Está en la página 1de 11

INTRODUCCIÓN

Cuando la fecundación ha tenido lugar, generalmente


desaparecen las piezas florales externas: cáliz, corola e
incluso los estambres por desecación. El ovario adquiere
mayor desarrollo,
transformándose en el fruto y los óvulos, con el
embrión en su interior, se transforman en semillas.
Así el fruto es el ovario transformado y maduro, y la
semilla el óvulo fecundado y maduro.

En algunas familias, el cáliz se mantiene


alrededor del fruto formando una envuelta protectora. Si crece
poco se denomina marcescente, y si se desarrolla mucho,
acrescente.

En algunos casos persiste el estilo y el estigma, o bien


se desarrolla el receceptáculo floral como ocurre en las
fresas.
FRUTO

Es el ovario fecundado de las plantas con flor.


La pared del ovario engorda al transformarse en la pared del
fruto y se denomina pericarpio, cuya función es
proteger a la semilla. En las plantas gimnospermas y plantas sin
flores no hay verdaderos frutos, aunque a estructuras
reproductivas como los conos de los pinos, comúnmente se
les tome por frutos.

Muchas plantas se cultivan porque dan ciertos frutos


comestibles y a menudo fragantes, sabrosos y jugosos llamados
frutas. El fruto es otra de las adaptaciones, conjuntamente con
las flores, que ha contribuido al éxito
evolutivo de las angiospermas. Así como las flores atraen
insectos para que transporten polen, también muchos frutos
tratan de atraer animales para que
dispersen sus semillas. Si un animal come un fruto, muchas de las
semillas que éste contiene recorren el tracto digestivo
del animal sin sufrir daño,
para después caer -con suerte– en un lugar idóneo
para su germinación. Sin embargo, no todos los frutos
dependen de su comestibilidad para dispersarse. Otros, como los
abrojos, se dispersan aferrándose al pelaje de los
animales. Algunos forman estructuras aladas para poder
dispersarse con el viento, como los arces. La variedad de tipos
de frutos ha que han desarrollado las angiospermas a
través de su evolución les ha permitido invadir y
conquistar todos los hábitats terestres
posibles.1

Partes Del Fruto:

La cubierta del fruto recibe el nombre de Pericarpio.


Suele estar formado por 3 capas Epicarpio (capa más
externa y forma la piel del
fruto, se originan a partir de la epidermis externa del ovario),
Mesocarpio (capa media, formada a partir del parénquima
del ovario) y Endocarpio (es la capa más interna, que
proviene de la epidermis interna del ovario).

Tipos De Frutos

El objetivo
fundamental de esta práctica es saber identificar los
tipos de frutos así como sus partes. Para ello, se
observarán distintos tipos de frutos, y se tratarán
de definir según sus características: Secos o
carnosos, dehiscentes o indehiscentes, monospermos o polispermos,
y por último se le asignará a cada uno el nombre
particular con que se le denomina: aquenio, baya, drupa,
hesperidio etc.

CLASIFICACIÓN DE LOS FRUTOS
 Dehiscentes: en la madurez se abren para
dejar en libertad las semillas

 Indehiscentes: no se abren en la
madurez.

 Secos: el pericarpio se seca y se hace


delgado y leñoso o coriáceo

 Carnosos: el pericarpio es grueso y


jugoso.

 Monospermos: poseen una sola


semilla.

 Polispermos: poseen varias
semillas

 Frutos simples:

a) Secos indehiscentes

– Aquenio : fruto simple, seco, indehiscente y


monospermo

– Cipsela: aquenio derivado de un ovario


unilocular ínfero (lám. Asteraceae)

– Cariópside: aquenios con pericarpo


soldado íntimamente a la semilla. Procede de un ovario
unilocular súpero (Poaceae)

– Nuez: Generalmente unilocular y monospermo.


Ej.: Corylus avellana (Avellano)

– Sámara: Aquenio con alas. Ej.: Ulmus


(olmo), Fraxinus (fresno) Si tiene dos semillas se denomina
Disámara (d). Ej.: Acer (arce)

b) Secos dehiscentes
– Cápsula (h): Son frutos dehiscentes y
polispermos derivados de un ovario de 2 ó mas carpelos y
con dehiscencia variable. Ej.: Papaver (amapolas)

– Folículo (f): Fruto monocarpelar


polispermo que se abre por la sutura ventral. Ej.: Delphinium,
Paeonia.

– Legumbre (g): derivado de un ovario unicarpelar


y con dos líneas de dehiscencia que corresponden a la
sutura carpelar y al nervio central del carpelo. Polispermo.
(Fabaceae). Ej.: Cytisus scoparius (escoba), Ulex europaeus
(tojo), Genista, etc..

– Silícua (i): derivado de 2 ó mas


carpelos con dehiscencia doble y por lo general más de 3
veces más largo que ancho. (Brassicaceae). Ej.: Erysimum,
Nasturtium, Cardamine, Brassica, etc.

– Silícula: Silícua de longitud


poco mayor que la anchura (Brassicaceae). Ej.: Lepidium, Capsella
bursa-pastoris

c) Esquizocárpicos : derivados de un ovario


simple, bi- o plurilocular, en los que los lóculos se
separan en la madurez semejando cada uno a un fruto procedente de
un ovario simple unilocular. (Apiaceae, Lamiaceae)

d) Carnosos

– Baya (j): fruto carnoso con pericarpo suculento


y polispermo. (Vitis vinifera, Lycopersicum sculentum)

– Hesperidio: baya pluricarpelar. Cada gajo


corresponde a una hoja carpelar. La "carne" del fruto está
formada por pelos gigantes y suculentos procedentes de la
epidermis interna de los carpelos Ej.: Citrus sp.
(cítricos)

– Pepónide: baya procedente de un ovario


ínfero pluricarpelar. Ej.: Cucurbita pepo (calabaza),
Cucumis melo (melón), Cucumis sativa (pepino), Citrullus
vulgaris (sandía)

– Drupa (k): fruto con núcleo (endocarpo


duro). Monospermo. (Prunus avium (cerezo), Prunus amygdalus
(almendro), Olea europaea (olivo), Juglans regia (nogal),
etc.)
 Frutos múltiples:

Grupo de frutos separados desarrollados a partir de los


carpelos de una sóla flor: eterio (Actaea), polidrupa
(Rubus), polifolículo (Caltha), regma (Erodium)

 Frutos complejos:

Frutos con un eje común procedente de la


coalescencia de varios ovarios procedentes de varias
flores.

– Bibaya: baya doble formada por concrescencia de


los frutos. Ej.: Lonicera sp.(madreselvas),

– Sicono: fruto compuesto de la higuera, se


compone de un receptáculo en cuyo interior se encuentran
los frutos (aquenios). Ej.: Ficus carica (higuera)

– Sorosis: fruto procedente de una inflorescencia


(piña). Ananas (piña).

 Frutos accesorios:

Frutos derivados de un ovario simple compuesto,


así como de tejidos no
ováricos y del hipanto.

-Cinorrodon: agregación de aquenios


incluidos en una cavidad formada por el cáliz y el
receptáculo floral. Ej.: Rosa sp. (rosas).

– Glande: aquenio protegido por una


cápsula leñosa (Bellota). Ej.: Quercus sp. (robles,
encinas, quejigos, coscojas)

– Pomo: Indehiscente y polispermo. Fruto con


"pepitas" (semillas) encerradas en el endocarpio cartilaginoso.
Ej.: Malus (manzana), Pyrus (pera)

– Pseudocarpo: agregados de
aquenios incluidos en un receptáculo carnoso. Ej.:
Fragaria vesca (fresa).

SEMILLA
Es cada uno de los cuerpos que forman parte del fruto
que da origen a una nueva planta, es la estructura
mediante la que realizan la propagación las plantas que por
ello se llaman espermatófitas (plantas con semilla). La
semilla se produce por la maduración de un óvulo de
una gimnosperma o de una angiosperma. Una semilla contiene un
embrión del que puede desarrollarse una nueva planta bajo
condiciones apropiadas. Pero también contiene una fuente
de alimento almacenado y está envuelto en una cubierta
protectora.

Partes de la Semilla:

En la semilla se diferencian tres partes:

Embrión (puede considerarse una planta


diminuta),

Albumen o Endospermo (rodea al embrión en mayor o


menor medida dependiendo del tamaño del embrión)
y

Tegumentos que son dos, uno externo denominado testa y


otro interno denominado cubierta seminal interna.

CLASIFICACIÓN DE LA SEMILLA
Semilla polinizada

La mayoría de las variedades de los


catálogos son de tipo "convencional" o "estándar".
No se ha realizado ninguna hibridación especial, por lo
que generalmente es la más económica. Recuerde, que
las nuevas variedades son más caras que las
viejas.

Semilla híbrida F1

Variedad producida por un cruzamiento de dos


progenitores de raza pura. Sus características principales
son su mayor vigor y uniformidad en su altura, forma, etc. y por
ello un híbrido F1 es, a menudo, una buena compra a
pesar de su elevado precio.
Presenta un inconveniente: todas las plantas tienden a madurar al
mismo tiempo, lo
cual es bueno para el profesional pero no para el
aficionado.

 Semilla capsulada
Semilla recubierta con arcilla u otro material para
facilitar su manipulación. Es útil para semillas
muy pequeñas ya que se pueden sembrar bastante espaciadas
y disminuir así, o eliminar, la necesidad de aclareos. A
menudo los resultados son decepcionantes ya que al suelo que rodea
las semillas debe mantenérselo uniformemente húmedo
(si se mantiene demasiado seco o demasiado húmedo, la
germinación será escasa).

 Semilla desinfectada

Semilla cubierta con un fungicida o con un


fungicida – insecticida antes de que el horticultor lo
empaquete.

Semilla empaquetada al
vacio

Semilla envasada en bolsas al vacío. Estas


semillas se conservan viables más tiempo que las
empaquetadas según el método
corriente. 

Semilla germinada

Semilla germinada por el cultivador y enviada en bolsas


impermeabilizadas. Esta semilla debe plantarse
inmediatamente. 

Semilla aprovechable

A menudo sobran algunas semillas después de la


siembra. Casi todas las variedades pueden aprovecharse para el
año siguiente. 

Semilla de cosecha

Es una tentación aprovechar las semillas de las


hortalizas que han formado vainas pero en la mayoría de
los casos no es aconsejable. Los híbridos F1
producirán plantas menos vigorosas y pudiera ser que las
coles sean el resultado de un cruzamiento y produzcan plantas sin
ningún valor. Los
guisantes, las judías y las cebollas son excepciones
(muchos cultivadores de cebollas campeonas insisten en emplear
sus propias semillas).

CONDICIONES PARA GERMINACIÓN DE LA SEMILLA


Para que la semilla pueda germinar se requieren unas
condiciones mínimas tanto en lo  que se refiere a la
parte interna de la  misma (condiciones intrínsecas),
como de condiciones ambientales (condiciones extrínsecas),
presentes en el  vivero o campo de cultivo.

La semilla, para iniciar la germinación requiere


haber alcanzado su madurez, es decir tener completamente
desarrollado el embrión y materiales de
reserva (cotiledones o endospermo); que conserve su vitalidad
interna, que no esté atacada por insectos u hongos
patógenos y sobretodo, no sufrir transformaciones
químicas (oxidaciones), principalmente de las
    sustancias que alimentarán el
embrión recién emergido.

Las condiciones del ambiente tales


como la humedad, la temperatura,
la luz y el oxígeno, en proporciones adecuadas,
facilitan e inducen  cambios físicos y 
fisiológicos de la semilla; transformando la vida latente
del embrión en una nueva planta, con todos sus procesos
vitales de asimilación, transporte y
transformación de alimentos,
respiración, crecimiento y reproducción que caracterizan la
vida.

La semilla para germinar requiere necesariamente de las


siguientes condiciones:

 Humedad suficiente y continua: el riego debe ser


adecuado para mantener el sustrato húmedo pero sin
encharcamientos y regarse todos los días incluso
festivos y dominicales. Cuando la semilla inicia el proceso
de imbibición, es decir que comienza a hincharse por
la absorción de agua, si se suspende el riego por un
solo día, (ejemplo el día domingo o festivo),
la semilla se deshidrata, muere y por lo tanto no germina
así se le aplique agua abundantemente, al día
siguiente.
 Temperatura adecuada: Todas las semillas tienen
rangos de temperaturas de germinación diferentes de
acuerdo al piso térmico y a las condiciones
ecológicas de donde proviene  (clima
cálido, medio o frío). Sin embargo a bajas
temperaturas los procesos germinativos son mas lentos,
propios de las especies alto andinas (páramos y
subpáramos), un poco mas rápidos a temperaturas
medias en las zonas andinas y subandinas y mucho mas
acelerado en el piso tropical. Sin embargo la mayoría
de las semillas, con algunas excepciones germinan bien a un
rango de temperatura entre 20 a 30ºC, con un
óptimo cercano entre 24 y 26ºC.
 Períodos de luz – oscuridad. La
necesidad de luz para  cada especie en su
germinación está de acuerdo a sus
requerimientos  para su desarrollo en estado natural, ya
sea la especie pionera o del bosque maduro o crezca en el
bosque bajo tropical,   en el bosque andino o en el
páramo: Las especies del piso bajo tropical
generalmente son  heliófitas o semiheliofitas,
tienen altas demandas de luz, mientras que para  la
mayoría de las especies de la zona alta andina o
bosques nublados, las necesidades de luz son más bajas
(esciofitas). La polisombra o umbráculo a utilizar
debe tratar de reducir la entrada de luz entre un 50 a 75 %,
tratando de asimilar a las condiciones naturales de la
especie ,con el fin de reducir la evaporación del agua
del germinador, aminorar  el impacto de las lluvias y
evitar sobrecalentamiento del sustrato al recibir los rayos
directos del sol.
 Oxígeno. La semilla como todo ser vivo,
necesita respirar y tiene alto consumo de oxígeno
durante los procesos germinativos. En consecuencia si se,
siembra la semilla muy profunda o se encharca el germinador
con un riego muy abundante, se priva a la semilla del
oxígeno necesario para sobrevivir, lo que
probablemente cause la pudrición o muerte de la misma
por ahogamiento. No siempre es aconsejable sembrar la semilla
con profundidad de dos veces su tamaño como indican
algunos documentos.
 Sustrato. La semilla para germinar solo utiliza los
nutrientes contenidos en sus tejidos de reserva (cotiledones
y endospermo). Por lo tanto, el sustrato durante el proceso
germinativo, únicamente requiere tener capacidad de
mantener la humedad adecuada, permitir la entrada de
oxígeno y luz a la semilla y evitar que los rayos del
sol incidan directamente sobre ella.

Cuando la plántula desarrolla las hojas


verdaderas, comienza a realizar  el proceso
fotosintético y las raíces están en
capacidad de absorber nutrientes, en ese momento el sustrato debe
contener materia
orgánica y/o los elementos mayores y menores en cantidades
adecuadas para una normal nutrición y desarrollo  del material vegetal.
BIBLIOGRAFÍA

También podría gustarte