Neruda, amor por las palabras

Neruda, poeta
inigualable… lo
conocí un día del
año 1973,
justamente el día
en que murió.

Era la hora de Castellano, por la tarde, entró la profesora, una chica joven, bajita que
mostraba su valentía calzándose unos pantalones amarillos que parecían esculpidos en
su cuerpo, y caminando muy segura entre las filas de bancos ocupados por
adolescentes, dijo:”Ha muerto un hombre maravilloso y un poeta extraordinario,
saquen una hoja” y empezó a dictar "Oda al diccionario”. Versos cortos pero muchos,
creo que me llevó dos carillas o más. Y lo admiré. ¿Quién sino un grande puede decir
tantas cosas de un libro tan aburrido?

Y nos volvimos a ver años más tarde, cuando me enamoré de alguno de esos chicos, no
recuerdo cuál y leía y lloraba y lloraba y leía la Canción desesperada o el poema 20, no
recuerdo y no quiero cortar la escritura por ir a buscarlo…”puedo escribir los versos
más tristes esta noche”….”pensar que la he perdido”…”es tan corto el amor y tan largo
el olvido”… “en noche como estas la tuve entre mis brazos” época de
enamoramientos, de estar enamorada del amor….hace muuucho tiempo atrás.

Después vino la película” El cartero”, belleza pura, desde el paisaje y María Cuccinota
hasta la sublime escena en la que el poeta le explica la metáfora al cartero. Me compré
el libro que lleva como subtítulo “Ardiente paciencia”, le hace honor esa historia ese
subtítulo, sin duda alguna.

Pero finalmente sellé mi pacto de amor con él cuando leí un libro de un autor
argentino, para niños en el que uno de los protagonistas era un profesor de Literatura
y citaba versos de Neruda. Lo amé. Y lo amé aún más cuando veía que mis alumnos se
enamoraban de su pluma. Entonces necesité visitar sus casas, la de Santiago, la de
Valparaíso y la de Isla Negra. Entonces lo conocí del todo y lloré con la autoguía en su
tumba junto a Matilde. Unos años más tarde, repetí la experiencia y volví a llorar,
como lloro siempre que leo el fragmento más amoroso del libro que cité antes y
siempre, siempre algún alumno me lo hace notar y yo, que casi no puedo hablar solo le
digo:”es que es el amor” y todos se quedan con una pregunta en el rostro, cierro el
libro y termina la clase como termina la presentación de este maravilloso poeta.

Si quieren saber más de él, todo está

a un click de distancia, poemas,
biografías, autobiografía, videos,
reseñas, noticias. Salgan a buscarlo,
descubrirán un mundo amoroso y
apasionado.
Autorretrato

¿Qué tal si nos presentamos?

Yo elegí el autorretrato de Neruda como ejemplo de una forma de presentación.

La idea es presentarse a la manera que lo hizo Neruda, en forma poética, con versos
libres, sin rima ni métrica.

Don Pablo...
Existe un texto suyo en que con mucho humor -y algo de ironía- Ud. se
autorretrata...

Por mi parte, soy o creo ser duro de nariz,

mínimo de ojos, escaso de pelos
en la cabeza, creciente de abdomen,
largo de piernas, ancho de suelas,
amarillo de tez, generoso de amores,
imposible de cálculos,
confuso de palabras,
tierno de manos, lento de andar,
inoxidable de corazón,
aficionado a las estrellas, mareas,
maremotos, administrador de
escarabajos, caminante de arenas,
torpe de instituciones, chileno a perpetuidad,
amigo de mis amigos, mudo
de enemigos,
entrometido entre pájaros,
mal educado en casa,
tímido en los salones, arrepentido
sin objeto, horrendo administrador,
navegante de boca
y yerbatero de la tinta,
discreto entre los animales,
afortunado de nubarrones,
investigador en mercados, oscuro
en las bibliotecas,
melancólico en las cordilleras,
incansable en los bosques,
lentísimo de contestaciones,
ocurrente años después,
vulgar durante todo el año,
resplandeciente con mi
cuaderno, monumental de apetito,
tigre para dormir, sosegado
en la alegría, inspector del
cielo nocturno,
trabajador invisible,
desordenado, persistente, valiente
por necesidad, cobarde sin
pecado, soñoliento de vocación,
amable de mujeres,
activo por padecimiento,
poeta por maldición
y tonto de capirote.

Pero, siempre hay un pero, si no no habría historia, recordemos que podemos saltar
las normas y hacerlo de otra forma, lo único que sí debe suceder es que sea con
palabras, así que como el carpintero, a sentarse frente al banco de herramientas y a
elegir libre y salvajemente las palabras para nuestra producción.

Espero ansiosa….