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EL DERECHO A LA SALUD

La referencia es un Amparo con referencia 619-2017 de la Sala de lo Constitucional de la


Corte Suprema de Justicia, San Salvador, a las ocho horas y treinta y dos minutos del día
seis de diciembre de dos mil diecisiete.
Esta demanda es presentada por la abogada Ingrid Elizabeth Blanco Martínez como
apoderada de JAZM. En la demanda se manifiesta que su representado fue diagnosticado
con insuficiencia renal en mayo de 2016, desde entonces, se realiza hemodiálisis por la
perdida de funciones del riñón. Aparte de este diagnóstico, presentaba diagnóstico de
espina bífida desde su nacimiento, lo que le impide caminar por sí solo.
Junto con esto, es una persona de escasos recursos que tiene que tomar un transporte hacia
Santa Ana desde Sonsonate, donde existe un trayecto que su padre lo lleva cargado en su
espalda. Recorrido que debe hacer dos veces por semanas hasta el Hospital Nacional
Regional “San Juan de Dios” de Santa Ana para las hemodiálisis.
Sin embargo, alega que en ciertas ocasiones dicha terapia se ha suspendido debido a que
"las máquinas de hemodiálisis están arruinadas o por falta de insumos médicos tales como
el dializador y la guía venosa, además de la falta del medicamento respectivo para
complementar el tratamiento..."

La parte actora destaca que, a partir del presente año, por instrucciones del Director del
referido hospital, el personal médico le expresó al señor ZM y a los demás pacientes que
acuden por terapias de hemodiálisis, que no se tiene la capacidad económica para
proporcionar los insumos médicos que se utilizan para la realización de dicha terapia, por lo
que cada paciente debía comprar y llevar los dializadores y las guías venosas; en caso
contrario, no se le podía brindar la atención requerida.

Esta Sala dice que también es importante destacar que, de conformidad con el art. 65 de la
Constitución, la salud de los habitantes de la República constituye un bien público, por lo
que el Estado y las personas están obligados a velar por su conservación y
restablecimiento. En consecuencia, la jurisprudencia de este Tribunal ha clasificado el
derecho a la salud dentro del conjunto de los derechos fundamentales que comparten una
naturaleza dual, pues, por una parte, son derechos subjetivos, pero, además, son deberes
jurídicos, es decir conductas de imperativo cumplimiento para quienes se encuentran en la
situación jurídica indicada en la citada disposición.

En conclusión, es perfectamente válida la intervención del demandante en el presente


amparo, no solo en su carácter personal, sino también en defensa de los intereses difusos,
particularmente del derecho a la salud de los pacientes que padecen insuficiencia renal y
que son tratados en el Hospital Nacional Regional "San Juan de Dios" de Santa Ana.

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