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INTRODUCCIÓN

Cuando oímos que ha habido inflación significa que los precios han subido o se han
«inflado», de ahí su nombre.

La inflación tiene sus primeros orígenes en los períodos de preparación de las grandes
guerras, cuando existe una mayor demanda de bienes y de inversión en relación con la
producción, por lo que los precios tienden a elevarse. En una economía
hiperinflacionista,

la inflación es un fenómeno tan general y un problema tan grande que domina


totalmente la vida económica diaria.

Se presenta de manera general el fenómeno denominado inflación como el desequilibrio


económico caracterizado por la subida general de precios y que proviene del aumento
del papel moneda, deterioro y mal manejo de la economía de un país, trayendo como
consecuencia que no haya ajuste en los contratos de trabajos, prestamos, etc.

En una economía de mercado los precios de los bienes y de los servicios están sujetos a
cambios. Algunos aumentan y otros disminuyen. Se habla de inflación cuando se
produce un aumento generalizado de los precios que no se limita a determinados
artículos. Como resultado, pueden adquirirse menos bienes y servicios por cada sol, es
decir, cada sol vale menos que antes.

LA INFLACIÓN

¿QUÉ ES LA INFLACIÓN?

En economía, la inflación es el aumento sostenido y generalizado del nivel de precios de


bienes y servicios, medido frente a un poder adquisitivo estable. Se define también
como la caída en el valor de mercado o del poder adquisitivo de una moneda en una
economía en particular, lo que se diferencia de la devaluación, dado que esta última se
refiere a la caída en el valor de la moneda de un país en relación a otra moneda cotizada
en los mercados internacionales, como el dólar estadounidense, el euro o el yen.

La existencia de inflación durante un período implica un aumento sostenido (ya que se


incrementa a medida que pasa el tiempo) del precio de los bienes en general. Para poder
medir ese aumento, se crean diferentes índices que miden el crecimiento medio
porcentual de una canasta de bienes ponderada en función de lo que se quiera medir.
La inflación es un aumento generalizado y continuo en el nivel general de precios de los
bienes y servicios de la economía. La inflación usualmente se calcula como la variación
porcentual del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que mide los precios promedio
de los principales artículos de consumo. Para conocer qué productos deben incluirse en
esta canasta representativa, se hace generalmente una encuesta a una muestra
representativa de hogares. La composición de la canasta usada para el IPC varía entre
países y refleja los diferentes patrones de consumo e ingreso de cada uno de ellos. La
inflación origina una serie de efectos negativos sobre determinados agentes económicos
(trabajadores, ahorristas, rentistas, etc.), por esto conviene tipificar y analizar sus causas
con el propósito de afrontarla. Beker (2001).

Y de esta manera se pueden encontrar definiciones similares y es que, este problema


macroeconómico, es la causa de innumerables consecuencias, que a lo largo de los años
ha cobrado vidas y hasta el futuro de diferentes países.

CAUSAS DE LA INFLACIÓN:

Según Samuelson (1990), es importante resaltar que no es lo mismo establecer las


causas o presiones inflacionarias y los mecanismos de propagación, que este último, sin
ser una causa u origen de la inflación la difunden, pueden mantenerla y aún contribuir a
darle carácter acumulativo. Debido a que los mecanismos de propagación son más
visibles que las causas reales, estos son erróneamente confundidos.

- Las presiones inflacionarias básicas: Residen en inflexiones, rigideces o


limitaciones estructurales del sistema económico. Esto debido a que los ciertos
sectores no son aptos para satisfacer los nuevos niveles que la demanda ha
alcanzado, ya sea en consecuencia por inmovilidad de los recursos productivos
y/o a causa de un desatinado comportamiento del sistema de precios o a la
inestabilidad por parte del gobierno para enfrentar los gastos rígidos.
- Las presiones inflacionarias circunstanciales: Son aquellas de carácter eventual
que provienen de los aumentos de precios de las importaciones, incrementos
masivos de los gastos públicos para atender daños por catástrofe o razones de
naturaleza política.
- Las presiones inflacionarias acumulativas: Son inducidas por la propia
inflación , entre ellas se hallan las distorsiones del sistema de precios, la ineficaz
orientación de la inversión por actividades, como a sectores financieros y no a la
producción de bienes y servicios básicos, los efectos del control de precios, y la
deformación de las expectativas económicas elevando el consumo presente en
deterioro de la inversión, con efectos en la productividad reducida por huelgas
inspiradas en la defensa de la estabilidad de los ingresos, con el subsidio a las
importaciones y el desaliento a las exportaciones dados los elevados costos
internos.
- Los mecanismos de propagación: Son lo que una vez desatada la inflación, la
generalizan, la mantienen o la refuerzan a consecuencia de las interrelaciones
existentes. Estas surgen de la incapacidad de detener una lucha de intereses
sectoriales en torno al ingreso; es decir que la asignación de recursos a, grupos
sociales, sectores públicos o privados, pretende favorecerse a expensas de otro
sector o grupo social restante, frecuentemente sin lograr una ventaja permanente.

En una economía de mercado los precios de productos y servicios pueden variar


pues están sujetos a cambios. Pueden subir o bajar. Esta situación conduce a
problemas en la balanza de pagos que a su vez obliga a restricciones en las
importaciones y/o devaluaciones en el tipo de cambio. Ambas medidas alteran el
precio relativo de los bienes importados respecto a bienes nacionales, que
generan una presión inflacionaria de origen estructural.

3. TEORIAS DE LA INLFACIÓN:

Las principales teorías de la inflación que se presentan en la literatura son:

Inflación de demanda:

Esta inflación obedece a la ley de la oferta y la demanda. Si la demanda de bienes


excede la capacidad de producción o importación de bienes, los precios tienden a
aumentar. El factor clave es la demanda agregada de forma que, si la demanda total
excede a la producción, tendrá lugar al aumento en el nivel de precios.

Formalmente se expresa de la siguiente manera:

O = D = C + G + I + (X-M)

Siendo O la oferta de pleno empleo y D el gasto agregado, si partiendo de esta situación


se produce un crecimiento del gasto D’ > D, el equilibrio inflacionista se produce como
consecuencia de:
D’ = C’ + G’ + I’ + (X-M)’ > O

Inflación de costos:

Esta inflación ocurre cuando el precio de las materias primas (cobre, petróleo, energía,
etc.) aumenta, lo que hace que el productor, buscando mantener su margen de ganancia,
incremente sus precios.

Dentro de esta línea de teoría de la inflación de costos se encuentran en las


investigaciones realizadas por R. Frenkel (1987). Este autor trata de predecir la inflación
futura (o pasada) en base a una ecuación de costos. Específicamente, esta última viene
definida de la siguiente manera:

P = aw* W + ae*E + at * TP

Donde P es el aumento en el nivel general de precios de la economía, en general medido


por el índice de precios al consumidor, aw, ae, at son la participación de los salarios, el
tipo de cambio y las tarifas públicas en la canasta de bienes considerada y W, E y TP es
el aumento registrado en los salarios nominales (W), en el tipo de cambio (E) y en las
tarifas públicas (TP).

Inflación estructural:

Involucra un círculo vicioso de elementos tanto subjetivos como objetivos, con lo que la
inflación se auto-alimenta. Significa que los métodos estándar de lucha contra la
inflación usando políticas monetarias o fiscales para inducir una recesión son
extremadamente caros, es decir, significan grandes aumentos de desempleo y grandes
caídas del Producto Interno Bruto. Esto sugiere que se necesitan otros métodos como
controles de salarios y precios (políticas de ingresos) como complemento a las
recesiones en la lucha contra la inflación.

Inflación inercial:

Es un tipo de inflación causada por la misma dinámica de la inflación, por las


expectativas inflacionarias. Por ejemplo, a medida que la inflación continua, adquiere
intensidad y se convierte en fuerte y persistente. Los trabajadores pedirán una actuación
cada vez más rápida para proteger sus ingresos contra la erosión producida por la
inflación.

Inflación con estancamiento:


Supone una subida notable y sostenida de los precios, junto con el aumento progresivo
de los niveles de paro, es decir un empeoramiento simultáneo de los niveles de paro y
de la tasa de inflación.

LA INFLACIÓN Y TRES RELACIONES IMPORTANTES:

- Inflación y tasa de interés:

En general, las tasas de interés y la inflación están fuertemente correlacionadas,


esto es, cuando una de ellas varía la otra también lo hará.

Dado que el interés es el precio del dinero, a medida que el dinero cueste menos,
la propensión al gasto aumentará, debido a que el costo de los productos se
vuelve relativamente más barato.

Por ejemplo, si quieres comprar una casa por medio de un préstamo hipotecario
a 20 años de plazo por USD 100,000 al 5% de interés anual, tu pago mensual
sería de USD 659.96. Pero si el tipo de interés fuese del 10% en el mismo hogar,
tu pago mensual sería de USD 965.02.

El aumento de la tasa de interés hace un freno en nuestro presupuesto, por lo que


tendremos menos dinero para otros gastos, es decir tendremos menos liquidez.

El ejemplo de la casa es bueno, muestra que, a menor tasa de interés, más poder
adquisitivo está en manos de los consumidores.

Ese es un ejemplo micro. En un nivel macroeconómico, cuando los


consumidores en toda la economía gastan más dinero, hay liquidez, la economía
crece y la inflación se produce.

Volviendo al ejemplo de la casa. Si muchas personas pueden comprar la misma


vivienda, el precio del inmueble es probable que aumente, pues hay varios
posibles compradores. En otras palabras, el costo más barato del dinero eleva
(infla) el precio de la casa. Históricamente, se puede trazar la correlación entre
las tasas de interés y la inflación y ver que hay una fuerte correlación positiva
entre las dos.

- Inflación y déficit fiscal:


Existe una estrecha relación entre la inflación y el déficit fiscal en una economía.
La inflación en términos generales resulta del elevado déficit fiscal que en las
economías en los países en vías de desarrollo se financia principalmente con
emisión monetaria.

Es decir, la inflación resultante del descontrol fiscal no es neutra, sino que


provoca un cambio en los precios relativos de la economía, es decir, altera su
estructura productiva.

- Inflación y desempleo:

La curva de Philips constata una relación inversa entre el desempleo y la


inflación, significa que es necesario un mayor desempleo si queremos reducir o
tratar de frenar la inflación. A corto plazo una perturbación positiva de la
demanda hará que se reduzca la tasa de desempleo por debajo de la denominada
tasa natural, y esto tenderá a elevar la tasa de inflación. A largo plazo, las curvas
de Philips tienden a ser inestables y no se cumple la regla anterior.
Empíricamente se constató que, a bajos niveles de desempleo, tiene lugar una
inflación normalmente empujada por los costos. Este fenómeno ha sido atribuido
al poder de los sindicatos o de los oligopolios o de ambos, y a la subida de
salarios o de precios, o de ambos a la vez, sin exceso de demanda.

CLASIFICACIÓN DE LA INFLACIÓN:}

 Hiperinflación: Según Beker (2001), se dice que una economía se ve afectada


por un proceso de hiperinflación cuando sus precios creces a tasas superiores al
50% mensual. En este contexto se entiende por inflación rampante a aquella que
supone una tasa de inflación entre el 4% y 6% e inflación acelerada es aquella
que alcanza casi al 10%. Los períodos de alta inflación generan desconfianza en
la economía y crean expectativas de depreciación del tipo de cambio nominal,
contribuyendo a la salida de capitales al exterior y presionando sobre la posición
de reservas internacionales del Banco Central. La hiperinflación afecta
negativamente al sistema financiero, produciendo lo que se llama la
desintermediación. La alta inflación también tiende a generar en economías no
desarrolladas la dolarización, para protegerse de sus efectos. Se ha establecido
que aquellos países que han tenido recurrentemente períodos de inflación
elevada han crecido menos que aquellos que han tenido una inflación moderada.
Las hiperinflaciones son fenómenos excepcionales y extremos. A menudo se
presentan asociadas a conflictos políticos, sociales.
 Inflación moderada: La inflación moderada se refiere al incremento de forma
lenta de los precios. Cuando los precios son relativamente estables, las personas
se fían de este, colocando su dinero en cuentas de banco. Ya sea en cuentas
corrientes o en depósitos de ahorro de poco rendimiento porque esto les
permitirá que su dinero valga tanto como en un mes o dentro de un año. En sí,
las personas están dispuestas a comprometerse con su dinero en contratos a largo
plazo, porque piensan que el nivel de precios no se alejará lo suficiente del valor
de un bien que puedan vender o comprar.
 Inflación galopante: La inflación galopante sucede cuando los precios
incrementan las tasas de dos o tres dígitos de 30, 120 o 240% en un plazo
promedio de un año. Cuando se llega a establecer la inflación galopante surgen
grandes cambios económicos. Muchas veces en los contratos se puede relacionar
con un índice de precios o puede ser también a una moneda extranjera, como por
ejemplo el dólar. Dado que el dinero pierde su valor de una manera muy rápida,
las personas tratan de no tener más de lo necesario; es decir, que mantienen la
cantidad suficiente para vivir con lo indispensable para el sustento de los
integrantes familiares.

EFECTOS DE LA INFLACIÓN:

Un aumento en el nivel general de precios implica una disminución del poder


adquisitivo de la moneda. Es decir, cuando el nivel general de precios sube, cada unidad
monetaria permite comprar menos bienes y servicios. El efecto de la inflación no se
distribuye uniformemente en la economía. Por ejemplo, los prestamistas o depositantes
que reciben una tasa fija de interés de los préstamos o depósitos pierden poder
adquisitivo de sus ingresos por intereses, mientras que los prestatarios se benefician. Las
personas e instituciones con activos en efectivo experimentarán una disminución de su
poder adquisitivo. Los aumentos de salarios a los trabajadores y los pagos de pensiones
a menudo se mantienen por debajo de la inflación, especialmente para aquellos con
ingresos fijos.

Los deudores que poseen obligaciones monetarias a tasas de interés nominal fijo,
observan una reducción en la tasa real proporcional a la tasa de inflación. El interés real
de un préstamo, es la tasa nominal menos la tasa de inflación aproximadamente. Por
ejemplo, si alguien toma un préstamo donde la tasa de interés establecida es del 6 % y la
tasa de inflación es del 3 %, la tasa de interés real que pagará por el préstamo es del 3
%.

Los bancos y prestamistas pueden ajustar en ocasiones incluyendo una prima de


inflación en los costos de los préstamos del dinero mediante una tasa inicial más alta o
mediante el establecimiento de los intereses a una tasa variable.

Efectos negativos:

El principal efecto negativo de la inflación, en una economía de mercado, es que


destruye el sistema de precios de la economía. Por un lado, los productores toman sus
decisiones de ahorro-inversión basándose en la información disponible, por lo que en un
ambiente inflacionario estos no son capaces de descubrir si un alza de precios es un
efecto relativo (solo a su producto) o, por el contrario, es un alza absoluta (donde todos
los precios de los productos suben).

 Pérdida del poder adquisitivo


 La Inflación es regresiva
 Perjuicio para los acreedores
 Inflación diferencial
 Inflación de costos
 Acaparamiento
 Hiperinflación
 Ineficiencia en la asignación de recursos
 Ciclos económicos

Efectos positivos:

Los efectos positivos incluyen la posibilidad de los bancos centrales de los estados de
ajustar las tasas de interés nominal con el propósito de mitigar una recesión y de
fomentar la inversión en proyectos de capital no monetarios.

 Mercado de trabajo-ajustes
 Margen de maniobra
 Crecimiento e inversión productiva

¿CÓMO DETENER LA INFLACIÓN?


Para detener la inflación, los bancos centrales tienden a incrementar la tasa de interés de
la deuda pública. De esta manera se incrementan las tasas de interés en los préstamos al
consumo (tarjetas de crédito, hipotecas, etc.). Al aumentar las tasas de interés del
consumo, se frena la demanda de productos.

El lado negativo de este control es que, al frenar la demanda de productos, se frena a la


industria que los produce, lo cual puede llevar a un estancamiento económico y
desempleo.

MÉTODOS DE REDUCCIÓN DE LA INFLACIÓN

Se han usado y sugerido diferentes métodos para detener la inflación. En casi todo el
mundo, se ha impuesto la política de control de la inflación, a pesar de que no existen
pruebas de que resulte dañina por debajo del 8-10 %17 o incluso el 20 o 40 % según
otros estudios.18 De hecho la priorización de medidas anti inflacionistas severas
produjo efectos adversos en Sudáfrica (1994) y Brasil (1996).16 Economistas
institucionalistas como Ha-Joon Chang han señalado que los partidarios del
neoliberalismo han aprovechado el miedo justificado a la hiperinflación para impulsar
políticas anti inflacionistas excesivas (dados los niveles de inflación en muchos lugares
donde se han impulsado). El hincapié neoliberal en la reducción de la inflación se
justifica a que los activos financieros tienen tasas de rentabilidad fijadas de modo
nominal, por lo que la inflación reduce la rentabilidad real, algo que perjudica a los
inversores financieros, pero no tanto a la población general.

 Políticas monetarias: Hoy en día, la herramienta principal para controlar la


inflación es la política monetaria. Los bancos centrales pueden influir
significativamente en este sentido fijando una tasa de interés más alta y
reduciendo la masa monetaria. Normalmente a un objetivo de tasa de alrededor
del 2 % a 3 % anual, y dentro de un rango objetivo de baja inflación, en algún
lugar entre el 2 % al 6 % anual.

Las políticas monetaristas enfatizan una tasa de crecimiento del dinero constante
y moderada. Los keynesianos hacen hincapié en la reducción de la demanda
agregada durante la expansión económica y el aumento de la demanda durante
las recesiones para mantener la inflación estable. El control de la demanda
agregada se puede lograr combinando la política monetaria y la política fiscal
(aumento de los impuestos o reducción del gasto público para reducir la
demanda).

 Tipo de cambio fijo: Bajo un régimen de cambio de divisas fijo, el valor de la


moneda de un país queda vinculado al valor de otra moneda o una canasta de
otras monedas (o, a veces a otra medida de valor, como el oro u otros
comodities). Un tipo de cambio fijo se utiliza generalmente para estabilizar el
valor de una moneda, vinculándolo a otra moneda más estable. Puede ser
utilizado como un medio para controlar la inflación. Sin embargo, cuando el
valor de la moneda de referencia sube o baja, lo mismo ocurre con la moneda
vinculada. Esto esencialmente significa que la tasa de inflación en el país, tipo
de cambio fijo se determina por la tasa de inflación de la moneda a la que se
vincula.

Un tipo de cambio fijo impide que un gobierno utilice la política monetaria nacional a
fin de lograr la estabilidad macroeconómica. Adicionalmente, puede exponer a los
países al peligro de ataques especulativos.

Con el acuerdo Bretton Woods, la mayoría de los países usaba tasas fijas al valor del
dólar de EE.UU. El acuerdo se rompió en la década de 1970, y los países poco a poco se
volcaron a tipos de cambio flotantes. Sin embargo, en la última parte del siglo XX,
algunos países que sufrieron procesos hiperinflacionarios volvieron temporalmente a un
tipo de cambio fijo para estabilizar sus monedas. Esta política se utilizó en muchos
países de América del Sur: por ejemplo, Argentina 1991- 2002, Bolivia, Brasil, Chile
(1979-1982)19 y Venezuela (desde 2003 con la en entrada vigencia de CADIVI).

 Patrón oro: El patrón oro es un sistema monetario en el que los medios de


intercambio de bienes y servicios es papel-moneda que puede ser convertida
libremente en cantidades de oro preestablecidas (u otras mercancías con valor de
mercado como, por ejemplo, plata). El patrón especifica de qué forma el
respaldo en oro se lleva a cabo, incluyendo la cantidad de especie por cada
unidad de papel moneda. La propia moneda no tiene valor intrínseco, sino que es
aceptada por los comerciantes, ya que pueden ser redimidos por la cantidad en
especie equivalente.

Un certificado de plata EE. UU., por ejemplo, podría ser canjeados por una verdadera
pieza de plata.
El patrón oro fue abandonado parcialmente a través de la adopción internacional del
sistema de Bretton Woods. Bajo este sistema, todas las demás monedas importantes
fueron atadas a tasa fija con el dólar, que a su vez estaba atado al oro a razón de 35
dólares por onza. El sistema de Bretton Woods se rompió en 1971 y la mayoría de los
países empezaron a utilizar tasas flotantes entre el papel moneda y el respaldado.

Las economías basadas en el patrón oro rara vez experimentan una inflación por encima
del 2 % anual. Bajo el patrón oro, la tasa de largo plazo de la inflación (o deflación)
queda determinada por la tasa de crecimiento de la oferta de oro en relación con la
producción total. Los críticos argumentan que esto puede provocar fluctuaciones
arbitrarias en la tasa de inflación, y que la política monetaria quedaría fijada
esencialmente por las políticas de minería.

Algunos autores creen que esta política contribuyó a la Gran Depresión, mientras que
otras teorías, como la monetarista y la austríaca, disienten. Las hipótesis sobre las
causas de la Gran Depresión son motivo de controversia.

El problema principal del Patrón Oro es que en tiempos modernos se necesitaría una
cantidad gigantesca de oro para que los Bancos Centrales pudiesen respaldar todo su
dinero emitido, con el consiguiente costo de atesorarlo y resguardarlo. Por lo demás, en
tiempos modernos se piensa que la demanda de dinero depende de varios factores (entre
ellos las expectativas, las tasas de interés, inflación e nivel de ingresos20) y estos no
tienen relación a la variación en la producción de oro.

Por las razones anteriores, el uso del patrón oro se abandonó en la primera mitad del
siglo XX.

 Control de precios: Otro método utilizado a lo largo de la historia para intentar


frenar la inflación es el control sobre los salarios y sobre los precios. Este
método fue implantado, por ejemplo, por el gobierno de Nixon al principio de la
década de 1970 con resultados negativos.

Algunos economistas coinciden en afirmar que los controles de precios no


alcanzan sus objetivos de estabilidad de precios y son contraproducentes pues
distorsionan el funcionamiento de una economía, promueven la escasez de
productos y servicios y disminuyen su calidad, entre otros efectos. A su vez, la
imposibilidad de aumentar los precios en un período de aumento de los costos de
producción provoca escasez de bienes y servicios. Los gobiernos frecuentemente
intentan remediar la escasez mediante subsidios a los bienes y servicios que
perdieron rentabilidad por el incremento de costos y precios fijos.

 quilibrio entre moneda y precios: La teoría del equilibrio moneda precios


propone que cuando algún producto aumente su precio, todos, incluido el mismo
producto, deben absorber ese aumento. Por ejemplo, cuando la inflación de un
mes sea del 2 %, todos los productos deben bajar 1,96 %, absorbiendo así ese
aumento, logrando que el valor de la moneda sea constante, y no se devalúe. Así,
se podrá adquirir menos de los productos que aumentan su precio, pero se
compensará al poder adquirir más de los productos que bajan sus precios. Esta
teoría propone para ello la creación de un Ente Regulador, en el cual los
representantes de los empresarios, sindicalistas, consumidores, y el Estado,
acuerden los precios, tomando como base el valor de la moneda, con el objetivo
de evitar devaluar. Tiene algo en común con el equilibrio de Nash, de la teoría
de Juegos.

GRADOS DE INFLACIÓN:

Acumulativa: Ocurre cuando el precio de los bienes y servicios aumenta y, a la par, sus
costes.

Imprevista: No se puede prever, ya que puede ser debida a problemas externos, como la
caída de una moneda extranjera.

Anticipada: Se puede prever, ya que se ve reflejada en el mercado de capitales.

Galopante: Ocurre cuando hay un aumento de precios, esto se ve reflejado en un


aumento de salarios y, a la vez, el aumento de gastos, provocando así un alza de precios.

PROCESO HIPERINFLACIONARIO:

Cuando la inflación desborda toda posibilidad de control y planeamiento económico, se


desata lo que se conoce como proceso hiperinflacionario, en el cual la moneda pierde su
propiedad de reserva de valor y de unidad de medida. Es un proceso de destrucción de
la moneda. Se desata la estanflación, y se hace imposible el cálculo y planeamiento
económico, lo cual lleva a destruir la economía.

INFLACIÓN EN EL PERÚ:
En la década de los ochenta, la economía padeció de hiperinflación, mientras declinaba
el rendimiento per cápita, y se incrementaba la deuda externa. Ha mediado de los 80s,
Perú estaba marginado del apoyo del FMI y del Banco Mundial, debido a sus grandes
atrasos en la deuda.

Se incrementó la gasolina en 30 %; el servicio postal y telefónico 20 %; agua potable y


alcantarillado 10 %. Se devalúa el Sol en 12 %; el dólar MUC (moneda única de
cambio), se fija en 13.95 intis y el dólar financiero en 17.5 intis por dólar
norteamericano. Después de año y medio del gobierno aprista, los desequilibrios
macroeconómicos se hacían insostenibles.

El aprismo aplica la política de precios con 4 categorías: los controlados propiamente


dichos, los de régimen especial, los regulados y los supervisados.

Ese gobierno siempre recurrió a los recursos del Estado para impulsar un
funcionamiento privado a corto plazo compatible con una baja inflación aparente.
Después de 2 años de experimento de una política económica improvisada, el gobierno
aprista de Alan García fue autodestruyéndose. Las empresas no invirtieron en el país y
sólo se limitaron a aumentar la producción y los precios.

A partir del tercer año de ese gobierno o desgobierno vinieron las reacciones de la
población frente a los ajustes de los llamados "paquetazos", seguido de las colas que
tenían que hacer todos para conseguir una cierta cantidad de productos de primera
necesidad como son leche, pan, arroz, azúcar.

A todo eso se sumó la especulación por parte de los comerciantes para proteger su
capital.

Desde mayo de 1988 que comenzaron los "paquetazos", los ajustes en la economía
nacional se fueron incrementando.

El tipo de cambio subió en 227 % para gran parte de las partidas de importación y se
subieron aún más los precios públicos.

A nivel político se observaba una situación crítica y compleja por efecto de las drásticas
medidas, la reducción de los ingresos, la estatización de la banca, el incremento de la
burocracia.
Los economistas señalaron que se estaba a las puertas de un manejo hiperinflacionario
de la economía peruana.

Los efectos de la desastrosa política aprista se mostraron no sólo con las colas
interminables para conseguir los productos alimenticios, sino que se produjeron huelgas,

desabastecimiento, violencia, especulación.

Alan García hizo un anuncio el 19 de noviembre de 1988, de que se iba a tomar nuevas
medidas y que se iba a retirar de la política al finalizar su mandato. Mandó otro
paquetazo de ahorcamiento a la población y mintió porque no se retiró de la política.

En los diarios capitalinos sólo se informaba de huelgas, de colas para conseguir


cualquier producto. Pequeños empresarios entraban en colapso y las familias sufrían
todas las consecuencias.

Los barcos con productos, varados en el puerto se negaban a descargar hasta que no se
les pagara. Las divisas se agotaron por el mal uso. Las colas se alargaban y
multiplicaban.

El 22 de noviembre de 1988 aparece Sendero Luminoso, iniciando el derrumbe de 32


torres de alta tensión, dejando sin luz a poblaciones desde Chiclayo hasta Marcona. "La
población limeña ha entrado en un estado de shock. La contaminación del agua potable,
el avance de la violencia, la falta de electricidad, la ausencia de pan y transportes, las
alzas, la crisis política, todo eso condensado en un solo día era demasiado".

Alan García siguió una política egocéntrica, caudillista y un extremado centralismo


político. Los analistas de esos años afirmaron que el gobierno aprista dejó al Perú en un
colapso.

OTROS DESASTRES EN CIFRAS

Inflación acumulada: 2,178.482 %

Remuneraciones y consumo per cápita por debajo del 50 %

 El índice de pobreza sólo en Lima Metropolitana ascendió a 43 %


 Las reservas internacionales netas del BCRP (Banco Central de Reserva del
Perú)
 cayeron de 894 millones de dólares en Julio de 1985 a 105 millones de dólares a
Julio de 1990.
 El nivel del subempleo ascendió a un desastroso 73 % al término del gobierno
aprista.
 La producción agrícola nacional cayó ostensiblemente y la importación de
 productos aumentó un 49 %
 El número de horas perdidas por conflictos laborales con el gobierno, aumentó
de 6 millones en 1985 a 124 millones en 1990.
 El gasto social cayó estrepitosamente.
 El ingreso per cápita cayó en un record, nunca antes visto
 Como consecuencia del mal manejo del gobierno aprista, el Grupo Andino
redujo la inversión en el Perú
 Durante ese gobierno de Alan García, el Perú apenas recibió inversión extranjera
debido a su desastroso manejo de la economía.

Esto es una breve reseña de lo que se vivió en el Perú a mediados de los años 80s, ya
que, como principal consecuencia de acuerdo a nuestro tema, fue una inflación de
2,178.482 % considerada una hiperinflación y la más alta a lo largo de la historia
peruana y mundial.

Lamentablemente la terrible inflación empobreció y afectó más a la clase proletaria que


a cualquier otra, se hizo común el trueque de mercancías ya que los billetes que se
tenían en la mañana perdían su valor adquisitivo en la tarde.

Afortunadamente, la realidad es distinta, ya que el Perú muestra un gran crecimiento


económico. En el 2006 la inflación anual fue 1,2%, lo que motivó que el BCR no
cumpliera la meta de inflación, que había fijado –ya desde hace varios años– en un piso
de 1.5% y un techo de 3.5% anual. Como se preveía que en el 2007 la inflación podría
ser incluso inferior a la del 2006, el nuevo directorio del BCR prefirió "curarse en
salud", lo que hizo bajando el piso y el techo, para el 2007, a 1% y 3%,
respectivamente.

Pero sucede que este año la inflación ha repuntado, pues ha sido 1.91% en el I Semestre.
Aquí es bueno precisar que estos rangos de inflación son pequeños y nada tienen que
hacer con la hiperinflación del primer gobierno de Alan García.
Pero, de todas maneras, el BCR decidió otra vez "curarse en salud" y, para prevenir
cualquier aumento adicional de la inflación, a principios de mes aumentó la tasa
interbancaria en 0.25%, de 4.50 a 4.75%. Para el BCR, la medida "tiene un carácter
preventivo (...) y se adopta para continuar manteniendo ancladas las expectativas de
baja inflación frente al robusto crecimiento que viene registrando la demanda interna".

Cuando se revisan las cifras del INEI, se aprecia que la inflación más alta está en
Alimentos y Bebidas, con 1.40%, la que se obtiene al multiplicar su ponderación en la
Canasta del INEI (49.58) por su inflación (2,83%). Nótese, también, que Alimentos y
Bebidas es casi la mitad del gasto de los hogares considerados en la canasta del INEI.
También aumenta Alquileres, Combustible y Electricidad (subió la gasolina) que
contribuye con 0.13%, junto con Enseñanza y Cultura, con 0.16%. La suma de estos
rubros es 1.69%, de un total de inflación de 1.91%.

Al desagregar Alimentos y Bebidas (rubro A), vemos que han subido el pan y los
cereales (0.27%, maíz, sorgo, arroz), las carnes y el pollo (0.23%), la leche, quesos y
huevos (0.28%) y las hortalizas y legumbres frescas (0.33%, zapallo, zanahoria, arveja
verde).

Esto se debe en buena medida al aumento del precio internacional del trigo, el maíz y la
soya, pues se utilizan para el pan y el alimento para aves y animales. Solo la suma de
estos cuatro suburbios llega a 1.11% en el I Semestre, de un total de 1,91%. El aumento
Alimentos y Bebidas golpea más a las clases populares (sectores D y E), pues le
destinan una mayor parte de su presupuesto familiar, en comparación con los sectores A
y B. Eso explica por qué buena parte de las plataformas de las protestas incluyen los
precios de los alimentos –y de la gasolina–.

En este caso, el problema de fondo es que somos un país importador neto de alimentos,
que sufre los aumentos de los precios internacionales. Revertir esta situación forma
parte de una política de soberanía y seguridad alimentaria, lo que le concierne al
gobierno central y no al BCR. Mientras eso no se encare, la situación se puede agravar,
antes que solucionarse.

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