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MI AVENTURA

EPISTEMOLOGICA Volumen 2

¡La segunda parte de la aventura!

Tabla de contenido
Introducción 1
Fundamentos epistemológicos en la enseñanza de las ciencias 1
La cultura química4
La naturaleza de la ciencia en libros de química 7
Métodos y modelos en química desde la epistemología de la química 8

INTRODUCCIÓN

Tras lo acontecido en la primera parte de la aventura tanto los lectores como los exploradores
nos quedamos con ganas de más. Afortunadamente las empresas que patrocinan las
investigaciones no se portaron reacias frente a nuestro proyecto y fue gracias a su apoyo
económico que pudimos continuar nuestro viaje por el globo terráqueo, extrayendo aquellos
relatos en torno a la epistemología que nos pudieron ofrecer las diversas culturas.
En esta ocasión contamos con 4 relatos epistémicos de suma importancia para comprender la
influencia, función, desarrollo y aportes de la epistemología a nuestro campo de estudio que es
la química.
Primer relato: Cultura A
La cultura A nos brinda un relato muy interesante en el año 2007, agradecemos a la profesora
Mercé Izquierdo por tratar dos ideas fundamentales en torno a Fundamentos epistemológicos en
la enseñanza de la ciencia, las cuales son:

 Que las ciencias constituyen una “actividad humana” muy amplia, uno de cuyos
aspectos (no el único) es la elaboración del conocimiento justificado;
 Que la epistemología es una guía para enseñar a pensar científicamente, porque
establece las pautas para justificar los conocimientos, relacionando las teorías
científicas y los fenómenos.
Ambas ideas tienen el objetivo de redefinir el modelo de la ciencia tradicional por uno más
rico y útil “La ciencia como actividad humana”. La epistemología nos enseña que

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necesitamos pensar dentro de la ciencia para poder explicar la historia de la ciencia y la
estructura de la misma, asimismo, también aprenderemos a discernir lo falso de lo
verdadero y entender como evoluciono la ciencia. Muchas han sido las corrientes
epistémicas que han tratado de explicar la ciencia, por aventuras anteriores recordaríamos
relatos como los del” Inductivismo” o “El positivismo lógico” del circulo que Viena, por
otra parte, estarían los relatos de la cultura de Thomas Kuhn, los paradigmas de la
investigación.
Hemos tratado otros relatos o modelos epistémicos, como, por ejemplo: Actualmente
conocemos la historia de la actividad científica gracias al lenguaje científico, para el cual,
en un principio era una tarea muy difícil definir lo que es la ciencia pese a que en ese
entonces ya se contara con los principios y fundamentos de la ciencia. Tradicionalmente la
ciencia no se adapta a los prototipos planteado en la época por intentar darle racionalidad.
La evolución social de la ciencia, la aparición de las redes sociales y la aplicación con las
ciencias naturales han desembocado en algo conocido como tecno-ciencia, que es una
relación conjunta de desarrollo puesto que los avances de un área permiten los avances de la
otra, las tareas de interés mutuo han permitido un crecimiento exponencial de ambos
campos del conocimiento, gracias a esto hemos podido resolver muchas de las necesidades
humanas.

Recuperado de: https://elreplicadorliberal.com/2014/09/19/tecnologia/

En cuanto a el aprendizaje según el modelo cognitivo, tenemos que darle sentido cognitivo tanto
a las ciencias como a los procesos educativos; la modelización de las ciencias es necesaria para
darle ese sentido cognitivo, puesto que, explica de manera racional las teorías, permite
interpretar teorías y permite formular hipótesis de manera práctica.
También podemos plantear la ciencia como una herramienta de transformación social, que
busca explicar la axiología de las acciones de los investigadores, la tecno-ciencia, la
matematización y la modelización de las ciencias son partes fundamentales en la ciencia que
deben seguir progresando.
En resumen, la actividad científica es una actividad de la humanidad, es una criticidad hecha por
y para la humanidad. Del mismo modo, la educación es una actividad netamente humana; es
importante formar en ciencia, en una ciencia de carácter constructivista, es importante educar en
lo ético, lo critico…etc. La educación científica debe ir pensada para que en un futuro la
sociedad sea transformada para bien desde la academia.

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Mercé Izquierdo.

Segundo relato: Cultura B


Continuando con los relatos recopilados en esta segunda versión de “Mi aventura
epistemológica” encontramos el relato que no brinda la excéntrica cultura B de la mano del
profesor José Antonio Chamizo, el cual nos cuenta sobre “La cultura Química” partiendo del
enunciado “La química crea su objeto de estudio”.
Comprendemos que para que la química sea considerada como una ciencia debe estar
organizada conceptualmente y poseer un conjunto de reglas, estas reglas se pueden entender

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como la cultura química. Una vez considerada como cultura debe estar compuesta por ciertos
rasgos que la caractericen como tal, históricamente hemos visto que la ortodoxia es lo que hace
la cultura y, todo aquello que difiera de la ortodoxia es considerado una herejía, estos se
complementan y se necesitan, por lo tanto, no puede existir uno sin el otro.
La ortodoxia y la herejía coexisten en la cultura química, solo que, a diferencia de otras culturas,
en la cultura química la herejía es una ortodoxia. La ideología de la ciencia comprende todos los
aspectos bien sean positivos o negativos, reconoce la importancia de valores y rasgos como
tolerancia, el escepticismo, la duda y el consenso, por ende, la cultura científica o química en
este caso no se resume a reglas.
Las grandes revoluciones científicas de la época han roto con las ciencias del momento y esas
revoluciones también hacen parte de la cultura, son herejías que se volvieron ortodoxias y
supusieron un avance. La ciencia es un mundo de muchas preguntas, las preguntas varían por
diversos factores como el tiempo y el espacio en el que fueron realizadas o el estado anímico del
científico, la ciencia marca las características sociales de la época.
El positivismo lógico intento explicar la axiomatización de las ciencias unificando todas las
ciencias de la vida, lo que termino en una reducción de los axiomas científicos al modelo
epistémico positivista, si se reduce a esto, tampoco podríamos decir que la ciencia tiene reglas,
puesto que, siempre esta avanzando y rompiendo épocas. No fue sorpresa que la época del
positivismo no se rompiera y diera paso a otras épocas, como la época de revolución liderada
por Thomas Kuhn con su teoría de los paradigmas, explicando que la ciencia puede avanzar sin
la necesidad de la física cuántica, dándole una respuesta a la embriaguez de Dirac (Hay que
recordar que muchas corrientes epistemológicas quieren recudir la ciencia a la física cuántica).
La ley periódica es un buen ejemplo de la ciencia, es una ley que explica y predice, y eso es
básicamente la ciencia, la ciencia explica fenómenos y hace predicciones de lo que puede
suceder y que no partiendo desde el conocimiento. El reduccionismo es fatal para la ciencia y
para la vida.

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Recuperado de: https://blogs.20minutos.es/ciencia-para-llevar-csic/2019/04/25/henry-moseley-el-joven-que-ordeno-el-
rompecabezas-de-la-tabla-periodica/

La química se divide especialmente en la síntesis y el análisis, es un hecho, refiriéndonos a la


capacidad de inventar y el proceso creativo que es de vital importancia para la química, debido a
que concede la capacidad de abstracción que nos permite comprendes las teorías, leyes e
hipótesis. Las propiedades de la materia dependen del contexto, las moléculas actúan
dependiendo de las circunstancias en las que se encuentren.
La química estudia objetos empíricos, sus propiedades, sus reacciones, En la ciencia existen tres
ejes, el método, que en química es la síntesis y el análisis. La medida, a través del mol. El
lenguaje, nombrar químicamente implica composición y estructura.

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El análisis busca la pureza de las sustancias desde la química, se pude decir que encontrar la
pureza de un material es la obsesión de los químicos, separar todo hasta donde mas no se pueda
y aplicar las técnicas de separación y purificación. Para reconocer una sustancia nueva y una
antigua se usa la espectroscopia de masas, para sustancias nuevas se pueden usar muestras más
pequeñas que para materiales conocidos. La química atmosférica apareció cuando hubo
herramientas para hacerla posibles, herramientas de medir partes por millón en los gases
atmosféricos. Podemos entender que la química es la ciencia más productiva, pues la química se
inventa a ella misma mientras progresa, es decir que la química crea su propio objeto. La
medida de la química es el mol, el mol es la medida fundamental de la química, esta unidad
relaciona el mundo microscópico y el mundo microscópico, no todo lo que produce la química
es utilizable, el fin de la creación o de la producción es el poder hacerlo. El poder hacerlos es lo
que le da a la ciencia, el poder.
A principios del siglo XX había 3 millones de químico en el mundo. La unión de cientos de
átomos forma las propiedades de un material ¿cautinos átomo o partículas son necesarias para
esto, para que un compuesto tenga las propiedades de los átomos que las conforman? Un
ejemplo de esto es el oro, cuanto más fina sea una lámina de oro, esta adquiere colores
diferentes y pierde opacidad. “la definición del color está ligada a una definición molecular del
espesor de la materia” Bachelard (1976). Las propiedades químicas de la materia no pasan
necesariamente por la cantidad de materia involucrada.
La IUPAC, toma decisiones de carácter internacional al estar conformada por químicos de
varios países alrededor del mundo, “el lenguaje d de química es un modelo predictivo de las
sustancias, en él se pueden predecir la materia y las sustancias que todavía no existen” símbolos,
formulas y ecuaciones conforman el complicado lenguaje de la ciencia química, y nos habla
acerca de la composición y estructura de la materia. El lenguaje de la ciencia no es el mismo
para otras ciencias, tal vez por simplicidad se pueden usar algunos nombres en común para
facilitar el trabajo en comunidad con otros científicos de otras ciencias, pero que una ciencia
como la química tenga su propio lenguaje le conde un nivel de independencia e las otras
ciencias, en especial porque es un lenguaje que está en constante crecimiento y la realidad es
que tiene un uso casi infinito como partículas tiene la materia. Es un hecho fascinante que la
química tenga un lenguaje tan desarrollado para ella misma. Las estructuras que forman los
átomos y las moléculas, para formar moléculas distintas son las estructuras de la materia, la
unión de átomos y moléculas forma estructuras fascinantes, claro que para entender las
estructuras de la materia es necesario tener u nivel de abstracción suficiente para imaginar estas
estructuras. La cultura quimia la forman los tres ejes antes mencionado (el método, la medida y
el lenguaje) “el cambio de la materia a través de la reacción química”. La química y la
farmacéutica han cambiado el mundo, la mecánica cuántica predice propiedades
electromagnéticas pero la química es la mucho más predictiva en lo que se refiere al resto el
mundo, por esto no se debe reducir a ciencias. La bilogía es tan compleja como la química
diversa, pero se cruzan en el mundo molecular de la bilogía, donde aparece la química y por
esto no se piensa reducir la bilogía a la química. “la pieza de la química no solo sería para ser
ejecutada, sino para ser compuesta.
La cultura de la química es expandirse a todo lo que involucre a la materia, es decir, a todo lado,
de igual manera que la física estudia los cuerpos y sus movimientos. Por esto podemos decir que
la cultura d de química es acompañar a las ciencias en lo que se refiere al mundo microscópico,
mientras hace esto ella se va nutriendo de los conocimientos, haciendo de esta manera que la
química tenga una ortodoxa de dar y de recibir, pero siempre será una ciencia independiente

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Recuperado de: http://revistaciencia.amc.edu.mx/images/revista/56_2/hacia.una.cultura.quimica.pdf

Tercer Relato: Cultura C


La cultura c nos deja uno de los relatos más elaboradas de la última década, es el resultado de
una investigación que nos explica por qué la ciencia se encuentra en este punto en esta parte del
mundo, un punto atrasado con respecto a otras partes del mundo. Es indispensable que
Latinoamérica se desprenda y trascienda el positivismo lógico para superar todas aquellas
falencias y limitaciones presentes tanto en la sociedad como en la ciencia.
¿Qué naturaleza de la ciencia se presenta en los libros de química para la educación secundaria
en América Latina? En la mayoría de textos no hay una naturaleza definida y en su defecto, la
poca que hay es positivista lógica, lo sabemos gracias a las investigaciones que configuran este
relato, una serie de análisis cualitativos y de argumentación realizados a libros de química en
américa latina.
La investigación fue sencilla a los ojos de los didactas expertos sin embargo para el común
puede parecer una tarea bastante compleja; la tarea se trataba de identificar 10 aspectos de la
filosofía de las ciencias en los libros de química, los aspectos son: correspondencia,
racionalidad, representación, lenguajes, intervención, método, contextos, valores, evolución y
juicio.
Una vez identificados estos aspectos pasarían a establecer relaciones entre lo identificado en el
libro y los saberes propios de los investigadores, es decir, comparar la información de los libros
con lo postulado en corrientes epistemológicas con respecto a los tópicos de la filosofía de las
ciencias; corrientes epistemológicas como:

 Positivismo lógico y concepción heredada (PL/CH)


 Racionalismo crítico (RC)
 Nueva filosofía de la ciencia (NFC)
 Filosofía de la ciencia poskunianiana (PK)
 Visiones recientes y actuales (VRA)
¿Cómo dejamos atrás el positivismo?
La filosofía, la historia y la epistemología de las ciencias han sido cuestiones de suma
relevancia para el desarrollo y la enseñanza de campos del conocimiento como la química. En
los años 90 se identificó que eras nulos los programas de formación en química que abordaran
tales cuestiones, era imposible encontrar una malla curricular que ofreciera historia o
epistemología de la química. Estas ausencias en los currículos eran preocupantes puesto que, los
científicos en formación y los que para ese entonces ya ejercían, sabían poco o nada sobre los

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fundamentos de la ciencia química. De modo que, para 1996 se empezaron a crear sociedades
dedicadas a la filosofía de la química, con el fin de que en los programas de investigación se
introduzca cada vez más filosofía.
La introducción de la filosofía llevaría consigo la introducción de la epistemología y, por ende,
supuso que los didactas y profesores de ciencias reformularan sus concepciones acerca de la
ciencia, lo que los llevaría a la necesidad de plantear nuevas respuestas fundamentadas a
interrogantes como qué es la ciencia, cómo se desarrollan las teorías, leyes y modelos, cuáles
son las relaciones entre ciencia y contexto sociocultural, o cómo ha cambiado la actividad
científica a lo largo de los siglos. Dicha reformulación tuvo como objetivo abandonar aquellas
posturas positivistas de la segunda guerra y adoptar nuevas posturas que epistémicas que
cuenten con un mayor poder explicativo para entender la ciencia y así poder enseñarla.

Elaboración propia

Cuarto relato: Cultura D


Para finalizar con este volumen de nuestras aventuras, abarcaremos el ultimo relato conseguido
en nuestra interacción con la cultura D. De la mano de Chamizo Antonio comprenderemos los
Métodos y modelos en química desde la epistemología de la química.
Como indica Chamizo, en su texto “¿Cómo ves las ciencias?”, las ciencias como una de las
muchas maneras de ver el mundo, está divida en 5 partes fundamentales que la conforman; la
biología, física, química, matemáticas y antropología. Ciencias que examinan hechos de los
cuales se obtienen preguntas desde cada ámbito de cada ciencia. De las cuales se hará énfasis en
la química; la ciencia que describe Chamizo (2009):
Tal como la conocemos hoy, es resultado de una multitud de herencias que, concretadas en
oficios, influyeron en la vida cotidiana de todas las culturas. No deja de ser sorprendente que
prácticas tan diferentes como la del herrero—y la metalurgia—, el curandero —y la farmacia—,
el alfarero —y la cerámica—, el panadero —y la biotecnología— hayan podido estar reunidas y
terminar por fundirse en un campo común: la química, donde se estudia, se practica y se
transmite cómo transformar la materia.
Entonces la química, como una de las distinciones de las ciencias, se lleva a cabo de un método
particular y con un lenguaje propio (Chamizo, 2005) y también a través de una lógica específica
(Jensen, 1998), propios de una filosofía, historia, sociedad científica que la representan. El
reciente conocimiento de lo anterior no ha permeado aún en la comunidad académica que sigue
pensando la química bajo la visión lógico positivista, donde la química es una ciencia reducida a

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la física. Entonces se ha enseñado desde este punto de vista, fracasando en el intento e
comprender la química como una ciencia. Así entonces, ¿cuál es la importancia de incentivar
aún más la filosofía de la química en la enseñanza de la química?
Principalmente, cabe mencionar la circunstancia de que la química no puede ser reducida a la
física el cual ha sido abordado a partir de dos tipos de reduccionismo: uno ontológico y uno
epistemológico (Silberstein, 2002 citado en Chamizo, 2009). Donde se han llevado intensos
debates abordando problemas importantes en los que se cuestionan aquellos relacionados con
“el tipo de relaciones”, o con “la forma en la que se establecen las relaciones”. Durante los
últimos años se ha ido fortaleciendo una postura ‘herética’ que se denomina “semántica” en la
cual se niega la posibilidad de la reducción que estaba propuesta por el positivismo lógico.
Según Chamizo (2009) Uno de los principales exponentes de esta postura es el filósofo R. Giere
que indica (1992, p. 106):

La mayoría de las teorías de la ciencia, viejas o nuevas, suponen que cualquier relación
representacional entre la teoría y la realidad ha de entenderse como una ‘correspondencia’ entre
los enunciados científicos y el mundo. El destino de cualquier concepción de las teorías como
algo que representa la realidad ha sido asociado, de esta forma, con los destinos de la teoría de
la correspondencia de la verdad. Es en este punto donde se entabla generalmente la batalla…

Sin embargo, dada la explicación de Chamizo, no existe relación directa entre los conjuntos de
enunciados y el mundo real. La relación es indirecta dada por la intermediación de un modelo
teórico. Que permite dar a conocerse mediante su filosofía. A pesar de la larga historia de la
química, su filosofía es prácticamente una nueva actividad intelectual. Solo druante la década de
los 90, aparecieron las primeras revistas especializadas en el tema (Hyle y Foundations of
Chemistry) en las cuales se reflexiona sobre muchos asuntos, como el de los modelos y el de la
relación con la educación (Chamizo, 2009).
Con ello han surgido diversos modelos, en los cuales se discute filosóficamente la autonomía
del químico respecto a las teorías fundamentales de las ciencias (Fisher, 2003 citados en
Chamizo, 2009) lo cual permite explicar la química sin recurrir a la física y enseñarla como una
disciplina científica fundamental y no una reducción de la física.
Como se ha visto anteriormente, el término “herejía” sugiere una afirmación contraria a
principios comúnmente aceptados. Significa elección, opción. Cuando hay una fuerte aceptación
por parte de las sociedades sobre ciertos saberes generales, se convierten en un saber cultural, y
se está hablando de “ortodoxia”. “No hay herejía si no hay ortodoxia; es en su enfrentamiento
donde se reconocen y caracterizan” (Chamizo, 2009).
En las visiones modernas de la ciencia se resalta una visión ortodoxa que, según Chamizo
(2009) está centrada en una elite de protagonistas descubridora del mundo y creadora de teorías
y máquinas fascinantes. De manera general, esta visión ortodoxa sostiene que el conocimiento
se alcanza a través de un método: el método científico, que consiste en una serie de pasos que
permiten, en caso de cumplirse rigurosamente, ser aceptado por una comunidad, la comunidad
científica. En lo que después de las aportaciones del filósofo alemán H. Reichenbach
(Reichenbach, 1938) según Chamizo (2009), uno de los más famosos exponentes del
positivismo lógico, se ha logrado identificar que el mito del ‘método científico universal’
reconocido como el algoritmo del conocimiento aparece en una multitud de libros de texto,
generalmente como la secuencia de los siguientes pasos:
● observación de un fenómeno

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● Elaboración de una hipótesis
● Prueba de la misma
● Conclusiones.
Este mito ha sido tan poderoso, en parte, porque las publicaciones científicas se escriben
siguiendo este protocolo, y porque muchos alumnos, y también profesores que no han sido
practicantes profesionales, asumen que así y sólo así se obtiene el conocimiento científico
(Chamizo, 2009).
Así entonces, una revisión completa y profunda sobre la validez de un único método científico
universal indica, según Chamizo (2009) que esta no se refiere únicamente a una serie de
sucesiones, o de reemplazos de una clase de conocimiento por otra; es más una cuestión de
acumulación compleja y de variedad simultánea, disputada en un cierto plazo. De esta forma,
citado Pickestone por Chamizo, reconoce tres grandes tipos de formas de conocer que aquí
permite esbozar el método de la química:
1. La historia natural, que se refiere a una primera clasificación de los componentes del
mundo. Comprende la variedad de objetos naturales o artificiales, normales o patológicos. Es el
espacio de las taxonomías: celestes, geológicas o biológicas y del lugar donde se vuelven
públicas, los jardines botánicos, los zoológicos y los grandes museos de ciencias (Chamizo,
2009).
2. El análisis. El cual busca el orden por disección, aparece cuando los objetos se pueden
ver como compuestos de “elementos”, o cuando los procesos se pueden ver como el ‘flujo' de
un ‘elemento' a través de un sistema. Es el espacio de los laboratorios de anatomía, química,
física e ingeniería y del lugar donde se vuelven públicos, las escuelas, institutos, politécnicos,
hospitales y universidades (Chamizo, 2009).
3. La síntesis. Es sobre cómo poner las cosas juntas. Especifica la composición de lo
“conocido” para posteriormente, poniendo juntos los “elementos”, crear nuevos objetos o
fenómenos. Es el espacio ‘privado’ del control, ya sea por motivos militares o económicos, de
los laboratorios de biomedicina y farmacia, de diseño de nuevos materiales o de física nuclear,
así como del lugar donde se vuelven públicos, el complejo tecnocientífico industrial (Chamizo,
2009).
Las formas de conocimiento, entonces, siguen o conforman algunos de los parámetros
mencionados anteriormente que se entienden como base de los modelos de la ciencia química.
Según Chamizo (2009). La palabra modelo es polisémica; se ha empleado en diversos sentidos.
Por un lado, es ejemplar, es decir, indica aquellas cosas, actitudes o personas que se propone
imitar. Sin embargo, otro sentido igualmente generalizado es que se emplea para las ciencias y
que discute Chamizo. Como:
Los modelos (m) son representaciones, basadas generalmente en analogías, que se construyen
contextualizando cierta porción del mundo (M), con un objetivo específico.
En esta definición todas las palabras son importantes: las representaciones son
fundamentalmente ideas, aunque no necesariamente, ya que también pueden ser objetos
materiales. Las representaciones no son autoidentificantes, lo son de alguien que las identifica
como tal. Una analogía está constituida por aquellos rasgos o propiedades que sabemos
similares en m y M. Que se construyen contextualizando, remite a un tiempo y lugar
históricamente definido, lo que además enmarca la representación; cierta porción del mundo
indica su carácter limitado y finalmente un objetivo específico, establece su finalidad, general

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pero no necesariamente, el explicar. Sabiendo que la explicación es una de las más
significativas características de las ciencias.
Para comprender el concepto de modelo Chamizo (2009) hace referencia a lo que los químicos
conocen como pureza de una sustancia a lo largo de la historia natural: “Toda vez que las
sustancias “naturales” no son puras, la separación de las partes que las constituyen, el
aislamiento de lo que se quiere hasta donde sea posible, ha sido una constante del quehacer
químico, incluso desde que este era alquímico”. Entonces, continuando con la interpretación que
da Chamizo, la pureza depende de la posibilidad de identificar impurezas. “Así, la IUPAC
define el límite de detección como aquel que indica la concentración cL o la cantidad qL
obtenida por la medición más pequeña XL que puede ser detectada con una razonable
certidumbre por una técnica analítica particular” (Chamizo, 2009). Así, se obtiene, es un modelo
de sustancia pura y con el advenimiento de más y mejores técnicas analíticas, es posible ir
construyendo la pureza que, de alguna manera, pudiera ser un artefacto. Es decir, un producto
generado por la manipulación experta de cierto material. “Su realidad no reside en su existencia,
sino en la manera en la que es conocida” (Chamizo, 2009).
Como docentes y profesores de la química es entonces importante reconocer puntos importantes
para el entendimiento de la propia ciencia que enseñan. Pues para ser los educadores deben
reconocer filosóficamente el progreso de la misma y la interpretación que permite hacer del
mundo bajo los diversos modelos, o más bien, representaciones analógicas que se dan mediante
un conocimiento y método científico que no específicamente es universal.
De la misma forma, cabe mencionar que ante la enorme avalancha de información proveniente
de la investigación en química y desarrollada a través de la síntesis, “los profesores de esta
disciplina no son profesores de química, somos, en el mejor de los casos, profesores de historia
de la química” (Chamizo, 2007a citado en Chamizo, 2009). Así lo presenta la información que
recibe a diario la revista Chemical Abstract Service de tan solo información química, entonces
la clase de mañana de un profesor de química de bachillerato ya es historia. Por otro lado, hay
que hacer notar que la síntesis química actual aspira a explicar sus resultados; es decir, no se
trata únicamente de obtener determinado producto, sino dar razones por las cuales se obtuvo.
Si un experimento de síntesis falla, lo usual es buscar en las condiciones del experimento las
causas del inesperado resultado. En la síntesis, el químico modela lo que sucederá con los
reactivos para obtener el producto. Si un modelo falla en explicar el resultado experimental, se
construye otro modelo. Sin una explicación generalmente basada en la estructura molecular, el
experimento de síntesis es una receta de cocina que solo es exitosa a nivel fenomenológico.
(Chamizo, 2009)
Se convierte en algo preocupando el descontrol total de la síntesis de objetos y sustancias
derivados de la ciencia química y sus múltiples modelos, “la síntesis es una actividad
tecnocientífica que modifica al mundo introduciendo en él nuevas sustancias” (Chamizo, 2009).
Es una actividad que modela, que no tiene paralelo en otras ciencias y que ha sido ignorada por
los filósofos de la ciencia, sobre todo por el intento fracasado de la tradición empírico
positivista, por la física y la biología.
A modo de conclusión se puede afirmar que, para enseñar la ciencia química, es fundamental
concebir una filosofía química completa y totalmente autónoma de la filosofía de las demás
ciencias. Con el fin de buscar orden y justificación a la total y descontrolada síntesis de
materiales que se distribuyen diariamente por las revistas de química, información que día a día
se convierte en un grano de la arena que conforma la historia de la naturaleza de la química y
que muchos filósofos preocupados han intentado estudiar y entender.

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Referencias

 Chamizo, J.A. (2009) Filosofía de la Química: I. Sobre el método y los modelos,


Educación Química, 6 – 11.
 Chamizo, J. A. (2007). La esencia de la química Reflexiones sobre filosofía y

educación (Primera Edición 2007 ed.). José Antonio Chamizo (ed.).

 Amador-Rodríguez, R., & Adúriz-Bravo, A. (2021, 2 agosto). ¿Qué naturaleza de la

ciencia se presenta en los libros de química para la educación secundaria en América

Latina? Enseñanza de las ciencias, 39(3). https://ensciencias.uab.cat/article/view/v39-

n3-amador-aduriz

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