Tu hija no tiene ninguna maldad, no es mala.

Tu hija no piensa
"literalmente" lo que dice. Siente enfado con vosotros, siente rabia y
así os lo está mostrando. La rabia se debe dejar expresar, hay que
permitir que salga y es lo que está haciendo (afortunadamente) tu hija.

Nuestros peques saben mucho más de salud emocional que nosotros;

ella sabe que necesitar soltar la tensión, la frustración, el enojo que
lleva dentro. Seguramente está harta de tanta riña, tanto exigirle que
se porte bien, además de los celos que debe sentir de su hermana. Se
siente mal, lo necesita soltar y ser atendida por ello.

Cada vez que dice "Te voy a matar" está realmente expresando su

dolor interior, su rabia. Tú cada vez que lo oyes lo interpretas de forma
literal, con lo cual tienes miedo que tu hija pueda tener instintos
asesinos y seguramente te de vergüenza lo oigan los demás papás
(¿tal vez porque piensen que es una mal educada o una niña mala?).

Estas expresiones son la señal de alarma de que su mundo emocional

no está siendo atendido: se siente dañada internamente, no querida,
no cuidada, no valorada y eso genera el dolor que está expresando
con mucha rabia. No estoy diciendo que vosotros, sus padres, no la
queráis o no la estéis atendiendo adecuadamente; seguro que la
queréis muchísimo pero este amor a ella no le está llegando ni
llenando.

Potencia todo lo positivo que hace tu hija de 6 años, sobre todo las

pequeñas cosas, las rutinarias. Dale mucho contacto, besos, caricias,
abrazos. Cógela, arrúllala como haces con la pequeña. Deja de
prestar tanta atención a las conductas que no te gusten.

Limita su conducta pero no su emoción

Ten en cuenta que cuando te pega debes poner límite a su conducta

dañina pero sin lastimar su autoestima. Así, le puedes decir sin gritar,
ni estar enfadada: "No me gusta que me hagas daño, a nadie le gusta
que le peguen. Saca tu enfado pegando a este cojín, saca tu rabia
pegando al sofá que así no haces daño a nadie". Si pega a su
hermana le puedes decir: "Así le haces daño a tu hermana; mejor
pega a las muñecas, a ellas no les harás daño y podrás descargar tu
rabia".

Cuando te diga "Te voy a matar" entiéndale diciéndole: "Ya veo estás

muy enfadada, ¿me cuentas por qué estás tan enfadada? Estoy
dispuesta a escucharte, necesito escucharte". Evita las
reprimendas del tipo eso no se dice, eso está feo, eres una mala
educada, etc. Pues cortarán toda posibilidad de conectar con tu hija y
ayudaros mutuamente.

No se trata de consentirles todo para evitar estos episodios de

enfado, frustración y dolor. Se trata de acompañar estos episodios con
amor, paciencia, presencia y sobre todo entendiendo su necesidad de
amor y necesidad de expresar su enfado para poder transfórmalo en
algo no dañino.