LA PSICOSIS ORDINARIA

OBSERVACIONES GENERALES:
1. Discernir la estructura psíquica: Neurosis / psicosis, puede dificultarse
cuando:
• El sujeto no se presenta delirante, pero se observa un funcionamiento
psicótico.
• La sintomatología es de apariencia neurótica.
• Se observan discretos acontecimientos de cuerpo, sutiles plomadas de sentido
en el deslizamiento de la significación, velados fenómenos de alusión,
suplencias minimalistas en las que el sujeto sostiene la frágil estabilidad de su
realidad.
• Es posible advertir sujetos que disponen de modos para compensar la
forclusión del NP.
Todo esto, nos conduce a IDENTIFICAR LA ESTRUCTURA PSICÓTICA NO
DESENCADENADA.
Algunas coordenadas:
• La estructura psicótica no desencadenada, puede distinguirse en la infancia del
sujeto, a partir de un signo sutil. Por ejemplo: Un sujeto examinado en la
adultez, destaca en su relato que a los 8 años surge una idea fija que se le
impone: ser Papa. 25 años más tarde se desencadena el delirio, en el que el
tema delirante consistía en ser Papa.
• Los modos de compensación, nos sugieren que hay un “como si”. Refiere a la
falta de comportamiento propio. El sujeto, sigue la trayectoria que otro realiza.
Por ejemplo: Adherirse con facilidad a l amigo de turno. Este es entonces un
mecanismo de compensación imaginaria al que recurren los sujetos que entran
en el juego significante y apelan a la IMIRTACIÓN EXTERIOR.
• Se observa un pobre desarrollo del Superyo. Recuerden que Freud sostiene
que el superyó es el heredero del complejo de Edipo.
• Falta el sentido de identidad.
• Se observa pobreza general respecto de la vida afectiva.
• Los síntomas no son percibidos como patológicos.
• El estadio del espejo: En la psicosis ordinaria cuando el sujeto se encuentra
pegado a su Yo, se transparenta en la imagen. Si bien esto acontece en la
 psicosis extraordinaria, en la ordinaria, reparar en la relación con la imagen del
cuerpo en el espejo, resulta una indicación clínica.

En el Texto establecido por Miller: Efecto retorno sobre la psicosis ordinaria,

Miller establece algunas puntuaciones que nos permiten distinguir “eso que se
experimenta” y que no se reconoce como signos evidentes de una neurosis.

• Esta noción rompe con el BINARISMO NEUROSIS / PSICOSIS:

N P

¿Por qué? Porque el sintagma la psicosis ordinaria introduce un tercer

elemento, que será ubicado del lado de la psicosis:

N P
CON ESTE SIMBÓLO, SE UBICA LA PSICOSIS VELADA,
DISIMULADA.

NEUROSIS PSICOSIS Psicosis ORDINARIA/ VELADA

La MP es el fundamento
de la realidad común. Se
asienta sobre la
estructura edípica.
EL ESTADIO DEL
ESPEJO es la primera
estructura del mundo
primario del sujeto Pero,
como producto del acto
psíquico que implica la
identificación, el sujeto se
reconoce en el espejo.
ORDENA EL MUNDO: LA
METÁFORA PATERNA
FORCLUSIÓN DEL NP
Si el mundo que construye el
sujeto, es el de la madre hablamos
de psicosis, porque allí solo está
presente el deseo desordenado de
la madre sin la significación dada
por el NP. La locura es el mundo
primario. El otro del espejo se le
viene encima.
ORDENA EL MUNDO: LA
METÁFORA DELIRANTE
El NP SE SUSTITUYE EL MISMO AL DESEO DE LA
MADRE.
El sujeto encontró un modo de suplir la falta de
inscripción del NP.
La relación con el espejo se sostiene bajo las
coordenadas de la psicosis, sin embargo, la
compensación a la falta del NP puede revelarse los
intentos desmedidos de arreglárselas con el espejo.
(Signo del espejo)
ORDENA EL MUNDO: EL ELEMENTO X
NP = (X). Ahora X funciona como NP para el sujeto.
El NP deja de ser un nombre propio para pasar a ser
un predicado: Predicado: “elemento que es un hacer
creer compensatorio”. Es un sustituto sustituido.
 ¿Que se intenta captar cuando hablamos de psicosis ordinaria?

Nos orientaremos por pequeños índices, por lo que Lacan llama: “UN
DESORDEN PROVOCADO EN LA JUNTURA MAS INTIMA DEL
SENTIMIENTO DE LA VIDA DEL SUJETO”

Este desorden se sitúa en

• La manera en que el sujeto siente el mundo que lo rodea.
• La manera en que siente su cuerpo.
• La manera de referirse a sus propias ideas.

Las preguntas que nos hacemos en la clínica son:

• ¿Cuál es la relación que tiene con el otro? ¿con el trabajo?
• ¿Cómo es la relación que tiene con su cuerpo?
• ¿Cuál es la relación que tiene consigo mismo, sus ideas, sus
sensaciones?
• ¿Qué uso hace del cuerpo, de lo social, de la confrontación con el
vacío?

Por eso, para determinar si se trata de una neurosis o no, debemos hallar
la relación que el sujeto tiene con
• El NP: ¿sustituye al deseo de la madre?
• La relación que el sujeto tiene frente a la castración: ¿es aceptada, es
de imposibilidad, impotencia? ¿Es rechazada? ¿Es renegada?
• ¿Hay diferencia entre el Yo y el Ello?
• ¿Hay un Superyo trazado?

Nos hacemos estas preguntas, porque en la psicosis ordinarias estamos en el

campo de lo que no dialectiza, lo que vuelve al mismo lugar pero no bajo la
repetición simbólica.
Por esto, es que Miller en este texto, destaca una triple externalidad, para
localizar estas sutilezas de la estructura en los tres registros: I-S-R.
Las externalidades son: La externalidad social / La externalidad corporal / La
externalidad subjetiva.
En la psicosis ordinaria:
La externalidad Social: se revela en la relación negativa que el sujeto tiene
con la identificación social. El sujeto es incapaz de asumir una función social,
no se ajusta, se desengancha. La otra forma es la manera de vivir esa
identificación social, por ejemplo: la manera de vivir el trabajo, el encierro, el
aislamiento.

La externalidad corporal: Concierne al cuerpo como Otro para nosotros

mismos. No somos un cuerpo, nos apropiamos de él, lo tenemos. En la
psicosis ordinaria observamos un desajuste. El índice está en la brecha que
hay entre el cuerpo que se descompone y los lazos artificiales que inventa el
sujeto para reapropiarse de él, por ejemplo: tatuarlo entero. O el no sentir dolor.

La externalidad subjetiva: El indicio está en la sensación de vaguedad, de

vacuidad que no dialectiza, en la medida en que la relación aquí es con el
vacío. También es visible en los casos en que se verifica una identificación real
con el objeto desecho. “él es el tacho de basura”. Por ejemplo, sensación de
aplastamiento, sensación de vaciamiento de energía, desvitalización, no
localizarse en el lazo.

CONCLUSIÓN:
Nuestra clínica bajo la perspectiva del NP, muestra que el terreno estaba bien
delimitado según las categorías de psicosis, neurosis y perversión. A partir de
la última enseñanza de Lacan, se pone más bien de relieve la continuidad entre
territorios, aquello que los hace contiguos, como dos modos de responder a un
mismo real, como dos modos de goce ante una misma dificultad de ser. No se
trata ya en esta segunda perspectiva de establecer fronteras sino de constatar
anudamientos y desanudamientos entre hilos que están en continuidad.
Se dirige al arreglo con el goce, en cada caso, de manera singular.