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VENTAJAS DE QUÉ ?
Entre las ventajas que se suelen atribuir al consultor externo se destacan: su
alto grado de especialización, su amplia gama de experiencias, su mayor
objetividad ante situaciones, que la empresa cliente no distrae recursos
regulares, el prestigio (a veces mágico) que pueden llegar a tener, la
posibilidad de aprendizaje por parte del cliente. SIN CITAS, NI EXPLICACIÓN
QUE SEA TRASCENDENTAL
DESVENTAJAS
Entre las desventajas usualmente destacadas debemos mencionar: su alto
costo, especialmente de las grandes empresas internacionales, el riesgo de
caer en soluciones estereotipadas, de moda, la dificultad para conocer a fondo
las situaciones “íntimas” del cliente, la posible dependencia (“adicción” en
casos extremos) que pueden generar.
CARACTERISTICAS GENERALES
Un consultor tiene características para llevar a cabo un buen trabajo. Sin ellas,
es difícil responder a las demandas exigidas por el trabajo y convertirse en una
referencia profesional en el área. No todo el mundo nace con todas estas
habilidades, pero la mayoría de ellas pueden ser desarrolladas y
perfeccionadas con mucho estudio, práctica y experiencia.
Teniendo en cuenta que cada uno de los negocios tienen una forma especial
de organizarse y operar, el consultor debe tener el don de escuchar a las
personas que asesora, ya que cualquier detalle puede ser la diferencia entre el
éxito y el fracaso de la consultoría.
Saber escuchar, te ayudará a conocer mejor a la empresa, sus necesidades y
la manera de cómo conseguir los objetivos aplicando el conocimiento que
tienes. PARECEN CONSEJOS
Por eso, es fundamental que sepas hasta dónde puedes llegar y cuándo tienes
que pedir ayuda o rechazar un trabajo.
¡Es preferible ser transparente que no poder ofrecer lo mejor o frustrar las
expectativas del contratante! Además no es ético, porque el consultor pierde la
oportunidad de fidelizar a los clientes que podrían contratarlo de nuevo en otras
oportunidades o incluso recomendar su trabajo a terceros.
Involucrar a todos en un proyecto, en el caso de ser 1 consultoría con más de
un cliente, el consultor necesita tener la sensibilidad necesaria para incluir a
todos los involucrados en el proceso.
En una empresa, por ejemplo, puede ser que la contratación haya ocurrido
para implementar un nuevo proyecto. Entonces, el consultor debe evaluar
cuidadosamente todo el funcionamiento organizacional, para comprender qué
áreas se verán afectadas por el cambio.
Saber adaptarte al tiempo determinado, una de las cosas a las que el cliente
suele dar más valor es el tiempo de duración de una consultoría. Quien
contrata este tipo de servicio, suele tener prisa para ver resuelto su dolor.
¡Claro que no siempre el consultor logra trabajar dentro del período que el
cliente espera! Al final, generalmente quien contrata no sabe lo que debe
hacerse en esa situación y, por eso, no tiene conocimiento del tiempo que
requiere alcanzar el resultado final.
Sin embargo, lo cierto es que el consultor debe ser claro con el cliente sobre el
tiempo que se insumirá para completar el proceso y, lo más importante,
que cumpla los plazos determinados.
El buen consultor es aquel que sabe que hace lo mejor, pero también reconoce
y comparte los logros con quien colabora para que se cumpla la planificación.
Para poder hacer frente a esta diversidad, el consultor tiene que saber usar su
creatividad y crear planificaciones estratégicas diferenciadas y motivadoras.