Enfrentando los vientos fuertes de la vida

Miedo, terror, angustia, aflicción y dolor es lo que nos produce una situación que

amenaza nuestra comodidad, seguridad o supervivencia. Acontecimientos como la

destrucción de las torres gemelas, conflicto armado ocasionado por la guerrilla el

terrorismo, escases de dinero y una familia que sostener, abandono del esposo(a) o

muerte de un ser querido. Preguntas como ¿dónde está Dios? y ¿por qué permite que

sucedan estas cosas? muestran la fragilidad humana ante las dificultades, angustia y

temor. Ante tal amenaza el ser humano reacciona bloqueando sus emociones,

paralizándose o haciendo cosas que apacigüen el dolor. La realidad es esta y como

cristianos la lucha será mayor sin embargo, la buena noticia es que Jesús está presente y

hace posible que atravesemos los vientos fuertes de la vida.

a) Los vientos fuertes de la vida (v. 16-18):

Los discípulos fueron testigos de señales como la conversión del agua en vino, la

sanidad del hijo del oficial del rey, la sanidad del paralítico en Betesda y la alimentación

de los cinco mil. Esta última fue un momento de euforia porque Jesús se hacía más

conocido y la multitud quería tomarlo por la fuerza y hacerle rey (6:15). Seguramente

los discípulos tenían las mismas expectativas pero Jesús se retira solo al monte (6:15) a

orar, enseñando que su reino es diferente al que ellos esperan.

El siguiente paso era dirigirse a Capernaum, los discípulos debían descender y llegar al

mar para embarcarse. De la expresión “había sucedido la oscuridad” y “Jesús no había

venido hacia ellos” se rescatan los verbos “ἐγεγόνει” y “ἐληλύθει” ambos en

pluscuamperfecto. Para Juan andar en oscuridad es no conocer a Jesús y no comprender

las implicancias de su mesianismo aunque este oscuro andar perduró en un tiempo

pasado con el tiempo cambió.

Seguidamente “un gran viento del mar era levantado”, el mar para los judíos

representaba la amenaza continua de las fuerzas del caos contra Dios y la creación y el

mar de Galilea desataba violentas tormentas. El viento también era utilizado para

describir diversas clases de adversidad. Precisamente los discípulos debían atravesar el

mar y el viento para llegar a Capernaum.

Hoy en día se le tiene miedo al sufrimiento, el dolor es atribuido al accionar de Dios y

no al pecado humano. La historia de un país sumergido en terrorismo, corrupción,

desigualdad racial y social ha producido dolor, decepción y desconfianza. Ha

aumentado el individualismo y la indiferencia por el prójimo y esta desconfianza resulta

en desconfianza en Dios.

Evitamos tener relaciones que impliquen compromiso, nos preocupamos más por el

número de asistentes a la iglesia que por la vida y necesidades de las personas.

Buscamos los pasos para dejar de sufrir y elegimos el camino que menos dificultades

tiene. Por ello, la falta de personas jóvenes dedicadas al ministerio a tiempo completo en

Perú. Pensamos en renunciar a nuestro llamado o cristianismo cuando aparece una

dificultad en el camino.

¿Le tienes miedo a los vientos fuertes de la vida? O ¿crees que el cristiano no debería

pasar por ellos? Debemos recordar que seguir la misión que Jesús implica atravesar los

vientos fuertes de la vida.

b) Dios controla los vientos fuertes de la vida: (v. 19-20)

En medio de los vientos fuertes que agitan el mar, los discípulos ven a Jesús caminando

sobre este, acercándose a la barca. El verbo “ver” en presente expresa una idea repetida

o habitual, es decir, para los discípulos ver a Jesús no era algo nuevo, lo vieron

constantemente, habían sido testigos de las señales pero se asustaron. Así caminar con
Jesús fue un peregrinaje de fe para los discípulos que fue creciendo a medida que

pasaban tiempo con Él.

Al caminar sobre el agua Jesús evidencia su lugar y poder sobre los poderes cósmicos,

afirma su identidad y soberanía sobre la creación y las fuerzas del mal. En medio del

temor dice: “Yo soy, no temáis”. La expresión (Ἐγώ εἰμι) tiene connotación teológica,

es la traducción del término hebreo que utilizó Dios al revelarse a Moisés en el A.T.

(Ex. 3:14, Dt. 32:39) y expresa su eterno ser. Jesús siempre ha existido y está dispuesto

a revelar su divinidad a sus discípulos. Ya lo había hecho antes asumiendo el papel de

Dios alimentando, protegiendo y rescatando a sus seguidores.

La expresión “no temáis (μὴ φοβεῖσθε)” está en presente imperativo e implica una

prohibición por parte de Jesús, en la vida del discípulo habrá "vientos fuertes" pero si

Jesús está con ellos, no hay lugar al temor.

Hablar de vientos fuertes es recordar el robo del dinero de jubilación de personas de la

tercera edad por un ex presidente, la época del terrorismo, grupos subversivos y fuerzas

armadas matando gente inocente, no saber qué pasa con el país porque vacaron al

presidente. Lo vientos fuertes de la iglesia puede ser no contar con personas que quieran

contribuir con la obra, ver que el liderazgo cae repetidas veces en el mismo pecado, no

tener el dinero suficiente para sostener la obra o a la familia pastoral.

¿Cuáles son los vientos fuertes de tu vida? Enfermedad, economía, relaciones rotas ¿A

qué te dice el Señor que no temas? Dios nos ha dado evidencia de su poder y soberanía

a lo largo de la historia, no temamos.

c) Anhelar la presencia de Dios (v.21)

Al reconocer que es Jesús los discípulos desean tenerlo en la barca. El uso del infinitivo

“λαβεῖν” (recibir) cuyo complemento es “ἤθελον” (desearon) no hace énfasis en el

tiempo sino en el hecho que, a partir de ese momento los discípulos desearon recibir a

Jesús. La intervención de Jesús en medio de los fuertes vientos aumenta el anhelo de los

discípulos por pasar tiempo con él. Ese es el efecto Jesús produce en el peregrinaje de fe

de sus discípulos. Es Jesús quien se revela a sus discípulos constantemente mostrando

señales para que sus discípulos puedan enfrentar los vientos fuertes de la vida que les

sobrevendrán por seguirlo.

El terrorismo duró quince años aproximadamente y en ese período el cristianismo creció

en Perú en gran escala. A pesar de la decepción humana frente a la corrupción, al

racismo étnico, a la desigualdad, Dios está en control de todo, evidencia de ello son

nuestras vidas y la vidas restauradas de otras personas.

No temamos a los vientos fuertes de la vida sea político, económico, laboral o familiar,

Dios es soberano, pese a un mundo caído, está presto a acompañarnos en toda

dificultad. Dios utiliza los vientos fuertes de la vida para revelar su poder y conocerlo

más.

¿Qué vientos fuertes de la vida te han llevado a conocer más de Dios? ¿Estás pasando

por alguno de ellos? Dios quiere que lo atravieses con él.

Escogí este texto porque al venir este semestre me sentí como los discípulos, en una

barca sobre Colombia azotada por los vientos fuertes de Medellin. El temor casi hace

que me quede en Perú y que renuncie al llamado de Dios de estudiar. Pero hoy puedo

decir que el Yo soy a caminado conmigo estos dos años y medio que llevo aquí y lo

seguirá haciendo.

Conclusiones

- Ser discípulo de Jesús implica atravesar los vientos fuertes de la vida.

- En esos momentos debemos recordar las manifestaciones de Dios en nuestra historia.

- El Yo Soy se ha manifestado y lo seguirá haciendo a pesar del pecado humano y las

falsas expectativas.

- Dios tiene el control de la historia, no hay por qué temer.

- Experimentar la presencia de Dios en medio de esos vientos fuertes nos permite

conocerlo y anhelarlo más.

Sugerencias

- Vientos fuerte = usar las palabras tormentas porque las utilizamos “tormentas de

la vida”.

- ¿Cuáles con las tormentas a las que quiero hacer alusión? No torres gemelas,

buscar Hydroituango, está como una tormenta latente de dimensiones que no

imaginamos. Eso puede generar el dolor. El volcán en Guatemala. Nos puede

afectar como iglesia, con familiares de esa región.

- Audiencia: Tormenta de las enfermedades, cáncer, enfermedades que nos

golpean.

- Mujeres profesionales, ancianas columna de la iglesia. No leerlo.

- Tormenta: cuando uno tiene un hijo rebelde, o un papá con adicciones, violencia

intrafamiliar.

- Gracias: Dios está presente y controla las tormentas y hace posible que

atravesemos las tormentas de la vida. La gracias de Dios e manifiesta no porque

Jesús nos evite pasar por tormentas sino que nos acompaña.

- Su reino es diferente, conectarlo bien con el pasaje anterior y las expectativas, el

tipo de rey que uno busca, el que evite pasar por las tormentas. Recalcar q su
 reino es diferente que reconoce nuestras realidades, q tneo que pasar por als

tormentas y en cuanto a q el rey no acompaña en medio de als tormentas que no

es el caso de los reyes actuales quienes tratan de resolver los problemas desde su

lugar en cambio Dios va con nosotros.

- Aprender las lecciones que Dios tiene para nosotros al pasar por las tormentas.

No desaprovechar el sufrimiento. ¿De esto es qué aprendemos? ¿como vemos a

Jesús presente? Y qué vemos de Jesús diferente cómo qué conocemos más.

- Manejo del pluscuamperfecto: Parte técnica que tiene efecto de gracias de Dios

por mostrar los diferentes momentos de como uno fortalece su fe en Jesús, ese

efecto técnico del pluscuamperfecto en la vida real.+ el tiempo presente “ver” un

mismo hecho como un desfile como un proceso, paso por paso, el proceso. No

es ver todo el conjunto sino la belleza de ver y seguir viendo a Jesús, vemos a

Jesús en medio de las tormentas. El tiempo del verbo no ayuda a entender que….

- No mencionar la alegoría como tal sino los componentes fácticos de la tormenta

como el masr de galilea con tormentas intempestivas + el contexto cultural que

creía q los demonios y caos… el autor tal sugiere que (citar autoridad

académica) un par de líneas de lo q dice. Elementos de superstición, en el pueblo

de Dios, la cultura se nos mete (lotería, horóscopo, chance, muerte).

- Perú y Colombia:

No mencionar medellin como tormenta

Mencionar características de Perú: La tormenta de no haber ido al mundial y

ahora sí, 36 años. Sendero Luminoso, corrupción, Alan García, yo entiendo que

uds sufren tormentas parecidas, lo del racismo de manera breve como una fuerte

tormenta.
 Final: testimonio Jesús está presente en las tormentas de la vida.

- No temáis: darle contenido xq nuestra reacción es tener miedo. ¿Por qué Jesús

manda q no temamos si es lo priemro q sentimos y es inevitable? Aprovechar a

proclamar la gracia de Dios, apunta a a necesidad de seguir creciendo en fe,

mientras más fe tenemos en Jesús, menos vamos a temer. Proceso de ver a Jesús,

mientras más nos alimentamos de él tenemos vida abundante, esa vida echa

fuera el temor, de manera que en medida q nosotros hemos sido entrenados a

controlar el temor en medio de las tormentas es más evidencia q vida abundante

tenemos. Le tenemos miedo al paso de un ratón. Revisar qué proceso de ver a

Jesús tengo? Reacciones naturales son a temer la muerte, partida puedo

mencionar lo de mi abuela y mis padres. Verlo + digerirlo / temor. Jesús pide lo

imposible, q se puede hace posible con su presencia xq el controla las tormentas.

Él los manda a los discípulos a meterse a la tormenta.

- Lucha entre fe y temor (ecuación) a más fe menos temor, a más temor menos fe.

Por eso la invitación a no temer. Recordar las manifestaciones de Dios en mi

historia, en medio de la tormentas se me olvida en aquellas que Dios ha estado

presente. Auto reflexión, historias en las que Dios estuvo. Para vencer esa

tendencia natural de nuestra tendencia caída es importante recordar las

manifestaciones de Dios en mi vida.

- El flujo argumentativo de todo el evangelio de Juan. ¿a quí q está pasando?

¿Qué función cumple esta perícopa en todo el evangelio de Juan? El era uno de

los q había pasado en la tormenta. En un punto xq Jesús se está haciendo más

conocido, y lo quiere promover como rey. Su reino es importante xq nos ayuda a

pasar por las luchas de la vida y los prepara a los discípulos para enfrentar la
 madre de las tormentas, esa era ver a su rey crucificado en un madreo “la

maldición” la vergüenza, Jesús los está preparando para vivir sin temor la madre

de las tormentas y no aprendieron la lección xq todos fueron dispersados y lo

dejaron solos. Pasado eso aprenden y en Hechos vemos que no le tienen miedo a

nada, esos son los líderes de la iglesia, si queremos tener un impacto de la vida

de otros tenemos que aprender a vivir, no es el final la tormenta de la vida. Ellos

son los que van a llevar su misión y Jesús los prepara con realismo. Pedro lo

negó, el no superó la tormenta de ver a su maestro arrestado. A los mismo q

mataron a Jesús Pedro les dice es necesario agradar a Dios y no a los hombres, y

como siguieron predicando el evangelio. Con la resurrección los empoderó,

transformación de Pedro y Juan.

- Testimonio presencia aquí al final. Mostrar algo puntual en lo que he crecido q

me da presencia, dignidad, una mujer más segura en el Señor. Explicar q x eso

escogí el pasaje.

- El testimonio de Juan este evangelio ¿cómo enriquece el sinóptico a este relato?

X q no metió a Pedro, cuál es el propósito de Juan? Sinóptico releja la vida de

Pedro en cambio aquí es q aprendió Juan, intimidad con la trinidad con Dios

“Yo soy” como se sintió como el discípulo amado.

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