Está en la página 1de 9

UNIVERSIDAD NACIONAL DEL CALLAO

FACULTAD DE INGENIERIA AMBIENTAL Y DE RECURSOS


NATURALES
ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERIA AMBIENTAL Y DE
RECURSOS NATURALES

INFORME N°6: “POBLACIÓN Y DEGRADACIÓN AMBIENTAL”


CURSO: SOCIOLOGIA AMBIENTAL
DOCENTE: QUINTANILLA ALARCÓN JORGE

ESTUDIANTES:
- ALVARADO CACERES, RONALD
- TECCSI PRADO, BRYAN
- VALENCIA VILLAIZAN, ARIANA
- YARANGA HUAMANCHAQUI, OSCAR

Callao, 2021
PERÚ
INDICE

POBLACIÓN MUNDIAL ............................................................................ 3

DEGRADACION AMBIENTAL ................................................................. 5

RIESGO......................................................................................................... 6

LAS AMENAZAS ........................................................................................ 7


POBLACIÓN MUNDIAL

El crecimiento acelerado de la población mundial es un fenómeno relativamente


reciente. Según algunas estimaciones, desde el inicio de nuestra Era y hasta el año
1000, la población no había rebasado los 300 millones de personas, pero sólo 500
años más tarde, el número de habitantes ya había crecido, según diversas
estimaciones, a entre 424 y 484 millones. En 1750, esta cantidad ya se había
incrementado en poco más de 200 millones llegando a cerca de 700 millones de
personas. Para inicios del siglo XX esta población se había incrementado poco más
de dos veces llegando a 1 550 millones de habitantes (Caldwell y Schindlmayr,
2002). Sin embargo, el crecimiento más acelerado comenzó en 1950, impulsado
principalmente por el aumento de la natalidad y la disminución de la mortalidad (a
causa de un mayor uso de vacunas, antibióticos e insecticidas) en las regiones
menos desarrolladas del mundo. Esta tendencia de crecimiento se mantuvo y para
finales del siglo XX ya se habían rebasado los seis mil millones de habitantes y al
finalizar el año 2011 el planeta albergaba siete mil millones de personas. La
División de Población de las Naciones Unidas prevé que la población mundial
seguirá aumentando hasta alcanzar más de nueve mil millones en el año 2050 (UN,
2012; Figura 1.1). La contribución de cada región del mundo a este crecimiento
tiene diferencias importantes. Por ejemplo, en Asia el crecimiento poblacional ha
sido muy alto: en 1950 había 1 403.4 millones de personas; en 2010, 4 164.2
millones, y se espera que para 2050 habiten en esta región del mundo 5 142
millones de personas. En Latinoamérica y El Caribe, en 1950 había 167.4 millones,
en 2010, 590.1 millones y para 2050 se proyectan casi 751 millones de personas.
Estas cifras pueden tener más sentido si se expresan en términos de densidad
poblacional en función del territorio disponible. En Asia, la densidad poblacional
en 1950 era de 44 habitantes/km2, en 2010 de 130 personas/ km2; y para 2050 se
esperan 161 personas/ km2; mientras que para Latinoamérica y El Caribe, en 1950
y 2010 había 8 y 29 personas/km2, respectivamente, y se espera que para 2050 se
incremente a 37 personas/ km2 (Figura 1.2). A nivel mundial, en 1950, la densidad
promedio era de 19 personas/km2, mientras que en 2010 se alcanzó el valor de 51
personas/km2, y se estima que en el año de 2050 llegue a 68 habitantes/km2.
Población mundial por región, 1650 - 2050

Fig. 1.1

Población mundial por región, 1950 - 2050

Fig. 1.2
El incremento poblacional ha traído consigo una mayor demanda de recursos
naturales, lo que presiona fuertemente sus reservas en la naturaleza. Por ejemplo,
para cubrir el requerimiento de alimentos tanto para uso humano como animal, el
sector agrícola utiliza actualmente el 11% de la superficie terrestre y el 70% del
agua total extraída de los acuíferos, ríos y lagos, lo que lo convierte en el mayor

DEGRADACION AMBIENTAL

Independientemente de la posibilidad de una mayor desagregación del concepto


de Degradación Ambiental, aspecto que trataremos con detalle más adelante,
aceptamos en primer término la doble definición ofrecida por Herzer en su
contribución a este volumen en el sentido de que la degradación en sí se refiere a
"una reducción de grado o a un rango menor", o a "cambios en la homeóstasis de
un sistema", de tal forma que hay una reducción en su productividad. Por el lado
de lo "ambiental", o el "medio ambiente urbano", hacemos referencia no solamente
a los elementos de la "naturaleza", el medio ambiente natural o el ecosistema, sino
a un medio producto de una compleja relación, a formas particulares de relación
entre los elementos del soporte ofrecido por la "naturaleza" (tierra, agua, aire, etc)
y el ambiente construido socialmente (la ciudad y sus estructuras físicas, patrones
sociales y culturales, etc.). La degradación, en este caso, hace referencia a la
totalidad ambiental: lo natural, lo físico y lo social. Tal forma de concebir la
degradación y el ambiente se aleja claramente de las formas restringidas de
considerar el problema, que emanan de los ambientalistas-ecologistas, para
quienes la degradación opera sobre el medio ambiente natural o sobre el
ecosistema, exclusivamente. Sirve para ubicar al ser humano y sus acciones como
componentes intrínsecos del ambiente y no disociarlo o divorciarlo, tratándolo
como un elemento externo perturbador. Desde este punto de vista, la degradación,
además de ser un concepto eminentemente social e histórico (ver Herzer y
Gurevich, en este volumen), implica, como proceso, el examen del impacto de lo
social sobre lo social, del acondicionamiento social del impacto del ser humano
sobre lo natural, y del impacto de la naturaleza transformada sobre la sociedad.
Una visión de la degradación ambiental urbana (o rural), formulada en los términos
arriba expuestos, trae a colación, de forma explícita, el problema del desarrollo
sostenible y de la sostenibilidad de la ciudad. Además, como examinaremos más
adelante, apunta hacia una conceptualización de la degradación, del riesgo y de los
desastres formulados desde un punto de vista humano-ecológico, a diferencia de
las corrientes "fisicalistas", "sociales" o "sociológicas" existentes, si no
dominantes. La degradación se hace equivalente a un aumento en la vulnerabilidad
global de la sociedad, operando sobre los componentes físicos, ecológicos y
sociales discutidos por Wilches Chaux (1993); el medio ambiente degradado sería
la "expresión que resume la vulnerabilidad ambiental frente a los desastres"
(Herzer y Gurevich, este volumen). A pesar de la aparente claridad en cuanto al
significado de degradación, en realidad, el problema de la definición operativa, los
parámetros con los cuales se emiten criterios y se formulan políticas en cuanto a
los niveles de degradación "aceptables" no son fáciles. Desde un punto de vista
purista o absolutista, cualquier modificación o transformación de los elementos de
la naturaleza sería degradación. Hoy en día, difícilmente se pueden identificar
muchos ecosistemas no afectados directa o indirectamente por la actividad
humana.

RIESGO

El concepto de riesgo, en su definición más sencilla, hace referencia a la


probabilidad de que a una población (personas, estructuras físicas, sistemas
productivos, etc.), o segmento de la misma, le ocurra algo nocivo o dañino.}

Para que exista un riesgo debe haber tanto una amenaza (o, como algunos dirían,
un peligro) como una población vulnerable a sus impactos, siendo la
"vulnerabilidad" la propensión de sufrir daños que exhibe un componente de la
estructura social (o la naturaleza misma). El riesgo es, en consecuencia, una
condición latente o potencial, y su grado depende de la intensidad probable de la
amenaza y los niveles de vulnerabilidad existentes. En este sentido, la
vulnerabilidad es una expresión del desequilibrio o desajuste, en igual medida,
entre la estructura social (ampliamente concebida) y el medio físico-constructivo
y natural que lo rodea. La vulnerabilidad, entonces, nunca puede tener un valor
absoluto, sino que depende siempre del tipo e intensidad de la amenaza. A nuestro
modo de ver, la amenaza y el riesgo nunca deben considerarse sinónimos, como lo
hacen algunos autores; por otra parte, el grado de riesgo siempre está en función
de la magnitud de la amenaza y de la vulnerabilidad, es, entonces, una condición
dinámica, cambiante y teóricamente controlable.

LAS AMENAZAS

Las amenazas son un factor del riesgo que diversos autores suelen dividir en
"amenazas naturales" y "amenazas tecnológicas". En este escrito propondremos
una clasificación más desagregada de las amenazas posibles que, según nuestro
parecer, es heurística y conceptualmente más útil que las macrodivisiones
normalmente propuestas. Esto, en reconocimiento de que la clasificación o
tipología tiene una función más allá de la simple descripción, debiendo
proporcionar elementos que guíen nuestro pensamiento y acciones, que sirvan para
ayudar a establecer causalidades y responsabilidades, y que sean en sí principios
para conceptuar y teorizar sobre la temática.

EFECTOS DE LA CONTAMINACION Y LA DEGRADACION DEL


AMBIENTE QUE FUERCEN A SECTORES DE LA SOCIEDAD A
MODIFICAR SUS PRÁCTICAS O LIMITEN SU CAPACIDAD DE
INSERCIÓN Y DESARROLLO SOCIAL
 La contaminación antrópica y degradación del ambiente afectan las
condiciones de vida de la población; muestra de ello es el aumento de
migraciones hacia las ciudades, el cambio del uso de suelo, la pérdida de
prácticas ancestrales, entre otros.

 Las disparidades que se tienen en infraestructura, servicios, ingresos y


oportunidades entre las ciudades y el campo continúan, lo cual ha
contribuido a la migración del área rural del país; no solo se tienen
migrantes por razones económicas y sociales, sino que también es posible
distinguir a los migrantes ecológicos.

La contaminación antrópica y la degradación del ambiente afectan las condiciones


de vida de la población; muestra de ello es el aumento de migraciones hacia las
ciudades, el cambio del uso de suelo, la pérdida de prácticas ancestrales, entre
otros. A su vez, las disparidades que se tienen en aspectos como infraestructura,
servicios, ingresos y oportunidades entre las ciudades y el campo continúan, lo que
contribuye a la migración del área rural del país. No solo se tienen migrantes por
razones económicas y sociales, sino que también es posible distinguir la categoría
de migrantes ecológicos. En esta condición se encuentran, por ejemplo, los
habitantes de zonas rurales de secano con suelos empobrecidos y erosionados,
cuyas unidades económicas no pueden sostener a todos los miembros de la familia,
y, en general, los habitantes de los ecosistemas frágiles.

Una de las debilidades del desarrollo rural ha sido la incapacidad de crear


oportunidades de trabajo que dependan menos directamente de la base de los
recursos naturales, es decir, avanzar hacia la diversificación productiva. Este hecho
es, en parte, reflejo de las dificultades del proceso de descentralización en curso.
Además, en razón de esta migración, la población de muchas ciudades ha
aumentado a un ritmo que ha saturado la capacidad de las infraestructuras urbanas
y los servicios necesarios, así como rebasado la creación de empleo en las
ciudades.
BIBLIOGRAFIA

ESDA. (2002). Efectos de los cambios ambientales en la conformación social y

cultural. Obtenido de https://www.minam.gob.pe/esda/4-2-1-efectos-de-la-

contaminacion-y-la-degradacion-del-ambiente-que-fuercen-a-sectores-de-

la-sociedad-a-modificar-sus-practicas-o-limiten-su-capacidad-de-

insercion-y-desarrollo-social/

Fernandez, M. (1996). Ciudades en riesgo. Obtenido de DEGRADACIÓN

AMBIENTAL, RIESGOS URBANOS Y DESASTRES:

https://www.desenredando.org/public/libros/1996/cer/CER_cap02-

DARDU_ene-7-2003.pdf

Tomás, C. A. (1994). Hacia una gestión sstenible del planeta. Obtenido de Gestión

sostenible: https://www.uv.es/aprjuv/quaderns/1/3_Gestion_sostenible.pdf

También podría gustarte