Con solo 25 minutos de

yoga, la meditación
'aumenta la función
cerebral y la energía'
Practicar hatha yoga o meditación de
atención plena durante solo 25 minutos
puede mejorar significativamente la función
cerebral y los niveles de energía, en
comparación con pasar 25 minutos leyendo
en silencio, según una nueva investigación
de Canadá.
 Los investigadores han descubierto que practicar Hatha yoga
Compartir en Pinterest

durante 25 minutos, en comparación con leer durante 25 minutos,

beneficia significativamente la función cerebral.
Kimberley Luu y el profesor asociado Peter Hall, de la Escuela de
Salud Pública y Sistemas de Salud de la Universidad de Waterloo en
Ontario, Canadá, informan sobre su estudio en la revista Mindfulness .

El yoga y la meditación, que alguna vez se consideraron costumbres

predominantemente orientales, se están convirtiendo en la corriente
principal en Occidente.

En Estados Unidos, por ejemplo, hay 36,7 millones de personas

que practican yoga, “frente a los 20,4 millones de 2012”, mientras
que algunos18 millonesFuente de confianzahan utilizado la
meditación.

La fuerza laboral de los EE. UU. está adoptando rápidamente el yoga

y la meditación. Aestudio recienteFuente de confianzade los Centros
para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) descubrió
que la práctica del yoga entre los trabajadores en los EE. UU. se
duplicó con creces entre 2002 y 2012, pasando del 6 al 11 por
ciento. La práctica de la meditación también aumentó del 8 al 9,9 por
ciento.

Hatha yoga y atención plena

De los muchos estilos de yoga, el más practicado en Occidente es el
hatha yoga, que combina la respiración con la meditación y el
movimiento y concluye con la relajación. Ashtanga y Iyengar yoga son
ejemplos de Hatha yoga.

La meditación de atención plena es un enfoque que hace hincapié en

prestar atención a lo que sucede en la mente sin evaluarlo ni
juzgarlo. Si bien el yoga a menudo incluye algunos aspectos de la
atención plena, también se puede practicar por sí solo.

El Prof. Hall explica: "El hatha yoga y la meditación consciente

concentran el poder de procesamiento consciente del cerebro en
un número limitado de objetivos, como respirar y posar, y
también reducen el procesamiento de información no esencial".

Explica que él y Luu estaban interesados en averiguar si las dos

prácticas podrían tener un "efecto de arrastre positivo" que ayude a las
personas a "concentrarse más fácilmente en lo que eligen atender en
la vida cotidiana".

Función ejecutiva
En una revisión exhaustiva de la evidencia, los dos autores ya habían
llegado a la conclusión de que se necesitaban "más estudios de buena
calidad" sobre los efectos del hatha yoga en la función ejecutiva.
En ese artículo, describen la función ejecutiva como “un conjunto
de procesos cognitivos de alto orden” que permite el control del
comportamiento, la emoción y el pensamiento
independientemente de los estímulos.

La función ejecutiva opera a través de la corteza prefrontal del cerebro

y otros centros que están vinculados a ella. Por lo general, implica la
memoria de trabajo, la flexibilidad mental y el control inhibitorio.

Muchos investigadores también consideran que la función ejecutiva

incluye otros procesos, como la toma de decisiones, la resolución de
problemas y el control de la atención, porque están estrechamente
vinculados a ella o dependen en gran medida de ella.

Para su nuevo estudio , los investigadores invitaron a 31 practicantes

sanos, "moderadamente experimentados", de 28 años en promedio, a
completar tres sesiones de Hatha yoga (que incluye un elemento de
meditación de atención plena), meditación de atención plena (sin
yoga) y lectura tranquila ( tarea de control).

Utilizaron un "diseño experimental dentro de los sujetos", lo que

significaba que los participantes no completaban las tareas en el
mismo orden (a cada uno se le asignaba el orden al azar).

Mejora de la función ejecutiva,

el estado de ánimo, la energía
Los investigadores evaluaron la función ejecutiva antes de cada
sesión y a los 5 y 10 minutos después de cada sesión mediante una
prueba estándar conocida como "tarea de interferencia de
Stroop". Esta prueba también mide el control inhibitorio.

El equipo descubrió que los participantes mejoraron significativamente

sus puntajes de funciones ejecutivas después de las sesiones de
Hatha yoga y meditación de atención plena en comparación con los
puntajes antes y después de la sesión de lectura.

Sin embargo, señalan que la mejora solo se mostró en las pruebas

posteriores a la sesión de 10 minutos y no en las pruebas posteriores
a la sesión de 5 minutos.

Usando una herramienta de autoinforme llamada Profile of Mood

States, los investigadores también encontraron que tanto el hatha
yoga como la meditación de atención plena dieron como resultado
puntuaciones de estado de ánimo significativamente mejores en
comparación con la lectura.

Esta herramienta incluye una “subescala de vigor-actividad” que

mide los niveles de energía. En esta subescala, mientras que
tanto el hatha yoga como la meditación consciente se
compararon favorablemente con la lectura, el hatha yoga mostró
“beneficios significativamente mayores”.

Luu explica que hay “varias teorías sobre por qué los ejercicios físicos
como el yoga mejoran los niveles de energía y el rendimiento en las
pruebas cognitivas. Estos incluyen la liberación de endorfinas,
aumento del flujo sanguíneo al cerebro y reducción del enfoque en los
pensamientos rumiantes. Aunque en última instancia, sigue siendo
una pregunta abierta”.

Debido a que los participantes no eran representativos de la población

general, ahora se necesitan más estudios, que involucren a diversos
grupos de personas, para averiguar si el hatha yoga y la meditación
consciente podrían beneficiar al público en general.

“ Aunque el aspecto meditativo puede ser incluso más importante que

la postura física para mejorar las funciones ejecutivas, existen
beneficios adicionales del hatha yoga, que incluyen mejoras en la
flexibilidad y la fuerza. Estos beneficios pueden hacer que el hatha
yoga sea superior a la meditación sola, en términos de beneficios
generales para la salud”.

Profesor Peter Hall