Las desestimadas pero graves consecuencias de la pirotecnia

Como todos sabemos, ya se están acercando las fiestas, una época festiva pero que
a veces la celebración se nos va de las manos; dañando a otras personas, seres vivos o
incluso a nosotros mismos.
La pirotecnia ya hace bastante tiempo que se utiliza. Sin embargo, varios
estudios modernos confirmaron que pueden dañar seriamente a los animales o a los
humanos, produciendo desde serios accidentes hasta muertes. Como todo indica, la
pirotecnia es peligrosa, pero eso, para algunas personas, no es suficiente. Para ellos es
mejor su manera de festejo aunque lastime a muchos a veces de modo irreparable.
Estos, priorizan su “bienestar” y su festejo antes que ayudar a que la navidad de otro
mejore. Son acciones muy egoístas ya que no solamente lastima a los otros, sino que se
gasta mucho dinero cuando ese mismo podría ser invertido en cosas mejores como
ayudar a los niños que esa noche no tienen que comer o ni un solo regalo.
Esas cosas no solamente son un desperdicio, sino que también te hace una peor
persona; ya que preferís unas lucecitas en el cielo, estéticamente bonitas, que poder
ayudar a personas que en verdad lo necesitan.
Además, el uso de la pirotecnia está prohibido en muchos municipios. Tanto su
comercialización, como expendio, uso, tenencia y transporte de todo tipo de elementos
relacionados. Y, a nivel ambiental, emanan metales pesados, aerosoles sólidos y agentes
oxidantes (que brindan la coloración, ayudan a la detonación y a la propulsión,
respectivamente), que terminan en el aire, el suelo y el agua. Muchos de los químicos
utilizados en estos productos, son cancerígenos y altamente inflamables, por lo que
pueden provocar incendios en viviendas o bosques y un malestar enorme en quien los
consume.
Por su parte, en los animales (tanto domésticos como silvestres) generan estrés,
desorientación, lesiones y, en muchos casos, la muerte. Debido a que estos seres poseen
el oído mucho más desarrollado que nosotros
En humanos, provocan miedo a los niños, personas con autismo o con capacidades
diferentes, ancianos y enfermos. Pero el peligro no sólo recae en ellos, sino que también
en quién los utiliza; ya que puede ser que estos productos estén defectuosos o tarden en
explotar, momento donde entonces uno va a revisar y puede que la pirotecnia explote
justo, ocasionándonos heridas graves. También puede pasar que uno lo mantenga
tanto tiempo en la mano que se le explote.
De esta forma, la lista de cosas malas que te pueden pasar utilizando estos explosivos
sigue y sigue. Por eso, esta Navidad te proponemos y recomendamos (por la salud de
todos y la tuya) que si querés festejar hacelo con algo que no sea tan peligroso, como
con espuma o serpentina, globos o papelitos. Pero siempre tratando de evitar el uso de
los fuegos artificiales, ya que es algo que le hace mal a muchas personas, seres vivos e
incluso al planeta. Y, en el caso de que estas últimas opciones no te convenzan, doná el
dinero para la gente que realmente lo necesite y no lo malgastes en explosiones o
lucecitas.

Felipe Díaz Román