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PREVENCIÓN Y DETECCIÓN DEL CÁNCER DE OVARIO

El cáncer es una de las enfermedades que ocasiona un crecimiento descontrolado de las células de
cualquier parte del cuerpo y puede propagarse.

El cáncer de ovario es responsable de la mortalidad más alta de todas las neoplasias ginecológicas
malignas. En todo el mundo, existen 239,000 nuevos casos y 152,000 muertes por cáncer de
ovario cada año.

A pesar de las mejoras en las tasas de supervivencia en los últimos 40 años, dos tercios de las
mujeres aún mueren dentro de los 10 años siguientes al diagnóstico.

La supervivencia a cinco años es de menos del 20% en mujeres diagnosticadas con cáncer de
ovario epitelial invasivo en etapa avanzada (estadio III o IV), pero supera el 90% en aquellas
detectadas en estadio I.

Por tanto, los esfuerzos se han enfocado en el diagnóstico de la enfermedad en estadio temprano
o con bajo volumen, mediante predicción de riesgo, prevención y detección.

En la última década, ha surgido una vía dualista para la carcinogénesis epitelial ovárica. Los
cánceres de ovario epiteliales invasivos tipo I son genéticamente estables, indolentes, e incluyen
subtipos serosos, endometrioides, de células claras y mucinosos de bajo grado. Los cánceres tipo
II, principalmente serosos de alto grado, son tumores agresivos y genéticamente inestables que
por lo general albergan mutaciones p53.

Etiología

Se desconoce la etiología exacta del cáncer de ovario. Hay datos prometedores de que las mujeres
que tienen el gen 1 del cáncer de ovario de mama (BRCA1) y el gen 2 del cáncer de ovario de
mama (BRCA2) tienen riesgo de desarrollar una neoplasia maligna de ovario. Además, en
pacientes con cáncer de colon hereditario sin poliposis (también conocido como síndrome de
Lynch II), las mutaciones MSH2 y MLH1 pueden asociarse con cáncer de ovario.

Según varios estudios epidemiológicos, existe buena evidencia de que el aumento de la paridad, el
uso de píldoras anticonceptivas orales, la tubectomía y la histerectomía reducen el riesgo de
cáncer de ovario. Otros factores como la lactancia, la edad de la menarquia y la edad de la
menopausia parecen tener un efecto menor en la reducción del riesgo. Los efectos del SOP, el
tratamiento de la infertilidad, la endometriosis sobre el cáncer de ovario y los riesgos siguen
siendo inciertos.

La teoría de la ovulación incesante establece que el riesgo de una mujer de desarrollar cáncer de
ovario está relacionado con el número de ovulaciones que ocurren en su vida. La ovulación da
como resultado la rotura y reparación del epitelio superficial. Un proceso de reparación aberrante
está relacionado con el origen del cáncer de ovario. Por lo tanto, las condiciones en las que se
suprime la ovulación, como la multiparidad, el uso de píldoras anticonceptivas orales, la lactancia
tiene efectos protectores y viceversa

Factores de riesgo asociados con el cáncer de ovario


Aumento del riesgo Disminución del riesgo
Maternidad retrasada Lactancia materna durante 18 meses o más
Menarquia temprana Menopausia precoz
Terapia de reemplazo de estrógenos durante Multiparidad (el riesgo disminuye con cada
más de cinco años. embarazo adicional)
Antecedentes familiares que sugieran Histerectomía*
predisposición genética
Síndromes genéticos Menarquia tardía
Dieta alta en grasas Dieta baja en grasas
Menopausia tardía Uso de anticonceptivos orales
Paridad baja Ligadura de trompas*
* Es probable que la histerectomía y la ligadura de trompas estén asociadas con un menor
riesgo de cáncer de ovario debido a la disminución del flujo sanguíneo útero-ovárico, lo que
limita la exposición local a factores hormonales o potencialmente cancerígenos.

Signos y síntomas

Habitualmente las etapas iniciales del cáncer de ovario suelen cursar sin síntomas, o con síntomas
muy leves que pasan desapercibidos y se confunden con procesos benignos.

En la cavidad abdominal el tumor puede crecer y diseminarse de manera silente, de manera que
cuando causa síntomas ya suele estar diseminado. Incluso los primeros síntomas en las etapas
avanzadas son habitualmente bastante vagos en forma de molestias inespecíficas abdominales,
por lo que es frecuente que sean ignorados o confundidos con procesos benignos como dispepsia
o "gases".

El cáncer de ovario es por tanto difícil de diagnosticar precozmente, y esta es la principal causa de
su elevada mortalidad.

A medida que el tumor crece pueden comenzar a aparecer algunos síntomas como pérdida de
apetito, sensación de plenitud abdominal tras la comida (aunque esta sea frugal), o pérdida de
peso.

En general, se suele acumular líquido en el abdomen causando lo que denominamos ascitis, que
puede ser muy importante, y causar distensión de la cavidad abdominal.

También se puede acumular líquido en la pleura en torno a los pulmones y producir dificultad para
respirar o sensación de falta de aire.

Por otra parte, el crecimiento de una masa ovárica en la pelvis puede afectar a las estructuras
vecinas, principalmente la vejiga y el recto causando síntomas como diuresis frecuentes, diarrea o
estreñimiento, y dolor abdominal o pélvico.

Síntomas que deben motivar acudir al médico para iniciar estudio especialmente sin son
persistentes y/o inusuales
 Distensión abdominal progresiva.
 Sensación repetida y persistente de plenitud con la comida, incluso con pequeñas
cantidades.
 Molestias pélvicas y/o abdominales que persisten y no tienen una explicación lógica.
 Molestias al orinar y/o hacer deposición que persisten y no se explican por otras causas.
 Sangrado vaginal inapropiado.

DIAGNÓSTICO

1 -DIAPOSITIVA

Solo el 15% de los casos de cáncer de ovario se diagnostican mientras el cáncer está localizado
(estadio I) y aproximadamente el 68% de las pacientes con cáncer de ovario epitelial tienen una
enfermedad avanzada (estadio III o mayor) en el momento del diagnóstico. Aunque algunas
mujeres con enfermedad temprana experimentan síntomas, la mayoría son asintomáticas.

• En el examen físico, una masa pélvica es un signo importante de enfermedad. En estadios más
avanzados, puede desarrollarse distensión abdominal y el examen del tórax puede revelar
evidencia de derrame pleural.

• La evaluación de una masa pélvica varía según la edad del paciente, los antecedentes médicos y
familiares importantes y las características ecográficas de la masa. Las mujeres con masas pélvicas
sospechosas de malignidad deben ser derivadas a un oncólogo ginecológico.

En mujeres premenopáusicas, una masa anexial de menos de 8 a 10 cm de diámetro sin otras


características o síntomas preocupantes se controla típicamente con ecografías seriadas. Si se
toma la decisión de proceder con la evaluación quirúrgica, la evaluación preoperatoria debe incluir
una historia clínica y un examen físico completos, incluidos un examen pélvico y una prueba de
Papanicolaou.

2 .DIAPOSITIVA

• Se deben realizar pruebas adicionales sobre la base de los factores de riesgo del paciente y su
estado médico subyacente. Se debe considerar la posibilidad de realizar una tomografía
computarizada (TC) del tórax, el abdomen y la pelvis para evaluar la presencia de metástasis. Si la
cirugía es necesaria, debe estar disponible un cirujano capaz de realizar un procedimiento de
estadificación adecuado, preferiblemente un oncólogo ginecológico, para optimizar los resultados
en casos de malignidad.

Tratamientos

Los tratamientos paliativos se emplean para aliviar los síntomas del cáncer de ovario.

Las mujeres con cáncer de ovario pueden presentar acumulación de líquido en el abdomen. Esto
Puede causar muchas molestias, pero puede ser tratado con un procedimiento de parecentesis. El
tratamiento con bevacizumab (Avastin) también puede ayudar a desacelerar la acumulación de
líquido. Estos tratamientos pueden aliviar los síntomas en algunas mujeres y, en raras ocasiones,
pueden ayudar a algunas mujeres a vivir por más tiempo. Sin embargo, a menudo sus efectos son
temporales y el cáncer regresa o persiste.
En los estadios iniciales el tratamiento será la cirugía, seguida de quimioterapia adyuvante cuando
existan factores de riesgo Envejecimiento. Sobrepeso u obesidad. ... Tener hijos más tarde o nunca
tener un embarazo a término. ... Terapia hormonal después de la menopausia. En los estadios
avanzados, la cirugía citorreductora será la primera aproximación terapéutica siempre que sea
posible, seguida de quimioterapia. En la recaída, la quimioterapia será el tratamiento principal. La
adición de bevacizumab a la quimioterapia de la recaída incrementa la supervivencia libre de
progresión (SLP). El tratamiento de mantenimiento con inhibidores de PARP tras la obtención de
una respuesta con quimioterapia en la recaída platino sensible también incrementa la SLP, siendo
especialmente eficaces en las pacientes con mutación germinal o somática en los genes BRCA.

OTRO

Aunque la Cirugía no ha logrado una nueva dimensión en lo que respecta a la soluci6n global del
problema, hasta el momento sigue siendo el recurso mas aceptable en las etapas I y II . La adici6n
de la radioterapia será un complemento positivo, ya que este tipo de cáncer comúnmente
responde a la radiaci6n. En el estadio II el tratamiento adicional con radioterapia postoperatoria, .
ha elevado el fodice de s supervivencia de 29 por ciento a 44 por ciento según estadísticas actual
es. En las pacientes en estadio III la radioterapia complementaria a la quimioterapia, no mejor6 el
índice de supervivencia. En estudios recientes, la quimioterapia ha demostrado su eficacia en el
tratamiento del carcinoma ovárico avanzado. Existen numerosas drogas antitumorales que
muestran ser activas en esta enfermedad. Como estos medicamentos tienen mecanismos de
acci6n diferentes, resulta muy difícil estereotipar un tratamiento de poliquimioterapia. Los
agentes que han demostrado ser más eficaces en el tratamiento del carcinoma ovárico son: el 5-
fluoracilo con una respuesta de 38 por ciento; Metotrexato 36 por ciento; ciclofosfamida 4 7 por
ciento y el Merfalan 49 por ciento. Debemos concluir en que una aclaraci6n verdadera de la etapa
en que se encuentra el proceso, es fundamental para un tratamiento adecuado.La Cirugfa con
tratamiento adicional de radioterapia post-operatoria en los estadios I y II es una terapeutica
eficaz. El uso de la radioterapia en la etapa III, parece no dar los resultados esperados, aun con el
uso de la tecnica de "campo abierto". Sin embargo, la quimioterapia en esta etapa es un
tratamiento adecuado. Las combinaciones de agentes diferentes merecen seguir siendo
estudiadas por la variedad de mecanismos de acci6n y sus efectos.

En cuanto a la histerectomía, existe evidencia contradictoria sobre los efectos de ésta en el riesgo
de cáncer de ovario. Aunque los estudios más antiguos muestran un efecto protector,45
recientemente no se ha reportado asociación (oportunidad relativa [OR] 0.97, 95% CI 0.81–
1.14).46 Parece haber un cambio temporal con un efecto protector en las pacientes
diagnosticadas con cáncer epitelial de ovario antes del 2000 (riesgo relativo 0.70, 95% CI 0.65–
0.76), pero mayor riesgo (riesgo relativo 1.18, 95% CI 1.06–1.31) en las mujeres diagnosticadas
después del 2000.45 Sin embargo, los datos sobre el cambio en el riesgo de protector a nocivo son
limitados y el cambio temporal es probablemente multifactorial: disminución general de los
índices de histerectomía, uso de abordaje vaginal más que abdominal, baja de
salpingooforectomía realizada al mismo tiempo, captura deficiente de datos en la extirpación de
los ovarios en la histerectomía en estudios más antiguos y aumento en la edad de las pacientes
sometidas al procedimiento.
 Salpingooforectomía bilateral :

se recomienda rutinariamente a las mujeres en alto riesgo después de que han tenido los
hijos que deseaban.

Las revisiones y metaanálisis recientes de estudios publicados de salpingooforectomía bilateral


para reducción de riesgo, han mostrado una reducción significativa del riesgo de cáncer de ovario
de aproximadamente 80% y una reducción de mortalidad por todas las causas del 70% en
portadoras de mutaciones BRCA.

Las mujeres con alto riesgo de cáncer de ovario (p. Ej., Síndrome de Lynch, mutaciones BRCA)
deben considerar la salpingooforectomía bilateral profiláctica entre las edades de 35 y 40 años o
cuando la maternidad esté completa. Para otras mujeres con riesgo poblacional (sin predisposición
genética al cáncer de ovario), la edad debe incorporarse en el proceso de toma de decisiones.
Existe evidencia que sugiere que la conservación de los ovarios hasta la edad de 65 años tiene
beneficios de supervivencia a largo plazo, en gran parte debido a la reducción del riesgo de
enfermedad cardiovascular. Después de los 65 años, esta protección se mitiga y se prefiere ofrecer
salpingooforectomía bilateral profiláctica concomitante.

 Salpingectomía bilateral:

En las mujeres premenopáusicas con alto riesgo, el abordaje propuesto es la salpingectomía.

Esa iniciativa, puede ser una alternativa rentable y aceptable para las mujeres que no desean
someterse a una salpingooforectomía bilateral de reducción de riesgo.

La extirpación radical del extremo fimbrial de la trompa de Falopio como una forma de reducir
el riesgo en estas mujeres se está probando en un estudio en Francia En los Estados Unidos se
encuentra en curso un estudio clínico de salpingectomía bilateral con ooforectomía
postergada en portadoras de la mutación BRCA, y en el Reino Unido, se lanzará pronto un
estudio similar.

 Quimioprevención:

Las estrategias de quimioprevención se dirigen mejor a quienes están en riesgo moderado a


alto, según el espectro del daño.

Hoy en día se prescribe aspirina como agente quimiopreventivo del cáncer (600 mg/día
durante al menos 2 años) a las mujeres con síndrome de Lynch de alto riesgo para reducir el
riesgo de cáncer colorrectal, así como ovárico y endometrial.

Aunque no se recomienda prescribir OCP para la reducción del riesgo de cáncer de ovario
primario, estos brindan esta ventaja adicional a quienes los usan para anticoncepción u
otras indicaciones médicas.
SEGUNDA DIAPOSITIVA DE PREVENCIÓN

El cáncer de ovario temprano a menudo es asintomático. Ninguna prueba de detección disponible


tiene suficiente valor predictivo positivo para el cáncer de ovario en estadio temprano.

 El examen pélvico anual de rutina todavía se usa ampliamente en la población general


como una herramienta de detección, pero tiene poca sensibilidad para detectar la
enfermedad en una etapa temprana.

 La Profilaxis de OCP es el único método documentado de quimioprevención para el


cáncer de ovario y el efecto es sustancial. El aumento de la duración del uso parece estar
asociado con una mayor disminución del riesgo, y el efecto protector persiste durante 10
años o más después de la interrupción.

La estimación general de protección con OCP es aproximadamente del 40%. El aumento de la


duración del uso parece estar asociado con una mayor disminución del riesgo, y el efecto
protector persiste durante 10 años o más después de la interrupción. El uso de OCP enBRCA Los
portadores de mutaciones también confieren un menor riesgo de cáncer de ovario sin aumentar el
riesgo de cáncer de mama.

Ocp: el uso de píldoras anticonceptivas orales

Bcra: breast pruebas para detectar cancer de mama

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