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Ciudad Nezahualcóyotl a 3 de septiembre de 2022

UNIVERSIDAD NACIONAL
ATONOMA DE MEXICO

POSGRADO EN DERECHO
MAESTRIA EN POLITICA CRIMINAL

Primer Semestre

Docente: Mtro. Roberto Calixto Márquez

Asignatura: Visiones Criminológicos del


Delito y del Delincuente

Actividad: Ensayo de la Lectura (Vigilar y


castigar) EL nacimiento de las Prisiones de
Michel Foucault

Alumno: Buenrostro Briseño Raúl Javier


 
Índice

Introducción……………………………...3

Desarrollo………………………………..3-7

Conclusión……………………………….7

Bibliografía……………………………….8
Introducción
En este trabajo, tras analizar la lectura que compren los capítulos VIII, IX y X de
la obra de Michel Foucault; Vigilar y Castigar - El Nacimiento de la Prisión, de 1975, se
identifican, mencionan y explican los elementos del Sistema Criminológico que se
encuentran inmersos en dicha lectura y así mismo el propio encaramiento de estos
mismos con la actual realidad que se vive en la prisión.

Los actuales calabozos de México


En cuanto a este primer elemento: la Criminalidad, se identifican en la lectura las
cifras que el autor nos comparte y que derivan de la reincidencia delictiva, nos comenta
Foucault que hacia 1845 Francia registraba un total de 108,000 prisioneros los cuales
estaban repartidos en diferentes localidades penitenciarias como Patíbulo y Picota,
además contaba con 3 presidios, 19 casas centrales, 86 casas de justicia, 362 casas
de detención, 2,800 cárceles de distrito y 2,238 calabozos.
La taza de reincidencia aumentaba y el hecho de ser detenido era sinónimo de
reincidencia, una buena parte de los condenados eran antiguos detenidos. Las cifras
de reincidencia se reflejaban de la siguiente forma; un 38% de los que salían de las
casas centrales reincidían y el 33% eran presidiarios.
De 1828 a 1834 de un total de 35,000 condenados, 7,400 eran reincidentes, es
decir, 1 de cada 4.7 condenados. Hablando de correccionales el fenómeno se repetía
pues de 200,000 reclusos, 35,000 eran reincidentes, es decir, 1 de cada 6. En 1831 de
2,174 condenados por reincidencia, 350 habían salido de presidio, 1,682 de casas
centrales y 142 de las 4 correccionales sometidas al mismo régimen de las casas
centrales, situación que se ve en aumento durante todo la monarquía de Julio.
Ya para 1835 se contaba con 1,486 reincidentes de un total de 7,223
condenados criminales.

“en 1839, 1,749 de 7,858; en 1844, 1,821 de 7,195. Entre los 980 detenidos de Los, había 570
reincidentes y en Melun, 745 de 1 088 presos. La prisión, por consiguiente, en lugar de devolver
la libertad a unos individuos corregidos, enjambra en la población unos delincuentes peligrosos:
"7 000 personas devueltas cada año a la sociedad... son 7 000 principios de crimen o de
corrupción esparcidos en el cuerpo social”1.

1
Foucault, M. (1975). Vigilar y Castigar El nacimiento de la prisión. Buenos Aires, Argentina: Siglo
Veintiuno. doi:987-98701-4-X,pp. 245,246
Es para este servidor algo no grato, pero entendible. Lo que se tiene registrado
desde hace ya poco más de 200 años, increíblemente en nuestro presente, vigente,
situación que así seguirá por espero no muchos años más y que a su misma vez
espero se logre erradicar, pero ¿Cuál es la razón del que esta situación se siga
repitiendo y que en palabras del autor más allá de erradicarla o simplemente
disminuirla esta simplemente aumente? Técnicamente hablando, se trata de una simple
y sencilla falta de eficacia, eficacia por parte del Sistema Penitenciario, Judicial y
Social, pero que irónica y que sencilla palabra: sencilla porque esta misma te da la
respuesta e irónica porque la solución no está en lo factico si no en lo abstracto.
¿Quién tiene la culpa de ello? Todos, directa e indirectamente, en menor y mayor
grado, y nadie quedaría sin por lómenos algo de culpa. ¿Cuándo podremos avanzar?
El día que tomemos las decisiones correctas, simplemente, el día que lo decidamos, el
día que realmente se quiera hacer lo necesario y no solamente lo que se puede.
Así como Foucault nos menciona los axiomas de la prisión de 1975 así mismo
nos lo dice nuestra carta magna en 2022; “El sistema penitenciario se organizara sobre
la base del respeto a los derechos humanos, del trabajo, la capacitación para el mismo,
la educación, la salud, y el deporte como medios para lograr la reinserción del
sentenciado a la sociedad y procurar que no vuelva a delinquir, observando los
beneficios que para el prevé la ley”2, y ¿qué pasa entonces? Si está escrito por ¿que
no sucede? Como ya lo comente eficacia. Y es que lo importante no está en ver los
objetivos facticos si no en los procesos abstractos, el secreto no está en las metas
sino en la metodología, ¿qué se necesita?, ¿qué camino se debe tomar?, ¿qué
estrategias se deben realizar para llegar al fin? Nuero uno: Por más leyes y códigos
que se creen, estos nunca servirán de nada si no se realiza un protocolo de
actuaciones preciso y claro. Antes de que ello exista, simplemente se hará lo que se
sigue haciendo; todo lo contrario, sintéticamente es tener poder coercitivo, hacer y
ejecutar la ley tacita y objetivamente, y numero dos: Fortalecer el estado benefactor,
crear una condición social que impida siquiera hacer pensar y optar por alguna
conducta delictiva. ¿Por qué la prisión es tan querida, valiosa y hasta amada por la
reincidencia? Facil de contestar; si bien nos dice Foucault que es la hija adoptada que
el sistema judicial nunca imagino, es entonces para estos reincidentes la Tia política
que los acogió y protegió más y mejor que el mismo papa Estado, una Tia que brinda
entendimiento y una mejor oportunidad de ser ellos mismos, una Tia que aun estando
en cautiverio, ofrece un mejor estado de bienestar que el que ofrece el Estado en plena
libertad, razón por la que y la aman y extrañan, al grado que regresan a ella.
En cuanto a la víctima compete, Foucault nos dice en verdad muy poco, pues
entendiendo el contexto en el que se basó su investigación e incluso la temporalidad
en la que este se encontraba, no es raro notar su falta de importancia ya que esta
empieza a tomar fuerza y forma sino hasta hace poco más de una década. De la
víctima nos comenta Foucault que se le quita el derecho de hacerse justica, el
2
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. (s.f.). Recuperado el 19 de agosto de
2022, de Camara de Diputads LXV Legislatura:
https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgv.htm, art. 18
nacimiento de la prisión tuvo como consecuencia el evitar que las víctimas se puedan
vengar, pero no desde una perspectiva que les limite atribuciones o derechos, sino más
bien desde el enfoque teórico científico que la misma temporalidad estaba tratando de
explicar, es decir, el cese a las venganzas de sangre y la monopolización del castigo
por parte del Gobierno.
Actualmente las victimas juegan un papel más importante y pueden haber
diferentes tipos de ella3 se ha ganado su lugar tanto en la norma social como en la ley,
es de hecho en la ley penal objetiva actual la que clasifica la forma de hacer saber del
delito ante la autoridad: por Denuncia o por Querella, refiriéndonos a la querella como
al requisito procedimental que presenta la victima directa del delito para hacerle saber a
la autoridad de la comisión de ese delito. Y a la denuncia como el requisito
procedimental que presenta cualquier persona que haya sido testigo o que baste con
que tenga conocimiento de algún delito. Ahora bien, podemos percatarnos que la
víctima ha evolucionado en cuanto a la protección de los derechos que la ley le asiste y
que en realidad no es sino una forma de reforzar la venganza hacia el victimario pues
ahora dependerá del daño hecho por este el que determinara su castigo final.
El delincuente es el protagonista de esta obra y de él se habla desde que
comienza la obra hasta que termina, para Foucault el delincuente no es sino el
producto de la prisión, si bien es cierto que la persona entra a la prisión por alguna
falta, también es cierto que este se perfecciona ya estando adentro, es simplemente
una escuela del crimen, la prisión no disminuye la tasa de criminalidad, y se debe de
redactar un acta de fracaso, per y si vemos en el fracaso que es lo que si hace la
prisión, y lo que si hace bien nos dice el autor es fabricar delincuentes.
Dentro de la prisión debe ser distribuido y clasificado, se le debe de extraer el
máximo provecho de tiempo y de su trabajo fisco, se le debe de educar, calificar su
comportamiento continuo; domesticarlo. Y teniendo como contexto la forma de
producción capitalista que imperaba en la época, se les enfocaba en el gusto por el
trabajo y no el ocio, para así lograr su arrepentimiento por sus errores y que lograsen
amar los deberes, “fabricación de individuos maquina” concientización por la propiedad
privada; respetar el trabajo de los demás.
El delincuente nos comenta el autor se distingue del infractor. Si bien los dos
tienen autoría, la técnica penitenciaria se enfoca en la relación que tiene el criminal con
su crimen, vinculo que solo tiene el delincuente y no el infractor, pues así entonces no
se necesita ser delincuente para cometer alguna infracción. Es esa la gran y compleja
relación que el autor hace para distinguir al delincuente, el delincuente “está ligado a su
delito por todo un haz de hilos complejos (instintos, impulsos, tendencias, carácter)” 4

3
Ley General de Victimas . (s.f.). Obtenido de diputados.gob:
https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgv.htm

4
Foucault, M. (1975). Vigilar y Castigar El nacimiento de la prisión. Buenos Aires, Argentina: Siglo
Veintiuno. doi:987-98701-4-X, p. 233
Pocas líneas después encontramos que el “El delincuente, manifestación
singular de un fenómeno global de criminalidad, se distribuye en clases, casi naturales,
dotadas cada una de esos caracteres definidos y a las que corresponde un tratamiento
específico”5 y el autor cita a Marquet Wasselot quien nos comparte la palabra
etnología.
Etnologías de la prisión, pequeños pueblos dentro de este ya considerado como
un pueblo, clasificar a la población de estos pueblos internos dependiendo de su
inteligencia seria nos dice el autor citando a Ferrus, clasificando a los delincuentes en
tres zoologías étnicas de malhechores: los Dotados, los viciosos, limitados,
embrutecidos o pasivos y los ineptos o incapaces. Cada uno de ellos con un
tratamiento diferente así como zonas de aislamiento diferentes. Sin duda una primera,
obvia y científica forma de obtener resultados.
Actualmente nada de esto se lleva acabo como técnica o procedimiento de
tratamiento, he aquí una de las tantas causas y factores que imposibilitan el objetivo
que como ya comentamos anteriormente tiene la prisión, y que antagónicamente si
hace bien la prisión, fabricar delincuentes.
Hablando del delito y de la parte criminológica el autor nos dice que se debe en
primera instancia de valorar la biografía del infractor, valoración hecha por el juez en
donde debe de tomar en cuenta las peligrosas inclinaciones de su historia de vida, las
enojosas predisposiciones de su posición social y los malos antecedentes de su
educación. Aunada a la biografía como técnica para la corrección real del individuo esta
la observación, observación que no debe solo de remontar las circunstancias sino las
causas de haber cometido el acto. Esto como parte esencial del sistema judicial para
así clasificar correctamente la pena. “La introducción de lo "biográfico" es importante en
la historia de la penalidad. Porque hace existir al "criminal" antes del crimen y, en el
límite, al margen de él”. El delito empieza a ser estudiado de forma criminológica,
algo que se refuerza en nuestra actualidad con el uso de otra disciplina la: victimologia,
que auxilia al estudio del delito desde una vertiente cualitativa causal, dotando e incluso
de nuevas líneas de investigación que hacen tener una visión más amplia de este
fenómeno que nace actualmente como resultado de un sistema capitalista de
producción.
La parte de la sociedad como elemento del sistema criminológico se puede ver
reflejado en la explicación del propio nacimiento de la prisión, se trata de un contrato
social en donde incluidos todos legitiman el poder de castigar como una función legal
de la sociedad, que va dirigida hacia la sociedad pero que solo el Gobierno tiene
derecho de castigar, procurar y administrar justicia. Y son la ideas de la sociedad las
mismas que progresan para suavizar las costumbres tan brutales e infames que se
venían practicando para así evolucionar en una pena más civilizada, la prisión, o
mejor dicho la perdida de la libertad, una libertad que tiene el mismo valor para cada
uno de los individuos de la sociedad, una estratégica forma de incluir a toda la
sociedad en este pacto.

5
Ídem.
Llevando a la sociedad a nuestra actualidad podría decir que se mantiene
vigente el contrato pero que aunado a este la historia y sobre todo la evolución que ha
tenido la sociedad en el transcurso de los tiempos ha trasjiversado su forma y su fondo,
tenemos una sociedad con doble moral, por un lado aquella justa y recta y por el otro a
una que reprocha y se manifiesta inconforme ya sea de forma consiente o inconsciente,
una sociedad que no sabe elegir y diferenciar entre los juicios morales que esta misma
lleva muy intrínsecamente.
Sociedad etiquetadora que no hace más que echar a perder el trabajo carcelario
que si en el mayor de los positivos resultados se pudiera tener, sociedad que primero
pide castigo y luego señala como si estuviera inconforme o simplemente no entendiera

que solo es el resultado de sus mismas acciones.

Conclusión
La reincidencia delictiva aumenta por la simple razón de encontrar tanto una
mejor comprensión del presidiario dentro de esta como por ese coraje que crece hacia
la misma sociedad derivada de un etiquetamiento social y hacía en Gobierno por la
falta de un estado de bienestar optimo que ayude a su reinserción social, situación que
encuentra más fácil de obtener dentro de la prisión. La prisión ha excedido desde su
nacimiento el fin que las sociedades acordaron y para las que fueran construidas;
privar de la libertad. “La delincuencia es la venganza de la prisión contra la justica” 6,
La prisión es el resultado de las ideas sociales civilizadas para castigar de forma
consensuada. La victima refuerza su derecho a la venganza de forma legal con una
pena civilizada impidiendo que esta se convierta en verdugo y así mismo se puedan
invertir los papeles de victima a victimario. El delincuente profesional es el resultado de
la prisión, si algo hace bien la prisión es hacer delincuentes aptos y capacitados en el
arte del crimen. La prisión es el castigo más idóneo y apropiado para esta nueva
economía del poder. El poder político.

6
Foucault, M. (1975). Vigilar y Castigar El nacimiento de la prisión. Buenos Aires, Argentina: Siglo
Veintiuno. doi:987-98701-4-X,p. 236
Bibliografía
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. (s.f.). Recuperado el 19 de agosto de 2022, de
Camara de Diputads LXV Legislatura: https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgv.htm

Foucault, M. (1975). Vigilar y Castigar El nacimiento de la prisión. Buenos Aires, Argentina: Siglo
Veintiuno. doi:987-98701-4-X

Ley General de Victimas . (s.f.). Obtenido de diputados.gob:


https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgv.htm

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