"JUAN EL NIÑO QUE CON POCAS ACCIONES AYUDO MUCHO"

En un hermoso bosque de la sierra vivían muchos animales, de diferentes variedades y a unos

cuantos kilómetros vivan las personas. Todos los animales vivían en paz y tranquilos, un día
llegaron un grupo de niños y al comer no depositaban la basura en su lugar correcto, sino que la
dejaron tirada sobre las plantas las cuales empezaron a malograrse, uno de los niños llamado
Juan sabía que todo eso estaba muy mal, pero cuando le dijo que estaba mal hacer eso.

-Y que tiene de malo que lo bote, no le estoy haciendo daño a nadie, dijeron los niños.

- Si hacen daño, a la naturaleza es como que nos dañaramos a nosotros mismos, respondió
Juan.

-Ya basta, ¿Quién eres tú para decirnos que hacer?, dijeron los niños y después los niños se
fueron.

Juan se quedó helado, ya que ellos tenían razón él no era nadie para decirles que estaba mal, ya
que pensaba que solo era un niño, y no tenía ni voz de voto para decirle a sus compañeros.

Al llegar a casa le contó todo lo sucedido a sus padres, y ellos le dijeron:

-Juan, tal vez tienen razón, solo eres un niño, no eres nadie para decirles eso, pero sabes que
eso hace daño a la naturaleza, y al no decir nada, estarías contribuyendo a que se contamine el
medio ambiente, ya que, aunque sabes que está mal, no dices nada. Así que no te preocupes,
algún día podrás explicarles a tus compañeros, le dijeron sus padres.

-Gracias mamá y papá, les dijo Juan.

A las semanas, Juan quedó en verse con sus compañeros, y cuando los vio se quedó
sorprendido ya que vio a sus compañeros tristes, ya que el bosque se estaba marchitando gracias
a la contaminación,

-Hola Juan, disculpa por no hacerte caso, hemos estado viendo cómo la gente ha estado
contaminando el bosque estos días y tienes razón, es algo incorrecto que no deberíamos hacer y
aquí están las consecuencias de no hacerte caso, le dijeron los niños.

-No se preocupen, hay que avisarles a todos los vecinos que vengan y podamos colaborar todos
juntos y unidos para poder arreglar el bosque ¿Qué opinan, chicos, me ayudan?, les dijo Juan.
-Con mucho gusto Juan, le respondieron los niños.

Así que Juan y todos sus compañeros fueron de casa en casa avisando a la gente sobre lo que
había pasado y sobre porque era importante ayudar a arreglar el bosque.

Algunos vecinos no hicieron caso, ya que les dijeron, porque se preocupan por un bosque, si hay
miles y miles de bosques en el mundo.

Pero a pesar de la negatividad del vecino, Juan y todos sus compañeros siguieron adelante,
avisando a los demás vecinos y también avisando a personas de pueblitos que quedaban cerca.

Los vecinos al enterarse de lo que estaba pasando decidió ir al bosque y así poder buscar
soluciones sobre el problema.

Al llegar todos al bosque observaron que todos los animales se estaban enfermando por la
contaminación causada.

Así que todos los vecinos se organizaron para poder ayudar a los animales y a las plantas.
Al ver la situación del bosque decidieron ir a la casa de un vecino y discutir hay las mejores
soluciones para el bosque, ese debate duró 2 días, ya que querían solucionar el problema, pero
querían tomar, medidas para que no pase lo mismo en el futuro. Así que todos acordaron vayan
recalentando materiales, para que la próxima semana se ponga fin a la contaminación en toda la
Sierra.

Cuando llegó la semana esperada, los vecinos fueron temprano para por fin acabar con la
contaminación.

¡Ah, y se acuerdan de Juan y sus amigos!, bueno ellos estuvieron realizando afiches para que
toda la gente de la sierra, se entere sobre la suma importancia del cuidado a la naturaleza.

Cuando estaban realizando la limpieza del bosque, el vecino de Juan llamado Tomas, contó su
experiencia sobre la contaminación a la naturaleza.

-Yo desde pequeño había visto en la televisión como varios lugares se contaminaban de pura
basura, y pensaba que nada pasaría, ya que yo siempre cuidaría a la naturaleza, pero ahora que
veo a tanta gente irresponsable, que es no capaz de poder tirara la basura al basurero, me da
mucha lastima, contó Tomás.
Todos los vecinos, pidieron disculpa por todo lo que hicieron ya que ellos por ahorrar tiempo de
no tirar la basura al basurero, están haciendo que la contaminación de la naturaleza crezca a
montones.

Luego de muchos días, semanas y meses, el parque quedó como nuevo, y ahora habían
instalado tachos de basura por lugares estratégicos.

Mientras los vecinos celebraban por lograr su objetivo, Juan y sus compañeros, seguían
repartiendo afiches sobre la importancia de cuidar el medio ambiente. Así que, al volver al parque,
se sintieron muy emocionados, y alegres.

Todos los vecinos decidieron darles las gracias a los Juan y a sus compañeros por el arduo
trabajo que hicieron y también por avisarles sobre lo que estaba pasando, antes de que fuera
demasiado tarde y ya no pudieran hacer nada.

-Gracias, por eso hemos acordado con mis compañeros que cada semana podremos venir a
limpiar el bosque, dijo Juan a todos.

-Sí, claro que lo haremos, para poder cuidar la naturaleza, y lograra que todos nosotros nos
llevemos bien con la naturaleza, conto los niños.

Después de unos meses, Juan y sus compañeros reflexionaron todo lo que habían pasado, y se
pusieron la meta de poder seguir avisando, a zonas más rurales para avisarles y alertarles sobre
la contaminación de la naturaleza y por qué es importante que los seres humanos nos llevemos
bien con la naturaleza.

Al final Juan aprendió que con acciones pequeños como el hablar, podía informar y prevenir a
todas las personas de la contaminación de la naturaleza. Y después de años, como si todo lo que
pasó pareciera un cuento, Juan les contó a todos sobre su experiencia, para poder dar a entender
la importancia de por qué los seres humanos se deben llevar bien con la naturaleza.

AUTOR: JERILIO.