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Una visión del problema a partir del estudio del discurso historiográfico venezolano del período
1830 - 1883.
En este estudio histórico se desarrolla una línea de investigación iniciada bajo la dirección del
Profesor Nikita Harwich Vallenilla. Ello hizo posible plantearse gran cantidad de interrogantes e
hipótesis que sólo una sistemática pesquisa a largo plazo ha permitido dilucidar. Tal pesquisa -
En el trabajo se analizan las interpretaciones que escritores como Thomas Carlyle, Laureano
Vallenilla Lanz, Mario Briceño Iragorry, Germán Carrera Damas, Angel Bernardo Viso, Jack
Ray Thomas, David Brading, Bradford E. Burns, Ruggiero Romano, E.Torres Rivas y otros han
aportado sobre el problema de la formación de las naciones, especialmente aquellas ideas que, de
y de Venezuela en particular. Dicha revisión será punto de partida para realizar un estudio
sistemático del discurso historiográfico venezolano del siglo XIX, especialmente en el período
1830-1883 ,cuya temática se inscriba - de alguna manera - en el culto a los héroes o próceres de
la patria.
Una de las tareas centrales propuestas es el examen de un vasto conjunto de textos históricos y
literarios del siglo XIX que (en un sentido muy amplio) se relaciona con lo que puede
como el que se manifiesta a través de la así denominada “literatura histórica menor”—se hace
con el propósito fundamental de comprender la importancia que tuvo esa veneración de los
las muestras de tales manifestaciones culturales para así explicar la relación existente entre el
patriótico elaborado por la élite—y que fue difundido ampliamente en el seno del pueblo
venezolano a través de libros de historia, piezas oratorias, editoriales, ensayos y artículos en la
proceso mediante el cual se estructuraron los estados que emergieron a raíz de los movimientos
nacionales estuvo más orientado a profundizar las peculiariadidades de cada uno de ellos y no
de Hispanoamérica (con la posible excepción de México) , esto es, el desarrollo de una entidad
política propia, sustentada en la negación del pasado común (ello a pesar de cierta retórica
ocasional) .En esas circunstancias, era vital el culto a los padres de la patria como un sustituto
que llenara el vacío histórico que dejaba el consciente olvido del pasado común hispano e
indígena.
Tal actitud por parte de las élites, se entiende como un intento de construir una <<falsa
historia>>, una de cuyas características fundamentales fue la mutilación de sus raíces más
profundas (el pasado prehispánico y los trescientos años de vida colonial bajo tutela española) ;
con el objeto, se puede suponer, de no asumir abiertamente su propia realidad de grupo étnico-
sociales.
Fue entonces más conveniente para los representantes de las élites (y lo es todavía) pretender
convertirse en lo que no eran, es decir en los únicos creadores de la nación a partir de una
epopeya donde la patria surgía de sus esfuerzos en los cabildos, congresos y campos de batalla.
Ellos, algunos preclaros representantes de la cúpula dirigente, tenían además otra buena razón
para no hurgar demasiado en ese pasado: muchos habían tenido una posición favorable hacia la
monarquía española y sus representantes durante la dura y larga guerra civil que fue la lucha por
manera , amenazaba con sacar a flote la verdad que muchos temían. El fantasma que persiguió al
Marqués de Casa León no fue exclusivo de este arquetípico personaje que vistió la casaca de
patriota y de realista alternativa e indistintamente. Muchos de los que ocuparon lugar prominente
en la nueva república, especialmente a partir de 1830, se escudaron en una historia que si bien
rendía culto oficial a los héroes, escamoteaba buena parte de la verdad sobre el pasado histórico
nacional venezolano.
Esa manera de asumir el pasado histórico, y por otra parte, las muy débiles bases económico-
sociales que sostenían a esas repúblicas recién emancipadas, obligaban a la nueva nación y a sus
En fin, se considera que analizando lexicográficamente las muestras representativas del discurso
historiográfico del siglo XIX—especialmente en el período 1830 - 1883 -- es una vía válida
para estudiar el culto heroico, las mentalidades de la época y su contribución a la edificación del
como pueblo, nación, patria, patriotas, realistas, héroes, próceres, padres de la patria y otros
más; en torno de los cuales se estructuran muchos de los textos publicados entonces.
Pudiera sostenerse que la investigación sobre las manifestaciones fundamentales del discurso
historiográfico centrado sobre el culto heroico no ha ido, en muchos casos , más allá de la
descripción o el análisis individual de algunas de ellas. Gran número de los estudios existentes se
comentario de recopilaciones) ; asimismo, debe agregarse, que los trabajos que conocemos están
casi todos orientados hacia la valoración literaria o hacia la revisión historiográfica aislada del
contexto que le sirve de marco histórico a tales producciones. Ejemplos de ello serían esfuerzos
Por otra parte, trabajos como los del Dr. Germán Carrera Damas: (El Culto a Bolívar ; Simón
de los textos bolivarianos , fundamentalmente de los correspondientes al siglo XX; por ello , este
trabajo trata - entre otras cosas - de profundizar en un esfuerzo más amplio sobre el conjunto de
textos histórico - literarios de carácter patriótico de la Venezuela del siglo XIX, incluyendo en
ellos, no solamente los textos relacionados directamente con el Libertador Simón Bolívar; si no
Francisco Javier Yanes, Rafael María Baralt, Juan Vicente González, Felipe Larrazábal, José de
Austria y Eduardo Blanco. Asimismo, se incluyen los trabajos <<menores>> sobre Bolívar y un
amplísimo grupo de héroes o próceres, esto es, una vasta colección de discursos, sermones,
otras que pueden apreciarse en nuestras notas o referencias y en la respectiva sección de fuentes.
Limitaciones de la Investigación.
El estudio realizado tiene como marco cronológico-espacial a la Venezuela del siglo XIX,
especialmente en el período 1830 - 1883, ya que interesa destacar las consecuencias que tuvo la
desaparición física del Libertador Simón Bolívar el 17 de diciembre ese año, sino también ,como
El año de 1883, que marca la celebración del primer centenario del natalicio del Libertador
Simón Bolívar, fue el climax del culto heroico en tiempos del guzmancismo. Por tanto, está
justificado establecer los límites del período a estudiar considerando esos hitos históricos.
Tomando en cuenta lo amplio de ese período y el vasto universo que representa eso que se
ciertos lapsos que ofrecen mayor cantidad de tales textos: Ejemplos serían los inmediatos años
anteriores y posteriores a 1842 y 1883, es decir cuando se realizan los actos del traslado de los
restos a Caracas y la conmemoración del Centenario del Natalicio del Libertador Simón Bolívar.
Al estudiar el culto a Simón Bolívar como héroe de la patria, se considerará que fue el culto más
elaborado y extendido ,al cual estaba supeditado el homenaje que se rendía al resto de los otros
próceres.
Entre las limitaciones difíciles de superar están las determinadas por las fuentes. Una ha sido la
imposibilidad de localizar hasta ahora algunos materiales de los cuales sólo se conoce su título o
única versión (en la prensa, folletos o libros de la época) no ha sido posible localizarla todavía.
posible ir más allá del análisis del texto en sí mismo aunque se sabe que es imperioso estudiar
cada producción intelectual en su contexto histórico. Entre los aspectos a considerar estarían las
ideas filosóficas, políticas, religiosas y literarias; así como la formación profesional y otras
condiciones del autor de la obra; las razones de la escritura o elaboración del discurso; la
En fin, las limitaciones del tema son enfrentadas apelando al esfuerzo heurístico y hermenéutico
sistemático sobre las fuentes, ello permite construir - esperamos - un discurso histórico válido.
Hipótesis de Investigación.
Entendiendo que es necesario enunciar esa proposición que “sirve de hilo conductor para
organizar las investigaciones” (G.Lefebvre) sostenemos que El culto a los héroes realizado en la
Venezuela del siglo XIX (y que puede estudiarse a través de los innumerables textos histórico-
literarios y las ceremonias y conmemoraciones debidamente documentadas) fue uno de los más
paso como nuevo Estado Nacional en Hispanoamérica después de haber culminado las guerras
importante sucedáneo histórico para quienes dirigieron la nación, pretendiendo echar un manto
de olvido al pasado colonial hispano, así como al período grancolombiano y al carácter de
guerra civil que tuvo el proceso emancipador, enfrentando además un presente lleno de
a) Fue mucho mayor el impacto que tuvieron publicaciones catalogadas como <<obras
menores>> tales como los discursos y sermones patrióticos, las biografías de próceres, los
artículos de contenido histórico en la prensa ,las obras dramáticas, los manuales o catecismos
masa popular a la cual llegaban mucho más ampliamente, que el de las llamadas <<obras
mayores>>, es decir los textos historiográficos de mayor alcance o desarrollo, esto es, las obras
de Feliciano Montenegro Colón, Rafael María Baralt, Francisco Javier Yanes, José de Austria,
carácter menor) giró en torno de un conjunto limitado de temas (barbarie española, leyenda
defensas ante supuestos agravios a la memoria de algún prócer,etc.) todo lo cual le confiere un
carácter reiterativo o repetitivo y por ello tal vez se explica la amplia recepción que tuvo dicho
atrasadas y en crisis) obligó a sus élites a justificar su existencia nacional a partir de la gesta
heroica y de una <<falsa historia>>. [ello impidió a Venezuela dejar de ser una de esas
En el trabajo realizado se utilizan los métodos y técnicas de investigación propios de las Ciencias
No obstante, fue en la Sala Pedro Manuel Arcaya, en la sección de Libros Raros y Manuscritos,
materiales fundamentales para la elaboración de este trabajo. Allí,no solamente se nos brindó la
asistencia usual de prestarnos los materiales solicitados sino que también se nos facilitó copia de
trabajos de investigación biblio-hemerográfica inéditos que nos dieron muy buenas pistas sobre
documental, se insiste en lo contextual del análisis para así profundizar en la cabal comprensión
del contenido y la intención <<pedagógica>> de casi todos esos textos ,expresiones intelectuales
de una inconsciente colectivo. Así, estamos seguros, puede obtenerse una confiable masa de
Histórico que ha venido estructurándose con los aportes de clásicos estudios como los de Karl
Marx ,Thomas Carlyle, Charles V. Langlois, Charles Seignobos, Wilhelm Bauer, Laureano
Vallenilla Lanz, Ruggiero Romano, George Duby, Germán Carrera Damas y otros.
Con la aplicación de tales principios generales del Método Histórico se intenta el análisis de los
aportes teóricos sobre el problema de la formación de las naciones y los procesos de legitimación
del Estado así como de los textos relacionados con el culto a los héroes.
Considerando la naturaleza del problema en estudio, las fuentes utilizadas para la redacción de
esta obra son -- en su casi totalidad -- libros, folletos, hojas sueltas, periódicos y algunas
El autor desea expresar su gratitud a todas aquellas instituciones y personas que hicieron posible
de Geografía e Historia del Instituto Pedagógico de Caracas y a las autoridades superiores del
agradecer también el apoyo recibido de la propia Universidad Católica Andrés Bello; del Centro
me facilitó (entre otras cosas) el uso de un cubículo de investigador en su sede durante mi año
Arcaya, la de Libros Raros y Manuscritos, así como los de la Hemeroteca; en fin , a todos los que
con sus consejos y sugerencias mejoraron este trabajo, pero muy especialmente , a mi tutor el
Doctor Nikita Harwich Vallenilla, quien desde los primeros intentos nos acicateó con sus
1.1. Para iniciar el tratamiento del problema, comenzaremos por resumir y comentar los
planteamientos de calificados autores cuyas obras nos han permitido sustentar teóricamente
este trabajo. Empezaremos la tarea , considerando los del ensayista latinoamericano
contemporáneo Edelberto Torres Rivas , en su trabajo titulado <<La Nación : Problemas
Teóricos e Históricos>>.(1)
Este, al explicar el concepto moderno de nación ,afirma que ella es “una comunidad política
cuya unidad se encuentra en la existencia dinámica de un mercado interior”. Es así ,
sostiene , que “la universalidad de la burguesía adquiere una forma nacional.para dar
históricamente a sus intereses una forma general. Es aquí donde aparece necesariamente el
estado ,como expresión política de esa generalidad y, con ello, la referencia dialéctica de la
nación y del estado como una realidad burguesa.”(2)
Considera por consiguiente que la nación es una forma específica de comunidad que surge en
el correspondiente proceso histórico junto con nuevas formas sociales de producción y
relaciones sociales que constituyen el hogar de la sociedad burguesa, expresión normal del
mercado capitalista. Dicho fenómeno nacional, logró su más alta expresión durante el siglo
XIX, así como durante el siglo XVIII la tuvo el Estado.(3)
Según Torres Rivas, los elementos y niveles del fenómeno nacional fueron los siguientes: En
la etapa de consolidación de los grandes estados nacionales del siglo XIX, su viabilidad estuvo
asociada a la existencia de grandes espacios territoriales con cierta densidad poblacional. El
“espacio” geodemográfico fue objeto de procesos unificadores en los que la integración
política por la fuerza ,en la búsqueda de un “tamaño” , fue una constante inevitable.
Todo ese proceso implicó una fuerza político-militar integradora pero también intereses
socioeconómicos en los que siempre aparece predominando un grupo nacional, una
socionacionalidad que se afirma por intermedio de una voluntad dominante de clase. (5)
En relación con lo Nacional y lo Estatal, opina el autor que en general, “... no se puede
entender lo nacional sino con referencia a lo estatal; es el estado el que unifica (o termina de
hacerlo) a la nación (...) el estado capitalista es siempre un estado nacional ,un espacio
económico y político unificado.” (6)
Al caracterizar a las naciones y estados, de acuerdo con la tipología de Malek , señala estos
sobre un t elón de fondo extranjero que se rompe y/o destruye a medias ,pero que tiene
hondas raíces etnoculturales. Ese fue el caso de países de América Latina en que la
colonización eliminó <<las antiguas naciones y sus civilizaciones ... y dispuso ,además, del
tiempo necesario para la constitución de verdaderas naciones ...>> “ (7)
La revisión de los conceptos asociados a la idea de nación permite precisar que son varias
“...las nociones que en la literatura contemporánea se asocian a la categoría de nación (...)
Por ejemplo, el uso reiterado de sociedad como equivalente al de nación, o el caso de la
sinonimia castrense en que patria, república y país se confunden en una imprecisa
concepción de nación. Resumiendo, son tres por lo menos los niveles o grados de significación
en que se concreta usualmente el hecho nacional ; a) cuando se le confunde con
nacionalidad, como conjunto de rasgos culturales e históricos que, por lo general, se unifican
a partir de una base étnica o linguística común. En este caso es sinónimo de nacionalitario,
neologismo de origen francés que alude a la existencia de uno o varios de esos rasgos que por
lo general están presentes en una agrupación social que precede a la nación; b) como fuerza
integradora que facilita o conduce a una identificación común; la nación es sinónimo de
conciencia colectiva y ,de hecho, funciona con extraordinaria fuerza orgánica o mejor
dicho ,como cualidad orgánica en virtud de la cual se mantiene la cohesión interna y se
aseguran formas de integración/participación. Es la idea de un sujeto colectivo y soberano
que además otorga un sentido de pertenencia transclasista y una capacidad de
autoidentificación defensiva”.(8)
A propósito de la relación entre las categorías de Nación y Territorio, entiende Torres ,que la
de nación debe ser tomada como sinónimo de “comunidad territorializada, espacio interior
concebido como límite de carácter político-administrativo.” No es nada más la geografía sino
la “delimitación de un interior” donde la vida comunitaria logra su desarrollo tomando como
referencia también la dimensión externa. “Nacional es es este sentido lo opuesto a lo externo,
que es extranjero.” (9)
El concepto de nación moderna necesita ser completado, en primer lugar “con la idea de
comunidad económica (....) pero. afirmar que la nación moderna es la nación burguesa no
resuelve el problema teórico fundamental de la especificidad de la nación que sólo ve
señalada así su última ratio. En segundo lugar, existen hechos a veces tan importantes como
los señalados ,experiencias comunes que constituyen lo que de manera a veces imprecisa se
llama la la tradición común y que en la historia de los pueblos cuenta de manera decisiva para
producir diversos grados de identidad, situaciones que engendran un sentimiento de
copertenencia al mismo conjunto. Tal como establece Terray, para que se evolucione del
instinto nacional - de la intuición colectiva - a la conciencia nacional es necesario que ese
<<conjunto>> emprenda luchas y resistencias y pase por experiencias donde simultáneamente
forje su unidad y su identidad. El destino compartido es una contradicción cohesiva porque
integra lo que es constitutivamente antagónico ....” (12)
Agrega Torres Rivas, que existe un tercer elemento sustentado por la común tradición
histórica y vida económica: Este es una expresión ideológica o elaboración cultural de las
experiencias nacionales. “En sus formas más desarrolladas ,la comunidad cultural puede ser
contenida en una forma nacional ... la llamada cultura nacional es siempre cultura de clase.”
Las clases subordinadas o explotadas son integradas a la <<comunidad cultural>> nacional.
Es decir, “conforme se vuelve nacional no sólo su participación en el mercado - su posición
estructural - sino su condición social y su estatus cultural.”(13)
Concluye Torres Rivas esta parte de su ensayo citando una opinión de Nicos Poulantzas sobre
la nación moderna caracterizada como <<historicidad de un territorio y territorialización de
una historia >> , es decir una realidad superior en que se funden de manera novedosa los
elementos materiales y espirituales de toda comunidad.(14)
Con la aplicación del principio jurídico del uti possidetis se pretendió “consagrar como
frontera nacional lo que sólo fue una barrera burocrática o política, de sabor medioeval. Lo
que la colonia unió lo dispersó la república”. Por ello, la dispersión de Hispanoamérica “fue
menos obra de la independencia que del imperialismo, aunque en la explicación de la historia
oficial el <<patriotismo>> ha pretendido decir la última palabra. “ (18)
Una gran dificultad a vencer fue la delimitación territorial de la nación , lo que constituyó
“parte del proceso original de formación del poder estatal en América Latina” en la que en su
proceso de formación como ,nación y estado no podían coincidir, sobre todo, “ porque el
espacio continuo de la colonia, la geografía, la economía y la política le señalaron
jurisdicciones diversas.”(19)
Alcanzar la unidad nacional y el control del territorio sólo fue posible con el triunfo de los
caudillos y de las montoneras en las guerras civiles. Se resolvió por la vía de las dictaduras
absolutistas el problema de la unidad nacional; así, tuvo la nación “una dimensión político
-militar. Por ejemplo, la conquista del desierto desde Buenos Aires, la disminución del espacio
mapuche, desde Santiago, o la ocupación de los llanos en Colombia y Venezuela, son formas
incipientes de afirmación nacional por la vía de asegurar administrativamente un territorio al
que sólo posteriormente se podrá integrar. Las ciudades juegan un papel decisivo en este
proceso y en América Latina ellas definen el primer momento del poder estatal. Es casi como
decir que la matriz espacial se realiza en una ciudad y en su extenso hinterland rural.”(20)
Considerando otros factores ,dice Torres Rivas, que el orden colonial se apoyó en normas
(legales) y costumbres que favorecieron la dispersión regional, el desarrollo de una cultura
parroquial sobre la base de una estructura económica y social que ,salvo excepciones, no
podía crear fuerzas materiales y sociales unificadoras. La ausencia de comercio interior - el
comercio vincula y unifica espacios y personas - y la presencia de monopolios económicos,
por ejemplo, no favorecieron la creación de una estructura económica común. (21)
Tampoco favorecía la unidad nacional la existencia de una legislación que dividía a la
población en grupos de acuerdo con su color, origen y las funciones que debía cumplir. Fue
muy fuerte en América la tendencia medieval a aislar a grupos socioculturales en forma de
estamentos; esto es, “cuerpos sociales cerrados con deberes y derechos específicos entre sí y
con los del <<exterior>> , separados por culturas y símbolos distintos.” Evidentemente, esos
factores no favorecieron la formación de una genuina conciencia nacional. (22)
Esa tradición colonial fue defendida cerrilmente porque ella entrañaba la vigencia de los
privilegios que se perdían con el derrumbre del viejo imperio. Por eso, las guerras de
independencia expresaron contradictoriamente dicha crísis.(23) .
Junto a este aspecto anterior debe considerarse que “la guerra de independencia construyó
una legitimidad y creó un sentido heroico del pasado .Contribuyó de esa manera a que los
elementos subjetivos de la nacionalidad en formación cristalizaran como fermentos de
identidad colectiva. La nación legitima el estado en la medida en que la victoria legitima el
poder de los vencedores. Pero esas circunstancias no facilitan exactamente la formación del
estado nacional ;sólo hicieron inevitable la derrota colonial.” (25)
Asimismo ,sostiene Torres Rivas, que sólo en la conciencia superior de figuras como Bolívar,
Sucre y Martí el nacionalismo americanista se encarnó como acabada visión histórica del
momento, adelantándose a su época. “Pero la patria no era América, vasto y vago conjunto
difícil de aprehender culturalmente”. Para otros la identidad la expresaban mejor los
intereses del comercio, la propiedad de la tierra y las influencias políticas locales.(26)
Finalmente se plantea, que ,al contrario de otras sociedades, el proceso nacional
latinoamericano no necesitó ser encabezado por una burguesía, pues aún en sus inicios “el
hecho nacional no se produce sin una clase dominante; ese rol político fue desempeñado por
la llamada, con notoria imprecisión, oligarquía”. Ella comprendió una gama de sectores
sociales: “comerciantes intermediarios, plantadores de cultivos para la exportación ,
propietarios de minas y tierras, y hasta una élite ilustrada formada en el exterior (...) para
todos ellos la primera experiencia nacional no fue el mercado sino la política . Se trata de una
protoburguesía que se va definiendo desde el poder, cuya experiencia la perfila como
clase.”(27)
Antes de analizar los argumentos de otro autor, es necesario ofrecer algunas consideraciones
sobre este conjunto de incitantes ideas ofrecidas por Torres.
El juicio que sobre la formación de la Nación y el Estado tiene este autor, no responde a una
de esas explicaciones que reducen todo a una causalidad elemental o determinista. Si bien es
cierto que pone en el centro de su tesis un importante factor como lo es la formación de un
mercado nacional con su respectiva burguesía dirigente; también lo es, que toma muy en
cuenta otros elementos como la articulación del territorio, los componentes nacionalitarios
(tradición común, comunidad cultural) y ,sobre todo --- en nuestro caso—el peculiar
desarrollo socio-histórico de América Latina, con su herencia indígena e ibero-colonial.
1.2. El notable historiador italiano Ruggiero Romano, discute el tema en su ensayo sobre los
conceptos de Nación, Estado y Libertad. (29)
Al explicar el origen de la idea de nación, estado nacional y otros conceptos conexos lo hace
apelando a los procesos históricos concretos de viejas sociedades como Inglaterra, Francia y
España (Estados Nacionales ya consolidados en la época moderna) ; así como de los de
Italia ,Alemania y las nuevas repúblicas americanas (cuya unidad nacional o su
emancipación ocurre en el siglo XIX). Tomando tales sociedades como ejemplos válidos,
califica a los viejos estados nacionales como nacionalidades satisfechas y a las de más nueva
data, como nacionalidades frustradas.
Romano enuncia las características del modelo ideal de nación afirmando que “Una nación
es un espacio delimitado por fronteras naturales, poblada por hombres que hablan el mismo
idioma y que practican la misma religión y unidos entre ellos por un no mejor identificado
<<espíritu nacional>>. El Estado administra estos hombres y concede algunos derechos a las
eventuales minorías...” (30) . Tal modelo, según Romano , fracasó en América.
De gran importancia nos parecen las ideas que enuncia el autor sobre el papel que desempeña
la geografía (ríos, montañas, brazos de mar) como justificación de la existencia de las
naciones americanas. Asimismo, lo es su precisa concepción de lo que denomina el
<<proyecto nacional>>.
En síntesis, las opiniones de Romano sobre lo que llama nacionalidades satisfechas (y por
ende orgullosas) y sobre las nacionalidades frustradas (acomplejadas, edificadas sobre la base
de la idea de libertad - independencia) nos permiten comprender el drama de la América
recién emancipada en búsqueda de una nueva identidad.
Si comparamos lo afirmado por el autor que ahora reseñamos en relación con el problema de
la escritura de una Historia de Italia o de una Historia de los Italianos (31) no podemos evitar
pensar en la situación de Venezuela hasta 1777 o si se prefiere antes de 1810-1811. No
obstante, creemos que acá entre nosotros el problema tiene mayor complicación, pues ni
teníamos una expresión geográfica (Venezuela, de igual alcance que Italia) ni tampoco unos
<<venezolanos>> con ese nosotros ya definido. Y hay algo más complejo aún; nos pudiéramos
preguntar, ¿ desde cuándo podemos hablar de una realidad geográfica llamada América o de
unos <<americanos>> sujetos de nuestra historia?
En fin, las anteriores nociones nos permiten hacer este último aserto: Venezuela, como
nación hija de un proceso de independencia se inscribe, al igual que sus hermanas
hispanoamericanas, dentro de ese mundo de las nacionalidades frustradas a pesar de haber
tenido la posibilidad de insertarse en el viejo tronco de una nacionalidad satisfecha, esto es, la
española, con tanta antigüedad o títulos de viejo estado nacional como los que exhibían
Inglaterra y Francia.
Hecha esa síntesis inicial de los planteamientos de Ruggiero Romano intentaremos ahora
ofrecer una más completa revisión de éstos. Para ello, transcribiremos o resumiremos los
textos fundamentales y a partir de tales ideas, si es pertinente, hacer las consideraciones
críticas del caso.
Para realizar la tarea propuesta partiremos del citado trabajo de Romano. Este, al someter a
discusión los conceptos de nación, estado, libertad y patria, nos dice que “<<Patria>>>
etimológicamente no es otra cosa que el lugar de nacimiento ... el sentido limitado de <<lugar
de origen >> subsiste todavía por mucho tiempo. Paralelamente, se afirma la palabra
<<Natio>>. También ésta, etimológicamente no significa otra cosa que nacimiento y por un
largo período, la palabra <<Natio>> identifica a las personas pertenecientes a un lugar de
nacimiento común : la <<Natio>> (nacimiento común) de los florentinos o de los
barceloneses, de los escoceses o de los lombardos. Pero progresivamente, también nación
amplía su esfera de identificación. Así en el siglo XVI nos encontramos con dos
palabras :<<patria>> y <<nación>> ,y ambas poseen un dúplice valor, un dúplice sentido”
[como simple lugar de origen y/o nacimiento y como identificación de un espacio geográfico,
cultural, más amplio. En el caso italiano ésto es evidente, dice el autor,] ... Pero es
precisamente durante el siglo XVI que la palabra Estado hace irrupción de modo
determinante .. [aunque no es todavía el Estado Moderno, es Nuevo. Para entonces,] ... Estado
significaba simplemente dominio ...” (32)
Ese gran movimiento del siglo XVIII encontró su punto culminante en la Revolución
Francesa “aquí , <<la Nation/Peuple>>afianzará su originalidad más fuerte .Ella fue acogida
con entusiasmo por parte de hombres como Kant, Fichte, Klopstock (para no hablar que de la
sola Alemania: pues el eco fue general en toda Europa) Las sucesivas desviaciones de la
revolución condujeron a la desilusión : y fue en el crucial invierno de 1807-1808 que Fichte
escribe sus Discursos a la Nación Alemana teorización completa de lo que será la Nación en el
siglo XIX. Pero no es sólo esto :el nuevo concepto de Nación hará alianza (y a veces
matrimonio) con el nuevo concepto de Estado. ....” (34)
La fundamental participación de los historiadores hará del siglo XIX será el siglo de las
grandes historias nacionales.” Y es aquí que se cumple la grande separación. ¿ Cuáles
historias nacionales ? Es decir, ¿Quién merece una historia nacional ? Francia, España,
Inglaterra: los países que tienen una pretendida <<unidad>> nacional constituida desde hace
tiempo.” Pero qué pasa con Grecia, Alemania, Polonia y otros más, la merecen también? (35)
respuesta pueda ser simple a través de una disyunción siempre mayor entre Estado y
Sociedad Civil , entre Nación Real y Nación Oficial. Esta disyunción dará origen a algunas
grandes rupturas, como la mexicana de 1911 ... las naciones americanas no logran encontrar
nunca una fuerte unidad, propia. Ellas oscilan siempre entre <<Nación en estado natural>> y
<<Nación constituida>>”. (36)
El Proyecto Nacional.
El es un concepto al que guarda mucho cariño desde hace años y que ha constituido uno de
los elementos principales de su reflexión sobre la historia de Italia. El asunto es precisamente
éste; nación, estado , patria, libertad “son palabras que ,o se resuelven en vana retórica [los
recuerdos de las batallas vencidas, de la sangre heroicamente derramada, de los gloriosos
destinos futuros debidos al genio de la raza] o se tienen que concretizar en un proyecto
nacional” (no nacionalista) el cual ,contrariariamente a lo que se piensa, no es una
ideología. “Aún mejor: una ideología puede estar al servicio de un proyecto nacional pero no
puede nunca sustituirlo”. Lo fundamental de dicha ideología es que sea espontánea. En un
proyecto nacional “convergen el pasado y el presente en vista de una realización futura” -- a
éste se le puede esbozar en pocas palabras. (37)
Considerando los aportes de Romano a la comprensión de este problema teórico, creemos que
no sólo la precisa explicación filológico-histórica sobre los conceptos mencionados representa
una valiosa contribución ;también lo es — en grado sumo — su tesis sobre las nacionalidades
satisfechas y las nacionalidades frustradas; ellas, nos permiten entender una de las más
complejas interrogantes sobre la génesis de la identidad de Venezuela como nación.
Debe así mismo reflexionarse sobre sus opiniones en torno del significado del <<proyecto
nacional>> como eje de las nuevas repúblicas hispanoamericanas y sobre su idea del papel
jugado por las oligarquías en la vida de las mismas.
Sobre esto último, considérese dicho planteamiento (sobre las oligarquías) contraponiéndolo a
lo sustentado por Torres en su ensayo antes citado. Opinamos, que Torres ofrece una buena
razón que explica la preeminencia de esas oligarquías, ella no es otra que la nula presencia de
una auténtica burguesía nacional, expresión de un sólido mercado capitalista propio. Fue ese
vacío, el que la oligarquía llenó históricamente en Latinoamérica.
El eco dejado por la historia en alguien puede recordarse y por tanto revivirse el pasado
colectivo, interpretándolo tal como aparece grabado en nuestra alma. Un escritor puede tratar
de narrar el drama de su tiempo total.(39)
Por todo ello, la historia venezolana tiene ese carácter guerrero, con la independencia y el
panteón de los héroes o padres de la patria como centro.
Asociada a esa historia está la costumbre de bautizar todo (calles, plazas, estados, municipios)
con los nombres de los héroes, aunque al rendir todo ese culto, se debe enfrentar el problema
del culto a Bolívar y él de los que traen recuerdos inconvenientes: Miranda, Piar, Mariño.
Este incompleto y apretado balance de las refrescantes ideas de Ángel Bernardo Viso, que
replantean añejas polémicas aún no resueltas del todo, nos permite reflexionar sobre varios
asuntos que han resultado verdaderos tabúes en el medio intelectual venezolano.
Creemos firmemente que los planteamientos de Viso guardan estrecha relación con la idea
esbozada por R.Romano en torno a las llamadas nacionalidades frustradas. Vemos con
mucha claridad que para Viso tal cosa tiene su origen en ese “suicidio criollo” de renunciar a
su vieja raíz hispana.
También puede verse un punto de convergencia entre la tesis de Viso y algunas posiciones del
doctor Carrera Damas. Es obvia (como veremos más adelante) la gran coincidencia en lo
atinente al desmesurado culto a los héroes y la estructuración a partir de allí de una historia
patria deformada.
En una obra posterior de Ángel Bernardo Viso, titulada por éste Memorias Marginales de
Pedro Mirabal (41) se plantea nuevamente un conjunto de razonamientos atrevidos que
enfrentan buena parte de los traumas que nos afectaron como pueblo en busca de identidad.
No cabe duda que los heterodoxos señalamientos de Viso rompen con una tradicional
interpretación de la historiografía venezolana. Su posición, que pudiera ser descalificada por
algunos como “hispanófila” ,arroja luz sobre un tópico que no se ha querido asumir con
valentía y honestidad intelectual.
El problema es muy sencillo, ¿ nos reconocemos como herederos de España --- con todo lo
bueno y lo malo que ello implica—o pretendemos asumir una falsa identidad, producto más
de la conmiseración con los vencidos, con los explotados, con los condenados de la Tierra?
Esa es la interrogante que Viso asume de manera desprejuiciada, y ofrece su respuesta, a
riesgo de ser execrado por quienes han preferido mutilar el rico proceso histórico venezolano
(Hispanoamericano) y ofrecer esa falsa visión del pasado.
Sólo en la medida que la historiografía patria entienda que la nación venezolana está anclada
en varios pilares, y uno de ellos, el español sea tomado como eje fundamental de la
nacionalidad, podrá plantearse un discurso más auténtico que ese otro construido sobre la
base de un <<autoctonismo>> o de un canto a la sociedad y cultura mestiza afroamericana.
1.4. Algunos planteamientos de Nikita Harwich Vallenilla y otros autores sobre las
identidades y proyectos nacionales en la historiografía hispanoamericana de los siglos XIX y
XX. (42)
Sostiene Harwich Vallenilla, que cuando se cortaron los lazos impuestos por el régimen
español sobre sus dominios coloniales americanos como consecuencia de las guerras de
independencia (siglo XIX) , las unidades que formaban ese imperio confrontaron una nueva
realidad: Ellas intentaban asumir “el doble compromiso de la modernidad política y la
conformación de una nacionalidad.”
Las élites responsables de esos cambios tuvieron un doble problema a resolver “Por una
De acuerdo con el citado autor se requería la perspectiva histórica “no solamente para
justificar y explicar el proceso de independencia” sino también para “justificar y explicar por
qué y cómo, tales naciones existían realmente ”. Esto último se explica porque “ l a
Y agrega el autor, que , más allá de las élites ,”hubo pocas evidencias de un verdadero y
percibido lazo entre un determinado cuerpo social y una entidad geográfica claramente
definida.” (44)
Lo que definía “las solidaridades territoriales” eran criterios propios del “antiguo régimen:
una pirámide de comunidades unidas por un sentido de vecindad física”. Por ello ,las
unidades políticas surgidas “se continuaran dividiendo en estados más pequeños, como fue el
caso de la Gran Colombia y la Federación Centroamericana ...” (45)
Identidad Nacional e Historia.
Se afirma que “sin tratar de reducir la identidad nacional a la mera aceptación de una
narrativa histórica común, es verdad , no obstante, que tal narrativa es la que provee en gran
medida ,un pasado común ,las figuras de los padres fundadores, modelos de acción y un
sentido de orgullo cultural. Por ello, la construcción de historias patrias ,durante el siglo XIX
y comienzos del siglo XX fue tan urgentemente necesitada.
Nos parece que el planteamiento esbozado en el ensayo del Dr. Harwich Vallenilla guarda
estrecha relación con esas ideas de los historiadores Germán Carrera Damas y Miguel Izard
sobre el justificado temor de la conservadora élite criolla ante los embates de un antiguo
régimen en proceso de desintegración. En todo caso, fue esa desintegración del antiguo
régimen colonial, lo determinante y no un proceso de estructuración de un estado nacional
liberándose a partir de un maduro proyecto internalizado por la población de las futuras
repúblicas a emanciparse.
En este sentido, resulta interesante traer a colación algunas opiniones que el mismo Carrera
Damas enunció en unas conferencias que posteriormente fueron publicadas bajo el título de
Una Nación Llamada Venezuela (49).
El enfoque de Carrera Damas en este asunto, al igual que el Harwich Vallenilla y los otros
autores antes citados, plantea una visión distinta a esas tradicionales explicaciones sobre la
génesis del proceso emancipador y la consiguiente estructuración de las nuevas naciones del
continente durante el siglo XIX.
Más que seguir insistiendo sobre esas explicaciones sustentadas sobre bases tan débiles como
el individualismo voluntarista, donde todo se hace depender de un programa o proyecto
ideológico inspirador de una dirigencia ejecutora de una revolución que trajo la
independencia y la libertad a todo un pueblo heroico; se parte más bien, del análisis de
objetivas condiciones que determinaron en última instancia el desarrollo del proceso (crisis)
que culminó en la organización de los estados emergentes.
Completada esta primera revisión general de las diferentes explicaciones aportadas por los
autores sobre la idea de nación y Estado nacional, así como de los de los problemas
específicos de su génesis en América Latina, continuamos con el análisis de uno de los más
importantes factores que coadyuvó a la formación de la identidad de estas patrias , nos
referimos al culto a los héroes.
2. EL CULTO A LOS HÉROES.
Primeramente ,partiendo del aporte griego, debe señalarse, que la epopeya por éstos
desarrollada , se funda en la existencia de un héroe que al enfrentar obstáculos y
adversidades, exalta los valores de una “nacionalidad”. Durante la llamada edad heroica, la
concepción del mundo es individual y aristocrática. Es por ello, que al exaltar al héroe ,se
destaca su coraje o fuerza física. Tal característica fue parte fundamental de la trama del
poema épico de Homero que cantó la guerra de Troya. Ese héroe de la Ilíada que cifraba
todos sus actos en el honor al que había que sacrificar la propia existencia, estaba impulsado
por las divinidades que lo llevaban a emprender grandes hazañas en los campos de batalla.
Este poema ,en tiempos remotos y también en épocas posteriores, alimentó la firme
admiración hacia una <<edad heroica>> de Grecia. Esa concepción de un pasado heroico la
alimentó el recuerdo de los terribles combates y jornadas que permitían decidir el destino de
los pueblos y de sus dirigentes (Aquiles, Príamo, Patroclo, Héctor, Néstor, Ulises) .Cierto fue
que Aquiles resultó victorioso en la guerra y accedió a permitir la celebración de las honras
fúnebres para Héctor (quien había entregado su vida en defensa de Troya, su patria) pero
será este último, quien quede convertido en la personificación del héroe. En buena medida, la
poesía de la edad heroica se convirtió en un canto individual en el que se exaltan las glorias
de la nobleza guerrera.
Ese espíritu heroico, ese ideal heroico que animó a los protagonistas de este poema está
presente así mismo en la Odisea ; sin embargo, Ulises u Odiseo lucha por salvar la vida para
poder regresar a su patria. Ello representa un rasgo romántico del héroe desde su primera
aparición lleno de nostalgia por su lejana isla natal. (53)
Heródoto en sus Nueve Libros de la Historia señala que los persas no acostumbraban “erigir
estatuas, ni templos, ni altares y tienen por insensato a los que lo hacen; porque no piensan
como los griegos que los dioses tengan figura humana.”(54)
En relación con los egipcios, indica Heródoto, que se ha dicho que fueron los “primeros en
introducir los nombres de los doce dioses ,y que de ellos lo tomaron los griegos ; los primeros
en asignar a los dioses altares, estatuas y templos, y en tallar figuras en la piedra. “ (55) Sin
embargo, agrega más adelante este mismo, no acostumbraron los egipcios “tributar ningún
culto a los héroes”. (56)
Cuando Hecateo pretendió establecer su genealogía enlazándola con dioses y héroes ,un
interlocutor egipcio le replicó mostrándole la representación de todos sus antepasados a través
de estatuas de <<hombres de bien>> o Piromis, muy diferentes a los dioses.(57)
Al recorrer la obra del llamado <<padre de la Historia>> nos conseguimos con variadas
referencias al tema que nos ocupa. Por ejemplo, la erección de un “santuario de héroe” sobre
la sepultura de un vencedor en Olimpia (p.298) ; la existencia de “un templo del héroe
Adrasto” a quien los sicionios tributaban honras (p.305) ; las columnas donde se grababan
los nombres de los bravos en batalla (p.333) ; las ceremonias fúnebres de los reyes espartanos
que mueren en la guerra, llevados en un féretro ricamente adornado y con su imagen labrada
(p.346) ; los templetes con coronas “en honor del héroe que llaman Astrábaco” (p.350) ; las
exequias, los túmulos levantados por los ejércitos a los héroes sacrificados (p.392) ; los
sacrificios que como héroe le hacen los fenicios a Amílcar, erigiéndole monumentos en todas
sus colonias “el más grande en la misma Cartago” (p.429-430) ; las acciones de la batalla de
las Termópilas ,las que se recordaron en epitafios (pp.433,449) ; las alianzas de los dioses y
los héroes (p.501) ; las honras fúnebres después de una dura pelea por rescatar el cadáver de
Masistio (p.511) ; el templo del héroe Andrócrates (p.512) ; los honores a los muertos en
batalla (p.530) . Todos estos y muchos otros ejemplos pueden conseguirse en las obras citadas,
ello nos confirma la antigüedad del ritual heroico, muy extendido en la cuenca oriental
mediterránea.(58)
Fundamental también es la revisión de los textos de los romanos, continuación en cierta
medida, de la literatura e historiografía griega de la cual tomó sus modelos. Considérense,
entre otros, las obras de Plutarco, Suetonio, Tito Livio y Tácito.
Iniciamos el recorrido por las obras más conocidas de estos autores considerando en primer
lugar la de Plutarco por ser éste y la temática de su obra un puente perfecto entre el mundo
griego y el romano. Sus Vidas Paralelas , son un estudio biográfico comparativo, de
Demóstenes y Cicerón; Fabio Máximo y Pericles; Alejandro y César; y así, hasta completar
veintitrés parejas, agregándole otras cuatro biografías para completar las cincuenta de los
más ilustres varones de esas edades así como de algunos de insigne maldad que sirviesen de
contraste o ejemplo.(59)
La obra de Plutarco ha sido juzgada en términos moralistas pues sólo busca en la historia los
grandes ejemplos; busca esencialmente “un abanico de héroes y padres de la patria para
ilustrarnos con su ejemplo inimitable”. (60)
Lo planteado en la citada obra fue una especie de “psicoanálisis de los héroes” pues Plutarco
más que hacer simple biografía tradicional trató en gran medida de dibujarlos o retratarlos en
sus profundos rasgos. Por ello, fue catalogado el libro por el escritor norteamericano Ralph
Waldo Emerson como una “biblia de héroes”. (61)
En la obra de Suetonio , Vidas de los Doce Césares (62) , esto es , las biografías de Julio
César, Augusto, Tiberio, Calígula, Claudio, Nerón, Galba, Otón, Vitelio, Vespasiano, Tito y
Domiciano se consigue una amplia galería de caracteres, algunos realmente heroicos.
En esos perfiles biográficos de cada uno de los césares pueden observarse las costumbres
públicas y privadas de esos tiempos, pero más importante todavía, puede conocerse cómo era
el ceremonial relacionado con las victorias militares , la muerte de los jefes de las legiones,
las honras a los próceres de Roma.
Sobre Julio César, por ejemplo, escribe Suetonio que le llamaron “Padre de la Patria” ,le
erigieron estatuas al igual que otros jefes romanos anteriores (como Pompeyo) y se le hicieron
pompas triunfales, retratos, templos, elaborados elogios fúnebres; y para remate, se levantó
una columna con inscripciones al “Padre de la Patria”. (63)
Presentando la vida de Augusto , hace nuevamente referencia a la estatua de Julio César (a
cuyos pies lanzaron la cabeza de Bruto) y a que “honró casi tanto como a los dioses
inmortales la memoria de los grandes hombres que habían hecho todopoderoso al pueblo
romano, antes tan débil . Por esta razón hizo restaurar , dejándoles sus gloriosas inscripciones
,los monumentos que aquellos levantaron. Por orden suya se colocaron todas sus estatuas en
traje triunfal bajo los dos pórticos de su Foro, y declaró en un edicto que quería <<que su
ejemplo sirviese para que se le juzgase a él mismo mientras viviese y a todos los príncipes
sucesores suyos>> .Hizo también trasladar la estatua de Pompeyo de la curia donde mataron
a César, bajo una arcada de mármol, enfrente del palacio contiguo ,al teatro del mismo
Pompeyo.”
Culminan las líneas dedicadas a Augusto describiendo el conferimiento del título de “Padre
de la Patria” a éste y las ceremonias de su funeral con grandes desfiles, elogios fúnebres e
himnos. (64)
Para no hacer más extenso este recorrido por las páginas que dedica Suetonio a cada
<<César>> solamente agregaremos que en general describe en ellas las ceremonias fúnebres
(funerales, oraciones fúnebres, entierros en el Campo de Marte) ; la colocación de Cenotafios,
estatuas, bustos, escudos. También, hace referencia a las diferentes clases de honores,
algunos ,los de más significación ,y otros menores, como las llamadas <<apoteosis>> . (66)
Tito Livio (59 a.C. - 17 d.C.) fue de los intelectuales que se integró al círculo que rodeó a
Augusto para impulsar una reforma moral desde el campo de la historia. No obstante no fue
uno de esos “cortesanos” que tanto se entusiasmaron con la figura del príncipe. “Fue el
primero en abarcar el conjunto de la historia romana desde la fundación de la ciudad hasta
los primeros años del imperio, en una narración unitaria que se extendió a lo largo de 142
libros de los que sólo quedan 35 y fragmentos de otros.” (67)
Su obra ha sido catalogada como la última de los “analistas” y primera como historiador de la
nueva edad. Retoma la obra de sus predecesores para plantearse como problema cultural
fundamental la justificación de la grandeza y supremacía romana.
Como muy certero puede calificarse el juicio ofrecido por Víctor José Herrero Llorente en su
“Introducción” al Libro I de la citada obra de Tito Livio. Dice el autor que se atreve a resumir
esta historia con esta fórmula: “Obra de arte ,de intención moralizadora destinada a la
glorificación de Roma y sin preocupaciones eruditas.” (69)
La revisión del clásico texto de Tito Livio nos ofrece innumerables ejemplos sobre la temática
heroica. No solamente las amplias y detalladas descripciones de los combates en los cuales el
ejército romano enfrentó a sus enemigos, dan clara idea de como el autor valoraba el
patriotismo de sus conciudadanos. También a través de los comentarios sobre la lucha política
en el seno del Estado y de las ceremonias religiosas, funerarias y cívicas— muy entrelazadas
por lo demás— puede valorarse el peso que tenían estos asuntos en la dinámica histórica
romana.
Veamos algunos de esos ejemplos. A raíz del destronamiento del último rey romano —
Tarquino el Soberbio— se desarrolló una guerra entre los romanos ,gobernados entonces por
magistrados republicanos, y los etruscos que apoyaban al destronado rey. Al terminar un
importante combate en el cual murió Bruto (uno de los cónsules que batalló con ardor desde
el principio) el otro cónsul , Valerio , “mandó recoger los despojos y regresó triunfador a
Roma. Aquí celebró las exequias de su colega con todo el aparato que entonces era posible ;
pero la mayor honra que al difunto se hizo fue la tristeza pública ,notable ,sobre todo , porque
las matronas decidieron guardar luto durante un año , como si se tratase de un padre, a tan
acérrimo paladín del pudor ultrajado.” (71)
Un caso de heroísmo individual relatado con esmero por el historiador es el del soldado
Cocles que formaba parte de un pequeño destacamento que vigilaba un estratégico puente
sobre el río Tíber. Este con gran valentía se puso al frente de sus compañeros los llevó al
combate a muerte con los etruscos que en gran número los atacaban y al final con mucho
trabajo destruyeron el puente para evitar el paso de los enemigos. “Agradecida Roma a tan
insigne valor, erigió a Cocles una estatua en el comicio” así como otras recompensas al
“heroico soldado”. (72)
En estos y en muchos otros casos Tito Livio describe no solamente los combates propiamente
dichos sino también las usuales ceremonias triunfales a las que se hacían merecedores los
valientes que derrotaban a los enemigos de Roma. Recogerlos todos, a más de innecesario,
nos llevaría a extendernos más allá de los límites de este trabajo. Sin embargo para cerrar esta
sección solamente mencionaremos brevemente la reseña de la vida de Marco Furio Camillo,
el ilustre patriota romano.
Cuando éste tomó la ciudad de Veyes después de más de diez años de asedio por los
romanos ,el Senado organizó grandes ceremonias de triunfo, se hicieron procesiones y
sacrificios durante cuatro días y las “matronas” fueron a los templos a dar gracias a dios.
La vida y las hazañas de Camillo así como de muchos otros ilustres jefes romanos sirven de
modelo o referencia para los herederos de esas glorias del pasado.
Los Anales de Cornelio Tácito nos servirán para concluir esta sección sobre los héroes y lo
heroico tal como vieron el asunto los escritores del mundo antiguo.
Tácito quien debió nacer hacia el año 54 y morir después del 117 ha sido catalogado como el
más grande de los historiadores romanos. Tuvo como lema para su historia el escribirla sin
encono ni parcialidad (Sine ira et studio) ,se quejaba en su obra que el tiempo que le tocó
historiar no tuvo la importancia de las gloriosas épocas anteriores. (75)
En su obra puede observarse el desprecio hacia el pueblo (la plebe) y hacia los extranjeros
(relativa xenofobia) ,un acentuado moralismo y una gran calidad literaria. Su obra histórica
toma como modelo las de Tucídides y Salustio, incorporando parlamentos o discursos
atribuidos a los protagonistas. Asimismo, lo enriquece con la historia trágica, la prosa retórica
,la épica; en suma, los “versos heroicos de los antiguos”. (76)
A lo largo de los sucesivos <<libros>> que forman la obra de Tácito (I-VI y XI-XVI) volvemos
a conseguir las usuales referencias a las diferentes ceremonias relacionadas con la muerte,
los combates y otros sucesos. Por ejemplo, los honores propuestos para Augusto al éste
fallecer ,son de gran interés. Se describe su sepelio con los ritos romanos tradicionales y se
deja constancia de la adulación de hacer llamar a su madre Augusta, <<Mater Patriae>>.
Al narrar las ocurrencias de una campaña militar, destácase la recuperación de un peculiar
botín , un “águila” de la legión # XIX perdida en la célebre derrota infligida antes a Varo. Se
rinden además “postreras honras” a los soldados caídos en esos combates y se les hace
desagravio levantando un “túmulo” como gesto de piedad.
En tiempos de Tiberio, se trata de titular a éste como <<Padre de la Patria>> pero rechaza tal
honor. Se levantan si, monumentos a los combatientes caídos, un arco como homenaje a las
enseñas perdidas por Varo ,y finalmente recuperadas por los ejércitos imperiales. Las noticias
sobre la construcción de otros arcos, las descripciones de las ceremonias triunfales
(ovaciones) , el funeral de Germánico , los monumentos levantados en su honor (arcos,
columnas, cenotafios, estatuas) así como los cantos que le dedican cierran estos primeros
libros de la obra. (77)
Continúa el autor explicando cómo fueron los honores a las <<cenizas>> de Germánico, las
ofrendas fúnebres, el recibimiento de su viuda en Roma y otras ceremonias, en especial las
celebradas en los <<rostros>> ,amplio espacio del Foro donde se colocaban los espolones de
las naves vencidas en combate. Era ese el lugar más importante para pronunciar los elogios
fúnebres de rigor.
Son amplias y reiteradas las menciones a los decretos de honores, erección de estatuas
(Pompeyo, Augusto y otros) , el desprecio de Tiberio por esas muestras de servilismo, los
acostumbrados elogios en <<los Rostros>> y otras ceremonias similares. De especial
importancia nos parece la reiterada negativa de Tiberio a aceptar en vida cualquiera de esos
homenajes. Decía este agudo emperador—con gran sabiduría—que prefería no aceptar esos
monumentos de piedra por considerar que la posteridad podía guardar mejor su memoria en
el corazón de los romanos. Decía preferir esos monumentos (los de la memoria) que los otros
como las estatuas.(78)
Finalmente, para no extenuar con demasiados ejemplos similares, sólo se mencionará que en
los restantes “libros” se presentan otras noticias sobre las efigies del César, diversas
ceremonias en los <<Rostros>> , los desfiles luciendo las condecoraciones obtenidas (láminas
metálicas y entorchados) , erección de nuevas estatuas y una referencia a la <<talla
prócer>> y hermosura del ilustre Gayo Pisón. (79)
2.2. El Poema de Mio Cid. (80)
Según el prologuista de la versión del poema que se consultó para la realización de este
trabajo, a éste se le puede considerar el monumento literario más antiguo de la lengua
española, pues conforme a las opiniones de Don Ramón Menéndez Pidal “debió ser escrito
hacia 1140 ,por un juglar anónimo , probablemente de Medinaceli”. Y agrega Salinas , que
esa pieza es para España una venerable y bellísima representación de su literatura heroico-
nacional similar a la poesía épica que produce en Francia La Chanson de Roland y en
Alemania el Nibelungenlied.(81)
En el estudio que realizó don Ramón Menéndez Pidal para trazar “la más completa y viviente
biografía del <<soberbio castellano>> al que sigue paso a paso ,iluminando sus actos y
revelando con nuevas luces el carácter del héroe representativo español que asume el Cid”
(82) nos encontramos con interesantes ideas que ayudan a comprender el sentido de lo
heroico en la historia.
De acuerdo con Menéndez Pidal, “el Cid es un héroe épico de naturaleza singular. Muy poco
o nada sabe la Historia acerca de los protagonistas de la epopeya griega, germánica o
francesa”. De Aquiles, de Sigfrido, de Roldán muy poco se ha logrado saber más allá de su
existencia como personas o de los escenarios donde actuaron “Estas heroicas vidas quedarán
para siempre en la región pura de la Poesía, intangibles para el curioso análisis histórico.
Mas he aquí—dice el autor—que el Cid es héroe de temple muy diverso: desde su mundo
superior ideal desciende para entrar con paso firme en el campo de la Historia, y afronta
serenamente este riesgo ,mayor que todos los peligros de la vida: el dejarse historiar por el
pueblo a quien tanto combatió ,y dejarse manosear por algunos eruditos modernos ,más
incomprensivos que los enemigos a quienes humilló.
Es que el Cid no pertenece ,como los otros héroes , a esas épocas primitivas en que la Historia
aún no se ha desenvuelto al par de la Poesía.” Por los estudios filológicos se ha podido
establecer con claridad los aspectos poéticos o históricos de la vida del Cid, considerando “la
poesía coetánea del héroe, la inspirada en la vida misma de él o en su recuerdo fresco. Y esta
poesía coetánea ,conservada para el héroe español y no para los otros ,nos puede
ayudar ,como complemento de la Historia ,en el conocimiento del carácter heroico (por todo
ello) no hay héroe épico más iluminado por la Historia que el Cid.” (83)
A pesar de cierta <<cidofobia>> y de la incomprensión hacia la figura del Cid, éste es ,sin
duda, el más genuino y representativo héroe español. (84)
Atestiguan lo anterior, sus esfuerzos heroicos en la guerra de reconquista (por ejemplo, la de
Valencia) ,aunque algunos de ellos se perdiesen por posteriores reveses militares. No obstante,
afirma Menéndez , “lo que le da carácter heroico a una empresa ,revistiéndola de la más alta
ejemplaridad ,no es el éxito ,ni menos la duración de los resultados. El héroe no lo es por la
permanencia de sus conquistas o de sus construcciones. En esto le puede superar cualquier
modesto general o magistrado, a quienes toca ejecutar empresas que, como por si solas ,se
realizan de maduras.” Muchos exitosos jefes militares en esas guerras de los tiempos del Cid,
sólo los conoce la erudita Historia; quedan en una especie de limbo donde nadie más los ve
con interés. No ocurrió lo mismo con el Cid, ese que fue al destierro privado del apoyo regio y
regresa para combatir y tomar a Valencia. Este, con su participación personal ,logrando que
Castilla se identificase con su <<campeador>> incomprendido y expatriado pudo elevarse
sobre los reyes a los que tuvo como señores. (85)
Esta revisión inicial de los testimonios que sobre los héroes y lo heroico pueden apreciarse
en algunas obras clásicas de la historiografía y la literatura universal, permite señalar que
este tema ha estado presente prácticamente a lo largo de todo el devenir histórico.
Estas individualidades, a veces vistas como semidioses, recibieron el culto entusiasta de sus
pueblos, y de ello se guardó testimonio en hermosas producciones intelectuales y en
monumentos conservados a través de los siglos.
Completado este primer acercamiento al tema a través de esta revisión de las clásicas obras de
la época antigua; así como del importante poema épico hispano que inmortalizó las hazañas
heroicas del Cid Campeador, continuamos nuestro examen del asunto considerando uno de
los más importantes trabajos escritos del siglo XIX. Nos referimos , al consagrado texto de
Thomas Carlyle : De Los Héroes ,El Culto De Los Héroes y Lo Heroico En La Historia.(86)
Thomas Carlyle.
Como intelectual de su tiempo, Thomas Carlyle (1795 - 1881) expresó con pasión las
angustias de una élite impactada por el terremoto ideológico y político que había sacudido a
Europa y al mundo desde los días de la Revolución Francesa. Este ensayista e historiador
nacido en tierras escocesas , autor y traductor de obras literarias cargadas del Romanticismo
de la época --- el que no abandonaba su preocupación por la tragedia social de los
trabajadores arrastrados a la extrema pobreza, la filosofía idealista, la poesía y las tradiciones
--- , dejó páginas para la posteridad que todavía se leen con admiración.
Su interés por ese fenómeno universal que fue la Revolución Francesa ,de la cual escribió
una amplia historia en dos volúmenes (1837) ,así como por el rico trasfondo de su propio
drama histórico nacional que quedó evidenciado en sus investigaciones sobre las cartas y
documentos de Cromwell, dieron a sus planteamientos filosóficos y literarios una sólida
sustentación.
Sin embargo, como sabemos, Carlyle ha sido reconocido siempre, más que todo, por sus
conferencias de 1840 sobre <<Los Héroes, el Culto a los Héroes y lo Heroico en la
Historia>>(87)
El ilustre conferencista del tema de los héroes no tuvo lo que pudiera definirse como una
posición política “progresista”. No sólo cuestionó con pasión— al igual que Burke— a la
Revolución Francesa , también alabó la Edad Media (algo típico de los Románticos) ,
condenó el parlamentarismo, vindicó la memoria del dios Thor, de Guillermo el Bastardo, de
Knox, Cromwell, Federico II de Prusia, del taciturno dictador paraguayo Dr. José Gaspar
Rodríguez de Francia y de Napoleón Bonaparte. Asimismo, desaprobó la abolición de la
esclavitud y la erección de estatuas (propuso fundirlas y hacer bañaderas con ellas) .No
contento con tales posiciones, declaró su abierta animadversión hacia los judíos y su
entusiasmo por la raza teutónica , Bismark , los cuarteles y la disolución del parlamento, tal
como lo hizo Cromwell en sus días. (88)
Esa concepción individualista de la historia no era reciente, prácticamente era tan vieja como
la historia misma. Y lo sabemos, siempre se había echado mano de la acción de los grandes
hombres: reyes, emperadores, sacerdotes, profetas, guerreros, jefes políticos, filósofos ,y sobre
todo , de los héroes; para explicar la ocurrencia de los hechos en el pasado.
Y para una nación como Inglaterra, que pasó de la mera aspiración a ejercer la hegemonía
mundial a la realización de tal destino como potencia imperial del siglo XIX, era fundamental
desarrollar una historiografía cuyo centro estuviese conformado por expresiones nacionales
como el proceso transformador dirigido por Cromwell y sus herederos.
Un discurso historiográfico que hiciera entroncar el peculiar proceso británico con las
grandes corrientes de la Historia de Occidente y de la remota Europa del Norte, así como con
los antiguos mitos y leyendas del mosaico de pueblos que había contribuido a estructurar el
moderno Reino Unido; era una de las más necesarias herramientas en las manos de la
dirigencia político-intelectual de la entonces llamada “dueña de los mares”.
En medio del proceso de estructuración y consolidación de los modernos estados nacionales
durante el siglo XIX, Inglaterra asumió un proyecto nacional que pasaba por su propia
integración como Estado de monarquía parlamentaria sobre la base de una sólida economía
capitalista en plena expansión, que a su vez necesitaba, estabilidad política interna y creciente
control de los mercados y fuentes de materias primas del mundo.
Esa Inglaterra, que se veía a si misma como una metrópolis sin verdaderos rivales que
pudieran desafiar con éxito su descomunal poderío económico y político-militar, desarrolló
también en la esfera de la cultura una actitud arrogante, que la alimentaba el prodigioso
florecer de los aportes de sus científicos, técnicos, filósofos, literatos, historiadores,
economistas y hombres de letras en general. Fue en ese ambiente, donde se incubó el ideario
de Carlyle, mundo de la razón, mundo de una sociedad que sólo parecía tener tiempo y ojos
para lo concreto, inmediato y rentable. A ese mundo , un tanto deshumanizado, le habló
Carlyle para convencerlo sobre lo que debía rescatarse y conservarse para nutrir
adecuadamente ese espíritu inglés, el alma de un Estado Nacional que aspiraba a seguir
dominando el mundo.
Inició Carlyle su histórica disertación proponiéndose decir “algo sobre los Grandes Hombres ,
cómo surgieron en el tráfago del mundo ;cómo moldearon la historia del mundo; qué ideas
tuvieron de ellos los hombres ; qué hicieron.” Planteó que iba a tratar de los Héroes , de su
acogida y de sus obras ; es decir, lo que llamaba el Culto de los Héroes y lo Heroico en la
historia. Estas ideas iniciales lo llevaron a señalar que la Historia Universal ,el relato de lo
que ha hecho el hombre en el mundo, es en el fondo la Historia de los Grandes Hombres.
”Fueron los jefes de los hombres; los forjadores , los moldes y ,en un amplio sentido ,los
creadores de cuanto ha ejecutado o logrado la humanidad. “ (89)
Se considera el Culto de los Héroes como gran elemento modificador en aquel antiguo
sistema de pensamiento. Lo que se llamó “compleja maraña del paganismo brotó de muchas
raíces : toda admiración ,adoración de una estrella u objeto natural, era raíz o fibra de raíz ;
pero el culto de los héroes es la raíz más profunda , la raíz - madre que nutría todas las demás,
desa rrollándolas grandemente ... el Culto del Héroe ,la admiración cordial ,sumisa, ferviente,
ilimitada, sentida por una noble y divina forma de Hombre ; ¿ no es ése [se pregunta Carlyle]
el germen del Cristianismo ? El más sublime de todos los Héroes es Uno, Uno que no
nombramos ahora ....” (90)
De acuerdo con la opinión del expositor, “la sociedad se basa en el Culto del Héroe” por lo
que todas las jerarquías que sustentan la asociación humana son sagradas, esto es, la
Heroarquía. “Duque significa Dux, Conductor, King (rey) es contracción de Kón-ning,
Kanning, compuesto de Know (saber) y Can (poder) , o sea el que sabe y puede”. En todas
partes hay Culto del Héroe; o “reverencia, y obediencia a los hombres grandes y sabios”. Y
agrega, que este Culto del Héroe ha decaído o desaparecido por discutibles razones. Una de
ellas es que al mostrarle a los críticos “un gran hombre ,un Lutero; inmediatamente
comienzan a explicarlo, como dicen, no a venerarlo, sino a medirlo, acabando por
empequeñecerlo. Fue hijo de una época, afirman ....” Considera que una prueba de la
pequeñez humana es la incredulidad en los grandes hombres y por ello reitera que “la
Historia del Mundo es la Biografía de los Grandes Hombres ... el Culto del Héroe existirá
mientras el hombre exista.” (91)
Desde Odín hasta Samuel Johnson “desde el divino fundadordel Cristianismo hasta el
decrépito Pontífice del Enciclopedismo, el Héroe ha sido venerado en todas partes. Así será
siempre. Todos amamos a los grandes hombres; los amamos y nos prosternamos
humildemente ante ellos ,porque es lo que más dignamente nos humilla.” (92)
El Tiempo.
Este es un gran poder, ya que cada gran hombre “decuplica su grandeza cuando muere”.
Gracias a esa cámara oscura ampliadora que es la tradición; las cosas se hacen grandes en la
memoria y en la imaginación ,como consecuencia del amor y la veneración del corazón. La
oscuridad, la ignorancia, la ausencia de fechas, certificados, archivos y mármoles. (93)
Héroe como Dios, sino inspirado por él, como profeta. Es la segunda fase del Culto al
Héroe... el Culto al Héroe varía continuamente ;cada época lo siente a su modo, siendo difícil
rendirlo acertadamente . Lo que anima el conjunto de sentimientos de una generación es
ciertamente rendirlo como es debido.” (94)
Al considerar el Héroe como Poeta, Carlyle señala que tanto el Héroe-Divinidad como el
Héroe-Profeta, sólo surgieron en remotas épocas pues “la Divinidad y Profecía pasaron para
siempre, teniendo que considerar al Héroe con el carácter menos ambicioso y menos
discutible del poeta, carácter que no perece. El poeta es figura heroica propia de todas las
épocas ....”(97)
Recuerda que los grandes hombres han sido llamados héroes , profetas o poetas, de acuerdo
con la época, el lugar y esfera de sus actuaciones. El “Héroe puede ser Poeta, Profeta, Rey,
Sacerdote, lo que queraís , según el ambiente en que nazca.”(98) .
Pareciera que a través del tiempo ha decrecido el aprecio por los grandes hombres , pues
primero se vio al Héroe como divinidad, luego como profeta y más tarde como poeta.
”Primero Dios, después inspirado por él, ahora como Poeta” ,éste ,con su palabra, buena
versificación y genialidad. Y aunque no parezca, todavía el hombre admira el don heroico que
ha surgido en diferentes épocas con distintas denominaciones. (99)
”la mayoría niega que haya en los grandes hombres algo realmente venerable. Creencia
funesta, fatal, que conduce a perder la esperanza en los hechos humanos. No obstante, fijaos
en Napoleón, teniente de artillería corso; eso es lo que podía ostentar, pero fue obedecido,
adorado en cierto modo como no consiguieron serlo todos los que ceñían diadema en el
mundo.”
Otro ejemplo fue el escocés Burn asediado por todos los que querían oírle. (100)
Considerando el valor de Shakespeare, dice Carlyle, que no se cansará de afirmar que a pesar
del lastimoso estado en que se halla el Culto de los Héroes ,debe considerarse lo que
representaba Shakespeare. Sostiene que renunciaría a cualquier inglés o a un millón de
ingleses, antes que a ese aldeano de Stratford. Ese que se lo imagina “como astro radiante que
centellea muy alto sobre todas las Naciones de Ingleses durante un milenio.”
Todos dirán: “Sí, este Shakespeare es nuestro ; nosotros lo produjimos , hablamos y pensamos
debido a él ; somos de su misma sangre; estamos emparentados con él.” (101)
Es fundamental para una Nación “tener una voz que hable por ella, producir un hombre que
exprese melódicamente lo que siente su corazón”. Un ejemplo es el de la pobre Italia
destrozada y dividida. Esta es realmente “una, porque produjo un Dante y puede dejar oír su
voz”. En cambio el poderoso “Zar de todas las Rusias” que tiene que luchar por mantener
unido ese vasto territorio no tiene voz. El “Pueblo que tiene un Dante está unido como no
puede estarlo ninguna muda Rusia”. (102)
En la cuarta conferencia: el héroe como sacerdote, tomando como modelo a Martín Lutero,
Carlyle explicó el tema del <<Gran Hombre como Sacerdote>>. Dijo que se había esforzado
por “mostrar que la esencia de todos los Héroes es idéntica” ;esto es, que cuando había un
alma grande que entendiese la significación divina de la vida surge el Héroe. El “Sacerdote
[afirma], es una especie de Profeta .... es el Capitán espiritual del pueblo ...”(103).Y agregó,
que consideraba a Lutero “tan iconoclasta como los demás Profetas” pues lo que caracteriza
siempre al Héroe “es la realidad , lo que son las cosas y no sus apariencias”, para él, la
“hueca manifestación es intolerable y detestable.”(104)
Admirado ante lo que es la autenticidad en el Culto al Héroe Carlyle nos dice que “si el
hombre se basta a sí mismo, es original , sincero, o como queramos llamarle ,eso es lo que
menos le indispondrá a reverenciar y creer en la verdad de otro, pues lo que hace es
disponerlo ,acuciarlo invenciblemente a no creer en fórmulas muertas de otros, en
supercherías y ficciones. El hombre abraza la verdad con los ojos abiertos, porque están
abiertos; ¿ necesita acaso cerrarlos para amar a su Maestro ? El Héroe-Maestro
únicamente puede ser amado con inmensa gratitud y genuina lealtad de espíritu por aquel
a quien ha librado de la tiniebla haciéndole gozar de la luz. Ese es el verdadero Héroe y
domador de serpientes digno de toda reverencia .... el Culto al Héroe no perece ,no puede
perecer, pues la Lealtad y la Soberanía son eternas, porque se basan en realidades y
sinceridades, no en imitaciones y apariencias.” (105)
Al enjuiciar el autor cuál es el papel del Héroe en los nuevos tiempos, dice que desde los dias
iniciales pocas veces ha sido tan difícil vivir heroicamente, por no ser época de fe o de héroes.
El heroísmo parecía desaparecer de la mente del hombre para siempre , surgiendo en cambio
la vulgaridad, el formulismo y la trivialidad. “Pasó la época de los milagros,” o no daba
señales de vida en un mundo estéril sin maravilla, sin grandeza y ateo. (109).Al horrorizarse
de ese nuevo tiempo - el siglo XVIII - lo llama escéptico , y dice, creer poner el dedo en la
llaga de ese “mundo hipócrita, ateo, falseador” que fue lo que causó las plagas sociales,
revoluciones y constitucionalismos. Tal siglo XVIII lleno de incredulidad era una
excepción ,por tanto—profetizaba Carlyle -- “el mundo será sincero una vez más ; mundo
creyente que contará muchos Héroes ; mundo heroico; entonces alcanzará la victoria , mas
no hasta entonces”.(110)
En la sexta conferencia: El Héroe como Rey, toma como ejemplos a Cromwell y Napoleón; y
dice que ha llegado “a la última forma del Heroísmo: La denominada Realeza (ésta) es el
resumen de todas las figuras del Heroísmo; en él se encarna el Sacerdote, el Maestro, toda
dignidad terrena o espiritual que se supone reside en un mortal para mandar sobre nosotros,
enseñarnos contínua y prácticamente, indicarnos qué tenemos que hacer cada día , y cada
hora. Se le llama Rex (regulador) ,Roi, siendo más apropiado su nombre inglés King (Kóning)
que significa Can-ning, es decir, Hombre Capaz.” (111)
Según Carlyle podía obtenerse el gobierno perfecto si se lograba encontrar al hombre más
capaz existente en el país y se le elevaba al supremo sitial reverenciándolo lealmente; “pues ni
las urnas electorales, elocuencia parlamentaria , sufragios, constitución ni otro mecanismo ,
podrán perfeccionarlo. Más capaz [dice] quiere decir de corazón más sincero, justo y
noble ...”(112). Considera además, que “el Culto de los Héroes en estas circunstancias es un
hecho inapreciable, el más consolador que ofrece el mundo”. Asimismo, se contaría con esto:
“la certidumbre de que surgen los Héroes ;la facultad, la necesidad de reverenciarlos cuando
los descubrimos, que brilla como Estrella Polar a través de los nubarrones de humo y polvo,
de todo desmoronamiento y conflagración . (113)
Afirma que “el Culto de los Héroes hubiera sonado de extraño modo en los oídos de los
factores y luchadores de la Revolución Francesa. Ni los reverenciaban ni esperaban , ni
creían ni deseaban que los Grandes Hombres apareciesen de nuevo” puesto que la Libertad e
Igualdad no los necesitaba. Por tanto, “el Culto de los Héroes, la reverencia rendida a tales
autoridades ,ha resultado falsa”. (114)
Cree firmemente Carlyle que “el Culto al Héroe existe eternamente y en todas partes , no
sólo la lealtad ,extendiéndose desde la divina adoración hasta los más bajos menesteres
prácticos de la vida. Si la inclinación ante el hombre no es mero simulacro, en cuyo caso es
preferible no practicarla, es Culto de los Héroes, aceptación de que en la presencia de nuestro
hermano hay algo divino ....” (115).Y se pregunta, “ ¿ No podemos decir que, mientras tantos
de los últimos Héroes actuaron como revolucionarios ,todo Grande Hombre, todo hombre
auténtico , es hijo del Orden por su naturaleza y no del Desorden? La actuación del hombre
veraz en las revoluciones es trágica: parece anarquista, porque el doloroso elemento de la
anarquía le abruma a cada paso, cuando repudia y odia la anarquía con toda su alma. Su
misión es el Orden, como la de todos los hombres. Viene a regular y encauzar lo
desordenado , lo caótico : es el misionero del Orden ....”(116)
Sostiene que el hombre necesita siempre algún Cromwell o Napoleón para terminar con el
sansculotismo. Curiosamente, asombra que en una época cuando el “Culto de los Héroes”
estaba en entredicho surgiera y obrara éste de manera admirable. Y cuando “la Realeza
parecía muerta y abolida ,surgieron Cromwell y Napoleón como reyes . La historia de esos
hombres es lo que tenemos que considerar como última fase del Heroísmo. Volvemos a los
remotos tiempos; en su historia preséntase de nuevo la manera cómo se hacían los Reyes ,
cómo surgió la Realeza.” (117)
Por el contrario, dice, “el mundo de estúpidos lacayos tiene que ser gobernado por el Héroe
Fingido, por el Rey que sólo tiene de rey sus galas”. En síntesis ,o sabemos reconocer al
Héroe—verdadero Gobernante y Caudillo—cuando tenemos esa oportunidad , o seguirán
gobernándonos los que no tienen estatura heroica, “aunque pongamos urnas electorales en
cada esquina, porque nada remedian. “ (118)
Finalmente, refiriéndose a Napoleón, considera que ese es el último Grande Hombre. Aquí
tienen fin las andanzas a través de tantos lugares y épocas , en busca de Héroes. Siente
manifestar que en ello encontró placer mezclado con inmenso dolor. El tema es
importante ,grave y, para quitarle gravedad, lo tituló Culto a los Héroes. Cree penetra
profundamente en el secreto de la conducta de la Humanidad y vitalísimos intereses del
mundo, por lo que es digno explicarlo.(119)
La más reciente literatura sobre el problema del héroe, las religiones y los mitos nos ayudan a
comprender mejor los planteamientos de los autores y obras que en los siglos anteriores
trataron directa o indirectamente sobre el culto a los héroes.
Iniciamos esta nueva sección del trabajo incorporando los argumentos de una variada gama
de escritores cuyas obras están centradas en la temática heroica y de los mitos pues
consideramos que detrás del culto heroico existe algo más que simples ceremonias cívicas.
Para cumplir esta tarea, primeramente, consideraremos los aportes de David A. Brading (120)
pues ellos representan un enlace temático natural dentro de esta síntesis inicial.
Brading ,considerando las ideas esbozadas por Carlyle en sus conferencias de 1840 (Los
Héroes, el Culto a los Héroes y lo Heroico en la Historia ) ,afirma que en esos explosivos
pronunciamientos se encuentra “la apoteosis de la teoría romántica de la Historia y el
Genio,
doctrina que Tolstoi atacó con incomparable vigor en la La Guerra y la Paz, aunque es de
notar que el culto a los grandes hombres precedió a la era romántica y se constituyó como
parte integral de la tradición humanista. De Maquiavelo y Bruno a Montesquieu y Rousseau,
el republicanismo clásico insistió en el deber de todos los ciudadanos de servir a la patria ; en
efecto, era sólo mediante la participación en la vida pública que el hombre encontraba el foro
apropiado para el ejercicio de la virtud. En el Senado, en el campo de batalla y en su
estudio ,el estadista buscaba obtener reputación y gloria a través del servicio a la patria ,listo a
sacrificar la vida por su causa. “ (121)
Se agrega que este concepto del héroe republicano tuvo su apogeo durante el movimiento
neoclásico de finales del siglo XVIII; la pintura de David plasmó su esencia en obras como el
<<Juramento de los Horacios>> .Tal estilo y culto lo hicieron suyo los jacobinos ; “su
simplicidad dórica y sus virtudes estoicas dieron forma histórica y base moral a su religión
republicana.” En esta tradición podía verse “el concepto del Legislador ,padre fundador del
Estado, figura ambígua que reunía las cualidades del príncipe y del profeta.” Tanto
Maquiavelo como Rousseau se interesaron en el papel jugado por “Moisés, Solón y Licurgo,
quienes promulgaron leyes perdurables para sus pueblos.” .Al considerarse el carácter
secular de la tradición republicana de Hispanoamérica, se destaca que fue un humanista
educado en Italia ,Francisco López de Gómara, el primero en proclamar abiertamente el
triunfo las grandes hazañas de los conquistadores.(122)
sus fuentes mismas, y siempre parece haber considerado sus propios actos desde esta
perspectiva. La famosa escena que protagoniza con su tutor en el Monte Sacro de Roma ,
donde el joven Bolívar juró liberar a su patria de la tiranía española, obviamente tuvo como
modelo alguna pintura neoclásica. El hecho de que esto fuera precedido por una
peregrinación a la ciudad natal de Rousseau y por el estudio de las obras de Maquiavelo en
Florencia sirve para demostrar el carácter ideológico de ese momento histórico.” (123)
En el caso de Argentina, el general Bartolomé Mitre ,mentor de Sarmiento ,fue quien intentó
proporcionarle a su patria “héroes republicanos con sus biografías de Manuel Belgrano y
José de San Martín.” El primero de ellos pretendía justificar el “proyecto de la élite
revolucionaria de Buenos Aires de 1810” y por tanto se convirtió en una historia general del
movimiento independentista .Por el contrario la “Vida de San Martín ,publicada en 1885 -
cuando en Argentina se gozaba de estabilidad política y de un crecimiento económico
acelerado - fue un manifiesto ejercicio de canonización patriótica diseñado para dotar a la
república de un héroe inmaculado, cuya esencia fuera su servicio desinteresado a la causa de
la independencia.”
Más bien como Cromwell, San Martín habitaba el “imperio del silencio” y aborrecía la
retórica y la ceremonia de los políticos insurgentes. Como soldado profesional evitaba la
intriga y despreciaba la vanidad de otros libertadores. Mitre presentaba a su héroe como una
“estatua viva de las fuerzas equilibradas” .Al hacer el contraste entre San Martín y Bolívar ve
al primero muy realista en cuanto a las limitaciones del proyecto político y al segundo como
un visionario obseso por su propia gloria . En tal comparación, “hay un eco de la preferencia
de Carlyle por Cromwell sobre Napoleón.” (124)
“el tema central de la historiorafía sudamericana del siglo XIX fue la épica patriótica de la
lucha por la independencia. Era un tema que demandaba más la narrración de batallas y
campañas militares que el análisis de las fuerzas sociales y económicas. En el contexto de las
repúblicas recién fundadas sólo era de esperar que los historiadores se concentrarían en las
hazañas de los grandes hombres que presidieron la fundación de sus respectivas
patrias ,quienes generalmente eran presentados como héroes neoclásicos, que actuaban como
agentes o ejecutores de la Providencia y del <<orden natural de las cosas>> ...” (125)
Al considerar el caso de México, plantea que ello demuestra que no todos los países de
Hispanoamérica eligieron honrar a sus generales. Aquí ”desde un principio ,se prefirió a los
líderes clericales de la insurgencia de 1810, Miguel Hidalgo y José María Morelos sobre el
libertador español Agustín de Iturbide y ellos fueron los enaltecidos por los primeros
historiadores del movimiento de independencia. Que ambos fueran clérigos rurales y
dirigieran ejércitos campesinos que marchaban bajo el estandarte de Nuestra Señora de
Guadalupe indica de manera fehaciente las grandes diferencias entre México y Sudamérica.
Además ,los ideólogos del movimiento ,Fray Servando Teresa de Mier y Carlos María de
Bustamante, rechazaban los ideales abstractos de la ilustración y apelaban a la historia
invocando la grandeza de México antiguo como la gloriosa fundación de su patria criolla,
énfasis que los condujo a incluir a Moctezuma y Cuauhtémoc, junto con Hidalgo y Morelos ,
en un panteón común de víctimas patrióticas de la tiranía española.” (126)
En ese sentido, no fue sino “hasta la Reforma de 1850 que los liberales mexicanos parecen
haber asimilado las doctrinas del republicanismo clásico y haberse inspirado en los ideales y
el ejemplo de la Revolución Francesa.” .Los políticos fueron influenciados por las ideas de
Michelet, Quinet y Victor Hugo; las que evidentemente asimilaron y aplicaron. Ellos
utilizaban un vocabulario religioso con “los héroes y eventos nacionales buscando crear una
religión cívica ,dotada con su propio panteón de santos ,calendario de fiestas y edificios
públicos decorados con una estatuaria apropiada. Pero en este caso el nacionalismo estaba
revestido de un estilo neoclásico más que de la antigua usanza y la <<patrie>> se definía no
por apelación a la historia sino más bien invocando los ideales radicales de la Revolución y la
República.” (127)
Como cierre ,es importante destacar que la opinión de Brading sobre la relación que hubo
entre el culto heroico y la acción político-ideológica de los republicanos liberales desde el
siglo XVIII; no coincide con lo afirmado por Carlyle en el sentido de identificar a esa época
de la Revolución Francesa (Igualdad, Libertad) como antagónica con algún tipo de culto a los
héroes. También resulta curioso ese entusiasmo de Carlyle por Napoleón, en cierta manera
consecuencia directa de esa—por él—detestada Revolución Francesa, con toda su carga de
<<sanculotismo>> , anarquía y ruptura con el pasado.
Otro importante punto de vista sobre el asunto es el del autor Mircea Eliade. (128)
Plantea éste en su obra — la que ha sido catalogada como una original Filosofía de la
Historia — una interesante explicación sobre lo que son los “arquetipos” , el importante
papel jugado por los dioses, los antepasados y los héroes; aunque de ellos ,en la tradición
griega, “sólo los héroes conservan su personalidad”. Y agrega que “se considera que los actos
religiosos han sido fundados por los dioses, héroes civilizados o antepasados míticos”. En
fin ,planteamientos como el del origen del héroe mítico, el héroe como modelo arquetípico y el
origen sobrenatural del héroe; llevan al autor a señalar que “el mito es lo último, no la
primera etapa en el desarrollo de un héroe”.(129)
Se ha señalado que los romanos supuestamente no tenían una mitología propia, pues la de
muy viejo origen o heredada de los indoeuropeos fue destruída en el nivel teológico; no
obstante, esos mitos prosperaron en forma de Historia.
En la ideología romana se observan dioses poderosos pero sin aventuras, esto es, “una
historia de los orígenes que despliega aventuras significactivas de hombres que, por su
carácter y su función , corresponden a dichos dioses.” (132)
En el denso ensayo de Dumézil, éste intenta explicar la compleja trama de los reyes -
campeones y los dioses-héroes y sus aventuras (en La India) , el papel jugado por Tulio
Hostilio (rey militar) , los tres pecados de Heracles ,único héroe panhelénico ; y , la epopeya
escandinava tan rica en héroes. (133)
La interpretación sobre las epifanías, maniquíes y signos; lo llevan a definir “los momentos
de una carrera heroica” a través de las hazañas y proezas de los que devienen en héroes
nacionales. Y agrega que “en todas las civilizaciones ,la hazaña concede un buen lugar
. Militar o deportiva, escénica y a veces hasta intelectual, realizada en provecho o bajo los
colores de la colectividad, crea, aun en nuestro tiempo, un héroe nacional .... no era de otra
manera en las socieades arcaicas, notablemente por las vías de la guerra. Mucho antes de
Plutarco y sus grandes capitanes, una carrera de guerrero no era sino una serie de
promociones fundadas en una sucesión de proezas.” (134)
Estas palabras de la mitología hindú (citadas por Dumézil) definen muy bien la idea que
muchos pueblos han tenido, y tienen , sobre los héroes: “El cielo es residencia de los héroes
de noble conducta, que no vuelven la espalda en las batallas.” (135)
Una búsqueda o análisis similar la encontramos en la obra de Furio Jesi (137) .Para este
estudioso de los mitos y los héroes, la propia palabra mitología (mytho y lógos) establece una
mezcla de contrarios como la que está presente en la Ilíada donde se observan las diferencias
entre el héroe que sobresale con sus acciones y el que lo hacía con la palabra. Lograr el
equilibrio entre esas dos capacidades era la meta de la educación impartida por Fénix a
Aquiles “para que el joven héroe llegara a ser al mismo tiempo <<buen hablador>> ... y
<<hacedor de obras>> ... el hombre completo tenía que saber juntar la acción ,simbolizada
por la destreza en el uso de las armas, con el talento de actuar con la palabra <<en los
consejos ,donde los hombres noblemente se afirman>> ,talento en el que sobresalió Odiseo, el
héroe de <<de multivario discurso>> ... y que fue también valeroso guerrero. (...) La
elocuencia del héroe homérico, <<buen hablador>> como Odiseo y como Néstor, se nutre ,por
lo menos, de dos facultades : la astucia para emplear las palabras justas en el momento
preciso—en lo que destacó Odiseo—y la capacidad de utilizar solemnemente un repertorio de
historias preexistentes que confieren al disertante y a sus argumentos la autoridad de un
pretérito consagrado—en lo que se destacó Néstor -- .La elocuencia del anciano Néstor es,
pues, diversa de la de Odiseo”.(138) “Un considerable número de los sucesos narrados por los
grandes evocadores de la tradición mítica ,como Néstor ,revelan un fondo iniciático. Las
mismas vicisitudes generales de la Ilíada y de la Odisea presentan un intenso colorido
iniciático. La continuidad de la existencia heroica que hace persuasivos y autorizados los
parlamentos de Néstor refleja la perenne relación entre el reino de los vivos y el reino de los
muertos, que en el poema genealógico de Hesíodo deviene relación eterna ,de dimensiones
cósmicas ,entre el tiempo del mythos y el tiempo de la historia ...” (139)
Completa el análisis realizado por Jesi sus planteamientos sobre el mito a través de los
sucesivos períodos de la historia de la cultura universal: Del renacimiento pagano a Vico; la
Ilustración, el romanticismo, el historicismo; hasta concluir con los debates intelectuales
contemporáneos.
Otto Rank en su obra El Mito del Nacimiento del Héroe (140) nos aporta una interpretración
que debemos considerar como fundamental para la cabal comprensión de este tema. En este
trabajo se aborda esta temática desde el campo del psicoanálisis precursor de las teorías de
Jung.
Plantea Rank que en las más importantes civilizaciones (las de Mesopotamia, Egipto, la India,
Iran, Palestina, Grecia y Roma junto con la de otros pueblos) ; glorificaron desde sus inicios
a los “héroes, reyes y príncipes míticos, fundadores de religiones, dinastías, imperios o
ciudades, en suma ,a sus héroes nacionales ,a través de una cantidad de leyendas y relatos
poéticos.” Tales relatos , que consagraron las hazañas de esas figuras , aunque elaborados y
transmitidos de manera independiente , tienen “una desconcertante similitud y hasta, en
parte, una correspondencia exacta”. (141)
Entre los héroes considerados en el citado estudio están Sargón, Moisés, Karna, Edipo, Paris,
Télefo, Perseo, Gilgames, Ciro, Tristán, Rómulo, Heracles, Jesús, Sigfrido y Lohengrin.
El recuento de las acciones o la descripción de las características de cada uno de ellos no sería
necesario ahora para afirmar que sus figuras heroico-mitológicas forman parte fundamental
del acervo espiritual de sus pueblos y de nuestra civilización.
Cerramos esta revisión de los aportes de estos autores sobre el tema presentando algunas
ideas de Joseph Campbell. (142)
Este autor al igual que Rank escribió una notable obra donde aplicando los postulados del
psicoanálisis—especialmente los de la escuela de Jung—penetra en el importante campo de la
mitología, las leyendas y las aventuras del héroe.
Para definir al héroe , dice el autor , que éste “es el hombre o la mujer que ha sido capaz de
combatir y triunfar sobre sus limitaciones. (agregando que) el héroe ha muerto en cuanto
hombre moderno; pero como hombre eterno --- perfecto, no específico, universal --- ha vuelto
a nacer. Su segunda tarea y hazaña formal ha de ser (como Toynbee declara y como todas las
mitologías de la humanidad indican) volver a nosotros transfigurado y enseñar las lecciones
que ha aprendido sobre la renovación de la vida.” (143)
El Héroe y el Dios.
“El camino común de la aventura mitológica del héroe—dice Campbell—es la magnificación
de la fórmula representada en los ritos de iniciación: Separación - Iniciación - Retorno ,que
podrían recibir el nombre de unidad nuclear del monomito. El héroe inicia su aventura desde
el mundo de todos los días hacia una región de prodigios sobrenaturales ,se enfrenta con
fuerzas fabulosas y gana una victoria decisiva ; el héroe regresa de su misteriosa aventura
con la fuerza de otorgar dones a sus hermanos. Prometeo ascendió a los cielos , robó el fuego
de los dioses y descendió. Jasón navegó a través de las rocas que chocaban para entrar al mar
de las maravillas, engañó al dragón que guardaba el Vellocino de Oro y regresó con el
vellocino y el poder para disputar a un usurpador el trono que había heredado. Eneas bajó al
fondo del mundo ,cruzó el temible río de los muertos, entretuvo con comida al Cancerbero ,
guardián de tres cabezas ,y pudo hablar ,finalmente , con la sombra de su padre muerto.
Todas las cosas le fueron reveladas: el destino de las almas, el destino de Roma, que estaba a
punto de fundar, y de qué manera podría evitar o soportar todas las aflicciones. Volvió al
mundo a través de una puerta de marfil a realizar sus deberes. Una representación
majestuosa de las dificultades del oficio del héroe y de su sublime importancia cuando es
concebida profundamente y llevada a cabo con solemnidad , la encontramos en la leyenda de
las grandes batallas del Buddha, el joven príncipe Gautama Sakyamuni ...” (144)
Para comprender el devenir de “los portadores simbólicos y mundiales del destino de todos los
hombres” débese considerar que éstos completan un ciclo desarrollado a través de una
“separación” o partida; la etapa de las pruebas y victorias de la iniciación y el regreso y la
reintegración a la sociedad. Y agrega Campbell, “el complicado héroe del monomito es un
personaje de cualidades extraordinarias. Frecuentemente es honrado por la sociedad a que
pertenece, también con frecuencia es desconocido o despreciado.” (145)
Finalmente, afirma el autor “el lugar en que ha nacido un ,héroe , donde ha realizado sus
Esta apretada síntesis de los aportes de los autores más recientes que han estudiado el
problema, nos lleva a confirmar nuestro planteamiento fundamental: El tema del héroe ha
sido desde la más remota antigüedad hasta los actuales debates uno de los más apasionantes
elementos del discurso historiográfico y de buena parte de la literatura universal. En nuestra
próxima sección abordaremos el asunto en su expresión más concreta: el culto heroico en la
historiografía venezolana, visto a través de la reflexión teórica de su más importante
estudioso.
Este sostiene que el culto a Bolívar ha sido la fuente de la legitimidad nacional venezolana y
ello nos ha conducido a confundir tal culto con la idea de nación, patria y república;
quedando igualmente supeditada la conciencia nacional y la conciencia histórica al
mencionado culto.
De acuerdo con la opinión de Carrera,el retorno a lo que fue el alma nacional venezolana es
lo fundamental para los que él llama pontífices del patriotismo (siendo Eduardo Blanco su
máximo representante) ;determinando ésto una evasión hacia el pasado y a una <<Historia
Patria>> llena de excesos, donde esa patria se concibe como una herencia que ha sido
dilapidada.
Finalmente, cita el autor a Laureano Vallenilla (hijo), quien habló del <<gorrear a los
héroes>> muy propio de los venezolanos; la certera crítica que hizo Eddie Morales Crespo
sobre la supuesta influencia de Carlyle en los historiadores de Venezuela y a la afirmación de
Mariano Picón Salas sobre nuestra lamentable vocación de pueblo sepulturero, siempre
mirando hacia atrás.
Sin duda que todas las opiniones contenidas en el ensayo clarifican mucho el problema que
pretendemos estudiar. Tales ideas expresan una posición que enfrenta a la historiografía
tradicional que gira en torno a esos paradigmas de virtud, a esos ejemplos edificantes para
escolares y soldados.
Consideramos que tal análisis penetra en el núcleo del problema que aspiramos a dilucidar,
puesto que rompe con mitos y prejuicios muy arraigados en el conservador medio intelectual
venezolano, que vive anclado en el pasado y se niega a enfrentar urgentes tareas como la de
estudiar el mundo contemporáneo desde la perspectiva de la Historia como ciencia social.
(149)
Para una mejor comprensión de la tesis del autor ahora examinado, anexaremos en las
páginas siguientes las ideas fundamentales del citado ensayo.
En relación con el papel jugado por el culto a Bolívar en la formación del estado y la nación,
plantea Carrera que “Instaurado . para dar legitimidad (al) estado nacional en circunstancias
[En este mismo sentido, continúa el razonamiento] , “la explicación del nacimiento de la
nación-patria-república no es una simple e inocua muestra de exaltación literaria ,ni es, en la
historiografía venezolana, un plano explicativo que se superpone a otro, más apegado éste al
estudio de los procesos sociales. Es la explicación , y cualesquier otras consideraciones son
complementarias, marginales o en todo caso no afectan la vigencia de esa explicación,
obviamente primordial para el culto.” (151)
Simón Bolívar, es lógico que conciencia nacional y conciencia bolivariana luzcan como una
sola y misma cosa, y es lógico igualmente que cualquier esfuerzo crítico ejercido en este
sentido tenga que ver con todos los aspectos de esa amalgama de valores , enfrentando su
nada reducida carga de prejuicios derivada de esa errónea sinonimia.” (153)
Asimismo, considerando lo concerniente a la conciencia nacional y la conciencia histórica, se
pregunta Germán Carrera Damas, “si sería legítimo decir que la historia de un pueblo es, en
sí y en tanto conocimiento de pasado , una toma de conciencia de la propia existencia como
pueblo”. Si este planteamiento es verdadero “la vida de un pueblo sería a la vez , su ser
histórico y el conocimiento de ese ser histórico”, por tanto ,el pasado y el presente se unirían
en un constante devenir. “La historia sería, entonces, su propia madre” .El gran interés por
conocer su propio ser histórico, y los esfuerzos realizados por convertir esa “conciencia en
factor activo de la vida de los pueblos”, significa para nuevos pueblos como el venezolano,
“carácteres de lucha por la propia existencia”.(154)
Mientras las antiguas sociedades pueden autocontemplarse de manera serena, muy diferente
es el cuadro que presentan aquellos pueblos de reciente formación histórica, cuya
organización nacional es producto de un acto controvertido y aún más reciente . “Para un
pueblo tal, la formación de la conciencia nacional reviste carácteres de tarea vital. Su firme
adquisición significará la definitiva estructuración histórica, porque un pueblo en posesión de
tal forma de conciencia podrá ser sojuzgado pero jamás destruido. “ (155)
entendida en Venezuela como función de. una historia cuya misión consiste en transmitir el
legado heroico y reivindicar con propósito ejemplarizante, a quienes constituyeron ese legado.
El punto de partida de tal concepción de esta función de la historia es inobjetable, si lo
situamos en el marco de las consideraciones precedentes ; el error comienza cuando se le
estima como la misión de la historia, porque su cumplimiento ni agota las posibilidades del
conocimiento histórico, ni es siempre compatible con los requisitos de la formación del
conocimiento histórico. Eduardo Blanco expuso con precisión en que consiste esta función de
la historia y cual es su alcance: <<Trasmitir a nuestros hijos las tradiciones épicas de las
pasadas glorias de la patria ,es un deber sagrado, que nos impone juntamente con el amor al
suelo en que nacimos ,el noble orgullo de ofrecer ante el mundo la eximia ejecutoria de
nuestra nacionalidad, en la epopeya que nuestros padres escribieron con su sangre y que no
cede en brillo ni grandeza a la más alta que pueden ostentar otras naciones.>> Conciencia del
pasado histórico ,orgullo de lo realizado , igualación con paradigmas, son todas
manifestaciones de un mismo propósito: apoyar en la historia el esfuerzo de formación
nacional” pero, se pregunta Carrera, cómo transmitir el legado heroico siendo fiel a su
esencia, a su tono, a su fuerza inspiradora?(156)
Es tanta la importancia de esta ideología convertida en una segunda religión que los espíritus
disidentes tienen que afrontar sanciones como las de no poder propagar su mensaje.
Trátase ,en síntesis, de “enderezar la tradición” para corregir la conciencia histórica y sus
efectos perversos. (157)
La Historia Patria.
evocación la forma de organización sociopolítica logra cuando menos tres cosas: en primer
lugar , se inserta expresamente en una línea de continuidad histórica, la cual de hecho
refuerza su legitimidad; en segundo lugar, ampara su existencia en la vigencia de valores que
adquieren de esta manera , la respetabilidad que les depara el pasado histórico; y por último,
estimula la movilización de las fuerzas que conforman el más puro y elemental patriotismo,
materia prima básica para fabricar héroes y pueblos disciplinados.” (160)
En este sentido “la conciencia histórica tradicional venezolana quiere que el pasado
heroico ,y específicamente Simóm Bolívar, sirvan a un tiempo de acicate y de escudo que
permitan compensar las alegadas deficiencias estructurales del pueblo venezolano. Bolívar ha
de ser un paradigma , siempre presente pero inalcanzable en su perfección por cuanto le sirve
de base un patrón deificado. El pueblo cumple, en estas circunstancias, un rol más bien
receptivo , por no decir pasivo” . Así entienden el asunto, los “círculos ideológicos ,en los
cuales se combinan la conciencia nacional - en sus tres niveles de expresión ya reseñados:
conciencia bolivariana, conciencia crítica y conciencia histórica - con el culto a los héroes
que nutre la historia patria, y con el culto a Bolívar que corona todo el edificio, los que
revelan cuán necesario es, para estudiar el funcionamiento de la conciencia nacional
venezolana, al someter a cuidadosa valoración los términos héroe y pueblo, y sus
correlaciones recíprocas . Pero a su vez, la comprensión del modo cómo se articulan la
conciencia nacional y el culto a los héroes hasta el punto de confundirse ,exige tener
presentes los fundamentos históricos de esa articulación.” (161)
Por ello la fórmula que permite identificar la conciencia nacional con el culto a los héroes
trasciende la justicia del reconocimiento , y al postularse que <<quien glorifica a los Héroes
honra la Patria>> (según Miguel León Rivero) se conforma un universo heroico, <<La
Epopeya>> en el cual Simón Bolívar desempeña un rol primordial , por ser <<el primero de
tus hijos ! oh Patria ! el primero de tus héroes !oh América ! El Gran Libertador de pueblos y
naciones !oh humanidad! (citando a Eduardo Blanco: Las Noches del Panteón ...) (162) .La
máxima que afirma “seremos porque hemos sido” condensa doctrinariamente el culto
heroico.
“En el origen fue Carlyle. Ello corresponde a una manera de ver el asunto que es la más
obvia y trajinada cuando se trata de comprender un rasgo cultural de los latinoamericanos, es
decir la explicación de las influencias europeas y de la realización ,necesariamente
degradada, en suelo americano. Pero, algo hay de positivo en este enfoque, pues conduce
inevitablemente por la vía de una revisión del concepto de héroe y de la capacidad de éste para
hacer la historia. En realidad, esta visión parece ser parte del asunto, pero no la explicación
del mismo: sólo podría serlo si admitiéramos previamente que los historiadores son capaces de
conformar la conciencia nacional, es decir, si admitiéramos que pueden ir más allá de aportar
algo a la formación de una conciencia histórica que se asienta en procesos sociales de ámbito
más vasto y primordial, como los que integran la estructura de poder interna de la sociedad
venezolana ....” (165)
En relación con el planteamiento anterior, dice Carrera, que hay que ponderar justamente un
conjunto de factores varios tales como circunstancias históricas, conciencia individual,
conciencia social, etc. y la real influencia de la historiografía en la conformación de la
conciencia nacional, particularmente en naciones incipientes.
“Es un error ver la resultante de estos factores. como un equivocado seguimiento del
pensamiento de Carlyle, cual lo pretendió Eddie Morales Crespo cuando afirmó que <<En el
desarrollo histórico de la personalidad latinoamericana se advierte como nota dominante una
especie de degenerado culto a las ideas de Carlyle>>, es decir, un Carlyle mal comprendido,
tergiversado y adaptado impropiamente a una realidad socio-histórica por completo ajena a la
tenida en cuenta originalmente por él: <<el esquema de Carlyle no ha tenido fortuna al
pretenderse aplicarlo a medios culturales de menor evolución que el europeo>> .De allí que
en Latinoamérica <<la que podría denominarse escuela de Carlyle no es sino una lamentable
aberración de las ideas del filósofo>>. Por esta vía de pensamiento se llega a la rotunda
conclusión de que <<un degenerado culto a Carlyle es la droga del desenvolvimiento histórico
latinoamericano>> “ (166)
Argumenta Carrera que “el acogerse al pasado lleva implícita cierta repulsión por el presente,
hasta el punto de juzgarlo indigno, lo que indujo a ignorarlo y a identificar el pasado con los
héroes, como si sólo héroes hubiese habido en el pasado. No se trata sólo de un triunfo de la
concepción individualista de la historia. Es algo más: es la evocación selectiva del pasado en
función de la inconformidad causada por el presente. Esta operación ,en la que pone más el
sentimiento que la razón, puede tener graves repercusiones actuales” .Y citando a Joaquín
Gabaldón Márquez (El Enlace de las Generaciones, Caracas, 1960) , comenta las
comparaciones que hace la historiografía tradicional entre el presente y el pasado, personajes
contemporáneos y héroes del pasado. Sobre éste opina que “Su conclusión representa una
acusación seria contra la historiografía tradicional, por su supeditación de ésta al culto a los
héroes.” (167)
Una implacable sentencia de Mariano Picón Salas en 1942 decía que “Venezuela era un País
que miraba hacia atrás mientras le iban cayendo las ruinas de su existencia presente. Parecía
mantener - cuando otros pueblos se lanzaban con audacia a las nuevas creaciones de la
economía y de la técnica - su lamentable vocación de pueblo sepulturero.” (168)
Este resumen general de los planteamientos antes considerados ,nos permite intentar una
reflexión crítica sobre los mismos. Creemos que el aporte teórico de Carrera es fundamental
para el estudio que intentamos realizar en nuestra propia tesis. Una observación que puede
adelantarse es que se observan coincidencias de fondo entre las ideas de Carrera y los
planteamientos de Ruggiero Romano, especialmente en esos señalamientos sobre la situación
de las naciones hispanoamericanas --- naciones de reciente formación ,que no pueden
autocontemplarse como esos estados de antigua data y por ende deben apelar a otras vías para
afirmar su propia identidad ---. Asimismo, Pueden hacerse interesantes correlaciones entre
este original enfoque de Carrera y los estudios citados sobre historiadores latinoamericanos,
en especial los de E. Bradford Burns y David A.Brading que analizaremos a continuación.
(169)
Varios autores ,al tratar de definir la historia, lo hacen en estos términos: Para E.Bernheim,
<<la historia es una ciencia sobre el desarrollo de la humanidad>> ; Robing George
Collingwood afirma que la investigación histórica se ocupa de las accciones humanas en el
pasado; J.Huizinga formula la misma idea , de modo que considera a la historia como <<la
forma intelectual en que una civilización se rinde cuentas a sí misma de su pasado; Raymond
Aron plantea que la historia es el estudio del pasado humano; Marc Bloch apunta a las
actividades humanas en el pasado; L. Febvre señala que la historia no se ocupa del hombre,
sino de las sociedades humanas, de los grupos organizados.(170)
Cuando el renombrado historiador polaco Jerzy Topolsky ofrece su propio punto de vista nos
hace la diferenciación entre Historia como res gestae e historia como rerum gestarum. Esto
es, que “a través de los siglos el término historia adquirió al menos dos significados básicos :
1) hechos pasados (res gestae) y 2) narración sobre los hechos pasados (historia rerum
gestarum). La historia como hechos pasados tiene a su vez varias interpretaciones. (171)
En fin ,concluye Topolsky, “hemos desmembrado así tres significados básicos del término
historia: historia como hechos pasados, historia como operaciones de investigación realizadas
por un historiador e historia como resultado de dichas operaciones de investigación; es decir,
una serie de afirmaciones sobre hechos pasados.” (173)
Historia de la Historiografía.
Entre otras consideraciones que hace sobre la historia, Lefebvre señala que ella ha asumido
el carácter de pragmática o subordinada a un designio como el de la educación moral y cívica
o el contar la vida de los grandes hombres, tal fue el caso de la que cultivó Plutarco. En otras
circunstancias, asumió ésta un objetivo utilitario, la educación del príncipe, del hombre de
Estado. Y agregaríamos nosotros, la educación de todo un pueblo, <<Moral y Luces>> . (175)
Considerando otro aspecto fundamental sobre nuestra disciplina ,Lefebvre apunta que “La
Historia ha sido también para el historiador un pretexto, un medio de hacer la apología de su
propia nación. Herodoto y Tito Livio no están libres de esta culpa; en el siglo XIX , ciertos
historiadores alemanes hicieron profesión de escribir para preparar ,y después para celebrar,
la unidad alemana. “ (176)
Escribió Croce que “somos producto del pasado ,y estamos viviendo sumergidos en lo pasado
, que por todas partes nos oprime”. Y se preguntaba, “ ¿ Cómo emprender nueva vida , cómo
crear nuestra acción sin salir del pasado, sin sobrepujarlo? , ¿ Y cómo sobrepujarlo , si
estamos dentro de él y él está con nosotros ?” . Su respuesta fue que no había “más que una
salida , la del pensamiento que no corta relaciones con el pasado, sino que se levanta sobre él
idealmente y lo trueca en conocimiento.”(177)
Croce, citando lo que Goethe dijo una vez sobre la práctica de escribir historias como un
modo de quitarse de encima el pasado; considera que “el pensamiento histórico lo acerca
hasta convertirlo en materia suya, lo transfigura en objeto suyo, y la historiografía nos liberta
de la historia. Sólo un extraño oscurecimiento de las ideas puede impedir que nos demos
cuenta de semejante oficio de catarsis que la historiografía, como la poesía .desempeña ,
sacudiendo ésta la servidumbre de la pasión , como aquella la sumisión al hecho y al
pasado.....” (178)
Finalmente se plantea que los historiadores ,a los “que no hay que confundir, ciertamente, ni
con los monjes dedicados a componer índices y crónicas, ni con los eruditos recopiladores de
narraciones y documentos , para sacar de ellos ,con su industria, noticias bien testificadas, ni
con los doctos autores de manuales de historia --- siempre fueron hombres de varia actividad,
llevados a meditar sobre las situaciones que se produjeron para sobrepujarlas y contribuir a
que los demás las sobrepujen , gracias a nuevas actividades: políticos que escribieron historias
políticas , filósofos que escribieron historias de la filosofía ... “ (179)
La Historia Intelectual.
En su análisis sobre el tema, agrega Stromberg, que “la Historia Intelectual, como disciplina
académica, es algo nueva y probablemente tiene todavía que completar la tarea de clarificar
cuál es su alcance, métodos y contenido. Claramente, el contenido o campo es muy interesante
para aquellos entusiastas del mundo de las ideas. Mientras que aquellos que por el contrario
no lo tengan, deberían evitar esta área; es por ello, que los historiadores orientados hacia los
hechos concretos no demuestran interés, y por tal razón, se muestran sospechosos hacia la
historia intelectual. Esta es definida como el estudio del rol de las ideas en los eventos y
procesos históricos; la historia intelectual ,hay que admitirlo, es un difícil arte.” (182)
percepción del pasado sustentada en los tópicos por ellos estudiados, sus valores y sus
interpretaciones. Es así, que cuando éstos representan un grupo relativamente homogéneo,
sus historias tienden a perpetuar una similaridad al asignarle al pasado una uniformidad más
en armonía con la visión de clase que con la totalidad de la experiencia. Tales restricciones
caracterizaron la historiografía latinoamericana del siglo XIX.
[Cree que] “sugerir que las historias escritas durante el siglo XIX en América Latina
representan más una visión de clase que una interpretación de carácter nacional es un
planteamiento muy serio ,y que para sustentarlo, se requiere un amplio estudio sobre la vida
de un grupo numeroso de historiadores ....” (185)
Del examen de dichas biografías y de las obras escritas por ese grupo representativo de
historiadores latinoamericanos del siglo XIX , se extraen estas conclusiones : “ Los
Nos parece oportuno señalar, a manera de resumen crítico, que E. B. Burns en su trabajo
sobre los historiadores latinoamericanos del siglo XIX trata de demostrar que éstos
efectivamente reflejaron en sus obras históricas los valores propios de una élite intelectual. La
mayoría de sus más representativos miembros pertenecieron a las clases propietarias o por lo
menos disfrutaron de su estilo de vida. La mayoría ocupó cargos públicos (parlamentarios,
ministros, diplomáticos, presidentes, gobernadores, etc.) .Muchos de los historiadores tenían
amplio conocimiento de idiomas modernos y clásicos, así como de la historiografía europea
pues un buen grupo de ellos había estudiado, vivido o viajado al viejo continente.
Es evidente que el ensayo de Burns descansa en una muestra de intelectuales con predominio
brasileño, argentino y mexicano. Mientras que de una muestra de sesentitres historiadores se
incorporan unos dieciséis brasileños, de Venezuela sólo se menciona muy ligeramente a
Cecilio Acosta y a Eduardo Blanco. Los autores seleccionados, y el tratamiento que se hace de
ellos y su producción, no es el más apropiado. Tangencialmente se menciona a Rufino Blanco
Fombona y a Andrés Bello.
A pesar de no ser un trabajo tan amplio o aprovechable como otros que hemos reseñado
antes, ya que éste es solamente un buen <<Dicccionario Biográfico>> , consideramos
fundamental ofrecer algunos aspectos de las ideas de Jack Ray Thomas sobre el tema en
estudio. (189)
Bajo este título, Thomas agrupa sus ideas sobre los que cultivaron la historiografía
latinoamericana. Dice que “en general ,los primeros historiadores latinoamericanos
provenían de familias que gozaban de las ventajas de la riqueza y la influencia política.
Fueron en su mayoría de elevada clase social y relacionados con los grandes apellidos por
varias generaciones. En resumen, sus características coinciden con la decripción que hacía
John Higham de los historiadores estadounidenses de comienzos del siglo XIX, a los que éste
denominó historiadores <<patricios>>, esto es, hombres que eran socialmente prominentes,
económicamente prósperos y partícipes de manera destacada en la actividad
historiográfica.”(190)
Germán Carrera Damas, tal vez el más destacado estudioso de este campo en Venezuela,
señala que conviene subrayar el sentido que atribuye a la historia de la historiografía, en
cuanto a la correlación entre el acontecer histórico concreto y la conciencia histórica que ésta
debe expresar. Igualmente , entiende la historiografía “no como la historia de la historia, en
el sentido. de las obras que se pueden llamar sobresalientes de la investigación histórica , sino
más bien en el sentido de ambiente historiográfico, incluyendo así en la historia de la
historiografía no sólo el nivel de investigación científica en historia sino también ,cuando
menos, los niveles en que se dan el aprendizaje y la enseñanza, al igual que las formas de
aprovechamiento de la historia que, como la literatura y la política, constituyen a un tiempo
uso legítimo de ese conocimiento y estimulante comprobación de su extensa y diversa
utilidad.” (191)
Definición de la disciplina.
historiografía venezolana propiamente dicha , tanto en razón del acontecer histórico concreto
como de su expresión en la conciencia histórica. [Considera que] lo que sería la definitiva
floración de ella a partir ,aproximadamente, de la década del cuarenta del siglo XIX, con la
obra de Rafael María Baralt, valorada como presentación sistemática de la nueva conciencia
histórica , fundada en una reinterpretación del período colonial y de buena parte de la
historia de Europa.” (194)
Finalmente se indica que a partir de 1890 se desarrolla la tercera fase de esta historiografía
de la Emancipación, ésta será la de signo positivista. Posteriormente, aparecen, ya en el siglo
XX, la historiografía marxista y la historiografía oficial modernizada o mestizaje
historiográfico. Para Carrera, esta última caracterización expresa su peculiar opinión crítica
sobre los desarrollos concretos de la historiografía venezolana contemporánea, especialmente
la cultivada en la Academia Nacional de la Historia, en las universidades y en el mundo
educativo en general. Tal historiografía no se adscribe rigurosamente a una corriente teórico-
metodológica o a alguna tendencia ideológica definida. Prefiere más bien expresar cierto
eclecticismo conceptual.
NOTAS Al CAPITULO I.
(1) n.a. De aquí en adelante se considera el trabajo de este investigador que aparece en la
obra de varios autores ESTADO Y POLÍTICA EN AMÉRICA LATINA .México, Siglo Veintiuno
Editores, 1985 . Véase especialmente, Edelberto Torres Rivas: “La Nación : Problemas
Teóricos e Históricos”, pp.87-132
(28) n.a. Los escritores dogmáticos que aplicaron el marxismo de manera determinista y
mecanicista (marxismo de inspiración Stalinista) publicaron gran cantidad de ensayos en la
América Latina de las décadas de los años treinta y cuarenta. En Venezuela, un buen ejemplo
lo fue la obra pionera de Carlos Irazábal Hacia la Democracia ,así como su posterior trabajo
Venezuela Esclava y Feudal.
n.a . De acuerdo con los datos suministrados en una entrevista personal al Dr. Ángel
Bernardo Viso, éste nació en 1930 en la ciudad llanera de Calabozo (Estado Guárico) .Su
primera formación educativa la realizó en el caraqueño Colegio La Salle y en 1956 se graduó
de abogado en la Universidad Central de Venezuela. Antes y después de su graduación hizo
viajes de estudio a Italia, Francia e Inglaterra. Además de su vasta cultura jurídica, el Dr.
A.B.Viso ha podido adquirir una sólida cultura literaria e histórica, la que ha plasmado en
sus ensayos y poemas.
n.a. Nos parece que acá puede observarse una gran similitud con el planteamiento de
Benedetto Croce sobre el Hombre como microcosmos, como compendio de la historia
universal. Véase (p.12) de B. Croce: LA HISTORIA COMO HAZAÑA DE LA LIBERTAD,
México, FCE, 1960
(41) Viso, Ángel Bernardo: Memorias Marginales de Pedro Mirabal. Caracas, Monte Ávila
Editores, 1991
(42) Seguiremos acá nuestra propia traducción del ensayo que consultamos, escrito y
publicado en inglés. Nikita Harwich Vallenilla : “National Identities and National Projects:
th th
Spanish American Historiography in the 19 and 20 Centuries”. STORIA DELLA
STORIOGRAFIA ,19 (1991) pp.147-156
(47) n.a. Nos referimos al que tituló Nuestra Revolución Francesa . Caracas, UCV. Esta tesis
está también reproducida en las conferencias publicadas bajo el título Una Nación Llamada
Venezuela. Caracas, UCV, 1980
(48) Miguel Izard: El Miedo a la Revolución (La Lucha por la Libertad en Venezuela 1777-
1830) .Madrid, Editorial Tecnos, 1979
(49) Germán Carrera Damas: Una Nación Llamada Venezuela. Caracas, Dirección de Cultura
de la UCV, 1980
(54) Heródoto: Los Nueve Libros de la Historia .México, Grolier Internacional - Editorial
Cumbre, S.A, 1978
Op.cit. ,p.55
(58) n.a. Obviamente, todas las páginas indicadas corresponden a la obra de Heródoto antes
citada.
(59) Plutarco: Vidas Paralelas. Consideramos acá dos ediciones. Madrid, Ediciones Busma,
S.A. ,1983. Véase también la de la Biblioteca Básica Salvat: Estella, Salvat Editores,
S.A. ,1982
(60) Ernesto Parra: ”Estudio Preliminar” Plutarco: Vidas Paralelas (Op.cit. Madrid,
1983) ,p.5
(62) Suetonio: Vidas de los Doce Césares .México, Editorial Cumbre, S.A. , 1978
(66) Ibídem, pp. 219-220, 260, 296, 319, 327, 358, 367, 383
(67) Victor Sanz: La Historiografía en sus textos. p.101 (Caracas, UCV-FHE, 1985)
(69) Víctor José Herrero Llorente: “Introducción” ,p.19 (Tito Livio: La Monarquía Romana.
Madrid, Aguilar, 1969)
(70) Tito Livio : Obras Completas de Tito Livio (Prefacio) , pp.17-19 (México, UNAM, 1955)
tomo I, p. 251
(75) Víctor Sanz: La Historiografía ebn sus Textos. Op.cit. p.105. ; Charles - Olivier Carbonell:
La Historiografía
n.a. Rafael María Baralt, quien muy seguros estamos leyó esa obra de Tácito, quejábase
también de lo poco que había para historiar en los siglos coloniales venezolanos, comparando
sus hechos con los de la época de la independencia. Tanto en Tácito como en Baralt, la razón
era la misma: se creía que sólo las grandes campañas militares daban substancia al discurso
historiográfico.
(78) Ibídem: pp.199, 201 - 202 , 217, 251 - 252, 256 - 257,
n.a. En estas páginas, (específicamente en la 291) aparecen las palabras de Tácito que ya
antes mencionamos en relación con Rafael María Baralt. Así también, se menciona una
célebre frase escrita por Cremucio Cordo , éste, en unos anales había elogiado a Marco Bruto
y llamado a Gayo Casio <<el último de los romanos>> (p.293) .Acá es evidente la inspiración
que debió ejercer esta obra sobre Juan Vicente González, quien llamó a Fermín Toro <<el
último de los venezolanos>> en su meseniana escrita con motivo de la muerte de este prócer
civil.
(80) Poema de Mío Cid (Versión de Pedro de Salinas) .Madrid, Revista de Occidente, 1969
(82) Comentario Editorial Inicial a la obra de Ramón Menédez Pidal: El Cid Campeador.
Madrid, Espasa - Calpe, S.A , 1973
(83) Ramón Menéndez Pidal: Op.cit. pp.17-18
(86) Thomas Carlyle: De los Héroes, el Culto de los Héroes y lo Heroico en la Historia
(Incluído en el volumen <<los Clásicos>> Carlyle y Emerson: De los Héroes / Hombres
Representativos. Traducción y Estudio Preliminar por Jorge Luis Borges. México, Editorial
Cumbre, S.A. - Grolier Internacional, 1978)
(87) Véase “Thomas Carlyle” en Funk & Wagnalls New Encyclopedia (vol.5, p.164) .
Will and Ariel Durant: The Story of Civilization: (Part XI The Age of Napoleon. A History of
European Civilization from 1789 to 1815) . New York, Simon and Schuster, 1975
(88) Véase el “Estudio Preliminar” escrito por Jorge Luis Borges en la edición de la obra
citada. Thomas Carlyle: Op.cit.
(128) Mircea Eliade: El Mito del Eterno Retorno. Madrid, Alianza Editorial, 1992
(129) Mircea Eliade: Op.cit. ,pp.15, 29, 39, 42-45, 48, 51-52
(130) George Dumézil: El Destino del Guerrero .México, Siglo Veintiuno Editores, 1990
(140) Otto Rank: El Mito del Nacimiento del Héroe. México, Editorial Paidos, 1989
(142) Joseph Campbell: El Héroe de las Mil Caras. México, FCE, 1992
63 (I) ,1983
(149) n.a. Usualmente, cualquier enfoque no tradicional es calificado por estos intelectuales
conservadores (en el mejor de los casos) como “sociologizante” o “presentista”.
(150) Germán Carrera Damas: “Simón Bolívar , el Culto Heroico ... “ Op. cit. ,p.109
(166) Eddie Morales Crespo: “El Culto a Carlyle” EL NACIONAL , (20-11-1965) ,citado en,
G.Carrera D. :Op.cit., pp.141-142
(168) G. Carrera D. : Op.cit. , p.144, citando a Mariano Picón Salas “Un joven arquetipo” -
Comprensión de Venezuela.
(169) E.Bradford Burns: <<Ideology in Nineteenth-Century Latin American
Historiography>>. Hispanic American Historical review 53 (3) , 1978, 409-431. Duke
University Press
(177) B. Croce, p.34, (Benedetto Croce: La Historia como Hazaña de la Libertad. México,
FCE, 1960)
(193 Ibidem,p.11
sobre los principales historiadores del siglo XIX venezolano ; destacándose con especial interés,
Rafael María Baralt, Francisco Javier Yanes, José de Austria, Juan Vicente González, Felipe
Larrazábal y Eduardo Blanco. Todos ellos, dignos de un cuidadoso análisis que eche un poco
más de luz sobre su aporte intelectual ,y por supuesto, sobre ese período durante el cual se inició
Si se plantease justificar por qué se escogió ese grupo de historiadores, fácil sería responder que
ello obedeció a muy válidas razones. Primeramente, es evidente ,que si se considera el asunto en
términos cronológicos, ese orden refleja - en líneas generales - la sucesiva publicación de las
obras fundamentales de los autores seleccionados, esto es, desde la publicación del cuarto tomo
de la obra de Montenegro Colón (1837) ; pasando por el Resumen de Baralt (1841) ; los libros
de Francisco Javier Yanes (uno en 1840 y el otro , aunque inédito hasta 1943, fue fuente
fundamental para Baralt, Austria y otros historiadores) ; el Bosquejo escrito por Austria e
impreso entre 1855-1857 ; las biografías salidas de la pluma de Juan Vicente González entre
1859-1865; la Vida de Bolívar del Dr. Larrazábal (1865-1866) ; y para cerrar, la Venezuela
Cuando se hace una selección ,se corre el riesgo de no dejar satisfechos a muchos. Unos podrían
pudiera argumentar - con muy consistentes razones - en contra de la presencia en este grupo de
pesar de las posibles objeciones, ofrecemos este cuadro o muestra representativa como una
siglo XIX.
El conjunto de obras y autores fue seleccionado tomando varios criterios de escogencia. El
primero de ellos fue el asomado por estudiosos como Germán Carrera Damas quien ha planteado
que la historiografía nacional sólo surge cuando ya existe una sociedad venezolana constituida y
Montenegro Colón, Francisco Javier Yanes y en menor grado Rafael María Baralt, que si bien no
fue partícipe directo del proceso como si lo fueron los dos primeros, tuvo la oportunidad de
La escogencia de autores como José de Austria, Juan Vicente González y Felipe Larrazábal
la misma temática patriótica. Todos ellos de alguna manera descansaron en esos primeros
aprovecharon nuevos testimonios documentales y sobre todo diferentes estilos literarios propios
del Romanticismo.
Hechas estas consideraciones preliminares, se inicia el balance presentando una síntesis sobre los
rasgos biográficos de los escritores seleccionados y las características más destacadas de las
análisis comparativo de los aportes de los historiadores citados, considerando especialmente sus
caracterizaciones de aspectos fundamentales de la historia venezolana, así como sus ideas sobre
el pueblo, la nación , la patria, los patriotas, los realistas, los héroes, lo heroico y otros conceptos
o nociones.
Siglo XIX.
Montenegro Colón. Podrá observarse al leer estas líneas, que ellas tienen una extensión mucho
más amplia que las dedicadas a los otros miembros del grupo. La razón, no es solamente la de
haberle dedicado ya un libro (1) a este personaje ; también lo explica, el considerarlo uno de
los más importantes historiadores de ese tiempo que fue referencia obligada— aunque no
Estudiar la vida y obra intelectual de Feliciano Montenegro Colón, ha sido un reto a la voluntad
de penetrar en un área oscura pero fascinante. Decimos ésto, considerando que materiales como
las páginas dedicadas al tema en la Autobiografía de José Antonio Páez y las ofrecidas por el
biógrafo Ramón Azpurúa en el siglo XIX; lo escrito en décadas pasadas por Mary Watters y por
Don Alfredo Boulton; así como la síntesis ofrecida por Héctor Bencomo Barrios no ofrecen sino
una base de datos; que , aunque muy útil, no nos permite aventurarnos mayormente en ese
período donde vivió y murió el atormentado militar, educador, historiador y geógrafo que fue
Esbozo Biográfico de Don Feliciano Montenegro Colón :Una Síntesis de los Aspectos
Fundamentales de su Vida.
Escribir sobre Feliciano Montenegro Colón (1781-1853) sólo es posible hacerlo (en las actuales
circunstancias) a partir de un limitado conjunto de textos, algunos ofrecidos por el propio Don
Sabemos que Feliciano Ramón de la Merced Montenegro y Colón nació el 9 de junio de 1781 en
la ciudad de Caracas y que fue hijo del abogado de la Real Audiencia de nombre José Cayetano
López de Montenegro, nativo de Betanzos (Galicia, España) quien, según costumbre de esa
Montenegro. Su madre fue doña Juliana Colón y Madrid, dama criolla caraqueña supuestamente
Debió haber tenido una infancia sin mayores dificultades, pues su situación fue la de uno de esos
alto mundo oficial hispano-peninsular. Ello, en aquella Caracas colonial, le franqueó las puertas
Según el testimonio del Dr. Felipe Fermín Paúl (3) , a Feliciano Montenegro podía
considerársele representante de una de las más ilustres y distinguidas familias de Caracas, con un
rico patrimonio de ganados, casas y esclavos. Agregamos nosotros, que seguramente la guerra y
todas sus secuelas negativas (muertes, emigración, saqueos, secuestro de bienes,etc.) acabó con
ese patrimonio; pues al regresar don Felicano a Venezuela después de las guerras de
independencia y hasta los días de su muerte ,siempre estuvo implorando protección para él y su
Sobre el período 1781-1797, años de su infancia y juventud, tenemos muy pocas noticias. Se
conoce que inició sus estudios formales en el Seminario de Caracas y ya a los 16 años es
Hacia 1798, a los diecisiete años, abandona las letras - a las que siempre fue afecto - e inicia su
carrera militar ingresando como cadete en el Batallón Veterano de Caracas. Al año siguiente
acantonado en el Cuartel San Carlos de la ciudad. Cinco años de entrenamiento allí lo prepararon
para trasladarse en 1803 a la propia España y continuar en la metrópoli su carrera como oficial.
(6)
Durante el período siguiente, esto es, entre 1803-1810, continuó su formación académica
estudiando matemática y otras ciencias y además cumplió con sus actividades militares en
España. En su propia relación sobre esa etapa de su vida ,dice Montenegro que le tocó participar
en el sitio militar contra los ingleses en Gibraltar, en una expedición de tropas españolas
enviadas a Dinamarca y ,además , combatir en esos días difíciles del año de 1808 cuando ocurrió
Estando los ejércitos leales a Fernando VII en retirada hacia Cádiz, y reunida allí la Junta
Central Gubernativa del Reino (convertida después en una Regencia ) , se decidió enviarlo en
envío de Feliciano Montenegro Colón en esa misión a su ciudad natal, se justificaba por la
opinión favorable de los <<diputados >> venezolanos presentes en Cádiz y por considerar que
El entonces Capitán Primero del Batallón Ligero de Infantería de Tiradores de Cádiz, partió a
La Guaira. (8)
Ese primer regreso y estadía de Montenegro en Venezuela solamente duró un corto período,
entre los meses de enero y junio de 1811. Ya para ese entonces se había organizado la Junta
Suprema de Caracas y convocado un Congreso que inició sus sesiones el dos de marzo de ese
mismo año. En esas nuevas circunstancias políticas, Feliciano Montenegro Colón decidió poner
punto final a la misión oficial que le habían encomendado y más bien quedarse al servicio del
España provocando con ello un escándalo, pues se le acusó de traidor y de haber sustraído
sombra de ese incidente lo perseguirá hasta su muerte, aunque siempre negó las acusaciones que
Después de su “huída” o regreso a España, continuará allí la carrera militar hasta un nuevo
por delicadeza personal, no informó sino lo más necesario y general sobre su estadía en
Venezuela , y que de inmediato ,pidió ir a combatir nuevamente en la guerra contra los invasores
franceses allá en la madre patria. Al concluir ésta, no quiso alistarse en la expedición que se
preparaba desde 1814, comandada por Don Pablo Morillo. Agrega Montenegro, que solamente
once meses después de la salida del ejército expedicionario y ya con noticias de haberse logrado
entre ellas ,desempeñó la presidencia del Consejo de Guerra en Caracas y la comandancia de los
Valles del Tuy. Posteriormente sirvió como jefe militar y gobernador en Barcelona en
1817 ,gobernador interino en Maracaibo (1820) y jefe del Estado Mayor de las fuerzas realistas
la batalla de ese día, después de la derrota, salió desde Valencia, por la vía de Puerto Cabello,
hacia la isla de Puerto Rico y luego regresó a España de donde fue enviado nuevamente a las
Antillas. (9)
Sus últimos años al servicio de España le trajeron serios conflictos personales. Es el mismo
Estando en España cumpliendo una misión encomendada por el general Miguel de la Torre, tuvo
que actuar comandando fuerzas militares para sofocar una rebelión de la guardia real y motines
populares (7-7-1822) , lo que le valió el título de <<Benemérito de la Patria>> otorgado por las
El ya coronel Feliciano Montenegro Colón (finalmente ascendido en 1822) fue enviado a Puerto
Rico en 1823 como jefe del Estado Mayor de las fuerzas acantonadas en la isla. Para entonces,
Desde esa isla se trasladó con su hijo a España para colocarlo en el Colegio de Nobles en
Vergara. De vuelta en España ocurrió la anulación de la Constitución del reino (1823) .Su
solicitud de retiro no fue aceptada y fue enviado como jefe de Estado Mayor de las fuerzas
geográficas y elaborar junto con un equipo (Juan Manuel Cagigal entre ellos) un Atlas de Cuba
que hasta entonces no se había hecho. Es de recordar, que Montenegro dice que también había
La situación de Montenegro se hizo cada vez más difícil. Las intrigas en su contra habían llegado
al extremo de existir planes para hacerlo preso y fusilarlo, por lo cual decidió irse de Cuba y
ponerse al servicio del gobierno republicano de México; el cual planeaba organizar una
expedición para liberar a Cuba del dominio colonial español. En México,no obstante, la situación
de guerra civil desatada entre 1828-1829, obligó al venezolano a desistir de sus planes
independentistas y retirarse hacia los Estados Unidos (Nueva York) ,desde donde finalmente
En el período que va desde 1831 a 1853, el biografiado vivirá en la ciudad que lo había visto
nacer. Cuando el ya cincuentenario coronel ve nuevamente las faldas del Avila, viene a iniciar
una vida que poco se asemejará a la que hasta entonces había llevado; y que sin duda, dejó una
profunda y duradera huella en su duro carácter. Esas dos décadas de vida caraqueña que
poco, (12) las utilizará don Feliciano para escribir un conjunto de obras y dedicarse a la tarea de
organizar el primer gran colegio privado del país: el Colegio de la Independencia, que fue
Los años que precedieron a su dedicación casi exclusiva al colegio, es decir entre 1831 y 1836,
los utilizó Montenegro para escribir su obra fundamental, y entre 1833 y 1837, publica los cuatro
noticias sobre la escritura y publicación de esa Geografía General Para el Uso de la Juventud
de Venezuela. (15)
Para mediados del año de 1832, publica Montenegro un prospecto de la obra que aparecería en
Este estudio tan necesa.rio al labrador y al negociante, como al letrado y al artesano, y de cuya
conocida utilidad se siguen tantas ventajas a la sociedad, nunca pudiera ser bastantemente
recomendado, si por un convencimiento hijo de la experiencia no se hubiera hecho general y
considerado base precisa de la ilustración; adorno precioso de la juventud de ambos secsos y
medio único y eficaz para conocer las costumbres de todas las naciones, e imitarlas si son
buenas ,ó desecharlas si son efecto de las preocupaciones; y para no vivir en el siglo como entes
aislados , a quienes apenas es dado comprender de que manera ecsisten sus semejantes ...”(16)
No solamente anunció el autor las ventajas de su obra, también adelantó un esquema completo
del contenido de la misma que constaba de veintidos aspectos diferentes, los cuales fueron
La obra, cuyo primer volumen apareció en 1833 dedicado al “Escmo. Sr. Jeneral en Gefe José
Antonio Páez Presidente de la República” señalaba en sus primeras páginas que al fin se
presentaba “ante el pueblo de Venezuela y bajo los auspicios de su gobierno una obra media de
era, más que todo, un conjunto ordenado de textos escogidos de los mejores autores entonces
conocidos, los cuales había organizado en capítulos y puesto al alcance de todos, especialmente
Después de enunciado el esquema general de la obra, comprométese el autor a dar unas breves
nociones de geografía astronómica y de geografía física, así como del sistema métrico decimal
ellos, los cuales trataban cada uno de los veintidós aspectos del esquema.
Dentro del conjunto de temas planteados, destácase la síntesis que hace con lo que denomina
<<una ojeada sobre la parte histórica>>. Allí resume a grandes rasgos la Historia del mundo
antiguo, medioeval y moderno partiendo de la creación del mundo en el año 4.004 antes de
Cristo; pasando por el acontecer de Egipto, Asiria; Grecia (Atenas, Esparta, Thebas); los
A partir del artículo 37, retoma su discurso geográfico, cuando describe el Descubrimiento de
América y otros viajes. Continúa con el estudio de América en general y luego cada una de sus
secciones : Haití, Santo Domingo, Cuba, Groenlandia, posesiones inglesas del Canadá y el
El Tomo II está dedicado a México, Centro América, pequeñas islas del Caribe y América
Patagonia. Y finalmente, en el Tomo III (que apareció el año 1834) se describe a Chile, Perú,
Como podemos observar, en esos tres primeros tomos de la Geografía General ... Feliciano
Montenegro Colón, no tocaba a Venezuela en forma específica. Será con la publicación del
cuarto volumen en 1837 cuando el autor vaya más allá de donde había llegado con la redacción
de sus <<Lecciones ...>> ya publicadas antes (Cuba ,1826) y de los conocimientos ya expuestos
por varios geógrafos, don Mariano Torrente entre ellos, cuya obra se había publicado en Madrid
en 1827.
También es de notar que una de las limitaciones de la Geografía de Montenegro Colón fue sin
duda alguna el hecho de haberla impreso en una modesta imprenta de Caracas. Su obra no pudo
gozar de las ventajas técnicas que tuvo la edición de la obra de Agustín Codazzi, Rafael María
Baralt y Ramón Díaz impresa en París en 1841. Montenegro tuvo que contentarse con sacar su
Venezuela desde los viajes de Cristóbal Colón hasta la historia republicana del período que
culminaba hacia 1836. También sabemos por el anuncio del propio autor ,que él había
documentos anexos hasta por lo menos el año de 1850, fecha en la cual publica su hoja suelta
(23), titulada <<Aviso Que Puede Ser De Utilidad>>. Igualmente, anunciaba en dicha hoja que
tenía lista una Geografía de Venezuela que representaría el Quinto Tomo de su obra, texto que
al igual que la continuación de su tomo cuarto se quedó inédita para siempre. (24)
Haciendo una comparación sistemática entre cada uno de los aspectos cubiertos por Torrente en
esquema de Torrente y muchos de sus datos son similares. Lógicamente, la gran diferencia que
nacional de los estados hispanoamericanos. (25) Mientras que Montenegro trata en todo
comentarios ,no pierde ninguna oportunidad para condenar a los que llama insurgentes.(26)
Para entonces era muy difícil que un autor (a menos que tuviera bienes de fortuna) pretendiera
editar sus obras ,y mucho más, si lo quería hacer por sí solo o era ésta una formada por varios
misma, no era posible pensar en ganancias a corto plazo que permitieran financiar el esfuerzo
realizado. A pesar de tales dificultades, Montenegro intentó, sin éxito, editar los primeros tres
tomos de su trabajo con la ayuda de una subscripción que anunciaba desde su <<Prospecto>>
Estado , con auxilios que el mismo autor reconoció públicamente en las páginas de presentación
del texto. En ellas escribió que editaba su obra bajo los auspicios del gobierno del general José
Antonio Páez a quien declara como protector, pues la obra había sido cedida al Estado que la
venta de los libros hasta que se comisionó al Sr. Antonio Damiron (quien había sido el impresor)
para que ,entendiéndose directamente con la Tesorería General, retirase los ejemplares para los
suscriptores y para los otros compradores. El impresor recibiría una comisión de 10% por su
tarea y debía rendir cuenta cada año sobre el dinero que se hubiese recaudado, el número de
No sin cierta sorpresa, puede leerse un aviso publicado el 26 de noviembre de 1841 ,en el cual se
anuncia que se encontraban en los Almacenes del Estado unos 1.272 ejemplares del tomo I;
1.396 del tomo II; 1.595 del tomo III y 1.667 correspondientes al tomo IV, es decir el
correspondiente a la Historia de Venezuela. Toda la existencia presentada en rústica, media pasta
o pasta tenía un valor estimado en unos 8.351 pesos. Tal cantidad de libros era ofrecida en venta
Si observamos bien la información anterior, deducimos sin mucho esfuerzo, que el Sr. Damiron
no debió haber retirado muchos ejemplares de los diferentes tomos de la obra, pues la existencia
almacenada para noviembre de 1841 era ,seguramente, casi toda la edición original menos
algunos ejemplares comprados por los alumnos del Colegio de la Independencia y algunos
amigos del autor. Tal vez por esa y otras razones, el Estado decide rematar lo guardado ya por
Ante estos datos, uno puede plantearse varias interrogantes en torno a las verdaderas razones de
ese aparente fracaso en la aceptación de la obra. Puede suponerse que el Sr. Damiron, el
impresor a quien se le ofrecía el 10 % de lo ganado en las ventas, estaría interesado en vender esa
primera edición de la obra lo antes posible, pues ello iba en su propio beneficio como
1845, en la cual se informa, que la Cámara de Representantes le había dado la tercera discusión y
seguía la obra sin haberse distribuido, y por ello, todavía hacia el año 1847, se quejaba
amargamente Montenegro sobre esa situación: denunciaba que la obra no se había divulgado por
territorio venezolano. ¿Cómo se venderían las obras de otros países, a dejarlas también
almacenadas? “—subrayado nuestro -- .Tales desventuras las atribuía a la negativa actitud del
Parte de la explicación sobre este <<extraño asunto>> es que a pesar de que el Estado
venezolano tenía esa existencia de libros sin distribuirlos, se publicó un aviso oficial el 3-2-1842
(Dirección de Instrucción Pública) en el cual se indicaban las “obras que deben tener los
Colegios Nacionales en su librería, y para cuya compra están autorizadas las respectivas juntas
de rentas ...” . Se indicaban en la resolución los autores y obras para cada curso, entre ellos:
Suponemos que existían razones diferentes a la disponibilidad y precio de las obras para
Puede uno imaginarse como se molestaría Montenegro cuando veía que se ordenaba comprar el
manual de Letronne (lleno de errores según el propio don Feliciano) mientras su Geografía
General ... era pasto de las polillas en los depósitos de la Tesorería de la Nación.
Puede hacerse una última consideración sobre el asunto del patrocinio de la edición de la obra de
Montenegro y su nula circulación posterior, debido a ese virtual saboteo oficial ya comentado
antes. Tal vez la causa de la escasa circulación de la obra no era solamente el supuesto
<<encarcelamiento>> de ella en los depósitos oficiales. A lo mejor, una causa de similar peso
fue la situación económica y social por la que atravesaba Venezuela para entonces ,caracterizada
por la escasez de dinero, los altos intereses, la carestía o altos precios y el pequeño número de
personas que supiesen leer y escribir y que además tuviesen hábitos de lectura sistemática.
Características de la Obra.
Considerando dicha Geografía ... en sí misma; podemos también entender cuáles razones hubo
para que no tuviese el impacto o influencia que su autor esperaba. Debemos comenzar señalando
que una obra destinada a servir de texto o manual para la juventud, es decir cuyo propósito
explícito era compendiar la información mínima que un estudiante venezolano debía conocer; no
era conveniente que tuviese una extensión de cinco tomos, de los cuales el número cuatro - la
Historia de Venezuela - tenía 646 páginas. Debe recordarse que el Quinto Tomo sobre Geografía
de Venezuela, aunque escrito y anunciado , quedó inédito, pues la publicación del Atlas
Geográfico de Codazzi bajo los auspicios del Estado lo mató antes de nacer.
En ese sentido, no podía esperarse que una obra de tal envergadura intelectual y de tal costo,
sirviera efectivamente para lo que explícitamente era su objetivo primario, es decir, servir de
manual. Por otra parte, el número de estudiantes que asistía cada año a los denominados colegios
obra, no permitía que esa u otra similar circulase hasta agotar aunque fuese una edición modesta.
(34)
Debe también considerarse que no todos los colegios u otras instituciones superiores
cursos de Historia de Venezuela en forma obligatoria. Si acaso, tal estudio era una actividad
Así como observamos que el susodicho <<manual>> no tenía las características de un verdadero
compendio escolar (por su extensión desmesurada) ;tampoco tenía la categoría de una obra que
la élite culta del país considerara como una obra de gran calidad literaria o científica. Sin
embargo, tal vez buena parte de ese público lector de la época (un segmento minúsculo de la
escasa población de la Venezuela de entonces) aceptó la obra que a pesar de sus limitaciones
De todas maneras, los lectores de su obra o aquellos que simplemente la descalificaron tomando
como base los comentarios de los que la habían leído; no aceptaron que alguien, que había
servido bajo las banderas de los monarcas españoles y que había estado ocupando posiciones en
consejos de guerra y estados mayores tanto en Venezuela como en Cuba y Puerto Rico, viniese a
medias su pasado.
Muchos de sus lectores venezolanos lo habían visto lucir en Caracas y otras localidades del país
el uniforme militar de teniente-coronel español (36) ; habían sentido el peso de sus decisiones en
el Consejo de Guerra de Caracas y también conocido de sus acciones en el Estado Mayor del
ejército realista que combatió todavía en el campo de batalla en Carabobo el 24 de junio de 1821.
En fin, a los venezolanos que entonces leían la obra de este viejo coronel retirado que regresaba
como el hijo pródigo a la patria; les costaba aceptar la sinceridad y honestidad de quien
conociendo ya la derrota definitiva de la causa que defendió y que tan mal le pagó y decepcionó.
No nos cabe la menor duda de que el pasado del autor fue una de las causas determinantes de la
ser vista entonces como un acontecimiento trascendente. No solamente porque era la primera
historia publicada después de la dura guerra de independencia, sino porque su autor no había
sido uno de esos próceres patriotas, que venían también acumulando documentos y escribiendo
memorias sobre ese pasado glorioso. Por supuesto que también ya existían obras publicadas
antes de la guerra (por ejemplo:la de José de Oviedo y Baños, la de Andrés Bello) u otras de
El ambiente donde el autor concibió y llevó a término la escritura de su obra no fue otro que el
de los aciagos días de la guerra de independencia y los años que siguieron, como ya dijimos, a su
contacto directo o indirecto con muchos actores del proceso histórico venezolano reseñado en la
mayor parte de la obra. Un oficial culto, que ocupó siempre posiciones en los consejos de guerra,
gobernaciones y estados mayores tenía excelentes posibilidades para conocer no solamente sus
judiciales (incluyendo las delaciones y a los delatores), registro de órdenes, planes políticos y
Los años finales de su actuación militar, primeramente cuando todavía cumplía funciones al
servicio de la corona española en los días de los tumultos contra las Cortes y en la administración
otros recuerdos con los cuales proceder a escribir su narración sobre ese pasado, en el cual había
sido actor y testigo de excepción. Es de recordar, que sobre cada uno de esos períodos,
Montenegro escribió y casi siempre publicó varios manifiestos , que a pesar de que tenían como
Una vez de regreso en Venezuela, Montenegro entró en contacto con muchos de sus paisanos
que le suministrarán valiosos datos con los cuales complementar los que él había venido
acumulando.
También tuvo la oportunidad de realizar nuevas lecturas, revisar previos apuntes, organizar su
copiosa correspondencia personal y oficial; y continuar, sobre todo, con el esfuerzo de redactar
las notas que urgentemente exigían las circunstancias de una nación , que apenas salía de la
El gral. José Antonio Páez, el coronel y antiguo presbítero José Felix Blanco, el prócer civil
patriota Francisco Javier Yanes y muchos otros ayudarán a Montenegro en su ardua tarea de
Hacia 1834, cuando ya completaba la edición de los tres primeros tomos de su trabajo,
documentos y noticias históricas sobre los acontecimientos de Venezuela ...” (38). En ellos, se
sintetizan las principales ocurrencias pasadas desde 1767 cuando reseña una revolución contra el
Colombia. En su texto de casi tres columnas de la página 3 de dicha Gaceta, don Feliciano
la situación de 1808 (noticias de España, conflictos con autoridades enviadas) ,revolución del 19
de abril, sucesos desde 1811 a 1823, otras noticias:la guerra en el Sur (Pasto, Quito, Perú,
Sin duda alguna, que con tal anuncio aspiraba a que todos aquellos que tuviesen documentos o
que pudiesen darle noticias en forma oral de lo que conocían ,supieran cuál era su interés
fundamental.(39)
Sabemos que muchos ya le habían suministrado o le habían ofrecido entregarle copias de
propio acopio de materiales históricos de origen realista. Entre quienes identifica como
colaborador en ese esfuerzo heurístico estuvo siempre el ilustre Francisco Javier Yanes.
Algo Más Sobre las Fuentes y el Contenido de la Obra Fundamental de Feliciano Montenegro
Colón.
nacional, afirma que nada escribirá sin el debido soporte de la documentación o de los
En un anterior comentario, a propósito del ambiente que rodeó al autor durante la escritura de la
(básicamente documentos realistas) y después de su regreso en 1831 aumentará esas fuentes con
De la revisión del contenido del cuarto tomo y sus principales referencias, se deduce que para la
fundamentalmente en las obras de Navarrete, el Padre Caulín, Fray Pedro Simón; y en los
testimonios de Federman y Huten (los llama Fédreman y Utre ) , Herrera, Humboldt, Alcedo,
Para esa primera parte, Don Feliciano no pretendió ir más allá de la síntesis o compilación en
muy pocas páginas de los hechos correspondientes a un amplio período de tres siglos , que
aparecía como una mera presentación o antecedente de la etapa nacional. En la obra, ese resumen
no representaba más que un diez por ciento del total de páginas editadas. (41)
A manera de ejemplo se puede señalar, que en unas cincuenta páginas, el autor sintetiza aspectos
tales como los límites de Venezuela; los viajes de Cristóbal Colón; otros viajes de
descubrimiento del territorio venezolano; las fundaciones de las primeras ciudades; acciones de
los Welser o belzares y de otros conquistadores; la guerra de conquista en Venezuela, esta última
muy detallada con los actos heroicos de los caciques aborígenes y los guerreros que enfrentaron
a los conquistadores. Ciertamente, parece ,que en esa última sección descansó en la gran Historia
Igualmente, con la misma concisión, en poco menos de cinco páginas, Montenegro despacha los
acontecimientos del siglo XVII, y en otras cuatro, resume lo ocurrido durante el siglo XVIII y
primeros años de la década inicial de la siguiente centuria. Se limitó a indicar los hechos
Es de pensar, que Montenegro estaba imposibilitado de ir más allá de esa síntesis preliminar que
contrario, es decir, realizar una amplia y seria investigación histórica del período
Puede asegurarse que la mayor experiencia que tenía Feliciano Montenegro no era precisamente
en el arduo trabajo en los archivos históricos, por lo demás, muy poco organizados para
entonces. Intentar escribir una Historia de Venezuela, remontándose a los hechos de los siglos
XVI - XVII y XVIII, requería tener paciencia y disposición para ese agotador esfuerzo
intelectual. Montenegro ,con más de cincuenta años de edad, un buen bagaje de conocimientos
geográficos y su experiencia como jefe militar, no era quien podía intentar reexaminar el lejano
pasado, cuando tenía enfrente retos más inmediatos: reivindicar su vida como venezolano digno
de volver a vivir en su patria recién emancipada, y sobretodo, echar por tierra las falsedades e
infamias - que en su opinión - propalaban obras como las de Mariano Torrente, especialmente la
La escasa extensión de la parte correspondiente al siglo XVII y al siguiente nos obliga a realizar
otras reflexiones, pues se ha sostenido que la segunda parte de la obra de José de Oviedo y Baños
estuvo en manos de Feliciano Montenegro Colón y que alguien le sustrajo la obra y la destruyó
¿Por qué si alguien destruyó tal obra, y era Montenegro quien la tenía guardada, ello no fue
comentado por el autor agraviado al verse privado de una valiosa fuente ? . Toda esa discusión
sobre la “misteriosa” segunda parte de la Historia de Oviedo, aunque es comentada por varios
Para la parte central de su obra, esto es, para la correspondiente a la narración de la epopeya
Feliciano Montenegro Colón hizo uso del gran reservorio de papeles de su propio archivo
personal (casi todo de origen realista), pero complementándolo ,como dice él, con las noticias
que le facilitó el consejero Yanes “extractándolas de los documentos que tiene en su poder ...”
(44)
Sobre esta característica de la obra, el Dr.Francisco Javier Yanes reconoció que él mismo, que
había logrado acumular - junto con José Félix Blanco, el Dr.Cristóbal Mendoza, y Antonio
Leocadio Guzmán - buena cantidad de documentos oficiales patriotas (casi todos relacionados
con Simón Bolívar) no había tenido la oportunidad de cotejar éstos con los de procedencia
realista. En ese sentido, afirmó Montenegro, que Yanes le planteó que “por carecer de
fuentes, Montenegro utiliza una amplia variedad de documentos jurídicos, políticos y militares.
Muchas veces, el simple documento sustituye el discurso del narrador, es decir, el autor cae en
un documentalismo acentuado transcribiendo muy extensos textos sin agregar ningún comentario
de su parte, considerando que éste habla por sí solo. En la obra, por ejemplo, transcribió
completa el ACTA DE LA INDEPENDENCIA - Caracas ,5 de julio de 1811 - (unas siete
páginas) ; el MANIFIESTO ... del 30 de julio de 1811, publicado en Caracas (en donde se ofrecía
disolución de Colombia plasmado en las actas y contra-actas de las municipalidades de los años
1826-1830. Allí, en esa parte, solamente nos enfrentamos a la lectura de documentos seguidos de
Aunque de menor importancia que su combate contra Torrente, también aspiraba Montenegro a
caraqueño y realista José Domingo Díaz), quien no solamente había contribuido a denigrar de la
causa de la emancipación venezolana, sino que también fue (aunque ello parezca extraño) uno de
esos que difamó a Feliciano Montenegro Colón propalando su propia versión del supuesto robo
de importantes documentos el año de 1811 , a raíz de la llamada “fuga” de Don Feliciano. (46)
Los fuertes comentarios que hace a lo largo de su Cuarto Tomo sobre << el gacetero de
Caracas>>, nos dan una buena pista sobre su sistemática lectura de la obra del fanático realista y
La obra de Díaz, que hoy conocemos gracias a la reedición crítica que hizo la Academia
Nacional de la Historia (47) , fue originalmente publicada en España durante el año de 1829. Al
respecto, escribió Ángel Francisco Brice que esta obra terminada de escribir en la capital
española no había sido reeditada “... quizá por habérsela considerado más un libelo, obra del
encarnizamiento que en todo momento demostró el autor contra los libertadores y contra la
lucha misma por independencia, que un trabajo histórico basado en la verdad e inspirado por el
deseo de realizar un estudio sereno e imparcial de los hechos que caracterizaron nuestra
epopeya...”(48)
No solamente por la lectura del contenido del cuarto tomo de Montenegro se puede inferir que
éste hizo amplio uso de la Gaceta de Caracas (por los despectivos comentarios en contra de su
redactor); sabemos también, a ciencia cierta, que el autor de la Historia que nos ocupa, vivió en
la ciudad capital o estuvo en contacto oficial con ella, durante buena parte del período de
dominación realista (esto es entre 1816 y 1821). Por tanto, tuvo que ser un lector sistemático de
los documentos y noticias, verdaderas o imaginarias, que allí se publicaban. Y en honor a la
verdad, hay que admitir, que no todo lo allí se publicaba tenía que ser mera propaganda, pues
También, las obras de Mariano Torrente - la Geografía Universal ... y especialmente la Historia
tenidas muy en cuenta por Montenegro como obras a las cuales enfrentar sistemáticamente en
A dicho autor se refiere Montenegro casi siempre llamándolo <<el afrancesado Torrente>> y en
unas dieciséis notas descalifica o niega lo afirmado por él sobre varios hechos ocurridos durante
librados entre patriotas y realistas) y , sobre todo, por la exculpación de los actos de barbarie
A lo largo de más de trescientas sesenta páginas ,se ocupa Montenegro de historiar la guerra de
el desarrollo de cada una de las campañas militares en sus respectivos espacios geográficos
(Oriente, Margarita, Guayana, Centro, Llanos, Occidente y otras regiones). Considera los
acontecimientos día a día, mes a mes y año a año ; indicando además las acciones de cada jefe
militar importante (realista o patriota) así como el saldo o los resultados de las acciones
emprendidas.
Esa rica y bien documentada crónica incorpora, de manera circunstanciada , los hechos
ocurridos en los cuales tomó parte el propio autor, pero sin hacerlo notar de manera abierta (por
ello se le ha llamado a su Historia unas memorias en tercera persona). La narración (en la parte
que ahora comentamos) la inicia con la mención a los acontecimientos españoles de 1808 y los
Finalmente, es pertinente acotar también que el amplio tratamiento que hace Montenegro de ese
período, así como de los siguientes (hasta 1836), debía tener relación con su formación como
militar de carrera, así como con su peculiar concepto de lo que era importante historiar.
Seguramente, Don Feliciano consideraba, al igual que la casi totalidad de los historiadores de
entonces, que sólo los sucesos político-militares daban la oportunidad de desarrollar un buen
discurso historiográfico. Por ello, su Historia no le dedica mayor atención a los asuntos jurídico-
políticos o constitucionales, culturales, sociales y económicos. Su fuerte era la guerra, y por ello,
desde 1806 hasta 1836, historió fundamentalmente los treinta años de combates y otros
conflictos.
Cuando Feliciano Montenegro Colón presentó su Historia de Venezuela en ese Cuarto Tomo de
páginas ,o algo peor, dejarlos en silencio ,teniendo a la vista gran cantidad de documentos que
Cristóbal Colón hasta los sucesos recientes de esa guerra de más de doce años entre realistas e
Fue por esa razón que en ese Cuarto Tomo, Feliciano Montenegro Colón rompió con el esquema
que se había impuesto para los tres primeros volúmenes de su obra. Recuérdese que tal esquema
aplicado a cada una de las naciones y regiones americanas establecía solamente un breve
independencia, etc. todo lo cual era sólo uno de los veintidós aspectos contemplados. Ahora,
Montenegro, escribió más bien una brevísima introducción sobre lo geográfico (apenas unas
cinco páginas) para indicar los límites, la situación y extensión del territorio. Y dedicó a la parte
El autor, que califica a su obra de Apuntes Históricos , consideró que ellos reseñarían los
esfuerzos y sacrificios que hicieron sus compatriotas por obtener la independencia y libertad.
(54) Se ve muy a las claras, que la exposición de la parte correspondiente al período de la guerra
de independencia era el centro o aspecto fundamental de los <<Apuntes>>. El resumen que
trataba de los acontecimientos que iban desde el Descubrimiento hasta los antecedentes del
autor o los que han estudiado su obra. Tampoco fue o ha sido de gran interés la parte final, es
decir la narración de los hechos ocurridos entre 1830 y 1836 con la Revolución de las Reformas
como centro del período, pues esta parte no fue más que una escueta crónica de la primera
administración del general José Antonio Páez y de los incidentes relacionados con la elección y
Más allá de los motivos explícitamente enunciados por Montenegro para escribir su obra
La vocación de historiador que se escondía debajo del uniforme militar que usó por muchos
años, llevó a don Feliciano a considerar como una obligación más de su parte salvar para la
posteridad las noticias que había logrado acumular a lo largo de su agitada vida ,de hombre que
participó activamente en las guerras y conflictos políticos de España e Hispanamérica. El, como
nadie, había estado en conocimiento de buena parte de esos sucesos sobre los cuales tenía
escritas esas <<memorias en tercera persona>>. Por tanto, llenar ese vacío intelectual era
imperativo para alguien, que como sabemos, conoció de cerca el proceso, y podía ahora, pasada
la tormenta revolucionaria, sentirse asqueado por la tergiversación de la historia que hacían los
Debe tenerse en cuenta que Montenegro ,como escritor , estuvo bajo la protección de José
Colombia>>. Fue bajo esa cobertura jurídico-política que pudo regresar a su patria hacia 1831;
patria que perdonaba primero a los antiguos realistas y otros desafectos mas no a Simón Bolívar
Esa situación de alguna manera quedó plasmada en el contenido de su obra y fue además una
buena razón para escribirla. En la obra, es notoria su admiración hacia Páez, quien sale muy
bien parado en líneas generales, considerando la estatura histórica que alcanza en el discurso. Sin
embargo, tal tratamiento (llamémoslo benévolo) no fue del total agrado del propio Páez y sus
seguidores que se resintieron por algunos juicios del historiador, especialmente en lo
concerniente a la <<Cosiata>> , así como lo que algunos vieron como una actitud demasiado
indulgente o francamente inclinada hacia la figura de Simón Bolívar, a quien detestaban los
enconados <<cosiateros>> , ex-realistas muchos de ellos, con ropaje de patriotas de nuevo cuño.
No obstante el hecho que estas consideraciones parecen válidas para explicar la razón o las
razones que tuvo Montenegro para asumir la tarea de escribir esa obra , puede también pensarse
que el autor escribió su Historia para exorcizar su pasado. Esto es, para presentar su propia vida
(de manera muy favorable) con el terrible drama nacional venezolano como telón de fondo.
Puede lucir exagerado, pero no es casual que una personalidad que fue conscientemente partícipe
esfuerzos para desentrañar el sentido de aquellos tiempos de horror y barbarie. Era vital para
Montenegro poder explicar esa etapa del pasado nacional ,pues en tal explicación estaba
olvidando los pecados individuales y colectivos de los llamados realistas nacidos de este o del
A través de sus Apuntes Históricos así como en los manifiestos públicos que hizo imprimir y
distribuir a lo largo de su vida, Feliciano Montenegro Colón siempre insistió en una idea
fundamental: fue cierto que sirvió la causa realista, pero en todos los cargos que le tocó asumir
(Consejo de Guerra, comandancias, Estado Mayor, gobernaciones, etc.) su norte fue siempre el
mismo: evitar las acciones fuera de la ley, los abusos, las matanzas y despojos, las venganzas de
algunos sanguinarios jefes como Morales, Aldama y otros. En suma, su tesis era que él había
hecho todo el bien posible a su patria y a sus paisanos venezolanos hasta donde las
Esa tarea de escribir esta obra pionera no fue ampliamente reconocida como uno pudiese
suponer. Para la propia época del autor, y también posteriormente, ese esfuerzo no se consideró
suficiente, o en otros casos, parece que no se consideró al escritor con la necesaria solvencia
como historiador, precisamente por ese pasado realista que ,decíamos antes, aspiró a exorcizar.
Un ejemplo de lo dicho antes, lo tenemos en unas crónicas aparecidas durante los años 1837 al
ocurrieron desde 1797 hasta la guerra de independencia. Es de observar, que el anónimo autor
afirma que su Bosquejo es una “ojeada sobre los anales de Venezuela, para que algún día
sirvan de auxilio a la pluma del Tácito que escribiere la gloriosa historia de nuestro pueblo”. Es
de suponer, que el autor de tales notas no consideró a Feliciano Montenegro Colón el Tácito de
Venezuela (ni a su obra los Anales) ,pues ya para entonces se había completado la edición de su
Cuando Fermín Toro, en medio de un amplio ensayo crítico sobre la historia escrita por Rafael
María Baralt y Ramón Díaz, le dedicó dos líneas a Feliciano Montenegro Colón y su obra,
solamente indicó que , al igual que los de Yanes , éstos eran “preciosos escritos coetáneos”. (57)
José Gil Fortoul, muchos años después, también siguió esa tradición nacional. Comentando sobre
los aportes historiográficos del colombiano José Manuel Restrepo, de Francisco Javier Yanes y
cuatro líneas a Montenegro. Acotó Gil Fortoul que “Codazzi fue el verdadero fundador de la
geografía venezolana, pues antes no existía sino la Geografía General de Feliciano Montenegro
Colón ... , la cual apenas merece recordarse ... por unos apuntes históricos venezolanos que en
ella incluyó el autor para uso de los alumnos de su Colegio de la Independencia.” (58)
El Impacto de la Obra
que la información recogida se concentra más entre los años 1836 y 1844.
De un total aproximado de ciento trece referencias más o menos relacionadas con el asunto
Tomo de ella; y dentro de esas nueve noticias de prensa están incluidos algunos simples
<<Avisos>> obra del propio Montenegro. Deben agregarse a esas nueve menciones a la obra
fundamental de don Feliciano, seis noticias relacionadas con sus <<obritas>> de carácter
pedagógico y tres juicios emitidos sobre él y su obra incluidos en otros análisis generales como
fue el escrito de Fermín Toro sobre la obra de Baralt; todo ello nos da un subtotal representativo
de dieciocho menciones.
presentamos a manera de comparación once referencias a Agustín Codazzi; una a Rafael María
Baralt; tres a Francisco Javier Yanes y una sobre Mariano Torrente. En total, dieciséis
menciones, casi todas ellas simples AVISOS. Lo que junto con nueve textos de tipo histórico y
sin autor (crónicas, apuntes, etc.) nos da un total de cuarentitres textos relacionados con el tema.
El resto del conjunto, es decir unas setenta menciones, se refieren a Feliciano Montenegro Colón
y su Colegio de la Independencia ,instalado en Caracas a partir de 1836. Casi todas esas setenta
Montenegro.(59)
Si partimos de que la mencionada Geografía ... tenía como meta fundamental servir de texto de
estudio para la juventud venezolana, y que el Estado inicialmente la adoptó como manual oficial
para los Colegios Nacionales, uno pudiese esperar que por lo menos a esos niveles, la obra debía
haber dejado una huella y con ello se estimulara su circulación y lectura, por lo menos en
Venezuela. Sin embargo, parece que tal cometido no lo logró ,pues como lo afirmó la
También cuando se comentaba lo relacionado con el patrocinio oficial recibido por la obra de
Montenegro, se trajo a colación lo referente a su uso como manual en los Colegios Nacionales.
Ello parece que no se hizo realidad cabalmente por los problemas de circulación que denunció
repetidamente el propio autor, quien llegó a señalar muy directamente, que su obra estaba cuasi
Cuando don Feliciano publicó en 1847 sus <<Recuerdos Históricos>>, dijo, con cierta
amargura que ,a pesar de todo ese saboteo , a la circulación de su obra, se había editado un libro
en París ,cuyo autor,de apellido Bustamante, lo citó ampliamente. Y agregó Montenegro con
gran ironía, que tal obra del señor Bustamante, dedicada a los nuevos estados americanos es, a
obtenido por Codazzi y Baralt, no quedan dudas sobre la ventaja de los últimos nombrados.
En los ya citados ensayos escritos por Fermín Toro con motivo de la publicación de los libros de
Codazzi y Baralt, éste planteó sus opiniones críticas sobre el contenido de los textos. En el
primero de ellos ,publicado en enero de 1842, Toro analizando el primer tomo de la obra de
Rafael María Baralt, desmenuza su contenido y en unas diez páginas presenta su juicio sobre los
aspectos positivos y negativos presentes. Es acá en ese conjunto de juicios sobre los autores
“extractados” o resumidos por Baralt donde aparece la mención de los “preciosos escritos
En segundo término, publicó Toro una amplia crítica científico-literaria sobre la obra de Codazzi
también recién editada en París junto con la de Baralt. En su largo y bien escrito ensayo de
febrero de 1842 publicado en las columnas de El Liceo Venezolano el articulista examina los
corrida por las antiguas naciones aborígenes cuya triste suerte quedó plasmada en las páginas de
la obra. (63)
En otros periódicos, podemos observar ese interés por la Historia y la Geografía comentadas
antes. Por ejemplo desde 1839 y a través de las entregas de EL LIBERAL se fueron publicando
listas parciales de los suscriptores de la obra de Codazzi hasta alcanzar finalmente los 1.254
ejemplares apartados. (64) Por cierto, uno de tales suscriptores fue Feliciano Montenegro Colón
quien adquirió cuatro de estos ejemplares ,seguramente para la biblioteca de su colegio. (65)
A mediados del año 1841,en EL VENEZOLANO,que fue otro importante órgano de opinión
nacional, se destacó la noticia de la llegada de los señores Carmelo Fernández (dibujante), Rafael
María Baralt y Agustin Codazzi junto con los primeros ejemplares de la obra impresa en París.
(66) Asimismo, se publicó en un número extraordinario los elogiosos comentarios que hizo
Sabin Berthelot, de la Sociedad Geográfica de París, sobre la obra de Codazzi. (67) Tanto en esa
A pesar de que comparativamente (con Montenegro) son numerosas las variadas referencias a la
obra de Codazzi y Baralt , ellas no fueron más allá de esas reseñas iniciales, motivadas por
supuesto por la novedad de la obra. Pasado ese impacto inicial y sin contar la publicación de las
sucesivas listas de suscriptores, la prensa nacional fue muy insensible al debate historiográfico.
Además del caso ya antes referido (69) , solamente localizamos otra serie similar en cuatro
vez cuestionado por otros, que le señalan unos supuestos errores. No obstante, más allá de la
polémica con los lectores y el redactor del periódico, lo más notable es que se señalan unas
correcciones se referían a varios detalles sobre la polémica retirada del coronel patriota García de
Sena, desde Barinas en enero de 1814. Este es casi el único ejemplo, donde pudo observarse
algún eco directo de la obra de Montenegro en la opinión, ya que en líneas muy generales el
contenido histórico. Los mencionados son ,por decirlo así, unos de los raros ejemplos
localizados. Era mucho más factible conseguir en los periódicos reproducciones de capítulos de
novelas europeas, comentarios técnicos sobre asuntos agrícolas, avisos sobre fugas de esclavos,
movimiento comercial, llegada y salida de buques o cuando mucho la llegada de alguna novedad
bibliográfica a las pocas librerías del país. El plato fuerte de la casi totalidad de los periódicos de
la época era la lucha política (elecciones, facciones, etc.) y la información relacionada con las
decisiones de los poderes públicos. Dentro de los temas tratados comunmente en las páginas de
la prensa venezolana, el debate historiográfico no ocupaba lugar de preeminencia y ello obedecía
(pudiera creerse) a la molestia que producía en muchos, el enfrentarse a ese incómodo pasado
reciente, donde muchos habían sido actores de primera línea y no precisamente en el campo de
los que defendieron la patria que nacía en medio de esa espantosa <<guerra civil>> en que se
Una excepción a lo planteado anteriormente, fueron algunas <<Reflexiones>> hechas hacia 1842
VENEZOLANO considerando las graves injusticias que había sufrido don Feliciano hizo un
elogio de sus méritos como educador, filántropo e intelectual. Dijo entonces Guzmán, que
Geografía. (72)
notablemente en autores como Rafael María Baralt. Mas no fue éste el único, aunque si uno de
De los historiadores coetáneos o los posteriores a la edición del <<Cuarto Tomo>> --- Francisco
Javier Yanes, Juan Vicente González, Felipe Larrazábal, José Félix Blanco, José de Austria y
Rafael María Baralt --- , solamente el último de los nombrados escribió y publicó una verdadera
fundamentales.
(73) , permitió superar esa ausencia de una verdadera tradición historiográfica venezolana, una
de cuyas excepciones fue la Historia de José de Oviedo y Baños (74) .La obra de Baralt (y la de
Codazzi) al igual que la de Montenegro ,recibió el patrocinio oficial del gobierno de José
Antonio Páez y en cierta forma también produjo similar descontento en los altos círculos
textos seleccionados , permite comprobar la estrecha relación existente entre lo escrito por Baralt
en su Resumen de la Historia de Venezuela y una de sus fuentes más importantes, es decir los
Recuerdos Históricos de Feliciano Montenegro . Por supuesto que Baralt utilizó otras fuentes
tales como Depons, Oviedo y Baños y muchos otros no siempre citados con el debido rigor.
En relación con la valiosa Relación Documentada de Francisco Javier Yanes, consideramos que
lo que hubo fue un fructífero intercambio de documentos (parece que más de Yanes hacia
Montenegro que viceversa). En varias notas de su cuarto tomo, Montenegro comenta sobre sus
casos su autorizada opinión sobre aspectos planteados. En todo caso, si ciertamente Yanes
Posibles Razones que Explican el Relativo Rechazo de sus Contemporáneos Hacia Feliciano
A lo largo del presente capítulo, ya hemos mencionado numerosos casos que pueden ser
como el por qué obras como la Geografía ... no tuvieron la aceptación que merecían. No
insistiremos más en las denuncias que hizo el propio Montenegro sobre el “encarcelamiento” de
sus libros en los almacenes de la Tesorería de la Nación y en las contínuas descalificaciones que
recibió de personajes como el Dr. Quintero que lo juzgó sólo apto “para coger café” ; o de otros
que le endilgaron epítetos como godo, realista, militar ignorante, traidor. (78)
Una interrogante que puede plantearse es si entonces hubo Horror a lo Contemporáneo u Horror
a un Pasado que escondía culpas colectivas que muchos querían olvidar. Aún con el riesgo de
parecer reiterativos, nos atrevemos a plantear que si se ve bien nuestro asunto, y lo comparamos
con lo que posteriormente si se convirtió en una especie de vicio historiográfico nacional(79) ,la
mayores como las de José Manuel Restrepo (Historia de Colombia...) , Francisco Javier Yanes,
Rafael María Baralt , Juan Vicente González , Felipe Larrazábal y José de Austria; así como
panfletos revolucionarios.
La anterior consideración nos lleva a sostener que necesariamente existía un factor explicativo
del rechazo a la historia que iba más allá de las virtudes o defectos del autor y su obra.
Lógicamente tal factor no era otro que esa mala conciencia que perseguía a muchos de los que
formaban la élite venezolana en los tiempos de la escritura y publicación de los libros de Don
Feliciano Montenegro.
autores también; ese <<horror a lo contemporáneo>> que parecían sentir los potenciales lectores
de entonces era el reflejo natural de los que no querían que testigos incómodos hablaran a través
de los documentos citados o a través del propio testimonio del escritor (testigo de excepción) de
oportunidades; no siendo el único, por supuesto, el célebre Marqués de Casa León, quien muy
bien personificará esa conducta descrita magistralmente en la obra de don Mario Briceño
Iragorry.(80)
En síntesis, fueron los potenciales lectores ,es decir los prohombres de esa élite de antiguos
mantuanos, no todos con su conciencia limpia de pecados como para que se erigieran en los
responsables de la acción de lapidar a don Feliciano y su producción intelectual; los que que
desde los poderes públicos, la prensa, los colegios y universidades hicieron todo lo posible para
que tal historia (u otras escritas por otras plumas) no llegase a quienes estaba destinada.
Para cerrar esta sección sobre el polémico historiador, se ofrecen estas consideraciones
generales:
La revisión de las fuentes nos permite, por ahora al menos , tener algunas certezas sobre varios
aspectos de la vida y obra de Feliciano Montenegro Colón. No obstante, tenemos que admitir
también, que todavía tenemos muchas dudas sobre algunas etapas de su vida y de su obra
intelectual.
Como ocurre casi siempre, buena parte de las acciones que las personas llevan a cabo a lo largo
de su vida adulta, no son otra cosa que la proyección de su temprana biografía. En el caso de
familiares, su formación intelectual y su quehacer hasta los cincuenta años, con lo que fue su
El contexto social en el cual se formó inicialmente el personaje estudiado no fue otro que el de la
clase social y el rango de su familia materna, así como la preeminencia social y política de su
padre (español-peninsular) que llegó a formar parte de la Real Audiencia de Caracas marcaron su
destino. O dicho de otra manera, su acceso a la selecta educación superior y a la milicia (donde
fue oficial de carrera hasta el grado de Coronel) no fue algo a lo que pudiera haber aspirado
cualquier venezolano de su misma generación, tales privilegios estaban reservados ,en tiempos
regulares, a los que como él podían exhibir junto a sus talentos y habilidades la alcurnia de sus
Su regreso a la patria en 1831, abrió una última etapa en el ciclo vital de Feliciano Montenegro
Paradójicamente ,durante ese ocaso, cuando Montenegro sufrió los achaques de la vejez, las
estrecheces de la pobreza relativa casi en forma permanente, los ataques más despiadados a su
reputación, y peor todavía, la indiferencia pública ante sus desvelos por la educación nacional
fue cuando escribió y publicó sus obras fundamentales; las cuales tampoco le granjearon un
El cambiar su espada de coronel realista por la pluma del geógrafo e historiador pretendidamente
imparcial, que quería salvar para la posteridad la gloria de los héroes de la patria venezolana y
además limpiar la afrenta infligida por el autor español Mariano Torrente al orgullo de una
Hispano América ,que había derrotado a su antigua metrópolis, fue una tarea que no le reportó
mayores créditos entre sus compatriotas que lo siguieron apostrofando hasta su muerte (y aun
después) como godo, realista, traidor, <<tránsfugo>> y otros calificativos del mismo tenor.
llevaron a la tumba.
Si uno se pregunta la íntima razón que, tal vez , tuvo en mente Montenegro al decidir echarse
encima esa tarea de ser el Tácito de la nueva patria que lo acogía en su seno como el Hijo
Pródigo , puede suponer, razonablemente , que éste quiso afianzar su identidad nacional como
venezolano (y en cierta manera justificar esa vida que llegaba al ocaso) , escribiendo obras útiles
El constante combatir con su pluma en defensa de su nombre y de su honor, fue para Feliciano
Montenegro Colón uno de sus quehaceres fundamentales. Entre sus armas principales estuvieron
la apelación a ese gran tribunal de la opinión ,la cita de honorables testigos incuestionables y el
recursos pecuniarios, parece que resultaron insuficientes para la ciclópea tarea a enfrentar, pues a
pesar de todos los textos que escribió y publicó no pudo revertir la corriente de adversos juicios
Su Obra Mayor.
Si se hace una comparación entre la Geografía General ... (especialmente su Cuarto Tomo) y el
resto de sus escritos, no nos queda la menor duda sobre el más elevado nivel que tuvo tal obra,
que llegó a ver publicados cuatro tomos y a dejar todavía inédita una parte de ella.
quien lanzó sus duras críticas en el tomo IV) puede admitirse que la obra del segundo ejerció una
influencia mucho mayor a la que explícitamente se deja ver. Pareciera que en los tres primeros
tomos, el modelo seguido y la fuente no indicada es la obra de Torrente. La gran diferencia ,ya lo
sabemos, se observa en la narración que hace cada uno sobre la Historia americana reciente.
Mientras que para Torrente todo se reduce a realizar la crónica de una guerra donde los leales
asesinos (en Venezuela destaca a Simón Bolívar, J.A.Páez y J.B.Arismendi) , para Montenegro
la cuestión es totalmente opuesta. Don Feliciano no solamente trata de demostrar los evidentes
errores fácticos de Torrente cuando le replica en todas las notas que indica en su cuarto tomo.
También le responde (sin nombrarlo) cuando presenta con todo detalle los actos de barbarie que
cometieron aquellos que Torrente calificó de <<héroes>>: José Tomás Boves, Francisco Tomás
Morales y otros jefes similares. No obstante, hay que admitir que Montenegro fue muchísimo
más equilibrado en su condena a la barbarie de la guerra a muerte que azotó a Venezuela; cuando
lo consideró necesario, examinó y condenó las matanzas llevadas a cabo por los republicanos en
estuvo muy cercana de una ecuánime y honesta narración de un período particularmente difícil
dado que gran parte de los sectores populares estuvieron, casi hasta el final, opuestos a la
república. Esa élite quedó desnudada por la pluma de don Feliciano quien , al ofrecer detalles
<<imparcialidad>>. Les costaba admitir que alguien que tuviese ese pasado realista pudiese
<<desdoblarse>> así y abandonar su propia participación entre los enemigos de la patria para
escribir un verídico testimonio de los hechos. Sin embargo, es de elemental justicia reconocer
que Montenegro realmente hizo un gran esfuerzo recogiendo sistemáticamente toda clase de
fuentes ,tanto de procedencia realista como patriota, para apuntalar su narración; siendo ayudado
en su tarea por insignes colaboradores como el historiador patriota Francisco Javier Yanes. Este
fue uno de los muchos que le facilitaron variados documentos oficiales, periódicos y valiosos
independencia.
Por supuesto que a tales fuentes recogidas después de su regreso en 1831 con la ayuda de
patriotas amigos, debíanse agregar las que el propio Don Feliciano venía colectando desde
mucho antes, ayudada su tarea por su participación directa en el proceso que luego pretendió
historiar.
El ambiente donde Don Feliciano colectó sus fuentes determinó junto con su experiencia vital y
formación intelectual que lo fundamental de su obra tomase ese matiz de gran crónica
guerrera .El análisis del <<cuarto tomo>> que resumió sus Apuntes Históricos—en líneas
tendencia es idéntica).
En sus apuntes, Montenegro sigue rígidamente la línea que sus documentos le imponen. En
muchas partes de la obra el relato del autor es sustituido por la simple reproducción de largos
documentos que supuestamente <<hablan solos>> pues quien los cita no los somete a crítica o
favor del autor quien trata por todos los medios de demostrar su imparcialidad como historiador
con sus comprobantes oficiales siempre a mano. Lógicamente, Montenegro sigue los estilos y
discurso historiográfico.
Finalmente, nos vemos tentados a insistir una vez más en este planteamiento. Tenemos la
convicción de que los historiadores venezolanos de la primera mitad del siglo XIX no le tuvieron
horror a lo contemporáneo, pero sí se lo tuvieron muchos de los que conformaron las élites del
momento.
El trauma dejado por una cruenta y larga guerra durante la cual muchos cambiaron de bando (el
Marqués de Casa León no estuvo solo en el grupo) determinó esa situación de <<mala
Congreso Nacional, gabinete ministerial, los tribunales y en la prensa de opinión. Tal cosa
explica esas actitudes cicateras (por ejemplo en el Congreso) hacia quienes escribieron sobre ese
pasado.
Ese verse retratados en el papel de los textos de historia causaba profunda desazón en las
conciencias de muchos de esos patriotas de última hora que escondían su pasado de delaciones y
traiciones con ensayadas poses de mártires nacionales y enrostrándole todo tipo de epítetos a
adversaron a Feliciano Montenegro Colón que éste ,habiendo estado del otro lado de la barrera ,
asumiera esa delicada tarea intelectual y política de partero historiográfico de la nueva nación
A todo lo anterior habría que agregarle la difícil explicación historiográfica que había que
realizar para poder conciliar el culto a los héroes (teniendo que incluir a Simón Bolívar y a José
A los ojos de quienes dirigían el Estado y controlaban las instituciones políticas y la opinión,
ninguna Historia de esas escritas para entonces, y menos la de Feliciano Montenegro Colón,
dejaba plenamente satisfechas sus expectativas pues ella no cumplía cabalmente con el cometido
que ellos habían establecido o deseado, esto es, la justificación intelectual del nuevo orden
Simón Bolívar.
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NOTAS (Capítulo II, Sección # 1)
1) Napoleón Franceschi G.: Vida y Obra del Ilustre Caraqueño Don Feliciano(Montenegro
Colón .Su Aporte Historiográfico y Contribución al Desarrollo de la Educación Venezolana de la
Primera Mitad del Siglo XIX. Caracas, DGIRP - Alcaldía de Caracas, 1994 191 p.
(4) En relación con la pobreza sufrida por Montenegro véase especialmente su propio testimonio
en Manifestación Documentada ... (1846), p.35 ; Recuerdos Históricos ... (1847), pp. 4, 5, 9,
12, 13, 14, 15, 15, 29, 31.
(5) Son importantes estos textos del propio Montenegro y de algunos de sus biógrafos. Véanse
entre otros:
Feliciano Montenegro Colón: Manifiesto que hace el Teniente-
Coronel D.Feliciano Montenegro Colón, .... sobre la conducta
que observó en Maracaibo .... 1820.
---------:Contestación al Suplemento de El Fanal ... 1820
---------: Exposición que hace a las Cortes el Teniente Coronel Feliciano
Montenegro .....,1822
---------: Conducta Militar y Política de Feliciano Montenegro durante su dependencia del
Gobierno Español. Demostración de sus servicios a la causa americana .... 1831
---------: Manifestación Documentada en Justa Defensa de Feliciano Montenegro
Colón ...,1846
---------: Recuerdos Históricos y Curiosidades Útiles ... ,1847
(este último es uno de los más importantes).
Véase además :
AUTOBIOGRAFÍA Del General José Antonio Páez .....Caracas,1946
(sobre FMC, vol.II,pp.183-192)
Ramón Azpurúa: Biografías de Hombres Notables .....Caracas,1877
(la de FMC en vol.IV,pp.92-95). Esta información es recogida por A. Boulton “Estudio...”
op.cit.,pp.11 - 88. ; por Mary Watters: <<A Venezuelan Educator:Don Feliciano Montenegro
Colón ....>> ,1947; y por Hector Bencomo Barrios:”Feliciano Montenegro Colón...” (vol.E-O,
pp. 995-996) en DICCIONARIO DE HISTORIA DE VENEZUELA..., Caracas, 1988
(10) Feliciano Montenegro Colón: Manifestación Documentada ... , Op.cit. ,pp. 13-17
(11) Ibídem
(12) n.a. Sobre la fecha de su fallecimiento y las condiciones en que vivía para el momento de su
muerte no conseguimos sino silencio en las fuentes hemerográficas. Aunque tomamos la fecha
que sus biógrafos repiten, no hemos localizado aún información documental sobre ella.
(13) Sobre ésto véanse:las fuentes indicadas en la nota # 5 y además lo planteado en: Feliciano
Montenegro Colón: <<Aviso que puede ser de utilidad>> (hoja suelta).Caracas,1850 ;Antonio
Mieres: Tres Autores en la Historia de Baralt ..., Caracas, 1966;
Caracciolo Parra-Pérez: Historia de la Primera República ...
(17) Ibídem.
(18) Feliciano Montenegro Colón: Geografía General .... Op.cit. vol. I, “Dedicatoria”
(24) Ibídem: Entre otras obras anuncia una <<Geografía Venezolana>> en dos tomos, esa quinta
parte sería la continuación de su Geografía General.... Dice que ya se hubiese publicado si el
Ministro del Interior no la hubiera despreciado en 1847, olvidando que desde 1835 ésta se
elogiaba en la prensa europea y acá también lo han hecho algunos ilustrados autores.
Sobre su Historia de Venezuela comenta la parte ya publicada e indica que para ese Cuarto Tomo
recibió consejo del ilustrado F.J.Yanes. Agrega que ha continuado escribiendo esa Historia a
partir de 1836 y la publicará con varios tomos de documentos antes no incluidos. Además
anuncia la publicación de otras obras nuevas:Biografías Venezolanas;Educación del Bello Sexo;
Espejo de los Calaveras; Erupciones Volcánicas y Terremotos; Descripción de 311
Cavernas.Finalmente, anuncia la reimpresión de sus obras anteriores. Ver también: Feliciano
Montenegro Colón: “Geografía...” en GACETA DE VENEZUELA # 189 (solicitud de datos
geográficos venezolanos)
(28) Feliciano Montenegro Colón: Recuerdos Históricos ... . Op.cit., p.21 (notas).
Ver también en : Feliciano Montenegro Colón: Manifestación Documentada ... . Op.cit., p.23
(notas)
(30) Junta Consultiva de Hacienda (aviso ofreciendo en venta lote de la obra Geografía ... de
Montenegro, indica cantidad de tomos y valor total de los existentes).EL VENEZOLANO, # 79
(31) EL PATRIOTA, # 2
(32) Feliciano Montenegro Colón: Recuerdos Históricos ... . Op.cit.,p.22 //// n.a. Don
Feliciano atribuía todas sus desventuras a las intrigas de Angel Quintero contra él y su obra.
(33) EL VENEZOLANO , # 94
(37) n.a. Véase: Napoleón Franceschi G. :Vida y Obra del Ilustre Caraqueño Feliciano
Montenegro Colón ...., Op.cit.
(43) Guillermo Morón: Los Cronistas y la Historia. Caracas,Ediciones del M.E., 1957 . (p.126,
citando a la página 10 de Julio Calcaño: Reseña de la Literatura Venezolana del Siglo
XIX ... .Caracas, Tip.El Cojo, 1888.) . Véase también: Gonzalo Picón Febres: La Literatura
Venezolana del Siglo XIX .Caracas, El Cojo, 1906 (De esta última obra existe edición de la
Presidencia de la República, Caracas, 1972)
(46) n.a. Sobre ese oscuro incidente (ya antes explicado) se han tejido contradictorias versiones.
Unos acusaron a Montenegro de haber sustraído importantes documentos cuando decidió irse
secretamente del país en los días previos a la declaración de independencia del 5 de julio de
1811. Otros, como su biógrafo Don Alfredo Boulton, aceptando la sinceridad de los testimonios
del propio Montenegro, defienden al acusado de haber sido un mero tránsfuga.
Por otra parte, en la biografía de Bolívar escrita por Felipe Larrazábal (t.I,p.107) , al narrar este
autor tal incidente, aprovecha la ocasión Rufino Blanco Fombona (autor de la introducción y las
notas) para apostrofarlo en estos términos:
“<<Este miserable se atrevió después a escribir la historia de la independencia.>> “ (t.I,p.107)
(50) Sin duda alguna, Mariano Torrente es uno de los autores más mencionados a lo largo de la
Historia escrita por Montenegro. Este establece con él una especie de duelo intelectual
calificándolo siempre - creemos que despectivamente - como <<el afrancesado Torrente>> y
tratando siempre de demostrar con documentos probatorios sus supuestas inexactitudes, errores y
actitudes complacientes con hechos de barbarie injustificable.
Montenegro, es evidente, tenía ciertos prejuicios antifranceses , pues cuando arremetió contra J.
A. Verdaguer (1821), alude que éste había tenido simpatías hacia los franceses. Esa actitud de
don Feliciano se debió seguramente a cierto nacionalismo español afianzado por sus recuerdos
de la guerra de independencia española en contra de la invasión napoleónica, especialmente
durante 1808-1810 y 1811-1813; así como de la invasión francesa de 1823 que trajo de vuelta la
monarquía absoluta y las persecusiones que lo alcanzaron.
(53) Feliciano Montenegro Colón:Op.cit. (Cuarto Tomo) 646 p. ; Ibídem: vol.I, 421 p.(menos 88
p. Introd.), vol.II, 377 p.
Lo correspondiente a la Geografía de Venezuela lo pospuso F.M.C para un <<Quinto Tomo>>
que como sabemos quedó inédito. Ver al respecto su <<hoja suelta>> AVISO QUE PUEDE
SER DE UTILIDAD, Caracas, 1850
(56) LA BANDERA NACIONAL,# 8; 18; 20; 47; 55; 62; 102; 103.
(59) Véanse los periódicos del período en la sección de fuentes hemerográficas, pues sería
demasiado extenso indicar la referencia de cada uno de ellos.
Entre tales menciones conseguimos noticias sobre convocatoria a los exámenes públicos de los
alumnos del colegio; premios obtenidos y nombre de los galardonados en los exámenes; cátedras
y profesores para cada curso; problemas relacionados con la reedificación y equipamiento del
viejo convento de San Francisco (sede entregada por la nación); instalación de una Academia
Latina y de una Academia de Historia (grupos de discusión para estudiantes y profesores);
problemas relacionados con los alumnos (disciplina, salud, uso del uniforme) ; funcionamiento
de una escuela elemental, de una Escuela Normal y de otras instituciones filantrópicas.
(62) Fermín Toro:”Crítica. Resumen de la Historia de Venezuela... por Rafael María Baralt”,EL
LICEO VENEZOLANO
# 1, p.1
(63) Fermín Toro: “Crítica. Resumen de la Geografía de Venezuela por Agustín Codazzi”.... EL
LICEO VENEZOLANO
# 2, pp.49-55
(65) EL LIBERAL, # 157 (suplemento con lista de suscriptores iniciales de la obra, FMC entre
ellos).
(68) EL LIBERAL # 470 (2-1-1844): Aviso anunciando la obra <<Catecismo de Geografía por
A.Codazzi>>. Ese resumen escolar del mismo autor del ATLAS debió reforzar más la influencia
de la obra mayor y seguramente ello fue un obstáculo más para el plan que tenía don Feliciano de
publicar una Geografía de Venezuela.
(69) n/a. En el periódico LA BANDERA NACIONAL ,y en sucesivas entregas de los años de
1837 y 1839, se publicó un Bosquejo Histórico de la Revolución de Venezuela en el cual su
anónimo autor ofrecía su contribución para que el TACITO venezolano redactara la Historia
Nacional de Venezuela ;por tanto, sugería que Montenegro no lo era, pues ya su obra estaba
publicada.
LA BANDERA NACIONAL # 8; 18 y 20 del año 1837; # 47; 55 y 62 del año 1838; # 102 y
103 del año 1839.
Además de esa serie, localizamos a un crítico histórico que cuestiona una versión publicada
sobre la Batalla de San Félix. Quien solamente se identifica como “Un Testigo Presencial”, dice
en su <<Aclaración para la Historia>>, que las cosas no ocurrieron de esa manera. Comparando
lo planteado por Feliciano Montenegro Colón sobre ese combate y lo dicho por el crítico,
pareciera que no es a don Feliciano a quien cuestiona.
(73) Eduardo Arcila Farías: “Prólogo” a la obra de Antonio Mieres:Tres Autores en la Historia
de Baralt, p.10
(75) Rafael María Baralt: Resumen de la Historia de Venezuela ... . Ver taambién : Antonio
Mieres: Tres Autores en la Historia de Baralt ...,Op.cit.
(77) El anuncio de la publicación de una Historia de Venezuela: Los avisos fueron publicados en
EL LIBERAL # 212 (19-5-1840) y en el número siguiente junto con aviso sobre obra de
Codazzi. También se le publica en EL VENEZOLANO # 3 (reaparece el aviso en varias
ediciones de 1840); en ellos, el editor Antonio Damiron ofrece la obra como un “Compendio de
la Historia de Venezuela” cuyo “autor es un antiguo magistrado de Venezuela, patriota ilustre y
distinguido literato” - aunque no lo dicen se supone que este autor es F.J.Yanes.
Sobre la obra se dice que es “Un compendio de la historia de Venezuela desde su descubrimiento
hasta que se declaró estado independiente” Tal obra saldría a la luz dentro de poco en un
volumen en 4to. pues “nuestra juventud carecía de un compendio de la historia de su propia
patria y en la que ofrecemos al público encontrará un lenguaje castizo y narración verídica,
circunstancias que la hacen sumanente recomendable para que se adopte en los colegios y
escuelas de la república.”
Es curioso que fuese el mismo editor de la obra de Feliciano Montenegro Colón quien hiciera las
afirmaciones anteriores, especialmente eso de que “nuestra juventud carecía ...”
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Nació éste en Maracaibo el tres de julio de 1810, hijo de Miguel Antonio Baralt y Ana Francisca
Pérez. Muy niño fue llevado por sus padres a vivir a Santo Domingo (Isla Española) y allí inició
sus estudios. Posteriormente regresó a su ciudad natal y, ya para 1821, se encontraba en la recién
Volantes>>; poco después, presencia la definitiva liberación de la región a mediados del año
1823 como consecuencia de la batalla naval del lago y la ocupación de Maracaibo por las fuerzas
patriotas.(1)
Se sabe que hizo estudios de latinidad, filosofía y derecho en Bogotá (1824-1826) , ciudad a la
que viajó en compañía de un tío suyo quien iba a ocupar una alta posición pública en la nueva
República de Colombia. En esa capital se hizo Bachiller, mejoró su aprendizaje del francés,
realizó innumerables lecturas y asistió regularmente a la barra del Senado presidido por su tío
Luis Andrés Baralt. Este le envió de regreso a Maracaibo, donde desde su llegada, se incorporó
del lar nativo. Más bien, quería viajar a Francia y dedicarse a las letras. No obstante, mientras
esperaba su oportunidad, participó como redactor de un periódico local titulado <<El Patriota
del Sulia>>, del cual salieron 26 entregas entre febrero y septiembre de 1829.
A pesar de su anterior posición pública ,es decir, en favor del Libertador y la Gran Colombia,
firma el acta del 16 de enero de 1830 mediante la cual Maracaibo decide su separación de la
unidad grancolombiana y reconoce la autoridad del general José Antonio Páez. Además, el joven
Rafael María Baralt “dando al olvido su proyecto de trasladarse a Francia , resolvió solicitar
un puesto a las órdenes del general Santiago Mariño, quien en marzo de 1830 había sido
designado por Páez (para entrevistarse) con los comisionados de Bogotá, que lo eran el
Ello le permitió reunir un conjunto de documentos relacionados con la marcha de las fuerzas
militares que escoltaban al grupo negociador y publicar una memoria sobre tales eventos. Este
raro folleto laudatorio fue impreso en Guanare y reimpreso poco después en la ciudad de
Valencia. (4)
Culminada esa primera experiencia militar, se residenció en Caracas durante la década de 1830-
1840 y realizó estudios en la Academia de Matemáticas, escuela militar, dirigida por el sabio
Juan Manuel Cagigal. En 1832, se graduó allí de Agrimensor Público, y ya para 1836, obtuvo su
cursos de la academia (matemáticas y formación castrense), así como su conducta en defensa del
gobierno constitucional del Dr. José María Vargas amenazado por la Revolución de las
Reformas. Es de destacar que, con motivo de esa insurrección, todos los alumnos y sus
costumbres, poemas y otros textos en la prensa de la ciudad. Los periódicos Correo de Caracas
que tanto contribuyó a su formación. En efecto, su maestro y amigo Cagigal le pidió que
Hacia 1840, ingresó a trabajar como oficial en el Ministerio de Guerra ;fue por ello, y por su
relación con Agustín Codazzi - también partícipe en los trabajos de dicha <<Sociedad>> - que
Al respecto ,señala Agustín Millares Carlo, hay dos opiniones. Una es la aportada por el propio
Codazzi que sostuvo que fue él quien en 1839 incorporó a Baralt en la empresa conjunta del
Atlas, agregando que ,dada la premura, se asoció también a Ramón Díaz M. La otra posición
(sostenida por Díaz Sánchez) plantea que ese trabajo histórico lo venía haciendo Baralt por
propia iniciativa desde 1837. Como sea, el hecho fue que el llamado <<Resumen>> de Baralt y
Díaz , por su extensión y alcance, no pudo haberse escrito sólo en tan corto período, aunque
fuese en 1839 cuando Codazzi los invitara a ayudarlo en su dura tarea. Obviamente ello no
Una vez que el Congreso Nacional aprobara la primera asignación de diezmil pesos en calidad de
préstamo, viajó a París el grupo formado por el propio Agustín Codazzi y su esposa Araceli
Rafael María Baralt y Ramón Díaz, el colaborador de este último. Así, pudo Baralt realizar su
sueño de ir a París a terminar de escribir y hacer imprimir la obra auspiciada por el gobierno del
general José Antonio Páez. Posteriormente, hubo necesidad de pedir cincomil pesos adicionales,
gastos relacionados.(6)
Después de su regreso de París, Baralt estuvo por poco tiempo en Caracas durante los meses
finales del año 1841. Ese lapso fue aprovechado para escribir - junto con Manuel María Urbaneja
- un Catecismo de la Historia de Venezuela ,el cual permaneció inédito hasta 1865. Dicha obra
de tipo pedagógico, presentaba las nociones elementales de la historia patria para conocimiento
de los jóvenes estudiantes venezolanos que no estaban en condiciones de leer con provecho ese
Seguramente considerando el enrarecido ambiente político del país que no terminaba de aceptar
la obra producto de tantos desvelos, Baralt decidió aceptar una tentadora oferta para ir
nuevamente a Europa. En tal sentido, el escritor viajó a Europa a finales de 1841 y permanecerá
allí sin regresar más nunca a su patria. Primeramente estuvo en Inglaterra y después se
estableció en España a partir de 1842. Su misión oficial original fue localizar documentos en los
archivos históricos que sirvieran para defender la posición venezolana en las negociaciones de
delimitación de las fronteras, en especial las de la Guayana Esequiba. Pero la ojeriza en su contra
por parte de muchos de los que controlaban la vida política e intelectual del país, determinó la
suspensión de los pagos del sueldo que venía recibiendo del gobierno venezolano; ello ,sin duda,
Quienes controlaban el Congreso Nacional de Venezuela, no podían dejar sin la debida sanción,
a quien aparecía ante sus ojos como el principal autor de una obra que no satisfacía su rígida
si pudo hacer carrera política y literaria. La reina Isabel II le tuvo en gran estima, encargándole
esas funciones, tuvo la oportunidad de ser agente diplomático de Santo Domingo para negociar
Castellana así como las primeras entregas del mismo; y en 1853 ,fue incorporado a la Real
de la lengua castellana. Sin regresar a su <<tierra del Sol amada>> ,donde no obstante siempre
siguieron con sumo interés sus pasos por las letras españolas , un cuatro de enero de 1860 la
A pesar de esa larga ausencia , “conservó con frescura inextinguible ,al través de una dulce
nostalgia, el amor a la tierra nativa, actitud sentimental que tradujo en versos de corte clásico,
como su oda <<Adios a la Patria>> y sus sonetos a Bolívar y a la batalla de Ayacucho.” (8)
Al estudiar el caso de Feliciano Montenegro Colón, decíamos que en esos años posteriores a la
documentos y a escribir memorias sobre la misma. Para entonces ya se habían publicado las
primeras colecciones documentales como lo fue la recopilada y editada por los doctores
había sido uno de esos próceres patriotas, de los que venían acumulando documentos y
patriota Francisco Javier Yanes y muchos otros que ayudaron a Montenegro en Caracas,
también ayudaron o estimularon al joven Baralt. Suponemos, que ese ambiente caraqueño lleno
responsabilidad intelectual. Tal vez, así como Montenegro sintió la necesidad de enfrentar a las
anti republicanas obras de Mariano Torrente (1827-1830) y al llamado <<libelo>> del realista
la patria escribir una genuina relación histórica de su génesis. De hecho un significativo número
de referencias a la obra de Torrente y a la José Domingo Díaz está presente en su obra, aunque
Sabemos que a pesar de haberse publicado ya la mencionada obra de Montenegro Colón bajo los
auspicios del gobierno del general José Antonio Páez, ella no fue bien recibida por muchos de
políticas en el novel estado venezolano. Ese rechazo a la obra pionera publicada en 1837 y el
hecho de que tal obra— en sus tomos iniciales— sólo trataba de la geografía universal
Desde 1830 la dirigencia pública venezolana tomó gran interés en la materia geográfica e
histórica. Era obvio que al separarse Venezuela de la Gran Colombia la élite nacional planteara
una política en ese sentido. Fue así que el Congreso Constituyente de 1830 decretó el 13 de
octubre de ese año la realización de los estudios pertinentes para elaborar los mapas, fijar los
límites, recoger estadísticas y otros datos sobre el territorio de la nueva república. Esa decisión
oficial fue apoyada por un selecto grupo de personas vinculado con la ciencia, la producción y el
política que solicitaba y auspiciaba la escritura de una obra de geografía e historia nacional que
afianzara la identidad de la recién emancipada república fue llenada por Agustín Codazzi y luego
por Baralt, quien a solicitud del geógrafo asume con él la ardua tarea.
A pesar de que ya existían obras históricas publicadas antes de la guerra, ellas , obviamente no
<<Resumen>>. De acuerdo con nuestras fuentes, tuvo éste que trabajar duramente a partir de
agosto de 1840, cuando llega a París, hasta mediados del año siguiente. Aunque se supone que
tanto él como Ramón Díaz llevaron una primera redacción del trabajo histórico ,es admirable que
ya para el mes de agosto de 1841, regresasen al país con los ejemplares de la obra impresa.
Además, según testimonios del propio escritor, su colaborador Ramón Díaz - una vez en París -
parece que no se dedicó a la tarea con el mismo empeño que sus colegas. (10)
Quienes han juzgado esta obra, plantean que en ella puede apreciarse la serenidad del raciocinio
simpatía hacia Simón Bolívar, todo ello escrito bajo la inspiración de la antigüedad clásica
Igual que en el caso de Don Feliciano, la obra de Baralt será rechazada por quienes no quedaron
satisfechos con los juicios históricos que en ella aparecían. Y pasado el entusiasmo inicial, de
algunos comentaristas que valoraron positivamente el trabajo; sus autores, en especial Baralt,
caerían en desgracia y serían privados del apoyo que tuvieron inicialmente. Una muestra de ello
(como ya vimos) fue no pagarle más a Baralt sus honorarios como investigador en los archivos
españoles, donde cumplía una misión oficial. También Codazzi sufrió las consecuencias, pues se
le quiso hasta enjuiciar como responsable del préstamo de quince mil pesos asignados por el
Congreso Nacional.
Sólo después de múltiples pedimentos pudo el infortunado Agustín Codazzi lograr del Congreso
Nacional un arreglo que le exoneró a él y a sus fiadores del pago de la suma adelantada para la
redacción e impresión de la obra geográfica e histórica. El acuerdo estableció aceptar como pago
por el profesor Antonio Mieres, titulado precisamente Tres Autores en la Historia de Baralt.
(13)
Se limitó Mieres, según juicio del prologuista Eduardo Arcila Farías, a estudiar la presencia de
sólo tres de los autores que sirvieron de fuente fundamental a lo largo de los tres tomos de la
obra. Ir más allá, dice, hubiese sido una tarea de nunca acabar. Sobre los juicios que se han
hecho sobre la obra de Baralt, se destaca que ellos han sido diversos y contradictorios. Mientras
algunos autores le han cargado de elogios, destacando siempre la belleza del estilo; otros , como
fue el caso de Don Augusto Mijares , la calificaron de <<apresurado acopio de elementos
ajenos>>. Mas , de acuerdo con Arcila,
“el valor radica no en no haber tomado nada de nadie, condición ésta punto menos que
imposible, sobre todo en una obra de historia que es ante todo recopilación , pues su autor la
anuncia como tal. Baralt nunca dijo que hubiese hecho investigación de archivos ni que
incluyese novedades que trastornasen la imagen hasta entonces conocida de Venezuela y de su
transcurrir histórico.” (14)
Se plantea que para consolidar a una nación - especialmente si está en ese proceso inicial de
formación - se requiere escribir su historia. Esa visión le da fisonomía como tal pues se mira en
ella como si fuese un espejo pues “sin una historia escritas ninguna nación puede estar segura
de
que existe hasta que puede ver su imagen reflejada. Ese es el más aquilatado mérito de Baralt,
que no podrá jamás menospreciarse, y es la más pesada deuda de gratitud que con él contrajo
Venezuela.
Como iniciador de la historia en el moderno período republicano, Baralt ejerció una influencia
historiográfica que llega casi hasta nuestros días. Durante más de un siglo ha sido para la
mayoría de s historiadores venezolanos el modelo más fielmente copiado.” (15)
Se considera en el estudio de esta obra, que ella no tiene realmente un verdadero plan, y que en
la recopilación, Ramón Díaz sólo aportó documentos para el primer volumen, mientras que para
los otros restantes, Baralt recibió materiales cedidos por los generales Briceño Méndez,
Urdaneta, Soublette y Páez. Esto se refleja en el lenguaje usado en el libro, mientras que en la
primera parte es arcaico (pues sigue a Martín Fernández de Navarrete) en las otras es distinto.
causalidad de los sucesos, algunas veces se señala a la providencia, otras, el héroe, el sistema de
gobierno, las leyes y costumbres, el pueblo , las teorías políticas, etc. (16)
Las fuentes consultadas , en las que no hay verdadero respaldo documental, son ,según se
anuncia en la portada del primer volumen, las siguientes: “Muñoz, Navarrete, Herrera, Irving,
Acevedo, etc.” Bajo el título de “Notas del Autor” cita otras obras en el volumen I. Y en el
volumen tercero se refiere a Montenegro Colón ,Yanes, los Documentos del Libertador,
Archivos del Gobierno y papeles de periódicos de Venezuela, Ecuador y Nueva Granada, así
Al realizarse un estudio comparativo entre lo escrito por Baralt y sus fuentes es claro que a
Depons le siguió muy de cerca, algunas veces toma textualmente las frases, otras las resume o las
alarga. Igualmente, cuando Baralt hizo amplio uso de la información aportada por Montenegro se
No cabe la menor duda de que la obra historiográfica fundamental de Rafael María Baralt,
independientemente de las posteriores peripecias de la vida literaria del expatriado autor , marcó
Ella no sólo recogió lo esencial de la narración histórica de autores de gran autoridad como lo
fueron Feliciano Montenegro Colón y Francisco Javier Yanes. También sentó la pauta del
Y no solamente en esa literatura mayor se puede trazar esa importancia. En los manuales
escolares, en los debates de la prensa, en los discursos patrióticos salía a relucir muchas veces el
(2) n.a. Contrariamente a lo anterior, en la “nota introductoria” a la edición antes citada del
Resumen ... , nota que suponemos obra de Lecuna, se indica que el joven Baralt fue enviado a
Bogotá en 1828, ya con el grado de subteniente de milicias, como parte de un grupo de doce
jóvenes pedidos al Zulia para formarlos como oficiales. De acuerdo con esa versión , fue
entonces cuando Baralt estudió latinidad y filosofía en el Colegio de San Bartolomé y al mismo
tiempo cumplía sus deberes como miliciano. Asimismo, se indica que el regreso del joven oficial
se produjo en 1830 ,y al entrevistarse con el general Mariño, decide acompañarlo en Cúcuta
como secretario. En este sentido, nos parece más convincente lo indicado por Agustín Millares
Carlo, Op.cit. , es decir, que éste estuvo en la capital de la Gran Colombia entre 1824 - 1826 y
regresó a Venezuela antes de 1830, tal como queda evidenciado por los testimonios
incorporados.
(5) A. Millares Carlo: Op.cit. pp. 27-35. Véase también lo ,planteado en la obra de Cósimo
Mandrillo Literatura Zuliana - Siglo XIX (Maracaibo, LUZ, 1987)
(13) Antonio Mieres: Tres Autores en la Historia de Baralt. Caracas, UCV, 1966
(14) Arcila Farías, Eduardo: “Prólogo” a la obra de Antonio Mieres:Tres Autores ..., op.cit.
pp.9-10
(17) ver texto original de Baralt, así como los comentarios de Antonio Mieres, op.cit. p.69.
n.a. El apellido Yanes, lo escribe Yanez en el original.
Nació Yanes en la “Villa de Santa María del Puerto Príncipe” , poblado colonial que ,en nuestros
obstante, vivió casi toda su vida adulta en Venezuela, donde ya sexagenario, falleció en Caracas
parlamentario, magistrado o funcionario. Sus restos descansan, junto con los de otros próceres de
fallecimiento, recibió, entre otros, el homenaje literario de una sentida <<Meseniana>> de Juan
Vicente González, composición de tono elegíaco donde su admirador resume en finas pinceladas
Fueron sus progenitores el abogado Juan Yanes Sigarroa y doña María de la Cruz Socarrás; éstos
lo llevaron a vivir, todavía niño, a la ciudad de La Habana hasta que posteriormente, un tío suyo,
el médico Francisco Javier Socarrás, se lo trajo a Caracas y lo hospedó en su casa desde el año de
1802.
El joven Yanes, desde que llegó a su nueva patria, se relacionó con ilustres familias
venezolanas, tal como correspondía a una persona como él, hijo de padres blancos, con
Ingresó en la Universidad de Caracas y cursó allí la carrera de Derecho Civil hasta obtener el
título de Licenciado. Después, al realizar sus pasantías en los bufetes de los abogados Juan
Germán Roscio y José Félix Sosa, logró ,no sólo completar su formación jurídica, sino
relacionarse con quienes serían importantes dirigentes del movimiento del 19 de abril de 1810.
Ese año, no sólo sería muy importante en términos políticos , también para entonces, tuvo lugar
su casamiento con una prima suya, la señorita Ana María Socarrás con la que dio comienzo a una
nueva familia venezolana que tuvo ilustres descendientes como el hijo que llevó su mismo
nombre, valioso intelectual, quien al igual que su padre, cooperó en las empresas historiográficas
El escritor Rafael María Baralt, quien aprovechó la consulta de los manuscritos y documentos de
Yanes para redactar su propia obra, no sólo dejó en ella la constancia de esa deuda sino que
elaboró un perfil del prócer civil. Escribió el autor del Resumen que Francisco Javier Yanes
“era un joven abogado lleno de fervor y de celo, embebido en las doctrinas religiosas y políticas
de los filósofos franceses ,y enemigo acérrimo de todo linaje de tiranías. Como todos los
hombres profundamente convencidos, cuya opiniones se han formado en la soledad del gabinete
y a escondidas de un gobierno opresor, Yanes poseía las suyas con rigidez ,tenacidad y
exageración; cualidades que formaban un contraste singular con su índole suave ,complaciente y
flexible. Versado en varios ramos de las humanidades y sobre todo en la historia
colonial ,determinado partidario de las ideas democráticas, y persuadido como muchos patriotas
ilustrados de su fácil aplicación a Venezuela, no disimulaba ni su odio al gobierno hispano-
americano ,ni su entera decisión por la causa de la independencia. Mirábanle por esto con razón
como uno de los jefes principales del partido republicano; y por lo demás poseía cuanto era
necesario para merecer este renombre :honradez a toda prueba, constancia, energía y firmeza en
los principios capitales.” (4)
El abogado Yanes , quien llegó a ser brillante jurista, periodista e historiador, se incorporó a la
causa emancipadora desde la época de las conspiraciones que culminaron en 1810. Por ello, la
Junta formada en Caracas lo comisionó ante el partido capitular de Araure. Como consecuencia
de su estadía en esa villa se logró aclarar una serie de malos entendidos y ganar la completa
adhesión de esa localidad a la política autonomista de la Junta , y fue así, que pudo el
comisionado enviar refuerzos para el ejército patriota que trataba de someter a la ciudad de Coro.
Logró ,en representación de esa región, su elección como diputado al primer Congreso Nacional
Además de su labor institucional en ese primer Congreso Constituyente , Yanes fue un entusiasta
“en esa célebre agrupación había ardientes demócratas como propagandistas de la absoluta
independencia ,como Simón Bolívar, el Doctor Miguel Peña, Coto Paúl, Francisco Carabaño,
Francisco Javier Yanes y otros, que comunicaban con su palabra de fuego intenso calor al radical
de 1811, tuvo destacada participación parlamentaria. Fue de los que en sus discursos defendió la
idea de declarar la independencia absoluta y , por tanto, firmó sin reparos el Acta de
Independencia; también ejerció la presidencia del cuerpo legislativo y ,a finales de ese mismo
provincia de Caracas (formada provisionalmente por los mismos diputados que representaban a
ese carácter debió firmar documentos políticos fundamentales como la <<Declaración de los
Derechos y Deberes del Pueblo>> y la primera ley de imprenta que tuvo Venezuela. Asimismo,
se ocupó , junto con el también abogado y diputado Antonio Nicolás Briceño, de la supervisión
del periódico El Publicista de Venezuela , vocero oficial del Congreso de la república. (6)
Dado su carácter de jurista, fue designado miembro de la comisión que redactaría un proyecto de
Código Civil y Criminal, y además, se le incorporó como integrante de una Sala de Justicia
extraordinaria, para la revisión de unas sentencias dictadas a los sublevados contra la República
en Valencia.
provincia de Caracas y le tocó, además, desempeñar una serie de comisiones delicadas ,hasta
que al caer la Primera República, viajó al exterior ,para refugiarse en la vecina Nueva Granada.
A este país pudo escapar junto con muchos otros patriotas venezolanos que tomaron las
embarcaciones disponibles en La Guaira, antes que el comandante del puerto lo cerrara del todo
nuevamente con los sobrevivientes del ejército y del gobierno republicano neogranadino, que se
Venezuela, sirvió como Secretario y consejero de una especie de gobierno provisional presidido
por Francisco Serrano (agosto-septiembre de 1816) . Tal difícil situación político-militar, es decir
una jefatura política - la de Serrano - y una jefatura militar - la de Francisco de Paula Santander -
Yanes siguió acompañando a ese nuevo ejército patriota formado mayoritariamente por fuerzas
Finalmente, cuando se consolidó la república con la toma de Guayana, Yanes continuó aportando
sus servicios como hombre de leyes. En tal sentido, el Congreso Nacional, reunido en Angostura
a partir del 15 de febrero de 1819 ,lo designó miembro de la Suprema Corte de Justicia
Cuando fue liberado el resto del país , Yanes formó parte de la Alta Corte de Justicia instalada en
Caracas , hasta que al organizarse los nuevos poderes públicos correspondientes a la Gran
Justicia del distrito de Venezuela. Esa corte, supeditada a la de Bogotá, estuvo presidida por el
jurista Cristóbal de Mendoza y en ella Yanes ocupaba una de las magistraturas. Esta situación se
mantuvo hasta que Mendoza fue nombrado en 1826 Intendente del Departamento de Venezuela
En esos años , Yanes y Mendoza - además de cumplir con sus funciones oficiales—cooperaron
para su publicación de los más importantes documentos que habían atesorado, muchos con la
ayuda del propio Libertador Simón Bolívar. Fue así que se comenzó a publicar lo que se llamó
Perú, Simón Bolívar. Hasta el año de 1829, cuando muere el Doctor Mendoza, se habían ya
publicado 15 volúmenes. Francisco Javier Yanes, continuó la tarea hasta completar la edición de
Yanes uno de los intelectuales escogidos como miembro correspondiente. También en 1829
formó parte, como miembro fundador en Caracas, de la <<Sociedad Económica de Amigos del
País>> .
oportunidad de presidir dicho congreso y de firmar la Constitución promulgada ese mismo año.
tales como los enviados entonces al gobierno de Bogotá. En ellos, el Congreso reunido en
Simón Bolívar del territorio colombiano. En ese acuerdo del Congreso Constituyente reunido en
“... Venezuela, a quien una serie de males de todo género ha enseñado a ser prudente, que ve en
el General Simón Bolívar el origen de ellos, y que tiembla todavía al considerar el riesgo que ha
corrido de ser para siempre su patrimonio, protesta que no tendrán ... lugar [las negociaciones y
compromisos] mientras éste permanezca en el territorio de Colombia, declarándolo así el
soberano Congreso en sesión del día 28 (de mayo) ...” (7).
En los años siguientes se dedicó a sus actividades jurídicas, a continuar la infatigable labor de
ellas. Asimismo, no se separó del todo de las funciones públicas: fue miembro del Consejo de
Gobierno durante la presidencia provisional del vice presidente Andrés Narvarte, así como en
En 1839 publicó su libro Manual Político del Venezolano, al que sólo firmó con el seudónimo
de <<Un Venezolano>>. De la misma manera, apareció sin autor en 1840 su otra obra
estado independiente. Dicha obra, cuya única edición circuló para entonces, hizo que el autor
emprendiera su ampliación con miras a una segunda edición que sólo un siglo después se
convirtió en realidad, cuando en 1943-1944 ,la Academia Nacional de la Historia la trajo a la luz
junto con la hasta entonces inédita Relación Documentada de los principales sucesos
Además de las obras antes mencionadas, el Ministerio de Educación Nacional publicó en los
años de 1948 y 1949 - respectivamente - (y también más de un siglo después de la muerte del
autor) , sus libros Historia de Margarita y la Historia de la Provincia de Cumaná , los cuales
Debe señalarse, que hasta ahora, seguimos fundamentalmente los datos aportados por Manuel
Pérez Vila en su artículo del Diccionario de Historia de Venezuela, (Op.cit.) ; así como ciertas
precisiones que aporta el valioso trabajo de Lucía Raynero M. también ya antes citado. No
obstante, es interesante plantear que ,en ninguna de las obras consultadas por nosotros, se
explica, qué pasó en la vida de Yanes, en el período comprendido entre su viaje hacia las
colonias extranjeras del caribe hasta llegar a la Nueva Granada en 1812 (caída de la Primera
República) y su retirada, en 1816, desde la Nueva Granada hacia los llanos venezolanos, cuando
el <<Pacificador>> Pablo Morillo había invadido y sojuzgado esa república. Es de suponer ,que
Venezuela para entonces. Sospechamos, además, que ello obedeció a sus particulares opiniones
políticas liberal-federalistas, más en sintonía con el “Gobierno de la Unión” que con aquellos
que, como Bolívar, catalogaron tales planteamientos como propios de “sofistas” que soñaban con
“repúblicas aéreas”. Una pista en ese sentido son las páginas de la Relación Documentada ...
(Op.cit.)
Este autor aportó una amplia producción de trabajos jurídicos, y de otros , propios del campo de
las ciencias políticas. Sus artículos periodísticos, sus discursos parlamentarios, proyectos de
leyes y códigos, dictámenes judiciales; pero especialmente su célebre Manual Político del
Sin embargo, tal faceta de su vida intelectual no será considerada en este trabajo, donde
como lo hemos señalado—en Caracas el año de 1840; y el otro, que se mantuvo inédito hasta un
siglo después de la muerte de su autor, fue la célebre Relación Documentada de los principales
sucesos ocurridos en Venezuela desde que se declaró Estado Independiente hasta 1821 (ésta
La última de las obras señaladas, a pesar de no haber sido publicada sino en 1944, tuvo amplia
difusión indirecta a través de la obra de historiadores como Feliciano Montenegro Colón; Rafael
María Baralt, José de Austria , Juan Vicente González y otros más. Esto se evidencia al revisar
las fuentes de las obras antes mencionadas ,donde se consiguen no solamente expresas y amplias
referencias al texto de Yanes, sino que también se incorporan datos aportados por éste aunque no
adquirida con Yanes lo fueron las cuidadosas observaciones que hizo Montenegro, las citas de
Baralt y las largas parrafadas incorporadas por Austria. Otros, en cambio, no siempre cumplieron
Si uno se pregunta porqué esta valiosa obra historiográfica no logró ver la luz sino hace apenas
medio siglo, la respuesta no está en la espera de diez años que solicitó su propio autor y la
penuria fiscal de los sucesivos gobiernos del país. Es obvio que existieron otras razones, como
por ejemplo las que asoma Gonzalo Picón Febres en estas líneas publicadas en 1906 :
“De la historia de la independencia por el doctor Francisco Javier Yanes ,no se han publicado
sino algunos fragmentos ,quizás porque en la mayor parte de la obra ,según los numerosos
decires de los hombres ilustrados que han tenido ocasión de consultarla, se comentan los hechos
inmorales con la severidad que impone la justicia, y se trata a Bolívar como a humano cuyas
faltas no alcanzan a deslustrar su gloria en cuanto genio representante de una raza inteligente y
heroica, en cuanto caudillo milagroso por la excelencia de sus dotes y por la inquebrantable
fortaleza de su voluntad ,y en cuanto generoso emancipador de pueblos.” (8)
emancipación. Junto a Miranda, Ribas, Mariño, Bermúdez, Piar, Arismendi, Urdaneta y muchos
otros, recibe el crédito debido por sus acciones, pero nada más.
Una evidente señal de lo antes dicho es el sencillo trato que recibe la persona de Bolívar.
Usualmente, cuando Yanes se refiere a él, lo identifica con su grado militar o la función
específica que entonces cumpliera. Casi siempre lo denomina simplemente General Bolívar; en
otros pasajes, lo identifica como “el jefe supremo” , o como el “presidente” (cuando el Congreso
error político o militar, lo hace sin contemplaciones (como cuando le echa en cara la derrota en la
batalla de La Puerta) ; también, desecha las acusaciones que algunos detractores han señalado,
Ocumare.
En relación con la <<Guerra a Muerte>> , Yanes ,a diferencia de otros autores (Juan Vicente
todas las instancias, desde el propio Rey hasta sus representantes en las colonias. Y algo muy
importante, no culpa a Briceño o a Bolívar de la misma. Más bien, hace recordar las matanzas de
los conquistadores contra los indígenas como el inmediato antecedente de los horrendos
crímenes perpetrados por los realistas durante la guerra, especialmente en contra de la población
civil, las mujeres, los niños y todos aquellos que cayeron bajo la cuchilla de Monteverde,
Es de destacar que Yanes informa ampliamente sobre ciertos pasajes históricos relacionados con
importantes incidentes en la vida de Bolívar, como por ejemplo, los argumentos del coronel
Castillo cuando se oponía a la marcha de las tropas neogranadinas hacia Venezuela en los inicios
derrotas militares y conflictos con el corsario Bianchi) , y para no citar demasiados ejemplos, la
En ningún momento, Yanes se dedica a cargar de adjetivos superlativos las actuaciones de los
patriotas participantes. Sólo reseña en orden cronológico las ocurrencias apelando siempre a la
sustentación documental del hecho respectivo. En cierta manera, no puede hablarse de <<culto
A los que si retrata, pero en términos negativos, es a los jefes realistas: Monteverde, Boves,
Morales, Morillo y otros. Para éstos, reserva, como veremos más adelante, los más duros epítetos
Tampoco, lo hay en relación con la actuación del general José Antonio Páez. Todo lo contrario;
ello le sirvió de base a sus historias de Margarita y de Cumaná) .Y es más, sólo Yanes, dentro de
los autores más importantes, emprende un amplio y favorable tratamiento de los acontecimientos
La concepción nítidamente liberal del autor, su formación eminentemente jurídica, sus amplias
lecturas científicas y filosóficas; su abierta simpatía por el sistema político federal y también, por
qué no, su condición de hombre civil comprometido con una posición política y que sólo conoció
la mayor parte de esos acontecimientos a través de los documentos, las relaciones de testigos o
participantes y las memorias de los congresos y despachos oficiales ; determinan , que dicha
Mientras Montenegro, Baralt, Austria y Eduardo Blanco fueron hombres con formación y
experiencia militar, otros como Yanes, González y Larrazábal no lo fueron. Ello sin duda ponía a
éstos últimos en desventaja a la hora de historiar un período como el que abordaron. En el caso
específico de Yanes, sin negar que éste asumió el reto de acompañar a los combatientes en
emigraciones y campañas, no podía pedírsele que analizara los hechos desde la perspectiva de un
hombre de armas. Lo que fue una gran ventaja para los veteranos como Montenegro, fue una
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(1) Diccionario de Historia de Venezuela. Caracas, Fundación Polar, 1988. (tomo P/Z, pp.933-
934) ; Francisco González Guinán : Historia Contemporánea de Venezuela.Caracas, PdeR,
1954. (véanse los tomos I - II - III - IX - XI - XV) ; M. Leonidas Scarpetta y Saturnino Vergara:
Diccionario Biográfico de los Campeones de la Libertad de Nueva Granada, Venezuela,
Ecuador y Perú, que comprende sus servicios ,hazañas y virtudes.- Reedición facsimilar -
Barcelona (España) ,1978 ; Gonzalo Picón Febres: La Literatura Venezolana en el Siglo XIX.
Caracas, PdeR, 1972 (reimpresión de la obra publicada originalmente en 1906) ; Rafael María
Baralt: Resumen de la Historia de Venezuela (Op.cit.) ;Cristóbal L. Mendoza y Vicente
Lecuna: “Introducción” a la obra de Francisco Javier Yanes:Relación Documentada de los
Principales Sucesos Ocurridos en Venezuela desde que se Declaró Estado Independiente
hasta el Año de 1821. Caracas, ANH, 1943. Lógicamente, en esta misma obra, se pueden
conseguir noticias sobre el propio autor, quien cuando es absolutamente necesario , se menciona
de manera modesta e impersonal. Felipe Larrazábal: Vida de Bolívar (Op.cit).
Véase además ,el trabajo (todavía inédito) de la profesora Lucía Raynero M. : <<El Fundamento
Histórico de la Nacionalidad Venezolana en la Historiografía de Francisco Javier Yanes>> .
Caracas, UCAB, 1990. Esta monografía sobre la vida y obra de Yanes está sólidamente
sustentada en las fuentes biblio-hemerográficas conocidas hasta ahora, y especialmente, en el
vasto y rico <<Archivo Histórico>> del propio Francisco Javier Yanes que reposa en la
Academia Nacional de la Historia.
(2) Juan Vicente González: “Meseniana a Francisco Javier Yanes” El Venezolano (28-6-1842)
Reproducida en pp.461-462 Juan Vicente González - La Doctrina Conservadora (Colección
Pensamiento Político Venezolano del Siglo XIX, vol.2, tomo I) . Caracas, Congreso de la
República, 1983
(3) Documentación del Archivo de Yanes, citada por Lucía Raynero M. : Op.cit. ,pp.4-6
(6) Suponemos que esa relación política y personal entre Yanes y quien después sería llamado en
nuestra historia nacional <<el Diablo Briceño>> ,explica el tratamiento benévolo que recibe la,
por otros muy maltratada, figura histórica de éste ,cuando decidió hacer la <<guerra a muerte>>
a los españoles y terminó ejecutado por los realistas en Barinas.
(7) Nota enviada en nombre del congreso por Francisco Javier Yanes. Citada por Francisco
González Guinán: Op.cit. tomo II, p.81, citando las Actas del Congreso de 1830.
Es de observar, que se indica expresamente, que el doctor José María Vargas negó su voto a la
parte de la nota referida al Libertador Simón Bolívar, a quien solamente dan la denominación de
<<General Simón Bolívar>> en la misma.
En un comentario de Felipe Larrazábal (Vida de Bolívar, t.III,p.321) éste se duele de la actitud
de Yanes en esas circunstancias.
ciudad natal, a los setentidós años de edad, el 29 de diciembre de 1863. Sus padres fueron José
Benito de Austria y Juana Antonia Reina; ellos hicieron posible que recibiera una esmerada
educación que se inició en los claustros de San Felipe Neri, donde fue condiscípulo del ilustre
Francisco Aranda. Esa primera formación la complementó con amplias lecturas de obras
la independencia y una vasta experiencia en los campos de batalla, los estados mayores, correo
batallón Barlovento comandado entonces por el coronel José Félix Ribas, quien además del
entrenamiento militar, les insuflaba la pasión por la patria y la defensa del pueblo. Bajo las
banderas de la primera república hizo las campañas de 1811-1812 en el ejército que llegó a ser
1813, participó en varios combates como el de Mosquiteros (14-10-1813) ,bajo las órdenes del
jefe patriota de origen español Vicente Campo Elías, así como en la batalla de Araure del 5 de
diciembre de ese mismo año, decisivo encuentro que permitió a Bolívar detener el avance
realista en Occidente. Su conducta le hizo merecer un ascenso a Teniente unos días después,
(17-12-1813) y otro al grado de Capitán el 11 de abril del siguiente año. Ese ascenso, estamos
seguros, debió obtenerlo por su participación en la heroica resistencia durante el asedio de José
Tomás Boves a la ciudad de Valencia, así como en la línea sitiadora de Puerto Cabello. En los
llanos ,estuvo en los combates de Guanare y de Ospino (donde murió el legendario jefe realista
Yañez o <<Ñañá>> ) y en el intento de auxiliar a Barinas, la que tuvo que ser trágicamente
evacuada por Ramón García de Sena. A pesar de los reveses, continuó en su patriótica lucha en
el <<Batallón Barlovento>> junto a otras fuerzas que acompañaron al general Rafael Urdaneta
Carúpano) , y a pedido del hermano gobierno patriota, participaron en las luchas por someter a
los disidentes de Bogotá (1814-1815). A pesar de que el propio Austria, al reseñar todas las
peripecias de la retirada hacia Nueva Granada y la estadía de las fuerzas venezolanas en esa
nación, no dice abiertamente que él iba en el grupo (igual que en otras oportunidades) , algunas
palabras del presidente Camilo Torres en el acto que sirvió al Libertador para informar de lo
ocurrido en Venezuela durante las campañas de 1813 y 1814. Asimismo, al cerrar su relato del
sometimiento de Bogotá, cita como apoyo unos <<Apuntes Originales de José Félix Blanco>> y
Las fuentes consultadas hasta ahora, incluyendo la propia obra escrita por José de Austria, no
arrojan mucha luz sobre la vida de éste entre los años de 1815 y 1821. Lo que sí sabemos, es que
más adelante, ya en las campañas de 1821, se destacó participando como oficial en las fuerzas
comandadas por José Francisco Bermúdez, quien tuvo como tarea fundamental atacar a Caracas
desde el Oriente para así evitar que todo el ejército realista pudiera concentrarse en el campo de
Carabobo. (3)
Libertador Simón Bolívar en su viaje desde Bogotá a Caracas (1826-1827). Al igual que en
1826, cuando llevó amplios informes al Libertador desde Venezuela, repite para el año de 1829
una operación similar. Viaja a Quito con amplia documentación suministrada por José Antonio
Páez, en relación con la futura organización del gobierno. Tal preocupación se derivaba de un
supuesto plan para establecer una monarquía en la Gran Colombia. Ya sabemos en que terminó
tal discusión, esto es, en el profundo distanciamiento político entre Páez y el Libertador Simón
Bolívar.
Austria realizó innumerables viajes entre Caracas, Bogotá, Quito y Guayaquil. De él dice
Urdaneta: “la eficacia de Austria y la puntualidad con que desempeña sus comisiones me dejan
tranquilo”.(4) .Es por ello que, como oficial de la más alta confianza, no sólo llevaba y traía la
correspondencia entre Páez, Urdaneta, Bolívar, Sucre y otros altos jefes patriotas; sino que se le
encargaba de dar verbalmente las más amplias explicaciones de ciertos temas ,tan delicados , que
no se podían dejar por escrito. En algunos casos se le ordenaba, incluso, destruir ciertos
documentos comprometedores que pudieran traer consecuencias posteriores, como lo fue toda
esa madeja de puntos de vista encontrados, sobre el supuesto plan de establecer una monarquía
en Colombia y sus vecinos del Sur (Bolivia, Perú) en el cual participaron (a favor en contra)
agentes de Francia, Inglaterra, Estados Unidos y , por supuesto, quienes manejaban la política de
El más ilustrativo juicio sobre las tareas de Austria en esa época lo ofrece el propio Libertador,
quien a su regreso a Bogotá desde el Sur, lo envía de nuevo a Venezuela, y dice , tal vez con
cierta ironía, que va otra vez a esa el “mensajero ordinario de los dioses en momentos difíciles y
quien debía insistir sobre dos puntos esenciales: Inconveniencia del sistema monárquico en
Es una lástima que Austria no haya podido dejar constancia en su propia historia de esa
interesante parte de su vida. Lo que si queda claro, es que ello le dio la oportunidad de vivir
intensamente no sólo las experiencias de los combates sino las de la alta política del Estado.
En tiempos de la Gran Colombia, y aún después de disuelta ésta república, Austria continuó
incorporado en las tropas venezolanas acuarteladas en Bogotá y comandadas por los generales
Florencio Jiménez y Justo Briceño hasta 1831. Posteriormente pudieron regresar a su país.
las campañas adelantadas contra las facciones en 1835 (pacificación del Oriente bajo el mando
llanos en 1846.
Todavía con el grado de Coronel, ocupa la Secretaría de Guerra durante la presidencia de José
En 1863, terminada la Guerra Federal, formó parte del Consejo de Estado por invitación de Juan
disfrutó muy poco tiempo, pues como ya dijimos , murió a fines de ese mismo año.
Debe destacarse que José de Austria fue un culto oficial que escribió varias obras de carácter
Libertadores. (Caracas, Imprenta de Manuel Carreño, 1851) -- ella, por cierto, aparece
ellas, sin duda alguna, la más importante por la extensión y calidad de su contenido fue la última
de las nombradas.(7)
En el balance sobre la obra, por razones de comodidad, utilizaremos la edición que en dos
referirá a esa autorizada reedición del año 1960. Sin embargo, antes de iniciar el recorrido por las
páginas del libro, se presentarán algunas acotaciones que se han hecho sobre el texto original.
Dicen los editores de la Academia, que “ l a primera edición . de la obra del Coronel José
de
Austria, Bosquejo de la Historia Militar de Venezuela, fue una auténtica aventura, hasta el
punto de quedar en publicación inconclusa. El tomo I ... apareció con pie de Caracas , Imprenta
y Librería de Carreño Hermanos, 1855. .... ( y ) del tomo segundo llegaron a imprimirse en
Valencia, en la misma imprenta y en el propio año de 1857, cuatro pliegos...” (8)
con la parte inédita del manuscrito. Es por ello que la edición de la Academia sólo reproduce las
mismas páginas que vieron la luz en Caracas y Valencia, cambiando únicamente la distribución
En la edición de 1960 ,se colocó el texto que va desde la amplia Introducción del propio autor y
los antecedentes históricos de los acontecimientos de 1810, hasta la narración de los hechos del
año 1812. Corresponde al segundo volumen, lo ocurrido entre los años de 1813 y 1816.
Culminado el relato en estricto orden cronológico, incorpora el autor un documento sobre
Es de hacer notar que ,además de los comentarios o la narración propiamente dicha del
<<Bosquejo>>, éste incorpora una importante cantidad de extensos y hasta poco conocidos
documentos históricos originales, entre ellos, algunos textos fundamentales de Simón Bolívar,
como el Manifiesto de Cartagena de 1812 ; el Manifiesto de Carúpano de 1814 ; la <<Carta de
Jamaica>> de 1815 ,y otros. Al respecto, señala el historiador Hector García Chuecos, que
“aunque posterior al historiador Baralt, Austria dio grande importancia a las piezas
documentales ,y se sabe de él que fue el primero en publicar la famosa <<Carta de Jamaica>>.
Contra la versión de O’Leary de que fuera publicada en un diario de Kingston, está la de don
Vicente Lecuna ,de que nunca llegó a imprimirse. Opinó este ilustre académico que Austria tuvo
a la vista el borrador original o una copia suministrada por Briceño Méndez, o quizá por Leandro
Palacios, cuyos papeles pasaron a manos de Austria, o por otro patriota.” (9)
Juan Pablo Rojas Paúl, en su discurso de inaugural de la Academia Nacional de la Historia del
El que Austria hablara con tal vehemencia después de treinta y cinco años de la batalla de
Carabobo, lo cuestiona Rojas Paúl considerando que ya para entonces en América Hispana se
echaba a un lado la frase rencorosa y las viejas recriminaciones; tales rencores patrióticos contra
“la nación española, nuestra madre” se les califica de arcaicos. Ellos debían ya enmudecer y
“dejar el paso a los serenos juicios de la filosofía de la historia “ (10)
muchos aspectos, obviamente apartando su comprensible rencor anti realista. Por ejemplo, si
bien en líneas generales sigue una tónica bolivariana en su discurso, ello no implica que no
relatara acuciosamente todo lo relacionado con las acciones de Mariño y otros próceres del
reseñado ampliamente tal campaña, más adelante, expresa una dura crítica en estos términos :
“Sensible es mencionar aquí la vituperable indiferencia con que las provincias de Oriente y sus
bravos libertadores, eran impasibles y fríos espectadores de tantos sucesos, de tantos combates,
de tanta sangre como se derramaba por la libertad, desdeñándose de tomar activa parte en tan
heroicos acontecimientos ...” (11)
En la misma dirección está la completa narración sobre todos y cada uno de los teatros de
operaciones en riguroso orden cronológico. Es así que pueden conocerse en detalle las correrías
de los guerrilleros del Oriente, los Llanos y Guayana, las acciones de los margariteños, la
formación y desarrollo del ejército de Apure por parte de José Antonio Páez, sin descuidar, las
constantes referencias a lo que hacían los del campo realista, tanto los jefes políticos, los del
La descripción de las acciones militares es casi siempre muy profesional, notándose la habilidad
del autor para presentar en cada oportunidad la ruta seguida, la composición de las fuerzas, su
orden de batalla, armamento, los resultados del enfrentamiento, etc. .A la mera descripción
militar, sigue usualmente algún comentario sobre la suerte corrida por los prisioneros ,por la
“emigración” que muchas veces seguía a los ejércitos o por parte de la población civil indefensa
Considerando esto último, es de notar que Austria no ahorra calificativos negativos para las
fuerzas realistas (tanto las expedicionarias como las de venezolanos al servicio del Rey) que
asesinaban, violaban y torturaban hasta a los más indefensos (niños, mujeres, ancianos) ,así
como las que incendiaban y saqueaban los poblados. En aras de mantener su equilibrio, Austria
se permite también cuestionar duramente a los jefes patriotas que cometieron actos similares a
los de los realistas. Por ejemplo, critica la dureza de Vicente Campo Elías (después del triunfo de
la Batalla de Mosquiteros del 14-10-1813) en contra de los llaneros realistas vencidos (12) ; la
de José Tadeo Monagas al quemar una iglesia llena de indígenas <<realistas>> ;los que antes , a
su vez, habían asesinado a un grupo de sus soldados patriotas heridos y enfermos (13) ;
finalmente, sólo como muestra, la actitud de Olmedilla asesinando llaneros <<realistas>>
prisioneros. Narra Austria que José Antonio Páez impidió seguir con esa odiosa e impolítica
práctica, lográndose así la incorporación a las filas patriotas de miles de antiguos seguidores de
la causa española.(14)
A propósito del <<bolivarianismo>> del Bosquejo...de Austria, debe asentarse que el autor no
solamente incorpora todos aquellos documentos escritos por el Libertador o relacionados con él,
No obstante, tratar el autor de hacer justicia a cada uno de los próceres civiles y militares
participantes en la dura lucha; para Bolívar reserva siempre su mayor admiración; alaba su genio,
Las Fuentes.
La historia escrita por José de Austria tiene entre sus principales fuentes ,como ya se dijo, los
recuerdos del propio autor, testigo presencial de muchos de esos acontecimientos o conocedor de
otros importantes testigos quienes compañeros en una lucha común—le suministraron también
sus opiniones sobre esos turbulentos años. Junto a esa masa de recuerdos propios y de los de
otros combatientes, Austria tuvo a mano una impresionante colección de documentos que logró
reunir, entre ellos, valiosos documentos del Libertador, papeles suministrados por Pedro Briceño
Méndez, Leandro Palacios, José Félix Blanco y otros. Y , por supuesto, el autor, al escribir su
obra en la década de los años cincuenta del siglo XIX, tuvo a su disposición libros como los de
Francisco Javier Yanes, Rafael María Baralt, Tomás Cipriano Mosquera, José Félix Blanco, la
de esto último, es evidente que , por los documentos citados explícitamente, una de sus fuentes
fue la Gaceta de Caracas dirigida por los patriotas. Sin embargo, aunque no lo dice
redactada por José Domingo Díaz, pues una vez en su obra menciona (sin nombrarlo) “los
obra, realiza muchas y amplias citas, que usualmente abarcan varias páginas. Casi siempre, apela
al testimonio de Baralt para reseñar alguna campaña de las que no podía cubrir con sus propios
testimonios o con <<apuntes>> como los de José Félix Blanco u otros similares. Asimismo, con
Independencia , los Manifiestos publicados para justificarla, etc. Se incorporan textos que
ninguna obra conocida había rescatado, muestras de ello sería: la documentación sobre las honras
fúnebres a las víctimas de Quito - 1810 - (suceso que conmovió profundamente al pueblo
caraqueño) ; el diario sobre el largo viaje de retorno desde Bogotá hasta Caracas del Padre José
Cortés de Madariaga, crónica que relata la fascinante odisea de la navegación a través de los ríos
llaneros, el Orinoco , hasta llegar a los llanos de Calabozo y desde allí a Caracas .En fin, unas
sesenta piezas documentales, casi siempre incorporadas en toda su extensión , aunque sin
comentarios o críticas, le confieren a la obra de Austria un gran valor como libro serio de
Historia de Venezuela.
No sabemos hasta qué año llevó el autor la escritura de su <<Bosquejo ...>> ,ni tampoco si llegó
a redactar todo lo relacionado con las negociaciones de los altos jefes político-militares y los
agentes diplomáticos interesados en un plan para establecer una monarquía en los años agónicos
entender, uno de los más calificados para historiar ese proceso. Tal vez, no se atrevió a escribir y
preparar la publicación de esos papeles, por considerar que tal asunto era demasiado inflamable
para entonces. O quién sabe, los papeles que tuvo en su poder o que pudo conocer, se perdieron
junto con ese manuscrito que se quedó a medio imprimir en la ciudad de Valencia.
Cerramos estos comentarios, citando el juicio que ofrece Francisco González Guinán. Al reseñar
este cronista la aparición de la última parte de la obra de Austria en 1857, dice que
“el estilo del Coronel de Austria es claro y elegante; su narración ,ingenua ; el acopio de
documentos ,numeroso. [ Y agrega] grandes dificultades lo obligaron a emplear tres años en la
impresión de este tomo, comenzándola en Caracas y concluyéndola en Valencia. Después del
primer tomo aparecieron algunas entregas del segundo; pero, desgraciadamente, fue paralizada
su continuación.” (16)
***************************
(1) Para esta parte resumimos la información fundamental recogida en Ramón Azpurua:
Biografías de Hombres Notables de Hispano-América. Caracas, Imprenta Nacional, 1877 (4
vols. Véase especialmente, t. IV, pp.204-214 ; Francisco González Guinán: Historia
Contemporánea de Venezuela (Op.cit.) Ver especialmente los tomos V - VI - VII - XV ;
Diccionario de Historia de Venezuela (Op.cit.) tomo A-D, p.261 ; Caracciolo Parra-Pérez: La
Monarquía en la Gran Colombia. Caracas, Ediciones Hispánicas, 1957 ; Hector García
Chuecos: “Estudio Preliminar” al Bosquejo de la Historia Militar de Venezuela escrito por
José de Austria. Caracas, ANH, 1960.
(n.a. Es de hacer notar, que en este “Estudio Preliminar” se señala que el padre de José de
Austria se llamaba <<José Donato de Austria>>, contrario a lo que sostienen Azpurua y
González Guinán que lo identifican como <<José Benito de Austria>> .Según F.González G., el
coronel José Donato de Austria ocupaba la cartera de Guerra y Marina el 11 de abril de 1870.)
Pueden verse además, Daniel Florencio O’Leary: Memorias del general O’Leary . Caracas,
Imprenta Nacional, 1952 Tomos I,II,III. Vicente Lecuna: Crónica Razonada de las Guerras
de Bolívar. New York, The Colonial Press Inc. , 1950 (tres vols) ; Gonzalo Picón Febres: La
Literatura Venezolana en el Sigo XIX. Caracas, PdR,1972 ; y por supuesto, el propio
testimonio de José de Austria incorporado sutil y modestamente en su <<Bosquejo>>.
(3) su hoja de servicios (citada por Ramón Azpurua: Op.cit.pp.206-207) señala que participó en
la defensa de El Rodeo y en el ataque al cerro de El Calvario en Caracas, bajo las órdenes del
general Bermúdez. Posteriormente aparece como Adjunto al Estado Mayor General (1826) ;
ascendido a primer comandante (1827) ; al grado de Coronel (Dic.1829) y empleo de 1er.
ayudante general del Estado Mayor Libertador. Participó en la pacificación del sur de Colombia
(1828) ; en la campaña del Cauca (1831) y sirvió en el Departamento de Boyacá en 1831.
Separada Venezuela de la Gran Colombia, pudieron regresar las tropas de origen venezolano a su
suelo natal.
(6) No obstante lo indicado sobre ese ascenso (referido por González Guinán, Op.cit, t.VI,p.33) ,
se plantea en el Diccionario de Historia de Venezuela (Op.cit.) que después de la llamada
Revolución de Marzo de 1858 que derrocó al gobierno de José Tadeo Monagas, fue ascendido a
General de Brigada el primero de mayo de ese mismo año. Posiblemente, sólo se trató de hacer
efectivo el mismo ascenso, es decir, una ratificación del ascenso ya obtenido antes.
(7) Sobre la primera enumerada, la que tituló <<Un Recuerdo de Bolívar>> ,dijo Gonzalo Picón
Febres (Literatura Venezolana del Siglo XIX. Op.cit. ,184) que era un “hermosísimo trabajo
acerca de Bolívar” . Cita además, este juicio de Austria: “Es comprobación de la historia que
siempre hubieron menester los pueblos de estos formidables pastores agresivos, que suman en la
potencia de su alma y en la eficacia de la acción , el alto pronóstico de los civilizadores y la
violencia imperativa de los dominadores.”
(8) Nota de la Comisión Editora de la obra, Academia Nacional de la Historia. José de Austria:
Bosquejo ... Op.cit.
(9) H. García Chuecos: “Estudio ...” en José de Austria: Bosquejo ... Op.cit. ,tomo I, pp.17-18
Rasgos Biográficos.(1)
Juan Vicente González nació en Caracas ,se supone que el 29 de mayo de 1810 ; y a los
cincuenta y seis años de edad y en completa miseria, murió en esta misma ciudad el primero de
octubre de 1866. Creció en medio de las terribles condiciones del tiempo de la guerra de
independencia. Hijo expósito, sólo recibió el afecto de la buena señora Josefa Palacios y
Obelmejía que lo tomó a su cuidado. Esta dama perdió a su esposo en las matanzas de la
<<guerra a muerte>> llevada adelante en los valles del Tuy por el jefe guerrillero realista
Francisco Rosete, circunstancia esta que dejará una profunda huella en la familia que acogió al
futuro escritor.
El Padre José Alberto Espinoza dirigió su primera educación en los claustros del Convento de los
Neristas. Para entonces el joven Juan Vicente González quiso hacerse sacerdote, pero desistió.
cánones. Allí en la universidad, lo toma bajo su protección el Rector de la misma, el ilustre Padre
José Cecilio de Avila. El cariño mutuo y el gran interés por el estudio del joven González, hace
que éste con avidez asombrosa se dedique al latín, la literatura, la filosofía, la jurisprudencia y
otras disciplinas.
Ya para el año 1828 se gradúa de bachiller y obtiene su licenciatura dos años después en 1830.
Su paso por la universidad fue algo fundamental en su vida; obtuvo en sus claustros las bases de
la formación humanística y el cálido afecto de algunos de sus maestros, pero sobre todo, se
desarrolló en él una insaciable pasión por la lectura y pudo conocer a quien sería siempre su
héroe más admirado, el Libertador Simón Bolívar. Aunque a éste sólo lo pudo ver físicamente
una vez ,en la oportunidad de su postrera visita a Caracas en 1827, la veneración que sintió hacia
él no tuvo límites.
Tal pasión se evidencia cuando afirmó que “el amor a Bolívar es parte esencial del sentimiento
de nacionalidad, y no se concibe que pueda serse hijo de Venezuela sin ser boliviano.” (2)
entonces, por lo que habrá de hacerlo notable víctima propicia de los <<ídolos del teatro y de
la tribu>> ; su prosa clara, vehemente y agresiva, recargada de imputaciones y de sarcasmos”.
(3)
periódicos permitieron la organización de grupos liberales en todo el país, entre ellas, por
supuesto, la Sociedad Liberal de Caracas con la que , en un principio, se identificó González. Las
luchas comunes llevaron a Guzmán y a otros dirigentes del partido a ocupar posiciones en el
luchas, Juan Vicente González abandona sus primeras posiciones y asume por el contrario una
abierta antipatía hacia Antonio Leocadio Guzmán y su Partido Liberal Amarillo, convertido ya
detención y condena de Guzmán) , Juan Vicente González asume una posición totalmente
identificada con el grupo godo o conservador, y será uno de los parlamentarios que
milagrosamente salva la vida en medio del tumulto del 24 de enero de 1848. La ruptura violenta
entre el nuevo presidente José Tadeo Monagas y la mayoría del congreso nacional provocó el
estallido de la guerra civil y la retirada de González de toda actividad pública durante una
década.
Durante el dominio de esa “dinastía” de los hermanos Monagas que sólo tuvo fin en marzo de
1858, González se refugió en la actividad intelectual. Fundó un colegio que llamó <<El Salvador
del Mundo>> ,donde formó brillantes discípulos (Eduardo Blanco , entre ellos) y escribió sus
más importantes trabajos históricos, su célebre Biografía de José Félix Ribas y su Historia de
necesariamente los publicó para entonces; por ejemplo, la Biografía de José Félix Ribas fue
Cuando en 1858 una nueva “revolución” derroca la autocracia monaguera, González puede
posiciones conservadoras, chocará violentamente con quienes gobernaron entonces. Tanto Julián
Castro, como después el propio José Antonio Páez, le encierran en prisión varias veces. La
intransigente conducta de González no entendió de acomodos ni con la Revolución Federal en
armas (1859-1863) ni con los que violaban la constitución y las leyes del país que habían jurado
cumplir al hacerse cargo del poder central. Desde su periódico El Foro y ,después , desde El
Heraldo lanza sus furiosos ataques contra los guerrilleros federalistas de Ezequiel Zamora y
Juan Crisóstomo Falcón, pero asimismo, los descarga contra aquellos de sus copartidarios que
Lo permanente en la trágica vida de Juan Vicente González fue su carácter polémico. Siempre
sus odios y sus amores por las causas y los que las representaban lo llevaron a dolorosas
rupturas. Fue por ello que nunca se “acomodó” a ninguna situación: rompió con sus amigos
aulas de clase durante la década del monagato, se enfrentó y terminó prisionero de los gobiernos
godos a los que ayudó a triunfar, y el colmo de todo, al salir de la cárcel y triunfantes entonces
los que había atacado a lo largo del período de la Guerra Federal, terminó mostrando las excelsas
bondades, que antes no había visto, del general Juan Crisóstomo Falcón.
Prensa (1846-1848). El paréntesis autocrático 1848 - 1858 lo obliga a refugiarse en sus libros y
en su colegio. Mas, cuando suene otra vez la campana de la libertad, vuelve la nación a leer sus
Heraldo (1859 - 1861) y más tarde en El Nacional (1864). Su última aventura periodística será
octubre de 1866.
El temprano gusto por los temas históricos y literarios se expresó en la escritura y publicación de
sus artículos periodísticos, después agrupados como libro en 1842 con el título de Mis Exequias
a Bolívar.
nuestros héroes ... para calumniarlos. Esa imprenta que multiplicaba las producciones sublimes
de Bolívar ,los himnos de gratitud que le entonaba un mundo agradecido, es el instrumento de
rencorosas y oscuras pasiones contra el autor de la libertad [Confiesa su dolor por la difamación]
... contra el más grande hombre de América ...[Simón Bolívar, por supuesto. Según González,
unos de aquellos que atacaba al Libertador le dijo que] ... los héroes son buenos, necesarios para
luchar en los tiempos de peligro, vencer a los enemigos, , constituir naciones ... pero hasta aquí
su misión, en adelante, son amenazas a la libertad.”
Termina su reflexión sobre quien llama “inmortal héroe” transcribiendo las palabras de un
entrañable amigo que le asegura que siendo las pasiones pasajeras y siendo eterno el mérito ,
huirán esos días y “de esa loza que cubre a Bolívar ,su nombre se levantará más grande y
glorioso”. (4)
En su otro artículo <<El Sueño>> ,confiesa con horror como, al asistir a una sesión de la Cámara
de Representantes, los legisladores de la patria se esmeraban por retratar al héroe que la creó con
los más negros colores. Los vio “despedazar sobre sus sienes el laurel de la victoria, arrojar un
velo de olvido sobre sus hazañas y cubrir con una nube de improperios sus eminentes glorias.
nos dan una cabal idea de la preocupación del para entonces joven escritor por examinar la vida
del héroe en medio de aquel hostil ambiente formado por los que trataban de justificar la
Juan Vicente González escribió también otros trabajos de índole histórica. Entre éstos, sus
Originalmente publicado en las páginas de El Heraldo (1859). Era el plan general de las
biografías históricas que pensaba publicar. Ella era su visión sobre varios próceres civiles y
héroes militares, lamentablemente, dicen los estudiosos del tema, tal obra no cuajó y fue
sustituida con una obra más modesta que tituló Historia del Poder Civil en Colombia y
Venezuela y que se limitó a las biografías de Martín Tovar Ponte y José María Vargas.
Sin duda alguna, sus trabajos históricos de mayor alcance serán su Manual de Historia
detallado para ver en él el manejo de las nociones que nos importa destacar aquí.
Finalmente, puede afirmarse, que la amplia formación humanística clásica de González, junto
con sus copiosas lecturas histórico-literarias, especialmente de todas las de los autores del
<<romanticismo>>, quedó plasmada en lo que nos dejó como legado intelectual. Como sobre
esta temática existen buenas investigaciones, no será necesario que acá se aborde tal problema.
Preferimos, en aras de los límites de este trabajo, remitir a la revisión de los mismos. (6)
Esta obra, de la cual Francisco Herrera Luque dice que tiene un “espléndido inicio y caótico
desarrollo” (8) , es ,a pesar de todo, la que permite observar mejor cuál fue el aporte de Juan
La escritura de la biografía del héroe y el contraste de éste con los anti héroes patriotas y realistas
en medio del período de la <<Guerra a Muerte>> permitieron a Juan Vicente González plantear
Las primeras páginas de esta obra son en verdad un cuadro histórico-literario que retrata
magistralmente la Caracas de fines del siglo XVIII. Esa dramática narración de la ejecución de
José María España es el telón de fondo para iniciar lo que supuestamente debería ser la biografía
de José Félix Ribas, nacido el 19 de septiembre de 1775 del matrimonio formado por Don
Marcos Ribas y Doña Petronila Herrera y Maríñez. El biografiado fue parte de una familia
Ribas ,que según el autor, vino a Venezuela desde las islas Canarias en la primera mitad del siglo
XVIII.
Algunos de ellos se dedicaron entonces a las tareas del campo y otros hubo, que llegaron a ser
ilustres sacerdotes.
José Félix Ribas fue de los que se consagró al trabajo de sus tierras, y en esa actividad estaba,
cuando ocurrieron los acontecimientos del 19 de abril de 1810, aunque no desconocía los
sucesivos movimientos que tramaban los criollos desde que estalló la crisis de 1808 en España y
Puerta] el general Ribas levanta una columna en Caracas ,arsenal de valientes , y se lanza a La
Victoria ,para obstruir el paso de las bandas vencedoras. Y era tiempo. Acometida el día 12 por
7.000 hombres ,a las órdenes de Morales, la plaza de La Victoria , que apenas defendían 2.000
jóvenes , sufrió un ataque que hará época en los anales del furor .... nueve veces volvió a la
carga Morales ,rechazado nueve veces: comenzó la lucha a las ocho de la mañana, y se luchó en
las calles a donde penetraron al fin las hordas enemigas ,y se peleó desde la plaza donde se
reconcentró el formidable jefe, incierto de socorro, seguro de sí y confiado en su fortuna. A
caballo en medio de sus soldados, los alienta e impele, él se halla en todos los puntos ;detiene y
fatiga las fuerzas enemigas. Hubo en su ojo ,en su palabra ,una centella que brilló en aquellos
momentos sombríos; su mirada esforzaba los corazones. Tres veces cae a sus pies el caballo que
monta; mil rayos se cruzan al derredor del plumaje que sombrea su cabeza, blanco de todos los
tiros, heroicamente apuesto, visible en medio de sus compañeros.” (9)
A pesar de todos esos esfuerzos, las fuerzas patriotas fueron arrolladas por la superioridad
numérica de los ejércitos de Boves. Ante la inevitable derrota en Caracas:
“Bolívar opinó porque se evacuase la ciudad y se retirasen las tropas a Barcelona y Cumaná.
Ribas sanguino, violento ,imperioso, agradable al pueblo por el énfasis heroico de su figura y
palabra ,sacudía orgullosamente la cabellera de león ,y se impacientaba y enfurecía a la idea de
dejar la capital. La previsión universal de su espíritu ,su actividad infatigable, su fuerte decisión
hicieron de él un centro eléctrico. <<Simón, Simón, le gritó a Bolívar, deja reparar los males que
has hecho>> .Pero Bolívar tenía razón: Caracas no podía defenderse ...” (p.141)
Las sucesivas derrotas en todo el Oriente del país, y sobre todo, los desastres de Urica y Maturín,
en diciembre de 1814, obligaron a Ribas, seguido sólo de algunos amigos, a tomar el camino del
sur tratando de acercarse de nuevo al alto llano de Caracas. En esa larga travesía, capturado y
Poéticamente, Juan Vicente González se duele del destino de Ribas ,y grita a quienes ultrajaron
“! Insensatos ! desde el afrentoso palo donde fue a podrirse, esa cabeza demudada os hace
siniestros gestos y os va a medir pocos días de mando. ! Os coronaís de flores para el sepulcro!
Ese hombre había sido la energía sublime, la vida de la revolución, el alma de la República:
Dispensa a su placer la tiranía
La muerte, no la gloria que acompaña
Al héroe de la patria en sus cadenas,
Y su cadalso en luz divina baña.
! Horror a la guerra a muerte! (p.160)
Cierra el autor sus líneas dedicadas a la vida y obra del héroe, trazando los aspectos
Esta lectura impacta por su belleza literaria, por la pasión que anima cada línea de esta
“biografía” que no es tal en el sentido estricto de la palabra. Aunque a veces el sujeto central de
terminan aflorando hermosas escenas sobre las hazañas de José Félix Ribas. El canto al héroe y a
La vida de Ribas es presentada como la de un héroe inmaculado. Todo en él era gloria, todo en él
era arrojo, valor rayano en la temeridad, incansable esfuerzo, amor infinito por la libertad e
independencia de la patria. Sólo la muerte pudo poner fin a la acción incansable de aquel brazo
que dirigía al pueblo a las batallas; pero su muerte, para ser más dolorosa, la recibió no como la
hubiese querido, en medio de uno de esos innumerables combates en los que se midió con
sobremanera que fuese ajusticiado y escarnecidos sus despojos durante varios años. Tal afrenta al
prócer lo llenó de ira; por ello ofrenda a su memoria el filial amor de aquella alma desgarrada.
Para resaltar todavía más las virtudes de Ribas apela el autor al trazo de unos cuadros biográficos
que incorporan el retrato físico y moral de varios protagonistas (patriotas y realistas) de la guerra
de emancipación. Ese nítido contraste moral le permite elevar aún más al héroe en su pedestal.
Por ejemplo, lo escrito sobre Juan Bautista Arismendi, es de una dureza extrema. No escatima
las notas negativas sobre éste. Veamos algunas muestras de esos lapidarios comentarios:.
“Dos hombres extraordinarios ,nutridos con miasmas de sangre, alto esfuerzo de la divina
cólera ,tipos de siniestro recuerdo , representan la espantosa época que dibujamos: la obra del
Intenta presentar algunos rasgos biográficos del jefe margariteño, mas no se queda en las usuales
precisiones sobre los orígenes familiares (pp.72 y siguientes) . Al describirlo, hace un retrato
“No veis esa cosa verdeamarilla ,de ojos parduscos, surcado el ceñudo rostro de duras líneas que
se chocan, su habla una jerigonza bárbara y sanguinaria? Observémosle bien: es pequeño de
cuerpo, la parte posterior del cerebro está desarrollado ampliamente como la del tigre; su acento
imita el acento español, como remedan algunos animales carnívoros los gritos de sus víctimas.
De qué laguna ha salido este batracio? Ninguna piedad en el alma de bronce (...) Sólo quedó
inaccesible ,entre cadalsos y espectros ,el corazón de hiena de Juan Bautista Arismendi.”
(pp.72-73)
En este sentido, González ,sin duda alguna ,imitaba el estilo de los románticos franceses y,
otros románticos que historiaron la Revolución Francesa hicieron esos “retratos” donde se dejaba
constancia de las caracteríticas físicas y morales de los más notables protagonistas de ese
proceso. Los cuadros—hechos por Juan Vicente González—de esos verdaderos “anti-héroes”
patriotas y realistas (Arismendi, Rosete, Boves) permiten a su autor elaborar una visión ,
negativa en extremo , sobre esos individuos. Cosa contraria le ocurre al retratar a su admirado
héroe José Félix Ribas. Este último resulta retratado como el héroe ideal: con su cabellera de
Se pregunta Juan Vicente González porqué ,si Arismendi solamente cumplió las órdenes
superiores de Bolívar y Ribas, atrae sobre sí el recuerdo de las matanzas de los españoles y
canarios víctimas del decreto de <<Guerra a Muerte>>. Su respuesta es que éste no sólo cumplió,
sino que se excedió en tal matanza. Aún más, la llevó a cabo con placer, presenciando
diariamente las ejecuciones, vigilando personalmente que no quedara ningún banquillo vacío sin
el correspondiente prisionero a matar. Y lo que fue todavía más repulsivo, completar esos
asesinatos con enfermos de los hospitales y ancianos indefensos como el célebre “Tío Medina”
de ochentiun años.
La comunicación oficial enviada por Arismendi deja constancia de lo realizado . Dice así :
“Se servirá U.S. elevar a la consideración del excelentísimo general en jefe, que la orden
comunicada por U.S. con fecha 8 de este mes se halla cumplida, habiéndose pasado por las
armas, tanto aquí como en La Guaira ,todos los españoles y canarios que se hallaban presos en
número de más de 800 ,contando los que se han podido recoger de los que se hallaban ocultos ....
Caracas, 25 de febrero de 1814”.
González, ante estas terribles líneas desahoga su rabia y grita “! Es el ogro sangriento, el Barba
Azul de la América, aquella monja de puñal en mano de las antiguas leyendas!” (pp.84-88)
Al historiar las acciones de Arismendi en Barlovento y en el Tuy, sólo destaca sus supuestos
abusos, crímenes y actos de cobardía; dice que éste ,en un combate ,huyó vergonzosamente. Y
agrega, que cuando salió a combatir hacia el Tuy lo hizo “después de mil vacilaciones.”
No cabe duda, que la tremendamente negativa opinión que exhibe González hacia Arismendi,
debió tener alguna explicación que iba más allá de la simple antipatía hacia el personaje.
que ,personalmente , González resultó una víctima indirecta de esas matanzas producidas en
medio de la Guerra a Muerte. Y no sólo eso, tenemos que comprender además, que esa era la
única manera de cargar sobre un culpable—al que detestaba en lo personal -- la deuda que no
de La Victoria.
Retrato de Francisco Rosete.
“Quién era ese Rosete ,vencedor de Arismendi? Un jefe digno de las turbas que guiaba, sin
mandarlas. Rechoncho, de una blancura sucia ,de andar convulsivo, coronábale una calva
innoble; dos ojos desiguales y saltados acechaban desde sus sienes y arrojaba de los abismos de
su pestilente boca, amenazas y blasfemias. El crimen abyecto había encontrado su figura: el
delirante, el bufón , el energúmeno, el ebrio tenía cóleras frenéticas y sanguinarias; los cuervos
le seguían por el olor ...” (p.96)
Es evidente, que degradando a Rosete, Juan Vicente González degradaba al vencido Arismendi,
sobre quien hace recaer su apasionado juicio histórico. Igualmente, le sirven para ese mismo
propósito, sus retratos de José Tomás Rodríguez “Boves”, José Domingo Díaz y otros. La
descalificaciones.
“José Tomás Rodríguez tenía cuanto era necesario para el terrible papel que estaba destinado,
ágil, intrépido, temerario , .... el héroe y el bandolero se confundieron tanto en él, que hubiera
sido difícil arrojar una línea divisoria ... el primer jefe de la democracia venezolana cubre el año
de 14 y a Morillo y a su expedición y a cuanto le rodeaba, como cubre la lava de los volcanes las
ciudades y los campos.” (pp.73-77)
“... Bolívar no tuvo nunca en los años que recorremos más de 10.000 soldados .... Boves y los
jefes realistas disponían de todos los hombres del país. (además) los soldados del pirata asturiano
le llamaban <<taita>> ,en muestra de respeto y amor, y él vivía como ellos, dándoles ejemplos
de valor y practicando la igualdad.” (p.107)
Los cuadros seleccionados representan muy bien el estilo utilizado en los despiadados ataques
lanzados sobre esos <<anti-héroes>> . Nada hubiese tenido de extraño que un escritor “patriota”
pintara con negrísimos trazos la persona y la obra de Boves y Rosete; no obstante, si resulta un
tanto raro, que al mismo tiempo, tal historiador se lanzara pluma en ristre a cargar de terribles
calificativos al prócer militar margariteño Juan Bautista Arismendi. Ese retrato, que despedaza
moralmente al que otros han calificado de valeroso luchador por la independencia de su isla de
Margarita y de la patria toda, no le reconoce nada a éste. Todo lo contrario, lo presenta como a
una bestia sanguinaria; como a un ser ignorante, cobarde, inepto, repulsivo. Nadie, que sepamos,
llegó a sufrir algo similar a ese asesinato moral del que resultó víctima el jefe oriental.
Más allá de los hechos concretos que permitieron a González sustentar sus lapidarios juicios
históricos, más allá de las reales razones que tuvo el biógrafo para establecer ese desigual trazado
de aquellas <<vidas paralelas>> debió existir la íntima convicción en éste sobre la superioridad
moral de Bolívar (el amado Padre de la Patria) y de José Félix Ribas, el osado combatiente
Ribas,no es un texto que se atiene a lo que el lector pudiera razonablente esperar de un libro con
ese título. En efecto, si uno creyese que va a conseguir sólo un balance completo de la vida de
Ribas, al culminar su lectura, no termina de entender si lo que tuvo ante sus ojos fue una Historia
de Venezuela durante el período de la guerra a muerte, una diatriba personal contra Juan Bautista
realistas; o simplemente, algunas noticias sobre la vida y obra político-militar de José Félix
Ribas, colocadas en medio de una narración donde se mezclan lo histórico y los más increíbles
desahogos del autor, que rayan algunas veces en eso que hoy en día se denomina “asesinato de
personalidad”.
A pesar de lo antes dicho, consideramos que este <<clásico>> de la historiografía venezolana del
siglo XIX ejerció una notable influencia en la conciencia histórica de varias generaciones;
incluyéndose entre los que recibieron esa influencia, al autor de Venezuela Heroica, Don
Eduardo Blanco, quien tuvo la oportunidad de oír de los propios labios del autor esas
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NOTAS (Capítulo II, Sección # 4)
(1) Juan Vicente González: José Félix Ribas - Biografía (Prefacio de Rufino Blanco
Fombona) .Caracas, MEN, 1946; Diccionario de Historia de Venezuela (Caracas, Fundación
Polar, 1988. Vol. E - O, pp.325-327) ; Francisco Herrera Luque: “Juan Vicente González” en
<<25 Clásicos Venezolanos>> ,pp.79-87 (Varios Autores, Caracas, Meneven, 1980) ; Presencia
de Juan Vicente González (Selección, Prólogo y Notas del Dr. Virgilio Tosta. Caracas,
Tipografía Garrido, 1954) ; Luis Correa: Tres Ensayos Sobre Juan Vicente González (Caracas,
MRI, 1987) ; Francisco González Guinán : Historia Contemporánea de Venezuela (Caracas,
Presidencia de la República, 1954. ver especialmente tomos I-IV-V-VII-VIII-XV) ;
Pensamiento Político Venezolano del Siglo XIX, Textos para su Estudio <<La Doctrina
Conservadora Juan Vicente González - Tomos I y II >> (Caracas, Congreso de la República,
1983) ; Juan Vicente González, Selección Histórica—Escogida y Prologada por Germán
Carrera Damas (Caracas, Monte Avila Editores, 1978) ; Juan Vicente González, Páginas
Escogidas—Selección y Prólogo de Mariano Picón Salas (Caracas, Monte Avila Editores, 1985)
(2) Virgilio Tosta: “prólogo”, Presencia de Juan Vicente González ..., p.14
(4) Juan Vicente González - Doctrina Conservadora ... , Op.cit. tomo I, pp.437-438
(6) Existe - todavía inédito - un buen trabajo sobre la vida y obra de Juan Vicente González,
escrito por la colega Lucía Raynero M. (Caracas, UCAB, Doctorado en Historia, 1990) .En él
pueden conseguirse valiosas observaciones sobre la obra intelectual de González.
Ver también: Argénis J.Gómez: Juan Vicente González y los Clásicos (Caracas, UCV-FHE,
1979) ; Antonio Mieres: La Historia de Juan Vicente González en sus Fuentes (Caracas,
UCV-FHE, 1977) ; Gonzalo Picón Febres: La Literatura Venezolana en el Siglo XIX. Caracas,
PdeR, 1972; Arturo Uslar Pietri: Letras y Hombres de Venezuela. Madrid, Edime, 1974
Este jurista, músico, periodista, político liberal y gran historiador bolivariano, nació en la ciudad
emigraron a España. Allí el joven Felipe y sus hermanos iniciaron estudios de música, los que
Asimismo, estuvo incorporado junto con sus dos hermanos y otros jóvenes músicos en una
“Para esa misma época, ya colaboraba en la prensa caraqueña donde publicaba encendidos
artículos políticos. El 20 de agosto de 1840 forma parte del grupo fundador del Partido Liberal.
En 1842 recibió el Doctorado en Derecho en la Universidad Central de Venezuela. En 1843 se
encontraba entre los redactores del periódico El Liberal y, en 1845, fundó su propio periódico
El Patriota.” (2)
Participó activamente en la lucha política de su tiempo. Como liberal aupó la candidatura del
tribuno Antonio Leocadio Guzmán, pero debido a un poco conocido problema judicial , tuvo que
irse al extranjero, hasta que pudo regresar sólo después que el gral José Tadeo Monagas se
distanció de los godos o conservadores y nombró al Dr. Sanabria ministro del Interior. Bajo ese
nuevo clima político, regresó Larrazábal al país, y posteriormente , ocupó importantes posiciones
públicas durante esa época de los hermanos Monagas, entre otras, gobernador provincial de
federal, fundó en 1863 el muy importante diario titulado El Federalista y pudo ingresar a la
Universidad Central; de esa época datan sus Principios de Derecho Público (1864). En 1865,
logró publicar finalmente en Nueva York su Vida del Libertador Simón Bolívar. Su viaje a los
Estados Unidos y Europa parece que lo hizo bajo los auspicios del gobierno nacional quien
de “dar a la estampa, con más comodidad y prontitud ,la correspondencia general del Libertador
Simón Bolívar. Esta obra [dice] será el más bello monumento que se eleve a la gloria de
Colombia y de su autor. América la leerá con entusiasmo ,y Europa envidiará la dicha de haber
producido un genio como el de Bolívar: el mayor que el mundo ha conocido.”(4)
En sus tareas como músico, dedicó sus últimos años a organizar un Conservatorio (Caracas,
1868). Como dirigente y periodista político liberal, apoyó en un principio al gral Antonio
Guzmán Blanco. No obstante, se fue distanciando del <<Ilustre Americano>> hasta romper
definitivamente con él. Después de haber sido director del <<Conservatorio de Bellas Artes>> y
miembro de la <<Alta Corte Federal>> fue expulsado hacia el exilio por conspirar junto con
Matías Salazar. Este último, al reincidir en su rebeldía contra Guzmán ,fue fusilado
aparatosamente en 1872.
Larrazábal quedó exiliado y sin dinero, pues sus bienes le fueron embargados. Desde Curazao,
donde se había refugiado, viajó hacia Nueva York y desde allí se dirigió a Francia para publicar
otra parte de su obra histórica. En ese trágico viaje, perdió la vida en un naufragio que también se
llevó al fondo de los mares unos tres mil folios manuscritos de documentos y de sus obras
González Guinán. Se dice allí que el naufragio ocurrió en las cercanías de las costas inglesas, a
bordo del vapor <<Ville du Havre>> .González Guinán lógicamente tomó el dato de la prensa de
la época, que recogió esa noticia. Blanco Fombona en su <<Prólogo>> a la edición modernizada
La polifacética obra de Larrazábal abarcó aportes como ejecutante y compositor (Trío para
piano, violín y violoncelo); como hombre de letras, se le reconoce como un típico representante
entre las lenguas vivas, el inglés, el francés y el italiano. Como historiador, fue uno de los más
Libertador Simón Bolívar. Finalmente, su ideario político liberal se nutrió de los principios de la
Revolución Francesa, y en muchos aspectos, fue un hombre de ideas avanzadas. Ello lo
de la pena de muerte, así como los planteamientos a favor de la protección hacia los huérfanos
detalles como lo fue el bautizar a su periódico <<El Patriota>> , y sobre todo, su temprana
pasión bolivariana que le llevó a dedicar buena parte de su vida a recopilar miles de cartas y
otros documentos relacionados con la historia del Libertador lo llevó a consagrar los años finales
de su vida a la escritura de una obra que cantara la gloria de los héroes de la patria encabezados
encendido artículo que tituló “Ojeada Histórico-Política ,sobre Venezuela en los catorce años de
gobernante oligarquía, dice ,refiriéndose al auspicioso inicio de ese período (1830-1831) que
“”subsistía ,aún, viva la memoria del gran Bolívar. Su sombra velaba sobre los destinos de
Venezuela.” (7)
Ya se adivinaba en juicios como esos lo que sería su trabajo histórico futuro. No obstante que la
publicación de su libro ocurre en 1865 y 1866, el prólogo de éste está fechado en Caracas, en
mayo de 1863. Ello hace suponer que la obra ya estaba lista para entonces y sólo esperaba
obtener los recursos para hacerla publicar en Nueva York. Asienta Blanco Fombona, que dicha
historia debió ser escrita entre 1850 y 1862 , pues una “obra semejante no se improvisa. Para
prepararla [dice] se necesita nutrida documentación ,compulsa de datos, varia lectura pertinente,
y previa asimilación de lo leído ya en manuscrito, ya en obras estampadas, tanto para penetrar la
psicología del personaje que se estudia como la época en que ese personaje figuró y va a
aparecer actuando.” (8).
Larrazábal, envuelto en el romanticismo de la escuela de Chateaubriand, enamorado de la
literatura, de la libertad y de los héroes se echó sobre sus hombros la tarea de convertir al
Libertador en un semidiós.
Cuando el día 28 de octubre de 1866 se celebraba el aniversario del Padre de la Patria (para
entonces lo que se celebraba era ese onomástico - día de San Simón - y no el 24 de julio)
aparecía el segundo y último tomo de la Vida de Simón Bolívar escrita por el doctor Felipe
Larrazábal.
En esa oportunidad, el erudito literato Felipe Tejera enjuicia la valía de Larrazábal como
historiador, y especialmente, a su obra recién salida de las prensas. Dice Tejera, citado por
González Guinán:
“Empero la Vida del Libertador ,que es su obra mejor trabajada, más que una historia ,nos
parece un panegírico; más que la biografía de Bolívar, es el canto del héroe, pero un canto tan
apasionado que raya en el lirismo y forma un Dios del maravilloso guerrero. Todavía Aquiles ,en
la epopeya, tenía el talón vulnerable; Bolívar ,en la historia de Larrazábal, no tiene un punto
flaco, deja de ser hombre y se transforma en ángel. En efecto, no se le ve allí en su talla
gigantesca como hombre, con sus aciertos y sus errores , con sus claridades y sus sombras, sino
en una apariencia de fantasma olímpico que ciega con la inmensa irradiación de su divina gloria.
Como se ve, tal podrá ser el héroe épico ; pero tal no puede ser el héroe histórico. Dejemos a
Olmedo la deificación del grande hombre ,y que nos lo presente al sonoro ritmo de sus
pindáricos versos como el Hijo de Colombia y Marte: <<Pero uno es escribir como poeta , según
el dictamen de Cervantes, y otro como historiador ; el poeta puede contar o cantar las cosas no
como fueron ,sino como debían ser, y el historiador las ha de escribir no como debían ser ,sino
como fueron, sin añadir ni quitar a la verdad cosa alguna.>> Se ha creído entre nosotros que
señalarle errores al Libertador es menoscabar su grandeza, y así, con singulares excepciones,
nuestros historiadores nos ofrecen la figura de Bolívar no como un hombre sujeto a las flaquezas
de la condición humana, sino como un ente divino incapaz de pecado. De ahí que el retrato del
héroe carezca de aquellas sombras naturales que necesita para que resalten sus raras
perfecciones, y que nos ofrezcan en la Historia una personalidad inverosímil, trocando así la
verdad en el mito. Tal es el Bolívar que nos describe Larrazábal :especie de guerrero mitológico
a quien envuelve siempre una nube fulgurosa. Por eso la obra ,en nuestro sentir, falla en su
condición más esencial de historia, pues parece relatar los acontecimientos más para maravilla y
asombro del lector que para enseñanza y provecho de los hombres.” (9)
Igualmente Francisco González Guinán cita otro juicio sobre Larrazábal y su obra. Dice que un
escritor extranjero, el redactor de La Voz de la América, (del cual no aporta mayores detalles)
emite un juicio favorable sobre la misma. Veamos este otro punto de vista, que seguramente
No obstante ofrecer esas fuertes críticas sobre la obra, de seguidas, balancea el juicio anotando
Se cierra esta parte del trabajo transcribiendo el juicio del propio Larrazábal sobre su obra. Dice
el biógrafo de Bolívar que el amargo deber de vindicar a América llevaría su pluma más allá ,
crueldad ; pero teme hacer demasiado difuso el tratado y transgredir los límites necesariamente
estrechos de una historia ,que no es la historia de la opresión sufrida, sino la del levantamiento
contra ella y de los hechos del magnánimo Libertador.(13)
Las Fuentes.
discurso histórico. Cuando abandona ese sustrato documental ,soporte de sus juicios sobre la
vida y obra del Libertador, y se dedica entonces a relatar en estricto orden cronológico la historia
José Manuel Restrepo, Feliciano Montenegro Colón y Rafael María Baralt. Junto con las
Díaz. A estos escritores, realistas furibundos, se les cita para enfrentar sus versiones, aunque al
hacerlo no va más allá de los cuestionamientos que ya conocemos, realizados por Montenegro en
su propia obra.
historia y la literatura romana; igualmente se citan obras y autores griegos. La mención de frases,
discurso , que aunque tiene como centro a Bolívar , se le presenta en un contexto donde desfila
Tácito, Cicerón, Catón, César, Favio, Juvenal, Ovidio, Virgilio, Horacio, Lucrecio, Justiniano,
Solón, Tulio, Polibio, Séneca, Augusto, Homero, Jenofonte, Pericles, Demóstenes, Alejandro y
Aníbal.
Variadas referencias a autores como Voltaire, Boileau, Milton, textos bíblicos (Lucas, Jeremías)
formación jurídica, filosófica, literaria e histórica del políglota autor. Ella queda expuesta
favorablemente en ese manejo magistral de los clásicos, de los que saca amplio provecho al
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(1) Utilizaremos como fuentes fundamentales para esta sección , la síntesis de su vida que
aparece en el Diccionario de Historia de Venezuela (Caracas, Fundación Polar, 1988) ; la obra
de Francisco González Guinán: Historia Contemporánea de Venezuela (Caracas, 1954) -
tomos III, IV, VIII, IX, X, XV ; el trabajo de Gonzalo Picón Febres: La Literatura Venezolana
en el Siglo XIX (Caracas, PdeR, 1972) , y finalmente, el <<Prólogo>> escrito por Rufino Blanco
Fombona para la edición “modernizada” (Madrid, 1918) de la Vida de Simón Bolívar de Felipe
Larrazábal.
(4) Liberales y Conservadores (Textos Doctrinales - tomo I - Vol. 10, Pensamiento Político
Venezolano del Siglo XIX, Textos para su Estudio). Caracas, 1983
p.421
(5) n.a. En la primera edición del Diccionario ... .Caracas, Fundación Polar, Op.cit. conseguimos
cierta disparidad en la información. Se señala allí que el Doctor Larrazábal murió en el Mar
Caribe, entendiéndose que esto ocurrió durante el viaje entre Curazao y Nueva York. Nos parece
que esto no es exacto.
(14) Unos catorce fragmentos en latín, así como variados ejemplos o comparaciones con
personajes o eventos de ese mundo clásico nos dan una idea sobre las lecturas y las ideas del
autor estudiado. Tomemos algunas como muestra: Comentando la batalla de Los Horcones, en la
cual J.F.Ribas el 22-7-1813 derrota a los realistas “con un arrojo digno de los tiempos de la
gloria romana” (t.I,p.189) ; “sólo Bolívar, que sacaba de las desgracias nuevo vigor, mayor
aliento y cuyo esfuerzo ,como el de Aníbal ,brillaba en los reveses ...” (t.I,p.256) ; “marcha
gloriosa digna de César y de Alejandro” (t.I,p.327) ;la Batalla de Carabobo “la Farsalia de
Colombia” ( t.II, p.250) ; Homero: “la magnanimidad es la virtud de los héroes” (t.II,p.307).
Véanse además, entre otras, estas otras páginas: tomo I, pp. 136, 230, 278, 289, 294, 307, 328.
tomo II, pp. 50, 68, 117, 146, 180, 225, 229, 242, 251, 259-261 , 307, 312, 318, 343. Tomo III,
pp. 9, 16-17 , 35, 78, 241, 263.
7. EDUARDO BLANCO Y SU OBRA
Antes de entrar en materia, necesario es ofrecer una justificación sobre la presencia de este
literato venezolano en el grupo de los historiadores escogidos para este trabajo. Debe entenderse
que tal selección obedece a la importancia de su obra titulada Venezuela Heroica ,la que no
obstante ser usualmente considerada más como una obra literaria (poema en prosa) contribuyó en
gran medida a la formación de la conciencia histórica de los venezolanos desde entonces.
fallece ,anciano y admirado, en su ciudad natal. (2) Fue un escritor y político con destacada
actuación en las letras nacionales. Su primera formación educativa la recibió en el colegio <<El
Salvador del Mundo>> dirigido por Juan Vicente González, quien ,no lo dudamos, despertó en
Aunque algunos de sus maestros parece que no lo consideraron un discípulo brillante, terminados
sus primeros estudios, aprendió francés y se dedicó a leer toda esa literatura <<Romántica>> de
la época, representada por Víctor Hugo, Dumas y otros. A ese respecto plantea Gonzalo Picón
Febres que “si madama Stáel ,Chateaubriand y Lamartine se sienten palpitar en el estilo de
Juan Vicente González y don Felipe Larrazábal ,la huella de Víctor Hugo se ve honda en el
Muy joven se interesó por la carrera de las armas, ya para 1859 era oficial del ejército nacional, y
entre 1861 y 1863 , sirvió en el cuerpo de edecanes del general José Antonio Páez, presidente
dictatorial que enfrentó la larga Guerra Federal. Tuvo la suerte de poder acompañar al general
Páez a las infructuosas conversaciones de paz con el máximo jefe de la revolución - Juan
Crisóstomo Falcón - en las cercanías del Campo de Carabobo, el 8 de diciembre de 1861. Según
acreditados testimonios (entre otros, el de Santiago Key Ayala) , pudo recorrer aquel antiguo
campo de batalla lleno de inmortales recuerdos, en compañía del “Centauro de los llanos” quien
se encargó de saciar la curiosidad histórica del joven oficial y futuro cantor de la gesta patria. En
esa ocasión, el general Juan Crisóstomo Falcón le dijo al joven y deslumbrado oficial, que
aquellos recuerdos que iban saliendo de la boca del guerrero, eran la Ilíada contada por el
mismo Aquiles..(4)
Una vez que se produjo su retiro de la vida militar en 1863, al solicitarle a su jefe José Antonio
Páez ,la respectiva separación del servicio, viajó y leyó mucho durante los años siguientes. El
antiguo coronel se dedicó al periodismo, la literatura y la historia. Se dio a conocer con un estilo
donde se dejaba traslucir “la misma arrogancia varonil, la misma complexión nerviosa que se
advierte en su persona.” Y acota además Picón Febres, que desde que inició su colaboración en
periódicos como La Tertulia (1874) este “ostentoso prosador” produjo de inmediato “el
asombro en todos los literatos viejos y en muchos de los jóvenes ,que no sospechaban al escritor
debajo del dormán del coronel que en mucho tiempo fuera gallardísimo edecán del Ciudadano
Esclarecido. (5)
Otros periódicos como La Entrega Literaria (1882) y La Causa Nacional (1882) harán
conocer también sus colaboraciones, algunas veces utilizando seudónimos. Su labor literaria la
coronará con la publicación de sus libros Una Noche en Ferrara (1875) y Lionfort (1879) , este
último un drama en tres actos, ambas obras lo identificaron plenamente dentro del Romanticismo
libro, Venezuela Heroica (6) ; y un año después (1882) ,salen a la luz sus Cuentos Fantásticos
y su famosa novela Zárate, en la que “se percibe la influencia de Víctor Hugo y que ha sido
considerada por algunos críticos literarios, en particular el padre Pedro Pablo Barnola, como
Dicha novela , fue publicada en dos volúmenes , y según Gonzalo Picón Febres ,
“en el primero de ellos transparenta mayor habilidad que en el segundo ... [dice que este] tomo
no es sino la adulteración lamentable de lo que en el primero vive y se mueve con verdad ... En
Zárate [agrega Picón] vale más todo el conjunto que los episodios, valen más las descripciones
de la naturaleza y las costumbres que la parte novelesca (...) El bandido Zárate parece mostrar en
su carácter arrojado algo de resistente bronce de aquellos luchadores impertérritos de Venezuela
Heroica”. [Y agrega que, ] años después que Zárate, en El Cojo Ilustrado aparecieron algunos
episodios nacionales de don Eduardo Blanco. A pesar de los hábitos románticos tan arraigados
en su ingenio, son esos episodios lo más digno del elogio , excepción hecha del primer tomo de
Zárate, que ha salido de la pluma del celebrado escritor venezolano en su fase de o condición de
novelista; pero necesario es decirlo con franqueza : el nombre interesante de don Eduardo Blanco
no habrá de perdurar por sus novelas, sino por Venezuela Heroica, libro en el cual hay cuadros ,
como el de la batalla de Carabobo, de deslumbradora belleza.”(8)
Eduardo Blanco estuvo entre los fundadores de la Academia Venezolana de la Lengua ,instalada
por el presidente Antonio Guzmán Blanco, con motivo del Primer Centenario del natalicio del
Historia, creada por decreto promulgado el año 1888 por el presidente Juan Pablo Rojas Paúl. (9)
En los años sucesivos escribe y publica Las Noches del Panteón como un homenaje al Gran
De gran importancia fue su actividad como colaborador en El Cojo Ilustrado a partir de 1896,
Junto a este hombre que llegó a la ancianidad aferrado a su pluma de escritor, estuvo su otra
identidad, la del hombre público que ocupó la cartera ministerial de Instrucción Pública en el
Instrucción Pública (1903-1904; 1906) durante el gobierno de Cipriano Castro, quien fue uno de
sus admiradores más entusiastas. Se dice que “cuando Cipriano Castro [llega] a Caracas, con
su
pierna enyesada y rodeado de cortesanos, el primer hombre a quien quiere conocer es al autor
de aquellas páginas que hicieron arder su pecho con el más encendido—y sobre todo
churrigueresco—patriotismo. Eduardo Blanco habrá terminado entonces, y definitivamente, su
travesía del desierto político ...” (10)
Sólo resta decir que Eduardo Blanco se ganó un lugar en el firmamento histórico-literario
venezolano, no por sus acciones en el campo militar o en el del mundo político-burocrático (lo
cual parece obvio) ,sino por la escritura de Venezuela Heroica que lo sembró en la conciencia
Afirma Pedro Grases que “si los sucesos de la Epopeya Emancipadora del Continente
Tal vez por haber empezado relativamente tarde su carrera literaria (tenía ya cuarentidós años
cuando publica Venezuela Heroica) , el medio intelectual caraqueño de entonces vio en aquello
signos de mediocridad o de pereza ; y , por eso, fue aureolado con una insidiosa <<leyenda
negra>> por muchos críticos y periodistas, que en medio de ese clima de pesimismo general,
plagió un manuscrito, atribuido, (según el momento) a sucesivos autores: Fermín Toro, Yanes,
los hermanos Manrique Jerez, o algún pariente olvidado del propio Blanco.
Esa “urticante leyenda” es la misma que ha perseguido a otros valiosos intelectuales. Lo curioso,
es que de esos que sólo descalifican a los que escriben y publican ,generalmente la posteridad no
recuerda nada de su insignificante existencia, mientras que los criticados, casi siempre terminan
reivindicados apoteósicamente, aunque sea a los setentidós años, seis meses antes de morir,
como fue el caso de Eduardo Blanco, a quien la noche del 28 de julio de 1911 “coronaron”
Caracas, (12)
Buena parte de la crítica realizada sobre la obra de Blanco (Venezuela Heroica) no ha sido
hecha por historiadores sino más bien por literatos. A pesar de todas las descalificaciones, al
Montenegro, Baralt, Austria, Páez; así como la documentación existente. Compárese lo esencial
de los datos que forman la médula de cada uno de los cuadros, con lo que podía leerse en la
historiografía de entonces ,y se verá ,que si bien es inútil buscar en la obra un frío análisis
científico del pasado, también es cierto que sería injusto solicitar algo que la obra, en primer
lugar, no ofrecía.
R.J. Lovera de Sola en un incisivo “Prólogo” a la obra, escrito para la edición centenaria de la
antes citado, hace una valoración crítica muy interesante , apelando a los muy pertinentes juicios
de Mario Briceño Iragorry, Key Ayala, Manuel Caballero, J.L. Salcedo Bastardo y otros
historiadores venezolanos.
Llama especialmente la atención , por ejemplo, la cita que hace sobre lo planteado por Caballero.
Este consideró que el libro de Eduardo Blanco resistía sin dificultades una exigente crítica
narración de hechos guerreros, el uso de los adjetivos y juicios de valor, la mitología patriótica,
etc. En tal sentido, de acuerdo con lo sugerido por Caballero, no era fácil “acusar a Blanco de
haber hecho un trabajo descuidado desde el punto de vista historiográfico” ,considerando que esa
corriente romántica, apelaba a la imaginación hasta llegar a sustituir con ella a la verdadera
Historia. (13)
Por último, existe un criterio que puede considerarse para finalizar esta discusión, este es, el
éxito
que tuvo este texto, catalogado por el prócer cubano José Martí como “un libro de lectura de los
colegios americanos ... [que] todo hombre debe escribirlo, todo niño debe leerlo, todo corazón
honrado, amarlo. [pues] de ver los tamaños de los hombres, nos entran deseos irresistibles de
imitarlos ... [dice Martí en sobrio juicio que el poema en prosa escrito por Blanco] ... es
patriótico ... es un viaje al Olimpo ... [pues] cada casa venezolana tiene allí sus dioses lares: los
Cedeño, los Jugo, los Montilla, los del hermoso Anzoátegui, los Ibarra, los Silva, los Urdaneta;
toda la nobleza de la libertad tiene allí su cuna: no tuvo un pueblo jamás mayor nobleza. --- Y los
bravos ingleses son loados. Y a los españoles ,luego de vencidos ,no se les injuria. (...) Es como
una tempestad de gloria ...” (14)
El impacto de la obra, producido por el éxito editorial que significó vender inicialmente unos
2.000 ejemplares en aquella pequeña ciudad que era la Caracas de entonces, así como las
sucesivas reediciones del libro hasta nuestros días, indican que no se trataba de un texto histórico
más.
Honestamente, no se puede afirmar que toda la información histórica recogida en sus páginas,
independencia, en forma tal, que lo “literario” (la celebrada prosa poética) pasaba a primer plano.
Es decir, esos <<cuadros>> que con gran dramatismo acercan al lector a ese glorioso pasado,
**********************************
(1) Diccionario de Historia de Venezuela. Caracas, Fundación Polar, 1988 (tomo A/D, p.378) ;
Francisco González Guinán: Historia Contemporánea de Venezuela. Caracas, 1954 (tomos:
XII ,XIV , XV) ; “Prólogo” a la edición de Eduardo Blanco: Venezuela Heroica. Caracas,
Monte Avila Editores, 1972 ; “Eduardo Blanco y Landaeta Rosales” en Pedro Grases: Otros
Temas de Bibliografía y Cultura Venezolana. Caracas, 1978 ; Arturo Uslar Pietri: Letras y
Hombres de Venezuela. Madrid, Edime, 1974 ; J.Salgado :”Prólogo” a Venezuela Heroica.
Madrid, Editorial Castellana, 1978 ; R.J. Lovera de Sola : “Prólogo” a Venezuela Heroica.
Caracas, Alfadil, S.A. ,1981 ;R.J. Lovera de Sola: “Eduardo Blanco en su Contexto - A propósito
de los Cien Años de Venezuela Heroica” ,pp.445-459 , Boletín de la Academia Nacional de
la Historia, (#258, abril-junio 1982) .Caracas, ANH, 1982; Gonzalo Picón Febres: La
Literatura Venezolana del Siglo XIX. Caracas, PdR, 1972 ; Colette Siwka:Historia, Biografía
y Literatura - Venezuela Siglo XIX.Caracas, UCV, 1982 ; Héctor Parra Márquez: Esbozo de
las Academias. Caracas, ANH, 1983
(2) R.J. Lovera de Sola: “Eduardo Blanco en su Contexto ...” Boletín de la Academia Nacional
de la Historia ,Op.cit. p.445
En este trabajo, su autor corrige una inexactitud que aparece en muchas de las notas biográficas
de los escritores que han tratado el tema, incluyendo al propio Lovera De Sola que así lo señala
(en su caso, el prólogo a la edición de Venezuela Heroica en Alfadil) .Indica que la fecha (26-
12-1838) establecida por el profesor Augusto Germán Orihuela es la cierta y no esa que se ha
venido repitiendo.
(4) “Prólogo” a la edición de Venezuela Heroica. (Monte Ávila, Editores, C A. 1972) t.I,p.8 ;
R.J Lovera de Sola: “Eduardo Blanco en su Contexto ...” Boletín ... Op.cit. p.446
(5) Gonzalo Picón Febres: Op.cit. p.366
(9) Consúltese, Héctor Parra Márquez: Esbozo de las Academias. Caracas, ANH, 1983
(10) “Prólogo” a Venezuela Heroica (Caracas, Monte Ávila editores, C A., 1972) t. I,p.9 .Véase
también, Arturo Uslar Pietri: Letras Y Hombres de Venezuela (Op.cit.). Dice éste, que los
intelectuales—vistos como mesías—despertaron entonces el interés del mundo político, y fue
así, que en la crisis de 1858, a Fermín Toro se le buscó como un augur; a Cecilio Acosta se le
convirtió en símbolo moral del antiguzmancismo; y es por eso, que Cipriano Castro “baja de la
cordillera con su temeraria guerrilla para buscar en Caracas a Eduardo Blanco.”,p.318 ; F.
González Guinán: Op.cit.,t.XIV,p.516.
(11) Pedro Grases: Otros Temas ... Op.cit. pp.179-180
(12) Véase el “Prólogo” a Venezuela Heroica (Caracas, Monte Ávila, Editores, C A. ,1972) t.I,
pp.7-10
(13) Manuel Caballero, citado por R.J. de Sola : “Prólogo” , Op.cit. , p.12; R.J. Lovera de Sola:
“Eduardo Blanco en su Contexto ...” ,Op.cit.pp.457-459
ideológicos fundamentales de los historiadores venezolanos del siglo XIX que hemos
Yanes, José de Austria, Juan Vicente González, Felipe Larrazábal y Eduardo Blanco a la luz de
planteamientos metodológicos como los de E.B. Burns y los de J.R. Thomas -- en sus obras ya
antes citadas -- , no cabe duda que pudieran ser caracterizados como <<Historiadores
Patricios>> ,pues todos ellos, fueron intelectuales provenientes de la élite económica, social,
política y cultural del país; la cúpula de la sociedad formada por los blancos, propietarios, cultos.
En todo caso, por lo menos , expresaban y defendían abiertamente sus intereses y valores
ideológicos fundamentales.
Aunque Juan Vicente González -- como hijo expósito -- no podía alardear de su propio
árbol genealógico, tenía esa aureola de superioridad de los expósitos blancos a los que se les
suponía hijos ilegítimos de una familia de abolengo. De todas maneras, González siempre se
sintió parte de las ilustres familias que le criaron y educaron. Su identificación fue
fundamentalmente con dichas familias, con la iglesia católica, la Universidad de Caracas , las
fuerzas armadas y otras honorables instituciones. Nunca se identificó con la plebe o populacho a
los cuales despreció siempre, junto con los demagogos que asumían su defensa.
resto de los otros historiadores cuando esbozamos sus respectivas biografías y los aspectos
generales de sus obras, sólo resta entonces iniciar el análisis de las opiniones o la revisión de los
La Idea de Pueblo.
Sólo en ese sentido el autor se permite apelar regularmente a él. Es así que a lo largo de la
narración se menciona la noción de pueblo decenas de veces. Véanse estos ejemplos: "El Tocuyo
y otros pueblos" (en favor del rey) , "en el pueblo de Magdaleno" , "pueblo de Güiria" , "el
pueblo de La Aparición" , "pueblo de Sabana Seca" , "pueblo de La Luz", "los pueblos del Zulia,
La Grita y Bailadores" , "el pueblo de Cagua" , "el saqueo de los pueblos" (por parte de esclavos
sublevados) , "en retirada para aquel pueblo" , "a otros pueblos de Venezuela" , "el pueblo de La
Piedra" , "en Carúpano y en otros pueblos" , "pueblito" , "se introdujo en el pueblo" ,Píritu y
Clarines "en cuyos pueblos" , "a la entrada del pueblo de Por La Mar". (2)
conseguimos en contadísimas oportunidades que el autor se refiera a pueblo como masa general,
Margarita a raíz del restablecimiento del control de los patriotas sobre la isla (3-6-1813). En
efecto dice Montenegro que como consecuencia de la sublevación fue liberado Juan Bautista
simplemente "habitantes". Una solitaria muestra es la cita de un documento firmado por F.J.
En relación con el uso de <<pueblo>> como sinónimo de masa de gente inferior, plebe o
populacho; podemos afirmar que el autor casi no se permite tales expresiones. Un raro ejemplo
lo sería este: a raíz de la toma de Caracas por las tropas de Monteverde en 1812 "sujetos que
específicos dentro de ese amplio conjunto usualmente denominado <<el pueblo>>. Siendo muy
elásticos en este sentido, diríamos que el autor hace mención de grupos como los negros
esclavos, los indios, los llaneros, los margariteños y los venezolanos o "hijos del país".
En relación con cada uno de estos grupos casi siempre se destaca solamente su
participación como individuos (jefes) o como grupos que seguían las banderas del rey español o
la de los patriotas. Pudiera afirmarse que no se dice algo más allá de la participación en
Una excepción, en cierta manera, es una caracterización que Pablo Morillo hizo de los
margariteños y que aparece reproducida en la obra. Aunque lógicamente mucho de lo dicho tiene
relación con lo militar ,en todo caso ,no dejan de ser interesantes esas apreciaciones del
tropas realistas. Tal vez ello era una manera de recordarle a sus lectores que no sólo él tuvo el
pecado de combatir durante algunos años bajo las banderas del rey español.
La Nación.
cuando todavía era fiel a España) reserva su uso preferentemente para ésta o las restantes
naciones europeas. Por ello habla repetidamente de la <<nación española>> en el sentido de una
comunidad que abarcaba pueblos y territorios a ambos lados del Atlántico. De la misma manera,
considera que nación y nacionalidad o gentilicio son conceptos similares. Un ejemplo sería el
llamado <<Diablo>> Briceño escribió que éste se propuso "vengar en todos los españoles las
atrocidades cometidas por los de su nación. " (I,p.245) . Otro ejemplo que puede citarse es el del
regreso de Fernando VII a su trono, dice que éste al disolver las cortes ofreció reunirlas de nuevo
La Patria.
A <<la patria>> se le identifica con el terruño nativo. Por ello , en múltiples ocasiones ,
república, de nación o país. En este sentido el autor utiliza a lo largo de su relato expresiones
que dejan ver claramente lo que él entendía por ese vocablo. Muestra de ello fue la relación de
los planes de Bolívar para volver a "su patria" desde la Nueva Granada (I,p.244) ; al mencionar
los acontecimientos de comienzos de 1814 en Caracas señala que la reunión discutió sobre cómo
"salvar la patria" (I,p.263) ; al señalar lo de "su patria adoptiva" en el caso de Vicente Campo
Elías, oficial republicano de origen español (I,p.268) ; relatando la suerte sufrida por el jefe
patria" (I,p.314) ;y finalmente ésta: "se alejaron de su patria" ,refiriéndose a la población que
emigraba en masa hacia Oriente en 1814 (I,p.283) .Es evidente que en el último ejemplo
mencionado se utiliza la noción de patria como el lar nativo en un sentido estricto. Es decir, los
que se alejaban de Caracas, dejaban "su patria" pues en su mayoría eran caraqueños.
Si se revisa el contenido del <<Cuarto Tomo>> (8) puede constatarse sin mucho
esfuerzo que el autor , al redactar sus Apuntes Históricos, no pretendió plantear una completa
su relato sobre los hechos ocurridos una evidente calificación o identificación de los adversarios,
pero tratando siempre el narrador de colocarse en una posición imparcial, aunque generalmente
desapruebe o condene ciertas acciones que considera ajenas a la verdad o violadoras de ciertos
principios éticos.
actor de muchos de los hechos descritos por su pluma. Un ejemplo ilustrativo de lo afirmado
antes lo fue su actuación en la campaña de 1817 y los sucesos ocurridos en Barcelona (toma de la
Casa Fuerte, degüello de prisioneros, castigo de los culpables). Tales ocurrencias las describe
Montenegro con mucho detalle y hasta señala la noble actuación del gobernador que recogió a
Más allá de esas memorias en tercera persona se asoman las no tan sutiles referencias a
los patriotas como aquellos que luchaban por la causa de la patria; las armas republicanas; el
Pueden leerse - repetidas veces - referencias a los patriotas; los republicanos; los jefes
patriotas ; los independientes; y finalmente (p.92) sobre "los que encontraron más adelante el
Una interesante referencia a esas denominaciones del bando que enfrentó a la corona
española es la reproducción de una orden oficial del general Morillo en la que se prohibe
denominar como <<patriotas>> a los que más bien debían ser llamados en adelante "rebeldes" ,
pretendía con ello quitarle esa aureola respetable a sus enemigos. (12)
Así como alude explícitamente a los patriotas y a la patria, denomina el autor a los
adversarios de éstos utilizando expresiones del siguiente tenor: agentes peninsulares; ferocidad
del español; españoles europeos; españoles y canarios; catalanes, realistas. (13) En la segunda
parte del cuarto tomo, agréganse a los anteriores los de: realistas de Cumaná; españoles; el
Otras expresiones importantes que sirven al escritor para completar su tarea (de
regionalismo de los orientales); "indios caribes" ; "hijos del país" ; "la república colombiana" ;
caían dentro de ese cognomento de <<realistas>>, fue muy cuidadoso en el sentido de diferenciar
siempre a los que representaban a las fuerzas armadas y autoridades revestidas de verdadera
legitimidad oficial, de aquellas fuerzas irregulares mandadas por oficiales que lograron sus
Considerando la distinción que hace el autor sobre los bandos en pugna, debe acotarse
que , para Montenegro, <<patriotas>> eran los que también muchas veces denominaba
<<independientes>> o <<republicanos>>. No queda duda por el uso que hace del término en
otros textos suyos que tal calificativo lo reservaba para los nativos de la patria comprometidos
Sin duda alguna, los ejemplos citados permiten afirmar que ,en general , Montenegro
tiene una concepción ideológica de <<antiguo régimen>> , ello se hace evidente en el uso que
hace de vocablos como pueblo, nación, patria y otros del mismo tenor. Usualmente eran los
políticos ,los juristas ,los periodistas y otros intelectuales de ideas liberales los más entusiastas
partidarios del pueblo y sus derechos. Los antecedentes de Montenegro, como sabemos, eran los
de un oficial de carrera dentro del ejército español ,educado dentro de la rancia tradición católica,
hijo de un magistrado español de la Real Audiencia y casado, además, con una española. No era
factible -- considerando esos antecedentes -- esperar que este coronel-historiador tuviese
Con el planteamiento anterior no queremos decir que hubiese sido imposible que alguien
ligado a las fuerzas armadas españolas o vinculado familiarmente con personas de esa
nacionalidad no pudiese tener una posición política avanzada, pero lo usual fue lo contrario.
Sabemos que la mayoría de los oficiales españoles, especialmente los nacidos fuera de España --
los llamados <<indianos>> -- debían exagerar su conservatismo político y religioso para así
alejar cualquier sospecha sobre su lealtad a la Corona y a las instituciones básicas del Estado que
les aceptaba como "leales vasallos" que sólo podían hacer súplicas a los pies del amado monarca
éste nunca fue, lo que pudiese llamarse , un liberal avanzado. A lo más que llegó, fue a
simpatizar con la monarquía constitucional cuando todavía era leal a la Corona española.
venezolano. Su interés por la escritura de catecismos religiosos católicos y obras para la rígida
nación y la patria, así como sobre quiénes representaron a los bandos en pugna durante la guerra
régimen. Opinamos que Montenegro no llega a plantear en su discurso una aproximación sobre
la idea de nación en los términos que lo popularizaron los escritores contagiados con el fervor de
la Revolución Francesa. Para Montenegro, España era claramente una "nación" , esto es ,un
Estado de añeja existencia con sólidas instituciones: Monarquía, Iglesia, Cortes, ejércitos. Por el
relacionadas con este tema. Por ejemplo, al historiar Montenegro la Campaña de Oriente iniciada
en enero de 1813 por Santiago Mariño acompañado de los oficiales patriotas José Francisco
Bermúdez, Bernardo Bermúdez, José Francisco Azcue, Juan Bautista Videau y otros; se destaca
que éstos, junto con apenas cuarenticinco combatientes y unas pocas armas, lograron tomar
varios puntos de la costa oriental. Una vez en Tierra Firme, pudieron derrotar a fuerzas realistas
mucho más numerosas y mejor armadas; tales fueron los casos de la ocupación de Irapa por parte
de José Francisco Bermúdez, quien derrota con sólo 75 hombres a los 400 que trae Cervériz; la
toma de Maturín por parte de Bernardo Bermúdez y el combate en defensa de esa misma
población, en el cual el jefe Manuel Piar derrotó a mayores fuerzas realistas y posteriormente las
Junto con el arrojo de las acciones de los jefes republicanos, el historiador resalta la
cobardía, crueldad y barbarie de jefes realistas como Monteverde, Cervériz, Antonio Zuazola y
otros de similar catadura moral. Sin duda, que frente al retrato de estos antihéroes, el valor y
positivamente. (16)
estos términos:
reservado como estaba a otro genio dar impulso a la guerra de independencia , a que se habían
lanzado los ilustres campeones de Cumaná y Margarita, se hace forzoso volver al año de 1812
para hallar en un hijo de Caracas el hombre destinado por la Providencia para dirigirla y
terminarla, y que a la entrada de Monteverde sólo se había hecho conocer por su emprendedora
amovilidad y por aquel temple de alma con que supo desplegar después los rasgos sublimes y las
cualidades guerreras que debían conducirlo al templo de la inmortalidad. Era el coronel Simón
Al describir dicha campaña, igual que cuando comentó los resultados de la de Oriente,
destacó siempre el arrojo de los jefes patriotas en su avance victorioso y , como contrapartida la
derrota y huida de fuerzas realistas mucho más numerosas. Asimismo, al reseñar lo ocurrido en
la Batalla de Bárbula, esto es , la trágica muerte de Girardot, reproduce el decreto de Bolívar que
un mausoleo, luto por un mes, inscripción de su nombre en los registros públicos como el primer
El contraste entre los jefes patriotas y los jefes realistas como Monteverde, Boves,
Morales y otros no deja lugar a dudas. Los anti héroes eran estos últimos. Los jefes republicanos
enfrentan y derrotan a sus enemigos en combates gloriosos: Niquitao, Los Horcones, Taguanes,
Puerto Cabello, Bárbula, Vigirima, Araure. En este último, Bolívar acicateó a un batallón a
rescatar el honor perdido en otro encuentro, allí el "batallón sin nombre" quedó bautizado como
Entre las ocurrencias de los primeros meses del año de 1814 estuvieron varios combates,
pueblo de La Victoria ,quedó inmortalizado el valor de los patriotas, quienes triunfaron a pesar
de la reciente derrota de La Puerta y la pérdida de casi todo el poblado que los dejó reducidos al
caballería, de los cuales quedaron tendidos unos 100 muertos y 300 heridos. Los defensores de
La Victoria ganaron la batalla bajo la jefatura de Ribas, auxiliado oportunamente por una
pequeña fuerza comandada por Campo Elías. "en pocas ocasiones (dice Montenegro) podrá
recordar la historia una jornada tan gloriosa, digna de ser transmitida a la posteridad en
El avance de los ejércitos de Boves fue detenido nuevamente en San Mateo .Aquí se
por el intrépido Lino de Clemente, las bizarras tropas comandadas por Pedro Salias, Ignacio
Luque, Antonio Camejo y Miguel Borrás retomaron las alturas que Boves personalmente les
disputaba y hasta lo persiguieron encarnizadamente bajo la dirección del mayor general Tomás
"También se hizo memorable el capitán Antonio Ricaurte, hijo de la Nueva Granada ,pues
rodeado por todas partes y no pudiendo salvar los pertrechos, los incendió y voló con ellos para
impedir que los aprovechara Boves ... " Ese descalabro, y el peligro que significaba el avance
del ejército de Mariño desde Oriente hacia el Centro obligó a los realistas a retirarse de San
Mateo.(19)
Muy largo sería presentar sucesivos ejemplos de esa larga crónica guerrera. Sólo resta
decir que el historiador dejó constancia detallada de ellos, destacando siempre el valor y el
aquellos que participaron activamente en esas campañas. Fue más bien muy sobrio en su relato
de los hechos, a los que valoraba en sus justos términos sin prodigar demasiados calificativos. A
diferencia de otros autores que denominaron héroes ,próceres o titanes a cualquiera que
combatiese en alguna de nuestras batallas, Montenegro fue comedido en extremo en ese sentido.
Su relato, sin dejar de darle el merecido crédito al valor, al arrojo o al "ardimiento" de los
combatientes no cae en los extremos propios de los futuros escritores románticos como Juan
********************
Concluido el tratamiento de las campañas militares y los temas conexos que llenan casi
las dos terceras partes de la Historia de Montenegro, pasa éste a abordar en el resto de su obra el
entre 1830 y 1836. Para analizar lo primero utiliza unas ciento cincuenta páginas y para lo último
unas setenta.
siempre completos - una gran cantidad de documentos. Ello le sirve para ofrecer los datos o los
hechos en bruto pero sin intentar extraer una conclusión propia. Generalmente, sólo hace de
facilitador de la información aunque en contadas oportunidades se atreve a criticar a quien como
Simón Bolívar se empeñaba en mantener unida aquella inmensa república. Dice Montenegro al
respecto : "se dejó alucinar con exceso de su prestigio y bien merecida gloria; que todo lo quiso
<<Cosiateros>>, para referirse a quienes desde 1826 habían venido luchando por separar a
esos actores que rodearon al general José Antonio Páez desde entonces en la política nacional.
Montenegro no cuestiona o lamenta, se dedican las páginas finales a resumir las vicisitudes del
país , entonces presa de nuevo de las facciones realistas como la de Dionisio Cisneros ; de
levantamientos como los de José Tadeo Monagas y otros que pretendieron reivindicar la unidad
grancolombiana y sólo desistieron de sus banderas cuando se supo en Venezuela la muerte del
Libertador Simón Bolívar ,y finalmente, el conflicto generado entre el sector militar (Mariñistas
y Bolivarianos) por la elección del Dr.José María Vargas como presidente de la república y que
recordar que Montenegro fue testigo presencial de los acontecimientos ocurridos entre 1831 y
1836. Conoció de cerca a muchos de los actores en el drama del derrocamiento de Vargas y
sufrió en su fuero íntimo al ver nuevamente al país ensangrentarse en una guerra civil, que no
sería la última. Por supuesto, tuvo a primera mano los documentos oficiales ,los debates de la
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destacarse lo siguiente:
a) El autor ofrece noticias sobre cada una de las campañas, batallas y combates utilizando
distintas a las del oficio. Solamente cuando se trata de evidentes actos de barbarie: asesinatos de
niños - , actos de estupro o lascivia, robo y pillaje, atropellos a sacerdotes, etc. toma posición y
condena a los culpables de tales hechos, sin importar su carácter de realistas o patriotas.
o patriotas - es siempre respetuoso. Aunque algunas veces critica ciertas disposiciones militares
así el que da a Santiago Mariño o a Manuel Piar a quienes hace veladas y duras críticas.
En relación con los jefes y soldados realistas siempre hace la distinción entre las tropas
expedicionarias españolas y las formadas por venezolanos o "hijos del país". A las primeras les
hace fuertes señalamientos sobre sus actos de pillaje (21) ; a las segundas, aunque les reconoce
su superior capacidad de aguante ante las duras marchas en las campañas, no deja de
cuestionarles las acciones de barbarie en contra de sus propios paisanos. Mención aparte merecen
los comentarios que hace sobre la condenable conducta de jefes como Aldama, Chepito
<<indios>> o flecheros tanto en el bando realista como en el patriota. Sin embargo son más
abundantes las mencionadas peleando en favor de la causa española, casi siempre asociadas a la
agradar a los que manejaban la política del país para entonces. Es de observar que siempre trató
capitulación de Miranda, el apresamiento del generalísimo por sus propios camaradas de lucha,
las acciones del <<Diablo>> Antonio Nicolás Briceño y Simón Bolívar durante la "Guerra a
Muerte", la retirada de Barinas por parte de García de Sena, el asesinato de los misioneros
e) Igualmente, el relato recoge los hechos ocurridos en el campo realista con minuciosa
precisión documental: ofrece información sobre las decisiones de las autoridades locales y
metropolitanas. Tal característica le da una mayor amplitud a esta Historia si se le compara con
algunos textos posteriores que han preferido ver nuestra historia de manera unilateral sin
considerar que ella era parte de un proceso global que incluía a España y su imperio colonial, y
Torre y otros jefes en las sucesivas campañas para enfrentar a los ejércitos republicanos entre
1812 y 1823 , permite entender con mayor claridad lo ocurrido en el pasado histórico
venezolano.
de Caracas en los tiempos coloniales y su larga vida militar (que dejó una impronta en su
carácter y mentalidad) no podía esperarse algo muy diferente a lo que fue como hombre,
Los planteamientos de su trabajo ,razonablemente bien escrito y ajustado a los normas del
oficio ,no fueron aceptados por la mayoría de sus contemporáneos , no tanto por lo que ellos
(1) Feliciano Montenegro Colón: Historia de Venezuela. Caracas, ANH, 1960 (Op.cit.)
(3) , p. 242
(4) Op.cit. vol.I, pp. 225, 263 (en la asamblea del 2-1-1814, en el templo de San
Francisco, Caracas, se reunieron "las autoridades, corporaciones y vecinos") ; I,pp. 317, 321,
352, 389 ("habitantes") ; vol.II, p. 14, ("vecinos de Villa de Cura)
(6) Op.cit.: "el pardo Nicasio" (I,p.169) ; "el indio Reyes Vargas" (I, p.222) ; "libertad de
los esclavos" (ley marcial de F.Miranda, 1812: t.I,p.223) ; "negros libres y esclavos a favor del
rey" , "negros amotinados en Barlovento" (I,pp. 226-228) ; "sublevación de los habitantes de
color" en favor de Fernando VII (I,p.251) ; "los llaneros" indignados por las acciones de Campo
Elías (I,255) ; "indios" seducidos por el cura de Tucupido en favor del rey (I, 270) ; "negros del
Esequibo" al servicio del gobernador realista (I,p. 311) ; "indios" realistas (I,p.312) ; "bravura de
los llaneros" (I,p.314) ; en la tropa realista de López "su primera línea compuesta toda de
venezolanos" (I,p.324) ; "indios de Cunaviche" matan a golpes al jefe López, hecho prisionero
(I,p.349)
(7) Montenegro (citando una comunicación de Morillo) Op.cit. I,p.389. "Desde aquel
momento ,dice, presentó el ataque de aquel fuerte el aspecto más espantoso: pasaban de 500
rebeldes de la canalla más atroz y desalmada de la isla los que le defendían, hombres feroces y
crueles, famosos y nombrados entre los piratas de las flecheras , el terror de las costas de
Venezuela, y facinerosos ..."
(9) Op.Cit.,vol.I,pp.366-378
(13) Op.cit. vol.I, pp. 221; 222; 224; 228; 248; 251
(entre otras)
(14) Op.cit. vol.II, pp. 9-10; 16; 37; 111 (entre otras)
(15) Op.cit. vol. I, pp. 251; 262 (entre otras páginas consultadas). vol.II, pp. 12; 14; 35;
38; 41; 67; 117
(21) Feliciano Montenegro Colón:Historia ...Op.cit. (en relación con los "hijos del país)
vol. I, pp. 345, 407. (en relación con los cargos de pillaje) vol.I, pp.376-377
(22) Ibídem: revisar especialmente las referencias a (J.T.Boves) vol.I, pp.253, 289-290,
295; (Morales) vol.I, p. 305 ; (Pablo Morillo, de sargento a coronel) vol. I, pp.353 - 354 , 358-
359, 387
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1.2. La idea de Pueblo, de nación, patria. Patriotas y realistas. Los héroes y lo heroico en
consideraremos ahora. La interpretación de los vocablos "Pueblo" , "nación" y otros más ha sido
las acepciones presentes en los diccionarios de los siglos XVIII y XIX puede constatarse la
evolución de tales categorías. Se señala que en el Resumen de Baralt es patente ese proceso de
transición entre los componentes tradicionales del discurso y las nuevas y modernas expresiones
La Idea de Pueblo.
tomo I del Resumen ... (2) ; éste será por ahora el más importante para nuestro propósito. En
efecto, al señalar Baralt que "las costumbres públicas o el conjunto de inclinaciones y usos que
leyes y de los gobiernos" definía de manera precisa uno de los más caros principios del
pensamiento ilustrado, por ejemplo, los planteamientos de Montesquieu sobre el origen de las
Al describir a los antiguos pueblos (griegos, fenicios, romanos) y sus prácticas coloniales
las compara Baralt con las acciones de los españoles (la madre patria) y las consecuencias que
ellas tuvieron sobre la población criolla del nuevo mundo. A ese respecto plantea que estos
indolentes criollos - a pesar de todo lo hecho por su madre patria - fueron perdiendo su memoria
histórica; olvidaron "la gloria de los antiguos héroes españoles" así como "las proezas de la
conquista". No obstante mantenerse una completa identidad de idioma, legislación y usos; "se
veía con asombro convertida la América en un gran pueblo sin tradiciones, sin vínculos filiales,
sin apego a sus mayores, obediente sólo por hábito e impotencia". La razón de esa
situación ,dice ,no fue otra que la incomunicación - casi absoluta - entre la metrópoli y los que
aquí habitaban. Tal incomunicación acarreó la conservación de las costumbres sin mezcla
extranjera, pero también ella borró "los recuerdos españoles en el suelo de sus conquistas".
Opina, que entre otros factores que contribuyeron al olvido de ese pasado común estuvieron la
ya que "ningún lazo de unión y afecto entre dos pueblos será jamás tan fuerte como el del cultivo
de las mismas artes y el mismo idioma". También en los libros, dice, "se aprenden los ejemplos
de la virtud y de heroísmo: ellos nos enseñan a amar la nación que los produjo" . Por tanto,
cuando el gobierno de la metrópoli privó a sus colonias del rico tesoro de la poesía española
eliminó una de las bases para la unidad de los pueblos. Fue por todos estos motivos que América
olvidó sus recuerdos de la madre patria y se privó también de sus tradiciones propias. (I,pp.455-
459)
Puede observarse sin dificultad, que para el autor, el asunto era más que todo un problema de
educación. Con ello no hacía sino mostrar su cosmovisión de liberal-ilustrado propia de la época.
En efecto, ese "olvido" de la cultura y los valores de la "madre patria" dejó un vacío en
(acertadamente o no) no dio paso a la solución adecuada, pues ni Baralt ni los otros historiadores
de entonces, trataron de llenar tal vacío con las bases de la antigua historia y literatura española y
estrictamente nacional - es decir ,aislado de ese conjunto mayor que le daba sentido. La razón ,la
sabemos de sobra, fue la necesidad de separse tajantemente de esa <<madre patria>> ,hasta en
términos intelectuales. Prefiriendo asumir modelos, valores e ideas más avanzadas, las que sólo
Lo que Baralt agudamente observó, fue lo que escritores posteriores (como Mario
Briceño Iragorry) también denunciaron: el llamado "hiato histórico" o salto en el vacío, esto es,
el pretender explicar nuestra historia, amputando secciones del pasado anterior a esa aurora del
año de 1810.
También se pudiera discutir este asunto desde otra perspectiva. Si bien fue cierto que la
corona española no tomó demasiado interés en llevar todos esos valores históricos y literarios a
quienes accedían a la elitesca educación colonial, el haberlo hecho tampoco hubiese garantizado
que se hubiese mantenido esa tradición hispánica entre los pobladores de las Indias. Pues, como
que tal influencia sólo llegaba a una minúscula parte de la población colonial.
Refiriéndose el autor al <<pueblo>> dice que (a) "este ministro (Aranda) no era amado de la
corte ni del pueblo". (b) "y llamaron a las armas al pueblo francés" (c) "según parece un gran
crimen era necesario a los autores de la revolución para fijar el carácter de ésta, y constreñir al
pueblo a seguir sin vacilar un solo y amplio camino. Luis XVI pereció en el cadalso ..." (d)
"Carlos IV se comprometió siguiendo por la primera y única vez el impulso del pueblo. Lleno
éste de indignación al saber la muerte del bueno y desgraciado jefe de la casa de Borbón, levantó
un grito general de venganza que resonó en todas las ciudades ..." (e) "no se cambian de un
instante a otro las costumbres y el carácter de un pueblo ..." (f) al hacer el balance del 19 de abril
de 1810, narra como el Padre José Cortés Madariaga hizo señas a la plebe, a la turba. Y "los
conjurados que estaban mezclados con el pueblo, gritaron no le queremos." .Finalmente, al Padre
Además de las expresiones anteriores sobre la noción de Pueblo, pueden citarse las
siguientes:
- " ¿ Con qué contaban pues los republicanos de 1811 para formar un pueblo
independiente y soberano en aquel país de servidumbre ?" (II, 89-90)
- "El pueblo , ese ente que cada partido define a su manera , que todos creen tener a su
disposición , que todos llaman en el momento de peligro, que todos olvidan después de la
victoria y con quien todos en fin procuran justificar su conducta y disculpar sus errores, fluctuaba
aquí por lo general entre sus hábitos perezosos y serviles, y el deseo de novedades, la curiosidad,
y la afición a destruir; sentimientos innatos en las turbas."(II,77)
Y anota el autor que, durante la caída de la primera república, Miranda, "cree que no hay
opinión ni virtud patriótica en aquella turba reunida por la coacción ,la novedad o la esperanza
del botín: que no hay pueblo allí ni hay principios, y que el triunfo por consiguiente era
imposible." (II,121)
Asimismo, en el año de 1812, "el pueblo inclinado al antiguo régimen y amedrentado con los
recientes desastres , apoyaba con su inercia al partido vencedor. Hasta los patriotas más firmes
habían perdido la esperanza de que jamás se moviera el pueblo en favor de la independencia ..."
(II,133- 134)
Para el año de 1814, en occidente, "se declaró (la tierra) en abierta hostilidad contra los patriotas.
Nada hubo ya seguro fuera del tiro del fusil ; no era posible conseguir un espía ni adquirir de
modo alguno noticias del enemigo; escaseaban las subsistencias ; estaban sitiados por el pueblo
De manera similar, se asienta, que en tiempos de las campañas de Boves en 1814, todo
"fue fatal para la república. La mala disposición de los pueblos había hecho que los patriotas no
tuvieran noticias exactas de las fuerzas del enemigo ..." (II,269) .
Se dice ,considerando las acciones de Rafael Urdaneta en occidente (1814) que "habiendo pasado
Ceballos en su fuga de los pueblos del occidente , se hallaba ya algún tanto rehecho y dando
calor e impulso a sus guerrillas. Porque , es preciso repetirlo ,todo aquel país era adicto a los
realistas .... vuelto Urdaneta a Barquisimeto , se dirigió hacia Araure ,llevando consigo una
numerosa emigración , pues bien puede decirse que en aquel tiempo aciago la población
republicana de Venezuela era ambulante." (II, 274) - subrayado nuestro -
realista, quien en el año de 1815, en tono de burla hacia las tropas venezolanas realistas que
habían destruido a la república dijo " Si éstos son los vencedores, ¿ quiénes serán los
vencidos?" (II,305) . Baralt ,por el contrario , los llamó "valerosos soldados americanos "
La observación hecha por ese oficial español, ponía de bulto una paradoja. Quienes
habían derrotado a los enemigos de la corona española no parecían gran cosa a los ojos de este
europeo que suponía que los vencidos serían necesariamente "inferiores" a quienes los habían
indígenas semidesnudos y armados con sus arcos y flechas, pobladores de origen africano
(muchos de ellos con la marca de su antigua esclavitud) , todos bajo la dirección de rudos isleños
canarios y muy contados vecinos blancos españoles peninsulares y criollos no inspiraba mucha
admiración de parte de los veteranos europeos recién llegados al país. No entraba en su lógica
que los derrotados hubiesen sido precisamente los ejércitos formados y dirigidos por los que más
tenían que perder en aquella terrible conmoción social, es decir, los vecinos blancos,
descendientes de los antiguos conquistadores y colonizadores españoles, los que hasta entonces
habían tenido acceso a la propiedad de las tierras de grandes haciendas y hatos, hermosas casas
Fue precisamente esa incapacidad de los españoles para entender lo que había ocurrido
hasta la llegada de los ejércitos expedicionarios de Pablo Morillo, lo que los llevó a la derrota
final. En efecto, hasta el año de 1815 ,fueron precisamente esos a los que Mendívil despreció ,los
sólo hasta esa época, pues hasta en los últimos combates librados por las fuerzas realistas en
Venezuela y en otras provincias hispanoamericanas, siempre estuvieron presentes los "hijos del
país" enfrentando a otros "hijos del país" en esa contienda civil o fratricida.
Del análisis de los textos considerados, se desprende que Baralt, al utilizar la palabra
pueblo, le da algunas veces el sentido tradicional de centro poblado o pequeña ciudad; otras
veces lo define en términos de población o conjunto de habitantes de una región o país, de masa
de vecinos o ciudadanos ; pero la idea dominante ,es la noción de pueblo como masa de gente
inferior o plebe. A esta última la asocia con la idea de turba, hez, gente no blanca. En reiteradas
oportunidades Baralt señala la presencia del populacho, de la plebe acalorada por las ideas
las fatigas de la guerra y por ende reacio a la recluta; y sobre todo, del pueblo - elemento
necesario para el cambio político -- pero que no estaba dispuesto a participar en revoluciones
Esa ambigüedad que todavía se aprecia hasta en nuestros días al utilizar dicho vocablo,
no era ajena al escritor analizado. Como se ha dicho, sólo el contexto del discurso permite
precisar el verdadero sentido en el cual se usa tal noción. También pudiera argumentarse --
De muy interesante se puede calificar la opinión que expresa Baralt sobre las
características de los llaneros venezolanos. Los compara con los árabes y los tártaros y ,al
hacerlo ,analiza sus costumbres, creencias, hábitos de trabajo, folklore musical, etc. Nos parece
que tales conceptos son muy similares a los que veremos en otras obras contemporáneas y en
algunas que aparecieron posteriormente ,como el clásico << Facundo >> de Domingo Faustino
Sarmiento.
Al escribir sobre los llaneros venezolanos, ofrece Rafael María Baralt un amplio análisis
sobre sus características económicas, sociales, políticas y culturales. Sólo éstos , y en parte los
margariteños, reciben una especial atención como pueblos o habitantes de una región particular.
éstos a los ejércitos y guerrillas realistas de Yañez, Boves y otros jefes. Igualmente, se historia la
participación de parte de esos llaneros en las fuerzas patriotas. Es de destacar que, participando
La participación de esos llaneros - de gran potencial militar - fue vital ,primero para la
derrota y posteriormente para la victoria final de la causa republicana. Por eso dice Baralt que,
gracias a las acciones de Pablo Morillo y su ejército expedicionario español ,los llaneros se
hicieron patriotas y la guerra de independencia dejó de ser una guerra civil. Por ello , confiesa,
"no maldigamos su orgullo y sus violencias, pues ellas dieron nacimiento a la patria" (II, 375)
(especialmente las de Apure) inclinarán la balanza a favor de la patria. La acción de otros jefes
como Pedro Zaraza, José Tadeo Monagas, Juan José Rondón, Manuel Sedeño, éstos ,al mando
componentes, como el caso de los llaneros; se pueden observar en el celebrado Resumen varios
comentarios sobre los negros. Ejemplos de ello serían sus sublevaciones en medio de la crisis y
<<Los Indios>>.
En relación con los indígenas sostiene que éstos , embrutecidos por el sufrimiento y la
servidumbre, no poseían una verdadera tradición histórica, aunque conservasen su propio idioma.
Como pueblo conquistado - sin mayores relaciones con los colonos de raza europea - eran
Abundan en la obra las noticias sobre la población autóctona. Sin considerar las
referencias más amplias, que por razones obvias aparecen en el primer volumen, en los dos
siguientes, menciona el autor la participación de los indígenas en los dos bandos enfrentados en
la guerra de independencia, reclutados por realistas o patriotas, peleando con sus armas
(año de 1814) quien "había sublevado a los indios en favor del rey" (II, 244) . Otro,
correspondiente al año de 1815, cuando el jefe realista Reyes Vargas ("indio ingrato y cruel")
sirviendo en las fuerzas de José Tadeo Monagas: una columna de 200 indígenas comandados por
sus capitanes Manaure y Tupepe. Y para cerrar, las noticias sobre los indios de las misiones del
Caroní, quienes se mostraron afectos a la república pues querían liberarse de la tutela de los
padres misioneros. De éstos se vengaron - incluso asesinándolos - al verse libres después de las
cuestión de las contradicciones entre los diferentes segmentos de la sociedad, y en especial los
que formaban la masa popular, es en las páginas dedicadas a la actuación de Piar en Guayana en
La caracterización hecha sobre los segmentos o grupos sociales antes mencionados y que
representaban la mayoría del pueblo venezolano corresponde a lo señalado sobre el pueblo visto
como plebe o gente baja. Llaneros, "indios" ,negros y otros grupos similares generalmente son
juzgados en términos negativos salvo cuando se les reconoce su eventual participación a favor de
la causa patriota.
Independencia y Libertad. Por ello, en muchos textos que se pueden citar se hace difícil
separarlos.
En el tomo segundo del Resumen ... de Baralt, específicamente en las páginas que
examinan los acontecimientos de 1797 a 1810 ,se presentan algunas opiniones sobre los orígenes
del proceso de emancipación nacional. La revolución política y sus causas, los proyectos
planteados en la madre patria para prevenir la ruptura (plan Aranda); las conspiraciones de San
Blas y la de Manuel Gual y José María España, los planes y ejecutorias de Don Francisco de
Miranda, etc. ; todo ello, permite apreciar la concepción baraltiana de la historia y otras
categorías conexas. Por ejemplo, cuando apela a los términos de emancipación, independencia y
revolución lo hace de manera indistinta. Asimismo, utiliza ampliamente la idea de nación como
país o estado. Veamos estos dos casos: "la nación estaba exhausta, y una deuda enorme fruto
amargo de las guerras exteriores ,gravitaba sobre ella". Y este otro: "la revolución que andando
español estimuló con su conducta la <<Independencia>> de sus vastas posesiones del continente
americano, haciéndolas sufrir además los horrores de una guerra devastadora. Fue por eso que
cuando el rey Carlos IV no corrigió los errores de su antecesor en el trono, aceleró la época de la
<<emancipación>> americana. (II,12) Tales errores los continuó cometiendo la Junta Central y
la Regencia que tomó medidas que hicieron posible la independencia de América. (II,43)
revolución de Gual y España (II,46) ; sin embargo ,dice Baralt que todavía para el momento de
declararla en 1811 "la revolución estaba aún lejos de tener un carácter popular" pues ella "había
empezado por las clases ilustradas, primeras en apercibirse del mal y en detestarlo".(II,76)
Niega el escritor que fuese cierta esa versión de los realistas sobre la fundamental decisión del
congreso de 1811. Este sostiene que cuando sus miembros declararon la Independencia, no lo
hicieron bajo presión o engaño, y la prueba de ello fue la conducta posterior de esa mayoría de
sólidas convicciones republicanas. A pesar de no haber tenido tal congreso el apoyo general de la
opinión "de todo el pueblo bajo, tenía a su favor la de la gente noble, rica, ilustrada y valiosa, a la
Estados Unidos de América y el de Venezuela. Dice el autor que en la nación del norte todo
estaba de antemano creado y dispuesto "para la libertad y la independencia, no hubo nada que
alterar, nada casi que añadir, cuando la emancipación constituyó en derecho el hecho ya pre
existente de la soberanía." (II,95) Al preguntarse que semejanza había entre esa nación y la
venezolana, concluía que era una locura la pretensión de establecer entre nosotros instituciones
políticas idénticas.
**************
La idea de patria la asocia Baralt a la de idea de nación. Es decir patria y nación
representan la tierra natal. Es por ello, que en repetidas oportunidades denomina a España como
nación", etc.
Otra acepción que se constata como presente, creemos , es la de nación como sinónimo
de estado. Así puede observarse que se menciona repetidas veces con ese sentido a la nación
Finalmente, la idea de <<país>> surge reiteradamente en la obra. Se dice por ejemplo "su
país" (refiriéndose a Miranda, II,20) para indicar a su natal tierra venezolana. En otras partes del
trabajo se usa "país" para indicar a una región específica o particular, por ejemplo, todo ese país
**********************
De nuevo ,es necesario señalar que los textos considerados evidencian la dualidad
conceptual del discurso. Tradicional como cuando identifica la nación con lugar de nacimiento
(inglés de nación) ; "moderno" como cuando habla de "nación colombiana" , esto es, un Estado o
república de Colombia.
Esta dualidad que pareciera estar presente en el texto baraltiano tiene sus raíces en el
carácter traumático de los tiempos que le tocó vivir al autor. Por una parte, debe tenerse en
cuenta que éste tuvo que escribir su obra cuando todavía sus propias opiniones estaban
influenciadas por corrientes ideológicas encontradas. Por una parte, quería el novel autor plasmar
en su obra las nuevas ideas que flotaban en la atmósfera revolucionaria del período de la
emancipación. Esto es, las ideas liberales, el pensamiento de la Ilustración francesa o ,por lo
menos ,su reflejo la española. Por la otra, la formación literaria clásica y la propia mentalidad un
época paecista, caracterizada por una especie de ambiente "reaccionario" producto de la alianza
distinta procedencia y el grupo paecista. Ese ambiente conservador aunado a las características
de sus fuentes (muy heterogéneas) explican esa peculiar manera de abordar el proceso histórico
nacional.
Consideramos que ,a pesar del carácter casi coetáneo de las obras de Montenegro, Baralt
y Yanes, existen diferencias apreciables entre ellos, entre otras razones , por ser Baralt un joven
escritor que apenas sobrepasaba los treinta años ,mientras que Montenegro y Yanes estaban
"pero no crea que por ello temió ni dio la patria por perdida."
La narración que hace Baralt sobre los hechos relacionados con el proceso de
emancipación nacional sigue una secuencia estrictamente cronológica. Año tras año, desde 1797
militares. Haciendo tal cosa, identifica como <<patriotas>> a los contendores que luchaban por
libertador, el partido de Bolívar. Todas estas expresiones aparecen a lo largo del discurso
analizado asociadas a otras como la patria, la independencia del país, el patriotismo de los
<<Los Realistas>>.
Las expresiones anteriores relacionadas con el bando patriota tienen su correspondiente
fueron otros que los partidarios de la causa del rey de España. Los leales monárquicos,
orden colonial español. Además de ese calificativo general, el autor utiliza otras expresiones
como las siguientes: Los españoles, los canarios, los americanos realistas, el antiguo régimen, , el
colonia, ejército español, autoridades españolas, realistas americanos, partido español, la Madre
España ,huestes realistas. A estas denominaciones pueden agregarse otras menos significativas
referidas a partes mucho más concretas de la narración de los combates: infantería realista,
caballería realista, la artillería realista, etc. También se refiere algunas veces al bando realista
Entre algunas otras expresiones concretas relacionadas con la descripción de las acciones
de los llamados <<realistas>>, utiliza Baralt las que a continuación se enumeran: el jefe español
(tal) , los catalanes de Cumaná, húsares europeos, criollos mandados por Remigio Ramos,
Entre los grupos realistas que son especialmente particularizados está el de los canarios.
A ese respecto dice el historiador: "tal fue la conspiración que se llamó de los Canarios ....eran
supersticiosos" (II, 90) - - - los Canarios --- "tremolaban entre ufanos y medrosos una bandera
en que estaban pintados la Virgen del Rosario y el rey Fernando VII." (II, 91)
*****************
La identificación de los beligerantes en una guerra que tuvo casi todas las características
de una verdadera "guerra civil" fue más que todo una consecuencia de la posición (política) que
El entusiasmo o la frialdad hacia cada una de las opciones en disputa no siempre reflejaba
el origen "nacional" .Fue así que tuvimos decenas de miles de venezolanos que defendieron
indígenas, negros, pardos de las ciudades, etc. Por el contrario, paradójicamente algunos
"nacionalistas" .
número de esbozos biográficos y retratos de los principales próceres civiles y militares del
proceso de la independencia. Casi todas las semblanzas incorporadas exaltan las virtudes
La reseña de la vida de Francisco de Miranda ,la hace con gran amplitud (II, pp.23-37).
de 1806, así como de la actividad política y dirección de la guerra durante la primera república
(Venezuela,1810-1812). Al narrar la participación del biografiado en los EE.UU, dice que éste
"hablaba con admiración de los héroes que habían combatido por la libertad de la América del
Norte ..." (II,30). Y destaca para cerrar, que el precursor, fue a su tiempo "aclamado por todos
- subrayado nuestro -
Sobre Simón Bolívar, se consignan bellas páginas. Comienza destacando que fue hijo de
noble familia, rico y con talento (II,65). Y al escribir sobre la campaña de Bolívar desde la
de Venezuela. Sean cuales fueren los errores que una vez pasados los peligros engendraron la
paz, el ocio militar y la ambición, no deben olvidarse aquellos días en que un puñado de hombres
valerosos osó concebir y ejecutar con inauditas proezas la libertad de la patria.(pero la ingratitud)
a los creadores de la república ,es mil veces más odiosa que la conducta de éstos en tiempos
Considerando Baralt la figura de Simón Bolívar durante el terrible año de 1814, asienta
que
"tal fue para Venezuela el año de 1814, fecundo en combates, en virtudes ,en crímenes y en
profundas lecciones. Bermúdez, Piar y Ribas nos han dado con los ejemplos de la constancia y el
valor, el funesto de la desobediencia :Mariño el de la indecisión y de la falta de energía :los
pueblos el de la división y los celos provinciales. Por fortuna sobre todas las miserias del amor
propio, sobre todos los males de la guerra, sobre la nulidad, la tibieza o la impericia, se levantó
un hombre superior cuyo espíritu penetró en el caos de la revolución y dio luz a sus tinieblas.
Ha caído, sí, pero cual pujante atleta , con la espada en la mano ,dispuesto a levantarse del suelo
más terrible." (II, 299) - subrayado nuestro -
Camilo Torres y Simón Bolívar en 1814, recuerda que entonces el primero "como si leyera en
el oscuro porvenir " le dijo al Libertador, "que aunque Venezuela hubiese sido ocupada por los
adversario de Cartagena, "no podía perdonarle aquella generosidad del hombre superior con
que Bolívar había siempre desdeñado devolverle insulto por insulto y aun procurando la
reconciliación. Tal fue en esta ocasión la conducta del noble hijo de Caracas." (II, 315-316) .En
otra sección de la obra, quiso Baralt recordar que el congreso de Angostura, 1819, llamó a
Es evidente que el autor intentó conciliar el culto a Bolívar con la ruptura de Colombia.
Trató siempre de no ocultar todos aquellos homenajes que al Libertador se hicieron en el apogeo
de su gloria sin por ello no dejar de atreverse a cuestionar algunas de sus actuaciones políticas o
militares.
(1813), los homenajes decretados: luto de un mes, procesión a Caracas con su corazón para
heroísmo>> de Ricaurte en San Mateo al hacer volar el polvorín patriota junto con los atacantes
"Y cosa singular ! cuando la guerra estaba próxima a expirar , cuando toda la gloria que ella
había podido conceder parecía estar definitivamente repartida entre cierto número de hombres
eminentes, entre los cuales no se hallaba inscrito Sucre, comienza éste una carrera que va a
colocarle al lado de ellos, y próximo a Bolívar. Aquí en efecto empieza a llenar el hijo invicto de
Cumaná las páginas más brillantes de la historia colombiana."(III,78)
Otros ejemplos de lo heroico como conducta planteados en la obra y que pueden ser
Valencia, La Victoria, San Mateo ; Casa Fuerte de Barcelona, Maturín. Conducta de valerosos
jefes (patriotas o realistas). Entre los primeros, Urdaneta, Ribas, Piar, Bermúdez, Arismendi,
Sedeño, Plaza, Rondón, Aramendi, Páez, Farriar, Escalona, Zaraza, Monagas, Girardot, Ricaurte,
D'Elhuyar, Campo Elías, Jalón y tantos otros que sería difícil sólo enumerar. En el grupo de los
realistas, Baralt destaca el caso de pocos como Boves y Morillo, a quienes a pesar de su
Al escribir sobre los resultados de la Batalla de Carabobo del 24 de junio de 1821, asienta
Baralt, que "entre otras cosas ,se ordenó levantar una columna ática en la llanura de Carabobo
para recordar a la posteridad la gloria de aquel día y los nombres de Bolívar, de Sedeño y de
Plaza. De paso diremos [agrega] que la tal columna ática tuvo la misma suerte que otros
monumentos mandados erigir en honor del Libertador o para perpetuar la memoria de otras
épocas más o menos importantes. Las atenciones de la guerra ,las tempestades civiles que a ésta
se siguieron , un fondo grande de levedad y de indolencia en el carácter nacional y mucha dosis
de ingratitud , hizo que pasados los primeros instantes de alborozo, se olvidaran los triunfos, los
triunfadores y los monumentos. Acaso nuestros hijos, más felices y virtuosos , satisfarán la
deuda de la patria ,honrando las cenizas y la memoria de sus héroes." (III, 64) - subrayado
nuestro -
******************
Ese moderado culto heroico -- expresado en los textos analizados -- ha llevado a algunos
compartida por quienes señalan que por la sobriedad del estilo (más bien dentro de lo clásico)
todavía no se llegaba a los excesos literarios de los típicos representantes de esta corriente: Juan
gesta heroica venezolana: Miranda, Bolívar, Sucre ;así como de los homenajes decretados o
necesarios para justicia a éstos y sus hazañas se acongoja el autor por la indolencia, el olvido y la
Simón Bolívar es examinada con el mayor de los respetos. Siempre se considera al Libertador
con gran admiración por su talento político, su integridad personal, alma noble de hombre
superior, etc. Por el contrario, en el texto se hacen fuertes críticas a la actuación política y militar
del general Santiago Mariño (pudiera decirse que es antimariñista) . Asimismo, cuestiona en
duros términos las acciones de los generales Manuel Carlos Piar, José Francisco Bermúdez y
mismo aspecto, la obra enjuicia duramente a lo que llamó el "congresillo" de Cariaco, producto
de la actividad del Padre Cortés de Madariaga y de Mariño y otros jefes del Oriente.(II,396)
El examen de la actuación del prócer José Antonio Páez es sumamente prolijo, desde que
éste aparece por vez primera como jefe menor de una partida de llaneros, hasta su elevación a los
más altos comandos militares políticos. Se observa que no se atreve a cuestionar abiertamente
sus actuaciones. Ejemplos de ello serían los pasajes sobre la conducta del jefe llanero ante la
Sombrero, 1818); el del incumplimiento de las órdenes de movilizar sus fuerzas hacia los valles
de Cúcuta durante la campaña de 1819; los que narran los enfrentamientos con Soublette durante
las campañas contra los realistas en Occcidente; y finalmente, la reseña sobre la actuación del
descalifica al igual que al <<gacetero>> José Domingo Díaz. (II,394; III,33, 37)
Finalmente, es evidente el tratamiento diferenciado que hace a los jefes de los ejércitos
gobernador de Guayana). A otros, como Boves, Yañez, Calzada los reconoce como valientes y
Zuazola, Cervériz, Aldama y otros similares reciben las más elocuentes condenas morales por
sus actos de carnicería, cobardía, etc. ,son los verdaderos <<anti héroes>>. En este aspecto,
existe una completa coincidencia con la posición de don Feliciano Montenegro Colón, ello
(1) Este problema, difícil por cierto, ha sido estudiado muy poco entre nosotros. Una
aproximación a éste lo representa un ensayo escrito por Elena Plaza (Seminario Doctorado de
Historia, UCAB, 1990). Parte de él, publicado en la revista Tiempo y Espacio #13,vol.VII, junio
1990. Caracas, Centro de Investigaciones Históricas Mario Briceño Iragorry, Universidad
Pedagógica Experimental Libertador; Instituto Pedagógico de Caracas. pp.63-96
De igual manera, ver ANUARIO DE ESTUDIOS BOLIVARIANOS. I.I.H. Bolivarium.
Caracas, USB, 1996 (año V, # 5, 1996)
(2) n/a . Para no recargar con demasiadas notas a esta parte del trabajo, nos limitaremos -
de aquí en adelante - a señalar que todas las ideas resumidas o incorporadas textualmente
provienen del Resumen de la Historia de Venezuela de Rafael María Baralt (Impresión
Facsimilar de la edición realizada por la Academia Nacional de la Historia en su Cincuentenario,
con Notas de Vicente Lecuna. Caracas, s.p.i, 1975). Sólo indicaremos en caso necesario - y entre
paréntesis - el número del volumen (I-II-III) seguido del número de la o las páginas respectivas.
1.3. Francisco Javier Yanes: Aportes Ideológicos de su Obra Historiográfica.
La Idea de Pueblo.
Yanes, al igual que otros historiadores de su tiempo, utilizó profusamente este vocablo
con los tres significados que le daba el diccionario; es decir, <<pueblo>> como sinónimo de
populacho, plebe. Sobre este punto es muy importante la consulta de trabajos como el ya citado
de Elena Plaza. En él, aunque esté dedicado a la obra historiográfica de Rafael María Baralt, se
acepción) cuando indica el nombre de una comunidad urbana de pequeño tamaño. Sólo en los
casos cuando menciona a Caracas u otra capital de importancia o cuando se refiere a algunas
otras denominadas "villas" no le antepone la categoría de pueblo. Es así que que menciona, entre
pueblo de Maracay; los pueblos de Santa Lucía, Yare y Ocumare. El pueblo de Magdaleno ;
pueblo de La Victoria; pueblo de Cagua; "los pueblos de Carora y los de la vía de Quíbor" ; "en
el pueblo de Aragua, distante de Maturín doce leguas" ; "los pueblos de Tucupido, Orituco y
Lezama" ; "los pueblos de occidente" ; "los pueblos de Río Caribe, Carúpano y Cariaco" .Como
Yanes. Cuando necesita indicar la presencia del conjunto de los pobladores en sentido general
apela a este término. No obstante, puede observarse que cuando se refiere al <<pueblo de
Caracas>> especialmente en todos esos agitados días de 1810 y 1811, le asigna una connotación
Era lógico que así se presentase el asunto, pues tanto Yanes como los restantes
república. A la casi totalidad de los otros centros urbanos sólo se les menciona como asiento de
los acontecimientos en cadena iniciados en Caracas, pero sin ofrecer mayores detalles sobre
ellos. Esa "otra historia" solamente será objeto de la atención de los cronistas locales o regionales
y de los historiadores del futuro que siguieron el ejemplo de Yanes, aunque sus trabajos de
analista como Yanes, al enjuiciar la participación del pueblo en tales eventos, tenía
necesariamente que adjudicarle ese rol de ciudadanos políticamente activos en la vida del
naciente Estado. Tal concepción liberal de la acción política rompía con esos viejos esquemas de
los tiempos coloniales, de vasallos que suplicaban mercedes a su majestad y esperaban todo del
amantísimo padre que supuestamente representaba el monarca. Ahora no, ahora se estaba en
libertad política.
gritaron ,que volviese el Cabildo con su Presidente a la sala capitular para oír y resolver sobre lo
(b) "Entraron en la sala del Ayuntamiento los doctores D. Juan Germán Roscio y D. Félix
Sosa, como diputados del pueblo ,pidiendo a nombre de éste se estableciese en Venezuela una
(y se presentan los) fundamentos y razones que había tenido el pueblo de Caracas para
(d) La Junta había prohibido la presencia del precursor "Pero el pueblo de La Guaira y de
la capital se alborotó en términos que Miranda desembarcó y fue conducido a Caracas en medio
A pesar de no haber roto del todo con esa mentalidad tradicional, pues ya sabemos que
buena parte de los argumentos esbozados por aquellos juristas formados en la universidad local
acontecimientos de Caracas con aquel pueblo como protagonista de los nuevos tiempos.
También los siguientes textos nos ofrecen evidencias sobre esa visión del autor sobre el
pueblo-ciudadanía:
(e) " ... la moción sobre la necesidad de la independencia absoluta ... fue apoyada por por
un gran número de diputados y recibida con gran aplauso del pueblo." (C, p.194)
(f) "Un pueblo en la edad de ser libre,con fuerzas físicas y morales, gobernado por un
(g) Ante las informaciones sobre un grupo reunido en la sabana del Teque - cerca de
Caracas - portando armas y estandartes, "voló el pueblo ,llevando cada cual el arma que tenía; los
facciosos hicieron fuego ... pero ... fueron vencidos y reducidos a prisión." (C, p.207)
(h) En 1811, el colegio electoral ,las comunidades religiosas y "un inmenso pueblo que
parecía haberse convidado al efecto se dirigieron a la sala del Congreso ..." (RD, I,p.17)
(i) "Esta (la Constitución de 1811) debía sancionarse o ratificarse por el pueblo de cada
(j) "En tal estado de cosas se reunieron las autoridades y el pueblo de Caracas ,el 2 de
enero (de 1814) , ... y teniendo en consideración las tristes circunstancias en que se hallaba la
(k) En medio de la derrota a los patriotas en Oriente (1814) se decidió "... evacuar a
Cumaná, porque el pueblo había desaparecido por la noticia que se había difundido de
(l) Al conocerse en Caracas (1818) que las fuerzas republicanas avanzaban victoriosas
desde Calabozo hacia el centro, muchos se movilizaron para emigrar pero "... el Capitán General
interino ... salió por las calles y tranquilizó al pueblo ..." (RD, II,p.37)
día 9 "... a la capital de Santafé de Bogotá, entre las aclamaciones de un pueblo que, después de
Todas y cada una de las anteriores muestras ponen en evidencia cuál era la idea que
Yanes tenía sobre el pueblo cuando lo definía en términos de masa general de vecinos, habitantes
de una ciudad ,región o país. No siempre queda claro que se refiera a ese pueblo activo o
república. Muchas veces, considerando el contexto, se ve a las claras, que el mencionado pueblo
era en ese caso, solo la masa general que habitaba en determinado lugar.
Finalmente, Yanes apela al tercer significado de <<pueblo>>, esto es, el de gente inferior,
plebe o populacho.
Aunque muchas menos veces, aparece dicha palabra utilizada en la obra en ese sentido.
(b) Los realistas, llenos de entusiasmo, "exitaron al populacho y a las tropas que se
hallaban en los cuarteles para que no se sometieran al Gobierno de Caracas." (RD, I,p.9)
(c) Cuando Mariño tomó a Barcelona el 19 de agosto de 1813, muchos realistas fueron
tratados con indulgencia, pues allí no ocurrieron situaciones como las de Cumaná. Sólo se
ejecutó a unos "... veintitrés individuos cuya vida se la habría quitado el mismo pueblo si
hubieran conseguido perdón del vencedor. El fraile Márquez y Arias Reina fueron del número de
aquellos."
(RD, I,p.121)
(d) Fue el año de 1814, un año funesto, "la multitud abandonó el trabajo ,para buscar la
(e) En febrero de 1814 los patriotas Cortés de Madariaga, Roscio y Ayala escaparon a la
posesión británica de Gibraltar desde el presidio de Ceuta, pero fueron capturados y traídos de
nuevo "... en medio de la algazara y vociferaciones del populacho español, que con frecuentes
(f) Refiriéndose a los atropellos de los realistas en 1814, se dice que éstos utilizaban
como arma "... la delación de las conspiraciones inventadas por hombres de la hez del pueblo. "
realista Pedro Luis Inchauspe, pero éste no cumplió lo ofrecido y ... "sedujo al populacho de la
A pesar de su menor número, si se les compara con los que se consiguen de la segunda
acepción, tales ejemplos muestran que Yanes tuvo ,como hombre de esa élite de blancos criollos
ilustrados ,los típicos prejuicios hacia esas masas del <<bajo pueblo>>. Recuérdese que estos
historiadores patricios veían con horror el jacobinismo, de ciertos personajes que inflamaban con
sus ideas a ese pueblo conformado en parte por pardos y negros. Y no fue solamente la actitud
regresaba a Venezuela después de muchos años en el exilio. También el gobierno federal que la
sustituyó hasta 1812 y los sucesivos gobiernos provisionales y constitucionales no fueron muy
lejos en esa visión del pueblo como masa levantisca y de tendencias anárquicas.
Fueron tales valores políticos, los de una "aristocracia" que vestía de ropaje liberal-
ilustrado a sus viejas concepciones sobre la organización del estado, los que se expresaban en
El pueblo venezolano, formado por los españoles y sus descendientes , los negros, los
indígenas y todos esos grupos productos del mestizaje; se dividió profundamente como
<<Los Indios>>
Uno de esos grupos -- parte del pueblo -- los así llamados "indios" es claramente
identificado como grupo diferenciado que participaba en el proceso militar que se relata.
Véase como el autor en los casos tomados enjuicia el papel de los aborígenes del país:
"fue antes de su cautiverio una nación soberana y tan separada del gobierno español , que ni
conocía la existencia de éste, ni la del antiguo mundo. Sus habitantes vivían en crecido número y
eran naturalmente felices con los benéficos productos de la tierra bajo la dirección patriarcal de
sus caciques. Cuando el factor Juan de Ampúes y sus compañeros pusieron el pie en la Coriana
ofreció a Manaure un tratado de amistad y perpetua alianza con su amo el rey de España ...."
(C, p.195)
Obsérvese como el autor señala que esa Venezuela prehispánica era una <<nación>>
soberana. Para él esos pueblos aborígenes que vivían bajo la dirección de sus caciques perdieron
(b) Indios Realistas. Bajo esta denominación se presentan los siguientes ejemplos de
acciones concretas reseñadas por el autor. Todos tienen que ver con el desarrollo de la guerra de
emancipación.
(b.1) Se denunciaba en 1812 una posible rebelión de "indios y gente de color" a favor del
(b.2) Al avanzar las fuerzas republicanas desde el Oriente en 1814, "la columna al mando
de Valdés siguió por los pueblos de Tucupido, Orituco y Lezama, y para ocuparlos fue preciso
batirse, porque en todos se manifestó oposición a los patriotas , siendo la más notable resistencia
Ybarrolaburu..."(RD, I, p.166)
(b.3) En algunas acciones militares en Oriente, 1820, fue atacada una fuerza patriota, "...
un cuerpo de más de 100 hombres ,incluso algunos ingleses y todos fueron muertos por los
indios de San Joaquín y Chamariapa, que componían parte de las tropas realistas." (RD, II,p.75)
(b.4) "... desde que (en 1820) se publicó en la parte oriental la Constitución española, fue
decreciendo el poder de los realistas, pues los indios y criollos más adictos al rey empezaron a
resfriarse y pasarse a las filas republicanas. El gobernador y los indios del pueblo de Tucupido
(c) Indios Patriotas. Descripción de algunas acciones militares en las que participaron
principios de 1816, "... murieron los dos famosos comandantes de los indios patriotas Manaure y
(c.2) El 11 de abril de 1817, en las cercanías de San Félix combatieron las fuerzas
realistas y las patriotas. Al formarse éstas últimas en batalla se colocó entre las filas, una formada
por unos 500 "... indios flecheros ..." .La victoria fue para los republicanos. (RD, II,pp.13-14)
De la revisión de los textos escogidos ,y que obviamente no son sino los más llamativos
de todos los presentados en la obra, se puede deducir que para Yanes (y también para los otros
historiadores) los llamados <<indios>> no fueron otra cosa que un peculiar grupo de soldados
que peleaban con sus armas tradicionales. Con la excepción de una pequeña partida en Oriente
(la que militó en la fuerzas de Monagas) o el de los flecheros que participó en la acción de San
Félix, todos los individuos o los grupos indígenas estuvieron asociados al poder español, que
<<Los Negros>>.
(a) En 1812, "... los negros esclavos y muchos libres de los valles de Curiepe, Capaya,
Guapo y otros puntos de Barlovento, fueron conmovidos y seducidos con la oferta de su libertad
y grandes premios por don José de las Llamosas, presidente que había sido de la Junta Suprema,
don Gaspar González y don Isidoro Quintero, españoles, y por los criollos Elzaburu y Galarraga,
y proclamando a Fernando VII como legítimo rey y señor de Venezuela, se dirigieron en masa
sobre Caracas y pueblos de la costa, cometiendo atroces excesos e inauditas crueldades en las
personas y bienes de los patriotas ..." (RD, I,p.44)
(b) "El 6 de marzo (de 1814) volvió Rosete, a ocupar a Ocumare, con 3.000 hombres y
ejecutó las crueldades de costumbre, sublevando además contra el Gobierno independiente a los
esclavos de aquellos valles ofreciéndoles la libertad y el saqueo de los pueblos ..." (RD, I,p.147)
Al igual que en el caso de los "indios" , los pardos u otros segmentos de esa rígida
sociedad de origen colonial; los negros (libres o esclavos) no son vistos con particular simpatía
por el autor ahora estudiado. Este grupo es considerado como una masa que actuaba bajo los
quienes si los tenían en abundancia , es señalado como el señuelo utilizado por los enemigos de
luchas político-sociales y de las características de los grupos sociales como los antes
mencionados.
La Patria y La Libertad.
La idea de patria está asociada al terruño nativo, al país natal. Igualmente, de acuerdo con
el contexto, no solamente se hace referencia al suelo natal sino también a una nueva entidad
política, la república liberal y democrática creada por las transformaciones iniciadas en 1810-
1811. Esa nueva formación política encarnaba la <<libertad>> (RD,I,p.41). Sentido similar
tienen algunas descripciones como la del ataque de Mariño a un cuartel en Güiria el 13-1-1813,
donde se dice que a pesar de la desigualdad numérica derrotaron a los realistas que "no pudieron
resistir el ímpetu de los que peleaban por la libertad" (RD, I,p.94), o igualmente esta, donde
afirma Yanes que a pesar de las derrotas de 1814 en el Oriente, hubo siempre un grupo que
siguió luchando "hasta lograr la libertad entera de Venezuela" (RD,I,p.191) .En fin, si se quiere,
tienen esa misma connotación las repetidas referencias al "ejército libertador" y al mismísimo
despotismo del colonialismo español ,pero también se cuestiona al autoritario gobierno militar
patriota que limitaba la libertad política del pueblo. Por ello, había que luchar sin descanso en
contra de los realistas, pero al mismo tiempo exigir la participación del pueblo en la libre
elección de sus magistrados, en la reunión de sus congresos, en la limitación del poder de los
jefes militares. Una muestra de esos escrúpulos sobre la libertad política, que orientaron sus
opiniones históricas, es este juicio que lanzó en la oportunidad de retirarse el Libertador hacia la
"... los adictos al poder sin restricción y al gobierno militar siguieron a Bolívar y Mariño ... fue
entonces cuando se manifestaron sin rebozo ideas contrarias a los principios del gobierno
popular representativo, proclamado desde el año de 1810, en todos los Estados" (RD,I,pp.195-
Cariaco (RD,II,pp.17-20) al que enjuicia muy favorablemente, cosa que no hicieron los
<<congresillo>>.
Esa nueva patria libre, debíase defender con las armas en los campos de batalla. Quienes
asumían su deber con la patria eran los llamados patriotas; quienes no, se les califica de traidores
a la misma.
indicar en el padrón a formar "su edad, estado, patria , vecindario, oficio ,condición y si era o no
(b) Al darse noticias sobre el recién liberado preso político español Sebastián Andrés, se
dice que éste "contestó que no admitía el destino que se le ofrecía (por parte de la Junta de
Caracas) ,porque no podía servir en un gobierno que seguía una marcha contraria a los intereses
(c) Se critica la actuación del general Miranda cuando éste desempeñaba la tarea de
"salvar la patria que le había confiado el Poder Ejecutivo (...) Recibió Miranda "... facultades
(d) Fuerzas realistas comandadas por Reyes Vargas proclamaron a Fernando VII ,"en el
mismo pueblo donde, reforzado y auxiliado por traidores a la patria que les dio el ser ...."
(RD, I,p.29)
(e) "El Libertador pensó que la victoria de Araure produciría un saludable desengaño en
los criollos alucinados que volverían al seno de la patria ..." (RD, I,p.137)
(f) "... el general Bolívar hizo ver a Mariño la necesidad de reunir sus fuerzas ,para salvar
como lugar de origen es lo más evidente. Véase el primer caso en donde se señala que deben
indicar los electores su edad, condiciones, propiedades, <<patria>> ,etc. Sin embargo, en algunos
de los otros ejemplos, no sólo está implícita esa noción de que la patria es el lar nativo, también
ella tiene aparejada la idea de una comunidad política --- una nación , un Estado --- al que había
Patriotas y Realistas.
independencia nacional. Yanes explica el surgimiento de estos grupos señalando que los
definitivamente a los habitantes de Venezuela en dos partidos: el de los europeos y canarios que
se denominó de los Godos ,y el de los criollos ,en que había muchos españoles, que se llamó de
los Patriotas ,al que dieron aquellos varios apodos ..." (RD, I,p.4)
cuando eran los más fuertes fueron crueles, perseguidores, feroces, carniceros, exterminadores,
nueva república liberal y democrática que pugnaba por ser libre del dominio colonial de la
metrópolis española.
Se presentan ejemplos de un texto representativo y de las expresiones que sirven para
Dice Yanes, que en los días que precedieron al 19 de abril de 1810, cuando ya se
"los que desde entonces se titularon patriotas resolvieron a romper el velo de esta política
tenebrosa, sacudir el yugo , estableciendo un gobierno patriótico o perecer en la demanda. [la
noche anterior, se reunieron y acordaron] ... citar a todos los patriotas que pudiese [cada
uno] ,para que concurriesen muy temprano a la plaza mayor a esperar ,cumplir y llevar a efecto
los acuerdos del Ayuntamiento." (C, p.142)
A todo lo largo de la Relación Documentada ... el autor identifica a los contendores que
independiente" .Estas u otras similares expresiones no dejan duda sobre a quien se refiere el
Los Realistas .
Los Realistas, el Partido Realista, los "españoles" , los españoles y canarios, los
viscaínos, los catalanes, los godos, los adictos a la causa del Rey y otras categorías sirvieron al
autor para identificar a los que tuvieron que enfrentar y vencer los patriotas, republicanos o
independientes.
(b) Una revolución - contra la república - en Cumaná por parte de "los catalanes y
(c) Cuando Mariño atacó a Cumaná en 1813, exigió la rendición de la ciudad y "la
intimación causó tal terror en Antoñanzas ,en los frenéticos catalanes y en los criollos leales (a la
corona) que ... no pensaron ni trataron de otra cosa que trasladarse a la embarcaciones que tenían
remitían en cajones a Cumaná, en donde las recibían con salvas de repiques de campanas ,y los
Catalanes las clavaban en las puertas de sus bodegas y en sus sombreros, como escarapelas..."
(RD, I,p.97)
(e) Los viscaínos y criollos de Valencia "entusiasmados por el rey y la religión" (RD,
I,p.5)
(f) "Coro, Maracaibo y demás pueblos ... adictos a la causa del rey ..." (RD, I,p.9)
(g) "los adictos a la causa del rey obraban ya con descaro" (RD, I,p.45)
(h) "... siguiendo Boves y Morales, con otros pocos al Guayabal, pueblo tenazmente
adherido a la causa del Rey por el influjo y persuasión de los misioneros capuchinos." (RD,
I,p.131)
(i) El 7 de marzo de 1814, un jefe republicano se tuvo que enfrentar a las fuerzas realistas
sin antes haber tenido ninguna información sobre la presencia de tales enemigos en las cercanías
"prueba inequívoca de la adhesión que la mayoría de los habitantes de Occidente tenían entonces
"La destrucción de Maturín y la matanza que se hizo en los días subsecuentes no mitigó
la insaciable sed de sangre americana que devoraba a los españoles y canarios ..." (RD, I,p.221)
No dejan nunca lugar a dudas las expresiones que sirvieron para identificar tanto a los
que fueron enviados por la antigua metrópolis como a los habiendo nacido o vivido muchos años
en estas tierras asumieron con fanatismo la defensa de los intereses de la corona española
naturaleza llevadas a cabo por estos <<realistas>> fue el norte seguido en la obra. Tales acciones
calificativos equivalentes. Tales realistas, no son presentados como dignos enemigos a vencer,
***********************
El análisis histórico de Yanes refleja evidentemente sus opiniones jurídicas y políticas.
de las formas legales de la vida civil organizada, se deja sentir a través de la prosa de su obra. En
su Relación Documentada ... puede constatarse una gran diferencia con autores como
Montenegro y ,especialmente , con Juan Vicente González quienes cuestionaron duramente los
similares actos de barbarie realizados por los jefes patriotas. Yanes , por el contrario, no asume
una abierta condena de la política de <<guerra a muerte>> ; más bien siempre trata de demostrar
que fueron los españoles realistas los que la iniciaron desde los tiempos de la Primera República.
Por tanto, la practicada por el abogado y oficial patriota Antonio Nicolás Briceño (el llamado
"Diablo" Briceño) ; por Simón Bolívar ,quien la decretó en Trujillo en 1813 y por quien tuvo la
Juan Bautista Arismendi, no fue otra cosa que la legítima respuesta a esos actos. Es tal la pasión
anti-realista del autor, que no pretende como otros historiadores asumir un papel de juez
En sus análisis no hay un evidente <<culto heroico>> tal como el planteado por otros
los hechos sin apelar a ese dramatismo tan propio de los escritores románticos. En muy pocas
oportunidades se permite ensalzar el arrojo de algún jefe y de los demás participantes, tal como
lo hizo en su descripción del combate de <<las Queseras del Medio>>. Sin duda que esa
característica del discurso de Yanes tiene mucho que ver con su condición de prócer patriota
civil, no muy ducho en cuestiones militares o particularmente entusiasmado por sus hazañas.
hechos que le parecieron relevantes y comprobados nos dejó un expediente sobre los hechos que
presenció o de los cuales tuvo noticias ciertas, pero también nos dejó como legado sus
emancipación.
abundan los comentarios específicos en relación con los que pudieran denominarse los "anti-
héroes", es decir el negro retrato de los enemigos: uno colectivo, España y los españoles;
individual el otro: el que hace a varios de los que califica de monstruos, fieras con apariencia
humana, etc.
(a) Zuazola.
"El teniente don Antonio Zuazola ,más inhumano que Cerveris y discípulo de Antoñanzas, fue
destinado por Monteverde, a reforzar a Cumaná [...] Es necesario hacer aquí un breve recuerdo
de los hechos atroces de Zuazola, porque este monstruo fue el que descaradamente comenzó en
el Oriente la guerra a muerte que Monteverde en Baragua y Antoñanzas en San Juan de los
Morros y Calabozo habían practicado sin rebozo.[...] todos los que se presentaron [a sus
llamados] sufrieron las especies de castigo, que aquella fiera disfrazada con la forma humana
había de antemano concebido, preparado y dispuesto, plan atroz y abominable que en la
regeneración política de Venezuela deberá llamarse el martirio de Zuazola."
Tormentos como cortar las orejas, desmembrar con golpes de hacha o machete, coser la piel de
dos personas colocadas espalda con espalda y luego lanzarlos a morir en una laguna, desollarlos
hasta morir, degollarlos, azotes y apaleamiento y otros castigos peores dieron triste fama a este
Del análisis de la obra de Yanes se desprende que ésta tenía un carácter ideológicamente
más avanzado que la de Montenegro mas no tanto como la de Baralt. Ello se explicaría en parte
cincuenta años.
Resulta evidente que Yanes como intelectual estuvo a medio camino entre las viejas
nuevas ideas modernas que los aires de la revolución emancipadora americana hicieron suyas.
Fue notoria en Yanes la influencia no sólo de las ideas francesas sino también especialmente del
los tribunales.
Al escribir ese discurso histórico donde se puede observar sin dificultad su preocupación
sobre las autoridades ejecutivas, de la ley y los tribunales sobre las acciones arbitrarias de los
Por todo ello, la principal obra de Yanes representó una visión histórica diferente:
"antiespañola". Tal vez por ello nunca fue publicada durante el siglo XIX venezolano.
NOTAS (Capítulo III, Sección 1.3)
(1) De aquí en adelante, y para no incorporar repetidas notas, sólo indicaremos de manera
abreviada las obras ya antes citadas: el Compendio ... y la Relación Documentada ... .Para el
primer caso, es decir el <<Compendio>>, se abreviará indicando entre paréntesis la letra (C) ,
seguida del número de la o las páginas citadas. En el caso de la <<Relación Documentada>> se
indicará entre paréntesis (RD) , seguido del número del tomo y de la o las páginas respectivas. Es
de destacar que la mayor parte de las referencias serán a esta última obra, considerándose la
importancia de la temática y del período cronológico tratado.
-- se hará el subrayado de lo fundamental ---
(2) n.a. Sobre la participación de los indígenas en los procesos históricos venezolanos,
véase además, la obra de Emigdio Cañizales Guédez: El Indio en la Guerra de Independencia.
Caracas, Coedición de la Dirección de Cultura de la U.C.V y la APUCV, 1993
1.4. La idea de Pueblo, Nación ,Patria y República. Patriotas y Realistas. Los Héroes y lo
La Idea de Pueblo.
En la obra estudiada (2) es usual que esta noción se le utilice en las acepciones que ya
como equivalente a conjunto de la población, ciudadanía o vecinos de una urbe, región, país o
nación; <<pueblo>> como expresión de masa de gente socialmente inferior, plebe, populacho.
expresamente, la presencia de ciertos segmentos sociales tales como los indígenas, los negros,
los llaneros, los españoles y canarios. Tales grupos, en algunos casos, caen en lo que sería la
De acuerdo con lo observado en este libro, es usual que el autor denomine <<pueblo>> a
villa u otras similares. Como ésta no es la más interesante acepción se presentará sólo este
ejemplo:
El Padre Torrellas del pueblo de Siquisique, al servicio de los españoles mantuvo "fieles
a la causa del rey aquellos indios y muchos otros vecinos de distintos pueblos de Occidente, muy
Véanse si, los del segundo caso, a través de innumerables muestras (subrayados nuestros
en muchas de ellas) :
(a) En 1808, cuando llegaron los enviados franceses a Caracas con noticias de las
ocurrencias en la corte española, "... se agrupó el pueblo y se multiplicó la vocinglería por todas
las calles (proclamaban a Fernando VII, hicieron sacar el pendón real y que se jurase al rey. Sólo
así se tranquilizó) el pueblo ... los emisarios franceses fueron ocultados para salvarles del furor
del pueblo ... tanto entusiasmo y tal espontaneidad del pueblo en favor de su soberano .... no
mejoraron en nada la triste condición colonial de los venezolanos." (I,75-76)
(b) En los sucesos de 1808, "temeroso ya el Capitán General
de la desconfianza y antipatía con que le veía el pueblo en aquellas circunstancias ,de suyo
delicadas y peligrosas, convocó ... una junta (...) no se le ocultó al pueblo lo que en la junta había
pasado .... todo fue agitación en aquellos momentos, sin que los gobernantes manifestasen
consideración alguna al pueblo, ni estimasen en nada la lealtad del Ilustre Ayuntamiento ... toda
armonía y mutua confianza llegó a perderse entre el Ilustre Ayuntamiento y los gobernantes, y el
pueblo apuraba la copa del sufrimiento ..." (I,78-79-80)
(c) Durante el 19 de abril de 1810 se expresó "la libre soberanía del pueblo" (I,91) "...
(por) la agitación del pueblo: se aumenta el número de aquella corporación con los dignos
representantes del pueblo" (...) Salias le pidió a Emparan que volviese al cabildo "porque el
pueblo y la salud pública así lo exigían.Semejante exigencia fue corroborada por las voces del
mismo pueblo, a las que no pudo resistir aquel magistrado ..." (I,94) "La suprema junta (del año
de 1810) no era usurpadora de la soberanía del pueblo ...."
(d) "Por primera vez respiró un aire libre el pueblo oprimido, y dieron principio a su
(e) Al llegar Miranda a La Guaira en 1810, con gran entusiasmo "... el pueblo le hizo
desembarcar, y fue conducido en triunfo ..." (I,145-146) .Al elegir a Miranda como diputado "..
el pueblo quiso premiar con sus sufragios a aquel veterano patriota." (I,148)
(f) "... la decidida y formal moción sobre la independencia absoluta , que fue apoyada por
un gran número de diputados y aceptada con gran júbilo del pueblo." (I,151)
(g) Ante el terrible terremoto de 1812, "Las armas que empleó el fanatismo, moviendo la
(h) Para mantener el ejército republicano en 1812, "... las autoridades y el pueblo no
pueblo entero ..." (I,358) Aunque, "parecía imposible la encarcelación de un pueblo entero..."
(I,369)
(j) El "... odio y la venganza de parte de un pueblo altamente ofendido e irritado contra
sus tiranos ... (a pesar de todo) loable y digna del mayor elogio fue la conducta de los pueblos de
Caracas y La Guaira .... la justa ira del pueblo contra sus opresores la refrenó el mismo pueblo."
(II,62)
"Inútiles fueron los esfuerzos de la primera raza para salvarse de la bárbara irrupción de los
conquistadores inhumanos, pueblos enteros, naciones opulentas , la generación toda volvió al
caos. A la guerra cruel de una invasión audaz siguió la calma del exterminio, y bajo la
dominación ominosa de los usurpadores , la América entera se convirtió en el vasto sepulcro de
sus infortunados hijos ! Desgraciada tierra de los desvelos del magnánimo Colón ! (....) "Ilustres
manes de los Incas; veneradas cenizas de tantos emperadores y reyes; millones de inocentes
víctimas esparcidas en el dilatado espacio de un mundo entero; conmoveos con la prolongación
de tantos horrores ! " (I,47)
Considerando estos y otros ejemplos que pueden conseguirse en la obra, se puede afirmar
que Austria hacía un amplio y muy "moderno" uso de esta categoría <<Pueblo>>. Se nota ,en su
caso , una visión idealizada del mismo; pues lo ve casi siempre como una comunidad homogénea
Esa visión del Pueblo como ciudadanía politizada (en especial la de Caracas) ; es decir ,la
que va a la plaza, lucha, se defiende y ataca como grupo; es una construcción ideológica hija de
la Revolución Francesa. Sin duda ,ella, muy extendida entre los intelectuales venezolanos
la luz de esos ejemplos) con algunas diferencias o matices que es preciso puntualizar: En ciertos
pasajes se destaca el carácter vocinglero y revoltoso de ese pueblo que obliga a actuar a los
factores de poder, esto es, a el capitán general, el ayuntamiento capitalino o a sus sucesores.
supuestamente respiró el aire libre de los nuevos tiempos; el mismo ,al que se le endilgaron
contradictorias notas: luchar por hacer desembarcar a Miranda (quien era enemigo de ese mismo
rey al que juraba lealtad en las calles de Caracas meses antes) ,caer presa del fanatismo y la
credulidad al hacer suyas las consejas propaladas después del terrible terremoto de 1812, y
No cabe duda, que cuando el autor se refiere al <<pueblo>> en cada uno de los casos
mencionados en su obra, lo hace en términos abstractos o ideales, que por supuesto deja por
fuera algunas evidentes contradicciones que se desprenden de una lectura rigurosa de tales
textos, tal como ya lo sugerimos antes. Tales menciones sobre ese mítico <<pueblo>>
demuestran que ,igual que ahora, cada quien ha llenado dicho concepto con diferentes
contenidos.
El examen de otras muestras nos permite visualizar cómo concibe el autor la idea de
pueblo en su acepción de masa de gente socialmente inferior. Véanse los ejemplos siguientes:
(a) ".... en apoyo de la emancipación. La multitud no conocía los caminos que conducen a
la gloria porque no tenía que defender ni ascendencia , ni recuerdos ,ni patria. Que antepasados
podía señalar el hijo de una india o de una africana? (...) .La turba de gente despreciada hubiera
permanecido siempre sin la menor sensación de orgullo nacional ,si la aristocracia no la hubiera
levantado del suelo y acercándola a sí misma." (I,93)
(b) Refiriéndose a la conducta de los <<Llaneros>> y otros grupos, para el año de 1813,
dice, que los españoles "tomaron a su cargo fomentar malignamente la funesta división de los
Austria, como historiador patricio que era, dejaba ver a través de sus opiniones la
presencia de los valores ideológicos y los prejuicios que podían esperarse en una persona de sus
condiciones sociales e intelectuales. Esa más que obvia referencia a la supuesta ausencia de
antepasados en los descendientes de indígenas y africanos; la superioridad de la aristocracia (los
blancos, propietarios, cultos) y de la barbarie de los llaneros y de la hez de los pueblos del
Ya sabemos, que esa plebe, ese populacho, esa hez de los pueblos fue el instrumento más
terrible que utilizó la corona española y sus agentes para aplastar a esa aristocracia en términos
populacho nutrió las fuerzas de Monteverde, de Boves, de Morales y de muchos otros jefes de
los ejércitos y guerrillas realistas para hacer la guerra en Venezuela y aún en otros escenarios de
Hispano América.
Los Indígenas.
(a) Los Indígenas y la Independencia. Recordando a los jefes indígenas sacrificados, les
dice: "! Patricios respetables ,mártires de la buena fe ,víctimas sacrificadas al furor del
despotismo
en la antigua y nueva lucha, desde la mansión eterna de los justos donde habitáis, contemplad a
vuestra patria, libre ya, regida por las leyes de su propia voluntad y restablecida en la plenitud de
sus derechos ! Vuestra sangre ha sido vengada, y vuestros anhelos cumplidos. No más
usurpación ,no más esclavitud ..." (I,62)
"La América teñida con la sangre de sus señores originarios, la cruel administración de los
gobernantes españoles ,y el deseo de recobrar su antigua independencia ,debían producir en los
naturales del país el horror, la desesperación y un constante conato por sustraerse a las tiránicas
leyes dictadas por un poder situado a una enorme distancia. No desconocía la corte de Madrid la
fuerza de estas observaciones, y comprendiendo que era imposible conservar perpetuamente la
unidad entre la América y la España imaginó un plan para retardar cuanto fuese posible la
ruptura. <<Destruir la población o reducirla a la nulidad>> ,o en otras palabras, <<embrutecer a
los indios o hacerlos perecer, fue el objeto ; el fanatismo, la miseria, la superstición y la más
completa ignorancia, los medios para realizarlo>>" (I,64)
(c) "Los Moctezuma, los Incas, los Cipas, los Zaques, los Manaures, los Cuicas, los
Teques, los Caracas y otros mil ; todos parece que desde la tumba elevaron sus plegarias a la
congresos y campos de batalla combatían por la libertad e independencia, reivindicando así a los
mártires indígenas. Pudiera afirmarse que en esas expresiones, que son parte de la sección
introductoria de la obra, el autor lanza una especie de manifiesto en defensa de los indígenas de
Cumplido ese ritual histórico, quien escribe ,sólo menciona en adelante a los indígenas
como pobladores de áreas específicas, que se incorporan o los incorporan, a las acciones
bélicas ,en favor o en contra, de los que luchaban por la emancipación de Venezuela. Obsérvense
estos ejemplos:
(a) En los días de la batalla de Araure (5-12-1813) , los realistas "no contentos ni saciada
una tan implacable saña, habían armado y emboscado a los indios de Acarigua en sus mismos
bosques, para que luego que fuesen derrotados los independientes, como ellos lo esperaban,
(b) Tropas realistas atacan a Barinas, enero de 1814. Fueron atacados con numerosas
fuerzas de caballería, unos 50 fusileros y "200 indios de flechas ..." (II,166) Para esos mismos
días, cuando venían fuerzas patriotas en su auxilio, fueron atacados por "una numerosa columna
de bandidos salida de las montañas de Acarigua, capitaneada por el cabecilla Rangel, con pocas
armas de fuego, pero con muchas flechas en cuyo uso son hábiles aquellos indios ..." (II,169)
(c) Enero de 1814 , para socorrer a los patriotas de Mérida se organizó una columna , y a
(d) Para entonces (1815) ya se habían incorporado con los patriotas algunas tribus
Caribes, capitaneadas por el famoso Tupepe y su segundo Manaure e hijos que abandonaron las
riberas del Orinoco, decididos contra los españoles por las depredaciones que experimentaron, y
el incendio, por último, de sus poblaciones. (se les unió, además, una fuerza comandada por
Vicente Parejo) "80 hombres titulados los Terecais, porque andaban desnudos, y por toda divisa
(e) Andaba José Tadeo Monagas en tierras guayanesas (1815) y organizó un hospital con
muchos enfermos y heridos de sus tropas. En esas condiciones llegaron fuerzas realistas, junto
con "los indios de Tapaquire, y con inaudita ferocidad degollaron a todos los enfermos, sin
perdonar uno. Fue también víctima de tan bárbara crueldad la bella joven ... Carmen Bolívar, a
quien asesinaron, y después ,para ofender más la moral y escandalizar a la humanidad ,colocaron
algunas partes de su cuerpo ,que el pudor no permite nombrar, en un chaparro a la entrada del
bosque." Como ya en páginas anteriores anotamos, Monagas, muy indignado, hizo morir a todos
autor se limita a describir las acciones de los llamados "indios" como partícipes de los combates ,
en uno u otro bando que los hubiese reclutado. Obsérvese cómo la narración de los hechos en los
cuales los indígenas participan (a favor o en contra de la causa patriota) es muy diferente a esa
visión idealizada de los antiguos pobladores del continente. Por lo demás ,resulta curioso , que
sean esos descendientes de los conquistadores, los que posteriormente asuman esa posición de
proceso. Las únicas veces que mencionan a éstos son siempre las mismas, es decir el decreto de
decretos de libertad de los esclavos que proclama Bolívar en Oriente y en Ocumare en 1816. En
la primera noticia, o sea el decreto de 1812, se "ofrecía la libertad a todos los esclavos que
tomaran el servicio en el ejército por diez años."; decreto calificado como desastroso e inútil.
(I,319)
"Otra tormenta, aún más aterradora ,se inflamaba al mismo tiempo para descargar sobre un
pueblo agobiado ya de infortunios. Las esclavitudes (de Barlovento) , seducidas y puestas en
armas por algunos enemigos de la independencia (...) , en masas numerosas, emprendieron una
incursión por distintas vías en completo vandalaje. Sin jefes reconocidos, sin moral ni
miramiento alguno, a semejanza de una devastadora plaga, penetraron (hacia todos los pueblos
de la región, donde pacíficos vecinos,) fueron sacrificados, y no hubo crimen que no cometiese
aquella horda de fieras que el averno vomitó. (...) tanto horror y miedo inspiró la sublevación de
aquellas numerosas esclavitudes a los patriotas como a los españoles, porque una vez que se
desbandaron, su único cebo fue el pillaje, el asesinato y todo género de depredaciones . " (I,330)
Para cerrar esta sección, resta solamente reiterar lo indicado en relación con la visión del
autor sobre el pueblo, juzgado como plebe o populacho, pues lógicamente los indígenas y los
negros caían dentro de ese concepto. Indígenas y negros (tanto libres como esclavos) eran
identificados como un segmento más de esa masa de gente inferior, manipulada por los agentes
Además ,tales grupos tenían sobre sí el estigma de la inferioridad étnico-social que arrastraban
desde cuando formaban parte de las llamadas "castas" de mestizos, pardos y otros estratos no
pasados bajo la férula de los altaneros blancos criollos mantuanos y de los blancos en general,
dejó un trasfrondo de arraigados prejuicios, a los cuales, no era ajeno este y los otros
historiadores de la época.
La Idea de Nación.
En el discurso histórico de Austria, aparece este vocablo asociado con otras categorías,
otro. Las naciones ,como los hombres ,están sujetas a las convenciones que arreglen su mutua
felicidad..." (I,66)
(b) "Mezclados los españoles y los americanos por la sangre ,por la religión ,por el
idioma , por las costumbres y por las conveniencias sociales, ¿ fueron aquéllos más humanos o
menos feroces cuando se emprendió la lucha por la nueva independencia de nuestro continente,
que en los tiempos de ingrato recuerdo,que en la época de su conquista ? Mi pulso tiembla al
escribirlo. ! NO !.. ! Dichoso aquel que nazca en otra era, cuando no existan ni los que han sido
testigos de la horrenda catástrofe que ha superado la América, para fijar en sus gigantes cimas el
estandarte de la Libertad ! Los fríos recuerdos de la historia le exitarán una tranquila
admiración ; mas no devorarán su alma ,ni el espectáculo de las crueldades ni el vivo dolor de los
que las presenciaron." (I,49)
la retrata, señalando que "Los despojos de vuestra opulencia (la de los indígenas de América) no
saciaron la sed de oro ; ni tanta sangre derramada calmó el furor de esa nación, que a nombre del
Dios de las luces y de toda bondad , e invocando el Evangelio, derramó el estrago donde hallaba
bienes y dictó la muerte para los que amaran su patria y defendieran sus derechos." (I,47)
Se cierra esta reseña, destacando la preocupación del autor por la presencia de lo que
denomina " ... funesto espíritu del provincialismo." (I,300), al que asocia ,por supuesto, a la
disgregación nacional.
Es de notar que Austria no tiene mayor predilección por el vocablo nación. Cuando echa
mano de él, lo relaciona usualmente con España y los españoles. En esto hay una constante entre
los primeros historiadores venezolanos (Montenegro, Baralt, Yanes) .Pareciera que para ellos y ,
en este caso caso específico, para Austria, tal vocablo se asociaba con lo muy viejo, con los
estados europeos o con los primitivos pobladores de América a los que si se denominaba
"naciones". Utiliza más bien, términos como república, patria y país para referirse a Venezuela u
otro estado hispanoamericano. En este sentido, muchas veces en su texto menciona a "los
habitantes del país" ; las ideas de los patriotas para "la regeneración del país"; y esta última,
"... la ocupación del país por el insidioso Monteverde, causaron la destrucción de la República
(pero ello no destruyó) la causa de la independencia que era ya para aquel tiempo la gran causa
venezolano [además estimuló] el amor a la libertad y el odio a la tiranía [y] ... el heroísmo."
(II,11)
Para José de Austria, la acción depredadora de Monteverde sobre Venezuela, generó una
positiva respuesta por parte de los agraviados. Estos tomaron conciencia sobre quienes eran sus
enemigos y quienes sus libertadores. Debe recordarse que Monteverde reconquistó el poder para
la Corona española con muy escasos recursos externos, pues el grueso de sus tropas ,armas y
apoyo político-militar provino de la propia Venezuela. Sin embargo fue tan torpe y arbitrario en
su gestión que rápidamente se ganó la animadversión de muchos de los que lo habían ayudado en
La Patria.
da el autor es el de suelo natal ; algunas veces, en sentido amplio, es decir, como equivalente a
nación, Estado Nacional o país que vio nacer a quien llama ese territorio su patria. En otros
(a) Al fracasar en 1806, Miranda tuvo la "dolorosa convicción de que su patria aún no
estaba preparada para emprender la terrible lucha contra sus opresores" (I,73)
(b) Los comprometidos en la conspiración de 1810 estaban decididos "a salvar la patria o
(d) Sebastián Andrés, prisionero español liberado por la Junta Suprema en 1810, no
aceptó un nombramiento de ésta "por no tomar parte en un gobierno que marchaba contra los
Maracaibo ..." (I,146). En este caso, pudiera entenderse que se refiere a que vuelven a Caracas
(su patria); mas parece que , el verdadero sentido es hacer ver que regresan a la proto-república,
a la que ya se ve como una patria (estado) diferente a Coro-Maracaibo que personifican otra
(f) "Se restituyeron a su patria los expulsos Ribas y Gallegos por decreto del supremo
(g) "Quiera la divina Providencia llevar este bosquejo de nuestra gloriosa historia hasta el
retiro de las familias que han sobrevivido a los inauditos sacrificios que por su patria hicieron sus
padres, sus hermanos, hijos ,deudos y amigos. (y a pesar de todo, recuerden) que su historia
conducirá, sin duda, a la inmortalidad, y sea ésta la única recompensa de los cruentos sacrificios
que a su querida patria tributaron." (I,218-219)
(h) "Qué americano recorrerá la historia de su patria con fría indiferencia, con criminal
indolencia? .... (a pesar de todo lo hecho por el gobierno español) hoy imploramos
(i) Bolívar le escribió repetidas veces a Mariño para que "se decidiese a ayudarlo en la
gloriosa empresa de arrojar más allá de los mares a los opresores de la patria común ..." (II,217)
(j) "la madre patria" (...) "El Gobierno de España, de la que se llamó madre patria ..."
(II,64)
Un claro uso de la idea de patria en sentido restringido, es decir, como equivalente sólo a
Refiririéndose a Bolívar, dice que "nada era más fácil al héroe (coronado de laureles por
todos esos combates gloriosos) que continuar su rápida y triunfante marcha sin obstáculos ni
demora ,hasta la capital de Caracas,su patria y privilegiado objeto de sus fatigas ..." (II,56)
expresiones derivadas, especialmente todas aquellas cuyo componente básico son los vocablos
patriotismo y patriota.
En fin, la <<patria>> era la tierra nutricia, tanto la <<madre patria>> (España) ,la patria
en sentido restringido (Caracas para Bolívar, por ejemplo) o la patria en sentido muy amplio: una
república o una nación llamada Venezuela, Colombia o Hispanoamérica. Fuese con el alcance
que fuese, esta noción fue la más extendida entre los que lucharon por la libertad política, por la
emancipación.
La República.
Ya se dijo que Austria prefería siempre escribir en términos de República, para referirse a
Es así, que ,entre otros, se pueden conseguir estos casos: "el triunfo de las armas
republicana ..." (I,295) ; "... la caballería del Pao desertó de las banderas republicanas,
incorporándose con los realistas ..." (I,297); "le confirió la autoridad de Generalísimo de las
tropas y armada de la República..." (I,297) ; En 1812, "las mejores tropas que quedaban a la
La Independencia.
emancipación política nacional y libertad política; así como, con la de república emancipada y la
(a) "En el mismo día que fue sancionada la Independencia de Venezuela ,nombró el
Congreso una comisión ... para que presentasen un diseño de la bandera y escarapela del nuevo
(b) "... el Poder Ejecutivo hizo publicar la siguiente proclama: ! Caraqueños ilustres !
"Decretado estaba que los americanos ,en ningún tiempo ni circunstancia, podían tener
derechos ni ser considerados como miembros de una misma familia. Los españoles en España
resumían su soberanía ,creaban juntas que entre sí se disputaban el poder nacional, decretaban la
guerra y celebraban la paz ,según su situación y sus conveniencias ; a los americanos en América
nada les era permitido hacer .... lo que en los españoles se llamaba patriotismo, en los americanos
se llamaba rebelión; y un orden de cosas tan violento y tan absurdo ,preparaba a todas luces la
gran revolución americana, porque al fin la injusticia produce la independencia." (I,78)
(a) "Proclamaban la libertad los que más siervos tenían bajo el antiguo régimen.
Desprendimiento eminentemente patriótico, que hace más cabal el elogio de aquellos patricios
caraqueños." (I,92)
(b) En Valencia al ser retomada la ciudad , las familias ofrecieron su ayuda "...a los
(d) "Llegó ,por fin ,el día 19 de abril de 1810, aurora de gloria; también de inauditas
desgracias. En el gran libro del destino estaba escrita la libertad de la patria ....las cadenas
Se adivina que la libertad es entendida sólo en términos políticos, o sea , el goce de los
derechos políticos individuales de los ciudadanos de esas nacientes repúblicas que habían
proclamado su independencia de la tutela colonial española. Por ello, se destaca que los que
lucharon por la libertad (paradójicamente) fueron los que tenían mayor cantidad de "siervos"
desde los tiempos coloniales, esto es, los <<mantuanos>> blancos criollos grandes terratenientes-
esclavistas.
no fueron otros que los llamados patriotas ,republicanos o independientes; es decir ,los mismos
que pretendieron ganar "su" libertad pero sin alterar las bases de una sociedad donde acumulaban
la mayor parte de los privilegios, con excepción del ejercicio del poder político nacional. En
resumen, sólo aspiraban a disfrutar de su propia libertad como individuos y del derecho a
disponer libremente de la dirección de un nuevo Estado ,no sujeto ya a la tutela colonial de una
nación, a la que veían peligrosamente a la deriva en medio del caos geopolítico de las luchas por
Aspiraban a lo que Simón Bolívar llamó el derecho a ejercer <<la tiranía activa y
doméstica>> ,es decir, el derecho a ejercer el poder en los territorios que sus antepasados habían
conquistado y luego poblado para hacerse "señores" de tierras, de indios encomendados y negros
esclavos. En el fondo -- y durante tres siglos -- ese país había sido más "su país" que de los
advenedizos funcionarios enviados por la metrópolis española. Además, ese territorio era suyo
porque lo habían defendido de los ataques de los piratas enemigos de la madre patria, habían
administrado sus ciudades desde los cabildos y habían, en fin, explotado sus recursos mineros y
sus suelos para exportar riquezas hacia el mercado exterior ,casi siempre enfrentando
Seguir atados a España no sólo los privaba , como decíamos antes , de la posibilidad de
gobernarse a sí mismos. Lo más grave, los condenaba a seguir unidos al polo más atrasado de
Europa o en el mejor de los casos a caer , tarde o temprano , en manos de la primera potencia
continental, la Francia napoleónica, cuyo destino frente a Inglaterra ,que luchaba por completar
su hegemonía en los mares y el comercio mundial era, por decir lo menos, nada auspicioso.
propagaban hasta su más rica posesión caribeña (Haití) no eran las opciones que podían asegurar
un futuro próspero y seguro para las élites blancas de Hispanoamérica. No deseando cambiar una
tutela colonial española por la de unos nuevos amos, prefirieron luchar por la posibilidad de
erigir su propia república en "su país". República que los salvaguardara de los extremistas
jacobinos a la francesa o de la tutela política directa de una corona británica que no dejaba de
despertar las suspicacias incubadas en tres siglos de odio al hereje, al pirata y al contrabandista
expresiones significativas:
(b) "Desde aquella época de súbita regeneración no hubo ya treguas entre la libertad y la
tiranía; los patriotas empuñaron las armas para sostener la emancipación de Venezuela, y los
antiguos dominadores juraron una guerra de exterminio contra los naturales, sus propios hijos."
(I,173)
<<Los Realistas>>.
isleños , los catalanes, viscaínos y españoles en general, así como los venezolanos o
Consíguense estos ejemplos que incluyen también los nombres de los más tristemente
(a) "los realistas" ; "tropas realistas" ; "vándalos realistas" ; "la tiranía peninsular" ; "los
enemigos de la libertad" ; "las filas españolas" ; "los españoles" ; "la causa del Rey".
(b) Fue en San Juan de los Morros donde "... eternizaron sus execrables nombres
Antoñanzas, Boves y Zuazola y las crueldades inauditas que ejecutaron en los infelices vencidos
aquellos monstruos, publicaron su ferocidad y les asignaron la más negra página de la historia."
(I,320)
(d) Para 1813, "la ocupación de aquellos llanos por las hordas que disputaban su
(e) "Con qué carácter ,con qué colores retratará la posteridad a los Monteverde, a los
Antoñanzas, a los Boves, a los Morales, a los Yañez, a los Calzada, a los Zuazola, a los Puy, a
los Miyet, a los Rosete, a los Cervériz, a los Gabazos, y mil otros que brotaron las furias
infernales para descrédito de la raza humana, y para eterna deshonra de la época que vivieron?
Cómo podrá justificarse ante la historia, la Madre Patria ,ese Monarca, ese Gobierno que aprobó
Junto con esas acotaciones a los <<Realistas>> aparecen en el texto muy directos
Los españoles.
Sobre éstos, hace el escritor duras observaciones, considerando tanto los primeros que
actuaron en el nuevo mundo - los conquistadores - como los que gobernaron e hicieron la guerra
(a) "El soplo de la fatalidad arrojó sobre nuestras playas a los conquistadores ; a los
primeros pasos siguieron los crímenes y a los crímenes el abismo de las crueldades." (I,47)
sirve a este historiador para indicar el origen nacional de uno de los componentes del pueblo
venezolano y también uno de los bandos contendores. Muchas de esas referencias a los
"españoles" tienen una connotación meramente político-militar, pues consideran como ejércitos
españoles o jefes españoles a los que en realidad, en estricto sentido no lo eran; más bien ,eran
sirven para comprender cabalmente algunas características del pueblo venezolano así como de
los bandos que se enfrentaron durante esa cruenta guerra. Resulta extraño que siendo Austria un
historiador que escribe su obra dos décadas después de Montenegro y una después de Baralt y
Yanes tuviese esas posiciones tan anti-españolas, aspecto que ,como sabemos ,desaprobó
abiertamente el presidente Juan Pablo Rojas Paúl cuando declaraba instalada la Academia
destaca la cobardía, la crueldad, barbarie y rapacidad de los jefes y sus tropas. Sólo en contadas
oportunidades le reconoce valor, honradez, espíritu humanitario u otro rasgo positivo a éstos.
Ejemplos de comentarios favorables serían algunas notas positivas sobre las autoridades
españolas legales personificadas en caballeros como Cagigal y Ceballos. De los otros, a Boves le
Los Patriotas.
Según el autor, éstos representan a los que defendían la patria, la nación, el país, la
patriotas eran por supuestos hombres como Simón Bolívar. Se presentan ahora, los ejemplos de
rigor:
(a) Para 1810, "exasperados ya los ánimos, y resueltos los que desde entonces se
llamaron patriotas a dar un golpe de redención aun cuando les costase la vida." (I, 86)
(b) La noche anterior al 19 de abril de 1810, fue "encargado cada uno de citar en aquella
madrugada a todos los patriotas que pudiese, para que concurriesen muy temprano a la plaza
mayor a esperar ,cumplir y llevar a efecto los acuerdos del M.I. Ayuntamiento, centro de la
(c) "se regaron los campos con la preciosa sangre de ilustres patriotas" (I,91)
(d) "... los frecuentes conatos reaccionarios por los partidarios de la España, amenazaban
de continuo a los patriotas; y como del seno de las revoluciones sale por lo regular el azote de los
mismos revolucionarios .... se acordó [por la Junta] el arresto y expulsión a una isla extranjera,
del coronel José Félix Ribas [y de sus hermanos, acusados de pretender] dominar las
deliberaciones del próximo congreso. El coronel José Félix Ribas se encontraba en el pueblo de
Petare ; en su plaza estaba formado su batallón haciendo ejercicios doctrinales ,en cuyas filas se
encontraba el que escribe este bosquejo, cuando se le intimó su arresto ..." (I,146-147)
Tanto en las líneas que a continuación se citan como en muchas otras más, se identifica a
los que defendieron esa patria con su vida: "Desde entonces se inscribieron con su propia
sangre ,como beneméritos de la Patria, los nombres de los Toros, los Pontes, los Carabaños ,los
Burozes y de otros que la historia recordará." -- SIC : apellidos en plural, en el original ---
(I,217)
héroes y al heroísmo. Cada combate, cada campaña, cada asedio que se hacía o se sufría, la vida
(a) "Vamos a emprender ... la relación de los hechos heroicos de Venezuela ,que tanto
ennoblecen su nacionalidad ... [y se escribe esta historia con imparcialidad y pureza] tributándole
(c) "En los gloriosos campos de Junín y Ayacucho, que inmortalizaron los nombres de
Bolívar y Sucre, se leyó el supremo decreto del Altísimo, por el cual la América quedó
"Bien merecen grato recuerdo y justo homenaje nuestros desgraciados compatriotas, que se
lanzaron los primeros en la peligrosa senda de la libertad. Ellos plantaron aquel precioso árbol y
lo regaron con su propia sangre. (...) El resultado no coronó su heroica empresa en el año de
1797 ,pero fue, sin duda, sensible anuncio de otras tentativas y de un posterior y más heroico
sacudimiento. Se cumplieron al fin aquellas palabras que con ánimo sereno y corazón fuerte
pronunció España marchando al patíbulo: <<no pasará mucho tiempo sin que mis cenizas sean
honradas>> " (I,70-71)
gobierno de la Junta Suprema, organizó las ceremonias en la iglesia de Altagracia, la que fue
hermosamente decorada para esta ocasión. Se explica con todo detalle las características de cada
inscripción y alegoría, y también, se presentan todas las producciones literarias ofrecidas para
esta ceremonia por Francisco Isnardi, Ramón García de Sena, Vicente Salias, Pedro Vicente
Rolichón y otros.
"Apenas la Sociedad Patriótica de esta ciudad tuvo la noticia de la muerte gloriosa de uno de
sus miembros, el ciudadano capitán Lorenzo Buroz, y de que se hallaban heridos algunos otros
individuos que componen esta corporación, se apresuró a formar una suscripción para hacer los
honores fúnebres a estos ilustres ciudadanos y demás militares muertos en la reducción de
Valencia. Fue destinado el 2 de septiembre para esta función cívica; el acto fue solemne y
majestuoso; era un espectáculo verdaderamente imponente .... un monumento fúnebre, erigido ....
en el cual se veían figurados varios símbolos alusivos al valor patriótico ..." (I,220) .
y los discursos patrióticos en honor de los héroes. Véase una muestra: (I,220-221)
por decreto de Simón Bolívar, el 22-10-1813. El primer condecorado con ella fue el general
de los Lara, los Montilla, Aldao, García de Sena, Blanco y otros próceres que vieron nacer a la
Confiaron al capitán Antonio Ricaurte la defensa del parque y del hospital en una altura
que dominaba la hacienda. La fuerzas defensoras de San Mateo eran unos dos mil hombres
" empero acompañaban al Libertador ,un Lino de Clemente, un Martín Tovar, experimentado ya
en los combates como en otros destinos cívicos, siempre valiente y honrado; los dos Montilla,
tan inteligentes como valerosos ; el intrépido Campo Elías ; el imbatible Villapol ; José
Leandro Palacios, modesto pero arrojado; Gogorza, vencedor en Ospino ; Pedro León Torres,
impávido ante el peligro; Masa y Ricaurte, de los más valientes granadinos, orlados ya con los
laureles obtenidos por un Girardot y un Delúyar; y otros guerreros experimentados en mil
combates, orgullosos todos de ser mandados inmediatamente por Bolívar". (II,205)
Ya se había combatido por muchos días, cuando las fuerzas de Boves atacaron en todos
los frentes el 25 de marzo. Fue entonces, cuando "el héroe granadino, capitán Antonio Ricaurte,
que veía descolgarse de la serranía numerosas fuerzas sobre la casa, cuya defensa se le había
confiado, y las cuales lo rendirían al fin, fue iluminado por el fuego sagrado de la libertad, y
recordando los tiempos heroicos de las antiguas repúblicas ,de cuyo estudio era entusiasta, dio
fuego a los pertrechos y junto con parte del edificio y los enemigos que ya lo ocupaban, voló
para eternizar su nombre y poner glorioso término al desesperado combate de aquel día, que
honrará siempre los fastos de la República." (II,213)
“Sobre cuarenta días duró la heroica defensa de San Mateo , dirigida por el inmortal Bolívar,
y es allí donde existe un depósito sagrado que debiera salvarse de las injurias del tiempo y del
olvido de la posteridad: allí reposan los restos de Villapol ,Campo Elías, Quintero, Picón, ,
Soublette y mil otros cuyos nombres debieran eternizarse." (II,213-214)
(k) "No se puede hacer un elogio cabal de la conducta y heroísmo de los jefes, oficiales y
tropa que defendieron a Valencia. ¿ Quién podrá negarles la inmarcesible gloria de que se
cubrieron ? ¿ Quién pudiera hacerlos aparecer ante la posteridad, la noche del 2 de abril de
1814, desfallecidos y postrados al pie de las armas con que tan valientemente habían defendido
la causa de la libertad ? A la vista de tan sublime e imponente espectáculo, ella apreciaría
justamente esta heroica conducta y demandaría para tan indomables e ilustres guerreros, la eterna
gratitud de la patria que defendieron." (II,221)
(l) "En aquella época en que ,a la faz del mundo, Venezuela levantaba sus monumentos
conducía el nombre de Bolívar por la senda del templo de la inmortalidad", el poder legislativo
del Estado de Cartagena acordó, cuando todavía se peleaba en San Mateo el 15-3-1814, declarar
al general Simón Bolívar <<hijo benemérito de la patria>> y colocar su nombre en letras de oro
La gran cantidad de ejemplos que se pueden citar sobre la temática heroica nos da una
idea de la amplitud de su presencia a todo lo largo del Bosquejo ... de Austria. El exaltado elogio
a cada acción mi litar comprometida convierte la narración en una especie de canto homérico.
Los combates , victoriosos o no, los terribles sitios o asedios donde los republicanos pelearon
sobre montones de cadáveres, la reseña de los homenajes a los mártires a través de sus honras
fúnebres y los cantos a la gloria de los guerreros ; todo ello, es recordado para que la posteridad
nunca olvide a esos que conquistaron con su sangre y su ejemplo la libertad de la nueva
república.
*******************
antigüedad clásica -- lo que el mismo llama "tiempos heroicos de las antiguas repúblicas". Se
consiguen, desde las típicas expresiones de la narrativa histórica de Heródoto, tal como esa de
<<irse a las manos >> los ejércitos que se lanzaban al campo de batalla, hasta las referencias a
los héroes y al ceremonial del pasado grecorromano. Esos retratos de las hazañas de los héroes
nacionales parecían tener su inspiración en los textos de Tácito, Suetonio, Plutarco y Tito Livio.
revolución. Por supuesto que también ya se venía cultivando para entonces la nueva tradición
"neoclásica" que los revolucionarios franceses habían popularizado entre los escritores.
Si se hiciera una comparación entre dos grupos de escritores, formado el primero por
formado por Juan Vicente González, Felipe Larrazábal y Eduardo Blanco (románticos) ; El
discurso histórico de José de Austria representaría una especie de transición entre ellos.
Incorporó a sus predecesores como fuentes pero construyó un discurso con un lenguaje más
moderno. Por otra parte, considerando el enfoque ideológico y el lenguaje del grupo posterior,
historiográfica con trazos de "modernidad" pero que no se separaba del todo del viejo tronco de
la tradición.
NOTAS (Capítulo III, Sección 1.4)
2 vols
identifica a c/u de los volúmenes de la obra, seguido del número o números arábigos de las
páginas citadas.
1.5 Juan Vicente González, análisis ideológico de su obra fundamental: La Idea de
Pueblo, Nación y Patria. Patriotas y Realistas. Los Héroes y lo Heroico: Un Examen de estas
La Idea de Pueblo.
En la obra comentada puede observarse que el autor utiliza la palabra <<pueblo>> con
considerarse el contexto para precisar si usa este término en el sentido de centro poblado;
población, masa general o ciudadanía; populacho, plebe u otro vocablo equivalente a grupo de
gente inferior.
Veamos un ejemplo del primer caso: Cuando los realistas lograron "...entrar a este pueblo
"La municipalidad de Caracas se reúne a la primera noticia, y entre los víctores del pueblo
entusiasmado, manda a erigir una estatua que lleve a la posteridad la memoria del glorioso día.
Ribas le contesta , lleno de fe religiosa y de una modestia antigua." (p.92)
(b) "El historiador tiene que trazar aquí dos cuadros paralelos ,igualmente grandes y
patéticos, pero triste el uno y sombrío, heroico el otro y de desesperados esfuerzos. Al lado de las
batallas tiene que contar la postración moral de todo un pueblo; al lado del ardor frenético que
mil peligros inspiran, la desconfianza ,el desaliento, el dolor que cunde y se dilata."(p.93)
(a) "Creía el pueblo que estaba la justicia donde estaba la abundancia, y corrió en
bandadas a aumentar el ejército realista. Aun tenía otras razones que debemos considerar :la
revolución debió parecer en ocasiones una secta de audaces pensadores ;la servían las
inteligencias más distinguidas ,los personajes más notables .Y luego formaban su base y la
dirigían, los que, bajo el nombre de mantuanos ,representaban la jerarquía, la propiedad y la
opinión. Dueños de de grandes propiedades en la extensión de la república, su autoridad pesaba a
lo lejos, la de los más célebres sobre todo, como la de Bolívar y Ribas. El mando político de los
que eran sus señores naturales no era para el pueblo la libertad, sino una argolla más ,añadida a la
cadena. La oposición parecía entonces la Independencia, y constituyó una bandera, de libertad
negativa, que se unió a las banderas realistas." (p.106)
(b) "Por lo que hemos dicho se colegirá la oposición que debió haber entre la patria de
esos tiempos y el pueblo, y se sabía de donde provino una parte del odio contra la revolución y el
furor con que se cebaban en los prisioneros de familias distinguidas. (los Briceño, Tovar, Ribas,
Toro, Silva, Herrera, Ibarra, Escalona, Ustariz) pp.107-108
(c) " imputan a los curas el realismo del pueblo algunos historiadores superficiales,
olvidando que si el alto clero permaneció adicto al rey , los curas fueron en su mayor parte
amigos decididos de la patria . .. " (p.109) -- subrayado nuestro --
Sobre estos ejemplos de la tercera acepción vale la pena hacer este comentario. González
-- a pesar de ser un reputado conservador -- comprendió con gran lucidez algo que sólo en
épocas posteriores se planteó abiertamente; esto es, la estrecha relación entre aquellas
papel jugado por los <<mantuanos>> : la gente notable y distinguida, los detentadores de la gran
propiedad, los personajes de jerarquía y opinión (poseedores de tierras y esclavos ,así como de
revolución de independencia, exterminaba con odio a las familias distinguidas del país y veía con
horror que sus señores naturales, revestidos ahora de poder político, le agregaban una argolla
En una dirección similar se inscribió su calificación de José Tomás Boves como el primer
jefe de la democracia venezolana. Sin duda, que tal señalamiento tenía que ver
fundamentalmente con ese proceso de anarquía popular desatado en los llanos venezolanos por
(a) "Los negros de Barlovento, capitaneados por Juan José Navarro ,alzan el grito de
guerra bárbaro <<Viva Fernando VII>>. Apenas se habían reunido 150 de ellos, cuando corre a
atacarlos al frente de 500 hombres el coronel Arismendi." (p.94)
(b) "Ninguna piedad, ninguna misericordia de parte de los negros, hechos crueles en el
embrutecimiento de la esclavitud. Ruinas lamentables marcaban sus pasos: las riquezas que
había creado, su cólera la destruyó entre transportes de alegría salvaje. Por todas partes la
desolación, el terror, el incendio, la muerte." (p.95)
Al igual que los juicios emitidos sobre la masa plebeya, éstos recogen la animadversión
hacia los negros alzados. De manera similar, aparece la profunda desaprobación de tales actos a
En general, en la obra analizada ,no se observa mayor interés sobre los llamados
<<indios>> .Seguramente ello obedeció a que éstos no tuvieron mayor presencia en los procesos
político-militares donde participó José Félix Ribas, héroe o figura central del discurso de
González. Distinto fue el caso de otros trabajos de carácter más general que necesariamente
tuvieron que abordar -- ampliamente -- la participación de los diferentes segmentos del pueblo
La Nación.
Ese pueblo que se lanzó a la guerra formaba una <<nación>>, sin duda hija de otra más
(a) "Es preciso que demos también en esta tragedia ,su parte ,no corta ,a la sangre
española ,que hervía en las venas. Realistas y republicanos, todos pertenecían a esa nación
caballeresca y valiente ,pero obstinada y cruel endurecida en doce siglos de combates ..." (p.67)
(b) "españoles y criollos habían constituido hasta allí una misma nación :los que seguían
una bandera eran hermanos, deudos de los que seguían la bandera contraria. De pronto es
preciso, no separarse con prudencia y lentamente sino romper con violencia ,desgarrar antiguas
ligaduras, convertirse en delator o verdugo ,conspirar contra el que fue su compañero y alzar
sobre su pecho el puñal homicida. La madre ,junto al esposo oculto, lloraba la ingratitud del
hijo ,que murmuraba canciones patrióticas ,y respiraba en el hogar el aire de la plaza pública: tal
vez lloraba a un hijo muerto, o le seguía con el corazón por los peligros de la campaña. En las
horas tranquilas de las noches, alrededor de la mesa doméstica ,los hermanos divididos y
enconados ,se lanzaban miradas furtivas ,llenas de rabia, se provocaban a veces, rompían en
insultos, sin respeto a las canas de sus ancianos padres, que se afligían y lloraban. De cuando en
cuando, frenética por el dolor , una viuda sombría , cerraba las puertas a su hijo, y Vicente
Linares llamaba en vano ,largo tiempo , a su inflexible madre.
Contribuía a exacerbar los espíritus la pálida hambre que extendía sus dedos lívidos sobre
todas las familias: los llanos estaban cerrados; cruzaban el Tuy feroces facciones; Aragua era
teatro de la guerra ..." (p.79) -- subrayado nuestro ---
Dos aspectos fundamentales están presentes en estos textos citados. Primeramente, esa
apreciación de la profunda relación entre las categorías de pueblo y nación. En segundo término,
el retrato del drama de la profunda escisión de un pueblo o nación unida hasta entonces.
Lógicamente, tal escisión fue muy dolorosa para aquellas familias de la élite colonial, que
resultaron enfrentados con sus más cercanos familiares y amigos. Tal ruptura, tal vez no fue
igualmente dolorosa para aquellos que siempre habían estado segregados de los afectos e
intereses de la cúpula social, nos referimos -- por supuesto -- a esa vasta masa de blancos de
La Independencia, la revolución.
vocablo revolución.
" !Oh días que no se olvidarán nunca ! ! Oh revolución ! ! Oh república! " (p.51)
Para un historiador conservador como González, la independencia fue algo más que un
proceso lógico de emancipación política que traía la libertad a un nuevo estado. Ella representaba
más bien, un traumático proceso revolucionario que conmovía todas las estructuras de la
sociedad tradicional. Tal revolución republicana pareciera verla como algo terrible por sus
consecuencias sangrientas.
En otra parte de su dolida escritura ,dice aterrado, "las revoluciones son Minotauros que
devoran rápidamente los partidos y los hombres ; y ya había años ,siglos para los pueblos , que
Y también, muchas veces, al relatar los pormenores del desarrollo de la guerra llama a
Caracas, el foco de la revolución. No queda duda, que para el escritor, la lucha por la
independencia llevada a cabo por los patriotas o republicanos no era otra cosa que una terrible
revolución, un cambio profundo que alteraba aquella paz colonial a la vera de la cual habían
prosperado las grandes familias mantuanas, principales víctimas del torbellino social y político-
militar desatado.
para denominar a los que defendían la patria (lar nativo) ,la república o la revolución de
independencia.
Al referirse a "los patriotas", "el gobierno patriota", "el jefe republicano" ,"el gobierno
tenor; no nos cabe la menor duda sobre quién o quiénes habla el autor.
De igual manera, González no deja nada en la oscuridad cuando nombra a los que
defendieron la causa de la corona española. Casi siempre los llama <<españoles >> o
simplemente <<realistas>> , y es así que se refiere al ejército realista y a las guerrillas realistas,
pero también los menciona evidentemente cuando nos habla del "realismo invisible" del pueblo
venezolano; del "catalán Puig" ; del "isleño Rosete" ; de "una columna de corianos"
acompañando a un jefe realista. Asimismo, los llama "los enemigos" , "hordas enemigas", las
En fin, los patriotas o republicanos eran los que luchaban por la libertad, es decir, los que
en los ejércitos, el gobierno, las reuniones políticas asumían la defensa de la patria amenazada
Dentro de la narración sobre las acciones de los patriotas y los realistas, aparece siempre,
por parte de Juan Vicente González, algún comentario sobre el carácter heroico de la lucha y el
amor patrio.
(b) "En medio de los esfuerzos más gloriosos , ante los prodigios de Valencia defendida
por el invencible Escalona, la patria se ahogaba en la sangre de la guerra a muerte, sin que el
valor fuese parte a evitarlo. Repetidos triunfos, cantos de victoria, el sacrificio de Ricaurte, igual
al de Curcio y Decio, la muerte de mil héroes gloriosos ; la República languidecía, expiraba !!!"
(p.98)
(d) "el 30 de marzo, después de treinta y dos choques sangrientos ,Boves había levantado
el sitio de San Mateo. Sabía la aproximación del ejército oriental ; y se cuenta además que el
sacrificio heroico de Ricaurte le había llenado de admiración y asombro : el valiente granadino
había salvado a Bolívar" (p.137)
(e) "Nosotros hemos deseado visitar ,con religioso respeto, el campo de Carabobo ,campo
de victoria; y el sitio de La Puerta, desnudo, desierto, donde no se ve ni una tumba levantada a
los muertos ,ni una piedra funeraria. Perecieron allí Antonio Muñoz Tébar, García de Sena y mil
otros que eran la esperanza de la patria." (p,130)
éste estaba lleno de fe religiosa y de una "modestia antigua" ,de igual manera ,al dar testimonio
de la acción de Ricaurte en San Mateo rememora a los guerreros de la antigua Roma: Curcio y
Decio. Pero no solamente deja testimonio de las hazañas de los heroicos luchadores de la
culto a esos mártires de la patria. Para ello, solicita la erección de monumentos -- como piedras
funerarias o túmulos -- que honrasen la memoria de los caídos en esa gesta. El eco de las obras
de Tito Livio, Tácito, Plutarco, Suetonio y otros autores clásicos queda plasmado en su
***********************************
histórico-sociológica sobre el papel jugado por los <<mantuanos>> que formaron la vanguardia
del movimiento independentista; mientras que <<el pueblo>> enfrentaba con odio la revolución
y a las familias distinguidas del país ,cuyos representantes eran sus señores naturales, revestidos
ahora de poder político. Fue por ello que el pueblo temió le agregaran una argolla más a las
Junto con las negativas expresiones referidas al pueblo como masa plebeya, se consiguen
otras sobre los negros, especialmente los negros alzados, ello ,a luz de la moralidad tradicional
El autor apreció una profunda relación entre las categorías de pueblo y nación. Ese
pueblo que se lanzó a la guerra formaba una <<nación>>, sin duda hija de otra más antigua, la
española. González retrató del drama de la profunda escisión de un pueblo o nación unida hasta
entonces.
vocablo revolución e identifica los bandos en conflicto de aquella <<Guerra a Muerte>> con los
En fin, los patriotas o republicanos eran los que luchaban por la libertad, es decir, los que
en los ejércitos, el gobierno, las reuniones políticas asumían la defensa de la patria amenazada
Dentro de la narración sobre las acciones de los patriotas y los realistas, aparece siempre,
por parte de Juan Vicente González, algún comentario sobre el carácter heroico de la lucha y el
(1) Juan Vicente González: Biografía de José Félix Ribas. Caracas, <<Revista
Literaria>>, 1865
Entre las numerosas reediciones está la realizada por Rufino Blanco Fombona en Madrid
en 1918, quien le agregó notas y comentarios críticos en su prólogo. Fue esa edición la que
publicó el Ministerio de Educación Nacional de Venezuela en 1946 y sucesivos editores
posteriores. Véase, <<Biografía de José Félix Ribas>> en La Doctrina Conservadora - Juan
Vicente González. (Pensamiento Político Venezolano del Siglo XIX - Textos para su
Estudio) .Caracas, Congreso de la República, 1983
Vol.2, tomo I
n.a. Todos los textos citados y de los cuales sólo se indica (entre paréntesis) el respectivo
número de la o las páginas, provienen de la indicada Biografía ... en su edición de 1946.
(3) J.V. González: Op.cit. (para esta cita y todas las siguientes)
1.6. Felipe Larrazábal :Análisis Ideológico de su Obra. La Idea de Pueblo, de Nación y
La Idea de Pueblo.
primera ,y la más elemental de ellas, es la "pueblo" como sinónimo de centro poblado, villa,
lugar habitado o población. Ejemplos de este uso los hay innumerables a lo largo de la obra (2) ,
pero a título de muestra se pueden citar los siguientes: (a) Durante la primera república, 1812,
"los españoles en el pueblo de Siquisique" (I,122) ; (b) "a muchos pueblos de la cordillera"
(I,124) ; (c) El realista Tizcar se retiró de Nutrias en 1813, "después de haber saqueado al pueblo
y cometido los más violentos excesos." (I,187) ; (d) Bolívar ,en 1813, ofrece perdón a una
comisión de paz que vino de Caracas, "bajo la condición de que se le entregaran pacíficamente la
"Nuestras fuerzas ,en tanto, se aproximaban más al pueblo, y reconociendo que el enemigo no lo
ocupaba ..." (I, 225) ; (f) En San Mateo, 1814, "las calles del pueblo y los caminos quedaron
empapados literalmente en sangre" (I, 267) ; (g) Rafael Urdaneta, escribe a Bolívar en 1814
diciéndole "que no debía contar con ningún pueblo del Occidente, pues que casi todos eran
enemigos de la independencia" (I,271) ; (h) Durante las negociaciones del armisticio de 1820,
designaron como sitio de la reunión "el pueblo de Santa Ana" . Los anfitriones realistas
ofrecieron una comida con "lo mejor que se pudo en aquel pueblo" (II,227).
Presentadas todas esas muestras que evidencian la utilización del vocablo en el sentido de
pequeña comunidad urbana, se examinarán de la misma manera las que se consiguen refiriéndose
al "pueblo" como ciudadanía, grupo de vecinos o como masa pero no en sentido peyorativo.
Pueden mencionarse , entre otras : (a) "el pueblo americano dio ejemplos" (I,77) ; (b) " la
América española ... volvió la vista al pueblo amigo de la libertad -- Inglaterra -- (I,95) ; (c) En
Caracas, 1810, "Miranda fue muy bien recibido por el pueblo (I,102) ; (d) Ofreció el Congreso
de 1811 "una hermosa alocución dirigida a los pueblos de Venezuela" (I,119) ; (e) Se apeló "a
la asustada conciencia de los pueblos" (I,125) ; (f) Monteverde con su perfidia en 1812,
"queriendo fundar en la voluntad de los pueblos" (I,154) ; (g) Apelando Bolívar en 1812 al
"generoso pueblo cartagenero" (I,155) ; (h) Percibía Bolívar a "los pueblos a los cuales su
espada debía dar independencia , las naciones que había que crear?" (I,169) ; (i) En 1813,
publicó Antonio Nicolás Briceño, unas proposiciones "a nombre de los pueblos de Venezuela ..."
(I,173) ; (j) "y como hablaba (Bolívar, 1813) a los pueblos por la primera vez, tuvo que decirles
quien era y que intentos le movían."(I,175) ; (k) Mérida, 1813, recibimiento de Bolívar, "el
pueblo merideño le recibió con demostraciones de amor ...."(I,176) ; (l) En la campaña de 1813
debíase "hacer comprender a los pueblos que debían correr a las armas para expulsar a los
tiranos." (I,176); (m) Igualmente, para 1813, fueron importantes "las aclamaciones con que los
pueblos recibían a Bolívar" (I,190) ; (n) Bolívar entró a Caracas el año de 1813, "en medio de un
concurso de más de 30.000 almas, recibiendo los homenajes de todo un pueblo que acababa de
liberar ..." (I,196) ; (ñ) Para entonces, recibe el título de Libertador, en una reunión en Caracas de
las autoridades, notables, "y un pueblo inmenso, (que) aclamaron , por voz unánime, al general
Simón Bolívar ...." (I,219) ; (o) "El Libertador anunció a los pueblos de Venezuela el triunfo de
Araure ..." (I,228) ; (p) "como se empieza a ver, (Bolívar) no tenía que luchar sólo con los
ejércitos españoles, ni contra las poblaciones venezolanas, que se levantaban por el rey ..."
(I,238) ; (q) A comienzos de 1814, "Bolívar rinde cuentas al pueblo (en una) asamblea popular
cual jamás se vio antes en Venezuela (y en ella estuvieron) todos los magistrados, corporaciones
y vecinos en general (el gobernador) presidía una Asamblea esencialmente popular, (ante ella,
Bolívar ofreció) su homenaje y sumisión a la soberanía del pueblo" (I, 241) ; (r) Para entonces,
hubo un pronunciamiento "a nombre de todo el pueblo venezolano" (I, 249) ; (s) En 1815,
Morillo, "dirigió a los pueblos de Venezuela, una proclama..." (I,323) ; (t) El rico comerciante
Southerland en 1816 "amante de la libertad de los pueblos" (II,18) ; (u) En Carúpano,1816 , "se
reunió una asamblea popular ..." (II,29) ; (v) En 1819, Bolívar le "habló a los pueblos
granadinos..." (II,161,162,170,171); (w) A propósito del armisticio de 1820, Bolívar "conocía
que los pueblos ,cansados de la guerra, le agradecerían el haberla suspendido ..." (II,233)
Apartando esa muy tradicional acepción de "pueblo" que antes mostramos, puede
observarse que los enunciados citados algunas veces se refieren a <<los pueblos>> y en otras al
<<pueblo>> . En el primer caso puede suponerse que el autor alude en términos tradicionales a
libertad de los pueblos" , etc. Esos "pueblos" representaban a una masa de pobladores de algún
área, vecinos o habitantes en general vistos en términos concretos. No hay en tales referencias
introduce una visión moderna o más avanzada que esas expresiones tipo "antiguo régimen". Esa
construcción de la nación.
significado de "pueblo". Es evidente que en los ejemplos siguientes se entiende "pueblo" como
sinónimo de masa popular, población de gente de clase inferior, plebe, turba, populacho
ignorante.
Veamos algunas de estas expresiones como muestra significativa: (a) Los pueblos de
Aranjuez y de Madrid se reunieron en tropel (I,75) ; (b) Refiriéndose a Godoy, en 1808, "el
pueblo contestaba a todo : muera el favorito" (I,75) ; (c) Entonces estaba la muchedumbre
desbandada y presente el tumulto popular. Murat, hizo asesinar traidoramente al pueblo. (I,76) ;
(d) Para 1808, "el movimiento popular de Caracas" (I,79) ; (e) Para entonces -- el 19 de abril de
1810 -- "el pueblo se arremolinó" (I,90) ; (f) Emparan "ocurrió al pueblo [y] preguntó a la
muchedumbre [no obstante] muy advertido era [el Padre Cortés de] Madariaga para librar el
resultado de aquel arduo asunto a la imprevisión o mudable voluntad del pueblo ; y quedándose
un poco atrás de Emparan, hizo señas que no. Varios de los comprometidos gritaron entonces :
No, no lo queremos, no lo queremos, palabras que repitió el pueblo con clamor más
expresivo ..." (I,91) ; (g) "Cedeño, Bermúdez, Monagas, Zaraza :Caudillos que salían de la
honrada clase del pueblo" (I,292) ; (i) Simón Bolívar, no apoyaba el sistema federal por
considerarlo inadecuado "en pueblos ignorantes ,sin prácticas de vida pública, sin hábito de
intervención en los negocios del estado ..." (I,118) ; (j) En los llanos de Calabozo, 1813, "los
pueblos que habían recibido a los patriotas como a sus libertadores se volvían ya contra ellos; un
sermón del cura menos inteligente bastaba para hacer cambiar la opinión." (I,218) ; (k) La
prédica religiosa, "todo esto ofuscaba la razón de los ignorantes y lanzaba pueblos enteros a
pelear contra sus hermanos y sostener a sus opresores." (I,218) ; (l) Hacia 1813, aquello era un
trabajo como el de Sísifo, pues "nuestros pueblos ofrecían por desgracia un ejemplo de estolidez
y aberración singular en los fastos del mundo civilizado ..." (I,230) ; (m) Durante un motín en
1816 "lanzaron al pueblo de Güiria contra Bolívar." (II,35); (n) Para 1818, teníamos "pueblos
sin iniciativa y sin patriotismo, que no sabían lo que era independencia. (....) un pueblo sumido
en la ignorancia más deplorable, que nada conocía ,ni siquiera las primeras nociones de política y
de derecho individual (...) un pueblo que no leía porque la instrucción estaba entrabada por la
censura y por la inquisición ...." (II, 89-90) ; (ñ) Igualmente, para 1818, "Cuando se dijo
independencia , la masa del pueblo no comprendía lo que se decía ..." (II,91) ; (o) Bolívar en
1818, "no se imaginó que había que empezar por crear un pueblo y transformar aquellas turbas
en sociedades inteligentes, capaces de la vida política activa (no obstante) logró Bolívar divorciar
ciudadano, la libertad de todos y de cada uno. (...) Y con esto constituir el poder nacional ! Y
vencer los ejércitos contrarios ! Y emancipar medio mundo ! Y fundar la república como
institución ! Y dejar ,al morir, una familia de pueblos ! " (II, 92) ; (p) Hacia 1818, "la lucha de
Bolívar no fue sólo con la España; fue también ,al principio, con la indiferencia de las masas, y
luego y siempre, con el orgullo de los caudillos, con la anarquía ..." (II,102)
Igual que en el caso de los otros autores considerados, es esta la acepción que presenta
más interesantes aspectos. Primeramente debe destacarse que se asocia al pueblo con la gente
común, simple, ignorante, manipulable, levantisca, turbulenta, desordenada, etc. Se llega incluso
Las citadas expresiones reafirman esa tradicional apreciación de las élites que han visto
con recelo a lo que eufemísticamente denominan <<el pueblo>> .Eso para no denominarlo con
expresiones que sonaban (y suenan) poco democráticas (populacho, plebe, turbas) apelan a ese
equívoco vocablo.
prejuicios propios de la cúpula social de la Venezuela del siglo XIX. Aunque, por supuesto,
Para cerrar esta parte dedicada a la idea de <<pueblo>> presente en la obra biográfica
estudiada, transcribimos el duro juicio que emite el escritor sobre la población venezolana.
Pudiera afirmarse que él resume muy bien la opinión de la intelectualidad patricia venezolana
sobre cuáles eran las virtudes ,vicios y defectos del "pueblo"; y cuáles los de la "parte sensata de
Venezuela" -- es decir -- la élite. La revisión de los planteamientos de Simón Bolívar (en especial
los del <<Discurso de Angostura>> , 15-2-1819) ofrece una pista sobre la procedencia de tales
ideas.
Señalaba Larrazábal que “la parte sensata de Venezuela ,la rica, la ilustrada ,quería la
independencia y hacía sacrificios por la libertad; pero el pueblo, no. (....) Los ejércitos de
Boves ,de Yañez, de Morales, de Ceballos, de Rosete, de Antoñanzas, de Lizón y de todos los
más rudos enemigos de la libertad, eran americanos. Incapaces las poblaciones de ideas
generales ; aprisionadas por la ignorancia en el horizonte más estrecho, inmovilizadas en la
obediencia sin examen, que bastaba a su vida material, no comprendían sus derechos más
preciosos ni amaban la libertad, y faltaba en el país el soplo vital, esto es ,la identidad de
intereses, la comunidad de ideas, la fusión de los pueblos..." (I,224) - subrayado nuestro -
relacionadas con los que llamaríamos grupos, segmentos o partes del pueblo. Entre las que
pueden traerse a colación está el del posible enfrentamiento étnico-social a raíz de la crisis
provocada por el general Manuel Carlos Piar en Guayana, 1817. Dice Larrazábal, a propósito del
célebre jefe patriota, que éste "revivía en el ejército la rivalidad de colores, concitando el odio
inextinguible entre las razas ( y que también) escribió a varios jefes pardos, induciéndoles a
éste odiaba, todo conforme al plan atroz que había concebido." (II,73-74)
<<Los Negros>> .
Sobre los negros, parte importante de ese pueblo, debe decirse que sólo son mencionados
cuando algún documento del Libertador hace referencias a ellos, como es el caso de las
del Discurso de Angostura de 1819, etc. Una mención a la actitud levantisca de éstos lo
representa la noticia sobre "las esclavitudes de Curiepe, ..." y otros puntos de Barlovento
amenazando a Caracas.
<<Los Indios>> .
En el caso de los "Indios" ,la situación es parecida o peor. No se presenta a este segmento
1817, se plantea allí: "los indios, que odiaban a muerte a aquellos padres, apoyaron el partido de
Tal aseveración ,que fue planteada por diferentes autores venezolanos de la época, parece
que tenía alguna sustentación documental en los testimonios de los jefes patriotas que tomaron y
luego administraron las misiones del Caroní en 1817. Tales testimonios estuvieron asociados a la
polémica surgida a raíz del asesinato de un grupo de los curas misioneros que habían sido
republicanos acusándolos del crimen, y tratando de hacer responsable de éste a Simón Bolívar, la
versión contraria siempre fue que la muerte de los Padres misioneros fue obra de un
malentendido y de los odios de los aborígenes hacia dichos religiosos; quienes venían
controlando totalmente sus vidas (las de los indios) en lo económico, social, político y espiritual.
<<Los Llaneros>> .
popular diferenciado. Observemos estas referencias: (a) Para 1813-1814, "quedaba Boves dueño
de Calabozo ,próximo a caer con sus llaneros, como un torrente sobre Aragua y Caracas." (I,236)
; (b) Boves en 1814, "haciendo gala de sus enormes masas de llaneros a caballo" (I,255) ; (c)
Tropas de Boves, 1814, "la indisciplinada osadía de los llaneros" (d) San Mateo, 1814, "más de
Al analizar las acciones de los patriotas ,especialmente en el caso de José Antonio Páez,
se hacen muchas referencias al valor heroico, bravura, audacia; pero también, a la indisciplina de
La Idea de Nación.
términos tradicionales cuando dice: "el fuego de la insurrección corría por todo el cuerpo de la
nación ibera". (I,76) y pareciera que expresa la idea de "nación" como <<estado nacional>>
cuando se refiere a la nación venezolana. En otras oportunidades el autor deja ver su peculiar
visión conceptual sobre la relación entre las categorías de "nación" y pueblo . Ello se evidencia
cuando afirma que en 1819 Bolívar "quería formar una nación de los pueblos de Nueva Granada
y Venezuela..." (II,131) .De la misma manera, cuando afirma - a propósito de la acción del
Libertador en Nueva Granada, 1819 -- que fue "la expresión unánime de aquellos pueblos por su
de Colombia, 17-12- 1819, dice que "aquel acto de política que unió tantos pueblos en una sola
(un Estado) que posibilita estructurar a esas comunidades humanas con intereses políticos
comunes.
A lo largo de la obra de Larrazábal abundan los señalamientos sobre el "país" más que
sobre el vocablo "nación". Como puede constatarse con los ejemplos, muchas veces se usan los
La idea de país se consigue ,en algunos casos, asociada a la idea de región específica (los
Venezuela, Nueva Granada. En este último sentido, país y nación se usan indistintamente para
dar la idea de una comunidad política mayor. Veamos algunos ejemplos tomados de la obra. (a)
"la humillación de la gente del país" (I,147) ; (b) "el país había hecho una sublevación general
en favor del rey" (I,223) ; (c) Para 1813, "cuál era la situación del país?" (I,230) ; (d) Hacia 1814,
"la opinión de la mayoría pensadora del país (...) el país recordaba con horror ..." (I,247) ; (e) En
1814, "el país estaba infestado (literalmente) de guerrillas realistas" (I,254) ; (f) Por imprudencia,
Mariño en El Tinaco, 1814, avanzó "sin considerar que el país era enemigo" (I,274) ; (g) "Boves
era un caudillo formidable, tan valiente como activo y emprendedor; y el país lo acompañaba,
exterminar a los patriotas blancos ,es decir , la más ilustrada y mejor parte de la nación, la que
subrayado nuestro --
(h) Los realistas en Caracas, 1814, "asolaron aquellos inicuos jueces el país, cebándose, como de
ordinario lo hacen el vulgo y la tiranía ,en lo mejor y más notable."(I,288) - - subrayado nuestro
-- ; (i) Después que desconocieron a Bolívar en 1816, "Era evidente que faltaba un centro de
actividad y de inteligencia en el país." (II,41) ; (j) Arismendi llevó 400 soldados a Barcelona en
1817, a pesar de ser "los insulares margariteños ,renuentes de ordinario a salir de su país." (II,47)
que prescindiendo del estado de guerra en el que el país se hallaba ..." (II,62) ; (l) En 1820, ello
Nótese que sólo en contados ejemplos se asocia la idea de país con su sentido restringido
de área específica (los Llanos, Margarita, El Tinaco) .En la mayoría de los casos ,cuando es visto
en sentido amplio , el autor asocia el país con la idea de una comunidad mayor, esto es, una
La Idea de Patria.
idea de patria, aparece la mención de España como "la madre patria" (I,66).
Casi siempre se sobre entiende que <<la patria>> es Venezuela, aunque en algunos casos,
por el contexto, se puede suponer que la referencia es a la ciudad o provincia natal o a una patria
(a) El general Miranda en 1806 quiso "independizar a su patria" (I,69) ; (b) Los representantes
del gobierno republicano en 1811, apelando a los vecinos de Coro y Maracaibo, recordándoles
patria" , "los destinos de la patria", "dar la libertad a su patria". (d) Bolívar en 1812-1813
planteaba que "redimir la patria cautiva , el país que le dio la vida, era su más ardiente anhelo. Lo
luchar a Mariño y sus orientales les llama "al servicio de la patria común" (I,199) ; (f) Para el año
"porque una era - decía - la patria de todos los americanos" (I,230) ; (h) Cuestionaba Bolívar en
obstante, "la política de Bolívar no se reducía a su patria" (I,234) ; (j) Los soldados patriotas en
Calabozo, 1813, "sacrificados heroica ,pero inútilmente, en las aras de la patria" (I,236)
<<República>> .
relaciones de Venezuela con la Nueva Granada en 1814, se dice, que ya entonces había
"ardientes deseos de unirse en masa de nación a tan benemérita república" (I,249) .Es evidente,
nacional. El siguiente caso sería una ilustración: Refiriéndose a las acciones de Simón Bolívar
entre 1812 y 1813, "los pueblos a los cuales debía dar independencia , las naciones que había que
España" (I,67); en cuanto al segundo adjetivo, aparece innumerables veces como sinónimo de
patriota, revolucionario, etc. pero ello, será tratado más adelante en un aparte especial.
<<La Independencia>>.
de la metrópolis española.
Para ilustrar este punto, citemos varias de estas expresiones: "la revolución de la
independencia americana" (I,77;91) ; "la emancipación americana era un hecho natural" (I,83) ;
Los errores de Emparan precipitaron "la revolución"; "la emancipación política de Venezuela"
(I,117) ; "la causa del Nuevo Mundo" (I,69) ; Por las tentativas de independencia de Miranda,
"en el pecho de algunos americanos renació el ardor de emancipación" (I,71) ; Enardecido
Emparan con "la pretensión de libertad que abrigaban los venezolanos"(I,87) ; Para 1813 ocurrió
Patriotas.
republicano y otros similares aparecen hasta el cansancio en la obra analizada. A veces, en aras
(b) "defensores de la patria", "el ejemplo de los patriotas de Norteamérica" ,"filas patriotas" ,
"los jefes y oficiales patriotas". (c) "los fundadores de nuestra independencia seguían el
pensamiento de emancipación [eran] aquellos próceres" (I,82) ; (d) "los revolucionarios" ; (e)
"los independientes" , "el jefe independiente" ,"fuerzas independientes" ; (f) "los republicanos" ,
"gobierno republicano e independiente" , "el edificio de la gloria republicana" ; (g) "los épicos
caballería", etc. ; (i) "la causa de nuestra independencia"; (j) "las armas americanas" .
Todas y cada una de las anteriores expresiones le sirven al autor para dejar bien claro
quienes eran los que enfrentaron a los llamados realistas durante la larga guerra de
emancipación.
El autor no oculta su simpatía e identificación total con estos patriotas, tanto del campo
civil como del militar. Llega al extremo de personalizar algunas de tales referencias ("nuestra",
"nuestras", etc.) .No pretende ser un narrador "imparcial" de los hechos, pues se muestra como
Los Realistas.
corona española aparecen presentados con los más negativos términos. A manera de muestra
inicial, leamos la reproducción que hace el autor de un testimonio de José Félix Ribas (Ocumare
del Tuy, 1814) "los horrores que he presenciado en este pueblo, al mismo tiempo que me
estremezco, me hacen jurar un odio implacable a los carnívoros españoles .... ofrezco que no
perdonaré medios de castigar y exterminar esa raza malvada. (a propósito de un hierro con P para
marcar a los patriotas que tenía Rosete) "este hierro de barbarie se depositó en Caracas con el
(a) En relación con el uso del término "realista" o "realistas", uno u otro lo podemos ver
asociado de esta manera: el "partido realista", los "emigrados realistas" , "clérigos realistas",
"venezolano realista" (jefes como D.Rafael López) ,un "escritor realista" (Torrente; J.D.Díaz),
"tropas europeas y americanas realistas". (b) Junto al vocablo "realista" se utilizan también
expresiones como estas: En occidente, San Carlos - Barquisimeto, 18130 "el país había hecho
una sublevación general en favor del rey" (I,223) , el "ejército real" , los "servidores del rey" ;
peninsulares" (I,100) , la saña y la crueldad de los mandatarios europeos" (I,100) , los "opresores
de la América" (I,100) , "el dominador europeo" , "el jefe español ..." , "los crueles jefes
guerra a muerte en 1813 para "poner un dique a las atrocidades y fierezas de los peninsulares.
Los europeos estaban sedientos de sangre y era preciso ahogarlos en la suya propia." (I,180) ; a
propósito del realista Quero, 1814, se destaca "el despotismo y la ferocidad de aquel mal
americano" ; Zuazola, el "feroz viscaíno" ; (d) <<Canarios, etc.>> : Los "españoles y canarios",
"la bozal muchedumbre de isleños de Caracas" (I,145) , "partidas de isleños, lo mismo que de
catalanes y otros europeos ...", "europeos y canarios" , F.T.Morales, "canario éste tan malvado
que el propio Boves lo hallaba ! atroz ! " (I,237) ; (e) "Boves y sus hordas" , "las huestes de
Boves" ; (f); (g) "los enemigos de la patria" ; (h) Finalmente, relatando la acción de Bermúdez
en Margarita,1815, quien "pasando por en medio de toda la escuadra española insultó a los
tiranos de su patria .... gritaba soy el general Bermúdez (y algo más impublicable) (I,327-328)
Igual que cuando comentábamos antes lo relacionado con los patriotas, en este caso,
tampoco el autor disimula cuáles son sus opiniones. A los realistas los condena, los execra. No
pretende sólo presentar los acontecimientos, pues junto con la narración de lo ocurrido,
Larrazábal presenta sus alegatos en contra de los enemigos de la causa de la Patria. El historiador
asume la defensa de Simón Bolívar, de los otros héroes o próceres y de la patria por ellos
Recogidas ya una amplia gama de expresiones que identifican a los que se enfrentaron
durante más de una década en los campos de batalla, sólo resta enunciar las que hacen mención a
la tierra que sirvió de escenario a tan terrible lucha, así como de la que envió o inspiró a los que
Entre las denominaciones utilizadas por el autor para referirse a estas tierras, tenemos las
de Nuevo Mundo, Nuevo continente ,las "colonias" , América, Suramérica , "la América
Los otros, los que se enfrentaron; venían de, o defendían la política de España, la madre
patria o la Metrópoli.
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Esa operación de "desmenuzamiento" del texto ,ese recorrido crítico realizado por sus páginas
nos permite afirmar que Larrazábal si desarrolló un discurso plenamente moderno. Este discurso
perfiles que estuvieron ausentes en la obra de los primeros narradores del proceso de
emancipación nacional. Ello fue posible, entre otras razones, por las circunstancias de su
Es interesante observar el juicio del autor sobre el pueblo venezolano. A pesar de sus
libertades públicas y de otras causas nobles) el biógrafo del libertador deja ver una carga de
prejuicios típicos de la élite blanca. Sus opiniones un tanto "descalificadoras" de ese pueblo --
actor histórico -- estaban más en sintonía con tradicionales ideas de autores conservadores y
especialmente con algunos planteamientos del propio Simón Bolívar; pero igual que éste, como
escritores posteriores que falsearon la historia nacional con tal de hacer ver que el pueblo
muchos intelectuales de su época, Larrazábal no logró comprender cabalmente por qué ese
pueblo de Venezuela (en todos sus segmentos) tuvo esas actitudes. Aunque en justicia hay que
histórica <<larrazabaliana>>. En el texto analizado se puede señalar toda una amplia gama de
usos de la idea del héroe y de lo heroico. Usualmente, cuando el autor quiere destacar el valor, la
audacia extrema, la aceptación del sacrificio y las privaciones por liberar la nación , el amor sin
límites a la patria y a la libertad, así como otras virtudes similares, por parte de un individuo o de
un grupo, califica tal cosa de conducta heroica. Los siguientes ejemplos, permiten observar la
Dice el autor que en España, en 1808, podía verse "la vileza de la familia real y la actitud
heroica del pueblo español" ; y juzgando la conducta del generalísimo en la Primera República,
agrega: "Por qué fatal destino no supo Miranda resistir como Sertorio ,o morir como Leonidas? "
(I,135).
La explicación de muchos procesos se hace a partir de la acción preponderante del
secuencia de muestras significativas: "Desde aquí (1812) toma sobre sí Bolívar los deberes y los
Según Larrazábal, Bolívar asume desde ese momento inicial un rol protagónico
"poseía aquella fuerza secreta de superioridad que le hacía convertir en reales los empeños ..."
(I,171)
"Bolívar había logrado hacer sensibles sus soldados al amor de la gloria y les había inspirado el
Genio Bolivariano.
Su espíritu era "luminoso y penetrante" (I,239) .Por ello, "todo encomio que quiera
hacerse de esta carta (Jamaica, 1815) será pequeño. Pero lo que más tiene de resaltante es la
Un Hombre Superior.
Por no estar presente Bolívar en Venezuela en 1816, "la patria vive alimentada de una
esperanza ;pero le falta un hombre superior , capaz de convertir esa esperanza en realidad.
Llenos de esa idea, los pueblos y el ejército han vuelto su vista al general Bolívar, la primera
Hombre Imprescindible.
"El objeto de los promovedores del Congresillo de Cariaco había sido desconocer a
Bolívar; pero Bolívar era la independencia" (II,63) ; "Por otra parte, Bolívar era un compuesto de
elementos tan diversos ; había en él tantas virtudes, tanto candor, tanto genio y tanto esfuerzo;
había aprendido o adivinado tantas cosas en el comercio de los hombres y en el manejo de los
negocios, que era el todo en la guerra y el todo en la política. No podía prescindirse de él en nada
ni por nada ;así que la farsa del Congreso (de Cariaco) no tuvo resultados." (II,64)
"Una y otra vez lo hemos dicho: uno de los más grandes méritos del Libertador fue el haber
creado en Colombia la opinión que no existía y sabido inspirar en las masas indolentes ... el
deseo de ser libres ..." (II,89) ; "Bolívar y sus pocos compañeros pretendieron cambiar el orden
de cosas ,y con él los hábitos inveterados, las creencias erróneas, la disposición servil de los
espíritus ... y emprendieron una obra de titanes ... En punto a luchar contra toda suerte de
obstáculos, casi sin elementos ,y a superar esos obstáculos a poder de constancia, de genio,
Bolívar es un prodigio, y la Historia del mundo no lo presenta semejante ... Washington no
conoció esas fatigas, y no sabemos si hubiera podido superarlas ,dominando la opinión casi
unánime de su país... (además, tuvieron los norteamericanos) poderosos aliados como Francia y
España ..."(II,90-91) ; "En verdad ,la Historia no tiene nada más extraordinario que ofrecer en
todo el curso de sus anales que ese gran combate librado en la segunda mitad del Nuevo Mundo
entre el absolutismo ,apoyado por todos los poderes morales de la tierra: encontrando por
dondequiera auxiliares y favorecedores, y la libertad reducida ,en último análisis ,a la sola fuerza
de un hombre. Pero ese hombre era Bolívar..."(II,92) ; "!Cuanto se había ganado al comenzar del
año (1818) estaba perdido! ... sólo se conservaba íntegro y en mejor temple ,el espíritu de
Bolívar, que sacaba de la desdicha ocasiones de esperanzas y del abandono de la fortuna motivos
de triunfos y de grandeza." (II,115)
En el Discurso de Angostura, 1819, "Bolívar ,el héroe, el Aníbal colombiano, era también
Demasiado obvio, para Larrazábal, la historia la hacían los héroes, los titanes, los
está allí en cada campaña (la admirable de 1813, la de Guayana en 1817, la de Carabobo de
1821) ; en cada combate o batalla: Niquitao, Taguanes, Araure, La Victoria, San Mateo, La
Puerta, San Félix, Matasiete, Queseras del Medio, Pantano de Vargas, Boyacá, Pichincha,
Ayacucho ; en cada uno de los terribles asedios o sitios: Barinas, Valencia, La Victoria, San
patria donde se batieron fieramente aquellos ejércitos siguiendo a sus jefes y a sus banderas, la
"en la cumbre de Bárbula inmortalizó este héroe su memoria. Bolívar lloró al joven granadino,
que tantas pruebas de heroísmo y de virtud nos había dado ....dio aquel mismo día una ley para
honrar la memoria del coronel Atanasio Girardot." El decreto de honores establecía: declarar el
día 30 de septiembre día aciago para la república, realizar un aniversario fúnebre, llevar su
corazón en triunfo hasta la catedral de Caracas - depositándolo allí en un mausoleo, transportar
sus huesos a su país nativo, darle el nombre de Girardot al batallón # 4, conceder a los soldados
granadinos que pelearan para vengar a su compatriota.(I,207-208)
"Ricaurte había despedido a sus soldados y dado fuego por su mano a los pertrechos ,
cuando vio la morada llena de enemigos ! Sublime resolución de un alma heroica ! Sacrificó su
persona cuando escribieron sus juicios históricos -- totalmente opuestos -- sobre la participación
Mariano Montilla.
aquellos héroes que acompañaron a Bolívar en su duro batallar por la libertad. Uno de éstos, "era
el teniente coronel Mariano Montilla , entusiasta por la patria y la independencia, valiente, joven
de ilustración y de riqueza, empeñado en la lucha desde la aurora del 19 de abril; pero rival
Angostura, 1819; culminaron en sus relevantes servicios cumpliendo una importante misión a las
costas de Santa Marta y Cartagena que permitieron liberar esos territorios en 1819-1820.
cabal tratamiento. Las noticias de sus fuerzas en las llanuras de Apure, llevan a caracterizarlo
como "el beduino Páez" (II,105) , especialmente por su participación en la campaña de 1818,
cuando después de las victoriosas acciones en Calabozo y El Sombrero se niega a seguir hacia el
Centro y vuelve al Apure, a la toma de San Fernando. Aunque recibe el reconocimiento de sus
proezas, su valor, etc. (heroísmo de Queseras del medio, toma de las flecheras y otros combates)
no se ve ese miramiento con que lo trataron los historiadores anteriores como Montenegro y
Baralt.
Debe recordarse que mientras los nombrados historiadores anteriores escribieron sus
obras bajo la sombra de la influencia del centauro llanero, el Dr. Larrazábal no tuvo un influjo
similar: la distancia temporal, las luchas político-partidistas (Larrazábal era un ideólogo del
estos términos: "Piar, caudillo heroico y vanidoso" (II,72) ; al recordar sus orígenes, se dice que
"Curazao, (fue) su patria". Lo demás, fue dar cuenta de su conspiración, juicio y ejecución.
(II,72-77). Se complementa el texto principal con una nota biográfica. (II,72) . Y para no recoger
solamente ejemplos de los llamados patriotas, se incorpora a quien ha sido execrado muchas
veces. No obstante, de José Tomás Boves, se destaca que "su carácter heroico, salvaje y
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notoria en el discurso historiográfico hilvanado por Don Felipe Larrazábal. Por ejemplo, el
tratamiento acordado a Piar, Arismendi, Bermúdez, Urdaneta, Zaraza, Páez, Anzoátegui, Sucre,
Soublette, Montilla y tantos otros más no puede compararse con el que recibe Mariño. Este es
sistemáticamente cuestionado en los más duros términos. Se le critica en casi todas sus
Rivalidad en 1813-1814.
"Atormentado de envidia porque se llevaba Bolívar los aplausos del pueblo; agitado de
ese funesto espíritu de rivalidad que es más irreconciliable que el odio, recayó Mariño en los
pasados afanes ,cuando tuvo noticia de la función del 2 de enero" , es decir la aclamación al
Mariño dejó sacrificar a los héroes y mártires de Barcelona, esto es, la tragedia de la casa
fuerte en 1817. "la ambición ,pues , esa pasión inquieta ,egoista, fue la causa del abandono de
aquellos nobles patriotas, mártires de la libertad , que pagaron con su sangre los deseos
inmoderados del jefe de las fuerzas republicanas. Causa extrañeza que entre los generales que
acompañaban a Mariño en su fatal inobediencia, se contase a Urdaneta ... (mientras que)
Arismendi, Armario, Bermúdez y Valdés rompieron con Mariño y regresaron a El Chaparro para
aguardar las órdenes de Bolívar ... (cerca de este lugar) halló el Libertador las divisiones que le
fueron fieles. No puede pintarse el dolor que le causó la noticia de la pérdida de Barcelona y el
asombro que le produjo la defección de Mariño.
Hasta cuándo (dijo Bolívar) querrá el general Mariño atormentarnos con su pretensión de
mando? No considera el mal que hace a la patria con esa sed que nada apaga? "(II,57)
"Mariño ,que estaba en Cariaco, se prestó a una farsa escandalosa que dio la medida de
las más ridículas". El Padre Cortés de Madariaga, regresó y planteó la reunión de un congreso,
ante éste, en Cariaco - el 8 de mayo de 1817 - renunció Mariño a las jefaturas, en su nombre y
en el de Bolívar. Allí se eligieron nuevos magistrados y jefes militares. Mas todo se disolvió al
día siguiente. (II,62-63)
Esa sistemática crítica hacia el prócer oriental no era otra cosa que la continuación de una
tradición desarrollada por la historiografía de signo bolivariano ,cuyas bases más sólidas echó
Baralt en su Resumen. Pudiera decirse que entre todos los otros historiadores que acompañaron
a Larrazábal en su tarea de exaltar el pasado nacional venezolano, solamente Yanes escapó a esa
tendencia. Y por ello, seguramente su obra quedó en la oscuridad relativa hasta hace medio siglo.
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Como se pudo constatar, el concepto de héroe y de lo heroico forma parte del tejido
gama de usos de la idea del héroe y de lo heroico. Para el escritor la historia la hacían los héroes,
los titanes, los hombres únicos como Simón Bolívar. Todo lo demás era secundario.
también la resistencia heroica de los combatientes patriotas o republicanos. Entre ellos destaca a
Montilla, Antonio Ricaurte, Atanasio Girardot y José Antonio Páez. A este último, aunque le
reconoce sus proezas, valor y heroísmo , no lo trata con ese miramiento con que lo juzgaron
superior e imprescindible, un genio cuya palabra tenía un un gran poder, un hombre único capaz
imágenes de la antigüedad clásica -- no haber resistido como Sertorio o haber muerto como
Leonidas.
NOTAS (Capítulo III, Sección 1.6)
(1) Felipe Larrazábal: Vida del Libertador Simón Bolívar. New York, 1865-1866. (Esta
edición original fue "modernizada" en la edición realizada por la Editorial América ,Madrid,
1918; con prólogo y notas de Rufino Blanco Fombona)
En este trabajo, utilizamos por conveniencia, la edición facsimilar ofrecida por la
Gobernación del Distrito Federal. Caracas, Ediciones de la Comisión del Bicentenario del
Nacimiento del Libertador, 1983
3 vols.
(2) n.a. Para no recargar de largas notas al texto, de aquí en adelante sólo indicaremos al
final de cada ejemplo significativo, el número romano I - II - III (según sea el caso) para indicar
el volumen, seguido de uno o más números arábigos que indicarán la o las páginas específicas de
éste.
1.7.La Idea de Pueblo y de Patria. Patriotas y Realistas. Los Héroes y lo Heroico. En la
Idea de Pueblo.
En la obra (2) , tal vez por el tipo de contenido fundamental que la llena -- las heroicas
campañas y grandes batallas -- no se consiguen muchas referencias sobre <<el pueblo>> .No
obstante, se puede decir, que con excepción de un comentario sobre la participación de un grupo
de indígenas incorporados en el ejército patriota, las apreciaciones que hace el autor sobre "el
Tales juicios sobre el pueblo -- si siguiéramos el esquema aplicado sobre este aspecto en
las restantes obras analizadas -- caerían dentro de lo establecido como la tercera acepción del
vocablo, esto es, la visión del Pueblo como una masa de gente inferior, plebe o populacho.
Para el autor, el pueblo venezolano que se vio envuelto en ese torbellino de la guerra de
independencia ,tenía grandes limitaciones: ignorante, sin ideales, sin conciencia de su pasado,
manipulable como un rebaño, hostil a la causa republicana , fanático seguidor de los realistas. A
pesar de todo, pudo transformarse en un pueblo de héroes gracias a su aspiración a ser libre; sin
embargo, sus descendientes mostrarán gran ingratitud hacia los héroes libertadores. En suma, el
pueblo ,más que un actor que luchaba a favor de la emancipación, es apreciado como un pesado
fardo que sólo sirvió para obstaculizarla, o en todo caso, como un poderoso aliado de la causa
realista.
Grupos populares como el de los bárbaros llaneros comandados por sanguinarios jefes
como Boves y Morales son considerados uno de los más temibles enemigos de la causa patriota;
mientras que una de las escasas referencias que aparecen sobre los aborígenes, idealiza a éstos
citada :
(a) "aquel pueblo incipiente, tímido ,medroso, nutrido con el funesto pan de las
preocupaciones, sin ideal soñado, sin anales, sin ejemplos; tan esclavo de la ignorancia como de
su inmutable soberano; rebaño más que pueblo; ciego instrumento de aquel que lo dirige, cuerpo
sin alma, sombra palpable, haz de paja seco al fuego del despotismo colonial, sobre el cual
dormía tranquilo, como en un lecho de plumas, el robusto león de Castilla; aquel pueblo de
parias, transformóse en un día en un pueblo de héroes. Una idea lo inflamó: la emancipación del
cautiverio. Una sola aspiración lo convirtió en gigante: la libertad. (p.10)
(b) "Por segunda vez, la altiva encarnación de los grandes propósitos emanados de la
Asamblea republicana de 1811, sentíase amagada de muerte por el esfuerzo insuperable de sus
pujantes enemigos y por la manifiesta hostilidad de nuestro pueblo,que , dominado casi en su
totalidad por el más fanático realismo y la inveterada costumbre de prestar obediencia a nuestros
seculares dominadores, ayudaba con indecible brío a sus propios verdugos en su tarea
exterminadora." (p.85)
(c) "Nosotros también tuvimos héroes de la talla de Hércules, gigantes mitológicos que
escalaron el cielo de la gloria, pero que no dejaron a la tierra descendientes olímpicos. Ellos se
fueron todos, tristes los más, por haber apurado con la muerte la ingratitud del pueblo por ellos
redimido." (p.300)
(d) En relación con los llaneros, sin duda alguna, parte de ese <<pueblo>> venezolano,
dice Blanco: El año terrible, un feroz caudillo dirige una horda, el " mayor número de jinetes
[ que ]
jamás se viera reunido en los campos de Venezuela ... suelta la rienda, hambrientos de botín y
venganza, impetuosos como una ráfaga de tempestad, ocho mil llaneros comandados por
Boves .... es la invasión de la llanura sobre la montaña; el desbordamiento de la barbarie sobre la
República naciente." (p.23)
(e) Finalmente, una acotación sobre otro segmento del pueblo de Venezuela, los
indígenas que pelearon en la batalla de San Félix (Guayana) el 7 de abril de 1817. "... 500 indios
flecheros
acuden ... aquellos valerosos indígenas ,poseídos como estaban de extraordinario ardor, al frente
de sus seculares dominadores, traían a la memoria los tiempos ya remotos de la conquista ... de
parias tornábanse en señores, tras tantos años de esclavitud y oprobio . Allí, alentándoles con el
recuerdo del antiguo heroísmo de su raza, hallábase el espíritu independiente de los más
soberbios caciques de Venezuela, que exterminaron los conquistadores: el de Maracapana, Gil
González y Cayaurima, Taricura, Mayuracari, Guaicaipuro, Paramaconi, Tamanaco, y el heroico
Sorocaima. El siglo XVI ,revivía para ellos en 1817." (p.232)
Sobre esto último -- ese glorioso pasado indígena -- pudiese señalarse que ello representa
un rasgo romántico en el discurso , propio de los autores que idealizaron al "buen salvaje" y las
todas las demás ya consideradas, lógicamente , no presenta ese lenguaje ambiguo característico
de los otros escritores venezolanos antes estudiados. En su obra ya no cabe esa ambigüedad
En sus juicios sobre el pueblo venezolano califica a éste de "rebaño" , "parias" ,fanático
realista, hostil a la independencia e ingrato con sus héroes. Sin embargo, ese mismo pueblo así
caracterizado, fue capaz ,gracias a los ideales de libertad, de convertirse en un pueblo de héroes,
Pareciera contradictorio que quien primero tachara en esos términos al pueblo venezolano
le reconociera de la misma manera ese potencial heroico y de sublime inspiración por la libertad.
En relación con el uso de estas categorías, se observa que en la obra de Blanco, éste
De los planteamientos del autor , se desprende que para él la Patria es la tierra natal, la
nación de origen, el territorio donde nació y se formó quien lucha. La Patria era la Venezuela
siempre , al igual que Montenegro, Yanes, Baralt, Larrazábal, Austria , González y otros; los
<<Españoles>>. Entendía el autor, como es obvio suponer, que los "patriotas" eran los
corona, de las estructuras políticas tradicionales de la nación española y su tiranía. Tales realistas
muchas veces son denominados "españoles" aunque ,no necesariamente fuesen ejércitos
"españoles" a todas las fuerzas que estaban al servicio de España y sus intereses.
Para no hacer demasiado extensa esta parte sólo mencionaremos estos contados ejemplos:
(a) "El 19 de abril de 1810, Caracas se rebela de hecho contra la Madre Patria ..."
(pp.10-11)
(b) En 1813, coincidiendo con la invasión de Bolívar "Mariño, Piar, Bermúdez y otros
(d) "El 1ro de enero de 1817, torna a pisar Bolívar el suelo de la Patria en las playas de
El concepto de Patria se expresa en el mismo sentido que venía utilizándose en todas las
obras históricas consideradas. Acá no hay diferencias de ninguna índole, pues para los
historiadores venezolanos del siglo pasado la patria era el terruño natal. En ese sentido al "pisar
Bolívar el suelo de la patria en las playas de Barcelona" se consideraba la idea de suelo patrio en
ese mismo sentido general del vocablo patria, en ese caso el lar natal de los ancestros españoles.
Por otra parte, patriota es, evidentemente, quien se identificaba con la patria común, quien
Sobre esta temática - por razones obvias - se consigue en la obra una amplia variedad de
ejemplos. Blanco no sólo aborda con maestría literaria la exaltación individual de las virtudes de
invasión y travesía de los 600; los 150 héroes de las Queseras ; los margariteños de Matasiete;
los sitiados de Valencia; o los que se batieron repetidamente en La Victoria, San Mateo y el
campo de Carabobo el autor toma siempre como modelos o referencias los de la antigüedad
clásica grecorromana.
Sería válido plantearse si en este sentido hay una estrecha relación entre Blanco,
Larrazábal y Juan Vicente González pues todos ellos se aferraron a esos modelos clásicos
Francesa , no olvidando que hubo una relación muy estrecha entre Eduardo Blanco y su antiguo
maestro Juan Vicente González, que tempranamente lo encaminó en esa dirección. De la misma
manera debió el romanticismo influir en la obra de estos tres autores, pero con fuerza
que en las naciones hay impresa "una huella sangrienta: allí las ruinas de la patria de Príamo,
allí el
suelo aún palpitante de Maratón, Platea y las Termópilas; allí el Granico, Issus y Arbela; allí los
campos de Trasimeto y Cannas; allí los de Farsalia y Munda; allí Actium con sus olas furiosas
que proclaman la muerte de la Roma republicana; allí el Gólgota siempre resplandeciente; allí las
ásperas gargantas de Roncesvalles; allí ,en fin, mil y más sitios de esforzadas proezas, y Lepanto,
Jemmapes, York-Town, Zaragoza y Waterloo.
Acaso no haya pueblo que deje de poseer uno de esos pedazos de tierra, reverenciados
por el patriotismo, consagrados por la sangre en ellos derramada. Boyacá, Carabobo y Ayacucho,
hablan más alto a nuestro espíritu ,que los poemas inmortales en que Homero y Virgilio narraron
las proezas de los antiguos héroes: campos memorables donde aún resuena con eco misterioso el
fragor del combate, las vibraciones del clarín y el grito de victoria. (a pesar de la falta de
monumentos y del abandono) no por ello los corazones generosos palpitan con menos emoción y
con menos respeto al contemplar aquellos campos de reñidas batallas, donde duermen el sueño
de los héroes, tanto guerrero ilustre y tanta humilde víctima de nuestra magna lucha (...) es La
Victoria: escenario sangriento de una de nuestras más terribles y reñidas batallas ..." (pp.21-22)
[Y se pregunta el autor] " ¿ Qué poder oculto y misterioso comunica ese fuego sublime,
que engendra héroes , realiza prodigios y convierte hasta pequeños en gigantes? ¿ Qué alienta a
aquellos corazones ? ¿ Qué los hace invulnerables a la debilidad, omnipotentes para el
sufrimiento ? [cree el autor, que ello obedece a] una idea, una sola inspiración : La Libertad."
(pp.36-37)
Tomando como ejemplo la célebre acción de San Mateo , dice que esta trascendental
En San Mateo y al lado de Bolívar, "escudándole con sus heroicos pechos ,combaten Lino de
Clemente y los hermanos Montilla, Florencio Palacio, el glorioso Ricaurte, el indomable Campo
Elías, Maza, Soublette, Muñoz Tébar, "y aquel patriota insigne, Martín Tovar, tan valeroso como
honrado." (p.70) Todos ellos formaron, sin duda, lo que se llamó una Generación de Héroes. Por
tanto,
".... transmitir a nuestros hijos las tradiciones épicas de las pasadas glorias de la patria, es un
deber sagrado ... [y se debe] evocar una vez más ,con el recuerdo imperecedero de Bolívar, el de
aquellos insignes lidiadores que con relámpagos de gloria iluminaron el portentoso palenque de
San Mateo [...]
Ricaurte, arcángel del denuedo que resplandeces en la historia, entre héroes que encarece la fama
y que la tierra admira --- generación incomparable para la cual parece escrita esta estrofa de un
poeta español.
<<Arrojada y resuelta cual ninguna
Como engendrada en tan heroico empeño
Templóla en sus rigores la fortuna
La ronca tempestad meció su cuna
Y el eco del cañón la arrulló el sueño>> " (pp.83-84)
También, para completar su balance sobre ese glorioso pasado, no olvida elogiar a los
Héroes Civiles que por sus luces, su carácter y virtudes "no hará olvidar nuestro silencio,
respetados por sus luces (...) firmes ... , altivas figuras de Cristóbal Mendoza, el enérgico
gobernador civil de la provincia de Caracas .... ,de Espejo, letrado distinguido, a quien trágica
muerte le acechaba, cuando con su palabra elocuente y briosa, avigoraba los ánimos de los
sitiados de Valencia; de Rodríguez Domínguez, primer presidente del Congreso de 1811, que
había iniciado la revolución dando la libertad a sus esclavos; de Sanz, legislador, filósofo, orador
y poeta, a quien altas celebridades apellidaron el Licurgo de Venezuela; del canónigo Cortés de
Madariaga, el orador tribunicio del 19 de abril ..."
También deben ser recordados, Juan Germán Roscio , Martín Tovar, Miguel Peña, Francisco
Javier Ustariz , el sacerdote Unda ,José Rafael Revenga ,Fernando Peñalver, Pedro
Gual ,Francisco Javier Yanes (eminente letrado e historiador, pero que llegó a participar en
batallas como El Yagual) , Salias, Juan Martínez, Tejera, Diego Bautista Urbaneja, Manuel
Palacio, Ángel Álamo (Síndico de la municipalidad de Caracas que en 1813 declaró a Bolívar
Libertador) ,Ramón Ignacio Méndez (futuro Arzobispo de Caracas) , Coto Paúl (el Dantón de la
Sociedad Patriótica) y muchos otros varones eminentes. (pp.90-92)
(a) "Entre aquellos 600 denodados que poseídos de la grandeza de su intento, cruzan a
Venezuela desde las costas de Ocumare hasta las llanuras de Barcelona [si se cansan] una voz
prestigiosa los alienta, un espíritu superior ,siempre sereno, les comunica reflexivo heroísmo:
Soublette les habla el lenguaje severo del filósofo; MacGrégor, todo ímpetu, los exita al combate
con su genial intrepidez (...) heroico esfuerzo el de aquel puñado de hombres que así se arriesgan
a todos los peligros, sin más estímulo que el amor a la Patria. Pero los héroes de la libertad son
invencibles: la fuerza moral que los sostiene no reconoce límites ..." (p.194)
"El bravo Coronel Chipía, atravesado de un balazo ,rinde la vida en medio de sus soldados que
respetuosamente , sin dejar de combatir , arropan el cadáver de su jefe con la bandera del
batallón <<Barlovento>> . Salóm ocupa el puesto que no abandona sino muerto aquel valiente
oficial. Poco después toca igual suerte al osado Landaeta al enfrentarse a los soberbios veteranos
del batallón <<Cachirí>> .... empapan ... con su sangre la tierra donde se abaten para jamás
volver a levantarse.
Estimulado el coraje de nuestros infantes por Anzoátegui, Pedro León Torres y
Hernández sienten que gravitan sobre ellos la compacta muchedumbre de las tropas realistas ...
pero Piar, a la cabeza de la caballería republicana ,no tarda en auxiliarlos.
Después de destrozar en dos furiosas cargas a los jinetes enemigos, Piar se arroja ... sobre
las columnas de La Torre y Ceruti, embistiéndolas de flanco. (...) Al grito cien veces repetido
de ! Viva Piar ! y ! A la bayoneta ! los republicanos cierran al arma blanca contra sus
desconcertados enemigos ..." (pp.232-233)
La exaltación del heroísmo más puro que observa Eduardo Blanco, lo lleva a extasiarse
ante la constelación de aquellas figuras en las que temprano preveía su grandeza. Dice con
asombro:
"! Qué hombres! Astros brillantes en aquel grupo de estrellas cuyo sol fue Bolívar, cada uno de
ellos en lo porvenir describirá su órbita , alcanzará luz propia , y legará a las futuras generaciones
con el ejemplo de sus virtudes republicanas y gloria para la patria.
Montilla da alto ejemplo por su valor e hidalguía, es el prototipo de los antiguos
paladines .... Venezuela recuerda con orgullo al héroe caballero.
Rivas-Dávila ... murió como Epaminondas, en los brazos del triunfo y de la gloria ....
Soublette es el Arístides americano. Esforzado en la lucha, prudente en el consejo; a las
condiciones del guerrero une las dotes eminentes del filósofo y del hombre de estado;
diplomático hábil, pulcro admistrador, obediente a las leyes como soldado y como magistrado;
de inteligencia clara y de educación muy superior a la de aquellos tiempos, nació predestinado a
muy altos destinos. Colombia y Venezuela ostentarán en sus blasones más de un laurel debido a
los talentos del héroe de la Popa. (...)
Ayala es el soldado del deber; severo, inflexible, tenaz; la fama no le deslumbra, la
ambición no tiene cabida en su alma espartana.... en la Grecia de Leónidas como en la Roma de
los Gracos, hubo caracteres semejantes.
Adrián Blanco, y Jugo, y Maza, y Canelón pertenecen a aquel grupo de jóvenes
guerreros, predestinados al martirio ...
Con tales hombres hay razón para acometer imposibles. " (pp.32-33)
Eduardo Blanco tiene también en su obra unas precisas y , casi siempre hermosas,
semblanzas individuales sobre los protagonistas más notables de la gesta heroica que canta.
Véanse a continuación:
(b.2) Boves avanza desde los llanos, en <<La Puerta>> tres mil soldados son
"acuchillados sin misericordia (...) el nombre de Boves resuena en los oídos americanos como
trompeta apocalíptica ! Cunde el terror ... Caracas se estremece de espanto .... sólo Bolívar no se
conmueve; superior a las veleidades de la fortuna, para su alma no hay contrariedad, ni sacrificio,
ni prueba desastrosa que la avasalle ni lo postre." (p.24)
(b.3) "Sin faltar a la verdad, Bolívar pudo siempre decir : yo soy la Revolución ; en mí se
encarna la República.
Con todas sus faltas reales, con todas las imputaciones con que algunos de los hijos
degenerados de esta América han tratado de empañar su memoria, Bolívar ,siempre grande,
aparece en la Historia, incomparable.
Alejandro, , Carlo Magno y Bonaparte, tienen entre sí puntos de semejanza. Bolívar no se
parece a nadie. Su gloria es más excelsa. Ser Libertador, está sobre todas las grandezas a que
puede aspirar la ambición de los hombres." (pp.82-83)
carácter a ese huracán que avanza, lo enfrenta con "toda una fortaleza: el corazón de José Félix
Ribas." (p.26)
Ezequías. "Resplandece sobre su frente olímpica, como lampo de fuego, aquel terrible gorro
frigio que ha de ostentar la cabeza del héroe hasta en la jaula de la picota; brilla en sus ojos la
encendida llama de las grandes pasiones .... colérico aguarda el peligro que le amenaza ,
provocando el destino con un gesto de soberbio desprecio y de arrogante superioridad. (...) con
un gesto imperioso el general republicano refrena la impaciencia de sus enardecidos
compañeros ; sacude la erizada melena como un león irritado, y blandiendo la espada que,
terrible y gloriosa, brilló en los campos de Niquitao y Los Horcones, exclama con vibradora
entonación" una brillante proclama que sacude a los defensores que responden con atronadores
vítores. (pp.30-31)
(c.4) "Entre el escaso número de esos seres singulares , a quienes el peligro les produce
fiebre sublime del heroísmo, la historia cuenta a José Félix Ribas. (Este resiste sucesivos asaltos
en La Victoria) Semejante rasgo da la medida de la energía de Ribas; pero aún hay algo más en
aquella batalla con que formar un canto digno de competir con los más épicos de la Ilíada."
(p.35)
(c.5) "Para vivir en la historia la vida palpitante de la inmortalidad , no basta ser Omar o
Erostrato, César romano o déspota bizantino; no es necesario ascender a más alto: ser Dante,
Gutemberg, Miguel Ángel, Franklin, Napoleón o Bolívar: genios que arrojen luz ,soles inmensos
que no eclipsen los siglos ni amengüen las distancias.
De las que pueden llamarse tinieblas de la historia ,sólo salva la gratitud y el buen criterio
de los pueblos a aquellos de sus héroes que, por virtudes muy probadas ,se hicieron acreedores a
una justa recompensa: y que ,aunque no tenidos por genios universales ,dieron sin embargo de sí
lo que el deber les exigía. Ribas se impone a nuestra admiración ,por su heroísmo; a nuestra
gratitud, por sus altos servicios a la patria. Su renombre vivirá con nosotros mientras aliente la
República." (pp.45-46)
(c.6) José Félix Ribas, después de la derrota en Urica, abandonado, enfermo, cansado con
la larga huida es capturado y conducido hasta Tucupido. "Así termina su carrera de triunfos, a
los 39 años ,aquel pujante lidiador, a quien Bolívar apellidara el invencible. Así el soberbio atleta
selló sus credenciales a la inmortalidad. Su muerte privó a la Patria de un poderoso defensor de
aquellos sus derechos ultrajados que nuevamente tornará a ventilar; para los realistas fue motivo
de gran satisfacción: aquella espada los había flagelado en cien batallas, y Horcones, Niquitao,
Vigirima, Ocumare del Tuy, La Victoria, y la primera de Carabobo, eran inolvidables.
Mutilado el cadáver del héroe, <<la poderosa diestra terror de los enemigos de la Patria,
fue colgada en un palo a media legua de Tucupido en el camino>> ;la cabeza frita en aceite y
puesta en ella, por escarnio, el gorro frigio <<que usara siempre como emblema de la
libertad>> ,la encerraron en una jaula de hierro; y hubo prisa en enviarla a Caracas, en cuya
plaza mayor se colocó en una horca levantada al efecto para tamaña afrenta; y luego, aquel
augusto despojo que impíamente negaron a la tierra, lo mantuvieron suspenso por muchos años,
en la llamada Puerta de Caracas ..." (p.175)
(d) Vicente Campo Elías. En San Mateo, 1814. "Frenético, se arroja Campo Elías sobre
las bayonetas enemigas : sus ojos despiden llamas, sus miradas avasallan y espantan. Desgarrado
el uniforme, el rostro ennegrecido por la pólvora, bañado en su propia y en ajena sangre, ruge
como un león furioso, rompe su espada en las filas de Boves y cae vencido por la muerte en
(e) Manuel Villapol. También en San Mateo (1814) "... se lanza como el rayo, hiere,
destroza, retrocede abrumado por innumerables enemigos, se rehace un instante y, sin flaquear
posición perdida ; pero una bala le hiere el corazón al proclamar el triunfo , y al pie de la bandera
Junto con los gritos de triunfo en el campo realista se escucha una explosión que retumba
en todo el valle. Todos lo adivinan "al disiparse el humo que cual fúnebre manto se extiende
sobre la casa del ingenio ... convertido de súbito en un montón de escombros, pregona el
heroísmo de Ricaurte ...! Glorioso sacrificio a que no le induce la desesperación ... ! No; Ricaurte
no es Cambronne en el último cuadro de Waterloo, revolviéndose en su agonía de león , para
escupir el rostro , con frases de desprecio, a su enemigo vencedor. Está más alto. El amor a la
patria es sólo quien le inspira ... Una peripecia de la batalla le sirve de pedestal y sobre ella se
empina. Su talla adquiere las proporciones de los antiguos héroes ...." (p.81)
duramente esa tumultuosa época llena de ira, venganza, sacrificios y heroísmo. Sus
contemporáneos le pintaron como un héroe terrible y, no pocas veces le calumniaron. "el héroe
de Margarita, tenía la talla de los más pujantes lidiadores de la época, y a pesar de los
sangrientos vértigos que quieran enrostrarle para amenguar sus glorias, alcanzó épica grandeza
en aquellos tiempos (...) su gloria tiene por pedestal a Margarita : a la isla diminuta en tamaño,
(h.3) Con genial temeridad Páez lanza su caballo en el río Arauca, de inmediato, ciento
cincuenta jinetes escogidos de los mejores lanceros del Apure cruzan el caudaloso río y ,en la
opuesta ribera, saludan al asombrado "ejército republicano que le
contesta con ruidosos aplausos, parten veloces tras las huellas de Páez (...) ! Osadía sin
ejemplo ! [ ¿qué pretenden? ] Los ímpetus heroicos no se explican; ellos se ven, se admiran y
producen deslumbramiento y pasmo. (...)
Allá va ,a la cabeza de sus intrépidos llaneros ,el héroe afortunado; todos le miran, todos
le reconocen por su marcial denuedo, por aquella figura atlética (...) exornada de atributos
olímpicos, cual la de los héroes inmortales cantados por Homero (...) los jinetes de Páez avanzan
sobre el centro de la línea española cual los antiguos paladines (...) semejante acometida ,más
que de una batalla, guarda las apariencias de un duelo colectivo, de un torneo caballeresco (...)
aquella empresa temeraria tenía ,en verdad , todo el realce mitológico de los tiempos heroicos de
la Grecia." (pp.291-293)
(h.4) La Gloria de José Antonio Páez.
"En vano ciegas pasiones tratarán de amenguar la prestigiosa aureola que resplandece en torno a
su memoria. Cual llama inextinguible , la gloria de Páez fatigará los vientos que se empeñen en
apagarla, y cada día más vívida y radiante, flotará sobre las olas tumultuosas del mar inmenso del
olvido en que pretenden sumergirla. (...)
Atentar contra las glorias de Páez, es atentar a las glorias de Venezuela. Esos muertos a quienes
maldicen hoy locas pasiones ,debieran ser sagrados; sus faltas, si algunas cometieron,
desaparecen ante el supremo esfuerzo que hicieron por la patria. Obscurecer el brillo que irradia
Sería lo mismo que decirle hoy al pueblo griego -- degenerado y abatido -- que todo lo
narrado por Herodoto es sólo una fábula ; que la existencia de Leonidas fue un mito; que la
gloria
de Maratón no pertenece a Milcíades ; "que Arístides ,en fin, no sintetiza el patriotismo de todo
aquel gran pueblo; y veréis la indignación sobreponerse a la indolencia de los descendientes de
Teseo. Porque en la postración en que hoy vegetan ,alientan sólo con los recuerdos del pasado, y
conculcarles su historia, que es su orgullo, es condenarlos a eterna obscuridad.
Las ejecutorias de Páez le hace merecer el respeto del mundo y la veneración de los
venezolanos "cual otro Aquiles, vivirá en la leyenda, y se tendrán por mitos sus hechos
prodigiosos. Como tributo de mi veneración por su memoria, permite !oh Patria ! que esta corona
de laureles ,mal tejida por mi pluma, pero perfumada con el incienso de un corazón reconocido,
ocupe el sitio donde medra el extranjero césped, sobre la tumba de aquel héroe inolvidable."
(pp.300-301)
Hermoso tributo filial, ese que hace el escritor a su héroe, cuando ya éste -- fallecido en
el exilio -- no sólo no podía prodigar favores, sino que más bien podía malponer a quien mucho
recordara sus gloriosas hazañas de la época de la independencia. Quien a finales del siglo
pasado, lo hiciera , corría el riesgo de ser asociado con lo que fue su dilatada vida política
En relación con lo planteado por Blanco acerca del drama contemporáneo del pueblo
griego, nos parece de gran importancia ese juicio sobre la relación entre las pasadas glorias y el
duro presente de ese pueblo. Tales consideraciones, creemos, arrojan luz sobre la propia
(arquitectura, escultura, teatro, poesía) , a la historia, la filosofía y a todo el saber universal con
su situación para el siglo XIX. Si bien es cierto que tal época estuvo signada por las luchas por su
El discurso de Blanco ofrece, en cierta manera, una reflexión indirecta sobre la dramática
empobrecido, presa del atraso en casi todos los órdenes, y para colmo, humillado por la
dependencia económica semicolonial, una crecida deuda externa, problemas de fronteras, crónica
Claramente nos dice que ,así como el venido a menos pueblo griego no soportaría la
negación de todo su glorioso pasado -- pues nada le quedaría -- tampoco Venezuela podía
olvidar, o permitir que se olvidara, la gloria de José Antonio Páez y de todos sus héroes, pues en
Sólo resta agregar, que el autor al trazar su cuadro sobre la trágica situación griega de su
tiempo, no puede evitar pasearse por todo el panorama historiográfico y literario de los tiempos
antiguos (y también de las siguientes épocas históricas) , ello le permite dibujar con magistral
elegancia el paralelismo entre esos guerreros, héroes y dioses de la antigüedad clásica con los
Granico, Issus y Arbela; a Trasimeto, Cannas, Farsalia, Munda y Actium; así como a
una de las también gloriosas batallas y campañas libradas en Venezuela por los héroes patrios a
los que compara con Licurgo, Epaminondas, Arístides, Leonidas, los hermanos Graco, Alejandro
Magno y César. Esos prototipos de los antiguos paladines de los tiempos heroicos, algunos
cantados por Homero y Virgilio, los incorpora el autor en su discurso seguramente apuntalado
por los testimonios de Heródoto, Tucídides y los ya antes mencionados historiadores romanos y
y españoles o entre patriotas y realistas con ese ropaje clásico que lo cubre todo.
***************************************
Este recorrido por la serie de ejemplos citados como muestras representativas de la obra
Obsérvase que el tratamiento que hace Eduardo Blanco sobre todos los sucesos
testimonios más autorizados. Todas esas batallas, esos largos asedios, campañas y acciones
mencionadas son ciertas en lo que se refiere a los hechos en sí. La diferencia fundamental entre
la información que puede leerse en los libros de Feliciano Montenegro Colón, Francisco Javier
Yanes, Rafael María Baralt, Felipe Larrazábal, Juan Vicente González y José de Austria; estriba
el caso de Blanco.
Cada uno de los cuadros históricos que tienen como tema, bien una batalla ,una campaña
militar ,un "sitio" ; giran siempre sobre la acción de los héroes de diferente jerarquía. Se nota,
que aunque se valora el aporte de la acción de los próceres civiles, son los héroes de carácter
militar, empapados de sangre y combatiendo sin cesar hasta la muerte, los que han de ser mejor
epopéyico. De la misma manera, si se considera cuáles personajes forman el núcleo del relato, es
evidente que aunque a Simón Bolívar se le exalta como a un semidiós, es José Antonio Páez
quien recibe el más cálido homenaje filial. Recordemos, que el antiguo coronel compartió
muchos momentos con el viejo Centauro de los llanos, cuando fue su edecán. Mientras que a
Bolívar, a Sucre, a Ribas, a los hermanos Montilla y a tantos otros los conoció a través de los
libros y documentos; a Páez lo pudo retratar oyendo de sus propios labios el relato vivo.
Como una manera de contrastar las virtudes de sus amados héroes con los vicios y otros
pecados de los que pudieran llamarse los <<anti héroes>> , en la obra se historia también a los
que como José Tomás Boves, Francisco Tomás Morales y otros de igual catadura hicieron la
(a) "Si Boves puede compararse al jaguar de nuestras selvas, Morales entre las fieras sólo
que derrama y se embriaga con el humo y el estruendo de las batallas. Morales es frío, su espada
no produce relámpagos; pero hiere, hiere sin misericordia. Después del combate mutila a los
cadáveres, degüella los heridos, y disputa el botín despreciado por Boves." (pp.33-34)
(b) "ni Boves ni Morales conocen la piedad: caer en sus manos es caer al sepulcro."
(p.34)
Las apreciaciones que hace el autor sobre "el pueblo" ,son - en gran parte - de signo
negativo y ellas responden a la caracterización de éste como masa de gente inferior, plebe o
limitaciones: ignorante, sin ideales, sin conciencia de su pasado, manipulable como un rebaño,
hostil a la causa republicana , fanático seguidor de los realistas. A pesar de todo, pudo
transformarse en un pueblo de héroes gracias a su aspiración a ser libre; sin embargo, sus
descendientes mostrarán gran ingratitud hacia los héroes libertadores. En suma, el pueblo es
visto como un pesado fardo que sólo sirvió para obstaculizarla, o en todo caso, como un
Grupos populares como el de los llaneros comandados por jefes como Boves y Morales
son considerados uno de los más temibles enemigos de la causa patriota; a los aborígenes, los
idealiza presentando a sus antiguos caciques como precursores de la lucha por la patria.
En relación con la idea de patria en la obra de Blanco se siguen los criterios de los
historiadores que le precedieron. Igualmente los sigue, cuando define los bandos enfrentados en
<<Realistas>> o <<Españoles>>.
Sobre la temática de los héroes y lo heroico hay en la obra amplia variedad de ejemplos.
Simón Bolívar, Ribas, Ricaurte, Girardot y muchos otros héroes, tanto militares como
civiles, son objeto del culto del autor. Sin embargo, sobre José Antonio Páez recaen los más
cálidos elogios. Al hablar del Centauro de los llanos dice que atentar contra sus glorias , es
Dice que esos muertos debieran ser sagrados pues obscurecer el brillo que irradia su
(2) Para evitar continuas e innumerables notas, de aquí en adelante, al final de cada "cita"
sólo indicaremos entre paréntesis el número de la o las páginas tomadas del texto (Op.cit.,
Madrid, 1978) - En algunos casos, se hará el subrayado de los aspectos fundamentales.
CAPITULO III
SECCION # 2
III. 2. Análisis General Comparativo del <<Corpus>> Historiográfico Venezolano.
) , de Yanes (Compendio ... y su Relación Documentada ...) , de Austria (Bosquejo ...) ,de
González (Biografía de José Félix Ribas) ,de Larrazábal (Vida de Bolívar ...) y de Blanco
especialmente ,de la del proceso de emancipación política nacional. Con dichas obras, se intentó
ofrecer una seria explicación sobre la génesis de la identidad venezolana como nación
Al caracterizar los orígenes coloniales del pueblo venezolano así como de las más
importantes instituciones del país, todos los que escribieron historias más o menos amplias
detallada narración de los hechos relacionados con la guerra de independencia política nacional.
peculiaridad de presentar unas "memorias en tercera persona" ,pues básicamente ,aportó sus
En los casos de Yanes y de Austria también estuvo presente ese aspecto "testimonial" de
la obra ,aunque todos , sin caer en una falsa modestia, se cuidaron mucho de mencionarse a sí
mismos como partícipes de muchos de esos eventos históricos. Sólo lo hicieron en casos
Austria trataron de que sus respectivas narraciones históricas tuviesen ,en lo posible, la mayor
Pueblo, Patria, Nación , República, los Héroes y lo Heroico, así como de las definiciones de los
bandos en pugna (Patriotas y Realistas) ; tuvieron la relativa similitud que les daba la influencia
(en mayor o en menor grado) de las concepciones políticas liberales, de los valores aportados por
ilustrado" ;mientras que en Juan Vicente González, Felipe Larrazábal y Eduardo Blanco está
presente más bien un "clasicismo republicano" que redescubre las virtudes de la antigüedad
clásica y hace referencias a ella. Por supuesto, este clasicismo republicano -- al que la
Revolución Francesa convirtió en uno de sus pilares estéticos y éticos -- se le hermanó con el
En cierta manera, la obra historiográfica de Rafael María Baralt recoge lo substancial del
enfoque , exento todavía, de ese tono extremadamente heroico-bolivariano del discurso histórico
general, todos ellos, consideraron que el contenido fundamental de las obras históricas debía ser
Eduardo Blanco, donde pareciera ser obvio ese carácter militar del contenido, también en las
restantes, se dedicaron sus autores a historiar básicamente las acciones bélicas del período
Si se compara la caracterización que hacen los autores estudiados sobre los realistas o
españoles, puede notarse que en la obra de Montenegro, comparándola con las demás, es donde
se hace la más nítida diferenciación entre las tropas y oficiales realistas de origen venezolano y
jefes al estilo de Boves y Morales. Los otros historiadores, que no tenían esas muy personales
razones del antiguo coronel realista, no insistieron mayormente en esa sutil diferencia que hubo
entre ser liquidado físicamente por Boves, Morales, Aldama, Chepito González, Remigio Ramos,
Rafael López, Rosete u otro carnicero similar ; o gozar de una ejecución a manos del verdugo
legal o de una expropiación de los bienes, previa sentencia de un tribunal de la corona española.
fuerza las acciones de los <<realistas>> ,pero especialmente Yanes , fue extremadamente duro
en su condena global a los realistas, expedicionarios o no, españoles de éste o del otro lado del
Atlántico.
localidad o centro poblado; otras, como simple agregado de población, masa de vecinos o
plebe o populacho.
régimen" ,no solamente por ser esta obra la primera en escribirse y publicarse sino por la
católica cerrada y cierta "deformación" profesional determinada por sus largos años de vida
militar.
ciertas categorías como <<pueblo>> visto como un colectivo orgánico, la representación ideal de
consideración la problemática social o económica. Sólo en la medida que era necesario, se trajo a
colación lo relacionado con el pueblo en su conjunto o con algunos segmentos de él, tales como
los llaneros, los indígenas, los negros o cualquier otro grupo específico.
Por ejemplo ,en el caso de los llamados <<indios>> se les menciona en todas las obras en
los mismos términos, y casi siempre en las mismas circunstancias, esto es, formando parte de
formando parte de las tropas patriotas, uno es el de los que participaron en la batalla de San Félix
, o el de los jefes y soldados que se mencionan acompañando a José Tadeo Monagas, los
La referencia a los llaneros, con excepción , del tratamiento más o menos geográfico y
sociológico que en parte hizo Baralt, se limita a señalar la destacada participación militar de
estos célebres lanceros de caballería, tanto en el bando realista como en el patriota. Lógicamente,
la mayor parte de las caballerías realistas de los tiempos de Boves son las que concentran la
atención de los narradores. También ,cuando posteriormente, José Antonio Páez era ya una
figura destacada (de 1816 en adelante) , se considera ampliamente el papel de éstos en las tropas
y oficialidad patriota.
(llaneros, negros, indios) ,especialmente cuando se les considera como masa de gente inferior o
plebe, es siempre negativa. En general, el pueblo es considerado como una masa ignorante,
fanáticamente realista, manipulable por los agentes peninsulares (especialmente por los curas) ,
una turba de enemigos jurados de la causa republicana, etc. A pesar de algunas sutiles diferencias
entre los autores (por ejemplo J.V.González no considera importante lo de la instigación del
clero) predominan entre los autores estudiados los señalamientos peyorativos hacia el pueblo
independencia de 1811, la asamblea patriótica que reconoció a Bolívar como Libertador y otros
eventos del año de 1813. Si se apartan esos y parecidos juicios en donde se aprecia al pueblo
como masa general de vecinos o pueblo como comunidad política, el panorama ideológico fue
muy poco favorable hacia la participación del pueblo venezolano. Por el contrario, si se destaca
en términos elogiosos la conducta de las élites , la llamada parte pensante del país, las ilustres
familias, los preclaros varones e ilustres matronas que con su conducta patriótica llevaron
adelante la gesta patriótica. A ellos y no al pueblo, se debió la libertad de la patria, pues la parte
sustancial del pueblo prefirió seguir el camino del saqueo, el pillaje y del fanático apoyo a la
República, Patria , no es ,en líneas generales , muy precisa. A veces utilizan estas nociones de
manera indistinta como términos similares. Podría decirse que mayormente utilizaron el vocablo
Patria para referirse al lar nativo, y por ello, el cognomento de patriota fue el más utilizado para
Igual que con la idea de Pueblo, al considerar los historiadores venezolanos la idea de
nación, patria y otras relacionadas ; el proceso de "modernización" del lenguaje del discurso
misma manera que con las otras nociones , es con Baralt cuando aparecen signos evidentes en
ese sentido. Proceso que se acelera con la escritura y publicación de las obras de Austria,
Con estos últimos historiadores -- los románticos -- especialmente con Blanco asistimos a la
La continua referencia a los modelos éticos y estéticos , a los paradigmas de valor militar,
discurso historiográfico nacional venezolano, tal como se ha visto en las obras y autores
estudiados. De la misma manera, cuando estos historiadores ,en menor o mayor grado -- directa o
indirectamente -- expresaron su opinión sobre cuál debía ser el tema central de sus obras, esto es,
qué cosa debía considerarse digna de su atención, escogieron como núcleo de ellas la narración
de todo ese proceso político-militar desarrollado en las primeras décadas del siglo XIX
venezolano. Junto con las campañas militares, batallas y combates gloriosos se rescató la
actuación histórica de las principales figuras heroicas nacionales o por lo menos se hizo el
bosquejo biográfico de los más notables actores civiles y militares de la gesta emancipadora. Por
eso pensamos que, más que a Heródoto, en este sentido, pareciera que nuestros historiadores
prefirieron a Tucídides (Historia de la Guerra del Peloponeso) o por lo menos a Tácito quien al
escribir sus Anales se dolió que los tiempos que le había tocado estudiar no tenían la importancia
de las gloriosas épocas anteriores; idea de la cual se hizo eco , como sabemos , Rafael María
Baralt cuando escribió que no había mucho que historiar de los tiempos coloniales comparando
sus hechos con los de la guerra de independencia. Definitivamente, ese "carácter guerrero" de
tradición clásica.
antigüedad grecorromana entre los que se cuentan los actores de la guerra de Troya cantados por
Homero. Igualmente los de las Vidas Paralelas recogidos por Plutarco, quien nos legó la
Catón el Menor, Demóstenes y Cicerón; Cayo Graco, Licurgo, Solón, Arístides y todos los otros
hasta completar medio centenar de figuras. Los paradigmas de maldad o de bondad, de pericia
militar y heroísmo, de grandeza o miseria humana los aportó en buena medida la Vida de los
Doce Césares de Suetonio así como la muy extensa obra historiográfica de Tito Livio
(Décadas ...) y la Historia ... de Polibio. Se establecieron paralelismos entre figuras como Julio
César, Augusto y los máximos héroes como Simón Bolívar. Dichas comparaciones también
permitieron censurar a los anti-héroes (realistas o patriotas) con el estigma de la imagen histórica
Especial mención sobre ciertos héroes como Alejandro Magno, Julio César , Arístides
(Batalla de Maratón) , Aníbal (guerras púnicas) y otros de igual estatura militar se consigue muy
a menudo en los textos históricos nacionales que apelaban a ellos como ejemplos de grandeza,
Quien haya leído a Tito Livio, Tácito u otro de los grandes historiadores romanos estará
de acuerdo con que los escritores venezolanos del siglo XIX dejan ver la influencia de tales
lecturas. Por ejemplo, todos esos historiadores "patricios" de entonces no escondían demasiado
su desaprobación por la conducta del pueblo venezolano. Ellos, en menor o en mayor medida,
criticaron acerbamente la supuesta actitud antipatriótica de vastos sectores que prefirieron seguir
las banderas españolas , dedicarse al saqueo y a las matanzas o ,habiendo recibido ese don
precioso de la libertad, no haber mostrado signos evidentes de respeto y veneración hacia los
héroes que la hicieron posible. Quienes han opinado que en los textos históricos de Tácito o en
los de Tito Livio está presente una posición de permanente descalificación del pueblo así como
de un cerrado espíritu romano pudieran ,de la misma manera , percibir similar tendencia en esos
planteamientos sobre la verdadera importancia del pueblo y de las clases superiores en el proceso
de emancipación.
Vicente González, Felipe Larrazábal y Eduardo Blanco tuvieron en común una gran admiración
por Simón Bolívar y los héroes patriotas que le acompañaron en su gesta libertadora. Para
expresarla firmemente, ellos asumieron como propio un discurso que se inspiraba en una
monumentos ,estatuas, templos y santuarios en honor de los héroes. En las obras de Plutarco,
Suetonio, Tácito y Tito Livio se reseña no solamente la crónica de los combates sino también
todo lo relacionado con el ceremonial de los "triunfos" que se le reconocían a los victoriosos
jefes militares; asimismo, el ceremonial desarrollado en los "rostros" del Foro romano, la
de las "matronas" , las honras fúnebres dedicadas a personas notables y en especial los honores
rendidos a los muertos en combate, el rescate de unas "águilas imperiales" perdidas en la derrota
de Varo ; los monumentos para honrar a los héroes tales como los arcos de triunfo, columnas
Si uno revisa las obras de los mencionados historiadores nacionales puede observar en
habían levantado los monumentos para honrar a sus héroes, Blanco , así como otros antes que
él , pide erigirlos en La Puerta, Carabobo, La Victoria y San Mateo. De igual manera se reseña la
celebración de los actos triunfales ( recuérdese las entradas de Bolívar como héroe después de
sus campañas en Caracas, Bogotá, Angostura, Quito, Guayaquil, Lima, Cuzco y muchas otras) ;
los homenajes a los mártires de Quito , el elaborado ceremonial para honrar a Girardot, el
recuerdo del heroico sacrificio de Ricaurte, los elogios a las "matronas" de Caracas y de otras
destacado batallón que había sido privado antes de su nombre (batallón "sin nombre"
Es fácil observar que las descripciones que aparecen en las obras historiográficas
venezolanas reflejan una clara convicción ideológica. Los historiadores del país siguieron un
conjunto de preceptos éticos y estéticos al someter a juicio el proceso histórico propio, éstos no
fueron otros que los aprendidos a través de la formación literaria, filosófica e histórica que esas
lecturas hicieron posible. Lógicamente, como puede suponerse, esa formación de "clasicismo
Consideramos que el discurso historiográfico tejido por los señalados autores, contribuyó
en altísimo grado , con la conformación de una nueva identidad venezolana. No teniendo todavía
-- para entonces -- el pueblo venezolano claramente estructurada dicha identidad, era imperativo
desarrollarla a partir de una nueva conciencia que sustituyera la arraigada tradición de origen
Iglesia Católica (mentalidad de antiguo régimen) . En relación con esto último, era fundamental
el apego del bajo pueblo a esas expresiones del culto religioso elemental impregnado de
fanatismo.
Sabemos, que más que tratar de edificar una identidad nacional sustentada en todo
aquello que significase continuidad con lo preexistente en los trescientos años de dominio
hispano (ella hubiese sido una "nacionalidad satisfecha") , se prefirió buscar una identidad propia
políticos. No obstante, dado que era un inmenso vacío el que debía llenarse, se apeló a la
construcción de una identidad que partía ,como lo dijo Mario Briceño Iragorry, de un verdadero
"hiato" histórico, montando una conciencia histórica que pretendía explicarlo todo partiendo de
esos días aurorales del 19 de abril de 1810, echando al olvido esos trescientos años de vida
colonial (o "provincial" como otros prefieren) , sólo vistos a la luz de los negativos juicios de la
Por querer negar todo lo que significase el pasado (bueno o malo) se insistió en construir
una nueva historia que explicara y justificara la profunda transformación política iniciada en
esfuerzo en demostrar que éramos una nación distinta no sólo de los enemigos derrotados (los
españoles) sino también de todas esas otras naciones hermanas del continente.
una república sobre bases formales liberales. La tarea de tal historiografía no era otra que cantar
a la libertad política alcanzada a costa de grandes sacrificios en vidas y bienes materiales, en una
larga y cruenta guerra contra una malvada nación de la que sólo se recordaba todo el mal
infligido a sus colonias, llegadas a una edad en que debían y , supuestamente ,podían ser libres.
Toda esa gesta histórica recogida en la obra de notables escritores venezolanos , tenía
como elemento central (en mayor o en menor grado) las acciones de los héroes o próceres de la
nueva república, en especial la vida y el quehacer político-militar del Libertador Simón Bolívar.
Esa Historia Patria, esa historia que reivindicaba a los héroes de una nueva nación ,una
nueva república orgullosamente libre e independiente, acrisolada en las acciones de los cabildos,
Sabemos que ,para estudiar el siglo XIX venezolano, especialmente todo lo relacionado con
obras como las de Feliciano Montenegro Colón, Francisco Javier Yanes, Rafael María Baralt,
José de Austria, Juan Vicente González, Felipe Larrazábal, Arístides Rojas E. y José María Rojas
E. (el Marqués de Rojas). También deben considerarse los trabajos biográficos de Ramón
Azpurúa y colecciones documentales como las de Cristóbal Mendoza & Francisco Javier Yanes;
la de José Félix Blanco & Ramón Azpurúa y la de Daniel Florencio O'Leary ; todas ellas
ellas catalogadas como héroes o heroínas de la patria, acompañadas también de algunos "anti
héroes" y figuras menores, ganó la atención de biógrafos, oradores, poetas, periodistas y otros
eran del todo ,considerándose su amplitud y originalidad intelectual; en otros casos (en su
dicha calificación; pues buena parte de esos escritos , sólo reproducían o resumían los
Tales producciones intelectuales ,presentes casi siempre en los actos de culto patriótico
rendido a los héroes o próceres en el Panteón Nacional, en las iglesias y cementerios, en las
plazas y monumentos públicos; fueron una importante herramienta de concientización nacional
***************************
Importancia de la Prensa.
representaban un grupo selecto; eran los privilegiados que podían acceder a la cultura intelectual.
La lectura de las obras históricas, los manuales escolares y las lecciones recibidas de insignes
maestros ,especialmente para aquellos que tuvieron la suerte de ser discípulos de Montenegro
Colón, Juan Vicente González, Felipe Tejera o algún otro buen maestro; todo ello permitió a las
intelectualmente como para enfrentar el reto de los estudios académicos, incluyendo la Historia,
era el que usualmente fundaba, redactaba o por lo menos leía los periódicos y revistas.
Sabemos que la prensa venezolana del siglo XIX fue fundamentalmente una prensa
político-partidista, o más exactamente, electoral. Ello explica la gran cantidad de periódicos que
aparecían y rápidamente desaparecían al cumplir el objetivo político para el cual habían surgido.
históricos. Cuando en el capítulo II estudiamos el impacto que tuvieron las obras de Feliciano
Montenegro Colón, Rafael María Baralt y otros autores; señalamos que la prensa del período
1830-1846 prestó muy poca atención al asunto. Reseñamos sí, algunos trabajos aparecidos en La
Gaceta de Venezuela ; El Venezolano ;El Liberal ; La Bandera Nacional; El Nacional; El
Liceo Venezolano. En ellos aparecieron trabajos sobre los homenajes a los héroes,
especialmente los relacionados con el Libertador Simón Bolívar (traslado de sus restos).
En las últimas décadas del siglo, aparecieron revistas literarias y periódicos generales que
Un diario como La Opinión Nacional que empezó a circular hacia 1868 y se mantuvo a
lo largo del período guzmancista simboliza muy bien a ese periodismo finisecular. Este y las
;llenaban el debate político nacional con sus campañas a favor o en contra de determinadas
excepcionales reportajes. Ejemplo de esos reportajes fueron los que dedicó La Opinión
Nacional con motivo de los funerales del Padre y general José Félix Blanco, la reseña de las
honras fúnebres del general Carlos Soublette o de las exequias del general José Antonio Páez.
personaje fallecido, documentos relacionados con el difunto (hoja de servicios, etc.) pasaban a
formar parte de esas publicaciones denominadas <<Coronas Fúnebres>> que analizaremos más
adelante.
recogidas en la prensa en momentos como el año Centenario del Natalicio del Libertador Simón
Bolívar en 1883, así como en los años precedentes e inmediatos a la fecha central.
Tales publicaciones periodísticas aunque limitaban su temática "histórica" a la
En las principales ciudades del país que contaban con un periódico local o recibían los
que se editaban en Caracas y otros centros culturales como Valencia, Maracaibo, Mérida y
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La Publicación de Textos Relacionados con los Próceres Nacionales, los Héroes y las
Heroínas.
Para tener una idea sobre el tema a explorar, examínese esta lista (en orden alfabético ) de
aquellos que recibieron esa atención de los intelectuales venezolanos. Lógicamente, el registro
debe estar incompleto, pues suponemos que muchos de esos trabajos no pudieron ser llevados a
la imprenta entonces, o sus escasos ejemplares publicados desaparecieron hace largo tiempo.
reivindicación:(1)
- Bolívar, Simón: 1831,1833, 1835, 1838, 1839, 1840, 1841, 1842, 1843, 1845, 1851, 1866,
1869, 1872, 1873, 1874, 1875, 1876, 1877*, 1880, 1883, 1886
***
Otros personajes objeto de atención :
- José Rafael Revenga (atacado por un familiar) -- 1849 --
- José Tomás Boves (antihéroe) -- 1863, 1895 --
- <<el Tirano>> Aguirre (1872)
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1. Apoteosis.
Volumen que recogía diferentes materiales en prosa o en verso publicado con motivo de la
2. Corona Fúnebre.
2.1. Discurso
2.5. Biografía
3. Honras Fúnebres.
3.1. Discursos
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demasiado este trabajo , solamente presentaremos los más representativos. Al dar inicio al
examen de los seleccionados, además de no reseñarlos a todos, tampoco será posible darles
similar extensión en el ensayo , pues ello depende mucho de la cantidad de textos localizados así
como de la calidad e impacto de los mismos. Por supuesto que, al analizar los diferentes textos
relacionados con los próceres escogidos, necesariamente, se hará mención de muchos de los
restantes.
Un caso muy especial, por razones obvias, es el de los materiales relacionados con el
de la atención intelectual, buena parte de ellas sólo fueron biografiadas una sola vez gracias al
esfuerzo de don Ramón Azpurúa que ,como se sabe , redactó centenares de biografías o recopiló,
corrigió y amplió algunas de las que ya habían sido publicadas. Haciendo un sencillo ejercicio
aritmético podemos concluir que para el período estudiado ,la mayor proporción de trabajos
apareció a partir de 1870 (período guzmancista) .De un total de 136 trabajos localizados, sólo
unos 33 aparecieron antes de 1870, mientras que en las décadas de 1870-1890 se publicaron unos
93 trabajos, agregándoseles, unos diez que aparecieron en la década final del siglo. Debe, sí,
anotarse que no se contabilizan los trabajos sobre Bolívar (el único que registra publicaciones en
casi todos los años del período) , pero si se toman en cuenta las biografías recogidas por
Azpurúa, casi la mitad de ese subtotal. Otra cuestión que debe tomarse en cuenta, es que muchas
En la generalidad de los casos, las publicaciones aparecidas en las primeras décadas del
siglo XIX, corresponden a textos relacionados con el fallecimiento de los respectivos próceres
(Cristóbal Mendoza, Bolívar, Zaraza, Bermúdez, Mariño) . Esas circunstancias (el fallecimiento
El mayor número de homenajes literarios registrados en las tres últimas décadas del
pasado siglo, se explica no sólo por el evidente interés del guzmancismo en manipular
políticamente el culto a los héroes como una consistente estrategia nacional legitimadora;
también hubo una razón biológica: muchos de esos próceres iban desapareciendo físicamente ,
dando así oportunidad a las consabidas ceremonias funerarias. Asimismo ,a los nacidos a finales
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Como ya se anunció, se examinará sólo una parte de todo ese vasto y variado conjunto de
expresiones intelectuales. Entre ellas y en este orden: las biografías, los discursos patrióticos en
sitios públicos, las obras que sirvieron para reivindicar la memoria de un héroe agraviado, las
coronas fúnebres, las honras fúnebres, las apoteosis y los poemas patrióticos.
Es de destacar, que la publicación de biografías sirvió para múltiples propósitos. Algunas
veces honraron la memoria de un prócer recién fallecido, en otras oportunidades sirvieron para la
"apoteosis" de una personalidad que recibía el homenaje en una ocasión posterior (centenario de
ellas para reivindicar una figura a la cual sus deudos o algún admirador consideraban maltratada
ellos fueron posteriormente incorporados en obras mayores, como fue el caso de la vasta
Sobre esta obra de Azpurúa (2) es importante señalar que incorporó unas 257 biografías
iglesia católica. De tales "Hombres Notables" ,unos ciento doce son venezolanos y el resto,
hacer notar que muchos de esos biografiados no venezolanos fueron partícipes en el proceso de
emancipación política de Venezuela, algunos ,de manera trascendente, como fueron (entre otros)
Piar, Brión, Campo Elías, Villapol, Mac Gregor, O'Leary, Padilla, Girardot, Ricaurte y
Santander.
amplía algunas de vieja data. En otros casos incorpora algunas que fueron publicadas en la
Entre las biografías escritas por otros autores y publicadas antes de 1877 estaban las de
Fernando de Peñalver, José Francisco Bermúdez, Martín Tovar Ponte, Mariano Montilla, Juan
Pablo Ayala, Carlos Soublette, Simón Bolívar, Luis Ignacio Mendoza, Pedro Zaraza, Cruz
Carrillo, Juan José Flores, José Tadeo Monagas, Diego Ibarra, Diego Bautista Urbaneja,
Francisco Esteban Gómez, Francisco Mejía, Tomás de Heres, José Laurencio Silva, José Agustín
Loynaz, Rafael Ortega, Cristóbal Mendoza, Miguel José Sanz, Pedro Hernández, Juan Guillermo
A pesar de la tentación ,por ahora nos limitamos solamente a mencionar tales textos, pues
analizar el contenido de cada uno nos llevaría a extendernos demasiado en esta sección.
menor de una obra más amplia. No obstante, tal publicación de las biografías de los próceres
nacionales fue una de las manifestaciones intelectuales más usuales de culto heroico en el país.
Mejía (1889) .Como se puede observar, no solamente está cubierto un amplio período sino que
se incorpora una figura femenina, una de las pocas que recibió la atención de los biógrafos.(4)
escribió ,como sabemos ,otros trabajos de Historia ,entre ellos una poco conocida biografía del
general Mariano Montilla, publicada con fecha de 30 de septiembre a raíz de la muerte de este
Escribió el autor (6), todavía bajo la dolorosa impresión de la desaparición del admirado
amigo y camarada de armas (22 de septiembre de 1851) , una muy completa biografía del prócer.
Dice que éste nació en Caracas el 8 de septiembre de 1782 en el seno de una ilustre ,noble y
distinguida familia. Fueron sus padres, el doctor Juan Pablo Montilla y doña Juana Antonia
Padrón.
ciudad natal y posteriormente viajó a España a servir en el cuerpo de Guardias reales de Corps,
llegando a participar en importantes campañas militares a las órdenes del Príncipe de la Paz.
Cumplidos sus deberes en la metrópoli, logró licencia para regresar a su patria y así encargarse
de los negocios de la familia, pues su padre había fallecido. En esas nuevas circunstancias, pudo
partir de 1810-1811.
Fue Montilla ,junto con los Tovar, Toro, Ribas, León, Ibarra, Ustariz y otros ilustrados y
ricos ciudadanos; uno de los primeros promovedores de la revolución. "Aquellos eran los
próceres de la revolución ,los defensores de la causa del pueblo, los legítimos representantes de
la nacionalidad americana en esta región del Nuevo Mundo, que habían de comprometerlo todo
capitulación de 1812 por encontrarse realizando una importante misión del gobierno en las
Una vez que se reanudó la lucha en 1813, corrió de nuevo a alistarse en las filas
retiró a Cartagena y allí dirigió hasta el final la heroica resistencia de esta sitiada ciudad durante
104 días, hasta que con gran audacia logró ,junto con los sobrevivientes, romper el cerco y
Considerando que sus relaciones con Bolívar no eran cordiales entonces, no participó en
las expediciones organizadas hacia Venezuela en 1816; prefirió, en aras de la armonía, viajar a
los Estados Unidos de Norte América así como cooperar en una acción militar para ayudar a la
emancipación mexicana.
Cuando los patriotas, dirigidos por Bolívar ,habían logrado consolidar sus posiciones en
venezolanas. Lo hace tomando servicio en las tropas mandadas por Rafael Urdaneta en el
Oriente y luego pudo reencontrarse con el Libertador en una ceremonia realizada en Angostura,
cuando éste había regresado de su victoriosa campaña de Nueva Granada en 1819. Restablecida
la gran amistad que antes había unido a ambos, el comandante supremo le pidió a Montilla que
se dirigiera a las costas de Cartagena para poder liberar toda esa importante región que ya este
veterano bien conocía. Fue así que "Montilla parte de Angostura autorizado por el Gobierno y
colocado por Bolívar en la posición en que podía desplegar su genio ,sus conocimientos, su amor
intenso a la independencia de su patria, y a las virtudes cívicas y militares de que ya había dado
muestras." (8)
Después de veinte meses de dura campaña militar, logró Mariano Montilla entrar a la
recibidos (Bolívar le pidió que conservara las célebres llaves de Cartagena) fue ascendido a
1824.
El autor reitera su admiración al recién fallecido prócer militar y señala que "hace falta
su presencia bajo el cielo de nuestra patria ,rica tan solo de hijos ilustres" . Agrega que la nueva
generación debe ofrecer su gratitud "a esos hombres de alma fuerte y corazón magnánimo que
opusieron sus pechos a las agresiones del despotismo" .Cree igualmente que se debe "rescatar del
sepulcro su gloria entera ,para que el amor y las tradiciones la lleven de corazón en corazón hasta
la remota posteridad y sea el panteón de su generosidad y de sus hazañas el sentimiento mismo
de libertad que sembraron ellos a manos llenas en esta tierra". Y afirma , enfáticamente, que
"detrás de esos hombres no hay más que oscuridad, la degradación del Nuevo Mundo, un vasto
dominio a disposición del monopolio, o el encierro de siervos despreciados ... ellos aparecen de
pie al frente de nuestro continente ,de nuestra existencia republicana y de nuestros anales, como
los Andes que nos cercan por ambos mares y a cuyas faldas combatieron sin descanso ..." (9)
En esta semblanza biográfica el autor cierra sus palabras de homenaje afirmando que
"al lado de Bolívar ,Montilla y todos esos héroes , que nada debieron al encadenamiento de
sucesos anteriores ,a los cuales por el contrario levantaron un dique indestructible , vivirán en la
memoria y con la vida de cuantos pueblos vengan al mundo colombiano a recibir las
inspiraciones de sus aires regeneradores y ensanchar los dominios de la libertad."(10)
Como nos fue difícil sintetizar mucho más el trabajo de Austria sobre Mariano Montilla,
recordado por sus heroicas acciones en La Victoria, San Mateo y Cartagena; también lo era por
Libertador. Lógicamente, Austria no echa mucha luz sobre ese incidente ,como tampoco lo hace
sobre las razones por las cuales mientras Montilla resistía valerosamente en Cartagena en los
meses finales de 1815, Simón Bolívar tuvo que contentarse con organizar sus futuras campañas
en su exilio de Jamaica. La razón, la sabemos, fue que este biógrafo ,al igual que muchos otros,
prefirió destacar sólo lo magnánimo de ambos héroes cuando ya se habían reconciliado de los
pasados enfrentamientos. El recordar las heroicas acciones militares y dejar en la oscuridad las
duras recriminaciones que hubo entre los próceres nacionales a lo largo de la dura guerra de
emancipación; se creía , era la mejor manera de rendir homenaje a esas figuras exhibidas como
Un comentario adicional.
Igual que el caso anterior, Francisco Cobos Fuerte , quien fue ministro del general
Soublette y lo conoció de cerca, escribió en 1870, todavía bajo el impacto de la desaparición del
amigo , unos Materiales para la biografía del general Carlos Soublette en los que ,a manera
Ese gesto de Francisco Cobos al igual que el de José de Austria al redactar la biografía de
Mariano Montilla y darla a conocer a raíz de la desaparición física del ilustre prócer de la
independencia comprueba lo afirmado al principio sobre los múltiples propósitos que cumplió
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Eulalia Ramos Sánchez de Chamberlain
En 1885, Arístides Rojas escribió una biografía - homenaje a la heroína de Oriente. (12) Inicia
dedicado a la señora Eulalia, a quien califica de una de las primeras heroínas de la Revolución
Venezolana y la compara con Juana de Montilla, Ana T.Toro de Ibarra, Luisa Cáceres de
Arismendi y otras matronas heroicas que hicieron grandes sacrificios por la patria.(13)
En la segunda parte del texto entra Rojas propiamente a biografiar a su personaje y narra las
Barcelona.
Con gran dramatismo, se refiere el trágico fin de la pareja en medio del feroz asalto de las
tropas realistas el 7 de abril de 1817. Allí, cuando su esposo vio que parecía todo llegar a su fin,
optó por suicidarse y pedirle a su bella esposa que hiciera lo mismo para evitar los
acostumbrados vejámenes de la soldadesca. Sin embargo, ésta aún estaba viva cuando entraron
los primeros asaltantes. Supuestamente un oficial le propuso salvarle la vida a cambio de que
diera vivas a España y mueras a los patriotas, pero como Eulalia se negó a la bajeza fue muerta a
Don Arístides Rojas culmina su narración trayendo a colación los testimonios de otros
historiadores que refieren lo ocurrido en esa situación de horror y dolor para la patria.
La citada biografía, la obra dramática , así como una "Oda" incluida ,son un modelo que
reproduce muy bien las preocupaciones o valores del siglo XIX venezolano. Se le canta a esas
delicadas y abnegadas damas, modelos de virtudes del hogar y de la patria. A ellas se les pinta
siempre como <<matronas>> que no escurrieron el bulto por su condición de tales, más bien, se
les vio siempre en la primera línea del deber afrontando las batallas, emigraciones, privaciones,
las persecuciones y el exilio. Esas modélicas damas, émulas de aquellas que adornaban las
páginas de la historiografía clásica grecorromana, una vez más, servían de elemento comparativo
moral, de referencia ética y estética en aquellas narraciones históricas que mayormente
Aunque no negamos que en medio de tales circunstancias de inhumana guerra las mujeres al
igual que sus esposos, hijos, hermanos fuesen capaces de los más nobles y altos sacrificios; es
lógico también suponer, que así como ocurrió con sus contrapartes masculinas, los escritores se
deslizaron por el camino de la idealización de tales hazañas, llegando incluso en algunos casos a
la fabricación de verdaderas leyendas patrióticas, muy buenas por lo demás, para levantar la
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El prócer Ramón Centeno Mejía fue biografiado por J.M. Seijas García (14). El autor de la
obra publicada en 1889 indica en una nota enviada al Dr. Antonio Carreyó (en Barcelona)
hace Seijas su bosquejo biográfico de Centeno Mejía. Este nace en Cumaná el 9-10-1807 y desde
muy joven entra al ejército patriota (1820) , participa en la batalla de Tarqui dirigida por A.J.de
Sucre y se mantuvo fiel al Libertador cuando sus compañeros de armas se sublevaron contra la
Gran Colombia en Maracaibo. En esa circunstancias ,prefirió irse hasta Santa Marta a acompañar
Ya muerto Bolívar, se trasladó a Bogotá para apoyar al general Urdaneta (1831) y , al volver a
Santa Marta, fue hecho preso y expulsado después a Jamaica. Posteriormente (1832) pudo
regresar a Venezuela , aunque consiguió mucha resistencia del gobierno de Páez que lo catalogó
de <<boliviano>>. A pesar de todo , el pueblo si lo recibió muy bien y pudo finalmente asentarse
gobierno de J..Falcón.
La breve y sencilla relación de la vida de este luchador patriota nos muestra esa peculiar
manera de presentar los hechos por parte de los escritores que cultivaban ese género para la
época.
algo muy relevante que permite considerarlos como partes de ese círculo de fundadores de la
patria. En este caso, se agrega otro elemento como es el utilizar la biografía de un prócer como
expresión patriótica que contribuye a la apoteosis de otro, en este caso, del tempranamente
malogrado general Anzoátegui a quien con justicia se le organizaron tales festejos públicos ese
año de 1889.
oportunidad de apreciar sus características. Nos parece que la sencillez y limitada extensión de
estos textos les permitió penetrar mucho más que esos vastos trabajos como los de Felipe
Larrazábal. Además , usualmente ,las biografías atraen mucho la atención del público lector no
especializado. Igual que las biografías, los discursos patrióticos en los actos públicos tuvieron
gran importancia y fueron también muy populares en la Venezuela del siglo XIX.
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Los discursos patrióticos pronunciados en los actos realizados en las plazas del país ,en
los cementerios y otros espacios públicos servían para celebrar alguna efeméride, la instalación
Aunque en las exequias de muchos próceres fallecidos a lo largo del siglo XIX, en la
se pronunciaban discursos patrióticos, sólo algunos de ellos se publicaban. Ese fue el caso del
pronunciado por Felipe Santiago Casanova el 12 de febrero de 1870, día del entierro del general
Carlos Soublette. Esta semblanza de la personalidad del prócer fallecido fue publicada
Sin más preámbulos, veamos unas muestras representativas de este tipo de literatura
Los textos sobre Miranda son numerosos. A pesar de todo el carácter polémico de su vida
(resultó hasta execrado por algunos) , el Precursor recibió la atención del culto oficial y también
En los años anteriores y posteriores a la magna efeméride de las fiestas del Centenario del
Libertador en 1883 se realizaron múltiples eventos patrióticos en todo el país. Entre esos actos,
hubo uno el 23 de julio de ese año memorable, se inauguró una estatua del generalísimo en la
plaza del Panteón Nacional. Con ese motivo el Licenciado Luis María Castillo pronunció un
importante discurso (15) .Este, quien se califica a sí mismo de peregrino que vino a <<esta tierra
santa que guarda con amoroso respeto el sepulcro de Bolívar>> dedica su hermosa pieza oratoria
¿ Quién ignora sus hechos portentosos que dan argumentos a otra Eneida?
¿ Quién no sabe que ese mentor de nuestra independencia consagró toda su vida al servicio de
Y agrega que sus palabras no son una biografía, pues en ellas no cabe la inmensa gloria del
héroe. Dice que ya se publicaron los documentos de su biografiado gracias a la labor de Arístides
Rojas y que ahora ofrece su grano de incienso para demostrar que <<la calumnia no puede
Después de esbozar los rasgos biográficos y referirse a los hechos de 1810-1811 pide que
"calle la maledicencia, enmudezca la calumnia ante esa imagen que se ve y esa historia que se
escribe! [nos recuerda el orador que] entre los romanos, por Ley Remia se marcaba con un
hierro candente la faz del calumniador [por ello] la posteridad de Miranda escribe !
Kalumnatior ! sobre la frente de Urquinaona, Torrente y Díaz voceros de difamación,
falsificadores de la historia, que trataron de arrebatarnos con la gloria excelsa de Miranda,
nuestra propia gloria." (17)
Añade que debe llenarnos de orgullo patrio que el nombre del paisano esté incorporado en el
Arco de Triunfo de París junto con otros heroicos compañeros de Napoleón el Grande y que
Concluye diciéndole al precursor " ! Y tú, Miranda , álzate victorioso sobre tu tumba, que la
calumnia vocinglera no podrá mancillar jamás tu nombre, y entra desde hoy con Bolívar el
Resulta chocante , a veces, como puede un orador plantear cualquier asunto (como el de este
caso) importándole solamente que su auditorio o sus lectores comulguen con sus puntos de vista.
Apartando la belleza literaria del discurso (que sin duda la tenía), éste es discutible en cuanto a la
verdad que de él se desprendía. Era cierto que a Miranda se le había calumniado y también era
cierto que Miranda había recibido el reconocimiento de la Francia agradecida a sus servicios a la
Revolución; pero de la misma manera se decía una verdad a medias cuando se quería hacer ver
que los supuestos difamadores ,falsificadores y calumniadores eran sólo esos <<historiadores>>
Es conocido que muchísimos patriotas (Bolívar entre ellos) habían cuestionado en términos
muy duros la actuación de Miranda y hasta habían participado personalmente en los tristemente
célebres días finales de la Primera República ,cuando Miranda fue escarnecido por su conducta
de entonces. Considerando este razonamiento, ¿ Cómo era posible plantear que las acusaciones a
Nuevamente se reitera la creencia en que para hacer homenaje a quien se admira y sobre
quien se aspira dirigir el culto de la nación ,débese echar un <<manto de olvido>> sobre lo que
se considera inconveniente a la gloria del héroe, es decir, se sacrifica la verdad histórica en aras
Durante ese año de 1883 -- Centenario del natalicio del Libertador -- como parte del programa
Gómez. Para darle la mayor solemnidad al acto, Jesús M. Espíndola H. pronunció un bello
discurso de orden (19), la noche del 14 de octubre de 1883, en La Asunción, isla de Margarita.
El discurso inaugural pintó una cuadro histórico que se inició con la descripción del pasado
"fue un tiempo, señores, en que la América gemía bajo el peso de la más horrible servidumbre.
Toda la vasta extensión del continente era una ergástula donde no se oía sino el chasquido del
látigo del rudo mayoral, el grito de agonía de una raza desgraciada y el ruido siniestro de las
cadenas del esclavo. --- El infeliz Americano estaba privado en absoluto de sus derechos ..." (20)
Pinta la redención de los oprimidos afirmando que "el esclavo se hizo héroe, el siervo
ciudadano, soldado el niño adolescente (...) trabose la lucha encarnizada y tenaz, y fue teatro
Hace el orador una evocación de la memoria de Bolívar, Mariño, Maneiro, Mata, Arismendi y
del marino Antonio Díaz a quien llama émulo del almirante Nelson; antes de afirmar ante su
auditorio que "aquí nació Francisco Esteban Gómez, intrépido y esforzado como Aníbal, como
Leonidas sagaz y estratégico, inmaculado como Arístides, padre y protector del pueblo como el
primero de los Gracos. -- Aquí nació Gómez, a cuya memoria veneranda rendimos en este
momento solemne el tributo merecido de nuestra profunda admiración y cuya efigie ha venido
recibiendo en este día que habrá de formar época en nuestros anales sacrosantos, las oblaciones
del pueblo redimido a los golpes de su espada triunfadora."(22)
próceres regionales y nacionales; pero no contento con ello, lo hace escoltar por los arquetipos de
la historiografía clásica grecorromana: Aníbal, Leonidas, Arístides y los hermanos Graco. Sin
duda que el orador, hombre culto, conocía bien estos modelos, y se los hace conocer a su
auditorio y a quienes serían sus lectores. La intención, no era otra, que dejar en las conciencias
La descripción del combate del 31 de julio de 1817 en el cerro de Matasiete donde los "hijos
de la Esparta Colombiana" comandados por Gómez derrotan a Morillo y sus tropas ,le da pie a
Espíndola no sólo para llamar al escenario de la batalla "roca altiva, eterno monumento de
gloria" sino también para calificar a Morillo de "bárbaro y fiero como una creación siniestra del
Averno".
Esas fuerzas ,a cuya cabeza estaba Morillo, fueron enfrentadas por los escasos defensores de
la patria, los descendientes de los caciques de la América, los argonautas invencibles de nuestros
mares.
Y agrega, que en medio de la batalla, el jefe patriota, Gómez, desafió a Morillo a combatir
entre ellos pero su adversario no aceptó. Por eso tuvo que continuar la pelea hasta derrotar a los
realistas.
Narra finalmente el orador, que Morillo en una carta al rey de España dijo que los
margariteños eran "gigantes que peleaban como tigres y se presentaban al fuego y a las
bayonetas con un valor de que no había ejemplo en las mejores tropas del mundo."
La pieza de oratoria patriótica presenta varios filones que pueden ser críticamente
considerados. Primeramente, tenemos esa reiterada visión que se inscribe dentro de la llamada
<<leyenda negra>>. Parece que los intelectuales de entonces ,se deleitaban todavía , con lanzar
esa carga de adjetivos anti-hispanos. Seguía vivo el ritornelo del supuesto terrible pasado de
cadenas, esclavitud, servidumbre, látigos y obscuridad total: pero siempre sin aclarar quienes
fueron los que realmente soportaron cadenas y látigos (no simplemente en sentido figurado) y
quienes disfrutaron de las ventajas de descender no de los caciques sino de los que derrotaron a
los caciques.
La descripción de los combates, las características de los vencedores y los derrotados y sobre
todo la del jefe (Morillo) tienen toda la exageración que puede esperarse en estos casos.
Contrasta inclusive con el comentario que se hace del <<Pacificador>> cuando se historió la vida
de Bailén y Zaragoza, es decir, un competente soldado que había defendido su patria invadida
Igual que en otras oportunidades, debe destacarse la tremenda importancia que estos
discursos patrióticos tenían. Ellos eran la fuente fundamental que nutría al pueblo venezolano
que no teniendo acceso directo a los testimonios de los grandes historiadores y sus obras, tenían
oratorias.
******************
La noche del 27 de octubre de 1884 ,en La Asunción, capital de Margarita, se hizo un acto
público para celebrar la instalación de un busto de bronce del libertador de la isla. Esa noche de
fervor patriótico regional, Pedro Aguirre Guerra saludó el evento con un memorable discurso.
(23)
El orador del acto planteó - con el estilo propio de la época - su homenaje en estos
términos:
Dijo éste entonces, que hubiera querido tener el talento de Olmedo, Fidias y Eduardo Blanco
para hacer una oración digna del héroe. Rememoró las gloriosas batallas de Junín, Pichincha,
Ayacucho, San Mateo y Matasiete ; recordó al patriota insular ,general Francisco Esteban Gómez
, y a la derrota que éste le propinó a Morillo (el vencedor en Bailén y Zaragoza) y calificó al
Llamó al homenajeado, hijo de la invicta Margarita, la moderna Esparta, tierra heroica; donde
este Espartano de Colombia luchó contra la tenebrosa noche de la esclavitud y tiranía que nos
patria
tiñen con sus pálidos fulgores los horizontes de Colombia; la aurora de la libertad ilumina las
cimas de Los Andes, y Bolívar ! Sol de gloria ! , derrama sobre suelo americano los resplandores
de su luz, calienta el pecho de los que llevan en sus venas la sangre de los Incas y funde en su
fuego la cadena del esclavo."
Junto con Arismendi, desfilan por el discurso los numerosos patriotas nativos: Mariño,
Gómez, Maneiro, Díaz, Fermín, Figueroa, Silva, Paz, Ruiz, Tubores. Ellos, son la antesala para
narrar a grandes rasgos la vida del prócer, su actuación como gobernador de la isla, sus
desventuras como prisionero, el drama de su bella esposa al perder el hijo recién nacido en la
prisión. En fin, se compara a Arismendi con Aníbal y le llama héroe valeroso ,que como terrible
rayo , redime la isla y la convierte en la tumba de los tiranos y patria del pueblo más heroico de
la Tierra.
Curiosamente, en una época (1884) en que ya iba cediendo un poco esa desaforada <<leyenda
negra>>, el orador insiste en pintar el pasado colonial como una tenebrosa noche de esclavitud y
tiranía que nos hizo gemir por tres centurias. Llama también la atención esa dolida referencia a
los que llevan en sus venas la sangre de los Incas. No podemos evitar evocar las ideas de Ángel
Bernardo Viso sobre esa tendencia ,muy propia de las élites venezolanas, a mirar ese pasado
El discurso de Pedro Aguirre Guerra es el que se eleva más hacia ese Olimpo de los héroes.
Hace acompañar a la figura del homenajeado con sus pares de la isla (Francisco Esteban Gómez,
Santiago Mariño, Maneiro, Díaz) pero también lo escolta con el gran Simón Bolívar, el
legendario Aníbal y con el jefe expedicionario español don Pablo Morillo, a quien no descalifica,
sino todo lo contrario, le reconoce todo su prestigio militar para así engrandecer más a su
llegase al extremo de descalificar al máximo representante del enemigo, el general español Pablo
Morillo.
Discursos en el Centenario de Soublette
1870 -- día del entierro del general Carlos Soublette -- se hizo una semblanza de la vida militar y
acción política del ilustre prócer. (24) Ese mismo discurso sirvió como homenaje en años
posteriores, cuando se publicó como Ofrenda a la Memoria del General Carlos Soublette en
"Hoy al pagar su tributo a la naturaleza, después de ochenta años de edad; el soldado en los días
de peligro; el magistrado en el despacho administrativo; el diplomático defendiendo los intereses
de su patria en Europa, el legislador en muchas de nuestras asambleas, y el estadista a quien
tanto debe esa misma patria, deja por toda fortuna a su familia, una noble indigencia y un
nombre inmaculado. La república sabrá recompensar aquellos eminentes e importantes
servicios." (26)
Otro discurso, el de Luis Sanojo, pide a la república que se vista de luto, y al hacer la
semblanza de la vida militar y política del finado, insiste una vez más ,en que Soublette dejó a su
familia en la pobreza, lo que dice mucho de su probada honradez. Y agrega como elogio final,
que en los últimos años de su vida éste asumió el papel de un Néstor. (27)
Las ideas enunciadas en los citados discursos anteriores no iban más allá de lo que las
materiales; y se vuelve a apelar a las figuras de la antigüedad clásica, en este caso, a la figura
homérica de Néstor, el anciano consejero que tanto ayudó a los otros héroes de la Guerra de
Troya.
Finalmente, otros oradores de entonces presentan sus elogios con ocasión del Centenario del
historiador Marco Antonio Saluzzo agrega su voz para romper ese silencio.(28)
El orador dice que "Corren días de justicia. Días de reparación en que caen falsos ídolos
forjados por la impostura, caen deshechos en polvo, para que se alcen en su vez los símbolos de
Y buscando compañía adecuada para Soublette, el orador se lanza en pos del recuerdo de
notables prohombres. Para ello nos rememora lo que fueron sus vidas y su posteridad:
"Coronado con la tiara que forma su triple gloria de sabio, de héroe y de mártir, sacude
Miranda, el Gran Padre de la Patria, aquel, para nosotros oprobioso sueño de más de medio siglo
que durmió en el olvido, y de nuevo lo saludan, atónitos, ambos hemisferios, testigos de sus
heroicos esfuerzos y de sus trágicas desgracias; Páez, el fundador de Venezuela, vuelve a la
patria engrandecido por la apoteosis; renace Urdaneta de su propia fama, sublimado por los
recuerdos épicos de la antigua Colombia; álzase Sucre en el solar paterno cuyas auras, si no
arrullaron sus amores ,celebraron sus triunfos; el nombre de Anzoátegui, tan presto dilatado
famoso como dado al olvido, vibra de nuevo con alabanza; deja Ramos el modesto sepulcro que
la piedad filial le erigiera, para ir a hospedarse entre inmortales; y tú ! oh Soublette ! recibes hoy
la recompensa que a tu virtud debían la patria y tus amigos, la historia y tus contrarios." (30)
Se celebraba la "virtud" , encarnada en ese patriota. Y tal virtud, decimos nosotros, no era
distinta a la que exigía Catón el Censor, la que exigió Cicerón en sus discursos en el Senado de
Roma; la del Areópago de Atenas, o la que Bolívar quería alcanzar con el establecimiento del
Continuando con su oración, nos señala el autor que sus palabras no pueden recoger todo lo
que fue esa vida de Soublette, ésta más bien es digna de un poema como aquellos que los
antiguos llamaron <<historias>>. Nos dice que "Muchos fueron los servicios
conmilitones suyos y sus iguales en jerarquía no pudiera decirse otro tanto? Sin hablar de
Miranda ni de Bolívar con quienes nadie puede compararse, (...) ¿ Quién podrá decir cuál es
más glorioso entre los invasores de Chacachacare o los mártires de la Casa Fuerte de Barcelona;
entre el denodado defensor de La Victoria, o el sublime suicida de San Mateo; entre el vencedor
de Mosquiteros, o aquel que en el primer Sitio de Valencia se parapeta con los cadáveres de sus
propios soldados; entre el Rustén de las Queseras del Medio o los vencedores de Boyacá; entre
los héroes de Carabobo, o los de Junín, o los de Ayacucho? Nadie cede a nadie en aquellos
inenarrables días ,pero no así cuando se lidian las lides de la libertad." (31)
venezolanos. A todos ellos -- excluyendo a los que como Miranda y Bolívar colocaba por
encima de esas comparaciones --- les atribuye igual mérito, pues el poeta se ha preguntado
¿ Quién podrá decir cuál es más glorioso ... ? . Y al enumerar ,prácticamente , todas las grandes
gestas de la patria : Chacachacare [Mariño, los Bermúdez] ; la Casa Fuerte de Barcelona [Freites]
; La Victoria [José Félix Ribas] ;la acción del sublime suicida de San Mateo [Ricaurte] y la del
vencedor de Mosquiteros [Vicente Campo Elías] ; el primer Sitio de Valencia [Urdaneta] ; las
Queseras del Medio [José Antonio Páez] ;batalla de Boyacá [Anzoátegui, Soublette, Rondón y
muchos otros] ; Carabobo [Páez, Plaza, Cedeño, Farriar] ; Junín [José Laurencio Silva] ;
Ayacucho [Antonio José de Sucre] ; estaba asignándole a cada uno su valor y con ello, no
merecían en justicia.
Continúa el discurso revisando la vida del héroe, que es , dice, como seguir la vida de
Venezuela misma, valora sus dotes de magistrado apegado a las leyes y culmina citando las
propias palabras del homenajeado que al regresar del ostracismo, dijo que
"algunas faltas he debido cometer cuando mi patria me ha castigado .... [y agregó Soublette] si
algo valen mis palabras, os encarezco la unión entre todos como hermanos y la obediencia al
gobierno." (32)
Culmina el poeta Saluzzo invitando a esparcir flores sobre la tumba de Soublette, flores de
esos campos que amó y por cuya libertad e independencia luchó arrostrando "la ira de los tiranos,
el desdén de los indiferentes, el insulto de los envidiosos, la furia de los demagogos y hasta la
La pieza oratoria de Saluzzo es en nuestra opinión la que alcanza los más sublimes registros
El discurso tiene la extraordinaria cualidad de ubicar al prócer en su verdadero contexto, esto es,
género de trabajos.
época de aprovechar el poder político-militar para elevar "falsos ídolos" , que por lo demás, caían
hechos polvo al poco tiempo. Es evidente que la crítica iba dirigida a los gobiernos guzmancistas
que aprovechando su poder tiránico elevaron estatuas, a falsos próceres (el propio Guzmán
personalidad>>. Con ello, degradaron los homenajes que justicieramente se hiceron a los que si
En fin, Saluzzo honra en Soublette, esas raras cualidades que exhibió. Destaca que fue
tolerante.
*******************
La preocupación de sus deudos por defender la memoria de algún prócer , el celo de sus
históricos ,cuyo objetivo específico era enderezar algún supuesto entuerto histórico que dejaba
mal parado al personaje objeto del debate. Entre los más notorios casos conseguimos los de
Ramón García de Sena (1881) , Francisco de Miranda (1883-1884), Juan Bautista Arismendi
El año de 1881 fue publicada una obra titulada Verdades Históricas (34) en dos entregas
sucesivas y que tenía como abierto propósito defender la memoria del coronel patriota Ramón
García de Sena. El prócer ,defendido por el escrito patrocinado por sus propios deudos ,murió en
cuando se dice que "defender la honra y la dignidad de nuestros antepasados contra los injustos
cargos y alevosos ataques, que sus enemigos les dirigen, luego que han dejado de existir, es un
El texto venía acompañado de variados documentos históricos que se presentan para defender
sido duramente criticadas por el barinés Dr.Lucio Pulido en su libro Historia Patria. La
Retirada y Abandono de Barinas por el coronel Ramón García de Sena... (35) ,dicha obra
las afirmaciones del Dr.Pulido sustentadas (según la familia García de Sena) en lo dicho por
entrega del libro; ofrecen ceñirse a la verdad al cuestionar a las citas de autores como
Montenegro, Baralt y Díaz y la autobiografía de Páez. Juzgan que tales citas hechas a propósito
situaciones, entre las que podemos mencionar , la defensa realizada por los descendientes de
Miranda y del puerto de La Guaira a los realistas después de la capitulación de 1812. En cierta
forma, también sería un caso muy parecido la obra de Mariano de Briceño sobre Arismendi a ser
considerada posteriormente.
En todos los casos considerados, y específicamente en la obra auspiciada por la familia García
de Sena, la intención de los deudos reflejaba los valores, prejuicios e intereses de grupos en
sólo la opinión de Pulido (representante de una rancia y rica familia barinesa) sino también la
visión ofrecida por autores de la talla intelectual de Baralt y Díaz (38) no solamente salía a
relucir el amor por su ilustre antepasado; asistimos a un serio intento de rendir homenaje a un
prócer que consideran tratado injustamente por quienes habían escrito sobre la historia patria.
Como un elemento de juicio, bueno es recordar ,que en una de las más precisas historias
militares escritas y publicadas en el siglo XIX (el ya conocido Bosquejo de la Historia Militar
de Venezuela, escrito por José de Austria) se recoge valiosa información sobre esas campañas
de 1813-1814 donde perdiera la vida García de Sena. En nuestra opinión, en líneas generales, no
se cuestionó su actuación por parte de sus contemporáneos. Austria, que no sólo escribió sobre
esas campañas, sino que participó personalmente en el intento de socorrer a los sitiados de
Barinas, no condenó lo hecho por el jefe patriota que evacuó su escasa tropa de la asediada
ciudad. Pero, por supuesto, el doctor Pulido, descendiente de esos que sufrieron las
sentimientos.
*************************
entre ellas una <<Ofrenda>> de 1883 y la publicación de una obra de factura mayor por parte del
<<Una Ofrenda>>.
En la Ofrenda del Estado Bermúdez en el Primer Centenario del Libertador (39), dentro
de los variados materiales que se imprimen ese año de 1883, en el volumen editado como
consideración a a una medida similar del gobierno de Caracas, él de Cumaná ordena recoger
todos los papeles contrarios a Miranda producidos por el gobierno colonial. Ello obedeciendo a
Se buscaba con ello exhibir un raro documento de esa región que tal vez no tenía algún otro
entrega del generalísimo a los realistas por parte de sus compañeros de lucha que le llamaron
traidor (eso, cuando salía a relucir en los homenajes de entonces, se le calificaba de calumnias).
No obstante, los autores de la <<Ofrenda ...>> consideraron de gran importancia dejar sentado
que esa tierra oriental había iniciado, ya desde los lejanos días de 1811, un esfuerzo por limpiar
el pasado de Miranda. Acá puede verse esa creencia de que los héroes deben ser perfectos e
inmaculados ,y para eso deben hasta recogerse los documentos (¿ para destruirlos?) que puedan
denominada <<patria boba>> -- cuando en sus manos, se perdió ésta, culminando todo con la
sólo proyectar su estatura universal, sino echar a un lado el tratamiento de esos incómodos
hechos históricos que todos preferían olvidar, pues era difícil conciliar tales eventos con la
*********************
A pesar de haber anunciado previamente que en esta parte de nuestro trabajo sólo se
menor>> ; por razones muy especiales , nos atrevemos a insertar acá una importante obra
histórica escrita por el célebre Marqués de Rojas. Veamos esta <<Obra-Homenaje>> del citado
autor, atendiendo más al propósito que la animó, que a su extensión y calidad, muy superior -- lo
memoria del Precursor Miranda; se abordará ahora la evaluación del extenso volumen de 774
páginas publicado en 1884 y producto del esfuerzo de José María Rojas, el Marqués de Rojas.
(42) Esta obra fue su homenaje personal al generalísimo Francisco de Miranda y constaba de
una Introducción, una semblanza del biografiado y un amplísimo legajo de documentos sobre sus
campañas militares en Francia, las expediciones de 1806, cartas sobre la campaña en Venezuela
"devolver honra y prestigio publicando testimonios en punto a la verdad histórica empañada por
las sombras del crimen o expuesta con tales mistificaciones que apenas si es conocida de la
actual generación venezolana, he aquí el objeto y la misión de este libro, con el cual trabajamos
En buena hora narren otros con fácil pluma y pomposo elogio el éxito del día; reprodúzcanlo
hasta el infinito en estatuas coronadas con mirto y laurel floridos, y regeneren los estragos que la
intemperie ocasione en ellas. Nosotros, que no sabemos rendir culto al endiosamiento efímero,
narramos con amor las vicisitudes de un destino misterioso .... " [el de Miranda por supuesto].
(43)
Y agrega dolido, que debe hacerse algo por Miranda,"cuyos despojos mortales no tienen
tumba, y cuya fama no ha tenido hasta hoy más homenaje que una estatua de bronce colocada en
Al hacer su semblanza de Miranda recuerda que ya hizo antes una de Bolívar. Resume las
Patriótica junto con Bolívar ,los hechos de 1811 y 1812 hasta culminar con su prisión.
quien admira y a quien quiere hacer rendir merecido culto nacional, lo hace con el arma de la
autor marca distancia con muchos intelectuales que junto al culto a los héroes que merecían el
amor de la nación ,aprovechaban para destilar las más almibaradas adulaciones al "Ilustre
Americano".
no deja escapar la oportunidad de atacar a los que como Guzmán Blanco se habían "auto
edificios públicos y otras formas que la adulación contemporánea estimuló y apoyó. No queda
duda, que Rojas, profundamente separado de todo aquello que simbolizaba el rastrero
******************
Para cumplir la meta propuesta, sintetizaremos los aspectos más notables que sobre éste
conseguimos en la literatura consultada. Primeramente tenemos que destacar que la figura de este
general en jefe del ejército libertador casi siempre la conseguimos asociada con la cautivadora
presencia de su esposa, la heroína Luisa Cáceres de Arismendi y de la gloriosa gesta del pueblo
margariteño.
Arismendi, por haber tenido la suerte o la desgracia de haber estado en Caracas en los trágicos
provincia, y con ese carácter, debió cumplir con las terribles órdenes del Jefe Supremo de la
república (Simón Bolívar) ,de ejecutar sumariamente a todos los prisioneros españoles que
Ese duro deber cumplido, así como sus otros largos servicios a la patria, peleando en su natal
Cuando Juan Vicente González escribió y publicó su Biografía de José Félix Ribas (45) no
se limitó - como se sabe - solamente a escribir sobre la vida y obra del héroe de La Victoria. La
obra fue más allá de lo que el título sugiere, al profundizar fundamentalmente en el problema de
la llamada <<guerra a muerte>> decretada por Simón Bolívar en 1813 y llevada hasta sus
últimas consecuencias por brazos ejecutores como José Félix Ribas y Juan Bautista Arismendi,
entre otros.
Como ya vimos en páginas anteriores, González en su clásica Biografía dedica buena parte
de sus más duras críticas al jefe margariteño que se responsabilizó de las ejecuciones en Caracas
y La Guaira. Pero, afortunadamente (para J.B.A.) ,en fecha posterior, Mariano de Briceño,
escribió la biografía del prócer junto con una biografía de doña Luisa Cáceres, todo ello en el
El libro de Briceño califica de falsa biografía y libelo difamatorio a lo escrito años antes por
Juan Vicente González. Acusa a éste, de haber descansado en fuentes como la Gaceta de
Caracas redactada por realistas de la catadura de José Domingo Díaz. Sin duda alguna que el
esfuerzo de Mariano de Briceño en favor de Arismendi (a pesar de la carga afectiva que presenta,
pues J.B. Arismendi era su suegro) nos permite adentrarnos en muchos aspectos poco conocidos
Arismendi como una especie de <<anti héroe>> sanguinario, cobarde e ignorante ; provocó la
Guerra; pero éste, no fue el único factor en contra que tuvo la memoria el héroe neoespartano.
Ese negativo retrato elaborado por el iracundo González, lo complementaron los otros
su isla natal, pero también criticaron las actitudes de éste al tratar de impedir la salida de tropas
acontecimientos de Angostura en 1819, cuando las intrigas contra Bolívar (ausente combatiendo
lugar del general Arismendi, preso para ese entonces en la capital provisional de la república.
o las veladas críticas presentes en las obras historiográficas mayores las que moldearon la
opinión del pueblo margariteño sobre su héroe. Más bien lo hicieron, trabajos como el de
Briceño, pero sobre todo, piezas oratorias como la pronunciada por Pedro Aguirre Guerra ,luego
Esa literatura <<menor>> , por algunos despreciada, llegaba realmente a la gran masa,
como por el contrario no lo hacían, esas grandes obras de varios tomos, de circulación más que
Las piezas que hemos reseñado antes y que de alguna manera nos ilustran ampliamente sobre
Arismendi tienen lógicamente marcadas diferencias entre sí. Primeramente, el texto de Juan
Vicente González (Biografía de José Félix Ribas) sólo toca tangencialmente a J.B. Arismendi
pues éste no es su tema central, no obstante, su importancia radica en que provocó ese acto de
contribuyó a levantarle su pedestal heroico. Tal obra, pretendió hacer justicia a quien se había
querido reducir a ser solamente una figura regional con condenables incursiones en los trágicos
******************
A este prócer ,Julio Calcaño le escribe y publica en 1890 una biografía (47) que pretende
rectificar algunos errores históricos y así reivindicar su memoria como <<el héroe de Turbaco>>.
El autor afirma que no ha faltado quien cante la gloria de Bolívar y Miranda. Por ello dedica
su trabajo a Jugo quien también realizó obra por la patria .Igualmente comenta las dificultades
errores históricos evidentes). Especialmente, sobre el segundo de los nombrados dice que se hizo
Señala Calcaño que "Don Diego de Jugo, el héroe republicano en aquel combate
homérico, ha dicho por la prensa que <<el desastre de Turbaco fue causado por una sorpresa que
no le era dable evitar a ningún jefe>>. Si el hecho de ser sorprendido un jefe, fuese suficiente
para deslustrar su gloria ¿ Qué sería de la de César sorprendido a las orillas del Sambro? [y
agrega] En asuntos de errores, son aún más notables los que contiene la Historia de la
dicho recordando que Jugo perteció a esas familias <<dignas de los Fabios y de los
Escipiones>>. Don Diego nació en Caracas el 5 de agosto de 1798. Se incorporó como oficial del
ejército en las campañas de la Nueva Granada, fue con Bolívar a Jamaica, participó en la
Expedición de Los Cayos (1816), guerreó en Margarita y otras localidades del Oriente y tuvo la
oportunidad de volver a la Nueva Granada acompañando , junto con Montilla, a los legionarios
permitiesen darle mayor brillo y belleza a su trabajo. Es así, que el modesto "héroe de Turbaco" ,
fuese derrotado por una sorpresa "a orillas del Sambro". Ese tratar siempre de buscar una
era muy propio de los intelectuales venezolanos del siglo XIX. Sólo de esa manera, creían
Cuando los realistas atacaron a Turbaco, fue con sus fuerzas desde Cartagena y derrotó a los
Aquí estamos en presencia de las usuales polémicas entre los que escribían sobre historia
entonces. El punto central es en este caso demostrar que no existió ninguna mancha en el
historial militar del coronel Jugo. Se considera que así se le rinde el tributo merecido a su gloria
ultrajada por esos historiadores tenidos como oráculos por la mayoría de la opinión. Tal posición
responde a una idea fuertemente establecida para la época: los héroes son sobrehumanamente
perfectos. Y si alguna vez alguien se atreve, de buena o de mala fe, a señalar algo que desmejore
esa imagen; siempre habrá alguien que salga <<pluma en ristre>> a enderezar el entuerto.
Estas "coronas" no eran otra cosa que un volumen impreso que recopilaba materiales
diversos relacionados con la persona notable fallecida: semblanza biográfica, méritos, honores
recibidos, etc. Entre las "coronas" localizadas tenemos las del general Andrés Ibarra, la de
Antonio Leocadio Guzmán y una para el doctor José María Vargas. No obstante , sólo
Una obra que nos sirve para conocer algunos aspectos de la vida del prócer fallecido en
1875 es una de las típicas <<coronas fúnebres>> que se publicaban entonces. (49)
un centenar de documentos y otros textos diversos: invitaciones para los funerales, decreto de
duelo nacional, biografía del oficial fallecido, selección de editoriales de la prensa nacional,
honores del Estado Guzmán Blanco, acuerdos de duelo de múltiples instituciones (gremios,
logias, periódicos); mesenianas, sonetos, epitafios, acrósticos, poemas recitados ante su tumba,
acuerdos de duelo del Congreso Nacional y de los estados Carabobo, Guárico, Zamora,
Portuguesa. Además, Antonio Guzmán Blanco como yerno del difunto recibe el pésame de los
independencia, destacando los textos publicados, su patriotismo y honradez ejemplar. Para darle
concurrir con sus uniformes enlutados a rendir homenaje a quien representaba la gran obra de la
titulado "Duelo de la Patria" (reproducido íntegro en la Corona Fúnebre) que "del cielo de la
antigua Colombia van desapareciendo una a una, las últimas estrellas que quedaban como
luminarias solitarias de aquella inmensa pléyade cuyo reflejo conserva el limpio cristal de la
historia ..." (50) .Se dice que murió a los sesentiocho años de edad y ofrecen detalles de su
conjuración septembrina.
Por su parte el Diario de Avisos (#665) , del cual se reproduce igualmente su comentario,
plantea con el título de "Un Prócer Menos" que "la patria acaba de perder uno de los ilustres
varones que le dieron independencia y libertad ..." .Destacan sus virtudes y por supuesto sus
méritos por salvar la vida de Bolívar en el atentado de 1828, quedando desde entonces inválido
Culmina el escrito recordando los servicios prestados por Ibarra a la causa liberal y envía su
Otro escrito titulado <<Exequias>> apareció en la Opinión Nacional (#1908). Este reproduce
palabra al tribunal de la historia la apoteosis de los grandes hombres de la patria. El orador hizo
Esta <<corona fúnebre>> fue una de las pocas que pudimos localizar dedicada a un prócer de
cuyo procerato es discutible, por decir lo menos. Y otra, la publicada en honor del Dr. José María
sus familiares y amigos (y casi siempre algún poeta) expresaban su dolor y admiración por la
persona fallecida.
evidentemente una manera de rendir homenaje más bien al notable hijo político (A.G.B) y no al
suegro fallecido. Igual pudiera decirse de la correspondiente a Don Antonio Leocadio Guzmán.
(52)
La "avalancha" nacional de dolor por el deceso del antiguo edecán del Libertador, llegó al
extremo de exagerar ,evidentemente , la importancia de éste. Fue cierto que el joven pariente de
Simón Bolívar estuvo en los hechos de 1828 ,pero convertir ese acto de valor en una hazaña para
llegar hasta los honores de general en jefe, pareció a muchos, ir más allá de lo justo. Decir
también que fue uno de esos ilustres varones que nos dieron independencia y libertad, cae en la
misma desproporción.
En fin, puede asegurarse que la magnitud del homenaje (las 240 páginas de textos luctuosos
diversos) no necesariamente evidencian la real importancia histórica del difunto. Rindiéndole esa
desmesurada cantidad de cumplidos se le dio una infame utilización política al asunto. Guzmán
Blanco y su padre aprovecharon para echar las bases de esa venezolana tradición que denominó
*****************
Estas les fueron tributadas a quienes habían sido considerados ilustres próceres de la
importante (la de Simón Bolívar) ,a lo largo del siglo XIX venezolano varios de estos próceres
fueron objeto de un elaborado ceremonial cívico-funerario. Entre ellos, los generales Carlos
Soublette (1870-1889) ,José Antonio Páez (1876-1888) , José Félix Blanco (1878-
1896) ,Atanasio Girardot (1891). Tomamos en cuenta para presentar el comentario sobre estas
ceremonias ,no solamente el momento cuando efectivamente se realizaron sino también la fecha
Soublette y Páez no recibieron mucha admiración por parte de sus contemporáneos .Aunque,
librado. No obstante, tuvo que desaparecer de este mundo, para que sus méritos fuesen
reconocidos en forma unánime por sus paisanos de entonces. Como puede verse, no se equivocó
En La Opinión Nacional (53) apareció una <<Nota luctuosa sobre la muerte del General
En dicho comentario periodístico se dijo que "La corona de la patria que forman los héroes de la
La nota hace una semblanza del ilustre ciudadano que siempre ayudó a su patria con sabios
consejos de concordia y apego a las leyes. Le reconocen dotes de diplomático y estadista y sobre
las notas redactadas por quienes rindieron homenaje al héroe recién fallecido. Sin duda alguna,
ello fue algo fundamental en el mensaje. Si bien no se trataría del caso de un verdadero indigente
o pobre de solemnidad, su situación era de, como anotábamos anteriormente, "relativa pobreza" ,
si se comparaba su situación con la de los otros próceres ,que si amasaron una cuantiosa fortuna
desde los tiempos de los arreglos de los "haberes militares". Los muy conocidos casos de José
Antonio Páez y de los hermanos Monagas , que no fueron los únicos , pero que si eran de los más
<<Exaltación de los Méritos y Servicios del general Carlos Soublette, con motivo de su
fallecimiento>> nos comunica que las manos del difunto prócer y expresidente nunca se
mancharon con el peculado, que bajó pobre al sepulcro después de vivir muy modestamente.
Sus servicios a la patria comenzaron cuando era un joven imberbe y se incorporó como
portaestandarte del ejército cuando se dio el grito de independencia. Sus ascensos en esas fuerzas
fueron producto de las innumerables campañas en que participó. En una de ellas, cuando
arribaron a Bogotá después del triunfo de Boyacá, y ya siendo jefe de Estado Mayor, Bolívar
colocó sobre su cabeza una corona que le habían obsequiado, diciéndole a Soublette y a
vicepresidente, presidente, agente diplomático, miembro del congreso, etc. Hasta los años
ciudadano. (56)
Otro texto que podemos considerar es esta <<Reseña de las ceremonias del entierro del
"Ayer a la hora fijada por el programa oficial, ocho de la mañana, se verificó la ceremonia de
entierro del Ilustre Prócer, general Carlos Soublette. La Iglesia Metropolitana donde tuvieron
lugar los oficios de inhumación, estaba convenientemente decorada de negro y con un aparato de
buen gusto por su sencillez. El tránsito de la casa mortuoria al templo fue exornado, de querer
espontáneo de los vecinos, con colgaduras de luto que hacían más grave el aspecto de la carrera.
El séquito era numeroso y en él se hallaban representados todos los gremios sociales , además de
las corporaciones civiles, órdenes militares, cuerpos diplomático y consular, empleados de la
nación y las congregaciones y funcionarios especiales del estado Bolívar. Abría la marcha el alto
clero presidido por el señor Deán, Gobernador del Arzobispado; y seguía antes del coche
fúnebre, un destacamento del cuerpo de matemáticos, conduciendo arrollada y de luto la bandera
nacional. Los Ilustres Próceres llevaban los crespones del féretro; y el resto de la comitiva
guardaba el orden correspondiente." (58)
Después de las ceremonias en la iglesia fue llevado el difunto hasta el cementerio de los
Hijos de Dios en medio de una gran concurrencia y salvas de artillería. Allí en el camposanto, el
Lcdo Cadenas Delgado pronunció el discurso de rigor para honrar al desaparecido patriota.
concurrencia que expresó tanta veneración y simpatía, debe pensarse que de esa forma la culta
sociedad caraqueña rindió tributo al verdadero mérito y a la virtud. Y concluyen señalando que
"Sólo a la verdadera virtud, a la santa honradez que baja al sepulcro ceñida con la blanca y
humilde toca de la pobreza, es dado arrancar esos honores póstumos, mas bien hijos del corazón
que de la cabeza; esas demostraciones fervorosas, espontáneas como el sentimiento; esa
admiración, ese <<dolor entusiasta>>,si es permitida la figura, que jamás pudo comprar la
malhabida riqueza con su oro, ni la gloria falsa con su engañoso brillo.
Los conceptos vertidos en estos escritos anteriores resumen valores muy arraigados para
entonces en nuestras élites. Tomando en primer lugar las palabras finales que citamos antes, se
la misma forma , véase como el modelo de comparación siempre es la historia clásica de Roma
antigua. A ésta antigua república , cuando aún no había degenerado por la corrupción, se le toma
que juzga como algo pecaminoso la ambición de bienes materiales, la riqueza acumulada, la
búsqueda del éxito como razón de la existencia. Mas que todo, pareciese que nos regodeáramos
persecución. Acá no podemos evitar, recordar nuevamente la posición de Ángel Bernardo Viso ,
genuino y desinteresado dolor colectivo por la desaparición del viejo patriota es recogida por los
textos publicados.
También se publicaron otras notas luctuosas en homenaje al finado general en los periódicos
de Caracas y del interior de la república (60). Entre las que se recogen, tenemos las expresiones
de condolencias del gobierno del Estado Aragua, las del señor Evaristo Fombona y de Esteban
Palacios, este último ,presidente del Estado Aragua. Asimismo se hicieron conocer unas
<<Breves crónicas referentes al fallecimiento del general Soublette, para rendirle testimonios de
admiración por su ejemplar existencia al servicio de la nación>> ;unas <<Ultimas Palabras del
familia especialmente afligida en el duelo nacional que ocasiona la muerte del ilustre prócer,
Carabobo con motivo de la muerte del general Carlos Soublette>> ; la <<Manifestación de duelo
del Estado Zulia, José María Hernández, en ocasión de la muerte del general Carlos Soublette>>
(decreto de honras fúnebres) ;un artículo de José A.Serrano, donde expresa condolencia por la
muerte de su amigo Carlos Soublette; las <<Honras Fúnebres en el Estado Zulia a la memoria del
Puede pensarse que hubo muchas otras manifestaciones similares publicadas en la prensa
nacional así como otros actos de homenaje a la memoria del honrado patriota que fue Soublette;
sin embargo , las indicadas son suficiente indicio del impacto nacional del evento.
Todas las producciones citadas eran las muestras de duelo oficial o formal que se estilaban
entonces. Y es de pensar, que el difunto las merecía y ellas reflejaban bien lo que éste había sido.
Esta y otras reseñas de honras fúnebres (en este caso las de Soublette) tienen gran
importancia para el estudio de nuestro tema; ellas expresaban muy bien las costumbres y la
mentalidad de la época. Aunque pudiera señalarse que en todos los tiempos han existido esas
ceremonias y que ellas estaban más o menos generalizadas; la diferencia radicaba en que lo que
pudiese haber sido una simple ceremonia privada, se convertía en una manifestación colectiva de
culto a una personalidad histórica a la que se presentaba como paradigma de la sociedad. Con
esos actos se llevaba un mensaje patriótico a amplios sectores nacionales, que impactados por
esos discursos, sermones, poemas, artículos de prensa se acercaban aunque fuese de manera muy
*************************
junto con Carlos Soublette, José Tadeo Monagas y Santiago Mariño; entre otros, la particular y
oposición (cívica o armada) durante largos períodos del tormentoso siglo XIX venezolano. Ello
luchadores de la gesta emancipadora, Páez entre ellos, no van a recibir sino el limitado homenaje
Salvo la gran apoteosis hecha a Bolívar en 1842 ,auspiciada por Páez y Soublette, no se
pretendió rendir abierto culto a ese círculo de los <<fundadores de la patria>>, como alguna vez
se les denominó. Por supuesto , que tampoco ninguno de ellos intentó auto-homenajearse con
estatuas y cosas similares a las hechas por Guzmán Blanco y su padre; este último , hasta se hizo
La hoja de servicios del Gral José Antonio Páez (61), nos permite tener una idea general sobre
algunos de los más importantes reconocimientos que recibió éste durante su larga vida pública y
los Estados Unidos de América, en Francia ,México, Argentina y otros lugares. Allí, en el
Venezuela, sólo después que el paso de los años y su muerte en el exilio en 1873 enfrió un poco
la pasión política; su memoria recibió el homenaje patriótico en medio de los actos de duelo
Antonio Guzmán Blanco tomó la iniciativa oficial en ese sentido, a pesar de los
enfrentamientos políticos que tuvieron hasta los años finales de la Guerra Federal. Dejando en el
olvido ese pasado, decretó el 11 de febrero de 1876 , la colocación de los restos de Páez ,al igual
Como esos restos estaban en New York, ciudad donde había fallecido el general, años
El nuevo presidente, Juan Pablo Rojas Paúl ,decretó el 1ro de enero de 1890 la erección de
estatuas a los generales en jefe de la independencia: Juan Bautista Arismendi, Manuel Piar, José
Félix Ribas, Santiago Mariño y José Antonio Páez. No obstante, solamente las correspondientes
Universidad de Los Andes de levantar una estatua del Centauro en el patio del instituto, de ella
Lo que si se hizo fue celebrar el Centenario del natalicio de Páez el 12 y 13 de junio de ese
Veamos con más detalles el proceso de traslado de los restos del ilustre prócer y ex presidente
Fue el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través del consulado venezolano en New York,
quien entabló una demanda de embargo de los restos hasta no conocer exactamente la naturaleza
de los homenajes u honores oficiales que tales restos recibirían en su tierra natal.
Venezuela de tener en el Panteón Nacional los restos gloriosos de todos aquellos que se
distinguieron notablemente en la magna guerra de nuestra independencia y hallándose en el
Marble Cemetery de New York los del general José Antonio Páez, varón insigne que ilustró las
páginas de nuestra historia con hechos gloriosísimos conocidos del mundo entero y que llevan la
alabanza de los que al genio y al valor rinden culto, no vacila en traerlos al seno de la patria para
colocarlos en sitio de honor en aquel templo que la nación levantó para tal fin ... "(63)
gobierno y los herederos del finado general, se aclaró la situación y se procedió a concretar el
varias veces anunciado solemne traslado de los restos y homenaje a su memoria. (64)
Llegados los restos de Páez al país, se celebró la apoteosis decretada por el gobierno nacional.
y homenajes en los Estados Unidos de América, Argentina y otras naciones; pero en su propio
país se le regateó hasta más allá de su muerte aunque fuesen, sus legítimos laureles de patriota.
Sin duda alguna que , como decíamos al comienzo, en la balanza se ponía como de más peso lo
que había sido su vida pública después de 1823 cuando venció al último reducto de resistencia
A partir de allí ,su actuación en los tiempos de la Cosiata, sus dos presidencias, sus
enemigos internos como para execrarlo del corazón de buena parte de sus compatriotas.
Sin embargo, es bueno señalar, que no era sólo un asunto de "magnanimidad" de los
gobiernos del tiempo del Liberalismo Amarillo ,la traída de sus restos y la organización de los
actos de homenaje; sin la figura de José Antonio Páez, quedaba un vacío muy difícil de
disimular. Por ello, en aras de legitimar la gloria de sus pares y además la de los promotores de
los homenajes, no se escatimaron esfuerzos por hacerle justicia, aunque tardía, al prócer llanero.
cronista de las campañas militares de las que fue partícipe, y -- sobre todo -- compilador y
custodio de los papeles del Libertador; se escribió siempre con admiración y respeto. Su nombre
figuró siempre en todas las relaciones que se publicaron entonces sobre la guerra de
independencia y se le asoció más que todo con la noble tarea de rescatar y publicar junto con el
historiador Ramón Azpurúa la colección documental que llevó sus nombres; dándole así
continuidad a la pionera tarea de los doctores Francisco Javier Yanes y Cristóbal Mendoza que
Una obra, aunque no escrita por un venezolano, publicada en Londres hacia 1878 nos da una
interesante visión de la Venezuela de entonces. En ese libro escrito por James M. Spence (65) se
describen las escenas del fallecimiento y los funerales del venerable y anciano prócer , ya
restituido de nuevo al orden sacerdotal que había abandonado para convertirse en hombre de
El autor citado, nos dice que el Padre y general José Félix Blanco murió en Caracas el 18 de
marzo de 1872, cuando ya había alcanzado la edad de noventa años. Lo llama patriota
distinguido que aunque administró bienes del Estado sólo dejó como única riqueza una colección
de documentos de Simón Bolívar. A pesar de su avanzada edad, su muerte fue sentida por todos,
y por ello , el representante del Poder Ejecutivo , señor Antonio Leocadio Guzmán, los ministros
y las fuerzas militares con sus enlutadas banderas y música marcial asistieron al desfile que
atravesó las calles de la ciudad llenas de gente. Hubo un solemne servicio religioso en la
catedral que culminó a las ocho de la noche y después se le dio sepultura al austero republicano.
Esta precisa descripción, aunque realizada por un escritor extranjero, tiene un interesante
valor testimonial sobre el ambiente de fervor patriótico que despertó la desaparición de Blanco
en el pueblo de Caracas y entre los que se consideraban los herederos de las glorias del ejército
Libertador.
El homenaje nacional recibido por el Padre y general José Félix Blanco hacía coincidir
sobre su venerable figura el recuerdo sobre una de nuestras polifacéticas figuras heroicas.
Prácticamente más nadie podía exhibir esa múltiple condición de prócer de los días del 19 de
abril de 1810, capellán y oficial activo en arriesgadas campañas militares, probo administrador
republicano, dirigente político liberal, historiador patriota bolivariano e ilustrado hombre del
clero (nuevamente) en los años finales de su existencia. Su persona era una referencia moral e
intelectual para el país que lloró su desaparición física. Por ello, esos actos reseñados por la
prensa de su tiempo y por el testimonio del libro de Spence estaban más que justificados.
Más adelante, en 1896, se volvió a publicar su biografía junto con la de otros próceres.
De acuerdo con lo señalado por Azpurúa (66) el Padre José Félix Blanco nació el 24 de
septiembre de 1782; participó en los acontecimientos del 19 de abril de 1810 y en las campañas
militares de la guerra de independencia nacional. Durante esos años de lucha, fue designado
administrador de las Misiones del Caroní (de gran riqueza entonces) y aunque salió pobre
después de concluir esa tarea renunció a recibir sus haberes militares a que tenía derecho.
honradez, eran en cierta manera, una denuncia en contra de los que gracias a las "adquisiciones
de la lanza" se habían convertido en los más ricos latifundistas y árbitros del poder político
nacional.
Aunque fue leal a Bolívar en la crisis política de 1826, posteriormente, el gobierno venezolano
importante renta del tabaco en Barinas que alcanzaba a más de 114.000 pesos.
Participó activamente en la vida política y llegó hasta a ser postulado (como liberal) en varias
oportunidades a la presidencia de la república, aunque sin éxito. Hacia 1855 se retiró a la vida
privada para poder dedicarse a escribir y organizar sus papeles históricos. Finalmente, para el
año 1862 pidió de nuevo al Papa de Roma su rehabilitación sacerdotal, la que obtuvo al año
siguiente.
Cuando muere, una década después, el 18 de marzo de 1872, deja una limpia y larga hoja de
homenaje al Padre Blanco. En el primero, el editorial del 19-3-1872, se hace una amplia reseña
sobre la vida y obra del personaje al que califican de "última reliquia viviente de aquel día
inmortal en los fastos de América del Sur" (se refieren al 19 de Abril de 1810) .En el segundo, de
fecha 20-3-1872, se describen los honores rendidos al difunto por parte de las autoridades
representadas por A.L.Guzmán, el alto clero y las fuerzas militares de la guarnición de la capital.
Todos los textos publicados sobre el Padre Blanco coinciden en destacar su honestidad y su
cuando varios próceres que no habían tenido bienes de fortuna antes de la guerra, eran después
(como dijo Vallenilla Lanz) los más ricos del país ; exhibir esa pobreza, a pesar de haber
administrado cuantiosos bienes, y encima de eso haber renunciado a las recompensas materiales
legítimas, era ,sin lugar a dudas, suficiente razón para ser considerado, algo así, como un santo
varón. Al lado de la dilatada riqueza acumulada por Páez y los Monagas, se destacaba aún más la
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trabajo escrito por don Arístides Rojas (68). Este texto de 1891 describe la trágica muerte del
ceremonias que se tributaron al finado. En este caso de Girardot, puede apreciarse uno de los más
De acuerdo con la narración de Rojas, Bolívar decretó (Boletín # 16 del Ejército Libertador
del 1-10-1813) una elaborada ceremonia de honras fúnebres. Se ordenó llevar el corazón de
Girardot en una urna o arca en procesión hasta la catedral de Caracas donde se le honraría
guardándole en lugar destacado. Debía realizarse un desfile, tocarse las campanas, llevar luto el
ejército, etc.
sencillez republicana; y fue, mas que todo, producto de la imaginación "oriental" de Bolívar. Se
agrega que tales cosas aunque caían muy bien entre nosotros, hubiesen sido rechazadas en el
Norte, y se supone , que el objetivo de toda la ceremonia estuvo dirigida a causar una buena
impresión entre las tropas neogranadinas y en el gobierno y pueblo hermano que las había
enviado.
Reconquistada Caracas por las tropas realistas de Boves, éste pretendió que el arzobispo le
entregara el corazón de Girardot supuestamente colocado al lado del sagrario de la iglesia matriz.
Mas éste se negó a cumplir la exigencia de Boves contestándole que previendo lo que pudiese
Fue muy triste la historia de la madre del héroe objeto de la crónica de Rojas, pues perdió
todo eso, la anciana Josefa Díaz, madre y esposa de esos mártires estaba en la miseria en 1848
La reseña hecha por don Arístides Rojas sobre el destino del corazón de Girardot y sobre las
desventuras de esa familia patriota nos permite visualizar una muestra pionera de lo que sería el
culto heroico asociado a las ceremonias religiosas como medio de estimular la unidad nacional y
la conciencia de patria.
Muchos otros héroes deberán esperar varias décadas, o hasta siglos, para alcanzar una apoteosis
similar a la realizada con los despojos mortales del hermano neogranadino, que vino a cubrir con
su sangre las laderas del cerro de Bárbula, convirtiéndose así, de allí en adelante, en un símbolo
para una patria que pedía héroes a emular. Solamente, un historiador como José de Austria (entre
los estudiados antes por nosotros) , reseña esos tempranos actos de culto heroico. Recuérdense,
los actos organizados por la Sociedad Patriótica de Caracas (en honor de los primeros miembros
de la misma caídos en batalla) y los auspiciados por la Junta Suprema para honrar a los mártires
de Quito en 1810.
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Las Apoteosis.
publicación conmemorativa que se dedicaba al homenajeado. Allí se recogían todos los textos
que formaban esta especie de muy solemnes <<Honras Fúnebres>>. Como muestra
En honor a este prócer civil, se celebró una apoteosis en Caracas el día 27 de abril de 1877
presidente de la república.
Tal Apoteosis del Eminente Ciudadano Doctor José María Vargas fue recogida en una
publicación oficial (69) que contenía un conjunto de documentos relacionados con el homenaje
y traslado de los restos de J.M.Vargas al Panteón Nacional; el discurso del Padre Juan B.Castro
Vargas; Discurso de honras fúnebres; Oración del Doctor Riera Aguinagalde en el Panteón
El Padre Castro en su discurso de La Guaira (bautizada entonces como Distrito Vargas) llama
bienhechor a Vargas y hace una semblanza de su vida. Plantea que "Dios que tiene en sus
manos el destino de los pueblos y que los levanta y los abate según su voluntad, al disponer que
Venezuela se elevara al rango de nación libre e independiente, le preparó también hombres que
la dirigieran con sus luces en el nuevo camino que Su Providencia le trazaba. Entre éstos aparece
Vargas que descuella en medio de sus contemporáneos por el doble prestigio de la virtud y el
saber ..... “
El orador, al esbozar los rasgos biográficos de Vargas, su educación y su vida pública concluyó
haciendo notar que "Vargas fue no solamente un sabio y un servidor de sus conciudadanos, sino
integral sobre la personalidad de Vargas, al valorarlo no sólo como la figura política que fue,
sino también como hombre de ciencia y de profundas convicciones religiosas católicas. En este
aspecto, era Vargas una de esas pocas personalidades venezolanas que podía exhibir esa
cualidad; pues si descartamos al Padre y general José Félix Blanco, la mayoría de los próceres
nacionales, no fueron figuras asociadas a una profunda fe religiosa. Todo lo contrario, algunos de
preocupaciones teológicas.
En sus palabras anuncia el significado de las apoteosis a los grandes hombres. Estos los
valoramos cuando los años han pasado, las generaciones se han sucedido y acontecimientos
políticos de extraordinaria magnitud han conmovido el suelo patrio. Hace una narración de los
su emigración forzada, sus nuevos estudios en Inglaterra y finalmente su regreso a la tierra natal
en 1825.
Bolívar ,que era grande verdaderamente, continúa Mármol León, le pone al frente de la
educación pública. Luego vendrá su tiempo al frente de la presidencia donde trató de demostrar
que <<el mundo es del hombre justo>> y su memorable comisión que lo llevó a Santa Marta
A través de los años continuó como maestro de la juventud, y al final de su vida, dona para el
beneficio de ésta, todos sus bienes, premios, colecciones de libros, etc. Fue un verdadero
"sacerdote de la ciencia [por todo ello, le dice] Anciano venerable, descansa en paz !!" (71)
Véase como el orador asocia al homenajeado con la figura de Bolívar ,que por grande si
era capaz de valorarlo con verdadera justicia (Bolívar lo puso al frente de la educación nacional).
Igualmente, Vargas, consecuente con el Libertador, fue su albaceas y cumplió la honrosa tarea en
Santa Marta. Esa relación con el héroe máximo, era un aspecto de la mayor relevancia a la hora
de valorar otros méritos: aportes como médico ilustre, educador, magistrado civilizado, altruismo
del sabio y virtuoso ciudadano Doctor José María Vargas>> ,leída ante su catafalco en la iglesia
de San Francisco en Caracas (72);el discurso pronunciado por el Dr. J.M.Samper en las honras
fúnebres del Dr.J.M.Vargas el día 26 de abril de 1877 también en la iglesia de San Francisco
Panteón Nacional el 27 de abril de 1877, día de la apoteosis (74); las poesías, los editoriales de
<<Corona Fúnebre>> , impresa originalmente en 1854. En ella, cada uno de los colaboradores
escribe un fragmento y lo firma para expresar el dolor por la muerte de Vargas en la ciudad de
New York el 13 de julio de 1853 y la veneración por el sabio y virtuoso ciudadano. (75)
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Vargas, conseguimos una expresión intelectual que por su contenido es muy similar al trabajo
precedente. El valioso impreso publicado en 1886 que también localizamos en nuestra pesquisa
es la Ofrenda Presentada a la Memoria del Sabio Dr.José María Vargas, con Motivo de su
Centenario. (76)
El texto, auspiciado por una empresa de farmacia de Maracaibo ,viene ilustrado con un retrato
a página completa del homenajeado. Dicha empresa, fundada desde 1879, tomó el nombre de
Vargas y puso su retrato en su salón principal para honrar al fundador de las ciencias médicas
venezolanas.
En el escrito de presentación se califica a Vargas de magistrado íntegro, abnegado y probo
María Vargas no sólo se le hacía justicia a sus verdaderas cualidades de hombre civilizado, sino
que se valoraba a uno de los pocos, que no debía su procerato a la casaca militar, las heridas de
guerra o a su participación protagónica en los congresos que echaron las bases de la república.
La página de ofrenda firmada por Anjel Urdaneta (con "j" y que era el patrocinante) culmina
señalando que el 27 de abril de 1877 se había realizado el traslado de sus restos al Panteón
Útiles de Todos los Países> texto editado por Rojas Hermanos. Reitera datos conocidos sobre su
Discurso del Dr.Gregorio Méndez. Dicha pieza oratoria fue originalmente pronunciada en el
<<Colegio Vargas>> de Curazao el 31-8-1872 con motivo de la colocación de una efigie del
luchó tal como lo hicieron los Sojo, Uztariz, Escalona, Echezuría que combatieron "por sacar a
Venezuela del letargo y la oscuridad de la ignorancia; y, más afortunado que el ilustre .... Sanz,
logró consagrar toda su vida a la obra del patrio engrandecimiento por la propagación de las
luces." (77)
"No al hierro, que homicida suele empuñar la diestra, por el rencor movida en hórrida
palestra ,debes el claro timbre de esa gloria que hoy la patria discierne a tu memoria."
"Ni al veleidoso mando....
"Ni al oro .....
"Si a la virtud ....
Obsérvese, como el poeta canta al hombre cuya gloria no proviene de la carrera de las
armas; ni tampoco de la falsa y vana gloria que se hace crecer gracias al poder político y
Otra oda, una danza y algunos textos que destacan aspectos particulares del homenajeado
completan la obra: Vargas como químico y una conferencia entre Vargas y Carujo, tomada de un
Es evidente que estos homenajes realizados en honor al Dr. Vargas, tanto el de carácter oficial
como el promovido por la iniciativa privada, destacan un tipo de heroísmo diferente al que se
cantaba normalmente. Este estaba representado por las virtudes de Vargas, su dignidad de
magistrado civil, sus aportes a las ciencias médicas y a la educación elemental y superior, una
democracia, ética) enfrentando al atraso, la guerra, la barbarie. Por ello el culto que se ofreció a
tal eminente ciudadano tuvo como oficiantes a notables personas de talento y el altar no podía ser
sabio Vargas se destacaba como una luz que enceguecía en medio de aquella oscuridad. Su
heroísmo se levantaba sobre las aulas y laboratorios de la facultad de medicina, los hospitales y
cierto que no podía proclamar acciones heroicas en los campos de batalla, pues el mundo que
escogió no fue ese, sin embargo, a pesar de quienes intentaron inútilmente enlodar su nombre de
honrado civil (acusándolo de realista, cobarde, reaccionario, etc.) ese nombre siempre salió
inmaculado ante los ojos de sus conciudadanos que si valoraron la virtud de auténtico patriota
venezolano.
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Poemas Patrióticos.
Seguramente, las piezas poéticas reseñadas en esta parte, no fueron las únicas publicadas,
pues además de las que estaban incorporadas en otros textos mayores: Coronas Fúnebres,
Descripción de ceremonias de honras fúnebres, discursos y otras obras; debió haber muchas otras
que ,o no se publicaron, o no han podido ser localizadas todavía. Entre las notables piezas
Un Poema a Miranda
descripción de las fiestas del centenario del Libertador (78). De esa manera se sumó a la
De capital importancia en este poema es el profundo mensaje histórico que presenta. Ese
canto II rememora lo que fue la vida toda de Miranda. Primeramente, su carácter de "precursor",
que aunque no triunfa deja una simiente; su presencia en el "libre Norte" (los Estados Unidos de
América) y en la "Francia democrática" donde dejó huellas, es una manera de decirle que su
figura es universal.
La sutil alusión a la herencia española de Miranda y los patriotas, cuya sangre común
corría en las venas, era una manera de no olvidar aquel pendón, aquella fe y aquella nación que
había sido la de los antepasados y que trescientos años después, emulando a los mayores,
sostendrán un nuevo pendón, con la misma pasión que le daba esa sangre ardiente que bullía en
sus venas.
Este canto pintó poéticamente lo que fue la tragedia mirandina. Su obra de pionero o
Cádiz hasta su muerte en el obscuro calabozo; y para colmo, el odio de los realistas que lo
El poema, a pesar de recordar a la opresora España y sus tiranos, alude también a la España
de la cruz y de la patria, a la que abrazó vastos continentes con su pendón y nos dejó la herencia
de su sangre ardiente.
En fin, el canto a Miranda es un canto a la historia común de ambas naciones, un canto a
Bolívar (quien tan duro recriminó a don Francisco) pero que ahora desde el interior de su
Panteón lo baña con su luz de nuevo sol de la patria que llega hasta la estatua del que
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Además de las innumerables menciones que recibe este prócer en la mayoría de las
donde hizo estallar el polvorín; nos parece de gran valor el poema de Marco Antonio Saluzzo
El héroe apercibido
en la ardua liza, cual león espera
al monstruo fementido,
que, ebrio de sangre y de maldad movido
sobre sangre y maldad, soñando impera.
Ya coronó la cumbre
al son de hórrido estruendo y vocería
la fiera muchedumbre;
Mas, Qué radiante y subitánea lumbre
en faz del astro rey aumenta el día ?
La patria americana
muestra en Los Andes tu inmortal trofeo,
memoria soberana;
y de odio exenta mas de gloria ufana,
Sus Termópilas mira en San Mateo."
Es difícil decir algo que no signifique sólo admiración por ese canto del fino poeta e
historiador que fue Saluzzo. En él se nos presenta la visión literaria de un duro momento del
Y aunque Saluzzo anuncie que estábamos ya exentos de odio, el propio poema está cargado de
todo ese clamor contra los tiranos, sanguinarios, monstruos, alanos (bárbaros), nuncios de la
Para Saluzzo, al igual que para otros intelectuales contemporáneos, el ideal de libertad, el
ideal de patria no era otro que el mismo de las gloriosas Atenas y Esparta. Por ello, la mención a
las "Termópilas" era infaltable en la conmemoración del sacrificio del héroe que se inmoló
volando el polvorín en San Mateo y con él a las fuerzas realistas atacantes, ofreciendo su vida,
como lo hizo en la antigüedad el valiente Leónidas deteniendo con sus espadas y lanzas a los
"bárbaros" persas.
Otra muestra de esos poemas patrióticos es este otro dedicado al mismo héroe Ricaurte.
El texto ,compuesto por don Andrés Bello, pintó así al mártir de San Mateo. (80)
Este, al igual que otros poemas en honor de los caídos en San Mateo, exalta el sublime
valor heroico del joven oficial neogranadino que prefirió entregar su vida antes que permitir que
las huestes de Boves tomaran los ansiados recursos del parque almacenado bajo su
responsabilidad. Este canto, no deja de presentar las usuales referencias a los guerreros de la
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Un Comentario Final.
algo esencial en común: Esos aportes de los intelectuales de la época contribuían poderosamente
a mantener encendida esa llama patriótica al idealizar las figuras de los próceres -- hombres o
través de la prensa, las hojas sueltas, los folletos de económica y rápida circulación; pero
también , mediante la palabra viva de los oradores en los diferentes actos cívicos a los que asistía
el pueblo. Esto último, en un país con altos niveles de pobreza, analfabetismo y escasas
bibliotecas era vital para explicarse cómo el mensaje histórico podía llegar a las masas.
El tratamiento recibido por los héroes y heroínas de la patria estaba íntimamente asociado
(paradigmas del valor, de la honradez, de las virtudes cívicas, del amor a la patria y a la libertad)
historia grecorromana. Casi todos los homenajes fueron realizados a los héroes ya fallecidos
(muchas veces, el escrito se presentaba en los propios funerales del homenajeado) . Y ello, no
solamente fue cierto en el caso de las piezas literarias explícitamente escritas o presentadas con
ese motivo (Descripción de Honras Fúnebres, Coronas Fúnebres, Apoteosis, etc.) ;también , a
muchas biografías, discursos y poemas se les podía asociar a ese ambiente de iglesias,
No cabe duda que en este sentido se seguía una muy antigua tradición que podía
remontarse a esas ceremonias en las "tribunas de las arengas" (Atenas, Roma) , en los
<<Rostros>> del Foro romano, y por qué no, en esa sólida tradición de la oratoria sagrada de la
(1) n.a. En los casos donde se indica el año 1877 marcándolo con un asterisco -- 1877 * -- éste
corresponde a la publicación de la biografía de ese personaje en la obra de Ramón Azpurúa
(Biografías de Hombres Notables... , Op.cit, Caracas, 1877) .De la misma manera, en el caso de
la fecha --- 1896* --- esta corresponde a la obra Tres Próceres ... del mismo autor.
Obsérvese que en la lista, solamente J.B. Arismendi, Luisa Cáceres de Arismendi, M.M. de las
Casas, Ramón García de Sena, Diego J. Jugo y Eulalia Ramos Sánchez de Ch. o Eulalia Buroz
no aparecen registrados en las citadas obras de Azpurúa. No obstante, si aparece biografiado un
importante número de otros próceres de los cuales esa es la única mención importante que
conocemos, además de las que obtienen en las obras generales de historia nacional de su tiempo.
(3) No todos los incorporados presentan la respectiva información sobre la primera aparición del
respectivo texto. Se indican las siguientes fuentes: EL LIBERAL (Caracas, 25-7-1837) ; un
texto fechado en Cumaná el 25-12-1831; EL PROMOTOR (Caracas, 1-1-1834)) ; folleto
(J.Austria, Caracas, 1851) ; DIARIO DE AVISOS (Caracas, s/f. # 288) ; EL CORREO DE
CARACAS (3-9-1853) ; GACETA DE VENEZUELA (#289) ; GACETA DEL GOBIERNO DE
CARACAS (# 167 del 11-4-1829) ; Felipe Tejera (1873) ; EL LIBERAL (# 649, Caracas, 1-5-
1847) ; DIARIO DE AVISOS (Caracas, 13-1-1855) ; DIARIO DE AVISOS (Caracas, 20-8-
1853) ; EL CORREO DE ULTRAMAR (#1044, 1870); T.Heres (publicación en Caracas, abril
de 1866) ; GACETA DEL GOBIERNO DE CARACAS (19-3-1828) ; EL COLOMBIANO
(Caracas, 1825) ; Hoja Firmada por “Sus amigos de Trujillo” (1865) ; Hoja publicada en Puerto
Cabello (1856) .
(4) Otra de las pocas damas biografiadas fue Luisa Cáceres de Arismendi. Véase especialmente
la obra citada de Mariano de Briceño: Historia de la Isla de Margarita ... Biografías del
General Juan Bautista Arismendi y de la señora Luisa Cáceres de Arismendi. Caracas, 1885
(5) José de Austria: Biografía del General de División Mariano Montilla (Del Orden de los
Libertadores) .Caracas, Imprenta de Manuel Carreño, 1851
Este mismo trabajo aparece incorporado en la obra de Ramón Azpurúa: Biografías de Hombres
Notables de Hispanoamérica (vol.I, pp.264-294) Por razones de comodidad utilizamos en este
trabajo esta versión, pues la original sólo puede verse en la división de Libros Raros y
manuscritos de la B.N.
(6) n.a. Seguramente Austria tenía casi lista dicha biografía y solamente le agregó algunas
reflexiones finales al conocer la muerte del prócer que había arribado ya a los sesentinueve años.
(7) José de Austria: “Mariano Montilla” en Ramón Azpurúa: Op.cit. vol.I, p.265
(12) Arístides Rojas: Biografía de Eulalia Ramos Sánchez de Chamberlain, Célebre Heroína
de la Casa Fuerte de Barcelona, llamada erróneamente Eulalia Buroz, victimada el 7 de
abril de 1817. Caracas, 1885 (reimpreso en 1925)
(13) n.a. El texto, aunque escrito hacia 1885, y seguramente divulgado en la prensa; se publicó
también en forma de libro en 1925 como parte de los actos de inauguración de un monumento a
la dama en Barcelona, sitio de su martirio. Ella recibió también otros homenajes, entre los que
podemos mencionar la escritura y puesta en escena de una obra dramática sobre su muerte en la
defensa de la Casa Fuerte de Barcelona. Véase el Primer Libro Venezolano De Literatura ...
(Sección de Teatro Nacional, género histórico y patriótico: “Eulalia Buroz”) .Caracas, 1895 .Ver
también: Ramón B. Luigi: “La Casa Fuerte de Barcelona” (Oda). Barcelona, 1882. pp.103-108 ,
en Apoteosis ... Ofrenda Del Estado Bermúdez ... Caracas, 1883. En realidad la oda sólo hace
referencia a ese lugar como “bastión de libertad”, a Rivas (así con “v”) y Freites; pero no
menciona a la célebre heroína local.
(14) J.M.Seijas García: Rasgos Biográficos del Ilustre Prócer de la Independencia Sur
Americana Gral Ramón Centeno Mejía. Caracas, 1889
(15) Luis María Castillo: Mi Ofrenda al Padre de la Patria en la gloriosa fiesta del de su
Centenario (Discurso de Orden en la inauguración de la estatua del general Francisco de
Miranda....) Caracas, 1883 .
Véase también: Ramón Hurtado Sánchez: Las Fiestas del Primer Centenario del
Libertador .... (recoge el discurso citado antes junto con otros similares)
(19) Jesús M.Espíndola H. : Discurso de Orden ... en la Plaza <<Gómez>> de La Asunción ....
La Asunción, spi, 1883
(21) Ibídem,pp.2-3
(22) Idem
(23) Pedro Aguirre Guerra: Palabras Pronunciadas en la Plaza Arismendi la noche del 27 de
octubre ..... La Asunción, 1884
n.a. No debió ser casual la escogencia de la fecha del acto, esto es , el 27 de octubre, víspera de
San Simón, día onomástico del Libertador Simón Bolívar, que entonces se celebraba
preferentemente, de acuerdo con la tradición española en vez del día natalicio , en su caso el 24
de julio.
(24) Felip e Santiago Casanova: “Discurso...” reproducción del texto en pp.167-175. Op.cit.
(25) El mismo discurso reimpreso como Ofrenda a la Memoria del general Carlos Soublette
en su Centenario ... Caracas, Imprenta El Economista, 1890 . pp.183-196. Op.Cit.
(26) Ibídem, p.175
(27) Luis Sanojo: “Discurso...” Ibídem, pp.167-175. ver también pp. 181-183: “Discurso ante la
tumba de Soublette pronunciado por el Lcdo. Manuel Cadenas Delgado”.
(29) n.a. El orador está considerando obviamente las nuevas condiciones políticas a partir de la
reacción anti guzmancista del gobierno de J.P.Rojas Paúl y por supuesto la demolición de las
estatuas del <<Ilustre Americano>>.
(33) Idem
(35) Lucio Pulido: Historia Patria. La Retirada y Abandono de Barinas por el coronel Ramón
García de Sena el 18 de enero de 1814. Caracas, 1881
(39) Apoteosis de Bolívar. Ofrenda del Estado Bermúdez en el Primer Centenario del
Libertador.... (documentos) Caracas, 1883
(45) Juan Vicente González: José Félix Ribas - Biografía (Prefacio de Rufino Blanco
Fombona). Caracas, MEN, 1946
(46) Mariano de Briceño: Historia de la Isla de Margarita
(Hoy Nueva Esparta) Biografías del General Juan B. Arismendi y de la señora Luisa Cáceres de
Arismendi. Caracas, 1885 (Segunda edición)
n.a. No hemos podido localizar la primera edición de la obra de Briceño, la cual debió publicarse
entre 1865 y 1875, pues a la obra que enfrentó (la de Juan Vicente González apareció en 1865) y
el autor de la Historia reivindicadora de la memoria de Arismendi murió en la última fecha
indicada.
(47) Julio Calcaño: El Héroe de Turbaco. Rasgos Biográficos del Ilustre Prócer coronel D.
Diego José Jugo .... Caracas, 1890
(49) Corona Fúnebre en Honor del General Andrés Ibarra, Ilustre Prócer de la
Independencia Sur Americana y el Edecán Herido en Bogotá la noche del 25 de setiembre
de 1828, defendiendo la vida de su jefe el Padre de la Gran Colombia, Perú y Bolivia.
Caracas, 1875
(52) Corona Fúnebre del Ilustre Prócer de la Independencia Sur Americana Coronel
Antonio Leocadio Guzmán .... Caracas, 1885
(55) n.a. Esta fue—en su tiempo—una muy ilustrativa expresión de Simón Bolívar, quien
escribiendo a Don Pedro Gual (carta fechada en Guanare el 24 de mayo de 1821) le confesaba
sus preocupaciones por la situación futura del país.
Simón Bolívar: Obras Completas. vol.I, pp.559-560
Felipe Larrazábal: Vida de Simón Bolívar ... (Op.cit.) ,vol.II, p.272
61) Gral. Manuel Landaeta Rosales: “Hoja de Servicios del Gral. José Antonio Páez” , pp.287 -
319, en José Antonio Páez Visto Por Seis Historiadores .... Caracas, 1973
(62) tomo I, pp.400-419, Documentos Para la Historia de la Vida de José Antonio Páez ...
Caracas, ANH, 1976
Ver también: Honores al General José Antonio Páez (Actos de la comisión encargada de
trasladar de Nueva York a Caracas las cenizas de este ilustre prócer de la independencia de
Venezuela). Caracas, Imp. Nacional, 1888
(66) Años después del fallecimiento del Padre Blanco y de la celebración de las respectivas
honras fúnebres; Ramón Azpurúa publicó en 1896 una obra en la que incorporó una biografía de
este ilustre sacerdote y general escrita originalmente en 1865 por José Antonio Calcaño y
modificada y ampliada por el mismo Azpurúa en 1877 para su ya mencionada obra mayor.
Ramón Azpurúa: Tres Próceres de la Independencia ... presbítero José Félix Blanco,...
Caracas, 1896
Ramón Azpurúa:Biografías de Hombres Notables de Hispanoamérica. Caracas, 1877. Op.cit.
vol.I, pp. 186 - 214
(69) Apoteosis Del Eminente Ciudadano José María Vargas Celebrada en Caracas el Día
27 De Abril de 1877 ... Caracas, 1877
(76) Anjel Urdaneta & Co. (con “j” en el original): Ofrenda Presentada a la Memoria del
Sabio Dr.José María Vargas con Motivo de su Centenario. Maracaibo, 1886
(78) Heraclio Martín de la Guardia: El Primer Centenario del Libertador en Caracas ....
Caracas, 1883
(80) El poema de Bello para honrar a Ricaurte lo conseguimos incorporado en una biografía del
joven militar neogranadino escrita por Ramón Azpurúa en su obra antes citada.
R.Azpurúa: Op.cit. vol.II, pp.512-519 (véase especialmente la página 515 de la obra) > del
fragmento, parte de un poema titulado <<América>> hay otro registro en una obra antológica
titulada Bolívar, Cantos Patrióticos a la Memoria del Libertador. Caracas, 1851
n.a. Aunque no es un Poema—sino una obra dramática - es interesante considerar que hacia 1865
se escenificó en Caracas una obra histórico-dramática que titularon Ricaurte en San Mateo. El
texto, del que sólo tenemos referencias por la obra de Carlos Salas (Historia del Teatro en
Caracas. Caracas, 1967), fue escrita y puesta en escena por el actor español Emilio Segura el día
28 de octubre, onomástico del Libertador.
(81) n.a. Ver apéndices—al final del trabajo—que incluyen otros textos relacionados con los
próceres venezolanos.
**************************************
Capítulo IV.
Segunda Parte.
A lo largo del siglo XIX , varios intelectuales venezolanos escribieron y pusieron en escena
algunas obras dramáticas de contenido histórico. Por ejemplo, en la sección "Teatro Nacional" ,
escrita por E. Méndez, y que es parte de la notable obra colectiva Primer Libro Venezolano de
Literatura, Ciencias y Bellas Artes / Ofrenda al Gran Mariscal de Ayacucho publicada hacia
1895 localizamos una lista de obras dramáticas de carácter histórico, conocidas para ese entonces
(1).
Según el autor, éstas eran: "Boves" ; "Eulalia Buroz" ; "Araure ..." y "Triunfar por la
Patria". El mismo Méndez indica que ese género histórico-patriótico lo cultivaban en Venezuela
Pedro Arismendi Brito, José Bernardo Gómez, Celestino Martínez, Francisco González Guinán y
Felipe Tejera.
Además de las obras dramáticas ya nombradas, se incluyen en el libro, noticias sobre dos
monólogos de José A.Calcaño, Eduardo Calcaño y Elías Toro: "Bolívar en Santa Marta" y
"Miranda en la Carraca".
A pesar de haber obtenido esas referencias, tales obras no pudimos evaluarlas pues no
pudieron ser ubicadas en las bibliotecas consultadas. Solamente pudimos conocer algunos
detalles de la obra titulada Araure ! Drama Histórico En Tres Actos, escrita por Celestino
Martínez (2) y que fue un texto preparado por el autor como homenaje al Libertador en el primer
célebre batalla de ese mismo nombre. Asimismo, pudimos conocer en relación con la obra
mencionada en la lista simplemente como <<Boves>> que la escribió Pedro Arismendi Brito con
el título de Lealtad y Venganza o Cumaná en los días de Boves y fue publicada en Caracas
hacia 1863.
Las obras dramáticas que localizamos y que pudimos analizar como muestra
del texto o la noticia de su primera puesta en escena. Suponemos que todas ellas efectivamente
fueron representadas públicamente, no obstante, de dos de ellas tenemos mayores noticias: las
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Presentaremos en primer término el trabajo de Pedro Pablo del Castillo quien hizo
imprimir en 1839 un drama histórico escrito en verso suelto, para representarlo en tres actos. El
Sacerdotisa. (3)
El mensaje de la obra no es otro que un canto o elogio a la libertad de un pueblo que luchaba
contra sus opresores. En la obra, los galos enfrentan a los romanos para defender su suelo.
Lógicamente, la identificación histórica debía ser con los galos (los conquistados, los vencidos,
los aborígenes) y no con los romanos (los conquistadores, vencedores, invasores). De esa
manera, un tema aparentemente extraño a la realidad venezolana, era en última instancia, una
manera poética de predicar contra los antiguos opresores, contra los cuales habíamos luchado
Era una manera sutil de presentar un discurso histórico anti español (leyenda negra) sin
plantearlo abiertamente. En este caso, los galos defendiendo su patria, defendiendo su libertad
contra la opresión de la conquista romana, resultaban idealizados como los equivalentes a los
libertad. Este paralelismo histórico era lo que seguramente se esperaba que los lectores o los
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Drama Patriótico en Elogio y Recuerdo del Glorioso Día 19 de Abril de 1810 y los
Esta obra dramática dedicada a Bolívar tiene gran importancia por rendir abierto
homenaje al héroe y relacionarse estrechamente con la historia nacional en una fecha tan
El texto titulado Drama Patriótico en Elogio y Recuerdo del Glorioso Día 19 de Abril de
1810 y los Triunfos Inmortales del Primer Caudillo de la Libertad Sudamericana Simón
Bolívar (4) escrito por José María Gámez y publicado en 1840 ,tiene una dedicatoria al Dr. José
María Vargas; sus personajes son Marte y Hércules y la escena corresponde supuestamente a
El decorado sugerido por el autor para la puesta en escena era un templo de color mármol
pendón nacional, flores y la estatua de la libertad; todo ello iluminado por el Sol del 19 de Abril.
En ella menciónanse las batallas de Junín, Ayacucho y Carabobo; la acción toma el camino del
Granada y Venezuela; al apureño y al bogotano y al "suelo en que nacisteis !oh Bolívar !"
La obra ,de la que no sabemos a ciencia cierta, si en realidad llegó a ponerse en escena y con
Junto con esos elementos clásicos (Aquiles suramericano, dios tutelar, inmortales
Bolívar (Dios tutelar) ; a la geografía del continente americano (Orinoco, Andes, Potosí) y que
parece corresponderse muy bien con el ambiente de esa Caracas que ya se preparaba a rendir
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Este trabajo tuvo un estilo similar a otro que se escenificará posteriormente bajo el título
de <<Patria y Honor>> .
Nacional ... fue escrita por Lisandro Ruedas, quien la hace publicar en Valencia en 1850 y
anuncia además que la estrenó el 19 de abril de ese mismo año en el teatro de esa ciudad.(5)
personajes eran los siguientes: Policarpa; el amante de Policarpa; Samano (el virrey) ; Carlos
Díaz (oficial español) ; un anónimo soldado español; un sacerdote; un alcalde y una comparsa de
Escena 1. Carlos y Henrique, embozados y con una linterna avanzan por una calle oscura.
Escena 2. Los dichos de Policarpa. Esta declama unos versos referidos a la patria oprimida
que lucha.
Escena 4. Casa de Policarpa. Mesa con papeles de los patriotas. Los espías tratan de observar
Escena 5. Los dichos de Isabel. Avisan a Policarpa la llegada de un comisionado con noticias
de las crueldades y persecuciones de los españoles. “te llaman la heroína de América". Santander
y los bravos de Casanare agradecen los informes que envías sobre los enemigos.
Ejecución de los prisioneros patriotas por orden del virrey Samano. Lo hace en honor a un
Este drama es pionero de una línea de trabajo que continuará en las décadas siguientes. En él
se recoge la vida de una mujer heroica que la ofrece por un ideal de libertad, que está asociado
por otra parte, con su amor por un hombre comprometido con la misma causa.
Esa actitud de arrostrar todos los peligros por la victoria de la causa de la emancipación
nacional, enfrentando a los malvados realistas , capaces de los mayores actos de crueldad; todo
ello, aunque termine con la muerte en el campo de batalla o con la ejecución de los prisioneros,
leído por muchos, es muy claro: Policarpa muere desafiando a los "verdugos realistas" porque es
toda una heroína que sabe que a pesar de su muerte, los que luchaban por la independencia
nacional triunfarían al final. Muere la heroína, pero lo hace con valor, no suplica a sus verdugos,
a los opresores de la patria, que creen que matándola a ella y muchos otros podían derrotar
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El Tirano Aguirre. Drama Nacional escrito por Adolfo Briceño Picón (6) será el
penúltimo de estos "dramones" que comentaremos en esta parte del capítulo. El espectáculo, en
tres actos, fue representado según su autor por primera vez en el teatro de Mérida el 30 de
diciembre de 1872.
Conquista: la llegada de unos <<marañones>> desde el Perú a Venezuela, comandados por Lope
Escena I. En la noche, cerca del campamento a orillas del río Marañón: Lope de Aguirre
"domador de potros del Perú, el fiero conspirador de Lima, que tiene pacto con el Diablo, según
dicen, se le ha antojado fraguar una conspiración que de estallar esta noche, contra el jefe del
Un ejército de 400 hombres, compuesto por lo más corrompido de Lima, viene en esa
campaña. Enviarlos a buscar "El Dorado" fue la manera que tuvo el virrey de Lima para
deshacerse de tantos bandidos. Uno de los que viene en esa expedición (el joven Arturo Villena)
está enamorado con pasión de la bella Cora, hija de Lope de Aguirre y de una india del Perú.
Escena III. Lope de Aguirre y Antón Llamosas continúan con la conversación en medio de la
noche.
[Aguirre le dice a su compañero: ] " ... los nobles, Antón, han querido convertir al
sencillo labriego de Oñate en un bandido, y lo han alcanzado ! Cuando salí de España sólo tuve
la mira de tantos aventureros que se lanzaban a la naciente América a hacer fortuna ... pero los
nobles me han perseguido siempre, y no han consentido que el pobre domador de bestias deje su
penoso oficio para adquirir una posición más elevada.... Dotado yo de un espíritu dominador y
turbulento: con el alma henchida de ideas de libertad e independencia, no he podido consentir
jamás en vivir subyugado bajo la mano de hierro de esos oidores y virreyes que nos envía el
idiota Felipe II rey de Castilla y de las Indias..."
Escena IV. En otro lugar, esa noche Arturo de Villena espera a la amada Cora (....)
Escena V. Arturo y Cora. Esta última vestida como sacerdotisa del Cuzco, cubierta de joyas y
con un velo blanco. Tras una larga espera se encuentran y se dicen palabras de amor. Cora dice a
su amado que su madre fue "hija del Sol”, descendiente de Atahualpa. Su madre, antes de morir,
la entregó a su padre Lope de Aguirre y éste la educó en un convento ya que tiene muchísimo
Escena VII. Cora y Lope de Aguirre. El padre le comunica a su hija que Guzmán ha pedido su
mano. Se produce una discusión entre Lope y su hija. El padre rechaza la relaciones entre Cora y
Arturo de Villena. Según Lope de Aguirre, este noble caballero desprecia a los plebeyos como él.
Cora suplica: "señor, no puedo combatir con la naturaleza: Dios ha hecho a Arturo para amar a
Cora y su aya o "dueña" Torralba. Estaban éstas hablando cuando llega un extraño visitante. Este
no era otro que el amado Arturo que vino disfrazado como indígena local. Amoroso reencuentro,
Lope de Aguirre le dice a su hija que ella es la soberana de la isla. Después se produce el ataque
contra Aguirre.
Escena Final: Derrotado el Tirano, éste es ejecutado. El verdugo toma la cabeza de Aguirre en
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La obra dedicada al Tirano Aguirre tiene varios aspectos interesantes. Primeramente, debe
destacarse que ese formato <<melodramático>> que le pone la presencia de ese amor prohibido a
Cora, por ser su amado un joven noble que Lope de Aguirre detesta, era y es un típico recurso de
los autores para despertar el interés del público, que usualmente gusta de esos enredos de amor,
pasión y dolor.
Por otra parte, el trasfondo histórico de la obra (que no respetaba la exactitud de los sucesos
pasados) servía para que los que conocían total o parcialmente esa crónica de la Conquista en
Aguirre es la dura crítica contra los prejuicios e injusticias sociales de la época. Es el larvado
resentimiento del hijodalgo vasco contra esos nobles engreídos que le cierran las alternativas de
ascenso social. De acuerdo con el texto, Lope de Aguirre expresa la inconformidad con lo
establecido.
americano (los "hijos del Sol" [Incas], Atahualpa, el Inca destronado y asesinado) .Las escenas
En términos políticos, es también Aguirre expresión de rebeldía ante esa monarquía inepta y
sus representantes en América (los oidores de la Real Audiencia, el virrey, los gobernadores).
Cuando dice tener un alma henchida de ideas de libertad e independencia y que ya no quiere
seguir subyugado a la mano de hierro de esos oidores y virreyes; su anarquista desafío a ese
atribuciones, lo puso en el camino del ajusticiamiento final, no sin antes crear toda una situación
Un detalle curioso resultan las afirmaciones de Lope de Aguirre y su hija sobre el poder de la
Yo te lo juro" (le dijo Lope a su hija Cora) Estas palabras de reto a la naturaleza se parecen
mucho al desafío del joven Bolívar frente a la plaza de San Jacinto cuando aseguró algo similar:
"Si se opone la naturaleza lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca"; ¿simple
coincidencia? .
Se pudiera pensar que esta aparente "coincidencia" en el desafío a la naturaleza; así como
en ese amor a la libertad y la independencia son una vía para identificar al Tirano Aguirre no con
la figura de un anti-héroe sino más bien con la figura máxima de nuestra historia, Simón Bolívar.
Otra obra localizada y revisada, fue la escrita por Luis Poleo Gonell con el título de Patria y
supuestamente en el pueblo de Huamanga, Perú, en 1824. Los personajes, usando trajes militares
de Colombia y España, eran los siguientes: Pérez (gobernador de Huamanga); María (hija del
gobernador) ;Enrique (oficial español) ; General Córdoba; Capitán Alvarez (fusilado en Perú por
traidor) ;Daza (Alberto Antonio Daza, joven granadino muerto en la Batalla de Ayacucho).
edición que realizó el Diario de La Guaira en 1881. Ella tenía como mensaje valorar el
heroísmo del joven Daza en constraste con la traición del otro personaje del drama (el capitán
Alvarez) . Por supuesto, que por medio de esos "dramones" con intervención de todas esas
independencia americana.
A Manera de Conclusión Preliminar.
Todos esos dramas, independientemente de la época histórica que les sirva de inspiración (La
Tanto Simón Bolívar, elevado al Olimpo de la gloria, como las figuras <<menores>> que son
tema de los dramas reseñados , se convierten en símbolos para expresar un mensaje nacionalista
y patriota.
y a la parte del pueblo que tenía la oportunidad de disfrutar de esas actividades artísticas, conocer
a partir del enfoque teatral de la época lo que puede denominarse una visión dramática de la
historia nacional.
solidaridad con el primer rebelde "hispanoamericano", algo así , como el más lejano desafío al
despotismo español hecho por quien para el siglo XVI, viniendo de España, sintió estas tierras
(2) Celestino Martínez: Araure ! (Drama Histórico en tres actos. Ofrenda al Libertador en su
Primer Centenario).
Caracas, 1883
(3) Pedro Pablo del Castillo: El Fanatismo Druida o la Sacerdotisa (Drama en tres actos en
verso suelto).
Caracas, 1839 (incluye una lista de varias páginas de suscriptores para la obra, tanto de Caracas
como de otras localidades)
(4) José María Gámez: DRAMA PATRIÓTICO (En elogio y recuerdo del glorioso día 19
de abril de 1810 y de los triunfos inmortales del primer caudillo de la libertad sudamericana
SIMON BOLÍVAR). Caracas, 1840
(6) Adolfo Briceño Picón: El Tirano Aguirre (Drama Nacional de grande espectáculo en tres
actos... Representado por primera vez en el Teatro de Mérida el 30 de diciembre de 1872 y
repetido el 6 de enero de 1873, con espléndida acogida).
Mérida, 1873
(7) Luis Poleo Gonell: Patria y Honor (Drama en cuatro actos y en verso). La Guaira, 1881
CAPITULO V
Habiéndose ya analizado ,en líneas generales ,la importancia que tuvieron tanto el
<<corpus>> historiográfico mayor como la así llamada "literatura histórica menor" ,es
necesario precisar cómo tales expresiones intelectuales incidieron también en la ciudadanía
a través de las instituciones educativas y de los manuales escolares de historia utilizados en
esa época.
Igualmente, debe tenerse muy en cuenta que las ideas fundamentales, los mitos
históricos más arraigados en la conciencia de los venezolanos fueron ,en buena medida, una
consecuencia de la acción formadora de la escuela, los maestros y los manuales.
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El Sistema Educativo Venezolano.(2)
Para el año fiscal de 1878-1879 existían en el país seis escuelas normales ubicadas
en Caracas, Cumaná, Valencia, Barquisimeto, Ortiz y San Cristóbal. Funcionaban los
siguientes dieciocho Colegios Federales:
b) Siete Colegios de segunda categoría. Los de los estados Guzmán Blanco, Falcón,
Guárico, Nueva Esparta, Táchira, Yaracuy y el de la ciudad de Puerto Cabello.
c) Tres colegios de tercera categoría. Los de los estados Apure, Cojedes y Maturín.
Para 1886- 1887 ya se contaba con 1.246 escuelas federales para la instrucción
primaria y con diecinueve colegios federales (cinco de primera categoría y el resto --
catorce -- de segunda categoría) .Se contaba también con once colegios nacionales de niñas
repartidos a lo largo del país y las dos universidades tradicionales ,la de Caracas y la de
Mérida; agregándosele nuevas instituciones de educación superior en Valencia y
Maracaibo. (4)
Debe si aclararse, que la mayor parte de tales escuelas federales eran en su
mayoría institutos que sólo contaban con un maestro -- no siempre idóneo -- para atender
todos los alumnos que cursaban ese nivel elemental de tres años de duración. En el caso de
los llamados colegios nacionales ,luego llamados federales, en ellos existían cátedras de
ciencias políticas, ciencias eclesiásticas, latín, gramática castellana, matemática, filosofía y
otras. Estas instituciones ,en especial las de primera categoría ,estaban facultadas para
otorgar grados menores como el de bachiller.
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Entre los más importantes colegios privados del siglo XIX en Venezuela estuvieron
El Colegio de la Independencia fundado por Feliciano Montenegro Colón en 1836 y El
Colegio El Salvador del Mundo, fundado y dirigido por Juan Vicente González un primero
de marzo de 1849. Otros fueron el célebre Colegio Chávez (5-7-1842) ,el Colegio Santa
María (2-10-1859) que sustituyó al Colegio El Salvador del Mundo, ambos ,por varias
décadas, contaron con el liderazgo intelectual del ilustre pedagogo venezolano Don Agustín
Aveledo.(5)
El Colegio de la Independencia
El plan de estudios que debía seguirse en ellas: Lectura y aprendizaje del texto de
doctrina cristiana, escritura, Gramática Castellana, Constitución, Aritmética mercantil,
Teneduría de libros, Geografía elemental, Historia, dibujo y Geometría con aplicación a las
artes, inglés y francés, pudiéndose establecer también otra de Aritmética razonada con
separación de la mercantil.
Ese testimonio de Páez y el de muchos otros, nos reiteran, que las preocupaciones
de escritor pedagógico de Montenegro, fueron parte de sus profundas convicciones como
hombre formado en el antiguo Seminario de Caracas y en más de tres décadas de vida
militar.
Puede considerarse una buena muestra en este aspecto, los manuales de Feliciano
Montenegro Colón (Geografía General ...),
De todas maneras, la obra tuvo muy mala acogida por un cúmulo de razones ya
expuestas en el segundo capítulo. Tal situación de rechazo , se repitió en cierta forma con
otras obras y autores. Un caso patético en ese sentido fue el de Rafael María Baralt y
Agustín Codazzi.(14)
Sobre Juan Esté tampoco se sabe mucho. Este maestro fue director en una escuela
municipal en San Fernando de Apure y publicó en Caracas (1858) unas Lecciones Primarias
de la Historia de Venezuela. Esta obra fue reeditada en 1876 y al igual que otros manuales de
la época siguió fielmente el Resumen de Baralt y Díaz.
No siendo necesario explicar ahora quién fue Baralt, sólo señalaremos brevemente
que el coautor de este manual fue el Doctor Manuel María Urbaneja Alayón (1814-
1897) ,hijo del prócer civil Diego Bautista Urbaneja. Graduado de ingeniero en la primera
promoción de la Academia de Matemáticas (1837) , Doctor en Derecho de la Universidad
Central en 1864 ,ejerció por muchos años la docencia tanto en la universidad como en
colegios ,algunos fundados por él. (16)
D. El gobierno colonial era malo. A sus providencias se debía que el país estuviese
despoblado, que no hubiese comunicaciones ,que el pueblo fuese ignorante ,que estuviese
dividido en clases; y últimamente que los peninsulares fuesen por lo general revestidos con los
primeros empleos ,a tiempo que los venezolanos eran excluidos de ellos.
D. Sí. Una de ellas fue la cooperación que dio España de acuerdo con la Francia a la
independencia de la América británica, la primera y más poderosa de las repúblicas del Nuevo
Mundo. Así la España ofreció a Venezuela el ejemplo de la libertad ....
D. Un hombre distinguido que había viajado mucho por la Europa y reunía a una
gran suma de experiencia, conocimientos útiles y variados. ....
M. ¿Qué otros sucesos de importancia ocurrieron este año (de 1810) en Venezuela?
D. Uno fue la retirada del general Francisco Toro a Caracas con las tropas que había
sacado para reducir a Coro (...)
M. ¿Cuál otro?
D. Cuando Bolívar llegó a Londres lo primero que hizo fue abocarse con Miranda
(...) le trajo consigo de Londres a La Guaira. (....)
Artículo Tercero.
D. Estaban los empleados subalternos con algunas excepciones, el clero con muy
pocas, y la mayor parte de los españoles y todos los canarios que engañados o ciegos habían
dado mano amiga al 19 de abril.
D. Fluctuaba por lo general entre sus hábitos perezosos y serviles y su deseo innato
de novedades: si bien no faltaban en su seno algunos individuos que siendo capaces de
concebir la tendencia filosófica de la revolución se declararon abiertamente por ella. .....
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Los fragmentos seleccionados nos dan una clara idea del estilo y del contenido de la
obra histórico-pedagógica compuesta por Baralt y Urbaneja; publicada tardíamente por
este último.
Entre las notas resaltantes sobre el contenido del mismo pueden señalarse el
énfasis que se hace en destacar la participación de ciertos héroes o individualidades en los
acontecimientos referidos. Llama también la atención esa apreciación negativa o despectiva
de la participación del pueblo venezolano en el proceso político-militar de la independencia,
y en contraposición ,un muy buen juicio sobre los principales representantes de las élites
del país.
El Manual de Historia de Venezuela (20) de Don Felipe Tejera fue desde sus
primeras ediciones visto no sólo como un trabajo de cierta calidad literaria, también él
representaba una versión de la historia nacional venezolana alejada de ese estilo anti-
español que habían cultivado algunos autores que le precedieron.
Este manual , de unas 216 páginas ,estaba dividido en dos grandes unidades, la
primera denominada <<Historia Antigua>> (unas 46 páginas) comprendía los
acontecimientos desde el año de 1492 (llegada de Cristóbal Colón el 12 de octubre) hasta los
eventos del año de 1811. Como complemento de la información presentada, el autor resume
cronológicamente lo reseñado en un cuadro de sincronismos históricos ( pp.47-51) que
permite apreciar el paralelismo entre la historia de Venezuela y los procesos ocurridos en
Europa y América.
La segunda parte, la más extensa del manual y que ocupa desde la página 52 a la
216 ,el autor la denomina <<Historia Moderna de Venezuela>> y la subdivide en estos
períodos: Del 5 de julio de 1811 en que se declaró la independencia hasta el año de 1819 en
que se constituyó la gran República de Colombia; desde esa fecha hasta 1830, cuando se
disolvió esa república en "tres nacionalidades soberanas" ; el siguiente transcurrió desde
ese año hasta 1842, cuando se decreta el traslado de los restos del Libertador; sigue desde
esa fecha hasta 1864 cuando se constituye la República federal, la época que corre hasta
"nuestros días" (lógicamente los del autor) .De acuerdo con el contenido del manual este
consideró la periodización histórica hasta el establecimiento de la República federal , sin
embargo ,el tratamiento de los años posteriores a 1842 se reduce solamente a presentar un
apretado balance del desarrollo de las letras nacionales, la música, la ciencia y el progreso
general del país a través de sus principales representantes.
Antes de entrar a tratar el primer período histórico, el autor hace una síntesis de
los principales aspectos "geográficos" de Venezuela: Extensión, límites, regiones, climas,
flora y fauna, cuencas hidrográficas, lagos, montañas más altas, cavernas, yacimientos
minerales y algunos fenómenos naturales.
Debe también adelantarse que el redactor del manual utilizó ampliamente como
fuentes (casi siempre de manera explícita) conocidas obras de historia como la de Feliciano
Montenegro Colón; la de Rafael María Baralt (Resumen de la Historia de Venezuela ...) ;la
Biografía de José Felix Ribas escrita por Juan Vicente González; la Vida de Simón Bolívar ...
del Dr. Felipe Larrazábal y la Historia Universal de César Cantú. Incorpora además,
información proveniente de los documentos y periódicos de la época.
Nos parece que todos estos autores ejercieron gran influencia en la orientación del
texto, especialmente notoria es la presencia de Juan Vicente González en todo lo
relacionado con el período más cruento de la guerra de independencia. Debemos recordar
que fue González un duro crítico de la política de <<Guerra a Muerte>> .Ello explica la
desaprobación oficial al texto que fue juzgado como demasiado indulgente con España,
muy católico-conservador y no lo suficientemente "bolivariano" para el gusto guzmancista.
Este manual que antes presentamos, al igual que otros utilizados en el siglo XIX
venezolano, permitieron a varias generaciones de venezolanos conocer los fundamentos de
la historia nacional. Tales textos escolares, en su mayoría, estuvieron sustentados en obras
historiográficas mayores como el Resumen de la Historia de Venezuela de Rafael María
Baralt (21) , por lo que en cierta manera lo esencial el discurso historiográfico mayor pudo
así llegar a mayor cantidad de venezolanos. Sin embargo, a pesar de lo dicho, su impacto
real sobre el país fue muy limitado, considerando que sólo una exigua minoría estaba
incorporada a la educación formal en los escasos colegios y escuelas; y en las mucho más
escasas instituciones de educación superior.
Esta educadora valenciana fue hermana menor del notable político guzmancista,
periodista e historiador Francisco González Guinán. Fue directora del Colegio de Niñas de
Valencia durante el período 1888-1892 y todavía en 1904 seguía enseñando historia de
Venezuela en ese plantel.
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Algo es cierto, tanto esta autora como la mayoría de los restantes escritores de
manuales de historia tuvieron estrechos lazos familiares con importantes magistrados, jefes
militares y políticos del siglo XIX venezolano. Ello les dio la oportunidad de tener
experiencias de primera mano que de alguna manera reflejaron en sus obras.
Es por ello que juzgamos muy significativa la influencia ideológica que las élites
ejercieron entonces (más allá de ese minoritario grupo escolarizado, lector de libros y
periódicos) en las amplias masas -- mayoritariamente analfabetas -- a través de los
discursos
patrióticos en los escenarios públicos, los actos religiosos, donde brillantes oradores
sagrados ofrecían su interpretación de la historia nacional y sus héroes, las ceremonias
fúnebres para honrar los héroes recién fallecidos o las conmemoraciones de las efemérides.
(24)
De igual manera puede decirse que la lectura y ,sobre todo , la asistencia a la
representación de obras dramáticas ,fue un muy eficaz medio de comunicar los valores
nacionales fundamentales a los más amplios grupos de la población del país. Tal vehículo
permitió poner a circular ideas relacionadas con la formación de la nueva patria, sus
héroes y sus antihéroes.
(1) De especial importancia para nuestro trabajo fue la consulta del ensayo <<La
Génesis de un Imaginario Colectivo: La Enseñanza de la Historia en Venezuela en el Siglo
XIX >> escrito por el Dr. Nikita Harwich Vallenilla. pp.349-387, Boletín de la Academia
Nacional de la Historia. Caracas, ANH, 1988 (# 282, Abril - Junio, 1988)
(2) Para esta síntesis consultamos, entre otros materiales, Memoria de la Secretaría
de Interior y Justicia (varios años) , <<Memorias Provinciales 1845>> (Recop. Antonio
Arellano M.,Caracas,1973) ; Documentos que Hicieron Historia ; José Gil Fortoul: Historia
Constitucional de Venezuela ; José María Vargas: <<Informe de la Dirección General de
Instrucción Pública, 1838>> ; Recopilación de Leyes y Decretos de Venezuela (Caracas,
1874) ; Francisco González Guinán: Historia Contemporánea de Venezuela (Caracas, 1954)
Las cifras que aparecen en las memorias de Instrucción Pública, las que se
incluyen en los presupuestos de gastos y en otras fuentes, no siempre coinciden. Parece que
en algunos casos se sumaban escuelas de diverso tipo (nacionales o federales, municipales,
privadas, etc.) .En otros casos resultan cifras más o menos abultadas por contabilizar como
escuelas a centros con un solo docente, junto con otras de mayor importancia, esto es, de
varios grados y maestros. Otro factor que contribuyó a la disparidad de las cifras
localizadas fue que la materia educativa estuvo en manos de diferentes despachos públicos.
(5) n.a. El propio Juan Vicente González nos ofrece una explicación sobre su
vinculación y su posterior separación del colegio así como de la calidad pedagógica del
Licenciado Aveledo y otros maestros. Véase, "Colegio El Salvador del Mundo" (El
Foro,Caracas 15 de junio de 1858) texto reproducido en pp.318-320, La Doctrina
Conservadora -- Juan Vicente González (Pensamiento Político Venezolano del Siglo XIX,
vol.3, tomo II). Caracas, Congreso de la República, 1983
(14) n.a. Para no caer en repeticiones, recordemos lo indicado en el capítulo II. Allí
está explicado ampliamente este problema.
(15) Nikita Harwich Vallenilla: Op.cit. pp.361-365. En esa misma sección, el autor
ofrece su juicio sobre los manuales y sus respectivos autores: Juan Esté, Socorro González
Guinán, Antonia Esteller y otros.
Otras obras del autor: Biografía del Licenciado Don Miguel José Sanz (Caracas,
1873), la obra dramática Triunfar con la Patria (Caracas, 1875) ; La Colombiada (Caracas,
1878) ; Historia de la Literatura Española; Perfiles Venezolanos (Caracas, 1881) ; La
Boliviada, (Caracas, 1883) y otros trabajos literarios e históricos.
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CONCLUSIONES GENERALES
CONCLUSIONES GENERALES
1.1.) Entre los teóricos que abordan el problema de la formación del Estado, E. Torres
Rivas presenta una interesante explicación, pues no pretende reducir de manera
"determinista" el asunto ,a un mero proceso en el cual sólo el mercado y la burguesía
nacional respectiva echan las bases del estado y la nación hasta en aquellas sociedades como
las de Hispanoamérica , donde tal mercado y burguesía eran virtualmente inexistentes. Sus
consideraciones sobre la formación de las llamadas oligarquías, así como sobre la
importancia de los componententes <<nacionalitarios>> ,los procesos de control territorial
por parte de los grandes caudillos "absolutistas" y la acción de las ciudades sobre los
respectivos "hinterland" ; son en gran medida la clave para explicar la organización de los
estados hispanoamericanos, herederos de vastos territorios cuyas fronteras coloniales se
resquebrajan durante y después de los procesos de emancipación nacional.
1.2.) Considerando la opinión de otros autores sobre estos problemas teóricos, puede
afirmarse que la formación de los estados nacionales hispanoamericanos y del estado
nacional venezolano en particular fue posible ,entre otros factores, por el proceso de
desintegración del imperio colonial español en las primeras décadas del siglo XIX; proceso
que se incubó en las décadas finales del siglo anterior.
Este proceso de emancipación nacional ha sido estudiado a partir de dos puntos de vista:
el que enfatiza que éste fue producto de la voluntad política de las élites y los pueblos que
querían sacudir un yugo colonial que asfixiaba sus aspiraciones de libertad política y
económica; y el que señala , que dicho proceso fue más bien consecuencia de una profunda
crisis general del imperio colonial hispano que hizo posible el simultáneo estallido de los
sucesivos movimientos a los cuales se incorporaron en posiciones de vanguardia los sectores
con mayor conciencia nacional o por lo menos aquellos que atemorizados por los avances del
dominio napoleónico de Europa quisieron salvaguardar sus propios intereses. Planteamientos
como los de Germán Carrera Damas, Miguel Izard y Nikita Harwich Vallenilla se inscriben
en esta última posición.
1.4.) La cabal comprensión de la trascendencia histórica del Culto a los Héroes, tomando
en cuenta sus expresiones desde los más lejanos antecedentes registrados en la poesía épica y
en la historiografía de la antigua Grecia y Roma, pasando por ese monumento que fue el
poema del Cid, por la clásica obra de Carlyle y por todo ese conjunto de textos
contemporáneos que han abordado el tema; permite afirmar que éste ha sido un componente
fundamental del discurso histórico de los pueblos. En Hispanoamérica, en general, y en
Venezuela, en particular, el culto heroico ha estado presente en la vida de sus pueblos a
través de la producción historiográfica y literaria generada sobre todo a partir del proceso de
emancipación nacional al cual había que justificar ante sus supuestos beneficiarios.
En el caso de Venezuela, dicho culto heroico ,y especialmente del que se hizo a Simón
Bolívar, formó lo esencial del corpus historiográfico nacional.
2.1.) El estudio realizado permitió conocer, entre otras cosas, las concepciones
historiográficas que predominaban en la Venezuela de entonces. Ello ,a pesar de que en
medio de la producción histórico-patriótica del siglo diecinueve, muy pocos fueron los textos
publicados que llegaban a la categoría de verdaderos libros si excluímos las colecciones
documentales, las memorias o los textos antológicos. En sentido estricto, los trabajos de
cierta envergadura historiográfica fueron muy pocos.
2.2.) Hubo una muy estrecha relación entre las obras de Montenegro, Baralt y Yanes; por
descansar mutuamente entre sí buena parte de sus juicios, sustentándolos a partir de las obras
que les precedieron así como por la utilización de muchas fuentes comunes (documentos
realistas y patriotas, periódicos, obras históricas) .A pesar de no haberse publicado en su
tiempo la obra de Yanes, de todas maneras, ella circuló indirectamente a través de los
diferentes autores que la incorporaron entre sus fuentes básicas.
2.3.) La obra de Austria ,junto con la de los autores románticos: J.V. González,
Larrazábal y Eduardo Blanco; se nutrió ampliamente de los aportes historiográficos de
Montenegro, Baralt y Yanes; no obstante, su valiosa contribución representada por las
fuentes primarias que incorpora en su discurso: documentación original de la época de la
emancipación, textos de Simón Bolívar, testimonios de varios camaradas de armas y sus
propias experiencias le dan a su obra un carácter especial. Algo similar pudiera decirse de la
obra de Larrazábal pero solamente en lo referente a la importante colección de documentos
bolivarianos originales que incorporó en su trabajo.
2.4.) El conjunto de textos históricos antes mencionado, fue uno de los instrumentos -- o
una de las vías -- para el desarrollo del culto a los héroes en la Venezuela del siglo XIX.
Entre ellos, lógicamente , hubo diferencias. Montenegro, Baralt y Austria establecieron la
tónica en el tratamiento <<bolivariano>> en la historia venezolana (especialmente Baralt) ,
aunque sin llegar todavía a los excesos de los historiadores "románticos" como González,
Larrazábal y Eduardo Blanco. Una excepción en ese sentido fue la seca prosa de Francisco
Javier Yanes, quien trató al Libertador Simón Bolívar, casi como uno más de los jefes
patriotas, sin nunca caer en lo que se ha denominado el culto desorbitado del héroe. Lo
único ,eso sí, que desarrolló en este sentido fue la construcción de una especie de "leyenda
negra" donde retrató los "anti-héroes" de la patria.
3.1.) Los aportes del corpus historiográfico mayor, junto con los de otros textos (grandes
colecciones documentales, memorias de ilustres próceres, autobiografías como la de José
Antonio Páez) contribuyeron a desarrollar la conciencia histórica nacional; sin embargo, el
vasto conjunto de biografías de héroes (y algunas heroínas) , discursos patrióticos , libros y
folletos que pretendían reivindicar la memoria de algún héroe maltratado, reseñas de honras
fúnebres, las llamadas <<coronas fúnebres>> , las <<apoteosis>> y las obras histórico-
dramáticas que se publicaron y representaron en los teatros del país; todo ello agrupado bajo
la cómoda (y un tanto arbitraria) etiqueta de <<literatura histórica menor>> fue el más
generalizado y eficaz medio para desarrollar el culto heroico en el seno del pueblo
venezolano.
3.2.) El número de textos revisados y que están directamente relacionados con el culto a
los héroes o próceres del siglo pasado, alcanza a unos sesentinueve títulos fundamentales, de
ellos, cincuentidos son de autoría individual y unos diecisiete tienen carácter antológico o
colectivo. Algunos de estos últimos, incorporan en ciertos casos, hasta más de treinta textos
de autores diferentes. Deben ser agregadas además, las nueve "hojas sueltas" , siete dramas
histórico-patrióticos , así como los respectivos trabajos generales u obras mayores. Las
referencias a diferentes materiales citados y el conjunto total de cientos de notas, comprueba
nuestro aserto.
3.3.) Buena parte de los textos decimonónicos investigados son meras reimpresiones de
materiales publicados originalmente en la prensa de Caracas y de otras localidades
importantes tales como Carúpano, Cumaná, Barcelona, La Asunción, Puerto Cabello,
Valencia, Maracay, Maracaibo, Mérida, San Cristóbal. Esa producción intelectual estuvo
limitada fundamentalmente a la escritura de editoriales, notas y ensayos periodísticos, poesía
patriótica, discursos, oraciones fúnebres, etc.
En esa literatura fue común la exaltación de las virtudes, el homenaje a las glorias
alcanzadas por los héroes, la nota luctuosa por la desaparición de los que fueron falleciendo a
lo largo de la centuria o el recuerdo a los que cayeron en las primeras décadas de ella. Todo
eso fue motivo para que nuestros escritores y oradores dejaran para la posteridad expresiones
intelectuales cargadas de fervor nacionalista y de adhesión filial a los considerados padres
fundadores de la patria, especialmente a Simón Bolívar.
3.4.) Una nota que resalta en esa producción es su carácter repetitivo, casi siempre
inspirada por la celebración de honras fúnebres y en las apoteosis organizadas con motivo de
los respectivos centenarios del natalicio de muchos de los que formaron parte de esa
generación que luchó en los campos de batalla, en los cabildos y congresos a partir de 1810.
3.6.) Parte de esa producción intelectual, estuvo representada por los llamados escritos de
reivindicación que buscaban honrar la memoria de alguien a quien sus biógrafos o familiares
consideraban maltratado por otros autores o publicaciones. Ejemplos de ésto lo tenemos en la
reivindicación o defensa que se hizo a Ramón García de Sena, Juan B. Arismendi, Manuel
M.de las Casas, Francisco de Miranda y Diego J. Jugo.
3.7.) También debe anotarse en este balance final, que la escritura y representación de
obras dramáticas de cierto contenido histórico o patriótico fue una práctica conocida en
Venezuela. La localización de algunas piezas completas y las noticias que obtuvimos sobre
otras, así nos lo indican. Tales obras (dedicadas algunas a Bolívar) tenían como tema
fundamental la lucha por la libertad de la patria. Un caso muy especial fue la obra <<El
Tirano Aguirre>> . Ella, aparentemente dedicada a un <<anti héroe>>, cantó al primer
rebelde "hispanoamericano" y por ende a una manera de representar la libertad, o por lo
menos a la libertad de rebelarse contra los más inmediatos símbolos de opresión: los agentes
de la Corona española en la América en pleno proceso de conquista.
3.10.) Las escasas publicaciones periódicas que insertaban en sus páginas trabajos de
contenido histórico coadyuvaron al desarrollo del culto heroico y de una elemental
conciencia venezolanista. La mayoría analfabeta no tenía acceso directo a tal información;
pero a los que vivían en las principales ciudades, ésta le llegaba fundamentalmente a través
de los discursos y ceremonias patrióticas en plazas, cementerios, iglesias y en el Panteón
Nacional. Los que no asistían a tales eventos cívicos pues vivían en remotas
ciudades ,pueblos y aldeas oían la lectura de la información de prensa de quienes la recibían y
podían leerla y comentarla.
4.2.) Ese tardío desarrollo del culto al Libertador Simón Bolívar tuvo que ver en parte con
la presencia políticamente dominante de los "godos" (*) en el Congreso Nacional y en otras
instituciones fundamentales del país, tal presencia , finalizó abruptamente en la época de los
Monagas. Ello explica, que cuando en 1842 se hizo el homenaje nacional al Libertador,
todavía existían grupos e individualidades que no perdonaban los supuestos pecados del
ilustre prócer.
___________
(*) n.a. Se afirma que en ese grupo <<godo>> participaron muchísimos ex realistas,
emigrados recién regresados al país, separatistas o "cosiateros" ; y por ello, todavía se
conservaban los viejos rencores dejados por el trauma de la desintegración de la Gran
Colombia y por esa sangrienta "guerra civil" que fue el proceso de emancipación nacional de
Venezuela.
4.4.) En las últimas décadas del pasado siglo, coinciden varios factores que explican la
presencia de un mayor número de actos de homenaje patriótico. Primeramente, casi todos los
importantes próceres nacionales nacidos a finales del siglo XVIII o a comienzos del XIX, ya
habían fallecido o se cumplía el primer Centenario de su natalicio. En una u otra
circunstancia, el gobierno aprovechó para conmemorar la ocasión en forma luctuosa o
festiva, según fuera el caso. En segundo lugar, la presencia de mentalidadades como la de
Antonio Guzmán Blanco, quien comprendió muy bien la importancia del culto a los héroes,
como una nueva <<religión cívica>> con su gran templo (el Panteón Nacional, lleno con los
restos y cenizas sagradas de los próceres, monumentos y lápidas) que servía de escenario para
las solemnes celebraciones periódicas, donde los pontífices de la nueva religión auspiciada
por el Estado, legitimaban con su prédica patriótica al propio Estado y a quienes lo
encarnaban como jefes políticos y militares.
4.5.) El guzmancismo (con Guzmán o sin Guzmán) hizo el más abierto aprovechamiento
político-partidista de las glorias de los héroes y especialmente de las del Libertador. Con ese
objeto se bautizó o rebautizó a varios estados y poblaciones con el nombre de Bolívar y de
otros próceres de la independencia; con los de los así llamados <<próceres de la federación>>
y con los del propio Guzmán Blanco y su padre. En esa misma línea estuvo la erección de
estatuas, la construcción de monumentos funerarios, plazas y bulevares, la organización de
una Academia Nacional de la Historia y la publicación de gran cantidad de obras históricas y
literarias (usualmente dedicadas al Ilustre Americano o a sus sucesores).
4.6.) En relación con el culto al héroe máximo, el Libertador Simón Bolívar ,se puede
afirmar que el número de los actos de homenaje -- tanto los de tipo intelectual como los que
se expresaron en festejos ,monumentos y disposiciones legales (moneda, condecoraciones,
etc.) -- supera con creces los acordados a la totalidad de los restantes.
A éste se le atribuyen todas las virtudes políticas, morales y sociales. Se considera sagrada su
memoria y se enmarca su actuación en una concepción providencialista de la Historia.
4.7.) La producción de los intelectuales venezolanos, desde los tiempos en que el joven
Juan Vicente González escribió sus primeros textos que posteriormente llamó <<Mis
Exequias a Bolívar>> hasta los publicados en la gran apoteosis del Centenario de 1883 y en
los años inmediatos, siempre consideró que la patria le debía su existencia a la acción del
ilustre prócer. Es más, siempre se cantó a su memoria intentando desagraviarla por las
condenables acciones de los que solamente habían dilapidado la herencia de esa patria libre.
El llamado reiterado a que despertara de su sueño o por lo menos a que jamás se olvidara
su epopeya era parte substancial de los discursos, poemas, himnos y otras muestras del amor
filial nacional.
4.8.) Muchísimas de esas expresiones intelectuales en honor a Bolívar así como todo ese
aparato institucional que canonizaba a los ilustres guerreros de la emancipación, usualmente
escondían gruesas contradicciones. Como sabemos, Bolívar (y también Miranda) consagró su
existencia no solamente a la independencia de la patria en sentido restringido. Su lucha fue
siempre por la emancipación de Hispanoamérica y aspiraba ni más ni menos a construir un
nuevo y grande Estado o un conjunto de estados republicanos que por su peso propio en la
geopolítica de entonces pudiera garantizarse el respeto a su libertad política recién adquirida.
Muy lejos estaba el ideal bolivariano de un estado o <<patriecita>> como el nacido al calor
de la Cosiata y el Congreso de Valencia en 1830.
De tal manera que cuando las élites rendían culto a Bolívar hacían abstracción de los grandes
proyectos que el Libertador defendió hasta expirar en Santa Marta y por los cuales le
execraron los separatistas que más nada quisieron saber de la Gran Colombia, congresos
anfictiónicos, confederaciones andinas y otras ideas que condenaron como meros sueños
descabellados de "Don Simón", como les gustaba llamarlo entonces.
Mención aparte merecen los planteamientos de casi todos los que argumentaron a favor
de su homenajeado sustentando puntos de vista que se inscriben dentro de la llamada
"Leyenda Negra".
Fue casi un lugar común en la mayoría de los textos patrióticos describir a los adversarios
en la lucha de independencia nacional con los peores epítetos.
A los partidarios del rey de España se les calificaba de bárbaros, crueles, sanguinarios,
asesinos, cobardes, tiranos, representantes del absolutismo, del oscurantismo y de los que nos
esclavizaron por tres centurias. Junto a esa condena a los trescientos años de esclavitud y
servidumbre, siempre se hace dolida referencia a la tragedia de los aborígenes, personificados
en los principales caciques o hasta en grupos no venezolanos como los Incas del Perú.
Solamente en contadas ocasiones, como por ejemplo en los actos de San Cristóbal en
1883, se rompió con esa tradición de levantar las banderas anti españolas. Allí, en medio del
fervor patriótico y bolivariano se echó a un lado la machacona reflexión sobre las tres
centurias de opresión, tiranía, servidumbre y obscuridad; en cambio, el entusiasmo de la
fecha centenaria se convirtió en un fraterno <<viva España>>.
En buena medida, en esa misma onda se inscriben el discurso del Padre Manuel Felipe
Rodríguez en la Iglesia Metropolitana de Caracas (julio, 1883) y el poema de Francisco
Calcaño a la Batalla de Carabobo y Simón Bolívar.
Aunque razonablemente se pueda suponer que muchos de los homenajes a los héroes no
siempre se convirtieron en materiales escritos (en la prensa, folletos, libros) y que tampoco
siempre tales materiales, se conservaron en su totalidad, hasta poder ser localizados en estos
días; suponemos que los testimonios efectivamente localizados y analizados son lo
suficientemente representativos como para servir de soporte a estas conclusiones, aunque no
puedan retratar exactamente ese universo de materiales diversos dedicados a los próceres y a
sus glorias.
FUENTES
FUENTES
1. El <<Corpus Historiográfico Mayor>> . Los Libros Fundamentales Escritos en la Venezuela
del Siglo XIX.
2.1. Literatura Histórica Venezolana Escrita o Publicada Durante el Siglo XIX: Libros , Folletos
, Publicaciones en la Prensa de la Época.
2.2. <<Hojas Sueltas>> de Contenido Histórico Publicadas Durante el Período Estudiado.
2.3. Obras Dramáticas, Monólogos, Comedias,etc. de Contenido Histórico, Impresas y/o
Representadas en la Época.
3. Memorias, Testimonios.
4. Recopilaciones Documentales; Antologías; Catálogos; etc.
5. Hemerografía Venezolana del Siglo XIX.
(Principales Periódicos del Período)
6. Los Clásicos (Grecia, Roma, España)
Textos Fundamentales y Estudios.
7. Bibliografía General.
7.1 Libros
7.2. Artículos
8. Enciclopedias y Diccionarios.
9. Trabajos Inéditos (Total o Parcialmente)
Azpurúa, Ramón.
BIOGRAFÍAS DE HOMBRES NOTABLES DE HISPANOAMÉRICA (Coleccionadas por
Ramón Azpurúa; obra mandada a publicar por el Ejecutivo Nacional de los Estados Unidos de
Venezuela, presidido por el Gran Demócrata General Francisco Linares Alcántara). Caracas,
Imprenta Nacional, 1877 4 v.
Existe una Edición Facsimilar: Ampliada con índices alfabéticos, Ilustraciones e informaciones
biográficas adicionales. Caracas, Ediciones Mario González, 1986
Bello, Andrés.
CALENDARIO MANUAL Y GUIA DE FORASTEROS EN VENEZUELA PARA EL
AÑO DE 1810 (Con Superior Permiso). Caracas, Imprenta de Gallagher y Lamb, 1810. (Edición
Facsimilar del Banco Central de Venezuela, 1968 con estudio preliminar de Pedro Grases) 64
p.
Blanco, Eduardo.
VENEZUELA HEROICA. Caracas, Imprenta Sanz, 1881
Nota. Hubo una primera edición de 266 páginas que sólo recogía los capítulos o cuadros
sobre la batalla de La Victoria, San Mateo, Las Queseras, Boyacá y Carabobo. Ese mismo año de
1881, la misma empresa publicó otra edición de 599 páginas, ampliada con nuevos cuadros,
además de los anteriores , incorporó los relativos al Sitio de Valencia, la toma de Maturín, la
Invasión de los Seiscientos, la Casa Fuerte, San Félix y Matasiete.
Este contenido es el que se ha venido repitiendo en las sucesivas ediciones hasta nuestros
días. Entre ellas las siguientes: la de Caracas, Monte Ávila Editores, 1972 ; la de Madrid,
Editorial Castellana, 1978 , 395 p. con Prólogo de J.Salgado; la de Caracas, Alfadil, S.A. ,1981
con Prólogo de J.R. Lovera de Sola.
Larrazábal, Felipe.
VIDA DEL LIBERTADOR SIMON BOLÍVAR, New York, 1865-1866
(Esta Edición original fue “Modernizada” y acompañada de un prólogo y notas de Rufino Blanco
Fombona. Madrid, Editorial América, 1918). Hay Edición Facsimilar de la Comisión del
Bicentenario del Nacimiento del Libertador, Gobernación del Distrito Federal, Caracas, 1983
3 vols.
===============//////================
2. El <<Corpus Historiográfico Menor>> , Siglo XIX.
2.1. Literatura Histórica. Libros y folletos: Biografías, Discursos, Homenajes, Coronas Fúnebres,
Descripciones de Honras Fúnebres, Apoteosis, Escritos Reivindicatorios, Descripción de
Conmemoraciones Patrióticas; Manuales de Historia.
Azpurúa,Ramón.
TRES PRÓCERES DE LA INDEPENDENCIA. Gral. Mariano Montilla, Pro.José Félix
Blanco, Fernando Peñalver (Publicación hecha por la Junta Directiva de la Apoteósis de
Miranda) . Caracas, Tipografía El Cojo, 1896
[En 120 páginas, recoge la biografía de Montilla tomada del libro BIOGRAFÍAS DE
HOMBRES NOTABLES ,la vida de J.F. Blanco escrita por J.A.Calcaño con adiciones de
Azpurúa y un conjunto de documentos oficiales]
Calcaño, Eduardo.
DISCURSO DE EDUARDO CALCAÑO EN EL PANTEÓN NACIONAL EL 28 DE
OCTUBRE DE 1880. CARACAS, Imprenta de la Gaceta Oficial, 1880. 13 p.
Calcaño, Francisco.
La Batalla de Carabobo Homenaje a Bolívar en su Centenario. Paris, Librería de Garnier
Hermanos, 1883. 14 p.
Calcaño, Julio.
EL HÉROE DE TURBACO. Rasgos Biográficos del Ilustre Prócer Coronel D.Diego José Jugo
(para el periódico El Zulia Literario e Ilustrado) . Caracas, Tipografía El Cojo, 1890 46 p.
Domínguez, Federico.
LAS FIESTAS DE PAEZ EN VALENCIA. Valencia, Imprenta Colombiana, 1859 24 p.
EL CENTENARIO DEL LIBERTADOR EN SAN CRISTÓBAL (Biblioteca de Autores
Tachirenses, vol.83).Caracas, B.A.T, 1983
135 P. (la parte fundamental de la obra es una reproducción facsimilar del texto original de 1883)
Ernst, Adolfo.
LA EXPOSICIÓN NACIONAL DE VENEZUELA EN 1883 (Obra Escrita de Orden del
Ilustre Americano General Guzmán Blanco) . Caracas, Publicación del Ministerio de Fomento -
Imprenta de Vapor de <<La Opinión Nacional>> ,1886.
tomo I,704 p. ;tomo II,427 p. (documentos)
Espíndola H.,Jesús M.
DISCURSO DE ORDEN PRONUNCIADO POR JESÚS M. ESPINDOLA H. EN LA
PLAZA <<GÓMEZ>> DE LA ASUNCION, LA NOCHE DEL 14 DE OCTUBRE CON
MOTIVO DE LA RECEPCIÓN PUBLICA DE LA EFIGIE DEL GENERAL
FRANCISCO ESTEBAN GÓMEZ. (La) Asunción, s.p.i, 1883 7 p.
Lange, H.(Representante)
VERDADES HISTÓRICAS (Defensa de la memoria del coronel Ramón García de Sena por
sus descendientes y publicada por H. Lange, representante de la familia García de Sena) .
Caracas, Imprenta de Espinal e Hijos, 1881 25 p.
Lange, H. (Representante)
VERDADES HISTÓRICAS N.2 (Vindicación de la memoria del coronel Ramón García de
Sena de los ataques que le dirige el Doctor Lucio Pulido, hecha por sus descendientes y
publicada por H. Lange representante de la familia García de Sena).Caracas, Imprenta de Espinal
e Hijos, 1881 36 p.
Montesdeoca, Ignacio.
ESBOZO BIOGRÁFICO DEL GENERAL PEDRO LEÓN TORRES. Barquisimeto,
Imprenta Progreso, 1889 28 p.
Pulido, Lucio.
RECUERDOS HISTÓRICOS CON MOTIVO DE LA COLOCACIÓN EN EL PANTEÓN
NACIONAL DE LOS RESTOS DEL ILUSTRE PRÓCER DE LA INDEPENDENCIA
SUR-AMERICANA, GENERAL JOSÉ IGNACIO PULIDO (padre). Caracas, Imprenta de
Vapor de La Opinión Nacional, 1880 110 p.
Pulido, Lucio.
HISTORIA PATRIA. LA RETIRADA Y ABANDONO DE BARINAS POR EL
CORONEL RAMÓN GARCÍA DE SENA EL 18 ENERO DE 1814. Caracas, Imprenta de la
Gaceta Oficial, 1881 41 p.
Rojas, Arístides.
EL CORAZÓN DE GIRARDOT 1813-1814 (De la Colección Leyendas Históricas de
Venezuela, homenaje del autor al 5 de julio de 1891) .Caracas, Imprenta y Litografía del
Gobierno Nacional, 1891
22 p. (el texto está junto con otro trabajo del autor)
Rojas, Arístides.
BIOGRAFÍA DE EULALIA RAMOS SÁNCHEZ DE CHAMBERLAIN, CELEBRE
HEROÍNA DE LA CASA FUERTE DE BARCELONA, LLAMADA ERRÓNEAMENTE
EULALIA BUROZ, VICTIMADA EL 7 DE ABRIL DE 1817 .Caracas, Tipografía Boston,
1925 36 p. (el texto, aunque publicado en esa fecha tardía con motivo de la inauguración de un
monumento en homenaje a la heroína, está fechado en Caracas 24-1-1885)
Tejera, Felipe.
BIOGRAFÍA DEL LICENCIADO DON MIGUEL JOSÉ SANZ. Caracas, 1873 (El ejemplar
consultado le falta su portada) 40 p.
Tejera, Felipe.
Manual de Historia de Venezuela. Caracas, Imprenta Federal, 1875 (sucesivas ediciones)
Toro, Fermín.
DESCRIPCIÓN DE LOS HONORES FÚNEBRES CONSAGRADOS A LOS RESTOS
DEL LIBERTADOR SIMON BOLÍVAR EN CUMPLIMIENTO DEL DECRETO
LEGISLATIVO DEL 30-4-1842, HECHA DE ORDEN DEL GOBIERNO. Caracas,
Imprenta de Valentín Espinal, 1843
53 p. (incluye apéndice documental)
Ver también: Fermín Toro - La Doctrina Conservadora (PENSAMIENTO POLÍTICO
VENEZOLANO DEL SIGLO XIX. Textos Para Su Estudio) .vol.1 , pp.321-355. Caracas,
Publicaciones del Congreso de la República de Venezuela, 1983.
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de diversos textos: proclama del Libertador, su testamento, homenajes de Bolivia, Chile, México;
artículo de un diario francés, etc.)
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de Colombia) .Imprenta de Echeverría Hermanos, 1883.
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RAFAEL URDANETA. (una lámina con la efigie del Gral. Urdaneta, fechas de su natalicio ,su
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ELEGIA A LA MUERTE DEL SEÑOR CORONEL JUAN JOSÉ CONDE (1848).
Impr. F.E.Bigotte, 1854
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Barazarte, Armando.
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Briceño Picón,Adolfo.
EL TIRANO AGUIRRE (Drama Nacional de grande espectáculo en tres actos por Adolfo
Briceño Picón. Representado por primera vez en el teatro de Mérida el 30 de diciembre de 1872
y repetido el 6 de enero de 1873, con espléndida acogida). Mérida, Imprenta de Juan de Dios
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Gaspar Marcano) .En: Gaspar Marcano, Poema del Teniente - Coronel y Licenciado Gaspar
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Martínez, Celestino.
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Martínez, Celestino.
ARAURE ! (Drama Histórico en tres actos. Ofrenda al Libertador en su Primer
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Ruedas, Lisandro.
LA VÍCTIMA DE LA LIBERTAD (O Policarpa Salavarrieta: Drama Histórico y Nacional en
tres actos en verso y prosa.Representada por primera vez el 19 de abril de 1850 en el teatro de
Valencia). Valencia,Imprenta y Librería de Bartolomé Valdez, 1850.
Tejera, Felipe.
Triunfar con la Patria (Teatro Nacional - Drama original en cuatro actos y en verso) .Caracas,
Imp. Federal, 1875 77 p.
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3. MEMORIAS.
Drenikoff, Ivan.
IMPRESOS VENEZOLANOS DEL SIGLO XIX. Caracas,Instituto Autónomo Biblioteca
Nacional y de Servicios de Bibliotecas,1984 237 p.
Grases, Pedro.
BIBLIOGRAFÍA DE DON ARISTIDES ROJAS 1826-1894. Caracas, FUNRES, 1977.
------------. INVESTIGACIONES BIBLIOGRÁFICAS (Colección Vigilia #13).Caracas,
Ministerio de Educación - Departamento de Publicaciones, 1968
tomo I,319 p.
--------------. ANTOLOGÍA DEL BELLISMO EN VENEZUELA.
Caracas, Monte Ávila Editores , 1981 478 p.
Martínez, Magda.
IMPRESOS DEL PERIODO 1830-1850 (manuscrito en Biblioteca Nacional). Caracas, 1990.
PRESENCIA DE JUAN VICENTE GONZÁLEZ (Selección, Prólogo y Notas del Dr. Virgilio
Tosta. Libro Homenaje del Liceo Nocturno Juan Vicente González) .Caracas, Tipografía
Garrido, 1954 147 p.
===============///////==============
5. HEMEROGRAFIA VENEZOLANA DEL SIGLO XIX:
*************************
*************************
*************************
6. LOS CLÁSICOS (Textos Fundamentales y Estudios)
----- Roma, Grecia, España—
Homero: LA ILIADA (Introducción Juan Pallí Bonet; Traducción Luis Segalá) .Barcelona
(España) ,Editorial Bruguera, 1981 446p.
POEMA DE MIO CID (Versión de Pedro Salinas) .Madrid, Revista de Occidente (Colección
Selecta) , 1969 --- 228 p. ---
Suetonio: VIDAS DE LOS DOCE CESARES (Estudio Preliminar y traducción revisada por
José Luis Romero) .México, Grolier International - Editorial Cumbre, S.A. ,1978 384 p.
Tito Livio: Décadas de Tito Livio, Príncipe de la Historia Romana (Traducidas al castellano
por Fr Pedro de Vega, del Orden de San Gerónimo. Corregidas y aumentadas posteriormente por
Arnaldo Byrkman). Madrid, Imprenta Real, MDCCXCVI
Tito Livio: Obras Completas de Tito Livio - Desde la Fundación de Roma (Bibliotheca
Scriptorum Graecorum et Romanorum Mexicana) .México, Universidad Nacional Autónoma de
México, 1955
Volumen :Libros I-II, 437 p.
Tito Livio: La Monarquía Romana (Traducción, Introducción y Notas por Víctor-José Herrero
Llorente) .Madrid, Aguilar, S.A de Ediciones , 1969
180 p.
***********************
ESTUDIOS.
Sanz, Victor.
La Historiografía en sus Textos (Desde sus orígenes hasta el Renacimiento) .Caracas, Fondo
Editorial de Humanidades y Educación - Universidad Central de Venezuela, 1985 317 p.
======================
========================
7.1 Libros.
Bauer, Wilhelm.
INTRODUCCIÓN AL ESTUDIO DE LA HISTORIA ( Traducción de la segunda edición
alemana y notas por Luis G. de Valdeavellano) . Barcelona, Bosch, Casa Editorial, 1957 626 p.
Bloch, Marc.
INTRODUCCIÓN A LA HISTORIA (Breviarios del FCE # 64) .
México, Fondo de Cultura Económica, 1979 159 p.
Bloom, Salomón F.
EL MUNDO DE LAS NACIONES. EL PROBLEMA NACIONAL EN MARX (Traducción
de Roberto Bixio). Buenos Aires, Siglo XXI editores S.A. , 1975
Brading, David.
LOS ORÍGENES DEL NACIONALISMO MEXICANO. México, Ediciones ERA, 1983
138 p.
Campbell, Joseph.
EL HÉROE DE LAS MIL CARAS (Psicoanálisis del Mito) .México, Fondo de Cultura
Económica, 1992 372 p.
Carlyle , Tomas.
DE LOS HEROES, EL CULTO DE LOS HÉROES Y LO HEROICO EN LA HISTORIA
(Incorporado en el volumen <<Los Clásicos Carlyle y Emerson: De los Héroes / Hombres
Representativos. Traducciones y Estudio Preliminar de Jorge Luis Borges) .México, Grolier
International - Editorial Cumbre, 1978 399 p.
(La obra de Carlyle ha sido publicada en múltiples ediciones, una muy conocida es la de la
Colección Austral, volumen extra #1009 . Buenos Aires, Espasa-Calpe, 1951 ----- 226 p.)
Croce, Benedetto.
LA HISTORIA COMO HAZAÑA DE LA LIBERTAD. México, Fondo de Cultura
Económica, 1986 295 p.
Croosman, R.H.S.
BIOGRAFÍA DEL ESTADO MODERNO (Traducción de J.A.Fernández de Castro y Carlos
Villegas) .México, Fondo de Cultura Económica (Colección Popular # 63), 1941
Correa, Luis.
TRES ENSAYOS SOBRE JUAN VICENTE GONZÁLEZ. Caracas, Publicaciones del
Ministerio de Relaciones Interiores, 1987 143 p.
Dumézil, Georges.
EL DESTINO DEL GUERRERO (Aspectos míticos de la función guerrera entre los
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Nota: Existe traducción en español bajo este título:
WATTERS, Mary: “Un Educador Venezolano - Don Feliciano Montenegro Colón” en
BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA. # 30 (119). Caracas, julio-
septiembre 1948 p.269-287
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8. ENCICLOPEDIAS Y DICCIONARIOS.
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Reese, William L.
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The Oxford Dictionary of Quotations. London, Oxford University Press, 1966 1.003 p.
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9. Trabajos Inéditos:
Plaza, Elena.
<<Historiografía y Nacionalidad:El Resumen de la Historia de Venezuela de Baralt>> .
Caracas, Universidad Católica Andrés Bello , Mayo, 1990
91 p.
Raynero M. ,Lucía.
<<Aspectos Historiográficos en Juan Vicente González>>. Caracas, Universidad Católica
Andrés Bello, Junio, 1990
127 p.
Raynero M. ,Lucía.
<<El Fundamento Histórico de la Nacionalidad Venezolana en la Historiografía de Francisco
Javier Yanes>>. Caracas, Diciembre, 1990
160 p.
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Galíndez C. ,Omar.
<<FORMACIÓN DEL ESTADO NACIONAL EN LOS ESTADOS UNIDOS DE
NORTEAMÉRICA 1600 - 1870>> (Trabajo de Ascenso presentado para optar a la categoría de
Profesor Asociado en el escalafón universitario). Caracas, Universidad Pedagógica Experimental
Libertador , Instituto Pedagógico de Caracas - Departamento de Geografía e Historia. 2 tomos,
669 p.
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