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Directora
Claudia Consuelo Torres Contreras
Co- directora
María Stella Campos de Aldana
Facultad de Salud
BUCARAMANGA
2018
DEDICATORIA
Dedicamos este trabajo primeramente a Dios que nos ilumina día a día, a nuestras
familias en especial nuestros hijos, que nos brinda el apoyo necesario para crecer
académica, personal y espiritualmente, a nuestros maestros que nos inspiran y
motivan para el continuo aprendizaje en exclusivo a nuestra directora por cada uno
de sus aportes durante este proceso, a nuestros compañeros y amigos que
estuvieron presentes en el recorrido y a todos los que creyeron en nosotros.
AGRADECIMIENTOS
A la Institución UDES, por abrir sus puertas contribuyendo con nuestro aprendizaje
y superación profesional.
Descripción:
Description:
2.JUSTIFICACION 16
3.OBJETIVOS 18
5. METODOLOGIA 42
Para lograr llevar a cabo un cuidado integral y dar manejo a un tratamiento médico
los usuarios requieren en su mayoría del uso de un acceso central, ya sea para
monitorización, toma de muestras sanguíneos, infusión de medicamentos irritantes,
con osmolaridad no permisible en accesos periféricos, fármacos que brindan
soporte hemodinámico, nutrición parenteral, entre otros. Este dispositivo es
imprescindible en la atención de salud brindada, pero su uso genera complicaciones
que pueden ser localizadas como flebitis y aquellas relacionadas con el
procedimiento como tal, como equimosis, hematomas, y las sistémicas de
predominio las infecciones que incluyen las bacteriemias relacionadas con el catéter
con o sin producción de complicaciones a distancia como endocarditis, abscesos
pulmonares, óseos, cerebrales, etc. (Osuna, et al., 2009)
En el siguiente trabajo se llevará a cabo una revisión sistemática iniciando con una
exploración de los indicadores de infecciones asociadas al cuidado de la salud
enfatizando en las bacteriemias por catéter central, posterior investigar acerca de
las medidas que se han tomado para disminuir estos riesgos, las estrategias por
parte del cuidado de enfermería con el fin de agrupar y concluir las medidas que
generan mayor impacto en la disminución de estas infecciones.
1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Ante esta situación surge la necesidad de conocer cuáles son las estrategias más
efectivas para evitar las infecciones por bacteriemias y las complicaciones derivadas
de las mismas. Al respecto se analizan algunas actividades del diario vivir en las
unidades de cuidado intensivo y que parecen normales, una de ellas es la
manipulación de los catéteres venosos centrales donde se dará una
fundamentación a la importancia de mantener una técnica de seguridad para evitar
infecciones o el hecho de no implementar estrategias para evitar la incidencia de
una bacteriemia teniendo presente que en su mayoría se consideran condiciones
evitables. (Zaragoza, R., Ramírez, P., & López-Pueyo, M. J. 2014).
Las Instituciones cuentan con diversas medidas para evitar la incidencia de esta
problemática, al presentarse una bacteremia asociada al catéter generara
obstáculos para lograr un tratamiento oportuno y optimo en el paciente, además de
disminuir la oportunidad en el giro cama en una Institución y aumentar costos. Por
tal motivo existen diversos mecanismos o estrategias para la reducción y el control
de estos riesgos por lo que es importante investigarlas y conocer en que consiste
cada una de ellas, para ofrecer un cuidado y tratamiento correcto basado en la
evidencia, donde cada estrategia o actividad que se realice o se implemente sea
con el fin de evitar infecciones asociadas al catéter venoso central. (Lupión, C.,
López-Cortés, L. E., & Rodríguez-Baño, J. 2014).
Dado el uso del catéter del catéter venoso central en las unidades de cuidado crítico,
como un procedimiento de rutina y los riesgo que este presenta para desarrollar una
infección por ser una técnica invasiva, cuya manipulación y cuidado está a cargo de
las enfermeras de las unidades de cuidado intensivo se consideró importante
realizar esta revisión sistemática, toda vez que se debe avanzar en aras de nuevas
prácticas y estrategias que arrojen resultados positivos en cuanto a la reducción
infecciosa que se presenta al momento de efectuar cualquier procedimiento en este
dispositivo terapéutico, más si se tiene en cuenta, que en los últimos años los
índices de infección han estado más elevados que en años anteriores, tanto así,
que la organización mundial de la salud acogió el lema, bacteriemias cero. (Palomar
Martínez et al., 2010).
El CDC define “infección asociada con catéter es aquella que se manifiesta con
hemocultivos positivos por el mismo germen recuperado en un cultivo de punta o
trayecto del catéter”. Las infecciones asociadas a catéter central generan aumento
de costos en las instituciones, prolonga la estancia hospitalaria, se relaciona con
otras complicaciones como por ejemplo no permite la recuperación del estado de
salud generando morbimortalidad, estas complicaciones se dan desde el momento
de la inserción de los dispositivos como el manejo del mismo, una muestra de ello
se da en Estados Unidos en donde cada año se presentan entre 200 mil y 400 mil
infecciones sanguíneas por el uso de catéter en su mayoría de accesos centrales
(Da silva, Oliveira y Ramos, 2009)
En Brasil, datos referentes a 2015 reportan una tasa de infección del flujo sanguíneo
relacionada al CVC en las unidades de cuidado intensivo de 5,1 a 1000 catéteres
día; comparado con Europa, 13,3 infecciones para 1.000 catéteres día y en este
estudio en los Estados Unidos se estima alrededor de 30.000 nuevos casos de
infección por año. Allí concluyen la tasa de mortalidad por infección relacionada con
el CVC puede alcanzar hasta el 69% (Gómez, De Oliveira, 2017)
Por todos estos datos vistos, a nivel de Latinoamérica, una pequeña comparación
con respectos a países desarrollados que se presenten en Europa, y en Estados
Unidos, entendemos que los accesos centrales son dispositivos que tienen contacto
directo al sistema vascular, estos dispositivos son con frecuencia usados en las
unidades de cuidado intensivo con fines diagnósticos como monitorización continua
de presiones centrales y terapéuticas como administración de medicamentos, el
paso de nutrición parenteral, toma de muestras sanguíneas, siendo necesario en el
tratamiento global del paciente, todo esto genera manipulación constante de estos
mecanismos, sus complicaciones pueden estar relacionadas desde el momento
que se realiza el procedimiento de inserción hasta la utilización de este y su retiro.
(Da silva et al., 2009)
Por medio de esta revisión se encontró que durante un período comprendido entre
1º de octubre a 03 de noviembre de 2010, en la unidad de cuidado intensivo adulto
de un hospital filantrópico con atención terciaria, en la ciudad de Campo Grande,
MS. En Brasil, allí 50 catéteres venosos centrales fueron analizados, siendo que la
utilización en cada paciente varió de 01 a 03 catéteres, con media de 01,5 y mediana
de 01 catéter. De los cuales 3 de estos se utilizan para nutrición parenteral, 12 para
hemoderivados, 24 para uso de vaso activos, 38 utilizados con sedación y 5 de ellos
con otras finalidades (monitorización, hidratación) cabe resaltar que algunos de
ellos tienen uso concomitante. Se utilizaron 32 catéter mono lumen de los cuales 13
presentan infección, y 18 bilumen de los cuales 5 presentan infección para un total
de 18 infecciones asociadas a catéter central. De estos mismos 18 que presentan
bacteriemia uno se utilizó para nutrición parenteral, 3 para hemoderivados, 10 para
medicamentos vaso activos, 15 sedación y 1 para otras finalidades con estos datos
podemos ultimar que las infecciones del flujo sanguíneo también pueden estar
relacionadas con el tipo de infusión administrada al paciente, es decir las soluciones
intravenosas y sustancias ácidas, hipertónicas o que causan irritación intravenosa
al endotelio vascular, aumentan el riesgo de infección, y el peligro de que se
presenten estas complicaciones se amplifica si el uso es concomitante, es decir
como en la mayoría de pacientes que lo requieren pues se usan estos dispositivos
para todas las finalidades anteriormente mostradas.(Torquato, Costa y Ferreira,
2012)
Con una categoría II evaluar diariamente el sitio de inserción del catéter por
palpación si hay presencia de vendajes y por inspección si se encuentra un vendaje
transparente, sin embargo recomiendan que si hay sospechas de infección, o signos
de sensibilidad, utilizar apósitos transparentes para mantener adecuada inspección
aunque una gasa estéril o apósito transparente semipermeable, los dos muestran
Categoría IA, si el paciente es diaforético o si el sitio está sangrando o tiene algún
tipo de drenaje, se debe usar un vendaje de gasa hasta que esto se resuelva.
Categoría II, igualmente recomienda cambiar los apósitos de gasa cada 2 días y los
transparentes 7 días. Usar un CVC con la cantidad mínima de puertos o lúmenes
esenciales para el manejo del paciente con una evidencia de Categoría IB, no se
puede hacer ninguna recomendación con respecto a uso de un lumen designado
para nutrición parenteral categorizado como un problema sin resolver. Quitar
inmediatamente cualquier catéter intravascular que esté ya no es necesario para el
tratamiento médico con una Categoría IA. Cuando la adherencia a la técnica
aséptica no puede ser asegurado (es decir, catéteres insertados durante una
emergencia), es recomendado como una categoría IB reemplazar el catéter lo antes
posible, es decir, dentro de las 48 horas siguientes. (O ‘Grady, 2011)
Los catéteres de clorhexidina / Sulfadiazina de plata son más costoso que los
catéteres estándar. Sin embargo, un análisis ha sugerido que implementar estos
tipos de catéteres debe conducir a un ahorro de costos en entornos en los que el
riesgo es alto, a pesar de la adherencia a otras medidas preventivas (por ejemplo,
precauciones de barreras máximas y técnicas asépticas). El uso de estos catéteres
podría ser rentable en pacientes de la UCI, pacientes quemados, pacientes
neutropénicos, y otras poblaciones de pacientes en las que la tasa de infección
puede ser alta debido a sus riesgos propios atribuidos a sus patologías. Por otro
lado según este documento el tiempo de permanencia del catéter venoso central es
el principal factor determinante para el desarrollo de la infección del torrente
sanguíneo. Si el tiempo de utilización del catéter es menor de tres días, el riesgo de
infección del flujo sanguíneo es cero. Si el tiempo de utilización es de tres a siete
días, el riesgo aumenta entre el 03 - 05%, y si se utiliza por más de siete días, el
riesgo aumenta a 5 - 10% ( O’ Grady, 2011)
El estudio realizado por Lopera (2016) quiso evidenciar los factores que han
ocasionado un desplazamiento de la función principal del profesional de enfermería,
cuyo pilar principal es el cuidado, pero que en los últimos tiempos parece estar
desplazándose a un segundo plano. Por esa razón a través de entrevistas a
diferentes profesionales de enfermería se pudieron conocer los aspectos que
llevaron a concluir que existen funciones otorgadas enfermeros/as, las cuales son
ajenas a su área de experticia pero que son consideradas como parte del “servicio”,
elevando así sus responsabilidades y carga laboral.
Estos riesgos son considerados por parte de la institución por ello se crean
estrategias para trabajar frente a los mismos y de allí se crean los protocolos
institucionales que deben ser conocidos y aplicados por las personas que prestan
su trabajo en dicha entidad.
Continuando con la labor de enfermeria, otro estudio indagado arroja datos
generalizados y abarcando la mayoría de intervenciones posiblemente aplicadas
fue el Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN), centro de referencia nacional en
pediatría que atiende a niños y adolescentes procedentes de todo el Perú. Tiene
450 camas y la UCI pediátrica médico-quirúrgica tiene 16 camas. La relación
enfermera-paciente en la UCIP es de 1:1 o 1:2. En esta revisión para cumplir con el
objetivo de cumplir con el proyecto ‘Infecciones Zero’ el cual en este caso estuvo
dirigido a implementar medidas que de alguna manera sean aceptadas por el
personal siendo estas sencillas y de bajo costo, que de por sí como en la gran
mayoría de todas las instituciones tiene trabajo asistencial y administrativo en
exceso en el cuidado del paciente crítico, con el fin de generar intervenciones que
disminuyan los riesgos pero que no impliquen un aumento notorio en la labor diaria
de enfermería, llevan a cabo principalmente 6 estrategias para reducir la tasa de
infección, sin embargo que competen a la labor de enfermería tendremos en cuenta
5 que son: (Nakachi, 2017)
Dentro de las estrategias y una de las más importantes para evitar infecciones en el
torrente sanguíneo es el lavado de manos, si evaluamos desde el inicio de la
practica en salud, el lavado de manos no era conocido como una manera de evitar
transmisión de agentes microbianos causantes de infecciones mortales para los
pacientes, y se documentaron muchas muertes en el mundo sin determinar la causa
exacta, los pacientes a los que se le practicaban cirugías morían por malas prácticas
de asepsia, antisepsia, esterilidad sin tener evidencia de lo que era esto, en
ciudades de Europa las maternas morían en el puerperio con el diagnostico de fiebre
puerperal, y estas muertes secundarias a infecciones que no se sabían, hasta que
fue esta preocupación y después de varios estudios que se consigue probar que los
pacientes presentaban infecciones secundarias a las malas prácticas de los
trabajadores en salud como el no higienizarse las manos, siendo estas el vector
para transmitir infecciones de un paciente a otro, o de un ambiente contaminado al
paciente o a otro ambiente, sin tener previo conocimiento de esto. Semmlweis en
sus estudios realiza la primera evidencia donde documenta el lavado de manos
como principal medida de control para la disminución de enfermedades infecciosas,
llego a evidenciar que estudiantes y médicos llevaban en sus manos partículas
cadavéricas que contaminaban a mujeres puérperas y estas terminaban muriendo
por agentes infecciosos. Louis Pasteur junto con otros científicos fueron también
grandes aportadores a la importancia de la higiene de manos, quienes aclamaron y
concluyeron el lavado de manos como una necesidad. Pasteur también llego a
mencionar que, “quienes mataban a las mujeres de fiebre de parto eran los médicos
que llevaban microbios mortales de una mujer enferma a una mujer sana”, pese a
la resistencia de muchos hacia el lavado de manos y cabe mencionar la incredulidad
se logró establecer la importancia y la evidencia de esta para evitar infecciones. Es
desde entonces que se inicia la práctica de lavado de manos en el personal de la
salud. (Raimundo, Companioni, Félix, y Rosales, 2015).
Según la revista “Medicina Intensiva “Las bacteriemias se pueden presentar por tres
vías:
Los catéteres centrales deben ser puestos con las máximas medidas de esterilidad,
aunque no vamos a profundizar en la colocación de este, cabe mencionarlo y
resaltar algunas medidas en el momento de la inserción como el utilizar medidas de
barrera y mencionando el proyecto “Bacteriemia cero” existen unas prácticas
importantes para tener en cuenta y disminuir la incidencia de las bacteriemias: la
colocación en lo posible en la subclavia evitando la femoral y yugular ya que estas
aumentan los índices de bacteriemias y la limpieza y desinfección de la piel debe
realizarse con clorhexidina. Los catéteres deben ser retirados lo más pronto posible
si ya no son necesarios ya que mantenerlos en el paciente son de gran riesgo y
factor principal para contraer bacteriemias, además el número de lúmenes en lo
posible utilizar pocos o solo el necesario, entre más vías, mayores es el riesgo. Para
la limpieza o curación del sitio de inserción, vías o conexiones, se recomienda el
uso de Gluconato de Clorhexidina al 2 % ya que esta elimina bacterias gram
positivas, gram negativas aerobios y anaerobios, además se documenta también el
uso de soluciones alcohólicas con concentraciones no menores del 70%, antes y
después de manipularlos o acceder a ellos (palomar, 2010) (Alguacil, Rumayor,
Fernández, Valverde, Barberán, y Santiago, 2013).
Las bacteriemias asociadas a catéter venoso central son de las infecciones más
frecuentes en instituciones con más incidencia en áreas de cuidado crítico, por lo
que las medidas y precauciones van enfocadas a evitar la recurrencia de estas. En
revisiones realizadas se ha podido calcular que en países como Brasil el 60% de
las infecciones son asociadas o atribuibles al uso del catéter venoso central lo que
es una cifra alarmante. A nivel mundial se ha establecido una serie de protocolos,
insumos, estrategias para evitar o disminuir su incidencia, encontramos una serie
de medidas en las que están; la utilización de dispositivos, gasas o apósitos para
cubrir el orificio o entrada de este siempre buscando la esterilidad o manteniéndola,
el catéter siempre debe permanecer cubierto evitando la contaminación y
colonización de este, el cubrimiento se inició con gasas, cintas estériles, apósitos
estériles y como relativamente nueva medida apósitos transparentes algunos con
gel de clorhexidina, el cual queda en contacto con el orificio de entrada del catéter,
beneficios más mencionados: el aposto transparente al ser transparentes se logra
ver la condición del sitio de inserción del catéter, se adhieren correctamente a la piel
en su totalidad logrando una mejor fijación del catéter, se cambian cada 7 días por
lo que reduce costos y aísla el contacto con el agua. La aparición del apósito
transparente fue una estrategia muy discutida por lo general elaborado con material
de poliuretano que permite visualizar sitio de inserción y fijaba el catéter, pero
estudios documentaron la aparición de bacteriemias secundarias la humedad que
se producía debajo del apósito y cambios menos frecuentes, y los que son con gel
de Clorhexidina que tiene los mismos beneficios respecto al anterior pero a este le
agrega el valor de la Clorhexidina. Estudios mencionan que este último disminuye
la carga bacteriana por tener el gel con clorhexidina, pero otros estudios
comparativos realizados, han medido la acción del apósito con clorhexidina, con el
cubrimiento de gasas estériles, encontrando que en ambos se presentaron
reacciones como enrojecimientos de la piel, maceración de esta, se fijan, pero se
presentaron casos donde se tuvieron que cambiar antes de lo establecido y no han
encontrado diferencias evidentes que el apósito con clorhexidina reduzca o
prevengan infecciones por poseer la película con este gel. Lo idealmente necesario
para que un apósito cumpla con su acción es que esté completamente sellado sin
bordes levantados, con un cubrimiento de más del 75% de su totalidad, este seco
no húmedo, en los apósitos transparentes se menciona que se puede dañar más
fácil con la humedad producida por el sudor del paciente teniendo que cambiarse
antes de los 7 días o si se despega, sin embargo la utilización de apósitos con
clorhexidina se fijan más fuertemente a la piel del paciente evitando
desplazamientos del catéter, además de resultar más cómodo para el paciente y
personal de la salud. Estudios han podido deducir que no se han identificado
diferencias, en relación con el apósito de clorhexidina y apósito formado por gasas
para prevenir infecciones, pero si se tiene una mejor percepción de seguridad con
el apósito transparente de Clorhexidina que con la utilización de gasas estériles sin
embargo los dos son efectivos si se utilizan de manera correcta. (Pedrolo, Tannia,
Danski, y Adami, 2014) (López, Díaz, Novo, Cid, y Mojón, 2016)
Otro aspecto importante, es que tanto el personal de salud como las enfermeras
y técnicos de enfermería implicados en el manejo de catéter tienen adherencia a
los protocolos y medidas de prevención para evitar las bacteriemias, pues son los
encargados de la correcta administración de medicamentos y asistencia a las
necesidades básicas del paciente, (en palabras de Gómez da silva y de Oliveira
2017) se manifestó que de la observación directa de los profesionales, se evidencia
baja adherencia al manejo de medidas preventivas para evitar la infección, sobre
todo en el lavado de manos y la deficiente limpieza de los puertos antes de la
administración de medicamentos y conexión de equipos. Es por ello que se resalta,
que el personal mostro adherencia al lavado de manos y área de la piel donde se
inserta el catéter antes de la instalación; esto nos lleva a preguntar ¿ porque se
falla tanto en el mantenimiento del catéter?, cuando se realiza mal la práctica del
lavado de manos favorece la transmisión cruzada de microorganismos,
principalmente en pacientes con alto riesgo, como son los inmunosuprimidos, lo
más trágico es que el personal ha remplazado el lavado de manos con el uso de
guantes limpios y/o estériles, es por esto que es de vital importancia para las
instituciones, una educación continua y permanente al personal responsable del
cuidado del catéter, más exactamente sobre los protocolos institucionales sobre el
correcto lavado de manos como lo mejor estrategia en prevención y control de las
infecciones cruzadas asociadas al cuidado, pero sobre todo recalcar cual es el
propósito de este.
Hoy en día podemos considerar que las bacterias han aprendido a adaptarse para
no morir es así que el día de hoy ellas ha creado una defensa creando una mutación
en su ADN, a lo cual llamamos resistencias antibiótica, y cuando estas invaden
nuestro cuerpo y se va multiplicando causando una descompensación en el sistema
de defensa y alteración en el estado hemodinámico hasta que la bacteria nos lleve
a la muerte, es por esto que los científicos realizan estudios de nuevos antibióticos
como eliminarlas, pero es de igual importancia la prevención de esto, como la
educación a nuestros profesionales de salud, el adecuada administración de
medicamentos tipificar que antibiótico usar y no automedicarnos, extremar el lavado
de manos, limpieza de puertos, la mayor arma que buscamos es mejorar el
conocimiento y el préstamo de servicios de salud con una calidad, para disminuir
costos a las instituciones y más estancia de la clínica. (Paim & Lorenzini 2014).
La revisión sistémica arrojó como factor común a los bundles conformados por
elementos como la higiene de las manos y la limpieza del área de inserción con
clorhexidina. Así mismo, los bundles resaltaron aspectos como evitar la vena
femoral, la revisión diaria del CVC y estrategias complementarias pero como el uso
de ultrasonido para encontrar la vena. Adicionalmente, el estudio también permitió
conocer que en procesos de auditoría de la implementación de ciertos bundles, se
evidenció la reducción significativa de la de la tasa de infección.
.
5. METODOLOGIA
Análisis de la información
Pregunta planteada:
Entre los autores y el director del trabajo de grado se revisaron inicialmente con el
título y el resumen que los artículos cumplían con los criterios de inclusión. Para ello
se realizó el siguiente proceso:
Primera Revisión: Cada estudiante por separado leyó los resúmenes de los
artículos y los clasificó en tres categorías de acuerdo a los criterios de
selección de los artículos: artículos incluidos, artículos excluidos, artículos
con dudas para incluir. Posteriormente se sacó un consenso y se continuo
con la lectura de todo el artículo de los incluidos y los que generaron dudas
Segunda Revisión: se incluyen aquellos que aportan sustentación y que
resuelven los objetivos planteados
Se realiza una lectura inicial del resumen inicial, si este es acorde con las
necesidades planteadas seguimos con el análisis en el cual se extrae mediante
parafraseo o citación directa, aquello que dé respuesta a los objetivos propuestos,
de igual manera se aplican las escalas seleccionadas que evalúan la calidad de las
revisiones y de allí se plasman los resultados obtenidos.
Se describieron los diversos tipos de intervenciones que reportaron los datos en las
diferentes revisiones hechas interpretando la calidad de los artículos de acuerdo a
las escalas mencionadas. Igualmente en el 2009 se publicó la declaración prisma
en donde se tienen en cuenta diversos aspectos relacionados con la lectura y
escritura y publicación de los artículos que son derivados de revisiones
sistemáticas, esto con el fin de generar impacto cada vez que se realiza un análisis
de alguna información; en este caso utilizaremos una parte de esta metodología que
es el flujo grama de selección de la literatura encontrada llevando un orden y
demostrando la forma en la que se escogió dicha información. (González de Dios,
J., Buñuel Álvarez, J. C., & Aparicio Rodrigo, M. 2011).
6. ASPECTOS ETICOS
IDENTIFICACIÓN PubMed: 242 Scielo: 58 EBSCOhost: 23 Lilacs: 2360 Google academic: 3460
Elsevier: 394 ministerio proteccion social: 6 OMS: 14
Registros seleccionados:
3450
Los catéteres de clorhexidina / Sulfadiazina de plata siendo estos más costosos que
los catéteres estándar, lo ideal en cuanto a costo beneficio, sería el uso en pacientes
con alto riesgo de adquirir infecciones, es decir aquellas personas que de alguna u
otra manera están susceptibles para adquirir de una manera más fácil infecciones,
ejemplo inmunosuprimidos, grandes quemados, largas estancias hospitalizados, sin
embargo es complicado categorizar y priorizar ya que solo el hecho de tener este
acceso ya es un gran riesgo, y allí mismo comparan con la adherencia a
precauciones de barreras máximas y técnicas asépticas en los que muestran
resultados favorables, es decir, el uso de apósitos con sustancias asépticas
comparado con las máximas medidas de barrera no generan diferencia importante
y si aumentarían los costos, todo esto según esta revisión. ( O’ Grady, 2011)
O ‘Grady, 2011, entre todo su análisis concluye que usar un CVC con la cantidad
mínima de puertos o lúmenes esenciales para el manejo del paciente con una
evidencia de Categoría IB. el uso más frecuente que se le da al acceso central serian
generalmente para manejo sedantes y para manejo vaso activos, existiendo una
relación en el tipo de infusión usada, en donde las sustancias ácidas, hipertónicas
o que causan irritación intravenosa al endotelio vascular, aumentan el riesgo de
infección. . (Torquato, Costa y Ferreira, 2012)
Otra duda que se mantiene en los servicios es con respecto a los jabones o
soluciones usadas para la preparación de la piel con respecto a la gran pregunta de
cuales son más efectivas y es que en su mayoría siempre y cuando se dé el uso
adecuado todos los mencionados muestran efectividad, hay que tener en cuenta
las normas de asepsia y antisepsia, en ciertas ocasiones es necesaria una técnica
estéril como el momento de inserción, y en otras menos rigurosas pero igual de
importantes como lo es la realización de curaciones, cambios de equipos, llaves y
fijación de estas. El tiempo para realizar algún cambio o para hacer la limpieza es
controversial puesto que en algunas revisiones con 72 horas es manejado como en
otros hasta 96 horas lo dan por permisible, y pues en las instituciones que se tiene
conocimiento hay promedio en estos días entre estos rangos, hay que tener en
cuenta las infusiones que generan mayor riesgo de infección si se mantienen por
más tiempo sin cambio de estas extensiones como lo son las nutriciones
parenterales, medicamentos como el propofol, los hemoderivados entre otros.
También el uso de lúmenes es controversial, pero no es el número de vías ya que
estas son decididas según la necesidad de cada paciente lo más importante, es la
cuidadosa manipulación de las conexiones adhiriendo a las recomendaciones
establecidas. (Nakachi, 2017)
9. RECOMENDACIONES
Álvarez Lerma, F., Olaechea Astigarraga, P., Palomar Martínez, M., Insausti
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ANEXOS
A. ¿Mereceré continuar?
A. ¿Mereceré continuar?
A. ¿Mereceré continuar?
A. ¿Mereceré continuar?
A. ¿Mereceré continuar?
A. ¿Mereceré continuar?
5.2 Para estudios que evalúan de manera comparativa (el fenómeno de investigación X
o variable dependiente), intra-grupos o inter-grupos, se presentan los valores p
(significancia estadística), ODDS ratio, riesgo relativo, pruebas de correlación, etc.
Numero de criterios con que cumple 9
El artículo es considerado elegible elegibilidad para la revisión sistemática (si/no) SI