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Exp. Nro.

: 6278-2015-0-3204-JR-PE-02
Cuaderno : Principal
Escrito : 04
Sumilla : FUNDAMENTACIÓN

SEÑOR PRESIDENTE DE LA SEGUNDA SALA PENAL DE APELACIONES PERMANENTE DE


ATE.
JOE WALTER QUISPE CERON, en la instrucción
seguida por los presuntos delitos de homicidio
calificado y tenencia ilegal de arma de fuego,
a Ud., expongo:

Que, habiéndose interpuesto recurso de nulidad contra la sentencia de fecha 6 de


diciembre de 2021, por lo que al amparo del Art. 300° del Código de Procedimientos
Penales se fundamenta el recurso en los términos siguientes:

I. LOS AGRAVIOS DE LA PRETENSIÓN IMPUGNATORIA.

1. La defectuosa valoración de los elementos de corroboración periférica del relato


de los agraviados - las declaraciones testimoniales carecen de entidad objetiva

La Sala Plena de la Corte Suprema en el Acuerdo Plenario 2–2005/CJ-116) ha


establecido criterios de ponderación sobre la valoración de la declaración del
agraviado y señala –criterio de verosimilitud – que no sólo incide en la coherencia y
solidez de la declaración, sino, que debe estar rodeada de ciertas corroboraciones
periféricas de carácter objetivo, que le doten de aptitud probatoria.

Según el mencionado Acuerdo Plenario los elementos de corrobación deben tener


el carácter objetivo.

En el fundamento 4.1.2.b de la sentencia impugnada la Sala señala que el relato de


los agraviados se encuentra corroborado con las declaraciones testimoniales de
Walter Fernando Castro Quiroz, Jesús Rubén Manrique Lovatón y Wilmer Terreros
Ayala.

Las declaraciones de órganos de prueba testimonial son elementos de


corroboración subjetiva y no objetiva como exige el mencionado acuerdo
plenario, más aún si dichas testimoniales también deben ser objeto de
corroboración periférica objetiva para adquirir relevancia probatoria.
2. La omisión de valorar la ilicitud del acta de incautación de arma de fuego.

En el fundamento 4.1.2.b y 4.2.2.b de la sentencia impugnada se invoca el “acta de


incautación” de fs. 30 como elemento de corroboración del relato de los agraviados
del delito de homicidio calificado y como prueba instrumental del delito de tenencia
ilegal de arma de fuego respectivamente.

La Sala omite valorar que el acta de incautación es nula por tratarse de prueba
prohibida, toda vez que participa como instructor del acta, el agraviado Teniente
PNP George Edward Huamán Bañares, quien estaba prohibido de participar,
conforme lo establece el Art. 6 del Decreto Legislativo 1267 Ley de la Policía
Nacional del Perú

El personal policial está sujeto a las siguientes incompatibilidades: 1) Intervenir en


asuntos donde sus intereses personales, laborales, económicos o financieros
pudieran estar en conflicto con el cumplimiento de los deberes y funciones a su
cargo.

3. La omisión de valorar la ilicitud el dictamen pericial balístico forense.

La Sala omite valorar que dicho dictamen pericial también es nulo, por que guarda
directo nexo con la nula acta de incautación (teoría del fruto del árbol envenenado)

4. La notoria insuficiencia probatoria del acta hallazgo y recojo de casquillos y del


dictamen pericial de restos de disparos por arma de fuego.

Excluidos el “acta de incautación del arma de fuego”1 y el dictamen pericial balístico


forense, la prueba documental se reduce al acta de recojo de hallazgo y recojo de
casquillos y el dictamen pericial de restos de disparos por arma de fuego.

El acta de recojo de hallazgo y recojo de casquillos no acredita que los casquillos


hallados sean justamente del arma que se presume tenía en su poder el acusado
Joe Quispe Ceron, ya que no existe prueba válida que acredite que dicho acusado

1
En estricto, debería ser acta de hallazgo y recojo, debido a que según su contenido no fue hallado en
poder del acusado luego de su registro personal, sino, en el suelo
tuvo en su poder el arma al que corresponde esos casquillos, además también se
halló otra arma de fuego, cuya posesión se atribuye a Felipe Huamán Torres.

La utilidad probatoria del dictamen pericial de restos de disparos por arma de fuego
es limitada, dado que solo acredita que el acusado Joe Quispe Cerón tiene restos
de disparo por arma de fuego, sin establecer cuando y como se efectuaron los
disparos que dejaron esos rastros.

5. La omisión de valorar el contra indicio de la supuesta posesión del arma atribuida


al acusado.

Según los cargos, el acusado Joé Quispe Cerón estuvo en posesión del arma con el
cual disparó contra los efectivos policiales; que, a este propósito sucede que el
arma tiene registro y se encuentra inscrita a nombre del efectivo PNP Luis
Gallardo López, quien jamás denunció su pérdida, robo, menos comunicó su venta
a tercero, pero resulta que luego es hallada por otros efectivos policiales (bajo la
alegación que un acusado lo dejó en el suelo - véase acta de incautación) lo que
constituye indicios relevadores de un caso típico de “sembrado del arma”

Lo que explica, que justamente los agraviados hayan sido los instructores de las
diversas actas y del propio atestado policial y en ningún extremo se dispuso
comunicar a Inspectoría, la irregular actuación del efectivo PNP Luis Gallardo López.

6. El superficial análisis del animus necandi del delito de homicidio calificado – falta
de motivación interna del razonamiento.

En el fundamento 4.1.2.c de la sentencia recurrida, luego de citar el acta de


incautación del arma y acta de hallazgo y recojo de casquillos, el Colegiado llega a la
conclusión que el acusado realizó disparos con la finalidad de atentar contrala vida
de los efectivos policiales agraviados, sin explicar o exteriorizar las razones o
elementos de juicio que le permiten llegar a esa conclusión.
Peor aún, cuando en la parte in fine del fundamento 4.2.1 de la sentencia, el
colegiado asevera “lo que acredita que su intención no fue dañar la unidad
vehicular, sino, el de herir a los ocupantes de la referida unidad vehicular” lo que
evidencia que el propio colegiado no tuvo la certeza del real aspecto subjetivo
distinto al dolo (animus necandi o animus vulnerandi).

7. La arbitraria imputación de concurso real de delitos.

En el fundamento 5.5 de la sentencia impugnada, el colegiado sumas las penas de


los delitos de homicidio calificado y tenencia ilegal de arma de fuego, al considerar
que se trata de un concurso real de delitos.

La imputación por el delito de homicidio calificado consiste en que utilizando arma


de fuego se intentó dar muerte a los efectivos policiales, de modo que – según la
propia imputación - en la misma acción fáctica reprochada al acusado se vulnera
dos bienes jurídicos, lo que constituye elementos del concurso ideal de delitos.

POR TANTO:

Solicito a Ud., tener presente la fundamentación y conceder el recurso de nulidad,


ordenando se eleve los autos a la Sala Penal Suprema, donde alcanzaré su revocatoria y la
absolución de la acusación fiscal.

PRIMER OTROSÍ DIGO.- El abogado que suscribe ejerce la legitimidad legal regulada en el
Art. 290° del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial, modificado por
Ley 26624.
Lima, 20 de diciembre de 2021

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