Estudio de caso.

Michael es un adolescente de 17 años, está cursando el segundo

semestre de la carrera profesional y los promedios de sus notas han
sido bajas en comparación con las obtenidas (anteriormente). Michael
estudia en una universidad que queda a 2 horas de su ciudad de origen,
por lo cual se vio obligado a cambiar de residencia y vivir en una
habitación arrendada en casa de unos desconocidos y visita a sus
familiares una vez por mes.
El desarrollo académico de Michael en el colegio fue superior y ocupó
el primer lugar en las pruebas saber pro, aunque en el transcurso de
los grados 9, 10 y 11 presentaba altibajos en sus calificaciones; en los
grado 6,7,y 8 ocupó los primeros lugares y fue reconocido por su
producción académica, aunque presentaba comportamientos
desadaptativos por lo cual era llamado constantemente a la oficina de
Coordinación de disciplina y debía firmar compromisos los cuales en la
mayoría de las ocasiones no eran cumplidos hasta cuando era
advertido de poder ser retirado del colegio debido a su
comportamiento.
Michael es el tercer hijo de un matrimonio religioso tradicional de
estrato socioeconómico alto y sus padres conviven en la casa contigua
a la familia paterna quien es liderada por la abuela (debido al abandono
de su pareja cuando sus hijos eran adolescentes). Es el tercer hijo del
matrimonio y tiene un hermano de 9 años y una hermana de 8 años,
mayores a él. Michael es fruto de un embarazo no planeado y la madre
refiere haber sido maltratada física, verbal y emocionalmente durante
el embarazo.
La madre narra que Michael nació a las 40 semanas de gestación, por
cesárea, el peso al nacer fue de 3,300 gramos, con talla de 54 cm,
presentó llanto al momento del nacimiento. Los 30 primeros días fue
alimentado con biberón debido a complicaciones de la madre. La madre
refiere que Michael a los 45 días de nacido sostenía la cabeza de forma
erguida cuando lo colocaban boca abajo y a la edad de 4 meses los
objetos que le colocaban en sus manos y frente a él se los llevaba a la
boca y se volteaba con facilidad. A los 5 meses se sentaba con ayuda
y balbuceaba, a los seis ya podía sostenerse sentado sin ayuda, a los
7 meses se sentaba solo y pronunció la primera palabra MAMÁ, a los 9
meses gateó, inicialmente arrastrándose de costado izquierdo, pero
jugando con sus hermanos en el suelo. A los 10 meses cambió el gateo
a posición de cuadrupedia y patrón cruzado; a los 11 meses caminó
 agarrándose de objetos, a los 12 meses intentó caminar sin ayuda, se
cayó y golpeó fuerte en la frente por lo que su padre le dice a su madre
que él debe mantenerse en el corral para que no se golpeara
nuevamente. A los 14 meses caminó solo, a los 2 años la madre le
retira el pañal y lo somete a regaños y castigos debido a que se orinaba
y defecaba en la ropa. A los 27 meses Michael controla esfínteres
durante el día, pero en la noche logra controlarlos hasta los 30 meses.
Durante estos primeros años de vida Michael espera a su padre para
dormirse en el regazo. A la edad de 3 años el padre abandona el hogar
por lo cual la madre se ve abocada a trabajar debido a la pérdida
significativa de ingresos. Deja a Michael con sus hermanos mayores
quienes son sus cuidadores primarios estableciendo una fuerte relación
afectiva con su hermano mayor quien también deja la casa cuando
Michael tenía 5 años.
Michael ingresa al colegio directamente al grado primero a la edad de
5 años, donde se muestra desconfiado del entorno, distraído, de llanto
fácil y comportamientos agresivos; este año escolar es perdido, es
matriculado nuevamente y ante esta nueva experiencia Michael se
presenta más sociable, aunque se sigue presentando distraído para lo
cual la profesora del curso se muestra próxima a él haciendo
comentarios favorables sobre su desempeño, dando cariño y caricias
con lo cual Michael mejora su rendimiento académico manteniéndolo
por toda la primaria y parte de sus estudios secundarios.