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Otra teoría que sirvió de base es la teoría del factor dual de Herzberg, que señala
que si se cumple la satisfacción de 2 factores (los higiénicos y los motivadores) el ser
humano se encontrara en un estado de motivación y por lo tanto realizara sin ningún
problema sus actividades. Esta teoría se inclina más al sistema laboral, donde Herzberg
dividió la teoría en dos factores conocidos como motivación e higiene. Este autor le dio
gran importancia al valor, que es lo que las personas consideran relevante en el ámbito
laboral y concluyó que eliminar los elementos que causen insatisfacción, no es suficiente
para considerar el trabajo como satisfactorio. Él se concentró en la relación que tiene el
empleado en su lugar de trabajo y la definió en dos factores que son:
McClelland por otro lado señala que las necesidades son diferentes de acuerdo al
tipo de persona, es decir la divide en 3 tipos de motivación: Logro, poder y afiliación. Esta
se encuentra entre las más importantes teorías motivacionales en el ámbito laboral, este
autor se basó en investigaciones de otros autores sobre las necesidades que tienen las
personas y por medio de la comparación entre diversos gerentes de distintos tipos de
empresas, para llegar a la conclusión de que a la hora de motivarse existen tres tipos de
necesidades.
Necesidad de logro: Son las personas que se esfuerzan por superase y alcanzar
una vida exitosa, por lo general son autosuficientes y le temen al fracaso.
Necesidad de poder: Se refiere a las personas se interesan por la influencia y les
gusta controlar a los demás, mayormente ejercen cargos de liderazgo.
Necesidad de afiliación: Estas personas les dan más importancia a las buenas
relaciones sociales, ya que les gusta ayudar a los demás en todo sentido.
El ciclo motivacional es un conjunto de teorías que tienen como objetivo analizar los
diferentes estadios de la motivación. Este ciclo es universal, es decir, es aplicable a todas
las personas y consta de las siguientes etapas:
Ya para finalizar se hablara sobre las técnicas de motivación laboral las cuales son
herramientas que pueden concretarse en hábitos, actitudes o procedimientos que
contribuyen a la productividad, la satisfacción en el trabajo. Son los directivos y los
mandos intermedios los que pueden utilizarlas, aunque lo ideal es crear una cultura que
fomente la automotivación. En este segundo caso, serán los propios empleados los que
usen estas técnicas en su propio beneficio. Algunas de ellas son: Solicitar la opinión de
los empleados, Ofrecer programas de crecimiento personal, Reconocer el trabajo bien
hecho, Establecer objetivos a corto plazo, Celebrar logros de equipo, Mantener una
actitud positiva, Crea un programa de tutorías, Crear un espacio de trabajo cómodo e
inspirador, Fomentar la atención plena, Compartir los beneficios como técnica de
motivación laboral, Llevar los beneficios al siguiente nivel, Ofrecer un programa de
incentivos.