tsakiris c.
Grecia, solicitud No. 44803/04, Sentencia, 6 de diciembre de 2007, párrs. 55 y 66; y Adam c. Eslovaquia, solicitud No. 68066/12, Sentencia, 26 de julio de 2016, párr. 82.

148 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Er y otros. v. Turquía, solicitud No. 23016/04, Sentencia, 31 de julio de 2012, párrs. 92–97.
149 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Aksoy c. Turquía, párr. 98.
150 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, El Haski c. Bélgica, solicitud No. 649/08, Sentencia, 25 de septiembre de 2012, párrs. 86 y 99. Véase también Tribunal Europeo de Derechos
Humanos, Othman (Abu Qatada) c. Reino Unido, solicitud No. 8139/09, Sentencia, 17 de enero de 2012, párrs. 267, 273 y 276, en los cuales la Corte afirmó que establecer un “riesgo
real” de que la prueba se hubiera obtenido mediante tortura era suficiente para excluir la prueba debido a las especiales dificultades para probar las alegaciones de tortura.

151
Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Martínez Sala y otros c. España, solicitud No. 58438/00, Sentencia, 2 de noviembre de 2004, párrs. 118 y 120 (versión oficial disponible
en francés); y Öcalan c. Turquía, párrs. 179 y 192-196.
152 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, El-Masri c. la ex República Yugoslava de Macedonia, solicitud No. 39630/09, Sentencia, 13 de diciembre de 2012, párrs. 215–223.
153 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Chahal c. Reino Unido, solicitud No. 22414/93, Sentencia, 15 de noviembre de 1996, párrs. 73–74; Cruz Varas y Otros c. Suecia, solicitud No.
15576/89, Sentencia, 20 de marzo de 1991, párrs. 69–70; y HR v. France, solicitud No. 64780/09, 22 de septiembre de 2011, párrs. 49–65 (versión oficial disponible en francés).

154 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, RR c. Polonia, solicitud No. 27617/04, Sentencia, 26 de mayo de 2011, párrs. 148–162.
155 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Rivière v. France, aplicación No. 33834/03, Sentencia, 11 de julio de 2006, párrs. 59–77 (versión oficial disponible en francés); Renolde v.
Francia, solicitud No. 5608/05, Sentencia, 16 de octubre de 2008, párrs. 119–130; Güveç c. Turquía, solicitud No. 70337/01, Sentencia, 20 de enero de 2009, párrs. 82–
99; y Ketreb v. France, solicitud No. 38447/09, Sentencia, 19 de julio de 2012, párrs. 108–116 (versión oficial disponible en francés).
156 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Nevmerzhitsky c. Ucrania, solicitud No. 54825/00, Sentencia, 5 de abril de 2005, párrs. 93–99; y Ciorap c. Moldavia, solicitud
No. 12066/02, Sentencia, 19 de junio de 2007, párrs. 76–89.
157 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Popov c. Francia, solicitud Nos. 39472/07 y 39474/07, Sentencia, 19 de enero de 2012, párrs. 91–103; Mahmundi y otros. v.
Grecia, solicitud No. 14902/10, Sentencia, 31 de julio de 2012, párrs. 61–76 (versión oficial disponible en francés); AB and Others v. France, solicitud No. 11593/12, Sentencia, 12
de julio de 2016, párrs. 107–115; y SF y Otros. v. Bulgaria, solicitud No. 8138/16, Sentencia, 7 de diciembre de 2017, párrs. 84–93.
158 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Mohamad c. Grecia, solicitud No. 70586/11, Sentencia, 11 de diciembre de 2014, párrs. 69–76 (versión oficial disponible en francés).

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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
que las condiciones en los centros de detención provocaron
los menores sentimientos de miedo, angustia e inferioridad.
c) Consejo de Europa: Comité Europeo para la
Prevención de la Tortura y los Tratos Inhumanos o
Trato o castigo degradante
91. El Convenio Europeo para la Prevención de la Tortura y las
Penas o Tratos Inhumanos o Degradantes estableció el
Comité Europeo para la Prevención de la Tortura y las
Penas
o Trato o Pena Degradante.
92. El Comité Europeo para la Prevención de
Torture realiza visitas no anunciadas a lugares de privación
de libertad ubicados en los Estados miembros del Consejo de
Europa. Los miembros del comité pueden hablar con las
personas privadas de libertad en privado, visitar a cualquiera o
todas las personas que elijan en dichos lugares y visitar todos
los locales sin restricciones.
93. El Comité Europeo para la Prevención de la Tortura ha elaborado
criterios para el tratamiento de las personas detenidas, que
constituyen normas generales159.
Estos estándares se ocupan no solo de las condiciones materiales
sino también de las garantías procesales, incluido el derecho de
las personas privadas de su libertad a informar inmediatamente a
un tercero (familiar) del arresto, a tener acceso inmediato a un
abogado y a tener acceso a un médico, incluido, si así lo desean,
un médico de su elección.
94. El Comité Europeo para la Prevención de
La tortura también ha subrayado repetidamente que uno de
los medios más eficaces para prevenir los malos tratos por
parte de los agentes del orden es el examen diligente por
parte de las autoridades competentes de todas las denuncias
de tortura y malos tratos y, en su caso, la imposición de penas
adecuadas.
d) Unión Africana: Comisión Africana de Derechos
Humanos y de los Pueblos y Corte Africana de
Derechos Humanos y de los Pueblos
95. A diferencia de los sistemas europeo e interamericano, el
sistema africano no cuenta con una convención
específicamente dedicada a la tortura oa su prevención.
159 Consejo de Europa, “Custodia policial” (Estrasburgo, 1992). Disponible en https://rm.coe.int/16806cea2f.
160 Por ejemplo, en noviembre de 2017, las víctimas presentaron una denuncia ante la Comisión por la falta de implementación por parte de Chad de la indemnización de 2015 otorgada por un
tribunal chadiano. Ver Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Clement Abaïfouta y otros 6.999 v. República de Chad, Caso No. 691/18.
161 Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Observación general n.º 4 (2017), párr. 10
162 Ibíd., párrs. 50–51.
163 Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Gabriel Shumba v. Zimbabwe, comunicación 288/04, Decisión, 2004, párrs. 143–145.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
La cuestión de la tortura se aborda principalmente en el
artículo 5 de la Carta Africana de Derechos Humanos.
y Derechos de los Pueblos, que establece que:
Toda persona tiene derecho al respeto de la
dignidad inherente a la persona humana y al
reconocimiento de su personalidad jurídica. Quedan
prohibidas todas las formas de explotación humana y
degradación del hombre, en particular la esclavitud, la
trata de esclavos, la tortura, las penas y los tratos
crueles, inhumanos o degradantes.
96. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos
Rights tiene el mandato del artículo 30 de la Carta Africana de
promover los derechos humanos y de los pueblos y garantizar su
protección en África. Una víctima o una ONG puede presentar una
denuncia ante la Comisión por actos de tortura tal como se definen
en el artículo 5 de la Carta Africana.160
97. En 2017, la Comisión Africana de Derechos Humanos y
Derechos de los Pueblos adoptó la Observación general No. 4
sobre el derecho a reparación de las víctimas de tortura y otros
tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes (artículo 5). En
el comentario general, la Comisión brinda una interpretación
autorizada sobre el alcance y el contenido del derecho a la
reparación de las víctimas de tortura o malos tratos en contextos
específicos y define la reparación como la restitución, compensación,
rehabilitación y satisfacción, que incluye el derecho a la verdad y a
las garantías de no repetición.161 También identifica los pasos
concretos y prácticos que los Estados deben tomar para reparar a
las víctimas de tortura o malos tratos en varios contextos
específicos, incluidas las víctimas de violencia sexual y de género,
las personas torturados durante un conflicto armado, a las víctimas
de tortura en entornos de justicia transicional y, en particular, en
casos de daño colectivo. La Comisión observa que, si bien las
violaciones de tortura y malos tratos son esencialmente perpetradas
contra individuos, estas violaciones pueden, no obstante, tener un
impacto sobre grupos, especialmente aquellos que se encuentran
en desventaja estructural162.
98. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos
ha interpretado la distinción entre tortura, incluidos los
abusos físicos y mentales, y los malos tratos.163 Por ejemplo,
la falta, sin justificación, de notificar a los miembros de la familia
19
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

de la fecha y hora de la ejecución de un detenido asuntos temáticos particulares, en líneas similares a los
fue considerado por la Comisión como un caso de procedimientos especiales del Consejo de Derechos Humanos.
malos tratos y una violación del artículo 5.164
103. El Comité para la Prevención de la Tortura en

99. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos África, anteriormente conocido como el Comité de Seguimiento
Rights también ha encontrado a los Estados partes responsables de las Directrices de Robben Island, brinda asesoramiento a
de la tortura de una persona dentro de su jurisdicción cuando los Estados y a la Comisión Africana sobre medidas

había pruebas claras que detallaban la tortura producida por el necesaria para implementar el artículo 5 de la Carta
denunciante u otra parte creíble, como una organización Africana y las Directrices de Robben Island. Ya que

internacional.165 Si la Comisión determina que las pruebas no su establecimiento, los miembros del Comité han llevado a
cumplen probar que se ha producido un acto de tortura, todavía cabo una serie de actividades de formación y sensibilización
puede declarar que el Estado parte ha violado el artículo 5 por no en varios países y han realizado visitas a varios Estados.168
haber investigado166.

100. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos también ha 104. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos también ha

encontrado violaciones del artículo 5 basadas en las malas condiciones creado el Relator Especial sobre Prisiones, Condiciones de Detención y

carcelarias, incluido el aislamiento excesivo, el hacinamiento, la falta de Vigilancia en África; la Relatora Especial sobre los Derechos de la Mujer en

acceso a atención médica adecuada, el uso de grilletes y alimentos de África; y el Grupo de Trabajo sobre la pena de muerte y las ejecuciones

muy mala calidad167. extrajudiciales, sumarias o arbitrarias y las desapariciones forzadas en África.

Estos mecanismos han creado vías para las víctimas de la tortura y las ONG.

101. Otros instrumentos también abordan la tortura y

malos tratos en el contexto africano, incluidas las Directrices enviar información directamente a los relatores especiales.
sobre las condiciones de arresto, custodia policial y prisión
preventiva en África (Directrices de Luanda) (2014), las 105. La Corte Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos ha dictado

Directrices para combatir la violencia sexual y sus jurisprudencia pertinente, incluida la determinación de que “la detención en

consecuencias en África (2017) y las Principios y directrices régimen de incomunicación constituye en sí misma una

sobre los derechos humanos y de los pueblos en la lucha violación grave de los derechos humanos que puede dar lugar
contra el terrorismo en África (2015). La Comisión Africana de a otras violaciones como la tortura [y] los malos tratos”169.
Derechos Humanos y de los Pueblos también ha adoptado
una serie de resoluciones y documentos relacionados con la 106. El Protocolo de la Carta Africana de Derechos Humanos y

tortura. Derechos de los pueblos sobre los derechos de la mujer

y malos tratos, en particular las Directrices y
Medidas para la Prohibición y Prevención de
Tortura, tratos o castigos crueles, inhumanos o degradantes
en África (Directrices de Robben Island) en 2002, que abordan
la tortura en el continente africano y ayudan a hacer cumplir
la prohibición absoluta de la tortura y los malos tratos de la
Carta Africana.
102. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos también ha
creado mecanismos especiales para
en África (Protocolo de Maputo), en vigor desde 2005, incluye
un catálogo completo de los derechos de la mujer en África.
Entre otras, incluye la prohibición de “toda forma de
explotación, penas y tratos crueles, inhumanos o
degradantes”.170
107. La Carta Africana sobre los Derechos y el Bienestar del
Niño describe una amplia gama de derechos de los niños
en África, incluida una disposición que protege a los niños
del abuso y la tortura (art. 16)171 .

164 Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Spilg and Mack and Ditshwanelo (en nombre de Lehlohonolo Bernard Kobedi) v. Botswana, comunicación 277/2003,
Decisión, 16 de diciembre de 2011, párr. 177.
165 Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Gabriel Shumba v. Zimbabwe, párrs. 111, 113 y 121.
166 Ibíd., párr. 136.
167 Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Krishna Achuthan (en nombre de Aleke Banda), Amnistía Internacional (en nombre de Orton y Vera Chirwa) y Amnistía Internacional
International (en nombre de Orton y Vera Chirwa) c. Malawi, comunicación 64/92-68/92-78/92_8AR (1995), Decisión, 27 de abril de 1994, párrs. 4 y 7.
168 Desde 2007, el Comité ha organizado varios seminarios para funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en Nigeria, Liberia, Benin y Camerún. Organizó conferencias regionales sobre el Protocolo Facultativo
de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes en Dakar y una sobre el mecanismo nacional de prevención en Senegal. Consulte www.achpr.org/sessions/
intersession?id=152.
169 Corte Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos c. Libia, solicitud No. 002/2013, Sentencia, 3 de junio de 2016, párrs. 84–
85.

170 Protocolo de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos sobre los derechos de la mujer en África (Maputo, 11 de julio de 2003), art. 4 (1).
171 Carta Africana sobre los Derechos y el Bienestar de los Niños (Addis Abeba, 11 de julio de 1990), art. dieciséis.

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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

Según la jurisprudencia, el Comité de Expertos sobre los
Derechos y el Bienestar del Niño, que supervisa la aplicación
de la Carta, ha encontrado a los Estados responsables de
violar el artículo 16 por no haber protegido a los niños de las palizas
por parte de agentes no estatales cuando tales palizas son utilizado
como castigo físico y con la intención de causar dolor o incomodidad,
llegando en algunos casos al nivel de tortura.172
111. Carta Árabe de Derechos Humanos. La Carta Árabe de Derechos
Humanos fue adoptada en una cumbre de la Liga de los Estados
Árabes en 2004; entró en vigor en 2008.176 El artículo 8 de la Carta
prohíbe explícitamente la tortura y los tratos crueles, degradantes,
humillantes o inhumanos, pero no las penas. El artículo 8 (2) prevé
el castigo de los actos de tortura y malos tratos, sin plazo de
prescripción, garantizando reparación, rehabilitación e indemnización
a las víctimas.

e) Tribunales, instituciones e instrumentos Sin embargo, la Carta permite la imposición de la pena capital,
regionales adicionales incluso a personas menores de 18 años cuando tal pena esté
“estipulada en las leyes vigentes en el momento de la comisión del
108. Comunidad Económica de los Estados de África Occidental. El delito”.177 La imposición de la pena capital a personas menores de

órgano judicial de la Comunidad Económica de los Estados de 18 años en el momento de la comisión del delito es una clara
África Occidental es el Tribunal de Justicia de la Comunidad, violación del derecho internacional de los derechos humanos.178

creado de conformidad con los artículos 6 y 15 del tratado

revisado de la Comunidad en 2005. El Tribunal es competente
para examinar casos que involucren presuntas violaciones de los
derechos humanos y tiene un mandato de investigar y juzgar las B. Derecho internacional de los
denuncias de tortura, encontrar a los Estados responsables y
refugiados y no devolución
otorgar daños y perjuicios a las víctimas.173
112. El principio de no devolución, derivado de

109. Tribunal de Justicia de África Oriental. La Corte de Justicia
de África Oriental se estableció en noviembre de 2001 de
conformidad con el artículo 9 del Tratado para el
Establecimiento de la Comunidad de África Oriental.
El Tribunal tiene el mandato de resolver las disputas entre los
Estados miembros de la Comunidad. Los denunciantes pueden
presentar demandas contra los Estados partes por violar su
derecho a no ser torturados ni maltratados, protegido por el artículo
7 (2) del Tratado.174
110. Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN)
Declaración de Derechos Humanos y la Comisión
Intergubernamental de Derechos Humanos de la ASEAN.
La Declaración de Derechos Humanos de la ASEAN establece que:
“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles,
el artículo 33 de la Convención sobre el Estatuto de los
Refugiados, no solo es un componente importante del derecho de
los refugiados, sino también del derecho internacional de los
derechos humanos, en particular con respecto a la tortura y los malos tratos.
El principio de no devolución está codificado en
convenciones internacionales179 y se considera parte de la
prohibición de la tortura y los malos tratos180
de acuerdo con la jurisprudencia bien establecida del Comité
de Derechos Humanos181 y la Corte Europea de Derechos
Humanos.182 La Convención sobre el Estatuto de los Refugiados
define la no devolución como el principio que prohíbe a los Estados
contratantes expulsar o devolver (refouler) a los refugiados en
cualquier forma alguna a las fronteras de los territorios
donde su vida o su libertad estarían amenazadas en

inhumanos o degradantes.”175 cuenta de su raza, religión, nacionalidad, membresía

172 Comité Africano de Expertos sobre los Derechos y el Bienestar del Niño, Centro de Derechos Humanos (Universidad de Pretoria) y La Rencontre africaine pour la défense des droits de l'homme (Senegal)
c. Senegal, Decisión, 15 de abril de 2014, párrs. . 62–68.
173 Tribunal de Justicia Comunitario, Federación de Periodistas Africanos y Otros c. Gambia, ECW/CCJ/JUD/04/18, Sentencia, 13 de marzo de 2018, párrs. 60–62; y Adamu and Seven Others v. Federal
Republic of Nigeria, ECW/CCJ/JUD/33/19, Judgment, 9 de diciembre de 2019, págs. 56 y 57 (donde se determina que el Tribunal es competente para escuchar las reclamaciones de los solicitantes
sobre una violación de artículo 5).
174 Corte de Justicia de África Oriental, Plaxeda Rugumba v. Secretary General of the East African Community and the Attorney General of Rwanda, Referencia No. 8 de 2010, Sentencia, 1 de diciembre de
2011 (utilizando el artículo 7 (2) del Tratado (buena gobernanza ) para interponer una denuncia contra el Estado por condiciones de incomunicación).
175 Declaración de derechos humanos de la ASEAN (Phnom Penh, 19 de noviembre de 2012), principio general 14.
176 Carta Árabe de Derechos Humanos (Túnez, 22 de mayo de 2004).
177 Ibíd., art. 7 (1).
178 Ver prohibiciones explícitas en la Convención sobre los Derechos del Niño, art. 37 (a), y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, art. sesenta y cinco).
179 Convención contra la Tortura, art. 3; y Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, art. 33.
180 Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, art. 7; y Convenio Europeo de Derechos Humanos, art. 3.
181 Comité de Derechos Humanos, Kindler c. Canadá (CCPR/C/48/D/470/1991), párr. 13,2; y Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 20 (1992), párr. 9.
182 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Jabari c. Turquía, solicitud No. 40035/98, Sentencia, 11 de julio de 2000, párr. 38.

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES

de un determinado grupo social u opinión política.183
También es una norma del derecho internacional consuetudinario.184
113. La protección contra la devolución en virtud del
La Convención sobre el Estatuto de los Refugiados se aplica a
cualquier persona que se ajuste a su definición de refugiado, así
como a las personas a las que aún no se les haya determinado
su estatuto, como los solicitantes de asilo.185 El artículo 1 de la
lugar donde una persona tiene motivos para temer persecución.189
La Convención contra la Tortura, por el contrario, es más
amplia y no exige que una persona esté en riesgo de persecución
por alguno de los motivos discutidos en la Convención sobre el
Estatuto de los Refugiados; más bien, esa persona debe estar
en riesgo de tortura o malos tratos.
115. Los Estados tienen el deber de garantizar que todas las formas de

Convención define a un refugiado como una persona con un
“temor fundado de ser perseguido por motivos de raza, religión,
nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opinión
política, [que] se encuentre fuera del país de su nacionalidad y no
pueda o, a causa de dicho temor, sea no dispuesto a valerse de la
protección de ese país”. La tortura ha sido reconocida como un
caso de persecución.186 Como ha declarado el Comité contra la
Tortura, la prohibición de devolución de personas a donde existen
motivos fundados para creer que estarían en peligro de ser
el traslado forzoso de una persona, incluida la expulsión, la
devolución forzosa y la extradición, se determinan
individualmente, caso por caso y de manera imparcial,
independiente y de conformidad con las garantías
procesales.190 El riesgo de tortura debe evaluarse , entre
otras cosas, a la luz de la situación general de los derechos
humanos en el país de origen de la persona.191 Esto incluye el
envío de extranjeros a un Estado que los enviará a un tercer
Estado

sometidas a tortura, según lo dispuesto en el artículo 3 de la
Convención contra la Tortura, es absoluta.187
114. Sin embargo, las aplicaciones del principio de no
la devolución que se encuentran en la Convención contra la
Tortura y la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados
difieren en su alcance. Mientras que la Convención sobre el
Estatuto de los Refugiados prohíbe el retorno de personas a los
países de los que huyeron, la aplicación de la Convención contra
la Tortura incluye explícitamente casos de traslado forzoso,
expulsión, deportación, traslado o extradición a cualquier país en
el que existan motivos fundados para creer que una persona
enfrenta un riesgo previsible, real y personal de tortura o malos
tratos.188 Además, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas
para los Refugiados contempla que la no devolución en virtud de
la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados se aplica no
solo a la devolución a la país de origen, sino también a cualquier
otro
donde corren el riesgo de ser torturados, la denominada
devolución indirecta o en cadena. El Estado que envía no
puede confiar en las garantías diplomáticas de un Estado
receptor de que una persona individual no sería torturada a su
regreso como una escapatoria para socavar el principio de no
devolución.192 Al determinar si existe un riesgo de tortura, los
Estados deben tener en cuenta los derechos humanos. situaciones
de derechos que puedan constituir un indicio de riesgo de tortura,
así como de malos tratos que no constituyan tortura. Además, los
Estados no deben adoptar medidas o políticas disuasorias
diseñadas para obligar a las personas a regresar a su país de
origen a pesar del riesgo de tortura, como detenerlas en malas
condiciones por períodos indefinidos o negarse a procesar sus
solicitudes de asilo, etc.193 Organismos de derechos humanos
han afirmado y desarrollado el principio de no devolución en sus
decisiones.194 El Comité de Derechos Humanos ha afirmado que
los Estados no pueden extraditar, deportar, expulsar o sacar a
personas de su territorio si existen motivos fundados para creer
que dichas personas estarían en reales y personales

183 Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, art. 33 (1).

184 Véase, por ejemplo, Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), “El principio de no devolución como norma del derecho internacional
consuetudinario: respuesta a las preguntas planteadas al ACNUR por el Tribunal Constitucional Federal de la República Federal de Alemania en los casos 2 BvR 1938/93, 2 BvR
1953/93, 2 BvR 1954/93” (Ginebra, 1994); y “Opinión consultiva sobre la aplicación extraterritorial de las obligaciones de no devolución en virtud de la Convención sobre el Estatuto
de los Refugiados de 1951 y su Protocolo de 1967” (Ginebra, 2007), párrs. 14–16.
185 ACNUR, “Opinión consultiva”, párr. 6.
186 Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párr. 29 (c).
187 Ibíd., párr. 9.
188 Ibíd., párr. 11
189 ACNUR, “Opinión consultiva”, párr. 7.
190 Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párr. 13
191 Comité de Derechos Humanos, X c. Dinamarca (CCPR/C/110/D/2007/2010), párr. 9.2; y X c. Suecia (CCPR/C/103/D/1833/2008), párr. 5.18.
192 Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párr. 20. Véase también Comité contra la Tortura, Agiza c. Suecia (CAT/C/34/D/233/2003), párr. 13.4.
193 Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párrs. 14 y 18.
194 CAT/C/CAN/CO/7, párr. 25 (a); CAT/C/NLD/CO/7, párr. 11; y Comité contra la Tortura, FB c. Países Bajos (CAT/C/56/D/613/2014) (en el que se declara una violación del principio de
no devolución en virtud del artículo 3 después de que el Estado parte intentara expulsar a un ciudadano extranjero que sería obligado someterse a la mutilación genital femenina a
su regreso).

22
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

riesgo de tortura o malos tratos en virtud del artículo 7 del 118. El Protocolo Adicional al Convenio de Ginebra

Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.195 Convenios del 12 de agosto de 1949 relativos a la
Protección de las Víctimas de las Fuerzas Armadas Internacionales

116. La Corte Interamericana de Derechos Humanos consideró que la expulsión de
miembros de una familia a su país de origen, a sabiendas de que podrían tener
protección como refugiados en un tercer país, es incompatible con el derecho a
buscar y a se le conceda asilo y con el principio de no devolución. 196
Conflictos (Protocolo I), y el Protocolo Adicional a los
Convenios de Ginebra de 12 de agosto de 1949, y relativo a
la Protección de las Víctimas de los Conflictos Armados No
Internacionales (Protocolo II), amplían la protección y el
alcance de los Convenios de Ginebra. Los cuatro Convenios
de Ginebra y

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos estableció que, cuando ambos Protocolos Adicionales adoptados en 1977
una persona gravemente enferma, si fuera expulsada, “correría un identifican la tortura o el trato inhumano y causar
riesgo real, debido a la ausencia de un tratamiento adecuado en el deliberadamente grandes sufrimientos o lesiones graves
país receptor o a la falta de acceso a dicho tratamiento, de estar al cuerpo o la salud como violaciones e infracciones graves
expuesta a un deterioro grave, rápido e irreversible de su estado de de los Convenios de Ginebra o crímenes de guerra.

salud que resulte en un sufrimiento intenso o en una reducción

significativa de la esperanza de vida”, esto plantearía problemas de 119. Cuando se cometa en un conflicto armado internacional,

malos tratos197. Además, la Corte consideró que la expulsión la tortura y algunas formas de malos tratos también

colectiva o individual de solicitantes de asilo a países con
deficiencias procesales conocidas en sus sistemas de asilo equivalía
a una violación del artículo 3 del Convenio Europeo de Derechos
Humanos.198
constituyen crímenes de guerra según el derecho internacional
humanitario consuetudinario. En Fiscal c. Duško Tadiÿ, el
Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia concluyó que se podían
cometer crímenes de guerra tanto si el conflicto armado era
internacional como si no.200
Los tribunales penales internacionales y otros han

declaró que todas las partes en cualquier conflicto armado, ya

C. Derecho internacional humanitario sea internacional o “no de carácter internacional”

y ya sea que luchen en nombre de un Estado o en nombre de un

117. Los tratados internacionales y el derecho consuetudinario
las normas que rigen los conflictos armados también se
conocen como derecho internacional humanitario, leyes de la
guerra o derecho de los conflictos armados; y prohíben
inequívocamente la tortura y los malos tratos en todas las
situaciones de conflicto armado.199 Los cuatro Convenios de
Ginebra del 12 de agosto de 1949 establecen normas para la
conducción de los conflictos armados y, especialmente, para el
trato de las personas que no , participar en las hostilidades,
incluidos los heridos, los capturados y los civiles. Las cuatro
convenciones prohíben infligir tortura y malos tratos, y la prohibición
de la tortura se extiende extraterritorialmente con el fin de proteger
a las personas en un conflicto armado dondequiera que ocurra,
independientemente de si los beligerantes reconocen o declaran
grupo armado no estatal, están sujetos a la prohibición absoluta
de la tortura y los malos tratos.201
120. El artículo 3, común a los cuatro Convenios de Ginebra (artículo
3 común), se aplica a los conflictos armados “que no sean de
carácter internacional”, el término no se aclara más, y todas
las partes deben respetar las obligaciones fundamentales en
todos los conflictos armados; esto generalmente se entiende
como que, sin importar la naturaleza de un conflicto armado,
ciertas reglas básicas de humanidad no pueden ser
derogadas.202 La prohibición de la tortura y los malos tratos
es una de ellas y es común al derecho internacional humanitario.
y derecho de los derechos humanos. El artículo 3 común establece:

un conflicto armado.
los siguientes actos están y permanecerán prohibidos en
cualquier momento y en cualquier lugar... (a) la violencia
contra la vida y la persona, en particular el asesinato

195 Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 20 (1992), párr. 9. Véase también Comité de Derechos Humanos, Hashi and SAA c. Dinamarca (CCPR/C/120/D/2470/2014),
paraca. 9.3.
196 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Familia Pacheco Tineo c. Estado Plurinacional de Bolivia, Sentencia, 25 de noviembre de 2013, párr. 199.
197 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Paposhvili c. Bélgica, solicitud n.º 41738/10, sentencia, 13 de diciembre de 2016, párr. 183.
198 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Sharifi and Others v. Italy and Greece, aplicación No. 16643/09, Sentencia, 21 de octubre de 2014, párrs. 240–243 (versión oficial
disponible en francés); y MSS c. Bélgica y Grecia, solicitud No. 30696/09, Sentencia, 21 de enero de 2011, párrs. 192 y 344–361.
199 Para obtener información adicional sobre las normas del derecho internacional humanitario consuetudinario, véase Comité Internacional de la Cruz Roja, Base de datos de DIH consuetudinario. Disponible en
https://ihl-databases.icrc.org/customary-ihl/eng/docs/home.
200 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal v. Duško Tadiÿ, Caso No. IT-94-1, Decisión, 2 de octubre de 1995, párr. 94.
201 A/HRC/34/54, párrs. 44–48.
202 Jelena Pejic, “El ámbito de protección del artículo 3 común: más de lo que parece”, Revista Internacional de la Cruz Roja, vol. 93, núm. 881 (marzo de 2011), págs. 214–216.

23
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
de todo tipo, mutilaciones, tratos crueles y torturas; ...
(c) los ultrajes a la dignidad personal, en particular los tratos
humillantes y degradantes.
121. Un ex relator especial sobre la tortura, Sir Nigel Rodley, afirmó
que: “La prohibición de la tortura o los malos tratos difícilmente
podría formularse en términos más absolutos. En palabras del
comentario oficial al texto del Comité Internacional de la Cruz Roja
(CICR), 'no queda ningún resquicio posible; no puede haber excusa, ni
atenuantes'.”203
122. Otro vínculo entre las relaciones internacionales
El derecho humanitario y el derecho de los derechos humanos
se encuentra en el preámbulo del Protocolo adicional II a los
Convenios de Ginebra de 1949. En él se establece que:
“los instrumentos internacionales relativos a los derechos
humanos ofrecen una protección básica a la persona
humana”.204 Según el comentario del CICR a los
Protocolos Adicionales a los Convenios de Ginebra de
1949, el término “instrumentos internacionales relativos a
los derechos humanos” significa en particular el Convenio
Internacional Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la
Convención contra la Tortura.205 Aunque el derecho internacional
humanitario y el derecho internacional de los derechos humanos
son dos sistemas jurídicos distintos, cada uno con sus propios
fundamentos y mecanismos, se aplican simultáneamente en tiempo
de conflicto armado.206
D. Justicia penal internacional
123. El Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, aprobado el 17 de
julio de 1998, estableció una corte penal internacional permanente
para juzgar a los responsables de genocidio, crímenes de lesa
humanidad y crímenes de guerra, añadiendo posteriormente a la lista
el crimen de agresión. La Corte Penal Internacional ha
jurisdicción sobre casos en los que se alegue la tortura como
un crimen de guerra, en particular cuando la tortura se comete
como parte de un plan o política o comisión a gran escala
203 Nigel Rodley y Matt Pollard, The Treatment of Prisoners under International Law, 3ra ed. (Oxford, Oxford University Press, 2009), pág. 60
204 Protocolo II Adicional a los Convenios de Ginebra de 1949, segundo párrafo del preámbulo.
205 CICR, Comentario sobre los Protocolos adicionales del 8 de junio de 1977 a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949 (1987), párr. 4428.
206 Ibíd., párr. 4429.
207 Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, art. 7 (2) (e).
208 Ibíd.
209 Estatuto actualizado del Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia (2009), arts. 2 (b) y 5 (f).
210 Estatuto del Tribunal Penal Internacional para Ruanda (actualizado en 2002), arts. 3 (f) y 4 (a).
211 Estatuto del Tribunal Especial para Sierra Leona (2002), arts. 2 (f) y 3 (a).
212 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal v. Dragoljub Kunarac et al., Casos Nos. IT-96-23-T y IT-96-23/1-T, Sentencia, 22 de febrero de 2001, párrs. 495–
496; y Tribunal Penal Internacional para Ruanda, Fiscal v. Laurent Semanza, Caso No. ICTR-97-20-T, Sentencia, 15 de mayo de 2003, párrs. 342–343.
213 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal v. Dragoljub Kunarac et al., párr. 471.
24
I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES
de tales delitos, o como parte del delito de genocidio o como
delito de lesa humanidad, en este último caso cuando la tortura
se cometa a sabiendas como parte de un ataque generalizado o
sistemático contra cualquier población civil. La tortura como crimen
de lesa humanidad se define en el Estatuto de Roma, dentro de
ese contexto, como la imposición intencional de dolor o sufrimiento
severo, ya sea físico o mental, a una persona bajo la custodia o el
control del acusado.207
124. La tortura no solo es un crimen internacional sujeto a la
jurisdicción universal, sino que ha sido incluido en los estatutos
de numerosos tribunales internacionales y
tribunales, incluida la Corte Penal Internacional,208 el
Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia,209 el Tribunal Penal
Internacional para Ruanda210 y el Tribunal Especial para Sierra
Leona.211
125. La tortura fue procesada como crimen de guerra tanto en el
Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia y en el Tribunal Penal
Internacional para Ruanda.
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda
desempeñó un papel influyente en el derecho penal internacional
al determinar, entre otras cosas, que la violación podía ser
procesada como tortura y como acto de genocidio.
Como el primer tribunal de crímenes de guerra creado por las
Naciones Unidas, el Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia
sentó muchos precedentes y afectó el enjuiciamiento de la tortura,
particularmente en relación con los conflictos armados.
126. La definición de tortura como crimen de guerra utilizada por el
Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia y el Tribunal Penal
Internacional para Ruanda
difiere del aplicable en virtud del derecho de los derechos humanos
debido a las especificidades del derecho internacional humanitario,
que dejan claro que se limita al contexto de los conflictos armados.
Primero, no hay necesidad de la participación de un funcionario
público.212
Esta diferencia se ha justificado sobre la base de la necesidad de
tomar “en consideración las especificidades del [derecho
internacional humanitario]”.213 Otra divergencia se aplica
específicamente al Estatuto de Roma,
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I. NORMAS Y ESTÁNDARES JURÍDICOS INTERNACIONALES PERTINENTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

en el que el delito subyacente de tortura como crimen de lesa
humanidad no requiere un propósito específico.214
Sin embargo, sí requiere que el perpetrador supiera que la
conducta era parte de, o pretendía que la conducta fuera
“parte de un ataque generalizado o sistemático dirigido contra
cualquier población civil”215
y cometerse “de conformidad con o en apoyo de la política
de un Estado o de una organización para cometer dicho
ataque”,216 ambos indican el propósito.
127. El Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia esbozó la prohibición
de la tortura en los conflictos armados en Fiscal v. Anto Furundžija.
La Corte concluyó que no necesitaba determinar si las disposiciones
habían pasado al derecho consuetudinario en su totalidad, porque
“una prohibición general contra la tortura ha 217 y evolucionado en
el derecho internacional consuetudinario”,
El Tribunal Penal de Ruanda determinó que la violación podía
constituir tortura. Según la Sala de Primera Instancia:
Al igual que la tortura, la violación se utiliza con fines
de intimidación, degradación, humillación,
discriminación, castigo, control o destrucción de una
persona. Al igual que la tortura, la violación es una
violación de la dignidad personal, y la violación de
hecho constituye tortura cuando es infligida por o
bajo la instigación de o con el consentimiento o
aquiescencia de un funcionario público u otra persona
que actúa en calidad de oficial.221
129. La Sala de Apelaciones del Tribunal Internacional para la ex
Yugoslavia afirmó que la violación podía constituir tortura222 y
la Corte Penal Internacional concluyó que la violación y otras

formas de violencia sexual se utilizaban como arma de

enfatizó que, dependiendo de las circunstancias del caso guerra223.
particular, la tortura puede ser perseguida como una categoría
de violaciones graves del derecho humanitario, infracciones 130. El Tribunal Penal Internacional para Ruanda

graves de los Convenios de Ginebra, crímenes de lesa
humanidad o genocidio.218 Además, “según el derecho
internacional humanitario, además a la responsabilidad penal
individual [por actos de tortura], la responsabilidad del Estado
puede surgir como resultado de que los funcionarios del Estado
participen en la tortura o no prevengan la tortura o no castiguen a
los torturadores.”219 La Corte también encontró que la prohibición
de la tortura durante los conflictos armados se refuerza por los
instrumentos internacionales de derechos humanos, y que la
prohibición de la tortura se ha convertido en una norma imperativa
del derecho internacional, abarca posibles
220
incumple e impone obligaciones a todos.
también ha determinado que la tortura puede ser uno de los
“delitos subyacentes” del genocidio porque constituye un acto que
“causa daño físico o mental grave a los miembros del grupo”.224
Además, el Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia concluyó
que no se requería lesión para que un acto constituya tortura, que
causar sufrimiento mental podría calificar como tortura y que “el
propósito prohibido no tiene por qué ser ni el único ni el propósito
principal de infligir dolor o sufrimiento severos”.225 El Tribunal
Internacional para la Primera Yugoslavia no tenía una respuesta
uniforme sobre si los funcionarios públicos tenían o no que
desempeñar un papel en los actos de tortura,226 y el Tribunal Penal
Internacional para Ruanda decidió

128. También se ha abordado la violación y la violencia sexual

en los conflictos armados. En Prosecutor v. Jean-Paul que no existía requerimiento de funcionario público cuando los
Akayesu, la Sala de Primera Instancia de la Corte Internacional actos de tortura constituían crímenes de lesa humanidad227.

214 Estatuto de Roma, art. 7 (1) (f).

215 Ibíd., art. 7 (1).
216 Ibíd., art. 7 (2) (a).
217 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal c. Anto Furundžija, Caso No. IT-95-17/1-T, Sentencia, 10 de diciembre de 1998, párr. 137.
218 Ibíd., párr. 141.
219 Ibíd., párr. 142.
220 Ibíd., párrs. 144 y 147–152.
221 Tribunal Penal Internacional para Ruanda, Fiscal v. Jean-Paul Akayesu, Caso No. ICTR-96-4-T, Sentencia, 2 de septiembre de 1998, párr. 597 (véase también el párr. 687).
222 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal v. Dragoljub Kunarac et al., Casos Nos. IT-96-23 e IT-96-23/1-A, Sentencia, 12 de junio de 2002, párrs. 149–151.
223 Corte Penal Internacional, Fiscal v. Jean-Pierre Bemba Gombo, Caso No. ICC-01/05-01/08, Sentencia, 21 de marzo de 2016, párrs. 98–112. La Sala de Apelaciones de la Corte Penal
Internacional revocó el fallo en Bemba en 2018.
224 Human Rights Watch, Genocide, War Crimes, and Crimes Against Humanity: Topical Digests of the Case Law of the International Criminal Tribunal for Rwanda and the International
Criminal Tribunal for the Former Yugoslavia (Nueva York, 2004), págs. 12 y 21– 22 Véase también Tribunal Penal Internacional para Ruanda, Fiscal v. Jean-Paul
Akayesu, párr. 504; y Fiscal v. Georges Anderson Nderubumwe Rutaganda, Caso No. ICTR-96-3-T, Sentencia, 6 de diciembre de 1999, párr. 51.
225 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Fiscal v. Miroslav Kvoÿka et al., Caso No. IT-98-30/1-T, Sentencia, 2 de noviembre de 2001, párr. 153; véanse también los párrs. 148–
149.
226 Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia, Prosecutor v. Dragoljub Kunarac et al., Sentencia, 12 de junio de 2002, párr. 148; Fiscal v. Milorad Krnojelac, Caso No.
IT-97-25-T, Sentencia, 15 de marzo de 2002, párr. 187; Fiscal c. Anto Furundžija, párr. 162; y Prosecutor v. Zdravko Muciÿ et al., Sentencia, 16 de noviembre de 1998, párrs.
494–496.
227 Tribunal Penal Internacional para Ruanda, Fiscal c. Laurent Semanza, párrs. 342–343.

25
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Códigos
éticos relevantes
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES

131. Todas las profesiones trabajan dentro de códigos éticos, que brindan una y el derecho inderogable a no ser sometido a torturas ni a otros

declaración de los valores compartidos y los deberes reconocidos de los tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes”.228 Las

profesionales y establecen estándares que se espera que cumplan. Las normas éticas obligaciones éticas de los jueces, fiscales y abogados se articulan

se establecen principalmente de dos formas: por instrumentos internacionales elaborados en las normas y códigos éticos desarrollados por las Naciones

por organismos como las Naciones Unidas y por códigos de conducta redactados por Unidas,229 y por las normas internacionales,230 asociaciones regionales

las propias profesiones, a través de sus asociaciones representativas a nivel nacional o y nacionales de profesionales del derecho.231

internacional. Los principios fundamentales son generalmente los mismos y se centran

en las obligaciones que tiene el profesional con los clientes o pacientes individuales, con Estas obligaciones éticas son la base de los derechos a un juicio

la sociedad en general y con los colegas para promover los intereses de los clientes y justo y al debido proceso legal, incluido un poder judicial imparcial,

pacientes, mantener la integridad de la profesión y garantizar que no se abusa del poder independiente y competente.232

y la autoridad conferidos a los miembros de la profesión.

(a) Obligación de comportarse de manera profesional e

independiente

133. Los profesionales del derecho deben desempeñar sus funciones sin

restricciones, incentivos, presiones, intimidaciones, influencias o

Estas obligaciones reflejan y complementan los derechos a los que interferencias indebidas, directas o indirectas, o por cualquier motivo,

todas las personas tienen derecho en virtud de los instrumentos o exposición injustificada a responsabilidad civil, penal o de otra

internacionales. Si bien este capítulo aborda específicamente la ética de índole.233 Los profesionales del derecho también deben observar

los profesionales del derecho y la salud, otras personas que trabajan con conducta en todo momento. Deben mantener los más altos estándares

presuntas víctimas y sobrevivientes de tortura o malos tratos deben ser de integridad, decoro y apariencia de honor, dignidad, competencia y

conscientes de sus obligaciones profesionales y, cuando falten, considerar diligencia.234

las obligaciones éticas pertinentes que se presentan en este capítulo. .

b) Deber de garantizar la igualdad de trato a todas las personas

A. Ética relevante de los
profesionales del derecho 134. Los jueces y fiscales tienen el deber de garantizar la igualdad de trato a

todas las personas sin discriminación ni prejuicios235 . En este sentido,

1. Principios comunes a todos los códigos de ética cuando traten con víctimas de tortura y otros tratos o penas crueles,

profesional del derecho inhumanos o degradantes, “deberán esforzarse por minimizar las

victimización o trauma”.236

132. Los profesionales del derecho “desempeñan un papel fundamental en

la defensa de los derechos humanos, incluido el derecho absoluto Los abogados también deben evitar todo tipo de discriminación

228 Resolución 35/12 del Consejo de Derechos Humanos, decimotercer párrafo del preámbulo.
229 Para las obligaciones éticas de las Naciones Unidas para los jueces, véanse Principios básicos sobre la independencia de la judicatura; Principios de Bangalore sobre la Conducta Judicial; Oficina de las
Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Comentario sobre los Principios de Bangalore sobre la Conducta Judicial (Viena, 2007); y Grupo de Integridad Judicial, “Medidas para la implementación
efectiva de los Principios de Bangalore sobre la Conducta Judicial (las medidas de implementación)” (Lusaka, 2010). Para los fiscales, véanse las Directrices sobre la función de los fiscales, adoptadas
por el Octavo Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente (1990) (A/CONF.144/28/Rev.1). Para los abogados, véanse los Principios básicos sobre la
función de los abogados, adoptados en el mismo Congreso.
230 Para conocer las obligaciones éticas internacionales de los jueces, véase Asociación Internacional de Independencia Judicial y Paz Mundial; Código Global de Ética Judicial de Bolonia y Milán (2015); y
Comisión Internacional de Juristas, Judicial Accountability: A Practitioners' Guide (Ginebra, 2016). Para los fiscales, véanse las Normas de Responsabilidad Profesional y Declaración de los Deberes y
Derechos Esenciales de los Fiscales, adoptadas por la Asociación Internacional de Fiscales (1999); y Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, The Status and Role of Prosecutors: A
United Nations Office on Drugs and Crime and International Association of Prosecutors Guide (Nueva York, 2014). Para los abogados, consulte los Principios internacionales sobre la conducta de la
profesión jurídica, adoptados por la Asociación Internacional de Abogados (2011) .
231 Véase www.icj.org/icj-launches-new-practitioners-guide-on-judicial-accountability. Véase también American Bar Association, Modelo de Código de Conducta Judicial, edición revisada (2020); y Consejo
de Europa, “Directrices europeas sobre ética y conducta de los fiscales: 'las Directrices de Budapest'” (Estrasburgo, 2005).
232 Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, art. 14; y Comité de Derechos Humanos, Observación general No. 32 (2007).
233 Para el deber de los jueces de comportarse de manera profesional e independiente, véanse los Principios básicos relativos a la independencia de la judicatura, art. 2; Principios de Bangalore de Conducta
Judicial, valor 2; American Bar Association, Código Modelo de Conducta Judicial, canon 1; y Código Global de Ética Judicial de Bolonia y Milán, principio 3.5. Para los fiscales, véanse las Directrices
sobre la función de los fiscales, párr. 4; Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párr. 2; y Protocolo de Estambul, párrs. 49 y 74. Para los abogados, véase
Principios básicos sobre la función de los abogados, principio 16. Véase también el preámbulo de la resolución 35/12 del Consejo de Derechos Humanos, en la que el Consejo recordó que: “Una
judicatura independiente e imparcial, una profesión jurídica independiente , un enjuiciamiento objetivo e imparcial capaz de desempeñar debidamente sus funciones y la integridad del sistema judicial son
requisitos previos para la protección de los derechos humanos y la aplicación del estado de derecho y para garantizar juicios justos y la administración de justicia sin discriminación alguna.”
234 Para los jueces, véanse los Principios de Bangalore sobre la Conducta Judicial, valores 3, 4 y 6; y Código Global de Ética Judicial de Bolonia y Milán, principios 5.1 y 5.2. Para los fiscales, véanse las
Directrices sobre la función de los fiscales, párr. 3; y Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párr. 1. Para abogados, véase Principios Internacionales sobre la
Conducta de la Profesión Jurídica, principio 2.
235 Para el deber de los jueces de garantizar la igualdad de trato a todas las personas, véanse los Principios de Bangalore sobre la conducta judicial, valor 5; y Código Global de Ética Judicial de Bolonia y Milán,
principio 5.3. Para los fiscales, véanse las Directrices sobre la función de los fiscales, párr. 13 (a).
236 Comisión Internacional de Juristas, Principios sobre el papel de los jueces y abogados en relación con los refugiados y los migrantes (Ginebra, 2017), pág. 22, comentario al principio 13.
Véase también Conor Foley, Protecting Brazilians From Torture: A Manual for Judges, Prosecutors, Public Defenders and Lawyers, 2ª ed. (Londres, International Bar Association, 2013), pág. 181.

28
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II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
y puede ser requerido por los jueces en
procedimientos ante un tribunal “que se abstenga de
manifestar parcialidad o prejuicio, o de involucrarse en acoso”.237
2. Principios que guían la conducta de los jueces
a) Deber de promover y proteger los derechos humanos
135. Como árbitros últimos de la justicia, los jueces desempeñan un papel especial en
la protección de los derechos humanos. Los jueces tienen el deber ético de
garantizar la protección de los derechos humanos.
Los jueces pueden ser responsables de violaciones de
derechos humanos cuando “ejercen o dejan de ejercer su
autoridad de manera que buscan ocultar violaciones
perpetradas por militares, paramilitares o agentes del orden”.238
(b) Deber de decidir los asuntos con imparcialidad
de acuerdo con la ley
136. El principio 6 de los Principios básicos relativos a la independencia
de la judicatura establece que: “El principio de la independencia
de la judicatura faculta y obliga a la judicatura a garantizar que
las actuaciones judiciales se desarrollen con equidad y que se
respeten los derechos de las partes”. Además, el Código Global
de Ética Judicial de Bolonia y Milán exige la estricta
independencia del poder judicial de los poderes legislativo y
ejecutivo del gobierno y “que en el proceso de toma de
decisiones, los jueces deben ser independientes y poder actuar
sin ninguna restricción, influencias, incentivos, presiones,
amenazas o injerencias indebidas, directas o indirectas, de
cualquier parte o por cualquier motivo”.239 El Código también
reconoce la importancia de un poder judicial competente,
independiente e imparcial en la protección de los derechos
humanos. Por lo tanto, para proteger a las personas de la tortura
y los malos tratos, los jueces deben tener un conocimiento
suficiente del Protocolo de Estambul y sus Principios y
asegurarse de que las partes pertinentes los apliquen en los
procedimientos judiciales.
237 American Bar Association, Modelo de Código de Conducta Judicial, regla 2.3 (C).
238 Comisión Internacional de Juristas, Judicial Accountability: A Practitioners' Guide, pág. 9.
239 Código Global de Ética Judicial de Bolonia y Milán, párr. 4.4 (nota al pie omitida). Las disposiciones de este Código se articularon para aclarar los códigos judiciales internacionales anteriores
y están destinadas a aplicarse a todos los jueces.
240 Conor Foley, Combating Torture: A Manual for Judges and Prosecutors (Colchester, Universidad de Essex, 2003), pág. 2.
241 E/CN.4/2001/66/Add.2, párr. 102.
242 Ibíd.
243 Directrices sobre la función de los fiscales, párr. 15; y Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, The Status and Role of Prosecutors.
244 Foley, Protegiendo a los brasileños de la tortura, pág. 29
245 Directrices sobre la función de los fiscales, párrs. 11–12; Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párr. 4.2; y Foley, Protegiendo
brasileños de la tortura, pág. 181.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
c) El papel de los jueces en la prevención y protección contra
la tortura
137. Para proteger a las personas de la tortura y la
malos tratos, los jueces “pueden exigir que un sospechoso
sea llevado ante ellos lo antes posible y comprobar que
recibe el trato adecuado. Cuando tengan discreción, pueden
interpretar el balance de la prueba, con respecto a las
denuncias de tortura y la admisibilidad de las pruebas
obtenidas a través de ella, de manera que disuada a los
agentes del orden y a los encargados de los lugares de
detención de llevar a cabo, o permitir que otros lleven a cabo
torturas y otras formas de malos tratos”.
sus alegaciones son compatibles con otras pruebas, como
pruebas forenses, el juez debe suspender el juicio”.241
Además, “si una confesión [obtenida mediante tortura o bajo
coacción] es la única prueba contra un acusado, el juez debe
decidir que no hay base para la condena”.242
3. Principios que guían la conducta de los fiscales
a) Deber de investigar y juzgar la tortura y otros tratos o
penas crueles, inhumanos o degradantes
138. Los fiscales tienen la obligación ética de investigar y enjuiciar
la tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes cometidos por funcionarios públicos. El artículo
15 de las Directrices sobre la función de los fiscales
establece: “Los fiscales prestarán la debida atención al
enjuiciamiento de los delitos cometidos por funcionarios
públicos, en particular la corrupción, el abuso de poder, las
violaciones graves de los derechos humanos y otros delitos
reconocidos por el derecho internacional y, cuando autorizado
por la ley o conforme a la práctica local, la investigación de tales
delitos.”243 Los fiscales deben “tomar en serio todas las
denuncias de malos tratos”244 y llevar a cabo las investigaciones
de manera activa (véase el párr. 253 infra) y con rapidez.245
29
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES

En el ejercicio de su deber de investigar efectivamente las c) Deber de imparcialidad y objetividad

denuncias de tortura o malos tratos, los fiscales deben tener
un conocimiento adecuado y aplicar el Protocolo de Estambul 140. Si bien es deber del Estado “garantizar que

y sus Principios en sus prácticas de investigación y
documentación.246
(b) Deber de rechazar la prueba obtenida mediante
tortura o malos tratos: la regla de exclusión
139. El párrafo 16 de las Directrices sobre la función de
Los fiscales declaran:
Cuando los fiscales tomen posesión de pruebas contra
sospechosos que saben o creen con motivos razonables que
se obtuvieron recurriendo a métodos ilegales, que constituyen
una violación grave de los derechos humanos del sospechoso,
especialmente cuando involucran tortura o tratos o penas
crueles, inhumanos o degradantes, o otros abusos de los
derechos humanos, se negarán a utilizar tales pruebas contra
personas que no sean quienes utilizaron tales métodos, o
informarán al Tribunal en consecuencia, y tomarán todas las
medidas necesarias para garantizar que los responsables de
utilizar tales métodos sean llevados ante la justicia.
Con el fin de evitar conflictos de interés, la
investigación sobre denuncias de obtención ilícita
de pruebas debe ser realizada por un fiscal distinto
del encargado de la investigación penal inicial247.
Las normas internacionales establecen que: “en el
los fiscales pueden desempeñar sus funciones profesionales
sin intimidación, obstáculos, acoso, injerencia indebida o exposición
injustificada a responsabilidades civiles, penales o de otra índole”,
los fiscales tienen el deber de realizar sus investigaciones con
imparcialidad (Directrices sobre la función de los fiscales, párr. 4) y
“desempeñar sus funciones de manera justa, coherente y expedita,
y respetar y proteger la dignidad humana y defender los derechos
humanos” (ibíd., párr. 12). Los fiscales deben esforzarse por ser y
ser vistos como objetivos e imparciales.251
d) Deber de garantizar que las autoridades estatales
respeten el derecho a no ser sometido a torturas ni
a otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes
141. Los fiscales se asegurarán de que las autoridades estatales
respeten el derecho a no ser sometido a torturas ni a otros tratos
o penas crueles, inhumanos o degradantes. Deben dar
instrucciones precisas contra el uso de métodos ilegales o
indebidos para obtener pruebas a otros investigadores y personal
a su cargo y supervisar su conducta; realizar visitas periódicas a
los lugares de detención y las comisarías; y exigir que las
confesiones se realicen en presencia de un juez o magistrado.252
Los fiscales tienen la obligación especial de tomar todas las medidas
necesarias para llevar ante la justicia a las personas sospechosas
de haber cometido violaciones de derechos humanos, como tortura
y malos tratos. Su trabajo

iniciación de procesos penales, procederán
únicamente cuando un caso esté bien fundado en
pruebas que razonablemente se consideren confiables y
admisibles, y no continuarán con un enjuiciamiento en
ausencia de tales pruebas”248.
En ausencia de otro material inculpatorio, los fiscales
no deben basarse únicamente en una confesión para el
enjuiciamiento. Los fiscales deben “examinar las pruebas
es clave tanto para remediar pasadas violaciones de derechos
humanos como para prevenir futuras violaciones.253
4. Principios que guían la conducta de los abogados
a) Deber de promover y proteger los derechos humanos
142. El principio 14 de los Principios básicos sobre la función de los abogados

propuestas para determinar si han sido obtenidas legal o establece que: “Los abogados, al proteger los derechos de sus clientes

constitucionalmente”.249 Este examen debe realizarse “de y promover la causa de la justicia, procurarán defender los derechos

acuerdo con la gravedad de la ilicitud o incorrección y los humanos y las libertades fundamentales reconocidos por el derecho

estándares descritos en las reglas de prueba de su propio nacional e internacional y actuará en todo momento
Estado”.250

246 “El Estado parte debe: (a) garantizar que el Protocolo de Estambul sea parte esencial de la formación de todos los profesionales médicos y otros funcionarios públicos que trabajen con personas privadas
de libertad” (CAT/C/NOR/CO/ 8, párrafo 30).
247 E/CN.4/2001/66/Add.2, párr. 102.
248 Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párr. 4.2 (d); y Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Convención de las Naciones Unidas contra la
Corrupción: Guía de implementación y marco de evaluación del artículo 11 (Nueva York, 2015), párr. 159.
249 Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párr. 4.3 (e).
250 Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, The Status and Role of Prosecutors, pág. 41.
251 Asociación Internacional de Fiscales, Normas de Responsabilidad Profesional, párrs. 1 (e), 3 (a) y 4.2 (c).
252 Esta declaración está respaldada por la Convención contra la Tortura, art. 11
253 ACNUDH, Human Rights in the Administration of Justice: A Manual on Human Rights for Judges, Prosecutors and Lawyers (Nueva York y Ginebra, 2003), Professional Training
Serie No. 9, pág. 369.

30
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II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
libre y diligentemente de conformidad con la ley y las normas
reconocidas y la ética de la profesión de abogado”. Dada su
obligación profesional de defender las libertades fundamentales,
como la protección contra la tortura y los malos tratos, los
abogados deben tener un conocimiento adecuado del Protocolo de
Estambul y sus Principios y aplicarlos para garantizar prácticas
eficaces de investigación y documentación.
(b) Deber de tratar los intereses de sus clientes como primordiales
143. Según el principio 13 de los Principios Básicos sobre
el Papel de los Abogados, los deberes de los abogados incluyen: “(a)
Asesorar a los clientes sobre sus derechos y obligaciones legales, y
sobre el funcionamiento del sistema legal en la medida en que sea
relevante para los derechos y obligaciones legales de los clientes; (b)
Asistir a los clientes en todas las formas apropiadas y emprender
acciones legales para proteger sus intereses; (c) Asistir a los clientes
ante los juzgados, tribunales o autoridades administrativas, en su caso.”
Asimismo, el principio 15 establece: “Los abogados respetarán siempre
lealmente los intereses de sus clientes”. En 2011, la Asociación
Internacional de Abogados desarrolló los Principios Internacionales de
Conducta para la Profesión Legal como un medio para anteponer los
intereses de sus clientes a los propios y esforzarse por respetar el
estado de derecho. Estos Principios incluyen, entre otros: mantener la
independencia profesional; honestidad, integridad y equidad en las
interacciones con los clientes, el tribunal y los colegas; mantener la
confidencialidad del cliente; y tratar los intereses de un cliente como
primordiales.254 Los abogados tienen un deber primordial para con sus
clientes y deben brindarles "asesoramiento y representación imparciales...
incluso en cuanto a la probabilidad de éxito del caso del cliente" y tratar
sus "intereses como primordiales".255 La nota explicativa del principio 1
recuerda que: “El hecho de que los abogados sean pagados por un
tercero no debe afectar su independencia y juicio profesional en la
prestación de sus servicios al cliente”. Sin embargo, los deberes de los
abogados para con sus clientes están “sujetos siempre a que no haya
conflicto con los deberes del abogado ante el tribunal y los intereses de
la justicia, de observar la ley y de mantener las normas éticas”.256 El
Principio 5 establece que: “Los abogados no debe involucrarse en, o
ayudar a su cliente con, conducta
254 Principios Internacionales sobre la Conducta de la Profesión Jurídica, principios 1, 2, 4 y 5.
255 Ibíd., principios 1 y 5; y Principios Básicos sobre la Función de los Abogados, principios 13 y 15.
256 Principios Internacionales sobre la Conducta de la Profesión Jurídica, principio 5.
257 Ibíd., pág. 25, nota explicativa del principio 5.
258 Ibíd., principio 4.
259 Principios Internacionales sobre la Conducta de la Profesión Jurídica, pág. 22, nota explicativa del principio 4.
260 También hay una serie de agrupaciones regionales, como la Asociación Médica de la Commonwealth y la Federación de Asociaciones Médicas Islámicas que emiten importantes
declaraciones sobre ética médica y derechos humanos para sus miembros.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
que tenga por objeto inducir a error o afectar negativamente el
interés de la justicia, o infringir deliberadamente la ley”257.
c) Deber de confidencialidad
144. Un abogado deberá mantener siempre la confidencialidad
“con respecto a los asuntos de clientes actuales o anteriores, a
menos que la ley permita o exija lo contrario y/
o las normas de conducta profesional aplicables”.258 Además, el
principio 22 de los Principios Básicos sobre la Función de los
Abogados establece que “todas las comunicaciones y consultas
entre los abogados y sus clientes dentro de su relación profesional
son confidenciales”.
Sin embargo, los abogados “no pueden invocar la confidencialidad/
secreto profesional en circunstancias en que el abogado actúa
como cómplice de un delito”259.
B. Obligaciones éticas de los
profesionales de la salud
145. Existen vínculos claros entre los conceptos de derechos humanos
derechos humanos y los principios bien establecidos de la ética de la
atención de la salud. Las obligaciones éticas de los profesionales de la
salud están articuladas en documentos de las Naciones Unidas en el
de la misma manera que lo son para la profesión legal. También están
incorporados en declaraciones emitidas por organizaciones
internacionales que representan a los profesionales de la salud, como la
Asociación Médica Mundial (WMA), la Asociación Mundial de Psiquiatría
(WPA) y el Consejo Internacional de Enfermeras (ICN).260 Las
asociaciones médicas nacionales y las organizaciones de enfermería
también emiten códigos de ética, que se espera que sus miembros
sigan. El principio central de toda ética profesional de la salud, como
quiera que se articule, es siempre el deber fundamental de respetar la
dignidad humana y actuar en el mejor interés del paciente,
independientemente de otras limitaciones, presiones u obligaciones
contractuales. En algunos países, los principios éticos médicos
específicos, como el de la confidencialidad médico-paciente, están
incorporados en la legislación nacional. En algunas situaciones, la
legislación nacional también puede estar en conflicto con las obligaciones
éticas de los profesionales de la salud. Todos los profesionales de la
salud están moralmente obligados por las normas éticas establecidas
por sus organismos profesionales y pueden ser juzgados culpables.
31
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
de mala conducta profesional si se desvían de las normas
profesionales sin una justificación razonable.
146. Es importante señalar que las obligaciones éticas
de los profesionales de la salud se aplican a todos los encuentros
con personas en los que el conocimiento profesional y/o
o las habilidades se aplican para algún propósito. La realización
de una evaluación clínica de supuestos o presuntos casos de
tortura, ya sea en entornos médico-legales, policiales, militares, de
atención primaria de la salud u otros, es un procedimiento basado
en conocimientos y habilidades profesionales que conlleva posibles
beneficios y riesgos para el individuo. El término “paciente”261 se
utiliza comúnmente para referirse a las personas que son objeto
de alguna intervención profesional de la salud y, por lo tanto,
incluye a las presuntas víctimas de tortura o malos tratos.
Ya sea que los profesionales de la salud se refieran a las presuntas
víctimas de tortura o malos tratos como “pacientes” o no, las
obligaciones éticas de los profesionales de la salud se aplican a
todas las evaluaciones clínicas. Las obligaciones éticas centrales
que se analizan en este capítulo (beneficencia, no maleficencia,
confidencialidad y respeto por la autonomía del paciente) se aplican
por igual en tiempos de conflicto armado y otras emergencias y en
tiempos de paz, y el personal militar tiene las mismas obligaciones
éticas que los civiles. profesionales de la salud.262
148. Los profesionales de la salud, como todas las demás personas que trabajan en
1. Declaraciones de las Naciones Unidas pertinentes
para los profesionales de la salud
147. Las Naciones Unidas han abordado específicamente las
obligaciones éticas de los médicos y otros profesionales de la
salud en los Principios de ética médica pertinentes a la función
del personal de salud, en particular los médicos, en la protección de
los reclusos y detenidos contra la tortura y otros actos crueles,
inhumanos o degradantes. Tratamiento o Castigo.263 Los Principios
de Ética Médica imponen al personal de salud el deber de brindar
atención médica a todos los detenidos y proteger su salud física y
mental, de conformidad con los principios de no discriminación e
igualdad de trato médico (principio 1). También especifican las
circunstancias que constituyen una violación de
ética médica e invocar la responsabilidad del personal de salud,
incluyendo: participar, activa o pasivamente, en actos de tortura o
malos tratos (principio 2); entablar una relación profesional con
261 “Paciente” se define no solo como “una persona que espera o está bajo atención y tratamiento médico”, sino también como “el receptor de cualquiera de los diversos servicios personales” y “alguien sobre
el que se actúa”. La palabra “paciente” deriva del latín “pati”, que significa sufrir.
262 AMM y otros, Principios éticos de la atención de la salud en tiempos de conflicto armado y otras emergencias (adoptado en 2015). Ver también las regulaciones de la AMM en tiempos de conflicto armado
y otras situaciones de violencia (adoptadas en 1956 y revisadas por última vez en 2012).
263 Resolución 37/194 de la Asamblea General, anexo.
264 Reglas de Bangkok, reglas 10 y 12–18.
32
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
los detenidos separados del único propósito de evaluar, proteger o
mejorar su salud física y mental (principio 3); aplicar sus conocimientos
y habilidades para ayudar en el interrogatorio de reclusos y detenidos
de una manera que pueda afectar negativamente a la salud física o
mental o al estado de dichos reclusos o detenidos y que no se ajuste
a los instrumentos internacionales pertinentes (principio 4 (a)); para
certificar la aptitud de los reclusos o detenidos para cualquier forma de
tratamiento o castigo que pueda afectar negativamente a su salud
física o mental (como la reclusión prolongada en régimen de
aislamiento) o para participar en la imposición de cualquier tratamiento
o castigo que no esté de acuerdo con las internacional relevante
instrumentos (principio 4 (b)); y a participar en cualquier
procedimiento de inmovilización de presos o detenidos, a menos
que dicho procedimiento se determine de acuerdo con criterios
puramente médicos como necesario para la protección de la salud
física o mental o la seguridad de los propios presos o detenidos, de
sus compañeros de prisión o detenidos , o de sus tutores, y no
presenta peligro para su salud física o mental (principio 5). Los
Principios de Ética Médica también recuerdan el carácter inderogable
de los principios antes mencionados bajo ninguna circunstancia
(principio 6).
los sistemas penitenciarios, deben observar las Reglas mínimas para el
tratamiento de los reclusos (Reglas Nelson Mandela), que exigen que los
servicios médicos, incluidos los psiquiátricos, estén disponibles para todos los
reclusos sin discriminación y que todos los reclusos enfermos o que soliciten
tratamiento sean vistos diariamente. Las Reglas de las Naciones Unidas para
el Tratamiento de las Reclusas
y Medidas No Privativas de la Libertad para Mujeres Delincuentes
(las Reglas de Bangkok) complementan las Reglas de Nelson
Mandela y articulan deberes éticos específicos para proteger a las
mujeres privadas de su libertad.264 Estos requisitos refuerzan las
obligaciones éticas de los médicos y otros profesionales de la salud,
discutidos a continuación, para tratar y actuar en el mejor interés de
sus pacientes. La regla 32 (1) de las Reglas Nelson Mandela establece
que “la relación entre el médico u otros profesionales de la salud y los
reclusos se regirá por las mismas normas éticas y profesionales que
se aplican a los pacientes en la comunidad”. Esto incluye el “deber de
proteger la salud física y mental de los reclusos”.
Machine Translated by Google
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
salud”;265 “apego a la autonomía de los reclusos con respecto
a su propia salud y consentimiento informado en la relación
médico-paciente”;266 “confidencialidad de la información
médica, a menos que mantener tal confidencialidad resulte en
una amenaza real e inminente para el paciente o a otros”;267
y la “prohibición absoluta de participar, activa o pasivamente, en
actos que puedan constituir tortura u otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes”268 . sanciones u otras medidas
restrictivas.269 Esto incluye el confinamiento solitario (22 horas o
más al día sin contacto humano significativo), el confinamiento
solitario prolongado (15 días consecutivos), la colocación de un
recluso en una celda oscura o constantemente iluminada, el castigo
corporal o la reducción de la alimentación o el agua potable de un
recluso y el castigo colectivo.270
Además, la regla 34 de las Reglas Nelson Mandela exige que
los profesionales de la salud que “tengan conocimiento de
cualquier señal de tortura u otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes” “documenten y notifiquen tales
casos a la autoridad médica, administrativa o judicial
competente”. ”.
149. Respecto de las mujeres privadas de su
libertad, la regla 10 de las Reglas de Bangkok establece
que “toda mujer tiene derecho a tratamiento y atención
equivalente al de los estándares comunitarios para sus
necesidades de atención médica específicas de género” y el
derecho a la confidencialidad médica.271 Además, la regla 6
(5) de las Reglas de Bangkok establece el deber del personal
de salud de documentar “cualquier signo de maltrato o tortura”
en los exámenes de detección de salud.
150. Deben seguirse las garantías procesales adecuadas
para no exponer al recluso oa las personas asociadas
a un riesgo previsible de daño. Las garantías
procesales pertinentes relativas a los riesgos de daño
específicamente en el contexto de las evaluaciones
clínicas de tortura o malos tratos se analizan en los
párrafos 312 a 315 a continuación. Organismos
regionales de derechos humanos, como el Comité Europeo para la Prevención
265 Reglas Nelson Mandela, regla 32 (1) (a).
266 Ibíd., regla 32 (1) (b).
267 Ibíd., regla 32 (1) (c).
268 Ibíd., regla 32 (1) (d).
269 Ibíd., regla 46 (1).
270 Ibíd., regla 43 (1) (a)–(e).
271 Reglas de Bangkok, reglas 8 y 11. Véanse también las reglas 12 a 18 de las mismas, que elaboran deberes sobre las necesidades específicas de atención de la salud física y mental de las mujeres basadas en el género.
272 Comité Europeo para la Prevención de la Tortura, 23° Informe General del CPT (1 de agosto de 2012–31 de julio de 2013) (Estrasburgo, Consejo de Europa, 2013), párrs. 71–84 273 Los
profesionales de la salud deben, sin embargo, tener en cuenta el deber de confidencialidad que se debe a los pacientes y la obligación de obtener el consentimiento informado para la divulgación de información,
particularmente cuando las personas pueden correr peligro por dicha divulgación (véanse los párrs. 165 a 171 supra).
274 A/HRC/31/57; A/HRC/7/3, párrs. 25–26; y ACNUDH, “Crímenes de género a través de la lente de la tortura, Día Internacional de la Mujer”, comunicado de prensa, 8 de marzo de 2016.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
de Tortura, también requieren que los profesionales de la salud
que trabajan en los lugares de detención documenten y reporten
evidencia médica de tortura o malos tratos.272
151. La “participación en la tortura” incluye evaluar una
la capacidad del individuo para soportar los malos tratos;
presenciar, supervisar o infligir malos tratos; reanimar a las
personas con el fin de someterlas a nuevos malos tratos o
proporcionar tratamiento médico inmediatamente antes, durante
o después de la tortura siguiendo las instrucciones de los
posibles responsables de la misma; proporcionar conocimientos
profesionales o información sobre la salud personal de las
personas a los torturadores; y el descuido intencional de pruebas
y la falsificación de informes, como informes de autopsias y
certificados de defunción.273 En una situación en la que una
intervención después de la tortura
es esencial para preservar la vida de un individuo, se
puede realizar una intervención de emergencia.
Además, el personal de atención médica debe informar los
efectos adversos de las sanciones disciplinarias u otras
medidas restrictivas y asesorar al director.
poner fin a la separación involuntaria para garantizar que
dicha separación no exacerbe la condición médica o la
discapacidad mental o física del recluso. Los Principios de Ética
Médica también prohíben cualquier relación profesional con
presos o detenidos que no sea únicamente para evaluar,
proteger o mejorar su salud física y mental. Por lo tanto, evaluar
la salud de un detenido para facilitar el castigo o la tortura es
claramente poco ético.
152. El deber de los profesionales de la salud de no participar,
activa o pasivamente, en prácticas de tortura y malos tratos y
de documentar y denunciar tales prácticas se extiende a una
amplia gama de abusos que han sido reconocidos como tortura
o malos tratos por el Relator Especial. sobre la tortura y el
Comité contra la Tortura.274 Estas incluyen, pero no se limitan
a, prácticas abusivas relacionadas con la discriminación de
género, incluidas aquellas bajo la apariencia de tratamiento o
pruebas médicas, como pruebas de virginidad, exámenes
anales para “detectar la homosexualidad”, violación , mutilación
genital femenina, matrimonio forzado, matrimonio infantil, honor
33
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
matanza, quema de viudas, trata de personas, mutilación
genital femenina, terapias de conversión para cambiar la
orientación sexual, cirugías de reasignación de género no
consensuadas, pruebas de embarazo forzadas o coaccionadas,
esterilización forzada o coercitiva, determinaciones médicas de
género sin consentimiento y cirugía y tratamiento a niños
intersexuales sin su consentimiento. El Relator Especial también ha
reconocido ciertas formas de abusos en entornos de atención de la
salud que pueden ser equivalentes a tortura o malos tratos, entre
ellos: alimentación forzada de personas en huelga de hambre,275 la
negación de analgésicos,276
detención obligatoria por motivos médicos, como la detención
obligatoria por drogas y la “rehabilitación”, las intervenciones
médicas no consensuadas contra las personas con discapacidad,
incluida la administración no consensuada de psicocirugía,
electrochoques y drogas que alteran la mente, como los
neurolépticos, el uso de la inmovilización y confinamiento solitario
tanto para aplicación a largo como a corto plazo.277
153. Los profesionales de la salud que participan en el seguimiento de los
lugares de detención, en particular como parte de los mecanismos
nacionales para la prevención de la tortura,278 tienen un papel
particular en el tratamiento de los problemas de salud relacionados
con la tortura y los malos tratos; en la evaluación del sistema de
salud en detención, por ejemplo a través de un análisis de archivos
y registros médicos y discusiones con
el personal de atención de la salud en los lugares de
detención; y en la evaluación del impacto de las condiciones
generales de detención (higiene, nutrición, acceso a duchas,
hacinamiento, etc.) en la salud de la población detenida. Esta
experiencia médica mejora la calidad del seguimiento que
realizan los mecanismos de visita. En esta perspectiva, los
profesionales de la salud pueden brindar una contribución
sustancial a la aplicación de normas y estándares, especialmente
sobre la provisión y el acceso a la atención médica y sobre las
prácticas éticas para quienes trabajan en los lugares de detención,
y las recomendaciones al Estado.
autoridades que abordan problemas de salud en detención que
pueden constituir tortura y/o malos tratos.279
275 ACNUDH, “La alimentación forzada es cruel e inhumana: los expertos de la ONU instan a Israel a no legalizarla”, comunicado de prensa, 25 de junio de 2014.
276 La resolución de la AMM sobre el acceso a un tratamiento adecuado del dolor (2011, revisada en 2020) destaca el problema de que la gran mayoría de la población mundial no tiene acceso a un tratamiento del dolor o
es inadecuado. La resolución insta a los profesionales de la salud y a los gobiernos a garantizar un tratamiento adecuado del dolor para todos y a establecer mecanismos efectivos de seguimiento y cumplimiento.
277 A/HRC/22/53, párr. 89 (b).
278 De conformidad con el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura.
279 La Asociación para la Prevención de la Tortura, “Visitas a los lugares de detención: ¿qué papel para los médicos y otros profesionales de la salud?” (Ginebra, 2008), págs. 6 y 7.
280 Adoptado en 1975 y revisado en 2005, 2006 y 2016.
281 Adoptado en 1977 y actualizado en 1983.
282 Aprobado por la Asamblea General de la WPA en 1996 y revisado en 1999, 2002, 2005 y 2011.
283 Adoptado en 1981, también conocido como el código islámico de ética médica.
284 Adoptado por el CIE en 1998 y revisado en 2006 y 2011.
34
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
2. Declaraciones de organismos profesionales
internacionales
154. Muchas declaraciones de profesionales internacionales
Los órganos se centran en principios relevantes para la protección
de los derechos humanos y representan un consenso médico
internacional sobre estos temas. Las declaraciones WMA definen
los deberes éticos a los que están sujetos todos los médicos. los
Las directrices para médicos sobre la tortura y otros tratos o
penas crueles, inhumanos o degradantes en relación con la
detención y el encarcelamiento (Declaración de Tokio), adoptadas
por la Asamblea Médica Mundial,280 reiteran la prohibición de
cualquier forma de participación médica o presencia médica en la
tortura o malos tratos Esta prohibición se ve reforzada por los citados
Principios de Ética Médica que se refieren específicamente a la
Declaración de Tokio.
Se prohíbe explícitamente a los médicos proporcionar
información o cualquier instrumento o sustancia médica que
facilite los malos tratos. la misma regla
se aplica específicamente a la psiquiatría en la Declaración
de Hawái de la WPA,281 que prohíbe el uso indebido de las
habilidades psiquiátricas para violar los derechos humanos de
cualquier individuo o grupo, y su Declaración de Madrid sobre
estándares éticos para la práctica psiquiátrica.282
La Conferencia Internacional sobre Medicina Islámica hizo un
comentario similar en su Declaración de Kuwait,283
que prohíbe a los médicos permitir que sus conocimientos
especiales se utilicen “para dañar, destruir o infligir daños en
el cuerpo, la mente o el espíritu, cualquiera que sea la razón
militar o política”. Se establecen disposiciones similares para las
enfermeras en la declaración de posición sobre el papel de las
enfermeras en el cuidado de los detenidos y presos.284
155. Los profesionales de la salud también tienen el deber de apoyar a los
colegas que denuncian violaciones de derechos humanos relacionadas
con la tortura. De lo contrario, no solo se corre el riesgo de infringir los
derechos de los pacientes y contravenir las declaraciones enumeradas
anteriormente, sino que también se desacredita a las profesiones de la
salud. Esto está elaborado por otras políticas de la AMM que complementan la
Declaración de Tokio. Por ejemplo, la Recomendación de la AMM sobre el
Desarrollo de un Sistema de Monitoreo y Reporte
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II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

Mecanismo para Permitir la Auditoría de la Adhesión de los Estados 156. La AMM también ha establecido la obligación ética

a la Declaración de Tokio recomienda el apoyo a los médicos y
asociaciones médicas nacionales en
sus esfuerzos para denunciar las violaciones de los derechos de
salud de los pacientes y la ética profesional de los médicos en entornos
de custodia. La AMM revisa los casos de supuestas violaciones de la
Declaración de Tokio y facilita las investigaciones de las asociaciones
de los médicos de no participar en otras prácticas abusivas que
constituyen un trato cruel y degradante y posiblemente tortura,
incluido el confinamiento solitario prolongado,290 registros
corporales forzados,291 alimentación forzada de personas competentes,
como personas en huelga de hambre,292
examen anal forzado para corroborar actividad sexual con

médicas nacionales sobre tales denuncias, incluida la posible remisión personas del mismo sexo293 y cirugía de mutilación genital femenina294
al Relator Especial sobre la tortura.285 La Declaración de Hamburgo
de la AMM sobre el apoyo a los médicos que se niegan a participar o a 157. Además, cuando los profesionales de la salud se encuentren en situaciones en las

tolerar, el uso de la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o que la ley estatal o militar o las políticas gubernamentales apoyen prácticas de

degradantes286 detención y/o interrogatorio que violen sistemáticamente el derecho internacional

y la ética médica, el profesional de la salud debe negarse a participar y denunciar

reafirma la responsabilidad de los individuos y grupos la situación a las autoridades internacionales. . Los profesionales de la salud

médicos organizados en todo el mundo de animar a los médicos a que hacen caso omiso de sus obligaciones éticas pueden convertirse en

resistir la tortura o cualquier presión para actuar en contra de los principios cómplices de prácticas de tortura y malos tratos de muchas maneras.295

éticos. Hace un llamamiento a los médicos individuales para que se

pronuncien contra la tortura y los malos tratos e insta a las organizaciones
médicas nacionales e internacionales a que apoyen a los médicos que
se resisten a tal presión. La resolución de la AMM sobre la responsabilidad 3. Códigos nacionales de ética profesional de la salud
de los médicos en la documentación y denuncia de actos de tortura o
158. Los principios éticos también se articulan a través de

tratos crueles, inhumanos o degradantes establece el deber de los códigos nacionales. Estos reflejan en gran medida los mismos
médicos de documentar y denunciar los actos de tortura y malos valores fundamentales mencionados anteriormente, ya que la

tratos y establece que el no hacerlo constituye complicidad en tales
abusos287.
Este deber se aplica a todos los médicos, gubernamentales y no
gubernamentales, dondequiera que se encuentren con presuntas
víctimas de tortura en contextos médico-legales y de cualquier otro
tipo. Otros profesionales de la salud tienen la misma obligación
ética de identificar, documentar y denunciar la tortura.288 El deber
de los médicos de documentar y denunciar la tortura y los malos
tratos respalda, en consecuencia, una excepción ética a la
confidencialidad profesional, que les permite denunciar abusos en
circunstancias limitadas. WPA y ICN han
también estableció deberes similares para los psiquiatras y
enfermeras para denunciar la tortura y los malos tratos.289
ética médica es la expresión de valores comunes entre los
profesionales de la salud. Prácticamente en todas las culturas y
códigos se dan las mismas presunciones básicas sobre los
deberes de evitar daños, ayudar a los enfermos y proteger a los
vulnerables y de no discriminar entre los pacientes por ningún otro
motivo que no sea la urgencia de sus necesidades médicas.
Idénticos valores están presentes en los códigos de la profesión
de enfermería. Sin embargo, un aspecto desafiante de los principios
éticos es que no proporcionan reglas definitivas para cada dilema,
sino que requieren alguna interpretación. Al sopesar los dilemas
éticos, es vital que los profesionales de la salud tengan en cuenta
las obligaciones morales fundamentales expresadas en sus valores
profesionales compartidos y

285 Adoptado en 2011.

286 Adoptado en 1997 y revisado en 2017.

287 Adoptado en 2003 y revisado en 2007, 2008 y 2020.

288 Por ejemplo, las enfermeras que son conscientes de los abusos y malos tratos deben tomar las medidas adecuadas para salvaguardar los derechos de los detenidos y presos. Véase CIE, “El papel de las enfermeras en el
cuidado de detenidos y presos”.

289 WPA, Pautas de consenso para exámenes médicos independientes (marzo de 2015); y CIE, “El papel de las enfermeras en el cuidado de detenidos y presos”.

290 Declaración de la AMM sobre el confinamiento solitario, adoptada en 2014 y revisada en 2019.

291 Declaración de la AMM sobre registros corporales de prisioneros, adoptada en 1993 y revisada en 2005 y 2016.

292 Declaración de Malta de la AMM sobre huelgas de hambre, adoptada en 1991 y revisada en 1992, 2006 y 2017.

293 Resolución de la AMM sobre la prohibición de exámenes anales forzados para corroborar actividad sexual entre personas del mismo sexo, adoptada en 2017.

294 Declaración de la AMM sobre la mutilación genital femenina, adoptada en 1993 y revisada en 2005 y 2016.

295 David H. Hoffman y otros, Revisión independiente relacionada con las pautas de ética de la APA, los interrogatorios de seguridad nacional y la tortura (Chicago, Sidley Austin, 2015). La Asociación Estadounidense de Psicología
(APA), la asociación de psicólogos más grande del mundo, prohibió la presencia de psicólogos en los interrogatorios de seguridad nacional, ver Asociación Estadounidense de Psicología, Consejo de Representantes,
resolución para enmendar las resoluciones del Consejo de 2006 y 2013 para aclarar los roles de psicólogos relacionados con el interrogatorio y el bienestar de los detenidos en entornos de seguridad nacional, para seguir
implementando la resolución de la petición de 2008 y para proteger contra actos de tortura y tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes en todos los entornos, adoptada en 2015.

35
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
que los implementen de una manera que refleje el deber
básico de evitar daños a sus pacientes.296
C. Aplicación de los principios éticos
en las evaluaciones clínicas de la
tortura y los malos tratos
159. Los códigos de conducta de los profesionales de la salud comparten una
serie de principios básicos. Los principios éticos más relevantes para las
evaluaciones clínicas de presuntos o presuntos casos de tortura o malos
tratos son actuar en el mejor interés de los pacientes (beneficencia), “no
hacer daño” (no maleficencia), respetar las decisiones de los pacientes
(autonomía ) y mantener la confidencialidad de la información compartida
en encuentros con profesionales de la salud. En los últimos años, la AMM
y las Reglas Nelson Mandela han establecido la
obligación ética de los médicos y otro personal médico
de documentar y denunciar actos de tortura y malos tratos
en determinadas circunstancias. Tiempo
estos principios éticos pueden reforzarse y apoyarse
mutuamente en una evaluación clínica de presuntas torturas
o malos tratos, pueden entrar en conflicto y, por lo tanto,
presentar un desafío para los profesionales de la salud. La
presente sección revisa la aplicación de los principios éticos
fundamentales en las evaluaciones clínicas de los casos en
los que se alega o sospecha tortura o malos tratos.
1. Beneficencia y no maleficencia
160. El deber de los médicos de actuar en el mejor interés del paciente y de no
dañarlo ha sido reconocido durante siglos en una serie de códigos, incluido
el Charaka Samhita, un código hindú que data del siglo I d.C., la Declaración
de Kuwait , la Oración de Maimónides y el Juramento Hipocrático.
La Declaración de la AMM de Ginebra297 es una
reafirmación moderna de los valores hipocráticos que reflejan
cuatro principios fundamentales: beneficencia, no maleficencia,
confidencialidad y respeto por la autonomía del paciente. Es una
promesa por la cual los médicos se comprometen a hacer de la
salud de sus pacientes su principal consideración y se
comprometen a dedicarse al servicio de la humanidad con
conciencia y dignidad. Estos fundamentos
296 Esto es reconocido por la AMM en la revisión periódica (como mínimo cada 10 años) de sus políticas para garantizar que sigan siendo lo suficientemente detalladas y claras para guiar la toma de decisiones
de los médicos. Las actualizaciones aclaran el lenguaje y buscan abordar asuntos que no fueron cubiertos por borradores anteriores.
297 Adoptado en 1948 y revisado en 1968, 1983, 1994, 2005, 2006 y 2017.
298 WPA, Declaración de Hawai (1983) y Declaración de Madrid; y CIE, Código ético para enfermeras del CIE (adoptado en 1953 y revisado por última vez en 2012).
299 Adoptado en 1949 y revisado en 1968, 1983 y 2006.
300 Adoptado en 2008 y revisado en 2018.
301 Adoptado en 1981, revisado en 1995, 2005 y 2015.
36
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
Los principios éticos también están reconocidos por la
WPA y el CIE y se aplican a psiquiatras y enfermeras.298
161. En los casos de presunta tortura o malos tratos, el
el interés superior del paciente o de la presunta víctima
suele ser coherente con el propósito de la evaluación
clínica, es decir, la documentación eficaz de la tortura y los
malos tratos, que puede corroborar las denuncias de abuso
de una persona.
162. La obligación ética de beneficencia se refleja en muchas
declaraciones de la AMM, que aclaran que los médicos
siempre deben hacer lo mejor para el paciente, incluidas
las personas acusadas o condenadas por delitos. Este
deber de beneficencia también se expresa a través de la
noción de independencia profesional, que requiere que los
médicos se adhieran a prácticas médicas buenas y
aceptadas a pesar de cualquier presión que puedan ejercer.
El Código Internacional de Ética Médica de la AMM enfatiza
el deber de los médicos de brindar atención con total
independencia profesional y moral, con compasión y respeto
por la dignidad humana.299 También contiene el deber de
negarse a utilizar el conocimiento médico para violar los
derechos humanos, incluso bajo amenaza. La política vigente
de la AMM, como la Declaración de Tokio o la Declaración de
Seúl sobre autonomía profesional e independencia clínica,300
es inequívoca en cuanto a que los médicos deben insistir en
ser libres para actuar en interés de los pacientes,
independientemente de otras consideraciones, incluidas las
instrucciones de los empleadores, autoridades penitenciarias o
fuerzas de seguridad. Se prescriben principios similares para
las enfermeras en el Código de Ética para Enfermeras del CIE.
163. Otra forma en que la AMM expresa los deberes de los
médicos es mediante el reconocimiento de los derechos
de los pacientes. Su Declaración de Lisboa sobre los
derechos del paciente301 reconoce que toda persona tiene
derecho, sin discriminación, a una atención sanitaria
adecuada y reitera que los médicos deben actuar siempre
en el mejor interés del paciente. Según la Declaración, esto
incluye los esfuerzos de los médicos y otras personas u
organismos involucrados en la prestación de atención médica
para defender los derechos de los pacientes, incluida la
autonomía y la justicia. La Declaración establece en su
preámbulo: “Cuando la legislación, la acción del gobierno o
cualquier otra administración o institución niegue a los pacientes
Machine Translated by Google
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
estos derechos, los médicos deben buscar los medios
apropiados para asegurarlos o restaurarlos”. Individuos
tienen derecho a una atención médica adecuada,
independientemente de factores como su raza, color,
origen nacional, étnico o social, idioma, edad, sexo,
género, orientación sexual e identidad de género, estado
migratorio, opinión política o de otro tipo, religión,
ascendencia, nacimiento, invalidez, estado de salud,
mérito individual, etc. Las personas acusadas o condenadas
por delitos tienen igual derecho moral a la atención médica
y de enfermería adecuada. La Declaración enfatiza que el
único criterio aceptable para discriminar entre pacientes es
la relativa urgencia de sus necesidades médicas.
164. Cuando se trabaja con niños y jóvenes, es importante
recordar que: “Las organizaciones tienen el deber de
cuidar a los niños con los que trabajan, están en contacto o
se ven afectados por su trabajo y operaciones.”302 El
principio de salvaguardar a los niños incluye garantizar que
los niños estén protegidos contra daños y que no estén
expuestos al riesgo de daño y que cualquier riesgo de este
tipo se informe y se aborde de inmediato.
2. Consentimiento informado
165. El principio más fundamental de la ética médica es la autonomía del
paciente. La autonomía reconoce que los propios pacientes son los
mejores jueces de sus propios intereses. Esto requiere que los profesionales
de la salud se adhieran a las decisiones de un paciente adulto en lugar de a
las opiniones de cualquier persona con autoridad sobre lo que sería mejor
para ese individuo. Esto es igualmente cierto en el contexto de las evaluaciones
clínicas de presuntas torturas o malos tratos que pueden dar lugar a
represalias y causar daños físicos y/o mentales graves. En los casos en que
el paciente esté inconsciente o se hayan realizado esfuerzos importantes y
no sea posible obtener el consentimiento libre e informado de una persona.
o para determinar su voluntad y preferencias, incluso a
través de la provisión de apoyo y adaptaciones, se debe
aplicar el estándar de “mejor interpretación de la voluntad y
preferencia” como último recurso.
166. Las organizaciones de profesionales de la salud, como WMA, WPA e ICN, las
Reglas de Bangkok y las Reglas de Nelson Mandela exigen que los médicos
y enfermeras respeten las decisiones autónomas de sus pacientes y obtengan
el consentimiento voluntario e informado de los pacientes antes de cualquier
examen o procedimiento. Esto significa que las personas necesitan saber y
comprender
302 Manteniendo la seguridad de los niños, Normas internacionales de salvaguardia infantil... y cómo implementarlas (2014/2020), pág. 10
303 A/64/272, párr. 18
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
las implicaciones de aceptar y las consecuencias de
negarse, así como cualquier alternativa razonable.
Antes de examinar a los pacientes, los profesionales de la
salud deben, por lo tanto, explicar con franqueza y de
manera accesible el objetivo del examen y del tratamiento. El
consentimiento obtenido bajo coacción o como resultado de
la transmisión de información falsa o parcial al paciente no es
válido, y los médicos que actúan en consecuencia infringen la
ética médica. Además, el Relator Especial sobre el derecho
de toda persona al disfrute del más alto nivel posible de salud
física y mental observó que garantizar el consentimiento
informado es una característica fundamental del respeto de la
autonomía, la libre determinación y la dignidad humana de
una persona en un proceso continuo adecuado de voluntad
voluntaria. servicios de salud.303
167. La tortura y los malos tratos, por definición, son delitos cometidos por
funcionarios del Estado o con su consentimiento o aquiescencia. Los
funcionarios estatales a menudo intentan ocultar estos delitos amenazando
a las víctimas con torturas y malos tratos adicionales si revelan cualquier
información de abuso a alguien, incluidos los médicos evaluadores. En el
contexto de las evaluaciones médico-legales de presuntas torturas y malos
tratos, el consentimiento informado es imperativo. El consentimiento informado
requiere la divulgación de toda la información material, incluido el propósito
de la evaluación, los riesgos y beneficios potenciales, la naturaleza de la
evaluación, incluida la posibilidad de tomar fotografías, los límites de
confidencialidad, como cualquier requisito de informe obligatorio del médico,
cómo la información recopilados en las evaluaciones serán utilizados y
almacenados y quiénes tendrán acceso a la información.
168. El consentimiento debe confirmarse una vez más en la
final de la entrevista después de la revelación de
información específica por parte de la presunta víctima
y antes de la evaluación clínica. El consentimiento
informado requiere que los pacientes y las presuntas
víctimas entiendan la información proporcionada,
discutiendo a fondo la información más importante, que
puede requerir traducción o interpretación, y que brinden
su consentimiento voluntariamente. La información
proporcionada por el médico debe ser accesible y
comprensible, lo que significa que, cuando sea necesario,
la información debe estar disponible en medios, modos y
formatos de comunicación accesibles, y se deben
proporcionar ajustes razonables, como la toma de decisiones
con apoyo. Como se analiza más adelante en el párrafo
273, el consentimiento informado debe solicitarse desde el principio.
37
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
de todas las evaluaciones clínicas de supuestas o
presuntas torturas o malos tratos y debidamente documentadas.
169. Siempre se supone que los pacientes adultos son competentes para tomar
decisiones por sí mismos. Los profesionales de la salud tienen la obligación de
reconocer y respetar la capacidad jurídica de todos los adultos, incluidas las
personas con discapacidad y las personas cuya capacidad mental se ha visto
afectada, y esto incluye el respeto por el consentimiento libre e informado de
la persona. Los esfuerzos deben
ser tomado por los profesionales de la salud para comunicarse
de una manera que sea accesible y comprensible para
el individuo. Esto puede implicar hacer que la información esté
disponible en formatos accesibles, proporcionando interpretación
en lenguaje de señas o mediante la provisión de apoyo para la
toma de decisiones. En situaciones en las que se han realizado
esfuerzos significativos y no es posible obtener el consentimiento
libre e informado del individuo, los profesionales de la salud no
deben recurrir a sustituir la decisión del individuo con base en una
determinación
de “interés superior”, sino que debe tomar como último
recurso el estándar de “mejor interpretación de la voluntad y
preferencias”.304 Este estándar implica determinar lo que el
individuo hubiera querido en lugar de
decidir sobre la base de sus mejores intereses. El proceso
debe incluir la consideración de las preferencias, valores, actitudes,
narraciones y acciones previamente manifestadas, incluida la
comunicación verbal y no verbal, del individuo en cuestión.305
170. Quienes sean menores de edad en el momento de la toma de decisiones pueden
dar su consentimiento, ya que el consentimiento no tiene una edad específica
en la que sea válido. La capacidad de los niños para dar su consentimiento se
desarrolla a medida que aprenden a tomar decisiones cada vez más complejas
y serias y, como tal, puede relacionarse con la experiencia más que con la
edad. Por lo tanto, se debe informar a los niños de la manera más completa
posible sobre la evaluación y los procedimientos relacionados de manera que
puedan entender, asegurando información y comunicación accesibles y
ajustando la comunicación a su edad y desarrollo. En muchos casos, dado
304 Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, Observación general No. 1 (2014), párr. 21
305 A/HRC/37/56, párr. 31
306 Real Colegio de Pediatría y Salud Infantil: Comité Asesor de Ética, “Pautas para la conducta ética de la investigación médica con niños”, Archives of Disease en
Infancia, vol. 82 (2000), págs. 177–182.
307 Pirkko Lepola y otros, “Consentimiento informado para ensayos clínicos pediátricos en Europa”, Archives of Disease in Childhood, vol. 101 (2016), págs. 1017–1025.
308 Real Colegio de Pediatría y Salud Infantil, “Pautas para la conducta ética de la investigación médica con niños”.
309 Grupo de Expertos Forenses Independientes, “Declaración sobre las pruebas de virginidad”, Torture Journal, vol. 25, núm. 1 (2015), págs. 62 a 68; y “Declaración sobre exámenes anales en casos
de presunta homosexualidad”, Torture Journal, vol. 26, núm. 2 (2016), págs. 85–91.
38
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
la complejidad de comprensión para una evaluación médico-
legal, se requerirá o recomendará informar a los padres y
solicitar su consentimiento, sin embargo, el consentimiento de
los padres no será válido si se otorga en contra del interés
superior del niño.306 Además, la edad bajo la cual los padres /los
tutores legales deben ser informados sobre cualquier participación
o procedimiento que involucre al niño bajo su cuidado varía entre
países.307 Por lo tanto, existe la necesidad de estar informados
sobre las obligaciones legales locales en términos del consentimiento
informado de los niños y elegir los procesos que están en el interés
superior del niño. Es importante recordar que el consentimiento
informado no exime a los profesionales de la salud del deber de
salvaguardar a los niños y su interés superior. Este deber requiere
que los profesionales de la salud se aseguren de identificar
cualquier riesgo potencial inmediato y a largo plazo para un niño
como resultado de una evaluación.
y considerado antes de solicitar el consentimiento y llevar a
cabo dicha evaluación.308 Los niños que aún no son capaces
de comprender su situación y sus alternativas desde el punto
de vista del desarrollo deben tener la oportunidad de aceptar el
tratamiento o expresar sus deseos de otra manera, como parte
de su derecho básico a ser Escuchó.
171. Se debe respetar la autonomía de las personas que se niegan a dar su
consentimiento para una evaluación y en ningún caso se les debe obligar a
cumplir con una evaluación. En algunos casos, se debe presumir que los
exámenes clínicos se realizan por la fuerza y sin el consentimiento
informado cuando se basan en una profunda discriminación y criminalización
y en situaciones en las que las víctimas entienden que el Estado
los funcionarios tienen el poder de obligarlos a someterse a un
examen y es probable que el incumplimiento tenga como resultado
resultados legales adversos, malos tratos o represalias.
Exámenes forzados del himen para detectar la virginidad y
examen anal forzado de individuos para detectar la misma
actividad sexual son ejemplos de tales exámenes clínicos: no
tienen valor clínico, representan formas de agresión sexual y
constituyen malos tratos y pueden equivaler a tortura dependiendo
de las circunstancias individuales.309
Machine Translated by Google
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES PROTOCOLO DE ESTAMBUL

3. Confidencialidad D. Profesionales de la salud

con obligaciones en conflicto
172. Códigos éticos, del Juramento Hipocrático al

los tiempos modernos, incluyen el deber de confidencialidad 173. Los profesionales de la salud pueden tener responsabilidades en

como principio fundamental. La confidencialidad también conflicto debido a sus circunstancias de empleo y/o tener

ocupa un lugar destacado en las declaraciones de la AMM, obligaciones éticas en conflicto relacionadas con el entorno de su encuentro con

como la Declaración de Lisboa, así como las Reglas de el paciente. En el caso de los profesionales de la salud empleados en

Nelson Mandela. En algunas jurisdicciones, la obligación de instituciones del Estado, en particular los que trabajan con la policía, el ejército,

confidencialidad se considera tan importante que se incorpora otros servicios de seguridad o en el sistema penitenciario, los intereses de su

a la legislación nacional. El deber de confidencialidad no es empleador y sus colegas no médicos pueden entrar en conflicto con los mejores

absoluto y puede incumplirse éticamente en circunstancias intereses de la detenido/paciente. Cualesquiera que sean las circunstancias de

excepcionales en las que previsiblemente su incumplimiento su empleo, todos los profesionales de la salud tienen el deber fundamental de

supondrá un perjuicio grave para el paciente o para terceros. En actuar en el mejor interés de las personas a las que examinan y tratan. No

general, sin embargo, el deber de confidencialidad que cubre la pueden verse obligados por consideraciones contractuales o de otro tipo a

información de salud personal identificable puede anularse solo incumplir sus obligaciones éticas fundamentales o comprometer su independencia

con la autorización informada del paciente.310 profesional. Deben hacer una evaluación imparcial de los intereses de salud del

paciente y actuar en consecuencia. Además, los profesionales de la salud

La información no identificable se puede utilizar para pueden tener obligaciones éticas en conflicto, en el sentido de que tienen el

otros fines y debe utilizarse preferentemente en todas las deber principal para con el paciente de promover los mejores intereses de esa

situaciones en las que la divulgación de la identidad del persona y el deber general para con la sociedad de garantizar que se haga

paciente no sea esencial. Este puede ser el caso, por justicia y se prevengan las violaciones de los derechos humanos. En tales

ejemplo, en la recopilación de datos sobre patrones de circunstancias, la principal obligación ética de los profesionales de la salud es

tortura o malos tratos, aunque se requiere un cuidado actuar en el mejor interés de sus pacientes. En situaciones en las que se ejerza

especial para obtener dichos datos. Los dilemas surgen presión institucional sobre un profesional de la salud, deben asegurarse de tener

cuando los profesionales de la salud son presionados o están mecanismos para resistir dicha presión, informarlo a su cuerpo profesional y

obligados por ley a revelar información identificable que podría escalar sus preocupaciones sobre la salud de sus

poner a los pacientes en riesgo de daño.

En tales casos, las obligaciones éticas fundamentales son
respetar la autonomía y la privacidad del paciente y evitar
daños. Esto reemplaza otras consideraciones. Los
profesionales de la salud deben dejar claro al tribunal oa la
autoridad que solicita información que están sujetos a
deberes profesionales de confidencialidad a pesar de la
posible responsabilidad legal. Los profesionales de la salud pacientes si no se siguen sus recomendaciones.312
que respondan de esta manera tienen derecho al apoyo de
su asociación profesional y colegas. Además, durante los 1. Principios que guían a los profesionales de
períodos de conflicto armado, el derecho internacional la salud con obligaciones en conflicto
humanitario brinda una protección específica a la confidencialidad
médico-paciente, exigiendo que los médicos no denuncien a 174. En todos los casos en que los profesionales de la salud actúen por cuenta ajena,

personas enfermas o heridas.311 tienen la obligación de asegurarse de que ésta sea comprendida por el paciente.

Los profesionales de la salud deben identificarse ante los pacientes y explicar

Los profesionales de la salud no pueden ser obligados a revelar el propósito de cualquier examen o tratamiento. Incluso cuando los profesionales

información sobre sus pacientes en tales situaciones, de la salud son designados y pagados

particularmente en situaciones de conflicto armado.

310 Excepto por los requisitos comunes de salud pública, como el informe por nombre de personas, por ejemplo, con enfermedades infecciosas, adicción a las drogas o trastornos mentales, y
actos de violencia como homicidio, violencia doméstica, agresión sexual y abuso de niños y ancianos.
311 Protocolo I (art. 16) y Protocolo II (art. 10) Adicional a los Convenios de Ginebra de 1949.
312 Facultad de Medicina Legal y Forense del Royal College of Physicians, Estándares de calidad para profesionales de la salud que trabajan con víctimas de tortura en detención
(Londres, 2019, revisado 2022).

39
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
por un tercero, conservan el claro deber de respetar sus
obligaciones éticas fundamentales. Deben negarse a cumplir
con cualquier procedimiento que pueda dañar a los pacientes
o dejarlos física o psicológicamente vulnerables al daño. Deben
asegurarse de que sus términos contractuales les permitan la
independencia profesional para hacer juicios clínicos. Los
profesionales de la salud deben garantizar que cualquier persona
bajo custodia tenga acceso a cualquier examen médico y
tratamiento que necesite. en situaciones
en que el detenido es menor de edad o vulnerable
adulto, los médicos tienen deberes adicionales para actuar
como defensores. Los profesionales de la salud conservan un
deber general de confidencialidad, por lo que la información no
debe divulgarse sin el conocimiento del paciente. Deben
asegurarse de que sus registros médicos se mantengan confidenciales.
Los profesionales de la salud tienen el deber de monitorear
y denunciar cuando los servicios en los que participan son
poco éticos, abusivos, inadecuados o representan una amenaza
potencial para la salud de los pacientes. En tales casos, tienen
el deber ético de actuar con prontitud, ya que el no tomar una
posición inmediata dificulta la protesta en una etapa posterior.
Deben denunciar el asunto a las autoridades competentes oa
los organismos internacionales que puedan investigar, pero sin
exponer a los pacientes, a sus familias ni a ellos mismos a
ningún riesgo de daño grave previsible. Los profesionales de la
salud y las asociaciones profesionales deben apoyar a los
colegas que toman tales medidas sobre la base de pruebas
razonables.
2. Dilemas derivados de obligaciones en conflicto
175. Pueden surgir dilemas cuando la ética y la ley están en
contradicción. Las circunstancias pueden surgir en situaciones
en el que los deberes éticos de los profesionales de la salud
les obligan a no obedecer una ley en particular, como la
obligación legal de revelar información médica confidencial
sobre un paciente o participar en prácticas nocivas. Existe
consenso en las declaraciones de preceptos éticos internacionales
y nacionales de que otros imperativos, incluido el derecho, no
pueden obligar a los profesionales de la salud a actuar en contra
de la ética médica y de su conciencia. En tales casos, los
profesionales de la salud deben negarse a cumplir con la ley o
un reglamento en lugar de comprometer los preceptos éticos
básicos o exponer a los pacientes a daños.
176. En algunos casos, dos obligaciones éticas pueden estar en
conflicto. Los códigos y principios éticos internacionales
exigen que la información relativa a la tortura o los malos
tratos se informe a un organismo responsable. En algunos
313 Penal Reform International y el Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Essex, Essex Paper 3: Initial Guidance on the Interpretation and Implementing of the UN Nelson
Reglas de Mandela (Londres, 2017).
40
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
jurisdicciones, esto también es un requisito legal. En algunos
casos, sin embargo, los pacientes pueden negarse a dar su
consentimiento para ser examinados con tales fines o para que
la información obtenida del examen se divulgue a otros. Pueden
temer los riesgos de represalias para ellos o sus familias. En
tales situaciones, los profesionales de la salud tienen
responsabilidades en conflicto: con el paciente y con la sociedad
en general, que tiene interés en prevenir la tortura y los malos
tratos y garantizar que los perpetradores de abusos sean
llevados ante la justicia.
177. Como se indicó anteriormente, la regla 32 (1) (c) de la Nelson
Las Reglas Mandela exigen la confidencialidad de la información
médica “a menos que mantener tal confidencialidad resulte en
una amenaza real e inminente para la salud”.
paciente o a los demás”. Además, la regla 34 establece
que toda señal de tortura o malos tratos debe ser comunicada
a la “autoridad médica, administrativa o judicial competente” y
que: “Se observarán las debidas garantías procesales a fin de
no exponer al recluso o a las personas asociadas a riesgo
previsible de daño”. La regla 71 exige que los directores de
prisiones informen sobre la tortura y los malos tratos a una
“autoridad competente que sea independiente de la
administración penitenciaria y tenga el mandato de realizar
investigaciones rápidas, imparciales y efectivas sobre las
circunstancias y causas de tales casos”. Se ha señalado que la
excepción a la confidencialidad en la regla 32 (1) (c) debe
entenderse en sentido estricto y no como aplicable a todo el
expediente médico. Más bien, requiere una evaluación de qué
piezas específicas de información deben comunicarse y a qué
nivel en función de la “necesidad de saber”.313
La AMM ha brindado orientación a los médicos sobre las
circunstancias en las que se pueden considerar violaciones
de la confidencialidad, por ejemplo, cuando se cree que el
daño es inminente, grave (e irreversible), inevitable excepto
por una divulgación no autorizada y mayor que el daño que
probablemente resulte de la divulgación. .
Al determinar la proporcionalidad de estos daños respectivos, el
médico debe evaluar y comparar la gravedad de los daños y la
probabilidad de que se produzcan.
ocurrencia. En caso de duda, la AMM recomienda que los
médicos busquen asesoramiento de expertos. También recomienda
que la divulgación debe contener solo la información necesaria
para prevenir el daño anticipado y debe estar dirigida solo a
aquellos que necesitan la información para evitar el daño, que el
médico informe al paciente de la divulgación de información,
explique el motivo de la revelación y busque la cooperación del
paciente si es posible. Pasos razonables
Machine Translated by Google
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
deben tomarse para minimizar el daño y la ofensa
al paciente que pueda derivarse de la divulgación. Se
recomienda que los médicos informen a sus pacientes que la
confidencialidad podría violarse para su propia protección y la de
cualquier víctima potencial. Si es posible, se debe contar con la
cooperación del paciente.
178. Al aplicar esta guía al contexto de las evaluaciones clínicas de casos
presuntos o presuntos de tortura o malos tratos, los profesionales de la
salud deben equilibrar el deber de no dañar a la presunta víctima y el de
prevenir daños potenciales a otras personas que de otro modo podrían
estar sujetas. a prácticas de tortura sin control. Antes de que los
profesionales de la salud consideren la posibilidad de violar la
confidencialidad sin el consentimiento de la presunta víctima, el profesional
de la salud debe creer razonablemente que:
(a) Es razonablemente cierto que se producirá un daño grave o
potencialmente mortal a otras personas de manera inminente (no solo
previsible y probable) si el profesional de la salud no toma medidas;
(b) La divulgación de información prevendrá daños razonablemente
ciertos e inminentes graves o potencialmente mortales a otros;
(c) Tanto el médico como la presunta víctima consideran que el riesgo de
represalias para las presuntas víctimas es bajo;
d) Hay suficiente evidencia clínica, como lesiones observadas y/o
angustia psicológica, para justificar una sospecha de tortura o malos
tratos;
(e) La información se puede proporcionar a un organismo independiente
que llevará a cabo una investigación rápida, imparcial y efectiva de las
circunstancias.
179. Los profesionales de la salud deben buscar todas las oportunidades para
garantizar la seguridad de la presunta víctima y que no vuelva a ser torturada.
Dadas estas consideraciones, las circunstancias en las que los profesionales
de la salud pueden incumplir el deber de confidencialidad son limitadas. Por
ejemplo, los médicos que observan evidencia de patrones de abuso pueden
reportar información anónima a un organismo independiente si pueden hacerlo
sin desencadenar represalias contra la víctima de la tortura. Los médicos que
trabajan en prisiones, lugares de detención, instituciones forenses y organismos
de supervisión nacionales (por ejemplo, instituciones nacionales de derechos
humanos y mecanismos nacionales de prevención) e internacionales pueden
estar en posición de observar evidencia de patrones de abuso y reportar
información anónima, evitando así posibles daños. a
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
otros. Sin embargo, un médico que examina a una presunta
víctima que teme represalias y se niega a dar su consentimiento
para una evaluación clínica no debe violar los deberes éticos
primarios de “no hacer daño” y el respeto a la autonomía sobre
la obligación de documentar e informar.
180. La capacidad del clínico para respetar la autonomía y
la confidencialidad establece una base para la confianza que
es esencial para realizar una evaluación eficaz de las pruebas
físicas y psicológicas de tortura y malos tratos. Si bien las
obligaciones éticas de los médicos son las mismas en todos los
encuentros con pacientes y presuntas víctimas, la capacidad de
una persona para ejercer su libre elección sobre la divulgación de
información puede depender de las circunstancias de la
evaluación. Por ejemplo, en entornos terapéuticos y evaluaciones
médico-legales realizadas por médicos independientes no
gubernamentales a pedido de la presunta víctima, generalmente
no existen requisitos obligatorios de notificación.
En tales circunstancias, las personas suelen considerar
que las evaluaciones clínicas de la tortura y los malos tratos son
en su mejor interés y la capacidad del médico para respetar
la autonomía y la confidencialidad establece una base para
la confianza y, en consecuencia, la divulgación de la información.
Documentar y denunciar la tortura y los malos tratos en tales
encuentros es completamente apropiado siempre que se brinde
el consentimiento informado.
181. Si bien los profesionales de la salud en las instituciones del Estado tienen
las mismas obligaciones éticas que los demás profesionales de la salud,
en algunas instituciones del Estado las condiciones de sus evaluaciones
pueden dificultar el establecimiento de confianza con los pacientes y
presuntas víctimas.
Los empleados estatales, en particular los expertos
forenses y los que trabajan con la policía, el ejército u otros
servicios de seguridad o en el sistema penitenciario, a
menudo tienen requisitos de presentación de informes
obligatorios. En tales entornos, las personas pueden tener un
poder y elección limitados en la evaluación y es posible que no
deseen hablar abiertamente sobre el presunto abuso por temor
a represalias contra ellos o sus familiares. Los profesionales
sanitarios en estas circunstancias deben, no obstante, cumplir
con sus obligaciones éticas y hacer todo lo posible para facilitar
la confianza y la compenetración con el paciente/detenido.
Como se indicó en los párrafos 166 y 167 anteriores, antes de
comenzar cualquier evaluación, el médico debe identificarse,
informar a la persona sobre el propósito y el contenido de la
evaluación y divulgar los requisitos obligatorios de información.
Es posible que las regulaciones no permitan que el paciente
rechace el examen, pero el paciente tiene la opción de elegir si
coopera con la evaluación y/o revela la causa de cualquier
lesión. En tales casos, el médico debe respetar la decisión del
paciente,
41
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
incluida la decisión de no cooperar con la evaluación. Los
médicos no deben examinar a las personas
para el tribunal sin el consentimiento del individuo
independientemente de la ley. Los médicos forenses no pueden
falsificar sus informes, pero deben proporcionar evidencia
imparcial, lo que incluye aclarar en sus informes cualquier
evidencia de maltrato.314 Si el detenido no da su consentimiento
para la evaluación (o cualquier parte de la evaluación) o su
documentación, el médico debe documentar el motivo de la falta
de consentimiento (véase también el párr. 273).
182. Como se indicó anteriormente, los profesionales de la salud también deben
tener en cuenta que denunciar el abuso a las autoridades en cuya jurisdicción
se alega que ocurrió puede implicar un riesgo de daño para el paciente o
para otros, incluido el denunciante. Los profesionales de la salud deben
314 Vincent Iacopino y otros, “Complicidad del médico en tergiversación y omisión de pruebas de tortura en exámenes médicos posteriores a la detención en Turquía”, Journal of
the American Medical Association, vol. 276, núm. 5 (1996), págs. 396–402.
42
II. CÓDIGOS ÉTICOS RELEVANTES
no poner a sabiendas a las personas en peligro de represalias.
No están exentos de tomar medidas, pero deben ser discretos y
deben considerar reportar la información a un organismo
responsable fuera de la jurisdicción inmediata o, en situaciones en
las que esto no suponga riesgos previsibles para los profesionales
de la salud y los pacientes, reportarlo de una manera no
identificable. manera.
Evidentemente, si se toma esta última solución, los
profesionales de la salud deben tener en cuenta la probabilidad
de que se les presione para que revelen datos de identificación
o la posibilidad de que sus registros médicos sean confiscados
por la fuerza. Si bien no existen soluciones fáciles, los
profesionales de la salud deben guiarse por el mandato básico
de evitar daños por encima de todas las demás consideraciones
y buscar el asesoramiento, cuando sea posible, de organismos
profesionales de la salud nacionales o internacionales.
Machine Translated by Google

Investigación
judicial de la
tortura y los malos tr
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
183. La Convención contra la Tortura contempla tres pilares fundamentales en la
lucha contra la tortura: la obligación de los Estados de hacer justicia y de
prevenir y reparar todo acto de tortura. La obligación de investigar es
fundamental para la realización de los tres pilares principales.315
El Relator Especial sobre la tortura precisó que:
La obligación de investigar los actos de tortura se inicia
por la existencia de motivos razonables. Las pruebas de
tortura que alcanzan el nivel de “prueba” en los procesos
penales (es decir, más allá de una duda razonable) no
deberían ser necesarias para establecer el reconocimiento
y la responsabilidad del Estado por la tortura o para
desencadenar las obligaciones que no implican la
asignación de culpabilidad y castigo individuales. , tales
como la implementación de políticas públicas de prevención
y reparación administrativa o civil, incluida la rehabilitación.
Esto es importante porque los Estados a menudo afirman que
la tortura y sus correspondientes obligaciones para abordarla
no existen porque la tortura nunca ha sido “probada” en los
tribunales.316
184. Los Estados están obligados por el derecho internacional a
investigar los incidentes de tortura denunciados con prontitud,
imparcialidad y eficacia.317 En situaciones en las que las pruebas
lo justifiquen, un Estado dentro de cuya jurisdicción se encuentre una
persona que presuntamente haya cometido o participado en la tortura
debe someter el caso a sus propias autoridades competentes con el
fin de investigación y enjuiciamiento de conformidad con las leyes
penales nacionales o locales, a menos que extradite al presunto
perpetrador a otro Estado que tenga jurisdicción competente.318 Los
principios fundamentales de cualquier investigación viable sobre
incidentes de tortura son competencia, imparcialidad, independencia,
recursos adecuados, prontitud, eficacia, minuciosidad , sensibilidad al
género, edad, discapacidad y características reconocidas de manera
similar, participación de las víctimas y escrutinio público. Estos
elementos pueden adaptarse a cualquier sistema legal y deben guiar
todas las investigaciones de presuntas torturas.
315 A/69/387, párr. 21
316 Ibíd., párr. 25
317 Convención contra la Tortura, arts. 12–13. Véase también A/69/387, párrs. 22–28.
318 Convención contra la Tortura, arts. 5–8.
319 Véase, entre otros, Estatuto de Roma, arts. 8 (2) (a) (ii) y (c) (i), 7 (1) (f) y 6 (b).
320 ACNUDH, Comisiones de investigación y misiones de determinación de hechos sobre derechos humanos internacionales y derecho humanitario: orientación y práctica (Nueva York y Ginebra, 2015).
321 Convención contra la Tortura, art. 2; y Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párr. 2.
322 A/69/387, párr. 67.
323 Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párrs. 8–11.
324 A/HRC/4/33, párrs. 41–47.
325 Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párr. 5; y observación general No. 3 (2012), párr. 38.
326 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Barrios Altos v. Perú (ver nota al pie 102); y Barrios Altos y La Cantuta c. Perú (ver nota al pie 103). Véase también Comité contra
Tortura, Urra Gurridi c. España (CAT/C/34/D/212/2002), párr. 6.7.
44
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
185. Las investigaciones pueden revestir la forma de
investigación de actos específicos de tortura, en particular los
definidos en el artículo 1 de la Convención contra la Tortura o la
tortura como elemento de los crímenes de guerra, crímenes de lesa
humanidad o genocidio, u otras formas de trato o pena cruel, inhumano
o degradante (malos tratos) .319 La investigación de tales actos
también puede estar dentro del mandato de las instituciones nacionales
de derechos humanos, las misiones de investigación o las comisiones
de investigación, que ejercen importantes funciones de investigación.320
La evidencia de tortura es relevante, y a menudo de importancia
crítica, en una variedad de procedimientos judiciales, por ejemplo:
investigaciones de derecho civil y público, demandas relativas a
reparación por tortura, solicitudes de asilo y no devolución,
procedimientos de denuncia de derechos humanos nacionales,
regionales e internacionales, y procesos penales, incluida la exclusión
de pruebas obtenidas como resultado de tortura. Independientemente
del contexto legal en el que tenga lugar, a fin de combatir la impunidad,
cualquier investigación u otro procedimiento para establecer los
hechos y la responsabilidad por la tortura o los malos tratos debe
llevarse a cabo de conformidad con las normas establecidas en este
manual. .
186. Según la Convención contra la Tortura, los Estados deben
adoptar medidas legislativas, institucionales, administrativas,
presupuestarias y de otro tipo para garantizar que se establezca un
marco adecuado para investigaciones rápidas, imparciales,
independientes, eficaces y que tengan en cuenta las cuestiones de
género y los niños.321 El Relator Especial sobre la tortura ha
recomendado adoptar e implementar el manual “como herramienta y
estándar de investigación”.322
Los Estados están obligados a tipificar la tortura como un delito
específico en la legislación nacional, que está sujeta a penas
proporcionadas que reflejen la gravedad del delito;323
establecer jurisdicción sobre el delito de tortura, incluso
previendo el ejercicio del principio de jurisdicción universal;324 y
eliminar barreras legales, tales como amnistías, inmunidades, plazos
de prescripción u otras restricciones procesales,325 incluidos indultos
u otras medidas que resulten en impunidad.326
Los Estados deben garantizar los derechos de las víctimas y
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
testigos en todas las etapas de la investigación, incluido el derecho
a presentar denuncias, a participar en los procedimientos, a ser
protegido de amenazas y hostigamientos,327
a que se respete su derecho a la intimidad, así como el
derecho a un recurso efectivo y a la reparación.
La reparación debe estar orientada a la víctima, ser sensible al
género, adecuada, efectiva, rápida e integral, adaptada a las
necesidades particulares de la(s) víctima(s) y proporcional a la
gravedad del daño sufrido.328
187. En situaciones en que los procedimientos de investigación
son inadecuados debido a la falta de recursos o
experiencia, la apariencia de parcialidad, la aparente
existencia de un patrón de abuso u otras razones
sustanciales, los Estados deben realizar investigaciones a
través de un órgano o mecanismo independiente, como una
comisión de investigación o un procedimiento similar. Los
miembros de dicho órgano deben ser elegidos por su reconocida
imparcialidad, competencia e independencia como personas. En
particular, deben ser independientes de cualquier institución,
organismo o persona que pueda ser objeto de la investigación.
Los órganos de investigación, como las comisiones de
investigación, deben contar con los recursos financieros y
humanos adecuados.329
188. El derecho internacional reconoce el importante papel en
las investigaciones de actores distintos de los órganos de
investigación de la justicia penal, incluidos los órganos
independientes a nivel nacional, regional e internacional, y los
actores no estatales, como los defensores de los derechos
humanos que documentan la tortura, impulsan y supervisan las
investigaciones. y representar a las víctimas de la tortura.330
Los Estados deben respetar el ejercicio de funciones legítimas
por parte de estos actores.331 Cualquier actor autorizado o no
autorizado que investigue la tortura o los malos tratos, o cuyo
papel tenga relación con la investigación de la tortura o los malos
tratos. tratamiento, debe adherirse a las normas establecidas en este manual.
incidentes de tortura o malos tratos, así como cualquier patrón o
189. La Sección A describe el propósito general de una
investigación de torturas o malos tratos. La sección B
establece los principios básicos relativos a la investigación
y documentación efectivas de la tortura y los malos tratos.
La sección C sugiere procedimientos para llevar a cabo
una investigación sobre presuntas torturas o malos tratos,
considerando primero la decisión sobre la autoridad
investigadora correspondiente,
327 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párrs. 29–36.
328 Ibíd., párrs. 6–18; Principios Básicos y Lineamientos sobre el Derecho a un Recurso y Reparación para las Víctimas de Violaciones Graves del Derecho Internacional de los Derechos Humanos y
Violaciones Graves del Derecho Internacional Humanitario; y Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, observación general No. 4.
329 A/HRC/19/61, párr. 58.
330 A/69/387, párr. 54.
331 Declaración sobre el derecho y el deber de los individuos, grupos y órganos de la sociedad de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales universalmente reconocidos
(resolución 53/144 de la Asamblea General, anexo), entre otros, art. 9; y conjunto actualizado de principios para la protección y promoción de los derechos humanos a través de la lucha contra la
impunidad, principio 19.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
luego ofrece pautas con respecto a la recopilación de
testimonios de la víctima denunciada y otros testigos y
otras pruebas. La sección D proporciona pautas para
establecer una comisión de investigación independiente
especial. Estas directrices se basan en las experiencias de los
profesionales y la práctica de varios países que han establecido
comisiones independientes para investigar presuntos abusos
contra los derechos humanos, incluidas ejecuciones
extrajudiciales, torturas y desapariciones. La sección E describe
el papel de los fiscales, jueces y otros actores en la investigación
de la tortura o los malos tratos. La sección F establece los
principios básicos sobre el uso de pruebas de tortura o malos
tratos en otros procedimientos legales.
A. Propósitos de una investigación
sobre tortura o malos tratos
190. El propósito general de la investigación es
establecer los hechos relativos a presuntos incidentes de
tortura o malos tratos, con miras a identificar a los
responsables de los incidentes y facilitar su enjuiciamiento,
o para utilizarlos en el contexto de otros procedimientos
destinados a obtener reparación o protección para las
víctimas. Los temas abordados aquí también pueden ser
relevantes para otros tipos de investigaciones de tortura o
malos tratos. Para cumplir con este propósito, quienes lleven a
cabo la investigación deberán, como mínimo, procurar (a)
obtener declaraciones de las víctimas de la supuesta tortura;
(b) recuperar y conservar pruebas, incluidas pruebas médicas,
relacionadas con la supuesta tortura o malos tratos para ayudar
en cualquier posible enjuiciamiento de los responsables; (c)
identificar a los posibles testigos y perpetradores y obtener
declaraciones de ellos sobre la presunta tortura o malos tratos; y
(d) determinar cómo, cuándo y dónde ocurrieron los presuntos
práctica dentro de la cual tuvieron lugar, incluida la identificación
de lugares y perpetradores particulares, los métodos utilizados y
el papel de la corrupción, y otros factores contextuales, como el
género, la orientación sexual, la identidad de género, la
discapacidad, la raza, el origen étnico, la nacionalidad, la edad y
el nivel socioeconómico de la(s) víctima(s).
45
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS

B. Principios sobre la han sido identificados en instrumentos internacionales,

Investigación y Documentación jurisprudencia y práctica relevante.333 La tortura o los malos

Eficaces de la Tortura y Otros tratos cometidos como elementos de

Tratos o Penas Crueles, Los delitos requieren elementos adicionales para ser probados, como
Inhumanos o Degradantes el nexo con un conflicto armado para la tortura como una guerra.

o ser parte de un ataque generalizado o sistemático contra

191. Los siguientes principios se basan en normas internacionales
estándares legales como se discutió en el capítulo I y ejemplos de
buenas prácticas, y representan un consenso entre individuos y
organizaciones con experiencia en la investigación de tortura y malos
tratos. Los propósitos de una investigación y documentación eficaces
de la tortura y los malos tratos incluyen los siguientes (véase el anexo I):
a) Esclarecimiento de los hechos y establecimiento y reconocimiento de
cualquier población civil por tortura como un crimen de lesa
humanidad . y los delitos que abusan de la vulnerabilidad, como los
de niños o personas con discapacidad, pueden merecer una
consideración especial. Pueden constituir delitos concurrentes de
tortura y violación, o tortura y otros delitos pertinentes relacionados
con la forma específica de abuso, respectivamente.335 La
investigación de tales delitos requiere establecer los hechos, patrones
y causas relevantes del delito, en particular la discriminación, también
con una para prevenir la recurrencia, incluidas medidas adecuadas

la responsabilidad individual y estatal frente a las víctimas y sus familiares; de protección.

(b) Identificación de las medidas necesarias para prevenir

reaparición;

c) Facilitación del enjuiciamiento o, en su caso, sanciones disciplinarias 2. Investigaciones prontas,

para las personas señaladas por la investigación como responsables independientes y eficaces
y demostración de la necesidad de una reparación y resarcimiento completos

por parte del Estado, incluida una compensación económica justa y adecuada 193. Los Estados deben establecer, preferiblemente con carácter estatutario,

y la provisión de medios para la atención médica. y rehabilitación.332 mecanismos con plenos poderes de investigación que sean institucional
y funcionalmente independientes, como comisiones de denuncia policial
independientes o defensores del pueblo, para garantizar la
imparcialidad.336 Los órganos de investigación deben reflejar la
1. Elementos del delito de tortura diversidad de las comunidades a las que sirven. .337 Los Estados
deben garantizar que las denuncias y denuncias de tortura o malos

192. Los hechos a determinar en una investigación dependen
sobre los elementos del crimen (u otro contexto legal) que se
investiga, según lo reconocido en la jurisdicción o ante el tribunal
en cuestión. Para la tortura, tal como se define en el artículo 1 de la
Convención contra la Tortura, estos elementos consisten en la
imposición intencional de
dolor o sufrimiento severo, ya sea físico o mental, el propósito
pertinente y el nivel de participación de las personas que actúan en
el ejercicio de funciones oficiales. Los elementos de las penas o tratos
crueles, inhumanos o degradantes consisten en las múltiples formas
de malos tratos que
tratos se investiguen con prontitud y eficacia. Incluso en ausencia de
una denuncia expresa, debe llevarse a cabo una investigación siempre
que haya motivos razonables para creer que se ha cometido un acto de
tortura o malos tratos.
comprometido. Una pronta investigación es fundamental para garantizar
la protección de la víctima y evitar el riesgo de que desaparezca
cualquier rastro de tortura o malos tratos.338 Las investigaciones deben
iniciarse sin demora, en cuestión de horas o, como máximo, , a pocos
días de la sospecha de tortura

332 La reparación adecuada incluye la restitución, compensación, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición, tal como se establece en los Principios y Lineamientos Básicos sobre el Derecho a
un Remedio y Reparación para las Víctimas de Violaciones Graves del Derecho Internacional de los Derechos Humanos y Violaciones Graves del Derecho Internacional Derecho Humanitario. Ver
también Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012).
333 A/HRC/13/39, párr. 60
334 Véase, por ejemplo, Corte Penal Internacional, Elements of Crimes (2010), arts. 7 (1) (f), 8 (2) (a) (ii)-1 y 8 (2) (c) (i)-4.
335 A/HRC/31/57, entre otros, párrs. 51–53.
336 Consejo de Europa, “Opinión del Comisionado para los Derechos Humanos sobre la determinación independiente y efectiva de las denuncias contra la policía”, CommDH (2009)4,
12 de marzo de 2009.

337 Los organismos de investigación deben centrarse en incorporar medidas antisesgo en su contratación, capacitación, educación y evaluación de investigadores. Ver Michael H. Tulloch, Report of the
Independent Police Oversight Review (Ontario, 2017), secs. 4.100, párr. 9, y 4.730; y Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial, recomendación general 31 (2005) párr. 1 (b).

338 Comité contra la Tortura, Blanco Abad c. España (CAT/C/20/D/59/1996), párr. 8.2.

46
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

o maltrato, y debe llevarse a cabo de manera expedita en
todo momento.339 La falta de una investigación pronta o expedita
no proporciona una justificación para la falta de acción debido al
paso del tiempo, ya que la tortura y los malos tratos no deben estar
sujetos a cualquier estatuto de limitación.340 Las investigaciones
deben llevarse a cabo de manera imparcial, teniendo en cuenta los
posibles conflictos de intereses, las relaciones jerárquicas con los
posibles sospechosos y la conducta específica de los investigadores.341
Una investigación imparcial debe ser exhaustiva e incluir varias pasos,
incluida una investigación médica forense.342 Los investigadores, que
deben ser independientes de los presuntos perpetradores y de la
agencia a la que sirven, deben ser competentes e imparciales. Deben
tener acceso o estar facultados para encargar investigaciones por parte
de expertos médicos o de otro tipo imparciales. Los métodos utilizados
para llevar a cabo estas investigaciones deben cumplir con los más
altos estándares profesionales. La investigación debe llevarse a cabo
de manera transparente y las víctimas, sus abogados y la autoridad
judicial deben tener acceso a los resultados. Las autoridades deben
recopilar sistemáticamente y publicar periódicamente datos desglosados
sobre el número, el contenido y el resultado de las denuncias e
investigaciones relacionadas con la tortura o los malos tratos .
-tratamiento previa solicitud y con examen e informe anual sobre la
eficacia de los procedimientos e investigaciones de quejas pertinentes.344
los recursos presupuestarios y técnicos necesarios para una
investigación eficaz. El órgano de investigación también debe estar
facultado para obligar a comparecer y testificar a todas las
personas que actúen en el ejercicio de funciones oficiales y que
presuntamente hayan estado implicadas en torturas o malos tratos.
Lo mismo se aplica a cualquier testigo. A estos efectos, la
autoridad investigadora está facultada para citar a testigos, incluidos
los funcionarios presuntamente implicados, y exigir la producción de
pruebas.
4. Medidas de protección
195. Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos, los testigos y
quienes realicen la investigación y sus familias deben ser protegidos
de la violencia, amenazas de violencia o cualquier otra forma de
intimidación o represalia que pueda surgir con motivo de la investigación.
Las personas potencialmente implicadas en torturas o malos tratos
deben ser apartadas de cualquier posición de control o poder, ya sea
directa o indirecta, sobre los denunciantes, testigos o sus familias, así
como sobre quienes realicen la investigación.346 Además, los Estados
deben tomar las medidas necesario para proteger a las víctimas y/o
testigos, como trasladarlos a un lugar seguro (por ejemplo, protección
de testigos y casas seguras).

5. Derechos de las víctimas en el marco de las investigaciones

196. Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos tienen derecho a

presentar denuncias por tales tratos y a que dichas denuncias sean

examinadas con prontitud e imparcialidad y derecho a un recurso

efectivo347.

Los Estados deben garantizar que el derecho a presentar una queja

3. Recursos, capacidad y competencia adecuados se pueda ejercer de manera efectiva. Esto incluye el derecho a: (a)
ser informado sobre los recursos disponibles y los procedimientos de

194. La autoridad investigadora debe tener la facultad denuncia;348 (b) tener acceso a un abogado, a un médico (al ser
y obligación de obtener toda la información necesaria para la detenido y regularmente durante la detención), a miembros de la
investigación345. Las personas que realicen la investigación deberán familia349
tener a su disposición todos los y a los representantes diplomáticos y consulares (por

339 Convención contra la Tortura, arts. 12–13; y Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura, art. 8. Véase también A/69/387, párrs. 24 y 68 (a).
340 Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Cestaro c. Italia (ver nota al pie 138), párr. 208. Ver también, por ejemplo, CCPR/C/JOR/CO/5, párr. 17 (a); y CAT/C/THA/CO/1,
paraca. 9 (c).
341 Reglas Nelson Mandela, regla 57 (3).
342 Véase, por ejemplo, A/68/295.
343 Erik Svandize, Investigación eficaz de los malos tratos: Directrices sobre las normas europeas, 2ª ed. (Consejo de Europa, 2014), págs. 15 y 65; y Comité contra la Tortura,
observación general No. 2 (2007), párr. 23. Véase también CAT/C/57/4, párrs. 59 y 75.
344 Svandize, Investigación efectiva de malos tratos, págs. 42 y 58; y Consejo de Europa, “Opinión del Comisionado para los Derechos Humanos”, párrs. 80–87.
345 Bajo ciertas circunstancias, la ética profesional puede requerir que la información se mantenga confidencial. Estos requisitos deben ser respetados.
346 Reglas Nelson Mandela, regla 71 (3).
347 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párrs. 25 y 33–34.
348 Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 13; y Reglas Nelson Mandela, regla 54 (b).
349 Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principios 15–19 y 24–25; Reglas de Nelson Mandela, reglas 58–61; y Comité
Europeo para la Prevención de la Tortura, “12º informe general sobre las actividades del CPT que cubre el período del 1 de enero al 31 de diciembre de 2001”, CPT/Inf(2002)15, párr. 40. Véanse,
sobre los servicios de atención de la salud durante la detención, las Reglas Nelson Mandela, reglas 24–35; y Svandize, Investigaciones efectivas de malos tratos, págs. 25–30.

47
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS

extranjeros350 y para refugiados y apátridas);351 (c) presentar
denuncias de manera oportuna y confidencial;352 y (d) tener
acceso a órganos judiciales y de control externos.353
“Las denuncias de tortura deben registrarse por escrito y debe
ordenarse inmediatamente un examen médico forense (incluido, si
corresponde, realizado por un psiquiatra forense)”. 354 También es de
interés público que cualquier persona pueda presentar denuncias de
tortura . o malos tratos, ni denunciar torturas o malos tratos, sin riesgo de
que dichas personas y sus familiares y representantes legales y
defensores de derechos humanos se vean expuestos a consecuencias
adversas como resultado de la presentación y seguimiento de la
denuncia355.
consulta o procedimiento similar. Los miembros de dicha
comisión deben ser elegidos por su reconocida imparcialidad,
competencia e independencia como individuos. En particular,
deben ser independientes de cualquier presunto perpetrador y de
las instituciones o agencias a las que puedan servir. La comisión
debe tener la autoridad para obtener toda la información necesaria
para la investigación y debe llevar a cabo la investigación de
conformidad con estos principios.358 Un informe escrito, elaborado
dentro de un plazo razonable, debe incluir el alcance de la investigación,
los procedimientos y métodos utilizados para evaluar la evidencia, así
como las conclusiones
y recomendaciones basadas en determinaciones de hecho y en la
ley aplicable. La publicación de los hallazgos debe estar de acuerdo
con los mejores intereses de las víctimas.

197. Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos y sus representantes
legales deben ser informados y tener acceso a cualquier audiencia,
así como a toda la información relevante para la investigación, y
deben tener derecho a presentar otras pruebas. Además, deben
poder impugnar las medidas de investigación, o la falta de las
Por lo tanto, debe tener en cuenta el deber de confidencialidad
en los exámenes y el riesgo para la integridad de las víctimas como
consecuencia de la publicación de los resultados. También debe
describir en detalle los eventos específicos que se descubrió que
ocurrieron y la

mismas, ante un órgano independiente y, cuando sea necesario, pruebas en las que se basaron tales hallazgos y enumere los
contar con asistencia letrada356. Las autoridades deben garantizar nombres de los testigos que testificaron con el

los derechos de las víctimas a la seguridad, la privacidad y la
integridad física y psíquica, y tomar medidas para minimizar el riesgo
de traumatización durante el curso de las investigaciones y otros
procedimientos legales relevantes.357 En los casos de investigación
de violencia sexual o abuso de niños u otras personas vulnerables,
las autoridades deben seguir un enfoque que tenga plenamente en
cuenta las características de las víctimas.
excepción de aquellos cuyas identidades han sido retenidas para su
propia protección. El Estado debe, dentro de un plazo razonable,
responder al informe de la investigación y, en su caso, indicar las
medidas a tomar en respuesta (véanse los párrs. 238 a 251 infra).
7. Informe pericial médico

199. Los expertos médicos que participan en la investigación de

y el impacto de la forma particular de tortura. la tortura o los malos tratos deben comportarse en todo momento

de conformidad con los más altos estándares éticos y, en

6. Comisión de investigación independiente particular, debe obtener el consentimiento informado antes de
llevar a cabo cualquier examen. El examen debe ajustarse a las
198. En los casos en que la instrucción indagatoria establecida normas establecidas.

procedimientos son inadecuados debido a conocimientos
insuficientes o sospecha de parcialidad, o debido a la aparente
existencia de un patrón de abuso, o por otras razones sustanciales, los
Estados deben garantizar que las investigaciones se lleven a cabo a
través de una comisión independiente de
de la práctica médica. En particular, los exámenes deben
realizarse en privado bajo el control del experto médico y fuera
de la presencia de agentes de seguridad y otros funcionarios
gubernamentales.
El experto médico debe preparar rápidamente

350 Reglas Nelson Mandela, regla 62 (1); Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 16 (2); y Convención de Viena
sobre Relaciones Consulares, art. 36 (1).
351 Reglas Nelson Mandela, regla 62 (2).
352 Ibíd., reglas 56 y 57; Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 33 (1)–(3); y Svandize, Investigaciones efectivas
de malos tratos, págs. 35–37.
353 Reglas Nelson Mandela, regla 56 (3); y Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principios 29 y 33 (4). Ver también
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe sobre los Derechos Humanos de las Personas Privadas de Libertad en las Américas (2011), párr. 254.
354 A/62/221, párr. 53 (a). Ver también Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 25
355 A/69/387, párr. 55.
356 Svandize, Investigación eficaz de los malos tratos, pág. 58, párr. 4.5.1.
357 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 21; y Sara Ferro Ribeiro y Danaé van der Straten Ponthoz, Protocolo internacional para la documentación e investigación de la
violencia sexual en los conflictos: mejores prácticas para la documentación de la violencia sexual como delito o violación del derecho internacional, 2ª ed. (Londres, 2017), pág. 239, que enumera
las siguientes estrategias para mitigar la retraumatización: (a) garantizar la seguridad física y emocional antes, durante y después de la entrevista; (b) promover la confiabilidad; (c) elección; (d)
colaboración y participación; ye) empoderamiento.
358 Bajo ciertas circunstancias, la ética profesional puede requerir que la información se mantenga confidencial. Estos requisitos deben ser respetados.

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tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
un informe escrito preciso. Este informe deberá incluir
al menos lo siguiente (ver anexo I):
(a) Las circunstancias de la entrevista. El nombre del sujeto
y el nombre y afiliación de los presentes en el examen; la
fecha y hora exactas, el lugar, la naturaleza y la dirección de
la institución (incluida, cuando corresponda, la habitación)
donde se realiza el examen (por ejemplo, centro de detención,
clínica o casa); cualquier circunstancia apropiada en el
momento del interrogatorio (p. ej., la naturaleza de las
restricciones a la llegada o durante el interrogatorio, la
presencia de fuerzas de seguridad durante el interrogatorio,
el comportamiento de los acompañantes del recluso y cualquier
declaración amenazante al examinador); y cualquier otro factor
relevante;
(b) El trasfondo. Un registro detallado del relato de los hechos
por parte del sujeto durante la entrevista, incluidos los
presuntos métodos de tortura o malos tratos, el momento en
el que supuestamente se produjeron la tortura o los malos
tratos y todas las denuncias de síntomas físicos y psicológicos;
c) Un examen físico y psicológico. Un registro de todos los
hallazgos físicos y psicológicos del examen clínico, incluidas las
pruebas de diagnóstico adecuadas, diagramas corporales para
registrar la ubicación y la naturaleza de todas las lesiones y,
cuando sea posible, fotografías en color de todas las lesiones;
(d) Una opinión. Una interpretación en cuanto a la probable
relación de los hallazgos físicos y psicológicos con la posible
tortura o malos tratos. También se debe dar una
recomendación sobre cualquier tratamiento médico y/o
psicológico necesario o exámenes adicionales;
(e) Un registro de autoría. El informe debe identificar
claramente a quienes realizan el examen y su autoridad, y
debe estar firmado.
200. Los informes deben ser confidenciales y comunicarse a
los sujetos o su representante designado. Los informes deben
presentarse por escrito, cuando corresponda, a la autoridad
responsable de investigar la denuncia de tortura o malos tratos.
Es responsabilidad del Estado garantizar que los informes se
entreguen de manera segura a estas personas. Los informes
no deben ponerse a disposición de ninguna otra persona,
excepto con el consentimiento de los sujetos o cuando
359 Reglas Nelson Mandela, regla 71; Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 23; y CAT/C/DEU/CO/5, párr. 19
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
autorizado por un tribunal facultado para ejecutar la
transferencia. Para consideraciones generales sobre los
informes escritos tras las denuncias de tortura, véase el
capítulo IV. Los Capítulos V y VI describen en detalle las
evaluaciones físicas y psicológicas, respectivamente.
C. Procedimientos
involucrados en una
investigación de tortura o malos tratos
1. Determinación de la investigación adecuada
cuerpo
201. Los Estados deben garantizar que cualquier investigación
de tortura sea realizada por un organismo independiente e
imparcial, que no tenga vínculos institucionales con el
presunto perpetrador y esté libre de prejuicios.359 En los
casos en que las personas que actúan a título oficial sean
sospechosos de estar involucrados en tortura, incluidas
posibles órdenes para el uso de tortura por parte de
ministros, asistentes ministeriales, oficiales que actúan con
el conocimiento de ministros, oficiales superiores en
ministerios estatales, líderes militares superiores u otros en
posiciones similares de autoridad, o tolerancia a la tortura por
tales personas, una investigación objetiva e imparcial puede
no ser posible a menos que se establezca un organismo
independiente especialmente constituido (como una comisión
de investigación). Un organismo de investigación independiente
especialmente constituido también puede ser necesario en
situaciones en las que serviría al interés público,
particularmente cuando las investigaciones realizadas por
organismos de investigación regulares están en tela de juicio
debido a la falta de capacidad, experiencia o imparcialidad o
por otras razones, incluida la importancia del asunto, la
aparente existencia de un patrón de abuso, denuncias de la
persona u otras razones sustanciales.
202. Los Estados deben considerar los siguientes factores al decidir establecer
un órgano o mecanismo independiente especialmente constituido,
como una comisión de investigación. En primer lugar, a las personas sujetas a
una investigación se les deben garantizar las garantías procesales mínimas
reconocidas en el derecho internacional en todas las etapas de la investigación.
En segundo lugar, los investigadores deben contar con el apoyo de personal
técnico y administrativo adecuado, así como acceso a asesoría legal objetiva e
imparcial para garantizar que la investigación produzca evidencia admisible para
procedimientos penales o de otro tipo. En tercer lugar, los investigadores deben
recibir todo el alcance de la
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
recursos y poderes. Finalmente, los investigadores deberían
tener el poder de buscar ayuda de la comunidad internacional
de expertos en derecho y medicina.
203. Los Estados están obligados a “garantizar que los principios
fundamentales de la investigación… sean… reconocidos
oficialmente entre los departamentos y el personal pertinentes,
incluidos los fiscales, los abogados defensores, los jueces,
las fuerzas del orden, el personal penitenciario y militar, los
profesionales forenses y de la salud y los responsables de los
detenidos”. atención de la salud”.360 Los Estados deben
brindar capacitación y orientación e instrucciones adecuadas
sobre las normas internacionales relativas a la investigación
de la tortura o los malos tratos, tal como se establece en este
manual, y sobre las buenas prácticas a cualquier persona
involucrada en las investigaciones pertinentes y otras
procedimientos judiciales.361 Dichas medidas deben incluir
un enfoque en consideraciones específicas aplicables en
casos de investigación de violencia sexual o abuso de niños u
otras personas vulnerables, como la necesidad de un enfoque
sensible al género y a los niños.
2. Planificación y preparación de una investigación
204. Los órganos de investigación deben planificar y preparar cuidadosamente sus
investigaciones sobre torturas o malos tratos.
Las consideraciones esenciales de planificación
incluyen, en particular: (a) realizar evaluaciones de riesgos y
amenazas exhaustivas y dinámicas; (b) seleccionar, capacitar
y examinar a los miembros del equipo de investigación (incluidos
investigadores, posibles intérpretes, intermediarios, analistas y
personal de apoyo); (c) preparar un plan de investigación por
escrito; (d) mapear los servicios de apoyo a los que la víctima
puede ser referida según sea necesario; (e) considerar qué
evidencia recopilar y cómo registrar, almacenar, transportar,
organizar y analizar de manera segura dicha evidencia, según
corresponda; (f) establecer códigos de conducta y procedimientos
operativos estándar, incluidos los procedimientos de autocuidado
apropiados para minimizar el riesgo de trauma secundario para
los miembros del equipo de investigación; (g) seleccionar un
lugar para la entrevista que sea seguro, privado, neutral y
cómodo; yh) establecer medidas de protección para víctimas y
testigos.
205. Considerando que puede haber múltiples actores (nacionales e
internacionales) con distintos mandatos en relación con la investigación
de la tortura o los malos tratos,
360 A/69/387, párr. 66.
361 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 35; y Corte Interamericana de Derechos Humanos, Espinoza Gonzáles v Perú, párrs. 323–327.
362 Para obtener orientación sobre entrevistas efectivas e implementación de salvaguardas durante el interrogatorio, consulte los Principios sobre entrevistas efectivas para investigaciones e información.
Reunión (2021). Disponible en www.apt.ch/sites/default/files/publications/apt_PoEI_EN_08.pdf.
363 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), párr. 21. Sobre la necesidad de “formación metodológica para prevenir la retraumatización de las víctimas de tortura
o malos tratos”, véase la Observación general núm. 3 (2012), párr. 35.
50
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
los investigadores deben ser conscientes, desde las
primeras etapas ya lo largo de cualquier investigación, de la
necesidad de coordinación. Los investigadores deben estar
equipados con conocimientos y habilidades sobre el uso de
declaraciones consolidadas. Los investigadores y otros actores
deben tratar de evitar tomar declaraciones adicionales o
duplicadas de víctimas y testigos en casos en los que ya hayan
sido entrevistados, en particular para evitar el riesgo de volver a
traumatizar y socavar la confianza en el trabajo y la eficacia de
los procedimientos judiciales.
Esto incluye adoptar un enfoque de equipo que involucre a
investigadores legales y médicos forenses que también
quieren y necesitan tomar un historial detallado de los eventos.
3. Realización de una investigación
206. Los órganos de investigación deben realizar, tan pronto como
sea posible, toda la gama de medidas de investigación
generalmente reconocidas con miras a establecer un registro
que sea lo más completo y exacto posible en las circunstancias
del caso particular. Dichos pasos de investigación incluyen la
recopilación de: (a) pruebas testimoniales (es decir, entrevistar
a las presuntas víctimas, testigos y presuntos autores);362
(b) pruebas físicas, incluidas pruebas forenses; (c) evidencia
digital; y (d) evidencia documental, tanto en relación con actos
específicos de tortura o malos tratos y elementos relevantes
del crimen, cuando corresponda, como patrones más amplios
de tortura y malos tratos.
(a) Entrevistar a las presuntas
víctimas y otros testigos
207. Por la naturaleza de los casos de tortura y el trauma
las personas sufren como resultado, que a menudo
incluye una devastadora sensación de impotencia, es
particularmente importante mostrar sensibilidad hacia la
presunta víctima de tortura y otros testigos mediante la
implementación de medidas y procedimientos que reduzcan el
riesgo de mayor trauma o retraumatización.363 El Estado debe
proteger a las presuntas víctimas de tortura ya los testigos y sus
familias de la violencia, amenazas de violencia o cualquier otra
forma de intimidación que pueda surgir con motivo de la
investigación. Los investigadores deben informar a los testigos
sobre las consecuencias de su participación.
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tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

en la investigación y sobre los hechos posteriores en
el caso que puedan afectarlos.
(i) Consentimiento informado y otras protecciones
para las presuntas víctimas
208. Desde el inicio, las presuntas víctimas deben ser informadas, en la medida de
lo posible, sobre la naturaleza del proceso, por qué se solicitan sus pruebas
y si las pruebas ofrecidas por ellas pueden ser utilizadas y cómo. Los
investigadores deben explicar a las presuntas víctimas qué partes de la
investigación serán información pública y qué partes serán confidenciales y
establecer un mecanismo para tomar estas determinaciones. Se debe hacer
todo lo posible para acomodar el horario
relatos de hechos de personas. Al seleccionar a una persona
como investigador principal responsable de las presuntas
víctimas, se debe prestar especial atención a la preferencia de
las presuntas víctimas por una persona del mismo sexo, el mismo
origen cultural o la capacidad de comunicarse en su idioma
nativo. El investigador principal debe tener capacitación o
experiencia previa en la documentación de la tortura y en el
trabajo con víctimas de trauma, incluida la tortura. Cuando
corresponda, el investigador principal también debe tener
experiencia específica en el trato con niños víctimas de tortura o
malos tratos, o víctimas de tortura sexual. Los niños que pueden
haber sido traumatizados por la tortura no deben ser aislados del
contacto adulto positivo y de apoyo.

La calidad de la evidencia puede verse comprometida

y deseos de las presuntas víctimas. Se debe informar
periódicamente a las presuntas víctimas sobre el progreso
de la investigación, en particular después de las entrevistas
y los exámenes. Las presuntas víctimas también deben ser
notificadas de todas las audiencias clave en la investigación
si los niños son entrevistados por personas sin las habilidades
adecuadas, por lo que solo los investigadores que poseen
suficiente experiencia en entrevistar a niños, o experiencia en
trabajar con ellos, deben involucrarse en entrevistar a niños
víctimas de tortura o malos tratos. Entrevistas

y enjuiciamiento del caso. Los investigadores deben informar
a las presuntas víctimas de la detención de los presuntos
autores. Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos
deben recibir información de contacto de grupos de defensa
y tratamiento que puedan serles de ayuda. Los investigadores
deben trabajar con dichos grupos dentro de su jurisdicción
para garantizar que haya un intercambio mutuo de información
y capacitación sobre la tortura y los malos tratos.
209. La búsqueda del consentimiento informado de los niños implica la participación
de sus padres o tutores legales, pero también la consideración del posible
consentimiento independiente del niño además del de los adultos responsables.
Requiere considerar la salvaguardia del interés superior del niño (véanse el
párr. 170 y el anexo II infra).
(ii) Selección del investigador
210. Las autoridades que investigan el caso deben identificar a una persona
que no se llevan a cabo adecuadamente pueden volver a
traumatizar a las víctimas, exponerlas a un riesgo adicional,
afectar la calidad y confiabilidad de la información
proporcionada y distorsionar la memoria de las víctimas
sobre los hechos.364 Al mismo tiempo, teniendo cuidado de
garantizar que los niños sean entrevistados por profesionales
con las habilidades apropiadas, los niños no deben ser aislados
por temor a contaminar las pruebas de aquellos que deben
continuar teniendo un contacto ordinario y afectuoso con ellos.
El bienestar y el interés superior del niño deben ser primordiales
en todo momento. La información y la orientación sobre la
tortura y las entrevistas a las víctimas de la tortura están
disponibles en fuentes, incluido este manual, varias
publicaciones profesionales y de capacitación, cursos de
capacitación y conferencias profesionales.365 El investigador
también debe tener acceso al asesoramiento y la asistencia de
expertos internacionales a lo largo de la investigación.
(iii) Contexto de la investigación

responsable principal de entrevistar a las presuntas víctimas. Si bien es 211. Los investigadores deben considerar cuidadosamente la

posible que las presuntas víctimas deban discutir su caso con profesionales contexto en el que están trabajando, tomar las precauciones
médicos y legales, el equipo de investigación debe hacer todo lo posible necesarias y proporcionar salvaguardas en consecuencia.
para minimizar la repetición innecesaria de tales Si entrevista a personas que aún están encarceladas o en
situaciones similares en las que son posibles represalias,

364 Ferro Ribeiro y van der Straten Ponthoz, Protocolo Internacional sobre la Documentación e Investigación de la Violencia Sexual, pág. 161.
365 Los materiales incluyen Polona Tepina, El manual de denuncia de tortura: Cómo documentar y responder a las denuncias de tortura dentro del Sistema Internacional para la Protección de los
Derechos Humanos, 2ª ed. (Colchester, Centro de Derechos Humanos, Universidad de Essex, 2015), incluidos los apéndices que enumeran los instrumentos pertinentes y más información y
lectura; Svandize, Investigación eficaz de los malos tratos, que tiene seis apéndices, incluidos documentos europeos clave; Foro de Asia Pacífico de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos,
Emprender Investigaciones Efectivas: Una Guía para las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos (Sydney, 2013, actualizado en 2018); Asociación para la Prevención de la Tortura, Foro de
Asia Pacífico de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos y ACNUDH, Preventing Torture: An Operational Guide for National Human Rights Institutions (Ginebra, 2010); reparar la confianza,
Tomar las denuncias de tortura en serio: derechos de las víctimas y responsabilidades de las autoridades (Londres, 2004); y Foley, Combating Torture (ver nota al pie 240). Sobre la violencia
sexual, véase Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Directrices sobre la lucha contra la violencia sexual y sus consecuencias en África (2017); y Ferro Ribeiro y van der Straten
Ponthoz, Protocolo Internacional sobre la Documentación e Investigación de la Violencia Sexual. Para entrevistas de víctimas de abuso infantil, véase Estados Unidos de América, Instituto Nacional
de Salud Infantil y Desarrollo Humano, “Protocolo NICHD revisado: guía de entrevistas” (2014).

51
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
el entrevistador debe tener cuidado de no ponerlos en
peligro. El entrevistador debe elegir un lugar para una
entrevista privada donde el testigo se sienta cómodo para
hablar libremente, tanto como sea posible, y hacer todo lo
posible para obtener tales condiciones.
212. Las investigaciones se llevan a cabo en una variedad de
contextos. Esto da lugar a importantes diferencias en la
forma en que deben llevarse a cabo las investigaciones.
El investigador debe adaptar las siguientes pautas de
acuerdo con la situación particular y el propósito de la
investigación.
213. Las investigaciones que se lleven a cabo en contextos
desafiantes, como durante un conflicto armado o en contextos
con recursos extremadamente limitados, deben, sin embargo,
tomar todas las medidas razonables para cumplir con los
estándares establecidos en este manual.366 En situaciones en
las que el cumplimiento estricto de los estándares demuestra
imposible, por ejemplo en contextos en los que la capacidad o
los recursos no están presentes, los Estados deben esforzarse
por aprovechar la experiencia y el apoyo internacionales para
cumplir con sus obligaciones.
214. El contexto político puede ser hostil hacia el
presunta víctima y el examinador, por ejemplo, cuando los
detenidos son entrevistados mientras están en prisión por sus
gobiernos o mientras están detenidos por gobiernos extranjeros
para ser deportados.
En los países donde se examina a los solicitantes de asilo para
establecer pruebas de tortura o malos tratos, la renuencia a
reconocer las denuncias de trauma y tortura o malos tratos puede
tener motivaciones políticas.
La posibilidad de poner en peligro aún más la seguridad del
detenido es muy real y debe tenerse en cuenta durante cada
parte del proceso de investigación.
Incluso en los casos en que las personas que alegan tortura
o malos tratos no se encuentran en peligro inminente, los
investigadores deben tener mucho cuidado en su contacto con
ellas. La elección del lenguaje y la actitud del investigador afectará
en gran medida la capacidad y disposición de la presunta víctima
para ser entrevistada. El lugar de la entrevista
debe ser lo más seguro y cómodo posible, incluido el
acceso a baños y refrigerios.
Debe asignarse tiempo suficiente para entrevistar a los
presunta víctima. Los investigadores no deben esperar obtener
el relato completo de los hechos durante la primera entrevista.
Las preguntas de carácter privado pueden ser traumáticas para
366 Ver también Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Mocanu and Others v. Romania, solicitud Nos. 10865/09, 45886/07 y 32431/08, Sentencia, 17 de septiembre de 2014, párr. 319:
“Incluso cuando los hechos que dan lugar al deber de investigar se produzcan en un contexto de violencia generalizada y los investigadores se enfrenten a obstáculos y coacciones
que obliguen a utilizar medidas de investigación menos eficaces o provoquen el retraso de una investigación, el hecho es que Los artículos 2 y 3 [del Convenio Europeo de Derechos
Humanos, el derecho a la vida y la prohibición de la tortura, respectivamente] establecen que se deben tomar todas las medidas razonables para garantizar que se lleva a cabo una
investigación eficaz e independiente”.
52
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
la presunta víctima. El investigador debe ser sensible en el tono,
la redacción y la secuencia de las preguntas, dada la naturaleza
traumática del testimonio de la presunta víctima. Se debe informar
al testigo del derecho a detener el interrogatorio en cualquier
momento, a tomar un descanso si es necesario oa optar por no
responder a ninguna pregunta.
215. De ser posible, la presunta víctima, los testigos y los miembros del equipo de
investigación deben tener acceso a consejeros psicológicos o personas
capacitadas para trabajar con víctimas de tortura. Volver a contar los hechos
de la tortura o los malos tratos puede hacer que la persona reviva la experiencia
o sufra otros síntomas relacionados con el trauma (véanse los párrs. 277 a
280 infra). Escuchar detalles de la tortura puede resultar en síntomas de
trauma secundario para los entrevistadores, y se les debe alentar a discutir
sus reacciones entre ellos, respetando sus requisitos éticos profesionales de
confidencialidad.
Siempre que sea posible, esto debe hacerse con la ayuda de
un facilitador experimentado. Hay dos riesgos particulares a
tener en cuenta: primero, existe el peligro de que los
entrevistadores se identifiquen con quienes alegan tortura y no
cuestionen suficientemente el relato de los hechos; y, segundo,
los entrevistadores pueden acostumbrarse tanto a escuchar
historias de tortura que disminuyen en sus propias mentes las
experiencias de la persona entrevistada.
(iv) Seguridad del testigo
216. El testimonio de la víctima es fundamental para establecer la existencia
de tortura o malos tratos. Otro
Los testigos desempeñan un papel importante en las
investigaciones de tortura o malos tratos, incluso como testigos
presenciales de actos u omisiones relevantes, o al declarar
sobre el estado de la presunta víctima antes y después de la
presunta tortura o malos tratos, sobre las condiciones de
detención, otros circunstancias, la identidad de los perpetradores
o como testigos expertos.
Los testigos pueden ser vulnerables, no cooperar u hostiles
y, por lo tanto, pueden representar un desafío para las
autoridades investigadoras. Los Estados deben tener en
cuenta la difícil posición en la que suelen encontrarse los
testigos cuando participan en investigaciones de tortura o
malos tratos. El Estado es responsable de proteger a los
denunciantes, víctimas y testigos, sus familias y representantes
legales, y a los defensores de derechos humanos de la violencia,
amenazas de violencia o cualquier
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
otra forma de intimidación que pueda surgir en virtud de la
investigación y medidas de investigación específicas, como
desfiles de identidad. Las personas potencialmente implicadas
en torturas o malos tratos deben ser apartadas de
cualquier posición de control o poder, ya sea directa o
indirectamente, sobre los denunciantes, los testigos y sus
familias, así como sobre quienes realizan las investigaciones.
Los investigadores deben considerar constantemente el efecto
de la investigación sobre la seguridad de la persona que
alega tortura o malos tratos y otros testigos.
Los derechos de los testigos, como el derecho a la intimidad,
sólo podrán ser injeridos en la medida absolutamente
necesaria para la investigación y de conformidad con las
normas internacionales de derechos humanos reconocidas.
217. Una técnica sugerida para brindar cierta medida de seguridad a los
entrevistados, incluidas las personas privadas de libertad en países en
situaciones de conflicto, es mantener un registro seguro de las identidades
de las personas visitadas para que los investigadores puedan hacer un
seguimiento de la seguridad de esas personas. durante una visita de regreso.
Se debe permitir que los investigadores hablen con todos y cada uno,
libremente y en privado, y se les debe permitir repetir una visita a la misma
persona (de ahí la necesidad de rastrear las identidades de los entrevistados)
cuando surja la necesidad. No todos los países aceptan estas condiciones y
los investigadores pueden tener dificultades para obtener tales garantías. En
los casos en los que es probable que los testigos corran peligro a causa de su
testimonio, el investigador debe buscar otras formas de prueba a las que se
hace referencia en este capítulo que puedan obtenerse sin crear tal riesgo.
218. Las personas privadas de libertad corren un mayor riesgo de represalias
como resultado de su cooperación con los investigadores. Las personas
privadas de libertad pueden tener diferentes reacciones ante diferentes
situaciones. En
En una situación, las personas privadas de libertad pueden
ponerse en peligro sin darse cuenta al hablar demasiado
precipitadamente, pensando que están protegidas por la
presencia misma del investigador “externo”. Este puede no
ser el caso. En otras situaciones, los investigadores pueden
tropezar con un “muro de silencio”, ya que las personas
privadas de libertad pueden estar demasiado intimidadas para
confiar en alguien, incluso cuando se les ofrece hablar en
privado. En esta última situación, puede ser necesario
comenzar con “sesiones informativas grupales” (pero no
entrevistas grupales), para poder explicar claramente el
alcance y el propósito de la investigación y luego ofrecer
entrevistas en privado con aquellas personas que deseo hablar
Si el temor a represalias, justificadas o no, es demasiado
grande, puede ser necesario entrevistar a todas las personas
privadas de libertad en un determinado lugar de custodia, para
no identificar a ninguna persona en particular. en situaciones
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
en el que una investigación conduce a un enjuiciamiento
u otro foro público de esclarecimiento de la verdad, el
investigador debe recomendar medidas para evitar daños a
la presunta víctima por medios tales como borrar nombres y
otra información que identifique a la persona de los registros
públicos u ofrecerle a la persona una oportunidad testificar a
través de dispositivos de alteración de la imagen o de la voz o
de un circuito cerrado de televisión. Estas medidas
debe ser compatible con los derechos del imputado.
(v) Uso de intérpretes
219. Los intérpretes cumplen un papel fundamental en las investigaciones.
Un intérprete es el guardián y el conducto de la
información que fluye en ambos sentidos entre el entrevistador y
el entrevistado. La ausencia de un buen intérprete corre el riesgo
de poner en peligro la eficacia de la investigación.
No es fácil trabajar con un intérprete cuando se investiga la
tortura, incluso con profesionales (véanse los párrs. 296 a
298 infra). No siempre será posible tener intérpretes disponibles
para todos los diferentes idiomas y dialectos y, a veces, puede
ser necesario utilizar intérpretes del grupo familiar o cultural de
la persona. Esto no es lo ideal, ya que es posible que las
personas no siempre se sientan cómodas hablando de la
experiencia de tortura o malos tratos a través de personas que
conocen.
No se debe esperar que los niños interpreten para sus
padres en entrevistas relacionadas con tortura o malos
tratos. Idealmente, el intérprete debe ser parte del equipo
de investigación, profesionalmente capacitado y examinado,
y conocedor de temas de tortura y malos tratos, así como
de palabras y eufemismos utilizados para referirse a partes
del cuerpo y actos sexuales a fin de reconocer indicios de
tortura sexual. ser revelado y reaccionar apropiadamente. Al
entrevistar a niños, solo se deben utilizar intérpretes que
hayan recibido una formación especial y que tengan
experiencia previa en el trabajo con niños (véase el anexo II).
Los intérpretes deben: (a) hablar directamente con las víctimas
y los testigos; (b) solo use un discurso directo ("¿puede
describir lo que sucedió?", no "el investigador está preguntando
qué sucedió"); (c) utilizar técnicas de escucha activa (posturas,
movimientos de cabeza y contacto visual respetuoso); (d) ser
capaz de controlar sus respuestas emocionales y mostrar
empatía y sensibilidad; y (e) no editorializar, es decir interpretar
exactamente lo que se dice y nada más.
(vi) Información que debe obtenerse de la
persona presuntamente torturada o maltratada
220. El investigador debe intentar obtener la mayor cantidad posible
de la siguiente información
53
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
posible a través del testimonio de la presunta víctima
(véanse los párrs. 360 a 370 infra):
a) Las circunstancias que condujeron a la supuesta tortura o
malos tratos, incluidas las amenazas, el hostigamiento, los
insultos, el arresto o el secuestro y la detención;
(b) Fechas y horas aproximadas de la supuesta tortura o malos
tratos, incluso cuándo ocurrió el último caso de tortura o malos
tratos. Establecer esta información puede no ser fácil, ya que
puede haber varios lugares y presuntos perpetradores (o grupos
de presuntos perpetradores) involucrados. Puede ser necesario
registrar historias separadas sobre los diferentes lugares. Espere
que las cronologías sean inexactas y, a veces, incluso confusas;
Las nociones de tiempo a menudo son difíciles de enfocar para
alguien que ha sido torturado o maltratado.
Las historias separadas sobre diferentes lugares pueden ser útiles
cuando se trata de obtener una imagen global de la situación.
Los sobrevivientes a menudo no sabrán exactamente a dónde fueron
llevados, ya que tenían los ojos vendados o estaban semiinconscientes.
Al juntar testimonios convergentes, puede ser posible “mapear”
lugares, métodos y
incluso perpetradores;
c) Una descripción detallada de las personas directa o
indirectamente involucradas en el presunto arresto,
detención y tortura o malos tratos, incluida la estructura de
mando del lugar de detención, si conocían a alguno de ellos
antes de los hechos relacionados con el presunto tortura o
malos tratos, vestimenta, cicatrices, marcas de nacimiento,
tatuajes, altura, peso (las víctimas pueden ser capaces de
describir a los presuntos torturadores o a las personas que
cometieron los malos tratos en relación con su propio tamaño),
cualquier cosa inusual en la anatomía del perpetrador, idioma y
acento, nombres, incluidos los apodos utilizados, y si los
presuntos perpetradores estuvieron intoxicados en algún momento;
(d) Detalles de lo que se le dijo o se le preguntó a la persona.
Por ejemplo, esto puede proporcionar información relevante
cuando se trata de identificar lugares de detención secretos o
no reconocidos;
e) Una descripción, que puede complementarse con
croquis, del lugar de detención y su disposición, o lugar de
la presunta tortura o malos tratos si fuera de un centro de
detención, celdas de detención, salas de interrogatorio y
salas de tortura si son diferentes, incluyendo equipo de tortura
presente en la habitación y/o utilizado (por ejemplo, varillas,
tubos, ganchos, cuerdas, alambre de púas y tanques de agua);
(f) Una descripción de las condiciones de detención (por
ejemplo, espacio, comida, higiene, temperatura, luz, acceso a
54
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
tratamiento médico, contacto con otros detenidos y visitas), la rutina
habitual en el lugar de detención y el patrón de supuestos malos tratos
(por ejemplo, el lugar y la hora del día en que solían ocurrir la tortura
o los malos tratos, su duración y otros factores);
g) Una descripción de los hechos de la supuesta tortura o
malos tratos, incluidos los métodos empleados. Es
comprensible que esto sea a menudo difícil, y los
investigadores no deben esperar obtener el relato completo
de los hechos durante una entrevista. Es importante obtener
información precisa, pero las preguntas relacionadas con la
humillación íntima y la agresión serán traumáticas, a menudo
extremadamente;
(h) Si el individuo fue agredido sexualmente.
La mayoría de la gente tenderá a responder una pregunta sobre una
supuesta agresión sexual como una violación o sodomía reales.
Los investigadores deben ser conscientes del hecho de que las
agresiones verbales, desnudarse, manosear, actos lascivos o
humillantes o golpes o descargas eléctricas en los genitales a menudo
no son interpretados por la víctima como una agresión sexual, y que los
niños pueden no comprender el concepto de agresión sexual. o
identificarlo. Todos estos actos violan la intimidad de la persona y deben
considerarse parte integrante de la agresión sexual. Muy a menudo, las
víctimas de agresión sexual no dirán nada o incluso negarán cualquier
agresión sexual. A menudo, solo en la segunda o incluso en la tercera
visita, si el contacto establecido ha sido empático y sensible al género,
la orientación sexual, la cultura y la personalidad de la persona, se
revelará una mayor parte del historial de agresión sexual (véanse los
párrs. 274 a 276). abajo);
(i) Lesiones físicas sufridas en el curso de la supuesta
tortura o malos tratos, así como otros daños físicos inmediatos
y a largo plazo relacionados;
(j) Daño mental inmediato ya largo plazo sufrido, limitaciones
funcionales y el impacto socioeconómico de la tortura o malos
tratos alegados en la persona y su familia;
(k) Una descripción de las armas u otros objetos
físicos presuntamente utilizados. Si supuestamente se utilizó
equipo de tortura diseñado específicamente, cualquier
información sobre su tipo, marca (fabricante) y país de origen;
l) La identidad de los testigos de los hechos de presunta
tortura o malos tratos;
m) Una descripción de cualquier otra prueba pertinente, como
cualquier grabación de la supuesta tortura o malos tratos o de
los acontecimientos que la precedieron o siguieron, y la
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
existencia de documentos, como una declaración firmada
bajo amenaza de tortura o malos tratos.
(vii) Declaración de la persona que alega tortura
y otros testigos
221. El investigador autorizado oficialmente con el mandato y la capacidad de mantener
seguros los registros debe grabar una declaración detallada de la persona y
hacer que se transcriba. El investigador debe utilizar preguntas abiertas amplias
(es decir, preguntas que requieren una respuesta narrativa) para obtener un
relato amplio e ininterrumpido y preguntas abiertas más específicas para obtener
detalles particulares y aclarar el relato. La declaración o las notas de la entrevista
deben basarse en las respuestas dadas en respuesta a preguntas abiertas de
tipo “diga, explique y describa” (p. ej., “Por favor, dígame cómo…”, “Por favor,
explíqueme qué…” y “Por favor, descríbame… ”) y “wh” abren preguntas sobre el
“qué”, “quién”, “cuándo”, “dónde”, “cómo” y “cómo sabe” de la supuesta tortura o
malos tratos. “Por qué” generalmente no es un tipo de pregunta productiva, ya
que puede invitar a una respuesta de opinión en lugar de una respuesta basada
en hechos y también puede ser estigmatizante o culpabilizador. Los investigadores
no deben utilizar preguntas capciosas. Las preguntas no dirigidas no hacen
suposiciones ni conclusiones y permiten que la persona ofrezca el testimonio
más completo e imparcial. Ejemplos de preguntas no dirigidas son "¿Qué te
pasó?" y "¿Dónde sucedió esto?" en lugar de “¿Fuiste torturado en prisión?”.
Esta última pregunta asume que lo ocurrido al testigo fue
tortura y limita el lugar de las acciones a una prisión. Evite
hacer preguntas con listas, ya que esto puede obligar a la
persona a dar respuestas inexactas si lo que realmente
sucedió no coincide exactamente con una de las opciones.
Permita que las personas cuenten su propio relato de
eventos sin interrumpirlos para obtener primero un relato
de recuerdo libre, pero ayude haciendo preguntas que
aumenten en especificidad. Anime a las personas a usar
todos sus sentidos para describir lo que les sucedió.
Pregunte qué olieron, escucharon y sintieron. Esto es
importante, por ejemplo, en situaciones en las que a la
persona le hayan vendado los ojos o haya sufrido la
agresión en la oscuridad. Se aplican consideraciones
similares, con los ajustes correspondientes, a la toma de
declaraciones de otros testigos, incluidos los familiares de
las presuntas víctimas, los codetenidos y los funcionarios,
en relación con el establecimiento de hechos pertinentes
relacionados con la presunta tortura o malos tratos, incluso
antes, durante y siguiendo tal tratamiento.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(viii) Declaraciones de los presuntos autores
222. Los investigadores deben hacer todo lo posible por entrevistar a los
presuntos autores. Cuando sea necesario, los investigadores deben
utilizar desfiles de identidad u otras medidas de investigación para
identificar a los presuntos autores. Los investigadores deben proporcionar
a los presuntos perpetradores las protecciones legales garantizadas por
el derecho internacional y nacional.
Esto incluye garantías contra el arresto y la detención
arbitrarios, la presunción de inocencia y el derecho a
un juicio justo. Tales garantías no incluyen amnistías,
inmunidades u otros mecanismos que resulten en la
impunidad de los perpetradores.
(b) Aseguramiento y obtención de evidencia física
223. Uno de los aspectos más importantes de una minuciosa
y la investigación imparcial de la tortura o los malos tratos
es la recopilación y el análisis de pruebas físicas.
La evidencia física consiste en cualquier objeto físico
o materia que pueda brindar información relevante para
ayudar a establecer que ha ocurrido tortura o proporcionar
un vínculo entre la tortura y su presunta víctima o entre la
tortura y su presunto perpetrador. Incluye: (a) material
físico, como vendas, esparadrapo, ropa o aparatos
eléctricos; (b) armas, como cuchillos, porras u otros
dispositivos de tortura; (c) biológica/
materiales forenses, incluidos saliva, sangre, vómito,
semen y fluidos vaginales; (d) artículos electrónicos/
digitales, como teléfonos o computadoras; (e) análisis
toxicológicos, que muestren la presencia de drogas, veneno
o alcohol; (f) trazas, como fibras o cabello; (g) impresiones,
incluyendo huellas dactilares, pisadas y marcas; y (h) los
sitios de presuntas violaciones, como los centros de detención.
224. Siempre que los investigadores tengan la autoridad legal y la capacitación
profesional necesarias para recolectar y almacenar evidencia física
relevante, y los recursos para almacenar, transportar y preservar dicha
evidencia de manera adecuada y segura, deben reunir tanta evidencia
física como sea posible para documentar un incidente o patrón de tortura
o malos tratos. Los investigadores que carezcan de la autoridad, la
capacidad o los recursos no deben recopilar pruebas físicas y, en su lugar,
documentarlas mediante notas, dibujos y fotografías y/o grabaciones de
vídeo de las pruebas.
Los investigadores deben documentar la cadena de
custodia involucrada en la recuperación y preservación
de la evidencia física para utilizar dicha evidencia en
futuros procedimientos legales, incluidos posibles procesos penales.
55
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
225. La mayoría de las torturas y malos tratos ocurren en lugares de
detención en la que la preservación de pruebas físicas o el
acceso sin restricciones puede ser inicialmente difícil o incluso
imposible. El Estado debe otorgar a los investigadores la autoridad
para obtener acceso sin restricciones a cualquier lugar o local y
poder asegurar el entorno en el que presuntamente tuvo lugar la
tortura. El personal de investigación y otros investigadores deben
coordinar sus esfuerzos para llevar a cabo una investigación
exhaustiva del lugar en el que presuntamente ocurrió la tortura.
Los investigadores deben tener acceso sin restricciones al presunto
lugar de tortura o malos tratos. Su acceso debe incluir, pero no
limitarse a, áreas abiertas o cerradas, incluidos edificios, vehículos,
oficinas, celdas de prisión u otros locales en los que presuntamente
hayan tenido lugar torturas o malos tratos.
226. Un sitio de violación/escena del crimen, como un lugar
de la detención, pueden contener pruebas físicas, digitales
y documentales útiles que puedan corroborar las pruebas
testimoniales aportadas por la presunta víctima u otros testigos.
Colaboración con clínica
y expertos forenses es de vital importancia para
recuperar y analizar las pruebas presentes en los sitios de
violaciones y garantizar que la cadena de custodia se mantenga
adecuadamente. Cualquier edificio o área bajo investigación
debe cerrarse para no perder o correr el riesgo de contaminación
de cualquier posible evidencia. Solo los investigadores
debidamente capacitados y su personal deben poder ingresar a
un área una vez que ha sido
designado como investigado. Debe llevarse a cabo un examen de
la escena en busca de evidencia material.
227. Todas las pruebas deben recopilarse, manipularse, empaquetarse,
etiquetarse y guardarse adecuadamente para evitar la contaminación,
la manipulación o la pérdida de pruebas.
Si la tortura o los malos tratos supuestamente han tenido lugar
recientemente para que tales pruebas sean pertinentes, todas las
muestras encontradas de fluidos corporales (como sangre o
semen), pelo, fibras e hilos deben recogerse, etiquetarse y
conservarse adecuadamente. Cualquier instrumento que pueda ser
utilizado para infligir tortura, ya sea destinado a tal fin o utilizado
circunstancialmente, debe ser tomado y conservado. Si es lo
suficientemente reciente como para ser relevante, todas las huellas
dactilares que se encuentren deben levantarse y conservarse.
Se debe hacer a escala un croquis etiquetado del local o lugar
en el que presuntamente se llevó a cabo la tortura, que muestre
todos los detalles pertinentes, como la ubicación de los pisos
en un edificio, las habitaciones, las entradas, las ventanas, el
mobiliario y el terreno circundante. También se deben tomar
fotografías a color y/o grabaciones de video para registrar el mismo.
Se debe hacer un registro de la identidad de todas las personas
presentes en la presunta escena de la tortura, incluidos los nombres
completos, direcciones y números de teléfono o
56
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
otra información de contacto. Si la tortura es lo suficientemente
reciente como para que sea relevante, se debe realizar un inventario
de la ropa de la persona que alega la tortura, ropa de cama, sábanas,
vendas para los ojos y otras pruebas pertinentes y examinarlas en
un laboratorio, si está disponible, para fluidos corporales y otras
pruebas físicas. Se debe obtener información de cualquier persona
presente en las instalaciones o en el área bajo investigación para
determinar si fueron testigos de los incidentes de presunta tortura
o malos tratos. Todos los papeles, registros o documentos
relevantes deben guardarse para uso probatorio y análisis de
escritura a mano.
c) Pruebas médico-legales
228. La documentación médico-legal puede consistir en notas, fichas médicas
(incluidas las cartografías corporales, como las que se incluyen en el
anexo III, para mostrar la ubicación de las lesiones), certificados médicos
oficiales, archivos informáticos, archivos móviles digitales, grabaciones,
fotografías , informes o una combinación de los mismos. La recopilación
de pruebas médico-legales consiste en la recopilación de: (a) la historia
narrativa de la supuesta tortura o malos tratos, el examen médico (físico y
psicológico) y la documentación de los hallazgos con el fin de corroborar
y, cuando sea factible, almacenar y procesamiento de muestras; y (b)
evidencia física – especímenes forenses – del cuerpo de la(s) presunta(s)
víctima(s) (u otras personas involucradas).
La evidencia médico-legal solo debe ser recopilada,
procesada y analizada por profesionales de la salud y
forenses capacitados. Los investigadores que soliciten
servicios médicos para proporcionar registros médicos o la
prestación de servicios o información del paciente solo deben
hacerlo en situaciones en las que estén debidamente autorizados
y tengan los poderes legales necesarios, teniendo plenamente en
cuenta la confidencialidad, la protección de datos y el consentimiento informado.
229. Los investigadores deben disponer los exámenes médicos de las presuntas
víctimas. La puntualidad de tales exámenes médicos es particularmente
importante. Se debe llevar a cabo un examen médico-legal independientemente
del tiempo transcurrido desde la presunta tortura o malos tratos y debe
organizarse con urgencia antes de que desaparezcan los signos agudos.
El examen debe incluir una evaluación
de la necesidad de tratamiento de lesiones y enfermedades,
ayuda psicológica, asesoramiento y seguimiento (véase el capítulo
V para una descripción de la evaluación clínica de la evidencia
física). Los exámenes médico-legales solo deben realizarse con el
consentimiento informado de las presuntas víctimas, incluso con
respecto a su derecho a ser examinados por un médico del género
de su elección, en entornos privados y seguros. Idealmente, el
tratamiento clínico y los exámenes médico-legales deben
proporcionarse en
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
al mismo tiempo para reducir el número de procedimientos a
los que debe someterse una víctima. Una evaluación psicológica
de la presunta víctima de tortura siempre es necesaria y puede
ser parte del examen físico o, en situaciones en las que no hay
signos físicos, puede llevarse a cabo como una evaluación
psicológica únicamente (ver cap. VI para una descripción de la
evaluación clínica de la evidencia psicológica). En situaciones
en las que se alegue que una persona ha muerto como
resultado de torturas o malos tratos, o después de haber sido
sometida a tales abusos, el investigador dispondrá que se realice
una autopsia de conformidad con las normas internacionales
reconocidas.367
230. Los Principios de Estambul indican que los médicos
deben brindar una “interpretación de la probable relación de
los hallazgos físicos y psicológicos con la posible tortura o
malos tratos”.368 En su interpretación de los hallazgos, los
médicos deben evaluar el nivel de consistencia entre los
hallazgos físicos y psicológicos y las denuncias de tortura o
malos tratos. malos tratos
En los capítulos IV, V y VI se proporciona orientación adicional
sobre la interpretación de las pruebas físicas y psicológicas de
tortura y malos tratos (véanse los párrs. 379–
381, 417–423 y 540–545) y anexos I y IV. Si el clínico
considera que existen razones clínicas
en el caso de una constatación incoherente, esto debería
examinarse (véanse los párrs. 268, 342 a 353 y 386 infra).
Los Principios de Estambul también requieren que los
médicos brinden una opinión clínica sobre la posibilidad
general de tortura o malos tratos. Al formular una opinión
clínica sobre la posibilidad de tortura o malos tratos, los
médicos deben considerar todas las pruebas clínicas pertinentes,
incluidos “hallazgos físicos y psicológicos, información histórica,
hallazgos fotográficos, resultados de pruebas de diagnóstico,
conocimiento de las prácticas regionales de tortura, informes de
consultas, etc. .”, según consta en el anexo IV. Además de
brindar una conclusión sobre la posibilidad de tortura o malos
tratos, los médicos deben reiterar los síntomas y discapacidades
actuales y los efectos probables en el funcionamiento social y
brindar recomendaciones para evaluaciones adicionales y
atención para el individuo.
231. El investigador debe asegurarse de que cualquier
la evaluación es del más alto nivel y de acuerdo con el Protocolo
de Estambul y sus Principios para evitar la necesidad de una
segunda evaluación clínica. en situaciones
en el que no se realizó una evaluación clínica
previamente realizada o concertada por el investigador
367 El Protocolo de Minnesota sobre la Investigación de Muertes Potencialmente Ilícitas: Manual Revisado de las Naciones Unidas sobre la Prevención e Investigación Eficaces de Muertes Extralegales,
Ejecuciones arbitrarias y sumarias (publicación de las Naciones Unidas, 2017).
368 Resolución 55/89 de la Asamblea General, anexo, párr. 6 (b) (iv).
369 A/69/387, párr. 39; y Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 25.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
de conformidad con el Protocolo de Estambul y
sus Principios, incluso debido a las preocupaciones de que
el estado del evaluador clínico como empleado del gobierno
podría haber influido en la evaluación, el investigador debe
organizar una segunda evaluación clínica por parte de un
profesional de la salud competente e independiente. El
investigador debe respetar el derecho de las presuntas
víctimas de tortura o malos tratos y de sus familiares a
solicitar una evaluación e informe clínico independiente en
cualquier momento.369
En situaciones en las que una evaluación anterior fue
realizado sin cumplir con estos estándares, un evaluador
clínico debe abordar un posible segundo examen con
cuidado adicional e implementar medidas de mitigación
relacionadas con los riesgos de duplicación, incluida la
retraumatización y las inconsistencias de las segundas
entrevistas. Las evaluaciones clínicas realizadas por expertos
extranjeros deben permitirse con el consentimiento o previa
solicitud de las presuntas víctimas o sus familiares si las
presuntas víctimas no están en condiciones de dar su
consentimiento o realizar dicha solicitud.
(d) Evidencia digital e investigaciones
digitales de fuente abierta
232. El investigador debe tratar de asegurar cualquier prueba
información almacenada, recibida o transmitida por un
dispositivo electrónico. Las pruebas digitales pueden adquirirse,
en particular, cuando se incautan dispositivos electrónicos,
como ordenadores y teléfonos móviles, y al navegar por
Internet en busca de información de fuente abierta.
Si se recupera evidencia digital de dispositivos electrónicos
incautados, dichos dispositivos deben conservarse como
evidencia física y el experto digital que extrajo los datos debe
preparar un informe o declaración jurada que pueda usarse
en los tribunales. La evidencia digital incluye: (a) registros de
salud electrónicos; (b) videos grabados por cámaras de circuito
cerrado; (c) fotos y videos, por ejemplo, de sitios de violaciones
y lesiones físicas, tomados con dispositivos móviles, como
cámaras digitales o teléfonos inteligentes; (d) imágenes,
videos u otra información publicada en las redes sociales; (e)
información almacenada en discos duros de computadoras y
otros equipos periféricos, como tarjetas de memoria, unidades
USB y CD-ROM; (f) correos electrónicos, mensajes de texto e
instantáneos; (g) fotografías aéreas e imágenes satelitales, por
ejemplo, de un centro secreto de detención u otro sitio de
violación; (h) información de ubicación almacenada en un
teléfono celular o redes sociales; y (i) metadatos,
57
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS

es decir, información que proporciona información sobre un dispositivo, porque algunos signos físicos se desvanecen rápidamente y las

archivo (por ejemplo, la hora y el lugar en que se tomó una fotografía ubicaciones pueden verse afectadas. Las fotos reveladas instantáneamente

digital). La autenticidad de la evidencia digital es una consideración pueden deteriorarse con el tiempo. Se prefieren fotos más profesionales y

crítica para su uso como evidencia. Por lo tanto, su autenticidad debe ser deben tomarse tan pronto como el equipo esté disponible. Si es posible, las

examinada mediante el uso de técnicas reconocidas de análisis forense digital. fotografías deben tomarse con una cámara digital, que registra la fecha y la

hora (ya sea en la foto misma o como metadatos adjuntos a la foto

electrónicamente). Si se utiliza una cámara de cine, si es posible, debe ser

233. Tal como se establece en el Protocolo de Berkeley sobre investigaciones una con fecha y hora automáticas.

digitales de fuente abierta:

Las investigaciones de fuente abierta son investigaciones que se y la cadena de custodia de la película, los negativos y las copias debe estar

basan, en su totalidad o en parte, en información disponible completamente documentada. Se requiere un rigor adicional con respecto al
públicamente para llevar a cabo investigaciones formales. almacenamiento y uso de imágenes íntimas. Si las fotografías analógicas son

e investigaciones sistemáticas en línea sobre presuntas tomadas por alguien que no sea el investigador, su recolección y manejo

irregularidades. Hoy en día, se puede acceder a grandes deben seguir los principios de recolección de evidencia y cadena de custodia.

cantidades de información disponible públicamente a través de

Internet, donde un panorama digital en rápida evolución ha dado

lugar a nuevos tipos y fuentes de información que podrían ayudar

en la
(f) Prueba documental
investigación de presuntas violaciones de derechos humanos y

graves crímenes internacionales. La capacidad de investigar tales 235. Los documentos, tanto oficiales como no oficiales, pueden

denuncias es de particular valor para los investigadores que no ser fuente de información sumamente relevante a la hora de

pueden acceder físicamente a las escenas del crimen de manera documentar torturas o malos tratos.

oportuna, lo que suele ser el caso en las investigaciones Las pruebas documentales deben recopilarse, en particular,

internacionales. de lugares de detención, edificios oficiales, bases militares,

registros judiciales, archivos de hospitales, archivos históricos o

La información de código abierto puede proporcionar pistas, fuentes abiertas.

respaldar los resultados de inteligencia y servir como evidencia

directa en los tribunales de justicia. Sin embargo, para que se 236. Los documentos oficiales incluyen: (a) listas de presos y otros registros de

pueda utilizar en los procesos de investigación formales, incluidas custodia (por ejemplo, listas de muertes, registros de transferencias y

las investigaciones judiciales, las misiones de determinación de registros de entrega de alimentos); (b) certificados médicos; (c) registros

los hechos y las comisiones de investigación, los investigadores policiales y archivos de investigación; d) denuncias presentadas ante la

deben emplear métodos coherentes que refuercen la precisión de policía, instituciones nacionales de derechos humanos, oficinas de personas

sus conclusiones y permitan a los jueces y otras personas desaparecidas u otras; (e) documentos del juicio y jurisprudencia previa; (f)

encargadas de la determinación de los hechos evaluar mejor la informes militares y de inteligencia y otros documentos operativos (registros de

calidad del propio proceso de investigación.370 servicio, registros de transporte, registros de logística, informes de actividades,

planes y estrategias militares, registros de comunicación, directivas y órdenes

escritas); (g) documentos de identidad y registro, incluidos documentos oficiales

(e) Fotografía sobre personas desaparecidas y registros de tumbas; y (h) archivos oficiales,

tales como actas de sesiones gubernamentales, documentos de comando y

234. Se deben tomar fotografías en color de las lesiones de las personas que control, memorandos internos del gobierno y registros diplomáticos.

alegan haber sido torturadas o maltratadas con su consentimiento, de los

locales donde presuntamente se produjeron las torturas o malos tratos

(interiores y exteriores) y de cualquier otra evidencia física encontrada allá.

Una cinta métrica o algún otro medio para mostrar la escala en la fotografía

es esencial. Las fotografías deben tomarse lo antes posible, incluso con 237. Los documentos no oficiales incluyen: (a) otros registros de salud; (b)

una cámara básica u otro equipo adecuado. informes y registros de organizaciones de la sociedad civil, incluidas

las organizaciones no gubernamentales de derechos humanos; c) artículos

de prensa y

370 Centro de Derechos Humanos, Facultad de Derecho de la Universidad de California, Berkeley, y ACNUDH, Protocolo de Berkeley sobre investigaciones digitales de fuente abierta: una guía práctica
sobre el uso eficaz de la información digital de fuente abierta en la investigación de violaciones del derecho internacional penal, de derechos humanos y humanitario (Nueva York y Ginebra, 2020),
pág. vii.

58
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
materiales periodísticos, incluyendo notas tomadas por
periodistas no incluidas en publicaciones; (d) relatos de
denunciantes/personas con información privilegiada sobre eventos,
prácticas e información relevantes; (e) diarios y palabras
garabateadas en una pared, por ejemplo, en un lugar de detención;
y (f) bocetos, por ejemplo, de sitios de violaciones.
D. Comisiones de investigación
238. Las comisiones de investigación cumplen un papel
importante al contribuir a la rendición de cuentas de
los perpetradores, responder a las necesidades de las
víctimas, identificar la responsabilidad institucional,
proponer reformas institucionales, legales y de personal y
promover la reconciliación.371 Sin embargo, por sí sola,
una comisión de investigación “nunca es suficiente para
satisfacer plenamente las obligaciones de un Estado en
virtud del derecho internacional con respecto a la tortura y
otras formas de malos tratos” y “se debe tener cuidado de
garantizar que el trabajo de la comisión no inhiba los
enjuiciamientos de ninguna manera”.372
1. Definición del alcance de la investigación
239. Estados y organizaciones que establecen comisiones
de investigación necesitan definir el alcance de la investigación
incluyendo términos de referencia en su autorización.
Definir los términos de referencia de la comisión puede
aumentar en gran medida su éxito al dar legitimidad a los
procedimientos, ayudar a los miembros de la comisión a
llegar a un consenso sobre el alcance de la investigación y
proporcionar una medida por la cual se puede juzgar el informe
final de la comisión. La asignación de una tarea específica a
una comisión de investigación debe complementarse con la
provisión de recursos adecuados para permitir que la comisión
cumpla con la tarea. Recomendaciones
para definir los términos de referencia son los siguientes:
(a) Deben enmarcarse de manera neutral para que no
sugieran un resultado predeterminado. Para ser neutrales, los
términos de referencia no deben limitar las investigaciones en
áreas que podrían descubrir la responsabilidad del Estado por
tortura o malos tratos;
(b) Deben indicar con precisión qué hechos y cuestiones
se investigarán y abordarán en el informe final de la
comisión;
371 A/HRC/19/61, párr. 26
372 Ibíd., párrs. 69 y 55. Véase también conjunto actualizado de principios para la protección y promoción de los derechos humanos a través de la lucha contra la impunidad, principios 6–13.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(c) Deben proporcionar flexibilidad en el alcance de la
investigación para garantizar que la investigación exhaustiva
por parte de la comisión no se vea obstaculizada por términos
de referencia demasiado restrictivos o demasiado amplios. La
flexibilidad necesaria puede lograrse, por ejemplo, permitiendo
que la comisión modifique su mandato según sea necesario.
Sin embargo, es importante que la comisión mantenga
informado al público sobre cualquier modificación de su
mandato.
2. Poder de la comisión
240. Los poderes de la comisión deben establecerse
mediante la estipulación de principios generales. La
comisión necesita específicamente lo siguiente:
(a) Autoridad para obtener toda la información necesaria
para la investigación, incluida la autoridad para obligar a
declarar bajo sanción legal, para ordenar la producción de
documentos, incluidos los registros médicos y del Estado, y para
proteger a los testigos, las familias de la víctima y otras fuentes;
(b) Autoridad para emitir un informe público;
c) Autoridad para realizar visitas in situ, incluido el lugar donde
se sospeche que ha ocurrido la tortura o los malos tratos;
(d) Autoridad para recibir pruebas de testigos y organizaciones
ubicadas fuera del país.
3. Criterios de afiliación
241. Los miembros de la comisión deben ser elegidos por su
antecedentes y reconocida imparcialidad, competencia e
independencia como personas, tal como se define a continuación:
(a) Imparcialidad. Los miembros de la comisión no deben tener
vínculos estrechos con ninguna persona, entidad estatal, partido
político u otra organización potencialmente implicada en la
tortura o los malos tratos. No deben tener vínculos demasiado
estrechos con una organización o grupo del que sea miembro la
víctima, ya que esto puede dañar la credibilidad de la comisión.
Sin embargo, esto no debe ser una excusa para exclusiones
generales de la comisión, por ejemplo, de miembros de grandes
organizaciones de las que la víctima también es miembro o de
personas asociadas con organizaciones dedicadas al tratamiento
y rehabilitación de víctimas de tortura;
59
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(b) Competencia. Los miembros de la comisión deben ser
capaces de evaluar y sopesar las pruebas y ejercer un buen
juicio. Si es posible, las comisiones de investigación deben
incluir personas con experiencia en derecho, medicina y otros
campos especializados apropiados;
(c) Independencia. Los miembros de la comisión deben tener una
reputación en su comunidad por su honestidad y equidad;
(d) Representación. La composición de la comisión debe ser tal que
asegure una representación adecuada de género y personas con
características y experiencias relevantes en el contexto específico.
242. La objetividad de la investigación y la
las conclusiones de la comisión pueden, entre otras cosas,
depender de si tiene tres o más miembros en lugar de uno o
dos. En general, un comisionado único no debe realizar
investigaciones sobre tortura o malos tratos. Un solo
comisionado aislado generalmente estará limitado en la
profundidad de la investigación que el comisionado puede
realizar solo. Además, un solo comisionado tendrá que tomar
decisiones controvertidas e importantes sin debate y será
particularmente vulnerable a la presión del Estado y otras
presiones externas.
4. Personal de la Comisión
243. Las comisiones de investigación deberían tener
abogado experto. Cuando la comisión esté investigando denuncias
de conducta indebida del Estado, sería aconsejable designar un
abogado fuera del Ministerio de Justicia.
El abogado principal de la comisión debe ser
aislado de la influencia política, a través de la permanencia
en el servicio civil o como miembro totalmente independiente del
colegio de abogados. La investigación a menudo requerirá
asesores expertos. La experiencia técnica debe estar disponible
para la comisión en áreas como patología, ciencia forense,
psiquiatría, psicología, ginecología y pediatría. Para llevar a cabo
una investigación completamente imparcial y exhaustiva, la
comisión casi siempre necesitaría sus propios investigadores
para buscar pistas y desarrollar pruebas. De este modo, la
credibilidad de una investigación mejoraría significativamente en
la medida en que la comisión
podría confiar en sus propios investigadores.
5. Protección de testigos
244. El Estado protegerá a los denunciantes, testigos,
los que llevan a cabo la investigación y sus familias
60
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
de la violencia, las amenazas de violencia o cualquier otra
forma de intimidación (véanse los párrs. 204 a 207 supra). Si la
comisión concluye que existe un temor razonable
de persecución, acoso o daño a cualquier testigo o posible
testigo, la comisión puede considerar aconsejable escuchar la
evidencia a puerta cerrada, mantener confidencial la identidad
de un informante o testigo, usar solo evidencia que no pondrá
en riesgo la identificación del testigo y tomar otras medidas
apropiadas. medidas.
6. Procedimientos
245. De los principios generales del procedimiento penal se desprende
que las audiencias deben celebrarse en público, a menos que las
audiencias a puerta cerrada sean necesarias para proteger la
seguridad y/o la privacidad de un testigo. Los procedimientos a
puerta cerrada deben grabarse y el registro sellado y no publicado
debe mantenerse en un lugar conocido. Ocasionalmente, se
puede requerir un secreto total para fomentar el testimonio y la
comisión puede querer escuchar a los testigos en privado, de
manera informal o sin grabar el testimonio.
7. Aviso de consulta
246. Amplia notificación del establecimiento de una comisión.
y se debe indicar el tema de la consulta. El aviso debe incluir
una invitación a presentar
información y declaraciones escritas a la comisión
e instrucciones a las personas dispuestas a testificar.
El aviso puede difundirse a través de periódicos, revistas,
radio, televisión, folletos y carteles.
8. Recepción de pruebas
247. Las comisiones de investigación deben tener la facultad
de exigir el testimonio y producir documentos, así como
la autoridad para exigir el testimonio de los funcionarios
presuntamente implicados en torturas o malos tratos.
En la práctica, esta autoridad puede implicar el poder de
imponer multas o sentencias si los funcionarios gubernamentales
u otras personas se niegan a cumplir. Las comisiones de
investigación deben invitar a personas a testificar o presentar
declaraciones por escrito como primer paso en la recopilación de pruebas.
Las declaraciones escritas pueden convertirse en una importante
fuente de evidencia si sus autores tienen miedo de testificar, no pueden
viajar a los procedimientos o no están disponibles por algún otro motivo.
Las comisiones de investigación deben revisar otros
procedimientos que puedan proporcionar información relevante.
9. Derechos de las partes
248. Quienes aleguen haber sido torturados (o
sufrido malos tratos) y sus representantes legales
Machine Translated by Google
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
debe ser informado y tener acceso a cualquier audiencia y toda la
información relevante para la investigación y debe tener derecho a
presentar pruebas. Este énfasis particular en el papel de las
presuntas víctimas como partes en el proceso refleja el papel
especialmente importante que juegan sus intereses en la conducción
de la investigación.
Sin embargo, todas las demás partes interesadas también deberían
tener la oportunidad de ser escuchadas. El órgano de investigación
debe estar facultado para citar a testigos, incluidos los funcionarios
presuntamente implicados, y para exigir la producción de pruebas.
A todos estos testigos se les debe permitir la asistencia letrada si es
probable que resulten perjudicados por la investigación, por ejemplo,
cuando su testimonio pueda exponerlos a cargos penales o
responsabilidad civil. Los testigos no pueden ser obligados a declarar
contra sí mismos. Debe haber una oportunidad para que la comisión
interrogue efectivamente a los testigos. Se debe permitir que las
partes en la investigación presenten preguntas por escrito a la
comisión.
10. Evaluación de la evidencia
249. La comisión debe evaluar toda la información y
evidencia que recibe para determinar la confiabilidad y la
probidad. La comisión debe evaluar el testimonio oral,
teniendo en cuenta el comportamiento y la credibilidad general
del testigo. La comisión debe ser sensible a los problemas
sociales, culturales y de género que afectan el comportamiento.
Corroboración de evidencia
de varias fuentes aumentará el valor probatorio de dicha
evidencia y la confiabilidad de la evidencia de oídas. La
confiabilidad de la evidencia de oídas debe ser considerada
cuidadosamente antes de que la comisión la acepte como un
hecho. Los testimonios que no se sometan a prueba mediante
un contrainterrogatorio también deben considerarse con cautela. En
el testimonio de la cámara conservado en un registro cerrado
o no registrado en absoluto a menudo no está sujeto a
contrainterrogatorio y, por lo tanto, se le puede dar menos peso.
11. Informe de la comisión
250. La comisión debe emitir un informe público dentro de un período
de tiempo razonable, que “debe publicarse ampliamente y de
manera que sea accesible a la audiencia más amplia posible”.373
Además, cuando la comisión no es unánime en sus conclusiones,
el los comisionados de minorías deben presentar una disidencia
373 A/HRC/19/61, párr. 77.
374 Según el Relator Especial sobre la tortura, “más allá de una enumeración de los hechos, el informe de una comisión de investigación debe tratar de proporcionar una imagen precisa del contexto
social y político en el que se produjeron los actos de tortura y otros crímenes internacionales. Crucialmente, el informe debe identificar las lagunas en el orden institucional público y privado que
han permitido la ruptura de las protecciones legales y procesales y han llevado a una cultura de impunidad para los crímenes investigados por la comisión”.
(Ibíd., párr. 75).
375 Resolución 35/12 del Consejo de Derechos Humanos, decimotercer párrafo del preámbulo. Ver también Foley, Combating Torture (ver nota al pie 240).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
opinión. Los informes de las comisiones de investigación
deben contener, como mínimo, la siguiente información:
(a) El alcance de la investigación y los términos de referencia;
(b) Los procedimientos y métodos de
evaluación de la evidencia;
(c) Una lista de todos los testigos, incluidos la edad y el sexo,
que hayan testificado, excepto aquellos cuyas identidades se
retienen por protección o que hayan testificado a puerta cerrada,
y los elementos de prueba recibidos como prueba;
d) La hora y el lugar de cada sesión (esto podría adjuntarse al
informe);
(e) Los antecedentes de la investigación, tales como las
condiciones sociales, políticas y económicas relevantes;374
(f) Los eventos específicos que ocurrieron y las pruebas en las
que se basan dichos hallazgos;
(g) La ley en la que se basó la comisión;
(h) Las conclusiones de la comisión basadas en la ley aplicable y
las determinaciones de hecho;
(i) Recomendaciones basadas en los hallazgos de la comisión.
251. El Estado debe responder de manera rápida y pública al
informe de la comisión y, en su caso, indicar qué medidas
pretende tomar en respuesta al informe, en particular con miras
a implementar de manera rápida y efectiva sus recomendaciones.
E. Papel de los fiscales, jueces,
instituciones nacionales de derechos
humanos y otros actores en la
investigación de la tortura
252. “Los jueces, fiscales y abogados desempeñan un papel
fundamental en la defensa de los derechos humanos,
incluido el derecho absoluto e inderogable a no sufrir
tortura ni otros tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes.”375
61
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
1. Fiscales
253. Los fiscales, en la administración de justicia, “desempeñarán un
papel activo en los procedimientos penales, incluida la iniciación
del enjuiciamiento y, cuando lo autorice la ley o sea coherente
con la práctica local, en la investigación del delito, la supervisión de
la legalidad de estas investigaciones, supervisión de la ejecución de
las decisiones judiciales y el ejercicio de otras funciones como
representantes del interés público”.376 Al hacerlo, “los fiscales
prestarán la debida atención al enjuiciamiento de los delitos cometidos
por funcionarios públicos, en particular la corrupción, el abuso de
poder, las violaciones de los derechos humanos y otros delitos
reconocidos por el derecho internacional y, cuando lo autorice la ley o
sea compatible con la práctica local, la investigación de tales
delitos”377.
254. Como principio general, “los fiscales deberán, en
de conformidad con la ley, desempeñar sus funciones de manera
leal, coherente y expedita, y respetar y proteger la dignidad
humana y defender los derechos humanos, contribuyendo así a
garantizar el debido proceso y el buen funcionamiento del sistema
de justicia penal”378.
Los fiscales tienen el deber de negarse a tener en cuenta las
pruebas de las que saben o creen por motivos razonables que se
han obtenido recurriendo a torturas o malos tratos. Deben asegurarse
de que cualquier información, confesión o admisión obtenida de una
persona por esos medios sea inadmisible como prueba contra esa
persona en cualquier procedimiento (regla de exclusión).
Sin embargo, dicha prueba, información, confesión o admisión
puede admitirse contra cualquier persona acusada de tortura
como prueba de que se obtuvo mediante tortura.379 En tales casos,
los fiscales deben informar al tribunal sobre la existencia de dicha
prueba y deben
tome todas las medidas necesarias para garantizar que los
responsables de utilizar tales métodos sean llevados ante la justicia.380
255. Los fiscales deben ser profesionales calificados y
recibir capacitación periódica, recursos adecuados, independencia
y protección para garantizar que puedan ejercer su función en el
contexto de las investigaciones de presuntos actos de tortura o
malos tratos de conformidad con este manual. Las autoridades
judiciales deben emitir directrices sobre el uso de este manual y los
fiscales deben recibir capacitación periódica sobre las
376 Directrices sobre la función de los fiscales, párr. 11
377 Ibíd., párr. 15.
378 Ibíd., párr. 12
379 Véase, en particular, Convención contra la Tortura, art. 15.
380 Directrices sobre la función de los fiscales, párr. dieciséis.
381 A/69/387, párr. 67.
382 CAT/C/54/2, párr. 92.
62
tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
estándares, métodos de investigación y desarrollos.381
Los fiscales deben ejercer su discreción en un
manera que respete plenamente la prohibición de la tortura a lo
largo de cualquier proceso judicial. No deben convertirse en
cómplices de la habilitación o comisión de actos de tortura o malos
tratos ni de la impunidad de tales actos.
256. Al recibir una denuncia, o enterarse de otra manera de una denuncia
de tortura o malos tratos, los fiscales deben tomar medidas de
inmediato para garantizar que se lleve a cabo una investigación
rápida, imparcial, eficaz y que tenga en cuenta las cuestiones de
género y los niños de conformidad con este manual. 382 Los
fiscales deben tomar o solicitar que se tomen medidas de
investigación expeditas de conformidad con este capítulo. Deben
abrir una investigación a tal efecto y, en situaciones en las que se
determine que las investigaciones han sido inadecuadas en
cualquier etapa a la luz de las normas establecidas en este manual,
se debe reabrir la investigación original o iniciar una nueva
investigación.
Durante todo el proceso, los fiscales deben tomar todas las
medidas posibles para garantizar la protección de las víctimas y
los testigos. Esto incluye iniciar procesos contra cualquier persona
que ponga en peligro la integridad física o psicológica de las
víctimas o testigos u otras personas involucradas en las
investigaciones. Los fiscales deben tratar de establecer la
responsabilidad de los funcionarios u otras personas involucradas
en actos de tortura o
malos tratos y presentar cargos por el delito penal de tortura
o malos tratos, o delitos similares pertinentes en virtud de la
legislación nacional, en situaciones en las que se disponga de
pruebas suficientes. En los casos en que
no se dispone de pruebas suficientes para presentar cargos de
tortura o malos tratos, los fiscales deben considerar la posibilidad
de presentar cargos por delitos menores o recomendar medidas
disciplinarias, según corresponda. Al solicitar una pena, en particular
una pena privativa de libertad, los fiscales deben asegurarse de que
sea proporcional a la gravedad del delito, teniendo en cuenta los
derechos y opiniones de las víctimas de tortura o malos tratos y sus
familias, según corresponda.
2. Jueces
257. “Un poder judicial independiente e imparcial… y la integridad del sistema
judicial son requisitos previos para
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tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS
la protección de los derechos humanos y la aplicación del
estado de derecho y para garantizar juicios justos y la
administración de justicia sin discriminación alguna.”383 Los
jueces deben contar con la independencia, capacitación,
recursos y protección necesarios que les permitan desempeñar
adecuadamente sus funciones . múltiples funciones en el
contexto de las investigaciones y otros procesos judiciales
relacionados con la tortura y los malos tratos de conformidad con
este manual.
258. Los jueces deben tener especial cuidado en el ejercicio de una función de
control en el ámbito de sus funciones para garantizar la integridad física y
psíquica y el bienestar de las personas privadas de libertad384.
Los jueces tienen la autoridad judicial para ordenar y
garantizar que los sospechosos y los detenidos no sean
arbitrariamente detenidos, detenidos o trasladados a lugares
donde puedan ser torturados. En situaciones en las que las
autoridades estatales u otras personas que actúen a título
oficial, así como los jueces, sepan o tengan motivos razonables
para creer que la tortura o los malos tratos han sido, están
siendo o serán cometidos por actores estatales o privados y,
cuando obligados a hacerlo, no investigan, juzgan y sancionan
a los actores, el Estado tiene la responsabilidad. Los funcionarios
que no tomaron medidas para evitar que se produjera ese trato
deben ser considerados responsables de consentir o tolerar
tales actos inadmisibles.385 El Comité contra la Tortura cita el
ejemplo específico del caso en el que una persona debe ser
trasladada o enviada a la custodia de una persona o institución
conocida por haber cometido torturas o malos tratos o por no
haber implementado las garantías adecuadas.386
259. En situaciones en las que los jueces sospechen que una
persona ha sido sometida a tortura o malos tratos, deben
hacer uso de su autoridad y poder judicial para iniciar investigaciones
o informar a los fiscales para que puedan intervenir en el asunto.
En particular, en situaciones en las que los sospechosos o el
acusado planteen denuncias de tortura o malos tratos en el curso
de procesos o juicios judiciales, los jueces deben tomar medidas
para garantizar que se lleva a cabo una investigación rápida,
imparcial y efectiva de tales denuncias de conformidad con con
este manual.387 De conformidad con el artículo 15 de la
383 Resolución 35/12 del Consejo de Derechos Humanos, quinto párrafo del preámbulo. Véanse también los Principios básicos sobre la independencia de la judicatura.
384 Conjunto de Principios para la Protección de Todas las Personas Sometidas a Cualquier Forma de Detención o Prisión, principio 4; y CAT/OP/2.
385 Comité contra la Tortura, Observación general No. 2 (2007), párr. 18
386 Ibíd., párr. 19
387 CAT/C/54/2, párr. 92.
388 Comité contra la Tortura, PE c. Francia (CAT/C/29/D/193/2001), párrs. 3.3, 6.2 y 6.3.
389 A/69/387, párr. 49.
390 Ibíd., párr. 52.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Convención contra la Tortura, un juez no debe admitir ninguna
prueba presuntamente obtenida como resultado de tortura o
malos tratos en situaciones en las que el
las autoridades de acusación no pueden demostrar que tales
pruebas no se obtuvieron de esa manera, salvo como prueba
contra la persona acusada de obtener tales pruebas.
La prohibición del uso de pruebas o información supuestamente
obtenida como resultado de la tortura (la regla de exclusión) se
aplica a cualquier procedimiento, incluidos los procedimientos
judiciales y no judiciales, como las audiencias penales y
administrativas y las audiencias de extradición.388
260. Los jueces encargados de dirigir las investigaciones de los casos de tortura o
malos tratos deben asegurarse de que todos los
se toman medidas de investigación de acuerdo con este
manual, y ordena a los organismos de investigación que
tomen medidas adicionales según sea necesario. En los
juicios penales contra los presuntos perpetradores de tortura,
los jueces deben escuchar y sopesar todas las pruebas
disponibles con miras a establecer con el estándar de prueba
requerido si los acusados son culpables, teniendo plenamente
en cuenta su derecho a un juicio justo, y, de ser así, qué
castigo es apropiado en las circunstancias particulares. En
particular, los jueces deben examinar la pertinencia y
confiabilidad de las pruebas forenses, que han sido descritas
como un tipo de prueba pericial, considerando la experiencia
profesional, las circunstancias relevantes y otras pruebas.389
Tal como lo enfatizó el Relator Especial sobre la tortura:
El Protocolo de Estambul debe utilizarse para
evaluación de las denuncias de tortura e informes médico
legales realizados de conformidad con las normas y
principios del Protocolo, incluidas la independencia y la
imparcialidad, [que] presenten conclusiones fiables sobre
la tortura. Estos informes médico legales, por lo tanto, deben
ser considerados como prueba fehaciente sobre la cuestión
de si se ha perpetrado o no tortura.390
261. Los jueces deben velar por que los principios y
las normas establecidas en este manual se respetan en
todos los procedimientos judiciales, incluidos los casos de
derechos civiles y fundamentales, los procedimientos
administrativos y civiles, y los casos de asilo y no devolución. jueces de
63
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS

Las cortes y tribunales regionales e internacionales y 4. Otros actores

los miembros de los órganos creados en virtud de tratados
de derechos humanos deben considerar las cuestiones 263. El derecho internacional obliga a los Estados a investigar
relacionadas con la tortura o los malos tratos con la debida denuncias de tortura o malos tratos. Actores distintos a los
referencia a las normas y principios establecidos en este manual. Estados, como las organizaciones de la sociedad civil,
Sin embargo, el resultado de los procedimientos judiciales no juegan un importante papel independiente y complementario
debe depender de una investigación completa previa de las en la búsqueda de lograr los objetivos de las investigaciones
denuncias de tortura o malos tratos. Por ejemplo, en casos para combatir la impunidad, garantizar la justicia y defender
constitucionales, civiles o administrativos en los que una víctima el estado de derecho. Esta función consiste en documentar la
presenta alegaciones creíbles de tortura o malos tratos bajo tortura o los malos tratos, representar a las víctimas, impulsar
custodia o una persona muere bajo custodia, la carga de la investigaciones u otras indagatorias o procesos judiciales que
prueba debe cambiar y recaer en el Estado para proporcionar den lugar a investigaciones, aportar pruebas y/o
una explicación plausible de cómo se causó el daño.391 o experiencia a los órganos de investigación, examinando
los procedimientos y proporcionando un análisis legal
3. Instituciones nacionales de derechos humanos y de la idoneidad de las investigaciones. Al documentar
mecanismos preventivos la tortura o los malos tratos, para su uso en procedimientos
legales, como investigaciones o procedimientos judiciales o
262. Las instituciones nacionales que, de conformidad con el cuasijudiciales, para reparación, prevención y acceso a
principios relativos al estatuto de las instituciones nacionales servicios o en solicitudes de asilo o de no devolución, los actores
para la promoción y protección de los derechos humanos no estatales deben buscar documentación que

(Principios de París), con competencias para promover y proviene de una fuente confiable e identificable, detallada,
proteger los derechos humanos, debe tener el mandato de internamente consistente y recopilada lo antes posible. Los
investigar todas las denuncias de violaciones de los derechos actores no estatales deben adherirse a los principios
humanos, incluidos la tortura y los malos tratos .392 En el ejercicio establecidos en este manual, para no poner en peligro el
de este mandato, las instituciones nacionales de derechos propósito de una investigación. Los Estados están obligados
humanos deben desempeñar sus funciones con respecto a los a respetar el papel desempeñado por dichos actores y brindar
presuntos actos y patrones de tortura o malos tratos, de protección efectiva contra cualquier amenaza, acoso u otra
conformidad con las técnicas de investigación no coercitivas y los interferencia injustificada.395

estándares y principios establecidos en este manual,

particularmente con respecto a cualquier investigación legal sobre
denuncias de tortura o malos tratos que una institución de este F. Uso de pruebas de tortura
tipo tenga el mandato de llevar a cabo. manual.394 Dichos o malos tratos en otros
órganos deben poder recibir denuncias confidenciales de tortura procedimientos legales
o malos tratos y tener el mandato de identificar cuestiones de
interés, que deben ser planteadas a las autoridades 264. Los resultados de las investigaciones sobre presuntos actos de tortura o
correspondientes, como parte de sus visitas periódicas. malos tratos deben tomarse

en consideración en cualquier otro procedimiento

legal pertinente. Esto incluye: (a) procedimientos relacionados
con la exclusión de confesiones o declaraciones hechas

bajo tortura (regla de exclusión) en la que el Estado tiene la

carga de la prueba para demostrar que una persona no ha
sido torturada;396 (b) casos civiles y administrativos y casos
de derechos fundamentales y derechos humanos,
particularmente para establecer responsabilidades e identificar
formas adecuadas de reparación para

391 E/CN.4/2003/68, párr. 26 (k). Esto está en consonancia con la jurisprudencia de los tribunales regionales e internacionales y los órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos, véase Fondo de Contribuciones Voluntarias de
las Naciones Unidas para las Víctimas de la Tortura, “Interpretación de la tortura a la luz de la práctica y la jurisprudencia de los organismos internacionales” (2011), pág. 9.

392 A/56/44, párr. 46 (c).

393 Asociación para la Prevención de la Tortura, Foro de Asia Pacífico de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos y ACNUDH, Preventing Torture: An Operational Guide for National Human Rights
Instituciones de Derechos, págs. 55–60.

394 Véase, entre otros, el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura. Para la relación entre las instituciones nacionales de derechos humanos y los mecanismos nacionales de prevención,
véase ACNUDH, Preventing Torture: The Role of National Preventive Mechanisms– A Practical Guide, Professional Training Series No. 21 (Nueva York y Ginebra, 2018), pág. dieciséis.

395 Resoluciones de la Asamblea General 32/31 y 70/161.

396 A/HRC/25/60.

64
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tercero INVESTIGACIÓN LEGAL DE LA TORTURA O MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

garantizar el derecho de las víctimas a un recurso y
reparación efectivos;397 (c) las comisiones de la verdad y
otros procedimientos establecidos en el contexto de una
transición de regímenes represivos y/o conflictos;398 y (d)
solicitudes de asilo o no devolución.399 En situaciones en
las que no se haya llevado a cabo una investigación completa,
cualquier prueba presentada en los procedimientos legales
pertinentes debe obtenerse adhiriéndose al Protocolo de
Estambul y sus Principios.
265. Los tomadores de decisiones, particularmente en materia de asilo y
sometidos a tortura (u otras violaciones de derechos humanos
equivalentes a persecución) – y considerar adecuadamente la
evidencia disponible, particularmente la evidencia clínica, en
su toma de decisiones. En particular, los tomadores de
decisiones no deben adoptar opiniones sobre asuntos clínicos
para los cuales no están calificados y no deben descartar
evidencia clínica sobre la base de haber realizado un hallazgo
de credibilidad negativo previo. La evidencia clínica de torturas
o malos tratos en el pasado suele ser un fuerte indicador de un
riesgo real de persecución o tortura al regresar.400
La falta de evidencia clínica no establece que

casos de devolución, debe aplicar el estándar de prueba una persona no ha sido torturada o que la denuncia de
correcto: una probabilidad razonable o un riesgo real de ser una persona que alega tortura carece de credibilidad.

397 Comité contra la Tortura, Observación general No. 3 (2012), inter alia, párr. 30: “Los Estados partes también pondrán a disposición de las víctimas todas las pruebas relativas a actos de tortura
o malos tratos a petición de las víctimas, sus abogados o el juez. El hecho de que un Estado parte no proporcione pruebas e información, como registros de evaluaciones o tratamientos
médicos, puede menoscabar indebidamente la capacidad de las víctimas para presentar denuncias y buscar reparación, indemnización y rehabilitación”.
398 A/HRC/24/42.
399 Comité contra la Tortura, Observación general No. 4 (2017), párr. 18 (e).
400 Ibíd., párr. 28

sesenta y cinco
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Consideraciones
generales para las entre
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
266. Cuando una persona presuntamente torturada es
entrevistado, hay una serie de cuestiones y factores prácticos
que deben tenerse en cuenta.
Estas consideraciones generales se aplican a todos los
médicos que realizan entrevistas. Las evaluaciones clínicas
de la tortura y los malos tratos ayudan a establecer tales
hechos y proporcionan evidencia crítica en contextos médico-
legales y otros (ver cap. VII). También pueden servir como
pautas útiles para otros profesionales que realizan
entrevistas con presuntas víctimas, incluidos abogados,
fiscales, adjudicadores, monitores de derechos humanos y
otros. Este capítulo proporciona una guía de "puntos en
común" sobre las consideraciones generales de la entrevista
y aborda diferentes contextos de entrevista.
A. Consideraciones preliminares
1. Finalidad de la consulta, el
examen y la documentación
267. El propósito de la investigación es establecer los hechos constitutivos
de los presuntos incidentes de tortura o malos tratos (ver cap. III y
anexo I), para asegurar la rendición de cuentas y reparación por
estos delitos y, en última instancia, la prevención mediante la
disuasión.
Evaluaciones clínicas de tortura o malos tratos
puede proporcionar evidencia crítica en contextos
médico-legales y otros (ver cap. VII), incluyendo:
a) Evaluaciones clínicas de pruebas físicas y psicológicas de presuntas
torturas o malos tratos en causas penales, civiles, administrativas y de
otra índole, a los efectos de:
i) Proteger a las personas de la tortura y los malos
tratos mediante evaluaciones clínicas periódicas de posibles
indicios físicos y psicológicos de tortura o malos tratos durante los
períodos de privación de libertad, como en los lugares de
detención y las prisiones;
(ii) Identificar a los autores de tortura y malos tratos y llevarlos
ante la justicia;
(iii) Documentar pruebas de tortura y malos tratos en
los procedimientos de asilo;
(iv) Documentar y establecer conclusiones de tortura y
malos tratos a efectos de diversos procedimientos judiciales,
incluida la identificación de confesiones obtenidas bajo tortura o
malos tratos;
68
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
(v) Documentar y establecer prácticas nacionales,
regionales e internacionales de tortura y malos tratos;
b) Visitas internacionales de vigilancia de los derechos humanos y
prevención de la tortura a los lugares de detención;
c) Investigaciones, misiones e investigaciones sobre derechos humanos;
(d) Responsabilidad de los funcionarios estatales y
prácticas estatales de investigación y documentación, incluidas las
evaluaciones clínicas realizadas por funcionarios estatales;
e) Promoción de la prevención de la tortura, la rendición de cuentas
y la reparación;
f) Encuentros de atención primaria de la salud en los que se alegue o
se sospeche de tortura o malos tratos;
g) Puesta en práctica de las condiciones necesarias para la investigación
y documentación efectivas de la tortura y los malos tratos (véase el cap.
VIII);
(h) Identificar las necesidades terapéuticas, de rehabilitación y
posibles reparaciones de los sobrevivientes de la tortura.
268. La finalidad de la valoración médico-legal de
casos presuntos o presuntos de tortura o malos tratos es
proporcionar una interpretación clínica del grado en que
los hallazgos clínicos se correlacionan con la afirmación
de abuso de la presunta víctima, y una opinión clínica
sobre la veracidad de tales afirmaciones y la posibilidad
de tortura, con base en en toda la evidencia clínica relevante,
y para comunicar efectivamente estos hallazgos,
interpretaciones y conclusiones al poder judicial u otras
autoridades apropiadas. Además, el testimonio clínico a
menudo sirve para educar al poder judicial, a otros
funcionarios gubernamentales y a las comunidades locales e internacionales.
sobre las secuelas físicas y psicológicas de la tortura.
Todas las evaluaciones clínicas de presuntas o presuntas
torturas o malos tratos deben llevarse a cabo de
de conformidad con los Principios incluidos en el anexo I.
El examinador debe estar preparado para hacer lo siguiente:
(a) Evaluar posibles daños y abusos, incluso en ausencia de
denuncias específicas por parte de individuos o funcionarios
judiciales o encargados de hacer cumplir la ley;
(b) Documentar evidencia física y psicológica de lesión y abuso;
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
(c) Correlacionar el grado de consistencia entre los resultados
de la evaluación y las denuncias específicas de abuso por parte de
la presunta víctima;
(d) Correlacionar el grado de consistencia entre los
resultados de la evaluación individual y los métodos de tortura
utilizados en una región en particular y sus efectos secundarios
comunes;
(e) Dar una interpretación clínica de los resultados de las
evaluaciones médico-legales y/o proporcionar una opinión experta
sobre la posibilidad de tortura basada en toda evidencia clínica
relevante, incluyendo “hallazgos físicos y psicológicos, información
histórica, hallazgos fotográficos, resultados de pruebas de diagnóstico,
conocimiento de las prácticas regionales de tortura, informes de
consulta, etc.” como se indica en el anexo IV;
f) Utilizar la información obtenida de manera adecuada para mejorar
la investigación y la documentación adicional de la tortura;
(g) Ante una solicitud judicial u otra solicitud legal apropiada,
proporcionar una evaluación de la confiabilidad de los hallazgos
clínicos.
2. Condiciones esenciales y habilidades de entrevista
269. Todas las evaluaciones clínicas de casos en los que la tortura
o se alegue o se sospeche de malos tratos debe llevarse
a cabo con objetividad e imparcialidad. La evaluación
debe basarse en la pericia y la experiencia profesional del
médico. Las obligaciones éticas de beneficencia, no
maleficencia, confidencialidad y respeto por la autonomía
exigen una precisión e imparcialidad inflexibles para establecer
y mantener la credibilidad profesional. Los médicos que
realizan evaluaciones de personas privadas de libertad deben
tener conocimiento del Protocolo de Estambul y sus Principios
y la capacidad de evaluar y documentar de manera efectiva
los efectos físicos y psicológicos de la tortura y los malos tratos.
270. Los médicos deben tener conocimiento de la detención
condiciones y métodos de tortura utilizados en la región
particular donde la presunta víctima estuvo detenida o
encarcelada, en situaciones en las que se dispone de esta
información, y las secuelas comunes de la tortura. El informe
clínico debe ser factual y cuidadosamente redactado.
Debe evitarse la jerga. Toda la terminología clínica debe
definirse de modo que sea comprensible para los legos.
El clínico no debe asumir que el funcionario que solicita
una evaluación médico-legal ha
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
retransmitido todos los hechos materiales. Es responsabilidad
de los médicos descubrir e informar sobre cualquier hallazgo
material que consideren relevante, incluso si se puede considerar
irrelevante o adverso para el caso del paciente o el caso de la
parte que solicita la evaluación clínica.
271. El lugar de la entrevista y el examen
debe ser lo más segura, privada y cómoda posible
y la entrevista debe tener suficiente tiempo, lo que puede
requerir múltiples entrevistas.
272. Generar confianza y buena relación son componentes esenciales
de obtener una explicación precisa del abuso. Establecer una
buena relación y ganarse la confianza de alguien que ha
sufrido tortura u otros malos tratos requiere que el entrevistador
trate a la persona con cortesía y respeto mediante el uso de
una escucha activa, una comunicación meticulosa, cortesía y
empatía y honestidad genuinas. Explicar con anticipación qué
esperar puede darle al entrevistado una mayor sensación de
control. El clínico debe tener en cuenta
del tono, la redacción y la secuencia de las preguntas
(las preguntas delicadas se deben hacer solo después de
que se haya desarrollado cierto grado de compenetración)
y se debe reconocer el derecho del individuo a tomar un
descanso si es necesario o elegir no responder a ninguna pregunta.
Proporcionar al entrevistado una sensación de control sobre
el ritmo de la entrevista puede fortalecer la relación.
273. Los médicos y los intérpretes tienen el deber de mantener la
confidencialidad de la información y de divulgarla únicamente
con el consentimiento de la presunta víctima (véanse los párrs.
165 a 171). Las personas deben ser examinadas individualmente,
con privacidad. Deben ser informados, de manera clara y
comprensible, de los límites a la confidencialidad de la evaluación,
incluidos los que puedan imponer las autoridades judiciales del
Estado. El médico debe asegurarse de que los entrevistados
entiendan claramente la información proporcionada. Esto incluye
cualquier requisito de informe obligatorio que pueda tener el
médico.
Los médicos deben asegurarse de que el consentimiento informado sea
basado en la divulgación y comprensión adecuadas de los
beneficios potenciales y las consecuencias adversas de
una evaluación clínica, que el individuo es mentalmente
competente y que el consentimiento se da voluntariamente
sin coerción por parte de otros, particularmente las
autoridades policiales o judiciales. La presunta víctima tiene
derecho a rechazar la evaluación. En tales circunstancias,
el médico debe documentar el motivo del rechazo de una
evaluación.
69
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
3. Revelación de torturas o malos tratos sexuales
274. La revelación de torturas o malos tratos sexuales puede ser tan
difícil que una persona prefiera no hablar de ello en absoluto o
puede revelarse mucho tiempo después durante la terapia.401
Sin embargo, sin la revelación de tales experiencias, la documentación
será incompleta y una evaluación de las necesidades de atención
médica resultantes se ve comprometida.
Es importante que las personas mantengan el control sobre sus
revelaciones para minimizar la retraumatización, especialmente
con respecto a cuándo, cuánto detalle ya quién. El examinador
debe realizar una evaluación subjetiva sobre la medida en que es
necesario presionar para obtener detalles para la efectividad del
informe en la corte. Se pueden encontrar pistas que indiquen que
una persona ha sufrido violencia sexual, pero no la ha revelado,
explorando lagunas en su narración de los hechos o eufemismos,
como “hicieron lo que quisieron”. Una pregunta útil para hacer
puede ser: "¿Alguna vez los oficiales se quitaron la ropa?" Las pistas
en el examen psicológico también pueden generar preocupaciones
de que ha ocurrido violencia sexual pero no ha sido revelada, como
un historial de lavado compulsivo muchas veces al día, comportamiento
repetido de autolesión y la naturaleza del desencadenante y el
comportamiento de evitación relacionado con el recuerdo intrusivo y
recuerdos de experiencias traumáticas.
275. La evitación, una característica del trastorno de estrés postraumático (TEPT), también
puede inhibir la revelación. Los médicos deben ser conscientes de sus propias
respuestas a las revelaciones de una persona y que ellos mismos no eviten estos
importantes temas. La revelación de violencia sexual, incluso en el entorno
relativamente seguro de una evaluación, puede ser intensamente angustiosa y
aumentar el riesgo de autolesión y suicidio de la persona. Se debe realizar una
evaluación del riesgo de daño a uno mismo y a otros.
hecha. Si la divulgación se hace por primera vez en
el contexto de una evaluación médico-legal, las razones por las
cuales no se hizo la divulgación previamente deben ser discutidas
en el informe. Las víctimas pueden sentir que otros las juzgarán
como culpables por haberse puesto en riesgo de alguna manera.
Pueden sentir que si no han sido heridos físicamente, no se les
creerá o se creerá que han dado su consentimiento.
276. La revelación de violencia sexual puede ser inhibida por
muchos factores, incluyendo la vergüenza y el miedo evocado, la
401 Los datos de la encuesta sobre delincuencia del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte muestran que casi el 31 por ciento de las víctimas de violación nunca habían revelado su experiencia
a nadie y aproximadamente el 83 por ciento no lo habían denunciado a la policía. Oficina de Estadísticas Nacionales, “Delitos sexuales en Inglaterra y Gales: año que termina en marzo de 2017”
(Londres, 2018).
402 ACNUR, “Trabajando con hombres y niños sobrevivientes de violencia sexual y de género en el desplazamiento forzado” (Ginebra, 2012), pág. 4.
403 Clayton M. Bullock y Mace Beckson, “Víctimas masculinas de agresión sexual: fenomenología, psicología, fisiología”, Revista de la Academia Estadounidense de Psiquiatría y Derecho, vol. 39, núm.
2 (2011), págs. 197–205.
404 Melanie P. Duckworth y Victoria M. Follette, eds, Re-traumatization: Assessment, Treatment, and Prevention (Nueva York, Routledge, 2012), cap. 1.
70
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
desafío que presenta para la identidad de género y la orientación
sexual de una persona o el miedo a la "violencia de honor"
de la familia o de la comunidad. Hay dificultades únicas para
hombres, mujeres y otras personas al revelar experiencias de
violencia sexual. Las normas de género están arraigadas en la
mayoría de las sociedades y tanto las víctimas
Las propias ideas sobre su orientación sexual e identidad de
género y las opiniones de la sociedad en la que viven pueden
estar indisolublemente ligadas al impacto de la experiencia de
violencia sexual para ellas e influir en la revelación. La violencia
sexual contra los hombres destaca la vulnerabilidad y la impotencia
de la víctima, desafiando y en conflicto con sus ideas de masculinidad.
Las percepciones de la sexualidad, la capacidad de
procreación y la identidad de género también pueden verse
cuestionadas.402 La respuesta de sumisión o congelación, la
asociación de la violación masculina con el placer homosexual y la
falta de reconocimiento y servicios para la violencia sexual contra los
hombres pueden afectar significativamente la revelación en los
hombres.403 En las mujeres, el estigma social y las preocupaciones
sobre “perder el honor” y/o ser marginadas de la familia o la
comunidad a menudo están arraigados en las sociedades e influyen
en la divulgación. De manera similar, la violencia sexual contra
personas homosexuales tiene impactos únicos en las víctimas y
distintos desafíos con respecto a la divulgación que deben ser
considerados y mitigados.
4. Riesgo de retraumatización del entrevistado
277. Los entrevistadores deben saber que las entrevistas clínicas
y las evaluaciones, incluido el relato de experiencias pasadas de
tortura y trauma severo, así como el examen físico y psicológico y los
procedimientos comunes y las pruebas de diagnóstico auxiliares,
como análisis de sangre, pueden volver a traumatizar profundamente
a las víctimas, tanto durante el examen como después.
La retraumatización se refiere a las reacciones de estrés traumático
(emocional y/o física) provocada por la exposición a recuerdos
o recordatorios de eventos traumáticos pasados.404 Durante la
evaluación, la retraumatización puede manifestarse como
ansiedad por la entrevista, querer evitar discutir incidentes
particulares, minimizar la conversación, volver a experimentar
síntomas físicos o emocionales , síntomas de hiperexcitación o
insomnio, adormecimiento de la capacidad de respuesta general
o sentirse abrumado por los recuerdos y la emoción.
Los individuos retraumatizados pueden movilizar fuertes
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IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
defensas que resultan en un profundo retraimiento y
aplanamiento afectivo durante el examen o entrevista;
alternativamente, pueden expresar hostilidad e ira.
La retraumatización presenta dificultades especiales porque las
víctimas de tortura pueden ser incapaces de comunicar su
historia traumática y las secuelas relacionadas, aunque sería
beneficioso para ellas hacerlo. Los síntomas de retraumatización
pueden estar presentes durante la entrevista o afectar al
sobreviviente durante días e incluso semanas después de la
entrevista y el examen. Además, aquellos que sobreviven a la
tortura y permanecen en su país pueden experimentar un miedo
intenso y sospechas de ser arrestados nuevamente y pueden
verse obligados a esconderse.
278. Las entrevistas, los exámenes y las pruebas de diagnóstico también
pueden exacerbar las secuelas psicológicas en los supervivientes de
la tortura. La entrevista puede desencadenar síntomas nuevos o que
empeoran de estrés postraumático, como: (a) síntomas de dolor físico
o ansiedad; (b) volver a experimentar el evento traumático (por ejemplo,
flashbacks); (c) evitar recordatorios asociados con el trauma; (d)
adormecimiento de la capacidad de respuesta general; (e) insomnio y
fenómenos relacionados con el sueño; y (f) sentimientos de miedo,
vergüenza y culpa. Los síntomas de depresión y ansiedad también pueden
empeorar durante y después de la entrevista y el examen. Porque
la exacerbación de estos síntomas puede empeorar los
pensamientos suicidas, los médicos deben considerar reevaluar
el riesgo de autolesión cuando sea relevante. Los médicos deben
también tenga en cuenta que las preguntas sobre la
angustia psicológica a veces se consideran tabú en muchas
sociedades tradicionales y hacer tales preguntas puede
considerarse irreverente o insultante.
279. Las reacciones personales del sobreviviente de la tortura a la
entrevistador (y el intérprete, en los casos en que se utilice
uno) pueden afectar el proceso de la entrevista y, a su vez,
el resultado de la evaluación. Asimismo, las reacciones
personales del entrevistador hacia el entrevistado también
pueden afectar el proceso de la entrevista y el resultado de la
evaluación. Es importante examinar las barreras para una
comunicación efectiva, incluidos los sesgos implícitos y explícitos
del médico y la influencia que estas reacciones personales
pueden tener en una evaluación. El médico debe mantener la
conciencia de tales factores a través de un examen continuo de
la entrevista y el proceso de evaluación. La consulta y discusión
con colegas familiarizados con el campo de la evaluación
psicológica y el tratamiento de sobrevivientes de tortura puede
ser útil.
280. Los examinadores pueden prevenir y mitigar la retraumatización y las secuelas
psicológicas con
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
comunicación, empatía y al permitir que los individuos controlen
su relato narrativo de los hechos alegados. La aplicación de
estas y otras habilidades de entrevista esenciales son de suma
importancia para realizar una entrevista eficaz y evitar volver a
traumatizar a un sobreviviente de tortura. A pesar de los esfuerzos
para prevenir y mitigar la retraumatización, es probable que los
sobrevivientes de tortura experimenten cierto nivel de angustia
durante una entrevista clínica. Los médicos, junto con el individuo,
deben sopesar los efectos traumáticos potenciales de una
entrevista con los beneficios potenciales de una evaluación
médico-legal integral. Cuando el entrevistador sospeche que ha
ocurrido una retraumatización, sería importante reconocer la
preocupación, mitigar la retraumatización en curso (como con
descansos, ejercicios de respiración y redirección a temas menos
emocionales), ofrecer apoyo psicológico y derivar a la presunta
víctima al seguimiento adecuado. cuidado.
5. Género, orientación sexual e identidad de género
281. Tanto las víctimas como los perpetradores de tortura o
el maltrato puede ser de cualquier orientación sexual o género y,
aunque a menudo se discuten juntos, el sexo, el género y la
orientación sexual son diferentes entre sí.
La orientación sexual se refiere a la atracción emocional,
romántica y/o sexual inherente a otras personas.
La identidad de género se refiere a cómo los individuos se
perciben a sí mismos y cómo se llaman a sí mismos. Las
personas que se identifican a sí mismas con cualquiera de un
amplio y variado espectro de orientaciones no heterosexuales a
menudo se denominan personas lesbianas, gays, bisexuales,
transgénero y queer. Las personas intersexuales son aquellas que
nacen con características sexuales (incluidos los genitales, las
gónadas y los patrones cromosómicos) que no se ajustan a las
nociones binarias típicas de cuerpos masculinos o femeninos.
Estas personas, así como aquellas que se encuentran en el
proceso de cuestionar, explorar o comenzar a comprender su
orientación sexual, corren un mayor riesgo de sufrir tortura y malos
tratos. En los casos en los que las presuntas víctimas no se ajusten
a la noción binaria tradicional de género (incluidas las personas
transgénero, intersexuales y de género no conforme), los
entrevistadores deben reconocer la identidad de género declarada
de los entrevistados y utilizar su nombre y pronombres de género
preferidos en consecuencia (ver párrafos 599 a 601 infra).
282. Es importante diferenciar entre tortura y abuso sexual y por motivos de
género. La tortura sexual incluye actos verbales, emocionales y físicos
de naturaleza sexual con la intención de producir sufrimiento físico y
psicológico. En la tortura basada en género, la identidad de género y/o
71
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
La orientación de las personas involucradas juega un papel
clave en el abuso. Tanto la tortura sexual como la basada
en el género dependen de las dinámicas de poder involucradas
y pueden cambiar según el contexto social, cultural y religioso.
Incluso si no se alega una agresión sexual explícita, muchas
formas de tortura tienen aspectos sexuales o de género que
deben tenerse en cuenta en la evaluación.
283. El género del médico también puede influir en la
proceso de evaluación. Idealmente, un equipo de evaluación
debería incluir médicos de diferentes géneros ofreciendo al
entrevistado la opción de ser atendido por un médico y, en caso
necesario, un intérprete del mismo u otro género. Se debe
respetar el deseo de la presunta víctima de que un médico del
mismo u otro género realice la entrevista. La experiencia ha
demostrado, particularmente en casos de víctimas que aún están
bajo custodia, que en la mayoría de las situaciones, el factor más
importante puede ser que el entrevistador sea un médico a quien
la víctima pueda hacer preguntas honestas, independientemente
del género. Cuando el equipo de evaluación no tiene un médico
del género deseado para una evaluación, el entrevistado aún
puede optar por hablar con un médico para obtener información
y asesoramiento clínico. Estas consideraciones son particularmente
importantes en situaciones de violencia de género y tortura sexual
conocidas.
En los casos en que el clínico y el entrevistado estén
de diferentes géneros, y especialmente durante un examen
físico, es esencial que se ofrezca un acompañante.
6. Entrevistar a niños
284. Hay consideraciones únicas y especializadas que
debe tenerse en cuenta al entrevistar a los niños.
Idealmente, los médicos que entrevistan a niños deberían obtener
capacitación especializada sobre cómo realizar evaluaciones
pediátricas. Se insta a los médicos sin experiencia especializada
a que sean cautelosos al evaluar a los niños.
285. Los niños tienen derecho a que se respete su consentimiento y
confidencialidad. Excepto en circunstancias excepcionales, que se
discutieron en el párrafo 170 anterior, no deben recibir tratamiento médico
sin su consentimiento o el de un padre o tutor.
Se debe prestar especial atención a brindar apoyo,
como tomarse el tiempo para establecer una buena relación,
usar un lenguaje claro y apropiado para la edad en todo
momento y brindar descansos y oportunidades para hacer preguntas.
286. Es importante comprender que las características y los efectos
psicológicos de la tortura y los malos tratos dependen de la etapa de
desarrollo del niño y de las normas sociales de la comunidad en la
que ha vivido.
72
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
sido levantado Los niños más pequeños pueden ser
torturados para causar dolor a sus padres. Los niños
mayores pueden ser torturados para reprimir la actividad política.
La comunicación adecuada a la edad con los niños es clave
tanto en el momento de recibir el consentimiento/asentimiento
informado como al realizar las evaluaciones. La información
sobre los procedimientos debe adaptarse a los niños y comunicarse
de manera que puedan entender. Aunque físicamente
pueden parecerse a los adultos, se reconoce cada vez
más que el desarrollo del cerebro continúa hasta la edad
adulta temprana, y las entrevistas con niños mayores,
adolescentes y adultos jóvenes deben adaptarse a su
capacidad cognitiva y verbal individual.
287. La memoria y la cognición en los niños dependen del desarrollo, así como
del trauma y su frecuencia y contexto social. El desarrollo de los procesos
cognitivos necesarios para el almacenamiento de la memoria adulta (recordar
y contar de manera cronológica coherente) es un proceso gradual y puede
retrasarse en niños traumatizados. Al considerar la memoria y el recuerdo de
eventos traumáticos, es importante considerar algunos problemas únicos
entre los niños. Si bien tanto los traumas únicos como los repetidos pueden
afectar el lenguaje, el desarrollo y la memoria de una persona joven, los
traumas repetidos pueden tener un efecto más grave. Parte de la memoria
de un niño puede formarse a partir de que su familia recuerda y vuelve a
contar experiencias, lo que ayuda a reforzar la memoria. Si un niño ha sido
separado de su familia a una edad temprana o si la familia no habla de
ciertas experiencias, los recuerdos de tales experiencias pueden, como
resultado, ser frágiles y escasamente detallados y pueden perderse por
completo a medida que el niño crece. Los niños que han sufrido experiencias
traumáticas y aquellos que han sido separados de sus cuidadores pueden
mostrar un desarrollo particularmente desigual. Dichos niños pueden ser
expertos de alguna manera debido a que tienen una responsabilidad
temprana de cuidar de sí mismos o de otros a pesar de carecer de educación
formal. La experiencia de tortura o malos tratos, las condiciones de salud
mental subsiguientes y las dificultades de desarrollo preexistentes, como
dificultades de aprendizaje o discapacidades, pueden influir en la comprensión
de los hechos por parte de un niño y en su capacidad para contarlos.
288. Se puede facilitar la construcción de una buena relación con los niños
tomando medidas para garantizar que el entorno y el tono
de la entrevista sean lo más informales y cómodos
como sea posible. Es útil permitir que los niños
participen en el flujo de las entrevistas haciéndoles saber
aproximadamente cuánto durarán las conversaciones y
que hay descansos disponibles a pedido.
La capacidad de atención de los niños puede ser bastante corta,
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
por lo que puede ser necesario tomar descansos durante
las entrevistas o realizarlas en varias sesiones.
289. Los entrevistadores deben usar un lenguaje apropiado para los niños y
adaptar su estilo de comunicación para que coincida con la terminología
local y las normas culturales para ayudar al niño a sentirse cómodo y
participar en el proceso de la entrevista.
El entrevistador puede utilizar una “narrativa de práctica”
mediante la cual se anima al niño a hablar en profundidad
sobre un tema neutral. Esto también permite a los entrevistadores
conocer a los niños, su capacidad verbal y su grado de (malestar)
relacional. Las preguntas sobre su edad, qué les gusta hacer si
tienen tiempo libre y dónde viven actualmente pueden ser
buenas para "romper el hielo" antes de pasar a temas más
delicados. Un médico puede conducir lentamente a temas
relacionados con el trauma usando sus propias palabras en
respuesta a preguntas abiertas siempre que sea posible.
290. Las reacciones emocionales de los niños pueden variar.
Los niños pueden permanecer en silencio durante un largo
período de tiempo, desviar la mirada o cambiar de tema por
completo cuando se sienten abrumados por una pregunta. En
esos casos, por lo general es mejor seguir su ejemplo y cambiar,
al menos temporalmente, a un tema menos amenazante. La
capacidad para concentrarse y participar en las entrevistas
también puede verse afectada por una mayor emotividad y una
capacidad limitada para regular su afecto, especialmente en los
adolescentes. Las explicaciones de eventos que parecen
superficiales o inverosímiles para un adulto pueden ser un reflejo
del razonamiento limitado de un niño o adolescente o un
comportamiento más impulsivo.
291. La presencia de figuras de apego importantes como los padres o tutores, al
menos al principio del proceso de entrevista, puede brindar consuelo a un
niño ansioso y también permitir que el padre o tutor respalde tácitamente la
cooperación del niño. Particularmente cuando la tortura consistió en la
separación forzada de los cuidadores, los médicos deben tener paciencia para
insensibilizar al niño para que no lo entrevisten solo, lo que en última instancia
es deseable. Un niño puede sentirse incómodo al revelar información sobre el
trauma en presencia de uno de los padres debido a su preocupación de que
la revelación aflija a su padre o aumente su culpa, vergüenza o vergüenza. Los
médicos deben ejercer el juicio y la paciencia para hacer que los niños se
sientan cómodos y apoyarlos cuando se les entreviste solos, especialmente en
situaciones que involucren violencia sexual. Es posible que los médicos deban
considerar los deseos de los niños de mantener confidencial la información que
revelan de sus padres y cómo abordar esto de manera ética.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
292. Al discutir eventos traumáticos, algunas técnicas pueden ayudar al niño a
describir los eventos. Dibujar una línea de tiempo puede ayudar a un niño a
secuenciar eventos y usar anclas cronológicas bien recordadas, por ejemplo,
"¿Sucedió esto antes o después de tu décimo cumpleaños?" o "¿Antes o
después de que terminara el año escolar?", pueden ayudar aún más a identificar
eventos en el tiempo con mayor especificidad. Algunos niños podrán relajarse
más mientras mueven todo su cuerpo, por ejemplo, hablando mientras caminan.
Un niño puede preferir hacer un dibujo y luego explicarlo. Si bien los juguetes
pueden ser útiles para permitir un rango de expresión, descargar físicamente la
ansiedad durante la entrevista y brindar comodidad, los juguetes no deben
usarse para obtener la historia, ya que pueden desdibujar la línea entre la
fantasía y la realidad. Para los sobrevivientes de tortura y otros traumas, es
importante tener en cuenta que el juego traumático es característicamente muy
repetitivo y de larga duración, a menudo con un afecto plano y desconectado o
con un afecto ansioso y excesivamente excitado, cualquiera de los cuales puede
hacer que el niño sea algo insensible. a las interrupciones del clínico. Aunque
los métodos de exploración no verbales deben usarse con precaución, pueden
ser una fuente de información.
293. Los niños suelen proporcionar menos información que los adultos.
Esto se debe en parte a que son menos capaces y menos
hábiles para generar señales de recuperación de forma independiente.
El uso de preguntas de sondeo es efectivo con los niños,
especialmente con los niños pequeños, ya que brindan una pista
dentro de la pregunta (p. ej., "Mencionaste a un hombre; ¿te dijo
algo el hombre?" o "¿Qué dijo el hombre?").
Sin embargo, por las razones descritas anteriormente, los
entrevistadores deben evitar entrevistar a los niños únicamente con
preguntas inquisitivas y cerradas. Un mejor método es fomentar la
elaboración basada en lo que el niño ya ha dicho (p. ej., “Dijiste
[detalle]; ¿qué pasó después?” o “Dijiste [detalle]; cuéntame más
sobre eso”).
A medida que un niño madura más en su desarrollo, se vuelven
mejores para generar sus propias señales de recuperación y son
más capaces de responder preguntas abiertas.
Empoderar al niño para que responda "No sé" o para aplazar o
negarse a responder preguntas si son demasiado dolorosas o
difíciles no solo puede aumentar la precisión de la información
obtenida, sino que sugiere que una agenda de investigación de
hechos no anulará el bienestar del niño. siendo.
7. Culturales, religiosas y sociopolíticas
conciencia
294. Los médicos que realizan evaluaciones de víctimas de
la presunta tortura debe tener la humildad cultural y la perspectiva
transcultural necesarias para comprender y documentar de manera
efectiva las condiciones físicas y psicológicas
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
efectos de la supuesta tortura o malos tratos. El clínico debe
intentar comprender el sufrimiento mental en el contexto de
la propia experiencia, circunstancias, creencias y normas
culturales del entrevistado. Los modismos de angustia
pueden ser métodos culturalmente específicos o ligados al
lenguaje para expresar un sentimiento o experiencia. La cultura
y el idioma también pueden influir en cómo se conceptualiza y
describe una enfermedad, un síntoma o una experiencia
específicos. La conciencia y el aprendizaje constante de
modismos de angustia y conceptualizaciones específicas de la
cultura del dolor y la enfermedad son de suma importancia para
realizar la entrevista y formular la impresión clínica y la conclusión.
295. Los entrevistadores también deben ser conscientes de las condiciones socioculturales
dinámica de su propia identidad y cómo las percepciones
implícitas y explícitas de poder, etnicidad, nacionalidad,
género, edad, orientación sexual y nivel socioeconómico
pueden afectar la entrevista. Además, los entrevistadores
deben asegurarse de comportarse de una manera que no
ofenda la cultura.
o sensibilidades religiosas. La falta de tal conocimiento corre
el riesgo de alienar al individuo y/o hacer que se sienta
incómodo, lo que lleva a una entrevista menos efectiva.
8. Uso de intérpretes
296. Para muchos propósitos, es necesario utilizar un intérprete
para permitir que el entrevistador entienda lo que es
dicho eso. Hay algunas consideraciones esenciales para el uso
de intérpretes que también se pueden aplicar a los participantes
o personas de apoyo presentes durante la evaluación. Es
esencial informar adecuadamente a los intérpretes antes de la
evaluación. Se debe advertir a los intérpretes que lo que
escuchan e interpretan en las entrevistas es estrictamente
confidencial. Deben interpretar con precisión lo que dice el
entrevistado y deben evitar conversaciones secundarias con el
entrevistado.
durante el transcurso de la entrevista. Los entrevistadores
deben tener cuidado al depender de los intérpretes para
proporcionar el contexto cultural, ya que ese conocimiento
puede estar desactualizado si los intérpretes abandonaron el
país años antes, o su conocimiento puede estar sesgado por
su propia perspectiva socioeconómica, étnica, religiosa o de género.
297. Los entrevistadores deben recordar hablar directamente
con el entrevistado y mantener el contacto visual, en
lugar de seguir la tendencia natural de hablar con el
intérprete. El entrevistador debe tener cuidado de
hablarle al entrevistado en segunda persona en lugar de
en tercera, tal como lo haría si no hubiera un intérprete
presente. Es esencial que los entrevistadores observen no
sólo las palabras, sino también las palabras que las acompañan.
74
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
el lenguaje corporal, las expresiones faciales, el tono de
voz y los gestos de los entrevistados para obtener una
imagen completa y precisa. Los entrevistadores deben
familiarizarse con palabras relacionadas con la tortura y
terminología en el idioma de la persona para demostrar que tiene
conocimientos sobre el tema.
298. Al visitar a personas privadas de libertad, es
es mejor no utilizar intérpretes empleados en o por la misma
instalación. También puede ser injusto para tales intérpretes, quienes
pueden ser “interrogados” por las autoridades de la instalación
después de una visita o ser presionados de otra manera. Es mejor
utilizar intérpretes independientes que claramente se vean como
provenientes de otro lugar. Lo mejor después de hablar el idioma
local con fluidez es trabajar con un intérprete capacitado con
experiencia, que sea sensible al tema de la tortura y a la
cultura local. Por regla general, los co-detenidos no deben
utilizarse para la interpretación, a menos que se trate de una
situación de emergencia y los entrevistados hayan elegido a alguien.
ellos confían En el caso de personas que no están
detenidas, también se aplican muchas de estas mismas reglas.
9. Reacciones emocionales y sus efectos potenciales
299. El médico debe explicar el proceso de la entrevista y los
tipos de preguntas que se harán a fin de preparar al
individuo para las difíciles reacciones emocionales que
pueden provocar las preguntas. El individuo debe tener
la oportunidad de solicitar descansos, interrumpir la
entrevista en cualquier momento y salir si es necesario.
Una persona que elige irse
se le debe ofrecer una cita posterior. Los médicos deben ser
sensibles y empáticos en sus preguntas, sin dejar de ser objetivos
en su evaluación clínica.
300. Médicos que realizan actividades clínicas y psicológicas.
Las evaluaciones deben ser conscientes de las posibles reacciones
emocionales que las evaluaciones de un trauma grave pueden
provocar tanto en el entrevistado como en el entrevistador. Estas
Las reacciones emocionales se conocen como transferencia y
contratransferencia, respectivamente. La transferencia se refiere
a los sentimientos que tiene un sobreviviente hacia el médico que
se relacionan con experiencias pasadas, pero que se malinterpretan
como dirigidos hacia el médico personalmente.
La desconfianza, el miedo, la vergüenza, la ira y la culpa se
encuentran entre las reacciones típicas que experimentan los
sobrevivientes de tortura, particularmente cuando se les pide que
cuenten o recuerden detalles de su trauma. Además, la respuesta
emocional del médico al sobreviviente de la tortura, conocida como
contratransferencia, puede afectar la evaluación psicológica.
Transferencia y contratransferencia
son mutuamente interdependientes e interactivos.
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
301. Las reacciones de transferencia pueden alterar la evaluación
asignando al examinador recuerdos, pensamientos y
sentimientos angustiosos y no deseados. Además, aunque
una presunta víctima de tortura pueda consentir en una
evaluación con la esperanza de beneficiarse de ella, la
exposición resultante puede renovar la experiencia traumática
en sí misma o dejar al superviviente con recuerdos inquietantes
del examen y del examinador.
Esto puede incluir los siguientes fenómenos:
(a) Las preguntas de los evaluadores pueden percibirse como una
exposición forzada similar a un interrogatorio. Esto puede llevar al
sujeto a percibir que el evaluador está del lado del enemigo. Simplemente
tomarse un tiempo al principio para explicar el propósito de la entrevista al
entrevistado ayudará a aliviar esto;
(b) Los sobrevivientes de tortura pueden percibir a los evaluadores
como personas en posiciones de autoridad, lo que suele ser el caso,
y por esa razón pueden no confiarles ciertos aspectos de la historia
del trauma o pueden confiar demasiado en situaciones en las que los
entrevistadores no pueden garantizar la seguridad. . Deben tomarse
todas las precauciones para garantizar que los detenidos no se pongan
en peligro innecesariamente.
302. Las reacciones contratransferenciales son a menudo inconscientes
pero pueden interferir con el proceso de evaluación,
especialmente cuando los médicos no los conocen.
Es de esperar que se tengan sentimientos al escuchar a las
personas hablar de su tortura. Cuando estos sentimientos no
se reconocen, pueden interferir con la eficacia del médico, pero
cuando estos sentimientos se reconocen y comprenden, pueden
proporcionar información importante sobre el estado psicológico
de una víctima de tortura. Existe un consenso entre los
profesionales de que aquellos que realizan regularmente este tipo
de examen deben obtener apoyo profesional de pares o
consejeros que tengan experiencia en este campo.
Las reacciones contratransferenciales comunes incluyen:
(a) Evitación, retraimiento e indiferencia defensiva;
(b) Desilusión, impotencia y sobreidentificación con la sobreviviente;
(c) Omnipotencia y grandiosidad;
(d) Sentimientos de inseguridad sobre las habilidades profesionales;
(e) Sentimientos de culpa por no compartir la experiencia del
sobreviviente de tortura y el dolor o frustración por la inacción;
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(f) Ira y rabia hacia los torturadores y perseguidores.
Estas reacciones son esperables, pero pueden socavar la
capacidad de mantener la objetividad cuando están
impulsadas por experiencias personales no reconocidas y, por
lo tanto, se vuelven excesivas o crónicas. Cuando se expresan
durante las evaluaciones, los sobrevivientes pueden percibirlos
como repugnancia o ira dirigida hacia ellos;
(g) Puede surgir ira o repugnancia contra la víctima como resultado de
sentirse expuesta a niveles de ansiedad desacostumbrados.
B. Realización de entrevistas
1. Calificaciones clínicas
303. Todos los médicos que realizan evaluaciones clínicas de
los casos presuntos o presuntos de tortura o malos tratos
deben hacerlo de conformidad con la Ley de Estambul
Protocolo y sus Principios. Las habilidades clínicas
necesarias para documentar pruebas físicas y psicológicas
de tortura y malos tratos incluyen
competencias clínicas. La realización de evaluaciones de
acuerdo con el Protocolo de Estambul no requiere la certificación
como experto forense, aunque esta puede ser la práctica
normativa en algunos Estados y, a veces, se utiliza para excluir
intencionalmente el testimonio de médicos independientes de los
procedimientos judiciales.
304. Documentación de pruebas clínicas de tortura
requiere conocimientos específicos por parte de
profesionales de la salud calificados. El conocimiento
de la tortura y sus consecuencias físicas y psicológicas
puede obtenerse a través de publicaciones, cursos de
capacitación, conferencias profesionales y experiencia.
Además, el conocimiento sobre las prácticas regionales
de tortura y malos tratos es importante porque dicha
información puede corroborar los relatos de un individuo
sobre estas prácticas regionales. Se recomienda
encarecidamente tener experiencia entrevistando y
examinando a personas en busca de pruebas físicas y
psicológicas de tortura o malos tratos y documentando los
hallazgos bajo la supervisión de médicos experimentados.
305. Los jueces y los expertos legales deben estar familiarizados con los
criterios relevantes para calificar a los peritos forenses y otros
testigos clínicos en procedimientos legales sobre la base de su pericia,
conocimiento, experiencia y capacitación, en lugar de sobre la base
de una licencia o certificado profesional en particular. Cualificación
para realizar evaluaciones de acuerdo con la Norma de Estambul
Protocolo no es sinónimo de certificación como
75
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
experto forense. Los testigos expertos forenses son
candidatos clave en relación con el Protocolo de Estambul y
sus Principios, y sus evaluaciones clínicas deben ser
coherentes con estos estándares. En cada caso legal, todos
los peritos forenses del gobierno y los peritos forenses y
clínicos no gubernamentales deben estar preparados para
demostrar sus calificaciones como expertos en la documentación
de la tortura y los malos tratos. Los jueces no deben suponer
que la certificación oficial es suficiente para calificar a un
experto forense del gobierno para realizar una evaluación de
acuerdo con el Protocolo de Estambul.
306. El Relator Especial sobre la tortura ha reconocido
la práctica de los fiscales y jueces excluyendo a los no
Peritos estatales de procesos judiciales, manifestando que:
Los tribunales no deben descartar a los expertos no estatales
ni otorgar más peso al testimonio de expertos estatales
basándose únicamente en su condición de “oficiales”. En
cuanto a la experiencia requerida, debe determinarse en
función de sus méritos. En ese sentido, la independencia y
la objetividad son una preocupación primordial. El Estado
normalmente tendrá más recursos y estará en una posición
privilegiada para examinar a las víctimas. Esos hechos deben
ser considerados junto con el grado de independencia e
imparcialidad del que disfrutan dichos expertos, así como los
obstáculos que los expertos no estatales pueden enfrentar
para obtener acceso a las pruebas y obtenerlas.
La presunción debe ser que el Estado debe dar cuenta
de su propia acción o inacción y de su
incapacidad para proteger los derechos de las personas
bajo su control efectivo. Es obligación del Estado
desmentir las denuncias y demostrar que ha realizado
investigaciones realmente efectivas405.
307. La calificación clínica más importante al realizar una evaluación de una presunta
víctima es el conocimiento de cómo aplicar el Protocolo de Estambul y sus
Principios. Si se les pide a los médicos que enumeren sus calificaciones clínicas
en procedimientos judiciales, pueden considerar incluir información adicional
como: (a) educación y capacitación clínicas; (b) entrenamiento psicológico/
psiquiátrico; c) experiencia en la documentación de pruebas de tortura y malos
tratos y otras formas de violencia; (d) finalización de los cursos y seminarios de
capacitación pertinentes, incluidos los específicos del Protocolo de Estambul; (e)
supervisión y tutoría por parte de médicos experimentados; (f) asociación con
una organización o red de derechos humanos o un centro de tratamiento para
sobrevivientes de tortura; y (g) experiencia regional en derechos humanos
relevante para
405 A/69/387, párr. 53.
76
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
valoraciones médico-legales. Cuando sea posible, los médicos
que realicen evaluaciones clínicas deben tener conocimiento de las
condiciones carcelarias y los métodos de tortura utilizados en la
región en la que se alegaron torturas y malos tratos.
308. Muchos médicos, incluidos médicos de atención primaria, psiquiatras,
psicólogos, trabajadores sociales clínicos y enfermeras, pueden adquirir
los conocimientos y las habilidades para diagnosticar enfermedades
psiquiátricas. Algunos médicos pueden documentar pruebas tanto físicas como
psicológicas de tortura o malos tratos. Clínicos que
no tienen formación formal en psiquiatría y/o
La psicología puede adquirir conocimientos y habilidades
para identificar pruebas psicológicas de tortura y malos
tratos, como síntomas de depresión, trastorno de estrés
postraumático y ansiedad a través de la formación o la experiencia.
2. Integración de evaluaciones físicas y
psicológicas
309. Valoraciones médico-legales de presuntas torturas o
los malos tratos pueden requerir la experiencia de más de un
médico, incluidos expertos en pruebas físicas y psicológicas, así
como subespecialistas en medicina, cirugía y neuropsicología.
En casos legales, es importante integrar los hallazgos de múltiples
evaluaciones en una evaluación integral cuando sea posible. Puede
ser recomendable que los expertos en evidencia física y evidencia
psicológica realicen una evaluación juntos. Cuando se realizan por
separado, las evaluaciones clínicas deben establecer, para que los
profesionales del derecho lo entiendan claramente, que tales
evaluaciones representan componentes de una sola evaluación
clínica y deben considerarse en consecuencia.
Si hay evaluaciones clínicas separadas y existe una fuerte
evidencia de apoyo en una evaluación y solo una evidencia de
apoyo moderada en la otra, la totalidad de la evidencia debe
considerarse como un fuerte apoyo.
3. Configuración de la entrevista
310. Evaluaciones clínicas de personas que alegan tortura o
los malos tratos deben llevarse a cabo en un lugar que
el clínico y el entrevistado lo consideren más adecuado. Este
es de particular preocupación en los entornos de detención. En
muchas situaciones, no es posible controlar el ambiente de la
entrevista, por ejemplo en las prisiones, y el entrevistador y el
entrevistado tendrán que hacer lo mejor posible.
de condiciones menos que ideales. Dichas deficiencias deben
documentarse claramente en el informe y deben solicitarse a la
autoridad pertinente que proporcione
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
condiciones apropiadas. En algunos casos, puede ser mejor insistir
en que la evaluación se realice en la unidad médica del centro o
fuera de la prisión o cárcel. En otros casos, los reclusos pueden
preferir ser examinados en la relativa seguridad de su celda si, por
ejemplo, les preocupa que las instalaciones médicas puedan estar
bajo vigilancia. Sin embargo, los entrevistadores deben aplicar y
adaptar estos principios básicos sobre entrevistas tanto como sea
posible. El mejor lugar estará determinado por muchos factores, pero
en todos los casos, los entrevistadores deben asegurarse de que los
entrevistados no se vean obligados a aceptar un lugar en el que no
se sientan cómodos o seguros.
311. Si es posible, la sala debe tener las condiciones físicas apropiadas
(luz, ventilación, tamaño y temperatura).
Debe haber acceso a instalaciones sanitarias y
oportunidades de refrigerio. La disposición de los asientos debe
permitir que el entrevistador y el entrevistado estén
igualmente cómodos y a una distancia adecuada para establecer
contacto visual y verse claramente las caras. Ni el entrevistador
ni el entrevistado deben sentarse en una posición que bloquee
el acceso a la puerta. Se debe prestar atención para arreglar la
habitación de manera que no recuerde el entorno oficial o el
proceso de interrogatorio.
4. Garantías procesales con respecto
a los detenidos
312. Las evaluaciones médico-legales de los detenidos deben ser
cuando lo soliciten los fiscales u otros funcionarios competentes por
escrito y con el consentimiento informado de la presunta víctima.
Las solicitudes de evaluaciones médico-legales por parte de los
funcionarios encargados de hacer cumplir la ley se considerarán inválidas a menos que
se solicitan por orden escrita de un fiscal u otro funcionario
competente. Los propios detenidos o sus abogados o familiares
tienen derecho a solicitar una evaluación clínica para evaluar las
pruebas de tortura o malos tratos. El detenido debe ser llevado
al examen clínico por parte de funcionarios que no sean
militares y policías, ya que es posible que se hayan producido
torturas o malos tratos bajo su custodia y, por lo tanto, eso ejercería
una presión coercitiva inaceptable sobre el detenido o el médico
para que no documente la tortura o los malos tratos.
malos tratos con eficacia. Los funcionarios que supervisan el
transporte del detenido deben ser responsables ante el fiscal u otro
funcionario competente, pero no ante otros funcionarios encargados
de hacer cumplir la ley. del detenido
406 Cuando los agentes de policía transporten a los detenidos a los médicos para que los evalúen y exijan recibir una copia del informe, el médico debe negarse y, en su lugar, proporcionar una
copia al fiscal u otros funcionarios legales apropiados. Los informes del médico pueden compartirse con los detenidos, pero se debe discutir con ellos el riesgo de que la policía acceda a
una copia.
407 Reglas Nelson Mandela, regla 30; y Reglas de Bangkok, regla 6.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
El abogado debe estar presente durante la solicitud de
interrogatorio y el transporte posterior al interrogatorio del
detenido. Los detenidos tienen derecho a obtener una segunda
evaluación clínica o alternativa por parte de un médico calificado de
su elección durante y después del período de detención.
313. Cada detenido debe ser examinado en privado. La policía u otros
funcionarios encargados de hacer cumplir la ley no deben estar
presentes en la sala de examen. Esta salvaguardia procesal sólo
podrá excluirse cuando, a juicio del médico examinador, existan
pruebas convincentes de que el detenido representa un riesgo
grave para la seguridad del personal de salud. En tales
circunstancias, el personal de seguridad del centro de salud, no
la policía u otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley,
debe estar disponible cuando lo solicite el médico. En tales casos,
el personal de seguridad debe permanecer fuera del alcance del
oído (es decir, estar dentro del contacto visual solamente) del
entrevistado.
314. La presencia de policías, militares, prisión
oficiales u otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley en el
sala de examen, por cualquier motivo, debe anotarse en el
informe médico-legal oficial del médico.
Su presencia durante el reconocimiento puede ser motivo de
desestimación de un informe médico-legal negativo. La identidad y los
títulos de otras personas que estén presentes en la sala de examen
durante las evaluaciones clínicas deben indicarse en el informe. Las
evaluaciones médico-legales oficiales de los detenidos por expertos
forenses del Estado deben incluir el uso de un examen médico
estandarizado.
formulario de informe que sea compatible con el Protocolo
de Estambul y sus Principios, incluido el anexo IV.
315. La evaluación original completa debe ser
transmitida directamente a la persona que solicita el informe,
generalmente el fiscal u otros funcionarios competentes, y/o su
representante legal. Cuando los detenidos o los abogados que actúen
en su nombre soliciten un informe médico-legal, se deberá aportar el
informe.
El médico examinador debe conservar copias de todos los informes
médico-legales. Bajo ninguna circunstancia se debe transferir una
copia del informe médico-legal a los funcionarios encargados de hacer
cumplir la ley.406 Es obligatorio que un detenido se someta a un
examen médico completo en el momento de la detención.407 Se
debe proporcionar acceso a un abogado en el momento de la
detención. evaluación clinica.
Una presencia externa durante los exámenes puede ser
imposible en la mayoría de las situaciones penitenciarias. En
tales casos, debe estipularse que los médicos penitenciarios que trabajen
77
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
con los reclusos deben respetar la ética médica y ser
capaces de desempeñar sus funciones profesionales
independientemente de la influencia de terceros. Si el examen
médico-legal respalda las alegaciones de tortura o malos tratos,
el detenido no debe ser devuelto al lugar de detención, sino que
debe comparecer ante el fiscal o el juez para determinar la
disposición legal del detenido.408 Una asociación médica
nacional o un comisión de
investigación puede optar por auditar los informes médico-
legales para garantizar que se cumplan las garantías
procesales y los estándares de documentación adecuados, en
particular por parte de los médicos empleados por el Estado y que
realizan una evaluación oficial en su nombre. Los informes deben
enviarse a dicha organización, siempre que se hayan abordado
las cuestiones de independencia y confidencialidad.
5. Visitas oficiales a los lugares de detención
316. Las visitas a las personas privadas de libertad pueden, en
algunos casos, ser notoriamente difícil de llevar a cabo de
manera objetiva y profesional, particularmente en países en
los que todavía se practica la tortura.
Una visita única, sin seguimiento para garantizar la seguridad
de los entrevistados después de la visita, puede poner en
riesgo aún más el bienestar de los detenidos. La noción de que
alguna evidencia es mejor que ninguna evidencia es
no es válido cuando se trabaja con personas privadas de
libertad que pueden correr peligro al prestar su testimonio.
Los entrevistadores bien intencionados pueden caer en la
trampa de visitar una prisión o comisaría y obtener una imagen
incompleta o falsa de la realidad.
Pueden dar una coartada a los perpetradores de tortura o malos
tratos, quienes pueden explotar el hecho de que personas ajenas
visitaron su prisión y no informaron sobre los abusos. Puede haber
valor en las visitas no anunciadas o la libertad de elegir qué lugar
de detención visitar porque las autoridades pueden aprovechar el
aviso previo para ocultar pruebas o silenciar a los reclusos.
317. Las comisiones independientes constituidas por juristas y médicos deben
tener acceso periódico para visitar los lugares de detención y las prisiones.
Las visitas de seguimiento, incluidas las realizadas por investigadores de
derechos humanos, instituciones nacionales de derechos humanos o
mecanismos nacionales de prevención, deben incluir expertos jurídicos y
clínicos cualificados para garantizar que las entrevistas con los detenidos se
ajusten al Protocolo de Estambul y sus Principios (véase el capítulo VII). Los
miembros de los mecanismos nacionales de prevención deben estar
familiarizados con las normas
y recomendaciones en el Protocolo de Estambul y
408 “Cuidado de la salud para los reclusos: implicaciones de la 'negativa de Kalk'”, Lancet, vol. 337, núm. 8742 (1991), págs. 647–648.
78
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
sus Principios y estándares internacionales/regionales para
el monitoreo de lugares de privación de libertad.
318. Entrevistas con personas que aún se encuentran detenidas,
y posiblemente incluso en manos de los perpetradores de tortura
o malos tratos, obviamente será muy diferente de las entrevistas en
la privacidad y seguridad de un centro médico externo. No se puede
enfatizar lo suficiente la importancia de obtener la confianza de la
persona en tales situaciones. Sin embargo, es aún más importante
no traicionar esa confianza, quizás sin quererlo. Deben tomarse
todas las precauciones para garantizar que los detenidos no se
pongan en peligro. A los detenidos que aleguen haber sido
torturados o maltratados se les debe preguntar si les preocupa que
la información que proporcionen en la evaluación pueda ser utilizada
en su contra y de qué manera. Por ejemplo, pueden tener demasiado
miedo de permitir el uso de sus nombres, por temor a represalias.
Los entrevistadores, médicos e intérpretes no deben hacer promesas
a los detenidos que no puedan cumplir.
319. La ubicación de una entrevista debe ser considerada
cuidadosamente, fuera de la vista y el oído de los oficiales de
seguridad, para garantizar la confidencialidad. También se debe
considerar la posible presencia de cámaras, micrófonos y/o espejos
unidireccionales, especialmente si se utiliza una sala de interrogatorio
policial. Por lo general, las entrevistas deben realizarse con el
consentimiento informado de los entrevistados, en una habitación
cómoda en la que no se sientan intimidados.
Los entrevistadores deben evitar lugares que puedan
albergar recuerdos de experiencias traumáticas para algunos
detenidos o simplemente estar asociados con abuso de autoridad.
320. Puede surgir un claro dilema en los casos en que un
El equipo visitante encuentra que se practican actos
generalizados y sistemáticos de tortura y malos tratos en un
determinado lugar de privación de libertad, pero todas las
víctimas se niegan a permitir que los entrevistadores utilicen sus evaluaciones.
por temor a represalias. Los médicos deben preservar la
confidencialidad y evitar traicionar la confianza de las personas
a través de decisiones unilaterales para denunciar los abusos.
Ante este tipo de situaciones, en las que varios detenidos
pueden presentar claros signos de maltrato, como marcas en el
cuerpo de latigazos, golpes, laceraciones, etc., pero que se niegan
a permitir la mención de sus casos, es útil para organizar una
"inspección de salud" de toda la sala a la vista en el patio. De esa
forma, los entrevistadores clínicos visitantes pueden observar
directamente los signos visibles de tortura en las personas y hacer
un informe sobre lo que han visto sin tener que declarar que las
personas
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
se quejó de la tortura. Este primer paso asegura la confianza
de las personas para futuras visitas de seguimiento.
321. Otras formas de tortura, menos visibles, psicológicas o
lo sexual, por ejemplo, no puede ser tratado de la misma manera.
En tales casos, puede ser necesario que los entrevistadores se
abstengan de hacer comentarios durante una o varias visitas hasta que
las circunstancias lo permitan o los detenidos se sientan lo suficientemente seguros.
322. Los médicos deben actuar con la debida diligencia en todo
incluso cuando se realizan múltiples evaluaciones en un solo
día. Una persona entrevistada a las 8 pm merece tanta
atención como una vista a las 8 am
Los entrevistadores deben gestionar su carga de trabajo para
garantizar suficiente tiempo y energía para cada evaluación.
6. Preparación para la entrevista
323. Antes de la entrevista, los entrevistadores deben
familiarizarse con el caso y prepararse identificando posibles
áreas temáticas en las que centrarse que son importantes para
el informe, al mismo tiempo que son lo suficientemente flexibles
como para esperar que puedan surgir nuevas áreas temáticas
durante la entrevista. Para esto, es útil revisar los documentos/
declaraciones juradas apropiados que el asesor legal del sujeto
haya preparado. Dichos documentos pueden ayudar al médico
a anticipar el contenido de la narración del individuo. Además,
el conocimiento de testimonios anteriores puede ayudar a
identificar elementos en la historia que necesitan aclaración. A
pesar de la utilidad de los documentos legales/declaraciones
juradas, no se debe confiar únicamente en la información
contenida en ellos y se debe verificar de forma independiente.
Toda la información relevante para una evaluación clínica debe ser
recopilada por el médico.
324. Es fundamental comprender las muchas razones por las
que las personas traumatizadas pueden faltar o llegar
tarde a las citas y permitir la reprogramación siempre que
sea posible. Establecer contacto justo antes de la cita puede
ayudar a prevenir la frustración y la ineficiencia de las citas perdidas.
7. Barreras de comunicación
325. El clínico también debe tratar de anticipar y,
cuando sea posible, aborde las posibles barreras para una
comunicación efectiva. Las barreras a la comunicación pueden
influir drásticamente en el valor y/o el proceso de una
entrevista. Las posibles barreras a la comunicación incluyen:
409 Allison Abbe y otros, “El papel de la relación en las entrevistas de investigación: una revisión”, Journal of Investigative Psychology and Offender Profiling, vol. 10, núm. 3 (2013), págs. 237 a
249; y Jonathan P. Vallano y otros, “Establecimiento de relaciones durante las entrevistas con testigos y sospechosos: una encuesta sobre las fuerzas del orden”, Applied Cognitive
Psychology, vol. 29, núm. 3 (2015), págs. 369–380.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(a) Barreras ambientales, como falta de privacidad, entorno
incómodo para la entrevista o tiempo inadecuado para la entrevista;
(b) Barreras físicas, como dolor u otras molestias que la persona
pueda estar experimentando: por ejemplo, dolor físico, dificultad para
sentarse durante períodos prolongados, fatiga o deficiencias
sensoriales, como ceguera o sordera;
(c) Barreras psicológicas, como miedo o ansiedad, o trastornos de
salud mental, como depresión, PTSD o déficits cognitivos;
(d) Barreras socioculturales, como el género del entrevistador
(esto es particularmente importante con las víctimas de tortura o
malos tratos sexuales), problemas de idioma (incluida la idoneidad
y precisión del intérprete) y el desequilibrio de poder entre el
examinador y el entrevistado ( incluyendo raza, cultura o estatus
social);
(e) Barreras relacionadas con el entrevistador, como la ausencia
de un plan o estructura de entrevista, el uso de técnicas de
interrogatorio deficientes y/o habilidades interpersonales deficientes,
prejuicios personales o falta de comprensión de las necesidades
culturales o dependientes de la edad del entrevistado. .
8. Establecer una relación
326. Establecer una buena relación, que en este contexto
significa una relación de trabajo entre el entrevistador y el
entrevistado, es clave para realizar una entrevista eficaz.409
Tomarse el tiempo para generar confianza y una buena
relación facilitará que los entrevistados de todas las edades
hablen sobre temas difíciles.
327. Mostrar respeto por el entrevistado, siendo
completamente involucrado en el proceso de la
entrevista, el lenguaje corporal abierto, la atención y la
coincidencia con el estilo de comunicación del entrevistado
pueden generar una buena relación. Se debe permitir tiempo para
alguna discusión sobre la familia y otros asuntos personales para
desarrollar una relación. No se debe obligar a las personas a
hablar sobre ninguna forma de tortura o malos tratos a menos y
hasta que se sientan cómodos haciéndolo.
328. La empatía es un componente importante de la construcción
relación, que es particularmente importante para los médicos
79
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
utilizar cuando se escucha al entrevistado revelar información
sobre tortura o malos tratos. La empatía se refiere a la capacidad
de reconocer y comprender la experiencia emocional de un
entrevistado considerando y reconociendo cómo podría sentirse el
entrevistado. La empatía se puede comunicar a través de la escucha
activa, expresiones faciales apropiadas o reconociendo verbalmente
las emociones del entrevistado.
En algunos casos, los médicos pueden encontrar útil expresar
su posición clara contra las violaciones de los derechos humanos,
incluidas la tortura y los malos tratos. Los médicos deben
reconocer la angustia que observan en sus entrevistas clínicas
mientras mantienen los límites profesionales y la objetividad
clínica.
9. Nivel de detalle en la historia
329. En el curso de la obtención de un relato narrativo de eventos y
experiencias, el médico debe intentar obtener tantos detalles como sea
posible que sean relevantes para realizar la evaluación. Las narraciones
extensas y detalladas pueden
proporcionar más información a partir de la cual evaluar la
correlación entre las alegaciones y los hallazgos; con frecuencia
brindan una sensación de “estar allí”, que los adjudicadores a
menudo consideran útil. Sin embargo, algunos adjudicadores
pueden considerar irrelevante la inclusión de información histórica
detallada.
330. Los intentos de obtener una historia detallada pueden provocar
relatos de eventos y experiencias de los cuales los individuos están
menos seguros. Se debe aconsejar a los entrevistados que
ser comunicativo acerca de la incertidumbre, por ejemplo,
diciendo cuando están seguros o inseguros de algo.
331. Un alto nivel de detalle, o un alto grado de certeza
con los que se guarda un recuerdo, son útiles cuando están presentes,
pero su ausencia no puede tomarse como una indicación de que el
la memoria no es fiable. Pueden surgir inconsistencias dentro de la
cuenta o entre la cuenta y otras fuentes
de información y estos deben ser explorados durante la entrevista. El
médico evaluador debe evaluar las razones clínicas de las limitaciones
para recordar y relatar experiencias, como se analiza en el párrafo 342
a continuación.
332. Se debe recordar a los entrevistados sobre la
importancia de informar solo lo que recuerdan y ser transparentes
cuando las lesiones no estén relacionadas con su presunta
tortura o malos tratos. El médico evaluador debe reconocer las
posibles limitaciones al recordar todos los eventos. Además, la
falta de detalles no debe considerarse como una indicación de
ser falso, ya que puede haber importantes razones sociales,
cognitivas y contextuales para la falta de
80
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
detalle, incluyendo: el nivel de confianza y compenetración,
alineación de género en la entrevista, edad, clase social,
alfabetización y nivel de educación, factores culturales y
condiciones clínicas que afectan los procesos cognitivos.
10. Técnicas de interrogatorio
333. Varias técnicas pueden ayudar a obtener información
de los entrevistados.
(a) Tipos de preguntas
334. El uso de preguntas abiertas como técnica de entrevista aumenta
significativamente tanto la cantidad como la precisión de la
información proporcionada por el entrevistado. Las preguntas
abiertas a menudo comienzan con las palabras "decir", "explicar"
o "describir" (por ejemplo,
“Dime qué pasó” y “Describe lo que quisiste decir cuando
dijiste…”). Las preguntas abiertas les dan a los entrevistados la
libertad de responder informando su historia en sus propias
palabras tal como la recuerdan. Por lo tanto, este estilo de
cuestionamiento alienta a las personas a asumir el rol activo de
generar y proporcionar información, en lugar del rol pasivo de
simplemente responder preguntas.
335. Para clarificar respuestas abiertas o motivar dudas
entrevistados, es apropiado usar preguntas enfocadas o de sondeo.
Las preguntas enfocadas pueden comenzar con las palabras "quién",
"qué", "dónde", "cuándo" y "cómo".
336. Es posible que se requieran preguntas cerradas para especificar
cosas, por ejemplo, "¿Sucedió eso antes o después de...?" o
"¿Quién hizo eso?". Las preguntas cerradas (a veces conocidas
como "preguntas específicas" o "preguntas que plantean opciones")
generalmente obtienen respuestas más cortas; por lo tanto, no son
efectivos como técnica principal de entrevista. Se debe tener cuidado
con las preguntas cerradas, ya que se sabe que el uso de preguntas
cerradas rápidas restringe tanto la cantidad como la precisión de la
información proporcionada por el entrevistado. Además, hacer
demasiadas preguntas demasiado rápido puede confundir a las
personas, creando respuestas contradictorias o incluso recordándoles
que están siendo interrogados.
337. Siempre que sea posible, deben evitarse las preguntas capciosas, porque
las personas pueden responder con lo que creen que el entrevistador
quiere escuchar. Esto es especialmente importante cuando se realiza
una entrevista con fines médico-legales en situaciones en las que el
testimonio puede ser impugnado ante un tribunal. Los niños son
particularmente susceptibles a las preguntas capciosas que sugieren
una respuesta deseada.
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
(b) Técnicas cognitivas
338. La calidad de la información obtenida se puede mejorar mediante
algunas técnicas específicas para facilitar la recuperación.
Primero, en un entorno clínico en el que el tiempo lo permita,
se debe pedir a las personas que describan todo lo
relacionado con el momento de los malos tratos (por ejemplo,
describiendo los eventos y el proceso de detención), incluso si no
parece directamente relevante para ellos. .
Esto podría ayudar a descubrir detalles o eventos que podrían
ser más importantes de lo que las personas creen.
En segundo lugar, a medida que las personas relatan estos eventos,
es posible que se les recuerden otros eventos. Ayuda si se alienta
a las personas a recordar el contexto en el que ocurrieron los
eventos, incluidos los aspectos físicos, emocionales y sensoriales
de ese evento (p. ej., "¿Qué pudiste ver?", "¿Qué pudiste oír?",
"¿Qué pudiste oler?” y “¿Cómo te sentiste?”). La restauración
mental del contexto de esta manera generalmente promueve el
recuerdo de información precisa adicional y es particularmente
efectiva después de un largo retraso.410 Sin embargo, el uso de
tales técnicas puede desencadenar escenas retrospectivas, por lo
que el entrevistador debe usarlas con cautela.
339. La comunicación de ciertos tipos de información puede ser
difícil de hacer verbalmente o en una narrativa lineal.
Por lo tanto, los entrevistadores deben considerar si algunos
de la información que un individuo tiene que reportar podría
describirse mejor o comunicarse de manera no verbal.
Por ejemplo, puede ser útil invitar a la persona a generar un
boceto de una habitación o edificio(s) para reportar información
espacial importante y ayudar a recordar detalles que de otro modo
podrían haberse olvidado.
De manera similar, el uso de una línea de tiempo puede mejorar la
comunicación del orden temporal de eventos y acciones.
340. El uso juicioso del silencio y las pausas puede ayudar a
fomentar un espacio seguro para revelar detalles muy personales,
así como proporcionar al entrevistado el tiempo necesario para
organizar sus pensamientos. Incluso si el tiempo de la entrevista es
limitado, el entrevistado no debe sentirse apurado. Es mejor
centrarse en unos pocos puntos específicos que tratar de cubrir
demasiado terreno en muy poco tiempo.
341. Es importante recordar que diferentes
las culturas tienen diferentes conceptos de lo que es normal
410 Ronald P. Fisher y Ronald E. Geiselman, Memory Enhancing Techniques for Investigative Interviewing: The Cognitive Interview (Springfield, Charles C. Thomas Publisher,
1992), págs. 99–102.
411 La disociación es un proceso mental de desconexión o falta de continuidad entre pensamientos, recuerdos, entorno, acciones e identidad. Los trastornos disociativos generalmente se desarrollan como una
reacción al trauma para ayudar a mantener a raya los recuerdos difíciles.
412 Richard F. Mollica y Yael Caspi-Yavin, “Resumen: evaluación y diagnóstico de eventos y síntomas de tortura”, en Torture and Its Consequences: Current Treatment Approaches, Metin
Baÿoÿlu, ed. (Cambridge, Reino Unido, Cambridge University Press, 1992), págs. 255–274; y Juliet Cohen, “Errores de memoria y credibilidad: ¿se puede decir razonablemente que las
omisiones y discrepancias en declaraciones sucesivas socavan la credibilidad del testimonio?”, Medico-Legal Journal, vol. 69, núm. 1 (2001), págs. 25 a 34.
413 Cohen, “Errores de recuerdo y credibilidad”.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Comportamiento en una entrevista. La humildad y la
comprensión cultural ayudarán a navegar las evaluaciones
interculturales (véanse los párrafos 294 y 295 anteriores).
11. Dificultad para recordar y contar
342. Los supervivientes de la tortura pueden tener dificultades
para relatar los detalles específicos de la tortura o los malos
tratos por varias razones importantes, entre ellas:
(a) Factores durante la tortura misma, tales como vendar los
ojos, drogar, lapsos de conciencia, etc.;
(b) Miedo de ponerse a sí mismos oa otros en riesgo;
(c) Falta de confianza en el médico examinador o
intérprete;
(d) El impacto psicológico de la tortura y el trauma, por ejemplo,
gran excitación emocional, evitación cognitiva debido a
emociones dolorosas, como la culpa y la vergüenza, y deterioro
de la memoria, secundaria a enfermedades mentales relacionadas
con el trauma, como la depresión y el TEPT;
(e) Deterioro de la memoria neuropsiquiátrica por traumatismo
craneoencefálico, asfixia, casi ahogamiento o inanición;
(f) Mecanismos protectores de afrontamiento, como la
negación, la evitación y la disociación;411
(g) Sanciones prescritas culturalmente que permiten que las
experiencias traumáticas se revelen solo en entornos altamente
confidenciales.412
12. Variabilidad e inconsistencias en la historia
343. Es importante tener en cuenta que a menudo hay variabilidad
en el nivel de detalle que un individuo recordará con respecto
a los eventos del trauma.
Esta variabilidad no indica necesariamente que el narrador
proporcione información falsa o que no sea confiable.413 La
variabilidad normal de la memoria, en la que los relatos
sucesivos pueden contener más y diferentes detalles cada vez
con la omisión de otros
detalles, es probable que se vea agravada por la tortura o
los malos tratos. Las víctimas de la tortura suelen ser sometidas
81
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
a múltiples formas de abuso, a menudo simultáneamente.
Este suele ser el caso cuando una persona es sometida a episodios
repetidos o prolongados de tortura o malos tratos. Además, las
personas pueden haber sido detenidas en condiciones en las que
pierden el sentido del tiempo y el lugar, por ejemplo, manteniéndolas
con los ojos vendados o recluidas en régimen de aislamiento en una
celda oscura, o en un estado debilitado como resultado de la privación
de alimentos, agua y/o dormir. Como tal, las personas son
susceptibles de cometer errores de "seguimiento de la fuente", en los
que confunden un episodio con otro y les resulta difícil decir con
certeza que la fuente de la información que están proporcionando es
su recuerdo de un episodio específico.
344. La memoria de eventos puede verse afectada en una o más de
al menos tres formas:
(a) Una incapacidad para establecer la memoria (por ejemplo, secundaria a una
lesión en la cabeza o excitación emocional extrema);
(b) Olvido motivado de recuerdos desagradables;
(c) Deterioro de la capacidad para recordar.
345. En la excitación emocional extrema, cuando el cuerpo está bajo amenaza,
el almacenamiento de la memoria se ve afectado.
Como resultado, los recuerdos de experiencias traumáticas
pueden estar fragmentados y mal ubicados en el contexto
general de cronología o ubicación. Los detalles centrales de la
experiencia se recuerdan mejor que los detalles periféricos (los
detalles de la fecha y el número se recuerdan particularmente
mal), pero incluso algunos detalles centrales de la experiencia
pueden no recordarse de manera confiable. La capacidad de
recordar y contar detalles de eventos traumáticos.
puede variar con el tiempo, particularmente cuando una persona
tiene PTSD. Se esperan diferencias en la historia (en particular, la
capacidad variable para recordar detalles sobre experiencias de
tortura y malos tratos) obtenidas de entrevistas realizadas en
diferentes momentos.
346. Los entrevistadores deben usar su juicio sobre cuánto
se necesitan detalles específicos para documentar el presunto abuso.
Por ejemplo, si alguien fue torturado o violado repetidamente,
puede ser innecesario o inapropiado obtener todos los detalles
de cada episodio. Si es importante obtener información sobre
varios episodios diferentes, pídale al entrevistado que identifique
los que recuerda con mayor claridad o los que tuvieron un mayor
impacto. Estos pueden ser la primera ocasión, la última ocasión o
un episodio específico que fue memorable.
82
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
por una razón particular. Deje que el entrevistado los nombre
diferenciando entre ellos y luego aborde cada episodio, uno a la vez,
para preguntar con más detalle. Esta instrucción es aún más
importante cuando se entrevista a un niño, ya que los niños son más
vulnerables a mezclar detalles de eventos repetidos.
347. Las inconsistencias entre las alegaciones de abuso de una persona y los resultados de
la evaluación pueden surgir de cualquiera o todos los factores antes mencionados y
no se debe suponer que indiquen falta de veracidad. Clínicos
tienen el deber de buscar posibles explicaciones de tales
inconsistencias. Si es posible, el médico debe solicitar más
aclaraciones. Cuando esto no es posible, el médico debe buscar
otra evidencia que
apoya o refuta el relato de los hechos. Una red de detalles de
apoyo coherentes puede corroborar y aclarar las alegaciones de la
persona. Aunque es posible que la persona no pueda proporcionar
los detalles deseados por el entrevistador, como fechas, horas,
lugares, frecuencias e identidades exactas de los perpetradores,
surgirá y se mantendrá con el tiempo una descripción general de los
eventos traumáticos alegados. En un contexto judicial, las diferencias
en la narrativa obtenida a lo largo del tiempo pueden interpretarse
como una influencia en la evaluación de la credibilidad; por lo tanto,
es imperativo que el testimonio presentado por el evaluador incluya
una discusión sobre cómo debe interpretarse la variabilidad y la
inconsistencia.
348. Es importante reconocer que algunas personas denuncian falsamente la tortura por
una variedad de razones. Otros pueden exagerar una experiencia relativamente
menor por razones personales o políticas. El clínico siempre debe ser consciente
de estas posibilidades y tratar de identificar posibles exageraciones o fabricaciones.
Sin embargo, el médico debe tener en cuenta que tal fabricación requiere un
conocimiento detallado sobre los síntomas relacionados con el trauma que los
individuos rara vez poseen. La documentación eficaz de pruebas físicas y
psicológicas de tortura o malos tratos requiere que los médicos tengan la
capacidad de evaluar las consistencias e inconsistencias en el informe. Si el
médico sospecha una fabricación, se deben programar entrevistas adicionales para
aclarar las inconsistencias en el informe. Los familiares o amigos pueden corroborar
los detalles del relato de los hechos. Si el médico lleva a cabo más
exámenes y aún sospecha fabricación, el médico debe
referir al individuo a otro
clínico y pida la opinión del colega. En algunos casos, la
sospecha de fabricación debe documentarse con la opinión de
dos médicos.
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IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
13. Abordar la variabilidad y las inconsistencias
349. La fiabilidad de las pruebas clínicas se basa a menudo en
elementos de coherencia interna y externa.
La coherencia interna se refiere a la corroboración entre
elementos de un caso individual, mientras que la coherencia
externa se refiere a la coherencia entre los hallazgos de casos
individuales y el conocimiento de métodos y prácticas de tortura
y malos tratos dentro de una región en particular o información
adicional de testigos.
350. La coherencia interna dentro del contexto de una evaluación
clínica puede estar respaldada por una amplia gama de
observaciones generales y específicas. En primer lugar, la
confiabilidad de la evidencia clínica se refleja en el nivel de
consistencia entre las denuncias específicas de abuso y la
documentación de los hallazgos físicos y psicológicos. De manera
similar, el grado de coherencia entre la descripción de las lesiones
físicas y los informes de los síntomas agudos posteriores, el
proceso de curación (teniendo en cuenta los factores atenuantes
pertinentes) y los síntomas crónicos y las discapacidades también
pueden respaldar la coherencia interna de los hallazgos clínicos.
Las observaciones de congruencia entre el afecto observado
(estado emocional) de una presunta víctima durante la entrevista y
el contenido de la evaluación, por ejemplo, angustia psicológica al
relatar experiencias dolorosas, pueden reflejar la consistencia
interna de los hallazgos clínicos, teniendo en cuenta que el afecto
apropiado puede variar ampliamente debido a las circunstancias
de un individuo y los mecanismos de afrontamiento.
351. Las inconsistencias son comunes en los relatos de los hechos.
por las víctimas de la tortura y ocurren por muchas razones.
La explicación adecuada de tales inconsistencias debe entenderse
como una indicación de la confiabilidad de los hallazgos clínicos más
que como una falta de veracidad.
Es importante tener en cuenta que sin el conocimiento médico de la
anatomía y fisiopatología humana, la mayoría de las personas no
podrían fabricar
información histórica sobre las secuelas físicas de formas específicas
de tortura o malos tratos.
352. Los médicos que realizan evaluaciones de evidencia psicológica
de tortura o malos tratos pueden considerar una serie de factores
adicionales que pueden ser relevantes para la confiabilidad de
los hallazgos psicológicos, por ejemplo, la relación temporal entre
el presunto abuso y la aparición de síntomas psicológicos. como
fluctuaciones en los síntomas psicológicos en relación con los
estresores psicológicos internos y externos y los factores
atenuantes. El significado individual asignado al presunto abuso
a la luz de
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
la historia psicosocial de los individuos también puede ser un
indicador de consistencia interna, así como la congruencia
entre las emociones de los individuos (tanto informadas como
observadas por el médico) y sus mecanismos de afrontamiento.
Algunos síntomas psicológicos del PTSD pueden referirse
específicamente al presunto abuso en lugar de otras experiencias
traumáticas. Por ejemplo, es más probable que los recuerdos
intrusivos y las pesadillas o los desencadenantes de recuerdos
intrusivos, revivir experiencias y pensamientos y conductas de
evitación que se refieren a la supuesta tortura o malos tratos sean
causados por la experiencia de tortura o malos tratos que por otros
traumas. experiencias.
353. Los ejemplos de consistencia externa pueden incluir
descripciones de métodos de tortura y malos tratos o dispositivos
específicos, posiciones del cuerpo utilizadas para aplicar métodos de
tortura y malos tratos, métodos de coerción durante la tortura y los
malos tratos, e información de identificación sobre los perpetradores y
los lugares de detención. Además, podrán obtenerse otras fuentes
externas de corroboración de los hechos alegados de testigos tales
como otros detenidos, familiares, amigos, representantes legales, así
como informes médicos, registros de tratamiento y fotografías.
C. Contenido de las entrevistas
354. Todas las evaluaciones clínicas de presuntos o presuntos casos
de tortura o malos tratos en entornos médico-legales deben
realizarse de conformidad con la Ley de Estambul.
Principios (véase el anexo I) que se resumen a continuación:
(a) Los evaluadores clínicos deben comportarse de conformidad
con los más altos estándares éticos y obtener el consentimiento
informado antes de realizar cualquier examen;
(b) Las evaluaciones clínicas deben:
(i) Llevarse a cabo con prontitud y en privado;
(ii) Cumplir con los estándares establecidos de
práctica clínica;
(iii) Estar bajo el control de expertos clínicos, no personal
de seguridad;
(c) Los informes escritos deben ser precisos e incluir lo siguiente:
(i) Identificación de la presunta víctima; hora y lugar de la
entrevista, documentación de cualquier restricción física
del entrevistado y/
83
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
o presencia de policías o terceros durante la
evaluación;
(ii) Un registro detallado de las denuncias
del sujeto, incluidos los métodos de tortura o malos
tratos y todas las denuncias de síntomas físicos y
psicológicos;
iii) Un registro de todos los resultados físicos y
psicológicos del examen clínico, incluidas las pruebas
de diagnóstico adecuadas, diagramas corporales para
registrar la ubicación y la naturaleza de todas las
lesiones (véase el anexo III) y, cuando sea posible,
fotografías en color de todas las lesiones;
(iv) Una interpretación en cuanto a la probable
relación de los hallazgos físicos y psicológicos con
posibles torturas o malos tratos;
(v) Una recomendación para cualquier tratamiento médico
y psicológico necesario y/o examen adicional;
(vi) Identificación y firma del o de los médicos evaluadores.
355. Es importante señalar que los Principios de Estambul se
aplican a las evaluaciones clínicas en contextos legales y no
legales con una excepción: que las evaluaciones clínicas en
contextos no legales no requieren una interpretación del nivel de
consistencia entre los hallazgos clínicos y los resultados.
denuncias de tortura o malos tratos o una opinión sobre la
posibilidad de tortura (ver párr. 635 infra). Sin embargo, en estos
contextos no legales, los médicos que tienen conocimiento y
experiencia en la aplicación del Protocolo de Estambul y sus
Principios aún deben considerar brindar una interpretación del
nivel de consistencia entre los hallazgos clínicos y los presuntos
métodos de lesión, así como como una opinión sobre la posibilidad
de tortura o malos tratos tal como se definen en la Convención
contra la Tortura.
356. El Protocolo de Estambul incluye normas mínimas
por la obligación del Estado de investigar efectivamente
la tortura y los malos tratos, que se articulan en los
Principios de Estambul y se desarrollan más
detalladamente en el presente manual. El Protocolo de
Estambul y sus Principios brindan orientación detallada a
los médicos que realizan evaluaciones médico-legales, que
deben aplicarse de acuerdo con una evaluación razonable
de los recursos disponibles y el juicio clínico (ver el anexo
IV). Es importante comprender que las evaluaciones clínicas
integrales suelen tardar varias horas o más.
84
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
más largo de llevar a cabo y que las declaraciones juradas médico-
legales pueden tener muchas páginas. Si el tiempo es limitado, los
médicos deben esforzarse por obtener las respuestas más críticas.
información de acuerdo con el Protocolo de Estambul
y sus Principios e informar la limitación temporal.
357. Una evaluación clínica detallada de los casos en los que
la tortura o los malos tratos que se alegan o
sospechan incluyen una serie de componentes, muchos
de los cuales son comunes a las evaluaciones de las
pruebas tanto físicas como psicológicas. La siguiente
guía sobre el contenido de la entrevista se enfoca en
componentes de las evaluaciones clínicas. En los
capítulos V y VI, respectivamente, se incluye orientación
adicional sobre las evaluaciones clínicas de pruebas
físicas y psicológicas de tortura o malos tratos.
1. Introducción e identificación
358. Las entrevistas para las evaluaciones clínicas suelen comenzar
con la presentación de los examinadores, seguida de:
(a) Una explicación del propósito de la evaluación y el papel
del entrevistador como examinador en lugar de
que un médico tratante;
(b) Una revisión de las condiciones de la evaluación:
(i) Independencia del evaluador o falta de ella;
(ii) Confidencialidad de los hallazgos del médico y
cualquier límite aplicable, como los requisitos de
informes obligatorios;
(iii) Derecho a negarse a responder preguntas o
participar en exámenes;
(iv) Importancia del detalle y exactitud de la
información;
(v) Posible dificultad para recordar ciertos eventos y
potencial de retraumatización y reacciones emocionales;
(vi) Capacidad para tomar descansos;
(vii) Acceso a refrigerios e instalaciones sanitarias;
c) Una declaración sobre el contenido general de la evaluación
que incluya: preguntas detalladas sobre los hechos anteriores,
durante y posteriores a la tortura o los malos tratos alegados,
seguidas de un examen físico y psicológico, en su caso, y la
posibilidad de fotografías;
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
(d) Una discusión de los posibles beneficios y riesgos de la evaluación;
(e) Respuestas a cualquier pregunta o inquietud que el individuo pueda
tener;
(f) Una solicitud de consentimiento informado para proceder con la
evaluación.414
359. Para las evaluaciones médico-legales, el médico debe establecer la
identidad del sujeto. Como se mencionó anteriormente, los funcionarios
encargados de hacer cumplir la ley no deben estar presentes durante la
evaluación. Si dichos funcionarios se niegan a abandonar la sala de examen, se
debe anotar en el informe del médico o se puede cancelar la evaluación.
2. Antecedentes/información del caso
360. Información general. Los médicos deben obtener
información de antecedentes relevante, que generalmente
incluye el nombre legal de la persona, la fecha y el lugar
de nacimiento, los motivos de la evaluación, el nombre de
la persona o autoridad que solicita la evaluación, el nombre
de cualquier intérprete o tercero presente durante la
evaluación , el lenguaje utilizado para llevar a cabo la entrevista
y si hubo restricciones en la evaluación, incluidas restricciones
físicas de la presunta víctima o limitaciones de tiempo.
361. Antecedentes médicos y de salud mental. Los médicos
deben obtener un historial completo, incluidos los
problemas médicos, quirúrgicos y/o psiquiátricos previos.
El médico debe documentar cualquier historial de
lesiones antes del período de detención y cualquier
posible efecto posterior. El conocimiento de lesiones
anteriores puede ayudar a diferenciar los hallazgos físicos
relacionados con la tortura de los que no lo son. el clínico
debe preguntar sobre los medicamentos que toma el
individuo; esto es particularmente importante porque la
medicación puede ser negada a una persona bajo custodia
con consecuencias adversas significativas para la salud.
362. Revisión de evaluaciones clínicas previas de supuestos
tortura o malos tratos. Los médicos deben preguntar
sobre la posibilidad de cualquier evaluación clínica previa de
la supuesta tortura o malos tratos, ya sea bajo custodia o
después de la liberación. Con el consentimiento de la
persona, los médicos deben hacer todo lo posible para
obtener una copia de dichos informes, ya que pueden
proporcionar información clínica corroborativa o contradictoria.
414 Si existe alguna duda sobre la competencia mental del individuo antes o durante la evaluación, se debe realizar una evaluación del posible deterioro cognitivo como
el consentimiento de personas consideradas mentalmente incompetentes no es válido.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
3. Historia psicosocial antes del arresto
363. El examinador debe indagar sobre la historia social de la persona, actividades
diarias, relaciones con amigos y familiares, trabajo o escuela, ocupación,
intereses, planes futuros y uso de alcohol y drogas antes de la supuesta
tortura o malos tratos. También se debe obtener información sobre el historial
psicosocial posterior a la detención de la persona. Las indagaciones sobre
actividades políticas, identidad, creencias y opiniones son relevantes en la
medida en que ayudan a explicar por qué una persona fue detenida, torturada
o maltratada. El clínico debe ser consciente
del hecho de que incluir información sobre actividades
políticas de una persona en la documentación clínica
puede generar riesgos adicionales para el individuo y,
como tal, puede estar en contra del principio ético de “no
hacer daño”. Estas preguntas a veces pueden generar
respuestas informativas cuando se hacen indirectamente al
preguntarle a la persona qué acusaciones se han hecho.
4. Denuncias de tortura y malos tratos
364. En muchos casos de presunta tortura o malos tratos, puede haber múltiples
entrevistadores, como otros investigadores, abogados y otros, que también
están involucrados.
Cualquier comunicación, intercambio de información u otra
interacción con estos actores debe llevarse a cabo
cuidadosamente y de acuerdo con los principios éticos.
a) Resumen de la detención y tortura
o malos tratos
365. Antes de obtener un relato detallado de los hechos, infórmese
información resumida, incluidas fechas, lugares, duración de la
detención y frecuencia y duración de las sesiones que impliquen
tortura o malos tratos. Un resumen ayudará a hacer un uso
efectivo del tiempo. En algunos casos en los que los sobrevivientes
han sido sometidos a tortura o malos tratos en múltiples
ocasiones, es posible que puedan recordar lo que les sucedió,
pero a menudo no pueden recordar exactamente dónde y cuándo
ocurrió cada evento. En tales circunstancias, puede ser
aconsejable obtener el relato histórico según métodos de tortura
o malos tratos en lugar de relatar una serie de hechos durante
detenciones específicas. Los lugares de detención son operados
por diferentes fuerzas de seguridad, policía o armadas, y
comprender lo que ocurrió en diferentes lugares puede ser útil
para obtener una imagen completa del sistema de tortura.
Obtener un mapa de dónde ocurrió la supuesta tortura o malos
tratos puede ser útil para reconstruir
85
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
juntar las cuentas de diferentes personas. Esto a menudo
resultará muy útil para la investigación general.
(b) Circunstancias de arresto y detención
366. Deben averiguarse las circunstancias de la detención.
Considere preguntas sobre los perpetradores, su
apariencia, testigos, tipos de detención y descripciones
de los hechos. Algunas preguntas enfocadas o de sondeo
pueden incluir: ¿Qué hora era? ¿Dónde estabas? ¿Que estabas
haciendo? ¿Quien estuvo ahí? ¿Cómo describiría la apariencia
de quienes lo detuvieron? ¿Quiénes eran y qué vestían? ¿Qué
tipo de armas, si alguna, llevaban? ¿Lo que fue dicho? ¿Hubo
testigos?
¿Fue un arresto formal, una detención administrativa o una
desaparición? ¿Se usó violencia, se pronunció amenazas? ¿Hubo
alguna interacción con los miembros de la familia? Anotar el uso
de medios de sujeción o venda en los ojos, medio de transporte,
destino y nombres de los funcionarios, si se conocen.
c) Lugar y condiciones de detención
367. El médico debe documentar cualquier contacto con
familiares, abogados o profesionales de la salud, las condiciones
de hacinamiento o aislamiento, las dimensiones del lugar de
detención y si existen otras personas que puedan corroborar la
detención. Considere las siguientes preguntas enfocadas: ¿Qué
sucedió primero?
¿Dónde te llevaron? ¿Hubo un proceso de identificación
(datos personales registrados, huellas dactilares o fotografías)?
¿Te pidieron que firmaras algo?
Describa las condiciones de la celda o habitación (observe
el tamaño, otros presentes, luz, ventilación, temperatura,
presencia de insectos, roedores, ropa de cama y acceso a
alimentos, agua y baño). ¿Qué escuchaste, viste y oliste? ¿Tuvo
algún contacto con personas ajenas o acceso a atención médica?
¿Cuál era la disposición física del lugar en el que estuvo detenido?
d) Relato narrativo de torturas o malos tratos
368. El médico debe obtener una descripción detallada de cualquier denuncia de tortura
o malos tratos, incluidas las formas tanto físicas como psicológicas. Para reducir
el riesgo de un posible embellecimiento, los médicos deben tener cuidado al
usar preguntas directas que sugieran formas específicas de abuso, como se
describe en el párrafo 372 a continuación.
Sin embargo, obtener respuestas negativas a preguntas
sobre diversas formas de tortura también puede ayudar a
establecer la credibilidad de los hallazgos clínicos. Las preguntas
deben estar diseñadas para obtener un relato narrativo coherente.
Considere las siguientes preguntas: ¿De dónde salió el
86
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
el presunto abuso, ¿cuándo y por cuánto tiempo? ¿Estabas con
los ojos vendados? Antes de discutir las formas de abuso, anote
quién estuvo presente (brinde nombres y cargos).
Describa la habitación o el lugar. ¿Qué objetos observaste?
Si es posible, describa detalladamente cada instrumento de
presunta tortura o malos tratos; para tortura eléctrica, el tipo de
corriente, dispositivo, número y forma de electrodos. Pregunte
acerca de la ropa, desvestirse y cambiarse de ropa. Registrar citas
de lo dicho durante el interrogatorio, insultos utilizados contra la
presunta víctima, etc. ¿Qué se dijo entre los perpetradores?
369. En las evaluaciones de las pruebas físicas de tortura o malos tratos, para
cada forma de presunto abuso, el médico puede anotar: la posición
del cuerpo, la inmovilización, la naturaleza del contacto, incluida la
duración, la frecuencia, la ubicación anatómica y el área del cuerpo afectada.
¿Hubo sangrado, traumatismo craneoencefálico o pérdida del conocimiento?
¿La pérdida de conciencia se debió a un traumatismo
craneoencefálico, asfixia o dolor? El médico también debe
preguntar sobre el estado de la persona, cómo estaba al final de
la "sesión", como la marcha, cualquier dificultad para caminar,
capacidad para funcionar en los días siguientes y signos físicos,
como hinchazón de los pies. . Estos detalles proporcionan
descripciones mejoradas, en comparación con una lista de
verificación. El historial debe incluir la(s) fecha(s) de la supuesta
tortura o malos tratos, cuántas veces y cuántos días duró la tortura
o los malos tratos, el período de cada episodio y la descripción y
estilo de la suspensión (lineal inversa). , estar cubierto por una
manta de tela gruesa o estar atado directamente con una cuerda,
aplicar peso en las piernas o tirar hacia abajo) o posición.
En casos de tortura que involucren suspensión, el médico debe
preguntar qué tipo de material se usó, ya que la cuerda, el
alambre y la tela dejan marcas diferentes, si las hay, en la piel
después de la suspensión. El médico debe recordar que las
afirmaciones sobre la duración de la sesión que involucra tortura o
malos tratos por parte de la presunta víctima son subjetivas y
pueden no ser precisas, ya que la desorientación de tiempo y lugar
durante la tortura y los malos tratos es un hallazgo comúnmente
observado. Se debe pedir a la presunta víctima que describa
cualquier episodio de acoso sexual, amenazas o abuso y el médico
debe obtener lo que
dicho durante la supuesta tortura o malos tratos.
Por ejemplo, durante la tortura que involucra descargas eléctricas
en los genitales, los perpetradores a menudo pueden decirles a
sus víctimas que ya no serán capaces de tener relaciones
sexuales normales o algo similar. Para una discusión detallada
de las evaluaciones de las denuncias de tortura sexual, incluida
la violación, véanse los párrafos 455 a 479 a continuación.
370. Como se indicó en el capítulo I, la tortura y los malos tratos
incluyen una amplia gama de actos en los que física y/o
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
se inflige dolor o sufrimiento mental. Muchos actos de
violencia que constituyen tortura u otros malos tratos
ocurren en entornos que no son de detención, por ejemplo,
daños físicos y psicológicos infligidos sobre la base de la
orientación sexual y la identidad de género, y el uso de fuerza
innecesaria y desproporcionada en entornos de control de
multitudes. El entrevistador debe estar preparado para
preguntar sobre la naturaleza y el alcance de tales daños y
sus efectos físicos y psicológicos.
5. Revisión de los métodos de tortura
371. Después de obtener un relato narrativo detallado de los
hechos, es recomendable revisar otros posibles métodos
de tortura. Hacer preguntas sobre formas específicas de tortura
y malos tratos es útil cuando:
(a) Los síntomas psicológicos nublan los recuerdos;
(b) La supuesta tortura o malos tratos estuvo asociada con
capacidades sensoriales disminuidas;
c) Hay un caso de posible daño cerebral orgánico;
(d) Existen atenuantes educativos y culturales que influyen en
el relato de los hechos.
372. La distinción entre métodos físicos y psicológicos de tortura es
artificial. Lo que comúnmente se denomina “tortura física” tiene
componentes psicológicos y lo que se denomina “tortura
psicológica” tiene componentes físicos.
Además, las víctimas con frecuencia están sujetas a
múltiples formas de abuso simultáneamente, por ejemplo,
amenazas, puñetazos y patadas cuando están inmovilizadas
y con los ojos vendados. La siguiente lista de métodos de
tortura se proporciona para ilustrar algunas de las categorías
de posibles torturas y malos tratos. No está destinado a ser
utilizado por los entrevistadores como una lista de verificación
o como un modelo para enumerar los métodos de tortura y
malos tratos en un informe. Un enfoque de lista de métodos
puede ser contraproducente, ya que todo el cuadro clínico
producido por la tortura y los malos tratos es mucho más que
la simple suma de las lesiones producidas por los métodos
de una lista. Los métodos de tortura y malos tratos a
considerar incluyen, pero no se limitan a:
(a) Traumatismo cerrado, como puñetazos, patadas,
bofetadas, latigazos, palizas con alambres o porras o contacto forzado
con superficies duras, como pisos y paredes;
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(b) Tortura posicional, usando suspensión, estirando las
extremidades, restricción prolongada de movimiento y
posicionamiento forzado;
(c) Quemaduras con cigarrillos, instrumentos calientes, líquidos
hirvientes o sustancias cáusticas;
d) descargas eléctricas;
(e) Asfixia, como métodos húmedos y secos, casi ahogamiento,
asfixia, confinamiento en cajas pequeñas o ataúdes, asfixia o uso de
productos químicos;
(f) Lesiones por aplastamiento, como aplastarse los dedos o usar un
rodillo pesado para lesionar los muslos o la espalda;
(g) Lesiones penetrantes, como puñaladas y heridas de bala o
alambres debajo de los clavos;
(h) Exposición química a sal, chile, gasolina, etc. (en heridas o
cavidades corporales);
(i) Violencia sexual en los genitales, abuso sexual,
instrumentación o violación;
j) Amputación traumática o quirúrgica de partes del cuerpo, como
orejas, dedos o extremidades;
(k) Extirpación quirúrgica de órganos;
l) Tortura farmacológica utilizando dosis tóxicas de sedantes,
neurolépticos o paralizantes, alucinógenos u otras sustancias;
(m) Condiciones de detención, como celdas pequeñas o
hacinadas, condiciones antihigiénicas, falta de acceso a baños,
alimentos y agua irregulares o contaminados, exposición a
temperaturas extremas, negación de la privacidad y desnudez forzada;
(n) Privación de estímulos sensoriales normales, como el sonido,
la luz, el sentido del tiempo y los contactos físicos y sociales;
(o) Negación de atención médica y de salud mental y
tratamiento;
p) Detención en régimen de incomunicación y denegación de
contactos sociales en la detención y/o con el mundo exterior;
(q) Uso prolongado de dispositivos de coerción, tales como
esposas, cadenas, hierros y camisas de fuerza;
87
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
r) Reclusión en régimen de aislamiento y otras formas de aislamiento;
(s) Sobrecarga sensorial, como música alta, luces brillantes e
interrogatorios prolongados;
(t) Agotamiento por ejercicio prolongado y forzado, a menudo en
combinación con privación del sueño;
(u) La humillación, la culpa y la vergüenza, a menudo resultantes del
abuso verbal y la realización de actos humillantes sobre la base de la
propia identidad, género y/u orientación sexual (real o supuesta);
(v) Amenazas de muerte, daños a la familia, nuevas torturas,
encarcelamiento y simulacros de ejecución; o ataques de animales,
como perros, gatos, ratas o escorpiones;
w) Técnicas psicológicas para quebrantar al individuo, incluidas
las traiciones forzadas, la amplificación de los sentimientos de
impotencia, la exposición a situaciones ambiguas o mensajes
contradictorios y la violación de tabúes;
(x) Coerción conductual, como la participación forzada en prácticas
contrarias a la religión de la víctima (por ejemplo, obligar a los
musulmanes a comer carne de cerdo), daño forzado a otros mediante
tortura u otros abusos, destrucción forzada de propiedad y traición
forzada de alguien que los coloca en riesgo de daño;
(y) Manipulación de afectos y emociones;
(z) Obligar a las víctimas a presenciar torturas o atrocidades infligidas a
otros, incluidos miembros de sus familias.
6. Valoraciones de pruebas físicas y
psicológicas
373. Cuando la evaluación de una presunta víctima sea realizada por más de
un médico, por ejemplo, uno para evidencia física y otro para evidencia
psicológica, el contenido de la entrevista debe enfocarse en la
información más relevante para el médico.
pericia. Los capítulos V y VI brindan orientación
detallada sobre estas evaluaciones. En resumen, la
evaluación de la evidencia física incluye: (a) una revisión de los
síntomas y discapacidades agudos y crónicos; (b) un examen
físico completo; (c) estudios de diagnóstico y consultas clínicas,
si están indicadas; d) el uso de diagramas anatómicos (véase el
anexo III) y documentación fotográfica para describir los
hallazgos físicos; y (e) una evaluación de la discapacidad
funcional. La evaluación psicológica típicamente
88
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
incluye: (a) métodos de evaluación; (b) quejas psicológicas
actuales; (c) antecedentes previos a la tortura; (d) historia
posterior a la tortura; (e) pasado psicológico/
antecedentes psiquiátricos; (f) historial de abuso de sustancias;
(g) un examen del estado mental; (h) una evaluación del
funcionamiento social; (i) pruebas psicológicas, si están indicadas;
y (j) pruebas neuropsicológicas, si están indicadas.
374. Al evaluar las consecuencias para la salud de la tortura
y malos tratos, es importante considerar y sondear la
interrelación entre las consecuencias físicas, psicológicas
y sociales de los malos tratos. Por ejemplo, las palizas
pueden provocar dolor musculoesquelético crónico, que a
su vez puede desencadenar recuerdos aterradores, que a
su vez resultan en aislamiento social. Ese sondeo puede
proporcionar una imagen más completa de los efectos
nocivos de la tortura o los malos tratos sufridos.
7. Cierre e indicaciones de remisión
375. Para concluir una evaluación, los médicos deben
revisar los próximos pasos en el proceso de documentación
médico-legal, por ejemplo, enviar una copia de sus informes al
abogado de una persona o recomendar pruebas o consultas
adicionales. Los médicos deben
considere reconocer la dificultad emocional de la entrevista,
agradezca a los entrevistados por su tiempo y esfuerzo, y
aborde cualquier inquietud o discapacidad en curso haciendo
referencias apropiadas. Se debe evaluar el estado emocional
del entrevistado.
y los médicos deben tomar medidas para mitigar los signos de
estrés. Los médicos tienen la obligación ética de hacer
referencias apropiadas para servicios médicos y psicológicos
si es necesario, particularmente si existe riesgo de autolesión
o suicidio. Durante las evaluaciones psicológicas, los médicos
pueden haber asegurado a las personas que sus síntomas son
reacciones normales a experiencias extremas.
Esto es particularmente útil cuando las personas sienten
que sus síntomas son un signo de “volverse locos”.
Los médicos pueden considerar revisar este punto con el
individuo al final de la entrevista. Clínicos
también debe discutir cómo la entrevista y el examen
proceso puede exacerbar los síntomas psicológicos.
376. Cuando los médicos detectan pruebas de tortura o
malos tratos, tienen obligaciones legales y éticas de reportar
tales evidencias a las autoridades correspondientes.
Como se analiza en el capítulo II (véanse los párrs. 174
a 182 supra), la decisión de denunciar pruebas clínicas de
tortura o malos tratos debe basarse en última instancia en el
consentimiento informado de la presunta víctima. La ley
estatutaria puede requerir que los médicos reporten evidencia de
Machine Translated by Google
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
delitos que incluyen tortura y malos tratos, pero hacerlo puede
poner a la presunta víctima en riesgo de represalias por parte
de funcionarios del Estado, incluidos malos tratos adicionales o
sanciones legales. Además, los órganos internacionales de
supervisión, los mecanismos nacionales de prevención y las
instituciones nacionales de derechos humanos deben tratar de
hacer referencias apropiadas con fines de rendición de cuentas
dentro de sus mandatos oficiales.
377. Siempre que sea posible, los exámenes para documentar
la tortura y los malos tratos por motivos médico-legales
deben combinarse con una evaluación de las necesidades
médicas, psicológicas y sociales en curso. Cuando se les pide
que brinden asesoramiento o atención médica durante o
después del examen, los médicos deben equilibrar su papel
como examinadores independientes con las obligaciones éticas.
Para asuntos no urgentes, puede ser adecuado el asesoramiento
y la derivación a médicos especialistas, psicólogos,
fisioterapeutas o aquellos que puedan ofrecer asesoramiento y
apoyo social. Si se requiere atención médica urgente, los médicos
están obligados a garantizar que el entrevistado reciba asistencia.
Los médicos no deben dudar en hacer una derivación para
cualquier consulta que consideren clínicamente necesaria dentro
de la evaluación clínica. Los evaluadores deben ser
conscientes de los servicios locales de rehabilitación y apoyo.
D. Consideraciones posteriores a la entrevista
378. Después de que se haya realizado una evaluación médico-legal
de la supuesta tortura o malos tratos, los médicos comienzan
el proceso de redactar un informe formal, que incluye una
interpretación de todos los hallazgos relevantes y una conclusión
sobre la posibilidad de tortura o malos tratos. .
1. Interpretación de los hallazgos
379. Los Principios de Estambul exigen que los médicos proporcionen
una “interpretación de la probable relación de los hallazgos
físicos y psicológicos con la posible tortura o malos tratos”.
Como mínimo, esto debería incluir una evaluación del nivel de
coherencia entre todos los resultados de la evaluación clínica
y las denuncias de tortura o malos tratos. Si el clínico considera
que existen razones clínicas
en el caso de una constatación incoherente, esto debe
discutirse (véanse los párrs. 342 y 353 supra y 386 infra).
380. Los niveles de consistencia de tales correlaciones se
expresan comúnmente de la siguiente manera:
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(a) “No consistente con”: el hallazgo no pudo haber sido causado
por la supuesta tortura o malos tratos;
(b) “Consistente con”: el hallazgo podría haber sido causado
por la supuesta tortura o malos tratos, pero no es específico y
hay muchas otras causas posibles;
(c) “Muy consistente con”: el hallazgo podría haber sido
causado por la supuesta tortura o malos tratos y hay pocas otras
causas posibles;
d) “Típico de”: el hallazgo suele observarse con este tipo de
supuestas torturas o malos tratos, pero existen otras posibles
causas;
(e) “Diagnóstico de”: el hallazgo no pudo haber sido causado
de otra forma distinta a la descrita.
El nivel de consistencia denotado por “típico
de” no se usa comúnmente para evaluar las
pruebas psicológicas de tortura o malos tratos,
ya que los hallazgos psicológicos tienden a
depender de factores individuales. Además, el
nivel de consistencia denotado por “diagnóstico
de” se usa con mayor frecuencia en la interpretación
de evidencia física de tortura o malos tratos y rara
vez se usa en la interpretación de evidencia psicológica.
381. Orientación adicional sobre la interpretación de
las pruebas físicas y psicológicas de tortura o malos tratos
se desarrollan más detalladamente en los capítulos V y VI y el
anexo IV. Si bien las interpretaciones de la evidencia física y
psicológica tienen algunas diferencias, ambas evaluaciones
requieren que los médicos determinen el nivel de consistencia
entre toda la evidencia clínica que el médico ha documentado
y la
denuncias de tortura o malos tratos. En algunos casos, la
evaluación general puede reportar un mayor nivel de consistencia
que cada hallazgo clínico individual, especialmente si hay
muchos hallazgos clínicos que, cuando se toman en conjunto,
confirman la misma conclusión. Es importante tener en cuenta que
el nivel más alto de consistencia de un hallazgo individual a menudo
determina el nivel de consistencia de toda la evidencia clínica.
2. Conclusiones y recomendaciones
382. Los Principios de Estambul exigen que los médicos proporcionen
una opinión clínica sobre la posibilidad general de tortura o
malos tratos. Al formular una opinión clínica sobre la posibilidad
de tortura o malos tratos, los médicos deben considerar todas
las pruebas clínicas pertinentes, incluidos
89
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
“hallazgos físicos y psicológicos, información histórica,
hallazgos fotográficos, resultados de pruebas diagnósticas,
conocimiento de prácticas regionales de tortura, informes de
consulta, etc.”, según consta en el anexo IV.
La opinión del médico sobre la posibilidad de tortura o malos
tratos se expresa utilizando los mismos niveles de consistencia
que los utilizados para la interpretación de los hallazgos.
Debido a la capacidad de los niños, los médicos deben tener
en cuenta que: “La
Por lo tanto, el umbral a partir del cual el trato o la pena
pueden clasificarse como tortura o malos tratos es
menor en el caso de los niños, y en particular en el caso de
los niños privados de libertad”415.
383. En última instancia, es la evaluación general de todos los
hallazgos clínicos y no la consistencia de un hallazgo en
particular lo que es importante para evaluar las denuncias
de tortura o malos tratos. Cuando la evidencia física y
psicológica se documenta en un solo informe por parte
de un examinador, la conclusión sobre toda la evidencia
clínica debe ser el nivel más alto de consistencia
informado. De manera similar, al considerar una
conclusión sobre la evidencia física y psicológica que se
informa en evaluaciones clínicas separadas, la conclusión
sobre toda la evidencia clínica
debe ser el nivel más alto de consistencia informado en
cualquiera de las evaluaciones clínicas separadas o, si
confirma la misma conclusión, podría ser más alto.
384. Evaluaciones médico-legales que no valoran y
dar una opinión sobre la posibilidad de tortura o malos tratos
no son consistentes con el Convenio de Estambul
Principios y debe considerarse deficiente. Las opiniones clínicas
sobre la posibilidad de tortura o malos tratos a veces se cuestionan
en entornos médico-legales. Es importante entender que las
opiniones clínicas sobre la posibilidad de tortura se basan en la
probabilidad de que la totalidad de la evidencia clínica haya sido
causada por la supuesta tortura o malos tratos según lo define la
Convención contra la Tortura u otras definiciones legales
aplicables.416 La causalidad es expresado en términos de
consistencia en lugar de estándares judiciales de prueba (por
ejemplo, "más probable que no" o "más allá de una duda
razonable") para evitar la confusión de opiniones clínicas con
determinaciones judiciales. Los médicos consideran rutinariamente
la causa de los síntomas de sus pacientes.
En el caso de valoraciones médico-legales de tortura o malos
tratos, los clínicos tienen el conocimiento y la experiencia
necesarios para formular una opinión sobre la
415 A/HRC/28/68, párr. 33. Véase, también, ibíd., párr. 17
416 En algunos países, la definición de tortura puede diferir de la de la Convención contra la Tortura y los jueces pueden solicitar o exigir a los médicos que opinen sobre si la tortura
ocurrió o no. En tales circunstancias, los médicos pueden considerar explicar los límites de su experiencia y las obligaciones éticas de trabajar dentro de los límites de su
competencia profesional.
90
IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
posibilidad de que los hallazgos clínicos que observen hayan
sido causados por la imposición del dolor o sufrimiento físico y/
o psíquico severo alegado.
385. Además de brindar una conclusión sobre la posibilidad de
tortura o malos tratos, los médicos deben reiterar los síntomas
y discapacidades actuales y los efectos probables en el
funcionamiento social y brindar recomendaciones para
evaluaciones y atención adicionales.
para el individuo Como se indica en el anexo IV, los informes
médico-legales también pueden incluir una declaración de veracidad
del informe médico-legal del médico, una declaración de cualquier
restricción en la evaluación, la información de identificación y la
firma del médico, y cualquier anexo relevante.
3. Autoimposición y simulación
386. La cuestión de las lesiones autoinfligidas (o autoinfligidas por
apoderado, es decir, por otra persona) y la simulación de
síntomas físicos o psicológicos pueden plantearse en
entornos médico-legales. Tanto los médicos como los
adjudicadores deben comprender que el Protocolo de Estambul
es una herramienta útil para corroborar acusaciones específicas
de abuso con hallazgos clínicos relevantes, como evidencia
física y psicológica. Si el médico sospecha que se trata de una
fabricación, otro médico debe realizar entrevistas adicionales.
Documentación de
la posibilidad de autoinfligir o simulación debe señalarse con el
acuerdo de ambos clínicos en la interpretación de los hallazgos
y la conclusión.
Sin embargo, los médicos no tienen el deber de considerar
estas posibilidades en ausencia de un fundamento probatorio,
ya que las decisiones judiciales se basan en la existencia y el
peso de la evidencia y no en posibilidades hipotéticas en ausencia
de evidencia de apoyo.
4. Confiabilidad de la evidencia clínica y credibilidad
387. En los casos médico-legales, los abogados, fiscales y
los jueces a menudo se preocupan por la credibilidad de una
presunta víctima o sospechoso. Estos expertos legales a menudo
utilizan las determinaciones de credibilidad para sopesar la
veracidad de las afirmaciones de un individuo y, a menudo,
tienen un efecto significativo en las decisiones judiciales.
Las determinaciones judiciales de la credibilidad de un individuo
varían entre los Estados, pero generalmente incluyen una serie
de factores: la evidencia clínica representa solo uno de estos
factores. Los expertos legales a veces preguntan a los médicos
sus opiniones sobre la credibilidad
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IV. CONSIDERACIONES GENERALES PARA LAS ENTREVISTAS
de presuntas víctimas y sospechosos. De hecho, en
algunos países, en los casos de asilo, se puede solicitar
a los médicos que opinen sobre la credibilidad de la
presunta víctima para que se considere el caso individual.
388. Opiniones clínicas sobre la credibilidad de una supuesta
víctima o sospechoso debe ser considerado a la luz de la
experiencia del médico y circunscrito, si es posible, a la
confiabilidad de la evidencia clínica y la medida en que la
evidencia clínica es consistente o inconsistente
con denuncias específicas de tortura o malos tratos.
La confiabilidad de la evidencia clínica a menudo se basa
en elementos de consistencia interna y externa como se
describe en los párrafos 349 a 353 anteriores. En situaciones
en las que los tribunales soliciten o exijan que un médico emita
una opinión sobre la credibilidad de las personas, en lugar de los
hallazgos clínicos, el médico debe tener en cuenta que la
evaluación de la credibilidad de una persona está más allá del
alcance del Protocolo de Estambul, que aconseja que la las
opiniones deben limitarse a opiniones sobre la confiabilidad de la
evidencia clínica y la medida en que la evidencia clínica es
consistente o inconsistente
con denuncias específicas de tortura o malos tratos.
389. No se aconseja a los médicos comentar sobre la
credibilidad de una presunta víctima o sospechoso en sus
informes médico-legales o testimonios de testigos. Si un
experto legal le pide al médico que brinde una evaluación
de la credibilidad, el médico debe proporcionar su
evaluación de la confiabilidad de la evidencia clínica en lo
que respecta a la credibilidad y asegurarse de distinguir
su evaluación y opinión de una determinación judicial de
credibilidad.
5. Limitaciones, mala interpretación o mal uso
deliberado del Protocolo de Estambul
390. Es importante reconocer las limitaciones y posibles malas interpretaciones o
mal uso deliberado de la
417 En una sentencia de 2019 de la Corte Suprema del Reino Unido, el Protocolo de Estambul fue reconocido como una guía autorizada sobre las evaluaciones clínicas de presuntas torturas y
malos tratos, incluida la formulación de una opinión sobre la posibilidad de que la tortura sea la causa de los hallazgos clínicos. . Véase Reino Unido, Tribunal Supremo, KV (Sri Lanka) v.
Secretario de Estado del Ministerio del Interior, Sentencia, 6 de marzo de 2019.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Protocolo de Estambul. Si bien el Protocolo de Estambul y
sus Principios pueden ayudar en el descubrimiento de
evidencia clínica de presunta tortura o malos tratos, la
ausencia de evidencia física y/o psicológica de tortura o malos
tratos, sin embargo, no significa que no haya tenido lugar.
Muchos factores pueden explicar la ausencia de hallazgos
físicos y psicológicos y documentar estos factores puede ser
útil para corroborar denuncias específicas de tortura o malos
tratos.
Desafortunadamente, en algunos casos, las partes
acusadas de tortura o malos tratos han malinterpretado o
deliberadamente mal utilizado el Protocolo de Estambul al
argumentar con éxito que deberían ser exonerados cuando
los hallazgos físicos o psicológicos están ausentes, por
ejemplo, en ausencia de criterios de diagnóstico para el
TEPT. En tales circunstancias, la mala interpretación o el mal
uso deliberado de las normas consagradas en el
Protocolo de Estambul ignorar u ocultar pruebas de tortura
o malos tratos puede constituir una forma de complicidad u
otras formas de responsabilidad.
391. En tales circunstancias y en los tribunales de algunos
países, es probable que la mala interpretación o el uso
indebido deliberado de dichas normas represente esfuerzos
de los funcionarios del Estado por ignorar u ocultar pruebas de
tortura o malos tratos y, en algunos casos, enjuiciar a personas
por hacer “acusaciones falsas” contra funcionarios encargados de
hacer cumplir la ley. El valor inherente del Protocolo de Estambul
es su capacidad para descubrir evidencia clínica que pueda
respaldar afirmaciones específicas de abuso. No es una
herramienta para probar que un acto hipotético no tuvo lugar.
392. Al desestimar las pruebas de tortura o malos tratos, algunos tribunales también
han rechazado opiniones clínicas pertinentes al afirmar incorrectamente que
están fuera del alcance o la experiencia del médico. Por el contrario, como lo
indican los Principios de Estambul, todos los médicos siempre deben incluir
opiniones sobre la posibilidad de tortura o malos tratos en sus evaluaciones
médico-legales.417
91
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Evidencia
física de
tortura y malos trat
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
393. Las evaluaciones clínicas de las denuncias de tortura o
malos tratos deben realizarse de conformidad con los
capítulos IV, V y VI. El presente capítulo brinda información
específica sobre la evaluación clínica de la evidencia física
de tortura o malos tratos y, por lo tanto, debe entenderse
como un componente integral de la evaluación clínica. En
la medida en que exista evidencia física de tortura o malos
tratos, proporciona una importante evidencia confirmatoria
de que una persona ha sido torturada o maltratada. Sin
embargo, la ausencia de tales pruebas físicas no debe
interpretarse en el sentido de que no hubo tortura o malos
tratos, ya que tales actos de violencia contra las personas
con frecuencia no dejan marcas permanentes.
A. Historial médico
394. El médico debe obtener un historial médico completo, incluida
información sobre problemas médicos, quirúrgicos o
psiquiátricos previos, y asegurarse de documentar cualquier
historial de lesiones antes de cada período de presunta
tortura u otros malos tratos y cualquier posible secuela.
Deben evitarse las preguntas capciosas y deben
estructurarse las investigaciones para obtener un relato
cronológico y abierto de los eventos experimentados. Si la
persona no es capaz de hacer esto, los médicos deben
recordar que algunas personas pueden tener dificultades tanto
debido a los efectos de la tortura o los malos tratos sobre ellas como1.
porque
Síntomas
pueden provenir de una cultura en la que no se prioriza
dar cuenta de las propias experiencias individuales. El
médico debe preguntar específicamente sobre el castigo
físico en la niñez, el abuso doméstico y las lesiones por vivir
en una zona de conflicto o por el servicio militar, ya que
estos pueden parecerse más a los signos físicos de tortura
y deben distinguirse de ellos. Una revisión completa de los
síntomas es importante ya que puede revelar efectos de la
tortura que no se revelaron durante la fase de examen que
trata sobre el historial médico, en particular, pero no
exclusivamente, en relación con la posibilidad de tortura sexual.
395. La información histórica específica puede ser útil
para correlacionar las prácticas regionales de tortura
con denuncias individuales de tortura o malos tratos.
Los ejemplos de información útil incluyen descripciones de
dispositivos de tortura, posiciones del cuerpo, métodos de
sujeción, descripciones de heridas y discapacidades agudas
o crónicas e información de identificación sobre
418 Una lesión es cualquier hallazgo físico en un examen o investigación. En cuanto a la piel, las lesiones curadas o en proceso de cicatrización incluyen heridas, cicatrices y áreas de pigmentación alterada.
Algunas lesiones de la piel pueden contener áreas tanto de cicatrización como de pigmentación alterada. Los procesos inflamatorios posteriores a una lesión pueden provocar un aumento o una reducción de la pigmentación
en la piel afectada. Las lesiones también incluyen lesiones óseas, déficits neurológicos y deterioro de la función articular.
94
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
perpetradores y lugares de detención. Sin embargo,
las prácticas pueden cambiar con el tiempo y variar de
un lugar a otro, por lo que se debe tener cuidado al
revisar la información de otras fuentes.
Todas las denuncias realizadas por una presunta víctima
de tortura son significativas. Aunque puede que no haya
una correlación directa con los hallazgos físicos, deben
informarse. Se deben documentar los síntomas agudos y
crónicos y las discapacidades asociadas con formas específicas
de abuso y los procesos de curación posteriores.
396. En los solicitantes de asilo, registros e informes médicos
del país de origen a veces puede estar disponible y puede
corroborar el relato del tratamiento anterior de lesiones o
condiciones de salud mental debido a la tortura o malos tratos.
En algunos casos, pueden no ser un registro exacto de la
tortura, ya que pueden omitir deliberadamente la mención de la
tortura o la agresión, por ejemplo, en los casos en que esto
requiere un informe obligatorio que podría llamar la atención de
las autoridades. Los registros médicos en general solo pueden
contener notas breves sobre una condición y tratamiento y, por
lo general, se preparan para transmitir información clínicamente
relevante de un médico a otro o a su paciente. No pueden ser
revisados de la misma manera que un informe médico-legal
preparado por un médico calificado y no pueden contener una
opinión sobre la causa de los hallazgos clínicos.
agudos
397. Se debe pedir a las personas que describan cualquier
síntoma o signo de lesiones que puedan haber resultado de
los métodos específicos de tortura o malos tratos alegados.
Estos pueden ser, por ejemplo, sangrado, hematomas,
hinchazón, heridas abiertas, laceraciones, fracturas,
dislocaciones, dolor en las articulaciones, parálisis, hemoptisis,
neumotórax, alteraciones visuales, perforación de la membrana
timpánica, lesiones del sistema genitourinario asociadas con
orina roja u oscura, disuria, incontinencia, flujo y sangrado
vaginal, quemaduras (color, bulla o necrosis según el grado de
quemadura), lesiones eléctricas (su color y características de la
superficie), lesiones por exposición a productos químicos (color
y signos de necrosis), dolor, entumecimiento , estreñimiento,
incontinencia de heces o flatos, náuseas y vómitos, alteración
de la conciencia, convulsiones o lagunas en la memoria. Debe
anotarse la intensidad, cronología, frecuencia y duración de
cada síntoma. Se debe describir el desarrollo de cualquier lesión
cutánea posterior418 , indicando si
Machine Translated by Google
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
dejaron cicatrices. Los médicos deben preguntar sobre la
salud de las personas después de los eventos traumáticos:
¿Podían caminar o estaban confinados a la cama? Si
estuvieran confinados, ¿por cuánto tiempo? ¿Cuánto tiempo
tardaron en sanar las heridas? ¿Estaban infectados? ¿Qué
tratamiento recibió? ¿Fue un médico o un curandero
tradicional? Los médicos deben ser conscientes de que
la capacidad de la presunta víctima para hacer tales
observaciones puede haberse visto comprometida por la
tortura misma o sus efectos secundarios y debe documentarse.
2. Síntomas crónicos
398. El médico debe obtener información sobre todos los
dolencias físicas que la persona cree que estaban
asociadas con la tortura o los malos tratos y anotar las
gravedad, frecuencia y duración de cada síntoma y
cualquier discapacidad asociada o necesidad de atención
médica o psicológica, o tratamiento recibido. Incluso si no
se pueden ver las secuelas de las lesiones agudas
meses o años después, pueden permanecer algunos
hallazgos físicos, como cicatrices, aumento o reducción
de la pigmentación, deformidades esqueléticas, anomalías
óseas asociadas con fracturas, lesiones dentales, pérdida de
cabello y miofibrosis. Los síntomas comunes incluyen dolor de
cabeza, dolor de espalda y articulaciones, molestias
gastrointestinales, disfunción sexual y dolor muscular.
Los síntomas psicológicos comunes incluyen depresión,
ansiedad, insomnio, pesadillas, escenas retrospectivas y
dificultades de memoria (véanse los párrs. 499 a 522 infra).
3. Importancia de la historia clínica
399. Las víctimas de tortura pueden tener lesiones sustancialmente
diferentes de otras formas de trauma. Aunque las lesiones agudas
pueden ser características de las lesiones descritas, la mayoría de
las lesiones curan a las pocas semanas de la tortura, sin dejar
cicatrices o, como mucho, cicatrices inespecíficas.
Este suele ser el caso cuando los torturadores utilizan
técnicas que previenen o limitan los signos detectables de
lesiones. El traumatismo cerrado es una de las formas más
comunes de lesión en la tortura y tiende a causar
principalmente hematomas y abrasiones, que pueden sanar
sin evidencia física duradera. En tales circunstancias, el
examen físico puede estar dentro de los límites normales,
pero esto de ninguna manera niega las denuncias de tortura.
Un relato detallado de las observaciones de la persona sobre
las lesiones agudas y el posterior proceso de curación a
menudo representa una importante fuente de evidencia para
corroborar denuncias específicas de tortura o malos tratos.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
B. Exploración física
400. Por lo general, el examen físico lo realiza un médico
calificado al final de la evaluación clínica y solo con el
consentimiento de la presunta víctima.
Siempre que sea posible, la presunta víctima debe poder
elegir el sexo del médico y, en su caso, del intérprete. Si el
médico no es del mismo sexo que el paciente, se debe ofrecer
un acompañante del mismo sexo que la presunta víctima (véase
el párr. 283 supra). Las presuntas víctimas deben entender que
tienen el control y tienen derecho a limitar el examen o detenerlo
en cualquier momento. Si bien es importante examinar todo el
cuerpo, debe hacerse en secciones, manteniendo la mayor
parte del cuerpo cubierto como sea posible en cualquier
momento. Exponer el cuerpo puede volver a traumatizar a la
víctima, ya que la desnudez forzada es una forma común de
tortura. Se debe realizar un examen completo, ya que puede
haber hallazgos que las víctimas desconozcan (por ejemplo, en
la espalda) o que olvidaron mencionar cuando se tomó la historia
clínica.
401. Las evaluaciones clínicas de pruebas físicas de tortura o malos
tratos pueden requerir la remisión a un especialista y una
mayor investigación. A menos que la presunta víctima esté
detenida, es importante que los médicos tengan acceso a
instalaciones de tratamiento físico y psicológico, para que se
pueda dar seguimiento a cualquier necesidad identificada. En
muchas situaciones, ciertas técnicas de prueba diagnóstica no
estarán disponibles y su ausencia no debe invalidar la
reporte. Para muchas investigaciones, si bien un resultado
positivo puede respaldar el relato de tortura, un resultado
negativo no significa necesariamente que no haya habido tortura.
402. En los casos de presuntas torturas o malos tratos recientes y
cuando la ropa usada durante la tortura o los malos tratos aún la
tenga la presunta víctima, se la llevará a examinar sin haberla
lavado y se le deberá cambiar la ropa. previsto. Se deben seguir
los procedimientos locales para asegurar la cadena de evidencia.
Siempre que sea posible, la sala de examen debe estar equipada
con suficiente luz y equipo médico para el examen. Cualquier
deficiencia debe anotarse en el informe. El examinador debe
anotar todos los hallazgos positivos y negativos pertinentes,
utilizando diagramas corporales para registrar la ubicación y la
naturaleza de todas las lesiones (véase el anexo III). Algunas
formas de tortura, como descargas eléctricas o traumatismos
cerrados, pueden ser inicialmente indetectables, pero pueden
detectarse durante un examen de seguimiento. Aunque puede ser
inusual poder registrar fotográficamente las lesiones de los
prisioneros mientras están bajo la custodia de sus torturadores, la
fotografía es un componente útil de
95
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
exámenes Si se dispone de una cámara, el médico debe obtener las
mejores fotografías posibles y complementarlas con descripciones
detalladas y diagramas corporales, y luego seguir con fotografías
profesionales tan pronto como sea posible (véase el párrafo 234
anterior).
Se necesita un consentimiento informado específico para las fotografías,
incluida una explicación de su naturaleza y propósito, y se deben
implementar protocolos para las imágenes íntimas con respecto a cómo
se almacenan y quién puede verlas. La calidad de la imagen puede variar
mucho y hay varias pautas prácticas disponibles. Las imágenes se pueden
tomar en una variedad de dispositivos, incluidos teléfonos inteligentes y
tabletas. Los médicos siempre deben asegurarse de que se incluyan
reglas y escalas de colores. La fotografía con luz polarizada cruzada
también puede demostrar algunas lesiones traumáticas contusas que ya
no son visibles en la piel.
403. Cabe señalar que si una lesión no puede ser
visto en una fotografía no significa que no estaba allí,
especialmente si el médico no es un fotógrafo forense capacitado
con equipo de buena calidad. Cuando no hay lesiones en la piel,
la gammagrafía ósea puede ser un método útil para detectar
lesiones óseas que no sean fracturas después de los golpes,
particularmente cuando la tortura ha sido prolongada.419
1. Piel
404. El examen debe incluir todo el cuerpo
superficie para detectar signos de enfermedades generalizadas de
la piel, incluidos signos de deficiencia de vitamina A, B y C, lesiones
previas a la tortura o lesiones infligidas por la tortura, como
abrasiones, hematomas, cambios de pigmentación, laceraciones,
heridas punzantes, quemaduras de cigarrillos, productos químicos,
líquidos hirviendo o instrumentos calientes, lesiones eléctricas, heridas
por incisión, alopecia y extracción de uñas. Las lesiones por tortura
deben describirse por su localización, simetría, forma, tamaño, color y
superficie (por ejemplo, escamosa, costrosa o ulcerosa), así como su
delimitación y nivel en relación
a la piel circundante. Los médicos deben notar si el crecimiento
normal del cabello está ausente o si hay áreas de entumecimiento.
Las lesiones pueden describirse como frescas/agudas o curadas. Se
recomienda la fotografía siempre que sea posible. Para la interpretación
de lesiones es útil considerar si la lesión es una lesión pigmentada o
despigmentada, una cicatriz o contiene áreas de cicatrización.
419 Onder Ozkalipci y otros, “Un método de diagnóstico significativo en la investigación de la tortura: gammagrafía ósea”, Forensic Science International, vol. 226, núm. 1–3 (2013), págs. 142–
145.
96
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
2. cara
405. Debe palparse la cara en busca de evidencia de fractura,
crepitación, hinchazón o dolor. Todos los nervios craneales
deben ser examinados. Cuando sea posible, se deben utilizar
técnicas radiológicas apropiadas para confirmar las fracturas
faciales, determinar la alineación y diagnosticar las lesiones y
complicaciones asociadas de los tejidos blandos. Las lesiones
intracraneales y de la columna cervical a menudo se asocian
con traumatismos faciales.
(a) ojos
406. El traumatismo directo en los ojos puede presentarse de
muchas formas, como hemorragia conjuntival, dislocación
del cristalino, hemorragia subhialoidea, hemorragia
retrobulbar, hemorragia retiniana, neuropatía óptica traumática,
rotura del globo ocular y pérdida del campo visual.
Las lesiones específicas del globo ocular pueden causar cicatrices
por hemorragia coroidea o una pupila irregular por lesiones en el
iris. Debe obtenerse una consulta oftalmológica siempre que exista
la sospecha de trauma o enfermedad ocular. Deben utilizarse técnicas
radiológicas para confirmar las fracturas orbitarias y
lesiones tisulares de las estructuras bulbares y retrobulbares.
La mirada solar forzada puede causar daños en los ojos, incluidas
quemaduras en la retina. El examen de la retina también debe
debe llevarse a cabo para descartar hemorragia retiniana, que puede
estar asociada con latigazo cervical/traumatismo craneal por impacto.
(osos
407. Traumatismo de los oídos, especialmente rotura del tímpano
membrana, es una consecuencia frecuente de fuertes palizas.
Los conductos auditivos y las membranas timpánicas deben
examinarse con un otoscopio y deben describirse las lesiones. Una
forma común de tortura, conocida en América Latina como teléfono, es un
fuerte golpe con la palma de la mano en uno o ambos oídos, aumentando
rápidamente la presión en el canal auditivo, rompiendo así la membrana
timpánica. Este tipo de impacto también puede causar sangrado subdural
homolateral, que puede necesitar ser explorado por tomografía
computarizada.
Es necesario un examen inmediato para detectar rupturas de la
membrana timpánica, que pueden curarse en 10 días, aunque la
curación puede demorarse. Puede observarse líquido en el oído medio
o externo. Si la hemotorrea
se confirma mediante análisis de laboratorio, se debe realizar una
resonancia magnética o una tomografía computarizada para determinar el
sitio de la fractura. La presencia de pérdida auditiva debe investigarse
utilizando métodos de detección sencillos. Si es necesario, audiometría.
Machine Translated by Google
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
las pruebas deben ser realizadas por un técnico audiométrico
calificado. El examen radiográfico de fracturas del hueso temporal
o ruptura de la cadena osicular requiere imágenes radiológicas
especializadas.
(c) Nariz
408. Debe evaluarse la alineación de la nariz,
crepitación y desviación del tabique nasal. Para fracturas
nasales simples, las radiografías nasales estándar deberían
ser suficientes. Deben utilizarse técnicas radiológicas para
confirmar fracturas e identificar lesiones de partes blandas.
(d) Mandíbula, orofaringe y cuello
409. Pueden producirse fracturas o dislocaciones mandibulares
de palizas El síndrome de la articulación temporomandibular
es una consecuencia frecuente de las palizas, incluidas las
bofetadas enérgicas en la parte inferior de la cara y la
mandíbula. La presunta víctima debe ser examinada en busca
de evidencia de crepitación del hueso hioides o del cartílago
laríngeo como resultado de golpes en el cuello. Los hallazgos
relacionados con la orofaringe deben anotarse en detalle,
incluidas las lesiones consistentes con quemaduras por
descarga eléctrica u otro trauma. El frenillo labial maxilar
puede estar desgarrado. También se debe tener en cuenta la
hemorragia gingival y el estado de las encías.
410. Cuando se ha intentado estrangular con ligaduras o con la
mano, los hallazgos potenciales incluyen:
(a) No se observa lesión;
(b) Dolor o sensibilidad: en el sitio de aplicación de la fuerza
sin lesiones visibles al tragar o al mover el cuello;
(c) enrojecimiento (eritema), que puede desaparecer después de
unas horas;
(d) Magulladuras, abrasiones o hinchazón de la piel en el punto de
compresión, por ejemplo, en los sitios del dedo/pulgar/
aplicación de ligadura: esto puede aparecer temprano o tarde
y persistir durante días;
(e) hematomas puntiformes (petequias) sobre el sitio de
compresión;
420 Asociación Internacional de Enfermeras Forenses, Kit de herramientas de documentación de estrangulamiento no fatal (Elkridge, 2016).
421 Jason Payne-James, “Asfixia: hallazgos clínicos”, en Encyclopedia of Forensic and Legal Medicine, 2.ª ed., Jason Payne-James y Roger Byard, eds. (Elsevier, 2015).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(f) Daño a la laringe – cartílago tiroides (caja de la voz) – causando
ronquera y/o hueso hioides (hueso en la base del cuello);
(g) Rasguños en el cuello: del agresor o la víctima o ambos, o por
la aplicación accidental de una ligadura en el cuello (cuando la víctima
trata de apartarse de las manos o la ligadura del agresor);
(h) Daño a la mucosa de la boca y la lengua debido a la presión
directa sobre los dientes internamente y la hinchazón de la lengua;
(i) Sangrado de la mucosa donde se ha elevado la presión
intravenosa, por ejemplo, de la nariz y los oídos;
(j) Las características adicionales no específicas que rara vez
pueden estar presentes incluyen hemorragia franca de orificios
como la nariz y el oído y evacuación espontánea de heces y orina.
Estos pueden aparecer solos o combinados.
411. Es esencial en posibles casos de compresión o estrangulamiento del
cuello que todas las áreas de los ojos, piel y mucosas (incluyendo
el interior de la boca, los párpados, el paladar y la úvula, y la piel del
cuero cabelludo) por encima del nivel de compresión se examinan con
una buena luz para identificar cualquier área localizada de petequias.
Es importante identificar las petequias en una etapa temprana, ya que
se desvanecen y desaparecen en aproximadamente 24 horas. En casos
de estrangulación manual o compresión del cuello, las petequias pueden
ser floridas y unirse para formar hematomas más grandes.
También puede haber dificultad para respirar, ptosis o parálisis
del nervio facial. Las complicaciones tardías incluyen neumonía
por aspiración, edema pulmonar y convulsiones.420
En muchos casos en los que se aplica un mecanismo de
asfixia por poco tiempo, los hallazgos pueden estar
completamente ausentes o ser menores. Tales hallazgos
también pueden estar ausentes en la compresión severa durante
períodos de tiempo más prolongados. En general, cuanto más
prolongada y poderosa sea la fuerza aplicada, más probable es
que la evidencia visual de la fuerza de compresión sea aparente.421
(e) Cavidad oral y dientes
412. El examen por un dentista debe considerarse un componente
de los exámenes de salud periódicos durante la detención. Este
examen a menudo se descuida, pero es un componente
importante del examen físico.
97
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
examen. El cuidado dental puede ser retenido a propósito
para permitir que la caries, la gingivitis o los abscesos dentales
empeoren. Se debe tomar una historia dental cuidadosa y, si existen
registros dentales, se deben solicitar.
Las avulsiones dentales, los dientes fracturados, los empastes
dislocados y las prótesis rotas pueden ser el resultado de un
traumatismo directo o tortura con descargas eléctricas. caries dental y
debe tenerse en cuenta la gingivitis. La mala calidad de la
dentición puede deberse a las condiciones de detención o puede
haber precedido a la detención. La cavidad oral debe ser examinada
cuidadosamente. Durante la aplicación de una corriente eléctrica, se
pueden morder la lengua, las encías o los labios.
Las lesiones pueden producirse al forzar objetos o materiales
en la boca, así como al aplicar corriente eléctrica. El impacto en
la cara puede provocar abrasiones o hematomas en la cara
bucal de la mejilla. El frenillo puede estar desgarrado. Se deben
utilizar técnicas radiológicas para confirmar la extensión del trauma
de tejidos blandos, mandibular y dental. Es más probable que se
desarrolle caries en dientes rotos, lo que posiblemente provoque la
pérdida del diente. Por lo tanto, la ausencia de un diente puede
deberse a un trauma directo o indirecto.
3. Pecho y abdomen
413. El examen del torso, además de observar las lesiones de la
piel, debe estar dirigido a detectar regiones de dolor,
sensibilidad o malestar que reflejen lesiones subyacentes de
los músculos torácicos y el esqueleto o los órganos
abdominales. El examinador debe considerar la posibilidad
de hematomas intramusculares, retroperitoneales e
intraabdominales, así como laceración o rotura de un órgano
interno.
Se requieren técnicas radiológicas para confirmar dichas lesiones. Los
análisis de sangre y de orina pueden ser pantallas útiles para tales
lesiones. El examen de rutina del sistema cardiovascular, los pulmones
y el abdomen debe realizarse de la manera habitual. Es probable que
los trastornos respiratorios preexistentes se agraven durante la detención
y con frecuencia se desarrollen nuevos trastornos respiratorios.
4. Sistema musculoesquelético
414. Las quejas de molestias y dolores musculoesqueléticos son muy
comunes entre los sobrevivientes de tortura.422 Pueden ser el
resultado de palizas repetidas, suspensión, otras torturas
posicionales o el entorno físico general de la detención.423 También
pueden ser psicosomáticos o somáticos (ver párr. 507 infra) en la
naturaleza, pero debe
422 Emma Baird y otros, “Intervenciones para el tratamiento del dolor persistente en sobrevivientes de la tortura”, Base de datos Cochrane de Revisiones Sistemáticas (2017).
423 Duncan Forrest, “Examen de los últimos efectos físicos posteriores a la tortura”, Journal of Clinical Forensic Medicine, vol. 6, núm. 1 (1999), págs. 4 a 13.
424 Michael S. Pollanen, “La patología de la tortura”, Forensic Science International, vol. 284 (2018), págs. 85–96.
98
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
todavía estar documentado. El dolor puede ser específico del mecanismo
de tortura o no específico y generalizado. El examen físico debe incluir
pruebas de movilidad de las articulaciones, la columna vertebral y las
extremidades. Los médicos deben tener en cuenta: dolor a la palpación
o con el movimiento, fuerza muscular, contractura, evidencia de síndrome
compartimental, fracturas con o sin deformidad y dislocaciones. En el
caso de palizas severas, la degradación del tejido muscular puede
provocar la liberación de grandes cantidades de mioglobina en la
circulación sanguínea, lo que podría provocar una insuficiencia renal
aguda. El nivel de mioglobina en orina puede analizarse cuando y si está
disponible en supervivientes gravemente golpeados durante la fase
aguda.424 Las sospechas de luxaciones, fracturas y osteomielitis deben
evaluarse radiológicamente. Las lesiones de tendones, ligamentos y
músculos se evalúan mejor con resonancia magnética, aunque también
se puede realizar una artrografía. En la etapa aguda, esto puede detectar
hemorragia y posibles desgarros musculares.
Los músculos generalmente sanan completamente sin dejar
cicatrices; por lo tanto, los estudios de imagen posteriores serán
negativos. Las imágenes de MRI y CT de músculos denervados y
síndrome compartimental crónico pueden demostrar fibrosis
muscular. Los hematomas óseos se pueden detectar mediante
resonancia magnética o gammagrafía. Los moretones en los huesos
suelen curarse sin dejar rastros. La deficiencia de vitamina D debido a la
falta de luz solar y la mala alimentación también puede ser una causa de
dolor musculoesquelético y responde a la terapia de reemplazo.
5. Sistema genitourinario
415. Si es necesario un examen genital, debe realizarse
únicamente con el consentimiento expreso de la
presunta víctima y puede ser necesario posponerlo
para un examen posterior. Se debe ofrecer un
acompañante si el sexo del médico examinador es
diferente al del paciente. Para más información, véase
el párrafo 283 anterior. Véanse los párrafos 455 a 479 a
continuación sobre la tortura sexual, incluida la violación,
y más información sobre el examen de las víctimas de
agresión sexual. La ecografía, las pruebas de función
renal, el análisis de orina y la gammagrafía dinámica se
pueden utilizar para detectar traumatismos genitourinarios.
6. Sistemas nerviosos central y periférico
416. El examen neurológico debe evaluar
los nervios craneales, los órganos sensoriales y el sistema
nervioso periférico, comprobando las neuropatías tanto motoras como
sensoriales relacionadas con un posible traumatismo, vitamina
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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
carencias o enfermedades. También deben evaluarse la capacidad
cognitiva y el estado mental (véanse los párrafos 523 a 598 infra sobre
la evaluación psicológica/psiquiátrica).
En los pacientes que informan estar suspendidos, se debe poner
especial énfasis en el examen de plexopatía braquial (fuerza asimétrica de
la mano, caída de la muñeca y debilidad del brazo con reflejos sensitivos
y tendinosos variables). Las radiculopatías, otras neuropatías, los déficits
de los nervios craneales, la hiperalgesia, la parestesia, la hiperestesia, los
cambios en el sentido de la posición, la sensación de temperatura, la
función motora, la marcha y la coordinación pueden ser el resultado de
traumatismos asociados con la tortura o los malos tratos. En pacientes
con antecedentes de mareos y vómitos, se debe realizar un examen
vestibular y evidencia de
se nota nistagmo. La evaluación radiológica debe incluir resonancia
magnética o tomografía computarizada. Se prefiere la RM a la TC
para la evaluación radiológica del cerebro y las fosas posteriores. Las
convulsiones pueden ocurrir como resultado de una lesión en la cabeza
y requieren un historial e investigación cuidadosos para distinguirlos de
los ataques de pánico y los episodios vasovagales.
C. Interpretación de los hallazgos
417. Los Principios de Estambul exigen que los médicos
proporcionen una “interpretación de la probable relación
de los hallazgos físicos y psicológicos con la posible
tortura o malos tratos” (véase el párr. 379 supra y el
anexo I). En este sentido, los “hallazgos físicos y
psicológicos” pueden incluir síntomas, signos, información
histórica, resultados de pruebas de diagnóstico, fotografías
y evaluaciones médicas previas.
El médico debe correlacionar lo siguiente:
a) ¿En qué medida los antecedentes de discapacidades y
síntomas físicos agudos y crónicos son compatibles con las
denuncias de tortura y/o malos tratos?
b) ¿En qué medida los resultados del examen físico
son compatibles con las denuncias de tortura y/o malos
tratos? (Nota: la ausencia de hallazgos físicos no excluye la
posibilidad de que se hayan infligido torturas o malos tratos).
c) ¿En qué medida los resultados del examen coinciden
con los métodos de tortura conocidos y sus
efectos secundarios comunes utilizados en una región en particular?
418. Al realizar evaluaciones de evidencia física de supuesta
tortura o malos tratos, los médicos deben considerar
los siguientes términos para los niveles de consistencia:
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(a) “No consistente con”: el hallazgo no pudo haber sido
causado por la supuesta tortura o malos tratos;
(b) “Consistente con”: el hallazgo podría haber sido
causado por la supuesta tortura o malos tratos, pero no es
específico y hay muchas otras causas posibles;
(c) “Muy consistente con”: el hallazgo podría haber sido
causado por la supuesta tortura o malos tratos y hay pocas
otras causas posibles;
d) “Típico de”: el hallazgo suele observarse con este tipo
de supuestas torturas o malos tratos, pero existen otras
posibles causas;
(e) “Diagnóstico de”: el hallazgo no pudo haber sido
causado de otra forma distinta a la descrita.
419. La consideración de la correlación de los síntomas puede
ser de particular importancia cuando se hayan utilizado métodos de tortura
o malos tratos que no dejen evidencia física duradera. Esto puede
aplicarse, por ejemplo, a experiencias de asfixia, lesiones en la cabeza,
descargas eléctricas, posiciones de suspensión y estrés, tortura sexual y
tortura ambiental. en la correlación
de los resultados del examen con conocimiento de los efectos de la
tortura utilizados en una región en particular, se debe tener en cuenta
el patrón cambiante de tortura y malos tratos a lo largo del tiempo y de
un lugar a otro.
420. Al correlacionar la consistencia entre los hallazgos del
examen físico y la supuesta tortura o malos tratos, el
médico debe indicar el nivel de consistencia para cada
hallazgo individual del examen.
Si el médico considera que existen razones clínicas para
una conclusión inconsistente, esto debe discutirse (véanse los párrafos
342 a 353 y 386 supra). A veces un grupo de lesiones similares o lesiones
con la misma atribución
pueden ser considerados juntos y un nivel de consistencia aplicado al
grupo como un todo. El médico debe considerar las posibles causas de
los hallazgos físicos según lo sugerido por la evidencia, por ejemplo,
tortura u otro daño deliberado, lesión accidental, enfermedad de la piel,
procedimientos médicos, atención médica cultural, escarificación ritual,
autolesión e imposición deliberada para fabricar evidencia. de herida Es
común que se atribuyan algunos hallazgos físicos en el cuerpo a causas
distintas a la tortura, como lesiones accidentales, o que haya hallazgos
físicos para los cuales la persona no puede recordar la causa. Una persona
puede confundir inocentemente un hallazgo físico con tortura (p. ej., estrías
de distensión en la parte baja de la espalda) porque no lo notó antes de la
supuesta tortura o malos tratos.
99
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

pero sólo después, cuando hay dolor en el sitio o lo indica el médico los accidentes disminuyen correspondientemente. El número

examinador. esperado de lesiones accidentales y su ubicación también está

influenciado por la historia ocupacional de la persona.

421. Puede ser que la causa de un hallazgo en particular no pueda ser descrita,

porque las personas no pudieron ver con claridad debido a múltiples 423. Autolesión. La autolesión por corte se puede encontrar en una amplia

perpetradores a su alrededor o porque tenían los ojos vendados o variedad de localizaciones anatómicas, incluida en particular la

encapuchados, o porque estaban total o parcialmente inconscientes en ese cara volar (lado de la palma) de la muñeca o el antebrazo de la

momento, o tenían otros síntomas clínicos. Razones para el deterioro de la extremidad superior no dominante. A menudo no es el sitio sino la

memoria del evento. En estos casos, el médico puede indicar un nivel de naturaleza y la multiplicidad lo que es relevante. Por lo general, la

coherencia entre los hallazgos físicos y la causa probable de los hallazgos. Más espalda está intacta, pero los antebrazos, la parte superior de los

comúnmente, con hallazgos menos característicos que no tienen atribución, es brazos, el cuello, el pecho, el abdomen y los muslos pueden ser otros sitios

posible que no se haga una evaluación específica de consistencia, pero es típicos de autolesión. Otras partes del cuerpo también pueden lesionarse

posible hacer un comentario general sobre el tamaño, el número y la ubicación de otras maneras, por ejemplo, la frente si la persona se golpea la cabeza

del hallazgo en términos de las características de las lesiones por tortura. u contra la pared o un puño si golpea una pared. La forma más común de

otras causas. Puede haber hallazgos que no se atribuyan específicamente a la autolesión es el corte y los cortes suelen ser superficiales, múltiples y muy

tortura, sino a caídas al tratar de evadir a los perpetradores, por ejemplo. Si la agrupados.

persona estaba bajo el control del agresor en ese momento, estas aún caen

dentro de la definición de lesiones por tortura y se debe evaluar su consistencia Se pueden encontrar lesiones por quemaduras autoinfligidas con

con la atribución dada. cigarrillos u otras fuentes de calor. Las víctimas de tortura pueden

revelar fácilmente estas lesiones y pueden explicar que se las

autoinfligieron en respuesta a su tortura, como una expresión del

dolor de su tortura o una forma de sobrellevar ese dolor. A otras

víctimas les puede resultar muy difícil revelar las autolesiones, ya que

Si hay hallazgos atribuidos a otras experiencias de agresión, no se asocian con la vergüenza y el estigma. Las lesiones autoinfligidas

relacionadas con la acusación específica de tortura bajo examen, más graves pueden estar asociadas con enfermedades mentales más
como violencia doméstica, abuso infantil, mutilación genital femenina, graves, como la psicosis. La lesión deliberada por ganancia secundaria

castigo físico, agresión criminal o violencia relacionada con la guerra y el es rara y tales lesiones tienden a ser superficiales, de un solo mecanismo

conflicto, estos pueden evaluarse. por coherencia con la atribución dada, de causalidad, en partes del cuerpo accesibles y poco congruentes con la

en su caso para el procedimiento legal para el que se requiere el informe historia, los hallazgos del examen y la línea de tiempo. Signos de lesiones

médico. en lugares inusuales y una dispersión difusa de lesiones sugieren tortura,

al igual que el hallazgo de múltiples modalidades de fuerza contundente,

fuerza cortante y lesiones por quemaduras. La evaluación global de todas

422. Lesiones accidentales. Las lesiones accidentales son más las pruebas físicas, junto con las pruebas psicológicas, en el contexto del

se encuentran comúnmente en las extremidades en comparación con relato dado, es clave para la consideración de la fabricación (véase el

las partes centrales del cuerpo,425 es decir, aquellas partes del cuerpo párr. 348 supra).

expuestas con mayor frecuencia en lugar de protegidas por la ropa y en

primer contacto con una superficie dura durante una caída. Por lo tanto,

las rodillas, las espinillas, la cresta ilíaca, los codos, las palmas de las

manos, la protuberancia espinal ósea, la frente y la coronilla son los sitios

más comunes de lesiones accidentales.

lesión. Las partes centrales del cuerpo (orejas, mejillas, ojos, boca, D. Conclusiones y recomendaciones
parte superior del brazo, parte interna del antebrazo, pecho, genitales,

parte delantera del muslo, parte interna del muslo, parte posterior del 424. Los médicos deben formular una opinión clínica sobre la posibilidad
muslo, glúteos, abdomen, dorso de las manos, hombros y cuello) son más de tortura o malos tratos basada en todas las pruebas clínicas

comúnmente asociado con lesiones no accidentales. En la cara, por pertinentes, incluidos los hallazgos físicos y psicológicos,426

ejemplo, no es raro que una persona tenga una o dos pequeñas cicatrices información histórica, hallazgos fotográficos, resultados de pruebas
de de diagnóstico, conocimiento de las prácticas regionales de tortura,

lesiones accidentales, pero a medida que aumenta el número de tales informes de consulta etc., como se indica en los párrafos 382 y 383

lesiones, también aumenta la posibilidad de que todas se deban a

425 Terry Allen, Shannon A. Novak y Lawrence L. Bench, “Patrones de lesiones: accidente o abuso”, Violencia contra la mujer, vol. 13, núm. 8 (2007), págs. 802–816.
426 Las evaluaciones clínicas que se llevan a cabo específicamente para evaluar la “evidencia física” pueden o no incluir algunos “hallazgos psicológicos”, por ejemplo, observaciones de
angustia psicológica durante la entrevista y/o un informe de síntomas psicológicos.

100
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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
supra y anexo IV. La opinión del médico sobre la posibilidad
de tortura o malos tratos debe expresarse usando los mismos
niveles de consistencia que los utilizados para interpretar los
hallazgos: no congruente con, congruente con, muy congruente
con, típico de y diagnóstico de. En última instancia, es la evaluación
general de todos los hallazgos clínicos, y no la consistencia de
cada lesión o síntoma con una forma particular de tortura o malos
tratos, lo que es importante para evaluar las denuncias de tortura
o malos tratos.
425. Además de brindar una conclusión sobre la
posibilidad de tortura o malos tratos, los médicos deben
reiterar los síntomas y discapacidades actuales y los efectos
probables en el funcionamiento social y brindar
recomendaciones para evaluaciones adicionales y atención
para el individuo.
E. Examen y evaluación
siguientes formas específicas de tortura
1. Palizas y otras formas de traumatismo cerrado
(a) Daños en la piel
426. Las lesiones agudas suelen ser características de la tortura y
malos tratos, porque muestran un patrón de lesiones infligidas que
difiere de las lesiones no infligidas, por ejemplo, en su forma,
tamaño, distribución en el cuerpo y número. Dado que la mayoría
de las lesiones se curan en unos pocos
semanas de tortura o malos tratos sin dejar cicatrices, o cicatrices
inespecíficas, una historia característica de las lesiones agudas y
su evolución hasta la curación puede ser el único apoyo para una
denuncia de tortura o malos tratos. Los cambios permanentes en
la piel debidos a un traumatismo cerrado son inespecíficos y, por
lo general, sin importancia diagnóstica. La aplicación prolongada
de ligaduras apretadas puede dar lugar a hallazgos característicos,
incluida una zona lineal que se extiende circularmente alrededor
del brazo o la pierna, por lo general en la muñeca o el tobillo, que
contiene pocos pelos o folículos pilosos, una forma de alopecia
cicatricial. Estos hallazgos pueden ser diagnósticos de la supuesta
tortura o malos tratos, ya que no hay otras enfermedades o lesiones
de la piel que puedan explicar tales hallazgos. Sin embargo, estos
hallazgos son relativamente raros; es más común ver cicatrices
cortas, lineales y angostas sobre los lados huesudos de las muñecas
debido a las abrasiones de las esposas, especialmente en
situaciones en las que la persona
427 Muhammed Nabi Kantarci y otros, “Evaluación de lesiones relacionadas con esposas de plástico y metal bajo custodia en exámenes médicos”, Turkiye Klinikleri Journal of
Ciencias de la Medicina, vol. 33, núm. 2 (2013), págs. 360–365 (en turco con resumen en inglés).
428 Miriam Y. Neufeld y otros, “Evaluación forense de presuntas lesiones por restricción de muñeca/esposas en sobrevivientes de tortura utilizando el Protocolo de Estambul”, International Journal of
Medicina Legal, vol. 135, núm. 2 (2021), págs. 583–590.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
ha sido golpeado mientras estaba esposado.
Estos hallazgos se pueden distinguir de las lesiones por
autolesiones por su ubicación en las partes óseas y, a menudo,
por una simetría relativa, mientras que las autolesiones son
más comunes en el antebrazo no dominante.
Las lesiones por ligadura dependerán de la tensión de la
ligadura, la naturaleza de la ligadura utilizada,427 y la fuerza
aplicada, como la torsión de las esposas o la suspensión y los
golpes mientras está esposado.428
427. Las abrasiones agudas resultantes de lesiones superficiales por raspado de
la piel pueden aparecer como rasguños, lesiones tipo quemadura por
cepillo o lesiones raspadas más grandes. A veces, las abrasiones agudas
pueden mostrar un patrón que refleja los contornos del instrumento o la
superficie que infligió
la lesión. Las abrasiones repetidas o profundas pueden crear
áreas de hipo o hiperpigmentación, según el tipo de piel. Esto
ocurre en el interior de las muñecas si las manos se han atado
con fuerza.
428. Los hematomas son áreas de hemorragia en los tejidos blandos
a la ruptura de vasos sanguíneos por traumatismo cerrado. La
extensión y la gravedad de un hematoma dependen no solo de la
cantidad de fuerza aplicada, sino también de la estructura y la
vascularización del tejido magullado. Los moretones ocurren más
fácilmente en áreas de piel delgada que recubren el hueso o en
áreas grasas. Muchas condiciones médicas, incluidas las deficiencias
de vitaminas y otras deficiencias nutricionales, la edad y la
medicación pueden estar asociadas con la aparición de hematomas
o púrpura con facilidad. Los moretones y las abrasiones indican que
se aplicó una fuerza contundente en un área en particular. Sin
embargo, la ausencia de un hematoma o abrasión no indica que no
hubo fuerza contundente en esa área. Los moretones pueden tener
un patrón que refleje la forma del instrumento que los infligió. Por
ejemplo, los hematomas de “línea de tranvía” pueden ocurrir cuando
se ha utilizado un instrumento, como una porra o un bastón. La
forma del objeto puede deducirse de la forma del hematoma. El color
de un moretón no ayuda en
evaluar la edad de la lesión. La percepción del color del hematoma
varía según el tono de la piel y no se puede determinar con precisión
a partir de las imágenes. En algunos tipos de piel, los hematomas
pueden provocar hiperpigmentación, que puede durar varios años.
Los hematomas que se desarrollan en los tejidos subcutáneos más
profundos pueden no aparecer hasta varios días después de la
lesión, cuando la sangre extravasada ha llegado a la superficie.
En los casos de alegación pero ausencia de hematomas, la
víctima debe ser examinada de nuevo después de varios días.
Debe tenerse en cuenta que la última
la posición y la forma de los hematomas pueden no tener relación
101
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
al trauma original y que algunas lesiones pueden haber
desaparecido en el momento de la nueva exploración.429
429. Las laceraciones, un desgarro o aplastamiento de la piel y los tejidos
blandos subyacentes por la presión de una fuerza contundente, se
desarrollan fácilmente en puntos de referencia óseos prominentes del
cuerpo, ya que la piel se comprime entre el objeto contundente y la
superficie del hueso debajo de los tejidos subdérmicos. Sin embargo, con
suficiente fuerza, la piel puede rasgarse en cualquier parte del cuerpo. Si
una laceración en lugar de un hematoma se sostiene a partir de
El trauma por fuerza contundente depende no solo de la parte
del cuerpo afectada, sino también de otros factores, incluida la
fuerza aplicada, el contorno del implemento y la presencia o
ausencia de ropa protectora.
430. Las cicatrices resultantes de los latigazos pueden verse si están llenas
Se han causado heridas de espesor. Estas cicatrices pueden ser
hipo o hiperpigmentadas y pueden ser hipertróficas, a menudo
dependiendo del tono de la piel y la ubicación. Los azotes no
pueden causar cicatrices, solo pueden causar ronchas y
magulladuras dependiendo de la naturaleza del implemento, la
fuerza utilizada, el número de latigazos y la protección proporcionada
por la ropa. La autoflagelación como parte del ritual religioso puede
producir cicatrices similares a las de los latigazos punitivos. Los
cambios lineales simétricos, atróficos y despigmentados del
abdomen, la parte inferior de la espalda, las axilas y las piernas, que
a veces se afirma que son secuelas de la tortura, pueden ser estrías
de distensión y representan crecimiento previo, embarazo o aumento
de peso, y deben distinguirse de los relacionados con tortura.430
Un individuo que describe haber sido golpeado o azotado en la
espalda puede no haber sido consciente de las estrías allí hasta
que se identifican en el examen y asume inocentemente que son
el resultado de la tortura. Se pueden encontrar estrías de distensión
alrededor de la axila después de la suspensión informada y
atribuidas por la persona a la tortura. El uso de cremas para aclarar
la piel puede exacerbar la apariencia y el tamaño de las estrías.
431. Las quemaduras pueden dejar cambios permanentes en la piel, en
en forma de lesiones pigmentadas o cicatrices, según la
profundidad de la quemadura y el tipo de piel. Las lesiones
pigmentadas que siguen a una quemadura de espesor parcial
pueden persistir durante meses o años antes de una resolución
gradual. La temperatura del objeto o sustancia calentado y, en
segundo lugar, el tiempo de contacto son los principales
determinantes de la aparición y profundidad de una quemadura.
Las quemaduras por líquido caliente variarán en profundidad y forma dependiendo de la
429 Jason Payne-James, Jack Crane y Judith A. Hinchliffe, “Evaluación, documentación e interpretación de lesiones”, en Clinical Forensic Medicine: A Physician's Guide, 2.ª ed.,
Margaret M. Stark, ed. (Totowa, Nueva Jersey, Humana Press), págs. 127–158.
430 Karlijn Clarysse y otros, “Lesiones de la piel, diagnóstico diferencial y enfoque práctico para posibles sobrevivientes de la tortura”, Revista de la Academia Europea de Dermatología
y Venereología, vol. 33, núm. 7 (2019), págs. 1232–1240.
102
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
viscosidad del líquido: por ejemplo, una quemadura altamente
viscosa por plástico fundido será profunda y relativamente
circunscrita, en comparación con una quemadura por agua
caliente, que puede mostrar un impacto inicial, esparcirse según
la gravedad y, a veces, quemaduras satélite por salpicaduras.
Las quemaduras de cigarrillo a menudo dejan cicatrices maculares
circulares u ovoides de 5 a 10 mm de diámetro con un centro
hipopigmentado o hiperpigmentado y una periferia hiperpigmentada,
relativamente borrosa. El diámetro de tales cicatrices puede variar
según el tipo de cigarrillo. Las quemaduras por cepillo de cigarrillos
pueden dejar lesiones menos distintivas. También se ha denunciado
la quema de tatuajes con cigarrillos en relación con la tortura. La
forma característica de la cicatriz resultante y los restos del tatuaje
ayudarán en el diagnóstico. La quemadura con objetos calientes
puede producir lesiones que reflejan la forma del instrumento y que
inicialmente están bien delimitadas con zonas marginales estrechas
hipertróficas o hiperpigmentadas que corresponden a una zona
inicial de inflamación. Los bordes de las quemaduras, que
inicialmente están muy bien delimitados, con el tiempo se vuelven
borrosos debido a la migración de los melanocitos, especialmente
en aquellos con piel más pigmentada. Esto puede verse, por ejemplo,
después de quemar con una barra de metal caliente o un encendedor
de gas. Los procesos inflamatorios que ocurren espontáneamente
carecen de la zona marginal característica y rara vez muestran una
pérdida pronunciada de tejido.
Tras una quemadura producida por la quema de caucho o
plástico fundido, pueden formarse cicatrices hipertróficas o queloides.
432. Cuando se quema la matriz de la uña, el crecimiento posterior
produce uñas rayadas, delgadas y deformadas, a veces rotas
en segmentos longitudinales. Si se ha arrancado un clavo, se
puede producir un crecimiento excesivo de tejido en el pliegue
ungueal proximal, lo que da como resultado la formación de
pterigión. Sin embargo, es posible que una uña normal vuelva a
crecer. Los cambios en la uña causados por el liquen plano
constituyen el único diagnóstico diferencial relevante, pero
generalmente se acompañarán de lesiones cutáneas generalizadas.
Por otro lado, las infecciones por hongos se caracterizan por uñas
engrosadas, amarillentas y desmoronadas, a diferencia de los
cambios anteriores.
La infección por hongos puede coexistir en la uña dañada.
433. Las heridas traumáticas cortantes se producen cuando se corta la piel con un
objeto cortante, como un cuchillo, una bayoneta o un vidrio roto, e incluyen
heridas punzantes, cortadas o cortantes y heridas punzantes. La apariencia
aguda suele ser fácil de distinguir de la apariencia irregular y desgarrada de
laceraciones y cicatrices que se encuentran en
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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
examen posterior que puede ser distintivo. Los patrones regulares de
pequeñas cicatrices incisionales podrían deberse a los curanderos
tradicionales.431 Si se aplica pimienta u otras sustancias nocivas a las
heridas abiertas, las cicatrices pueden volverse hipertróficas. Las
cicatrices rituales de juju pueden tener pigmento, como hollín, frotado
sobre ellas.
434. Se puede pedir a los médicos que calculen la edad de las cicatrices.
Es poco probable que se pueda decir mucho a menos que una herida
parezca muy reciente con enrojecimiento y formación de costras. Durante el
proceso de cicatrización de heridas, a la formación de costras inicial le sigue
la formación de tejido cicatricial, que al principio aparece rojo y gradualmente
se vuelve más pálido y plano. El enrojecimiento de la cicatriz es variable y
está influenciado por factores distintos al paso del tiempo, incluido el tono de
la piel. El tiempo que tarda una cicatriz en evolucionar de la forma aguda a
la forma madura plana pálida es variable, dependiendo de múltiples
factores, incluido el trauma en los bordes de la herida, la profundidad de
la herida, la infección, el método de cierre de la herida, una herida "sucia"
o limpia, el acceso a la higiene de la herida, la posición en el cuerpo, la
tensión en y movimiento de la herida, nutrición, enfermedad crónica, presión
y fricción de la ropa. Algunas heridas (p. ej., quemaduras de cigarrillos)
pueden causar un picor intenso durante la cicatrización, lo que genera el
hábito de rascarlas o frotarlas, lo que puede dejarlas rojas o rosadas mucho
después de que otras heridas hayan quedado inactivas. Por estas razones,
las cicatrices causadas al mismo tiempo y por el mismo tipo de lesión pueden
sanar a ritmos diferentes. Si bien por lo general no es posible dar una opinión
exacta sobre la fecha de una lesión, es posible afirmar que la apariencia
está de acuerdo con la línea de tiempo establecida.
(b) Fracturas
435. Las fracturas producen una pérdida de integridad ósea debido al efecto
de una fuerza mecánica contundente sobre varios
planos vectoriales. Se produce una fractura directa en el sitio del impacto
o en el sitio en el que se aplicó la fuerza.
La ubicación, el contorno y otras características de una fractura reflejan
la naturaleza y dirección de la
fuerza aplicada. A veces es posible distinguir una fractura provocada por
una lesión accidental por el aspecto radiológico de la fractura. La datación
radiológica de fracturas relativamente recientes debe ser realizada por un
radiólogo de trauma experimentado.
c) Traumatismo craneoencefálico
436. El traumatismo craneoencefálico es una de las formas más comunes de
tortura. En casos de traumatismo craneoencefálico recurrente, incluso si
431 Ibíd.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
no siempre de dimensiones graves, cabe esperar atrofia cortical y daño
axonal difuso. En casos de trauma causado por caídas, se pueden observar
lesiones cerebrales de contragolpe (ubicación opuesta al trauma), mientras
que en casos de traumatismo directo, se pueden observar contusiones
cerebrales directamente debajo de la región en la que se infligió el trauma.
Los moretones en el cuero cabelludo son frecuentemente invisibles externamente
a menos que haya hinchazón. Los moretones pueden ser difíciles de ver en
personas de piel oscura, pero serán sensibles a la palpación.
Es poco probable que las estimaciones de un período de pérdida de la conciencia
después de una lesión en la cabeza sean precisas, ya que una persona puede
sufrir un período de amnesia peritraumática.
437. Habiendo estado expuesto a golpes en la cabeza, un sobreviviente de tortura
puede quejarse de dolor agudo, mareos, náuseas, vómitos y trastornos
visuales. Crónicamente, puede haber dolores de cabeza persistentes, mareos
y déficits de memoria u otros cognitivos. Puede haber trastornos convulsivos.
El dolor puede ser somático o puede ser referido desde el cuello. La víctima
puede referir dolor al tacto en esa región, y se puede observar plenitud difusa
o local o aumento de la firmeza por medio de la palpación del cuero cabelludo.
Se pueden observar cicatrices en los casos en los que ha habido laceraciones
del cuero cabelludo Inmediatamente después de un traumatismo
craneoencefálico, los dolores de cabeza pueden ser el síntoma inicial de
un hematoma subdural en expansión. Pueden estar asociados con la
aparición aguda de cambios en el estado mental y se debe realizar una
tomografía computarizada de manera urgente. La hinchazón o hemorragia
de los tejidos blandos suele detectarse mediante TC o RM. También puede
ser apropiado organizar evaluaciones psicológicas o neuropsicológicas
(véanse los párrs. 549 a 565). Los efectos tardíos de la lesión cerebral
pueden detectarse con técnicas radiológicas especializadas.
Una lesión cerebral traumática menor, incluso sin pérdida del conocimiento,
puede afectar la memoria y la concentración a corto y largo plazo. La lesión
cerebral por tortura de asfixia también puede conducir a un déficit cognitivo.
438. Las sacudidas violentas como forma de tortura pueden producir lesiones
cerebrales sin dejar marcas externas, aunque pueden presentarse
hematomas en la parte superior del pecho o en los hombros donde se
ha agarrado a las víctimas o su ropa. En su forma más extrema, la
sacudida puede producir lesiones idénticas a las que se observan en el
síndrome del bebé sacudido: edema cerebral, hematoma subdural y
hemorragias retinianas.
Más comúnmente, las víctimas se quejan de dolores de cabeza
recurrentes, desorientación o cambios en el estado mental.
Los episodios de temblores suelen ser breves, solo unos pocos
103
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

minutos o menos, pero puede repetirse muchas veces durante un (a) Síndrome compartimental. Esta es la complicación más grave. El

período de días o semanas. Se recomiendan exámenes edema en un compartimento cerrado produce obstrucción vascular y
radiológicos y de retina. necrosis muscular, lo que puede provocar fibrosis, contractura o gangrena

en la parte distal del pie o de los dedos. Suele diagnosticarse midiendo la

d) Trauma torácico y abdominal presión en el compartimento;

439. Las fracturas de costillas son una consecuencia frecuente de

los golpes en el pecho. Si se desplazan, pueden asociarse (b) Talón aplastado y almohadillas anteriores de las patas. Las

con laceraciones del pulmón y posible neumotórax. almohadillas elásticas debajo del calcáneo y las falanges proximales se

Las fracturas de los pedículos vertebrales pueden resultar del uso aplastan durante la falanga, ya sea directamente o como resultado del
directo de fuerza contundente. Cuando la fractura de costilla es edema asociado con el traumatismo. Además, se rompen las bandas de

se sospecha, se deben obtener radiografías simples. tejido conectivo que se extienden a través del tejido adiposo y conectan

el hueso con la piel. El tejido adiposo se ve privado de su suministro de

440. En los casos de trauma abdominal agudo, el físico sangre y se atrofia.

el examen debe buscar evidencia de lesión de órganos abdominales y El efecto de amortiguación se pierde y los pies ya no absorben las

del tracto urinario. Sin embargo, el examen es a menudo negativo. La tensiones producidas por caminar;

hematuria macroscópica es la indicación más importante de contusión

renal. El lavado peritoneal puede detectar una hemorragia abdominal (c) Cicatrices rígidas e irregulares que afectan la piel y los tejidos

oculta. El líquido abdominal libre detectado por investigación radiológica subcutáneos del pie. En un pie normal, los tejidos dérmicos y

después del lavado peritoneal puede ser del lavado o hemorragia, lo que subdérmicos están conectados a

invalida el hallazgo. La lesión de órganos puede presentarse como aire la aponeurosis plantar a través de estrechas bandas de tejido

libre, líquido extraluminal o áreas de baja atenuación, que pueden conectivo. Sin embargo, estas bandas pueden destruirse parcial o

representar edema, contusión, hemorragia o laceración. completamente debido al edema, que rompe las bandas después de

la exposición a la falanga;

El edema peripancreático es uno de los signos de pancreatitis (d) Rotura de la aponeurosis plantar y tendones del pie. El edema en

aguda traumática y no traumática. La ecografía es particularmente útil el período posterior a la falanga puede romper estas estructuras.

para detectar hematomas subcapsulares del bazo. La insuficiencia renal Cuando la aponeurosis no puede tensarse normalmente, la función de

debida al síndrome de aplastamiento puede ser aguda después de apoyo necesaria para el arco del pie desaparece, el acto de caminar se

fuertes palizas. La hipertensión renal puede ser una complicación tardía vuelve más difícil y los músculos del pie, especialmente el cuadrado

de la lesión renal. plantar largo, se fuerzan excesivamente y se fatigan. La extensión pasiva

del dedo gordo del pie puede revelar si se ha desgarrado la aponeurosis;

2. Golpe de pies

441. Falanga, o falaka, son los términos comunes para la aplicación repetida de

traumatismos cerrados en los pies (o más raramente en las manos o las (e) Fascitis plantar. Esto puede ocurrir como una complicación

caderas), generalmente aplicados con una porra, un trozo de tubo o un adicional de los golpes con los pies. En los casos de falanga, la

arma similar. irritación suele estar presente en toda la aponeurosis, provocando

Las víctimas pueden describir el dolor que les llega directamente a la una aponeurosis crónica. Los estudios sobre el tema han demostrado

cabeza. Debido a que las lesiones generalmente se limitan a los tejidos que, en presos liberados después de 15 años de detención que

blandos, la TC o la RM son los métodos preferidos para la documentación afirmaron haber sido sometidos a falanga cuando fueron detenidos por

radiológica de la lesión, pero se debe enfatizar que el examen físico en primera vez, se observaron gammagrafías óseas positivas de puntos

la fase aguda debe ser diagnóstico. Falanga puede producir discapacidad hiperactivos en el calcáneo o metatarsianos;433

crónica. Caminar puede ser doloroso y difícil. Apretar la planta (planta)

del pie y la dorsiflexión del dedo gordo del pie puede producir dolor.

(f) Deformidades permanentes de los pies. Tales deformidades son poco

comunes pero ocurren, al igual que las fracturas de los huesos del tarso,

metatarsianos y falanges. Los huesos del tarso pueden estar fijos o tener

442. Pueden presentarse numerosas complicaciones y síndromes:432 mayor movimiento;

432 Kristine Amris, Søren Torp-Pedersen y Ole Vedel Rasmussen, “Consecuencias a largo plazo de la tortura falanga: qué sabemos y qué necesitamos saber”, Tortura,
vol. 19, núm. 1 (2009), págs. 33 a 40.
433 Veli Lök y otros, “Escintigrafía ósea como indicio de tortura previa”, Lancet, vol. 337, núm. 8745 (1991), págs. 846–847. Véase también Mehmet Tunca y Veli Lök, “Bone
gammagrafía en la detección de sobrevivientes de tortura”, Lancet, vol. 352, núm. 9143 (1998), pág. 1859.

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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(g) Neuropatía periférica dolorosa. Esto puede ser una complicación
tardía de la falanga. Deben descartarse otras causas, como la diabetes.
443. Las radiografías de rutina se recomiendan como
el examen inicial. La resonancia magnética es el examen
radiológico preferido para detectar lesiones de tejidos blandos. La
resonancia magnética o la gammagrafía pueden detectar lesiones
óseas en forma de hematomas, que pueden no detectarse mediante
radiografías o tomografías computarizadas de rutina.434
3. Suspensión
444. La suspensión es una forma común de tortura que puede
producir un dolor extremo, pero que deja poca o ninguna
evidencia visible de lesión. Se puede encontrar edema de las
extremidades dependientes o constreñidas con el riesgo de
trombosis venosa profunda con la inmovilización prolongada en
una sola posición, incluida la bipedestación forzada. El hallazgo
de déficits neurológicos periféricos, diagnóstico de plexopatía
braquial, prueba virtualmente el diagnóstico de tortura por
suspensión.
La suspensión se puede aplicar de varias formas:
(a) Suspensión cruzada, que se aplica extendiendo los brazos y
atándolos a una barra horizontal;
(b) Suspensión de carnicería, que se aplica mediante la fijación de las
manos hacia arriba, ya sea juntas o una por una;
(c) Suspensión de carnicería inversa, que se aplica mediante la
fijación de los pies hacia arriba y la cabeza hacia abajo;
(d) Suspensión inversa, que se aplica suspendiendo a la víctima con
los antebrazos atados detrás de la espalda, los codos flexionados a 90
grados y los antebrazos atados a una barra horizontal. Alternativamente,
el preso está suspendido de una ligadura atada alrededor de los codos
o las muñecas con los brazos detrás de la espalda. Un efecto similar
puede producirse cuando se obliga a la víctima a acostarse boca abajo
con las esposas detrás de la espalda y luego se tira hacia arriba con las
esposas;
(e) Suspensión de “percha de loro”, que se aplica suspendiendo
a la víctima por las rodillas flexionadas de una barra que se pasa
por detrás de las rodillas, generalmente mientras las muñecas
están atadas a los tobillos.
445. La suspensión puede durar desde minutos hasta varias horas o
incluso más. La cantidad de tiempo descrito como suspendido a
menudo es inexacta ya que las víctimas son
434 Ozkalipci y otros, “Un método de diagnóstico significativo en la investigación de la tortura: gammagrafía ósea”.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
desorientarse o perder el conocimiento. Examen cuidadoso
debe hacerse para las marcas de ligadura, que pueden variar según el
tipo de ligadura (por ejemplo, esposas de metal, ataduras de plástico o
cuerda). La suspensión inversa puede producir una lesión permanente del
plexo braquial en un período breve.
La “percha del loro” puede producir desgarros en los ligamentos cruzados
de las rodillas. Las víctimas a menudo son golpeadas mientras están
suspendidas o torturadas o maltratadas. En la fase crónica, es habitual que
persista el dolor y la sensibilidad alrededor de las articulaciones del hombro,
ya que el levantamiento de peso y la rotación, especialmente interna,
causarán un dolor intenso muchos años después. Las complicaciones en el
período agudo que sigue a la suspensión incluyen debilidad de los brazos o
las manos, dolor y parestesia, entumecimiento, insensibilidad al tacto, dolor
superficial y pérdida de los reflejos tendinosos. El dolor intenso y profundo
puede enmascarar la debilidad muscular.
En la fase crónica, la debilidad puede continuar y progresar a atrofia
muscular. Hay entumecimiento y, más frecuentemente, parestesia.
Levantar los brazos o levantar peso puede causar dolor,
entumecimiento o debilidad. Además de la lesión neurológica, puede
haber desgarros de los ligamentos de las articulaciones del hombro,
dislocación de la escápula y lesión muscular en la región del hombro.
En la inspección visual de la espalda, se puede observar una "escápula
alada" (borde vertebral prominente de la escápula) con lesión del nervio
torácico largo o dislocación de la escápula.
446. La lesión neurológica suele ser asimétrica en los brazos. La
lesión del plexo braquial se manifiesta de muchas maneras
diferentes, incluida la disfunción motora, sensorial y refleja. Los
cambios sutiles pueden ser difíciles de detectar o diagnosticar
para un no especialista. En el momento de la evaluación, la
lesión puede haberse resuelto, pero una historia cuidadosa de
los síntomas sufridos es valiosa en la evaluación y debe haber
un
Umbral bajo para la derivación al especialista. Las evaluaciones de
una posible lesión neurológica deben incluir:
(a) Examen motor. La debilidad muscular asimétrica, más
prominente distalmente, es el hallazgo más esperado. El dolor
agudo puede dificultar la interpretación del examen de fuerza
muscular. Si la lesión es grave, puede observarse atrofia muscular en la fase
crónica;
(b) Examen sensorial. Es común la pérdida completa de sensibilidad o
parestesia a lo largo de las vías nerviosas sensoriales. Se deben evaluar
la percepción posicional, la discriminación de dos puntos, la evaluación
de pinchazos y la percepción del calor y el frío. Si al menos tres
105
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

semanas después se presenta deficiencia o pérdida o disminución la rotación y la pronación-supinación del antebrazo pueden ser

de reflejos, se deben realizar los estudios electrofisiológicos correspondientes deficientes. La deficiencia sensorial se observa en la región deltoidea

por un neurólogo con experiencia en el uso e interpretación de estas y puede extenderse al brazo y las partes externas del antebrazo.

metodologías;

(c) Examen reflejo. Pérdida de reflejos, disminución de los reflejos 4. Otra tortura posicional
o diferencia entre las dos extremidades

puede estar presente. En la suspensión inversa, aunque ambos plexos 448. Hay muchas formas de tortura posicional, todas las cuales atan o

braquiales estén sujetos a un traumatismo, se puede desarrollar una inmovilizan a la víctima en posiciones contorsionadas, hiperextendidas

plexopatía asimétrica debido a la forma en que la víctima de la tortura ha u otras posiciones antinaturales, que causan dolor intenso y pueden

sido suspendida, según qué brazo se coloca en una posición superior o el producir lesiones en ligamentos, tendones, nervios y vasos sanguíneos.

método de sujeción. Aunque la investigación sugiere que las plexopatías

braquiales suelen ser unilaterales (comúnmente después de ser catapultado Característicamente, estas formas de tortura dejan pocas marcas

desde una motocicleta y aterrizar sobre un hombro), eso difiere de la externas o hallazgos radiológicos, si es que dejan alguna, a pesar de la

experiencia en el contexto de la tortura, en el que la lesión bilateral es común; subsiguiente discapacidad crónica frecuentemente grave. Las muñequeras

pueden causar hematomas superficiales, abrasiones y laceraciones,

especialmente en las partes huesudas de la muñeca. También pueden

causar edema de la mano, síntomas de tenosinovitis, fractura de la

apófisis estiloides del radio o el cúbito o déficit neurológico de duración

447. Entre los tejidos de la región del hombro, el plexo braquial es la estructura más variable debido a la compresión del nervio, más comúnmente de una

sensible a las lesiones por tracción. rama superficial del nervio radial.

La incidencia y la gravedad de esta complicación después de la

suspensión dependerán de la duración y la frecuencia de la tortura y el

grado de musculatura; una persona bien musculada bien puede escapar a 449. La tortura posicional afecta principalmente a tendones, articulaciones

tal lesión. y músculos Los métodos adicionales de tortura posicional incluyen: el

La suspensión inversa provoca daños en el plexo braquial debido a "puesto de plátanos" o el "atajo de plátanos"

la extensión posterior forzada de los brazos. Como se observa en el sobre una silla en el suelo, o en una motocicleta; posición forzada;

tipo clásico de suspensión inversa, cuando el cuerpo está suspendido forzado a pararse sobre un solo pie; estar de pie durante mucho tiempo

con los brazos en hiperextensión posterior, normalmente se dañan las con los brazos y las manos estirados en lo alto de una pared; okupación

fibras del plexo inferior y luego las fibras del plexo medio y superior si la forzada prolongada; e inmovilización forzada en una pequeña jaula. De

fuerza sobre el plexo es lo suficientemente severa. Si la suspensión es del acuerdo con las características de estas posiciones, las quejas se

tipo “crucifixión”, pero no incluye hiperextensión, es probable que las fibras caracterizan por dolor en una región del cuerpo, limitación del movimiento

de los plexos inferior y medio se dañen debido a la hiperabducción. articular, dolor de espalda, dolor en las manos o en las partes cervicales

del cuerpo e hinchazón de la parte inferior de las piernas. Los mismos

principios de examen neurológico y musculoesquelético se aplican a

Las lesiones del plexo braquial se pueden clasificar de la siguiente manera: estas formas de tortura posicional que se aplican a la suspensión. La

resonancia magnética es la modalidad radiológica preferida para la

(a) Daño al plexo inferior. Las deficiencias se localizan en los evaluación de lesiones asociadas con todas las formas de tortura posicional.

músculos del antebrazo y de la mano. Las deficiencias sensoriales

pueden observarse en el antebrazo y en los dedos cuarto y quinto del lado

medial de la mano en una distribución del nervio cubital;

5. Tortura con descargas eléctricas

(b) Daño al plexo medio. Los músculos extensores del antebrazo, el codo 450. En la tortura con descargas eléctricas, la corriente eléctrica se transmite a través

y los dedos se ven afectados. La pronación del antebrazo y la flexión radial de electrodos colocados en cualquier parte del cuerpo.

de la mano pueden ser débiles. Las áreas más comunes son las manos, los pies, los dedos de las

La deficiencia sensorial se encuentra en el antebrazo y en las caras manos, los dedos de los pies, las orejas, los pezones, la boca, los labios

dorsales de los dedos primero, segundo y tercero de la mano en una y el área genital. La fuente de energía puede ser un generador manual o

distribución nerviosa radial. Los reflejos del tríceps pueden perderse; de combustión, una fuente de pared, una pistola paralizante, una picana

para ganado u otro dispositivo de energía conducida. La corriente

eléctrica sigue la ruta más corta entre los dos electrodos. los

(c) Daño al plexo superior. Los músculos del hombro se ven especialmente Los síntomas que se presentan cuando se aplica corriente eléctrica son

afectados. Abducción del hombro, axial característicos. Por ejemplo, si se colocan electrodos

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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
en un dedo del pie derecho y en la región genital, habrá dolor,
contracción muscular y calambres en los músculos del muslo y la
pantorrilla derechos. Se sentirá un dolor insoportable en la región
genital. Dado que todos los músculos a lo largo de la ruta de la
corriente eléctrica se contraen tetánicamente, se pueden observar
dislocaciones del hombro y radiculopatías lumbares y cervicales
cuando la corriente es moderadamente alta. Sin embargo, el tipo,
el tiempo de aplicación, la corriente y el voltaje de la energía utilizada
no se pueden determinar con certeza tras el examen físico de la
víctima. Los torturadores a menudo usan agua
o geles para aumentar la eficacia de la tortura, ampliar el punto de
entrada de la corriente eléctrica en el cuerpo y prevenir quemaduras
eléctricas detectables. Trazas de quemaduras eléctricas pueden ser
circulares de color marrón rojizo
lesión de unos pocos milímetros de diámetro, generalmente sin
inflamación, que puede resultar en una cicatriz hiperpigmentada.
Las superficies de la piel deben examinarse cuidadosamente
porque las lesiones a menudo no son fácilmente perceptibles.
Se puede informar hipersalivación, pero a menudo la historia es
limitada debido a la pérdida del conocimiento durante la tortura.
6. Tortura dental
451. La tortura dental puede consistir en romper o extraer dientes o
mediante la aplicación de corriente eléctrica a los dientes. Puede
provocar la pérdida o rotura de los dientes, hinchazón de las encías,
sangrado, dolor, gingivitis, estomatitis, fracturas mandibulares o
pérdida de los empastes de los dientes.
El síndrome de la articulación temporomandibular producirá
dolor en la articulación temporomandibular, limitación del
movimiento mandibular y, en algunos casos, subluxación de
esta articulación debido a espasmos musculares producidos
por la corriente eléctrica o golpes en la cara.
7. Asfixia
452. La casi asfixia por asfixia es un método de tortura cada vez más
común. No suele dejar marca y la recuperación es rápida. Este
método de tortura fue tan ampliamente utilizado en América
Latina que su nombre en español, submarino, se ha convertido
en parte del vocabulario de los derechos humanos. La respiración
normal puede impedirse mediante métodos tales como cubrir la
cabeza con una bolsa de plástico, cerrar la boca y la nariz, aplicar
presión o ligaduras alrededor del cuello o aspirar forzadamente
polvo, cemento, gasolina, pimientos picantes, etc.
Esto también se conoce como “ submarino seco”. Pueden
desarrollarse diversas complicaciones, como petequias de la
435 Para obtener orientación adicional sobre la investigación y documentación de la violencia sexual, consulte Ferro Ribeiro y van der Straten Ponthoz, International Protocol on the Documentation
e Investigación de la Violencia Sexual (ver nota al pie 357).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
piel, hemorragias nasales, sangrado de los oídos, congestión de
la cara, infecciones en la boca y problemas respiratorios agudos
o crónicos. La gasolina en la bolsa de plástico puede causar
quemaduras en la piel del rostro. La inmersión forzada de la
cabeza en agua, a menudo contaminada con orina, heces,
vómito u otros contaminantes, puede resultar en casi ahogamiento
o ahogamiento. La aspiración del agua a los pulmones puede
provocar neumonía.
Esta forma de tortura se llama “ submarino mojado”.
453. Otra forma de asfixia, el submarino, consiste en verter agua sobre un paño
que se coloca sobre la nariz y la boca de la víctima, provocando la
sensación de ahogamiento real o real. La víctima yace boca arriba, ya sea
horizontal o con los pies más altos que la cabeza. En el ahorcamiento o en otras
asfixias con ligaduras, a menudo se pueden encontrar abrasiones o contusiones
en el cuello. los
el hueso hioides y el cartílago laríngeo pueden fracturarse por
estrangulación parcial o por golpes en el cuello.
454. Cualquiera de estas formas de asfixia puede causar la pérdida de la
conciencia debido a un suministro insuficiente de oxígeno al cerebro y
las consecuencias de este tipo de pérdida de la conciencia pueden ser
similares a las de un traumatismo craneoencefálico cerrado, en términos
de pérdida de -Memoria a largo plazo u otros déficits cognitivos.
8. Tortura sexual, incluida la violación435
455. La tortura sexual comienza con la desnudez forzada, que en muchos
países es un factor constante en las situaciones de tortura. Un
individuo nunca es tan vulnerable
como cuando estaba desnudo e indefenso. La desnudez
aumenta el terror psicológico de todos los aspectos de la
tortura, ya que siempre existe la amenaza de posibles torturas o
malos tratos sexuales, incluida la violación. Además, las
amenazas sexuales verbales, los abusos verbales y las burlas
también forman parte de la tortura sexual, ya que potencian la
humillación y sus aspectos degradantes. La tortura sexual incluye la
desnudez forzada, la agresión sexual tocando partes íntimas del
cuerpo, la penetración digital, la masturbación forzada, la inserción
forzada de un objeto en la vagina o el ano, la violación oral, la
violación anal y la violación vaginal, la eyaculación o la micción
sobre la víctima, la tortura sexual. esclavitud, embarazo forzado y
esterilización forzada. Una experiencia de tortura sexual es a
menudo una prueba prolongada para la víctima, en la que ocurren
muchos eventos traumáticos diferentes. Si bien algunas víctimas
pueden contar cada momento de su terrible experiencia, muchas no
lo hacen y bloquean ciertas partes que son demasiado angustiosas
para relatar.
107
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
o que temen que su entrevistador no pueda aceptar ser escuchado.
La revelación de la tortura sexual puede resultar difícil y retrasada
(véanse los párrs. 274 a 276 supra).
456. Existen algunas diferencias entre la tortura sexual
de los hombres y la tortura sexual de las mujeres, pero varios
temas se aplican a ambos. Puede haber abuso verbal de
naturaleza sexual, tortura física en las zonas íntimas del cuerpo,
como los senos y las nalgas, y tortura dirigida específicamente a
los genitales. La electricidad y los golpes a menudo se dirigen a
los genitales de los hombres, con o sin tortura anal adicional. El
trauma físico se ve reforzado por el abuso verbal. Los presos pueden
ser colocados desnudos en celdas con familiares, amigos o completos
extraños, rompiendo tabúes culturales. Esto puede empeorar por la
falta de privacidad al usar los baños. Además, los reclusos pueden
verse obligados a abusar sexualmente unos de otros, lo que puede
ser particularmente difícil de sobrellevar emocionalmente. El miedo a
una posible violación, dado el profundo estigma cultural asociado con
la violación, puede aumentar el trauma. Para las mujeres, también
existe el trauma de un posible embarazo, el miedo a perder la virginidad
y el miedo a no poder tener hijos (incluso si la violación puede ocultarse
a un posible marido y al resto de la sociedad).
La violación siempre está asociada con el riesgo de desarrollar
infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH/SIDA.
Actualmente, la única profilaxis eficaz contra el VIH/
El SIDA debe tomarse dentro de las 72 horas posteriores al incidente,
cuanto antes, más efectivo, y es poco probable que esté disponible
mientras la víctima aún está detenida.
457. Un estudio nacional encontró que los efectos más comunes que sufren
las víctimas de agresiones sexuales graves son problemas mentales
o emocionales (63%), seguidos de dificultad para confiar en las
personas o dificultad en otras relaciones (53%).436 En este estudio,
solo el 27 por ciento de las víctimas tenían hematomas menores o un
ojo morado y las lesiones más graves eran raras.437 Sin embargo, la
noción de que una víctima que no ha sufrido lesiones físicas debe haber
dado su consentimiento todavía está muy extendida. El miedo a más
violencia a menudo limita la resistencia de las víctimas o simplemente
pueden “congelarse”. En una revisión global de los casos de agresión
sexual, un promedio del 65 por ciento de las víctimas tenía algún tipo de
lesión física (es decir, el 35 por ciento no) y un promedio del 30 por
ciento tenía evidencia de trauma anogenital (es decir, el 70 por ciento
no lo hizo).438
Una historia no revelada previamente de violencia sexual
436 Reino Unido, Oficina Nacional de Estadísticas, “Sexual delincuentes en Inglaterra y Gales” (ver nota 401).
437 Ibíd.
438 Ibíd.
439 ACNUR, “Trabajando con hombres y niños sobrevivientes” (ver nota al pie 402).
440 Ibíd., pág. 11
108
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
se puede encontrar haciendo una revisión completa de los síntomas,
particularmente de los sistemas genitourinario y anorrectal y un examen
completo. Si se encuentran lesiones en una parte íntima del cuerpo,
como los senos, las nalgas o los muslos, esto puede indicar que ocurrió
violencia sexual.
Cabe señalar que la ausencia de lesiones genitales no puede
tomarse como indicación de que la violencia sexual no
ocurrir. La vulvovaginitis que ocurre como resultado de duchas
vaginales repetidas puede ser un indicador de violencia sexual en el pasado.
458. Las violaciones o agresiones sexuales violentas y repetidas mediante
la penetración anal con un objeto pueden causar daños físicos
considerables en el esfínter anal y el recto con efectos duraderos, como
dolor al defecar, fisura y hemorroides anales crónicas e incontinencia
de heces o flatos. La divulgación de estos síntomas puede ser difícil
pero, paradójicamente, una investigación sobre dichos síntomas como
parte de una revisión de los sistemas del cuerpo por parte del médico
puede conducir a la revelación de la agresión que los causó. Otros
indicios pueden ser la incapacidad para sentarse cómodamente o por
mucho tiempo, quejas sobre problemas en la parte inferior de la espalda
y altos niveles de ira e irritabilidad.439 Según la guía del ACNUR:
“Muchos sobrevivientes masculinos solo informan sobre sus experiencias
cuando requieren una intervención médica urgente.”440
Otra posible apertura para la divulgación es cuando se realiza
una evaluación de riesgo de daño a sí mismo oa otros, cuando una
exploración detallada de los pensamientos que desencadenan actos
impulsivos de violencia puede facilitar la divulgación.
459. Si en casos de tortura sexual la víctima no desea que el hecho sea conocido
por presiones socioculturales o razones personales, el médico que realiza el
examen médico, los organismos de investigación y los tribunales tienen la
obligación de cooperar para mantener la privacidad de la víctima. Establecer
una relación con sobrevivientes de tortura que recientemente han sido
agredidos sexualmente requiere educación psicológica especial y apoyo
psicológico adecuado. Se debe evitar cualquier tratamiento que aumente el
trauma psicológico de un sobreviviente de tortura. Antes de comenzar el
examen, se debe obtener el consentimiento específico del individuo. El
individuo debe ser informado
sobre la importancia del examen y sus posibles hallazgos de
manera clara y comprensible.
Machine Translated by Google
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(a) Revisión de los síntomas
460. Antecedentes completos de la supuesta tortura sexual o
los malos tratos deben registrarse como se describe anteriormente
en el presente manual (véanse los párrafos 394 a 396 supra).
Sin embargo, hay algunas preguntas específicas que son
relevantes solo para una acusación de tortura sexual.
Estos buscan obtener síntomas actuales resultantes de una
agresión reciente, por ejemplo, sangrado, flujo vaginal o anal y
ubicación del dolor, hematomas o llagas. En casos de agresión
sexual en el pasado, las preguntas deben dirigirse a los síntomas
continuos que resultaron de la agresión, como polaquiuria,
incontinencia o disuria, menstruación irregular, antecedentes
posteriores de embarazo, aborto o hemorragia vaginal, problemas
con la función sexual, incluyendo coito y dolor anal, sangrado,
estreñimiento o incontinencia de orina, flatos o heces, y dolor abdominal
inferior. Los pacientes pueden describir vómitos, arcadas y náuseas al
recordar la violación oral.
461. Idealmente, debería haber suficientes condiciones físicas y
instalaciones técnicas para el examen apropiado de
sobrevivientes de violación sexual por parte de un equipo de
psiquiatras, psicólogos, ginecólogos y enfermeras experimentados,
que están capacitados en el tratamiento de sobrevivientes de violación sexual
tortura. Un objetivo adicional de la consulta después de una
agresión sexual es ofrecer apoyo, asesoramiento y, en su caso,
tranquilidad. Esto debería cubrir temas como las enfermedades de
transmisión sexual, el VIH/SIDA, el embarazo, si la víctima es
mujer y el daño físico permanente, porque los torturadores a
menudo les dicen a las víctimas que nunca volverán a tener una
vida sexual normal, lo que puede convertirse en una profecía
autocumplida. .
Es posible que sea necesario realizar un examen de las
lesiones anorrectales bajo sedación, si los síntomas indican que
la víctima no podría hacer frente de otra manera. El objetivo debe ser
realizar un solo examen para minimizar la retraumatización, con toda
la experiencia y el equipo necesarios presentes para la recolección de
evidencia, hisopos y tratamiento.
(b) Examen después de un asalto reciente
462. Es raro que una víctima de violación durante la tortura sea puesta en
libertad mientras aún es posible identificar signos agudos de la
agresión. En estos casos, hay muchos problemas a tener en cuenta
que pueden impedir la evaluación médica.
Las víctimas de agresiones recientes pueden estar
preocupadas y confundidas acerca de buscar ayuda médica o
legal debido a sus temores, preocupaciones socioculturales o la
naturaleza destructiva de la tortura o los malos tratos. En tales
casos, un médico debe explicar a la víctima todas las opciones médicas
y judiciales posibles y debe actuar de acuerdo
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
con los deseos de la víctima. Los deberes del médico incluyen
obtener el consentimiento informado voluntario para el examen,
registrar todos los hallazgos médicos de tortura o malos tratos y
obtener muestras para el examen forense. Siempre que sea posible,
el examen debe ser realizado por un experto en documentación de
agresión sexual. De lo contrario, el médico examinador debe hablar
con un experto o consultar un texto estándar sobre medicina forense
clínica. Cuando el médico es de un género diferente al de la víctima,
se le debe ofrecer a la víctima la oportunidad de tener un acompañante
del mismo género en la habitación. Dada la naturaleza delicada de la
investigación de una agresión sexual, no es apropiado que esta
persona sea familiar de la víctima o del intérprete (ver párr. 219 supra).
Los médicos deben permitir que los exámenes se lleven a cabo al ritmo
dictado por las presuntas víctimas, minimizando la exposición de su
cuerpo al examinar una parte a la vez si encuentran que esto es más
fácil de manejar. Los médicos deben observar el comportamiento y las
emociones de las presuntas víctimas y estar preparados para detenerse
si se angustian demasiado. Se debe realizar un examen físico completo,
incluida la documentación meticulosa de todos los hallazgos físicos,
incluido el tamaño, la ubicación y el color y, siempre que sea posible,
se deben fotografiar estos hallazgos y recolectar evidencia de los
especímenes del examen.
463. El examen físico no debe ser inicialmente
dirigida a la zona genital. Debe anotarse cualquier deformidad.
Se debe prestar especial atención para asegurar un examen
completo de la piel, en busca de lesiones cutáneas que podrían
haber resultado de
un asalto. Estos incluyen moretones, laceraciones y petequias
por chupar o morder. Cuando las lesiones genitales son mínimas, las
lesiones localizadas en otras partes del cuerpo pueden ser la evidencia
más significativa de una agresión, especialmente, por ejemplo,
aquellas en contacto forzado con el suelo, como la espalda, las nalgas
o las rodillas. Incluso durante el examen de los genitales femeninos
inmediatamente después de la violación, la lesión está presente solo
en una minoría de casos. Exámenes anales de hombres y mujeres
después
la violación anal también muestra lesiones en una minoría de
casos. En los casos en que hay lesiones, la mayoría se curará
en unos pocos días. En situaciones en las que se han utilizado
objetos relativamente grandes para penetrar la vagina o el ano,
aumenta la probabilidad de daño identificable, pero no es infrecuente
la ausencia de lesión.
464. En situaciones en las que se disponga de un laboratorio forense, se
debe contactar a la instalación antes del examen para discutir qué
tipos de muestras se pueden analizar y, por lo tanto, qué muestras
se deben tomar y cómo.
Muchos laboratorios proporcionan kits que permiten a los médicos
109
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
tomar todas las muestras necesarias de las personas que
alegan agresión sexual. Si no hay un laboratorio disponible,
aún puede valer la pena obtener hisopos húmedos y secarlos
más tarde al aire. Estas muestras se pueden usar más adelante
para las pruebas de ADN. Se deben tomar precauciones
estrictas para evitar denuncias de contaminación cruzada
cuando se han tomado muestras de varias víctimas diferentes,
particularmente si se toman de los presuntos perpetradores.
Debe haber preservación y documentación de la
cadena de custodia para todas las muestras forenses.
(c) Examen después de la fase inmediata
465. En los casos en que la presunta tortura sexual o
malos tratos ocurridos más de una semana antes
y no hay signos de hematomas o laceraciones, hay
menos inmediatez en la realización de un examen
pélvico. Se puede tomar tiempo para tratar de encontrar
a la persona más calificada para documentar los hallazgos
y el mejor entorno para entrevistar al individuo.
Sin embargo, aún puede ser beneficioso fotografiar
adecuadamente las lesiones residuales, si es posible.
466. La evaluación clínica debe registrarse como se describe
arriba, luego examen y documentación de los hallazgos
físicos generales. En mujeres que han dado a luz antes
de la violación, y particularmente en aquellas que lo han
hecho después, los hallazgos patognomónicos no son
probables. Puede pasar algún tiempo antes de que las
personas estén dispuestas a hablar sobre los aspectos
de la tortura que les parecen más vergonzosos o
estigmatizantes. Del mismo modo, las presuntas víctimas
pueden desear posponer las partes más íntimas del
examen para una consulta posterior, si el tiempo y las
circunstancias lo permiten.
467. Solo en una minoría de casos se encuentran pruebas físicas al examinar
los genitales después de una agresión. Al examinar más adelante,
cuando la persona pudo haber tenido actividad sexual posterior, ya sea
consentida o no, o dado a luz, se debe tener cuidado al atribuir cualquier
hallazgo a un incidente específico de supuesta tortura o malos tratos. Por
lo tanto, tanto para las mujeres como para los hombres, el componente
más importante de una evaluación médica puede ser la evaluación de la
información de antecedentes por parte del examinador (por ejemplo, la
correlación entre las denuncias de tortura o malos tratos y las lesiones
agudas observadas por el individuo), el comportamiento del individuo y el
impacto psicológico de la experiencia.
110
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
d) Seguimiento
468. Muchas enfermedades infecciosas pueden transmitirse por
tortura o malos tratos sexuales, incluidas las infecciones
de transmisión sexual, como gonorrea, clamidia, sífilis,
VIH, VPH, hepatitis B y C, herpes simple, verrugas
anogenitales, vulvovaginitis por tricomoniasis, vaginitis
monilial, vaginosis bacteriana y oxiuros, así como así
como infecciones del tracto urinario.
469. Deben realizarse pruebas de laboratorio y tratamientos apropiados.
prescrito en todos los casos de tortura o malos tratos sexuales.
En el caso de gonorrea y clamidia, se debe considerar la
infección concomitante del ano o la orofaringe al menos para
fines de examen. Se deben obtener cultivos y pruebas
serológicas iniciales en casos de agresión sexual e iniciar la
terapia adecuada.
La presencia de una infección de transmisión sexual puede
ser consistente con un relato de tortura sexual, pero
no confirma necesariamente que la tortura fue la causa.
470. La disfunción sexual es común entre los sobrevivientes de tortura
o malos tratos, particularmente entre quienes han sufrido tortura
sexual o violación, pero no exclusivamente. La disfunción sexual
puede ocurrir en quienes no han sufrido tortura sexual
o puede ser que aún no lo hayan revelado.
Los síntomas pueden ser de origen físico o psicológico
o una combinación de ambos e incluyen:
(a) Aversión a miembros del sexo opuesto o disminución del
interés en la actividad sexual;
(b) Miedo a la actividad sexual porque una pareja sexual “sabrá” que la
víctima ha sido torturada sexualmente o temor de haber sido dañada
sexualmente. Los torturadores pueden haber amenazado con esto e
infundido miedo a la homosexualidad en los hombres que han sido
torturados analmente. Algunos hombres han tenido una erección y, en
ocasiones, han eyaculado durante una violación anal. Se les debe asegurar
que se trata de una respuesta fisiológica y que no implica consentimiento,
disfrute ni refleja necesariamente su orientación sexual;
(c) Efectos profundos en la psique debido a
transgresiones forzadas de orientación sexual e identidad de
género;
(d) Incapacidad para confiar en una pareja sexual;
(e) Alteración de la excitación sexual y disfunción eréctil;
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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(f) Dispareunia (relaciones sexuales dolorosas en las mujeres) o
infertilidad debido a infecciones de transmisión sexual adquiridas,
traumatismo directo en los órganos reproductivos o abortos mal
realizados de embarazos posteriores a una violación.
(e) Examen genital de las mujeres
471. En muchas culturas o grupos sociales, es completamente
es inaceptable penetrar la vagina de una mujer
virgen con cualquier cosa, incluidos un espéculo, un dedo o
un hisopo. Si la mujer demuestra evidencia de penetración
vaginal en la inspección visual externa, puede ser innecesario
realizar un examen pélvico interno.
Los hallazgos del examen genital pueden incluir:
(a) Pequeñas laceraciones o desgarros de la vulva. Estos pueden
ser agudos y son causados por un estiramiento excesivo.
Normalmente sanan por completo, pero pueden dejar cicatrices,
aunque la penetración repetida no necesariamente da como
resultado una evidencia visual;
(b) Abrasiones de los genitales femeninos. Las abrasiones pueden
ser causadas por el contacto con objetos ásperos, como uñas o
anillos, o por la ausencia de lubricación;
(c) Laceraciones vaginales. No necesariamente pueden
diferenciarse de las incisiones causadas por objetos punzantes
insertados;
(d) Cicatrización curada alrededor del área genital. Esto puede
haber sido causado por quemaduras de cigarrillos o heridas cortantes.
472. Muchos de los hallazgos del examen genital enumerados
anterior puede resultar de “exámenes de virginidad”, que se
practican en muchos países a menudo por la fuerza, incluso en
lugares de detención, en mujeres que alegan violación o son
acusadas de prostitución; y como parte de las políticas públicas o
sociales para el control de la sexualidad. En su declaración de
2014 sobre el tema,441 el Grupo de Expertos Forenses
Independientes concluye que los exámenes de virginidad no son
médicamente confiables y no tienen valor clínico. Estos exámenes
son intrínsecamente discriminatorios y, en casi todos los casos,
cuando se realizan por la fuerza, dan como resultado un dolor y
sufrimiento físico y mental significativo. Cuando sea realizado por
un funcionario público u otra persona que actúe en el ejercicio de
su cargo, o por instigación de este, el examen de virginidad
constituirá un trato o tortura cruel, inhumano o degradante. Cuando
los exámenes de virginidad son
441 Grupo de Expertos Forenses Independientes, “Declaración sobre las pruebas de virginidad” (ver nota al pie 309).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
realizado a la fuerza e involucra penetración vaginal, el examen
debe ser considerado como sexual
agresión y violación. La participación de profesionales
de la salud en estos exámenes viola las normas básicas y la ética
de las profesiones pertinentes.
473. Debe identificarse la mutilación genital femenina, si existe. A
pesar de los esfuerzos internacionales para eliminar la mutilación
genital femenina, todavía se practica comúnmente, con 200
millones de mujeres y niñas vivas en todo el mundo que han sido
sometidas a esta práctica por razones socioculturales. La
mutilación de los genitales también puede haber sido parte de la
tortura sexual. La mutilación genital femenina está clasificada por
la Organización Mundial de la Salud de la siguiente manera:
(a) Tipo I: extirpación parcial o total del glande del clítoris y/o del prepucio/
capucha del clítoris;
(b) Tipo Ia: extirpación del capuchón del clítoris o del
prepucio únicamente;
(c) Tipo Ib: extirpación del glande del clítoris con el prepucio/
capuchón del clítoris;
(d) Tipo II: extirpación parcial o total del glande del clítoris y los labios
menores, con o sin escisión de los labios mayores (escisión);
(e) Tipo IIa: extirpación de los labios menores solamente;
(f) Tipo IIb: extirpación parcial o total del glande del clítoris y los
labios menores;
(g) Tipo IIc: extirpación parcial o total del glande del clítoris, los
labios menores y los labios mayores;
(h) Tipo III: estrechamiento de la abertura vaginal con creación de
un sello de cobertura al cortar y reposicionar los labios menores o los
labios mayores, con o sin escisión del prepucio del clítoris/capuchón del
clítoris y glande (infibulación);
(i) Tipo IIIa: remoción y reposicionamiento de los labios
menores;
(j) Tipo IIIb: remoción y reposicionamiento de los labios
mayores;
111
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
k) Tipo IV: todos los demás procedimientos lesivos de los genitales
femeninos con fines no médicos, por ejemplo: pinchazos,
perforaciones, incisiones, raspados y cauterizaciones.
474. A una mujer se le debe preguntar cómo el procedimiento
la ha afectado, y si ha tenido complicaciones como
resultado. De manera aguda, las mujeres y las niñas
pueden sufrir hemorragias o infecciones abrumadoras. La
mutilación/ablación genital femenina se asocia con
complicaciones médicas a largo plazo, incluidas
infecciones recurrentes, quistes y abscesos, formación de
cicatrices queloides que provocan dolor, daños en la uretra
que provocan incontinencia urinaria, complicaciones de futuros
partos (incluido un mayor riesgo de hemorragia y muerte) ,
disfunción sexual y trauma psicológico, incluidos TEPT,
ansiedad y depresión.
Además, los niños nacidos de mujeres que se han
sometido a la mutilación genital femenina tienen más
probabilidades de sufrir morbilidad y mortalidad perinatal.
(f) Examen genital de los hombres
475. Los hombres que han sido sometidos a torturas en la región genital,
incluidos aplastamientos, retorcimientos o tirones del escroto o
traumatismos directos en esa región, suelen quejarse de dolor y
sensibilidad en el período agudo.
Se puede observar hiperemia, hinchazón marcada y
equimosis. La orina puede contener una gran cantidad de
eritrocitos y leucocitos. Si se detecta una masa, se debe
determinar si se trata de un hidrocele o un hematocele, que
podría ser resultado de una tortura o una hernia inguinal. En
el caso de una hernia inguinal, el examinador no puede palpar el
cordón espermático por encima de la masa. Con un hidrocele o
un hematocele, las estructuras normales del cordón espermático
suelen palparse por encima de la masa. Un hidrocele resulta de
la acumulación excesiva de líquido dentro de la túnica vaginal
debido a la inflamación de los testículos y sus apéndices oa la
disminución del drenaje secundario a obstrucción linfática o
venosa en el cordón o el espacio retroperitoneal. Un hematocele
es una acumulación de sangre dentro de la túnica vaginal,
secundaria a un traumatismo.
A diferencia del hidrocele, no transilumina.
La enfermedad de Peyronie puede surgir como consecuencia de un
traumatismo en el pene (p. ej., que le hayan cerrado un cajón de golpe).
476. La torsión testicular también puede deberse a un traumatismo en
el escroto. Con esta lesión, el testículo se tuerce en su base,
obstruyendo el flujo de sangre al testículo. Esto causa dolor
intenso e hinchazón y constituye una emergencia quirúrgica. Si
no se reduce la torsión inmediatamente, se producirá un infarto
del testículo. Por debajo
112
V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
condiciones de detención, donde se puede negar la atención
médica, se pueden observar secuelas tardías de esta lesión.
477. Las personas que fueron sometidas a tortura escrotal pueden
padecer infección crónica del tracto urinario, disfunción eréctil
o atrofia de los testículos. Los síntomas del PTSD no son
infrecuentes. En la fase crónica, puede ser imposible distinguir
entre la patología escrotal causada por la tortura y la causada
por otros procesos patológicos. Si no se descubren anomalías
físicas en un examen urológico completo, se sugiere que los
síntomas urinarios, la impotencia u otros problemas sexuales
pueden explicarse por motivos psicológicos. Las cicatrices en la
piel del escroto y el pene pueden ser muy difíciles de visualizar.
Por esta razón, la ausencia de cicatrices en estos lugares
específicos no demuestra la ausencia de tortura. En
por otro lado, la presencia de cicatrices suele indicar
que se ha producido un trauma importante.
(g) Examen de la región anal
478. Penetración del ano con un objeto o una erección
el pene no siempre resulta en lesiones. Puede observarse dolor
inicial y sangrado. La mayoría de las lesiones se curan en unos
pocos días. Ocasionalmente, el dolor y el sangrado pueden
ocurrir durante días o semanas. Esto puede provocar
estreñimiento, que puede verse agravado por la mala
alimentación en muchos lugares de detención. Pueden surgir
hemorroides o una fisura secundaria al estreñimiento. También
pueden presentarse síntomas gastrointestinales y urinarios. En
la fase aguda, cualquier examen más allá de la inspección
visual puede requerir anestesia local o general y debe ser
realizado por un especialista. En la fase crónica, varios
síntomas pueden persistir y deben investigarse. Puede haber
cicatrices anales de tamaño o posición inusual y deben
documentarse.
Las fisuras anales pueden persistir durante muchos años,
pero no es posible diferenciar por inspección visual entre
las causadas por tortura y las causadas por otros
mecanismos, como enfermedades gastrointestinales. En
el examen del ano, se deben buscar y documentar los
siguientes hallazgos:
(a) Las fisuras tienden a ser hallazgos inespecíficos, ya que pueden
ocurrir en una serie de situaciones "normales" (estreñimiento o mala
higiene). Sin embargo, cuando se observan en una situación aguda
(es decir, dentro de las 72 horas), las fisuras son un hallazgo más
específico y pueden ser compatibles con la penetración;
(b) Pueden notarse desgarros rectales con o sin sangrado;
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V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(c) La interrupción del patrón rugal puede manifestarse como una
cicatrización suave en forma de abanico. Cuando estas cicatrices se ven fuera
de la línea media (es decir, no a las 12 oa las 6), pueden ser una indicación de
un traumatismo penetrante;
(d) papilomas cutáneos, que pueden ser el resultado de
un traumatismo curativo;
(e) Secreción purulenta del ano. Se deben tomar cultivos para gonorrea y
clamidia en todos los casos de supuesta penetración rectal, independientemente
de que se observe secreción.
479. Los exámenes anales se practican por la fuerza en muchos países
en los que las relaciones sexuales anales consentidas se
consideran un acto delictivo.442 Se practican casi exclusivamente
a hombres en un esfuerzo por "probar" que tienen un
"comportamiento homosexual". En una declaración realizada en
2016, el Grupo de expertos forenses independientes concluyó
que no había validez clínica en tal prueba. Dichos exámenes son
inherentemente discriminatorios. En muchas circunstancias en
las que los exámenes anales se realizan por la fuerza, van
acompañados de otras formas de tortura física o malos tratos, como
palizas por parte de la policía y comentarios degradantes sobre la
supuesta homosexualidad de la persona por parte de la policía y el
personal médico. A menudo se aplican amenazas, coerción y fuerza
física. El hecho de que un examen pueda realizarse con la presencia
de personal no médico es una fuente adicional de preocupación.
Además, los elementos de desnudez forzada y restricción física, cuando
se utilizan, amplifican la sensación de impotencia, miedo, humillación y
degradación que experimentan las personas. El Comité contra la
Tortura, el Relator Especial sobre la tortura y el Grupo de Trabajo sobre
la Detención Arbitraria han declarado que la práctica de los exámenes
anales forzados contraviene la prohibición de la tortura y los malos
tratos.443
Cuando los exámenes anales se realizan a la fuerza e implican
penetración anal, el examen debe considerarse una forma de
agresión sexual y
violación. La participación de profesionales de la salud en estos
exámenes viola las normas básicas y la ética
de las profesiones correspondientes. Los exámenes anales realizados
como revisión de las cavidades corporales solo deben realizarse de
acuerdo con las Reglas de Bangkok (reglas 19 a 21), las Reglas de
Nelson Mandela (reglas 50 a 52) y la declaración de la AMM sobre
registros corporales de reclusos.
442 Grupo de Expertos Forenses Independientes, “Declaración sobre exámenes anales” (ver nota al pie 309), pág. 85.
443 A/HRC/19/41, párr. 37. Véase también A/HRC/22/53, párr. 79.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
F. Pruebas diagnósticas especializadas
480. Las pruebas de diagnóstico no son una parte esencial de la evaluación clínica de
una persona que alega tortura o malos tratos.
En muchos casos, un historial médico y un examen físico
son suficientes. hay circunstancias
en los que dichas pruebas son valiosas pruebas de apoyo, por
ejemplo, en situaciones en las que hay un caso legal contra
miembros de las autoridades o una reclamación de indemnización.
Sin embargo, hay que recordar que cualquier prueba tendrá una
tasa de falsos negativos y esta suele ser mayor cuanto mayor sea
el intervalo entre la realización de la prueba y el momento en que se
produjo la lesión. Si las pruebas de diagnóstico se realizan por
razones clínicas y no legales, los resultados deben agregarse al
informe clínico. Debe reconocerse que la ausencia de un resultado
positivo de la prueba de diagnóstico, como ocurre con los hallazgos
físicos, no debe utilizarse para sugerir que no se produjeron torturas
o malos tratos. Hay muchas situaciones en las que las pruebas de
diagnóstico no están disponibles por razones técnicas, pero su
ausencia nunca debe invalidar un informe debidamente escrito.
481. Se están desarrollando y evaluando pruebas de diagnóstico
todo el tiempo. Por esta razón, la referencia aquí a pruebas
específicas es limitada, pero cuando se requiere evidencia de
respaldo adicional, los investigadores deben utilizar los recursos más
actualizados disponibles para ellos.
482. En la fase aguda de la lesión, diversas imágenes
Las modalidades pueden ser útiles para proporcionar
documentación adicional de lesiones esqueléticas y de tejidos blandos.
Sin embargo, una vez que las lesiones físicas de la tortura o los
malos tratos han sanado, las secuelas residuales generalmente ya
no son detectables por los mismos métodos de imagen. Esto suele
ser cierto incluso cuando los sobrevivientes
continúan sufriendo dolor significativo o discapacidad a causa de
sus lesiones. Además, la tecnología más sofisticada y costosa
puede no estar disponible universalmente o al menos no para una
persona bajo custodia.
483. La resonancia magnética puede detectar contusión ósea y estrés o
fracturas ocultas antes de que se puedan visualizar mediante
radiografías de rutina, tomografía computarizada o gammagrafía.
484. El uso de escáneres abiertos y la sedación pueden
aliviar la ansiedad y la claustrofobia, que prevalecen
entre los supervivientes de la tortura.
113
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL V. PRUEBAS FÍSICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

G. Valoración de la incapacidad funcional instalaciones (por ejemplo, rayos X y otras técnicas de imagen),
pruebas hematológicas y más asesoramiento especializado según

485. La evaluación de la discapacidad funcional es particularmente sea necesario. Al interpretar sus hallazgos, los médicos

útil en circunstancias en las que se presenta una reclamación generalmente necesitan buscar información adicional de niños,

de indemnización, pero también es útil para planificar
estrategias y objetivos de rehabilitación individuales. El
Calendario de Evaluación de Discapacidad de la Organización
Mundial de la Salud versión 2.0 es una herramienta que se puede utilizar para
489. Los niños que han sufrido torturas y otras
con este propósito producir niveles y perfiles de discapacidad
estandarizados aplicables a todas las culturas. Es la herramienta
operativa de la Clasificación Internacional del Funcionamiento, la
Discapacidad y la Salud.444
jóvenes y sus cuidadores además de la disponible en entrevistas no
médicas.
formas de malos tratos y violaciones de los derechos humanos
deben tener acceso a examinadores pediátricos capacitados y
competentes, siempre que sea posible, que puedan proporcionar
evaluaciones médicas y recomendaciones para la atención.

En el caso de los niños, parte de la evaluación debe incluir

486. El Programa cubre seis dominios de funcionamiento, a saber: la protección para la prevención de más torturas y malos

cognición (comprensión y comunicación); movilidad (moverse tratos, recomendaciones para la recuperación y reintegración

y desplazarse); autocuidado (higiene, vestirse, comer y y la reducción de la exposición a experimentar o presenciar

permanecer solo); llevarse bien (interactuar con otras violencia. El acceso a un seguimiento médico y psicológico

personas); actividades de la vida (responsabilidades domésticas, adecuado y confidencial es un derecho446 para los niños.

ocio, trabajo y escuela); y participación (unirse a las actividades

de la comunidad y participar en la sociedad).
490. El examen genital de los niños debe ser realizado por médicos con
487. Al anotar, se asignan los siguientes números
a las respuestas en cada dominio: 1 (“ninguno”); 2 (“leve”); 3
(“moderado”); 4 (“grave”); y 5 (“extrema o no puede hacer”). Las
puntuaciones de los ítems en cada dominio se suman y luego se
suman las puntuaciones de los seis dominios. La puntuación
resumida se convierte luego en una métrica que va de 0 a 100
(donde 0 = sin discapacidad y 100 = discapacidad total).445
experiencia en la documentación e interpretación de los hallazgos.
En entornos en los que se puede realizar una grabación de vídeo,
otros expertos pueden opinar sobre los hallazgos físicos y genitales
sin que el niño tenga que ser examinado de nuevo. Sin embargo, el
médico debe ser consciente de que un examen puede recordar la
agresión original y, por lo tanto, debe realizarse con delicadeza y
con las explicaciones adecuadas para el niño y su cuidador.

El examen de las áreas genital y anal bajo anestesia general

H niños
488. Los exámenes médicos deben realizarse en un niño
entorno amigable por médicos capacitados con experiencia en la
evaluación y documentación de lesiones físicas (incluidas las
resultantes de agresión sexual) en niños y jóvenes. El consentimiento
para el examen debe obtenerse de los tutores de los niños y, cuando
corresponda, de los propios niños o jóvenes (véanse los párrs. 165 a
171 y 285 supra). Idealmente, los médicos deberían tener acceso a
diagnósticos adicionales
puede producir cambios en los hallazgos físicos y conlleva riesgos
clínicos adicionales; normalmente no debe llevarse a cabo a menos
que se esté considerando un tratamiento quirúrgico concurrente en
el área. Los médicos deben ser conscientes de que la formación de
cicatrices en los niños puede ser diferente a la de los adultos, ya que
las heridas pueden sanar más rápido. Las lesiones óseas,
dependiendo de su posición en relación con la placa de crecimiento,
pueden no ser evidentes en las radiografías iniciales o meses
después de que se haya curado una fractura.
Las técnicas radiológicas deben utilizarse de forma escrupulosa
en niños dada la ansiedad que pueden producir y las posibles
secuelas de las radiaciones infantiles.

444 Organización Mundial de la Salud, Cómo usar la CIF: un manual práctico para usar la Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud – Proyecto de Norma para
Comentario (Ginebra, 2013).
445 Las plantillas de puntuación se pueden obtener en: www.who.int/classifications/icf/more_whodas/en.
446 La Convención sobre los Derechos del Niño, art. 39, estipula que: “Los Estados Partes tomarán todas las medidas apropiadas para promover la recuperación física y psicológica y la
reintegración social de un niño víctima de: cualquier forma de abandono, explotación o abuso; tortura o cualquier otra forma de trato o pena cruel, inhumano o degradante; o conflictos
armados. Dicha recuperación y reintegración se llevarán a cabo en un entorno que fomente la salud, el respeto por sí mismo y la dignidad del niño”.

114
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Pruebas
psicológicas
de tortura y
malos tratos
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

A. Consideraciones generales es un medio para atacar los modos fundamentales de

1. Papel central de la evaluación psicológica
491. Es opinión generalizada que la tortura es una experiencia vital
extraordinaria capaz de causar una amplia gama de sufrimientos
físicos y psicológicos. La investigación y la experiencia clínica han
demostrado que las secuelas psicológicas de la tortura suelen ser
más persistentes y prolongadas que las secuelas físicas447 y la
documentación de la tortura suele tener lugar cuando las lesiones
físicas ya han desaparecido.
Estas circunstancias confieren a la evaluación psicológica un
papel central para evidenciar la tortura, responsabilizar a los
perpetradores y reclamar reparación. La mayoría de los médicos
e investigadores están de acuerdo en que la naturaleza extrema
de la tortura es lo suficientemente poderosa por sí sola para
producir consecuencias mentales y emocionales,
funcionamiento psicológico y social de un individuo.
En tales circunstancias, el torturador se esfuerza no solo por
incapacitar físicamente a la víctima, sino también por
desintegrar la personalidad del individuo.449 El torturador
intenta destruir el sentido de la víctima de estar arraigado en
una familia y sociedad como un ser humano con sueños,
esperanzas y aspiraciones de el futuro. Al deshumanizar y
quebrantar la voluntad de sus víctimas, los torturadores ofrecen
una terrible advertencia para aquellos que luego entran en
contacto con la víctima. De esta forma, la tortura puede
quebrantar o dañar la voluntad y la coherencia de comunidades
enteras. Además, la tortura puede dañar profundamente las
relaciones íntimas entre cónyuges, padres, hijos, otros miembros
de la familia y entre las víctimas y sus comunidades.
493. Es importante reconocer que no todas las personas que han sido torturadas

independientemente del estado psicológico del individuo antes de desarrollan una enfermedad mental diagnosticable.450

la tortura. Las consecuencias psicológicas de la tortura, sin
embargo, varían según la naturaleza del daño infligido y el contexto
de atribución personal de significado, desarrollo de la personalidad
y factores sociales, políticos y culturales. Por esta razón, no se
puede suponer que todas las formas de tortura tienen el mismo
consecuencias en cada individuo. Por ejemplo, las
consecuencias psicológicas de un simulacro de ejecución no
son las mismas que las debidas a una agresión sexual, y es
poco probable que el confinamiento solitario y el aislamiento
produzcan los mismos efectos que los actos físicos de tortura.
Asimismo, los efectos de la detención y la tortura en un adulto
generalmente no serán los mismos que en un niño.
Sin embargo, hay grupos de síntomas y reacciones
psicológicas que se han observado y documentado en
sobrevivientes de tortura con cierta regularidad.
492. Los perpetradores a menudo intentan justificar sus actos
de tortura o malos tratos por la necesidad de recabar
información. Tales conceptualizaciones oscurecen el
propósito de la tortura y sus consecuencias previstas.
Uno de los objetivos centrales de la tortura es reducir una
individuo a una posición de extrema indefensión y angustia
que puede conducir a un deterioro de las funciones cognitivas,
emocionales y conductuales.448 Por lo tanto, la tortura
Sin embargo, la mayoría de las víctimas experimentan reacciones
emocionales profundas y síntomas psicológicos que a menudo
también incluyen cambios cognitivos y conductuales graves.
Los principales trastornos psiquiátricos asociados con la tortura
son el TEPT y la depresión. Si bien estos trastornos están
presentes en la población general, su prevalencia, aunque varía
entre los estudios, es mucho mayor entre los sobrevivientes de
tortura. Los estudios epidemiológicos con sobrevivientes de tortura
y refugiados muestran tasas de prevalencia de 23 a 88 por ciento
para TEPT y de 28 a 95 por ciento para depresión.451 La alta
variabilidad entre estudios probablemente se deba a diferentes
muestras de población (incluidos estudios con sobrevivientes de
tortura que buscan tratamiento), diferentes métodos de evaluación,
factores estresantes coexistentes y otros factores. Sin embargo,
las implicaciones culturales, sociales y políticas únicas que tiene
la tortura para cada individuo influyen en la capacidad de esa
persona para describirla y hablar sobre ella. Dichos efectos en la
capacidad de la víctima para dar sentido y describir la experiencia
de la tortura deben ser considerados especialmente cuando se
realiza una evaluación de un individuo de otra cultura.
La investigación transcultural revela que los métodos
fenomenológicos o descriptivos son los enfoques más útiles
cuando se intenta evaluar trastornos psicológicos o psiquiátricos.
Lo que se considera desordenado

447 José Quiroga y James M. Jaranson, “La tortura por motivos políticos y sus sobrevivientes. Una revisión documental de la literatura”, Torture, vol. 15, núm. 2–3 (2005).
448 José A. Saporta y Bessel A. van der Kolk, “Consecuencias psicobiológicas del trauma severo”, en Torture and its Consequences: Current Treatment Approaches, Metin
Baÿoÿlu, ed. (Cambridge, Reino Unido, Cambridge University Press, 1998), págs. 151–181.
449 Almerindo E. Ojeda, ed., El trauma de la tortura psicológica (Westport, Praeger, 2008); y Pau Pérez-Sales, Tortura Psicológica: Definición, Evaluación y Medición
(Routledge, 2016).
450 Debe tenerse en cuenta que la calificación de un acto como tortura no depende de la existencia de daño mental prolongado posterior. Véase, a este respecto, Manfred
Nowak, “¿Qué prácticas constituyen tortura?: Estándares de EE. UU. y la ONU”, Human Rights Quarterly, vol. 28, núm. 4 (2006), págs. 809–841.
451 Hiba Abu Suhaiban, Lana Ruvolo Grasser y Arash Javanbakht, “La salud mental de los refugiados y sobrevivientes de la tortura: una revisión crítica de la prevalencia, predictores y
care”, Revista Internacional de Investigación Ambiental y Salud Pública, vol. 16, núm. 13 (2019).

116
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

el comportamiento o una enfermedad en una cultura puede involuntariamente y es probable que afecten o alteren la
no ser visto como patológico en otra.452 capacidad de las víctimas para recordar y presentar lo que han
experimentado, lo que a su vez puede afectar su capacidad para

494. En los últimos años, el diagnóstico de TEPT se ha
aplicado a una gama cada vez más amplia de personas que sufren
el impacto de tipos muy variados de violencia. Sin embargo, la
utilidad de este diagnóstico ha sido cuestionada por muchos
motivos, incluida su aplicabilidad universal. Sin embargo, la
evidencia sugiere que hay altas tasas de PTSD y síntomas
depresivos entre las poblaciones de refugiados traumatizados de
diferentes orígenes étnicos y culturales.453 Un estudio transcultural
de la depresión proporciona información útil.454 Si bien algunos
participar y testificar en diversas formas de procedimientos legales,
incluida la adjudicación relacionada con la investigación de la tortura.
456 La evaluación y la documentación de estas barreras a la
participación plena en los procesos judiciales como consecuencia de
las secuelas de la tortura pueden ayudar a evitar que abogados y
jueces extraigan conclusiones inexactas en los procesos judiciales.457
496. Qué se puede preguntar y documentar de forma segura

síntomas pueden estar presentes en diferentes culturas, es Es variará considerablemente y depende del grado en que se pueda
importante considerar las formas específicas de la cultura de garantizar la confidencialidad y la seguridad.
experimentar, expresar y describir la angustia psicológica para Por ejemplo, un examen en una prisión por un médico visitante que
reconocer y documentar la amplia gama de sufrimiento que puede se limita a 15 minutos no puede seguir

permanecer invisible si el concepto de PTSD se aplica acríticamente.
Tales expresiones de angustia moldeadas por la cultura pueden ser
más relevantes para el sobreviviente que los síntomas del PTSD.
el mismo curso que una evaluación psicológica en un
consultorio privado que puede durar varias horas.
Surgen problemas adicionales cuando se trata de evaluar si
los síntomas psicológicos o los comportamientos son patológicos
o adaptativos. Cuando se examina a una persona mientras está
detenida o viviendo bajo una amenaza u opresión considerable,
algunos síntomas pueden ser adaptativos.

2. Contexto de la evaluación psicológica Por ejemplo, la disminución del interés en las actividades y los
sentimientos de desapego o extrañamiento serían comprensibles

495. Las evaluaciones tienen lugar en una variedad de contextos políticos.
Esto da como resultado diferencias importantes en la forma en
que se debe realizar una evaluación. los
El clínico debe adaptar las siguientes pautas a la situación
particular y al propósito de la evaluación (ver párr. 185 anterior),
manteniendo en cualquier circunstancia los más altos estándares
éticos, tal como se establece en el capítulo II anterior. Las evaluaciones
psicológicas pueden ayudar a identificar condiciones postraumáticas
(por ejemplo, problemas de memoria, flashbacks, evitación y
disociación),455
que puede hacer que las víctimas actúen inconscientemente o
en una persona en confinamiento solitario.
Asimismo, las conductas de hipervigilancia y evitación pueden
ser necesarias para las personas que viven en sociedades
represivas.458 A pesar de las posibles limitaciones impuestas por
las condiciones en las que se lleva a cabo la entrevista, se deben
realizar todos los esfuerzos para cumplir con las pautas del Protocolo
de Estambul. Es especialmente importante en circunstancias difíciles
que los gobiernos y las autoridades involucradas estén
ateniéndose a estos estándares tanto como sea posible.

452 H. Tristram Engelhardt, Jr., “Los conceptos de salud y enfermedad”, en Evaluación y explicación en las ciencias biomédicas, H. Tristram Engelhardt, Jr. y Stuart F. Spicker, eds. (Dordrecht, D.
Reidel Publishing Co., 1975), págs. 125–141. Véase también Joseph Westermeyer, “Diagnóstico psiquiátrico a través de las fronteras culturales”, American Journal of Psychiatry, vol. 142,
núm. 7 (1985), págs. 798–805.
453 Véase Richard F. Mollica y otros, “El efecto del trauma y el confinamiento en la salud funcional y el estado de salud mental de los camboyanos que viven en los campamentos fronterizos entre
Tailandia y Camboya”, Journal of the American Medical Association, vol. 270, núm. 5 (1993), págs. 581 a 586; Kathleen Allden y otros, “Disidentes políticos birmanos en Tailandia: trauma y
supervivencia entre adultos jóvenes en el exilio”, American Journal of Public Health, vol. 86, núm. 11 (1996), págs. 1561–1569; J. David Kinzie y otros, "La prevalencia del trastorno de estrés
postraumático y su importancia clínica entre los refugiados del sudeste asiático", American Journal of Psychiatry, vol. 147, núm. 7 (1990), págs. 913–917.
454 Norman Sartorius, “Investigación intercultural sobre la depresión”, Psicopatología, vol. 19, núm. 2 (1986), págs. 6 a 11.
455 Andrea R. Ashbaugh, Julia Marinos y Brad Bujaki, “El impacto de la depresión y la gravedad de los síntomas del TEPT en la memoria del trauma”, Memory, vol. 26, núm. 1 (2018), págs. 106–116.
456 Karen E. Krinsley y otros, “Consistencia de informes retrospectivos sobre la exposición a eventos traumáticos”, Journal of Traumatic Stress, vol. 16, núm. 4 (2003), págs. 399 y 409; Amina Memon,
“Credibilidad de las solicitudes de asilo: consistencia y precisión de los informes de memoria autobiográfica después del trauma”, Psicología Cognitiva Aplicada, vol. 26, núm. 5 (2012), págs.
677–679; Hannah Rogers, Simone Fox y Jane Herlihy, “La importancia de parecer creíble: el impacto de las secuelas conductuales del trastorno de estrés postraumático en la credibilidad de
los solicitantes de asilo”, Psychology, Crime & Law, vol. 21, núm. 2 (2015), págs. 139–155.
457 Belinda Graham, Jane Herlihy y Chris R. Brewin, “Memoria general en solicitantes de asilo y refugiados”, Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, vol. 45, núm. 3 (2014), págs.
375–380; Urs Hepp y otros, “Incoherencia en la notificación de eventos potencialmente traumáticos”, British Journal of Psychiatry, vol. 188, núm. 3 (2006), págs. 278 a 283; Jane Herlihy, Peter
Scragg y Stuart Turner, “Discrepancias en los recuerdos autobiográficos: implicaciones para la evaluación de los solicitantes de asilo: estudio de entrevistas repetidas”, British Medical Journal,
vol. 324 (2002), págs. 324–327; y Cohen, “Errores de recuerdo y credibilidad” (ver nota al pie 412).
458 Michael A. Simpson, “¿Qué salió mal?: Problemas diagnósticos y éticos al tratar los efectos de la tortura y la represión en Sudáfrica”, en Beyond Trauma: Cultural
y Societal Dynamics, Rolf J. Kleber, Charles R. Figley y Berthold PR Gersons, eds. (Nueva York, Plenum Press, 1995), págs. 187–212.

117
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
B. Consecuencias psicológicas
de la tortura y los malos tratos
1. Observaciones de precaución
497. Antes de entrar en una descripción técnica de
síntomas y clasificaciones psiquiátricas, cabe señalar
que las clasificaciones psiquiátricas generalmente se
consideran basadas en conceptos médicos occidentales y
que su aplicación a poblaciones no occidentales presenta
ciertas dificultades.459 Se puede argumentar que las culturas
occidentales sufren de una medicalización indebida
de los procesos psicologicos. La idea de que el
sufrimiento mental representa un trastorno que reside
en un individuo y presenta un conjunto de síntomas
típicos puede ser inaceptable para muchos miembros
de sociedades no occidentales. No obstante, existe
evidencia considerable de los cambios biológicos que
ocurren en el PTSD y, desde esa perspectiva, el PTSD es
un síndrome diagnosticable susceptible de tratamiento
biológico y psicológico.460 En la medida de lo posible, el
clínico evaluador debe intentar relacionar el sufrimiento mental
en el contexto de las creencias y la cultura del individuo
normas Esto incluye el respeto por el contexto político, así
como por las creencias culturales y religiosas. Dada la
gravedad de la tortura y sus consecuencias, al realizar una
evaluación psicológica se debe adoptar una actitud de
aprendizaje informado en lugar de apresurarse a diagnosticar
y clasificar. Idealmente, esta actitud comunicará a las
víctimas que su
las quejas y el sufrimiento se están reconociendo
como reales y comprensibles bajo las circunstancias. En
En este sentido, una actitud empática puede ofrecer a la
víctima algún alivio de la experiencia de alienación.
498. En la mayoría de los casos, la intensidad del trauma relacionado
los síntomas psicológicos cambian con el tiempo según el
procesamiento del trauma personal, la efectividad de las
estrategias de afrontamiento disponibles y los factores
externos. Puede haber síntomas por debajo del umbral en el
momento de la evaluación o informados por fases desde el
evento traumático que no equivalen a un trastorno mental
diagnosticable. La expresión de angustia puede estar
matizada o mediada por la cultura y el contexto social, por
ejemplo, según la experiencia de vergüenza, el miedo a las
represalias y el miedo a un mayor estigma o aislamiento
dentro de la familia o la comunidad. Es importante reconocer
que la ausencia de un diagnóstico formal no
459 Derek Summerfield, “La invención del trastorno de estrés postraumático y la utilidad social de una categoría psiquiátrica”, British Medical Journal, vol. 322 (2001), págs. 95 a 98; y
Nimisha Patel, “La psicologización de la tortura”, en Desmedicalizando la miseria: psiquiatría, psicología y la condición humana, Mark Rapley, Joanna Moncrieff y Jacqui Dillon,
eds. (Londres, Palgrave Macmillan, 2011), págs. 239–255.
460 Matthew Friedman y James Jaranson, “La aplicabilidad del concepto de trastorno de estrés postraumático a los refugiados”, en En medio del peligro y el dolor: la salud mental y el
bienestar de los refugiados del mundo, Anthony J. Marsella y otros, eds. (Washington, DC, Asociación Americana de Psicología, 1994), págs. 207–227.
118
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
no excluye la presencia de sufrimiento psíquico grave y
discapacidad y no es incompatible con la tortura o los
malos tratos que hayan tenido lugar. La evaluación
psicológica debe apuntar a alcanzar una comprensión de
las múltiples reacciones psicológicas, psicosomáticas y
psicosociales a corto y largo plazo, más allá y no limitada a
una posible clasificación psiquiátrica.
2. Respuestas psicológicas comunes
499. Esta sección describe algunas de las respuestas psicológicas
frecuentes a la tortura. No pretende ser una lista exhaustiva, ya que también
pueden ocurrir otras reacciones.
(a) Volver a experimentar el trauma
500. Una persona que ha sufrido tortura puede haber
recuerdos intrusivos no deseados o flashbacks, en los que
el evento traumático se experimenta como si volviera a
ocurrir, incluso cuando la persona está despierta y
consciente, o pesadillas recurrentes, que incluyen elementos
del evento traumático en su forma original o simbólica.
Dichos episodios de revivir el evento traumático causan una
angustia emocional significativa y/o reacciones fisiológicas
y la persona puede sentir o actuar como si el evento fuera
recurrente. La persona también puede experimentar angustia
emocional y reacciones fisiológicas al exponerse a señales
que simbolizan o se asemejan al trauma. Esto puede incluir
la falta de confianza y el temor de las personas con
autoridad, incluidos los profesionales de la salud, ya que
pueden evocar recuerdos de la tortura experimentada y sus
perpetradores.
(b) Evitación
501. Dado que los recuerdos de la tortura suelen ir acompañados de una grave
angustia emocional, a menudo experimentada como abrumadora e
incontrolable, los supervivientes pueden evitar las circunstancias o las
señales que probablemente desencadenen estos recuerdos. La evitación
puede incluir lugares, personas, actividades, conversaciones, pensamientos,
sentimientos o cualquier otra señal que despierte un recuerdo de tortura.
La evasión puede limitar seriamente la capacidad de los sobrevivientes
para participar en actividades diarias e interacciones sociales y seguir
planes y proyectos. Incluso puede llevar a los sobrevivientes a evitar
buscar ayuda para sus síntomas y, por lo tanto, inhibir el tratamiento o la
terapia.
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(c) Hiperexcitación
502. La hiperexcitación incluye:
(a) Dificultad para conciliar o permanecer dormido;
(b) Irritabilidad o arrebatos de ira;
(c) Dificultad para concentrarse;
(d) Hipervigilancia, respuesta de sobresalto exagerada.
(d) Autoconcepto dañado y cambios negativos
en la cognición y el estado de ánimo
503. Para muchos sobrevivientes, la experiencia de la tortura marca una
ruptura profunda en sus vidas. Tienen la sensación subjetiva de
haber sufrido un daño irreparable y de haber sufrido un cambio de
personalidad irreversible461, creyendo a menudo que nunca
volverán a ser la misma persona. Las creencias y suposiciones
demasiado negativas sobre uno mismo y el mundo (desconfianza,
expectativas de que suceda lo peor, desesperanza y culpa de uno
mismo y de los demás por causar el trauma) caracterizan con
frecuencia la relación con el entorno.
Los sentimientos de desapego de los demás afectan aún
más las relaciones y también pueden llevar al retraimiento social
y al aislamiento. Los sobrevivientes tienen una sensación de escorzo
futuro sin expectativas de una carrera, matrimonio, hijos o
una vida normal. Las dificultades para experimentar sentimientos
positivos, como la felicidad o el amor, y/o el predominio de
emociones negativas (p. ej., miedo, horror, ira, culpa y vergüenza),
así como la constricción emocional general, también son comunes
entre los sobrevivientes de tortura.
e) Sentimientos de culpa y vergüenza
504. La culpa y la vergüenza son emociones autoconscientes.
La vergüenza es causada por una creencia interna de
inadecuación, indignidad, deshonor o arrepentimiento, de la que
otros pueden o no ser conscientes. Otra persona, un fracaso o
una circunstancia particular pueden desencadenar la vergüenza.
La culpa es una experiencia cognitiva o emocional que
ocurre cuando las personas creen o se dan cuenta, con
certeza o no, de que han transgredido sus propias normas de
conducta o violado un principio universal.
estándar moral y tienen una responsabilidad significativa por esa
violación. Está íntimamente relacionado con el concepto de
remordimiento. Dado que los sentimientos de culpa y vergüenza
pueden llevar a la conclusión de que todo el ser es defectuoso, malo
461 Neal R. Holtan, “Cómo se relaciona la evaluación médica de las víctimas de la tortura con la atención psiquiátrica”, en Caring for Victims of Torture, James M. Jaranson y Michael K. Popkin, eds.
(Washington, DC, American Psychiatric Press, 1998), págs. 107–113.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
o sujeto a exclusión, hace que los individuos quieran retirarse
o esconderse. Violencia sexual
particularmente provoca sentimientos de vergüenza y culpa.
(f) Síntomas de depresión
505. Pueden presentarse los siguientes síntomas de depresión: estado de
ánimo deprimido, anhedonia (disminución notable del interés o el
placer por las actividades), alteración del apetito o pérdida de peso,
insomnio o hipersomnia, agitación o retraso psicomotor, fatiga y
pérdida de energía, sentimientos de inutilidad y culpa excesiva,
dificultad para prestar atención, concentrarse o recordar de la
memoria, pensamientos de muerte y morir, ideación suicida o intento
de suicidio. La evaluación del riesgo de suicidio es fundamental, y
los médicos deben tener en cuenta que algunas personas no
admitirán fácilmente tales comportamientos y pensamientos, ya que
pueden verse como un signo de debilidad y, a menudo, son
estigmatizados. La exploración del comportamiento de autolesión
puede conducir a la revelación adicional de tortura, como la tortura
sexual, no revelada anteriormente.
g) Disociación, despersonalización y
comportamiento atípico
506. La disociación es una ruptura en la integración de
conciencia, autopercepción, memoria y acciones.
Los individuos pueden estar aislados o inconscientes de
ciertas acciones y pueden sentirse separados de sí mismos
o de sus cuerpos como si se observaran a sí mismos desde la
distancia (despersonalización). La desrealización describe la
experiencia subjetiva de la irrealidad o distorsión del mundo o
entorno exterior. Disociativo
Los fenómenos pueden estar presentes durante eventos
traumáticos como resultado del estrés físico y psicológico
extremo, lo que lleva a cambios en la percepción y procesamiento
de la información con un sentimiento de distancia y desapego
del evento traumático y el
emociones que lo acompañan. Ciertas impresiones sensoriales
no se registran mientras que otras pueden percibirse con mucha
intensidad. La disociación peritraumática, así como la represión y
la evitación de los recuerdos traumáticos, pueden generar
recuerdos incompletos o fragmentados del evento traumático y
pueden impedir una narración coherente y completa del mismo.
La disociación también puede ocurrir cuando la víctima se enfrenta
a la
evento traumático durante la evaluación. En este caso, los
individuos frecuentemente parecen estar distantes,
desconectados de sus emociones, mostrando indiferencia u
otros estados emocionales incongruentes con el trauma.
119
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
narrativo. Los sobrevivientes también pueden exhibir problemas
de control de impulsos que resultan en comportamientos que
consideran muy atípicos con respecto a su personalidad previa al
trauma. Por ejemplo, una persona previamente cautelosa puede
involucrarse en un comportamiento de alto riesgo.
(h) Molestias físicas (síntomas somáticos)
507. El dolor, los dolores de cabeza u otras molestias físicas, con
o sin hallazgos físicos objetivos, son problemas comunes
entre los sobrevivientes de tortura. El dolor puede ser la única
queja manifiesta y puede cambiar de ubicación y variar en
intensidad. Los síntomas somáticos pueden deberse
directamente a las consecuencias físicas de la tortura o tener
un origen psicológico. Por ejemplo, el dolor de todo tipo puede
ser una consecuencia física directa de la tortura o tener un
origen psicológico. Las quejas somáticas típicas incluyen
dolor de espalda, dolor musculoesquelético y dolores de
cabeza. Los dolores de cabeza son muy comunes entre los
sobrevivientes de la tortura y pueden deberse a lesiones
infligidas por la tortura (las lesiones en la cabeza y el cuello
son una parte común de la tortura), además de ser causados
o exacerbados por patrones de sueño deficientes, estrés y ansiedad.
(i) Problemas sexuales
508. La disfunción sexual es común entre los supervivientes
de la tortura, en particular entre los que han sufrido
tortura sexual o violación, pero no exclusivamente (véase el
párr. 470 supra). Los problemas sexuales incluyen interés/
excitación/deseo sexual reducidos o ausentes, disfunción
eréctil, dolor genito-pélvico, relaciones sexuales dolorosas,
repugnancia o miedo a la intimidad y la participación sexual,
recuerdos y disociación provocados por las relaciones
sexuales y preocupaciones relacionadas con la orientación
sexual, la identidad de género y Fertilidad. La violencia sexual
también puede conducir a comportamientos arriesgados,
autodestructivos o imprudentes. Hablar de problemas sexuales
suele ser difícil debido a sentimientos de inutilidad, vergüenza
y culpa, y además se ve obstaculizado por tabúes culturales,
religiosos o de género. Si el perpetrador era hombre, la ansiedad
de los hombres es un síntoma frecuente. Para los sobrevivientes
masculinos, el sentimiento de humillación después de la tortura
sexual suele ser particularmente profundo y también pueden
experimentar una crisis de identidad sexual (es decir,
preocupaciones sobre ser homosexuales después de haber sido
violados). A menudo se sienten débiles, no lo suficientemente
fuertes para defenderse, más que como víctimas.
Para los hombres, por lo tanto, a menudo es extremadamente
difícil revelar su experiencia con la violencia sexual.
120
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(j) Síntomas psicóticos
509. Las diferencias culturales y lingüísticas, así como los flashbacks y
las ansiedades, pueden provocar una mala interpretación de los
síntomas psicóticos. Antes de diagnosticar a alguien como psicótico
(que sufre de un trastorno mental caracterizado por una percepción
o procesamiento distorsionado de la realidad), los síntomas deben
evaluarse dentro del contexto cultural único del individuo. Las
reacciones psicóticas pueden ser breves o prolongadas, y los
síntomas pueden ocurrir mientras la persona es detenida y
torturada o después. Los siguientes hallazgos son posibles:
(a) Delirios;
(b) Alucinaciones auditivas,
visuales, táctiles y olfativas;
(c) Ideación y comportamiento extraños;
(d) Ilusiones o distorsiones perceptivas que pueden tomar la
forma de pseudo-alucinaciones y rayan en verdaderos estados
psicóticos. Las percepciones falsas y las alucinaciones que
ocurren al dormirse o al despertar son comunes entre la población
general y no denotan psicosis. No es raro que las víctimas de
tortura informen que ocasionalmente escuchan gritos, que las
llaman por su nombre o que ven sombras, pero que no tienen
signos o síntomas floridos de psicosis. Además, algunos
sobrevivientes informan síntomas disociativos que pueden
confundirse con psicosis, como sentir que el entorno físico no es
real o que su cuerpo está alterado o desconectado. Experiencias
perceptivas vívidas pueden ocurrir durante un episodio disociativo.
Las alucinaciones también pueden ocurrir en el contexto de una
pérdida traumática. Es importante indagar sobre el origen y la
comprensión de los síntomas por parte de la persona. Muchos
sobrevivientes reconocen que estas experiencias no son lo que
otras personas perciben y que emanan de su propia mentalidad.
Esta distinción puede ayudar a distinguir los fenómenos disociativos
de los psicóticos en los que los individuos creen que los demás
ven las distorsiones en
la realidad como ellos. La distinción entre un flashback y las
alucinaciones puede no ser fácil de establecer durante la experiencia,
pero el individuo disociado puede reconocer más tarde que la
experiencia no representa la realidad actual;
e) Paranoia y delirio de persecución. Como la
persecución, el acoso y las hostilidades pueden ser una realidad
para los sobrevivientes de tortura, los médicos deben tener
especial cuidado de no confundir estas situaciones reales con
paranoia y delirios de persecución;
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(f) Recurrencia de trastornos psicóticos o trastornos del estado de ánimo con
características psicóticas entre quienes tienen antecedentes de enfermedad
mental. Las personas con antecedentes de trastorno bipolar, depresión mayor
recurrente con características psicóticas, esquizofrenia y trastorno esquizoafectivo
pueden experimentar un episodio de ese trastorno como resultado del estrés
extremo de la tortura.
(k) Abuso de sustancias
510. El uso indebido de alcohol y drogas, incluido el uso indebido de
medicamentos recetados (por ejemplo, sedantes, hipnóticos y
analgésicos), a menudo se desarrolla de manera secundaria en los
sobrevivientes de tortura como una forma de borrar recuerdos
traumáticos, regular el afecto y controlar la ansiedad, el dolor y los
problemas para dormir.
(l) Deterioro neuropsicológico y neurocognitivo
511. Las alteraciones extensas en los procesos cognitivos pueden ser
Se encuentra en personas que han estado expuestas a una
exposición dramática o continua a situaciones que amenazan la
vida, como la tortura, y que desarrollan PTSD. No están
necesariamente relacionados con lesiones cerebrales y también
se pueden encontrar en personas que se han visto obligadas a
presenciar actos de violencia perpetrados contra otras personas.
Pueden incluir cambios en las funciones de la memoria, la
atención, el procesamiento de la información, la planificación y
la resolución de problemas. También se sabe que los métodos
de tortura, como el aislamiento o la privación del sueño y los
sentidos, causan un deterioro cognitivo grave, incluso en las
áreas de la memoria, el aprendizaje, el razonamiento lógico, el
procesamiento verbal complejo y la toma de decisiones.462 Por
otra parte, la tortura puede causar un trauma físico que conduce
a varios niveles de deterioro cerebral. Los golpes en la cabeza,
la asfixia y la desnutrición prolongada pueden tener consecuencias
neurológicas y neuropsicológicas a largo plazo que pueden no
evaluarse fácilmente durante el transcurso de un examen médico.
El diagnóstico de una lesión cerebral traumática contusa es
especialmente desafiante e incluso una resonancia magnética
del cerebro realizada correctamente puede arrojar resultados
negativos. Los síntomas de una lesión cerebral traumática
contusa incluyen dolores de cabeza, confusión o desorientación,
problemas de concentración o de memoria, irritabilidad,
inestabilidad emocional y trastornos del sueño.
Como en todos los casos de deterioro cerebral que no se
puede documentar a través de imágenes de la cabeza u otros
462 Médicos por los derechos humanos, Romperlos: uso sistemático de la tortura psicológica por parte de las fuerzas estadounidenses (Cambridge, Massachusetts, 2005).
463 La ICD-11 fue adoptada por la Asamblea Mundial de la Salud en mayo de 2019 y entró en vigencia el 1 de enero de 2022. Los médicos siempre deben consultar la última edición actualmente
en uso en la región específica. Véase www.who.int/classifications/classification-of-diseases.
464 Asociación Americana de Psiquiatría, Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales: DSM-5, 5ª ed. (Washington, DC, 2013).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
procedimientos, un diagnóstico podría tener que basarse en
un perfil de síntomas clínicos y la evaluación y las pruebas
neuropsicológicas pueden ser la única forma confiable de
documentar los efectos. Con frecuencia, los síntomas objetivo
de tales evaluaciones tienen una superposición significativa
con la sintomatología que surge del TEPT y el trastorno
depresivo descrito anteriormente.
Por lo tanto, las habilidades especializadas en evaluación
neuropsicológica y el conocimiento de los problemas en la
validación transcultural de instrumentos neuropsicológicos son
necesarios cuando tales distinciones y diagnósticos son pertinentes
(véanse los párrafos 550 a 565 infra).
3. Clasificaciones diagnósticas
512. Si bien las quejas principales y los hallazgos más destacados entre los
sobrevivientes de la tortura son muy diversos y se relacionan con sus
experiencias de vida únicas, los mecanismos de afrontamiento y el
contexto cultural, social y político en el que viven, es aconsejable que
los evaluadores se familiaricen con los más importantes. trastornos
comúnmente diagnosticados entre los sobrevivientes de trauma y tortura.
Además, es más común que no haya más de un trastorno mental
presente, ya que existe una comorbilidad considerable entre los trastornos
mentales relacionados con el trauma. Diversas manifestaciones de
la depresión, la ansiedad y los síndromes relacionados con
el trauma son las consecuencias más comunes de la tortura.
Los dos sistemas de clasificación más aceptados son la
Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y
Problemas de Salud Relacionados (ICD), elaborado por la
Organización Mundial de la Salud,463 y el Manual Diagnóstico
y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM),464 elaborado
por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría. . Las versiones
actuales de ICD y DSM son ampliamente compatibles, pero
persisten diferencias significativas, lo que puede dar lugar a
diagnósticos diferentes. Ambos manuales se revisan
periódicamente y las nuevas ediciones reflejan nuevos datos de
investigación y desarrollos conceptuales. Esta revisión se centrará
en los diagnósticos más comunes relacionados con el trauma:
depresión y TEPT. Para obtener descripciones completas de las
categorías de diagnóstico, el lector debe consultar ICD-10/11 y
DSM-5, que son las últimas ediciones actualmente en uso.
121
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(a) Trastornos depresivos
513. Los estados depresivos son extremadamente comunes entre
los sobrevivientes de tortura. En el contexto de la evaluación
de las consecuencias de la tortura, es problemático suponer que
el TEPT y el trastorno depresivo son dos trastornos separados con
etiologías claramente distinguibles.
Hay una superposición significativa de síntomas y la
comorbilidad entre la depresión y el PTSD es alta. Los
trastornos depresivos pueden manifestarse como un episodio
único o recurrente que puede variar en severidad (leve,
moderado o severo). Los síntomas depresivos causan una
angustia significativa o un deterioro social, laboral u otras
áreas importantes del funcionamiento.
Los trastornos depresivos pueden presentarse con o sin
características psicóticas, catatónicas, melancólicas o atípicas.
Los síntomas clave de los trastornos depresivos son:
(a) Estado de ánimo deprimido (triste, irritable, vacío);
(b) Interés o placer marcadamente disminuidos en todas o casi
todas las actividades;
(c) pérdida/ganancia de peso o disminución/aumento del apetito;
(d) Insomnio o hipersomnia;
(e) Enlentecimiento observable del pensamiento y reducción del
movimiento físico;
(f) fatiga o energía reducida;
(g) Sentimientos de inutilidad o culpa excesiva o
inapropiada;
(h) Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse
o indecisión;
(i) Pensamientos recurrentes de muerte, ideación suicida
recurrente o intento de suicidio o plan específico para suicidarse.
(b) Trastorno de estrés postraumático
514. El diagnóstico más comúnmente asociado con las consecuencias
psicológicas de la tortura es el TEPT.
La asociación entre la tortura y este diagnóstico se ha vuelto
muy fuerte en la mente de los proveedores de salud, los
jueces, los tribunales de inmigración y el público lego
informado. Esto ha creado la impresión errónea y simplista
de que el TEPT es la principal e inevitable consecuencia
psicológica de la tortura.
122
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
515. El DSM-5 clasifica el PTSD en la categoría de "trastornos relacionados
con traumas y estrés". Para diagnosticar TEPT, la persona debe
haber estado directa o indirectamente expuesta a la muerte, eventos
que amenazan la vida, lesiones graves o violencia sexual. Esta
definición de trauma subraya la gravedad del evento y marca una
clara diferencia entre otras
factores estresantes, por ejemplo, la inseguridad
general. Se distinguen cuatro grupos principales de síntomas:
(a) Síntomas intrusivos: recuerdos perturbadores no
deseados, pesadillas, escenas retrospectivas, angustia emocional o
reacciones fisiológicas después de la exposición a estímulos
relacionados con el trauma;
(b) Evitación de estímulos relacionados con el trauma: recuerdos,
pensamientos, sentimientos y recordatorios externos, como
lugares o personas;
(c) Cambios negativos en las cogniciones y el estado de ánimo:
incapacidad para recordar aspectos importantes del trauma,
pensamientos y suposiciones excesivamente negativos persistentes
sobre uno mismo y el mundo, culpa exagerada de sí mismo y de los
demás por causar el trauma, afecto negativo (por ejemplo, miedo,
vergüenza y culpa), pérdida de interés, sentimientos de aislamiento y
desapego y dificultades para experimentar afecto positivo;
(d) Alteraciones en la excitación y reactividad: irritabilidad y arrebatos
de ira, comportamiento de riesgo o destructivo.
516. El diagnóstico requiere que los síntomas duren
por lo menos un mes y la perturbación debe causar
malestar significativo o deterioro en áreas importantes de
funcionamiento. El DSM-5 también describe un subtipo
disociativo de PTSD que incluye experiencia adicional de altos
niveles de despersonalización y desrealización.
517. La CIE-11 distingue entre TEPT y TEPT complejo. El TEPT
complejo incluye los síntomas centrales de reexperimentación,
evitación e hiperexcitación, así como alteraciones persistentes y
amplias del funcionamiento afectivo (desregulación emocional,
reactividad emocional elevada, arrebatos agresivos, estados
disociativos), percepción de sí mismo (autopercepción negativa y
sentimientos de vergüenza y culpa) y funcionamiento social
(dificultades para mantener relaciones sociales y dificultades para
sentirse cercano a los demás). El concepto de TEPT Complejo
es capaz de capturar sintomatologías complejas que afectan
profundamente la capacidad de la víctima para integrarse y
funcionar en las relaciones sociales, responder a los requerimientos
de la vida diaria y llevar una vida plena.
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

518. El inicio de los síntomas del PTSD suele estar dentro los síntomas persistentes de TEPT o depresión no se presentan en

el primer mes después de la experiencia de la tortura, pero también el momento de la evaluación psicológica, pero los síntomas descritos

puede haber un retraso de meses o años antes de que los síntomas para el período peritraumático o postraumático temprano pueden, desde

comiencen a aparecer. Los síntomas del PTSD pueden ser crónicos o un punto de vista clínico, ser consistentes con la supuesta tortura.

fluctuar durante largos períodos de tiempo.

Durante algunos intervalos, los síntomas de hiperexcitación e

irritabilidad pueden dominar el cuadro clínico. (d) Trastorno por uso de sustancias
En estos momentos, el sobreviviente generalmente también informará

un aumento de los recuerdos intrusivos, las pesadillas y los 520. Los médicos han observado que el trastorno por uso de sustancias

flashbacks. En otras ocasiones, el sobreviviente puede parecer a menudo se desarrolla de forma secundaria en los supervivientes

relativamente asintomático o emocionalmente restringido y retraído. de la tortura como una forma de suprimir los recuerdos traumáticos,
Comportamiento de evitación consistente regular los efectos desagradables, controlar la ansiedad y el dolor crónico

a veces no es fácil de detectar, pero puede resultar en niveles bajos de o mitigar los trastornos del sueño (automedicación).

síntomas intrusivos. Los estresores externos, la ruptura de los Los sobrevivientes de trauma a menudo presentan comorbilidad de

mecanismos individuales de afrontamiento y la pérdida de apoyo social PTSD y trastorno por uso de sustancias.466 Los hallazgos de grandes

se encuentran entre los factores que influyen en el curso del trastorno estudios epidemiológicos mostraron que entre un tercio (34 por ciento)

y su posible agravamiento. Por otro lado, el apoyo social, las estrategias 467 y casi la mitad (46 por ciento) 468 de las personas con PTSD también

individuales de afrontamiento, el compromiso ideológico o religioso, la cumplían los criterios de abuso de sustancias. trastorno por consumo de

justicia y el reconocimiento oficial de responsabilidad pueden contribuir alcohol, principalmente consumo de alcohol, y que más del 20 por ciento

a un proceso de recuperación. cumplía con los criterios de dependencia de sustancias.

En resumen, existe evidencia considerable de otras poblaciones

en riesgo de PTSD de que el trastorno por uso de sustancias es

(c) Trastorno de estrés agudo un posible diagnóstico comórbido para los sobrevivientes de tortura.

Esta comorbilidad parece estar relacionada con el género, más a

519. Trastorno de estrés agudo (DSM-5)465 capturas post menudo en hombres que en mujeres.469

síntomas traumáticos que pueden comenzar inmediatamente después de También existe una comorbilidad entre el trastorno por uso de

la exposición al trauma pero que no persisten más de un mes. Tiene sustancias y el dolor crónico, ya que los sobrevivientes de tortura a

esencialmente los mismos síntomas que el PTSD de cualquiera de las menudo tienen un dolor crónico que es difícil de tratar.

categorías de intrusión, estado de ánimo negativo, disociación, evitación y

excitación, siendo a menudo predominantes los síntomas disociativos. En (e) Otros diagnósticos
contraste con el PTSD, que requiere que los síntomas estén presentes

durante al menos un mes, los síntomas del trastorno de estrés agudo 521. Hay otros diagnósticos a considerar además de los
desaparecen dentro del primer mes después de la exposición al trauma. descritos anteriormente.
Estos incluyen pero no se limitan a:

Muchos sobrevivientes de tortura que no presentan PTSD en una etapa

posterior, sin embargo, reportarán síntomas que equivalen a un
trastorno de estrés agudo durante las primeras semanas después de la tortura.
ha tenido lugar la tortura. Los médicos que evalúan a los supervivientes
de la tortura poco después de que ésta haya tenido lugar deben, por lo
tanto, preguntar explícitamente acerca de tales síntomas. Además, al
evaluar meses o años después de los hechos traumáticos alegados, se
debe preguntar sobre la evolución de los síntomas a lo largo del tiempo,
así como eventuales síntomas peritraumáticos y síntomas que pudieran
haber ocurrido en el período inmediatamente posterior a la tortura.
Algunas veces
(a) Trastornos de ansiedad: (i) el trastorno de ansiedad
generalizada se caracteriza por una ansiedad excesiva y
preocupación por una variedad de eventos o actividades diferentes,
tensión motora y aumento de la actividad autonómica; (ii) el
trastorno de pánico se manifiesta por ataques recurrentes e
inesperados de miedo o incomodidad intensos, incluidos síntomas
como sudoración, asfixia, temblores, frecuencia cardíaca acelerada,
mareos, náuseas, escalofríos o sofocos; y (iii) fobias, como fobia
social, agorafobia o claustrofobia;

465 En la CIE-11, la categoría de “trastorno de estrés agudo” se modificó por “reacción de estrés agudo”. Ya no es una categoría diagnóstica, sino una reacción no patológica en la que los
síntomas surgen después del trauma en algunas horas o días y desaparecen en una semana.
466 Jenna L. McCauley y otros, “Trastorno de estrés postraumático y trastornos concurrentes por uso de sustancias: avances en evaluación y tratamiento”, Psicología clínica: ciencia y práctica,
vol. 19, núm. 3 (2012), págs. 283–304.
467 Katherine L. Mills y otros, “Trauma, TEPT y trastornos por uso de sustancias: hallazgos de la Encuesta Nacional Australiana de Salud Mental y Bienestar”, American Journal
de Psiquiatría, vol. 163, núm. 4 (2006), págs. 652–658.
468 Robert H. Pietrzak y otros, “Prevalencia y comorbilidad del eje I del trastorno de estrés postraumático total y parcial en los Estados Unidos: resultados de la ola 2 de la Encuesta
epidemiológica nacional sobre el alcohol y condiciones relacionadas”, Revista de trastornos de ansiedad, vol. 25, núm. 3 (2011), págs. 456–465.
469 Marianne Kastrup y Libby Arcel, “Tratamiento específico de género de los refugiados con PTSD”, en Broken Spirits: the Treatment of Traumatized Asylum Seekers, Refugees and War
y Torture Victims, John P. Wilson y Boris Drozdek, eds. (Nueva York, Routledge, 2005), págs. 547–571.

123
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(b) Trastornos disociativos, que se caracterizan por una pérdida
parcial o total de la integración normal entre los recuerdos del pasado,
la conciencia de identidad, las sensaciones inmediatas y el control de los
movimientos corporales. La capacidad de control voluntario y consciente
de los movimientos y la atención parece estar distorsionada y puede
cambiar en cortos períodos de tiempo;
(c) Trastornos de síntomas somáticos, caracterizados por
síntomas somáticos, acompañados de pensamientos, sentimientos
y comportamientos excesivos y desproporcionados y gran angustia o
alteración significativa del funcionamiento.
Los síntomas pueden o no estar asociados con una
condición médica. En ICD-11 esto se clasifica como trastorno
de angustia corporal;
(d) Trastorno bipolar caracterizado por episodios maníacos o
hipomaníacos con estado de ánimo elevado, expansivo o irritable,
grandiosidad, disminución de la necesidad de dormir, fuga de ideas,
agitación psicomotora y fenómenos psicóticos asociados;
(e) Trastornos debidos a una condición médica general (p. ej., lesión
cerebral traumática) a menudo en forma de deterioro cerebral con
fluctuaciones o déficits resultantes en el nivel de conciencia,
orientación, atención, concentración, memoria y funcionamiento
ejecutivo;
f) Trastornos psicóticos, ya sea como primera manifestación o
exacerbación después de la tortura;
g) Disfunción sexual.
522. También debe tenerse en cuenta que los trastornos previos a la tortura
no específicos de la tortura (por ejemplo, episodios depresivos
recurrentes) pueden empeorar o reaparecer como resultado de la tortura.
C. Evaluación psicológica/
psiquiátrica
1. Consideraciones éticas y clínicas
523. Las evaluaciones psicológicas pueden proporcionar evidencia
crítica de abuso entre víctimas de tortura por varias razones:
la tortura a menudo causa síntomas psicológicos devastadores;
los métodos de tortura a menudo están diseñados para no dejar
lesiones físicas; y los métodos físicos de tortura pueden resultar
en hallazgos físicos que se resuelven o carecen de especificidad.
524. Las evaluaciones psicológicas proporcionan evidencia crítica
para exámenes médico-legales, solicitudes de asilo,
124
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
establecer las condiciones bajo las cuales se pueden
haber obtenido confesiones por la fuerza, comprender
las prácticas nacionales, regionales e internacionales
de tortura, identificar las necesidades terapéuticas de las
víctimas, respaldar los reclamos de reparación y reparación
y como testimonio en investigaciones de derechos humanos,
misiones de determinación de hechos e indagatorias. Dado
que el impacto emocional de la tortura es profundo y los
síntomas psicológicos resultantes son tan frecuentes entre
los sobrevivientes de tortura, es muy recomendable que
cualquier evaluación de las presuntas víctimas de tortura
incluya una evaluación psicológica integral. El objetivo general
de una evaluación psicológica para un informe médico-legal
de conformidad con el Protocolo de Estambul es evaluar el
grado de coherencia entre el relato de tortura de un individuo
y los hallazgos psicológicos obtenidos en el curso de la
evaluación y dar una opinión sobre la probable relación entre
los hallazgos psicológicos y la posible tortura o malos tratos.
La evidencia psicológica comprende no solo la declaración de
la presunta víctima, sino también una variedad de información,
incluidas observaciones sobre la comunicación verbal y no
verbal, las reacciones emocionales, la resonancia afectiva y
el comportamiento. Con este fin, la evaluación debe
proporcionar una descripción detallada de los métodos de
evaluación, quejas psicológicas actuales, antecedentes
previos y posteriores a la tortura, antecedentes de tortura y
malos tratos, antecedentes psicológicos/psiquiátricos
anteriores, antecedentes de uso/abuso de sustancias, examen
de estado, evaluación del funcionamiento social, resultados
de pruebas psicológicas/neuropsicológicas si están indicadas
y la formulación de impresiones clínicas.
Se debe hacer un diagnóstico psiquiátrico, si corresponde.
525. La evaluación del estado psicológico y la
la formulación de un diagnóstico clínico siempre debe
hacerse con conocimiento del contexto cultural.
El conocimiento de cómo los antecedentes culturales
y el idioma del sobreviviente dan forma a la expresión
psicológica individual de la angustia es de suma importancia
para realizar la entrevista y formular la impresión clínica y
la conclusión.
Cuando el entrevistador tiene poco o ningún
conocimiento de la cultura de la presunta víctima, la
asistencia de un intérprete es esencial. Lo ideal es que
un intérprete del país de la presunta víctima conozca el
idioma, las costumbres, las tradiciones religiosas y
demás creencias que se deben tener en cuenta durante la evaluación.
Las entrevistas pueden inducir miedo y desconfianza en
las víctimas y posiblemente recordarles interrogatorios
anteriores. Para reducir el riesgo de retraumatización, el
médico debe comunicar un sentido de
comprensión de las experiencias del individuo y
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
trasfondo cultural. Es inapropiado observar la estricta
“neutralidad clínica” que se utiliza en algunas formas de
psicoterapia, durante las cuales el clínico está inactivo y
dice poco. El médico debe comunicarse de manera
transparente y empática y adoptar un enfoque de apoyo y
sin prejuicios.
2. Proceso de entrevista
526. Los médicos deben presentarse y presentar
el propósito y el proceso de la entrevista de una manera que
explique en detalle los procedimientos a seguir y los temas a
tratar y que prepare al individuo para las difíciles reacciones
emocionales que
las preguntas pueden provocar. Los médicos deben ser
sensibles y empáticos en sus preguntas, sin dejar de ser
objetivos en su evaluación clínica. En todo momento tienen
que equilibrar su necesidad de obtener información
detallada y las necesidades de las presuntas víctimas para
mantener o recuperar su equilibrio emocional. Las
entrevistas deben llevarse a cabo de una manera que
reduzca el riesgo de retraumatización y, en todo momento,
permita que la presunta víctima mantenga una sensación
de control. El Capítulo IV describe pautas integrales para
realizar entrevistas clínicas.
527. Una estructura adecuada de la entrevista clínica es
fundamental para generar una adecuada relación y
confianza. Generalmente, es recomendable comenzar la
entrevista con temas menos sensibles y luego pasar a
contenidos más difíciles o estresantes. En muchos casos,
puede ser útil comenzar con la historia anterior a la tortura y
seguir un orden cronológico. En otros casos, especialmente
cuando la persona se encuentra bajo un alto nivel de
angustia emocional, puede ser mejor comenzar con las
quejas psicológicas actuales y el funcionamiento social
actual. Se aconseja al médico que utilice un enfoque flexible
en lugar de seguir un orden predeterminado. La siguiente
descripción de los componentes de la evaluación psicológica/
psiquiátrica sigue el orden sugerido para el informe escrito
(ver anexo IV), pero no para la entrevista clínica.
3. Componentes de la evaluación psicológica/
psiquiátrica
528. La introducción debe contener mención de la
fuente de referencia, un resumen de las fuentes
colaterales (como registros médicos, legales y
psiquiátricos) y una descripción de los métodos de
evaluación utilizados (p. ej., entrevistas, inventarios de
síntomas, listas de verificación y pruebas neuropsicológicas).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
a) Antecedentes de tortura y malos tratos
529. Debe hacerse todo lo posible para documentar la totalidad
antecedentes de la supuesta tortura o malos tratos y otras
experiencias traumáticas pertinentes declaradas por la presunta
víctima (véanse los párrs. 364 a 372 supra). Esta parte de la
evaluación suele ser agotadora para la persona evaluada. Por
lo tanto, puede ser necesario proceder en varias sesiones. La
entrevista debe comenzar con una
resumen general de los hechos antes de obtener los detalles
de la presunta experiencia de tortura o malos tratos. El
entrevistador necesita conocer los asuntos legales en cuestión
porque eso determinará la naturaleza y la cantidad
de información necesaria para lograr una documentación
completa de la presunta tortura o malos tratos.
(b) Quejas psicológicas actuales
530. La evaluación del estado psicológico actual y de las quejas
constituye el núcleo de la evaluación.
Además de la descripción espontánea del entrevistado,
se deben hacer preguntas específicas sobre las
respuestas psicológicas comunes a la tortura (como se
describe en los párrafos 499 a 522). Todos los síntomas
afectivos, cognitivos y conductuales deben ser descritos
detalladamente, incluyendo su severidad, frecuencia, aparición
y evolución en el tiempo, independientemente de que
equivalgan a un diagnóstico específico. Es importante dar una
descripción detallada de la presentación específica de los
síntomas, ya que esto ayuda a corroborar el nivel de coherencia
entre la supuesta tortura o malos tratos y los hallazgos
psicológicos en una etapa posterior. Esto puede incluir la
descripción del contenido de las pesadillas, pensamientos o
recuerdos recurrentes, escenas retrospectivas o alucinaciones.
También se deben explorar y describir los desencadenantes
de angustia emocional, tristeza, miedo o revivir experiencias.
Preguntas sobre el sueño (cuántas horas, qué interrumpe el
sueño, sentimientos al despertar de una pesadilla), de cómo
transcurre el día (en aislamiento social, tratando de mantenerse
ocupado a toda costa, conductas obsesivas/compulsivas y
capacidad de realización). las actividades involucradas en la
vida diaria), así como preguntas para identificar el
comportamiento de evitación relacionado con los
desencadenantes de la reexperimentación.
Una ausencia o un nivel subumbral de síntomas en el
momento de la evaluación puede deberse a la naturaleza
episódica o al inicio tardío de síntomas específicos oa la
negación de los síntomas por vergüenza. Por lo tanto, la
exploración y valoración de la evolución de los síntomas desde
la supuesta tortura es de suma importancia.
125
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
c) Historia posterior a la tortura
531. Este componente de la evaluación psicológica busca información sobre
las circunstancias de la vida actual. Está
Es importante indagar sobre las fuentes actuales de estrés,
como la separación o la pérdida de seres queridos, la huida
del país de origen y la vida en el exilio. Los entrevistadores
también deben preguntar sobre la capacidad de las personas
para ser productivas, ganarse la vida, cuidar a sus familias,
participar en interacciones sociales, formar relaciones de
confianza y la disponibilidad de apoyo social. Además, se debe
considerar el posible impacto de la tortura sexual pasada en la
orientación sexual, la identidad de género, la capacidad de
disfrutar de la intimidad sexual y la asociación.
d) Historia previa a la tortura
532. La historia previa a la tortura debe incluir información
sobre la niñez, la adolescencia, la adultez temprana de las
presuntas víctimas, sus antecedentes familiares, enfermedades
familiares y composición familiar. También debe haber una
descripción del historial educativo y ocupacional de la presunta
víctima. También debe incluir una descripción de cualquier
historial de trauma pasado, como abuso infantil, trauma de
guerra o violencia doméstica, así como los antecedentes
culturales y religiosos de la presunta víctima.
533. La descripción de la historia previa al trauma es importante para
evaluar el estado de salud mental y el nivel de
funcionamiento psicosocial de la presunta víctima previo a
los hechos traumáticos denunciados. De esta forma, el
entrevistador puede comparar el estado psicológico actual
con el que informa el individuo antes de la supuesta tortura o
malos tratos y evaluar la contribución relativa de diferentes
experiencias, incluida la supuesta tortura o malos tratos. Al
evaluar la información de antecedentes, el entrevistador debe
tener en cuenta que la duración y la gravedad de las
respuestas al trauma se ven afectadas por múltiples factores.
Estos factores incluyen, entre otros, las circunstancias de la
tortura, la percepción e interpretación de la tortura por parte
de la víctima, el contexto social antes, durante y después de
la tortura, los recursos de la comunidad y de los compañeros,
los valores y actitudes personales acerca de las experiencias
traumáticas, la política y factores culturales, severidad y
duración de los eventos traumáticos, vulnerabilidades
genéticas y biológicas, fase de desarrollo y edad de la víctima,
antecedentes de trauma y mecanismos de afrontamiento. En
muchas situaciones de entrevista, debido a limitaciones de
tiempo y otros problemas, puede ser difícil obtener esta
información. Es importante, sin embargo, obtener suficientes
datos
126
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
sobre la salud mental previa y el funcionamiento
psicosocial de la persona para formarse una idea del grado en
que la supuesta tortura o malos tratos ha contribuido al estado
psicológico.
(e) Historial médico
534. El historial médico resume las condiciones de salud previas al
trauma, las condiciones de salud actuales, el dolor corporal, las
molestias somáticas, el uso de medicamentos y sus efectos
secundarios, los antecedentes sexuales pertinentes, los procedimientos
quirúrgicos anteriores y otros datos médicos (véanse los párrs. 394 a 399 supra). .
f) Antecedentes psiquiátricos
535. Se debe indagar sobre antecedentes de
condiciones mentales o psicológicas, la naturaleza de
tales condiciones y si las presuntas víctimas recibieron
tratamiento o requirieron hospitalización psiquiátrica. La
consulta también debe cubrir el uso terapéutico previo de
medicamentos psicotrópicos.
(g) Historial de uso y abuso de sustancias
536. El médico debe preguntar sobre el uso y abuso de sustancias, incluyendo
la ruta de uso, la frecuencia, la cantidad y los períodos de tiempo de
uso, antes y después de la supuesta tortura, los cambios y la evolución
del patrón de uso y si las sustancias se están usando para hacer frente
a la tortura. con insomnio, dolor o problemas psicológicos/psiquiátricos.
Dichas sustancias incluyen alcohol, cannabis y opio, pero
también medicamentos recetados y sustancias regionales de
abuso, como la nuez de betel y muchas otras.
h) Examen del estado mental
537. El examen del estado mental comienza en el momento en que el
clínico se encuentra con el individuo. El entrevistador
debe tomar nota de la apariencia de la persona, como
signos de desnutrición, falta de aseo, cambios en la actividad
motora durante la entrevista, estado de ánimo, concentración,
ocurrencia de reacciones disociativas o flashbacks, reacciones
intercurrentes en desencadenantes, uso del lenguaje,
presencia de contacto visual , capacidad de relacionarse con
el entrevistador y los medios que utiliza el individuo para
establecer comunicación. Los siguientes componentes deben
cubrirse y todos los aspectos del examen del estado mental
deben incluirse en el informe de la evaluación psicológica;
aspectos como apariencia general, actividad motora, habla,
concentración, estado de ánimo (evaluación subjetiva y
objetiva) y afecto, sueño, alteración del apetito, contenido del
pensamiento, proceso del pensamiento, ideación suicida y
homicida
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
y un examen cognitivo (orientación, memoria a largo plazo,
recuerdo intermedio y recuerdo inmediato).
(i) Evaluación de la función social
538. El trauma y la tortura pueden directa e indirectamente
afectar la capacidad de una persona para funcionar. La tortura
también puede causar indirectamente el deterioro o la pérdida del
funcionamiento y la discapacidad, si las consecuencias psicológicas
de las experiencias reducen la capacidad de las personas para
cuidar de sí mismas, ganarse la vida, mantener a una familia y
continuar su educación. El médico debe evaluar el nivel actual de
funcionamiento del individuo indagando sobre las actividades
diarias, el rol social (p. ej., estudiante, trabajador o padre), las
actividades sociales y recreativas y la percepción del estado de
salud. El entrevistador debe pedir a las personas que evalúen sus
propias condiciones de salud, que indiquen la presencia o ausencia
de sentimientos de fatiga crónica y que informen sobre posibles
cambios en el funcionamiento general. Debido a que la función
social, por definición, abarca el comportamiento, las habilidades
sociales, los sentimientos y el bienestar general de un individuo, es
importante evaluar la función social a través de múltiples dimensiones.
Los cambios en la función social podrían derivarse de las
consecuencias físicas de la tortura (como la incapacidad para
levantar pesas debido a una disfunción de la articulación del
hombro) o estar relacionados con las consecuencias psicológicas de la tortura. lesiones cerebrales resultantes de la tortura, aunque deben
Por ejemplo, el nivel de actividad de un individuo (incluida la
voluntad de participar en actividades que antes disfrutaba), así
como el nivel de participación de un individuo (incluida la
participación en reuniones familiares o la participación en la
sociedad), podrían verse afectados negativamente. Por lo tanto,
el entrevistador debe tener en cuenta estas dimensiones durante
la entrevista.
540. Los hallazgos psicológicos resultantes de la
(j) Pruebas psicológicas y el uso de listas de
verificación y cuestionarios
539. Las personas que han sobrevivido a la tortura pueden tener
problemas para expresar con palabras sus experiencias y
síntomas. En algunos casos, puede ser útil utilizar
cuestionarios o listas de verificación de eventos y síntomas
traumáticos.470 Si el médico cree que puede ser útil
utilizarlos, existen numerosos cuestionarios disponibles,
aunque ninguno es específico para las víctimas de tortura. Antes
de usar pruebas psicológicas/
cuestionarios, el médico debe tener especial cuidado en
evaluar su adecuación cultural y el posible impacto negativo
en los sobrevivientes de tortura en
470 Joseph Westermeyer y otros, “Comparación de dos métodos de investigación de tortura con refugiados de África Oriental: consulta única versus lista de verificación”, Torture, vol. 21, núm. 3 (2011),
págs. 155–172.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
situaciones específicas. La falta de estandarización para el grupo
específico de referencia, la falta de validez transcultural y las
diferencias lingüísticas pueden limitar severamente el significado y
la confiabilidad de los resultados.
Existen pocos datos publicados sobre el uso de pruebas de
personalidad proyectivas y objetivas en la evaluación de
sobrevivientes de tortura y, por lo tanto, su uso debe ser
evaluada con especial cuidado. No hay evidencia de que los
rasgos de personalidad específicos medidos en estas pruebas
resulten típicamente de la experiencia de tortura o que ciertos
rasgos de personalidad sean inconsistentes con haber sido
torturados. Además, las pruebas psicológicas de personalidad
carecen de validez transcultural. Las pruebas de personalidad se
han utilizado con frecuencia de forma indebida para estigmatizar a
las presuntas víctimas, cuestionar su credibilidad general o atribuir
el estado emocional a los rasgos de personalidad. En cualquier
caso, las pruebas psicológicas solo pueden complementar la
entrevista clínica, nunca pueden sustituir a una evaluación
psicológica integral como se describe en el presente capítulo. El
uso de pruebas psicológicas no debe considerarse como un
imperativo, ni como generalmente más objetivo o más probatorio
que la evaluación del clínico. No obstante, pueden ser una fuente
importante de información adicional y, cuando no concuerdan con
la impresión clínica, esto debería dar lugar a una mayor exploración
de los fenómenos en cuestión. Sin embargo, las pruebas
neuropsicológicas pueden ser útiles para evaluar los casos de
considerarse seriamente las cuestiones de fiabilidad, validez y
pertinencia cultural (véanse los párrs. 549 a 565 infra).
(k) Interpretación de los hallazgos
evaluación incluyen toda la información proporcionada por la
presunta víctima, así como los hallazgos objetivos observados o
recopilados por el médico durante la evaluación. Para interpretar los
hallazgos psicológicos con el propósito de emitir una opinión sobre
la posibilidad de tortura, el evaluador debe considerar las siguientes
preguntas importantes:
(a) ¿Son consistentes los hallazgos psicológicos con el
presunto informe de tortura?
(b) ¿Son los hallazgos psicológicos esperados o las
reacciones típicas al estrés extremo dentro del contexto cultural y
contexto social del individuo?
127
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(c) Dado el curso fluctuante de los trastornos mentales
relacionados con el trauma a lo largo del tiempo, ¿cuál es el marco
temporal en relación con los eventos de tortura? donde esta el individuo
en el curso de la recuperación?
(d) ¿Cuáles son los factores estresantes coexistentes que inciden
en el individuo (por ejemplo, persecución en curso, migración
forzada, exilio, pérdida de la familia y el rol social)? ¿Qué impacto
tienen estos problemas en el individuo?
(e) ¿Qué condiciones físicas pueden contribuir al cuadro clínico?
Debe prestarse especial atención a las posibles pruebas de
lesiones en la cabeza sufridas durante la tortura o la detención.
541. Los médicos deben comentar sobre la consistencia de los
hallazgos psicológicos y la medida en que estos hallazgos se
correlacionan con la supuesta tortura o malos tratos. Para ello,
el estado emocional y la expresión de la persona durante la
entrevista, el impacto psicológico, psicosocial y social
informado de la supuesta tortura, las observaciones clínicas,
la supuesta historia de detención y tortura y la historia personal
previa a la tortura, el inicio y Se debe tener en cuenta la
evolución de los síntomas específicos relacionados con la
supuesta tortura, la especificidad de cualquier hallazgo
psicológico particular y los patrones de funcionamiento
psicológico, así como las posibles interacciones. Asimismo,
deben describirse y analizarse las posibles razones de las
incoherencias (p. ej., lagunas en la memoria, deterioro cognitivo,
disociación, desconfianza, sentimientos de vergüenza o culpa u
otros factores que puedan dificultar la divulgación) (véanse los
párrs. 343 y 353 supra). Se deben considerar las condiciones
físicas, como traumatismo craneoencefálico o lesión cerebral, y
factores adicionales, como persecución continua, migración
forzada, reasentamiento, dificultad de aculturación, problemas
de idioma, desempleo, pérdida del hogar y del estatus social y
familiar. Se debe evaluar y describir la relación y consistencia
entre eventos y síntomas.
542. Si la persona tiene niveles de síntomas que se corresponden con un
diagnóstico DSM o ICD, se debe indicar el diagnóstico. Más de un
diagnóstico puede ser aplicable.
Nuevamente, se debe enfatizar que, aunque un
diagnóstico de un trastorno mental relacionado con un trauma
puede respaldar el reclamo de tortura, no cumplir con los
criterios para un diagnóstico psiquiátrico no significa que la
persona no haya sido torturada. Un sobreviviente de tortura
puede no tener el nivel de síntomas requerido para cumplir
completamente con los criterios de diagnóstico para un diagnóstico DSM545.
o ICD.
En estos casos, como en todos los demás, los síntomas que
128
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
el sobreviviente tiene y la supuesta tortura, así como los
factores de protección y los mecanismos de afrontamiento,
deben ser considerados como un todo. El grado de concordancia
entre la supuesta tortura o malos tratos y la totalidad de los
hallazgos psicológicos debe evaluarse y describirse en el
informe.
543. Según el régimen legal y jurisdiccional
contexto y requisitos bajo los cuales los médicos preparan
un informe médico-legal, la consistencia de los hallazgos
psicológicos con la supuesta tortura y/o
los malos tratos podrían describirse de la siguiente manera:
(a) “No consistente con”: los hallazgos psicológicos no pueden
haber sido causados por la supuesta tortura o malos tratos;
b) “consistente con”: los hallazgos psicológicos podrían
haber sido causados por la supuesta tortura o malos tratos,
pero no son específicos y existen muchas otras causas posibles;
(c) “Muy consistente con”: los hallazgos psicológicos podrían haber
sido causados por la supuesta tortura o malos tratos y hay pocas
otras causas posibles;
(d) “Típico de”: los hallazgos psicológicos generalmente
se encuentran como consecuencia de la supuesta tortura o malos
tratos y hay pocas otras causas posibles;
(e) “Diagnóstico de”: los hallazgos psicológicos no podrían haber
sido causados en casi ninguna otra forma que no sea la supuesta
tortura o malos tratos.
544. Especificar el grado de consistencia es común en
evaluar evidencia física de tortura o malos tratos y también puede
ser útil para evidencia psicológica.
Sin embargo, la lógica subyacente difiere ya que la coherencia
entre los hallazgos psicológicos y la presunta tortura o malos
tratos no se refiere a la conexión
entre un síntoma específico y un método específico de
tortura o malos tratos. En cambio, se refiere a la
conexiones entre un conjunto de experiencias traumáticas y la
presentación psicológica, psicosocial y psiquiátrica general de la
persona. La pregunta principal es si estas conexiones tienen sentido
y hasta qué punto
a los que se explican por el maltrato que la persona alega haber
sufrido. Si el médico considera que existen razones clínicas para
un hallazgo incoherente, esto debe discutirse (véanse los párrafos
343 a 353 anteriores).
Los médicos deben tener en cuenta que el nivel de consistencia
denotado por "típico de" se refiere a esperado o típico
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
reacciones al estrés extremo dentro del entorno cultural y
contexto social del individuo. No se suele utilizar para evaluar
pruebas psicológicas de tortura o malos tratos, ya que las
consecuencias psicológicas tienden a depender de factores
individuales. La presencia o ausencia de una "reacción
psicológica típica" no debe considerarse más o menos
significativa o corroborativa que el nivel de consistencia denotado
por "altamente consistente". Además, el nivel de consistencia
denotado por “diagnóstico de” se usa con más frecuencia en la
interpretación de evidencia física de tortura o malos tratos y rara
vez se usa en la interpretación de evidencia psicológica.
l) Conclusiones y recomendaciones
546. Los médicos deben formular una opinión clínica sobre la
posibilidad de tortura o malos tratos basada en toda la
evidencia clínica pertinente, incluidos “ hallazgos físicos471
y psicológicos, información histórica, hallazgos fotográficos,
resultados de pruebas de diagnóstico, conocimiento de las
prácticas regionales de tortura, consulta informes, etc.” como
se indica en el párrafo 382 supra y en el anexo IV. La opinión
del médico sobre la posibilidad de tortura o malos tratos debe
expresarse usando los mismos niveles de consistencia que los
utilizados para la interpretación de los hallazgos: no congruente
con, congruente con, muy congruente con, típico de y diagnóstico
de. En última instancia, es la evaluación general de todos los
hallazgos clínicos, y no la consistencia de cada lesión o síntoma
con una forma particular de tortura o malos tratos, lo que es
importante para evaluar las denuncias de tortura o malos tratos.
547. Además de brindar una conclusión sobre la posibilidad de tortura
o malos tratos, los médicos deben reiterar los síntomas y
discapacidades actuales y los efectos probables en el
funcionamiento social y brindar recomendaciones para
evaluaciones adicionales y atención para el individuo.
548. Las recomendaciones que resultan de la evaluación psicológica
pueden variar y dependen de la pregunta planteada al momento
de solicitar la evaluación. Los temas bajo consideración pueden
referirse a asuntos legales y judiciales, asilo, reasentamiento, la
necesidad de tratamiento o reparación. Las recomendaciones
pueden ser para una evaluación adicional, como pruebas
neuropsicológicas, tratamiento médico, psicológico o psiquiátrico,
condiciones de custodia o la necesidad de seguridad o asilo.
Siempre que el clínico detecte una necesidad
471 Las evaluaciones clínicas que se llevan a cabo específicamente para evaluar la “evidencia psicológica” pueden incluir algunos “hallazgos físicos”, por ejemplo, quejas de lesiones físicas y
síntomas u observaciones de signos físicos durante la entrevista.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
para tratamiento psicológico o médico, se debe hacer una
derivación, independientemente de la pregunta planteada
al momento de solicitar la evaluación.
4. Evaluación neuropsicológica
549. La neuropsicología clínica es una ciencia aplicada que
se ocupa de la expresión conductual de la disfunción
cerebral. La evaluación neuropsicológica, en particular, se
ocupa de la medición y clasificación de los trastornos del
comportamiento.
asociados con el deterioro orgánico del cerebro y las
pruebas neuropsicológicas están diseñadas para evaluar
los déficits en el rendimiento cognitivo. La comprensión de la
naturaleza, la gravedad y la modalidad de las quejas cognitivas
se logra mejor con una evaluación neuropsicológica realizada
por un psicólogo calificado con competencias relevantes en
evaluaciones neuropsicológicas. Tal evaluación proporciona
información útil sobre el funcionamiento cognitivo del paciente,
algo que no es fácil de obtener de otra manera.
Las evaluaciones neuropsicológicas de las presuntas víctimas
de tortura se realizan con poca frecuencia, pero pueden ser útiles
para identificar y cuantificar algún tipo de deterioro cognitivo. Las
siguientes observaciones se limitan a una discusión de los
principios generales para guiar a los médicos en la comprensión
de la utilidad y las indicaciones de las evaluaciones
neuropsicológicas de las personas que alegan tortura. Antes de
discutir las cuestiones de utilidad e indicaciones, es fundamental
reconocer las limitaciones de las evaluaciones neuropsicológicas
en esta población.
(a) Limitaciones de las evaluaciones neuropsicológicas
550. Hay una serie de factores comunes que complican la evaluación
de los sobrevivientes de tortura en general que se describen
en otras partes de este manual. Estas
Los factores se aplican a las evaluaciones neuropsicológicas
de la misma manera que a los exámenes médicos o
psicológicos. Las evaluaciones neuropsicológicas pueden
verse limitadas por una serie de factores adicionales, incluida
la falta de investigación sobre los supervivientes de la tortura,
la dependencia de las normas basadas en la población, las
diferencias culturales y lingüísticas y el riesgo de retraumatización
de quienes han experimentado la tortura.
551. Como se mencionó anteriormente, existen muy pocas
referencias en la literatura sobre la evaluación
neuropsicológica de los sobrevivientes de tortura. El cuerpo de
literatura pertinente se refiere a varios tipos de traumatismo craneoencefálico y
129
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
la evaluación neuropsicológica del TEPT en general.
Por lo tanto, la siguiente discusión y las subsiguientes interpretaciones
de las evaluaciones neuropsicológicas se basan necesariamente en la
aplicación de los principios generales utilizados con otras poblaciones
de sujetos.
552. Las evaluaciones neuropsicológicas, tal como se han
desarrollado y practicado en los países occidentales, se
basan en gran medida en un enfoque actuarial. Este enfoque
generalmente implica comparar los resultados de una batería
de pruebas estandarizadas con normas basadas en la población.
Aunque las interpretaciones de las evaluaciones
neuropsicológicas basadas en normas pueden complementarse con un
enfoque luriano de análisis cualitativo, particularmente cuando la situación
clínica lo exige, predomina la confianza en el enfoque actuarial.472
Además, la confianza en los puntajes de las pruebas es mayor cuando
el deterioro cerebral es de gravedad leve a moderada, en lugar de
grave, o cuando se cree que los déficits neuropsicológicos son secundarios a
un trastorno psiquiátrico.
553. Las diferencias culturales y lingüísticas pueden
limitar la utilidad y aplicabilidad de las evaluaciones neuropsicológicas entre
las presuntas víctimas de tortura. Hay muchas pruebas neuropsicológicas
disponibles, pero la mayoría de ellas han sido desarrolladas y “normadas” en
un contexto europeo/occidental. El examinador debe ser consciente de estas
limitaciones y debe
adapte la selección de métodos e instrumentos a los antecedentes
específicos de la persona, incluida la educación, el idioma, la cultura
y la familiaridad con las pruebas.473 Las evaluaciones neuropsicológicas
tienen una validez cuestionable cuando las traducciones estándar de
las pruebas no están disponibles y el examinador clínico no está
fluidez en el idioma del sujeto. A menos que se disponga de traducciones
estandarizadas de las pruebas y los examinadores estén
Habla con fluidez el idioma del sujeto, las tareas verbales no pueden
administrarse en absoluto y no pueden interpretarse de manera
significativa. Esto significa que solo se pueden usar pruebas no verbales
y esto impide la comparación entre facultades verbales y no verbales.
Además, un análisis de la lateralización (o localización) de los déficits es
más difícil. Sin embargo, este análisis suele ser útil debido a la organización
asimétrica del cerebro, en la que el hemisferio izquierdo suele ser el
dominante para el habla. Si las normas basadas en la población no están
disponibles para el grupo cultural y lingüístico del sujeto, las evaluaciones
neuropsicológicas también son de utilidad.
472 Alexander Romanovich Luria y Lawrance V. Majovski, “Enfoques básicos utilizados en la neuropsicología clínica estadounidense y soviética”, American Psychologist, vol. 32, núm.
11 (1977), págs. 959–968. Véase también Robert J. Ivnik, “Exageración de las diferencias”, American Psychologist, vol. 33, núm. 8 (1978), págs. 766 y 767; y Uwe Jacobs y
Vincent lacopino, “La tortura y sus consecuencias: un desafío para la neuropsicología clínica”, Professional Psychology Research and Practice, vol. 32, núm. 5 (2001), págs. 458–464.
473 Bahrie Veliu y Janet Leathem, “Evaluación neuropsicológica de los refugiados: barreras metodológicas y transculturales”, Neuropsicología aplicada: adultos, vol. 24, núm. 6
(2017), págs. 481–492.
130
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
dudosa validez. Una estimación del coeficiente intelectual es uno de
los puntos de referencia centrales que permiten a los examinadores
colocar las puntuaciones de las pruebas neuropsicológicas en la
perspectiva adecuada. Dentro de la población de los Estados Unidos de
América, por ejemplo, estas estimaciones a menudo se derivan de
subconjuntos verbales que utilizan las escalas de Wechsler, en particular la
subescala de información, porque en presencia de una deficiencia cerebral
orgánica, es menos probable que el conocimiento fáctico adquirido sufra un
deterioro. otras tareas y ser más representativo de la capacidad de aprendizaje
pasada que otras medidas. La medición también puede basarse en el historial
educativo y laboral y en los datos demográficos. Obviamente, ninguna de
estas dos consideraciones se aplica a sujetos para los que no se han
establecido normas basadas en la población. Por lo tanto, solo se pueden
hacer estimaciones muy aproximadas sobre el funcionamiento intelectual
antes del trauma. Como resultado, un deterioro neuropsicológico que sea
menos que severo o moderado puede ser difícil de interpretar.
554. Las evaluaciones neuropsicológicas pueden volver a
traumatizar a quienes han sufrido tortura. Se debe tener
mucho cuidado para minimizar cualquier posible
retraumatización de la presunta víctima en cualquier forma
de procedimiento de diagnóstico (véanse los párrs. 277 a
280 supra). Para citar solo un ejemplo obvio específico de las
pruebas neuropsicológicas, sería potencialmente muy dañino
proceder con una administración estándar de la batería
neuropsicológica de Halstead-Reitan, en particular la prueba de
rendimiento táctil, y vendar los ojos al sujeto de manera rutinaria.
Para la mayoría de los sobrevivientes de tortura a los que se les
vendaron los ojos durante la detención y la tortura, e incluso para
aquellos a quienes no se les vendaron los ojos, sería muy
traumático presentar la experiencia de impotencia inherente a este
procedimiento. De hecho, cualquier forma de prueba
neuropsicológica en sí misma puede ser problemática,
independientemente del instrumento utilizado. Ser observado,
tomar el tiempo con un cronómetro y pedirle que se esfuerce al
máximo en una tarea desconocida, además de que se le pida que
realice, en lugar de tener un diálogo, puede resultar demasiado
estresante o recordar la experiencia de la tortura.
(b) Indicaciones para la evaluación neuropsicológica
555. Al evaluar los déficits conductuales en presuntas víctimas de
tortura, hay dos indicaciones principales para la evaluación
neuropsicológica: lesión cerebral y TEPT.
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
más diagnósticos relacionados. Si bien ambos conjuntos de
condiciones se superponen en algunos aspectos, y a menudo
coincidirán, solo el primero es una aplicación típica y
tradicional de la neuropsicología clínica, mientras que el
segundo es relativamente nuevo, no está bien investigado y
es bastante problemático. Una evaluación neuropsicológica
típica incluirá una entrevista clínica con
al paciente para determinar: el nivel más alto de
educación formal obtenido, la presencia de dificultades
de aprendizaje preexistentes, antecedentes médicos y
psicológicos, traumatismos craneales previos, incluidos los
de la infancia, y una revisión más detallada de las quejas
cognitivas y el estado emocional del paciente. Con base en la
información recopilada durante la entrevista y de la
documentación y las preguntas de derivación, el neuropsicólogo
luego decide qué dominios cognitivos y emocionales deben
evaluarse y
puede identificar pruebas que sean validadas, confiables
y culturalmente apropiadas para la persona, o elegir no usar
pruebas y basarse en una entrevista clínica detallada.
La mayoría de los neuropsicólogos ahora utilizan un
enfoque de batería flexible, en el que las pruebas se eligen
en función de la información recopilada, la prueba
sistemática de hipótesis y la comprensión de la afección
médica subyacente que supuestamente es responsable de
las dificultades cognitivas y emocionales.
556. Las lesiones cerebrales y los daños cerebrales resultantes pueden deberse a
diversos tipos de traumatismos craneales y trastornos metabólicos infligidos
durante períodos de tortura o malos tratos. Esto puede incluir heridas de
bala, los efectos del envenenamiento, la desnutrición como resultado de la
inanición o la ingestión forzada de sustancias nocivas, los efectos de la
hipoxia o anoxia resultantes de la asfixia o casi ahogamiento y, más
comúnmente, de los golpes en la cabeza sufridos durante las palizas.
Con frecuencia se infligen golpes en la cabeza durante
los períodos de detención y tortura. Por ejemplo, en una
muestra de sobrevivientes de tortura, el 91 por ciento reportó
golpes en la cabeza.474 El potencial de daño cerebral
resultante es alto entre los sobrevivientes de tortura.
557. Traumatismos craneoencefálicos cerrados con resultado de leve a moderado
los niveles de deterioro a largo plazo son quizás la causa
más comúnmente evaluada de anormalidad neuropsicológica.
Los dominios cognitivos y emocionales que normalmente se
evalúan en una evaluación neuropsicológica integral son:
intelecto; capacidades cognitivas superiores (funcionamiento
ejecutivo); atención; memoria; habilidades visoespaciales;
habilidades motoras y sensoriales; y estado emocional. Los
signos de lesión pueden
474 Dorte Reff Olsen y otros, “Dolor prevalente y nivel de dolor entre los sobrevivientes de tortura: un estudio de seguimiento”, Danish Medical Bulletin, vol. 53, núm. 2 (2006), págs. 210–214.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
incluyen cicatrices en la cabeza, pero la ausencia de
cicatrices no excluye una lesión cerebral significativa. A
veces, las lesiones cerebrales no pueden detectarse
mediante imágenes de diagnóstico del cerebro. Los
profesionales de la salud mental pueden pasar por alto o
subestimar los niveles leves a moderados de daño cerebral
porque es probable que los síntomas de depresión y TEPT
ocupen un lugar destacado en el cuadro clínico, lo que hace
que se preste menos atención al efecto potencial del
traumatismo craneal. Comúnmente, las quejas subjetivas de
los sobrevivientes incluyen dificultades con la atención, la
concentración y la memoria a corto plazo, que pueden ser el
resultado de una deficiencia cerebral o reflejar las consecuencias
psicológicas de la tortura. Dado que estas quejas son comunes
en los sobrevivientes que sufren de PTSD o depresión, es
posible que ni siquiera se haga la pregunta de si en realidad se deben a una lesió
558. El diagnosticador debe confiar, en una fase inicial de
el examen, sobre la historia reportada de traumatismo
craneoencefálico y el curso de la sintomatología. La decisión
de cuándo derivar para una evaluación neuropsicológica
debe hacerse caso por caso. Como suele ser el caso con
sujetos con lesión cerebral, la información de terceros,
particularmente familiares, puede resultar útil. Debe recordarse
que los sujetos con lesión cerebral a menudo tienen grandes
dificultades para articular o incluso apreciar sus limitaciones
porque están, por así decirlo, "dentro" del problema. Al recopilar
las primeras impresiones sobre la diferencia entre el deterioro
cerebral orgánico y el TEPT, una evaluación sobre la cronicidad
de los síntomas es un punto de partida útil. Si se observa que
los síntomas de atención, concentración y memoria deficientes
fluctúan con el tiempo y covarían con los niveles de ansiedad y
depresión, es más probable que esto se deba a la naturaleza
fásica del TEPT. Por otro lado, si el deterioro parece crónico,
carece de fluctuación y es confirmado por miembros de la
familia, se debe considerar la posibilidad de deterioro cerebral,
incluso en ausencia inicial de una historia clara de traumatismo
craneoencefálico.
559. Una vez que hay una sospecha de cerebro orgánico
discapacidad, el primer paso para un profesional de
la salud mental es considerar la remisión a un médico para
un examen neurológico adicional. Dependiendo de los
hallazgos iniciales, el médico puede consultar a un
neurólogo u ordenar pruebas de diagnóstico. Entre las
posibilidades a considerar se encuentran un amplio estudio
médico, una consulta neurológica específica y una
evaluación neuropsicológica. El uso de procedimientos de
evaluación neuropsicológica suele estar indicado si hay una
falta de conocimiento neurológico macroscópico.
131
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
perturbación, los síntomas informados son predominantemente
de naturaleza cognitiva o se debe hacer un diagnóstico
diferencial entre el deterioro cerebral y el TEPT.
560. La selección de pruebas neuropsicológicas y
Los procedimientos están sujetos a las limitaciones
especificadas anteriormente y, por lo tanto, no pueden seguir
un formato de batería estándar, sino que deben ser específicos
para cada caso y sensibles a las características individuales.
La flexibilidad requerida en la selección de pruebas y
procedimientos exige considerable experiencia, conocimiento
y precaución por parte del examinador. Como se ha señalado
anteriormente, la variedad de instrumentos que se utilizarán a
menudo se limitará a tareas no verbales, y las características
psicométricas de cualquier prueba estandarizada muy
probablemente se verán afectadas cuando las normas basadas
en la población no se apliquen a un sujeto individual. La ausencia
de medidas verbales representa una limitación muy seria.
Muchas áreas del funcionamiento cognitivo están mediadas por
el lenguaje y, por lo general, se utilizan comparaciones
sistemáticas entre varias medidas verbales y no verbales para
llegar a conclusiones sobre la naturaleza de los déficits.
561. La elección de instrumentos y procedimientos en
Las evaluaciones neuropsicológicas de las presuntas
víctimas de tortura deben dejarse en manos del médico individual,
quien deberá seleccionarlas de acuerdo con las demandas.
y posibilidades de la situación. Las pruebas neuropsicológicas
no se pueden utilizar adecuadamente sin una amplia formación
y conocimiento en las relaciones cerebro-conducta. En las
referencias estándar se pueden encontrar listas completas de
procedimientos y pruebas neuropsicológicas y su aplicación
adecuada.475
(c) Trastorno de estrés postraumático
562. Las consideraciones ofrecidas anteriormente deben hacer
claro que se necesita mucha cautela cuando se intenta la
evaluación neuropsicológica del daño cerebral en presuntas
víctimas de tortura. Este debe ser aún más el caso al intentar
documentar el PTSD en presuntas víctimas a través de la
evaluación neuropsicológica. Incluso en el caso de evaluar
sujetos con PTSD para los que se dispone de normas basadas
en la población, existen considerables dificultades a considerar.
TEPT
es un trastorno psiquiátrico y tradicionalmente no ha sido
objeto de evaluación neuropsicológica.
475 Esther Strauss, Elisabeth MS Sherman y Otfried Spreen, Compendio de pruebas neuropsicológicas: administración, normas y comentarios, 3.ª ed. (Nueva York,
Prensa de la Universidad de Oxford, 2006).
476 Jeffrey A. Knight, “Evaluación neuropsicológica en el trastorno de estrés postraumático”, en Assessing Psychological Trauma and PTSD, John P. Wilson y Terence M. Keane, eds.
(Nueva York, Guilford Press, 1997), págs. 448–492.
477 John E. Dalton, Sanford L. Pederson y Joseph J. Ryan, “Efectos del trastorno de estrés postraumático en el rendimiento de las pruebas neuropsicológicas”, International Journal of Clinical
Neuropsychology, vol. 11, núm. 3 (1989), págs. 121 a 124; y Tzvi Gil y otros, “Funcionamiento cognitivo en el trastorno de estrés postraumático”, Journal of Traumatic Stress, vol. 3,
núm. 1 (1990), págs. 29–45.
132
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
Además, el PTSD no se ajusta al paradigma clásico de un
análisis de lesiones cerebrales identificables que pueden
confirmarse mediante técnicas médicas. Con un mayor énfasis
y comprensión de los mecanismos biológicos involucrados en
los trastornos psiquiátricos en general, los paradigmas
neuropsicológicos se han invocado con más frecuencia que
en el pasado. Sin embargo, los hallazgos hasta el momento
son diversos y, por lo tanto, no son aplicables con fines de
diagnóstico.
563. Existe una gran variabilidad entre las muestras utilizadas
para el estudio de las medidas neuropsicológicas en el
estrés postraumático. Esto puede explicar la variabilidad
de los problemas cognitivos informados en estos estudios.
Se señaló que “las observaciones clínicas sugieren que los
síntomas del PTSD muestran la mayor superposición con
los dominios neurocognitivos de la atención, la memoria y el
funcionamiento ejecutivo”.476 Esto es consistente con las
quejas que se escuchan con frecuencia de los sobrevivientes
de tortura. Sujetos que describen dificultades para concentrarse
y sentirse incapaces de retener información y participar en
actividades planificadas y dirigidas a objetivos.
564. Los métodos de evaluación neuropsicológica parecen
capaces de identificar la presencia de déficits
neurocognitivos en el TEPT, aunque la especificidad de
estos déficits es más difícil de establecer. Algunos estudios
han documentado la presencia de déficits en sujetos con
TEPT en comparación con controles normales, pero no
han podido discriminar a estos sujetos de controles
psiquiátricos equiparados.477 En otras palabras, es
probable que los déficits neurocognitivos en el desempeño
de las pruebas sean evidentes en casos de TEPT, pero
insuficiente para diagnosticarlo. Como en muchos otros
tipos de evaluación, la interpretación de los resultados de
las pruebas debe integrarse en un contexto más amplio de
información de la entrevista. En ese sentido, los métodos
específicos de evaluación neuropsicológica pueden contribuir a
la documentación del PTSD de la misma manera
que hacen para otros trastornos psiquiátricos
asociados con déficits neurocognitivos conocidos.
565. A pesar de las importantes limitaciones, la evaluación
neuropsicológica puede ser útil para evaluar a las personas
con sospecha de lesión cerebral y para distinguir la lesión
cerebral del TEPT. La evaluación neuropsicológica también se
puede utilizar para evaluar
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

síntomas, tales como problemas con la memoria y
cuantificar el deterioro real y las consideraciones
resultantes para la reparación y rehabilitación. los
la evaluación de las capacidades cognitivas también puede ser
útil para determinar las barreras para participar en los procesos
adjudicativos. La evaluación de las dificultades de memoria puede
informar a los jueces y otros encargados de tomar decisiones
sobre el peso que se debe dar a las discrepancias en la evidencia.
Una persona puede carecer de la capacidad mental478
instruir a un representante legal, consentir en un interrogatorio,
ser entrevistado o prestar declaración.
La evaluación de las deficiencias en la cognición puede
encontrar que una persona con una capacidad básica para
tomar decisiones carece de conocimiento sobre cómo su
memoria y las dificultades de concentración afectan su capacidad
para prestar testimonio y ser entrevistado o contrainterrogado.
tenga en cuenta que los niños no suelen expresar sus pensamientos
y emociones con respecto al trauma verbalmente, sino más bien de
forma conductual. El grado en que los niños pueden expresar
sentimientos, pensamientos y recuerdos en palabras depende de la
edad del niño, el nivel de desarrollo y otros factores, como la dinámica
familiar, las características de la personalidad, las normas culturales y
el contexto psicosocial. Hay varias pautas sobre cómo entrevistar
mejor a un niño que los médicos pueden usar para
apoyar su labor (véanse los párrs. 284 a 293 supra).
568. Si un niño ha sido física o sexualmente
agredido, es importante, si es posible, que el niño sea
visto por un experto en abuso infantil y utilizando guías
adecuadas.479

Su capacidad para comprender las inferencias que otros (a) Consideraciones de desarrollo
pueden extraer de las formas en que estas dificultades afectan
su evidencia puede verse comprometida. 569. Los factores de desarrollo afectan la capacidad de
niños y adolescentes para realizar tareas que son relevantes
5. Niños y tortura para la evaluación.480 La investigación sobre entrevistas

forenses señala que los niños comienzan a manifestar la

566. La tortura puede afectar a un niño directa o indirectamente. capacidad de recordar eventos con precisión entre las edades
El impacto puede deberse a que el niño haya sido torturado de 3 y 6 años, pero existe una gran variabilidad.481 No
o detenido, la tortura de los padres o familiares cercanos, o obstante, la información que se valiosa y veraz se puede
presenciar tortura y violencia o enterarse de que les ocurrió a obtener de los niños.

otras personas significativas. Esto requerirá procedimientos de entrevista cuidadosos y un

La tortura es un factor de riesgo significativo que altera el
desarrollo psicológico, físico, emocional y social de los niños
y afecta negativamente su salud mental y física. Una
discusión completa del impacto psicológico de la tortura en los
niños y pautas completas para realizar una evaluación de un
niño que ha sido torturado es
más allá del alcance de este manual. Sin embargo, se
pueden resumir varios puntos importantes.
567. En primer lugar, al evaluar a un niño del que se sospecha que
ha sido torturado, el médico debe estar informado y adherirse al
Protocolo de Estambul y sus normas.
Principios. El médico debe asegurarse de que los niños reciban el
apoyo de personas afectuosas y que se sientan seguros durante la
evaluación. Esto puede requerir que uno de los padres o un
proveedor de atención de confianza esté presente durante la
evaluación o partes de ella. En segundo lugar, el médico debe
conocimiento de las capacidades de los niños.482
570. Los bebés pueden ser evaluados y observados aunque
no pueden ser entrevistados verbalmente. El clínico puede
comentar sobre el nivel de actividad, la naturaleza de la
interacción y las relaciones con los demás, el estado afectivo y de
regulación, el estado de ánimo general y la participación en el
juego. Los informes de los padres o cuidadores sobre el
comportamiento de su bebé (comer, dormir y temperamento)
pueden ser útiles, particularmente en relación con cambios en los
hitos del desarrollo o regresiones notables o pérdida de
capacidades previamente mantenidas. Las evaluaciones que
utilizan escalas de desarrollo infantil pueden proporcionar una
indicación del nivel de funcionamiento del niño en relación con el
grupo de edad.
571. Los niños en edad preescolar generalmente tienen altos
niveles de sugestionabilidad y conformidad social con los adultos.

478 La capacidad mental se refiere a la capacidad de comprender la información relevante para una decisión, así como de retener y sopesar la información y comunicar la decisión de manera efectiva. En los
sobrevivientes de tortura, estas capacidades pueden verse afectadas, ya que es probable que los trastornos psicóticos y del estado de ánimo afecten la capacidad de sopesar y equilibrar la
información, y los déficits cognitivos pueden afectar la capacidad de comprender y retener información relevante.
479 Royal College of Pediatrics and Child Health, The Physical Signs of Child Sexual Abuse: An Evidence-Based Review and Guidance for Best Practice (Lavenham, Reino
Unido, Lavenham Press, 2015). Véase también Astrid Heger, S. Jean Means y David Muram, eds., Evaluation of the Sexually Abused Child: A Medical Textbook and
Photographic Atlas, 2ª ed. (Nueva York, Oxford University Press, 2000).
480 Linda Sayer Gudas y Jerome M. Sattler, “Entrevistas forenses de niños y adolescentes”, Evaluación forense de salud mental de niños y adolescentes, Steven N.
Sparta y Gerald P. Koocher, eds. (Nueva York, Oxford University Press, 2006), págs. 115–128.
481 Ibíd.
482 Ibíd.

133
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

Las solicitudes y su cognición se caracterizan por un
pensamiento prelógico, mágico y egocéntrico que puede
confundirse con hechos fácticos. Construyen la realidad sobre su
mundo observable, tienden a pensar en términos absolutos y
experimentan rápidos cambios de estados emocionales. Sin embargo,
el lenguaje se desarrolla rápidamente entre los 3 y los 5 años y los
niños pueden hablar sobre sus preocupaciones y sentimientos y dar
descripciones veraces de los acontecimientos. Responden mejor a
preguntas breves, concretas y de sondeo diseñadas para ampliar sus
ideas y aclararlas.
las capacidades de los niños en edad preescolar y mayores:
los niños más pequeños tienden a recordar menos información,
brindan relatos más breves de sus experiencias que los niños
mayores y son más propensos que los niños mayores a responder
erróneamente a preguntas sugerentes. Además, cuanto más
pequeños sean los niños, más se verá influida su experiencia y
comprensión del evento traumático por las reacciones y actitudes
inmediatas de los cuidadores después del evento.485 Sin embargo,
es importante señalar que los informes de los niños más pequeños
no son menos precisos que los de niños mayores.486

572. Entre los 6 y los 12 años, los niños pueden pensar de manera más

planificada y realizar diferentes tareas mentales. Sin embargo, el 575. Las reacciones de un niño a la tortura dependen de la edad,

pensamiento sigue siendo concreto, rígido y literal. Tienden a pensar etapa de desarrollo y habilidades cognitivas.487 Para los

en términos de hechos en lugar de relaciones lógicas y no pueden niños menores de 3 años que han experimentado o presenciado

reflexionar sobre los posibles resultados. Al mismo tiempo, entienden las torturas, el papel protector y tranquilizador de sus cuidadores es

relaciones de causa y efecto, tienen conciencia social y pueden crucial.488 Las reacciones de los niños muy pequeños a las

comprender las inconsistencias en el comportamiento social. La capacidad experiencias traumáticas generalmente involucran hiperexcitación,

para discutir temas abstractos es limitada y existe vulnerabilidad a comentarios como alteración del sueño, irritabilidad, reacciones de sobresalto

negativos y preguntas engañosas. intensificadas y evitación de personas, lugares, recordatorios

físicos, situaciones interpersonales o conversaciones (como una
entrevista clínica) que despiertan recuerdos del trauma. Los niños
mayores de 3 años a menudo tienden a

573. Los adolescentes son menos concretos en su pensamiento y

son capaces de pensamiento simbólico y racional. Le dan un gran
valor a la influencia de los compañeros y pueden tener una actitud de
invencibilidad y es más probable que se involucren en un
comportamiento de riesgo. Pero también son más capaces que los
niños más pequeños de reconocer los límites y los requisitos éticos
de una evaluación, así como el motivo de un examen relacionado con
experiencias de tortura o malos tratos. Los investigadores señalan
que los adolescentes pueden informar con precisión síntomas, eventos
y experiencias con un sentido adecuado del tiempo y el entorno.483 El
médico debe hacerle saber al adolescente que sus opiniones y aportes
son valorados.
La privacidad puede ser una preocupación especial para los
adolescentes y las limitaciones de confidencialidad deben
revisarse cuidadosamente. Es recomendable comenzar
centrándose en temas neutrales y abordar los temas sensibles más adelante.484
retraerse y negarse a hablar directamente sobre experiencias
traumáticas. La capacidad de expresión verbal aumenta durante el
desarrollo. Se produce un marcado aumento alrededor de la etapa de
operaciones concretas (8–9 años), cuando los niños desarrollan la
capacidad de brindar una cronología confiable de los eventos.489 Estas
nuevas habilidades aún son frágiles y, por lo general, no es hasta el
comienzo de la etapa de operaciones formales. (12 años) que los niños
son consistentemente capaces de construir una narrativa coherente.
La adolescencia es un período de desarrollo robusto en el que los
efectos de la tortura pueden variar ampliamente. Las experiencias de
tortura pueden causar cambios profundos en la personalidad de los
adolescentes, lo que resulta en un funcionamiento emocional
crónicamente desregulado y problemas de comportamiento y relacionales.
Alternativamente, los efectos de la tortura en los adolescentes
pueden ser similares a los observados en los niños más
pequeños, con regresión y disminución del funcionamiento.

574. Existen importantes diferencias entre

estrategias de recuperación de la memoria autobiográfica y

483 Ibíd. Véase también Zoe Given-Wilson, Jane Herlihy y Matthew Hodes, “Contar la historia: una revisión psicológica sobre la evaluación de las solicitudes de asilo de los adolescentes”, Canadian
Psychology, vol. 57, núm. 4 (2016), págs. 265–273.
484 Sayer Gudas y Sattler, “Entrevista forense de niños y adolescentes”.
485 Saskia von Overbeck Ottino, “Familles victimes deviolences colectivos et en exil: quelle urgence, quel modèle de soins? Le point de vue d'une pédopsychiatre”, Revue française de psychiatrie et
de psychologie médicale, vol. 14 (1998), págs. 35–39.
486 Michael E. Cordero y otros. “Los protocolos de entrevistas forenses estructuradas mejoran la calidad y la información de las entrevistas de investigación con niños: una revisión de la investigación
utilizando el Protocolo de entrevistas de investigación del NICHD”, Child Abuse & Neglect, vol. 31, núm. 11–12 (2007), págs. 1201–1231.
487 Australian Child and Adolescent Trauma, Loss and Grief Network, “Cómo los niños y jóvenes experimentan y reaccionan ante eventos traumáticos” (2010), pág. 4.
488 Michel Grappe, “La guerre en ex-Yougoslavie: un consider sur les enfants réfugiés”, en Psychiatrie humanitaire en ex-Yougoslavie et en Arménie: face au traumatisme, Marie
Rose Moro y Serge Lebovici, eds. (París, Presses universitaires de France, 1995), págs. 89–106.
489 Jean Piaget, La naissance de l'intelligence chez l'enfant, 9ª ed. (Neuchâtel, Delachaux et Niestlé, 1977).

134
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(b) Consideraciones para realizar la evaluación
576. Como preparación para la evaluación, los médicos deben considerar
las circunstancias individuales y contextuales
que requieren un ajuste de la complejidad del lenguaje y
las expectativas para el nivel de detalle que el niño podrá
brindar.490 Siempre que sea posible, se recomienda recopilar
información de los padres, maestros y otras personas sobre
el historial de desarrollo del niño, necesidades especiales ,
antecedentes médicos y psiquiátricos, funcionamiento social y
escolar, y ajuste conductual.491 Los cuidadores también
pueden proporcionar información sobre las emociones y
alteraciones del niño.
en el estado de ánimo y el comportamiento. Si el niño, niña o adolescente es
no acompañados por sus padres, o sustitutos de los padres,
como ocurre en el caso de los menores no acompañados en
los casos de asilo, se debe prestar especial atención al
establecimiento de un clima de confianza y acogida. También es
importante asegurarse de que el menor no acompañado sea
atendido después de la entrevista.
577. El médico debe conocer y considerar las
riesgos y amenazas potenciales para el niño, por ejemplo,
por parte de los perpetradores de la tortura. Se recomienda
encarecidamente que los médicos planifiquen una evaluación
que pueda ser más larga que la de los adultos, teniendo en
cuenta el tiempo que podría ser necesario para establecer
una buena relación con un niño o darles el tiempo que podría
ser necesario para compartir información importante y
delicada.492 Esto podría significar programar la evaluación
durante varios días de reuniones e incluir tiempo para
descansos y conversaciones y actividades no relacionadas con la tortura o una pantalla de computadora frente al médico y al intérprete.
experiencia de malos tratos. El nivel de comunicación con el
niño debe ser adecuado a su edad, nivel de desarrollo,
habilidades de comunicación y otras circunstancias individuales
y contextuales.493
Se debe proporcionar al niño información y explicaciones
sobre la evaluación que le permitan tomar decisiones sobre
si desea participar en el procedimiento y cómo desea hacerlo,
de una manera que le resulte comprensible y adecuada a su
edad y nivel de madurez. Los riesgos potenciales y reales
deben ser considerados con el niño. Hacia
En la medida en que sea posible y en el mejor interés de
los niños, es una buena práctica incluir a sus padres o
tutores en el proceso de evaluación y
490 ACNUR, El meollo del asunto: Evaluación de la credibilidad cuando los niños solicitan asilo en la Unión Europea (Bruselas, 2014), pág. 107.
491 Kathryn Kuehnle y Steven N. Sparta, “Evaluación de las denuncias de abuso sexual infantil en un contexto legal”, en Evaluación forense de salud mental de niños y adolescentes,
Steven N. Sparta y Gerald P. Koocher, eds. (Nueva York, Oxford University Press, 2006), págs. 129–148.
492 Ibíd.
493 ACNUR, El corazón del asunto, pág. 107.
494 Ibíd., pág. 126.
495 Ibíd., pág. 107.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
llegar a un entendimiento claro y mutuo sobre la naturaleza y
grado de su participación y de la información que se les
proporcionará.
578. El establecimiento de confianza puede ser un desafío, ya
que el niño puede experimentar la situación o las
condiciones de la entrevista como una reminiscencia de la tortura o
malos tratos La confianza puede verse socavada por la
edad y los desequilibrios de poder o si se percibe a los
médicos o intérpretes como representantes del grupo político,
étnico o social cuyas autoridades ejecutaron la tortura. Estos
factores también pueden afectar la confianza y comodidad de
los padres y tutores con la evaluación. Puede ser imposible
lograr el establecimiento de confianza dentro del tiempo
limitado
marco de la evaluación. Las directrices del ACNUR para
entrevistar a niños en el contexto de las solicitudes de asilo en
la Unión Europea establecen que: “Las buenas prácticas para
generar confianza se evidenciaron al comienzo de muchas
entrevistas en las que los entrevistadores presentaron a los
intérpretes, explicaron su papel, el significado de la
confidencialidad , que hablarían en primera persona e interpretarían
palabra por palabra”494.
579. Se recomienda saludar adecuadamente al niño
y comenzar la evaluación con temas neutros sobre asuntos
relacionados con la vida cotidiana del niño, como la escuela,
las amistades y las actividades preferidas. Otro factor que
potencialmente puede facilitar el establecimiento de la confianza
es una reducción de la distancia psicológica y la formalidad; por
ejemplo, usando una mesa redonda u ovalada y evitando tener
Se recomienda que el médico brinde amplias oportunidades
para los descansos y observe la presentación del niño con
especial cuidado para no abrumarlo. Si hay
indicaciones de que el niño se está volviendo ansioso,
disociado o con una angustia notable, el evaluador debe tomar
nota de estos indicadores clínicos y tomar todas
medidas para aliviar al niño y/o proporcionar apoyo psicosocial.
La evaluación se puede grabar con el consentimiento del niño
y posiblemente del padre o tutor para permitir que los
entrevistadores mantengan una comunicación directa con el
niño sin las interrupciones de la toma de notas.495 Si se graba
la evaluación, se debe tener precaución adicional. para
mantener el
135
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS

registro confidencial, con acceso limitado dado solo al equipo
de evaluación y para proteger la identidad del niño. Si existen
otros requisitos legales locales con respecto a la protección de
datos, estos deben cumplirse.
580. El uso de instrumentos de evaluación puede ser útil y proporcionar
apoyo adicional para las conclusiones de la evaluación.
Se recomienda que los médicos utilicen instrumentos que
cuya validez y confiabilidad se han establecido para la población
particular que se evalúa. Cuando tales instrumentos no estén
Los síntomas pueden ser muy diferentes a los de los adultos
y el médico debe basarse más en las observaciones del
comportamiento del niño que en la expresión verbal,
considerar el comportamiento del niño antes de la supuesta
tortura o malos tratos y utilizar los hitos del desarrollo para
identificar cualquier impacto potencial en el comportamiento
normal. .497 Se recomienda recopilar información de los
cuidadores, maestros u otros adultos en el entorno del niño y
podría ser necesario.
La investigación ha delineado los efectos del trauma en

disponibles, se debe tener mucho cuidado en la interpretación
de los resultados de las pruebas.
Cualquier adaptación en los procedimientos de administración
e interpretación debe documentarse y debe anotarse el
impacto potencial en los hallazgos.496
(c) Consideraciones clínicas
581. Una evaluación de los efectos psicológicos de la tortura y los
malos tratos en niños y jóvenes debe incluir información sobre
lo siguiente: (a) la edad del niño, el estado de desarrollo, así
como el funcionamiento psicológico y médico actual y pasado
(incluido el cognitivo, habilidades de comunicación y lenguaje,
necesidades especiales, funcionamiento social y escolar, ajuste
conductual y trastornos emocionales); (b) historia personal y
familiar cronológica de eventos de vida, residencias, etc.; (c)
descripción de la supuesta tortura o malos tratos, su frecuencia
y duración; (d) información sobre si el niño fue testigo de la
muerte y/o tortura de otros, especialmente de otros significativos,
o se enteró de que les había ocurrido a otros significativos; (e)
la identidad del presunto torturador y lo que representa para el
niño en su contexto social y político particular; (f) factores
protectores e indicadores de resiliencia; (g) la disponibilidad de
familiares y otros cuidadores para brindar apoyo psicosocial; h) la
situación jurídica del niño; y (i) las disposiciones vigentes para el
tratamiento y apoyo.
582. Si bien los síntomas pueden aparecer en niños y pueden ser
similares a los observados en adultos, la manifestación
salud física y mental de los niños. Por ejemplo, se ha encontrado
que el trauma compromete significativamente el desarrollo
cognitivo,498 y que la exposición a experiencias traumáticas
aumenta el riesgo de problemas de aprendizaje y de conducta,
obesidad499 y síntomas psicóticos en la niñez.500 La
investigación sobre el desarrollo neuroconductual muestra que
el desarrollo del cerebro de los niños se ve afectado por la
ambiente en el que crecen. Aunque es posible que no puedan
recordar, el recuerdo de la tortura puede tener un efecto
traumático en los bebés y niños pequeños con un impacto
potencial a largo plazo en su apego, regulación y experiencia de
confianza.501 El entorno y el trauma influirán en la identidad y
la maduración del cerebro de un adolescente. y funciones del
pensamiento, como el pensamiento abstracto y la capacidad de
considerar múltiples perspectivas, así como la regulación de las
emociones y el procesamiento emocional, que aún están en
desarrollo a esta edad.502
583. Los síntomas del PTSD pueden aparecer en los niños. los
los síntomas pueden ser similares a los observados en los
adultos, pero el médico debe confiar más en las observaciones
del comportamiento del niño que en la expresión verbal.503
Por ejemplo, el niño puede mostrar síntomas de
reexperimentación manifestados por juegos monótonos y
repetitivos que representan aspectos del evento traumático,
recuerdos visuales de los eventos dentro y fuera del juego,
preguntas o declaraciones repetidas sobre el evento traumático
y pesadillas recurrentes que por los niños más pequeños en
particular (por ejemplo, los de 6 años o menos) pueden no tener
contenido reconocible. Los niños también pueden articular
preocupaciones repetitivas de que la tortura volverá a ocurrir o

496 Gerald P. Koocher, “Cuestiones éticas en la evaluación forense de niños y adolescentes”, en Evaluación forense de la salud mental de niños y adolescentes, Steven N. Sparta
y Gerald P. Koocher, editores. (Nueva York, Oxford University Press, 2006), págs. 46–63.
497 Véase Lenore C. Terr, “Traumas infantiles: un resumen y una descripción general”, American Journal of Psychiatry, vol. 148, núm. 1 (1991), págs. 10 a 20; Zero to Three, DC:0–5:
Clasificación diagnóstica de la salud mental y los trastornos del desarrollo de la infancia y la primera infancia, versión 2.0 (Washington, DC, 2021); Françoise Sironi, “'Sobre la
tortura en un niño', ou les avatars de l'ethnocentrisme psychologique”, Sud/Nord – Folies et Cultures, No. 4 (Enfances) (1995), pp. 205–215; y Lionel Bailly, Les catastrophes et
leurs conséquences psychotraumatiques chez l'enfant (París, ESF, 1996).
498 Michelle Bosquet Enlow y otros, “Exposición al trauma interpersonal y desarrollo cognitivo en niños hasta los 8 años: un estudio longitudinal”, Journal of Epidemiology
y Salud Comunitaria, vol. 66, núm. 11 (2012), págs. 1005–1010.
499 Nadine J. Burke y otros, “El impacto de las experiencias infantiles adversas en una población pediátrica urbana”, Child Abuse & Neglect, vol. 35, núm. 6 (2011), págs. 408–413.
500 Louise Arseneault y otros, “Trauma infantil y síntomas psicóticos emergentes en niños: un estudio de cohorte longitudinal genéticamente sensible”, American Journal of
Psiquiatría, vol. 168, núm. 1 (2011), págs. 65–72.
501 Atilgan Erozkan, “El vínculo entre los tipos de apego y el trauma infantil”, Universal Journal of Educational Research, vol. 4, núm. 5 (2016), págs. 1071–1079.
502 ACNUR, El corazón del asunto, págs. 58–60.
503 Véase Terr, “Traumas de la infancia”; Cero a tres, DC:0–5 Clasificación diagnóstica; Sironi, “'Sobre la tortura de un niño'”; y Bailly, Les catastrophes et leurs conséquences.

136
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VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
que los perpetradores los lastimarán a ellos o a sus seres queridos
nuevamente a pesar de las garantías de que están a salvo. El niño
puede desarrollar enuresis nocturna, pérdida del control de las
deposiciones, retraimiento social, afecto restringido, cambios de actitud
hacia sí mismo y hacia los demás y sentimientos de que no hay futuro.
El niño puede experimentar hiperexcitación y tener terrores nocturnos,
problemas para ir a la cama, trastornos del sueño, respuesta de
sobresalto intensificada, irritabilidad y trastornos significativos en la
atención y la concentración.
El niño puede quejarse de dolores corporales, como dolores de
estómago u otros problemas físicos. Miedos y comportamientos
agresivos que no existían antes del evento traumático pueden
manifestarse como agresividad hacia los compañeros, adultos o
animales, miedo a la oscuridad, miedo a ir solo al baño y fobias. Los
niños pueden demostrar un comportamiento sexual inapropiado para
su edad. Los cambios de comportamiento postraumáticos también
pueden incluir conductas de riesgo, autolesiones e intentos de
suicidio. El niño puede volverse evasivo y/o apegado a los padres o
cuidadores, exhibir arrebatos explosivos o berrinches, o exhibir un
estado de trance, falta de atención, confusión, olvido y falta de
respuesta. Pueden aparecer síntomas de ansiedad, como miedo
exagerado a los extraños, ansiedad por separación, pánico, agitación,
berrinches y llanto incontrolado. La angustia puede manifestarse en
otros comportamientos, como morderse las uñas y chuparse el dedo,
y cambios en el uso del lenguaje. El niño también puede desarrollar
problemas de alimentación. Los adolescentes pueden presentarse
de manera muy diferente, negando inicialmente cualquier síntoma e
insistiendo en que su nivel de funcionamiento es bueno y que no
necesitan ayuda. La presión de los compañeros para encajar con los
demás y el miedo al estigma de la enfermedad mental pueden ser
particularmente evidentes. Los adolescentes pueden tener dificultades
particulares para manejar las características del PTSD, como arrebatos
de ira e irritabilidad, dirigiendo la violencia hacia los demás o hacia
ellos mismos.
El examinador necesita tiempo adicional para construir
confianza y comunicación y evalúe cuidadosamente los
indicadores indirectos de angustia mental, incluidos, por ejemplo,
el apetito, el patrón de sueño, la capacidad de entablar amistades
y confiar en los demás, el comportamiento autodestructivo, el
comportamiento de toma de riesgos y el manejo de la ira.
(d) Clasificación diagnóstica
584. Al evaluar la salud mental, los comportamientos y las emociones
de los niños que son consistentes con la
La edad de desarrollo debe diferenciarse de
504 Research Triangle Institute International, DSM-5 Changes: Implications for Child Serious Emotional Disturbance (Rockville, Maryland, Substance Abuse and Mental Health
Administración de Servicios, 2016).
505 Ibíd.
506 Ibíd.
507 Ibíd.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
los que son motivo de preocupación. Las mismas categorías
diagnósticas pueden verse como problemáticas en algunas edades y
ser parte del comportamiento normal en edades más jóvenes. Por lo
tanto, el comportamiento y los síntomas deben evaluarse y considerarse
dentro del rango esperado en una edad y etapa de desarrollo en
particular, así como dentro del contexto cultural del niño. Además, la
tortura puede empeorar problemas preexistentes en todos los dominios
del funcionamiento y puede causar una pérdida o regresión del
funcionamiento que ya se ha logrado.
585. La siguiente lista complementa la información anterior sobre
la clasificación diagnóstica en adultos. No es exhaustivo y
enumera diagnósticos o criterios propios de niños y
adolescentes.
(i) Trastorno de estrés postraumático
586. Los eventos traumáticos que le ocurrieron a un cuidador u otro
adulto de confianza a menudo son experimentados por los niños
como muy perturbadores y angustiosos, incluso indirectamente
cuando el niño se entera de los eventos. Porque
los niños necesitan relacionarse con sus padres y cuidadores
para sentirse seguros, tales eventos pueden experimentarse como
una amenaza para la supervivencia física y psicológica del niño.504
De hecho, el criterio A en el DSM-5 diagnóstico de TEPT en niños de
6 años o menos incluye en el definición de trauma presenciar el evento
o eventos tal como les ocurrió a otros, especialmente a los cuidadores
principales, o enterarse de que el evento traumático le ha ocurrido a un
padre o cuidador. El TEPT puede desarrollarse a cualquier edad
después de 1 año de edad.505 El diagnóstico de TEPT en niños
menores de 6 años excluye los síntomas que dependen de la capacidad
de verbalizar construcciones cognitivas y estados emocionales
complejos, como la autoconfianza negativa y la culpa. Por tanto, el
umbral de los síntomas de evitación y cogniciones negativas (criterio
C) se reduce de tres a un síntoma506.
587. La reexperimentación del trauma puede variar según la edad
del niño. En los niños pequeños, es más probable que los
síntomas se expresen a través del juego, y pueden faltar las
reacciones de temor en el momento de la exposición o de la
reexperimentación del trauma. Los sueños aterradores de los
niños pequeños pueden no ser específicos del trauma.
Los padres pueden reportar una amplia gama de cambios
emocionales y de comportamiento, incluidos cambios en el juego.507
137
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(ii) Trastorno de ansiedad por separación
588. Miedo o ansiedad excesivos e inapropiados para el desarrollo con
respecto a la separación de aquellos a quienes el niño está
apegado, como lo demuestran tres de los siguientes: (a) angustia
excesiva recurrente al anticipar o experimentar la separación del
hogar o de las principales figuras de apego; (b) preocupación
persistente y excesiva por la pérdida de figuras de apego
importantes o por posibles daños a estas, como enfermedades,
lesiones, desastres o la muerte; (c) preocupación persistente y
excesiva por experimentar un evento adverso (p. ej., perderse, ser
secuestrado, tener un accidente o enfermarse) que provoque la
separación de una figura de apego importante; (d) desgana persistente
o negativa a salir, lejos del hogar, a la escuela, al trabajo oa cualquier
otro lugar por temor a la separación; (e) miedo persistente y excesivo
o renuencia a estar solo o sin figuras de apego importantes en el hogar
o en otros entornos; (f) desgana persistente o negativa a dormir fuera
de casa oa irse a dormir sin estar cerca de una figura de apego
importante; (g) pesadillas repetidas que involucran el tema de la
separación; y (h) quejas repetidas de síntomas físicos (tales como
dolores de cabeza, dolores de estómago, náuseas o vómitos) cuando
ocurre o se anticipa la separación de las principales figuras de apego.
(iii) Fobia específica
589. Un miedo marcado o ansiedad acerca de un objeto específico
o situación que está fuera de proporción con el peligro real
planteado por el objeto. La ansiedad o el miedo pueden
expresarse mediante el llanto, las rabietas, el congelamiento
o el aferramiento. El objeto o situación fóbica casi siempre
provoca esta reacción, se evita activamente o se soporta con
miedo intenso.
590. Se considera apropiado para el desarrollo de
los niños pequeños experimentan miedo a objetos específicos
(reales o imaginarios) o situaciones (p. ej., animales, brujas,
monstruos o la oscuridad), y por lo general estos son transitorios
y solo tienen un efecto levemente perjudicial. Por lo tanto, al
diagnosticar la fobia específica, es importante considerar la
duración del miedo, la ansiedad o la evitación, el grado de
deterioro y la etapa de desarrollo del niño.
508 Ricky Greenwald, “El papel del trauma en el trastorno de conducta”, Revista de agresión, maltrato y trauma, vol. 6, núm. 1 (2002), págs. 5 a 23; Pratibha Reebye y otros, “Síntomas
del trastorno de estrés postraumático en adolescentes con trastorno de conducta: diferencias sexuales y patrones de inicio”, Canadian Journal of Psychiatry, vol. 45, núm. 8 (2000),
págs. 746–751.
138
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(iv) Trastornos del funcionamiento social con inicio específico en
la niñez y la adolescencia
591. La CIE-11 enumera los trastornos del funcionamiento social con
inicio específico de la niñez y la adolescencia que se asocian
con grandes distorsiones y privaciones ambientales. Entre estos
se encuentran el mutismo electivo, el trastorno reactivo del apego
de la infancia y la desinhibición.
Trastorno de apego de la infancia. El mutismo electivo es
una condición caracterizada por una marcada selectividad
emocionalmente determinada en el habla y se manifiesta con
mayor frecuencia en la primera infancia. El trastorno de apego
reactivo de la infancia se caracteriza por anormalidades
persistentes en el patrón de relaciones sociales del niño y de las
relaciones con los padres que es reactivo a los cambios en las
circunstancias ambientales, antes de los 5 años de edad. El
trastorno de apego desinhibido de la infancia se caracteriza por un
apego difuso alrededor del de 2 años y un comportamiento de
apego en la infancia, y/o un comportamiento de búsqueda de
atención indiscriminadamente amistoso en la niñez temprana o
media. Este patrón está asociado con marcadas discontinuidades
en los cuidadores o múltiples cambios en las ubicaciones familiares.
(v) Trastorno de conducta
592. Los criterios diagnósticos del DSM-5 para el trastorno de la
conducta son la violación de las normas o reglas sociales o los
derechos de los demás de manera persistente y repetitiva, incluida
la agresión hacia personas y animales, la destrucción de la
propiedad, el engaño o el robo y las violaciones graves de las
reglas. . Hay dos especificadores para el diagnóstico, con respecto
al inicio y el grado de emocionalidad social. Se ha sugerido que el
trauma juega un papel clave en el desarrollo y la persistencia del
trastorno de conducta y se ha encontrado que los jóvenes a los que
se les diagnostica un trastorno de conducta a menudo experimentan
un trauma.508 Los factores de riesgo ambientales enumerados en el
DSM-5 incluyen y abuso sexual y exposición ambiental a la violencia.
Una nota de advertencia en el DSM-5 establece que el contexto de
los comportamientos indeseables
asociado con el trastorno de conducta debe ser considerado
y que el diagnóstico puede potencialmente aplicarse
incorrectamente a personas en entornos en los que el
comportamiento se considera casi normativo, como zonas de
guerra y áreas amenazantes y peligrosas con un alto índice de criminalidad.
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(vi) Trastorno de conducta de oposición
593. Las características diagnósticas de la conducta de oposición
trastorno incluyen un patrón frecuente y persistente de enojo/
irritabilidad, comportamiento discutidor/desafiante o venganza
(criterio A). Los factores ambientales juegan un papel importante
en las teorías causales del trastorno. Los primeros síntomas
suelen aparecer durante los años preescolares y rara vez
después de la adolescencia temprana.
(vii) Trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo
594. Los criterios diagnósticos del estado de ánimo disruptivo
El trastorno de desregulación incluye arrebatos de cólera
severos y recurrentes, expresados verbalmente y/o
conductualmente, que son intensos y prolongados en relación
con la situación o provocación. Son inconsistentes con el nivel
de desarrollo y ocurren tres o cuatro veces por semana en
promedio. Entre arrebatos, el estado de ánimo es
persistentemente irritable la mayor parte del día, durante al
menos 12 meses, en al menos dos o tres entornos (es decir, la
escuela, el hogar y con los compañeros). Si bien no hay
consenso sobre las causas del trastorno de desregulación
disruptiva del estado de ánimo, la desregulación en la infancia
se ha relacionado con el trauma y el abuso interpersonal.509
La validez del diagnóstico se ha establecido para niños de entre
7 y 18 años y su uso debe restringirse este grupo de edad.
e) Contexto familiar
595. Las familias se ven profundamente afectadas por la experiencia de tortura de
un niño, así como por la tortura de otros miembros de la familia. La tortura de
los padres, además de vivir en contextos sociales y políticos de violencia y
opresión, puede tener un impacto grave en el funcionamiento y la salud mental
de los padres. Por lo tanto, es importante considerar los factores ambientales y
contextuales que afectan
la familia y el niño, como la separación entre los miembros de
la familia y las circunstancias de estas separaciones, las vías
de comunicación durante la separación, las amenazas a los
miembros de la familia, las circunstancias de la reunificación,
los factores de estrés en los procesos de reasentamiento (como
la pérdida del estatus social y económico), el impacto de la
aculturación, el racismo, los apoyos sociales y las experiencias
y creencias relacionadas con la búsqueda de apoyo (como el
miedo a llamar la atención de las autoridades sobre la familia),
por nombrar solo algunos.
509 Yael Dvir y otros, “Maltrato infantil, desregulación emocional y comorbilidades psiquiátricas”, Harvard Review of Psychiatry, vol. 22, núm. 3 (2014), págs. 149–161.
510 Center for Victims of Torture, Healing the Hurt: A Guide for Developing Services for Torture Survivors (Minneapolis, 2005), cap. 2.
511 Ibídem.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
596. Como padres, muchos supervivientes de la tortura temen
que la intensidad de sus propios sentimientos los abrume
y puedan sentir vergüenza y culpa510. Hacer frente a los
sentimientos expresados o no expresados por sus hijos
también puede plantear dificultades a los padres, que pueden
sentirse culpables por las circunstancias que sus hijos
soportaron y continúan soportando.511 Los padres de niños
que fueron torturados también pueden sentirse culpables por
su incapacidad para proteger a sus hijos y su crianza puede
verse afectada por sentimientos de impotencia. La experiencia
de impotencia de los padres puede reforzarse en ambientes
violentos y opresivos que exponen a los niños y adolescentes
a múltiples factores de riesgo. Dichos entornos también pueden
dañar las percepciones de los adolescentes sobre la autoridad
de sus padres.
597. Los efectos de la tortura en la capacidad de las personas para
La función como padres puede tomar muchas formas.
Está más allá del alcance de este capítulo describir estos
efectos, sin embargo, es importante señalar que estos deben
considerarse con respecto a la edad, la cultura y el desarrollo
del niño. Las cuestiones de protección relacionadas con las
consideraciones generales del funcionamiento de los padres,
incluido el abandono infantil y el abuso físico, sexual y emocional,
también deben considerarse y abordarse dentro de la
marcos legales y sociales locales apropiados.
f) Papel de la familia
598. La familia juega un papel dinámico importante en
sintomatología persistente entre los niños. Con el fin de
preservar la cohesión en la familia, pueden presentarse
conductas disfuncionales y delegación de roles. A los miembros
de la familia, a menudo niños, se les puede asignar el papel de
paciente y desarrollar trastornos graves. Un niño puede estar
demasiado protegido o se pueden ocultar hechos importantes
sobre el trauma. Alternativamente, el niño puede ser
parentalizado y se espera que cuide a los padres, lo que puede
dificultar el desarrollo y dar lugar a una sintomatología depresiva
o bien a un comportamiento agresivo. En el marco de los
trastornos postraumáticos, los padres pueden mostrar arranques
de ira y violencia contra el niño, así como otras formas de
violencia doméstica, que el niño puede vivir, presenciar y
procesar de manera traumática. Cuando el niño no es la víctima
directa de la tortura sino sólo indirectamente afectado, los adultos
a menudo tienden a subestimar el impacto en la psique y el
desarrollo del niño. Cuando los seres queridos que rodean a los
niños han sido perseguidos, violados
139
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
y torturados o los niños han sido testigos de graves
trauma o tortura, pueden desarrollar creencias disfuncionales,
como creer que son responsables de los malos eventos o que
tienen que soportar las cargas de sus padres. Este tipo de
creencia puede conducir a problemas a largo plazo con la
culpa, conflictos de lealtad, desarrollo personal y maduración
en un adulto independiente.
D. Personas lesbianas,
gais, bisexuales, transgénero e
intersexuales y tortura y malos tratos
599. Con base en su orientación sexual, identidad de género,
expresión de género o características sexuales, las personas
lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales son
frecuentemente estigmatizadas y deshumanizadas, lo que las hace
particularmente vulnerables a las violaciones de los derechos
humanos, incluida la persecución, la criminalización, el encarcelamiento
y la tortura. y malos tratos. Las investigaciones sobre niños y jóvenes
lesbianas, gais, bisexuales y transgénero muestran que corren el
riesgo de sufrir abusos físicos y psicológicos graves y prolongados,
con un impacto potencialmente grave en su salud mental.512
Los solicitantes de asilo adultos lesbianas, gays, bisexuales
y transgénero también tienen experiencias particulares de
persecución, con consecuencias para la salud mental.513
Dependiendo de los diferentes niveles de estigma y
patologización, las personas lesbianas, gays, bisexuales,
transgénero e intersexuales han experimentado en sus vidas,
incluyendo atención médica, pueden tener grandes dificultades
para revelar su identidad, incluso al médico que los examina.
600. Al examinar a una presunta víctima de tortura perteneciente a la
comunidad lesbiana, gay, bisexual y transgénero, se deben tener
en cuenta consideraciones específicas para evitar patologizarla o
retraumatizarla. Algunos de los principios básicos y notas clave que
los médicos deben tener en cuenta para crear una sensación de
seguridad y respeto y, por lo tanto, ayudar a las personas a revelar
todos los aspectos de su historial de tortura y ayudar al médico a
comprender mejor sus necesidades actuales.
(médica, psicosocial y legalmente) incluyen:
(a) Reconocer que la diversidad en orientación sexual,
identidad de género, expresión de género y características
sexuales es normal y no es una enfermedad mental;
512 Edward J. Alessi, Sarilee Kahn y Sangeeta Chatterji, “'Los tiempos más oscuros de mi vida': recuerdos de abuso infantil entre migrantes forzados perseguidos por su
orientación e identidad de género”, Child Abuse & Neglect, vol. 51 (2016), págs. 93–105.
513 Rebecca A. Hopkinson y otros, “Experiencias de persecución y salud mental de solicitantes de asilo LGBT”, Journal of Homosexuality, vol. 64, núm. 12 (2017), págs. 1650–1666.
514 Alessi y otros, “'Los momentos más oscuros de mi vida'”.
515 Ibíd.
516 Ibíd.
140
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(b) Comprender cómo las experiencias de persecución de
niños, niñas, jóvenes y adultos lesbianas, gays, bisexuales,
transgénero e intersexuales afectan su salud mental y física;514
c) Estar familiarizados con los factores sociales, culturales
y políticos específicos que pueden haber influido en la salud
física y mental de las personas lesbianas, gais, bisexuales,
transgénero e intersexuales515;
(d) Preguntar sobre la persecución y el abuso que tienen como
objetivo la orientación sexual y la identidad de género durante la
niñez y la adolescencia;516
(e) Crear un entorno de apoyo en el que las personas lesbianas,
gays, bisexuales, transgénero e intersexuales puedan explorar,
debatir y revelar su orientación sexual e identidad de género tanto
como sea posible en ese momento;
(f) Reconocer que las personas lesbianas, gais,
bisexuales, transgénero e intersexuales pueden no haber
revelado su orientación sexual, identidad de género, características
sexuales, nombre elegido o pronombres de género en interacciones
previas con las autoridades por miedo basado en experiencias
pasadas y otros factores;
(g) Utilizar, siempre que sea posible, los nombres propios y pronombres
de género elegidos por la persona, compatibles con la autoidentificación
de la persona;
(h) ser conscientes de sus propias actitudes, percepciones y
prejuicios y cómo pueden afectar la calidad de la interacción con
personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales;
(i) Aplicar un enfoque interseccional, intercultural e
interreligioso y esforzarse por comprender las barreras específicas
que enfrentan las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero
e intersexuales cuando tienen identidades minoritarias o estigmatizadas
adicionales (por ejemplo, personas con VIH, refugiados, trabajadores
sexuales o persona con discapacidad física);
(j) No intentar cambiar la orientación sexual o la identidad de
género del entrevistado;
Machine Translated by Google
VI. PRUEBAS PSICOLÓGICAS DE TORTURA Y MALOS TRATOS
(k) No interpretar o buscar elementos específicos que
“expliquen” la orientación sexual y la identidad de género de las
personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero;
(l) No asumir la orientación sexual y/o identidad de género de
una persona en base a su apariencia o expresión de género.
517 Asociación Americana de Psicología, Pautas para la práctica psicológica con clientes lesbianas, gays y bisexuales (2011).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
601. Más información útil y referencias sobre
las cuestiones de identidad, intervención y
evaluación se pueden encontrar en las directrices
de la Asociación Americana de Psicología517 y otras referencias.
141
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Papel de los
profesionales de
la salud en la
documentación de
la tortura y los
malos tratos en
diferentes contextos
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS

602. La participación de los profesionales de la salud en la tienen la obligación de respetar y proteger el derecho de toda
investigación y documentación de la tortura y los malos tratos persona a no ser torturado ni maltratado.
no se limita a evaluaciones clínicas integrales con fines Esto incluye la obligación de prevenir, investigar y documentar
legales. La tortura y los malos tratos también pueden ser incidentes de tortura y otros

descubiertos por profesionales de la salud en contextos no
legales518, como la prestación rutinaria de atención médica y las
inspecciones o exámenes de salud. Este capítulo busca aclarar el
papel de los profesionales de la salud tanto en contextos legales
como no legales y brindar orientación sobre las prácticas efectivas
de investigación y documentación519 en estos contextos. Si bien la
guía de este capítulo tiene como objetivo principal ayudar a los
profesionales de la salud que trabajan en contextos no legales a
cumplir con sus obligaciones de investigar y documentar la tortura y
los malos tratos, no pretende servir como una guía integral para las
evaluaciones clínicas de la tortura y los malos tratos.
Los profesionales de la salud que trabajan en contextos no legales
deben estar familiarizados con todos los capítulos relevantes del
Protocolo de Estambul y sus anexos, en particular los capítulos II,
IV, V y VI y los anexos I–IV. Este capítulo también tiene como
objetivo aclarar el papel de los profesionales de la salud en los
contextos de monitoreo y prevención, en los que el objetivo
principal de los encuentros clínicos suele ser la prevención de la
tortura y los malos tratos en lugar de evaluar una acusación
específica de abuso o la prestación de servicios de salud. cuidado. La
guía de este capítulo se basa en una revisión de consideraciones
relevantes, que incluyen: obligaciones estatales relevantes y
obligaciones éticas de los profesionales de la salud, una revisión de
diferentes contextos de documentación y
formas de malos tratos y hacer que los perpetradores rindan
cuentas.520 Los Estados también tienen el deber de tomar
medidas legislativas, administrativas, judiciales o de otro tipo
efectivas para prevenir actos de tortura en cualquier territorio bajo
su jurisdicción.521 Estas obligaciones del Estado están detalladas
en las normas internacionales de derechos humanos. como se
analiza en el capítulo I. Además, las obligaciones específicas de los
profesionales de la salud que trabajan en entornos de detención,
para documentar y denunciar la tortura y los malos tratos, están
detalladas en las Reglas Nelson Mandela522 y en los instrumentos
regionales de derechos humanos523 como se analiza en el capítulo
II. El Protocolo de Estambul y sus Principios brindan orientación sobre
cómo cumplir las obligaciones de los Estados de investigar y
documentar de manera efectiva la tortura y los malos tratos.
604. Las asociaciones internacionales de profesionales de la salud, como WMA, WPA y
ICN, también han establecido obligaciones éticas que tienen por objeto elaborar
los deberes universales fundamentales de sus respectivos profesionales de la
salud para documentar y denunciar la tortura y los malos tratos (véanse los párrs.
147 y 155 supra). Como se indica en los párrafos 177 a 182 anteriores,
independientemente de la condición de empleador (estatal o no estatal) o del
entorno de trabajo (con o sin custodia), todos los profesionales de la salud tienen
la obligación ética de documentar y denunciar los casos presuntos y presuntos de
tortura y malos tratos. -tratamiento. Esta obligación debe considerarse a la luz de
otras obligaciones éticas fundamentales (no hacer daño, confidencialidad y

respeto por la autonomía) y se deben considerar detenidamente las condiciones

desafíos especiales que los profesionales de la salud pueden necesarias para documentar y denunciar la tortura y los malos tratos en ausencia
enfrentar en diferentes contextos de documentación.
de consentimiento (véanse los párrs. 177–178 arriba). Como se indicó en el

párrafo 155 anterior, cuando las presuntas víctimas dan su consentimiento

informado a los profesionales de la salud para una evaluación clínica y denuncian

A. Obligaciones del Estado y ética la tortura y los malos tratos, el médico tiene el deber inequívoco de documentar y
obligaciones de los profesionales de la salud denunciar la tortura o los malos tratos, si se comprueba, en su defecto.

603. La obligación de los profesionales de la salud de documentar y denunciar la

tortura y los malos tratos en todos los contextos se basa en la obligación de

los Estados en virtud del derecho internacional, así como en las obligaciones

éticas de los profesionales de la salud. Como se establece en los capítulos I

y III, los Estados

518 El término contextos “no legales” se utiliza para referirse a encuentros clínicos en los que la evaluación de posibles torturas y malos tratos no son el propósito explícito o implícito del encuentro con el
paciente, aunque la información recopilada en dichos contextos no legales en última instancia pueden ser presentados como evidencia en casos legales como sucede a menudo en casos de
violencia doméstica, agresión sexual y abuso de niños y ancianos.
519 La investigación y la documentación en entornos no legales generalmente requieren que los profesionales de la salud identifiquen primero la posibilidad de tortura y/o malos tratos en función de las
observaciones del médico (p. ej., lesiones y/o angustia psicológica) y un historial de contacto con los posibles perpetradores, y luego proceder a una evaluación clínica para documentar y
posteriormente reportar evidencia clínica de tortura y/o malos tratos.
520 Convención contra la Tortura, art. 12
521 Ibíd., art. 2.
522 Si bien las Reglas Nelson Mandela no son obligaciones de los Estados basadas en tratados, proporcionan una guía universal para los profesionales de la salud que trabajan con personas privadas de su
libertad.
523 Comité Europeo para la Prevención de la Tortura, 23° Informe General del CPT (ver cap. III, párr. 71 et seq.); Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Principios y Buenas Prácticas sobre la
Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas; y Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, Directrices y Medidas para la Prohibición y Prevención de la Tortura,
Penas o Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes en África (Directrices de Robben Island).

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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
hacerlo constituiría, según WMA, una forma de
complicidad en la tortura y los malos tratos.524
605. En los casos en que no se obtenga el consentimiento y la tortura
alegada u observada pueda constituir una amenaza tanto para la
persona como para los demás, incluso representando problemas
sistémicos, es necesario que los profesionales de la salud comuniquen
sus preocupaciones e informen sobre tales asuntos en maneras que
respeten la confidencialidad médica.
B. Contextos en los que puede ser
necesaria la documentación
606. Los profesionales de la salud pueden encontrarse con denuncias
de tortura y malos tratos en muchos contextos diferentes.
Estos contextos incluyen, pero no se limitan a:
(a) Custodia policial y militar o prisión:
(i) Evaluaciones clínicas solicitadas por los detenidos;
(ii) Evaluaciones clínicas obligatorias durante la
detención (p. ej., evaluación inicial al momento de la
detención y controles de salud de los detenidos segregados);
(iii) Exámenes o formas de exámenes regulares, como
controles de salud;
(iv) Consultas generales con profesionales de la
salud;
(v) Vigilancia de los lugares de detención y todos los
lugares de privación de libertad (por ejemplo, mecanismo
nacional de prevención, institución nacional de derechos
humanos, Subcomité para la Prevención de la Tortura,
CICR, Comité Europeo para la Prevención de la Tortura, la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos , relatores
especiales de las Naciones Unidas y ONG/organizaciones
de la sociedad civil);
(vi) Diferentes tipos de inspecciones sanitarias
institucionales;
(b) Contextos de inmigración (privados o no de libertad):
i) Examen clínico de los solicitantes de asilo;
524 Resolución de la AMM sobre la responsabilidad de los médicos.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(ii) Consultas generales con profesionales de
la salud;
(iii) Evaluación clínica como examen preliminar;
c) Instituciones de atención de la salud, psiquiátricas y sociales:
(i) Consultas generales con profesionales de
la salud;
(ii) Inspecciones sanitarias institucionales;
(iii) controles de salud periódicos;
(d) Entornos nacionales e internacionales ad hoc:
(i) Las denuncias de tortura o malos tratos en el contexto de las
misiones de determinación de los hechos en materia de derechos humanos;
(ii) evaluaciones médicas solicitadas por cortes y tribunales
regionales e internacionales;
e) Los establecimientos de atención de la salud, las salas de emergencia y los servicios de urgencia.
centros de atención:
(i) Consultas generales con profesionales de
la salud;
(f) Otros contextos:
(i) investigaciones de ONG y evaluaciones individuales de
presuntas víctimas;
(ii) Centros de rehabilitación y tratamiento para víctimas
de tortura.
607. En estos contextos, el propósito principal de una clínica
encuentro puede variar. En algunos encuentros, el objetivo
principal será evaluar los casos presuntos y presuntos de
tortura y malos tratos y/o la prestación de servicios de
atención de la salud. Otros encuentros pueden tener como
objetivo principal monitorear las condiciones de detención
y el trato de las personas privadas de libertad con miras a
prevenir la tortura y los malos tratos, incluido el monitoreo
de la prestación de servicios de salud. Además, los
encuentros clínicos pueden ocurrir tanto en contextos
legales como no legales.
Cualquier evaluación clínica de una persona privada
de su libertad debe ser considerada un contexto legal
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
dada su vulnerabilidad y el mayor riesgo de tortura y malos
tratos en tales entornos.
608. Los exámenes de salud obligatorios incluyen
exámenes en el momento de la detención, periódicamente
durante la detención y antes del traslado a otras instalaciones
o la puesta en libertad. El propósito de tales exámenes es
evaluar las condiciones de salud
y para prevenir la tortura y los malos tratos.
C. Desafíos
609. Profesionales de la salud que evalúan a presuntas víctimas
de violencia, ya sea como resultado de la tortura, la violencia
doméstica, el abuso infantil u otras formas de malos tratos, pueden
experimentar desafíos significativos para realizar dichas
evaluaciones de manera efectiva. Para cumplir con su obligación
de documentar y denunciar la tortura y los malos tratos, los
profesionales de la salud deben comprender y mitigar tales
desafíos. Los profesionales de la salud empleados por el estado
deben comprender y mitigar los desafíos asociados con la
documentación efectiva de la tortura y los malos tratos para cumplir
con sus funciones.
prevención de la tortura y obligaciones de rendición de cuentas.
Estos desafíos se analizan en detalle en los párrafos 269 a 302
anteriores e incluyen condiciones esenciales y
habilidades de entrevista (por ejemplo, seguridad, confianza,
empatía y privacidad), el riesgo de retraumatización del
entrevistado, consideraciones específicas con respecto al género
y los niños y las reacciones emocionales del entrevistado
entrevistado y el profesional de la salud que pueden afectar
negativamente la evaluación clínica y las personas involucradas en
la evaluación. Al realizar evaluaciones clínicas de casos en los que
la tortura o los malos tratos
se alegue o se sospeche, los profesionales de la salud deben
conocer: las garantías procesales para garantizar evaluaciones
seguras, éticas y eficaces que sean independientes de influencias
indebidas (véanse los párrs. 312 a 315 anteriores); barreras de
comunicación y las habilidades y técnicas para abordarlas como se
discutió en el párrafo 325 anterior, incluido el uso de intérpretes
(véanse los párrafos 296 a 298 anteriores); y cómo evaluar las
incoherencias que pueden resultar de la dificultad relacionada con el
trauma para recordar y relatar experiencias traumáticas (véanse los
párrs. 342 y 353 supra). El capítulo IV también brinda orientación
sobre cómo los médicos deben interpretar sus hallazgos clínicos y las
limitaciones de tales interpretaciones (véanse los párrafos 379 a 389
supra).
610. Los profesionales de la salud que se encuentren con presuntas
víctimas de tortura o malos tratos en el
contextos mencionados anteriormente, particularmente
contextos no legales, pueden experimentar
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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
retos Estos desafíos incluyen, entre otros, los problemas
que se mencionan a continuación.
1. Miedo a las represalias
611. Como se mencionó anteriormente, siendo la tortura un delito
cometido por o con el consentimiento o la aquiescencia de
funcionarios del Estado, los profesionales de la salud pueden temer
represalias por realizar una evaluación clínica y/o hacer
interpretaciones que impliquen que un funcionario del Estado cometió
un delito. Los profesionales de la salud que trabajan en tales
condiciones deben comprender que tienen el deber profesional de
documentar y denunciar la tortura y los malos tratos siempre que se
proporcione el consentimiento informado y que no hacerlo es una
forma de complicidad en tales abusos. Debe tenerse en cuenta que
los contextos en los que los profesionales de la salud se enfrentan al
riesgo de represalias pueden ser al mismo tiempo contextos en los
que las prácticas de tortura y malos tratos están generalizadas. Por
lo tanto, la evaluación clínica y la documentación son de vital
importancia.
importancia. Deben ser conscientes de las garantías
procesales al realizar sus evaluaciones clínicas para minimizar
el riesgo de represalias (véanse los párrafos 312 a 315 supra).
Además, como se discutió en el párrafo 179 anterior, los
profesionales de la salud deben buscar trabajar con organismos
independientes de monitoreo e investigación, así como con
organizaciones profesionales nacionales e internacionales, para
mitigar cualquier temor a represalias.
612. En caso de que el examen clínico se realice fuera
instalaciones clínicas, por ejemplo dentro de una prisión o
incluso en una celda de prisión, puede haber mayores riesgos con
respecto a la seguridad, privacidad, represalias y diferentes
formas de presión de las que el profesional de la salud debe ser
consciente. También existe el riesgo de falsas
informes negativos después de dichos exámenes.
2. Falta de formación
613. Los profesionales de la salud deben buscar obtener la
la capacitación necesaria sobre los estándares de documentación del
Protocolo de Estambul, incluida la lectura y comprensión del Protocolo
de Estambul y sus Principios, la participación en cursos de capacitación
y el aprendizaje de colegas, cuando sea posible en entornos de
tutoría supervisada. Los Estados deben brindar dicha capacitación a
sus profesionales de la salud, y las instituciones académicas deben
incluir
capacitación en currículos profesionales, así como cursos de educación
continua. Dichos cursos y planes de estudios deberían
incluir temas relevantes en el Protocolo de Estambul.
614. Los profesionales de la salud deben ser conscientes de sus
obligación ética profesional de documentar y
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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
denunciar la tortura y los malos tratos y obtener los
conocimientos y habilidades profesionales necesarios
para cumplir con estas obligaciones. La falta de la
formación necesaria no disminuye en modo alguno las
obligaciones éticas del profesional de la salud de documentar
y denunciar eficazmente la tortura y los malos tratos.
3. Falta de tiempo, gran carga de trabajo y número
inadecuado de profesionales de la salud
615. Al igual que en los casos de violencia doméstica, agresión sexual,
abuso infantil y otras formas de violencia, la falta de tiempo no
es una razón aceptable para no realizar una evaluación en casos
de presunta o presunta tortura o malos tratos. Una evaluación
clínica puede condensarse y aún ser consistente con los Principios
de Estambul.
Los profesionales de la salud deben tomarse el tiempo
necesario para una evaluación efectiva y programar un
cita de seguimiento o derivar a otro profesional de la salud
con conocimientos y habilidades adecuados si la evaluación no
se puede completar en una sola visita.
616. Los profesionales de la salud deben documentar todos los
los hallazgos y la información detectados durante los
encuentros clínicos y las evaluaciones clínicas, así como las
condiciones, como el tiempo y el entorno del examen, como
se establece en el párrafo 270 anterior, respetando la
confidencialidad y la privacidad.
4. Falta de espacio o condiciones profesionales
adecuadas
617. Las condiciones de evaluación pueden ser desafiantes, por ejemplo,
la falta de privacidad, las condiciones físicas del entorno de la
entrevista y la persona sujeta.
Como se menciona en los párrafos 315 y 354 anteriores y
en el anexo I, todas las evaluaciones deben realizarse en
privado y sin limitaciones ni restricciones. Si esto no se puede
lograr, cualquier limitación a la privacidad debe documentarse
en el informe del médico.
618. Para cumplir con su obligación profesional de documentar y
denunciar la tortura y los malos tratos, los profesionales de
la salud deben tomar medidas para solicitar, si es posible, por
escrito, que las autoridades proporcionen un entorno y
condiciones, equipo, tiempo y recursos humanos apropiados. Al
dirigirse a las autoridades en estas situaciones, los profesionales
de la salud pueden hacer referencia a las normas internacionales
y científicas.
Se recomienda conservar una copia de dicha correspondencia.
525 Facultad de Medicina Legal y Forense del Real Colegio de Médicos, Normas de Calidad para Profesionales Sanitarios.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
5. Confidencialidad
619. Las víctimas de tortura no necesariamente revelan su
experimentan la tortura fácilmente o en la primera cita y
circunstancias como la presencia de otras personas o el miedo
a las represalias pueden hacer que sea aún menos probable
que lo hagan. El profesional de la salud debe desarrollar
habilidades para facilitar la revelación, prestar atención a las
señales de nuevas experiencias de tortura, especialmente tortura
sexual (véanse los párrs. 274 a 276 anteriores), que la persona
puede encontrar difícil de revelar inicialmente, y explorar esas
señales a medida que presentes en la revisión de los sistemas
corporales y en el examen completo.525
6. Trauma vicario y agotamiento
620. Como se discutió en los párrafos 300 y 302 anteriores,
Los profesionales de la salud que desconocen la forma en
que indirectamente experimentan el trauma de los demás
pueden reaccionar de una manera que no es saludable para
ellos ni efectiva para la presunta víctima.
El bienestar profesional y las evaluaciones efectivas requieren
conocimiento y mitigación del trauma indirecto. Esto es
especialmente cierto para los médicos que trabajan solos, con un
apoyo colegiado limitado y están sujetos a altos niveles de estrés
en el trabajo y grandes cargas de trabajo.
D. Implementación de obligaciones éticas
621. Como se discutió en los párrafos 159 a 172 anteriores,
todos los profesionales de la salud que se encuentren
con presuntas víctimas de tortura o malos tratos,
independientemente del propósito principal del contacto o del
contexto en el que se produzca el encuentro, deben respetar
sus obligaciones éticas fundamentales incluso frente a
obligaciones reales o percibidas con terceros. La obligación
de no maleficencia puede implicar en casos extremos que,
debido a los riesgos para la presunta víctima, no se deban
realizar más trámites en materia de identificación,
documentación, evaluación y denuncia. Al mismo tiempo, la
obligación ética de documentar y denunciar es fundamental
para prevenir la complicidad pasiva de los profesionales de la
salud en estos delitos.
622. El deber de documentar y denunciar la tortura y
los malos tratos pueden ser particularmente desafiantes en entornos
en los que los profesionales de la salud están bajo una presión real
o percibida de terceros, como un empleador estatal, que entra en
conflicto con sus deberes éticos. En los casos en que la supuesta
tortura o malos tratos
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
fue perpetrado en la institución en la que se encuentra recluida la
presunta víctima, esto puede exponer a la víctima a un riesgo muy
alto. En tales circunstancias, las obligaciones éticas del profesional
de la salud de actuar en el mejor interés del individuo, no hacer
daño y respetar la autonomía y la confidencialidad pueden entrar
en conflicto con la obligación ética de documentar y denunciar la
tortura y los malos tratos y de prevenir daños a otros.
623. Incluso en situaciones tan conflictivas, los profesionales de la salud nunca deben
ignorar los casos y las sospechas de tortura o las denuncias presentadas. Los
profesionales de la salud que sospechen tortura o malos tratos, independientemente
del entorno o el propósito de un encuentro clínico, siempre deben:
(a) tratar de obtener el consentimiento informado y divulgar cualquier obligación
de notificación obligatoria;
(b) Documentar y denunciar la tortura y los malos tratos de conformidad con
los Principios de Estambul cuando se proporciona el consentimiento informado
para una evaluación e informe clínicos;
(c) considerar, en ausencia de consentimiento informado, todas las
obligaciones éticas y solo considerar las violaciones de la confidencialidad
en las condiciones previstas en los párrafos 177 y 178 anteriores;
d) Documentar patrones de abuso de forma anónima y denunciar esos
patrones de abuso a las instituciones internacionales y nacionales de
derechos humanos;
(e) Considerar la necesidad de derivaciones, ya sea para fines de tratamiento o
para documentación adicional por parte de otros médicos.
1. Obligaciones reales o percibidas frente a terceros
624. Como se discutió en los párrafos 173 a 182 anteriores,
los dilemas que surgen de las obligaciones reales o percibidas
con terceros, como los empleadores estatales o una cadena de
mando militar, pueden comprometer el respeto de un profesional
de la salud por los deberes éticos fundamentales.
Cualesquiera que sean las circunstancias de su empleo, los
profesionales de la salud no pueden verse obligados por
consideraciones contractuales o de otro tipo a comprometer sus
obligaciones éticas profesionales o su independencia.
526 Chloë FitzGerald y Samia Hurst, “Sesgo implícito en los profesionales de la salud: una revisión sistemática”, BMC Medical Ethics, vol. 18, núm. 1 (2017).
148
2. Sesgo implícito y explícito
625. Los sesgos explícitos son pensamientos conscientes
dirigidos hacia un grupo específico de individuos y son
fácilmente reconocidos por el poseedor de esas creencias o por
otros durante las interacciones de rutina.526 Los sesgos implícitos
son pensamientos inconscientes que están dirigidos hacia un
grupo específico de individuos. La naturaleza inconsciente del
sesgo implícito lo hace bastante generalizado, incluso entre los
profesionales de la salud que trabajan con grupos como las
víctimas de tortura o malos tratos, en particular los que están
bajo custodia. Es importante reconocer y mitigar los sesgos
implícitos y explícitos en el trabajo con pacientes, clientes y
presuntas víctimas, para evitar actuar sobre tales concepciones
sesgadas.
3. Oportunidades limitadas de derivación
626. Las opciones de referencia pueden ser limitadas debido a la falta de
expertos para derivar, resistencia en el sistema para derivar
casos, trabas económicas, así como problemas de acceso y
estándares adecuados en cuanto a traslado y exámenes en
los establecimientos de salud. Este
hace la documentación inicial de la tortura o
malos tratos tanto más urgentes como necesarios.
E. Orientación y procedimientos
627. Todos los médicos deben hacer todo lo posible para cumplir con sus
obligación ética de documentar y denunciar la tortura y los
malos tratos en todos los entornos. El Protocolo de Estambul y sus
Principios deben considerarse el marco principal dentro del cual
cumplir esta obligación.
1. Evaluaciones clínicas en contextos legales
628. Los capítulos IV, V y VI y los anexos I–IV disponen
orientación detallada sobre las evaluaciones clínicas de la
tortura y los malos tratos en contextos legales. Varios puntos
clave de esta guía se incluyen aquí solo para resaltar las
diferencias entre las evaluaciones clínicas en contextos legales y
no legales. Los profesionales de la salud deben consultar los
capítulos IV, V y VI y los anexos I–IV para asegurarse de que sus
evaluaciones clínicas en contextos legales sean consistentes con
los estándares del Protocolo de Estambul.
629. Cuando un individuo alegue el delito de tortura o malos tratos, el Estado
tiene el deber de investigar la
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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
alegaciones.527 Estas investigaciones deben incluir
evaluaciones clínicas de pruebas físicas y psicológicas de
conformidad con el Protocolo de Estambul
y sus Principios. Independientemente del tipo de caso
legal (penal, civil, administrativo u otro) o el entorno en el
que se alega la tortura (detención o extradetención), el Estado
debe realizar evaluaciones oportunas por parte de expertos
calificados. Como se indica en el capítulo IV (véanse los párrs.
354 y 355, 379 y 382 supra) y el anexo I, los Principios de
Estambul sugieren que los profesionales de la salud deben
proporcionar una interpretación de todos los hallazgos y una
opinión sobre la posibilidad de tortura o malos tratos.
630. Las disposiciones del Protocolo de Estambul permiten cierta
flexibilidad con respecto al nivel de detalle proporcionado en
un informe médico-legal. Esto significa que el contenido de las
evaluaciones médico-legales puede variar siempre que las
evaluaciones sigan los Principios de Estambul.
Los Estados deben establecer políticas y procedimientos
para el uso del Protocolo de Estambul por parte de los
profesionales de la salud empleados por el Estado, incluida
su obligación de realizar evaluaciones de conformidad con el
Protocolo de Estambul y sus Principios. Esto también incluye,
pero no se limita a, exigir el uso de formatos de evaluación
estandarizados para garantizar la calidad, precisión y rendición
de cuentas que sean consistentes con el Protocolo de
Estambul y sus Principios. Los profesionales de la salud no
gubernamentales, por otro lado, no deberían estar obligados
a utilizar un formulario de evaluación estandarizado que se
puede exigir a los profesionales de la salud del Estado.
631. En todos los casos de presunta o presunta tortura o
malos tratos, es deber del profesional de la salud realizar este
trabajo de acuerdo con el Protocolo de Estambul y sus
Principios y no aceptar ninguna limitación a este procedimiento,
dada por ejemplo por fiscales o jueces. Esto significa que el
deber de interrogar a las presuntas víctimas de esta manera
supera cualquier limitación que pueda imponerse por
consideraciones legales. Cabe señalar que los médicos
que realicen evaluaciones de salud de personas privadas de
libertad, por ejemplo, en el caso de evaluaciones de salud de
rutina de detenidos, atención médica de reclusos y visitas de
monitoreo de detención, deben estar capacitados y tener la
capacidad de realizar evaluaciones clínicas de acuerdo con la
Norma de Estambul.
Protocolo y sus Principios dan la posibilidad de tortura
y malos tratos en estos entornos.
527 Convención contra la Tortura, art. 12: “Cada Estado Parte se asegurará de que sus autoridades competentes procedan a una investigación pronta e imparcial, siempre que haya motivos razonables para
motivo para creer que se ha cometido un acto de tortura en cualquier territorio bajo su jurisdicción”.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
632. Si bien los profesionales de la salud no gubernamentales
no realizan evaluaciones en nombre de la
Estado, sus evaluaciones deben ajustarse a las
normas mínimas contenidas en la Ley de Estambul
Principios cuando brindan una opinión médico-legal
sobre tortura o malos tratos en casos judiciales.
2. Evaluaciones clínicas en contextos no legales
633. En contextos no legales, los profesionales de la salud pueden
observar las lesiones y el estrés psicológico durante la prestación
de servicios de atención de la salud o la evaluación del estado
de salud de las víctimas. Cuando este sea el caso, el profesional
de la salud debe indagar sobre la causa de tales lesiones o
estrés psicológico y las circunstancias relacionadas, incluso si
el individuo ha estado bajo la custodia de algún funcionario del
Estado, incluidas las fuerzas del orden. Los profesionales de la
salud siempre deben tener en cuenta que toda persona privada
de libertad corre el riesgo de sufrir tortura y otras formas de malos
tratos.
634. Si el particular alega o el profesional de la salud
sospecha la posibilidad de tortura o malos tratos por parte de un
funcionario del Estado o con su aquiescencia, el médico debe
tener en cuenta la siguiente orientación al documentar y denunciar
la tortura o los malos tratos (véase el anexo I):
(a) Tratar de obtener el consentimiento informado, como se
describe en los párrafos 165 a 171 y 273 anteriores, incluida la
divulgación de los requisitos obligatorios de información, antes de
proceder con una evaluación;
(b) Excluir a terceros de la sala de evaluación para garantizar la
privacidad. Consulte los párrafos 312 a 315 anteriores para obtener
orientación adicional sobre la presencia de cualquier tercero durante
una evaluación;
(c) Indagar sobre la causa de cualquier lesión o angustia
psicológica;
(d) Registrar y evaluar cualquier síntoma o discapacidad
física y/o psicológica que pueda estar relacionada con el presunto
abuso;
(e) Realizar un examen físico dirigido de todos los sistemas de
órganos que puedan estar relacionados con las denuncias de
abuso, incluido un breve examen del estado mental y una evaluación
del riesgo de daño a sí mismo y a y
de otros;
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
f) Documentar la presencia de todas las lesiones
detectadas, incluidas las que puedan estar asociadas con
presuntos o presuntos malos tratos, con diagramas corporales
(véase el anexo III) y fotografías, si es posible;
(g) Si se alegan o sospechan malos tratos sobre la base de
observaciones clínicas o hallazgos clínicos, y con la condición
de que la presunta víctima brinde su consentimiento informado,
el profesional de la salud debe:
(i) Hacer derivaciones apropiadas para
consultas adicionales, evaluación y evaluación
médico-legal de los presuntos o presuntos malos tratos y
también para el tratamiento de problemas médicos y mentales.
condiciones de salud;
(ii) Notificar a las autoridades correspondientes e informar
a las personas de su derecho a evaluaciones clínicas por
parte de expertos clínicos no gubernamentales
independientes y, en la medida de lo posible, remitirlos a
un experto no gubernamental específico;
(h) Los médicos que tengan conocimiento y experiencia en
la aplicación del Protocolo de Estambul y sus Principios
pueden considerar brindar una interpretación del nivel de
consistencia entre los hallazgos clínicos y los presuntos
métodos de lesión, así como una opinión sobre la posibilidad
de tortura o malos tratos tal como se definen en la Convención
contra la Tortura (véanse los párrs. 382 a 385, 424 a 425 y
546 a 548 supra);
(i) Proporcionar una copia de la documentación/evaluación
a las autoridades legales correspondientes y al paciente, si
así lo solicita, y/o al representante legal del paciente, pero no
a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Los
profesionales de la salud deben conservar una copia de la
evaluación y la documentación en archivos médicos seguros;
(j) Si el profesional de la salud no puede realizar alguno o todos
los componentes de esta evaluación, el médico debe indicar los
motivos en la documentación y buscar enfoques alternativos;
(k) Si hay algún signo de tortura o malos tratos, el médico
debe hacer todo lo posible y tomar todas las medidas para evitar
que la presunta víctima sea enviada de regreso al lugar donde
se alega o sospecha la tortura o los malos tratos. haber tenido
lugar.
635. Cuando la salud independiente, no gubernamental
profesionales realizan evaluaciones clínicas de presuntas o presuntas
torturas o malos tratos en entornos no legales, no cuentan con las
mismas pruebas formales
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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
requisitos como los que se llevan a cabo en entornos legales. En tales
casos, sería razonable que los médicos siguieran los Principios de
Estambul y observaran cualquier desviación de los elementos requeridos
de estos Principios cuando corresponda. Por ejemplo, algunas
investigaciones de campo de derechos humanos pueden no permitir
tiempo suficiente para realizar evaluaciones psicológicas completas y
detalladas y, por lo tanto, sería necesario señalarlo.
636. Los profesionales de la salud necesitarán, al evaluar la
información proporcionada y los hallazgos clínicos, para tener en cuenta
que las personas pueden no revelar el alcance total de sus experiencias
de tortura o malos tratos.
Las experiencias de tortura sexual, en particular, pueden no divulgarse
como se discutió en los párrafos 274 a 276 anteriores y la capacidad
de las personas para recordar completamente los detalles de sus
experiencias puede verse afectada por muchos factores, incluido el
estrés de la situación, por ejemplo, si son en detención (véanse los
párrs. 342 y 353 supra). También es probable que su estado mental y
los síntomas psicológicos informados sean diferentes si están privados
de libertad. Finalmente, los médicos que no están familiarizados con el
reconocimiento y la documentación de las lesiones físicas pueden
subestimar los hallazgos físicos en comparación con los médicos más
experimentados.
637. Las evaluaciones clínicas en entornos no legales deben
esforzarse por proporcionar toda la información inherente a
una evaluación médico-legal completa como se describe en
otra parte del Protocolo de Estambul. Esto incluye abordar la
historia clínica relevante, las denuncias o sospechas de abuso,
los síntomas físicos y psicológicos y los hallazgos que surgen
de un examen físico y psicológico. La conclusión debe evaluar
los problemas clínicos y las necesidades de tratamiento, así
como los pasos tomados para iniciar las pruebas y el
tratamiento y las remisiones para un examen y tratamiento
adicionales.
Para efectos legales, se debe incluir la información del caso
y las circunstancias de la evaluación.
y el informe del médico debe estar fechado y firmado.
F. Información y regulación
638. La obligación profesional de denunciar la tortura
y los malos tratos se examinan en el capítulo II (véanse los
párrs. 148, 155 y 177 a 182 supra), así como las condiciones
que pueden impedir la denuncia de torturas y malos tratos cuando
la presunta víctima no da su consentimiento. También es importante
conocer las leyes y reglamentos nacionales en relación con la
denuncia de denuncias de tortura o malos tratos.
Dichas leyes (por ejemplo, códigos de procedimiento penal y
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VIII. PROFESIONALES DE LA SALUD DOCUMENTANDO LA TORTURA Y LOS MALOS TRATOS
leyes forenses o de salud) a menudo establecen un requisito de informe
obligatorio para los profesionales de la salud y pueden ignorar el predicado
del consentimiento informado. Como se establece en el párrafo 175
anterior, los profesionales de la salud tienen el deber de cumplir con sus
obligaciones éticas fundamentales, incluso si están en conflicto con la ley.
639. Como se discutió en el párrafo 315 anterior, la clínica
los informes de presuntas víctimas nunca deben entregarse a los
funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, sino a una autoridad
judicial u otra autoridad independiente separada del entorno en el que
se produjo el posible abuso.
La institución nacional oficial de derechos humanos y los
mecanismos nacionales de prevención de un Estado pueden
ser mecanismos de colaboración eficaces para aclarar o definir
dichos procedimientos.
640. Políticas de documentación y reporte para la salud
profesionales deben ser establecidos por las instituciones del Estado en
consulta con los organismos internacionales de vigilancia y prevención, así
como con las asociaciones nacionales e internacionales de profesionales de la
salud, para garantizar el respeto de todas las obligaciones de los profesionales
de la salud. Esto puede ser particularmente importante para los profesionales
de la salud que trabajan en entornos de detención,
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
que pueden estar clínicamente aislados del apoyo de sus compañeros.
Las asociaciones nacionales de profesionales de la salud y las
instituciones nacionales de derechos humanos deben desempeñar un
papel activo en la identificación de la documentación y los procedimientos de
denuncia de los casos de presunta o presunta tortura o malos tratos,
especialmente cuando las autoridades detenedoras no brindan dicha
orientación.
G. Vigilancia y garantía de la
calidad de todas las evaluaciones oficiales
641. No es suficiente que los Estados simplemente establezcan
procedimientos y prácticas que apliquen las disposiciones del
Protocolo de Estambul y sus Principios. Como se analiza en los
párrafos 674–679 a continuación, los Estados deben monitorear y
garantizar la calidad de todas las evaluaciones oficiales en las que se alegue
o sospeche tortura o malos tratos y tomar medidas correctivas en caso de
incumplimiento. Además, es de vital importancia que los Estados se aseguren
de que los profesionales de la salud realicen las evaluaciones adecuadas. Las
evaluaciones forenses oficiales deben llevarse a cabo de conformidad
con el Protocolo de Estambul y sus Principios.
151
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Implementación
de Estambul
Protocolo
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
642. El Protocolo de Estambul fue desarrollado para establecer
normas específicas de las Naciones Unidas sobre la eficacia
de las investigaciones jurídicas y clínicas de las denuncias de
tortura o malos tratos.
Si bien el Protocolo de Estambul sirvió para cerrar la brecha
entre los deberes de los Estados de investigar la tortura y los malos
tratos, basados en tratados, y la falta de
orientación, en particular sobre la investigación y documentación
médico-legal de la tortura y los malos tratos, no proporcionó
una orientación detallada y específica sobre cómo los Estados
deben implementar estos estándares. Este capítulo busca brindar
orientación a los Estados y miembros de la sociedad civil sobre la
implementación del Protocolo de Estambul en base a la amplia
experiencia práctica de las partes interesadas en el Protocolo de
Estambul. Como garantes de los derechos humanos, los Estados
tienen la obligación de garantizar la prevención, la rendición de
cuentas y la reparación efectivas de la tortura y los malos tratos.
Si bien la guía de este capítulo está dirigida principalmente a los
Estados para cumplir con sus obligaciones de derechos humanos,
también es relevante para los miembros de la sociedad civil para
que la utilicen como marco para la rendición de cuentas del Estado
por prácticas efectivas de investigación y documentación de la
tortura y los malos tratos y para identificar actividades específicas
de implementación en las que la sociedad civil pueda participar.
643. Desde 1999, varios profesionales del derecho y la salud,
y otros defensores de los derechos humanos han trabajado
para implementar los estándares del Protocolo de
Estambul en aproximadamente 40 países. Esta amplia
experiencia práctica ha proporcionado información sobre las
necesidades y los desafíos asociados con la implementación
estatal del Protocolo de Estambul.528 En 2012, cuatro
organizaciones asociadas (Médicos por los Derechos Humanos,
el Consejo Internacional de Rehabilitación para la Tortura
Victims, la Fundación de Derechos Humanos de Turquía y
Redress Trust) desarrollaron una serie de directrices prácticas,
conocidas como el “Plan de Acción del Protocolo de Estambul”,
para la implementación estatal del Protocolo de Estambul. El
Plan de Acción del Protocolo de Estambul fue
reconocido y apoyado por el Alto Comisionado de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos en 2012529
y el Relator Especial sobre la tortura en 2014.530
644. Las directrices del Plan de Acción del Protocolo de Estambul se
han aplicado en varios países y han sido fundamentales para
mejorar la investigación
528 Haar y otros, “El Protocolo de Estambul: una encuesta de partes interesadas” (ver nota al pie 7 en la introducción anterior), que proporciona los resultados de una encuesta de 220 Protocolo de Estambul
partes interesadas de 30 países sobre las condiciones del país en el que trabajan e informes de los desafíos que enfrentan.
529 Declaración de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navanethem Pillay, el 24 de febrero de 2012.
530 A/69/387, párrs. 56 y 74.
531 Vincent Iacopino y otros, “Implementación del Protocolo de Estambul en Asia Central: doblando el arco del universo moral”, Journal of Forensic and Legal Medicine, vol. 69
(2020).
154
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
y prácticas de documentación relativas a la tortura y los
malos tratos. La orientación incluida en este capítulo se
basa en los elementos centrales del Plan de Acción del Protocolo
de Estambul, así como en la experiencia práctica global de
quienes prepararon y redactaron la presente edición del
Protocolo de Estambul.531 Dicha orientación tiene por objeto
ayudar a los Estados implementar las normas del Protocolo de
Estambul y fortalecer las condiciones necesarias para una
investigación y documentación legal y médico-legal efectiva de
la tortura y los malos tratos. Este
la guía también pretende servir como marco para la rendición
de cuentas por la implementación estatal de prácticas
efectivas de investigación y documentación.
A. Condiciones para la
implementación efectiva del
Protocolo de Estambul
645. Durante los últimos 20 años, quienes han trabajado para
implementar las normas del Protocolo de Estambul han
aprendido que la investigación y documentación legal y
clínica eficaz de la tortura y los malos tratos depende de una
serie de condiciones interdependientes que requieren una
implementación progresiva. Los estados deben tomar
medidas para cumplir las condiciones que se describen a continuación.
1. Reconocimiento oficial de las normas del
Protocolo de Estambul
646. La tortura y los malos tratos son violaciones cometidas
por o a instigación de o con la aquiescencia de funcionarios
del Estado. Para lograr una consistencia
rendición de cuentas dentro de las ramas pertinentes del gobierno,
es esencial que los Estados, a través de acciones legislativas y
administrativas, reconozcan e institucionalicen oficialmente las
normas del Protocolo de Estambul entre los departamentos y el
personal pertinentes, como fiscales, abogados, incluidos los
abogados designados por los tribunales, jueces, agentes del orden
público, personal penitenciario y militar, profesionales forenses y de
la salud, y los responsables de la atención de la salud de los
detenidos.
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VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
2. Voluntad política
647. Una de las condiciones más importantes para la investigación y
documentación efectivas de la tortura y los malos tratos es la voluntad
política necesaria a nivel nacional en todas las agencias
gubernamentales relevantes para erradicar la tortura y los malos
tratos, incluidos los compromisos de los actores dentro de instituciones
como
las fuerzas del orden, las fuerzas de seguridad y antiterroristas,
los servicios forenses y médicos, el poder judicial, las prisiones y
los departamentos gubernamentales para implementar reformas
administrativas, legislativas y judiciales. La voluntad política debe
demostrarse mediante una acción coherente, amplia y sostenida.
Las acciones correctivas limitadas, como la capacitación para uno
o más grupos objetivo en ausencia de otras reformas políticas
sustantivas, representan un compromiso inadecuado por parte de
los actores estatales y pueden incluso ser un intento deliberado
de aplacar los llamados a una acción correctiva efectiva. La
evidencia de la voluntad política necesaria para poner fin a las
prácticas de tortura a menudo incluye el reconocimiento por parte
del Estado de la naturaleza y el alcance de las prácticas de tortura
y malos tratos, una política de “tolerancia cero” con respecto a la
tortura y los malos tratos, y un plan de acción nacional. que incluye
la implementación del Protocolo de Estambul y se basa en una
evaluación exhaustiva de la naturaleza y el alcance de la tortura
y prácticas de malos tratos. La guía de implementación
elaborada en este capítulo puede servir como modelo para
los planes de acción nacionales. En última instancia, la
medida de una política eficaz para combatir la tortura y los
malos tratos será la capacidad del Estado para prevenir tales
delitos, hacer que los perpetradores rindan cuentas y brindar
a las víctimas la reparación que merecen.
3. Un sistema de justicia penal eficaz
648. Los sistemas de justicia penal a menudo enfrentan una amplia gama
de desafíos para garantizar de manera efectiva, entre otras cosas:
a) Salvaguardias fundamentales durante el arresto y la
detención;
b) Investigación y enjuiciamiento de la tortura y los malos
tratos;
c) Valoraciones médico-legales de las presuntas víctimas;
d) Investigaciones policiales de presuntos delitos sin recurrir a la
tortura o los malos tratos como medio para obtener confesiones;
532 Los Estados podrían adoptar otras definiciones que brinden más protección que el artículo 1 de la Convención contra la Tortura (por ejemplo, la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar
Tortura).
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
e) Defensa jurídica de las presuntas víctimas;
f) La prohibición de utilizar en cualquier proceso las pruebas
obtenidas mediante tortura o malos tratos;
g) Sanciones a los perpetradores y cómplices;
h) Medidas para proteger y promover los derechos de las
personas privadas de libertad con necesidades especiales;
i) Vigilancia sistemática de prácticas que puedan constituir tortura o
malos tratos;
j) La rendición de cuentas y el seguimiento por parte de los
funcionarios gubernamentales cuando se denuncien torturas o malos tratos;
k) Garantías procesales y mecanismos de rendición de
cuentas para hacer frente a la posibilidad de represalias contra
las presuntas víctimas;
l) Reparación, incluida la rehabilitación, de las víctimas de
tortura o malos tratos.
649. La capacidad de un Estado para realizar investigaciones efectivas
y documentación de torturas y malos tratos
a menudo depende de un sistema de justicia penal
funcional, incluida la legislación que tipifica la tortura y
los malos tratos, definidos de conformidad con la
Convención contra la Tortura u otros tratados
internacionales pertinentes,532 un delito penal específico, la
existencia de normas de procedimiento penal y normas
probatorias que respetar los derechos de las personas
detenidas y acusadas, voluntad y capacidad demostradas
para erradicar la corrupción y separación formal y práctica
entre el personal policial, médico y judicial. Los servicios forenses
estatales deben ser independientes de las autoridades policiales,
judiciales y/o militares. Los médicos no gubernamentales deben
estar facultados para evaluar la evidencia física y psicológica de
acuerdo con los estándares del Protocolo de Estambul. el estambul
El Protocolo y sus Principios brindan un marco normativo
para los sistemas legales, en particular los sistemas de
justicia penal, con el objetivo de garantizar la prevención de la
tortura y los malos tratos, la rendición de cuentas y la reparación.
155
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
4. Recursos financieros y humanos adecuados
650. Los Estados deben garantizar recursos financieros y humanos adecuados
para mantener la implementación progresiva de las normas del Protocolo
de Estambul y las condiciones
necesario para una implementación efectiva, incluido personal
legal y médico-legal calificado y, en particular, un número
adecuado de profesionales de la salud con las calificaciones
clínicas apropiadas (véanse los párrafos 303 a 308 anteriores),
incluidos médicos de salud mental, y un compromiso con la ética
médica.
Asegurar dichos recursos humanos generalmente requiere
un apoyo financiero sostenido durante varios años.
5. Buen gobierno
651. La forma en que gobiernan los Estados es relevante para
lograr una reforma significativa de los derechos humanos. La
tortura y los malos tratos son actos de violencia y representan la
antítesis del buen gobierno. Según ACNUDH, la buena gobernanza
abarca: “pleno respeto de los derechos humanos, estado de derecho,
participación efectiva, alianzas de múltiples actores, pluralismo
político, procesos e instituciones transparentes y responsables, un
sector público eficiente y eficaz, legitimidad, acceso al conocimiento,
información y educación, empoderamiento político de las personas,
equidad, sostenibilidad, y actitudes y valores que fomenten la
responsabilidad, la solidaridad y la tolerancia”533.
Además, “la buena gobernanza es el proceso mediante el cual las
instituciones públicas conducen los asuntos públicos, administran
los recursos públicos y garantizan la realización de los derechos
humanos de manera esencialmente libre de abusos y corrupción, y
con el debido respeto por el estado de derecho.”534
La buena gobernanza no solo es de vital importancia en el proceso de
implementación de las normas del Protocolo de Estambul, sino que a
menudo sirve como remedio a las condiciones que facilitan la tortura
y los malos tratos. remediación exitosa
las acciones contra la tortura, incluida la implementación del
Protocolo de Estambul, por lo tanto, dependen de la capacidad del
gobierno para la transparencia, la rendición de cuentas, las
instituciones funcionales, la creación de capacidad, los frenos y
contrapesos de las instituciones de control, el estado de derecho y la
participación activa de las organizaciones de la sociedad civil ,
movimientos y líderes para comprometerse con los actores estatales.
6. Cooperación
652. La adopción de medidas para poner fin a las prácticas de tortura y malos tratos
implica la cooperación entre los
533 Ver www.ohchr.org/EN/Issues/Development/GoodGovernance/Pages/AboutGoodGovernance.aspx.
534 Véase la sección de buena gobernanza y derechos humanos del sitio web del ACNUDH (www.ohchr.org/en/good-governance). Véase también Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo, Towards Human Resilience: Sustaining MDG Progress in an Age of Economic Uncertainty (Nueva York, 2011), cap. 8 sobre principios de gobernanza; y Consejo de Europa,
“12 principios de buena gobernanza democrática” (2018).
156
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
instituciones internacionales, incluidas las Naciones Unidas y otras
organizaciones multilaterales, y ONG.
Dicha cooperación depende en gran medida de la medida en
que un Estado demuestre la voluntad política sostenida necesaria
para poner fin a las prácticas de tortura y malos tratos.
Dicha cooperación puede ser facilitada por acuerdos o condicionada
a pruebas mutuamente acordadas de voluntad política y progreso
sostenido. Los acuerdos de cooperación y las asociaciones ayudan
a establecer confianza y una comprensión común de los desafíos y
las medidas correctivas que deben tomarse. Dicha cooperación
permite una amplia gama de actividades de asistencia técnica,
incluida la identificación de prácticas y políticas que facilitan la tortura
o los malos tratos, el establecimiento de un plan de acción nacional
oficial para la prevención de la tortura y los malos tratos, la rendición
de cuentas y la reparación, la creación de capacidad integral de grupos
objetivo pertinentes, y el seguimiento de la eficacia de los esfuerzos
de implementación, incluidas las prácticas eficaces de investigación y
documentación con respecto a la tortura y los malos tratos.
7. Participación activa de la sociedad civil
653. Aquellos que han trabajado para implementar Estambul
Los estándares de protocolo entienden desde su colectivo
experiencias globales que los crímenes de Estado de tortura y malos
tratos probablemente no cambien en ausencia de una participación
activa de la sociedad civil. Los Estados que cometen torturas y malos
tratos a menudo utilizan el poder del Estado para ocultar estos
crímenes y resistirse a la reforma. Establece que
están comprometidos a poner fin a la tortura y los malos tratos
deben acoger y facilitar el compromiso activo con las organizaciones
de la sociedad civil, los movimientos, las organizaciones
profesionales y los líderes en la acción contra la tortura, incluida la
implementación del Protocolo de Estambul. Los Estados también
deben alentar y apoyar una red nacional de médicos no
gubernamentales para realizar evaluaciones clínicas de presuntas
torturas, revisar la calidad y precisión de las evaluaciones estatales
y participar en actividades de reforma de políticas, creación de
capacidad y educación pública.
Los Estados también deben garantizar que los actores jurídicos
y clínicos no estatales tengan acceso adecuado a toda la
información pertinente, como expedientes, investigaciones y
presuntas víctimas, en casos médico-legales de presunta tortura o
malos tratos, así como de muertes bajo custodia.
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VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
B. Hacia la implementación efectiva
del Protocolo de Estambul
654. Aquellos que han trabajado para implementar las normas del Protocolo
de Estambul han encontrado útil
contemplar tres actividades complementarias hacia la
implementación: evaluación, desarrollo de capacidades y
reforma de políticas, que se aplican en fases interdependientes.
Es importante señalar que la implementación exitosa de
actividades dentro de estas fases no requiere una aplicación
secuencial estricta.
Los ejemplos de implementación exitosa del Protocolo
de Estambul incluyen, entre otros, las siguientes fases de
objetivos y actividades.
1. Fase I
655. En la fase inicial, las partes interesadas en la prevención de la tortura
normalmente enfrentan los desafíos de desarrollar un entendimiento común
sobre la naturaleza y el alcance del problema de la tortura y los malos
tratos, la importancia de las normas del Protocolo de Estambul y la
necesidad de establecer alianzas funcionales. Los objetivos principales de
esta fase incluyen: (a) evaluar las condiciones y desafíos prevalecientes
específicos del país; (b) sensibilizar sobre las normas del Protocolo de
Estambul entre las partes interesadas gubernamentales y de la sociedad civil
pertinentes; y (c) el desarrollo de asociaciones entre las partes interesadas
del gobierno, la sociedad civil y las organizaciones internacionales de
derechos humanos.
2. Fase II
656. En la segunda fase, los objetivos principales implican la transferencia de
conocimientos y habilidades esenciales, así como la adopción de medidas
para implementar reformas de política. Los objetivos específicos de la
fase II incluyen: (a) desarrollar una capacidad sostenida para utilizar los
estándares del Protocolo de Estambul para investigar y documentar presuntas
torturas y malos tratos entre los grupos objetivo relevantes (expertos forenses
estatales, expertos clínicos y forenses de la sociedad civil y otros profesionales
de la salud, fiscales , abogados y jueces); (b) instituir reformas de política
para garantizar una investigación y documentación efectivas de la tortura y
los malos tratos; y (c) desarrollar un plan de acción nacional contra la tortura
que incluya la implementación del Protocolo de Estambul.
3. Fase III
657. Después de establecer un marco para la creación de capacidad sostenida e
identificar las reformas de políticas correctivas necesarias, la implementación
efectiva generalmente requiere
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
la transferencia de las actividades de implementación a la
sociedad civil local y los actores estatales, la
institucionalización de las normas y prácticas del Protocolo
de Estambul y el seguimiento del resultado de los esfuerzos
de implementación. Los objetivos específicos de la fase III
incluyen: (a) transferir actividades de creación de capacidad
y reforma de políticas a la sociedad civil local y los actores
estatales; (b) integrar las mejores prácticas en las instituciones
gubernamentales y profesionales; c) mejorar la creación de
redes y la colaboración regionales; y (d) monitorear la calidad
y precisión de las evaluaciones forenses y médico-legales de
presuntas torturas o malos tratos.
C. Reformas jurídicas,
administrativas y judiciales
658. En muchos países, los Estados practican la tortura y
malos tratos con impunidad porque los sistemas legales y
judiciales no cuentan con un marco normativo y salvaguardias
institucionales para prevenir violaciones y garantizar la rendición
de cuentas y la reparación. En algunos casos, tienen disposiciones
que en realidad facilitan la tortura y los malos tratos. Los sistemas
de justicia penal que se basan en gran medida en las confesiones
como prueba principal en los procedimientos judiciales pueden
facilitar, de forma intencionada o no, la tortura y los malos tratos.
para que el
Para que las prácticas de investigación y documentación
descritas en el Protocolo de Estambul sean efectivas, es
posible que los Estados deban llevar a cabo reformas legales,
administrativas y judiciales, incluida la definición y tipificación
como delitos de actos de tortura y malos tratos de conformidad con
las obligaciones de la Convención contra la Tortura y otros
tratados internacionales pertinentes; ratificar y garantizar la
aplicación efectiva del Protocolo Facultativo de la Convención
contra la Tortura y el establecimiento de mecanismos nacionales
de prevención y otros órganos de vigilancia independientes y
eficaces. Los Estados deben garantizar además la aplicación
adecuada de las leyes penales sobre tortura y malos tratos y que
su aplicación no se vea impedida por leyes menores sobre el
abuso de poder por parte de funcionarios del Estado o las lesiones
causadas por funcionarios del Estado o por la imposición de
sanciones administrativas. Además, los Estados deben asegurar
que las reglas de prueba excluyan la admisión de declaraciones
hechas bajo
tortura y malos tratos y de todas las demás pruebas
obtenidos como resultado de tales violaciones. Uno de los
La forma más eficaz de prevenir confesiones falsas bajo
tortura o malos tratos es exigir que el proceso de obtención
de declaraciones autoincriminatorias se lleve a cabo en
presencia de un juez después de que el detenido haya tenido
un abogado independiente.
157
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
659. La tortura y los malos tratos a menudo ocurren bajo custodia
cuando los Estados no garantizan las salvaguardias para
las personas privadas de libertad y no cuentan con
mecanismos de denuncia efectivos para abordar los presuntos abusos.
Los Estados deben tomar las medidas necesarias para
garantizar mecanismos de denuncia efectivos para las personas
que alegan tortura o malos tratos y protección contra represalias y/
o intimidación. También deben garantizar salvaguardias para las
personas privadas de libertad mediante:
a) Cumplir las Reglas de Nelson Mandela y otras normas
pertinentes de las Naciones Unidas;
b) Informar a las personas privadas de libertad de sus derechos
en un idioma que entiendan;
c) Garantizar el pronto acceso a un abogado de su
elección durante todos los interrogatorios y procedimientos
judiciales;
(d) Permitir el contacto rápido y las visitas de familiares y/o
amigos;
e) Permitir visitas periódicas de los órganos de control;
f) Garantizar el pronto acceso a un juez de oficio en los procesos
penales y el derecho de hábeas corpus en todos los procesos;
g) Permitir el rápido acceso consular de las personas detenidas en
un Estado extranjero (un Estado que no sea su Estado de
nacionalidad);
h) Velar por que nadie sea detenido en ningún
centro de detención secreto o no reconocido;
(i) Mantener registros de custodia efectivos y precisos;
j) Prohibir la detención incomunicada e indefinida,
incluso en lugares de detención no oficiales;
k) Prohibir el uso en cualquier procedimiento de pruebas obtenidas
mediante tortura o malos tratos;
l) Garantizar que los interrogatorios se ajusten a las prácticas
de aplicación de la ley reconocidas internacionalmente;
m) Adoptar procedimientos operativos estándar para
evaluar y denunciar presuntas torturas o malos tratos
535 Dado que tales evaluaciones son una obligación de los Estados, el costo de las evaluaciones sanitarias obligatorias debe ser sufragado por ellos.
536 Si bien las ONG, los médicos y los profesionales de la salud no están obligados por el derecho internacional a producir evaluaciones de conformidad con el Protocolo de Estambul, se les alienta encarecidamente a
que lo hagan. Asimismo, las presuntas víctimas se reservan el derecho de decidir sobre la presentación de pruebas y el tipo de las mismas.
158
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
en detención, ya sea en entornos civiles o militares, de conformidad
con las normas del Protocolo de Estambul;
n) Garantizar salvaguardias apropiadas para categorías
especiales de detenidos (mujeres, menores, personas de
edad, extranjeros, minorías étnicas, lesbianas, gais, bisexuales,
transgénero e intersexuales, personas enfermas, personas con
discapacidad, personas con problemas de salud mental) o
discapacidades de aprendizaje y otros grupos o individuos que
pueden ser particularmente vulnerables durante la detención).
660. Como se describe en el párrafo 186 anterior, los Estados tienen
el deber de realizar investigaciones prontas, imparciales,
independientes, eficaces y exhaustivas de todas las denuncias de
tortura o malos tratos con la participación de las víctimas durante
todas las fases de las investigaciones. Dada la importancia crítica de
las pruebas médico-legales de la tortura, los Estados deben
implementar un sistema de evaluaciones de salud obligatorias de las
personas detenidas, incluido un examen de salud inicial en el
momento de la detención y cada 24 horas a partir de entonces; a
petición del detenido; y antes de los traslados a otros lugares de
detención, incluida la prisión preventiva535. Dado que la tortura y los
malos tratos son delitos cometidos por o con la aquiescencia de
funcionarios del Estado, es esencial que los Estados garanticen el
derecho de las presuntas víctimas a uno o más profesionales de la
salud de la elección del detenido para la evaluación clínica en cualquier
momento durante o después de su detención, incluso en los lugares
de detención que requieren autorización de seguridad. Dichas
evaluaciones realizadas por médicos no gubernamentales deben ser
admisibles en los tribunales y recibir la misma consideración que la de
los expertos médicos gubernamentales.536 Los médicos, tanto
gubernamentales como no gubernamentales, deben tener acceso
rápido (en menos de 24 horas) a las presuntas víctimas de tortura o
malos tratos. -tratamiento para evaluar la evidencia física y psicológica
de acuerdo con el Protocolo de Estambul
estándares ya sea que los individuos estén o no en
custodia. Los Estados deben asegurarse de que todas las garantías
procesales del Protocolo de Estambul para las evaluaciones médico-
legales de presuntas torturas o malos tratos estén codificadas en la
legislación nacional, incluidos los códigos de procedimiento penal y las
leyes forenses y sanitarias (véanse los párrs. 312 a 315 supra).
661. Los Estados deben desarrollar un marco legal sólido para
reparar la tortura y los malos tratos, incluidos los procesos
civiles que sean independientes del resultado de cualquier
proceso penal.
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VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
y el derecho de las víctimas a la rehabilitación. Esto debe
incluir recursos procesales efectivos, tanto judiciales como
extrajudiciales, para proteger el derecho de las víctimas a no
sufrir tortura ni malos tratos.
en la ley y en la práctica y proporcionar reparación y
rehabilitación por la tortura y los malos tratos cometidos
contra ellos. La legislación nacional debe contemplar las
diferentes formas de reparación reconocidas por el derecho
internacional y las reparaciones otorgadas deben reflejar la
gravedad de la(s) violación(es).
662. Los Estados deben garantizar que todo el personal pertinente (funcionarios
encargados de hacer cumplir la ley, funcionarios penitenciarios, expertos
forenses del Estado y otros profesionales de la salud, fiscales, abogados y
jueces) reciban capacitación sobre la investigación y documentación legal y
clínica efectivas de la tortura y los malos tratos y que la ley el personal encargado
de hacer cumplir la ley recibe formación específica sobre métodos de
interrogatorio internacionalmente aceptados y medidas eficaces para prevenir la
tortura y los malos tratos. La formación de los grupos destinatarios pertinentes
debe incluirse en los planes de estudios profesionales correspondientes, así
como cursos de formación específicos y educación continua para aquellos que
ya ejercen en sus campos. Los abogados, fiscales y jueces deben tener
conocimientos y capacitación específicos sobre el Protocolo de Estambul y sus
Principios, en particular la orientación sobre investigaciones legales de tortura y
malos tratos y cuestiones médico-legales pertinentes, como la comprensión del
contenido de las evaluaciones médico-legales. de supuestas torturas y malos
tratos, tal como se describe en los capítulos IV, V y VI y los anexos I y IV, y las
calificaciones necesarias para el testimonio de peritos clínicos (véanse los párrs.
303 a 308).
Los abogados, fiscales y jueces también deben tener
conocimientos y formación específicos sobre la regla de exclusión
(véanse los párrs. 10 i), 16 y 264 supra) en virtud de la cual las
pruebas obtenidas como resultado de torturas o malos tratos
quedan excluidas del uso en procedimientos judiciales. .
Además, los funcionarios del gobierno deben estar capacitados
para reconocer y responder adecuadamente a las denuncias de
tortura o malos tratos. Los que han trabajado
para implementar los estándares del Protocolo de Estambul,
han desarrollado una serie de materiales de capacitación
generales y específicos para profesionales legales y clínicos relevantes.
663. Los Estados también deben garantizar el respeto de los derechos
deberes éticos médicos descritos en el capítulo II.
Estos incluyen, entre otros, la no participación de los
profesionales de la salud en cualquier forma de prácticas de
interrogatorio y requisitos obligatorios de documentación y
presentación de informes cuando se alegue o sospeche tortura o
malos tratos. Los profesionales de la salud también
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
prohibido tener cualquier papel en la imposición de sanciones
disciplinarias u otras medidas restrictivas.
D. Reforma estatal de la
profesión forense y de la salud
664. Las obligaciones de los Estados en virtud del derecho internacional de
investigar efectivamente las denuncias de tortura o malos tratos exigen
que los Estados garanticen políticas, prácticas y capacidades efectivas
para la investigación y documentación efectivas de la tortura y los malos
tratos por parte de médicos y expertos forenses empleados por el
Estado. Esta obligación del Estado también se extiende al apoyo de los
médicos no gubernamentales dada la importancia crítica de la independencia
y la imparcialidad para lograr la rendición de cuentas por los crímenes de
Estado, como la tortura y los malos tratos. Además, las víctimas de la tortura
tienen derecho a tener acceso a profesionales de la salud y expertos clínicos
independientes y pueden no confiar en los servicios del Estado ni desearlos.
ya que la tortura es un delito cometido por el Estado.
665. Los peritos y médicos forenses empleados por el Estado pueden
encontrar víctimas de tortura o malos tratos en medico
legales y otros entornos clínicos o institucionales. En todos los
entornos, tienen el deber de investigar y documentar eficazmente
las pruebas clínicas de tortura o malos tratos.
de acuerdo con las normas del Protocolo de Estambul.
Las instituciones forenses estatales y las agencias de salud deben
revisar y reformar las políticas y prácticas que no son consistentes
con los estándares del Protocolo de Estambul, garantizar
salvaguardas para evaluaciones efectivas, brindar capacitación y
apoyo adecuados a todos los profesionales de la salud relevantes y
garantizar el respeto de los principios éticos relevantes.
666. Uno de los problemas más importantes en la aplicación de las normas del
Protocolo de Estambul es la falta de independencia de los profesionales de la
salud empleados por el Estado. Dado que la tortura y los malos tratos son delitos
de Estado y
Los expertos y médicos forenses empleados por el Estado
están bajo la autoridad de funcionarios del Estado, estos
profesionales de la salud pueden experimentar y/o percibir
presiones para ignorar o tergiversar las pruebas clínicas de
tortura o malos tratos. Esto nunca debería ser
tolerado por las instituciones forenses y los organismos de salud
como la falta de documentación y denuncia de la tortura
y los malos tratos son considerados una forma de complicidad
por parte de la AMM (ver párr. 155 supra). Los estados,
particularmente sus instituciones forenses y agencias de salud,
son responsables de garantizar un entorno en el que todas las
evaluaciones forenses puedan realizarse de manera independiente,
científica y ética. Para que los Estados se reúnan
159
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
su obligación de investigar efectivamente las denuncias de tortura o
malos tratos, los servicios forenses y clínicos deben ser independientes
de las autoridades policiales, judiciales y/o militares. Si bien esto puede
requerir cambios administrativos significativos, no se puede exagerar la
importancia de la independencia clínica.
667. Las instituciones forenses estatales independientes y los organismos de
salud deben estar dotados de autoridad y fondos para capacitar y
supervisar la realización de evaluaciones médico-legales y otras evaluaciones
clínicas pertinentes y tener
recursos financieros y humanos adecuados para realizar evaluaciones
médico-legales efectivas de presuntas torturas o malos tratos,
incluyendo: personal calificado/
consultores; intérpretes profesionales; equipos médicos y
fotográficos; acceso a diagnóstico por imágenes y pruebas de
laboratorio; y el tiempo adecuado para realizar sus evaluaciones.
Los Estados no deben prohibir u obstruir el establecimiento de
servicios forenses o médico-legales no gubernamentales; ni deben
tener la autoridad para calificar o descalificar a expertos o médicos
forenses no gubernamentales.
668. Las instituciones forenses estatales y los organismos de salud deben
Garantizar que las evaluaciones médico-legales de la tortura y los malos
tratos denunciados se lleven a cabo con prontitud (inmediatamente y a
más tardar 48 horas después del momento en que se cometió la tortura).
o se alega o documenta malos tratos en una evaluación clínica
inicial)537 y objetivamente por expertos gubernamentales
independientes y calificados para evaluar la evidencia física y
psicológica de acuerdo con los estándares del Protocolo de Estambul.
Deben exigir a sus expertos forenses y profesionales de la salud que
investiguen todas las denuncias de tortura o malos tratos y los casos en
los que se sospeche de tortura o malos tratos, incluso en ausencia de
una denuncia o solicitud legal específica.
Las instituciones forenses estatales y los organismos de salud deben
garantizar que se realicen evaluaciones forenses y clínicas de las
presuntas víctimas de tortura o malos tratos.
de acuerdo con el Protocolo de Estambul y sus
Principios. Para garantizar el cumplimiento de las normas del Protocolo
de Estambul, los Estados deberían considerar exigir el uso de formularios
de informe de evaluación estandarizados que se basen en el Protocolo
de Estambul y sus Principios.
669. Los organismos forenses estatales y los organismos de salud deben
asegurarse de que las garantías procesales para la documentación
médico-legal eficaz de la presunta tortura y malos tratos se incluyan en la
legislación nacional, los reglamentos pertinentes y los procedimientos
operativos estándar para
537 Este plazo se basa en la necesidad de identificar y preservar evidencia clínica de tortura o malos tratos, particularmente evidencia física, que puede resolverse con el tiempo.
160
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
todo el personal de salud que evalúe o pueda encontrarse con
presuntas víctimas de tortura o malos tratos.
670. Instituciones forenses estatales y organismos de salud
debe respetar y facilitar el derecho de las personas a ser evaluadas
por uno o más profesionales de la salud no gubernamentales de su
elección en cualquier momento durante o después de su detención.
Los Estados deben informar a la presunta víctima de este derecho
y proporcionar información de remisión a otros profesionales de la
salud si así lo solicita la presunta víctima.
671. Los Estados deberían proporcionar capacitación sobre la
investigación y documentación de la tortura y los malos tratos.
Instituciones forenses estatales y de salud.
Las agencias deben asegurarse de que todo el personal relevante
reciba capacitación sobre el Protocolo de Estambul y sus
Principios. Esto no solo incluye a los expertos forenses del
Estado, sino a todos los médicos que puedan encontrarse con
presuntas víctimas de tortura o malos tratos. Como se señaló en los
capítulos IV y VII, los profesionales de la salud pueden encontrarse con
víctimas de tortura o malos tratos en contextos no médico-legales en los
que el propósito principal de la evaluación está relacionado con el estado
de salud o la atención médica. La capacitación sobre el Protocolo de
Estambul para profesionales de la salud debe ser integral e incluir todos
los aspectos de las evaluaciones clínicas, en particular: condiciones y
habilidades esenciales para la entrevista; calificaciones clínicas; garantías
procesales para tales evaluaciones; el contenido de una evaluación
completa, incluyendo evidencia física y psicológica; orientación sobre la
interpretación de hallazgos y conclusiones; y limitaciones del Protocolo
de Estambul y posible uso indebido. Además, los expertos forenses y los
médicos deben recibir capacitación específica sobre las obligaciones
éticas pertinentes, incluida la resistencia a las presiones institucionales
que entren en conflicto con sus obligaciones éticas hacia los pacientes y
las presuntas víctimas de tortura o malos tratos. Las instituciones estatales
también deben garantizar sistemas de apoyo para que los médicos
cumplan con sus obligaciones éticas y vías para que informen sus
inquietudes.
672. La capacitación eficaz de los grupos de profesionales de la salud se puede
lograr a través de la capacitación en aulas interactivas, generalmente bajo
el liderazgo de capacitadores nacionales o internacionales independientes
y altamente experimentados, seguida de la tutoría individual y la supervisión
de expertos forenses y médicos en entornos de la vida real.
Este enfoque generalmente se mejora mediante la implementación de
cursos extendidos de "capacitación de capacitadores" para amplificar
los esfuerzos de capacitación inicial. La eficacia de la formación sobre
el Protocolo de Estambul también se ve reforzada por
Machine Translated by Google
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
capacitar juntos a los profesionales de la salud y del derecho,
como interacción entre los diferentes grupos objetivo (expertos
forenses estatales, otros profesionales de la salud y de la salud
mental, fiscales, abogados y jueces) ayuda a desarrollar una
comprensión común de las normas y procedimientos de
investigación y documentación, y los respectivos roles y desafíos
que experimenta cada grupo. Además, la participación de profesionales
de la salud y del derecho de la sociedad civil en la formación de
funcionarios del Estado a menudo enriquece la experiencia de
formación y permite que dichos funcionarios y miembros de la sociedad
civil trabajen hacia objetivos comunes.
673. Los médicos independientes no gubernamentales desempeñan un
papel fundamental en la investigación y documentación eficaces de
la tortura y los malos tratos. Tiempo
no actúan en nombre del Estado, su capacidad para documentar
de manera independiente e imparcial la tortura y los malos tratos
suele ser esencial para el Estado
en el cumplimiento de su obligación de garantizar la
investigación y documentación efectivas de la tortura y los
malos tratos y su prevención, rendición de cuentas y reparación
y rehabilitación. Los estados pueden y deben
apoyar a los médicos no gubernamentales tanto como sea
posible, incluso garantizando la capacitación, facilitando las
evaluaciones de presuntas torturas y malos tratos por parte de
médicos no gubernamentales, asegurando que se dé el mismo
peso a sus evaluaciones médico-legales en los procedimientos
judiciales y apoyando la capacidad pertinente. esfuerzos de
construcción y creación de redes.
E. Implementación del Protocolo de
Estambul: seguimiento y
rendición de cuentas
674. Es esencial monitorear los esfuerzos de implementación y medir los
resultados significativos para evaluar la efectividad de los esfuerzos
para erradicar
la tortura y los malos tratos, o la falta de ellos. La supervisión
estatal de la conducta de los funcionarios del Estado suele ser
ineficaz y, en algunos países, se utiliza como medio para ocultar
prácticas de tortura y malos tratos. Por esta razón, es esencial que
los organismos independientes controlen la implementación del
Protocolo de Estambul y los resultados de las actividades de
control se informen públicamente para garantizar la rendición de
cuentas por los crímenes de Estado. Los Estados deben encargar
y apoyar un organismo de monitoreo independiente para monitorear
la implementación de los estándares del Protocolo de Estambul y
538 CAT/OP/12/5; y Asociación para la Prevención de la Tortura e Instituto Interamericano de Derechos Humanos, Protocolo Facultativo de la Convención de la ONU contra la Tortura:
Manual de implementación, edición revisada. (Ginebra, 2010), págs. 85–103.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
las condiciones necesarias para una investigación y
documentación efectivas de la tortura y los malos tratos.
675. La estructura organizativa de una organización independiente
El organismo de seguimiento puede estar informado por las
directrices sobre los mecanismos nacionales de prevención.538
En la actualidad, los organismos independientes existentes
pueden tener ya un papel en el seguimiento del progreso en el
uso de las normas del Protocolo de Estambul en contextos
nacionales. Independientemente de la estructura organizacional,
el establecimiento de un organismo de monitoreo independiente
debe seguir los Principios de París para garantizar la independencia,
legitimidad y credibilidad del organismo de monitoreo.
Ya sea que las funciones de monitoreo sean realizadas por o
dentro de las instituciones nacionales de derechos humanos
existentes (como una comisión nacional de derechos humanos,
la oficina del defensor del pueblo u otras instituciones similares)
o un organismo nuevo y separado, la participación de la sociedad
civil es esencial y la selección de los representantes de la sociedad
deben ser inclusivos y transparentes.
676. Las funciones de seguimiento deben incluir, pero no están
limitado a: cumplimiento de las condiciones para la implementación
efectiva del Protocolo de Estambul (véanse los párrs. 645 a 653
supra), desarrollo de normas, procedimientos y estructuras para
las profesiones jurídicas y de la salud y capacitación de los
profesionales jurídicos y de la salud pertinentes. El órgano de
supervisión independiente también debe supervisar el
funcionamiento continuo del sistema nacional de documentación,
incluido el desempeño general del sistema de documentación, el
acceso individual a investigaciones y documentación rápidas,
independientes, imparciales y eficaces de denuncias de tortura o
malos tratos, y tortura y malos tratos. prácticas de tratamiento
basadas en datos desagregados recopilados en un sistema de
documentación nacional.
Un organismo de monitoreo independiente puede considerar
establecer comités asesores médicos y legales subsidiarios
compuestos por expertos independientes para brindar asistencia
técnica al organismo de monitoreo independiente en la ejecución
de actividades de monitoreo y proporcionar opiniones y
recomendaciones para la acción.
677. Un órgano de vigilancia independiente debe procurar que se rindan
cuentas sistemáticamente por la tortura y los malos tratos en forma de
recomendaciones y recomendaciones.
orientación sobre cuestiones específicas de interés para los grupos
y subgrupos profesionales, como la creación de capacidad y las
reformas de políticas. Dicho organismo de control independiente
debería tratar de garantizar que las personas y los profesionales
161
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
rendición de cuentas a través de procedimientos profesionales
de rendición de cuentas iniciados contra personas por los
organismos profesionales pertinentes, como colegios de
abogados, asociaciones médicas y psicológicas nacionales y
asociaciones de jueces. En situaciones en las que un organismo
de control independiente determine que las personas han
desempeñado sus funciones en violación de la legislación penal
nacional u otras normas pertinentes
legislación (en cualquier caso, cuando dicha legislación sea
compatible con las normas jurídicas internacionales), o las
normas éticas o profesionales, las recomendaciones para
investigaciones o procedimientos disciplinarios o penales deben
ser iniciadas por las autoridades pertinentes y los organismos
profesionales y las agencias de concesión de licencias.
678. Los Estados deben alentar y apoyar la vigilancia
actividades de las Naciones Unidas contra la tortura y
otros órganos de derechos humanos, órganos regionales
contra la tortura y de derechos humanos y organizaciones
internacionales y nacionales de derechos humanos con el
fin de controlar y responsabilizar de manera efectiva a los
funcionarios del Estado por las prácticas de tortura y malos tratos.
679. Los Estados deben garantizar que sus denunciantes
las políticas de protección amparan al personal médico-legal
y de salud que informan los resultados de sus evaluaciones de
presuntas torturas y malos tratos. Los Estados también deben
garantizar la protección de los testigos y de cualquier funcionario o
individuo que denuncie un caso de presunta tortura o malos tratos y
sancionar la no denuncia de tortura o malos tratos por parte de los
funcionarios en situaciones en las que existan canales confidenciales
de denuncia.
F. Cooperación, coordinación y
asistencia técnica
680. La cooperación, coordinación y asistencia técnica del Estado con
actores externos es fundamental para la
implementación exitosa de los estándares del Protocolo de
Estambul y condiciones relevantes dada la responsabilidad
de los actores estatales por delitos de tortura y malos tratos. Los
Estados deben coordinar actividades para
implementar el Protocolo de Estambul en cooperación con la
asistencia de instituciones multilaterales, como el
Naciones Unidas, en particular ACNUDH, el Comité contra la Tortura,
el Relator Especial sobre la tortura, el Subcomité para la Prevención
de la Tortura, el
Relatora Especial sobre la violencia contra la mujer, CICR, órganos
regionales de derechos humanos, como el
539 Rohini Haar y otros, “El Protocolo de Estambul: una encuesta global de partes interesadas sobre experiencias pasadas, prácticas actuales y establecimiento de normas adicionales”, Torture, vol. 29, núm. 1 (2019),
págs. 70–84.
162
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Comité para la Prevención de la Tortura y el
Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, y con
ONG experimentadas y otros Estados.
681. Los Estados también deben proporcionar asistencia exterior
para la implementación del Protocolo de Estambul sobre la
base del apoyo al desarrollo, el estado de derecho, la
seguridad, la cooperación, la democratización y la
consolidación de la nación, en particular en las democracias
emergentes y después de prácticas prolongadas de tortura
y malos tratos.
G. Sociedad civil
682. Si bien los Estados tienen la responsabilidad primordial de
implementando los estándares del Protocolo de Estambul y las
condiciones necesarias para la investigación y documentación
efectivas de la tortura y los malos tratos, la sociedad civil a
menudo juega el papel más crítico para facilitar la implementación
del Protocolo de Estambul.
Durante los últimos 20 años, los miembros de la sociedad civil
han jugado un papel clave en la implementación de los
estándares del Protocolo de Estambul. En una encuesta reciente539
de 220 interesados en el Protocolo de Estambul de 30
países, los participantes informaron que utilizaron el Protocolo
de Estambul en una amplia gama de actividades relacionadas
con la investigación y documentación de la tortura y los malos
tratos y su prevención, rendición de cuentas, reparación y
rehabilitación, así como concientización y promoción. La mayoría
de los encuestados utilizó el Protocolo de Estambul para promover
el conocimiento público, investigaciones convincentes, promover
el Protocolo de Estambul en la reforma de leyes y políticas
nacionales, campañas y sensibilización, y en investigaciones
legales y evaluaciones médico-legales de presuntas torturas o
malos tratos. El Protocolo de Estambul también se utilizó como
herramienta de admisión para médicos y
tratamiento y rehabilitación de la salud mental. Otro
los usos incluían investigación, educación y detección o
documentación de otras experiencias traumáticas, como el
abuso infantil o la violencia doméstica. miembros de la sociedad civil
la sociedad también han desempeñado un papel clave en el seguimiento
y la promoción de la implementación de la Declaración de Estambul.
Protocolo y en la capacitación de las instituciones del
Estado, y trabajó para garantizar que los esfuerzos de creación
de capacidad también incluyan y beneficien a la sociedad civil,
que los médicos de la sociedad civil realicen evaluaciones clínicas
de presuntas torturas o malos tratos y que las pruebas clínicas
Machine Translated by Google
VIII. IMPLEMENTACIÓN DEL PROTOCOLO DE ESTAMBUL
documentada por médicos independientes no
gubernamentales se acepta en procedimientos judiciales.
683. Como se indicó anteriormente, los Estados pueden y deben alentar y apoyar la
colaboración con la sociedad civil en sus acciones correctivas contra la tortura,
pero los miembros de la sociedad civil no deben depender únicamente de las
iniciativas estatales para tomar medidas correctivas independientes. Los
miembros de la sociedad civil, incluidos expertos en derechos humanos,
abogados y profesionales de la salud, deben organizarse y trabajar junto con
organismos y organizaciones internacionales y regionales de derechos
humanos para desarrollar las capacidades necesarias dentro de la sociedad
civil para implementar las normas del Protocolo de Estambul y otras actividades
contra la tortura.
Esto incluye la aplicación del Protocolo de Estambul y sus
Principios en la investigación y documentación legal y médico-
legal de presuntas torturas y malos tratos en casos
individuales; utilizar las normas del Protocolo de Estambul
como marco para hacer que los Estados rindan cuentas por
prácticas efectivas de investigación y documentación,
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
incluyendo el establecimiento de las condiciones necesarias
para la implementación del Protocolo de Estambul; llevar
a cabo reformas legales, judiciales y administrativas
efectivas; garantizar la independencia de las instituciones
forenses y los organismos de salud del Estado; establecer
actividades de seguimiento eficaces; y facilitar la cooperación,
la coordinación y la asistencia técnica entre los Estados
y actores externos. Se debe prestar especial atención al
desarrollo de conocimientos psicológicos relevantes que
pueden faltar en la sociedad civil. En los Estados en los que
la tortura y los malos tratos se practican con impunidad, la
prestación de los servicios de rehabilitación suele recaer en
las organizaciones de la sociedad civil dada la falta de
confianza en las instituciones gubernamentales. Los servicios
de rehabilitación en muchos países sirven como puntos
focales para una amplia gama de actividades contra la tortura
y deben recibir apoyo por el papel clave que desempeñan en
la investigación y documentación de la tortura y los malos tratos.
y su prevención, rendición de cuentas y reparación.
163
Machine Translated by Google

GLOSARIO
ABUSO cualquier forma de maltrato físico o psicológico.

PRESUNTA VÍCTIMA una persona que afirma y/o se sospecha que ha sido perjudicada por un acto ilícito.

CADENA DE CUSTODIA un proceso que permite rastrear y recrear la historia completa de la custodia de una exhibición desde el
(DE UNA EXHIBICIÓN) momento en que se aseguró por primera vez hasta el momento actual.

un profesional de la salud que presta servicios de atención de la salud y/o realiza evaluaciones clínicas
CLÍNICO
de presuntas torturas y malos tratos.

una evaluación de las pruebas físicas y/o psicológicas de presuntas torturas y/o malos tratos por parte de
EVALUACIÓN CLINICA
un médico.

hallazgos físicos y/o psicológicos relevantes en casos de presunta o presunta tortura y/o malos tratos.
EVIDENCIA CLÍNICA

información recopilada en evaluaciones clínicas de evaluaciones físicas y/o psicológicas relacionadas con presuntas
HALLAZGOS CLÍNICOS
torturas y malos tratos.

DETENIDO toda persona privada de libertad, excepto por sentencia condenatoria.

DSM Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales.

relacionado o relacionado con la aplicación del conocimiento científico y clínico a cuestiones legales o de
FORENSE
derecho.

MÉDICO FORENSE/ para los fines de este documento, un médico/experto que aplica conocimientos científicos y clínicos a
MÉDICO/EXPERTO cuestiones legales o de derecho.

cualquier persona que haya completado un curso de estudio en un campo de la salud. La persona generalmente
PROFESIONAL DE LA SALUD
tiene licencia de una agencia gubernamental y/o está certificada por una organización profesional.

CIE Clasificación Internacional de Enfermedades y Problemas de Salud Relacionados.

tal como se define en la Convención contra la Tortura, cualquier forma de trato o pena cruel, inhumano o
MALOS TRATOS
degradante.

IMPLEMENTACIÓN DE se refiere al proceso de establecimiento de las condiciones necesarias para una investigación y documentación
EL PROTOCOLO DE ESTAMBUL efectivas de la tortura y los malos tratos.

el proceso mediante el cual una persona se entera y comprende el propósito, los beneficios y los riesgos potenciales
CONSENTIMIENTO INFORMADO de un procedimiento (clínico), incluidas las evaluaciones clínicas de presuntas torturas o malos tratos, y luego acepta
el procedimiento.

disposiciones articuladas en el anexo I del Protocolo de Estambul sobre la investigación y documentación efectivas
PRINCIPIOS DE ESTAMBUL
de la tortura y los malos tratos.

PROTOCOLO DE ESTAMBUL se refiere a individuos, grupos, organizaciones e instituciones involucradas o afectadas por la investigación y
PARTES INTERESADAS documentación efectivas de la tortura y los malos tratos.

Perteneciente o relativo a la ciencia o la práctica de la medicina, incluidos los aspectos físicos y psicológicos de la
MÉDICO
práctica médica.

profesionales de la salud que actúen como testigos expertos en procedimientos judiciales sobre la base de sus
EXPERTO MÉDICO/CLÍNICO
conocimientos y habilidades profesionales y de su capacidad para aplicar los Principios y directrices de Estambul
TESTIGOS
en las evaluaciones clínicas de presuntas torturas y malos tratos.

MEDICO-LEGAL relativo a aquella rama de la medicina que se relaciona con el derecho o contextos jurídicos.

164
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL

una evaluación clínica de posibles pruebas físicas y psicológicas de tortura y/o malos tratos en contextos
EVALUACIÓN MEDICO-LEGAL legales. Dichas evaluaciones pueden ser realizadas tanto por médicos que estén empleados dentro o fuera de las
instituciones del Estado.

INFORME MEDICO-LEGAL un informe de los hallazgos físicos y/o psicológicos de una evaluación médico-legal.

profesionales de la salud con capacitación y/o certificación específica en salud mental, como psicólogos,
CLÍNICOS DE SALUD MENTAL psiquiatras, trabajadores sociales, enfermeras psiquiátricas y consejeros de salud mental.

ONG organización no gubernamental.

ACNUDH Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

PERSONAS PRIVADAS DE SU personas que han sido arrestadas o están detenidas o encarceladas o cualquier otro entorno de custodia
LIBERTAD del que no se les permita salir a voluntad.

El término utilizado en el contexto de las Reglas Nelson Mandela para referirse en términos generales a las
PRISIONERO personas privadas de libertad en instituciones penales, ya sean penales o civiles, sin juicio o condenadas,
incluidas aquellas sujetas a “medidas de seguridad” ordenadas por un juez.

principios morales que gobiernan el comportamiento y las actividades de los miembros de una determinada
ÉTICA PROFESIONAL
profesión.

PSICOLÓGICO (O
una evaluación clínica de las posibles consecuencias psicológicas de la tortura o los malos tratos.
EVALUACIÓN PSIQUIÁTRICA)

información que se deriva de la evaluación clínica de una presunta víctima de tortura o malos tratos, que
generalmente incluye síntomas y discapacidades relevantes, signos y síntomas observados en el examen físico,
HALLAZGOS FÍSICOS
resultados de pruebas de diagnóstico, evidencia fotográfica e informes médicos relevantes, entre otros.

se refiere a reacciones de estrés traumático (emocional y/o físico) provocadas por la exposición a recuerdos o
RETRAUMATIZACIÓN
recordatorios de eventos traumáticos pasados.

condiciones (hallazgos y/o síntomas) que son consecuencia de una enfermedad o

SEQUELA (PLURAL, SEQUELAE)
lesión previa.

tal como se define en el artículo 1 de la Convención contra la Tortura, “todo acto por el cual se inflijan
intencionalmente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener
de ella o de un tercero información o una confesión, castigarla por un acto que él o un tercero haya cometido o se
sospeche que ha cometido, o intimidarlo o coaccionarlo a él o a un tercero, o por cualquier motivo basado en
TORTURA discriminación de cualquier tipo, cuando tal dolor o sufrimiento sea infligido por o a instigación de o con el
consentimiento o aquiescencia de un funcionario público u otra persona que actúe en calidad oficial.

No incluye el dolor o sufrimiento que surja únicamente de, inherente o incidental a las sanciones legales”.

TORTURA Y MALOS TRATOS se refiere a la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.

impacto psicológico en el yo de un individuo que trabaja con víctimas de trauma que resulta del compromiso
VICARIO (O SECUNDARIO)
empático con clientes traumatizados y sus informes de experiencias traumáticas.
TRAUMA

VÍCTIMA (O SOBREVIVIENTE)
una persona que ha sufrido daño físico y/o mental a través de actos u omisiones que equivalen a tortura y/o malos
DE TORTURA Y/O
tratos.
MALOS TRATOS

165
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Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
1. Los fines de una investigación eficaz y
documentación de tortura y otros tratos o penas crueles,
inhumanos o degradantes (en adelante, “tortura u otros
malos tratos”) incluyen los siguientes:
a) Esclarecimiento de los hechos y establecimiento y
reconocimiento de la responsabilidad individual y estatal frente a las
víctimas y sus familiares;
(b) Identificación de las medidas necesarias para prevenir
reaparición;
(c) Facilitación del enjuiciamiento y/o, en su caso, sanciones
disciplinarias para aquellos señalados por la investigación como
responsables y demostración de la necesidad de una reparación
integral y reparación por parte del Estado, incluida una
compensación financiera justa y adecuada y la provisión de los
medios para atención médica y rehabilitación.
2. Los Estados velarán por que las denuncias y los informes de
la tortura o los malos tratos se investiguen con prontitud y
eficacia. Incluso en ausencia de denuncia expresa, se
iniciará una investigación si existen otros indicios de tortura
o malos tratos.
podría haber ocurrido. Los investigadores, que serán
independientes de los presuntos autores y del organismo al
que sirven, serán competentes e imparciales.
Tendrán acceso a, o estarán facultados para encargar
investigaciones a expertos clínicos imparciales o de otro
tipo. Los métodos utilizados para llevar a cabo tales
investigaciones deberán cumplir con los más altos
estándares profesionales y los resultados se harán públicos.
3. (a) La autoridad investigadora tendrá el poder y la obligación de
obtener toda la información necesaria para la investigación.2 Las
personas que realicen la investigación tendrán a su disposición
todos los recursos presupuestarios y técnicos necesarios para
una investigación efectiva. También estarán facultados para
obligar a comparecer y declarar a todos los que actúen en el
ejercicio de sus funciones oficiales presuntamente implicados en
torturas o malos tratos. Lo mismo se aplicará a cualquier testigo.
A estos efectos, la autoridad investigadora podrá citar a testigos,
incluidos los funcionarios presuntamente implicados, y exigir la
producción de pruebas.
(b) Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos, los
testigos, quienes realicen la investigación y sus familias serán
protegidos contra la violencia, las amenazas de
2 Bajo ciertas circunstancias, la ética profesional puede requerir que la información se mantenga confidencial. Estos requisitos deben ser respetados.
3 Bajo ciertas circunstancias, la ética profesional puede requerir que la información se mantenga confidencial. Estos requisitos deben ser respetados.
168
ANEXOS
violencia o cualquier otra forma de intimidación que pueda
surgir con motivo de la investigación. Los potencialmente
implicados en torturas o malos tratos serán removidos de
cualquier cargo de control o poder, directo o indirecto, sobre
los denunciantes, testigos y sus familias, así como sobre
quienes realicen la investigación.
4. Las presuntas víctimas de tortura o malos tratos y sus
representantes legales serán informados y tendrán
acceso a cualquier audiencia, así como a toda la
información relevante para la investigación, y tendrán
derecho a presentar otras pruebas.
5. (a) En los casos en que los procedimientos de investigación
establecidos sean inadecuados debido a conocimientos
insuficientes o sospecha de parcialidad, o debido a la aparente
existencia de un patrón de abuso o por otras razones sustanciales,
los Estados garantizarán que las investigaciones se realicen a
través de un organismo independiente. comisión de investigación
o procedimiento similar. Los miembros de dicha comisión serán
elegidos por su reconocida imparcialidad, competencia e
independencia como individuos. En particular, serán independientes
de los presuntos autores y de las instituciones u organismos a los
que puedan servir. La comisión tendrá autoridad para obtener toda
la información necesaria para la investigación y llevará a cabo la
investigación según lo dispuesto en estos Principios.3
(b) Un informe escrito, elaborado dentro de un plazo razonable,
deberá incluir el alcance de la investigación, los procedimientos
y métodos utilizados para evaluar las pruebas, así como
conclusiones y recomendaciones basadas en determinaciones
de hecho y en la ley aplicable. Al finalizar, el informe se hará
público. También describirá en detalle los eventos específicos
que se descubrió que ocurrieron y la evidencia en la que se
basaron dichos hallazgos y enumerará los nombres de los
testigos que testificaron, con la excepción de aquellos cuyas
identidades se han retenido para su propia protección. El Estado
deberá, dentro de un plazo razonable, dar respuesta al informe
de la investigación y, en su caso, indicar las medidas a tomar al
respecto.
6. (a) Expertos clínicos involucrados en la investigación
de tortura o malos tratos se comportará en todo momento
de conformidad con los más altos estándares éticos y,
en particular, deberá obtener el consentimiento informado
antes de realizar cualquier examen. El examen debe
ajustarse a las normas establecidas.
Machine Translated by Google
ANEXOS
de la práctica clínica. En particular, los exámenes
se realizarán en privado bajo el control del experto
clínico y fuera de la presencia de agentes de
seguridad y otros funcionarios gubernamentales.
(b) El experto clínico preparará con prontitud un informe
escrito preciso, que incluirá al menos lo siguiente:
(i) Circunstancias de la entrevista: nombre del
sujeto y nombre y afiliación de los presentes en el
examen; hora y fecha exactas; ubicación, naturaleza y
dirección de la institución (incluyendo, en su caso, la
habitación) donde se lleva a cabo el examen (por
ejemplo, centro de detención, clínica o casa);
circunstancias del sujeto en el momento del examen (p.
ej., naturaleza de las restricciones a la llegada o durante
el examen, presencia de fuerzas de seguridad durante
el examen, comportamiento de los acompañantes del
recluso o declaraciones amenazantes al examinador); y
cualquier otro factor relevante;
(ii) Historial: registro detallado del relato de los
hechos por parte del sujeto durante la entrevista,
incluidos los presuntos métodos de tortura o malos
tratos, los momentos en que presuntamente se produjeron
torturas o malos tratos y todas las denuncias de síntomas
físicos y psicológicos;
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
(iii) Examen físico y psicológico: registro de todos
los resultados físicos y psicológicos del examen clínico,
incluidas las pruebas de diagnóstico apropiadas y,
cuando sea posible, fotografías en color de todas las
lesiones;
(iv) Opinión: interpretación en cuanto a la probable
relación de los hallazgos físicos y psicológicos con
posibles torturas o malos tratos.
Se dará una recomendación para cualquier
tratamiento médico y psicológico necesario y/o
examen adicional;
(v) Autoría: el informe deberá identificar claramente a
quienes realizaron el examen y deberá estar firmado.
(c) El informe será confidencial y se comunicará al sujeto oa su
representante designado.
Las opiniones del sujeto y su representante sobre el
proceso de examen se solicitarán y registrarán en el
informe. También se facilitará por escrito, en su caso, a
la autoridad encargada de investigar la denuncia de
tortura o malos tratos. Es responsabilidad del Estado
garantizar que se entregue de manera segura a estas
personas.
El informe no se pondrá a disposición de ninguna otra
persona, excepto con el consentimiento del sujeto o con la
autorización de un tribunal facultado para ejecutar tal
transferencia.
169
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Directrices
para
documentar la
tortura y los
malos tratos a los niños
Machine Translated by Google
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Si bien el Protocolo de Estambul y sus Principios se aplican a los
niños, existen consideraciones adicionales a tener en cuenta y
pautas prácticas que deben implementarse para garantizar que la
investigación y documentación de la tortura y el maltrato de niños
se hace de manera efectiva. Esta edición del Protocolo de
Estambul incluye actualizaciones y aclaraciones adicionales sobre la
documentación de la tortura y los malos tratos.
de niños en cada capítulo. Este anexo sirve como un resumen
del contenido basado en capítulos, pero no como una guía
integral para dichas evaluaciones.
I. Consideraciones para la documentación
tortura y malos tratos a niños
Una definicion
El artículo 1 de la Convención sobre los Derechos del Niño define a
un niño como “todo ser humano menor de dieciocho años, a menos
que en virtud de la ley que le sea aplicable, haya alcanzado antes la
mayoría de edad”. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones
Unidas para los Refugiados (ACNUR) también entiende que la
definición de “niño” incluye una amplia gama de etapas de desarrollo
y niveles de madurez.1 A pesar de su lugar especial en la mayoría
de las sociedades y su condición de vulnerable universalmente
reconocida, los niños el mundo experimentan o son testigos de
torturas y malos tratos.
B. Consideraciones legales
La Convención sobre los Derechos del Niño establece que:
“Ningún niño será sometido a torturas ni a otros tratos o penas
crueles, inhumanos o degradantes”. 2 Varios otros tratados de
las Naciones Unidas y sistemas regionales de derechos humanos
se ocupan de los niños y sus derechos. Los tratados de las
Naciones Unidas incluyen el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o
Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, la Convención
Internacional sobre la Protección de
los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y de sus
Familiares (art. 10); y la Convención sobre los Derechos de las
Personas con Discapacidad (art. 15).
Los tratados regionales incluyen la Convención para la
Protección de los Derechos Humanos y Derechos Fundamentales
1 ACNUR, El meollo del asunto, Evaluación de la credibilidad cuando los niños solicitan asilo en la Unión Europea (Bruselas, 2014), pág. 21
2 Convención sobre los Derechos del Niño, art. 37 (a).
3 A/HRC/28/68, párr. 33. Véase también, ibíd., párr. 17
4 Linda Sayer Gudas y Jerome M. Sattler, “Entrevistas forenses de niños y adolescentes”, Evaluación forense de salud mental de niños y adolescentes, Steven N.
Sparta y Gerald P. Koocher, eds. (Nueva York, Oxford University Press, 2006), págs. 115–128.
172
ANEXOS
libertades; el Convenio Europeo para la Prevención de la Tortura y de
las Penas o Tratos Inhumanos o Degradantes (art. 3); la Convención
Americana sobre Derechos Humanos (art. 5 (2)); y la Carta Africana
de Derechos Humanos y de los Pueblos (art. 5). En un informe al
Consejo de Derechos Humanos, el Relator Especial sobre la tortura y
otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, Juan E.
Méndez, afirmó que al considerar la tortura y los malos tratos de niños
por separado de los adultos, “el umbral en el cual trato o pena puede
calificarse como tortura o malos tratos es por lo tanto menor en el caso
de los niños”, especialmente en los casos en que se encuentran
privados de libertad o no acompañados3 (ver párr. 382 supra).
Además de los tratados internacionales y el derecho internacional
consuetudinario que rigen los derechos del niño, a menudo
existen marcos y normas legales específicos de cada país con
respecto a la protección y salvaguardia de los niños que deben
tenerse en cuenta al realizar evaluaciones clínicas.
C. Consideraciones psicológicas
Los efectos de la tortura y los malos tratos deben
considerarse en el contexto de las etapas de desarrollo
psicológico y físico de los niños y adolescentes. Si bien la tortura
y los malos tratos han
Con consecuencias tanto físicas como psicológicas en
todas las personas, los efectos en los niños y adolescentes
pueden conducir potencialmente a cambios a más largo
plazo y de mayor alcance en el curso de su desarrollo
psicológico y físico.
Los factores de desarrollo siempre deben tenerse en cuenta en
las evaluaciones clínicas de la tortura y los malos tratos.
de niños. Las estimaciones de la edad a la que los niños se
vuelven capaces de recordar eventos con precisión varían
mucho, y oscilan entre las edades de 3 a 6 años y de 14 a 15
años.4 Además, la capacidad de los niños para contar eventos
y establecer narraciones coherentes es
afectados por las capacidades cognitivas y lingüísticas, y los contextos
sociales y culturales (véanse los párrs. 284 a 293 supra).
No obstante, se puede obtener información valiosa y veraz de niños
de diferentes edades.
Cuanto más pequeños sean los niños, más sus experiencias y
comprensión de los eventos traumáticos se verán influenciados por
las reacciones y actitudes inmediatas.
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ANEXOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

de los cuidadores.5 Para los niños menores de 3 años que han para preservar la cohesión en la familia, se puede proteger

experimentado o presenciado torturas, el papel protector y tranquilizador demasiado al niño o se pueden ocultar hechos importantes

de sus cuidadores es crucial.6 sobre el trauma.

Los niños mayores de 3 años pero menores de 8 a menudo tienden a

retraerse y encontrar imposible hablar directamente sobre E. Cuestiones éticas

experiencias traumáticas. La capacidad de expresión verbal aumenta

durante el desarrollo con un marcado aumento alrededor de los 8 a 9 1. Protección de los niños y deber de cuidado
años. En este momento e incluso antes, se desarrollan operaciones

concretas y capacidades temporales y espaciales.7 La adolescencia es un Cuando se trabaja con niños y jóvenes, es importante recordar que: “Las

período de desarrollo volátil en el que los efectos de la tortura y los malos organizaciones tienen el deber de cuidar a los niños con los que trabajan,

tratos pueden variar ampliamente y pueden causar profundos cambios de están en contacto o se ven afectados por su trabajo y operaciones”. 9 El

comportamiento, incluidas reacciones erráticas similares a las observadas principio de protección de los niños incluye garantizar que los niños

en niños más pequeños, así como los observados en adultos, por ejemplo, estén protegidos contra daños y que cualquier riesgo de daño se

ira, depresión y recuerdos dolorosos (véanse los párrs. 575 y 584 a 594 identifique y aborde de inmediato. La salvaguardia incluye la prevención

supra). de nuevas torturas o malos tratos, recomendaciones para la recuperación

y la reintegración, la reducción de la exposición a experimentar o

presenciar violencia, y el acceso a atención de seguimiento médico y

La edad y el desarrollo de los niños, así como los traumas repetidos psicológico adecuada y confidencial .

que experimentan, la separación de la familia a una edad temprana

o la actitud de la familia sobre compartir las experiencias, la salud mental

y las dificultades preexistentes, como problemas de aprendizaje, pueden

afectar la comprensión de los niños sobre eventos y su capacidad para se registra la evaluación, se debe tener especial cuidado en

recordar eventos y comunicar experiencias. mantener la confidencialidad de la grabación, con acceso limitado solo

al equipo de evaluación, y para proteger la identidad del niño. Deben

cumplirse los requisitos legales locales de protección de datos.

D. Consideraciones familiares

Es importante considerar los factores que afectan a la familia y al 2. Consentimiento informado

niño (p. ej., separación física entre los miembros de la familia,

amenazas a los miembros de la familia, duelo, presenciar la tortura o la A los niños se les debe proporcionar con anticipación

muerte de miembros de la familia, pérdida del estatus social y económico, información completa sobre cualquier evaluación o

discriminación, desplazamiento forzado, racismo , y experiencias y procedimiento. La información sobre los procedimientos debe

creencias relacionadas con la búsqueda de apoyo) y los contextos adaptarse a los niños y sus etapas de desarrollo y comunicarse de

sociales y políticos. Los padres que son sobrevivientes de tortura pueden manera que puedan entender.

experimentar vergüenza y culpa, temiendo que la intensidad de sus Los niños deben tener la oportunidad de dar su consentimiento o

propios sentimientos sobre el trauma pueda abrumar a sus hijos.8 asentimiento a cualquier evaluación o procedimiento. En los niños más

pequeños, este proceso también implicará normalmente la búsqueda

del consentimiento de sus padres o tutores legales; sin embargo, en todos

los casos, la consideración de salvaguardar el interés superior del niño

Los padres de niños que fueron torturados también pueden sentir debe ser primordial e incluir la deliberación sobre la posibilidad de daño

culpa por su incapacidad para proteger a sus hijos, y su crianza puede por parte de los miembros de la familia. La edad a la que los niños pueden

verse afectada por sentimientos de impotencia, que pueden reforzarse dar su consentimiento independiente sin la necesidad de informar a sus

en entornos violentos y opresivos. Dichos entornos también pueden padres o tutores legales varía según los países y jurisdicciones, por lo que

dañar la percepción de los adolescentes sobre la autoridad de sus se deben considerar las pautas legales y éticas locales antes de buscar un

padres. Es más, consentimiento independiente.

5 Saskia von Overbeck Ottino, “Familles victimes deviolences colectivos et en exil: quelle urgence, quel modèle de soins? Le point de vue d'une pédopsychiatre”, Revue française de
psychiatrie et de psychologie médicale, vol. 14 (1998), págs. 35–39.

6 Michel Grappe, “La guerre en ex-Yougoslavie: un consider sur les enfants réfugiés”, en Psychiatrie humanitaire en ex-Yougoslavie et en Arménie: face au traumatisme, Marie
Rose Moro y Serge Lebovici, eds. (París, Presses universitaires de France, 1995), págs. 89–106.
7 Jean Piaget, La naissance de l'intelligence chez l'enfant, 9ª ed. (Neuchâtel, Delachaux et Niestlé, 1977).

8 Center for Victims of Torture, Healing the Hurt: A Guide for Developing Services for Torture Survivors (Minneapolis, 2005), cap. 2.
9 Manteniendo a los niños seguros, Estándares de protección infantil y cómo implementarlos (2014), pág. 10
10 Convención sobre los Derechos del Niño, art. 39.

173
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
consentimiento informado (véanse los párrafos 165 a 171 y 273).
Los médicos también deben tener en cuenta las posibles obligaciones
de informar a las autoridades pertinentes cuando un niño está en peligro
o ha estado expuesto a violencia o abuso de cualquier tipo y si no lo
hacen, por parte del profesional de la salud u otras personas que
observen o estén informadas. de tal violencia o abuso, puede conducir a
una investigación criminal y/o sanciones por parte de asociaciones
profesionales o agencias de licencias.
II. Proceso de entrevista y
evaluación
Un entrenamiento
Es importante recibir una formación adecuada sobre cómo entrevistar
y examinar a los niños que fueron torturados o maltratados, e idealmente
debería ser completada por cualquier persona que participe en la
evaluación y documentación de las experiencias de los niños. La
capacitación debe cubrir técnicas y procedimientos de entrevista
específicos que salvaguarden el bienestar de los niños y los protejan
de la retraumatización, y brinde orientación sobre cómo recopilar
información de los niños de manera confiable en función de su etapa
de desarrollo. Existen varias guías y protocolos de capacitación
nacionales e internacionales en esta área, incluidos los elaborados por
el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano,11 ACNUR,12
Defense for Children International13 y la American Professional Society
on the Abuse of Children.14
B. Configuración
1 vez
Una sola entrevista larga puede ser demasiado agotadora para los
niños y, dado que su capacidad de atención puede ser bastante corta
(dependiendo de su etapa de desarrollo, nivel de trauma y condiciones
comórbidas), puede ser necesario tomar descansos durante la
entrevista o realizarla repetidamente. múltiples sesiones.
11 Estados Unidos de América, Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano, “Protocolo NICHD revisado: guía de entrevista” (2014).
12 ACNUR, Directrices para entrevistar a menores no acompañados y preparar historias sociales (1985).
13 Defense for Children International – Bélgica, Guía práctica: Monitoreo de lugares donde los niños están privados de libertad (Bruselas, 2006).
14 Grupo de Trabajo de la Sociedad Profesional Estadounidense sobre el Abuso de Niños, “Pautas de práctica: entrevistas forenses en casos de sospecha de abuso infantil” (Columbus, 2012).
174
ANEXOS
2. Presencia de adultos de confianza y apoyo
durante la evaluación
Los niños deben ser apoyados por personas en las que confíen siempre
que sea posible y el miedo a contaminar las pruebas de los testigos no
debe ser una razón para aislar a los niños del contacto adulto positivo
y de apoyo; el bienestar y el interés superior del niño deben ser
primordiales en todo momento. La presencia de los padres/
Se deben considerar los tutores legales u otros adultos de apoyo
en la evaluación, a menos que no estén disponibles o no
representen el interés superior del niño. La presencia de adultos que
sean significativos para el niño y representen los mejores intereses
del niño brindarán consuelo a un niño ansioso y también permitirán
que el adulto apruebe tácitamente la cooperación del niño. En algunos
casos, como los que involucran violencia sexual, violencia doméstica
o problemas que surgen de la orientación sexual percibida y/o la
identidad o expresión de género, la presencia de miembros de la familia
puede dificultar que los niños revelen estas experiencias por temor a
avergonzarse. estigmatización o nuevos malos tratos o castigos para
ellos o sus familias. Los niños no pueden revelar en presencia de un
padre debido a su preocupación de que la revelación aflija a sus
padres o aumentar su culpa o vergüenza. Los médicos deben
ejercer el juicio y la paciencia para hacer que el niño se sienta
cómodo y apoyarlo cuando lo entrevisten solo. Es posible que los
médicos deban considerar los deseos de los niños de mantener
confidencial la información que revelan de sus padres y cómo abordar
esto de manera ética. En circunstancias en las que se entreviste a niños
o adolescentes en ausencia de sus padres o tutores, se debe tener
cuidado para garantizar que comprendan y consientan en la entrevista.
Se debe prestar especial atención a brindar apoyo, como
tomarse el tiempo para establecer una buena relación, usar un
lenguaje claro y apropiado para la edad en todo momento y brindar
descansos y oportunidades para hacer preguntas.
C. Recopilación de información
1. Construir una relación y establecer confianza
Tomarse el tiempo para generar confianza y compenetración
facilitará que los entrevistados de todas las edades, incluidos los
niños, hablen sobre temas difíciles. sin embargo, el
Machine Translated by Google
ANEXOS
establecer la confianza puede ser un desafío, ya que el niño
puede experimentar la situación de la entrevista o elementos de
ella como una reminiscencia de la tortura o los malos tratos.
La confianza puede verse socavada o faltar si se percibe que los
evaluadores o intérpretes representan a los grupos políticos,
étnicos o sociales cuyas autoridades han iniciado o participado en
la tortura o los malos tratos. Estos factores también pueden afectar
la confianza de los padres y tutores. La confianza se puede mejorar
o establecer si
los entrevistadores o intérpretes provienen de la propia cultura o
grupo étnico del niño.15 Los factores de desarrollo relacionados
con la edad, como la autoafirmación de un adolescente, también
deben tenerse en cuenta en el establecimiento de la confianza. Alguno
Las técnicas que pueden facilitar una relación positiva inicial
incluyen ambientes informales y cómodos en la habitación (p.
ej., iluminación, diseño adecuado para niños, temperatura,
asientos apropiados para la edad y ruidos de fondo) y explicar el
entorno y el proceso (p. ej., cuánto durará la entrevista, señalar
que los descansos están permitidos).
Como se mencionó en el párrafo 272 anterior, el lenguaje
corporal abierto, la atención, la escucha activa y la empatía son
importantes para construir y mantener la confianza y la relación.
Como es el caso de los adultos, es importante que los examinadores
pregunten directamente sobre cuestiones que un niño o un
adolescente no se sentiría seguro de revelar, por ejemplo, violencia
sexual o doméstica, impulsos suicidas, identidad o expresión de
género real o percibida u orientación sexual. Es importante recordar
que en todas las culturas el desarrollo de la autoconciencia de la
propia orientación sexual e identidad de género tiene lugar a lo
largo del tiempo, a menudo años o décadas y que, en áreas en las
que las identidades sexuales y de género de las minorías se
encuentran con una represión violenta, tal autoconciencia puede
haber sido suprimida. Algunos entrevistados que son muy jóvenes
pueden estar desconcertados acerca de por qué han sido
maltratados en primer lugar. El lenguaje y el vocabulario también
son importantes, especialmente cuando se discuten temas
relacionados con la sexualidad y la expresión de género. Los
examinadores e intérpretes deben ser sensibles a la falta de
nombres neutrales o positivos para las descripciones de diversas
presentaciones y comportamientos sexuales y de género en
muchas culturas e idiomas. Deben conocer y tomar medidas para
mitigar la homofobia y la transfobia internalizadas en los
entrevistados y en ellos mismos.
La construcción de una buena relación con los niños puede
facilitarse tomando medidas para garantizar que el entorno
15 ACNUR, El corazón del asunto, pág. 126.
dieciséis
Michael E. Cordero y otros. “Los protocolos de entrevistas forenses estructuradas mejoran la calidad y la información de las entrevistas de investigación con niños: una revisión de la investigación
utilizando el Protocolo de entrevistas de investigación del NICHD”, Child Abuse & Neglect, vol. 31, núm. 11–12 (2007), págs. 1201–1231.
17 Defense for Children International – Bélgica, Guía práctica.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
y el tono de la entrevista no es amenazante y es lo más informal
posible. Los entrevistadores deben usar un lenguaje apropiado
para el niño y adaptar su estilo de comunicación para que coincida
con la terminología local y las normas culturales para ayudar al niño
a sentirse cómodo y participar en el proceso de la entrevista.
Comenzar las entrevistas alentando a los niños a hablar sobre un
tema neutral puede crear oportunidades para establecer una buena
relación y transmitir una sensación de seguridad, y permitir que los
entrevistadores conozcan a los niños, sus habilidades verbales y
su grado de (in)quietud relacional. 16 Después de explicar el
propósito y el contenido de la evaluación y solo cuando el niño
hable con facilidad, la entrevista debe progresar hacia temas más
delicados, y los entrevistadores deben comprender que puede
tomar algún tiempo para que los niños se sientan lo suficientemente
cómodos hablando.17
2. Comunicación y técnicas
Siempre que sea posible, se deben usar preguntas abiertas,
ya que permiten que personas de todas las edades respondan
con sus propias palabras. Sin embargo, los niños tienden a
proporcionar menos información que los adultos, por lo que las
preguntas de sondeo pueden ser útiles. Los niños son
particularmente susceptibles a las preguntas capciosas que
sugieren una respuesta deseable, por lo que deben evitarse las
preguntas capciosas y cerradas siempre que sea posible. Dejar
que los niños sepan que es aceptable decir "No sé" para indicar
cuando no entienden una pregunta también ayudará a mejorar la
precisión.
Los niños suelen proporcionar menos información que los adultos.
Esto se debe en parte a que son menos capaces y menos
hábiles para generar señales de recuperación de forma independiente.
Técnicas como el dibujo, los diagramas corporales y el uso
de líneas de tiempo pueden ayudar a los niños a generar
pistas de memoria que, a su vez, deberían ayudarlos a recordar
detalles adicionales. Se debe tener cuidado al interpretar la
comunicación no verbal de los niños, como el juego, ya que no es
necesariamente un relato literal de los eventos y puede incluir
elementos de la imaginación y su mundo interior. Consulte los
párrafos 284 a 293 anteriores para obtener información adicional
sobre cómo entrevistar a niños.
3. Fuentes de información adicionales
Dado que el grado en que los niños expresan verbalmente
sus pensamientos y emociones con respecto al trauma
175
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL ANEXOS

en lugar de que el comportamiento dependa de la edad del tercero Evaluación médica

niño, el nivel de desarrollo y otros factores, como la dinámica
familiar, las características de personalidad, las normas Los exámenes médicos deben realizarse en un niño.

culturales y el contexto psicosocial, a veces es útil incluir
otras fuentes de
información en la evaluación con el fin de evaluar
y registrar el impacto potencial que incluye:
(a) Comportamiento de los niños durante las evaluaciones: el evaluador
puede comentar sobre el nivel de actividad, la naturaleza de las
interacciones y relaciones con los demás, afecto y estado de regulación,
estado de ánimo general y participación en el juego;
(b) Informes externos: siempre que sea posible, se recomienda
recopilar información de los padres, maestros y otras personas sobre el
historial de desarrollo de los niños, las necesidades especiales, el historial
entorno amigable por médicos capacitados con experiencia en la
evaluación y documentación de lesiones físicas (incluidas las
resultantes de agresión sexual) en bebés, niños y jóvenes. El
consentimiento para los exámenes debe obtenerse de los cuidadores
de los niños y, en situaciones en las que ellos mismos puedan dar
su consentimiento, de los niños o jóvenes. Idealmente, los médicos
deberían tener acceso a instalaciones de diagnóstico adicionales,
por ejemplo, radiografías y otras imágenes, pruebas hematológicas
y más asesoramiento especializado según sea necesario. Al
interpretar sus hallazgos, los médicos generalmente necesitan
buscar información adicional de niños, jóvenes y sus cuidadores
además de la disponible en entrevistas no médicas. Los médicos
deben ser capaces de documentar

médico y psiquiátrico, el funcionamiento social y escolar y el ajuste del sus conclusiones utilizando el formato internacional acordado.
comportamiento, antes y después de los supuestos eventos traumáticos. y

cambios en los patrones de comportamiento;18 Niños que han sufrido torturas o malos tratos
debe tener acceso a examinadores pediátricos capacitados y
competentes, siempre que sea posible, que puedan
(c) Escala y medidas de diagnóstico: para evaluar los síntomas, se pueden proporcionar evaluaciones médicas y recomendaciones para la atención.

considerar instrumentos adicionales, como escalas y listas de verificación. Es
deseable siempre que se haya establecido la validez y confiabilidad de estos
instrumentos para la población particular que se está evaluando, o para
poblaciones similares. Si no existen, se pueden consultar los datos de
poblaciones culturales diferentes, pero se deben usar con cuidado.
En el caso de los niños, parte de la evaluación debe incluir
la protección para la prevención de más torturas y malos
tratos, recomendaciones para la recuperación y reintegración,
y la reducción de la exposición a experimentar o presenciar
violencia. El acceso a un seguimiento médico y psicológico
adecuado y confidencial es un derecho de los niños.20

D. Consideración especial para la evaluación de la
agresión sexual en niños
Los investigadores deben ser conscientes del hecho de que los
niños y los jóvenes pueden no comprender el concepto de agresión
sexual o no ser capaces de identificarlo. En tales casos, a menudo
puede existir el temor de avergonzarse o estigmatizarse a sí mismos
o a sus familias, lo que también puede afectar su capacidad para
revelar sus experiencias. Es importante, si es posible, que en tales
circunstancias el niño sea visto por un experto en abuso infantil.19
El evaluador debe ser consciente de que un examen puede ser una
reminiscencia de la agresión original y, por lo tanto, debe llevarse a
cabo con delicadeza y con las explicaciones apropiadas. al niño y al
tutor o cuidador que lo acompaña.
Un niño que ha sufrido o se cree que ha sufrido tortura
sexual debe ser examinado, siempre que sea posible, por
un pediatra con experiencia especializada en el examen de
víctimas de abuso sexual.
IV. Impacto psicológico del trauma.
Los traumas infantiles se han asociado con una amplia
gama de problemas sociales, de salud y de salud mental.
Las experiencias infantiles adversas acumuladas aumentan el
riesgo de problemas sociales, conductuales, de salud y de salud
mental de manera marcada y gradual.21
La investigación ha demostrado que el trauma puede
comprometer significativamente el desarrollo cognitivo22

18 Kathryn Kuehnle y Steven N. Sparta, “Evaluación de las denuncias de abuso sexual infantil en un contexto legal”, en Evaluación forense de salud mental de niños y adolescentes,
Steven N. Sparta y Gerald P. Koocher, eds. (Nueva York, Oxford University Press, 2006), págs. 129–148.
19 Real Colegio de Pediatría y Salud Infantil, Los signos físicos del abuso sexual infantil: una revisión basada en la evidencia y una guía para las mejores prácticas (Lavenham,
Reino Unido, Lavenham Press, 2015). Véase también Astrid Heger, S. Jean Means y David Muram, eds., Evaluation of the Sexually Abused Child: A Medical Textbook and
Photographic Atlas, 2ª ed. (Nueva York, Oxford University Press, 2000), págs. 229.
20 Convención sobre los Derechos del Niño, art. 39.
21 Nadine J. Burke y otros, “El impacto de las experiencias infantiles adversas en una población pediátrica urbana”, Child Abuse & Neglect, vol. 35, núm. 6 (2011), págs. 408–413.
22 Michelle Bosquet Enlow y otros, “Exposición al trauma interpersonal y desarrollo cognitivo en niños hasta los 8 años: un estudio longitudinal”, Journal of Epidemiology
y Salud Comunitaria, vol. 66, núm. 11 (2012), págs. 1005–1010.

176
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ANEXOS
y que la exposición a experiencias traumáticas aumenta el riesgo
de problemas de aprendizaje y de comportamiento, obesidad23 y
síntomas psicóticos en la infancia y más allá.24 La investigación
del desarrollo neuroconductual también indica el impacto
neurológico duradero de las experiencias traumáticas en niños de
diversas edades, desde etapas preverbales hasta adolescencia
tardía. En cuanto a las condiciones y diagnósticos psicológicos,
algunos son similares a los utilizados en adultos, como el trastorno
de estrés postraumático, la depresión, la ansiedad y las fobias,
mientras que otros son específicos de los niños, como el mutismo
electivo, el trastorno reactivo del apego de la infancia y la
desinhibición. trastorno de apego de la infancia, trastorno de
conducta, trastorno de conducta oposicionista y trastorno de
desregulación disruptiva del estado de ánimo. Véanse los párrafos
581 a 594 anteriores para obtener una descripción detallada de las
condiciones y diagnósticos que pueden observarse en los niños
que han sido torturados o maltratados.
Cabe señalar que, si bien se pueden encontrar los mismos
diagnósticos tanto en niños como en adultos, los niños manifiestan
los síntomas de manera diferente y los médicos deben depender
más de la observación del comportamiento del niño (p. ej., juego
monótono y repetitivo) y reacciones somáticas (p. ej., pérdida de
control de movimientos intestinales), y considerar el uso de
cuestionarios apropiados para hacer diagnósticos precisos. Por lo
tanto, es posible que el médico deba confiar en el comportamiento
del niño y en los informes de otros en lugar de predominantemente
en las narrativas proporcionadas por el niño. Una gama de técnicas
de diagnóstico psicológico
23 Burke y otros, “El impacto de las experiencias adversas en la infancia”.
24 Louise Arseneault y otros, “Trauma infantil y síntomas psicóticos emergentes en niños: un estudio de cohorte longitudinal genéticamente sensible”, American Journal of
Psiquiatría, vol. 168, núm. 1 (2011), págs. 65–72.
25 Edward J. Alessi, Sarilee Kahn y Sangeeta Chatterji, “'Los tiempos más oscuros de mi vida': recuerdos de abuso infantil entre migrantes forzados perseguidos por su
orientación e identidad de género”, Child Abuse & Neglect, vol. 51 (2016), págs. 93–105.
26 Ibíd.; y Rebecca A. Hopkinson y otros, “Experiencias de persecución y salud mental de solicitantes de asilo LGBT”, Journal of Homosexuality, vol. 64, núm. 12 (2017),
págs. 1650–1666.
PROTOCOLO DE ESTAMBUL
puede ser necesario ya que los niños, especialmente los
adolescentes, pueden presentarse como que no tienen
dificultades en sus vidas hasta que se hagan preguntas más específicas.
También se debe tener en cuenta que, al diagnosticar la
salud mental de los niños, es importante diferenciar entre el
comportamiento, la cognición y la emoción que son típicos de la
edad y etapa de desarrollo del niño y aquellos que son motivo de
preocupación. Además, el comportamiento y otros indicadores
deben ser considerados
dentro del contexto cultural y psicosocial del niño.
V. Lesbianas, gays, bisexuales y
niños y jóvenes transgénero
Es probable que los niños y jóvenes lesbianas, gais,
bisexuales y transgénero sufran abusos por parte de adultos
y compañeros, y el riesgo aumenta con la disminución o
ausencia de protecciones sociales y legales.25
Las investigaciones demuestran que las experiencias de persecución
y abuso pueden afectar gravemente su salud mental.26
Al documentar la tortura en niños y jóvenes lesbianas, gays,
bisexuales y transgénero, es importante considerar los factores
de riesgo específicos y reconocer su impacto potencial. En
cuanto a los adultos, es fundamental proporcionar un entorno
seguro y respetuoso y no patologizar las identidades de género
y las orientaciones sexuales (véanse los párrs. 599 a 601 supra).
177
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Dibujos
anatómicos para
la documentación
de la tortura y
los malos tratos
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Número de referencia................................................ ..........

© JJ Payne-James 2019 189

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

laterales
yderecha
izquierd
Cabeza
-VistasNúmero de referencia................................................ ..........

190 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

R

Manos
Dorsal
Vista
–

© JJ Payne-James 2019 191

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Palmar
Manos
Vista
–
Número de referencia................................................ ..........

192 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

L R

© JJ Payne-James 2019 193

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

R L

194 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

Axila

© JJ Payne-James 2019 195

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

izquier
extend
Cuello
lateral
yderec
vistas Número de referencia................................................ ..........

196 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

R L

© JJ Payne-James 2019 197

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

femeninos
Genitales

L
198 © JJ Payne-James 2019
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

L
género
neutral
Ano
de

© JJ Payne-James 2019 199

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Genitale
circunci
masculi
no Número de referencia................................................ ..........

200 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

L

circuncidados
masculinos
Genitales

© JJ Payne-James 2019 201

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

Cavidad
yDientes
Oral
31 32
30 2 1
3
29 4
28 5
6
27
7
26
24
25 8

9
23
10
22
11
21 12
20 13
19 14
18 15 dieciséis
17

31
32 1 2
30 3
29 4
28 5
6
27
23
24
25
26 7

10
22
11
21 12
20 13
19 14
18 17 15 dieciséis

202 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

R
Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

Membrana
timpánica:
izquierda
yderecha
vistas

© JJ Payne-James 2019 203

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

204 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

© JJ Payne-James 2019 205

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

anterior
pequeñ
yposteri
vistas
Niño Número de referencia................................................ ..........

206 © JJ Payne-James 2019

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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
Nombre del tema ................................................ ................
ANEXOS
Nombre del examinador .................................................. .............

Fecha de examinacion ............................................... ........

Hora del examen .............................................................. ........

Número de referencia................................................ ..........

izquierda
pequeño:
laterales
derecha
vistas
Niño
e

© JJ Payne-James 2019 207

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Directrices para la
evaluación clínica de
la tortura y los malos
tratos
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL ANEXOS

I. Información del caso

Las siguientes directrices se basan en el Protocolo de Estambul. No pretenden ser una prescripción fija, sino que deben aplicarse teniendo
en cuenta el propósito de la evaluación y después de una valoración de los recursos disponibles. La evaluación de las pruebas físicas y
psicológicas de tortura y malos tratos puede estar a cargo de uno o más médicos, según sus calificaciones.

Fecha del examen: .............................................. ......................... Núm. de caso o reporte: ................... ..........................................

Examen solicitado por (nombre/cargo): ............................................... .................................................... ............................................

Número de identificación del sujeto: ............................................... .................................................... .................................................... ...................

Duración de la evaluación (horas/minutos): ............................................... .................................................... ......................................

Nombre del sujeto: ............................................... .................................................... .................................................... ............

Apellido del sujeto: ............................................... .................................................... .................................................... ..........

Fecha de nacimiento: ............................................... ............................. Lugar de nacimiento: ................. .................................................... ......

Género: masculino femenino otro

Motivo del examen: .............................................. .................................................... .................................................... ..................

Nombre del médico: ............................................... .................................................... .................................................... ..................

Intérprete: sí no nombre ............................................... .................................................... .............................................................

Consentimiento informado: si no Si no hay consentimiento informado, ¿por qué?: ........................................... .................................................... .

Asunto acompañado de (nombre/cargo): .................................................. .................................................... .....................................

Personas presentes durante el examen (nombre/cargo): ........................................... .................................................... ...............................

Sujeto sujeto durante el examen: sí no Si la respuesta es "sí", ¿cómo/por qué? .................................. .................................................... ....

Informe clínico transferido a (nombre/cargo/Nº de cédula): .................................. .................................................... ......................

Fecha de transferencia:............................................... ......................... Tiempo de transferencia: ...................... ................................................

Evaluación/investigación clínica realizada sin restricciones (para sujetos bajo custodia) sí no

Proporcione detalles de cualquier restricción: ............................................... .................................................... ............................................

210
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ANEXOS PROTOCOLO DE ESTAMBUL

II. Calificaciones del médico (para testimonio judicial) 6. Tórax y abdomen (incluidos los signos vitales)
7. Sistema genitourinario
Educación clínica y formación clínica. 8. Sistema musculoesquelético
Formación psicológica/psiquiátrica 9. Sistema nervioso central y periférico.
Experiencia en la documentación de pruebas
de tortura y malos tratos VIII. Historia psicosocial/examen
Experiencia regional en derechos humanos relevante para la investigación
Publicaciones, presentaciones y cursos de capacitación relevantes 1. Métodos de evaluación
Curriculum vitae. 2. Quejas psicológicas actuales
3. Historia posterior a la tortura
tercero Declaración sobre la veracidad del testimonio 4. Historia previa a la tortura
(para testimonio judicial) 5. Antecedentes psicológicos/psiquiátricos pasados
6. Historial de uso y abuso de sustancias
Por ejemplo: “Conozco personalmente los hechos que se 7. Examen del estado mental

indican a continuación, excepto los que se declaran a título 8. Evaluación del funcionamiento social
informativo y de creencia, que creo que son ciertos. Estaría 9. Pruebas psicológicas (ver párrafo 539 arriba para
preparado para testificar sobre las declaraciones anteriores indicaciones y limitaciones)
en base a mi conocimiento y creencia personal”. 10. Pruebas neuropsicológicas (véanse los párrs. 549 a 565
arriba para indicaciones y limitaciones)
IV. Información de contexto
IX. Fotografías y diagramas corporales.
Información general (edad, ocupación,
educación, composición familiar, etc.) X. Resultados de las pruebas de diagnóstico (véanse los párrafos 480 a 484 supra)

Historia médica pasada para indicaciones y limitaciones)

Revisión de evaluaciones clínicas previas
de tortura o malos tratos XI. Consultas
Antecedentes psicosociales previos a la detención.

XII. Interpretación de los hallazgos

V. Denuncias de tortura o malos tratos
1. Evidencia física
1. Resumen de la detención y el abuso
2. Circunstancias de arresto y detención A. Correlacionar el grado de consistencia entre la historia de
3. Lugares de detención iniciales y posteriores (cronología, transporte síntomas físicos agudos y crónicos y discapacidades con
y condiciones de detención) denuncias de abuso.
4. Relato narrativo de malos tratos o B. Correlacionar el grado de consistencia entre
tortura (en cada lugar de detención) hallazgos del examen físico y denuncias de abuso.
5. Revisión de los métodos de tortura. (Nota: la ausencia de hallazgos físicos no excluye la
posibilidad de que se hayan infligido torturas o malos
VI. Síntomas físicos y discapacidades tratos).
C. Correlacionar el grado de consistencia entre los hallazgos
Describir el desarrollo de síntomas y discapacidades agudos y crónicos del examen del individuo con el conocimiento de los
y los procesos de curación subsiguientes. métodos de tortura y sus efectos posteriores comunes
utilizados en una región en particular.
1. Síntomas agudos y discapacidades
2. Síntomas crónicos y discapacidades 2. Evidencia psicológica

VIII. Examen físico A. Correlacionar el grado de concordancia entre

los hallazgos psicológicos y el informe de
1. Apariencia general supuesta tortura.
2. Piel B. Proporcionar una evaluación de si el
3. Cara y cabeza Se esperan hallazgos psicológicos o reacciones típicas
4. Ojos, oídos, nariz y garganta al estrés extremo dentro de la cultura.

5. Cavidad bucal y dientes y el contexto social del individuo.

211
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PROTOCOLO DE ESTAMBUL
C. Indicar el estado del individuo en el
curso fluctuante de los trastornos mentales relacionados
con el trauma a lo largo del tiempo, es decir, cuál es el
marco de tiempo en relación con los eventos de tortura y dónde
en el curso de la recuperación es el individuo?
D. Identificar cualquier factor estresante coexistente
que afecte al individuo (p. ej., persecución en
curso, migración forzada, exilio y pérdida de la
familia o el rol social) y el impacto que estos
pueden tener en el individuo.
E. Mencione las condiciones físicas que pueden
contribuir al cuadro clínico, especialmente con
respecto a la posible evidencia de lesión en la cabeza
sufrida durante la tortura o la detención.
XIII. Conclusiones y Recomendaciones
1. Declaración de opinión sobre la consistencia entre todas
las fuentes de evidencia citadas anteriormente (hallazgos
físicos y psicológicos, información histórica, hallazgos
fotográficos, resultados de pruebas de diagnóstico,
conocimiento de prácticas regionales de tortura, informes de
consulta, etc.) y denuncias de tortura o malos tratos. tratamiento.
2. Reiterar los síntomas y discapacidades de los
cuales el individuo continúa
sufrir como resultado del presunto abuso.
3. Proporcione recomendaciones para futuras
evaluación y cuidado del individuo.
212
ANEXOS
XIV. Declaración de veracidad (para testimonio judicial)
Por ejemplo: “Declaro bajo pena de perjurio, de
conformidad con las leyes de [país], que lo anterior es
verdadero y correcto y que esta declaración jurada fue
ejecutado el [fecha] en [ciudad], [estado o provincia]”.
XV. Declaración de restricciones en la clínica
evaluación/investigación (para sujetos bajo custodia)
Por ejemplo: “Los médicos abajo firmantes certifican
personalmente que se les permitió trabajar libre e
independientemente y hablar con [el sujeto] y examinarlo en
privado, sin ninguna restricción o reserva, y sin que las
autoridades detenedoras utilicen ningún tipo de coerción. ”; o
“El(los) médico(s) abajo firmante(s) tuvo(n) que llevar a cabo su
evaluación con las siguientes restricciones: ...........”
XVI. Firma del médico, fecha y lugar
XVII. Anexos relevantes
Copia del curriculum vitae del médico, dibujos
anatómicos para identificación de tortura y/o malos
tratos, fotografías, consultas y resultados de pruebas
diagnósticas, entre otros.
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