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EL FENÓMENO SUCESORIO

ELEMENTOS DE LA RELACIÓN SUCESORIA

El fenómeno sucesorio es un fenómeno extraordinariamente complejo en el que pueden


verse desde un punto de vista empírico, varios sujetos que dan origen a la sucesión, tal
el caso de los herederos, legatarios, albaceas, contadores-partidores, acreedores del
causante, acreedores de los sucesores, etc. Pero los sujetos que necesariamente han de
existir en la sucesión mortis causa son tres y eventualmente dos: El causante o sucedido,
siempre necesario por definición; el sucesor a título universal (heredero) y sucesor a
título particular (legatario).

EL CAUSANTE DE LA HERENCIA

Es aquella persona cuya muerte da origen a la sucesión, provocando la necesidad de


buscar nueva titularidad a sus relaciones jurídicas. La muerte es, pues, la causa de la
sucesión, lo que significa que causantes propiamente dichos sólo pueden serlo las
personas físicas, pues de ellas y sólo de ellas se puede predicar el hecho natural de la
muerte.

EL SUCESOR: HEREDERO O LEGATARIO

Las otras figuras fundamentales del fenómeno sucesorio son el heredero y el legatario
(causahabientes). Fundamentales en el sentido que los que reciben transmisiones
jurídicas transmisibles por el causante son únicamente ellos dos.
Al sucesor mortis causa a título universal lo llama el Código Civil heredero, al sucesor
mortis causa a título particular lo denomina legatario, en dichos términos lo expresa el
artículo 921 del Código Civil… por lo tanto, se entiende que se sucede a título singular
o particular cuando quien es llamado, recibe bienes de la herencia determinados,
singulares, o un valor de la misma. A título universal cuando el heredero recibe un
conjunto de bienes o derechos.

LA POSICIÓN DE HEREDERO

El heredero es el protagonista, es la posición fundamental del Derecho de Sucesiones de


la lectura de los artículos 918 y 919 del CC la ley considera la existencia de un heredero
como un dato básico para la ordenación mortis causa de los bienes (tanto como un
elemento central de la sucesión voluntaria como para predicar de su inexistencia la
consecuencia de la apertura de la sucesión ab intestato), aunque no cabe excluir la
posibilidad de que dicha decisión, por disposición del causante, se haga prescindiendo
de la figura del heredero, en el supuesto de que toda la distribución de la herencia sea en
legados.
Ser heredero significa suceder in locum et ius al causante, no en su condición de
persona, sino en la parte en las relaciones jurídicas de éste.
Lo que distingue realmente la figura del heredero es la peculiar estructura de su título,
que implica la adquisición de derechos y obligaciones del causante de un modo global,
sin necesidad de recurrir a los mecanismos singulares de transmisión de derechos y
deudas.

ELEMENTO MATERIAL: LA HENENCIA


DEFINICIÓN:

La herencia es el objeto de la sucesión universal como universalidad total o parcial


(parte alícuota) del patrimonio del causante, en el que subentra, como nuevo titular, el
heredero.
Hay diversas acepciones del concepto herencia, no excluyentes o incompatibles entre sí,
sino que, más o menos precisas y técnicamente correctas, se emplean por los textos
legales, doctrina y jurisprudencia. Se abordan fundamentalmente dos concepciones:

Subjetiva: viene de los jurisconsultos romanos y hacen referencia al hecho de suceder,


a la adquisición por sucesión mortis causa o en un solo acto, de la universalidad del
patrimonio del causante, al fenómeno de convertirse en titular de sus derechos y
obligaciones.

Objetiva: ésta es el propio patrimonio del causante, es decir la universalidad o conjunto


de bienes, derechos y obligaciones que son objeto de la sucesión mortis causa, cuya
acepción puede entenderse recogida en el artículo 919 del Código Civil.

COMPOSICIÓN DEL CAUDAL HEREDITARIO

Hablar de la herencia en sentido objetivo tiene la utilidad de establecer qué relaciones


jurídicas son heredables y cuales no… podemos hablar de composición de la herencia
desde una perspectiva objetiva.
En un principio, se pueden sentar las siguientes reglas generales en orden a la
composición del patrimonio heredable.

A) Que el núcleo esencial de la transmisión mortis causa son los derechos


patrimoniales, aunque no sólo éstos, pues hay posiciones jurídicas patrimoniales
que sí son transmisibles;
B) Que existen derechos de carácter patrimonial que no se pueden transmitir mortis
causa, como por ejemplo los derechos de uso y habitación, y los que e extinguen
con la muerte de su titular, como normalmente sucede con el usufructo; y
C) Que hay derechos que se transmiten o nacen con la muerte de la persona, y no
forman parte de la herencia en sentido objetivo.

LA HERENCIA COMO UNA UNIDAD PATRIMONIAL

El complejo de relaciones jurídicas que no se extinguen con la muerte de la persona, y


que en consecuencia, debe ser heredado ¿es una unidad patrimonial? La respuesta a la
pregunta se resuelve simplemente en determinar si los bienes que componen el caudal
hereditario son considerados de manera unitaria a los efectos de concretas normas;
como importante surge la necesidad de mantener cohesionado el patrimonio hereditario
hasta que se produzca el advenimiento del heredero o herederos, lo que inclina a regular
su administración y conservación como un todo; hacer posible el goce compartido de
dicho patrimonio hasta que se produzca su liquidación, cuando haya varios herederos, lo
que también fuerza a una consideración unitaria del caudal relicto como objeto general
de una comunidad, y que hay que tener también en cuenta a la hora de hacerla cesar
mediante la partición; hacer efectivo el pasivo hereditario, satisfaciendo las pretensiones
de los acreedores del causante y de los legatarios, a cuyas exigencias vienen afectados
prioritariamente todos los bienes relictos, que a estos efectos no se integran de manera
absoluta en el patrimonio del heredero o herederos.

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