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RESPONDA LAS PREGUNTAS 16 A 18 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

LA AGRICULTURA QUIERE SER UNA SOLUCIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

Además, de sufrir las consecuencias del cambio climático, la agricultura también es una de sus
causas.

Víctima y culpable del cambio climático mundial, la agricultura también querría demostrar que puede ser una
solución al calentamiento global, gracias a un mejor uso de los suelos y tierras agrícolas. Este año, Marruecos
vio cómo sus cosechas de trigo caían un 70% por la sequía. Francia también recolectó un 30% menos de trigo
respecto al año pasado, tras una primavera de lluvias e inundaciones. En América Latina, el fenómeno de El
Niño ha provocado drásticos recortes en las cosechas.

Además de sufrir las consecuencias del cambio climático, la agricultura también es una de sus causas, al ser
responsable de al menos un cuarto de las emisiones mundiales de gas con efecto invernadero. Contribuye
directamente al calentamiento global al menos en un 17%, sobre todo por la ganadería, al que se suma de 7%
a 14%, relacionados con las modificaciones de las tierras (deforestación...), según la OCDE.

Un desafío colosal

La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) lo dijo el 17 de octubre. La


agricultura y los sistemas alimentarios requieren una "profunda transformación" para enfrentarse a un desafío
colosal y a la vez paradójico: reducir las emisiones y conseguir alimentar cada vez a más gente. De 3.700
millones de habitantes en 1970, la población mundial pasará a 9.700 millones en 2050. Para ello, los
proyectos se multiplican, especialmente en África, donde no está asegurada la autonomía alimentaria.

Un grupo de científicos franceses propone un proyecto llamado "4 por 1000" o “agro-ecología”. Según ellos, si
se utilizan cada año un poco más los prados y los campos para bombear carbono, al mismo tiempo que se
cultiva de otra forma, se podría conseguir almacenar 0,4% más de carbono por año en los suelos, y frenar así
el aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera. El uso de las tierras agrícolas se ha convertido en un
tema central en las negociaciones sobre el clima que se están llevando a cabo en Marrakech esta semana,
bajo los auspicios de la ONU.
Tomado de: Semana Sostenible

16. El texto anterior se publicó en

A. una investigación presentada por la OCDE.


B. una sección de Semana Sostenible.
C. un informe especial de la ONU.
D. un reporte técnico de la FAO.

17. De acuerdo con el texto, tanto la OCDE como la FAO

A. cuestionan que la agricultura pueda ayudar a que disminuya la concentración de CO2 en la atmósfera.
B. invitan a desarrollar proyectos de agroecología que reduzcan la emisión de gases con efecto
invernadero.
C. exigen compromiso por parte de los gobiernos para renovar la agricultura y detener el calentamiento
global.
D. declaran que la explotación agrícola de suelo es una de las actividades responsables del cambio
climático.

18. Considere el siguiente fragmento del texto:

“Además de sufrir las consecuencias del cambio climático, la agricultura también es una de sus causas, al
ser responsable de al menos un cuarto de las emisiones mundiales de gas con efecto invernadero”.

En este fragmento, la expresión subrayada indica que la agricultura

A. es la causa de menos de un cuarto de las emisiones de gas con efecto invernadero.


B. es la fuente de exactamente un cuarto de las emisiones de gas con efecto invernadero.
C. contribuye como mínimo con un cuarto de las emisiones de gas con efecto invernadero.
D. aumenta cuatro veces las emisiones de gas con efecto invernadero.
RESPONDA LAS PREGUNTAS 19 A 21 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

LA TIERRA SOBREPASA SUS LÍMITES PLANETARIOS

En septiembre de 2009, la revista científica Nature publicó un especial en el que trataba de establecer los
límites planetarios que la humanidad no podría sobrepasar pues, de lo contrario, enfrentaría una situación
irreversible. Los artículos fueron elaborados por un grupo de 28 reconocidos investigadores liderados por
Johan Rockström, un científico sueco especializado en temas de sostenibilidad mundial y director de
Resiliencia de Estocolmo.

“Se trata de un intento meritorio de cuantificar las limitaciones de nuestra existencia en la Tierra y proporcionar
una buena base para la discusión y el futuro. La definición de los límites para nuestro crecimiento y existencia
en este planeta no sólo es un gran desafío intelectual; también es una fuente potencial de información
necesaria para los políticos”, dijo entonces Nature en su editorial.

Ahora, cinco años y medio después de haber dado a conocer esos nueve desafíos, un par de nuevas
investigaciones advierten sobre una realidad que la ciencia había vaticinado desde hace tiempo: cuatro de
esos límites planetarios, entre los que también se encuentran el uso de agua dulce, la acidificación de los
océanos y la modificación de organismos, ya fueron superados. Se trata del cambio climático, la pérdida de
biodiversidad, el cambio en el uso de la tierra y los altos niveles de nitrógeno y oxígeno generados por el
excesivo uso de fertilizantes.

Esa fue la conclusión a la que llegaron dos estudios publicados en la revista Science y coordinados por Will
Steffen, director del Instituto del Cambio Climático de la Universidad Nacional de Australia (ANU) e
investigador del Centro de Resiliencia de Estocolmo.

De acuerdo con Steffen, el auge económico que vive la humanidad desde 1950 ha acelerado la trasgresión de
esos límites. “La población urbana se ha multiplicado por siete, el uso de energía se ha quintuplicado y la
cantidad de fertilizantes es ocho veces mayor. La pérdida de biodiversidad es cien veces más rápida de lo
experimentado hasta mediados del siglo XX. Nos estamos acercando a unos puntos críticos que será mejor
no atravesar”, dice.

Entre las amenazas más graves que hoy enfrenta el mundo están la expansión de zonas urbanas, la
sobrepoblación, las altas emisiones de CO2 (hasta el momento hemos lanzado 1.900 gigatoneladas, cuando
el máximo posible es 2.900) y la excesiva deforestación de zonas tropicales como los bosques del Amazonas.
En esta región, el área de selva destruida en los últimos cuarenta años fue equivalente a dos veces la
superficie de Alemania: 763.000 km².

Estar al límite no implica estar al borde del precipicio, pero sí es una gran advertencia, a la que debería
sumarse otro factor que ratificaron el pasado viernes la Nasa y la Administración para el Océano y la
Atmósfera de Estados Unidos: 2014 fue el año más caluroso de toda la historia.

Para los autores del artículo, esto indica que en un futuro no muy lejano el mundo va a ser menos hospitalario
para las sociedades. “Estos cambios están llevando a la Tierra a un estado más hostil para los humanos”.

Tomado y adaptado de: Medio Ambiente (2015, 18 de enero). La tierra sobrepasa sus límites planetarios. Recuperado de
https://www.elespectador.com/noticias/medio-ambiente/tierra-sobrepasa-sus-limites-planetarios-articulo-538608

19. El enunciado “cuatro de esos límites planetarios, entre los que se encuentran el uso de agua dulce, la
acidificación de los océanos y la modificación de organismos, ya fueron superados” significa que

A. los límites ya no representan ningún peligro para la humanidad.


B. la humanidad progresa mediante la ciencia y la tecnología.
C. ahora el reto es superar los demás.
D. los límites fueron excedidos.

20. ¿Cuál de las siguientes opciones presenta la 21. De acuerdo con el texto anterior, la humanidad
tesis del texto? se acerca a un límite que es mejor no traspasar
porque
A. Las revistas científicas Nature y Science
buscan alarmar a la población mundial. A. todo extremo es dañino.
B. El uso excesivo de fertilizantes está
B. pereceríamos de forma súbita.
llevando a la humanidad hacia el colapso.
C. La supervivencia de la humanidad en la C. Caeríamos en un círculo vicioso.
Tierra está en riesgo.
D. llegaríamos a un punto de no retorno.
D. 2014 fue el año más calurosos de toda la
historia.
RESPONDA LAS PREGUNTAS 22 Y 23 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

1984 es una novela futurista que tiene lugar en una sociedad totalitaria. Los ciudadanos de esta sociedad son
controlados por una figura omnipresente conocida como el Gran Hermano. En el siguiente apartado, un
miembro defensor del orden le explica al protagonista el principal propósito del régimen.

No habrá lealtad; no existirá más fidelidad que la que se debe al Partido, ni más amor que el amor al Gran
Hermano. No habrá risa, excepto la risa triunfal cuando se derrota a un enemigo. No habrá arte, ni literatura,
ni ciencia. No habrá ya distinción entre la belleza y la fealdad. Todos los placeres serán destruidos. Pero
siempre, no lo olvides, Winston, siempre habrá el afán de poder, la sed de dominio, que aumentará
constantemente y se hará cada vez más sutil. Siempre existirá la emoción de la victoria, la sensación de
pisotear a un enemigo indefenso. Si quieres hacerte una idea de cómo será el futuro, figúrate una bota
aplastando un rostro humano... incesantemente.

Tomado de: Orwell, George. 1984. Barcelona: Ediciones Destino. 2008

22. El régimen del Gran Hermano se opone a que sus ciudadanos sean

A. fuertes y crueles.
B. inquietos y dominantes.
C. autónomos y pensantes.
D. triunfalistas y poderosos.

23. El planteamiento ideológico del Gran Hermano privilegia

A. el interés de todos los habitantes.


B. el beneficio de los más poderosos.
C. las insuficiencias de los altos mandos.
D. la satisfacción a largo plazo del pueblo.

RESPONDA LAS PREGUNTAS 24 Y 25 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

Un río separaba dos reinos; los agricultores lo utilizaban para regar sus campos, pero un año sobrevino una
sequía y el agua no alcanzó para todos. Primero se pelearon a golpes y luego los reyes enviaron ejércitos
para proteger a sus súbditos. La guerra era inminente; el Buddha se encaminó a la frontera donde acampaban
ambos ejércitos.

«Decidme», dijo, dirigiéndose a los reyes: «¿qué vale más, el agua del río o la sangre de vuestros pueblos?»

«No hay duda», contestaron los reyes, «la sangre de estos hombres vale más que el agua del río».

«¡Oh, reyes insensatos», dijo el Buddha, «derramar lo más precioso por obtener aquello que vale mucho
menos! Si emprendéis esta batalla, derramaréis la sangre de vuestra gente y no habréis aumentado el caudal
del río en una sola gota».

Los reyes, avergonzados, resolvieron ponerse de acuerdo de manera pacífica y repartir el agua. Poco
después llegaron las lluvias y hubo riego para todos.

24. Según el relato, los dos reinos se pelearon 25. En el relato, el narrador
porque
A. es el mismo Buddha.
A. El Buddha generó un conflicto entre los dos
reinos. B. es el protagonista del relato.

B. Un río separaba arbitrariamente los dos C. relata su propia experiencia.


reinos.
D. no interviene en los hechos relatados.
C. El agua no era suficiente para ambos
reinos.

D. La guerra era inminente para ambos reinos.


RESPONDA LAS PREGUNTAS 26 Y 27 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

Su cuerpo apareció en la sala. La policía lo encontró acurrucado sobre una alfombra sucia. Una vecina dio la
alarma, alertada por el olor fétido que salía del apartamento. La vivienda le pertenecía a un tal George Bell
que vivía solo, así que era fácil suponer que el cuerpo era suyo. Sus vecinos le habían visto por última vez
seis días antes, el domingo. El auto que movía de lado a lado de la calle para evitar las multas de tráfico se
habían quedado desde el jueves en el lado equivocado con una sanción en el parabrisas. Su vecina le llamó
por teléfono sin obtener respuesta…

Cincuenta mil personas mueren al año en Nueva York. La mayor parte de quienes mueren tiene amigos y
parientes que se enteran de inmediato. Unos pocos mueren solos, sin testigos. Nadie reclama sus cuerpos,
nadie guarda luto. Apenas un nombre en una lista. En la de 2014, George Bell, de 72 años, fue uno de ellos.
George Bell, nombre simple, dos sílabas. Sin respuestas sobre quién era, cuál fue su vida, qué le preocupó, a
quien amó o quién le amó. Como la mayor parte de los neoyorkinos, su vida transcurrió al margen. Cuando los
bomberos forzaron la puerta, la policía irrumpió en una vivienda llena de cosas. No cabía duda de que se
trataba de uno de esos ancianos, aquejados de síndrome de Diógenes, que lo acumulan todo.

En la oficina del condado trabajan tres investigadores que peinan las viviendas de los fallecidos y buscan
pruebas de qué pudieron poseer en vida o de quienes pudieron ser sus familiares. Es un trabajo peculiar ese
de ver lo que alguien guardó. El 24 de julio, dos investigadores, Juan Plaza y Ronald Rodríguez, ingresaron al
apartamento de Bell. Habían visto cosas peores. Como una vivienda tan llena de cosas que su inquilina murió
de pie porque era imposible caerse. O un lugar del que tuvieron que salir espantando pulgas…

Rebuscaron entre la anarquía del apartamento, de 74 metros cuadrados. El aire, denso y hediondo. Por única
cama, el sofá. Parecía que alguien había saqueado dormitorio y baño. La cocina estaba llena de basura,
inservible. El grifo no funcionaba. Hacía mucho que la estufa no se usaba para cocinar. Hurgar entre las
posesiones de los muertos, percibiendo su miseria, ha cambiado a estos hombres. Rodríguez, de 57 años,
divorciado, siente la urgencia. “Trato de vivir la vida como si fuera el último día… nunca sabes cuándo te vas a
morir”. La soledad de tantas muertes ha hecho mella en Plaza, tiene miedo de ser él quien acabe tirado en el
suelo. “Este trabajo enseña mucho… Aprendes que debes compartirte. La gente se muere sin tener con quien
hablar. Se muere y los parientes salen de quién sabe dónde. ‘Era mi tío. Era mi primo. Dame lo que tenía’.
Dame, dame. Pero en vida nunca le hicieron una visita. Me cambió la vida desde que trabajo en esta
oficina”…

Kleinfield, N. R. (2015, diciembre). Morir solo en Nueva York. The New York Times. Recuperado y adaptado el 23 de junio de 2016 de:
https://www.nytimes.com/ 2015/10/18/universal/es/george-bell-morir-solo-en-nueva-york.html?_r=0

26. Considere el siguiente fragmento:

George Bell, nombre simple, dos sílabas. Sin respuestas sobre quién era, cuál fue su vida, qué le
preocupó, a quien amó o quién le amó. Como la mayor parte de los neoyorkinos, su vida transcurrió al
margen.

Al indicar el número de sílabas del nombre del fallecido, el autor busca

A. recalcar el carácter anónimo del fallecido.


B. destacar la simpleza y fidelidad del fallecido.
C. reflejar el carácter rígido y directo del fallecido.
D. contraponer la humildad con la vida del fallecido.

27. Considere el siguiente fragmento:

Este trabajo enseña mucho… Aprendes que debes compartirte. La gente se muere sin tener con quien
hablar. Se muere y los parientes salen de quién sabe dónde. ‘Era mi tío. Era mi primo. Dame lo que tenía’.
Dame, dame. Pero en vida nunca le hicieron una visita. Me cambió la vida desde que trabajo en esta
oficina.

El anterior pasaje muestra que el investigador Juan Plaza

A. reconoce que la gente ha aprendido la importancia de compartir.


B. cree que los parientes viven muy pendientes de sus demás familiares.
C. lamenta que muchas personas se vayan sin expresar su última voluntad.
D. rechaza las conductas interesadas de los familiares de muchos fallecidos.
RESPONDA LAS PREGUNTAS 28 Y 29 DE ACUERDO CON LA SIGUIENTE INFORMACIÓN

¿CÓMO ILUSTRARÍAS EL MAL MOMENTO QUE VIVE LA ECONOMÍA PORTUGUESA?

Otra de las aportaciones de Peirce al campo de la semántica (el estudio de los significados) fue la clasificación
de los signos por tipos. En función de la relación existente entre signo y objeto, Peirce definió tres tipos de
signos: íconos, indicios y símbolos. Los íconos son signos que mantienen una relación de semejanza con
aquello que representan. Por ejemplo, en la fotografía en una casa reconocemos algunos de los atributos
formales de una casa (las proporciones, los elementos que la componen, etc.) y, por lo tanto, interpretamos
que lo que estamos viendo es este elemento. De mismo modo, para que podamos considerar una
determinada ilustración como el ícono de una casa, tiene que tener una serie de rasgos que la hagan
identificable, como un tejado, una chimenea o una puerta de entrada. Una fotografía tiene un grado alto de
iconicidad mientras que un dibujo seguramente lo tiene más bajo (normalmente diremos que es menos
“realista”), pero ambos casos son íconos, porque se asemejan al objeto que representan. El segundo tipo de
signo, los indicios, mantiene una conexión asociativa real con el objeto, a menudo mediante una relación
causa/efecto. Una huella es un indicio del paso de un animal por un determinado lugar, una columna de humo
es un indicio de la presencia de fuego, etc.; sin embargo, ni la huella ni el humo son en sí mismos la imagen
del animal o del fuego. Y, por último, los símbolos. Los símbolos son signos que no mantienen una relación
lógica o intuitiva con su significado sino que están conectados con él por una convención.

Por tanto, es necesario a persona que vaya a interpretarlos haya aprendido antes cuál es la relación que se
establece entre un símbolo y su significado. Por ejemplo, casi todo el mundo reconoce el símbolo de la Cruz
Roja, aunque no posea ningún rasgo físico que lo conecte con aquello que simboliza. La imagen de arriba
contiene estas tres categorías de signos. El gallo, un conocido souvenir que nos e también como símbolo de
Portugal, es un ícono. La cabeza gacha y la lagrimita con la que hemos modificado la imagen original son
indicios de que el país, o más concretamente, su economía, no va bien.

Tomado de: Jardí, E. (2012). Tipos de signos.


En: E. Jardí (ed.) Pensar con imágenes, pp. 46-47. Barcelona: Gustavo Gil Editorial

28. Según el texto, la ilustración es un ícono de un 29. Considere esta imagen:


gallo porque
Según la tipología de Peirce, esta es
A. su forma concuerda con la del signo
universal del gallo. A. un indicio, pues es la consecuencia natural
de querer prohibir una acción.
B. posee algunos de los atributos observables
propios de los gallos. B. un ícono, pues tiene una relación de
semejanza con la acción de prohibir.
C. sus rasgos gráficos coinciden de manera
exacta con la anatomía del animal. C. un símbolo, pues no tiene ninguna relación
lógica o intuitiva con la acción de prohibir.
D. se ajusta el significado de la palabra gallo:
“Ave de cresta roja, pico corto y plumaje D. un ícono e indicio, pues se parece a la
abundante”. acción de prohibir e indica algún suceso
que se quiere prohibir.

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