Está en la página 1de 9

3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco

   

CALLE DEL ORCO


B L O G D E L I T E R AT U R A . G R A N D E S E N C U E N T R O S

calledelorco / julio 17, 2020 / Fotografía, Literatura

El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria


humana de su autor

Tenemos el mismo problema con Wagner. Durante el almuerzo, esperando a que sirvan el postre, Cosima Wagner dice a los
criados: “Hay que esperar, el maestro está tocando el piano”. Arriba, en el segundo piso, se le oye tocar. Estaba estudiando,
preparando la música de Semana Santa de Parsifal. Wagner baja. Y en la mesa del almuerzo —tenemos el testimonio directo de
Cosima— se pronuncia sobre la cuestión judía y dice: “¡Hay que quemar vivos a los judíos!”. El mismo día en que compone la
música de Semana Santa de Parsifal. Me dirá usted: “Hay que comprenderle.” ¡No! No se puede comprender. Nosotros somos
hombres y mujeres insignificantes. Usted y yo. Gracias a esos gigantes tenemos una herencia inmensa; no imagino mi existencia
sin Tristán, sin otras páginas de Wagner, sin Ser y Tiempo, sin los libros sobre Kant, sin los ensayos sobre los presocráticos, etc.
La edición de las obras completas de Heidegger tendrá más de cien volúmenes.
Para mí la mejor explicación la ha dado su discípulo predilecto, su sucesor, Gadamer, que también fue un gran pensador.
Estábamos en el centenario de Heidegger, en Friburgo, y casi llegamos a las manos Ernst Nolte, un historiador hasta cierto punto
neonazi, y yo. Gadamer, que era físicamente un gigante, con toda tranquilidad, pone sus manos sobre mis hombros y me dice:
“¡Steiner! ¡Steiner! Cálmese usted. Martin era el más grande entre los pensadores y el más mezquino entre los hombres”. Es un

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 1/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco
análisis excelente; no justifica nada, pero no cabe duda de que es verdad. Heidegger, Wagner… Hay muchos otros ejemplos.

Si me pregunta quién ha marcado el curso de la lengua francesa, en los tiempos modernos, le diré que son Proust y Céline. Los
dos. Céline es, con Rabelais, uno de los más grandes magos de la lengua francesa, gracias a Viaje al fin de la noche. Pero no solo es
el Viaje. Las tres novelas sobre su fuga a Dinamarca (que muy pocos leen hoy en día) —De un castillo al otro, Norte y Rigodón—
son una maravilla. Las escenas con su gato Bébert, ante las llamas de Colonia, cuando el gato se pierde entre las llamas y se baja
del tren; las escenas en Sigmaringen —donde Pétain completamente sordo, no oye el descenso del avión inglés que se acerca al
puente— ¡son shakespearianas! Y lo digo con todo el cuidado. En ese hombre horrible se esconden grandes invenciones poéticas.
Y también una inmensa compasión humana. Como médico fue formidable con los pobres, con los animales. A mí me encantan
los animales y comparto, me atrevo a compartir con él, esa pasión y admiro en él lo que significa para él el animal, el
sufrimiento animal. Por eso no consigo comprender. Ese mismo hombre concibe esa basura infame que es Bagatelas para una
masacre y otros textos. Panfletos, grandes panfletos antisemitas. Se me pide comprensión; no puedo comprenderlo. Ese mismo
hombre quiere que todos los judíos acaben en un horno.
¿Qué hacer frente a eso? Como lector, como profesor, tengo una deuda enorme con esos textos. Son los textos que amueblan mi
mente y mi ser. Ello no quiere decir ni por un instante que defienda a esos hombres. Así pues, tal vez nuestra suerte sea no
llegar a conocerlos: yo no quise conocer a Heidegger. No quería, no me habría atrevido. También tuve, claro está, la posibilidad
de conocer a Céline.
¿Cómo vivir sin Wagner? La música de Wagner es la de Wagner. ¿Y en filosofía? Acabo de leer una cita de Derrida, quien dice:
“La filosofía del futuro es estar a favor de Heidegger o en su contra.”

George Steiner
Un largo sábado
Conversaciones con Laure Adler
Traducción: Julio Baquero Cruz
Editorial: Siruela

***

Proust considera que en el proceso creador la inteligencia no desempeña más que un papel secundario. Muchos escritores
comparten esta opinión. Colette dijo a Emmanuel Berl: «Es usted demasiado inteligente para ser un buen novelista». Y Claudel
observaba: «La inteligencia no es la cualidad esencial de un artista en mayor medida que la prudencia lo es de un militar». Lo
cual no quiere decir, evidentemente, que para un artista sea más ventajoso ser un imbécil —Proust mismo tenía una inteligencia
formidable—; pero todos esos escritores saben por experiencia que, en la creación literaria, no es su inteligencia lo que se
moviliza, sino más bien su sensibilidad y su imaginación. Lo que importa sobre todo es «la inspiración», el «estado de gracia», la
comunicación directa establecida con las fuentes profundas de la memoria y del inconsciente; y para captar esas fuentes a
menudo es preferible dar descanso a la inteligencia. Aragon era más inteligente que Eluard, pero Eluard era mejor poeta. La
inteligencia no inhibe ese don poético; el don poético simplemente es de otra naturaleza: puede coexistir con una inteligencia
mediocre, incluso con una mente confusa. Tengo un disco de Céline que escucho de vez en cuando. Las primeras páginas de El
viaje al fin de la noche (leídas por Michel Simon) producen físicamente (carne de gallina) la impresión del genio en estado puro.
Es perturbador. Luego viene una larga entrevista al autor, que desvaría y repite machaconamente banalidades. Es deprimente.
¿Céline y el doctor Destouches habrían sido, pues, dos individuos diferentes?

No, diría Sainte-Beuve, que pensaba que el hombre y el escritor constituían una unidad: un completo conocimiento del primero
os dará la plena comprensión del segundo. Pero Proust demolió soberbiamente esta mecánica grosera: «[Sainte-Beuve]
desconocía lo que nos enseña una habituación un poco profunda con nosotros mismos: que un libro es el producto de un yo
distinto del que manifestamos en nuestras costumbres, en la sociedad, en nuestros vicios». Lo cual explica, por otra parte, el
contraste a veces impresionante entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor. Paradoja
perfectamente resumida por el axioma de Valéry: «Toda persona es inferior a lo que ha hecho de más hermoso».

Simon Leys
La felicidad de los pececillos
Traducción: José Ramón Monreal
Editorial: Acantilado

Foto: Louis Ferdinand Celine

Previamente en Calle del Orco:


La función de la crítica es salvar la obra del artista que la creó, Simon Leys
Las “K” me parecen feas, Franz Kafka

Comparte esto:

Tweet

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 2/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco


 WhatsApp  Correo electrónico

Cargando...
Me gusta
A 22 blogueros les gusta esto.

Related

La verdadera lengua de la literatura, Hay que leer siempre lápiz en mano, "Te parezco extraño, pero por lo menos
Ricardo Piglia George Steiner estoy vivo"
En «Filosofía» En «Fotografía» En «Fotografía»

Publicado en Fotografía, Literatura y etiquetado Aragon, Éluard, Bagatelas para una masacre, Berl, Céline, Claudel, Colette,
Contre Sainte-Beuve, Cosima Wagner, De un castillo a otro, Derrida, Gadamer, Heidegger, Kant, La felicidad de los pececillos,
Laure Adler, Norte, Parsifal, Proust, Rabelais, Rigodón, Sainte-Beuve, Ser y Tiempo, Shakespeare, Steiner, Valéry, Viaje al final de
la noche, Wagner. Marca el enlace permanente.

5 Comentarios Agrega el tuyo

El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco | Café
1
Montevideo el julio 17, 2020 a las 2:15 pm Responder
[…] Tenemos el mismo problema con Wagner. Durante el almuerzo, esperando a que sirvan el postre, Cosima Wagner dice a los criados:
“Hay que esperar, el maestro está tocando el piano”. Arriba, en el segundo piso, se le oye tocar. Estaba estudiando, preparando la música
de Semana Santa de Parsifal. Wagner baja. Y en la mesa… — Leer en calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-
una-obra-y-la-maloliente-miseria-huma… […]

Luis el julio 17, 2020 a las 6:07 pm Responder


2
(1) https://www.facebook.com/watch/?v=1143113485750158 La historia la escriben los vencedores resaltando todo lo malo del
vencido y ocultando lo muy malo del vencedor.
Petit histoire: “Se merecía los cuernos que le puse por vanidoso” (Nietzsche, sobre Wagner en “Mi hermana y yo”)
(2) Dalí afirmó (En “Diario de un Genio” y creo que refiriéndose a García Lorca) que casi todo buen artista no es realmente
inteligente).
Petit histoire: En una biografía de Victor Hugo leí que Sainte-Beuve, quien era muy feo, tenía amores adulterinos con la mujer
de Hugo, quien era más bien bello.

Artemisa el julio 19, 2020 a las 7:14 pm Responder


3
Guauuuu. Pensaba que solo yo había leído ” Mi hermana y yo” de Nieztche.
La leí en la adolescencia y hace algunos años, pocos, volví a hacerlo.
Incluso regalé algún libro pero creo que no fue leído porque nunca me lo comentaron aunque lo pregunté.
Cosas que pasan……

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 3/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco

rodrigo pérez gil el julio 17, 2020 a las 8:17 pm Responder


4 Tan desmedida valoración del arte de Wagner, de la filosofía de Heidegger, sobrepasa cualquier ponderación. Nietzsche lo
había revelado en relación con Wagner, y el mismo Heidegger mostró el cobre al inaugurar un curso de filosofía en 1933,
justo cuando asciende el Tercer Reich al poder en Alemania, diciendo que la única razón a considerar en adelante era la
razón del Fürher… Música y filosofía alemanas decadentes, insertas en culturas decadentes, la del imperio austrohúngaro, de
la que dio buena cuenta Thomas Bernhard, y la cultura nazi, que en paz descansen…

Walter erazo el julio 17, 2020 a las 10:22 pm Responder


5
Gran articulo.

+· Responder

Introduce aquí tu comentario...

“Una antología que reuniera citas elegidas solo por su elocuencia, su profundidad, su chispa o su belleza correría el riesgo de ser
aburrida, interminable e incoherente. Su unidad interna no debe provenir más que de la personalidad y los gustos del
compilador, y ofrecer una especie de reflejo de ellos.”

– Simon Leys

Un blog de Kim Nguyen Baraldi

Contacto: calledelorco@gmail.com

Sigue Calle del Orco por Email

Únete a 3.760 seguidores más

Introduce tu email

Seguir

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 4/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 5/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco


¿Quieres saber más sobre Calle del Orco?

“Entrevista en La Colmena, informativo cultural de Radio Castilla la Mancha (22/11/19).”

00:00 00:00

Sígueme en Twitter

Nathalie Sarraute: "En este momento, el maestro de todos nosotros es Flaubert. En torno a su nombre, hay unanimidad…
twitter.com/i/web/status/1… 1 day ago

Entradas recientes

La página en blanco, Henri Michaux

El descubrimiento de la estructura del momento presente, Milan Kundera

El lugar de las ilusiones, Julien Gracq

Cada poeta es un océano pacífico, Marina Tsvietáieva

La imposibilidad de escribir con lucidez absoluta, Aldolfo Bioy Casares

Encuentros más concurridos

Mi padre encargaba al sastre chaquetas con bolsillos grandes y profundos, Primo Levi

Dimitri Karamazov no puede matar en mí a Samuel Pickwick, Julio Cortázar

La gran literatura y la gran filosofía son testimonio de la vida, Gilles Deleuze

La libertad en El Quijote, Sergio Pitol

El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor

La página en blanco, Henri Michaux

Este gigante paseaba entre nosotros como si fuera un enano, Max Brod

Indice

La primera palabra de un verso, Rainer Maria Rilke

Acerca de

Blogroll

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 6/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco
Asociación Georges Perec

El blog de Rafael Argullol

El lamento de Portnoy

El lector perdido

En lengua propia

Enrique Vila-Matas

Félix Pelegrín

Guillermo Schavelzon

La bañera de Moby Dick

Le Réseau Modiano

Lector salteado

Los perros de la lluvia

No (ha) lugar

Archivos

agosto 2020 julio 2020

junio 2020 mayo 2020

abril 2020 marzo 2020

febrero 2020 enero 2020

diciembre 2019 noviembre 2019

octubre 2019 septiembre 2019

agosto 2019 julio 2019

junio 2019 mayo 2019

abril 2019 marzo 2019

febrero 2019 enero 2019

diciembre 2018 noviembre 2018

octubre 2018 septiembre 2018

agosto 2018 julio 2018

junio 2018 mayo 2018

abril 2018 marzo 2018

febrero 2018 enero 2018

diciembre 2017 noviembre 2017

octubre 2017 septiembre 2017

agosto 2017 julio 2017

junio 2017 mayo 2017

abril 2017 marzo 2017

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 7/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco
febrero 2017 enero 2017

diciembre 2016 noviembre 2016

octubre 2016 septiembre 2016

agosto 2016 julio 2016

junio 2016 mayo 2016

abril 2016 marzo 2016

febrero 2016 enero 2016

diciembre 2015 noviembre 2015

octubre 2015 septiembre 2015

agosto 2015 julio 2015

junio 2015 mayo 2015

abril 2015 marzo 2015

febrero 2015 enero 2015

diciembre 2014 noviembre 2014

octubre 2014 septiembre 2014

agosto 2014 julio 2014

junio 2014 mayo 2014

abril 2014 marzo 2014

febrero 2014 enero 2014

diciembre 2013 noviembre 2013

octubre 2013 septiembre 2013

agosto 2013 julio 2013

junio 2013 mayo 2013

abril 2013 marzo 2013

febrero 2013 enero 2013

diciembre 2012 noviembre 2012

octubre 2012 septiembre 2012

agosto 2012 julio 2012

junio 2012 mayo 2012

abril 2012 marzo 2012

febrero 2012 enero 2012

diciembre 2011 noviembre 2011

octubre 2011

Sigue Calle del Orco por Email

Únete a 3.760 seguidores más

Introduce tu email

Seguir

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 8/9
3/9/2020 El contraste entre el esplendor de una obra y la maloliente miseria humana de su autor – Calle del Orco


“Cuando un artista habla de otro, siempre habla (por carambola, por desvío) de sí mismo y ahí está todo el interés de su juicio.”

– Milan Kundera

Blog de WordPress.com.

https://calledelorco.com/2020/07/17/el-contraste-entre-el-esplendor-de-una-obra-y-la-maloliente-miseria-humana-de-su-autor/ 9/9

También podría gustarte