Está en la página 1de 882

Prof. Dr. J.

García-Conde Bru
Catedrático de Medicina. Universidad de Valencia
Er-Jefe del Servicio de Hematología y Oncología Médica
Hospital Clínico Universitario de Valencia.
Valencia. España

Prof. Dr. J. Merino Sánchez


Catedrático del Departamento de Medicina Clínica.
Universidad Miguel Hernández.
Jefe de Servicio de Medicina Interna.
Hospital Universitario de San Juan.
Alicante. España

Prof. Dr. J. González Macías


Catedrático de Medicina. Universidad de Cantabria.
Jefe de Departamento de Medicina Interna.
Hospital Marqués de Valdecilla.
Santander. España
© 2015
MARBÁN LIBROS
Joaquín María López, 72
28015 Madrid. España
Teléf. : (34) 91 543 55 55
www.marbanlibros.com

© Los autores.
Javier García-Conde Bru
Jaime Merino Sánchez
Jesús González Macías y col s.

Fotocopiar es un delito (Art. 270 C.P.)

Son muchos los delitos de distinta naturaleza que se cometen diari amente en nuestra sociedad y que quedan
impunes, pero ello no legitima a sus autores, que son delincuentes en cualquier caso.

En el supuesto de realizar estos actos de piratería, el elevado ni vel de fo rmación del destinatari o de un libro
médico es, en todo caso, un agravante, pues no puede alegar ignorancia o fa lta de capacidad intelectual.

Este libro está lega lmente proteg ido por los derechos de propiedad intelectual. Su reproducción med iante
fo tocopi a o cualquier otro soporte fís ico o electrónico es ilegal.

C ÓDIGO P ENA L - De los delitos relativos a la propiedad intelectual


Art. 270 C.P. Será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años.o de multa de seis a veinticuatro
meses quien, ( .. .) en perjuicio del tercero, reproduzca, pl agie, di stribuya o comunique públicamente, en todo o
en parte, una obra literaria, artística o científica, o su transformación, interpretación o ejecución artística fijada
en cualquier ti po de soporte o comunicada a través de cualquier medi o, sin la autorización de los titu lares de los
correspond ientes derechos de la propiedad intelectual o de sus cesionarios. La mi ma pena se impondrá a quien
intencionadamente importe, exporte o almacene ejempl ares de dichas obras o producciones o ejecuciones sin la
referida autori zación.

MARBÁN'" es marca registrada.


La fotocopi a o el uso de prod uctos protegidos bajo una marca reg istrada ® constituye delito tipi ficado en el
artfculo 274 C. P. que protege el derecho de propiedad industrial.

ISB N: 978-84-71O1-401 -6 (MARBÁN)


D.L. : M-32760-L V o
Impreso en España. Primed i11 Spai11 M.BOSS
Contenido

SECCIÓN 1 9. Enfermedades por agentes vivos.


Síndrome infeccioso ..... . .............. . .... 80
CONCEPTOS FUNDAMENTALES
Dr. Melchor Álvarez de Man Soto,
Dr. Raúl de Pablo Sánchez
1. Salud y enfermedad. La patología y sus
contenidos ....................... .. ............... 1 1 O. Bases genéticas de las enfermedades.
Dr. Javier García-Conde Bru La herencia como causa
de enfermedad . ............. ........ ...... .. ... 87
2. El acto médico. Dr. José Antonio Riancho Moral
Relación médico-enfermo ......... ......... .... 7
Dr. Javier García-Conde Bru 11. Etiopatogenia del cáncer
y síndrome tumoral. .. .. ................ .... 103
3. Historia clínica ....... .. ................ .. ....... 15 Dr. Jaime Font de Mora,
Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. Vicente F. Gil Guillén Dr. Javier García-Conde Bru

4. Exploración global del enfermo .............. 21 12. El sistema inmunitario


Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. Vicente F. Gil Guillén, en la salud y en la enfermedad ........... 120
Dra. Reyes Pascual Pérez Dr. Jesús Merino Pérez,
Dr. Jesús González Macías
5. Exploraciones complementarias básicas
para el diagnóstico de las enfermedades .. 34 13. Inflamación ...... .. .............. ... ...... . ... 139
Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. Vicente F. Gil Guillén, Dr. Jesús González Macías,
Dra . Reyes Pascual Pérez Dr. Jesús Merino Pérez,
Dra. Carmen Fa riñas Álvarez
6. Otras habilidades profesionales
necesarias para el médico del siglo xx1. .... 51 14. Estrés . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 154
Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. José Antonio Amado Señarís,
Dr. José Miguel Seguí Ripoll, Dr. José Antonio Riancho Moral
Dr. Jorge Peris García
15. Envejecimiento .............................. 159
SECCIÓN 11 Dr. Eloy Pacho Jiménez,
ETIOPATOGENIA GENERAL Dr. Jaime Merino Sánchez

7. Agentes físicos como causa


de enfermedad ......... . . . ...................... 56
SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA GENERAL
Dr. Avelino Senra Varela,
Dr. Jesús Millán Núñez-Cortés
16. Alteraciones de la regulación térmica.
8. Agentes químicos como causa Síndrome febril . .............. ... ... .. . . ..... 164
de enfermedad ...... .. ....... . .................. 71 Dr. Jaime Merino Sánchez,
Dr. Raúl de Pablo Sánchez, Dra. Reyes Pascual Pérez,
Dr. Melchor Álvarez de Man Soto Dr. Pablo Roig Rico

3
Contenido

17. Síndrome de afectación general. ......... 170 27. Alteraciones de la digestión


Dr. Jesús González Macías, y absorción intestinal. Síndromes de
Dr. José Luis Hernández Hernández malabsorción y maldigestión ............. 242
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
18. Síndrome doloroso ...... . .................. 174 Dra . María Lourdes del Olmo Martínez
Dr. Juan Carlos García-Moneó
28. Síndrome ictérico ........................... 249
19. Síndrome edematoso ....................... 183 Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
Dr. Felipe Miguel de la Villa
Dra . María Lourdes del Olmo Martínez

20. Enfermedades sistémicas autoinmunes .. 190


29. Síndrome de hipertensión portal.
Dr. Miquel Vilardell Tarrés,
Ascitis . ..................... . ............ . ..... 254
Dr. Alberto Selva O' Callaghan
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
Dra . José María Manso Martínez

SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA 30. Insuficiencia hepática ... ..... .............. 262


DE APARATOS Y SISTEMAS: Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
APARATO DIGESTIVO Dr. José María Manso Martínez

21. Principales manifestaciones clínicas 31. Patología general de las enfermedades


de las enfermedades digestivas . .... .. ... 197 de las vías biliares ............. . ......... . . . 268
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez, Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
Dr. José María Manso Martínez Dra. María Lourdes del Olmo Martínez

22. Exploración física


en la patología digestiva ................... 204
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez, SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LAS
Dr. José María Manso Ma rtínez ENFERMEDADES DEL APARATO RESPIRATORIO

23. Técnicas diagnósticas 32. Principales manifestaciones clínicas


en la patología del aparato digestivo . .. . 21 O y causas de las enfermedades
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez, del aparato respiratorio .............. . .. .. . 272
Dr. José María Manso Martínez
Dr. Ja ime Merino Sánchez,
24. Patología general del esófago . .. ... . .. ... 218 Dra . Reyes Pascual Pérez,
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez, Dra. Eva López Calleja
Dr. José María Manso Martínez
33. Exploración física en patología
25. Patología general respiratoria ....................... . . ... . ... . .. 279
de las enfermedades del estómago ..... . 224 Dr. Ja ime Merino Sánchez,
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez,
Dra . Reyes Pascual Pérez,
Dr. José María Manso Martínez
Dr. Santiago Romero Candeira
26. Trastornos motores del intestino.
Diarrea, estreñimiento, 34. Exploraciones complementarias
íleo y meteorismo. en las enfermedades
Síndrome de irritación peritoneal ........ 232 del aparato respiratorio . ................... 285
Dr. Agustín Caro-Patón Gómez, Dr. Juan Manuel Arriero Marín,
Dr. José María Manso Martínez Dr. Santiago Romero Candeira

4
Contenido

35. Insuficiencia respiratoria ....... . ... . ...... 292 43. Exploración física en patología
Dra. Concepción Martín Serrano, cardiovascular . ...... .. ................ .. .. . . 354
Dr. Luis Hernández Blasco, Dr. Jaime Merino Sánchez,
Dr. Joan Gil Carbonell Dr. José Miguel Seguí Ripoll,
Dra. Eva López Calleja

36. Patología general


de los trastornos ventilatorios ............ 301 44. Exploraciones complementarias
Dra. Reyes Pascual Pérez,
en el diagnóstico de los enfermos
Dr. Jaime Merino Sánchez,
del aparato cardiovascular ................ 364
Dr. Mariano Valdés Chavarri,
Dr. Carlos Pérez-Barba
Dr. Arcadio García Alberola,
Dr. Federico Soria Arcos, Dra. María Claver Salas
37. Mecanismos de defensa
del aparato respiratorio ............. .. ..... 310 45. Principios básicos
Dra. Pietat Ussetti Gil de electrocardiografía . ..................... 370
Dra . Desirée Vélez Rodríguez
38. Grandes síndromes
de la patología respiratoria ........... ... .. 316
Dr. Jaime Merino Sánchez, 46. Síndrome de insuficiencia
~~ia~ ...................................... . 3~
Dra. Reyes Pascual Pérez,
Dr. Santiago Romero Candeira Dr. Pedro Conthe Gutiérrez

39. Síndrome de hipertensión 47. Insuficiencia circulatoria periférica:


pulmonar ..... . ...... . ........... . ......... .. . 326 shock y síncope . ..................... ... .... 396
Dr. Joan Gil Carbonell, Dr. Jaime Merino Sánchez,
Dra. Concepción Martín Serrano, Dr. Francisco Colomina Climent,
Dr. Luis M. Hernández Blasco Carlos Lafuente Gormaz

40. Patología general 48. Trastornos del ritmo y de la


de las enfermedades de la pleura . ....... 332 conducción del corazón: mecanismos
Dr. Luis M. Hernández Blasco, y diagnóstico ................................ 405
Dr. Joan Gil Carbonell, Dr. Francisco Javier Chorro Gaseó,
Dra. Concepción Martín Serrano Dr. Roberto García Civera

49. Patología de las lesiones


41. Síndrome mediastínico ....... .... ......... 339
valvulares del corazón ..................... 418
Dr. José Luis Álvarez-Sala Walther,
Dr. Jaime Merino Sánchez,
Dra. María Asunción Nieto Barbero,
Dr. Vicente Bertomeu Martínez,
Dra. Gema Rodríguez Trigo
Dr. Vicente Bertomeu González

50. Arteriosclerosis . .. .......................... 429


SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LAS Dr. Jaime Merino Sánchez,
ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES Dra . Reyes Pascual Pérez, Dr. Vicente Gil Guillén

42. Semiología de las enfermedades 51. Fisiopatología y clínica


cardiovasculares ............................ 349 de las enfermedades isquémicas
Dr. Jaime Merino Sánchez,
miocárdicas .... .............................. 437
Dr. Mariano Valdés Chávarri,
Dra. Ruth Cañizares Navarro,
Dr. Eduardo Pinar Bermúdez,
Dr. José Miguel Seguí Ripoll
Dr. Francisco Marín Ortuño

5
Contenido

52. Patología vascular periférica .............. 446 60. Insuficiencia renal crónica .... .......... . . 508
Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. Jaime Merino Sánchez,
Dr. José María Cuadrado Pastor, Dr. Francisco Rivera Hernández,
Dr. Jorge Peris García Dr. Víctor M. Valverde Contreras

53. Hipertensión e hipotensión arterial ...... 453 61. Patología general


Dr. Jaime Merino Sánchez, de las enfermedades de las vías
Dr. Vicente F. Gil Gui llén, urinarias y la vejiga.
Dra. Reyes Pascual Pérez Litiasis renal ............ .. .... .. ............. 514
Dra . Reyes Pascual Pérez,
Dr. Francisco Rivera Hernánd ez,
Dra . Sara Anaya Fernández
SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LAS
ENFERMEDADES DEL APARATO GENITOURINARIO
s
SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DEL
54. Semiología de las enfermedades
SISTEMA ENDOCRINO Y DEL METABOLISMO
del riñón y de las vías urinarias .......... 462
Dr. Jaime Merino Sánchez,
62. Introducción a los síndromes
Dr. Francisco Rivera Hernández
endocrinos y metabólicos . ................ 522
Dr. José Antonio Amado Señaris,
55. Exploración física en patología
Dr. José Manuel Olmos Martínez
genitourinaria . . ............. . ................ 468
Dr. Francisco Rivera Sánchez,
63. Manifestaciones clínicas de los
Dra . Sara Anaya Fernández,
síndromes endocrinos y metabólicos ... 526
Dr. Jaime Merino Sánchez
Dr. Jesús González Macías,
Dr. José Antonio Amado Señaris
56. Exploraciones complementarias
en el diagnóstico de las afecciones
64. Técnicas diagnósticas
renales y de las vías urinarias:
en los síndromes endocrinos
semiología de la orina ...................... 473
y metabólicos ................ .. . ... . ......... 535
Dr. Víctor M. Valverde Contreras,
Dr. José Antonio Amado Señaris,
Dr. Jaime Merino Sánchez
Dr. José Antonio Riancho Moral

57. Patología general de las enfermedades 65. Patología general del hipotálamo
glomerulares del riñón ....... . . ...... ...... 485 y la hipófisis ............................. . ... 540
Dr. Alberto Ortiz Arduán, Dr. José Antonio Amado Señaris,
Dr. Francisco Rivera Hernández Dr. José Manuel Olmos Martínez

58. Patología del túbulo, 66. Patología general de la hipófisis


intersticio y vasos renales ................ 494 anterior o adenohipófisis . ............ .. . . . 546
Dr. Luis Ángel Jim énez del Cerro Dr. José Antonio Amado Señaris,
Dr. Fernando Pazos Toral
59. Insuficiencia renal aguda .................. 501
Dra . Reyes Pascual Pérez, 67. Patología general del tiroides .. . . .. . . .. .. . 551
Dr. Jaime Merino Sánchez, Dr. José Antonio Amado Señaris,
Dr. Carlos Pérez Barba Dr. José Manuel Olmos Martínez

6
Contenido

68. Patología general de las cápsulas 77. Patología general


suprarrenales y el sistema cromafín . .... 559 del metabolismo ácido-base .. . ........... 636
Dr. José Antonio Amado Señaris, Dr. José Antonio Riancho Moral,
Dr. José Manuel Olmos Martínez Dr. Jesús González Macías

69. Patología general de las gónadas . ... . .. . 570 78. Patología de los trastornos
Dr. José Antonio Riancho Moral,
de la nutrición ..................... .. .... .. .. 644
Dr. José Antonio Amado Señaris
Dr. José Cabezas-Cerrato,
Dr. David Araújo Vilar
70. Patología general de las
paratiroides y del metabolismo
del calcio . . ...... .. ..... . .. . ..... . ... . ... ... .. 578
Dr. Jesús González Macías, SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LA
Dr. José Antonio Amado Señaris SANGRE Y ÓRGANOS HEMATOPOYÉTICOS

71. Patología general del crecimiento . . ..... . 585


79. Semiología clínica y exploración
Dr. José Manu el Olmos Martínez,
en hematología . . ........................ .. .. 655
Dr. José Antonio Am ado Señaris
Dr. Javier García-Conde Bru

72. Patología general del metabolismo


80. Patología de la serie roja: Anemias .... . . 669
de los hidratos de carbono . . . ... .. .. .. .... 588
Dr. José Antonio Amado Señaris Dr. Javier García-Conde Bru

73. Patología general del metabolismo 81. Síndrome poliglobúlico


lipídico . . .. . ... . .. . ...... . .. .. ......... . .. . .. . . 599 y eritrocitosis . ........ . ... . ..... . . ... . . ...... 683
Dr. Jesús González Macías, Dr. Javier García-Conde Bru
Dr. José Luis Hernández Hernández
82. Patología general de las alteraciones
74. Patología general de los leucocitos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 690
del metabolismo de las proteínas Dr. Manuel Giralt Reich,
plasmáticas y los aminoácidos ......... . . 608 Dra. María Rosario Caballero Gabas
Dr. José Manuel Olmos Martínez,
Dr. Jesús González Macías
83. Síndromes adenomegálicos.
Semiología del bazo . .......... . .......... . . 700
75. Fisiopatología del metabolismo
Dr. Jord i Sierra Gil
del ácido úrico, de las porfirinas
y del hierro . ..... ...... . . . . . . .. .. .. ....... . ... 615
84. Síndrome hemorrágico ......... . .......... . 708
Dr. José Manuel Olmos Martínez,
Dr. Vicente Vicente García,
Dr. José Antonio Riancho Moral
Dra . Vanesa Roldán Schilling

76. Fisiopatología de los trastornos


del metabolismo hidrosalino 85. Síndrome de hipercoagulabilidad.
y del potasio . ... .. . . .. . ... . .. . . .... . ... . . . . .. 620 Enfermedad tromboembólica . . ... ........ 717
Dr. Jesús Gon zález Macías, Dra. Vanesa Roldán Schilling,
Dra . José Antonio Riancho Moral Dr. Vicente Vicente García

7
Contenido

SECCIÓN X 95. Patología general del sistema


SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LAS nervioso periférico y autónomo .. .. .. ... . 808
ENFERMEDADES DEL SISTEMA NERVIOSO Dra. Manuela Lema Bouzas,
Dr. Julio Pardo Fernández
86. Exploración física de los enfermos
neurológicos. Pruebas 96. Patología general de las meninges
complementarias para su diagnóstico . . 726 y el líquido cefalorraquídeo.
Dra . Manuela Lema Bouzas, Síndrome meníngeo. Hidrocefalia.
Dra. María Dolores Dapena Bolaño Hipertensión intracraneal. ................. 817
Dra . Manuela Lema Bouzas,
87. Patología general de la función Dr. José María Prieto González
motora, tono y reflejos . ..... . .......... .... 736
Dr. Manuel Noya García, Dr. Alfonso Castro García 97. Patología general
de la circulación cerebral. ................. 825
88. Patología general de los núcleos Dr. Miguel Blanco González,
basales . Movimientos anormales Dr. José Castillo Sánchez
y síndrome parkinsoniano ............ . .... 744
Dr. Manuel Noya García, Dr. Alfonso Castro García
SEMIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA DE LAS
89. Patología general de la sensibilidad ENFERMEDADES DEL APARATO LOCOMOTOR
y del dolor. Cefalea ......................... 751
Dr. Rogelio Leira Muiño, 98. Manifestaciones clínicas
Dr. José Castillo Sánchez del aparato locomotor ...................... 839
Dr. José Luis Hernández Hernández,
90. Patología general del cerebelo y del Dr. Jordi Casademont Pou,
sistema vestibular. Ataxia y vértigo ..... 764 Dr. Joan Miquel Nolla Solé
Dr. Manuel Noya García,
Dr. José María Prieto González 99. Exploración física
del aparato locomotor ...................... 845
91. Patología general de la corteza Dr. Jordi Casademont Pou,
cerebral. Síndromes cerebrales Dr. Joan Miquel Nolla Solé,
lobares. Afasias, apraxias, Dr. José Manuel Olmos Martínez
amusias, agnosias. Demencia . ..... . ..... 770
Dr. Manuel Noya García, 1OO. Exploraciones complementarias
Dr. Manuel Arias Gómez, Dra . Susana Arias Rivas en las enfermedades
del aparato locomotor .................... 848
92. Patología general del estado Dr. Joan Miquel Nolla Solé,
de consciencia. Sueño. Epilepsia. Dr. Jordi Casademont Pou,
Coma ............. . ......... . .. . ........ .. . .. .. 778 Dr. José Antonio Riancho Moral
Dr. Manuel Noya García, Dr. Manuel Arias Gómez,
Dr. Francisco Javier López González 101. Patología general
de las enfermedades musculares ...... . 853
93. Patología general Dr. Jordi Casademont Pou
de los nervios craneales
y del tronco del encéfalo ......... .. .. .. ... 788 102. Patología general
Dr. Manuel Noya García, de las enfermedades articulares . . . ... . . 858
Dr. Julio Pardo Fernández Dr. Joan Miquel Nolla Solé

94. Patología general 103. Patología general


de la médula espinal ........................ 799 de las osteopatías metabólicas .... . .... 863
Dr. Manuel Rodríguez-Yáñez, Dr. Jesús González Macías,
Dr. José Castillo Sánchez Dr. José Antonio Riancho Moral

8
Autore
Dr. Javier García-Conde Bru Dr. Jaime Merino Sánchez
Catedrático de Medicina Catedrático del Departamento de Medicina
Universidad de Valencia Clínica. Univer idad Miguel Hernández.
Jefe del Servicio de Hematología y Jefe de Servicio de Medicina Interna.
Oncología Médica. Hospital Clínico Hospital Un ivers itario de San Ju an.
Universitario de Valencia Alicante
Dr. Jesús González Macias Dr. José Luis Rodríguez García
Catedrático de Medicina. Coordinador edición 2015
Universidad de Cantabria. Profe or Asociado de Medicina.
Jefe de Departamento Univer idad de Castilla-La Mancha.
de Medicina Interna. Servicio de Medicina Interna.
Hospital Marqués de Valdecilla. Complejo Ho pitalario Un iversitario
Santander. de Albacete

Dr. José Luis Álvarez-Sala Walther Dr. Juan Manuel Arriero Marín Dra. Ruth Cañizares Navarro
Catedrático de Medicina. Pro feso r A ociado de Medicina. Profesora Honorífica de Medicina.
Universidad Complutense. Madrid. Universidad Miguel Hernández de Elche. Universidad Miguel Hernández de Elche.
Jefe del Servicio de Neumología. Alicante. Alicante.
Hospital Clínico San Carlos. Madrid Médico Adjunto de la Sección de Médico Adjunto del Servicio de M.
Neumología. Interna.
Dr. Melchor Álvarez De Mon
Hospital Univers itario de San Ju an de Hospita l Universi tario de San Juan de
Catedrático de Medicina.
Alicante Ali cante
Universidad de Alcalá de Henares.
Jefe de Servicio de Enfermedades del Dr. Vicente Bertomeu González Dr. Agustín Caro-Patón Gómez
Sistema Jnmune (Reum atología, Alerg ia y Profesor Asociado de Medicina. Catedrático del Departamento de Medicina.
Enfermedades Sistémicas) y Universidad Miguel Hernández de Elche. Universidad de Valladolid
Oncología. Hospital Universitario Príncipe Alicante. Jefe del Servicio de las Enfermedades
de Asturias Médico Adjunto de la Sección de Cardiología. de Aparato Digestivo. Hosp ital
Hospi tal Universitario de San Ju an de Univers itario del Río Hortega de Valladolid
Dr. José Antonio Amado Señaris
Catedrático de Medicina Universidad de Alicante Dr. Jordi Casademont Pou
Cantabria Dr. Vicente Bertomeu Martínez Profesor Titular de Medicina
Jefe del Servicio de Endocrinología. Profe or A ociado de Medicina. Universidad Autónoma de Barcelona
Hospital Marqués de Yaldecilla. Santander Universidad Miguel Hernández de Elche. Jefe de Servicio de Medicina Interna.
Alicante. Hospital de la Santa Creu i Sant Pau
Dra. Sara Anaya Fernández
Médico Adjunto del Servicio de Jefe de la Sección de Cardiología. Dr. José Castillo Sánchez
efrología. Hospital Universitario de San Juan de Catedrático de Neurología.
Hospital General. Ciudad Real Alicante Departamemo de Medicina.
Universidad de Santiago de Compo tela.
Dr. David Araujo Vilar Dr. Miguel Blanco González
Director del Área Clínica de
Profesor Titular de Medicina. Médico Adjunto del Servicio de eurología.
Neurociencias. Hospital Clínico
Universidad Santiago de Compostela. Área Clínica de eurociencias
Universitario de Santiago de Compostela
Médico a Xeral de Galicia. Santiago de Hospital Clínico Universitario.
Compo tela. Santiago de Compostela Dr. Alfonso Castro García
Profesor Titular de Medicina.
Dr. Manuel Arias Gómez Dra . María Rosario Caballero Gabas Univer idad Santiago de Compostela.
Profesor Titular de Medicina. Consultan! in Allergy. Jefe de Sección de Neurología.
Universidad de Santiago de Compostela Guiy's and St Thoma Hospitals. Hospital C líni co Univer itario. Santiago de
Médico Adjunto del Servicio de NHS Foundation Tru t. Londres Compostela
eurología. Complexo Hospitalario
Dr. José Cabezas Cerrato Dr. Francisco Javier Chorro Gaseó
Univer itario de Santiago de Compostela
Catedrático de Medicina. Catedrático de Cardiología.
Dra. Susana Arias Rivas Universidad de Santiago de Compostela Univer idad de Valencia.
Médico Adj unto del Servicio de Ex Jefe del Servicio de Endocrinología y Jefe del Servicio de Cardiología
eurología. Complexo Hospita lario Nutrición. Hospital Clínico Universitario de del Hospital Clínico Univer itario de
Universitario de Santiago de Compostela Santiago de Compostela Valencia

9
Autores

Dra. María Claver Salas Dr. Roberto García Civera Dra. Eva López Calleja
Prof. Asociada Universidad de Murcia. Profesor Titu lar de Card iología. Profesora Colaboradora Honoraria del
Jefa de Servicio de Medicina Nuclear. Universidad de Valencia. Departamento de Medicina Clínica.
Hospita l Virgen de la Arrixaca. Murcia Jefe Clínico, Unidad Arritm ias. Universidad Miguel Hernández. Elche.
Hosp ital Clínico Universitario de Va lencia Alicante
Dr. Francisco Colomina Climent
Prof. Honorífico del Opto. de Medicina Dr. Juan Carlos García-Moneo Carra Médico Adjunto del Servicio de Medicina
Clínica. Universidad Miguel Hernández. Jefe del Servicio de Neurología. Interna del Hospital Universitario de San
Elche. Alicante Hospital Galdacano. Vizcaya. Juan. Alicante
Médico Adjunto del Servicio de Cuidados Prof. Asociado de la Universidad del País
Vasco Dr. Francisco Javier López González
Intensivos. Hospital Universitario de San
Juan. Alicante Médico Adjunto del Servicio de
Dr. Joa n Gil Carbonell Neurología.
Dr. Pedro Conthe Gutiérrez Profesor Honorífico del Departamento Complexo Hospita lario Universitario
Profesor Asociado del Departamento de de Medicina Clínica Universidad de Santiago de Compostela
Medicina. Universidad Complutense de Miguel Hernández. Elche, Al icante.
Madrid. Médico del Servicio de Neumología. Dr. José María Manso Martínez
Jefe de Servicio de Medicina Interna. Hospi tal General Universitario de Al icante Profesor Titular del Departamento
Hospital Gregario Marañón. Madrid Dr. Vicente Gil Guillén de Medicina (Patología General) de la
Profesor Titular del Opto. de Medicina Universidad de Valladolid.
Dr. José María Cuadrado Pastor
Clínica. Médico Jefe de Sección de Med icina
Profesor Asociado del Departamen to de
Univers idad Miguel Hernández Elche. Interna.
Medicina. Universidad Miguel Hernández.
Alicante. Hospital Universitario de Valladolid.
Elche. Alicante
Unidad de Infecc iosas. Médico de Familia Centro de Salud Las
Acacias, Dr. Francisco Marín Ortuño
Hospital Universitario San Juan. Alicante
Elda, Alicante Médico Adjunto del Servicio de
Dra. Mª Dolores Dapena Bolaño Cardiología.
Médico adj unto del Servicio de Dr. Manuel Guiralt Reich Hospital Universitario Virgen de la
Neurología. Jefe del Servicio de Hemato logía. Arrixaca. Murcia.
Hospital Xeral de Galicia. Santiago de Hospital Miguel Servet. Zaragoza
Compostela Dra. Concepción Martin Serrano
Dr. Luis Hernández Blasco
Profesora Asociada de Medicina
Dr. Raúl De Pablo Sánchez Profesor Titular del Departamento
Universidad Miguel Hernández de Elche.
Profesor Asociado de Medicina. de Medicina Clínica
Al icante.
Coordinador del Laboratorio de Universidad Miguel Hernández. Elche.
Jefa de Sección de Neumología
Habilidades. Servicio de Neumología.
Hospital General Univers itario de Alicante
Universidad de Alcalá de Henares. Hospital General Universitario de Alicante
Méd ico Adjunto del Servicio de Cuidados Dr. José Luis Hernández Hernández Dr. Jesús Merino Pérez
Intensivos. Hosp ital Universitario Príncipe Catedrático de Inmunología.
Médico Adjunto del Servicio de Med icina
de Asturias. Un iversidad de Cantabria
Interna
Alcalá de Henares. Madrid
Hospital Marqués de Valdecilla. Santander
Dra. Mª Lourdes Del Olmo Martínez Dr. Felipe Miguel De La Villa
Dr. Luis Angel Jiménez Del Cerro Catedrático de Medicina. Universidad del
Profesora Asociada del Departamento de
Colaborador Honorífico del País Vasco.
Medicin a. Universidad de Valladolid.
Opto. de Medicina Clínica. Un iversidad Jefe de Servicio de Medicina Interna.
Médico Adjunto Servicio Enfermedades
Miguel Hernández. Elche. Alicante. Hospital de Basurto. Bilbao.
del Aparato Digest ivo. Hospital Clínico
Médico Adjunto de l Servicio de
Universitario. Valladolid
Nefrología. Dr. Jesús Millán Núñez-Cortés
Dra. Carmen Fariñas Álvarez Hosp ital General Universitari o de Alicante Catedrático de Medicina.
Profesora Titular del Departamento de Universidad Complutense de Madrid
Dr. Rog elio Leira Muiño
Medi cina, Universidad de Cantabria. Jefe de Servicio de Medicina Interna.
Profesor Asociado de Neurología.
Jefa de Sección de Enfermedades Hospital Gregario Marañón. Madrid.
Universidad de Santiago de Compostela.
Infecc iosas.
Médico Adjunto del Servicio de
Hospital Marqués de Valdecilla. Santander Dra. Mª Asuncion Nieto Barbero
Neurología. Hospital Clínico Un iversitario
Dr. Jaime Font De Mora de Santiago de Compostela Profesora Asociada de Medicina.
In vesti gador del Centro de Investigaciones Universidad Complutense. Madrid.
Dra. Manuela Lema Bouzas Médico Adjunto. Servicio de Neumología.
Príncipe Felipe. Valencia
Profesora Titular de Medicina. Hospital Clínico San Carlos. Madrid.
Dr. Arcadio García Alberola Universidad de Santiago de Compostela
Profesor Titular. Universidad de Murcia. Jefa de Sección de Neurología. Hospital Dr. Joan Miquel Nolla Solé
Jefe de Sección, Unidad de Arritmias. Clínico Universitario de Santiago de Jefe del Servicio de Reumatología.
Hospita l Virgen de La Arrixaca. Murcia Compostela Hospital de Bell vitge. Barcelona.

10
Autores

Dr. Manuel Noya García Dr. Ed uardo Pinar Bermúdez Dr. José Miguel Seguí Ripoll
Catedrático de Med icina. Médico Jefe de Sección de Card iología. Profesor Asociado del Departamento de
Uni versidad de Santiago de Compostela Hospital Uni versitario Virgen de la Medicina C línica. Un iversidad Miguel
Jefe de Servicio de Neuro logía. Hospi ta l Arrixaca. Mu rcia Hernández. E lche.
C línico Uni versitario de Santi ago de Médico Adjunto del Servicio de Medicina
Composte la Dr. José María Prieto González Interna del Hospital Univer itario de San
Profesor Asociado de C iencias de la Salud . Juan. A licante
Dr. José Manuel Olmos Martínez Uni versidad de Santi ago de Compostela.
Médico Adjunto del Servicio de Dr. Alberto Selva O'Callaghan
Profeso r Titul ar del Departamento de
Neurología. Méd ico Adj unto del Servicio de Medicina
Medicina y Psiquiatría. Uni versidad de
Hospital Cl íni co U ni versitario Interna.
Cantabri a.
de Santi ago de Compostela Hospital Universitario Val ! d' Hebrón.
Médi co Adjunto de Medicina Interna.
Barcelona.
Hospital Marqués de Valdecill a. Santander.
Dr. José Antonio Riancho Moral
Dr. Avelino Senra Varela
Dr. Alberto Ortiz Raduán Profesor T itular del Departamento
Catedrático de Medicina. Universidad de
Profeso r Titular de Medicina. Medic ina y Psiqui atría. Un iversidad de
Cádiz.
Uni ver idad Autónoma. Madrid Cantabri a
Jefe del Servicio de Oncología Méd ica.
Médi co Adjunto de l Servicio de Jefe de Sección de l Medi cina Interna.
Hosp ital Universitario Puerta Del Mar.
Nefrología. Hospital Uni versitari o Marqués de
Cádiz.
Fundación Jiménez Díaz Madrid Valdecilla. Santander
Dr. Jordi Sierra Gil
Dr. Eloy Pacho Jiménez Dr. Francisco Rivera Hernández Catedrático de Medicina.
Ex profesor de Patolog ía Genera l y Profesor Titul ar de Uni versi dad . Jefe del Servicio de Hemato logía C lín ica.
Gerontología. Uni versidad Autónoma de Médico Adjunto de la de Sección de Hospital Santa Creu y San Pa u, Barcelona.
Nefrología.
Madrid Dr. Federico Soria Arcos
Hospital Genera l de Ciudad Rea l.
Médico Adjunto del Servicio de
Dr. Jul io Pardo Fernández
Dra. Gema Rodríguez Trigo Cardio log ía.
Médi co Adjunto del Servic io de
Profesora Asociada de Medicina. Hospital Univers itario Virgen de la
Neurología.
Uni versidad Complutense. Madrid Arrixaca. Murcia
Hospital Clínico Uni versitario de Santiago
Médico Adjunto. Servicio de Neumología.
de Compostela Dra. Pietat Usseti Gil
Hospital Clínico San Carlos. Madrid
Servicio de Neumología. C lín ica Puerta de
Dra. Reyes Pascual Pérez Hierro. Universidad Autónoma de Mad ri d .
Dr. Manuel Rodríguez-Yáñez
Profe ora Titular de l Departamento de
Médico adjunto del Servicio de Dr. Mariano Valdes Chavarri
Medic ina Clínica. Uni versidad Miguel
Neurología, Catedrático del Departamento de Med ic ina.
Hernán..dez.
del Área Clínica de Neurocienc ias Cardiología. Un iversidad de Mu rc ia
Elche. Alicante
Hospital Clínico Uni versitari o. Jefe del Servicio de Cardiología.
Je fe Clínico del Servicio de Medi cina
Santiago de Compostela. Hospita l Universitario Virgen de la
Interna.
Arrixaca. Murcia.
Hospital Genera l De Elda, Alica nte Dr. Pablo Roig Rico
Profesor Colaborador Honorario del Dr. Víctor Valverde Contreras
Dr. Fernando Pazos Toral Departamento Jefe del Servicio de Nefrología.
Profesor Asociado. Uni versidad de de Medicina Clínica. Hospital Genera l de Elda. Alicante.
Ca ntabria . Uni versidad Mi gue l Hernández. Elche.
Médico Adjunto, Servic io de Dra. Desirée Veléz Rodríguez
Alicante .
Endocrinología. Médico adjunto de Medicina Interna.
Médi co Adjunto del Servicio de Medicina
Hospital U ni versitari o Marqués de Hospita l del sureste
Interna.
Valdecill a. Santander Arganda del Rey. Madrid
Hospi tal Universitario de San Juan de
Alicante Dr. Vicente Vicente García
Dr. Carlos Pérez Barba
Catedrático de Medicina. Un iversidad de
Profesor Honorífico del Opto. de Medicina Dra. Vanesa Roldán Schilling Murcia
Clínica. Uni versidad Mi guel Hernández Profesora Asociada de l Departamento de Jefe del Servicio de Hematología
Jefe del Servicio de Medic ina Interna. Medicina. Uni versidad de Murcia. y Onco logía Médica.
Hospital General de Elda. Alicante Médico del Servicio de Hemato logía y Hospita l Univers itario Morales Meseguer.
Oncología Médica. Hospi ta l Uni versitario Murcia
Dr. Jorge Peris García Moral es Meseguer. Murcia.
Profesor Honorífico del Opto. de Medicina Dr. Miquel Vilardell Tarrés
Clínica. Uni vers idad Mi guel Hernández Dr. Santiago Romero Candeira Catedrático de Medici na.
Médi co Adjunto del Servic io de Med icina Catedrático de Neumología Universidad Universidad Autónoma de Barcelona
Interna. Mi guel Hern ández. Elche. Alicante. Jefe de Servicio de Medicina I nterna.
Hospital Uni versitario de San Juan. Jefe del Servicio de Neumología. Hospital Universitario Va l! d'Hebrón.
Alicante Hospital General Uni versitario de Alicante Barcelona.

11
Prólog
Desde la última edición de nuestro libro, se han producido numerosos avances que implican aspectos
biológicos, especialmente moleculares, avances tecnológicos, clínicos y pedagógicos que afectan al
diagnóstico, pronóstico y tratamiento de las enfermedades, y también a la forma y fondo de cómo se
debería enseñar la medicina en el momento actual.

Los conocimientos de biología molecular han cambiado la identidad de las enfermedades, la interpre-
tación de sus mecanismos fisiopatológicos, la aplicación de tratamientos sobre dianas específicas y
han aportado criterios basados en una semiología molecular. El cáncer es el paradigma de esta forma
de enfocar un proceso clínico y biológico.

Los avances tecnológicos no han desplazado a los datos clínicos recogidos e interpretados con las
habilidades propias de la exploración física, pero los han ampliado y han perfilado mejores criterios
de sensibilidad y especificidad. La tecnología ha significado un gran avance en el conocimiento y en el
tratamiento de las enfermedades, pero también tiene limitaciones en ciertos aspectos de la relación
clínica y consideraciones éticas sobre las mismas.

Las actuaciones clínicas se desarrollan en escenarios diferentes a los clásicos. Mayor precisión diag-
nóstica, necesidad de integrar y priorizar un mayor número de datos, importante responsabilidad
profesional y judicial de los profesionales sanitarios y cada vez una mayor limitación del presupuesto
sanitario.

También es necesario complementar la calidad de lo ya existente con nuevas formas de enseñar y


de contribuir a la formación de estudiantes, médicos y profesores. Las formas clásicas siguen siendo
importantes para la transmisión de conocimientos, pero no deberían ser las únicas ni excluir otras
alternativas basadas en tres criterios: participación del estudiante sobre temas acordados, estímulo
de la capacidad de pensar y de hacerse preguntas en lugar de obsesionarse solo con las respuestas y,
por último, el trabajo en grupo con evaluaciones basadas en la resolución de aspectos que requieren
no solo integrar conocimientos sino también comprobar la capacidad de aplicación.

En esta edición incorporamos algunos de estos aspectos: revisión de todos los capítulos para recoger
nuevos conocimientos, encargados a autores según su especificidad para cada uno de ellos, inte-
gración de la semiotecnia y semiología clásica con los avances tecnológicos y biológicos y una nueva
ilustración en figuras y tablas para facilitar la información contenida en el texto.

Deseamos expresar nuestro agradecimiento a la editorial Marbán por las facilidades y orientación
para la edición de este libro en un momento complejo para este tipo de acciones. Es necesario desta-
car la generosidad para editar un libro aceptando las imágenes ofrecidas y su impresión en color.

Una especial gratitud a los autores de los diferentes capítulos por el esfuerzo y por la calidad aportada.

Javier García-Conde Bru


Jaime Merino Sánchez
Jesús González Macías

12
·101
Salud y enfermedad.
La patología
y sus contenidos
Javier García-Conde Bru

INTRODUCCIÓN
El inicio del estudio y el contacto con la medicina
clínica pone al estudiante ante la necesidad de co-
nocer el concepto y los contenidos de la salud y de
la enfermedad, así como los principios de la relación
médico-enfermo, es decir, el acto médico.
Los objetivos de estas enseñanzas son los siguientes:
Conocer los criterios y las bases de la salud y de
la enfermedad.
Estudiar las causas y mecanismos genéticos de
producción de las enfermedades.
Conocer los mecanismos fisiopatológicos que se
ponen en marcha , en situación de enfermedad,
en los distintos órganos y sistemas, y que tienen
como sustrato una alteración tisular, celular o
molecular.
Conocer los signos y síntomas ex-
presivos de enfermedad, junto con
su análisis fisiopatológico y semio-
lógico.
Adquirir la capacidad para
adoptar una actitud adecuada
en la relación médico-enfermo.
Elaborar la historia clínica, de-
finir el estado de salud y de en-
fermedad y fomentar la comu-
nicación y la relación interper-
sonal como base de la relación
médico-enfermo.
Adquirir la capacidad necesaria para la obten-
ción de los signos de enfermedad, así como para
su reconocimiento, interpretación individual y
síntesis de conjunto.
De esta forma, en el aprendizaje deben coincidir
la incorporación de conocimientos, la adquisición
de habilidades y los cambios de actitud necesarios ,
consecuencia de una relación técnica y personal en-
tre el estudiante de medicina, el enfermo y los pro-
fesores.
--,-
-- SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

En medicina es importante tener en cuenta, además Criterio de comportamiento o conducta


de los actos técnicos, los actos morales, cuyos funda- Existe una adaptación crítica a las propias pautas y ob-
mentos estudia la bioética médica. Por otra parte, es jetivos (coherencia y autenticidad). La an1bición des-
necesario comprender que los actos morales tienen un proporcionada, junto con la envidia y el resentimiento,
carácter individual. En ellos influyen las necesidades determinan comportamientos apartados de la salud.
de la sociedad, las directrices de la política sanitaria En resumen, podemos decir que estar sano es una
de cada país y, en cierta medida, las connotaciones forma de vivir que implica el sentimiento subjetivo
de posibilismo económico (economía limitada para de sentirse bien y el objetivo de no padecer alteracio-
promover la salud y tratar la enfermedad). nes morfológicas ni fisiopatológicas, ni ser portador
En la actuación médica se mezclan «saber», «de- de signos de enfermedad. También es importante te-
ber» y «poder». Expresado de otra forma, la medicina ner la capacidad para realizar un trabajo y sentirse
tiene un contenido científico, moral y político que integrado en la sociedad y en estado de armonía (au-
configura el «orden médico ». tenticidad) con uno mismo.
El sentimiento de estar sano lo sintetiza Laín Entral-
SALUD Y ENFERMEDAD go en seis puntos: a) validez o capacidad de poder; b)
bienestar orgánico y psíquico, que establece una dife-
MEDICINA rencia con la sensación de malestar con la que gene-
Es la forma social, científica y ética de mantener la ralmente comienzan las enfermedades; c) seguridad de
salud y de enfrentarse con la enfermedad, con el fin poder seguir viviendo; d) libertad respecto al cuerpo
de prevenirla o tratarla. Lo que caracteriza a la me- propio; e) semejanza vital con los demás; f) posibilidad
dicina científica moderna es, fundamentalmente, la de gobernar el juego vital de la soledad y la compañía.
preocupación por el método.
CALIDAD DE VIDA
SALUD Aparece como una expresión derivada del sentido
La OMS (Organización Mundial de la Salud) consi- positivo de la salud, que no se limita a la ausencia de
dera que la salud no es sólo la carencia de enferme- enfermedad y que se establece con un sentido de ra-
dad , sino «la posesión de un bienestar físico, social cionalidad. Por otra parte, hay que destacar la impor-
y mental completo, que debe ser extensible a toda la tancia de la calidad de vida sobre la cantidad de vida,
sociedad» (criterio de justicia). es decir, sobre aspectos que superan los exclusivos de
La salud se refiere a un sentimiento subjetivo («me vida o muerte.
encuentro bien») y a una evidencia objetiva de no Calman define la calidad de vida como el grado en
padecer enfermedad o ser portador de signos de en- el que las esperanzas y las ambiciones de una perso-
fermedad. na se corresponden y son satisfechas por la realidad.
Laín Entralgo clasifica los criterios objetivos para Ello implica calidades de vida diferentes según los
definir el estado de salud en los siguientes grupos: individuos y así, los cambios de expectativas en el
tiempo llevan a percepciones alteradas de la calidad
Criterio morfológico de vida. Pese a este criterio algo abstracto de la ca-
lidad de vida, hay varios elementos que pacientes ,
Se define por la ausencia de alteraciones en la estruc-
familias y profesionales relacionados con la sanidad
tura anatómica del cuerpo.
aceptan para calificar este concepto:
Criterio etiológico ■ Capacidad funcional. Habilidad y energía para
Corresponde a la ausencia de causas evidentes de en- actos cotidianos, interacción o relación social,
fermedad , como taras genéticas, de microorganismos, actividad intelectual, reacciones emocionales y
sustancias tóxicas o cuerpos extraños. La situación de adaptaciones e independencia económica.
portador de una enfermedad, aunque no se eviden- ■ Autopercepción del bienestar o de su ausencia.
cien signos clínicos o de sufrimiento, tiene impor- La situación de bienestar significa satisfacción,
tancia en aquellos enfermos que son potencialmente tranquilidad de espíritu, comodidad, disponer de
transmisores. lo necesario para vivir satisfactoriamente agre-
gando además las percepciones subjetivas. La fe-
Criterio funcional licidad consiste en la percepción y obtención del
Son normales las constantes vitales, las pruebas funcio- bien y se establece y perdura con el desarrollo de
nales y la actividad de los diversos órganos y sistemas. capacidades orientadas hacia el bien.
Relación con los síntomas derivados de la enfer-
Criterio utilitario medad o producidos por el tratamiento.
Representa la capacidad para el cumplimiento de ac- Los estudios de calidad de vida se han introducido
- 2- - tividades (trabajo profesional, creación intelectual o como un elemento habitual en los ensayos clínicos,
artística). particularmente en estudios sobre el tratamiento del
CAPITULO 1 Salud y enfermedad. La patología y sus contenidos

cáncer y de forma especial en los que los resultados Morfología o anatomía patológica, bioquímica,
de eficacia se prevén limitados o con una cierta toxi- biología molecular e inmunología.
cidad. La valoración de la calidad de vida se realiza Fisiopatología: es el estudio de las alteraciones
con cuestionarios, de los cuales los más utilizados son funcionales del organismo.
los de la EORTC (European Organisation for Research Semiología o semiótica: es el estudio de las se-
and Treatment of Cancer), donde se expone al pacien- ñales de enfermedad desde el punto de vista del
te el deseo de conocer aspectos relacionados con su diagnóstico y del pronóstico.
salud. En este tipo de entrevistas, las respuestas no
Síntomas: son las señales subjetivas de enfer-
se establecen con un criterio dogmático («acertadas »
medad, p. ej., dolor, náuseas o mareos.
o «desacertadas »). Esta información, como es lógico,
Signos: son las señales objetivas de enferme-
es estrictamente confidencial. La confidencialidad es
dad, p. ej. , ictericia o eritema.
un aspecto básico en la relación médico-enfermo; no
sólo es confidencial la información que se trasmite Patocronía: es la forma de evolución de la enfer-
directamente, sino también la contenida en las histo- medad en el tiempo.
rias clínicas, en la documentación de ensayos clíni- La patología general comprende los conocimientos
cos, en los documentos administrativos y también en relacionados con la enfermedad, la clínica y aquellos
los ordenadores. Estos son instrumentos básicos en el que, junto con las habilidades necesarias para recoger
momento actual, recogen wia parte muy importante los signos de enfermedad, permiten el reconocimiento
de la información que está sometida a unas normas del proceso patológico (Fig. 1-1).
acordadas de forma específica en la legislación sani- La aspiración de un estudiante de medicina radica
taria. Las representaciones y valoraciones aisladas de en ser un buen clínico y realizar una medicina cien-
curvas de supervivencia global o supervivencia libre tífica en el plano del conocimiento, antropológica en
de recaída o de eventos son un dato insuficiente para cuanto a la relación con el enfermo como persona, y
apreciar la situación de los pacientes respecto a los ética en cuanto a los comportamientos morales indi-
tratamientos y a la toxicidad que éstos presentan en viduales y de servicio a las necesidades de la socie-
los ensayos clínicos, así como a sus consecuencias. dad. Estos aspectos definen la actuación profesional
técnicamente correcta y moralmente adecuada.
ENFERMEDAD Nosografía: Se ocupa del estudio de cada enfer-
medad en particular.
Deriva de la pérdida de la salud, que incide en la vida Nosotaxia o nosología: Se ocupa de la clasifi-
de una persona interrumpiendo su autonomía y su cación de las enfermedades. Puede basarse en
capacidad de adaptación. Laín Entralgo desarrolla el criterios anatómicos (órganos o sistemas), cau-
concepto de enfermedad señalando que ésta «es un sales (enfermedades infecciosas o tóxicas), fisio-
modo de vivir aflictivo , anómalo y reactivo a una alte- patológicos (enfermedades del metabolismo) y
ración del cuerpo que hace imposible la vida biológica patocrónicos (enfermedades agudas y crónicas).
(enfermedad letal), impide o entorpece transitoria- Dentro de cada sistema o aparato , las enfermeda-
mente la realización de la vida personal (enfermedad des suelen clasificarse con arreglo a su causa o
incurable) o la limita de un modo preciso y definitivo mecanismo de producción.
(enfermedad incurable, residual o cicatriza!) ».
En esta definición se considera el carácter aflictivo
personal (antropológico), la alteración de la forma de BASES PARA EL CONOCIMIENTO
vivir y el carácter reactivo, la lesión del cuerpo y el DE LA ENFERMEDAD
sufrimiento y las posibilidades de evolución bajo la
forma de curación, muerte o enfermedad residual. ETIOLOGÍA
Estudia las causas que producen enfermedad. Aris-
PATOLOGÍA tóteles señaló que el conocimiento científico se di-
ferencia del empírico (experiencia) en que aquel es
Se encarga del estudio de la enfermedad consideran-
un conocimiento por causas, de forma que una de las
do los mecanismos causales, los mecanismos lesivos
características de este conocimiento es la explicación
y la relación con las alteraciones fisiopatológicas y su
causal de los fenómenos.
expresión sintomática.
La causa biológica produce lesión y reacción, y
Las bases para el conocimiento de la patología son:
ambos mecanismos originan el conjunto de las alte-
Etiología: es el estudio de las causas de las en- raciones patológicas.
fermedades. La causa física, a diferencia de las anteriores, pro-
Patogenia: es el estudio de los mecanismos que duce una alteración que es específica y proporcional,
intervienen en el desarrollo de los cuadros mor- precede al efecto y desaparece cuando la causa cesa, - --
3
bosos, tanto por acción como por reacción. sin existir fenómenos reactivos.
--- SECCIÓN l. Conceptos fundamenta les

las alteraciones del sistema inmu-

- ~-______.
CUADRO MORBOSO nitario , las lesiones son diferentes

·
cuando el mecanismo se debe a una
inmunodeficiencia, un fenómeno
de hipersensibilidad o un fenóme-

+ PATOGENIA

~ ~CCIÓN
/

SÍNTOMAS
no de autoinmunidad. Cada vez se
tienen más conocimientos sobre el
origen del cáncer y las lesiones ge-
SIGNOS néticas implicadas y, sin embargo,
SEMIOLOGÍA los mecanismos de la carcinogéne-
-------c:: P.~T.§~?.ª¡~:ª~~iiFiÁi:· · } ------••~ sis y de la difusión de los tumores
revisten tal complejidad bioquími-
◄•------- c····¡;ATOLO°áÍA.ÓÜ~iic.ii.'''''• - - - - - - - - ca que no facilitan la explicación
''''{'~¡~~~~{ti~i'\''''''''''' suficiente del mecanismo completo
del proceso. Los agentes infecciosos
Fi gura1•1 Modelo representativo del estudio de un proceso pato lógico.
pueden proceder del exterior o del
La reacción debe considerarse como la forma parti- interior del organismo y pueden le-
sionarlo mediante la liberación de toxinas o de sus-
cular de respuesta biológica ante la agresión. Lama-
yoría de las causas, no siempre conocidas, producen tancias inhibidoras de las defensas o por invasión.
una reacción que altera considerablemente la salud Ante la infección se ponen en funcionamiento una
e incluso ocasiona lesiones residuales. Las citocinas serie de mecanismos reactivos: fagocitosis , liberación
son un ejemplo de sustancias reactivas que intervie- de sustancias intracelulares (citocinas), mecanismos
nen en múltiples procesos con alteración importan- inmunitarios y acción del complemento, y mecanis-
te del estado general, como fiebre o mialgias, y que mos de la inflamación.
derivan de la acción de ciertos estímulos sobre los
linfocitos y monocitos o de reacciones en las que ellas FISIOPATOLOGÍA
intervienen. La reacción puede ser local o general.
Los tipos de causas se recogen en la Tabla 1-1 . Estudia la disfunción, es decir, el funcionamiento
anormal, de órganos y sistemas. El modelo experi-
mental en animales ha tenido como base determina-
OTROS FACTORES O CONCAUSAS dos estudios de tipo fisiopatológico; este modelo ha
En un proceso patológico suele haber una causa fun- sido el punto de partida para su aplicación al hombre
damental y, además, factores que modulan el desa- mediante ensayos clínicos, que deben atenerse a nor-
rrollo, la forma, la localización o la gravedad de la mas sumamente rigurosas tanto en el plano técnico
enfermedad. Estos factores han sido ordenados por como en el plano ético. El estudio de la fisiopatología
el profesor Balcells en los siguientes apartados: debe partir del conocimiento de la alteración genética
de la célula, para abordar después el de las anomalías
■ Factores de preparación: proximidad al foco,
magnitud de la causa, frecuencia de su acción.
■· Factores desencadenantes .
■ Factores de perpetuación (cronicidad). Tabla 1•1 Causas de las enfermedades
■ Factores patoplásticos (forma clínica). Causas externas
■ Factores de localización. Causas físicas
■ Factores de irreversibilidad o letales .
Mecánicas Acción de las
Traumatismos radiaciones
Cinetosis Acción de las
PATOGENIA Aceleración vibraciones
Estudia los mecanismos por los que las diferentes Gravedad Acción de la presión
causas producen los cuadros morbosos, es decir, los Acción del frío y del atmosférica
mecanismos por los cuales se enferma. En este proce- calor Acción de ruidos
Acción de la electricidad
so intervienen tanto el fenómeno de reacción endóge-
Causas químicas
na condicionada por la causa, como la situación del
organismo. La reacción puede ser muy variada desde Agentes vivos
el punto de vista biológico y funcional, y puede con- Factores psicosociales
trolar, agravar o modular la acción de la causa. Causas internas
Los mecanismos de producción de enfermedad va- Herencia Constitución
- 4- rían considerablemente según las causas que inciden,
el sistema afectado y el mecanismo de reacción. En
CAPÍTULO 1 Salud y enfermedad. La patología y sus contenidos

funcionales, y finalmente la disfunción de los distin- a) Tipos evolutivos


tos órganos, aparatos y sistemas. La prueba funcional Enfermedad aguda: se caracteriza por un co-
representa el método clínico más adecuado para va- mienzo brusco y llamativo de manifestaciones
lorar la función de un órgano y es un signo de natu- clínicas, criterios de localización, causas y me-
raleza fisiopatológica. canismos fácilmente identificables.
En la investigación y en la práctica clínica de la ■ Enfermedad crónica: el comienzo es solapado o
medicina existen muchos conocimientos que se rela- indolente, con independencia de la gravedad; en
cionan entre sí y que, sin embargo, no establecen una sus inicios hay escasas manifestaciones clínicas
relación causal. En el área de la fisiopatología, el estu- y no siempre se descubre la localización.
dio de las moléculas que van descubriéndose estable-
ce fenómenos de relación que permiten, de una forma
cada vez más específica, establecer las vías por las que b) Fases evolutivas
se producen las enfermedades. Por ello, es necesario Comprenden, según el profesor Balcells, las siguien-
diferenciar entre los fenómenos causales, las relacio- tes etapas, que son más evidentes en las enfermeda-
nes entre procesos biológicos y la aplicación que es- des infecciosas y menos perceptibles en el resto de
tos mecanismos pueden proyectar sobre la clínica y los procesos (Fig. 1-2):
la terapéutica. El diagnóstico precoz se establece para
Iniciación o contacto: es el momento en el que
intentar el diagnóstico de procesos en su fase inicial
el agente causal toma contacto con el organismo.
mediante técnicas de gran sensibilidad y accesibili-
Período de incubación: es la fase necesaria para
dad. En el diagnóstico precoz del cáncer de mama se
que se inicien las manifestaciones clínicas. En
intenta realizar este diagnóstico en una fase inicial, y
las enfermedades infecciosas esta etapa es carac-
con ello reducir el riesgo de extensión del tumor y rea-
terística de cada proceso y ayuda al diagnóstico.
lizar técnicas quirúrgicas más conservadoras. Las en-
Por ejemplo, el virus de la hepatitis A requiere
fermedades hereditarias no siempre se detectan como
una incubación de 15 a 45 días y el de la hepati-
un proceso clínico en una edad precoz. En ocasiones,
tis B, de 40 a 180 días.
la enfermedad aparece en la edad media de la vida y,
mediante estudios realizados sobre células somáticas Período prodrómico: en esta etapa se inician
se puede detectar la alteración molecular que origina las manifestaciones clínicas que no son aún las
la enfermedad o se relaciona con ella. Esto permite características de la fase de estado de la enfer-
abordar el consejo genético e intentar investigar los medad. Pueden ser comunes a otros procesos y
casos que se dan en esas familias. entre ellas cabe citar el malestar y la fiebre . Las
manifestaciones idiosincrásicas son propias de
la forma particular de reaccionar de cada pa-
PATOCRONIA ciente. Las manifestaciones diagnósticas son
las propias de un proceso determinado. Así,
Estudia la evolución de la enfermedad en el tiempo, en el sarampión, el signo de Koplik (máculas
analizando las características y situaciones que acon- blanquecinas en el interior de labios y mejilla
tecen. en la región molar) preceden en 48 horas a la
Es difícil trazar un modelo evolutivo en las distintas aparición del exantema, y constituyen un dato
enfermedades, ya que influyen las causas, la patoge- patognomónica debido a su gran especificidad.
nia y las lesiones y sus consecuencias. Se pueden te- Fase de aparición e incremento de las manifes-
ner en cuenta los tipos y las fases evolutivas: taciones características.

Recrudescencia

,. . . .
•;i49GiMi
i ....
. •

Incubación
•11m;1
t
fii'@i
Período
prodrómico
Convalecencia
t
•M+IMI --
5
Figura 1•2 Esquema representativo de l mode lo patocró ni co de u na enfermedad infecc iosa.
~ Conceptos fundamentales

Fase de acmé o de estado: es el momento de tanto el número de signos como su interpretación y


máxima expresión e intensidad sintomatológica. el análisis de sus características de especificidad y
■ Fase de declinación o defervescencia: hay una sensibilidad. Existen tres clases de signos: anatomo-
reducción progresiva o brusca de las manifesta- clínicos, fisiopatológicos y etiológicos.
ciones clínicas. Los signos anatomoclínicos (lesión) corresponden a
■ Fase de terminación: desaparecen los signos clí- alteraciones que se observan en la exploración física
nicos, lo cual puede expresarse como: (p. ej ., en la auscultación del tórax) o bien a la existen-
Crisis: final brusco del proceso. cia de concentraciones anormales de diversas sustan-
Lisis: final progresivo del proceso. cias en sangre y orina, como la glucosa en la diabetes
o la proteinuria en el síndrome nefrótico. Las técnicas
■ Convalecencia: es el momento en que han desa- radiológicas, como la tomografía computarizada (TC),
parecido los síntomas de la enfermedad, pero no permiten describir y medir lesiones en el cerebro, el
se ha recuperado la salud. tórax y el abdomen. La endoscopia permite descubrir
■ Empeoramiento: es un agravamiento de la enfer- lesiones en cavidades, órganos o sistemas como el esó-
medad en alguna de sus fases evolutivas: fago, el estómago o el colon, en ocasiones con una gran
• Exacerbación: empeoramiento en la fase de precisión diagnóstica. En otros casos se procede a la
acmé. extracción de una muestra (biopsia) para su estudio
• Recrudescencia: empeoramiento en la fase de anatomopatológico. Los signos fisiopatológicos (dis-
declinación. función) permiten describir la alteración funcional de
Recaída: empeoramiento en la fase de conva- un órgano o sistema. Las pruebas funcionales , como el
lecencia. aclaramiento de creatinina, el estudio ventilatorio del
Recidiva: aparición de manifestaciones de pulmón o el electrocardiograma reflejan los signos fi-
enfermedad después de la convalecencia y de siopatológicos más característicos. Los signos etiológi-
haber recuperado la salud. cos expresan la causa de enfermedad y por ello tienen
una gran especificidad y definen las entidades noso-
En el final de la enfermedad la situación clínica lógicas. El estudio de los microorganismos (hemo-
puede expresarse de tres formas: cultivo~, urocultivo) que originan las enfermedades
■ Curación: desaparición de la causa, de las mani- infecciosas, la determinación de tóxicos en las intoxi-
festaciones clínicas y de las alteraciones fisiopa- caciones y el estudio del cariotipo o de los genes por
tológicas. biología molecular, son ejemplos de la identificación
■ Invalidez: permanecen lesiones residuales y, por de las causas de enfermedad.
tanto, alteraciones morfológicas, funcionales o
psicológicas.
■ Muerte: se produce el cese de las funciones vi- FORMAS DE ENFERMAR
tales. Hay que distinguir los síndromes y las entidades
nosológicas. El síndrome comprende un conjunto de
síntomas que aparecen relacionados. Así, en el caso
SEMIOLOGÍA de las anemias , estas tienen como sustrato una altera-
Es la doctrina científica de las señales de enfermedad ción de la eritropoyesis. Sin embargo, una anemia he-
mediante la interpretación de los síntomas y los signos. molítica tiene como base un aumento de destrucción
Se distinguen dos tipos de señales de enfermedad: de los hematíes, y una anemia por déficit de hierro,
unas subjetivas, que son los síntomas (dolor, mareo), un trastorno de la hemoglobinogénesis. Otros síndro-
y otras objetivas, los signos (ictericia, cianosis). Los mes pueden ser la ictericia, la insuficiencia cardíaca
síntomas se comunican mediante la entrevista entre o la hipertensión arterial.
el médico y el enfermo, que permite elaborar la anam- Las entidades nosológicas son formas de enfermar
nesis. Los signos se recogen mediante los métodos de que tienen una causa, patogenia, fisiopatología, pato-
exploración directa general, la exploración de cada cronía específica y constante en cada enfermo. Syd-
aparato o sistema y las técnicas complementarias de enham describió estas formas de enfermar recogiendo
exploración. Ello requiere, por parte del estudiante los conocimientos obtenidos de la clínica y aplicán-
de medicina, la adquisición de la capacidad para la dolos a la individualidad de los pacientes. Son en-
obtención de estos signos, su reconocimiento e inter- tidades nosológicas cada una de las enfermedades
pretación. infecciosas, las intoxicaciones o las quemaduras. En
El médico intenta disponer del mayor número de la clínica, al atender inicialmente al enfermo es más
signos para poder realizar el diagnóstico. Para obte- frecuente enfrentarse con síndromes que con entida-
ner un diagnóstico diferencial acertado no importa des nosológicas.

- 6-
-l02
Acto médico.
Relación médico-enfermo
Javier García-Conde Bru

ACTO MÉDICO
Es un hecho radicalmente social que establece, como
señala Laín Entralgo, una relación técnica y amistosa
entre el médico , capaz de prestar ayuda, y el pacien-
te, necesitado de recibirla.
La relación amistosa se basa en la confianza y en la
confidencia. Ello significa respeto a la dignidad y a la
autonomía del paciente, que son aspectos necesarios
para la adecuada comunicación (sobre todo del diag-
nóstico) y que tienen un gran relieve en la conducta
ética de la relación médico-enfermo.
La situación del paciente o del enfermo, según
Laín Entralgo, tiene aspectos diferenciales muy im-
portantes entre lo que sería la actitud y la intención
en el acto médico. La actitud del enfermo puede
mostrar rasgos de confianza y desconfianza al mismo
tiempo, con una posición personal frente a la
propia enfermedad y con la experiencia de
situaciones análogas previas. La inten-
ción primaria del enfermo es recobrar
la salud, pero también aparecen como
intenciones posibles conocer la en-
fermedad, refugiarse en ella, simular
o someterse a un reconocimiento.
El médico debe tener una acti-
tud de considerar al enfermo como
ser humano, como paciente y como
cliente, es decir, una disposición
amistosa, científico-natural y profesio-
nal. Esta actitud ayuda al médico a descu-
brir su capacidad profesional y el significado
e su actu ación ante el enfermo, destacando la fina-
lidad de curar o aliviar el sufrimiento (cuidar) y el
aprendizaje o formación continua.
La actuación del médico debe ser moralmente bue-
na (virtud). La competencia y la capacidad para curar
o cuidar es la primera norma ética. La relación médi-
co-enfermo debe desarrollarse siempre basándose en
el respeto a la autonomía del paciente, con la corres-
pondiente consideración a su toma de decisiones. Por
otra parte, en la actuación médica se mezclan saber, - -7-
deber y poder, es decir, ciencia, moral y política. El
SECCIÓN Conceptos fundamentales

coste de la asistencia sanitaria y la compleja organi- Los principios éticos son de gran aplicación en la
zación que requiere, hacen que este sea otro factor medicina moderna. Los comités de ética asistencial y
importante y real en la relación médico-enfermo e los comités de ética e investigación intentan aplicar
incide, al mismo tiempo, en la necesidad de una gran estos principios a la asistencia y a la investigación
eficiencia en la práctica clínica. clínica y al mismo tiempo realizan un análisis en
En la actualidad, el sistema sanitario se ocupa profundidad de cada caso. La forma de analizar los
tanto de promocionar la salud como de atender las problemas éticos requiere deliberación y argumenta-
enfermedades . Por ello, no todas las personas aten- ción, es decir, se intenta ser más razonable que total-
didas por este sistema son enfermos. El paciente que mente racional o cuantificable. Para ello los comités
acude para someterse a un estudio relacionado con el tienen una representación competente de los sectores
diagnóstico precoz de un tumor no es un enfermo, y implicados en estas tareas y su actuación consiste en
tampoco lo es aquel que se somete a una exploración desarrollar mediante el diálogo (ética dialógica) y la
para detectar una enfermedad genética. El concepto deliberación (ética deliberativa). normas y decisiones
de «paciente» se aproxima más a una visión paterna- libres, razonablemente aceptadas por todos los parti-
lista, y por tanto de poca participación en las decisio- cipantes y por lo tanto universalizables (J. Habermas).
nes sobre la enfermedad. Por otra parte, la conside- La Ley de Sanidad y la Ley del Medicamento españo-
ración de «clientes de la sanidad» está basada en el las se refieren ampliamente a los aspectos éticos tanto
concepto de gestión clínica de la atención sanitaria. asistenciales como de investigación.
En resumen, el diagnóstico precoz, el estudio de las Los fines de la Medicina en el siglo xx1 (D. Gracia)
enfermedades hereditarias, la actitud activa de los pa- van a tener en cuenta los cambios de la vida y de la
cientes ante su enfermedad y el coste sanitario repre- Medicina. Estos tendrán relación con cambios de la
sentan aspectos de notable importancia en la relación imagen del profesional y cambios en los usuarios de
médico-paciente. los servicios de salud y en la toma de conciencia de
la sociedad en su conjunto. De estos cambios y situa-
ciones dependerán las orientaciones de la Bioética,
ÉTICA MÉDICA que se pueden formular de la siguiente manera: a)
aparición de constantes cambios tecnológicos que
En la toma de decisiones médicas es importante una manipulan la vida y la muerte; b) aplicación de la
conducta que permita, mediante un método científi- justicia en la Salud como bien universal: distribución
co, basado en el estudio de casos y en la aplicación de de recursos de forma equitativa, coste progresivo de
ciertos principios, poder realizar un análisis moral de la sanidad; c) educación de la ciudadanía para la ges-
las situaciones, considerando siempre que la decision tión, como personas automas , del cuerpo y la salud
ética debe ser siempre individual. ante la vida y la muerte , y d) diálogo verdadero in-
El análisis ético de los problemas médicos se basa terdisciplinar que conduzca a una reflexión conjunta
en la consideración de cuatro principios: interprofesional.
Autonomía: respeta el criterio de moralidad del
individuo. Como señala el profesor D. Gracia, la
razón humana se constituye en norma de mo- CONSENTIMIENTO INFORMADO
ralidad, y a ello se denomina «conciencia». Se Representa la expresión escrita de la relación médico-
limita la capacidad de autonomía de libertad y enfermo, en la que el paciente es informado de su pro-
de capacidad de escoger por la persuasión, la ceso y del tratamiento que se le ofrece sobre criterios
manipulación y la coacción. de beneficio/riesgo para que él adopte con libertad,
Beneficencia: el bien no se puede hacer en con- y después de recibir la información que necesite, la
tra de la voluntad de quien lo recibe; por ello decisión responsable que desee establecer.
este principio se subordina al de autonomía. Es En ciertas ocasiones se plantea al enfermo la posi-
necesario que el médico considere la importan- bilidad de participar en un ensayo clínico, y por tanto
cia de los valores de los enfermos. se le informa de las características metodológicas de
este y de su contenido.
Estos dos principios son relativos, mientras que los La norma jurídica de mayor rango que establece la
dos siguientes son casi siempre absolutos: obligatoriedad del consentimiento informado es el
No maleficencia: implica el principio de no Convenio para la Protección de los Derechos Huma-
hacer daño. Ello supone, junto al principio de nos y la dignidad del ser humano con respecto a la
beneficencia, extremar los posibles beneficios y aplicación de la biología y la medicina.
minimizar los posibles riesgos . Los elementos del consentimiento informado, se-
gún P. Simón, son los siguientes:
Justicia, expresada como equidad (Rawls). Con-
sidera la igualdad de oportunidades y el trato Continuidad: no es un hecho aislado, sino un
--
8 - igualatorio, junto con el apoyo al más necesi- proceso continuo (oral, comunicativo, delibera-
tado. tivo y prudencial).
CAPÍTULO 2 Acto médico. Relación médico-enfermo

■ Voluntariedad: debe ser un proceso libre, no Atención primaria


coaccionado ni manipulado. Comprende la asistencia prestada por médicos ge-
■ Información suficiente: tiene que explicar la neralistas, pediatras y enfermeras en los centros de
naturaleza, objetivos, riesgos/beneficios, efectos salud y consultorios y en el domicilio del paciente.
secundarios y otras posibles opciones. Es decir, Incluye los servicios de urgencia extrahospitalarios.
debe contener la información que se necesita El médico generalista filtra y regula el acceso del pa-
para tomar una decisión prudente. ciente al especialista (salvo ciertas urgencias y revi-
Existen, no obstante, situaciones en las que el he- siones de algunos procesos) .
ch o de no poder obtener el consentimiento constituye
una excepción moralmente legítima, esto es, lo qu e Asistencia especializada y hospitalaria
se entiende como «mal menor». Estas situaciones son Se presta en régimen ambulatorio (en consultas exter-
las siguientes : nas en el hospital o en centros de especialidades) o
mediante hospitalización. Cada área de salud dispo-
■ Urgencia vital.
ne de un hospital general. En la red pública española
Incapacidad del paciente . Ello obliga a que el hay 362 hospitales con 123 000 camas y un número
consentimiento informado se realice a través de de camas por 1 000 habitantes de 1 ,7. El gasto inverti-
sus representantes. do en sanidad es el 6,9 % del PIB .
Grave riesgo para la salud pública, lo que pue- El sistema sanitario debe tener unos niveles esti-
de incluir legítimas actuaciones sanitarias coac- mables de calidad, equidad y eficiencia. Ello supo-
tivas , aunque el médico no puede adoptarlas de ne alcanzar un nivel técnico acorde con el progreso
forma individual e independiente. científico, igualdad en el acceso a las prestaciones y
■ Imperativo legal o judicial. la creación de una conciencia de gasto y de sentido de
Privilegio terapéutico : esta situación está basa- la responsabilidad económica y también social.
da en el riesgo de que la información produzca
daño.
Así pues, el consentimiento informado debe con-
CONTENIDO DEL ACTO MÉDICO
siderarse como un proceso continu o, en el qu e la in- El contenido del acto médico, como relación técnica
formación debe ser la necesaria para que el paciente entre médico y enfermo, puede esquematizarse en los
tome decisiones y debe tener en cuenta el momento siguientes elementos :
en que se transmite la información y la situación en la
que se encuentra el paciente. Anamnesis.
Exploración.
Juicio diagnóstico.
SISTEMA NACIONAL DE SALUD Juicio pronóstico.
Indicación terapéutica.
Instaurado en la Ley de Sanidad, integra los di-
versos subsistemas sanitarios públicos (Seguridad El documento que reúne todos estos aspectos es la
Social, Beneficencia), configurándose como un con- historia clínica (Capítulo 3).
junto de Servicios de la Salud de la Administración
Central y de las Comunidades Autónomas. Extiende ANAMNESIS
a toda la población (98%) la asistencia sanitaria con
Es el conjun to de la información recogida sobre un
financiación pública y provisión también básica-
enfermo, relativa a su historia personal y a su enfer-
mente pública, completada con la atención priva-
medad.
da concertada. Ello supone la universalización del La anamnesis no debe ser un interrogatorio ni la
derecho de asistencia. Los principios de la Ley de contestación rígida a un cu estionario. Los protagonis-
Sanidad son: tas de esta conversación son el médico y el enfermo.
La forma en que el médico realiza esta recopilación
Prioridad a la promoción de la salud y a la pre- de datos es decisiva cu ando se trata de pacientes en
vención de enfermedades. coma, incapacita dos mentales o niños. Es necesario
■ Extensión de la asistencia a toda la población que el médico recoja el relato directo del proceso por
española de forma progresiva. parte del enfermo, además de captar lo que este per-
■ Acceso a la atención sanitaria en condiciones cibe como sufrimiento, valorando al enfermo como
de igualdad efectiva. paciente y como persona.
■ Superación de las desigualdades territoriales y Por otra parte, la conversación entre médico y en-
sociales. fermo debe reunir una serie de características, de las
■ Participación comunitaria a través de las corpo- cuales la más importante es la de saber escuchar y - --
9
raciones territoriales. saber transmitirle la importancia que tiene su expo-
SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

s1c10n para el diagnóstico y tratamiento.


Además, es necesario que la expresión del
médico sea sencilla, que utilice correcta-
mente la voz y los gestos, los cuales no de-
ben mostrar desinterés, temor o gravedad.
El ambiente donde se realiza la entrevista Historia clínica
debe ser el adecuado, sin ruidos ni interrup-
ciones. Al final es conveniente una breve y Datos administrativos/sociales:
clara recopilación de la conversación y la
comprobación de que el paciente ha com-
Motivo de la consulta o ingreso:
prendido lo que en ella se ha tratado.
La anamnesis es la parte fundamental del
acto médico. En ella se establece la relación Antecedentes personales. Hábitos y tratamiento habitual:
personal con el enfermo y se reafirman los
criterios de confianza hacia el médico, lo
que en cierto modo, ejerce un efecto psico- Antecedentes familiares:
terapéutico beneficioso. De la anamnesis
derivan la descripción de los síntomas y, de Anamnesis actual:
forma particular, el síntoma guía o manifes-
tación directriz para establecer o investigar
el diagnóstico. El médico debe profundizar Anamnesis o revisión sistemática por aparatos o sistemas:
en la forma de comienzo de la enfermedad,
analizar los síntomas fundamentales, es
Exploración física:
decir, su definición, forma de expresión,
intensidad, evolución en el tiempo y varia-
ciones con la postura, alimentación, sueño Juicio de orientación diagnóstica:
o medicación. Los datos que se obtienen en
la anamnesis deben servir para justificar la
Pruebas complementarias solicitadas:
petición de exploraciones y son el punto
de partida del tratamiento. Los síntomas y
los signos que recogen no deben configu-
rarse como señales aisladas de enfermedad;
deben, por el contrario, integrarse para in-
tentar comprender mejor la fisiopatología
que permite explicarlos y configurar el sín-
drome o la entidad nosológica, según sea la Figura Esquema de una historia clín ica tradicional.
forma de enfermar.
En la historia clínica figuran los antece-
ción instrumental las bioquímicas, microbiológicas,
dentes personales y familiares del paciente, la anam-
histopatológicas, inmunológicas, radiodiagnósticas,
nesis por apartados, la exploración, el juicio diag-
respiratorias, neurológicas, oftalmológicas, auditivas
nóstico, la indicación terapéutica, la evolución y el
resumen de los aspectos anteriores (Fig. 2-1). y otras muchas.

EXPLORACIÓN DIAGNÓSTICO
Después de obtener la información acerca de la enfer- Representa el acto clínico mediante el cual el mé-
medad del paciente, el médico lo explora para obte- dico reconoce la enfermedad y al enfermo como
ner los signos de la enfermedad. La exploración clí- persona que sufre, y, en consecuencia, interpreta el
nica inmediata comprende la inspección, palpación, proceso.
percusión y auscultación, que junto con la toma de la Con los síntomas y signos de enfermedad, el médi-
presión arterial y del pulso, peso y talla, representan co establece una hipótesis integradora sobre la forma
la forma más sencilla y habitual de aproximarse al de enfermar e induce, desde estos datos, las caracte-
diagnóstico y de solicitar exploraciones instrumenta- rísticas fisiopatológicas y patológicas del proceso.
les justificadas de mayor o menor complejidad. Por ello, el juicio diagnóstico es: a) genérico, defi-
La finalidad de la exploración es reunir los signos niendo el estado de enfermedad; b) específico, reco-
necesarios para realizar los juicios fundamentales en nociendo el síndrome o la especie morbosa; c) indivi-
el acto médico (el diagnóstico y el pronóstico), así dual, es decir, centrado en el caso clínico, y d) perso-
como lo que deriva de ellos, es decir, la indicación nal, es decir, orientado a la persona, con su particular
terapéutica. Se utilizan como técnicas de explora- forma de vivir la enfermedad.
CAPÍTULO 2 Acto médico. Relación médico-enfermo

Características de las pruebas diagnósticas del proceso etiológico fisiopatológico , patogénico y


La solicitud de exploraciones ha aumentado conside- pronóstico.
rablemente en los últimos años, lo que en general ha Diagnóstico diferencial
incrementado la precisión en el diagnóstico y el co-
nocimiento de la extensión de las enfermedades. Sin Consiste en destacar el síntoma principal y, a partir
embargo, ha hecho más lento en ocasiones el proceso de él, situarlo en el contexto de otras enfermedades
diagnóstico y además lo ha encarecido. Esta situación donde puede aparecer. Se procede a continuación al
se debe a la tecnificación de la medicina, a la utiliza- análisis de otros síntomas y signos y a perfilar los cri-
ción de procedimientos diagnósticos por médicos en terios de especificidad y de compatibilidad entre el
formación (que sienten la necesidad de solicitar un conjunto del cuadro clínico.
mayor número de pruebas para hacer frente a su inse-
guridad) y al creciente índice de denuncias judiciales Razonamiento clínico aplicado al diagnóstico
interpuestas por los enfermos, que han creado una El diagnóstico es el proceso de reconocimiento de los
reacción de defensa por parte del médico, de forma enfermos por los síntomas y los signos. El proceso se
que este tiende a protegerse con el tipo de exploracio- inicia recogiendo los síntomas y los signos mediante
nes que considera necesario para este fin. la exploración clínica, y continúa con las exploracio-
La solicitud de una prueba con intención diagnós- nes complementarias.
tica debe reunir las siguientes características:
Las fases diagnósticas comprenden las siguientes
Debe justificar la lógica de la exploración solici- etapas:
tada.
■ Debe precisar la información que deriva de ella. ■ Generación de hipótesis diagnósticas .
■ Debe servir para tomar decisiones en función de ■ Proceso para la confirmación de estas hipótesis.
los resultados. ■ Análisis de los puntos cruciales del diagnóstico.
■ Finalización del procedimiento diagnóstico.
Las pruebas diagnósticas se utilizan con las si-
guientes orientaciones: La aportación del razonamiento basado en proba-
■ Excluir una enfermedad en grupos de personas bilidades se realiza en dos niveles :
(detección selectiva). ■ Generación de hipótesis.
■ Control en individuos de alto riesgo. ■ Confirmación de hipótesis.
■ Confirmar el diagnóstico de una enfermedad.
Definir el pronóstico. La actividad diagnóstica no debe considerarse un
■ Indicar el tratamiento . procedimiento lineal. Se trata más bien de varias eta-
pas sucesivas en las cuales se adoptan decisiones que
Valor de las pruebas confirman o descartan aspectos relacionados con el
Las pruebas unen a su valor semiológico las caracte- diagnóstico objeto de estudio.
rísticas de sensibilidad, especificidad y valor predic- El diagnóstico necesita alcanzar la mayor precisión
tivo positivo o negativo (véase Capítulo 5). posible para establecer las medidas terapéuticas más
adecuadas. No obstante, en ocasiones debe iniciarse
Métodos para el diagnóstico el tratamiento (empírico) sobre la base de un diagnós-
El profesor Laín Entralgo estableció cuatro sistemas, tico de sospecha. Estas situaciones implican también
de los cuales el más utilizado por su adecuada meto- aspectos éticos.
dología es el diagnóstico diferencial.
Comunicación del diagnóstico
Diagnóstico intuitivo
El diagnóstico debe compartirse con el enfermo.
Integra y define de forma inmediata y por asociación
Cuando a un enfermo se le oculta la verdad, se está
la especie morbosa. Por consiguiente, es un método
empírico basado en la experiencia. atentando contra la dignidad de una persona que ha
depositado en el médico confianza y amistad. Es di-
Diagnóstico hipotético fícil que el paciente colabore y adopte una conducta
Sustituye el juicio diagnóstico definitivo y sólido por activa ante su enfermedad si no se le comunica el
una hipótesis, que debe ser confirmada por explora- diagnóstico, su probable evolución, las complicacio-
ciones subsiguientes. nes que puede sufrir, las posibilidades de curarse o
de quedar con alguna lesión residual, la medicación
Diagnóstico inductivo que se le va a administrar y los efectos beneficiosos o
Desde los aspectos particulares intenta, por un pro- secundarios que tiene. Cuando se procede adecuada-
ceso inductivo, conocer aspectos generales y amplios mente y se informa con corrección, el paciente tiene
de la realidad de la enfermedad. No solo se detiene la posibilidad de elegir y de tomar la decisión que _ 1_1_
en el diagnóstico clínico, sino que induce el análisis considere más oportuna para él. Informar no equivale
SECCIÓN Conceptos fundamentales

a suprimir la esperanza, y hace necesario aumentar el de enfermedad y se predicen grupos de riesgo evolu-
apoyo del médico hacia el paciente. tivo diferente (Fig. 2-2).
La medicina actual, en este aspecto, debe defender Los factores pronósticos ayudan a conocer la evolu-
el principio de autonomía del enfermo; el médico no ción natural de la enfermedad, que no es más que el
debe adoptar una actitud paternalista con el deseo de curso de una enfermedad en subgrupos de pacientes
realizar el mejor bien según su interpretación, pero definidos por factores pronósticos qu e permiten el
con ocultación de la verdad y sin la opinión de su pa- conocimiento del proceso y su evolución (Fig. 2-3).
ciente. Es cierto que, en ocasiones, comunicar el diag- Los factores pronósticos ofrecen información para
nóstico puede producir un grave impacto al enfermo . conocer la evolución del proceso, para el tratamiento
En estos casos se utiliza el principio del privilegio de las enfermedades y para la comparación y la homo-
terapéutico y, como excepción, se omite la comuni- geneidad de los resultados de diversos estudios clíni-
cación del diagnóstico. Ello debe ser una excepción y cos. Su utilidad comprende los siguientes aspectos:
no debe convertirse en norma. A esta actuación tiene
a) Ajustar las diferencias existentes cuando se
una cierta proclividad la cultura latina. También se
comparan tratamientos, sobre todo cuando no
omite la opinión del paciente cuando está en coma,
se lleva a cabo mediante un ensayo aleatorizado.
incapacitado o en urgencias, y en los niños , que no
b) Diseñar estudios en los que , para comparar la
pueden tomar una decisión.
eficacia de un tratamiento, este debe aplicarse
La comunicación del diagnóstico debe ser veraz,
en grupos de pacientes con factores pronósticos
ajustada a la capacidad de asimilación del paciente
similares.
y progresiva, si fuera necesario. Le debe permitir to-
c) Predecir la evolución individual de los pa-
mar decisiones, tanto más cuando estas tengan que
cientes.
ver con la calidad de vida, la aparición de lesiones
d) Analizar la forma de intervenir en el curso de la
residuales o riesgo de mortalidad. El enfermo, si así lo
enfermedad.
desea, debe tomar decisiones durante su enfermedad
e) Conocer la evolución natural de la enfermedad.
y por ello se le debe tratar como un ser autónomo. La
f) Explorar las variaciones o interacciones detec-
autonomía no es un valor absoluto y, en ocasiones,
tadas.
debe ser subsidiaria al principio de no causar daño.
La información debe tener como interlocutor directo
al paciente; es una mala práctica médica la informa- 100
ción a la familia excluyendo al paciente; esta acción QJ
'
aísla al enfermo del médico. ¿Se debe decir la verdad '"O

a los enfermos? Se debe contestar diciendo: se debe


ser veraz con los enfermos dentro de las pautas que
ls~
·-
-
QJ -

-
'"O

"'"'
·u~ 50
se han señalado. ~ E
> ~
·- QJ
~~
., e
a. QJ

JUICIO PRONÓSTICO V,
::,

Es el conocimiento relacionado con la probable evo- o


2 3 4 5
lución del enfermo. Este juicio se basa en los signos
clínicos, los datos recogidos en la exploración y los a) Años
datos proporcionados por la situación clínica del
enfermo, lo que los anglosajones denominan perfor- 100
mance status (PSJ. '"O
QJ

Hasta muy recientemente, la apreciación del pro- 15 ~


QJ -

·- '"O
-
nóstico era empírica y se basaba en la experiencia de -

cada médico , que consideraba que en casos determi- "'"' 50


·u~
~ E
> ~
nados la evolución sería la curación o la muerte en '¡.,,: J!!e
pocos meses . Esta forma de obrar daba un gran pres- a.
::,
QJ

tigio: acertar el momento en que el paciente fallece- V,

ría era motivo de consideración por encima de otras o


muchas actuaciones a lo largo de la enfermedad. Es 2 3 4 5
lógico que ello sucediera así, ya que los oráculos y b) Años
los astrólogos han gozado de gran popularidad. Ac-
tualmente, el estudio de los factores pronósticos en --- Bajo riesgo A lto riesgo

cada enfermedad suele hacerse mediante métodos es-


tadísticos multifactoriales, que requieren un número Figura a) Test idea l que diferencia clara mente
importante de casos. De este modo, los factores pro- grupos de alto riesgo y bajo riesgo. b) Test pronóstico
nósticos se expresan en una representación mediante simi lar al encontrado en clíni ca co n escasa diferencia
12
curvas actuariales de supervivencia o de tiempo libre entre ambos gru pos.
CAPITULO 2 Acto médico. Relación médico-enfermo

Los factores pronósticos dependen generalmen- (proporción de pacientes que mueren o sufren
te de: otro suceso en un intervalo o unidad de tiempo).
c) El pronóstico individual, que es la valoración
a) Particularidades del enfermo.
más personalizada y, por tanto , la más impor-
b) Características de la enfermedad (p . ej ., tipo de
tante que deriva del estudio de los diversos
tumor).
signos que configuran la expresión clínica de
c) Interacción entre enfermo y enfermedad.
la enfermedad. Actualmente se utilizan en al-
d) Efecto del tratamiento.
gunos procesos sistemas de puntuación para
Rozman sintetiza la visión actual sobre los factores determinados signos que expresan mal pronós-
pronósticos en las enfermedades distinguiendo: a) el tico, y que traducen en una curva actuaria} de
parámetro que se pretende valorar, como puede ser: mejor o peor pronóstico, según los casos.
la supervivencia, la probabilidad de obtener curación
Clásicamente, se ha venido considerando que
en una determinada situación clínica, con recupera-
el juicio pronóstico debía abordar los siguientes as-
ción total o parcial de las funciones orgánicas y la
pectos:
probabilidad de recaída o de una complicación den-
tro del proceso; b) el objeto del quehacer pronóstico, Contenido: fundamentalmente orientado a los
como puede ser la extrapolación respecto a la pobla- aspectos relacionados con la vida y superviven-
ción general de un país, un grupo de individuos afec- cia (quod vitam}; y cuyos grados serían leve, gra-
tados por una enfermedad y un sujeto aislado. ve, muy grave, mortal , y con la función (quod
Para estos estudios se utilizan: functionem}: recuperación o enfermedad resi-
dual.
a) Las tablas de mortalidad del Instituto Nacional
Certeza: categórico , condicional e indetermi-
de Estadística, con las que se puede calcular la nado.
supervivencia de la población general y la es- Forma: explícito y reservado.
peranza de vida (expectativa media de supervi-
vencia según edad y sexo). El médico debe expresar el pronóstico con cautela,
b) La curva actuarial de supervivencia, que permi- sobre todo en los casos muy desfavorables.
te expresar la historia natural de la enfermedad. La gran importancia del pronóstico en el momen-
Con ella se analiza el modelo de mortalidad, to actual radica en su proyección individual y en la
los datos pronósticos y la eficacia de los trata- posibilidad de diferenciar grupos para aplicar trata-
mientos Figs. 2-2 y 2-3. Estas gráficas permiten mientos diferentes y de establecer una comparación
calcular la probabilidad de supervivencia de un entre ensayos clínicos realizados en diferentes cen-
grupo de individuos, algunos de los cuales son tros.
observados hasta que se produce el suceso obje- El pronóstico es el proceso que permite prever la
to de estudio (muerte o recaída). evolución de una enfermedad, sus complicaciones y
La curva de supervivencia permite obtener su final. Representa un criterio basado en el conoci-
datos sobre el pronóstico expresados en la me- miento de las probabilidades absolutas o relativas de
diana de supervivencia (tiempo en que la curva la posible evolución de la enfermedad y de los facto-
desciende al 50 %) , o en la función de riesgo res pronósticos que influyen en estas probabilidades.
El pronóstico interesa al médico , al paciente y a
su entorno. Exige una gran prudencia y respeto del
secreto profesional.
100
\
INDICACIÓN TERAPÉUTICA
~ a
"'
'ü 50 Los avances más importantes de la ciencia moderna
~ van orientados a prevenir y curar las enfermedades y
>
-~ a promover la salud. Sin embargo, no todas las enfer-
cu b
o.. medades pueden curarse y, por otra parte, hay pacien-
:::,
V,

o tes que padecen una enfermedad larga y penosa sin


2 3 4 5 Años que exista un tratamiento curativo.
Los tratamientos, en cuanto a su finalidad, pue-
den considerarse como curativos o como paliativos o
Figura Representación actuaria! de superviven- de cuidados. Cuando la acción es curativa se preten-
cia libre de enfermedad. de que: a) desaparezca todo signo de enfermedad; b)
a) Curva de descenso rápido expresiva de la mortali- el paciente retorne a su posición social; c) la enferme-
dad hasta el 2º año. dad no afecte negativamente a la vida del paciente.
b) Fase de meseta expresiva de la posibilidad de cura- Cuando la acción es paliativa (cuidar), la finalidad
13
ción en un 20 % de casos. es el control de los síntomas y el mayor bienestar del
SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

enfermo y su familia. El paradigma de esta situación avances que se han producido recientemente. Estos
es el paciente oncológico. El control de los síntomas, son los siguientes:
de gran eficacia, equivale al control del dolor y de los
a) Desarrollo de estrategias para buscar y obtener
trastornos digestivos, la alimentación y nutrición, los de forma eficaz evidencias que tengan validez y
cuidados de la boca y el tratamiento de los síntomas relevancia.
respiratorios. b) Elaboración de revisiones sistemáticas y resú-
El tratamiento requiere desde el inicio una plani- menes concisos sobre los efectos de la asisten-
ficación. El enfermo debe ser informado sobre qué cia médica.
tratamiento va a recibir y los efectos curativos o pa- c) Creación de sistemas de información que per-
liativos del mismo, así como de su posible toxicidad. miten obtener resultados inmediatos.
El tratamiento consiste en la utilización de medios d) Identificación y aplicación de estrategias efica-
susceptibles de modificar de forma favorable la evo- ces para el aprendizaje permanente (formación
lución de los enfermos. Los cuidados consisten en continuada) y para mejorar nuestra actuación
medidas mediante las cuales se atiende a un paciente. clínica.
La conducta terapéutica se desarrolla en las si-
guientes etapas:
NUEVAS ORIENTACIONES
a) Decisión de la indicación terapéutica.
b) Aplicación de la terapéutica propiamente di- DE LA MEDICINA
cha. En los últimos veinte años la sociedad ha experi-
c) Supervisión de los efectos del tratamiento. mentado una serie de transformaciones , entre las
d) Decisión referente al final del tratamiento. cuales figura la disponibilidad de recursos, que han
La terapéutica requiere ejercer una vigilancia rigu- cambiado de forma profunda la relación médico-en-
rosa de la eficacia y de los efectos colaterales. fermo y, en términos generales, la sanidad de diver-
La utilización de un placebo sin ningún principio sos países. Los aspectos más notables de la medicina
curativo plantea serios problemas éticos. La respuesta actual son:
a un placebo no se puede interpretar como una prue- a) Paso de una medicina paternalista a una medici-
ba de no organicidad del proceso patológico. na autonomista, donde el paciente tiene libertad
para decidir después de recibir una información
suficiente y dialogada (autonomía dialógica).
MEDICINA BASADA EN LA EVIDENCIA (MBE) b) El consentimiento informado es la expresión de
Consiste, según D. L. Sackett, en la integración de las que el paciente ha comprendido la información
mejores pruebas de la investigación con la experien- y, en consecuencia, la acepta o la rechaza.
cia clínica y los valores del paciente. c) Gran afluencia de información que es necesario
Ello requiere: recoger y sobre la que hay que proyectar una
actitud creativa. La introducción masiva de or-
a) Investigación destacada, sobre todo en el ám- denadores y el conocimiento del inglés (como
bito de la investigación clínica centrada en el idioma científico de la medicina) por parte de
paciente, y en relación con la precisión de las un número considerable de profesionales sani-
pruebas diagnósticas, el poder de los marcado- tarios han sido elementos básicos de la informa-
res pronósticos, la eficacia y seguridad de las ción médica.
pautas terapéuticas, la rehabilitación y las me- d) Extensión de la Seguridad Social a la totalidad
didas preventivas. de los ciudadanos y de seguros privados a casi
b) Por experiencia clínica se entiende la capacidad el 50 % de ellos.
de utilizar nuestras habilidades clínicas y la ex- e) Desarrollo de las más modernas tecnologías en
periencia del pasado para identificar el estado el sector público.
de salud y el diagnóstico específico de cada pa- f) Participación activa del enfermo en el sistema
ciente, los riesgos individuales y los beneficios sanitario. El enfermo conoce y expresa lo que
de posibles intervenciones. desea en el ámbito de la atención médica y de
c) Los valores del paciente son sus preferencias , los cuidados sanitarios.
preocupaciones y expectativas específicas, las g) A los médicos se les exige actualmente compe-
· cuales deben integrarse en las decisiones clíni- tencia y una actuación ética adecuada. Los con-
cas dirigidas que puedan servir mejor al enfer- flictos pueden dirimirse judicialmente.
mo. h) Igualdad de oportunidades. Cuando sea nece-
sario establecer diferencias, estas deben ir en
La gran difusión de la MBE se ha producido por beneficio de los más necesitados (criterio de
una serie de consideraciones asumidas por un núme- equidad).
14
ro cada vez mayor de médicos y por determinados i) Medicina basada en la evidencia.
·103
Historia clínica
Jaime Merino Sánchez, Vicente F. Gil Guillén

CONCEPTO
La historia clínica es una recopilación ordenada de la
biografía del sujeto en lo que respecta a las manifes-
taciones de su enfermedad y que ayuda a la compren-
sión de todos sus problemas de salud. No busca datos
sino información, que el médico obtiene del propio
paciente o sus cuidadores mediante una entrevista o
diálogo, y se basa en una relación humana de ayuda.
La historia clínica es clave para alcanzar un diagnós-
tico y con él curar o aliviar al enfermo. Tras ella se
debe explorar al enfermo y elaborar un diagnostico
de sospecha acerca de lo que padece; luego se le so-
licitan pruebas complementarias que lo verifiquen.
La historia, además de obtener información para el
diagnóstico, nos relaciona con el enfermo, nos permi-
te educarle y favorecer su motivación.
La práctica médica es un equilibrio entre ciencia y
arte: combina datos científicos y relación humana.
El profesional debe ser un experto y sus actua-
ciones deben tener una base científica, por
lo que importa que sea hábil en la rea-
lización de las historias clínicas. Una
buena historia clínica se obtiene si el
entrevistador conoce cómo se expre-
san las enfermedades (patología), ha
aprendido a reconocerlas en los en-
fermos (clínica) y tiene habilidades
para recoger esas expresiones (los
síntomas y signos: semiotecnia) e in-
terpretarlos (semiología) en un enfer-
mo concreto. Estas habilidades pueden
ser aprendidas. Es un deber de los profe-
sores facilitar su adquisición y obligación de
os alumnos adquirirlas.

NORMAS PRÁCTICAS PARA LA ELABORACIÓN


DE LA HISTORIA CLÍNICA
La historia clínica es clave para orientar el juicio
diagnóstico y la selección de las pruebas complemen-
tarias a realizar. Conviene que sea lo más completa y
ordenada posible. Con frecuencia va a ser utilizada _ 1_5_
por diversos profesionales, por lo que (si está escrita
SECCIÓN Conceptos fundamentales

a mano) debe ser legible y si se utilizan abreviaturas sea empático (sea capaz de colocarse en el lugar del
deben ser de comprensión general. enfermo). y asertivo (expresar sus convicciones pero
Es importante iniciar la entrevista presentándose al respetando las del enfermo). También conviene cer-
enfermo, dialogar con él de forma franca, respetuosa, ciorarse de que ha entendido Jo que Je decimos, resu-
con un lenguaje sencillo que evite los términos técni- miendo o recopilando la información.
cos y ser consciente de que a la vez nos expresamos En la escucha proactiva ayuda mucho asentir, mi-
con un lenguaje no verbal que el enfermo percibe. rar a los ojos, no interrumpir, esperar tras cada frase
Influimos en él con nuestra actitud. Lo hacemos a tra- del otro, no precipitarse en los juicios, no esperar oír
vés de: a) nuestro vestuario y apariencia (artifáctica); lo que se desea. También ayuda repetir, verificar que
b) nuestra postura o energía (quinésica); c) la distan- se nos ha entendido, resumir de vez en cuando y sa-
cia entre ambos , el espacio general (proxémica); d) el ber guardar un silencio activo si hay componentes de
contacto ocular (oculística), y e) el tono de nuestra emotividad en la situación. Y como en toda actividad
voz (paralingüística) (Tabla 3-1). humana las relaciones establecen reciprocidad: así le
Luego se le debe preguntar por el motivo de la con- tratamos o «nos cae», así nos tratará o «le caeremos».
sulta y/o el ingreso. Si hay varios conviene que señale Nuestra manera de escuchar y comunicar ayuda a ga-
su importancia. Hay que recordar que el enfermo no narse el aprecio y respeto de los demás y tiene mucho
sabe medicina y puede omitir información por no re- que ver con la colaboración que conseguimos. Puede
cordarla o no considerarla relevante para el diagnósti- ser útil acabar solicitándole que señale algún aspecto
co, o por el contrario ser excesivamente minucioso en que no se haya comentado y que desee plantear.
aspectos poco trascendentes. El entrevistador con sus En la realización de la historia clínica debemos es-
preguntas debe orientar sus contendidos. timular a que el enfermo cuente Jo que Je pasa y tratar
Durante su realización el paciente debe sentirse có- de interpretar sus manifestaciones, siendo muy im-
modo física y m entalmente, por lo que debemos evi- portante conocer cómo valora sus síntomas y lo que
tar preguntas que le hagan sentirse torpe o desorien- para él representa la enfermedad. Es un abordaje que
tado; conviene que sean abiertas , que no induzcan las se llama bio-psico-social ya que tiene en cuenta los
respuestas . Es preferible preguntar: ¿Cómo ocurrió? componentes de enfermedad orgánica, psíquica y las
en vez de: ¿Le ocurre si come? Si hay que hacer pre- implicaciones sociales de cada caso (Tabla 3-2).
guntas embarazosas (p. ej. , referidas a sexualidad o Es conveniente que el enfermo se sienta atendido,
hábitos) es preferible adoptar un tono neutro, profe- por lo que es preferible que el médico se limite a to-
sional. Y ayudarle: «Dígame más sobre ». mar notas generales y la historia se complete luego.
Importa reflexionar con el paciente: «Veo que esto le Las prisas y las interrupciones dificultan hacer una
molesta». También legitimarle, apoyarle o reforzarle: buena historia. Cuando el entrevistador tiene gran ex-
«Entiendo lo que siente », «Estoy aquí para ayudarle». periencia la historia puede ser esquemática o concisa,
Hacer la historia también permite educar sobre la cuando no es así es preferible ser minucioso, pero
enfermedad, su pronóstico y su tratamiento. siempre ordenado. Cuando en la historia se expresa
La historia es el resultado de un diálogo o conver- que una manifestación no existe implica que se ha
sación donde el entrevistador debe preguntar, pero es formulado la pregunta y existe constancia de su au-
muy importante que deje hablar y sepa oír. Ese diálo- sencia. Si no consta, pudo haber estado presente y
go debe ser dirigido. Debe escuchar lo que se le dice no anotarse porque la historia es incompleta. La ex-
e interpretarlo. Una escucha activa supone interesar- periencia favorece la realización de buenas historias
se al 100 % por lo que se está haciendo y el enfermo clínicas, pero todas exigen tiempo y paciencia.
dice. Supone escuchar para entender, no para con- Siempre que sea posible la historia debe obtener-
testar. Importa que el enfermo entienda que estamos se del enfermo, pero en ocasiones la colaboración de
interesados por sus problemas, que el entrevistador

---------- Tabla Formas de ver la enfermedad


Tabla Puntos clave en la por el enfermo
realización de las historias clínicas AMENAZA: aporta dificu ltad y contratiempos
Implica dudas
Dedicarse plenamente a lo que se hace,
atender al enfermo RETO : le exige adoptar estrategias de
Cuidar la comunicación verbal y no verbal afrontamiento y lucha
Escuchar para entender, ser empático y asertivo CASTIGO : le genera resignación, pasividad,
Facilitar al enfermo que se exprese aceptación
Dirigir el proceso: ser conciso, ordenado ENEMIGO: provoca ansiedad , exige lucha o
A la vez informar, educar y motivar
huida; si dura le agota
16
CAPITULO 3 Historia clínica

familiares, amigos o cuidadores es imprescindible e Barreras en la comunicación


interesante, sobre todo si el enfermo no puede hacer- Deben cuidarse los factores ambientales y favorecer
lo o los invita a que estén presentes, ya que hay que la privacidad, por lo que la historia se realizará en
recordar la importanica de la confidencialidad. un ambiente tranquilo y recogido. La relación se dis-
El entrevistador selecciona la o las manifestaciones torsiona si en la habitación existen otros enfermos o
clínicas de mayor trascendencia y trata de asociarlas personal que no garantizan la intimidad, o si el lugar
a alteraciones de algún órgano o aparato y las orde- o el ambiente es inadecuado. En ocasiones existen
na en el tiempo. Las preguntas se orientan en base a circunstancias que la interfieren o dificultan. Convie-
las respuestas del enfermo, que le sugieren posibles ne que las conozcamos y de ser posible las evitemos.
diagnósticos. Elige el llamado signo o síntoma guía. La Tabla 3-4 recoge las principales.
Con él orienta un posible diagnóstico, bien genérico
(de tipo sindrómico) o lo más específico posible (de MODELOS DE HISTORIA CLÍNICA
enfermedad) . Es importante tener una mente abierta
y no encuadrar las manifestaciones que el enfermo Nos centraremos en la historia clínica tradicional, la
relata en un diagnóstico preconcebido, manteniendo historia orientada por problemas y la entrevista mo-
abierta la posibilidad de varios, pero tratando de ex- tivacional.
plicar lo que ha sucedido con uno o los menos diag-
nósticos posibles (hipótesis integradora). HISTORIA CLÍNICA TRADICIONAL:
CONTENIDOS
CARACTERÍSTICAS DEL BUEN ENTREVISTADOR Incluye los epígrafes que se describen a continuación.
Y BARRERAS EN LA COMUNICACIÓN Se deben cubrir todos, de forma metódica pero flexi-
ble, ajustando cada uno de ellos a las características
El entrevistador debe ser: a) empátíco: tener capaci- del enfermo y la situación en que nos encontramos.
dad para comprender los sentimientos y emociones Si no se ob tienen del enfermo (p. ej., si está confuso o
del enfermo y ser capaz de transmitirle que se le ha desorientado) conviene reseñar quién la ofrece (fami-
entendido; b) respetuoso con la forma que tiene el liar, cuidador) y el motivo.
enfermo de ver sus problemas o conducir su vida; Privacidad y confidencialidad son esenciales, por
c) cordial: aumentará la confianza en el enfermo; d) lo que otros testigos deben ser aceptados por el enfer-
tener autocontrol: ser capaz de contenerse y dirigir en mo. Importan que tanto médico como enfermo estén
todo momento la entrevista; e) asertivo: asumir con cómodos durante la entrevista.
plenitud los derechos y los deberes de su papel como
médico: afirmar o negar con seguridad. Los enfermos Datos de filiación
aceptan mal la inseguridad o la información contra- En ocasiones figuran recogidos por la administración.
dictoria, y f) concreto, es decir, capaz de definir los En muchos casos es muy útil saber la edad y sexo del
términos de la entrevista o la relación con el enfermo. paciente y su lugar habitual de residencia (recordar
El médico (entrevistador) puede adoptar alguno de los que hay enfermedades más prevalentes en relación
modelos de actuación que se recogen en la Tabla 3-3. con esos aspectos), ocupación (enfermedades profe-

Tabla Actuación del entrevistador: ventajas e inconvenientes


TIPOS DE ENTREVISTADOR ASPECTOS POSITIVOS LIMITACIONES DEL MODELO
Técnico Predomina la Falta cordialidad y empatía. Se infravalora la
profesionalidad, los subjetividad del enfermo
criterios técnicos
Sacerdote-padre Conlleva asertividad, Autoridad excesiva. Transmite las propias
aporta tranquilidad y convicciones, convence sin respetar la opinión
cordialidad del paciente. Falta empatía y concreción
Compañero-camarada Gran empatía, respeto, Pérdida de la distancia terapéutica u objetividad.
cordialidad Contenidos profesionales pobres. No hay
concreción en el análisis de los problemas
Contractual-centrado en el Respeto a la autonomía No tiene
paciente del enfermo
L_ ----,-,-
SECCIÓN I Conceptos fundamentales

te , sordo, etc.), la cronología de aparición, que hace


I Tabla -4 Interferencias referencia a la frecuencia y periodicidad de los episo-
dios dolorosos, las circunstancias que Jo modifican
en la comunicación médico-enfermo bien en sentido de aliviarlo o agravarlo, por ejemplo,
comer, dormir, si existen otras manifestaciones que
Dependientes del paciente
se asocien a él, si el cuadro o una situación similar
Excesiva tensión emocional estuvo presente en el pasado, cuál fue la evolu ción,
Problemática física (hipoacusia, incapacidades) así como los resultados de las terapéuticas aplicadas
si se habían indicado. En esencia se trata de objetivar
Problemática psíquica: somatizaciones, las manifestaciones lo más posible e intentar cuanti-
ansiedad ficar los hallazgos jerarquizando su importancia.
Dependientes del médico Es conveniente incluir en este epígrafe una pregun-
ta más: ¿Cómo percibe el enfermo esa problemática?,
Estado emocional: bum-out qué le preocupa de ella y cómo le afecta a su situación
Prejuicios de raza, sexo, etc. vital. Ello permitirá definir mejor los objetivos que el
Interferencias sociales, prestigio médico debe proponerle.

Interferencias económicas Antecedentes personales y hábitos


Interferencias científicas (Investigación) Se refieren tanto a la enfermedad orgánica, las capaci-
Capacidades para la entrevista: comunicación dades funcionales del enfermo y los aspectos psicoso-
verbal y no verbal ciales (paro, dependencia, etc.).
Entre los antecedentes se recogen todas las enfer-
Dependientes del medio medades médicas, quirúrgicas o traumatismos que ha
Escaso tiempo para la entrevista padecido, con expresión de la fecha en que se produ-
jeron y su grado de control. Tan1bién se deben anotar
Interrupciones (teléfono, etc.) si hay antecedentes de embarazos, abortos y partos.
Ambiente inadecuado (ruido, frío, pasillos, etc.) Conviene recoger la existencia de reacciones alér-
gicas a medicamentos, aunque en ocasiones el dato
Falta de material o instrumentos aparezca impreciso y no se conozca bien el agente
implicado. Es importante anotar el consumo habitual
de medicación, así como las hospitalizaciones y la
sionales), y dirección o domicilio (necesidad de con- atención en diversas consultas especializadas . Los
tactos ulteriores). antecedentes de enfermedades psiquiátricas deben
Estos datos , aparte de un valor administrativo, lo recogerse con la mayor precisión posible.
tienen desde los aspectos epidemiológicos, clínicos e En este epígrafe también se debe hacer referencia
incluso sociales. a los hábitos vitales del enfermo : consumo de alco-
hol (unidades/día) y tipo , tabaco (años/paquete), la
actividad física que realiza, la observancia de dietas,
Motivo de consulta o ingreso patrón del sueño, etc.
En una o pocas palabras se señala ese motivo. En La relación enfermedad-actividad sociolaboral es
determinados casos debe indicarse cómo llegó el pa- importante, por lo que debe recogerse el tipo de vida
ciente al centro sanitario. que realiza, su actividad laboral, cómo afecta la enfer-
medad a las actividades de la vida diaria, los soportes
Anamnesis o historia actual existentes en su medio, la responsabilidad familiar que
tiene e incluso información sobre su vivienda o trabajo.
Recoge toda la información referida al proceso por
el que el enfermo es atendido. Tradicionalmente de-
ben responderse tres preguntas: ¿qué le pasa?, ¿des- Antecedentes familiares
de cuándo? y ¿a qué lo atribuye? Conviene que el En este epígrafe se recogen las enfermedades impor-
médico seleccione, de entre las manifestaciones que tantes presentes en los familiares (habitualmente de
el enfermo ofrece, aquellas que parezcan de mayor los de primer grado). Se indica su edad o el momento
importancia para obtener una máxima información del fallecimiento y la causa. Es de gran utilidad cuan-
de ellas. Pueden ser subjetivas (síntomas = p . ej., do se plantea la posible existencia de enfermedades
dolores) u objetivas (signos = p. ej ., fiebre). Son los hereditarias. En este caso puede ser útil dibujar un
llamados signos-síntomas guía. Supongamos que se árbol genealógico. La Fig 3-1 expresa los principales
trata de un cuadro doloroso. Preguntaremos por su signos con que se representan los miembros del árbol.
forma de comienzo (súbito, gradual), por su locali- Ese epígrafe también es importante cuando se sospe-
zación en el organismo e irradiación, su duración, chan enfermedades ambientales o convivenciales (in-
intensidad, carácter o cualidad (pulsátil, desgarran- fectocontagiosas).
CAPÍTULO 3 Historia clínica

Generaciones
Tabla Revisión sistemática
del enfermo: preguntas a realizar sobre
problemas en los diferentes aparatos
1 1 o sistemas orgánicos

l'caso
rL rL ?caso
Digestivo: presencia de náuseas, vómitos,
ardores, dolor, estreñimiento o diarrea,
sangrados por boca o heces, «gases»...
varón mujer l aborto
enlace
Respiratorio: tos, expectoración, disnea
(«fatiga» o «ahogo» ), dolor torácico.
➔ ➔ afectado - enlace consanguíneo
Cardiovascular: disnea, presión arterial
elevada, dolor torácico, palpitaciones, varices,
Figu ra Representación de un árbol genealógico.
flebitis , dolor a la marcha, hinchazón en tobillos
o piernas.
Genitourinario: aumento de la frecuencia
Anamnesis por aparatos urinaria, incontinencia o dolor al orinar, cantidad
de orina, micciones nocturnas, bultos en mama
Revisión sistemática por aparatos o sistemas: aquí se o en genitales, cambios en la esfera sexual.
revisan de forma breve y ordenada las manifestacio-
Locomotor: dolores óseos o articulares,
nes que el enfermo pueda padecer en sus diferentes
rigidez, deformidades, enrojecimiento, ruidos al
aparatos o sistemas. Suele ser útil preguntarle pasan- movilizarlas, bultos o masas, etc.
do de lo general a lo específico: ¿tiene usted algún
problema cuando come o camina?, y de ahí ofrecerle Endocrino: diuresis muy aumentada (poliuria),
una lista de posibles manifestaciones. El epígrafe tie- aumento o pérdida del apetito o del peso,
ne importancia porque muchas veces estas manifesta- intolerancia al fr ío o al calor
ciones no han sido señaladas por el enfermo por no Sistema nervioso: cefalea, alteración o
considerarlas importantes y, sin embargo, pueden ser pérdida de la consciencia, la memoria, la
útiles en el diagnóstico . movilidad, o el equilibrio; alteración de la
Así, este apartado nos permite realizar una valo- sensibilidades (adormecimiento, calambres),
ración global del enfermo, cubrir olvidos y tiene temblor o convulsiones.
implicaciones terapéuticas. La Tabla 3-5 recoge qué Manifestaciones psíquicas: inquietud,
valoraciones se hacen habitualmente. tristeza, inhibición.
Órganos de los sentidos: alteración de la
Exploración física y solicitud de exploraciones vista o el oído.
complementarias
Manifestaciones generales: pérdida
La historia clínica se completa con la exploración o ganancia de peso, pérdida de apetito
física del enfermo. Esta se orienta a la búsqueda de (anorexia), presencia de fiebre, alteraciones
señales objetivas que la enfermedad le ha producido. cutáneas o bultos.
Con ambos el médico elabora un juicio diagnóstico
orientativo, que luego trata de verificar realizando de-
terminadas exploraciones complementarias : análisis
de laboratorio, registros , técnicas de imagen, etc. (Ver
Caps. 4 y 5). y se registran si estima que deban ser conocidos por
Los modelos de historia son variables según los condicionar su salud, porque tienen una cierta con-
tinuidad en el tiempo y requieren un seguimiento.
servicios que las usan, ya que existen ajustes para
Pueden ser: diagnósticos previos, signos o síntomas
resaltar las características de los problemas propios.
de enfermedad o situaciones personales, laborales o
Son ejemplos la historia clínica pediátrica, quirúrgica
sociales. En general se excluyen los procesos autoli-
o la de salud mental.
mitados de evolución benigna y breve. Cuando el pro-
blema se soluciona pasa al apartado de antecedentes
HISTORIA CLÍNICA ORIENTADA personales.
POR PROBLEMAS Este modelo es muy usado por los médicos que
trabajan en Atención Primaria. En otras hojas se pue-
Fue descrita por L. Weed en 1967. En ella el médico de incluir información acerca de un plan de estudio
elabora un documento en el que se recogen los prin- (diagnóstico diferencial y pruebas complementarias),
cipales problemas de salud que el enfermo presenta seguimiento, tratamiento y educación referidos a los
y su fecha de inicio. Se consideran como problemas problemas activos del enfermo.
--- SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

ENTREVISTA MOTIVACIONAL Y OTROS HISTORIA CLÍNICA INFORMATIZADA


MODELOS
Un signo de nuestro tiempo es intentar modificar los
La entrevista motivacional se centra en el paciente procedimientos tradicionales para mejorar sus resul-
para ayudarle a explorar y resolver ambivalencias tados y obtenerlos con menor tiempo y esfuerzo. Así
acerca de conductas no saludables o hábitos de vida ha surgido la historia informatizada, lo que supone
insanos. Se utiliza mucho con personas con adiccio- eliminar el papel como soporte de la información. En
nes. Con ella se busca que el paciente reconozca su su implementación existen resistencias derivadas de
problema y la ambivalencia que le supone seguir en la necesidad de cambio de las rutinas aprendidas y
él y la necesidad/beneficios/dificultad de cambiar, la necesidad de adquirir conocimientos informáticos.
que elija alternativas y se le ayuda a hacerlo. Ayuda También, y ello es importante, modifica la relación
más al cambio que el enfermo descubra por sí mismo médico-enfermo.
las salidas, que decirle lo que pretendemos que haga.
La informatización tiene como ventajas que: a) Ho-
mogeneiza los datos recogidos, y si el sistema es
OTROS POSIBLES FINES amplio puede incluir múltiples manifestaciones clí-
DE LA HISTORIA CLÍNICA nicas. b) Permite disponer de una historia única para
cada enfermo utilizable por todos los niveles asisten-
También denominamos historia clínica al conjunto ciales: Primaria, especializada, e incluso de varias
formado por el documento de la propia historia clí- comunidades autónomas o países. c) Ayuda a la toma
nica junto con otros de atención sanitaria al enfermo, de decisiones, especialmente si al sistema se acoplan
tales como exploraciones complementarias y hojas de otros contenidos: p. ej., alarmas en el uso de determi-
seguimiento o evolución. nados fármacos , etc., lo que aumenta la seguridad del
enfermo. d) Mejora la base de datos qu e la sociedad
SISTEMA DE REGISTRO dispone debida a los problemas de salud. e) Permite
una comunicación ágil entre los profesionales, entre
La información que contienen las historias clínicas estos y el enfermo y la administración.
puede utilizarse para organizar y hacer funcionar
los servicios sanitarios. Su archivo y catalogación es Sus principales inconvenientes son: a) Se modifica de
importante para garantizar una asistencia de calidad forma importante la relación médico enfermo tradicio-
al enfermo. En nuestro país no existe un sistema de nal, para algunos con pérdida de calidad. b) Algunos
registro único. Cada comunidad autónoma e inclu- estiman que esta fase del proceso asistencial podría
so cada centro sanitario ha desarrollado un modelo ser resuelta por personal ajeno al saber médico, lo que
propio. En general, todos los sistemas de registro in- modifica el perfil de sus actuaciones. Se sugiere que si
cluyen un conjunto mínimo básico de datos (CMBD). recoger la historia clínica se transforma en rellenar fi-
que ofrecen el máximo común para cubrir las necesi- chas, la relación médico-paciente se resiente. c) Se ha
dades informativas del mayor número de usuarios. La señalado que con el procedimiento se recogen datos
información que contiene el CMBD puede ser utili- pero no información, lo que en determinadas situacio-
zada por clínicos, investigadores, gestores sanitarios, nes de enfermedad puede ser trascendente. d) Implica
epidemiólogos, sociólogos, etc. Así: costes y dificultades en su implantación.
■ La historia clínica permite la continuidad en el
diagnóstico, estudio y tratamiento de los pacientes. EL ESTUDIANTE DE MEDICINA Y EL ENFERMO
■ Al ser un reflejo del proceso asistencial, permite AL HACER LA HISTORIA CLÍNICA
evaluar la calidad de la asistencia prestada en
un sentido amplio: consumo de fármacos, fre- Aprender a realizar historias clínicas forma parte del
cuentación del enfermo, consumo de recursos programa formativo de los estudiantes de medicina.
sanitarios, etc. En nuestro ámbito cultural, en general los enfermos
■ Permite iniciar actividades sanitarias orientadas aceptan de buen grado ser historiados y explorados
hacia la comunidad: campañas de prevención, por los alumnos. Sin embargo, el profesor-tutor debe
etc. solicitar del enfermo la correspondiente autorización
■ Ayuda a formar a los alumnos y los residentes y debe presentar al alumno. Este, cuando se relacione
para que adquieran las habilidades propias de la con él, debe identificarse como alumno, actuar con
profesión médica. respeto y garantizarle que guardará confidencialidad
Son documentos básicos de investigación. Su re- de lo que le confíe. Debe adoptar una actitud «profe-
cogida permite generar hipótesis sobre la enferme- sional», especialmente ante pacientes ancianos o en-
dad, conocer la eficacia de los tratamientos, etc. fermos con limitaciones físicas (sensoriales, sordera),
■ Igualmente son elementos clave para el esclare- psíquicas o culturales. Es importante que nunca reac-
cimiento de actuaciones en situaciones de litigio cione con críticas o irritación y se muestre educado y
o procesos judiciales. empático.
-104
Exploración global
del enfermo
Jaime Merino Sánchez, Vicente F. Gil Guillén, Reyes Pascual Pérez

CONCEPTO
Las enfermedades alteran la estructura y la función
de los órganos del cuerpo ocasionando síntomas y
signos; estos son las llamadas señales o manifestacio-
nes de la enfermedad. Llamamos exploración física
a una serie ordenada de actuaciones (maniobras re-
gladas) que se realizan con el fin de descubrir esas
señales en el enfermo, lo que facilita el diagnóstico de
la enfermedad que padece.
La exploración se inicia en el momento en que el
enfermo aparece a los ojos del explorador y acaba
cuando ambos dejan de relacionarse. Sus hallazgos
se suman a los datos de la historia clínica. Las manio-
bras exploratorias son habilidades que caracterizan el
oficio del médico y es muy importante que el estu-
diante las aprenda, que adquiera una buena técnica
exploratoria (semiotecnia) y que sepa interpretar
los hallazgos de esa exploración (semiología).
Semiología y semiotecnia forman juntas
lo que llamamos propedéutica clínica o
semiótica.

MÉTODOS DE EXPLORACIÓN
FÍSICA
La exploración física inmediata o di-
recta del enfermo se realiza mediante
la inspección , palpación, percusión y
auscultación.
El médico hace inspección cuando
utiliza la vista para detectar las señales de la
rmedad y palpación cuando las recoge mediante
el tacto. La percusión es una maniobra que combina la
audición con una forma de palpación (golpeteo); per-
mite descubrir signos de la enfermedad a través de los
sonidos que el explorador produce al golpear sobre
diferentes zonas del cuerpo del enfermo e interpreta
los ruidos que ese golpe genera. Para la auscultación
el médico utiliza un instrumento (estetoscopio o fo-
nendoscopio) para apreciar los sonidos que se produ-
cen en el interior del organismo como resultado de
sus funciones.
SECCIÓN I Conceptos fundamentales

SISTEMÁTICA EXPLORATORIA seleccionando maniobras en base a los hallazgos que


se buscan. El observador experimentado es capaz de
Una buena exploración requiere conocimientos y ex- captarlos a la vez que explora. El alumno debe apren-
periencia del que la practica y la colaboración del en- der a explorar de forma extensa y en orden, para luego,
fermo, que debe solicitarse siempre. Debe hacerse en cuando tenga experiencia, limitar esas maniobras.
un medio ambiente adecuado: no ruidoso, bien ilumi-
nado (si es posible con luz natural), suficientemente
cálido (para evitar incomodidades) y que permita res- VALORACIÓN DE LAS CONSTANTES VITALES
petar la privacidad del enfermo. Este estará libre de la Se denominan constantes vitales a una serie de pa-
ropa que dificulte las maniobras exploratorias y en su rámetros que se refieren a funciones que son impor-
caso ofreciéndole una sabanilla. tantes en el ser humano; son muy fáciles de valorar y
La exploración debe ser ordenada, siguiendo una ofrecen información relevante sobre el estado del pa-
sistemática adecuada, minuciosa, recogiendo el máxi- ciente. A pesar de llamarse constantes no son valores
mo de detalles posibles, y lo más amplia que se pue- inmutables; varían, pero dentro de un rango limitado.
da, sobre todas las regiones del cuerpo, los aparatos o Las que habitualmente se valoran son la presión arte-
sistemas. El tiempo disponible del explorador hacen rial, el pulso, la respiración y la temperatura.
que a veces se restrinja a los aparatos o regiones que
presuntamente están enfermos; sin embargo, una bús- TENSIÓN O PRESIÓN ARTERIAL
queda amplia casi siempre aporta información útil al
diagnóstico ya que las enfermedades con frecuencia Concepto
se expresan muy a distancia del órgano enfermo. La La capacidad de los lechos vasculares es superior a
experiencia clínica orienta acerca de qué debe explo- la del volumen sanguíneo que circula por ellos. Sin
rarse en cada enfermo. embargo, el flujo en los vasos es continuo, no hay zo-
La exploración puede ajustarse a los padecimien- nas vacías; ello se debe entre otros mecanismos a la
tos del enfermo, pero conviene seguir una sistemáti- existencia de reflejos neurógenos que adaptan el tono
ca, recogida en la Tabla 4-1. En este capítulo se aborda del lecho vascular a su contenido. La elasticidad de
la de los epígrafes 1 a 3. Las restantes al inicio de las los propios vasos asegura la distribución de sangre
secciones de cada apartado correspondiente. Los ha- desde el corazón a todos los órganos del cuerpo y su
llazgos deben anotarse de forma ordenada y objetiva. retorno. Este equilibrio entre capacidad y contenido
La importancia de lo hallado no está en relación con genera una fuerza denominada tensión o presión ar-
su tamaño: pequeños cambios pueden ser trascenden- terial (TA o PA).
tes (un pequeño nódulo mamario), y otros de mayor ta- Las cifras de presión arterial se expresan mediante
maño ser poco relevantes: (p. ej., adenopatías subman- dos valores: la sistólica (PAS), que resulta del equi-
dibulares en un enfermo con caries) . La experiencia librio entre volumen de sangre eyectada por el ven-
debe definir la extensión o minuciosidad de la explo- trículo izquierdo y las resistencias que le ofrecen los
ración y modificar el orden de la misma, generalmente grandes vasos durante la sístole, y la diastólica (PAD),
que expresa el balance entre la eyección ventricular y
las resistencias que existen en las arterias periféricas
durante la diástole.
Tabla • Sistemática de la exploración
física Formas de medida de la presión arterial
Se determina en clínica utilizando un aparato llamado
Constantes vitales (presión arterial, pulso,
temperatura y respiración) esfigmomanómetro. Consiste en un manguito que con-
tiene una bolsa de goma hinchable con aire mediante
Valoración general: hábito, aspecto, talla, una pera y que está conectada a un manómetro. La esca-
nutrición, hidratación, piel y faneras la de este manómetro permite conocer en cada momen-
Cráneo y cara to la presión de hinchado (en mm de Hg). Hay varios
tipos de esfigmomanómetros: los tradicionales infor-
Cuello man de la presión de hinchado con una escala lineal
Tórax: aparato respiratorio, aparato circulatorio, de mercurio. En los aneroides la presión de hinchado
mamas y axilas se registra en una escala esférica. Existen otros aparatos
que miden la presión arterial de forma automática, bien
Abdomen, genitales y ano en base a registros fonográficos (al recoger un micrófono
Extremidades superiores e inferiores los cambios sonoros que la sangre produce al circular)
u oscilométricos (medir la variación del diámetro de la
Sistema nervioso
arteria que se produce cuando al descomprimir el man-
Aparato locomotor guito la sangre comienza a fluir por ella). Hoy día dispo-
nemos de aparatos que de forma automática toman la
presión arterial a intervalos fijos, por ejemplo, cada 20
CAPÍTULO 4 Exploración global del enfermo

o 25 minutos: la técnica se conoce como monitoriza- gangliopléjicos, diabéticos que tienen neuropatía o
ción ambulatoria de la presión mterial (MAPA) y su enfermos con una forma de evolución tardía de la
uso es útil en determinadas situaciones clínicas. sífilis (tabes torsal), esos cambios son mayores. En-
tonces la PAS desciende más de 15 mmHg. Se deno-
mina hipotensión ortostática y puede causar mareos
Técnica de la toma o pérdidas del conocimiento.
La toma de la PA puede hacerse con el enfermo en La toma de la presión puede ser difícil si el suje-
decúbito supino, de pie o sentado. No debe tener ro- to tiene arritmias (p. ej. , fibrilación auricular). Para
pas o ataduras que compriman la arteria cuya presión garantizar la lectura lo mejor es repetir la toma. Ha-
se mide. El manguito debe tener al menos 12,5 cm bitualmente ambos brazos deben registrar una PA
de ancho para los adultos y rodear al menos una vez semejante. En ocasiones uno de ellos tiene una PA
y media el diámetro del brazo. Los obesos y los ni- menor, lo que expresa que hay algún obstáculo al flu-
ños requieren manguitos especiales. El brazo no debe jo sanguíneo y conviene valorar la PA en el otro, que
quedar suspendido en el aire sino apoyado en una es el brazo que se llama dominante.
superficie y el manguito del aparato debe quedar a La PA puede valorarse también en las extremida-
nivel del corazón del enfermo. des inferiores. El enfermo debe colocarse en decúbito
Habitualmente la PA se determina en la arteria bra- prono, el brazal (de al menos 18 cm de ancho), seco-
quial. El manguito se coloca 2 cm por encima de la loca por encima de la rodilla, y se ausculta sobre la
flexura del codo y la arteria se localiza por palpación. arteria poplítea en ese hueco.
Sobre ella se coloca la campana del fonendoscopio.
El manguito se infla con aire presionando sobre la Fuentes de error en la medida de la PA
pera hasta una presión superior a 30 mmHg a la que Se recogen en la Tabla 4-2 . En algunas personas (an-
hace desaparecer el pulso radial en ese brazo (apre- cianos o embarazadas), tras los primeros latidos, que
son los que definen la PA sistólica, desaparecen los
sonidos hasta reaparecer de nuevo, dando origen
al llamado pozo o hiato auscultatorio. Si
el manguito no se insufló bien puede
ocurrir que no se detecten los primeros
latidos y que se interprete como valores
de PA sistólica los latidos que aparecen
siguiendo al hiato , con valores errónea-
mente bajos.
En la insuficiencia aórtica o en fístulas arterio-
venosas es posible oír la PAD en valores muy bajos,
incluso O; igual sucede si el sujeto posee arterias muy
rígidas (arteriosclerosis).

ciado por palpación). Después se permite salir el aire Significado de las lecturas
aflojando la pera, de forma lenta y regular (2 a 3 mm Aunque las cifras de PA se consideran una constante,
Hg por segundo). Se ausculta y cuando se oye el pri- varían a lo largo del día. Los valores de PAS y PAD
mer latido la cifra que marca el manómetro corres- en las poblaciones de los países occidentales siguen
ponde a la presión sistólica (fase 1 de Korotkoff, PAS una distribución gausiana. De forma convencional
o cifra máxima) . Se continúa deshinchando de forma los organismos internacionales han establecido para
lenta y regular y pocos segundos después es posible la población adulta valores (en mm Hg) de PA ópti-
palpar el pulso en la arterial radial , lo que permitiría ma< 120180 mm Hg, PA normal de 120-129 y/o PAD
la toma de la tensión mediante la palpación, aun- de 80-84, y normal alta PAS de 130-139 y/o PAD de
que ofrece valores algo inferiores a la auscultación. 85-89. La hipertensión arterial (HTA) se define con
Seguimos escuchando y a veces los latidos cambian PAS;,: de 140 y/o PAD;,: 90 mmHg, si se demuestran
de carácter (fase IV de Korotkoff) antes de desapare- en una persona al menos en tres tomas durante dos
cer (fase V de Korotkoff). La fase V es la que más se días diferentes, independiente de la edad del sujeto.
aproxima a la presión intraarterial diastólica, medida Los diabéticos, los que tienen insuficiencia renal o
mediante un catéter colocado dentro del vaso. Señala los que han tenido una complicación vascular (ictus,
la PA diastólica (PAD). Luego el manguito se deshin- infarto, etc.) se consideran hipertensos con valores de
cha hasta el valor de O y se retira. PAS > 130 y/o de PAD > 85 mm Hg.
En condiciones normales, si estando echados La diferencia entre presión sistólica y diastólica
nos ponemos de pie, la PAS cae ligeramente y sube se denomina presión de pulso o presión diferencial.
la PAD. Es un ajuste fisiológico al ortostatismo. En Cuanto mayor es la presión de pulso mayor es el ries-
algunas situaciones: enfermos con disminución im- go que el sujeto tiene de desarrollar enfermedades
portante del volumen circulante, personas que toman vasculares: infarto de miocardio, etc.
Conceptos fundamenta les

Si el pulso no es palpable se supone que la arteria


está obstruida por encima del lugar de la palpación,
Tabla -2 Fuentes de error en la toma el corazón está disfuncionante o no late por parada
de la presión arterial cardiaca y la onda del pulso no llega a las arterias
periféricas. Por ejemplo, ello ocurre en los enfermos
Dependientes del aparato con shock, en los qu e el corazón mantiene la perfu-
sión de los tejidos periféricos con dificultad. En este
Mala calibración
caso debe valorarse a nivel central, en la carótida, o
Cámara del manguito inadecuada
verificando los latidos por auscultación cardiaca. La
Fugas de a ire en las válvu las
Tabla 4-3 recoge las arterias en que suele valorarse.
Columna de vidrio sucia
Colocación del manguito a una altura Si h ay dudas de si el pulso que se palpa correspon-
inadecuada respecto al corazón del enfermo de al enfermo o es el del explorador, éste debe palpar
su propio p u lso radial con la otra mano , al tiempo
Dependientes del enferm o y del medio que toma el del enfermo. De forma excepcional an1bos
No reposo previo. Nerviosismo pulsos femorales pueden estar abolidos o muy dismi-
Toma de sustancias que elevan la PA nuidos respecto a los radiales. Este hallazgo puede
Presencia de arritmias o valvulopatías que expresar la existencia de una coartación de aorta, que
dificultan la toma es una malformación congénita del vaso, que se estre-
Comprensión del brazo por ropa cha por encima de la salida de las arterias femorales.
Ambiente frío y/o ruidoso
Dependientes del méd ico o del método Hallazgos al explorar el pulso arterial
Defecto en audición o visión El explorador obtiene la máxima ayuda posible de
Redondeo de las cifras de lectura la palpación del pulso si valora su frecuencia , ritmo,
Interpretación incorrecta de los ruidos de Korotkoff amplitud, forma y tensión.
Sesgo por visión angulada de la cifra de la PA.
Colocación inadecuada del manguito o la
membrana del fonendoscopio
Brazo del enfermo colgando Tabla ·3 Arterias en las que se
Pozo auscultatorio no detectado explora el pulso
Errores ortostáticos
Carótidas : En el tercio medio del borde interno
de cada músculo esternocleidomastoideo.
Temporales: Sobre el hueso temporal a nivel
La hipertensión puede ser secundaria a otra enfer- de las sienes.
medad: daño renal, de los vasos del riñón, de origen Humerales o braquiales : En la cara ventral
endocrinológico, por fármacos, etc., o puede apare- de la flexura del codo, por encima de la fosa
cer sin enfermedad subyacente, lo que se llama HTA anticubital, apoyando contra el húmero.
primaria o esencial. Entonces suele afectar a varios Radiales: En el canal radial del antebrazo,
miembros de una familia y se favorece por la ingesta estando el brazo del enfermo en pronación y con
salina, el sobrepeso o el alcohol. la muñeca semiflexionada. El explorador apoya
sus dedos medios contra la cabeza del radio.
PULSO ARTERIAL Femorales : En las ingles, en el punto medio
entre la cresta ilíaca y la s ínfisis del pubis; los
Concepto dedos del explorador comprimen contra el fémur.
Corresponde a la expansión que sobre una arteria pro-
Poplíteas: Con el enfermo en decúbito y las
duce el volumen de sangre expulsado por el ventrícu- rodillas en discreta flexión (120º). El explorador
lo izquierdo en cada sístole. Ese volumen se transmi- coloca los pulgares en la rótula y los otros
te a la periferia amortiguado por la elasticidad de las dedos en la fosa poplítea.
arterias. Su valoración nos informa de la función del
Pedios: A nivel del dorso del pie, junto al
ventrículo izquierdo.
tendón del extensor del primer dedo, apoya ndo
los dedos del explorador contra los huesos del
Técnica exploratoria tarso del enfermo.
Se valora por palpación. El explorador apoya el pul- Tibiales posteriores: Se aprecian
pejo de los tres dedos centrales de una mano sobre aproximadamente un centímetro por detrás de
las arterias superficiales. No se utiliza el dedo pulgar los maléolos internos del enfermo.
porque tiene un lecho capilar muy rico y sus latidos
se pueden confundir con los del enfermo.
CAPÍTULO 4 Exploración global del enfermo

Frecuencia das (taquiarritmias) . Las arritmias se valoran mejor


Supone contar el número de latidos del enfermo du- mediante el registro de la actividad eléctrica cardiaca
rante un minuto. Habitualmente se hace durante 15 (electrocardiograma) . Si los latidos son todos diferen-
segundos y se multiplica por 4. En un sujeto sano tes entre sí y aparecen a tiempos distintos la arritmia
suele oscilar entre 60 1pm y 80 1pm, pero existen am- se califica de completa, y generalmente se correspon-
plias variaciones de una persona a otra y según las de con una fibrilación auricular.
circunstancias ambientales; p . ej., la exploración al
Amplitud
inicio de la entrevista puede demostrar frecuencias
elevadas por el nerviosismo. Si la frecuencia es me- Valora la amplitud del desplazamiento de la pared ar-
nor de 60 1pm se dice que el sujeto tiene bradicardia, terial, con la llegada de la onda de sangre (equivale a
si excede a los 100 1pm, taquicardia. Las causas más la variabilidad de la arteria o la altura de la onda pul-
habituales de ambas se recogen en la Tabla 4 -4. sátil). Depende del volumen de sangre que le llega y
En ocasiones (arritmias) la frecuencia del pulso en de la elasticidad de la pared arterial. A igual volumen
una arteria periférica es menor que la apreciada a ni- la amplitud es mayor si la elasticidad arterial es gran-
vel de una arteria central o auscultando el corazón. de, lo que permite una gran distensibilidad durante la
Existe un «déficit de pulso» debido a que algunos sístole y el vaciamiento durante la diástole. Equivale
latidos son tan débiles que la onda que producen no a la presión del pulso.
llega a la periferia y no se palpan. En casos de duda el Según la amplitud el pulso puede ser:
pulso debe valorarse durante un minuto y a nivel cen-
tral, por ejemplo mediante la auscultación cardiaca. Pulso amplio, también llamado magno o saltón;
p. ej., acompaña a la existencia de una válvula
Ritmo aórtica incompetente; entonces parte del volumen
En un sujeto sano todos los latidos están separados expulsado en sístole por el ventrículo vuelve a él
por intervalos iguales: El pulso normal es rítmico. a causa de la insuficiencia valvular y se añade a la
Realmente, durante la inspiración las pausas entre sangre que en ese momento le llena proveniente
los latidos son más cortas que durante la espiración. de la aurícula izquierda. En la sístole siguiente
Si el fenómeno es muy evidente se habla de arritmia habrá un gran volumen sistólico, que se sigue de
respiratoria, que es fisiológica. un vaciado arterial rápido por la insuficiencia
Si las pausas entre los latidos son distintas se ha- valvular. La diferencia entre la PA sistólica y PA
bla de pulso arrítmico. Su hallazgo tiene interés pues diastólica aumenta mucho (presión de pulso am-
informa de la existencia de trastornos en el origen o plia). Este tipo de pulso también puede aparecer
en la transmisión del impulso nervioso en el corazón. en el hipertiroidismo, y en la arteriosclerosis a
Algunas arritmias cursan con frecuencias cardiacas causa de la rigidez de las paredes arteriales.
bajas (bradiarritmias) y otras con frecuencias eleva- ■ Si la amplitud está disminuida el pulso es difícil
de palpar, lo que sucede si el enfermo está cho-
cado o padece insuficiencia cardiaca. Se habla
de pulso parvus, que puede llegar a ser filiforme.
Tabla 44 Causas de taquicardia Entonces la diferencia entre FAS y PAD es míni-
y bradicardia ma, está pinzada, por ejemplo 95/70 mm Hg.
■ En inspiración aumenta el volumen de sangre
Taquicardia Bradicardia que llega al corazón derecho y disminuye el con-
Ejercicio físico Entrenamiento tenido del ventrículo izquierdo. Por esta causa,
reciente deportivo al final de la inspiración el volumen del pulso
radial disminuye ligeramente. Si el descenso
Ansiedad Alteración de los es grande el pulso puede dejar de palparse. Se
nodos cardiacos
dice que hay pulso paradójico, porque pueden
Fiebre Bloqueo auriculo- oírse latidos cardiacos a la auscultación y no hay
ventricular completo pulso palpable en la arteria radial. Esa situación
Hemorragia Hipofunción tiroidea acompaña a la pericarditis constrictiva o la insu-
ficiencia respiratoria de tipo obstructivo, p. ej. ,
Shock Hipertensión craneal en casos de asma bronquial grave : al inspirar, el
Anemia diafragma se desplaza hacia abajo y el pericardio
se estira sobre el corazón impidiendo el retorno
Insuficiencia cardiaca venoso y reduciendo el gasto cardiaco. Si hay lí-
Arritmias quido en el pericardio la capacidad del corazón
se limita más, entonces el pulso paradójico es
Hiperfunción tiroidea evidente y a él se añade un aumento de la sangre
contenida en la vena yugular durante la inspira-
ción (ingurgitación yugular).
-- SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

En algunas circunstancias puede aparecer pulso que puede ser difícil hacerlo en los ancianos. En ellos las
alternante: latidos amplios alternando con otros fibras elásticas se han sustituido por fibras colágenas que
pequeños. Puede comprobarse insuflando el es- han acumulado lípidos e incluso calcio en sus paredes.
figmomanómetro hasta superar la presión sistó-
lica y comprobar que la frecuencia del pulso se RESPIRACIÓN
ha reducido a la mitad por haberse bloqueado
los latidos de menos amplitud. Este pulso puede Valoración
acompañar a la insuficiencia cardiaca, a la car- La respiración es otra constante vital fácil de valorar y
diopatía hipertensiva, isquémica y a la lesión de de gran interés semiológico. Se inicia mediante la ins-
las válvulas aórticas. pección valorando la morfología torácica y la posible
existencia de anomalías en el mismo: a) por ejemplo,
Forma
el tórax hundido o «en embudo » (pectum excavatum)
La onda del pulso arterial resulta de la suma de múlti- por un defecto del desarrollo a nivel esternal; b) tórax
ples componentes: el vaciado ventricular, llenado arti- en quilla o en «buche de paloma» (pectum carina-
cular y ondas reflejas desde la periferia. Por palpación tum), con esternón prominente y depresión de las pa-
no es posible valorar con exactitud esos componentes. redes laterales del tórax; c) tórax raquítico, con engro-
Las ondas pueden registrarse con la ayuda de un po- samiento de las uniones condrocostales y depresión
lígrafo. La onda pulsátil consta de tres componentes: de la caja a nivel de la inserción del diafragma; d)
■ Una pendiente de ascenso, uniforme y rápida que tórax en tonel, como si estuvieran insuflado y en ins-
sigue al primer ruido que se ausculta en el corazón. piración permanente (con el diámetro anteroposterior
■ Un vértice redondeado. igual o mayor que el lateral), y e) el tórax paralítico,
Una pendiente de descenso menos abrupta que la aplanado, largo y estrecho y con una amplitud de sus
de ascenso , que se interrumpe por la llamada inci- movimientos escasa.
sura dícrota, que coincide con el cierre de las vál- Se debe valorar si existen asimetrías en ambos he-
vulas sigmoideas, es decir, con el segundo ruido de mitórax que pueden deberse a malformaciones de la
la auscultación cardiaca, y a dicha incisura sigue la columna (cifosis, escoliosis, o lordosis, existencia de
onda dícrota. retracciones en alguno de ellos).
En la respiración conviene valorar la frecuencia, el
En algunas enfermedades el pulso es tan anormal
ritmo y la profundidad.
que su morfología se altera de forma evidente:
■ En la estenosis severa de la válvula aórtica exis- Frecuencia
te un obstáculo al vaciamiento y se produce un Estando el enfermo distraído se cuentan las inspira-
pulso de escasa amplitud con onda de llegada ciones que realiza en un minuto. En el sano serán de
lenta y mantenida, es el «pulso anácroto» (par- 14 a 20. Si la frecuencia es menor de 14 se dice que
vus y tardus). hay bradipnea. Puede estar causada por lesión de los
■ Si hay incompetencia de la válvula sigmoidea centros respiratorios, intoxicaciones, etc. Si supera
aórtica (insuficiencia aórtica) parte del volumen las 20 se habla de taquipnea, que acompaña al esfuer-
sanguíneo expulsado durante la sístole retrocede zo físico , ansiedad, fiebre, determinadas enfermeda-
al corazón desde la aorta, sumándose al volumen des cardiopulmonares o respiratorias con falta de oxi-
del llenado siguiente. Al contraerse de nuevo el genación de los tejidos, o a las acidosis metabólica.
corazón origina un pulso amplio con ondas de
ascenso y caída rápidas: el pulso celer, colapsan- Ritmo
te o en martillo de agua. El ciclo respiratorio se estructura en las fases de ins-
■ Si existe a la vez estenosis e insuficiencia aórtica piración, espiración y pausa respiratoria o apnea. Los
la onda de pulso tiene una doble cúspide, que es ciclos tienen una duración similar, señalando que la
palpable, pulso bisferiens. respiración es rítmica. A la inspección puede parecer
En el pulso paradójico ya descrito, la amplitud que la inspiración dura más que la espiración, pero en
disminuye en inspiración. Es la exageración de realidad esta dura 1,2 veces más que la inspiración. El
un fenómeno normal, y aparece con nitidez si ritmo normal puede alterarse y ello puede tener inte-
hay problemas en la distensibilidad del corazón rés diagnóstico. Si el sujeto realiza movimientos res-
o hay líquido que presiona en el pericardio. piratorios cada vez más profundos hasta alcanzar un
En ocasiones el latido normal se sigue de un la- máximo y posteriormente cada vez menos profundos
tido prematuro, generando el llamado pulso bi- hasta alcanzar una fase de apnea se dice que existe rit-
geminado. mo respiratorio de Cheyne-Stockes. Algunos ancianos
o niños pueden respirar con ese patrón durante el sue-
Tensión o dureza ño, pero habitualmente expresa la existencia de lesio-
Se valora por la fuerza que hay que hacer para colapsar nes cerebrales graves, intoxicación por narcóticos, etc.
la arteria. Refleja la dureza del vaso. Las arterias de los La respiración de Biot o a boqueadas se caracteriza
niños y los jóvenes son fácilmente colapsables, en tanto por respiraciones muy irregulares que varían en pro-
CAPÍTULO 4 Exploración global del enfermo

FRECUENC IA RITMO

NORMAL CHEYNE-STOKES

TAQUIPNEA
/\/VVW0I\ ATAXICA (BIOT)

HIPERPNEA
SUSPIROSA

BRAD IPNEA _/\J\j\j\ OBSTRUCTIVA

1 = INSPIRACIÓN
E= ESPIRACIÓN

Figura 4-1 Alteración en la frecuencia y el ritmo respiratorio.

fundidad y frecuencia interrumpiéndose por interva- El enfermo debe estar en reposo; el termómetro en
los de apnea, sin regularidad. La respiración suspirosa contacto el tiempo suficiente para garantizar la ho-
suele asociarse a situaciones de angustia emocional e mogeneidad térmica (mínimo 3 minutos). Los valores
incluye aumento de la frecuencia y respiración su- normales, 35,8-37,2 ºC sufren ciertas variaciones en
perficial expresando hiperventilación intensa. Si hay relación con la fisiología diaria. La temperatura tiene
una obstrucción al flujo, la fase espiratoria se alarga. un ritmo inverso a la secreción de glucocorticoides,
La Figura 4-1 recoge las alteraciones más frecuentes es máxima de las 16 a las 18 horas y mínima entre
en la frecuencia y el ritmo respiratorio. las 2 a las 6 horas; se incrementa con el ejercicio, la
digestión, la ovulación y la gestación. La elevación
Profundidad térmica se denomina hipertermia. Los valores infe-
La amplitud de los movimientos respiratorios es fácil- riores a los normales se denominan ilipotermia.
mente valorable por el observador. Si disminuye mu- La Tabla 4-5 recoge las principales causas de va-
cho se dice que existe una respiración superficial. Esta riación de la temperatura. No toda elevación de la
suele acompañar a la existencia de fracturas o heridas
que causan dolor al movilizar el tórax o a la presencia
de alcalosis metabólica. Otras veces la respiración es
profunda (batipnea), sobre todo si el organismo trata Tabla Principales causas
de eliminar grandes cantidades de C0 2 , como ocurre de variación térmica
si hay que compensar una acidosis metabólica; así su-
cede en la respiración magna o de Kussmaul, en la que HIPERTERMIA
se combina la batipnea y la bradipnea. La respiración Infecciones
pu ede ser profunda y rápida: hiperpnea, por ejemplo Destrucción tisular
tras el ejercicio o en las crisis de ansiedad. Tumores: linfoma, cáncer de riñón
Hipertiroidismo
TEMPERATURA Ambientes calurosos: golpe de calor
Fármacos
El ser humano mantiene su temperatura constante, Convulsiones
independiente de la del medio que le rodea, es ho- Enfermedades sistémicas
meotermo. Ese valor es mayor en las cavidades cen- Pérdida de la capacidad de sudoración
trales y menor en periferia. Para medir la temperatura HIPOTERMIA
se utiliza un termómetro. Con el de mercurio, tras
verificar que la escala está enrasada se coloca habi- Exposición a bajas temperaturas
tualmente en axila, boca, ingle o recto; el electrónico Hipotiroidismo
en el conducto auditivo. Las localizaciones que están Administración de gangliopléjicos
cerca de las cavidades centrales dan cifras entre 0,5 y
1 grado más altas.
SECCIÓN Conceptos fundamentales

temperatura se debe a una infección. Si además de de Quetelet, que se calcula al dividir el peso (en kg)
la elevación térmica hay otras manifestaciones pode- por la talla del sujeto al cuadrado (en metros). Será
mos definir que existe fiebre. normal entre 20 y 25, existe sobrepeso entre 25 y 30
y obesidad por encima de 30. Tan1bién tiene interés
valorar el tamaño del panículo adiposo. En clínica
EXPLORACIÓN GENERAL DEL ENFERMO puede hacerse viendo el estado de la bola de grasa de
la mejilla (Bichat), pellizcando y valorando el grosor
HÁBITO CORPORAL Y ASPECTO de los pliegues cutáneos, o incluso palpando las ma-
Al explorar interesa conocer si el hábito del enfermo sas musculares, que tienden a desaparecer si existe
es normal, si tiene deformidades o amputaciones. desnutrición. Más exacto es valorar los pliegues cu-
También debe anotarse si su aspecto concuerda con táneos utilizando un calibrador o compás adecuado.
los datos de la historia, si impresiona o no de grave-
dad y también si adopta alguna actitud especial. GRADO DE HIDRATACIÓN
Se refleja en la turgencia de los tegumentos. Puede
ACTITUDES valorarse: a) pellizcando suavemente la base del cue-
En ocasiones, los enfermos que tienen dolor abdomi- llo. Si el sujeto está bien hidratado el pliegue produci-
nal de tipo cólico suelen estar inquietos, se mueven do desaparece en segundos (Fig. 4-2). En los ancianos
constantemente tratando de aliviar su dolor. Por el puede no ser así, incluso con grados de hidratación
contrario, si existe peritonitis aparecen inmóviles en normal; b) por la humedad existente en la lengua, si
cama tratando de no irritar el peritoneo al movilizar- bien puede parecer reseca si por obstrucción nasal el
se. Determinados dolores de cabeza se incrementan enfermo tiene una respiración oral; c) por la resisten-
con la luz (fotofobia) y el enfermo permanece os- cia que ejercen los globos oculares cuando, una vez
curas. Si el enfermo está aquejado de insuficiencia cerrados, el explorador los comprime suavemente con
cardiaca izquierda trata de limitar el acumulo de sus pulgares. Puede estar aumentada en presencia de
líquido en los alvéolos durante el decúbito y reposa glaucoma, aunque exista deshidratación; d) en niños
sentado o con varias almohadas (ortopnea). Si pa- que aún tienen la fontanela sin soldar, la hidratación
dece una meningitis trata de limitar la irritación de puede valorarse por su grado de turgencia.
las raíces de la médula cervical, para lo cual adopta
la posición de gatillo de fusil: echado en decúbito PIEL Y FANERAS
lateral con hiperextensión del cuello y flexión de los
muslos sobre el abdomen. En presencia de pericardi- La piel puede ser asiento de múltiples lesiones, unas
tis aguda, el dolor precordial mejora flexionando el por enfermedades propias y otras por enfermedades
tórax hacia delante , por lo que se sienta en la cama internas y/o respuestas anormales a fármacos que
apoyando su tórax sobre las rodillas , de esta forma se expresan sobre ella. Se valora fundamentalmente
la capacidad del pericardio para acumular líquido es por inspección y palpación . Debe hacerse con luz na-
máxima. En el caso de una crisis tetánica , el enfermo tural que permita apreciar mejor las variaciones de
está en hiperextensión, apoyándose en la cama prác- color, asegurándonos que la temperatura ambiente es
ticamente sobre talones y nuca (opistótonos) . la adecuada y la zona a explorar está libre de ropa.
Los cambios hallados deben describirse con minu-
ciosidad indicando su ubicación, tamaño (medir con
TALLA regla), forma , tipo de bordes y textura. Su palpación
Su conocimiento es fácil utilizando un tallímetro y no suele ser peligrosa en la mayor parte de las enfer-
midiendo descalzo al enfermo. Múltiples tablas in-
forman de los criterios de normalidad para una de-
terminada población. El exceso de talla se denomina
gigantismo y el defecto enanismo. Deben valorarse si
son armónicos o si existe desequilibrio entre las pro-
porciones de las diferentes regiones del cuerpo.

ESTADO DE NUTRICIÓN
Muchas enfermedades alteran el estado nutricional
del enfermo. Para valorarlo es importante conQcer el
peso, si bien no refleja directamente el estado nutri-
cional, ya que puede resultar de un acúmulo anormal
de líquido (edemas). Existen tablas del peso ideal para
hombres y mujeres en todos los países occidentales.
En el adulto se utiliza el índice de masa corporal o Figura Signo del pliegue.
CAPÍTULO 4 Exploración global del enfermo

Tabla Cambios en el color global de la piel con interés semiológico


Coloración Mecanismo Situación clínica
Palidez Genético: falta melanina Albinismo
Disminución de Hb circulante Anemias
Vasoconstricción Shock, síncope
Azulada (cianosis) Aumento Hb reducida en capilares Enfermedades cardiopulmonares
Amarilla (ictericia) Acúmulo de bilirrubina Anemias hemolíticas, lesión hepatocelular, obstrucción
de la vía biliar
Cereza Intoxicación por CO Inhalación de gases
Rojizo Exceso de Hb, vasodilatación Poliglobulia, policitemia vera, síndrome carcinoide
Oscura Genético: exceso de melanina Raza negra
Pigmentación Exceso de MSH-ACTH Insuficiencia corticosuprarrenal crónica (enfermedad
oscura de Addison)

medades, pero debe hacerse con guantes cuando se un vaso, entonces se denominan petequias. Las
sospechen lesiones causadas por los agentes infeccio- efélides o pecas son depósitos puntuales de me-
sos (herpes simple, zóster, sífilis, etc.). lanina, generalmente en zonas expuestas del sol;
por el contrario, la falta de melanina se expresa
Cambios generales como una lesión pálida o vitíligo.
Conviene valorar su color. Las principales posibilida- Lesiones elevadas: Cuando la lesión se eleva
des se recogen en la Tabla 4-6. También debe valorar- sobre la piel vecina se denomina pápula. Si
se su temperatura, colocando el dorso de la palma es mayor de 1 cm se denominan placas (p. ej. ,
de la mano del explorador sobre la zona a valorar; psoriasis). Cuando su forma es irregular y hay
también debe valorarse la humedad, textura, turgen- edema cutáneo se denominan ronchas; un buen
cia y movilidad, pellizcándola suavemente. El exceso ejemplo son las picaduras de insectos. En otros
de líquidos en tejidos subcutáneos (edema) se puede casos la lesión es profunda y se localiza en la
apreciar al comprimir sobre las zonas donde pueden dermis , pero por su tamaño (de 1 a 2 cm) hacen
estar, sobre todo en las declives, ya que en ellas ori- relieve en la piel y se denominan nódulos, p. ej.,
gina una pequeña huella o fóvea. En raras ocasiones, lipomas o acúmulos de grasa. Cuando la lesión
al comprimir se aprecia una sensación semejante al hace relieve y es mayor de 2 cm se denomina
aplastar nieve fresca, lo que se denomina crepitación. tumor.
Si existe expresa la presencia de gas subcutáneo. Pue- Lesiones con contenido: Cuando la lesión con-
de proceder de un órgano que lo poseía y lo liberó al tiene líquido seroso, pero es elevada, circunscri-
romperse (p. ej., el pulmón), o por la presencia de una ta y pequeña (menor de 1 cm) se denomina ve-
infección por gérmenes que lo producen (clostridios). sícula. Producen vesículas el virus del herpes o
de la varicela. Si son de mayor tamaño se habla
Lesiones elementales de ampollas. Son características del pénfigo y
también aparecen en enfermedades infecciosas
En la piel pueden aparecer las llamadas lesiones ele-
(herpesvirus) y metabólicas. Si contienen leuco-
mentales, entre las que distinguimos las primarias y
citos (pus) se habla de pústulas; p. ej., algunas
secundarias.
lesiones infectadas del acné juvenil. Si el ma-
Lesiones primarias terial está circunscrito y rodeado por una cáp-
Máculas: Corresponden a cambios en la colora- sula se habla de quiste, p. ej. , en las glándulas
ción de la piel sin modificar el relieve cutáneo. sebáceas.
Si corresponden a un aumento en la vasculari-
zación (eritema) desaparecen al comprimirse la Lesiones secundarias
piel por un vidrio (vitropresión). Otras veces no Cuando las lesiones primarias se complican por agre-
desaparecen por vitropresión, p. ej. , si hay acú- siones externas o evolucionan, se transforman en se- ~
mulo de sangre por la ruptura puntiforme de cundarias:
--- SECCIÓN l. Conceptos fundamenta les

En las lesiones escamosas las células de la piel se fia. Por el contrario, la piel puede aparecer engrosada,
desprenden fácilmente o al roce. Así sucede en la áspera, por ejemplo en zonas de roce: liquenificación.
psoriasis. Si hay pérdida en la continuidad de la piel
puede originarse una fisura, rasgadura lineal que va
de la epidermis a la dermis, p. ej., las producidas por EXPLORACIÓN DE LAS UÑAS
los hongos entre los dedos del pie, conocido como pie
de atleta. En las erosiones hay pérdida de la superfi- Su evaluación nos ayuda al diagnóstico de múltiples
cie de la epidermis. A veces son consecuencia de la enfermedades que las pueden afectar. Pueden oscure-
ruptura de vesículas o ampollas por un traumatismo. cerse debido al acúmulo de pigmento tabáquico o a la
Si en una zona se pierde la epidermis y la dermis se toma de fármacos antipalúdicos. Las manchas blancas
habla de úlcera. Así sucede en sujetos encamados, en en la placa ungueal se originan por traumatismos o
los que la piel está isquémica al quedar comprimida manipulaciones leves sobre la cutícula. Ciertas enfer-
entre la cama y un relieve óseo. Al evolucionar las medades como la anemia ferropénica, las lesiones por
lesiones, p. ej ., úlceras o erosiones, puede originarse hongos (tiñas), la sífilis o el hipotiroidismo las defor-
una costra, que resulta de la desecación de exudados man haciéndolas aparecer una depresión central, en
serosos, sanguinolentos o purulentos. Otras veces forma de cuchara. La psoriasis puede producir depre-
aparece una cicatriz, compuesta de tejido fibroso que sión y separación de sus bordes (onicólisis). decolora-
reemplaza al tejido cutáneo normal. En ocasiones se ción y engrosamiento periungueal (paroniquia).
desarrolla de forma exagerada, en forma de queloides. La presencia de pequeñas zonas hemorrágicas en
Otras veces la piel, sometida a múltiples agresiones, forma de una pequeña herida por clavarse una peque-
sobre todo si está envejecida y adelgaza, se hace tras- ña astilla sugieren émbolos múltiples, por endocardi-
lúcida y pierde su relieve; se habla entonces de atro- tis infecciosa. En condiciones normales la base de la

Lesiones ampol losas Lesión macular pigmentada (melanoma) Lesión eritematoescamosa


(herpes circinado)

Nódulos y papulopústu las Acné pustuloso Máculas eritematosas, reacción a


(tiña inflamatoria) medicamentos (exantema morbi liforme)

~
Figura 4•3 Algunas lesiones elementales de la piel. Cortesía del Dr. Manuel
Araña vascular (spider) Maragón, Servicio de Dermatología. Hospital Universitario San Juan, Alicante.
CAPITULO 4 Exploración global del enfermo

uña y la piel forman un ángulo de 160 grados. Otras


veces la uña aparece convexa en sentido longitudinal
y transversal y el ángulo disminuye. Esta situación se
conoce como uñas en vidrio de reloj. Su presencia, de
no ser congénita, orienta a la existencia de procesos
que cursan con una oxigenación pobre y mantenida
de los tejidos, infecciones crónicas, enfermedades
tiroideas, etc. Otras veces esta situación se acompa-
ña además de expansión de la extremidad distal del
dedo, transformándose este en un «palillo de tambor»
o acropaquia, que puede ser congénita o acompañar a
la existencia de un tumor pulmonar.
Las afecciones de la cutícula hacen que el lecho
ungueal aparezca rojo, hinchado y doloroso. Es la lla-
mada paroniquia, y expresa la existencia de infección
local.
Figura A lopecia areata.

EXPLORACIÓN DEL PELO


glándulas sebáceas origina tapones oscuros llamados
Se debe valorar la cantidad y distribución del vello. comedones, que son las lesiones iniciales del acné en
Ambas están condicionadas genética y racialmente el adolescente.
en gran medida. El hombre español tiene, de forma
genérica, la superficie corporal cubierta en mayor o
menor medida por un vello fino. Otro más grueso y EXPLORACIÓN DE LA CABEZA
terminal se localiza en cuero cabelludo, axilas, barba,
miembros superiores e inferiores y con una distribu-
Y EL CRÁNEO
ción variable en plano anterior y dorso del tórax y el Por inspección valoramos su tamaño y forma. El
pubis, donde llega al ombligo con una distribución tamaño excesivo (m acrocefalia) puede expresar un
romboidal. La mujer carece de vello en la barba y bloqueo en la circulación del líquido cefalorraquí-
tronco y es escaso en las extremidades. En el pubis su deo (hidrocefalia). La situación inversa surge por un
distribución es triangular con base superior. En oca- defecto del desarrollo (microcefalia) . El crecimiento
siones las mujeres presentan vello terminal excesivo puede no ser uniforme y predomina en partes acras
de distribución masculina (hirsutismo). Si se descar- (acromegalia) o en ciertas zonas del cráneo (p. ej .,
ta una excesiva pilosidad familiar o genética debe enfermedad de Paget) .
pensarse en la existencia de actividad androgénica A la palpación se puede apreciar la existencia de
patológica y buscar la presencia de otros signos de puntos dolorosos o masas , y a la auscultación, de for-
esa actividad como serían la voz grave y ronca o un ma excepcional, soplos.
aumento del desarrollo muscular. Entonces se habla
de virilización.
La pérdida de pelo, alopecia (Fig 4-4) puede ser EXPLORACIÓN DE LA CARA
localizada (a causa de cicatrices, infecciones por hon-
gos, o de carácter psicógeno) o ser generalizada. La FACIES
calvicie común tiene una distribución característica
y está condicionada genéticamente, pero se expresa Algunas enfermedades la modifican y así los afecta-
en relación con los andrógenos circulantes. En el dos adquieren rasgos semejantes. Las de mayor inte-
hombre la calvicie acompaña a la madurez y en la rés clínico se recogen en la Tabla 4- 7.
mujer tiene una clara influencia hormonal. En otras
ocasiones se debe a factores externos como la quimio
o la radioterapia, que impiden la división del folículo HALLAZGOS EXPLORATORIOS EN LOS OJOS
piloso. Cejas. Los hipotiroideos pueden perder su ex-
El pelo del cuero cabelludo suele ser suave y bri- tremo externo (madariosis) . Otras veces las cejas
llante; en los enfermos con hipofunción tiroidea se aparecen unidas (sinofridia) sin que tenga signi-
hace lacio y quebradizo. ficación patológica clara.
Los párpados pueden aparecer retraídos si el
globo ocular sobresale (exoftalmos), lo que acom-
GLÁNDULAS ACCESORIAS paña a algunos tipos de hiperfunción tiroidea
La producción de sebo aumenta en el adolescente y (enfermedad de Graves). Si el párpado se infla-
favorece la aparición de acné. La obstrucción de las ma (blefaritis) las pestañas pueden retraerse ha-
---
SECCIÓN Conceptos fundamentales

Tabla Hallazgos semiológicos de la facies (cara)


Tipo de facies Rasgos Fisiopatología
Luna llena Cara redonda, seborreica, con hipertricosis Exceso de glucocorticoides con
redistribución de la grasa
En máscara Inexpresiva, mirada fija, a veces babeo Enfermedad de Parkinson
Hipocrática Prominencias óseas marcadas, ojos hundidos, Enfermedades caquectizantes (tumores)
pérdida de grasa y músculo
Hipotiroidea Piel seca, pálida. Pérdida de la cola de las cejas, Hipofunción tiroidea
edema periorbitario, cabello frágil , a veces
macroglosia
Acromegálica Crecimiento de partes acras: mentón , nariz, Exceso de hormona de crecimiento
orejas con cartílagos de crecimiento
soldados (acromegalia)
Nefrótica Palidez amarillo-pajiza. Edema en párpados Gran hipoproteinemia por pérdidas en
orina
Mongoloide Ojos achinados, pliegue vertical, cabello y orejas Trisomía del cromosoma 21 (síndrome
de implantación baja de Down)

cia fuera (ectropión) o hacia dentro (entropión) . pados inferiores y valoramos el color de esa red
La inflamación de las glándulas lacrimales, bien vascular.
de forma aguda (orzuelo) o de forma crónica Córnea. En condiciones normales es transpa-
(chalazión) las hace prominentes. Si se altera el rente y lisa. Puede sufrir erosiones, úlceras u
cierre correcto de los globos oculares se facilitan opacidades. Estas pueden ser leves (nébulas) o
las erosiones cornea.les. El párpado puede apare- lesiones mayores (leucomas). Los ancianos sue-
cer caído (ptosis) , y está paralítico si hay lesión len tener en su borde externo un halo claro re-
del tercer par craneal correspondiente. A veces dondeado , el anillo cornea]. Si está presente en
acumula líquido de forma difusa (edema) , orien- jóvenes orienta a la existencia en ellos de una
tando a la existencia de nefropatías con pérdi- dislipemia (hipercolesterolemia).
da de proteínas. En otras ocasiones acumulan Las pupilas son iguales de tamaño , es decir, iso-
lípidos, en forma de pequeñas placas llamadas córicas. Si no es así hay anisocoria, lo que sugie-
xantelasmas, lo que orienta a la existencia de un re patología. A la más abierta la denominamos
trastorno en el metabolismo del colesterol. Las midriática y a la cerrada miótica. Las pupilas
secreciones lacrimales pueden estar aumentadas normales responden a la luz y a la acomodación.
(epífora) o disminuidas (xeroftalmia). Si con una linterna iluminamos una de ellas se
Conjuntivas. A su través valoramos la coloración debe provocar su miosis (respuesta directa) y
de la esclerótica. Se torna amarillenta si acumula la constricción pupilar en el otro ojo, (reflejo o
bilirrubina. Otras veces las escleras están adelga- reacción consensual). Si se mira a lo lejos están
zadas y dejan traslucir el color azulado de los abiertas y si se pide al enfermo que mire algo cer-
vasos subyacentes (p. ej., en la osteogénesis im- ca, convergen y se cierran (se acomodan). Si no
perfecta). Si aparece especialmente enrojecida es así se dice que son arreactivas, lo que expresa
nos habla de inflamación local (conjuntivitis). En enfermedad.
ocasiones de los ángulos del ojo ocular nace una Nariz y senos para.nasales. La inspección ex-
banda fibrosa triangular dirigida hacia la córnea terna puede demostrar la existencia de lesiones
(pinguécula) . Si está vascularizada y es grande cutáneas. Frecuentemente son unas dilataciones
puede dificultar la visión (pterigion). La conjun- lineales de los capilares o telangiectasias, u otras
tiva tarsal permite visualizar una red vascular malformaciones vasculares que tienen un engro-
rica, cuya coloración orienta sobre la existencia samiento central del que salen ramificaciones y
o no de anemia. Para su valoración pedimos al que por su forma se denominan arañas vascula-
enfermo que mire hacia arriba al tiempo que res o spiders. Pueden vaciarse al comprimir su
nuestros pulgares desplazan hacia abajo los pár- centro rellenándose a continuación desde él a la
CAPÍTULO 4 Exploración global del enfermo

periferia. Estas lesiones se relacionan con un ex- que la úvula está en posición medial y que se eleva
ceso de actividad estrogénica, lo que acompaña a al pedir al paciente que diga AAA ... !, lo que infor-
la insuficiencia hepática o al embarazo. ma de la integridad de los pares craneales IX y X que
inervan esa zona. El contacto del depresor sobre el
Debe valorarse si existe alguna malformación en el
paladar blando debe provocar el reflejo nauseoso.
tabique y el grado permeabilidad de las fosas. Para
El suelo bucal debe aparecer limpio de lesiones. A
ello pedimos al enfermo que flexione hacia atrás la
veces las hay, por obstrucción de las glándulas sub-
cabeza y con nuestro pulgar impulsamos la punta de
maxilares o la presencia de un tumor. El fondo farin-
la nariz hacia atrás, comprobando la simetría de am-
geo aparece rojo, brillante, húmedo, con las amígda-
bas ventanas . Por cada una se logra solo una visión
las a ambos lados, de color rojo y sin placas blanque-
parcial del vestíbulo, que se mejora si se usa un espé-
cinas. A veces han sido extirpadas. La lengua aparece
culo nasal. La sospecha de obstrucción se comprueba
simétrica, sin atrofias, con su movilidad conservada
porque al presionar sobre un ala nasal y pedir al en-
en todas las direcciones, lo que asegura la indemni-
fermo que espire fuerte por la otra fosa, no es posible.
dad del XII par craneal que la inerva. Debe estar bien
El especialista en Otorrinolaringología (ORL) valorará
hidratada. Aumenta de tamaño (macroglosia) en cier-
con el espéculo la mucosa, los cornetes, la desembo-
tas formas de hipotiroidismo y raras veces porque se
cadura de los senos maxilares, los senos paranasales
acumula en ella sustancia amiloide (amiloidosis) o es
frontales, etc.
asiento de algún tumor. Sus papilas pueden aparecer
En clínica los senos paranasales pueden explorar- atróficas si hay un déficit de vitamina B12. En ciertos
se mediante compresión de los mismos con los pul- enfermos, sobre todo desnutridos, deshidratados o
gares del explorador. Para valorar los senos frontales con infecciones locales no es infrecuente que aparez-
se presiona hacia arriba sobre el borde ciliar y para ca recubierta de una capa blanquecina (lengua sabu-
los maxilares hacia dentro, en la región maleolar. Si rra]). Debe distinguirse de las lesiones puntiformes,
duelen sugieren la existencia de un proceso inflama- más extensas y lineales en los bordes, que produce la
torio (sinusitis). sobre todo si hay fiebre. También es infección por Gandida albicans (micosis). Para explo-
útil su transiluminación con una linterna. El paso de rar la naso e hipofaringe se requiere ayuda instrumen-
la luz por los mismos se verá dificultado si el seno tal y habitualmente la realiza el ORL.
correspondiente está ocupado por exudados.

OÍDOS
BOCA Y FARINGE El pabellón auditivo puede ser asiento de malforma-
El aliento del enfermo (fétor) puede orientar a la exis- ciones congénitas, deformidades, quistes sebáceos o
tencia de ciertas patologías. forúnculos (infección del folículo piloso). Los enfer-
mos con gota pueden tener en él acúmulos de ácido
Si el fétor es urinoso orienta a la existencia de insu- úrico (tofos). El dolor o la exudación al mover el pa-
ficiencia renal crónica. bellón auricular hacia arriba o abajo y al presionar
Si huele a acetona o frutas ácidas se habla de alien- sobre el trago sugieren la existencia de una infección
to o fétor cetósico y expresa un déficit en la me- en el oído externo (otitis aguda externa). La hiper-
tabolización de los hidratos de carbono (diabetes sensibilidad del pabellón sugiere una otitis media.
descompensada). El conducto auditivo es asiento ocasional de tapones
Si el olor es a tierra mojada, habría fétor hepático, de cerumen o de la infección de folículos pilosos
acompañando a la insuficiencia hepática. (foliculitis o forunculosis) , a veces muy dolorosa.
Otros olores que son característicos son el fétor del Se explora mediante visión directa o con el uso de
alcohólico o del fumador de tabaco. un otoscopio, que será imprescindible para explorar
el tímpano. El paciente debe girar la cabeza hacia el
En la boca debe valorarse su simetría. Si hay asi- lado opuesto y el explorador introduce el aparato en
metría puede deberse a afectación del nervio facial, el conducto auditivo , tras dirigir con su mano la oreja
que la desvía hacia el lado sano. Su interior se ex- hacia arriba, hacia atrás y algo hacia fuera. El apara-
plora con la ayuda de un depresor que el explorador to se orienta hacia abajo y hacia delante. El tímpano
maneja con una mano y una linterna en la otra. En intacto muestra su membrana translúcida, cóncava,
los labios conviene valorar la existencia de pigmenta- de color gris oscuro apoyada sobre el martillo. Se al-
ciones, lesiones vasculares (telangiectasias), tumores tera en procesos infecciosos locales (otitis), y se debe
o fisuras. En los dientes, su número, color, estado; valorar la existencia de exudación, cuerpos extraños,
en las encías, la presencia de inflamación, lesiones enrojecimiento, hinchazón o exceso de cerumen. El
hemorrágicas o procesos infiltrativos. En las mejillas especialista en ORL realizará una exploración más
se valora especialmente la coloración y la permeabi- completa.
lidad del conducto de Stenon. El paladar duro puede El resto de la exploración física del enfermo será
aparecer amarillento si el enfermo tiene ictericia. Se comentada en cada uno de los capítulos correspon-
debe comprobar la movilidad del paladar blando, y diente a cada aparato o sistema.
-"TI
-105
Exploraciones complementarias
básicas para el diagnóstico
de las enfermedades
Jaime Merino Sánchez, Vicente F. Gil Guillén, Reyes Pascual Pérez

CONCEPTO
Para curar al enfermo debemos diagnosticarle. El
diagnóstico se sospecha por la historia clínica y la
exploración física y se confirma con determinadas
pruebas. Son técnicas realizadas por diferentes ser-
vicios centrales (laboratorio , radiología, otros) que
tratan de objetivar las señales o signos que se pro-
ducen en el organismo a consecuencia de la enfer-
medad. De forma esquemática podemos clasificarlas
en:

PRUEBAS O TÉCNICAS DE LABORATORIO


REALIZADAS SOBRE FLUIDOS
O MATERIAL BIOLÓGICO
Se realizan en los laboratorios de
hematología, bioquímica, genética,
alergia, anatomía patológica y mi-
crobiología. Habitualmente usan
plasma, que es sangre anticoagu-
lada, al que se retiran sus células
por centrifugación, o suero líquido
sobrenadante al dejar coagular la
sangre. También pueden ser líqui-
dos muy diversos: orina, líquido
pleural, raquídeo, de un absceso, de
una articulación, o muestras de tejidos
obtenidos por punción o biopsia (Tablas 5-1, 5-2,
5-3, 5-4).
En estos líquidos se pueden valorar:
■ Sus características organolépticas: color, volu-
men, olor, transparencia, etc.
■ Su contenido en múltiples sustancias : iones,
proteínas, lípidos, azúcares, metabolitos, enzi-
mas, hormonas , fármacos, tóxicos, gases (oxíge-
no, carbónico). etc., ver Tabla 5-1.
■ Las propiedades de ese líquido como densidad,
~
osmolaridad, viscosidad, etc.
CAPÍTULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

·--~--------------------
Tabla Valores de referencia de hematología
Hemograma Valores de referencia Unidades
Leucocitos 3,5-12 109 / L
Segmentados 1,5-7,5 109 / L
Linfocitos 15 109 / L
Monocitos 0,1-0,8 109 / L
Eosinófilos < 0,5 109 / L
Basófilos < 0,2 109 / L
Hematíes 4,5 1012 / L
Hemoglobina 10-12 g/dl
Hematocrito 40-50 (H) , 36-46 (M) %
Volumen corpuscular medio 80-100 fl
Hemoglobina corpuscular media 27-33 pg
Plaquetas 140-500 109 /L
Velocidad de sedimentación globular < 25 mm/h
Coagulación
Actividad de protombina 70-120 %
Índicie de Quick 12-14 Seg.
T. de tromboplastina parcial activado 28-40 Seg.
T. de trombina 12-20 Seg.
Fibrinógeno 2-4,5 g/L
H = hombre; M = mujer

La presencia en él de agentes biológicos: son los


estudios microbiológicos, que permiten detectar
Tabla Valores de referencia la presencia de gérmenes, bien por tinción di-
en el análisis de orina recta, o a través de cultivos de esos líquidos en
medios especiales.
Elemental Presencia de cristales al microscopio (orina, lí-
pH 7,4
quido sinovial).
Nitritos negativo
Algunas pruebas son de naturaleza inmunoló-
Densidad 1010-1035
gica: miden componentes de la inmunidad, del
Bilirrubina, urobilinógeno negativo
complemento, si existen complejos inmunes cir-
Cuerpos cetónicos negativo
culantes o la presencia de au toanticuerpos.
Glucosa negativo
Sedimento leucocitos < 15 por campo Estas determinaciones no solo ofrecen una infor-
hematíes< 13 por campo mación estática del valor en el momento de la de-
Otras determinaciones terminación, sino que pueden darnos información
Osmolaridad 300-900 mOsm / 24 h. acerca de la funcionalidad de algunos órganos. Por
Creatinina 50 - 150 mg / día ejemplo, las determinaciones hormonales basales nos
Proteinuria < 150 mg / 24 horas orientan acerca de la actividad de una determinada
Sodio 30 - 300 mEq / 24 horas glándula. Los valores están elevados si hay hiperfun-
Potasio 25 - 90 mEq / 24 horas ción o disminuidos si existe hipofunción. Pero las
Cloro 85 - 170 mEq / 24 horas hormonas están reguladas por mecanismos de retroa-
Calcio 50 - 350 mEq / 24 horas limentación, por lo que obtenemos más información
si medimos las otras hormonas de cada sistema: por
~ - - - - - - - - - - - - - - - - ----~ ejemplo la T4 con la TSH. Se puede identificar no
---- SECCIÓN . Conceptos fundamentales

Tabla-3 Valores plasmáticos normales de algunas determinaciones bioquímicas


automatizadas frecuentes
Determinación Valores Unidades
Glucosa 55-115 mg/dl
Urea 10-50 mg/dl
Creatinina 0.6-1,3 mg/dl
Proteínas totales 7,5 g/dl
Albumina 3,4-4,8 g/dl
Uratos 3,4- 7 (H) 2,4-5,7 (M) mg/dl
Colesterol total 100-240 mg/dl
Colesterol HDL 35-55 (H) 45-65 (M) mg/dl
Triglicéridos < 200 mg/dl
Calcio 8,1 -10,4 mg/dl
Sodio 133- 145 mEq/1
Potasio 3,3- 5,1 mEq/1
Cloro 96-110 mEq/1
Magnesio 1,59- 2,56 mg/dl
Fosfato 2,7- 4,5 mg/dl
Bilirrubina total 0,2-1 mg/dl
Bilirrubina directa < 0,25 mg/dl
Alanina aminotransferasa (ALAT) (GPT) 10 - 50 (H), 10 - 35 (M) U/litro
Aspartato aminotransferasa (ASAT) (GOT) < 37 (H) < 31 (M) U/litro
Gamma glutamil traspeptidasa (GGT) 55- 115 mg/dl
Fosfatasa alcalina (FA) < 270 (H) < 240 (M) U/litro
Lactico deshidrogenasa (LDH) 230-460 U/litro
Creatinquinasa (CK) < 190 (H) < 167 (M) U/1
Creatinquinasa mb <6 U/1
Colinesteresa < 190 (H) < 167 (M) U/1
Amilasa 25 - 100 U/1
Antiestreptolisina O < 200 ui/ml
L U: unidades. ui: unidades internacionales. H: hombre. M: mujer. _ __

Tabla 5- Valores plasmáticos normales de la determinación de proteínas y hormonas


Proteínas/hormonas Valores referencia Unidades
Factor reumatoide < 14 ui/ml
Ferritina < 300 ng/ml
lgA 100 - 490 (H), 85-450 (M) mg/dl
lgG 800- 1700 mg/dl
lgM 50-320 (H), 60-370 (M) mg/dl
Proteína C reactiva < 0,5 mg/dl
Transferrina 200-400 mg/dl
Cortisol 6-30 mcg/dl
Insulina 8-25 mcu/ml
PTH 10-65 pg/ml
----
~ Abreviaturas: ver tabla 5-3
CAPÍTULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

sólo la existencia de hipo o hiperfunción, sino tam- tras exposición al bacilo de Koch) o si el sujeto es
bién su origen: en tiroides si la T4 está baja y la TSH alérgico y reacciona contra algún alergeno de póle-
alta, o en la hipófisis si la TSH también está dismi- nes, ácaros , hongos o determinados fármacos.
nuida. Cuando se sospecha insuficiencia glandular
o quiere conocerse la reserva funcional de una glán-
dula se utilizan pruebas de estímulo: se administra PRUEBAS DIAGNÓSTICAS DE IMAGEN
la hormona trófica y se valora la respuesta sobre la
hormona diana. Por ejemplo, se inyecta ACTH y se Calificamos así aquellos procedimientos que de al-
miden los cambios del cortisol plasmático. Cuando guna manera nos enseñan la morfología, estructura o
se supone que hay hiperfunción glandular se utilizan arquitectura de los órganos. Permiten al clínico apre-
pruebas de supresión o frenado: se administra una ciar las posibles alteraciones. Calificamos de técnicas
hormona o sustancia que produce una retroalimenta- de imagen: a) Las endoscopias, b) Técnicas radiológi-
ción negativa y se comprueba si frena adecuadamen- cas, c) Las técnicas ecográ.ficas, y d) Las técnicas que
te. Por ejemplo, si disminuyen el cortisol o el ACTH utilizan isótopos radioactivos.
tras administrar dexametaxona exógena.
Para estos estudios de laboratorio se utilizan todo
tipo de técnicas: calorimétricas, enzimáticas, isotópi- ENDOSCOPIAS
cas, microscópicas, etc. Pueden ser muy sencillas y
empleadas en la rutina, o muy complejas y de uso El endoscopio es un tubo flexible dotado de un siste-
limitado, por ejemplo de biología molecular. Muchos ma de lentes de fibra óptica, que trasmite la luz desde
análisis de la clínica diaria suelen realizarse median- una fuente generadora y que permite visualizar imá-
te aparatos de forma automatizada. genes distales al orificio de entrada. Dispone de un
canal operativo por el que se pueden introducir ins-
trumentos que completan la exploración (aspirar con-
PRUEBAS QUE ESTUDIAN LAS CÉLULAS tenido, extraer cuerpos extraños, toma de biopsias,
Y TEJIDOS etc.), así como un canal para la insuflación de aire
o inyección de agua para lavados locales. Al visuali-
Se incluyen las de la sangre (laboratorio de hematolo- zar directamente las lesiones podemos diagnosticar
gía) (tabla 5-1). No solo valoran el número de células los procesos inflanrntorios o tumorales en sus fases
existentes en sangre periférica, sino su morfología, iniciales, obtener secreciones y muestras de tejidos
presencia de células anormales , carga enzimática, sus y realizar procedimientos terapéuticos como extrac-
antígenos (grupos sanguíneos, sistema HLA), etc. ción de material, extirpación de pólipos, esclerosis de
Los anatomopatológos también estudian las células venas varicosas, etc. Sus inconvenientes son, además
aisladas (citología); unas veces obtenidas de secre- de las molestias y el tiempo que consumen, el ries-
ciones descamadas (vaginales o de mucosa bucal), go de producir lesiones, especialmente perforación
otras mediante punción con aguja fina de las masas o de vísceras durante la realización de la biopsia y la
tejidos (PAAF) o por sección de los mismos (biopsia). limitación de la exploración a las zonas a las que real-
Estas últimas permiten relacionar las lesiones con la mente son accesibles (Fig. 5-1).
estructura del órgano que se estudia. En el sujeto vivo
o fallecido (necropsia), su estudio permite definir con Las endoscopias que habitualmente se utilizan para
nitidez la naturaleza del proceso (si la enfermedad es valorar las enfermedades del aparato digestivo son:
inflamatoria, tumoral, etc.) La esofagogastroduodenoscopia: en ella el en-
El material citológico permite profundizar en el co- doscopio se introduce por vía oral y permite el
nocimiento de la base de las enfermedades genéticas: estudio sistemático de esófago, estómago y duo-
se hacen dividir a las células contenidas en esos líqui- deno hasta su segunda porción.
dos, luego se detiene su crecimiento y se destruyen,
■ La rectocolonoscopia: el instrumento se intro-
obteniendo su contenido, por ejemplo cromosomas,
que pueden fotografiarse (cariotipo). Los inmunólo- duce por vía anal y permite la visualización del
gos caracterizan las células de la inmunidad e incluso recto y colon hasta el ciego.
valoran en ellas determinadas funciones: capacidad La Japaroscopia o peritoneoscopia: permite vi-
de producción de citoquinas, de migrar, etc. sualizar la cavidad peritoneal y obtener biopsias
hepáticas bajo control visual.

PRUEBAS CUTÁNEAS En el aparato respiratorio se usa:

La aplicación de determinadas sustancias externas ■ La fibrobroncospia; el aparato pasa desde la


(alergenos) sobre la piel produce un peculiar tipo de boca hacia el interior del árbol bronquial, lo que
respuesta que debe ser valorada. Informan de si hubo nos permite visualizarlo , obtener secreciones y
un contacto previo del sujeto con ese antígeno, (por muestras (aspirado bronquial, cepillado, lavado ---y¡-
ejemplo en la reacción de la tuberculina o mantoux, bronquioalveolar y biopsia transbronquial).
SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

más, son procedimientos universa-


les, ya que permiten ser aplicados
a un grupo de población como pro-
cedimiento de cribado, como en la
detección del cáncer de mama.
Los principales inconvenientes
vienen de que el paciente es so-
metido a una cierta radiación, ya
que los rayos X ionizan directa-
mente las moléculas biológicas e
indirectamente el medio en el que
aquellas se encuentran: al interactuar
con la materia ionizan los átomos de la
misma, es decir, originan partículas con
carga (iones). Los radiólogos deben obtener las
imágenes con la mayor calidad diagnóstica, pero
radiando al enfermo lo menos posible (criterios
Alara).
Las principales técnicas son: la radioscopia ,
la radiología convencional sin y con contraste,
la radiología digital TAC, la resonancia nuclear
magnética (RM) , el PET (tomografía de emisión de
positrones) y el SPECT (tomografía computarizada
por emisión de fotón único).
Para evitar sus posibles inconvenientes sólo deben
realizarse los estudios radiológicos que estén justi-
ficados para el diagnóstico. Una radiografía normal
Figura 5-1 Realizac ión de una colonoscopia. puede no descartar de forma absoluta que pueda
haber lesiones: por ejemplo, en las fases iniciales
de la osteoporosis o las metástasis vertebrales no se
■ Con una técnica semejante también podemos demuestran cambios óseos, ni aparecen en la radio-
realizar una mediastinoscopia, o una pleurosco- logía de tórax en caso de un infarto pulmonar. Debe
pia. valorarse si los hallazgos radiológicos justifican las
En el aparato locomotor es posible introducir el ar- manifestaciones clínicas del paciente, ya que pueden
troscopio en una articulación (rodilla, cadera) para ser un hallazgo no relacionado. Se debe recordar que
valorarla y examinar su contenido, obtener muestras, en el estudio radiológico convencional los hallazgos
extraer cuerpos extraños, etc. se expresan en un plano, cuando ellos y el sujeto ocu-
En el aparato genitourinario, el cistoscopio permite pan un volumen, y por ello algunas alteraciones pue-
valorar la cavidad vesical y obtener muestras. Se in- den p ermanecer ocultas, por ejemplo bajo estructuras
troduce por la uretra o vía transvesical suprapúbica. óseas.
En el aparato genital femenino, la uteroscopia valora
el útero introduciendo por la vagina el uteroscopio. Radiología de tórax
Las proyecciones convencionales son: la posterior-
anterior (enfermo de pie con el tubo de rayos cató-
TÉCNICAS RADIOLÓGICAS dicos a su espalda); la anteroposterior, si el enfermo
Los rayos X son radiaciones electromagnéticas pro- está en la cama y el tubo se coloca delante del mismo;
ducidas por la desaceleración de electrones; son in- y la lateral, colocando el lado correspondiente del
visibles y capaces de atravesar los cuerpos opacos e enfermo sobre la placa. En casos muy concretos se
impresionar películas fotográficas, con lo que pode- hacen oblicuas.
mos en ellas obtener la imagen de cualquier zona del La interpretación puede ser compleja y conviene
cuerpo. Sus principales ventajas consisten en que son hacer una lectura reglada: vías aéreas, partes blandas,
baratas y en general poco agresivas. silueta cardiaca, mediastino e hilios, parénquima
Los avances técnicos hacen que los equipos ac- pulmonar, y senos costo y cardiofrénicos (Fig. 5-2).
tuales ofrezcan imágenes de alta calidad con meno- La radiología de tórax es de gran utilidad si existe
res dosis de radiación. Si se utilizan correctamente, sintomatología del aparato respiratorio, anteceden-
tienen una alta rentabilidad diagnóstica. Tienen una tes de EPOC o tabaquismo o sospecha de neoplasias
gran versatilidad, es decir, se dispone de técnicas di- primarias o metatastizadas en el tórax, traumatismos
versas que permiten explorar todo el organismo. Ade- torácicos , fiebre de origen desconocido , enfermos
CAPITULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

Figura Radiografía de tórax normal: PA y lateral. Imágenes 5-2, 5-3 y 5-4 cortesía de la Dra. M.ª Á ngeles Vázquez. Serv i-
cio de Radi odiagnóstico . Hospital Universitari o de San Ju an. Ali ca nte.

VIH con deterioro del estado general y también para


valorar la correcta ubicación de las vías centrales o la
localización de cánulas endotraqueales.
Aunque su uso esté generalizado no tienen indica-
ción en todos los preoperatorios. Sólo deben realizar-
se en enfermos de alto riesgo, cardiópatas, broncópa-
tas y enfermos con neoplasias primarias del tórax. No
está indicada si se sospecha infeccion de la vía aérea
durante el embarazo o en las campañas de detección
del cáncer de pulmón.

Radiología de abdomen
Ofrece información sobre los órganos allí situados,
fundamentalmente hígado, bazo y riñones, así como
la distribución y morfología del gas intestinal y el
esqueleto de esa zona. Se realiza con el enfermo en
decúbito supino, aunque si se sospecha presencia de
íleo paralítico se prefiere en bipedestación. Es muy
útil en la valoración del abdomen agudo y ofrece da-
tos diagnósticos en el neumoperitoneo, presencia de
líquido libre intraperitoneal, organomegalias y obs-
trucción intestinal. También es útil en la valoración
de las calcificaciones abdominales (litiasis). Una ra-
diología normal de abdomen no descarta la existencia
de patología grave o urgente (Fig. 5-3). Figura Radiografía de abdomen, de pie, normal.
SECCIÓN Conceptos fundamentales

Radiología convencional músculo-esquelética es el mayor rendimiento de la endoscopia en ciertos


Su lectura debe hacerse valorando de forma sistemá- casos, ya que en las fases iniciales de los procesos
tica la alineación ósea (contornos óseos y su relación inflamatorios y tumorales permite obtener biopsias y
con la articulación), la densidad ósea, el espacio ar- realizar tratamientos terapéuticos endoscópicos. Está
ticular (cartílago) y las partes blandas. Es útil en toda contraindicada si se sospecha que existe una perfora-
la patología osteoarticular y muy eficaz en el estudio ción del tubo digestivo (peritonitis química), si hay
de las fracturas o la evolución de los callos óseos, el una obstrucción en el intestino delgado, o hay alergia
estudio de las enfermedades articulares, en ortopedia al látex que contienen los dispositivos que se usan
(para la valoración de las malformaciones), así como para retener los enemas opacos.
en tumores óseos o metástasicos. La urografía intravenosa utilizada en estudios del
Las Rx convencionales son menos utilizadas en aparato genitourinario es un procedimiento muy
la valoración de las fracturas complejas o la existen- económico y poco agresivo. Permite estudiar todo el
cia de hernias discales (son más útiles la TAC o la tracto urinario incluyendo el uréter y las estructuras
RM), la extensión de tumores en las articulaciones de que lo rodean, así como valorar la función renal. Está
hombros, cadera, rodilla y columna vertebral (utilizar indicada si la radiología abdominal ha demostrado
RM), así como en patología muscular o en la luxación alteraciones del tracto urinario de un paciente con
congénita de cadera (usar ecografía) . síntomas urológicos. No está indicada en la patología
El radiólogo debe realizar los estudios colocando la prostática, en la que la ecografía, la TAC o la RM son
región a estudiar en una posición determinada. Para más resolutivas. Para el estudio de la hipertensión
la columna cervical, dorsal y lumbar en proyección arterial de causa renovascular, la estenosis de la arte-
posterior, anterior o lateral; pero para otras articula- ria renal se valora mejor por ecografía Doppler o por
ciones se requieren oblicuas. técnicas isotópicas.
La radiología craneal en presencia de un trauma-
tismo craneoencefálico sin lesiones visibles o sin TAC y sus variedades
manifestaciones clínicas tiene baja rentabilidad, y lo
Combina la metodología de los rayos X y la compu -
mismo sucede con las series óseas metastásicas (es
tarización. Se basa en que las diferentes áreas ana-
preferible hacer un rastreo isotópico) o la radiología
tómicas o las lesiones orgánicas tienen diferentes
lumbar en las lumbalgias benignas de pacientes jóve-
coeficientes de absorción de los rayos X y el paso de
nes (Fig 5-4).
estos por los diferentes tejidos se expresa con coefi-
cientes de atenuación distintos, representados por
Radiología con contraste imágenes en distintos tonos de gris. Los hallazgos
Es particularmente útil en el aparato digestivo. Con- permiten diferenciar los tejidos normales entre sí
siste en administrar un medio de contraste positivo según su estructura y los de otras áreas . Se obtienen
(sulfato de bario por vía oral o enema) y seguir su imágenes que expresan lesiones isquémicas, edema-
tránsito con radiología de alto contraste. La mucosa tosas, desmielinizantes, tumores o calcificaciones
digestiva alta puede estudiarse tomando además sus- (Fig. 5-5).
tancias efervescentes, que liberan gases y hacen que Además , el diagnóstico se ve realzado por los cam-
el bario forme una película fina sobre las paredes de bios que dichas lesiones sufren al inyectar por vía
la mucosa. Su principal ventaja es que permite estu- intravenosa un contraste yodado hidrosoluble. En
diar toda la pared del tubo digestivo, y su limitación unos casos las lesiones ganan contraste y en otras no

~
Figura Rad iografía de co lumna y de cráneo.
CAPITULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

Figura5• Resultados de una TAC. (lzda. ) TC axial sin contraste donde se observan signos de una herida pun-
zante . (Dcha .) TC axial ósea del mismo paciente que muestra un defecto en el hueso escamoso izquierdo.

se modifican. Esta tecnología permite obtener cortes dal o angio-TC que permite obtener cortes de menor
de un grosor de 10 mm en dos dimensiones. Sus prin- grosor y de más rápida ejecución.
cipales inconvenientes son: a) no ser inocua ya que
utiliza rayos X; b) en ocasiones los artefactos limitan
su rendimiento : movimientos del enfermo, objetos en Resonancia magnética nuclear (RM) (Fig. 5-6)
su interior; c) la posibilidad del riesgo de reacciones Se basa en el fenómeno físico de que ciertas partí cu -
adversas a los contrastes, y d) excepcionalmente las las como los electrones, los protones y determinados
imágenes obtenidas son patognomónicas. núcleos atómicos bajo un potente campo magnético
Esta técnica está indicada especialmente cuando pueden adsorber energía electromagnética y radio-
existe sospecha de un tumor en cualquier localiza- frecuencias, y a su vez generar una señal de radio-
ción, en el enfermo politraumatizado, si hay sospecha frecuencia que puede ser captada por una bovina
de patología inflamatoria-infecciosa de cualquier lo- receptora. Sus principales ventajas son: a) no utiliza
calización, y en las enfermedades de los grandes va- radiaciones ionizantes y no irradia, b) permite la ob-
sos. En este caso es preferible utilizar la TAC helicoi- tención de imágenes en todos los planos del espacio,

Figura Resultados de una RM. (lzda .) RM sagital en Tl (Dcha.) RM sagital en Tl con supresión de la grasa ~
(mismo paciente).
SECCIÓN l. Conceptos fundamenta les

y c) ofrecen imágenes que muestran un gran contraste


tisular. Puede obtener cortes de 1-3 mm de grosor en
las 3 dimensiones , lo que permite diferenciar clara-
mente unos tejidos de otros y visualizar los vasos sin
necesidad de utilización de contraste.
Sus principales indicaciones son el estudio de las
lesiones del sistema nervioso: áreas de desmieliniza-
ción, delimitación de las lesiones expansivas, estudio
de lesiones del ángulo pontocerebeloso y obtención
de imágenes angiográficas. En la patología intracra-
neal permite una delimitación perfecta entre médula,
líquido cefaloraquídeo, meninges y grasa epidural,
por lo que está especialmente indicada en la valora-
ción de la patología del canal raquídeo. También p·er-
mite visualizar de forma excelente los meniscos, los
ligamentos, tendones y cartílagos, por lo que es muy
útil en el estudio de las grandes articulaciones. Sus
Figura •7 Ecocardiografía. M uestra regu rgitació n en
limitaciones derivan de su elevado coste y los tiem- la vá lvu la mitra l de grado severo (insuficiencia mitra l)
pos del estudio, y no se puede realizar si el paciente El Dopp ler co lor se demuestra por la salida de un fl ujo
es portador de marcapasos o determinadas prótesis ascendente (de un color predominantemente verdoso)
metálicas. hacia la aurícula izqu ierda.

ULTRASONOGRAFÍA (ECOGRAFÍA) con la capacidad diagnóstica de la persona que la usa


y del equipo que utiliza.
Es la técnica radiológica no convencional más utili-
zada. Los ultrasonidos son sonidos que tienen una
frecuencia por encima de la capacidad de audición
del oído humano (de 16 a 20 mil herzios). Los usados RADIOISÓTOPOS COMO TÉCNICAS
en Medicina están entre 2 y 10 megaherzios. Para su DIAGNÓSTICAS DE IMAGEN
emisión y captación se usan trasductores que permi-
ten transformar la energía mecánica del sonido en La física nuclear ha creado múltiples isótopos ra-
eléctrica. dioactivos de los átomos y la radioquímica ha obte-
La ecografía se basa en que un transductor de cuar- nido nuevos derivados orgánicos. Todos ellos se ad-
zo emite ultrasonidos que se propagan en línea recta y ministran e introducen en el organismo generalmen-
a velocidad constante. Las ondas sonoras son refleja- te por vía intravenosa. Se dispone de la tecnología
das en proporción directa a la densidad de las estruc- biofísica que permite el registro de las radiaciones
turas que se encuentran a su paso. De esta forma las emitidas por cantidades mínimas de radioisótopos ,
ondas (ecos) se transforman en señales eléctricas que dosificarlas, calcular las diluciones que sufren y se-
se reconstruyen en forma de imagen en una pantalla a guirlas durante su estancia en el organismo. Así, los
base de puntos de diferente intensidad de grises que isótopos se pueden utilizar como trazadores o indi-
dibujan las estructuras atravesadas. cadores.
La ecografía es una técnica cuyas ventajas funda- Se llaman indicadores aquellas sustancias que en
mentales son que es inocua, no emite radiación io- una estructura anatómica cualquiera alcanzan una
nizante, de fácil manejo y accesible a muy diferentes concentración significativamente distinta de la que
zonas del organismo (superficial, endocavitaria o in- existe en estructuras contiguas, con lo que es fácil-
tracorporal), tiene un bajo coste, y en general, una alta mente identificada. Los indicadores permiten delimi-
rentabilidad. Además, permite realizar no solo estu- tar sus confines, detectar estructuras con una capa-
dios morfológicos sino funcionales. Los transducto- cidad funcional distinta de los tejidos que le rodean,
res cada vez son de menor tamaño, lo que permite es- etc. Es el caso de las gammagrafías. Los radioisótopos
tudios endocavitarios, por ejemplo transesofágicos, y administrados se fijan predominantemente en un
visualizar las cavidades cardiacas (Fig. 5-7). Por otra tejido del organismo. Pero allí donde existe hiper-
parte el equipo puede ser transportado con facilidad , función se acumulan y se expresan en forma de un
lo que permite explorar a los pacientes en unidades nódulo «caliente», hiperactivo, o por el contrario se
especiales: neonatología, cuidados intensivos, etc. Se distribuyen homogéneamente por toda la glándula. El
puede decir que no tiene contraindicaciones, aunque isótopo puede ser captado por una glándula (p. ej., el
sí inconvenientes: consume tiempo, los ultrasonidos tiroides) excepto en una zona, que se conoce como
no son capaces de atravesar estructuras como el hue- nódulo «frío ». Los principales estudios gammagrá-
so, el aire o los metales, y su rentabilidad se relaciona ficos utilizados son la gammagrafía del tiroides, del
CAPITULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

pulmón y ósea. Se utilizan en busca de tejido tumoral Para ello usa una gammacámara/tomógrafo capaz de
y de procesos inflamatorios. medir la actividad metabólica del cuerpo humano. Se
Los mecanismos de localización utilizados per- detectan los fotones producidos por una «aniquila-
miten valorar el transporte activo del isótopo, lo que ción » entre un positrón emitido por el radiofármaco
permite conocer el tamaño y forma (alteraciones de y un electrón cortical del paciente. Según lo que se
volumen) del órgano, alteraciones posicionales (ecto- desee estudiar se usan diferentes radiofármacos. El
pias) y detectar alteraciones funcionales, así como flúor 18 es uno de ellos, emisor de positrones y capaz
valorar el secuestro celular (acúmulo en el bazo de de unirse a la desoxi-glucosa para obtener el trazador
hematíes alterados), el bloqueo capilar por el tamaño 18-Flúor-Desoxi-Glucosa (18FDG). De esta forma per-
de las moléculas (por ejemplo, macroagregados de mite identificar, localizar y cuantificar el consumo de
albúmina en áreas capilares y valorar si hay infarto glucosa de los tejidos. Las neoplasias tienen un meta-
pulmonar), la difusión simple o el intercambio (tra- bolismo glucídico elevado, por lo que la PET tiene un
zadores de calcio para la detección de tumores en el rendimiento diagnóstico elevado en la identificación
hueso) o el uso de sustancias que difunden en el inte- de tumores malignos o sus metástasis en cualquier
rior (por ejemplo, aminoácidos muy utilizados en un parte del cuerpo. No puede realizarse en embarazadas
determinado órgano, como la selenio-metionina en el o mujeres lactando.
páncreas, etc) .
Se califican de trazadores las sustancias que in- SPECT
troducidas en un sistema químico o biológico se Tiene una base similar a la PET pero usa un determi-
mezclan de forma uniforme con los constituyentes nado isótopo (por ejemplo, Te) y él es el que produce
de este, pero al ser identificables y diferenciables de directamente el rayo gamma. El acrónimo significa
los restantes componentes de ese sistema (por ser tomografía computarizada por emisión de fotón úni-
radioactivos) reproducen fielmente el comportamien- co. Es más simple porque pueden usarse isótopos
to de aquellos constituyentes sin modificarlos. Así, más fáciles de obtener y de vida media más larga. El
por ejemplo, utilizando un radioisótopo trazador, detector, la cámara de rayos gamma, gira alrededor
podemos conocer la masa globular que tiene el su- del paciente y obtiene imágenes cada 3-6 grados. Al
jeto. Para ello extraemos una muestra de sangre y le realizar una rotación completa de 360 grados se obtie-
añadimos el trazador, que se fija sobre los hematíes. ne una reconstrucción tridimensional óptima. Según
Podemos medir la concentración del trazador en la el radiofármaco empleado se puede conocer la perfu-
muestra, inyectarla de nuevo, dejarle que se distribu- sión regional de un órgano, la actividad metabólica
ya homogéneamente en el organismo y luego obtener de una lesión, la concentración de receptores en una
otra muestra y en ella medir la radioactividad. Se estructura, etc. Además de en Oncología, es muy útil
puede calcular el volumen de masa total conociendo en Neurología.
la concentración al inicio y la concentración en la di-
lución. (C x V= C' x V').
Los trazadores permiten valorar procesos fisiológi-
cos dinámicos, tales como calcular los flujos sanguí- PRUEBAS BASADAS EN EL REGISTRO
neos a través de los distintos órganos. Por ejemplo, el DE LA ACTIVIDAD DE LAS CÉLULAS, TEJIDOS
flujo renal si hay una estenosis en una arterial renal. U ÓRGANOS: LOS REGISTROS
También permiten valorar el aclaramiento que los ór-
ganos hacen de determinadas sustancias o determinar Los cambios en la actividad de las funciones de las
la dimensión de los espacios corporales. células, órganos o tejidos son susceptibles de ser re-
Los radioisótopos , además del diagnóstico, pueden gistrados. Esos registros constituyen unas pruebas
utilizarse en el tratamiento de las enfermedades en complementarias para el diagnóstico de alta impor-
base a la capacidad que tienen los órganos y tejidos tancia. En este grupo debemos incluir el registro de
para captar el radioelemento sin discriminar si es es- los cambios en la actividad eléctrica, las variaciones
table o radioactivo. Si existe hiperfunción de un órga- en los flujos aéreos, o los flujos circulatorios con re-
no, por ejemplo, del tiroides, la administración de un lación al tiempo.
radiofármaco que se acumule en él y tenga capacidad
destructiva (p. eje. , yodo radioactvio) puede controlar
esa hiperactividad funcional. ELECTROENCEFALOGRAMA (EEG)
Supone el registro de la actividad eléctrica normal
PET del sistema nervioso mediante electrodos situados en
Este acrónimo significa tomografía por emisión de la cabeza. Es muy útil para demostrar si existe acti-
positrones. Se basa en detectar y analizar la distri- vidad paroxística en el sistema nervioso central, (en
bución tridimensional que adopta en el interior del las crisis epilépticas), en la valoración de la actividad
cuerpo un radiofármaco de vida media ultracorta nerviosa en el caso de encefalopatías tóxicas y en el
administrado a través de una inyección intravenosa. diagnóstico de la muerte cerebral.
-- SECCIÓN . Conceptos fundamentales

ELECTROMIOGRAMA (EMG)
Supone el registro de la actividad eléctrica de los
músculos esqueléticos. Utiliza electrodos de aguja
insertados en los diferentes músculos y registra los
cambios en su potencial de acción estimulando desde
las propias fibras musculares o transmitidos por las
fibras nerviosas que inervan el músculo. Permite de-
finir la existencia de enfermedades miopáticas, neu-
rogénicas o de la unión neuromuscular.

POTENCIALES EVOCADOS
Cuando un tren de estímulos sensoriales de cualquier
tipo llega al cerebro provoca secuencias caracterís-
ticas de ondas en el trazado electroencefalográfico
que denominamos potenciales evocados. Son dife-
rentes para cada modalidad sensorial y su variabili-
dad también depende de la intensidad del estímulo.
Característicamente presentan una relación estable
en el tiempo respecto al estímulo. Esta exploración
neurofisiológica permite evaluar la función del sis-
tema sensorial acústico, visual, somato-sensorial y
sus vías por medio de respuestas provocadas frente
a un estímulo conocido y normalizado. Lo hacen al
medir la conducción nerviosa de las fibras sensitivas
y motoras de los nervios periféricos registrando los
potenciales evocados , el potencial de acción tras el
estímulo eléctrico de un nervio, o la velocidad de
Figura Rea lizando un ECG.
conducción entre dos puntos de un nervio tras esti-
mular esos puntos y registrar los potenciales muscu-
lares evocados.
Permiten evaluar si la lesión nerviosa es de causa
axonal, en cuyo caso los potenciales evocados son de de reposo de la membrana. Si la célula se despolari-
baja amplitud y moderadamente enlentecidos; o por za, la permeabilidad de la membrana al sodio y po-
lesión de la mielina, entonces los potenciales evoca- tasio cambia; lo hace rápidamente al inicio y luego
dos son de amplitud normal y la velocidad de con- se recupera lentamente (repolarización), por entrada
ducción está muy disminuida. de iones sodio (potencial de acción). Como hemos di-
cho, la suma de las actividades de todas las células
cardiacas es registrable por electrodos colocados en
ELECTROCARDIOGRAMA (ECG) (ver Cap. 45) la superficie del cuerpo (Fig. 5-8).
El ECG es particularmente útil en el diagnóstico
El corazón es capaz de contraerse de forma automá- de la hipertrofia auricular y ventricular, en todas las
tica y rítmica. Los impulsos que preceden a la con- formas de cardiopatía isquémica, en las arritmias, en
tracción surgen de los nodos, se extienden luego por el diagnóstico de ciertas alteraciones electrolíticas
el sistema de conducción y acaban traduciéndose (especialmente del potasio y el calcio), en la valo-
en una excitación de todas las fibras musculares del ración del efecto de ciertos fármacos (digoxina) y en
miocardio. Esos impulsos y su conducción producen la detección de los procesos inflamatorios del peri-
corrientes eléctricas débiles que se difunden por todo cardio (pericarditis). Pero conviene recordar que un
el cuerpo. Estas corrientes pueden ser detectadas por enfermo con enfermedad cardiaca puede tener un
electrodos colocados en diferentes puntos del cuerpo ECG normal y un sujeto sano un ECG con alteracio-
y que conectados al electrocardiógrafo permiten obte- nes inespecíficas. Los hallazgos electrocardiográficos
ner un registro que denominamos ECG. deben interpretarse en concordancia con los datos de
Su base es que la concentración de potasio dentro la clínica.
la célula miocárdica es de 150 mEq/1 y fuera de ella Las principales ventajas del ECG son la comodi-
de 5 mEq/1, probablemente porque en reposo la mem- dad, el bajo coste, que es fácil de repetir y la gran
brana es treinta veces más permeable al potasio que información que aporta. Sus inconvenientes son esca-
al sodio. Esa diferencia genera el llamado potencial sos y derivan de los errores en la interpretación.
CAPÍTULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

varios volúmenes, como la capacidad vital o la ca-


pacidad pulmonar total. También valora indicadores
dinámicos como el volumen espiratorio máximo en
el primer segundo (VEMS) o la máxima capacidad
ventilatoria (MCV) en un minuto (ver Capítulo 35)
(Fig. 5-9).

MEDIDA DE LOS FLUJOS


También son registros la valoración de los flujos vas-
culares a través de los vasos o los orificios valvulares.
Los ultrasonidos con Doppler permiten estudiar el
flujo vascular. Aplicándolos al flujo arterial, se valo-
ran las frecuencias del haz de ultrasonidos emitidas y
las reflejadas sobre los hematíes circulantes. Con ello
es posible calcular la velocidad de estos hematíes y la
dirección de su flujo.

Figura Realizando una espirometría.


PLETISMOGRAFÍA
Es una técnica que nos permite registrar los can1bios
ESPIROMETRÍA en la impedancia eléctrica que se producen en el or-
Consiste en valorar, mediante un espirómetro, el vo- ganismo al cambiar el flujo sanguíneo en una extre-
lumen de aire que se moviliza al ventilar y en rela- midad. El flujo se modifica a través de un cojinete
ción al tiempo. El registro obtenido puede valorar de hinchable y se relaciona con el volumen de las extre-
forma directa e indirecta determinados volúmenes midades.
estáticos, como el volumen inspiratorio o espirato-
rio , o determinadas capacidades que son la suma de
PRUEBAS DE ESFUERZO (Fig. 5-1 O)
También se denomina tolerancia al ejercicio, ergo-
metría, electrocardiografía de esfuerzo o ECG de
esfuerzo. Se utiliza para diagnosticar la enfermedad
arterial coronaria ya que permite ver cómo funcio-
na el corazón durante el ejercicio. Consiste en hacer
que el enfermo realice un determinado esfuerzo (por
ejemplo, realizar bicicleta estática o caminar sobre un
tapiz rodante) y a la vez registrar el trazado ECG. Se
anotan los cambios y las manifestaciones clínicas,
si aparecen. El esfuerzo puede poner de manifiesto
situaciones de isquemia latente.

RASGOS A CONSIDERAR EN LAS


PRUEBAS DE DIAGNÓSTICO
COMPLEMENTARIAS
Las pruebas diagnósticas se realizan para
obtener una información que apoye nuestra
sospecha de que el enfermo tenga una deter-
minada enfermedad, o por el contrario que
permita rechazar ese diagnóstico con un
mayor nivel de seguridad que la infor-
mación previa que disponemos. Las
pruebas pueden apoyar o descartar
un diagnóstico, pero quien la solicita
debe conocer en qué medida la infor-
Rea lizando una prueba de esfuerzo. mación que le aporta es válida.
SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

Ello se conoce calculando los INDICADORES DE pero a veces se usan pruebas de las que desconoce1:1os
VALIDEZ (ver Tabla 5-5): los indicadores de validez. Una prueba muy sensible
no tiene falsos negativos y otra poco sensible tiene
■ Sensibilidad (S): Es la capacidad de una prue-
muchos falsos negativos. Una prueba muy específica
ba diagnóstica para detectar la enfermedad. Es
tiene muy pocos falsos positivos.
la probabilidad de que la prueba obtenga un re-
Ejemplo del cálculo de los indicadores de validez del
sultado positivo cuando el individuo padece la
ECG para conocer si un enfermo con hipertensión ar-
enfermedad. Se valora en proporciones y se ex-
terial padece hipertrofia ventricular izquierda (HVI).
presa en porcentajes y la sensibilidad mejor es la
Para conocerlo, el mejor método disponible es rea-
que se aproxima al 100% . Si es del 50 % identi-
lizar una ecocardiografía, pero es muy costosa y en su
fica correctamente al 50 % de los enfermos, pero
lugar le realizo un ECG. ¿Necesito saber en qué me-
deja sin diagnosticar otro 50%. Ese porcentaje de
dida la información que me ofrece ese ECG es válida?
sujetos tiene la enfermedad y en ellos la prueba
Para ello debo calcular sus indicadores de validez:
es negativa: son los falsos negativos (FN: valor
sensibilidad y especificidad (Tabla 5-5).
complementario de la sensibilidad) y escapan al
Si el ECG tiene una sensibilidad del 50%, quiere
diagnóstico. Se debe pensar en las consecuen-
decir que sólo identifica correctamente al 50% de los
cias que tendría un falso negativo en un servicio
hipertensos que tienen HVI y dejará sin diagnosticar
de urgencias ante un dolor torácico agudo que
al otro 50 % . En ellos el ECG no registra la hipertrofia
podría ser un infarto de miocardio.
y, sin embargo, el enfermo la tiene. Son fa~s~s. negati~
■ Especificidad (E): Es la probabilidad de que la
vos o valores complementarios de la sensibilidad. Si
prueba sea negativa (indica que no presenta la
la especificidad es de 99% quiere decir que el ECG
enfermedad) cuando el individuo no la padece.
no registra la HVI en el 99% de los hipertensos en los
Es decir, valora la capacidad de la prueba para
que esta realmente no existe, pe~o en un 1 % de e~los
descartar la enfermedad sospechada. Se cuantifi-
el registro se interpreta como si el enfermo tuviera
ca en porcentajes y la mejor especificidad es del
HVI cuando no es así. Tiene un 1 % de resultados
100%. Si es del 90% identifica correctamente a
falsos positivos (o complementarios de la espec~fici-
ese porcentaje de los que no padecen la enferme-
dad). Si una prueba tiene muchos falsos negativos ,
dad, pero en un 10% de los casos señalará que
deja sin diagnosticar a muchas personas que tienen la
padecen la enfermedad y no es cierto, son f~l~o_s
enfermedad. Una prueba que tiene muchos falsos po-
positivos (FP: complementario de la especifici-
sitivos califica como enfermo a muchas personas que
dad).
no lo son. Cuando una prueba es muy específica, el
En clínica una prueba es válida cuando tanto su valor complementario de la especificidad, los falsos
sensibilidad como su especificidad superan al 80%, positivos, son muy pocos.

Tabla5-5 Cálculo de los indicadores de val idez de una pru eba (por ejemplo
del electroca rdiograma para el diagnóstico de la hipertrofia ventricular izquierda, HVI)
Prueba de certeza: Ecocardiografía
{define con gran seguridad si hay HVI)

Sí HVI No HVI Total


SíHVI a= 15 b= 1 a+b = 16
Prueba diagnóstica
a valorar: NoHVI e = 15 d = 69 c+d = 84
Por ej. ECG
Total a + e= 30 b + d= 70 a + b + e + d = 100
S =ala+ c, s = 15/15 +15 = 0,5 = 50% y 50% serían los falsos negativos (FN)
E =d/b+d E = 69/1 + 69 = 0,99 = 99% y 1% serían los falsos positivos (FP)
VPP= a/a+ b VPP = 15/16 = 0,937 = 94%
VP N= d/c + d VPN = 69/84 = 0,82 = 82%
Prevalencia: a+ c/a + b + c + d Prevalencia= 15 + 15/15 + 1 + 15 + 69 = 30/100 = 0,3 = 30%
CPP = S/FP0 0,5/0,01= 50 CPN = FN/E = 0,5/ 0,99 = 0,51

Interpretación de los coeficientes de probabilidad (CP): Si el resu ltado de la prueba es positivo confirma el diagnóstico de HVI ,
peor si es negativo no lo puede descartar.
CAPITULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

-- - - . - -------------------~

Tabla Cá lculo de los indicadores de validez de una prueba para diagnosticar un tumor
cuya prevalencia es de 50/100.000
Presencia de tumor maligno
Sí No Total
Positiva 50 1.000 1.050
Resultado de la prueba Negativa o 98.950 98.950
TOTAL 50 99.950 100.000
S = 50/50 = 1 ; F - = O;
E = 98.950/99.950 = 0.99; F + = 0,01
VP+ = 50/1050 = 0,05 = 5%
VP - = 98.950/98.950 = 1 = 100%
Prevalencia= n.º total casos de la enfermedad (aquí 50) / total de la población (100.000) = 0,05%
CPP = S/FP = 1/ 0,01 = 100
CPN = FN/E = O /0,99 = O

Interpretación de los coefic ientes de probabilidad (CP): Si el resultado de la prueba es positivo, ese resultado prácticamente
confirma el hallazgo, pero como la prevalencia de la enfermedad es muy baja, un 1% de FP es un número importante (equivale a
1.000 personas). Si el resultado de la prueba es negativo, se descarta el diagnóstico de la enfermedad.

Como habitualmente no hay pruebas que tengan una de cada cien personas que la tengan positiva
100% de sensibilidad y 100% de especificidad se no tendría el tumor. Si se realiza un cribado en
seleccionan las mejores que tenemos según se desee una población en la que ese tumor maligno tenga
confirmar una enfermedad o excluir su presencia. Si una prevalencia de 50/100.000 habitantes, espe-
es importante diagnosticar la enfermedad, se deben ramos 50 resultados verdaderos y mil resultados
elegir pruebas que tengan una sensibilidad muy alta. positivos por cada cien mil habitantes (Tabla
Si lo que se desea es tener la seguridad de que el diag- 5-6). Entre los que dan las pruebas positivas (en
nóstico es correcto y no obtener falsos positivos, se el caso de que la S sea del 100% ) sólo un cinco
escoge una prueba que tenga una especificidad muy por ciento de los positivos tendrán cáncer (VPP).
alta. Por el contrario, si una prueba tiene muchos fal- Debemos entonces fijarnos en la prevalencia de
sos negativos el problema principal es que deja sin la enfermedad de la población y la especificidad
diagnosticar un gran número de enfermos por su baja del dato (ver ejemplo en la tabla 5-6). La preva-
sensibilidad. lencia se calcula como se indica en la tabla 5-6:
Nº de casos con la enfermedad (aquí 50) dividi-
Otros indicadores son los de rendimiento de las do por el total de habitantes. Es decir 50/100.000
= 0,05%.
pruebas:
Indicadores de utilidad clínica: Se califica de
Los valores predictivos (VP. El positivo (VPP}, probabilidad preprueba, pretest o «a priori»,
informa de la probabilidad que tiene la perso- a la estimación de la probabilidad que tiene el
na de padecer realmente la enfermedad si el paciente de tener la enfermedad que se sospe-
resultado de la prueba que se quiere aplicar es cha antes de realizar la prueba. Ese valor se basa
positivo. El negativo (VPN) informa de la pro- habitualmente en la experiencia personal no
babilidad de que la persona no tenga realmente cuantificada o excepcionalmente en datos cono-
la enfermedad si el resultado de la prueba es cidos de la literatura médica o la publicación de
negativo. Se calculan según se expresa en las otros casos parecidos (ver ejemplo en Tablas 5-5
Tablas 5-5 y 5-6. y 5-6).
Los indicadores de validez se ven influidos Los indicadores antes señalados, el VPP y el
por la prevalencia de la enfermedad. Por ejem- VPN, aportan información clave y ayudan a ela-
plo, si para detectar un tumor maligno se requie- borar un árbol de toma de decisiones clínicas.
re una prueba altamente especifica, y la que usa- Al VPP se le denomina probabilidad postprueba
mos tiene una E= 0,99 (ver Tabla 5-6), equivale a de resultado positivo, postest, postexamen o a
tener un 1 % de falsos positivos, es decir que sólo posteriori. Se formula tras conocer e interpretar
SECCIÓN l. Conceptos fundamentales

los resultados de la prueba diagnóstica que se ha de probabilidad negativos inferiores a 0,1 indu-
solicitado. Esa verosimilitud es un cociente de cen cambios amplios y a menudo concluyentes
probabilidad. para confirmar la enfermedad (el positivo), y
El complementario del VPN (1-VPN) es la descartarla (el negativo). Los CPP con valores de
probabilidad postprueba del resultado negativo 5 a 10, y los CPN de 0,1 a 0,2 generan cambios
y cuantifica la probabilidad de que un pacien- moderados desde la probabilidad preprueba o
te con resultado negativo en la prueba tenga la la de postprueba. Los CPP comprendidos entre
enfermedad. Incluir estos indicadores en el es- 2 y 5 y los CPN entre 0,5 y 0,2 generan cambios
quema de decisiones clínicas permite cuantifi- pequeños de la probabilidad pre a los de post
car el grado de incertidumbre del clínico ante el prueba. Los CPP de 1 a 2 y los CPN de 0,5 a 1
diagnóstico. generan cambios de la probabilidad preprueba a
■ La utilización del VP tiene limitaciones. La fun- la de postprueba en un grado insignificante.
damental es que se influye por la prevalencia,
por lo que como indicadores de utilidad clínica OTROS RASGOS DE UNA PRUEBA que convienen
cada vez se usan más los cocientes de probabili- conocer son su:
dad (CP), también llamados indicadores de vero-
■ Exactitud: Expresa que la información que apor-
similitud o razón de probabilidad.
■ El diagnóstico clínico debe ser formulado como ta la prueba corresponde a la verdad. La prueba
expresión de una probabilidad. La probabilidad mide bien aquello que pretende medir. Es decir,
toma valores entre O e infinito , en el que O sig- tiene un alto grado de correlación entre el valor
nifica la certidumbre absoluta de que no padece observado y el verdadero. Un método de deter-
esa enfermedad en el CP negativo (CPN) e infi- minación de la creatinina del plasma es exacto
nito la certeza de que se trata de ella en el CP si nos informa de la tasa que realmente tiene el
positivo (CPP) . sujeto.
Los CP indican hasta qué punto el resultado ■ Precisión: Define la variabilidad de los resulta-
de una prueba diagnóstica aumenta o disminuye dos cuando la prueba se repite. Si es muy pre-
la probabilidad que detecte un trastorno objeti- cisa, al repetir o duplicar las determinaciones,
vo, es decir, cuántas veces es más probable que por ejemplo, en días distintos se obtendrán los
la prueba resulte positiva (CPP) o negativa (CPN) mismos resultados. Una prueba puede ser muy
en un paciente enfermo o no enfermo. precisa y sin embargo, inexacta.
El CPP se interpreta como en qué medida es Cuando una prueba no es precisa se dice que
más probable que la prueba sea positiva en al- tiene variación o variabilidad: que expresa di-
guien que tenga la enfermedad que quien no la ferencias en los resultados. Puede deberse al
tenga y resulta de dividir entre los enfermos que propio método (reproduce mal los resultados) ,
dan la prueba positiva (sensibilidad) en el nu- o al explorador u observador (porque oye o ve
merador, y los no enfermos que dan la prueba mal , varía la técnica o redondea valores) : es la
positiva (falsos positivos) en el denominador. variabilidad intra-observador. A veces los resul-
■ El CPN se interpreta como las veces que es más tados varían, si son varios los técnicos los que la
probable que la prueba sea negativa en alguien realizan (variabilidad inter-observador). La va-
que tenga la enfermedad que en quien no la ten- riabilidad se mide calculando el índice Kappa,
ga y es el cociente entre los enfermos que dan la que mide la concordancia existente entre varias
prueba negativa (falsos negativos) en el numera- determinaciones tras eliminar la influencia del
dor y entre los no enfermos que dan la prueba azar. La variabilidad no solo la tienen las técni-
negativa (especificidad) en el denominador. cas; por ejemplo, existe entre médicos para diag-
Para una mejor interpretación del CPN puede nosticar la existencia de infarto de miocardio al
calcularse el inverso del CPN, con lo que el co- valorar sus electrocardiogramas. Hay un ejemplo
ciente da un valor superior a la unidad. Entonces sobre 50 enfermos en la Tabla 5-7.
la interpretación debe hacerse a la inversa, es de- ■ Riesgo: Puede deberse a la prueba en sí (agresi-
cir, cuántas veces la prueba obtendrá un resulta- vidad, incomodidad) o por cometer errores en la
do negativo en los no enfermos (especificidad) interpretación de sus resultados. En general, los
con respecto a los enfermos (falsos negativos). clínicos asumen mayores riesgos en una prueba
Los CPP y CPN se calculan de la siguiente forma: si el beneficio que aporta es muy grande, si el
CPP = S/FP, CPN = FN/E, y si se usa el inverso: enfermo está muy grave o es joven.
1/CPN. ■ Coste: Las técnicas cuestan: implican tiempo,
■ En general las pruebas complementarias para consumo de reactivos, aparataje, personal, etc.
el diagnóstico son más útiles cuanto más incre- Todo ello debe evaluarse. En general preocupan
mentan su probabilidad desde la pre a la post las de alto coste, sin embargo a veces los gastos
prueba. De hecho, pruebas con cocientes de pro- son altos por realizar un gran número de técnicas
babilidad positivos superiores a 10 y cocientes baratas pero innecesarias.
CAPITULO 5 Exploraciones complementarias básicas para el diagnóstico de las enfermedades

Tabla5· Un ejemplo del cálculo del grado de concordancia (índice kappa) entre dos
decisiones clínicas o el valor de dos pruebas diagnósticas
MÉDICO 1
Infarto agudo No infarto agudo
Totales
de miocardio de miocardio

Infarto agudo a b N1
de miocardio

MÉDICO 2 No infarto agudo e d N2


de miocardio

Totales M1 M2 T
El acuerdo simple observado es a + d / T.
Se determina el % de acuerdo entre los dos observadores que puede explicarse por el azar, multiplicando los valores existentes
en las tablas de concordancias y discordancias de los totales de las columnas (M1 , M2) por los de las filas (N1 y N2) y esa suma
se divide por el cuadrado del total.
Acuerdo esperado por el azar: M1 x N1 + M2 x N2 /T 2
El acuerdo observado no atribuible al azar seria el acuerdo observado menos el acuerdo esperado por el azar.
Se estima el máximo acuerdo que pueden tener los dos médicos no debido al azar que sería: acuerdo máximo posible, que
sería del 100%, menos el acuerdo esperado por el azar.
El índice Kappa se valora dividiendo el acuerdo observado no atribuible al azar por el máximo acuerdo posible no atribuible al
azar. Sus valores van de - 1 (< 100%) o total desacuerdo a +1 (100% o total acuerdo).

■ Beneficio: Se relaciona con la información que les, d) el valor ideal, e) la media de los valores, f)
ofrecen para el individuo o para documentar el valor más representativo, etc.
el caso. Los beneficios pueden ser de índole ■ La importancia o relevancia clínica. Un resulta-
diagnóstica, pronóstica o terapéutica. Si las ac- do anormal en una prueba no implica que el ha-
tuaciones a realizar después en el sujeto son in- llazgo tenga relevancia clínica. Esta se extrae del
dependientes del resultado de la prueba esta no contexto del hallazgo. Un pequeño hematoma en
debería hacerse. el muslo de una mujer no se considera normal
pero puede ser un hallazgo intrascendente (una
púrpura vascular por lesión de los pequeños va-
USO CLÍNICO DE LAS PRUEBAS sos) o muy grave si aparece en el contexto de he-
COMPLEMENTARIAS PARA morragias por anticoagulantes o por un defecto
EL DIAGNÓSTICO en las plaquetas.

Al clínico actual se le pide no solo que diagnostique En general las pruebas utilizadas en clínica tienen
de forma correcta al enfermo, sino que lo haga en el la ventaja de ser objetivas y bastante exactas, y el in-
menor tiempo posible y con el menor gasto. Así, las conveniente de que muchas son agresivas y costosas.
pruebas se realizan en orden, según su rendimiento , Es importante jerarquizarlas, conocer sus indicacio-
exactitud, coste, riesgo y agresividad. Para definir el nes, contraindicaciones y sobre todo sus indicadores
orden de las peticiones deberíamos conocer árboles y sus límites.
de decisión clínica para ese problema y que se elabo-
ran según el beneficio que pueden aportar cada una
de ellas. Conviene conocer aspectos como:
OTROS EJEMPLOS DE UTILIZACIÓN
DE INDICADORES PARA DIAGNÓSTICO
■ La normalidad. Es una cualidad que viene defi-
nida o considerada como aquel valor que no re- USAR UNA PRUEBA DIAGNÓSTICA
quiere acciones diagnósticas o terapéuticas adi-
cionales. Su interpretación puede ser compleja. Se presenta en la Tabla 5-8. Se atiende a un enfermo
Puede referirse a: a) un rango de la distribución que, por los signos y síntomas que presenta, tiene una
(gausiana) de los valores en la población, b) los probabilidad preprueba de padecer una enfermedad
valores de ese laboratorio concreto, c) los índices del 20%, es decir, la prevalencia conocida de la en-
señalados por consenso de instituciones oficia- fermedad es del 20%. Para aumentar la seguridad del
SECCIÓN l. Conceptos fundam entales

Tabla 5-8 El uso de una prueba diagnóstica


Método de certeza
ENFERMEDAD NO ENFERMEDAD TOTAL

Resultado POSITIVO 19 8 27
de la prueba NEGATIVO 72 73
TOTAL 20 80 100
S = 19/20 = 0,95 o 95%
E = 72/80 = 0,90 o 90%
VPP = 19/27= 0,71 o 71 %
VP N = 72/73 = 0,986 o 98,6%
CPP = S/FP = 9,5
CPN = FN/E = 0,055

diagnóstico se decide realizar una prueba comple- enfermedad que en uno que la tenga. En conclusión,
mentaria. Esa prueba tiene una sensibilidad del 95 % el resultado de la prueba casi asegura el diagnóstico
y una especificidad del 90 % . Interpretación: Si la de sospecha si es positivo y prácticamente lo descarta
prueba resulta positiva, su VPP sería la probabilidad si es negativo.
postprueba del resultado positivo de tener la enfer-
medad (71 %). Si la prueba es negativa, se calcula el
complementario del VPN, que será la probabilidad VALORAR LA CONCORDANCIA DIAGNÓSTICA
postprueba del resultado negativo de esta enferme- DE DOS PRUEBAS O ACTUACIONES
dad (1,4%).
(Tab_la 5-7)
Si en el sujeto la prueba es positiva, la probabili-
dad de que realmente padezca la enfermedad aumen- Dos médicos valoran los ECG de «x» enfermos sobre
ta desde el 20% a casi el 71 % , y si es negativa baja los que cada uno ha decidido si tienen o no un infarto
del 20% al 1 ,4%. El cociente de probabilidad positi- de miocardio. Se pretende conocer el grado de acuer-
vo nos informa que es 9,5 veces más probable que la do en ese diagnóstico. Supone calcular el índice de
prueba sea positiva en un sujeto que tenga la enferme- concordancia entre an1bos o índice kappa. Se procede
dad que en uno que no la tenga, y al valorar el inverso como se expresa en las Tablas 5-8 y 5-9 y se calcula
del cociente de probabilidad negativo comprobarnos el índice kappa, que es 0,524 . Es decir, una vez elimi-
que es casi 18 veces (1/0,055) más probable que la nado el papel del azar los 2 médicos coinciden en el
prueba sea negativa en una persona que no tenga la 52,4 % de los diagnósticos.

Tabla5-9 Ejemplo de cálculo de la coincidencia en las decisiones entre dos observadores


(o índice Kappa)
MÉDICO 1
1AM NOIAM Total

1AM 20 10 30

MÉDICO 2 NOIAM 10 60 70

Total 30 70 100
Índ ice Kappa: Acuerdo obse rvado no atribuible al azar/ Máximo acuerdo posible no atri buible al azar
Acuerdo espe rado por el azar= 30 x 30 + 70 x 70 / 1002 = 0,58
Índice kappa= 0,8- 0,58 / 1- 0,58 = 0,22 / 0,44 = 0,524 o 52,4%.
50
-~06
Otras habilidades profesionales
necesarias para el médico
del siglo xx1
Jaime Merino Sánchez, José Miguel Seguí Ripoll, Jorge Peris García

INTRODUCCIÓN
En este capítulo el alumno debe adquirir conocimien-
tos que le serán fundamentales para su trabajo como
médico. Es importante conocer cuáles son las habili-
dades que el futuro médico necesitará al margen de
las tradicionales. Se ha señalado que se le va a exigir
una gran capacidad de trabajo, hacerlo en equipo, que
será multidisciplinario, debe mantener una actitud de
aprendizaje permanente, comunicar bien, liderar la
gestión clínica y tener una actitud de servicio orienta-
da a la calidad y la eficiencia.
Pretendemos ofrecer aquí información sobre esas
habilidades y dar algunas claves para conseguirlas.
Las hemos denominado no escolósticas, en referencia
a que habitualmente no se enseñan en los programas
tradicionales, lo que no supone que no sean
importantes, más bien lo contrario, nos
ayudan a conseguir buenos resultados,
ser excelentes en el trabajo y crecer en
lo humano y lo profesional.

COMUNICAR
Los seres vivos además de nacer,
crecer, reproducirse y morir, se re-
lacionan. Para ello la comunicación
es clave. El médico debe adquirir esa
formación específica, pues ejerce una
profesión de ayuda y debe comunicarse
con sus enfermos o familiares, con compañe-
s, presentar trabajos en congresos, etc.

TIPOS DE COMUNICACIÓN
Se ha considerado a la palabra clave en la comunica-
ción, pero sólo el 25% de la comunicación que ha-
cemos es verbal. La comunicación no verbal incluye
componentes como: vestuario (artifáctica), postura
(quinésica), distancia del otro (proxémica), contacto _ 5_1_
ocular (oculística) y tono de la voz (paralinguística).
SECCIÓN Conceptos fundamentales

Son palabras que no se pronuncian. El buen comuni- CÓMO COMUNICAR


cador domina la comunicación verbal y la no verbal.
El médico debe comunicar con el enfermo, entonces La comunicación con el enfermo es importante. Se
no solo compartirá información (sobre la enfermedad, le debe recibir cordialmente, presentarse, identificar
pruebas a realizar, pronóstico o tratamiento) sino que el motivo de la relación (consulta/ingreso), cuidar el
se relaciona con él (posible efecto terapéutico) , y a la lenguaje no verbal (prestar atención , asentir con la
vez educa. La Tabla 6-1 expresa las ventajas e incon- cabeza) y el verbal (hacer preguntas abiertas , evitar el
venientes de la buena o mala comunicación. lenguaje técnico) y facilitar el diálogo (dígame lo que
más le preocupa, a qué lo achaca). Conviene que se

FACTORES FAVORECEDORES
DE LA COMUNICACIÓN CON EL ENFERMO
Para la buena comunicación ayuda mucho la empatía
y la asertividad. La empatía es la habilidad para en-
tender experiencias emocionales del paciente, comu-
nicarle que se le entiende y revertirlo en beneficio
del proceso terapéutico. La asertividad consiste
en expresar opiniones, sentimientos y pensa-
mientos propios a un nivel de comunicación
adecuada y respetando los de los demás. Supo-
ne expresar las propias convicciones y a la vez
respetar las de los demás.
Es frecuente que los enfermos aparezcan
como confiados, sociables, cooperadores, sen-
sibles, respetuosos , enérgicos, extrovertidos, y
que viven su enfermedad como un reto, amena-
za, beneficio, castigo o enemigo. El médico debe
ajustar la forma de comunicar a cada uno de estos
rasgos.

Tabla Ventajas e inconvenientes


de una buena o mala comunicación sienta comprendido y acompañado. Finalmente, se
Ventajas de Inconvenientes debe hacer un resumen de lo comentado y organizar
una buena de una mala la información según su importancia, ser concreto,
comunicación comunicación conciso y específico.
La escucha activa es muy importante en este pro-
Nos ayuda a entender Se pierde información ceso. Ello supone que cuando se atiende a un enfer-
mejor al otro mo sólo se piensa en él. Comunicar no supone solo
Aumenta su No se detectan hablar, sino también escuchar. El diálogo es bidirec-
satisfacción por la problemáticas cional. Se escucha para comprender, no para esperar
consulta, y la nuestra sociales lo que se quiere oír, ni es el tiempo para preparar la
por los resultados respuesta. Las preguntas luego sirven para compren-
Mejora la información No se capta cómo der o aclarar. La escucha proactiva supone compren-
que conseguimos ve el enfermo su der, ponerse en el lugar del otro. Nos ayuda asentir,
situación no interrumpir, esperar a que concluya, no precipitar-
Favorece el Se favorece el se en los juicios.
cumplimiento de incumplimiento
nuestras indicaciones
COMUNICAR PARA DAR MALAS NOTICIAS
Reduce el tiempo que
precisamos Una mala noticia es cualquiera que supone un acon-
Aumenta la tecimiento traumático para quien lo recibe. Para darla
colaboración se debe:
■ Establecer el contacto de forma adecuada: elegir el
sr- lugar, la compañía, evitar interrupciones, etc.
CAPÍTULO 6 Otras habilidades profesionales necesarias para el médico del siglo xx1

■ Saber lo que el enfermo conoce y lo que quiere co- gos de quien la hace , su competencia, jerarquía, etc.;
nocer. c) valorar si esa crítica nos la hacen con frecuencia y
■ Ofrecer la información gradualmente, a veces en si es por personas distintas. En cualquier caso, debe-
más de una entrevista. mos plantearnos su veracidad y la conveniencia de
■ Usar un lenguaje asequible, no culpabilizar nunca cambiar.
y verificar que entiende lo hablado.
■ Aceptar y favorecer las expresiones emocionales
del enfermo, evitar contagiarnos de ellas y preparar CONOCERSE BIEN: EL AUTOCONOCIMIENTO
las respuestas.
■ Es importante no faltar a la verdad y siempre ofre- Es clave no solo para el trabajo médico, trasciende y es
cer esperanza y apoyo. clave para vivir la vida con plenitud. Te da una visión
más real de tu vida, te inmuniza frente a las críticas
Las respuestas emocionales a las malas noticias con
y te permite convivir mejor con el éxito o el fracaso .
frecuencia incluyen la incredulidad, la negación, el
Se ha trabajado mucho el mundo de la inteligencia (el
miedo , la rabia, la ansiedad, la acusación o la culpa-
cerebro, p. ej., determinación del cociente intelectual,
bilidad, la desesperación, el llanto, la amenaza, etc.
etc.), pero solo el 20% de nuestras decisiones son ra-
cionales, mientras el 80% restante son emocionales.
De hecho, la inteligencia emocional tiene como pun-
COMUNICACIÓN CON UN ENFERMO tos clave: conocer y controlar las emociones propias,
O FAMILIAR AGRESIVO reconocer las ajenas y ser capaz de controlar las rela-
La agresividad es con frecuencia una forma de reac- ciones y de automotivación.
ción excesiva porque se percibe como una amenaza.
Si es posible conviene, según los casos: a) evitarla/
admitirla : mantener la calma, mantener una escucha AUTOCONOCIMIENTO Y MOTIVACIÓN
activa, usar voz pausada; b) reducirla: restarle impor- EN EL TRABAJO
tancia, hacerle ver que su comportamiento no es co-
rrecto, que puede conseguir más con calma; c) pedir El autoconocimiento supone conocer lo que posee-
ayuda si se estima que la agresión puede ser más que mos y nuestras limitaciones. Decía Goethe: «Somos
verbal. En todos los casos es muy importante tener un tan limitados que creemos tener siempre razón». Con-
control emocional. viene ser conscientes del valor de lo que haces; en
ese sentido importa tener un nivel alto de motivación
en tu trabajo. El psicólogo Abrahan1 Maslow plantea
REVERTIR, CRITICAR, CONFRONTAR que para alcanzar la plenitud como persona se deben
cubrir una serie de aspectos: Los fundamentales están
O HACER FEEDBACK en la base de la piránüde y otros, los más complejos,
Son otras formas de comunicar. Si somos nosotros en el vértice, para alcanzarlos debemos superar cada
los que hacemos las críticas es importante hacerlo escalón. Los factores motivantes son distintos en cada
de forma constructiva, crear un ambiente motivador, zona. La Figura 6-1 expresa esa pirámide y los facto -
ser concreto, demostrar interés, ser
positivo positiva y dar tiempo para JERARQUÍA DE NECESIDADES FACTORES MOTIVADORES
que se explique y escuchar, y si se Logros
pueden ofrecer soluciones. Reconocimiento
Es útil utilizar el llamado esque- El trabajo en sí
ma SCI, que tiene en cuenta: S = Factores Responsabilidad
situación. Explicar al otro cuándo motivadores Progreso
no lo hizo de forma adecuada; C Crecimi ento person al
= Comportamiento. Reflexionar Factores
con él sobre lo que ha hecho mal, higiénicos FACTORES HIGIÉNICOS
su falta de habilidad, corrección, Salario
plantear posibles alternativas etc., Re lación con superiores, con
e I =Importancia. Analizar las con- subordinados y con iguales
secuencias que tiene o podría haber Rasgos ele la organ ización,
administración y supervisión
tenido el hecho. Conviene sustituir
Condiciones del trabajo
los juicios por comentarios, evitar
Estatus
juzgar a las personas y centrarse Seguridad
más en los hechos o actuaciones. Vicia no laboral
Si la crítica nos la hacen a no-
sotros es importante: a) determinar Figura 6•1Pi rá m ide que establece la jera rquía de las necesidades segú n ~
su importancia; b) analizar los ras- Abraham Mas low y los factores motivac iona les.
SECCIÓN Conceptos fundamentales

res motivacionales que actúan en la base y la cúspide trabajo, y los felices en el trabajo suelen serlo en la
de la misma. vida.

CONOCER LA REALIDAD Y FIJAR METAS RASGOS DE LOS EQUIPOS


REALISTAS Habitualmente el trabajo a realizar por el médico se
integra en un equipo que es multidisciplinar (inte-
Importa recordar que en la vida nos influyen las per- gra a profesionales de diverso tipo). Un equipo es un
sonas y las circunstancias. Muchas de esas influen- conjunto de personas que se reúnen para conseguir
cias se sitúan en el subconsciente y debemos hacerlas un objetivo determinado apoyándose unos en otros.
conscientes. La realidad puede ser más compleja y Importa que exista entre ellos confianza y apoyo mu-
difícil de apreciar de cómo la vemos. Todos nos in- tuo, comunicación interpersonal adecuada, respeto
fluimos y las ideas de los demás pueden mejorar las para cada una de las aportaciones y colocar el interés
nuestras. del grupo por encima del de cada uno. En el equipo,
Para valorar la realidad son enemigos los prejui- además de los objetivos comunes deben quedar esta-
cios y los presentimientos. Si etiquetamos a alguien o blecidos las actuaciones o procesos, los mecanismos
creemos que un ambiente no nos gusta, es seguro que de decisión y los sistemas de evaluación de los resu l-
siempre encontraremos razones que nos justifiquen. tados y de los procesos.
Fijar metas es muy importante. ¿Te has planteado
qué y cómo quieres ser? ¿Te entrenas en conseguirlo?
¿Qué porcentaje de actividades realizas rutinariamen- VENTAJAS E INCONVENIENTES DE TRABAJAR
te, no te gustan y podrías cambiar? ¿Cómo gestionas EN EQUIPO
tu tiempo? ¿Diferencias entre lo que es urgente y lo
Se analizan en la Tabla 6-2. Un equipo inteligente es
que es importante?
el que aúna las capacidades de sus integrantes para
La realidad, las dificultades, el desafío y las opor-
potenciarse, y de ello se derivan beneficios para ellos.
tunidades: La vida tiene dificultades, pero vividas
El líder debe fomentar los factores motivacionales
como desafío pueden ser las claves en nuestra satis-
para los miembros de su equipo, especialmente: a)
facción. Importa ver los problemas como oportunida-
Crear sentimiento de equipo. b) Tener en cuenta la
des. La realidad, p . ej ., la laboral puede ser difícil de
opinión de todos, escucharlos y mostrarles el máximo
modificar, pero es posible cambiar nuestra percep-
respeto . c) Compartir con ellos la información que se
ción negativa de ella.
dispone.
En ocasiones el profesional desfallece, se agota,
cae en el denominado bum-out que se expresa con
TRABAJAR EN EQUIPO tres manifestaciones: a) Despersonalización o rigidez.
b) Anulación afectiva. c) Falta de realización.
El trabajo ocupa muchas horas en la vida de un mé-
dico. Importa la actitud que adopte ante él. Se ha
demostrado que el trabajo puede ser fuente de gran CAMBIAR
satisfacción, que nacemos con una gran capacidad
para ser felices en él y es un ingrediente de la feli- El cambio es una oportunidad que permite nuevos
cidad: los muy felices en la vida suelen serlo en el aprendizajes, aplicarla y seguir creciendo.
CAPITULO 6 Otras ha bilidades profesionales necesarias para el médico del siglo xx1

Tabla Ventajas e inconvenientes de trabajar en equipo


Ventajas Inconvenientes

Se aumentan los logros y con ellos las El papel de los participantes puede ser difícil de definir;
satisfacciones individuales puede haber confusión o superposición en las tareas
Permite realizar protocolos más complejos y Se necesitan vías y s iste mas de comunicación eficaces
elaborados

Favorece el autoaprendizaje y la motivación Puede ser difícil hacer coincidir las expectativas de cada
uno con las del conjunto

Mejora la creatividad En ocasiones hay resistencias a ca mbiar y se exigen


adaptaciones no sencillas

Disminuye la ansiedad por la demanda asistencial Exige aceptar las decisiones del líder

Se aúnan experiencias disti ntas Hace r funcionar el equipo exige reuniones frecuentes, lo
que consume tiempo y esfuerzos

PROCESO DE CAMBIO LIDERAZGO


En él se requiere: El médico en ocasiones debe liderar la ges tión clíni-
Ser consciente de la necesidad de mejora (quiero), ca, pero puede ser líder en muchos terrenos. La fun-
de n u estras posibilidades (puedo) y de la resisten- ción fundamental del líder es dirigir y desarrollar a
cia normal al cambio (es duro) . las personas a su cargo, estimular, ilusionar.
Luego necesitamos tener decisión en conseguirlo, Liderar es crear las condiciones idóneas para que la
asumir el compromiso personal. gente esté permanentemente construyendo y dando
■ Se debe actuar, adquirir los compromisos a través lo mejor de sí m ismos. Se necesitan líderes a to d os
d e fijar objetivos asumiendo acciones y planes. los niveles , porque un líder es un administrador de
■ Hay que perseverar hasta lograr el cambio y man- esperanzas (véase Tabla 6-3).
tenerlo.

- -- ---- - ---- - - - -- - - - - - - -

Tabla Rasgos y habilidades del líder


Rasgos Habilidades
Integridad-credibilidad Pensamiento estratégico
Bien orientado a los resultados Crear y hacer crecer los equipos
Visión Comunicar bien
Colaborativo Pensamiento crítico
Innovador Escucha activa
Asume riesgos Habilidades de gestión , conocimientos
Sistemático en sus acciones
Carismático
·107
Agentes físicos
como causa
de enfermedad
Avelino Senra Varela, Jesús Millán Núñez-Cortés

INTRODUCCIÓN
Determinados agentes físicos externos son capaces
de actuar sobre el organismo humano produciendo
lesiones. Las características de las lesiones dependen
de la modalidad del agente agresor, por lo que habi-
tualmente se clasifican según su origen en:
Lesiones debidas a agentes térmicos (quemaduras
y congelaciones).
Lesiones por la electricidad.
Lesiones por radiaciones ionizantes.
Trawnatismos. Clínicamente, se entien-
de como traumatismo los efectos de
cualquier violencia mecánica, cuya
actuación sobre los tejidos se realiza
mediante fuerzas de tracción, com-
presión o cizallamiento.

AGENTES MECÁNICOS
COMO AGRESIÓN DIRECTA.
TRAUMATISMOS
La lesión traumática se produce cuan-
do un objeto con una fuerza cinética
choca contra la superficie del cuerpo hu-
mano. Los traumatismos por agentes físicos
sólidos pueden producir conmoción, contu-
sión y heridas.

CONMOCIÓN
El agente traumático provoca trastornos de las fun-
ciones celulares, pero sin llegar a provocar una lesión
anatómica detectable. En la práctica es el sistema ner-
vioso el que expresa más fielmente esa alteración, por
lo cual el término es sinónimo de conmoción cerebral.
~ Los traumatismos craneales leves rara vez causan pér-
dida de conciencia. Si el traumatismo es más intenso,
CAPITULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

Figura A) Les ión por contusión; B) Herida incisa; C) Les ión por quemadura; D ) Lesión producida por el frío.

se pierde instantáneamente la conciencia, y dicha pér- Aparecen equimosis, petequias y sufusiones,


dida puede durar minutos, horas o días e ir seguida de que son pequeñas hemorragias en el tejido celu-
recuperación o bien de coma profundo. La aparición lar subcutáneo.
de convulsiones puede significar un agravamiento. A Contusiones de segundo grado: el dolor, el ede-
veces, el sujeto no vuelve a la total normalidad, sino ma y la impotencia funcional son más intensos.
que presenta trastornos en la comprensión y conduc- Se rompe un gran número de vasos y se produ-
ta, e incluso puede presentar un cuadro amnésico. La cen extravasaciones hemáticas (hematomas) o
pérdida de conciencia se debe a la inhibición del sis- linfáticas (derran1es serosos) . Los hematomas
tema reticular activador ascendente. son colecciones de sangre extravasada que se
localizan en el tejido celular subcutáneo y que-
CONTUSIÓN (Fig. 7-1) dan circunscritas, a menos que progresen por
Es un traumatismo cerrado, sin solución de continui- encontrarse en tejidos laxos, lo que da lugar a un
dad en la piel o en las mucosas. En el tejido contuso hematoma difuso. Los derrames serosos son acú-
se produce un vasoespasmo reflejo. Además, resultan mulos subcutáneos de linfa extravasada como
lesionadas las terminaciones nerviosas sensitivas; por consecuencia de traumatismos tangenciales. Son
eso, la zona lesionada no despierta dolor significati- poco frecuentes y aparecen como tumoraciones
vo, sino que el dolor se hace progresivamente intenso flácidas, fluctuantes a la palpación.
después de una o dos horas. Esta fase va seguida de Contusiones de tercer grado: son las más graves.
una respuesta inflanrntoria a la que se suma una va- La violencia del traumatismo provoca necrosis.
sodilatación secundaria a los productos metabólicos Estas lesiones quedan determinadas clínicamen-
liberados en toda situación de isquemia o de hipoxia te por una escara necrótica.
celular. El edema muchas veces se extiende más allá
de los límites de la propia contusión.
Las contusiones se clasifican en: HERIDAS
Contusiones de primer grado: es el grado más La lesión se caracteriza por una solución de continui- ~
leve; el dolor y el edema suelen ser moderados. dad en la piel o en las mucosas. Se pueden clasificar
Etiopatogenia general

según su dirección, su profundidad, su forma, su de torniquetes durante varias horas. Al producirse la


mecanismo de producción o el agente que las pro- descompresión y restablecerse la circulación, surge
duce (Tabla 7-1). una caída brusca de la presión arterial y puede llegar
Las heridas pueden tener repercusión general. Si a producirse un shock. Paralelamente, en ese momen-
el dolor es intenso se puede producir una respues- to hay una brusca liberación al torrente sanguíneo de
ta vasovagal traducida en un síncope. En casos más gran cantidad de mioglobina y otras sustancias ne-
graves, una hemorragia copiosa a través de la herida frotóxicas, que puede causar una insuficiencia renal
puede determinar un shock hipovolémico. aguda por necrosis tubular.

MOVIMIENTO COMO CAUSA


SÍNDROME DE APLASTAMIENTO
DE ENFERMEDAD. CINETOSIS
Puede ser la consecuencia de lesiones más o menos
extensas con compresión de masas musculares y teji- La cinetosis es un cuadro clínico sindrómico deter-
dos , producidas en catástrofes como terremotos o de- minado por la acción etiológica del movimiento que
produce desplazamientos pasivos de nuestro orga-
rrumbamientos de edificios, así como por el empleo
nismo. Dentro de la cinetosis se incluyen el mareo y
los síndromes determinados por la velocidad y por la
aceleración.

Tabla Clasificación de las heridas


MAREO
Por su dirección Es un síndrome provocado por las oscilaciones o
Longitudinales movimientos del cuerpo. El movimiento es el agente
Transversales etiológico por excelencia. Se puede producir en una
Oblicuas dirección del espacio o en varias, combinadas. Los
Espiroideas desplazamientos pueden ser de cabeceo (sobre el eje
transversal), de balanceo (sobre el eje longitudinal)
Por su profundidad o de leva (de ascenso y descenso). Existe un factor
Escara constitucional y genético del mareo, demostrado por
Superficial la existencia de familias que presentan una gran pre-
disposición a padecerlo. Con respecto a la edad, son
Profunda
menos propensos al mareo los niños pequeños, en
Perforante especial los lactantes y los ancianos.
Por su forma El mareo es un síndrome funcional, reversible y
con un componente de tipo neurovegetativo. Todo
Lineal
movimiento que se imprima al organismo determina
Arqueada un cambio de presión en la endolinfa y esta, a su vez,
Angulosa estimula las terminaciones nerviosas en los conduc-
Estrellada tos semicirculares.
Puntiforme El síndrome clínico tiene un pródromo definido
Irregular por un malestar inespecífico, y en ocasiones sensa-
Por su mecanismo de producción ción de calor o de falta de aire. Los primeros sínto-
mas son sensación de peso epigástrico, con rápida
Punzante aparición de náuseas, seguidas de vómitos. El sujeto
Incisa presenta sudores, sensación de frialdad y respiración
Contusa profunda. En el cuadro clínico del mareo constituido
Por desgarro hay vómitos, y el sujeto se encuentra pálido. A ve-
Mordedura ces refiere visión borrosa y trastornos auditivos. En
la fase de resolución, una vez ha cesado la causa, el
Por el agente causal
sujeto entra en un estado especial con cefalalgia, som-
Arma blanca nolencia y apatía.
Arma de fuego
Metralla
Asta de toro
VELOCIDAD YACELERACIÓN
Objetos metálicos COMO CAUSA DE ENFERMEDAD
Otros La aceleración puede ser rectilínea o lineal y rotatoria
o centrífuga. En la aceleración lineal los efectos pato-
lógicos son relevantes cuando la velocidad traspasa la
CAPITULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

del sonido. Aparecen síntomas tales como opresión En condiciones normales el cambio del decúbito
torácica, sensación de dificultad respiratoria, mani- al ortostatismo lleva consigo una modificación en al-
festaciones psíquicas (ansiedad, otras) y desfigura- guno de los sistemas y aparatos del organismo: en el
ción facial. circulatorio aumenta ligeramente la presión arterial y
La aceleración angular se produce cuando existen la frecuencia cardiaca, disminuye el volumen minu-
variaciones de la velocidad angular. Puede ser de dos to y el volumen de contracción sistólico y los movi-
tipos: 1) una aceleración curvilínea, llamada positiva, mientos respiratorios sufren también un aumento de
en la cual son los pies los que sufren los efectos cen- frecuencia (taquipnea).
trífugos porque van en la dirección más periférica de El ortostatismo puede inducir un cuadro sincopal
la curva. Se produce sensación de pesadez en todo (pérdida de consciencia por disminución del flujo
el cuerpo, sobre todo en las extremidades inferiores, sanguíneo cerebral). Como manifestaciones del apara-
donde aparecen calambres. El sujeto refiere opresión to circulatorio, aparecen taquicardia y palpitaciones.
torácica, causada por la tracción ejercida sobre las La disminución de la presión arterial , que se conoce
vísceras. Debido a la disminución de la presión arte- como hipotensión ortostática o postural, puede cau-
rial en las regiones superiores del cuerpo, se reduce sar una disminución del gasto cardiaco, a pesar de la
la visión. La inspiración se hace difícil a causa del estimulación de los reflejos simpáticos. Puede existir
descenso del diafragma. Cuando la aceleración au- un fallo de la respuesta simpática que puede ser se-
menta y como resultado de la hipoxemia cerebral, se cundario a enfermedades que causan disfunción neu-
puede llegar a la pérdida de la consciencia. Todo ello rológica (p. ej., tabes dorsal) o a una enfermedad del
está determinado porque la circulación sanguínea no SNC (p. ej., Parkinson).
puede retornar al corazón, ya que la fuerza centrífuga Otras manifestaciones son sensación de vértigo o
la desplaza hacia los miembros inferiores; 2) hay otra mareo en el momento de levantarse y náuseas e in-
aceleración, conocida como negativa (pies-cabeza), cluso vómitos.
en la que la sangre es llevada a la cabeza por la fuerza
centrífuga y las extremidades inferiores son las que se
vacían de sangre. Aparece sensación congestiva en la SEDENTARISMO
cabeza, cefalea, palpitaciones en la región temporal, La inactividad completa de un órgano causa un rápido
ingurgitación yugular, acúfenos (zumbido de oídos) declinar de su capacidad funcional. La vida sedenta-
y tendencia hemorrágica, que suelen consistir en ria entraña desde el punto de vista patogénico ciertos
epistaxis. Con aceleraciones mayores, la sensación peligros, facilitando sobre todo determinadas altera-
es de estallido. La instauración de estos síntomas no ciones de índole metabólica. Favorece la obesidad,
depende solo de la intensidad de la aceleración, sino alteraciones metabólicas como la hipercolesterolemia,
también de su forma de comienzo y de su duración. así como una intolerancia hidrocarbonada por resis-
tencia a la insulina; por otra parte, en los obesos son
más frecuentes otros procesos como la hipertensión
ACCIÓN DE LA GRAVEDAD arterial o las artropatías degenerativas (artrosis) causa-
E INGRAVIDEZ das por el sobrepeso que soportan las articulaciones.
Se incluirán en este apartado el ortostatismo y la hi-
potensión ortostática, los efectos del sedentarismo ESTANCIA PROLONGADA EN CAMA
y el encarnamiento y los trastornos derivados de la
ingravidez. Cuando una persona está confinada en cama entran
en juego diversos factores relacionados con la activi-
dad: disminución total de los movimientos del cuer-
ORTOSTATISMO po, posición del cuerpo en relación con la gravedad y
Con el nombre de ortostatismo se conocen las reaccio- una estimulación sensorial disminuida.
nes patológicas que pueden desencadenarse en un su- Efectos musculoesqueléticos: se produce una
jeto por el cambio postural. Se denomina hipotensión atrofia progresiva de la musculatura, que comien-
ortostática el descenso de ;:: 20 mm Hg en la presión za a los pocos días. Otro efecto de la limitación
sistólica y/o;:: 10 mm Hg en la presión diastólica. Su de la actividad es el desarrollo de contracturas.
causa habitual es una patología del sistema nervioso La falta de actividad en las articulaciones puede
vegetativo (p. ej., en la tabes dorsal, en la polineu- llegar a producir, con el tiempo, fenómenos de
ropatía diabética, en la amiloidosis, o con el uso de anquilosis.
fármacos simpaticolíticos). El hecho patogénico pri- La osteoporosis es otra de las consecuencias
mordial es que, fisiológicamente, todo cambio postu- del encarnamiento prolongado. El incremento de
ral de la clinoposición a la posición erecta traduce en la resorción ósea comienza a los pocos días de la
el sistema nervioso vegetativo un cambio desde el de inmovilidad y se acompaña de un mayor riesgo
predominio vagal al predominio simpático. de fracturas.
SEC IOfl; 1 Etiopatogenia general

Efectos circulatorios: Cuando una persona per- cutáneo que cubre las eminencias óseas están
manece en cama en una posición horizontal más sometidos a una considerable presión; el tejido
de 1 o 2 días , la respuesta adaptativa normal a la subcutáneo y los vasos sanguíneos en el área es-
posición erecta resulta afectada, y al volver a le- tán comprimidos, por lo que se bloquea el flujo
vantarse se producen fenómenos de hipotensión de sangre, causando isquemia local.
ortostática. Efectos psicosensoriales: las alteraciones se
La trombosis venosa profunda es una de las deben a la disminución de la estimulación ci-
complicaciones del encarnamiento, particular- nestésica y propioceptiva como resultado de la
mente en las personas ancianas. Constituye la disminución de la actividad muscular. El elec-
principal causa de embolismo pulmonar. Los troencefalograma durante el sueño muestra que
factores predisponentes para la trombosis son la el porcentaje de tiempo total de sueño profundo
lentificación del flujo sanguíneo, los cambios en se incrementa con el encarnamiento prolongado,
la pared de los vasos y la hipercoagulabilidad. con una disminución de la proporción de sueño-
Efectos pulmonares: la presión de la cama contra vigilia.
el tórax genera una resistencia a la expansión to-
rácica. Una persona confinada en cama tiende a
respirar superficialmente y a retener secreciones INGRAVIDEZ
mucosas en las zonas declives. Ello conduce al
En los viajes espaciales, el organismo sufre inicial-
desarrollo de infecciones respiratorias.
mente los trastornos propios de la aceleración al salir
Efectos gastrointestinales: el encarnamiento pro-
longado va acompañado de anorexia y estreñi- o entrar en la órbita terrestre. Más adelante se produ-
miento por hipomotilidad. cen las alteraciones propias de la ingravidez. En au-
Efectos metabólicos y endocrinos: resultan afec- sencia de gravedad los fenómenos más característicos
tados no solo los niveles de algunas hormonas, son los siguientes:
sino también su ritmo circadiano. Asimismo, Aparato circulatorio: Si la ingravidez se man-
disminuye la temperatura corporal, lo que refleja tiene hay hipervolemia en el territorio torácico
una disminución del metabolismo. y los barorreceptores auriculares se estimulan,
La tolerancia a la glucosa disminuye debi- regulando la diuresis y la secreción de aldoste-
do a la reducción en la captación de esta por rona.
las células. Los niveles de GH están elevados Actividad muscular: están disminuidos el tono
en los primeros días; después de 10 días de muscular y la contractilidad, ello supone pérdi-
estancia en cama el nivel medio diurno de GH da de masa muscular.
decrece. El ritmo circadiano del cortisol no se Sistema nervioso: se aprecia la sensación de ha-
ve afectado por la estancia prolongada en cama. llarse «como flotando », descrita como un vértigo
El pico de secreción se mantiene alrededor de peculiar y extraño.
las 8 horas. Sin embargo, cuando la estancia en Sistema osteoarticular: en estancias prolonga-
cama es prolongada (más de un mes), este pico das en el espacio se producen fenómenos de os-
es menor. teoporosis y dolores articulares.
El metabolismo mineral y electrolítico tam- Sistema psicosensorial: la sensación de aisla-
bién está alterado. El incremento en la excreción miento es un problema de índole psíquica.
de sodio es más llamativo durante la primera se-
mana y da lugar a un balance negativo de sodio.
También existe un balance negativo de potasio, PRESIÓN ATMOSFÉRICA COMO CAUSA
así como un incremento de la excreción urinaria DE ENFERMEDAD. DISBARISMOS
de nitrógeno , presumiblemente por la destruc-
ción de proteínas musculares. Se produce un La presión atmosférica varía dependiendo de la altura
incremento progresivo en la excreción de calcio a la que sea medida. También varía en relación con la
urinario y de fósforo , resultantes de la pérdida temperatura y el grado de humedad. Las repercusio-
de la masa muscular y ósea. nes patológicas de dichas variaciones son los disba-
Efectos urinarios: la elevada concentración de rismos , que pueden ser clasificados según se indica
calcio y fósforo en la orina constituye un riesgo en la Tabla 7-2.
potencial de formación de cálculos de oxalato
cálcico. Además, son frecuentes las infecciones
urinarias. SÍNDROMES POR HIPOPRESIÓN
Efectos tegumentarios: la presión sobre la piel ATMOSFÉRICA
puede conducir al desarrollo de úlceras de de-
cúbito. El peso del cuerpo no se distribuye uni- Absoluta
formemente , y las protuberancias óseas soportan Mal de montaña agudo y crónico. Se trata de altera-
más peso que otras áreas. La piel y el tejido sub- ciones clínicas que se producen cuando se alcanzan
CAPITULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

altitudes superiores a los 2500 metros , o que se pre-


sentan en personas que viven en zonas de alta monta-
Tabla Clasificación ña cuando fracasan los mecanismos de adaptación a
de los disbarismos la disminución de la presión parcial (pp) de oxígeno.
La causa del síndrome es el déficit de 0 2 para la
A. Síndromes por hipopresión respiración celular, lo que provoca anoxia tisular.
atmosférica El 0 2 se encuentra en la atmósfera y en los alvéolos
a una pp determinada , que es imprescindible para
a) Hipopresión absoluta
mantener la respiración de los tejidos (100 mm Hg) .
- Mal de la montaña Cuando se asciende, la pp de 0 2 disminuye. Así, a
• Agudo 1040 m sobre el nivel del mar es de 92 mm Hg; si
• Crónico ascendemos a 2080 m, la pp alveolar será de 78 mm
- Mal de los aviadores de Hg. Si seguimos ascendiendo , la pp puede llegar a
b) Hipopresión relativa 40 mm Hg en el alvéolo , alcanzándose el límite de la
adaptación natural , y surgen fenómenos de anoxia. A
Descompresión explosiva (aeronáutica) 8000 m la pp 0 2 es de 25 mm Hg y a 9000 m la pp es
B. Síndromes por hiperpresión casi cero.
atmosférica La disminución de las presiones atmosférica glo-
bal, parcial de 0 2 y vapor de agua , origina hipobaria,
a) Hiperpresión absoluta con hipoxia. El organismo reacciona con mecanismos
Onda explosiva (Blast injury) reflejos tales como taquipnea, taquicardia para elevar
el volumen minuto y poliglobulia. Estos tres meca-
b) Hiperpresión relativa nismos tienen una limitación. La hiperventilación
Descompresión brusca (submarinismo) secundaria a la taquipnea provoca depleción de C0 2 ,
que da lugar a hipocapnia y alcalosis respiratoria. Si
persiste la hipoxia tisular, se altera la bomba de sodio

Figura A) Hipopresión atmosférica. Mal de montaña. Machu Picchu (2490 m). B) Situación de hiperpresión
atmosférica. C) Descarga eléctrica atmosférica (rayo). D) Lesión (quemadura) producida por radiaciones infra- -rr
rrojas.
Etiopatogenia general

y el resultado es un edema intracelular y un aumento SÍNDROMES POR HIPERPRESIÓN


de la presión oncótica. Este edema es más intenso a ATMOSFÉRICA
nivel cerebral y pulmonar.
Las alteraciones que aparecen dependen de la al- A nivel del mar, la presión atmosférica es de 1 atmós-
titud: fera (760 mm Hg); al descender en el agua, por cada 10
m de profundidad la presión aumenta en 1 atmósfera,
Zona inicial: es la zona comprendida hasta los es decir, que por cada 10 m se duplicará la presión y,
4000 m. Las personas entrenadas, que realizan por tanto, el volumen de los gases se reducirá a la mi-
descansos y llevan equipo apropiado, no experi- tad. Por consiguiente, al aumentar la presión aumenta
mentan ningún síntoma. la solubilidad del gas, disminuyendo su volumen.
Zona de aclimatación: comprende hasta los El oxígeno se disuelve en el suero y así es trans-
6000 m. Se presenta una marcada disminución portado, pero el nitrógeno, que es un gas inerte, se
de la potencia física. Las manifestaciones pue- disuelve en el suero, y los tejidos ricos en lípidos
den ser: a) En el aparato respiratorio: disnea, (periarticular, cerebro y médula ósea) fijarán una gran
taquipnea y tos seca, por la mayor sequedad proporción de nitrógeno. Al volver a la superficie
atmosférica. Puede producirse el edema pulmo- ocurren los fenómenos inversos, es decir, aumento
nar de las alturas. b) En el aparato circulatorio: del volumen del gas, disminución de su solubilidad
taquicardia, palpitaciones, extrasístoles, a veces y desprendimiento de nitrógeno. Si el regreso a la su-
angina de pecho y cianosis. c) En el aparato di- perficie es brusco no da tiempo a exhalar el nitrógeno
gestivo: anorexia, náuseas , vómitos , diarrea, se- en la respiración, por lo que se originan burbujas en
quedad de boca y signos de insuficiencia hepá- el torrente circulatorio con efectos deletéreos.
tica, secundaria a la hipoxia de los hepatocitos.
d) En el sistema nervioso: sensación de vértigo,
Absoluta
cefalea, nerviosismo y excitación. En algunos su-
jetos aparece sensación de somnolencia. Onda explosiva (Blast injury). Se produce cerca del
Zona de adaptación orgánica y fisiológica: com- sujeto cuando en sus cercanías tiene lugar una explo-
prende de los 6000 a 8000 m. Si se desea prose- sión. Hay un efecto traumático, fruto del aumento de
guir la ascensión, es obligatorio permanecer en la presión y de la proyección a gran distancia del su-
esta zona por lo menos quince días. Se presentan jeto. El movimiento explosivo del aire se descompone
los mismos síntomas de la zona anterior, pero en un primer factor de movimiento de masa de aire en
con más intensidad. todas las direcciones; otra onda de presión positiva
Zona letal: corresponde a altitudes superiores a que avanza a la velocidad del sonido, con efectos de
los 8000 m . La pp 0 2 es inferior a 25 mm Hg. hasta 6 m del lugar de su producción; y una onda de
succión o de presión negativa, posterior a la positiva.
El síndrome crónico, también llamado enfermedad Unas veces el efecto no es otro que el traumatismo,
de Monge, se manifiesta en sujetos aclimatados que más o menos grave, a causa del desplazamiento por la
han perdido la capacidad para seguir adaptándose a onda explosiva; otras veces determina la pérdida del
las grandes alturas. Se caracteriza por disminución de conocimiento por efectos cardiovasculares; y otras, se
la actividad física y mental, astenia, anorexia, náu- presenta una conmoción cerebral con todo su cortejo
seas, vómitos, parestesias y pérdida de la agudeza sintomático.
visual, junto a cefalea, disnea, cianosis, edema palpe- Los tipos de onda explosiva que condicionan el
bral, quemosis conjuntival, y a veces acropaquias. Si síndrome son los siguientes:
el cuadro es grave existe disnea crónica y un estado
letárgico que puede llevar al coma. Entre los datos de Onda de transmisión aérea. Su acción es más
laboratorio destaca la policitemia. intensa dentro de los 20 metros. Se distinguen
dos tipos de ondas: positiva o de hiperpresión,
y negativa, de hipopresión de succión o aspi-
Relativa
ración. La onda de presión positiva es de corta
Síndrome de descompresión explosiva. Es un síndro- duración y de gran intensidad. Las lesiones que
me aeronáutico secundario a una rotura de la estruc- se producen dependen de la distancia y del lugar
tura de la cabina presurizada. Se pasa bruscamente de la explosión. La onda de presión negativa o de
de unas condiciones de normobaria artificial a una succión es de menor amplitud y de mayor dura-
hipobaria marcada, combinada con hipoxia. De en- ción, y tiene un efecto parecido al de una brusca
trada, existe un tiempo de consciencia, de duración descompresión.
inversamente proporcional a la velocidad del descen- Onda de trasmisión por agua. El movimiento de
so de las presiones. Seguidamente, sobreviene una la masa de agua es mucho menor que el del aire.
pérdida del conocimiento, por aeroembolismo en los Sus efectos tienen un mayor radio de acción que
vasos cerebrales, acompañada de hemorragias visce- los de la onda aérea. No hay onda de hipopresión
rales y cutaneomucosas y a continuación sobreviene o succión. Los huesos y vísceras de contenido
el exitus. líquido y macizas no resultan afectados. En cam-
CAPÍTULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

bio, sí que sufren lesiones las vísceras de conte- (campana de inmersión, submarinismo). Si el ascenso
nido gaseoso, por la propiedad compresible del es rápido, el desprendimiento de nitrógeno en forma
gas. de burbujas ocluye los capilares, originándose anoxia
Onda de transmisión por sólidos. Sus efectos tisular, mientras que si el ascenso es muy lento, no
suelen verse en las explosiones de los navíos de ocurrirá fenómeno alguno, pues el nitrógeno irá poco
guerra, de los carros de combate o en los atenta- a poco desprendiéndose, siendo exhalado por la res-
dos con coche-bomba. La onda se transmite des- piración.
de el elemento que explosiona, sin solución de La forma moderada cursa con dolores osteoarticu-
continuidad, al organismo, a una velocidad ma- lares, mialgias, dolor abdominal por el aumento del
yor que la del sonido. Se producen alternancias volumen de los gases en el intestino, exantema, cia-
entre fenómenos de hiperpresión e hipopresión. nosis, cefalea, vértigos y prurito por microangiopatía
Esta onda es, además, mayor y más prolongada trombótica de la piel.
que las anteriores. Entre las lesiones que pro- La forma grave afecta al estado general y se carac-
ducen este tipo de onda son más específicas las teriza por disnea, dolor retroesternal, debilidad mus-
fracturas óseas múltiples instantáneas, así como cular y alteración del sistema nervioso central. El ae-
el estallido visceral. roembolismo facilita la agregación plaquetaria y, por
Según la localización anatomoclínica del daño, se consiguiente, la formación de trombos.
puede distinguir: La forma letal se caracteriza porque el sujeto, poco
tiempo después de salir a la superficie, entra en esta-
• Onda generalizada: se debe a la violencia de la
do de coma, del cual pocas veces se recupera.
explosión y tiene efectos mortales. Aunqu e no
produzca lesión externa alguna, están afectados
los órganos internos. VIBRACIONES COMO CAUSA
• Onda torácica (pulmonar y cardiaca): las lesio-
nes pulmonares están siempre presentes en todos
DE ENFERMEDAD
los tipos de onda, ya que las costillas hacen im- Las manifestaciones clínicas producidas por las vi-
pacto sobre la superficie pulmonar. Se produce braciones de baja frecuencia, como las que se produ-
un aumento brusco de la presión intrapulmonar cen en obreros que emplean martillos neumáticos,
con rotura alveolar y dislaceración del parénqui- en mecanógrafas, pianistas, etc., constituyen una
ma. Las lesiones broncoalveolocapilares originan preocupación constante en el campo de la medicina
edema pulmonar, y posteriormente se pueden laboral y son objeto de numerosas investigaciones.
desarrollar condensaciones neumónicas . Los efectos nocivos más destacados están producidos
La onda puede cursar con lesiones cardíacas que por lesiones (microtraumas repetidos) sobre estructu-
abarcan desde hemorragias miocárdicas hasta la rotu- ras vasculares, nerviosas y articulares de las manos,
ra de la propia víscera, así como un infarto por lesión siendo los más representativos el fenómeno de Ray-
coronaria. naud, la esclerodactilia, el síndrome del túnel carpia-
• Onda abdominal: la fuerza explosiva se transmite no, la retracción palmar y microfracturas articulares
a través de la pared abdominal hacia las distintas en la muñeca con la consiguiente artrosis de peque-
vísceras, movilizando el aire intestinal a una pre- ñas articulaciones.
sión muy elevada. Se producen hemorragias difu- Sin duda, las alteraciones vasculares de las extre-
sas submucosas y si la presión es muy grande se midades y los problemas articulares en el carpo, el
originan estallidos y perforaciones peritoneales. metacarpo y la muñeca son las más prevalentes en
• Onda cerebral: las lesiones cerebrales del blast este grupo de trabajadores que manejan máquinas que
están producidas por la acción de la onda so- generan una energía vibratoria.
bre la presión venosa, que se transmite hasta la
red venosa encefálica, causando hip ertensión
intracraneal. Pueden producirse además despla-
RUIDOS COMO CAUSA
zamientos rotatorios y laterales del cerebro, así DE ENFERMEDAD
como lesiones directas cuando el enfermo se gol-
Las principales características de los ruidos que el ser
pea el cráneo al ser despedido con más o menos
humano puede escuchar y que influyen en su audi-
violencia por la fuerza expansiva.
ción son la frecuencia y la intensidad. Una persona
• Onda auditiva: la lesión del tímpano aparece en
joven es capaz de percibir ruidos con frecuencias que
el 50-60 % de los casos. Menos frecuentemente
oscilan entre 20 y 20 000 Herzios (Hz). Un ruido que
se observan lesiones en el oído medio.
supere los 85-90 decibelios (dB) se considera fuerte.
Cuando el organismo humano se expone a ruidos
Relativa de intensidad fuerte, también se modifica el um-
Descompresión brusca. Se produce después de una bral de percepción, que aumenta. Tal aumento puede
larga permanencia en un entorno de hiperpresión ser temporal, en el caso de ruidos intensos súbitos,
SECCION II Etiopatogenia general

o permanente, cuando la exposición a ruidos inten- Efectos generales


sos es de larga duración. Esto quiere decir que, en la Hipotermia. Se define como la temperatura corporal
práctica, la exposición a ruidos intensos provoca una central menor o igual a 35 ºC. Se clasifica en tres gra-
pérdida de agudeza auditiva, qu e por lo que se sabe, dos: a) leve (temperatura central: 34-35 ºC); b) mode-
afecta más a los ruidos de frecuencia media y alta. rada (temperatura central: 30-34 ºC; c) grave (tempe-
Un segundo efecto de la exposición a ruidos inten- ratura central menor de 30 ºC). Influyen en su apari-
sos son los cambios que tienen lugar en el sistema ción una serie de circunstancias predisponentes: alte-
cardiovascular, y que afectan, fundamentalmente , a raciones de la consciencia o de la percepción del frío
la presión arterial y a la frecuencia cardíaca, las cua- (alcohol, drogas o fármacos depresores del sistema
les se incrementan por una respuesta inmediata de nervioso central, demencia, edad avanzada), o de los
origen simpático. mecanismos que el organismo pone en marcha para
Por último , cabe señalar que un estímulo acústico combatirlo, debido a una alteración de la respuesta
de suficiente intensidad (habitualmente muy enérgi- metabólica o vasoconstrictora fisiológica.
co) puede ser capaz de provocar alteraciones del sis- Cuando el organismo es sometido a temperaturas
tema vestibular que se traducen en alteraciones del frías, se origina un enfriamiento de la piel. El orga-
equilibrio. nismo pone en marcha fundamentalmente dos tipos
La rotura del tímpano , producida tras un trauma- de respuestas compensadoras: a) vasoconstricción
tisp.10 acústico de elevada intensidad, está provocada cutánea: la sangre es desviada desde la piel y las ex-
por la aplicación de una alta energía sonora sobre la tremidades para preservar y mantener la temperatura
membrana timpánica, con estallido de la misma. Esta central; b) temblor: que contribuye a la generación de
eventualidad puede darse por un traumatismo acús- calor. El temblor cesa cuando la temperatura cutánea
tico agudo, o como consecuencia de la exposición a es inferior a 32 ºC, momento en el que se presenta la
ruidos de intensidad creciente y progresiva. rigidez muscular.
Cuando estas respuestas compensadoras no bastan
para mantener la temperatura central, se desarrollan
FRÍO Y EL CALOR COMO CAUSA una serie de modificaciones en diferentes sistemas
DE ENFERMEDAD del organismo (Tabla 7-3).
La hipotermia ambiental aumentan la producción de Aparato cardiocirculatorio. Al principio se pro-
calor metabólico, mientras que la hipertermia am- duce una estimulación cardiorrespiratoria por
biental eleva las pérdidas calóricas. Si se desbordan descarga adrenérgica. Si la temperatura es infe-
los mecanismos de termorregulación aparecen las rior a 32 ºC, se produce un descenso progresivo
distermias ambientales, que pueden acontecer por de la frecuencia y del gasto cardiaco . La hipo-
exceso de calor o de frío , y que tienen repercusiones tensión arterial induce hipoxia tisular y, como
generales (hipertermia e hipotermia), o locales (que- consecuencia, acidosis metabólica y aumento
maduras y congelaciones). de la permeabilidad capilar. Este último efecto
determina la extravasación plasmática y, en con-
secuencia, edema. Se produce un aumento de
TRASTORNOS PROVOCADOS POR EL FRÍO la irritabilidad miocárdica y una disminución
En los trastornos provocados por el frío sobre el ser de la conducción cardíaca, originándose arrit-
humano intervienen, por un lado, factores meteoroló- mias y trastornos de la conducción. En el ECG es
gicos, y por otro una serie de factores personales que frecuente la bradicardia extrema y el ensancha-
modularán la respuesta orgánica. Entre los primeros miento del QRS.
tiene importancia el grado de descenso de la tempe- Sistema nervioso central. Disminuye progre-
ratura, así como el tiempo de exposición a estas tem- sivamente el flujo cerebral. Esta disminu ción
peraturas. Con similares descensos térmicos, una hu- se encuentra en parte compensada por una re-
medad ambiente excesiva facilita la pérdida calórica ducción del metabolismo cerebral. No obstante,
por conducción, lo mismo que la presencia de viento cuando la temperatura central desciende por de-
puede aumentar la pérdida calórica por convección. bajo de los 32 ºC, aparece una clara depresión de
En altitudes elevadas, el efecto de la disminución de la función del sistema nervioso central, con una
la presión atmosférica de oxígeno influirá negativa- alteración variable del nivel de consciencia.
mente en la lesión producida por el frío , al favorecer Aparato respiratorio. La hipotermia, a medida
la hipoxia tisular. Entre los factores personales tienen que aumenta, induce una disminución de la fre-
importancia la edad (en los niños y ancianos la termo- cuencia respiratoria, de la capacidad vital y del
rregulación es defectuosa), el estado nutricional (la volumen minuto, contribuyendo a la retención
contracción muscular conlleva un consumo de ener- de anhídrido carbónico y a la acidosis respirato-
gía), y las circunstancias que favorezcan la hipoxia en ria. A bajas temperaturas, la curva de disociación
las zonas distales, que son las más comprometidas en de la hemoglobina se desvía a la izquierda, con
~
la adaptación al frío. lo que la cesión de oxígeno a los tejidos se ve
CAPÍTULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

Tabla Fisiopatología de la hipotermia


Efectos sobre el aparato Efectos sobre el sistema Efectos sobre el aparato
Fase
circulatorio nervioso central respiratorio
Lucha Aumento de frecuencia Temblor, nerviosismo Aumento de frecuencia
cardiaca (FC) y gasto respiratoria (FR)
cardiaco (GC) Alcalosis respiratoria
Vasoconstricción
Aumento de la presión
arterial (PA)

Claudícacíón Disminución de FC y GC Rigidez Disminución ele FR.


capacidad vital volumen
minuto
Vasodilatación Depresión de funciones
Disminución de la PA respiratorias superiores
Acidosis respiratoria
Hipoxia hística y acidosis
metabólica Aumento de la afinidad de
la hemoglobina por el
Edemas
oxígeno

el i ficu ltmla: c:ou lurn pera turas mu11orns dn 2 7 'C. dad sanguí1rna \' ol riesgo d1J trombosis niscular quu
la lw111oglobí11u rntimw u[ 7'."i '1,, del oxígeno, fo- mnpoorn la isqll(nnia. La necrosis. a s11 vuz. f'nvoruct'
vorncíundo dn <:Sta forma lu hipoxiil lisulm. In infocc:itin y ln gangr<)IHJ de los tejidos.
Como consm:um1c:ia del nllfrimnicnto Imito do un
El síndrome clínícu se estructura on diversas foses:
tnjidu. y por nfor:lo dirrn:to, se provoca la congelación
Por m1cima du los 34 ·C:. las constantus so m,rn- dol agua dnl líquido in1orstícial, lorm6ndoso cristal<is
tinmm. Jfoy lmnblor \' pílocrocciún. el(: hinlo. Los sol11tos un nl líquido rosidrnil SP (l!1<:twn-
Por debajo de los :J4 "C \a desa¡rnrncicndo la pur- trnn liípcn:onumtrndos, y este grnclinntn osmótico ha-
cnpci(m dnl frío. 1•:l tm11blor es sustituido por una cia ul espacio intnrstícinl determina la exlrnn1sación
rigidez muscular guneralizmla. Existe bradicar- del rluido intrnvasculm con la consiguiente hipovolo-
dia, hípole11si(rn mlerinl v np,1lí,1. miu, qun incronrnnta la isquemia,- la hi¡,oxin tisular.
Por ddiaju de lo:; 27 C:, Hxistc mw inten,:;a hi- Lo,; 1wrvius pori !{,ricos sun particularnwnte susc:Ppti-
poxia hístíc:n, con isquemia corobrnl y mioc;írcli- lJlns a r)slos fonómnnos bipóxir:os.
ca. Cuando la 11:m¡wraturn dnsci()!Hln pc1r debajo Sn distingunn din1rsas formas clínicas, un lnm:i(m
dc) 2;', 0·C. sn obsorvu arn,lfoxia. nus1mc:i,1 du rns- (cmtrn otros factores). do ln temperatur;1 u la qiw su
puosta pupilar y aparece ol coma. ,mu1cmlra nxpunsto ol organismo:

Efectos locales Formas dínicas de las congeladones:


Congelaciones. La \'W,m:onstricción perifúric:a. o! De primer grado: la clínico es ~uc:undaria al Ya-
principal mecanismo dnfonsinJ rn1!P la bipolermia soespasmo. Cuandu cusa la acción do! frio, In
nmbim1t,1l. tinncln u provocar isqunmiu en zonas disl¡¡- ,-asodílatacícín rnactiva v la extravasación plas-
los. al limitar Sti vascularización. ,\1 mismo timnpo, la rnútica su tradttcPJI HJI un intenso lmrojncimíc,nto
exposición ele estas zonas ac:ras al frío e,; m2ffor. Por cutáneo con tumefacción dolorosa, qwi desapa-
consiguiunt(), la aliernción celular producirla por ni rnrnrá a los pocos días, sin düjar lesión alguna.
frío ptwcle deberse ¡¡ la nisrn:onstricci(ÍJJ reactint o al De segundo grado: existe afoctacir:)I] cfo ía piel y
efecto directo del fríu sobre la zona. tejido subcut,íneo. S(~ obs1:rva edema, t'Jic:tenas \
Como consecuencia de la vasoconslricci<in ¡wrifé- \'esícttlas de contenido seroso o serohumútico.
ric:a manienida. sn produce isquemia e hipoxia tisll- quo porsisten durante días aunque cosn la acción
lar. con lesión celular y lilwrac:icín ele sustancias va- del frío.
soactinis. Estos hechos inducen una vasodilalaci(rn De tercer grado: la piel afectada adqllíerc un cu-
regíonal y un mnmmto de la permeabilidad capilar. lor grís,.íceo. Existe 11n ndmna importanle y tume-
c¡ue originan un edema intersticial. facción. f1ictenas >' úlceras, con amplias zonas ele➔
El aunwnio del líquido intorsticial y la disminu- necrosis.
ción consecuente do la volomia intran1scular fonire- De cuarto grado: la necrosis tisular alcanzn lus
c:en la lwmoconnmtrncíón, el aumento dn la viscosí- planos profundos. prod uciúndose u na gangrena.
ION I Etiopatogenia general

Además de la congelación, existen otras lesiones TRASTORNOS PROVOCADOS POR EL CALOR


locales. La forma más leve de ellas es el eritema per-
nio, perniosis o sabañón. Se detecta como una zona Efectos generales
enrojecida, fría y pruriginosa. Se mantiene durante Golpe de calor
periodos de días o meses, y mejora con el clima cá-
lido. El pie de inmersión o pie de trinchera es una Existen distintos síndromes asociados a una tempera-
entidad que se produce a consecuencia del contacto tura ambiente elevada: síncope, edemas, calambres,
de los pies con agua fría durante periodos prolon- agotamiento por calor y golpe de calor. Los síndromes
gados. En su aparicion influye fundamentalmente por calor ocurren fundamentalmente con temperatu-
la humedad. El cuadro clínico tiene una fase inicial ras ambientales elevadas, superiores a 32-36 ºC, con
con alteraciones sensitivas (anestesia) y autonómicas una humedad ambiental relativa también elevada,
(hiperhidrosis) así como palidez distal; esta fase va superior al 60 % , y con una ventilación insuficiente.
seguida, cuando se normalizan la temperatura y la Si el aumento de la temperatura se produce de
humedad, por las fases de hiperemia y recuperación. modo gradual, determinará una serie de fenómenos
conocidos como «aclimatación ». Si por el contrario
el aumento de la temperatura tiene lugar bruscamen-
El frío como causa predisponente ,
te, la eliminación masiva de agua y sales a través del
precipitante o agravante sudor inducirá una situación de disminución de vole-
El frío puede ser, asimismo, un factor desencadenante mia y de pérdida electrolítica, responsable en último
de síntomas y signos en enfermedades de etiopatoge- término de los calambres musculares.
nia diferente a la propia de los agentes térmicos. La expresividad clínica del síndrome puede ser di-
ferente , atendiendo a la situación personal del sujeto
Fenómeno de Raynaud. Se caracteriza por isque-
y al incremento de la temperatura.
mia digital episódica, expresada por un desarro-
El edema por calor es común. Afecta a las extremi-
llo secuencial de palidez, cianosis y rubor de los
dades inferiores. Su causa parece ser una retención
dedos tras la exposición al frío y recalentamien-
de sal y agua secundaria al hiperaldosteronismo se-
to posterior. El cuadro es secundario a la vaso-
cundario.
constricción en los dedos y puede presentarse
El síncope tiene lugar en individuos que desarro-
de modo idiopático o asociado a otras entidades
llan actividades o ejercicios a temperaturas eleva-
(esclerodermia, arteriosclerosis de extremidades,
das. Es consecuencia de la vasodilatación cutánea y
fármacos vasoactivos , etc.).
de la acumulación de líquido en extremidades, con
En este mismo epígrafe, es preciso considerar
disminución del retorno venoso y del gasto cardiaco
también la livedo reticularis. En ella se detecta
e isquemia cerebral transitoria, caracterizada por la
un patrón o dibujo reticular en las extremida-
pérdida súbita de conciencia, que cede rápidamente
des, de coloración azulada a roja. Puede ser una
tras la caída al suelo.
manifestación de una enfermedad sistémica (p.
Los calambres se atribuyen a la pérdida de grandes
ej., síndrome antifosfolípido , crioflubulinemia,
cantidades de sodio por el sudor. Se caracterizan por
vasculitis).
contracciones breves, intermitentes, a menudo dolo-
El frío puede asimismo poner de manifiesto una
rosas, que afectan a grupos musculares sometidos a
crioglobulinemia. Las crioglobulinas son proteí-
un esfuerzo importante.
nas séricas anormales o complejos proteicos que
El agotamiento por calor representa un fallo de
sufren una precipitación reversible cuando son
las respuestas cardiovasculares a las elevadas tem-
expuestos a bajas temperaturas. La precipitación
peraturas externas. Entre sus manifestaciones se en-
de las crioglobulinas determina una obstrucción
cuentran síntomas y signos de depleción de volumen
vascular distal , responsable de cianosis, isque-
(sed, hipotensión arterial, taquicardia y síncope); de
mia, ulceración y gangrena, junto a manifestacio-
afectación del sistema nervioso central (cefalea, irri-
nes generales como fiebre, artritis, alteraciones
renales , etc. tabilidad) e hiperventilación. Pueden presentarse asi-
mismo náuseas , vómitos o calan1bres musculares.
El frío puede precipitar la aparición de las ma-
Dentro del síndrome agotamiento por calor se ad-
nifestaciones clínicas de una criofibrinogenemia
miten dos variedades no mutuamente excluyentes:
(moléculas anómalas de fibrinógeno que pueden
determinar oclusiones vasculares), o la enferme- Agotamiento por calor debido a depleción acuo-
dad por crioaglutininas (macroglobulinas capa- sa: al no ser reemplazado el volumen de agua
ces de aglutinar a los hematíes tras exposición que un individuo pierde los síntomas son funda-
al frío). mentalmente los de una deshidratación intensa.
La exposición al frío puede ser responsable de Agotamiento por calor debido a depleción sa-
la degranulación de los mastocitos. Este meca- lina: aparece cuando las grandes cantidades de
nismo se presenta, por ejemplo, en la urticaria sudor son reemplazadas por agua, sin aportar los
por frío. electrólitos que han sido eliminados.
CAPÍTULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

El golpe de calor se caracteriza por hipertemia ex- vocan alteraciones en la piel a través de la producción
trema (temperaturas superiores a 40,6 ºC), piel seca y de muerte celular, lesión capilar en grados variables y
caliente y alteraciones del sistema nervioso central. coagulación de las proteínas.
Puede aparecer durante el ejercicio o con indepen- La lesión capilar local se manifiesta por un au-
dencia de él. mento de la permeabilidad capilar, que determina
El golpe de calor sin relación con el ejercicio, o gol- el desplazamiento de los fluidos corporales, tanto
pe de calor clásico, se da generalmente en ancianos, plasma como electrólitos, hacia el compartimento
coincidiendo con olas de calor ambiental. extravascular. Parte de este líquido se pierde a través
Los signos característicos del golpe de calor son de la herida producida por la quemadura.
la hiperpirexia, con una temperatura central que con Como resultado de ello, en quemaduras extensas
frecuencia excede los 40 ºC y una disfunción grave puede existir una disminución marcada del volumen
del sistema nervioso central (puesta de manifiesto por vascular y una reducción del gasto cardiaco y, en de-
delirio, psicosis, convulsiones o coma). Otros rasgos finitiva, de la perfusión tisular.
frecuentes son los propios de la alteración cardiovas- Existen, asimismo, repercusiones sobre los ele-
cular: hipotensión arterial, taquicardia sinusal o arrit- mentos formes de la sangre, con la hemólisis debida
mias, así como los vómitos, las alteraciones electro- a la acción directa del calor sobre los hematíes y al
líticas, del equilibrio ácido-base y de la coagulación. atrapamiento por los macrófagos de los eritrocitos le-
Entre sus complicaciones se encuentran la disfunción sionados.
hipóxica de diversos órganos, la rabdomiólisis, la in- La gravedad de los cambios vasculares está relacio-
suficiencia renal y la coagulación intravascular dise- nada con la extensión y profundidad de la lesión:
minada (Fig. 7-3).
Extensión de la lesión: una superficie quemada
Es frecuente la hemoconcentración. La leucocitosis
superior al 20 % puede llegar a ser mortal.
es característica, al igual que la proteinuria, la cilin-
Profundidad de la lesión: se clasifica en grados.
druria y la elevación de la urea plasmática. Al princi-
pio se observa alcalosis respiratoria, que irá seguida Primer grado: existe lesión térmica de las célu-
de una acidosis metabólica. El potasio sérico es bajo o las superficiales de la epidermis. Las lesiones
normal. En los casos en los que se ha producido una son hiperémicas y eritematosas, sin ampollas.
rabdomiólisis, se observará una elevación en el suero Segundo grado: pueden ser lesiones superfi-
de las enzimas musculares (CPK y aldolasa). ciales o profundas. Las superficiales afectan a
la epidermis, con exudación de suero y forma-
Efectos locales ción de ampollas. La superficie quemada está
uniformemente eritematosa y es muy dolorosa.
Quemaduras Las quemaduras de segundo grado profundas
Pueden producirse por exposición a las radiaciones afectan a la epidermis y a la dermis. La cura-
solares o por contacto con focos de calor directo. Pro- ción se produce tras más de cinco semanas. La

AUMENTO DE LA TEMPERATURA AMBIENTE

VASOD ILATACIÓN CUTÁNEA


SUDORACIÓN
ACLIMATACIÓN

PÉRDIDAS ELECTROLÍTICAS RABDOMIÓLISIS

ACTIVACIÓN DEL SRAA


HIPOVOLEMIA ARTERIAL
HIPOPOTASEMIA

ISQUEMINHIPOX IA DEL S. .C.

COAGULOPATÍA ◄ MAYOR HIPOVOLEMIA ► INSUFICIENCIA RENAL

1 HIBICIÓ DE LA
VASODILATACIÓ CUTÁ EA Y DE
LA SUDORACIÓ

AUME TO DE
TEMPERATURA

Figura Fisiopato logía del golpe de ca lor. SRAA: sistema renina angiotensina aldosterona.
o Etiopatogenia general

lesión deja una cicatriz firme en la zona; tam- longitud de onda superior a 10 cm, las cuales tienen
bién puede producir una pérdida permanente muy poco efecto biológico específico.
de pelo y de glándulas sebáceas en la zona.
Tercer grado: implica la destrucción completa
del espesor de la piel. Tienen secuelas locales RADIACIONES IONIZANTES
tardías muy graves: cicatrices invalidantes y Hay dos tipos fundamentales de radiaciones ioni-
úlceras de Marjolin, que pueden malignizarse zantes. Unas son las radiaciones electromagnéticas
(carcinoma epidermoide). o fotones , tales como los rayos X y las radiaciones
gamma. Otras son las radiaciones corpusculares; en
El calor como causa predisponente, ellas, las partículas emitidas como radiaciones son
precipitante o agravante partículas alfa, partículas beta y neutrones. Las par-
De modo similar al frío, el calor puede actuar como tículas alfa se generan en el ambiente de una explo-
agente precipitante o agravante de una serie de pro- sión atómica o en la desintegración de los isótopos
cesos. Cabe señalar en este apartado las siguientes radiactivos. Las partículas beta, o electrones, tienen
alteraciones : carga negativa y son producidas en aceleradores li-
ne'ales de electrones o en los aceleradores circulares o
Alteraciones vasculares: destaca en este grupo betatrones . Los emisores de positrones se emplean en
la eritromelalgia: eritema y dolor quemante en equipos médicos con el fin de realizar exploraciones
las extremidades tras la exposición al calor. Pue- de imagen (tomografías) .
de ser primaria o secundaria a discrasias sanguí- La unidad fundamental de medida que se emplea
neas. para las radiaciones ionizantes es el rad. Es la unidad
Urticaria tras exposición al calor: aparecen ha- fundamental de dosis absorbida de cualquier tipo de
bones pruriginosos, producidos por la degranu- radiación. Un rad representa wrn dosis absorbida de
lación de los mastocitos y liberación de media- 100 ergios/gramo de tejido. El Gray (Gy) es el equiva-
dores humorales , particularmente de histamina. lente a 100 rads.
Obstrucción de las glándulas sudoríparas: El uso de las radiaciones ionizantes está muy
provocada por un aumento de la temperatura controlado a través de leyes y normas reguladoras
ambiental. Se clasifica, en función de la profun- específicas y estrictas por lo que, en la práctica, la
didad, en sudamina, miliaria rubra y miliaria exposición del ser humano a graves radiaciones sólo
profunda. se produce en situaciones accidentales , de guerra, o
de catástrofe. El empleo de radiaciones ionizantes en
medicina está controlado por una estricta normativa,
RADIACIONES COMO CAUSA referente a su utilización tanto en procedimientos
DE ENFERMEDAD diagnósticos como en procedimientos terapéuticos.
Los efectos biológicos de las radiaciones son de
El efecto de las radiaciones depende de la transferen- distinto tipo, que están condicionados al menos en
cia de energía a la materia sobre la que inciden, de parte por el momento de actuación y por la dosis:
acuerdo con los siguientes principios básicos:
Alteraciones que producen muerte celular por
Solo aquellas ondas que son absorbidas pueden inhibición de la capacidad mitótica celular en
causar efectos secundarios. los tejidos con gran capacidad regenerativa (mé-
La intensidad y la duración de la dosis de ener- dula ósea, células gástricas e intestinales, células
gía son inversamente proporcionales , de tal embrionarias o fetales).
forma que, para mantener constante la energía Alteraciones estructurales de los cromosomas ,
transferida, un aumento de la intensidad debe ir que pueden ser de dos tipos: mutaciones inesta-
acompañado de un descenso de la duración, y bles, que son letales para las células que deben
viceversa. entrar en mitosis para sobrevivir, y mutaciones
La intensidad de la radiación es inversamente estables tales como pequeñas deleciones, trans-
proporcional al cuadrado de la distancia entre el locaciones recíprocas y aneuploidia, que no im-
foco radiante y el punto de impacto. piden que la célula se divida.
El efecto de cualquier tipo de radiación es máxi-
Mutaciones de células germinales o gaméticas,
mo cuando la radiación incide perpendicular que se transmiten a la descendencia.
sobre la piel.
La acción sobre las células fetales, entre las se-
El espectro electromagnético muestra que hay tres manas 8 y 15 del embarazo, produce malforma-
grupos importantes de radiaciones: radiaciones ioni- ciones congénitas.
zantes, con una longitud de onda menor de 12 nanó- Mutaciones de las células somáticas, con posible
metros; radiaciones solares, con una longitud de onda activación de los oncogenes o inactivación de los
entre 180 mm y 15 000 000 mm; y radiaciones con genes supresores tumorales.
CAPÍTULO 7 Agentes físicos como causa de enfermedad

Algunos factores individuales influy1m en los efoc- monas sexuillns son mús rnsistunt,1s a las radin-
tos biológicos: cimws.
E<lnd: las Jl'ffsrmas 111,ís jc'J\'nnns son mucho m,ís En relac.ír.ín con ni síndrome clínico qun pro,'Pc:an
,,,msibles qup los ancianos. las radiacímws ionizantes. hay que trmcr en r.:uonta
Toso ,Je mdioción (rndinc:ión por trnirLid do qun los efoc:tos tóxicos se pumlen ¡expresar a corto pla-
tiornpo): cuanto 111<n·or sea la dosis. mm·cir sPnÍ zo (dnctos a~udos) o a largo plazo (doctos crc'Jniroi').
ni daíio org(inico.
h'x/1:nsinn: árnu dnl cunrpo sobre In qun ar:túa la Síndrome agudo
rnd iacir'n1.
La mayor parle do los síntomas agud()s se dr,lwn a
s,,nsíhi/illur/ rnlntirn de Jus cólulns: ns dirccta-
lcsiorws de la mríduln 6sc,1. del aparato dígc,sli,·o \'
menln proporci01rnl al tam,1ño dnl núch,o c:Cl-
dnl sistnma nervioso cr•ntr;1l. Las nrnnifPstncimws
lular y al índicn do c:rcc:iminnlo dD los tejidos.
;1g11das o inmndíat,i;-; dn un accidenle por nxposir,i(m
Dr1 acuerdo con la lc\' d1: lforgrmin-Trilic11dnm1.
a rarlirn:ionP, ioniznntus cln¡wnden dn la dosis roci-
cuanto manir es el grndo de indil'ornncinción dn
hida. El cfot.to ge1rnral ns nwvor si la rndiHr:ión es do
las cúlulas, mnvor es s11 ,wn~ihilidnd n la:-- radin-
todo el c1wrpo. Dentro de las nrnnifoslm:ionns ngudas
cioncs. Los tejidos m,ís sensihlt>s. en ordnn d(;-
por nxposicirín do todo ni uwrpn. h,n algunas que
crpr:iPnte. son: tt,jirlo linfütir:o, módula ósna. tr;-
son innrndiatas (os ni caso dn las nút1soas, los vómi-
jiclo gonad,il (trislcs, U\arios). npilnlío intestinal.
tos\' la ,istcnin). !\l cabo dn dos smnanas aparncn un
pird, lojido r:011Pt.liuJ, hueso. (Jrgnnns \'iscmal1;s
síndmnw lwmalo]ógíco. La mtrnrlc sn prodm:n on ni
\' tejido rnHTioso.
20 % de los casos qt1n rncíbm1 tma dosis de 2fl0-400
Los ofoctos sobrP órgi111os y !ejidos cs¡rnr:íficos. rnrl. ni 50 % do los qun rncib1:11 400-500 rnd. v 011 nl
sug(m la dosis absnrhidu. pundon rr,sumirso como 100 '¼,dolos íjllO rnr:ilmn 500-1000 rad. Con dosis rlc
sigue: J000-5000 rnd. In m11orto sobrevinnn nípidamentn (en
trnas 4/l horns). Si la dosis su administra frncciomida.
Aládulu ns1:11: las c,ílulas prm:ursorns en In mú-
ni efor:to lóxicn sH ,itnnúu clu !al forma qun se rnquinrn
dnla ósr,n son rntIV nilnmahlns ;1 lns rndincioncs.
t11rn dosis cnatro \·ocns mnvor para obtnnnr el mismo
Sin mnlrnrgo. r,s posiblP c¡un dnspu1ís d,i 1111a l'X-
nfoclo.
posici(Jll de todo ¡,I cuorpo u (1 (;y. lu médnla óirna
Hm· tn's síndrnmns ¡irnclominanlcs. que se prnsen-
sn rngenerc.
tnn dn f'ornrn gradual sugún la dosis do PXJHJsici(m:
lntostino: rnrn dosis dn ·1 (;y produrn la pfadida
de un 5fl ºL dP las c6lulas do las cripliis. l:1w do- Síndrome hematológico. Se da nn un l'ormos qun
sis do-¡ 5 G\· puedo producir la dm:trucci(rn total recil)(Jll l 0-12 Cy en radiucirín c:mporal total.
de, lns vnllosidades. Hay 111111 losírín du ln nH~dula ósea. intestinal
Sislomo no1vioso nwlrnl: las rwunHrn~ sólo so lci- (míusm1s. vómitos) y nrnlestnr gmwrnl q1w durn
sionan con dosis llHl\'On,s de GO G\' (por no lonnr 24 horas. Tr.1s un ¡mriodo silonto, rpw se prolon-
capncidnd cln mitosis). Las grandrn; nxposicíonos. ga dunmto :lA sc;11H111as (qun ns mús corto si In
cln fiO a fiOO Cy. pronirnn cmnbios funcionalr's dosis rncibida !JS rna.vor), ;1parncn 1wutropcnía :i,·
agt1dos e incluso la mtwrt1,. trombopenía. con prnclisposíción a prr!sentnr in-
Piel: con dosis bajas (20 C\·) su procluc:e nritmnu foccionns y lrnmorragias. La nnnrnia es m,'is tardía
local v ade!gaznminnto do lu capa do c¡\]nlas dn (aparece pasadas algunas snmarrnsl.
ln npidnrmi!-'. Con dosis rnayorns a 20 Gy se) pro- Síndrome gastrointestinal. Apareen con dosis
dnnm úlcurn,;. entre 1 :J Y :10 Gv..'\nlns dP una snmmrn (periodo
Puln11í11: unn dnsis d<, H) Cy producn nnrnnonilis !ntPnt,i) npan•cci una diarma gra\'e.
agurla. con un ¡rn1r(m intc:rsticíal q11() SP inir:ia a Síndrome cardiovascular y del sistema min-ioso
los irns nws,,s \ que put>dn durar mios. central. Se prnsnnta clcsp116s ciu dosis alias, es¡w-
Comzrín: con una dosis clP 15 C\' o superior, b,n- cialrmmte entre 20 :v 50 Gv. Con dosis mu,; altas
disminm:ión do n1pilarns Y pfadida Sf'cundaria ('.'J00-500 Gy) sobrrffímw una munr!n nipírln por
d[) r:últdas m usc1ilme.s mioc(irrl ic:as. disfunción d(,l SNC.
Hígado: una dosis de 10 GY prod1tc:e. en una .se-
mana. obstrucción centrolohulillnr. pérdida de Síndrome crónico
hepatocitos e hipertensión portal.
La:-- manifestaciones tardías implican que la dosis de
17iiión: una dosis de JO C\' produce cm unos me-
radiación recibidn no hd sido ],)tal ¡,n s,i fase aguda.
sns ¡.Hirdida de rrnfrona.s. daiio.s cnpilanis \' glo-
nrnrular e hiperiensicín arterial. S,i producen mutaciones genéticas, o efoctos g,➔-
Gónados: la.s células reproductoras son rnuY notóxicos. qun son el n:sultado de dehicimws y
s,rnsihles a las radiacimrns ioniz;mtes. Urrn do- translocacíonos. L.1 dnsi;; dtl radiaci(m 1rncnsaria
sis dB 5 a 10 Cy puode producir una ostorili(h1cl para duplicar la lasa ch, mutaciones esponl,ínr:as
¡wrmancmto. Lns ceílulas productoras dr, hor- en nl hombre es do 100 cGy.
S CCION I Etiopatogenia general

Aparecen mutaciones de las células somáticas, lesiones de fotodermatitis en individuos predispues-


que predisponen al desarrollo de tumores malig- tos (por ejemplo, en la porfiria cutánea tarda) o en
nos. personas cuya piel se ha sensibilizado por algún fár-
Se produce un envejecimiento celular prematuro maco. Las radiaciones ultravioleta pueden favorecer
en el individuo expuesto. el desarrollo de cáncer de piel, pero por otro lado tie-
nen efectos beneficiosos en el hueso relacionados con
la síntesis de la vitamina D.
RADIACIONES SOLARES
Las radiaciones naturales emitidas por el sol y que ELECTRICIDAD COMO CAUSA
llegan a nuestro medio, son de tres tipos:
DE ENFERMEDAD
Radiaciones ultravioleta (10 %) . Las hay de tres
tipos: a) UV-A, que producen pigmentación de Como agente etiológico, la electricidad puede actuar
la piel y cataratas; b) UV-B, que son atrapadas, a través de tres mecanismos:
en gran parte, por la capa atmosférica de ozo- La electricidad estática del cuerpo humano
no; las que logran atravesarla producen eritema cuando se mantiene aislado del suelo.
en la piel, modifican el ADN y producen enve- La corriente eléctrica a través de un conductor,
jecimiento de la piel en el hombre; y c) UV-C , ya sea continua o alterna.
denominadas germicidas por su capacidad para Las descargas eléctricas, originadas por la des-
destruir bacterias, virus y hongos; son atrapadas carga a tierra de la carga electrostática de las nu-
por la capa de ozono. bes.
Radiaciones de luz (50 %). Tienen muy poca
actividad biológica. Pueden ocasionar fotoder- Los factores que condicionan el efecto patógeno de
la electricidad son los siguientes:
matosis por sensibilización previa de la piel con
una sustancia, tal y como sucede en la porfiria La intensidad de la corriente. La piel fina , hú-
cutánea por acción de la protoporfirina. meda , sudorosa o mojada es buena conductora.
Radiaciones infrarrojas (40 %). Su efecto es El trayecto de la corriente. Si atraviesa el co-
calórico; tienen capacidad para producir que- razón puede producir fibrilación ventricular y
maduras cutáneas de primer grado en casos de muerte. Si atraviesa el bulbo raquídeo, puede
exposición prolongada al sol. provocar graves lesiones con parada cardiorres-
piratoria. La tetania en la musculatura respira-
Las radiaciones solares de mayor efecto nocivo
toria puede provocar una insuficiencia respira-
son las radiaciones UV. Estas radiaciones están con- toria.
dicionadas por una serie de factores exógenos que Naturaleza de la corriente. La corriente continua
modifican la capa de ozono, que filtra e impide el es cuatro veces más peligrosa para una misma
paso de las radiaciones UV. La capa atmosférica de intensidad, ya que produce alteraciones electro-
ozono varía con la estación del año (es más densa líticas a su paso. En el polo positivo se producen
en invierno) y su espesor disminuye con la altitud. úlceras secas (por efecto ácido) y en el negativo ,
Otros factores, que son de índole endógena, también úlceras húmedas (por efecto alcalino). La co-
determinan la cantidad de luz UV que va a atrave- rriente alterna es menos peligrosa cuanto mayor
sar la piel. Las radiaciones UV producen rotura de sea la alternancia. Si la frecuencia es mayor de
las bandas de ADN. Cuando la rotura es de una sola 2000 ciclos, es inocua, salvo por la producción
banda se produce siempre la autorreparación. Pero de calor.
cuando es de las dos bandas en lugares próximos, Procedencia de la descarga atmosférica (el
hay una rotura añadida del cromosoma, y no es posi- rayo]. Produce la muerte por auténtica fulgura-
ble la autorreparación. ción. Es una descarga eléctrica de enormes di-
La melanina dérmica es un excelente filtro para las mensiones, ya que puede alcanzar un voltaje de
radiaciones UV de origen solar. Los individuos mo- mil millones de voltios y entre 12 000 y 200 000
renos resultan mucho menos afectados que quienes . amperios, con una breve duración de exposición
son rubios o tienen la piel más clara. El albinismo que oscila entre una milésima y una centésima
(déficit enzimático de la síntesis de melanina) es una de segundo, y una temperatura que alcanza los
enfermedad que predispone al efecto nocivo de las 30.000 ºC, pero que se disipa en cuestión de
radiaciones ultravioleta. milisegundos. Las personas alcanzadas por un
Los efectos biológicos de las radiaciones solares rayo sufren asistolia y fibrilación ventricular,
dependen de los efectos de cada tipo de radiación. que puede ser reversible si se inicia la recupera-
Los rayos infrarrojos producen quemaduras por la ción mediante reanimación cardiorrespiratoria
producción de calor. Las radiaciones de luz causan inmediata.
I08
Agentes químicos
como causa
de enfermedad
Raúl de Pablo Sánchez, Melchor Álvarez de Man Soto

INTRODUCCIÓN
Cuando los agentes químicos son capaces de produ-
cir muerte , lesión o cualquier otro efecto perjudicial
en el organismo decimos que esa sustancia química
es un tóxico. Una intoxicación es, por lo tanto , aque-
lla situación clínica en la que una sustancia química
produce daño en el individuo. En sentido estricto,
en la intoxicación no hay intencionalidad en la ex-
posición al agente químico y se diferenciaría así de
la sobredosis, en la que hay intencionalidad
por parte del afectado, aunque no siempre
se busque causar daño corporal. En la
práctica clínica, ambos términos son
intercambiables.
La etiología más frecuente es la
medicamentosa (46 % ), segui-
do de productos de limpieza
(23 %), plaguicidas (7 %), pro-
ductos industriales (6 %), cos-
méticos (3 % ), setas y alimentos
(1 %) y plantas y animales (1 %,
cada uno). En cuanto a la edad,
las intoxicaciones siguen una
distribución bimodal. Ocurren
principalmente en los cinco
primeros años de vida y en la
vejez.
Según su intencionalidad, las intoxicaciones se
pueden dividir en involuntarias (generalmente
por sobredosis o accidentales) y voluntarias (la
mayoría por intentos autolíticos) . Los tóxicos
responsables más comunes son las drogas de
abuso, el alcohol y los medicamentos.
Según el criterio patocrónico, es decir, según
la evolución en el tiempo, las intoxicaciones se
pueden clasificar como agudas y crónicas. La in-
toxicación aguda es aquella en la que aparecen
71
síntomas clínicos tras una exposición reciente a
Etiopatogenia general

una dosis potencialmente tóxica de una sustan- Fase de exposición


cia química. La intoxicación retardada es una Las principales vías por las que un tóxico accede al
forma especial de intoxicación aguda en donde organismo son: la vía digestiva o ingestión, las vías
la clínica se manifiesta varios días o semanas aéreas o inhalación, la piel y las mucosas o vía tópica
después de la absorción del tóxico. La intoxica- y la vía parenteral (subcutánea, intraperitoneal, intra-
ción crónica suele producirse como consecuen- muscular y endovenosa). La vía endovenosa es la que
cia de la exposición repetida del tóxico. Habi- tiene una capacidad de acción más rápida.
tualmente, el tóxico se va acumulando dentro de Es importante destacar la exposición al tóxico es
órganos concretos a los que acaba por producir inferior al tiempo de eliminación, el organismo pue-
una lesión que puede posteriormente conducir de recuperarse; mientras que si es mayor, el agente
a manifestaciones clínicas. Uno de los ejemplos químico se acumulará hasta producir daño en los
más representativos de intoxicación crónica es sistemas biológicos y, por consiguiente, las manifes-
el abuso de alcohol , cuya ingesta va lesionando taciones clínicas.
casi todos los sistemas orgánicos, principalmen-
te el hígado y el cerebro.
Fase toxicocinética
El tóxico o sustancia química debe experimentar una
ETIOPATOGENIA serie de procesos y transformaciones bioquímicas has-
ta que llega a los órganos diana y se produce el daño.
Estos procesos que el organismo ejerce sobre el tóxico
CLASIFICACIÓN DE LOS TÓXICOS se denominan Toxicocinética y sigue los principios
Las sustancias tóxicas pueden ser clasificadas según básicos de la farmacología como son la absorción, la
varios criterios: distribución , la biotransformación (o metabolismo] y
la eliminación.
Sus características fisico químicas: gases, alco- Los agentes químicos antes de ejercer su acción
hol, etc. tóxica deben pasar a través de las membranas celula-
Usos: medicamentos, productos tóxicos , indus- res mediante una gran variedad de mecanismos, en-
triales, agrícolas, etc. tre los que destaca la difusión pasiva y el transporte
Lugar de acción: activo. La difusión es un proceso pasivo que ocurre
Local o por contacto. Destruyen las membra- como consecuencia de la diferencia de concentración
nas que actúan como m ecanismo de defensa de una sustancia a ambos lados de una membrana
de la piel o de las mucosas. Son sustancias biológica, de tal manera que la sustancia se mueve
conocidas como cáusticos, corrosivos o vesi- desde el lugar donde hay más concentración hacia
cantes . aquel en la que hay menos . En el transporte activo,
Toxicidad sistémica. El tóxico penetra en el or- la sustancia es capaz de desplazarse en contra del
ganismo y se dirige hasta el órgano o los tejidos gradiente de concentración, generalmente gracias a la
donde ejercerán su acción. presencia de proteínas transportadoras transmembra-
na. Esta acción supone un gasto energético y necesita
Mecanismo de acción a nivel celular que existan proteínas específicas del grupo químico
o molecular. a transportar.
Métodos de análisis y determinación.
Absorción
Es el paso del tóxico desde el área de exposición has-
FASES DE LA ACCIÓN PATÓGENA ta la circulación sistémica. El tóxico puede absorber-
DE LOS AGENTES QUÍMICOS se desde varios lugares, siendo el más importante por
su frecuencia el tracto gastrointestinal.
Para que un agente químico o el producto de su bio- La absorción gastrointestinal ocurre fácilmente por
transformación (su metabolito) sean capaces de pro- difusión pasiva en aquellas sustancias que son lipo-
ducir efectos tóxicos es necesario que alcance los lu- solubles, de bajo peso molecular y sin carga eléctrica.
gares apropiados en el organismo con una concentra- Sin embargo, para las moléculas ionizadas, la absor-
ción y durante un tiempo suficiente. Para caracterizar ción depende en gran medida del pH. La constante
el efecto nocivo de una sustancia química, necesita- de ionización (pK) de un ácido o de una base es el
mos saber cómo es la exposición al tóxico, la dosis pH para el cual esa molécula está al 50 % ionizada y
que se necesita para producir daño , el tipo de efecto al 50 % sin carga eléctrica. Muchos tóxicos son áci-
que produce y la predisposición por parte del sujeto dos o bases débiles. Los ácidos liberan un protón en
que recibe el agente químico. Esta acción patógena se el medio acuoso, quedando ellos con carga negativa.
puede dividir, siguiendo los principios de la farmaco - Estas sustancias se absorben mejor en un medio ácido
logía, en tres fases: a) exposición; b) toxicocinética; c) como el estómago. Por el contrario, las bases se ab-
72
toxicodinámica. sorben mejor en medios alcalinos, como el intestinal.
CAPÍTULO 8 Agentes químicos como causa de enfermedad

Otro factor que influye en la absorción es el estado Las vías de exposición parenteral son prácticamen-
del tóxico. Si es un líquido se absorbe más fácilmen- te exclusivas de los fármacos o de las drogas de abuso.
te que si es una sustancia sólida, que el tracto gas- La administración intravenosa de fármacos siempre
trointestinal tiene que disolver. Esta disolución del tiene que ser muy vigilada debido a su rápida distri-
agente químico no solo depende de su formulación bución en el organismo. La vía intramuscular tiene
química, sino también de la presencia de comida, del una absorción muy errática y depende de la perfusión
vaciamiento gástrico y del pH. El vaciamiento gástri- del tejido y de la formulación del fármaco. Por el con-
co y la motilidad intestinal tienen gran trascendencia trario, la vía subcutánea es más predecible.
en la absorción de tóxico, que suele realizarse en el
intestino delgado . La presencia de comida y algunas Distribución
sustancias químicas retrasan el vaciamiento gástrico. Es el proceso por el cual las moléculas circulan por
La absorción en el intestino delgado trae como conse- la sangre y pasan a los tejidos. En general, en la fase
cuencia que el tóxico entre en la circulación portal y inicial, el factor más importante es el flujo sanguíneo,
pueda ser inactivado en el hígado antes de alcanzar mientras que en la fase de penetración a los tejidos
una distribución general por el organismo. Es lo que lo determinante es la afinidad de ese tóxico por cada
se conoce con el nombre de primer paso metabólico uno de ellos. Esta depende fundamentalmente de la
o extracción presistémica. La mucosa oral puede ab- solubilidad lipídica, del peso molecular y de la carga
sorber tóxicos directamente, que alcanzan el torrente eléctrica del tóxico.
Se ha desarrollado un modelo teórico lla-
mado volumen de distribución, que refleja
la capacidad del organismo para contener
la sustancia absorbida. Su fórmula es la si-
guiente:

Volumen de distribución (Vd)=


_ Cantidad de tóxico en el organismo (masa)
- Concentración (masa por volumen)

Si un tóxico tiene un volumen de dis-


tribución cercano al plasma, por ejemplo,
40 ml/kg para un adulto, significa que está
secuestrado en el espacio vascular. Suelen
ser moléculas grandes que no pueden entrar
fácilmente en los tejidos. Las moléculas hi-
drnfílicas tienen generalmente un volumen
de distribución bajo porque se distribuyen
por el agua corporal total. De las sustan-
cias que pasan muy bien a los tejidos, sólo
una pequeña parte permanece en la sangre
sanguíneo con rapidez. Con ello, además, se evita el (la concentración será baja), por lo que el volumen
primer paso del metabolismo a través del hígado y su de distribución será muy alto. Suelen ser moléculas
posible inactivación. Esta misma circunstancia es lo lipofílicas, que se concentran mucho en los tejidos,
que le pasa a la vía rectal. especialmente grasa y músculo. El volumen de distri-
Los pulmones también pueden ser una ruta para la bución tendrá gran trascendencia a la hora de diseñar
absorción de gases o de pequeñas partículas(< 1 µm). una estrategia terapéutica para eliminar el tóxico.
Debido a que los alvéolos representan una gran super- Otro concepto importante en toxicología es la
ficie y a que reciben todo el gasto cardiaco, los tóxicos unión a proteínas. Muchos tóxicos se unen a las pro-
que alcanzan las vías aéreas inferiores entran rápida- teínas plasmáticas, sobre todo albúmina, por lo que
mente en el torrente circulatorio sanguíneo, por lo sólo la cantidad libre en plasma es la que es bioló-
que sus efectos suelen ser muy agudos y graves . gicamente activa y produce el efecto fisiológico. La
Ciertos tóxicos pueden absorberse por la piel, a tra- albúmina se une más fuertemente con ácidos débiles
vés de la epidermis o a través de las glándulas sebá- que con bases débiles y no suele unirse a sustancias
ceas y sudoríparas o los folículos pilosos. Es evidente hidrofílicas o neutras.
que si la piel está inflamada o denudada es más sus-
ceptible al efecto tóxico de las sustancias químicas. Biotransformación o metabolismo
La penetración por una piel intacta viene determina- Los agentes químicos, antes de ser eliminados por
da fundamentalmente por tres factores: la liposolubi- el organismo, suelen sufrir unos cambios químicos.
lidad de la sustancia, el grosor de la capa córnea de la Generalmente los tóxicos se transforman en sustan- -=¡f'
piel expuesta y el gradiente de concentración. cias más hidrosolubles, de tal manera que se dificulta
Etiopatogenia general

su paso a través de las membra- depende, a su vez, del pH.


nas biológicas de los tejidos y, La mayoría de los fármacos
como consecuencia de ello, se son ácidos o bases débiles,
pueden eliminar mejor por la y en una orina ácida las
orina o por la bilis. Estas sus- bases débiles están muy
tancias intermedias se deno- ionizadas, eliminándose
minan metabolitos, y en algu- en su mayoría, mientras
na ocasión se puede producir que en una orina alcali-
una bioactivación del tóxico , na las bases débiles están
es decir, que el metabolito se poco ionizadas y en su
convierta en una sustancia mayor parte se reabsorbe-
más tóxica para el organismo rán. Como el pH de la orina
que la sustancia primaria del se puede modificar con la
que se originó. ingestión de ácidos o bases,
Estas reacciones se producen es fácil comprender la impor-
principalmente en el hígado y se tancia que ello tiene desde el
dividen en dos fases: fase I y fase punto de vista terapéu tico.
II. Las de fase I son la oxidación, la Las sustancias químicas pue-
reducción y la hidrólisis. Las más den pasar a la luz tubular mediante
importantes son las reacciones oxida- un proceso activo de secreción. Por
tivas microsomales , en las que suele ejemplo, ciertas sustancias lipofíli-
estar implicado el citocromo P-450, que cas pueden ser eliminadas gracias
es un sistema de más de 60 enzimas con a la bomba glicoproteína-P, que está
actividad sobre un elevado número de presente en las células epiteliales
moléculas. del túbulo proximal. También así se
En la fase II, los compuestos directamen- pueden eliminar aniones y cationes
te o sus metabolitos derivados de la fase I orgánicos mediante sus respectivas
se hacen más solubles parn poder eliminar- proteínas transportadoras.
se mejor mediante procesos de conjugación.
Esta se lleva a cabo por enzimas denomina- Fase toxicodinámica
das transferasas, en cuyo proceso se consu-
Durante esta fase, los tóxicos ejercen
me energía. Tras la fase II del metabolismo
su acción sobre los procesos fisiológi-
los productos suelen quedar en forma inerte,
cos del paciente a través de la interac-
sin actividad biológica, pero esto no siempre
ción entre moléculas. La toxicodinamia
es así y en ocasiones, el metabolito resultante
es la relación cuantitativa entre la dosis
tiene capacidad tóxica.
del tóxico y la magnitud del efecto biológi-
Eliminación co producido en la intoxicación. Los efectos
se pueden expresar mediante curvas dosis-respuesta ,
Es la fase por la que el organismo expulsa al exterior
el tóxico. La ruta de eliminación más importante es la puesto qu e la respuesta es una variable que depende
de la dosis y de la duración de la exposición.
vía renal, aunque también puede producirse a través
En la mayoría de las ocasiones, las drogas actúan
del intestino, los pulmones, la bilis o el sudor.
mediante receptores a los que se unen para producir
La eliminación renal se lleva a cabo mediante los
su efecto fisiopatológico. La curva dosis-respuesta
procesos de filtración glomerular, transporte tubular
en este caso será la relación teórica entre la ocupa-
pasivo y transporte tubular activo, es fundamental
ción de los receptores y el efecto clínico del agente
para la eliminación de la mayoría de los agentes quí-
químico. Suele ser una curva sigmoidea, en donde al
micos, de tal manera que la insuficiencia renal puede
aumentar la dosis de la droga, inicialmente no hace
aumentar la concentración plasmática a diferentes
efecto, después a mayor dosis se produce más efecto
sustancias químicas.
fisiológico , hasta que llega un momento que por dar
El filtrado glomerular se produce por gradiente de
más dosis no se consigue más respuesta.
presión entre la arteriola aferente y eferente y hace
que las moléculas menores de 20 000 daltons y que
no están unidas a proteínas plasmáticas pasen a la luz FACTORES QUE CONDICIONAN LA ACCIÓN
de los túbulos renales. Allí, las sustancias pueden ser TÓXICA
reabsorbidas o eliminadas por la orina. La resorción Factores dependientes del organismo
depende de la solubilidad lipídica del compuesto y
de su carga electrostática. Una sustancia con gran car- Edad
ga de ionización será más hidrosoluble y, por lo tanto, Se trata de un factor importante en el perfil de sus-
será más fácilmente eliminada. El grado de ionización ceptibilidad al daño. Durante la vida intrauterina,
CAPÍTULO 8 Agentes químicos como causa de enfermedad

algunos tóxicos Ji()JH'Tl efoctos 1eratr:ígcmos. En las pri- Susceptibilidad o intolerancia


mrirm; décndas de la dda. so toleran nn general mejor, La rnaccirín ,1 los tóxicos puede sm la prnvisiblc o
v durante ln senectud. a] oxistir un duterioro fisioló- bien snr müs o monos intonsa, es decir. ídiosincnítica.
gico de la función renal. se mantienen m.ís tiempo en Estas diforuntDs rnspuns1as del organismo se ddmn n
la sangre. lo que aumenta su toxicidad. características gm1élicus en las nrnmbrunas celulares
o rm determinadas molr\culas protnir:ns, o a los distin-
Sexo los niv()les enzimúticos mntabolizanlns.
El hecho de que la nrnjDr tonga mayor cantidad de gra-
Tolerancia
sa que el varón. y que esta ns nwtabólicanwntc nwnos
acli\·a que ol resto do lns tejidos, puede dl)terminar Es ln rnsístnncia ,Hlquirida trns nl contucto con ni tóxi-
nrnyorns concentraciones plasm.ític:a. Por otrn p,l!'te, co.
se puncle producir nHn·or ::;ncuustro dn las sustancias
químicas muy lipofílicas un ni tnjído adiposo, y su pos- Factores dependientes del agente químico
terior lilmrnc:ión. SP ha dnnwstrndu. asimismo, que las
hormonas sexualns fmnoninas clnsnmpnfían un impor-
Propiedades moleculares del agente químico
tante papo] nn lll motabolismo de los ((\xicos al fani- S(i puoden citar las siguíentos:
rncm lo:; eslrógenos la síntnsis dn difornnlcs nnzinws.
Líposoluhiliclml u hídrosoluhilíclml. al absorlrnrsu
Cunndo nstns pertnrn)r'tm a sistenrns de eliminación,
mnjor por la piel las sustancias liposolublos.
nl fon(mwno PS hnncficioso al disminuir ni rinsgo: sín
Gmdo rie ioni✓,uóón: n mavor ionizm:iún. m;ís hi-
()lllbargo. cuando las rn1zimas nstimulndas son ]ns qun
drnsolubilidad v nrnvor' dil'icultnd para alrnvosar
producen mutabolitns m6s tóxicos, SP inc:ro1rnmtn su
las distintas memlmlllas.
acción lusiva,
1\.ccíón cudtropu o du r'sluhiliuu:i6n de los nwm-
hmm1:; hiolóp,íc(ls, por allnrnción de sus proteínas
Factores fisiológicos
(p, nj., lrnrnólisis por cldnrguntns).
El consumo do diotas vngntarianas o la ingesta d(, bi- Afiníclocl por los proteínas do/ p/nsmu y de los /e-
c:nrhonato prolongan los cf'oclos du algunos fúrnrncos jidos: al uxistir puntos du unión parn sustancias
p, ej .. las anfetaminas). al disminuir su eliminación ,ícidas y otros parn las brísicas, ¡nwcle hnlmr com-
urinnríu. Una f)SU1s,1 absorción en ul intostino delgado petencia rmtru los ag(mtns (J(IÍlllicos v moliíc:ulas
se pundn prnclucir con mcdicanwntos con pH 6cido \' ondcíg<mns que circulan unidas a protníirns. talos
su incrnmenlo. con los dr, pH alcalino. La flora lnll,s- como las hormonas.
tíual tiene la capacidad cln trnnsfornrnr, por su acción Cu¡mcíc/111/ quolonto: algunas sustanr:ins, como ni
rnduclorn, c:ornp11nstos diazo on aminas arormíticas. EDT:\, sm:unstrnn iones: sin embargo, nn algunas
que son müs tóxicas. Finalmente, ni aumnnto do la ocasiones, como ocurrn con los ditiocarbumatos,
frer:unncin .\' profundidad do los modminntos respi- la acción q11nlnnte es pmjudicial pues, ni unirse al
ratorios duranto ni njurcicio muscular r:ontrilrnven ,1 colirn, se inac:t i va la enzima ac:ntaldnbidodeshiclro-
11rn1 mavor aspiración do tóxicos nxislontcs on td aíre gonasa, que n:-; nm:esaria para h1 degrndaci(rn dnl
ele mnbirmtos contrnnínados. n lcobol etílico.
Sus<'F!plibílir/(l(f o biotmn::,jomwc:íones: so proclucl'
Constitución con ciertos óstorns rnblandr•icodorns de pl{Jsticos
En sujotns obesos, !a nwyor cantidarl dn tPjído adi- como o! díntilftalato, que al sor utilizmlo en envasPs
poso detormina que se acumulen irnís l'{Jcilnwntn los de alimentos puede pasar a ustos al lrntarso do un
fürmacos liposolublcs. agnntn liposnluhlfl.

Forma de presentación del tóxico


Enfermedades hereditarias
Ln toxícidml us varinblo según la prnsnntación sea cm
En algunos déficit enzim6Licos. como DI dn glucosa-
forma de amosolns, líquida, sólida. ntc., ~' también
f-\-fosfato-di➔ shídrogenasn, sn produce lwmólísis al
está rnlacionmla con su grado d<i c:oncnnlracicín o di-
ingerir ciertos fürnrncos oxidantes (p. ej., A.AS y anti-
1ución. ya qun con menor volumen será m{Js rápida-
palúdicos) o alimentos (habas), que necesitan esa im-
mcmtr1 nbsorbido v se producirú un mnvor nivol en
zima para su motabolización. Por otro lado. nl riesgo
plasma.
do polineuritis por isoniazida es mayor on los sujetos
que tionen c!Micit de acetilación (acotíladores lentos) Tiempo de actuación del tóxico
del farmaco. Suele snr muv variable, algunos necesitan nll'ios m1os
para alcanzar el Pí'r>c:to lesivo.
Enfermedades adquiridas
En la insuficiencia hepática o rmrnL al disminuir la Dosis y efecto producido
eliminación aumentan los efoctos tóxicos de los difo- La relación dosis-(ifocto putide ser lineal. cuando ~
rontes ugentos químicos. existo un aumento proporcional v progresivo dn sus
SECCION I Etiopatogenia general

efectos al aumentar la dosis; semilogarítmica, cuan- Cuando un tóxico es capaz de alterar la regulación
do la respuesta es proporcional al logaritmo de la de la expresión genética, puede producir una divi-
dosis, o puede seguir la ley del todo o nada cuan- sión celular inapropiada, apoptosis o alteración en
do los efectos comienzan a ser evidentes a partir de la síntesis proteica. A través de estos mecanismos, el
cierta dosis. La misma dosis podrá determinar ni- agente químico puede causar teratogénesis (daño en
veles tóxicos de tres formas: al variar la velocidad el desarrollo del embrión o el feto que lleva a pro-
de absorción, al modificarse la de eliminación o al ducir una malformación congénita) y carcinogénesis
alterarse la susceptibilidad del individuo. (desarrollo de tumores malignos).
El tóxico también puede dañar la función celu-
Eliminación lar. Por ejemplo, el alcohol o fármacos neurotóxicos
Entre los factores que modifican la eliminación se en- pueden causar disfunción del SNC, y con ello mani-
cuentran la insuficiencia renal, la dieta, los fármacos festaciones clínicas como debilidad neuromuscular,
o sustancias que alteran el pH de la orina, o la movi- convulsiones o alteración del nivel de consciencia.
lización de sustancias de depósito en las situaciones Numerosos tóxicos interfieren en las funciones de
de adelgazamiento o regeneracíón ósea. mantenimiento celular de tal manera que se producen
daños irreversibles que llevan a su muerte. Una célula
Factores que dependen del medio ambiente necesita para su supervivencia la síntesis de molécu-
las endógenas, el perfecto funcionamiento de los com-
La temperatura, la presión atmosférica y el clima son
plejos macromoleculares de su estructura interna y la
factores que modifican la absorción de algunos agen-
producción de energía. Las sustancias químicas que
tes químicos. La temperatura ambiental modifica el
son capaces de afectar a estas funciones son potencial-
metabolismo de algunas sustancias no solamente al-
mente tóxicas, especialmente si alteran la producción
terando la velocidad de las reacciones químicas, sino
energética mitocondrial y/o a la síntesis proteica.
también porque al producir vasodilatación aumenta la
Como ya hemos señalado, una gran mayoría de las
cantidad de sangre circulante y, en consecuencia, la
acciones tóxicas se deben a la interacción específica
cantidad de la molécula que llega a los receptores. La
entre el agente causal y su receptor. Sin embargo, se
presión atmosférica incide en la absorción de gases
pueden establecer otros tipos de mecanismos de toxi-
y vapores y en su eliminación por vía respiratoria, al
cidad que no están mediados por receptores.
modificar la velocidad de la reacción entre el tóxico
Por lo tanto, podríamos clasificar los principales
y los receptores; la reacción es más intensa cuando
mecanismos de toxicidad como:
aumenta la presión atmosférica.
Mecanismos mediados por receptores. Se mo-
Interacciones entre tóxicos difica la molécula para originar un producto
más tóxico o para liberarlo de su unión con las
Cuando dos sustancias actúan conjuntamente sus proteínas que los transportan. La intensidad del
efectos se pueden potenciar (sinergismo) o reducir efecto depende no solo del número de receptores
(antagonismo). Esta acción puede ocurrir durante la afectados, sino también de la intensidad y de la
fase de exposición: así ocurre con el cianuro, que al rapidez con la que esto ocurre.
unirse con los ácidos da lugar a ácido cianhídrico,
Mecanismos no mediados por receptores. Inclu-
mucho más tóxico.
yen las acciones específicas que se dan en este
mecanismo incluyen los siguientes:
MECANISMOS DE ACCIÓN Quelación, que es la formación de complejos
entre el tóxico con iones de metales pesados.
DE LOS TÓXICOS La sustitución de constituyentes celulares por
Para que la toxicidad se llegue a producir es necesario xenobióticos tales como, por ejemplo, el cloro
que acontezcan una serie de pasos secuenciales: en por el bromo o el calcio por el plomo, etc.
primer lugar, el tóxico debe alcanzar el órgano diana Sustitución de metabolitos por antimetabolitos
desde su sitio de exposición; posteriormente, tiene al interrumpir procesos metabólicos o desviar-
que ser capaz de interaccionar con la molécula diana los hacia productos o funciones consideradas
o, al menos , alterar su entorno biológico de tal mane- «erróneas ».
ra que se produzca un daño o una disfunción a nivel
molecular, celular o tisular. Cuando la alteración que Mecanismos mixtos
ha producido el agente químico supera la capacidad La toxicidad por fármacos o por tóxicos ambientales
de adaptación o de reparación del organismo es cuan- puede tan1bién estar mediada por factores inmunita-
do la intoxicación tiene lugar. rios y genéticos:
En los mecanismos de toxicidad generalmente inter-
Reacciones inmunitarias:
vienen más de un acontecimiento bioquímico o mole-
cular que afectan tanto a la expresión genética celular Por sensibilidad adquirida por el contacto con
como a las actividades funcionales de las proteínas. sustancias químicas , conocido como reaccio-
CAPITULO 8 Agentes químicos como causa de enfermedad

nes de hipersensibilidad, en donde se produce Las manifestaciones clínicas de las intoxicaciones


un estímulo exagerado o inadecuado del siste- son muy variadas y pueden afectar a varios órganos y
ma inmune. sistemas o tener predisposición por alguno de ellos y
Fenómenos de inmunosupresión producidos provocar la sintomatología basado en este tropismo .
por la acción nociva de cualquier tóxico. La clínica puede ser:
Fenómenos de autoinmunidad, donde el indi- Sistémica con un cuadro de fiebre o con un sín-
viduo no es capaz de diferenciar aquello que le drome de afectación general con astenia, debili-
es propio de lo que es extraño a su organismo. dad, anorexia, etc.
Modificaciones genéticas: Manifestaciones respiratorias.
Mecanismos mitogenéticos, que afectan al re- Insuficiencia respiratoria con hípoxemía debi-
parto equitativo del material genético. do a:
Mecanismos genotóxicos, tanto a nivel del - Respirar aire pobre en oxígeno. Se produce
ADN como del ARN. cuando en el aire ambiente el oxígeno es
desplazado por otro gas: butano, dióxido de
carbono, etc.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Y DIAGNÓSTICO - Dificultad para la absorción alveolar de
oxígeno. El alvéolo está ocupado por líqui-
Las intoxicaciones pueden producir un cuadro clíni-
do (edema de pulmón) o por un contenido
co muy variable, no solo en cuanto a su sintomatolo-
gía sino también en cuanto a la gravedad,
y oscila desde una mínima afectación
del estado general hasta la disfunción
multiorgánica y la muerte del paciente.
Además, diversos tóxicos pueden provo-
car síntomas y signos característicos. Por
lo tanto, ante cualquier cuadro clínico
siempre habrá que pensar en intoxica-
ción dentro del diagnóstico diferencial a
realizar.
La anamnesis debe recoger toda la in-
formación posible sobre el enfermo. Se
debe evitar, en la medida de lo posible,
que cualquier testigo se retire, ya que
puede dar más información que el pro-
pio paciente. Se deberá detallar el nom-
bre de la sustancia química responsable,
la cantidad, la vía y el tiempo de exposi-
ción, el intervalo hasta los síntomas, su
patrón de evolución, consumo habitual
de medicamentos por parte del paciente
y enfermedades previas y si existen o no
otras personas de su entorno afectadas
por los mismos síntomas.
fruto de la aspirac10n (contenido gástrico)
Aun así, en muchas ocasiones, la etiología del cua-
que hace que el oxígeno no pueda pasar a la
dro clínico que sufre el paciente no está clara y es
sangre.
necesaria la sospecha clínica de intoxicación para po-
- Hipoventílacíón . Es muy frecuente como re-
der hacer un diagnóstico correcto. Son especialmente
sultado de depresión del sistema nervioso
relevantes estas situaciones:
central, pero también puede deberse a debili-
Enfermo psiquiátrico con síntomas que no se dad de la musculatura respiratoria.
justifican por su enfermedad. - Broncoespasmo. Se produce un estrecha-
Traumatismos con mala evolución cuya clínica miento difuso de las vías respiratorias como
no concuerda con las lesiones que presenta. consecuencia de la inhalación de gases, por
Coma sin causa que lo justifique. hipersensibilidad o por un efecto farmacoló-
Niños y jóvenes con síntomas poco habituales gico.
en la infancia o en la juventud, como arritmias
La hipoxia tisular. Puede ser por:
graves sin patología cardiovascular previa, tras-
tornos metabólicos inesperados, etcétera. - Alteraciones en el transporte del oxígeno -=¡=¡-
Acidosis metabólica de etiología desconocida. por la hemoglobina, o por la aparición de
Etiopatogenia general

carboxihemoglobina o metahemoglobina. Es Sudomción intenso.


importante destacar que tanto la gasomotría Vesículas, umpollos o epíclermólisi8.
como el pulsioxímetro no detectarán esta
falta de oxígeno, pues mielen solo la fracción Cambios ele temperatura:
disuelta de oxígeno en la sangre. Para detec- Hipertermia por pérdida de los mecanismos de
tarla habrá que pedir una cooximetría que homeostasis térmica, apareciendo temperatu-
miela la saturación ele la hemoglobina. ras corporales por encima de los 41 ºC.
Défiót en la utilizocíón tisular ele oxígeno, HipotermÍCI, con aparición de temperaturas por
como ocurre en la intoxicación por cianuro y debajo dn 35 ºC. Suele dnberse a depresores del
por ácido sull'hídrico. sistema nervioso central t1 implica mal pronós-
- Híperventíloción. El aumento del volumen tico.
minuto de airn puede ser consecuencia de
una intoxicación por t➔ slimulantes del siste- Manifestaciones musculares:
ma nervioso central, por acidosis metabólica Bobdomiólisis. La destrucción muscular ptrnde
o por ansiedad. ser debida a un nfocto clirncto del tóxico sobre
Manifestaciones digestivas: el músculo o a un efecto indirecto (convulsio-
nes. hipertermia).
Olor en el aliento. Es bastnnte significativo y 1vlioclonías y jásciculociones.
a v1:icns orientativo de algunas intoxicaciones
como el alcohol (el vodka no huele). alm@clras Manifestaciones urinarias:
amargas (cianuro), acetona (c:etoacidosis), ele. Insuficiencia reno] por acción directa del agen-
Dolor y úlcems omles por ingesta ele ácidos o te causal (nefrotoxiciclacl), por hipot1msión
alcalis. mantenida, por rabdomiólisis, hemólisis, etc.
Sequedod de boco o síalorreo (hipersaliva- Poliizrio.
c:ión). Ifetención urinario.
Náuseas y vómitos. Pueden hacer sospechar
iritación gástrica o estinrnlación do! sistema La sintomatología propia ele muchas intoxicaciones
nervioso central. pero en muchas ocasiones son so agrupa en síndromes específicos que rnsulta muy
inespecíficos. útil ele conocer. para así identificar más fácilmente el
Hemorragia digestiva por anticoagulantes, por origen del cuadro clínico. La Tabla 8-1 munstra los
antiinflamatorios, ole. principales síndromes tóxicos v sus causas más fre-
ictericia debido a afectación hepática o por he- cuentes.
mólisis. En cuanto a la exploración física, debe sor lo rnéís
Hipoperistaltismo intestinal (íleo paralítico), completa posible, centrando nuestra atención cm las
por opiáceos o por sustancias anticolinérgicas. constantes vitales, el estado 1rnurológico, la reacción
Hepatitis y/o insuficiencia hepatocelular (p. pupilar, la respuesta carcliovascular. los hallazgos ab-
ej .. enCEifalopatía hepática). dominales, la inspección de la pin! y en la obtención
do olores. En los pacientes con alteración del nivel de
Manifestaciones neurológicas: consciencia dnbe recogerse la puntuación do la escala
del coma de Glasgow (Capítulo 92).
Bajo nivel de consciencio. Muchos tóxicos pro-
Las pruebas diagnósticas que se deben solicitar en
ducen confusión, estupor o, incluso, coma.
caso do sospecha o corteza de intoxicación pueden
Cuodros psiquiátricos con agitación. delirio,
sor muy variadas. Sin embargo. 011 la mayoría dn las
alucinaciones. etc.
intoxicaciones solicitaremos un bemograma. estudio
Convulsione.e;.
de coagulación, una determinación en sangre de elec-
Jnestobilidnd, mareo y acúfenos.
trolitos, urea, creatinina, glucosa, creatinifosfokinasa
Heoc:ciones 1-1xtrnpimmidales con rigidez, dis- y gasometría arterial. La radiografía de tórax puede
tonía, etc.
tener gran utilidad clínica sobni lodo sí el paciente
Manifestaciones carcliovascnlares: presenta sintomatología respiratoria o sistémica. Un
electrocardiograma y la monitorización continua del
Hipertensión o hipotensión arterial. ritmo cardiaco pueden ser necesarios hasta conocer la
Arrilmic1s corcliocos: gravedad de la intoxicación.
- Bradicardia y bloqueos cardiacos. El análisis toxicológico puede sor útil para relacio-
- Taquicardia sinusal, prolongación dnl QT. fi- nar la sintomatología que presenta el paciente con
brilación o taquicardia ventricular. etc. el hallazgo del tóxico en algún fluido biológico. Sin
embargo. en muchas ocasiones, las decisiones diag-
Manifestaciones cutáneas:
nósticas y terapéuticas no van a variar por conocer .
Piel seca y caliente: sustancias anticolinérgicas por ejemplo, la concentración del frírmaco en sangre.
y antihistamínicos. Las pruebas toxicológicas se pueden solicitar con tres
CAPÍTULO 8 Agentes químicos corno causa de enfermedad

Tabla Principales síndromes relacionados con las intoxicaciones más frecuentes


SÍNDROME MANIFESTACIONES CLÍNICAS AGENTES ETIOLÓGICOS
Acidosis metabólica Hiperventilación, náuseas, vómitos, • Alcoholes
disminución del nivel de conciencia, • Salicilatos
vasodilatación periférica.
• Cianuro
• lsoniazida
• Hierro
Anticolínérgíco Piel seca. visión borrosa, midriasis, • Atropina
taquicardia, hipertermia, distensión • Antihístamínicos
abdominal, urgencia o retención urinaria.
• Tricíclícos
confusión, alucinaciones. excitación o coma.
• Fenotiazinas
Colinérgíco Hipersalivación, broncorrea, broncoespasmo. • Acetilcolina
diarrea, lagrimeo, debilidad neuromuscular. • Insecticidas organofosforados
• Betanecol
• Metacolina
• Setas silvestres
Simpaticomimético Excitación. hipertensión arterial, arritmias • Anfetaminas
cardiacas. convulsiones. • Cocaína
• Cafeína
• Aminofílina
• Betaagonistas

Por cianuro Náuseas, vómitos, bradicardia, coma. • Cianuro


acidosis metabólica sin cianosis. • Amigdalina
Extrapiramidal Rigidez, tortícolis, disfagia. trismos. crisis • Haloperidol
oculogiras. laringoespasmo. • Clorpromazina
• Fenotiazinas
Narcótico Depresión del sistema nervioso central. • Morfina y heroína
depresión respiratoria, miosis, hipotensión. • Codeína
• Propoxifeno
• Opiáceos sintéticos o semisintéticos
Salicilismo Fiebre. híperventilacíón, tinnitus, hípokaliemia. • Aspirina
• Otros salicilatos

Hemoglobinopatía Disnea, cianosis, ceíaíea, confusión o • Monóxido de carbono


letargia. • Metahemoglobinemia
- Nitratos
- Dapsona
• Sullohemoglobinemia
- Sulfasalazina

propósitos diferentes: como descarte (pruebas de cri- con una determinada situación clínica. Deben sr:r
bado). como test diagnóstico n corno monitorización pnrnbas de alta sensibilidad. Sin embargo. cm los
terapéutica. muílisis toxicológicos con fines diagnósticos se busca
Los amílisis más utilizados son las pruebas de cri- más la Pspecificiclad para confirmar o descartar quo
bado. qne tratan de dotoctrrr en sangrn. orina o jngo ese paciente solecr:ionado presenta. o no. una intoxi-
góstrico los agentes que más fwcuenternente proclu- cación por un agente, químico concre1o.
·109
Enfermedades
por agentes vivos.
Síndrome infeccioso
Melchor Álvarez de Mon Soto, Raúl de pablo Sánchez

EL PROCESO INFECCIOSO
TIPOS DE GÉRMENES Y BIOLOGÍA
DE SU INTERACCIÓN CON EL HUÉSPED
Las personas , y en general los seres pluricelulares,
viven en interacción con microorganimos y con fre-
cuencia en diferentes áreas geográficas con parásitos
y hongos. Muchos de estos organismos viven en la
naturaleza de forma independiente, pero otros
han adquirido una dependencia de la aso-
ciación con otros seres vivos de mayor
tamaño y complejidad, denominado
hospedador, del que obtienen ventajas
de supervivencia, como nutrientes o
entornos de condiciones físicas ade-
cuadas. Estas asociaciones pueden
ser facultativas u obligadas para el
agente beneficiado.
El proceso de asociación se denomi-
na simbiosis y puede aportar ven-
tajas a ambos (mutualismo) o a uno
sin perjudicar al otro (comensalismo) ,
o por el contrario uno puede ser per-
judicado produciéndose la enfermedad
infecciosa, es decir, daño en el hospeda-
dor (parasitismo, aunque el término parási-
to suele restringirse a los protozoos, helmintos y
artrópodos).
En el hombre existen diversos microorganismos
que son simbiontes, mayoritariamente bacterias, y
que conviven en la piel y mucosa del tracto digestivo,
uretra o vagina como comensales o mutualistas. Estos
microorganismos constituyen la microbiota o flora
normal, pero que pueden causar patología o infeccio-
nes oportunistas cuando existe una disminución de
la capacidad defensiva del individuo.
Además de los elementos de la flora normal, en
la naturaleza existen múltiples especies de priones,
CAPITULO 9 Enfermedades por agentes vivos. Síndrome infeccioso

virus, bacterias, hongos, protozoos, helmintos y artró- en el tracto respiratorio superior. Este tropismo se
podos capaces de provocar enfermedades infecciosas debe a la existencia de estructuras de reconocimiento
en el hombre. Estos agentes proceden de fuentes ex- específicas en los gérmenes y los tejidos del organis-
ternas de contagio o infecciones exógenas, en contra- mo , y permite predecir en gran parte el tipo de ger-
posición a las endógenas u oportunistas: Cuando el men presente en un proceso infeccioso según cuál sea
agente produce patología en animales se la identifica el órgano o tejido enfermo. Debe tenerse en cuenta, no
como zoonosis. obstante, que el grado de especificidad es variable, ya
Debe indicarse que la clasificación de gérmenes pa- que algunos microorganismos pueden infectar múlti-
tógenos y no patógenos no es rigurosa, porque, como ples tejidos.
acabamos de señalar a propósito de la flora normal , Por otra parte, diversos factores, como el padeci-
existen gérmenes que no producen habitualmente miento de enfermedades que disminuyen la inmuni-
enfermedad, pero pueden hacerlo ocasionalmente si dad, el tratamiento previo con antibióticos y la hospi-
disminuyen las defensas del organismo, y otros sólo talización prolongada (especialmente en unidades de
se comportan como patógenos si acceden al organis- cuidados intensivos) hacen que dicha especifidad se
mo de una determinada manera (caso del tétanos , que pierda en gran parte, pudiendo, por ejemplo, aparecer
requiere la existencia de una herida). gérmenes como E. coli en las vías respiratorias.

VÍAS DE TRANSMISIÓN DE LOS AGENTES PATOGENIA DE LAS INFECCIONES


INFECCIOSOS Los agentes infecciosos producen su acción patogé-
Los mecanismos de transmisión de estos agentes exó- nica a través de diferentes mecanismos que incluyen
genos son las vías y medios que utilizan para pasar, los efectos lesivos directos por su invasión y multi-
de forma directa o indirecta, desde el reservorio o plicación en los tejidos y los producidos por la res-
fuente hasta el huésped susceptible. La transmisión puesta defensiva del hu ésped a través del sistema
directa incluye el contacto con la piel o mucosas de inmunitario-inflamatorio a nivel local del foco infec-
un enfermo o sus secreciones, o sangre u órganos que cioso y/o a distancia (Figura 9-1). Además, algunos
transfieran el material infectivo al individuo sano. In- microorganismos producen elementos solubles o toxi-
cluyen diversas infecciones de transmisión oral-oral, nas capaces de inducir efectos deletéreos a distancia.
fecal-oral, sexual, cutánea, etc. Un caso especial son El análisis de estos procesos se puede realizar desde
las denominadas de transmisión vertical transplacen- una perspectiva de evolución temporal o patocrónica
taria o en el canal del parto de la madre al hijo. y por identificación de los mecanismos patogénicos
desarrollados.
La transmisión indirecta incluye la vía aérea. Des-
de el huésped emisor se producen aerosoles al hablar,
toser o estornudar, con gotitas grandes o de mediano FASES DEL PROCESO INFECCIOSO
tamaño que contienen organismos viables que llegan
a las vías aéreas superiores o a la conjuntiva del re- La interacción entre el agente infectante y el hués-
ceptor y que generalmente lo logran hasta a un metro ped es un proceso dinámico y complejo con peculia-
de distancia. Cuando se producen aerosoles de gotitas ridades individuales determinadas por ambos seres
pequeñas (menos de 10 µm de diámetro) pueden al- vivos. Se puede generalizar y simplicar en una serie
canzar los alvéolos pulmonares. Otras transmisiones de fases que comienzan con la exposición y contacto
indirectas utilizan un vehículo común, en general
inanimado, que lo hace llegar al receptor y que in-
cluye a los alimentos, el agua, objetos, instrumental
sanitario, o incluso la tierra. En otras ocasiones el me- Germen <············· .................> Huésped
dio de transporte es un agente vivo o vector como los
artrópodos. Debe señalarse que un mismo agente in- Adhesión Mecanismos
feccioso puede utilizar diversas vías de transmisión. Colonización de respuesta
Multiplicación inmunoinflamatorios
El medio ambiente también es relevante en la Diseminación patogénicos del germen
transmisión de las infecciones e incluye factores fí-
sicos (temperatura y humedad), biológicos (densidad MANIFESTACIONES CLÍNICAS
de animales , disponibilidad de vectores y alimentos),
sociales y económicos (higiene, viajes, etc.). Eliminación Muerte Cronificación
Tanto los gérmenes de la flora normal como los gér- del germen del paciente manifiesta o
menes patógenos exógenos tienen un alto grado de y curación con subclín ica
selectividad o tropismo por tejidos específicos (Bac- o sin secuelas
teroides fragilis y E. coli se encuentran fundamental-
mente en el intestino, mientras que los estreptococos
81
alfahemolíticos y el neumococo se pueden localizar Figura Proceso infeccioso.
Etiopatogenia genera l

del huésped con el agente infeccioso. Si el germen de mayor o menor dimensión, por picaduras de vec-
logra adherirse a la superficie cutánea y/o mucosa tores o accesos vasculares por razones médicas. Las
del individuo y se reproduce en ella, se produce la mucosas son más susceptibles a la infección, no solo
denominada colonización del organismo por el ger- porque constituyen un buen medio de crecimiento,
men. Si además atraviesa estas barreras estructurales sino por su delgadez y gran superficie. En las muco-
y penetra en el tejido se alcanza la fase de invasión . sas, los microorganismos patógenos logran sobrevivir
Cuando el germen progresa por el huésped y alcanza a pesar de los elementos defensivos y adherirse por
tejidos vecinos o circula por el árbol sanguíneo y/o estructuras de superficie que les unen a los diferentes
linfático hasta localizaciones a distancia se alcanza epitelios a través de distintos receptores. Estas adhe-
la fase de diseminación . Se debe distinguir la infec- sinas incluyen las fimbrias proteicas y los ácidos li-
ción o invasión y reproducción del agente infectante poteicoicos bacterianos o las glucoproteínas de algu-
en el huésped, de la enfermedad infecciosa que se nos virus. La capacidad de un microorganismo para
produce cuando hay lesiones tisulares estructurales penetrar a través de la piel o las mucosas se conoce
o funcionales con manifestaciones clínicas. La mera como infectividad.
presencia ocasional y momentánea de gérmenes en el
interior del organismo (por ejemplo, la bacteriemia Invasión , multiplicación y difusión del germen
transitoria que puede seguir a la manipulación den-
tal) no puede considerarse infección. Tras la fase de interacción del germen con las barreras
anatómicas y alcanzada la dosis infectante mínima,
variable entre microorganismos, se puede producir
Barrera cutánea-mucosa. Adhesión del germen
el daño tisular con las consiguientes manifestaciones
La interacción entre el agente infeccioso y el huésped clínicas. El intervalo de tiempo silente requerido para
suele producirse a través de la piel o de el inicio de la sintomatología se deno-
las mucosas, que constituyen una mina periodo de incubación.
barrera física y química para El proceso infeccioso
evitar su penetración. puede limitarse a la
La sequedad y acidez puerta de entrada del
(mantenida por los germen o asociarse
ácidos grasos) de la a su multiplica-
piel asociados al ción con difusión
sudor y la secre- linfática y hema-
ción sebácea inhi- tológica y desa-
ben el crecimien- ))""
.~ 'i rrollo de focos
to de muchos ' L. secundarios . La
microorganismos presencia de gér-
y evitan la colo- menes en la san-
nización. Las mu- ',:,.¿ ·---¡' '1!!1111!--.,,,
gre se denomina
cosas constituyen bacteriemia y
otra barrera física cuando se asocia
y las secreciones a manifestaciones
mucosas con subs- clínicas graves se
tancias microbicidas denomina sepsis.
también constituyen La aparición de estas
una relevante barrera nuevas localizaciones
defensiva. En las estructu- del germen está determi-
ras tubulares, como las vías nada por diferentes factores
respiratorias, urinaria, colédoco, que incluye la capacidad de ad-
etc., el flujo ininterrumpido por conductos herencia de los gérmenes a los diversos tejidos, el
permeables es un elemento esencial en la protección estado de los distintos órganos y su flujo sanguíneo,
frente a las infecciones. Otros elementos defensivos la presencia de cuerpos extraños o prótesis y la ca-
especiales son: el pH ácido gástrico, las enzimas pro- pacidad defensiva del huésped. Así, se conoce bien
teolíticas pancreáticas, secreciones biliares y la flora la afinidad del meningococo por las meninges y del
normal en el tubo digestivo; el flujo de orina, la urea, gonococo por las articulaciones. Los estreptococos
la proteína de Tamm-Horsfall y otras sustancias en la orales, que pueden penetrar en el torrente sanguíneo
vía urinaria; el reflejo de la tos y el movimiento ciliar durante una extracción dentaria tienden a fijarse en
en la vía respiratoria y la presencia de lactobacilos en las válvulas cardíacas dañadas. Algunos estafilococos
la vagina. coagulasa negativos producen una sustancia (slime)
La piel suele ser impermeable a los microorganis- con la que se fijan a superficies extrañas, como los
82 mos, que la atraviesan por soluciones de continuidad catéteres intravasculares.
CAPITULO 9 Enfermedades por agentes vivos. Síndrome infeccioso

Los gérmenes que han accedido al interior del orga-


nismo pueden multiplicarse fuera o dentro de las cé-
lulas dependiendo de sus características biológicas.
Los gérmenes de crecimiento extracelular pueden
crecer en el espacio intersticial, producir enzimas
con actividad citolítica tales como hialuronidasa,
colagenasa, fosfolipasa, etc., activar el complemento,
inducir la producción de citoquinas y provocar una
respuesta inflamatoria, y en su erradicación la acti-
vidad fagocítica es clave. Los intracelulares facultati-
vos son capaces de permanecer vivos en el interior de
los fagocitos (o macrófagos), resistiendo a su acción
destructora. En su erradicación son claves los macró-
fagos activados por células T cooperadoras y pueden
desencadenar la formación de granulomas en cuyo
interior pueden mantener viabilidad por largos perio-
dos de tiempo. El ejemplo típico es Mycobacterium
tuberculosis. Los gérmenes intracelulares obligados
no pueden reproducirse más que en el interior de las
células. Incluyen rickettsias y clamidias, todos los
virus, y parásitos como los esporozoos. El mecanis-
mo de defensa primordial lo constituye la respuesta
inmunitaria celular y pueden persistir en el huésped
por largo tiempo. Una consecuencia de esta persisten-
cia es la capacidad oncogénica de algunos virus. La
persistencia del agente conlleva en muchos casos la
finalización de la enfermedad infecciosa, pero no de
la infección (infección latente). Cuando son transmi-
sibles, al sujeto se le califica de portador. nasas, proteasas, DNAsas, etc., o inductoras de lisis y
necrosis celular.

Producción de toxinas Endotoxinas


La acción lesiva del germen se asocia a diversos El término endotoxina se utilizó originalmente para
efectos biológicos de su crecimiento, que incluyen designar los productos tóxicos que forman parte de la
la producción y liberación de diferentes substancias pared bacteriana, y, en concreto, el lipopolisacárido
denominadas toxinas . Estos elementos con actividad (LPS) de las bacterias gramnegativas. Está formado
patogénica incluyen a las exotoxinas, que son subs- por un componente polisacárido y por el lípido A
tancias secretadas al medio por el microorganismo responsable de su toxicidad. Los gérmenes gramposi-
y las endotoxinas, que son elementos estructurales tivos también poseen en su membrana una molécula
liberados al medio con su lisis. (el ácido lipoteicoico, ALT) que desarrolla una activi-
dad proinflamatoria similar al LPS.
Exotoxinas
Las endotoxinas son capaces de provocar activa-
Suelen ser productos bacterianos codificados por ge- ción de diferentes células, incluyendo las de estirpe
nes de origen externo a la bacteria que se localiza en monocitaria, induciendo la síntesis de citoquinas
un fago lisogénico o en un plásmido y suelen ser poli- como las interleuquinas (IL) 1 y del 6 , factor de ne-
péptidos. Su producción está generalmente asociada crosis tumoral alfa (TNF) , y activación del comple-
a bacterias grampositivas y se encuadran entre los mento (C3b, C3a y C5a) y del factor Hageman y de la
venenos conocidos más potentes (toxina botulínica vía de las calicreínas y del sistema de la coagulación.
o diftérica). Algunas producen daño localmente, en Estas acciones inducen inflamación local y sistémica
el sitio en el que se liberan, y otras lo hacen a dis- que puede evolucionar en un shock séptico.
tancia y su acción lesiva la producen por diferentes
mecanismos que incluyen la penetración en las célu-
las diana, el daño de la membrana citoplasmática o Efectos citopáticos de los virus
la activación del sistema inmunitario al actuar como Los virus son capaces de inducir daño celular por
superantígenos de linfocitos T. diferentes mecanismos que incluyen las alteraciones
Destacan las enterotoxinas causantes de vómitos y cromosómicas, del ADN y de la síntesis proteica. Ade-
diarrea, las neurotoxinas con efectos en las sinapsis , más, pueden alterar distintas estructuras celulares
exotinas inductoras de daño en diferentes tejidos y como el núcleo y los lisosomas e incluso inducir la
83
de acción menos específica como hemolisinas, leciti- formación de células multinucleadas y oncogénesis.
N II Etiopatogen ia general

MECANISMOS DE RESPUESTA DEL HUÉSPED desencadenado, a favorecer la proliferación y madu-


ración de los linfocitos T citotóxicos o B activados
La respuesta del huésped a la agresión de los agentes por los antígenos del microorganismo. Esta respuesta
infecciosos está mediada fundamentalmente por el provoca la generación de linfocitos T citotóxicos ca-
sistema inmunitario, que constituye un mecanismo paces de inducir la lisis de las células infectadas o
de defensa esencial. Una respuesta eficiente puede la secreción de inmunoglobulinas por las células B
erradicar el agente etiológico con mayor o menor que bloquean al microorganismo o a sus productos
daño colateral inflamatorio local y/o sistémico. Sin patogénicos, activan al complemento y favorecen su
embargo, su alteración conlleva la posibilidad de in- opsonización y fagocitosis o su lisis. Además, las cito-
ducir daño al propio huésped o permitir la progresión quinas producidas regulan la respuesta inflamatoria.
y/o cronificación de la infección. Los microorganismos utilizan diferentes mecanis-
En esta respuesta inmunitaria se distingue la de- mos para evadir la acción del sistema inmunitario/
nominada innata y la adaptativa. Tras la penetración inflamatorio . Estos incluyen la degradación del com-
del microorganismo se produce la acción de pépti- plemento, la resistencia a la opsonización y fagocito-
dos antimicrobianos (defensinas, catelicidinas, etc.), sis, la disminución de la expresión de moléculas del
complemento y otros sistemas inflamatorios como el sistema principal de histocompatibilidad, etc.
de las cininas y la interacción con diferentes células
fagocíticas (neutrófilos, monocitos, macrófagos y cé-
lulas dendríticas) y citotóxicas espontáneas. FACTORES DEL HUÉSPED QUE
Todo ello constituye la respuesta inmunitaria inna- AUMENTAN EL RIESGO O LA GRAVEDAD
ta. Estas interacciones se fundamentan en la expresión DE LA INFECCIÓN
en los microorganismos de distintos tipos de estruc-
turas moleculares que pueden compartir similitudes Diversos factores influyen en la capacidad defensiva
por grupos de diferentes patógenos (PAMP o patro- del huésped frente a los agentes infecciosos. Estos in-
nes moleculares asociados a patógenos). Estos PAMP cluyen elementos estructurales y funcionales relacio-
incluyen ADN, ARN, glicoproteínas, lipoproteínas o nados con la dotación génica y edad del huésped, su
diversos componentes de la membrana de bacterias, estado nutricional, la función de sus distintos órga-
virus, hongos y parásitos. Los PAMP se reconocen por nos y sistemas, y componentes neuroendocrinos que
receptores de patrones (PRR) solubles y están situa- modulan el sistema inmunitario. Cualquier alteración
dos en las células de la respuesta inmunitaria innata/ en los mecanismos de defensa facilita las infecciones .
inflamatoria. Estos PRR son receptores de membrana Por lo que se refiere a la piel y las mucosas se inclu-
o intracelulares denominados TLR con diferentes ca- yen procesos como: a) soluciones de continuidad; b)
pacidades de reconocimientos de los distintos PAMP. inteiferencias con los mecanismos de barrido de las
Tras la interacción entre el PAMP y el TLR se pro- superficies mucosas y obstrucción en las estructuras
duce una señal que induce la activación celular. Esta tubulares, y c) modificaciones de la flora normal.
acción activadora provoca la secreción de citocinas Debe señalarse por su relevancia práctica que las vías
proinflanrntorias, inmunorreguladoras, interferones y y procedimientos médicos intravenosos, la introduc-
quimioquinas que regulan el tipo, intensidad y du- ción de catéteres o dispositivos en cavidades y las
ración de la respuesta inflamatoria y contribuyen al heridas quirúrgicas facilitan la entrada de gérmenes
desarrollo de la inmundidad adaptativa. Otros recep- en el organismo. En cuanto a las alteraciones en los
tores PRR son las proteínas extracelulares como la mecanismos de defensa generales, son de naturaleza
proteína fijadora de LPS, la proteína C reactiva, o el muy diversa. La disminución en el número de leuco-
componente amiloide P del suero . citos neutrófilos (neutropenia) o de su función facili-
Además, los microorganismos pueden activar al ta la infección por los gérmenes frente a los cuales la
sistema del complemento y de la coagulación. Este fagocitosis es el principal mecanismo de defensa. Se
conjunto de eventos modulan la generación de la res- incluyen también las deficiencias de algunos compo-
puesta defensiva inflamatoria, que puede controlar la nentes del complemento que intervienen facilitando
infección, pero que también contribuye al desarrollo la fagocitosis (C3), así como con las situaciones de
de enfermedad local y sistémica. Estos efectos inclu- deficiencia de producción de anticuerpos. Las alte-
yen la flogosis (inflamación) local, la fiebre, la astenia raciones cuantitativas y funcionales de los linfocitos
y, en su caso, el compromiso hemodinámico. T citotóxicos facilitan las infecciones por gérmenes
La respuesta adaptativa se desencadena por el intracelulares. Estas anomalías estructurales y/o
reconocimiento de los antígenos por los receptores funcionales en los mecanismos de defensa genera-
de los linfocitos T y las inmunoglobulinas de los B. les pueden tener un carácter congénito (síndrome de
La adecuada presentación antigénica por las células Chédiak-Higashi, inmunodeficiencias primarias) o
dendríticas y monocitarias a los linfocitos T coope- adquirido. Entre estas últimas destacan enfermedades
radores desencadena su activación y la secreción de de órganos y sistemas como la insuficiencia hepática
citoquinas. La expansión clonal linfocitaria T coo- o renal, neoplasias, alteraciones metabólicas como la
84
peradora contribuye, según sea el patrón funcional diabetes mellitus o la desnutrición, que interfieren
CAPÍTULO 9 Enfermedades por agentes vivos. Síndrome infeccioso

con el sistema inmunitario e inflamatorio. Diversos


fármacos tienen actividad inmunosupresora, como
los esteroides o los empleados en el control del re- Tabla Síndrome infeccioso agudo
chazo de órganos trasplantados o en el tratamiento de
las enfermedades oncológicas y autoinmunes. El esta- COMÚN
do de inmunodeficiencia secundaria también puede SEPSIS, manifestaciones clínicas de respuesta
ser debido a radioterapia, anestesia y cirugía, trans- inflamatoria sistémica debidas a la infección
fusiones sanguíneas, etc. Por último, la presencia en
entornos contaminados, el ingreso hospitalario y los SEPSIS GRAVE cuando además se desarrolla
desplazamientos a áreas geográficas con diferentes oliguria, acidosis metabólica, alteración de la
consciencia, trombopenia, distrés respiratorio
características epidemiológicas a las habituales, favo- agudo, coagulación intravascular diseminada,
recen las exposiciones a agentes infecciosos. alteraciones electrocardiográficas
SHOCK SÉPTICO cuando además existe
SÍNDROME INFECCIOSO hipotensión arterial resistente al tratamiento
farmacológico
Las manifestaciones de las enfermedades infecciosas FRACASO MULTIORGÁNICO
pueden clasificarse en locales y generales. Las locales
se refieren a las derivadas de la afectación de un órga-
no determinado, en general como consecuencia de la
acción directa del microorganismo y en ocasiones por
mecanismos indirectos como los relacionados con la sequedad oral. En ocasiones se observa. Con frecuen-
inadecuada activación del sistema inmunitario. La cia hay somnolencia. En los niños, además, la fiebre
patogenia de los síntomas y signos locales suele ser puede determinar convulsiones y cuadros delirantes.
inflamatoria. En el anciano puede haber depresión de conciencia
Las manifestaciones generales son comunes a la y a veces delirio. Puesto que en las personas de edad
mayor parte de las infecciones y se deben a la produc- la elevación de la temperatura es menos constante e
ción de citocinas y otros mediadores inflamatorios y intensa, hay que tener en cuenta que en ellas estas
constituyen el núcleo central del síndrome infeccio- manifestaciones deben hacer pensar en un proceso
so. Es importante saber que en ocasiones se observa infeccioso, aunque no haya fiebre.
únicamente este síndrome general, sin que sean de- En algunas infecciones no hay taquicardia o esta es
tectables manifestaciones locales. menor de la que cabría esperar para el grado de fiebre
En la Patocronia del síndrome infeccioso se distin- alcanzada (bradicardia relativa).
gue el periodo de incubación (tiempo de acción del El síndrome infeccioso agudo incluye también el
microorganismo sin expresividad clínica), el pródro- mal estado general, astenia y anorexia, y si el proceso
mos o fase de manifestaciones clínicas inespecíficas dura lo suficiente, adelgazamiento. No son infrecuen-
y compartidas por diferentes infecciones, y la fase de tes las artralgias y mialgias difusas, náuseas y vómitos
estado en la que aparecen síntomas y signos carac- y la cefalea.
terísticos producidos por los mecanismo patogénicos La repercusión biológica suele incluir en el hemo-
propios del agente infeccioso. Estas fases se puede se- grama una tendencia a la leucocitosis con neutrofilia
guir de la muerte del paciente, de la persistencia de la o desviación izquierda. En ocasiones (infecciones por
expresión clínica o de su resolución y convalecencia. bacterias intracelulares y virus) las cifras de leuco-
Por la rapidez de su instauración y evolución se citos pueden ser normales, e incluso estar disminui-
diferencia el síndrome infeccioso agudo y el crónico. das, con neutropenia. En estos casos, puede haber
Aquel, en función de su gravedad, se clasifica en for- linfocitosis. La neutropenia no excluye la posibilidad
mas comunes y en otras graves como la sepsis, cuyo de desviación izquierda. También se acompaña de
grado extremo está constituido por el shock séptico y alteraciones en los reactantes de fase aguda: veloci-
el fracaso multiorgánico (Tabla. 9-1). dad de sedimentación globular, proteína C reactiva,
ceruloplasmina, fibrinógeno , haptoglobina, amiloide
A sérico, ferritina, etc.
SÍNDROME INFECCIOSO AGUDO COMÚN
Se caracteriza por la fiebre y el mal estado general SÍNDROME INFECCIOSO AGUDO GRAVE
que se acompaña de manifestaciones analíticas ca-
racterísticas. La expresión clínica deriva además de Cuando un proceso infeccioso cursa con una respues-
la localización de la infección y de las características ta inflamatoria sistémica (fiebre o hipotermia, leuco-
del agente infeccioso. citosis o leucopenia, taquicardia y taquipnea) se de-
La fiebre constituye el signo más constante. Entre nomina sepsis. Entre el síndrome infeccioso común
los síntomas y signos asociados se incluye la taqui- y la sepsis existen diferencias cuantitativas (mayor ~
cardia, la taquipnea, el aumento de sudoración, la temperatura -aunque paradójicamente la sepsis tam-
SFCCIÚ"" 1 Etiopatogenia general

bién puede cursar con hipotermia-, mayor taquipnea (o dificultad) respiratorio del adulto. El shock séptico
y taquicardia), pero además suelen existir diferencias y el fracaso multiorgánico, a menudo aparecen aso-
cualitativas, consistentes en disfunción ciados, en parte porque son expresión de un
de distintos órganos, y entonces se mismo fenómeno y en parte porque el
diagnostica como sepsis gra- déficit de perfusión tisular propio
ve. Los órganos principal- del primero facilita la instaura-
mente afectados son el ción del segundo.
sistema n ervioso cen- Las manifestaciones de
tral (alteración del esta última fase del pro-
estado de cons- ceso infeccioso son
ciencia), el riñón las de cada uno de
(oliguria), el hí- sus componentes:
gado (ictericia) cianosis por la in-
y el pulmón suficiencia respi-
(hipoxemia ratoria , oliguria
con hip er- por la insuficien-
ventilación). cia renal, icteri-
Pueden alte- cia por la insufi-
rarse las pla- ciencia hepática
quetas , unas y hemorragias
veces con por la coagula-
trombocitosis ción intravascular
(en relación diseminada.
con la reacción La patocronia
de fase aguda) y de la evolución de la
otras con trombo- sepsis al fracaso mul-
penia (por consu- tiorgánico es variable. En
mo) y establecerse una pacientes con una infección
acidosis metabólica. Las localizada que desarrollan
resistencias vasculares peri- bruscamente manifestaciones de
féricas disminuyen, aunque en sepsis es fácil establecer el diagnós-
esta fase la presión arterial no llega a tico. Sin embargo, la sepsis puede estable-
caer. Aproximadamente la mitad de los episodios cerse de forma larvada y sin aparente foco infeccioso.
de sepsis cursan sin presencia de gérmenes en sangre, En otras ocasiones, la presentación es fulminante con
por tanto , no implica la detección de bacteriemia. evolución rápida a shock y fracaso multiorgánico.

SHOCK SÉPTICO Y FRACASO SÍNDROME INFECCIOSO CRÓNICO


MULTIORGÁNICO Este síndrome participa de muchas de las manifesta-
En ocasiones, la infección sumada a la intensidad de ciones del agudo , pero con diferente intensidad. La
la respuesta del sistema inmunitario/inflamatorio del fiebre y su sintomatología asociada suelen ser me-
huésped provocan que los mediadores solubles y las nores. Cursa con afectación del estado general, con
células induzcan el fracaso del aparato circulatorio astenia y anorexia, y es muy común la asociación
en su función de asegurar la perfusión tisular. Esto se con pérdida de peso. Esta tríada (astenia, anorexia,
traduce en el denominado shock séptico, con caída adelgazamiento) tiene también lugar en otros proce-
de la presión arterial, fundamentalmente debido a sos crónicos no infecciosos (en general, tumorales o
vasodilatación, aunque a su desarrollo también pue- inflamatorios).
de contribuir la depresión de la actividad miocárdica El dato analítico más característico de los proce-
(Tabla 9-1). En esta fas e del síndrome infeccioso la sos infecciosos crónicos es la anemia. Suele tratarse
alteración hemodinámica se hace resistente a los tra- de una anemia leve, normocrómica y normocítica. Es
tamientos vasoactivos, y puede progresar a un fracaso frecuente la disminución de la sideremia con aumen-
multiorgánico, esencialmente integrado por insufi- to de los niveles de la ferritina. La fórmula leucoci-
ciencia respiratoria, renal y hepática, así como por taria es variable con predominio de la linfocitosis y
coagulación intravascular diseminada. La afectación monocitosis. La velocidad de sedimentación globular
pulmonar que conduce a la insuficiencia respiratoria también suele ser alta, bien porque se mantengan ele-
consiste básicamente en la acumulación de exudado vados los reactantes de fase aguda, bien porque la es-
en el intersticio y los alvéolos (edema), y da lugar a timulación mantenida del sistema inmunitario haya
un cuadro clínico característico denominado distrés dado lugar a un aumento de las gammaglobulinas.
·11 O
Bases genéticas
de las enfermedades.
La herencia como
causa de enfermedad
José Antonio Riancho Moral

BASES BIOLÓGICAS DE LA HERENCIA


ESTRUCTURA DEL ADN. ADN NUCLEAR
Y MITOCONDRIAL
El ácido desoxirribonucleico (ADN) contiene la infor-
mación genética de las células. Está constituido por
una serie de nucleótidos unidos entre sí, uno a
continuación de otro, formando una «hebra»
o «cadena». Cada nucleótido está forma-
do por una molécula de desoxi-ribosa
(monosacárido de 5 carbonos), ácido
fosfórico y una base nitrogenada. Hay
4 bases nitrogenadas diferentes: dos
purinas (adenina -A- y guanina
-G-) y dos pirimidinas (citosina-
C-, o timina-T-). Los nucleótidos se
unen entre sí gracias al ácido fosfóri-
co, que forma enlaces entre el carbo-
no 3' de una desoxi-ribosa, con el car-
bono 5'de la siguiente. De esa manera,
al principio de una molécula de ADN
hay un carbono 5' «libre », mientras en
el extremo final hay uno 3' libre. Por eso
se dice que la cadena de ADN va en sentido
5' ➔ 3' .
En su forma natural, el ADN tiene una estructura
de doble hélice, constituida por dos cadenas de nu-
cleótidos complementarias que discurren en sentido
contrario y se unen por puentes de hidrógeno a nivel
de las bases nitrogenadas, cada una de las cuales se
acopla con su complementaria (A con T y C con G).
Cada célula (a excepción de las germinales) tiene
46 moléculas de ADN (cada una de las cuales está a
su vez formada por dos hebras o cadenas de nucleóti-
dos) . Cada una de estas moléculas de ADN correspon-
de a un cromosoma. En realidad, el ADN está dupli-
Etiopatogenia general

cado; es decir, cada célula contiene dos copias muy a la existente previamente. En realidad, hay algunas
parecidas de cada molécula de ADN. Una es igual a la diferencias entre ambas. En ocasiones la ADN-poli-
existente en el espermatozoide paterno y otra es igual merasa introduce un nucleótido erróneo. No obstan-
a la existente en el óvulo materno en el momento de la te, la propia enzima tiene capacidad para corregir
fecundación. Por tanto , los 46 cromosomas se pueden posteriormente algunos de esos errores. Por otro lado,
considerar en realidad como 23 parejas de cromoso- la ADN-polimerasa no puede iniciar la copia desde el
mas . Por eso decimos que las células somáticas son extremo mismo de la molécula de ADN. Por tanto, en
«diploides ». De las 23 parejas de cromosomas, 22 co- cada replicación la molécula de ADN nueva es algo
rresponden a los cromosomas somáticos o autosomas, más corta que la precedente. Pero eso no supone en
y la otra corresponde a los cromosomas sexuales. En principio una pérdida de genes, pues precisamente
el caso de las mujeres , esta pareja está formada por los extremos de los cromosomas (telómeros) tienen
dos cromosomas X; sin embargo, los hombres tienen secuencias de ADN repetitivo y no funcional. No
un cromosoma X y un cromosoma Y. obstante, el acortamiento progresivo de los telómeros
El tamaño del ADN humano es de unos 3.000 mi- acaba condicionando la posibilidad de replicación
llones de pares de bases. Se llama «par de bases » al íntegra del ADN. Algunas células, incluyendo las de
formado por dos nucleótidos complementarios (AT muchos tumores, expresan telomerasa, una enzima
o CG) que están en una determinada posición en la que va alargando los telómeros, lo que permite la
doble hélice del ADN. multiplicación indefinida de las mismas.
El ADN de los cromosomas está unido a diversas El material genético debe mantenerse también du-
proteínas que ayudan a mantener su estabilidad y rante la reproducción sexual del individuo, pero en
modulan su actividad. Entre ellas son especialmente este caso se dan algunas peculiaridades:
importantes las histonas. Los cromosomas tienen dos El embrión resulta de la fusión de dos células
partes o «brazos », de tamaño distinto. El más corto se germinales, óvulo y espermatozoide. Por tanto ,
designa con la letra p; el más largo con la q. Así, por para evitar que tenga doble cantidad de ADN,
ejemplo, con el término 17p nos referimos al brazo las células germinales deben reducir a la mitad
corto del cromosoma 17. Ambos brazos se «unen» en su ADN. Así, mientras las células somáticas tie-
una zona llamada «centrómero ». Los extremos de los nen 23 parejas de cromosomas (es decir, tienen
cromosomas se llaman «telómeros ». cromosomas duplicados, por lo que decimos que
Hasta ahora nos hemos referido al ADN nuclear son «diploides»), las células germinales tienen
o cromosómico. Pero además las células tienen otro solo 23 cromosomas individuales (son «haploi-
ADN que se encuentra en el interior de las mitocon- des »). Esa reducción a la mitad tiene lugar en la
drias. A diferencia del ADN nuclear, el ADN mitocon- meiosis, proceso en el que se producen dos mito-
drial consiste en una molécula circular de unos 16 500 sis seguidas, pero solo una replicación del ADN.
pares de bases. Contiene 37 genes que están implica- El ADN del nuevo embrión no es igual al de nin-
dos en la producción de ATP en las mitocondrias. guno de sus progenitores, sino que es una com-
En la mitosis, las mitocondrias de una célula binación única, pues cada pareja de cromosomas
se distribuyen entre las dos células hijas. En la fe- está constituida por uno proveniente del padre y
cundación, las mitocondrias del zigoto provienen del otro proveniente de la madre.
óvulo, no del espermatozoide. Por tanto, los genes del Esa individualidad del embrión también se esta-
ADN mitocondrial provienen siempre de la madre. blece a nivel de cada cromosoma, pues el cromo-
soma heredado no es idéntico al que tenía el pro-
genitor. Esto se debe a que durante la meiosis se
MITOSIS Y MEIOSIS. REPLICACIÓN DEL ADN produce un intercambio de fragmentos de ADN
Una característica fundamental de las células es el entre cromosomas homólogos (los que forman
mantenimiento de la dotación genética durante la re- parte de la misma pareja). Así, después de este
producción. Es decir, cada vez que se dividen, cada proceso de «recombinación», los cromosomas
una de las células hijas recibe una copia de ADN existentes en las células germinales contienen
idéntico al que tenía la célula madre. Evidentemente, fragmentos de cada uno de los dos cromosomas,
ello requiere que se duplique el ADN antes de la divi- que forman una pareja en el progenitor.
sión de la célula madre. Ese proceso de duplicación
del ADN se llama replicación y se produce durante la
fase S de la mitosis.
REPARACIÓN DEL ADN
En el proceso de replicación del ADN desempeña Ocasionalmente, se producen alteraciones en el ADN.
un papel clave la ADN-polimerasa. Esta enzima va Por ejemplo, porque, como hemos dicho, la ADN-po-
sintetizando pequeños fragmentos de ADN que son limerasa comete errores e introduce en un determi-
una copia del ADN existente. Posteriormente se unen nado punto de la secuencia un nucleótido con una
esos fragmentos por la acción de la ADN-ligasa. El re- base errónea. Aunque la propia enzima tiene cierta
sultado final es una molécula de ADN casi idéntica capacidad de corrección, algunos de los errores esca-
CAPITULO 1O Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

pan a esta y quedan incorporados en el ADN. Aproxi- 30 000 genes. El tamaño de los genes es variable, pero
madamente, esto ocurre en uno de cada 10 millones la mayoría están constituidos por varias kilobases
de nucleótidos. Aunque la frecuencia puede parecer (1kb: 1000 pares de bases).
pequeña, supone que en cada replicación del ADN Sin embargo, aunque puedan parecer grandes, en
se producen numerosos errores. Afortunadamente, realidad constituyen una pequeña fracción , no su-
las células disponen de otros sistemas que detectan perior al 10-15% del total del ADN de la célula. La
y reparan más del 99 % de esos errores. Son varias mayoría del ADN no forma parte .d e genes conocidos;
las proteínas implicadas en ese proceso, incluyendo es no codificante. Dentro de él merece especial men-
glicosilasas, varias ADN-polimerasas (beta, delta y ción el llamado «ADN repetitivo », muy abundante,
épsilon), el factor de trascripción IIH, la ADN-ligasa, que, como indica su nombre , está constituido por se-
la ADN-helicasa, MSH2 , MLHl y BRCA. En ocasiones cuencias de nucleótidos que se repiten varias veces.
se puede romper la hebra de ADN. En ese caso, la En ocasiones puede ser causa de enfermedad. Resulta
proteína Ku se encarga de volver a unirla. muy útil para identificar individuos en función de su
Es tal la importancia del mantenimiento de la inte- ADN, pues el número de repeticiones es variable de
gridad del ADN que las células han desarrollado , ade- unos individuos a otros.
más de esos mecanismos de reparación, mecanismos El ADN de los genes suele distribuirse en unas re-
de control que tienden a impedir la mitosis de la célu- giones definidas (Figura 10-1):
la en caso de que el ADN acumule daños importantes,
Exones: Estas regiones sirven de molde para sin-
haciendo que se pare el ciclo celular o induciendo su
tetizar el ARNm, cuya secuencia a su vez deter-
apoptosis. Esos mecanismos son complejos y en ellos
minará la secuencia de aminoácidos de las pro-
representa un papel destacado la proteína p53.
teínas. La mayor parte de los genes tienen varios
exones.
GENES. ADN CODIFICANTE Intrones: Se encuentran entre los exones. Se «co-
pian » también en ARN. De hecho, todos los exo-
Y NO CODIFICANTE n es e intrones de un gen se copian en una molé-
El ADN contiene la información clave para el man- cula de ARN. Pero después, durante el proceso
tenimiento de la función celular. A partir de él se de «maduración » del ARN, se eliminan las par-
sintetiza el ARN mensajero (ARNm), que a su vez de- tes correspondientes a los intrones y se unen las
termina la secuencia de todas las proteínas celulares. partes del ARN que corresponden a los exones
Se llan1a gen a la unidad funcional del ADN que en el ADN. Este proceso de «corte y empalme »
contiene la información necesaria para dirigir la sín- («splicing» en inglés) admite ciertas variaciones,
tesis de una molécula (generalmente una proteína, por lo que algunos genes no codifican un solo
pero a veces un ARN). Nuestro ADN contiene unos ARNm, sino varios.

Exones lntrones

ADN

Trascripción

ARN
Maduración
~

- - ~---
.
-
' ~,

- ___' _,,
'
'
~ ~-~-- -
-
~
.

AAAA

Traducción

Proteína
111111111111111111111111111111111111111111111111111111 1

Figura Esquema de la estructura de un gen. Desde el ADN a la síntesis de proteínas.


Etiopatogenia general

Región 5' no traducida: incluye secuencias ne- con otros co-activadores y ca-represores. A menudo ,
cesarias para iniciar la expresión del gen («pro- existen secuencias de ADN que , situadas a cierta dis-
motor») y otras con función reguladora de dicho tancia del promotor, actúan como «potenciadores »
proceso. («enhancers») de la transcripción.
Región 3' no traducida: sirve también de molde
para la parte final de la molécula de ARN y pue-
de servir para modular su transporte del núcleo ARNS
al citoplasma. También influye en la estabilidad El ARN «típico » es el ARN mensajero, al cual nos aca-
del ARN. No codifica aminoácidos , es decir, no bamos de referir en el apartado anterior. Pero existen
se traduce a la secuencia de aminoácidos de la
otros ARNs :
proteína.
ARN ribosómico: forma parte de los ribosomas,
Así pues, tras sintetizarse sobre el molde del ADN,
donde se produce la síntesis de proteínas, sobre
el ARN sufre algunas modificaciones que lo convier-
el molde del ARNm.
ten en el ARNm maduro. Las más importantes son las
ARN de transferencia: son ARNs pequeños, que
siguientes: a)la retirada de las secuencias intrónicas,
transportan los aminoácidos hasta los lugares
que ya hemos mencionado; b)la adición de una cape-
precisos de la cadena proteica, determinados por
ruza en el extremo 5 ' ; y c)la adición de una secuencia
elARNm.
de «poli-A » (varios nucleótidos con adenina) en su
Micro-ARNs: son ARNs muy pequeños. Existen
extremo 3'.
unos 1000 diferentes. Regulan la expresión de
Los ARN mensajeros determinan la secuencia de
los genes porque modulan la estabilidad de los
aminoácidos de las proteínas , sintetizadas en los
ARNm o su capacidad para inducir la síntesis
ribosomas. A este proceso se la llama «traducción »
proteica.
(o «traslación »). Pero muchas proteínas sufren mo-
ARNs pequeños nucleares: se encuentran en el
dificaciones «postraduccionales». Así, a menudo se
núcleo y regulan procesos como el corte y em-
sintetizan como propéptidos más largos, con varios
palme del ARNm.
aminoácidos que deben ser retirados de sus extremos
para dar lugar a la forma final de la proteína. También
es frecuente que a la cadena de aminoácidos se le aña- ETIOPATOGENIA DE LAS ENFERMEDADES
dan otros radicales necesarios para que la proteína
desarrolle su actividad normal. Entre ellos se encuen- HEREDITARIAS
tran moléculas de tipo glucídico («glicosilación»), Antes de describir la etiopatogenia, conviene aclarar
grupos fosfato («fosforilación »), etcétera. algunos conceptos que en ocasiones se confunden.
Enfermedad genética o de base genética. Nos
REGULACIÓN DE LA EXPRESIÓN GÉNICA referimos con este término a las enfermedades
en cuya etiopatogenia están implicadas modifi-
Aunque todas las células poseen las secuencias de to- caciones en el ADN, que pueden estar presentes
dos los genes en su ADN, solo una fracción de esos ge-
desde el nacimiento o no. Es un término muy
nes se expresa en cada tipo celular. Entre los mecanis-
amplio , pues gran parte de las enfermedades se
mos que determinan que se expresen o no ciertos genes
ven influidas por las características genéticas del
en una célula determinada se encuentran los llamados
individuo.
mecanismos «epigenéticos», como la metilación de
Enfermedad hereditaria. Trastorno debido a al-
las citosinas de las secuencias promotoras. En gene-
teraciones del material genético presente en las
ral, cuando estas citocinas se encuentran metiladas,
células germinales y por tanto transmisible de
se reprime la expresión del gen; mientras que cuando
unas generaciones a otras.
se encuentran desmetiladas se expresa normalmente.
Enfermedad congénita. Es la que se desarro-
Este mecanismo de metilación es también responsable
lla intraútero y por tanto está presente ya en el
de la inactivación de un cromosoma X en las mujeres.
momento del nacimiento. Sus manifestaciones
La expresión de los genes no inactivados es regula-
distintivas pueden estar ya presentes entonces y
da de manera fina por diversos factores que modulan
hacerse evidentes algún tiempo después.
la trascripción, es decir, la síntesis de ARNm. Esos
factores son diversos e incluyen tanto factores físicos Las enfermedades congénitas a menudo tienen una
(temperatura, estímulos mecánicos, etc.), como hu- base genética y son hereditarias, pero no necesaria-
morales (hormonas, citocinas, etc) . Sus efectos están mente. Por ejemplo, la infección por el virus de la
mediados por diversos «factores de transcripción », rubéola intraútero produce una grave embriopatía
que se fijan a las regiones promotoras y estimulan o (congénita) no hereditaria. Asimismo, las enferme-
inhiben la síntesis de ARNm. La regulación suele ser dades de base genética no siempre son hereditarias.
compleja. Depende del efecto combinado de varios Por ejemplo, el cáncer de piel se debe a alteraciones
factores de trascripción, actuando conjuntamente del ADN de las células de la epidermis; es una altera-
CAPÍTULO 1O Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

Tabla Nomenclatura de las mutaciones


Mutaciones puntuales
Si se refieren al ADN, se indican en mayúsculas el nucleótido original y mutado, su localización y una letra
según se refiera a ADN genómico, complementario o mitocondrial (g, c, m). Ej: g.128 A>G: cambio de adenina
por guanina en el nucleótido 128 del ADN genómico.
Cuando se trata de deleciones o inserciones, se añaden los términos del o ins
La numeración de los nucleótidos comienza en la A del codón iniciador ATG . La posición de las
mutaciones de la zona promotora se indica por tanto con un número negativo. La posición de las
mutaciones en los intrones se indica con respecto a los exones contiguos; con el número del nucleótido
del exón anterior o del siguiente, seguidos del signo más o menos y la distancia a la que se encuentra la
mutación. Ej: g. 140-2T>C: cambio de timina por citosina en un intrón , 2 nucleótidos anteriores al exón que
comienza en el nucleótido 140.
Si se refieren a la secuencia de aminoácidos de la proteínas, se indican el aminoácido inicial y el resultante de
la mutación. Ej: Arg34Trp: cambio del aminoácido 34, que pasa de arginina a triptófano.

Anomalías cromosómicas
Se indican el cromosoma y el brazo afectados, con una abreviatura que se refiere al tipo de alteración: del
(deleción), dup (duplicación), ins (inserción), inv (inversión) , t (traslocación). Por ejemplo:
del 5p: pérdida de brazo corto del cromosoma 5
t (2;8): traslocación entre cromosomas 2 y 8
47,XY,+21: varón con trisomía 21

ción genética, pero no transmisible a la descendencia, Inserciones: inclusión de varios nucleótidos,


puesto que no afecta a las células germinales. provenientes de otra zona de esa misma molécu-
la de ADN o de otra molécula.
Inversiones: se rompe un fragmento de ADN y
TIPOS DE MUTACIONES se reinserta después de nuevo , pero en sentido
Se denomina mutación a cualquier cambio en la se- contrario.
cuencia del ADN, con independencia de sus conse- Repeticiones: en el ADN son frecuentes las se-
cuencias (véase tabla 10-1) . No obstante, en el uso cuencias repetitivas, en especial los microsaté-
común, el término suele aplicarse a los cambios con lites, constituidos por grupos de 2-6 nucleótidos
consecuencias negativas sobre la actividad celular. que se repiten muchas veces. El número de repe-
Las mutaciones pueden ser de diverso tipo: ticiones puede variar de unos individuos a otros,
pero en general están en zonas silentes del ADN
Mutaciones puntuales y ello no tiene consecuencias apreciables. Sin
embargo, en ocasiones el aumento del número
Cambio puntual en la secuencia del ADN, afectando a de repeticiones puede afectar la función de un
un solo nucleótido. Incluyen: gen y ser causa de enfermedad (por ejemplo, co-
Cambio de una base por otra. Se llaman tran- rea de Huntington).
siciones a los cambios de una purina por otra
purina (AHG) o de una pirimidina por otra Cromosomopatías
(CHT). Se llaman transversiones a los cambios Afectan a grandes regiones del ADN, que incluyen
de una purina por una pirimidina, o viceversa. una gran parte de un cromosoma, o incluso cromoso-
Pérdida de un nucleótido (a menudo se usa el mas completos. Se puedan demostrar con el examen
anglicismo «deleción»). microscópico, mediante técnicas citogenéticas, como
Inserción de un nucleótido. el cariotipo. A su vez se pueden distinguir diferentes
tipos:
Mutaciones segmentarias Alteraciones en el número de cromosomas:
Afectan a una región más o menos grande del ADN.
Aneuploidías: número anormal de cromosomas
Puede tratarse de:
por existir uno extra o ausente.
Pérdidas de varios nucleótidos seguidos («dele- Trisomías. Existe un cromosoma extra; es de-
ciones »). cir, en vez de una pareja de cromosomas, existe
Etiopatogenia general

un trío. El ejemplo más común es la trisomía nuye la actividad del factor codificado por el gen) o
21 (existen 3 cromosomas 21), que es respon- en una «ganancia de función » (si la mutación induce
sable del síndrome de Down. Otro ejemplo es un aumento de actividad del factor).
la duplicación del cromosoma X en un sujeto Los mecanismos implicados en las pérdidas y ga-
varón, que así tiene 22 parejas de cromosomas nancias de función son variados, dependiendo de la
somáticos y XXY como cromosomas sexuales localización de la mutación.
(síndrome de Klinefelter).
Mutaciones en regiones codificantes. Pueden in-
Monosomías. Ausencia de un cromosoma. La
ducir un cambio en la secuencia de aminoácidos
más común es la ausencia de un cromosoma
de la proteína, lo que a su vez puede impedir
X en una mujer, que produce el síndrome de
su funcionamiento normal. Otras veces crean
Turner.
un «codó de terminación » o «sin sentido», lo
Poliploidias: existe una copia extra de todos los
· que bloquea la incorporación de aminoácidos a
cromosomas. No suelen ser compatibles con la
la cadena proteica a partir de ese punto, de ma-
vida, por lo que son causa de abortos espontá-
nera que no se puede sintetizar la proteína. Más
neos.
raramente , la mutación produce un aumento de
Alteraciones en la estructura de los cromosomas: actividad de la proteína.
Mutaciones en regiones reguladoras. Pueden im-
Traslocaciones: durante la meiosis se produce
pedir la fijación de factores de transcripción, con
un intercambio anormal de ADN entre dos cro-
lo que se inhibe la síntesis del ARN y en conse-
mosomas de diferentes parejas.
cuencia la de proteína.
Deleciones: se pierde un fragmento de un cro-
Otras mutaciones intragénicas. Algunas muta-
mosoma.
ciones en los extremos de los intrones impiden
Duplicaciones: se produce una duplicación de
el corte y empalme normal del ARN.
una región de un cromosoma.
Cromosomopatías. Pueden ser causa de enferme-
Inversiones: una región amplia de un cromoso-
dad por diversos motivos.
ma se suelta y se reinserta en sentido contrario.
Las monosomías y triso mías lo hacen por su -
poner, respectivamente, un defecto o exceso en
CAUSAS DE LAS MUTACIONES la «dosis » de genes presentes en las regiones
Las mutaciones pueden producirse espontáneamen- afectadas , lo que modifica en consecuencia la
te, durante el proceso de replicación del ADN, como cantidad de proteína sintetizada.
se ha explicado antes, o ser la consecuencia del efecto Las inserciones y deleciones, cuando se produ-
de agentes nocivos de diverso tipo. cen en medio de un gen, pueden bloquear su
expresión.
Las traslocaciones pueden interrumpir también
Agentes ambientales un gen, y en consecuencia bloquearlo. Otras
Las radiaciones no ionizantes, como la luz ultravio- veces, al contrario, provocan una expresión
leta y algunos compuestos químicos (p . ej. , benceno, anormalmente alta de un gen. Ocurre así cuan-
anilinas, etc.) favorecen la aparición de mutaciones do hacen que un promotor muy activo se colo-
puntuales, es decir, de cambios de un nucleótido por que delante de un gen que normalmente está
otro . Las radiaciones ionizantes (rayos X, emisiones reprimido. Por otro lado, las traslocaciones no
de isótopos radiactivos) tienden a romper las cadenas balanceadas hacen que una de las células hijas
de ADN al separar las uniones entre los átomos de herede un exceso de material genético , mien-
fósforo y oxígeno en los puentes de fosfato que unen tras que la otra recibe menos de lo normal , lo
los nucleótidos entre sí. que también puede alterar la función.

Factores endógenos
ESTUDIO DE LAS ENFERMEDADES GENÉTICAS
Algunos pacientes presentan alteraciones de la ma-
quinaria de reparación del ADN. A menudo se deben
a mutaciones en los genes que codifican las proteínas ANAMNESIS E HISTORIA FAMILIAR
que forman parte de esa maquinaria. A su vez, ello Como en otros tipos de enfermedades, la anamnesis
favorece la acumulación de mutaciones espontáneas desempeña un papel clave en el enfoque de los pa-
que no son reparadas . cientes con sospecha de enfermedades genéticas. Hay
algunos aspectos que se deben investigar con especial
interés:
FISIOPATOLOGÍA GENERAL
Edad de comienzo: las enfermedades de base ge-
~ De manera general, los efectos de las mutaciones pue- nética se suelen manifestar en edades precoces.
den consistir en una «pérdida de función » (si dismi- Por tanto, un comienzo del trastorno en la infan-
CAPÍTULO 1O Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

cia sugiere esta posibilidad. Pero no es un dato EXPLORACIÓN FÍSICA


excluyente. Algunas enfermedades genéticas se
manifiestan clínicamente en la edad adulta (p. Permitirá descubrir las alteraciones propias de las di-
ej., hemocromatosis). versas enfermedades:
Factores de riesgo: se debe investigar la exposi- Dismorfias: los trastornos genéticos están pre-
ción de la madre a factores mutagénicos (radia- sentes desde el comienzo del desarrollo. Por
ciones, fármacos, etc.) durante el embarazo. ello, pueden existir alteraciones groseras en
Antecedentes familiares: las enfermedades gené- la forma de alguna parte del organismo. Por
ticas suelen estar presentes en varias generacio- ejemplo, el cráneo en torre aparece en algunas
nes. Por tanto, es fundamental investigar la exis- anemias; los dedos largos y finos (aracnodacti-
tencia de trastornos similares en la familia. No lia) son típicos del síndrome de Marfan; etc. A
obstante, no siempre se observa esa agregación veces las deformidades no son consecuencia de
familiar. Ello puede deberse a varios motivos: a) alteraciones del desarrollo prenatal, sino de las
«mutación de novo », es decir, que ha aparecido alteraciones postnatales del esqueleto. Ocurre
por primera vez en ese individuo; b) ausencia de así en los raquitismos (debidos a alteraciones del
descendencia de los individuos con enfermeda- metabolismo del fosfato o de la vitamina D) y en
des graves; c) familias poco numerosas, con po- la osteogénesis imperfecta (debida a mutaciones
cos hijos , lo que impide, por simple casualidad, del colágeno que provocan una fragilidad anor-
observar el patrón de transmisión esperado a tra- mal del esqueleto).
vés de las generaciones. Alteraciones de la talla: la talla baja aparece en
Es importante indagar si existe consanguinidad en muchas enfermedades hereditarias. La talla alta
los progenitores (p. ej ., matrimonios entre primos) . La puede ser consecuencia de un hipogonadismo
unión de individuos emparentados favorece la apa- primario (p. ej ., Klinefelter) o de síndromes que
rición de enfermedades genéticas, sobre todo las de cursan con alteraciones hipofisarias.
tipo recesivo (ver más adelante) , pues aumenta la pro- La hiperlaxitud articular es típica de los trastor-
babilidad de que ambos progenitores sean portadores nos del tejido conectivo, como los síndromes de
de la misma mutación. Un fenómeno similar se da Marfan y de Ehlers-Danlos.
en comunidades pequeñas y poco relacionadas con La debilidad muscular es típica de las miopatías
el exterior, en las cuales es probable que los matri- y algunos trastornos neurológicos.
monios acaben produciéndose entre individuos con La hepatomegalia y la esplenomegalia son fre-
antecesores comunes (endogamia). cuentes en los trastornos metabólicos que cursan
Es habitual resumir los datos fanüliares en forma con acumulación de diversos productos en esos
de árbol genealógico, dibujado con signos estándar órganos («errores congénitos del metab olismo »),
(Fig. 10-2 ). por ejemplo, glucogenosis o mucopolisacaridosis.

□ o H ombre y m ujer sanos


;,. Caso índice

0
• Hombre y mujer en fermos

Portadora de
.trasto rn o recesivo
ób Gemelos
d icigóticos

0
ligado al X

Hombre fa ll ecido
6b Gemelos
monoc igóticos

0-0 ◊
Sexo
Emparejamiento desconocido

Figura
D=O Emparejam iento
co nsanguin eo

Símbo los e n los árbo les genealóg icos.


• Aborto de sexo
desco nocido

~
Etiopatogenia general

Alteraciones de la coloración de la piel: la pali- nudo está constituido por decenas de miles de
dez aparece en muchas formas de anemia. La hi- nucleótidos.
perpigmentación es típica de la hemocromatosis. Estudios funcionales bioquímicos e inmunohis-
La ictericia puede deberse a anemias hemolíticas toquímicos. Los ensayos funcionales en mues-
o a alteraciones del metabolismo de la bilirrubi- tras de tejidos permiten detectar la ausencia de
na. La más frecuente es la enfermedad de Gilbert, proteínas con actividad enzimática, consecuen-
en la cual existe un déficit de la conjugación de cia de mutaciones de los genes que las codifican.
la bilirrubina. Por otro lado, las técnicas inmunohistoquímicas
permiten demostrar la ausencia de expresión de
diversas proteínas tisulares, tanto estructurales
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS como enzimáticas.

Pruebas rutinarias Técnicas de investigación


Las pruebas complementarias convencionales son úti- Las pruebas anteriores se utilizan habitualmente en
les para valorar la repercusión de la alteración gené- la asistencia a los pacientes. Otros procedimientos se
tica sobre el organismo. Así, las radiografías permiten usan en estudios de investigación, clínica o de labo-
definir las alteraciones esqueléticas; el hemograma ratorio.
identifica las alteraciones de las células sanguíneas,
Estudios cl ínico-epidemiológicos
y los análisis bioquímicos de suero y orina ayudan a
identificar los trastornos metabólicos. Pueden ser de dos tipos: asociación y ligamiento.
En los estudios de asociación se incluyen sujetos
Pruebas genéticas sanos y enfermos no emparentados y se estudian
Otras pruebas especiales van dirigidas a identificar en ellos algunos genes candidatos (presumible-
la alteración genética subyacente. Se seleccionan en mente relacionados con la enfermedad). Se com-
función del tipo de alteración sospechada. paran después las frecuencias de los alelos en
los enfermos y en los controles. En los estudios
Cariotipo: imagen de los cromosomas teñidos y de asociación genómica (o genome-wide associa-
ordenados por parejas. Útil en las cromosomopa- tion studies, GWAS) el análisis no se limita a uno
tías (Fig. 10-3). o unos pocos genes, sino que se analizan cientos
Hibridación fluorescente in situ (FISH, fluores- de miles de nucleótidos distribuidos a lo largo
cent in situ hybridization): los cromosomas se de todo el genoma.
incuban con sondas de ADN marcadas con molé- En los estudios de ligamiento se incluyen suje-
culas fluorescentes. Dependiendo del número y tos sanos y enfermos de una o varias familias . Se
la especificidad de las sondas, se pueden marcar estudian en ellos marcadores distribuidos por to-
cromosomas completos, regiones cromosómicas dos los cromosomas y se comparan las frecu en-
o un solo gen. Permite identificar traslocaciones, cias en los sanos y los enfermos. Ello permite
inversiones, pérdidas de fragmentos de cromoso- localizar la región cromosómica asociada con la
mas (deleciones) y duplicaciones. enfermedad. Después se hace un análisis espe-
Hibridación genómica comparativa (CGH): se cial dirigido a esa región para identificar cuáles
aísla el ADN del paciente y se híbrida con un de los genes presentes en ella son responsables
microchip que incluye miles de sondas. Los re- del trastorno
sultados se comparan con los obtenidos con un
ADN normal. Permite detectar variaciones en el Estudios in vitro
número de copias de muchos genes. Es especial- Las técnicas de retardo en gel (o electrophore-
mente útil para identificar microdeleciones. tic mobility sl1ift assay, EMSA) son útiles para
Secuenciación. Las mutaciones que afectan a estudiar las consecuencias funcionales de las
un solo nucleótido o a unos pocos pueden de- mutaciones en las regiones reguladoras de los
tectarse amplificando esa región mediante una genes. Permiten analizar la fijación de factores
reacción en cadena de la polimerasa (PCR) y ana- de trascripción a esas regiones, en presencia y
lizando después la secuencia de los fragmentos ausencia de la mutación. Para ello se incuban
obtenidos mediante algún procedimiento, como oligonucleótidos con la secuencia de la región
secuenciación directa o análisis con enzimas de mutada con extractos de proteínas nucleares y
restricción. El procedimiento es sencillo cuando después se separan mediante electroforesis los
las mutaciones se dan siempre en una zona con- complejos formados .
creta del gen. Sin embargo, resulta mucho más Los ensayos con genes reporteros son también
laborioso cuando la localización de la mutación útiles para analizar regiones reguladoras. Para
es variable de unos pacientes a otros, pues se ello se clona la región promotora del gen que
hace necesario secuenciar todo el gen, que a me- se quiere analizar y se inserta en un vector, por
CAPÍTULO 1O Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

.,_ 3

11

19 20 X '(

Figura Cariotipo con trisomía 21: síndrome de Down.

delante de un gen reportero , cuya actividad se fieste la enfermedad. Su incidencia global es de 1/200
mide fácilmente, como la luciferasa. Después individuos.
se compara la expresión de luciferasa en el vec- En general, es suficiente con que exista un alelo
tor que lleva insertado el promotor normal con la normal para que se exprese un gen en cantidad su-
del vector que lleva el promotor mutado. De esta ficiente para la función celular normal. Por eso la
manera, se analiza si la mutación influye en la dominancia es infrecuente en las mutaciones que
actividad transcripcional. inducen pérdida de función del gen. Habitualmente
Los modelos con ratones transgénicos son tam- la dominancia se da en las mutaciones activadoras o
bién muy útiles para conocer las consecuencias con «ganancia de función », es decir, que provocan un
del bloqueo o la sobreexpresión de un gen. aumento en la actividad o la expresión de la proteína.
In vitro también se puede analizar la actividad Pero hay excepciones y a veces las mutaciones inacti-
celular tras bloquear la expresión de un gen de- vadoras pueden tener también un componente domi-
terminado introduciendo en la célula siARNs, nante. Ocurre así, por ejemplo, cuando al tener solo
que son ARN pequeños que bloquean el ARNm. un alelo funcionante se sintetiza una menor cantidad
de una proteína crítica en un proceso, de manera que
cuando se expresa sólo un alelo normal es insufi-
ciente para mantener la actividad celular (fenómeno
TIPOS DE ENFERMEDADES HEREDITARIAS conocido como haploinsuficiencia). En otras ocasio-
nes, la mutación inactivadora se comporta como do-
ENFERMEDADES MONOGÉNICAS minante porque la proteína anormal que resulta del
alelo mutado es citotóxica o inhibe el metabolismo o
Se deben a la alteración de un solo gen. Son las pri- la función de las moléculas normales codificadas por
meras que se identificaron y en muchos casos siguen el alelo no mutado.
las leyes de Mendel, por lo que también se llaman Los árboles familiares de los trastornos dominantes
«clásicas » o de «herencia mendeliana ». Se pueden (Fig. 10-4) presentan estas características:
distinguir varios tipos en función del tipo de heren-
cia: autosómicas (dominantes o recesivas) y ligadas Hay individuos enfermos en todas las generacio-
al sexo. nes.
Todos los individuos enfermos tienen al menos
un progenitor enfermo (salvo mutaciones de
Herencia autosómica dominante
novo).
Se dice que una mutación es dominante cuando basta Los individuos sanos no tienen hijos enfermos
con que exista un solo alelo mutado para que se mani- (salvo mutaciones de novo)
Etiopatogen ia general

■ □
Figura Ejemplo de tra nsm is ión autosómi ca dom inante.

Los individuos enfermos tienen, en promedio, Los árboles familiares de los trastornos recesivos
un 50% de hijos enfermos. presentan estas características (Fig. 10-5) :
La enfermedad afecta por igual a hombres y mu-
Ambos progenitores de un enfermo deben ser
jeres.
portadores de la enfermedad. El riesgo de trans-
misión de la enfermedad de una pareja de porta-
Herencia autosómica recesiva dores a sus descendientes es del 25%.
En general, los padres de un enfermo están sanos
Se dice que la mutación es recesiva cuando es preciso (son portadores; cada uno con un alelo mutado),
que los dos alelos del gen estén mutados para que se pero puede haber varios hermanos afectados. Es
manifieste la enfermedad. Enfermedades de este tipo decir, a menudo existe una generación sin nin-
aparecen en 1/500 individuos. En general se deben gún enfermo y otra con varios.
a mutaciones inactivadoras. Cuando ambos alelos se La enfermedad afecta por igual a hombres y mu-
inactivan aparece la enfermedad. jeres.

~ F-igura
• □
Ejemp lo de tra nsm isión autosómica recesiva.

CAPÍTULO 1o Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

La consanguinidad entre los padres aumenta el Las mujeres portadoras transmiten la enferme-
riesgo de enfermedad dad a la mitad de sus hijos varones. También
transmiten el estado de portador, a la mitad de
Herencia ligada al cromosoma X sus hijas. En consecuencia, si hay varones afec-
tos en varias generaciones, han de estar empa-
El cromosoma Y tiene pocos genes y son excepcio-
rentados por línea materna.
nales las mutaciones del cromosoma Y que causan
enfermedad, las cuales, lógicamente, solo afectarán a Si existen mujeres enfermas, sus hijos varones
son enfermos, pero sus hijas son portadoras sa-
los varones. Sin embargo hay muchas enfermedades
debidas a mutaciones de los genes presentes en el nas.
cromosoma X. Los trastornos dominantes ligados al cromosoma X
La mayor parte de los trastornos ligados al cromosoma son mucho más raros que los recesivos. Tanto las mu-
X tienen un comportamiento recesivo. Por tanto, se jeres como los hombres están afectos , aunque en_ una
manifiestan preferentemente en los varones (las mu- familia determinada son más frecuentes las mu¡eres
jeres, al tener dos cromosomas X, si son portadoras de enfermas que los hombres enfermos . Esto se debe a
la mutación en uno de sus cromosomas X, no están que los hijos varones de los hombres afectos no r~~i-
afectas, puesto que siguen teniendo un alelo normal ben su cromosoma X anormal; mientras que las lu¡as
en el otro cromosoma). Las mujeres sólo desarrollan sí lo reciben. En cuanto a la descendencia de las mu-
la enfermedad cuando se da la coincidencia de que se jeres enfermas, la mitad de los descendientes (varo-
emparejan un varón enfermo y una mujer portadora. nes o mujeres) heredarán la enfermedad. A menudo
Las mujeres portadoras (o enfermas) transmiten la en- la enfermedad es más grave en los varones que en las
fermedad a los hijos varones; pueden transmitir tam- mujeres (puesto que estas tienen un alelo normal que
bién el alelo mutado, y por tanto al ser portadoras, a ejerce cierta compensación).
las hijas. Los hijos de los varones enfermos no tienen
Otra forma infrecuente de herencia ligada a los cro-
la enfermedad, puesto que los varones reciben un cro-
mosomas sexuales es la llamada «herencia pseudoau-
mosoma Y normal y las hijas reciben un cromosoma
tosómica». Se da en algunas displasias esqueléticas,
X mutado (lo que las convierte en portadoras, pero
debidas a la mutación de un gen que se encuentra en
no en enfermas). La hemofilia A es el trastorno más
el extremo del brazo corto de los cromosomas X e Y.
frecuente de este tipo, debido a una mutación del gen
Las regiones extremas de estos cromosomas se llaman
que codifica el factor VIII de la coagulación. . «pseuodoautosómicas » porque son similares en am-
En resumen, las características de los árboles fami-
bos cromosomas y por tanto pueden recombinarse
liares de los trastornos recesivos ligados al cromoso-
durante la meiosis. De ahí que tengan un patrón de
ma X son las siguientes (Fig. 10-6):
transmisión atípico. Se comportan como dominantes.
La enfermedad se da solo en varones, o en todo Al igual que los trastornos dominantes ligados al cro-
caso es mucho más frecuente en varones que en mosoma X, son más frecuentes en las mujeres, pero a
mujeres. diferencia de estos hay transmisión de la enfermedad
Los hijos de los hombres enfermos son sanos. de varón a varón.

- UT

Figura Ejémplo de transmisión recesiva ligada al cromosoma X.


SECC ON I Etiopatogenia general

Herencia mitocondrial Hay que recordar que no todas las enfermedades


La tasa de mutación del ADN mitocondrial es unas debidas a alteraciones de la función mitocondrial
10 veces mayor que la del ADN nuclear. Sin embargo, se deben a alteraciones del ADN mitocondrial. Este
puesto que el mitocondrial es mucho más pequeño, ADN contiene algunos genes esenciales para las mi-
en conjunto son mucho más frecuentes las enferme- tocondrias, pero otros están presentes en el ADN nu-
dades debidas a mutaciones del ADN nuclear. Las en- clear. Sus mutaciones produ ce enfermedades ca¡ac-
fermedades debidas a mutaciones del ADN mitocon- terizadas por alteraciones mitocondriales, pero con
drial son de herencia materna. Las mitocondrias del herencia autosómica.
zigoto provienen del óvulo, no del espermatozoide. En los árboles familiares de las enfermedades de
Por tanto , las mujeres con alteraciones del ADN mi- herencia mitocondrial se observa (Fig. 10-7):
tocondrial transmiten la enfermedad tanto a los hijos Están afectados igual número de varones y mu-
varones como a las mujeres. Sin embargo, los varones jeres.
no la transmiten a ninguno de ellos. Los varones enfermos tienen hijos sanos.
Cada mitocondria contiene varias moléculas de Las mujeres enfermas tienen hijos e hijas enfer-
ADN, algunas de las cuales pueden presentar la muta- mos (a diferencia de la herencia recesiva ligada
ción y otras no. Cada célula contiene cientos o miles al cromosoma X, que también se transmite por
de mitocondrias. Durante la mitosis, las mitocondrias vía materna).
hijas reciben al azar las moléculas de ADN, algunas Existen diferencias significativas en la gravedad
mutadas y otras normales; a su vez, las mitocondrias del trastorno entre diversos individuos.
pasan a las células hijas en número similar, pero de
manera aleatoria. Por eso en estos trastornos suele
existir «heteroplasmia », es decir, diferencias en la CROMOSOMOPATÍAS
proporción de mitocondrias anormales en las diver-
sas células y tejidos. El grado de afectación depende Las alteraciones de los cromosomas afectan a varios
de la proporción total de ADN mutado en las células genes, situados en el fragmento del cromosoma alte-
de un tejido , lo que, por lo que acabamos de decir, es rado. Por tanto, pueden considerarse cono «poligéni-
variable de unos individuos a otros . Por tanto , típica- cas ».
mente en estas enfermedades hay mucha variabilidad Las aneuploidias son las más frecuentes; se dan en
en la gravedad del trastorno dentro de los miembros el 3% de las gestaciones. La más común es la trisomía
de una misma familia. 21 o síndrome de Down. El mecanismo de producción
Las mitocondrias son esenciales en la producción más común es la alteración de la disyunción, es decir,
de energía en forma de ATP. Las manifestaciones de de la separación de la pareja de cromosomas durante
los trastornos mitocondriales son variables, pero pre- la meiosis , de manera que una célu la hija recibe un
dominan las propias de los sistemas nervioso, mus- cromosoma extra, mientras que la otra recibe uno de
cular y cardiaco (tejidos con un alto requerimiento menos. Su frecuencia aumenta de manera exponen-
de energía). cial cuando la edad de la madre supera los 35 años.

~
Figura Ejemplo de herencia mi toco ndrial.
CAPITULO 10 Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

Las alteraciones estructurales de los cromosomas Aunque ocasionalmente esos procesos pueden ser
(traslocaciones, deleciones, etc.) se producen como causados por la mutación grave de un solo gen, en la
consecuencia de la rotura del cromosoma y pérdida inmensa mayoría de los pacientes la susceptibilidad
del fragmento o reconstitución de manera anómala en no viene determinada por un solo gen, sino por mu-
el mismo cromosoma o en otro. En conjunto, apare- chos, quizás docenas o centenares. De al1í el nombre
cen aproximadamente en el 0,3 % de los nacidos vi- de enfermedades poligénicas. Cada uno de los genes
vos. Las traslocaciones o transferencias de una parte presenta pequeñas alteraciones que aisladamente tie-
de un cromosoma a otro pueden ser equilibradas o no nen poco efecto sobre la función del organismo, pero
equilibradas. Se dice que son equilibradas cuando se al combinarse sí ejercen una influencia importante.
mantiene la dotación genética normal (aunque distri- Esas enfermedades son frecuentes , por lo que las al-
buida en distintos cromosomas). Por el contrario, se teraciones de los genes a las que nos referimos son
dice que son desequilibradas cuando existe pérdida o también frecuentes. De ahí que no se llamen «muta-
ganancia de material genético. ciones », sino «polimorfismos ». Por tanto , los poli-
Las traslocaciones equlibradas (a veces se llaman morfismos son variaciones frecuentes en la secuen-
también balanceadas) pueden provocar alteraciones cia del ADN (por definición , deben darse al menos
en la descendencia, aun cuando sus portadores ini- en el 1 % de los individuos) y tienen consecuencias
ciales sean normales, pues favorecen que se produz- funcionales limitadas. Por el contrario, las mutacio-
can alteraciones en la división de los cromosomas en nes son poco frecuentes y a menudo alteran grave-
la meiosis de sus células germinales. mente la función del gen. Los polimorfismos más
Las manifestaciones clínicas de las
alteraciones cromosómicas son varia-
bles. Las más graves son incompatibles
con el desarrollo normal intraútero y
ocasionan abortos. Otras producen di-
versas dismorfias , deficiencia mental,
cardiopatías congénitas, hipogonadis-
mo, etc.
Las anomalías cromosómicas pueden
estar presentes ya en el óvulo o el esper-
matozoide, y en consecuencia en el zigo-
to, de manera que se van transmitiendo
a todas las células del organismo. Sin
embargo, en otras ocasiones se producen
durante la mitosis de una división tem-
prana, pero posterior a la fecundación.
En ese caso algunas células del organis-
mo presentan la alteración, pero otras
son normales , situación a la que se llama
«mosaicismo ». Los individuos con mo-
saicismo suelen presentar alteraciones
más leves que los portadores de la alte-
ración en todas las células.
frecuentes son los que afectan a un solo nucleótido
(polimorfismos bialélicos o «single nucleotide poly-
ENFERMEDADES POLIGÉNICAS morphisms », SNPs). Existen más de 10 millones en
el ADN humano. La mayoría de ellos se encuentran
Muchas enfermedades son el resultado de la interac- en regiones silentes y no tienen consecuencias fun-
ción entre factores genéticos y ambientales, es decir, cionales, También son frecuentes los polimorfismos
se dan cuando algunos factores externos actúan sobre debidos a variaciones en el número de copias («copy
individuos «genéticamente susceptibles». Así, por number variations», CNV), es decir, a la existencia
ejemplo, la obesidad se produce cuando existe un de regiones del ADN, de varios miles de nucleótidos,
consumo energético superior al gasto. Pero unos suje- que en algunos individuos se encuentran duplica-
tos son más susceptibles que otros, en función de sus das, bien en el mismo cromosoma o en cromosomas
características genéticas. Otros ejemplos de enferme- diferentes.
dades poligénicas frecuentes son la diabetes mellitus, Las enfermedades poligénicas presentan agrega-
la arterioesclerosis, la hipertensión arterial, la osteo- ción familiar, es decir, los individuos afectos a me-
porosis, la artrosis, las enfermedades inflamatorias nudo tienen otros familiares afectos, pero cuando se
del tejido conectivo o las enfermedades inflamatorias analizan los árboles familiares no se observa ningún
intestinales. patrón definido de transmisión.
Etiopatogenia general

MUTACIONES SOMÁTICAS. CÁNCER Willi (obesidad, hipogonadismo, hipotonía, retraso


de desarrollo) y de Angelman (retraso en el desarrollo
Las enfermedades hereditarias se transmiten a la des- psicomotor, movimientos anormales, risa inapropia-
cendencia, lo que implica que las mutaciones causales da)- y la osteodistrofia de Albright (resistencia a la
están presentes en las células germinales. Hay otras hormona paratiroidea, braquidactilia).
enfermedades de base genética que no se heredan.
Son las debidas a mutaciones en las células de tejidos
extragonadales ya desarrollados y que por tanto no Expresividad variable , penetrancia incompleta
pasan a los gametos. El ejemplo mejor conocido es el e influencia de la edad
de las enfermedades neoplásicas. La mutación en una
célula determinada induce su proliferación anormal Por expresividad se entiende la gravedad con la
y el desarrollo de un tumor. En realidad, los tumores que se manifiesta en el fenotipo una determinada
no suelen ser la consecuencia de una mutación ais- mutación. Puede variar de unos individuos a otros,
lada, sino del acúmulo de múltiples mutaciones (ver incluso dentro de la misma familia. La penetrancia
cap. 11). se refiere a la proporción de individuos portadores
Sin embargo, debe tenerse en cuenta que el desa- de la mutación que manifiestan la enfermedad. Pue-
rrollo de tumores puede verse favorecido por la com- de ser completa (todos los que tienen la mutación
binación de mutaciones germinales y somáticas. Ocu- manifiestan la enfermedad) o incompleta (no todos
rre así cuando se produce una mutación germinal de manifiestan la enfermedad). La variabilidad en la ex-
alguno de los genes implicados en la reparación del presión y la penetrancia incompleta pueden deber-
ADN. Los individuos con una mutación germinal de se a diversos factores. En ocasiones el efecto de la
estos genes la transmiten a los hijos. Eso hace que los mutación viene modulado por la existencia de otras
descendientes tengan dificultad para reparar el ADN. mutaciones o polimorfismos (en el mismo gen o en
Por tanto, cuando en uno de sus tejidos se produce otros distintos). o por factores ambientales . En otros
una mutación (mutación somática). es más probable casos, la enfermedad se manifiesta sólo a partir de
que no puedan repararla y que acaben desarrollando cierta edad, de manera que un sujeto joven puede
un tumor. Por su parte, ellos no transmitirán a la si- estar aparentemente sano en el momento del estu-
guiente generación la mutación que desencadenó el dio y desarrollar la enfermedad en el futuro. Por otra
tumor, pero sí la del gen encargado de la reparación parte, entre los patrones de transmisión autosómico
del ADN. Dicho de otra manera, no se transmite la y recesivo típicos, pueden aparecer a veces patrones
enfermedad neoplásica, pero sí la susceptibilidad. intermedios en los que se da un fenómeno de «dosi-
ficación alélica» o «haploinsuficiencia» En ese caso,
los sujetos que tienen la mutación en homocigosis
FACTORES QUE INFLUYEN EN LOS PATRONES presentan una enfermedad manifiesta, mientras los
heterocigotos con un alelo mutado y otro normal su-
DE LAS ENFERMEDADES HEREDITARIAS fren alteraciones más leves.
Diversos factores condicionan la expresividad de las
alteraciones genéticas y pueden dificultar el recono- Influencia del sexo
cimiento de los patrones de transmisión de las en-
Algunas mutaciones se manifiestan de manera dife-
fermedades. Es importante tenerlos en cuenta porque
rente en hombres y en mujeres. El motivo es claro
identificar el patrón de herencia es fundamental a la
en los trastornos ligados a los cromosomas sexuales
hora de establecer el riesgo de enfermedad en la des-
(por ejemplo, todos los varones con una alelo mutado
cendencia, y, por tanto, el consejo genético.
del factor VIII de la coagulación, localizado en el cro-
mosoma X, desarrollan hemofilia, mientras que las
Impronta genética mujeres no lo hacen porque tienen un alelo normal
Habitualmente las mutaciones tienen el mismo efec- en el otro cromosoma X). A veces hay también dife-
to, con independencia de que el cromosoma en el que rencias entre sexos en cuanto a las manifestaciones
se encuentren sea de origen paterno o materno. Pero de mutaciones que radican no en los cromosomas
a veces no es así. Se dice entonces que existe una sexuales, sino en los autosomas. Ello puede deberse a
impronta genética. Ello se debe a que algunos genes que la molécula mutada tiene distintas consecuencias
sólo se transcriben cuando provienen del progenitor en ambos, como ocurre típicamente con las relacio-
de un sexo determinado. Los mecanismos no están nadas con las hormonas sexuales (por ejemplo, una
bien aclarados, pero se supone que tienen que ver mutación en alguna de las enzimas necesarias para
con la metilación del ADN, que se produce de mane- la síntesis de estrógenos no tiene las mismas conse-
ra diferente durante la gametogénesis, en función de cuencias fenotípicas en los varones que en las muje-
que tenga lugar en los testículos o en los ovarios. Los res) . Otras veces, la diferente expresividad tiene que
trastornos mejor conocidos que muestran impronta ver con otros factores orgánicos o ambientales. Por
genética son algunos debidos a mutaciones en el cro- ejemplo, la hemocromatosis (trastorno caracterizado
mosoma 15 -que dan lugar a los síndromes de Prader- por una absorción excesiva de hierro y su depósito
CAPÍTULO 1O Bases genéticas de las enfermedades. La herencia como causa de enfermedad

en los tejidos) suele expresarse más tardíamente y de rentes de un mismo gen. Es lo más frecuente: todos
manera más leve en las mujeres, puesto que en ellas los individuos afectos de una misma familia tienen
la menstruación supone una pérdida de hierro que la misma mutación; sin embargo, en otras familias la
las protege. mutación causante es distinta.
Se dice que existe heterogeneidad de Jocus (o he-
Mosaicismo y heteroplasmia terogeneidad genética) , cuando las mutaciones que
causan la enfermedad en diferentes familias están
Estos fenómenos, en los que se producen diferencias
localizadas en genes distintos. Estos genes a menu-
en la proporción de ADN mutado en las diversas célu-
do están localizados en cromosomas diferentes , pero
las del organismo (ver arriba), pueden dar lugar tam-
codifican proteínas implicadas en una misma vía
bién a diferencias importantes en la expresividad de
metabólica o estructura celular. Un ejemplo es la
la enfermedad. Por otro lado, hay que tener en cuenta
osteogenesis imperfecta, un trastorno que cursa con
que las mujeres presentan siempre cierto mosaicismo
fragilidad del esqueleto y que puede deberse a muta-
respecto al cromosoma X. En efecto, en cada una de
ciones en cualquiera de los dos genes que codifican
sus células se inactiva la expresión de la mayor parte
las cadenas del colágeno, los cuales se encuentran en
de los genes presentes en uno de los cromosomas X.
cromosomas distintos.
Este fenómeno, conocido como «!ionización», afecta
aleatoriamente al cromosoma X de origen paterno o al
de origen materno. Heterogeneidad fenotípica
En general, las mutaciones de un gen ocasionan una
Mutaciones de novo y letales alteración fenotípica similar, con independencia de
cuál sea la región del gen donde se sitúa la mutación.
En algunas enfermedades casi todos los casos parecen
Sin embargo, no siempre es así. Algunos genes pre-
ser esporádicos, no hereditarios, pues no se observa
sentan heterogeneidad fenotípica; es decir, el fenoti-
ningún caso de transmisión de padres a hijos. Ello
po es muy diferente dependiendo del lugar de asiento
puede deberse realmente a que la mayoría sean muta-
de la mutación.
ciones nuevas (aparecidas por primera vez en los ga-
metos que dieron lugar al individuo afecto , o durante
las etapas iniciales de su desarrollo embrionario) o Heterocigotos compuestos
a que, aún dándose una transmisión hereditaria, los En ocasiones se encuentran individuos que presentan
individuos afectos no tengan descendencia, bien por- una enfermedad de herencia recesiva, aunque son he-
que sean infértiles, bien por razones sociales, o bien terocigotos , es decir, solo tienen mutado uno de los
porque la enfermedad sea letal antes de llegar a la alelos. A menudo ello se debe a que presentan otra
edad fértil. A veces, la existencia de otros hermanos mutación en una región diferente del mismo gen, es
afectos permite identificar claramente el carácter he- decir, son heterocigotos para dos mutaciones distin-
reditario. tas o «heterocigotos compuestos».

Heterogeneidad alélica y de locus Anticipación genética


Se dice que existe heterogeneidad alélica cuando una En algunas enfermedades se produce un empeora-
enfermedad puede ser causada por mutaciones dife- miento progresivo a través de las generaciones: la
SFCCION Etiopatogen ia general

Tabla Algunos trastornos de herencia materna (ligada al cromosoma X o mitocondrial)


Trastorno Gen alterado Frecuencia Herencia Manifestaciones
Hemofilia A Factor VIII 1/7000 AX Hemorragias externas e
coagulación internas

Distrofia de Duchenne Distrofina 1/4000 AX Paresia, pseudohipertrofia


de gemelos, miocardiopatía

Síndrome X frágil Proteína de unión 1/5000 AX Retraso mental ,


al ARN (FMR1) varones rasgos faciales toscos,
macroorquidia

MELAS Varios genes 1/ 10 000 Mitocondrial Miopatía, encefalopatía,


mitocondriales epilepsia, acidosis láctica,
episodios seudoictales,
hipoacusia

Abreviaturas. AX: recesivo ligado al cromosoma X. MELAS: encefalopatía mitocondrial con acidosis láctica y
episodios ictus-like.

enfermedad se va h aciendo cada vez más grave y Fenocopias


aparece a edades más tempranas. Es típico de algu- Son trastornos provocados en realidad por factores
nos trastornos debidos a la acumulación de repeti- ambientales, pero tienen unas manifestaciones simi-
ciones en tándem (grupos de 3-4 nu cleótidos qu e se lares a las de los trastornos genéticos.
repiten muchas veces) en ciertos genes. Ocurre así en
algunas enfermedades neurológicas, como la distro- EJEMPLOS DE ENFERMEDADES
fia miotónica, la corea de Huntington o el síndrome
del X frágil. También aparece un fenómeno similar
HEREDITARIAS
en u n raro trastorno cutáneo (disqueratosis congéni- En las Tablas 10-2 y 10-3 se exponen las característi-
ta), debido a una mutación de la telomerasa, enzima cas principales de algunos de los trastornos heredita-
encargada del mantenimiento de la longitud de los rios ligados al cormosoma X y de las cromosomopa-
telómeros. tías más frecuentes .

Tabla Algunas cromosomopatías frecuentes


Alteración
Síndrome Frecuencia Manifestaciones
cromosómica
Down 47, XY, +21 1/ 1000 Talla baja, hipotonía, hiperlaxitud,
retraso mental , alteraciones cardiacas y
gastrointestinales, enfermedades autoinmunes

Turner 45, X 1/2000 mujeres Hipogonadismo, talla baja, pliegue cervical ,


cardiopatía

Klinefelter 47, XXV 1/ 1000 varones Talla alta, hipogonadismo, ginecomastia

~
-i11
Etiopatogenia
del cáncer
y síndrome tumoral
Jaime Font de Mora, Javier García-Conde Bru

MECANISMOS DE LA ONCOGÉNESIS
Desde los comienzos de la clonación y caracteriza-
ción de los primeros oncogenes retrovirales a finales
de los años 70, se ha producido un acelerado proceso
de descubrimientos y caracterizaciones de los meca-
nismos moleculares involucrados en la iniciación y
progresión del cáncer. En la actualidad, la visión glo-
bal que se tiene del cáncer, incluyendo su etiología y
los fundamentos farmacológicos de muchas terapias,
ha alcanzado hitos históricos. Así, la identifi-
cación molecular de los productos de genes
involucrados en el cáncer ha proporcio-
nado a los científicos el conocimiento
detallado de los procesos de señali-
zación que gobiernan la fisiología y
patología de la célula. El cáncer es
una enfermedad genética resultante
de la acumulación de mutaciones
específicas que regulan los procesos
celulares de proliferación, apopto-
sis, diferenciación, metabolismo e
interrelación con el entorno. En este
sentido, las alteraciones del equili-
brio proliferación-apoptosis que sufre
la célula cancerosa le proporcionan una
ventaja de supervivencia frente al resto .
Estos cambios suelen coincidir con células
menos diferenciadas que las de su entorno, su-
giriendo un papel de la célula troncal o célula madre
en el cáncer. Asimismo, estas alteraciones requieren
de importantes cambios en el metabolismo celular
para poder mantener la mayor capacidad prolifera-
tiva de la célula cancerosa. Finalmente, sabemos que
el entorno tisular juega un papel muy importante en
la evolución de la célula cancerosa. Del entorno de-
pende la capacidad de invasión y de metástasis de
la célula cancerosa. Es muy probable que la mayoría
103
de los tumores humanos dependan de células estro-
Etiopatogenia general

males que controlan y definen el nicho donde se lo- causantes del cáncer de cérvix, o el linfoma de
caliza el tumor. Además, en numerosas ocasiones las Burk.itt originado por el virus de Epstein-Barr),
células estromales también sufren cambios genéticos obesidad y otros desórdenes genéticos (como
que favorecen y conducen a la célula cancerosa a es- la ataxia telangiectasia). Es muy difícil evaluar
tadios más avanzados del tumor. Todo este conoci- cómo todos y cada uno de estos factores contri-
miento molecular ha permitido descubrir marcadores buyen a la etiología del cáncer, pero lo que hoy
tumorales con valor pronóstico y nuevas estrategias en día queda claro es que todos ellos convergen
terapéuticas, mejorando de este modo el resultado en la inestabilidad cromosómica y, finalmente,
clínico final. en alteraciones de las rutas de transducción de
señales (Fig. 11-1). Alteraciones en estas rutas
incapacitan a la célula para responder adecua-
ETIOLOGÍA DEL CÁNCER Y RUTAS damente a las señales que le llegan. Como resul-
DE TRANSDUCCIÓN DE SEÑALES tado de nuevas modificaciones en las rutas que
controlan la regulación de la transcripción, el
La etiología del cáncer es complicada y diversa y en metabolismo celular, la proliferación y la super-
ella intervienen numerosos factores que regulan el vivencia, se promueve la evolución de la célula
inicio de la oncogénesis y promueven la evolución dirigiéndola hacia la transformación neoplásica.
del tumor. Por tanto, resulta esencial comprender estos me-
canismos de señalización y cómo se alteran los
Algunos de estos factores que contribuyen al de-
diferentes tumores, para poder encontrar nuevas
sarrollo del cáncer lo hacen con distinto grado
estrategias terapéuticas más eficientes con las
de relevancia y tienen implicaciones fisiológicas,
que tratar específicamente a cada tipo de tumor.
alterando la señalización de moléculas que es-
tán directamente implicadas en el crecimiento y
la proliferación celular. Entre estos factores está BASES GENÉTICAS DEL CÁNCER
bien establecido que el cambio en los niveles de
expresión de proteínas activas como hormonas , El cáncer es el resultado de una acumulación sucesiva
factores de crecimiento y citocinas desempeñan de errores y alteraciones genéticas en el tiempo que
un importante papel en la etiología del cáncer. van evolucionando y transformando a la célula. Estos
Se conocen, también, alteraciones en las molé- cambios y alteraciones genéticas resultan en impor-
culas que transducen la señal de estas proteínas tantes cambios de la función y/o expresión de genes
activas (receptores transmembrana y receptores implicados en el cáncer, pudiendo ser de varios tipos:
nucleares) y que mimetizan la señal, incluso en
Alteraciones y mutaciones genéticas, que afectan
ausencia del estímulo.
directamente a la secuencia del ADN, alterando la
La herencia genética heredada constituye otro información contenida en él. El grado del daño al
importante factor que condiciona y predispone ADN puede ser muy variable, pudiendo ir desde
a la aparición del cáncer. El estudio de cánceres una simple sustitución de una base a traslocacio-
familiares ha llevado al descubrimiento de mu- nes cromosómicas. También ocurre por la pérdi-
taciones específicas en genes que aumentan en da de una base en el exón de un gen, con el con-
gran medida la probabilidad de desarrollar cán- siguiente cambio de pauta de lectura del mismo.
cer en aquellos parientes que las han heredado. Adicionalmente, los grandes cambios masivos
Muchas de estas mutaciones están asociadas a la como deleciones y amplificaciones de toda una
pérdida de expresión o de función del gen al que región cromosómica y las pérdidas o ganancias de
afectan. cromosomas enteros (aneuploidía) son también
La contribución de los factores ambientales al una consecuencia de la inestabilidad cromosó-
cáncer es difícil de evaluar, por tratarse de facto- mica y una característica de la célula cancerosa.
res en ocasiones ambiguos y difíciles de cuanti- Estas alteraciones provocan cambios, tanto direc-
ficar o de establecer los límites mínimos capaces ta como indirectamente, en la expresión conjunta
de desencadenar el cáncer. Sin embargo, se trata de múltiples genes, por lo que su estudio ha re-
de factores muy relevantes, que suelen acompa- querido de aproximaciones tecnológicas mucho
ñar nuestros hábitos sociales, y cuya acción en el más sofisticadas como los «microarrays » de ex-
tiempo favorece la aparición del cáncer. El estilo presión. El estudio de tumores mediante arrays
de vida, incluyendo el ejercicio físico, la dieta, de expresión ha supuesto una gran mejora en la
fumar y el estrés característico de la vida moder- clasificación molecular del tumor, proporcionan-
na son, entre otros, de gran trascendencia en el do nuevos marcadores diagnósticos, pronósticos
cáncer. y de respuesta a fármacos. El estudio de ganan-
Finalmente, hay otro grupo de factores relacio- cias, pérdidas y amplificaciones del DNA en una
nados con otras enfermedades, como infecciones muestra tumoral es hoy en día factible gracias a
104
virales (como los virus del papiloma humano los arrays de hibridación genómica comparativa
CAPÍTULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

Factores fisiológicos

Factores
relativos
a otras
patologías

Factores del entorno

Figura Etiología del cáncer y rutas de transducción de señales. La etiología está in fluenciada y depende,
en mayor o menor medida, de múltiples factores. Todos estos factores convergen en los procesos de inestabi lidad
cromosómica y, fina lmente, en alteraciones de las rutas de transducción de señales. En la figura se muestran
varias de las rutas de señalización más frecuentemente alteradas en cánceres, la ruta de los receptores tirosina
qui nasa, la ruta de la fosfoinositido 3-quinasa Pl3K/AKT, la ruta de Ras/ERK y la ruta de los receptores hormonales
como el receptor de estrógenos (ER). Estas rutas de señal ización regulan los procesos clave de la fisiología ce lul ar,
por lo que su alterac ión da lugar a pato logías como el cáncer.

(CGH-arrays). Adicionalmente, la microscopía la célula cancerosa es muy alta y es la causante


SKY (Spectral Karyotyping) y M-FISH (Multiplex de inestabilidad cromosómica, de reactivación
Fluorescence In Situ Hybridization) han supuesto de transposones y de la pérdida de imprinting
dos valiosas herramientas, complementarias entre (como IGF2R). Por tanto, en la célula cancero-
sí, para el cribado de aberraciones cromosómicas sa se produce una reorganización del patrón de
por su capacidad de identificar translocaciones metilación del ADN. De igual modo, los cambios
sutiles, complicadas reparaciones y puntos de en la estructura y organización de la cromatina
rotura cromosómicos. constituyen un importante modo de regulación
Las alteraciones epigenéticas son alteraciones de la expresión de genes que va más allá de la
que no dañan la integridad e información del propia patología tumoral , constituyendo la base
ADN, pero constituyen un mecanismo clave de muchos procesos fisiológicos como la diferen-
para el patrón de expresión de genes. Se trata, ciación celular y la embriogénesis.
por tanto, de mecanismos de regulación sin que La inestabilidad cromosómica es la causa del
ocurran cambios en la secuencia del ADN. La desarrollo del cáncer. Las mutaciones y altera-
principal modificación epigenética en humanos ciones cromosómicas que se encuentran asocia-
es la metilación de la citosina localizada en el das a tumores son muy variables en extensión
dinucleótido CpG. Existen zonas especialmente y son la consecuencia de lesiones promovidas
ricas en dinucleótidos CpG, llamadas islas CpG, por situaciones de estrés del entorno, tanto por
las cuales no están usualmente metiladas en cé- especies químicas reactivas como por radiacio-
lulas normales. Sin embargo, en células cance- nes ionizantes y estímulos prolongados, como
rosas las islas CpG de algunos genes supresores en el caso de procesos inflamatorios crónicos.
de tumores están hipermetiladas, impidiendo la Mediante un proceso selectivo en el que la cé-
expresión del gen en cuestión. El genoma huma- lula cancerosa adquiere ventajas sobre el resto
no contiene en torno al 6 % de metilaciones en de células de su entorno, esta pasa a sus células
regiones distintas a las islas CpG y, en condicio- hijas los daños genéticos adquiridos. El aumento
nes normales , interviene en la estabilidad cromo- de la inestabilidad cromosómica, el déficit de la
sómica así como en la represión de secuencias correcta reparación del ADN y, llegado el caso, la
parásitas del genoma (transposones, retrovirus) falta de activación de los mecanismos de control
adquiridos en la evolución de la especie humana. y muerte celular adecuados hacen progresar las
105
La hipometilación de cisteínas en el genoma de células hacia estadios más avanzados del tumor.
Etiopatogenia general

El estudio citogenético confirma que las altera- PROGRESIÓN TUMORAL


ciones de los tumores son siempre múltiples. Sin
embargo, en el laboratorio las células en cultivo se El crecimiento de un tumor es un proceso gradual
pueden transformar con un único oncogén, lo cual que , en el caso de tumores sólidos (carcinomas o
permite simplificar el problema y estudiar en detalle sarcomas, según si se originan en el epitelio o en el
la función de cada uno de los distintos oncogenes por tejido estro mal), culmina con la colonización de te-
separado. Adicionalmente, el estudio con modelos jidos distantes. En el caso de cánceres de la sangre
animales, como ratones modificados genéticamente, (leucemias), el proceso es similar, aunque desde el
principio las células no están restringidas en un solo
permite adquirir un visión mucho más fisiopatológica
órgano las fases de la progresión tumoral (Fig. 11-2)
de la enfermedad. En estos casos, la formación de tu-
son las siguientes: a) En la hiperplasia las células
mores in vivo requiere de un tiempo determinado , más han proliferado sin control dando lugar a un exceso
o menos variable, en el que la inestabilidad cromosó- celular en la misma región del tejido. La morfología
mica promovida por la introducción en el genoma de celular todavía se preserva. b) Nuevas lesiones gené-
un oncogén (normalmente sobreexpresando un proto- ticas hacen evolucionar las célula s de hiperplasia a
oncogén, como ocurre en ratones transgénicos), o por displasia. Aumenta la proliferación y cambia la mor-
la deleción de un gen supresor de tumores (ratones fología, tanto de las células en cuestión como en el
knock-out generados mediante tecnología de «gene resto del tejido. c) Nuevas alteraciones promueven el
targeting»), genera los suficientes cambios como para paso a carcinoma in situ. Las células presentan un
transformar una célula y desarrollar un tumor. claro can1bio de morfología (neoplásicas, tumorales

-
Primera mutación Mutaciones sucesivas Carcinoma in situ

Médula ósea
Cerebro Angiogén esis
Pulmones
Hígado
Digestivo

Carcinoma invasor

Figura La progresión tumoral. En la figura se muestran distintas fases de la evolución de un tumor só lido.
Una de las primeras ventajas adq uiridas es la mayor proliferación celul ar y la falta de respuesta a estímu los apoptó-
ticos. El resultado es la formación de una hiperplasia en esa misma región del tejido. Nuevas alteraciones aceleran
este proceso y hacen cambiar la morfología celular de modo que ni las cé lulas ni el tejido son ya normales. Estas
lesiones premalignas anteceden a la formación del carcinoma in situ, quedando el tumor localizado en una misma
región. Nuevas alterac iones permiten que las célul as migren y penetren en el estroma, diseminándose por el tejido
y dando lugar a un carcinoma invasivo. La producción en exceso de factores angiogénicos como VEGF provoca la
vascu larización en torno a las cé lul as cancerosas, abastec iendo de nutrientes y oxígeno a las cé lul as tumorales y
favoreciendo su proliferación. Finalmente, en un proceso conocido como metástasis, la cé lul a cancerosa accede al
torrente circulatorio y es transportada a otros tejidos, dando lugar a tumores secundarios.
CAPITULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

o cancerosas), pero siguen confinadas en el sitio y no rus del sarcoma de Rous (RSV), presente en una gran
han atravesado todavía la lámina basal, por lo que variedad de organismos. Este descubrimiento llevó
son cánceres curables mediante cirugía. El carcinoma a postular la hipótesis de que durante el proceso de
in situ es considerado como wrn neoplasia maligna evolución del virus, éste había incorporado un gen
debido a su potencial de convertirse en invasivo. d) celular normal, c-Src, a su genoma vírico, constituido
En el carcinoma invasivo las células han invadido por ARN. La capacidad oncogénica de v-Src en re-
el estroma de la periferia. Para ello, han tenido que lación a c-Src vendría dada por un doble efecto. En
adquirir nuevas propiedades, como la capacidad de primer lugar, la expresión de proteínas bajo el control
degradar la matriz extracelular de su entrono y migrar de los promotores virales es superior. En segundo lu-
entre su nuevo nicho. e) La angiogénesis ocurre me- gar, la secuencia de v-Src posee mutaciones puntuales
diante la secreción de factores de crecimiento espe- que son suficientes para producir malignidad. Estos
cíficos como VEGF, favoreciendo la vascularización estudios dieron lugar al concepto de protooncogén:
del tumor. Los nuevos vasos sanguíneos oxigenarán y genes que cumplen funciones normales en las células
aportarán más nutrientes al tumor. f) En la metástasis, pero que , cuando se alteran, pueden desencadenar la
algunas células cancerosas adquieren la propiedad de transformación maligna.
atravesar las paredes de los vasos sanguíneos alcan-
zando el torrente circulatorio. Mediante un proceso Los genes supresores de tumores son genes que
inverso atraviesan los vasos sanguíneos y comienzan controlan negativamente los mecanismos de proli-
a colonizar los tejidos distantes. Estos tejidos metas- feración y replicación del ADN y positivamente los
tásicos son los más agresivos y los causantes de la mecanismos de reparación del ADN. También hay
mayor parte de muertes por cáncer. genes supresores que regulan positivamente la muer-
te celular controlada o apoptosis. A diferencia de los
oncogenes, los genes supresores de tumores tienen
CLASIFICACIÓN DE LOS GENES IMPLICADOS un carácter recesivo, ya que basta con un solo alelo
EN EL CÁNCER funcional para que el punto de control que regulan
siga funcionando correctamente (Tabla 11-1). Es por
Desde un punto de vista funcional, los genes implica- ello que se requiere de una pérdida completa de su
dos en el cáncer se pueden clasificar en dos: función dentro de la célula para que se produzca la
Los oncogenes son genes que dominan el compor- transformación. El primer gen supresor de tumores
tamiento de la célula en la cual actúan, contribuyendo que se aisló fue Rb, un importante regulador negati-
a su transformación en una célula cancerosa. La ca- vo del ciclo celular procedente de un retinoblastoma
racterística fundamental es la de ganancia de función, humano. La mayoría de los factores genéticos here-
por lo que tienen un carácter dominante, bastando dados relativos a cánceres familiares son mutaciones
la mutación en un solo alelo para que se produzca en genes supresores de tumores. Una característica
la transformación celular. Históricanrnnte, el primer de muchos de estos genes supresores de tumores es
oncogén que se descubrió fue el oncogén v-Src del vi- que se asocian frecuentemente con cánceres de tejidos

Tabla Propiedades de los genes supresores de tumores y de los protooncogenes


Genes supresores Prot ooncogenes
Alelos mutados en cáncer Los dos alelos Un solo alelo
Transmisión a través de la línea Muy frecuente Muy infrecuente
germinal
Implicación de mutaciones Sí Sí
somáticas en el desarrollo tumoral

Función del alelo mutado Pérdida de función (alelo recesivo) Ganancia de función (alelo
dominante)
Efecto sobre el crecimiento celular Inhiben el crecimiento celular Promueven la proliferación celular

Predisposición al cáncer como Cáncer específico Muchos tipos de cáncer


resultado de la mutación
107
Etiopatogenia general

específicos. Por ejemplo, los genes BRCA1 y BRCA2 La sobreexpresión por amplificación o trasloca-
se asocian con cáncer de mama y ovario mientras que ción cromosómica de factores de transcripción
APC lo hace con el cáncer de colon. es muy común en el cáncer. Destacan c-MYC
Atendiendo a la función celular específica de aneo- en carcinoma de pulmón, N-MYC en neuro-
genes y genes supresores, estos se pueden clasificar en blastoma, JUN y FOS en sarcomas, el receptor
genes de señalización, de proliferación, de reparación de estrógenos (ER) en mama y el gen supresor
del ADN y de regulación de la apoptosis. PLZF en leucemia promielocítica aguda. Algu-
nos factores de transcripción necesitan de co-
Los genes de señalización codifican proteínas factores para promover el ciclo celular, como es
que regulan los procesos de transducción de se- el caso de TCF y su activador ~-catenina.
ñales , es decir, los mecanismos por los que las
Los genes de proliferación están a su vez regu-
células responden a las señales que les llegan del
lados por los genes de señalización e incluso
entorno, como hormonas y factores de crecimien-
participan molecularmente en el propio proceso
to. La señal se internaliza a través de receptores
de señalización, pero destacan por intervenir de
específicos y se tranduce (transmite) de unas
una forma mucho más directa en el control del
proteínas a otras mediante cambios conformacio-
ciclo celular. Todos los desórdenes proliferativos
nales como fosforilaciones y desfosforilaciones,
pasan por alteraciones en el control del ciclo ce-
etc. Finalmente, la señal llega hasta los factores
lular. La sobreexpresión de ciclinas y el silencia-
de transcripción que transcribirán nuevos ge-
miento de inhibidores de CDK son frecuentes en
nes para dar la respuesta adecuada al estímulo
el cáncer por mantener una mayor actividad de
inicial. La sobreexpresión de factores de creci-
CDK y favorecer la proliferación celular.
miento como IGF-I es una característica común
a muchos tumores. Estos factores actúan de for- Los genes de reparación del ADN y de mante-
ma auto y paracrina activando la proliferación nimiento de la integridad de los cromosomas,
celular. Otros factores como PDGFB (sis), TGFa como MLHl , BRCAl , BRCA2, MGMT, ATM y
y NRGl (neuregulina) están también sobreexpre- p53 (Fig. 11-3), entre otros. Todos ellos son genes
sados en distintos tipos de cánceres (Tabla 11-2). supresores de tumores.
Los genes de regulación de la apoptosis. A lo lar-
Dentro de los genes de señalización destaca la go del ciclo celular hay cuatro puntos de control
supeJfamilia de genes que codifican proteínas en los que la célula puede pararse en el ciclo y,
con actividad tirosina quinasa. La señalización en ocasiones en que el daño que ha sufrido la
por fosforilaciones es una característica común célula es irreparable, existen mecanismos que
a todos los seres vivos, pero la fosforilación en permiten estimular la apoptosis.
tirosinas está particularmente especializada en
organismos pluricelulares. Muchos receptores
transmembrana como HER2/neu, RET, MET y MECANISMOS MOLECULARES DE FÁRMACOS
TRK, poseen en su porción citosólica actividad DIRIGIDOS CONTRA DIANAS BIOLÓGICAS
tirosina quinasa. Su sobreexpresión o mutacio- IMPLICADAS EN CÁNCER
nes activantes dan lugar a la activación consti-
tutiva del receptor, favoreciendo la progresión Los nuevos descubrimientos en la biología celular del
tumoral. La activación constitutiva de quinasas cáncer ha proporcionado la oportunidad para el dise-
también puede ocurrir por traslocación cromo- ño de nuevos fármacos anti tumorales. El conocimien-
sómica y fusión con otra proteína, como es el to de las rutas de transducción de señales y los meca-
caso de BCR-ABL, implicada en leucemia mie- nismos moleculares alterados en cáncer ha permitido
loide crónica. La actividad quinasa de ABL es desarrollar fármacos específicos contra distintos tipos
fuertemente inhibida por imatinib, por lo que de tumores. Algunos de los fármacos más relevantes,
su administración ha tenido éxito en cánceres junto con su diana molecular y su modo de acción,
dependientes de estas quinasas. se enumeran en la Tabla 11-3. La inhibición de tales
Las proteínas G (con actividad GTPasa) como dianas moleculares reduce las ventajas proliferativas
K-RAS están habitualmente mutadas en cán- de la célula cancerosa y, en ocasiones, activa los me-
ceres de colon, tiroides y piel. Estas proteínas canismos moleculares de apoptosis que habían sido
regulan procesos de proliferación celular, la silenciados durante la evolución del tumor.
migración, la organización del citoesqueleto y
el tráfico intracelular. Se conocen mutaciones EPIDEMIOLOGÍA DEL CÁNCER
oncogénicas en RAS que le impiden hidrolizar
GTP y lo mantienen constitutivamente activo. Estudia la frecuencia y distribución del cáncer en-
Por otro lado, NFl es un regulador negativo de tre diferentes grupos de población y los factores que
la transducción de RAS, comportándose por influyen en sus variaciones. Permite, por una parte,
108
ello como un supresor tumoral. la identificación y cuantificación de los factores de
CAPíTULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

Tabla Algunos ejemplos de genes implicados en el cáncer


Protooncogén/ locus genético
Neoplasia Función celular
Supresor tumoral (Ensembl)
Factores de crecimiento
NRG1 Carcinoma de mama 8p12 Ligando de HER2/neu
TGFA Sobreexpresado en numerosos 2p13.3 Ligando de EGFR
carcinomas
Tirosina quinasas
EGFR (HER1) Carcinomas de células escamosas 7p12 Receptor de EGF
KIT Sarcoma 4q12 Receptor de MGF
NTRK1 Carcinoma de colon 1q23,1 Recepior de NGF
ERBB2 (HER2/NEU) Neuroblastoma, carcinoma de mama 17q12 Receptor de NRG1
RET Carcinoma de tiroide (Men2A, Men2Bl 10q11.21 Receptor ele GDNF
ABL (translocación con Leucemia mieloide crónica 9q34.12 (22q11.23) Tirosina quinasa
BCRi citosólica
K~RAS Carcinoma de tiroides, 12p12J GTPasa
melanoma
Citosólicos
MOS Sarcoma 8q12,1 Proteína quinasa (ser/
thr)
APC Carcinoma de colon y estómago 5q22.2 Ubicuitina ligasa
l:l-catenina
Factores de transcripción
MYC Leucemias, !infamas 8q24.21 Factor de transcripción
JUN (AP1) Sarcoma 1p32.1 Factor de transcripción
REL ( NFKB) Leucemia linfática 2p16.1 Factor de transcripción
TP53 (p53) Alterado en el 50% de todos los 17p13.1 Factor de transcripción
cánceres
Ciclo celular
R81 Retinoblastoma. mama. pulmón, 13q14,2 Represor transcripcional
osteosarcoma, vejiga de E2F e inhibidor de
ciclo
CDK1 B (p27''" 1) Desregulado en numerosos 12p13.1 Inhibe CDKs y bloquea
carcinomas en G1
Reparación del ADN y epigenética
BRCA 1 Carcinoma de mama, ovario 17q2l31 Reparación, punto
de control del ciclo
y mantenimiento de
estabilidad genómica
BRCA2 Carcinoma de mama 13q13, 1 Similar a BACA 1
ATM Ataxia telangíectasia 11q22,3 Proteína quinasa (serí
thr)
Reguladores de
apoptosis
DAPK1 Carcinoma de pulmón y colon 9q21.33 Proteína quinasa (ser/
thr)
BCL2 Leucemia, linfomas de célula B 18q21.33 lnhibeAPAF
Ciclo celular
RB1 Retinoblastoma, mama, pulmón, 13q14,2 Represor
osteosarcoma. vejiga transcripcional de
E2F e inhibidor de
ciclo
CDK18 (p27"'') Desregulado en numerosos 12p13.1 Inhibe CDKs y bloquea
carcinomas en G1

Continúa ~
Etiopatogenia general

Tabla Algunos ejemplos de genes implicados en el cáncer (Continuación)


Protooncogén/ Locus genético
Neoplasia Función celular
Supresor tumoral (Ensembl)
Reparación del ADN y epigenética
BRCA 1 Carcinoma de mama, ovario 17q21.31 Reparación , punto de
control del ciclo y
mantenimiento de
estabilidad genómica
BRCA2 Carcinoma de mama 13q13.1 Similar a BRCA 1
ATM Ataxia telangiectasia 11q22.3 Proteína quinasa (ser/thr)
Reguladores de apoptosis
DAPK1 Carcinoma de pulmón y colon 9q21.33 Proteína quinasa (ser/
thr)
BCL2 Leucemia, linfomas de célula B 18q21.33 lnhibeAPAF

Figura Control del ciclo celular y apoptosis por p53. Es considerado el gen guardi án de la integridad del
genoma por activarse tras situaciones de daño al AD N y de estrés celul ar (por ejempl o hi poxia, déficit de nu-
tri entes y acortami ento de te lómeros) y transcri bir la expresión de genes implicados en bl oqueo del ciclo ce lul ar
(como p2 1CIPl, GADD45, 14-3-3 cr y Reprimo-RPRM) y en apoptos is (FAS, BAX, PIDO, NOXA, PUMA y p53AIP1 ).
Su form a funcional es un homotetrámero capaz de interaccionar co n secuencias co nsenso de ADN loca li zadas
en las regiones promoto ras de genes di ana a los que regul a su expres ión. El hecho de que más del 50% de los
cá nceres humanos ti enen alteraciones en p53, revela la gran importancia de p53 como supresor tumoral. Diver-
sas aprox im aciones terapéuti cas se han centrado en restaurar la función transcripcional de p53 para provoca r de
manera se lectiva la apoptos is mas iva de las cé lul as neopl ás icas .
CAPÍTULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

Tabla Mecanismos moleculares de algunos fármacos antitumorales

Diana Indicación terapéutica


Fármaco Mecanismo molecular
biológica (neoplasia)
Tamoxifeno Receptor de Modulador selectivo del receptor de estrógenos Mama.
estrógenos (SERM). Impide la unión de estrógenos a ER inhibiendo
(ER) el crecimiento de tumores hormonodependientes.
Trastuzumab EGFR2 Anticuerpo contra el dominio extracelular de EGFR2, Mama y otros que
induciendo citotoxicidad celular mediada por sobreexpresan EGFR2.
anticuerpos.
Bevacizumab VEGF Anticuerpo contra el factor de crecimiento del endotelio Glioblastoma y cánceres
vascular (VEGF). Se une a VEGF, impidiendo su metastásicos de mama
unión al receptor e inhibiendo el desarrollo de vasos HER2 negativo, colon,
sanguíneos en torno al tumor. riñón y pulmón de célula no
pequeña.
Rituximab CD20 Anticuerpo contra el antígeno CD20, específico Leucemia linfocítica crónica
de linfocitos B. Después de su unión produce una y linfoma no Hodgkin de
respuesta inmunológica citotóxica contra las células célula B.
CD20 positivas.
lmatinib Abl, KITy Se introduce en el bolsillo de unión de ATP localizado Leucemias mieloide
PDGFR a en el dominio catalítico e inhibe la actividad tirosina crónica, eosinofílica crónica
yp quinasa de Abl y de los receptores KIT y PDGFR a y y linfoblástica aguda; tumor
p. Disminuye la proliferación y aumenta la apoptosis estroma! gastrointestinal,
de células Philadelphia positivas y de células con (GIST) síndromes
alteraciones de KIT y PDGFR oop. mieloproliferativos/
mielodisplásicos.
Aldesleukin IL-2R Análogo recombinante de interleucina 2 (IL-2). Se Cáncer de riñón y
une al receptor de IL-2 y activa rutas de señales melanoma metastásico.
implicadas en la proliferación de linfocitos T, aumenta
la citotoxicidad mediada por linfocitos e induce la
regresión tumoral mediada por linfocitos Ten algunos
tipos de tumores.

riesgo individual o ambiental y, por otra , sirve para N. º de casos de cáncer por año x
establecer medidas de prevención, o aportar conoci- x 100 000 habitantes
mientos en los mecanismos de la carcinogénesis.
Población total viva

EPIDEMIOLOGÍA DESCRIPTIVA La tasa de mortalidad se define como:


La aproximación a la epidemiología del cáncer consis-
te, en primer lugar, en la descripción de su frecuencia N. º de pacientes fallecidos en un año x
en términos de distribución geográfica, edad y sexo x 100 000 habitantes
de los pacientes afectados , así como de cualquier
cambio de incidencia de la enfermedad en el tiempo. Población total viva
Las medidas de frecuencia más utilizadas son: in-
cidencia, prevalencia y mortalidad. Estas medidas Las causas de muerte se recogen, por lo general , de
se basan en tres datos fundamentales: a) número de los certificados de defunción y dependen en gran me-
individuos afectados (pacientes con determinada en- dida de factores demográficos y de law disponibilidad
fermedad vivos en un momento determinado; casos de métodos diagnósticos.
nuevos; pacientes fallecidos); b) población total en En los estudios epidemiológicos, la tasa de morta-
riesgo; y c) período de tiempo de observación. lidad identifica los cánceres de mal pronóstico. Por
La tasa de incidencia es una medida directa de la otro lado, observando su evolución en el tiempo se
posibilidad de desarrollo de una neoplasia, y se ex- puede evaluar el impacto de las medidas de preven-
presa como: ción y tratamiento en la población general.
SE 10 Etiopatogenia general

Pulmón y bronquios

90 90

Estómago
Pulmón y b ronquios

20 20

10 10

o o
~ ~ *~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~
Año de la muerte

Fig ura Mortal idad según la loca lización de l Figura Mortalidad según la localización de l
cáncer ajustada al tiempo en hombres, 1930-2005 cáncer ajustada al tiempo entre mujeres, 1930-2005
(American Cancer Society). (American Cancer Society).

SÍNDROME TUMORAL. EXTENSIÓN En ocasiones aparecen síntomas comunes a otras


DE LOS TUMORES enfermedades. La existencia de disfonía, tos ,
diarrea o estreñimiento en los cánceres colorrec-
tales pueden si se prolongan en el tiempo hacer
SÍNDROME TUMORAL sospechar cáncer.
El término cáncer comprende una gran diversidad Síntomas que derivan de la colusión de un con-
de enfermedades que afectan a cualquier órgano o ducto: en los bronquios conduce a la aparición
sistema. La proliferación es la alteración más carac- de tos, disminuye la eliminación ciliar de las
terística de las células cancerosas aberrantes, pero secreciones y puede originar bronconeumonía y
esta puede ser rápida o lenta. Estas células crecen con atelectasia; en los tumores del esófago aparece
independencia de los mecanismos que controlan el disfagia; en los tumores gástricos la obstrucción
crecimiento de las células normales y en ello se dife- no suele ser completa pero se altera la motilidad
rencian de la hiperplasia, la hipertrofia y los tumores gástrica y se origina una rápida saciedad con
benignos. anorexia y náuseas; en los tumores colorrectales
Las manifestaciones clínicas de los cánceres pue- aparece estreñimiento y dolor abdominal, la obs-
den ser múltiples, variadas, o bien asintomáticas du- trucción de la vía biliar cursa con ictericia, y la
rante un tiempo más o menos prolongado. En ellas obstrucción ureteral producida por masas retro-
influyen diversos factores: tipo de alteraciones bioló- peritoneales o por tumores de vejiga da lugar a
gicas, etiología, características de la alteración tisular hidronefrosis; la afectación de la uretra deriva de
y de las substancias liberadas por las células cance- lesiones propias o de la próstata y ocasiona pola-
rosas, efecto de la masa tumoral, metástasis, órgano quiuria y nicturia. Los cuadros oclusivos pueden
original del cáncer y síndromes paraneoplásicos. cursar con retención de fluidos que facilitan la
aparición de infecciones (p. ej. , colangitis en tu-
mores de la vía biliar).
EFECTO MASA, LESIÓN TISULAR Y ÓRGANO
PRIMARIAMENTE AFECTO POR EL CÁNCER Síntomas que derivan de un efecto masa: pue-
den detectarse por palpación o por pruebas
El análisis de los síntomas y signos producidos por radiológicas en tumores superficiales como el
el cáncer deben tener como punto de partida las ca- cáncer de mama o bien detectar ganglios au-
racterísticas del órgano afecto inicialmente, el tipo mentados de tamaño como consecuencia de un
de lesión y en su caso las metástasis. Se denomina tumor del sistema linfático o como extensión
cáncer mestatásico de primario desconocido aquella regional de cánceres de cabeza y cuello. La com-
situación en la que se detectan lesiones propias de un presión del mediastino por un linfoma puede
cáncer (p. ej. , metástasis hepáticas) sin poder encon- ocasionar disnea, derrame pleural, síndrome
trar el tumor primario. de vena cava superior y afectación de la cade-
Los síntomas y signos del cáncer pueden adoptar na simpática con síndrome de Horner. También
114
las siguientes características: presentan una masa palpable los tumores de te-
CAPÍTULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

Tabla Síndromes paraneoplásicos por producción ectópica de hormonas

Síndrome paraneoplásico Hormona ectópica Tumores asociados


Frecuentes

Hipercalcemia maligna PTHrP Carcinoma epidermoide (cabeza y cuello,


1 ,25 hidroxívítamina D pulmón) mama, riñón.
PTH (rara) Liníomas, pulmón, ovario, renal.
PGE2 (rara¡

Secreción inapropiada de hormona Vasopresina Pulmón (epídermoide y células pequeñas)


antidiurética gastrointestinal. genitourinario, ovario,

Síndrome de Cusl1ing ACTH Pulmón (célula pequeña, carcinoide bronquial.


CRH adenocarcinoma, epidermoideJ, timo,
páncreas, carcinoma medular de tiroides,
GIP, LH, hCG

Menos frecuentes

Hipoglucemia IGF 11 Sarcomas, hígado. adrenal, gastrointestinal.


Insulina riñón, próstata.
Cérvix (carcinoma de células pequeñas).

Feminizacion masculina hCG Testículo (embrionario, coríocarcinomas¡,


pulmón, hepático, páncreas

Diarrea o hípermotílidad intestinal Calcíionina Pulmón, colon, mama, carcinoma medular


VIP tiroides, VIPoma, feocromocitoma.

PTHrP: hormona paratíroidea relacionada con proteína: PTH: hormona paratiroidea; PGE 2: prostaglandina E 2;
ACTH: hormona adrenocorticoiropa: CRH: hormona liberadora de corticotrofina: LH: hormona luteinizante; hCG:
gonadotropina coriónica; factor de crecimiento IGF 11: insulina-líke; GIP: péptido inhibidor gástrico: VIP: péptidos
intestinal vasoactivo.

quidos como la sangrn, ol ospulo, la oriirn o ol líquitlo nrndacks n¡:opliísicas, \alorm:iún dul pro1Híslico v la
¡:nl'al orraq uí< leo, monitorización dn la f'11fornwdnd, os decir, estudio dn
Los híornan:arlows tícllen su uplíeución cm ni diag- la progresión, rncurrenciu ,. rnspucsla al lrntmuicmío
nóstico dtd ciÍnccr. en la c:lasificación ele las 011for- Tabl;1 1 t-7).

Tabla Signos hematológicos paraneoplásicos asociados a cáncer

Alteración
Proteína Cáncer asociado
hematológica

Eritrocitosis Eritropoyetína Riñón. hepatocarcinoma, hemangíoblastoma del cerebelo.

Granulocitosis G-CSF, GM-CSF Pulmón, gastrointestinal. ovario, genitourinario, enfermedad de


IL-6 Hodgkin.

Trombocitosis IL-6 Pulmón. gastrointestinal, mama, ovario. linfoma.

Eosinofilia IL-5 Linfoma, leucemia. pulmón.

Trombosis. Proteínas Pulmón. páncreas, gastrointesiinai, mama, genitourinario, ovario,


hemorragia actívadoras de la próstata, linfoma.
coagulación o de
la fibrinólisis.

117
Etiopatogenia general

Tabla Síndromes paraneoplásicos neurológicos

Síndromes cerebrales y cerebelosos


• Encefalitis focal
• Degeneración cerebelosa paraneoplásica
• Opsoclonus y mioclonus

Síndromes de la médula espinal

• Mielopatía subaguda necrotizante


• Disfunción de neurona motora
• Mielitis

Síndrome del ganglio dorsal


• Neuropatía sensorial

Niveles múltiples de alteración del sistema nervioso


• Encefalomielitis y neuropatía sensorial, disfunción autonómica

Síndromes por afectación de nervios periféricos


Síndromes por alteración de la unión neuromuscular
• Síndrome miasténico de Lambert-Eaton
• Míastenía gravís

Síndromes musculares
• Polimiositis
• Miopalía aguda necrotizante

Síndromes que afectan el sistema visual


• Retinopatía
• Uveítis

Tabla Marcadores tumorales según localización y características

Tipo de cáncer Biomarcador Características


Tumores germinales: HCG Producido por la placenta en la enfermedad trofoblástica
enfermedad trofoblástica Alfa-fetoproteína Muy relacionado con la evolución del tumor. RC y supervivencia
y tumores testiculares
Coriocarcinoma, carcinoma embrionario y teratocarcinoma
de células embrionarias
testicular

Cáncer de mama ER y PR, HER2 Relación con pronóstico y tratamiento con anticuerpos anti-
CA 15.3, HER2

Carcinoma colorrectal CEA Elevado en varias enfermedades. No recomendado para el


diagnóstico precoz
Elevación en las recaídas

Cáncer de pulmón p53, p21, K-ras Probable valor pronóstico

Cáncer de ovario CA 125 No es útil para un diagnóstico precoz. Indicado en el


seguimiento de la enfermedad y respuesta terapéutica

Cáncer de próstata PSA Útil para el diagnóstico precoz y monitorizar la enfermedad


CAPITULO 11 Etiopatogenia del cáncer y síndrome tumoral

Tabla Clasificación TNM de los adenocarcinomas colorrectales

Tumor primario

Tx. No es posible valorar el tumor primario


TO. No existen indicios de tumor primario
Tis. Carcinoma in situ (intraepitelial) o intramucoso
T1. El tumor invade la submucosa
T2. El tumor invade la muscular propia
T3. El tumor sobrepasa la muscular propia e invade la subserosa o el tejido pericólico o perirrectal no recubierto de
peritoneo
T4. El tumor invade directamente otros órganos o estructuras adyacentes y/o perfora el peritoneo visceral
Ganglios linfáticos regionales

Nx. Los ganglios linfáticos no pueden ser valorados


NO. Ausencia de metástasis ganglionares regionales
N1. Metástasis en 1 a 3 ganglios linfáticos
N2. Metástasis en 4 o más ganglios linfáticos
Metástasis a distancia

Mx. Las metástasis a distancia no pueden ser valoradas


MO. Ausencia de metástasis a distancia
M1. Metástasis a distancia
Agrupamiento en estadios (AJCC)

Estadio T N M MAC (1) SG (2)


o Tis NO MO 100%
T1 NO MO A 95%
T2 NO MO B1 90%
IIA T3 NO MO B2 85%
11B T4 NO MO B3 72%
IIIA T1-T2 N1 MO C1 64%
111B T3-T4 N1 MO C2/C3 55%
IIIC CualquierT N2 MO C1/C2/C3 44%
IV CualquierT Cualquier N M1 D 5%
(1) Clasificación modificada de Astler-Coller.
(2) Supervivencia global a 5 años.

DIAGNÓSTICO DE EXTENSIÓN grado de extensión local (T}, localización y extensión


DE LOS TUMORES de las metástasis ganglionares regionales (N) y metás-
tasis a distancia (M]. Una vez establecido el TNM en
La evolución de un paciente con cáncer incluye una un determinado tumor, se procede a la clasificación
serie de pasos que van desde la confirmación histo- por estadios. La Tabla 11-8, presenta como ejemplo,
patológica, que establece propiamente el diagnóstico, la clasificación del cáncer colorrectal por estadios ,
hasta la selección de una estrategia terapéutica ade- con los criterios TNM de la AJCC (American Joint
cuada. La determinación del estadio de un paciente Committee on Cancer). La clasificación según el es-
con cáncer implica el estudio de la extensión anató- tadio TNM ayuda a determinar el tipo de tratamiento
mica del tumor a nivel local y regional, así como la y el pronóstico de un determinado paciente; además ,
detección de metástasis a distancia. facilita la comunicación entre los profesionales , so-
Para la mayoría de los tumores existe un acuerdo bre todo en lo referente a unificar criterios o agrupar
internacional acerca de su clasificación, según una pacientes de similares características en el estudio
serie de criterios validados. Estos son: órgano de ori- de nuevos factores pronósticos o nuevas estrategias
gen y tipo histológico, tamaño del tumor primitivo y terapéuticas.
-112
El sistema inmunitario
en la salud
y en la enfermedad
Jesús Merino Pérez, Jesús González Macías

FUNCIONES DEL SISTEMA INMUNITARIO


Denominamos sistema inmunitario (SI) al conjunto
de células y moléculas encargadas de preservar la in-
tegridad del cuerpo humano frente a las agresiones
del microentorno. La activación de estas células, en
respuesta a un potencial agresor, se conoce como res-
puesta inmunitaria (RI) y en ella participan directa-
mente todas las células de la sangre además de otras
células de los tejidos, como los mastocitos, las cé-
lulas dendríticas y los distintos tipos de ma-
crófagos tisulares (células de Kuppfer, mi-
croglía, etc). Todas estas células tienen
receptores moleculares especializados
en la captación de sefiales de peligro
del entorno. La unión de estos recep-
tores a sus dianas inicia diferentes
mecanismos efectores cuyo objetivo
es anular y destruir al posible agente
agresor. Dotadas de gran movilidad,
estas células se distribuyen por todo
el organismo, aunque se concentran
en una serie de bases logísticas, los
órganos linfoides, que facilitan la in-
teracción entre los distintos tipos celu-
lares para su ulterior activación.
La naturaleza y distribución de los
receptores de las células inmunocompe-
tentes configuran dos tipos de estrategias en
la forma de actuar de la RI, diferentes pero al mis-
mo tiempo complementarias: la RI natural o innata
(RII) y la respuesta inmune adquirida o adaptativa
(RIA) (Fig. 12-1). A excepción de los linfocitos, los
demás tipos celulares tienen receptores para el com-
plemento y para el fragmento Fe de las inmunoglo-
bulinas que facilitan la captación de células diana y
agregados moleculares para su lisis o su fagocitosis.
Además, en los últimos afios se ha visto que estas cé-
lulas reconocen directamente patrones moleculares
CAPÍTULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

Células poliespecíficas, pero


iguales entre sí
Respu esta
inmun e
Gran potencial biológico
innata

No son autorreactivas

Los linfocitos son específicos de un antígeno (clones), pero su repertorio


antigénico es muy diverso

Poco eficientes en Expansión Memoria


el 1." contacto clonal inmunológica
Respu esta
inmun e
adapta tiva
Representan un mecanismo de seguridad frente a la capacidad mutagénica
de los microorganismos

La frecuencia de elementos autorreact ivos es muy alta

Figura La respuesta inmune (R I) se compone de dos estrategias: innata y adaptativa. Ver texto.
Ab reviatu ras: Mf: macrófago; DC: célu la dendrítica .

asociados a los patógenos (Pathogen-Associated Mo- de los genes de las regiones variables de sus recepto-
lecular Pattern o PAMP: RNA viral, DNA bacteriano, res: las inmunoglobulinas o el receptor antigénico de
lipopolisacáridos, carbohidratos de las paredes bac- las células T (TCR) . El objetivo de tanta variabilidad
terianas como la manosa, etc.) o patrones asociados es disponer de elementos capaces de reconocer cual-
a señales de peligro (Damage-Associated Molecular quier antígeno (Ag) posible, cubriendo así los vacíos
Pattern o DAMPs: proteínas de choque térmico , flu- dejados por los receptores de la RII para el recono-
jos de potasio, cristales de urato o de colesterol, etc.). cimiento de patógenos. Pero este planteamiento es-
Cada célula de la RII expresa una amplia variedad de tratégico tiene dos debilidades. La primera es la baja
receptores para estos patrones (Pattern Recognition eficacia de la RIA en un primer contacto con un Ag,
Receptors o PRR), muchos de los cuales coinciden dada la ínfima frecuencia de elementos capaces de
en células de distinto tipo. Por ello decimos que es- reconocerle. Sin embargo, la RIA tiene una propie-
tas células son poliespecíficas. Los PRR se codifican dad peculiar que compensa este defecto: la expansión
en la línea germinal (naturales) y se expresan des- clona] de los linfocitos específicos para el Ag. De esta
de el nacimiento (innatos) independientemente de forma la RIA se «adapta» al nuevo antígeno y cada vez
un contacto previo con el agente agresor. Todo ello que vuelva a encontrárselo responde de forma mu-
determina que las células de la RII actúen siempre cho más rápida y potente (memoria inmunológica).
con la máxima eficacia, sin tener el cuenta contactos La segunda debilidad de un repertorio antigénico tan
previos con dicho agente. Todas estas moléculas (li- variable y generado al azar es el elevado porcentaje
gandos y receptores) juegan un papel relevante en la de linfocitos capaces de reconocer Ag propios (auto-
activación de la inflamación, como se describe en el rreactividad). Este riesgo real obliga al SI a emplear
capítulo correspondiente (Cap. 9). mecanismos sofisticados de regulación que eviten el
El hecho diferencial de la RIA es que cada linfocito desarrollo de enfermedades autoinmunes.
T o B tiene un receptor particular, de forma que en La RIA y la RII son dos planteamientos estratégicos
una célula determinada todos los receptores para el de la RI, con múltiples puntos de conexión y, por lo
antígeno son idénticos (especificidad). Sin embargo, tanto, estrechamente dependientes el uno del otro.
el conjunto de linfocitos de un individuo tiene un Dotadas de un alto grado de plasticidad, permiten que
repertorio antigénico con un grado de variabilidad la RI se adapte a cada situación a la que se enfrenta.
estimado en 10 14 (Fig. 12-1). Este altísimo grado de Así, cuando las células de la RII captan el peligro me-
variabilidad se logra mediante recombinación al azar diante sus PRR y se activan, la función señalizadora
-:rrr
Etiopatogenia general

de los PRR, además de promover fagocitosis (polimor- focitos B al interior de los centros germinales de los
fonucleares, macrófagos) o citotoxicidad (eosinófilos, órganos linfoides secundarios. Estas células secretan
células natural killer), potencia la presentación de IL-21 y expresan la molécula coestimuladora ICOS,
antígenos por moléculas MHC, permitiendo la acti- pudiendo ser relevantes en la maduración de la afini-
vación de los linfocitos T-CD4+ (conexión RII/RIA), dad de las células B por el Ag y en su diferenciación a
y moldea la diferenciación de estos linfocitos a dis- células plasmáticas o a células B memoria.
tintos fenotipos (THl, TH2, TH17 , T-reguladores) me- Mención aparte merecen dos tipos celulares de lin-
diante la secreción de diferentes citocinas. A su vez, focitos con una función a medio camino entre la RII
la activación de la RIA es crítica para que las células y la RIA. Son los denominados linfocitos Tyó y lin-
de la RII alcancen la máxima eficiencia en la respues- focitos B-1 , para diferenciarlos de los linfocitos Ta~
ta inmunitaria. Así, los anticuerpos (Ac) producidos y B (B-2) convencionales. Ambos tipos celulares no
por los linfocitos B actúan como señuelos para marcar tienen una especificidad antigénica tan fina como las
de forma muy específica dianas celulares o molecu- células T y B convencionales. Los linfocitos Ty8 son
lares que deben ser eliminados; de esta forma los Ac células citotóxicas que se localizan fundamentalmen-
conducen selectivamente a los elementos efectores te en la piel las mucosas , mientras que los B-1 tienen
de la RII como el sistema del complemento, las célu- un asentamiento preferencial en las cavidades peri-
las fagocíticas o las células citotóxicas (células NK, toneal y pleural, y se las responsabiliza de la produc-
eosinófilos , basófilos) que se encargan de eliminar ción de los denominados anticuerpos naturales IgM.
al potencial agente agresor. Por otro lado, las células La frecuencia de estos dos tipos celulares en los ór-
T-CD4+ coordinan la logística de la respuesta del Si ganos linfoides secundarios es muy baja. Su papel de
adoptando distintos patrones de actuación en función vigilancia inmunológica está más próximo al llevado
del agente que desencadena la respuesta, general- a cabo por los elementos de la RII, sirviendo como una
mente un microorganismo. Así, se han establecido al primera línea de linfocitos ante antígenos que nunca
menos tres tipos de células CD4+efectoras (Fig. 12-2): han estado en un organismo.
a) las células TH1 , especializadas en la respuesta fren- Como se ha mencionado previamente, las células
te a virus y patógenos intracelulares, producen IFNy e de la RI tienen dos propiedades que las diferencian
IL-2 que activan a macrófagos , células NK y linfocitos del resto de células del organismo: movilidad, para
CD8+; b) las células TH2 , que responden frente a toxi- desplazarse a cualquier localización anatómica, y
nas y parásitos de gran tanrnño , producen IL-4, IL-5 e plasticidad, para adaptarse a situaciones muy diver-
IL-13 que activan a linfocitos B, eosinófilos, basófilos sas tanto de tipo efector como regulador. Si al mismo
y mastocitos; y c) las células TH17, implicadas en la tiempo consideramos que cada una de estas células
respuesta frente a bacterias extracelulares y hongos tiene gran autonomía, pero al mismo tiempo su acti-
producen IL-6, G-CSF e IL-17 , que activan a las cé- vidad es enormemente dependiente de las interaccio-
lulas fagocíticas como los neutrófilos. Se adminte un nes con otras células de la Ri , es obvio que tiene que
cuarto tipo de células TH que acompañan a los lin- existir un complejo sistema de comunicación entre

Agente
estimul ador [
1.' y 2.' señal
+
1-- Gen
implicado
-- Receptor
inducido
-- Fenotipo
CD4
Citocinas
secretadas

Bacterias
intracelulares
y virus
IL-1 2 (CD)
IFNy (NK)

-- IL-1 2Rb2
IL-18R
0- IFN-y
LTa

-- 0-
IL-4,
IL-5,
IL-4 (NKT,
Helmintos IL-13,
Eos, Bas)
IL-25

-- (8)-
IL-17A,
Bacterias TGF~ (Tregs) IL-17B,
IL-23R
extracelulares + IL-6,
IL-18R
y hongos IL-6 (LT, Mo) G-CSF

Figura El fenotipo de las células CD 4 + tras el encuentro con el Ag está condicionado por el tipo de pató-
~
geno.
CAPITULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

todas ellas. El sistema de comunicación por exce- citotóxicos T-CDa+J, la célula T CD4+ ha tenido que
lencia es una amplia variedad de moléculas solubles activarse antes, y para ello precisa también otras se-
producidas por los leucocitos (interleucinas, o en un ñales coestimuladoras. La activación del linfocito T
sentido más amplio, citocinas), capaces de activar o es aún más compleja que la del linfocito B. En primer
inhibir a otras células o incluso de ejercer un efecto de lugar no puede reconocer antígenos solubles, sino
atracción química (quimiocinas). Además, las células péptidos acoplados a moléculas del complejo mayor
inmunitarias poseen en su membrana citoplasmática de histocompatibilidad (MHC, o HLA en humanos).
un amplio equipamiento de moléculas coestimulado- En el caso de la célula CD4 estos péptidos son presen-
ras, moléculas presentadoras de antígenos, moléculas tados por un tipo especial de células, denominadas
de adhesión intercelular, receptores para quimiocinas por ello «células presentadoras de Ag» (APC). Pero
y citocinas y moléculas efectoras inductoras de acti- estas células tienen que estar activadas, expresando
vación, inhibición o incluso muerte en otras células. así las moléculas B-7.1 (CD80) y/o B-7.2 (CD86), que
El sistema inmunitario debe tratar de evitar dañar son ligandos del CD28, expresado constitutivamen-
lo propio además de combatir a los agentes extraños. te en el linfocito T-CD4, quien proporciona a este las
El control de la tolerancia de lo propio se realiza señales coestimuladoras necesarias. También aquí es
esencialmente a tres niveles. El primero de ellos es la importante la presencia de citocinas ·producidas por
eliminación clona] en los órganos linfoides primarios las APC y otras células de la RII. En ausencia de estas
(OLP) de los linfocitos B y T que reconocen con alta señales coestimuladoras el linfocito T se convierte en
afinidad autoantígenos, al menos aquellos mas ubi- una célula anérgica. Pues bien: la ausencia de señales
cuos. Este mecanismo opera en estadios madurativos de peligro (patógenos u otras señales de estrés) man-
en los que los linfocitos no son aún células inmuno- tiene «en reposo » a las células de la RII (entre ellas
competentes, en el proceso conocido como «selección las APC) y ello controla la activación de los linfocitos
negativa». Así, los linfocitos B IgM+IgD- o los linfoci- potencialmente autorreactivos.
tos T CD4+Coa+ (todos ellos inmaduros), cuyos recep- El tercer nivel es probablemente el más sofisticado
tores antigénicos interaccionan con Ag presentes en la y se basa en la existencia de células especializadas
médula ósea o el timo, respectivamente, mueren por en inhibir otras células potencialmente efectoras.
apoptosis. No obstante, este proceso no puede asegu- Son las denominadas células reguladoras. Se han ca-
rar la eliminación de todos los linfocitos autorreac- racterizado fenotipos reguladores en poblaciones de
tivos, porque hay autoantígenos que no se expresan células NK, linfocitos By ambos tipos de linfocitos T,
en los OLP. Esto lleva a la necesidad de mecanismos aunque las más estudiadas y mejor conocidas son las
adicionales de control de la autorreactividad que ope- células T-CD4 reguladoras (T-regs). En este contexto
ren en la periferia. se distinguen dos tipos: las T-regs naturales, genera-
El segundo nivel de control estriba en la necesidad das en el timo a partir de timocitos con especificidad
de que se den simultáneamente varias señales coesti- autorreactiva que no sucumben en el proceso de se-
muladoras para la activación de las células inmuno- lección antes mencionado, y las T-regs adaptativas,
competentes. Efectivamente, las células de la RI ne- que se producen en la periferia tras un encuentro con
cesitan señales coestimuladoras que complementen el antígeno en ausencia de señales coestimuladoras,
al propio reconocimiento del Ag con su receptor an- generalmente en presencia de altas concentraciones
tigénico. Este mecanismo opera sobre todo en los lin- de citocinas inhibidoras (IL-10 o TGF-~). Estas células
focitos, por ser las células con mayor capacidad auto- tienen una serie de marcadores fenotípicos de mem-
rreactiva. Por un lado, el linfocito B necesita diversas brana, como CD25, CTLA-4 o GITR, aunque ninguno
señales de ayuda de linfocitos T, normalmente aque- de ellos es exclusivo de las T-regs, dado que también
llos que están reconociendo los antígenos presentados pueden aparecer en algún momento tras la activación
por esa célula B. La señal coestimuladora esencial la de las células T efectoras. El marcador más fiable de
proporciona la molécula CD40, que el linfocito B lle- célula T-reg es Fox-P3, un factor de transcripción in-
va en su membrana (expresión constitutiva), cuando tracelular, necesario para que se desarrolle el fenotipo
interacciona con la molécula CD40L que el linfocito T T-reg en una célula T.
expresa solo cuando se activa (expresión inducible).
Pero no es la única. En el interior del centro germinal,
la molécula ICOS del linfocito T interacciona con la ORGANIZACIÓN DE LA RESPUESTA INMUNE
molécula B7H de la célula B para que se diferencie a EN LA INFECCIÓN
célula B memoria o a célula plasmática, con la ayu-
da adicional de diferentes citocinas que modulan la El sistema inmunitario tiene como misión esencial
subclase de Ig que esa célula va a producir si termina preservar el medio interno de la invasión por mi-
su maduración. En ausencia de estas ayudas la célula croorganismos. La penetración de agentes infecciosos
B no se activa y entra en estado de «estupor» (aner- en el interior del cuerpo está limitada por distintas
gia) en el que es refractaria a nuevas señales activa- barreras físicas y químicas de la superficie externa
doras. Por otra parte, para poder ayudar al linfocito (cutánea) o interna (mucosa). Cuando un microorga-
B o a otras células efectoras (por ejemplo linfocitos nismo traspasa esta barrera inespecífica, el sistema
S CI Etiopatogenia general

inmunitario constituye el principal sistema de reco- o RNA) . Por diferentes mecanismos, el virus utiliza
nocimiento y de respuesta que conduce a la muerte la maquinaria de replicación y de transcripción ge-
de aquel y a la inhibición funcional de sus productos nética de la célula infectada y la pone a su servicio
patogénicos. Por tanto, las alteraciones inmunológi- para que fabrique los componentes estructurales de
cas pueden incrementar la incidencia y morbilidad nuevos virus. Desde el punto de vista de la logística
de las infecciones. de la respuesta inmune este hecho tiene un signifi-
Como se viene insistiendo en estos capítulos dedi- cado: los antígenos virales van a ser considerados a
cados a la respuesta inmunitaria, los elementos de la todos los efectos antígenos endógenos de la célula
RII y de la RIA se coordinan estrechamente para lo- parasitada, y como tal van a procesarse y presentarse
grar el máximo de eficacia en su enfrentamiento con por moléculas MHC de clase I, lo que permite el re-
el agente agresor, generalmente un microorganismo. conocimiento de los antígenos virales por linfocitos
Además se ha comentado que el sistema inmune tie- T-CD8+ citotóxicos.
ne plasticidad para adaptar su estrategia de respuesta No obstante, antes de que esto ocurra y de que la
en función del tipo de estímulo al que se enfrenta. RIA pueda reconocer antígenos virales, entran en ac-
Ambos conceptos adquieren su máximo sentido en ción elementos de la RII. En fases muy tempranas,
la respuesta frente a los microorganismos. Avances la célula infectada sintetiza interferones de tipo I
en el conocimiento de los mecanismos celulares de (IFNa e IFN~) que inducen la síntesis de dos enzi-
la respuesta inmune producidos en los últimos años, mas, 2'5'-oligoadenilato sintetasa y Pl-cinasa, que
nos permiten tener una idea bastante completa de estimulan la degradación de RNA viral y bloquean
la forma de responder frente a los distintos tipos de la traducción proteica, respectivamente. Además , los
patógenos. Así, podemos imaginar un escenario en interferones estimulan la presentación de antígenos
donde el sistema inmunitario selecciona qué células virales y estimulan a las células natural killer (NK).
y qué moléculas de la RII y la RIA va a emplear de- Las células NK representan un papel relevante en la
pendiendo de si se enfrenta a una infección por un respuesta antiviral, ya que son capaces de eliminar
virus , una bacteria intra o extracelular, un hongo o células infectadas por el virus y son una fuente muy
un parásito de mayor tamaño que los mencionados importante de IFNy, que resultará decisivo a la hora
(Fig. 12-3). de programar a las células T-CD4 de la RIA. Así, en
presencia de IFNy los linfocitos T-CD4 específicos
para antígenos del virus van a producir el factor de
transcripción t-bet específico de la diferenciación a
RESPUESTA INMUNE EN LAS INFECCIONES células efectoras THl, productoras de más IFNy y de
VÍRICAS IL-2. A su vez, la IL-2 es una citocina crítica para po-
tenciar la activación de las células NK y de las T-CD8,
Los virus no son células autónomas , sino que nece- que reconocerán los antígenos virales presentados en
sitan utilizar un organismo superior para replicarse, por la célula infectada, procediendo a su eleminación
por ejemplo una bacteria o una célula eucariota. Para por una forma especial de apoptosis , recientemente
poder penetrar en una célula hospedadora, el virus descrita, denominada apoptonecrosis. Finalmente,
tiene ligandos en su cápside para moléculas de la anticuerpos producidos por células B que también
membrana de la célula diana, lo cual le confiere espe- hayan tenido acceso a los antígenos virales desem-
cificidad de especie y de tejido. Una vez seleccionada peñaran un papel importante neutralizando posibles
esta célula, el virus penetra en su citosol y descompo- subunidades virales liberadas por las células infecta-
ne su estructura liberando su material genético (DNA das tras su muerte.

Bacterias Bacterias
extracelulares y parásitos Virus Grandes
y hongos intracelulares (intracelulares) parásitos

1 1 1 r 1 1
Fagocitosis Lisis Lisis de la célula Ataque por
RII porM0 intracelular infectada eosinófilos
neutrófilos porM0 por células NK y mastocitos

Anticuerpos Anticuerpos, lgE


RIA Linfocitos THl linfocitos T-CDB y THl
Linfocitos THl 7 y linfocitos TH2

~
Figura Especialización de la respuesta inmunitaria frente a patógenos. M0: macrófagos.
CAPÍTULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

RESPUESTA INMUNE FRENTE RESPUESTA FRENTE A PARÁSITOS


A BACTERIAS EXTRACELULARES DE GRAN TAMAÑO
Y HONGOS Los mecanismos que operan frente a hongos , bacte-
Las bacterias responsables de infecciones piógenas se rias o virus no son eficaces contra los grandes pató-
reproducen extracelularmente de forma descontro- genos, al no poder ser fagocitados por los leucocitos
lada, originando infecciones agudas potencialmente y tener gruesos tegumentos que resisten la actividad
graves shock séptico y fracaso multiorgánico. En la lítica del complemento y las enzimas de neutrófilos
defensa inmunitaria frente a este tipo de infecciones y macrófagos. La estrategia elaborada por el sistema
juegan un papel clave las células fagocíticas: los ma- inmunitario en estos casos se basa en la existencia
crófagos y sobre todo los polimorfonucleares neutró- de células productoras de sustancias con un enorme
filos. Estas células, con ayuda del complemento y de potencial tóxico: los polimorfonucleares (PMN) eosi-
los anticuerpos previamente preformados que opso- nófilos y basófilos, y los mastocitos o células cebadas.
Estas células tienen receptores de alta afinidad para
nizan al patógeno, van a captarlo y destruirlo gracias
el fragmento Fe de las IgE (constitutivo en basófilos
al enorme potencial de las enzimas proteolíticas de
y mastocitos, inducibles tras activación en eosinófi-
sus gránulos. En la captación del patógeno por los
los). Cuando el antígeno (alérgeno) se une a las IgE,
fagocitos también juegan un papel relevante los re-
los receptores a los que estas se encuentran unidas se
ceptores para PAMP, expuestos con mayor detalle en
entrecruzan, lo que promueve la rápida activación de
el siguiente capítulo. La RIA también va a intervenir estas células con la inmediata liberación del conteni-
en la respuesta frente a estos microorganismos. Los do de sus gránulos citoplasmáticos.
linfocitos T-CD4 van a reconocer el antígeno en un La célula fundamental en la respuesta frente a hel-
contexto particular de citocinas, donde abundan la mintos el PMN eosinófilo, transporta en sus gránulos
IL-1, IL-6 y el TGF-~, producidas por los macrófagos y diferentes productos, entre los que destacan tres toxi-
células dendríticas en este ambiente microbiano. Es- nas: una potente neurotoxina, la proteína catiónica y
tas citocinas van a promover la activación del factor la proteína básica principal. Estas sustancias parali-
de transcripción RORyT y la diferenciación al fenoti- zan y destruyen al parásito, aunque tienen un efecto
po funcional TH17, productor de IL-17, IL-6 y GM- tóxico que acaba implicando los tejidos circundantes.
CSF, entre otras. Las consecuencias son la activación Tambien el mastocito y el PMN basófilo poseen gránu-
de las células B para que produzcan más anticuerpos los con sustancias tóxicas para los parásitos, como la
opsonizantes y la formación de más neutrófilos en la histamina, la serotonina y la heparina. Sin embargo,
médula ósea. la histamina y, en menor medida , la serotonina tienen
El sistema inmunitario maneja las infecciones por potentes propiedades vasoactivas, produciendo vaso-
hongos con el mismo planteamiento estratégico. dilatación y aumento de la permeabilidad vascular.
Otros factores quimiotácticos que atraen eosinófilos,
neutrófilos, monocitos y basófilos, son los leucotrie-
RESPUESTA INMUNE FRENTE nos, que aumentan la secreción de moco, y la hista-
A BACTERIAS INTRACELULARES mina y prostaglandina D2, que producen contracción
del músculo liso. Sus efectos contribuyen a producir
Algunos microorganismos como las bacterias o los daño al parásito y a expulsarlos cuando se encuentran
parásitos intracelulares han desarrollado sofisticadas en zonas tales como la luz intestinal. Además de esta
estrategias que les permiten sobrevivir en los fagoli- respuesta, en la eliminación de helmintos el huésped
sosomas de los macrófagos, evitando los mecanismos utiliza el sistema del complemento, anticuerpos de
de defensa extracelulares previamente comentados. otros isotipos y la acción de PMN y macrófagos. Estas
En estas infecciones el sistema inmune debe propor- células de la RII producen otros factores, entre los que
cionar al macrófago los factores de activación capaces se encuentran diversas quimiocinas , que atraen más
de aumentar la eficacia de los mecanismos de diges- leucocitos, y citocinas como la IL-4. Esta interleucina
tión de estos patógenos. La citocina activadora del va a dirigir la diferenciación funcional de los linfoci-
macrófago por excelencia es el IFNy producido por tos T y B. En las células T-CD4+ se promueve la sín-
los linfocitos TH1. En presencia de esta citocina, el tesis del factor de transcripción GATA-3 que guía la
macrófago incrementa su capacidad de producción diferenciación de esta célula hacia el fenotipo efector
de radicales superóxido y de enzimas proteolíticas TH2, productor de más IL-4 y de otras citocinas como
capaces de eliminar el patógeno fagocitado. En estos IL-5 e IL-13 , que en la médula ósea promueven la pro-
casos se reproduce un patrón de respuesta similar al ducción de más eosinófilos y de células dendríticas ,
comentado previamente en el caso de las infeccio- respectivamente. En las células B, la IL-4 producida
nes por virus, llegándose en ocasiones a la lisis del por las células TH2 promueve un cambio en el isotipo
macrófago infectado por parte de linfocitos T-CDB de la inmunoglobulina hacia un fenotipo de célula B
citotóxicos activados por la IL-2 producida por las productora de IgE. Esta inmunoglobulina opsoniza al ~
células THl. patógeno y establece un nexo de unión con los recep-
SEC (. O, 1 Etiopatogenia general

tares para IgE de la membrana de eosinófilos, basófi- Expresan en la pared bacteriana sustancias,
los y mastocitos, los cuales provocarán la muerte del como el glucolípido fenólico, que neutralizan
parásito. radicales libres de 0 2 .
Si las condiciones en el fagolisosoma se vuelven
demasiado hostiles se escapan al citosol, o sim-
MECANISMOS PATOGÉNICOS plemente inducen apoptosis en la célula fagocí-
EN LA RELACIÓN AGENTE INFECCIOSO- tica.
SISTEMA INMUNITARIO Un mecanismo relativamente común consiste en
Los agentes patógenos han desarrollado diversos me- intentar confundir al sistema inmunitario generando,
canismos biológicos para intentar evadir o alterar los por parte del agente infeccioso, una respuesta inmu-
mecanismos de defensa del sistema inmunitario. Uno nitaria inapropiada o un estado de inmunosupresión.
de ellos es la producción de mutaciones de los genes Las estrategias empleadas con este fin son múltiples, y
que codifican proteínas de superficie, lo que se tradu- entre ellas figura la producción de toxinas que actúan
ce en la variación antigénica de los microorganismos como superantígenos, provocando la activación poli-
y posibilita su escape de los mecanismos de memoria clonal de células T con inducción de apoptosis o de
de la RIA adquiridos en infecciones previas. Este fe- producción masiva de citocinas. Otras veces consiste
nómeno es característico de virus como el de la gripe. en provocar la alteración preferencial de células pre-
También se ha observado que en esta variación anti- sentadoras de antígeno, y en concreto de las células
génica pueden participar reordenamientos programa- dendríticas que, como ya se ha indicado, desempeñan
dos en el ADN del agente patógeno, como ocurre en un papel esencial en la activación de los linfocitos T.
algunos parásitos como Trypanosoma y en bacterias Finalmente, algunos patógenos de crecimiento intra-
como la Salmonella y Neisseria gonorrhoeae. celular son capaces de generar respuestas inmunita-
Otro mecanismo de escape de los microorganismos rias de predominio TH2 irrelevantes en la ayuda al
es el llevado a cabo por virus que cesan su replica- macrófago en esa infección. Así, por ejemplo, en la
ción hasta que la presión del sistema inmunitario lepra lepromatosa la capacidad funcional de los linfo-
disminuye, entrando en un estado denominado de citos y de las células fagocíticas está extremadamente
latencia. El virus latente no produce enfermedad ni deprimida.
proteínas víricas que permitan la identificación de
las células infectadas y su consiguiente eliminación,
pero puede reactivarse provocando enfermedades. SISTEMA INMUNITARIO
Un claro ejemplo es la infección por el virus del her- COMO CAUSA DE ENFERMEDAD.
pes simple. TIPOS DE TRASTORNOS
Otro de los recursos utilizados por los agentes pató-
genos es el desarrollo de mecanismos especializados Cuando uno o varios de los elementos previamente
que resisten al sistema inmunitario. Así, existen bac- citados no actúa, o lo hace de forma incorrecta tan-
terias que evitan la fusión del fagosoma con los lisoso- to por exceso como por defecto, se suelen producir
mas, o que producen catalasa que inhibe los radicales enfermedades. Lógicamente, las consecuencias pato-
superóxido de los fagolisosomas, lo que preserva su génicas del funcionamiento defectuoso del sistema
integridad. Bacterias intracelulares, como Listeria inmunitario van a estar muy relacionadas con el ele-
monocytogenes , estimulan la formación de un pseu- mento o los elementos de la respuesta inmune altera-
dópodo en la célula infectada, en cuya punta se ubica dos , habida cuenta de la diferente relevancia de cada
el microorganismo. De esta forma la célula infectada uno de ellos en la RI. Dado el enorme grado de in -
le inyecta la bacteria a una célula sana, sin que tenga terrelación de las distintas células que participan en
que pasar por el compartimento extracelular en don- la RI, las manifestaciones patológicas se relacionan
de estaría más expuesta a la neutralización por otros no solo con la función efectora directa de una célula
componentes del sistema inmunitario. concreta, sino también con las repercusiones que este
Pero los mecanismos de evasión más sofisticados defecto tiene en el funcionamiento de las demás célu-
de adaptación a la supervivencia en los fagolisoso- las. Por ejemplo, la deficiencia de los linfocitos T CD4
mas de los macrófagos son los que han desarrollado no solo entraña una disminución en la secreción de
bacterias intracelulares, como las micobacterias res- citocinas, sino también la alteración de los otros tipos
ponsables del desarrollo de tuberculosis o de la l~pra: celulares regulados por estos linfocitos.
Las alteraciones funcionales del sistema inmuni-
Interfieren con la expresión de las moléculas tario pueden tener un origen endógeno, que puede
MHC de tipo II, evitando la presentación de sus ser congénito (fundamentalmente de tipo genético)
péptidos antigénicos a la célula T-CD4. o adquirido (edad, estado nutricional, factores hor-
Producen sustancias como el lipoarabinomana- monales y metabólicos, etc.). Entre estos estarían
no que bloquea la señal del IFNy, citocina esen- los factores exógenos o ambientales, entre los cuales
rn- cial para la activación del macrófago. juegan un papel especialmente relevante los agentes
CAPÍTULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

microbiológicos y diversos agentes no microbianos antígenos solubles. Estos complejos provocan la


(radiaciones ionizantes, agentes tóxicos). activación del sistema del complemento y de los
Desde un punto de vista muy general, en aquellas fagocitos en los sitios de depósito (fundamental-
situaciones en que la RI no alcanza un umbral sufi- mente glomérulos y vasos sanguíneos) desarro-
ciente de intensidad, el organismo va a estar mucho llando fenómenos inflamatorios locales.
más expuesto al padecimiento de infecciones. Estos Por último, las reacciones de tipo N están media-
procesos infecciosos van a ser recurrentes y, con das por células. El papel esencial en este mecanis-
frecuencia, promovidos por patógenos oportunistas mo de hipersensibilidad se otorgó a los linfocitos
(microorganismos habitualmente inocuos en sujetos T. No obstante, otros leucocitos (polimorfonu-
con un sistema inmunitario normal) . En estos casos cleares, macrófagos) son también relevantes en
hablan10s de inmunodeficiencia. En el lado opuesto este mecanismo de producción de daño tisular.
se encuentran todas aquellas situaciones en las que
la intensidad de la RI frente a la agresión externa es Esta clasificación ha tenido plena vigencia durante
excesiva, provocando daños más o menos importan- varias décadas y ha sido muy útil para estudiar fenó-
tes en las células del propio organismo. Los términos menos patogénicos y orientar conductas terapéuticas.
hipersensibilidad y alergia se han utilizado clásica- Sin embargo, aunque alguno de estos mecanismos
mente para designar la manifestaciones clínicas pro- siguen definiendo grupos de enfermedades inflama-
vocadas por este segundo bloque de alteraciones de torias, los conocimientos actuales sobre las funciones
la función del sistema inmunitario. Un nivel superior de las células de la RII y la RIA en la generación de
de desorden en la RI se alcanza cuando esta reaccio- numerosos cuadros clínicos han desbordado el plan-
na directamente contra los componentes del propio teamiento conceptual elaborado por estos autores,
organismo. En este caso hablamos de autoinmunidad sobre todo en lo referente al tipo IV de hipersensibi-
y de enfermedades autoinmunes. En todos estas cir- lidad.
cunstancias la potente capacidad citotóxica del sis-
tema inmunitario acaba produciendo enfermedades
inflamatorias. SÍNDROME DE INMUNODEFICIENCIA
CONCEPTO
RECUERDO HISTÓRICO. LOS MECANISMOS Es una alteración del sistema inmunitario consis-
DE HIPERSENSIBILIDAD DE GELL Y COOMBS tente en la incapacidad de promover una respuesta
suficientemente eficaz ante agentes patógenos. Como
En 1963 Gell y Coombs clasificaron los mecanismos consecuencia, el organismo queda expuesto a infec-
de daño tisular según las respuestas de hipersensibi- ciones, a menudo por microorganismos oportunistas,
lidad, definiendo cuatro mecanismos básicos: y al desarrollo de tumores.
Las reacciones de hipersensibilidad de tipo I es-
tán mediadas por IgE frente a antígenos solubles
e implican la activación de los mastocitos. Son
CLASIFICACIÓN
responsables de las reacciones alérgicas que se Las inmunodefiencias pueden clasificarse de mane-
tratan en la parte final del presente capítulo. ras muy diferentes, aunque la más empleada es aque-
Las de tipo II están directamente mediadas por lla que implica el factor etiológico responsable del
anticuerpos, fundamentalmente de los tipos IgG defecto. Así, hablamos de inmunodeficiencias prima-
e IgM, que reaccionan específicamente con an- rias en aquellos casos en los que el mecanismo inicial
tígenos de las células (incluidos receptores de es una alteración intrínseca de las propias células o
la superficie celular) o de la matriz tisular. La de las moléculas que llevan a cabo la RI. Suelen ser
porción Fe de estos anticuerpos puede activar el de base genética y se manifiestan generalmente en las
complemento o determinar la adhesión de célu- primeras etapas de la vida. Las inmunodeficiencias
las citotóxicas (fagocitos, células NK), provocan- secundarias son las producidas por fenómenos exter-
do daño en la estructura reconocida por dichos nos o alteraciones extrínsecas al sistema inmunitario
anticuerpos. Otras veces, la unión del anticuer- que terminan provocando lesiones en los componen-
po a un receptor de la superficie celular puede tes inmunológicos. Son de carácter adquirido y se
simular el efecto del ligando y activar una vía manifiestan en cualquier momento de la vida de un
de señalización en las células. Un ejemplo es el individuo.
hipertiroidismo de la enfermedad de Graves por Otras clasificaciones atienden a los componentes
un autoanticuerpo contra el receptor de la TSH, del sistema inmunitario que resultan preferentemente
que simula el efecto de esta hormona. alterados, es decir, a los linfocitos T, B, NK y a las
Las de tipo III, están mediadas por el depósito ti- células accesorias y fagocíticas, así como a distintas
sular de complejos inmunes antígeno-anticuerpo moléculas como el sistema del complemento, las ci-
formados por la presencia de IgG o IgM contra tocinas y el sistema HLA.
SECCIÓN II Etiopatogenia general

INMUNODEFICIENCIAS PRIMARIAS de ADA, preferentemente los T en el defecto de


PNP).
Las inmunodeficiencias primarias constituyen una Deficit de HLA clase JI: al faltar estas moléculas
lista muy amplia de diferentes entidades nosológicas, el reconocimiento del antígeno por los linfocitos
asociadas a defectos celulares o moleculares concre- T CD4+ no se puede llevar a cabo. El número to-
tos (en la Tabla 12-1 se recoge la clasificación de estas tal de linfocitos es normal, pero están disminui-
enfermedades por la OMS). Debido a su carácter con- das las células T CD4+, así como la producción
génito, se suelen manifestar en los primeros meses o de anticuerpos y las inmunoglobulinas del suero.
años de vida. El elevado número de entidades clínicas
Disgenesia reticular: producida por la falta de di-
diferentes contrasta con la bajísima incidencia de la
ferenciación de las células progenitoras de la mé-
mayoría de ellas, lo cual determina que, en conjunto,
dula ósea hacia células linfoides y mieloides, por
las inmunodeficiencias primarias representen una ra-
lo que además de linfopenia se observa neutrope-
reza clínica. No obstante, el estudio de los pacientes
nia y trombocitopenia. La muerte suele ocurrir
con inmunodeficiencias primarias ha posibilitado
en este caso pocos días después del nacimiento.
notables avances en el conocimiento de procesos re-
Deficiencias de RAG-1 o RAG-2: los defectos de
levantes de la respuesta inmunitaria.
alguna de estos dos genes activadores de recom-
Las formas más graves de inmunodeficiencia pri-
binación, que intervienen en la génesis del re-
maria son las inmunodeficiencias combinadas. En
ceptor antigénico de las inmunoglobulinas y del
ellas se afectan los linfocitos B y T. Se manifiestan en
receptor de la célula T para el Ag, impide el desa-
las primeras semanas de vida como infecciones graves
rrollo de estos receptores y, como consecuencia,
que ponen en riesgo la vida, falta de desarrollo, linfo-
la generación de linfocitos B y T maduros.
penia e hipogammaglobulinemia. Las más frecuentes
son las diferentes entidades conocidas como inmuno- Las formas clínicas más frecuentes de inmunode-
deficiencias combinadas severas (SCID) , entre las que ficiencia primaria son las que cursan con un defecto
cabe mencionar: predominante en los niveles de anticuerpos circulan-
SCID ligada al cromosoma X: debida a una muta- tes. Ellas solas constituyen casi la mitad de todas las
ción en la cadena gamma del receptor de la IL-2. inmunodeficiencias primarias. Entre ellas destaca,
Déficit de adenosina desaminasa (ADA) y de por su significado fisiopatológico, el denominado sín-
purina-nucleósido fosforilasa (PNP): debida a drome de hiper-IgM ligado al cromosoma X, causado
mutaciones o deleciones en los genes que codifi- por la mutación en el gen CD40L, molécula crítica en
can para estas enzimas, fundamentalmente cito- la cooperación entre los linfocitos T y los B y, por
sólicas, que participan en el metabolismo de los lo tanto , en la maduración funcional de las células
ácidos nucleicos. En an1bos casos la acumulación B tras su encuentro con el antígeno. Cursa con cifras
de metabolitos tóxicos impide la proliferación elevadas de la inmunoglobulina IgM junto a niveles
casi indetectables de IgA, IgG e IgE y ausencia de for-
de los linfocitos (tanto T como B en el defecto
mación de centros germinales en los órganos linfoides
secundarios.
La enfermedad de Erutan (agammaglobulinemia li-
gada al sexo) es otra inmunodeficiencia que permitió
la caracterización de un factor clave en la activación
Tabla Clasificación de las células B, la BTK (Erutan tyrosine kinase) ex-
de las inmunodeficiencias primarias presada en las células B. Los pacientes con déficit de
Defectos congénitos del número o función de BTK muestran una ausencia de linfocitos B maduros
los fagocitos y otras células de la respuesta periféricos y una marcada disminución de las concen-
inmune innata traciones séricas de IgG, IgA e IgM.
La deficiencia de IgA es la inmunodeficiencia pri-
Déficits congénitos del sistema del
complemento maria más frecuente (uno de cada 500 individuos de
origen caucásico). Sus bases moleculares no están cla-
1nmunodeficiencias combinadas ramente establecidas, pero comparten la ausencia de
Déficit predominantemente de anticuerpos células plasmáticas productoras de IgA. Con frecuen-
cia se asocia con un déficit en la producción de otras
Otros síndromes de inmunodeficiencia subclases de inmunoglobulinas.
combinada bien definidos Entre las inmunodeficiencias bien definidas se en-
Déficits predominantemente de células T cuentra el síndrome de Wiskott-Aldrici1, de herencia
ligada al sexo, con anomalías en el gen WASp que
Inmunodeficiencias asociadas a otras codifica la síntesis de una proteína implicada en la
enfermedades congénitas/hereditarias transducción de señales necesarias para la reorganiza-
128 ción del citoesqueleto. Esos pacientes presentan una
expresión deficiente de glucoproteínas de membrana
CAPITULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

relevantes en la activación de los linfocitos T y pla- ciencia cardiorrespiratoria y la renal. Asimismo, al-
quetas, como CD43, lo cual provoca trornbocitopenia gunos fármacos pueden producir alteraciones en el
y alteraciones cuantitativas y funcionales de los linfo- sistema inmunitario, generalmente cuantitativas pero
citos T, junto a disminución sérica de IgM y aumento también funcionales, mermando significativa.men-
de IgA. te su capacidad defensiva. También la malnutrición
El síndrome de DiGeorge se caracteriza por la pér- constituye una causa frecuente de inmunodeficiencia
dida de un pequeño fragmento del cromosoma 22, secundaria en países económicamente desfavorecidos
con afectación de los órganos derivados del tercero y o en personas con desórdenes dietéticos (anorexia}, al
cuarto arcos faríngeos y otras alteraciones somáticas relacionarse con deficiencias marcadas en la función
adicionales. Desde el punto de vista inmunológico es- y el número de las poblaciones celulares del sistema
tos pacientes carecen de timo, o tienen una marcada inmunitario. Finalmente, situaciones tan habituales
atrofia del mismo, presentando una profunda dismi- como el envejecimiento o el estrés, se asocian con una
nución en el número de linfocitos T maduros. Ade- marcada disminución en la eficacia del sistema inmu-
más, estos pacientes presentan hipoparatiroidismo y nitario frente a los microorganismos que, en algunos
malformaciones faciales y cardiacas. casos, puede llegar a considerarse patológica.
Finalmente, las alteraciones en el sistema del com-
plemento constituyen otro amplio grupo de inmu-
nodeficiencias con defectos funcionales a distintos MANIFESTACIONES CLÍNICAS
niveles de sus vías de activación. Se manifiestan en El hallazgo clínico capital en una inmunodeficien-
sujetos hornocigóticos, dado que los niveles disminui- cia es la predisposición a desarrollar infecciones
dos al 50 % en sujetos heterocigóticos no tienen con- frecuentes, anormalmente prolongadas y a menudo
secuencias funcionales para la activación del sistema. provocadas por gérmenes oportunistas. No es rara la
Los déficits de los primeros factores, implicados en afectación multiorgánica o sistémica en estos episo-
la eliminación de complejos inmunes, provocan sín- dios infecciosos, y que su gravedad sea mucho ma-
dromes semejantes al lupus eritematoso sistémico, yor. Sin embargo, estos aspectos pueden ser difíciles
mientras que las deficiencias en el resto de factores se de apreciar, al menos en las fases iniciales, en el caso
asocian a infecciones por bacterias piógenas. de las inmunodeficiencias primarias en los niños
de corta edad. Por un lado , en ese momento de la
vida el sistema inmunitario presenta aún una inma-
INMUNODEFICIENCIAS SECUNDARIAS durez fisiológica, motivo por el cual la recurrencia
En su conjunto son mucho más frecuentes que las de procesos infecciosos no suele alarmar al médico.
primarias. Aparecen en personas que eran portadoras Además, con frecuencia concurren otros factores
de un sistema inmunitario normal hasta el momento epidemiológicos adversos, la estancia en guarderías
de desarrollar la inmunodeficiencia. Su etiología es en etapa temprana de la vida, la interrupción precoz
muy variable, destacando las causas infecciosas. En de la lactancia materna, la convivencia con portado-
las últimas décadas el síndrome de inmunodeficien- res asintomáticos, la malnutrición, etc. Todos estos
cia adquirida (SIDA}, provocado por el virus de la factores pueden retrasar la realización de estudios,
inmunodeficiencia humana (VIB}, ha cobrado espe- generalmente costosos, dirigidos a caracterizar una
cial protagonismo en el panorama sanitario mundial, inmunodeficiencia. Por ello, la tendencia a las infec-
especialmente en países en vías de desarrollo. Este ciones con frecuencia se detecta en edades posterio-
virus pertenece al grupo de virus RNA portadores de res , incluso en las inmunodeficiencias primarias. En
una convertasa inversa (retrovirus) y es capaz de in- las secundarias es lógico que sea así, por el momento
fectar a las células T cooperadoras, a las dendríticas en que se instauran.
y a los monocitos a través de la interacción con el Las infecciones pueden afectar a cualquier lugar
CD4 y con los receptores de las quirniocinas CCR5 y del organismo, aunque predominan las de vías respi-
CXCR4. En las fases avanzadas el virus induce una ratorias, tubo digestivo y oídos. La repetición de estas
marcada disminución de los linfocitos CD4+, las in- infecciones debe hacer sospechar la existencia de una
fecciones virales deprimen la respuesta inmunitaria inmunodeficiencia, incluso en las formas menos gra-
hasta el punto de facilitar infecciones por bacterias ves. Los patrones de infección pueden relacionarse
piógenas causantes de infecciones graves, principales con las poblaciones celulares o las moléculas pre-
responsables de la mortalidad asociada a dichas in- ferentemente afectadas en los pacientes, con mayor
fecciones graves. El ejemplo más frecuentes y mejor incidencia de infecciones por virus, bacterias intrace-
conocido es la infección por el virus de la gripe. lulares y parásitos en pacientes con alteración a nivel
Un grado más o menos severo de depresión en la de los linfocitos T, y de infecciones por bacterias de
función inmunitaria, capaz de facilitar también el crecimiento extracelular (piógenas) en deficiencias de
desarrollo de infecciones, puede asociarse a múlti- linfocitos By complemento. El déficit en la actividad
ples enfermedades crónicas no infecciosas, corno la de los fagocitos se asocian a infecciones por bacterias
diabetes mellitus, la hepatopatía crónica, la insufi- y parásitos.
Etiopatogenia general

En los enfermos con inmunodeficiencias también car enfermedades inflamatorias tan diversas. La fre-
aumenta, con respecto a la población normal, el riesgo cuente asociación de estas enfermedades con los an-
de padecer tumores. Esta asociación se trata de ex- tígenos HLA y el hallazgo de autoanticuerpos motivó
plicar en base al papel de la vigilancia inmunológica que, con frecuencia , a todas estas enfermedades se les
sobre las células que sufren transformación tumoral, colocara la etiqueta de autoinmunes. El concepto de
fundan1entalmente por parte de las células natural autoinmunidad se ha basado en el paradigma de que
killer y de los linfocitos T, sobre todo las células cito- el sistema inmune distingue entre lo propio y lo no-
tóxicas CDs+. Además, la mayor susceptibilidad a las propio, debiendo responder sólo en el segundo de los
infecciones, sobre todo virales, también contribuye a casos. Sin embargo, no rechazamos células tumorales
este fenómeno. Las neoplasias más frecuentes son los a pesar de que muchas de ellas expresan proteínas
linfomas y los tumores del tubo digestivo. nuevas o mutadas, tampoco respondemos contra las
bacterias saprofitas del tubo digestivo.
Para intentar aclarar este enigma, en los años 90 Po-
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS lly Matzinger plantea la te01ía de la «señal de peli-
Los estudios de laboratorio son esenciales para la gro». Esta teoría propone que el sistema inmune no
caracterización del defecto celular o molecular que defiende la integridad del propio organismo («el YO
subyace en una inmunodeficiencia. El estudio de una original»), sino la paz, la ausencia de muerte violenta
inmunodeficiencia se realiza desde varios puntos de de las células (necrosis). La alarma surge fundamen-
vista. En primer lugar se determinan los niveles séri- talmente cuando las células vigilantes del sistema
cos o plasmáticos de una amplia variedad de proteí- inmune (APC) detectan «señales de peligro», como
nas de interés inmunológico, como los niveles de las tejidos endógenos dañados (fenómenos necróticos
distintas subclases de inmunoglobulinas, los factores esencialmente) y microorganismos con capacidad
del complemento o los niveles de citocinas solubles, patogénica (representan menos del 5 % del total). Por
entre otras. Seguidamente se cuantifican los diferen- el contrario, no está claro que la simple detección de
tes tipos de leucocitos sanguíneos y se estudia la ex- una estructura extraña (el no-YO) active siempre la
presión en ellos de una amplia batería de moléculas respueta inmunitaria.
de membrana, mediante las técnicas de citometría de La teoría de Matzinger es coetánea con la descrip-
flujo: receptores y correceptores de los linfocitos y ción de los receptores para patrones moleculares de
de las células de la respuesta inmune innata, recep- patógenos y otras señales de peligro en las células
tores de citocinas, moléculas de adhesión intercelu- de la RII, que sirven para activar a estas células por
lar y antígenos HLA. Mediante análisis de proteínas mecanismos independientes de los linfocitos T y B.
(western-blot) , RNA y DNA (Northern blot y Southern Poco después , una serie de enfermedades inflamato-
blot, respectivamente) o de expresión génica (RT-PCR) rias raras denominadas en su conjunto «fiebres perió-
se estudian las posibles anomalías genéticas caracte- dicas hereditarias », se asociaron con defectos en el
rísticas de las inmunodeficiencias primarias. El aná- funcionamiento de estos sistemas de activación de la
lisis se completa con diversos estudios funcionales: RII. Así, todas estas enfermedades tienen su base en
actividad del sistema complemento (CH50), cuantifi- alteraciones rnonogénicas en alguno de los siguientes
cación de células secretoras de citocinas o respuesta mecanismos (ver Tabla 12-2): a) proteínas asociadas
a la inmunización con antígenos T-dependientes y con la detección de microorganismos (PRR); b) vías
T-independientes. Habitualmente se evalúa también de señalización de citocinas proinflamatorias, como
la presencia de autoanticuerpos mediante técnicas de TNFa o IL-1 ; c) el «inflamasoma », un sistema par-
inmunofluorescencia indirecta o de ELISA. ticular de activación de citocinas proinflamatorias
(ver descripción en el capítulo de la Inflamación). La
ausencia de autoanticuerpos o de asociación con el
AUTOINMUNIDAD HLA respalda la idea de que la producción de estas
enfermedades es independiente de la RIA y, por lo
Hemos empezado a comprender mejor el funciona- tanto, no encajan en el concepto de autoinmunidad.
miento del sistema inmune cuando hemos concebido Por oposición a este término , se empieza a hablar de la
la RII y la RIA como dos estrategias perfectamente naturaleza «autoinflamatoria » de estas enfermedades.
coordinadas y el engranaje de los distintos elementos En esa misma época se caracterizan defectos fun-
celulares y moleculares de la RII y la RIA dan al sis- cionales en sensores de patrones moleculares en
tema una asombrosa plasticidad que le permite adap- enfermedades poligénicas más frecuentes que com-
tarse a diferentes situaciones. parten hallazgos clínicos con las fiebres periódicas
hereditarias, como Nodl y Nod2 en la enfermedad de
AUTOINMUNIDAD VERSUS Crohn o receptores TLR en la enfermedad de Behr;et
en las vías de activación de la RII coexisten con altera-
AUTO INFLAMACIÓN ciones, más o menos prominentes, en elementos de la
rro- Más difícil aún resultaba entender cómo las mismas RIA: asociación de antígenos HLA con determinadas
células que nos defienden del entorno pueden pravo- enfermedades (por ejemplo, HLA-B51 con enferme-
CAPÍTULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

Tabla Bases genéticas y celulares de las enfermedades autoinflamatorias


Entidad clínica {acrónimo) GEN / Proteína Distribución celular/ Función
Fiebre mediterránea familiar MEFV/pyrina Neutrófilos, monocitos, células
(FMF) estromales/regulación de la inflamación

Síndrome de hiper-lgD (HIDS) MVK/mevalonato quinasa Difusa/biosíntesis de colesterol

Síndrome periódico asociado TNFRSF1 A/TNFR1 Difusa/receptor del TNF


al receptor de TNF (TRAPS)

Urticaria familiar por frío CIAS1 /NALP3//criopyrina/NALP3 Monocitos, células estromales /


(FCAS) regulación de la inflamación

Síndrome de Muckle-Wells CIAS1 /NALP3//criopyrina/NALP3


(MWS)

Síndrome infantil crónico CIAS 1/NALP3//criopyrina/NALP3


neurológico, cutáneo y
articular (CINCA)

Artritis estéril piogénica, PSTPIP1 /PSTPIP1 Neutrófilos y monocitos/regulación de la


pioderma gangrenoso y acné inflamación
(PAPA)

Osteomielitis recurrente LPIN2 (en humanos)/no conocida Distribución difu sa/no defi nida
crónica multifocal (CRMO) PSTPIP2 (en ratones)/MAYP Macrófago/regulación respuesta
inflamatoria

Síndrome de Blau NOD2/NOD2 Macrófagos, células de Paneth /


detección de bacterias

dad de Behc;et), alteraciones funcionales en linfocitos experimentales de estas enfermedades, la trans-


T, etc. En este nuevo escenario las alteraciones de la ferencia de linfocitos desde animales enfermos
RIA (autoinmunidad) y de la RII (autoinflamación) a animales sanos reproduzca la enfermedad ori-
coexisten y, de la misma forma que lo hacían en la de- ginal.
fensa contra microorganismos, cooperan en la genera- Autoinflamación: Estado de inflamación dirigi-
ción de mecanismos patogénicos en las enfermedades do contra los componentes propios, en el cu al
inflamatorias (Fig. 12-4). factores locales en los órganos predispuestos a
una enfermedad concreta alteran el equilibrio en-
tre citocinas proinflamatorias y antiinflamatorias
DEFINICIÓN DE CONCEPTOS y/o activan a macrófagos y neutrófilos, produ-
En base a todo lo dicho en el parágrafo anterior, pode- ciéndose daño tisular. Por lo tanto , es la RII quien
mos definir dos conceptos. asume el protagonismo en estas reacciones. Por
ejemplo, una homeostasis alterada en cascadas
Autoinmunidad: Estado de inflamación dirigi- de citocinas (como en las fiebres periódicas), la
do contra los componentes propios, en el cual señalización aberrante en el reconocimiento de
respu estas aberrantes en los órganos linfoides bacterias (como en la enfermedad de Crohn), o
secundarios por parte de células dendríticas y el depósito de microcristales (gota y pseudogo-
de linfocitos T y B rompen la tolerancia frente a ta), provocan una inflamación organoespecífica,
los propios antígenos y reaccionan contra ellos. donde la participación de la RIA es escasa o nula.
La RIA juega el papel principal en la expresión
de la enfermedad. En las enfermedades autoin-
munes es típica la aparición de autoanticu erpos,
ETIOPATOGENIA
tanto sistémicos como organoespecíficos, y la
asociación con diferentes haplotipos de antíge- En la mayoría de las enfermedades inmunológicas -m
nos MHC. También es frecu ente que en modelos el desencadenamiento de las manifestaciones pato-
Et iopatogenia general

AUTOINFLAMACIÓN
Enfe rm edad es a utoinflamato rias FMF, TRAPS, HIDS, PAPA, Síndrome de Blau
mo nogéni cas ra ras

Enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa


Artropatías por microcristales (gota, pseudogota)
Artritis inflamatorias autolimitadas
Enfe rmedad es a utoinfl amatorias Vasculitis asociadas a ANCA
po ligénicas
Uve ítis idiopáticas
Enfermedades neurológicas como la encefalomielitis diseminada
Enfermedades asociadas a eritema nodoso (incluida la sarcoidosis)

Espondilitis anquilosante Enfermedad de Beh~et


Enferm e dad es co n Artritis reactivas Uveítis asociadas al HLA-B2 7
pa tró n mi xto Psoriasis y a rtritis psoriásica

Artritis reuma toide Diabetes tipo 1


Lupus eritematosos sistémico Enfermedad celíaca
Cirrosis bilia r prima ri a Esclerosis múltiple
Vasculitis asociadas a ANCA Miastenia gravis
En fe rm e dades auto inmun es
po ligénicas clás icas Pénfigo, penfigoide, vitíligo Síndrome de Sjogren
(orga noespecíficas Tiroiditis autoinmune Enfermedad de Goodpasture
y no o rganoespecífi cas) Enfemedad de Addison
Uve ítis autoinmune (ofta lmía simpá tica)
Gastritis autoinmune / anemia perniciosa
De rmatomiositis, polimiositis, esclerodermi a

Enfe rm ed ad es a utoi nmun es


mon ogé ni cas ra ras ALPS, IPEX, APECED
AUTOINMUNIDAD

Figura Clasificación de las enfermedades causadas por el sistem a in mune.

lógicas tiene lugar cuando en un mismo individuo enfermedad, ya que la disfunción de un gen determi-
concurren una serie de factores predisponentes. Los nado puede verse implicada en la susceptibilidad a
factores predisponentes a enfermedad inmunológica múltiples enfermedades inmunológicas.
se pueden agrupar en tres categorías: factores gené- El número de alteraciones genéticas requerido para
ticos, epigenéticos y ambientales. La interacción de traspasar el umbral para que se desencadene una en-
estos factores va a tener una influencia decisiva sobre fermedad inmunológica es variable y puede depender
los mecanismos reguladores de la respuesta inmune de la importancia relativa de los genes afectos, o de
frente a antígenos propios (autotolerancia) y extraños. las denominadas interacciones epistáticas: acumula-
ción de mutaciones en genes de diferentes loci cuyos
Factores genéticos productos tienen un alto grado de interacción, en este
caso en mecanismos de la respuesta inmune.
Sabemos que los fac tores genéticos confieren suscepti-
Se han descrito asociaciones de enfermedades in-
bilidad al desarrollo de enfermedades inmunológicas
munológicas con alteraciones genéticas a múltiples
por la elevada incidencia de estas enfermedades en
niveles:
familiares cercanos a los individuos que las padecen.
Esta asociación adquiere las cotas más elevadas en ge- Genes del MHC. Con diferencia, son las más es-
melos univitelinos, donde la incidencia se acerca al tu diadas. Se h an descrito asociaciones con ha-
50 %. Las alteraciones más frec uentes son las modifi- plotipos HLA tanto de clase I como, sobre todo,
caciones en las regiones reguladoras de la expresión de clase II, en prácticamente todas las enferme-
génica: promotores, potenciad ores («enhancers») dades mediadas por el sistema inmunitario. No
o silenciadores. Estas variaciones suelen consistir obstante, la relación de determinados alelos del
en mutaciones puntuales, lo que se denomina habi- complejo principal de histocompatibilidad con
tualmente SNP (single n ucleotide polymorphisms) y la susceptibilidad a las enfermedades autoinmu-
determinan cambios cuantitativos, por exceso o por nes no tiene un mecanismo claro. La asociación
defecto, en la expresión de las mencionadas proteí- mejor conocida entre HLA y enfermedad es la del
nas. Las alteraciones genéticas no son específicas de HLA-B27 con la espondilitis anquilosante (9 0 %).
12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

No obstante. solamente una pcqunfia fracción do prPsión du moléculas pro-apoptúlicas. como Bim
los indiYíduos desarrollará la rmfernrnrlad. Los y P11111a, so acompailan del dnsarrollo de~ un LES
mecanismos propuestos para explicar esta aso- cnn rrnfropatía lúpica.
cíación son: la influencia de las moléculas HLA
un los fonónrnnos de selección positiva y nega- Factores epigenéticos
tiva en el limo. S1l influencia en la generación
El estudio de l,1 rngulac:i{m epígi•nótir:a crn las enfor-
de células T-reguladoras (T-rng) y la reacción
rnedadn!i nrndiHdas por nl sistnma inmunitario tinne
cruzada entro clntnrminadas moléculas HLA con
trascnnclrmcia tanto parn analizar mecanismos pato-
antígenos lrncinrianos.
gónicos como ¡rnrn ni dísnfio du estrategias tmapéu-
lvlolór:ulos nn-HLA mlor:ionudns con Jo selección ticas. En efucto. las modi l'icaciDnns en la exprnsión
de lin/ócitos T en el limo. La prosnncia dii au- dn gmws por factorPs Dpigenéticos extornos al prnpio
toantígunos en el timo, parn ser prPsen lados jun- J\DN. con su carácter hr1redabln Y su susceptibilidad
to a moléculns HLA. es wrnncial para eliminar los ¡rnrn Hff modificados por factorns ambinntalns. nm a
linfocitos T altamente reactivos y parn gmrnrar ju3nr un papel du primer nrdnn E)ll ¡¡¡ forma dn nc-
linfocitm: T rng11lc1dorf's. El gnn 1\IRE (uuloim- tum:i(in de la rPsp1wsta inmunitaria. Cualquinra de
mum: regu/ntor gene) rnguln la uxpresión en Jas lustres formas dPsc:rilas hasla la fecha du rng1ilación
células üpitolialPs do! timo do anligcnos propios externa dul ~enoma (mutilación del ADN. modil'ica-
du tPjidos pmifúríc1Js, fundm1rnntalnrn11ln nndo- r:ión dP las liislonm, y producción de RN:\ ele int1Jr-
c:rinos. \lutacionns nn AJRE provocan ül dmrn- feroncia), p11Pdcm ayudarnos a comprendm cúmo on
minndo síndrome poligl,mdular autoinmurrn tipo gnnwlos idénticos o 11rn11oc:igólicos, qtw comparlmi
1 L\PECED). dobido a la falla de producción dn la rn isma in I'ornrnc:irín gorn?t ica \' los rn ismos factorns
cúltilas T-rng. wnbirmtalns. uno de olios padezca una dPterminad,1
:Vfo/(,cu/ns mliwinnudus con fu /úncirín dn c;6- nnfermodad inmunológica ,. ni otro no (50 % de los
Iulus 1~rnp,. IL-2 rn, una citocina Hsoncial para casos).
mantnnm la viahilidml dn lm; cólulas T-rng \' nl-
toraciones ¡m IL-2 u sus rm:cptorns se asocia ,1 un Factores ambientales
lupus milnnrntoso sistómico (LES). Trnnbión se
So clispont) dn ntrnwrosos datos üpidnmiulógicos quP
nsocinn al dHsarrollo do LES dnfm:tos en mm sn-
vinculan diversas nnfornrndadns inmlmoJógicas n
rin du molóculas c:uvn función us controlar la du-
fnclorns amhim1talus lllll\' variados, qtw incluyen in-
ración dn la rns¡rnnsta inmune, impidiendo q1w
fuccionns, f{irmacos. rngímmws nutricionnlns. toxinas
rnspLwstas nxcosi,·;mHmtu prolong:iclas provo-
o incluso situucio1ws dn osln)s psíquico. En ol cnso
qwm rnm:c:ionns autoinrnuiws. Así, el defecto (Jil
dn lns infoccionns se) han propunsto dos nwr:onisrnos
CTL,\-4 se acompaí'ía dn linfoproliforaci(m, LES.
pom tmlur do cxplir:or esto osor:iución: Ju exíslenr:iu
dinlHJlns tipo l. artritis rm1rnatoid¡,, nnfnrnwdad
rle rm11:/il'iclnrl r:rnuulo un/ro r:l gnrmnn v los rrnl(L!n-
de Cran)S, \' otras nrnnifostac:ionns ,rnloinmu1w:;.
nos propios (mimetismo 1110/eculur). y Jo oclívm:ión
Dnfnctos ui~ PTP!\22 (lirosiD-fosfotasa ln11coc:itn-
de los r:rílufos or:cesoríns do lo JUi.
ria ,pw inhib,, LC:K) pro,·orn LES, dinl)()tes tipo L
El r:ow:opto du mímntísmo 111olec11/nr propnnn qtw
artritis rPumatoidc, míastc:nia gnn·is \' tiroiditis los palógm10s oxpwsan una protdna lllll\' similM a lln
,rntoinrnune. comporrnntn del huósped. Esl!, cpítopo dn] patógrmo
Her:eptores efe Jo inmuníclml ínm1/o. Su lwn c:a- puede sPr prnsPntaclo por las molóculas de hislocom-
raclrffL;;adn djvHrsos defectos en cornponnntes dn péltibilidad y actirnr cóluias T autorreactivas. l,¡¡ acti-
la nispuesta inrnimo innata en enfermedades in- vación linne lugar posiblonwnte porqun el rncnptor de
nrnnitarias. tanto de perfil m1toinmuno como au- la cólula T tinno una nfinidml mavor por la proteína
toinflmnalorio. 1\sí, los déficits en los primeros dnl patógeno qun por el cnmpotrnnte propio.
factonis dH la \'Ía c!ásíl'a dnl complHmPnlo indu- Respecto a !a or:lin1CÍón rfo las cólulns ru:r:nsoríos.
cen la formación cln inmunocomplejos circulan- va se expuso en la introdncción de nste capítulo qun
tes v ni dPsmTollo de un LES. En nl otro extremo las c(ílulns presentadoras de antígenos (APC) nn ex-
se s-itúan dos altcracionns en fa regulación de la presan ser1ales coestimuladnrns cuando snn inmadu-
expresión génica do dos n➔ ceptores ele P,\MP: la rns. En estas condiciones, las cólnlas T que reconocen
exisl(mcia de una molécula NOD (NOD-2) biper- complejos MHC+Ag entran en t)staclo anórgico o. in-
funcional. asociada a la m1formedacl de Crohn. ,. cluso. adquieren un fenotipo dn T-reg. Lo que hacen
la dt1plicacicí11 dnl gen de 1m TLR (TLR-7). que los rigentes infecciosos es poner en estado de alerta a
provoca un LES en modelos murinos. los ratonus ías J\PC, vestas, al activnrse. expresan las moléculas
RXSB. coestimuÍacloras B7-1 v B7-2. En estn estado. las /1,PC.
Molécu/m; regula cloros del cir:lo o lo nwerte celu- además d11 prnsen1ar c;ntígeno:; microbianos, pueden
lnr, La interfornncía r:on In procluccicín do mtwrtn presentar au!oantígenos y. si estos son rnconocidos
cnlular, por sobreexpresión de molóculas inhibí- por linfocitos T autorreactivos. p11ecln11 activarlos. ~
doras ele la apoptosis como Bc:l-2. o por sohreex- Además. ciado qun ni equilibrio ele las citocínas está
Etiopatogenia general

alterado en el contexto de la inflamación secundaria


a la infección, se puede generar un ambiente propicio
al desencadenamiento de una reacción autoinmune.
Otros factores ambientales, no infecciosos, pueden
también contribuir a la activación de las células de la
respuesta inmune frente a las células del propio orga-
nismo. La radiación ultravioleta provoca recaídas en el
LES y las lesiones cutáneas de esta enfermedad están
generalmente limitadas a las zonas de exposición solar.
Los fármacos pueden causar vasculitis por hipersensi-
bilidad y lupus inducido. La procainamida, la hidra-
lazina, la clorpromacina o la difenilhidantoína pue-
den inducir la aparición de anticuerpos antinucleares
(ANA), fundamentalmente dirigidos contra histonas y
algunos pacientes pueden desarrollar un lupus.
Figura LES (Lupus eritematoso sistém ico). Erite-
ma malar en «alas de mariposa».
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Los hallazgos clínicos en las enfermedades autoin- ej., los anticuerpos antitiroideos o antitrreceptor de
munes/autoinflamatorias pueden ser muy variados, la acetil colina) o contra antígenos no organoespecifi-
ya que la reacción del sistema inmune puede dirigirse cos (p. ej., los anticuerpos antinucleares). En algunos
contra células o moléculas localizadas en la sangre o casos los anticuerpos que se determinan tienen un
en cualquier órgano o tejido. Generalmente, cursan papel patogénico directo (p. ej. , los anticuerpos anti-
con signos de carácter inflamatorio (ver capítulo de membrana basal en la enfermedad de Goodpasture),
Inflamación) que condicionan un daño tisular, con pero otras representan un epifenómeno de la reacción
alteración o pérdida de las células residentes y poste- inflamatoria. En el segundo caso, no obstante, siguen
rior inducción de anomalías funcionales. teniendo un enorme valor en el diagnóstico (p. ej., los
Uno de los hechos que hacen pensar que estamos ante referidos anticuerpos antinucleares) .
una enfermedad autoinmune es que el trastorno infla- Los anticue1pos antinucleares (ANA) se dirigen
matorio no sea atribuible a una infección, una exposi- contra una gran variedad de estructuras intranu-
ción a tóxicos o un antecedente traumático. cleares, entre las que se encuentran el ADN, el ARN,
La presentación clínica y la evolución son muy va- desoxirribonucleoproteínas, histonas y otras proteí-
ribles de unas enfermedades a otras, aunque algunas , nas . La detección de títulos elevados de ANA tiene
como el LES , cursan en forma de brotes seguidos de un valor esencial en diversas enfermedades en que
fases de remisión clínica. predominan mecanismos autoinmunes. En el estudio
La destrucción de células secretoras de moléculas de los anticuerpos antinucleares se empieza por una
biológicamente relevantes da lugar a síntomas y sig- técnica de cribado mediante inmunofluorescencia in-
nos relacionados con su deficiencia y no directamente directa, usando como sustrato cortes histológicos de
con el proceso inflamatorio. Un ejemplo de ello es la hígado de rata o células cultivadas de la línea Hep-2.
destrucción de las células secretoras del factor intrín- En los casos positivos se obtienen una serie de patro-
seco o de anticuerpos que bloquean su actividad y que nes de tinción nuclear característicos: el homogéneo
generan una deficiencia en la absorción de vitamina o difuso de todo el núcleo , el de refuerzo periférico,
B12 (anemia perniciosa). el moteado , el nucleolar y el centromérico. En base a
Las enfermedades autoinmunes son más frecuentes estos patrones, el estudio se completa mediante test
en mujeres jóvenes. Con frecuencia afectan a múlti- de ELISA en los que se constata la reactividad de los
ples órganos o aparatos (enfermedad sistémica) como autoanticuerpos contra un antígeno concreto (DNA,
el LES (Fig. 12-5). aunque otras veces se limita a uno Sm, Ro/SSa , La/SSb, etc.). En algunos casos (p. ej. ,
en particular (enfermedad organoespecífica). como la patrón centromérico), el estudio de inmunofluores-
hepatitis autoinmune. cencia es suficiente (esclerosis sistémica progresiva
o esclerodermia).
También hay anticuerpos dirigidos contra antíge-
EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS nos citoplasmáticos que resultan de gran ayuda. En
Entre las exploraciones complementarias más útiles este capítulo tenemos los denominados anticuerpos
para el diagnóstico de muchas de estas enfermeda- antimitocondriales y antimicrosomales de hígado-
des se encuentra la determinación sérica de diversos riñón. Estos autoanticuerpos se asocian con algunas
autoanticuerpos (anticuerpos dirigidos contra au- enfermedades autoinmunes hepáticas. Los anticuer-
toantígenos). Los autoanticuerpos pueden dirigirse pos dirigidos contra los antígenos citoplasmáticos del
134 tanto contra antígenos específicos de un órgano (p. neutrófilo (ANCA) poseen relevancia diagnóstica en
CAPITULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

exógenos (alérgenos), mediadas por una subclase par-


ticular de inmunoglobulina, la IgE. Los alérgenos son
antígenos ambientales inocuos para la mayoría de las
personas. Los sujetos alérgicos, cuyo sistema inmu-
nitario ha producido IgE frente a un alérgeno concre-
to, presentan una respuesta inflamatoria muy rápida
cuando ese alérgeno se une a la IgE previamente de-
positada en la membrana de mastocitos y basófilos.

ETIOPATOGENIA
Desde el momento en que el sistema inmunitario de
Figura Exoftalmos en la enfermedad de Gra-
una persona produce una cantidad considerable de
ves-Basedow, proceso autoinmune en que se produ-
IgE frente a un alérgeno, se genera una situación de
cen anti cuerpos contra el receptor de la TSH, lo que
riesgo inminente de sufrir un episodio de hipersensi-
da lugar a un hipertiroidismo que típicamente cursa
bilidad inmediata en el momento en que ese alérgeno
con exoftalmos. ingrese en su organismo. Tan1bién va a ser decisivo
para el desarrollo de la alergia el tipo de célula so-
las vasculitis cutaneosistémicas. Reconocen enzimas bre la que se depositan las IgE a esperar el alérgeno
lisosómicas de células mieloides (PR3, mieloperoxi- (los mastocitos y los PMN basófilos), lo que hacen
dasa), que dan lugar a patrones de tinción citoplas- gracias a que en su membrana tienen un receptor de
mática mediante inmunofluorescencia indirecta sobre alta afinidad para el fragmento Fe de la IgE. La unión
neutrófilos humanos fijados . del antígeno a la IgE determina un entrecruzamiento
También es de gran utilidad diagnóstica la carac- de estos receptores , generando una cascada de seña-
terización de determinados anticuerpos organoespe- lización que provoca la liberación inmediata de los
cíficos. En este grupo se encuentran los anticuerpos potentes mediadores inflamatorios contenidos en los
antitiroglobulina y antimicrosomales de tiroides , diri- gránulos de los mastocitos y los basófilos. Además de
gidos contra la peroxidasa , de gran importancia en el los mediadores preformados (histamina, serotonina,
diagnóstico de enfermedades autoinmunitarias tiroi- heparina, factores quimiotácticos, proteasas ... ), se lle-
deas. A ellos hay que añadir los anticuerpos contra el va a cabo una síntesis de novo de leucotrienos, factor
receptor de la hormona estimulante de tiroides (TSH) de activación de plaquetas y de citocinas, con induc-
(Fig. 12-6). Los anticuerpos antiislotes del páncreas, ción de una respuesta inflanrntoria y reclutamiento
dirigidos contra diferentes antígenos como la enzima de células efectoras. Los mastocitos residen de forma
descarboxilasa del ácido glutámico (GAD), tienen im- predominante en mucosas y tejidos epiteliales, en la
portancia diagnóstica en la diabetes mellitus tipo I. proximidad de pequeños vasos sanguíneos y vénulas
El último apartado en el estudio de anticuerpos con poscapilares. Los eosinófilos son reclutados hacia es-
interés diagnóstico lo componen aquellos que recono- tos tejidos si la reacción inflamatoria se prolonga en
cen moléculas extracelulares solubles. El más clásico el tiempo y, al igual que los basófilos, son capaces de
es el factor reumatoide, autoanticuerpo que reaccio- secretar mediadores inflanrntorios.
nan contra el fragmento Fe de las inmunoglobulinas, La respuesta inflamatoria tras la unión de la IgE
IgG, IgM o IgA, presentes en algunas enfermedades de los mastocitos se puede clasificar en inmediata y
autoinmunes que cursan con estimulación crónica del tardía. La inmediata está producida por la liberación
sistema inmunitario, como la artritis reumatoide. Los de histamina, prostaglandinas y otros mediadores
anticuerpos antifosfolípidos reconocen a fosfolípidos preformados o rápidamente sintetizados, que provo-
aniónicos como la cardiolipina. Estos anticuerpos can un gran aumento de la permeabilidad vascular y
son capaces de inducir diferentes reacciones inmu- la contracción del músculo liso. La tardía está pro-
nológicas , que conducen a diversas manifestaciones ducida por la síntesis y liberación de leucotrienos,
clínicas como trombosis arterial o venosa o abortos quimiocinas y citocinas que reclutan eosinófilos y
de repitición. linfocitos. También participa en el mantenimiento de
la contracción del músculo liso y del edema.
En esquema, la secuencia de eventos que determina
ALERGIAS el desarrollo de una enfermedad alérgica es el siguien-
te: Exposición al alérgeno ➔ Diferenciación de la cé-
CONCEPTO lula TH a TH2 productora de IL-4 ➔ Producción de
Las reacciones alérgicas son una forma especial de IgE por el linfocito B ➔ Fijación de la IgE al receptor
hipersensibilidad (término genérico acuñado para del mastocito ➔ Entrecruzamiento de los receptores
describir una reacción inmunitaria exacerbada que de IgE por nueva entrada del alérgeno ➔ Degranula-
produce manifestaciones clínicas) frente a antígenos ción del mastocito ➔ Fenómeno alérgico.
Etiopatogenia general

Teniendo en cuenta que la mayoría de alérgenos fármacos o tras la picadura de un insecto. Ejemplos
son sustancias aparentemente inocuas con las que respectivos de ello son la alergia a la penicilina o de-
estarnos en contacto a menudo, el enigma patogénico rivados y la alergia a la picadura de abeja o de avispa.
en las reacciones alérgicas es : ¿Por qué, en algunos La vía más común de entrada de alérgenos es la
individuos, el sistema inmune pone en marcha es- inhalación. En estos casos se provoca la activación
tos mecanismos de respuesta? Una serie de hechos de los mastocitos de las vías respiratorias. Cuando la
constatados nos pueden ayudar a desentrañar este entrada se produce a nivel de las vías respiratorias
enigma. superiores, la degranulación de los mastocitos del
En la actualidad se admite que hasta un 40 % de epitelio nasal produce un edema local con obstruc-
la población occidental muestra una tendencia exa- ción y signos de irritación denominados rinitis alér-
gerada a desarrollar respuestas IgE contra una gran gica. De forma similar, cuando los alérgenos aéreos
variedad de alérgenos ambientales comunes. Este se depositan en la conjuntiva se puede producir una
estado, denominado atopia, parece estar influido por inflamación local o conjuntivitis alérgica . La activa-
polimorfismos en diferentes loci genéticos, como los ción de los mastocitos de la submucosa en las vías
relacionados con los genes que codifican el receptor aéreas inferiores, por alérgenos inhalados, da lugar a
de alta afinidad para la IgE y la síntesis de distintas constricción bronquial, secreción aumentada de moco
citocinas como las interleucinas 3, 4, 5 y 13. Concre- e inflamación de la pared de los bronquiolos. Esta res-
tamente, polimorfismos en la región del promotor de puesta se denomina asma alérgica , y puede evolucio-
la IL-4 se asocian con niveles elevados de IgE en indi- nar hacia un estado inflamatorio crónico, sobre todo
viduos atópicos. si la reacción inflan1atoria se prolonga y aparecen los
El desequilibrio TH1/TH2 es un factor clave para eosinófilos, con capacidad remodeladora del tejido
el desarrollo de fenómenos alérgicos. Así, ratones intersticial. En estos casos es frecuente la evolución a
deficientes en el factor de transcripción t-bet presen- una enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
tan respuestas THl defectuosas, con un incremento La alergia a alimentos se acompaña de activación
compensador de las respuestas TH2. Estos ratones de los mastocitos de la mucosa digestiva. En estos
presentan reacciones alérgicas espontáneas en las casos son frecuentes los episodios agudos de vómi-
vías respiratorias. Otro factor que igualmente parece tos y diarrea. En las alergias alimentarias es también
fundamental en el proceso es la estimulación de cé- habitual que el alérgeno absorbido y distribuido por
lulas TH2 secretoras de IL-4; estas células expresan el organismo (generalmente a dosis bajas) provoque
el ligando del CD4O y CD23, que se unen con sus activación de los mastocitos de la piel, con aparición
contrarreceptores en la superficie de los linfocitos B de cuadros de urticaria generalizada. También se pro-
provocando el cambio de clase de inmunoglobulina ducen reacciones alérgicas localizadas en la piel por
secretada a IgE. la penetración del alérgeno a través de ella, lo que da
lugar a los habones típicos de las lesiones urticari-
formes.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Las manifestaciones clínicas de las reacciones
La expresión clínica de las reacciones alérgicas varía alérgicas suelen ser agudas e intensas. Las respuestas
según la localización de los mastocitos activados y inflamatorias en la piel o mucosas y en las vías res-
la cantidad de anticuerpo IgE específico de alérgeno, piratorias deben hacer sospechar una etiopatogenia
tanto el que circula libremente en la sangre como el alérgica por su asociación temporal con la exposición
depositado en los mastocitos. Asimismo, la vía por a sustancias que puedan ser alérgenas.
la que se introduce en el organismo y su dosis son
cruciales.
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
Cuando un alérgeno se administra por vía sistémica
o tiene una absorción intestinal rápida puede alcanzar Para identificar el factor etiopatogénico responsa-
una concentración considerable en el torrente circula- ble del proceso alérgico en un paciente se utilizan
torio. En este caso, si coincide con la presencia de IgE pruebas diagnósticas in vitro e in vivo. La detección
preformada específica puede inducir la activación de de la concentración de IgE total, la medición de los
los basófilos circulantes y de los mastocitos del tejido anticuerpos IgE frente a alérgenos específicos, y la
conjuntivo asociado a los vasos sanguíneos, dando capacidad de los basófilos para liberar histamina u
lugar a un cuadro de extrema gravedad denominado otros marcadores inflamatorios, constituyen las prin-
anafilaxia. Esta activación generalizada de mastoci- cipales pruebas de laboratorio. Los estados alérgicos
tos y basófilos provoca un incremento masivo en la se asocian a incrementos de los niveles séricos de la
permeabilidad vascular, con disminución del retor- IgE total y a la elevación de los títulos de las IgE espe-
no venoso y posible edema de las vías respiratorias , cíficas frente a los alérgenos implicados.
que pueden llegar al shock anafiláctico. Un ejemplo Entre las pruebas in vivo destacan las cutáneas. En
de este tipo de reacciones es la que se produce en ellas, el alérgeno se aplica de forma tópica por vía
136 individuos sensibilizados tras la administración de cutánea y la respuesta inducida se cuantifica pasados
CAPITULO 12 El sistema inmunitario en la salud y en la enfermedad

unos minutos (respuesta inmediata) o varias horas nasofaríngeo; el virus linfotrópico humano tipo
(respuesta tardía). Una prueba positiva frente a un I (HTLV-I) relacionado con el linfoma/leucemia
alérgeno indica que los mastocitos de la piel están de células T del adulto; el virus del papiloma
sensibilizados con anticuerpos IgE unidos a sus re- (HPV) relacionado con carcinomas anogenitales;
ceptores de membrana. o el virus de la hepatitis B relacionado con el he-
patocarcinoma. En estas neoplasias se expresan
antígenos proteicos codificados por los genomas
NEOPLASIAS Y SISTEMA INMUNITARIO virales, responsables de respuestas de linfocitos
T o B frente a los antígenos de estirpe viral.
Con frecuencia , las células tumorales expresan pro-
teínas estructuralmente modificadas (neoantígenos),
las cuales pueden ser reconocidas como extrañas por
las células del sistema inmunitario. Estos antígenos,
MECANISMOS EFECTORES EN LA RESPUESTA
directa o indirectamente, van a despertar el interés de INMUNITARIA ANTITUMORAL
distintas células inmunocompetentes. Por otra parte,
Las células tumorales se originan en el propio orga-
para sobrevivir en el organismo, las células tumorales
nismo y no deberían pasar desapercibidas a la vigilan-
sufren un proceso de adaptación para lograr que el
cia inmunológica, esencialmente por la producción
sistema inmune la tolerancia de estos antígenos tu-
de antígenos tumorales, como se ha comentado en el
morales. Vamos a considerar detalladamente estos
apartado anterior. Y en efecto, directa o indirectamen-
tres aspectos.
te, estos antígenos determinan distintas reacciones de
las células inmunocompetentes . En primer lugar, la
célula tumoral expresará péptidos de estos antígenos
ANTÍGENOS TUMORALES unidos a sus moléculas HLA de tipo I, pudiendo ser
Podemos clasificar los antígenos tumorales en tres reconocidos por linfocitos T-CDB+ citotóxicos. Tam-
grandes categorías: bién los linfocitos T-CD4+pueden percibir la presen-
cia de antígenos tumorales si estos le son presenta-
Antígenos codificados por genes silentes en las dos, junto a moléculas MHC de tipo II, por células
células normales antes de sufrir la transforma- APC que los hayan captado como antígenos solubles
ción tumoral: Existen genes que no se expresan o como cuerpos apoptóticos de células tumorales.
en tejidos normales o que solo lo hacen en las Por otra parte, los linfocitos B pueden producir anti-
fases iniciales del desarrollo. La transformación cuerpos contra los antígenos tumorales, que activen
maligna de la célula puede hacer que se expre- al sistema complemento y atraigan células fagocíticas
sen en el sitio o el momento inapropiado, dando y células NK. Finalmente, la propia cél ula NK puede
lugar a proteínas que el sistema inmune no reco- reconocer también antígenos tumorales, sobre todo
nozca como propias. los codificados por genomas virales; asimismo, lamo-
Antígenos codificados por oncogenes o genes su- dificación fenotípica de la célula neoplásica puede
presores de tumor: Casi todos los tumores expre- conllevar la pérdida de las moléculas HLA de clase I,
san genes cuyos productos son necesarios para circunstancia que puede ser detectada por las células
la transformación maligna o el mantenimiento NK, provocando su activación. Además de la citotoxi-
del fenotipo maligno. Entre ellos hay oncoge- cidad directa por células NK o T-CD8+, la activación
nes, que son formas alteradas de genes normales de la respuesta inmune da lugar a la producción de
(protooncogenes) que regulan el crecimiento y la diferentes citocinas, algunas de las cuales poseen
diferenciación celular. Por otro lado, los genes un efecto citotóxico directo sobre la célula tumoral,
supresores regulan negativamente la prolifera- como el TNFo: (tumor necrosis factor).
ción celular. Las mutaciones ocasionales de es- Por lo tanto, el sistema inmune tiene herramientas
tos gen es tienen implicaciones patogénicas en la para luchar contra el tumor. ¿Por qué, sin embargo, un
transformación maligna y dan lugar a proteínas tumor sigue creciendo de forma descontrolada?
alteradas que pueden actuar como antígenos tu-
morales.
Antígenos codificados por genomas de virus on- EVASIÓN DE LA AGRESIÓN INMUNOLÓGICA
cogénicos: En la actualidad se conoce la implica-
ción de diferentes virus ARN y ADN en el desa- La transformación tumoral es un proceso muy lento
rrollo de diversos tumores. Las células de estas en el que las células de un tejido sometido a un estí-
neoplasias integran genes provirales y producen mulo carcinogénico (luz solar, tabaco , infección viral
las correspondientes proteínas, cuyos péptidos crónica) van acumulando mutaciones genéticas hasta
pueden ser presentados junto a moléculas MHC, adquirir el carácter pleno de «malignidad». Para ello
estimulando a los linfocitos T específicos. Exis- el tumor debe sufrir un proceso de adaptación evo-
ten varios ejemplos : el virus de Epstein-Barr aso- lutiva en el que se irán seleccionando las células con
ciado con el linfoma de Burkitt y el carcinoma mayor capacidad de supervivencia, mayor capacidad
SECCIÓN I Etiopatogenia general

proliferativa y mayor autonomía de su entorno. Ade- se manifiesta minutos u horas después de la revascu-
más, dado que estas células pueden expresar antíge- larización del injerto; b) el rechazo agudo (RA) es el
nos extraños para el sistema inmune, el mencionado que ocurre pocos días o semanas después de la reali-
proceso de adaptación evolutiva tiene que tener obli- zación del trasplante; c) el rechazo crónico (RC) es el
gatoriamente un mecanismo adicional que permita la que ocurre meses o años después de la intervención.
tolerancia de estos antígenos tumorales por el sistema El rechazo hiperagudo (RHA) está producido por
inmune. En base a los conocimientos actuales sobre anticuerpos alorreactivos preformados que reaccionan
la tolerancia inmunológica, la estrategia que mejor preferentemente con el endotelio vascular y activan
encaja en toda esta situación es la inducción de célu- rápidamente al complemento y a los neutrófilos. El
las reguladoras, capaces de suprimir la actuación del hallazgo anatomopatológico más relevante en el RHA
sistema inmune sobre el tejido tumoral. es la presencia de lesiones vasculares en los vasos de
En los últimos años han proliferado los trabajos pequeño calibre. La existencia de estos anticuerpos se
clínicos y experimentales demostrando el desarrollo debe descartar siempre antes de realizar el trasplan-
de células T-reg capaces de proteger a los tumores del te mediante la denominada «prueba cruzada», en la
ataque inmunológico. Así se ha demostrado un predo- que linfocitos del donante se incuban con suero del
minio de células con fenotipo regulador en los linfo- receptor en presencia de complemento. También debe
citos que infiltran tumores y una correlación entre la buscarse la compatibilidad de los grupos sanguíneos
concentración de estos linfocitos y la agresividdad y ABO y Rh. Este tipo de rechazo es refractario a cual-
mal pronóstico del cáncer. quier medida terapéutica farmacológica.
El rechazo agudo (RA) está mediado por linfocitos
que reconocen aloantígenos, fundamentalmente del
SISTEMA INMUNE Y TRASPLANTE HLA. Se caracteriza por la presencia de infiltrados de
DE ÓRGANOS células mononucleares (linfocitos T y B, macrófagos
En la medicina actual, el trasplante de órganos, teji- y células NK) localizadas primeramente en las áreas
dos o células de un individuo a otro es una estrate- perivasculares, que posteriormente pueden extender-
gia terapéutica bastante común. Es el último recurso se al resto del injerto. Al igual que en el RHA, la célula
para sustituir la función de un órgano o un sistema endotelial parece ser la primera diana en este tipo de
incapaz de cumplir sus funciones biológicas como rechazo. Esta reacción no es infrecuente, pudiéndose
consecuencia de un proceso degenerativo irrever- detectar más de un episodio en el mismo paciente, y
sible. El tipo inicial y más frecuente de trasplante suele responder a la terapia inmunosupresora agre-
fue la transfusión sanguínea, pero en la actualidad siva.
el éxito logrado con los trasplantes de vísceras y de El rechazo crónico (RC) también está mediado por
precursores hematopoyéticos ha hecho que la pato- linfocitos del receptor activados tras el reconocimien-
logía asociada a la exposición de células y moléculas to de los aloantígenos del donante, principalmente
procedentes de otro individuo sea una situación clí- HLA. El rasgo anatomopatológico predominante es la
nica cotidiana. fibrosis obliterante de las estructuras del injerto (va-
En las transfusiones sanguíneas la compatibilidad sos sanguíneos, bronquíolos, conductos biliares, etc).
entre donante y receptor se reduce a los grupos san- Aparecen lesiones avanzadas de arterioesclerosis, y
guíneos ABO y Rh, dado que los eritrocitos no expre- en el intersticio, infiltrados constituidos por linfoci-
san otros sistemas antigénicos que provoquen en el tos, macrófagos y células NK, junto a fibrosis .
receptor una reacción inmunitaria capaz de destruir- Como hemos dicho , los aloantígenos del donante
los. Mucho más compleja es la situación en los tras- que representa un papel patogénico mayor en el re-
plantes alogénicos de células u órganos sólidos que chazo son los aloantígenos HLA (clase I: sistema HLA
presentan moléculas del sistema HLA, susceptibles A, B y C; clase II: sistema HLA-DR, DQ, DP).
· de ser reconocidas por linfocitos T alorreactivos . El Existen dos formas de reconocimiento de los
elevado polimorfismo de estas moléculas hace prácti- aloantígenos del sistema HLA del donante por par-
camente imposible encontrar un donante idéntico al te de los linfocitos T del receptor: a) reconocimiento
receptor, salvo en el caso de trasplantes entre gemelos directo, en el que los linfocitos T CD4 y/o CD8 del
idénticos. receptor interaccionan directamente con moléculas
El reconocimiento de los órganos o tejidos trasplan- HLA alogénicas sobre la superficie de células APC
tados por parte del sistema inmunitario del huésped del donante, las cuales han sido transferidas con el
puede dar lugar a una respuesta efectora que limita órgano trasplantado; b) reconocimiento indirecto, en
su viabilidad y funcionalidad, debiéndose recurrir el que las moléculas HLA del donante se presentan
siempre al empleo de fármacos inmunosupresores como péptidos por las APC del receptor y, por tanto ,
durante largos periodos o incluso de por vida. El re- acoplados a moléculas HLA de este. Se cree que el
chazo de un aloinjerto vascularizado se clasifica en reconocimiento directo juega un papel mucho más
tres tipos, dependiendo del tiempo transcurrido tras destacado que el indirecto en la generación de reac-
138
su implante: a) el rechazo hiperagudo (RHA) es el que ciones alogénicas contra el injerto.
-i13
1nf lamación
Jesús González Macias, Jesús Merino Pérez,
Carmen Fariñas Álvarez

CONCEPTO
La inflamación constituye un mecanismo de defen-
sa que el organismo pone en marcha cuando existe
una agresión tisular. Su finalidad es, en primer lugar,
detener la agresión y, en segundo término, reparar el
daño producido. Se lleva a cabo gracias a un conjunto
de células y de sustancias denominadas, respectiva-
mente, mediadores celulares y mediadores químicos
de la inflamación.
Con un propósito eminentemente didác-
tico , la respuesta inmune se ha dividido
clásicamente en dos compartimentos:
la respuesta inmune innata y la res-
puesta inmune adaptativa. La falta
de pruebas hasta hace relativamente
poco tiempo de la interconexión en-
tre ambas, ha perpetuado el concep-
to de dos sistemas independientes.
En esta dicotomía, el fenómeno de
la inflamación se ha asociado con la
respuesta inmune innata, conside-
rándolo un proceso inespecífico en
el que juegan un papel muy relevante
granulocitos, monocitos-macrófagos,
plaquetas y las moléculas producidas por
todos ellos. El hecho de que la inflamación
sea posible en ausencia de microorganismos
(lo que después llamaremos «inflamación estéril»),
así como de linfocitos T y B, ha contribuido a con-
solidar esta idea. Se acepta, no acepta, no obstante,
que la contribución de la respuesta inmune adapta-
tiva en el fenómeno inflamatorio varía en función
de al menos dos factores: en primer lugar, el agente
desencadenante; en segundo lugar, el perfil temporal
de la inflamación: la respuesta adaptativa juega un
papel más importante en las formas crónicas de la
139
inflamación.
<; CCION I Etiopatogenia general

CAUSAS con el término genérico de patrón molecular asociado


a patógenos o PAMP (de Path ogen-Associated Mole-
Prácticamente todos los tipos de causa de enferme- cular Pattern) , presente en los gérmenes, y otro que
dad pueden producir inflamación: agentes ñsicos se conoce como patrón molecular asociado a daño
(traumatismos, calor, radiaciones ... ), agentes quími- o DAMP (de Damage-Associated Molecular Pattern),
cos (fármacos, tóxicos ... ), agentes vivos (virus, bacte- generado por una lesión tisular o la presencia de sus-
rias ... ), isquemia o necrosis celular... Incluso los fac- tancias extrañas ajenas a los microorganismos. Los
tores genéticos y el cáncer pueden estar implicados DAMP originadas por lesión tisular pueden proceder
en el desarrollo de fenómenos inflamatorios. Algunos de células (ácidos nucleicos, ATP, ácido úrico ... ) o de
agentes pueden ser diñciles de clasificar, como es el la matriz extracelular (ácido hialurónico, biglicanes,
caso de sustancias endógenas que precipitan en for- versican .. .). Lógicamente, los PAMP son propios de
ma de cristales (urato monosódico, pirofosfato) o al- la inflamación de origen infecciosas, mientras que las
gunas sustancias exógenas concretas (asbesto, óxido DAMP pueden producirse tanto en los procesos infla-
de silicio), que podrían calificarse de agentes ñsicos matorios infecciosos (como consecuencia de la lesión
o de agentes químicos. tisular producida por el germen) como en los estériles.
Desde el punto de vista práctico es útil clasificar Estas señales de peligro inducen una respuesta
a los agentes causales de inflamación en dos grandes en el sistema de defensa innata al actuar sobre los
tipos: infecciosos y no infecciosos. La inflamación receptores y sistemas moleculares que los detectan.
producida por estos últimos con frecuencia se englo- Los detalles de esta respuesta se han conocido en los
ban bajo el término de «inflamación estéril». últimos años, a medida que se han ido describiendo
varias familias de receptores que desarrollan esta
función de «centinela» en las células del sistema de
DOBLE SIGNIFICADO DE LA INFLAMACIÓN respuesta inmune inmediata.
Los receptores que reconocen los patrones PAMP
El fenómeno inflamatorio supone la puesta en mar- y DAMP se conocen genéricamente como PRR (de
cha de una serie de procesos que tienen dos tipos de pattern recognition receptors). Se han descrito varias
consecuencias, aparentemente contradictorias. El pri- familias de PRR, que se exponen seguidamente.
mero coincide con la finalidad del proceso inflamato-
rio y es claramente beneficioso: eliminación el agente
nocivo y reparación de las estructuras dañadas. El Lectinas tipo C receptoras
segundo , un tanto paradójico, consiste en la lesión de (LCR , de lectin type C receptors)
tejido previamente sano. Este es un hecho práctica- Las lectinas son moléculas de unión a carbohidratos
mente inevitable, ya que los mismos mecanismos de (manosa, galactosa o fucosa) . Reconocen carbohi-
la inflamación diseñados para eliminar el tejido da- dratos en superficies celulares, así como proteínas
ñado, pueden lesionar el tejido sano vecino («efectos glicosiladas en la superficie de los patógenos y en
colaterales»). En las infecciosas, la eliminación del la sangre o el tejido intersticial. Funcionan esencial-
germen puede justificar más fácilmente, en términos mente como receptores al servicio de la fagocitosis
biológicos, los efectos colaterales. En las estériles, en (scavenger receptors), captando microorganismos
que no hay ningún germen que eliminar, la lesión ti- u otras partículas potencialmente nocivas para que
sular puede ser predominantemente perjudicial. Un sean internalizados en los lisosomas y endosomas de
ejemplo de inflamación estéril fundamentalmente los macrófagos y neutrófilos. Otra de las funciones
negativa es la gota. En ella precipitan en el líquido adscritas a estos receptores es servir como molécu-
sinovial cristales de urato monosódico , que inician las de adhesión intercelular, pudiendo comportarse
una intensa respuesta inflamatoria enormemente do- como ligandos de integrinas.
lorosa; la reacción no se acompaña de ningún efecto
beneficioso, y, con el tiempo, los episodios inflamato-
rios recurrentes dañan la articulación conduciendo a Receptores tipo Toll
una artropatía crónica. Los PRR más estudiados son una familia de recepto-
res denominados TLR (Toll-like receptors) (Fig. 13-1).
Presentes en la membrana citoplasmática y en di-
PATOGENIA versas organelas, son proteínas transmembrana cuya
propiedad esencial es poner en marcha cascadas de
DETECCIÓN DE LAS SEÑALES señalización intracelular (Fig. 13-2). Los TLR están
INFLAMATORIAS presentes en diversos tipos de células hematopoyé-
ticas, como los macrófagos , las DC (células dendríti-
La inflamación se pone en marcha porque el agente cas), los mastocitos y los linfocitos T y B. También se
desencadenante induce la aparición de las denomi- expresan en las células endoteliales y en las células
nadas «señales de peligro» (danger signals), que son del parénquima de varios órganos. Los ligandos habi-
140
fundamentalmente de dos tipos: uno que se conoce tuales de los TLR de la membrana citoplasmática son
CAPITULO 13 Inflamación

Peptidoglicano


Flagelina
LPS, DNA
Lipopéptido RNA viral
HSP, bacteriano
bacteriano de doble RNA viral
Taxol (CpG )
o de cadena de cadena
simple
D.

TLR2 + TLR4 TLRS TLR3 TLR7 TLR9

TLR1 o 6
Membrana de organelas
Membrana citoplasmática
intracelulares

Figura Receptores To/1-/ike (TLR). Son proteínas de membrana que detectan moléculas derivadas de
agentes patógenos. Existen diversos tipos, con distintos ligandos, como se observa en la figura.

estructuras habituales en las bacterias como peptido- La unión de un TLR a su ligando inicia una cascada
glicanos, lipopéptidos o lipopolisacáridos (endotoxi- de señales citosólicas, que terminan en la activación
nas bacterianas) o proteínas como la flagelina (Fig. de factores de transcripción, sobre todo NF-KB o AP-
13-1). Los TLR situados en la membrana de vesículas 1. Esto lleva rápidamente a la expresión de genes
intracelulares reconocen RNA virales o secuencias que codifican diversas citocinas (TNF~) (Fig. 13-2) y
frecuentes en los DNA bacterianos. quimiocinas proinflamatorias, péptidos antimicrobia-

PAMP / DAMP
intracelulares
MyD

U ºt~ c:~~r
~
IIM,W;,I
.,.....
W&I
Pro- llll l ~ 1 ~ -+----+
Pro-lL 18 IL18

G
Figura Activación del sistema inmune innato. Las «señales de peligro » -PAMP (Patrón Molecular Aso-
ciado a Patógenos) o DAMP (Patrón Molecular Asociado a Daño)-, actúan sobre los «Receptores de Recono-
cim iento de Patrones» o PRR (TLR, NOD, NLR), desencadenando una respuesta (MPK, inflamasoma ... ) que se
traducirá, por una parte, en la producción de citocinas y mediadores de la inflamación, y por otra en la presen-
tación de antígenos a los linfocitos. RIA: respuesta inmune adaptativa .
5fCCION I Etiopatogenia general

nos y moléculas de adhesión. Un hecho relevante es nan con sus ligandos se forman oligómeros de
que esta ruta de señalización incrementa la función NLR en el citosol, y ello pone en marcha una
presentadora de antígenos en las células correspon- ruta efectora. Los distintos NLR tienen diferen-
dientes. tes funciones según el tipo de dominio efector:

APAF-1, primera molécula descrita de esta


RAGE (receptor of advanced glycation end products)
familia, contribuye de forma destacada a la
Es un caso particular de receptor de membrana, ex- formación del apoptosoma , una plataforma
presado en células hematopoyéticas y parenquimato- molecular que posibilita la activación de la
sas. Es un miembro de la superfamilia de las inmuno- caspasa-9. Este fenómeno pone en marcha la
globulinas. Fue descrito como un receptor de produc- ruta endógena de apoptosis dependiente de
tos de glicosilaciones no enzimáticas y de proteínas caspasas, en donde es esencial el papel de la
oxidadas, que se producen en algunos estados proin- mitocondria.
flamatorios como la diabetes y el fracaso renal cróni-
En el caso de NODl y NOD2 , que detectan
co. Posteriormente se ha demostrado que también se
peptidoglicanos bacterianos presentes en el
une a otras proteínas con estructura terciaria similar,
citosol, su oligomerización pone en marcha la
como fibras de amiloide, y la proteína HMGB 1 (high-
activación de MAP-cinasas y NF-KB, lo cual
mobility group box 1). La unión de RAGE con sus
tiene unas consecuencias similares a la unión
ligandos activa una vía de señalización que termina
de los TLR de membrana con sus ligandos:
con la traslocación de NF-KB al núcleo de la célula.
producción de citocinas proinflamatorias y
facilitación de la presentación de antígenos ,
Receptores citosólicos de la respuesta inmune innata lo que contribuye a la conexión entre la res-
A diferencia de los receptores de membrana anterior- puesta inmune innata y la respuesta inmune
mente mencionados, otras dos familias de PRR citosó- adaptativa.
licos solubles van a actuar como vigilantes del com-
Un tercer grupo de NLR forman plataformas
partimento intracelular para las señales de peligro.
moleculares que se h an denominado «infla-
A) Los PRR citosólicos mejor conocidos son los m asomas» (Fig. 13-3). Cuando las proteínas
NLR (NOD-like receptors ). Cuando interaccio- NLRP3 localizan alguno de sus ligandos se

M embrana celul ar

DAMP, PAMP

pre-lL-1~

Ác ido úrico,
asbesto,
síli ce
{DAMP)
Fago fi sosoma

Figura Procesamiento de señales DAMP por los lisosomas para actuar sobre los inflamasomas . Las molé-
cu las que estimu lan receptores intracelulares pueden no ser las propias señales de peligro interior izadas, si no e l
producto de la digestión de dichas mo lécu las por las enzi mas de los lisosomas (la mo lécu la es internalizada e n
un fagosoma, que se une a un lisosoma fo rma ndo un fago lisosoma; en él d icha mo lécul a sufre la acc ió n de las
enzimas). En la figu ra, la susta ncia resul tante de la acc ió n de los enzimas se une al receptor de un in flamasoma,
lo que activa la caspasa, con lo que se prod uce IL-1 ~- ROS: reactive oxygen species; DAMP: Damage Associated
Molecular Pattern; PAMP: Pathogen-Associated Molecular Pattern.
CAPÍTULO 13 Inflamación

asocian con proteínas adaptado-


ras. Esto capacita a estas últimas
para unirse a moléculas de pro-
caspasa-1, que al encontrarse en
estrecha proximidad se activan
entre ellas originándose caspasa-1
,u,!::::c:.•,~
Receptores reconocedores
de patrones (PRR)
Otras estructuras
de reconocimiento
activa. Esta proteasa actúa sobre
las formas inactivas de pro-lL-1 ~ +
Mediadores inflamatorios químicos
+
y celulares
y pro-IL-1 8 y las activa (Figs. 13-2
y 13-3). De esta forma se secretan
al exterior de la célula y produ-
cen los efectos proinflamatorios
• •
Vasodilatación - • - - - - • • Agentes vasoactivos
y aumento de • • Moléculas de adhesión
característicos de estas citocinas. permeabilidad 0iapedesis
Quimiotaxis
B) Otro tipo de sensores citosólicos Fagocitosis
son las helicasas tipo R1G (RLHJ. Autofagia
Las RLH se definen como sensores
citoplásmáticos de RNA viral de
doble cadena, lo cual complementa Destrucción del
la labor de TLR-3 en las vesículas agente agresor y
intracelulares . La activación de las del tejido dañado o sano
RLH desencadena la activación de
los factores de transcripción NF-KB Figura Esquema general del fenómeno inflamatorio. El
e IRF3/7 (IFN regulatory factor-317), agente desencadenante (bacteria, traumatismo) produce señales
los cuales cooperan en la inducción de daño, que se unen a los receptores y otras sustancias (Co mple-
de interferones de tipo I (o: y ~) con mento) de reconocimiento. Ello da lugar a la producción de los
marcada actividad antiviral mediadores de la inflamación, entre los que hay sustancias vasoac-
tivas que determinan vasodi latación y aumento de la permeabi li -
Otras estructuras de reconocimiento dad. Otros mediadores tie nen efecto quimiotáctico, favorecen la
diapedesis leucocitaria, o estimulan la fagocitosis (opsoninas) o los
Con independencia de los sistemas de
fenómenos de autofagia. El resultado es la destrucción del agente
receptores referidos, existen otras estruc-
agresor y del tejido (daña do o sano) circundante.
turas, tanto celulares como extracelulares,
que pueden reconocer agentes desencade-
nantes de la inflamación. (p. ej., por activación mutua y recíproca de distintos
Entre las estructuras celulares que pueden ser esti- mediadores). Ello hace que el proceso inflamatorio
muladas por dichos agentes cabe señalar receptores de
pueda desarrollarse de forma muy rápida, explosi-
tipo scavenger, como los que reconocen componentes
endógenos modificados (lipoproteínas LDL oxidadas). va, y que el organismo deba disponer de elementos
Las estructuras extracelulares estimulables por las
señales de daño son proteínas que tras su unión a la
señal inician y propagan la respuesta inflamatoria
(quimiotaxis, fagocitosis, etc.). Un ejemplo lo consti-
tuyen los componentes del sistema del complemento.
-•e!" _J
También se comportan de esta forma los propios re- Señal de daño (PAMP, DAMP)
ceptores PRR, que pueden ser vertidos al exterior de
la célula, actuando como proteínas solubles.
+ M,d;ado:~ oflamatodM +
Mediadores de la inflamación
La estimulación por las señales de daño de los re-
ceptores y moléculas que acabamos de comentar, se Daño tisular
traduce en la producción o activación de determina-
das sustancias, y en la atracción al foco y activación
de determinadas células. Se conoce a ambas como Figura Retroalimentación de la inflamación. Di-
mediadores de la inflamación (Fig. 13-4). Algunas versos productos de la activación de la cascada inflama-
de estas sustancias, o derivados de las células, pue- toria y de la propia lesión tisular tienen capacidad para
den volver a actuar sobre los receptores, cerrando un actuar sobre las estructuras que reconocen las señales
círculo de autoalimentación (Fig. 13-5). Esta retroali- de daño, con lo que se cierra un círculo que amplifica,
mentación puede también efectuarse a otros niveles y tiende a perpetuar, la in flamación.
Etiopatogenía general

Citar:inos yfoctare::; de creCÍmiento. Las citocinas trom bosa los vasos digeridos por las 1mzimas 0m
son polipéptidos producidos por distintos tipos el foco inflamatorio. e\'itando la hemorragia Em
ele células que activan o modulan la actividad de esta rngión.
otras células. Sistemo de la Jibrinólisis. Tiene corno finalidad
Algunas de las citocinas (TNF, lL-1) constituvcm los la producción dfl plasmina, enzima proteolílica
nrndiadorns primarios de la inflamación, liber~dos en que interviene lisanclo la fibrina.
respuesta al efecto de las moléculas PAMP v DAMP Sistenw de los cininas. Producen nisodilatación
sobre los rHceptores PRR. Olras son sinleti;,aclas on y aumentan la permeabilidad vascular. Además,
respuesta a las anterioros, y forman parte ele los me- inducen dolor y pueden tener propiedades qui-
diadores secundarios (IL-6). rniotáct icas.
La IL-1 y el TNF tienen muchas propiedades co- Sistemo del complemento. Su misión principal
munes. Sus efectos son con mucha frecuencia adi- es la opsonización dfl partículas (patógenos,
tivos, e inclucEm cada una de ollas la síntesis de la complejos inmunes circulantes) lo cual se
otra. Además de otros mediadores secundarios de consigue plenamentfl cuando se activa el C3, o
efrlcto fundamontalmnnte local. Hstán implicadas en parcialmente si se activa Hl C4 o incluso el C1q.
la rnspuesta sistémica del organismo a la inflamación. ciado qufl estos factores Sfl unfln a receptores
inducim1do en ol hígado la producción de rnactantes específicos en las células fagocíticas. Así. se
de fase aguda (PCR, factores clfl coagulación) y en el han descrito un receptor para el C1q y cuatro
endotelio cerebral la producción do prostaglandinas. receptores para C3b y C4b (denominados CR1 a
También inducen la producción do JL-6, que está muy CR4), alguno dfl los cuales (CR3 y CR4) son tam-
rolacionacla funcionalmente con ellas, y parece tener bién moléculas de adhesión loucocitarias. Por
más trascendencia en la respuesta sislómica qufl en otra parte, lns anafilotoxinas C5a, C3a v C4a son
la local. activadoros prncocos dn la cascada inlirn1rntoria
Junto con las cilocinas comentadas, merecen citar- debido a sus propiedadus quimiotácticas sobrn
se otras. Por ejemplo. el GM-CSF y la IL-3 estimulan los leucocitos y a sus propiedades vasoactivas
la producción do granuloc:itos y macrófagos on la (aumento do la permeabilidad\' vasodilalé1ción).
médula ósea. La IL-8 posflfl efoctos quimiotácticos (ns Dn esta forma. el complflmento tiene un papel
el antiguo factor quimiotúctico de los neutrófilos) v crítico en la señal cln alarma de la reacción in-
angiogénicos, y es un potente activador de los neL;- flamatoria.
trófilos.
El complemento 1iene. admrnís. efectos bactoricidas
directos. La activación de sus últimos componentes.
Factores plasmáticos hasta C9. confecciona un sistema formador dn poros
Sistema de contacto en las membranas celulares (MAC) qun causan la lisis
osmótica clfl la célula o bacteria diana. La formación
Está integrado por una serie clfl proteínas plasmáti-
del MAC adquiere relevancia en la respuesta frnnte a
cas, caracterizadas por actuar mediante un sistcmrn
N. meningiUdis, como lo demuestra la existencia do
de amplificación en cascada. Varios componentes se
infecciones recurrentes por este microorganismo cm
activan sucesivamHnte, dfl tal forma qufl t1! compo-
pacientes con dóficit congénitos de los últimos facto-
nonto de un paso dflterminado ,ictiva un gnm núnrn-
rr:is del complemento.
ro de moléculas dfll siguiente. lo que tiemi un nfocto
Finalmente, como una muestra más dfl la inter-
multiplicador. Son cuatro sistemas: el del cornple-
conexión flntrn los sistemas de respuüsla inmune
mentn, fll de la coagulación, el clfl la librinólisis v el
innato v adaptativo, el complemento también juega
de las cininas. Se encuentran basalmente en fo;·ma
un papel relHvante en la activación de los linfocitos
inactiva. La activación Sfl produce cuando una sus-
B. Contribuyfl a la formación del ,,correceptor» para
tancia, denominada factor Hageman, entra en con-
el antígeno, con una función superponible a la desa-
tacto (ele ahí el nombre) con el colágeno dfll tejido
rrollada por las moléculas CD4 y CD8 cm las cólulas
lesionado, que ha qtrnclado al dHscubinrto por la alte-
T. Así, fll receptor CR2 para el C3h Sfl expresa cm la
ración del endotelio. El factor Hageman es habitual-
membrana las células B junto a otras dos moléculas
nrnntfl clm;crito como el factor XII de la coagulación,
(CDrn y CD81). Este complejo sfl une a antígenos qufl
pero también activa el sistema clfl la fibrinólisis v el
han fijado complemento, potenciando la señal del re-
do las cininas. La activación ele estos sistemas é;ca-
ceptor antigénico necesaria para la activación de los
ha activando a su \'eZ el sistoma dnl complemento.
linfocitos B.
El complemento ptrnde activarse también por otros
mecanismos. Reactantes de fase aguda
Sístemos de la cooguloción. La finalidad dfl su Durante la inflamación. y bajo ol efecto do las dcmo-
activación es la formación de coágulos de fibrina, minadas citocinas proinflamatorias (TNFa, lL-1, IL-
que forma una malla para aislar el foco inflama- 6), HI hígado modifica su patrón habitual cln síntesis
146
torio dul rosto do! organismo. Por otra parte, proteica, de forma qufl disminuye la síntusis do albú-
CAP[TULO 13 Inflamación

mina y prealbúmina, y aumenta la de otras proteínas se comprende que esta sólo puede ocurrir en los teji-
plasmáticas, conocidas como reactantes de fase agu- dos vascularizados.
da. Constituyen una familia de aproximadamente 30
proteínas. El papel de los reactantes de fase aguda no Aumento de la leucopoyesis
siempre es bien conocido. En algunos casos parecen La llegada de las células fagocíticas al foco infla-
estar implicados en la fase inicial de la inflamación, matorio se ve favorecida por los cambios vasculares.
mientras que en otros lo están en el control de la mis- Además durante la reacción inflamatoria, aumenta la
ma. La PCR es una pentraxina que tiene capacidad producción de leucocitos en la médula ósea y libera-
para reconocer patógenos microbianos, para activar ción.
el complemento, y para activar los macrófagos a tra-
vés de su receptor Fe. El SAP, o componente P sérico Marginación y adherencia leucocitaria
del amiloide, es otra pentraxina de efectos similares. En los vasos del foco inflamatorio tiene lugar un fe-
La SAA (proteína sérica asociada al amiloide) es una nómeno de marginación leucocitaria, o unión de los
apoproteína que forma parte de las HDL 3, las cuales leucocitos a las paredes de los vasos , que constitu-
desarrollan un efecto antioxidante y antiinflama- ye un paso previo a su posterior salida al intersticio.
torio. Otros reactantes de fase aguda se comportan Este fenómeno se establece merced a la existencia,
como inactivadores enzimáticos (al-antitripsina , al- tanto en la superficie de los leucocitos como en la
quimiotripsina, a2-macroglobulina). de las células endoteliales, de las llamadas moléculas
Finalmente, la hepcidina es una proteína segregada de adhesión celular. La unión de los leucocitos a la
fundamentalmente por los hepatocitos, encargada de pared vascular tiene lugar en dos fases. En la prime-
la regulación del metabolismo del hierro, cuya sínte- ra se establecen uniones laxas que se deshacen con
sis aumenta marcadamente bajo la acción de la IL-6. facilidad. Tras despegarse, los leucocitos se despla-
zan, para unirse otra vez más adelante. El fenómeno
se conoce en conjunto con el nombre de rodamiento.
FISIOPATOLOGÍA Las moléculas de adhesión que intervienen en esta
primera fase son las selectinas. En la segunda fase,
El primer cambio morfológico que se percibe como
la unión, más firme , se establece a través de las in -
reacción a la actuación del agente causante de la in-
tegrinas, presentes en los leucocitos, y de miembros
flamación es de carácter vascular. Varios de los me-
de la superfamilia de las inmunoglobulinas (ICAM),
diadores comentados promueven la vasodilatación y
presentes en las células endoteliales .
el aumento de la permeabilidad vascular. Ambos he-
chos contribuyen a que alcancen el foco inflamatorio Quimiotaxis
los agentes defensivos, tanto bioquímicos como ce-
lulares. Los principales mediadores celulares, como Consiste en la atracción de células fagocíticas hacia
ya hemos dicho, son los leucocitos. A su llegada al el foco inflamatorio. Merced a ella los leucocitos mar-
foco y a su actuación contribuyen los agentes bioquí- ginados atraviesan la pared vascular (diapedesis) y
micos estimulando diversas funciones: leucopoyesis, se desplazan por el intersticio. Se establece porque
quimiotaxis, opsonización, fagocitosis y destrucción los fagocitos poseen receptores para los agentes qui-
intraleucocitaria. El resultado de la actuación de los miotácticos, orientándose en su desplazamiento se-
leucocitos es la destrucción y retirada del tejido le- gún el gradiente de concentración de los mismos (se
sionado y, si se encuentra en él, del agente agresor. desplazan hacia donde esta es mayor) . Los agentes
Tras esta primera fase destructiva, el tejido lesionado quimiotácticos son muy numerosos: C5a, leucotrieno
se reparará (fase reparadora). Además, el fenómeno B4, PAF, productos bacterianos, productos del daño
de inflamación local puede acompañarse de una reac- tisular, IL-8, etc.
ción general o sistémica.
Opsonización y fagocitosis
Tras llegar al foco (lo que da lugar al infiltrado leu-
COMPONENTE LOCAL DE LA INFLAMACIÓN cocitaria}, los leucocitos desarrollan su función de-
Fase destructiva fensiva, que se establece fundamentalmente gracias
a la fagocitosis y a la producción de sustancias con
Vasodilatación y aumento de permeabilidad capacidad destructora. La fagocitosis es el fenóme-
La vasodilatación, por una parte, permite la llegada no en virtud del cual el fagocito hace que pasen a
de una mayor cantidad de sangre (hiperemia) con sus su interior diversos tipos de materias particuladas,
elementos defensivos y, por otra, enlentece el flujo como las bacterias, englobándolas en una invagina-
sanguíneo, facilitando el contacto de las células con ción de la membrana citoplasmática, que termina por
la pared del vaso. El aumento de permeabilidad pro- desprenderse de la membrana para incorporarse al
mueve el paso de células y sustancias humorales des- citoplasma, constituyendo un fagosoma. Es facilita-
de el interior del vaso al intersticio. Dada la impor- da por la opsonización o recubrimiento de la materia
tancia de los vasos en el desarrollo de la inflamación, a fagocitar por sustancias para las que los fagocitos
Etiopatogenia general

poseen receptores. Dichas sustancias se denominan reciclar productos de la propia célula y además cons-
opsoninas. Se comportan como tales los anticuerpos tituye un sistema de defensa, ya que permite destruir
y el C3b. microorganismos. No es de extrañar, por tanto, que
uno de los mecanismos que la activan sea la estimu-
Destrucción del agente inflamatorio lación de receptores PRR. Pero además de destruir la
Una vez en el interior del fagosoma, la partícula fa- partícula englobada en la vesícula, la autofagia contri-
gocitada sufre la acción de dos tipos de agentes: las buye a la respuesta inflamatoria porque -como ocurría
enzimas contenidas en los gránulos y los lisosomas, y con la fagocitosis- sustancias originadas en la diges-
las ROS (reactive oxygen species). Lo primero ocurre tión lisosómica pueden estimular receptores PRR. El
cuando el fagosoma se une al lisosoma. Las ROS se fenómeno interviene en el proceso de presentación de
producen durante la formación del fagosoma. Ambos antígenos.
tipos de agentes, además de actuar en el interior del
leucocito, son vertidos al exterior, donde actúan so-
bre el tejido lesionado circundante -e incluso sobre Fase reparadora
el sano-, destruyéndolo. Control de la destrucción
En relación con la fagocitosis debe mencionarse el
fenómeno de la autofagia, descrito más recientemente. Ya se ha señalado que, desde el comienzo de la infla-
En ella, una estructura alojada en el citoplasma celu- mación, existen sistemas de control para evitar que
lar es englobada en una vesícula, la cual -como en el proceso se desborde. Así por ejemplo, el sistema
la fagocitosis- se une a los lisosomas, que la digieren de la coagulación limita su extensión a su vez, para
(Fig. 13-6). La diferencia con esta última estriba en que evitar una actuación excesiva del mismo , el sistema
dicha estructura no se encuentra en el interior de la de la coagulación está controlado por el de la fibri-
célula por haber sido englobada en una invaginación nólisis.
de la membrana citoplasmática, sino que, o bien es un Por otra parte, una vez que el proceso inflamatorio
componente de la propia célula (autofagia en sentido ha conseguido sus objetivos de eliminar el agente
estricto), o bien ha penetrado desde el exterior por me- causal y el tejido lesionado, se produce un cambio
canismos diferentes, como es el caso de las bacterias en los mediadores, destinado a frenar el proceso
intracelulares o los virus (en tal caso algunos autores destructivo e iniciar el reparador. Dicho cambio está
prefieren hablar de xenofagia). La autofagia permite fundamentalmente mediado por los macrófagos,

Lisosoma

Fagóforo

► L
Autofagosoma Autolisosoma

Figura Autofagia. Es un proceso en virtud del cua l se forman en el interior de una céula vesículas de doble
membrana que engloban tanto productos prop ios como sustancias que han sido interiorizadas por mecanismos
distintos a la fagocitosis. Las vesícu las se acaban uniendo a un lisosoma, sufriendo su contenido la acc ión de los
enzimas de este. Entre las susta ncias que pueden eng lobarse en dichas vesículas se encuentran las señales de
daño, que sufren la misma evolució n que cuando han sido internalizadas en un fagosoma, como se indica en la
148
Figura 13-3.
CAPITULO 13 Inflamación

que pasan de desarrollar un papel proinflamatorio La adrenalina y la noradrenalina son también


a otro antiinflamatorio. En primer lugar, comienzan sustancias antiinflamatorias, inhibidoras de las
a producir otras sustancias antiinflamatorias de na- citocinas y otros mediadores inflamatorios, cuya
turaleza lipídica, como las lipoxinas, derivadas del intervención significa la implicación del sistema
ácido araquidónico (un ácido graso ro6), y las resol- nervioso simpático en sus dos brazos efectores,
vinos y protectinas, derivadas de ácidos grasos ro3. la médula suprarrenal y las fibras simpáticas
Más recientemente se ha descrito la maresina. Estas periféricas.
sustancias, producidas por los macrófagos que han Por otra parte, ya hemos comentado que se li-
fagocitado neutrófilos, frenan la llegada de nuevos beran citocinas y otros productos inhibidores de
neutrófilos, y atraen macrófagos para la limpieza del las citocinas proinflamatorias (IL-4, IL-10, TGF~,
foco. En segundo lugar, los macrófagos modifican su TNF binding protein, IL-lR soluble).
patrón de secreción de citocinas, lo que viene funda-
mentalmente marcado por la producción de TGF~, Repa ración
IL-10 y el IL-4 por los linfocitos T-reg, que suprimen Tras finalizar la fase de destrucción, comienza la de
la activación macrofágica previa y promueven la reparación, caracterizada por la emigración y prolife-
reparación tisular. ración de las células del tejido conectivo. Las células
La finalización de la inflamación supone no solo endoteliales dan lugar a los vasos, y los fibroblastos
el cese en la producción de los mediadores de la fase al tejido intersticial. Los miofibroblastos (híbridos de
destructiva, sino también la intervención de sustan- fibroblastos y células musculares lisas) permiten, por
cias que evitan su actuación. Las enzimas liberadas su contracción, la aproximación de los bordes de la
en el foco inflamatorio son controladas por toda una lesión.
serie de antienzimas, como la a¡-antitripsina o la ai- Intervienen también mediadores químicos, ya que
macmglobulina. El SLPI (inhibidor de la proteasa de la actuación de estas células responde en gran parte
los leucocitos secretores}, a diferencia de las sustan- a estímulos humorales (fundamentalmente a factores
cias anteriores, no predomina en los tejidos, sino en de crecimiento).
las secreciones. Suprime la capacidad del TNF para La restauración está también sometida a mecanis-
activar a los neutrófilos y promueve la epitelización. mos de control. Se cuentan entre ellos las chalanas
Las ROS se controlan a múltiples niveles: supe- (producidas por las células maduras de una determi-
róxido dismutasa, catalasa, glutatión reductasa. Un nada línea celular para evitar la proliferación excesiva
interesante sistema de control de las ROS parece de células de esa misma línea), el factor regulador del
guardar relación con un conjunto de proteínas intra- crecimiento de los fibmblastos, etc.
celulares denominadas proteínas de estrés o proteínas
del shock térmico, del que se sabe que aumentan en
situaciones de lesión tisular, desarrollando diversas COMPONENTE SISTÉMICO
funciones protectoras y de reparación celular. Una de
ellas es la antioxidante.
DE LA INFLAMACIÓN
El sistema de las cininas es controlado tanto en La respuesta sistémica a la lesión tisular ha sido de-
su activado1~ la calicreína (destruida por el Cl INH}, nominada reacción de fase aguda, y se debe funda-
como en sus productos, las cininas (destruidas por las mentalmente a la acción de las citocinas. La reacción
cininasas I y II). El del complemento, también por el de fase aguda puede considerarse como un elemento
Cl INH y los inhibidores de C3. de la reacción de estrés que se estudia en el capítu-
También se establecen mecanismos sistémicos de lo 14, también conocida como síndrome general de
control. Por ejemplo: adaptación o síndrome de alarma, la cual se instaura
cuando existe una amenaza para la homeostasis gene-
Se estimula la secreción de cortisol, que inhibe ral del organismo.
la síntesis de diversos mediadores (histamina, Las citocinas determinan lo que acabamos de deno-
cininas, derivados de lípidos de membrana, IL- minar reacción de fase aguda, que está integrada por
1), así como la salida de los neutrófilos del lecho los siguientes componentes:
vascular.
Se activa el «reflejo colinérgico antiinflamato- Fiebre. El aumento de temperatura es inducida
rio», que supone la intervención del sistema por las citocinas (fundamentalmente IL-6 e IL-1)
nervioso parasimpático. Aferencias sensitivas mediante su actuación sobre las células endote-
-así como sustancias liberadas en la inflamación liales cerebrales, lo que determina la producción
(citocinas)- alcanzan el sistema nervioso central, de prostaglandinas.
donde establecen un reflejo cuyo brazo eferente Leucocitosis. En las inflamaciones agudas, tras
son las vías parasimpáticas. Los macrófagos ti- una breve fase de disminución de los leucocitos
tulares poseen receptores para la acetilcolina; al (leucopenia] por marginación de los mismos, se
unirse a ellos, inhiben la producción de citocinas produce una leucocitosis (aumento en el número ----,-;fg
inflamatorias. de leucocitos de la sangre) por incremento en
SECCIOfli II Etiopatogenia general

la producción y salida de los neutrófilos de la musculares, y aumentarla para las células de


médula ósea. Su finalidad, lógicamente, es au- los sistemas de defensa.
mentar el número de leucocitos disponibles. La inflamación, además , se asocia típicamente
Anemia. Se establece de una parte por falta de con modificaciones en el metabolismo del
disponibilidad de hierro «y por disminución hierro , debidas al aumento de hepcidina. Di-
de la eritropoyetina, así como de la respuesta a cho aumento determina una reducción en la
la misma. A la anemia contribuye además una absorción intestinal de hierro y un secuestro
disminución de la vida media de los hematíes. del mismo en forma de ferritina en el sistema
Reactantes de fase aguda. Ya nos hemos referido reticuloendotelial (Fig. 13-7).
a ellos como factores supuestamente benefi- Finalmente, la inflamación repercute también
ciosos, aunque el efecto de algunos de ellos se sobre el metabolismo mineral, ya que las ci-
desconoce. tocinas estimulan a los osteoclastos, disminu-
Metabolismo intermediario. yendo la masa ósea.
En la reacción de fase aguda se establece un ba- Modificaciones hormonales. En la reacción de
lance nitrogenado negativo , fundamentalmen- fase aguda está estimulado el eje hipotálamo-
te a expensas de las proteínas musculares. El hipófisis-suprarrenal, con el resultado de un au-
fenómeno es mediado por las prostaglandinas. mento en la producción de cortisol, lo que cierra
Los aminoácidos procedentes del músculo un bucle de control sistémico de la inflamación,
son en parte desaminados, pero en parte son al inhibir diversos aspectos de ella.
también transferidos a otros órganos (hígado, Sistema nervioso. Las citocinas actúan sobre el
sistema linfopoyético) para facilitar la síntesis cerebro mediante la inducción en las células en-
proteica (reactantes de fase aguda, anticuer- doteliales de la producción de prostaglandinas
pos) y la proliferación celular. (particularmente PGE2), determinando y astenia,
En cuanto al metabolismo lipídico, hay una que facilita el ahorro de energía (lo que algunos
disminución del depósito de triglicéridos en el han denominado sickness behavior - «compor-
tejido graso (inhibición de la lipoproteinlipa- tamiento de enfermo »- , o reorganización de las
sa) y una liberación de ácidos grasos libres. El prioridades del organismo para enfrentarse a los
consumo de estos ácidos grasos constituye una agentes patógenos). Las prostaglandinas también
fuente de energía. La disminución del tejido disminuyen el umbral del dolor, lo que tendría
adiposo se traduce, lógicamente, en adelgaza- la finalidad de contribuir a evitar que el enfermo
miento. Este aspecto parece particularmente se exponga a situaciones que pueden suponer
debido al TNF, que, de hecho, también recibe una demanda de energía. Paradójicamente, como
el nombre de caquectina (caquexia = adelga- parte de la reacción de alarma, puede haber con-
zamiento extremo con desnutrición y altera- comitantemente un cierto grado de aumento de
ción funcional). actividad del sistema nervioso simpático. En si-
Por otra parte, hoy se insiste también en la im- tuaciones graves puede determinar una situación
portancia que puede tener la inflamación en el de excitación o aumento de consumo energético,
metabolismo hidrocarbonado. Determina una que se impone a la sickness belwvior que acaba-
situación de insulinorresistencia, cuya finali- mos de comentar.
dad es disminuir la disponibilidad de glucosa Anorexia. También debida a la actuación de las
por las células hepáticas, adipocitos y células citocinas sobre el cerebro, forma parte del «com-

Af
.
lnflamación - - - -u v - -
IL-6 r-7
L!_J Hepci dina Metabolismo
del hierro

Macrófago Hepatocito Secuestro


Bloqueo
de la absorción en el sistema
intestinal reticuloendotelial

Figura Metabolismo del hierro en la inflamación. Las citocinas inflamatorias (IL-6) inducen la producción
por el hígado de hepcidi na, la cual dismin uye la cantidad de hierro disponible para la formación de hematíes al
in hibir la absorción intestinal de hierro y bloquear en el sistema reticuloendotelial el hierro que ya se encuentra
150
en el in teri or del organ ismo.
CAPITULO 13 Inflamación

portamiento de enfermo » y su utilidad real es A las cuatro manifestaciones comentadas, Galeno


desconocida. (según otros autores , Virchow) añadió una quinta: la
alteración funcional (functio laesa). La traducción clí-
nica de esta alteración funcional es muy variable, de-
MANIFESTACIONES pendiendo de cuál sea la función del órgano afectado:
inmovilidad en la inflamación articular, insuficiencia
Las manifestaciones de la inflamación varían depen- hepática en la hepatitis, insuficiencia respiratoria en
diendo de que se trate de una forma aguda o de una la inflamación pulmonar, etc.
forma crónica de la misma. Por otra parte, tanto en La inflamación aguda puede manifestarse de for-
una como en la otra existen manifestaciones locales ma muy variable, en función de diversos factores.
y manifestaciones generales. La inflamación de un
órgano determinado suele designarse añadiendo el Influye la localización del órgano inflamado:
sufijo -itis al nombre del órgano; p. ej. , hepatitis. las manifestaciones galénicas son detectables
fundamentalmente cuando el proceso afecta a
estructuras superficiales, pero no a las profundas
MANIFESTACIONES LOCALES (excepto tal vez el dolor y la tumefacción).
Inflamación aguda En segundo lugar, influyen las características
anatómicas del órgano. Mientras que en un ór-
Las manifestaciones cardinales de la inflamación agu- gano macizo el exudado produce edema, en las
da son habitualmente enunciadas como dolor tumor serosas da lugar a la aparición de líquido libre
rubor y calor, y se conocen como «manifes(acione~ (derrame pleural, por ejemplo) y en las mucosas
galénicas » (de Galeno, s. III d.C) , aunque parecen ha- a un cuadro catarral (exudado rico en moco).
ber sido descritas por Celso (s. I a.C). El dolor se debe
Por otra parte, el agente causal puede determinar
a que algunos de los mediadores, como la bradicinina
el tipo de exudado, que puede ser seroso (rico
y la histamina, estimulan los receptores dolorosos
en albúmina , pero pobre en células), fibrinoso
(sustancias algógenas). Otros, como las prostaglan-
(rico en fibrina) o purulento (predominio de neu-
dinas, aumentan la respuesta dolorosa a aquellas. El
trófilos PMN). El primero indica una reacción
dolor inflamatorio con frecuencia es pulsátil. El tu-
inflamatoria más suave, y suelen producirlo los
mor (tumefacción , en el lenguaje actual) se debe a la
virus y reacciones autoinmunitarias; el segundo
acumulación, en el intersticio del foco inflamatorio
suele estar producido por bacterias, y tiende a or-
de un líquido rico en proteínas y en leucocitos, deno~
ganizarse; el tercero es propio de infecciones por
minado exudado, procedente de la extravasación de
gérmenes piógenos (estreptococos, estafiloco-
líquido plasmático, como consecuencia del aumento
cos). Cuando el pus infiltra un tejido, hablamos
de la permeabilidad vascular (la acumulación de lí-
de flemón; el flemón tiende a formar un absceso,
quido en el intersticio se conoce como edema). Cuan-
o colección de pus alojada en una cavidad produ-
do el exudado es muy rico en neutrófilos , se deno-
cida por la necrosis del tejido correspondiente.
mina pus (o exudado purulento), cuyo color verde se
A su vez, el absceso tiende a abrirse al exterior
debe a una enzima (mieloperoxidasa) presente en este
mediante el desarrollo de fístulas. La acumula-
tipo de granulocitos. El rubor (eritema en el lenguaje
ción de pus en una cavidad serosa se denomina
actual) (Fig. 13-8) se debe a la acumulación de sangre
empiema.
en los vasos dilatados. El calor se debe a este mismo
fenómeno , contribuyendo además al incremento del También tiene importancia el principal tipo de
metabolismo que tiene lugar en el foco inflamatorio. célula implicada en la respuesta inflamatoria;
El término inflamación (derivado de la palabra llama) por ejemplo, en las vías respiratorias son abun-
hace referencia a este hecho. dantes los mastocitos, lo que facilita el desarrollo
de respuestas de tipo alérgico (asma).

Inflamación crónica
Frente a las manifestaciones semiológicamente flori-
das de la inflamación aguda, la inflamación crónica
tienden a presentar cuadros indolentes. En su forma
más típica se caracterizan por un componente exuda-
tivo escaso y un componente proliferativo (vascular
y fibroblástico) intenso, con aumento de producción
de tejido conectivo, por lo que es frecuente la produc-
ción de una fibrosis marcada. Las células monocito/
macrofágicas desempeñan un papel predominante
Figura Eritoma nodoso: zonas de tumefacción y (a diferencia de lo que ocurre en las formas agudas,
----:rsT
enrojecimiento. en que predominan los neutrófilos) , y con frecuencia
5 CC ON I Etiopatogenia general

se disponen en granulomas (formaciones nodulares lar diseminada). El TNF, o alguna sustancia inducida
compuestas por macrófagos y células derivadas de por él, deprimen además la función miocárdica.
ellas -epitelioides y gigantes-, rodeadas de linfocitos
y células plasmáticas). Inflamación crónica
Las manifestaciones sistémicas son algo diferentes
MANIFESTACIONES GENERALES de las que tienen lugar en los procesos agudos. Son
más típicas la astenia, la anorexia y el adelgazamien-
DE LA INFLAMACIÓN to, particularmente este último, puesto que da más
Inflamación aguda tiempo a que se desarrolle. Puede aparecer anemia,
denominada «anemia de trastorno inflamatorio cró-
La repercusión general de la inflamación es fundamen- nico», por las razones ya comentadas en relación con
talmente consecuencia de la liberación de citocinas la eritropoyesis, el metabolismo del hierro y la vida
que inducen a las siguientes manifestaciones clínicas: media de los hematíes. No suelen estar elevados los
Fiebre, acompañada de su «cortejo»: aumento neutrófilos en sangre. En cambio, sí pueden estarlo
de la frecuencia cardiaca (taquicardia}, de la fre- los linfocitos {linfocitosis]. En relación con ello, pue-
cuencia respiratoria (taquipnea}, sudoración, etc. de existir una hipergammaglobulinemia por estimu-
lación mantenida del sistema inmunitario. Los reac-
Mialgias, tal vez en relación con la proteólisis
tantes de fase aguda, aunque aumentados, no lo están
muscular. Al estar mediadas por las prostaglan-
tanto como en la inflamación aguda. No obstante, la
dinas , responden a inhibidores de las mismas.
VSG puede estar elevada, ya que la hipergan1IDaglo-
Adelgazamiento, por disminución del tejido bulinemia también contribuye a este fenómeno.
adiposo. Junto a él, la anorexia y la astenia cons-
tituyen una tríada típica.
Desde el punto de vista analítico, hay que añadir: EVOLUCIÓN
Leucocitosis, que cursa con aumento de neutrófi- Puede tener lugar en dos sentidos: favorable y des-
los (neutrofilia] y aumento de la presencia de for- favorable. La primera, hacia la curación, puede, a su
mas celulares jóvenes (desviación a la izquierda]. vez, desarrollarse sin secuelas (restitutio ad integrum]
Aumento de los reactantes de fase aguda, lo que, o con ellas (cicatriz].
además de comprobarse determinándolos indivi-
dualmente (suele determinarse la PCR), da lugar
a una aceleración de la sedimentación de los EVOLUCIÓN FAVORABLE
hematíes cuando se dispone la sangre anticoagu- Las posibilidades de regeneración del tejido varían
lada en un tubo capilar. Ello se conoce en clínica de un caso a otro. Los epitelios (piel y mucosas), que
como aumento de la velocidad de sedimentación se encuentran en continua actividad mitótica, y los
globular (VSG). parénquimas (hígado, riñón), que no lo hacen pero
Disminución de los niveles séricos de hierro (si- mantienen la capacidad de reproducirse, se regene-
deremia] y aumento de la ferritina. ran con facilidad. En cambio, el sistema nervioso y
el músculo esquelético apenas tienen capacidad de
En ocasiones la repercusión general del proceso
división celular. Cuando no es posible la restauración
inflamatorio es especialmente intensa, dando lugar al
completa, se forma, a partir de células no especializa-
cuadro clínico conocido como síndrome de respuesta
das del tejido conjuntivo, a una cicatriz fibrosa .
inflamatoria sistémica (SRIS). En él la fiebre y sus ma-
nifestaciones acompañantes (taquicardia, taquipnea)
son más intensas y, sobre todo, comienzan a aparecer EVOLUCIÓN DESFAVORABLE
signos de disfunción orgánica (alteración del estado
mental, disminución de la PaO 2 , disminución de la La inflamación puede fracasar en su función de de-
diuresis). Puede tener diversos orígenes: infecciones, fensa. La consecuencia más grave es, lógicamente, el
grandes traumatismos, quemaduras extensas, pan- fallecimiento del paciente. Otras veces, lo que ocurre
creatitis aguda grave, etc. El de origen infeccioso se es que la inflamación se hace crónica.
denomina sepsis. El cuadro de mayor gravedad tiene
lugar cuando las citocinas (principalmente el TNF, Fallecimiento (o exitus /eta/is)
actuando a través del NO) producen una alteración di- Puede deberse a dos tipos de razones:
fusa de la microvascularización (dilatación, aumento
de la permeabilidad, tendencia procoagulante), lo que El agente agresor produce una lesión que el orga-
clínicamente se traduce en una situación de shock nismo no puede vencer.
séptico y fracaso multiorgánico (insuficiencia respira- La propia reacción inflamatoria compromete la
toria por distrés respiratorio del adulto, insuficiencia vida del paciente. Ello puede ocurrir tanto por
renal, insuficiencia hepática, coagulación intravascu - su repercusión local (p. ej., estenosis de las vías
CAPÍTULO 13 Inflamación

respiratorias por inflamación de las paredes de Arterioesclerosis. La inflamación interviene en


los bronquios) como por su repercusión general el desarrollo de la arteriosclerosis de varias ma-
(caso del shock y el fracaso multiorgánico). neras. En primer lugar, los cristales de colesterol
se comportan como agentes DAMP, estimulando
Evolución a la cronicidad los receptores NLR. En segundo lugar, al desa-
rrollo de la enfermedad contribuye la existencia
La inflamación crónica puede reconocer distintos ti-
de un «trasfondo » inflamatorio general que actúa
pos de mecanismos.
a modo de fenómeno predisponente o de «pri-
Persistencia del agente desencadenante. Puede ming», y que puede reconocer diversos motivos:
tratarse de un agente de carácter infeccioso (infec- infección por cillamydia spp, exceso de sustan-
ción por Helicobacter pylori, tuberculosis, lepra) o cias procedentes del tejido adiposo (adipocinas
no. Esto segundo es lo que ocurre en los fumadores , proinflamatorias -véase a continuación-) , enfer-
que se exponen de forma mantenida al hun10 del medad inflamatoria crónica, etc. De hecho, en las
tabaco, desarrollando una bronquitis crónica, o en enfermedades inflamatorias sistémicas, como la
las personas expuestas a la inhalación de agentes artritis reumatoide, está aumentada la incidencia
inertes del que el organismo no puede deshacerse de enfermedad vascular.
(por ejemplo, asbesto y óxido de sílice inhalados Diabetes mellitus tipo 2. Ya hemos comentado
-asbestosis y silicosis, respectivamente-). que la inflamación se asocia a insulinorresis-
Trastornos del sistema inmune adaptativo. Dan tencia. La persistencia de ésta durante tiempo
lugar a las enfermedades autoinmunes. (proceso inflamatorio crónico) puede llevar a
Trastornos del sistema inmune innato. Sus prin- un agotamiento en la secreción compensadora
cipales representantes son las enfermedades de insulina, que favorezca el desarrollo de dia-
autoinflamatorias, descritas en el Capítulo 12. betes .
A propósito de la relación inflamación-dia-
Algunas inflamaciones crónicas presentan unas
betes tipo 2, debe recordarse que esta forma de
formas especiales de evolución. Por ejemplo, y aun-
diabetes suele asociarse a obesidad. Dado que
que no con mucha frecuencia, la evolución final de
el tejido adiposo puede producir diversas sus-
la inflamación crónica puede llegar a la calcificación
tancias (adipocinas) entre las que se encuentran
del foco inflamatorio. En otras ocasiones la inflama-
las citocinas inflamatorias (IL-6, IL-1 y TNF), en
ción crónica determina una amiloidosis, enfermedad
la obesidad están aumentados los niveles de las
sistémica debida a la producción excesiva de un
mismas (de hecho , hoy se considera a la obesi-
reactante de fase aguda, la SAA, cuyo derivado AA
dad un estado inflamatorio de bajo nivel, pero
se deposita en los tejidos interfiriendo en su función.
de efectos persistentes). Ello, lógicamente, puede
Una tercera forma de evolución especial de un pro-
contribuir a la insulinorresistencia y el desarro-
ceso inflamatorio crónico es el cáncer, conociéndose
llo de diabetes. La resistina es una adipocina
diversos procesos tumorales que tienen su origen en
descrita recientemente, que recibe este nombre
inflamaciones crónicas; tal es el caso caso del cáncer
precisamente por determinar resistencia a la in-
de estómago y la infección por Helicobacter pylori,
sulina, y que parece poseer también propiedades
el de hígado y la infección por algunos virus hepa-
proinflamatorias. Como las otras citocinas infla-
totropos, el de ciertos linfomas y la infección por el
matorias, también puede originarse en células
virus de Epstein-Barr, el cáncer de colon y la colitis
fagocíticas.
ulcerosa, o el de los tumores de pulmón desarrollados
sobre cicatrices tuberculosas. Seguramente contribu- Osteoporosis. Las citocinas proinflamatorias
yen a ello la mayor replicación celular impuesta por (TNFa, IL-1, IL-6) estimulan a los osteoclastos.
el proceso inflamatorio y la actuación sobre el DNA La presencia de estados de inflamación sisté-
de algunos de los mediadores de la inflamación. mica crónica (artritis reumatoide), de manera
análoga a lo que ocurre en la arteriosclerosis,
favorece la pérdida de masa ósea y la osteopo-
ENFERMEDADES RELACIONADAS CON rosis.
PROCESOS INFLAMATORIOS Enfermedad de Alzheimer. En ella el depósito de
agregados de péptidos de amiloide estimula a la
La inflamación está implicada en procesos hasta aho- microglía para producir mediadores inflaniato-
ra considerados ajenos a la misma. Podemos señalar: rios que dañan las neuronas.
·114
Estrés
José Antonio Amado Señarís, José Antonio Riancho Moral

INTRODUCCIÓN
Los seres vivos sobreviven gracias a su capacidad
para mantener un equilibrio interno dinámico (ho-
meostasis) que está siendo amenazado continuamen-
te por factores extrínsecos e intrínsecos. El estrés se
define como un estado en el que se produce una ame-
naza contra la homeostasis. Curu1do ello ocurre, el
organismo desarrolla unas respuestas compensadoras
complejas que intentan contrarrestar los efectos de
los factores estresantes. Las respuestas pueden
ser específicas frente a cada agente particu-
lar (por ejemplo, apartar la mano de un
objeto caliente) o generalizadas, inespe-
cíficas y estereotipadas . La respuesta
inespecífica generalmente sólo se
pone en marcha cuando la magnitud
de la amenaza a la homeostasis su-
pera un cierto umbral, y el conjunto
de síntomas y signos que aparecen
recibe la denominación de síndrome
general de adaptación, síndrome de
alarma o simplemente síndrome del
estrés.

ETIOPATOGENIA DEL ESTRÉS


AGENTES ESTRESANTES
Las causas que pueden desencadenar el es-
trés son muchas y muy diversas. Entre ellas figuran
agentes externos o internos con repercusión funda-
mentalmente orgánica (agentes físicos, químicos o
biológicos, como el calor o el frío extremos, el choque
eléctrico, las quemaduras, los tóxicos, los traumatis-
mos, la cirugía, el dolor, la hemorragia, la hipovole-
mia, la sepsis, las enfermedades graves de cualquier
etiología, la anoxia, la acidosis, la hipoglucemia, etc.)
o mental (miedo, peligro, sobrecarga personal, labo-
154
ral o social, etc.) .
CAPÍTULO 14 Estrés

La reacción al estrés desencadenado por agentes la vías aferentes procedentes de las áreas lesionadas
con repercusión somática resulta en general más es fundamental, ya que si se bloquean (por ejemplo,
uniforme que la derivada de factores puramente mediante anestesia epidural) no se produce o se ate-
psicológicos. La respuesta de diferentes individuos a núa mucho la respuesta del estrés, si bien este puede
un mismo estímulo no es idéntica, ya que el umbral activarse exclusivamente por vía humoral.
de respuesta es variable; no obstante, habitualmente,
cuanto mayor es la intensidad y duración del estímu- Sistema neuronal de la CRH
lo se produce una mayor respuesta. Así, por ejemplo,
la respuesta frente a un pequeño golpe es transitoria La CRH se produce en múltiples regiones cerebrales,
y autolimitada, mientras que es más intensa y pro- entre las que se encuentra el hipotálamo. La CRH
longada si el traumatismo induce daño tisular, dolor, hipotalámica estimula la hipófisis para que libere
infección secundaria, etc. Es posible que en algunos a la sangre ACTH y otros péptidos (P-lipotropina,
individuos se produzca habituación frente a un deter- P-endorfina). La ACTH activa la liberación de corti-
minado factor estresante que, a fuerza de repetición coides suprarrenales, especialmente de cortisol. El
de deja de inducir la reacción de estrés. cortisol, además de sus bien conocidos efectos direc-
tos sobre el metabolismo, tiene un efecto permisivo,
es decir, es necesario en unas cantidades mínimas,
SISTEMA DEL ESTRÉS para que pueda funcionar adecuadamente toda la
maquinaria metabólica del organismo (por ejemplo,
La puesta en marcha e integración de esta respuesta para que se sintetice adrenalina o para que las cate-
se produce en el sistema nervioso central a través de colaminas tengan sus efectos vasoactivos). De ahí que
la activación de dos circuitos neuronales reverberan- un sujeto con deficiencia de cortisol sucumba ante
tes, el sistema neuronal de la CRH (hormona hipo- una situación de estrés que exige una respuesta me-
talámica liberadora de corticotropina o ACTH) y el tabólica inmediata. Las concentraciones fisiológicas
sistema del locus coeruleus/sistema autónomo sim- máximas de cortisol que se alcanzan durante el estrés
pático, que en conjunto constituyen el sistema del intenso estabilizan los lisosomas, y por tanto previe-
estrés (Fig. 14-1). Este sistema se puede activar por nen la activación de las enzimas lisosómicas. Tam-
vía humoral (alteraciones de la temperatura central o bién frenan la fosfolipasa A, con lo que disminuyen la
de la osmolalidad, hipoglucemia, aparición de toxi- síntesis de eicosanoides, así como la síntesis de fac-
nas o de determinadas citocinas en la sangre) o por tor de necrosis tumoral y de interleucinas 1 y 6, etc.,
vía neural. Los estímulos nerviosos aferentes pueden por lo que tienen un potente efecto antiinflamatorio.
proceder de centros superiores (estímulos sensoriales Además, potencian la acción detoxificante del hígado
visuales, auditivos, etc., o puramente psicológicos) o al aumentar la síntesis de diversas enzimas, de ma-
de cualquier parte del organismo (estímulos doloro- nera que limitan el efecto de los agentes estresantes.
sos, térmicos, de los barorreceptores, etc.). El papel de El papel de los péptidos opioides en el estrés proba-
blemente es similar al del cortisol, ya que potencian
la liberación de mineralocorticoides y tienen efectos
AGENTE ESTRESA TE analgésicos, imnunosupresores y antiarrítmicos (por
ejemplo, antagonizan los efectos arritmogénicos de
las catecolaminas sobre el corazón).
RESPUESTA La CRH tiene efectos centrales y periféricos inde-

l ~
.
DEL
s e
pendientes del eje hipófisis-suprarrenal. En realidad,
es el principal neurotransmisor del sistema del estrés .
Administrada directamente en el sistema nervioso
central, activa el sistema autónomo simpático, lo que
produce liberación de catecolaminas a la sangre. Ade-
SISTEMA )
EURO AL
DE LA
CRH
- ( SISTEMA
DEL
LC/SAS
más, modifica otras funciones hlpotálamo-hipofisarias
(véase más adelante), aumenta la actividad respiratoria
y provoca los cambios del comportamiento típicos del
'- estrés. La CRH se produce también en las terminales

~
nerviosas y en las células mononucleares de áreas in-
flamatorias, donde actúa como agente proinflamatorio,
al activar los monocitos y los linfocitos.
RESPUESTA
PERIFÉRICA
Sistema del locus coeru/eus/sistema
autónomo simpático
Figura Funcionamiento del sistema del estrés. Este sistema se localiza en el tronco encefálico y al
CRH: hormona liberadora de corticotropina (ACTH ). activarse produce la liberación de noradrenalina en -----:rs"s
LC/SAS: locus coerulens/sistema autónomo simpático. una red de neuronas extraordinariamente extendida
Etiopatogenia general

por todo el cerebro. Ello origina efectos centrales (hi- central (básicamente en el comportamiento) y cambios
pervigilancia, ansiedad) y la activación de su efector periféricos, en el sistema inmunológico, en el sistema
periférico, el sistema simpatocromafín (véase el ca- endocrino-metabólico y en la función cardiovascular
pítulo sobre la médula suprarrenal). Por este último que, en conjunto, garantizan un aporte continuado de
mecanismo, aumentan las concentraciones de cateco- oxígeno, glucosa y otros nutrientes a los órganos que
laminas circulantes. La liberación de las distintas ca- más lo necesitan, a expensas de órganos no esenciales
tecolaminas no es necesariamente paralela en inten- como la piel o el intestino (Tabla 14-1). Los órganos
sidad ni en duración, aunque suele ser muy rápida, beneficiados son el cerebro, que es el centro que coor-
intensa y breve, a diferencia de la liberación de corti- dina todas las respuestas , y las zonas afectadas por
coides, que suele ser menos intensa y más prolonga- el agente estresante (por ejemplo, los músculos si es
da. Otra consecuencia de la activación de este sistema necesario huir, o una extremidad si se ha producido
es la puesta en marcha del eje renina-angiotensina- en ella un traumatismo). Todas las actividades fisio-
aldosterona, que induce vasoconstricción y retención lógicas que no comporten un beneficio inmediato se
de sodio. Las situaciones de estrés que inducen hipo- aplazan (crecimiento, actividad osteoblástica, repro-
volemia se acompañan de una marcada activación de ducción, inflamación, hambre, digestión). Si esta res-
este eje, al sumarse el efecto activador directo de la puesta es incapaz de mantener la homeostasis, puede
propia hipovolemia. sobrevenir la muerte. La respuesta aguda al estrés, sin
embargo, tiene un coste, ya que aumenta el riesgo de
Modulación de la respuesta del sistema que se desencadene una diabetes mellitus, un infarto
del estrés de miocardio, una arritmia cardíaca o una úlcera pép-
tica, o de que empeore una infección.
El sistema de la CRH y el del locus coeruleus se ac-
tivan mutuamente, configurando una retroalimenta-
ción positiva. Numerosos neuTotransmisores regulan
su actividad. Los péptidos opioides y los glucocor- Tabla Respuesta al estrés
ticoides inhiben ambos. Los opiáceos exógenos en
dosis altas previenen la activación del sistema del Central
estrés, aunque no son capaces de inhibirlo totalmente
si se administran después de que se haya activado. La Redireccionamiento del comportamiento
ADH o arginina-vasopresina es otro neuropéptido im- • Aumento de las funciones cognitivas y
portante, ya que estimula el sistema del locus coeru- de las actividades de prevención, alerta,
leus, potencia los efectos de la CRH y tiene efectos vigilancia y atención dirigida
sistémicos (antidiuresis y vasoconstricción esplácni- • Inhibición de las actividades de
ca cuando alcanza concentraciones altas). La hipovo- alimentación y reproducción
lemia y la activación del centro del vómito producen Modulación (positiva o negativa) de la propia
marcadas elevaciones de la ADH plasmática. respuesta al estrés
Diversos mediadores de la inflamación, como las
interleucinas 1, 2, 3 y 6, el factor de necrosis tumo- Periférica
ral, la prostaglandina F2 y el factor de activación de Redireccionamiento de los sustratos
las plaquetas (PAF) estimulan el sistema de la CRH energéticos
en el hipotálamo, por lo que se activa el eje hipófisis-
El 0 2 y los nutrientes se dirigen al sistema
suprarrenal. Se ha señalado que la IL-1 tiene efectos nervioso central o a las zonas afectadas por el
estimuladores directos sobre las células suprarrenales, agente estresante
mientras que otras citocinas (defensinas o corticosta-
tinas) tienen efectos bloqueantes de los receptores su- • Aumento de la glucogenólisis, glucogénesis
prarrenales de ACTH. Todo ello configura la existen- y lipólisis
cia de un complejo eje inmuno-neuro-endocrino, en el • Aumento de la función cardíaca y
cual las citocinas inflamatorias son capaces de activar respiratoria
el eje CRH-ACTH-cortisol, mientras que el cortisol, • Aumento de la presión arterial
por su parte, inhibe la formación de nuevas citocinas. Inhibición del crecimiento y de la función
gonadal

FISIOPATOLOGÍA DEL ESTRÉS Aumento de la actividad destoxificadora del


hígado
El síndrome del estrés puede adoptar una forma aguda Inhibición de la respuesta inmunitaria y de la
o crónica. La respuesta aguda prepara al organismo inflamación
para «luchar» o «huir» frente a la agresión y facilita
la supervivencia a corto plazo. Su utilidad es limitada Modulación de la propia respuesta al estrés
en el tiempo, ya que si se prolonga se convierte en no-
civa. El estrés produce cambios en el sistema nervioso
CAPITULO 14 Estrés

La activación crónica del sistema del estrés tam- sustratos que llegan al hígado procedentes del mús-
bién resulta perjudicial, ya que aumenta el riesgo de culo y del tejido adiposo. La producción hepática de
diabetes mellitus, hipertensión arterial y cardiopatía glucosa aumenta considerablemente, mientras que
isquémica y, por otro lado, el organismo entra en una aparece insulinorresistencia en los tejidos periféricos
situación de catabolismo crónico, de manera que se (hígado, músculo , tejido adiposo), y ello deteriora la
frena el crecimiento, la fertilidad, la cicatrización de tolerancia a la glucosa. Estas modificaciones se de-
las heridas y la reparación de los tejidos, disminuye ben a la elevación de las hormonas contrainsulares
la masa muscular (que puede condicionar a medio (catecolaminas, cortisol, glucagón) y a la inhibición
plazo insuficiencia respiratoria por fallo de los mús- relativa de la secreción de insulina que produce la
culos respiratorios), se produce inmunosupresión y adrenalina a través de los receptores o:-adrenérgicos
aumenta la propensión a las úlceras pépticas. de las células ~ de los islotes pancreáticos, así como
a un aumento en el catabolismo periférico de la insu-
lina. El glucagón se eleva por mecanismos neurales
EFECTOS DEL ESTRÉS SOBRE EL SISTEMA y por el efecto directo de las catecolaminas sobre los
NERVIOSO CENTRAL islotes. Todo ello facilita que la glucosa se desvíe a los
La activación del sistema del estrés pone en marcha tejidos que la utilizan independientemente de la in-
varios circuitos cerebrales, con lo que se potencia la sulina (cerebro, riñón, áreas inflamatorias, quemadas
vigilancia, la atención, la ansiedad y la cognición, o en fase de cicatrización, etc.).
disminuye la percepción del dolor, la sensación de
hambre y la actividad sexual, se aceleran los refle- Efectos sobre el metabolismo de los lípidos
jos y se activa la respiración. Todas estas respuestas El estrés induce un aumento de la lipólisis mediado
nerviosas facilitan la respuesta inmediata frente a los por las catecolaminas y la inhibición de la insulina,
diversos agentes estresantes. de manera que los ácidos grasos se utilizan como una
En la depresión endógena se observa una activa- fuente energética fundamental en este proceso. Curio-
ción crónica del sistema del estrés en presencia de samente los cuerpos cetónicos no se elevan mucho ,
una función normal de las corticotropas hipofisarias, probablemente porque hay suficiente insulina para
lo que condiciona un hipercortisolismo periférico. A frenar su liberación. En la sepsis, el factor de necrosis
diferencia de lo que ocurre en la enfermedad de Cus- tumoral inhibe la actividad de la lipoproteinlipasa,
hing, estas células no responden a la CRH exógena, ya por lo que aparece hipertrigliceridemia y se frena la
que su función está inhibida por las altas concentra- lipogénesis en el tejido adiposo. En las situaciones de
ciones de cortisol plasmático. Otras situaciones en las estrés crónico se ha comprobado un descenso en los
que se ha comprobado una hiperactividad del sistema niveles de HDL colesterol, probablemente mediado
de la CRH son la anorexia nerviosa, el alcoholismo por la hipercortisolemia.
crónico, la retirada brusca de opiáceos o de alcohol,
etc. Se desconoce cuál es el significado de la activa- Efectos sobre el metabolismo de las proteínas
ción del sistema del estrés en estas enfermedades.
En el estrés hay un aumento del catabolismo proteico,
que se manifiesta por un aumento de las pérdidas uri-
EFECTOS ENDOCRINOMETABÓLICOS narias de nitrógeno y de la liberación de aminoácidos
DEL ESTRÉS a la circulación. El hígado capta los aminoácidos para
utilizarlos en la gluconeogénesis, mientras que en los
La respuesta al estrés de los traumatismos se pue- tejidos periféricos dicha captación está inhibida. La
de dividir en dos fases , una inicial de reflujo y otra glutamina es el aminoácido más críticamente afecta-
posterior de flujo. En la primera fase, se producirían do, pues aunque su salida de los músculos aumenta,
los cambios neuroendocrinos destinados a favore- su consumo es superior. Todo esto viene mediado por
cer la supervivencia, mientras que en la segunda se las modificaciones de la insulina y de las hormonas
produciría una fase anabólica de recuperación en los contrainsulares, y quizá también por un efecto directo
supervivientes. La fase inicial se caracteriza básica- de algunas citocinas sobre el catabolismo muscular.
mente por una elevación de las hormonas catabólicas Durante el estrés provocado por lesión tisular, la
(glucocorticoides, catecolaminas, glucagón) y una síntesis hepática de determinadas proteínas (deno-
inhibición de las hormonas anabólicas (insulina, hor- minadas reactantes de fase aguda) puede aumentar,
monas sexuales), lo cual produce una modificación mientras que la de otras disminuye. Dentro de los
sustancial del metabolismo. reactantes de fase aguda se incluyen el fibrinógeno ,
el plasminógeno, algunos factores de la coagulación,
Efectos sobre el metabolismo de los hidratos de carbono la antitrombina, la o: 2 -antiplasmina, la calicreína,
Un rasgo bioquímico típico del estrés es la tenden- algunas proteínas del complemento, la proteína C
cia a la hiperglucemia , que se debe inicialmente a la reactiva, la proteína sérica amiloide A, la haptoglo-
glucogenólisis hepática seguida de gluconeogénesis bina, la 0:1 -glucoproteína ácida (orosomucoide) , la
157
a partir de aminoácidos , lactato, piruvato o glicerol, ~-antitripsina, la ~-antiquimotripsina, la ceruloplas-
S CCIQI'. 1 Etiopatogenia general

mina y la ferritina, entre otras. El grado de elevación secreción de la hormona de crecimiento y, por ello,
de estas proteínas se halla en relación directa con la de la somatomedina C. Esto se puede deber a un au-
lesión tisular producida y está mediado por el efecto mento del tono somatostatinérgico inducido por la
sobre el hígado de un conjunto de sustancias, entre CRH, al que se suma el efecto inhibidor directo de la
las que se encuentran el cortisol, las interleucinas 1 y secreción de GH provocado por los corticoides cró-
6, el factor de necrosis tumoral, el interferón-y y otras nicamente elevados. El estrés también eleva aguda-
citocinas. La respuesta de las distintas proteínas es mente la prolactina.
diferente en cuanto a intensidad y perfil temporal. La
reacción de fase aguda aumenta las concentraciones Efectos sobre las hormonas tiroideas
sanguíneas y tisulares de estas proteínas, cuya función El estrés pu ede provocar un síndrome de eutiroi-
es regular la inflamación, reducir al mínimo la lesión dismo con T3 baja (véase Cap. 67). El elevado tono
tisular y facilitar los procesos de reparación. La ele- somatostatinérgico (que inhibe la secreción de TSH),
vación mantenida de la proteína sérica amiloide A es los niveles elevados de cortisol y la elevación de los
nociva, ya que está implicada en la patogenia de la ácidos grasos libres y de las citocinas inflamatorias
amiloidosis secundaria. en la sangre, desempeñan un papel en la aparición de
Entre las proteínas hepáticas cuya síntesis disminu- este síndrome.
ye se encuentran la transferrina, la albúmina y la preal-
búmina. Por ello, la síntesis hepática total de proteínas
no aumenta a pesar del aumento de reactantes de fase
EFECTOS DEL ESTRÉS SOBRE EL SISTEMA
aguda. La osteocalcina sérica, una proteína sintetizada CARDIOVASCULAR
en los osteoblastos, tan1bién disminuye en el estrés. Están mediados por la activación del sistema simpáti-
co-suprmTenal. Se caracterizan por un aumento de la
Efectos sobre el metabolismo energético actividad cronotropa (taquicardia) e inotropa del cora-
zón, vasoconstricción en muchos lechos vasculares ar-
El estrés produce un aumento del consumo energético,
teriales (esplácnico, cutáneo, etc.) y venoconstricción.
ya que todos los mediadores del estrés (catecolanünas,
El flujo sanguíneo de los vasos coronarios y cerebrales
cortisol, citocinas) tienden a aumentarlo. El máximo
está en general preservado, debido a que su inervación
aumento del consumo energético se produce con las
simpática es relativamente escasa. El flujo sanguíneo
quemaduras (hasta un 120 %), mientras que con la ci-
muscular aumenta en grado variable. La presión ar-
rugía es mucho menor (10 %). Se ha comprobado que
terial, especialmente la sistólica, tiende a elevarse.
durante el estrés se pueden activar ciclos metabólicos
fútiles (síntesis-destrucción de glucosa o triglicéridos),
que sólo consumen energía, aunque tan1bién propor- EFECTOS DEL ESTRÉS SOBRE EL SISTEMA
cionan a los pacientes una flexibilidad metabólica que INMUNOLÓGICO Y LA INFLAMACIÓN
les permite adaptarse rápidamente a las demandas de Están mediados básican1ente por el hipercortisolis-
sustratos energéticos. Ya que la ingestión de alimentos mo y quizá por el descenso de los andrógenos y el
suele estar reducida y el anabolismo frenado , el estrés aumento de los péptidos opioides circulantes. Se ca-
conduce inexorablemente a una pérdida de peso. racterizan por una inmunosupresión generalizada e
inespecífica. El hipercortisolismo reduce el número
Efectos sobre las hormonas sexuales de linfocitos, monocitos y eosinófios circulantes e
La CRH inhibe la liberación de la LHRH. Por otra inhibe la acumulación de eosinófilos, macrófagos y
parte, los glucocorticoides inhiben el eje hipotálamo- neutrófilos en las zonas inflamadas, aunque aumenta
hipófiso-gonadal. En conjunto se produce un hipogo- el número de neutrófilos circulantes. La linfopenia se
nadismo hipogonadotropo, que es clínicamente evi- debe a redistribución selectiva de los linfocitos T y a
dente en las mujeres, ya que aparece an1enorrea. En linfólisis . La linfólisis corticoidea se debe a apopto-
los varones se objetiva un descenso de la concentra- sis. Este mecanismo también produce la atrofia tímica
ción plasmática de la testosterona. Además, el estrés característica del estrés. Los corticoides inhiben prác-
muy intenso provoca un descenso de los andrógenos ticamente todos los pasos implicados en la respuesta
suprarrenales, porque la maquinaria enzimática su- inmunológica, tanto la presentación de antígenos por
prarrenal se dirige preferentemente hacia la síntesis parte de los macrófagos, como la proliferación y la
de cortisol. En algunos casos, incluso, se produce un diferenciación linfocitaria. Este efecto está mediado
defecto en la secreción de aldosterona. por una inhibición de la expresión de los genes de las
citocinas inflamatorias y por la producción de pro-
teínas antiinflamatorias como las lipocortinas, que
Efectos sobre la hormona de crecimiento (GH) y sobre la inhiben la fosfolipasa A2 y bloquean la producción
prolactina de eicosanoides. Los corticoides también son capaces
Habitualmente, se aprecia una elevación de la hor- de bloquear la activación de la enzima óxido-nítrico-
mona de crecimiento al comienzo del estrés, pero sintetasa inducible, que está implicada en los proce-
158
si este se mantiene se produce una supresión de la sos inflamatorios y en la patogenia del shock séptico.
-115
Envejecimiento
Eloy Pacho Jiménez, Jaime Merino Sánchez

CONCEPTO DE ENVEJECIMIENTO
Se puede decir que el envejecimiento es un proceso
dinámico que refleja el paso del tiempo, que afecta a
todos los individuos y que se traduce en un deterioro
progresivo que conduce a la muerte.
Su significado es incierto, ya que lo que puede ser un
fenómeno negativo para la persona podría tener aspec-
tos positivos para la especie, al limitar el crecimiento
de la población y mantener el equilibrio biológico.
Al ser un proceso continuo, no hay una
respuesta, desde el punto de vista fisioló-
gico, para la pregunta sobre la edad a
partir de la cual uno puede conside-
rarse viejo. En general, se acepta una
fecha de carácter socioeconómico
que coincide con la edad de la jubi-
lación, aunque esta no es la misma
en todos los países.
La Gerontología es la ciencia que
estudia el proceso de envejecimien-
to , incluyendo aspectos biológicos,
clínicos y sociales.

ASPECTOS DEMOGRÁFICOS
En las últimas décadas se ha producido un
cambio profundo de la población, con un incre-
mento absoluto y relativo del colectivo de personas
mayores.
Es una situación nueva, propia de los países desa-
rrollados , que supone para España una población de
7 ,5 millones de ancianos y 2 millones de personas
mayores de 80 años , con un índice de envejecimien-
to (proporción de individuos mayores de 65 años en
relación con el total de la población) alrededor del
17 % (Tabla 15-1).
Las causas del envejecimiento de la población
están en relación , por una parte, con la disminu-
Etiopatogenia general

dependencia para la realización de actividades bási-


cas de la vida diaria.
Tabla Evolución de la población
mayor española (miles de personas)
BIOLOGÍA DEL ENVEJECIMIENTO
Mayores Mayores % Mayores
de 65 años de 80 años de 65 años
Envejecemos porque macromoléculas fundamentales
1970 3291 524 9,7 de nuestro organismo (ácidos nucléicos, proteínas)
1990 5352 1148 13,8 van acumulando daños que alteran la función celular
y el funcionamiento de los diferentes órganos.
2010 7525 2171 17,8 El principal problema reside en que los agentes le-
2030 10301 2798 23,7 sivos se producen en el curso de procesos fisiológicos
fundamentales como la producción de energía o la
2050 12 867 41 09 31,2
utilización de la glucosa.
La cadena normal de producción de energía a nivel
de las mitocondrias genera de forma colateral unas
moléculas inestables, altamente reactivas, que con-
tienen oxígeno, conocidas generalmente como radi-
ción de la mortalidad y el aumento de la esperanza cales libres (superóxido, peróxido de hidrógeno , ión
de vida y, por otra, con el marcado descenso de la hidroxilo) con capacidad de dañar las estructuras ce-
natalidad. lulares. Para defenderse de los radicales libres, las cé-
Se entiende por esperanza de vida el promedio de lulas cuentan con mecanismos antioxidantes de tipo
años que puede vivir un individuo a partir de un mo- enzimático (su peróxido dismutasa, catalasa, glutatión

mento determinado. La esperanza de vida al nacer se peroxidasa) y compuestos de origen alimentario (vi-
ha duplicado a lo largo del siglo xx, alcanzando en taminas C y E, carotenoides y polifenoles) . Cuando
nuestro país los 82 años para las mujeres y los 75 para existe una producción excesiva de radicales libres y/o
los hombres. Es importante no confundir este concep- una disminución de los sistemas de defensa, se llega
to con la expectativa de vida máxima o longevidad, a una situación de desequilibrio con disminución en
que tiene que ver con el límite biológico vital, que se la producción de energía, que conducirá al proceso de
mantiene constante y se sitúa en la especie humana muerte celular por apoptosis.
en torno a los 120 años. De forma similar, algunos azúcares como la gluco-
Centrándonos de nuevo en el colectivo de personas sa, esencial para nuestro metabolismo, pueden reac-
mayores, interesa conocer que la esperanza de vida a cionar con los aminoácidos de las proteínas y otras
los 65 años es de, aproximadamente, 18 años y, lo que macromoléculas en un proceso conocido como glica-
es aún más importante, que durante casi la mitad de ción, que puede alterar gravemente la estructura y el
estos años va a existir cierto grado de discapacidad y funcionamiento de las mismas.
CAPÍTULO 15 Envejecimiento

Además, las células normales están programadas trar los signos clásicos de irritación meníngea y el hi-
para un número limitado de divisiones que viene pertiroidismo carecer del cuadro clínico característico
marcado por la longitud de los extremos de los cromo- y manifestarse sólo como apatía y fibrilación auricular.
somas o telómeros. Los telómeros se van acortando en Con mucha frecuencia, un paciente presenta varias
cada división celular y cuando llegan a una longitud enfermedades (pluripatología} que pueden tener un
mínima se desencadena el proceso de muerte celular. agravamiento recíproco y un peor pronóstico.
Una enzima, llamada telomerasa, es capaz de regene- Además, existen situaciones clínicas como las caí-
rar los telómeros, pero su actividad desaparece tras la das o la incontinencia urinaria, muy frecuentes en las
etapa embrionaria. De esta manera, la longitud de los personas mayores , que no suelen recibir la atención
telómeros representaría una especie de reloj genético que se merecen por interpretarse erróneamente como
que marcaría la duración de la vida celular y estaría parte del proceso de envejecimiento. La actitud co-
relacionado con el envejecimiento. rrecta ante estos problemas sería considerarlos como
Por último, se ha descubierto el factor de transcrip- auténticos síndromes geriátricos, con alta prevalencia,
ción FOXO, implicado en mecanismos de resistencia elevada morbimortalidad y que, de ser diagnosticados
al estrés celular, reparación del ADN y apoptosis, y tratados de forma adecuada, podrían ser reversibles.
así como las sirtuínas dependientes de FOXO, que La Figura 15-1 muestra un patrón frecuente de evo-
se activan por restricción calórica y son capaces de lución de las enfermedades en el anciano. Se obtiene
aumentar la longevidad. Algunas sustancias como el una curación de la misma pero quedando limitacio-
resveratrol, presente en las uvas entre otros alimentos, nes y no se recupera la funcionalidad previa; se re-
son activadoras de las sirtuínas. pite el proceso y el deterioro es progresivo hasta que
En resumen, podemos decir que en el proceso de fallece.
envejecer se rompe el equilibrio entre la acumulación
de daños y la capacidad de reparación, interviniendo
factores muy variados que van desde la predisposi- VALORACIÓN DEL ANCIANO ENFERMO.
ción genética a influencias ambientales. ENFOQUE DIAGNÓSTICO
El estudio de los pacientes ancianos tiene múltiples
MANIFESTACIONES CLÍNICAS dificultades que se hacen evidentes a la hora de rea-
Durante el proceso de envejecimiento, se producen lizar la historia clínica o la exploración física y tam-
una serie de cambios (Tabla 15-2) que reducen la re- bién al indicar la realización de pruebas diagnósticas
serva funciona l de los órganos y limitan la capacidad complementarias, establecer un pronóstico y prescri-
de adaptación a situaciones de estrés. bir un tratamiento (Tabla 15-3).
Envejecimiento no es sinónimo de enfermedad, Además, la enfermedad en el anciano puede estar
pero es bien conocido que las personas mayores pa- condicionada no sólo por factores clínicos, sino tam-
decen más enfermedades al combinarse la exposición bién funcionales, psicológicos y sociales.
a diversos factores de riesgo durante más tiempo y la Todo ello hace que se trate de un paciente especial-
repercusión de las enfermedades que no se han cura- mente complejo que requiere una valoración integral.
do y se acumulan a lo largo de la vida. Esta debe incluir, además de los aspectos médicos, una
Los ancianos pueden tener muchas de las enfer- evaluación funcional , mental y social (Tabla 15-4). y
medades que aparecen a cualquier otra edad, pero debe ser realizada, a ser posible, por un equipo multi-
algunas de ellas, como la insuficiencia cardiaca o la disciplinario (médico, enfermera y trabajador social).
diabetes, presentan una incidencia muy superior, y Desde el punto de vista médico , es fundamental una
otras, como el cáncer de próstata o la arteritis de cé- anamnesis y exploración física cuidadosas, prestando
lulas gigantes, son casi exclusivas de las personas de especial atención al consumo de fármacos y a los as-
edad avanzada. pectos relacionados con la nutrición.
Entre los procesos más frecuentes siempre figuran La evaluación funcional se centra en las activida-
las enfermedades cardiovasculares y los trastornos des de la vida diaria, divididas, según su nivel de
del aparato locomotor, menos graves que las primeras complejidad, en básicas e instrumentales. La necesi-
pero que representan la primera causa de incapacidad dad de ayuda para la realización de las actividades
en los ancianos. básicas implica un nivel de dependencia considerable
Aunque en la mayoría de los ancianos las enfer- con la consiguiente pérdida de autonomía.
medades se manifiestan de una forma más o menos La valoración de la esfera mental debe incluir, al
clásica, la presentación atípica es una posibilidad que menos, la detección de deterioro cognitivo o demen-
hay que considerar en el paciente de edad avanzada. cia y los trastornos afectivos de tipo depresivo.
La aparición de síntomas generales, como astenia, ano- En cuanto a la situación social del paciente, es muy
rexia y pérdida de peso, puede ser la primera manifes- importante saber si hay un cuidador responsable y si
tación de una tuberculosis pulmonar que no presenta la vivienda reúne unas condiciones básicas de confort.
tos ni hemoptisis. También el infarto de miocardio Todo ello nos permitirá confeccionar una lista de -----,¡;,¡-
puede cursar sin dolor torácico, la meningitis nomos- problemas y establecer un plan de cuidados adapta-
5ECCIÓ Etiopatogenia general

Tabla Cambios asociados al envejecimiento


Composición corporal Riñón y aparato genitourinario
Disminución del agua corporal total Descenso del número y de la función de las
nefronas
Disminución de la masa muscular
Déficit en la formación de metabolitos de la
Aumento relativo de la grasa corporal
vitamina D
Piel y faneras Anemia por déficit de eritropoyetina
Descenso del esfínter y de la pared vesical
Atrofia dermoepidérmica y subcutánea
Capacidad de la vejiga disminuida
Disminución del número de melanocitos
Hipertrofia prostática (varón)
Atrofia de folículos pilosos y glándulas
Disminución del tono de la musculatura
sudoríparas
pélvica (mujer)
Disminución de la vascularización dérmica
Sistema endocrino
Daño actínico acumulado
Respuesta disminuida al estrés del eje
Sistema osteomuscular hipofiso-suprarrenal
Acortamiento de la columna vertebral por Respuesta excesiva de ADH
reducción del disco y osteoporosis Turnover de hormonas tiroideas reducido
Cifosis Resistencia a la insulina
Pérdida de masa ósea Disminución de hormonas sexuales
Disminución de la elasticidad articular Sistema hematopoyético
Degeneración del cartílago Ferropenia
Disminución del número de fibras musculares Elevación de fibrinógeno
Descenso de la actividad de la miosina Disminución de la respuesta de células B a la
ATPasa inmunización
Aparato cardiovascular Alteración en las células T cooperadoras y
supresoras
Disminución del número de células
miocárdicas y de la contractilidad Sistema nervioso
Aumento de la resistencia al llenado Pérdida neuronal y disminución de
ventricular conexiones interdendríticas
Disminución de la actividad del sistema de Menor velocidad de conducción nerviosa
conducción Disminución del flujo sanguíneo cerebral
Menor sensibilidad de los barorreceptores Disminución de reflejos posturales
vasculares Regulación autonómica defectuosa
Rigidez de la pared arterial Alteración en mecanismos de control de la
Descenso del gasto cardíaco y del flujo temperatura y la sed
sanguíneo a la mayoría de órganos
Órganos de los sentidos
Aparato respiratorio Vista
Reducción de la distensibilidad de la pared Fisiología alterada del vítreo y retina
torácica Degeneración macular asociada a la edad
Disminución de la compliance pulmonar (DMAE)
Pérdida de septos alveolares Alteración del cristalino (cataratas)
Colapso de la vía aérea Disminución de reabsorción de líquido
Disminución de la fuerza de la tos y del intraocular (glaucoma)
aclaramiento mucociliar Oído
Disminución de la función de células cocleares
Aparato digestivo
Alteración funcional de los núcleos vestibulares
Disminución de la producción de saliva
Gusto y olfato
Disminución del peristaltismo
Descenso en número y función de papilas
Disminución de secreción de ácido clorhídrico
gustativas
y enzimas digestivas
Disminución de células sensoriales olfatorias
Disminución de la absorción de calcio y hierro
Reducción del tono del esfínter anal Tacto
Disminución de la síntesis hepática de Disminución de sensibilidad táctil y de la
proteínas temperatura
CAPITULO 15 Envejecimiento

do a cada paciente, que incluirá, en muchos casos un


100
programa de rehabilitación. ~
::,
Al analizar los beneficios de la valoración integral ü
del paciente geriátrico se ha comprobado que pro- ~
porciona una mayor precisión diagnóstica al detectar "'
"C
problemas que podían pasar inadvertidos, prolonga la "'
:S!
-¡¡¡
supervivencia, mejora la situación funcional y men- E
tal de los pacientes, reduce el consumo de fármacos, o
e:
disminuye la necesidad de ingreso hospitalario y de o
-¡¡¡
institucionalización y controla el gasto sanitario. En
la valoración de las actividades de la vida diaria o
e:
o

2
e:
l
instrumentales del anciano son muy utilizadas ciertas "C
escalas, como la de Katz. "'
"C

u
.
"'o.
o Años
Tiempo
Tabla Dificultades para
la actuación clínica en el paciente Figura Perfil habitual de evolució n de las en-
de edad avanzada fermedades (flechas) en los ancianos.

En la realización de la historia clínica


y exploración física
La forma de vida limita la expresión de las Tabla Datos que debe incluir
enfermedades la valoración geriátrica integral
Los déficits sensoriales dificultan la
relación con el médico 1. Biomédicos
Se cansan fácilmente de colaborar y las
Antecedentes patológicos
entrevistas deben ser cortas
Enfermedades activas, antecedentes
Las enfermedades se expresan en ellos de
personales y síndromes geriátricos
forma menos características
Dieta y nutrición
En las pruebas complementarias Consumo de fármacos
Autopercepción de salud
No se conoce la relación riesgo-beneficio
de muchas técnicas. Las agresivas están 2. Funcionales
contraindicadas por la fragilidad del enfermo
Actividades de la vida diaria
En el diagnóstico Básicas (alimentación, baño, vestido,
En ocasiones las manifestaciones no son movilidad, uso del retrete, continencia)
explicables por un proceso único. Hay Instrumentales (uso de transportes, ir
limitaciones impuestas en la solicitud o de compras, manejar el dinero, usar el
realización de pruebas complementarias teléfono, utilizar los medicamentos, llevar
invasivas la casa)

En el pronóstico 3. Psicológicos

Se formula con dificultad pues faltan estudios Función cognitiva (orientación, fijación ,
en este colectivo memoria reciente, atención , lenguaje,
comprensión)
En la indicación terapéutica Función emocional (depresión, paranoia,
alucinaciones, personalidad, capacidad de
Con frecuencia no se conoce el beneficio
adaptación)
final de determinados tratamientos
Función perceptiva (visión, audición, habla)
La necesidad de múltiples actuaciones
incrementa el coste 4. Sociales
Hay alto riesgo de efectos secundarios y
de iatrogenia. Familia y red social
En ellos hay cambios en la farmacocinética Cuidador principal
de los medicamentos y niveles elevados de Ingresos económicos
incumplimiento terapéutico Necesidades de cuidado
·116
Alteraciones de la
regulación térmic
Síndrome febril
Jaime Merino Sánchez, Reyes Pascual Pérez, Pablo Roig Rico

, ,.,., 'J ,.,., ', '''',


. . '''',' 'IJ,
/ II /// III J/ 11JJ¡1111 / /11 // ,',;',',';,;','i "" 1rrrr lrrrr Irrrr Irrrr 1
,,, '"' ,,,,, ,,,,,,,,,,,
AJUSTE TÉRMICO
Los humanos somos homotermos, mantene-
mos la temperatura corporal independiente del
medio en que nos encontramos. Ello se debe a la
existencia en el hipotálamo de neuronas que son
capaces de responder a dos tipos de sensacion es :
las que le llegan por los nervios periféricos y que son
recogidas por los receptores del frío y del calor, y por
otra parte la temperatura de la sangre que perfunde
el hipotálamo. Esta información se integra para man-
tener la temperatura constante. La Tabla 16-1 recoge
los mecanismos de que disponemos para producir
y eliminar calor. En condiciones normales predo-
mina la producción de calor, por lo que el hipo-
tálamo regula fundamentalmente las pérdidas de
calor. Gracias a ese ajuste la temperatura corporal
del sujeto sano se mantiene en 36,8 ± 0,4ºC con
variaciones circadianas diarias de menos de 0,5 ºC,
con un máximo de 4 a 6 de la tarde y un mínimo
a las 6 de la mañana.
La temperatura basal del cuerpo se debe a
mecanismos como: a) la actividad metabólica de
las hormonas tiroideas, que regulan la actividad
ATPasa sodio-potasio de las membranas ce-
lulares, que induce un bombeo activo del
sodio y favorece cambios metabólicos
que liberan ATP; b) la contracción
muscular; c) el calor generado
al metabolizarse los alimentos
(acción dinámica específica),
y d) el transporte activo de
aminoácidos.
Los mecanismos de pérdida del
calor están realacionados con la vaso dilatación cutánea,
que favorece los fenómenos de irradiación, convección
y evaporación (sudoración), etc. Con ellos colaboran
CAPÍTULO 16 Alteraciones de la regulación térmica. Síndrome febril

rógenos) capaces de producirla (Fig. 16-1). Son:


las infecciones, traumatismos, isquemia de órga-
Tabla Mecanismos de producción nos, etc. Se califican de pirógenos los agentes in-
y pérdida de calor en el organismo fecciosos: bacterias o compuestos celulares de las
bacterias como las endotoxinas (proteoglicanos),
Termogénesis Termólisis los virus, los hongos (ya sean intactos o solo sus
paredes celulares), los protozoos, etc., pero tam-
lngesta de Pérdidas de calor en piel: bién los agentes tóxicos, fármacos, polinucleóti-
alimentos irradiación, conducción, cos sintéticos o reactantes inmunológicos tales
convección, evaporación como complejos inmunes circulantes, fracciones
Aumento del Calentamiento del complemento, etc.
metabolismo del aire inspirado
celular: estimulación Estos pirógenos, denominados exógenos,
simpática actúan sobre ciertos tipos celulares, fundamen-
(catecolaminas) talmente los monocitos/macrófagos o células
Actividad muscular Pérdidas por heces u orina
MECANISMOS DE PRODUCCIÓN
DE LA FIEBRE

determinados comportamientos instintivos, como uti-


lizar más ropa; al hacerlo disminuye la superficie de Infecciones - Traumatismos - Isquem ia, etc.
contacto con el medio ambiente frío y las pérdidas de
calor. Hay variaciones fisiológicas de la temperatura
(de pequeña cuantía), que se producen con el ejerci-
cio, la ovulación, la digestión o el embarazo. Pirógenos exógenos

FIEBRE
Células del sistema monocito-macrofágico
CONCEPTO o relacionadas
Consiste en una elevación de la temperatura corpo-
ral que excede a la variación diaria normal y se debe
a un ajuste más elevado del centro termorregulaclor Pirógenos endógenos: citoquinas
hipotalámico, pero que mantiene los mecanismos re-
guladores. Es un signo de enfermedad, pero también
puede considerarse un síndrome, ya que la elevación
Hipotálamo anterior
térmica se acompaña de otras manifestaciones clíni- Liberación de PGE2 - PGF2a
cas en respuesta a las diversas agresiones. La fiebre
rara vez supera los 41 ºC de temperatura. Si es mayor
se habla de hipertermia.
En la hipertermia la producción de calor excede a Célu las gliales: i AMPc
las pérdidas, pero el ajuste del centro hipotalámico se i punto del ajuste del termostato
hace a nivel de normotermia. Por ello no se produce su-
doración ni la variación circadiana de la temperatura.
Cursan con hipertermia: el golpe de calor, la hiperter-
Descarga del SNS
mia maligna por anestésicos, el síndrome neuroléptico (neuronas sens ibles al frío)
maligno y la hipertermia inducida por drogas .
El concepto de distermia se refiere a la sensación
subjetiva de fiebre sin que se demuestre elevación
térmica. Aparece en enfermos con distonía neurove- Contracción
getativa. muscular
ve cutánea
MECANISMOS Y FASES DE PRODUCCIÓN
DE LA FIEBRE Fiebre
Se distinguen cinco fases:
Fase l. La fiebre se inicia cuando alguna circuns- Figura Mecanismos de producción de la fiebre.
tancia favorece la producción de sustancias (pi- SNS: Sistema Nervioso Simpático. VC: Vasoconstricción.
165
Semiología y fisiopatología general

relacionadas, como las de Kupffer hepáticas, los sus niveles de AMP cíclico, que sería el transmi-
astrocitos o queratinocitos, etc. También actúan sor real. El AMP cíclico elevado actuaría sobre
sobre los linfocitos T, los leucocitos polimorfo- las neuronas del centro hipotalámico y reajusta-
nucleares e incluso sobre las neuronas. ría su termostato.
Fase 2. Estas células producen, a partir de los El punto de ajuste del termostato hipotalámico
aminoácidos, una serie de proteínas de bajo se vería en parte modificado tan1bién por otros
peso molecular, 10 000 a 20 000 daltons, que son metabolitos, como el tromboxano.
capaces de regular procesos inflamatorios, he- Fase 5 . El AMP cíclico activa las fibras del siste-
matológicos e inmunes y que tienen el nombre ma nervioso simpático aumentando su índice de
genérico de citocinas o pirógenos endógenos. descarga para generar calor (contracción muscu-
Las más importantes implicadas en la fiebre son lar y disminuir las pérdidas de calor a través de
producidas por monocitos , es decir, son monoci- la vasoconstricción cutánea).
nas y serían: la interleukina 1 (ILl), el factor de Si el estímulo pirogénico disminuye o la res-
necrosis tumoral alfa (TnF a) y la interleukina 6 puesta ha sido excesiva, la elevación térmica de
(IL6), pero también hay otras producidas por los la sangre que baña al hipotálamo informa a este
linfocitos y las linfocinas, como el TNF ~ o la del exceso térmico y se frena la actividad de las
linfotoxina. Se han descrito otras muchas como neuronas sensibles al frío y se activan las neuro-
los interferones (IFN) alfa (a), beta (~), o gan1ma nas que favorecen la pérdida de calor, que son
(y) que son producidos por los macrófagos en parasimpáticas. Estas aumentan su índice de des-
respuesta a polisacáridos. carga y se produce vasodilatación y sudoración.
Todas son capaces de elevar la temperatura
(son pirogénicas) pero ejercen también efectos
importantes sobre la inflamación, la regulación CAMBIOS TÉRMICOS
de la hematopoyesis y la respuesta inmune y son
causa de otras de las muchas manifestaciones que Los cambios en la producción de pirógeno endógeno,
acompañan al síndrome febril. La ILl se produce p. ej., su aumento, hacen que la temperatura ya pre-
directamente por los leucocitos en las leucemias viamente elevada se incremente más, y a la inversa,
y linfomas y puede ser responsable de la fiebre en que su descenso la disminuya. Es la expresión de que
estos pacientes. el termostato sigue siendo sensible a estos cambios.
Los pirógenos endógenos amplifican los meca- De igual manera, la administración de antiinflamato-
nismos de respuesta, ya que aumentan el número rios no esteroideos que bloquean el enzima ciclooxi-
de macrófagos en el foco. Si la temperatura es un genasa (como la aspirina) disminuye los niveles de
marcador de la respuesta inflamatoria, la fiebre prostaglandinas y hace bajar la temperatura elevada.
sería en ciertos casos la expresión de la gravedad La administración de glucocorticoides induce
del proceso inflamatorio. disminución térmica por dos mecanismos: por inhi-
Fase 3. Una vez producido el pirógeno endó- bición de la fosfolipasa A2, que disminuye la síntesis
geno, este actúa sobre las células endoteliales de AA y con ello de las prostaglandinas y además
de los órganos vasculares de la lámina terminal porque bloquea la transcripción del RNA mensajero
del hipotálamo anterio1~ específicamente sobre para la síntesis de las citocinas ILl y TNF.
la fosfolipasa A de las membranas de las células
endoteliales y libera fosfolípidos, entre ellos el
ácido araquidónico (AA), que es un ácido graso CAUSAS DE LA FIEBRE
poliinsaturado. Este va a ser ulteriormente meta- La causa más frecuente de fiebre, aunque no es la úni-
bolizado por el enzima ciclooxigenasa (CO) que ca, son las infecciones. En especial, las del tracto res-
genera gran cantidad de prostaglandinas, sobre piratorio superior, tracto urinario , celulitis, abscesos
todo la PGE2 y la PGpF2 a, que tienen capacidad superficiales y neumonías. En la Tabla 16-2 se reco-
de regular la respuesta térmica. No existen pros- gen las principales causas de fiebre. Es importante no
taglandinas almacenadas; estas se generan en hacer a la fiebre sinónimo de infección, ya que tiene
el momento y su producción se va a proyectar muchas otras causas. Por otra parte, la fiebre puede
sobre el hipotálamo anterior elevando el punto faltar (p. ej. , en recién nacidos , ancianos, enfermos
de ajuste del termostato hipotalámico . Durante con tratamiento glucocorticoideo, y situaciones gra-
la fiebre los niveles de PGE2 están aumentados en ves en el shock séptico, que incluso puede cursar con
el hipotálamo y el tercer ventrículo. hipotermia) .
Fase 4. En las neuronas hipotalámicas se han
descrito cuatro receptores para la PGE2 • Si el gen
que controla estos receptores se altera, la inyec- HIPERTERMIAS
ción de endotoxina o ILl no produce fiebre. Se
cree que el transmisor no es la PGE2 sino que esta El término hipertermia expresa una elevación térmi-
actúa sobre células gliales para que estas eleven ca por alteración de su regulación y no está causada
CAPITULO 16 Alteraciones de la regulación térmica. Síndrome febril

Tabla Causas de fiebre


Infecciones De causa respiratoria, urinaria, celulitis, abscesos, otras
Tumores Linfomas, adenocarcinoma renal, tumores primarios y metastásicos de
hígado y pulmón
Hemorragias Sistema nervioso central, retroperitoneal
Enfermedades metabólicas agudas Artropatías por microcristales
De base inmune Lupus eritematoso sistémico, artritis reumatoide, vasculitis
Reacciones diversas Fármacos
Transfusionales
Trombosis Infarto agudo de miocardio, enfermedad tromboembólica,
tromboflebitis
Enfermedades endocrinológicas Hiperfunción tiroidea, feocromocitoma, insuficiencia corticosuprarrenal
Miscelánea Autoinducida. Enfermedades granulomatosas (sarcoidosis)

por procesos infecciosos; en ella no hay posibilidad de vados de PGE 2 , mejorando con antiinflamatorios
ajuste del termostato hipotalámico. Se relaciona con no esteroideos.
una excesiva producción de calor, por ejemplo, por un Sudoración y enrojecimiento: Expresan la re-
exceso de actividad muscular en el golpe de calor; otras distribución de la circulación sanguínea hacia
veces existe dificultad en la eliminación de calor, por los vasos dérmicos por la elevación térmica.
ejemplo, si se dañan las glándulas sudoríparas, o se de- Puede controlarse con antiinflamatorios no es-
sarrolla una deshidratación. La hipertermia puede ser teroideos.
consecuencia de daño directo del centro hipotalámico: Cambios en el nivel de consciencia: El enfermo
por efecto de drogas o fármacos como en el síndrome febril a veces presenta obnubilación, irritabili-
neuroléptico maligno (administración de fenotiacinas), dad o delirio; estas manifestaciones son frecuen-
o por la toma de determinados anestésicos en personas tes en ancianos, niños, alcohólicos, o personas
susceptibles como en la hipertermia maligna, o en alte- con enfermedad cardiovascular subyacente. Se
raciones endocrinológicas como la crisis hipertiroidea relacionan con el estado de salud previo o la
(tirotoxicosis). existencia de enfermedades asociadas y con el
Respecto a la patogenia de la hipertermia se ha grado de elevación térmica; de hecho , mejoran
señalado que podría estar causada por la liberación al bajar la temperatura y en su patogenia se ha
directa por las células nerviosas de citocinas que di- implicado la IL1, TNFcx y la liberación de be-
rectamente producirían la elevación térmica. taendorfinas.
Las convulsiones pueden aparecer en niños,
sobre todo en los menores de cinco años. Se rela-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Y BIOLÓGICAS cionan con la rapidez o intensidad de la subida
QUE ACOMPAÑAN A LA ELEVACIÓN TÉRMICA térmica y su presencia puede obligar a descartar
EN EL SÍNDROME FEBRIL alguna enfermedad subyacente.
Herpes labial: El aumento de la temperatura ac-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS tiva a los virus del herpes simple crónicamente
acantonados en las terminaciones nerviosas
La percepción de la elevación térmica es muy varia- periorales, lo que se expresa con la aparición
ble según los individuos. Las manifestaciones princi- de vesículas sobre aquellas (calenturas) y pue-
pales son: den aparecer con elevaciones térmicas discretas
Escalofríos: Es una sensación de frío acompaña- (acompañan a la mujer en la ovulación), o en
da de contracciones musculares generalizadas. procesos infecciosos agudos o si existe inmuno-
Suele producirse por una gran liberación de supresión celular.
pirógenos (bacterias o hemólisis). La piloerección forma parte de los mecanismos
Artralgias y mialgias: Se deben a un aumento de obtención de la energía y acompaña a la vaso-
167
de IL1 y/o TNF, y se relacionan con niveles ele- constricción.
SE ( O Semiología y fisiopatología general

MANIFESTACIONES BIOLÓGICAS renal , pérdida ligera de sal y tendencia a la aci-


dosis metabólica.
A las manifestaciones clínicas se suelen acompañar Cambios del metabolismo basal, que se incre-
alteraciones en las pruebas de laboratorio: menta entre un 12 % a un 15 % por cada grado de
En sangre hay cambios en las proteínas plasmáti- ascenso térmico. Las reacciones metabólicas se
cas, muchas de ellas por mayor síntesis hepática, aceleran al aumentar la temperatura; ello supone
como la proteína C reactiva o la proteína sérica que los tejidos requieren más aporte de oxígeno
asociada a amiloide (PSAA). Algunas, como hap- y nutrientes y por consiguiente un aporte cardio-
toglobinas o ceruloplasmina, tienen movilidad vascular mayor. Su expresión más evidente es la
electroforética a nivel de las alfa-2 globulinas, por taquicardia que acompaña a los procesos febriles.
lo que se moclifica el espectro electroforético del El aumento del gasto cardiaco puede ser nocivo
proteinograma. También aumenta la síntesis de en personas con enfermedad cardiovascular o en
fibrinógeno y disminuye la de albumina, lo que ancianos y favorece la aparición de insuficiencia
hace elevar la velocidad de sedimentación; hay cardiaca o infarto agudo de miocardio.
un descenso de la sideremia (muchos gérmenes Con la fiebre prolongada hay pérdidas proteicas
necesitan hierro para su crecimiento). A la vez en el músculo y en la matriz ósea, ya que con-
hay modificaciones en las células sanguíneas, diciona una hiperactividad del eje hipotálamo-
especialmente leucocitosis en respuesta a la 111. hipofisario- suprarrenal que genera un balance
En orina aparece albuminuria. Experimental- nitrogenado negativo mediado por glucocorticoi-
mente es posible producirla induciendo fiebre. des; estos liberan aminoácidos de las proteínas
Suele ser de escasa cuantía y cesa cuando la y glicerol de las reservas grasas en el tejido adi-
temperatura se normaliza. poso; ambos se usan para la gluconeogénesis. Se
ha demostrado que el TNFa. inhibe el gen que
regula la lipoproteinlipasa y con ello disminuye
IMPORTANCIA CLÍNICA DE LA FIEBRE la síntesis grasa.
La fiebre actúa sobre el sistema nervioso central
La temperatura es una constante vital que se valora favoreciendo la aparición de cefalea, fotofobia
en clínica. Sus características nos ayudan a entender y en algunos casos convulsiones o un cuadro
la gravedad o el carácter orgánico de una enferme- confusional.
dad. La temperatura bucal o rectal informa mejor de
los cambios térmicos que suceden en las cavidades
centrales. VALORACIÓN SEMIOLÓGICA
DE LA ELEVACIÓN DE LA TEMPERATURA
EFECTOS BENEFICIOSOS DE LA FIEBRE La técnica de la toma se explica en el Capítulo 4. En
general la toma de la temperatura en la axila es menos
Ciertos microorganismos se desarrollan mejor a tem- exacta que la oral, la rectal o la timpánica.
peraturas bajas, pero la eficacia antibacteriana de la
elevación térmica no parece haberse demostrado in
vitro. PATRONES TÉRMICOS
La elevación térmica inducida por la 111 produce Algunas causas de fiebre inducen un patrón térmico
aumento de la actividad quimiotáctica, fagocitaría y que en algunas ocasiones puede ayudar al diagnósti-
bactericida de los polinucleares neutrófilos. co, si bien la mayoría son poco específicos. Los más
La IL6 y el TNF favorecen la adhesión de los leuco- útiles son:
citos polimorfonucleares a la pared vascular. Su pre-
sencia acompañando a la fiebre debemos interpretarla La febrícula: Es una elevación térmica que no
como un mecanismo de defensa, ya que expresa la alcanza los 38 ºC; suele deberse a infecciones por
respuesta inflamatoria que trata de controlar cual- patógenos intracelulares, por ejemplo tuberculo-
quier agresión, por ejemplo una infección. sis, o causas no infecciosas (p. ej. , neoplasias)
con frecuencia es de predominio vespertino y se
acompaña de sudoración.
EFECTOS NEGATIVOS DE LA FIEBRE La fiebre es recurrente o recidivante cuando
aparece intercalada entre días sin fiebre. Los
Se expresan sobre todo si la fiebre es prolongada. Los
ejemplos más claros corresponden a la terciana,
principales son:
una forma de paludismo causado por el plasmo-
Las propias molestias descritas: malestar ge- diun vivax en la que el sujeto tiene fiebre el día
neral , artralgias, mialgias, cefalea, sudoración, uno y el tres, estando apirético los restantes, o la
escalofríos, etc. cuartana, producida por el Plasmodium malariae
Alteraciones metabólicas del tipo de la deshidra- en la que tiene fiebre los días uno y cuatro. Las
168
tación que puede condicionar una insuficiencia infecciones por Borrelia spp pueden producir
CAPITULO 16 Alteraciones de la regulación térmica . Síndrome febril

varios días de fiebre seguidos de otros de api- do (mayor riesgo para infecciones por gérmenes
rexia , y en determinados linfomas (enfermedad capsulados). También si se le han colocado o es
de Hodgkin) se ha descrito la fiebre de Pel Ebs- portador de sondas o catéteres, si tiene antece-
tein, que tiene un perfil parecido. Los enfermos dentes de enfermedades como cirrosis o hiper-
con neutropenia cíclica tienen fiebre uno de tensión portal (riesgo de peritonitis bacteriana) ,
cada veintiún días. La fiebre vespertina en picos si padece síndrome nefrótico (pérdidas urinarias
hasta 40 ºC acompañada de exantema macular de inmunoglobulinas), tiene otorrea de líquido
asalmonado en el tronco es característica de la cefalorraquídeo, o está recibiendo quimioterapia.
enfermedad Still.
Si la diferencia entre el pico y el nadir es muy
grande calificamos a la fiebre de séptica o hécti- PERFIL DE LOS CUADROS FEBRILES
ca, ya que suele estar causada por agentes pióge-
nos o por infecciones diseminadas Las enfermedades febriles podemos encuadrarlas, de
Hay fiebre mantenida cuando la temperatura está forma esquemática, y según su perfil temporal en:
continuamente elevada y no hay caída diurna. Es
un patrón que a veces se observa en infecciones
por Salmonella typhi (fiebre tifoidea), o en la ENFERMEDAD FEBRIL DE CORTA DURACIÓN
endocarditis infecciosa. Suele deberse a procesos infecciosos, alergias a fár-
macos , crisis de gota o enfermedad tromboembólica.
Sugiere que se trata de una infección si el inicio es
EVALUACIÓN DEL PACIENTE FEBRIL brusco, la temperatura se eleva por encima de los
39 ºC y se asocia a manifestaciones respiratorias (tos,
Con viene valorar: dolor en costado) , o digestivas (diarrea, náuseas, vó-
Las características del medio en el que aparece mitos, odinofagia). A veces cursa con un cuadro de
la fiebre . Si otros convivientes del afectado la tie- afectación general (mialgias, artralgias, cefalea, foto-
nen o la han tenido sugiere la existencia de una fobia}, o un discreto aumento de los ganglios linfá-
fuente de contagio común (los alimentos, el agua ticos o del bazo, signos meníngeos o molestias uri-
o por transmisión directa). Es importante saber si narias. Las leucemias agudas y las vasculitis pueden
ha habido prácticas higiénicas o hábitos favore- expresarse así. En este caso el resto de los hallazgos
cedores de contagio: intercambio de agujas , coito exploratorios y sobre todo las pruebas complementa-
sin protección con personas de riesgo, viajes a rias ayudan a su diagnóstico.
zonas endémicas de ciertas enfermedades infec-
ciosas, o la estancia en hospitales o instituciones
cerradas, lo que favorece la adquisición de de-
ENFERMEDAD FEBRIL PROLONGADA
terminados procesos (llamados nosocomiales). Es causa frecuente de ingreso hospitalario. Si el enfer-
En todos los casos la cronología de la supuesta mo lleva más de 2 semanas con temperatura por enci-
exposición y las manifestaciones es importante. ma de 38,3 ºC y tras su estudio hospitalario una sema-
Las características del propio enfermo. Es impor- na después sigue sin diagnóstico definitivo se habla
tante conocer si padece alguna enfermedad que de fiebre de origen desconocido (FOD). Estos criterios
altere su inmunidad, sea congénita o adquirida, descartan la mayor parte de las infecciones autolimi-
si está recibiendo fármacos inmunosupresores, tadas , las producidas por virus o pirógenos. Sus prin-
existe una neutropenia o ha sido esplenectomiza- cipales causas están recogidas en la Tabla 16-3.

Tabla Causas de fiebre de origen desconocido


Infecciones Abscesos, osteomielitis, infecciones granulomatosas, sinusitis, otras

Neoplasias Linfomas, leucemias, mixoma auricular, tumores sólidos (p. ej. , hipernefroma)

Enfermedades del tejido Fiebre reumática, lupus eritematoso sistémico, artritis reumatoide, arteritis de
conectivo células gigantes

Enfermedades granulomatosas Tuberculosis, sarcoidosis, hepatitis

Varios Fármacos, tromboembolismo pulmonar, crisis hemolíticas, tiroiditis, fiebre facticia

Hipertermia habitual

169
·117
Síndrome de
afectación general
Jesús González Macías, José Luis Hernández Hernández

INTRODUCCIÓN
Los enfermos acuden frecuentemente al médico con
manifestaciones vagas e inespecíficas , que no propor-
cionan una sospecha de la enfermedad que padecen.
Las principales de estas manifestaciones ines- 11 1 il j ,111
pecíficas son la astenia, la anorexia y el adel-
gazamiento. La literatura anglosajona suele
referirse a ellas con el término de manifes-
taciones constitucionales. Esta terminología
va imponiéndose en nuestro país, donde tra-
dicionalmente se hizo referencia a ellas con
la expresión de manifestaciones generales y 1 c.:. l :. i,.
«síndrome de afectación general ». ---
CO
e::,
C'O
C'0
00
CX)
.CX> ~
Con frecuencia aparecen , junto a las ante-
riores, otras manifestaciones inespecíficas, como
fiebre, sudoración nocturna, artralgias, mialgias y
cefalea. No es extraño que aparezca también anemia.
No obstante, el término síndrome de afectación gene-
ral hace referencia fundamentalmente a la astenia , la
anorexia y el adelgazamiento.

ASTENIA
La astenia es una sensación de falta de energía, que
suele dejarse notar incluso en reposo, aunque se hace
más evidente durante la realización de ejercicio. Es
una palabra que pertenece al léxico médico, y que no
suele ser utilizada por los enfermos. Estos se refie-
ren en general a ella con los términos de debilidad o
fatiga. Debilidad, en sentido estricto, significa inca-
pacidad de un músculo o grupo muscular para desa-
rrollar un esfuerzo máximo; pero con frecuencia los utilizan estas palabras en un sentido diferente al co-
pacientes utilizan dicha palabra para describir una mentado. Por ejemplo, la palabra fatiga se emplea con
sensación generalizada de falta de fuerza (confirién- frecuencia para hacer referencia a cualquier factor que
dole un valor subjetivo que la aproxima al concepto dificulte la actividad física, como la disnea (sensación
de astenia). El término fatiga, en principio, no hace de dificultad respiratoria) o incluso la claudicación
referencia a ninguna manifestación patológica; de- intermitente (aparición de dolor muscular por isque-
signa la sensación de cansancio que aparece tras la mia por ejercicio físico repetido. El término debilidad
realización de ejercicio. Los enfermos, sin embargo, es utilizado a veces por los pacientes para referirse a
lo utilizan frecuentemente en el sentido de cansancio una sensación de mareo o inestabilidad.
precoz y exagerado para la intensidad del ejercicio La sensación de astenia es muy frecuente , y puede
que lo determina (los médicos a veces denominan a darse en numerosas enfermedades. Su interés diag-
este fenómeno como «fatigabilidad fácil »). nóstico es escaso, dada esta inespecificidad. Cuando
En la práctica las cosas se complican un poco más es intensa y duradera, suele indicar la presencia de
si se tiene en cuenta que, en ocasiones, los enfermos una enfermedad de relevancia clínica.
CAPÍTULO 17 Síndrome de afectación general

ETIOPATOGENIA (IL-1, TNF) . El aparato digestivo puede ser el origen


de una disminución del apetito , en parte por vía re-
El sustrato neurológico (receptores , vías de transmi-
fleja (a través del vago) y en parte por vía humoral (a
sión) de la astenia es desconocido, como no se cono-
través de algunas de las hormonas gastrointestinales,
cen tampoco los estímulos concretos que la desenca-
como la colecistocinina). Así, la distensión gástrica
denan. Parece lógico que, en su génesis, esté implica-
determina sensación de saciedad. También estímulos
da la falta de aporte energético. En este sentido, cur-
superiores, como los que suponen factores sensoria-
san con astenia, debilidad y fatiga las enfermedades
les (gusto, olfato), emocionales e incluso sociales, in-
determinantes de hipoxemia (insuficiencia cardiaca,
fluyen en la regulación de la ingesta.
situaciones de hipotensión, insuficiencia respiratoria
La anorexia es frecuente en las enfermedades in-
y anemia) . Sin embargo, la mayor parte de las veces
fecciosas , en las inflamatorias y en las tumorales, en
el mecanismo es desconocido. La astenia es frecuente
parte por la intervención de las citocinas menciona-
en infecciones (tuberculosis, hepatitis) , enfermeda-
das. Es casi constante en las enfermedades del aparato
des inflamatorias (artritis reumatoide). enfermeda-
digestivo , probablemente por la intervención de los
des metabólicas y endocrinológicas (enfermedad de
reflejos señalados. Es propia también de cualquier si-
Addison). y tumores. También pueden producirla
tuación grave y de los cuadros dolorosos, en relación,
diversos fármacos (diuréticos) y tóxicos (alcohol), así
al menos en parte, con el estrés que ello supone y con
como factores de carácter psicológico (depresión). El
la consiguiente liberación de catecolaminas y CRH.
síndrome de fatiga crónica es un trastorno con per-
Es frecuente en los ancianos , posiblemente por las
sonalidad propia, cuya naturaleza exacta aún no está
alteraciones sensoriales (gusto y olfato) propias de la
suficientemente esclarecida. La fatiga propia del ex-
edad. Es habitual en los cuadros depresivos , tal vez
ceso de trabajo, del sueño inadecuado, del embarazo,
por elevación de CRH.
etc. , puede calificarse de fisiológica.
Más difícil resulta explicar la anorexia que se ob-
La astenia de origen psicológico o fisiológico suele
serva en diversas endocrinopa tías (enfermedad de
d~nominarse funcional, y la de otros orígenes, orgá-
Addison, hiperparatiroidismo) , la insuficiencia de los
mca. Cada una de ellas viene a suponer la mitad del
órganos vitales (pulmón, corazón, riñón , hígado). la
total de los casos.
ingestión de tóxicos (alcohol, tabaco, drogas) o cier-
tos fármacos, y en general cualquier situación en que
CARACTERÍSTICAS SEMIOLÓGICAS haya pérdida de la sensación de bienestar.
(Tabla 17-1) No debe confundirse la fa lta de apetito con la sa-
La astenia orgánica se caracteriza por ser de dura- ciedad precoz que ocurre, por ejemplo, cuando es tá
ción relativamente breve (1-2 meses); por aumentar dificultada la distensión gástrica (gastrectomía par-
con el ejercicio y aliviarse con el reposo; por no estar cial, ocupación del abdomen por masas tumorales o
presente por la mañana, sino aparecer e intensificar- por órganos aumentados de tamaño -hígado, bazo-) .
se a lo largo del día; y por ser más progresiva que Tampoco debe confundirse la falta de apetito con el
fluctuante (Tabla 17-1). En cambio, la astenia fun- abandono prematuro de la ingesta, o el miedo a co-
cional suele ser de mayor duración (varios meses o mer, porque la propia ingesta provoca molestias (do-
años), estar presente (e incluso ser más intensa) por lor posprandial), fenómeno conocido como sitofobia
la mañana, ser fl uctuante y no guardar relación con (de siton , alimento) que se observa en pacientes con
el ejercicio. Aunque ambas pueden interferir en las isquemia mesentérica crónica.
actividades de la vida diaria, suele hacerlo más la or-
gánica. Tan1bién suelen diferir ambos tipos de astenia
en el carácter de las manifestaciones concomitantes :
la orgánica va acompañada por las manifestaciones Tabla Diferencias entre la astenia
de la enfermedad que las determina ; la funcional , de orgánica y la funcional
múltiples quejas somáticas mal definidas.
Orgánica Funcional

ANOREXIA Duración 1-2 meses Meses-años


Anorexia significa disminu ción del apetito. Su me- Relación con el Sí No
canismo no es bien conocido. Se considera que en ejercicio
el hipotálamo existen dos centros, uno lateral, que Patrón diurno Tarde Mañana
promueve la ingesta, y otro ventromedial o de la sa- Evolución Progresiva Fluctuante
ciedad, influidos por diversos neurotransmisores. La
noradrenalina, a través de su efecto o:2 , y la dinorfina Manifestaciones Patrón definido Mal definidas
(opioide endógeno) son estimuladoras de la ingesta. acompañantes
La adrenalina, a través de su efecto ~2 , y la hormona Exploración Patológica Normal
liberadora de ACTH o CRH (hormonas de estrés) son
inhibidoras. Parecen serlo también diversas citocinas
Semiología y fisiopatología general

ADELGAZAMIENTO con el primero (falta de aporte) o el segundo (exceso


de consumo).
Puede definirse como una pérdida de peso debida a la
disminución del tejido graso. Con alguna frecuencia
se acompaña de disminución de la masa muscular. Adelgazamiento por disminución de la ingesta
Se excluye del concepto la pérdida de peso debidas Falta de apetito. Se ha expuesto en el apartado
a depleción de líquidos. Por otra parte, el adelgaza- de anorexia.
miento es un fenómeno dinámico , que implica una Alteraciones del aparato digestivo . Se trata de
disminución ponderal respecto a una situación pre- aquellas alteraciones que impiden o dificultan
via. Por tanto, se excluyen también de este concep- mecánicamente la ingesta de alimentos: tras-
to los casos en que una persona es delgada de forma tornos de la deglución, vómitos o simplemente
constitucional y estable. Debe recordarse que una alteraciones de la dentición.
aparente pérdida de peso puede deberse, en realidad, Procesos que limitan psíquica o físicamente el
a que el enfermo se haya pesado con diferente ropa o acceso a los alimentos. Un ejemplo es el de la
en básculas distintas. demencia: si los pacientes que la sufren no re-
Aunque el peso, en condiciones de normalidad, ciben la atención debida, acaban presentando
tiende a mantenerse constante, no dejan de existir adelgazamiento y malnutrición.
ciertas fluctuaciones de unas épocas a otras, que no Situaciones que cursan con sitofobia. En ella,
deben interpretarse como patológicas. Variaciones como ya se comentó, el paciente tiende a evitar
inferiores a un kilogramo son posibles a lo largo de la comida porque la ingesta le produce molestias.
un día, e igualmente existen oscilaciones a lo largo Malabsorción. En la malabsorción el aporte ener-
del ciclo en la mujer. Hay una cierta tendencia al gético puede ser normal , pero no se aprovecha
aumento de peso hacia el cuarto decenio de la vida, dado que los alimentos no se absorben adecua-
e inversamente, una tendencia a la pérdida gradual, damente.
progresiva y limitada en la vejez. En términos gene- Diabetes mellitus. Cabe mencionarla aquí como
rales, solo se consideran preocupantes las pérdidas una enfermedad en la que , aunque el aporte de
de peso superiores al 5 % ocurridas en menos de 6 alimentos sea correcto y su absorción también,
meses. Como se deduce de ello, es más importante la no lo es su aprovechamiento celular, ya que la
fracción porcentual de pérdida de peso que supone falta de insulina impide la entrada de glucosa en
el adelgazamiento, que la cuantía absoluta de dicha las células. Además, su carencia hace que no se
pérdida (por ejemplo, debe considerarse de mayor active la lipoproteína lipasa, por lo que dismi-
importancia una pérdida de 4 kg en una persona de nuye el depósito de lípidos en el tejido adiposo.
40 kg que en otra de 80 kg). Algo similar ocurre en los procesos inflamatorios
El adelgazamiento puede deberse a razones de di- y tumorales, que liberan citocinas inhibidoras de
versa índole, con una trascendencia y un significado esta enzima, como el TNF (también denominado
diferente: caquectina por sus efectos sobre el estado pon-
Puede ser voluntario, en cuyo caso no suele tener deral).
trascendencia. (Es una excepción un complejo
trastorno de naturaleza psiquiátrica, denomina- Adelgazamiento por aumento de consumo
do anorexia nerviosa, en que existe un rechazo
patológico de los alimentos). Enfermedades endocrinas. El ejemplo típico es
Puede deberse a imposibilidad para alimentarse el hipertiroidismo. Hay que citar también el feo-
adecuadamente por razones socioeconómicas cromocitoma.
(guerras, pobreza, etc.); en ese caso, su trascen- Síndrome de respuesta inflamatoria sistémica.
dencia fundamental es de carácter nutricional. Sus causas son la sepsis y los traumatismos
Por último , puede deberse a alguna enfermedad graves. Conduce a un estado hipercatabólico in-
y ser expresión de la misma. En tal caso, además tenso , y en su base están tanto la reacción de fase
de repercutir sobre el estado nutritivo , el adel- aguda (aumento de citocinas, como IL-1 , TNF,
gazamiento tiene un valor semiológico, es decir, IL-6) como la reacción endocrinológica al estrés
constituye una manifestación de la enfermedad. (aumento del cortisol y las catecolaminas, dismi-
nución de la insulina). Estos factores actúan no
ETIOPATOGENIA solo aumentando el catabolismo, sino inhibiendo
el anabolismo y disminuyendo el apetito. Ade-
La pérdida de peso, en definitiva, no significa sino un más, las citocinas pueden producir fiebre, que
desequilibrio entre el aporte y el consumo energético, supone por sí misma un aumento del consumo
con predominio del segundo. Los factores responsa- energético. La trascendencia de la reacción en-
bles son muy numerosos , y pueden coincidir varios docrinológica del estrés y de las citocinas no es
en un mismo proceso causal. En principio, pueden solamente cuantitativa, sino también cualitativa.
clasificarse en dos tipos, según estén relacionados En los procesos en los que el balance energético
CAPITULO 17 Síndrome de afectación general

negativo se debe fundamentalmente a una falta número de posibilidades diagnósticas disminuye. A


de aporte de alimentos, siendo bueno el estado este respecto es tradicional dividir las enfermedades
general (el ejemplo extremo sería el ayuno volun- que causan adelgazamiento en dos tipos: las que cur-
tario), la pérdida de peso tiene lugar fundamen- san con apetito normal o aumentado y las que cursan
talmente a expensas del tejido graso. En cambio, con anorexia. Las más numerosas son las segundas.
en las situaciones que cursan con síndrome de Las primeras, por ser su número escaso, son fáciles
respuesta inflamatoria sistémica hay una notable de recordar: hipertiroidismo, diabetes y malabsor-
pérdida de masa proteica. La importancia de la ción, fundamentalmente; con menor importancia,
pérdida proteica es grande, pues el riesgo de el feocromocitoma . Las enfermedades que cursan
alteración las funciones de los órganos vitales es con adelgazamiento y anorexia son tan numerosas
mayor. que únicamente cabe sistematizarlas en: neoplasias
Tumores. También en ellos puede estar aumen- (sobre todo las digestivas), infecciones y procesos
tado el catabolismo, por la producción de cito- inflamatorios (tuberculosis, arteritis de la temporal),
cinas. Además, los procesos neoplásicos pueden trastornos endocrinológicos (enfermedad de Addison,
conducir al adelgazamiento por otras razones, hipercalcemia) , insuficiencia de órganos vitales (in-
como la inducción de anorexia, la posible afecta- suficiencia renal, insuficiencia cardiaca) y trastornos
ción del aparato digestivo e incluso el consumo psiquiátricos (ansiedad, depresión).
energético que lleva a cabo el propio tumor. Por último, es preciso recordar que el adelgaza-
Pérdida de nutrientes. Aunque no son propia- miento puede ir acompañado de signos de malnutri-
mente situaciones hipercatabólicas, hay que ción. La semiología clínica y analítica de la malnutri-
mencionar aquí las enteropatías, en las que se ción se expone en el capítulo 78: Fisiopatología de los
pierden proteínas por el tubo digestivo. trastornos de la nutrición.

CARACTERÍSTICAS SEMIOLÓGICAS ASTENIA, ANOREXIA, ADELGAZAMIENTO


SIMULTÁNEO
El adelgazamiento de escasa cuantía tiene poca reper-
cusión sobre el aspecto del paciente. Si es algo mayor, La asociación de esta tríada (síndrome constitucional)
se aprecian manifestaciones debidas a pérdida del pa- suele indicar la existencia de un proceso orgánico, de
nículo adiposo, como un aspecto laxo de la piel en los gravedad variable y cuya naturaleza suele ser tumo-
brazos y el abdomen y, más adelante, depresión de la ral, infecciosa o inflamatoria (Tabla 17.2).
región temporal y hundimiento de las mejillas. Con
el tiempo, el dato más llamativo es un intenso relie-
ve de las estructuras esqueléticas. Diversos términos
describen este aspecto de adelgazamiento extremo:
consunción, emaciación, estado marántico o maras- Tabla Enfermedades que cursan
mático (de marasmo). El término caquexia hace refe- con un síndrome de afectación general
rencia a la asociación de adelgazamiento con deterio-
ro funcional grave. Enfermedades en las que el síndrome de
Junto a la importancia que pueda tener el conoci- afectación general es con frecuencia su
miento de las situaciones de adelgazamiento intenso, forma de presentación
debe recordarse la trascendencia que tienen pérdidas Infecciones y procesos inflamatorios
de peso menores si ocurren en periodos breves de crónicos, tuberculosis, arteritis de células
tiempo. Una pérdida de peso del 5 %-10 % no da lu- gigantes
gar al aspecto emaciado que se acaba de referir, pero si Tumores malignos
tienen lugar en menos de 6 meses, debe considerarse Enfermedades endocrinológicas
como expresión de un trastorno grave que exige un y metabólicas (diabetes mellitus,
diagnóstico urgente y, en su caso, tratamiento. Con hipertiroidismo, enfermedad de Addison)
respecto a las pérdidas bruscas de peso, de todos
Enfermedades en las que el síndrome
modos, debe recordarse que las que tienen lugar en
de afectación general sólo suele ser una
lapsos de tiempo muy pequeños (días) suelen deberse
manifestación acompañante
a depleción hidrosalina.
El adelgazamiento puede cursar con otras mani- Insuficiencia de órganos vitales
festaciones propias de la enfermedad responsable, (insuficiencia cardiaca, pulmonar, hepática,
lo que facilita la identificación de la misma. Otras renal)
veces, las menos, aparece como síntoma aislado o Enfermedades digestivas
como la queja principal del paciente. En estos casos, Tóxicos
dada su inespecificidad, es más difícil identificar la
enfermedad subyacente. No obstante, si es intenso el
-118
Síndrome
doloroso
Juan Carlos García-Moneó

CONCEPTO
El dolor ha sido definido por la Asociación
Internacional para el Estudio del Dolor
(IASP) como una experiencia sensorial y
emocional desagradable ocasionada por un
daño tisular o por una lesión en las vías de su
transmisión. Esta definición resalta los dos
aspectos fundamentales del dolor: el sensiti-
vo, o de percepción del dolor, y el afectivo, o
de vivencia desagradable asociada al mismo;
como veremos, ambos componentes tienen
una base neuroanatómica bien definida.
El dolor es un fenómeno subjetivo, que no
puede ser medido ni confirmado por el médi-
co. En principio, el dolor tiene una finalidad
protectora, pero una vez cumplida dicha mi-
sión (tras alertar de la existencia de un agente
agresor o un daño tisular), se convierte en un
fenómeno indeseable, que causa sufrimiento.

RECUERDO ANATOMOFISIOLÓGICO

RECEPTORES DOLOROSOS Y VÍAS


DE TRANSMISIÓN DEL DOLOR
(FIGS. 18-1 Y 18-2)
Los receptores del dolor consisten en termina-
ciones nerviosas libres que se encuentran distri-
buidas por todo el organismo. Conviene distinguir,
por un lado, las que recogen el dolor producido en
las vísceras (dolor visceral), y por otro las localiza-
das en la piel y el tejido subcutáneo o en el aparato
locomotor (dolor somático). Los receptores del dolor
visceral no están situados en los parénquimas, sino
en las serosas, los vasos, la duramadre, la pared de las
vísceras huecas y la cápsula de los órganos sólidos.
Las fibras nerviosas que transmiten el dolor son de
pequeño diámetro y poco mielinizadas (fibras A8) o
son amielínicas (fibras C) (Tabla 18-1) . El glutamato es
el principal neurotransmisor de ambas, y las de tipo
C sintetizan neuropéptidos, especialmente sustancia
174 P, de gran importancia en la transmisión del dolor.
CAPÍTULO 18 Síndrome doloroso

Fil:iras C ( amielínicas) - Dolor lento

•••
Fuente
dolorosa '

Figura Esquema de la vía principal de transmisión del dolor (espi notal ámica) desde el receptor periférico
(nociceptor) hasta el sistema nervioso central.

Las fibras Aó son de conducción más rápida y El estím ulo que activa los receptores de las A8
transmiten el dolor rápido (punzante, agudo, bien puede ser mecánico o térmico, y se origina en la piel.
localizado), mientras que las C trasmiten el dolor El de las C, además de mecánico o térmico, puede
lento (urente, sordo, difuso); aquel se percibe inme- ser químico (mediadores químicos de la inflamación:
diatamente después de su producción, mientras que histamina, serotonina, prostaglandinas), y se puede
el dolor lento tarda un poco más (un segundo), y se originar en la piel o en estructuras profundas, somáti-
mantiene tras desaparecer el estímulo. cas o viscerales. A diferencia de lo que ocurre con la

Cordón posterior
Sensibilidad profunda - - - -
Doloc ~

( ~
Haz espinotalámico

Figura Teoría de la compuerta para la modulación del dolor a nivel medular. Los estímulos no dolorosos
transmitidos por los cordones posteriores inhiben la transmisión dolorosa espinotalámica a nivel del asta pos-
terior, mediante sinapsis inhibitorias directas o indirectas (modulación medular del dolor). Al asta posterior (no
representado en la figura) llegan también impulsos inhibitorios procedentes de núcleos del rafe y otros núcleos
del tronco cerebral y de la corteza prefrontal (modulación del tronco cerebral y cortical).
Semiología y fisiopatología general

Tabla Fibras nerviosas asociadas con las diferentes modalidades de estímulo doloroso
Tipo de fibra Estímulo al que responden Tipo de dolor que transmiten
Fibras A6 (poco mielinizadas) Térmico, mecánico (p. ej., pinchazo, Dolor inmediato, punzante y bien
pellizco, corte) localizado
Fibras C (amielínicas, conducción Térmico, mecánico y químico (son Dolor más tardío, quemante y peor
más lenta que las A6) fibras polimodales) localizado

mayoría de los demás receptores del organismo, ante procedentes de regiones inferiores (sacrococcígeas) se
la presencia de un estímulo mantenido, los receptores sitúan superficialmente, mientras que las superiores
del dolor no experimentan un fenómeno de adapta- se localizan en la profundidad del tracto. Las fibras
ción sino que, por el contrario, pueden sensibilizar- sacrococcígeas se respetan en los tumores intrame-
se progresivamente, dando lugar a una percepción dulares, mientras que son las primeras afectas en
dolorosa excesiva (hiperalgesia). Ello se debe a que los extramedulares, que comprimen el haz de afuera
las terminaciones nerviosas estimuladas por el dolor hacia dentro.
liberan antidrómicamente neuropéptidos del tipo de El tracto espinotalámico asciende por la médu-
la sustancia P, que potencian la nocicepción. la espinal y el tronco cerebral. A nivel del tronco
El cuerpo neuronal de la primera neurona sensiti- cerebral el tracto se ubica en la porción lateral del
va se encuentra en el ganglio espinal (o en el ganglio tegmento junto al lemnisco medial; aquí las fibras de
de los pares craneales sensitivos) y su axón tiene for- diferentes modalidades se separan para dirigirse a di-
ma de «T» (Fig. 18-1). La rama periférica se dirige al ferentes núcleos talámicos y del tronco cerebral. Las
receptor periférico (terminaciones libres), y la central fibras del dolor rápido y del tacto simple sinapsan
penetra en la médula espinal por la raíz posterior del en el complejo nuclear ventral posterior del tálan10 y
nervio espinal (o en el tronco cerebral por el origen del acaban en la corteza sensitiva primaria del lóbulo pa-
nervio craneal correspondiente). Las fibras que con- rietal. Son responsables de la percepción consciente
ducen el dolor somático forman parte del componente del dolor.
sensitivo de los nervios periféricos, mientras que las Las fibras del dolor lento, así como del visceral,
del dolor visceral viajan hacia el sistema nervioso sinapsan tanto en la formación reticular del tronco
central (SNC) en los nervios autonómicos del sistema cerebral como en los núcleos del tálamo y en el hipo-
nervioso vegetativo. La rama central se dirige al asta tálamo, alcanzando finalmente la corteza cerebral. En
posterior; las fibras A8 terminan en las neuronas de su paso por el tronco del encéfalo estas fibras sinap-
las láminas I y IV, mientras que las C lo hacen sobre san con diversos núcleos de la formación reticular, un
las de las láminas VI a VIII. En estas sinapsis parti- hecho muy importante para la modulación central del
cipan numerosas interneuronas que contribuyen a dolor, como después veremos.
dispersar las señales dolorosas y que, además , liberan Por otra parte, en todas las regiones implicadas en
neurotransmisores (entre ellos, por ejemplo, la misma el control del dolor están presentes los opioides endó-
sustancia P, que potencia la sensación dolorosa). genos , que disminuyen el dolor (neuromoduladores).
Los axones de las segundas neuronas se decusan
contralateralmente en la comisura gris (90%-95%),
configurando el tracto espinotalámico, que se localiza MODULACIÓN DEL DOLOR
en el cuadrante anterolateral de la médula espinal. La La percepción del dolor es modulada mediante di-
decusación tiene lugar varios segmentos por encima versos mecanismos , que suelen clasificarse en seg-
del mielómero de entrada de las fibras a la médula, lo mentarías y suprasegmentarios:
que explica que una lesión espinotalámica dé lugar a
una disminución de la sensibilidad varios niveles por
debajo del nivel de la lesión. El tracto se divide en dos Segmentario o medular
componentes, el anterior y el lateral. El componente Esta modulación se realiza al nivel de la sustancia
lateral es el responsable de la transmisión del dolor y gelatinosa de Rolando en el asta posterior de la mé-
la temperatura, mientras que el anterior transmite la dula espinal y constituye el sustrato anatómico de la
sensación de tacto simple (la que permite localizar un denominada «teoría de la compuerta (gate control) ».
estímulo en la piel se transmite por otro tipo de fibras De acuerdo con ella, las sensaciones no dolorosas que
mielínicas de mayor tamaño, las Ao. y A~, y viaja por llegan a las astas posteriores por las fibras muy mieli-
la vía de los cordones posteriores). El tracto tiene una nizadas de los cordones posteriores estimulan inter-
176
organización somatotópica, de tal modo que las fibras neuronas de la sustancia de Rolando, que a su vez
CAPÍTULO 18 Síndrome doloroso

ejercen un efecto inhibitorio sobre las neuronas del COMPONENTE EMOCIONAL DEL DOLOR.
tracto espinotalámico, bloqueando así la transmisión REACCIÓN DE ALERTA
dolorosa (Fig. 18-2). En esta teoría se basa el empleo
de la estimulación eléctrica transcutánea (TENS), que Las vías espinotalámicas que transmiten las sensa-
se utiliza para el dolor crónico, y probablemente sea ciones dolorosas hacia la corteza sensitiva emiten
la base del efecto analgésico de la acupuntura. proyecciones hacia otras regiones cerebrales involu-
cradas en las respuestas emocionales, tales como el
Suprasegmentarios lóbulo prefrontal y el giro del cíngulo, lo que explica
el componente emocional del dolor. Emiten también
Están constituidos por vías descendentes , bien a ni- proyecciones a numerosos grupos neuronales de la
vel del tronco del encéfalo o de la corteza cerebral. formación reticular, lo que justifica la reacción de
Tronco del encéfalo. A este nivel, se sabe que la alerta que acompaña al mismo.
estimulación de determinados núcleos (sustan-
cia gris periacueductal, núcleo magno del rafe,
núcleo gigantocelular y locus ceruleus) produce TIPOS DE DOLOR
una modulación del dolor. Es útil clasificar el dolor de acuerdo con distintos cri-
La vía mejor conocida nace en la sustancia gris terios, como la duración (dolor agudo y crónico) o
periacueductal, desde donde, tras hacer estación el lugar de origen (dolor nociceptivo y neuropático).
en la formación reticular (núcleo del rafe magno
y gigantocelular), alcanza las neuronas del asta
posterior, donde modula la percepción dolorosa DOLOR AGUDO Y DOLOR CRÓNICO
bien en sentido positivo o en sentido negativo.
Utiliza diversos neurotrasmisores , incluyendo la La International Association far the Study of Pain
serotonina, el GABA, la sustancia P y opioides (IASP) ha propuesto la cifra de tres meses para sepa-
endógenos (fan1ilia de péptidos con importantes rar ambos tipos de dolor. Algunos autores prefieren
propiedades analgésicas, que incluye las endor- considerar dolor crónico aquel que , en el caso de una
finas, encefalinas y dinorfinas) . La sustancia gris enfermedad aguda, se prolonga más de un mes en re-
periacueductal, a su vez, recibe aferencias de di- lación con la duración esperable, y el que se asocia a
versas regiones de la corteza cerebral (en especial una enfermedad crónica.
del lóbulo límbico) y del hipotálamo. Su efecto El dolor agudo suele ser de comienzo brusco y estar
estimulador sobre neuronas de la formación reti- relacionado con un problema específico del que pre-
cular, que son inhibidoras, así como la liberación tende defender al organismo (lesiones tisulares) . En
de opioides endógenos explican el efecto analgé- general desaparece al cesar este. Cuando es intenso se
sico tras la estimulación periacueductal. acompaña de ansiedad e hiperactividad del sistema
El locus ceruleus, ubicado en la protuberancia nervioso simpático (taquicardia, hipertensión, sudo-
junto al suelo del IV ventrículo, tiene carácter ración, midriasis).
noradrenérgico y ejerce a su vez un efecto inhi- El dolor crónico suele ser de comienzo gradual y
bidor sobre la sustancia gris periacueductal que tiende a presentar fluctuaciones , pudiendo ser in-
potenciaría la percepción dolorosa . termitente. Con frecuencia es peor localizado que el
La capacidad de modular estas vías explica la agudo. Carece de utilidad biológica (no tiene finalidad
acción de determinados fármacos antidepresivos protectora) y tiende a cursar con un mayor componen-
sobre el dolor, particularmente de aquellos que te emocional, siendo frecuente la depresión y el in-
potencian la acción de la noradrenalina y la se- somnio, que pueden facilitar la percepción del dolor.
rotonina.
Cortical. La influencia cortical e hipotalámica
sobre el dolor se realiza a través de conexiones
TIPOS DE DOLOR SEGÚN EL LUGAR
directas e indirectas con los niveles troncoence- DE ORIGEN (Tabla 18.2)
fálicos ya mencionados y los medulares (véase
más adelante). Dolor nociceptivo
Es consecuencia de la activación fisiológica de los
La sustancia gris periacueductal del mesencéfalo receptores del dolor. Su causa suele ser una lesión ti-
envía proyecciones al núcleo del rafe magno loca- sular, aunque puede producirse sin que esta llegue a
lizado en el mesencéfalo, que a su vez envía termi- ocurrir (p. ej., un golpe). Puede ser somático o visceral.
naciones nerviosas al asta posterior, modulando así
los impulsos dolorosos aferentes. Diversos impulsos
procedentes de la corteza cerebral, del hipocampo y la Dolor somático
amígdala envían, a su vez , proyecciones a la sustancia Puede ser superficial, producido en la piel o el tejido
gris periacueductal, contribuyendo así a la modula- subcutáneo, o profundo, producido en músculos , ten-
177
ción «central» del dolor. dones, ligamentos, huesos, articulaciones y arterias.
Semiología y fisiopatología general

Tabla Clasificación del dolor de acuerdo con su origen


Comentarios-características
Nociceptivo El sistema nervioso permanece indemne

Somático Por lesión de estructuras somáticas, como la piel o el sistema


musculoesquelético, entre otros

Visceral Por lesión de vísceras, tales como corazón o el aparato digestivo, entre otras

Neuropático Por lesión del sistema nervioso

Central La lesión se ubica en el sistema nervioso central

Periférico La lesión se ubica en el sistema nervioso periférico

La piel posee numerosos receptores para el dolor. por órgano enformo. lo que se conoce con el nombre ele
lo qun el dolor superficial sEi localiza on olla con mu- dolor referido. Consiste en la percepción cle➔l el olor en
cha precisión. Suele loner un caráctm vivo, bíon defi- los dermatomas inorvados por los mismos segmentos
nido. punzante. a voces urente. Las nstructuras on qun medulares que la víscera enferma. aun cuando ana-
so origina o! dolor profundo poseen menos receptores lórnicamente se encuentren alejados. La explicación
para el dolor. por lo que esto so pnrcibe ele forma me- más aceptada para el fonómeno la proporciona la de-
nos prncisa. El dolor somático profundo suele temer nominada teoría de lo connngencio. De acuerdo con
un cnnícter sordo. ella, las afonmcias procedentes de los clerrnalomas y
las vísceras originadas en las mismas metámeras <<cou-
Dolor visceral vergon» en las astas posteriores ele la médula sobrc-1
neuronas del haz espinotalámico (segundas neuronas)
Los receptores del dolor visceral son 1mís escasos que
comunes. Por lanto, tales aforencias acaban alcanzan-
los del dolor s01rnítico. por lo que se suele percibir de
do on la corteza los mismos lugares. En consecuencia,
forma imprecisa y mal localizada. Su caráclnr varía
cuando la corteza es estimulada por aforencins proce-
con los mecanismos que lo generan. Entre estos de-
dentes do las vísceras, las «confunde» con las proce-
ben citarsi:,: a) In r/jstensión de la pmed (dilatación de
dentes de la piel de las melé'ímoras corrnspondientes,
la veejiga por rntención urinaria) o la cápsula (hema-
sinndo ésta la información que se hace consciente.
toma renal); b) la obtrncción de la luz (intestino, vía
Ejemplos típicos de dolor referido son el de la is-
biliar. uréter): e) el espasmo (esófago); el) la isquemia
quemia miocárdica (hombro izquierdo y región inter-
(miocardio); y e) la inj1anwción (peritoneo).
na -cubital~ ckil antebrazo y mano del mismo Indo).
En todos los casos el dolor es r:on/Ínuo, con excep-
t➔ l cólico biliar (esuípula derecha) o el cólico ureteral
ción ele la obstrucción, en que puede ser cólico. Soco-
(testículo y la región superointerna del muslo). Un
noce con este nombre un tipo ele dolor caracterizado
caso ernpecialrnente interesante es el de la apendicitis.
por alternar períodos breves de gran intensidad con
En ella. el dolor inicinlnrnnte sólo es producido por la
otros ele dolor leve o ausento. lJn ejemplo ns la obs-
distEmsión del apéndice. percibiéndose alrededor del
trucción intestinal. La obstrnc:ción ele la vía biliar y la
ombligo (dolor referido); 1mís adel:mte, la inflamación
del uréter suelen dar lugar a un dolor continuo más
apendicular alcanza el peritoneo parietal, percibién-
qun cólico. aunque tradicíonalmnnte se le describa
dose el dolor on la fosa ilíaca dnrncha (dolor local).
con este nombre (no obstantH, pueden sobreirnponer-
se exacerbacionns). El dolor por distensión suele sur
menos intenso que otros dolores viscerales. Dolor neurogénico
Respecto a la inflamación de las serosas (pleura pa- La lesión ele las vías que conducen el dolor (norvios,
riBtal, peritoneo. pericardio diafragmático). convimrn raíces, etc.) puede producir una sensación dolorosa
rncordar que, a diferencia de lo que ocurro con el resto que, a clifonmcia del dolor nociceplivo, no se debe a
do las aforcmcias viscerales. que son conducidas por ustimulación de los rnceptores del dolor. Este tipo de
fibras clf;] sistema nervioso vegetativo, on r➔ ste caso lo dolor se denomina dolor neurogénico, distinguiéndo-
son por los nmvios espinales. Ello hace que el dolor se dm1tro de él un dolor neuropcílico. un dolor por
producido cm las misnrns so localice mejor que el resto desoferenlización y un dolor monten ido por el sisle-
de los dolores viscerales. mo simpático. El dolor neurogénico, según el I ugar
Un fenómeno característico (aunque no exclusivo) del sistema nervioso en que asiente su causa, se deno-
178
del dolor visceral es su percepción a distancia del mina cenlml o periférico.
CAPITULO 18 Síndrome doloroso

El dolor neuropático tiene lugar en caso de com- ASPECTOS SEMIOLÓGICOS DEL DOLOR
presión o irritación nerviosa, o debido a la forma-
ción de un neuroma tras una lesión nerviosa. Se
debe a descargas anormales en la fibra nerviosa CRONOLOGÍA
(que desarrolla zonas de desmielinización) y a
pérdida de la inhibición segmentaría de las fibras Dentro de los aspectos temporales del dolor deben
considerarse el comienzo, la duración y la evolu-
gruesas. Ello da lugar a aumento de la sensibilidad
ción.
(hiperestesia}, disminución del umbral doloroso
(hiperalgesia) y dolor en respuesta a estímulos Comienzo. De acuerdo con su forma de comien-
no dolorosos (alodinia) (véase Tabla 18-3). zo, el dolor puede ser insidioso, brusco o súbito.
El dolor por desaferentización puede ocurrir El dolor insidioso comienza como un malestar
en cualquier punto del recorrido de las vías del que va aumentando de intensidad hasta alcanzar
dolor, y se debe a una alteración en el procesa- su máximo en minutos u horas (cólico biliar o
miento central de la información dolorosa, lo que pancreatitis). El dolor brusco alcanza su mayor
interfiere los mecanismos de control del dolor. intensidad en segundos o pocos minutos (infarto
Suele cursar con pérdida sensitiva (hipoestesia o de miocardio). El dolor súbito o instantáneo se
anestesia). Un ejemplo muy típico es el dolor del establece de forma fulminante, y se observa en
miembro fantasma, en que el sujeto percibe como la ruptura de una víscera hueca (perforación de
dolorosa una extremidad que ha sido amputada. estómago y consecuente dolor abdominal), de un
También merece mencionarse el dolor talámico, aneurisma craneal (cefalea) o de un aneurisma
secundario a procesos vasculares cerebrales, que disecante de aorta (dolor torácico y/o abdomi-
cursa como una termoanalgesia dolorosa y sen- nal). Los dolores que comienzan y terminan
sación que quemazón en extremidades. Aparece bruscamente se denominan paroxísticos.
como consecuencia de lesiones de la corteza pa- Duración. Ya se ha mencionado la clasificación
rietal o de las fibras sensitivas talamocorticales. del dolor en agudo y crónico, y las características
El dolor man tenido por el sistema simpático de ambos. Además, la duración precisa del dolor
se caracteriza por la coexistencia de dolor y puede tener valor diagnóstico. Así, el dolor de la
alteración vegetativa local (edema, trastornos angina de pecho dura típicamente menos de 10
vasomotores y del sudor) en una extremidad, minutos , y el del infarto de miocardio más.
con cambios distróficos acompañantes (pérdida Evolución. En cuanto a la evolución, el dolor
de pelo, crecimiento anormal de las uñas, osteo- puede ser continuo o intermitente. El tiempo de
porosis focal). Recibe su nombre en razón de que intermitencia es variable. En el caso del cólico
el dolor se alivia con el bloqueo simpático. Es es de segundos o minutos. El dolor ulceroso pre-
propio del denominado síndrome del complejo senta, por una parte, un ritmo horario (tiende a
doloroso regional (SCDR}, que incluye lo que aparecer en ayunas, aliviarse con la ingesta de
tradicionalmente se ha denominado distrofia alimentos y reaparecer dos o tres horas más tar-
simpática refleja (SCDR tipo 1) y la causalgia de) y por otra un ritmo estacional (suele darse en
(SCDR tipo 2) (véase más adelante). primavera y otoño).

Tabla Terminología asociada al dolor


Término Definición-comentarios
Alodinia Dolor inducido por un estímulo no doloroso
Hiperalgesia Percepción excesiva de un estímulo doloroso tras un estímulo repetitivo
Hiperestesia Sensibilidad excesiva a un estímulo de escasa intensidad
Hiperpatía Término general que engloba a la alodinia, la hiperestesia y la hiperalgesia
Hipoalgesia-analgesia Percepción disminuida-ausente del dolor, debida habitualmente a una lesión del
sistema nervioso
Dolor referido Dolor visceral percibido a distancia.
Dolor irradiado Dolor -neuropático- que se extiende a lo largo del trayecto de la estructura nerviosa
lesionada (raíz, nervio, plexo, etc.)
179
10 1 Semiología y fi siopatología genera l

CUALIDAD en la parte baja de la espalda que se irradia a lo


largo de la pierna hasta el pie (Fig. 18-3).
Ya se ha visto que, en general, el dolor somático su-
perficial es más vivo y está mejor localizado que el
visceral, que es más bien sordo e impreciso. El dolor Migración del dolor
somático profundo probablemente se sitúa en un lu- Indica un cambio en la localización del mismo. Un
gar intermedio. buen ejemplo es el de la apendicitis, ya comentado,
Por otra parte, el paciente tiende a describir el dolor en la que el dolor comienza en el centro del abdomen
con expresiones que, aunque influidas por su perso- para trasladarse posteriormente a la región correspon-
nalidad y su cultura, pueden ser de ayuda diagnóstica. diente al apéndice (fosa ilíaca derecha).
Señalaremos las más frecuentes: a) dolor constrictivo,
opresivo o como de sensación de peso; b) dolor pun- INTENSIDAD
zante; c) dolor urente o quemante; d) dolor lancinante
(muy vivo e intenso, «similar al que produciría una La intensidad del dolor no se relaciona con la gra-
herida de lanza»); e) terebrante («similar al que resul- vedad de la lesión; es muy variable de unos proce-
taría de taladrar»); f) dolor pulsátil (aumenta con los sos a otros e incluso dentro de un mismo proceso. El
latidos); g) dolor en puñalada; h) dolor con sensación menor estímulo percibido como doloroso se conoce
de desagarro; i) dolor sordo, vivido como sensación como um bral del dolo1~ del que se considera que ape-
de malestar o pesadez. nas varía de unas personas a otras. En el umbral del
dolor influye la dominancia perceptiva, que explica
por qué el dolor percibido en una zona del cuerpo
LOCALIZACIÓN puede disminuir o abolir el producido en otra. Por
En relación con ella se distinguen diversos aspectos. tolerancia al dolor se entiende el tiempo que un pa-
ciente resiste el dolor antes de intentar aliviarlo. Es
Extensión del dolor muy variable de unas personas a otras .
La intensidad del dolor no es cuantificable, aunque
Aunque en ocasiones el dolor puede ser generalizado,
algunos datos permiten al médico hacerse una idea
y afectar a múltiples zonas del organismo, en gene-
de la misma: el llanto , la gesticulación, la posibili-
ral afecta solo a una región determinada, dentro de dad de continuar h aciendo vida normal, el h echo de
la cual su extensión puede ser mayor o menor (por
poder conciliar el sueño, la presencia de reacción
ejemplo, una cefalea puede afectar a toda la cabeza o
vegetativa (sudoración ... ). Los dolores muy intensos
sólo a parte de ella). Dolores de similar localización
pueden incluso producir pérdida transitoria del nivel
pueden originarse en estructuras vecinas diferentes
de consciencia (síncope vasovagal).
(por ejemplo, un dolor precordial puede originarse en
En la actualidad se está generalizando la idea de
la pared torácica, el miocardio , el pericardio, la aorta,
medir la intensidad del dolor recurriendo a las de-
el esófago o el mediastino). Debe recordarse que el
nominadas escalas analógicas visuales. En ellas el
dolor puede originarse lejos de donde se detecta, de
sujeto cataloga su dolor del Oal 10 (punto O, sin dolor;
forma que, por ejemplo, un dolor abdominal puede
punto 10, máximo dolor imaginable) . Con frecuencia,
originarse en una víscera torácica o viceversa. Los do-
sin embargo, el clínico simplemente clasifica el dolor
lores generalizados suelen tener su origen en el apara-
en «ausente », «leve », «moderado », «intenso » y «muy
to locomotor (mialgias, artralgias, dolores óseos).
intenso » (Fig. 18-4).

Irradiación del dolor


FACTORES MODIFICADORES DEL DOLOR
Por irradiación del dolor se entiende su extensión
desde un lugar a otro. Puede deberse a distintos me- En el estudio de un proceso doloroso es importante
canismos: tener en cuenta las maniobras o factores que desen-
cadenan o agravan el dolor, o que , por el contrario, lo
Dolor referido. Aunque ya se comentó, conviene alivian. Muchos guardan relación con la actividad o
destacar su importancia clínica, pues en ocasio- el reposo del órgano enfermo.
nes hay procesos torácicos que se manifiestan
con dolor abdominal, por ejemplo, una neumo-
nía basal. Ya hemos comentado también el caso Factores desencadenantes y agravantes
del infarto de miocardio. Esfuerzo físico. Produce dolor por aumentar las
Dolor por afectación de un tronco neivioso (dolor demandas de oxígeno muscular (caso del miocar-
irradiado). La afectación de un tronco nervioso dio en la angina de pecho)
(por ejemplo, por compresión) puede dar lugar a Movimiento. Produce dolor en las estructuras del
un dolor que se irradia a lo largo del trayecto co- aparato locomotor que intervienen en él (artritis) .
rrespondiente, alcanzando la zona inervada por Ingesta de alimentos. Puede producir dolor ab-
el mismo. Así, en la ciática, una compresión de dominal en la isquemia intestinal, al aumentar
180
las raíces 15 o Sl da lugar a un dolor originado las exigencias metabólicas durante la digestión.
CAPÍTULO 18 Síndrome doloroso

( Cara posterior )

1--- - - - - C2
+--- - - - - C3

C7

L5

Figura Irradiac ión del dolor siguiendo la distribución de las raíces nerviosas.

La ingesta de comidas ricas en grasas puede Defecación y eliminación de gases por recto .
producir dolor en pacientes con litiasis biliar al Alivia el dolor abdominal en la obstrucción in-
provocar la contracción de la vesícula. testinal.
Tos. La tos, y en general cualquier maniobra de Actitudes antiálgicas. Diversas posturas pueden
Valsalva (defecación), pueden producir dolor en aliviar determinados tipos de dolor, como la
los enfermos con discopatía lumbar o con me- «posición de oración mahometana» (inclinado
ningitis, al aumentar la presión del líquido cefa- hacia delante) en la pericarditis, o la flexión por
lorraquídeo. La tos, y en general los movimientos la cintura en la pancreatitis.
respiratorios profundos, producen dolor en los Uso de analgésicos.
enfermos con inflamación pleural.

Factores que alivian el dolor FACTORES ACOMPAÑANTES


Reposo. Aunque inespecífico, alivia el dolor por Algunos factores acompañantes son inespecíficos, y
isquemia, así como el debido al movimiento. únicamente informan sobre la intensidad del dolor,
Ingesta de alimentos. Alivia el dolor ulceroso. pero no sobre su causa; es el caso, por ejemplo, de la
S CCIÓN II Semiología y fisiopatología general

de dedo »). Presenta ritmo estacional. El dolor de


Máximo
dolor la perforación de estómago (complicación de la
10 úlcera) es intensísimo, de comienzo fulminante
9 («en puñalada»), localizándose inicialmente en
8 epigastrio, y extendiéndose en minutos al resto
7 del abdomen.
6

5
® Cólico biliar. Producido por la impactación de
un cálculo en la vía biliar, se localiza en epigas-
trio o hipocondrio derecho, irradiándose hacia la
4

3
® escápula del mismo lado.
Cólico renal. Producido por un cálculo ureteral,
2

1
© en su forma típica comienza en fosa lumbar,
irradiándose hacia delante en dirección a los
º®
Sin dolor ~ genitales. Puede llegar a la parte superointerna
del muslo.
Figura - Escala analógica visual.
CEFALEA
reacción vegetativa (sudoración fría, palidez, náuseas ,
incluso vómitos) propia de los dolores muy intensos. Existen numerosos tipos y causas de dolor de cabeza.
En otras ocasiones, tienen utilidad diagnóstica: Una de las formas más frecuentes es la migraña. Se
trata de un dolor pulsátil y hemicraneal, al que se aso-
Manifestaciones propias de un órgano o sistema. cian a náuseas y fotofobia. Dura 1-2 días y se repite
La presencia de tos y expectoración en un pa- con una cierta periodicidad, particularmente en las
ciente con dolor torácico debe hacer pensar en mujeres durante la fase menstrual. Más frecuente es
un proceso respiratorio. La presencia de diarrea la cefalea tensional, en la que hay un dolor opresivo,
en un paciente con dolor abdominal, en un ori- holocraneal («como si un casco me apretara la cabe-
gen digestivo. za»), de intensidad moderada y de aparición frecuen-
Actitud del enfermo. El paciente con dolor ab- te con predominio por las tardes. El excesivo empleo
dominal por peritonitis tiende a permanecer de analgésicos en los pacientes con cefalea (no así en
inmóvil, mientras que en un cólico renouretral otros síndromes dolorosos) conduce a una cefalea
tiende a moverse y estar agitado. crónica, mucho más difícil de tratar. El posible papel
Otros fenómenos acompañantes. P. ej. , un dolor de los analgésicos en estos casos (causa o consecuen-
abdominal con contractura de la pared del abdo- cia) no siempre queda claro.
men debe hacer pensar en una peritonitis.

SÍNDROMES DOLOROSOS MÁS FRECUENTES DOLOR LUMBAR

DOLOR TORÁCICO Sus causas son múltiples. Cuando no hay afectación


radicular, el dolor queda limitado a la región lumbar
Dolor pleurítico. Producido por inflamación (lumbalgia}, o todo lo más se irradia por referencia a
pleural, se percibe en un costado, localizándose los muslos. Si la hay, el dolor afecta a toda la pierna
de forma precisa, es agudo , y aumenta con la y el cuadro se denomina ciática. Si la raíz afectada
respiración y la tos. es L-5, la irradiación es por la parte lateral de muslo
Dolor coronario. El dolor causado por isquemia y pierna hasta el empeine del pie; si es la S-1 , por la
miocárdica es típicamente retroestemal, irradián- parte posterior de muslo y pierna hasta la planta del
dose al hombro izquierdo y a la región interna pie. Cuando la causa es una hernia de disco, el dolor
del brazo y la mano del mismo lado. El paciente se exacerba con la mruüobra de Valsalva.
con frecuencia lo describe poniendo el puño o
la mano sobre el pecho, revelando su carácter
opresivo. En la angina de pecho dura menos de NEURALGIA
10 minutos, y en el infarto de miocardio más.
En aquélla puede estar desencadenado por un Consiste en un dolor de carácter lancinante, muy in-
esfuerzo, aliviándose con el reposo. tenso y breve, similar a una descarga eléctrica, que
se localiza en el área de inervación de un nervio o
raíz nerviosa. Es importante recordar que responde
DOLOR ABDOMINAL pobremente a los analgésicos, estando indicado el tra-
Dolor ulceroso. Es percibido en epigastrio, loca- tamiento con fármacos antiepilépticos del tipo de la
182 lizándose con mucha precisión («dolor a punta carbamacepina.
·119
Síndrome edematoso
Felipe Miguel de la Villa

DEFINICIÓN
Se entiende por edema el aumento evidenciable del
volumen de líquido en el espacio intersticial. Es signo
de diversas enfermedades de origen, consecuencias
clínicas y tratamientos muy diversos. Una correcta
interpretación de la historia clínica, la exploración
física y las pruebas complementarias permite, en
la mayoría de los casos, el diagnóstico de la en-
fermedad que causa el síndrome edematoso.

CLASIFICACIÓN
La acumulación difusa de líquido en el
organismo da lugar a edema generali-
zado; en caso contrario, el edema es
local. En los edemas generalizados la
retención de líquido debe ser mayor
de 2,5-3 litros para ser evidente en
la exploración del enfermo. Cuan-
do el edema general es intenso se
denomina anasarca. Generalmente
los pacientes suelen notar la exis-
tencia del edema por hinchazón
en la cara o por aparición de mar-
cas en los pies, manos o cintura
debido a la presión de calcetines,
zapatos, anillos o vestidos, junto
con una ganancia de peso corporal
no explicada. En algunos casos, la
presión con el dedo sobre la piel
edematosa deja una marca persis-
tente llamada fóvea, (Fig. 19-1).
El edema generalizado es conse-
cuencia de alteraciones en los mecanis-
mos centrales que regulan el intercambio
de líquidos entre la circulación capilar y
el espacio intersticial. El edema localizado
obliga a investigar mecanismos locales que fa-
ciliten la acumulación de líquido; entre ellos la
obstrucción venosa, que es la causa más frecuente.
La localización del edema en la cavidad peritoneal se
denomina ascitis y si es en la cavidad pleural hidro-
tórax.
S ION II Semiología y fisiopatología general

Mixedema Fóvea

Figura Diferentes formas de edema.

El edema no debe confundirse con el mixedema, de la permeabilidad capilar; d) obstrucción linfática,


que se debe principalmente a un depósito de muco- y e) mecanismos mixtos (ver Fig. 19-2).
polisacáridos por hipofunción de la glándula tiroidea El riñón desempeña un papel fundamental en la
(Fig. 19-1). El mixedema se localiza predominante- producción del edema; la salida de líquido desde el
mente en la región pretibial, no deja fóvea y se acom- interior de los capilares al espacio intersticial por
paña de una piel más áspera y fría. cualquiera de los mecanismos antes citados, reduce el
volumen plasmático y, en consecuencia, el volumen
arterial de perfusión eficaz. Como compensación se
FISIOPATOLOGÍA produce una respuesta vasoconstrictora renal y una
En el interior de las células se encuentran las dos activación del eje renina-angiotensina-aldosterona
terceras partes de toda el agua corporal. El tercio res- cuya consecuencia es la retención en el túbulo proxi-
tante es el agua extracelular que, a su vez, se reparte mal de agua y sodio, destinadas a aumentar de forma
entre el compartimento intersticial (75 % ) y el intra- compensadora el volumen intravascular y así mante-
vascular (25 % restante). ner la perfusión tisular. La administración de diuréti-
El intercambio de líquidos en el espacio extrace- cos mejora el edema, pero también puede disminuir
lular se realiza a través de la membrana de los capi- significativamente la perfusión de los tejidos.
lares sanguíneos según las fuerzas de Starling, inte- La persistencia de los mecanismos productores de
gradas por los siguientes factores: a) la diferencia de edema tiene por consecuencia que solo una parte del
las presiones hidrostáticas intracapilar e intersticial líquido retenido en el riñón permanezca en el compar-
que, al ser fisiológicamente favorable al espacio in- timento intravascular para mejorar la perfusión de los
travascular, tiende a impulsar el líquido fuera de los tejidos; el resto sale al espacio intersticial, rebasando
capilares; b) la diferencia de las presiones oncóticas la capacidad de drenaje de los linfáticos y formándose
del plasma y del intersticio, que por ser mayor en el el edema. Como respuesta protectora ante la continua-
espacio vascular tiende a retener los líquidos dentro da salida de líquido desde el interior de los capilares,
de los capilares sanguíneos; esta presión está ligada, la presión hidrostática intersticial aumenta y se opone
sobre todo, a la concentración de proteínas y funda- a esta salida al reducirse el gradiente de las presiones
mentalmente de albúmina. Además de estos factores, hidrostática intracapilar e intersticial, alcanzándose
el intercambio de líquidos está regulado por el grado un equilibrio compensador que frena la formación
de permeabilidad de la pared capilar. En condicio- del edema. En algunas enfermedades renales, como
nes normales, el juego de estas fuerzas se salda con las glomerulonefritis, la retención hidrosalina renal
la salida de muy pequeñas cantidades de líquido al no se produce como respuesta compensadora al
espacio intersticial en el extremo arteriolar, que es descenso previo del volumen plasmático, sino como
drenado por el sistema linfático hacia la circulación consecuencia de la propia enfermedad glomerular
general, y el resto que retorna al capilar en su extremo (por disminución de la presión oncótica por la hipoal-
venoso, lo que evita la aparición de edema. buminemia); la retención de líquidos provoca no sólo
Según los factores antes citados, la formación de el aumento del volumen intersticial, sino también el
edema puede deberse a los siguientes mecanismos: del compartimento vascular, por lo que en este caso
,-gr- a) aumento de la presión hidrostática capilar; b) des- la eliminación del exceso de líquido intravascular no
censo de la presión oncótica del plasma; c) aumento tendría efectos hemodinámicos negativos.
CAPITULO 19 Síndrome edematoso

A B (
SANO PRESIÓN HIDROSTÁTICA Ul,MINUCIÓt-. DE L,\
AUMENTADA PR[SIÓN ON( ó ne,\
Ca
~ /~-:::::::-
-~
~
~
Ve _/>-~ _/
PrH PrH
<:._ ::> <:~
,e---

f
\\C/'/ Pro
\\é)d / PrH\ ' - , !¡ ,H
PrO ++
\ /
1/ ✓
+

~ +
~ ✓
LI FÁTI CO
1 1

1 1

D E
PERMEABILIDAD OBSTRUCCIÓN
CAPILAR AUMENTADA LINFÁTICA

/ [_ -- \_

+
Ca = capil ar
Ar = lado arleriolar
Ve = lado venular
PrH = presió n hidrosláli ca
PrO = presión oncóti ca l 1 ) 1

Figura La circul ación en los lechos capi lares. Situaciones que co nducen a la aparició n de edema.

La contribución de los distintos factores de las AUMENTO DE LA PRESIÓN HIDROSTÁTICA


fuerzas de Starling en la formación de edema es CAPILAR
variable en las diferentes zonas del organismo (Fig.
19-2). Estas diferencias explican la mayor o menor La pres10n hidrostática capilar depende del flujo
facilidad para que se desarrolle edema en ciertas lo- sanguíneo resultante de la contracción cardiaca, de
calizaciones y su relación con la etiología de la enfer- la resistencia postcapilar o presión venosa y de la re-
medad responsable. En la circulación pulmonar, los sistencia y permeabilidad del propio capilar al flujo
capilares muestran una presión hidrostática relativa- sanguíneo (Fig. 19-2) . La presión hidrostática es ma-
mente menor. En cuanto a su drenaje linfático, es más yor en el extremo arteriolar del capilar, lo que favore-
eficaz en el caso del edema pulmonar de evolución ce la salida de líquido hacia el intersticio. La menor
crónica que en el agudo. En la circulación hepática, presión en su extremo venoso permite que el líquido
los sinusoides son más permeables para las proteínas, intersticial entre en el capilar atraído por su presión
por lo que existe poco gradiente entre las presiones oncótica. La autorregulación en el esfínter precapilar
oncótica capilar e intersticial. Con ello se reducen es un mecanismo de compensación frente a los cam-
las fuerzas que se oponen a un aumento de la presión bios en la presión arterial, de forma que aumentos de
hidrostática capilar que, por otra parte, también es esta originan una constricción del esfínter que atenúa
menor que en otras zonas, al suceder en un sistema el impacto de la subida de la presión en el capilar y
circulatorio como el portal, que es de baja presión. previene la aparición de edema. En contraste con la
El aumento de la presión hidrostática sinusoidal va a anterior situación, la elevación de la presión venosa
superar la capacidad de drenaje linfático del hígado se transmite con mayor facilidad al capilar al no dis-
y a facilitar, junto a otros factores , el desarrollo de poner este de un mecanismo tan eficaz de autorregu-
ascitis y edema periférico en el paciente con hepato- lación en su porción distal; la consecuencia es que ~
patía grave. cuando aumenta la presión venosa, bien por obstruc-
~ e 10 1 Semiología y fisiopatología general

ción de las venas o bien por aumento del volumen OBSTRUCCIÓN LINFÁTICA
sanguíneo venoso, aparece rápidamente el edema.
Esto ocurre en enfermedades tan frecuentes como la El drenaje linfático del escaso líquido que se forma
insuficiencia cardiaca, cirrosis hepática y enfermeda- fisiológicamente en el intersticio como consecuen-
des renales. cia de las fuerzas de Starling, puede ser anulado por
diversas enfermedades que dificultan y obstruyen la
circulación linfática: tumores , infecciones bacteria-
DISMINUCIÓN DE LA PRESIÓN ONCÓTICA nas o por parásitos (cirugía linfática en el cáncer de
PLASMÁTICA mama), compresiones linfáticas y otras.
La presión oncótica del plasma se debe fundan10n-
talmente a la concentración de albúmina u otras pro- ETIOPATOGENIA
teínas y solutos que, por su tamaño y carga eléctrica,
permanecen en el interior de los vasos reteniendo INSUFICIENCIA CARDIACA CONGESTIVA
agua. Esta presión es netamente superior a la presión
oncótica intersticial, que está ligada sobre todo a la La formación de edema en la insuficiencia cardiaca
cantidad dB proteínas filtradas desde los capilares y, está en relación con la disminución de la eyección
en menor medida, a los proteoglicanos intersticiales. sistólica ventricular, con la alteración en la relajación
Esta diferencia entre ambas presiones, a favor del es- ventricular o con ambos mecanismos. Su consecuen-
pacio intravascular, se opone a la presión hidrostá- cia es una disminución del gasto cardiaco y un au-
tica capilar, con lo que se regula el intercambio de mento de la presión venosa central, con elevación de
líquidos según las fuerzas de Starling (Fig. 19-2). El la presión hidrostática capilar y alteración del drena-
descenso de la concentración de albúmina plasmática je linfático que provocan la salida del agua hacia el
disminuye la presión oncótica capilar y es la princi- intersticio. La reducción del gasto cardiaco conlleva
pal causa de edema generalizado por este mecanismo. un descenso de la presión de perfusión tisular, que
Enfermedades como la cirrosis hepática, el síndro- va a poner en marcha mecanismos compensadores
mes nefrótico, la malabsorción intestinal y los estados con el fin de mejorar la contractilidad miocárdica y
de malnutrición cursan con hipoalbuminemia. Aun- el gasto cardiaco, como son la activación del siste-
que todos estos procesos disminuyen la concentración ma simpático y el aumento de la secreción de renina.
de albúmina plasmática, su capacidad para producir Se produce una vasoconstricción general y renal con
edema no es igual, ya que también intervienen otros disminución del filtrado glomerular y del flujo renal;
mecanismos reguladores relacionados con cada enfer- la activación del sistema renina-angiotensina-aldos-
medad y con su diferente repercusión sobre la presión terona va a llevar a una mayor retención hidrosalina
oncótica intersticial. Los capilares pulmonares tienen que , en una fase inicial, no se acompaña de edema
mayor permeabilidad para la albúmina, lo que se tra- salvo que se asocien otros factores precipitantes
duce en una mayor presión oncótica intersticial. Si como ingesta excesiva de sal o anemia. Con efectos
la concentración de albúmina plasmática desciende compensadores también se van a liberar una serie de
significativamente también lo hace la presión oncó- péptidos (endotelial, auricular y cerebral) con acción
tica intersticial, y ello disminuye el riesgo de edema natriurética y vasodilatadora. El mejor conocimiento
pulmonar en los casos debidos exclusivamente a hi- de estos efectos compensadores a nivel del riñón y de
poalbuminemia. El edema se presenta si además se la circulación general ha llevado a la utilización de
produce un aumento de la presión hidrostática capilar fármacos como los inhibidores del enzima conversor
pulmonar por la coexistencia de insuficiencia cardia- de la angiotensina (IECA), antagonistas del receptor
ca o por un aporte exógeno excesivo de líquidos. de la angiotensina II (ARA) y betabloqueantes en el
tratamiento de la insuficiencia cardiaca, con claros
efectos beneficiosos.
AUMENTO DE LA PERMEABILIDAD CAPILAR La localización del edema se relaciona con la etio-
La membrana capilar puede lesionarse por quemadu- logía y lugar de inicio de la insuficiencia cardiaca.
ras, traumatismos mecánicos, infecciones, reacciones En los enfermos con alteración dominante del ventrí-
inmunes, etc., que favorecen de forma directa la salida culo izquierdo por isquemia miocárdica, enfermedad
de líquido al intersticio e indirectamente por el escape valvular, hipertensión arterial u otros trastornos, el
de proteínas. La lesión endotelial tiene un papel de- edema se localiza inicialmente en los pulmones.
terminante en la producción de edema, cuya localiza- Clínicamente se manifiesta por disnea, al princi-
ción y extensión vendrá determinada por la naturale- pio de esfuerzo, después en reposo, y en ocasiones
za de la enfermedad causal. En el síndrome de distrés tos de predominio nocturno. La progresión ulterior
respiratorio del adulto, algunas citocinas son las res- de la hipertensión venocapilar pulmonar altera el
ponsables del aumento de la permeabilidad capilar. vaciamiento ventricular derecho con aumento de la
Mediadores implicados en otros procesos asociados a presión venosa central y de la aurícula derecha que ,
edema son: radicales libres, leucotrienos, histamina, trasmitiéndose de forma retrógrada, puede originar
interleucinas, factor de necrosis tumoral, etc. edema un generalizado. La liberación compensadora
CAPITULO 19 Síndrome edematoso

de péptidos natriuréticos provocada por la distensión OBSTRUCCIÓN VENOSA


venosa y auricular no es suficiente para evitar la apa-
rición de edema en estos pacientes. Cuando existe una disminución o anulación del dre-
Cuando la insuficiencia cardiaca se debe a una naje venoso a nivel regional, la presión hidrostática
alteración dominante de las cavidades derechas, se venosa aumenta por debajo del nivel del obstáculo
produce un aumento de la presión venosa central. favoreciendo la salida de líquido del vaso hacia el es-
En los capilares periféricos el aumento de la presión pacio intersticial. La disminución de la volemia por
hidrostática supera la presión oncótica plasmática la salida de líquido pone en marcha los mecanismos
y la capacidad de drenaje linfático, con formación compensadores renales antes citados. En este tipo de
de edemas en los miembros inferiores, que pueden edema localizado, el aumento de la presión hidros-
acompañarse de ascitis y/o hidrotórax. En estos ca- tática intersticial por el edema se opone a la salida
sos, además de edema puede existir disnea si, como de más líquido desde los vasos, con lo que se llega
es frecuente, hay enfermedad pulmonar o disfunción a un estado de equilibrio entre las dos presiones hi-
asociada del ventrículo izquierdo. drostáticas, limitándose la progresión del edema y la
respuesta compensadora renal. Estos edemas se loca-
lizan habitualmente en una de las extremidades infe-
ENFERMEDAD RENAL E HIPOALBUMINEMIA riores o superiores; en ellos la presión venosa central
es normal y la respuesta al tratamiento diurético es
En el síndrome nefrótico, por ejemplo por una glo- escasa. En estos pacientes es necesario investigar la
merulonefritis, existe una pérdida masiva de proteí- posible existencia de una trombosis venosa profunda.
nas por la orina(> 3,5 g/24 h), a expensas fundamen-
talmente de albúmina. El descenso de albúmina y la
progresiva reducción de la presión oncótica facilita OTRAS CAUSAS DE EDEMA
la salida de agua del vaso al intersticio. La conse-
cuencia es una situación de hipovolemia que pone en Diversos trastornos hormonales, como el exceso de
marcha la retención hidrosalina por los mecanismos glucocorticoides, o la alteración de los niveles de es-
antes citados; parte del líquido retenido sale al espa- trógenos y progesterona en el embarazo, pueden ser
cio intersticial por la hipoalbuminemia que, por otra responsables de la aparición de edema. También pue-
parte, estimula al hígado para aumentar su síntesis de de aparecer por la toma de diversos fármacos como
forma compensadora, aunque no se alcancen las con- algunos antagonistas de los canales del calcio (dihi-
centraciones séricas precisas para evitar la formación dropiridinas), betabloqueantes, antiinflamatorios no
del edema. En las glomerulonefritis es característica esteroideos, antidiabéticos (glitazonas) y otros. Cuan-
la presencia de alteraciones del sedimento urinario do no se encuentra la causa precisa del edema, este
(hematuria, cilindros hemáticos, proteinuria, etc. ) y se denomina idiopático; se caracteriza por aparecer
de la función renal, que van a permitir diferenciar el casi exclusivamente en mujeres jóvenes, más frecuen-
edema de esta causa del originado por insuficiencia temente con sobrepeso/obesidad; no está relacionado
cardiaca u otras etiologías. con el ciclo menstrual, es de carácter episódico, se
acentúa con el ortostatismo y se localiza preferente-
mente en cara y extremidades. Parece ser debido a un
CIRROSIS HEPÁTICA aumento de la permeabilidad capilar.
En esta enfermedad coexisten varios mecanismos
capaces de producir edema: hipoalbuminemia por SEMIOLOGÍA. ORIENTACIÓN DIAGNÓSTICA
disminución de síntesis hepática, hipertensión por-
tal, vasodilatación arterial esplácnica, obstrucción La realización e interpretación adecuada de la his-
del flujo linfático y alteración en los sistemas de toria clínica, exploración física y pruebas básicas
control del agua e iones (hiperaldosteronismo se- complementarias permiten, en la mayoría de los
cundario. Todos estos factores entrañan un descenso casos, conocer la enfermedad responsable del sín-
de la presión oncótica del plasma, un aumento de la drome edematoso. En su valoración, es básico el
presión hidrostática a nivel de sinusoides hepáticos y hallazgo de datos clínicos que sugieran o descarten
una mayor reabsorción de agua y sodio a nivel renal; la existencia de una enfermedad cardiaca, hepática,
como consecuencia de ello, los enfermos con cirro- renal, intestinal o malnutrición como causas más fre-
sis hepática tienden a desarrollar edemas y ascitis. Si cuentes de edemas generalizados. La detección de
esta alcanza un gran volumen, desplaza los diafrag- un edema localizado obliga a estudiar otros factores
mas hacia arriba y aumenta la presión intratorácica, etiopatogénicos regionales o locales, especialmente
lo que a su vez dificulta el retorno venoso hacia el la obstrucción venosa frecuentemente por trombosis
corazón y facilita la progresión del edema; en estos venosa profunda de una extremidad. Es útil saber en
casos la paracentesis evacuadora es útil para dismi- qué circunstancias ha aparecido el edema: horario,
nuir la presión intraabdominal y facilitar el retorno variación postural, fase del ciclo menstrual, ingesta 18]
venoso. de fármacos, etc.
c;ECCIÓN II Semiología y fisi opatología genera l

HISTORIA CLÍNICA EN LA VALORACIÓN ascitis es masiva produce una elevación de ambos


DE LOS EDEMAS hemidiafragmas con aparición de disnea, que deberá
diferenciarse de la de origen cardiaco; en la disnea de
Las principales enfermedades causantes de edema origen hepático la presión venosa central es normal y
generalizado se recogen en la Tabla 19-1. El paciente no hay edema pulmonar que la justifique.
con edemas de origen cardiaco suele tener anteceden- A menu do los edemas de origen renal se localizan
tes de cardiopatía isquémica, hipertensión arterial, inicialmente en la cara, que aparece con un caracterís-
valvulopatía, miocardiopatía o enfermedad pulmonar tico aspecto de hinchazón; después se generalizan. En
crónica. Habitualmente, el edema coexiste con otros el síndrome nefrótico el edema aparece cuando la con-
síntomas característicos de la insuficiencia cardiaca, centración de albúmina sérica es muy baja(< 2,5 g/dl);
como disnea, ortopnea o tos que suele aumentar con el edema es de tipo generalizado y en algunos casos
el decúbito. Si la insuficiencia cardiaca se debe a dis- también puede llegar a la circulación pulmonar. En
función de las cavidades izquierdas, los síntomas pro- enfermedades renales, como la glomerulonefritis o la
ducidos por el edema pulmonar anteceden a la apari- insuficiencia renal, existe una retención hidrosalina
ción del edema en las extremidades inferiores; en la primaria que no es de tipo reactivo o compensador
enfermedad biventricular el edema puede ser más o de la hipovolemia como ocurre en el síndrome ne-
menos simultáneo en ambas localizaciones. En la in- frótico. En estos pacientes suele haber anteceden tes
suficiencia cardiaca aguda, el enfermo da impresión de infección, diabetes mellitus, hipertensión arterial ,
de gravedad y los síntomas cardiacos son bastante enfermedad inflamatoria sistémica u otras.
evidentes, mientras que en la forma crónica la sensa- Los edemas por hipoalbuminemia debida a enfer-
ción de astenia, afectación general o adelgazamiento medad intestinal o malnutrición son generalizados y
pueden ser los dominantes. Las enfermedades cró- se acompañan de otros síntomas, tales como diarrea
nicas pulmonares (fibrosis, broncopatía obstructiva) y los derivados de los estados carenciales asociados.
producen una alteración dominante sobre las cavida- En el edema generalizado, si no hay síntomas o sig-
des derechas, con edema inicial en las extremidades nos que sugieran la existencia de enfermedad cardiaca,
inferiores. La glomerulonefritis aguda por retención hepática, renal, intestinal o estado de malnutrición, es
hidrosalina y el síndrome de distrés respiratorio agu- necesario preguntar al enfermo si toma fármacos capa-
do por aumento de la permeabilidad capilar también ces de producirlo; en el caso de las mujeres conviene
pueden producir edema pulmonar. precisar si la aparición del edema se relaciona con el
Los pacientes con cirrosis hepática suelen tener ciclo menstrual o si tiene las características del llamado
antecedentes de alcoholismo o hepatopatía crónica edema idiopático. Durante el embarazo puede haber al-
por los virus C o B. La ascitis y los edemas pueden ser gún grado de edema que no tiene trascendencia clínica
la primera manifestación de la enfermedad y preceder y que se puede distinguir fácilmente del edema debido
a otras. La ascitis es producida por múltiples factores, a enfermedad renal o de la preeclampsia mediante la
siendo los principales las alteraciones funcionales historia clínica y las pruebas complementarias.
renales (vaso contricción, retención hidro salina), la En cuanto al edema localizado, la obstrucción
hipertensión portal, la obstrucción del drenaje lin- venosa es una de sus principales causas a través del
fático del hígado y la hipoalbuminemia. Cuando la aumento de la presión hidrostática capilar de forma
retrógrada. Si el edema se localiza en una extremidad
inferior de forma crónica suele haber antecedentes de
insuficiencia venosa crónica, bien por la existencia de
Tabla Principales causas varices o por un síndrome postflebítico. Si el edema es
de edema generalizado de aparición rápida, es necesario pensar en la existen-
cia de una trombosis venosa profunda. Si la dificu ltad
Insuficiencia cardiaca congestiva del flujo venoso ocurre en el territorio portal se va a
producir ascitis , que puede ir o no acompañada de
Enfermedad renal glomerular
edema generalizado. La obstrucción de la vena cava
Hepatopatía crónica (cirrosis) superior origina edema en la cara, cuello y extremida-
des superiores (edema «en esclavina») . En este caso es
Malnutrición
preciso investigar la presencia de una tumoración en
Malabsorción intestinal (con pérdida de proteínas) el mediastino, que más frecuentemente suele ser de
Fármacos origen pulmonar y maligna.

Obstrucción venosa
EXPLORACIÓN FÍSICA EN LA VALORACIÓN
Cambios hormonales DE LOS EDEMAS
ldiopático Uno de los objetivos más importantes de la explo-
ración física es determinar si el edema es general o
188
local y, en caso de que sea general, saber si es de ori-
CAPÍTULO 19 Síndrome edematoso

gen cardiaco o no. La valoración de la presión venosa la exploración de un edema localizado es importante
central mediante la exploración física del pulso y de investigar si hay adenopatías o masas que puedan ser
la presión yugular es de extraordinaria importancia responsables de obstrucción venosa local. La ausencia
en el estudio de los edemas generales para conocer el de fóvea en una extremidad con edema debe hacer pen-
estado de las cavidades cardiacas derechas. sar en linfedema moderado/severo por patología linfá-
Cuando el edema generalizado es de origen cardia- tica o en mixedema en el caso de enfermedad tiroidea.
co, la presión venosa central está elevada, mientras
que si la causa es una cirrosis hepática o estados hi- EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
poalbuminémicos la presión es normal. Para valorar la
distensión venosa yugular es útil observar su relación
EN LA VALORACIÓN DE LOS EDEMAS
con los movimientos respiratorios o las maniobras de El estudio bioquímico sérico básico que incluya los
compresión abdominal. En condiciones normales la niveles de creatinina, albúmina, sodio y potasio, junto
distensión yugular disminuye con la inspiración; de con el análisis elemental de orina y la hematimetría
lo contrario (signo de Kussmaul) es necesario descar- son de gran utilidad en el estudio inicial del síndro-
tar la existencia de pericarditis constrictiva o insu- me edematoso. Para valorar el componente oncótico
ficiencia ventricular derecha grave. En este último plasmático nos fijamos en la concentración sérica de
caso, la compresión mantenida sobre el abdomen va a albúmina; tasas inferiores a 2,5 g/dl pueden producir
originar un mayor aumento de la presión venosa yu- edema generalizado; en este caso se medirá la pro-
gular. En algunos casos podrá ser necesaria la medida teinuria en orina de 24 horas para detectar la posible
de la presión capilar pulmonar por medios invasivos. existencia de un síndrome nefrótico. Si se acompaña
En la exploración física del paciente con edema de alteraciones del sedimento de orina, de la diure-
pueden encontrarse otros signos que nos orienten sis y de la función renal deben hacer pensar en una
sobre la etiología del mismo; así, en la insuficiencia glomerulonefritis como posible causa del edema. La
cardiaca izquierda la auscultación de los pulmones ausencia de proteinuria y de alteraciones renales debe
revela la existencia de estertores crepitantes, reflejo orientar hacia otras causas de hipoalbuminemia tales
del edema pulmonar, y a nivel cardiaco suele apre- como cirrosis hepática, síndrome de malabsorción o
ciarse taquicardia, ritmo de galope, arritmias o soplos malnutrición. Las pruebas funcionales hepáticas, es-
cardiacos. Los edemas que se localizan en ambas ex- tudios de absorción intestinal, radiológicos, inmuno-
tremidades inferiores se acentúan con el ortostatismo, lógicos e histopatológicos (biopsias) si proceden, pue-
disminuyen en las primeras horas de la mañana y au- den aclarar el origen hepático o intestinal del edema.
mentan al avanzar el día. En caso de encarnamiento La radiografía de tórax es muy útil para el diag-
prolongado se localizan preferentemente en zonas nóstico del edema cardiogénico, ya que puede reve-
declives como la región presacra. A veces el edema lar la existencia de cardiomegalia, signos de edema
enmascara el frecuente estado de desnutrición que pulmonar y/o derrame pleural uni o bilateral. El
acompaña a la insuficiencia cardiaca crónica grave, electrocardiograma puede mostrar signos propios de
que solo se aprecia objetivamente después del trata- una cardiopatía isquémica, crecimientos cavitarios,
miento con diuréticos. En la pericarditis constrictiva arritmias u otras alteraciones que permiten el diagnós-
el componente de ascitis puede ser mayor que los tico etiológico del edema. La ecocardiografía es una
edemas en extremidades inferiores. exploración no invasiva de gran valor en el estudio de
El edema de los estados que cursan con hipoalbu- los pacientes con edema y sospecha de cardiopatía.
minemia y de las nefropatías es de tipo generalizado Otras exploraciones, como la prueba de esfuerzo (er-
y se localiza sobre todo en los tejidos laxos, de forma gometría}, TACIRM cardiaca, coronariografía y estu-
que es característico el edema periorbitario. Se ve dios hemodinámicos, pueden ser necesarios según la
favorecido porque no tienen ortopnea y duermen sin sospecha etiológica derivada de los estudios previos.
necesidad de elevar la cabeza. El hallazgo en la explo- Si se trata de un edema localizado, la distribución
ración física de ictericia, circulación abdominal co- del mismo es bastante sugestiva de su posible origen
lateral y hepatoesplenomegalia sugiere que el edema y orienta sobre qué pruebas complementarias hay que
o la ascitis se debe a una hepatopatía crónica. En el realizar. En el caso del edema de predominio facial,
edema de origen intestinal es importante la detección es necesario descartar la presencia de enfermedad
de otros signos carenciales y/o digestivos. compresiva que dificulte el retorno venoso en la vena
En el edema localizado la exploración física suele cava superior. La radiografía de tórax es la primera
aportar suficiente información para sospechar la etiolo- exploración que se debe realizar y puede complemen-
gía. Las alteraciones venosas son una de las principales tarse con una TAC o angio-TAC. El edema localizado
causas de edemas en las extremidades inferiores. Se en una extremidad inferior puede requerir un estu-
explorará el color de la piel, la posible existencia de dio inicial con ecografía Doppler como técnica no
signos inflamatorios locales, la presencia de asimetrías invasiva de alto rendimiento diagnóstico, que podrá
entre las dos extremidades, los signos de varices, el se complementada con otras (TACIRM, flebografía,
aumento reciente del volumen de una extremidad que gammagrafía isotópica, etc.) según los hallazgos de ----:¡gg
haga sospechar una trombosis venosa profunda, etc. En las exploraciones anteriores.
·120
Enfermedades
sistémicas autoinmunes
Miquel Vilardell Tarrés, Alberto Selva O'callaghan

CONCEPTO Y CARACTERÍSTICAS
GENERALES
El término de «conectivopatías» o «enfermedades del
tejido conjuntivo» define a un conjunto de enferme-
dades que cursan con inflamación y disfunción del
colágeno o tejido conectivo. Todas tienen en común
que en ellas se implican mecanismos de autoinmu-
nidad y una afectación de diferentes órganos o m ul-
tisistémica. Los principales órganos diana donde
tiene lugar el proceso inflamatorio son el riñón, la
piel, los vasos arteriales y venosos , los pulmones
y el sistema musculoesquelético. Es característi-
co de ellas su curso clínico en forma de brotes,
con exacerbaciones en las que a veces se pueden
identificar factores externos desencadenantes .
Por otro lado, existe un grupo de enferme-
dades de base inmune caracterizadas por la
presencia de infiltrados inflamatorios en la
pared vascular (arterial y /o venosa) de vasos
de diverso calibre, conocidas en conjunto
como vasculitis. Tienen también una evo-
lución en brotes y una afectación de varios
órganos y sistemas, si bien el curso clínico
puede ser más agresivo que en el caso de
las conectivopatías. El término «enferme-
dades autoinmunes » (ESA) engloba a las
conectivopatías y las vasculitis.
Sus manifestaciones clínicas son
proteiformes , tienen un diagnós-
tico complejo y un sustrato
patológico e inmunológico
propio , que permite identi-
ficarlas en diferentes enti-
dades. La Tabla 20-1 recoge
las principales ESA. Algunas
son de predominio articular,
como la artritis reumatoide;
CAPITULO 20 Enfermedades sistémicas autoinmunes

Tabla Principales enfermedades


sistémicas autoinmunes
Conectivopatías

Lupus eritematoso sistémico (LES)


Dermatomiositis (DM). Polimiositis (PM)
Esclerosis sistémica (ES)
Policondritis recidivante
Síndrome de Sjogren
Artritis reumatoide
Enfermedad mixta del tejido conectivo (EMTC)
Vasculitis

Arteritis de células gigantes o de Horton


Enfermedad de Takayasu Figura ariz en «silla de montar» en un pa-
ciente con enfermedad de Wegener.
Poliarteritis nudosa clásica (PAN)
Granulomatosis alérgica de Churg-Strauss
Granulomatosis de Wegener
Poliarteritis microscópica (PAM) PATOGENIA Y FISIOPATOLOGÍA
Enfermedad de Behr_:et
Vasculitis por hipersensibilidad Estudios epidemiológicos demuestran una mayor
prevalencia de las conectivopatías en las mujeres, en
Crioglobulinemia mixta esencial
una proporción de 9 a 1 para enfermedades como la
Urticaria-vasculitis esclerodermia o el LES, posiblemente en relación con
la mayor cantidad de estrógenos circulantes en las
mujeres.
El mecanismo responsable de las ESA, no es bien
conocido y se explica por la interacción de agentes
otras se clasifican en función del tamaño de los externos -virus, agentes físicos como las radiaciones
vasos afectos, como las vasculitis sistémicas, Así, ultravioleta, fármacos , tumores .. .- que actúan sobre
por ejemplo, la arteritis de célula s gigantes afecta a una base genética favorecedora, constituida en gran
vasos de gran calibre, y entre las entidades clínico- parte por un sistema de reconocimiento que es el sis-
patológicas que cursan con vasculitis de pequeño tema de histocompatibilidad o HLA. La existencia de
vaso se encuentran desde enfermedades graves una agregación fan1iliar en algunos pacientes respalda
como la granulomatosis de Wegener hasta otras más la importancia genética de estos procesos.
benignas como las desencadenadas por fenómenos
de hipersensibilidad (vasculitis por hipersensibi-
lidad o leucocitoclásticas]. En otras puede verse AGENTES EXTERNOS
afecto cualquier órgano o sistema, como en el lupu s La aparición de algunas enfermedades se ha relacio-
eritematoso sistémcio. nado con la presencia de infecciones víricas; en con-
Es frecuente la superposición de sus manifestacio- creto el virus de la hepatitis C es el agente responsa-
nes clínicas y, así, en ocasiones sólo el paso del tiem- ble de la aparición de crioglobulinas (inmunoglobu-
po permite catalogarlas de forma definida. Existen linas lgM que reaccionan contra las IgG y precipitan
manifestaciones clínicas características de algunas de con el frío) y constituyen el agente responsable en
ellas, como la nariz en «silla de montar» (Fig. 20-1) una gran mayoría de casos de la «crioglobulinemia
que aparece por destrucción del cartílago nasal en pa- mixta esencial», entidad que cursa con nefropatía,
cientes con policondritis recidivante o en la enferme- polineuropatía y lesiones cutáneas características en
dad de Wegener. La afección muscular inflamatoria, forma de púrpura palpable recidivante en los miem-
que por sí misma constituye una enfermedad propia, bros inferiores, asociada a la presencia de crioglobu-
puede asimismo aparecer en pacientes con LES, escle- linas. Otras vasculitis, como la poliarteritis nudosa
rodermia o síndrome de Sjogren. clásica (PAM}, que cursa con fiebre, lesiones isqué-
SEC(ION II Sem iología y fisiopatología genera l

micas y aneurismas en arterias de mediano calibre, transplacentario maternofetal bidireccional permi-


de preferencia en bifurcaciones arteriales, se ha rela- te explicar la aparición de estas enfermedades en
cionado con infecciones por el virus de la hepatitis pacientes de ambos sexos por este mecanismo. Las
B, sobre todo ante la persistencia como portador del manifestaciones clínicas características de algunas
antígeno de superf'.icie del virus (HBsAg). Otras ve- enfermedades autoinmunitarias como la sialoadeni-
ces los antígenos de células neoplásicas actúan como tis autoinmunitaria y el síndrome seco, las fibrosis
desencadenante de la patogenia de algunas de estas cutánea y pulmonar, la polimiositis y las alteraciones
enfermedades, por ej . en las miopatías inflamatorias, hepáticas inflamatorias típicas de la cirrosis biliar
especialmente en la dermatomiositis, cuyo cuadro primaria, remedan las que aparecen en la enfermedad
clínico va paralelo al curso de la neoplasia (síndro- del injerto contra el huésped crónica y que aparece
me «paraneoplásico» J. Por último, la administración tras un trasplante de médula ósea. Ciertos cambios en
de fármacos como la procainamida o la hidralazina la expresión del ADN que no afectan al genoma pro-
puede provocar un síndrome similar al LES, cono - piamente dicho, y en especial la metilación del ADN,
cido como lupus erimatoso inducido por fármacos se han invocado en las patogenia de algunas enferme-
(LEIF). dades autoinmunes, como por ejemplo el LES.
Otros agentes externos pueden
implicarse en la aparición
de alguna de estas en- DIAGNÓSTICO
fermedades. Por ej. los
El desconocimiento del fac-
síndromes escleroder-
miformes : la intoxi- tor etiológico y la afección
multisistémica de estos
cación por aceite de
colza desnaturali- procesos obliga a realizar
zado que tuvo lugar su diagnóstico en función
de la presencia de deter-
en nuestro país en la
minadas manifestaciones .
década de los ochen-
ta, o el síndrome de La importancia de estos
mialgia-eosinofilia hallazgos o rasgos clíni-
cos, biológicos, inmuno-
en relación con la
ingestión de triptó- lógicos o histopatológicos
varía según la entidad.
fano que apareció
en Estados Unidos
en la década de los
noventa, o la fibrosis LABORATORIO Y
sistémica nefrogéni- AUTOANTICUERPOS
ca de reciente des-
cripción en pacien- Muchos de los hallazgos
tes con insuficiencia analíticos en estas en-
renal y atribuida al fermedades son inespe-
gadolinio (contraste cíficos, pero sirven como
radiológico utilizado marcadores de actividad de
en la resonancia magné- la enfermedad. Así, una eleva-
tica). Las radiaciones UV ción de la velocidad de sedimen-
puede desencadenar un brote tación globular (VSG) por encima
de la enfermedad lúpica y favorecer la presencia de de 100 mm/hora, un fibrinógeno elevado, la
dermatomiositis en países con una gran exposición presencia de leucocitosis y una anemia por bloqueo
fotol umínica. del hierro, o la presencia de hipergammaglobuline-
mia indican que la enfermedad está activa, aunque
no permiten por sí mismos el diagnóstico. En cambio
la demostración de autoanticuerpos, expresión de la
BASE GENÉTICA
etiopatogenia autoinmunitaria del proceso, puede
Se ha postulado la existencia de un microquimeris- ayudar al diagnóstico. La Tabla 20-2 recoge los prin-
mo fetal como responsable de la generación de una cipales anticuerpos de las ESA más prevalentes y su
respuesta aloinmunitaria del feto contra la madre. significado clínico.
La persistencia de células inmunológicamente acti- La existencia de anticuerpos antinucleares (ANA)
vas provenientes del feto desencadenaría en la madre determinados por inmunofluorescencia indirecta (IF)
una reacción similar a la observada en los pacien- sobre líneas celulares Hep-2 de neoplasia de laringe
tes sometidos a trasplante de médula ósea («injerto humana, a títulos superiores a 1/160 en adultos y a
192 contra huésped»). La existencia de un flujo celular 1/320 en ancianos, orienta hacia una enfermedad de
CAPÍTULO 20 Enfermedades sistémicas autoinrnunes

Tabla Principales autoanticuerpos en las enfermedades sistémicas autoinmunes más


preva lentes
Enfermedad Autoanticuerpos: prevalencia y comentarios
Lupus eritematoso ANA casi en el 100º0 en algún momento de la enfermedad.
sistémico (LES) Anti-DNAdc (doble cadena): positivos en el 99~-º en algún momento de la enfermedad si
se utilizan técnicas de alta sensibilidad. Los títulos altos se correlacionan con la actividad
de la enfermedad. afectación renal y del SNC.
Anti-Sm (15%-30º~): muy específico. asociado con la actividad de la afectación renal.
Anti-SSA!Ro (20~o-50~o): la mitad de los casos asociados a anti-SSBiLa. Mayor
afectación cutánea. fotosensibilidad. afectación pulmonar intersticial, vasculiiis, nefriiis.
linfadenopatía y leucopenia; lupus neonatal. bloqueo cardíaco congénito.
Anti-SSBiLa (10º;-30%): la mayoría anti-SSA/Ro+, asociados a síndrome de Sjbgren
secundario. lupus neonatal y lupus cutáneo subagudo.
Anti-RNP ribosomal P (10%-20%): asociados con cerebritis. psicosis. depresión y
mononeuritís ml'.1ltíple.
Antihistonas (50%-70ºó): nefritis, lupus inducido por drogas (35'lo-75º-~) y lupus
neuropsiquiátrico {50%).
Anti-C1 q (33%): en nefritis, títulos correlacionados con la actividad.
Anticardiolipína (lgG e lgM) -30~o-40°i>- y anticoagulante lúpico - 10ºi>-30%-: asociación
con trombosis venosas y arteriales. abortos, preeclampsia y prematuridad.

Artritis reumatoide Factor reumatoide (FR): positivo en el 50% de los pacientes. Asociado a afectacíón
extraarticular y peor pronóstico.
Anti-CCP (70'lo-80~'o): marcador muy sensible y específico. presente en fases precoces.
sus niveles disminuyen si existe respuesta al tratamiento

Enfermedad mixta ANA 100%, anti-U, RNP en el 100% (criterio clasificador de la enfermedad)
del tejido conectivo

Esclerosis Antí-Scl70 (topoísomerasa 1): en el 60º'o de las formas difusas y el 35<,o de las localizadas,
sistémica Asociados a íibrosis pulmonar, afectación articular y muscular y proteinuria.
Anticentrómero: en el 50°0 de las formas limitadas y el 6°,ó de las difusas, Asociados a
hipertensión pulmonar

Polimiositis (PM). Anti-aminoaciHRNA sintetasas (20%-30~~): el más frecuente es el anti-Jo 1. asociado con
dermatomiositis PM y DM con artritis, fenómeno de Raynaud y enfermedad intersticial pulmonar.
/DM) Anti-Mi2: en un tercio de pacientes con DM. muy específicos.
Anti-p155: DM asociada a neoplasia.

Síndrome de ANA (85%).


Sjógren Anti-Ro (65%-95~ó): títulos altos correlacionados con mayor frecuencia de afectacíón
extraglanduiar (púrpura y vasculiiis cutánea).
Anti-La (35ºó-80%): correlación con afectación renal, pulmonar y hepática; asociados
habitualmente a anti-Ro.

Vasculitis Granulomatosis de Wegener: C-ANCA anti-PR3+ í70%-95'l10). P-ANCA ant1-MPO+ (10ºó-20º{,).


Síndrome de Churg-Strauss: C-ANCA antí-PR3+ (30'lo). P-ANCA anti-MPO+ {30ºó-60%).
Poliangeíiis microscópica: C-ANCA anti-PR3+ (20%-30º'o). P-ANCA anti-MPO+ (45%-60%).
Poliarterítis nodosa: C-ANCA anii-PR3+ (10%).
ANA; anticuerpos antinucleares. Ant1-CCP: anticuerpos ant1péptídos cíclicos citrulínados. RNP: ribonucieoproteína.
ANCA: anticuerpos aniiciioplasma del neutrófilo. MPO: mieloperoxidasa. PR3: prote111asa 3

bas11 autoinmu1w. Se pueden diforcmciar distintos núd(HJ (E::-,.JA). Los anticuerpos co1Jtra el ADN bicate-
patrones do IF que sugiernn ul tipo dt, auloanlicuerpo nariu determinado~ por inrnunofl11orescnnr:ia sobre el
implicado. El patrón homogéneo es característico de cineloplasto do Crilhidío lm:ilioe é>Oll tispocíficos de
los anticuorpos unti-.·1DN. el nucleular se ve on la lupus erilemotoso sistémico y tienen valor patogénícu
esclerodermia. el patrón moteado sugiere la existen- \ pronóstico. siendo marcadores de un curso clínico
cia riH anticuerpos frente a antígi.inos extraíb!es del müs agresi\'o y de nefropatía.
SECCION II Semiología y fisiopatología general

SU IMPLICACIÓN EN LA PATOGENIA
Se discute si los autoanticuerpos son epifenómenos, Tabla Criterios clasificatorios
«espectadores inocentes» de la enfermedad o si des-
empeñan un verdadero papel patogénico. En algunos
del LES (ACR 1997)
casos existe una excelente correlación entre manifes- Exantema malar
taciones clínicas y autoanticuerpos, y lo que sin duda
apoya su valor patogénico. Por ej., los anticuerpos Lupus discoide
anti-Ro pueden fijarse al queratinocito dando lugar a Fotosensibilidad
lesiones por fotosensibiidad, unirse al tejido especí-
fico de conducción cardíaco provocando un bloqueo Úlceras orales o nasofaríngeas indoloras
auriculoventricular e incluso atravesar la barrera pla- Artitris no erosiva en más de dos articulaciones
centaria dando lugar a estas mismas manifestaciones periféricas
en el recién nacido (el denominado lupus neonatal).
Otro ejemplo lo constituyen los anticuerpos an- Serositis (pleuritis, pericarditis)
tifosfolípido, cuya infusión en animales de experi- Nefropatía (proteinuria > 500 mg/24 h; cilindros
mentación provoca manifestaciones clínicas carac- hemáticos)
terísticas, es decir, trombosis vascular y placentaria.
Afección neurológica (convulsiones, psicosis)
Finalmente, los anticuerpos anticitoplasma del neu-
trófilo (ANCA) se han implicado en el diagnóstico y Alteración hematológica (anemia hemolítica,
patogenia de las vasculitis. De hecho, han facilitado leucopenia, linfopenia, trombocitopenia)
una clasificación nosológica según su positividad y Alteración inmunológica (anti-ADN, anti-Sm,
tipo. Estos anticuerpos presentan una distribución aPL)
por IF que permite agruparlos principalmente en dos
grupos de distinto significado: a) los cANCA (tinción Anticuerpos antinucleares
del citoplasma del neutrófilo por IF), con especifi- APL: anticuerpo antifosfolípidos. Cuatro o más criterios,
cidad antigénica frente a la proteinasa-3, y que son en cualquier momento de la evolución de la enfermedad,
característicos de la enfermedad de Wegener, y b) tienen una especificidad y sensibilidad diagnóstica del
los pANCA (tinción perinuclear), con especificidad 96%.
antigénica frente a la mieloperoxidasa, típicos de la
poliangeítis microscópica (PAM}, entidad que cursa
con lesión tanto del capilar en el alvéolo pulmonar
como del capilar glomerular renal, manifestándose en témicas autoinmunes. La Tabla 20-3 muestra los cri-
forma de síndrome renopulmonar (insuficiencia renal terios clasificatorios del universalmente aceptados.
y hemorragia alveolar). En estos casos de afectación si- Al igual que para esta enfermedad, se han elaborado
multánea reno-pulmonar, la presencia de anticuerpos criterios para otras muchas enfermedades sistémicas.
anti-membrana basal glomerular (anti-MBG) permite En la presentación de tales enfermedades no es
realizar el diagnóstico de síndrome de Goodpasture. infrecuente el hallazgo de signos y síntomas de afec-
Otros autoanticuerpos de utilidad clínica son los tación general, como la presencia de fiebre o de un
antitopoisomerasa (scl-70), marcadores de la forma síndrome de afectación general con astenia, anorexia
difusa de esclerodermia; los anticentrómero, marca- y pérdida de peso . Hemos señalado que la afección
dores de la forma limitada de esa enfermedad, y los multisistémica de diferentes órganos es una caracte-
anticuerpos específicos de miositis. Algunos de estos rística de estas enfermedades. A continuación se de-
presentan una especial correlación con determinadas tallan las peculiaridades de cada uno de los órganos
manifestaciones clínicas, por ej. los anticuerpos anti- o sistemas en ellas.
sintetasa (anti-Jo-1 y otros) con la fibrosis pulmonar,
los anticuerpos anti-Mi2 con las manifestaciones cu-
táneas y los anticuerpos anti-p155 con la neoplasia LESIONES CUTÁNEAS
que en ocasiones acompañaa la dermatomiositis. La presencia de pú1pura palpable (Fig. 20-2) en zonas
de declive se acompaña generalmente de un sustrato
histológico de vasculitis con infiltración por leucoci-
RASGOS CLÍNICOS E HISTOLÓGICOS tos polimorfonucleares de las vénulas poscapilares y
DE AFECTACIÓN DE LOS ÓRGANOS presencia de restos nucleares (leucocitoclastia o «pol-
EN LAS ENFERMEDADES SISTÉMICAS vo nuclear»).
En otras ocasiones, como ocurre en los pacien-
El lupus eritematoso sistémico (LES) , la escleroder- tes con dermatomiositis, LES o cuando coexiste la
mia o esclerosis sistémica (ES) y la dermatopolimio- presencia de anticuerpos anti-Ro, pueden aparecer
sitis (DM, PM) son entidades bien definidas que , jun- lesiones de fotosensibilidad, generalmente en zonas
to a las vasculitis representan las enfermedades sis- de exposición solar (cara, escote ... ).
CAPÍTULO 20 Enfermedades sistém icas autoi nmunes

Figura Púrpura palpable (vascu litis cutánea). Figura Pápulas de Gottron en un paciente con
dermatomiositis.

Algunas de estas manifestaciones cutáneas son tan a estas enfermedades, pero su relación con ellas es
características que pueden considerarse patognomó- controvertida.
nicas del proceso en cuestión. Así sucede con el erite-
ma malar en el LES (Fig. 20-3) o el exantema violáceo
en heliotropo y las pápulas de Gottron en la dermato-
AFECTACIÓN MUSCULAR
miositis (Fig. 20.-4). La induración cutánea en zonas Se produce en forma de mialgias difusas que en oca-
proximales y la aparición de lesiones con pérdida de siones aparecen en las cinturas escapular y pelviana
sustancia en los pulpejos de los dedos, («mordedu- con gran impotencia funcional. Unidas a otros hallaz-
ra de rata»), son características de la esclerodermia. gos (VSG elevada y edad avanzada) orientan hacia el
Las úlceras cutáneas, de bordes bien definidos y de diagnóstico clínico de polimialgia reumática, en oca-
predominio en zonas declives, son características del siones asociadas a una arteritis de células gigantes.
proceso vasculítico y acompafüm frecuentemente a la Otra forma clínica de afectación muscular es la mio-
patía inflamatoria, que aparece como entidad propia
poliarteritis nudosa clásica. Por último , otras lesiones
o asociada a otras enfermedades sistémicas. En estos
como el pioderma gangrenoso, el eritema elevado casos sí existen hallazgos anatomopatológicos bien
diutinum o el granuloma anular también acompañan definidos que permiten incluso diferenciar diversos
subgrupos, como la dermatomiositis, la polimiositis
o la miositis por cuerpos de inclusión. El infiltrado
inflamatorio suele ser perimisial, con atrofia perifas-
cicular y necrosis en el primer grupo; de tipo endomi-
sial en el segundo, y con cuerpos de inclusión carac-
terísticos en el tercero. La fascia muscular, interfase
entre piel y músculo, aparece inflamada en la fascitis
eosinófila, y las lesiones del tejido celular subcutáneo
producen lesiones de paniculitis lobulillar o septal
que se pueden observar en la poliarteritis nudosa cu-
tánea.

NEFROPATÍA
El riñón es órgano diana en el LES y en algunas
vasculitis. La glomerulonefritis necrosante focal y
segmentaria es el sustrato histológico de diferentes
entidades como la enfermedad de Wegener o la po-
liangeítis microscópica. En los pacientes con lupus
la afección glomerular adopta diferentes tipos (me-
sangial, mesangioproliferativa, membranosa y mem-
branoproliferativa), que condicionan la intensidad
del tratamiento. En los pacientes con esclerodermia
la «crisis renal», que cursa con insuficiencia renal
Figura Exa ntema en «alas de mariposa » en una aguda, es una complicación rara pero grave, aunque ----;¡-gs
paciente con LES. se ve con menor frecuencia desde la introducción de
SECC O II Semiología y fisiopatología general

los fármacos inhibidores de la enzima conversora de con vegetaciones y desestructuración del sistema
la angiotensina. valvular.
La pericarditis es frecuente en los pacientes con
LES, aunque también puede acompañar a otras en-
PULMÓN fermedades sistémicas. La aortitis autoinmune es
más característica de las vasculitis de grandes vasos
Las manifestaciones respiratorias que presentan estos como la arteritis de células gigantes o la enfermedad
pacientes son variadas. La entidades más frecuente de Takayasu (más prevalente en mujeres jóvenes de
es la afección intersticial pulmonar, que presenta raza asiática). Hay que tener en cuenta que el uso
diferentes sustratos anatomopatológicos. Las más de glucocorticoides, piedra angular en el tratamiento
conocidas son la neumonía usual crónica (NUC), la de estas enfermedades, favorece la aparición a largo
bronquiolitis obliterante con neumonía organiza- plazo de aterotrombosis, lo que, junto con las infec-
da (BONO) o neumonía organizativa criptogenética ciones representa la principal causa de mortalidad
(NOC) y el daño alveolar difuso. Su respuesta al trata- en algunos grupos de pacientes (p. ej., en el LES).
miento es también diferente. Los pacientes con LES,
además de la inflamación pleural clásica que cursa
con dolor pleurítico y derrame pleural de naturaleza SISTEMA NERVIOSO
inflamatoria, presentan una forma de lesión pulmo-
La presencia de polineuropatía y, sobre todo, de mul-
nar que se traduce en la existencia de unos pulmones
tineuritis, obliga a descartar una inflamación de los
«encogidos» («shrinking lungs»}, disnea y taquipnea ,
vasa nervorum por vasculitis; la realización a de una
atribuido a la presencia de una probable miopatía dia-
biopsia del nervio sural permite el diagnóstico en la
fragmática. La hemorragia pulmonar, que se sospecha
mayoría de las ocasiones. Las lesiones isquémicas por
a partir de la tríada clínica de expectoración hemop-
afectación de pequeños vasos que causa vasculitis
toica recurrente, patrón alveolar pulmonar y anemia
cerebral o la presencia de áreas de desmielinización
ferropénica, puede presentarse en pacientes con LES
también aparecen en algunas de estas enfermedades,
o formar parte de los síndromes renopulmonares , en-
como por ej. en la enfermedad de Belu;et o el síndro-
tre los que se encuentran la poliangeítis microscópica
me de Sjogren primario, y son responsables de algu-
(pANCA, MPO) y el síndrome de Goodpasture (anti-
nas de las manifestaciones neurológicas del sistema
MBG).
nervioso central.

APARATO CARDIOVASCULAR OTRAS LOCALIZACIONES


Algunas de las manifestaciones en este aparato se Por último , el proceso inflamatorio vascular -vascu-
han relacionado estrechamente con la presencia de litis- puede afectar a cualquier órgano o sistema; por
determinados autoanticuerpos. Es el caso de los an- ej. , en el aparato digestivo desencadenan hemorragias
ticuerpos antifosfolípido (aPL), que se han asociado incoercibles, infartos mesentéricos o una hiperplasia
con trombosis arteriales (infarto agudo de miocardio nodular focal regenerativa a nivel hepático, o lesiones
y accidentes cerebrovasculares) y/o venosas, trom - graves en los órganos de los sentidos (coriorretinitis,
bosis venosa profunda de miembros y embolia pul- uveítis o vasculitis endococlear) que pueden abocar a
monar) y con la presencia de endocarditis que cursa ceguera o cofosis residual.

196
·121
Principales manifestaciones
clínicas de las
enfermedades digestivas
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

INTRODUCCIÓN
Existe una serie de síntomas que son bastante carac-
terísticos de los pacientes con patología digestiva. El
aparato digestivo puede presentar alteraciones fun-
cionales y orgánicas; estas pueden asociar manifesta-
ciones de otros órganos o sistemas y también pueden
formar parte de enfermedades sistémicas.

ESÓFAGO
En general, los síntomas esofágicos se localizan en
las zonas retroxifoidea, retroesternal y en la base del
cuello.

DISFAGIA
Se trata quizá del síntoma más característico y fre-
cuente de afectación esofágica, aunque la causa pue-
de radicar en la boca o en la faringe, en cuyo caso se
habla globalmente de disfagia orofaríngea. El término
significa dificultad para la deglución. El paciente lo
refiere muy a menudo como sensación de detención
del bolo alimenticio. La incapacidad absoluta de de-
glutir se denomina afagia.
En la anamnesis de los pacientes con disfagia es
importante recoger algunos datos, señalados en la
Tabla 21-1.

Localización de la sensación de detención


del bolo alimentario
Si la causa asienta en la parte proximal del esó-
fago, la sensación suele referirse a la base del
cuello. En cambio, si el origen está en el tercio
inferior del esófago, la disfagia se refiere en
unos casos al cuello y en otros a la re-
gión xifoidea. Es decir, suele existir
relación entre localización de la
patología y de la sensación re-
ferida por el enfermo en las
disfagias altas, pero en las
Semiología y fis iopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

originadas por patologías que asientan en zonas bajas tencia del esfínter esofágico inferior. Los pacientes lo
del esófago no siempre es así. explican en general como una sensación de ardor o
quemazón de localización xifoepigástrica o retroester-
Tipo de alimentos que la condicionan nal, muchas veces con irradiación alta, hasta la man-
La disfagia de causa orgánica comienza manifestándo- díbula. Es más frecuente en decúbito o al inclinarse
se con los alimentos sólidos y, a medida que aumenta, hacia delante. La pirosis se acompaña también, con
se manifiesta también con los líquidos. En cambio, en frecuencia, de regurgitación de contenido gástrico. La
muchos trastornos motores o funcionales del esófago, aspiración del reflujo gastroesofágico a las vías respi-
la disfagia se desencadena sobre todo al ingerir líqui- ratorias, en particular durante el descanso nocturno,
dos (disfagia paradójica), y a veces depende de la tem- puede dar lugar a sibilancias por hiperactividad bron-
peratura de estos (se da principalmente si están fríos). quial a causa del efecto irritante del ácido , lo que pue-
de llevar al diagnóstico erróneo de asma bronquial.
Maniobras o posiciones que alivian la disfagia
Entre ellas, se encuentran la ortoposición, en caso de DOLOR ESOFÁGICO
atonía del esófago, y la maniobra de Valsalva, que al
aumentar la presión intratorácica puede lograr que el Nos referimos aquí al dolor que se origina en el esófa-
bolo pase a través de una estenosis, especialmente si go que no acompaña a la deglución (lo que ya hemos
esta es funcional. denominado odinofagia). Al igual que la disfagia, su
ubicación, especialmente si el origen es bajo, no se
relaciona con la localización de la lesión. Suele ser
ODINOFAGIA moderado a intenso, simulando a veces , por su locali-
Dolor durante la deglución (disfagia dolorosa}, apa- zación y carácter, un dolor coronario. Se localiza a ni-
rece a menudo cuando la mucosa esofágica está infla- vel retroesternal, en cualquier lugar, desde el epigas-
mada (esofagitis) o cuando existe un aumento de pre- trio hasta la base del cuello. La irradiación, igual que
sión en la luz esofágica (espasmo esofágico funcional la sensación de pirosis, se extiende hacia el cuello,
o hiperperistaltismo de lucha, ante una estenosis de la mandíbula, los costados o el dorso . En ocasiones
instauración más o menos rápida). tiene carácter opresivo, no guarda relación con los es-
fuerzos y muchas veces es nocturno o se asocia al de-
cúbito. Frecuentemente se alivia al beber agua, tragar
REGURGITACIÓN ESOFÁGICA saliva o con antiácidos, así como con vasodilatadores
El paciente la refiere como la llegada a la boca de (relajantes del músculo liso). Aunque su duración es
contenido esofágico, sin esfuerzo y sin náuseas. A ve- variable, suele prolongarse unos minutos.
ces, se regurgitan alimentos deglutidos varias horas
antes. Un problema que plantea la regurgitación es la
aspiración a las vías respiratorias, que puede originar
ESTÓMAGO Y DUODENO (Tabla 21-1)
cuadros respiratorios graves. Con frecuencia la aspi-
ración sucede durante la noche, y se presenta como ANOREXIA
crisis de disnea nocturna. En estos casos el clínico Se define como la pérdida o disminución (hiporexia)
puede pensar erróneamente que se encuentra ante un del deseo de ingerir alimentos, o del apetito. Puede
proceso cardiorrespiratorio. ocasionarla cualquier enfermedad del tubo digestivo
El reflujo nasal es más típico de la disfagia de origen o de sus anejos (fundamentalmente del hígado), así
faríngeo que , por otro lado, también pueden ocasionar como numerosas situaciones patológicas extradigesti-
aspiraciones como las de causa esofágica. vas y generales, tales como enfermedades infecciosas,
Muchos pacientes con patología esofágica presen- dolor crónico de cualquier origen, tumores, insufi-
tan hipersalivación, a veces en forma de crisis recor- ciencia cardiaca (probablemente por congestión de
tadas, especialmente en casos de estenosis esofágica. las vísceras abdominales), uremia, insuficiencia res-
piratoria, trastornos psíquicos, etc.
HALITOSIS Hay qu e diferenciar la hiporexia de la sitofobia o
temor a ingerir alimentos, por cuanto ello desenca-
Otro síntoma que puede acompañar a la disfagia es dena síntomas, sobre todo dolor, como sucede en la
la halitosis, o mal olor del aliento, por retención de estenosis o los trastornos motores del tubo digestivo,
alimentos en el esófago, en particular si contiene di- en la isquemia intestinal, en algunas enfermedades
vertículos (p. ej., de Zenker). biliares o, a veces, por mecanismo psicógeno.

PIROSIS PÉRDIDA DE PESO


Sensación de quemazón retroesternal, cuya causa más Es una manifestación muy frecuente en la patología
198 frecuente es el reflujo gastroesofágico por incompe-
digestiva. Las enfermedades que producen anorexia,
CAPÍTULO 21 Principales manifestaciones clínicas de las enfermedades digestivas

tación, que, sea del contenido esofágico o gástrico, no


es forzada). Se acompaña de contracciones rítmicas
Tabla Manifestaciones clínicas e intensas del diafragma, los músculos abdominales
principales de las enfermedades y los músculos respiratorios, inicialmente sin ex-
esofágicas y gastroduodenales pulsión del contenido gástrico, lo que se denominan
coloquialmente arcadas (o «arcadas secas»).
Manifestaciones esofágicas En la anamnesis es importante tener en cuenta una
serie de aspectos con respecto al vómito:
Disfagia Para sólidos
Para líquidos (paradójica) Su relación con la ingesta. Por ejemplo, las náu-
Odinofagia y seas y los vómitos aparecen con frecuencia en
dolor esofágico ayunas en el embarazo, en pacientes con uremia
y en alcohólicos. Su aparición durante la ingesta
Pirosis o muy poco después sugiere estenosis pilórica
Regurgitación Esofágica (sin CIH) (asociada a veces con ulcus péptico) o causa
Gástrica (en general, con psicógena; si aparece 4 a 6 horas después de la
CIH) ingesta, nos hará pensar en la posibilidad de re-
Aspiración tención gástrica.
Presencia de otros síntomas concomitantes.
Otras (halitosis,
hipersalivación) (Por ejemplo , cefalea de tipo migraña, vértigo,
dolor abdominal que sugiere trastornos de otras
Manifestaciones gastroduodenales vísceras como vesícula biliar, vías urinarias,
Náuseas, Acuosos Precoces etc.). Si existe dolor epigástrico y este se alivia
vómitos Alimentarios De retención con el vómito, es posible que se deba a patología
Biliosos gastroduodenal.
Hemáticos Pérdida ponderal. Si los vómitos son repetidos
Fecaloideos pero no hay pérdida de peso existe la posibilidad
de que se trate de patología funcional.
Dispepsia Funcional Tipo ulceroso Los vómitos no precedidos de náuseas, explo-
Orgánica Tipo dismotilidad sivos, denominados vómitos en escopetazo,
Tipo indeterminado sugieren patología intracraneal (hipertensión
Hemorragia digestiva alta (hematemesis), intracraneal).
melena
Es importante la anamnesis relativa al aspecto del
vómito, que permite distinguir varios tipos:
Acuosos: de aspecto claro. Puede indicar obs-
trucción pilórica funcional u orgánica o hiperse-
creción clorhidropéptica.
malabsorción, vómitos de repetición, trastornos
Alimentarios: contiene alimentos sin digerir o
del vaciamiento gástrico o procesos neoplásicos o
parcialmente digeridos. Pueden ser precoces,
inflamatorios crónicos pueden originar pérdida de
que aparecen poco después de la ingesta y suelen
peso. En cambio, algunas enfermedades, como el ul-
indicar irritación de la mucosa gástrica, o tardíos,
cus no complicado o los trastornos funcionales, no
que indican retraso en el vacianliento gástrico. A
suelen ocasionar alteraciones ponderales.
veces transcurren muchas horas o se produce el
vómito al día siguiente de la ingesta, como ocurre
NÁUSEAS Y VÓMITOS en la obstrucción pilórica (vómitos de retención).
En este caso son a veces de contenido maloliente
Es habitual que ambos fenómenos vayan unidos, ya por sobrecrecimiento bacteriano.
que las vías nerviosas para ambos son probablemente Biliosos: de coloración amarillenta-verdosa y
las mismas. sabor amargo. Lo habitual es que cualquier tipo
Podemos definir náusea como una sensación des- de vómito que se repita continuadamente acabe
agradable e imprecisa, referida en general a la región siendo bilioso por paso del contenido duodenal
faríngea o al epigastrio, con deseo inminente de expul- al estómago; si no fuera así, podría ser indicativo
sión del contenido gástrico. Frecuentemente se asocia de estenosis pilórica.
a síntomas vegetativos, tales como hipersalivación, Hemáticos (hematemesis): puede ser de sangre
palidez, sudoración y, a veces , hipotensión y bradi- roja (frecuentemente si es de origen esofágico) o
cardia; es decir, síntomas fundamentalmente vagales. de sangre digerida, de color pardo o negruzco ,
El vómito es la expulsión forzada del contenido gás- a veces «en posos de café », dependiendo sobre
trico por la boca al exterior (a diferencia de la regurgi- todo de la cuantía de la hemorragia.
Sem iología y fi siopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Fecaloideos: pueden aparecer fundamentalmen- ces (que no ofrecen ya el aspecto de melena) pueden
te en obstrucciones intestinales, principalmente ser positivas durante una semana o más. La existencia
en los últimos tramos del íleon, o en la parálisis de melena o de sangre oculta en heces denota la exis-
intestinal que acompaña a la peritonitis. tencia de una enfermedad orgánica del tubo digestivo.

Hematoquecia (enterorragia o rectorragia)


DISTENSIÓN ABDOMINAL
Es la emisión de sangre roja por el recto. Aunque la
Se trata de una sensación de hinchazón, referida a causa de este trastorno suele radicar en tramos del
nivel epigástrico o abdominal difuso . Suele obedecer tubo digestivo distales al ángulo de Treitz, también
en general a exceso de gas en el tubo digestivo (me- puede ser la expresión de una h emorragia de tramos
teorismo, flatulencia), aunque puede tener otros orí- altos, si la cuantía de la hemorragia ha sido importan-
genes (trastornos en el vaciamiento gástrico, ascitis, te y si el tránsito intestinal ha sido lo suficientemente
tumores abdominales, etc.). rápido como para evitar la transformación de la he-
moglobina.

HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA


Originada generalmente en tramos altos del tubo di-
INTESTINO (Tabla 21-2)
gestivo, puede manifestarse como : Aunque muchos de los síntomas expuestos pueden
originarse en el intestino delgado o en el colon, los
Hematemesis que se exponen a continuación son más típicos de
Es sinónimo de vómito hemático. Puede variar de esta localización.
color según la intensidad de la hemorragia y la con-
centración de ácido clorhídrico en el estómago en el
momento de producirse y según su mezcla con aquel,
DIARREA
transformándose la hemoglobina en hematina, de co- Se define como la disminución de la consistencia de
lor pardo. Así, si la hematemesis sucede muy poco las heces, que en general se acompafia de un aumento
tiempo después de producirse la hemorragia, el color del número de deposiciones diarias. El aumento del
será rojo vivo; si media más tiempo entre la hemorra- número de deposiciones diarias sin disminución de
gia y su expulsión (vómito), la hematemesis será de su consistencia no debe ser considerado estrictamen-
color rojo oscuro, marrón o negruzco. Los pequefios te como diarrea. Desde el punto de vista cuantitativo,
coágulos precipitados en el jugo gástrico ofrecen el y con una dieta baja en fibra la diarrea supone una
típico aspecto de posos de café. eliminación de heces superior a 200 gramos en 24
El origen de la hematemesis puede radicar en horas. Sus mecanismos se estudiarán en el capítulo
cualquier lesión del tubo digestivo que asiente en el correspondiente.
esófago, el estómago o el duodeno, es decir, proximal Desde el punto de vista clínico, las diarreas se clasi-
al ángulo de Treitz. fican en agudas (comienzo brusco, con una duración

Melena
Es la expulsión de heces de color negro intenso y
muy adherentes, como consecuencia de la presencia Tabla Manifestaciones de origen
de sangre alterada por el ácido clorhídrico y retenida intestinal
en el tubo digestivo. Ciertos alimentos (calan1ares, es-
pinacas), o medicamentos (hierro, bismuto, regaliz), Características Localización
pueden teñir de negro las heces .
Diarrea Acuosa Intestino
La hemorragia que da lugar a melena puede ori- delgado o
ginarse en cualquier tramo del aparato digestivo, colon
desde el esófago hasta el colon ascendente o incluso
transverso , si el tránsito es lo suficientemente lento Tenesmo Sangre y moco Colon y recto
como para permitir la alteración de la sangre antes de Estreñimiento
ser expulsada. Para que ello suceda, se precisa una
permanencia en el tubo digestivo superior a 8 horas. Dolor cólico Intestino
Se requiere aproximadamente una hemorragia de delgado o
colon
60 ml como mínimo para producir una única deposi-
ción negra. Una hemorragia agu da de mayor cuantía Malabsorción Esteatorrea Intestino
puede ocasionar melena durante un periodo de hasta delgado
3 días después del cese de la hemorragia, si bien las
200
pruebas empleadas para detectar sangre oculta en he-
CAPÍTULO 21 Principales manifestaciones clínicas de las enfermedades digestivas

en general inferior a 20-30 días) y crónicas (más dura- acuoso, y su origen hay que centrarlo en el colon o
deras , continuas o intermitentes). en el recto.
En la anamnesis, una diarrea de heces claras y Hay que tener en cuenta la gran variabilidad in-
abundantes habla a favor de un mecanismo secretor dividual en el hábito de defecar. Generalmente, se
(no cede con el ayuno) u osmótico (tiende a ceder con considera normal una deposición cada 24 o 48 horas.
el ayuno). La presencia de hematoquecia, con moco y Es importante tener en cuenta que un estreñimien-
pus en la deposición sugiere un proceso inflamatorio. to de reciente aparición, así como cualquier alteración
Es necesario interrogar sobre la ingesta de determina- del hábito intestinal, sin causa aparente, obliga a des-
dos alimentos que pudieran estar contaminados, o de cartar, sobre todo si se trata de un paciente de edad
fármacos que afecten a la motilidad o secreción intes- superior a los 50 años, una neoplasia de colon o recto.
tinal. La existencia de tenesmo rectal y la urgencia
rectal sugieren afectación rectal. El tenesmo rectal es
la sensación referida en la zona anorrectal de evacua- DOLOR INTESTINAL
ción incompleta, que en ocasiones obliga a intentos
El origen reside con mayor frecuencia en el intestino
frecuentes de defecación, a veces sin conseguirlo,
delgado, donde habitualmente es de carácter intermi-
o expulsando pequeñas cantidades de moco , solo o
tente o cólico. Suele obedecer a procesos inflamato-
mezclado con otros materiales (sangre, por ejemplo).
rios u oclusivos, con un aumento del peristaltismo. A
La urgencia rectal es la necesidad imperiosa, casi in-
menudo, se detecta un incremento de los ruidos in-
controlable, de defecación.
testinales coincidiendo con los episodios dolorosos o
Tanto el tenesmo como la urgencia indican un in- inmediatamente después de ellos. El dolor originado
cremento de la sensibilidad rectal al reflejo de la defe- en el intestino delgado y colon derecho suele ser de
cación, de tal forma que con una mínima distensión, localización periumbilical. El originado en el colon
o sin ella, se está provocando continuanrnnte dicho izquierdo se localiza más frecuentemente en hemiab-
reflejo. domen inferior, sobre todo en el hipogastrio y en la
Una situación peculiar es la del impacto fecal, que fosa ilíaca izquierda.
aparece con frecuencia en ancianos y en personas
debilitadas o que padecen enfermedades neurológi-
cas. Consiste en una retención de heces en la ampolla MALABSORCIÓN
rectal, que se endurecen, sin estimular el reflejo de
defecación. Puede existir una hipersecreción proxi- Es propia de enfermedades del intestino delgado y
mal, por lo que fluyen continuamente heces líquidas comprende una serie de alteraciones nutricionales y
y moco por el recto. En estos casos, hablamos de carenciales a las que nos referiremos en el correspon-
pseudo diarrea. diente capítulo.

ESTREÑIMIENTO HÍGADO Y VÍAS BILIARES (Tabla 21-3)


Se define como un retraso y dificultad en la defeca- ICTERICIA
ción, que requiere un esfuerzo de la prensa abdomi-
nal mayor de lo habitual. En general, las heces pre- Es quizá la manifestación más llamativa y reconocida
sentan mayor consistencia por un menor contenido de afectación hepática, aunque puede tener otros orí-

Tabla Manifestaciones relacionadas con enfermedades del hígado, vías biliares


y páncreas
Síntoma/signo Hígado Vías biliares Páncreas

Ictericia + + +
Hematemesis/melena + +/-

Encefalopatía +
Ascitis/edema + +/-

Dolor +/- + +
Mal absorción +/- +/-
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

genes, como se verá en el Capítulo 28. Es importante DOLOR BILIAR


conocer su forma de comienzo (brusco o progresivo),
y si se inició con dolor (probable cálculo biliar en- Típicamente se localiza en el epigastrio y en el hipo-
clavado en el colédoco) o sin él (alteración paren- condrio derecho , y se irradia hacia la escápula dere-
quimatosa hepática o tumor de vías biliares o cabeza cha. Si es intenso, suele ir acompañado de náuseas y
de páncreas) . El prurito es un síntoma acompañante vómitos reflejos. Suele deberse a la impactación de
muy importante, pues indica obstrucción del flujo un cálculo (litiasis biliar) en el infundíbulo de la ve-
biliar (colestasis). La anamnesis acerca del color de sícula biliar.
las heces y de la orina es obligada en el paciente con
ictericia. Si es de origen hepatobiliar (por ictericia
obstructiva), irá acompañada con frecuencia de heces PÁNCREAS
hipopigmentadas (hipocólicas o acólicas) y orinas os- Salvo situaciones especiales, el páncreas , dada su
curas (colúricas). situación profunda en el abdomen (retroperitoneal),
origina una sintomatología poco específica. Sin em-
bargo, algunas manifestaciones nos orientan hacia la
HEMORRAGIA DIGESTIVA existencia de enfermedad en dicho órgano.
Es una complicación grave del enfermo hepatópata
y, en ocasiones , la forma de presentación de la enfer-
medad. Se debe en general a dilatación varicosa de
MALABSORCIÓN
colaterales venosas situadas en la unión esofagogás- Se necesita la destrucción de más del 90% de la glán-
trica. Sucede cuando la enfermedad hepática causa dula para que se produzca. La desnutrición y algunas
hipertensión portal. manifestaciones carenciales, junto a los cambios en
las características de las heces , son los hechos más
demostrativos.
ALTERACIONES NEUROPSIQUIÁTRICAS
En la evolución de las enfermedades hepáticas, o a DOLOR PANCREÁTICO
veces también como forma de presentación, pueden
aparecer alteraciones tales como una inversión del El dolor pancreático puede originarse por aumento de
ritmo sueño-vigilia, cambios de carácter, lenguaje la presión intraductal (conducto de Wirsung). Suele
lento y disártrico y aparición de temblor aleteante o ser intenso y constante, a menudo aumenta con las
asterixis, que corresponden a una situación clínica comidas grasas o con la ingesta de alcohol. No res-
denominada encefalopatía hepática. ponde a antiácidos , a diferencia de lo que sucede con
el dolor de origen gastroduodenal, y suele ser de loca-
lización epigástrica, irradiado a la espalda. A veces, y
ASCITIS Y EDEMAS de forma típica, se alivia al inclinarse hacia delante.
Otras veces , el dolor es de origen infiltrativo (proce-
La ascitis, o acumulación de líquido en la cavidad sos tumorales; menos veces en los inflamatorios). La
peritoneal , es un hallazgo frecuente, y también puede invasión en el retroperitoneo de los n ervios esplácnicos
ser la forma de presentación de una enfermedad he- y plexos simpáticos es la causa de este tipo de dolor.
pática; está tan1bién relacionada con la hipertensión
portal. El paciente lo refiere como un incremento, en
general lento y progresivo, del perímetro abdominal. OTROS SÍNTOMAS
Si la ascitis es muy voluminosa, puede ocasionar Las enfermedades pancreáticas pueden ocasionar as-
disnea por elevación del diafragma o por aparición citis, derrame pleural (característicamente en el lado
concomitante de un hidrotórax, más frecuentemente izquierdo) e ictericia por compresión del colédoco a
en el lado derecho, debido al paso de líquido ascí- su paso por la cabeza del páncreas, especialmente en
tico hacia el tórax a través de pequeños poros en el tumores de esta zona. Rara vez las enfermedades pan-
diafragma. En ocasiones existen edemas en las extre- creáticas causan hemorragias digestivas por hiperten-
midades, sin ascitis , dada la tendencia a la retención sión portal, debido a trombosis del sistema portal por
hidrosalina. contigüidad.

ASTENIA Y OTRAS MANIFESTACIONES MANIFESTACIONES ABDOMINALES


CONSTITUCIONALES GENERALES
La astenia, o sensación de fatiga o cansancio, es un Nos hemos referido hasta ahora a las manifestaciones
síntoma frecuente e inespecífico de enfermedad he- de las enfermedades digestivas, sistematizándolas se-
pática, y se acompaña a veces de hiporexia y dismi- gún el lugar del aparato digestivo en que se originan.
202
nución ponderal. Ello podría proporcionar la impresión de que tales
CAPITULO 21 Principales manifestaciones clínicas de las enfermedades digestivas

manifestaciones se presentan en clínica de forma fá- enfermedad ulcerosa, en la que el dolor dismi-
cilmente atribuible a uno u otro órgano abdominal, lo nuye con la ingesta, o con la pancreatitis crónica
cual a menudo no es cierto. A fin de completar el es- o la isquemia intestinal, en que aumenta (en este
tudio de la semiología digestiva, describiremos final- último caso se habla de «angina abdominal»).
mente a dos manifestaciones abdominales generales: Relación con el movimiento y con la tos: el dolor
el dolor abdominal y la dispepsia. de inflamación peritoneal aumenta con ambos,
cosa que no ocurre con el dolor visceral. De ahí
que el enfermo con peritonitis tienda a estar
DOLOR ABDOMINAL quieto, en contraste con el paciente con dolor de
Los nervios aferentes de las vísceras abdominales tipo cólico.
acompañan al sistema nervioso simpático y son los
encargados de transmitir el dolor visceral, que sue- DISPEPSIA
le referirse hacia la línea media, aunque como sen-
sación algo imprecisa en cuanto a características y a Etimológicamente significa digestión inadecuada, y
localización. El incremento de presión en el interior de hecho en la literatura médica anglosajona se usa
de una víscera hueca, su distensión o su contracción como sinónimo de «indigestión».
excesiva pueden ocasionar dolor de este tipo. Por otra parte, aunque la dispepsia puede tener
Si el estímulo causante del dolor aumenta o el tanto un origen orgánico como funcional, en la prác-
umbral doloroso disminuye, como sucede si hay in- tica tiende más a utilizarse en el segundo sentido, ya
flamación de la víscera, el dolor tiende a lateralizarse, que la dispepsia de origen orgánico suele designarse
denominándose entonces dolor referido, que está con el nombre de la entidad que la produce (úlcera
conducido por los nervios somáticos correspondien- duodenal, por ejemplo).
tes a las metámeras por donde ingresan los impulsos La dispepsia consiste en una sensación crónica,
vegetativos de una determinada víscera. Por ejemplo, persistente (más de 2 o 3 meses) o recurrente, de
el dolor biliar suele iniciarse en el epigastrio (línea malestar en el hemiabdomen superior, que puede
media), para después irradiarse, si se mantiene o se revestir la forma de auténtico dolor, de pirosis o
incrementa el estímulo, al hipocondrio derecho y a simplemente de distensión o pesadez, y que puede
escápula (lateralización). Si la afectación de la víscera ir acompañada o no de náuseas y eructos. El dolor,
alcanza al peritoneo, el dolor se define muy bien y habitualmente de localización epigástrica, puede o
origina además contractura refleja de la musculatura no modificarse con la ingesta de alimentos y de anti-
abdominal, que se detecta en la exploración del ab- ácidos. La sensación de pesadez suele ser postpran-
domen. Otro ejemplo típico es el dolor apendicular, dial, y con frecuencia reviste la forma de saciedad
que suele iniciarse en la región periumbilical, des- precoz. Hace pensar al enfermo que «no hace bien
plazándose a la fosa ilíaca derecha (lateralización) al las digestiones» o que lo que come «le sienta mal».
alcanzar la inflamación el peritoneo visceral y provo- Otras veces la interpretación del enfermo es que
cando finalmente contractura de la pared abdominal, tiene «demasiados gases», e intenta eructar para eli-
al irritarse el peritoneo parietal contiguo. minarlos. En ocasiones esta sensación corresponde a
la realidad, y efectivamente puede comprobarse que
En cuanto a la localización, en la patología gastro-
duodenal, biliar o pancreática el dolor suele referirse existe un exceso de gas en el estómago o el intesti-
no. Las náuseas varían en cuanto al momento de su
al hemiabdomen superior. El dolor periumbilical co-
rresponde en general a patología del intestino delgado. presentación. Unas veces son postprandiales, pero
otras tienen lugar antes de las comidas o incluso por
Por último, el dolor infraumbilical suele originarse en
el colon, el apéndice o los órganos pélvicos. la mañana, en ayunas.
Como ya se ha señalado, la dispepsia puede tener
Es de interés reseñar la relación del dolor con di-
un origen orgánico (es decir, estar causada por una
versas circunstancias:
enfermedad específica comprobable radiológica o
Con la postura: el dolor pancreático tiende a ali- endoscópicamente) o funcional (en caso contrario).
viarse al inclinarse hacia adelante. La mayor parte de las dispepsias orgánicas se debén
Carácter continuo o intermitente: el dolor con- a úlcera duodenal o gástrica o a cáncer de estóma-
tinuo es más propio de los procesos infiltrativos go. Con mucha menos frecuencia la producen otras
(tumorales o inflamatorios), y el intermitente o enfermedades (pancreatopatías, malabsorción). Las
cólico es frecuente en situaciones de aumento manifestaciones de las dispepsias orgánicas son más
intermitente de presión en una víscera hueca reproducibles y más definidas que las de las dispep-
(hiperperistaltismo de lucha ante una estenosis sias funcionales. Responden al estereotipo convencio-
intestinal, etc.). nal que hemos descrito antes para el dolor ulceroso,
Ritmo estacional: es típico de la enfermedad por ejemplo. En cambio, en la dispepsia funcional las
ulcerosa gastroduodenal. manifestaciones son más vagas, su relación con la in-
Relación cronológica con la ingesta: existen gesta o la medicación es menos convincente y varían
203
ritmos muy característicos, como sucede con la más de unas ocasiones a otras.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

labras (disartria) o lentitud en el lenguaje. Aparecen,


además, trastornos del comportamiento y, lo que es
más característico, el llamado temblor aleteante o as- Tabla Exploración abdominal
terixis, que consiste en sacudidas, qu e simulan clau- en el paciente con patología digestiva
dicaciones, sin ritmo, cuando se trata de mantener
una postura. Como mejor se comprueba es ordenando Inspección Distensión abdominal
al paciente que mantenga extendida la muñeca, con Meteorismo
los dedos igualmente extendidos y separados. Ascitis
Tumores y quistes
Comportamiento con la
CABEZA respiración
Peristaltismo visible
La presencia de signos carenciales en la boca, la len-
Red venosa superficial
gua y las comisuras bucales pueden hacer pensar, por
Cicatrices
ejemplo, en un cuadro de malabsorción. De la misma
forma, una afectación de pares craneales puede expli- Hernias
car una disfagia por afectación de los músculos de la Palpación Dolor abdominal
deglución. A veces, la ictericia o subictericia empieza Localización
a detectarse en la conjuntiva. La existencia de angio- Puntos dolorosos
mas o dilataciones vasculares en los labios o la muco- Signo de rebote (Blumberg)
sa bucal de un enfermo con hemorragia digestiva nos Maniobra de Carnet
hará pensar en las mismas lesiones en las mu cosas Defensa parietal
digestivas como origen de la hemorragia (p. ej., una
Masas abdominales
enfermedad de Rendu-Osler).
Comportamiento con la
respiración
CUELLO Contacto lumbar
Percusión Meteorismo
Las adenopatías pueden sugerir un proceso neoplá- Ascitis
sico de tipo linfoide con afectación digestiva, o bien
metástasis de un cáncer de esófago o incluso de vís- Auscultación Ruidos intestinales
ceras abdominales. Se describe clásicamente el gan- Soplos vasculares
glio de Troisier-Virch ow, en la fosa su praclavicular
izquierda, como signo de metástasis de una neopla-
sia digestiva ab dominal. En caso de ascitis, la exis-
tencia de ingurgitación yugular apuntará h acia un
origen cardiaco; su ausencia sugerirá hipertensión
portal o una enfermedad inflamatoria o neop lásica
peritoneal. ABDOMEN
La exploración del abdomen es la que más datos de
TÓRAX interés pu ede aportar en la evaluación de un paciente
con patología digestiva. (Tabla 22-2 ).
Una exploración cardiológica minuciosa nos ayuda a
diagnosticar, por ejemplo, una insuficiencia cardía-
ca que puede explicar una hepatomegalia de estasis. INSPECCIÓN
También se tendrá en cuenta que un derrame pleural, Distensión abdominal
sobre todo si es derech o, puede corresponder a hidro-
Puede estar producida por una acumulación de ga-
tórax, por retención hidrosalina en un enfermo he-
ses (meteorismo o flatulencia), líquido libre (ascitis)
patópata. En can1bio, algunas enfermedades pancreá-
(Fig. 22-1), o tumoraciones sólidas o quísticas. En
ticas pueden asociarse a derrame pleural izquierdo.
ocasiones, la obesidad puede dar la sensación de ab-
Ante un paciente con problemas de deglución, que
domen distendido.
presenta un cuadro de insuficiencia respiratoria y en
cuya exploración se detectan signos de consolidación
pulmonar, deberá pensarse en una neumonía por as- Movimientos respiratorios
piración. Normalmente, el abdomen se moviliza con la respi-
Una ginecomastia puede ser un signo de hiperes- ración. Lo contrario nos haría pensar en una contrac-
trogenismo y a veces se presenta en el contexto de tura de la musculatura parietal por algún proceso in-
una insuficiencia hepática crónica, como sucede en flamatorio subyacente peritoneal, que puede aparecer
206
la cirrosis. de forma difusa o localizada.
CAPÍTULO 22 Exploración física en la patología digestiva

Figura Ascitis. Abdomen distendido y presen-


cia de hernia umbilical que frecuentemente la acom-
paña a la asc itis.
Figura Circulación venosa superficial abdomi-
nal colateral en un paciente cirrótico con hipertensión
Peristaltismo visible portal.
Puede observarse en sujetos con pared abdominal
muy delgada. Si el peristaltismo es intenso y el pa-
ciente se queja de dolor y además se escuchan ruidos no precoz de ascitis , ya que las primeras cantidades
hidroaéreos (borborigmos) de carácter «metálico » es de líquido acumuladas tienden a escapar por zonas
muy sugestivo (sobre todo si sucede en forma de cri- débiles de la pared abdominal, y una de ellas es el
sis) de oclusión intestinal. ombligo. Sucede esto también en zonas de dehiscen-
cia de la capa muscular, en pacientes con cicatrices
Circulación colateral abdominal quirúrgicas, donde puede originarse una gran hernia ,
llamada laparocele (o eventración).
En los pacientes con enfermedad hepática e hiperten-
sión portal, la sangre portal deriva hacia otras áreas
tributarias del sistema cava. Ello ocasiona, alrededor PALPACIÓN
del ombligo y por la pared abdominal anterior, una
red venosa muy visible, en la que la dirección de la La palpación abdominal se encamina fundamental-
corriente sanguínea es umbilicofugal (a diferencia de mente a la búsqueda de tres signos:
lo que sucede en las obstrucciones de cava inferior,
donde la corriente es ascendente) (Fig. 22-2). Esto Dolor
puede demostrarse fácilmente exprimiendo una vena
entre dos dedos y liberando alternativamente uno y Puede aparecer con la palpación superficial del abdo-
men, en cuyo caso se sospechará una causa parietal,
otro dedo. Observando cómo se repleciona más rá-
pidamente la vena exprimida se puede saber la di- o con la palpación profunda, que hará pensar en un
rección del flujo . En ocasiones, la vena umbilical se proceso intraabdominal. En el primer caso el dolor
tiende a agravarse al elevar la cabeza y separarla de
repermeabiliza de tal manera al aumentar la presión
portal, que las venas periumbilicales aparecen muy la camilla de exploración, y lo contrario sucede si el
origen del dolor es intraabdominal (maniobra de Car-
prominentes y varicosas (lo que se denomina cabe-
net). Existen algunos puntos abdominales de interés
za de medusa) , a veces con soplo venoso perceptible
a la auscultación de la zona umbilical (síndrome de en la exploración, como el punto cístico (intersección
de la línea medioclavicular con el reborde costal de-
Cruveilhier-Baumgarten) .
recho), el apendicular (unión del tercio externo con
los dos tercios internos de la línea que une el ombligo
Cicatrices quirúrgicas y hernias con la espina ilíaca derecha), etc.
Pueden tener interés como posible causa de obstruc- El llamado dolor de rebote (signo de Blumberg) es
ción intestinal. En efecto, las intervenciones quirúr- indicativo, en general, de irritación peritoneal. A ve-
gicas pueden causar adherencias o bridas donde las ces la exploración de este signo produce intenso do-
asas pueden acodarse, sufrir torsión y obstruirse, al lor y defensa muscular, que dificulta la subsiguiente
igual que ocurre con las hernias. palpación. Una percusión suave del abdomen puede
Además, la aparición de una protuberancia hernia- desencadenar dolor, aunque mucho menos intenso, y
207
ria en el ombligo (hernia umbilical) puede ser un sig- tiene el mismo valor semiológico.
Semiolog ía y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Defensa muscular inguinal, etc.), que conviene explorar haciendo que


Puede ser voluntaria, en cuyo caso cede casi siempre el paciente fuerce la prensa abdominal (por ejemplo,
cuando se distrae y tranquiliza al enfermo. Si no es tosiendo) . En caso de retención gástrica por esteno-
voluntaria, indica inflamación de la serosa perito- sis pilórica o trastornos funcionales del vaciamiento
neal. Puede ser difusa, como en las peritonitis gene- gástrico, podemos detectar, al presionar y soltar re-
ralizadas (por ejemplo, en perforaciones de vísceras petidamente, un ruido de tipo hidroaéreo, lo que se
huecas), ocasionando el llamado vientre de tabla, o denomina signo del bazuqueo gástrico.
localizada sobre la víscera que tiene afectada su sero-
sa. Suele ir acompañada de dolor con la palpación y
signo de Blumberg. PERCUSIÓN
La percusión del abdomen normalmente pone de ma-
Masas abdom inales nifiesto zonas de sonoridad diversa. Así, por ejemplo,
Si el abdomen no está a tensión (como a veces sucede el hipocondrio izquierdo suele presentar timpanismo,
si existe gran meteorismo, ascitis masiva o grandes al ser la zona donde se acumulan más gases (cámara
masas sólidas o quísticas) ni la pared abdominal pre- gástrica y ángulo esplénico del colon). Por percusión
senta contractura voluntaria o refleja, se pueden apre- podemos detectar varias situaciones patológicas:
ciar formaciones abdominales que muchas veces son
normales, pero que otras obedecen a masas tumorales, Meteorismo
plastrones (asas apelotonadas por procesos infiltrati- Produce un sonido timpánico, más o menos generali-
vos -inflamatorios, cicatriza o tumorales- que afectan zado, que puede obedecer a los motivos ya apuntados
a las asas y el mesenterio) o vísceras aumentadas de en el capítulo anterior o a cuadros de parálisis u obs-
tamaño (hepatomegalia, esplenomegalia, etc.). En trucción intestinal. Un signo de perforación de vísce-
ocasiones, la masa palpada representa materia fecal, y ra hueca es la desaparición de la matidez hepática, al
cambia de un día para otro o desaparece con un ene- acumularse aire intraperitoneal en esta zona.
ma. A veces, se palpa el sigma contraido atravesando
en diagonal la fosa ilíaca izquierda, en ocasiones algo
dolorosa. Este signo de la cuerda cólica es muy típico Líquido libre (ascitis)
del colon espástico, pero también pue- Con el paciente en decúbito, se detecta
de corresponder a un proceso in- matidez en los flancos, que cambia
flamatorio sigmoideo, en cuyo con la postura. También pue-
caso suele despertar dolor de detectarse el signo de la
más intenso. oleada ascítica (por palpa-
Por último, siempre ción-percusión combina-
que se palpe una masa das). En bipedestación,
en el abdomen habrá el líquido desplazado
que precisar su locali- hacia la parte inferior
zación, forma, tamaño del abdomen hace que
aproximado y consis- la matidez sea de dispo-
tencia, así como tam - sición horizontal, algo
bién si está adherida más elevada en los flan-
a planos superficiales cos, por tendencia del
o profundos, si su pal- líquido a ascender por
pación despierta dolor las fosas parietocólicas
más o menos intenso, debido a la aspiración
si se moviliza con la que ocasiona el diafrag-
respiración (localiza- ma (signo del menisco).
ción intraperitoneal) o En el caso de un gran
si tiene contacto lum- quiste de ovario que
bar (retroperitoneal). ocupe todo el abdomen,
las asas se desplazan a
los flancos, lo que se
Otros hallazgos detecta por percusión,
Al palpar el abdomen al contrario de lo que
se pueden detectar ocurre en la ascitis: es
pequeños abultamien- decir, matidez en el
tos (hernias) en orifi- centro y timpanismo en
cios herniarios natura- los flancos, sin apenas
208
les (ombligo, conducto cambios con la postura.
CAPITULO 22 Exploración física en la patología digestiva

AUSCULTACIÓN descendido, palpable por debajo del reborde costal,


que no significa hepatomegalia. Lo mismo puede de-
Se pueden percibir los ruidos peristálticos, que cirse de procesos patológicos subfrénicos derechos,
aumentan inicialmente en los procesos obstructivos que gravitan sobre el hígado y lo hacen descender,
intestinales y se acompañan de dolor cólico, para fi- dando la sensación de hepatomegalia.
nalmente desaparecer por agotamiento del músculo La palpación hepática, además de precisar el ta-
intestinal, dando lugar a ruidos esporádicos de tono maño, permite conocer la consistencia, la forma y,
agudo que se producen por movimiento de líquidos y si la pared abdominal lo permite, las características
gases en las asas distendidas. Un incremento de rui- de la superficie hepática (lisa o nodular). Además, es
dos intestinales sin dolor puede suceder en personas importante especificar si la palpación hepática es o no
nerviosas , o en una hemorragia digestiva alta , mien- dolorosa. En ocasiones no es posible la palpación, por
tras persista contenido hemático en intestino delga- ejemplo, si el abdomen está muy distentido o en pa-
do. El llamado silencio abdominal es muy típico de cientes con musculatura abdominal muy desarrolla-
la peritonitis generalizada, donde existe una parálisis da. Si la distensión se debe a acumulación de ascitis,
intestinal completa. se puede buscar el signo del témpano: tras aplicar un
La auscultación permite igualmente detectar soplos impulso en dirección dorsal a nivel del hipocondrio
venosos, por ejemplo, en el caso de hipertensión por- derecho , la mano percibe un choque cuando el hígado
tal con vena umbilical permeable, o a nivel hepático vuelve a la posición inicial, al flotar en el líquido.
en ciertos procesos inflamatorios o tumorales. Tam- Al palpar el hígado conviene observar las yugu-
bién pueden detectarse soplos arteriales al auscultar lares, ya que un signo muy típico de hepatomegalia
el abdomen, por ejemplo en caso de estenosis de la congestiva de origen cardíaco es el llamado reflejo
arteria renal, aneurisma aórtico, etc. hepatoyugular: la presión sobre un hígado congestivo
produce o incrementa la ingurgitación yugular.
La percusión hepática es útil , pero menos que
EXPLORACIÓN FÍSICA DEL HÍGADO la palpación. Puede estar muy distorsionada por la
Y LA VESÍCULA BILIAR (Tabla 22-3) existencia de meteorismo o ascitis. A veces , el ángulo
hepático del colon se interpone entre el hígado y la
En condiciones normales, y en decúbito supino, el hí- pared costal, originando timpanismo, en lugar de la
gado se sitúa debajo de la parrilla costal. No obstante, matidez normal en el hipocondrio derecho (síndrome
la palpación del borde hepático 1 o 2 cm por debajo de Chilaiditi); en la perforación de víscera hueca pue-
del reborde costal puede ser normal. Es importante de desaparecer la matidez hepática.
también percutir la matidez hepática para establecer La auscultación de la zona hepática puede poner de
su límite superior. Por término medio se sitúa hacia manifiesto un soplo venoso, como ya se ha indicado.
la quinta costilla, a nivel de la línea medioclavicular, En cuanto a la exploración de la vesícula biliar,
pero puede estar situado más abajo, sobre todo en su- cuando hay un proceso inflamatorio de esta víscera,
jetos de hábito asténico, lo que daría lugar a un hígado es muy frecuente percibir dolor al palpar el punto
cístico, que a veces sólo se detecta invitando al pa-
ciente a realizar una inspiración profunda mientras la
mano del explorador hace presión en ella. El descenso
Tabla Exploración física inspiratorio del hígado hace que entre este y la mano
se comprima la vesícula, lo que desencadena dolor,
del hígado, vesícula biliar y bazo que hace al enfermo detener la respiración (signo de
Hígado Palpación Tamaño Mwphy).
Forma En un paciente ictérico, la vesícula puede palparse
Superficie como un globo elástico, no doloroso , que se moviliza
con la respiración. Ello sugiere una obstrucción del
Consistencia
colédoco , generalmente neoplásica, que provoca la
Signo del témpano
dilatación de una vesícula de pared sana y, por tan-
Reflujo hepatoyugular to , distensible. Este hallazgo se denomina signo de
Percusión Matidez (tamaño) Courvoisier-Terrier.
Auscultación Soplos
Vesícula Palpación Punto cístico
biliar Maniobra de Murphy EXPLORACIÓN FÍSICA DEL BAZO
Signo de Courvoisier
En la exploración abdominal, y sobre todo en el pa-
Bazo Palpación/ Esplenomegalia ciente con patología hepática, la palpación y percu-
percusión sión del bazo es fundamental, ya que en las enferme-
dades hepáticas con hipertensión portal es frecuente
209
detectar esplenomegalia congestiva.
-123
Técnicas diagnósticas
en la patología del aparato
digestivo
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

TUBO DIGESTIVO
Existen dos tipos de técnicas para el estudio de las en-
fermedades del tubo digestivo: Unas permiten obser-
var lesiones; otras aportan datos acerca de la función
motora o secretora del tracto esofagogastrointestinal.

TÉCNICAS DE VISUALIZACIÓN O DE IMAGEN


Las fundamentales son la radiología, la endoscopia y
la anatomía patológica.

Radiología
La radiología simple de abdomen, es decir, sin con-
traste, es útil para estudiar la distribución del aire en
el tubo digestivo o su escape a la cavidad peritoneal
en caso de perforación de una víscera (neumoperi-
toneo), y en la visualización de niveles hidroaéreos,
que muchas veces indican obstrucción intestinal.
La administración de un contraste radiológico (ba-
rio) por vía oral para explorar el esófago, el estómago
y el intestino delgado, o por medio de un enema
para explorar el colon (enema opaco), es la técnica
clásica de visualización del tubo digestivo. Permi-
te estudiar lesiones de la pared del tubo digestivo,
las compresiones extrínsecas, los cuerpos extraños
intraluminales, divertículos, etc. (Figs . 23 -1 , 23 -2
y 23-3) . En cuanto a la función, puede utilizarse,
por ejemplo, para evaluar la velocidad de tránsito
intestinal o de vaciamiento gástrico, pero al ser el
contraste un líquido, no reproduce exactamente las
condiciones fisiológicas . Pueden administrarse
también marcadores radiopacos, por ejemp lo
para determinar el tiempo de tránsito cólico en
el estudio del estreñimiento.

Endoscopia
Desde la introducción de los
endoscopios flexibles, cuya
210 nitidez de imagen es prác-
CAPITULO 23 Técnicas diagnósticas en la patología del aparato digestivo

Figura Radiología con contraste baritado de


estómago y duodeno normal.

Figura Enema opaco que muestra divertículos


ticamente perfecta, y sobre todo con los videoendos-
en el co lon sigmoide (flechas) .
copios, esta técnica ocupa el primer lugar en el diag-
nóstico de las enfermedades del tubo digestivo. Per-
mite visualizar directamente la lesión y, en el supuesto
de hemorragia digestiva, localizar su origen enlama- segunda porción del duodeno (gastroscopia), o por vía
yor parte de los casos. Puede realizarse por vía oral rectal para observar el recto y el colon (colonoscopia)
para observar el esófago, el estómago y la primera y (Fig. 23-4). Además, a través del endoscopio se reco-
gen muestras para el estudio anatomopatológico, una
vez visualizada la lesión. La endoscopia tiene aplica-
ciones terapéuticas muy importantes, que evitan los
riesgos de las intervenciones quirúrgicas, como por
ejemplo la extirpación de pólipos, la hemostasia de

Figura Tránsito baritado normal de intestino Figura Colonoscopia que muestra divertículos
211
delgado. en el colon.
Semiología y fisio patología de aparatos y sistemas: apa rato digestivo

hemorragias mediante administración local de fár- Estudio de la motilidad


macos vasoconstrictores o esclerosantes, aplicación Puede realizarse mediante radiología con contraste
de láser, etc. baritado, pero ya se h an indicado las limitaciones
La cápsula endoscópica se usa sobre todo para va- que esta técnica tiene para estudios funcionales .
lorar lesiones en el intestino delgado no accesibles al
endoscopio. La manometría es una técnica de motilidad di-
gestiva muy útil, que permite registrar las pre-
Biopsia siones intraluminales y suele hacerse de forma
Consiste en la extracción de una muestra de tejido simultánea en varios segmentos de un tramo del
para su estudio mo1fológico, a veces histoquímico tub o digestivo , para estudiar la coordinación
(para detectar, por ejemplo, déficit de enzimas del motora. Se lleva a cabo mediante el empleo de
epitelio intestinal) o ultraestructural. Para obtener las sondas con transductores , que transforman los
muestras se emplea la endoscopia, que puede llegar cambios de presión en señales eléctricas que se
hasta la tercera porción del duodeno, para el estudio registran y se inscriben.
sobre todo de las enfermedades que causan malabsor- La manometría se aplica al estudio de los
ción (p. ej; celiaquia). En algún caso se puede extraer trastornos motores del esófago y de la zona ano-
la muestra mediante la biopsia yeyuno] perora] con rrectal, es decir, de las porciones accesibles del
una cápsula especial. tubo digestivo.
.En el esófago, que es la zona que con mayor
frecuencia se explora mediante manometría, se
colocan los transductores en los tercios superior,
PRUEBAS FUNCIONALES medio e inferior del esófago , así como en los
Podemos clasificarlas en tres grupos : las que estu- esfínteres cricofaríngeo y esofágico inferior. De
dian la función motora, las que estudian la función esta forma pueden registrarse simultáneamente
secretora y, finalmente , las de absorción. Estas últi- los cambios de presión en todas estas regiones
mas se detallan en el capítulo correspondiente, por del esófago durante determinadas maniobras.
lo que aquí se expondrán solo las dos primeras (Tabla Por ej emplo , durante la deglución puede ob-
23 -1 ). servarse la relajación momentánea de ambos
esfínteres y la aparición de ondas de presión
sucesivas (y no simultáneas, como ocurre en al-
gunas situaciones patológicas) en las tres zonas
exploradas del cuerpo del esófago (Fig. 23 -5).
La manometría es muy eficaz para diagnosticar
Tabla Pruebas funcionales ciertas enfermedades esofágicas, tales como la
del tubo digestivo acalasia o el espasmo esofágico difuso, así como

Motilidad
Radiología
Manometría
Esofágica
- - - - - - -o mm Hg
Anorrectal
Isótopos
Vaciamiento gástrico Esófago
- - - - - - - -o
Aclaramiento esofágico (1/3 superiorf - -

Electrofisiología
Secreción Esófago
(1/3 medi o)
_}J _____ o
Secreción ácida gástrica
BAO
MAO
Relación BAO/MAO
Esófago
(1/3 inferi o r)
__/l ___ o

Test de Hollander Esfínter


pHmetría esofágica esofágico - -o
Pepsinógeno en suero
in ferior
t
D eglución
Gastrinemia
Figura Manometría esofágica. Reg istro normal
212
tras una degl ución.
CAPÍTULO 23 Técnicas diagnósticas en la patología del aparato digestivo

ciertas alteraciones motoras anorrectales. entre dades gastrocluodenales. Sin embargo, sigue estando
ellas la enfermedad de Hírschprung o megaco- indicada en algunos caso:;, como ul de tumores se-
lon congénito. cretorns ele gastrina o gastrinomas (síndrome de Zo-
Tiene interés una técnica que valora la compe- llínger-Ellison), y quizá en la comprobación de una
tencia do! esfínter esofágico inferior en caso de aclorhidria o para valorar si una vagotomía quirúrgica
reflujo gastroesofúgico. Se trata de la pHmetría ha sido o no eficaz.
esofágica. que consiste en colocar un electrodo Median te sonda jn nasogástric:o. se aspira cada 15
medidor de pH unos 5 cm por encima del esfín- minutos. durante una hora. el contenido gástrico. se
ter esofágico inforior (de ahí que deba realizarse miele el volumen v se determina la concentración do
a sm posible en conjunción con una manonrn- C]H en cada mLw;tra. La suma de la cantidad de ClH
lría esofágica). Se registran así los cambios de segregado en las cuatro munstras nos dará. en mEqí
pH en el tercio inferior del esófago en relación hora, la secreción 6cida hasal (BAO, huso] w:id out-
con diversas posturas, movimientos respirato- put).
rios. etc. A continuaci(ín sfi rnaliza la nstimulaci(m con pen-
Si el pH desciendH de forma pnrsistente por tagastrinu. que es un pépticlo sintético que comprencfo
dnbajo de 4. olio es muy indicativo de qtw existe Hl tetrapéptíclo C-teminal do la gastrina original. In-
rnflujo gaslrcrnsofúgic:o. La pHmeiría esof'ágicu nrndialamonlu so continúa la rncogida de jugo gústrico
se está utilizando mucho nn registros do 24 ho- durante otros cuatro periodos do 15 minutos. obte-
ras. en régimen ambulatorio. Cada 4 segundos niondo así la secreción fü:ida máxima (MAO, nwxinwl
se registran las variacimws de pH nn relación w:irl outpul).
con las divorsas ac:lividndes cotidianas del La relación BAO/Jv[AO puede toner interés en al-
pacienln (comer. acostarse, lnvantarsu, pasear. gunos c:asus, ¡mos si ns superior D 0.6 indica que. en
etc.) o con la aparición do síntomas (pirnsís. condiciones basulus. adormís del tono vaga! nornwl
clolor. utc.). existo otro estímulo do la sncrnción ,ícida c¡uo !mee
Existen otras lcíc:nícas que evalúan trastornos c¡uH la B1\() se apruxinrn a la MJ\O. !~sin situación fJS
rnotoros del estómago. como por ejemplo alte- baslanlo caractorística do los casos quu cursan con
raciones del vaciamiento, em plnando alimentos hipe1gw;/rinemin, como sucede on Hl sindronw ele
rnarcmlos con isótopos y observando por gam- Zollinger-Ellison (goslrínoma).
magrafía y rccuontu ol tiumpo de desaparición Para evaluar la eficaciu do la vagotomía, so ha uti-
do la radiactividad güslríca. Tmnbión p1wde lizado Jn prunlrn de ("stirnnlación nrndiante hipoglu-
utilizarse esta tócnica para nvuluar el reflujo gas- cemia indtrc:ida por la administración subculfürna de
troesofügico. obsernmdo cómo la rucliactividad 0,2 U/kg rlo peso de insulina (prueba de Hollm1der),
invado la zona correspondiente al esófago. En ya quu la hipoglucemia es un Bstímulo ele la secreción
este caso es intnrnsantH evaluar el tiempo que gústrica a travós del vago. Se considorn quo la vagoto-
tarda el isótopo regurgitado en ser dev110lto mw- mfa lw sido incompleta sí un las dos horas siguientes
vamcmtn al estómago, lo que se denomina tiempo al Hstímulo. la concentración de úcido supera en más
rle nclommíenlo esofrígir:o. de 20 mEq/l los valores basales. o es de 10 mEq/1 si no
En cuanto a los trastornos del vaciamiento nxiste Clll detectabln basal.
gústrico (por ejemplo, on la Dstcnosis pi l6ri-
ca, quo ocasiona el consiguiente rntraso en la Pepsínógeno
evacuación). puede emplearse una pruelrn muy El cimi';geno Sl)<:rntadn por las c6lulas principales de
sencilla. no isotópica. que consiste en admi- las glándulas fúndic:as (pepsinógeno I, para diforen-
nistrar una sobrecarga oral de suoro fisiológico ciarlo del pepsinógeno Il, quu es secrntado por toda la
(7;'i0 mi) a través de una sonda nasogástrica: u mucosa gástrica e incluso por la duodenal), se detecta
los 30 minutos se aspira: la recuperación ele un en la saugre y se elimina por la orina. En el suero
volumen superior a 400 mi sugiere rutención puede determinarse por mdioinmunoancilisis o en-
gástrica. zimoinmunoanálisis, y parece guardar una rnlación
estrecha con la !YL\O estimulada con pentagastrina (a
Estudio de la secreción pesar de que el ClH :,.: el pepsinógeno sean secretados
En este capítulo nos limitamos a la secreción gástri- por diforenles células).
ca. Para las secreciones pancreática y biliar nos remi- Gastrina
tirnos al Capítulo 27.
Es típico el aumento de la gastrinemia tras la adminis-
tración de secretina en el síndrome de Zollínger-Elli-
Secreción gástrica de CIH son. La elevación basal de gastrína es característica dn
Su duturminación tiene en la actualidad escasas in- algunos tipos de gastritis aclorhídricas. al no existir la
dicaciones. ya que la endoscopia y la biopsia gástrica inhibición normal que ejerce el ácido sobre las célu-
213
permiten diagnosticar la mavor parte ele las enforme- las G del antro.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

HÍGADO, VÍAS BILIARES Y PÁNCREAS


Tabla Técnicas de imagen Se distinguen también técnicas de visualización o
en patología del hígado, vías biliares imagen y pruebas funcionales (Tablas 23-2 y 23-3).
y páncreas
Ecografía
TÉCNICAS DE VISUALIZACIÓN O DE IMAGEN
En el estudio del hígado y páncreas, la radiología
Tomografía axial computarizada (TAC)
convencional no tiene más objetivo que observar en
Resonancia magnética (RM) la radiografía simple de abdomen calcificaciones pan-
Colangiopancreatografía retrógrada creáticas o cálculos biliares radiopacos. La colecisto-
endoscópica (CPRE) grafía con contraste oral o intravenoso para poder ver
la vesícula biliar o el colédoco ha sido desplazada por
Colangiopancreatografía por RM técnicas más actuales. En este sentido, las técnicas
Arteriografía selectiva (tronco celíaco) con ultrasonidos (ecografía) (Figs. 23-6 y 23-7) son
quizá las de primera elección en el diagnóstico de
Angio-TAC
algunas enfermedades hepatobiliares; por ejemplo,
Gastroscopia (valoración de hipertensión portal) para detectar cálculos en vesícula, dilatación de vías
Laparoscopia
Biopsia hepática
Gammagrafía con isótopos Tabla Pruebas de función
hepática
Citólisis
Transaminasas: GPT (ALT) y GOT (AST)
Fe, ferritina
Colestasis
Bilirrubina conjugada o directa
Fosfatasa alcalina
Gammaglutamil transpeptidasa

Insuficiencia hepática
Síntesis proteica
Albúmina
Tiempo de protrombina
Eliminación
Bilirrubina
Bromosulftaleína
Verde indocianina
Metabolismo hidrocarbonado
Glucemia
Tolerancia a la galactosa
Metabolismo nitrogenado
Amonio en sangre venosa
Ácidos biliares séricos (determinación basal y
posprandial)
Hipertensión portal
Parámetros biológicos
Gammaglobulinas
Plaquetas y leucocitos (hiperesplenismo)
Estudio hemodinámico
CAPITULO 23 Técnicas diagnósticas en la patología del aparato digestivo

Figura Ecografía abdominal normal. H: híga-


do. R: riñón derecho.

biliares, tumores o quistes, o en el estudio de la hiper- Figura Cortes de TC con contraste en las que
tensión portal. se han numerado los segmentos hepáticos. El plano
La tomografía computarizada (TC) o la reso- del ligamento falciforme separa los segmentos medial
nancia magnética (RM) son técnicas muy valiosas (segmento 4) y lateral (segmentos 2 y 3). No se muestra
y complementan la ecografía (Figs. 23-8 y 23-9). el segmento 3.
Para observar las vías biliares y los conductos
pancreáticos se procede a la canulación de la papila
mayor del duodeno a través de un endoscopio, inyec- La arteriografía selectiva puede estar indicada para
tando contraste de forma retrógrada, lo que se deno- la valoración preoperatoria de la vascularización de
mina colangiopancreatografía retrógrada endoscó- algunos tumores (hígado, páncreas).
pica (CPRE) (Fig. 23-10). Con esta misma técnica se El sistema venoso portal también puede contem-
pueden realizar maniobras terapéuticas, tales como plarse a través de una arteriografía selectiva del
la extracción de cálculos alojados en el colédoco, la
colocación de drenajes biliares, etc. La colangiografía
por RM puede ser de gran utilidad diagnóstica y no
es invasiva.

Figura TC con contraste que muestra una gran


Figura Ecografía, que muestra un cálcu lo biliar masa quística hipodensa en el hígado con quistes peri-
en vesícula (flecha ), con la típica sombra acústica pos- féricos hijos de menor atenuación. Estos hallazgos son
215
terior. patognomónicas de quiste hidatídico.
Sem iología y fi siopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

la determinación en el suero de enzimas pancreáticas


(amilasa y lipasa, sobre todo) es una prueba de gran
utilidad para el diagnóstico d la pancreatitis aguda,
donde las enzimas pancreáticas pasan en grandes
cantidades a la cavidad peritoneal por la autodiges -
tión de la glándula, y de ahí a la circulación.
Nos ocuparemos aquí, pues, exclusivamente de las
llamadas pruebas de función hepática, que pueden
dividirse en los siguientes grupos (Tabla 23-3):

Citó lisis
La citólisis hepática, es decir la lesión y sobre todo
la necrosis de los hepatocitos, libera a la circulación
una serie de enzimas, de las cuales las transaminasas
glutámico-oxalacética (GOT) o aspartato-aminotrans-
ferasa (AST) y glutamicopirúvica (GPT) o alanina-
aminotransferasa (ALT) son las más utilizadas. La GPT
es mucho más específica del hígado que la GOT, que
también se encuentra en el músculo cardiaco y esque-
lético, por ejemplo. La GPT se libera más fácilmente
que la GOT, ya que la primera se encuentra en el cito-
sol, mientras que la GOT es preferentemente intrami-
tocondrial y tiende a aumentar notablemente cuando
el agente etiológico que genera la lesión hepática pro-
duce lesión rnitocondrial, como sucede con el etanol.
Dada la riqueza en hierro y ferritina que tiene el
Figura Colangiopancreatografía retrógrada parénquima hepático, una hipersideremia y un incre-
endoscópica (C PRE) normal. mento de los niveles de ferritina en suero representan
también marcadores de citólisis h epática.

tronco celíaco (portografía de retorno), o inyectando Colestasis


contraste en la propia vena porta, a la que puede Se denomina así la disminución de la capacidad hepá-
llegarse por vía transhepática o repermeabilizando la tica para la secreción biliar. Frecuentemente se retiene
vena umbilical con un catéter, y actualmente median- en la sangre bilirrubina conjugada o directa, así como
te angio-TAC, que no es invasiva y ofrece imágenes deteminadas enzimas, de las cuales la más representa-
muy precisas. La hipertensión portal puede valorarse tiva es la fosfatasa alcalina, que se localiza en la mem-
mediante la detección de varices esofagogástricas brana canalicular y aumenta su síntesis en la colesta-
(dilatación de las comunicaciones portocava a nivel sis. Para diferenciar el origen de la fosfatasa alcalina
del cardias), mediante endoscopia. es útil la determinación de sus isoenzimas (sobre todo
La biopsia es una exploración obligada para llegar ósea y hepática) La gamma-glutamiltranspeptidasa
al diagnóstico de determinadas enfermedades del (gamma-GT] también es un marcador de colestasis.
hígado . La punción-biopsia con aguja fina del pán- Si ambos enzimas están elevados es un dato práctica-
creas percutánea con control de TAC o bien mediante mente concluyente de la existencia de colestasis.
ecoendoscopia, está indicada en el diagnóstico de También se encuentra frecuentemente elevado el
procesos inflamatorios y tumorales de la glándula.
colesterol sérico.
La laparoscopia es una exploración que visuali-
za directamente la cavidad peritoneal. Es útil para INSUFICIENCIA O FALLO HEPÁTICO
observar la superficie hepática y puede servir de
guía para obtener muestras para biopsia hepática o Puede detectarse a través de las siguientes pruebas:
peritoneal.
Síntesis proteica. La prueba más sencilla y rápi-
da para detectar un fallo hepático es el tiempo
PRUEBAS FUNCIONALES de protrombina, ya que la corta hemivida de los
factores de la coagulación permite detectar un
Las pruebas de función pancreática, concretamente descenso horas después de iniciarse aquel. La
las que se refieren a la función secretora, se describi- albúmina sérica es también un parámetro que
216
rán en el capítulo 27. Aquí sólo cabe mencionar que permite valorar la síntesis proteica en el hígado,
CAPÍTULO 23 Técnicas diagnósticas en la patología del aparato digestivo

pero su hemivida (de 15 a 20 días), y el hecho Función microsomal. Puede medirse con la prue-
de que su determinación se vea afectada por fac- ba de la aminopirina-C14, que se absorbe con
tores tales como la hemodilución o la hemocon- rapidez y es metabolizada casi exclusivamente
centración, hacen que no sea tan fiel reflejo de la en el hígado, sin metabolismo extrahepático,
capacidad hepática para la síntesis de proteínas eliminándose CO 2 , marcado en el aire espirado,
como puede ser la determinación de los factores que es lo que se mide en la prueba.
de la coagulación .
Eliminación de pigmentos y colorantes . El pig-
mento biliar o bilirrubina tiende a elevarse en Hipertensión portal
la insuficiencia hepática, como prueba de la Además de las técnicas de imagen mencionadas al
incapacidad del hígado para su eliminación, hablar de las técnicas de visualización, hay algunas
captación o ambas. pruebas que sirven para detectar la existencia de
La eliminación de colorantes, como la bro- hipertensión portal, generalmente en el contexto de
mosulftaleína (BSF) o el verde indocianina, se una enfermedad hepática crónica.
ha empleado con frecuencia como prueba de
función hepatocelular. El verde indocianina, Parámetros biológicos. En la hipertensión portal
a diferencia de la BSF, tiene la ventaja de que se abren una serie de colaterales que derivan la san-
no se conjuga y se elimina como tal por la bilis; gre portal hacia la circulación sistémica, eludiendo
además, no experimenta circu- el paso a través del hígado .
lación enterohepática, ni Los antígenos de ori-
causa reacciones anafi- gen intestinal no son
lácticas, como las descri- filtrados a través de la
tas con la BSF. Además, red de células de Ku-
su determinación es más pffer (que secuestran
sencilla y fiable. normalmente estos
Metabolismo hidrocar- antígenos, sin pre-
bonado . La prueba de sentarlos a las células
tolerancia a la galactosa inmunocompetentes),
determina la curva de sino que pasan a la
desaparición de este circulación sistémica,
monosacárido, que es ex- con la consiguiente
traído por el hígado para estimulación del sis-
la glucogénesis, tras su tema inmunológico e
administración por vía incremento policlonal
intravenosa (0,35 g/kg de las gammaglobuli-
de peso) . También puede nas. Aunque no exista
realizarse esta prueba hipertensión portal,
como un test del aliento, una pérdida de la
marcando la galactosa función de las célu-
con C14 y determinando las de Kupffer ya es
la radiactividad en el suficiente para condi-
aliento por el CO 2 mar- cionar hipergammag-
cado, como producto del lobulinemia por este
metabolismo de la galac- mecanismo. A menudo
tosa. se detecta también una
Metabolismo nitrogenado. La capacidad del hí- disminución de los elementos formes de la sangre,
gado para transformar el amonio en urea puede especialmente trombocitopenia por secuestro esplé-
alterarse en la insuficiencia hepatocelular, con nico, al existir en muchas ocasiones hiperesplenismo
la correspondiente elevación plasmática de los a causa de congestión esplénica por la hipertensión
niveles de amonio. portal.
Ácidos biliares. La determinación basal de áci- Estudio hemodinámico portal. La presión portal
dos biliares, de los cuales entre un 70 % y un 90 % puede medirse introduciendo un catéter por la
son extraídos por el hígado en un único paso, da suprahepática, enclavándolo y midiendo enton-
una idea bastante aproximada de la función del ces la llamada presión suprahepática enclavada.
parénquima hepático. Para sensibilizar la prue- Si desenclavamos el catéter, medimos la llamada
ba, se propuso realizar la determinación basal y presión suprahepática libre. La diferencia o gra-
posprandial; es decir, después de producir una diente entre ambas mide la presión sinusoidal,
sobrecarga de la circulación enterohepática de prácticamente equivalente a la presión portal
ácidos biliares tras una comida. (2 -5 mm.Hg).
-l24
Patología general
del esófago
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

FUNCIONES DEL ESÓFAGO


Desde el punto de vista anatómico, el esófago está
constituido por una capa mucosa de epitelio escamo-
so y una capa muscular que tiene zonas que ejercen
funciones de esfínteres: el esfínter esofágico superior,
constituido por el músculo cricofaríngeo, y el infe-
rior, o cardias, cuya alteración es fuente frecuente de
patología. Ambos se relajan inmediatamente antes de
que el bolo alimenticio los atraviese.
Simplificando, se puede considerar que las fun-
ciones esofágicas son dos: a) deglución (transporte),
y b) contención del contenido gástrico, evitando su
retroceso.

DEGLUCIÓN
La deglución es un proceso que implica complejas
secuencias de contracciones musculares. Se divide
en tres fases :
Fase oral. En ella el bolo alimenticio pasa des-
de la boca a la faringe. Es de inicio voluntario
(elevación de la lengua que empuja el bolo).
Participan en ella algunos músculos faciales , la
lengua y el velo del paladar, y está implicado
fundamentalmente el nervio hipogloso.
Fase faríngea. Es una fase automática e involun-
taria. El bolo alimenticio pasa por una encruci-
jada desde el istmo posterior de las fauces hasta
el esófago. En dicha encrucijada el bolo puede
dirigirse a las fosas nasales, volver a la boca,
ser aspirado a las vías respiratorias o pasar al
esófago. Para que tome el camino adecuado,
se precisa una secuencia compleja y coor-
dinada de actos motores reflejos, que
se inician cuando el bolo alcanza
el istmo de las fauces. Hay un
centro reflejo que coordi-
na los movimientos de
propulsión, situado en
218
el suelo del cuarto
CAPÍTULO 24 Patología general del esófago

ventrículo. Los nervios vago y glosofaríngeo son


las vías aferentes , y los mismos nervios más el
hipogloso , las eferentes. Tabla Factores y circunstancias
Los movimientos consisten en una elevación que influyen sobre el tono del esfínter
de la laringe hacia arriba y hacia delante, con lo esofágico inferior
que se ocluye el brocal laríngeo u orificio larín-
geo superior (se aprecia un ascenso del cartílago In crementan
tiroides al tragar); una elevación del velo del
paladar, que ocluye el paso de las coanas; el cie- Vago
rre de los pliegues palatofaríngeos, que cierran Descenso del pH gástrico
el paso retrógrado a la cavidad bucal; el cierre Alfaadrenérgicos
de las cuerdas vocales; apnea (por eferencias del Gastrina
centro de la deglución al respiratorio); relajación Prostaglandina F2-a
del esfínter esofágico superior e inicio de una Comidas ricas en prote ínas
onda peristáltica en el constrictor de la faringe. Aumento de presión abdominal
El hecho de que participen diversas estructuras
Disminuyen
musculares, vías y centros nerviosos, hace que la
lesión de cualquiera de ellas altere esta fase de la Vagotom ía
deglución, con riesgo de que el bolo pase a la vía Anticolinérgicos
respiratoria, lo que puede tener graves consecuen- Espasmolíticos
cias. Otras veces se produce reflujo nasal. Antiparkinsonianos
Fase esofágica. Es también de carácter reflejo y Antidepresivos
automática, y está controlada por el nervio vago. Betaadrenérgicos, xantinas
Se inicia cuando el bolo alimenticio alcanza el Antagonistas del calcio, progestágenos
inicio del esófago, y consiste en la aparición de Elevación del pH gástrico
una onda peristáltica primaria, que desciende
Secretina
precedida de una onda de relajación y que bas-
Prostaglandinas E1 , E2 y A2
ta habitualmente para arrastrar el bolo hasta el
estómago, incluso en contra de la gravedad. De Comidas grasas o copiosas
no ser así, en el lugar en que se detuvo el bolo se Comidas copiosas
generan trenes de ondas peristálticas llamadas Alcohol , nicotina
secundarias, que completan la deglución. Estas
ondas se originan a veces espontáneamente.
Hay un tercer tipo de pe1istaltismo, llamado tercia-
1io, que no es eficaz para la propulsión. Se inicia espon- contrario, lo disminuyen y son potenciales inductores
táneamente, a veces por grandes bolos detenidos, y en de reflujo.
algunas ocasiones por irritación de la pared esofágica.
Es más frecuente en los ancianos y a veces, por su carác-
ter espástico y su duración, puede causar dolor. SÍNDROMES ESOFÁGICOS MÁS FRECUENTES
En primer lugar, se expondrán los síndromes por alte-
CONTENCIÓN CARDIAL ración de la función de deglución o disfagia; a conti-
nuación, los producidos por la pérdida de la función
La mucosa esofágica es poco apta para defender- de contención del cardias, es decir, el reflujo y la re-
se de la agresión que supondría el paso retrógrado gurgitación; finalmente , se abordará el dolor de origen
habitual de jugo gástrico. El responsable de que no esofágico.
se produzca este fenómeno es el esfínter esofágico
inferior o cardial (EEI). Su tono está gobernado por
un control neurohormonal. Tanto el estímulo vagal DISFAGIA
como la gastrina inducen la secreción de jugo gástri- El concepto de disfagia se definió en el Capítulo 21 y
co y, al mismo tiempo, y precisamente para evitar el
se suele clasificar en orofaríngea y esofágica, según qué
riesgo que supone el reflujo ácido para la mucosa del
fase de la deglución esté afectada. Aquí nos limitare-
esófago, ocasionan un aumento del tono del EEI. Su
mos exclusivamente a la disfagia esofágica, que suele
relajación está mediada por neuronas intramurales
dividirse en funcional y orgánica.
que liberan neurotransmisores, fundamentalmente
VIP.
Dada su trascendencia, en la Tabla 24-1 se muestran Disfagia esofágica funcional
los factores que aumentan el tono cordial, tratando Se produce por alteración de la motilidad y se clasifi- ~
de evitar el reflujo gastroesofágico, y los que, por el ca en atónica y espástica. Entre las disfagias atónicas,
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

que mejoran en ortoposición, se encuentran las cau- nación motora de la porción distal del esófago con
sadas por lesión del núcleo del vago o por sección de peristaltismo desordenado e ineficaz, e incremento
este nervio. La disfagia causada por la esclerodermia del tono basal del esfínter (quizá como consecuencia
puede englobarse también en este grupo. de una hipersensibilidad del esfínter a la acción de
Son situaciones de disfagia espástica los llamados la gastrina) . Es muy característica de la acalasia una
espasmos esofágicos. Se trata de contracciones inefi- respuesta anómala a la metacolina, con contracción
caces para la propulsión. Causan dolor, con frecuen- del cuerpo esofágico, que puede llegar a ser dolorosa
cia son idiopáticos, es decir, de causa desconocida, y (en la persona sana no hay contracción). También hay
se desencadenan a veces con los intentos de deglutir. una respuesta paradójica a la administración de cole-
Una variante, que es causa de disfagia orofaríngea, es cistocinina, que en individuos sanos causa relajación
la llamada acalasia del cricofaríngeo (acalasia = falta del EEI y en los afectados por acalasia lo contrae.
de relajación). La falta de relajación de este músculo A largo plazo, la acalasia suele causar una progre-
(esfínter esofágico superior) dificulta la deglución y siva dilatación del esófago (megaesófago}, que llega
causa frecuentemente el paso del material deglutido a a ser capaz de contener varios litros de secreción y
la vía respiratoria, produciendo crisis asfícticas. alimentos.
Un tipo de disfagia esofágica espástica con marca- Desde el punto de vista etiopatogénico, el megaesó-
do perfil clínico se presenta en la acalasia, también fago puede ser: a) idiopático o esencial, b) secundario,
llamada megaesófago, que es un trastorno crónico y acompaña a determinadas neoplasias (paraneoplá-
progresivo, poco común, de la motilidad del esófago sicos), en especial pulmonares (tumor de células en
(Fig. 24-1). avena o microcítico) o de origen digestivo, y otros que
La acalasia obedece a una alteración de la inerva- siguen a una infestación por el Trypanosoma cruzi (en-
ción colinérgica de la porción inferior del esófago. Es fermedad de Chagas), que es propia de ciertas regiones
característica en ella la falta de relajación del esfínter (es muy frecuente en Brasil). En cualquiera de los ca-
esofágico inferior cuando llega el bolo alimenticio. sos, se produce la destrucción del plexo intramural de
Coexisten, además, otros dos fenómenos: incoordi- Auerbach, con lesión de las neuronas posganglionares,
lo que explica las disfunciones motoras.
Además de este tipo de acalasia, llamada a veces
clásica, se reconoce hoy otra forma «vigorosa», en la
que es muy llamativo el hiperperistaltismo terciario.
En ocasiones, esta variante se suma a espasmos (aca-
lasia) del cricofaríngeo.

Disfagia esofágica de causa orgánica


Dificultad en la deglución al disminuir la luz del esó-
fago. Suele aceptarse el límite de 2,5 cm de diámetro
para que aparezca disfagia; las estenosis de menos de
1,3 cm son siempre sintomáticas.
Las causas de estenosis esofágicas se agrupan en:
a) estenosis por obstáculos situados dentro de la luz
del esófago (intraluminales); b) de la propia pared
(parietales o intrínsecas) (Fig. 24-2), y c) estenosis que
radican fuera del esófago (extraparietales o compre-
siones extrínsecas). En la Tabla 24-2 se recogen algu-
nas de las causas de disfagia esofágica por estenosis.
Las estenosis esofágicas orgánicas, al igual que las
de cualquier víscera hueca del organismo, su elen
causar hiperperistaltismo, para intentar vencer la di-
ficultad al paso. El hiperperistaltismo es más intenso
cuanto más brusca es la instauración de la estenosis.
Si la estenosis persiste, va apareciendo lentamente
una dilatación preestenótica.
Las disfagias orgánicas se caracterizan por presen-
tar mayor dificultad para la deglución de alimentos
sólidos que para la de líquidos; en cambio, en las
Figura Imagen radiológica con contraste de disfagias funcionales del tipo del espasmo esofágico
bario de estenosis funcional del cardias por aca lasia . ocurre a veces lo contrario (lo que se conoce como
Se observa la di latación esofágica supraestenótica disfagia paradójica). El lugar en el que asienta la sen-
no (megaesófago). sación de dificultad corresponde a la localización de
CAPITULO 24 Patología general del esófago

al esófago que se expresa clínicamente por pirosis


(sensación de quemazón retroesternal). La mucosa
esofágica no tiene mecanismos de defensa tan efica-
ces frente al jugo gástrico como la mucosa del estóma-
go. Por ello, cuando el reflujo es reiterado y duradero,
puede aparecer una esofagitis. El reflujo ocasional y
transitorio es sumamente frecuente, sobre todo en el
periodo posprandial, y carece de significado patológi-
co y de consecuencias.

Fisiopatología
Pese a que el contenido gástrico está sometido, como
el de todas las vísceras abdominales, a una presión
positiva y superior a la intraesofágica, en condiciones
normales no existe reflujo gastroesofágico duradero
ni habitual. Entre todos los mecanismos que se han
implicado en el hecho de impedir el reflujo, el prin-
cipal parece ser el esfínter esofágico inferior, cuya
contracción tónica genera una presión que supera a la
gástrica. Se puede comprender fácilmente que cual-
quier circunstancia que anule este gradiente, bien
porque aumente la presión intragástrica por encima
de la ejercida por el esfínter, bien porque disminuya
la presión de este por debajo de la gástrica, causará
reflujo. También pueden causarlo procesos que defor-
man el cardias o alteran su disposición anatómica.
Entre otras circunstancias, pueden aumentar la
presión intragástrica (intraabdominal): la obesi-
Figura Imagen radio lógica co n contraste de dad, el embarazo, las fajas o cinturones apretados,
ba ri o de estenos is supracard ial de esófago por cá ncer. la ascitis y el aumento de presión mantenido de la
pared abdominal. Aumenta la presión intragástrica
con independencia de la intraabdominal la retención
la estenosis cuando esta es alta (base del cuello), pero
del contenido gástrico (estenosis p ilórica, comidas
no cuando es baja (que puede sentirse tanto en la base
copiosas, etc.) y/o el decúbito, especialmente en po-
del cuello como en la región xifoidea).
sición de Trendelenburg (decúbito con la cabeza más
baja que los pies).
REFLUJO GASTROESOFÁGICO La Tabla 24-1 recoge los factores que influyen en el
tono del EEI. Cualquiera de las circunstancias mencio-
Puede definirse como una incompetencia del EEl, nadas en la columna de los factores que disminuyen
que causa un flujo retrógrado del contenido gástrico el tono puede determinar o facilitar el reflujo .

Tabla Causas de disfagia esofágica orgánica (estenosis)


lntraluminales Parietales (intrínsecas} Extraparietales (extrínsecas}
Cuerpos extraños y grandes bolos Tumores esofágicos Tumores o adenopatías mediastínicas
alimentarios Anillos esofágicos Absceso retrofaríngeo
Estenosis cicatriza! Bocio gigante
Esofagitis péptica Divertículos de Zenker
Cáusticos Aneurisma aórtico
Posradiación Subclavia derecha (disfagia lusoria)
Atresia Hipertrofia auricular izquierda
Grandes osteofitos
221
Semiología y fisiopato logía de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Por último , el cardias puede ser incompetente a Manifestaciones clínicas del reflujo
causa de una alteración de su integridad anatómica. Cuando la mucosa se inflama y aparece la denomina-
Esto sucede frecuentemente, aunque no siempre, en da esofagitis péptica o de reflujo, además de pirosis,
la hernia de hiato, que consiste en el desplazamiento los pacientes suelen referir dolor por trastornos moto-
de presión mantenido de la pared abdominal de parte res secundarios a la irritación de la mucosa esofágica,
del estómago al tórax a través del hiato esofágico del fundamentalmente por el ácido. En ocasiones, las zo-
diafragma, lo que provoca la desaparición del ángulo nas de esofagitis pueden llegar a ulcerarse.
de Hiss, formado por el fórnix gástrico y el esófago, Por otra parte, tanto la esofagitis péptica
que actuaría como válvula antirreflujo. como las úlceras son fuente frecuente de
sangrado, agudo o crónico, y una de las
Consecuencias causas comunes de ferropenia y, a veces,
El reflujo puede ser asintomático, o por el contrario de anemia. Asimismo, un número signi-
manifestarse como pirosis. Además puede acompa- ficativo de pacientes desarrollan estenosis
ñarse de regurgitación de contenido alimentario gás- pépticas, que se originan por la cicatriza-
trico. ción de la esofagitis o de las mencionadas
Hay factores personales y dependientes de la cau- úlceras.
sa del reflujo que condicionan la aparición de ma- La mucosa crónicamente irri-
nifestaciones clínicas y complicaciones. tada sufre a veces un proceso
El reflujo puede ser asintomático, o por el con- de metaplasia, transfor-
trario manifestarse como pirosis. Además, puede mándose el epitelio esca-
acompañarse de regurgitación de contenido ali- moso en columnar. Esta
mentario gástrico. alteración, denominada
En primer lugar, es importante tener en cuenta esófago de Barrett (Fig.
la frecu encia y la duración . No es lo mismo un 24-3), predispone a la
reflujo esporádico o por una causa transitoria aparición de adenocar-
(como el embarazo) que el que se produce de cinoma de esófago.
modo continuo en un enfermo con una sonda Ya se ha mencionado
nasogástrica permanente. antes el riesgo de aspira-
En segundo lugar, ciones traqueobronquia -
debe considerarse les y sus consecuencias.
el tipo de material
contenido en el
reflujo, la carga DOLOR ESOFÁGICO
de H+ , proteasas
En la práctica, es frecuente que el
gástricas y pan-
esófago sea origen de dolor. Sus carac-
creáticas y sales
terísticas semiológicas ya han sido reseña-
biliares. Las sales
biliares tienen gran das (Capítulo 21).
capacidad lesiva para la El dolor esofágico puede gen erarse por los siguien-
mucosa esofágica y gástrica. tes mecanismos, que pueden coexistir y potenciarse
Su acción deletérea sobre la mucosa se en ciertas situaciones:
debe en buena parte a que son detergentes.
Acción del jugo gástrico, enteropancreático o
El esófago se defiende del reflujo mediante: biliar sobre la mucosa inflamada o ulcerada.
La regeneración de la mucosa, que tiene un cier- Estas secreciones irritan las terminaciones ner-
to límite.
La delgada capa de moco que la recubre.
La capacidad del esófago para aclarar de forma
anterógrada el material del reflujo. Esto se lleva
a cabo en dos pasos. En primer lugar, el peris-
taltismo elimina rápidamente la mayor parte del
reflujo (ello precisa una adecuada apertura del
cardias); a continuación, los pequeños restos que
bañan la pared son neutralizados por la saliva y
la secreción local de bicarbonato.
Todo aquello que disminuye los mecanismos Figura Imagen endoscópica de esófago de Ba-
defensivos o aumenta los lesivos, hace que puedan rrett. Se observan áreas eritematosas en forma de len-
222 güeta.
aparecer síntomas o complicaciones del reflujo.
CAPITULO 24 Patología general del esófago

viosas en el lecho de la ulceración. Cuando hay


inflamación, el umbral de las fibras nerviosas Mecanismo Tipo y localización
para ser estimuladas por noxas diversas está
disminuido.
El hiperperistaltismo y las contracciones espás-
ticas pueden ser causa de dolor, como ocurre en Divertículo de
cualquier otra víscera hueca, por aumento de la Zenker o
presión intraluminal. hipofaríngeo
La distensión, particularmente si es brusca (im- (superior)
pactación de un cuerpo extraño, por ejemplo).
Tienen una importancia indudable factores de
índole psicológica, particularmente las situacio-
nes de estrés y angustia, bien sea por la aparición
de espasmos esofágicos o por el incremento de Tracción
la sensibilidad visceral en situaciones de tensión (raro por Medio esofágico
psíquica. pulsión) o parabronquial

DIVERTÍCULOS ESOFÁGICOS
Un divertículo es una dilatación sacular de la pared Pulsión
de una víscera hueca. Los divertículos verdaderos tie- (raro por
tracción)
nen en su pared las capas mucosa y muscular.
En el caso del esófago, los divertículos suelen clasi-
ficarse según su localización en: a) hipofaríngeos,
faringoesofágicos o de Zenker, situados en la unión
entre la faringe y el esófago; b) medioesofágicos opa-
rabronquiales, y c) esofágicos inferiores o epifrénicos
en los 10 cm distales.
Atendiendo a su patogenia, se clasifican en diver-
tículos por pulsión, por tracción y congénitos. Los
causados por pulsión aparecen generalmente en zonas
en las que la musculatura esofágica es más débil, y se
propicia la herniación de un pequeño saco de mucosa
a través de una ventana de la capa muscular, que suele
coincidir con una zona más débil en el entramado de
fibras musculares. Se denominan también divertículos Figura D ivertícu los esofágicos.
falsos, pues en su pared solamente hay mucosa y sub-
mucosa, que se hernian a través de la capa muscular.
Cada vez que la presión intraesofágica aumenta, como
sucede al tragar, el divertículo es sometido a distensión El mecanismo de pulsión parece estar también im-
y puede ir creciendo. Generalmente, corresponden a plicado en la génesis de los divertículos epifrénicos,
la localización faringoesofágica, en la zona muscular que son una complicación frecuente de la acalasia del
débil entre el inicio del esófago y la faringe, inmedia- cardias.
tamente proximal al cricofaríngeo. Paulatinamente, el Los divertículos causados por tracción suelen
saco va creciendo y puede llegar a tener grandes pro- identificarse con los de tercio medio. Teóricamente,
porciones. Los grandes divertículos, de tipo Zenker, muchos de ellos se generan por procesos inflamato-
completamente desarrollados, tienen un orificio de rios periesofágicos, frecuentemente adenopatías, que
entrada y un cuello estrecho; al llenarse de saliva o se adhieren al esófago. Cuando la inflamación cesa
material deglutido penden del cuello comprimiendo se retraen, traccionando desde fuera la pared del esó-
el esófago desde fuera . Por ello, se incluyen entre las fago. Se trata de divertículos verdaderos. Suelen ser
causas de estenosis esofágica extrínseca (Fig. 24-4). poco o nada sintomáticos.
·125
Patología general
de las enfermedades
del estómago
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

SECRECIÓN GÁSTRICA: INTRODUCCIÓN


La secreción gástrica es de aproximadamente 1500 ce
en 24 horas. Este volumen es el producto de la secre-
ción de los siguientes elementos celulares:
Células mucosas. Producen moco, que tapiza
y protege la mucosa gástrica, así como bicar-
bonato, que ejerce también un efecto protector,
impregnando el moco.
Cél ulas parietales u oxínticas. Secretan el áci-
do clorhídrico contra gradiente, de forma que
la concentración de H+ en el jugo gástrico es
3 millones de veces superior a la del plasma. Se
calcula que la concentración de H+ directamente
segregados por estas células es de 160 mM. Los
H+se acompañan de cloro, y por cada H+secreta-
do se retiene en sangre un ion bicarbonato, lo que
genera la llamada marea alcalina de la digestión.
El último paso de la secreción de H+ se realiza
en las microvellosidades del canalículo secretor
de la célula, merced a una ATP-asa H+K+o bomba
de protones.
Las células parietales secretan también el fac-
tor intrínseco, que se une a la vitamina B12 para
su absorción ileal.
Células principales o pépticas. Secretan pep-
sinógeno, que en presencia de ClH se activa a
pepsina, la cual tiene su máxima actividad a pH
1,5-2; por encima de 4 comienza a descender.
También lo producen en menor cantidad las
células mucosas.
Desde el punto de vista inmunológico, se
distinguen dos tipos de pepsinógeno: el tipo I,
secretado por las glándulas fúndicas, se detecta
en la sangre y en la orina, y guarda estrecha
relación con la secreción de ácido. El
pepsinógeno II se secreta en todo
el estómago y en el duodeno ; su
concentración en sangre no
refleja la actividad secreto-
224 ra gástrica. En general, la
CAPITULO 25 Patología general de las enfermedades del estómago

eslimulación gústrica produce una secreción ba;,:lante trica. Tradicionalmente. se distinguen tres fases de la
paralela do ácido y pepsim1: una excepción os la se- secreeión gástrica en relación con la ingesta alinrnn~
cretina, que disminuye la secrocíón é1cicla y en cambio licia. a las que se puede aiíaclir una cuarta fase que
incnmwnta la secreción ele pepsinógeno por las cé- correspondería a la secreción basal o interdigestiva.
lulas principales. La pepsina es una endopeptidasa En cada una de estas fases predominaría alguno de los
qtrn interviene en el metabolismo de las proteínas de estímulos va referidos ..\ continuación describimos
la dieta convirtiéndolas en péptidos, cuya ulterior estas fosi,s.
digestión correrá a cargo do las enzimas pancreáticas.
La secreción gástrico se, ustímula por impulsos Fase cefálica, intorvimrnn sobrn todo impulsos
nerviosos colinérgicos vagoles y por la gastrino, qun vogalcs anlo la visión. olor o degustación del
os el más potente estimulante de Dsla socreción. La alinrnnto. Ya se ha sefialado que la nstimulnción
gastrina sn lilwra por las células G del antro, domle se vaga] lambíen induce SHc:rnción clu gastrina.
oncuentra en un HO '¾, en forma de Ju~ptadecnpóptido Fase gástrica. El principal mediador de esta fase
(C-17); en el suero se oncmrntrn en un 70 '},, aproxima- es la goslrino. liberada fundanwnlalmentD por
dnnrnnte ,rn forma dB G-34. Existe una rnlación entre Dslímulos químicos, sobrn todo el contenido en
el efecto estimulan!(;) del vago y du la gastrina. ya que proteínas y espucialmente los productos iniciales
aquél. acllm1ás dn estimular clirnctnmnnlo las cólulas de In digestión r],.i las mi,mrns. La respunsta n la
SHCrntoras, sobre todo las parintales, prommwn tam- distensión mecánica del estómago anlo la llegadn
bifin la lilmracíón do gastrinn, y mlemás disminuye dol alimento parecD ostar rmís bien mediada por
ol umbral cln (,stimulación do las células parietales a reflujos vagalcs, ya que Ju atropina inbilm dicha
nsta hormona. Es importante asimismo ul bocho de respuesta Sflcrntorn.
quo ol aumento do] pH intragóstrico estimula la prn- Fase intestinal. !Jura unas horas tras ol vacia-
ducción de gastrina; lo contrario ocurru cuando Hl pH miento gústrico. El mecanismo es mixto, pero
desciende. prnfornntenrnntc lmmurnl, bien sea la gustrino
El papel de lil hislnrninc1 en la secreción góslrica duocfona/ u otro plipticfo similor. que es nípi-
ns fondanrnntaL !Je bocho, alreclodor dn las glúndulas danwntu degradado a su paso por ol hígado, ll
fúnclicas existen cólulas similares a las untorocrnnrn- difornncia ele lo quo ocurre con lu gaslrina prn-
fines (dlulus SEC), así como mastocitos o cólulas pianrnntn dicha. Los mninoúc:idos absorbidos
cebadas. quu sm:rntan usto nrndiador. Sn eme que In
histmnirrn ns la vía final común de la sm:ruci(m ácida
géstrica, y actúa sobro los receptores H 2 dn las cólulas
parietales. !Je bocho. los inhibidorns de Pstos rncop-
ton,s suprimen la secreción basal y la inducida por el
alinrnnto. la gastrina, la hístamina, la hipoglucemia
o los agentes colinérgicos, En realidad. las célufw;
oxfnticos presentan trns tipos efe recoplore.c;: a) rnusca- Cuerpo
rínicos M3, sobre los que actúan el vago y los agentes
colinérgicos; b) gustdnicos (que r,n rnnlidad sou re-
ceptores para la colccistocinina. o CCK-13), y e) histu-
mfnicos H:,• La histamina activa en la cólula parietal
prot(➔ Ín-cinasas dependientes del /1.MPc. en tanto que
la gastrirrn y ul vago ostimula11 las células parietales u
través de un aumento del calcio citosólico.
Por otra parle. en la mucosa gástrica existen unas
células endocrinas, las cólulas D. productoras de
sornntoslnti1w. que inhiben la secreción probable-
mente por un mecanismo paracrino. En efocto, se ha
dnrnoslrado la existencia de prolongaciones citoplás-
micas de estas células que establecen contacto con
las células G o gastrínicas en ol antro, así como con
las células parietales. Do ello se puede deducir que la Figura Interrelaciones a nivel de la pared del
somalostatina modula la secreción de ócido al actuar estómago entre los estimulantes de la secreción ácida
tanto sobre la libflración ele gastrina corno inhibiendo y su inhibición por somatostatina 1efecto paracrino,.
directamente la sDcrnción de las cólulas parietales. Ach acetilcolina.
Las células D tienen receptores ele alta afinidad para CP = células parietales.
la colecistocinina (CCK-A) (Fig. 25-1). H. receptor histamínico H 2 •
La ingesta alimenticia, al desPncadonar rd'lejos va- 1v1 mastocito.
gales e inducir la liberación de gastrina, constituye el G = células G iprocluctoras de gastrina).
225
estímulo fisiológico más potente de la secreción gós- D células D 1procluctoras de somatostatinal.
Sem iología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

también parecen estimular la secreción ácida


gástrica.
Quizá tengan más importancia a nivel intesti- Tabla Mecanismos
nal los efectos inhibidores ejercidos por diversos de hipersecreción gástrica
estímulos como la hiperglucemia postabsorción,
la presencia de grasa o de contenido hipertónico, Estímulos Alimentos (fisiológico)
así como la de ácido en el duodeno . La secre- locales Retraso en el vaciamiento
tina parece ser el factor inhibidor en respuesta gástrico
al descenso del pH en el duodeno; la inhibición Estímulos Emocionales
ejercida por las grasas parece mediada por el GIP vagales
(péptido inhibidor gástrico).
Otros péptidos liberados por la pared intestinal Estímulos Gastrina
humorales Hiperplasia antral
podrían actuar como inhibidores de la secreción
gástrica, por ejemplo el VIP, la neurotensina, el Gastrinoma (síndrome de
péptido YY, la urogastrona y el enteroglucagón Zollinger-Ellison)
con sus dos componentes, oxintomodulina y Antro retenido y excluido
(Billroth 11)
glicentina.
Insuficiencia renal crónica
Fase interdigestiva o secreción ácida basal. El
nervio vago parece ser el mediador de esta secre- Histamina
ción ácida, que es máxima hacia la medianoche Mastocitosis sistémica
y mínima hacia las 7 de la mañana. La secreción Comunicaciones
nocturna debe ser tenida en cuenta en pacientes portocava
con patología ulcerosa. Disminución Resecciones intestinales
de
inhibidores

ALTERACIONES DE LA SECRECIÓN GÁSTRICA Ulcus (Véase el texto)


duodenal
Se pueden distinguir dos situaciones: hipersecreción
e hiposecreción.

Hipersecreción
Tan1bién se conoce con el nombre de hiperclorhidria.
Es el incremento de ácido secretado en una unidad de G)
tiempo. En la práctica, los términos «hipersecreción» Gastriti s
e «hiperclorhidria» se emplean como sinónimos ,
aunque no lo sean en sentido estricto.
Mecanismos (Tabla 25-1)
Aumento de los estímulos locales, como sucede
con la secreción fisiológica o alimenticia, espe-
J, 0
G

~-----';____ Insufi ciencia


Gastrina

cialmente con ciertos alimentos (café con o sin H iperpl as ia I· H IPERG ASTRIN EMIA I- r~nal
cafeína, té, caldos proteínicos, alcohol), así como
cuando aumenta el tiempo de contacto del conte-
nido con la mucosa , como sucede en la estenosis
antral

©
\c~ ~ca
Antro retenido~
pilórica. En este caso, la distensión mecánica del
y exclui do
estómago por la retención también estimula la
secreción.
Aumento de los estímulos vagales, como puede
suceder teóricamente con emociones intensas o
repetidas, por mecanismo central o hipotalámi-
co.
Aumento de gastrina (hipergastrinemia) (Fig.
25 -2). Este mecanismo puede presentarse en di-
versas situaciones:
dJ~-~ Intervención tipo Billroth 11

Figura Mecan ismos de hi pergastr in e m ia. La


Hiperplasia antral, o incremento del número primera situac ió n es aclorh ídr ica (1 ). Las c uatro res-
de células G en el antro. Se trata de una situa- ta ntes son h iperclorh ídricas.
226 e= gastri na .
ción muy poco frecuente.
CAPÍTULO 25 Patología general de las enfermedades del estómago

Tumores secretores de gastrina (gastrinomas o Úlcera duodenal. En ella tiende a existir hiper-
síndrome de Zollinger-Ellison). Generalmente, clorhidria, sin que aumente la concentración
el tumor se localiza en los islotes pancreáti- sérica de gastrina (hiperclorhidria normogastri-
cos. La intensa hiperclorhidria puede generar némica). Se ha intentado explicar este fenómeno
úlceras gastroduodenales múltiples, de locali- por varios mecanismos, que actuarían de forma
zación atípica y resistentes al tratamiento con- aislada o combinada:
vencional, así como diarrea y malabsorción
Incremento del número de células parietales.
por excesiva acidez en el duodeno , que inac-
Hipersensibilidad de las células parietales a la
tiva la lipasa pancreática y precipita las sales
gastrina.
biliares. En este caso, como se apuntó en el
Autonomía de las células G, que no se inhiben
Capítulo 23, la relación BAO/MAO se aproxi-
normalmente ante el descenso del pH intragás-
ma a la unidad, y es característica la respuesta
trico.
paradójica de la gastrina a la administración
Aumento del tono vagal.
de secretina.
Presencia de Helicobacter pylori en la muco-
Síndrome del antro retenido y excluido. Se
sa gástrica, actuaría interfiriendo la inhibición
trata de una situación posquirúrgica en la que
ejercida por las células D, secretoras de soma-
se ha resecado el antro y se ha realizado una
tostatina, sobre las células G.
anastomosis gastroyeyunal (gastroyeyunosto-
mía), dejando el
Consecuencias
duodeno en asa
ciega y vaciando La mayor parte de las ve-
el quimo en el ces, la hiperclorhidria es
yeyuno (opera- asintomática, pero en oca-
ción de Billroth siones puede asociar mani-
JI). A veces , una festaciones por sí misma o
porción de mu- por el proceso causal:
cosa antral se si- Síntomas de tipo dis-
túa en la primera pepsia (dolor, pirosis) .
porción del duo- Alcalosis metabólica
deno y, tras esta en el caso de vómitos
intervención, frecuentes con pérdi-
la zona queda da de H+ en cantida-
aislada del baño des importantes.
ácido , por lo que Favorece la aparición
produce gastrina de úlceras gastroduo-
en cantidades denales.
significativas;
ello puede dar Hiposecreción
lugar a recidivas
ulcerosas. También denominada hi-
Helicobacter pylori. poclorhidria, se define
Insuficiencia re-
nal. La gastrina como una disminución de
se degrada en parte en el riñón; de ahí su incre- la secreción ácida por debajo de los valores norma-
mento en la insuficiencia renal, que contribuye les de secreción basal (BAO) y estimulada (MAO). La
al riesgo de enfermedad péptica ulcerosa. aclorhidria o aquilia verdadera es la ausencia total de
ClH en el jugo gástrico a pesar de la estimulación con
Aumento de histamina. Al ser la histamina un pentagastrina.
poderoso estimulante de la secreción ácida, no es
de extrañar que en una enfermedad en la que pro- Mecanismos
liferan las células cebadas, llamada mastocitosis Las situaciones de hiposecreción se pueden agrupar
sistémica, se produzca hiperclorhidria. También en funcionales y orgánicas (Tabla 25 -2).
se atribuye a un incremento de la histamina la
Hipoclorhidrias funcionales. Son aquellas en las
hipersecreción en pacientes con comunicaciones
que no se detecta ninguna lesión en el estómago.
porto-cava, pues por ellas la histamina (u otros
secretagogos procedentes del intestino) escapa Pueden ser constitucionales; estos enfermos
de la degradación hepática. pueden estar más predispuestos a desarrollar
Disminución de los inhibidores. Se le ha atri- cáncer de estómago.
buido la hipersecreción que a veces aparece en Con frecuencia acompañan a algunas enfer-
resecciones intestinales amplias. medades endocrinas, como hipotiroidismo o
Semiología y fis iopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

gastritis atróficas tipo A o autoinmunitarias.


En ellas existe una intensa atrofia, hasta la
Tabla Causas de hipersecreción total desaparición de las glándulas fúndicas.
gástrica En el suero se detectan típicamente autoan-
ticuerpos anticélulas parietales gástricas y
Funcionales Constitucionales muchas veces antifactor intrínseco. Esto pro-
Endocrinas duce una malabsorción de vitamina B12 , que
Ferropenia conduce al desarrollo de anemia perniciosa.
Fármacos Además, existe hipergastrinemia, ya que el
antro no está bañado por ClH, pues en estos
Orgánicas Úlcera gástrica casos hay aquilia verdadera.
Cáncer gástrico - Un segundo tipo es la llamada gastritis antral
Gastritis crónica o tipo B, qu e no es de tipo inmunológico y
Autoinmune que parece estar condicionada, sobre todo ,
Antral por la infección por el Helicobacter pylori y
Cirugía gástrica en ocasiones por reflujo duodenogástrico; en
este caso parece que las sales biliares ejercen
un efecto lesivo sobre la mucosa gástrica,
alterando la capa protectora de moco y el
epitelio cilíndrico, es decir, la barrera muco-
insuficiencia suprarrenal, y a los infrecuentes sa gástrica. En todo caso, puede tener lugar
tumores secretores de VIP (vipomas); estos úl- un escape por «retrodifusión » de H+, lo que
timos se asocian característicamente a diarrea desencadena una reacción inflamatoria en la
acuosa e hipopotasemia (síndrome de Ver- lámina propia y una liberación de histamina
ner-Morrison). por estimulación local de las células SEC o
La ferropenia altera el trofismo general de las de los propios mastocitos. Ello da lugar a una
mucosas que muestran recambio elevado, como vasodilatación que favorece el proceso infla-
sucede con las mucosas digestivas. De ahí que matorio de la mucosa , ocasionando mayor
frecuentemente curse con hipoclorhidria, que secreción de ClH, mayor retrodifusión de H+
a su vez provoca una malabsorción de h ierro y la potenciación de la lesión de la mucosa.
(pues el jugo gástrico convierte los compues- Es el llamado m ecanismo de Davenport, que
tos férricos no absorbibles en ferrosos , absorbi- explica la autoperpetuación de estas gastritis,
bles) . Ello crea un círculo, que sólo se corrige, que puede conducir a pérdidas de sustancia
la mayor parte de las veces, con la administra- en forma de erosiones múltiples o de ú lcera
ción de hierro por vía parenteral. gástrica (Fig. 25 -3) .
Utilización de fármacos antisecretores (anti- La alteración de la barrera puede también
colinérgicos, bloqueantes HZ inhibidores de la producirse por otro tipo de agresión, como la
bomba de protones , etc.) . ingesta de alcohol o la de aspirina u otros an-
tiinflamatorios no esteroideos, que inhiben
Hipoclorhidrias orgánicas. Son las que cursan localmente la síntesis de prostaglandinas ,
con lesiones de la mucosa gástrica, como sucede sobre todo del grupo E, que se sabe estimu-
en las siguientes situaciones: lan la producción de moco y bicarbonato y
Úlcera gástrica, que, a diferencia de la duode- tienen además un efecto citoprotector sobre
nal, cursa con cierta frecuencia con hipoclor- el epitelio gástrico cilíndrico.
hidria. La existencia de aclorhidria verdade- En este segundo tipo de gastritis , no existe
ra, es decir, ausencia de ClH tras administrar realmente hipoclorhidria, sino que se pier-
pentagastrina, puede ser índice de sospecha de den H+ por retrodifusión , pero la secreción
ulcus-cáncer. de ClH propiamente dicha es normal, o in-
En el cáncer gástrico, aunque no de forma cons- cluso aumentada por el citado mecanismo de
tante, existe aclorhidria, posiblemente previa a Davenport.
la n eoplasia.
Finalmente, hemos de considerar la cirugía
Las lesiones inflamatorias difusas de la mucosa gástrica (resecciones o vagotomía) como meca-
gástrica, denominadas gastritis, cursan con hi- nismo de hiposecreción ácida
poclorhidria o aclorhidria:
- En ciertos casos, se trata de una agresión au - Consecuencias
toinmunitaria de la región de las glándulas En realidad no existen síntomas ni signos atribuibles
fúndicas , secretoras de ClH y pepsina, así a la hipoclorhidria per se. En las gastritis crónicas
como de factor intrínseco. Son las llamadas atróficas autoinmunitarias ya se ha mencionado la
CAPÍTULO 25 Patología general de las enfermedades del estómago

m E
dos y carbohidratos) y las grasas contraen el píloro
H. pylori e inhiben la motilidad evacuadora antral. Todo ello
5B o
Al E
parece regulado por reflejos enterogástricos vagales,
Alcohol
o así como por péptidos hormonales (colecistocinina,
secretina, motilina y glucagón, fundamentalmente).

H•
\ o
o
o ALTERACIONES DEL VACIAMIENTO
o GÁSTRICO
CP Inflamación Podemos dividirlas en alteraciones por retardo y al-
teraciones por aceleración (Tabla 25-3).

Retardo del vaciamiento


Figura Retrodifusión de W por alteración de la
Puede ser por causa funcional u orgánica:
barrera mucosa gástrica (círculo de Davenport). Funcional. Con frecuencia se califica de gastro-
m = moco. paresia, y puede aparecer en diversas situacio-
E = epitelio. nes:
SEC = célula similar a las enterocromafines.
M = mastocito. Vagotomía troncular, hoy día en desuso, que
CP = célula parietal. denerva la totalidad del estómago, por lo que
SB = sales biliares. siempre debe combinarse con una técnica qui-
A INE = anti inflamatorios no esteroideos. rúrgica que permita el drenaje del estómago.
Causas psíquicas, como por ejemplo situacio-
nes de miedo.
existencia de anemia por ausencia de secreción de Trastornos endocrinometabólicos (hipopotase-
factor intrínseco y malabsorción de vitamina B12 , que mia, hipocalcemia e hipercalcemia, acidosis e
puede asociarse a glositis atrófica dolorosa (glositis hipotiroidismo, entre otros). Especial mención
de Hunter) y a manifestaciones neurológicas. Fre- merece la llamada gastroparesia diabética, rela-
cuentemente, pueden detectarse también síntomas cionada con la neuropatía autonómica.
y signos dependientes de la ferropenia (alteraciones Neuropatías, como la diabética ya citada, la ta-
de piel y faneras , anemia, etc.). Por último, como el bes y la poliomielitis .
ClH es un mecanismo protector frente a la contami- Otras situaciones, como la administración de
nación bacteriana del intestino delgado , en la hipo- opiáceos o anticolinérgicos, el ayuno prolon-
clorhidria puede desarrollarse un sobrecrecimiento gado, las afecciones de vísceras abdominales
bacteriano, lo que puede originar un síndrome de o la irritación peritoneal, por mecanismo re-
malabsorción. flejo.

MOTILIDAD GÁSTRICA

INTRODUCCIÓN Tabla Alteraciones


El estómago recibe los alimentos sin que cambie prác-
del vaciamiento gástrico
ticamente la presión intragástrica merced a la relaja- Retraso Funcional
ción receptiva, que corre a cargo del fórnix y el cuer- Vagotomía troncular
po; en ello parece ejercer algún papel la producción Endocrinometabólicas
local de óxido nítrico. Luego mezcla los alimentos (p. ej. , diabetes)
entre sí y con el jugo gástrico, función desempeña- Neuropatías
da por cuerpo y antro, en los que aparecen potentes Fármacos
contracciones rítmicas (aproximadamente, tres por Irritación peritoneal
minuto) que recorren el estómago hasta el píloro en Orgánico
aproximadamente un minuto. Alguna de estas ondas Estenosis pilórica
logra el vaciamiento, que depende de la coordina-
ción antro-píloro-duodeno y que viene regulada por Aceleración Ulcus duodenal
varios factores, tales como el volumen del quimo y Cirug ía gástrica (dumping)
su consistencia. Además, en el duodeno el pH ácido,
la osmolaridad (sobre todo a expensas de aminoáci-
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Orgánica. Está representada por la estenosis piló- dolor en este caso, ya que no existe distensión
rica, que se define como la disminución del cali- visceral.
bre del orificio pilórico. Puede estar producida
por las causas que a continuación se citan:
VÓMITO
Intraluminales, como los cuerpos extraños y
los bezoares, que son masas intragástricas for- En el Capítulo 21 se describió cómo se efectúa la
madas por material no digerible (fibras vegeta- expulsión forzada del contenido gástrico al exterior
les, pelos u otros, frecuentemente con depósito por la boca, y se comentaron también sus aspectos
de sales cálcicas) . Son poco frecuentes. clínicos. Se describirán aquí sus mecanismos y sus
Compresiones extrínsecas. Por ejemplo, por consecuencias
una neoplasia de páncreas.
Causas intrínsecas, como el ulcus yuxtapilórico
por el edema y espasmo o la fibrosis cicatriza!; MECANISMOS
la estenosis hipertrófica del píloro del lactante;
En el acto del vómito, el estómago desempeña un
las neoplasias prepilóricas o las antrales.
papel prácticamente pasivo. De hecho, el fundus y
En cuanto a la fisiopatología de la estenosis piló- el esfínter esofágico inferior están atónicos. Son las
rica, se distingue una fase de lu cha, o hiperperistal- contracciones de la musculatura abdominal y el dia-
tismo desencadenado por la distensión gástrica, que a fragma los que producen un aumento de la presión
veces ocasiona dolor. Sigue una fase descompensada, intraabdominal, lo que, junto con contracciones anti-
con dilatación por pérdida de tono e hipersecreción peristálticas de los primeros tramos del intestino del-
por aumento del tiempo de contacto del contenido gado y un aumento del tono del píloro, logran la ex-
con la mucosa, con vómitos de retención, en los que pulsión del contenido gástrico. A todo ello contribu-
se expulsan alimentos ingeridos muchas horas antes, ye también un incremento de la presión intratorácica,
incluso uno o dos días antes . Si la instauración es al contraerse los músculos respiratorios y cerrarse la
rápida, aparece un cuadro de deshidratación y alca- glotis (similar a una maniobra de Valsalva), a lo que
losis hipoclorémica; si se prolonga llega a aparecer muchas veces se unen contracciones antiperistálticas
desnutrición. del esófago.
Al mismo tiempo que se produce este complejo
Aceleración del vaciamiento mecanismo motor, se eleva el velo del paladar para
evitar el reflujo nasal. El cierre de la glotis, además de
Generalmente se relaciona con la cirugía gástrica (pi-
crear una presión positiva intratorácica, evita aspira-
loroplastia o resecciones). Ocasiona un síndrome que
ciones del material procedente del estómago a las vías
se describe con el término anglosajón de dumping,
respiratorias.
del que se distinguen dos tipos:
El control de todo ello radica en el centro del vómi-
«Dumping» precoz, que se debe a la llegada to, situado en la zona dorsal de la formación reticular
brusca del contenido gástrico al intestino cau- del bulbo, en estrecha relación con la llamada zona
sando su distensión inmediatamente después de «gatillo », constituida por neuronas quimiorrecepto-
la ingesta y ocasionando síntomas como dolor, ras situadas en el área postrema del suelo del cuarto
náuseas, vómitos e hipotensión. Parece que los ventrículo que envían aferencias al centro del vómito.
reflejos vagales son los responsables del cuadro, Este también recibe aferencias de distintas vísceras,
que se ve incrementado por el hecho de que el sobre todo del aparato digestivo, así como de otras
contenido gástrico, al vaciar rápidamente , no zonas del sistema nervioso central, como por ejemplo
está preparado desde el punto de vista osmolar. de las áreas vestibulares o de áreas corticales, lo que
Por ello se produce una intensa secreción os- explicaría el carácter psicógeno de algunos vómitos.
mótica en el intestino desde el compartimento La zona «gatillo» puede estimulars e por causas
vascular, causante además de hipovolemia . mecánicas, como la hipertensión intracraneal, o bien
El paciente trata de paliarlo evitando la orto- por agentes químicos endógenos (uremia, cetoacido-
posición y haciendo comidas no copiosas ni sis, hipoxemia, etc.) o exógenos (digital, apomorfina,
hiperosmóticas. dopamina, toxinas bacterianas, etc.), tal como se
«Dumping» tardío, que aparece a las 2 o 3 horas muestra en la Figura 25 -4.
de la ingesta y se debe a una descarga de insuli- El centro del vómito descarga a través del nervio
na ante la absorción brusca de glucosa, debido frénico, los nervios espinales y el nervio vago, fun-
al vaciamiento rápido del estómago. La respues- damentalmente. La localización bulbar del centro del
ta postabsorción de insulina resulta exagerada vómito, próxima a los centros respiratorio, vasomotor,
para una determinada hiperglucemia, y ello cardiomoderador y otros centros vegetativos, explica
ocasiona hipoglucemia, que es la que produce la detención de la respiración, la bradicardia, a veces
los síntomas. Entre estos síntomas predominan la hipotensión, y otros fenómenos vegetativos que
las palpitaciones y la sudoración, sin que exista acompañan el acto del vómito. También la proximidad
CAPITULO 25 Patología general de las enfermedades del estómago

OTROS TRASTORNOS. HIPO Y ERUCTO

O { Estímulos -~síquicos
H1pertens1on
intracraneal
Alt. metabólicas
HIPO
El hipo o singultus se produce por contracción mus-
cular inspiratoria brusca, en especial del diafragma,
{ Fármacos
prácticamente simultánea con el cierre de la glotis,
con lo que se bloquea el paso de aire a las vías respi-

~)et Gr·· ii
~ferencias - - - - . _ TT
Zooa ,gaUllo•
ratorias. Se trata de un reflejo cuya vía aferente está
constituida por los nervios vago y frénico y por la ca-
dena simpática torácica. El centro se sitúa en C3 y C4.
. Centro del vómito Las eferencias discurren nuevamente por el nervio

Eferencias
somáticas
1 frénico y además por los nervios de la glotis y mús-
culos respiratorios (espinal y torácicos). Su finalidad
se desconoce.
Generalmente es breve y autolimitado, pero a veces
es persistente, y rara vez intratable. Puede conllevar
dificultad para la ingesta de alimentos , pérdida de
Figura Mecan ismos del vómito.
peso, dolor toracoabdominal (por los espasmos dia-
fragmáticos), fatiga, ansiedad e insomnio.
del centro tusígeno puede explicar que, en ocasiones, El hipo transitorio puede deberse a varias causas,
la tos , si es muy intensa y repetitiva, pueda desencade- como: a) distensión gástrica; b) ingesta de alcohol;
nai· arcadas o el vómito mismo (tos emetizante). e) tabaquismo, y d) estrés .
El hipo persistente se debe a procesos orgánicos que
irritan directan1ente el diafragma o el nervio frénico,
CONSECUENCIAS o a procesos que afectai1 al sistema nervioso central:
Muchas veces, el vómito cumple una función protec- A nivel del abdomen, por irritación diafragmá-
tora del organismo, al eliminar agentes infecciosos o tica, (por ejemplo, por un absceso subfrénico),
tóxicos que ingresan por vía digestiva. No obstante, meteorismo intenso, etc.
en otras muchas ocasiones el vómito no tiene ningu- A nivel del tórax y del cuello, por compresiones
na finalidad conocida (como en el caso de los vómitos del nervio frénico (adenopatías, tumores, etc.),
de origen central o en los originados desde órganos enfermedades esofágicas, tumores del diafragma,
extradigestivos) y puede tener efectos deletéreos, neumonía de lóbulo inferior, infarto agudo de
como los que a continuación se citan: miocardio.
A nivel del sistema nervioso central, en encefalo-
Deshidratación y desnutrición: Es consecuencia
patías tóxicas, alteraciones metabólicas (uremia,
de la pérdida de líquidos y de nutrientes cuando
hiponatremia), fármacos (anestésicos generales) ,
los vómitos son abundantes y prolongados.
meningoencefalitis , tumores cerebrales o acci-
Alcalosis metabólica hipoclorémica: Se debe a
dentes cerebrovasculares.
pérdida de agua, cloro, potasio e hidrogeniones.
Aspiración del contenido gástrico (síndrome de
Mendelson}: Aparece sobre todo en pacientes ERUCTO
con alteraciones del nivel de consciencia. Con-
siste, como sucede en el reflujo gastroesofágico Es la expulsión ruidosa, por la boca, de aire previa-
(Capítulo 24), en la aspiración de material rico mente deglutido . Habitualmente se produce desde la
en ácido clorhídrico hacia las vías respiratorias, cámara de gases del estómago durante o después de
con la consiguiente alteración de la permeabi- la ingesta, especialmente si ha sido copiosa o muy
lidad de la membrana alveolocapilar e insufi- rápida (lo que induce muchas veces a deglutir un vo-
ciencia respiratoria. Además, la zona pulmonar lumen importante de aire).
afectada puede infectarse (neumonía por aspi- Existen personas que eructan de forma repetitiva.
ración). En este caso, el aire deglutido no llega al estómago,
Síndrome de Mallory-Weiss: Se trata de desgarros sino que se queda en el esófago y es expulsado al ex-
de la mucosa a nivel del cardias como conse- terior continuamente. Es decir, se trata de una regur-
cuencia de los esfuerzos del vómito , si estos son gitación esofágica de aire. Suele asociarse a tensión
muy intensos y repetidos , lo que representa una emocional, aunque a veces se asocia a enfermedades
causa frecuente de hematemesis . Mucho más in- que producen dolor u otro tipo de molestias en el
frecuente es la rotura de todas las capas del esófa- tórax o el abdomen. Si parte del aire circula hacia
go, con perforación del esófago en el mediastino abajo, es decir, si pasa al estómago o tramos altos del ~
(síndrome de Boerhaave). intestino, puede a su vez motivar distensión o dolor.
·126
Trastornos motores del intestino.
Diarrea, estreñimiento, íleo
y meteorismo. Síndrome
de irritación peritoneal
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

RECUERDO FISIOLÓGICO
SECRECIÓN Y ABSORCIÓN DE AGUA Y SODIO
En condiciones normales, ingresan diariamente en
el tubo digestivo unos 9 litros: 2 litros proceden de
la ingesta y los 7 restantes están constituidos por las
secreciones digestivas. La mayor parte se absorbe en
el intestino delgado; un litro pasa al colon, donde
también se absorbe el 80%-90 %. De esta forma, las
heces contienen un 60%-80 % de agua en su peso. En
las civilizaciones occidentales, cuya dieta es pobre en
fibra, las heces eliminadas en 24 horas tienen normal-
mente un peso inferior a los 200 gramos.
El sodio se absorbe en el intestino delgado en gran
parte acoplado a la glucosa, arrastrando cloro y agua.
También se absorbe intercambiándose con potasio a
lo largo del intestino delgado y del colon. El cloro
se intercambia igualmente con bicarbonato mediante
una bomba aniónica.
Si falla la absorción de agua en el intestino delgado,
el colon tiene gran capacidad de reserva de absorción
(lo que se denomina compensación colónica de un
trastorno de absorción en el intestino delgado). En
efecto, el colon puede absorber hasta 6 litros de agua
al día y 800 milimoles de sodio, absorción que se
produce sobre todo en el colon ascendente y trans-
verso.

MOTILIDAD
Interesa especialmente la motilidad del
colon. El colon y el recto poseen ter-
minaciones nerviosas liberadoras
de norepinefrina, acetilcolina y
algunos péptidos neurotrans-
misores. La coordinación
232 de la motilidad del colon
CAPITULO 26 Trastornos motores del intestino. Diarrea, estreñimiento, íleo y meteorismo. Síndrome de irritación peritoneal

viene determinada por la acción conjunta de estímu- CLASIFICACIÓN FISIOPATOLÓGICA


los que parten del sistema nervioso central (de ahí
los trastornos motores del colon desencadenados mu- Desde el punto de vista fisiopatológico, se acostum-
chas veces por causa psíquica), reflejos locales en los bra a clasificar las diarreas en secretoras, exudati-
plexos mientéricos, actividad intrínseca del músculo vas, osmóticas y motoras (Tabla 26-1, Fig. 26-1).
liso del colon y regulación por algunas sustancias,
como la colecistocinina (que parece ser la mediadora Diarreas secretoras
del reflejo gastrocólico), la motilina, etc. Se producen por secreción activa de sodio y cloro, que
En términos generales, se puede decir que el sis- conducen tras de sí agua (diarreas por agua conduci-
tema nervioso parasimpático estimula la motilidad da) , y pueden obedecer a los siguientes mecanismos:
(y también la secreción) del colon y que el simpático
inhibe ambas funciones.
En los segmentos proximales del colon, especial-
mente en el ascendente, predominan contracciones
segmentarías rítmicas, no propulsoras, que prolongan Tabla Diarreas: clasificación
el tiempo de contacto entre el contenido y la mucosa, fisiopatológica
favoreciendo la absorción de agua. El colon descen-
dente tiene, en cambio, una actividad fundamental- Secretoras
mente propulsora. Aparte de esta actividad, pueden Dependientes de AMPc
existir varias veces al día fases de peristaltismo pro- Enterotoxinas (V. cholerae, E. coli)
pulsivo de todo el colon, que sitúan las heces en el Metilxantinas
recto. La distensión de este estimula el reflejo de la Prostaglandinas
defecación, ayudado voluntariamente por la prensa
VIP
abdominal, y también voluntariamente inhibido por
Sales biliares
la contracción del esñnter anal externo o estriado.
Dependientes de GMPc (probablemente)
Esta inhibición voluntaria, si se practica de forma
habitual, puede conducir a una distensión mantenida Enterotoxinas (E. coli, C. perfringens,
S. aureus, Shigella)
de la ampolla rectal, disminuyendo progresivamente
la sensibilidad del reflejo, lo cual puede inducir una Hormonas (glucagón, GIP, calcitonina)
forma de estreñimiento muy habitual. Laxantes (ricinoleico)
Dependientes del calcio
Serotonina
DIARREA Exudativas
Se define como la disminución de la consistencia de Infecciosas
las heces , que suele ir acompañada de un aumento Gérmenes enteroinvasores (Salmonella,
del número de deposiciones diarias. Desde el punto Shigel/a, E. coli, amebiasis)
de vista cuantitativo, la existencia de diarrea supone Citotoxina (c. difficile)
una eliminación de heces en 24 horas superior a los Inmunológicas
200 gramos en un sujeto con una dieta pobre en fibra. Enfermedad inflamatoria intestinal
Desde el punto de vista fisiopatológico, la diarrea Procesos infiltrantes difusos
puede originarse: a) por un incremento del volumen Tumores (linfomas)
de agua que ingresa en el colon a través de la válvula Amiloidosis
ileocecal, sobrepasando la compensación colónica, es Isquemia intestinal
decir, su capacidad teórica de absorción de 6 litros
al día; b) por enfermedad del colon, bien sea por al- Osmóticas
teración mucosa o por trastorno de la motilidad, que
Disacaridosis
condicione una alteración en la absorción de agua,
Síndrome de malabsorción
e incluso secreción neta, aunque el colon reciba un
volumen normal; c) finalmente, porque el líquido que Laxantes osmóticos
llega al colon, independientemente de su volumen, Motoras
presente una elevada osmolaridad o contenga sustan-
Aumento de motilidad
cias que estimulen la secreción neta de agua y elec-
trólitos por el colon, impidiendo el ya mencionado Hipertiroidismo
mecanismo de compensación colónica. Intestino irritable
En definitiva, una diarrea puede originarse en el Disminución de la motilidad
intestino delgado o en el colon, pero solo aparecerá si Neuropatía autonómica
el mecanismo de compensación descrito se ve sobre-
pasado por las causas mencionadas.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

1 litro < 6 lilros > 6 lilros

l J
Normal C(l111¡ie:nsació11 Diarrea
íno dia1Tea) colónica
\no di,1rrea}

Diarrea Diarrea Diarrea Diarrea


secretora exudativa osmótica motora

Figura Fisiopatología de los distintos tipos ele diarrea.

Activación del sistema adenilciclasa, que au- y el FIP (pépticlo intestinal vasoacti vol, produci-
menta la producción do AMPc. El ejemplo más dos por algunos tumores endocrinos digestivos o
común es el de la enteroloxÍna colérica, que se extracligestivos. Las sales bihares, que llegan al
uno a un gangliósiclo ele la membrana del onte- colon por malabsorción en resocciones del íleon
rocito; desde ahí activa la proteína G del sistema terminal, también estimulan esto mecanismo.
adenilciclasa, puos la toxina actúa como una Aumento de producción de GMPc (por activa-
enzima que transfiern ADP-ribosa desde el NAD cÍón del sistema guonilotocíclmw). Este parece
a la proteína C, comportándose así como estimu- ser el caso de las enteroloxinas ele otros gérmenes
ladora de este sistema. En este caso, el trastorno como Shígella. Stophylococcus cwreus, ClostI'Í-
radica en el intestino delgado. donde el sodio dium pert'ringens y la toxina termoestable de E.
es secretado activamente por la vellosidad, y el coh. Es decir, E. coli. dependiendo de la cepa,
cloro por la cripta. Ello ocasiona la secnición de es capaz de inducir diarrea secretora tanto por
gran cantidad ele líquido, que el colon no puede un nrncanismo dependiente de AMPc, como.
absorber. Se desencadena una diarroa profusa. probablemente. por estirnulación del sistema
de deposiciones claras (denominada diarrea co- guanílatociclasa o dependiente del GMP). Otras
leriforme, por ser el cólera su representante más sustancias de tipo hormonal, como el glucagón,
genuino), sin lesión do la mucosa intestinal. el GlP y la calcitonina, pueden inducir diarrea
La enterotoxina ele otros gérmenes, como al- por este mocanisrno, así como algunos lcixontes,
gunas cepas do Escherichia coli, quo producen como el ácido ricinolEdco. En esto sentido, la
una enterotoxina termolábil, actúa por el mismo diarrna acuosa que acompafia a muchos estados
mecanismo. de malnbsorción puede estar relacionada con los
Existen también otras suslancias capaces de cícidos grasos no absorbidos, que son ulterior-
inducir diarrea a través de un mecanismo depen- mente hiclroxilados por las bacterias del colon.
diente del AMPc, tanto en el intestino delgado Mecanismo dependiente del calcio. En algunos
como en el colon. Ello sucede con algunos fárma- casos, el ingreso de calcio en la célula intestinal
~
cos, como las metilxontinas. las prostaglandinas parece ser el estímulo para la secreci6n activa de
CAPITULO 26 Trastornos motores del intestino. Diarrea, estreñimiento, íleo y meteorismo. Síndrome de irritación peritoneal

sodio. Este parece ser el mecanismo de la sero- Las heces son también claras, acuosas, sin elementos
tonina, producida en exceso por ciertos tumores inflamatorios macroscópicos ni microscópicos, puesto
denominados carcinoides. que no hay lesión de la mucosa. En el caso de las dia-
rreas osmóticas habrá un hiato osmolar, es decir, un ex-
Diarreas exudativas o inflamatorias ceso de agua en relación con el contenido electrolítico
de las heces. La osmolaridad de las heces es mayor que
Se originan por lesión orgánica de la pared intesti-
el doble de la suma Na+ + K+ (ya que existen aniones
nal (intestino delgado o, más frecuentemente, colon)
orgánicos que se añaden a los inorgánicos habituales,
que , además de perturbar los procesos de absorción
c1- y C0 3H-). Son ejemplos de ello la intolerancia a la
de agua, produce exudación, es decir, líquido
lactosa y otras disacaridosis (déficit de
con alto contenido en proteínas. En oca-
disacaridasas). Los disacáridos no
siones, este es purulento, con moco
absorbidos se comportan como
y muchas veces sangre, oculta
agentes osmóticamente ac-
o macroscópicamente evi-
tivos. La flora normal del
dente, así como leucocitos ,
colon los transforma en
detectados en el examen
ácidos orgánicos, por
microscópico de las he-
lo que característica-
ces. Son las llamadas
mente desciende el
diarreas disenterifor-
pH fecal. En general,
m es (con moco , sangre
en el síndrome de
y pus), por ser propias
malabsorción, cual-
de las enfermedades
quiera que sea su
tradicionalmente deno-
causa, el mecanismo
minadas disenterías (shi-
osmótico se suma a
gelar, amebiana, etc.) .
menudo a otros meca-
En efecto, la mayor par-
nismos que intervienen
te de las veces la causa es
en la frecuente aparición de
inflamatoria, infecciosa o no,
diarrea. Los laxantes osmóticos,
aunque también pueden ocasionarla
como los compuestos de magnesio o
procesos infiltrativos de tipo tumoral o de Salmonella los disacáridos no absorbibles (tipo lactu-
otro tipo (amiloidosis, por ejemplo), así como
losa) actúan a través de este mecanismo.
los procesos isquémicos intestinales. El adeno-
ma velloso es un tumor premaligno que se localiza
preferentemente en el recto y produce una exudación Diarreas motoras
abundante , rica en moco , agua y potasio. Las diarreas de origen motor pueden estar producidas
Los ejemplos etiológicos más frecuentes de este por:
tipo de diarreas son las enfermedades inflamator_ias
Incremento de la motilidad, con reducción del
intestinales de origen posiblemente inmunológico
tiempo de contacto del contenido intestinal con
(enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa}, y las colitis
la mucosa. Ahora bien, si solo actúa este meca-
infecciosas por gérmenes enteroinvasivos (bacterias,
nismo, no es habitual que se produzca diarrea en
virus o protozoos), sobre todo Salmonella, Shigella,
sentido estricto, debido a la gran capacidad del
algunas cepas enteroinvasoras de E. coli, y por ame-
colon para la absorción hidroelectrolítica. En oca-
biasis. Otras veces, los gérmenes no son enteroin-
siones, la única consecuencia es el aumento de
vasivos, sino que elaboran citotoxinas que inducen
la frecuencia en la defecación, pero sin aumento
necrosis de la mucosa del colon, con formación de
del peso fecal en 24 horas ni alteración en la co~-
pseudomembranas (por ello, se denominan colitis
sistencia de las heces (se habla entonces de «hi-
pseudomembranosas). La más reconocida es la indu-
perdefecación»). Sucede esto, en ocasiones, en el
cida por la citotoxina de Clostridium difficile.
hipertiroidismo o en la entidad conocida como
En resumen, los microorganismos pueden desen-
síndrome del intestino irritable, aunque en ambas
cadenar diarrea, unas veces secretora, mediada por
situaciones-puede aparecer una verdadera dia-
enterotoxinas, y otras veces exudativa, por invasión
rrea. En estos casos se ha detectado un aumento
de la pared o por elaboración de citotoxinas. Algunas
del ritmo eléctrico basal en el colon, así como una
cepas comparten varios de estos mecanismos.
respuesta excesiva al estrés psicológico y a la co-
lecistocinina liberada por la ingesta alimenticia.
Diarreas osmóticas Disminución de la motilidad, que en el intestino
Son inducidas por la existencia, en la luz intestinal, delgado produce estasis del contenido intestinal
de sustancias osmóticamente activas, que atraen y sobrecrecimiento bacteriano, dando lugar,
agua. Este «agua atraída» arrastra electrólitos (Na+, como se verá, a un síndrome de malabsorción.
K+ y bicarbonato, especialmente). Se da esta situación en las alteraciones de la
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

inervación vegetativa del tubo digestivo, como encamadas o debilitadas, puede producirse un endu-
sucede a veces en la neuropatía autonómica de recimiento de las heces retenidas en la ampolla rectal
la diabetes. (impactación fecal o fecaloma) que, al irritar la muco-
sa, pueden producir hipersecreción de agua y moco,
simulando una situación diarreica (pseudodiarrea).
CONSECUENCIAS DE LA DIARREA
Dependen fundamentalmente de su etiología, de la
intensidad de las pérdidas hidroelectrolíticas y de su CLASIFICACIÓN FISIOPATOLÓGICA
duración. Las más importantes son:
El estreñimiento puede originarse en el colon o en el
recto, y de acuerdo a ello puede clasificarse en (Ta-
Disminución ponderal bla 26-2):
Se produce fundamentalmente en las diarreas cróni-
cas de tipo exudativo o en las que acompañan a un
síndrome de malabsorción, lo que frecuentemente se
asocia a anemia , hipoproteinemia y déficit de otros
principios inmediatos, vitaminas y oligoelementos . Tabla Estreñimiento: clasificación
Una diarrea crónica sin pérdida de peso sugiere una fisiopatológica
causa funcional (p. ej., síndrome del intestino irrita-
ble). Colónico

Deshidratación Disminución de la motilidad


Dieta
Suele producirse en los procesos diarreicos agudos,
Lesiones neurológicas
con grandes pérdidas acuosas, como ocurre en las
Enfermedad de Hirschsprung
diarreas coleriformes.
Esclerodermia
Endocrinometabólicas:
Depleción electrolítica
Hipotiroidismo
Lo más frecuente en estos casos es la hipopotasemia, Hiperparatiroidismo
que en ocasiones puede ser muy intensa. Ciertos tu- Hipercalcemia
mores endocrinos pancreáticos secretores de VIP, o Hipopotasemia
los adenomas vellosos , inducen diarrea con grandes
Deshidratación
pérdidas de potasio, como ya se ha señalado.
Porfiria
Espástico
Alteraciones del equilibrio ácido-base Opiáceos
La alteración más frecuente suele ser la acidosis me- Colon espástico
tabólica ya que, en general, predomina la pérdida de Orgánico
bicarbonato. No obstante, la alteración del equilibrio Estenosis (cicatriza!, tumoral , cuerpos
ácido-base es muy variable y depende de la pérdida extraños, compresiones extrínsecas)
que predomine en cada caso concreto. Dolicocolon
Rectal
ESTREÑIMIENTO
Orgánico
Se define como la expulsión infrecuente e incompleta Hemorroides, fisuras, neoplasias
de heces , en general con aumento de consistencia de Neurológico
las mismas y con mayor esfuerzo de lo habitual de la Plexo lumbosacro
prensa abdominal. No obstante, es difícil definir cuan-
Lesiones medulares bajas
titativamente el estreñimiento, dada la variabilidad
Disminución de la fuerza de la prensa
individual en el hábito intestinal. Se podría hablar de abdominal
un intervalo entre las deposiciones mayor de 3 días o
Multíparas
un peso fecal medio en 24 horas inferior a 35 gramos.
Grandes hernias
En realidad, desde el punto de vista clínico práctico
la definición de estreñimiento se basa en la sensación Senilidad
subjetiva de esfuerzo en la defecación, independien- Sedentarismo
temente de la frecuencia o consistencia de las deposi- Encarnamiento
ciones. Como consecuencia del estreñimiento pueden Represión del reflujo de la defecación
aparecer hemorroides o fisuras anales que, a su vez, ldiopá tico
tienden a acentuarlo. Asimismo, pueden aparecer her-
Tir
nias de la pared abdominal. En ancianos y en personas
CAPITULO 26 Trastornos motores del intestino. Diarrea, estreñimiento, íleo y meteorism o. Síndrome de irritación peritoneal

Estreñimiento colónico Por causa orgánica


Se incluyen en este apartado los procesos que con-
Por disminución de la motilidad (inercia colón ica) dicionan una estenosis de la luz del colon (especial-
Surge por: mente en el colon descendente o el sigma y también
en el recto), tanto intraluminales (fecalomas, cuerpos
Alteración en la composición de la dieta, espe-
extraños) como parietales (tumores, estenosis infla-
cialmente por déficit de fibra , pues la digestión
matorias) o extraparietales (compresiones extrínse-
parcial de sus componentes (celulosa y hemice-
cas). Si el estreñimiento es de aparición reciente, sin
lulosa) genera compuestos hidrófilos, aumen-
causa justificada, habrá
tando el volumen
que pensar en alguna de
fecal y favoreciendo el
Hemorroides estas causas, especialmen-
crecimiento de la flora
te en la tumoral.
bacteriana normal, re-
El dolicocolon , o au-
guladores ambos de la
mento de la longitud del
motilidad colónica. Lo
colon, que es muy redun-
mismo podemos decir
dante a veces, puede ser
del déficit de ingesta
otra de las causas, al estar
de líquidos.
más tiempo en contacto
Lesiones neurológicas
las heces con la mucosa,
de la inervación vege-
lo que condiciona una
tativa del colon, como
mayor absorción de agua.
la diabetes; el uso
de anticolinérgicos ;
la afectación de los Estreñimiento rectal
ganglios intramurales, Es el más habitual. Se
como sucede en el denomina también dis-
llamado megacolon quecia, y puede deberse a
congénito o enferme- varias causas:
dad de Hirschprung,
y en afecciones del Causas orgánicas
propio músculo liso Como hemorroides , fisu-
del colon, como en la ras u otros procesos infla-
esclerodermia. matorios o tumorales de la
Causas endocrino- zona anorrectal, que pro-
metabólicas, como internas vocan estenosis o dolor
externas
la hipercalcemia, durante la defecación, con
secundaria o no a hi- lo que esta se reprime vo-
perparatiroidismo, y luntariamente. En el carci-
la hipopotasemia (ambas situaciones disminu- noma rectosigmoideo es frecuente que disminuya el
yen la excitabilidad neuromuscular), el hipoti- calibre de las heces y que se acompañe de tenesmo
roidismo , la deshidratación y la porfiria aguda rectal.
in ter mi ten te.
Alteraciones neurológicas
Por espasmo colónico Que afectan a las vías y centros del reflejo de la defe-
Es el llamado estreñimiento espástico, que hace que cación, como lesiones pélvicas inflamatorias, tumora-
las heces queden detenidas en el colon por contraccio- les, traumáticas, etc. , que afectan a los plexos nervio-
nes simultáneas de la musculatura circular existente sos lumbosacros; o lesiones medulares bajas.
entre las haustras, que actúan a modo de esfínteres,
impidiendo el peristaltismo evacuador normal. Las Disminución de fuerza de la «prensa abdominal »
heces son de calibre muy estrecho y a veces muy frag- Ejercida por la musculatura de la pared abdominal ,
mentadas (heces caprinas). Este cuadro pueden pro- suelo pélvico y diafragma, necesaria para evacuar la
vocarlo los opiáceos y es característico del llamado ampolla rectal, como sucede en las multíparas, en
colon espástico, que es una forma clínica de la entidad las personas con grandes hernias parietales, y en los
denominada síndrome del colon irritable o del intesti- ancianos y personas debilitadas, así como debido al
no irritable. En este caso, se ha atribuido el trastorno sedentarismo y a la falta de ejercicio físico.
a una hipersensibilidad del músculo del colon ante
estímulos psicógenos o a la colecistocinina liberada Represión del reflejo de la defecación
durante la digestión. También se ha detectado un in- Desde la infancia, a veces por aparecer en mamen-
237
cremento de la actividad motora basal en el colon. tos inoportunos o por otros motivos, en general de
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

tipo psicológico, o por patología anorrectal dolorosa,


como antes se apuntó. Con el paso del tiempo se va
creando una disminución progresiva de la sensibili- Tabla Íleo: clasificación
dad de la ampolla rectal a la distensión.
Mecánico u obstructivo
Estreñimiento idiopático
Simple
Es el más frecuente, y probablemente es de origen
lntraluminal (íleo biliar)
rectal. Se han detectado algunas alteraciones en las
personas que lo padecen, tales como: Parietal (tumoral , inflamatorio, cicatriza!)
Extraparietal (tumores del peritoneo,
Alteraciones histológicas de los plexos mienté- adherencias)
ricos, con lo que podría tratarse de formas leves Con estrangulación (asa cerrada)
de la llamada enfermedad de Hirschsprung o Hernias
megacolon agangliónico. Vólvulo
Relajación incompleta del esfínter anal interno o Invaginación
liso durante la defecación (acalasia rectal). Obstrucción simple de colon con válvula
Contracción excesiva del esfínter externo [anis- ileocecal competente
mo).
Reducción del ángulo ano1wctal durante la defe- Funcional
cación, con la consiguiente aparición de una ba- Adinámico
rrera mecánica que la dificulta (por contracción 1rritación peritoneal
excesiva del músculo puborrectal). Procesos agudos extraperitoneales:
Ausencia de respuesta mioeléctrica colorrectal Cólico nefrítico
atribuida a una disminución de la sensibilidad a
Fractura de vértebra lumbar
la colecistocinina; es decir, lo contrario a lo que
Disección aórtica
sucede en el colon espástico.
Procesos extraabdominales:
Neumonía basal
Infarto agudo de miocardio
ÍLEO Procesos generales:
Se define como la detención del tránsito intestinal, Sepsis
tanto de heces como de gases, y lo habitual es que se Hipopotasemia grave
presente de forma aguda. Puede deberse a obstruc- Hipercalcemia grave
ción intestinal o a parálisis del músculo intestinal Dinámico o espástico
(íleo mecánico u obstructivo, y funcional o adinámi- Intoxicación por plomo
co, respectivamente) (Tabla 26-3). Porfiria aguda intermitente
Uremia
Úlceras intestinales múltiples
ÍLEO MECÁNICO
Íleo mecánico simple
Se produce por obstrucción, debido a causas intra-
luminales, como cálculos biliares grandes emigrados
por fistulización de la vesícula al intestino (íleo bi-
liar) u otros cu erpos extraños; ca usas parietales, de
tipo inflamatorio, cicatriza! o tumoral; y causas ex-
traparietales, como tumores del peritoneo y bridas o
adherencias quirúrgicas (Figs. 26-2, 26-3 y 26-4).

Íleo mecánico con estrangulación
o con asa cerrada
Cuando el intestino se obstruye en dos puntos se
produce entre ellos un asa cerrada. Más importante
que esto es el hecho de que se interrumpe el riego del
asa, por obstrucción primero de las venas y luego de
las arterias del asa cerrada. Ello ocasiona necrosis y
perforación, con invasión del peritoneo por el con-
tenido del asa, donde proliferan bacterias, debido a
238
la estasis. Las causas más frecuentes son las hernias Figura Íl eo mecá nico simple.
CAPITULO 26 Trastornos motores del intestino. Diarrea, estreñimiento, íleo y meteorismo. Síndrome de irritación peritoneal

Vólvulo

1nvagi nación Obstrucción de


co lon
Figura Estenosis inflamatoria en el íleon ter-
minal, correspo ndi ente a una enfermedad de Croh n Figura Íleo mecánico con estrangu lación (asa
(imagen radiológica de un tránsito intestinal baritado). cerrada, en sombreado).

tente (esto es, no permite reflujo), debe considerarse


esta situación como íleo con asa cerrada. La disten-
sión que experimenta el ciego en estos casos aumenta
tanto la tensión de su pared, según la ley de Laplace,
que muy pronto se interrumpe el riego sanguíneo, y
frecuentemente conduce a la pe1foración cecal. Este
fenómeno tan1bién puede suceder en las obstruccio-
nes simples del intestino delgado, pero la distensión
de este, al no estar cerrado hacia arriba, es raro que
produzca la suficiente tensión parietal como para
obstruir el flujo sanguíneo.
En la estrangulación, lo primero que sucede es que
el asa cerrada se edematiza al obstruirse el retorno
venoso. Disminuye hasta desaparecer rápidamente el
peristaltismo, cesa la absorción de agua y, acto segui-
do, el asa comienza a segregar. Si no se trata, aparece
gangrena de la pared (por isquemia y sobrecrecimien-
to bacteriano), perforación y peritonitis, con escape
al peritoneo de grandes cantidades de secreciones
intestinales infectadas y sangre, lo que provoca hipo-
Figura Estenosis en «corazón de manzana » en volemia y un cuadro de sepsis.
un caso de cáncer de colon transverso (imagen radio-
lógica por enema opaco).
ÍLEO FUNCIONAL OADINÁMICO
Se origina por un mecanismo reflejo , probablemen-
(el orificio herniario obstruye el asa en dos puntos), te simpatoadrenérgico, con pérdida de la función
el vólvulo o torsión del asa alrededor del eje mesen- motora del intestino. Suele obedecer a una irrita-
térico y la invaginación o intususcepción (un asa se ción peritoneal ante cualquier afectación peritoneal
introduce y avanza dentro de la siguiente) (Fig. 26-5). (traumática o infecciosa), y especialmente en perfo-
En el colon, aunque la obstrucción sea simple (es raciones de vísceras que contienen secreciones muy ~
decir, en un punto), si la válvula ileocecal es campe- irritantes (como el ácido clorhídrico o las enzimas
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

pancreáticas). También puede aparecer en procesos


extraperitoneales, como hematomas retroperitonea-
les (tras fracturas vertebrales o por disección de un
aneurisma de la aorta abdominal, por ejemplo), un
cólico ureteral o una pielonefritis grave. Se presenta
incluso en procesos extraabdominales (neumonía del
lóbulo inferior o infarto agudo de miocardio). Otras
veces puede generarse por alteraciones electrolíticas
o generales, tales como una depleción importante de
potasio, una hipercalcemia grave o una sepsis. La is-
quemia intestinal puede perpetuar un íleo producido
por las causas mencionadas.
Son muy raros los íleos funcionales (denominados
dinámicos o espásticos, en contraposición a los ante-
riores) , en los que un gran espasmo masivo y mante-
nido del intestino ocasiona, además de dolor intenso,
una detención del tránsito. Aparece en algunos casos Figura Radiografía simpl e en decúb ito lateral,
de intoxicación por plomo (saturnismo), porfiria agu- do nde se muestran niveles hidroaéreos (flechas) en un
da intermitente, uremia o en ulceraciones intestinales caso de íleo.
múltiples.

CONSECUENCIAS DEL ÍLEO dida de la capacidad de absorción de agua por estas


asas distendidas, que secretan líquidos en cantidades
Las fundamentales son: abundantes. En el examen radiológico esta acumu-
lación de gases y líquidos en las asas distendidas
produce la típica imagen de niveles hidroaéreos (Fig.
Ausencia de emisión de heces y gases
26-6). Esta distensión condiciona una elevación del
Ya se ha comentado que este es un fenómeno que se diafragma con limitación de la ventilación y apari-
da en el íleo por definición. No obstante, al principio ción de atelectasias.
puede existir tránsito , incluso diarrea, con evacua-
ción del contenido intestinal que queda distal a la Pérdida de líquidos
oclusión.
Existe una notable pérdida de líquidos en el interior
de la luz de las asas distendidas y en el propio espe-
Dolor cólico sor de la pared que está edematizada, muchas veces
Se caracteriza por ser intermitente, y suele ir acompa- también con pérdida abundante de sangre, dada la
ñado al principio de ruidos hidroaéreos por hiperpe- congestión de las asas. Si además existe perforación,
ristaltismo de lucha. El dolor es más intenso cuanto las pérdidas también tienen lugar hacia el interior de
más alta sea la obstrucción. Se hace persistente en la cavidad peritoneal. Esto desencadena una situa-
caso de estrangulación, con signos de irritación peri- ción de hipovolemia, hemoconcentración (salvo que
toneal si hay perforación del asa. la hemorragia sea intensa), sepsis debida a la infec-
ción sobreañadida en caso de estrangulación, shock
e insuficiencia renal, que pueden conducir al exitus.
Vómitos
Son más precoces cuanto más alta sea la obstruc-
ción. También lo son en caso de estrangulación, por
METEORISMO
producirse pronto una irritación del peritoneo, que Es el aumento del contenido gaseoso en el tubo diges-
condiciona vómitos reflejos. En caso de obstrucción tivo. La consecuencia clínica es la sensación de dis-
en el íleon, los vómitos pueden ser fecaloideos por tensión, a veces con dolor, que en ocasiones es muy
sobrecrecimiento bacteriano . Es poco frecuente que intenso y que puede ser localizado o generalizado
aparezcan en las oclusiones de colon, sobre todo si la por todo el abdomen. Cuando se localiza en la zona
válvula ileocecal es competente. superior del abdomen, forma parte del síndrome dis-
péptico, al que ya se ha aludido en otros apartados.
Distensión abdominal En este capítulo solo se mencionarán sus causas, que
pueden ser:
Las asas proximales a la obstrucción se dilatan debi-
do a los gases procedentes del aire deglutido, rico en El aumento del aire deglutido, en caso de aero-
nitrógeno, que no se absorbe. A esto se añade la pér- fagia.
CAPITULO 26 Trastornos motores del intestino. Diarrea, estreñimiento, íleo y meteorismo. Síndrome de irritación peritoneal

La detención del aire deglutido, en caso de íleo, DOLOR


que se acaba de comentar.
El aumento de la producción de gas intestinal, Se debe a irritación del peritoneo parietal. Es conti-
en caso de aumento de los procesos de fer- nuo y está localizado directamente sobre el área in-
mentación intestinal, tal como sucede en las flamada, ya que se transmite por los nervios somá-
disacaridosis y, en general, en el síndrome de ticos que inervan el peritoneo parietal contiguo a la
maldigestión o malabsorción, cualquiera que sea víscera inflamada. Aumenta con la presión y con los
su etiología. movimientos que producen tensión de la pared abdo-
minal; de ahí la respiración superficial y la quietud
Lo más frecuente es que el contenido gaseoso ab- que presentan estos pacientes. A la palpación es ca-
dominal proceda del aire deglutido. Ello puede com- racterístico el dolor de rebote (signo de Blumberg).
probarse mediante el estudio cromatográfico de los Su intensidad depende sobre todo de:
gases que componen el aire expulsado en el eructo o
La capacidad irritante del material que ingresa
el ventoseo , donde se detectan preferentemente oxí-
en la cavidad: ocasiona más dolor la entrada
geno y nitrógeno, que no se producen en las fermen-
de ácido clorhídrico o jugo pancreático, rico en
taciones u otras reacciones químicas que tienen lugar
enzimas, que la de materia fecal , sangre u orina.
en el tubo digestivo. La excesiva aerofagia conduce,
Si se trata de materia fecal, al proliferar bac-
pues, al eructo, que mejora o alivia la sensación de
terias estas pueden producir metabolitos ácidos
distensión, y lo mismo podemos decir del ventoseo.
o inducir la liberación de enzimas leucocitarias,
En condiciones normales , del 20% al 60 % del gas
que pueden hacer que el dolor aumente.
intestinal procede del deglutido , si bien la ingesta
La velocidad de entrada del material al peritoneo.
de ciertos alimentos ricos en hidratos de carbono no
absorbibles (rafinosa y estaquiosa de las alubias , por
ejemplo), igual que ciertos laxantes disacáridos como DEFENSA PARIETAL
la lactulosa, determina que estos sean captados por las
bacterias intestinales, sobre todo en el colon, dando Se denomina así a la contractura que experimenta el
lugar a una producción excesiva de gas, que ocasiona músculo parietal adyacente al peritoneo inflamado.
meteorismo y en cuya composición figuran sobre todo Si la peritonitis es generalizada, aparece el llamado
el hidrógeno , el C0 2 , y pequeñas cantidades de gases «vientre en tabla». La intensidad de esta contractura
malolientes (indol, escatol y productos sulfhídricos). depende mucho de la profundidad de la víscera afec-
Aproximadamente un 30 % de la población produce tada (por ejemplo, la apendicitis retrocecal produce
también metano , independientemente del tipo de menos contractura que la de localización habitual).
dieta. También será más intensa cuanto más rápidamente se
Los alimentos grasos generan C0 2 , al reaccionar los haya producido la irritación del peritoneo.
ácidos grasos con el bicarbonato presente en las secre-
ciones digestivas altas; ello puede explicar en parte
la flatulencia o meteorismo causado por las comidas ÍLEO REFLEJO
grasas. Puede ser localizado (relacionado con la zona infla-
Se han descrito algunos síndromes relacionados mada) o generalizado (si la irritación también lo es).
con la dispepsia flatulenta , como el llamado de la
burbuja gástrica, que aparece en algunas personas
que adoptan la posición de decúbito inmediatamente VÓMITOS REFLEJOS
después de comer (el aire se acumula en la cámara
aérea gástrica) o el síndrome de la flexura esplénica Es un síntoma frecuente y, en general, precoz. En caso
de colon, en personas con una disposición anatómica de peritonitis generalizada con íleo también generali-
de dicha flexura que favorece el estancamiento de los zado, estos vómitos pueden llegar a ser fecaloideos.
gases a este nivel. En estos casos, la distensión puede
ocasionar dolor, a veces intenso.
DESHIDRATACIÓN E HIPOVOLEMIA
Se deben a vasodilatación por el proceso inflamatorio
SÍNDROME DE IRRITACIÓN PERITONEAL de la serosa y exudación, si la situación continúa. A
veces puede ser muy abundante, causando ascitis in-
Es la consecuencia de un proceso inflamatorio agu- flamatoria. Esta acumulación de líquido intraperito-
do de la membrana peritoneal. Puede ser traumático neal, junto con las pérdidas por el íleo paralítico y los
(heridas penetrantes, intervenciones quirúrgicas), vómitos, pueden conducir a una situación de shock
pero la mayor parte de las veces se debe a la entrada hipovolémico, que puede agravarse por la infección
en la cavidad peritoneal de material procedente de peritoneal y la sepsis con todas sus consecuencias,
la perforación de una víscera hueca. Se caracteriza es decir, insuficiencia renal y de otros parénquimas
clínicamente por: (fracaso multiorgánico).
·127
Alteraciones de la digestión
y absorción intestinal.
Síndromes de malabsorción
y maldigestión
Agustín Caro-Patón Gómez, María Lourdes del Olmo Martínez

Se produce malabsorción de uno o más constituyen-


tes de la dieta cuando la digestión y absorción nor-
mal de los nutrientes está alterada. La alteración de
la digestión comprende tanto la hidrólisis defectuosa
de grandes moléculas como la de los productos re-
sultantes de estas moléculas en el intestino delgado.

RECUERDO FISIOLÓGICO
DE LA ABSORCIÓN INTESTINAL
El intestino delgado mide aproximadamente 3,5 m
en los adultos. La morfología del intestino compren-
de las válvulas conniventes, las vellosidades y las
microvellosidades. Las vellosidades miden apenas
0,05-0,1 mm de altura y se proyectan hacia el interior
de la luz intestinal. Están revestidas por tres tipos
de células: columnares o absorbentes (enterocitos),
secretoras de moco y enterocromafines. Entre las ve-
llosidades se localizan las criptas de Liebe1*ühn. La
superficie de absorción aumenta notablemente gra-
cias a todos estos elementos, y sobre todo gracias a
las microvellosidades de la membrana apical de los
enterocitos .
El proceso digestivo se inicia en el estómago por
acción del ácido y la pepsina sobre los alimentos.
Continúa en el intestino delgado proximal por ac-
ción de las enzimas pancreáticas: amilasa, lipasa,
quimiotripsina y otras peptidasas. Como resultado
de estos procesos digestivos, los hidratos de car-
bono se convierten en monosacáridos y disacári-
dos; las proteínas en aminoácidos , dipéptidos y
tripéptidos, y las grasas en monoglicéridos y
ácidos grasos. Estos son los nutrientes que
van a ser transportados a través de las
células intestinales. La motilidad
del intestino facilita los movi-
mientos de los nutrientes a
~ lo largo del tubo digestivo.
CAPITULO 27 Alteraciones de la digestión y absorción intestinal. Síndromes de malabsorción y maldigestión

TIPOS DE ABSORCIÓN INTESTINAL drófilos , que están cerrados en el periodo de reposo y


se dilatan durante la absorción.
Existen varios tipos: transporte activo, difusión pasi- Gradientes electroquímicos y de presión osmótica
va, difusión facilitada y pinocitosis. son las fuerzas que provocan el movimiento pasivo
de agua y electrólitos a través de los poros de la mem-
Transporte activo brana celular. Sin embargo, la difusión de agua puede
a) Se produce contra un gradiente eléctrico o quími- producirse secundariamente a un transporte activo
co; b) requiere energía derivada del metabolismo ce- de solutos, y el agua, al atravesar los poros, puede
lular; c) se halla sujeto a inhibición competitiva por transportar otros solutos. Este proceso se denomina
compuestos similares que poseen una ruta en común; «arrastre de solutos».
d) posee una constante de saturación; e) puede reque-
rir la presencia de iones sodio. DIGESTIÓN Y ABSORCIÓN DE GRASAS
Difusión pasiva Consideramos las siguientes fases:
Se caracteriza por el movimiento de una sustancia Fase intraluminal. La grasa ingerida se encuen-
a través de una membrana de forma proporcional a tra fundamentalmente en forma de triglicéridos
la concentración. No depende de energía ni muestra de cadena larga. Al llegar al intestino, actúan
propiedades de inhibición competitiva. sobre ellos la lipasa y la colipasa pancreática que,
junto con los ácidos biliares, forman un complejo
Difusión facilitada que genera productos lipolíticos (monoglicéridos
Es similar a la difusión pasiva, excepto que presenta y ácidos grasos) para su ulterior absorción.
inhibición competitiva. Los ácidos biliares son ácidos monocarboxílicos
esteroideos derivados del colesterol. Los principa-
Pinocitosis les son el ácido cólico, el quenodesoxicólico y el
Solo se ha demostrado de forma significativa duran- desoxicólico. Son conjugados en el hígado con tau-
te el periodo neonatal, y consiste en la absorción de rina y glicina. Las sales biliares son reabsorbidas
proteínas enteras. por el íleon, recuperándose el 95 % de los ácidos
y sales biliares excretados; es decir, experimentan
circulación enterohepática. Solo una pequeña
ABSORCIÓN DE LOS HIDRATOS DE CARBONO parte se elimina diariamente con las heces.
Los hidratos de carbono de la dieta se hallan en for- Estos compuestos tienen varias propiedades:
ma de almidón, glucógeno, disacáridos y monosacá- a) cambian el pH óptimo de la lipasa pancreática
ridos. Las amilasas salival y pancreática hidrolizan y potencian la actividad lipolítica de la misma;
el almidón en oligosacáridos y disacáridos. Estos son b) son moléculas anfipáticas, con un terminal
degradados en sus azúcares por las disacaridasas lo- hidrófilo (soluble en agua) y otro hidrófobo (in-
calizadas sobre las microvellosidades de las células soluble en agua); de este modo , pueden actuar
epiteliales intestinales. Los monosacáridos son trans- como detergentes y emulsionar los ácidos grasos
portados al interior de la célula, algunos por transpor- y los monoglicéridos en una solución acuosa,
te activo (glucosa, galactosa) . mediante la formación de micelas; los ácidos
grasos, los monoglicéridos y otras sustancias li-
posolubles (p. ej., vitaminas) quedan así suspen-
ABSORCIÓN DE LOS AMINOÁCIDOS didas en solución acuosa, formando las llamadas
Las proteínas de la dieta son degradadas en el estó- micelas mixtas; c) estimulan la captación celular
mago por la pepsina. Las proteínas y los péptidos que de los ácidos grasos y la esterificación de dichos
llegan al intestino delgado son sometidos a la acción ácidos a triglicéridos en las células intestinales.
de la tripsina, la quimiotripsina, las carboxipeptida- Fase intracelular o intramucosa: Los ácidos gra-
sas y las aminopeptidasas pancreáticas. Las proteínas sos y los monoglicéridos abandonan la fase micelar
son hidrolizadas hasta convertirse en dipéptidos y y entran en el enterocito por difusión, después de
tripéptidos. Estos a su vez son hidrolizados por oligo- pasar a través de una capa acuosa. Los de cadena
peptidasas, localizadas en el interior del enterocito. larga (más de 12 átomos de C) son reesterificados
El mecanismo por el que los aminoácidos son absor- a triglicéridos por enzimas localizadas en el re-
bidos no está claro, aunque se sabe que algunos lo tículo endoplásmico. Se unen al colesterol, a los
hacen por transporte activo. fosfolípidos y a una betalipoproteína formando
los quilomicrones, que son transportados por los
linfáticos intestinales a la circulación sistémica.
ABSORCIÓN DEL AGUA Y ELECTRÓLITOS Los ácidos grasos de cadena media (entre 8 y
Las membranas de las células intestinales son lipí- 12 átomos de C) penetran en el sistema venoso
dicas. El agua y los electrólitos pasan a través de las portal directamente, sin reesterificación, y son
uniones intercelulares. Estas zonas tienen canales hi- transportados junto a la albúmina.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

LUGARES DE ABSORCIÓN Fase epitelial o parietal. Comprende: a) la hi-


DE LOS PRINCIPIOS INMEDIATOS drólisis de los hidratos de carbono por las disa-
caridasas del borde en cepillo; b) el transporte
En la Figura 27-1 se muestran los puntos principa- epitelial de monosacáridos, ácidos grasos, mono-
les donde son absorbidos los principios inmediatos . glicéridos, pequeños péptidos y aminoácidos; c)
El hierro, el calcio, las grasas y los azúcares se ab- la formación de quilomicrones con los triglicéri-
sorben fundamentalmente en el intestino delgado dos y el colesterol en las células.
proximal. En el tercio medio del intestino, sobre Fase de transporte linfático. Es importante en el
todo en el yeyuno , se absorben los azúcares y los paso de nutrientes desde las células intestinales
aminoácidos. En el tercio distal (mucosa ileal) se a otros órganos para su almacenamiento o meta-
reabsorben las sales biliares y se absorbe la vitami- bolismo.
na B12 ; por eso, la absorción de esta vitamina puede
servir para analizar la integridad funcional de la
mucosa ileal.
SÍNDROMES DE MALDIGESTIÓN
De acuerdo con exposición, podemos dividir la Y MALABSORCIÓN
digestión y absorción normal en tres estadios secu en-
ciales: CAUSAS
Fase intraluminal. Comprende la hidrólisis lu- La clasificación general de los síndromes de malab-
minal de las grasas (lipólisis) y proteínas por las sorción, de acuerdo al lugar donde existe el defecto
enzimas pancreáticas excretadas al duodeno y la de la asimilación de nutrientes, se detalla en la Ta-
solubilización de las grasas por los ácidos bilia- bla 27-1.
res. Para que el hierro y la vitamina B12 sean ab- Alteraciones intraluminales o maldigestión
sorbidos es preciso que estén en la luz intestinal
de una forma asimilable. Origen gástrico
El defecto de la lipólisis recibe el nombre de Se observa en pacientes sometidos a una resección gás-
maldigestión, ya que el defecto más importante trica amplia, ya que en ellos se conjugan varios facto-
se encuentra en el desdoblamiento de las grasas res, como el paso al intestino de partículas de alimen-
a moléculas absorbibles. tos de gran tamaño y su mezcla inadecuada
con la bilis y el jugo pancreático, todo ello
por el rápido vaciamiento gástrico.
Origen pancreático
Como la lipasa pancreática y la colipasa
son necesarias para la hidrólisis de triglicé-
ridos , las enfermedades que causan déficit
INTESTINO DELGADO de enzimas pancreáticas pueden cursar con
maladigestión. Así sucede en la pancreatitis
PATOLOGÍA crónica, el carcinoma de páncreas, la fibro-
,--.&<;:".--- PROXIMAL Gastrectomía Billroth 11 sis quística y la resección pancreática. Asi-
Hierro Estasis de asa aferente mismo se afecta también , aunque con me-
Ca lcio (síndrome del asa ciega)
Grasa Resecc ión yeyunal
nor intensidad, la digestión de las proteinas
Azúca res Celiaquía y de los carbohidratos.
Am inoáci dos Las enzimas pancreáticas pueden ser in-
activadas por un pH intraluminal bajo, como
COLON "1-'W'r - - MEDIO Resecc ión intestinal en el caso del síndrome de Zollinger-Ellison .
Agua Azúca res ampli a
El ectról itas Aminoácidos Origen biliar (déficit de sales biliares)
Se puede producir por una inactivación de
las sales biliares en la luz intestinal, por dis-
minución en su producción o por incremen-
"si:~ - - DISTAL Resección ilea l to de las pérdidas.
Sa les biliares Enfermedades del íl eon
Vi ta mina B12 Enteri tis regional
Ina ctivación de las sales biliares. El
Esprúe no tropica l intestino delgado proximal es estéril
lin foma desde el punto de vista microbiológico,
ya que el crecimiento bacteriano está
limitado por el ácido gástrico, la peris-
Figura Lugares de absorc ió n de los prin cipa les nutr ientes talsis normal y la secreción intestinal
244
y situac io nes frecuentes asoc iadas a la ma labsorc ión . de IgA.
27 Alteraciones de la digestión y absorción intestinal. Síndromes de malabsorción y maldigestión

Tabla Clasificación fisiopatológica de ia malabsorción


Enfermedades
Mecanismo afectado Patogenia
responsables
l Fase intraluminal (digestión)
ai Gástrico Tránsito rápido de los nutrientes Posgastrectomía
Dilución de las enzimas pancreáticas
bJ Pancreático Disminución de !as enzimas Pancreatítis crónica
pancreáticas Carcinoma pancreático
lnactivación de enzimas por ácido Fibrosis quística
Síndrome de Zollinger-Ellison
c) Biliar Interrupción de la circulación entero- Sobrecrecim,enio bacteriano
hepática de las sales biliares Enfermedad o resección del
íleon terminal
Hepatopatía colesiásica
Obstrucción biliar

2. Fase epitelial o parietal


a) Digestión en células epitelia- Dé!icii de d1sacaridasas Intolerancia a la lactosa
les (hidratos de carl)ono)
b) Disminución de superficie Pérdida de células epiteliales Celiaquía, esprúe tropical
de absorción Enfermedad de Whipple
Enteritis por radiación
Resección intestinal
c¡ lmposibilic!ad de íormar Isquemia intestinal
quilomicrones Abetalipoproteinemia

3. Fase de transporte linfático Obstrucción linfática Linfangiectasia. linfoma.


tuberculosis. carcinoide

Ctialquior trastorno (JU!) c:ausn ustasi;.; del cou- /Jísmínur·ión on /u c.•xcn!(.·íón hifíor. l'uodc dP-
tnnido intnstinal fovoro<.c la aparición do! llama- lH:rsn a: n] dismi11uci())] du h1 síntusí,;, corno nn
do sínclrnmu dí' sohn:r·n·címíenio hw:/1:ríuno. Las la lw¡rntopatía crónica; li) clismi1111ci(,11 do la
causas pur las que puede producírs() su11: cual- liburnci(m ,1 la luz intnsliirnl. corno oct11Te (lll la
qui,ir trnstorno que u1rsn cou disminución de la ohstrll(:ciúll biliar o c·n otras enfornrndados que
motilidad. asas ciegas. divertículos rnúltip!ns un cursan con coiPstasis.
f•l intestino delgado. 1:ste111¡sis. físlu!,is, ('siasis de l11r:rewe11lo en lns pt:nlicius. bn l,i cnlnrmedud
un nsa afornnte posquirúrgica. aclorhidria g;ístri- de Croirn con afoctación do] íleon terminal. o ()11
r:a o allnrnciorws inmuriológicas. caso do resección cfol mismo se interrumpe la
La prolifernc:i(m lrnclurihn:i Pll ol intestinn circulación enterolwpfüica y sn pierdnn las salns
delgado pumiu ocasiorrnr 1:síunturrou al pioducir biliares i1 travós ,le! colon.
dcc:c:onjug,n:ión de las sales biliares. lo que re-
duce la c<mt:(mtrncíón intrnl11mí1wl de li!s salf,s Alteraciones en la pared intestinal
biliarns conjugadas. v una ull<'rac:ión nn lu for-
Los mecanismos y las causas rnsponsnble:,; son los si-
maci(m de miculas lipídicas. 1\dermís. las sales
guientes:
clt>sconjugadus S\) ahsorbnn a trnvós de la mucosn
de todo el intestino delgado. por lo q1w su pro- Dt~ficit de disacaridasas. Cuando las !Jllzimas
duc:11 tamhiún un doscnnso dti la concPn!.rm:i(m !1Sp!n;ífica:-; del bordn Pll ct➔ pillo cln las células
intrnl11rni11al dH s,lÍr:s hilial'íis totales. intestinales son deficientes, se produce una ma-
:\dmmís ck la esitrniurrrm. disminuye I¡¡ iib- lahsorción de ol igo:-;acúridos. que son metaboli-
sorciún de vítwnínu B 1~ a causa del consumo de zados por las bacterias (it,l colon. Existen \·arios
esta vitamina por las bacteria.;. Estas tambi(m déficits do disacaridasas. que inducnn unn dia-
oca,;ionan una degradación de las protoínn;;, con ITfül osmótica: 1,l 111<ÍS frnc:uentn P:- el dn lactasa.
el consiguiente clét'icít prnteil'o. quP p1wde sur ccmgéníto o adquirido.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Disminución de la superficie de absorción. La componentes de la dieta, lo que provoca desnutrición


causa más frecuente es la resección quirúrgica y fenómenos carenciales. En este síndrome, lo más
del intestino delgado, por ejemplo por enferme- característico es la aparición de esteatorrea, es decir,
dad de Crohn (Fig. 27-2) o como el tratamiento de incremento del contenido de grasa en las heces.
la obesidad mórbida. El grado de malabsorción Las heces esteatorreicas son voluminosas, blandas,
producido depende de varios factores: a) de la de aspecto grasiento, coloración amarillenta, pálidas,
extensión y el lugar de la resección intestinal; b) de olor desagradable y flotan en el agua. La esteatorrea
de la función de absorción del resto del intestino puede ir acompañada de alteraciones en la absorción
y de la integridad funcional del hígado y el pán- de agua y electrólitos por los mecanismos expuestos
creas; c) de respuestas de adaptación del resto del en el Capítulo 26 . Si este trastorno supera la capaci-
intestino. dad de absorción del colon, condicionará la aparición
Lesiones de la pared intestinal. Numerosas en- de diarrea. Además, la fermentación bacteriana de hi-
fermedades intestinales dan lugar a la destruc- dratos de carbono no absorbidos provoca meteorismo.
ción de las células epiteliales y a la pérdida de la El exceso de ácidos grasos en la luz intestinal for-
función de absorción. Así sucede en la enferme- ma, con el calcio, que no se absorben y se excretan
dad celíaca, en la que se produce una importante provocando un déficit secundario de calcio, que pue-
destrucción mucosa por intolerancia al gluten de de producir osteoporosis.
los cereales, y en cualquier enfermedad que afec- El déficit de absorción general es responsable de
te de forma difusa al intestino delgado. desnutrición y pérdida de peso progresiva. La carencia
Imposibilidad en la formación de quilomicro- de proteínas provoca debilidad muscular y edemas.
nes. Ocurre en la abetalipoproteinemia y en la El déficit de numerosos minerales, principios in-
hipobetalipoproteinemia, que son enfermedades mediatos y vitaminas da lugar a una serie de mani-
hereditarias que consisten en la ausencia o défi- festaciones clínicas y datos bioquímicos que , con su
cit de síntesis de apoproteína B, necesaria para la fisiopatología, se recogen en la Tabla 27-2.
formación de quilomicrones
Alteraciones en el transporte linfático. Tienen
lugar en el linfoma intestinal, la tuberculosis,
EXPLORACIÓN FUNCIONAL
la fibrosis retroperitoneal, etc., que causan obs- DE LA MALABSORCIÓN
trucción linfática y, por tanto, impiden el paso a Revisamos las principales pruebas:
la linfa, y en último extremo a la sangre, de los
productos de la digestión que han atravesado la Determinación de grasa fecal
barrera mucosa. Se pueden efectuar dos tipos de pruebas:
Determinación cualitativa: Se realiza exami-
FISIOPATOLOGÍA nando con el microscopio una muestra de heces,
Las consecuencias funcionales de los trastornos de la evaluando el número y tamafio de los glóbulos
digestión y de la absorción son las mismas: la pre- de grasa. En la maldigestión intraluminal (insu-
sencia en la luz intestinal de nutrientes mal digeri- ficiencia pancreática) existe también un conside-
dos o no absorbidos y la expulsión al exterior, con rable número de fibras musculares de la carne sin
las heces, de una proporción mayor o menor de los digerir. Es una prueba poco específica.
Determinación cuantitativa (test de van de
Kamer): Es la técnica más fiable para valorar la
existencia de esteatorrea. El paciente debe ingerir
durante varios días , antes de la determinación,
una dieta con 70-100 g/día de grasa. Se recogen
las heces de 24 horas. Los individuos norma-
les excretan menos de 7 g/día. Cuando la cifra
supera los 12 g/día se considera que existe una
malabsorción de lípidos.

Prueba de la o-xilosa
Es útil para valorar la integridad de la mucosa intesti-
nal, que es normal cuando la esteatorrea es de origen
pancreático. Se administran 25 g de o-xilosa y se re-
coge la orina de las siguientes cinco horas, determi-
nando en ella la concentración del azúcar. Valores in-
feriores a 4 g se consideran patológicos e indicativos
Figura Biopsia yeyuna l que muestra atrofia de de malabsorción. La utilidad de esta prueba está limi-
246
vellosidades en un caso de enfermedad ce líaca (H&E). tada cuando existe una eliminación escasa de orina
CAPíTULO 27 Alteraciones de la digestión y absorción intestinal. Síndromes de malabsorción y maldigestión

Tabla Bases fisiopatológicas de los síntomas y signos de la malabsorcíón


Síntomas o signos Fisiopatología
t Generales
Desnutrición generalizada y Malabsorción de grasas, hidratos de carbono y proteínas, pérdida de
pérdida de peso calorías

2. Gastrointestinales
Diarrea Secreción neta de agua y electrólitos
Alteración de la mucosa absorbente
Ácidos grasos hidroxilados
Ácidos biliares dihidroxilados
Meteorismo Fermentación bacteriana de hidratos de carbono no absorbidos
Glositis, queilosis, estomatitis Déficit de hierro. vitamina B, 2 , folato y otras vitaminas

3. Renales y genitourinarios
Nicturia Absorción retrasada de agua, hipopotasemia
Hiperazoemia, hipotensión Depleción de líquidos y electrólitos
Amenorrea, disminución de la libido Hipopituitarismo

4. Hematológicos
Anemia Absorción reducida de hierro, vitamina 8 12 y ácido fálico
Diátesis hemorrágica Malabsorción de vitamina K

5. Osteoarticulares
Osteopatía Depleción de proteínas y calcio --, Disminución de la formación ósea
-; Osteoporosis
Malabsorción de vitamina D --, Desmineralización ósea -; Osteomalacia
Tetania, parestesias Malabsorción de calcio y vitamina D __., Hipocalcemia
Malabsorción de magnesio --, Hipomagnesemia
Debilidad Anemia: depleción de electrólitos (hipopotasemia)

6. Neurooftalmológicos
Ceguera nocturna Disminución de vitamina A
Xeroftalmía Disminución de vitamina A
Neuropatía periférica Déficit de vitamina B 12 y tiamína

7. Cutáneos
Eccema Causa desconocida
Dermatitis Déficit de vitamina A. zinc, ácidos grasos esenciaies y oiras vitaminas

o en el sobreerec:imiento !rncieria!lo. va que la xilosa volátihis. amonio y otros. El 1JxígPn11 y F,\ nitrógnno
puede stürir procesos (!¡; fermentación que impiden proceden del aire a1mosforíco. por deglución: el resto
su absorción. se forma en el colon, por la acción de la flora bactnria-
na normal sobro los suslra1os no dígericlos ni absorbi-
dos en el intestino clelgaclo. Los gases allí presentes se
Determinación de metabolitos en el aliento
difunden, en ¡rnrte a tnwés el(' la pan1d del colon. hacia
Se conocm1 como pruebas del ,diento ac¡unllos méto- la círc:ulación sanguínea. y a través ele ella llegan al
dos qtw nnalizan el aire espirado. A. través de ellos. aparato respiratorio. por dondo son eliminados.
ya sea 1,11 ayunas o trns la ingesií(m df' un suslrnlu.
;;e obtiene información sobre la absorción cln carbohi- Prueba del hidrógeno en el aliento
drntos y l ípidns. Stl utiliza fundamentalmente para deteclar la malab-
Los gasPs presentes en ol intestino humano son: sorción ele hidrntos cfo carbono (intolerancia a la lac-
oxígeno, nitrógeno. anhídrido carbónico. hidrógeno. tosa) \- el sohrncrncímíenlo bacleriano. Se basa en que.
247
metano Y m1n- pequeüas cantidades de {icidos grasos nn cc;ndicíones hasalPs, no se produce hidrógeno cm
Semiología y fi siopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

ningún punto del intestino. Tampoco debe producirse Pruebas de función pancreática exocrina
si se administra un hidrato de carbono totalmente ab-
Estimulación directa o prueba de secretina-co-
sorbible. Cuando se ingiere un hidrato de carbono que
lecistocinina. Se basa en el principio de que la
no es absorbido, se produce hidrógeno, que pasa al
inyección intravenosa de secretina y colecistocinina
torrente sanguíneo y es eliminado con la respiración.
provoca un aumento de la producción de jugo
La cuantificación del hidrógeno eliminado se realiza
p ancreático, es decir, de bicarbonato y enzimas.
mediante cromatografía de gases, y es prop orcional a
Requiere la intubación duodenal para la recogida
la cantidad de hidratos de carbono no absorbidos.
de la secreción. Esta exploración es muy fiable y
Prueba de la colilglicina marcada con 14C muy sensible, ya que detecta patología pancreática
Esta técnica aprovecha la eficacia de la circulación en- en más del 75 % de los pacientes afectados.
terohepática de las sales biliares. La 14 C-colilglicina ad- Estimulación indirecta:
ministrada por vía oral sigue el mismo camino que las Comida de prueba de Lundh. También requiere
sales biliares. Permite, midiendo el 14 C0 2 exhalado en intubiación duodenal; en esta exploración se
la respiración, estudiar la absorción, desconjugación y efectúa una comida de prueba, que provoca la
metabolismo de los ácidos biliares. La prueba aparece liberación de colecistocinina-pancreocimina, con
alterada en caso de patología del íleon terminal, ya que aumento de la producción de enzimas pancreá-
la 14 C-colilglicina y las sales biliares llegan al colon, en ticas. Se mide la concentración de lipasa en el
donde son desconjugadas y metabolizadas por las bac- aspirado duodenal. Su principal inconveniente
terias, produciendo 14 C0 2 • En caso de sobrecrecimien- es que provoca falsos negativo cuando el vacia-
to bacteriano en el intestino delgado, las sales biliares miento gástrico es lento, y falsos positivos en
se desconjugan antes de alcanzar la zona donde debían pacientes con patología primaria de la mucosa
ser absorbidas, y forman allí mismo 14 C0 2 • intestinal.
Prueba del ácido n-benzoil-tirosil-p-aminoben-
Prueba de la trioleína marcada zoico (NBT-PABA). Este compuesto se administra
Su administración oral en caso de malabsorción de- al paciente por vía oral y es escindido por la qu i-
tecta una disminu ción de eliminación de C0 2 isotópi- miot:ripsina, dando lugru: a PABA, que se absorbe
co en el aliento. y se excreta posteriormente en la orina. Es una
prueba sencilla y fiable, aunque su sensibilidad
Test de Schilling (absorción de vitamina B12 ) es escasa en la insuficiencia pancreática mode-
rada.
Este test pretende seguir el rastro de esta vitanüna,
marcada con isótopos radiactivos y administrada por
vía oral, detectando los isótopos en la orina de 24 ho-
ras. La vitanüna B12 se administra en dos formas: sin
ENTEROPATÍA CON PÉRDIDA
conjugar (marcada con 58 Co) y conjugada con el factor DE PROTEÍNAS
intrínseco (marcada con 57 Co) . Cuando la vitanüna
no se absorbe en ninguna de las dos formas adminis- Bajo esta denominación se engloba un grupo de tras-
tradas, nos encontramos ante una enfermedad ileal o tornos caracterizados por la pérdida excesiva de pro-
una resección intestinal amplia. Lo mismo ocurrirá teínas plasmáticas, hipoalbuminemia y, habitualmen-
cuando exista insuficiencia pancreática grave, ya que te, edema.
no se produce la hidrólisis del complejo vitamínico Los mecanismos por los que se pierden proteínas
B12 -proteína R, a la que se ha unido en el estómago, a través de la mucosa no se conocen totalmente. Se
que es indispensable para que se una al factor intrín- han postulado varios: a) secreción activa por las célu-
seco y pueda fijarse en los receptores del íleon. las de la mucosa intestinal; b) exudación a través de
En caso de sobrecrecimiento bacteriano intestinal, una mucosa inflan1ada y ulcerada; c) pérdida debida
el test de Schilling, en sus dos formas, será también a metabolismo celular mucoso anormal; d) difusión
anormal, ya que las bacterias consumen la vitanüna. pasiva entre las células mucosas, y e) rotura de vasos
Esta situación se corrige administrando antibióticos. linfáticos dilatados de la mucosa intestinal.
El hígado sintetiza entre 10-14 g de albúmina al día .
Cuando las pérdidas de proteínas sobrepasan su ca-
Biopsia yeyunal pacidad de síntesis, se produ ce una hipoproteinemia
Es una técnica casi siempre imprescindible en el es- con hipoalbuminemia, que da lugar a una disminu-
tudio de un síndrome de malabsorción. La histología ción en la presión oncótica del plasma y al desarrollo
demostrará si existe atrofia de las vellosidades u otros de edema.
datos de interés diagnóstico. También se pueden de- Existen diferentes técnicas para la detección y
terminar, por técnicas histoquímicas, los niveles de cuantificación de las pérdidas proteicas gastrointes-
disacaridasas presentes en el borde en cepillo de la tinales . La mayor parte implican la utilización de
mucosa intestinal, responsables de la hidrólisis de los macromoléculas marcadas, tales como la albúmina
248
disacáridos. marcada con 131 lo, 51 Cr, entre otras.
·128
Síndrome ictérico
Agustín Caro-Patón Gómez, Maria Lourdes Del Olmo Martinez

La ictericia consiste en una acumulación de pigmen-


to biliar en el organismo, que confiere a la piel y a las
mucosas una coloración amarillenta. Su aparición es
siempre consecuencia de una alteración del metabo-
lismo de la bilirrubina. Clínicamente, no se detecta
hasta que los niveles séricos de bilirrubina no sobre-
pasan los 3 mg/dl, aunque ello depende de la textura
y grado de pigmentación de la piel, así como de su
riego sanguíneo.

METABOLISMO DE LA BILIRRUBINA
La bilirrubina es un producto de desecho que deri-
va, en su mayor parte, del metabolismo normal de
la hemoglobina. Cuando los hematíes envejecen son
destruidos por el sistema reticuloendotelial, en parti-
cular por el bazo. Una pequeña fracción puede proce-
der de algunas enzimas tisulares que llevan el grupo
hemo en su molécula (citocromos, etc.) , así como de
una eritropoyesis ineficaz, es decir, destrucción de
precursores de la serie roja en la médula ósea que , en
condiciones normales, es poco importante.
La conversión de la porción hemo de la hemoglobi-
na en bilirrubina comprende una complicada serie de
reacciones enzimáticas. La bilirrubina no conjugada
o indirecta se libera al plasma, donde se liga fuerte-
mente a la albúmina, siendo captada por los hepato-
citos, que la separan de esta. La tasa de entrada de la
bilirrubina está relacionada con dos proteínas cito-
plasmáticas de unión o ligandos, Y y Z. Una vez en
el hígado, la bilirrubina es conjugada con el ácido
glucurónico, estando la reacción catalizada por la
UDP-glucuronil transferasa (UGT-I] en los micro-
somas y en parte también a nivel de la membrana
del canalículo biliar. La conjugación cambia las
propiedades de la bilirrubina, que se trans-
forma en hidrosoluble y capaz de ser eli-
minada por la bilis y, dado el caso,
por la orina. Posteriormente, se
produce una transferencia de
la bilirrubina conjugada a
los canalículos biliares, -ro
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Degradación hemoglobina
SRE: bazo

bacteriana

Urobilinógeno urin ario


Circulación
enterohepática
Urobilinógeno fecal de urobilinógeno
(estercobilina)

Figura Diagrama de los pasos principales del m etabo lismo normal de la bilirrubina. SRE: sistema reticu-
loendote l ial.

donde, como se ha mencionado, se completa la conju- Descenso de la captación por la membrana sinu-
gación y se produce su excreción biliar, fundamental- soidal del hepatocito: La situación más conocida
mente en forma de diglucuronato de bilirrubina, junto es la competencia con otros agentes químicos
con los otros componentes de la bilis. (rifampicina, contrastes yodados , etc.).
La bilirrubina conjugada, al llegar a la luz intes- Alteraciones de la conjugación: Se deben a
tinal, es transformada por las bacterias intestinales, un déficit o ausencia de la enzima microsomal
dando lugar a urobilinógeno. UGT-I. El déficit moderado ocasiona el llamado
Aproximadamente, el 80 % del urobilinógeno for- síndrome de Gilbert, también denominado hiper-
mado se excreta con las heces en forma de estercobi- bilirrubinemia constitucional, pues no se puede
lina (que es el pigmento fecal) y el 20 % se reabsorbe, considerar realmente como una entidad patológi-
pasando de nuevo al hígado y excretándose en la bi- ca, sino como un rasgo constitucional. Algunos
lis; una pequeña parte escapa por la orina en forma individuos con esta alteración presentan también
de urobilina. Este proceso se denomina circulación alteraciones en la captación hepatocelular e in-
enterohepática del urobilinógeno. La Figura 28-1 re- cluso un ligero componente hemolítico. Un dé-
producen las fases del metabolismo de la bilirrubina. ficit más importante de la enzima condiciona un
trastorno más grave, mortal si existe ausencia to-
tal, que se denomina síndrome de Crigler-Najjar.
MECANISMOS FISIOPATOLÓGICOS
DE LA ICTERICIA
Las ictericias pueden clasificarse en dos grandes gru-
AUMENTO DE LA BILIRRUBINA CONJUGADA
pos: a) ictericias debidas al aumento de la bilirrubi- Puede deberse a los siguientes mecanismos:
na no conjugada o indirecta, y b) ictericias debidas
al aumento de la bilirrubina preferentemente conju- Alteraciones hereditarias del metabolismo de
gada o directa. la bilirrubina, una vez que se ha conjugado en
los microsomas, hasta llegar al canalículo biliar.
Los síndromes de Dubin-Johnson y de Rotor se
AUMENTO DE LA BILIRRUBINA incluyen en este apartado.
NO CONJUGADA Ictericias hepatocelulares, donde predomina
también el incremento de la bilirrubina conju-
Puede obedecer a los siguientes mecanismos: gada.
Aumento de la producción de bilirrubina: Como Ictericia obstructiva o colestásica.
sucede en los procesos hemolíticos o por reabsor- A continuación, se expondrán las formas de icteri-
ción de grandes hematomas. cia que se observan con mayor frecuencia.
CAPÍTULO 28 Síndrome ictérico

ICTERICIA HEMOLÍTICA homóloga , la estercobilina. Por otro lado, el aumento


de bilirrubina conjugada, al eliminarse por el riñón,
En casos de hemólisis grave se produce la destrucción ocasiona bilirrubinuria.
de gran cantidad de hemoglobina, con lo que aumen- En resumen, en la ictericia hepatocelular existe
ta la producción de bilirrubina no conjugada, hasta aumento predominante de la bilirrubina conjugada o
el punto de que puede desbordar la capacidad del hí- directa y no tan marcado de la no conjugada o indi-
gado, aumentando sus niveles en sangre. Al ser esta recta, eliminación normal o disminuida de estercobi-
bilirrubina insoluble en agua, no se elimina por la ori- lina fecal (heces hipocólicas}, bilirrubinuria (coluria),
na, por lo que se habla de ictericia acolúrica (coluria y finalmente aumento de urobilinuria.
= presencia de bilirrubina en la orina). Dado que el
hígado transforma mayor cantidad de bilirrubina de
lo normal, tiene lugar un aumento de la producción ICTERICIA COLESTÁSICA (colestasis)
de urobilinógeno y de su excreción fecal en forma de
estercobilina (heces pigmentadas o pleiocrómicas) y La colestasis es la reducción del flujo biliar debido a
en la orina. Así pues, las características fundamenta- un obstáculo que impide total o parcialmente la llega-
les de la ictericia hemolítica son la hiperbilirrubine- da de bilis al duodeno. Ello hace que se retenga bili-
mia no conjugada, el aumento de la excreción fecal rrubina conjugada, por lo que suele cursar con icteri-
de estercobilina, el aumento de la excreción urinaria cia, que recibe el calificativo de colest6sica. También
aumentan en sangre las sales biliares, el colesterol y
de urobilina y la ausencia de bilirrubinuria. Los nive-
enzimas como la fosfatasa alcalina (FAL) y la gamma-
les plasmáticos de bilirrubina indirecta pocas veces
glutamiltranspeptidasa (GGT).
sobrepasan los 5 mg/dl, por muy grave que sea la ane-
Hay que señalar que no en todas las situaciones de
mia hemolítica. En la ictericia hemolítica del recién
colestasis se retiene bilirrubina ni, por consiguiente,
nacido por incompatibilidad de grupo sanguíneo, la
hay ictericia. Cuando aumentan en la sangre las enzi-
hiperbilirrubinemia puede ser muy intensa y, al ser li-
mas FAL y GGT, que se retienen en la colestasis, pero
posoluble la bilirrubina, se disuelve en los lípidos del
no la bilirrubina, se habla de colestasis disociada o, lo
sistema nervioso central originando un cuadro muy
que es lo mismo, de colestasis sin hiperbilirrubinemia
grave denominado ictericia nuclear («kernicterus») o
o sin ictericia.
encefalopatía hiperbilirrubinémica. Lo mismo sucede
La colestasis puede ser de dos tipos: colestasis
en el síndrome por ausencia total de la conjugación
intrahepática, cuando la causa reside en el interior
(síndrome de Crigler-Najjar tipo I). del parénquima hepático, y colestasis extrahepática,
cuando se halla en la vía biliar principal.
ICTERICIA HEPATOCELULAR
Frecuentemente pueden ocasionarla las hepatitis COLESTASIS INTRAHEPÁTICA
agudas y también algunas enfermedades hep6ticas La formación de la bilis se debe a un proceso acti-
crónicas, como la cirrosis en fase muy avanzada. Este vo de transporte de solutos a través de la membrana
tipo de ictericia se produce por alteración de las prin- canalicular, que constituye el primer segmento del
cipales funciones hepáticas relacionadas con el meta- árbol biliar. En ella existen transportadores de los
bolismo de la bilirrubina: captación y eliminación de solutos biliares, ATP-dependientes, cuya síntesis está
la bilirrubina. La conjugación no resulta afectada de regulada por receptores nucleares, activados por los
forma significativa en las enfermedades hepáticas ad- ácidos biliares o por la bilirrubina.
quiridas, dada la enorme reserva funcional del hígado La colestasis intrahepática puede producirse a dife-
para dicha función. La bilirrubina conjugada que no rentes niveles y por los siguientes mecanismos:
puede ser eliminada a la vía biliar pasa a la sangre,
desde donde tiende a ser recaptada por el hepatocito. Canalicular o hepatocanalicular, que puede ser
Compite así con la bilirrubina no conjugada, que por ocasionado por:
tanto aumenta en sangre, dada la alteración de la cap- Interferencia con las fuentes de energía nece-
tación producida por la lesión del hepatocito. sarias para la síntesis y transporte de solutos
La cantidad de bilirrubina conjugada que llega al colefílicos.
intestino puede ser normal o estar disminuida, según Disfunción del retículo endoplásmico liso de
el grado de bloqueo intrahepático en su eliminación. los hepatocitos, con alteración del metabolis-
Esto provocará una excreción fecal normal o dismi- mo de las sales biliares, que son importantes
nuida de urobilinógeno, y de modo parecido se al- promotores del flujo biliar a través de la mem-
terará la circulación enterohepática del pigmento. El brana canalicular.
hígado enfermo no es capaz de captarlo a velocidad Alteración de la membrana canalicular, por un
normal. En estos casos, puede producirse un aumento fallo de las bombas de solutos o por una altera-
de la eliminación urinaria de urobilina en presencia ción de los microfilamentos que mantienen la ~
de una excreción fecal normal o disminuida de su forma y la dinámica de dicha membrana.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Precipitación intracanalicular de compuestos


insolubles.
Ductal, por lesión de los conductillos biliares a
nivel del espacio porta.
Ejemplos de colestasis de origen preferente-
mente canalicular son aquellas que aparecen en
el curso de hepatitis agudas o crónicas, o secun-
darias a la ingesta de ciertos fármacos como anti-
conceptivos orales o fenotiazinas.
La cirrosis biliar primaria es una entidad clíni-
ca que constituye una de las causas mejor cono-
cidas de colestasis crónica de origen ductal, y se
debe a la destrucción de los conductillos biliares
portales e interlobulares de origen autoinmuni-
tario.

COLESTASIS EXTRAHEPÁTICA E ICTERICIA


OBSTRUCTIVA
Se produce por obstrucción total o parcial de las
vías biliares extrahepáticas, que impide o dificulta,
respectivamente, el paso de la bilis al duodeno. Las
causas más frecuentes son: litiasis del colédoco (colo-
docolitiasis, Fig. 28-2; carcinoma de las vías biliares
o de la cabeza del páncreas (Fig. 28-3) y ampuloma
(ampolla de Vater) ; pancreatitis; estenosis biliar pos-
quirúrgica, y presencia de parásitos en las vías bilia-
res. La regla general es que aparezca ictericia que, por
su mecanismo, recibe el nombre de ictericia colestási-
ca extrahepática, o simplemente ictericia obstructiva.
En presencia de una obstrucción, la célula hepáti-
ca capta la bilirrubina no conjugada y la conjuga con
ácido glucurónico, como sucede en condiciones nor-
males. Como la bilirrubina conjugada no puede eli-
minarse a la velocidad normal, aumentan sus niveles Figura CPRE que mu estra una obstrucció n del
plasmáticos por reflujo desde el hepatocito hacia el colédoco por varios cálculos, con dilatación de la vía
plasma. Al ser hidrosoluble , se elimina por la orina, bi liar.
por lo que aparece bilirrubinuria (orina colúrica, si-
milar en su aspecto a la coca-cola) . Además, la dismi-
nución de la eliminación de bilirrubina conjugada al
intestino provoca una disminución en la producción el parénquima h epático y, por tanto, no existe urobi-
de urobilinógeno (o estercobilinógeno), así como su linuria.
excreción fecal (heces hipocólicas o acólicas, por dé- En la Tabla 28-1 se resumen los rasgos que caracte-
ficit o ausencia de estercobilina, de color pálido, a rizan a cada tipo de ictericia.
veces con aspecto de yeso) . La bilirrubina no conju-
gada está mucho menos elevada que en las ictericias
hepatocelulares, porque la alteración de la captación CONSECUENCIAS DE LA COLESTASIS
hepática es menor. En efecto, aunque funcione el me-
Las consecuencias clínicas, además de la ictericia
canismo competitivo entre la bilirrubina conjugada y
(salvo en la colestasis disociada), son comunes para
la no conjugada, al no existir lesión hepatocelular, es
los dos tipos, la intrahepática y la extrahepática.
decir, al no existir pérdida de parénquima hepático
funcionante , dicho mecanismo no se hace evidente.
Las principales características de la ictericia obs- Prurito
tructiva son, pues, hiperbilirrubinemia (predominan- No es una manifestación constante. Se atribuye a la
temente conjugada), bilirrubinuria y disminución en retención de sales biliares, que serían irritantes para
la eliminación fecal y urinaria de urobilinógeno. Al las terminaciones nerviosas sensitivas de la piel. Pue-
no formarse apenas urobilina, la poca que se absorbe de ir acompañado de ictericia o no (colestasis diso-
y pasa a la circulación enterohepática es captada por ciada).
CAPITULO 28 Síndrome ictérico

lesterol libre de origen biliar, estabilizados por apo-


proteínas. El incremento del colesterol se atribuye, en
parte, al contenido de esta lipoproteína. En pacientes
con colestasis crónica puede dar lugar a la aparición
de xantomas y xantelasmas.

Elevación enzimática
Como ya se ha señalado, en la colestasis hay un au-
mento de las concentraciones séricas de fosfatasa al-
calina y gamma-glutamiltranspeptidasa.

Otras consecuencias de la colestasis extrahepática


Además, se pueden observar las siguientes conse-
cuencias:
Dilatación de la vía biliar por encima de la obs-
trucción. Se produce debido a la presión ejer-
cida por la bilis retenida en el árbol biliar. Este
hallazgo, fácilmente evidenciable mediante una
ecografía, tiene gran valor, ya que permite rea-
lizar el diagnóstico de colestasis extrahepática.
La palpación de una vesícula distendida (signo
de Courvoisier-Terrier) orienta hacia una obstruc-
Figura CPRE que muestra di latación del colé- ción baja de la vía biliar principal, especialmente
doco y vía bil iar intrahepática por una neoplasia de la por un carcinoma de páncreas o un ampuloma.
cabeza del páncreas. En estos casos, la vesícula suele tener unas pare-
des elásticas, lo que permite su dilatación. Este
hecho no suele producirse cuando la causa es un
Maldigestión y malabsorción cálculo enclavado en el cístico, ya que en tales
ocasiones la vesícula presenta una pared rígida,
La colestasis puede provocar esteatorrea por dismi-
debido a la inflamación crónica, por ser el asien-
nución de la llegada de sales biliares al intestino.
to original de los cálculos.
Además, se pueden observar otras manifestaciones
propias del síndrome de malabsorción intestinal.
Hepatomegalia . Es frecuente y se debe a reten-
ción de bilis en el hígado.
Infección. La obstrucción de las vías y la estasis
Hipercolesterolemia y lipoproteína X de la bilis pueden dar lugar a infección de esta,
En la colestasis aparece una lipoproteína anómala; que recibe el nombre de colangitis y que puede
la lipoproteína X, constituida por fosfolípidos y co- originar una sepsis grave.

Tabla Diferencias entre los principales tipos de ictericia


Hemolítica Hepatocelular Colestásica
Orina Aspecto Normal Colúrica Colúrica
Bilirrubina Ausente Presente Presente
Urobilina Aumentada Aumentada Aumentada
Heces Estercobilina Aumentada (heces Disminuida (heces Disminuida o ausente
pleiocrómicas) hipocólicas) (heces hipo o acólicas)
Sangre Bilirrubina No conjugada Ambas, con predominio Conj ugada
de la conjugada
-129
Síndrome de hipertensión
portal. Ascitis
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

INTRODUCCIÓN ANATOMOFISIOLÓGICA
La vena porta recoge la sangre procedente de las vís-
ceras abdominales, desde donde la mayor parte de los
nutrientes llegan al hígado. Las hormonas pancreá-
ticas e intestinales son conducidas también por esta
vía al hígado , donde son en gran parte metabolizadas
e inactivadas. Algunas proteínas enteras absorbidas
en el intestino, antígenos bacterianos y algunas bac-
terias son conducidas por la vena porta al hígado,
donde sus macrófagos, representados por las células
de Kupffer, se encargan de procesarlos. A diferencia
de los restantes macrófagos del organismo, estos no
presentan los antígenos procesados al sistema inmu-
nológico. Así, este filtro hepático trata de evitar, en
condiciones normales , la sensibilización inmunoló-
gica frente a antígenos procedentes de la dieta o de
infecciones de origen intestinal.
Las últimas ramificaciones (o radicales) de la vena
porta se sitúan en los espacios porta del lobulillo
hepático, desde donde parten los sinusoides hasta la
vena centrolobulillar, raíz de las venas suprahepáti-
cas, que constituyen el drenaje del hígado a la cava
inferior.
Normalmente, la presión en la vena porta es de
unos 5-10 mm Hg, aunque suele expresarse como
gradiente de presión portal, es decir, la diferencia
entre la presión portal y suprahepática, que supone
2-5 mm Hg. La circulación portal es , pues , de baja
presión, debido a que no existe apenas resistencia
en los sinusoides. Además , al carecer este sistema
de válvulas, un aumento de la presión en cualquier
nivel provoca inmediatamente su transmisión
retrógrada a todo el sistema, produciendo con-
gestión de las vísceras , incluido el bazo.

MECANISMOS Y CLASIFICACIÓN
DE LA HIPERTENSIÓN PORTAL
La hipertensión portal se de-
fine como el aumento de la
254
presión en la vena porta
CAPÍTULO 29 Síndrome de hipertensión portal. Ascitis

mayor de 10 mm Hg (o del gradiente de presión portal


mayor de 5 mm Hg). y se transmite en sentido retró-
grado a sus raíces (p . ej ., la vena esplenica).
Puede producirse por aumento de las resistencias
circulatorias portales o por aumento del flujo sanguí-
neo portal.
Dada la gran distensibilidad de las áreas portal y
sinusoidal, el inicio de la hipertensión portal suele
deberse a un incremento de las resistencias, si bien
en el mantenimiento de la hipertensión contribuye

li
ro
de manera destacada el aumento del flujo sanguíneo.
Pasamos a analizar estos dos componentes.

AUMENTO DE RESISTENCIAS CIRCULATORIAS


Figura Tipos de hipertensión portal y princ ipa-
La hipertensión portal se clasifica atendiendo al lugar
les causas responsables.
donde asienta el obstáculo que ocasiona el aumento
de las resistencias circulatorias. En este sentido, y en
razón de las consecuencias fisiopatológicas tiene gran Hipertensión presinusoidal prehepática
interés conocer si el obstáculo se sitúa antes o después (o extrahepática)
de los sinusoides hepáticos, dato éste que lo propor-
ciona la medición de la presión supralrnpática enclava- Se produce por obstáculos en la vena porta. La cau-
da o en cuña (que refleja la presión en los sinusoides) sa más frecuente es la trombosis de esta. También se
(véase Capítulo 23). De ahí que la hipertensión portal produce por compresión extrínseca por tumores o
se clasifique en presin usoidal y postsinusoidal (Tabla adenopatías. Si el obstáculo se produce en una de las
29-1 y Fig. 29-1). raíces de la vena porta, por ejemplo en la vena es-
plénica, algunos autores la denominan hipertensión
portal segmentaría.
Hipertensión portal presinusoidal
En este tipo de hipertensión portal la presión en los Hipertensión presinusoidal hepática (o intrahepática)
sinusoides es normal. Puede dividirse, a su vez, en Es mucho menos frecuente. Para que aparezca es
preh epática y hepática. preciso que exista un bloqueo difuso de las últimas
ramificaciones portales en los espacios porta. Puede
aparecer en procesos infiltrativos difusos del hígado ,
ya sean de tipo inflamatorio, en general granuloma-
toso (sarcoidosis, por ejemplo), o tumoral (linfoma,
Tabla Hipertensión portal:
etc.). La esquistosomiasis, aunque no se observa en
clasificación nuestro medio, es un buen ejemplo, ya que los huevos
del parásito, con la consiguiente reacción granuloma-
Presinusoidal
tosa que producen, obstruyen estas ramificaciones
Extrahepática (prehepática) portales.
Trombosis portal
Compresión extrínseca Hipertensión portal postsinusoidal
lntrahepática (hepática) Se caracteriza por un aumento de la presión sinusoi-
Afectación difusa de espacios porta dal, lo cual tiene una serie de implicaciones fisiopa-
tológicas y clínicas que más adelante se analizarán.
Postsinusoidal
Se divide en hepática y posthepática.
lntrahepática (hepática)
Cirrosis Hipertensión postsinusoi dal hepática
Enfermedad venooclusiva (o intrahepática)
Es la más frecuente, puesto que se asocia a la cirro-
Extrahepática (posthepática)
sis hepática, que representa el 90% de las causas de
Síndrome de Budd-Chiari hipertensión portal en general. En esta entidad cli-
Pericarditis constrictiva nicopatológica, en la que desembocan muchas enfer-
Valvulopatía triscusp ídea medades crónicas y progresivas del hígado , después
Insuficiencia cardíaca congestiva de producirse necrosis del parénquima hepático por
múltiples causas, este se regenera de forma anóma- ~
la y aparecen nódulos regenerativos, separados por
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Puentes
de necrosis

Colapso de Cirrosis
los puentes

Figura Desarroll o de un a c irros is hepática . Los


nódul os de rege nerac ió n co mprim en fun damental- Figura Nód ul os cirróticos en un a bi ops ia he-
mente la vena centro lobu lill ar (flechas) , por lo que pática (H&E).
genera n un a hi pertensió n porta l predomin antemente
postsin usoida l.
hepática, por la compresión a nivel sinusoidal y
postsinusoidal llevada a cabo por el tejido colá-
tabiques o septos colágenos, producto en gran parte geno y por el crecimiento de los propios nódulos
de la cicatrización de las zonas necróticas (Figs . 29-2, de regeneración.
29-3 y 29-4). Los nódulos producen compresión, so- Resistencias variables o funciona les: además de
bre todo en las venas centrolobulillares o de drena- este componente anatómico, fijo o pasivo, existe
je, por lo que la h ipertensión portal que se crea es otro componente activo producido fundamental-
preferentemente de tipo postsinusoidal. No obstante, mente por la transformación o activación de las
teniendo en cuenta que existe depósito de colágeno células estrelladas o perisinusoidales (también
en el espacio de Disse (lo que se denomina colage- llamadas lipocitos o células de Ita) en m iofibro-
nización o capilarización sinusoidal}, que ocasiona blastos, similares a las células musculares lisas
una significativa disminución de la compliance o de la pared vascular. Estas células se contraen
distensibilidad de estas estructuras, muchos autores, por estímulos alfaadrenérgicos, y además pre-
al referirse a la cirrosis hepática, prefieren hablar de sentan receptores para la mayoría de los factores
hipertensión portal sinusoidal, en lugar de postsinus- vasoconstrictores circulantes (endotelina, angio-
oidal. En esta situación sobre todo hay que tener en tensina II, tromboxano A2, etc.). De igual forma,
cuenta dos tipos de resistencias circulatorias porta- estos elementos se relajan, disminuyendo así la
les intrahepáticas: presión portal, por la actuación de sustancias va-
sodilatadoras, entre las que destaca la liberación
Resistencias fijas o an atómicas: se produ cen por local de óxido nítrico. En este sentido, parece
la propia desestru cturación de la arquitectura existir un déficit de liberación intrahepática de
este mediador en el hígado cirrótico, lo que favo-
recería el incremento de estas resistencias activas
o funcionales.
Otra causa de hipertensión postsinusoidal in tra-
hepática es la afectación de las raíces de las venas
suprahepáticas (vénulas hepáticas), continuación de
las centrolobulillares . Esta situación, poco frecuente,
se denomina enfermedad venooclusiva h epática, qu e
puede presentarse en el trasplan te de progenitores
hematopoyéticos.
Hipertensión postsinusoidal posthepática
o extrahepática
Se genera por obstrucción a nivel de las venas su-
prahepáticas (lo que se conoce como síndrome de
Budd-Chiari), por trombosis, malformaciones congé-
nitas de la desembocadura de las venas suprahepáti-
256 Figura Hígado cirrótico (vi sión mac roscópi ca). cas en la cava (membranas) o compresiones extrín-
CAPÍTULO 29 Síndrome de hipertensión portal. Ascitis

secas por tumores hepáticos o de órganos contiguos


(riñón derecho, por ejemplo).
También puede generar este tipo de hipertensión Tabla Manifestaciones asociadas
portal la propagación retrógrada de un aumento de a la hipertensión portal
presión en la aurícula derecha, como sucede en la
insuficiencia cardíaca congestiva y, sobre todo, en la Circulación colateral
pericarditis constrictiva. Red venosa abdominal (venas del ligamento
redondo)
Hemorroides (plexos hemorroidales)
AUMENTO DEL FLUJO SANGUÍNEO PORTAL
Varices esofágicas (comunicaciones
El incremento de la presión portal, como luego ve- porta-ácigos)
remos, hace que se desarrolle circulación colateral
Hemorragia digestiva
portocava o portosistémica a partir de plexos venosos
Rotura de varices esofagogástricas
preexistentes, que derivan la sangre portal a la circu-
Gastropatía de la hipertensión portal
lación sistémica. Probablemente los mismos estímu-
los que desarrollan dicha circulación colateral (óxido Ulcus duodenal
nítrico, sustancias vasodilatadoras circulantes, etc.), Encefalopatía hepática portosistémica
ocasionan vasodilatación arteriolar esplácnica; ello Estimulación inmunológica
origina un hiperaflujo de sangre al territorio venoso
portal que contribuye al mantenimiento de la hiper- Intolerancia a los hidratos de carbono
tensión portal a pesar del escape de sangre por las Hiperesplenismo
colaterales.
Citopenias
La vasodilatación arteriolar también afecta a la cir-
culación sistémica, lo que produce un desajuste cir- Retención hidrosalina (solo en la
culatorio (desequilibrio continente/contenido), con hipertensión portal postsinusoidal)
la consiguiente estimulación de los barorreceptores. Ascitis
Estos inducen la liberación de sustancias presoras Edemas
(noradrenalina y sistema renina-angiotensina-aldoste- Hidrotórax
rona). La vasodilatación mteriolar fundamentalmente
esplácnica origina una redistribución circulatoria y,
en consecuencia, disminución del flujo sanguíneo
renal y del filtrado glomerular. Se produce entonces
un incremento de la reabsorción proximal de sodio y
agua, lo mismo que sucede en el túbulo contorneado solo se producen cuando la presión sinusoidal está
distal por efecto de la aldosterona. Esta retención re- elevada, es decir, cuando la hipertensión portal es
nal de sodio y agua incrementa más aún el hiperaflujo postsinusoidal, tanto intrahepática como posthepá-
sanguíneo portal, que se mantiene porque también lo tica. Son propios de cualquier tipo de hipertensión
hace la vasodilatación arteriolar, a pesar de la libera- portal los derivados del desarrollo de circulación co-
ción de los mencionados sistemas vasoconstrictores, lateral. Sin embargo, la retención hidrosalina (ascitis
que no son capaces de contrarrestar los potentes es- especialmente) aparece si la presión sinusoidal está
tímulos vasodilatadores (probablemente en relación elevada. En la Tabla 29-2 se enumeran estas conse-
sobre todo con la producción incrementada de óxido cuencias.
nítrico). El desajuste circulatorio mantenido acaba
por inducir la liberación de hormona antidiurétíca,
que provoca la reabsorción de agua libre en los tubos
colectores, ocasionando hiponatremia dilucional y DESARROLLO DE LA CIRCULACIÓN
manteniendo el hiperaflujo portal. Todos estos hechos COLATERAL
coexisten con una tendencia al descenso de la presión
arterial, dada la vasodilatación mantenida, y la acu- El bloqueo de la circulación portal condiciona la
mulación de líquidos, especialmente en la cavidad apertura de comunicaciones, normalmente no evi-
peritoneal (ascitis). dentes, entre el sistema porta y el sistema cava, lla-
madas comunicaciones o derivaciones porto-cava
o porto-sistémicas (Fig. 29-5). Se cree que el óxido
CONSECUENCIAS DE LA HIPERTENSIÓN nítrico puede estar implicado en este proceso al ser
PORTAL liberado de forma local y progresiva por el endotelio
vascular expuesto al incremento de presión; tam-
El aumento de la presión portal origina una serie de bién pueden estar implicados otros factores vaso-
fenómenos: algunos se observan en cualquiera de dilatadores circulantes (glucagón, prostaglandinas, ~
los tipos de hipertensión portal; otros, en cambio, etc.).
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Comuni caciones porta -ác igos


{va ri ces esofagogástricas)

V. mesentérica
Pared inferior
abdominal Figura Endoscopia que muestra varices esofá-
{caput medusae) gicas supracardiales .

Gastropatía de la hipertensión portal y ectasias


de la mucosa gástrica: Se trata de una congestión
Figura Circulación colateral debida a hiperten- e hiperemia de la mucosa gástrica motivadas por
sión portal asociada a cirrosis hepática. la dificultad del retorno venoso gástrico y por
el hiperaflujo arteriolar esplácnico. Las ectasias
consisten en pequeñas dilataciones venulares,
Dichas comunicaciones pueden localizarse en que pueden observarse a veces con el endoscopio
los plexos hemorroidales, apareciendo dilataciones y son muy evidentes en una biopsia gástrica. Am-
varicosas anorrectales (hemorroides}, y en la pared bas lesiones pueden producir hemorragia, casi
abdominal, a través de las venas que rodean el liga- siempre crónica, con pérdidas ocultas de sangre,
mento redondo. Se observa una red venosa supe1ficial lo que ocasiona una anemia ferropénica.
prominente en el abdomen, con dirección umbilicofu- Hemorragia por ulcus duodenal: Se ha descrito
gal de la corriente sanguínea. Con menor frecuencia, una tendencia a la hiperclorhidria en pacientes
aparecen venas varicosas prominentes y aglomeradas con comunicaciones portocava, que se ha atri-
alrededor del ombligo, lo que se denomina cabeza de buido a un déficit de inactivación hepática de
medusa (caput medusae). En el ligamento falciforme la histamina circulante. Ello podría favorecer la
del hígado, en el retroperitoneo y en cicatrices intra- aparición de ulcus péptico.
abdominales en pacientes que han sufrido alguna
intervención o traumatismo abdominal, pueden tam-
bién abrirse colaterales porto-sistémicas. Pero las de
mayor interés clínico, por las graves consecuencias ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA PORTOSISTÉMICA
que pueden asociar, son las llamadas comunicaciones Es en gran parte una consecuencia del desarrollo de
porta-ázigos por dilatación del plexo esofágico situado colaterales portosistémicas, por las que sustancias ni-
en la unión esofagogástrica, que originan unas dilata- trogenadas (fundamentalmente procedentes del intes-
ciones venosas varicosas en la submucosa del fórnix , tino) eluden su paso por el hígado y alcanzan el SNC
cardias y tercio inferior del esófago, denominadas a través de la circulación sistémica, dando lugar a un
varices esofago-gástricas (Fig. 29-6). Estas varices cuadro clínico denominado encefalopatía hepática.
pueden ulcerarse, con ulterior ruptura y ocasionar una Para ello se requiere que exista cierto grado de insufi-
hemorragia digestiva alta grave. El tan1año de las vari- ciencia hepática, por lo que suele ser casi exclusiva de
ces y el grado de hipertensión portal guerdan relación la cirrosis hepática, donde existe lesión parenquimato-
con el riesgo de hemorragia. sa más o menos grave. Este aspecto se abordará en el
siguiente capítulo.
HEMORRAGIA DIGESTIVA
Puede aparecer en un paciente con hipertensión por- ESTIMULACIÓN INMUNOLÓGICA
tal por varios motivos:
En circunstancias normales, los antígenos proceden-
Rotura de varices esofagogástricas: Es la causa tes del intestino son captados y destruidos por las
más frecuente y ya se ha comentado anterior- células de Kupffer. Al desarrollarse comunicaciones
258
mente. portosistémicas, dichos antígenos pasan directamen-
CAPITULO 29 Síndrome de hipertensión portal. Ascitis

te a la circulación general o toman contacto con el Las prostaglandinas renales (sobre todo la PGI2
sistema macrofágico del bazo, siendo presentados a y la PGE2). que inducen natriuresis. En estos
las células inmunocompetentes. Ello es el origen de pacientes parece existir una disminución de la
la hipergammaglobulinemia policlonal, que suelen síntesis de estas prostaglandinas. De hecho , la
presentar los enfermos con hipertensión portal. administración de antiinflamatorios no esteroi-
deos (que inhiben dicha síntesis) tiende a agravar
la situación de retención renal de sodio.
INTOLERANCIA A LOS HIDRATOS El péptido natriurético auricula1~ almacenado
DE CARBONO en los miocitos de la aurícula derecha, se libe-
Se ha descrito especialmente en la cirrosis hepática ra en condiciones normales como respuesta a
una tendencia a la hiperglucemia, con niveles plas- la expansión de volumen. En los pacientes con
máticos de insulina aumentados. Esto sugiere la exis- hipertensión portal puede existir un fallo en la
tencia de una resistencia a la insulina, demostrada liberación de este péptido en respuesta a la ex-
sobre todo en las células hepáticas, tanto a nivel de pansión de volumen.
receptor como posreceptor. Una posible explicación La retención renal de sodio y agua en pacientes
es que el establecimiento de la circulación colateral con hipertensión portal postsinusoidal tiende a resta-
ocasiona un escape de insulina por estas colaterales, blecer la volemia sin embargo, también contribuye a
con lo que elude su metabolización hepática. Lo mis- incrementar la ascitis y los edemas.
mo sucede con el glucagón, cuyos niveles plasmáti- Una situación especialmente grave, muchas veces
cos se encuentran también elevados. terminal, que puede surgir en los pacientes con hiper-
tensión portal generalmente de origen cirrótico, con
insuficiencia hepática, es la llamada insuficiencia
HIPERESPLENISMO renal funcional o síndrome hepatorrenal. Consiste
Es frecuente que exista hiperemia y congestión a ni- en la instauración de oliguria con una eliminación
vel del bazo, con secuestro de todas las series hema- prácticamente nula de sodio urinario y elevación pro-
topoyéticas. Por ello puede aparecer pancitopenia, gresiva de la urea plasmática. Obedece a una intensa
aunque lo más habitual es la trombocitopenia, que vasoconstricción renal , en el marco de una acusada
no suele producir hemorragia porque casi siempre es vasodilatación esplácnica, con un descenso muy mar-
moderada. cado de la perfusión renal y del filtrado glomerular,
con intensa reabsorción de sodio. Además de la actua-
ción a nivel de la circulación renal de las sustancias
RETENCIÓN HIDROSALINA vasoconstrictoras antes mencionadas (catecolaminas
Aparece típicamente bajo la forma de ascitis, aunque y sistema renina-angiotensina), existe un desequili-
con frecuencia también aparece edema en las extre- brio entre las prostaglandinas renales vasoconstricto-
midades inferiores e hidrotórax, sobre todo en la ca- ras (tromboxano A2) y vasodilatadoras (PGI2 y PGI2).
vidad pleural derecha. Es una consecuencia casi ex- con detrimento de éstas y predominio de las primeras,
clusiva de la hipertensión portal postsinusoidal, pues y un descenso en la producción renal de cininas vaso-
el simple aumento de la presión hidrostática en los dilatadoras (calicreína) y óxido nítrico.
capilares peritoneales, como consecuencia de la esta-
sis venosa en el territorio portal, no parece suficiente Aumento de la producción hepática de linfa
para producir ascitis. Si así fuera , aparecería en pre- Es otro factor que contribuye al desarrollo de ascitis.
sencia de hipertensión presinusoidal y, en cambio, es De hecho , mediante laparoscopia se observa cómo el
excepcional que eso suceda. hígado rezuma linfa a través de su cápsula y del hilio,
goteando literalmente en la cavidad peritoneal. Ello
Retención renal de sodio y agua se debe a que el aumento de la presión en los sinusoi-
Ya se ha expuesto que la vasodilatación arteriolar des, por efecto del bloqueo postsinusoidal, ocasiona
esplácnica y sistémica origina una redistribución cir- un escape de plasma al espacio de Disse, que es preci-
c1:1-latoria que explica la retención hidrosalina a nivel sanrnnte donde se origina la linfa hepática. De hecho,
renal. Además, según la teoría del secuestro esplác- en el conducto torácico el flujo linfático se encuentra
nico, el bloqueo en la circulación portal genera un aumentado en los pacientes con cirrosis y ascitis, y
secuestro de la volemia en el territorio esplácnico, y ello se debe al incremento de linfa procedente del hí-
ello condiciona una disminución del volumen plas- gado, parte de la cual se escapa y gotea en la cavidad
mático eficaz a nivel sistémico, con la consiguiente abdominal, por sobrecarga del conducto torácico.
estimulación de los sistemas vasoconstrictores, que a
nivel renal provocarían retención hidrosalina. Aumento de la presión hidrostática
Otros factores que se han estudiado en relación en los capilares esplácnicos
con la retención de sodio y agua a nivel renal en los A través de estos capilares se produce una ultraftltra- ~
pacientes con hipertensión portal son: ción del plasma debido a la presión oncótica ejercida
Semiología y fisi opatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

por el relativamente alto contenido en proteínas de


la linfa derramada en la cavidad peritoneal desde el
hígado. Esta mezcla del componente linfático con el Tabla Mecanismos implicados
ultrafiltrado de los capilares peritoneales da como re- en la aparición de la ascitis
sultado final un trasudado.
Generales
Hipoalbuminemia Retención hidrosalina (riñón)
Hipertensión portal postsinusoidal
Produce descenso en la presión oncótica a nivel del
plasma. Esta alteración es frecuente en pacientes con Insuficiencia cardíaca
hepatopatía, en parte por déficit de síntesis proteica, Hipoalbuminemia (descenso de la presión
si existe insuficiencia hepática, y en parte también oncótica)
por un mecanismo dilucional, debido a la retención Insuficiencia hepática
hidrosalina. Puede también contribuir a la aparición Síndrome nefrótico
de ascitis y edemas. Enteropatía con pérdida de proteínas

Locales
ASCITIS Hipertensión portal (aumento de la presión
hidrostática)
Se define como la existencia de líquido en la cavidad
Aumento de la permeabilidad en capilares
peritoneal. Puede obedecer a mecanismos o causas
esplácnicos
generales o locales, que a veces se combinan en un
Inflamación (peritoniti s)
mismo paciente (Tabla 29-3 y Fig. 29-7).
Infecciosa
Inmunológica
Química (ascitis pancreática)
MECANISMOS GENERALES
Tumores
Es frecuente que la ascitis se asocie a edema o a derra- Primarios
me en otras zonas del organismo. Carcinomatosis peritoneal

Obstrucción linfática
Retención renal de sodio y agua Afectación del cond ucto torácico
Afectaci ón ganglionar abdominal
Este tipo de alteración fisiopatológica ya se expuso al
hablar de la hipertensión portal postsinusoidal. No Hiperproducción hepática de linfa (en
hipertensión postsinusoidal)
obstante, otras situaciones que desencadenen la ac-
tivación simpaticosuprarrenal o del eje renina-angio-
tensina-aldosterona (insuficiencia cardíaca, por ejem-
plo), pueden inducir un síndrome ascítico-edematoso
por este mismo mecanismo.
Aumento de la presión hidrostática en el lecho capilar
esplácnico
Disminución de la presión oncótica del plasma
Por sí solo no suele ser suficiente para producir asci-
Es debida a hipoalbuminemia, bien sea por disminu- tis, aunque contribuya a ello. Esta alteración aparece
ción de su síntesis (en la insuficiencia hepática) por en la hipertensión portal de cualquier tipo, como ya
un mecanismo dilucional (como puede suceder en se ha expuesto antes , pero prácticamente sólo la post-
las situaciones de retención hidrosalina), por pérdi- sinusoidal es capaz de ocasionar ascitis.
das (como acontece en el síndrome nefrótico o en la
enteropatía con pérdida de proteínas) .
Aumento de la permeabilidad del lecho capilar
esplácnico
MECANISMOS LOCALES Tienen lugar en procesos de tipo inflamatorio (pe-
ritonitis, de origen infeccioso o inmunológico o por
En este caso existe exclusivamente ascitis. Si hay ede- irritación química, por ejemplo en el caso de esca-
ma en las extremidades inferiores, puede deberse a pe de enzimas pancreáticas al peritoneo) o de tipo
una compresión extrínseca de la cava inferior a causa tumoral (tumores primitivos o metastásicos del pe-
de la propia ascitis. Igualmente, si existe hidrotórax ritoneo, situación esta última denominada carci no-
(en general, derecho), se debe al paso de líquido as- matosis peritoneo]). En este caso se habla de ascitis
cítico a la pleura por soluciones de continuidad en el exudativa, ya que el líquido es un exudado (concen-
diafragma. tración de proteínas superior a 2,5g/dl), que, a su
CAPÍTULO 29 Síndrome de hipertensión portal. Ascitis

Vasodilatación arteriolar sistémica

Desajuste
Volemia efectiva -► circulatorio
~'-.. 1 1

SNS SRAA

ADH

Figura Mecanismo ÍÍ<;iop,1tológicos rcl;icionados con el desarrollo de c1scitis. Fn la cirrosis hcp,ítica el


íaclor iniciador C'S la hipertensión por-tc1I postsinusoidal. SNS: sistema nervioso simpMíco. SRAA, sistema rPnina-
,rngior,nsina-aldo~leon,1 . ..\T-11· an¡.;ín1cnsín,1 11. FPI\: fllljo pla,;m,ítícn r<>nal. FC: fillr,Kln glonwrular

n,z. punclP sPr ¡mrulento. con ,1h11nd¡¡ntns polimorfn- drmtns dn la absorción intnstínal. l .n obstrw:ción lin-
nuclnarns: homrítfr:n. si contimw sangre. n rnw.'ínnso. fúlíc:a puPdo sm rnlatin1. en !d r·aso de un aumento
como sucncln en algunos turnorns mucosr:cretores o nn la producción hopátir:a de linfa quP nl condur:to
nn otra,; afoccinnu:-; hnnignas (mucoc(J!e apendicular. torácico no os capaz dn drenar ('11 su totalidad. Esto
por ejemplo). ocurrn. como ya se apuntó. en la hípcrtm1sión por-
tal poslsinusnidal (insuficiencia cardíaca. síndrnnw
Obstrucción linfática de Bucld-Chiari y cirrosis hnpática). En estos casos.
Asociada n traumatismos. tumores. u otrns cuasas que <Hmque la ,1scitis suelo Sf)J' un tipo lraf.udaclo. no debe
lnsionan o causan obstrucción. del r:oncluc1o toní.cico. oxtrnfinr que en algunas ocasiones sna de tipo cxuda-
ganglios o vasos linf:íticos ahdominalns o rotroperiio- tívo. _va que la linfa hepática os mm, rica en proteínas
neales quo drenan la linfa dnl peritoneo. En esto cnso cuando la cm1sa no es una cirrosis. ciada la nusencia
!)S muy carc1ctrirísticn nl aunrnnto do la concf-mtración do cnlagenización o capilarizar:ión sinusoidal, con Jo
do 1riglicfaidos ím:r:ítís quiloso) en el líquido ascítir:o. que escapa líquido con mavor concentración proteica
por nxudación de linfo rica en quilomicrnnes prmH- a través ele la pared del sinusoide.
-130
1nsuf iciencia hepática
Agustín Caro-Patón Gómez, José María Manso Martínez

INTRODUCCIÓN
El hígado cumple una importante función, relaciona-
da con el aparato digestivo, que es la de producir y
secretar la bilis, por la que el organismo elimina co-
lesterol y pigmentos biliares (bilirrubina y biliverdi-
na). Este último es el responsable de la pigmentación
de las heces, y parece actuar regulando la flora del
colon. La bilis, por su contenido en sales biliares, es
esencial en la micelización de las grasas de la dieta,
para su digestión y ulterior absorción.
Pero el hígado, además, es un órgano central del
metabolismo de todos los principios inmediatos. Es
también clave en el metabolismo de las hormonas y de
agentes químicos exógenos, como los medicamentos,
que experimentan fundamentalmente en el hígado
fenómenos de biotransformación. En este sentido, y
lo mismo que sucede con la bilirrubina, los compues-
tos liposolubles son transformados en hidrosolubles
en los microsomas hepáticos mediante conjugación,
para ser así fácilmente eliminables por la bilis o la
orina. Es lo que se denomina función detoxificante
del hígado.

CONCEPTO
La insuficiencia hepática es un síndrome clínico, de
expresividad variable, que se origina por una pérdida
brusca o lentamente progresiva de las funciones he-
páticas. Esto produce, por lo general, una alteración
en la síntesis y secreción biliar y además un trastorno
metabólico múltiple, que repercute fundamental-
mente en la síntesis proteica y en el funcionamiento
del sistema nervioso central. Se trata de una situa-
ción en general muy grave, que puede acabar con
la vida del paciente.

ETIOLOGÍA
Las causas que pueden inducir una
insuficiencia hepática son todas
aquellas capaces de provocar
una afectación difusa del
parénquima hepático. Esta
afectación puede ser agu-
CAPITULO 30 Insuficiencia hepática

da o fulminante, como sucede en la necrosis masiva


aguda del hígado por fármacos (p. eje. , paracetamol),
por ejemplo, o lentamente progresiva, como ocurre Tabla Cambios metabólicos
en las enfermedades hepáticas crónicas, sobre todo asociados a la insuficiencia hepática
en la cirrosis hepática. En esta última, muchas veces
se van perdiendo muy lentamente las funciones del Hidratos de carbono
hígado, hasta llegar a una situación terminal en un
plazo variable, en general de muchos años . Los posi- Hipoglucemia
bles factores etiológicos son muy variados: Lípidos
Infecciones, sobre todo las hepatitis víricas. Hipocolesterolemia
Agentes químicos, fundamentalmente el etanol Alteración ácidos biliares
y también una amplia variedad de fármacos (pa- Ácidos grasos de cadena corta
racetamol, tuberculostáticos) y tóxicos (amanita
phalloides). Nitrógeno
Trastornos metabólicos, que pueden ser heredi- Hiperaminoacidemia
tarios, como por ejemplo la hemocromatosis (por Aminoácidos aromáticos
depósito de hierro), la enfermedad de Wilson Metionina
(por depósito de cobre), etc., o adquiridos, como
algunas degeneraciones agudas grasas, embarazo, Aminoaciduria
síndrome de Reye , etc.). Hiperamonemia
Enfermedades autoinmunitarias, que cursan con Disminución de la síntesis proteica
afectación preferente o exclusiva del hígado (he- Albúmina
patitis autoinmunes). Coagulación
A lteraciones vasculares, tanto isquémicas (situa-
ciones de bajo gasto, como el shock de cualquier Incremento de falsos neurotransmisores
origen, sobre todo si se combina con sepsis), Incremento de neurotransmisores inhibidores
como congestivas (síndrome de Budd-Ch iari, GABA
insuficiencia cardiaca congestiva, etc.). Serotonina
Enfermedades de tipo infiltrativo dif uso de origen
Agua y sodio
tumoral (tumor primario o metastásico, o de ori-
gen hematológico) o por depósito (amiloide, etc.). Retención hidrosalina con hiponatremia

SÍNDROME METABÓLICO Y CLÍNICO


La situación de insuficiencia hepática implica la dis-
minución o pérdida global de las funciones desarro- nesis y la glucogenólisis. La hipoglucemia es una de
lladas por el hígado, si bien es cierto que este dete- las manifestaciones de la insuficiencia hepática cuan-
rioro se manifiesta con mayor o menor intensidad, y do aparece de forma aguda grave o fulminante (en la
de forma muy variable, para unas u otras funciones. necrosis aguda masiva del hígado). De modo menos
Algunas de ellas, como por ejemplo la conjugación frecuente puede aparecer en la insuficiencia hepáti-
de la bilirrubina o la síntesis de fibrinógeno, tienen ca terminal de las enfermedades hepáticas crónicas.
una gran reserva funcional, por lo que solo se alteran La causa reside en una depleción de los depósitos de
en fases muy avanzadas, de la insuficiencia hepáti- glucógeno hepático, con déficit en su síntesis y res-
ca. Otras, en cambio (como la síntesis de otros fac- puesta glucogenolítica al glucagón disminuida. Suele
tores de la coagulación o la captación y eliminación haber una elevación de lactato en el plasma, debido
de sales biliares, por ejemplo) resultan afectadas más a que el hígado no lo utiliza para la neoglucogénesis.
precozmente. De todas formas, existen numerosas En las enfermedades hepáticas crónicas (cirrosis),
diferencias individuales. Pasamos, pues, a describir por el contrario, se tiende a la intolerancia a los hi-
los trastornos metabólicos que puede inducir la insu- dratos de carbono, cuyos posibles mecanismos ya se
ficiencia hepática y su relación con la clínica (Tabla comentaron en el Capítulo 29.
30-1).

METABOLISMO DE LOS LÍPIDOS


METABOLISMO DE LOS HIDRATOS
Lo más característico es la disminución de la esteri-
DE CARBONO ficación del colesterol, con el consiguiente descenso
Para mantener la glucemia, en el hígado se produce de los niveles plasmáticos del mismo , en especial del ~
glucosa a expensas de la glucogénesis, la gluconeogé- esterificado. La disminución de la esterificación se
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

debe a un déficit de la enzima LCAT (lecitín-coleste- así como, en menor proporción, del riñón (amonio-
rol acil-transferasa), sintetizada en el hígado. La alte- génesis a partir de la glutamina) y de la mucosa del
ración en la síntesis de apoproteínas también puede intestino delgado, donde existe también actividad de
contribuir al descenso de los niveles de lipoproteínas la glutaminasa. El amonio es metabolizado a urea en
en la sangre. el hígado , a través del ciclo de la urea. Un descenso en
En la insuficiencia hepática está afectada la síntesis la producción de urea indicaría una grave afectación
y la recaptación de ácidos biliares procedentes de la hepática; pero el descenso suele estar enmascarado
circulación enterohepática. La bilis suele contener por la existencia de insuficiencia renal funcional,
menor concentración de sales biliares, lo que podría presente en muchos de estos enfermos. Ello determi-
contribuir a la esteatorrea que aparece en algunos na un aumento en el plasma del amonio producido
pacientes. en el intestino. Si además existe, como es frecuente,
Los ácidos grasos de cadena corta, producidos en hipertensión portal con derivación portosistémica (en
el intestino, son absorbidos sobre todo en el colon, y la cirrosis hepática), el amonio que circula por la vena
conducidos por la sangre portal al hígado. En porta elude su paso por el hígado; esto constituye
la insuficiencia hepática, o cuando existen otro importante factor que contribuye a la hi-
comunicaciones portosistémicas, pasan a peramoniemia, presente en un gran número
la circulación general. En el sistema ner- de pacientes cirróticos con insuficiencia
vioso pueden desemp eñar algún papel en hepática. El amonio está considerado como
la génesis de la encefalopatía h epática. el factor más importante en la génesis de la
encefalopatía hepática.

METABOLISMO NITROGENADO Síntesis proteica


Es el más afectado y el que mayores conse- El hígado tiene gran
cuencias clínicas ocasiona. capacidad para la
En efecto, se detectan alte- síntesis de proteí-
raciones en el metabolis- nas. En efecto, ade-
mo de los aminoácidos, más de sintetizar las
del amonio y de la urea, propias, produce y se-
de la síntesis proteica y de grega la mayor parte de
las aminas neurotransmisoras. las proteínas del plasma.
Todo ello va a desempeñar un papel Uno de los hallazgos más
crucial en la encefalopatía hepática. representativos de insu-
ficiencia hep ática es el
Aminoácidos, amonio y urea descenso de los niveles
séricos de albúmina, lo que
La mayor parte de los aminoácidos que lle-
gan al hígado se metabolizan a an10nio y a urea, Molécu la de urea puede contribuir a la tendencia al ede-
ma que se observa en estos enfermos
a excepción de los ramificados (valina, leucina
por descenso de la presión oncótica del
e isoleucina), que pasan a la circulación para ser
plasma.
utilizados por el músculo esquelético . Además,
Más precoz y más característico aún es el descenso
los aminoácidos sirven para la síntesis proteica en el
de los factores de la coagulación, que además apare-
hígado, tanto de las proteínas intracelulares como de
ce a las pocas horas de producirse una insuficiencia
las que pasan al plasma (albúmina, factores de la coa-
hepática aguda, dada su corta semivida (a diferen-
gulación, etc.) .
cia de la de la albúmina, que es de 15 a 20 días). Se
En la insuficiencia hepática tiende a existir una
mide por la alteración del índice de protrombina. El
alteración del balance de aminoácidos en el plasma,
fibrinógeno, salvo en fases muy avanzadas, no suele
con elevación de los aminoácidos aromáticos (feni-
alterars e desde el punto de vista cuantitativo, e in-
lalanina, tirosina y triptófano) y de la metionina, ya
cluso puede estar elevado en el plasma, comportán-
que son muy utilizados por el hígado en condiciones
dose como un reactante de fase aguda. Sin embargo,
fisiológicas, y con normalidad o descenso de los ra-
en algunas ocasiones es funcionalmente anormal
mificados, porque estos experimentan metabolismo
(disfibrinogenemia adquirida de las enfermedades
extrahepático.
hepáticas).
Cuando existe insuficiencia hepática aguda grave
o fulminante , la elevación en plasma de los niveles
de aminoácidos es muy intensa, lo que ocasiona con Aminas neurotransmisoras
frecuencia una aminoaciduria. En el sistema nervioso central existen aminas neu-
El amonio procede en su mayor parte de la acción rotransmisoras , que son de tipo estimulador (nora-
de las bacterias intestinales sobre las proteínas de la drenalina y dopamina) o inhibidor (serotonina y
dieta, y también del metabolismo de los aminoácidos, ácido gammaaminobutírico o GABA).
CAPITULO 30 Insuficiencia hepática

En la insuficiencia hepática existen varios motivos el parénquima hepático esté gravemente dañado (en-
por los que la concentración de estas aminas puede cefalopatía de la insuficiencia hepática aguda) o por-
estar alterada: que existan comunicaciones portosistémicas intra o
extrahepáticas (encefalopatía hepática portosistémi-
Algunas aminas sintetizadas en el intestino
ca}, junto con un deterioro más o menos importante
pueden alcanzar la circulación general por
de la función hepática, como sucede en la cirrosis en
insuficiencia hepática o por comunicaciones
fase descompensada. En ambos casos, determinadas
portosistémicas. Atraviesan la barrera hematoen-
sustancias tóxicas de procedencia sobre todo intes-
cefálica y desplazan a los verdaderos neurotrans-
tinal eluden el paso por los sinusoides hepáticos,
misores estimuladores. Las más conocidas de
con lo que actúan a nivel sistémico, penetrando en el
estas ami.nas, que se comportan como débiles o
sistema nervioso central a través de la barrera hema-
falsos neurotransmisores, son feniletanolamina y
toencefálica.
octopamina, que compiten con la dopa.mina y la
noradrenalina en las sinapsis del sistema nervio- Desde el punto de vista clínico, la encefalopatía
so central. hepática se caracteriza por alteraciones psíquicas
Estos neurotransmisores falsos pueden también (agitación, desorientación u otros tipos de trastornos
sintetizarse en el propio sistema nervioso central del comportamiento), alteraciones del ritmo del sue-
merced a la entrada masiva de aminoácidos aro- ño, y lenguaje lento y disártrico, con dificultad para
máticos, al predominar sobre los ramificados, la escritura o para el dibujo (lo que denominamos
con los que comparten los mismos receptores apraxia constructiva). Además, aparece un caracte-
en la barrera hematoencefálica. La presencia de rístico temblor de tipo postura], arrítmico, que suele
estos neurotransmisores falsos o débiles, que explorarse con la muñeca y los dedos extendidos, de-
suplantan a los verdaderos, se ha señalado como nominado temblor aleteante o asterixis. El paciente, a
una hipótesis patogénica de la encefalopatía he- medida que avanza el cuadro clínico, va entrando en
pática. estupor cada vez más profundo, llegando así al coma
Se ha detectado tan1bién un aumento de neuro- hepático. En su evolución pueden aparecer trastornos
transmisores inhibidores (GABA y serotonina) en neurológicos, especialmente piramidales y extrapira-
el plasma, tanto en animales como en personas midales.
con insuficiencia hepatocelular. Esto puede ex- La patogenia de la encefalopatía hep ática no se
plicar también el descenso de la función cerebral conoce con exactitud. Se ha sugerido que puede estar
que conduce a la encefalopatía. El aumento de relacionada con ciertas sustancias y algunas situacio-
serotonina en el sistema nervioso central se ex- nes que pasamos a comentar (Tabla 30-2).
plica por el aumento de triptófano, su precursor,
el cual, como anünoácido aromático, atraviesa Amonio
con facilidad la barrera hematoencefálica. Este metabolito es el agente que más se ha relacionado
El GABA puede ser sintetizado por las bac- más estrechamente con la encefalopatía hepática. Sus
terias intestinales y, una vez más, al eludir el niveles en sangre arterial se vinculan con la inten-
metabolismo hepático, alcanza en concentracio- sidad o grado de la afectación neurológica. En cual-
nes elevadas el sistema nervioso, donde se ha quier caso, las situ aciones que producen incremento
detectado, en animales, un aumento del número de la amoniemia favorecen la encefalopatía, y en la
de receptores de este neurotransmisor inhibi- clínica los tratamientos encaminados a disminuir la
dor. Existe además un aumento en el líquido producción o absorción intestinal de amonio tienden
cefalorraquídeo de unas sustancias endógenas a mejorar notablemente la situación neurológica del
de tipo benzodiacepínico, no identificadas aún, enfermo.
que parecen actuar de forma alostérica (cambio
Analizaremos algunas situaciones precipitantes
estructural de una proteína) sobre los receptores
o desencadenantes de la encefalopatía hepática ,
GABA. Ello puede explicar la gran sensibilidad
relacionadas con la acción del amonio. Teniendo
que presentan estos pacientes a la administración
en cuenta que este se produce sobre todo en el tubo
de benzodiacepinas y los resultados terapéuticos
digestivo por la actuación de la flora bacteriana sobre
favorables que se han obtenido en algunos casos
las proteínas, el aumento de estas (como sucede en
de encefalopatía hepática con la administración
las dietas hiperproteicas o en la hemorraaia diaes-
de flumazenilo, que es un inhibidor de los recep- . J pue d e ser desencadenante de la encefalopatía
t1va o o
tores benzodiacepínicos.
en un paciente con insuficiencia hepática o con de-
rivaciones portosistémicas. Lo mismo se puede decir
del estreñimiento, por la mayor permanencia de los
ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA compuestos nitrogenados en la luz del colon. La in -
suficiencia renal también favorece la producción de
Se trata de un síndrome neuropsiquiátrico secunda- amonio, ya que la flora intestinal puede sintetizarlo
rio a la pérdida de la función hepática, ya sea porque a partir de la urea (que llega al intestino desde la
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Tabla Factores implicados en la patogenia de la encefalopatía hepática


Causas. Factores Consecuencias
precipitantes

Amonio Dietas hiperproteicas Aumento de glucólisis


Hemorragia digestiva Depresión del ciclo de Krebs
Estreñimiento Descenso del ATP (energía)
Insuficiencia renal Aumento de permeabilidad de la barrera hematoencefálica
Helícobacter py/ori Aumento de la glutamina (edema)
Hipopotasemia Activación de receptores GABA
Alcalosis
Infecciones

Neurotransmisores Origen intestinal Competición con dopamína y noradrenalina


falsos Síntesis en SNC

Neurotransmisores GABA de origen Incremento en el número y actividad de receptores GABA


inhibidores intestinal Sensibilidad a las benzodiacepinas
Benzodiacepinas
Serotonina
(síntesis en SNC)

Otros Origen intestinal Descenso del consumo de oxígeno en el SNC


Mercaptanos
Ácidos grasos de cadena
corta

Alteraciones Aumento de glutamina Edema


en los astrocitos Alteraciones de la relación astrocito/neurona

sangrn. donde esiéí elevada) mediante la acción ele las por ello. la atrofia muscular. frecuonte en enfermos
urcrnsas bacterianas. cirróticos avanzados. favornce también la elevacicín
La hipopotasemia es otro factor precipitan le de osto clo las cunc:onlrac:iones du amonio. Finalmente, en nl
cuadro, pues se ha demostrado que aumenta la pro- sistema nervioso el amonio sP combina con el ácido
ducción de amonio a nivel renal. La alcalosis tiende glutfünico. también como nrncanisrno de detoxifica-
asimismo a elevar la amonemia, también por meca- ción. dando lugar a glutanüno. que está aumentada
nismo renal. ya que el déficit ele H' hace que el NH;, on ol líquido cefalorraquídeo de eslos pacientes y on
en lugar de eliminarse por la orina corno NH.1 '. paso a los astrocitos. donde puede contribuir por su ofocto
la circulación. Por otra parte, la alcalosis aumenta la osmótico al edema y la disfunción de estas células.
fracción no ionizada o difusible de amonio (NHi). se- En rnlación con ol melctlJOlisnw energético cerehml,
gún la nrncción NH1 ' + OI-t = NHi + HlO, penetrando parece que el amonio ejerce un efecto inhibidor. Así
así fácilmente en el sistema nmTioso contrnl a través se ha obsorvaclo un descenso do 1\TP en algunas zonas
de la barrnra hernatmmcefrílica. uncef'álicas, así como una rnducción on el consumo
Las infecciones, frecuentes en los paciente,; con de oxígeno por parte del cerebro en la encefalopatía
cirrosis. al aumonlar el catabolismo proteico pueden lrnpútica. Las concentraciones elevadas de amonio en
aumentar la generación de amonio y actuar también ni sistema nervioso parocen estimular la glucólisis, al
como factores precipitantes de la encefalopatía lwpá- tiempo que deprimen el ciclo ele Krebs (por inhibición
tica. dul complejo alfa-ceto-glutarato-dehiclrogenasa). Ello
En la detoxficación del amonio intorvüme, corno condiciona un desacoplamiento entre nmbas vías me-
ya se indicó. ol hígado, mediante el ciclo do la urna. tabólicas, con la consiguiente eslimulación ele la glucó-
cuyas enzimas tienen el zinc corno cofactor, por lo lisis anaerobia y aumento de la producción de lactato.
que un déficit de este metal puede favorecer la hi- cuya concentración citosólica está elevada. Esto expli-
poramonemia. El músculo esquelético también su caría la disminución de la producción de ATP y, por
266
encarga de detoxificar el amonio formando glutamina; tanto. de la energía a nivel del sistema nervioso centrnL
CAPÍTULO 30 Insuficiencia hepática

El amonio tmnliiún parece ínr:remenlor la permeohi- El edema es1á prnscnte sobre todo en la i.mcefalopn-
líclud de Ju harreru hemaloencefcílico. favon,ciendo tía dn la insufici1111cia lrnpática agud;i gran➔ o fulmi-
su propia difusión así como la ;le otros meli1bolitos nm1tn, con la consiguiontn disfunción ele nstas células.
qrn, pueden ser clelntérnos para la función nnníosa que son fllll\' importanh,s en la rngulrn:ión dfll meta-
(arnino.ícidos aromáticos, etc.). bolismo neuronal y de los JHnirolransmisorPs, aclcm.ís
de las const>cuencias qun tiene nl eclemG cornbrnl por
Neurotransmisores falsos sí mismo. En la encefalopatía portosistémica, la situa-
ción crónica permi1n estab]Acnr mecanismos de com-
Ya se ha conHmlado la posihiliclHd de que ciertas ami- pensación para tratar de impedir el nclmna cerobrnl,
nas, como la fer¡j]cta11olr1111íno y In oclopamína, pro- mediante la roducción en la concontración de, otros
endentes dnl intostino o sintetizadas en el sislnma nm- osmolitos norrnalmente presenlns un las células astro-
vioso por ingrnso excesivo do aminoácidos aronuíti- cíticas. en particular el míohwsitol. ;'\ posar de nllo.
c:os, desplacen a los nnurolransmisorns nstinrnladorns. ns frncuonlu cierto grado ele nrlflmil cornbral un ns1p
tipo do encefalopatía, pero sobro todo existn maym
Neurotransmisores inhibidores tnnclnncia al mismo cuando aparncon otros !'nctoros
Tarnbiún se ha all!dido al aurn1mto c[p la donsidacl do prndisponentes, como por i.ijnrnplo la biponntrnmia.
mcuptoros rlo GABA on ol sisttmrn norvioso 1;on trn l nn situación, como se salw. frncwmto en pacientes c:on
la cncefalopatía lrnpática. Puedo que exista un 1rnxo cirrosis y rntcnción hidrnsalirn1.
do unión con el amonio, en ni sentido de que eslu pa- En conclusión, conviene subrayar que. ,rnnqtw lll
rnco aum<mtar In actividad dn los rncuplorns G1\BA. rnlación con la clínica disln dn ser oxacta, hasta la
So ha comnntmlo tambión la roladón de oslos recep- focha es ol amonio la sustancia más clirnc:tmnente im·
tores con posibles comp1wstos fwnzodí(l(:epínícos plicada nn la gúnesis de la enc:efalo¡mtía hnpútica. v on
endógenos, do origen incierto. así como la hípersfmsí- cs¡rnr:ial dr, In portosistúmica dn la cirrosis, actuando
hi/icíod comhml o los henzodioc:epinns uxÓ.f.(011/lS. probahlnnrnnlc. u di fornntes n ivclus (Fig. :HJ-1 ).
Otro neurotransmisor ínhibidor, la semlo11ím1.
tambión ha sido implicado en la gónnsis de la onco-
folopatía. Su eh;vacíón on ol ,mcúfolo sn dobmía a un ASTROCITO ~-·----r-~
umnento de la on1rada ele 1rip1rífano. )í <;Ju1 .imin.1\ NI L 'I\OmN,°si~oi,:1 ~
¡
1
* r ¡ . ,, I.\ISOS ,
"~:) ,\
1
,, ~
Otras sustancías implicadas MIR(\l'IANOS ~,, \ \
Lu 1111:tioninu es otro aminodcido quo nstá numnnlado \ , . f..r"h' \ \
""/\(;I•--, 11\TI' \/
en esta situación, dando lugar a unos compuestos lla- \ •·· lí
mados mercaptunos que, aclnmás dn ser los cnusanlns
do un olor uspecial del alionlo ch, los pacicntus con
IFT(W
'1'
1 1
,.\,\':~1:
ri1mific:.1dn:--
nnr:efalopntía (Ietor lwpátíco}, podrían deprimir ni Mf:R(~\f'.
·\/\

consumo ele oxígeno por el corobro. Esto mismo su lrn \ ·\lcdlo,;;i~

mostrado en algunos estudios con rír:ir/m; grosos de '


L 1
''"ll ·'
cadena (:orla, producidos en ni intestino y que Bsca-
;\L( ·\I f lSl'i
pan al rnotabolismo hepático. 1IIPOPOTASF,\W,

¡'.,\
1
Alteraciones en los astrocitos .___ ___;y:,,; 11, \
, j /

La detoxifícacíón del omonío en el sistema nervioso


se produce por combinación con el ácido glutámico
para formar ,glutumíno, proceso que tiene lugur en los
cÍ<)N 11J
uslmcitos. La glutamina acumulada ejerce una pre-
sión osmótica que induce el edema de estas células.
En experimentos en cultivo de astrocitos en presencia
de amonio. estas células experimentan ncumulación
de líquido. De hecho, la alteración histológica que se
demuestra en la encefolopatía hepática se da en los Figura Encefalopatía hepática portosistémica.
astrocítos. que se denominan en este caso célulos de Circunstancias desencadenantes v mecanismos. AGL:
A.lzh,úmer tipo JI. ácidos grasm librPs. AA: c1rnino,1<'.idos.

267
-131
Patología general
de las enfermedades
de las vías biliares
Agustín Caro-Patón Gómez, María Lourdes del Olmo Martínez

FISIOLOGÍA DE LA FORMACIÓN Y SECRECIÓN


DE LA BILIS
La bilis hepática es un líquido isotónico pigmentado,
con una composición electrolítica semejante a la del
plasma sanguíneo. La composición electrolítica de la
bilis vesicular difiere de la hepática: en la primera
se han reabsorbido, a través de la mucosa, múltiples
aniones inorgánicos.
Los principales componentes de la bilis son: agua,
bilirrubina, sales o ácidos biliares, otros aniones or-
gánicos, colesterol, fosfolípidos (sobre todo fosfatidil-
etanolamina), cationes tales como sodio, potasio y
calcio, y aniones inorgánicos como cloro y bicarbona-
to. La secreción diaria de bilis hepática es de 500-600
ml. El flujo biliar se regula a través de tres mecanis-
mos: a) transporte activo de ácidos biliares desde los
hepatocitos a los canalículos biliares; b) transporte de
sodio mediado por una ATP-asa, independiente de los
ácidos biliares , también a nivel canalicular; c) secre-
ción ductular. Este último es un fenómeno que depen-
de del AMP-cíclico y que parece ser el resultado del
transporte activo de sodio y bicarbonato hacia la luz
del conductillo biliar, con movimiento pasivo de agua
a través de la membrana de las células epiteliales del
conductillo, lo cual es estimulado por la secretina.
Los ácidos biliares tienen una función detergente,
y pueden ser primarios o secundarios. Los prima-
rios (cólico y quenodesoxicólico) son sintetizados
en el hígado a partir del colesterol, conjugados
con glicina y taurina, y son excretados a la bilis.
Los ácidos biliares secundarios (desoxicólico
y litocólico) se forman por degradación
bacteriana en el intestino a partir de los
ácidos biliares primarios.
El colesterol es poco soluble
en un medio acuoso. Su so-
lubilidad en la bilis depen-
de de la concentración
CAP[TULO 31 Patología general de las enfermedades de las vías biliares

lipídica y del porcentaje relativo de ácidos biliares LITOGÉNESIS BILIAR


y de fosfolípidos. Una relación normal de estos com-
ponentes favorece la formación de micelas. Cuando la Es el trastorno más frecuente de las vías biliares, por
proporción es anómala, se provoca la precipitación de lo que se aludirá exclusivamente a él. Se define como
cristales de colesterol en la bilis. la formación de cálculos en el interior de las vías bi-
La relación existente entre la síntesis de colesterol liares, generalmente en la vesícula biliar; es lo que se
y su transformación en sales biliares puede resumirse denomina colelitiasis.
en la siguiente expresión: Los cálculos son estructuras cristalinas forma-
das por la concreción de constituyentes normales o
HMG-CoA anormales de la bilis. Los cálculos se dividen en dos
reductasa 7a-Hidroxil asa
Acetil-Co A --•Colesterol--• Ácidos biliares tipos fundamentales: a) cálculos de colesterol, que
contienen más de un 70 % de monohidrato de coles-
terol, estando constituido el resto por calcio, ácidos
Los ácidos biliares son absorbidos a lo largo de biliares, pigmentos biliares, proteínas, ácidos grasos
todo el intestino mediante un mecanismo de difusión y fosfolípidos; y b) cálculos pigmentarios, que están
pasiva. Sin embargo, en el íleon distal la absorción es compuestos por bilirrubinato de calcio y por menos
mayor. El mecanismo implicado es el transporte acti- de un 10 % de colesterol.
vo. Los ácidos biliares reabsorbidos pasan al torrente
sanguíneo y llegan nuevamente a los hepatocitos,
siendo reconjugados y secretados otra vez a la bilis,
cerrándose así el círculo enterohepático. Estos ácidos CÁLCULOS DE COLESTEROL
biliares que retornan al hígado suprimen la síntesis de Cuando el contenido de colesterol de la bilis supera
novo inhibiendo la enzima limitante, 7 a-hidroxilasa, la cantidad que puede ser solubilizada por las mice-
con lo que además se estimula el transporte canali- las de ácido biliar-fosfolípido, el exceso es dispersa-
cular ATP-asa dependiente. Asimismo, los ácidos do en vesículas lipídicas más grandes. Las vesículas
biliares secundarios, sobre todo el desoxicólico, y son partículas esféricas compuestas de fosfolípidos y
en cantidades mínimas el litocólico, se absorben, se colesterol, y contienen solamente trazas de sales bi-
conjugan y experimentan también circulación ente- liares. Las micelas son agentes muy importantes para
rohepática. la solubilización y transporte del colesterol en bilis
supersaturadas de colesterol, así como las vesículas,
si bien estas son mucho menos estables y el colesterol
FUNCIONES DE LA VESÍCULA BILIAR tiende a escapar de ellas precipitando en forma de
cristales.
Son dos: Existen varios factores precipitantes en la forma-
ción de bilis litógena, que a continuación pasamos a
describir.
CONCENTRACIÓN DE LA BILIS
Se produce por absorción de agua y compuestos in- Aumento de la secreción biliar de colesterol
orgánicos de la bilis (sobre todo aniones), con el con-
siguiente aumento en las concentraciones de todos Puede estar asociado a obesidad, dietas hipercalóri-
los principales solutos orgánicos. Se absorbe aproxi- cas y fármacos. En algunos casos, se ha detectado un
madamente el 90 % del agua. El producto final es aumento de la actividad de la hidroximetilglutaril-
una solución en la que las concentraciones de sales coenzima A (HMG-CoA) reductasa, que es la enzima
biliares, colesterol, fosfolípidos y sodio aparecen muy limitante de la síntesis de colesterol hepática.
elevadas, así como la de bilirrubina conjugada, que
proporciona un color muy oscuro a la bilis vesicular.
La concentración tan elevada de sales biliares la hacen Disminución de la secreción de ácidos biliares
muy apta para cumplir su función digestiva. En ocasiones, se ha detectado un descenso de la acti-
vidad de la 7-a-hidroxilasa hepática, enzima limitan-
te de la síntesis de ácidos biliares primarios.
ALMACENAMIENTO DE LA BILIS
Es debida a la alteración de la circulación ente-
La vesícula biliar actúa, además, como reservorio de rohepática de los ácidos biliares, como ocurre:
esta bilis concentrada y controla la entrada de las a) en la alimentación parenteral prolongada, por
sales biliares al duodeno. En efecto, después de la hipomotilidad y estasis de bilis en la vesícula
ingesta de alimentos, el intestino delgado libera cole- biliar, al no existir estímulo en el intestino para
cistocinina-pancreozimina (CCK-PZ) , que estimula la su contracción; y b) en la patología y resección
contracción de la vesícula y relaja el esfínter de Oddi, del íleon terminal, por malabsorción de sales
269
descargando la bilis al intestino. biliares.
Semiología y fisiopatología de aparatos y sistemas: aparato digestivo

Alteración en la formación de vesículas


Se produce por existir una baja concentración de fos-
folípidos o ácidos biliares, o de ambos , en relación
con la de colesterol, con la consiguiente supersatura-
ción del mismo.

Nucleación de los cristales de monohidrato


de colesterol
Se encuentra muy acelerada en las bilis litógenas, y se
ve favorecida por cualquiera de los factores siguien-
tes:
Exceso de factores pronucleantes, como son las
glucoproteínas, la lisina y la fosfatidilcolina.
Déficit de factores antinucleantes, como las apo-
lipoproteínas Al y AII, presentes en la bilis.
La nucleación de los cristales de colesterol, así
como su crecimiento, se produce en una capa de
mucina. La fusión de vesículas da lugar a los lla-
mados cristales líquidos, que a su vez se nuclean
en cristales sólidos de colesterol. El crecimiento
se produce por una aposición continua de más
cristales. Así, estos llegan a alcanzar un tamaño
suficiente como para ser detectados mediante
métodos de exploración. Figura Manifestaciones clínicas de la litias is
Otro factor precursor de la formación de cál- bi liar.
culos biliares es el llamado bal'J'o biliar. Es un
material mucoso, que al microscopio aparece
constituido por cristales de colesterol-fosfolí- núcleo para el crecimiento de cálculos mixtos de co-
pidos, cristales de monohidrato de colesterol, lesterol.
bilirrubinato cálcico y mucina. La presencia de Las situaciones más frecuentes y conocidas de este
barro biliar implica la existencia de dos anoma- tipo de litiasis son:
lías:
Anemias hemolíticas crónicas: Por ejemp lo, la
Alteración del balance normal entre la secre- esferocitosis. En ellas existe un aumento de la
ción de mucina por la vesícula y su elimina- excreción biliar de bilirrubina.
ción. Hepatopatías crónicas: Sobre todo en la cirrosis
Aceleración de la nucleación de los solutos bi- alcohólica. Se deconoce su mecanismo.
liares por la presencia anormal de mucina. Desconjugación de la bilil'l'ubina: Se puede
El barro biliar puede desarrollarse en situacio- producir por h idrólisis alcalina de la bilirribina
nes que cursan con hipomotilidad de la vesícula: conjugada o por aumento de la actividad de la
cirugía, nutrición parenteral, embarazo y toma enzima beta-gl ucuronidasa en la bilis. Puede
de anticonceptivos, entre las más frecuentes. presentarse en casos de infección biliar bacteria-
na o por la presencia de parásitos en la bilis (en
poblaciones orientales).
Hipomotilidad de la vesícula biliar
Es un factor muy importante en la litogénesis biliar,
ya que si la vesícula se contrae y vacía normalmente MANIFESTACIONES Y COMPLICACIONES
todo su contenido biliar, aunque sea muy litógeno e DE LA COLELITIASIS (Fig. 31-1)
incluso presente ya cristales de colesterol, estos no
podrán nuclearse, crecer y convertirse en cálculos. Con elevada frecuencia la colelitiasis cursa sin sín-
tomas y se descubre de forma casual, en general en
el curso de una ecográfica abdominal realizada por
CÁLCULOS PIGMENTARIOS algún otro motivo. Cuando ocasiona manifestaciones
clínicas, lo hace por provocar obstrucción biliar al
La presencia de cantidades significativas de bili- emigrar los cálculos desde la vesícula a los conductos
rrubina no conjugada en la bilis puede provocar su cístico o colédoco. A continuación se comentarán las
precipitación, con lo que se desarrollan este tipo de principales manifestaciones clínicas y complicacio-
270
cálculos, o también puede ocasionar la formación del nes.
CAPÍTULO 31 Patología general de las enfermedades de las vías biliares

A veces, la obstrucción del conducto cís-


tico ocasiona simplemente una retención de
bilis en la vesícula, con secreción mucosa
por parte de la pared vesicular, que origina
el llamado hidrops (o hidropesía) vesiculm~
en el que la vesícula se encuentra muy dis-
tendida y puede infectarse originando un
empiema vesiculm~ que puede complicarse
con perforación a la cavidad peritoneal (pe-
Vesícula ritonitis biliar).
bil iar

Cálculo biliar
ICTERICIA
La presencia de este signo supone el paso
Cálculo biliar de uno o más cálculos al colédoco (coledo-
colitiasis) (Fig. 31-2) La ictericia puede ser
pasajera o persistente. En la coledocolitiasis
aparecen una serie de manifestaciones clí-
DOLOR ABDOMINAL nicas ya detalladas en el Capítulo 28 al hablar de la
El denominado cólico biliar se produce por impacta- ictericia colestásica extrahepática u obstructiva. Si el
ción en el conducto cístico, o en el colédoco, de un cálculo impacta en la ampolla de Vater, puede dificul-
cálculo que emigra desde la vesícula; ello provoca tar el drenaje del conducto pancreático principal; ello
una distensión brusca de las vías biliares por enci- puede desencadenar una pancreatitis aguda.
ma del obstáculo. El dolor se localiza característica-
mente en el cuadrante superior derecho y se irradia
a la espalda, habitualmente hacia la línea media in-
terescapular. El dolor, sordo y continuo, dura horas
en ausencia de tratamiento. Es frecuente que vaya
acompañado de náuseas y vómitos. El cólico biliar
puede desencadenarse tras una comida grasa o abun-
dante o tras un ayuno prolongado, pero también pue-
de aparecer sin que exista un factor desencadenante
conocido.
En algunas ocasiones, la migración del cálculo al
conducto cístico puede provocar una inflamación
aguda de la pared vesicular, que se manifiesta con
dolor similar al descrito, hipersensibilidad con la pal-
pación del hipocondrio derecho (signo de Murphy)
y fiebre . Este cuadro se denomina colecistitis aguda .
Una de sus complicaciones es la perforación libre
de la vesícula (ocasionando peritonitis biliar) o por
adherencia al duodeno, con formación de una fístula
colecistoentérica con migración del cálculo por el in-
testino , que puede dar lugar a una obstrucción intes-
tinal por impactación del mismo, si tiene un tamaño
lo suficientemente grande (lo que se conoce como Figura Coledoco litias is. La CPRE muestra un
íleo biliar). Lo más frecuente es que la impactación se defecto de repleción del co ntraste (liti as is, flecha) y
produzca a nivel de la válvula ileocecal. una d il atación retrógada del colédoco.

271
-132
Principales manifestaciones clínicas
y causas de las enfermedades
del aparato respiratorio
Jaime Merino Sánchez, Reyes Pascual Pérez, Eva López Calleja

INTRODUCCIÓN
Algunas enfermedades causan insuficiencia res-
piratoria porque alteran el tórax y pueden ser
detectables en la exploración física (Véase Ca-
pítulo 33). La insuficiencia respiratoria puede
producir hipoxemia e hipercapnia y a su través
acidosis o alcalosis respiratoria, cuya expresión
clínica se revisa en los Capítulos 35 y 77. La tos
y la expectoración se explican en el Capítulo 37.
Nos ocupamos aquí de otras de sus manifestacio-
nes, complementando las explicadas en el Capítulo
36. Una de las más importantes es la sensación de
dificultad respiratoria o disnea, que se explicará
en el Capítulo 42.

CIANOSIS
CONCEPTO
Es una coloración azulada de la piel y mucosas
que se produce cuando la hemoglobina redu-
cida en la sangre que circula por los lechos
capilares aumenta por encima de 4 g/dl. En
condiciones normales y con una saturación
arterial del 100 % la concentración de he-
moglobina reducida o desoxigenada es de
0,75 g/dl. Si el sujeto tiene poliglobulia es
más fácil que aparezca cianosis, pero en
presencia de anemia es difícil alcanzar esta
concentración de hemoglobina reducida, y
por tanto aquella no se expresa. También
aparece si el sujeto tiene hemoglobinas
patológicas (meta o sulfahemoglobinemia)
que dificultan la oxigenación tisular o si
hay una intoxicación por monóxido de
carbono (coloración cereza de la piel). La
cianosis es un signo capital que acompaña
272 a la hipoxemia, y habitualmente se asocia
a taquipnea y taquicardia (Fig. 32-1).
CAPÍTULO 32 Principales manifestaciones clínicas y causas de las enfermedades del aparato respiratorio

jidos en una concentración elevada. Predomina en el


área perioral: mucosas de labios, mejilla o lengua; es
más intensa que la periférica y no desaparece al frotar.
El flujo sanguíneo y la oxigenación de la sangre a
nivel periférico se estiman normales si el color y el
calor de la zona examinada son adecuados, y se con-
firma si al comprimir y hacer que esa zona palidezca
su color se recupera en menos de 2 o 3 segundos. La
valoración de la cianosis, sobre todo la periférica,
Central Periférica varía mucho entre los observadores.
Figura Tipos de cianosis.
TAQUICARDIA
Se define por la presencia de una frecuencia cardiaca
Tipos (Tabla 32-1) superior a 100 latidos por minuto. Acompaña a mu-
La concentración de hemoglobina reducida a nivel chas situaciones: anemia, fiebre , ejercicio, ansiedad,
capilar depende de la del 0 2 en la sangre arterial y del hiperfunción tiroidea, etc. En las enfermedades respi-
oxígeno extraído por los tejidos. Según su mecanis- ratorias es un mecanismo compensador de la hipoxia
mo de producción la cianosis puede tener un origen tisular. Es una respuesta a la producción de cateco-
periférico o central. Es periférica si existe un exceso laminas, que incrementan la frecuencia cardiaca y el
de extracción tisular. Suele deberse a que el flujo de volumen sistólico, lo que aumenta el gasto cardiaco.
esa zona está disminuido, bien por vasoconstricción También la hipoxia local induce vasodilatación de
arteriolar o por estasis y congestión venosa. Predomi- los tejidos periféricos, es decir, disminuyen las resis-
na en las partes acras y superficiales , suele ser más tencias vasculares periféricas. Este mecanismo no au-
pálida que la central, la piel está fría y disminuye si menta el contenido de oxígeno de la sangre pero dis-
esta se calienta o se frota. minuye la distancia entre la hemoglobina del hematíe
La cianosis central está causada por un descenso en y los tejidos, lo que facilita la difusión del oxígeno y
la saturación de oxígeno en sangre arterial por: a) una aumenta la p0 2 en ellos.
menor concentración del oxígeno inspirado; b) una
incapacidad por parte de los pulmones para oxigenar TAQUIPNEA
la sangre, o c) por la existencia de algún cortocircuito
que hace que la sangre desoxigenada llegue a los te- La frecuencia respiratoria normal de un adulto es de
16 a 20 respiraciones por minuto. Hay taquipnea si
ese valor se incrementa. Como la taquicardia, es un
signo sensible pero poco específico de insuficiencia
respiratoria. Acompaña a la cianosis cuando existe
Tabla Causas de las diferentes hipoxemia. Suele iniciarse si la p0 2 desciende de
formas clínicas de cianosis 60 mm Hg y expresa la puesta en marcha de meca-
nismos de compensación, ya que con ella el pulmón
Cianosis periférica trata de mejorar la oxigenación central; en ocasiones
Mecanismo: vasoconstricción no solo se incrementa la frecuencia respiratoria sino
Exposición al frío que en los movimientos respiratorios se implican los
músculos accesorios (pectorales, esternocleidomas-
Bajo gasto cardiaco: shock o insuficiencia toideo y escalenos).
cardiaca
Obstrucción arterial o venosa HIPOXEMIA E HIPERCAPNIA
Cianosis central En condiciones normales la pü 2 en sangre arterial
Mecanismo: desaturación arterial está próxima a 100 mm Hg y la pCo 2 a 40 mm Hg.
Enfermedades pulmonares crónicas Hipoxemia e hipercapnia expresan una disminución
evolucionadas y aumento , respectivamente, de esos valores. En la
hipoxemia de inicio agudo disminuye la oferta oxi-
Vivir a gran altura gendada al sistema nervioso y puede aparecer inquie-
Cortocircuitos en enfermedades cardiacas tud, ansiedad o confusión mental. Si su desarrollo es
congénitas subagudo predominan las manifestaciones de los me-
Alteraciones de la hemoglobina: meta, sulfa y canismos compensadores (hiperactividad simpática)
carboxihemoglobina como taquicardia, vasoconstricción e hipertensión
arterial. De forma tardía predomina la cianosis. En
ocasiones la hipoxemia se expresa en forma de is-
273
Semiología y fisiopa tología de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla Características y diferentes tipos de dolor localizado en el tórax


Enfermedad Localización Características Otros rasgos
De origen respiratorio
Neumonía o Localizado, unilateral Dura horas o días A veces se acompaña
pleuritis Agudo de tos, fiebre , disnea,
Punzante roce y/o estertores en la
Aumenta en inspiración auscultación
Neumotórax Unilateral , localizado Duración variable, agudo, Disnea, disminución del
espontáneo punzante, intenso aumenta en murmullo vesicular
inspiración
Embolismo Retroesternal De minutos a horas, inicio Disnea, taquipnea,
pulmonar brusco o agudo, aumenta en taquicardia y/o hipotensión
inspiración
De origen cardiovascular
Angina de pecho Retroesternal, irradiado Dura de 2 a 10 minutos, opresivo En reposo, con esfuerzos,
a cuello, mandíbula y o tras exposición a frío,
hombro izquierdo o estrés; mejora con
nitroglicerina
Infarto agudo de Ídem Más intenso y prolongado. A veces se acompaña de
miocardio Náusas, sudoración insuficiencia cardiaca o
arritmias
Pericarditis Retrosternal o en punta. Horas o días. Aumenta en Mejora con la flexión
Irradiada a hombro supino y con la inspiración ventral , auscultación de
izquierdo profunda roce pericárdico
De origen digestivo
Espasmo Retroesternal, irradiación Intermitente, no progresivo
esofágico semejante a la angina
Reflujo esofago- Retroesternal , Dura minutos, pirosis Aumenta en decúbito tras la
gástrico epigástrico ingesta
U/cus péptico Epigástrico Aparece 2-3 horas tras la Mejora con alcalinos y con
gastroduodenal ingesta inhibidores H2 • Carácter
estacional
De origen psicoemocional
Ansiedad Variable, señalado a punta Muy variables Asociado a crisis de pánico,
de dedo inquietud, depresión

quemia sobre determinados órganos: angor pectoris, DOLOR TORÁCICO


claudicación sobre los músculos de las extremidades,
isquemia transitoria o accidente cerebrovascular en el Las enfermedades de origen respiratorio que causan
cerebro y de forma genérica astenia. dolor generalmente son la neumonía o la pleuritis ,
La hipercapnia es un potente vasodilatador cerebral, el n eumotórax espontáneo y el embolismo p ulm onar
que se manifies ta con cefalea y aumento de la presión (véase Tabla 32-2). El p ulmón y la pleura visceral ca-
intracraneal (véase Capítulo 35). Puede produ cir exci- recen de fibras receptoras de dolor. La patología res-
tación neuronal y alterar el ritmo del sueño y si pro- piratoria dolorosa lo hace irritando la pleura parietal
gresa induce confusión, apatía, somnolencia y coma. (neumonías o embolia pulmonar).
Sobre el sistema nervioso periférico produce cam- El dolor de origen pleural surge por irritación de
bios en la coordinación muscular que provoca u na los nervios aferentes de la p leura parietal. Se origina
especie de aleteo en las man os cu ando el enfermo por procesos qu e cau san inflamación , in filtración o
tiene las extremidades superiores extendidas (tem- distensión-estiramiento , que son mecanismos por
blor aleteante, flapping o asterixis). Puede favorecer los que lo provocan las infecciones o los tumores .
la aparición de mioclonías y de modo poco frecuente La presencia de aire entre las pleuras (neumotórax)
convulsiones generalizadas. Sobre el sistema cardio- causa dolor p or un mecanismo no completamente
vascular al inicio h ay excitación con taqu icardia e dilucidado . Los nervios que recogen las sensaciones
hipertensión, pero si se prolongase puede observar dolorosas reflejan localmente el sitio de la irritación.
h ipotensión arterial. La hipercapnia aumenta la se- Si surge de la p leura diafragmática lo hace el nervio
creción salivar, sudorípara y bronqu ial. frénico y su irritación produce dolor reflejo expresado
CAPITULO 32 Principales manifestaciones clínicas y causas de las enfermedades del aparato respiratorio

en la parte alta del cuello o de los hombros. Es típico


que empeore al inspirar o toser y limita la movilidad
pulmonar.
El dolor musculoesquelético puede deberse a fi-
suras o fracturas de los huesos de la caja torácica , a
procesos inflamatorios del cartílago (condritis o sín-
drome de Tietze), o a la afectación neurológica de una IFO
GP
rama intercostal (virus del herpes zóster).
ÁNGULO ACROPAQUIA
En general, el dolor en la parrilla costal se origina ÁNGULO NORMAL
(o de Lovibond)
en las fibras nerviosas que inervan el periostio, la piel A B
__-K-..__
~
A_ r
o los músculos intercostales. Suele deberse a fracturas 160-180º
,.,-- a/ b l ~ > 180°
o infiltración tumoral. Suele ser local, fijo , persisten- a/ b 1

te y en general empeora al movilizar o comprimir la IFO = interfal¡\ngica distal


zona afecta, lo que reproduce el dolor. GP = grosor del pulpejo

Son causas cardiovasculares de dolor las diferen-


tes formas de angina o infarto agudo de miocardio, las
pericarditis y las lesiones valvulares como el prolap-
so de la mitral. El dolor de origen cardiaco o isqué-
mico por su trascendencia es de los más importantes.
Surge por existir un desequilibrio entre el aporte de
oxígeno al miocardio y las necesidades del mismo ,
en base a que las coronarias tienen su luz disminuida Acropaquias
por arteriosclerosis y se dilatan de modo insuficiente en los dedos
en respuesta a la demanda miocárdica de oxígeno. El de la mano.
dolor pericárdico se inicia en los nervios del mismo.
Asemeja al coronario pero aumenta en la posición su- Figura Medida de la acropaquia.
pina y con la inspiración profunda.
Las enfermedades del aparato digestivo que pue-
lar en la zona afecta, espontáneo o a la presión y cam-
den expresarse con dolor torácico son el espasmo
bios vasomotores y parestesias. La Tabla 32-3 expresa
esofágico, el reflujo gastroesofágico y el ulcus péptico
las enfermedades que se asocian a las acropaquias.
gastroduodenal. La Tabla 32-2 expresa las caracterís-
Los mecanismos implicados en la apaTición de las
ticas del dolor en el tórax de este origen.
acropaquias y la osteoartropatía no están claros. Po-
drían deberse a: a) hipoxia crónica, pero no siempre
ACROPAQUIAS está presente y no se correlaciona con su grado; b) un
aun1ento de flujo local causado por factores neurogé-
CONCEPTO nicos; c) niveles elevados de hormona de crecimiento
Corresponde a un ensanchamiento de la falange dis- o de estrógenos.
tal de los dedos con disminución del ángulo obtuso
que forman el lecho ungueal y la uña (Fig. 32-2). DIAGNÓSTICO
Las acropaquias se diagnostican a la inspección (véase
SEMIOLOGÍA Figura 32-2) y la osteoartropatía mediante radiología
La falange distal se ensancha y adopta la forma de pa- que demuestra la neoformación ósea que separa el cór-
lillo de tambor, la uña se redondea en forma de vidrio tex normal por una línea radiotransparente. El líquido
de reloj y en su base puede existir eritema y calor local. de las articulaciones afectas tiene escasos leucocitos
Puede afectar a los dedos de manos (lo más habitual) y (menos de 2000 por mm 3 ) , siendo los neutrófilos me-
pies. Su hallazgo puede ser poco relevante o expresar nos del 15 %. Las lesiones acumulan tecnecio 99m de
la existencia de una enfermedad subyacente relevante, forma lineal en el periostio de las diáfisis distales de
a la que en ocasiones precede. Se debe a una hiperpla- los huevos afectados, incluso antes de que aparezcan
sia fibrosa del segmento existente entre la falange y la los cambios radiológicos.
uña con aumento de la vascularización y edema.
Las acropaquias pueden formar parte de la llamada
osteoartropatía pulmonar hipertrófica. En ella existe
HEMOPTISIS
periostitis y neoformación ósea en la diáfisis de los CONCEPTO
huesos largos de los antebrazos y piernas, e incluso
en ocasiones en metacarpianos y metatarsianos. Puede De hemo = sangre, ptysis = esputo. Es una expecto-
acompañarse de inflamación periarticular, hipertrofia ración que contiene sangre originada en el tracto res-
~
de la sinovial y derrame articular. Suele cursar con do- piratorio inferior (por debajo de las cuerdas vocales)
Sem iología y fisiopatolog ía de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla Enfermedades asociadas Tabla Principales causas


a las acropaquias de hemoptisis
ldiopáticas Tumores malignos (cáncer) y benignos
(familiares) (adenomas) de pulmón
Adquiridas Infecciones o inflamaciones
Enfermedades Bronquiectasias Bronquitis aguda y crónica (EPOC)
del pulmón o la Abscesos Neumon ía
pleura Bronquiectasias
Enfermedades Congénitas (cianóticas) Tuberculosis
cardiacas Endocarditis infecciosa Abscesos de pulmón
Enfermedades Enfermedad de Crohn Infecciones por hongos
digestivas Colitis ulcerosa Parásitos pulmonares
Cirrosis hepática Enfermedad del tejido conectivo
Fibrosis quística
Enfer medades Tirotoxicosis
endocrinológicas Enfermedades cardiovasculares
Enfermedades ldiopáticas Embolismo pulmonar
asociadas a Cáncer de pulmón Insuficiencia cardiaca
osteoartropatía primario o metastásico Estenosis mitral
hipertrófica Mesotelioma pleural Malformaciones vasculares pulmonares
Linfomas Otras
Carcinoma de tiroides o
nasofaríngeo Enfermedades hematológicas
Sobredosificación de anticoagulantes
Aspiración de cuerpo extraño
Traumatismos (iatrogénicos)
El sujeto puede expulsar sangre sola o mezclada
con el esputo, que aparece manchado. Se considera
que una hemoptisis es masiva si el volumen total de
la hemorragia es superior a 600 ml en 24-48 horas, o la mecanismo inmune, como en el síndrome de
cuantía del sangrado supera los 100 ml/hora. Goodpasture (capilaritis pulmonar y renal).
La hipertensión en el círculo menor favorece el
CAUSAS paso de hematíes desde los lechos vasculares
hasta el alvéolo.
Se recogen en la Tabla 32-4. Cuando existe una coagulopatía, el sangrado pue-
de ocurrir sobre lesiones pulmonares previas.
MECANISMOS IMPLICADOS
El sangrado puede surgir por ruptura del lecho vas-
cular a cualquier nivel. El pulmón tiene un doble MANIFESTACIONES CLÍNICAS
sistema arterial: el de las arterias pulmonares y el de La sangre expulsada es de color claro, habitualmen-
las bronquiales, que son el lugar predominante de te brillante y suele acompañarse de tos. Deben des-
sangrado. Revisamos esos mecanismos:
cartarse otros lugares de sangrado: nariz (epistaxis),
Las causas inflamatorias (bronquitis) producen vías aéreas superiores (pólipos nasales o sinusitis), o
hiperemia mucosa, que favorece el sangrado. neoplasias nasofaríngeas o laríngeas. En este último
Las inflamaciones crónicas (bronqu itis crónicas, caso la sangre es oscura, no se acompaña de tos y sí
bronquiectasias) o los tumores favorecen la apa- de naúseas y vómitos. Deben buscarse otras manifes-
rición de neovasos y circulación colateral. taciones clínicas de la enfermedad causal. Rara vez
Los procesos destructivos lesionan los vasos (tu- el esputo es oscuro por la existencia de pigmentos
berculosis, cáncer bronquial, absceso , neumonía (infección por serratia marcescens), contaminantes
necrotizante). alimenticios o fármacos.
Más raro es que existan comunicaciones ar- Sus consecuencias pueden ser graves ya qu e, aun-
teriovenosas congénitas o adquiridas o lesiones que no sea masiva, ocupa las vías aéreas y puede llenar
microvasculares causadas por drogas o tóxi- los alvéolos, producir atelectasias y comprometer la
276
cos inhalados, o bien lesiones vasculíticas de ventilación. En la hemoptisis suelen predominar las
CAPITULO 32 Principales manifestaciones clínicas y causas de las enfermedades del aparato respiratorio

CAUSAS
Se expresan en la Tabla 32-5.
Tabla Causas de ronquera
Agudas EVALUACIÓN
Infecciones: virales, bacterianas
Irritantes químicos: gases Debemos recoger: su duración, fluctuaciones durante
Abuso de la voz el día o los días , si hay otras manifestaciones acom-
pañantes, especialmente presencia de dolor (en oído
Crónicas: sugiere tumor). afectación general, si hubo maniobras
Enfermedades locales benignas: pólipos o instrumentales en la laringe y los hábitos del sujeto
nódulos en cuerdas vocales (habla), especialmente los tóxicos (tabaco, alcohol).
Irritantes: tabaquismo Se completa con una exploración de cabeza y cuello,
Tumorales: tumores epidermoides en especialmente la boca y la faringe, pero también del
cuerdas vocales
oído y el cuello, buscando adenopatías. Si dura más
Neuropatías: parálisis en cuerdas
de dos semanas puede ser necesaria la laringoscopia
Endocrinológicas: hipotiroidismo
y muchas veces son de ayuda las técnicas de imagen.
Digestivas: reflujo gastroesofágico

EPISTAXIS
manifestaciones por hipoventilación, y su complica- CONCEPTO Y VALORACIÓN CLÍNICA
ción más grave es la asfixia, más que la exanguinación. Es un sangrado nasal proveniente de las vías aéreas
Su diagnóstico requiere algunas pruebas comple- superiores (por encima de las cuerdas vocales). Im-
mentarias: a) la Rx de tórax, en busca de cavitaciones, porta estimar: a) el volumen de sangre perdida; b) las
masas, condensaciones, infiltrados o patología cardia- circunstancias en que apareció , y c) los antecedentes
ca, o b) la broncofibroscopia, que a veces puede susti- médicos y quirúrgicos del enfermo. La exploración se
tuirse por una c) TAC torácica y d) laRM es útil en la deli- orienta a buscar el origen del sangrado, exploración de
mitación de quistes broncogénicos. En un tercio de los fosas nasales y las cifras de presión arterial (Capítulo
casos la causa de la hemoptisis queda sin diagnóstico. 4). Las pruebas complementarias se orientan a valorar
la coagulación y el grado de anemia.
RONQUERA
CAUSAS
CONCEPTO
Pueden ser poco relevantes si se relacionan con una
La ronquera o disfonía expresa un cambio en el tono lesión en la zona nasal anterior (zona de Kiesselbach),
habitual de la voz, que se hace más grave o bitonal. traumatismos , el enfermo es hipertenso o tuvo un
Puede tener un curso agudo, que dura menos de dos cuadro inflamatorio-infeccioso; otras veces pueden
semanas y habitualmente es de carácter benigno, por expresar una situación de mayor gravedad (tumor).
ejemplo una viriasis, o crónico, que dura más de dos Las lesiones en las zonas posteriores suelen lesionar
semanas y puede expresar una enfermedad más grave las ramas de la arteria esfenopalatina. Las principales
como un tumor. causas de epistaxis se recogen en la Tabla 32-6.

Tabla Causas, tipos y mecanismos de las epistaxis


Ca usas Tipos Mecanismos
Traumatismos y tóxicos Agresiones internas o externas, Agresión sobre la zona de
irritantes químicos Kiesselbach
Alteraciones vasculares Hipertensión arterial Aumento de fragilidad vascular
Telangiectasias hereditarias
Procesos inflamatorios Rinosinusitis La inflamación causa vasodilata-
Rinitis alérgica o atrófica ción y friabilidad de las mucosas
Trastornos de la coagulación Congénitos o adquiridos Alteraciones de la hemostasia
Tumores de la nariz, senos Benignos o malignos Disrupción de los vasos
paranasales y nasofaringe
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla Causas de hipo Tabla Principales causas de las


enfermedades del aparato respiratorio
Irritación del nervio vago
Distensión gástrica, endoscopia Infecciones
Gastritis, ulcus péptico Entre ellas podemos incluir: laringitis,
Pericarditis, tumores torácicos bronquitis agudas o crónicas y neumonías y
abscesos causados por todo tipo de agentes
Infa rto agudo de miocardio
vivos (bacterias, hongos, protozoos, virus).
Irritación del diafragma Enfermedades tóxicas o degenerativas.
Distensión gástrica: aerofagia y hernia de Provocadas o favorecidas por el efecto de
hiato ciertos tóxicos ambientales como el tabaco,
Absceso subfrénico o por las industrias del carbón , sílice, etc. ,
favorecen la bronquitis crónica, la silicosis, etc.
Lesión del sistema nervioso central
Tumores
Enfermedades vasculares, neoplásicas o
traumáticas Tanto benignos como los de origen maligno;
broncopulmonares y pleurales
Agresiones tóxico-metabólicas Trastornos vasculares
Tabaco, alcohol Como el embolismo pulmonar
Fá rmacos (alfa-metildopa)
Enfermedades de base inmune
Trastornos hidroelectrolíticos, uremia Como el asma bronquial
En el postoperatorio Trastornos genético
Anestesia general Déficit de alfa-1 antitripsina (que condiciona
Distensión o tracción de vísceras enfisema) , la fibrosis quística, etc.
Trastornos del desarrollo
Psicógeno
Fístulas traqueoesofágicas, secuestros
Ansiedad o estrés pulmonares, etc.

HIPO siones toxicometab ólicas o causas psíquicas . Antes


de calificarlo de psicógeno se d eben exclu ir las cau -
CONCEPTO Y TI POS sas orgánicas, qu e se recogen en la Tabla 32-7 .
Supone la contracción espasmódica e involuntaria
d el diafragma con la glbtis cerrada. Suele ser au toli- EVALUACIÓN
m itado . Se habla de crisis de hipo si existen episodios
intermitentes, y no se prolongan más de 48 h oras , de Es importan te recon ocer sus características : duración ,
hipo persistente si dura más de 48 horas y menos d e factores qu e lo desen cadenan, enfermedades asociadas,
dos meses, e hipo intratable si excede este periodo. uso de fármacos, etc. La exploración debe ser global y
Véase Tabla 32-7. las técnicas complementarias además de la analítica ru-
tinaria exigen técnicas de imagen para valorar el tórax
(mediastino) y en ocasiones el abdomen.
MECANISMOS IMPLICADOS
Es un mecanismo reflejo cuya aferencia se origina en
el nervio frénico, el vago o la cadena simpática de D6 CAUSAS DE LAS ENFERMEDADES
a D l2 . Sus núcleos se localizan en la médula cervical DEL APARATO RESPIRATORIO
C3-C5 y las eferencias se condu cen vía nervio frénico.
En los próximos cap ítulos se describirán los grandes
síndromes con qu e se expresan las diferentes enfer-
CAUSAS medades del pulmón. La Tabla 32-8 describe los gru-
Surge por irritación directa del vago, a través del dia- pos etiológicos que pueden producir enfermedades
fragma o por lesiones del sistema nervioso, por agre- en el aparato respiratorio.

278
l33
Exploración física
en patología respiratoria
Jaime Merino Sánchez, Reyes Pascual Pérez, Santiago Romero Candeira

EXPLORACIÓN DEL TÓRAX


EN LAS ENFERMEDADES
DEL APARATO RESPIRATORIO
GENERALIDADES
La exploración física del tórax utiliza una serie
de maniobras sistemáticas: inspección, palpación,
percusión y auscultación. Debe realizarse por pla-
nos: anterior, posterior y lateral; de vértices a bases,
comparando los hallazgos de un lado con los de
otro, relacionándolos con las estructuras de la caja
torácica y al describirlos utilizar puntos de referen-
cia anatómicos (Fig. 33-1). El ángulo esternal (don-
de se unen el cuerpo y el mango del esternón y al
que se une la segunda costilla) permite identificar
los espacios intercostales siguientes. Para ello el
explorador desciende y bordea los arcos costales
anteriores con los dedos centrales de su mano.
Este capítulo aborda los hallazgos del tórax
limitados a las enfermedades del aparato respi-
ratorio.

INSPECCIÓN
Conformación de la caja torácica
Ciertas anomalías o deformidades pueden
limitar su movilidad, favorecer las enferme-
dades respiratorias o explican el hallazgo
de soplos cardiacos a la exploración. La ci-
fosis es la deformidad de la colunma dorsal
en el plano anteroposterior con aumento
de la curvatura o con cavidad anterior (Fig.
33-2). La escoliosis es la desviación de la
columna en el plano sagital. Se describe in-
dicando el punto de su convexidad mayor,
por ejemplo, escoliosis dorsal derecha en
,. D7. Las malformaciones congénitas a nivel
esternal hacen que este aparezca hundido,
excavado o en embudo; otras veces es pro-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

2 4 5 3 6 7
1. Línea externa! media: vertical, a través del centro del esternón.
2. Líneas medioclaviculares: verticales, paralelas a la anterior por el punto medio de cada clavícula.
3. Línea axilar anterior: vertical, paralela a la anterior, a nivel del pliegue axilar anterior.
4. Línea axilar posterior: ídem, en el pliegue axilar posterior.
5. Línea axilar media: ídem, en el punto medio de 3 y 4.
6. Línea espinal media: une las apófisis espinosas de las vértebras dorsales.
7. Líneas escapulares: verticales, paralelas a la línea espinal media, pasando por el ángulo de la escápula.
8. Área interescapular: queda entre las líneas escapulares de cada lado hasta el ángulo de la escápula.
9. Línea infraescapular: entre las líneas escapulares, por debajo de los ángulos de las escápulas.

Figura Puntos de referencia en la explorac ión del tórax.

minente, en forma de quilla o buche de paloma. Si La movilidad de ambos hemitórax sanos es simé-
existe atrapamiento aéreo excesivo el tórax aparece in- trica. Su amplitud se aprecia mejor si el explorador
suflado, en forma de tonel, con costillas horizontales, coloca sus pulgares a ambos lados de la apófisis es-
columna algo cifótica y el ángulo esternal abierto. pinosa de una de las vértebras dorsales medias y los
dedos restantes en las últimas costillas. Algunas en-
fermedades localizadas pueden limitar la movilidad
Movilidad torácica de un hemitórax: fijación inflamatoria de la pleura,
La inspección permite valorar los movimientos respi- parálisis del diafragma, fracturas costales con dolor
ratorios: tipo de respiración, frecuencia, ritmo, inten- a la movilización, etc. Si existe atrapamiento aéreo
sidad (véase Capítulo 4). (enfisema) la movilidad global está limitada.

Cifosis Escoliosis

Figura Cifosis y esco liosis.


CAPÍTULO 33 Exploración física en patología respi ratoria

Cuando hay una obstrucción importante en las modulado se expresa como palabras, pero también se
vías respiratorias (por ejemplo, en el asma bronquial), conduce por los bronquios (si están permeables) has-
la movilidad torácica está comprometida y por ello ta la periferia del parénquima pulmonar y allí pueden
pueden participar músculos accesorios (pectorales, palparse.
esternocleidomastoideos y escalenos); es la respira- Para detectarlas en el plano anterior el enfermo
ción auxiliada. A veces hay retracción de los espacios debe estar tumbado o de pie, y en el plano posterior
intercostales y/o de los huecos supraclaviculares o su- debe estar sentado o de pie. Se pide al enfermo que
praesternales («tiraje») y expresa que existe dificultad pronuncie palabras sonoras: «treinta y tres » o «regi-
para movilizar el parénquima subyacente. miento de caballería». El explorador coloca alternati-
vamente el borde cubital de sus manos en los espacios
Latido de la punta intercostales de cada hemitórax del enfermo, desde
los vértices a las bases. El sonido se aprecia mejor
En personas delgadas el movimiento de la punta car- cuanto más próximas están las manos del explorador
diaca se puede visualizar o palpar en el quinto espa- al parénquima y mejor aún si la conducción sonora de
cio intercostal izquierdo a nivel de la línea medio-cla- la voz se ve facilitada por la existencia de un bronquio
vicular. Su desviación tiene interés semiológico. Una permeable entre alvéolos compactos , es decir, que
pérdida completa e importante de contenido aéreo en han sustituido su aire por un exudado. Esto sucede
las vías respiratorias (atelectasia) desplaza el corazón por procesos infecciosos del pulmón (neumonía).
en el sentido de la lesión y con él la punta. Si crece el Por el contrario están disminuidos o abolidos si: a)
ventrículo izquierdo la punta se desplaza hacia abajo desaparece el parénquima conductor (p. ej., rotura
y hacia la izquierda. Si crece el ventrículo derecho, de tabiques en el enfisema); b) la onda sonora se ve
hacia arriba y hacia dentro. interrumpida por alguna estructura que impide la
transmisión (p. ej., líquido -derrame pleural- o aire
en las hojas de la pleura-neumotórax); oc) el sujeto es
PALPACIÓN obeso o atlético y la grasa o el músculo aleja la mano
Movilidad , fracturas costales , dolor y anomalías del explorador del parénquima pulmonar por el que
observadas se transmite el sonido.
En las fracturas costales la separación de sus bor-
des es dolorosa y para ello el explorador compri- Tráquea
me esa costilla en sentido anteroposterior o lateral, Para palparla el explorador debe colocar el dedo índi-
apoyándose sobre el hemitórax correspondiente. ce sobre el hueco supraesternal del enfermo entre los
Para precisar mejor el punto de lesión, se deben pal- bordes internos de los músculos esternocleidomastoi-
par uno a uno los arcos costales en sus segmentos deos. Se localiza en la línea media, pero se desvía si
anterior, lateral y posterior, tratando de localizar la existen tumores vecinos (del tiroides o adenopatías)
zona de dolor local, movilidad anormal o de crepi- o si hay una zona del pulmón que no ventila (atelec-
tación. tasia); en este caso hacia el lado del pulmón afecto.

Enfisema subcutáneo
PERCUSIÓN
Si una lesión de la vía respiratoria permite el paso de
aire al tejido subcutáneo, este tiende a localizarse en Fundamento
las porciones altas del tórax o en la base del cuello y Esta técnica se basa en los principios del radar o el
puede apreciarse a la palpación. Es una crepitación, sonar. Dar un golpe seco sobre la superficie de un to-
sensación semejante al aplastar nieve fresca. nel medio lleno de vino origina un sonido distinto si
se hace sobre la zona vacía o la llena. La técnica más
utilizada es la percusión digital, en la que el explora-
ROCE PLEURAL dor golpea con la punta del dedo medio de una mano
La inflamación de la pleura (pleuritis) hace desapare- sobre la segunda falange del dedo medio de la otra;
cer la textura lisa de sus hojas. Al respirar ambas se este dedo se va colocando en los distintos espacios
desplazan y producen un sonido audible a la auscul- intercostales del tórax del enfermo tensando la piel
tación que a veces es palpable cuando el explorador y desplazándose desde el vértice a la base, valoran-
coloca su mano sobre la zona inflamada. Es el roce do comparativamente un hemitórax con otro. Para la
pleural. percusión sobre el plano anterior del tórax el enfermo
está en decúbito supino y para el del plano posterior
sentado
Vibraciones locales Al percutir se genera una onda sonora que viaja
El aire espirado hace vibrar las cuerdas vocales y ge- por el tórax y vuelve a los oídos del explorador tras --isl"
nera un sonido que se transmite en dirección oral y ser reflejada por los distintos tejidos subyacentes en
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

CP = claro pulmonar SM = sub mate (músculos, huesos ...)


MH = matidez hepática MC = matidez cardiaca
T =timpanismo (espacio de Trambe o cámara gástrica)

Figura Hallazgos a la percusión en el tórax normal.

esa zona. Su calidad depende de las estructuras que AUSCULTACIÓN


atraviesa e informa del estado físico del pulmón y las
otras estructuras intratorácicas. Con el estetoscopio (en lenguaje coloquial fonendos-
Los sonidos obtenidos pueden ser: a) Claro pul- copio) se debe auscultar en todos los planos: anterior,
monar. Se produce al percutir sobre un parénquima lateral y posterior. Para explorar los planos anterio-
pulmonar bien ventilado. Su tono corresponde al res y laterales el enfermo debe estru· de pie, echado en
de la sonoridad normal; b) Mate. Es un sonido de decúbito supino, sentado o en decúbito lateral; para
menor resonancia, apagado, producido al percutir explorar el plano posterior debe estar de pie o senta-
sobre zonas no aireadas. Lo reproducimos si per- do. Se comparan los sonidos en cada hemilado desde
cutimos en el antebrazo; c) Submate. El sonido los vértices hacia las bases. El enfermo debe respirar
tiene una resonancia intermedia. Surge cuando tranquilan1ente con la boca abierta.
el parénquima pulmonar aireado se superpone a Los ruidos normales según su origen pueden ser
un órgano compacto, como ocurre por ejemplo glóticos, laringotraqueales o bronquiales y vesicula-
en las últimas costillas derechas sobre el hígado. res. Tabla 33- 1 y Figura 33-4.
Así, percutir el tórax nos permite definir el límite Glóticos: El aire pasa por la glotis, forma remoli-
superior del hígado , que normalmente aparece en nos y genera un ruido semejante al pronunciar la
el undécimo espacio intercostal derecho y sube si letra J espirando; tienen un timbre alto y se aus-
hay derrame pleural (neumotórax); d) Timpánico. cultan sobre la tráquea. Las espiraciones son más
Es un sonido más musical , parecido al golpeteo de prolongadas y ruidosas que las inspiraciones.
un tambor. Indica que el contenido aéreo pulmonar Bronquiales o laringotraqueales: Se producen al
está aumentado; puede deberse al atrapamiento aé- pasar el aire por las vías respiratorias superio-
reo (enfisema), grandes bullas , o aire localizado en res , sobre todo al generarse turbulencias en el
las pleuras (neumotórax). bronquio principal. El sonido, de tono medio, se
La Fig. 33-3 expresa los sonidos habitualmente ausculta igual en inspiración que en espiración
obtenidos al percutir en cada área del tórax. Los y mejor a nivel traqueal, paraesternal o paraver-
cambios expresan alteración en las estructuras subya- tebral.
centes; por ejemplo, si existe un derrame pleural o si Murmu llo vesicular: Se produce al entrar y salir
hay una parálisis del nervio frénico que asciende ese el aire de los alvéolos; se oye mejor en inspira-
hemidiafragma, se eleva la zona del sonido submate ción (que es un movimiento activo) y más en las
en esa base pulmonar. El sonido claro se hace mate si bases, donde abunda el parénquima pulmonar.
el aire de los alvéolos desaparece, por ejemplo, por te-
ner exudados (neumonía), si el parénquima aéreo está Patología de los ruidos normales: Su intensidad
sustituido por una neoplasia, si hay obstrucción en la puede ser normal, estar aumentada o disminuida. Los
vía respiratoria (atelectasia) o se superpone líquido ruidos se auscultan mejor en las personas delgadas. El
entre el parénquima y la mano que percute (derrame murmullo puede apagarse o abolirse, si: a) disminuye
rnr- pleural). el parénquima pulmonar transmisor (enfisema); b) los
CAPITULO 33 Exploración física en patología respiratoria

Tabla Características de los ruidos respiratorios


Fase Intensidad Tono Zonas
Tipo
del ciclo espiratoria espiratorio de audición

Fisiológicos
Glótico Mayor en espiración Alta (ruidoso) Alto Tráquea
Bronquial Igual ambas fases Media Medio Esternón, entre escápulas
Vesicular Mayor en inspiración Baja (suave) Bajo Áreas pulmonares
Añadidos
Roncus Ambas fases Alta Bajo Ambos pulmones
Sibilancias Mayor en espiración Alta Alto Ambos pulmones
Estertores Mayor en inspiración Baja Bajo Variable(+ bases)
subcrepitantes Mayor en inspiración Intermedia Bajo Variable(+ bases)
Estertores crepitantes Igual ambas Baja Grave Variable
Roce pleural

alvéolos no se ventilan; por ejemplo, si su espacio Pueden aparecer ruidos anormales o patológicos
está ocupado por exudados o desaparece (neumonía, que expresan cambios en la fisiología pulmonar. Los
atelectasia), y c) hay una superficie no conductora más importantes son:
del sonido entre el parénquima y el fonendoscopio
(derrame pleural, neumotórax o engrosamiento de Estridor: Se produce cuando el aire pasa por
las hojas de la pleura-plaquipleuritis) . Es anormal una zona de la laringe o la tráquea estrechada,
escuchar los ruidos glóticos o bronquiales fuera de habitualmente por neoplasias o malformaciones
sus zonas fisiológicas de audición. (traqueomalacia). Es un sonido de intensidad

EN EL SANO EN EL ENFERMO

GLÓTICO -------------~

ESTRIDOR

RONCUS
BRONQUIAL
O LARINGO-
TRAQUEAL
SIBILANCIAS

. , - - - - - ESTERTORES
SUBCREPITANTES

ESTERTORES
CREPITANTES

MURMULLO
VESICULAR

Figura Origen de los sonidos respiratorios a la auscultación.


Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

elevada, audible a veces sin necesidad de fonen- con un neumotórax (presencia de aire entre las
doscopio. pleuras) el sonido adquiere un timbre metálico,
Estertores: Se clasifican en secos y húmedos: soplo anfórico, que se parece al ruido producido
al soplar por encima del borde del orificio de una
Secos: Si existe disminución de la luz bron-
botella.
quial (por edema de su mucosa, secreciones
Roces pleurales. El sonido nos recuerda el frotar
o brococonstricción) el aire puede generar
cuero nuevo. Se oye mejor en inspiración, aun-
dos tipos de ruidos, unos de tipo agudo como
que está presente en espiración. No se modifica
pitidos , denominados sibilancias, u otros de
con la tos y aumenta al comprimir con el fonen-
carácter ronco o roncus. Con frecuencia acom-
do el área de la auscultación. A veces se llega a
pañan a enfermedades como el asma bronquial
palpar.
o la bronquitis crónica; pueden ser percibidos
Auscultación de la voz: Hemos señalado cómo
por el propio enfermo y los describe como «pi-
la voz , además de palparse, puede ser oída al
tos ». Ambos se oyen en inspiración o espira-
auscultar el tórax. Habitualmente se percibe
ción; las sibilancias mejor en la inspiración y
el enunciado vocal y con mucha dificultad
se modifican por la tos.
las palabras articuladas. Cuando la transmi -
Húmedos: Son de dos tipos: subcrepitantes y
sión se ve facilitada por la existencia de una
crepitantes. Los subcrepitantes se producen
condensación pulmonar estando el bronquio
al pasar el aire por la vía respiratoria pequeña
permeable se dice que existe broncofonía; en
del pulmón cuando está parcialmente ocupada
ellas se aprecia un sonido vocal fuerte y claro
por secreciones líquidas. El tono del estertor
pero las palabras son ininteligibles (aumenta la
es más bajo cuanto más alto es su origen en
resonancia vocal).
el árbol respiratorio. Se auscultan en inspira-
En el borde superior de los derrames pleu-
ción y espiración y se modifican con la tos.
rales puede auscultarse la voz , aunque algo
Se escuchan, por ejemplo, en el paciente que
distorsionada, con un carácter nasal. Al fenó-
permanece en cama de modo prolongado y se
meno se le llama egofonía y es una variedad
suelen escuchar en ambas bases pulmonares ,
de la broncofonía. Cuando las palabras se reco-
disminuyendo o desapareciendo tras pedirle
nocen claramente, como si la voz saliera desde
que tosa. Los estertores crepitantes se originan
donde se ausculta, este fenómeno se denomina
al entrar y salir el aire en unos alvéolos que
han cambiado parte de su contenido aéreo nor-
pectoriloquia. Se produce cuando hay una
consolidación pulmonar. Si las palabras mu-
mal por líquido , bien sea un exudado o un tra-
sitadas se perciben nítidamente, al fenómeno
sudado (véase Capítulo 38). Su timbre es alto ,
se le denomina pectoriloquia áfona. Podemos
se suelen oír mejor al final de la inspiración y
hallarla en el borde superior de un derrame si
no se modifican por la tos. Su sonido recuerda
pedimos al enfermo que cuchichee al tiempo
al de aplastar la nieve recién caída y se imi-
que le auscultamos.
ta frotando suavemente el cabello delante del
La voz se suele dejar de oír por las mismas
pabellón auditivo. Según su intensidad, y de
un modo subjetivo, se pueden clasificar en pe- causas que se deja de palpar. Estas causas son:
a) si hay contenido líquido aéreo entre las hojas
queña, mediana o gruesa burbuja. Su presencia
pleurales que alteran la transmisión; b) si la pleu-
sugiere edema pulmonar, neumonía o hemo-
rragia, fundalmentalmente. ra está engrosada; c) si falta parénquima pulmo-
nar (enfisema), y d) si el bronquio que ventila la
Soplos: Si el parénquima pulmonar ha sustituido zona está obstruido.
su contenido aéreo por líquido y el bronquio que
debe airear ese segmento o lóbulo es permeable
(lo que sucede en algunas neumonías) es posible OTROS HALLAZGOS DE LA EXPLORACIÓN
oír sobre esa zona un soplo tubárico; éste resulta FÍSICA DE LOS ENFERMOS DEL APARATO
de la transmisión del ruido bronquial a través de RESPIRATORIO
la zona de consolidación pulmonar.
Si entre las hojas de la pleura se acumula lí- Las enfermedades del aparato respiratorio pueden ex-
quido es posible que en la parte alta del mismo se presarse fuera del tórax, y su evaluación requiere una
ausculte un soplo pleural. Está producido por la exploración completa del sujeto. Son características
compresión parcial que el derrame ejerce sobre la coloración azulada de piel y mucosas, (cianosis,
el parénquima pulmonar vecino. véase Capítulo 32), ciertos tumores broncopulmona-
Cuando un bronquio comunica con una caver- res bloquean el drenaje de la vena cava superior y el
na, que es una zona de pulmón que se destruyó, enfermo desarrolla estasis yugular e incluso edema
al entrar el aire en ella origina un ruido de alta en la zona supraclavicular (esclavina) (Capítulo 41), o
resonancia: soplo cavitario o cavernoso. Si las hacen que aparezca un ensanchamiento en los dedos
284
paredes de las cavernas son lisas o comunican de los enfermos (acropaquias) (Capítulo 32).
-~34
Exploraciones complementarias
en las enfermedades
del aparato respiratorio
Juan Manuel Arriero Marín, Santiago Romero Candeira

INTRODUCCIÓN
A continuación se exponen sucintamente las téc-
nicas diagnósticas que se pueden emplear en en-
fermedades del aparato respiratorio, excluyendo
de este capítulo la exploración funcional (véase
Capítulo 35).

ANÁLISIS DEL ESPUTO


La simple observación del esputo puede aportar in-
formación de interés clínico: un esputo amarillento
o verdoso indica inflamación, un esputo hemop-
toico constituye una señal de alarma que debe ha-
cer descartar una neoplasia, y un esputo de color
negro (melanoptisis) aparece por depósito de pig-
mento antracótico en mineros de carbón.

OBTENCIÓN DE LA MUESTRA
El esputo debe obtenerse por la mañana, tras el
lavado de la cavidad bucal, procurando expec-
torar tras una respiración profunda y evitando
la saliva. En personas incapaces de expectorar
se puede inducir el esputo inhalando suero sa-
lino aerosolizado. Las muestras deben llegar
al laboratorio lo antes posible. Para cualquier
tipo de análisis se considera que es una bue-
na muestra la que contiene más de 25 leuco-
citos polimorfonucleares y menos de 10 cé-
lulas epiteliales por campo, al considerarse
que los primeros proceden del tracto respi-
ratorio inferior y las segundas de la boca.

ANÁLISIS MICROBIOLÓGICO
Al tratarse de una muestra contaminada
por gérmenes saprofitos de las vías respira-
,. torias superiores, tanto la tinción de Gram
como el cultivo de esputo son sólo orien-
tativos en el diagnóstico etiológico de las
Semiología y fi siopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

neumonías bacterianas. La tinción de Ziehi-Neelsen


y el cultivo en medio de Lowenstein son el procedi-
miento habitual de diagnóstico de la tuberculosis Tabla Indicaciones
pulmonar. En pacientes infectados por el virus de la de la broncoscopia
inmunodeficiencia humana el esputo puede consti-
tuir una buena muestra para el diagnóstico de la neu- Diagnósticas
monía por Pneumocystis jiroveci.
Sospecha de neoplasia broncopulmonar
Hemoptisis de etiología desconocida
ANÁLISIS CITOLÓGICO Aspiración de secreciones para estudios
Los tumores broncopulmonares descaman a la luz microbiológicos en las infecciones pulmonares
bronquial células neoplásicas que se pueden identifi- Tos persistente sin causa aparente
car en el esputo. Así, los esputos tras la broncoscopia Derrame pleural de causa no fil iada por otros
se utilizan como una muestra adicional a las obteni- métodos
das durante esta exploración. Lesiones traqueobronquiales de origen
traumático, por tóxicos inhalados o por
aspiración de contenido gástrico
BRONCOSCOPIA Sospecha de obstrucción de la vía superior
Es una técnica endoscópica que permite la visión di- Terapéuticas
recta de las vías respiratorias superiores y del árbol
traqueobronquial. Se puede realizar de forma ambu- Intubación endotraqueal dificultosa
latoria y presenta muy pocas complicaciones. Los Aspiración de secreciones y tapones de moco
instrumentos flexibles con un sistema de fibra óptica Extracción de cuerpos extraños
(fibrobron coscopios] han desplazado en gran medida Tratamiento con láser de lesiones
al broncoscopio rígido, por ser menos traumáticos y traqueobronquiales
por llegar a zonas más distales del árbol bronquial.
Las indicaciones de la broncoscopia rígida han que- Control evolutivo
dado limitadas a la extracción de cu erpos extraños Respuesta al tratamiento de tumores
cuando se fracasa con el fibrobroncoscopio , la dilata- malignos
ción de estenosis traqueales y la realización de endos- Fístulas traqueoesofágicas y broncopleurales
copias en las que exista riesgo de hemorragia masiva
(algunos tumores , tratamiento con láser) (Fig. 34-1).

INDICACIONES
atelectasia o hiperclaridad de etiología desconocida
Las principales indicaciones de la broncoscopia se en una radiografía de tórax puede indicar hacer una
recogen en la Tabla 34 -1 . broncoscopia.
La hemoptisis (sangrado procedente de las vías
Diagnósticas respiratorias por debajo de la glotis) es un síntoma re-
La indicación más frecuente es la sospecha de neo- levante que puede aparecer en muchas enfermedades,
plasia pulmonar. Cualquier densidad, infiltrado, tanto respiratorias (tumores, bronquitis crónica, bron-
quiectasias) como extrapulmonares (estenosis mitral,
trastornos de la coagulación) . La broncoscopia, sobre
todo si se realiza de forma precoz, permite localizar
lesiones endobronquiales sangrantes o al menos la
zona de sangrado.
Cuando se sospecha una tuberculosis pulmonar y
el análisis de esputo en las zonas pulmonares sospe-
chosas ha sido negativo, el aspirado selectivo de se-
creciones con el broncoscopio puede ser diagnóstico.

Terapéuticas y su control
El broncoscopio sirve de guía para intubar antes de una
intervención quirúrgica a pacientes en los que resulte
dificultoso hacerlo por lesiones cervicales, maxilares
o traumatismos de cabeza, cuello o vías respiratorias.
Sirve también para aspirar secreciones y tapones de
moco en pacientes que presentan una atelectasia pul-
Figura Rea lizac ión de un a fibrobro ncoscop ia. monar debida a obstrucción bronquial por un tapón
CAPÍTULO 34 Exploraciones complementarias en las enfermedades del aparato respiratorio

de moco y en enfermos intubados con ventilación me-


cánica, así como para la extracción de cuerpos extra-
ños. La broncoscopia permite confirmar la remisión
de un tumor maligno en tratamiento.

OBTENCIÓN DE MUESTRAS
La toma de muestras se lleva a cabo a través del canal
de aspiración mediante distintos tipos de técnicas y
dispositivos que se enumeran a continuación:
Broncoaspirado de secreciones para estudio de
micobacterias y citología (en las neoplasias) .
Cepillado exfoliativo de lesiones bronquiales para
citología.
Biopsia de lesion es bronquiales con pinzas bajo
visión directa.
Biopsias transbronquiales con las que se obtiene
material que incluye parénquima pulmonar para
su examen histológico.
Figura Corte sagita l del tórax al realizar una
Aspiración de secreciones del tracto respiratorio
toracocentesis en un pac iente con derrame pleu ral. La
inferior no contaminadas, mediante catéteres te-
lescopados de doble luz con oclusión distal. aguja de p unción se introd uce perpendicularme nte a
la pa red torácica y p róxima al borde supe rior de la
Lavado broncoalveolar en uno o varios segmen-
costi ll a inferior en el espac io intercostal.
tos. Permite analizar los porcentajes de las dis-
tintas poblaciones celulares y realizar estudios
microbiológicos y citológicos. y citohistológicos para conocer la causa del derrame
(Tabla 34-2).
El pleuroscopio es un instrumento óptico que per-
TORACOCENTESIS Y BIOPSIA PLEURAL mite visualizar la cavidad pleural y tomar biopsias
En condiciones normales la cavidad pleural contiene directas de las zonas que macroscópicamente parecen
de 2 a 4 ml de líquido en cada hemitórax. Existen patológicas. La pleuroscopia está indicada cuando la
muchas enfermedades, tanto sistémicas como pleuro- causa de un derrame pleural no ha podido establecer-
pulmonares, que pueden hacer que la cavidad pleural se tras reali zar una toracocentesis diagnóstica y una o
acumule líquido por encima de estas cantidades fi- varias biopsias pleurales ciegas.
siológicas. Como norma, cuando aparece un derrame
pleural es obligado el análisis del líquido para llegar
a un diagnóstico etiológico preciso, salvo si se sospe- OTRAS TÉCNICAS DE PUNCIÓN Y BIOPSIA
cha una causa extrapulmonar tratable, por ejemplo,
un derrame pleural bilateral atribuible a insuficiencia PUNCIÓN TRANSTRAQUEAL
cardiaca, situación en la que puede valorarse la res-
La punción transtraqueal consiste en introducir un
puesta del derrame al tratamiento diurético.
catéter en el tracto respiratorio inferior a través de la
Se denomina toracocentesis a la punción de un de-
membrana cricotiroidea para recoger secreciones, evi-
rrame pleural a través de la pared torácica. Una vez
tando la contaminación por gérmenes saprofitos de
analizado , si se está ante un exudado de etiología
las vías respiratorias superiores. Su indicación básica
desconocida se debe realizar una biopsia pleural,
reside en el diagnóstico etiológico de las neumonías.
obteniendo muestras de la pleura parietal, lo que se
Es muy incómoda para el paciente y puede lesionar
hace mediante diferentes tipos de aguja (Abrams ,
vasos tiroideos próximos, por lo que su realización en
Cope, Ramel). La toma de muestras se realiza a tra-
la práctica clínica es excepcional.
vés de un espacio intercostal, acercando la aguja al
borde superior de la costilla inferior y colocándola
perpendicular a la pared torácica para evitar lesiones PUNCIÓN TRANSTORÁCICA
del paquete vasculonervioso intercostal (Fig. 34-2).
En pacientes con derrame masivo se realizan toraco- Consiste en introducir una aguja fina a través de la
centesis terapéuticas o drenajes cerrados (con un tubo pared torácica y con control realizar una aspiración
de tórax) para aliviar la disnea y mejorar la insuficien- de lesiones pulmonares como nódulos o infiltrados.
cia respiratoria. El material obtenido se envía para citología y estudios
En el líquido pleural y en las muestras de biopsia se microbiológicos. Su rentabilidad diagnóstica es alta
deben realizar análisis bioquímicos, microbiológicos en las neoplasias (Fig. 34-3). Está indicada cuando la
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla Valoración de las muestras


obtenidas por toracocentesis y biopsia
pleural
LÍQUIDO PLEURAL

Determinaciones bioquímicas
pH y glucosa
Proteínas totales y LDH
Colesterol , triglicéridos y quilomicrones
Amilasa
Marcadores tumorales
Adenosina desaminasa (ADA)
Látex, anticuerpos antinucleares, niveles Figura Punción transtorácica de una masa pu l-
de complemento
mo nar co n contro l de TC.
Análisis microbiológico
Tinción de Gram y cultivo para gérmenes hemorragia, el neumotórax y la lesión del nervio re-
aerobios y anaerobios
currente laríngeo.
Tinción de Ziehl-Neelsen y cultivo para
mico bacterias

Análisis citológico
BIOPSIA PULMONAR ABIERTA
Recuento de hematíes La biopsia de tejido pulmonar por toracotomía bajo
Recuento de leucocitos y fórmula anestesia general constituye el «último recurso » para
Detección de células neoplásicas el diagnóstico de enfermedades pulmonares cuya
etiología no ha podido ser determinada por otro mé-
BIOPSIA PLEURAL
todo . Pero puede ser una técnica especialmente ren-
Estudios microbiológicos: tinción y cultivo table en pacientes inmunodeprimidos con patología
para micobacterias pulmonar difusa y un estado clínico crítico en los
Anatomía patológica
que un diagnóstico y un tratamiento precisos no ad-
miten demora. Igual ocurre en enfermedades intersti-
Se incluyen en esta tabla únicamente las ciales, en las que tener muestras pequeñas, como las
determinaciones habituales en la práctica clínica. obtenidas por biopsia transbronquial , no aportan un
diagnóstico de certeza.

EXPLORACIÓN RADIOLÓGICA DEL TÓRAX


etiología de una lesión no se ha podido determinar
con la broncoscopia o cuando la lesión es periférica Para interpretar correctamente cualquier exploración
y por tanto no accesible a esta exploración. En las en- radiológica se deben conocer con detalle las estructu-
fermedades infecciosas constituye una alternativa al ras anatómicas del tórax y sus relaciones.
catéter telescopado. Las complicaciones más frecuen- Segmentación pulmonar. El pulmón derecho tiene
tes de las punción transtorácica son el neumotórax y tres lóbulos separados por dos cisuras: la menor, cuyo
la hemorragia pulmonar. plano es perpendicular al haz de rayos X en las pro-
yecciones frontal y lateral, y la mayor, que lo es en la
lateral. En el pulmón izquierdo no existe cisura me-
MEDIASTINOSCOPIA nor. Los segmentos pulmonares en un sujeto normal
Esta técnica quirúrgica tiene como objetivo la biopsia (Fig. 34-4) son:
de ganglios linfáticos o masas situados en el mediasti- Pulmón derecho:
no bajo visión directa; su indicación básica es el estu- Lóbulo superior: apical, anterior y posterior.
dio de extensión del carcinoma broncogénico. En ma- Lóbulo medio: lateral y medial.
nos expertas, puede evitar un porcentaje significativo Lóbulo inferior: apical, anterior, posterior, lateral
de toracotomías en pacientes con tumores de pulmón y medial.
cuya irresecabilidad no ha podido ser demostrada por
otros medios. El mediastinoscopio se introduce me- Pulmón izquierdo:
diante una incisión por encima del yugulum esternal Lóbulo superior: anterior, apicoposterior, lingular
o bien a nivel del segundo o tercer espacio intercostal superior e inferior.
288
izquierdo. Las complicaciones más frecuentes son la Lóbulo inferior: apical, anterior, posterior y lateral.
CAPÍTULO 34 Exploraciones complementarias en las enfermedades del aparato respiratorio

LÓBULOS Y SEGMENTOS PULMONARES


VISIÓN IATERAL

j-
PUlMÓN DERECHO PUlMÓN IZQUIERDO
segmento
opicol segmento anterior o-
segmento segmento apical posterior ~
anterior segmento de ~
segmento
la língulo superior ¡¡¡
posterior segmento de lo Q.
língula inferior

segmento
superior

segmento
superior

segmento
basal lateral segmento
basol posterior

segmento
segmento basol lateral
basal anterior

a segmento
lateral
segmento
medial

lóbulo medio
o
VISIÓN MEDIAL
PUlMÓN DERECHO PUlMÓN IZQUIERDO

segmento apicol posterior

segmento
apical
segmento anterior

·º¡;::;;
a.
segmento 0-
posterior CT
o e
:i
..o
o
:Q e
segmento ]
de la lingula ¡¡-
superior
segmento
anterior

segmento

l[
de lo lingulo
inferior
segmento
medial

:Q

8 0
segmento segmento segmento segmento segmento segmento segmento segmento segmentos
basol bosol basal casal superior superior cosal casal oosales
medial anterior lateral posterior posterior lateral anterior
y medial
lóbulo inferior lóbulo inferior

Figura Anatom ía pulmo nar para la eva luación rad io lóg ica. Visión lateral (A y B) y medial (C y D ) de los
p ulmones derecho e izqu ierdo, que muestran la p os ic ión anató mi ca de los segmentos pulmonares.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Existen numerosas variantes de la normalidad; así, Lectura sistemática


puede existir: a) una cisura de la vena ácigos en el vér- Al revisar una radiografía de tórax, hay que detenerse
tice pulmonar derecho (que delimita el denominado de forma sistemática en cada uno de los siguientes
lóbulo de la ácigos); b) una cisura accesoria inferior puntos:
cerca del seno cardiofrénico, y c) otra accesoria supe-
rior que continúa la menor derecha hacia atrás, sepa- Tipo de proyección.
rando el segmento apical del resto del lóbulo inferior. Técnica correcta o incorrecta: una placa poste-
roanterior está «centrada» cuando las extremi-
dades proximales de las clavículas están a la
RADIOGRAFÍA misma distancia de la tráquea o de las apófisis
Es la representación en una placa o película fotográ- espinosas; una placa puede estar hecha con poco
fica (en un solo plano) de todo el tórax del paciente. kilovoltaje («blanda») o con demasiado («pene-
Constituye una exploración muy sensible en enferme- trada »); una proyección «asinclítica » es aquella
dades respiratorias y se realiza de rutina en cualquier en la que una clavícula está más elevada que la
enfermo adulto que ingresa en un hospital. otra. Es deseable siempre la máxima inspiración
posible.
Comparar el tamaño de ambos hemitórax.
Las proyecciones que se emplean son:
Huesos y partes blandas.
Posteroanterior: el haz de rayos entra por detrás del Mediastino: tráquea y grandes vasos.
paciente y la placa se sitúa por delante. Se realiza Silueta cardiaca: nitidez de contornos y creci-
en bipedestación, separando los brazos del tórax. miento o no de cavidades.
Lateral: derecha o izquierda, según el lado del en- Tamaño , densidad y situación relativa de los
fermo más próximo a la placa. Esta proyección y hilios.
la posteroanterior son las que deben considerarse
Hemidiafragmas: nitidez y situación relativa.
«de rutina ».
Pleura: en condiciones normales , excepto las ci-
Anteroposterior: en pacientes que no pueden
suras, la pleura no debe verse.
levantarse de la cama por su estado clínico. La
placa se coloca en la espalda y los rayos entran Campos pulmonares: patrones alveolar e intersti-
por delante. cial, nódulos o masas y vascularización.
Oblicua anterior derecha e izquierda: pueden Para la localización de lesiones torácicas es muy útil
delimitar mejor algunas estructuras torácicas y el denominado signo de la silueta (de Felson}: cuando
sus alteraciones (p. ej ., ganglios linfáticos hilio- dos estructuras anatómicas en contacto tienen la mis-
mediastínicos aumentados de tamaño). ma densidad radiológica, se borran los contornos que
Lordótica: separa las estructuras óseas que se las definen. Así, si vemos un borramiento del borde
superponen a los vértices pulmonares para ver derecho de la silueta cardiaca, la lesión pulmonar se
mejor estos. localiza en el lóbulo medio y, de igual forma , una le-
Decúbito lateral con rayo horizontal: sirve para sión localizada en el lóbulo inferior izquierdo puede
confirmar la presencia de derrame pleural libre. borrar el hemidiafragma, pero no el borde izquierdo
Espiración forzada: con esta maniobra se ve mejor del corazón (Fig. 34-5).
la pleura visceral desplazada del borde lateral del
tórax por un neumotórax.
EXPLORACIONES CON CONTRASTE
Densidades radiológicas
Tomografía computarizada (TC): La TC de tórax
Existen cinco densidades básicas: aporta una mayor gama de densidades radioló-
Aire: es la densidad del tejido broncopulmonar. gicas que la radiografía convencional y una gran
Grasa: producida por partes blandas (cuello, axi- definición anatómica. Delimita mejor los grupos
las, músculos pectorales). de ganglios linfáticos, las lesiones mediastínicas
Agua: es la densidad del corazón, los grandes y el grado de extensión de los tumores.
vasos y el diafragma. Resonancia magnética: Tiene escasa utilidad en
Calcio: es la densidad del hueso. el estudio del tórax, debido a la ausencia de señal
Metal: suturas posquirúrgicas y cuerpos extraños. (o debilidad de la misma) del espacio aéreo. No
obstante, puede ser útil en procesos específicos
Hay que recordar que en radiología se habla de «cla- en los que existe fibrosis , hemorragia parenqui-
ridad» cuando la densidad de una zona es parecida matosa o líquido con elevado contenido proteico,
a la del aire (de color oscuro). Así, un enfermo con así como para diferenciar una atelectasia obstruc-
atrapamiento aéreo por una enfermedad obstructiva tiva frente a la compresiva. Además, muestra una
de las vías respiratorias inferiores tiene una «hiper- gran sensibilidad en la distinción entre los vasos
~
claridad» pulmonar en la placa de tórax. y nódulos pulmonares.
CAPITULO 34 Exploraciones complementarias en las enfermedades del aparato respiratorio

Figura Borram iento del hemidiafragma izq uierdo por neumonía del lóbulo inferior (signo si lueta de Felson).

Angiografía pulmonar: Se realiza inyectando TOMOGRAFÍA POR EMISIÓN


contraste en las arterias pulmonares tras un cate- DE POSITRONES PET
terismo derecho y se emplea para el diagnóstico
del tromboembolismo pulmonar. En esta indi- Esta técnica se basa en la captación de fluordesoxiglu-
cación, la angiografía ha sido desplazada por la cosa (FDG) para medir el metabolismo de la glucosa de
angi-TAC. distintos tejidos. Su indicación básica es la distinción
entre lesiones benignas y malignas de modo que en los
tumores malignos la captación de FDG medida por el
EXPLORACIONES ISOTÓPICAS índice SUV (Standardizd Uptake Value) es superior
(> 2,5) a la de los procesos inflamatorios o infecciosos.
GAMMAGRAFÍA PULMONAR
Es un registro de la distribución de un isótopo radiac- ESTUDIOS DE SUEÑO
tivo que se inhala (gammagrafía de ventilación, con
Los trastornos respiratorios durante el sueño, en par-
xenon-133) o se inyecta por vía venosa (gammagrafía
ticular el síndrome de apnea/hipopnea del sueño,
de perfusión, con albúmina marcada con tecnecio-99
constituyen una patología muy frecuente . Para su
o yodo-131). Se emplea para el diagnóstico del trom-
diagnóstico se requiere la demostración del cese de la
boembolismo pulmonar.
respiración durante el sueño, acompañado de un des-
censo en la saturación de oxígeno y un breve despertar
GAMMAGRAFÍA CON GALIO-67 («arousal» ). Los estudios diagnósticos se clasifican en
distintos niveles atendiendo a su complejidad, desde
Este isótopo, tras ser inyectado por vía venosa, es la pulsioximetiia nocturna, que registra la saturación
captado en el pulmón por los leucocitos polimor- de oxígeno y la frecuencia cardiaca, hasta la polisom-
fonucleares, los macrófagos activados y las células nografía, que detecta, además, las apneas e hipopneas,
tumorales. En las enfermedades cuya patogenia se las fases del sueño, los ronquidos y la posición del
relaciona con una acumulación de estas células en paciente de forma simultánea. Algunos pacientes
el parénquima pulmonar y en los ganglios linfáticos, precisan de un segundo estudio para ajuste de pre-
aumenta la captación. En general es una prueba bas- sión cuando ya han iniciado tratamiento con másca-
tante sensible, pero poco específica. ras de CPAP (continuous positive airway pressure).
291
·135
1nsuficiencia res pi rato ria
Concepción Martín Serrano, Luis Hernández Blasco, Joan Gil Carbonell

CONCEPTO
La principal función del pulmón es proporcionar oxí-
geno (0 2) a la sangre arterial y eliminar el anhídrido
carbónico (C0 2) de la sangre venosa para permitir la
vida celular. Se produce insuficiencia respiratoria
cuando el aparato respiratorio es incapaz de man-
tener las presiones parciales de 0 2 y C0 2 de la
sangre arterial en niveles adecuados, y se define
cuando a nivel del mar, respirando aire ambien-
te y estando en reposo , la presión parcial de 0 2 en
la sangre arterial (Pa0 2 ) es inferior a 60 mm Hg.
Este límite se ha elegido porque a partir de él cae
significativamente la curva de disociación de la he-
moglobina, y pequeñas disminuciones de la Pa0 2
implican importantes disminuciones de la satura-
ción de la hemoglobina y, por tanto, de su conteni-
do de 0 2,

FISIOPATOLOGÍA
La respiración es un proceso vital por el cual se
suministra a las células el oxígeno preciso para
el mecanismo energético oxidativo y se elimina
el C0 2 producido. El transporte de 0 2 desde el
aire ambiente hasta la mitocondria de una célu-
la individual sigue una serie de pasos. Los pul-
mones, el corazón y la circulación recogen el
oxígeno desde la atmósfera y generan un flujo
de sangre oxigenada hacia los tejidos para
mantener el metabolismo aeróbico.
Para que este proceso se lleve a cabo son
necesarios una respiración externa, un
medio de transporte para el 0 2 y C0 2, un
flujo sanguíneo que haga llegar el 0 2 hasta
la célula y una respiración interna a nivel
de las células. Se considerarán los dos pri-
meros aspectos.

RESPIRACIÓN EXTERNA
Incluye las siguientes fases:
Ventilación
El aire penetra en el tórax (inspiración)
292
cuando la contracción de los músculos
CAPITULO 35 Insuficiencia respiratoria

inspiratorios aumenta el volumen de la caja torácica La ventilación alveolar (VA) resulta de la ventila-
y crea un gradiente de presión que produce flujo de ción total menos la del espacio muerto fisiológico.
aire hacia los alvéolos. Depende de la frecuencia respiratoria y del volumen
La salida de aire (espiración) se realiza de forma corriente (TV o Tidal Volume). Un volumen corriente
pasiva gracias a la energía almacenada en todos los normal de 600 ml produce una ventilación alveolar de
elementos elásticos que constituyen la bomba respira- 450 ml. Con volúmenes corrientes muy bajos sólo se
toria. Todos ellos fueron separados de su posición de ventila el espacio muerto.
reposo durante la inspiración y tienden a volver a ella. Para que la ventilación alveolar se adapte a las
Esa retracción provoca una disminución del volumen necesidades en cada momento existe un complejo
de la caja torácica, con el consiguiente aumento de la sistema de regulación. Se inicia con un impulso res-
presión por encima de la atmosférica, lo que genera el piratorio central, originado en neuronas situadas en
flujo espiratorio. el bulbo (centro respiratorio). Sus axones constituyen
El volumen de aire movilizado en este proceso se vías descendentes que llegan a las motoneuronas
denomina volumen corriente («tidal»J. El proceso del asta anterior de la médula, desde donde parten
se repite entre 12 y 20 veces por minuto (frecuencia los nervios periféricos. Sobre el centro respiratorio
respiratoria). Durante una inspiración tranquila, la influyen estímulos procedentes de centros protube-
mayor parte del volumen corriente es generado por ranciales (responsables del ritmo de la ventilación) y
el diafragma ayudado por los músculos intercostales de la corteza cerebral. La intensidad y frecuencia de
internos y escalenos, por una parte, y por el constric- respuesta del impulso central se adaptan a las deman-
tor faríngeo y el geniogloso por otra. Estos tres grupos das gracias a un mecanismo de carácter fundamental-
musculares se activan de forma sincronizada: en mente humoral: cuando unas células especializadas
primer lugar se contrae el diafragma, cuyo descenso (quimiorreceptores del seno carotídeo y cayado aórti-
aumenta la presión negativa intrapleural; a continua- co) detectan una elevación del CO 2, una disminución
ción, los músculos de la pared torácica elevan ligera- del 0 2 • o un descenso del pH, aumenta la frecuencia e
mente las costillas y expanden el tórax, al mismo tiem- intensidad de los impulsos y, por tanto, la fuerza de la
po que estabilizan la pared, para equilibrar el efecto contracción muscular y el volumen de aire renovado
de la presión negativa generada por el diafragma; en (Fig. 35-1). Existe una relación hiperbólica entre la VA
tercer lugar, la activación de los músculos superiores y los valores de PaCO 2 definida por la ecuación:
mantienen abiertas las vías respiratorias superiores.
Cuando se necesita mayor esfuerzo inspiratorio se VA= k.Vco/PaCO2
reclutan los llamados «músculos accesorios» de la La ventilación alveolar (VA) es proporcional a la
respiración: esternocleidomastoideo, subclavio, pec- producción de CO 2 (Vc02) e inversanrnnte proporcio-
toral mayor y menor, serrato anterior, trapecio y dor- nal a la PaCO 2 (siendo k = una constante). Cuando la
sal ancho. Todos estos músculos poseen un punto de producción de CO 2 no varía, una disminución en la
inserción extratorácica y otro en la parrilla costal, así VA se acompaña de un incremento de la PaCOz. El au-
su contracción estira la parrilla y aumenta el volumen mento de la Vco2 asociado a fiebre, convulsiones otros
de la caja. factores se suele compensar con un aumento inme-
Cuando el retroceso elástico no es suficiente para diato de la VA. Sólo se desarrolla hipercapnia cuando
el vaciamiento pulmonar durante la espiración, se el aumento de la VA es desproporcionadamente bajo.
precisan mecanismos de compensación. La ayuda Para que la ventilación del gas alveolar se reali-
más importante la brindan los músculos de la prensa ce con normalidad se requiere un funcionamiento
abdominal, ya que el aumento de la presión abdo- correcto de la musculatura respiratoria y de la caja
minal tiende a elevar el diafragma y a compensar el torácica y una adecuada permeabilidad de las vías
descenso de su cúpula debido a la hiperinsuflación. respiratorias, que permitan la circulación y distribu-
Para que exista una expansión del tórax hay que ción correcta del aire desde el ambiente hasta la zona
vencer unas resistencias: a) resistencia elástica que de intercambio. El árbol bronquial está constituido
se opone a la distensión de los tejidos elásticos del por una red de tubos cuyo diámetro disminuye desde
pulmón), y b) resistencia de la vía respiratoria, que la tráquea hasta los alvéolos; su sección a este nivel,
depende del calibre de la misma, del volumen pulmo- al aumentar el número de vías, es 10 000 veces mayor
nar y de la densidad del aire. que a nivel traqueal. Dado que la resistencia al paso
La ventilación permite que el aire contenido en del aire es inversamente proporcional al radio de la
los alvéolos se renueve y mantenga una composi- -sección elevado a una potencia de cuatro, el 80 % de
ción constante. Parte del aire movilizado renueva el todas las resistencias se origina en vías respiratorias
existente en un espacio que no interviene en el in- de gran calibre.
tercambio gaseoso (espacio muerto fisiológico). Está
constituido por el espacio muerto anatómico de las
grandes vías respiratorias desprovistas de alvéolos y Difusión
por el espacio muerto de los alvéolos mal perfundidos La difusión alveolocapilar de un gas consiste en el ~
(en condiciones normales, unos 150 ml). paso de sus moléculas desde el compartimento al-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Cerebro
Qui miorreceptores
carotídeos IX

Quimiorreceptores X
aórticos

receptores
de irritación
bronquial y
vías aéreas de
receptores capilar alveolar conducción
de volumen (sistema pulmonar)

nervio receptores
médula espinal
(aferente de distensión de
...,~al--- bronquiolo
terminal y
Figura Ajustes de la ventilación. En alvéolos
el control respiratorio intervienen tanto es-
tímulos centrales como periféricos. El prin-
cipal centro regulador está situado en la
médula. El control de la respiración puede
alterarse en distintos puntos de esta cadena. músculos abdominales

veolar al sanguíneo. Se hace por difusión simple, Circulación


siguiendo la ley de Fick. La capacidad de difusión El lecho vascular pulmonar es un circuito de baja
de un gas depende: a) del espesor y superficie de la presión y alta capacitancia que contiene aproxima-
membrana alveolocapilar (0,3 µm y 100 m2, aproxi- damente unos seis millones de capilares. La arteria
madamente); b) del tiempo de contí;lcto (0,75 segun- pulmonar debe aportar un volumen determinado de
dos en condiciones normales); c) de la solubilidad del sangre que debe distribuirse de forma uniforme en
gas en las estructuras que integran la membrana, y d) los capilares perialveolares, y además tiene que exis-
de la diferencia de presión del gas a un lado y otro de tir una adecuada relación entre la ventilación y esta
la membrana. perfusión.
La sangre capilar está completamente oxigenada
antes de que el hematíe atraviese un tercio de la dis-
tancia de la interfase alveolocapilar. Una oxigenación Relación ventilación/perfusión
inadecuada por acortamiento del tiempo de tránsito La unidad funcional respiratoria (acino) consta de
sólo se produce por un gasto cardiaco muy elevado un componente alveolar, que aporta el gas , y un com-
o por una intensa desaturación de la sangre venosa ponente vascular, que aporta la sangre y entre ambos
mixta en la arteria pulmonar. La hipoxemia arterial en existe una membrana de escaso grosor y amplia su-
la fibrosis pulmonar se relaciona más con trastornos perficie, que es la membrana alveolocapilar. El nú-
en la ventilación/perfusión (V/Q) que con un engro- mero aproximado de acinos en el pulmón es de 300
samiento de la pared alveolar. millones.
CAPÍTULO 35 Insuficiencia respiratoria

La ventilación por unidad de volumen alveolar sin ningún contacto con el lecho vascular pulmonar),
va disminuyendo hacia las zonas altas del pulmón y el «shunt efectivo» debido a alteraciones en la rela-
(vértices). Se supone que esto se debe a la acción de ción V/Q. La mezcla venosa es normalmente inferior
la gravedad sobre un pulmón, que está flotando en al 5 % del gasto cardiaco.
la cavidad pleural. La presión intrapleural es «menos
negativa» en las zonas bajas, por lo que el volumen
de los alvéolos en estas zonas es menor que en las
zonas altas. Por ello, en la inspiración los alvéolos TRANSPORTE
de las zonas bajas ganan más volumen que los de las
zonas altas.
Transporte de oxígeno
El flujo sanguíneo por unidad de volumen alveo- El transporte de 0 2 depende del gasto cardiaco y de
lar también disminuye progresivamente en las zo- la cantidad de dicho gas en la sangre. En ella, más del
nas altas del pulmón (de forma más acentuada que 97 % de las moléculas de 0 2 están ligadas de forma
la ventilación). Esto es secundario a la interrelación reversible con la hemoglobina (cada gramo de hemog-
de la presión hidrostática entre vasos arteriales y lobina saturada al 100 % transporta 1,39 cm 3 de 0 2
venosos, y a la presión intralveolar dependiente por cada 100 cm 3 de sangre). La cantidad disuelta,
de la gravedad. En las zonas altas la presión intral- aunque es la que determina la presión parcial del gas
veolar supera a la arterial y a la venosa, con lo que en la sangre, es una fracción mínima del total (oxí-
el flujo se interrumpe. En la zona media la presión geno disuelto: 0,003 x 100 cm 3 por cada mm Hg de
arterial supera a la alveolar y se reanuda el flujo; Paü 2 ).
este aumenta más en las zonas bajas, por ser mayor La mayoría del 0 2 va unido al hierro de la hemog-
la diferencia de presión entre la sangre arterial y la lobina formando oxihemoglobina. La relación entre
venosa. la Paü 2 y la cantidad del mismo combinada con la
Un intercambio gaseoso eficiente requiere un hemoglobina viene indicada por la curva de disocia -
ajuste adecuado de la ventilación y la perfusión al- ción de la hemoglobina . Cuando la PaO 2 es inferior
veolar. Una inadecuada ventilación de los alvéolos a 60 mm Hg la cantidad contenida en la sangre se
bien perfundidos o la reducción de la perfusión en reduce considerablemente; sin embargo, cuando su
alvéolos bien ventilados altera la oxigenación de la presión parcial está por encima de dicha cifra, solo
sangre aportada por la arteria pulmonar (Fig. 35-2). se consiguen pequeños incrementos del contenido de
El efecto neto de las alteraciones en la ventilación y Ü 2, Como medida de esta afinidad se utiliza la deno-
la perfusión se calcula como mezcla venosa (Qs/QT), minada P50 o cifra de PaO2 necesaria para saturar la
e incluye el «shunt verdadero » (sangre venosa mixta hemoglobina en un 50 %. En condiciones normales su
valor es de 26-28 Torr. Si la curva se desplaza hacia la
derecha, es decir, si la P 50 aumenta, la afinidad de la
hemoglobina para el oxígeno disminuye. El fenóme-
no contrario se produce si la curva de disociación se
desplaza hacia la izquierda (la P50 disminuye) . La dis-
minución del pH sanguíneo, el aumento de la PaCO 2 ,
de la concentración intraeritrocitaria de 2,3-difosfo-
VENTILACIÓN glicerato (2,3 -DPG) o de la temperatura, provocan un
incremento de la P50 , con lo que disminuye la afinidad
de la hemoglobina por el oxígeno y se facilita su li-
beración a los tejidos . La alcalosis, la hipocapnia, la
hipotermia y la disminución del 2,3-DPG tienen un
efecto contrario.
v Si se conoce la presión parcial del oxígeno, se
puede calcular el contenido de oxígeno de la sangre
aplicando la siguiente relación:
DIFUSIÓN

CaO2 = (1,39 x Hb x Sat 0 2 %) + (0,00 3 x PaO2 )


rr- PERFUSIÓ
donde
Sangre venosa Sangre arteri al
(desoxigenada) {oxigenada)
CaO 2 = contenido de oxígeno en la sangre arterial
Figura Representac ión esquemática de una (ml de Oi/100 ml de sangre).
uni dad func ic~>na l respiratoria (ac in o). V representa la Hb = concentración de hemoglobina (gramos/1 00
venti lación, Q la perfus ión pu lmonar. Entre ambas, la ml de sangre).
membrana alveolocapilar, a través de la cual se produ- Sat 0 2 % = fracción de Hb ligada con el oxígeno.
ce la d ifusión de los gases. PaO2 = presión parcial de 0 2 en la sangre arterial.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Transporte de anhídrido carbónico


El transporte de CO 2 en la sangre se realiza de tres
maneras: a) Parte va unido a la hemoglobina (un
20 %) y la curva de disociación es lineal; b) disuelto,
aproximadamente el 10 %, y c) como ión bicarbonato,
el 70%
RV
Una proporción significativa de moléculas de CO 2
está ligada reversiblemente con la hemoglobina. Sin
embargo, la mayor parte de las moléculas están disuel-
ESPIRACIÓN
tas en solución o están involucradas en el equilibrio FLUJO
ácido carbónico-bicarbonato: 1/s

Este equilibrio explica las relaciones entre la PCO 2 TLC ve INSPIRACIÓN


(reflejado en el número de moléculas de CO 2 disuel-
tas) y el pH sanguíneo (que es la expresión logarítmica
de la concentración de H +). VRI =volumen de reserva inspiratorio
VRE = volumen de reserva espiratorio
TV = volumen corriente
RV = volumen residual
EXPLORACIÓN DE LA FUNCIÓN ve= capacidad vita l
FRC = capacidad funcional residual
RESPIRATORIA TLC = capacidad pulmonar total

Las técnicas que se han desarrollado para el estudio Figura Espirometría y curvas de flujo-volumen.
de la función respiratoria son numerosas y comple- En la zona super ior se muestran los vo lúmenes estáti-
jas, por lo que se expondrán únicamente las de mayor cos pulmonares, y en la inferior las relaciones entre el
trascendencia clínica. flujo y el volumen.

ESTUDIO DE LA VENTILACIÓN
Consiste en determinar los volúmenes, capacidades,
resistencias e índices dinámicos obtenidos durante Volumen coITiente: es el movilizado durante una
una espiración forzada. Todos los valores obtenidos respiración normal.
deben interpretarse en relación con unos valores Volumen de reserva inspiratoria: es la cantidad
considerados «normales » o de referencia. Son los ob- de aire que puede ser introducida en el tórax
tenidos al realizar las mismas mediciones en sujetos con una inspiración forzada realizada tras una
sanos sin afectación cardiorrespiratoria, de la misma respiración normal.
edad, sexo, raza y masa corporal. Se considera que Volumen de reseiva espiratoria: es el aire movili-
un valor está alterado cuando existe una diferencia zado con una espiración forzada después de una
estadísticamente significativa con respecto al <<nor- normal.
mal ». Volumen residual: es el aire que permanece en el
Las mediciones habituales se realizan con un tórax después de una espiración forzada .
espirómetro y pueden ser de dos tipos: sistemas
cerrados (espirómetros de agua y secos) y sistemas
abiertos (neumotacógrafo). El espirómetro permite la
Capacidades pulmonares
medición de volúmenes pulmonares y capacidades, Resultan de la suma de distintos volúmenes. Son la:
excepto el volumen residual, la capacidad funcional
residual y la capacidad pulmonar total (Fig. 35-3) para Capacidad funcional residual: Representa el aire
cuya obtención se requieren otros métodos como la contenido en el tórax después de una respiración
pletismografía o técnicas de dilución de helio. Para la normal y es la suma del volumen de reserva espi-
medición de las resistencias es necesario emplear un ratoria y el volumen residual.
pletismógrafo. Capacidad vital: Es la cantidad de aire que es
expulsada mediante una espiración forzada
después de una inspiración forzada; resulta de la
Volúmenes pulmonares suma del volumen corriente más los de reserva
Son las cantidades de aire movilizado en determina- inspiratorio y espiratorio
das condiciones o existentes a nivel torácico en un Capacidad pulmonar total: es la suma de la capa-
momento determinado. Son el cidad vital más el volumen residual.
CAPITULO 35 Insuficiencia respiratoria

Índices dinámicos parámetros como la saturación, el bicarbonato y el


Se obtienen mediante espiraciones forzadas y expre- exceso de bases.
san volúmenes en unidad de tiempo. El más útil es el La sangre arterial se obtiene mediante punción, ha-
FEV1 o volumen espiratorio forzado en un segundo, bitualmente de la arteria radial a nivel de la muñeca,
que corresponde al volumen de aire espirado en el por encantarse esta alejada de otras estructuras vas-
primer segundo de una espiración forzada tras una culares y nerviosas e irrigar una zona con múltiples
inspiración máxima. colaterales. Se utiliza una aguja de bisel corto y una
Mediante las espirometrías se pueden diferenciar jeringa heparinizada. La recogida debe hacerse en
dos tipos de trastornos, los obstructivos y los restric- condiciones anaeróbicas.
tivos: La cifra normal de PaO2 en una persona joven, a
Alteración ventilatoria obstructiva. Se caracteriza nivel del mar, es de 95-100 mm Hg. El descenso de la
por una disminución del flujo espiratorio forzado y PaO 2 por debajo de 60 mm Hg se denomina hipoxe-
se manifiesta por una disminución del volumen es- mia.
piratorio forzado en el primer segundo (FEVl) , de la La presión parcial de 0 2 en el alvéolo (PAO 2) puede
capacidad vital forzada y por una forma anormal de calcularse teóricamente mediante la siguiente fór-
la curva espiratoria flujo/volumen. La capacidad vital mula:
forzada debería estar conservada, pero en realidad
cuando aumenta la obstrucción se reduce, por existir PAO 2 = (PB-47) x FlO 2 - PaCO 2 x 1,25
un atrapamiento aéreo. Además de la reducción en el
valor absoluto de FEVl, en la relación FEV1/FVC se PB = presión barométrica; 47 = presión parcial ejer-
aprecia una disminución desproporcionada del flujo. cida por el vapor de agua; FIO 2 = fracción inspirada de
Alteración ventilatoria restrictiva. Se caracteriza 0 2; 1,25 = inversa del cociente respiratorio.
por una disminución de la capacidad vital. En las Una vez determinado este valor y conociendo la
afecciones restrictivas suele haber también una caída PaO 2, se puede calcular el gradiente alveoloarterial
del FEVl , pero estos flujos disminuyen de una forma de 0 2 (PAO 2-PaO 2). que es el indicador más fiel de la
proporcional al descenso de la capacidad vital , por lo eficacia de los pulmones como intercambiadores de
que la relación FEV1/VC (índice de Tiffeneau) perma- gases.
nece normal. La PaCO2 es el indicador de la ventilación alveolar.
La PaCO 2 normal es de 40 mm Hg (35-45). Se dice que
Resistencias hay hipercapnia cuando la PaCO 2 es superior a 45 mm
Mediante estudios más complejos se pueden me- Hg (hipoventilación) e hipocapnia cuando es inferior
dir las resistencias ejercidas al movimiento de aire a 35 mm Hg (hiperventilación).
por parte de la vía respiratoria y de las fuerzas elás- El pH arterial es el logaritmo negativo de la con-
ticas. centración de hidrogeniones en la sangre arterial; se
utiliza como indicador del estado ácido-base. El valor
normal del pH arterial es de 7,40 (7,35-7,45). Existe
ESTUDIO DE LA DIFUSIÓN DE LOS GASES acidosis cuando el pH es inferior a 7,35 y alcalosis
cuando es superior a 7,45.
La permeabilidad de la membrana alveolocapilar
se explora mediante la valoración de la difusión del
uso de monóxido de carbono, gas que es 20 veces Oximetría (o pulsioximetría)
más difusible que el oxígeno. Es un método no cruento de medición indirecta de
la saturación de hemoglobina (SatO 2) para valorar la
hipoxemia. Se basa en el diferente espectro de ab-
ESTUDIO DE LA CIRCULACIÓN PULMONAR sorción de luz entre la oxihemoglobina (O 2Hb) y la
Necesita técnicas más complejas, como la angiogra- hemoglobina reducida en un flujo pulsátil. El sensor
fía pulmonar o la gammagrafía tras inyectar un me- del oxímetro tiene una fuente de luz y un fotodetec-
dio de contraste radiactivo (agregados de albúmina tor insertados en una especie de pinza que se coloca
marcadas con tecnecio-99). La valoración del estado en la falange distal de uno de los dedos de la mano
ventilación-perfusión no puede realizarse por estos del paciente. La longitud de onda de la fuente de luz
métodos y precisa estudios con gases inertes que más frecuentemente utilizada se sitúa entre los 660
nm (luz roja) y los 940 nm (luz infrarroja). Este tipo
muestren sus curvas de eliminación.
de luz tiene una capacidad de penetrar en los tejidos
mucho mayor que la de la luz azul, amarilla o verde.
ESTUDIO DE LOS GASES SANGUÍNEOS El oxímetro es capaz de diferenciar no solo el diferen-
te espectro de absorción entre la O 2Hb y la hemoglo-
Gasometría arterial bina reducida, sino (y debido a su carácter pulsátil)
Se lleva a cabo con aparatos denominados gasóme- la absorbancia del componente arterial sanguíneo de
tros. Miden el pH, la PaCO 2 y la PaO 2 y calculan otros los otros sistemas que atraviesa (sangre venosa, tejido
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

conjuntivo, etc.). De esta forma es posible conocer los extremos que son: a) Efecto espacio muerto (V/Q
niveles de 0 2Hb en la sangre arterial. En condiciones elevada): hay áreas ventiladas y no perfundidas.
normales, una Sat0 2 del 90 % equivale a una Pa0 2 de El aire alveolar es malgastado ya que no se inter-
60mmHg. cambia con la sangre, o b) el efecto «shunt» o
Pueden existir problemas de lectura por presen- co1tocircuito (V/Q baja): áreas no ventiladas y sí
cia de carboxihemoglobina (saturación falsamente perfundidas
elevada), hiperbilirrubinemia (saturación falsamente Global o hipoxémica e hipercápnica: Se produ-
baja) , piel melanótica (señal reducida, saturaciones ce por una ventilación alveolar insuficiente. Al
variables) o mala perfusión periférica (señal baja con ventilar conseguimos que el aire ambiente entre
resultados no fiables). en los alvéolos para efectuar el intercambio
gaseoso. La ventilación alveolar (VA) depende
de la ventilación minuto (VE) y de la ventila-
CLASIFICACIÓN DE LA INSUFICIENCIA ción del espacio muerto (VD) según la relación
RESPIRATORIA VA = VE-VD. A su vez, el VE es el producto
de la frecuencia respiratoria y el volumen co-
Según su forma de presentación, puede ser: rriente. La mayoría de las situaciones en las que
disminuye la VA son debidas a la disminución
Aguda: Se presenta en personas sin enfermedad del VE. La existencia de una hipoventilación
respiratoria previa, como consecuencia de un alveolar pura conlleva una disminución de la
proceso de rápida instauración. Se considera Pa0 2 y una elevación de la PaC0 2 con gradiente
que existe cuando la Pa0 2 experimenta una caí- alveoloarterial normal.
da brusca por debajo de 55 mm Hg. Si además
va acompañada de una elevación de la PaC0 2 se
habla de «insuficiencia respiratoria global ». ETIOLOGÍA
Crónica: Aparece de forma insidiosa en sujetos
Las causas de insuficiencia respiratoria se recogen en
portadores de una enfermedad respiratoria cró-
la Tabla 35-1.
nica, habitualmente en pacientes con limitación
crónica del flujo aéreo (p. ej., EPOC). Se diag-
nostica cuando la Pa0 2 es inferior a 60 mm Hg, CLÍNICA
con o sin aumento de PaC0 2 • Cuando el carbóni-
co está elevado habitualmente, el pH es normal Los síntomas y signos de la insuficiencia respiratoria
debido a que la cronicidad permite la puesta en son secundarios a la hipoxemia, a la hipercapnia y a
marcha de los mecanismos de compensación trastornos de equilibrio ácido-base. Además pueden
renal. existir signos o síntomas que derivan de las alteracio-
Crónica agudizada: Es la exacerbación de una nes de la enfermedad causal. Los analizamos:
insuficiencia respiratoria crónica por un episo-
dio de agudización de la enfermedad subyacente
o por una agresión pulmonar añadida. En la HIPOXEMIA
gasometría se manifiesta por un empeoramiento Ocasiona un déficit de entrega de oxígeno a los teji-
de los niveles basales y generalmente con un dos (hipoxia tisular). No todos los tejidos muestran
trastorno del equilibrio ácido-base tipo acidosis igual vulnerabilidad a la hipoxia. El cese de la irriga-
respiratoria. ción sanguínea a la corteza cerebral ocasiona pérdida
de su función en 4-6 segundos, pérdida de concien-
Según el grado de alteración: Se expresa como: cia en 10-20 segundos y cambios irreversibles en 3-5
minutos. También el miocardio es muy sensible a la
Parcial o hipoxémica: Se produce por un tras-
hipoxia hística. Si la Pa0 2 desciende por debajo de un
torno de la relación ventilación-perfusión por
nivel crítico comienza la glucólisis anaerobia y hay
existir un predominio de acinos mal ventilados
formación y liberación de cantidades apreciables de
y bien perfundidos. Constituye el mecanismo
ácido láctico.
de hipoxemia en la mayor parte de las enferme-
Los principales mecanismos de adaptación a la
dades del parénquima pulmonar. Se acompaña
hipoxemia son:
de un gradiente A-a de 0 2 elevado. La existen-
cia de desigualdades en la V/Q significa que la Hiperventilación inducida por estímulo de los
ventilación y el flujo sanguíneo no concuerdan quimiorreceptores periféricos para aumentar la
en diferentes regiones del pulmón y ello origina cantidad de oxígeno en los tejidos.
un intercambio gaseoso ineficaz. La hiperven- Aumento del gasto cardiaco debido a hiperreac-
tilación de las unidades no afectadas «lava» el tividad simpática. Esta aumenta la frecuencia
anhídrido carbónico: hay hipoxemia y no hiper- cardiaca y además se produce vasodilatación
298
capnia. El grado de afectación varía entre sus dos secundaria a la relajación del músculo liso de las
CAPÍTULO 35 Insuficiencia respiratoria

Tabla Etiología de la insuficiencia respiratoria


Tipo insuficiencia
Estado del pulmón Mecanismo Causas
respiratoria
Disminución de la FIO2. Altura
Normal Cortocircuito Shunt intracardiaco
extrapulmonar Fístulas arteriovenosas
Edema pulmonar
V/Q =O.Enfermedades Atelectasia
Parcial o hipoxémica restrictivas por ocupación
alveolar Neumon ía
Hemorragia alveolar
Patológico
Enfermedades restrictivas por
patolog ía intersticial
V/Q disminuida
Enfermedad pulmonar
obstructiva inicial o leve
Síndrome de Ondina
Alteraciones en el control
(hipoventilación central
de la respiración
congénita)
Alteración en la médula
Sección medular
espinal
Normal (gradiente Alteraciones en la
Poliomielitis
alvéolo-arterial normal) motoneurona anterior
Global o hipoxémica
Alteración en nervios Síndrome de Guillain-Barré
hipercápnica

Alteración muscular Miopatías

Alteración en la caja
Fibrotórax
torácica
Patológico (gradiente Por aumento de la Enfermedad pulmonar
alvéolo-arterial resistencia en la vía obstructiva crónica avanzada
alterado) respiratoria Estado asmático

paredes arteriales debida a la hipoxia. El objetivo mimética caracterizada por vasoconstricción


es llevar más sangre a los tejidos. periférica, au mento d e la frecuencia cardiaca e
Policitemia, por un aumento de entropoyetina a hipertensión arterial ligera. En pacientes ancia-
nivel renal como consecuencia de la hipoxia. nos o que han consumido fármacos o tóxicos
Desviación de la curva de disociación de hemog- depresores del sistema autónomo , puede faltar
lobina a la derecha, con lo que se facilita la libe- esta respuesta y produ cirse h ipotensión y bradi-
ración del oxígeno a nivel tisular. Esta desviación cardia.
es secundaria al aumento de 2,3-difosfoglicerato Man ifestacion es tardías : De ellas la más carac-
en el eritrocito como consecuencia de la hipoxia. terística es la presencia de cianosis, que es u n
signo específico de hipoxemia. Consiste en una
Su expresión clínica es la siguiente: coloración azulada de la piel y las mucosas. Para
que sea evidente es necesario que haya más de
Manifestaciones precoces: Son poco específicas. 5 gran10s de h emoglobina reducida por 100 rol,
Se produ cen por alteración del sistema nervioso con u na saturación de hemoglobina por d eb ajo
central: inquietu d, ansiedad o confusión mental. del 80 %. Se detecta mal cuando existe un fluj o
Manifestaciones intermedias: Para compensar la capilar aumentado y cuando la piel es oscura o
299
hipoxemia se produce una respuesta simpatico- hay anemia. La cianosis se observa al inspeccio-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

CENT ROS CEREBRALES SUPERIORES


c . - - - - - - , : - ~ - - - - - - - - - =p= - i
o
N R
T o
R CENTROS RESPIRATORIOS DEL TRONCO p
o 1
L o
A c
D E
o Eferentes p
R motores T
E espinales o
s R
E
MÚSCULOS
s
PULMONES Y VÍAS
AÉREAS SUPERIORES DE LA RESPIRACIÓ ,

Recepto res pulmo nares


y de la vía aérea

Receptores arteri ales


peri féri cos

Receptores centrales LCR

Figura Vías que regulan el control de la resp iración. LCR: líquido cefa lorraquídeo.

HIPOVENTILACIÓN ALVEOLAR lar; si es mayor de 45 mm Hg indica hipoventilación


alveolar.
CONCEPTO
La ventilación alveolar (VA] es la parte de la venti- ETIOLOGÍA
lación total que participa en el intercambio gaseoso La hipoventilación puede presentarse de forma agu-
con la sangre capilar pulmonar. Por medio de un da o crónica. La hipoventilación aguda aparece ha-
sistema de retroalimentación negativo , la frecuencia bitualmente en forma de crisis, casi siempre como
y profundidad de la respiración se ajustan de forma consecuencia de fármacos o tóxicos que deprimen el
automática de acuerdo con las necesidades metabóli- centro respiratorio o de una enfermedad neuromus-
cas cambiantes del organismo. A nivel del mar, una cular. Las formas crónicas, mucho más frecuentes,
persona sana tiene una P0 2 arterial (Pa0 2 ) de 95 mm pueden presentarse en personas sanas o con patología
Hg y una PC0 2 arterial (PaC0 2 ) de 40 mm Hg. El gra- pulmonar previa. La Tabla 36-1 muestra las principa-
do de ventilación alveolar depende del volumen de les causas de hipoventilación alveolar.
intercambio y de la frecuencia respiratoria. La PaC0 2 La hipoventilación alveolar pura es un hallazgo
está regida por la relación entre la producción de C0 2 clínico infrecuente que aparece en individuos bajo
(VC0 2 ) y la eliminación de C0 2 a través de la ventila- anestesia o que han tomado depresores del SNC. Lo
ción alveolar (VA) . Esta relación puede determinarse
más frecuente es que suceda junto con otros trastor-
mediante la fórmula:
nos de la oxigenación.

FISIOPATOLOGÍA
Por tanto, la disminución de la VA ocasiona un in-
cremento de la PaC0 2 y su aumento , una disminución La retención de C0 2 equivale a almacenar valencias
de la PaC0 2 • A efectos prácticos la PaC0 2 se usa como ácidas (C0 2 + H 2 0 = C0 3H 2 = C03 W + W); además,
medida de la PC0 2 alveolar media y los valores de va acompañada de una disminución de la Pa0 2 • La
PaC0 2 anormales pueden ser indicativos de hiperven- fisiopatología de la hipoventilación alveolar indica la
tilación o hipoventilación. existencia de hipoxemia, hipercapnia y acidosis. La
La hipoventilación se caracteriza por una eleva- hipoxemia, ya sea aguda o crónica, al producir una
ción anormal de la PaC0 2 , con independencia de su vasoconstricción arterial y arteriolar, causa hiperten-
causa. Invariablemente se acompaña de una dismi- sión pulmonar. Los efectos de la hipercapnia sobre el
nución de la Pa0 2 • En la práctica, un valor de PaC0 2 SNC dependen de lo aguda que sea su instauración.
302
menor de 35 mm Hg indica hiperventilación alveo- La hipercapnia aguda y la acidosis asociada producen
CAPITULO 36 Patología general de los trastornos ventilatorios

vasodilatación cerebral, aumento de presión del LCR y


trastornos neurológicos como cefalea, debilidad, irrita-
Tabla Causas de hipoventilación bilidad neuromuscular, temblor distal (flapping o as-
alveolar crónica terixis) , obn ubilación, somnolencia, confusión y coma
(véase la Fig. 36-2). A nivel cardiovascular, la acidosis
CON PULMONES NORMALES respiratoria dismin uye la contractilidad miocárdica
y puede producir insuficiencia cardiaca, aumento de
Por disminución de la ventilación minuto
la irritabilidad miocárdica gen erad ora de arritmias o
Depresión funcional de los movimientos vasodilatación sistémica. La acidosis respiratoria, con-
respiratorios (sueño, fármacos, tóxicos,
mixedema) secuencia de la hipoventilación crónica, pone en mar-
cha mecanismos de compensación a nivel renal con
Lesión anatómica de las neuronas
respiratorias (SNC, bulbo, médula cervical). aumento de la reabsorción de bicarbonato; se produce
Hipoventilación alveolar idiopática. así una alcalosis metabólica, de escasa repercusión clí-
nica. El H + aumentado penetra en las célu las intercam-
Síndrome de hipoventilación central
congénita (síndrome de Ondina) biándose con K+, lo qu e aumenta el K+ sérico, que se
contrarresta con una mayor eliminación renal.
Alteración mecánica del aparato respiratorio La hip ercapnia crónica compensada puede tener
Trastornos neuromusculares periféricos una repercu sión clínica escasa y manifestarse solo
(poliomielitis, síndrome de Guillain-Barré, por una dilatación de vasos conjuntivales y lagrimeo.
miastenia, polimiositis)
La acidosis respiratoria que acompaña a la h ipoventi-
Alteraciones de la caja torácica lación alveolar generalmente intensifica la hip erten-
(cifoescoliosis, síndrome de obesidad-
hipoventilación) sión p ulmonar in ducida por la h ipoxemia. Por otra
parte , la acidosis tiene un efecto positivo , ya qu e es
Síndrome de obesidad-hipoventilación).
u n estimulante químico de la respiración durante la
Obstrucción de la vía respiratoria superior
(estenosis traqueal , síndrome de apnea hip oventilación alveolar.
obstructiva del sueño)
CON PULMONES PATOLÓGICOS SÍNDROMES CLÍNICOS
Por aumento del espacio muerto Existen d os sín dromes clínicos que, por sus peculia-
Enfermedad obstructiva de la vía ridades, merecen ser tratados con mayor detalle: el
respiratoria síndrom e de apnea-hipopnea obstru cti va del sueñ o
(SA HOSJ y el síndrom e de obesidad hipoven tilación
(SOH}.

HIPERCAPNIA AGUDA

i
Vasodilatación cerebral:
i
Alteraciones renales:
Aumento presión LC R Alteraciones card iovasculares
Alca losis metabó lica
Alteraciones neurol ógicas: J. contracti Iidad Aumento de K+ pl asmático
Debil idad i irritabilidad (arritmias)
Aumento de la eliminación renal de K+
Irritabilidad neuromuscul ar
Flapping
Obnubilac ión
Confusión, coma
Cefa lea

HIPERCAPNIA CRÓNICA

l 1, l
Dilatación
de vasos Hipertensión Acidosis
conjuntivales pu lmonar

Figura
303
Consecuencias fisiopatológicas de la hiperca pni a.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

permeable (p. ej ., el geniogloso se contrae durante la


inspiración, tirando de la lengua hacia fuera y abrien-
Tabla Criterios diagnósticos do la vía respiratoria). El electromiograma (EMG) de
delSAHOS estos grupos musculares no muestra actividad durante
los esfuerzos ventilatorios.
1. IAH (índice de apneas hipopneas por hora) Las pa usas de apnea durante el sueño nocturno se
> 5 asociado a uno de los siguientes síntomas: asocian con despertar frecuente y, a menudo, dismi-
A. Excesiva somnolencia diurna (ESD) no
nución de las ondas lentas del electroencefalograma
explicada por otras causas (EEG) durante el sueño. Durante las fases REM y
NREM las respuestas ventilatorias a la hipoxia y a la
B. Dos o más de los siguientes: hipercapnia están reducidas. En el sueño aumenta
B1. Episodios asfícticos repetidos durante el la resistencia de la vía respiratoria y disminu ye la
sueño distensibilidad pulmonar, lo que puede contribuir
a disminuir la respuesta ventilatoria. Las pausas
B2 . Despertares recurrentes durante el de apnea suelen durar entre 15 y 120 segundos. Se
sueño
produce un ciclo (apnea-afucia-despertar-reinicio de
B3. Percepción del sueño como no la respiración) que puede repetirse varios cientos de
reparador veces durante la noche, de forma que , a veces, el 50 %
B4. Cansancio y/o fati ga du rante el día del sueño nocturno transcurre en apnea.
Sus consecuencias son la producción de hipercap-
B5. Dificultades de concentración nia, acidosis respiratoria e hipoxemia. La hipoxemia
Diagnóstico: 1 + (A ó B)
produce hipertensión pulmonar y sistémica durante
la noche. Los esfuerzos respiratorios repetidos contra
una vía respiratoria cerrada aumentan el tono vagal,
dan lugar a bradicardia y, en ocasiones, a parada si-
nusal. La hipoxia induce la aparición de arritmias car-
SÍNDROME DE APNEA-HIPOPNEA diacas , y la hipoxemia a la aparición de policitemia.
Todos estos efectos combinados dan lugar a un cor
OBSTRUCTIVA DEL SUEÑO (SAHOS) pulmonale crónico (sobrecarga del ventrículo derecho
Se defin e como la aparición de episodios recurrentes con insuficiencia cardiaca derecha) . Los pacientes con
de limitación al flujo de aire durante el sueño como apnea obstructiva del sueño tienen mayor morbimor-
consecuencia de una alteración anatomico-funcional talidad de causa cardiovascular y cerebrovascular. El
de la vía aérea superior que conduce a su cierre total incremento del riesgo vascular parece estar media-
(apnea) o parcial (hipopnea), provocando descensos do por la interacción entre los efectos mecánicos y
en la saturación de oxígeno de la hemoglobina y mi- químicos (hipoxia e hipercapnia) debidos al cierre
crodespertares (despertar electroencefalográfico ha- repetido de la vía respiratoria y sus repercusiones en
bitualmente no consciente) múltiples que dan lugar el sistema nervioso simpático, que pueden dar lugar a
a un sueño no reparador, somnolencia diurna exce- hipertensión arterial.
siva y trastornos neuropsiquiátricos, respiratorios y Desde el punto de vista clínico, el SAHOS cursa
cardiovasculares. La Tabla 36-2 recoge los criterios con somnolencia diurna, cansancio, irritabilidad y
diagnósticos del SAHOS. cambios de personalidad debidos a la desaturación
El criterio mínimo para diagnosticar un SAHOS es nocturna de oxígeno y a la privación crónica de
la presencia de al menos cinco episodios de apnea o sueño . Además, los pacientes emiten ronquidos es-
hipopnea en una hora de sueño. La apnea obstructiva truendosos que, en ocasiones, anteceden al síndrome
se define como la ausencia de flujo aéreo durante al en varios años , y presentan patrones anormales del
menos 10 segundos junto con un esfuerzo ventilatorio sueño, con despertares frecuentes. Los síntomas que
continuado. La hipopnea se define como una disminu- acompañan al SAHOS se muestran en la Tabla 36-3.
ción < 50 % del paso de aire a través de la vía respira- Estos enfermos tienen un riesgo de accidentes de trá-
toria superior durante al menos 10 segundos, asociado fico siete veces mayor que la población general.
a una disminución patológica en la saturación de oxí- Para el diagnóstico definitivo de este trastorno es
geno de la hemoglobina o a un despertar brusco. En necesario realizar un estudio polisomnográfico. En un
ambas situaciones existe un cierre completo o parcial laboratorio del sueño se monitoriza durante toda la
de los segmentos colapsables de la faringe . La obstruc- noche el electroencefalograma, electrooculografía (para
ción se debe a la existencia de un estrechamiento de determinar los movimientos oculares durante la fase
la vía respiratoria (p. ej ., por obesidad, hipertrofia de REM), el esfuerzo respiratorio, el flujo aéreo y la satura-
amígdalas, adenoides o lengua, micrognatia u otras ción arterial de 0 2 , estimaciones del C0 2 alveolar o ar-
malformaciones), o al cierre de la vía respiratoria por terial, electrocardiograma y electromiografía de pierna
una relajación anormal de varios músculos que, en o cara. Las grabaciones en vídeo ayudan a diferenciar la
304
condiciones normales , se contraen para mantenerla apnea obstructiva de la no obstructiva o apnea central,
CAPITULO 36 Patología general de los trastornos ventilatorios

vías aéreas de las zonas pulmonares declives pueden


estrecharse e incluso cerrarse, con la consiguiente
Tabla Síntomas asociados disminución de la ventilación en dichas regiones. Al
alSAHOS mantenerse el flujo sanguíneo se produce un trastorno
de la ventilación-perfusión con derivación (shunt) de-
Síntomas Síntomas recha-izquierda, que refleja la existencia de zonas del
diurnos nocturnos pulmón perfundidas pero no ventiladas, e hipoxemia
arterial. La hipercapnia suele ser moderada.
Excesiva Ronquidos
somnolencia diurna Apneas observadas
Sensación de sueño Episodios de asfixia HIPERVENTILACIÓN ALVEOLAR
no reparador Movimientos
Astenia anormales CONCEPTO
Cefalea matutina Sudoración El término implica una disminución de la PaCO2 , de-
Irritabilidad Despertares bido a una respiración más acelerada o profunda, y
Apatía frecuentes
debe diferenciarse de la hiperpnea, o aumento del vo-
Depresión Nicturia (adultos) y lumen ventilado por minuto causado por un aumento
Dificultad de enuresis (niños)
de la demanda de oxígeno (p. ej ., durante el ejerci-
concentración Pesadillas
cio). Un valor de PaCO 2 inferior a 35 mm Hg indica
Pérdida de memoria Sueño intraquilo hiperventilación alveolar. En personas con pulmones
Disminución de la Insomnio normales, el aumento en la ventilación/minuto dis-
libido Reflujo curre paralelo al aumento de la ventilación alveolar,
Cambios de carácter gastroesofágico de manera que su valor puede servir como índice de
la ventilación alveolar. En enfermos respiratorios (en-
fermedades intersticiales difusas y pulmones rígidos)
el patrón de respiraciones rápidas aumenta la venti-
lación del espacio muerto, y entonces la ventilación/
que se produce por un trastorno primario en la genera-
minuto no constituye una guía fiable del grado de
ción del ritmo respiratorio. Aparece en enfermos con
ventilación alveolar. La hiperventilación siempre se
lesiones neurológicas que afectan al tronco encefálico,
asocia con disminución de la PaCO 2 , pero los efec-
a la médula cervical superior o a ambos.
tos en el pH arterial varían con el paso del tiempo, la
magnitud de los mecanismos de compensación renal
SÍNDROME DE OBESIDAD-HIPOVENTILACIÓN y la presencia o no de alteraciones respiratorias del
equilibrio ácido-base (Fig. 36-3).
Se define como la combinación de obesidad con índi-
ce de masa corporal~ 30 kg/m 2 con hipercapnia cróni-
ca en ausencia de otras causas de hipoventilación. An-
ETIOLOGÍA
tes deben excluirse otras causas de hipoventilación. La causa más frecuente de hiperventilación alveolar
El 90 % de los pacientes con síndrome de obesidad- es la ansiedad, pero también pueden producirla nu-
hipoventilación (SOH) tienen también un SAHOS merosos trastornos pulmonares, metabólicos y neuro-
que condiciona o empeora la hipoventilación. Se lógicos (Tabla 36-4).
caracteriza por somnolencia, plétora, cardiomegalia
y edemas. Cursa con alteración de los volúmenes pul-
monares, con disminución de la capacidad vital (CV},
FISIOPATOLOGÍA
de la capacidad pulmonar total y de la capacidad re- La disminución de la PaCO 2 provoca vasoconstricción
sidual funcional, como consecuencia de los efectos de coronaria y cerebral, descenso del gasto cardiaco, con
la obesidad sobre la pared torácica, que disminuye su la consiguiente disminución del transporte de 0 2 a
distensibilidad (síndrome restrictivo, véase Capítulo los tejidos, y una desviación a la izquierda de la curva
38). Esto produce una desviación a la derecha de las de disociación de la hemoglobina, lo que aumenta su
curvas de presión-volumen de los pulmones. El des- afinidad por el 0 2 • La hiperventilación aguda puede
censo de la capacidad residual funcional sin que varíe ser causa de hipocalcemia por reducción del Caz+ ió-
el volumen residual hace que estos dos parámetros nico libre en el plasma (la alcalosis lo fija a la albúmi-
se igualen. La diferencia entre los dos (el volumen de na), con el consiguiente aumento de la excitabilidad
reserva espiratorio) disminuye significativamente. De- neuromuscular, que puede producir crisis de tetania.
bido al descenso de la distensibilidad y de la fuerza
muscular, se reduce la CV. A causa de la disminución MANIFESTACIONES CLÍNICAS
de la distensibilidad y aumento de la resistencia al
flujo aéreo, el trabajo respiratorio aumenta. También La alcalosis respiratoria suele ser sintomática cuando
305
se producen alteraciones del intercambio gaseoso: las existe una elevación importante del pH, en general
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Vasoconstricción Di sminución gasto Desviación curva H ipocalcemi a


coronaria ca rdiaco Hb a la izquierda Aumento
y cerebral Disminución Aumento afinid ad excitabilidad
transporte 0 2

Taq uica rdia Aumento ROT


Apnea Espasmo carpopeda l
Aumento de irritabilidad
poshiperventi lac ión Signos de Chvostek y Troussea u
mi ocá rdica

Figura Consecuencias fisiopatológicas de la hiperve ntilación a lveo lar. ROT: reflujos osteotend in osos.

superior a 7,5. Un pH mayor de 7,7 rara vez se tolera


durante mucho tiempo. La mayor parte de los sínto-
mas reflejan la afectación del SNC y del periférico ,
a consecuencia de la disminución d e Ca/ y Mg/
Tabla Causas de hiperventilación en plasma. Pueden aparecer fotopsias , zumbido de
oídos, visión borrosa, parestesias de cara, manos y
alveolar pies, rigidez muscular, tetania, síncope y convulsio-
nes. La vasoconstricción sistémica, la taquicardia y
Estímulo de receptores periféricos
Hipoxia el aumento de la irritabilidad miocárdica pueden dar
Enfermedad pulmonar intersticial difusa, lugar a arritmias. En ocasiones pueden presentarse
edema de pulmón apneas poshiperventilación por depresión del centro
Embolia pulmonar respiratorio , que es consecuencia de la disminución
Dolor de PaC0 2 • En la exploración se observa aumento de
los reflejos osteotendinosos , espasmo carpopedal y
Shock
signos de Chvostek (contracción de los músculos fa-
Aumento de estimulación del SNC ciales tras la percusión del nervio facial delante del
Ansiedad pabellón auricular) y Trousseau (espasmo carpope-
Fiebre dad tras isquemia del miembro superior inducida por
Lesiones del tronco encefálico la presión de un esfigmomanómetro).
Hemorragia intracraneal
Salicilatos
Acidosis metabólica DISNEAS
Descenso desde la altitud
CONCEPTO Y VALORACIÓN
Estímulo desconocido
Cirrosis hepática Los pacientes con enfermedades respiratorias , cardia-
Uremia cas o neuromusculares pueden sentir una sensación
Embarazo desagradable asociada a la respiración. La disnea se
define como una conciencia anormal y desagradable
Ventilación mecánica asistida de estar respirando . Se deben establecer las circuns-
tancias en que aparece y los síntomas que la acompa-
306 ñan. Preguntas como ¿qué actividades la provocan?,
CAPITULO 36 Patología general de los trastornos venti latorios

¿aparece en reposo?, ¿aparece en decúbito?, ¿se acom-


paña de tos o dolor torácico?, ¿le despierta brusca-
mente durante la noche?, etc., ayudan a establecer Tabla Causas de disnea aguda
su causa y los mecanismos que la desencadenan. La
disnea puede aparecer de forma brusca, como en la Ansiedad/hiperventilación
embolia pulmonar, el neumotórax, etc., o de manera Asma
progresiva, en las enfermedades pulmonares o cardia- Traumatismo torácico
cas crónicas. Embolia pulmonar
Es importante cuantificarla. Se gradúa, según la Neumotórax
intensidad de ejercicio físico necesario para produ-
cirla en: grado I o disnea de grandes esfuerzos, grado
II o de medianos esfuerzos, grado III o de pequeños
esfuerzos y grado IV o disnea de reposo. El grado
viene condicionado no solo por la presencia o no de
enfermedad, sino también por la condición física del
individuo, sus hábitos y su entrenamiento.
Se denomina ortopnea a la disnea que aparece al
colocarse en decúbito supino, trepopnea a la que Tabla Causas de disnea crónica
aparece en decúbito lateral y apnea a la ausencia de
movimientos respiratorios. Enfermedad de la vía respiratoria
Obstrucción de la vía respiratoria superior
Asma
ETIOLOGÍA Bronquitis crónica
Enfisema
Las principales causas de disnea (aguda y crónica) se Bronquiectasias
recogen en las Tablas 36-5 y 36-6.
Enfermedad parenquimatosa pulmonar
Enfermedad intersticial pulmonar
FISIOPATOLOGÍA Neoplasia
Neumonía
La disnea tiene lugar siempre que el trabajo respira-
torio es excesivo, lo que sucede cuando: a) aumenta Enfermedad vascular pulmonar
la ventilación, por ejemplo, en el ejercicio; b) au- Malformación arteriovenosa
mentan las resistencias de la vía aérea; c) disminuye Hipertersión pulmonar
la elasticidad pulmonar, o d) existe debilidad o de- Enfermedad venooclusiva pulmonar
terioro mecánico de los músculos de la respiración.
En estas circunstancias, se produce un estímulo de Enfermedades pleurales
Derrame
los diferentes receptores, que se trasmite a los cen-
Fibrosis
tros respiratorios del trnnco cerebral. La teoría de
la «tensión-longitud inapropiada» sugiere que los Neoplasia
husos musculares desempeñan un papel principal Enfermedades de la pared torácica
como mediadores de la sensación de disnea. Si se Deformidades (cifoescoliosis)
produce un alineamiento inapropiado de los ner- Ascitis, embarazo, obesidad
vios de los husos que perciben tensión en relación (desplazamiento diafragmático)
con la longitud del músculo (p. ej., en los músculos
costales), se produce una sensación desagradable de Enfermedades de los músculos
respiración insuficiente para la tensión generada por respiratorios
Enfermedades neuromusculares
los músculos respiratorios .
Disfunción del nervio frén ico
Los mecanismos implicados en la aparición de la
disnea son distintos según su etiología. Enfermedades cardiovasculares
En la disnea de causa pulmonar: a) Cuando existe Disminución de gasto cardiaco
hipoxemia, aumenta la ventilación pulmonar, y con Aumento de la presión venosa pulmonar
ella el trabajo respiratorio. b) Si existe una estenosis de Shunt derecha-izquierda
las vías respiratorias, se alarga el tiempo espiratorio y
en las zonas de constricción bronquial aumenta la ve- Anemia
locidad del aire espirado, que transforma la circulación Psicológica/ansiedad
lineal en turbulenta. La espiración es un movimiento
menos enérgico y en presencia de reducción de la luz Falta de entrenamiento
de las vías respiratorias se alarga. En esta situación, el
esfuerzo de los músculos respiratorios debe aumentar
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

FISIOPATOLOGÍA DE LA DISNEA DE CAUSA PULMONAR


1

ESTENOSIS ALTERACIONES

• • • •
HIPOXEMIA VÍA AÉREA RESTRICCIÓN DE LA DISTRIBUCIÓN

i Ventilación i Esfuerzo músculos i Trabajo respiratorio por Hiperventilación


pulmonar respiratorios i Resistencia elástica pulmonar i Actividad muscular

TEORÍA DE LA TENSIÓN-LONG ITUD INAPROPIADA

Figura Fisiopatología de la disnea de causa pulmonar.

para vencer la mayor resistencia del flujo aéreo. c) En pacidad vital. La elevación diafragmática contribuye a
la hipoventilación global de mecanismo restrictivo la reducir el volumen espiratorio final. La combinación
disnea puede deberse al aumento del trabajo respirato- de un volumen espiratorio final disminuido y un au-
rio secundario al aumento de las resistencias elásticas mento del volumen de cierre produce una alteración
toracopulmonares, o a la disminución de la potencia del intercambio gaseoso alvéolo-capilar que contribu-
de los músculos respiratorios, que hace que aumente ye a la producción de disnea (Fig. 36-6).
el trabajo de los menos afectados o sanos. d) La altera- La disnea paroxística nocturna (DPN) es la apari-
ción de la distribución del aire ventilatorio pulmonar ción súbita de disnea, generalmente por la noche, que
origina hiperventilación, que incrementa la actividad despierta al paciente y le obliga a levantarse o a sen-
de los músculos respiratorios, y aparece la disnea (Fig. tarse en la cama para poder respirar. Es característica
36-4). de la enfermedad cardiaca avanzada y se asocia con
La disnea de origen cardiaco se debe a: a) Disminu- elevaciones de la presión capilar pulmonar. Durante
ción de la distensibilidad: por ejemplo, las situaciones la noche , el volumen sanguíneo total puede aumentar
que causan insuficiencia ventricular izquierda, este- por reabsorción de edemas de las zonas declives al
nosis de la válvula mitral, etc., producen un aumen- adoptarse el decúbito. En esta posición, se redistri-
to retrógrado de la presión en la aurícula izquierda
y en el lecho capilar pulmonar (PCP). Cuando esta
presión alcanza un determinado nivel se produce DISNEA CARDIACA
una trasudación de líquido al espacio intersticial,
DISFUNCI N VI
que da lugar a una disminución de la distensibilidad, VALVULOPATÍA M ITRAL
a la estimulación de receptores J yuxtacapilares en
el espacio intersticial alveolar y a la producción de
disnea. Además, la hipertensión pulmonar venosa
1
Í PAi
prolongada origina un engrosamiento de los vasos
pulmonares y un aumento de células perivasculares i
1 PCP
y de tejido fibroso, todo lo cual disminuye la disten-
sibilidad pulmonar. b) Aumento de la resistencia de
la vía respiratoria: el compromiso de espacio entre
1
Trasudación de líquido al intersticio
vasos, vía aérea y líquido intersticial disminuye la luz
de la pequeña vía respiratoria y aumenta su resisten-
cia. c) Disminución del gasto cardiaco, que conlleva /
J, de distensibilidad Estimulación
una disminución de la perfusión de los músculos pulmonar de receptores J
respiratorios , con la consiguiente fatiga muscular; a
ella contribuyen la acidosis metabólica y la anoxia
sistémica y cerebral (Fig. 36-5).
La ortopnea, o disnea de decúbito, en consecuen-
e >
cia de los cambios que la gravedad induce cuando se Figura Fisiopato logía de la disnea de origen
adopta la posición horizontal: aumenta el volumen card iaco. Vi: ventrículo izqu ierdo. PAi: presión en au-
sanguíneo intratorácico, la presión capilar pulmonar rícu la izquierda. CPC: presión capi lar pulmonar. HP:
308
y el volumen de cierre pulmonar, y disminuye la ca- hipertensión pulmonar.
CAPITULO 36 Patología general de los trastornos ventilatorios

F·MHHéi
1 DECÚBITO/ALT. FUERZAS DE GRAVEDAD 1
-- -
DISNEA PAROXÍSTICA NOCTURNA

Rea bsorción de edemas

i volumen sa nguíneo intratorácico

Redistribución de flujo
1 i PCP 1

1 i vol umen de cierre pulmonar 1 Agrava miento de la congestión pulmonar

1 J, de la ca pacidad vital 1

ELEVACIÓ DIAFRAGMÁTI CA _ _ __. J, Volumen espiratorio final Despertar, disnea, sibil ancias

Figura Fisiopatología de la ortopnea y de la disnea paroxística nocturna.

buye en los flujos y aumenta el volumen sanguíneo El origen está en una disminución de la
intratorácico, lo que produce congestión pulmonar. El sensibilidad del centro respiratorio que sólo
paciente se despierta con sensación de intensa disnea, responde a presiones elevadas de C0 2 , como
debida al edema pulmonar. En ocasiones, además de sucede en las fases de apnea. El aumento de la
crepitantes, se pueden auscultar sibilancias por bron- PaC0 2 estimula la ventilación e inicia la fase
coespamo debido al edema de la pared bronquial, lo respiratoria, durante la cual se elimina el exce-
que se conoce como asma cardial (Fig 36-6). so de C0 2 , hasta que, cuando disminuye , cesa
A veces, resulta difícil diferenciar la disnea de la actividad del centro respiratorio y se entra
origen cardiaco de la de origen pulmonar, sobre todo de nuevo en apnea. Este tipo de resp iración se
en el caso de la disnea nocturna. En tales situaciones, produce: a) en situaciones de hipoxia del centro
los antecedentes personales , la anammesis y la ex- respiratorio (bajo gasto cardíaco e hipertensión
ploración física , así como la correcta interpretación intracra.neal) b) por depresión respiratoria indu-
de las exploraciones complementarias (ECG, radio- cida por fármacos .
logía de tórax) serán herramientas muy útiles en el Respiracion de Biot: Consiste en fases respira-
diagnóstico diferencial. Otras veces coexisten ambas torias desiguales con apneas prolongadas entre
patologías, pulmonar y cardiaca. las que se intercalan fases respiratorias de dos
a cuatro movimientos respiratorios de profundi-
dad irregular (respiración atáxica). Se produce
TRASTORNOS DEL RITMO RESPIRATORIO en lesiones del SNC (troncoencéfalo) y depresión
respiratoria por fármacos.
Pueden ser muy diversos (Fig. 36-7). Los más impor-
tantes son:
TRASTORNOS DEL RITMO RESPIRATORIO
Respiración de Kussmaul: Consiste en un au-
mento del ritmo y la profundidad de los movi-
mientos respiratorios que permite eliminar más
Respiració n
C0 2 • Surge como mecanismo compensador en
situaciones de acidosis metabólica, tales como la
cetoacidosis diabética.
de Kussmaul
--+
1: NVWINW½ 1
Respiración de Cheyne-Stokes: Se caracteriza
por fases periódicas de respiración y apnea.
Las fases respiratorias se inician con movi-
Respiración
de Cheyne-Stokes
--+
l~AAI
~
mientos superficiales que van aumentando
progresivamente en profundidad hasta alcanzar 1 Respiración de Bi ot 1 --+
un máximo, a partir del cual se va reduciendo
paulatinamente la profundidad de la respiración
1: Inspiración. E: Espiración
hasta que se produce una fase de apnea. Tras esta
comienza de nuevo un ciclo respiratorio similar
Figura Trastornos del ritmo respirator io. 309
al descrito.
-137
Mecanismos de defensa
del aparato respiratorio
Pietat Ussetti Gil

INTRODUCCIÓN
El aire inspirado es el origen del oxígeno nece-
sario para el organismo , pero también el medio
a través del cual pueden entrar en nuestro or-
ganismo numerosas partículas, gases tóxicos y
microorganismos.
Para facilitar el intercambio de gases, el pulmón
dispone de la mayor superficie epitelial en con-
tacto con el medio externo. Durante la respiración
entran diariamente en las vías respiratorias unos
10 000 litros de aire , compuesto por una mezcla
compleja de gases y partículas, a los que se suman
diversos microorganismos. El depósito de estas
partículas y microorganismos puede producirse
tanto en las vías respiratorias superiores como en
las inferiores, por lo que existen mecanismos de
defensa encargados de eliminarlos en todos los
niveles del aparato respiratorio.
Además de las partículas inhaladas que pe-
netran durante la respiración, las vías aéreas
son inoculadas de forma repetida por bacterias
procedentes de la nasofaringe a través de mi-
croaspiraciones de repetición, especialmente
durante la noche.
La primera línea de defensa pulmonar son
los mecanismos de defensa innatos, o no
específicos, carentes de memoria inmuno-
lógica. Si esta repuesta rápida inespecífica
falla, se ponen en marcha los mecanismos
de defensa inmunológicos específicos o
adaptativos (Tabla 37-1).
Forman parte de las defensas innatas
las barreras estructurales o mecánicas,
el aclaramiento mucociliar, mecanismos
reflejos como el estornudo y la tos , las
defensas fagocíticas, humanares y bioquí-
micas y los mediadores de la inflamación.
Las defensas específicas o adquiridas se
generan tras el reconocimiento inmuno-
lógico de los antígenos externos, e in-
~
cluyen tanto la inmunidad celular como
CAPITULO 37 Mecanismos de defensa del aparato respiratorio

o hablar (gotas de Pflügger). ya que ello les permite


mantenerse por mayor tiempo en suspensión. Los ae-
Tabla Mecanismos de defensa rosoles con trascendencia clínica son los compuestos
pulmonar por partículas menores de 5 µrn de diámetro, ya que
las partículas mayores sedimentan con rapidez y se
Innatos o no específicos depositan en la nasofaringe. Las partículas de < 5 µm
no son retenidas en las vías respiratorias superiores y
Defensas mecánicas o estructurales pueden penetrar hasta el alvéolo. Este hecho es espe-
Aclaramiento mucociliar cialmente relevante en la patogenia de las infecciones
pulmonares, ya que la mayor parte de las bacterias
Mecanismos reflejos (estornudo y tos) son menores de 5 µm. En general, los compartimen-
Defensas fagocíticas tos nasal y faríngeo retienen el 70 % de las partículas
inhaladas y el árbol traqueobronquial el 10 %; el 20 %
Defensas humorales y bioquímicas
restante llega hasta el espacio alveolar.
Mediadores de la inflamación

Específicos o adquiridos
ACLARAMIENTO MUCOCILIAR
Linfocitos Prácticamente todas las partículas sólidas que im-
pactan en la superficie de las vías respiratorias y los
lgA secretora alvéolos son eliminadas. Existen dos sistemas de acla-
lgG ramiento relacionados entre sí: el transpo1te mucoci-
liar, que es el encargado de eliminar las partículas en
la nasofaringe y el árbol traqueobronquial, y los ma-
crófagos alveolares, que son los encargados del aclara-
miento de las partículas a nivel alveolar (Tabla 37-2).
la mediada por anticuerpos específicos. La acción El transporte mucociliar está compuesto por las
integrada de estos mecanismos de defensa es muy células ciliadas del epitelio y una doble capa de
eficaz, y la esterilidad del tracto respiratorio inferior moco que cubre su superficie. Las células ciliadas
en las personas sanas es la principal prueba de ello. se encuentran en el tracto respiratorio superior des-

DEFENSAS INNATAS O INESPECÍFICAS


DEFENSAS ESTRUCTURALES O MECÁNICAS Tabla Localización anatómica
Las defensas mecánicas o estructurales constituyen de los mecanismos de defensa
la barrera inicial que deben superar los distintos
agentes nocivos. La mucosa bucofaríngea está revesti- Vías respiratorias
da por epitelio escamoso y se encuentra habitada por Barreras mecánicas
una microflora bacteriana «normal» o «habitual», que
evita la colonización por otros gérmenes patógenos. Reflejos (estornudo y tos)
Además, la descamación epitelial recurrente y el flujo Aclaramiento mucociliar
salival sobre la mucosa eliminan los agentes patóge-
nos adheridos. lgA secretora
Antes de alcanzar las unidades alveolares, el aire
inspirado circula secuencialmente y de forma turbu- Espacio alveolar
lenta a través de los cornetes nasales, los tortuosos
canales de la bucofaringe, la glotis, la tráquea y las Macrófagos
más de 20 subdivisiones progresivas de los bronquios Neutrófilos
y bronquiolos. La corriente de aire sufre constantes
modificaciones en su dirección, por lo que la inercia Células dendríticas
de las partículas hace que choquen y se depositen en lgG
la superficie con la que contactan.
Los aerosoles son partículas sólidas o líquidas Complemento
dispersas en el aire que permanecen durante un Surfactante
cierto tiempo en suspensión. Las partículas líquidas
pueden disminuir su tan1año por evaporación, hecho Fibronectina
que tiene importancia en las microgotas de secrecio-
nes respiratorias que se eliminan al toser, estornudar
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

flujo neto de microorgonismos


moco

copo
mucoso
viscoso
de 2 µm

capa
acuosa
periciliar
de 5 µm

células
Figu ra Repre- epiteliales
sentación esquemática ciliadas
del ep itelio de las vías de la vía
resp iratorias provisto de aérea
célu las ciliadas, célu las
caliciformes y g lándu-
las submucosas, revest i-
das por la doble capa de
moco (so l-gel ). lgE específica célula caliciforme

de los dos tercios posteriores de la nariz hasta la MECANISMOS REFLEJOS: ESTORNUDO Y TOS
nasofaringe, y desde el inicio de la tráquea hasta los
bronquiolos terminales. Cada célula ciliada posee La anfractuosa estructura anatómica de la nariz per-
aproximadamente 200 cilios, constituidos por pro- mite que la mayor parte de las partículas inhaladas
yecciones celulares dotadas de motilidad intrínseca impacten en su parte anterior y sean eliminadas a
y rodeadas por una prolongación de la membrana continuación por la espiración y el estornudo. El es-
citoplasmática. La unidad básica del cilio es el axo- tornudo es un mecanismo de defensa de tipo reflejo,
nema, constituido por nueve pares de microtúbulos que se desencadena por la irritación o inflamación
dispuestos en la periferia y por dos microtúbulos de la mucosa nasal. Tras una inspiración profunda,
centrales. Los cilios se mueven coordinadamente la expulsión brusca del aire a través de la nariz, man-
generando una fuerza mecánica capaz de transpor~ teniendo la boca cerrada, permite limpiar las fosas
tar las partículas hacia la laringe. Cada cilio tiene nasales eliminando las partículas y las secreciones de
un movimiento bidireccional: un golpe rápido en su interior.
dirección central seguido de un lento retorno a su Cuando el aclaramiento mucociliar está alterado o
posición inicial. Cada cilio vibra un poco después se ve sobrepasado, la glotis y el reflejo tusígeno son
del que le precede, y un poco antes del que le sigue, los mecanismos de defensa primarios contra los agen-
lo que hace que su movimiento sea similar al de un tes patógenos aspirados desde la bucofaringe. La tos
campo de trigo movido por el viento. se produce por estimulación de receptores ubicados
La superficie de la mucosa traqueobronquial está en la tráquea y grandes bronquios. La tos mantiene
revestida por una fina película compuesta de una las vías respiratorias permeables, y es una respuesta
doble capa de moco (sol-gel) secretado por las cé- normal que protege al pulmón frente a la inhalación
lulas caliciformes y por las glándulas submucosas o aspiración de partículas extrañas . La tos es un acto
(Fig. 37-1). Los cilios están inmersos en el fluido de reflejo, que también puede ser provocado voluntaria-
transporte de la fase sol, donde se mueven libremente mente, mediante el cual se origina una rápida corrien-
cubiertos por la capa mucosa de la fase gel, a la que se te de aire que impulsa al exterior el contenido de las
adhieren las partículas inhaladas. La parte superior vías respiratorias inferiores.
de los cilios contacta con la capa mucosa propulsan-
do las partículas en el moco hacia la laringe a unas
1000 vibraciones ciliares por minuto, lo que supone
DEFENSAS FAGOCÍTICAS
una velocidad de transporte a nivel traqueal de 10 a Los componentes celulares de la inmunidad innata
13 mm/minuto. Las partículas que consiguen atrave- son los macrófagos alveolares, los neutrófilos, las cé-
sar las vías respiratorias superiores quedan atrapadas lulas NK y las células dendríticas.
en la superficie del moco y son transportadas hasta Los macrófagos, primera línea de defensa a nivel
31¿
la bucofaringe, donde son finalmente deglutidas o alveolar, se originan en la médula y alcanzan el parén-
expectoradas. quima pulmonar a través de la circulación sanguínea
CAPITULO 37 Mecanismos de defensa del aparato respiratorio

Los macrófagos pueden eliminar la mayor parte de


las partículas inhaladas mediante la fagocitosis y la li-
beración de radicales de oxígeno y proteasas. Cuando
por su naturaleza las partículas no pueden ser dige-
ridas, los macrófagos migran con ellas en su interior
hasta las áreas proximales de las vías respiratorias,
desde donde son eliminadas con el aclaramiento mu-
cociliar.
Cuando los macrófagos se ven sobrepasados por
gérmenes muy virulentos o numerosos, liberan dis-
tintas moléculas capaces de reclutar y activar a los
neutrófilos intravasculares.
Los neutrófilos tienen una actividad fagocítica
mayor que la de los macrófagos, constituyen la
mayor población fagocítica intravascular y son un
componente esencial de la defensa antiinfecciosa, al
migrar rápidamente hacia los tejidos como reacción
frente a los estímulos inflamatorios. En condiciones
Figura Macrófago alveolar activado y trans- normales, se observan escasos neutrófilos en los
formado en célula gigante multinucleada (flecha) con espacios alveolares, pero los vasos pulmonares, y
partículas fagocitadas en su interior (Tinción de Papa- especialmente sus capilares, contienen numerosos
nicolau). neutrófilos a nivel marginal. En presencia de in-
fección o inflamación, los neutrófilos de la reserva
marginal intravascular son reclutados a los espa-
cios alveolares. La adhesión al endotelio vascular
como células monocítica. El contenido enzimático de constituye el primer paso en la migración de los
los macrófagos es distinto del de los monocitos, por neutrófilos al lugar de la inflamación. La quimio-
lo que la migración desde la sangre al alvéolo debe taxis se produce por la unión entre las denominadas
comportar una diferenciación celular. selectinas, moléculas de adhesión presentes tanto
Los macrófagos tienen una prominente función en la membrana del neutrófio como en el endotelio
fagocítica, microbicida y secretora en la respuesta vascular. Las citocinas liberadas en la zona desenca-
inmunitaria pulmonar, e inician tanto la respuesta denan un aumento en la expresión de las selectinas,
inflamatoria inespecífica como la respuesta inmuni- lo que lentifica la circulación de los neutrófilos
taria. Como célula de defensa, el macrófago puede marginales, que giran sobre sí mismos, se adhieren
fagocitar, migrar, producir enzimas proteolíticas, me- al endotelio vascular y posteriormente penetran en
tabolitos tóxicos del oxígeno y del nitrógeno, y secre- el intersticio pulmonar.
tar mediadores de la inflamación como las citocinas. En la membrana de los neutrófilos existen recep-
Los macrófagos se activan, aumentado su tamaño y su tores para anticuerpos y complemento, que facilitan
capacidad funcional (Fig. 37-2). interactuando con su la fagocitosis bacteriana. Al igual que los macrófagos,
entorno a través de los receptores de superficie y la los neutrófilos ejercen su acción bactericida mediante
producción de citocinas. la producción y liberación de radicales de oxígeno y
Para reconocer lo propio de lo extraño las células enzimas como la elastasa. A diferencia de los macró-
fagocíticas poseen receptores de reconocimiento de fagos, en sus gránulos contienen abundante mielope-
patógenos (PRR) que identifican las moléculas asocia- roxidasa como fuente de radicales oxidantes.
das con patógenos microbianos (PAMP), que no están Las defensinas son péptidos catiónicos, producidos
presentes en las células de los mamíferos, como los primordialmente por los neutrófilos, con actividad
lipopolisácaridos o la manosa (de la pared celular de frente a bacterias, hongos y algunos virus. Los neutró-
bacterias y hongos), o ácidos nucleicos como el ADN filos liberan defensinas como respuesta ante distintos
y el ARN (viral y bacteriano). estímulos inflamatorios, y su actividad microbicida
La unión de las bacterias a la superficie de los ma- depende de su capacidad para permeabilizar o formar
crófagos se ve favorecida en presencia de anticuerpos poros en las membranas biológicas.
opsonizantes y complemento. Tras su fagocitosis, la Las células NK (Natural Killer) son una tercera
acción bactericida de los macrófagos se produce por población de linfocitos, diferentes a los linfocitos B
la liberación de radicales de oxígeno y enzimas pro- y T, capaces de eliminar directamente a las células
teolíticas como la lisozima. invasoras y activar los macrófagos para promover su
Los macrófagos actúan en la presentación de antí- fagocitosis y destrucción. El mecanismo por el cual
genos, transportando las partículas antigénicas a los las células NK producen la lisis celular es mediante
vasos linfáticos regionales, donde generan la produc- la liberación de perforinas que lesionan la membrana ~
ción de linfocitos T y B sensibilizados. plasmática.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Las células dendríticas son las principales células fenómenos inflamatorios. La liberación de proteasas
presentadoras de antígeno del organismo y proporcio- (como la elastasa) y radicales de oxígeno fuera del es-
nan un vínculo crítico entre la respuesta innata y la pacio celular puede lesionar el parénquima pulmonar;
respuesta adaptativa. Llegan al pulmón procedentes de para limitar el daño disponemos de inhibidores de
la médula ósea en un estado inmaduro. Son muy nu- las proteasas y mecanismos de defensa antioxidantes.
merosas a nivel pulmonar, en especial en las vías res- En condiciones normales, la elastasa es rápidamen-
piratorias, y también en el bazo y en la piel. La función te neutralizada por la a,-antitripsina, glucoproteína
de estas células es captar las moléculas antigénicas y sintetizada fundamentalmente en el hígado, aunque
migrar con ellas a los vasos linfáticos regionales para existe también síntesis local en los macrófagos, los
desencadenar una respuesta inmunológica específica. linfocitos y los neutrófilos. La a 1 -antitripsina es el
principal inhibidor de la elastasa, tanto a nivel sérico
como pulmonar, e interactúa con ella en concentra-
DEFENSA HUMORAL Y BIOQUÍMICA ciones equimolares. El déficit de a, -antitripsina se
asocia al desarrollo de enfisema panacinar en perso-
La función de las células fagocíticas se ve facilita-
nas jóvenes.
da en presencia de distintos factores humorales . El
fluido que cubre las vías aéreas contiene distintas El pulmón es susceptible a la acción de los agentes
sustancias constitutivas e inducibles con actividad oxidantes liberados por las células fagocíticas, como
antimicrobiana como la lisozima, la lactoferrina y las el anión superóxido (0-2 ), el peróxido de hidrógeno
defensinas, (H 2 0 2 ) y los radicales hidroxilo (OH-). Los sistemas
enzimáticos antioxidantes a nivel pulmonar son la
La lisozima, producida por las glándulas serosas,
su peróxido dismutasa, la catalasa, la glutatión peroxi-
células epiteliales y macrófagos, es un componente
dasa, el NADPH, la citocromo C reductasa y el ácido
mayor tanto del esputo como del lavado broncoalveo-
ascórbico.
lar y tiene un importante papel antimicrobiano, en
especial frente a los gérmenes grampositivos.
La lactoferrina, producida por las células serosas MEDIADORES DE LA INFLAMACIÓN
y los neutrófilos, es capaz de destruir y aglutinar las
bacterias presentes a nivel pulmonar. Para que la respuesta defensiva sea organizada, los
Las defensinas son proteínas sintetizadas por las componentes celulares de la inmunidad innata se co-
células epiteliales y los leucocitos, que poseen una munican por medio de citocinas. Las citocinas actúan
an1plia capacidad microbicida frente a bacterias, mi- como mensajeros dentro del sistema inmunológico, y
cobacterias, hongos y algunos virus. No son específi- entre el sistema inmunológico y otros sistemas corpo-
cas del pulmón y se encuentran también presentes en rales. Las citocinas son importantes mediadores de la
otras superficies como el tubo digestivo. defensa pulmonar al controlar el inicio, el manteni-
El surfactante alveolar está constituido por una miento y la resolución de la respuesta inflamatoria.
mezcla de lípidos y proteínas cuya principal fun- La producción local de citocinas forma parte de la
ción es proteger al alvéolo de las fuerzas de estira- respuesta normal a la infección, y la liberación selec-
miento y prevenir el colapso alveolar. Las proteínas tiva de citocinas proinflanrntorias es esencial para
hidrofílicas del surfactante (SP-A y SP-D) tienen la localizar la reacción inflamatoria en el tejido o zona
habilidad de reconocer y unirse a los carbohidatos afectada.
de la superficie de algunos virus y bacterias actuan- A nivel pulmonar, el factor de necrosis tumoral
do como receptores de reconocimiento de patógenos alfa (TNF-a), diversas interleucinas (IL) como la IL-8,
(PRR), produciendo de forma directa la lisis de los y el factor estimulador de granulocitos (G-CSF) han
microorganismos y/o su opsonización para facilitar demostrado un papel importante en la inmunidad
su posterior fagocitosis. innata.
Cuando una bacteria contacta con la pared alveolar, El TNF-a es una citocina de «alarma» o de res-
gira sobre sí misma sumergida en el líquido del es- puesta rápida. Los lipopolisacáridos de la pared de
pacio alveolar, donde encuentra distintas sustancias los bacilos gramnegativos constituyen el estímulo
que pueden inactivarla y facilitar su fagocitosis. Entre más potente y bien conocido para su liberación, y en
estas sustancias cabe mencionar las lipoproteínas del estudios experimentales se observa una importante
surfactante, las inmunoglobulinas (IgG), los factores acumulación de TNF-a y neutrófilos tras su instila-
del complemento (C3b) y la fibronectina, opsonina ción traqueal.
no inmunológica de alto peso molecular. Los compo- La IL-8 producida por los macrófagos alveolares y
nentes del complemento, como el C5a, interactúan las células epiteliales como reacción frente a distintos
con las bacterias y pueden activar la vía alternativa estímulos inflamatorios, constituye el principal factor
del complemento y ser un potente estímulo para su quimiotáctico para los neutrófilos.
quimiotaxis por los neutrófilos. El G-CSF (granulocyte colony-stimulating factor]
Los macrófagos y los neutrófilos liberan proteasas es una glucoproteína producida por los macrófagos
y radicales de oxígeno como respuesta ante distintos activados por otras citocinas o bacterias, y su fun-
CAPÍTULO 37 Mecanismos de defensa del aparato respiratorio

Figura Bronquiolo con agregado linfoide (L) y Figura Submucosa bronquial con depósitos de
macrófragos cargados de pigmento antracótico. lgA.

ción es estimular selectivamente la proliferación y Los macrófagos alveolares fagocitan y eliminan rápi-
maduración de los progenitores medulares de los damente bacterias como el neumococo , pero ciertos
neutrófilos. El G-CSF actúa localmente activando y organismos como las microbacterias son resistentes a
reclutando neutrófilos en el lugar de la infección, y su actividad microbicida y se replican en su interior;
sistémicamente estimulando su producción. por ello, la erradicación de estos patógenos dependerá
del desarrollo de la inmunidad celular.
A nivel pulmonar, los linfocitos tienen tres funcio-
DEFENSA ESPECÍFICA O INMUNOLÓGICA nes fundamentales: producción de inmunoglobuli-
Los mecanismos de defensa específicos son adquiri- nas, actividad citotóxica y producción de citocinas.
dos y se generan tras el reconocimiento inmunológico Las inmunoglobulinas actúan en forma específica
de los antígenos externos. Forman parte de las defen- contra diferentes microorganismos impidiendo su ad-
sas específicas los linfocitos y las inmunoglobulinas. hesión a receptores celulares, opsonisándolos y aglu-
El tejido linfoide está presente en distintos grados tinándolos , y activando el sistema del complemento.
de organización a todos los niveles del tracto respi- Las secreciones respiratorias contienen las mismas
ratorio. Existen nódulos linfoides en la superficie de inmunoglobulinas presentes en la sangre junto con la
las vías respiratorias, folículos linfoides submucosos IgA secretora.
y agregados linfoides en las uniones broncoalveolares La IgA secretora está constituida por un dímero de
(Fig. 37-3). dos moléculas de IgA y un componente secretor sin-
Los canales linfáticos de las proximidades de los tetizado por las células epiteliales. En las vías respi-
bronquíolos permiten una rápida comunicación entre ratorias, las inmunoglobulinas proceden de la síntesis
la superficie epitelial y los ganglios hiliares, donde local a partir de los linfocitos B situados en el tejido
debe desarrollarse la respuesta inmunológica especí- linfático submucoso, mientras que las inmunoglobuli-
fica. nas del alvéolo proceden de la síntesis sistémica. Por
Los antígenos que entran en nuestro cuerpo a ello, en las vías respiratorias predomina la IgA secre-
partir de la superficie mucosa del tracto respiratorio tora, mientras que en el espacio alveolar predomina la
activan el tejido linfoide local. Los macrófagos y las IgG (véase Tabla 37-2).
células dendríticas localizan y fagocitan las partículas La IgA secretora previene la adherencia de los
antigénicas, las procesan y las presentan al linfocito microorganismos a las células epiteliales de las vías
a nivel ganglionar para iniciar la respuesta inmuno- respiratorias (Fig. 37-4). A nivel alveolar la IgG, en
lógica humoral o celular. Los linfocitos B y T están especial sus subclases IgGl e IgG3, facilitan la fago-
diseñados para activarse en respuesta a una señal an- citosis de las bacterias por parte de los macrófagos y
tigénica específica, restringiendo su participación en los neutrófilos.
la respuesta inflamatoria a aquellas situaciones en las Imágenes histológicas cortesía de la Dra. Clara So-
que se ven sobrepasadas las defensas innatas, como ras. Servicio de Anatomía Patológica. Hospital Puerta
el aclaramiento mucociliar y las defensas fagocíticas. de Hierro. Majadahonda.
-138
Grandes síndromes
de la patología respiratoria
Jaime Merino Sánchez, Reyes Pascual Pérez, Santiago Romero Candeira

Al respirar el aire debe entrar y salir de los pul-


mones (Ventilación) y repartirse homogéneamente
desde vértices a bases (Distribución), llegando a
todos los alvéolos, que deben estar bien perfun-
didos (Perfusión) para que los gases lleguen a la
sangre (Difusión). La alteración en cada una de
estas fases puede provocar insuficiencia respira-
toria. En este capítulo abordarnos la posibilidad
de producir insuficiencia respiratoria por altera-
ciones en la ventilación. Considerarnos el síndrome
obstructivo y el restrictivo.

TRASTORNOS EN LA FUNCIÓN
VENTILATORIA DEL APARATO
RESPIRATORIO. SÍNDROME
OBSTRUCTIVO
El síndrome obstructivo incluye una serie de
enfermedades en las que hay obstrucción al
flujo aéreo , lo que se hace muy evidente en
espiración, que es una actividad pasiva resul-
tante de la retracción elástica del pulmón. Es
una patología muy frecuente que conlleva
una elevada mortalidad/morbilidad y reper-
cusión sociosanitaria. La obstrucción pue-
de situarse en:
Las vías respiratorias superiores, en
laringe o tráquea, y sus causas pueden
ser extra o intratorácicas (bocio, tumor
laríngeo). Son las menos frecuentes.
Otras veces la obstrucción se sitúa en
los bronquios o vías aéreas más dista-
les. En este caso la obstrucción puede
ser: reversible, expresando una hipe-
rreactividad bronquial y cuya enfer-
medad más paradigmática es el asma
bronquial, o irreversible, estructural o
estable como ocurre en la bronquitis
crónica o el enfisema.
CAPITULO 38 Grandes síndromes de la patología respiratoria

OBSTRUCCIÓN REVERSIBLE: por reversibilidad que aumente la FEV1 al menos


HIPERREACTIVIDAD Y ASMA BRONQUIAL un 15 % tras dos inhalaciones de un agonista beta-2
adrenérgico. Si la espirometría es normal, se puede
provocar broncoconstricción con dosis muy bajas de
HIPERREACTIVIDAD BRONQUIAL agentes como la histamina o metacolina. Estos cam-
Concepto y mecanismos implicados bios generan hipoxemia con hiperventilación o hi-
pocapnia que puede llevar a alcalosis respiratoria. Si
Supone una reacción exagerada del árbol bronquial el cuadro se prolonga horas y no existe respuesta al
a estímulos diversos (físicos, químicos, infecciosos tratamiento habitual (beta-2 agonistas y esteroides) se
e inmunológicos) que inducen broncoconstricción y califica de «estatus asmático» que es una situación
en clínica se expresan con disnea. La hiperreactivi- grave que puede causar la muerte del enfermo. En el
dad induce hipertrofia de las células de músculo liso estatus asmático puede haber aumento de la pC02 y
y de las glándulas mucosas de la pared bronquial, descenso del pH.
edema de pared y proliferación de eosinófilos. Los
bronquios se llenan de un moco espeso. Esta respues-
ta acompaña a enfermedades como el asma bronquial Manifestaciones clínicas
(de la que es prototipo), la bronquitis, el enfisema,
La crisis asmática se expresa como un ataque agudo
etcétera.
de disnea. El episodio cede de forma espontánea o
con tratamiento. Entre las crisis no hay sintomatolo-
ASMA BRONQUIAL gía.
A la inspección el enfermo está inquieto, respira
Concepto y tipos con ayuda de músculos accesorios (tiraje) y puede
Es una enfermedad inflamatoria de las vías aéreas ca- haber una espiración prolongada.
racterizada por un aumento de la respuesta del árbol A la auscultación el murmullo está disminuido y
traqueobronquial a múltiples estímulos. Se expresa son audibles múltiples sibilancias, a veces sin fonen-
con estrechamiento difuso de las vías respiratorias doscopio.
(broncoespasmo o broncoconstricción) como conse-
cuencia de una hiperreactividad bronquial. Es una
enfermedad que cursa con exacerbaciones y periodos OBSTRUCCIÓN IRREVERSIBLE: EPOC
asintomáticos; aunque puede cronificarse.
A veces los agentes externos que la desencadenan Incluye dos enfermedades : bronquitis crónica y enfi-
son conocidos, la enfermedad se asocia a otras ma- sema pulmonar.
nifestaciones de hipersensibilidad (rinitis-fiebre del
heno, urticaria, eczema, etc.) y existen otros familia-
res afectos: es el asma alérgico o extrínseco. En otras ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA
ocasiones lo anterior falta: es el asma intrínseco o CRÓNICA (EPOC) U OBSTRUCCIÓN
idiopático.
En el alérgico se demuestra respuesta cutánea po-
CRÓNICA AL FLUJO AÉREO (OCFA)
sitiva a los antígenos precipitantes (alérgenos), res- Incluye dos enfermedades, la bronquitis crónica cuyo
puestas broncoconstrictoras a los antígenos inhalados estereotipo es el enfermo calificado de «blue bloated»
y a veces niveles muy elevados de IgE en el suero. o «hinchado azul», y el enfisema pulmonar, cuyo
estereotipo es el «pink puffer» o «soplador rosado»
Fisiopatología (Fig. 38-1 y Tabla 38-1).
Fisiopatología: Al espirar, el aire se elimina de la
Existe una hiperreactividad que aparece en respues-
ta a agresiones de las vías aéreas, habitualmente por vía aérea por la retracción elástica del pulmón. El flujo
infecciones, alérgenos o contanlinantes aéreos con ca- aéreo viene definido por las diferencias de presión en-
pacidad oxidante, lo que mantiene activo el proceso tre el alvéolo y la boca, siendo ese flujo directamente
inflamatorio. La vía aérea disminuye su luz por con- proporcional a la presión entre ambos e inversamente
tracción de las células del músculo liso, congestión proporcional a las resistencias de la vía aérea. Un
vascular, edema de pared y presencia de secreciones aumento de esas resistencias puede agotar el flujo. En
mucosas espesas. la bronquitis crónica, el enfisema y el asma bronquial
el flujo disminuye porque aumentan las resistencias,
ya que disminuye el calibre de la vía aérea. En el en-
Exploraciones complementarias en el diagnóstico fisema, además, porque lo hace la retracción elástica
Durante la crisis disminuye la FEV1, la relación FEV1/ pulmonar.
CV (índice de Tiffeneau) y la CV; y puede aumentar la En esas circunstancias el flujo espiratorio en el
capacidad pulmonar total por aumento del volumen primer segundo (FEV1) de la capacidad ventilatoria ~
residual. Estos cambios son reversibles. Se entiende forzada (CVF) está muy disminuido. Lo mismo suce-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Figura Estereoti pos de EPOC: «blue bloa ted» (arriba ) y «pink puffer».

de con el flujo espiratorio medio máximo, es decir, sible. Se expresa con la presencia de tos crónica pro-
el considerado al 50 % de la capacidad vital (véase ductiva durante tres o más meses al año , en al menos
Capítulo 35). dos años consecutivos y tras excluir la presencia de
bronquiectasias.

BRONQUITIS CRÓNICA Etiopatogenia


Concepto La bronquitis crónica es un proceso inflamatorio que
Es una enfermedad caracterizada p or la obstrucción afecta a la vía aérea y que resulta de un aumento de
de las vías aéreas generalmente progresiva e irrever- la actividad de agresores oxidativos y la disminución

Tabla Características diferenciales de los estereotipos de EPOC


EPOC A. Enfisema EPOC B. Bronquitis crónica

Fenotipo Pink puffer. Delgado, taquipneico, tórax 8/ue bloated. Obeso, cianótico
en tonel

Tos y Escasa, en exacerbaciones Habitual


expectoración

Disnea Marcada Ligera


Hipoxemia Ligera al inicio Moderada a severa

Hipercapnia En fases avanzadas Moderada a intensa

Policitemia No Frecuente

Cor pu/mona/e En fases avanzadas Frecuente


crónico

Radiografía de Hiperinsuflación , bullas, ausencia de Tórax "sucio'; engrosamiento broncovascular


tórax vascularización , diafragmas aplanados

Espirometría FEV1NC: reducido. TLC : aumento FEV1NC: reducido. TLC: normal o ligero
significativo (volumen residual) aumento

DLCO Baja Normal

Abreviaturas. FEV1NC (índice de Tiffeneau): volumen máximo de aire espirado en el primer segundo/capacidad
vital. TLC: capacidad pulmonar total. DLCO: capacidad de difusión de monóxido de carbono.
CAPITULO 38 Grandes síndromes de la patología respiratoria

de la actividad antioxidante. Entre los agresores está Cambios fisiopatológicos/funcionales


el tabaco, que genera localmente una gran cantidad
Limitación del flujo aéreo: La diferencia entre la pre-
de radicales libres (anión superóxido, peróxido de
sión alveolar y la intrapleural se denomina presión
hidrógeno, ácido hipoclorhídrico e ión ferroso) y
estática de retracción (elastic recoil). En la espira-
contiene sustancias que in.activan la 0'.1 -antitripsina.
ción forzada ambas casi se igualan. Esta presión es
El estrés oxidativo aumenta la secreción mucosa, pro-
el determinante más importante del nivel del flujo
duce sustancias que alteran la función ciliar, inhibe la
espiratorio máximo. Supone un equilibrio dinánlico
función de los macrófagos alveolares, aumenta la qui-
entre el calibre de las vías, la posibilidad de colapsar
miotaxis de los leucocitos y la producción de molécu-
la vía aérea y la presión de la retracción elástica. En
las de adhesión, induce la hiperplasia/hipertrofia de
la EPOC está disminuida; en la bronquitis crónica,
las glándulas mucosas, inhibe antiproteasas, aumenta
al estrecharse la pequeña vía por un aumento en las
la expresión del factor de trascripción nuclear NFK~,
resistencias, y en el enfisema al destruirse el parén-
que es proinflamatorio, y de la interleucina 8, que es
quima pulmonar por la pérdida de la tracción radial
quimiotáxica para neutrófilos, fagocitos, eosinófilos y
sobre las vías aéreas.
linfocitos T. Su capacidad oxidante daña los lípidos
y el DNA de las células. Se ha demostrado que exis- Aumenta el trabajo respiratorio: Los cambios en la
te una relación dosis-dependiente entre el consumo vía aérea expresan obstrucción, se altera la relación
de tabaco y el daño presente en la mucosa bronquial. entre presión y flujo y, por consiguiente, aumenta el
Otros contaminantes aéreos que favorecen la bronqui- trabajo respiratorio.
tis crónica son frecuentes en áreas industriales o con Hiperinsuflación: El volumen residual y la capaci-
alta polución ambiental, en trabajadores expuestos a dad residual funcional están muy aumentados en la
gases nocivos y a polvos orgánicos o inorgánicos. Las bronquitis crónica porque hay una disminución de la
infecciones respiratorias se asocian a su origen y su presión estática de retracción (elastic recoil). La obs-
progresión. trucción favorece que se alargue la espiración, y con
ello el volumen residual es mayor de lo normal. Si la
inspiración se inicia antes que el sistema respiratorio
Cambios anatomoestructurales alcance su punto de balance estático el aire puede
La inhalación crónica de partículas o gases induce retenerse y se genera una hiperinsuflación dinámi-
cambios inflamatorios en la mucosa y submucosa ca. Hay pues un atrapamiento aéreo, que hace que
de la pared bronquial. Hay edema, fibrosis peribron- el diafragma se aplane y se coloque en una posición
quial, tapones mucosos intraluminales, aumento de funcional menos eficaz y como consecuencia puede
células de músculo liso e infiltrados con linfocitos haber un aumento de la capacidad pulmonar total a
T (CD8) y B. También hay hipertrofia e hiperplasia expensas del aire residual.
de glándulas de secreción mucosa, lo que aumenta Se altera el intercambio gaseoso: En la bronquitis
la secreción de moco, su contenido en glicoproteínas crónica se altera la distribución de los gases inspi-
y su viscosidad. El índice de Reid mide el cociente rados. El estrechamiento de la vía aérea supone una
entre el grosor de las glándulas submucosas respecto menor ventilación de los alvéolos. Estos pueden
al total de la pared bronquial. En los sujetos sanos mantener su perfusión, lo que genera hipoxemia,
es de 0,44 y en los bronquíticos crónicos tiene como favorecida por la menor superficie existente para el
media 0,52 . intsercambio gaseoso.
En los afectos se altera el número y tamaño de los Cambios en la circulación pulmonar: Cuando la
cilios, así como su funcionalidad . Aparece espasmo enfermedad avanza, la luz de los vasos disminuye por
bronquial, que se ha relacionado con que el tabaco u la contracción de las células del músculo liso en las
otros agresores estimulan receptores submucosos que arterias pulmonares y arteriolas.
inducen la constricción de las células del músculo La hipoxemia produce vasoconstricción en la ar-
liso mediadas por el vago. Hay además edema en la teria pulmonar y aumento de presión en el círculo
mucosa, con hipertrofia muscular, lo que aumenta el menor, lo cual incrementa el trabajo en el ventrícu-
grosor de la pared y disminuye su luz. lo derecho. Esos cambios son consecuencia de una
En los bronquios de mayor calibre hay pérdida del disminución en la síntesis de óxido nítrico y una
epitelio ciliado, aparición de metaplasia escamosa, alteración en la vasodilatación dependiente del en-
atrofia de células ciliadas, fibrosis peribronquial, dotelio. Por otra parte, la hipoxia crónica favorece la
hiperplasia de las células en anillo e hipertrofia de aparición de poliglobulia, que contribuye a la hiper-
las glándulas mucosas. Existe pues un remodelado tensión pulmonar. Es comprensible que si aumenta
epitelial y ese epitelio dañado es capaz de producir la presión en el círculo menor, es decir, la precarga,
citocinas que amplifican el proceso inflamatorio. puede dificultar el trabajo ventricular derecho y este
Los cambios de la bronquitis crónica afectan a toda fracasa, con lo que de forma retrógrada aumenta su
la mucosa bronquial incluyendo la de la pequeña vía presión telediastólica. El fallo retrógrado aumenta la
terminal, que es donde se produce la mayor limita- presión en las venas yugulares y más tarde aparecen ~
ción al flujo aéreo. las restantes manifestaciones del fracaso ventricular
S ( Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

derecho: h epatomegalia, edemas, etc. Esta situación


se denomina cor pulmonale crónico. VRi
CV
Manifestaciones clínicas VRE


FRi
En la historia del enfermo suele recogerse una exposi-
ción prolongada a tóxicos ambientales o tabaco y una CV ve
CPT }v~i
historia de «catarros» invernales descendentes de na- VRE CV
riz a bronquios. El cuadro clínico se inicia hacia la ve CPT
VRE
quinta década y se expresa con tos con expectoración
mucosa, que a veces se hace purulenta (sobre todo
en los periodos en los que se exacerba por presentar ESPIROMETRÍA SÍNDROME SÍNDROME
sobreinfecciones, a veces febriles). La expectoración NORMAL OBSTRUCTIVO RESTRICTIVO

es habitual pero no muy abundante (menos de 60 ml/


día). Al inicio es matutina, luego aparece a cualquier Figura Espirometrías en los síndromes obstruc-
hora del día. tivos y restrictivos. CV: capacidad vital. VRi: vo lumen
Posteriormente aparece disnea, que empieza de reserva in spiratorio. VRE: VR esp iratorio; VC: Volu-
siendo de esfuerzo y luego progresa hasta hacerse men corriente, VR: Volumen residual. Capac idad pul-
de moderados a pequeños esfuerzos. Habitualmente monar total.
no se acompaña de ortopnea ni de crisis de disnea
nocturna. La presencia de hipoxemia favorece la
aparición de cianosis. Cuando surge la hipercapnia Al inicio la disminución del FEV1 es reversi-
puede existir cefalea, habitualmente matutina. Si el ble con la administración de una beta-2 agonista
cuadro progresa pueden aparecer síncopes tusígenos, adrenérgico de acción corta. Este componente
somnolencia y temblor distal en las manos (asterixis). funcional se pierde cuando el proceso progresa.
Un paso más son las manifestaciones de la insuficien- La resistencia al flujo se puede valorar por el
cia cardiaca derecha: estasis yugular, hepatomegalia y tiempo de espiración forzada (FET), que en el
edemas maleolares (cor pulmonale). sano es menos de 3 segundos y aquí es de 6 o más
segundos. También disminuye la capacidad vital
Hallazgos exploratorios forzada y el índice de Tiffeneau (FEV1/CVF). La
capacidad pulmonar total permanece normal o
El enfermo está «hinchado y azul» (blue bloated),
está discretamente aumentada por aumento del
pletórico, con cianosis central y con frecuencia uti-
volumen residual.
liza músculos respiratorios accesorios. Los tiempos
Gasometría arterial: la distribución de los gases
espiratorios se prolongan y la fuerza espiratoria está
suele ser anormal aunque su capacidad de difu-
disminuida. La auscultación pulmonar muestra habi-
sión se mantiene normal. La gasometría arterial
tualmente roncus y sibilancias, que se oyen mejor en
demuestra hipoxemia, que empeora con el ejer-
espiración. No es infrecuente la existencia de hipe-
cicio físico. Al progresar aparece hipercapnia y a
rinsuflación, que aumenta el diámetro posteroante-
veces acidosis respiratoria.
rior de tórax, disminución de la matidez cardiaca y
La radiología de tórax muestra cardiomegalia a
ruidos cardiacos apagados.
expensas del ventrículo derecho. Si hay hiperin-
La hipertensión pulmonar se expresa con un segun-
suflación el tórax se alarga en sentido vertical, el
do tono pulmonar fuerte , en ocasiones acompañado
diafragma se aplana, las costillas están horizonta-
de un soplo sistólico de insuficiencia tricúspide. Si
lizadas y la silueta se verticaliza. En la radiogra-
hay insuficiencia cardiaca aparece estasis yugular, y
fía lateral de tórax aumenta el área retroesternal
posteriormente hepatomegalia (con reflujo hepatoyu-
y el ángulo costofrénico se hace de 90 grados. La
gular) y edema en los miembros inferiores.
presencia de hipertensión pulmonar se expresa
con arterias pulmonares proximales aumentadas
Pruebas complementarias de tamaño. La trama broncovascular se refuerza ,
Revisamos las principales. y la radiografía aparece como si los campos pul-
monares estuvieran «sucios », básicamente por
La espirometría demuestra un patrón obstructi-
bronquioli tis.
vo , con evidente disminución de volumen espira-
torio en el primer segundo (FEV1 o VEMS) (unos
50-80 ml por año). La Sociedad Americana del ENFISEMA PULMONAR
Tórax clasifica la bronquitis crónica en estadios
según la FEV1: estadio 1 o ligero si es ~50 % del Concepto
esperado, estadio 2 o enfermedad moderada si La unidad respiratoria recibe el nombre de acino o
está entre el 35% y el 49 % y el estadía 3 o cuadro lobulillo respiratorio y lo forman las estructuras dis-
severo si es menor del 35 % (véase Fig. 38-2). tales al bronquiolo terminal, la llamada pequeña vía
CAPITULO 38 Grandes síndromes de la patología respiratoria

dominante. Los afectos pueden


tener disminuida (heterocigo-
tos) o abolida (homocigotos) su
producción. En esos últimos
(fenotipo ZZ) se sustituye el
aminoácido glicina por lisina
y esto hace que el polipéptido
polimerice y no se libere desde
el hígado a la circulación.
Hipoplasia: Excepcio-
nalmente , determinadas
personas nacen con un
desarrollo insuficiente de
las estructuras del pulmón.
Esta hipoplasia genera en-
fisema , que a veces es uni-
lateral (enfermedad Swyer
Enfisema James/McLeod).
normales con dilatación
A estos mecanismos se aña-
de los alvéo los
den otros factores coadyu-
vantes que al sobrepasar
los mecanismos de defensa
Figura Vía aérea terminal normal y enfisema pulmonar. de las vías aéreas aceleran
el proceso: tabaquismo , po-
lución, viriasis, etc.

aérea; es decir, los bronquiolos respiratorios de 1. 0 , 2. 0 Tipos de enfisema


y 3. 0 ' orden, los canales alveolares, los sacos alveola-
Se clasifican en primarios, si se inician en las pe-
res y los alvéolos (Fig. 38-3).
queñas vías respiratorias y secundarios si surgen en
El enfisema supone el aumento de los espacios
lesiones vecinas a esas vías. Revisamos sus caracte-
aéreos distales al bronquiolo terminal, con destruc-
risticas:
ción de su estructura y sin fibrosis. Es una definición
anatómica, pero por sus manifestaciones, hallazgos
radiológicos y exploratorios puede diagnosticarse en Enfisemas primarios
clínica. Debe diferenciarse del atrapamiento aéreo en Enfisema centrolobulillar o centroacinm~ La le-
el que el contenido aéreo pulmonar aumenta pero se sión se inicia en el bronquiolo respiratorio , en el
respeta la arquitectura. que se forman cavidades de 3 a 12 mm (Fig. 38-3)
y dejan indemnes los alvéolos respiratorios. Pre-
Mecanismos implicados domina en las zonas de menor ventilación (ló-
Pueden ser: bulos superiores y segmentos superiores de los
lóbulos inferiores). Representa más del 90% de
Obstrucción : Una obstrucción incompleta y los casos de enfisema y se asocia a tabaquismo, y
mantenida en los bronquios pequeños (p. ej. , por por tanto a la bronquitis crónica.
moco) dificulta la salida del aire atrapado, que Enfisema panlobulillar o panacinar: Se inicia y
aumenta y rompe tabiques. lesiona los conductos alveolares y alvéolos, que
Destrucción: Las agresiones de las vías aéreas se transforman en cavidades aéreas interlobuli-
(p. ej. , bacterianas) favorecen el acúmulo de llares; en él se respetan los bronquiolos termina-
leucocitos que liberan enzimas (tipo elastasas) les y respiratorios. Se localiza en los vértices y
susceptibles de destruir las estructuras fibrosas en las bases del pulmón. Acompaña al déficit de
de las vías aéreas. El plasma de las personas sa- cxl-antitripsina.
nas contiene una antiproteasa (cxl-antitripsina)
que neutraliza el proceso, ya que inhibe las
Enfisemas secundarios
serinproteasas de los microorganismos. Es un
polipéptido de 394 aminoácidos sintetizado en el Paracicatrizales o paralesionales: Aparecen
hígado , y en menos cantidad en los neutrófilos y por formación de cicatrices en el parénquima
monocitos, desde donde pasa a la circulación; su que engloban las vías respiratorias y produ-
producción se regula por un gen localizado en el cen atrapamiento aéreo distal, progresivo, que
cromosoma 14. El déficit de alfa 1 antitripsina es las destruye, p. ej., tras lesiones tuberculosas. ~
una enfermedad genética de herencia autosómica También se califican así los que aparecen tras
Semiolog ía y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

resecciones de parte del pulmón, con lo que aparece caquexia, por el aumento en la liberación
el resto rellena el espacio existente (enfisema de TNFa en respuesta a la hipoxia, y quizá tam-
compensador). bién por el mayor trabajo respiratorio. La severidad
Enfisema local o peribronquiolar: Acompaña a de las alteraciones en el intercambio gaseoso y las
la formación de granulomas en el parénquima manifestaciones clínicas dependen de la respuesta
(por depósitos de polvos inertes, carbono o síli- ventilatoria. En algunos enfermos aumenta mucho el
ce) y el tejido cicatriza! favorece la aparición de trabajo respiratorio, tienen disnea crónica y un alto
ampollas , vesículas, o «blebs» de paredes finas y volumen minuto (producto volumen corriente x fre-
llenas de aire. cuencia respiratoria), con lo que consiguen mantener
relativamente alta la Pa0 2 y normal la PaC0 2 • Otros,
con menor esfuerzo ventilatorio y menos disnea, in-
FISIOPATOLOGÍA crementan poco el volumen minuto pero a expensas
de mantener una gran hipoxemia y retención de car-
El atrapamiento aéreo y la destrucción de los tabiques bónico.
favorece la aparición de una insuficiencia respirato-
ria de mecanismo obstructivo, en la que se altera la
relación ventilación-perfusión. Existe un aumento Pruebas diagnósticas complementarias
del espacio muerto funcional y disminución de la su-
La espirometría muestra un patrón obstructivo,
perficie de intercambio.
con aumento de la capacidad pulmonar total
Parte del aire inspirado no puede salir y aumenta (a expensas de aumentar el volumen residual)
la capacidad pulmonar total a expensas del volumen y disminución de la capacidad vital. La capa-
residual (no funcional), lo que aplana el diafragma cidad de reserva inspiratoria y espiratoria está
y le coloca en una posición de peor funcionalidad; muy disminuida y también lo está la FEV1 (Fig.
todo ello altera la retracción elástica del pulmón. 38.3).
Al progresar se destruyen los tabiques y los lechos La difusión de los gases disminuye por estar al-
vasculares, hay áreas ventiladas y no perfundidas, se terada su distribución y ser menor la superficie
favorece que el pulmón pierda elasticidad, que au- de intercambio.
mente el espacio muerto y disminuya la superficie de La gasometría revela fundamentalmente hipoxe-
intercambio. La circulación pulmonar se altera, no mia, manteniéndose mucho tiempo la pC0 2 nor-
solo porque el flujo se modifica, sino que también lo mal a expensas de hiperventilación; diferencia
hace la relación flujo/presión . Por la destrucción de alvéolo-arterial de oxígeno aumenta ligeramente
tabiques disminuyen los lechos vasculares y se altera y sin saberse la causa, no suele haber poliglo-
la síntesis del óxido nítrico producido en ellos, lo que bulia.
junto a la vasoconstricción debido a la hipoxia favo-
La radiología del tórax es semejante en inspi-
rece la hipertensión pulmonar.
ración y espiración, la placa muestra el atrapa-
Sus consecuencias son la hipoxemia, la hiperten- miento y la pérdida de la trama broncovascular,
sión pulmonar y el aumento de la diferencia alvéolo- con falta de parénquima en la periferia y las cos-
arterial de 0 2 (Pa0z-PA0 2 ), que se compensa con hi- tillas están horizontales (en la Rx PA de tórax se
p erventilación y pocas veces con poliglobulia. cuentan más de los siete arcos costales anteriores
superpuestos a la imagen del pulmón). El espa-
cio retroesternal está aumentado y los diafrag-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS mas aparecen aplanados, por lo que los ángulos
costo y cardiofrénicos en vez de agudos se hacen
El prototipo es el enfermo soplador rosado («pink pu-
rectos. A veces se aprecian áreas redondeadas
ffer»] {Tabla 38-1) que refiere una historia de disnea
traslúcidas avasculares en la periferia (bullas o
progresiva, tos, a veces crónica y habitualmente seca, blebs) .
astenia y pérdida de peso.
La TAC tiene mayor sensibilidad y especificidad
En la exploración física, la inspección revela sig- en el enfisema, pero no suele ser necesaria para
nos de atrapamiento: tórax insuflado (en tonel), cos- su diagnóstico.
tillas horizontalizadas, disminución de la movilidad
y espiración alargada. La punta cardiaca está cubierta La difusión del CO está disminuida en el enfisema,
por el pulmón, por lo que no se palpa y las vibracio- siendo normal en la bronquitis crónica.
nes vocales están disminuidas. La auscultación de-
muestra un murmullo vesicular disminuido y ruidos
cardiacos apagados. La percusión es timpánica, la
Evolución
matidez cardiaca y la submatidez hepática desapa- Suele ser progresiva, con fases de agravamiento por
recen y las bases pulmonares están descendidas. La sobreinfecciones respiratorias o rotura de bullas y
322 disnea se inicia si el sujeto tiene un FEV1 del 40 % paso de aire a la pleura. Rara vez se desarrolla insufi-
y es de reposo si baja al 25 %. En fases avanzadas ciencia cardiaca derecha.
CAPITULO 38 Grandes síndromes de la patología respiratoria

ENFERMEDADES QUE CURSAN en casos de ascitis, cirugía abdominal, etc. Enton-


CON UN SÍNDROME RESTRICTIVO ces se denominan atelectasias laminares o colapsos
lineales y son visibles en la Rx del tórax. También
Son la atelectasia, la condensación, la afectación in- aparecen cuando el bronquio del lóbulo medio del
tersticial o fibrosis pulmonar y la dificultad respirato- pulmón derecho es comprimido por ganglios vecinos
ria del adulto (distrés). (p. ej., por tuberculosis o cáncer bronquial).

Fisiopatología
ATELECTASIA El pulmón atelectásico origina una insuficiencia res-
Concepto piratoria restrictiva, en la que: a) aumenta el trabajo
respiratorio , ya que el plumón tiene disminuida su
Etimológicamente atelectasia significa sin expansión;
elasticidad; b) se altera la relación ventilación-perfu-
es una situación en la que el pulmón disminuye de
sión (efecto cortocircuito o shunt), ya que la sangre
volumen por la pérdida de aire en sus alvéolos, cuyas
que llega a esa zona no se oxigena y c) disminuye la
paredes se colapsan; en cierta manera sería una lesión
superficie de intercambio gaseoso .
especular al enfisema.

Etiopatogenia
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Se produce por:
Dependen de su extensión y se añaden las de la en-
Obstrucción: entonces se bloquea completamente fermedad causal. A veces hay dolor costal, disnea en
la renovación del aire alveolar por un obstáculo. relación con el aumento del trabajo respiratorio, cia-
Este puede estar dentro de la luz bronquial (se- nosis por la hipoxemia y fiebre si existe sobreinfec-
creciones, cuerpos extraños aspirados, etc.), en ción en la zona atelectásica.
la pared (edema o tumor) o fuera de ella, extra-
parietales (masas que comprimen, adenopatías,
etc.). Exploración física
El aire atrapado va desapareciendo por varios Si la atelectasia es extensa se puede observar retrac-
mecanismos: a) si la obstrucción es en válvula se ción costal en la zona afecta y disminución de los
favorece su salida y no la entrada; b) a través de movimientos del hemotórax. La palpación permite
los poros interalveolares de Khon que comuni- reconocer la disminución de las vibraciones vocales.
can los alvéolos no ventilados con otros que sí lo La percusión sobre la zona afecta es mate y la auscul-
están por los que escapa el gas; c) por los canales tación revela la desaparición del murmullo sobre ella
bronquioalveolares de Lambert que funcionan y la abolición de las vibraciones vocales.
de igual manera, y d) por difusión de los gases
desde los alvéolos no ventilados a los vecinos Exploraciones complementarias
que sí lo están. para el diagnóstico
Compresión : Si el contenido existente entre las La espirometría, en pacientes con atelectasia extensa,
hojas de la pleura (aire en el neumotórax o lí- demu estra una insu ficiencia ventilatoria restrictiva
quido en el derrame) comprime el parénquima con disminución de la capacidad vital. La gasometría
pulmonar vecino, favorece su vaciamiento y el revela una hipoxemia no corregible con el aumento
colapso de las paredes. de la FiO2 por la presencia del slwnt. La Rx de tórax
Disminución de surfactante: Esta es una sus- demuestra que el pulmón afecto ocupa menos volu-
tancia proteica con propiedades tensoactivas men, su trama broncovascular está agrupada y refor-
sintetizada por los neumocitos tipo 2 y cuya zada ofreciendo una imagen de densidad en ocasiones
misión es mantener abiertos los alvéolos. Si dis- de forma triangular. A ella se une una desviación de
minuye su producción, las paredes se adhieren estructuras (cisuras, corazón, diafragma, mediastino)
y se vacía el aire que contienen. Esto sucede en hacia el lado de la lesión ya que ocupan el volumen
el recién nacido inmaduro (membrana hialina). colapsado). y las costillas se aproximan disminuyen-
por respirar oxígeno puro largo tiempo, en trau- do el tamaño de los espacios intercostales.
matismos directos sobre el tórax o en situacio-
nes de shock.
CONDENSACIÓN PULMONAR
Tipos de atelectasia
Puede afectar todo un pulmón, un lóbulo, un segmen- Concepto y causas
to o parte de él. Son características las que aparecen Son un conjunto de enfermedades en las que el aire
en las bases del pulmón si se movilizan poco, están alveolar está sustituido por líquido, sangre o pus, lo -m
comprimidas o acumulan secreciones, lo que sucede que implica que no suele haber pérdida de volumen.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

broncofonía, pectoriloquia e incluso un soplo tubá-


rico.
Tabla • Patogenia y causas
más frecuentes de la condensación Pruebas complementarias para el diagnóstico
pulmonar La espirometría demuestra un patrón restrictivo en
el que la capacidad vital está disminuida en propor-
Mecanismos Causas ción a la extensión de la condensación. La capacidad
Procesos Infecciosas: neumonías funcional residual disminuye y el volumen residual
inflamatorios No infecciosas: aspiración es normal. La gasometría demuestra hipoxemia y en
de gases inertes determinados casos hipercapnia y acidosis respira-
toria. En la radiología de tórax el alvéolo (densidad
Estasis Insuficiencia ventricular aire= negro) se sustituye por densidad agua (líquido
circu latoria izquierda
= blanco) ; al estar la luz bronquial permeable (con
Hemorragia Hemosiderosis pulmonar aire) y rodeada por la condensación (densidad agua)
alveolar se hace visible aquella, originando la llamada ima-
gen de broncograma aéreo. Para ubicar la condensa-
ción en la radiología es útil el signo de la silueta:
los límites del órgano afecto se confunden con las
estructuras que contactan con él, pero sus límites son
netos cuando están en planos distintos , es decir, si no
contactan.
La Tabla 38-2 recoge las causas y los mecanismos im-
plicados.
AFECTACIÓN INTERSTICIAL: FIBROSIS
PULMONAR
FISIOPATOLOGÍA
Concepto y causas
La sustitución del aire por líquido induce a:
Desde los alvéolos y por fuera de las vías respiratorias
Una insuficiencia ventilatoria de tipo restrictivo hay un espacio virtual que es el intersticio y que sirve
ya que el pulmón pierde sus propiedades elásticas de sostén a bronquios y a vasos. A nivel bronquial se
y su movilidad está limitada. compone por tejido rico en colágeno y fibras elásticas,
Una alteración de la relación ventilación/perfu- que supone el 20 % de la masa pulmonar. Se califican
sión ya que los alvéolos ocupados no se ventilan de fibrosis las situaciones que cursan con un aumento
pero se perfunden. de ese tejido conjuntivo pulmonar. El criterio es ana-
Una alteración en la difusión de los gases con dis- tomopatológico, pero por sus manifestaciones clíni-
minución de la superficie de intercambio, ya que el cas y los hallazgos funcionales y radiológicos pueden
área no ventilada no es eficaz para esos fines. diagnosticarse en la clínica. La Tabla 38-3 expresa
sus principales causas.
Todos esos cambios aumentan el trabajo respirato-
rio e inducen hipoxemia.
Fisiopatología
Manifestaciones clínicas Las neun10patías intersticiales cursan con:
Debido al aumento de trabajo respiratorio aparece Insuficiencia respiratoria de tipo restrictivo, ya
disnea, y por la hipoxia cianosis. Según su causa se que el pulmón fibroso esta rígido y se distiende
acompaña de fiebre, dolor torácico , tos, expectora- con dificultad.
ción, hemoptisis y otras manifestaciones de la enfer- Aumenta el trabajo respiratorio .
medad responsable o causal. Hay un trastorno de la difusión de los gases, ya
que el aire de los alvéolos se aleja de la hemoglo-
Exploración física bina del hematíe al estar engrosado el intersticio.
El tejido intersticial comprime los vasos y favo-
La inspección revela taquipnea y disminución de la
rece la aparición de la hipertensión pulmonar, a
movilidad del hemitórax afecto. A la palpación hay
la que contribuye también la hipoxemia.
aumento de las vibraciones vocales ya que el parén-
quima transmite mejor la onda sonora, siempre que
el bronquio de esa zona este permeable. La percusión Etiopatogenia
es mate, ya que el aire alveolar se ha sustituido por El daño de las células alveolares y endoteliales se
líquido. A la auscultación el murmullo desaparece, produce por vía inhalatoria o vascular e induce el
ya que el aire no entra en el alvéolo, las vibraciones reclutamiento de células inflamatorias. La agresión
vocales están aumentadas y con frecuencia se aprecia aguda se transforma en inflamación porque partici-
CAPÍTULO 38 Grandes síndromes de la patología respiratoria

crepitantes de carácter metálico en las bases pulmo-


nares por estar la vía aérea terminal atrapada en la
Tabla Etiopatogenia de la fibrosis fibrosis.
pulmonar
Pruebas complementarias para el diagnóstico
Exposición ocupacional y ambiental
Polvos inorgánicos: silicatos (asbesto) o La espirometría muestra un patrón restrictivo. En
metales pesados (cobalto) la gasometría hay hipoxemia y por la hiperventila-
Polvos orgánicos, bacterias y hongos ción, hipocapnia y alcalosis respiratoria. Técnicas
(pulmón del granjero), animales (enfermedad especiales permiten comprobar que la difusión del
de los cuidadores de aves), protozoos Co (DLCO) está disminuida. La Rx del tórax muestra
aumento de la trama broncovascular.
Infecciones:
Tuberculosis, virus, hongos y bacterias
Radiaciones ionizantes
DIFICULTAD (DISTRÉS) RESPIRATORIA
Tumores DEL ADULTO
Linfangitis carcinomatosas
Concepto
Enfermedades cardiovasculares
Estenosis mitral e insuficiencia cardiaca Es una insuficiencia respiratoria aguda y grave por
izquierda afectación alveolointersticial en la que hay infiltrados
pulmonares bilaterales y disminución de la distensi-
Enfermedades del tejido conectivo bilidad pulmonar, ello junto con hipoxemia grave.
LES, artritis reumatoide, esclerodermia
Sustancias químicas y fármacos Etiopatogenia
Antineoplásicos (busulfán, metotrexato)
Acompaña y complica la evolución de múltiples en-
Antiinflamatorios (penicilamina, sales de fermedades : traumatismos torácicos graves, sepsis,
oro)
transfusiones múltiples , inhalación de cáusticos, que-
Terapia cardiovascular (amiodarona)
maduras extensas, cuadros de coagulación intravas-
Antibióticos (nitrofurantoína) cular diseminada, shock, etc. ; lesionando el endotelio
capilar pulmonar o la membrana epitelial. Ese daño
favorece una mayor permeabilidad de la membrana
alveolocapilar y el paso desde el plasma de líquido
pan macrófagos y linfocitos T. La respuesta crónica rico en proteínas y a veces hemorrágico al intersticio
muestra un patrón de inflamación y fibrosis, a veces pulmonar y los alvéolos , causando infiltrados y dis-
con daño alveolar difuso. En ocasiones hay granu- minución de la distensibilidad.
lomas con acúmulo de linfocitos T, macrófagos y
células epiteloides en el parénquima pulmonar. La Fisiopatología
respuesta fibrótica supone proliferación de fibroblas-
Hay rigidez pulmonar que condiciona una insuficien-
tos y producción de un exceso de colágeno y matriz
cia respiratoria restrictiva y un slwnt, que condiciona
extracelular. Todo ello conduce a la destrucción de
el desarrollo de hipoxemia.
la arquitectura normal, que altera el intercambio ga-
seoso. La persistencia de la inflamación y las lesiones
puede deberse a una exposición mantenida al agente Manifestaciones clínicas
causal, el antígeno o fallos en los mecanismos antiin- Derivan de la enfermedad causal y se añaden las de
flamatorios pulmonares. la insuficiencia respiratoria aguda: disnea, hiperven-
tilación, etc. Los cambios radiológicos consisten en
Manifestaciones clínicas infiltrados reticulares difusos que progresan a infil-
trados alveolares bilaterales y qu e son la causa de la
Consiste en disnea progresiva, cianosis , tos seca y
disminución en la distensibilidad y la hipoxemia. El
acropaquias.
diagnóstico exige, además del de la enfermedad cau-
sal demostrar el patrón radiológico, la disminución
Exploración física del tórax en la distensibilidad (< de 50 ml/cm de agua) y una
La inspección evidencia taquipnea. La palpación y la hipoxemia (PaO2 < 50 mm Hg con FiO2 > 0 ,6) con pre-
percusión son poco útiles. La auscultación demuestra sión capilar pulmonar menor a 15 mm Hg.

325
·139
Síndrome de hipertensión
pulmonar
Joan Gil Carbonell, Concepción Martín Serrano, Luis M. Hernández Blasco

INTRODUCCIÓN: RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
La circulación pulmonar se inicia en la válvula
pulmonar del ventrículo derecho y se extiende
hasta la desembocadura de las venas pulmona-
res, en la pared de la aurícula izquierda.
La función principal de la circulación pulmo-
nar es:
Mantener el flujo de sangre escasamente
oxigenada y rica en C0 2 hacia los capilares
pulmonares, donde tiene lugar el intercambio
de gases, y hacer llegar después la sangre rica
en oxígeno a la circulación sistémica.
Otras funciones de la circulación pulmonar son:
Aportar nutrientes al parénquima pulmonar.
Transportar moléculas que son degradadas
o sintetizadas en el pulmón, con importante
función metabólica.
Filtrar elementos extraños que podrían
embolizar órganos más sensibles, como el
sistema nervioso central.
Una característica particular del pulmón es
que posee una doble circulación. Las arterias
bronquiales transportan sangre arterializada
que nutre y aporta oxígeno a las vías respi-
ratorias. Las venas bronquiales drenan parte
de su contenido en las venas pulmonares.
Así, la circulación bronquial constituye una
derivación fisiológica derecha-izquierda.
La característica principal de la circula-
ción pulmonar es que constituye un lecho
vascular de baja resistencia que puede aco-
modarse a grandes incrementos del gasto
procedente del corazón derecho, como
ocurre durante el ejercicio, con pequeños
aumentos de presión. Esta baja resistencia
al flujo depende de dos factores morfofun-
cionales: a) Escasez de fibras musculares
en los vasos arteriales, lo que permite una
326
distensión pasiva ante el aumento del gas-
CAPÍTULO 39 Síndrome de hipertensión pulmonar

ve AD VD AP MC VP Ai VI Ao

A 5 20/8 (12) 6 6 120/80

Normal

s __5_ _ ffi
HP precapilar
,sns 132~\.::
, =======6=======-'~ - -6- - ~ 8 : f , . . . . - 12_0_
18_0_

C 5 ~ 5 45/5 - 4-5-/2_5_(-32_)__,E==:::::2=5=========L- - r=lL


fr
25_ _ _,;, 25 20/5f_1_2-0/_7_0_

HP poscap~ ~
Figura Representación de las presiones (en mm Hg) en la circulación pulmonar normal (A), en una hiper-
tensión (HP) precap ilar por aumento de resistenc ia (B), y una hipertensión poscap ilar secundaria a una estenos is
mitra l (C). Están representadas las presiones en la vena cava superior e inferior (VC), la aurícula derecha (AD),
el ventrículo derecho (VD), la arteria pulmonar [sistólica/d iastól ica (media)] (AP), la microcirculación (MC), las
venas pu lmonares (VP), la aurícula izquierda (Al ), el ventrículo izqu ierdo (M ) y la ao rta (Ao).

to; b) Apertura de vasos que, en condiciones norma- la respiración. En determinadas situaciones pato-
les, se encuentran funcionalmente cerrados. lógicas, como en la enfermedad pulmonar obstructiva
La presión en la arteria puhnonar está determina- crónica, una elevada presión intratorácica durante la
da por tres factores: espiración puede aumentar la resistencia vascular al
disminuir el calibre de los vasos. Véase Fig. 39-1.
Resistencia vascular pulmonar (RVP) , situada en
las arteriolas precapilares de entre 0,1 y 1 mm
de diámetro , que pueden modificar la resistencia CONTROL FISIOLÓGICO DE LA CIRCULACIÓN
del lecho vascular mediante su constricción o PULMONAR
dilatación.
Presión en la aurícula izquierda (PAI), que se El tono vascular de la circulación pulmonar normal
transmite de forma retrógrada a todo el circuito depende de un delicado equilibrio entre varios facto -
pulmonar. res como son:
Gasto cardiaco (GC). Control neural: Los vasos pulmonares expresan
Estos tres factores permiten calcular la presión receptores adrenérgicos alfa (vasoconstrictores)
en la arteria pulmonar (PAP) mediante una fórmu- y beta (vasodilatadores) cuya estimulación mo-
la en la que la presión del capilar pulmonar eferente, difica el tono vascular.
habitualmente igual a la PAI, se suma al producto del Control humoral: Distintos mediadores va -
gasto cardiaco por la resistencia vascular pulmonar: soactivos, liberados localmente por las células
endoteliales, o procedentes de la circulación,
PAP = PAI + (GC x RVP)
mantienen el equilibrio entre la vasodilatación y
Sin embargo, es preciso tener en cuenta que otros la vasoconstricción, además de controlar la proli-
dos factores menores no incluidos en esta fórmu - feración de las células vasculares y la agregación
la pueden influir en la PAP: a) Viscosidad: la ley de las plaquetas en el lecho vascular.
de Poiseuille muestra que la resistencia al paso de Hipoxia alveolar. Es el mayor determinante del
un líquido a través de un tubo está en función de la tono de la circulación pulmonar. La vasocons-
viscosidad del líquido, además de la longitud y radio tricción secundaria a la hipoxia alveolar desvía
del tubo. La viscosidad adquiere importancia clínica la circulación desde áreas del pulmón mal ven-
cuando el hematocrito es superior al 60 %. b) Presión tiladas hacia zonas con concentración normal
intratorácica : los vasos pulmonares están influidos de oxígeno, permitiendo un intercambio óptimo
327
por los cambios de presión que tienen lugar durante en zonas del pulmón bien ventiladas y bien per-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

fundidas. Los vasos de resistencia del pulmón los mediadores que controlan la circulación pulmo-
detectan la caída de la presión de oxígeno de sus nar. El déficit de óxido nítrico y prostaciclina y la
alvéolos y se produce una despolarización de la sobreexpresión de endotelina, serotonina y trom-
membrana de las células del músculo liso de las boxano provocan un predominio de la vasocons-
arteriolas , que provoca la entrada de calcio en tricción , proliferación de las células del endotelio y
las células y con ello la vasoconstricción. La va- músculo liso y trombosis intravascular, fenómenos
soconstricción por hipoxemia tiene una impor- que conducen a un remodelado de los vasos con re-
tancia capital, en el desarrollo de hipertensión ducción de su calibre y aumento de la resistencia
pulmonar en situaciones de hipoxia. vascular.
A causa de la baja presión de la circulación, la La disfunción endotelial y los cambios secundarios
gravedad también influye en la distribución del flujo de la morfología vascular son el sustrato de las for-
sanguíneo a través de los pulmones, especialmente en mas idiopáticas de la hipertensión arterial pulmonar
bipedestación, de tal forma que el flujo es mayor en y de la que aparece asociada a algunas colagenosis,
las bases pulmonares, en tanto que en los vértices la cardiopatías congénitas con cortocircuito izquierda-
mayoría de los vasos se encuentran funcionalmente derecha, infección por el virus de inmunodeficiencia
obliterados. humana o tras exposición a algunos fármacos.
En la enfermedad tromboembólica venosa la obs-
trucción aguda de una gran parte del lecho vascular
HIPERTENSIÓN PULMONAR es responsable de un aumento agudo de las RVP y
de la PAF, que puede hacer claudicar el ventrículo
DEFINICIÓN derecho. La persistencia y organización de los trom-
bos es responsable de la hipertensión pulmonar
La hipertensión pulmonar se define por la presencia, tromboembólica crónica, reversible tras la extracción
en el cateterismo cardiaco derecho, de una presión de la obstrucción mecánica mediante una tromboen-
media en la arteria pulmonar mayor de 25 mm Hg. darterectomía.
Cuando la hipertensión se origina en algún punto
En las enfermedades respiratorias el origen de la
entre las venas pulmonares y el ventrículo izquier-
hipertensión es probablemente multifactorial. La
do, recibe el nombre de hipertensión poscapilar; la
hipoxia alveolar aguda produce una constricción
derivada del aumento de las resistencias vasculares
reversible de los vasos de resistencia pulmonar. La
recibe el nombre de hipertensión precapilar, dado
persistencia de la hipoxia durante un periodo de
que su origen se encuentra proximal a los vasos de
tiempo prolongado induce cambios en la estructura
resistencia precapilares (Fig. 39-1).
de los vasos que hacen parcialmente irreversible el
aumento de las resistencias. La disminución de la
FISIOPATOLOGÍA Y CAUSAS presión parcial de oxígeno (PO 2 ) en la sangre venosa
Aunque de la fórmula PAP = PAi + (GC x RVP) po- que llega al pulmón y la acidosis pueden potenciar
la vasoconstricción inducida por la hipoxia alveolar,
dríamos deducir que la hipertensión pulmonar pue-
aunque en menor medida. Todas las enfermedades
de aparecer como consecuencia de un aumento en
cualquiera de sus tres factores , son el aumento de la capaces de producir hipoxia crónica como la enferme-
dad pulmonar obstructiva crónica, las deformidades
presión auricular izquierda y de las resistencias vas-
de la caja torácica o la hipoventilación con pulmones
culares pulmonares las que tien en más importancia
en la práctica clínica, dado que el aumento del flujo, normales que tiene lugar en algunos pacientes obesos,
con enfermedades neuromusculares o con síndrome
en condiciones fisiológicas (ejercicio). es fácilmente
acomodado por el lecho vascular, y en situaciones pa- de apnea durante el sueño, pueden producir hiper-
tensión pulmonar. En las enfermedades que cursan
tológicas , como en las cardiopatías con cortocircuito
izquierda-derecha, la hipertensión aparece después con fibrosis pulmonar, la retracción del parénquima
de un remodelado de la estructura de los vasos que distorsiona, oblitera y disminuye la extensión del
conduce a un aumento de las resistencias vasculares. lecho capilar.
Este remodelado es más precoz e intenso en los cor-
tocircuitos de cámaras de alta presión (comunicación Aumento de la presión capilar pulmonar
interventricular y conducto arterioso -ductus arterio- La elevación de la presión en la aurícula izquierda,
sus- persistente) que en la cámaras de baja presión como ocurre en la insuficiencia ventricular izquierda
(comunicación interauricular). Si no se ha desarrolla- o en la estenosis mitral, se transmite de forma retró-
do remodelado , el cierre del cortocircuito normaliza- grada al lecho capilar pulmonar. Si esta elevación se
rá la presión en la circulación pulmonar. mantiene durante un periodo prolongado, como ocu-
rre en la estenosis mitral, aparecen cambios funcio-
Aumento de las resistencias nales y estructurales en los vasos de resistencia, con
Como consecuencia de una disfunción del endotelio lo que se añade un factor precapilar a la hipertensión
328
vascular pulmonar se produce un desequilibrio en pulmonar.
CAPITULO 39 Síndrome de hipertensión pulmonar

MANIFESTACIONES CLÍNICAS Ecocardiografía


DE LA HIPERTENSIÓN PULMONAR Permite medir el tamaño de las cavidades derechas,
estimar la presión en la arteria pulmonar y la función
Síntomas de ambos ventrículos. Es poco sensible para detectar
Aparecen tardíamente, únicamente cuando la hiper- la hipertensión no grave, pero permite evaluar la evo-
tensión pulmonar es severa o grave, mientras que en lución de la hipertensión y la respuesta al tratamiento.
la hipertensión leve los pacientes permanecen asin-
tomáticos. Los pacientes con hipertensión pulmonar Radiografía de tórax
grave presentan disnea, probablemente por dismi- Permite identificar la prominencia del segundo arco
nución de la distensibilidad pulmonar y bajo gasto izquierdo de la silueta cardiaca y de las sombras bi-
cardiaco. El síncope con el esfuerzo por bajo gasto y liares, como expresión de la dilatación de la arteria
el dolor torácico por isquemia del ventrículo derecho pulmonar y de sus ramas derecha e izquierda. Aunque
aparecen en la enfermedad avanzada. estos signos son poco sensibles en el diagnóstico de la
hipertensión, en algunos casos la radiografía es muy
Signos útil para identificar su origen. Ejemplos típicos serían
La exploración física del paciente con hipertensión el crecimiento de las cavidades cardiacas izquierdas
pulmonar muestra un segundo tono cardiaco desdo- en la enfermedad valvular mitral o en la insuficiencia
blado con un aumento del componente pulmonar, cardiaca izquierda, o la hiperinsuflación torácica de la
debido al cierre retrasado de las sigmoideas del ven- enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
trículo derecho. En ocasiones, es posible palpar una
onda pulsátil sobre la arteria pulmonar durante la Electrocardiograma
sístole, en el segundo espacio intercostal izquierdo. Si Es útil cuando la hipertensión ha provocado la hi-
ya se ha desarrollado hipertrofia ventricular derecha, pertrofia del ventrículo derecho y cuando informa de la
puede palparse un «latido» paraesternal izquierdo, y presencia de enfermedad de las cavidades izquierdas.
puede aparecer un cuarto ruido cardiaco. Si el ven-
trículo se ha dilatado y existe regurgitación tricuspí-
dea, aparece un soplo holosistólico, que aumenta con EDEMA PULMONAR
la inspiración, y ondas «y» prominentes en el pulso
venoso yugular. Cuando la sobrecarga de presión hace CONCEPTO
fracasar el ventrículo derecho, aparece congestión he-
pática con reflujo hepatoyugular y edema periférico. Es un exceso de líquido extravascular en el pulmón.
La cianosis es un hallazgo tardío, y es consecuencia
de varios factores como el bajo gasto cardiaco, los tras- RECUERDO FISIOLÓGICO
tornos ventilación/perfusión o la presencia de un cor-
Las bases fisiológicas de la filtración de líquido y
tocircuito derecha-izquierda a través del agujero oval
(foramen ovale). proteínas a través de una membrana semipermeable
vieron enunciadas en la ley de Starling. Su ecuación
muestra que el flujo de un líquido a través de una
DIAGNÓSTICO DE LA HIPERTENSIÓN membrana es el producto de la permeabilidad de di-
cha membrana por la resultante de las presiones hi-
PULMONAR drostática y osmótica implicadas.
Cateterismo cardiaco Q = K (Pcm - Pint) - cr (¡¡; me - n int)
La introducción de un catéter en la circulación pul-
Los componentes de esta ecuación (Fig. 39-2) son:
monar es la única exploración que proporciona un
diagnóstico de certeza al permitir la determinación Q: flujo de líquido filtrado desde la microcircu-
directa de las presiones. El catéter de Swan-Ganz per- lación al intersticio.
mite obtener el trazado de presiones en la arteria pul- K: coeficiente de filtración (del agua) de la pared
monar. Posteriormente, mediante un globo hinchable capilar.
que detiene el flujo, se mide la presión de «enclava- Pcm y Pint: presión hidrostática en la microcir-
miento», que es la presión de los capilares del pul- culación e intersticio, respectivamente.
món, equivalente a la presión de la aurícula izquierda cr : coeficiente de «reflexión» osmótica. Represen-
transmitida de forma retrógrada hasta el extremo del ta la eficacia de la barrera para oponerse al paso
catéter. Una presión capilar pulmonar (CPC) elevada de proteínas . Si el coeficiente fuera 1, la barrera
confirma que la hipertensión está originada más allá sería impermeable, mientras que O representaría
del lecho capilar (hipertensión poscapilar), mientras una completa permeabilidad. Se estima que en
que una presión capilar normal manifiesta que la el pulmón el coeficiente es 0,9 para el endotelio
causa de la hipertensión se encuentra proximal a los de la microcirculación y prácticamente 1 para el
capilares (hipertensión precapilar). epitelio alveolar.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

7tme y 7t int: representan la presión osmótica tral) o por disfunción ventricular izquierda, se trans-
de las proteínas en la microcirculación y en el mite de forma retrógrada hasta la microcirculación,
intersticio, respectivamente. produciéndose un aumento del paso de líquido al
intersticio.

FISIOPATOLOGÍA Disminución de la presión hidrostática intersticial (Pint)


En condiciones normales , en la microcirculación pul- Es una causa menor en la formación de edema. Se
monar se produce el paso fisiológico de una peque- ha propuesto su importancia en situaciones en que
ña cantidad de líquido y proteínas desde el espacio un déficit de un agente tensoactivo aumentaría la ten-
vascular al intersticio, a través de pequeñas aberturas sión superficial alveolar y haría más negativa la Pint
entre las células endoteliales. El líquido y las proteí- (como ocurre en el síndrome de dificultad respirato-
nas que llegan al espacio intersticial no pueden pasar ria del recién nacido por inmadurez en la producción
al espacio alveolar debido a la unión perfecta de su de surfactante).
epitelio, y son drenados por los vasos linfáticos hasta
la circulación sistémica (Fig. 39-2). Disminución del gradiente de presión osmótica
En condiciones patológicas, cuando el paso de lí- transmembrana (1t me - 1t int)
quido al intersticio supera la capacidad del drenaje
linfático, el líquido rellena el espacio intersticial, Al igual que en la hipoalbuminemia intensa, la dis-
«rompe » la pared alveolar y ocupa los espacios aé- minución de la presión oncótica plasmática debería ir
reos. A partir de la ecuación de Starling, pueden pre- acompañada de una disminución de la concentración
decirse las situaciones en las que puede desarrollarse de proteínas en el líquido intersticial (con lo que el
un edema pulmonar. Son las siguientes: gradiente se mantiene). No obstante, se ha observado
que cuando disminuye la presión oncótica del plas-
ma, aumenta el drenaje linfático, lo que significa que
Aumento de la presión hidrostática capilar (Pmc) está aumentada la filtración al intersticio. Probable-
Un aumento de la presión en la aurícula izquierda, ya mente esta situación sólo tiene trascendencia clínica
sea por un impedimento al flujo a través de la válvula si coexiste un aumento de la presión hidrostática ca-
auriculoventricular (como ocurre en la estenosis mi- pilar o un aumento de la permeabilidad vascular.

Pint -2
1

- - - - - - - ----'I-F-=-F--""111
ARTERI OLA VÉN ULA
Pmc 9 1tmc 24

LECHO CAPILAR

Figura Factores que intervienen en el intercambio de líquidos en el pu lmón. K (coeficiente de fi ltrac ión) y
a (coeficiente de refl exión) son prop iedades de la membrana alveolocapi lar. Pmc es la pres ió n hidrostática en la
microcircu lación y Pintes la presió n hidrostática del intersticio; 1t me y 1t int son la presión osmótica de la m icro-
circulación y del intersticio, respectivamente. La resu ltante de las fuerzas favorece el paso constante de líquido
330
al intersticio, que se el imina mediante el drenaje linfático. Los valores se expresan en mm Hg.
CAPITULO 39 Síndrome de hipertensión pulmonar

Figura Radiografía de tóra x posteroanterior en un edema agudo de pulmón. El esquema adjunto permite
apreciar mejor la presencia de vasos de calibre aumentado en los lóbulos superiores (hipertensión venosa) (1),
líneas A (2) y B (3) de Kerley (edema intersticia l), y el engrosamiento de la cisura menor (edema subpleural ) (4).
Las áreas sombreadas muestran el edema alveolar perihi liar.

Aumento de la permeabilidad capilar (cr) respiratorias. La presencia de cianosis indica la gra-


El aumento de la permeabilidad del endotelio capilar vedad del trastorno del intercambio gaseoso.
es el origen del edema pulmonar que aparece tras una
amplia variedad de agresiones al pulmón, como la in- Radiografía de tórax
halación de tóxicos o la sepsis. Como consecuencia Es el método más sensible para el diagnóstico precoz
del daño de la unidad alveolocapilar por mediado- del edema pulmonar. En el edema de origen cardiogé-
res de la inflamación, se extravasa un líquido rico en nico , la hipertensión venosa pulmonar se manifiesta
proteínas y el cuadro se conoce como síndrome de por un aumento del calibre de los vasos en los lóbu los
dificultad respiratoria del adulto. superiores, como expresión de la redistribución del
flujo de las bases pulmonares a los vértices. El paso
Descenso del drenaje linfático de líquido al intersticio hace que se deposite a nivel
perivascular y en los tabiques interlobulillares; su
Es una circunstancia no contemplada en la ecuación. expresión radiológica son la mala definición de las
El drenaje linfático aumenta en cualquier situación líneas que delimitan las sombras vasculares y la apa-
de edema pulmonar en un intento de limitar el lí- rición de las líneas A y B de Kerley, respectivamente.
quido extravascular. Una obstrucción linfática que Cuando el líquido invade los alvéolos , aparece el pa-
bloqueara el drenaje, como la que existe en la linfan- trón alveolar, de bordes imprecisos y confluentes que,
gitis carcinomatosa, podría disminuir su eficacia en típicamente, adoptan una distribución perihiliar en
limitar el edema pulmonar desencadenado por otra «alas de mariposa» (Fig. 39-3).
causa.

Valoración de la función pulmonar


MANIFESTACIONES CLÍNICAS Las alteraciones en las pruebas de función pulmonar
se correlacionan con la cantidad de líquido extrava-
En las situación más frecuente en la clínica, como es sado. Durante la fase de edema intersticial, la acu-
el edema pulmonar cardiogénico, todos los pacientes mulación de líquido alrededor de las pequeñas vías
presentan disnea, y la dificultad respiratoria suele ser respiratorias (y posiblemente en su pared) hace que
evidente en la exploración y emperora con el decúbi- se cierren prematuramente durante la espiración, lo
to (ortopnea). Es frecuente la tos, a través de la cual el qu e causa áreas de ventilación/pe1fusión desigual,
paciente llega a expectorar un líquido rosáceo , que ha que disminuyen la PO2, pero no provocan cambios
invadido previamente el espacio alveolar. apreciables en los volúmenes pulmonares. Cuando
el líquido extravasado invade la luz alveolar, dismi-
nuyen la capacidad vital y el resto de los volúmenes
Signos pulmonares. Ello aumenta la desigualdad ventila-
La auscultación pulmonar muestra estertores crepi- ción/perfusión y provoca un importante descenso de
tantes, que se inician en las bases y pueden llegar la PO2 • La hiperventilación, que disminuye la PCO2 ,
a cubrir ambos campos pulmonares. Inicialmente, suele ser habitual en las fases iniciales, probablemen-
pueden auscultarse sibilancias debidas a edema en la te por estimulación de receptores del intersticio del ~
mucosa bronquial, que disminuye la luz de las vías pulmón.
·140
Patología general de las
enfermedades de la pleura
Luis M. Hernández Blasco, Joan Gil Carbonell, Concepción Martín Serrano

RECUERDO ANATOMOFISIOLÓGICO
La pleura, como toda membrana serosa, consta de
dos hojas: la parietal, que recubre el mediastino, el
diafragma y la pared costal, y la visceral, que recu-
bre el parénquima pulmonar. El espacio pleural es
una cavidad real de unas 10 a 20 micras de anchura,
que está comprendida entre ambas hojas pleurales.
En condiciones normales el espacio pleural está
ocupado por unos pocos mililitros de líquido pleu-
ral, que actúa como lubricante entre las superficies
pleurales permitiendo el deslizamiento de las mis-
mas durante los movimientos respiratorios. Existe
una presión intrapleural negativa que representa
el equilibrio entre dos fuerzas opuestas: la fuerza
elástica de la pared torácica dirigida hacia afuera,
y la fuerza elástica pulmonar que actúa hacia den-
tro. Su valor medio es de -5 cm H2 0, disminuye
al final de la inspiración y aumenta al final de la
espiración. Además, la presión pleural exhibe un
gradiente vertical que depende de la gravedad (es
más negativa en el vértice pulmonar), aumentan-
do a razón de 0,2 a 0,5 cm H 2 0 por cada centí-
metro en sentido caudal (es menos negativa en
las bases pulmonares).
Si se observa la estructura de la membra-
na pleural (desde la cavidad pleural hacia
las estructuras que rodea), se aprecia un
único estrato de células mesoteliales (con
numerosas microvellosidades) y una capa
conjuntiva subpleural formada por fibras
de colágeno, elastina y vasos. .
La pleura parietal recibe su vascula-
rización arterial de la circulación sisté-
mica. La irrigación de la pleura visceral
parece que varía en las distintas especies
animales según su grosor; así, en pleuras
delgadas procedería de la circulación pul-
monar, y en pleuras más gruesas (como
la del hombre) dependería también de la
CAPITULO 40 Patología general de las enfermedades de la pleura

circulación sistémica a través de las arterias bron- DERRAME PLEURAL


quiales. El drenaje venoso se efectúa en la pleura vis-
ceral principalmente hacia las venas pulmonares y Concepto
bronquiales, y en la parietal hacia las venas ácigos Se denomina derrame pleural (DP) a la acumulación
y mamaria interna. patológica de líquido en el espacio pleural
Los vasos linfáticos pulmonares se componen de
un plexo superficial, localizado en el tejido conjunti-
vo subpleural, y un plexo profundo, que rodea a los FORMACIÓN Y REABSORCIÓN DEL LÍQUIDO
bronquiolos y vasos sanguíneos para drenar hacia el PLEURAL
hilio pulmonar pasando por los tabiques interloba-
res. Entre las células mesoteliales de la pleura parie- El movimiento de líquidos a través de las membranas
pleurales está regido por la ley de Starling sobre la
tal existen unos agujeros o estomas (1 estoma/mm 2 )
dinámica de los fluidos (Fig. 40-1).
que conectan con canales linfáticos progresivamente
mayores, ello hasta drenar en sus correspondientes Qp = K (PHcap - PHpl) - (Pücap - PO pl)
ganglios mediastínicos o intercostales. Qp = flujo de líquido pleural.
La inervación de la pleura parietal en su porción K = coeficiente de filtración de la membrana pleu-
costal y en zonas periféricas de la pleura diafragmá- ral.
tica depende de los nervios intercostales, lo que ex- PH = presión hidrostática.
plica que cuando están afectados reflejan el dolor en PO = presión oncótica.
la pared torácica. La porción central de la pleura dia- cap = capilar; pl = pleural.
fragmática se inerva a través del nervio frénico (C6), La vascularización de la pleura visceral depende
haciendo que su estímulo se exprese como dolor en principalmente de las arterias bronquiales. La PH en
el hombro y el cuello. La pleura visceral no presenta la pleura visceral humana se aproxima a 24 cm H 2 O,
terminaciones nerviosas dolorosas . que con los -5 cm H 2 O del espacio pleural ofrecen
Se van a describir aquí tres grandes cuadros de la una presión de 29 cm H 2 O a favor de la salida de
patología pleural: el derrame pleural, el neumotórax líquido hacia el espacio pleural. Esta presión sería
y el fibrotórax. Los tres, al alterar la función normal contrarrestada por los 26 cm H 2 O de PO neta (34 cm
de la pleura e impedir una completa expansión pul- H 2 O del plasma menos 8 cm H 2 O pleural), por lo que
monar con la inspiración, producirán una alteración el gradiente neto para el movimiento de fluidos a
funcional respiratoria de tipo restrictivo. través de la pleura visceral sería próximo a cero . De

PLEU RA ESPACIO PLEURA


PARIETAL PLEURAL VISCERAL

PH Cap. sist. PH Cap. pulm .


30 cm H 2O 24 cm H 2O
PH Pl eural
- 5 cm H, O

PO Pleural
8 c m H, O
PO Plasma PO Pl asm a
34 cm H 2O 34 cm H , O

ESTOMA

LINFÁTICO
B) CO CEPTO MODERNO
PLEURAL

Figura Fisiología de la dinámica del líquido pleural. (Véase explicación en el texto.) PH: presión hidros- ~
tática. Po: presión oncótica. Cap.: capilar. Sist. sistémica. Pulm: pulmonar
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

ello se deduce que existe una salida continua de lí- Ante cualquier derrame pleural de causa no cono-
quido (principalmente desde la pleura parietal hacia cida, está indicado realizar una toracocentesis diag-
el espacio pleural), que no se reabsorbería a nivel de nóstica para obtener y analizar el líquido pleural. En
la pleura visceral. El espacio pleural no se inunda ocasiones su aspecto macroscópico puede ser muy
gracias al drenaje efectuado por los vasos linfáticos, orientativo:
principalmente a través de los estomas de la pleura
Un líquido amarillento claro, traslúcido, sugiere
parietal. Se calcula que la capacidad de los vasos lin-
la presencia de un trasudado.
fáticos es 28 veces superior a la formación normal de
líquido pleural. Es decir, la mayor parte del líquido Un líquido purulento h ará pensar en la existen-
pleural se produce y reabsorbe en la pleura parietal. cia de un empiema, secundario a un proceso in-
feccioso.
La presencia de sangre en la cavidad pleural (he-
ETIOPATOGENIA motórax) orientará principalmente hacia causas
traumáticas.
Existen seis mecanismos responsables de la acumula- La existencia de un líquido turbio lechoso por
ción de un volumen anormal de líquido pleural: presencia de linfa en el espacio pleural (quilotó-
Aumento de la presión hidrostática: Sobre todo rax), generalmente es secundaria a neoplasias o
por elevación de la presión venosa pulmonar, a traumatismos que afecten al conducto torácico.
como ocurre en pacientes con insuficiencia car-
diaca congestiva.
Disminución de la presión oncótica del plasma: ETIOLOGÍA
En los pacientes con hipoalbuminemia. El derrame pleural es una manifestación frecuente de
Disminución de la presión intrapleural: En la muchas enfermedades sistémicas e intratorácicas. Los
atelectasia pulmonar. principales procesos que se asocian a la aparición de
Aumento de la permeabilidad vascular: Por in- derrame pleural varían según sea un trasudado o un
tervención de mediadores inflamatorios (neumo- exudado (Tabla 40-1).
nías, enfermedades del tejido conectivo).
Alteración del drenaje linfático pleural: En
cualquier punto del sistema linfático, desde los FISIOPATOLOGÍA
estomas pleurales a los ganglios linfáticos (neo-
plasias, tuberculosis). El derrame pleural actúa como un proceso ocupan-
Paso de líquido desde el espacio peritoneal: A te espacio en la cavidad torácica, reduciendo así el
través de los vasos linfáticos o por defectos dia- volumen pulmonar y aumentando la presión intra-
fragmáticos y favorecido por la presión negativa pleural. En la exploración funcional respiratoria se
intrapleural (p . ej., en la cirrosis hepática con observará un trastorno ventilatorio restrictivo. Al re-
ascitis) . ducir la ventilación (V) de los alvéolos y persistir la
perfusión (Q) se alterará la relación V/Q originándose
Aunque en algunas condiciones fisiopatológicas hipoxemia.
puede predominar un solo mecanismo, en la mayoría
de los casos en que se genera un derrame actúan varios.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
CLASIFICACIÓN Algunos pacientes no tienen síntomas atribuibles a
su derrame pleural, o bien estos se encuentran en-
Los derrames pleurales se clasifican atendiendo al
mascarados por la enfermedad que lo origina. Cuan-
mecanismo responsable de su formación y a la natu-
do los síntomas aparecen, suelen ser secundarios a
raleza del líquido que se acumula:
la inflamación pleural, al trastorno de la mecánica
Trasudado (hidrotórax) : En el que se acumula pulmonar o a la alteración del intercambio gaseoso.
un líquido con escasas proteínas y células. Es un El síntoma más característico de afectación pleural es
filtrado de plasma que se origina como resultado el dolor torácico pleurítico producido por irritación
de cualquiera de los tres primeros mecanismos de las terminaciones nerviosas situadas en la pleura
antes citados, es decir, cuando se encuentran al- parietal. Es frecuente su presencia cuando el derrame
terados los factores mecánicos que influyen en es un exudado, y suele estar ausente en caso de ser
la formación o reabsorción del líquido pleural. un trasudado. Suele ser de instauración más o menos
Las superficies pleurales no están afectadas por aguda, se acentúa con los movimientos respiratorios,
el proceso patológico primario. con la tos y con los movimientos de la pared toráci-
Exudado: Se trata de un líquido rico en proteínas ca. A menudo es unilateral y se localiza en el área
que resulta de la alteración de la permeabilidad afectada, ya que la inervación depende de los nervios
vascular, de la obstrucción del drenaje linfático intercostales (salvo que el dolor se refiera al hombro
334
o de ambos mecanismos. por afectación de la porción central del diafragma).
CAPÍTULO 40 Patología general de las enfermedades de la pleura

En la auscultación, se observará una disminución


o ausencia del murmullo vesicular y de las vibracio-
Tabla Principales causas nes vocales sobre el área del derrame, ya que el líqui-
de derrame pleural do interpuesto impide la transmisión de los sonidos.
Sin embargo, en el límite superior del derrame estos
Trasudados sonidos pueden estar acentuados y puede percibirse
un soplo bronquial secundario a la mejor transmisión
Insuficiencia cardiaca del ruido respiratorio bronquial a través de una zona
congestiva
pulmonar parcialmente atelectasiada por el líquido
Cirrosis pleural. Durante la formación o reabsorción del de-
rrame pleural puede escucharse un roce pleural se-
Hipoproteinemia
cundario al deslizamiento entre sí de unas superficies
Síndrome nefrótico pleurales inflamadas y con depósitos de fibrina. El
Mixedema roce pleural se caracteriza por ser un sonido grueso ,
como el roce de cuero en el oído, que se escucha al
Exudados final de la inspiración y al principio de la espiración.
Infecciones Tuberculosis
Bacterianas, víricas,
fúngicas EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
Neoplasias Primarias: mesotelioma La radiografía de tórax permite detectar la pre-
Metastásicas: cáncer sencia y tamaño del derrame pleural. El líquido
bronquial, mama, ... pleural se puede disponer de distintas formas:
a) libre, como una opacidad homogénea situada
Embolia pulmonar en la base pulmonar, que no sigue una distri-
Enfermedades del Artritis reumatoide bución segmentaría y atraviesa las cisuras sin
colágeno Lupus eritematoso borrarlas, con un borde superior cóncavo más
sistémico alto en su porción lateral que la medial, configu-
rando el llaniado «signo del menisco » o «curva
Enfermedades Pancreatitis; rotura
gastrointestinales esofágica; absceso de Ellis-Daimosseau»; b) encapsulado, ya sea en
subfrénico la pleura parietal costal o en la mediastínica; c)
intercisural, cuando se localiza entre las dos ca-
Traumático pas de la pleura visceral que forman las cisuras
pulmonares; y d) subpulmonar, cuando se sitúa
entre la base pulmonar y el diafragma.
La ecografía y la tomografía computarizada
(TAC) torácica permiten detectar cantidades más
Otros síntomas del derrame pleural son la tos no pro- pequeñas de líquido pleural, localizar las zonas
ductiva y la disn ea, en relación con el volumen del de punción cuando hay poco líquido o este se
derrame. el'lcuentra encapsulado. En particular, la TAC
ofrece información de gran interés en el estudio
de la etiología del derrame pleural, en particular
EXPLORACIÓN FÍSICA DEL TÓRAX en el caso de los exudados.
En la inspección el paciente puede adoptar una posi- La toracocentesis, mediante punción transto-
ción antiálgica (estar inclinado o recostado en cama rácica de la cavidad pleural, está indicada ante
sobre el lado del derrame) , lo que reduce la movilidad cualquier derrame pleural de causa desconocida.
de dicho hemitórax y con ello el dolor. Tiene una doble finalidad: confirmar la presen-
La palpación puede ser útil para delimitar el tan1a- cia de líquido pleural y extraer una muestra para
ño del derrame, ya que el frémito táctil está ausente su estudio bioquímico, citológico, microbioló-
o atenuado al absorber el líquido las vibraciones vo- gico, etc. (véase Tabla 40-2). Tradicionalmente
cales transmitidas por el pulmón. Se puede también se vienen utilizando los criterios de Light para
apreciar si existe desviación de la punta cardiaca o de distinguir si el derrame es un exudado (cumple
la tráquea, que orientará acerca del desplazamiento alguno de los tres criterios propuestos): a) co-
del mediastino secundario a un derrame masivo. ciente proteínas pleurales/séricas > 0,5; b) LDH
Por percusión, se apreciará matidez en el lado pleural/LDH sérica > 0,6; c) LDH pleural supe-
afectado debido a la interposición del líquido entre el rior a los 2/3 del límite superior normal de LDH
pulmón y la pared torácica; es mayor en las bases pul- en sangre; o trasudado (no cumple ninguno de
monares debido a que allí se acumula mayor volumen los tres criterios anteriores). Existen, sin embar-
de líquido por efecto de la gravedad.
335
go, algunos casos dudosos , ya que se ha demos-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla Toracocentesis diagnóstica. Análisis del líquido pleural


Investigaciones Método recogida
pH Jeringa heparinizada
BIOQUÍMICA: Glucosa, proteínas, LDH , amilasa, Tubo heparinizado
colesterol, triglicéridos, CEA
CITOLOGÍA: Tinción H-E, cels. mesoteliales. Tubo heparinizado
Hematíes, leucocitos y recuento diferencial Tubo con EDTA
MICROBIOLOGÍA: Gram y cultivo aerobios/anaerobios, Jeringa, frascos de hemocultivos
tinción y cultivo micobacterias

trado que el uso de diuréticos puede hacer que Espontáneos: Se producen sin antecedente trau-
algunos trasudados se clasifiquen erróneamente mático previo . Se subdividen en:
como exudados; en estos casos se recomienda la
Primarios. Aparecen en individuos sanos, ge-
utilización del gradiente entre suero y líquido
neralmente entre los 20 y 40 años de edad, con
pleural de proteínas (> 3,1 sugeriría trasudado).
predominio masculino.
Secundarios. Aparecen como complicación de
NEUMOTÓRAX una enfermedad pulmonar previa, p . ej. , por
rotura de bullas subpleurales en un paciente
con enfisema.
CONCEPTO
Consiste en la presencia de aire en la cavidad pleural,
lo que provoca la separación de ambas superficies FISIOPATOLOGÍA
pleurales y el colapso pulmonar, debido a las pro- Desde este punto de vista los neumotórax se clasifi-
piedades elásticas de este órgano. La existencia de
can en:
presión negativa intrapleural facilita la formación del
neumotórax , que tiene lugar cuando el espacio pleu- Cerrados: En ellos se produce la obliteración de
ral comunica con el pulmón o con el exterior. la comunicación anormal tras pasar una deter-
minada cantidad de aire. Originan un trastorno
ventilatorio restrictivo secundario al colapso
ETIOPATOGENIA Y TIPOS pulmonar.
Ya se han mencionado los mecanismos que mantie- Abiertos: Generalmente se deben a heridas pe-
nen libre de líquido la cavidad pleural. Ahora bien, netrantes del tórax, con una comun icación con-
para mantener los pulmones unidos a la pared toráci-
ca debe evitarse también la acumulación de gas en di-
cha cavidad. Esto se consigue gracias a qu e la presión
total de gas en sangre venosa es de 54 mm Hg (71 cm
H 2 0 ), menor que la presión atmosférica (Tabla 40-3). Tabla Presiones parciales
Por ello, la sangre venosa es capaz de extraer gas de de los gases en sangre venosa y arterial
la cavidad pleural y evita, en condiciones normales, (en mm Hg) en el sujeto sano
su acumu lación.
Según su causa, los neumotórax pueden dividir- Gas Arteria Vena
se en: Oxígeno 100 40
Traumáticos: Aparecen como consecuencia de Anhídrido carbónico 40 46
un traumatismo que pone en comunicación el
espacio pleural con el exterior o con el pulmón. Vapor de agua 47 47
Habitualmente van acompañados de hemorragia Nitrógeno 573 573
intrapleural (h em on eumotórax). Se incluye aquí
el neumotórax iatrogénico que aparece como Total 760 706
complicación de maniobras diagnósticas o tera-
péuticas sobre el tórax.
CAPITULO 40 Patología general de las enfermedades de la pleura

A B

Figura Neumotórax abierto. Fenómeno del «bamboleo mediastínico» (flechas huecas) y del «aire péndu-
lo» (flechas rellenas ). A) Inspiración. B) Espiración.

tinua con el exterior. Si dicha comunicación es MANIFESTACIONES CLÍNICAS


mayor que el diámetro de las vías respiratorias
superiores se producen dos fenómenos graves El inicio del cuadro suele ser brusco, con dolor toráci-
(Fig. 40-2): co homolateral y disnea en la mayoría de los pacien-
tes. Puede acompañarse de manifestaciones vegetati-
El bamboleo mediastínico. Se debe a la entra- vas (sudoración, taquicardia, palidez) y, en los casos
da de aire en la cavidad pleural con la inspi- más graves, de signos y síntomas de insuficiencia
ración a través de una herida torácica abierta respiratoria o circulatoria, o de ambas.
y succionante, lo que origina el colapso del
pulmón homolateral y el desplazamiento con-
tralateral del mediastino que comprime el pul- EXPLORACIÓN FÍSICA DEL TÓRAX
món opuesto. En la espiración, a medida que En la inspección, se aprecia una menor movi-
la pared torácica se contrae y el diafragma se lidad del hemitórax afectado, que puede estar
eleva, se expulsa aire de la cavidad pleural a aumentado de volumen.
través de la herida, y la diferencia de presiones Con la palpación se puede percibir la dismi-
entre ambos hemitórax se invierte, con lo que nución de la movilidad torácica, así como la
el mediastino se desplaza hacia el lado afecta- abolición de las vibraciones vocales, ya que la
do. Estos movimientos mediastínicos pueden propagación de la voz hacia la pared torácica se
perjudicar el retorno venoso y comprometer ve limitada por el aire intrapleural. La tráquea
seriamente la función circulatoria. y la punta cardiaca están desplazadas hacia el
El aire péndulo. Es el volumen de aire que se hemitórax no afectado.
traslada del pulmón afectado al contralateral Por percusión se apreciará un aumento de la re-
durante la inspiración (y al revés durante la es- sonancia o timpanismo.
piración), como consecuencia de los intercam- En la auscultación es muy característica la au-
bios de presión entre ambos pulmones. Produ- sencia de murmullo vesicular en el hemitórax
ce un aumento del espacio muerto fisiológico. afectado, ver Tabla 40-4.
Neumotórax valvular o a tensión : En él, el aire
entra en la cavidad pleural durante la inspiración
con más facilidad de la que sale en la espiración.
EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
Con las sucesivas respiraciones, el aire aumenta La radiografía de tórax permite diagnosticar el neu-
progresivamente la presión, colapsa el pulmón motórax al mostrar un pulmón disminuido de tama-
subyacente y empuja el mediastino hacia el ño, bien delimitado por la pleura visceral y separado
lado no afectado; en consecuencia, disminuye de la pared costal por una cámara ocupada por aire.
también el volumen pulmonar contralateral. El Además puede detectar posibles lesiones pulmonares
desplazamiento mediastínico y el aumento de la causantes del proceso. En neumotórax pequeños pue-
presión intratorácica reducen el retorno venoso de ser de más utilidad la realización de la radiografía
337
al corazón y, con ello, el gasto cardiaco. de tórax en espiración forzada .
Semiología y f isiopatología de las enfermedades del aparat o respiratorio

Tabla Resumen de la semiología de los grandes cuadros de la patología pleural


Inspección Palpación Percusión Auscultación

Derrame pleural
Menor movilidad del Ausencia vv. Matidez Abolición mv
hemitórax Mediastino desviado
al lado sano

Neumotórax
Menor movilidad del Ausencia vv. Timpanismo Abolición mv
hemitórax Mediastino desviado
al lado sano

Fibrotórax
Menor movilidad del Ausencia vv. Matidez Abolición mv
hemitórax Mediastino desviado
al lado enfermo

vv: Vibraciones vocales; mv: Murmullo vesicu lar.

FIBROTÓRAX MANIFESTACIONES CLÍNICAS


Como todos los síndromes pleurales, el fibrotórax
CONCEPTO ocasiona disnea y síntomas derivados de la insufi-
ciencia respiratoria.
Es el cuadro clínico que aparece cuando las dos su-
perficies pleurales se encuentran engrosadas y adhe-
ridas (paquipleuritis). EXPLORACIÓN FÍSICA DEL TÓRAX
Mediante la inspección se puede apreciar una
reducción de la movilidad y volumen del hemi-
ETIOPATOGENIA tórax afectado, con disminución de los espacios
Cuando la inflamación pleural ha sido intensa su intercostales.
resolución va seguida del depósito de una gruesa La palp ación demuestra una disminución de las
capa de tejido conjuntivo fibroso sobre la superficie vibraciones vocales; la tráquea y la punta cardia-
pleural, que con el tiempo tiende a calcificarse. Sue- ca se desvían hacia el lado enfermo.
le producirse como consecuencia de una patología Por percusión se advierte la matidez correspon-
pleuropulmonar primaria (sobre todo empiemas, he- diente a la pleura engrosada.
motórax y tuberculosis), pero puede aparecer en en- La auscultación revela una disminución o au-
fermedades sistémicas, como la artritis reumatoide o sencia del murmullo vesicular secundaria a la
la enfermedad renal crónica. menor movilidad torácica y a la alteración de la
transmisión de los ruidos respiratorios a la pared
torácica.
FISIOPATOLOGÍA
El engrosamiento pleural extenso reduce la movili-
EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
dad torácica ya que el pulmón se vuelve más rígido , La superficie pleural es muy delgada y no se refleja
lo que obliga a realizar un mayor esfuerzo para expan- habitualmente en la radiografía de tórax. En el fibro -
dir la caja torácica. Ocasiona un trastorno respiratorio tórax, al encontrarse engrosada, se puede observar
restrictivo, generalmente de un grado mucho mayor como una capa irregular que rodea al pulmón y que,
que el esperado por los hallazgos clínicos o radioló- con mucha frecuencia, se encuentra calcificada en su
gicos. porción más interna.

338
·141
Síndrome mediastínico
José Luis Álvarez-Sala Walther, María Asunción Nieto Barbero, Gema Rodríguez Trigo

ANATOMÍA DEL MEDIASTINO


El mediastino es el espacio central torácico , de
localización extrapleural, que se encuentra entre
ambos pulmones. Alberga numerosas estructuras
en su interior y está relleno por un tejido adiposo
y conjuntivo laxo. Es un espacio virtual mínima-
mente extensible, aunque su elasticidad permite
los movimientos cardiacos, vasculares , respirato-
rios y digestivos. Tiene una presión interna nega-
tiva, lo que facilita el retorno venoso. Está limitado
por delante por la tabla interna del esternón, por
la cara posterior del extremo anterior de los arcos
costales y por los músculos intercostales que se
encuentran en esa zona. Queda cerrado por detrás
por los cuerpos vertebrales, por la cara anterior
de la porción posterior de los arcos costales y
por los músculos intercostales que ahí se ubi-
can. Se delimita lateralmente, a cada lado, por
la cara medial de los dos pulmones, recubiertos
por la pleura. Por abajo se encuentra el músculo
diafragma, en especial el centro frénico o tendi-
noso. Por arriba el mediastino se continúa de
forma imperceptible con los espacios del cue-
llo, que se estima comienzan cranealmente a
un plano horizontal teórico que pasase por la
cara superior de la primera costilla. Contiene
estructuras vitales como el corazón, los gran-
des vasos arteriales y venosos , la tráquea, el
esófago, el timo y diversos elementos del
sistema linfático (por ejemplo, además de
ganglios, el conducto torácico).

COMPARTIMENTOS
DEL MEDIASTINO
El mediastino puede dividirse en varios
compartimentos siguiendo diferentes crite-
r rios. Ninguno de ellos es perfecto, porque
las estructuras y las enfermedades medias-
tínicas a menudo traspasan estas separa- 339
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

albergar a órganos que habitualmente son cervicales,


como el tiroides o las glándulas paratiroides.

Compartimento medio
Es el espacio que se encuentra entre dos planos fron-
tales teóricos que pasaran por las caras anterior y
posterior, respectivamente, del saco pericárdico . En
su interior se ubican, además del corazón, la tráquea,
los bronquios principales, la aorta ascendente, el ca-
yado aórtico , los troncos supraaórticos, las grandes
venas torácicas, los ganglios linfáticos de los hilios
pulmonares y parabronquiotraqueales, las arterias
pulmonares y nervios importantes como el frénico (a
ambos lados) y el recurrente o laríngeo inferior (sólo
el izquierdo).

Compartimento posterior
Es el territorio que se halla entre un plano frontal teó-
rico que pasara por la cara posterior del saco pericár-
dico , por delante, y los cuerpos vertebrales y la por-
ción posterior de los arcos costales, por detrás. En su
CD MEDI ASTINO ANTERIOR
interior se localiza el esófago, la aorta descendente,
el conducto torácico, la cadena nerviosa simpática (a
0 MEDIASTINO MEDIO
ambos lados), los nervios intercostales, el nervio vago
G) MEDI ASTINO POSTERIOR
o neumogástrico (a ambos lados) y las venas ácigos y
hemiácigos.
Figura Esquema topográfico de los distintos
compartimentos mediastínicos.
ETIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA
DEL SÍNDROME MEDIASTÍNICO
ciones del todo artificiales. La división más utilizada
desde un punto de vista clínico-radiológico es la que Las enfermedades y alteraciones mediastínicas pue-
establece la existencia de tres compartimentos: el an- den ser de naturaleza muy variada y tener su origen
terior, el medio y el posterior (Fig. 41-1). Con una en las siguientes circunstancias:
perspectiva anatómica, a veces de gran interés semio-
lógico, el mediastino puede dividirse, en atención a Procesos inflamatorios mediastínicos, como
ocurre en las mediastinitis agudas (piogénicas
un plano horizontal que pasara por la unión entre el
localizadas, purulentas difusas o flemonosas) y
manubrio y el cuerpo esternal, en superior e inferior.
crónicas (hiperplásicas), en algunas granuloma-
Es conveniente conocer el contenido de cada uno
tosis y en la fibrosis mediastínica.
de estos compartimentos, dado que la mayor parte de
Tumores o pseudotumores mediastínicos (lo
los procesos patológicos se originan en las estructu-
más frecuente), de tipo neoplásico (de estirpe
ras que , en condiciones normales , se encuentran en
conectiva, linfoide, germinal o epitelial) o quísti-
cada uno de ellos. Lo que permite, además , orientar el
diagnóstico etiológico de los diferentes procesos que ca, pero también ocasionados por estructuras de
pueden producir un síndrome mediastínico y expli- localización ectópica, que originariamente per-
tenecen al cuello o al abdomen (bocios, hernias,
car gran parte de las manifestaciones clínicas que se
observan. etc.). El m ediastino al ser una auténtica encru-
cijada, las células que transitan por él durante
el periodo embrionario pueden dejar restos y
Compartimento anterior nidos celulares pluripotenciales, con capacidad
Es la región situada entre la tabla posterior del ester- para producir n eoplasias de estirpe diversa o,
nón y la cara dorsal del extremo anterior de los ar- incluso múltiples (teratomas, quistes dermoides,
cos costales, por delante, y la cara anterior del saco hamartomas, etc.). La distribución topográfica y
pericárdico, por detrás. En su interior, además de las características específicas de los principales
un tejido conectivo y adiposo abundante, se hallan tumores y pseudotumores mediastínicos se ex-
estructuras como el timo , algunos grupos gangliona- ponen más adelante.
res linfáticos y vasos sanguíneos importantes. Puede Presencia anormal de aire (neumomediastino o
340
enfisema mediastínico).
CAPÍTULO 41 Síndrome mediastínico

Presencia anormal de sangre (hemomediastino o y estructuras que ocupan la región correspondiente


hemorragia mediastínica). (Tabla 41-1).
Las enfermedades y alteraciones referidas actúan
en el mediastino a través de dos mecanismos dife- Manifestaciones pleuropulmonares
rentes: por compresión, ante el conflicto de espacio Tos: es muy habitual y se debe a la compresión,
que se produce, y por infiltración, circunstancia que, erosión o infiltración traqueal o bronquial.
con independencia de la compresión, solo se obser- Disnea: aparece cuando se produce una parálisis
va cuando en el origen de la anomalía se encuentra uni o bilateral del nervio frénico. También puede
un tumor maligno. Los factores que permiten que las observarse cuando existe una enfermedad pleu-
estucturas mediastínicas puedan resistir y adaptarse ral invasiva o irritativa.
a la compresión, sobre todo cuando el conflicto de Hemoptisis: aunque es infrecuente, puede ser
espacio se produce con lentitud, son diversos: capa- una expresión directa o primaria de la propia
cidad de algunos de estos órganos, como el esófago, enfermedad mediastínica.
para desplazarse; menor resistencia de la pared de Disfonía o voz bitonal: se debe a la paresia opa-
otros, como la tráquea y los bronquios, para dejarse rálisis de la cuerda vocal izquierda ocasionada
deformar; estructura «esponjosa» del mediastino; y por una lesión del nervio recurrente o laríngeo
posibilidad de desarrollar una circulación colateral, inferior izquierdo (nervio laríngeo inferior iz-
al objeto de derivar la sangre estancada por la oclusión quierdo).
de las venas afectas. No obstante, los dos mecanismos
Estridor: surge cuando hay una parálisis del ner-
referidos hacen que, cuando se supera el límite de la
vio recurrente o una compresión importante de
adaptación, se ocasionen ciertas manifestaciones.
la tráquea.
Así, en el neumotórax a tensión se produce un
Hipo: se debe a un estímulo irritativo del nervio
desplazamiento agudo del mediastino, que puede
frénico.
comprometer la función cardiaca e, incluso, la respi-
Neumonitis distal: se aprecia en los enfermos
ratoria. El derrame pleural masivo es una situación en
que tienen una lesión traqueal compresiva o ero-
la que, con frecuencia, se origina un desplazamiento
siva. A veces se produce, incluso, una neumonía
del mediastino. En las fracturas costales múltiples
postobstructiva o la atelectasia parcial o total de
(«volet» costal) puede crearse en el hemitórax co-
un pulmón.
rrespondiente un fenómeno en el que el mediastino
se desvía sucesivamente de un lado al otro. Es el Parálisis diafragmática uni o bilateral: se origina
llamado «bamboleo» mediastínico. Como es lógico, por una afectación del nervio frénico.
todos estos cambios pueden tener graves repercusio- Derrame pleural: puede deberse a dos mecanis-
nes sobre el llenado ventricular o la ventilación, por mos distintos: a) invasión o irritación de la su-
lo que pueden convertirse en una auténtica urgencia perficie pleural; y b) compresión del conducto
médica. torácico. En este último caso el líquido pleural es
linfa y, por tanto, el derrame pleural es un quilo-
tórax, rico en quilomicrones y triglicéridos.
Edema pulmonar intersticial: es el resultado de
MANIFESTACIONES CLÍNICAS un bloqueo que dificulta el drenaje de los vasos
DEL SÍNDROME MEDIASTÍNICO linfáticos.

MASA ASINTOMÁTICA Manifestaciones cardiovasculares


Las masas mediastínicas no producen manifestación Soplo sistólico: suele ser intenso y deberse a una
alguna en algo menos de la mitad de los casos, por compresión extrínseca de las arterias pulmona-
lo que su hallazgo es casual muchas veces y surge al res.
realizar una radiografía de tórax por cualquier moti- Derrame o taponamiento pericárdico: su origen
vo. Casi todas estas masas asintomáticas (aproxima- suele estar en relación con la invasión del peri-
damente un 90%) son benignas. La malignidad (el cardio por la lesión mediastínica correspondien-
10% restante) es más frecuente en los niños que en te.
los adultos. Arritmias cardiacas o insuficiencia cardiaca: se
produce por una afectación miocárdica.
Síndrome de la vena cava superior: su causa sue-
MANIFESTACIONES INTRATORÁCICAS le encontrarse en una compresión y obstrucción
de la vena cava superior, a veces con una trom-
O LOCALES bosis asociada, habitualmente en relación con
Las masas y los procesos inflamatorios del mediasti- un tumor infiltrante en el mediastino superior.
no pueden provocar síntomas y signos muy variados, La dificultad en el retorno venoso de la cabeza,
341
como consecuencia de la afectación de los órganos del cuello y de la zona superior de tórax que se
SEC..CON Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

Tabla 1• Posibles manifestaciones clínicas de un síndrome mediastínico


Manifestaciones clínicas intratorácicas o locales
Pleuropulmonares: tos, disnea, hemoptisis, disfon ía, voz bitonal, estridor, hipo, neumonitis distal , neumonía
postobstructiva, atelectasias, paresia o parálisis diafragmática, derrame pleural , edema pulmonar intersticial
Cardiovasculares: soplo sistólico, derrame o taponamiento pericárdico, arritmias cardiacas, insuficiencia
cardiaca, síndrome de la vena cava superior
Otras manifestaciones: dolor torácico, omalgia (dolor de hombro) , disfagia, síndrome de Claude
Bernard-Horner, edema en esclavina
Manifestaciones clínicas extratorácicas o a distancia
Síndrome general: fiebre, anorexia, pérdida de peso, afectación general
Síndrome de Cushing
Ginecomastia
Hipertensión a rterial
Hipercalcemia
Diarrea
Hipoglucemia
Acropaquias
Procesos especialmente asociados con un timoma (miastenia grave, aplasia pura de células rojas,
hipogammaglobulinemia)

produce hace que aparezca una congestión veno-


sa en todos los territorios tributarios de la vena
afecta. El organismo, en un intento de aliviar la
obstru cción, favorece el desarrollo de una impor-
tante circulación colateral (Fig. 41-2). Por ello es
h abitual observar, cuando el enfermo se pone de
pie, la existencia de una llamativa ingurgitación
yugular, un notable edema cervical «en esclavi-
n a» (c uello «procons ular» de Stokes}, qu e puede
extenderse a la cabeza y a los miembros su pe-
riores, y una significativa red venosa superficial,
con un gran ab otargamiento facial. Son frec u en-
tes, por el mismo motivo, la cianosis, la epis-
taxis, la quemosis conjuntival , las hemorragias
retinianas y las equ imosis cutaneomu cosas. En
la pared torácica aparecen dilataciones venosas,
en relación con el drenaje venoso colateral que
se ha p u esto en marcha (Fig. 41 -3) . Es posible
que surjan manifestaciones clínicas secu ndarias
a un eventual edema cerebral acompañante (ce-
falea, alteraciones visu ales, estu por, ed ema de Figura C irc ul ació n co lateral v isib le en un a ca -
papila en el fondo de ojo). El síndrome de la vena vografía rea li zada en un enferm o co n un sín drome de
cava superior casi siempre tiene su origen en un la cava superi o r sec un da ri o a un carc in o m a b ro nco-
342
tum or maligno, que un 70 % de las veces es un géni co.
CAPÍTULO 41 Síndrome mediastínico

carácter opresivo, lo que suele asociarse a una


mediastinitis aguda, una perforación esofágica,
un enfisema mediastínico o una neoplasia infil-
trante.
Disfagia: suele deberse a una compresión extrín-
seca o a una invasión directa del esófago, en cuyo
caso también es posible el reflujo gastroesofágico
y la aspiración broncopulmonar.
Síndrome de Horner: se origina por una afec-
tación de la cadena simpática cervical y se ca-
racteriza por la existencia, total o parcial, de las
cuatro manifestaciones clínicas siguientes: pto-
sis palpebral, enoftalmos , miosis y anhidrosis
oculocutánea ipsilaterales.

MANIFESTACIONES EXTRATORÁCICAS
O A DISTANCIA
Los síntomas generales que con más frecuencia se ob-
servan en el síndrome mediastínico de causa tumoral
o granulomatosa crónica son la fiebre , la anorexia, la
pérdida de peso y la afectación general. Además, los
tumores mediastínicos se asocian a veces con mani-
Figura Circulación colateral visible como una festaciones clínicas extratorácicas o con síndromes
importante red venosa superficial en un enfermo con orgánicos específicos, que pueden ser muy orienta-
un síndrome de la vena cava superior. tivos desde un punto de vista etiológico. Al respecto
cabe recordar el síndrome de Cushing (en los timo-
carcinoma broncogénico. Sólo en un 3 % se debe mas , los tumores carcinoides y el cáncer de pulmón),
a causas no malignas (bocio, aneurisma aórtico, la ginecomastia (en ciertos tumores germinales), la hi-
fibrosis mediastínica), en cuyo caso son posibles peitensión arterial (típica en el feocromocitoma, pero
otras complicaciones, como una hemorragia di- que también aparece en los ganglioneuromas y en
gestiva por varices esofágicas o una tromboflebi- los quemodectomas) y la hipercalcemia (en algunos
tis de las extremidades superiores. linfomas y en el adenoma paratiroideo). La diarrea
es muy común en los niños que tienen un ganglio-

Otras manifestaciones locales


Mesotelioma pleural
Omalgia (dolor de
hombro), braquialgia y
dolor torácico: son fre-
cuentes y pueden ser
muy intensos. Se pro-
ducen por la tracción,
compresión, irritación
y/o infiltración de las
estructuras nerviosas
regionales , aunque tam-
bién pueden deberse
a una erosión ósea o a
una afectación de los
nervios intercostales.
En tal caso el dolor sano
Célula
suele irradiarse por el mesotelial
dermatomo correspon-
diente. A veces, sobre
todo cuando se rela-
ciona con un tumor de
343
gran tamaño , tiene un
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

neuroma, probablemente como consecuencia de una


secreción hormonal ectópica. La hipoglucemia puede
observarse a veces en los mesoteliomas, los terato-
mas, los fibrosarcomas o los neurosarcomas, además
de en la tirotoxicosis y en el bocio intratorácico.
Los timomas pueden ocasionar diversos y nume-
rosos síndromes orgánicos, casi siempre de origen
incierto. El más conocido es la miastenia gravis,
aunque también son posibles otros como la aplasia
pura de células rojas (eritroblastopenia selectiva} y
la hipogammaglobulinemia . Las acropaquias y la
osteoartropatía hipertrófica pueden observarse en
el mesotelioma, el neurofibroma y el cáncer de pul-
món.

TÉCNICAS DIAGNÓSTICAS EN EL ESTUDIO Figura Tomografía computar izada torácica en


DEL SÍNDROME MEDIASTÍNICO la que se observa una masa de aspecto maligno loca li-
zada en el mediastino anterosuper ior (flecha).
Debe sospecharse la existencia de un síndrome me-
diastínico cuando aparecen algunos de los síntomas
o signos referidos anteriormente. En realidad, el me- un ganglio linfático es normal o es el asiento de
diastino es una región anatómica oculta a la explo- un proceso patológico. La administración de un
ración directa, por lo que su estudio ha de basarse, contraste intravenoso mejora el rendimiento de
esencialmente, en métodos de imagen. este procedimiento y permite la visualización de
La radiografía posteroanterior y lateral de tórax los vasos intratorácicos.
es el procedimiento inicial a emplear (Fig. 41-4) . La resonancia magnética es una técnica que pue-
En el momento actual la tomografia computari- de complementar a la tomografía computarizada
zada torácica es el procedimiento de elección, y tiene la ventaja de que no irradia al enfermo.
ya que ayuda a precisar cuál es el lugar de origen Es especialmente útil en las enfermedades que
de una lesión, su naturaleza y también facilita la asientan en el mediastino posterior (Fig. 41-6).
diferenciación entre una variante de la normali- En las tumoraciones que ocupan el mediastino
dad (un acúmulo de grasa o de tejido fibroadi-
poso) o una alteración benigna (una formación
quística) de un proceso maligno (Fig. 41-5 ).
Permite establecer, con ciertas limitaciones, si

Figura Radiografía posteroanterior de tórax en Figura Resonancia magnética torácica en la


la que se observa una neop lasia pulmonar que invade que se observa una tumo ració n vertebral que no tiene
344
el mediastino. extensión intrarraquídea.
CAPITULO 41 Síndrome mediastínico

anterior, como ocurre con el timoma, permite


valorar si existe o no una invasión de la arteria
pulmonar, de la vena innominada o de la cava
superior.
Las técnicas de imagen basadas en la adminis-
tración de contrastes marcados con isótopos
pueden tener utilidad diagnóstica en algunas
enfermedades mediastínicas. Así, con el iodo ra-
diactivo (iodo 1 31 ) pueden estudiarse los tumores
tiroideos funcionantes y los bocios subesterna-
les. El galio 67 puede ayudar en el diagnóstico de
los linfomas y de algunos procesos granuloma-
tosos (sarcoidosis). Los leucocitos marcados con
iodo 1 31 permiten identificar la naturaleza infec-
ciosa de algunas lesiones mediastínicas.
La tomografía por emisión de positrones (PET)
es un procedimiento que se basa en el análisis Figura Imagen broncoscópica de la toma de
de la imagen «funcional» que proporcionan una muestra de una adenopatía mediastínica median-
algunas sustancias marcadas radioactivamente te una punción y asp iración con aguja fina ll evada a
(por ejemplo, la fluor 18-desoxiglucosa o 118FDG) cabo por vía transbronquial. Cortesía de la Dra. C. Montero
cuando se metabolizan por ciertas células, cuya Martínez.
actividad queda así bien definida. Es útil, por
ejemplo, en la identificación de metástasis me-
diastínicas o de adenopatías tumorales (Fig. 41-
7). Conviene recordar, no obstante, que la exis- etiológica de un síndrome mediastínico (Fig.
tencia de actividad celular no siempre indica 41-8). En ocasiones, la ecoesofagoscopia tam-
que una lesión sea de naturaleza maligna. Puede bién puede ser un procedimiento adecuado
ser la expresión, simplemente, de que hay una para realizar la punción y subsiguiente aspira-
importante actividad inflamatoria (p. eje., en la ción citológica de una masa o de una adenopa-
sarcoidosis) tía mediastínica.
La broncoscopia puede ayudar a precisar si una La punción y aspiración con aguja fina puede
enfermedad mediastínica es primaria o secun- llevarse a cabo, asimismo, por vía transparietal
daria y, en ambos casos, si es maligna o benigna. o transtorácica. Como guía para ello suele em-
En ocasiones, la biopsia bronquial, la punción plearse la tomografía computarizada.
transbronquial con aguja fina, mejor si se apoya El esofagograma baritado puede servir para di-
en la aplicación de los ultrasonidos (ecobron- ferenciar una compresión extrínseca de una in-
coscopia), o alguna otra técnica broncoscópica vasión tumoral o para identificar la causa de una
(broncoaspirado, lavado broncoalveolar, etc .), masa localizada en el mediastino (Fig. 41-9).
pueden ser de gran utilidad en la valoración Finalmente, muchas veces es necesario recurrir,
para alcanzar el diagnóstico de una enfermedad
mediastínica, a técnicas más cruentas o invasivas
(toracoscopia, mediastinoscopia, mediastinoto-
mía, toracotomía), que actualmente, en muchos
casos, pueden ser videoasistidas.

LOCALIZACIÓN Y CARACTERÍSTICAS
DE LAS LESIONES MEDIASTÍNICAS
MÁS FRECUENTES
El ensanchamiento mediastínico encuentra su ex-
plicación más común en una cardiomegalia o en un
derrame pericárdico. No obstante, son posibles otras
muchas causas. Los tumores del mediastino más ha-
bituales son los secundarios a las metástasis de un
Figura Tomografía por emisión de positrones carcinoma broncogénico o, en segundo lugar, a un
en la que se observa una masa metabólicamente muy linfoma. En los niños y en los jóvenes predominan
activa (hipercaptante) localizada en el mediastino an- los tumores nerviosos y los germinales, además de los
terosuperior (flecha ). linfomas (Tabla 41-2).
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

o dientes, por lo que su aspecto radiológico suele ser


muy característico. Cuando son malignos se denomi-
nan teratocarcinomas.
Otros tumores derivados de las células embriona-
rias o germinomas extragonadales , como el semino-
ma, el coriocarcinoma o el carcinoma embrionario o
de células embrionarias, son menos frecuentes, aun-
que también tienden a ocupar una posición anterior
en el mediastino. El coriocarcinoma segrega gonado-
tropina coriónica humana (BhCG), por lo que es muy
habitual que se asocie con una ginecomastia.
Los timomas son invasivos en un 20 % de las oca-
siones. Es muy característica su asociación con la
miastenia gravis.
El tejido tiroideo ectópico intratorácico suele ser la
expresión del crecimiento y la extensión al tórax de
un bocio cervical (bocio intratorácico). El diagnóstico
se realiza mediante TAC y gan1111agrafía tiroidea.
Los linfomas no hodgkinianos y la enfermedad
de Hodgkin en su variante de esclerosis nodular, se
presenta como un ensanchamiento en el mediastino
anterosu perior.
Otros tipos de tumores de estirpe mesenquirnal,
corno los lipomas, fibromas , miomas , condromas, lin-
fangiornas o h emangiomas, son mucho más raros en
esta región mediastínica.

Figura Esofagograma baritado en proyección ENFERMEDADES DEL MEDIASTINO MEDIO


latera l en e l que se observa una hernia hi ata l por des-
lizamiento. La riqueza linfática existente en el mediastino medio
hace que las adenopatías inflamatorias o metastási-
cas sean la causa más común de tumoraciones loca-
lizadas en el mediastino medio. La tuberculosis, la
ENFERMEDADES DEL MEDIASTINO ANTERIOR
silicosis, la sarcoidosis, la lues y las micosis pueden
Los teratomas son, en sentido genérico, tumoracio- citarse corno causa de las primeras (Fig. 41-10). Las
nes compuestas por estructuras derivadas de las tres metástasis ganglionares originadas por un carcino-
hojas embrionarias, aunque a veces sólo de dos de ma pulmonar, renal, gástrico, pancreático o prostático
una (quistes dermoides o epidermoides, respectiva- entre las segundas. No obstante, los linfomas primiti-
mente). Los quistes dermoides pueden contener pelo vos y los secundarios también son frecuentes.

Tabla Localización topográfica de las principales enfermedades que pueden afectar


al mediastino
Mediastino anterior Mediastino medio Mediastino posterior
Enfermedad de Hodgkin , linfoma no Hodgkin Adenopatías metastásicas Tumores neurogénicos
Teratoma, semionoma (p. ej., pulmón, mama) Meningoceles
Quistes (pericárdico, broncogénico, tímico) Sarcoidosis Cordomas
Timomas Hernia de Morgagni Quistes entéricos
Bocio intratorácico, adenoma paratiroideo Aneurisma aórtico Divertículos de Zenker
Aneurisma aórtico Mediastinitis Hernia esofágica
Hernia de Bochdalek
Aneurisma aórtico
CAPÍTULO 41 Síndrome mediastínico

Figura Sarcoidosis. Radiografía posteroante-


rior de tórax en la que se observan unas grandes ade-
nopatías hiliares bilaterales y paratraqueales .

Los quistes que más habitualmente se ubican en el


mediastino medio son los de origen pericárdico, que Fig,u~a Hern ia de Morgagni. Defecto d iafrag-
suelen encontrarse en el ángulo cardiofrénico, sobre mat1co adyacente al apéndice xifo ides co n hern iac ió n
todo en el derecho. Casi siempre son benignos y en del co lon tranverso. Cortesía del Dr. J.B. Gáldiz lturre.
la radiografía de tórax aparecen con unos contornos
bien definidos y con una forma ovoidea. Los quistes
broncogénicos derivan de la porción anterior del in-
el sistema neurovegetativo o el tejido paraganglionar.
testino primitivo, reproducen el tejido bronquial y
En el adulto generalmente son de naturaleza benigna.
suelen situarse por detrás de la carina bronquial. Si
En los niños tienden a la malignidad. Los paragan-
se comunican con la vía aérea pueden tener un nivel
gliomas, los quemodectomas y los feocromocitomas
hidroaéreo.
segregan catecolaminas. Los neurofibromas y los cor-
Una masa localizada en el mediastino medio que
domas (procedentes de restos de la notocorda primi-
se descubre en una radiografía de tórax puede co-
tiva) pueden crecer en el interior del canal vertebral
rresponder a un aneurisma arterial, sobre todo de la
(tumores en reloj de arena) y suelen producir erosio-
aorta ascendente o del cayado aórtico, a una dilata-
nes vertebrales. A veces se asocian a una enfermedad
ción varicosa venosa o a una alteración congénita
de von Recklinghausen. Los neurilemomas o schwan-
del retorno venoso. La angiografía no siempre es ne-
nomas derivan de las vainas nerviosas y de las células
cesaria para su identificación, ya que la tomografía
de Schwann. Los neuroblastomas (tumores malionos
computarizada torácica con contraste intravenoso, o
del sistema nervioso simpático) son más frecue~tes
la resonancia magnética torácica pueden tener sufi-
en los niños. Su correspondiente variedad benigna es
ciente capacidad de discriminación y sensibilidad
el ganglioneuroma.
diagnóstica.
Los quistes entéricos proceden de la porción pos-
También ciertas hernias abdominales, como la de
terior del intestino embrionario. Tienen una pared
Morgagni, que se produce a través del espacio dia-
constituida por una capa muscular y mucosa, que
fragmático de Larrey, se manifiestan como una masa
puede ser similar a la del esófago, el estómago o el
situada en un ángulo cardiofrénico, habitualmente el
intestino. Suelen ocasionar fenómenos compresivos
derecho (Fig. 41 -11).
sobre la tráquea o el esófago. Es característico que se
asocien a anomalías vertebrales. Debe incluirse en
ENFERMEDADES DEL MEDIASTINO este apartado, aunque su patogenia sea el divertículo
deZenker.
POSTERIOR Otra otra causa es una hernia, por ejemplo esofá-
En esta región asientan los tumores neurooénicos gica, que se reconoce bien si tiene un nivel hidroaé-
. . o '
que se ongman a partir de los nervios intercostales, reo . La hernia de Bochdalek se produce en el lado
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades del aparato respiratorio

El neumomediastino cursa con disnea, sensa-


ción de sofocación, dolor retroesternal que se irra-
dia al cuello, ingurgitación venosa, crepitación cer-
vical, supraesternal o supraclavicular, y un típico
crujido sincrónico con la sístole cardiaca (signo de
Hamman), que puede oírse al auscultar al enfermo.
Otros síntomas posibles son la disfagia y la disfonía.
Es habitual que también aparezca, simultáneamente,
un enfisema subcutáneo o, incluso, un neun1opericar-
dio. El pronóstico depende de la causa que lo originó.
En sí mismo es benigno y la resolución espontánea
suele ser, en los casos leves, la norma.

MEDIASTINITIS AGUDA
Es un proceso infeccioso muy grave, casi siempre
debido a alguna de las siguientes causas: a) interven-
ción quirúrgica regional; b) perforación esofágica,
traqueal o bronquial postendoscópica, cáustica o tu-
moral (cáncer de pulmón o de esófago); c) extensión
mediastínica de un absceso cervical, retrofaríngeo,
Figura Radiografía lateral de tórax en la que del suelo de la boca u osteomielítico; d) síndrome de
se observa un aneurisma de la aorta descendente. Boerhaave.
Desde un punto de vista clínico cursa con fiebre
dolor retroesternal, disnea y alteraciones hemodiná-
micas graves asociadas a sepsis. En la radiografía de
izquierdo, ya que el hígado impide la herniación por tórax el mediastino aparece ensanchado y con niveles
el derecho. hidroaéreos . Es habitual que se asocie un derrame
Los aneurismas de la aorta descendente también pleural. La mediastinitis puede adoptar una forma
aparecen como masas localizadas en el mediastino piogénica o purulenta (circunscrita) o una más flemo-
posterior (Fig. 41-12). nosa y difusa. En todo caso, es una enfermedad de
gravedad extrema y, en general, de mal pronóstico.

NEUMOMEDIASTINO
FIBROSIS MEDIASTÍNICA
El enfisema mediastínico o neumomediastino es una
alteración que se caracteriza por la presencia de aire Es una enfermedad caracterizada por la sustitución
libre en el mediastino. Su origen puede estar en rela- del tejido conjuntivo por un colágeno cicatriza!,
ción con traumatismos, intervenciones quirúrgicas o que engloba y comprime las diversas estructuras
heridas cervicales, esofágicas o, pocas veces, abdomi- del mediastino. Se asocia a neoplasias malignas o a
nales. Lo más frecuente es que se deba a lesiones tra- procesos inflamatorios crónicos, como tuberculosis ,
queobroncopulmonares (bullas, cavernas, quistes) o lúes, histoplasmosis, actinomicosis o sarcoidosis .
pleurales (neumotórax). También se ha descrito como También se ha puesto en relación con el consumo
una complicación de la ventilación mecánica inva- de algunos fármacos (metisergida). Otras veces no
siva. Puede ser idiopático (síndrome de Hamman) se descubre su origen y se cataloga como idopática,
o coincidir con un golpe de tos , un esfuerzo físico en cuyo caso puede acompañarse de una fibrositis
intenso, una crisis de broncoespasmo o el periodo ex- retráctil , con afectación retroperitoneal, ocular y/o
pulsivo de un parto. La perforación esofágica espon- tiroidea (enfermedad relacionada con IgG4). En oca-
tánea asociada a vómitos que produce un neumome- siones es la causa de un síndrome compresivo de la
diastino y, luego, la consiguiente mediastinitis aguda, cava o de otras estructuras regionales. Su evolución
se denomina síndrome de Boerlwave. es crónica.
·142
Semiología
de las enfermedades
cardiovasculares
Jaime Merino Sánchez, Ruth Cañizares Navarro, José Miguel Segui Ripoll

SEMIOLOGÍA CARDIACA
Las manifestaciones clínicas que se expo-
nen a continuación hacen sospechar que
el enfermo padece un proceso cardiovas-
cular.

DISNEA
CONCEPTO
Es una sensación subjetiva de respiración
dificultosa, el enfermo tiene conciencia
de que le cuesta respirar y ello es des-
agradable. En esa percepción influyen
la sensibilidad individual y el grado de
esfuerzo que requiere para aparecer. Sus
mecanismos de aparición y estadios se
explican en el Capítulo 36.
La disnea en el paciente cardiópata pue-
de ser:
De esfuerzo: Es una manifestación
precoz de insuficiencia cardiaca iz-
quierda, pero acompaña a otras mu-
chas enfermedades (respiratorias,
anemia, etc.). Es importante conocer
el grado de esfuerzo que la provoca.
Ortopnea: Es una disnea que apa-
rece en reposo con la posición de
decúbito. Se debe a que en esa posi-
ción se favorece el retorno cardiaco;
este puede aumentar mucho, sobre
todo si hay edemas. El aumento de
sangre a nivel intratorácico aumenta
la presión venosa en los lechos capi-
lares pulmonares y la elevación del
diafragma disminuye la capacidad
torácica. Indica un mayor grado de
insuficiencia cardiaca y el enfermo
recurre a aumentar el número de al- 349
mohadas que utiliza para acostarse.
S ( N Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Disnea paroxística nocturna (DPN): El pacien- ¿quién lo padece? es decir, cuál es el sexo, la edad del
tes presenta una crisis de dificultad respiratoria paciente y si existen en él factores de riesgo vascular,
intensa nocturna, que le despierta bruscamente ¿qué características tiene?, localización, irradiación,
con sensación de ahogo y le obliga a sentarse en cualidad, intensidad, ¿qué lo precipita o lo alivia? y
la cama. Minutos después , con el ortostatismo y ¿qué otras manifestaciones asocia?
el reposo las manifestaciones pueden desapare- Si se sospecha que el dolor es isquémico, la norma-
cer y el enfermo puede recuperar el sueño. Al lidad de la exploración física, del electrocardiograma
cuadro colaboran la disminución nocturna de o de las pruebas de laboratorio no descarta la enfer-
los impulsos adrenérgicos al ventrículo izquier- medad. Pero también conviene recordar que el enfer-
do , el aumento del volumen sanguíneo circulan- mo puede tener otras causas cardiacas y no cardiacas
te con el decúbito y la depresión nocturna del para su dolor torácico.
centro respiratorio. Los hallazgos de la exploración física que orientan
La ortopnea y la DPN son características del ede- el origen cardiaco del dolor son: un soplo sistólico
ma agudo de pulmón (EAP). Si la insuficiencia si existe una estenosis aórtica o una miocardiopatía
cardiaca izquierda aparece bruscamente (infarto hipertrófica y un soplo diastólico si hay insuficiencia
agudo de miocardio , arritmias) o aumenta su gra- aórtica generada por una disección aórtica. Puede ha-
do , puede formarse edema intersticial que favo- ber roce en las pericarditis. El cuarto tono es audible
rece la trasudación al alvéolo y origina un EAP. en casos de isquemia coronaria (por disminución de
Es una situación muy grave que cursa con gran la distensibilidad ventricular) o situaciones que indu-
dificultad respiratoria y a veces expectoración cen hipertrofia ventricular izquierda, aunque es au-
rosada, espumosa. La auscultación revela múlti- dible en los sanos. Cuando el dolor se produce por la
ples estertores crepitantes difusos. compresión local o la movilización, sugiere un origen
en el aparato locomotor.
En la evaluación del dolor torácico el electrocar-
CIANOSIS diogranrn es clave: el ST descendido sugiere isquemia
y el ST elevado infarto agudo de miocardio (en su evo-
CONCEPTO lución aparecen ondas Q). La Rx de tórax es útil sobre
Expresa la aparición de una coloración azulada de todo porque permite descubrir causas de dolor en el
piel y mucosas por un aumento de la hemoglobina aparato respiratorio o la caja torácica. La analítica
reducida en el lecho capilar (> de 4-5 gramos por 100 sanguínea debe aorientarse a valorar la enzima crea-
ml). La cianosis se debe a una falta de oxigenación en tinfosfoquinasa (CPK) y su fracción MB y la troponina
la sangre arterial (cianosis central) y/o a una excesiva T o I. La existencia de un prolapso mitral, pericardi-
extracción de oxígeno por los tejidos (cianosis perifé- tis o miocardiopatía hipertrófica, se diagnostica con
rica) (ver Capítulo 32). ecocardiografía. Las pruebas de esfuerzo realizadas
en cinta o mediante escintigrafía con talio mejoran
La cianosis central está presente en las conjun- el rendimiento diagnóstico del electrocardiograma
tivas , mucosa bucal o lengua. Aparece acompa- de reposo; si el sujeto no puede realizar ejercicio son
ñando a las cardiopatías congénitas con circuito muy útiles las pruebas de talio con dipridamol.
izquierda-derecha o a enfermedades del pulmón
en las que la sangre no se oxigena suficientemen-
te a su paso por él. DOLOR EN PROCESOS CARDIOLÓGICOS
La cianosis periférica surge si el flujo sanguíneo
a través de la piel está lentificado o disminuido. ESPECÍFICOS
Esto sucede habitualmente tras la exposición al Cardiopatía isquémica: El dolor surge cuando el
frío, en el shock y en los chocados, enfermos en aporte de oxígeno es insuficiente en relación con
insuficiencia cardiaca o con patología vascular la demanda (Capítulo 51). El dolor típico de la
periférica. Predomina en las partes acras y super- angina aparece durante el ejercicio, tras la inges-
ficiales ; especialmente en la piel de los dedos, ta o la exposición al frío y mejora con el reposo
la nariz o la mejilla. El color de la piel suele ser y los nitritos. Suele ser opresivo, de localización
pálido azulado y la temperatura más fría restroesternal o precordial; se irradia a mandí-
bula, cuello o brazo izquierdo y habitualmente
dura menos de 10 minutos. De hecho , si es muy
DOLOR TORÁCICO DE ORIGEN intenso, de mayor duración o no mejora con los
CARDIACO nitritos sugiere un infarto agudo de miocardio.
Su diagnóstico se realiza mediante determina-
ciones bioquímicas, ECG, prueba de esfuerzo,
GENERALIDADES eco de esfuerzo y coronariografía.
En la valoración del dolor torácico en el que se Pericarditis aguda: Suele localizarse a nivel es-
350
sospecha un origen cardiaco las preguntas claves son: ternal o paraesternal. Se irradia hacia el cuello,
CAPÍTULO 42 Semiología de las enfermedades cardiovasculares

espalda o epigastrio. A diferencia de la angina Es importante conocer: a) las circunstancias que


rara vez lo hace a los brazos. Su intensidad es va- las provocan o favorecen: ansiedad, ingesta de café,
riable y sus características son las de ser punzan- tabaco; b) la frecuencia del pulso en esos momentos;
te, persistente y exacerbable con la inspiración. c) su duración; d) la forma de inicio y cese; e) si se
Mejora si el enfermo se inclina hacia delante o acompaña de repercusiones hemodinámicas (pali-
cambia de posición y con la toma de antiinfla- dez, disnea, mareo o hipotensión).
matorios no esteroideos. La auscultación permi- Con frecuencia aparecen sin enfermedad cardiaca,
te en ocasiones apreciar un roce. Se diagnostica acompañando a situaciones de ansiedad y pueden re-
con ayuda del ECG y la ecocardiografía (si existe sultar de una taquicardia sinusal banal; entonces su
derrame pericárdico). inicio y cese suele ser gradual. Otras veces revelan la
Embolia pulmonar: Los émbolos pulmonares existencia de una enfermedad cardiaca, especialmen-
surgen de material trombótico procedente de te si hay extrasístoles frecuentes , taquicardias pa-
lechos venosos habitualmente de las extremida- roxísticas (inicio y cese brusco de las palpitaciones) o
des inferiores y más rara vez de las cavidades fibrilación auricular (pulso irregular y rápido).
cardiacas derechas. El dolor torácico O son la expresión cardiaca de enferme-
depende en gran medida de la ex- dades a otro nivel; especialmente
tensión de la embolia y se atri- anemias, hiperfunción tiroidea ,
buye a la distensión aguda de existencia de fístulas o corto-
la arteria pulmonar y sus circuitos, feocromocitoma o
ramas principales. Es re- síndrome carcinoide.
troesternal y opresivo y En su evaluación la
se acompaña de disnea. historia clínica es funda-
En un tercio de los pa- mental y la exploración
cientes se produce un física debe orientarse
infarto pulmonar que a valorar la frecuen-
se manifiesta por do- cia o regularidad de
lor de tipo pleurístico los latidos cardiacos
por irritación pleural. y la existencia de so-
El diagnóstico se basa plos. Es preciso hacer
en la valoración del un electrocardiogra-
dímero D, el angioTAC ma para caracterizar la
de pulmón y la gam- arritmia, si bien suele ser
magrafía de ventilación/ necesario monitorizar el
perfusión. registro electrocardiográfi-
Disección aórtica: El dolor co 24 horas (Holter) y reali-
surge por el desgarro de la zar además otras pruebas para
misma y formación de un hema- descartar anemia, hiperfunción
toma bajo la íntima o sangrado en tiroidea , alteraciones electrolíticas,
los vasa-vasorum, con estímulo de las etc.; además de una Rx de tórax y un
terminaciones nerviosas de la adventicia. Suele ecocardiograma.
ser intenso, de comienzo súbito y máximo desde
el inicio; su localización se relaciona con el lu-
gar de la disección y se desplaza si esta progresa; SÍNCOPE
el de la aorta ascendente se expresa en el tórax
anterior y se irradia hacia nuca, cuello, brazos y CONCEPTO
espalda. Si progresa puede extenderse hacia ab-
Es una pérdida brusca y transitoria de la consciencia
domen, región lumbar y extremidades inferiores.
causada por disminución del flujo sanguíneo cerebral
La TAC o la RM confirman el diagnóstico.
que se acompaña de pérdida del tono postural, con
recuperación espontánea (Capítulo 47).
Sus principales causas son:
PALPITACIONES
Cardiológicas: alteraciones del ritmo, obstruc-
Suponen la percepción consciente y habitualmente ciones al flujo, daño miocárdico.
desagradable de los latidos cardiacos. El enfermo los Cerebrovasculares: oclusión parcial o completa
describe como golpeteo en el tórax, latidos en el cue- de una de las grandes arterias del cuello.
llo, aceleración de las pulsaciones o irregularidad de Vasculares: por hipotensión favorecida por fenó-
las mismas. En su apreciación representa un papel menos vasovagales, especialmente ortostatismo,
importante la sensibilidad del enfermo y el tipo de uso de fármacos vasodilatadores o depleción de
351
arritmia que las causa. volumen.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

En los jóvenes los síncopes más frecuentes son de se plantea cirugía se deben realizar estudios arterio-
origen periférico o por disfunción neurocardiológica gráficos, es decir, valoración radiológica mediante
vasodepresora; con frecuencia tienen cefaleas con contraste en las arterias afectas.
fotopsias y en ellos la función del ventrículo izquier-
do es normal. La segunda causa son las enfermedades
cardiacas, en general aparecen en personas con frac- EDEMAS
ciones de eyección del ventrículo izquierdo inferio-
res al 40 %. CONCEPTO
La historia clínica detallada permite reconocer el
Suponen un aumento del líquido extracelular que se
síncope y diferenciarlo de otras situaciones que se
localiza en el intersticio de los tejidos. El edema no
acompañan de pérdida de consciencia. Deben reco-
es clínicamente aparente hasta que el volumen inters-
gerse las circunstancias que han rodeado al proceso:
ticial aumenta al menos 2,5-3 litros. La compresión
lugar, actividad que se realizaba, existencia de cam-
sobre las zonas donde el líquido se ha acumulado (zo-
bios ortostáticos, o enfermedades previas (estenosis
nas declives) provoca una hendidura o marca (fóvea)
aórtica, miocardiopatía hipertrófica, disfunción del
(Capítulo 19) .
ventrículo izquierdo).
Los de origen cardiaco suelen progresar durante
La exploración física y las pruebas complementa-
el día y mejorar durante la noche y con frecuencia
rias deben orientarse a descartar patología cardiaca.
se asocian a otras manifestaciones de insuficiencia
Se debe realizar un ECG basal y un registro ECG de
cardiaca. A veces el líquido se acumula en las cavi-
24 horas (Holter) y valorar la función cardiaca me-
dades, p. ej., en el peritoneo en forma de ascitis o en
diante ecocardiografía; en casos específicos puede
la pleura como derrame. Si el edema es generalizado
ser necesario estudios en mesa basculante (tilt test) o
se denomina anasarca y puede cubrir el escroto, pár-
electrofisiológicos.
pados, etc.
En la valoración de los edemas cardiacos la his-
CLAUDICACIÓN INTERMITENTE toria clínica y la exploración física son importantes;
los causados por insuficiencia cardiaca o renal o por
hipoalbuminemia suelen ser bilaterales y en la trom-
CONCEPTO bosis venosa profunda son unilaterales.
Se denomina así la existencia de dolor con la deam- Conviene valorar la apariencia de la piel sobre
bulación que cede con el reposo y que expresa un ellos: en la insuficiencia cardiaca puede aparecer
déficit en el flujo sanguíneo arterial a los músculos cianótica; si hay trombosis venosa o celulitis apare-
de las extremidades inferiores. Se relaciona con arte- ce eritematosa y caliente. También debe valorarse su
riosclerosis de las arterias femorales o poplíteas que curso: si es remitente o intermitente y si se acompaña
nutren esos músculos. El dolor puede ser unilateral y de dolor (trombosis venosa).
habitualmente es progresivo en el tiempo. La isque-
mia en reposo indica un compromiso circulatorio gra-
ve. Puede confundirse con la claudicación neurógena PARADA CARDIACA
que aparece en enfermos que tienen estenosis del
canal medular lumbar o una discopatía a ese nivel: CONCEPTO
en general sus molestias son semejantes pero también Supone el cese brusco de la función del corazón, y si
aparecen cuando están de pie o en reposo , aunque no se recupera rápidamente conduce a la muerte.
necesitan cambiar de posición para notar alivio.
El enfermo con frecuencia tiene antecedentes de
otras manifestaciones de arteriosclerosis avanzada ta- CAUSAS
les como infarto de miocardio o accidente cerebrovas-
cular, y presenta factores de riesgo vascular: diabetes, Su principal causa es la cardiopatía isquémica, de la
tabaquismo , hipertensión, dislipemia, etc. que en el 20 % de los enfermos es su primera mani-
La exploración física muestra pulsos arteriales festación. En jóvenes puede deberse a una miocardio-
muy disminuidos o ausentes, a veces soplos sobre las patía hipertrófica. Puede ser reversible si se aplican
arterias, la temperatura de la extremidad puede ser maniobras de resucitación.
más fría si existe isquemia crítica y en ocasiones hay La Tabla 42-1 recoge sus principales causas y me-
úlceras isquémicas que, en general se localizan en la canismos.
porción distal de los dedos, en áreas interdigitales o
zonas de presión; son dolorosas y están bien circuns-
critas. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
La oscilometría registra valores bajos, y el índice En ocasiones el enfermo tiene pródromos tipo dolor
tobillo-brazo valorado por eco-doppler ofrece infor- precordial, fatigabilidad , disnea o palpitaciones. En
mación a cerca de la severidad de la enfermedad. Si la parada el enfermo tiene ausencia de pulso y apnea.
CAPÍTULO 42 Semiología de las enfermedades cardiovasculares

El paciente no responde a estímulos y la auscultación


cardiaca demuestra la ausencia de latidos. En su diag-
Tabla Etiopatogenia de la parada nóstico el electrocardiograma es clave; puede demos-
cardiaca trar fibrilación ventricular, taquicardia ventricular o
ausencia completa de actividad (asistolia). El enfer-
Causas mo tiene una hipoxemia muy importante y acidosis
Enfermedad coronaria metabólica.

Miocardiopatía hipertrófica
Miocardiopatía dilatada SEMIOLOGÍA DE LAS ENFERMEDADES
Miocardiopatía restrictiva DE LOS VASOS
Miocarditis
Los enfermos con problemas en su circulación perifé-
Enfermedades valvulares rica pueden presentar algunas de las siguientes mani-
Alteraciones del sistema de conducción: festaciones (Capítulo 52) :
s índrome de Wolff Parkinson White,
enfermedad de Lev-Lenegre Úlceras. Son pérdidas de la solución de conti-
nuidad de la piel. Pueden deberse a lesiones: a)
Corazón estructuralmente sano: s índromes arteriales, consecuencia de isquemia de la zona
de QT largo y corto, s índrome de Brugada,
tóxicos cutánea afecta, y predominan en la región preti-
bial y distal de los dedos; bJ venosas, que apare-
Otras causas: embolismo pulmonar, cen en enfermos que tienen circulación venosa
taponamiento cardiaco, neuropatía
autonómica cardiovascular diabética varicosa y predominan en los maléolos; y c) le-
siones en los nervios, frecuentemente por neuro-
Factores facilitantes patía diabética; suele ser una úlcera plantar que
Aterosclerosis coronaria aparece en las zonas de apoyo o decúbito.
Factores de riesgo cardiovascular Dilataciones venosas: varices. Las venas super-
ficiales se dilatan si existe dificultad al retorno
Alteraciones del metabolismo ácido-base o venoso. Con el tiempo ello favorece el paso de
hidroelectrolítico hematíes, que pigmentan de color marrón la piel
Sustancias tóxicas (fármacos, drogas de de la extremidad inferior, junto a la presencia de
abuso) edema.
Los edemas y la claudicación intermitente se
han comentado en epígrafes previos.

353
-143
Exploración física
en patología
cardiovascular
Jaime Merino Sánchez, José Miguel Seguí Ripoll , Eva López Calleja

INSPECCIÓN GENERAL
FENOTIPOS ASOCIADOS A
ENFERMEDADES CARDIACAS
Ciertos fenotipos se asocian a cardiopa-
tías congénitas. Los más frecuentes son:
El síndrome de Down: causado por
una trisomía en el par 21. Cerca de
la mitad de los pacientes con síndro-
me de Down tienen una cardiopatía
congénita: persistencia del ductus
arterioso, comunicación interventri-
cular, comunicación interauricular
y tetralogía de Fallot, que combina
varios defectos: estenosis pulmonar,
comunicación intraventricular, aca-
balgamiento de la aorta e hipertofia
del ventrículo derecho .
El síndrome de Marfan: es un tras-
torno congénito del tejido conjunti-
vo (por mutaciones en el gen FBNl
que codifica la proteína fibrilarina)
que se caracteriza por longitud anor-
mal de las extremidades, anomalías
óseas (esternón hundido o pectus
excavatum) y laxitud articular y
aracnodactilia. Se altera también el
conjuntivo de los vasos sanguíneos
con debilidad de las fibras elásticas
y se produce insuficiencia valvular
aórtica por dilatación de la raíz de
la aorta, con riesgo de disección o
rotura de esta.

ACTITUD DEL PACIENTE


Puede orientar hacia la existencia de de-
terminadas patologías de origen cardiaco
y de su gravedad. Así, en la insuficiencia
354
cardiaca izquierda aguda, el paciente no
CAPÍTULO 43 Exploración física en patología cardiovascular

puede estar tumbado (ortopnea) y tiende a sentarse localizado en la parte periférica de la córnea, sugie-
en la cama con las piernas colgando, ya que cuando ren un trastorno del metabolismo del colesterol y un
se acuesta aumenta el retorno venoso que sobrecarga mayor riesgo de enfermedad coronaria. El examen
la circulación y empeora la disnea. En la pericardi- del fondo de ojo es útil para valorar la repercusión
tis cuando los enfermos se sientan suelen inclinar el a nivel de los vasos retinianos de la hipertensión ar-
tronco hacia delante para darle así más capacidad a la terial.
serosa pericárdica torácica. Los niños con tetralogía
de Fallot a veces adoptan una posición en cuclillas
(«squatting»}, de este modo aumentan las resistencias EXPLORACIÓN DEL CUELLO
vasculares periféricas disminuyendo el cortocircuito
intracardiaco, lo que mejora su sintomatología. Exploración de la glándula tiroides mediante
inspección o palpación: el aumento de su tama-
ño (bocio) puede estar en relación con alteracio-
EXAMEN DE LA PIEL nes en su función que puede inducir patología
cardiaca, en particular arritmias supraventricu-
Cianosis: Es la coloración azulada de la piel y/o lares por hipertiroidismo.
mucosas debido a un aumento en la hemoglobi-
Exploración de las venas del cuello: Aporta in-
na reducida capilar. Todas las circunstancias que
formación acerca del retorno venoso. En el sano,
impiden una adecuada oxigenación de la sangre
las venas se encuentran colapsadas, pero cuando
producirán cianosis. Si es de origen central (p.
hay insuficiencia cardiaca derecha , el aumento
ej. , en la estenosis mitral) es más acentuada en
de presión en la aurícula derecha se transmite
labios, lecho ungueal , orejas y eminencias mala-
directamente a las venas del cuello (que no tie-
res (Capítulo 33).
nen válvulas) y aparecen ingurgitadas o rellenas
Palidez cutánea: Se produce cuando disminuye
(por la baja presión que presentan no se colapsan
el gasto cardiaco, como por ejemplo al inicio de
a la palpación).
un shock cardiogénico, o por anemia, (que puede
descompensar una enfermedad cardiaca previa o Presión venosa yugular: Es la distancia vertical
favorecer su aparición al aumentar el gasto car- medida en centímetros desde el punto más ele-
diaco). vado de la vena yugular interna derecha ingur-
Ictericia: Puede aparecer por estasis hepática en gitada (que presenta un trayecto recto hacia la
casos de insuficiencia cardiaca derecha. vena cava) hasta el ángulo de Louis del esternón
Nódulos de Osler: Se trata de lesiones rojo-violá- (formado por la unión del manubrio y el cuerpo
ceas, dolorosas, que pueden aparecer en los pul- del esternón). Se valora colocando al paciente en
pejos de los dedos y en las palmas de las manos decúbito supino, con la cabeza elevada 45° sobre
en el contexto de una endocarditis infecciosa. la horizontal. Si no existe patología, la vena está
Eritema marginado: Lesiones maculares de con- colapsada, sobresaliendo solo 1-2 cm sobre el án-
torno circular o policíclico, que se aclaran en el gulo de Louis (Fig. 43-1).
centro en el curso de horas y desaparecen en po- La presión venosa yugular aumenta en: a) insufi-
cos días, de localización preferente en el tronco. ciencia cardiaca derecha; b) bloqueos al retorno ve-

EXPLORACIÓN DE LA CARA
Las chapetas malares son áreas de eritrocianosis loca-
lizadas en las mejillas, y se han descrito en enfermos
con estenosis mitral. Los enfermos con el síndrome
de Down (que pueden tener tetralogía de Fallot) pre-
sentan una facies de aspecto oriental (ojos achinados, ------1- PRESIÓ
VE OSA
- --- - YUGULAR
con nariz corta, pliegue antimongoloide en los globos
oculares) e implantación baja del cabello.
En el examen de los ojos algunos hallazgos orien-
tan hacia la existencia de patologías con repercusión
cardiaca. El exoftalmos o protrusión de los globos
oculares. Puede estar en relación con hiperfunción
del tiroides (hipertiroidismo), que puede ocasionar
arritmias e insuficiencia cardiaca. El hipertelorismo
es la separación excesiva de los ojos de la línea me-
dia. Se asocia a estenosis de la válvula pulmonar. Los
xantelasmas son acúmulos de lípidos en los párpa-
dos y al igual que el arco cornea], anillo blanquecino Figura Valoración de la presión venosa central.
355
SECCION V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Valle x: Se debe a la salida de sangre del ventrí-


culo derecho; combina la relajación auricular y
el desplazamiento inferior de la válvula tricúspi-
de durante la sístole ventricular. Se incrementa
durante la sístole en pacientes con pericarditis
constrictiva. Esta onda está disminuida cuando
se dilata el ventrículo derecho y puede hasta in-
vertirse cuando existe una insuficiencia tricús-
pide.
Pulso arterial Onda v: Es una onda positiva que aparece al fi-
nal de la sístole y que se debe al aumento del
volumen de sangre en la vena cava y la aurícula
derecha durante la diástole auricular (estando la
Sístole Diástole válvula tricúspide cerrada). La onda v se hace
lR 2R 1RRuidoscardiacos
prominente cuando existe regurgitación tricús-
pide (insuficiencia tricúspide).
Figura Ondas del pulso venoso: relación entre Valle y: Cuando la onda v alcanza su máximo se
pulso arterial, venoso y ruidos cardiacos. observa una rama descendente negativa que se
conoce como valle y. Se debe a la apertura de la
válvula tricúspide y a la entrada rápida de san-
noso: pericarditis constrictiva, lesiones de la válvula gre en el ventrículo derecho. En pacientes con
tricúspide; c) bloqueo mediastínico al retorno venoso insuficiencia tricúspide grave se puede observar
si hay compresión de la cava superior. un descenso de la onda y rápido y profundo al
Con la inspiración las venas yugulares disminu- principio de la diástole. En los casos en los que
yen su volumen, excepto en el caso de existir una existe una pericarditis constrictiva con insufi-
pericarditis constrictiva que no lo permite (signo de ciencia cardiaca derecha grave y presión venosa
Kussmaul). La presión venosa yugular disminuye si elevada, puede verse un pulso venoso yugular
hay una disminución aguda del volumen de sangre característico con un descenso rápido y profun-
circulante, ya sea por depleción hidrosalina o hemo- do seguido de una elevación rápida hasta la línea
rragia. basal (en forma de raíz cuadrada). Un descenso y
lento en el pulso venoso sugiere una obstrucción
Ondas del pulso venoso: El pulso venoso yugu- al llenado del ventrículo derecho, como ocurre
lar refleja los cambios de presión en la aurícula en la estenosis tricúspide o en el mixoma de la
derecha y no es palpable sino visible, y mejor aurícula derecha.
aún registrable con la ayuda de un polígrafo.
Consta de dos, y a veces tres , ondas positivas y El pulso venoso yugular desaparece si hay una obs-
dos depresiones negativas. Las ondas positivas trucción en la vena cava superior.
se denominan a, c, v; mientras que las dos depre- Exploración de las carótidas: El pulso carotídeo
siones son los valles x, y (Fig. 43-2). expresa el volumen de eyección del ventrículo iz-
Onda a: Corresponde a la sístole auricular. Es la quierdo a la aorta. Se explora con el paciente en decú-
onda que predomina en el pulso venoso yugu- bito supino y el tórax elevado unos 45 °, con la cabeza
lar, sobre todo durante la inspiración. Ondas a ligeramente rotada hacia el lado contrario. Se palpan
prominentes indican que la aurícula derecha se en el tercio medio interno del músculo esternocleido-
contrae contra una resistencia aumentada al lle- mastoideo.
nado del ventrículo derecho. Esto ocurre cuan- La carótida es uno de los lugares donde podemos
do hay una obstrucción (estenosis) a nivel de la valorar el pulso; en él podemos considerar: ritmo,
válvula tricúspide o cuando hay un aumento de frecuencia, amplitud y simetría en ambos lados. La
la resistencia al llenado del ventrículo derecho disminución de la amplitud del latido indica falta de
(hipertensión pulmonar o estenosis pulmonar) . volumen sanguíneo a su nivel. Otras veces los latidos
También aparecen ondas a grandes en ciertas cardiacos no son percibidos en la periferia (pulso ra-
arritmias, cuando la aurícula derecha se contrae dial) porque hay una disminución de la eyección ven-
estando la válvula tricúspide cerrada por la sís- tricular o por fracaso circulatorio periférico (shock),
tole ventricular. En estos casos la onda a se hace pero entonces suele ser posible medir la frecuencia
gigante (onda a «cañón »). Así sucede en la diso- cardiaca en las carótidas, por ser vasos muy próximos
ciación auriculoventricular. La onda a desapare- al corazón.
ce en pacientes con fibrilación auricular. El pulso es pequeño (parvus] cuando existe un bajo
Onda c: Es pocas veces visible. Es una onda po- gasto cardiaco como en la estenosis aórtica o por fa-
sitiva producida por el cierre de la válvula tri- llo de la bomba. El pulso es amplio si el ventrículo
356
cúspide. izquierdo maneja volúmenes grandes, como en los
CAPÍTULO 43 Exploración física en patología cardiovascular

casos en que existe insuficiencia aórtica o situaciones Soplos, tonos y extratonos: La sangre circula por
con flujo hipercinético (anemia grave, hipertiroidis- los vasos en régimen laminar, es decir, con sus
mo). Si está disminuido en un lado conviene valorar elementos formes alineados. Si esta situación se
la posibilidad de una estenosis en la arteria. altera se producen turbulencias que son audibles
con el estetoscopio (soplos). Cuando el soplo tie-
ne una alta frecuencia puede palparse, y se de-
EXPLORACIÓN DEL TÓRAX nominafrémito o thrills. Hay que indicar el lugar
donde se palpa y con ayuda de la auscultación la
INSPECCIÓN fase del ciclo cardiaco en que aparece.
Hay que valorar la existencia de malformaciones
torácicas que puedan orientar hacia la existencia de
cardiopatías congénitas, o que justifiquen la presen- PERCUSIÓN
cia de un soplo cardiaco o la desviación del latido de No tiene interés en la exploración cardiaca.
la punta cardiaca. Es el caso del tórax en quilla, in-
fundibuliforme, o el síndrome de espalda recta (véase
Capítulo 4). AUSCULTACIÓN
Hay que considerar:
PALPACIÓN
Permite evaluar: Ciclo cardiaco normal
Dentro del ciclo cardiaco normal se consideran dos
Cavidades o vasos. La «punta cardiaca» corres-
fases:
ponde al ventrículo izquierdo y se palpa durante
Sístole: Es el periodo en el que se produce el va-
la sístole en el 5.o espacio intercostal izquierdo,
ciamiento o eyección de la sangre del ventrículo
en la línea medioclavicular. Es difícil de apreciar
izquierdo en la aorta o del ventrículo derecho en
en obesos, si existe derrame pericárdico o si se
la arteria pulmonar en el derecho. Comienza tras
localiza bajo una costilla. Su latido se desplaza si
el cierre de las válvulas auriculoventriculares
existe escoliosis, atelectasia, fibrosis pulmonar o
(AV) mitral y tricúspide (por este orden), lo que
derrame pleural. Si hay crecimiento del ventrí-
origina el primer ruido cardiaco y finaliza con
culo izquierdo el desplazamiento es hacia fuera
el cierre de las sigmoideas aórtica y pulmonar
y abajo, y si es del ventrículo derecho la punta
(en ese orden), lo que genera el segundo ruido
se desvía hacia arriba. La arteria pulmonar pue-
o tono.
de palparse si se tiene experiencia y soporta una
Desde que se cierran las válvulas AV hasta que
gran presión, en el segundo espacio intercostal
se abren las sigmoideas el volumen de sangre in-
izquierdo en espiración.
traventricular no varía (periodo de contracción
isovolumétrica). Cuando la presión intraventri-
cular supera la presión de la aorta y de la arteria
pulmonar se abren las válvulas aórtica y pulmo-
nar y comienza el periodo de eyección ventricu-
lar. Cuando la presión en la aorta y en la arteria
pulmonar supera la intraventricular se cierran
las válvulas aórtica y pulmonar y comienza la
diástole.
Diástole: Es la fase en la que se
produce el llenado ventricular de
la sangre procedente de las aurícu-
las. Se localiza entre el segundo
y el primer ruido y tiene una
mayor duración que la sístole.
Desde que se cierran las vál-
vulas sigmoideas hasta que se
abren las AV el volumen de san-
gre del ventrículo no varía (periodo
de relajación isovolumétrica). Cuando la
presión intraventricular se hace inferior a la
auricular, se abren las válvulas AV y comienza
el llenado ventricular, con una primera fase de
llenado rápido y una segunda de llenado lento,
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

que finaliza con un llenado adicional por la con- Cuando se auscultan se oye un ritmo en tres
tracción auricular final. tiempos o galope porque asemeja al que produce
A la auscultación se deben reconocer el pri- un caballo que galopa. Son:
mer y el segundo ruido cardiacos seguidos de
Tercer ruido: Se produce por un llenado ventri-
una pausa cada uno. La primera pausa, la que
cular rápido muy acelerado o muy volumino-
aparece tras el primer ruido , corresponde a la
so. También se denomina galope ventricular o
sístole. La segunda pausa es de mayor duración
protodiastólico. Aparece al inicio de la diástole
y aparece tras el segundo ruido; se corresponde
y puede confundirse con la apertura de la vál-
con la diástole. Si existen dudas , es útil saber
vula mitral; es de baja frecuencia por lo que a
que el latido de la punta o el latido carotídeo
veces se palpa mejor que se oye. Puede ser fi-
siguen al primer ruido.
siológico en los niños y en situaciones de gasto
cardiaco elevado, pero en los adultos suele ser
Focos de auscultación patológico (por insuficiencia mitral o aórtic_a
Los ruidos cardiacos se auscultan mejor en determi- miocardiopatía obstructiva, disfunción ventri-
nados puntos del tórax, próximos a donde se generan; cular y en la pericarditis constrictiva).
son los llamados focos de auscultación: Cuarto ruido: Siempre es patológico. Se debe a
la contracción auricular brusca que hace pasar
Aórtico: Localizado en el segundo espacio inter- la sangre a un ventrículo con distensibilidad
costal derecho junto al esternón; recoge mejor disminuida. Se produce al final de la diástole
los sonidos producidos en la válvula aórtica.
por lo que también se le llam~ galoP_e ~uri~;1-
Pulmonar: En el segundo espacio intercostal iz- lar o presistólico. Desaparece s1 hay fibnlac10n
quierdo; recoge mejor los fenómenos auscultato- auricular. Puede aparecer en la hipertensión ar-
rios de la válvula pulmonar. terial, estenosis aórtica, miocardiopatía hiper-
Mitral: También llamado foco de la punta. Se lo- trófica obstructiva, insuficiencia mitral aguda ,
caliza sobre ella, en el cuarto-quinto espacio in- cardiopatía isquémica o situaciones hiperdiná-
tercostal izquierdo, en la línea medioclavicular. micas. Es frecuente en cardiopatías, y siempre
Tricúspide: Localizado en el apéndice xifoides es patológico en niños y en adultos jóvenes.
o región paraxifoidea, en el cuarto espacio inter-
costal izquierdo. Desdoblamientos: Aparecen cuando el cierre de
Aórtico accesorio o de Erb: Entre el tercer y las válvulas que originan los tonos cardiacos no
cuarto espacio intercostal izquierdo. Es un punto es sincrónico. En general, el cierre de las válvu-
muy cercano a las válvulas semilunares. las del hemicorazón izquierdo precede en milé-
simas de segundo a las del derecho.
Patología de los ruidos cardiacos Un pequeño desdoblamiento del primer ruido
es fisiológico. Este desdoblamiento aumenta en
Los ruidos cardiacos pueden cambiar de intensidad
el bloqueo de rama derecha y está disminuido o
(estar reforzados o apagados) o existir ruidos adicio-
incluso invertido en el bloqueo de rama izquier-
nales.
da del haz de His, en la estenosis mitral (primero
Ruidos reforzados: El primer ruido se refuerza
se cierra la tricúspide y luego la mitral) o si hay
en la estenosis mitral, debido al cierre brusco
un mixoma auricular izquierdo (Fig. 43 -3) .
de una válvula que soporta grandes presiones.
Un pequeño desdoblamiento del segundo rui-
También aumenta de intensidad en casos de ta-
do es fisiológico durante la inspiración, ya que
quicardia y cuando se incrementa el flujo auricu-
durante ella aumenta el volumen de sangre que
loventricular. Desaparece si existe calcificación
llega al corazón derecho , por lo que el cierre de
valvular. El segundo ruido se refuerza cuando
las válvulas de ese lado se retrasa. El desdobla-
hay hipertensión arterial , estenosis aórtica o
miento fisiológico del segundo ruido desapare-
hipertensión pulmonar (por hacerlo, respecti-
ce durante la espiración y se incrementa si hay
vamente, el componente aórtico o pulmonar del
sobrecarga del ventrículo derecho: en el embo-
segundo ruido).
lismo pulmonar, la estenosis pulmonar, comu-
Los ruidos están apagados cuando está difi-
nicación interventricular o interauricular, o en
cultada la transmisión del sonido, bien porque
el bloqueo de rama derecha. El desdoblamien-
exista derrame pericárdico, atrapamiento aéreo
to disminuye, desaparece o incluso se invierte
pulmonar o una miocardiopatía que disminuya
(primero se cierra la válvula pulmonar, luego la
la fuerza contráctil del corazón. La intensidad
aórtica) cuando la resistencia vascular pulmonar
del primer ruido disminuye en la insuficiencia
se encuentra elevada o en situaciones como la
mitral y cuando las válvulas AV se encuentran
estenosis aórtica o el bloqueo de rama izquierda.
calcificadas o rígidas.
Chasquidos: Cuando las válvulas soportan una
Extratonos: Al primer y segundo tono pueden gran presión (están estenóticas) es posible escu-
358
añadirse otros adicionales llamados extratonos. char su apertura como un chasquido o «click» de
CAPITULO 43 Exploración fís ica en patología cardiovascular

1T 2T 1T
Tonos normales Fisiológico
A2 P2

1T 1T
Desdoblamiento del 2. 0 T En inspiración
A, P,
1T 1T
Invertido o paradójico Bloqueo de rama izqda . retrasa
P, A, el cierre de sigmoideas aórticas

1T 2T 3T 1T
3.°' Ruido: galope protodiastólico 11 11 t 11 Fisiológico en niños
Insuficiencia ventrículo izquierdo
1T 2T T, 1T
4. 0 Ruido: galope presistólico 11 11 1 11 Cardiopatía isquémica.
M,T, A, P, Miocardiopatías importantes

Figura Ruidos cardiacos: desdoblamientos y extratonos y situaciones en las que se producen.

eyección. En el caso de las válvulas auriculoven- el soplo de la estenosis aórtica o pulmonar, en


triculares (AV) el chasquido aparece al principio la que la sangre del ventrículo debe atravesar
de la diástole; cuanto más cerca está del segundo esas válvulas sigmoideas que están estrechadas:
ruido indica que la presión que soportan las vál- En caso de incompetencia valvular, cuando los
vulas es mayor, mientras que en el caso de las ventrículos se contraen para enviar sangre a la
sigmoideas aparece al inicio de la sístole. aorta o la pulmonar, parte de ella refluye (regur-
gitación) a través de la válvula incompetente, sea
Soplos cardiacos mitral o tricúspide (insuficiencia valvular) . En
las aurículas esa sangre suma a la que llega por
Son sonidos que surgen cuando el régimen laminar las venas y se produce el soplo.
de la circulación de la sangre (que es el fisiológico) se
Diastólicos : Surgen si el flujo se altera durante
altera y aparecen turbulencias.
la diástole (fase de llenado ventricular en la que
Mecanismos de producción están abiertas las válvulas AV y cerradas las sig-
moideas). Son ejemplos la estenosis mitral o tri-
Existen tres mecanismos principales para la produc-
cúspide; en ellas la sangre de las aurículas pasa
ción de soplos: a) Si un volumen normal de sangre
con dificultad a los ventrículos a través de unas
debe pasar por un orificio valvular más estrecho; por
válvulas estrechadas; o la insuficiencia aórtica o
ejemplo, si una válvula está estenótica. b) Porque la
pulmonar, en las que la sangre que sale de los
dirección normal del flujo sanguíneo se invierte de-
ventrículos y pasa a las grandes arterias durante
bido a que la válvula se ha hecho incompetente y no
la sístole regurgita y choca con la sangre que lle-
cierra bien (insuficiencia o regurgitación valvular).
ga procedente de las aurículas.
c) Porque un orificio valvular normal es atravesado
por un volumen mayor de sangre, lo que acelera su
velocidad de paso y favorece las turbulencias. Por
ejemplo, si hay una comunicación anormal entre las 1T 2T 1T
aurículas , como la presión en el hemicorazón izquier- Pansistólico (IM, ID
do es siempre superior al derecho , la sangre pasa a
las cámaras derechas y el volumen que atraviesa la 1T 2T 1T
tricúspide o la pulmonar está aumentado. Protodiastólico (IAo, IP)

Tipos de soplos 1T 2T 1T
Mesosistólico (EAo, EP)
Pueden clasificarse según la fase del ciclo cardiaco en
el que se producen, según su ubicación en esa fase o
Telediastólico o 1T 2T 1T
según el origen o causa de los mismos (Fig. 43-4). Presistólico (EM, ED
Según la fase del ciclo cardiaco son sistólicos,
diastólicos o continuos.
Figura Tipos de soplos cardiacos. IM: insufi-
Sistólicos: Surgen si el flujo sanguíneo se altera c ie ncia mitral. IT: l. triscúpide. IAO: l. aórtica . IP: l.
durante la sístole, que es cuando están abiertas pu lmonar. EAO: estenosis aórtica . EP: E. pulmo nar.
las sigmoideas y cerradas las AV. Son ejemplos EM : E. mitral. ET : E. triscúp ide
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Tabla Orientación diagnóstica ante un soplo cardiaco


Tipo de soplo Enfermedad causal
Insuficiencia mitral o tricúspide
Holo o pansistólico
Defecto del septo ventricular
Insuficiencia mitral o tricúspide
Protosistólico
Defecto del septo ventricular
Estenosis aórtica
Mesosistólico Estados circulatorios hipercinéticos: anemia, embarazo, hipertiroidismo
Aneurisma de aorta
Prolapso mitral
Telesistólico
Disfunción de un músculo papilar
Protodiastólico Insuficiencia aórtica o pulmonar
Estenosis mitral o tricúspide
Mesodiastólico
Mixoma auricular
Telediastólico Estenosis mitral o tricúspide
Mixoma auricular
Continuo Ductus arterioso persistente

Continuos : Ocupan ambas fases del ciclo. Por origina el soplo; pero a medida que se llenan la
ejemplo, si el conducto arterioso que comunica presión va incrementándose en ellos y el flujo
la aorta con la pulmonar está permeable tras el retrógrado va cesando hasta hacer desaparecer
nacimiento. La sangre pasa a su través tanto en el soplo. Al registrar el soplo (por fonomecano-
sístole como en diástole y el soplo es audible en grafía) aparecerá al inicio de la diástole y será
ambas fases, ya que en ellas la presión del lado decreciente.
izquierdo o aórtico es superior a la del lecho pul- Si aparecen en el centro de la sístole o diás-
monar. tole son: mesosistólicos o mesodiastólicos:
Los soplos mesosistólicos aparecen en la esteno-
Según su ubicación en sístole o diástole: Los so-
sis aórtica o la estenosis pulmonar; al inicio de
plos pueden ocupar la totalidad de la fase cardiaca
la sístole el ventrículo se contrae y su presión
(se denominan con el prefijo «pan » ... }, o solo parte
aumenta hasta igualar a la de la aorta o la pul-
de ella.
monru·, (periodo de contracción isovolumétrica).
Cuando ocupan toda la sístole se denominan En ese momento la sigmoidea se abre. Hasta en-
pansistólicos: por ejemplo, en la insuficiencia tonces no se ha producido paso de sangre y, por
mitral o tricúspide, ya que la sangre regurgita tanto, no hay sonido de soplo. Luego la sangre
desde los ventrículos hacia las aurículas desde el pasa rápido a una aorta o a una pulmonar que
mismo momento en que se inicia la sístole. Des- está exangüe. Posteriormente esas arterias se van
de entonces la presión en el ventrículo es mucho llenando de sangre, su presión aumenta y el vo-
mayor que la de la aurícula y es así durante toda lumen de la sangre que pasa desde los ventrícu-
esa fase. Si registramos el soplo con fonomeca- los va disminuyendo hasta cesar. El registro del
nografía su morfología es rectangular. soplo es romboidal. Igual sucede con los soplos
Cuando ocupan una parte de una de las fases mesodiastólicos en la estenosis mitral o tricúspi-
del ciclo (de la sístole o diástole) pueden ser: al de. La sangre pasará de aurículas a ventrículos
inicio, al medio o al final de ellas. por la válvula estrechada y la morfología de los
Al inicio: Protodiastólicos: Aparecen en la insu- soplos se relaciona con las presiones de las au-
ficiencia aórtica o en la insuficiencia pulmonar. rículas.
Al cerrarse las válvulas sigmoideas se produce Cuando aparecen al final de la diástole son tele-
el segundo tono, pero como alguna de esas vál- diastólicos: Por ejemplo , en la estenosis mitral
vulas es incompetente la sangre regurgita desde o la estenosis tricúspide, al final de la diástole
360 la aorta o la pulmonar hacia los ventrículos y se las aurículas hacen un último esfuerzo contráctil
CAPÍTULO 43 Exploración física en patología cardiovascular

por enviar sangre a los ventrículos. Esa sangre lo general, los soplos por estenosis valvular son más
debe atravesar una válvula estrechada, lo que intensos y rudos que los que se producen por regur-
produce un soplo ascendente previo al primer gitación, que son más suaves y de carácter aspirativo
tono. o piante.
Según su origen o causa: Pueden clasificarse en
orgánicos y no orgánicos: Roce
Es el sonido que se produce al moverse las hojas del
Orgánicos: Se denominan así los soplos que re- pericardio cuando están inflamadas (pericarditis) y
sultan de una lesión estructural del corazón, por hay cierta cantidad de líquido entre ellas. Suele tener
ejemplo una estenosis valvular de etiología bac- un tono alto, áspero o rugoso. Se ausculta mejor en el
teriana o reumática. mesocardio y con el paciente en decúbito supino en
Funcionales o no orgánicos: Son los que surgen hiperextensión, que favorece el máximo contacto de
si hay cambios en el gasto cardiaco, en la posi- las hojas de la serosa. Su intensidad varía al cambiar
ción del sujeto o de la presión intraarterial. La la posición del paciente y según la presión que ejerza-
anemia, el hipertiroidismo y el embarazo son si- mos con el fonendoscopio sobre el tórax. En general
tuaciones hiperdinámicas que favorecen la gene- no se irradian.
ración de soplos. En general son poco intensos,
suaves, sistólicos y no se irradian.
EXPLORACIÓN DEL ABDOMEN
Técnicas de auscultación
Orientan a que exista una enfermedad cardiovascular
Para auscultar ha de utilizarse un fonendoscopio; que la existencia de hepatomegalia, ascitis o esplenome-
tiene habitualmente una membrana y una campana. galia.
Con la membrana (o diafragma) se oyen mejor los to- Puede haber una hepatomegalia congestiva cuando
nos altos , como son el primer y segundo ruido cardia- existe una insuficiencia cardiaca derecha y la sangre
co, los soplos de la insuficiencia aórtica o mitral, los se acumula de forma retrógrada. Si se comprime so-
chasquidos de apertura y los roces pericárdicos . Con bre el hígado , parte de su contenido se vacía hacia
la campana se oyen mejor los sonidos de baja frecuen- las venas cavas haciendo llamativa la antiarrítmicos
cia, como el tercer y cuarto ruido cardiaco y el soplo yugular (reflujo hepatoyugula1J
de estenosis mitral. Si se quiere que la campana actúe La ascitis y la esplenomegalia también se producen
como membrana sólo hay que comprimirla contra la por aumento de presión retrógrada en la circulación.
piel.
La auscultación se realiza normalmente con el
enfermo en decúbito supino o de pie. Es una manio- EXPLORACIÓN VASCULAR
bra exploratoria excelente para diagnosticar lesiones
valvulares cardiacas. Si se quiere valorar una lesión EXPLORACIÓN DEL SISTEMA ARTERIAL
mitral, es preferible que el enfermo se coloque en
decúbito lateral izquierdo, y para valorar las lesiones Hay que explorar los pulsos , indicando cuáles son
aórticas inclinado hacia delante y en espiración. Los sus características. Si existe una obstrucción aguda
ruidos y los soplos se oyen mejor en vecindad a la circulatoria, el pulso estará ausente y se manifestará
válvula donde se originan y se irradian según la di- con dolor, palidez, cianosis y frialdad distal a la obs-
rección del chorro sanguíneo o «jet» que los causa. trucción. Si esta es crónica (p. ej., arteriopatía perifé-
rica crónica en miembros inferiores) el dolor aparece
Cuando encontremos un soplo habrá que anotar
cuando se realizan esfuerzos con la extremidad afec-
algunas de sus características como son: ¿cuál es el
tada. El dolor puede obligar a detener esta actividad y
foco en el que se ausculta con mayor intensidad?, ¿en
reemprenderla más tarde (claudicación intermitente)
qué fase del ciclo se localiza?, ¿cuál es la ubicación
(véanse Caps. 42 y 52).
dentro de cada fase del ciclo?, ¿cuál es su intensidad,
siguiendo una escala de 1 a 6?, ¿que características tie- La prueba postural de Ratschow ayuda al diag-
ne su timbre : es musical, piante o rudo?, y ¿cuáles son nóstico: Con el enfermo en decúbito supino, la
las áreas de irradiación? Los soplos de las válvulas de elevación de la extremidad afecta produce pali-
un hemicorazón se diferencian de los producidos en dez del antepié (isquemia) y este recobra el color
las válvulas del otro hemicorazón según el foco máxi- si se le deja colgando. Se observan los grados en
mo de auscultación, el tipo de irradiación y porque los que la palidez aparece al elevar el pie y el
los generados en el hemicorazón derecho aumentan tiempo en que aparece el enrojecimiento al de-
en apnea postinspiratoria máxima, lo que se denomi- jarlo colgar en el borde de la cama. En los sanos
na maniobra de Rivera Carvalho. Los soplos de ori- la palidez es inmediata al elevar el pie y el en-
gen aórtico suelen irradiar hacia los vasos del cuello rojecimiento rápido al suspenderlo (menos de 5
o el borde esternal izquierdo, los pulmonares hacia el segundos) . Si hay insuficiencia arterial tarda en
361
mesocardio y los mitrales hacia la axila izquierda. Por enrojecer más de 20 segundos.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

En la exploración pueden existir úlceras en


las porciones distales de los dedos de los pies,
zonas interdigitales o lugares de presión, y pos-
teriormente necrosis (véase Capítulo 52).
El signo de Allen valora la circulación en las ar-
terias cubital y del arco palmar. Para ello el en-
fermo eleva la mano y abre y cierra el puño varias
veces hasta que la mano queda pálida. Entonces
el explorador comprime las arterias cubital y ra-
dial. Tras un minuto libera solo la arteria cubital
y sigue comprimiendo la radial , al tiempo se ob-
serva el color de la mano y los dedos. Si la arteria
radial y el arco palmar están permeables la mano
se colorea rápidamente. Si la arteria cubital está
ocluida la mano queda pálida. Si el arco palmar
está permeable de forma incompleta los dedos
cuarto y quinto recuperan el color pero los pri- Figura Varices.
meros quedan pálidos.
Valoración de la permeabilidad del sistema venoso
EXPLORACIÓN DEL SISTEMA VENOSO Para valorar la competencia de las comunicantes
se hace la prueba de Trendelenburg o del llena-
Se debe valorar la existencia de obstrucción por trom- do retrógrado: El enfermo se coloca en decúbi-
bos en el sistema venoso (tromboflebitis); ello se ex- to y debe levantar la pierna afecta hasta vaciar
presa con dolor al tacto, calor, aumento de volumen completamente de sangre las venas superficiales.
de la extremidad por edema y palpación del cordón Entonces el explorador comprime con dos dedos
venoso profundo que está obstruido si la tromboflebi- en la unión safena-femoral, que se localiza unos
tis es superficial. El sistema venoso profundo también 5 cm por debajo y dentro del pulso femoral. Lue-
puede obstruirse (trombosis venosa profunda}, gene- go el enfermo se pone a pie con los dedos com-
ralmente en los miembros inferiores (venas femorales primiendo. Si la safena se rellena de forma lenta
o poplíteas). La compresión sobre los gemelos provo- (más de 35 segundos) desde abajo hacia arriba
ca dolor en la pantorrilla y aparece dolor en la zona y se reproducen las varices indica normalidad
de los gemelos con la dorsiflexión de esa extremidad de las comunicantes. Si se llena rápidamente y
(signo de Homans}, expresando que existe una trom- desde arriba hacia abajo indica que hay incom-
bosis en sus venas. petencia de las venas que comunican el siste-
Las varices son venas superficiales engrosadas a ma profundo con el superficial (incompetencia
consecuencia de la lesión de sus válvulas. Cuando safena-femoral).
hay un aumento de la presión hidrostática en esos va- La prueba de Perthes permite valorar la per-
sos se produce estasis circulatoria y edemas distales meabilidad del sistema profundo y la suficien-
(en maléolos). cia de las comunicantes. El enfermo se coloca
Las varices suponen la aparición de venas superfi- en decúbito supino con la extremidad a valorar
ciales dilatadas y tortuosas (Fig. 43-5). La safena ex- elevada. Se le coloca un torniquete por encima
terna e interna son las únicas venas superficiales que de la rodilla, lo que evita que estas venas se lle-
se tornan varicosas. La safena externa nace de la vena nen desde la raíz del muslo. El enfermo se pone
dorsal del pie, sube por detrás del maléolo externo, de pie y debe caminar. La contracción muscular
por la región externa y posterior de la pierna y ter- actúa sobre las venas profundas y hace que va-
mina en la vena poplítea a nivel del hueco poplíteo. cíen en las superficiales. Si no se rellenan debe
La safena interna nace de la vena dorsal del pie, pasa sospecharse que las venas profundas también
por el maléolo interno y sube por la cara interna de están alteradas; es decir, si las comunicantes no
la pierna, rodilla y muslo para desembocar en la vena son insuficientes las venas varicosas localizadas
femoral en el pliegue inguinal, formando el cayado de bajo el lazo deben desaparecer. Las pruebas de
la safena interna. Ambas están ampliamente anasto- Perthes y Trendelenburg se han sustituido ac-
mosadas y son bien visibles si el enfermo está de pie, tualmente por el estudio con eco-Doppler.
apareciendo dilatadas y tortuosas. Eco-Doppler venoso: se ha convertido en la
Las varices son más frecuentes en el cayado de prueba de referencia en el diagnóstico de la pa-
la safena interna (80 %) y el 20 % corresponde a la tología venosa, especialmente de la trombosis
safena externa. Las varices favorecen el edema ma- venosa profunda y las varices. Permite valorar
leolar por estasis y el desarrollo de úlceras tróficas , la permeabilidad de las venas y la dirección del
362
habitualmente en el maléolo interno. flujo en su interior. Se valora también el reflujo
CAPITULO 43 Exploración física en patología cardiovascular

venoso , que es el flujo centrífugo de sangre en ce por acumulación en el intersticio de líquido linfá-
determinadas situaciones de provocación, como tico rico en proteínas debido a la obstrucción del flujo
las maniobras de Valsalva o la bipedestación. El linfático. La causa más frecuente es la filariasis , que
reflujo es la causa de las varices y debe explorar- afecta a 90 millones de personas en el mundo. En los
se con el paciente en bipedestación. La trombo- países desarrollados es más frecuente en miembros
sis venosa profunda se estudia, por el contrario, superiores debido a la disección quirúrgica de adeno-
en decúbito. patías axilares por cáncer de mama.
Pletismografía venosa: es un examen que estu- El linfedema se puede clasificar en dos tipos, pri-
dia el flujo sanguíneo de las extremidades supe- mario y secundario:
riores e inferiores, o de una parte de ellas, que
El linfedema primario suele deberse a la agenesia,
puede ser medido registrando el aumento de
hipoplasia u obstrucción de los vasos linfáticos, y
volumen cuando el flujo venoso es interrumpido
puede asociarse con el síndrome de Turner, de Klin-
de forma repentina. Las puebas pletismográficas
efelter, de Noonan, el síndrome de las uñas amarillas,
más habituales son la estimación del tiempo de
la linfangiectasia intestinal o la linfangioleiomioma-
llenado venoso mediante fotopletismografía y
tosis. También existen formas familiares de herencia
la estimación de flujo venoso máximo mediante
autosómica dominante y penetrancia variable, como
pneumopletismografía. En la práctica, se realiza
la enfermedad de Milroy.
mediante el empleo de un manguito neumáti-
co, que se insufla en la parte proximal del lugar El linfedema secundario puede tener una causa
donde se ha ubicado el sensor pletismográfico. infecciosa, fundamentalmente por linfangitis bacte-
La presión de oclusión debe ser mayor que la riana recidivante, sobre todo por estreptococos. Sin
presión venosa, pero menor que la presión ar- embargo, a nivel mundial, como se ha comentado, la
terial para no interrumpir este flujo sanguíneo. filariasis es la primera causa.
Como las venas normalmente están provistas de Los procesos expansivos también pueden obstruir
válvulas unidireccionales, no puede regresar a la los vasos linfáticos. Dentro de las neoplasias destacan
pierna a menos que exista insuficiencia de las el cáncer de próstata y los linfomas, y en particular
válvulas y circulación invertida en alguna vena la cirugía (linfadenectomía axilar en pacientes con
(reflujo). El tiempo de llenado venoso es aquel carcinoma de mama). La radioterapia, la tuberculosis,
que tarda la pierna en reasumir su volumen pre- la dermatitis de contacto, el linfogranuloma venéreo,
vio después de ser vaciada por movimientos de la artritis reumatoide y el embarazo, son otras causas
dorsiflexión del pie; el valor normal es superior frecuentes de linfedema.
a 24 segundos. Mientras más corto es el tiempo En cuanto a su sintomatología, el linfedema sue-
de llenado venoso, mayor es el reflujo. le ser indoloro, aunque con sensación de pesadez.
Flebografía: ha dejado de ser la prueba de refe- Los signos clínicos consisten primero en un edema
rencia para valorar las trombosis venosas y en la blando que deja fóvea, para evolucionar a un edema
actualidad prácticamente se reserva para el estudio leñoso con tejidos indurados y fibrosos . En la explo-
de las varices pélvicas o las trombosis venosas más ración , la piel clásicamente tiene un aspecto de piel
proximales de los miembros inferiores y siempre de naranja debido a la estasis linfática crónica y a la
con vistas a realizar en el mismo procedimiento fibrosis cutánea y subcutánea. Hay una predilección
diagnóstico alguna intervención terapéutica en- por la tumefacción del dorso del pie y de los dedos,
dovascular (embolizaciones de varices pélvicas o con imposibilidad para pellizcar la piel del dorso de
recanalizaciones de segmentos venosos trombo- los dedos (signo de Stemmer).
sados para su posterior fibrinólisis o angioplastia
El diagnóstico suele ser clínico y se debe buscar
endoluminal).
la causa desencadenante. La linfogammagrafía y la
linfangiografía se reservan para la confirmación diag-
VALORACIÓN DE LA PATOLOGÍA LINFÁTICA nóstica y la diferenciación entre las formas primarias
y secundarias. El diagnóstico diferencial se debe rea-
La patología linfática se expresa fundamentalmente lizar con la trombosis venosa profunda y la insufi-
por la aparición de edema, o linfedema, que se produ- ciencia venosa crónica.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

nal son otros factores que además de la positividad pulmonar, que es imprescindible para el diagnóstico
de la prueba, confieren un valor pronóstico de alto o de la insuficiencia cardiaca.
bajo riesgo, que sirve para elegir el tratamiento más Con la proyección posteroanterior se valora el
adecuado. Es importante resaltar que ni una prueba tamaño global del corazón con la medida del índice
positiva o negativa, diagnostica o elimina la presencia cardiotorácico (relación entre el tamaño máximo de
de enfermedad coronaria. Hasta un 50 % de pruebas la silueta frente al total del tórax a nivel diafragmáti-
negativas pueden tener una lesión en un solo vaso, co), siendo anormal una relación por encima de 0,5.
sobre todo si es la coronaria derecha o la circunfleja. A continuación, se analizan los bordes de la silueta
La sensibilidad y especificidad aumenta de manera cardiaca. El borde cardiaco derecho de la silueta está
significativa con el número de vasos afectados. formado de arriba abajo, por la cava superior, la au-
rícula derecha (AD) y, en placas muy inspiradas, la
Monitorización ambulatoria del ECG (Holter) llegada de la cava inferior a la AD. En condiciones
patológicas es posible ver cómo la aorta ascendente
Denominada también monitorización Holter en supera por la derecha a la cava superior, cons-
honor de su inventor, consiste en el registro de 2 tituyéndose ella misma en borde cardiaco a
o 3 derivaciones electrocardiográficas duran- ese nivel. El borde cardiaco izquierdo está
te un periodo prolongado (generalmente 24 formado , de arriba abajo , por la arteria
horas). La señal electrocardiográfica alma- l subclavia izquierda seguida por el arco
cenada en una cinta o en la tarjeta de me- aórtico , la arteria pulmonar izquierda, la
moria sólida se analiza posteriormente en orejuela izquierda y el ápex del ventrí-
un ordenador, que interpreta de manera culo. En la proyección lateral, el borde
semiautomática los complejos del pacien- anterior está formado , de arriba abajo,
te e imprime en forma de tablas y gráficos por la aorta ascendente, el tracto de sa-
la frecuencia cardiaca, las alteraciones del lida del VD y luego el VD, que estará en
ritmo durante el periodo de registro y el contacto con el esternón sólo en su tercio
comportamiento del segmento ST. Algunas inferior. Por delante de la aorta se dibuja un
indicaciones de la monitorización ambulato- espacio radiotransparente, el espacio retroes-
ria son la detección de arritmias, la evaluación ternal, ocupado por los pulmones . En el borde
de síntomas potencialmente producidos por posterior, la Al se continúa con
arritmias, como mareos o sínco- el VI. Al igual que en la zona
pes, la evaluación de la frecuencia anterior, existe un espacio
cardiaca y de sus variaciones , radiotransparente, el re-
el comportamiento del seg- trocardiaco, que desapa-
mento ST durante periodos rece cuando se dilatan
prolongados y la estratifica- la Al a nivel medio o el
ción de riesgo en pacientes VI a nivel inferior.
con diversas cardiopatías. La circulación ve-
nosa se valora mejor en
ECC con promediado de señal pro yección posteroan-
Se trata de una técnica que per- terior y con el paciente en
mite una gran an1plificación de la señal electrocar- bipedestación. Los aumentos de la presión intra-
diográfica mediante el promediado de muchos com- vascular venosa (hipertensión venosa, HV) se ma-
plejos electrocardiográficos consecutivos. Se pueden nifiestan de diferentes modos. En grados leves, se
así poner de manifiesto potenciales de baja amplitud hacen visibles las venas de los vértices pulmonares ,
que se generan en áreas ventriculares con activación fenómeno que se conoce con el nombre de redistri-
retrasada («potenciales tardíos »). La presencia de bución vascular. Cuando la HV aumenta , aparece el
estos potenciales se ha utilizado como predictor de edema intersticial. La placa parece estar desenfoca-
arritmias después de un infarto de miocardio. da debido al edema perivascular y peribronquial, y
más tarde por la aparición de líneas de Kerley A , B
o C (las de tipo B son las más típicas , disponiéndose
TÉCNICAS DE IMAGEN como líneas de distribución en las bases pulmonares
de 1-2 cm, perpendiculares a la pleura parietal) y
RADIOGRAFÍA DE TÓRAX de la acumulación de líquido en cisuras interlobares
(edema interlobar o cisural) o en forma de derrame
Constituye un método de diagnóstico complementa- pleural. En los casos más graves aparece edema al-
rio de gran interés en cardiología. Aunque en la valo- veolm~ que se manifiesta por imágenes algodonosas
ración de las distintas cavidades y estructuras ha que- que comienzan en los hilios y que adoptan con fre -
dado ampliamente superado por la ecocardiografía, cuencia una imagen que recuerda a las alas de una
366
es particularmente útil para valorar el lecho vascular mariposa.
CAPITULO 44 Exploraciones complementarias en el diagnóstico de los enfermos del aparato cardiovascular

Cuando la presión aumenta en el territorio arterial,


se produce dilatación de las arterias pulmonares de
gran calibre, mientras que disminuye el calibre de las
ramas periféricas por la vasoconstricción reactiva que
se produce como mecanismo de defensa.

ECOCARDIOGRAFÍA-DOPPLER
La ecocardiografía permite, mediante la utilización
de ultrasonidos , delimitar con gran precisión diáme-
tros y grosores miocárdicos , visualizar el pericardio
y las diferentes válvulas y medir la función sistólica
y diastólica. Para ello se emplean transductores que
incorporan un cristal piezoeléctrico que vibra a fre-
cuencias altas emitiendo ultrasonidos en frecuencias
por encima del rango audible por el oído humano
(superiores a los 20 000 ciclos/s). Estos ultrasonidos
pueden ser dirigidos a voluntad. Luego se recibe el
ultrasonido reflejado en las estructuras intratorácicas
y se integra la información obtenida construyendo
imágenes del corazón en movimiento en tiempo real
(Fig. 44-2).
Existen tres modalidades de aplicación: el modo
monodimensional o modo M, el bidimensional o 2D y unos 90° como una pantalla de radar, reconstruyendo
el 3D o tridimensional. El primero utiliza un solo haz la anatomía cardiaca en tiempo real. El reciente 3D
de ultrasonidos; en el segundo, el haz de ultrasonidos hace posible reconstruir la imagen en tres dimensio-
efectúa un barrido continuo a través de un sector de nes a tiempo real. El estudio se complementa con el
Dopple.r, basado en el efecto físico del cambio de fre-
cuencia que sufren las partículas en movimiento (la
sangre) al ser integradas mediante ondas sonoras, lo
que permite calcular tanto la dirección como la velo-
cidad del flujo en las diferentes cavidades cardiacas,
diagnosticando estenosis y regurgitaciones de forma
sencilla. El Doppler puede ser de onda continua,
onda pulsada o color. En este último , el color depen-
derá del sentido del movimiento de la sangre en ese
punto: se representa en rojo todo flujo que se acerca al
transductor explorador y en azul todo el que se aleja.
El estudio se realiza exan1inando al paciente en las
llamadas «ventanas de exploración», que son puntos
de la pared torácica donde, por la ausencia de inter-
posición de aire de los pulmones, obtenemos una
adecuada definición de las estructuras cardiacas. Se
utilizan dos paraesternales: longitudinal, que explora
el corazón en su eje mayor longitudinal, y transver-
sal, que lo hace efectuando cortes transversales desde
niveles altos (grandes vasos), bajando al nivel mitral
(músculos papilares y punta cardiaca), el apical (si-
tuando el transductor sobre el latido apexiano, obte-
niendo imágenes de las cuatro cámaras cardiacas), el
supraesternal (para la exploración del arco aórtico) y
el subcostal (desde el epigastrio).
Además de la ecocardiografía convencional, se dis-
pone en la actualidad de otras formas de aplicación
de los ultrasonidos. Así, la introducción de sondas
esofágicas, ecocardiografía transesofágica, llevan
Figura Ecocardiografía cardiaca . Plano de cua- montado en su extremo distal un transductor de pe-
367
tro cámaras queño tamaño que permite obtener imágenes de alta
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

calidad que evitan el problema de las «malas ventanas El hallazgo patológico es la ausencia de captación
acústicas» y ofrece imágenes de gran calidad en situa- en las zonas con pérdida de la inervación. Tiene por
ciones varias en las que la ecocardiografía transtorá- tanto utilidad clínica en la cuantificación y el pronós-
cica convencional no es suficientemente informativa. tico de la insuficiencia cardiaca, de las arritmias y de
Además, la ecocardiografía combinada con cualquier la cardiopatía isquémica.
forma de estrés (farmacológico o físico) proporciona
información sobre la función cardiaca en situaciones
de aumento de las demandas, siendo de gran utilidad RESONANCIA MAGNÉTICA (RM)
en el estudio de la isquemia miocárdica y con mayor
Es una técnica que, con respecto a la tomografía com-
sensibilidad y especificidad que la pruebas de esfuer-
putarizada (TC), ofrece dos ventajas: no utiliza radia-
zo simple.
ción y su definición es mejor. Con la sincronización
con el electrocardiograma y la aparición del cine RM
permite el estudio de la anatomía y la función tanto
CARDIOLOGÍA NUCLEAR
global como regional de ambos ventrículos, la medi-
Se denomina así al conjunto de exploraciones diag- da del gasto cardiaco e incluso de la perfusión mio-
nósticas mediante técnicas de medicina nuclear con cárdica, el flujo coronario y el estado de los puentes
aplicación en cardiología. de safena.

Estud ios de perfusión miocárdica


TOMOGRAFÍA MULTICORTE AXIAL
Están indicados para mejorar la sensibilidad y espe- COMPUTARIZADA
cificidad de la prueba de esfuerzo. Se utilizan tra-
zadores tecneciados y se realizan habitualmente los Es otra técnica de imagen, cuya principal indicación
estudios gammagráficos mediante técnica GATED es la coronariografía no invasiva, que permite gra-
SPECT, con sincronización de ECG, lo que proporcio- cias a la velocidad de adquisición obtener imágenes
na información simultánea sobre datos funcionales nítidas de las coronarias que pueden evitar en casos
del ventrículo izquierdo y de perfusión. seleccionados el cateterismo cardiaco. Al igual que
Las moléculas empleadas son el metoxi-isobu- la resonancia, es también válida para la anatomía y
til-isonitrilo (MIBI) y la tetrofosmina (TF) , ambos función, aunque en esta indicación, la ecocardiogra-
marcados con Tecnecio 99m. La farmacodinámica de fía se ha convertido es el método de primera elec-
estos trazadores implica que para valorar la perfusión ción.
miocárdica en esfuerzo y en reposo sea necesario ad- Su mayor utilidad es la eliminación de enfermedad
ministrar dosis independientes en cada estudio. coronaria cuando la prueba es normal. La presencia
Los hallazgos patológicos consisten en la detec- de calcio hace difícil valorar la gravedad de la arte-
ción de defectos de perfusión tras el esfuerzo, que se rioesclerosis.
normalizan con el reposo (defecto reversible o par-
cialmente reversible), lo que constituye un patrón de
isquemia cardiaca o bien defectos de perfusión fijos MÉTODOS DIAGNÓSTICOS INVASIVOS
(no reversibles) , que no se normalizan tras el reposo,
indicativos de infarto o necrosis. CATETERISMO CARDIACO. VALORACIÓN
Se conoce ya suficientemente la utilidad de los HEMODINÁMICA Y ANGIOGRÁFICA
isótopos emisores de positrones (tecnología PET)
como una técnica no invasiva, segura y reproducible La principal indicación para realizar un estudio he-
para evaluar isquemia miocárdica y sobre todo la po- modinámico es la identificación de la enfermedad
sible viabilidad de territorios isquémicos conocidos. coronaria y la valoración de su extensión y gravedad.
La valoración invasiva se equipara de modo general
con la del cateterismo cardiaco, llamado así porque
Estudio de daño miocárdico el procedimiento se realiza con la ayuda de pequeños
Actualmente se realiza mediante el estudio de la iner- tubos de plástico que se denominan catéteres. Es im-
vación miocárdica utilizando como trazador la MIBG portante tener en cuenta que se trata de un procedi-
I-123. miento invasivo (introducción de catéteres dentro de
Se realiza mediante la realización de una gam- las cavidades cardiacas), y que por tanto puede haber
magrafía planar, comparando la intensidad de la complicaciones derivadas del uso de contraste, como
captación cardiaca con otras zonas de captaciones empeoramiento de la función renal.
fisiológicas. Se utiliza como trazador la metaiodo- Existen diferentes tipos de cateterismo: pueden ser
benzilguanidina (MIBG) marcada con Iodo-123 . Se izquierdos o derechos, dependiendo de en qué cavi-
trata de una molécula análoga a la norepinefrina, dades (izquierdas o derechas) se introduzcan los caté-
lo que nos permite evaluar la inervación simpática teres y de la vía de acceso, arterial para los izquierdos
368
cardiaca. y venosa para los derechos. Según el vaso punciona-
CAPÍTULO 44 Exploraciones complementarias en el diagnóstico de los enfermos del aparato cardiovascular

do o vía de acceso, el cateterismo puede ser femoral, índice de contractilidad global, y se analiza la movi-
radial o braquial. lidad regional en sus caras anterior, inferior y apical;
El término angiografía hace referencia a la inyec- también se puede determinar el grado de competen-
ción de contraste y su grabación en película o digitali- cia de la válvula mitral.
zación en CD; la técnica se denomina ventriculografía
cuando se inyecta en el ventrículo y coronariografía
cuando la inyección se hace en las coronarias. ESTUDIOS ELECTROFISIOLÓGICOS
Mediante el cateterismo obtenemos unas medidas
hemodinámicas de diferente tipo, fundamentalmente Se realizan introduciendo uno o más electrocatéteres
presiones, flujos y resistencias. El catéter lleno de lí- (catéteres dotados de electrodos en su extremo dis-
quido, conectado a un transductor de presión, registra tal) en el interior de las cavidades cardiacas. Con ello
las presiones de las diferentes cavidades cardiacas, lo podemos registrar la señal eléctrica local en el punto
que más tarde nos ayudará a obtener gradientes, dife- del endocardio donde se apoya el catéter y también
rencia de presión y áreas valvulares. De igual forma estimular ese punto iniciando la activación de la
podemos obtener medidas de flujo, calculando el gas- cavidad correspondiente. Para un estudio electrofi-
to cardiaco mediante la utilización preferen- siológico básico se suelen utilizar tres elec-
temente de termodilución; los shunts o cor- trocatéteres, que se disponen en la au-
tocircuitos intracavitarios por la aparición de rícula derecha alta, en el ápex del
un salto oximétrico (cambios de saturación de ventrículo derecho y en la zona
oxígeno entre cavidades contiguas); los flujos del haz de His. Utilizando los
regurgitantes o del flujo coronario a través de diferentes electrogramas intra-
guías de Doppler o de presión con el cálculo cavitarios y diversas técnicas de
de la reserva coronaria. Por úl- estimulación podemos estudiar el
timo, con datos de gasto y de automatismo sinusal, el sistema de
presiones podemos calcular conducción y los periodos refrac-
resistencias vasculares tan- tarios de las diversas estructuras. Se
to pulmonares como sisté- puede detectar asimismo la existen-
micas. cia de vías, circuitos o focos
La angiografía más uti- anormales, y también
lizada hoy en día es la co- inducir muchas de
ronariografía, consistente las arritmias que el
en la intubación selectiva paciente sufre de for-
de uno u otro ostium coro- ma espontánea, lo que
nario y la posterior inyec- nos permite estudiar
ción de contraste radiopa- en detalle sus mecanis-
co. En la ventriculografía mos y determinar las zonas
izquierda, se inyectan críticas necesarias para el
unos 45-50 ce de contraste mantenimiento de la arrit-
por medio de una bomba de mia. La aplicación de energía
inyección, grabando la inyec- de radiofrecuencia en estas zonas
ción hasta que desaparece el (técnica conocida como ablación por ra-
contraste. Se calcula el volu- diofrecuencia), permite en muchos casos eli-
men sistólico y diastólico, así minar el sustrato de la arritmia, consiguiendo la
como la fracción de eyección como curación definitiva.

369
-145
Principios básicos
de electrocardiografía
Desirée Vélez Rodríguez

PRINCIPIOS BÁSICOS DE
ELECTROCARDIOGRAFÍA
ELECTROCARDIOGRAMA
El electrocardiograma (ECG) es el registro
gráfico de la actividad eléctrica cardiaca
que se obtiene usando un electrocardió-
grafo (Fig. 45-1) que consta, de unos elec-
trodos denominados derivaciones , que se
disponen sobre la superficie corporal, en
las extremidades y en la pared torácica,
capaces de recoger los potenciales eléc-
tricos del corazón. Estos electrodos están
conectados a un sistema de registro que
usa papel milimetrado y, al desplazarse
a una velocidad establecida, permite cal-
cular la duración (o tiempo) y amplitud
(o voltaje) de cada onda del ECG. Actual-
mente los electrocardiógrafos suelen ser
de registro digital y contienen un ampli-
ficador, que magnifica las señales eléctri-
cas que le llegan desde los electrodos, y
un galvanómetro, que mueve una aguja
de inscripción. Esta aguja se va a despla-
zar e inscribir sobre papel termosensible,
diferentes deflexiones hacia arriba (por
convenio se consideran ondas positivas)
y hacia abajo (ondas negativas) según la
magnitud del potencial eléctrico genera-
do por el corazón del paciente.
El ECG es la única medida indirecta
y, por lo tanto , no invasiva de la activi-
dad eléctrica cardiaca y, de hecho, per-
mite identificar alteraciones anatómicas
(como crecimiento de aurículas o ven-
trículos) y del ritmo, detecta infarto de
miocardio, alteraciones iónicas de sodio
o potasio, e incluso, algunas formas con-
génitas de alteraciones en los canales io-
nicos localizados a nivel de la membrana
celular de las células cardiacas, como el
síndrome de Brugada o el síndrome de
QT largo congénito.
CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

Electrodo

Impulso
A 8 _ _ _ _ _ fl, :•parador
;: _j\_
eléctrico ~
-----p-1•► Deflexión hacia
arriba
Impulso
eléctrico

'--\ 8 Et;

Electrod~ ~
V
Deflexión hacia
explorador
abajo

@!J
CEJ
oo o
IIIl cal (G)
mmco0 mm CDCD ~ o
ITIJ CGl (w) (IJ) rr::J CID (!:I) Impulso
eléctrico exply
Electrodo

GJCDCDCTJC!:JCDo:JCDCDCE:JEJ
~ G:J CD CD CD CD CD C!J CEJ ~ r,;,;i
O ~ ~ [ 1mV/eOf"Y ) (nARTISTOP: ) ~
"\ e
~
Et;

+
Deflexión
isodifásica

Figura Electrocardiógrafo. En el electrocardió-


grafo se puede seleccionar la velocidad del papel (1O, Figura Deflexiones registradas en un electro-
25, 50 y 100 mm/s), la calibración (5, 1O y 20 mm/ card iógrafo según la posición del electrodo explora-
mV) y las derivaciones que se registren en un momen- dor y la dirección de l vector cardiaco.
to dado. Un ECG estándar va a correr a una veloc idad
de 25 mm/s y a un voltaje de 1O mm/mV.
Durante la despolarización de la célula miocárdica
el potencial de membrana de la célula pasa de ser ne-
ELECTROFISIOLOGÍA CARDIACA gativo (-90mV) a positivo y durante la repolarización
vuelve a su potencial de reposo (de nuevo -90 mV).
Los electrodos del electrocardiógrafo detectan la ac- Los flujos de corriente de iones generados durante
tividad eléctrica porque el cuerpo humano está cons- la despolarización y repolarización de las células
tituido de agua en un porcentaje muy alto y en ella cardiacas de aurículas y ventrículos en un momento
están disueltos numerosos electrolitos capaces de dado, durante el registro electrocardiográfico se re-
transportar cargas eléctricas que generan flujos de co- presentan por un vector denominado vector cardiaco.
rriente. De esta manera, cuando se produce la activi-
Este vector es pues la resultante de la suma de las
dad eléctrica del corazón se transmiten estos flujos de
fuerzas eléctricas del ciclo cardiaco (Fig. 45-2) y, por
corriente por todo el cuerpo y así se pueden registrar
convenio internacional, en el electrocardiógrafo se
en su superficie.
inscribe como una deflexión por encima de la línea
El origen de esta actividad reside en las células isoeléctrica (onda «positiva") si se dirige hacia el
miocárdicas, que tienen capacidad de excitarse fren- electrodo explorador; como una deflexión por debajo
te a estímulos externos (eléctricos, químicos, mecá- de la línea isoeléctrica (onda «negativa") si se aleja
nicos) y generan una respuesta eléctrica (o potencial del electrodo explorador o como una deflexión isodi-
de acción cardiaco) contrayéndose (se despolarizan) fásica (onda «isoeléctrica" u onda positiva y negativa)
y relajándose (se repolarizan) y, en el tejido espe- si el vector es perpendicular al electrodo.
cializado de conducción, desde donde se generan
y propagan los impulsos eléctricos. Estos impulsos
eléctricos son el resultado de flujos de iones positi- DERIVACIONES
vos (sodio, potasio y, en menor medida, de calcio)
a través de la membrana de las células cardiacas. Las derivaciones del ECG no se colocan en cualquier
Como estas membranas separan dos medios acuo- sitio, sino en localizaciones preestablecidas para con-
sos con diferente concentración iónica existe entre seguir una estandarización, de forma que los electro-
ambos lados una diferencia de potencial que se de- cardiogramas sean iguales en todas partes y los datos
nomina potencial de membrana. Las corrientes ió- obtenidos comparables. De esta manera, al colocar los
nicas formadas al abrir o cerrar canales iónicos que electrodos podemos obtener 12 derivaciones que re-
atraviesan la membrana celular, son las que cambian gistran la actividad del corazón de forma simultánea.
el potencial de membrana. Por ello, el potencial de Esto quiere decir que se observa el mismo fenómeno
acción cardiaco es la representación esquemática de desde 12 localizaciones diferentes.
los cambios que experimenta el potencial de mem- Existen seis derivaciones de los miembros o del
brana de una célula cardiaca durante la despolariza- plano frontal y seis derivaciones precordiales o del """""371
ción y repolarización. plano horizontal del tórax.
Semiología y fisiopatología de las enferm edades cardiovasculares

0 =polo negativo
:f. = polo positivo
m
.J .
0
\..
0
¡
SUP~RIO~
I diferencia de potencial entre brazos izquierdo y
derecho (LA-RA).
II diferencia de potencial entre pierna izquierda
y brazo derecho (LL-RA) .
III diferencia de potencial entre pierna izquierda
y brazo izquierdo (LL-LA) .
aVR ·. :
Las derivaciones de los miembros ampliadas [aVR,
aVL y aVF (las siglas significan a: amplificado; V: vol-
taje; R: derecho; L: izquierdo; F: pie)] también son con-
0 ········ ·· sideradas actualmente bipolares porque se obtienen
DEREC A emparejando un electrodo indiferente (con voltaje O
obtenido de unir los 3 electrodos de las extremidades
... ... a unas resistencias de 5000 ohmios) con un electrodo
- +1 explorador. Por ello el término «monopolar" que se
usaba en la descripción de estas derivaciones ha per-
dido precisión. El eje de las derivaciones se obtiene,
a su vez, uniendo cada electrodo positivo con el elec-
\±)
trodo indiferente:
+90°
aVF aVR tiene electrodo positivo colocado en brazo
INFE~IOR derecho.
aVL tiene electrodo positivo colocado en brazo
izquierdo.
SISTEMA HEXAXIAL aVF tiene electrodo positivo colocado en pierna
1(+Oº) J.. AVF (+90°) izquierda.
11 (+60°) J.. AVL (-30°)
111 (+120°) J.. AVR (-150°) En la práctica, la relación existente entre las
derivaciones de los miembros y la región cardiaca
que exploran es la siguiente:
Figura Derivaciones de los m iembros. Las de- 1) Las derivaciones II, 111 y aVF registran fenó-
rivac io nes de los miembros (1, 11 y 111) guardan una re- menos eléctricos que suceden en la cara infe-
lac ió n matemática con las derivaciones de los miem - rior del corazón.
bros amp liadas (aVR, aVL y aVF) for mando un sistema 2) Las derivaciones I y aVL registran fenómenos
hexaxial c uyo centro coincide co n el centro eléctrico eléctricos que suceden en la cara lateral alta
del corazón. del corazón.

Las derivaciones precordiales (Vl a V6) nos infor-


Las derivaciones de los miembros (I, II y III, aVR,
man de lo que sucede en un plano horizontal y se ob-
aVL y aVF) nos informan de lo que sucede en el plano
tienen mediante electrodos que se sitúan en la pared
frontal (Fig. 45-3) y se obtienen mediante electrodos
anterior del tórax (Fig. 45-4). Actualmente también
que se sitúan en el brazo derecho e izquierdo y pierna
se consideran bipolares porque se utiliza un electro-
izquierda. Existe un cuarto electrodo para la pierna
do indiferente con potencial O y se «empareja" con
derecha que funciona como una toma de tierra y no
electrodos positivos de superficie que se disponen en
tiene trazo electrocardiográfico. Por convención se
distintas localizaciones a nivel del área torácica. Por
usa el color rojo para el primero, el amarillo para el
ello, el término «monopolar" que se usaba en la des-
segundo, negro para el tercero y verde para el cuarto
cripción de estas derivaciones ha perdido precisión:
electrodo (un acrónimo muy usado es RANa verde:
Rojo, Amarillo, Negro y verde, de derecha a izquierda Vl en línea paraesternal derecha (4° espacio in-
y de superior a inferior). tercostal).
Las derivaciones de los miembros [I, II y III (las V 2 en línea paraesternal izquierda (4° espacio
siglas significan RA: Brazo derecho; RL: Pierna dere- intercostal).
cha; LA: Brazo izquierdo; LL: Pierna izquierda)] son V3 en la mitad de la distancia entre V2 y V4.
bipolares porque registran la diferencia de potencial V4 en línea medioclavicular (5° espacio intercos-
entre dos electrodos exploradores. Tenga en cuenta tal) .
que la línea que une ambos electrodos se denomina V5 en línea axilar anterior a nivel de derivación
eje de la derivación (cada línea se divide en dos mita- V4.
des, una mitad próxima al polo positivo y una mitad V6 en línea axilar media a nivel de derivación
372 próxima al polo negativo):
V4.
CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

ANTERIOR
VISIÓN ANTERIOR DEL TÓRAX

2
3

,6
'\
/
.,•' 7
DERIVACIONES PRECORDIALE (V1 aV6)
POSTERIOR
8
Eje de derivaciones precordiales (plano
horizontal). Pasan por el centro del corazón
que en el plano horizontal se localiza hacia la
izquierda y se sitúan respecto de ese centro o
a diferentes grados.

Figura Derivaciones precordiales.


2) Cuando se imprima la tira de ECG, recordar
En la práctica la relación existente entre las de-
poner el nombre del paciente y la fecha en que
rivaciones precordiales y la región cardiaca que
lo realizó (en el electrocardiógrafo, al ser habi-
exploran es la siguiente:
tualmente digital, ya se imprime la fecha y la
1) Las derivaciones V1 y V2 registran fenómenos hora y se puede añadir el nombre del paciente
eléctricos que suceden en el septo interven- de forma manual). Anotar la tensión arterial y la
tricular. saturación basal de 02 , si se dispone de ellas, y si
2) Las derivaciones V3 y V4 registran fenómenos el paciente tiene síntomas (palpitaciones, dolor
eléctricos que suceden en la cara anterior del torácico, sudoración .. ).
corazón. 3) Comprobar antes de empezar a leer que la ve-
3) Las derivaciones V5 y V6 rregistran fenómenos locidad y el voltaje son los adecuados (ha de
eléctricos que suceden en la cara lateral baja. correr a una velocidad de 25 mm/min y con un
voltaje de 10 mm/mV).
En situaciones especiales (dextrocardia, infarto El ECG se realiza con el paciente acostado en decúbi-
de ventrículo derecho) se pueden usar electrodos en to supino, en reposo y evitando que hable o se mueva.
la parte derecha del tórax, normalmente se colocan Colocamos entonces 4 electrodos en los miembros (re-
V3R y V4R (misma posición que V3 y V4, respectiva- cuerde el acrónimo RANa verde) y 6 en la región pre-
mente, pero en hemitórax derecho). En caso de infarto cordial (Fig. 45-6) que darán lugar posteriormente a las
posterior se pueden colocar electrodos en posiciones 12 derivaciones estándar. Se debe tener en cuenta que:
posteriores V7-9 (V7 en línea axilar posterior, V8 en
línea escapular posterior, por debajo de la escápula y 1) Se deben colocar los electrodos siempre por
V9 en borde izquierdo de la columna) usando como encima de la muñeca o tobillo y si existe am-
referencia el plano horizontal que pasa por las derva- putación por encima del muñón. Mantener un
ciones V4-6 (Fig. 45-5). adecuado contacto de los electrodos con la piel
El ECG se realiza con el paciente acostado en decúbi- con un gel especial o con alcohol.
to supino, en reposo y evitando que hable o se mueva. 2) Cuando se imprima la tira de ECG, recordar
Colocamos entonces 4 electrodos en los miembros (re- poner el nombre del paciente y la fecha en que
cuerde el acrónimo RANa verde) y 6 en la región pre- lo realizó (en el electro-cardiógrafo, al ser habi-
cordial (Fig. 45-6) que darán lugar posteriormente a las tualmente digital, ya se imprime la fecha y la
12 derivaciones estándar. Se debe tener en cuenta que: hora y se puede añadir el nombre del paciente
de forma manual). Anotar la tensión arterial y la
1) Se deben colocar los electrodos siempre por saturación basal de 02 , si se dispone de ellas, y si
encima de la muñeca o tobillo y si existe am- el paciente tiene síntomas (palpitaciones, dolor
putación por encima del muñón. Mantener un torácico, sudoración ... ).
adecuado contacto de los electrodos con la piel 3) Comprobar antes de empezar a leer que la ve-
con un gel especial o con alcohol. locidad y el voltaje son los adecuados (ha de
373
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovascul ares

VISIÓNANTERIOR DEL TÓRAX VISIÓNPOSTERIOR DEL TÓRAX

1
4

/
6 1DIL
·········· ········· {'7 ······Ja········v~ ...J....!...............Piáiio~ciriiciiiiar ...............
1 ¡' ! ' " de V4-6
Colocad V3R y V4R si
se sospecha infarto de
(V1 aV6)
~RDIALES
!
Colocad V7,V8 y V9 si
¡ t2
i u I
Ventrículo derecho se sospecha de infarto t
DERIVACIONES PRECORDIALES ACCESORIAS posterior
(V3R, V4R) r, DERIVACIONES PRECORDIALES ACCESQRIAS
(V7 aV9)

Figura Derivac io nes precord iales accesor ias.

correr a una velocidad de 25 mm/min y con un


voltaj e de 10 mm/mV).

ACTIVACIÓN NORMAL CARDIACA


Las células miocárdicas se activan siguiendo una se-
cuencia de activación preestablecida para que su con-
tracción sea eficaz (Fig. 45-7). En condiciones norma-
les el estímulo eléctrico cardíaco se inicia en el nodo
sinusal (NS) porque es el que habitualmente tiene una
frecuencia de despolarización mayor y se localiza en
la aurícula derecha cerca de la desembocadura de la
RA: Brazo derecho
LA: Brazo ~quierdo Electrodo LA
vena cava superior. Desde aquí se activan las aurícu-
RL: Pierna derecha Q COLOR
AMARILLO
las de arriba abajo, y se transmite el impulso hacia el
LL: Pierna izquierda
nodo aurícula-ventricular (NAV), que se localiza en
la pared septal de la aurícula derecha, donde se pro-
duce un retraso fisiológico de unos 80 milisegundos.
Finalmente, el impulso es conducido por el sistema
His (Haz de His y sus ramas derecha e izquierda) y
las fibras de Purkinje hacia el miocardio ventricular.
Solo son visibles en el ECG convencional la activi-
dad de aurículas y ventrículos, pero no la activación
del NS, NAV, Haz de his y sus ramas ni de las fibras
de Purkinje.

ELEMENTOS DE UN ECG
La secuencia de activación cardiaca normal se va a
corresponder en el ECG con el sigu iente trazado (Figs.
45 -7 y 45-8):
Figura Situación de los electrodos de las deri- Onda P, que es la primera onda que se ve y es
374
vac iones. debida a la despolarización de las aurículas.
CAPÍTULO 45 Princi pios básicos de electrocardiog rafía

Onda Q (q): es la primera onda negativa antes


de la primera onda positiva.
Onda R (r): es toda onda positiva. La segunda
onda positiva será R'.
Onda S (s): es toda onda negativa después de
una onda positiva. La segunda onda negativa
será S' .
Complejo QS: es un complejo totalmente ne-
Nodo sinusal gativo.
(NS) - - - --
Las letras mayúsculas (Q, R, S) indican
Nodo ondas de gran tamaño (más de 5 mm) y las
minúsculas (q, r, s) ondas pequeñas (menores
de 5 mm).

Punto J: punto donde termina el QRS y empieza


Fibras de Purkinje el segmento ST.
Segmento ST: se inicia en el punto J y finaliza
al inicio de la onda T y es isoeléctrico. Mide el
tiempo de despolarización ventricular y el co-
mienzo de la repolarización ventricular.
VENTRÍCULOS Onda T, después del complejo QRS, debida a la
repolarización ventricular.
Onda U: sigue a la onda T, suele ser más evidente
en V2, V3 y mide menos de 1 mm. Se debe a
la despolarización de las fibras de Purkinje. Se
considera prominente si onda U ~ onda T en la
misma derivación.
Segmento TP: línea basal entre el final de la onda
T y el inicio de la siguiente onda P.
Intervalo QT: se mide desde el comienzo del
complejo QRS hasta el punto donde la onda T
vuelve a la línea isoeléctrica. Mide despolariza-
ción y repolarización ventricular.
Q¡ Como regla nemotécnica con una frecuen-
s\ cia cardiaca normal (6 0-90 1pm) el intervalo
= -e:-
- ►~ QT debe ser menor de la mitad del intervalo
Intervalo RR previo.
PR

► Intervalo PP: comprendido entre dos ondas P


consecutivas.
Intervalo RR: comprendido entre dos ondas R
consecutivas, debe medirse desde comienzo de
Figura Secuencia de activación eléctrica y su los complejos QRS y no desde el vértice de las
representación esq uemática en el ECG. ondas R.

Intervalo PR o PQ, que se mide desde el comien-


zo de onda P hasta el comienzo de complejo
PAPEL ELECTROCARDIOGRÁFICO
QRS. Incluye el tiempo de la conducción aurícu- El electrocardiograma (ECG) se registra sobre un pa-
la-ventricular. pel milimetrado donde existen cuadros grandes de-
Segmento PR, desde el final de la onda P al co- limitados por trazos gruesos con 5 mm de lado que
mienzo del complejo QRS. ¡No confundir con contienen, a su vez, 5 cuadros pequeños de 1 mm de
intervalo PR (Fig. 45-7)! lado cada uno (Fig. 45-9).
Intervalo QRS , que representa la despolariza- Por consenso, en sentido horizontal se mide dura-
ción ventricular y mide menos de 0,11 segundos ción (o tiempo) a una velocidad estándar de 25 mm/s
(< 3 cuadraditos) . Se mide desde el comienzo al y en sentido vertical se mide amplitud (o voltaje) y se
375
final del complejo QRS , y está constituido por: calibra para que 1 mV sea igual a 1 0 mm.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

g; 1 -t--t--+--+-t---+---t--+--t--t--! ~ ~ ~ -· ----,.i-1--1'------l-+-+-+-l-----l--+--+-+-l--ll--l-+-+-+-I
~- Intervalo PP
c.
n>
~ Intervalo RR 1
o
:::,
c.
~ l -t--t--+--+-t-.:+---t--+--+-<-l-+--l-lt--t-l---+-t---+---t--l--l--!--l-+1--1--+--+-=+-+--, -+--t--t-+--I
§" l -t--t--+--+-t-.:+---t--+--+-'·- 1 - -.t''~--t--+--t--!-+--l-1-1--+--+-+-..;+--l--t--!--¼-!-~F-!--+--+--+-I
~
ls. l -t--t--+--+-t-++---t--+--!-.-l---l-ll--t-l--!--t---+--+--t--t--!-+-:-1--1--+--+--'+---l--+--t--t-+--I
o 1-;......----,......;..-+-....+--+--+--+--;..¡....,--¡......,,-.;-1-.....;.......;..-.......- ---1--.-.......-
.............................----.-........
§ l -1--t--+--+-l-.:+--+--+--+-'-f-lHl--l-11--t-l---+.....;..-+---t--l--l--!-J---;.l--l--+--+...+---l--+--t--l-+--I
[ l-1-t-t--t--f--!+-!--t--t~11-f-llW-t--ll-t-l---t--+-t--!-+-+-+-f-;-f-l-t--+~ -1+--+--t--t--!--!-I
1 -t--t--+--+-1--,.... Segmentoi;
1-t-+--+--+-~ ~ PR '~' ..-.,,.......-----,1--+--+--+--+---1--1-,-..,>-++--1---+--+-~-H......-1--+---<--+-!-<
I-W-J....J.-l-~ ::::¡:::::,r,:::i:
, ~J!!l. Segmento_,.....,--;---¡- Segmento t-,,t--tt--t---t-....-;----t---t--+--!--t--t
1,
1

ST TP
i..,:..¡

cJ
~
1~ ¡~
• \! \.
~
,
¡,, '
...~ J
1, =
1 ~¡ : ,, ' ~ "' 1( ::
Intervalo r.;-t-+-"'+-'"1-t Punto J ,t-t--r-l--'r-+"+---+--t--t--t--+--11""""'"o-+--+--+--+-1
1--t--+--+-t--1-;-i PR !-jllntervalof--j........j=¡:~~-l-+-- Linea •1+--1--1-+--1--t- t--+-+---+--+--1
' QRS isoeléctrical
~ 1 1 1 1 1
1-....1---1.....1....................1.......1........... ..i....;= --;1-ntervalo QT ,.._...._,_......_.______.____....._______....__.._v_e._lo-ci--da.....d-:2.....s_m_m/_,s

Figura Ondas, intervalos y segmentos de un ECG.

RUTINA DE INTERPRETACIÓN lo pronto comience midiendo la frecuencia cardiaca


DEL ELECTROCARDIOGRAMA y valore si el ritmo es regular o irregular y después se
sigue un orden muy lógico: inicie el estudio buscando
El modo más correcto de interpretar un ECG se basa la onda P, intervalo PR, complejo QRS (en orden valo-
en seguir siempre la misma rutina de interpretación re eje, anchura, voltaje y morfología de los complejos
de forma que no se le pase ningún detalle por alto. Por QRS aprovechando para observar como «progresan"

>
E
eE ..... .
3 segundÓs .....«I
-
co (1)

= (.)

tQ)
11
-e
1 segundo o
> >
=ªc.. o
"O
Q)
E +' Q)
<( e :o
Q)
> (/) E
.s En sentido horizontal se mide el tiempo e
w
Q)
(/)
"'
E
g ....
- IJ~

>
Tiempo (s) Velocidad = 25 mm/s

I□r~ci'
Cuadro E E
E lt')
grandre lt')
o E Cuadro
.... ;
-
pequeño
1 1r
~ ~

0,2 segundos 0,04 segundos

,n-- F.,gura Papel electroca rdiográfico.


CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

las ondas R en las precordiales) y finalice con la repo- diendo ritmo ventricular), después deslice el compás
larización ventricular (fíjese en el segmento ST, onda (o el papel) y vea si la distancia entre las ondas R
T y onda U, sin olvidar medir el intervalo QT). son iguales para comprobar que se encuentra ante un
ritmo regular. Haga lo mismo con 3 ondas P sucesivas
(ritmo auricular).
FRECUENCIA CARDIACA (FC) Recuerde que en condiciones normales el estímulo
eléctrico se inicia en el nodo sinusal, que es el marca-
Es una medida de los latidos cardiacos que tienen pasos del corazón y como en el ECG no podemos re-
lugar en un minuto. Cada latido o ciclo cardiaco com- gistrar la actividad del mismo deducimos por la mor-
prende un intervalo RR. El marcapasos normal del fología de la onda P que la activacion está teniendo
corazón es el nodo sinusal, que tiene una FC entre 60 lugar como ha de ser, de arriba hacia abajo. Además,
y 100 1pm. Si una FC es menor a 60 1pm se denomina ya hemos aprendido que la frecuencia normal del
bradicardia, mientras que una superior a 100 1pm se nodo sinusal es de 60- 100 1pm y que si la conducción
denomina taquicardia. Para el cálculo de la FC: aurículo-ventricular es normal toda onda P se debe
Con ritmo ventricular regular busque una onda seguir por un complejo QRS.
R dispuesta sobre una línea gruesa y cuente cuán- Con esto «en mente», una vez comprobado que el
tos cuadrados grandes de separación hay entre ECG es rítmico deberá evaluar si se encuentra ante
ella y la onda R sucesiva, de forma que la FC será un ritmo sinusal, es decir un ritmo cuyo origen es el
300-150-75-60-50 ó 43 1pm si la separación entre nodo sinusal y, por lo tanto, es normal. Para ello no
dos ondas R sucesivas es 1-2-3-4-5-6 ó 7 cuadra- solo debe conocer la ritmicidad y la FC de su ECG
dos grandes respectivamente (Fig. 45-l0A). sino la morfología de la onda P.
Con ritmo ventricular irregular cuente el núme-
ro de complejos QRS que existen en 6 segundos El ritmo sinusal normal debe cumplir las si-
(o 30 cuadrados grandes) y multiplique por 10 guientes características: a) ondas P son menores de
para convertir a latidos por minuto. Algunos re- 3 cuadraditos (o < 0,12 segundos) y de morfología
gistros tienen marcas cada 3 segundos para faci- normal (positivas en I, II y a VF y negativas en a VR);
litar esta medida (Fig. 45-l0B). b) complejos QRS precedidos por onda P y c) FC
entre 60-100 1pm.

RITMO CARDIACO Si se cumplen todas las características salvo la de la


Determine si el ritmo es regular o irregular usando frecuencia cardiaca, la arritmia será sinusal (bradicar-
un «compás" o colocando un papel sobre la tira de dia sinusal si< 60 1pm o taquicardia sinusal si >100
ECG y fijando cada una de las puntas sobre una onda 1pm). Si no existe ritmo sinusal nos encontramos ante
R en el caso del compás, o marcando con un lápiz la una arritmia cardiaca (Figs. 45-11-I y 45-11-II: taqui-
distancia entre tres ondas R sucesivas (estamos mi- cardia, bradicardia o trastorno aislado del ritmo).

A. Con ritmo regular

il p)
1 1 1 1 1 1 1 1 1
n 300150100 75 60 50 43 38Ip m

I..A.. ,../ '-


---
B. Con ritmo irregular
Intervalo de 3 segundos Intervalo de 3 segundos
#1.t ... ...... .... ,

~ ttr 1± ¡:¡¡ ·..


rd 11 -ldH JFl :ft t IWt .t :o
1 t:t ~

4_ ,U. ~ +¡=!6½ 1;:;:;:;- rw ➔ 7 llll ti-¡± H+1


~

i:i r 2 13 ¡f Íh 145 w.... fo~ HE = ..:


1~ ti:i eP m

tJ P ._ +11:1 1'[..... 1\ = ....


tt t:tl
. .... ..
- _.., w .. ,t+

- - ...... - - ..,. .... :o- =1-• 1\+ J! .¡;... ...... \~ ¡:m "11:f
r 1) 11 1 - 1
++ ~
m= ~

= r:o- tfu lrm


i:r fF $ ---,--. --¡:
Il
Ejemplo: 1) Número de complejos QRS en 6 segundos= 8 y 2) Frecuencia cardiaca por minuto= Bx10 = 80 1pm.

Figura -1 Medida de la frecuencia cardiaca.


Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovascu lares

Recuerde que, en ocasiones el nodo sinusal puede ser aVF debido a un fenómeno de macroreentrada a
ligeramente arrítmico de forma fisiológica (arritmia través del istmo cavo-tricuspídeo de la aurícula
sinusal) con frecuencia secundaria a la respiración, derecha, con una FC aproximada de 300 1pm y
ya que la FC aumenta con la inspiración y disminuye ritmo ventricular irregular en este caso, aun-
con la espiración. que con frecuencia tiene ritmo regular) o bien
una TQ auricular multifocal (caracterizada por
Taquicardias (TO) tener más de 3 ondas P seguidas en la misma
derivacion distintas entre sí y con intervalos PR
Son ritmos con frecuencias cardiacas mayores a 100 variables debido a varios focos ectópicos auri-
1pm. En estos casos siempre deben hacerse dos pre- culares).
guntas. Primero si el QRS es estrecho (< 3 cuadradi- Una TQ regular de QRS estrecho a una frecuen-
tos o < 0,12 s) o ancho (> O, 12 s) para valorar si se
cia ventricular de 150 1pm suele ser un flúter
encuentra con una TQ supraventricular o ventricular auricular, por lo que fije su atención en las deri-
y segundo si el ribno es regular o irregular.
vaciones II y III y aVF donde se ven bien ondas
Ha de empezar a saber que una TQ con QRS estre- F; si no se vieran y parecieran ondas P entonces
cho es siempre supraventricular, es decir, por fuerza lo habitual es que sea una TQ supraventricular
se produce la despolarización a través de un sistema paroxística (TPSV: Fig. 45-11-1. A2) producida
íntegro de conducción por encima del Haz de His, por una alteración y un fenómeno de reentrada
mientras que si tiene una TQ con QRS ancho, lama- hacia las aurículas a través del nodo AV o a tra-
yoría de veces la TQ es ventricular, originándose por vés de una vía AV accesoria anómala, y vería-
debajo del Haz de His. Para empezar a conocer estas mos un ritmo regular con QRS estrecho y ondas
arritmias por ahora debe saber que: P''negativas en II, III y aVF al final o detrás del
Una TQ irregular de QRS estrecho (Fig. 45-11- complejo QRS, porque la despolarización auri-
1. Al) casi siempre es una arritmia muy frecuen- cular se genera por la reentrada de abajo hacia
te en la práctica clínica denominada fibrilación arriba.
auricular (caracterizada por tener una línea ba- Una TQ irregular de QRS ancho generalmente
sal muy irregular sin distinguirse ondas P, sino es una fibrilación auricular con complejos QRS
las denominadas «ondas f" en Vl y complejos anchos porque, o bien, previamente existía un
QRS muy irregulares , porque es un ritmo muy bloqueo de rama, o bien se inicia un bloqueo de
caótico debido a múltiples reentradas en las au- rama funcional (ritmo supraventricular con abe-
rículas). Sin embargo, a veces, es un flúter auri- rrancia), o bien la fibrilación auricular se con-
cular con conducción AV variable (se caracteri- duce a través de wrn vía anómala accesoria AV
za por presentar unas ondas que se denominan y parte de la conducción se hace independiente
F negativas en «dientes de sierra" en II, III y del sistema específico de conducción (se
registran QRS anchos por vía accesoria an-
tidrómica y QRS normales por vía nodal).
A. Taquicardias Con menos frecuencia la causa es una TQ
ventricular polimórfica, caracterizada por
tener complejos QRS anchos y distintos en-
tre sí: (Fig 45-11-1. A3).
Fibrilación auricular Flúter auricular frecuencia Taquicardia auricular multifocal Una TQ regular de QRS ancho gene-
AV variable
ralmente en más de un 90% es una TQ
A2. Taquicardias regulares de QRS estrecho ventricular (TV) sobre todo si el pa-
ciente ha sufrido cardiopatia isquémi-
ca previa. Siempre ante la duda consi-
dere estos casos como TV (Fig. 45-11-1.

-=======
Flúter auricular conducción AV (4:1) Taquicardia sinusal A4) porque sólo una minoría son TQ
·1P .·· . •·· • .· . ... .... '
supraventriculares debido a que el pa-
ciente tenía previamente un trastorno
Taquicardia auricular en la conducción intraventricular (blo-
queo de rama preexistente o funcional
A3. Taquicardias irregulares de QRS ancho debido a la alta frecuencia cardiaca o
vía accesoria AV anómala).

Brad icardias
Taquicardia ventricular polimórfica Taquicardia ventricular
Son ritmos con frecuencias cardiacas me-
nores de 60 1pm y pueden deberse a dismi-
378 Figura Arritmias cardiacas 1: Taquicardias (A). nución en el automatismo del nodo sinusal
CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

(bloqueos o pausas sinusales) o a enlentencimiento Bloqueo AV de segundo grado cuando algu-


de la conducción aurículo-ventricular (bloqueos A V nas ondas P no conducen. Puede cuantificarse
que alteran el intervalo PR). el grado de bloqueo poniendo nº de ondas P que
tenemos/ nº de ondas P que conducen (ej.: 3:2 de
Las bradicardias por disminución del automa- cada 3 ondas P, 2 conducen). Será tipo Mobitz I
tismo del nodo sinusal (Fig. 45-11- II. Bl): o de Wenckebach si el intervalo PR aumenta su-
Bloqueo sinusal donde existe una descarga cesivamente en cada ciclo hasta que se produce
regular y normal del impulso sinusal desde el una onda P que no conduce, volviendo entonces
nodo sinusal pero hay un bloqueo en la conduc- el PR a ser corto. Será tipo Mobitz II cuando la
ción del impulso sinusal al tejido auricular, por PR permanece siempre constante y algunas on-
lo que no hay onda P en el ECG -ni tampoco su das P no conducen, por lo que faltan QRS. En el
complejo QRS correspondiente- y se registra caso de bloqueo A V 2:1 no se puede saber si es
una pausa cuya duración es un múltipo exacto un bloqueo AV de segundo grado tipo Mobitz I
del intervalo PP previo por lo que, en este caso, o II.
cuando reaparece el ritmo sinusal normal se dice Bloqueo A V de tercer grado ninguna onda
que reaparece «en fase" . P conduce. Mida el ritmo auricular y el ritmo
Paro sinusal por cese súbito del automatismo ventricular por separado con el compás y verá
del nodo sinusal se registra en el ECG ausencia que cada uno va por su lado. Siempre requiere
del latido sinusal (faltan ondas P y sus corrres- de marcapasos (diferido o inmediato). Existe un
pondientes QRS) y aparece una pausa de dura- bloqueo A V de alto grado cuando alguna onda P
ción variable que no es múltiplo del intervalo conduce de forma esporádica.
PP previo a la misma, por lo que, en este caso,
cuando reaparece el ritmo sinusal normal se dice Trastornos aislados del ritmo (Fig. 45-11-I1.C)
que reaparece «fuera de fase".
Pueden ser extrasístoles o latidos de escape:
Las bradicardias por enlentencimiento de la
conducción aurículo-ventricular se denominan Extrasístoles son latidos adelantados al rit-
bloqueos AV (Fig. 45-11- II. B2): mo normal por focos ectópicos y pueden ser
Bloqueo A V de primer grado cuando todas extrasístoles auriculares (aparece una onda
las ondas P conducen pero se alarga el PR de un P"prematura diferente a la sinusal, que pue-
modo constante en cada ciclo. de ser igual a una onda P normal si se genera
cerca del nodo sinusal o negativa en II, III
B. Bradicardias y aVF si se genera cerca del NAV o zona
B1. Bradicardias por disminución automatismo nodo sinusal auricular baja porque el impulso eléctrico
se dirige de abajo a arriba y se sigue de
un QRS normal), extrasístoles de la unión
AV (aparece un QRS prematuro normal
Paro sinusal Bloqueo sinusal con frecuencia sin onda P antes o con una
onda P' 'retrógrada negativa en II, II y aVF
B2. Bradicardias por trastornos conducción AV
antes o después del complejo QRS) o ex-
trasístoles ventriculares (complejo QRS
prematuro, grande y ancho , seguido de
una pausa que se denomina compensado-
ra , porque la distancia entre las dos on-
das P normales que engloba la extrasístole
ventricular es igual al doble de un interva-
Bloqueo AV 2° grado Mobitz 11 Bloqueo AV 3er grado lo PP normal).
Latidos de escape se producen por un
C. Trastornos aislados del ritmo fallo en la actividad espontánea del
nodo sinusal y después de una pausa
de más de un ciclo completo. Pueden
ser auriculares, de la unión o ventri-
culares y parecen extrasístoles pero se
diferencian porque siempre aparecen
después de una pausa. Si el nodo si-
Ritmo de escape de la unión nusal fuera incapaz de mantener el
Extrasistole de la unión
ritmo de base normal el foco ectópico
asumiría el control y aparecerían más
Figura Arritmias cardiacas 11 : Brad icardi as (B) y tras- de 3 latidos de escape seguidos consti-
tornos aislados de ritmo (C: extrasístoles y latidos de escape). tuyéndose un ritmo de escape.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

ONDA P El término preexcitación ventricular (Fig. 45-


Es debida a la despolarización auricular (la fase ini- 13) hace referencia a que se activa, al menos en
cial se forma por activación de la aurícula derecha y parte, el ventrículo desde las aurículas a través de
la fase final por activación de la aurícula izquierda) . una vía anómala que conduce paralela al sistema
No supera los 0,12 segundos de duración (menos de de conducción normal (nodo AV-His-Purkinje):
3 cuadraditos) y los 0,25 mV de altura (2,5 cuadradi- Preexcitación Wolff-Parkinson-White (WPW) .
tos) . Busque signos de crecimiento auricular (Fig. 45- La vía anómala -haz de Kent- conecta la aurí-
12 A y B) cuando la onda P sea> 0,12 segundos(> 3 cula con el tejido muscular de los ventrículos.
cuadraditos). Debe saber que estos criterios son muy La activación se produce, a la vez, por el haz
inespecíficos y pueden aparecer cambios similares en anormal y por el nodo AV, por lo que el com-
alteraciones de la conducción interauricular: plejo QRS es la suma de ambas < 3 activacio-
Crecimiento auricular izquierdo (se denomina nes. Se caracteriza por tener un intervalo PR
«P mitral » por dilatación de la aurícula izquier- corto (PR < 3 cuadraditos), seguido de un QRS
da como ocurre en la estenosis mitral): es onda P ancho de >3 cuadraditos con presencia en su
ancha(> 0,11 segundos) y mellada en II e inverti- parte inicial de una onda delta y depresión
da o difásica con componente final ancho en Vl. de ST e inversión asimétrica de onda T si el
Crecimiento auricular derecho (se denomina QRS es positivo. Hasta en un 20% de pacien-
P «pulmonar" por dilatación de la aurícula de- tes pueden sufrir taquicardias paroxísticas de
recha como ocurre en la estenosis tricuspídea): QRS estrecho y regular y, en ocasiones, taqui-
ondaP alta 2! 2,5 mm en II o difásica con compo- cardias de QRS ancho y regular, e incluso,
nente inicial alto 2! 1,5 mm en Vl. flúter y fibrilación auricular que en alguna
ocasión pueden desembocar en TQ ventricu-
lar tipo fibrilación ventricular y muerte súbita.
INTERVALO PR Preexcitación Long-Ganon-Levine. El haz
anormal -haz de James- salta el -nodo A V y
Desde inicio de onda P a inicio de complejo QRS. conecta las aurículas con el tejido de conduc-
Dura de 0,12 a 0,2 segundos (de 3 a 5 cuadraditos). ción infranodal (haz de His) por lo que no
Está compuesto por la conducción interauricular, existe el retraso de la conducción producido
conducción del nodo aurícula-ventricular (AV), y por el nodo A V y se produce un PR acortado
conduccion del haz de His y del sistema de Purkinje. con QRS de morfología normal y sin altera-
El intervalo PR se alarga cuando mide > 0,2 se- ciones de la repolarización. Pueden sufrir TQ
gundos(> 1 cuadrado grande) e indica presencia paroxísticas supraventriculares recurrentes.
de bloqueo AV (Fig. 45-11-II. B2) por retraso en Preexcitación de Mahaim. Vía anómala que
la conducción desde el nodo sinusal al nodo AV conecta fibras del miocardio con el haz de His
o en el haz de His (o sus ramas) o sistema Pur- y tiene un PR normal porque el estímulo pasa
kinj e. Existen 3 tipos de bloqueos AV: de primer, por el nodo AV, pero hay presencia de onda
segundo y tercer grado (ver bradicardias). delta porque se altera la parte inicial del QRS.
El intervalo PR se acorta cuando mide < 0,12 Este tipo de preexcitación no produce taquia-
segundos (< 3 cuadraditos) cuando se produce rritmias.
una conducción AV más rápida de lo normal,
como ocurre en presencia de una vía accesoria
AV anómala (producen los síndromes de preex- COMPLEJO QRS
citación ventricular) o de un ritmo en la unión
AV o ritmo auricular bajo por aparición de un
Eje QRS medio o eje eléctrico cardiaco
foco ectópico auricular diferente al sinusal (se
ven en ambos casos ondas P negativas en II, III y Si sumamos todas las fuerzas de la despolarización
aVF con intervalo PR normal o acortado). ventricular en el plano frontal obtenemos un vector
cardiaco medio, que por la posición del co-
Crecimientos auriculares razón en el tórax se dirige hacia la izquierda
A B y abajo hacia el ápex (en condiciones nor-
males se localiza entre - 30° y+ 110°). Pue-
de calcular el eje QRS medio usando varias
derivaciones de los miembros. Ponga aten-
Crecimiento auricular izquierdo ción y fíjese en los voltajes de los complejos
QRS de las derivaciones I, II y III observan-
do si estos complejos son fundamentalmen-
Figura
380 (B).
1 Crecimiento auricular izquierdo (A) y derecho te positivos, negativos o isoeléctricos y siga
las siguientes normas (Fig. 45 -14):
CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

n 111

yy 1 11

º Ayy
·60º 1 11 111

1 A Al
30• Aty
1 11

1 11 m +Oº AA V
1 11 111

+30• AA ~
Preexcitación tipo +60°
1 n m
t
Wolff-Parkinson-White

Figura Cálculo del eje QRS medio.

Desviación del eje a la derecha (DED) a más de


Preexcitación tipo Preexcitación tipo +1 10°: crecimiento ventricular derecho, niños ,
Long-Canon-Levine Mahaim delgadez, enfermedad pulmonar obstructiva cró-
nica (EPOC), tromboembolismo pulmonar (TEP),
dextrocardia, estenosis pulmonar, hemibloqueo
Figura Síndromes de preexcitación . posterior e infarto de miocardio lateral.
Dentro de los límites normales, una desviación
del eje a la izquierda (entre Oº y - 30º) representa una
posición horizontal normal del corazón, frecuente en
Recuerde como regla que el eje se localiza a ancianos. y una desviación del eje a la derecha (entre
60º si el voltaje QRS es positivo en I, II y m. + 75º y + 110°) representa una posición vertical nor-
Fije en su mente un eje localizado a 60º. Este mal del corazón frecuente en niños sanos y jóvenes
eje se desplazará 30° o 60° hacia la izquierda si longilíneos.
III es isoeléctrico o negativo respectivamente,
y se desplazará 30° o 60° hacia la derecha si Hemibloqueo (Fig. 45-16) Aparece por altera-
I es isoeléctrico o negativo, respectivamente: ción en la conducción de uno de los dos fascículos
de la rama izquierda del Haz de His que conduce
Entonces (Fig. 45-14A), si ID es isodifásico el
a desviación del eje QRS medio pero no ensancha
eje se localizará a +30° y si es negativo a +Oº
el QRS, como ocurre con el bloqueo completo de
(se desplaza 60ª). Si además II es isodifásico
la rama izquierda, porque la rama derecha y el otro
(sume 30° más) el eje se localizaría a -30º y
fascículo de la izquierda siguen conduciendo de
si II fuera negativo (en lugar de 30º sume 60º
forma adecuada. Piense en hemibloqueo si QRS
más) el eje se localizaría a -60º.
estrecho y patrón Q1S3 (onda Q en I y S profunda
En el caso de que I sea isodifásico (Fig. 45-
y/o ancha en III) con desviación del eje a menos de
14B) el eje se localizará a +90º y si es nega-
-45° si es hemibloqueo anterior izquierdo (HAI) o
tivo a +120° (se desplaza 60ª). Si además II
con patrón S1Q3 (S profunda en I y onda Q en III) y
es isodifásico (sume 30° más) el eje se locali-
desviación del eje a más de +90° si es hemibloqueo
zaría a +150° y si II fuera negativo (en lugar
posterior izquierdo (HPI) .
de 30º sume 60° más) el eje se localizaría a
Pueden coexistir con bloqueo de rama derecha,
+180°.
dándose en este caso dos situaciones: a) bloqueo
bifascicular, que implica presencia de bloqueo de
Causas de desviación del eje eléctrico (ver Fig. 45-15) rama derecha asociado a HAI o HPI y b) bloqueo
trifascicular que implica presencia de bl) bloqueo
Desviación del eje a la izquierda (DEI) a más de
de rama derecha alternando con bloqueo de rama
-30º: en crecimiento ventricular izquierdo, obe-
izquierda o con HAI y HPI o b2) bloqueo bifascicu-
sidad, hemibloqueo anterior e infarto de miocar-
lar y PR largo (bloqueo AV primer grado). ~
dio inferior.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

iii l
-90°
3
(>- 45 º) qR
~~
~ rS
~ ·~ S2
~ : ; -,
-30°
Aparece en 1AM anterior hasta en un 50%

±180° +Oº HPI 1 11 111

S1Q3
DEO t Á
1
Eje
Normal
(-30° a +110°) (>+90º)
rS qR
Aparece en 1AM inferior y de vent. dcha

+110° +75° Figura -1 Hemibloqueos.

Figura Causas de desviación del eje QRS.


criterios no son válidos si existe BRIHH, síndrome de
Anchura del QRS es de 0,08 a 0,12 segundos WPW o marcapasos de demanda ventricular) porque
(2 a 3 cuadraditos) se produce incremento del voltaje en las derivaciones
Si se confirma que el QRS es ancho(> 0,12 s) piense en que reflejan actividad eléctrica del ventrículo izquier-
bloqueo de rama del Haz de His (BRHH) por trastorno do (I, aVL, V5-V6).
en la conducción intraventricular o conducción anor-
mal por vías accesorias (preexcitación conduce por
vía anormal de aurícula a ventrículo y el QRS se hace Los signos electrocardiográ.ficos típicos de cre-
ancho) o taquicardia ventricular o ritmo de marca- cimiento ventricular izquierdo son (Fig. 45-18):
pasos de demanda ventricular (DEI a -60° y BRIHH). Onda R de I + onda S de 111 > 25 mm.
Si existe bloqueo de rama derecha del Haz de His Onda R en aVL > 11 mm.
Onda S (profunda con elevación de ST) en Vl
(BRDHH) se producirá retraso en la propagación del
o V2 + R de V5 o V6 > 35 mm.
impulso y se despolarizará tardíamente el ventrícu-
lo derecho (se forma un vector tardío dirigido hacia Se acompaña también de eje eléctrico en torno
adelante y a la derecha) y si existe bloqueo de rama a +Oº y -30° e inversión asimétrica de onda T con
izquierda del Haz de His (BRIHH) se producirá re- descenso de ST en derivaciones de la cara lateral
traso en la propagación del impulso y se despola- del ventrículo izquierdo (1, aVL y V5-V6).
rizarán tardíamente el septo y ventrículo izquierdo
(los 3 vectores de despolarización se dirigen hacia la
izquierda).
Para reconocer el BRHH debe fijarse en Vl y V6.
El BRHH no altera el eje. A V1-2 1
R 3 aVL
Los signos electrocardiográficos típicos de
BRHH son (Fig. 45-17): R,.
E3 ºR' :
V5-6
.,.........
QRS ancho >0,12 s (si bloqueo incompleto es
QRS normal).
scU
·•= q '
c S •empastad ..
Bloqueo de rama derecha
Patrón RR' con alteraciones en la repolariza-
ción secundarias (inversión asimétrica de onda
T y depresión de ST) en las derivaciones que B 1-2
registran la despolarización anormal (Vl-2 si
BRDHH y V5-6 si BRIHH).
Onda S empastada en V6 en BRDHH y QS con S
mellada y ancha en Vl-2 en BRIHH. M QS
Bloqueo de rama izquierda
Voltaje del QRS (o altura en mV)
Busque signos de crecimiento ventricular izquierdo Figura Bloqueos de rama derecha (A) e iz-
382
(CVI) si el complejo QRS es alto (recuerde que estos quierda (B).
CAPITULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

Figura Onda Q patológica.

Figura Crecimiento ventricular izquierdo.


Progresión de onda R en precordiales
La activación normal ventricular produce un patrón
Morfología del QRS
típico de progresión de las ondas R y S en el plano
La despolarización se inicia en la zona septal media horizontal (complejos QRS negativos en V1-V2 y po-
izquierda y rota desde una posición anterior y derecha sitivos en V5-V6). De esta manera existe una zona de
hacia up.a posición posterior, izquierda y superior. Si transición donde los complejos QRS son isoeléctricos
existe alteración en la despolarización se alterará la que se sitúa en las derivaciones V3-V4 (Fig. 45-21).
morfología de las ondas Q o R. Busque: Si la zona de transición se localiza hacia la derecha
Ondas Q normales son: a) ondas Q septales :;:; (V1-V2) se denomina rotación antihoraria (o levorro-
0,02 segundos (= ½ cuadradito) y <3 mm de pro- tación) y si se localiza hacia la izquierda (V5-V6) se
fundidad en I, aVl, V5-V6; b) presencia de onda denomina rotación horaria (o dextrorrotación) .
Q en aVR (eje de QRS se dirige en dirección con-
traria) y en III (no en II ni aVF) y c) presencia de
onda Q en I, II con altura< del 25% de onda R y
REPOLARIZACIÓN
en V5-V6 < del 15% de la onda R. Segmento ST elevado~ 1 mm (Fig. 45-22A)
Ondas Q patológicas (Fig. 45-19) son: a) anchas
> 0,04 segundos (> 1 cuadradito) sobre todo si Infarto agudo de miocardio por lesión subepicár-
son melladas y b) profundas > del 25% (o > 0,2 dica o transmural, con elevación convexa en «lomo
mV = > 2 cuadraditos) de altura de la onda R en de delfín » de horas a días; si no desciende pensar
I, II, V5 y V6. en aneurisma ventricular; espasmo coronario (angi-
Ondas R patológicas si se ven en: a) avR (QRS na de Prinzmetal) con elevación de ST transitoria y
normalmente es negativo con onda R < S por- reversible asociada a dolor anginoso en reposo y a
que es contrario al eje QRS medio); piense en medianoche; pericarditis (elevación plana o cónca-
posibilidad de infarto de miocardio y b) En Vl va en «silla de montar" en cara anterior e inferior-
y V2 (si onda R ~ 0,4 m V = 4 cuadraditos de salvo en AVR y, rara vez, en Vl , con onda T también
altura y algo mayor que onda S). Aparecen en por encima de línea basal. En unos días se normaliza
crecimiento ventricular derecho , en infarto el ST y pueden invertirse las ondas T, pero quedan
posterior o BRDHH. En los dos primeros casos
el QRS es estrecho, mientras que es ancho en el
BRDHH.

El crecimiento ventricular derecho produce in-


versión del predomino del ventrículo izquierdo en
la morfología del QRS con desviación de las fuer-
zas netas de despolarización a posición derecha y
anterior.
Los signos electrocardiográficos típicos de cre-
cimiento ventricular derecho son (Fig. 45-20):
Onda R > S (R > 5 mm de altura en V1-V2) o
qR alta con depresión de ST e inversión de
onda T en V1-V2.
Ondas S profundas en V5-V6.
También onda R que disminuye de V1 a V6 (=
pobre crecimiento de la onda R) .
Figura Crecimiento ventricular derecho.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Zona de transición
3,V4)

V4

Rotación horaria
Causas:
- Dilatación ventricular derecha
Rotación antihoraria severa.
Causas: -Enfisema severo.
-Crecimiento ventricular derecho
- Infarto posterior
- Rotación cardiaca antihoraria

Figura 2 Onda R en precordiales y rotación cardiaca.

por encima de la basal durante semanas o meses); sinusal y ondas T altas y picudas), hiperpotasemia;
BRIHH y CVI (en precordiales derechas); patrón de en BRIHH y CVI (en precordiales derechas).
repolarización precoz (patrón normal con punto J Onda T plana en hipopotasemia con onda U 2
elevado hasta 1-2 mm con ST cóncava hacia arriba veces mayor en voltaje respecto de onda T.
en cara anterior e inferior); síndrome de Brugada: Onda T negativa (invertida) existen en las alte-
imagen de bloqueo de rama derecha y al menos 0,1 raciones primarias de la repolarización (ondas
mV (1 cuadradito) de elevación de ST de Vl a V3 T invertidas y simétricas) por isquemia o infarto
(sufren taquicardias ventriculares polimórficas, fi- miocárdico; pericarditis subaguda; tromboembo-
brilacion ventricular y síncopes de repetición por lismo pulmonar masivo (a veces, onda T invertida
alteraciones de los canales iónicos celulares); hiper- de Vl a V4); alteraciones electrolíticas o fármacos
potasemia; síndrome de WPW; miocarditis; tumores (digital) y alteraciones secundarias de la repolari-
y quistes cardiacos. zación (ondas T invertidas y asimétricas) debidas
a alteraciones en la despolarización ventricular
Segmento ST descendido (Fig 45-22B) (bloqueo de rama, crecimiento ventricular, sín-
drome de preexcitación, marcapasos ventricular o
Cuando ~ 1 mm por debajo de la línea isoeléctrica extrasistolia ventricular).
por: lesión miocárdica subendocárdica aguda o cró-
nica; impregnación digitálica (descenso de segmento En el infarto agudo de miocardio (1AM) existe insu-
ST cóncavo o en línea oblicua desde punto J -cazo- ficiente riego sanguíneo y necrosis del tejido cardiaco
leta digitálica- en I, aVL y V5-6); BRIHH y CVI (en que se hace incapaz de rep/despolarizarse. Previo al
precordiales izquierdas); tromboembolismo pulmo- 1AM se producen cambios reversibles y transitorios:
nar agudo con infarto pulmonar (patrón S1Q3T3 y a) isquemia del área subendocárdica (T altas) o sube-
T invertida de Vl a V4; ST deprimida en 11, DED y picárdica (T invertidas y simétricas) y b) si hay más
BRDHH transitorio); extrasístole ventricular; ritmo de compromiso se produce lesión (cambios en segmento
marcapasos ventricular; hiperpotasemia; hiponatre- ST) subepicárdica (elevación ST) o subendocárdica
mia-hipernatremia e hipocalcemia. (descenso ST).
El infarto es irreversible y se registra como ondas Q
o QS si afecta a todo el grosor del miocardio u ondas
Ondas T
R de menor voltaje a las que se registrarían si no exis-
Son positivas en I, 11 y V4-6 y negativas en aVR y pue- tiera necrosis si el infarto es pequeño (Fig. 45-23A).
den serlo en Vl, III y aVL. Niños y mujeres de 40-60 Localización de infartos transmurales por ECG
años pueden tener ondas T negativas de Vl a V4. A (Fig. 45-23B):
partir de 15 años se hace en positivas las ondas Ten
Arteria Descendente Anterior: 1AM Anterior
V2 y V3.
(V3-4) ± Septal (Vl-2) o Lateral (alto: I y aVL y
Onda T picuda aparece en: infarto de miocardio hi- bajo: V5-6).
peragudo (en primeros minutos, generalmente >10 Arteria Circunfleja: IAM Lateral (alto: I y aVL y
mm y afilada); variantes de la normalidad como bajo: V5-6) ± 1AM Posterior (primero descenso
en repolarización precoz o vagotonía en mujeres de ST y después ondas R ~ S y ondas T positivas
jóvenes (puede observarse tendencia a bradicardia en Vl-2).
CAPÍTULO 45 Principios básicos de electrocardiografía

Derecho (elevación de ST en V2R-4R,


11, 111 y aVF,V2-V6 V1-V2 11, 111 y aVF, V2-V6 derivaciones precordiales que se colo-
A Tporencima STelevado Pequeña muesca
can en hemitórax derecho).
de la basal al final del QRS

Intervalo QT
~~rlto J elevado Si está alargado puede favorecer la
Síndrome de Brugada
Pericarditis aguda Patrón de bloqueo de rama Repolarización precoz aparición de arritmias graves (taquicar-
Elevación ST cóncava hacia incompleto (RsR'con QRS
arriba en cara antenor e inferior
Elevación punto J y segmento ST dias ventriculares polimórficas o mo-
normal) y ST elevado que
cóncava hacia arriba en 11, 111 y nomórficas) y si está acortado indica
con ondas T por encima de línea nace desde parte superior aVF (inferior) y V2-6 (anterolateral)
basal. de onda R' incremento de la velocidad de repolari-
zación y suele deberse al uso de digital,
hiperpotasemia o hipercalcemia.
QT corregido= QTc = QT medido (en
B 1, aVL,V5-V6
Depresión ST
1, aVL,V5-V6
segundos)/-ylntervalo RR previo (en se-
~ ~rt•a gundos).
El QTc está prolongado si ~ 0,42 s en
Depresión ST
varones o ~ 0,43 s en mujeres (aprox. < 2
Cubeta digitálica
cuadrados grandes y¾ de uno pequeño).
Lesión subendocárdica Marcapasos ventricular
Punto J a 3 mm de línea iso- Tiene imagen de bloqueo de Un intervalo QT es normal si no su-
eléctrica y depresión de ST rama izquierda pera en ±10% su intervalo QTc y como
asociada a angina regla nemotécnica con una frecuencia
cardiaca normal (60-90 1pm) debe ser
menor de la mitad del intervalo RR
Figura Segmento ST elevado (A ) o descendido (B). previo.

Arteria coronaria derecha: IAM Inferior (II, III y El síndrome QT largo se caracteriza por una
prolongación en la repolarización ventricular y del
aVF) ± IAM Posterior (primero descenso de ST
intervalo QT corregido para la frecuencia cardiaca
y después ondas R ~ S y ondas T positivas en
(QTc > 0,44 segundos).
Vl-2), 1AM Lateral (bajo: V5-6) o de Ventrículo

Fase hiperaguda Fase aguda Fase crónica


Primeros minutos Primeras horas Primeros días antiguo
a horas a semanas Meses a años

1-aVL VS-6 11 111 aVF


,,,:,::: ¡ : . ,, .. . . . . .
l"-lé+-'+'~~+'-'li'-4-'-'i
. ¡.," " ':
µ.'-1-=-l-'-'!· " ' '.. 'i ' ..,
===·•::::: ··•··
lf' !~ p~,)·
,;;,1 ¡;;;:¡¡,;4··;,·,, JJ
' -:;;i. ,.
"""-=~
Infarto anterior Infarto lateral Infarto inferior Infarto posterior Infarto vent. derecho

Figura Cambios evolutivos en el ECG de un 1AM transmural A) y localizacion de los infartos transmu- ~
rales (B).
V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovascu lares

Puede ser adquirido (hipocalcemia, hipopo- COMPLEJO QRS


tasemia o hipomagnesemia, uso de amiodarona, Eje: Fíjese en I, II y III. Si eje muy desviado piense
sotalol, quinidina o procainamida, psicotrópicos en hemibloqueo (Hemibloqueo anterior izquier-
-haloperidol, risperidona, antidepresivos tricícli- do si eje ~ 45º; Hemibloqueo posterior izquierdo
cos- miocarditis, pericarditis o IAM entre otros) si eje~ +120°).
o congénito. En los casos congénitos el pronóstico
Anchura: si >3 cuadraditos piense en bloqueo
puede ser malo porque suelen ser jóvenes quepa-
de rama derecho o izquierdo (fíjese en Vl y V6) ,
decen síncopes cardiogénicos y pueden desarrollar
preexcitación ventricular (tipo Wolff-Parkinson-
taquicardias ventriculares polimórficas, fibrilacion
White o preexcitación de Mahaim), ritmo de
ventricular y muerte súbita.
marcapasos ventricular (busque la «espiga »,
detrás imagen de bloqueo de rama izquierda),
RUTINA DE INTERPRETACIÓN ritmo supraventricular con aberrancia o ritmo
ventricular.
DE ELECTROCARDIOGRAFÍA Voltaje: piense en crecimiento ventricular iz-
quierdo si RI + SIII > 25 mm; R > 11 mm en aVL;
RITMO RV5 + SVl > 35 mm con inversión asimétrica de
Ritmo sinusal: a) ondas P son positivas en II, III onda T y depresión de ST en I, aVL y V5-6.
y aVF y negativas en aVR; b) frecuencia cardiaca Morfología: a) onda Q normal es negativa en III
entre 60-100 1pm y c) ondas P preceden a com- y aVR; b) onda Q patológica si> 1 cuadradito de
plejos QRS. ancho y> 25% de la altura de R en I, II, V5-6 y
Arritmia cardiaca: taquiarritmias, bradiarrit- c) onda R patológica si onda R> S en a VR (QRS
mias y extrasístoles o latidos de escape. positivo) piense en posibilidad de infarto o si
R>S en Vl-2 con QRS normal) piense en creci-
miento ventricular derecho o infarto posterior
FRECUENCIA y con QRS ancho en bloqueo de rama derecha.
Para medir la frecuencia cardiaca tenga en cuen-
ta que 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 u 8 cuadrados grandes de
separación entre dos ondas R consecutivas son
REPOLARIZACIÓN
respectivamente 300 - 150 - 100 - 75 - 60- 50 - 43 Alteración del segmento ST: 1) ST elevado en in-
o 38 lpm. farto agudo de miocardio, angina de Prinzmetal,
pericarditis, repolarización precoz, crecimiento
ventricular o bloqueo de rama izquierdas (pre-
NTERVALO PR cordiales derechas) y síndrome de Brugada y 2)
Si intervalo PR ancho (> 5 cuadraditos) piense ST descendido en lesión miocárdica subendocár-
en bloqueo AV (si constante es de primer grado; dica, digital , crecimiento ventricular o bloqueo
si se alarga progresivamente es de segundo grado de rama izquierdas (en precordiales izquierdas),
tipo Mobitz I). extrasístole ventricular y ritmo de marcapasos
Si intervalo PR corto (< 3 cuadraditos) piense ventricular.
en ritmo auricular bajo (si onda P negativa en II, Onda T patológica: si negativa en I, II, V4-6.
III y aVF con PR normal/corto y QRS estrecho) o Intervalo QT: corto si digital o hipercalcemia
ritmo de la unión AV alto (si onda P negativa en y largo en síndrome QT largo adquirido (antia-
II, III y aVF con PR corto y QRS estrecho) o en rrítmicos IA y III, hipopotasemia, hipocalcemia
preexcitación ventricular (conducción de Wolff- e hipomagnesemia, psicotrópicos, hipotermia,
Parkinson-White con PR corto, onda delta y QRS hipotiroidismo, isquemia miocárdica, alcoho-
an cho; conducción de preexcitación de Long- lismo crónico, bradicardias severas) o congénito
Ganon-Levine con PR corto). (canalopatías) .
-146
Síndrome de insuficiencia
cardiaca
Pedro Conthe Gutiérrez

INTRODUCCIÓN
El aparato circulatorio muestra una con-
siderable capacidad adaptativa. Según
las circunstancias de demanda de oxíge-
no y nutrientes de los tejidos, el aporte
circulatorio puede aumentar hasta en 10
veces respecto a la situación de reposo.
El término insuficiencia circulatoria alu-
de a un estado fisiopatológico del aparato
circulatorio que genera una incapacidad
para aportar a los tejidos el flujo sanguí-
neo y las condiciones metabólicas que
requieren en cada momento. Cuando ello
se debe a un fallo en la bomba de este sis-
tema , el propio corazón, o bien a que este
no recibe suficiente cantidad de sangre,
hablamos de insuficiencia circulatoria
central o insuficiencia cardiaca (IC).
El papel fundamental del corazón
consiste, pues, en mantener un flujo san-
guíneo adecuado a las necesidades nutri-
tivas del organismo. Su capacidad para
realizar esta tarea está en estrecha depen-
dencia con la cuantía de sangre que llega
a los ventrículos y con la que estos son
capaces de lanzar a la circulación pulmo-
nar y sistémica.
En este capítulo nos referiremos prin-
cipalmente a la IC congestiva crónica,
que es aquella que se suele desarrollar
lentamente, dando tiempo a que se esta-
blezcan una serie de mecanismos com-
pensadores que tratan de neutralizar la
situación hemodinámica y que a la larga
serán inequívocamente perjudiciales y
terminarán produciendo gran parte del
complejo sintomático de esta entidad.
Cuando la IC se desarrolla de forma súbi-
ta o aguda no predomina, por el contra-
rio, la congestión vascular y sí el cuadro
de shock general que tendrá protagonis-
mo propio, y que es tratado en otro capí-
387
tulo (Capítulo 47).
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Tabla Criterios de Framingham de insuficiencia cardiaca


Criterios mayores Criterios menores
Ortopnea o disnea paroxística nocturna Edemas maleolares
Distensión de las venas del cuello Tos nocturna
Estertores húmedos (crepitantes) Disnea de esfuerzo
Cardiomegalia Hepatomegalia
Edema agudo de pulmón Derrame pleural
Galope por tercer ruido Capacidad vital< 1/3 del máximo
PVC > 16 cm H2O o elevación de PVY Frecuencia cardiaca> 120 1pm
Tiempo circulatorio > 25 seg
Reflujo hepatoyugular

Criterio mayor o menor


Pérdida de peso > 4,5 kg en 5 días en respuesta al tratamiento

Interpretación. El diagnóstico de insuficiencia cardiaca requiere la existencia de al menos dos criterios mayores o
uno mayor y dos menores. PVC : presión venosa central. PVY: presión venosa yugular.

CONCEPTO Y DEFINICIONES DE IC BASES FISIOPATOLÓGICAS DE LA IC


De forma clásica se definía la IC como la situación en La función ventricular depende de la interacción de di-
la que el corazón (bomba del sistema circulatorio) no versos factores que regulan finalmente el volumen de
es capaz de mantener un débito cardiaco (volumen sangre expulsado por el corazón (Fig. 46-1). Los princi-
minuto) adecuado al retorno venoso y a las necesi- pales factores implicados en el volumen de eyección
dades tisulares de cada momento. Pero este concepto o volumen minuto son: la contractilidad cardiaca, la
resulta en la práctica algo teórico y ambiguo, pues- precarga , la postcarga y la frecuencia cardiaca.
to que no es habitual determinar los requerimientos La variación en parámetros como la contractilidad,
metabólicos , el volumen minuto ni el retorno venoso. la precarga y la postcarga van a modificar o regular el
Por ello se prefiere en la práctica diaria definir la IC volumen expulsado en cada latido (volumen de eyec-
como un síndrome caracterizado por un conjunto de ción), mientras que la frecuencia cardiaca, variando
síntomas y signos físicos secundarios a una alteración el número de contracciones cardiacas, condiciona
de la función ventricular, de las válvulas cardiacas el volumen minuto. El sistema nervioso autónomo
o de las condiciones de carga de los ventrículos. Es (especialmente el sistema simpático) influye sobre
necesaria, pues, la presencia de una constelación de todos los mecanismos citados. Además, se requiere
síntomas y signos, dado que ninguno de ellos es por obviamente una indemnidad anatómica y funcional
sí mismo patognomónica. del tabique interventricular y de las válvulas auricu-
Los criterios más utilizados para el diagnóstico loventriculares. Los factores que regulan la función
de IC son los de Framingham (Tabla 46 -1). Estos
criterios sólo son válidos cuando se excluyen otras
causas que pudieran justificar su presencia. Actual-

!
mente estos criterios, que vienen siendo utilizados CONTRACTILIDAD
desde 1948, son considerados muy estrict9s, y es POSCARGA
PRECAR \
posible que muchos enfermos con IC incipiente pre-
senten alteraciones de la función ventricular aunque
no muestren síntomas tan marcados de congestión
pulmonar y sistémica como los que establecen los
mencionados criterios. Por otro lado, diversas di-
rectrices han llamado la atención sobre el hecho de
que el diagnóstico exclusivamente clínico de la IC
;,9,~r,1,rg~\¡'f,J\~tCÁ~lc"·· · · +····· · ~~c,;;!~IA
puede tener un amplio margen de error. Por ello,
actualmente se recomienda obtener una valoración !VOLUMEN MINUTO
objetiva de la función cardiaca (habitualmente con
ecocardiografía) para poder realizar un diagnóstico Figura Principales determinantes de la función
388
óptimo de IC. ven tri cu lar.
CAPITULO 46 Síndrome de insuficiencia cardiaca

DISTE SIBILIDAD VOLUME En el corazón intacto la precarga representa la fuer-


VENTRIC ULAR DIASTÓLICO za que distiende el miocardio antes de contraerse, o
también la tensión que soporta el miocardio antes de
contraerse, esto es, la tensión que soporta la pared ven-
PRESIÓN TELEDIASTÓLICA tricular al final de la diástole. Cuando el corazón no
está intacto también modifican la precarga el diámetro
del ventrículo y el espesor de su pared (ley de Laplace).
ESPESOR DE LA PARED
DEL VE TRÍCULO TAMA O VE TRICULAR En la Figura 46-3 se muestra un diagrama de la re-
IZQUIERDO lación presión volumen en el ventrículo izquierdo a
·►
1 lo largo de un ciclo cardiaco. Es interesante destacar
PRECARGA
que la relación presión/volumen no es lineal y varía
(fuerza que distiende el ventrículo antes de contraerse) cuando disminuye la distensibilidad del ventrículo
(Fig. 46-4), de forma que un ligero aumento de vo-
lumen se acompaña de un incremento desproporcio-
Figu ra Factores determinantes de la precarga. nado de la presión. Es decir, para manejar el mismo
volumen un corazón menos distensible (por ejemplo,
ventricular actúan de forma coordinada para ajustar por hipertrofia) necesita un mayor grado de presión.
el volumen minuto a las necesidades del organismo. Este concepto ayuda a entender la IC por disfun-
Debido a la gran trascendencia e implicación fisio- ción diastólica (ver más adelante).
patológica que tienen la precarga y la postcarga en dis-
tintas circunstancias clínicas se debe incidir y detallar POSTCARGA
sobre sus factores determinantes (Figs. 46-2 y 46-5).
Es la fuerza con la que se contrae el músculo cardia-
co. Es igual a la fuerza que se opone al vaciamiento
CONTRACTILIDAD del ventrículo durante la sístole. La postcarga es di-
La contracción de la fibra muscular se debe a la inte- rectamente proporcional a la presión intraventricular.
racción de las proteínas actina y miosina. Este acopla- El esfuerzo sistólico máximo se produce, en condi-
miento está a su vez regulado por distintos condicio- ciones normales, justo antes del momento de abrirse
nantes , tales como la concentración de calcio intrace- las válvulas sigmoideas para, a continuación, enviar
lular libre para unirse con las proteínas contráctiles, la sangre eyectada a la aorta. Desde el punto de vista
y por la acción del sistema nervioso autónomo, en práctico, la postcarga puede considerarse equivalente
especial por la de los receptores agonistas betaadre- a la resistencia vascular, que puede ser calculada más
nérgicos, que estimulan la contracción miocárdica. fácilmente periférica. Es fácil comprender que cuando
El proceso inverso sucede durante la diástole o pe- aumentan sensiblemente las resistencias vasculares
riodo de relajación de la fibra miocárdica, durante el disminuye el volumen minuto. Además, las resisten-
cual el calcio se disocia del aparato contráctil, reincor- cias periféricas vasculares suponen la vía final común
porándose a sus reservorios celulares. Este proceso es de actuación de diversos mecanismos compensadores
un transporte activo, que también consume energía. que tratan de conservar el volumen minuto en distin-
La denominación de contractilidad ventricular alu- tas situaciones, como es el caso de la IC.
de a la fuerza que desarrolla el ventrículo al contraer-
se para expulsar sangre en unas condiciones estables FRECUENCIA CARDIACA
de precarga y postcarga. Se denomina hipocontracti-
lidad si el acortamiento de las fibras miocárdicas, y La frecuencia cardiaca (número de latidos por minu-
por ello el volumen de eyección, son menores a las to) influye decisivamente sobre el volumen minuto.
estimadas como normales. De igual modo , se habla Esta relación no es estrictamente lineal, ya que al
de hipercontractilidad cuando existe un aumento del acortar el tiempo de sístole y diástole también cam-
volumen de eyección por un mayor acortamiento de bia el volumen de eyección. En condiciones norma-
las fibras miocárdicas. les, la frecuencia cardiaca depende del equilibrio del
sistema nervioso autónomo (sistema simpático acele-
rador y sistema parasimpático desacelerador). En la
PRECARGA IC predomina la acción del sistema simpático, que a
Es la fuerza que distiende el músculo relajado y con- través de los receptores betaadrenérgicos induce un
diciona por ello el grado de elongación de la fibra aumento de la frecuencia cardiaca.
miocárdica antes de contraerse. Gracias a la ley de La alteración de cualquiera de los mencionados
Frank-Starling se sabe que existe una relación directa factores determinantes de la función ventricular pue-
entre el grado de elongación de la fibra miocárdica y de propiciar la aparición de insuficiencia cardiaca.
el acortamiento de la fibra miocárdica. Sin embargo, Las consecuencias directas son la disminución del
sobrepasados ciertos límites disminuye la eficacia de volumen sistólico, del volumen minuto y el acúmulo -m
la contracción. de sangre en el circuito menor y sistémico. La menor
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Presión

Cierre Ao

Apertura Ao

Re lajación
isométrica
Contracción
isométrica

Apertura M Cierre M

VTS Llenado V VTD Volumen

Figura Diagrama de presión/vo lumen en un ciclo cardiaco comp leto. VTS: Volumen telesistólico . VTD:
Vo lumen telediastólico. V: ventr icular. M: vá lvula mitral. Ao: válvula aórtica.

eyección de sangre produce hipoperfusión tisular. La sistemas compensadores (unos propiamente cardia-
acumulación retrógrada de sangre origina congestión cos y otros de acción sistémica) para adaptarse a las
en el área pulmonar y en todo el territorio dependien- necesidades tisularns de oxígeno en cada situación.
te del drenaje de las cavas en la aurícula derecha. Estos mecanismos, que vamos a exponer a con-
tinuación, pueden tener inicialmente una función
positiva al contribuir a mantener la situación equili-
MECANISMOS ADAPTATIVOS brada sin aparición de síntomas clínicos. Pero a me-
Una vez que se ha originado alguna forma de lesión dida que evolucionan llegan a ejercer un claro efecto
miocárdica, se produce en algún momento evolutivo perjudicial para el propio corazón y para el aparato
una disminución del volumen minuto, que va a acti- circulatorio, y pueden incluso contribuir a perpetuar
var una serie de mecanismos cuyo principal objetivo el trastorno hemodinámico y vital del organismo. En
es mantener la perfusión tisular, especialmente en los este sentido, se considera que los mecanismos neuro-
órganos vitales. El organismo dispone de diferentes hormonales ejercen un papel decisivo en el deterioro
ventricular y progresivo característico de la IC.

Presión
Mala Buena
distensibi lidad distensibiliclacl DISTENSIBILIDAD AÓRTI CA RESISTENCIAS
(RESISTE CIA AL VACIAMIENTO) PERIFÉRICAS

~ /
¡ PRESIÓN INTRAVENTRICULAR 1

ESPESOR DE LA PARED
DEL VE TRÍCULO
IZQU IERDO
. .. . ►
lTAMAÑO VENTRICULAR

◄ ...•. ·······••· ..
Volumen

POSCARGA
(fuerza con la ue se contrae el ventrículo)
Figura Re lación presión/vo lumen en el cora-
zón norma l y en el corazón con mala distensibilidad
(generalmente por hipertrofia ventr icu lar). Figura Factores determinantes de la postcarga.
CAPITULO 46 Síndrome de insuficiencia cardiaca

TIPOS DE MECANISMOS ADAPTATIVOS Hipertrofia ventricular: Es otro mecanismo adap-


tativo importante frente a la IC, habitualmente de
Los mecanismos adaptativos pueden ser clasificados aparición relativamente temprana. Al aumentar
en intrínsecos, periféricos y neurohormonales. la masa ventricular debe producirse una mayor
contractilidad. Sin embargo pueden verse pro-
Mecanismos cardiacos intrínsecos piciados ciertos problemas de llenado-relajación
Son la frecuencia cardiaca, la dilatación y la hiper- ventricular por una mayor rigidez ventricular
trofia. que, por otra parte, va a ser perjudicial y aparece
por esta vía sintomatología de IC congestiva.
Aumento de la frecuencia cardiaca: Uno de los
mecanismos de compensación intrínseco que La hipertrofia ventricular tiene claros determinan-
posee el corazón es aumentar el gasto cardiaco tes hemodinámicos (sobrecarga de presión y de vo-
por medio del incremento de la frecuencia car- lumen), pero en su aparición también influyen otros
diaca; este es el mecanismo adaptativo más sim- factores, tales como la predisposición genética indi-
ple. Posiblemente, el aumento de la frecuencia vidual y, sobre todo, la activación de los mecanismos
cardiaca produce además un cierto efecto inotró- neurohormonales (en especial, la actividad adrenér-
pico positivo (mejorando la contractilidad con gica y el sistema renina-angiotensina-aldosterona),
aumento del calcio intracelular disponible para que trataremos después, y que son auténticos facto-
la contracción). El volumen minuto es directa- res tróficos propiciadores del aumento de miocitos y
mente proporcional a la frecuencia cardiaca: otros componentes de la estructura ventricular.
Sin embargo, la hipertrofia no va acompañada de
(Volumen minuto = un aumento adecuado de los componentes del cora-
= Volumen sistólico x frecuencia cardiaca)
zón sano. No hay un aumento proporcional del tejido
Esta relación no es estrictamente lineal, pues si la vascular pero sí lo hace la producción de colágeno;
frecuencia cardiaca baja a menos de 40 latidos por ello condiciona un incremento de la fibrosis, que
minuto, desciende de forma significativa el gasto contribuye al aumento de espesor de los diámetros
cardiaco, y cuando la frecuencia cardiaca aumenta ventriculares.
en exceso (sobre todo por encima de 140-160 1pm) se
acorta marcadamente la diástole y la sístole, disminu- Mecanismos adaptativos periféricos neurohormonales
yendo el volumen de eyección.
Se activan al disminuir el gasto cardiaco y se dirigen
El aumento de la frecuencia está regulado por el
básicamente a mantenerlo, aumentando la volemia y
automatismo del nódulo sinusal, si bien depende en
la extracción periférica de oxígeno. A la vez redistri-
grru1 medida de los efectos del sistema nervioso au-
buyen el flujo sanguíneo hacia los órganos vitales (en
tónomo (el simpático aumenta la frecuencia y el pa-
especial, hacia el corazón, el cerebro y el hígado), con
rasimpático la frena), así como de las catecolaminas
objeto de preservarlos.
plasmáticas.
Estos sistemas se contrarregulan dependiendo de Mecanismos adaptativos
las circunstancias. En la IC crónica predomina la
La activación neurohormonal desempeña un papel
acción aceleradora simpática, que será tratada poste- fundanrnntal en la fisiopatología de la IC y su evolu-
riormente (activación neurohormonal).
ción natural de la IC.
Dilatación ventricular: Es un mecanismo que La respuesta adaptativa es semejante a la que pue-
cobra importancia en la IC cuando el corazón de desencadenarse en situaciones de hemorragia,
pretende conseguir una contracción más enérgi- depleción de volumen o ejercicio extenuante como
ca: al disminuir la eyección ventricular y man- reacción de defensa dirigida a mantener el volumen
tenerse el retorno venoso, se va dilatando la ca- minuto y así asegurar la perfusión de órganos vitales
vidad ventricular. El rendimiento de la contrac- y también de la musculatura esquelética. Esta activa-
ción ventricular es por la ley de Frank-Starling ción neurohormonal, que se ve activada crónicamen-
proporcional al grado de estiramiento de la fibra te al existir un fallo mantenido en la perfusión tisular,
muscular antes de la contracción. Este mecanis- no está destinada específicamente a esta situación de
mo tiene inicialmente un rendimiento aceptable, insuficiencia cardiaca. Así, inicialmente resulta ser
pero a partir de un límite de dilatación ventri- adaptativa, pero a la larga es claramente perjudicial
cular la fuerza de la contracción no aumenta y para el propio sistema circulatorio y para la propia
empieza a ser funcionalmente ineficaz. De esta hemodinámica del corazón.
forma, a pesar de la dilatación ventricular, va au- En resumen, el volumen minuto disminuido que
mentando la precarga sin conseguir normalizar se instaura al evolucionar la IC dispara una serie de
el volumen de eyección. Además, la dilatación mecanismos compensadores (Tabla 46-2), fundamen-
ventricular, al igual que la hipertrofia, va acom- talmente generadores de vasoconstricción y retención
pañada de un aumento del consun10 de oxígeno hidrosalina, con el fin inmediato de mantener la pre-
391
que agrava la situación. sión arterial y la perfusión tisular.
Semiología y fisiopatología de las enfe rmedades cardiovasculares

Mecanismos compensadores vez ejerce una potente retención hidrosalina. La


El organismo dispone de diversos mecanismos com- activación del sistema renina-angiotensina-al-
pensadores neurohormonales. para compensar las dosterona se pone en marcha por la disminución
alteraciones responsables del cuadro clínico de IC. del volumen minuto y por otros mecanismos (es-
Estos son: timulación simpática, hipopotasemia, etc.).
Las acción vasoconstrictora y trófica de la an-
Activación adrenérgica: El sistema adrenérgico giotensina II, elemento clave de las acciones del
es, junto con el sistema renina-angiotensina-al- sistema RAA, son consecuencia de la activación
dosterona, el mecanismo más importante para de los receptores ATl . La ECA es la enzima res-
corregir las alteraciones iniciales de la función ponsable del paso de la angiotensina I a angioten-
ventricular. El aumento de las catecolaminas cir- sina II. Esta enzima está situada en el endotelio
culantes y del tono simpático es consecuencia vascular, fundamentalmente a nivel pulmonar.
de la estimulación de barorreceptores arteriales En los últimos años se ha puesto en evidencia
que se produce cuando desciende el volumen que existe un mecanismo tisular de producción
minuto. Así, aumenta la frecuencia cardiaca y la de angiotensina II, sobre todo a nivel cardiaco.
contractilidad a través de los receptores beta, se Este sistema local tiene una acción fundamental-
equilibra la presió arterial y la redistribución del mente generadora de hipertrofia y fibrosis vas-
volumen minuto a los órganos vitales. Sin em- cular y miocárdica, actuando en los receptores
bargo, esta mayor actividad adrenérgica conduce locales del corazón y de los vasos sanguíneos.
a una menor sensibilidad de estos receptores y La activación de este sistema es muy precoz, e
a determinados cambios de los mismos que van incluso en fases de disfunción ventricular asin-
provocando una disminución de este mecanismo tomática puede demostrarse un aumento de su
de reserva para situaciones de estrés. Además, la actividad. En cualquier caso, la activación del
activación adrenérgica mantenida induce daño sistema es progresiva y proporcional a la altera-
miocárdico directo, aumenta el consumo de oxí- ción de la función ventricular y la sintomatolo-
geno y tiene efecto arritmogénico, por lo que es gía del paciente.
claramente perjudicial a medio y largo plazo. Factores endoteliales: En condiciones normales
Sistema renina-angiotensina-aldosterona: La re- el endotelio, auténtico órgano endocrino, equili-
nina es una enzima que actúa sobre un péptido bra la producción y acción de sistemas vasodila-
de producción hepática, el angiotensinógeno , y tadores y vasoconstrictores manteniendo el tono
da lugar a un decapéptido (la angiotensina I), que vascular adecuado. En la IC está aumentada la
es degradado a un octapéptido (la angiotensina acción de los sistemas vasoconstrictores (endo-
II), que ejerce una potente acción vasoconstric- telinas), en detrimento de los sistemas vasodila-
tora. La angiotensina II estimula la liberación de tadores (óxido nítrico). Este mecanismo, que
aldosterona por la médula suprarrenal, que a su intenta mantener la perfusión tisular, acaba pro-

Tabla Mecanismos alterados en la insuficiencia cardiaca y entidades patológicas que


los ocasionan
Alteraciones de la postcarga (generalmente sobrecarga de presión) Hipertensión arterial
Hipertensión pulmonar
Estenosis aórtica
Alteraciones en la precarga (sobrecarga de volumen o alternativa Cortocircuitos
en el llenado) Insuficiencia valvular
Pericarditis constrictiva
Miocardiopatía restrictiva
Miocardiopatía hipertrófica
Hipertrofia ventricular izquierda
Alteración en la contractilidad (pérdida de función o masa Miocardiopatía dilatada
ventricular) Cardiopatía isquémica
Miocardiopatía hipertensiva evolucionada
Alteración en la frecuencia cardiaca (alteración en el llenado y/o Taquiarritmias
eyección) Bradiarritmias
Alteraciones mecánicas cardiacas Alteraciones valvulares
Alteraciones pericárdicas
CAPÍTULO 46 Síndrome de insuficiencia cardiaca

vacando una mayor reducción del volumen mi- La re incrementa su prevalencia acorde con la
nuto, al incrementar la precarga y la postcarga, edad de la población, debido a la sumación de
facilitando la aparición de isquemia miocárdica. factores de riesgo o predisponentes para pade-
Vasopresina: Es una hormona hipotalámica que cerla.
actúa sobre receptores específicos en los vasos
sanguíneos (vasoconstricción) y sobre el riñón
(efecto antidiurético) . Conocida también como
hormona antidiurética, presenta en la re un as- Tabla Etiología de la insuficiencia
censo plasmático similar a la actividad de renina cardiaca: causas predisponentes,
plasmática porque comparte mecanismos co- determinantes y precipitantes
munes de activación, siendo asimismo sensible
a las alteraciones de osmolaridad y a la acción CAUSAS PREDISPONENTES
de otras hormonas como las catecolaminas y la (factores de riesgo)
aldosterona. Historia de cardiopatía
Péptido natriurético auricular: El miocardio Hipertensión arterial
Diabetes
auricular libera péptidos natriuréticos cuando Edad avanzada
se produce algún grado de distensión auricular Hipertrofia ventricular izquierda
que es detectado por los mecanorreceptores. Es- Cardiomegalia
tos, al potenciar la diuresis, disminuyen la vo- Capacidad vital reducida
Tabaquismo
lemia y la distensión auricular, contribuyendo a
compensar la situación. Esta familia de péptidos CAUSAS DETERMINANTES
(que también se producen a nivel cerebral) tiene Alteraciones miocárdicas
Primarias
como su nombre indica una acción vasodilata- Miocardiopatías dilatada, hipertrófica y restrictiva
dora y natriurética. La elevación de los niveles Secundarias
plasmáticos de estos péptidos tienen lugar en Enfermedad coronaria
fases tempranas de la enfermedad que refleja Miocarditis
Enfermedades del tejido conectivo
grados iniciales de sobrecarga cardiaca. Además, Fármacos/tóxicos
los niveles de péptido natriurético pueden tener Enfermedades metabólicas
valor pronóstico, y se considera un buen marca- Enfermedades genéticas
Enfermedades neurológicas o musculares
dor de gravedad del cuadro clínico de re.
Alteraciones mecánicas del corazón
Sobrecarga de presión
ETIOLOGÍA DE LA INSUFICIENCIA CARDIACA Hipertensión arterial sistémica
Estenosis aórtica
La etiología de la re debe dividirse a su vez en tres Coartación de aorta
Sobrecarga de volumen
apartados; causas predisponentes, determinantes y Insuficiencia valvular (mitral y/o aórtica)
precipitantes (Tabla 46-3) . Cortocircuitos
Vasodilatación
Defecto de llenado ventricular
CAUSAS PREDISPONENTES Estenosis valvular (mitral , tricúspide)
Constricción pericárdica
Son los factores de riesgo para el desarrollo de re; Taponamiento cardiaco
dentro de ellos hay algunos que tienen un marcado Miocardiopatía restrictiva
papel en la génesis de la re, siendo las causas etioló- Disinergia de la contracción ventricular
Aneurismas ventriculares
gicas más habituales. Zonas discinéticas
La lesión de la célula miocárdica tiene con fre- Alteraciones del ritmo cardiaco
cuencia un origen isquémico (cardiopatía isqué- Taquicardias
mica) en cualquiera de sus expresiones clínicas: Bradicardias
infarto agudo de miocardio, angina, cardiopatía CAUSAS PRECIPITANTES
isquémica crónica, etc. , o hipertensivo (cardio- Cardiacas
patía hipertensiva crónica). Taquiarritmias
Bradiarritmias
La hipertensión arterial precede a la re en más Cardiopatía de nueva aparición
del 70 % de los casos. Muy frecuentemente se Farmacos inotrópicos negativos
asocia a enfermedad coronaria, contribuyendo Embolia pulmonar
ambos factores a la aparición de re. Extracardiacas
Determinados virus y tóxicos (alcohol, citotóxi- Falta de adherencia al tratamiento
Transgresión dietética
cos, etcétera) pueden producir daño miocárdico Infecciones
reversible o irreversible. Anemia
Las lesiones valvulares (congénitas, reumáticas, Aporte excesivo de líquidos
Fármacos que retienen sal
degenerativas , etc.) generan también un número
393
apreciable de casos de re.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

CAUSAS DETERMINANTES contrario, en la IC derecha predominan los síntomas


y/o signos de congestión venosa sistémica, tales como
Son situaciones que, a través de diversos mecanis- aumento de la presión venosa yugular, hepatomega-
mos, predisponen a la aparición del síndrome clíni- lia congestiva y edemas. En estos casos, la disnea es
co. La alteración de cualquiera de los mecanismos menos evidente, aunque puede haber algún grado de
que regulan la función ventricular puede propiciar la disminución del volumen minuto expulsado por el
aparición de re (Tabla 46-2). Las causas determinan- ventrículo derecho. En la práctica, esta clasificación
tes pueden a su vez dividirse en: se emplea para manifestar el predominio de los sínto-
Alteraciones miocárdicas: pueden ser primarias mas congestivos sistémicos.
o secundarias.
Alteraciones mecánicas del corazón: producen
sobrecarga de presión o de volumen, disminu- CLASIFICACIÓN FISIOPATOLÓGICA
ción del llenado ventricular o depresión o disi-
nergia en la contractilidad ventricular. Cuando el corazón no bombea la cantidad adecua-
Alteraciones del ritmo cardiaco. da de sangre y disminuye el volumen minuto sur-
gen signos y síntomas de hipoperfusión tisular, que
pueden ser considerados como insuficiencia anteró-
CAUSAS PRECIPITANTES grada . Estos pacientes pueden presentar sobre todo
Son aquellas que provocan la aparición o exacerbación astenia, síncope, fatigabilidad muscular e hipoten-
de los síntomas de re, en sujetos que poseen causas sión sintomática. Si por el contrario los síntomas
predisponentes y/o determinantes. Estas causas preci- dominantes son los característicos de la congestión
pitantes o desencadenantes de re pueden ser cardiacas pulmonar y/o sistémica, se denomina insuficiencia
(arritmias, fármacos ... ) o extracardiacas (situaciones retrógrada.
que produzcan sobrecarga de volumen circulante o De forma más actual se habla de disfunción sistó-
sobrecarga de presión, anemia, infección, etc.) . lica cuando existe un fallo contráctil objetivado, y de
disfunción diastólica cuando existe un problema en
el llenado ventricular. A diferencia de otras clasifica-
CLASIFICACIÓN DE LA INSUFICIENCIA ciones más artificiales o puramente conceptuales, esta
CARDIACA distinción tiene una implicación evidente en cuanto a
El estudio de las condiciones fisiopatológicas y de las pronóstico y aproximación terapéutica diferenciada.
peculiaridades clínicas de la re ha dado pie a distin- La re sistólica se produce cuando , por diversos fac-
tas clasificaciones según su evolución, tipo de fallo tores (en especial por cardiopatía isquémica, tóxicos,
ventricular y situación clínica. A continuación deta- miocarditis, etc.), se origina un daño miocárdico que
llamos alguna de estas clasificaciones. acaba produciendo un fracaso en su contractilidad y,
por tanto , una deficiencia en su función sistólica o
efectiva.
CLASIFICACIÓN PATOCRÓNICA En los últimos años, se ha reconocido que muchos
Se denomina IC aguda a la insuficiencia cuyos sínto- pacientes con síntomas graves de re no tienen ningún
mas y signos se desarrollan en minutos u horas. Ello tipo de fracaso contráctil y sí una alteración en la dis-
ocurre generalmente por una complicación mecánica tensibilidad del ventrículo izquierdo (IC diastólica).
o por una complicación evolutiva progresiva en un Ello ocurre en la práctica totalidad de los pacientes
paciente que previamente se hallaba en fase crónica. que presentan hipertrofia miocárdica, frecuentemen-
La IC crónica es la forma más frecuente de fallo te, pero ·no de forma exclusiva, en la hipertensión
cardiaco, con una evolución natural prolongada que arterial. Algunos datos clínicos, que se comentarán
permite la aparición de los mecanismos compensa- más adelante, pueden ser de utilidad en esta diferen-
dores y la presencia de los signos y síntomas típicos ciación, aunque su discriminación certera exige la
de la entidad. En su evolución pueden presentarse realización de un ecocardiograma que valore objeti-
episodios de exacerbaciones agudas con un empeo- vamente la función ventricular.
ramiento asociado de la situación funcional y sinto-
mática.
SEGÚN EL GRADO DE COMPENSACIÓN
Algunos autores hablan de IC compensada, en contra-
CLASIFICACIÓN TOPOGRÁFICA posición con las situaciones de IC descompensada.
Según el ventrículo insuficiente o con mayor grado En este caso, se hace referencia a una circunstancia
de expresividad clínica, la re se clasifica como iz- clínica en la que no se han controlado los síntomas
quierda o derecha. La IC izquierda se caracteriza por porque no se ha empleado el tratamiento adecuado
síntomas de congestión pulmonar, a los que pueden o porque no responden al tratamiento adecuado. En
394
acompañar síntomas y/o signos anterógrados. Por el este caso la re se denomina refractaria.
CAPITULO 46 Síndrome de insuficiencia cardiaca

SEGÚN LA SITUACIÓN FUNCIONAL trabajo respiratorio cuando se adopta la posición de


tumbado. A ello contribuye la aparición de edema de
La disnea es el síntoma esencial de la IC, y suele apa- la mucosa bronquial, que facilita el broncoespasmo
recer desde el inicio del cuadro clínico. Hace más y la obstrucción de las vías respiratorias. Asociada a
de 30 años se estableció una clasificación, común- la disnea, es frecuente la aparición de tos irritativo,
mente aceptada, que indica, según el grado de disnea, que en ocasiones se presenta solo en la postura de
la situación funcional del paciente con IC (Tabla 46-4). decúbito. En la auscultación respiratoria se perciben
sibilancias, que simulan un cuadro de asma bron-
quial. La forma más grave y florida de disnea se da en
SÍNTOMAS Y SIGNOS DE INSUFICIENCIA el edema agudo de pulmón. En estas circunstancias,
CARDIACA además de disminuir la distensibilidad pulmonar por
aumento de la presión capilar pulmonar, se produce
Podemos clasificarlos en: derivados del fallo car- el paso de líquido del espacio capilar al intersticio
diaco retrógrado (por fallo pulmonar-insuficiencia y espacio alveolar, sintiendo el paciente una fuerte ,
ventricular izquierda o fallo sistémico-insuficiencia y a menudo brusca, sensación de dificultad para la
ventricular derecha) y derivados del fallo cardiaco respiración. Además de los datos auscultatorios de
anterógrado. obstrucción respiratoria citados se perciben ruidos
de burbujeo (crepitantes), muy característicos de esta
situación clínica.
FALLO CARDIACO RETRÓGRADO
Fallo sistémico (insuficiencia ventricular derecha):
En la práctica clínica suelen predominar las manifes- Los síntomas de congestión sistémica expresan la acu-
taciones clínicas dependientes del fracaso retrógrado , mulación retrógrada o pasiva de sangre en distintos
con la consiguiente congestión venosa pulmonar y territorios. Además de la presencia de edemas en
sistémica. las zonas declives, pueden predominar los síntomas
Fallo pulmonar (insuficiencia ventricular izquier- gastrointestinales: distensión abdominal , náuseas, vó-
da). Se producen síntomas y signos clínicos derivados mitos y dolor por distensión de la cápsula hepática.
de la congestión pulmonar. La sensación subjetiva de Con frecuencia se produce oliguria (por disminución
falta de aire (disnea) es el rasgo clínico fundamen- de la diuresis ante la hipoperfusión renal) y polaquiu-
tal de la IC, que, sin embargo, debe ser diferenciada ria-nicturia (por aumentar la presión hidrostática du-
de otras causas de disnea comunes en la clínica (por rante la noche al reabsorberse el líquido intersticial).
obesidad, ansiedad, enfermedades respiratorias , etc.).
No obstante, una correcta anamnesis permitirá dis-
cernir en la mayoría de los casos el ·origen cardiaco FALLO CARDIACO ANTERÓGRADO
de la disnea. Es muy significativa la presencia de
episodios de disnea paroxística nocturna (crisis de La fatigabilidad y la astenia presentes en buena parte
disnea durante el sueño que obligan al paciente a in- de los pacientes con IC, en ocasiones de forma más
corporarse y la ortopnea (disnea en decúbito), que se prominente que los síntomas congestivos, se deben a
produce por un aumento de la presión hidrostática fracaso anterógrado; habitualmente, surgen en pacien-
en los pulmones al aumentar el retorno venoso, dis- tes con tendencia a la hipotensión y con disfunción
minuyendo la capacidad pulmonar y aumentando el contráctil severa. Puede aparecer cierta disfunción
sobreañadida de la musculatura respiratoria por des-
censo del gasto cardiaco. En algunos casos se suma
el efecto hipotensor de la medicación (IECA, betablo-
queantes diuréticos), utilizados como tratamiento en
Tabla Clasificación funcional estos pacientes.
de la disnea en grados, según la New La caquexia cardiaca se manifiesta generalmen-
York Heart Association (NYHA) te en las formas crónicas de insuficiencia cardiaca
grave. Su aparición se ha puesto en relación con la
Disnea de grandes esfuerzos. No existe elevación de niveles de TNF y otras citocinas. Otros
limitación factores indirectamente relacionados, como la admi-
11 Disnea de moderados esfuerzos. Limitación nistración de diuréticos , la fatigabilidad muscula1~
moderada en la actividad ordinaria la depresión y la malabsorción-desnutrición, pueden
contribuir a su aparición.
111 Disnea de pequeños esfuerzos. Limitación
Hasta ahora se han explicado los síntomas de for-
marcada de la actividad física
ma independiente, pero con frecuencia, en la práctica
IV Disnea con cualquier actividad. Puede ser de clínica, se encuentran pacientes con manifestaciones
reposo clínicas mixtas reflejo de un fallo cardiaco anteró-
grado junto con insuficiencia cardiaca retrógrada (iz-
395
quierda , derecha o ambas).
Semiología y fi siopatología de las enferm edades cardi ovasculares

Tabla Manifestaciones clínicas del shock (síntomas y signos) según su gravedad


Fase 1 Por disminución del volumen Hipotensión arterial (disminución de la PA
de eyección y gasto cardiaco: diferencial)
cardiogénico y obstructivo Pulso acelerado (taquicardia) y pequeño (parvus)
Piel pálida, fría y sudorosa, cianótica
Hipotermia
Agitación , nerviosismo
Debilidad generalizada
Oligu ria (< 25 mi/hora)
Venas yugulares colapsadas (< 6 cm de H20 )

Fase 2 Disfunción metabólica Hipoxemia-cianosis


Hiperlactacidemia
Hipoglucemia, retención de urea, hiperpotasemia
Acidosis metabólica

Fases 3 y4 Lesión celul ar y orgánica Disfunción multiorgánica


CID (trombosis y hemorragias)
Anem ia hemolítica microangiopática
Inquietud y debilidad , confusión o somnolencia

vasoconstricción de los vasos venosos de capa- Fase 3: lesión celular


citancia, retención de líquidos y sal, mejoría del Los cambios descritos hacen progresar el daño celu-
gasto cardiaco y de la presión arterial, y también lar. En la circulación van generándose mediadores
redistribución del flujo sanguíneo en los lechos que son tóxicos celulares de muy diferente tipo: ci-
vasculares, que pasa de los de baja prioridad tocinas (factor de necrosis tisular, interleucinas 1, 2
(piel, área esplacnica) a otros de mayor prioridad y 6), múltiples metabolitos del ácido araquidónico
como el corazón, el cerebro y el riñón. (prostaglandinas, tromboxanos , prostaciclina), sus-
En la microcirculación: A la hipoperfusión ge- tancias vasoactivas (bradiquinina, calicreína, seroto-
neral inicial sigue una reacción vasoconstricto- nina, histamina, óxido nítrico , endotelina), sustancias
ra con cierre de los esfínteres pre y postcapilar depresoras del miocardio y factores agregantes de las
en respuesta a las catecolaminas y la angioten- plaquetas. Si el shock es de origen séptico hay que
sina II; ello favorece una mayor hipoperfusión , añadir la presencia de endo y exotoxinas, y en el ana-
con anoxia tisular, lo que favorece la acidosis filáctico una importante activación del complemento
metabólica. Con la acidosis el esfínter precapi- con liberación de sus componentes (CZ , C3 y C5) que
lar se relaja y la sangre se acumula en la mi- aumentan la permeabilidad capilar y favorecen la for-
crocirculación. En ella aumenta la presión hi- mación de agregados plaquetarios. El resultado final
drostática, lo que unido a una mayor permeabi- es un mayor daño celular.
lidad por la anoxia se favorece la filtración de
plasma desde el vaso al intersticio. El aumento
del líquido intersticial aísla a las células de los Fase 4: lesión generalizada de órganos y sistemas
tejidos y dificulta su oxigenación; en los vasos La suma de todas las agresiones induce un síndrome
hay hemoconcentración y formación de agrega- de disfunción multiorgánica (SDMO) :
dos de hematíes y plaquetas. Se incrementa la
Alteraciones hematológicas: Son fundamental -
viscosidad sanguínea y el flujo circulatorio se
mente la coagulación intravascular diseminada
dificulta.
(CID) y una anemia hemolítica microangiopá-
tica .
Fase 2: disfunción metabólica La coagulación intravascular diseminada sur-
Las alteraciones circulatorias previas favorecen la ge porqu e el daño del endotelio vascular altera
anoxia tisular, que favorece el metabolismo anaerobio la liberación de las sustancias que participan en
y la aparición de una acidosis metabólica, en especial el mantenimiento del flujo. Además , la estasis
398
láctica. y los flujos no laminares favorecen los trauma-
CAPITULO 47 Insuficiencia circulatoria periférica: shock y síncope

tismos plaquetarios y la liberación de sustancias creas libera amilasa, cuyos niveles se elevan en
con actividad tromboplástica en la circulación. plasma.
El resultado es que se activa la coagulación plas- El miocardio: La hipoxia, la acidosis y la hiper-
mática y se genera trombina; esta transforma el potasemia favorecen su alteración funcional;
fibrinógeno, que es una proteína soluble, en fi- también lo hacen las sustancias tóxicas libera-
brina, que forma fibras o mallas que atrapan a das como el factor depresor del miocardio, que
los hematíes y originan múltiples trombos en los disminuye su distensibilidad y contractibilidad.
lechos vasculares. Estos trombos obstruyen los Todo ello favorece la aparición de arritmias insu-
vasos, y con ello los órganos que perfunden que- ficiencia cardiaca y de parada cardiaca.
dan isquémicos. En paralelo hay una respuesta El sistema nervioso: Sus manifestaciones va-
fibrinolítica generalizada que trata de perfundir rían desde la inquietud a la confusión, apatía y
los vasos y que no solo destruye la fibrina forma- coma. Están causadas por un déficit en la per-
da sino que digiere múltiples factores-proteínas fusión, lesiones isquémicas y edema cerebral. A
de la coagulación, lo que incrementa el trastorno la hipoperfusión se añaden factores metabólicos
hemostático al deplecionar al sujeto de los facto- como la hipoglucemia y la uremia. En estados
res de la coagulación, y se favorece el desarrollo avanzados el enfermo puede desarrollar rigidez
de hemorragias (véase Cap 84). de decorticación o descerebración.
La anemia hemolítica (microangiopática) sur- A nivel musculoesquelético: La hipoperfusión y
ge porque al circular los hematíes por vasos en la liberación de ciertas citocinas explican la apa-
cuyas paredes hay fibrina depositada se dislace- rición de mialgias y artralgias. En el plasma au-
ran y originan células fragmentadas o esquisto- menta la concentración del isoenzima MM de la
citos. creatincinasa (CK) y la mioglobina. La liberación
El riñón: se daña inicialmente de forma fun- de lactato contribuye a la acidosis metabólica y
cional en relación con la hipotensión. El flujo es un marcador de pronóstico del shock. La li-
disminuido se expresa con caída del filtrado y beración de mioglobina por los músculos (rab-
oliguria. La concentración de sodio en orina es domiólisis) puede obstruir los túbulos renales y
< 15 mEq/1 y la osmolaridad urinaria está eleva- causa insuficiencia renal.
da (> 400 müsm) y aumenta en plasma la con- Inflamación y sistema inmune: En estadios
centración de urea y creatinina. Posteriormente avanzados se expresa como un proceso agudo
puede aparecer una necrosis tubular aguda. En muy activo: hay elevación de la temperatura y
ella el sodio en orina es mayor de 40 mEq/1 y la niveles elevados de reactantes como PCR, IL-1,
osmolaridad urinaria se acerca a la del plasma TNF y óxido nítrico.
(< 350 mü sm).
El pulmón: La acidosis favorece la disnea. Hay
además hipoxia grave de origen multifactorial: HALLAZGOS EXPLORATORIOS
el pulmón está congestivo, edematoso, con daño Los más evidentes son:
capilar, tienen alterada la difusión de los gases y
disminuye la producción del surfactante, lo que Hipotensión arterial: PAS < a 85 mm Hg. A veces
genera atelectasias pulmonares; hay disminu- es difícil recoger la PA.
ción de las áreas ventiladas y apertura de corto- Pulso: Taquicardia con pulso pequeño (parvus),
circuitos (shunts) arteriovenosos. a veces no palpable a nivel radial; puede haber
El hígado: La hipoxia induce necrosis centrolo- bradicardia si el shock está producido por una
bulillar y se altera la capacidad de detoxifica- enfermedad del seno o un bloqueo auriculoven-
ción. Se incrementan los niveles de bilirrubina tricular.
en el plasma y puede aparecer ictericia. Al ini- Fiebre: Puede aparecer en casos de sepsis, shock
cio del proceso la síntesis de amoniaco dismi- anafiláctico, o por insuficiencia corticosuprarre-
nuye; posteriormente, y debido al formado en nal.
el intestino, se incrementa. En plasma se elevan Piel: Pálida, cianótica. Si se comprime una uña
los niveles de las transaminasas expresando el dejando exangüe la zona, tarda en recuperar el
daño celular; hay hipoglucemia, hipoalbumine- color por la alteración de la microcirculación.
mia y déficit en la síntesis en los factores de la Venas yugulares: En el shock hipovolémico y
coagulación. distributivo están colapsadas (< 6 cm de H20 L
El tubo digestivo: La disfunción de las barreras y están distendidas en el shock cardiogénico u
mucosas favorece el paso a la circulación de obstructivo (> 8 cm de H2 0).
sustancias tóxicas desde el intestino. En fases Auscultación pulmonar: Hay roncus , estertores
avanzadas se altera la absorción y secreción in- húmedos y/o puede haber derrame pleural.
testinal, y se pueden producir úlceras de estrés Auscultación cardiaca: Los tonos están apaga-
y erosiones múltiples en las mucosas que favo- dos si hay taponamiento. Si hay hipertensión
399
recen las hemorragias gastrointestinales. El pán- en el círculo menor aumenta el segundo tono
10 Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

dente del tronco cerebral en respuesta a alteraciones


metabólicas, generalmente anoxias, causada por una
Tabla Factores pronósticos disminución del flujo cerebral. El cerebro recibe un
del shock 20 % del gasto cardiaco, es decir, 55 ml por cada 100
g de cerebro, a pesar de suponer solo el 2 % de los te-
Causa jidos del organismo. Tiene una autorregulación que le
protege de la caída del flujo sanguíneo, pero si la TAS
Gravedad del daño tisular
disminuye de 60 mm Hg o el flujo a menos de 25 ml/
Tiempo de evolución min. se induce una disfunción cerebral. Las reservas
cerebrales de glucosa o glucógeno son muy limitadas.
Edad del paciente
De forma experimental se ha demostrado que una caí-
Fallo uni o multiorgánico da significativa y brusca del flujo cerebral induce a
los 12-14 segundos la aparición de ondas lentas en el
electroencefalograma a partir de 3-5 minutos se pro-
duce daño neuronal.
pulmonar. Si hay estenosis aórtica se refuerza el
segundo tono.
ETIOPATOGENIA
El sistema nervioso: Inicialmente puede existir
inquietud y cuando avanza, confusión y somno- Las causas del síncope se pueden clasificar en tres
lencia. grandes grupos desde el punto de vista fisiopatológi-
El aparato digestivo: La exploración muestra co (Tabla 47-4): l. Síncope reflejo o neuromediado. 2.
disminución de los ruidos abdominales. Síncope por hipotensión ortostática. 3. Síncope car-
En cualquier caso, los hallazgos clínicos varían en diogénico o cardiovascular.
función del tipo de shock, de su causa y disfunción
multiorgánica. Síncope reflejo o neuromediado
La Tabla 4 7-3 expresa los factores pronósticos del
shock. Es la causa más frecuente de síncope en cualquier
grupo de edad y contexto (urgencias o consultas es-
pecializadas). Hay varios tipos de síncope neurome-
SÍNCOPE Y SITUACIONES diado, pero en todos ellos se produce una respuesta
RELACIONADAS refleja a un desencadenante, con incremento del
tono vagal que provoca vasodilatación y/o bradicar-
CONCEPTO dia con caída de la presión arterial e hipoperfusión
cerebral transitoria. Cuando predomina la hipoten-
El síncope supone una pérdida brusca y transitoria de sión se denomina vasodepresor, cuando lo hace la
la consciencia y del tono muscular de corta duración y bradicardia, cardioinhibidor, y mixto cuando parti-
recuperación espontánea sin secuelas. Se denominan cipan ambos componentes por igual. Su pronóstico
pródromos los síntomas que avisan de la inminencia es excelente.
del síncope: visión borrosa,
náuseas, mareo, sudoración,
debilidad o acúfenos. La apa-
rición de pródromos que lle-
gue a producirse el síncope,
se denomina presíncope. El
síncope es una situación fre-
cuente ya que supone un 1 %
a 2 % de los pacientes atendi-
dos en una unidad de urgen-
cias hospitalarias. Su preva-
lencia aumenta con la edad.
Un 25 % de síncopes queda
sin diagnóstico etiológico.

FISIOPATOLOGÍA
El síncope es debido a una
disfunción de las neuronas
400 del sistema reticular aseen-
CAPÍTULO 47 Insuficiencia circulatoria periférica: shock y síncope

Tabla Causas de síncopes según el mecanismo de producción

Vas ova gal


Neuromediado o
Situacional
reflejo (65%)
Síncope del seno carotídeo

Inducida por fármacos y tóxicos


Depleción de volumen
Hipotensión
Remanso venoso en extremidades inferiores
ortostática (5%)
Disfunción autónoma primaria
Disfunción autonómica secundaria
Arrítmico (causa más frecuente de síncope cardiogénico): bradiarritmias y
taquiarritmias
Cardiogénico (5%)
Cardiopatía estructural: estenosis aórtica o mitral, miocardiopatía (M.) hipertrófica
obstructiva, M. restrictiva, M. dilatada, cardiopatía isquémica, taponamiento cardíaco
Cardiovascular: tromboembolismo pulmonar, hipertensión pulmonar primaria severa,
disección aórtica

Síncope no filiado (25%)

Situaciones diferentes del síncope que plantean diagnóstico diferencial (no hay hipoperfusión
cerebral transitoria)

Neurológicas/ Crisis epiléptica generalizada, ictus vertebrobasilar,


cerebrovasculares síndrome de robo de subclavia, migraña, accidente isquémico transitorio carotídeo

Metabólicas Hipoglucemia
Hipoxia (viajes a zonas de altura)
Otras causas
Intoxicaciones (drogas, fármacos, alcohol). Psicógeno (histeria, pánico, ansiedad)

El síncope reflejo se clasifica según el desencade- Típicamente, el síncope ocurre con los giros del cue-
nante específico en: llo o al comprimirlo al afeitarse.
Síncope vasovagal. En lenguaje coloquial conocido
como «lipotimia común». Es la forma más frecuente
de síncope neuromediado o reflejo. Suele tener como Hipotensión ortostática
desencadenante situaciones estresantes, miedo, vi- Se define como una caída de la PAS ;:,; 20 mm Hg o de
sión de sangre, dolor, ambiente caluroso, ducha ca- la PAD;:,; 10 mm Hg tras permanecer 3 minen bipe-
liente o permanecer inmóvil en bipedestación mucho destación. Puede cursar de modo asintomático o con
tiempo. síntomas como mareo, visión borrosa, palpitaciones,
Síncope situacional. Asociado a ciertas situaciones temblor o síncope. Con frecuencia estos síntomas
específicas como tos (síncope tusígeno), estornudos, aparecen por las mañanas, en el período posprandial
miccional, defecatorio, deglutorio, dolor visceral, o tras ejercicio. Supone aproximadamente un 1 %-
posprandial, risa compulsiva, tocar instrumentos de 10% de todas las causas de síncope.
viento o levantar pesas. Entre sus causas predisponentes más frecuentes se
Hipersensibilidad del seno carotideo. El reflejo se encuentran las siguientes: a) Fármacos: diuréticos y
origina en los barorreceptores del seno carotídeo, si- otros hipotensores; fenotiazinas, IMAO y barbitúri-
tuados en la arteria carótida interna, por encima de la cos; b) Hipovolemia por deshidratación, diarrea, vó-
bifurcación de la arteria carótida común, provocando mitos, hemorragia, tercer espacio o diabetes insípida;
una pausa> 3 seg por bradicardia sinusal y/o bloqueo c) Remanso venoso en extremidades inferiores por
aurículo-ventricular de alto grado, un descenso de la encarnamiento prolongado o embarazo; d) Insuficien-
401
presión arterial sistólica (PAS) ;:,; 50 mm Hg o ambos. cia autonómica primaria: síndrome de Shy-Drager,
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

enfermedad de Parkinson; e) Insuficiencia autonó- existir varios mecanismos, como arritmias ventricula-
mica secundaria: diabetes , amiloidosis, alcoholismo, res (la más frecuente) o bradicardia, reflejo neurome-
enfermedades del sistema nervioso y enfermedades diado o bien ortostático (pacientes polimedicados), o
metabólicas (deficiencia de vitamina B12 , porfiria). ser consecuencia de complicaciones mecánicas del
infarto. La presencia de una disfunción ventricular
Síncope cardiogénico o cardiovascular severa con una fracción de eyección del ventrículo
izquierdo (FEVI) s; 35% (miocardiopatía dilatada is-
Es más frecuente en personas de edad más avanzada, quémica) es un marcador de riesgo de muerte súbita
sobre todo en> 65 años y en varones. Debe sospechar- arrítmica en estos pacientes.
se en todo paciente con síncope y cardiopatía conoci-
da. Supone el principal factor de riesgo de mortalidad
global y por tanto de muerte súbita cardíaca en los Valoración del síncope
pacientes con síncope. Datos de interés en la ananmesis del paciente con sín-
El síncope cardiogénico puede deberse a arritmias cope son los siguientes:
o a cardiopatía estructural: a) Antecedentes del paciente: Historia familiar de
Síncope por arritmias cardiopatía, muerte súbita o síncopes, enfer-
medades cardíacas, neurológicas y metabólicas
Las arritmias son la causa más frecuente de síncope previas, tratamiento farmacológico actual y con-
cardiaco. Producen deterioro hemodinárnico por dis- sumo de tóxicos, episodios previos de síncope y
minución crítica del gasto cardíaco y del flujo sanguí- sus características.
neo cerebral en relación con la frecuencia cardíaca, la b) Circunstancias antes del episodio: Posición
duración, el tipo de arritmia (ventricular o supraven- antes del episodio: decúbito, sedestación, bipe-
tricular) y la existencia de cardiopatía de base. Sue- destación, actividades que estuviese realizando
len ser sujetos de mayor edad y con menos síncopes (cambio de posición, antes o después del ejer-
previos. Las principales arritmias consisten en bra- cicio, micción, tos , afeitado), factores predispo-
diarritmias (enfermedad del nodo sinusal, bloqueo nentes (calor, bipedestación prolongada, dolor,
auriculoventricular), taquiarritmias (la taquicardia movimientos del cuello).
ventricular es su causa más frecuente), y en pacientes c) Sintomatología al comienzo: Náuseas , vómitos ,
portadores de marcapasos, por disfunción del mismo palidez, sudoración, aura, mareo , visión borrosa,
(fallos de captura, de estimulación, por infrasensado), dolor en cuello u hombros, palpitaciones, dolor
o por el síndrome de marcapasos (por la contracción torácico.
de las aurículas con las válvulas mitral y tricúspide
d) Características del episodio: Forma de caer
cerradas cuando se produce una estimulación simul-
(pérdida de tono postural total o parcial, súbita
tánea de aurículas y ventrículos).
o progresiva), pérdida de consciencia comple-
Síncope por enfermedad estructural cardíaca ta, duración, coloración cutánea, movimientos
anormales, tipo de respiración, mordedura de
Las enfermedades cardiovasculares estructurales lengua.
provocan síncope principalmente por un mecanismo
e) Sintomatología a la finalización: Sudoración,
obstructivo (mecánico), pero en otros casos puede
palidez, náuseas, vómitos, frío, confusión, dolor
participar un mecanismo arrítmico, hemodinámico
muscular, coloración cutánea, relajación de es-
(por reflejos vasodilatadores inadecuados) o multi-
fínteres, palpitaciones o dolor torácico.
factorial. El síncope por mecanismo obstructivo se
produce cuando la demanda circulatoria sobrepasa Se debe diferenciar el síncope de otras situaciones
la capacidad limitada del corazón para aumentar el que no lo son, interrogando sobre la existencia de
gasto cardíaco, como ocurre en una estenosis valvular movimientos anormales (tónicos o tónico-clónicos),
aórtica severa al realizar un esfuerzo físico. aura, mordedura de lengua, relajación de esfínteres o
La cardiopatía isquémica es la causa más frecuente cianosis facial; cefalea, dolor muscular o somnolen-
de síncope por cardiopatía estructural, bien en fase cia tras el episodio y duración de las convulsiones.
aguda ("síncope isquémico") o en la crónica (más fre- Descartar trastornos metabólicos, como la hipoxemia,
cuente). En el síncope isquémico coinciden dolor to- preguntando por estancias en lugares de altura; o la
rácico , alteraciones isquémicas en el ECG y síncope, hipoglucemia en pacientes diabéticos tratados con
como ocurre en el infarto agudo de miocardio (el más insulina o antidiabéticos orales. Se sospechará un
frecuente) o en la angina de Prinzmetal. Los posibles origen psicógeno si siempre ocurren en presencia de
mecanismos implicados son arritmias ventriculares, otras personas, el paciente nunca se hace daño ocie-
bradicardia sinusal o bloqueo BAV y/o bajo gasto car- rra voluntariamente los párpados.
díaco. El síncope por cardiopatía isquémica crónica Se debe realizar una exploración física comenzan-
se presenta en pacientes que han sufrido un infarto do por las constantes vitales, valorando el grado de
de miocardio previo. Es la causa de síncope más fre- hidratación del paciente (signo del pliegue, grado de
402
cuente entre las cardiopatías estructurales y pueden hidratación de la mucosa oral) y estado de la presión
CAPÍTULO 47 Insuficiencia circulatoria periférica: shock y síncope

venosa yugular. Se hará especial hincapié en el estu- En muchas otras situaciones, los hallazgos de la
dio cardíaco, buscando soplos cardíacos que sugieran evaluación inicial no permiten establecer un diagnós-
una cardiopatía estructural, así como en la región ca- tico definitivo, pero pueden orientar hacia determi-
rotídea y clavicular. En el abdomen se deben buscar nadas causas. En estos casos, se requieren pruebas
masas o soplos abdominales (descartar disección de diagnósticas específicas:
aorta). En miembros inferiores se buscará cualquier
alteración (trombosis venosa profunda) que pueda ser Masaje del seno carotídeo
origen de un tromboembolismo pulmonar. Se reali- Consiste en presionar firmemente durante 1 0 segun-
zará una exploración neurológica buscando datos de dos en el lugar donde la carótida común se bifurca en
focalidad neurológica o de disautonomía. carótida interna y externa, de forma secuencial en el
Además se realizará una prueba de ortostatismo, lado derecho e izquierdo (nunca simultáneamente),
midiendo la presión arterial y la frecuencia cardíaca primero en supino y luego en bipedestación, mientras
en decúbito y tras bipedestación, cada minuto, hasta se monitoriza el ECG y la presión arterial. El masaje
los 3 min, siendo positiva cuando se documenta una está contraindicado si existe antecedente de acciden-
caída de la PAS ~ 20 mm Hg o de la PAD ~ 10 mm te isquémico cerebral en los últimos 3 meses y si exis-
Hg. Si no existe una taquicardización proporcional te un soplo carotídeo (excepto si por Doppler se ha
al descenso significativo de la presión arterial proba- descartado una estenosis significativa). Se considera
blemente se trata de una hipotensión ortostática por positivo si se documenta una pausa> 3 seg secunda-
disautonomía (diabetes, amiloidosis, enfermedad de ria a bradicardia y/o BAV de alto grado, un descenso
Parkinson), mientras que la taquicardización apropia- de la PAS ~ 50 mm Hg o ambos. Es imprescindible
da suele indicar hipovolemia. que además se reproduzcan los síntomas, pues hasta
Las pruebas complementarias iniciales incluyen la el 40% de los ancianos tienen una respuesta de hi-
analítica, que aunque no suele ayudar al diagnóstico persensibilidad a la maniobra de estimulación pero
etiológico del síncope, se debe realizar determinando se encuentran asintomáticos.
electrolitos, glucemia, hemograma, y en determina-
dos casos marcadores de necrosis miocárdica (CPK Mesa basculante
y troponinas), gasometría y dímero D, si se sospecha Es una prueba que se ha generalizado en el estudio del
un síndrome coronario agudo o un tromboembolis- síncope y permite el diagnóstico del síncope reflejo o
mo pulmonar. La radiografía de tórax puede orientar neuromediado de forma fiable. El objetivo final de la
respecto de la existencia de una cardiopatía si mues- prueba es inducir una hipotensión y/o bradicardia re-
tra cardiomegalia, datos de insuficiencia cardíaca o fle ja que reproduzca los síntomas . Es una prueba segu-
la presencia de una prótesis valvular; también puede ra, prácticamente sin complicaciones de importancia,
mostrar datos sugestivos de disección de aorta (en- que también se puede realizar a los pacientes de edad
sanchamiento mediastínico); o disfunción de marca- avanzada. Consiste en colocar al paciente sobre una
pasos (desplazamiento o fractura de electrodos) . mesa con capacidad de bascular de 0° a 60°-80° de for-
El ECG de 12 derivaciones es una herramienta ma rápida, mientras se monitoriza el ECG y la presión
fundamental en la valoración inicial del paciente arterial. Tras permanecer de 30 a 45 minen posición
con síncope. Sirve para establecer el diagnóstico en supina a 0°, se coloca al paciente con una angulación
aproximadamente el 5% de los pacientes y orienta el de 60°-80º el mismo tiempo. Si esta primera fase es
diagnóstico en otro 5%. No obstante, un ECG normal negativa, se puede repetir utilizando fármacos como
no descarta la posibilidad de una causa cardiológica isoprenalina en perfusión continua o nitroglicerina
del síncope. Los hallazgos específicos que identifican sublingual, lo que aumenta la sensibilidad de la prue-
fácilmente la causa del síncope son la presencia de ba, pero disminuye la especificidad. Las respuestas a
un QT largo o corto, síndrome de preexcitación como la prueba se han clasificado en cardioinhibitorias, va-
el de Wolff-Parkinson-White (PR corto y onda delta), sodepresoras o mixtas, según el predominio de cada
patrón de síndrome de Brugada (bloqueo de rama de- una. Sin embargo, una respuesta negativa no excluye
recha más elevación del ST de Vl a V3), signos de totalmente el diagnóstico de síncope reflejo.
infarto agudo de miocardio, fallos de estimulación, Esta prueba está especialmente indicada en pacien-
captura o sensado de un marcapasos, o docun1enta- tes con síncopes de repetición sin etiología aclarada,
ción de una taquiarritmia o bradiarritmia durante los pacientes con sospecha de enfermedad psiquiátrica o
síntomas. Otros hallazgos menos específicos pero que para diferenciar síncope de epilepsia. Por el contrario,
pueden sugerir la etiología del síncope son la pre- no está recomendada en pacientes con un único sín-
sencia de ondas Q de necrosis miocárdica antigua, cope vasovagal típico y sin complicaciones, excepto
hipertrofia ventricular, bloqueo de rama, bloqueo bi- cuando exista lesión traumática, ansiedad o profesión
fascicular o trifascicular, bloqueo de rama alternante, de riesgo (p . ej., piloto de aviación).
bloqueo AV, extrasistolia ventricular, T negativas en
derivaciones precordiales derechas y/u ondas épsilon Monitorización electrocardiográfica tipo Holter
típicas de displasia arritmogénica del ventrículo de- Es una técnica de registro continuo del ECG median-
403
recho . te dos o más derivaciones electrocardiográficas si-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

multáneas durante períodos variables. Es uno de los peña un papel importante en la estratificación del
métodos de diagnóstico no invasivo más utilizado en riesgo basada en la fracción de eyección del ventrí-
la práctica clínica, en particular cuando se sospecha culo izquierdo. Sin embargo, esta técnica identifica
que el sustrato del síncope es una arritmia. La princi- la causa del síncope en muy pocos pacientes (p . ej.,
pal limitación del Holter es que la recurrencia del sín- valvulopatías severas , trombos o tumores cardíacos
cope suele ser baja y el paciente puede no presentar obstructivos, taponamiento) . Otras técnicas de ima-
ningún episodio durante la monitorización. Además, gen como la ecocardiografía transesofágica, TC o la
se pueden registrar algunas arritmias que pueden no RM cardíaca, pueden emplearse como técnicas com-
tener relación con la causa verdadera del síncope. El plementarias de la ecocardiografía convencional, por
rendimiento del Holter en el síncope puede ser de tan lo que deben realizarse en casos seleccionados (p. ej.,
solo de un 1-2% en una población no seleccionada, y disección o hematoma aórtico, masa cardíaca).
puede tener más valor cuando los síntomas son muy
frecuentes. Prueba de esfuerzo
No está indicada en la población global con síncope,
Estudio electrofisiológ ico (EEF) sino que debe reservarse para pacientes con episodios
Es una técnica invasiva que permite evaluar la fun- sincopales durante la actividad física o poco después.
ción del nodo sinusal, analizar la secuencia de acti- En el primer caso suele deberse a causas cardíacas
vación del corazón, localizar el nivel del sistema de (mecánicas o arrítmicas), mientras que en el segundo
conducción donde se producen retrasos o bloqueos en suele ser debido a un mecanismo reflejo.
la propagación del impulso, establecer el mecanismo Cateterismo card íaco
y lugar de origen de una taquiarritmia y estratificar
Debe realizarse cuando haya sospecha de cardiopatía
el riesgo de muerte súbita en determinadas cardiopa-
isquémica como causa o sustrato inductor del sínco-
tías. Para realizar un EEF es preciso introducir varios
pe.
electrocatéteres mediante punción venosa (y en oca-
siones también arterial) y colocarlos en determinados Pruebas neurológicas
lugares estratégicos de las cavidades cardíacas. A tra- El síncope, como síntoma aislado , rara vez obedece a
vés de los electrocatéteres se registran las diferentes una causa neurológica. Por tanto, no está indicado el
señales eléctricas generadas desde el interior de las uso rutinario de pruebas para descartar causas neu-
cavidades cardíacas y también se puede realizar una rológicas del síncope. La electroencefalografía solo
estimulación programada, analizando los diferentes se recomienda cuando la epilepsia sea la causa más
intervalos de conducción y la respuesta a la estimula-
probable de la pérdida transitoria del conocimiento o
ción. En ocasiones también se analiza la respuesta a la cuando los datos clínicos sean equívocos. La TC y la
administración de diferentes fármacos antiarrítmicos. RM cerebral y el eco-doppler carotídeo no están indi-
Si el sustrato del síncope es una taquiarritmia, puede cados, a menos que se sospeche una causa neurológi-
intentarse su tratamiento mediante un procedimiento ca o cerebrovascular de la pérdida de conocimiento.
de ablación con radiofrecuencia.
Examen psiquiátrico
Ecocardiografía transtorácica
En ocasiones, tras descartar razonablemente una cau-
La ecocardiografía es una técnica clave para diagnos- sa orgánica del síncope, puede ser necesaria una va-
ticar la presencia de cardiopatía estructural y desem- loración por un psicólogo o psiquiatra.

404
·148
Trastornos del ritmo y de
la conducción del corazón:
mecanismos y diagnóstico
Francisco Javier Chorro Gaseó, Roberto García Civera

CONCEPTO DE ARRITMIA
Se entiende por arritmia cualquier rit-
mo cardiaco diferente del ritmo sinusal
normal, y que se define como un ritmo
sinusal normal es un ritmo automático
regular que tiene su origen en el nodo
sinusal, está dentro de unas frecuencias
adecuadas (60-100 1pm) y en el que la
onda de activación es transmitida a los
ventrículos sin retrasos significativos.
En la práctica clínica, cuando obser-
vamos un paciente con un ritmo regular
entre 60 y 100 1pm, hacemos la presun-
ción de que se trata de un ritmo sinusal.
No obstante, el diagnóstico definitivo es
electrocardiográfico y se basa en el cum-
plimiento de los siguientes criterios:
Dado su origen en el nodo sinusal el
vector de activación auricular ten-
drá una dirección de arriba-abajo y
de derecha a izquierda. Así pues, el
eje de la onda P (onda de activación
auricular) en el plano frontal estará
entre O y 90°, lo que implica que la
onda P será positiva en las deriva-
ciones I, II y aVF (Cap. 45).
Convencionalmente, la frecuen-
cia cardiaca «normal» está entre
60 1pm y 100 1pm. Aunque frecuen-
cias sinusales por encima y debajo
de estos límites pueden ser fisioló-
gicas, en el diagnóstico electrocar-
diográfico serán definidas como
taquicardia y bradicardia sinusal
respectivamente.
Todos los impulsos sinusales deben
ser conducidos a los ventrículos
con un intervalo PR que en el adul-
to debe estar comprendido entre --¡os
0,12 s y 0 ,20 s.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

ACTIVIDAD DESENCADENADA
(TRIGGERED ACTIVITY)
Tabla Mecanismos básicos
de las arritmias Los estudios del potencial de acción transmembrana
con microelectrodos intracelulares han mostrado la
Anomalías en la formación existencia de activaciones celulares dependientes de
del impulso la presencia de postpotenciales. En electrofisiología
celular un pospotencial es una oscilación anormal
Automatismo del potencial de acción que si llega a alcanzar un cier-
Alteración del automatismo normal to umbral puede dar lugar a otro potencial de acción.
Automatismo anormal Este a su vez genera otro pospotencial resultando en
Actividad desencadenada (triggered respuestas repetitivas propagadas. Estas respuestas
activity) propagadas forman la base de la llamada actividad
desencadenada, que se distingue del automatismo en
Conducción anormal del impulso que siempre necesita un potencial previo que la de-
Bloqueo de la conducción con escape de sencadene, mientras que las respuestas automáticas
marcapasos subsidiarios se inician espontáneamente. Se han descrito dos ti-
pos de pospotenciales: precoces y tardíos. Los pospo-
Bloqueo unidireccional y reentrada tenciales precoces (PPP) se inscriben en el «plateau»
Reentrada ordenada o en la rama descendente del potencial de acción
Reentrada aleatoria transmembrana, mientras que los pospotenciales tar-
Anomalías del automatismo
díos (PPT) se producen cuando ya se ha completado
y conducción
la repolarización
En el momento actual, se piensa que la taquicardia
Parasistolia ventricular del tipo de torsades de pointes asociada
a QT largo es debida a actividad desencadenada por
PPP, mientras que la actividad desencadenada por
PPT puede ser responsable de arritmias por intoxi-
cación digitálica, ritmos idioventriculares acelerados
Así, en un sentido amplio puede considerarse arrit- durante la reperfusión, bigeminismo, taquicardias
mia cualquier alteración en el origen, frecuencia, re- ventriculares idiopáticas sensibles a la adenosina,
gularidad o conducción del impulso cardiaco. taquicardia ventricular catecolaminérgica y ciertas
taquicardias auriculares.

MECANISMOS ELECTROFISIOLÓGICOS
ALTERACIÓN EN LA CONDUCCIÓN
BÁSICOS DE LAS ARRITMIAS
DEL IMPULSO
Pueden clasificarse tal como se esquematiza en la
Tabla 48-1. La propagación del impulso es enlentecida o inte-
rrumpida (bloqueada) cuando encuentra una región
del corazón con disminución de la excitabilidad. El
ANOMALÍAS EN LA FORMACIÓN bloqueo de la conducción puede ser transitorio o
permanente y puede ser unidireccional (el bloqueo
DEL IMPULSO se produce cuando el estimulo se propaga en una di-
rección pero no cuando lo hace en la dirección con-
ALTERACIONES DEL AUTOMATISMO traria). o bidireccional (el bloqueo se produce en las
El aumento o la disminución del automatismo sinusal dos direcciones).
pueden dar lugar a taquicardia y bradicardia sinusal
respectivamente. Por otra parte, la pérdida de células
marcapasos sinusales y la fibrosis del nodo sinusal
REENTRADA
en el curso de la llamada enfermedad del seno, puede En condiciones normales, un único impulso genera-
producir tanto bradicardia como otros tipos de bra- do en el nodo sinusal activa las aurículas y los ven-
diarritmia (pausas, paros sinusales etc.). trículos. El impulso se propaga generando una onda
Bajo condiciones patológicas, que producen alte- de activación que despolariza los tejidos adyacen-
ración celular y disminución del potencial de reposo tes excitables y va dejando atrás tejido inexcitable.
diastólico, células miocárdicas comunes pueden ad- Cuando esta onda de activación alcanza el final del
quirir propiedades de automatismo. Este tipo de auto- músculo y queda rodeada de tejido inexcitable se
matismo dependiente de mecanismos no fisiológicos extingue. Hasta que no se genere un nuevo impulso
~
se denomina automatismo anormal. sinusal, no se volverá a activar el corazón. Sin em-
CAPÍTULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

Tabla Causas generales


de arritmias

~ .,._./'------+- Anomalías congénitas (síndromes


arritmogénicos primarios)
Síndrome de QT largo congénito
Síndrome de QT corto congénito
Síndrome de Brugada
Taquicardia ventricular polimorfa
catecolaminérgica
Enfermedad de Lenegre
Síndrome de Wolff-Parkinson-White/vías
accesorias AV «ocultas»
Figura Esquematización del mecanismo de
reentrada en un circuito anatóm ico formado por la ra- Cardiopatía estructural
mificación final de las fibras de Purkinje y e l miocar- C. isquémica, miocardiopatías
dio en el que se insertan. c. hipertensiva, valvulopatías, etc.
Alteraciones electrolíticas
Hiper e hipopotasemia, hipercalcemia,
hipomagnesemia
bargo, en ciertas circunstancias, la activación puede Fármacos
persistir sin extinguirse en una zona del corazón el Digoxina
tiempo suficiente para que el tejido vecino recupere Anti arrítmicos
su excitabilidad (supere el periodo refractario), con Simpaticomiméticos
lo que el mismo impulso vuelve a reexcitar parcial o Neurolépticos, etc.
totalmente el corazón. Esta activación se denomina
activación reentrante y el mecanismo por el que se Enfermedades endocrinas:
produce reentrada. El camino que sigue la activación Tirotoxicosis, hipotiroidismo
reentrante se denomina circuito de reentrada. El me- Feocromocitoma
canismo de reentrada ha sido clasificado en dos ca- Hiperparatiroidismo
tegorías principales: reentrada ordenada y reentrada
Otras patologías
aleatoria.
Embolismo pulmonar
La reentrada ordenada implica un circuito reen-
trante fijo. La reentrada ordenada es considerada el Hipotensión, shock
mecanismo de la mayoría de las taquicardias que se Infecciones
dan en el ser humano. Las condiciones para que se Postoperatorio
dé la reentrada serían: a) Un circuito anatómico o Causas mecánicas
funcional. b) Presencia en el circuito de una zona de Catéteres/electrodos, traumatismo torácico
conducción unidireccional. c) Una conducción lenta
en alguna parte del circuito (Fig. 48-1). Tóxicos
La reentrada aleatoria es la responsable de la fi- Alcohol , café, tabaco, etc.
brilación auricular y ventricular y se caracteriza por Causa desconocida: arritmias idiopáticas
la presencia en el tejido de varias ondas reentrantes
simultáneas que van cambiando continuamente de
dirección adaptándose al tejido excitable que tienen
al frente.

ETIOLOGÍA DE LAS ARRITMIAS


ANOMALÍAS DEL AUTOMATISMO
Y CONDUCCIÓN Las causas de arritmia son múltiples, y en términos
generales pueden agruparse bajo los epígrafes que se
muestran en la Tabla 48-2. Las arritmias pueden pre-
PARASISTOLIA sentarse en corazones sin anomalía estructural o ser
Es una forma rara de arritmia que se caracteriza por secundarias a patología cardiaca. En los últimos años
la presencia de un foco de automatismo protegido de se han demostrado diversas mutaciones de genes que
ser despolarizado por los impulsos del ritmo basal se asocian a la aparición de cuadros arritmogénicos
407
(bloqueo de entrada). familiares. La mayoría de estos genes codifican pro-
SE(CION V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

teínas que forman parte de distintos canales iónicos el paciente de diversas maneras: sensación de aleteo
de la membrana celular. La alteración funcional de o golpeteo precordial; percepción del latido cardia-
estos canales altera la electrofisiología celular y faci- co en cuello o epigastrio; sensación de fallo de algún
lita la aparición de arritmias. latido cardiaco; percepción de pulsaciones añadidas;
La presencia de cardiopatía estructural facilita la aceleración de las pulsaciones; irregularidad de las
producción de arritmias. En este contexto, las arrit- pulsaciones; corazón desbocado, etc.
mias producen un mayor deterioro funcional y en al- Cuando se interroga a un paciente sobre sus pal-
gunos casos tienen significado pronóstico. Igualmen- pitaciones, es importante intentar definir una serie
te, patologías extracardiacas que producen sobrecarga de puntos: a) El tipo de palpitación. b) La frecuencia
del corazón (por ejemplo, el embolismo pulmonar) cardiaca y su regularidad o irregularidad. c) La forma
son causa de la producción de arritmias. de comienzo y terminación. d) Los posibles desenca-
Múltiples alteraciones metabólicas, electrolíticas o denantes (postura, esfuerzo, emoción, alcohol, etc.).
toxicas así como numerosos fármacos alteran la elec- e) La presencia de otros síntomas asociados (p. ej.,
trofisiología celular y pueden estar implicados en la disnea o dolor torácico).
producción de arritmias. La capacidad de percepción de las palpitaciones y
la respuesta individual a las mismas es muy variable.
Cuando se analizan registros de Holter y se correlacio-
NOMENCLATURA. CLASIFICACIÓN nan las arritmias con los síntomas se puede encontrar
DE LAS ARRITMIAS desde pacientes que perciben como palpitación una
única extrasístole aparecida en 24 horas de registro
Existen múltiples formas de presentación de las arrit- hasta otros que permanecen asintomáticos con miles
mias en la clínica, y su clasificación es difícil. Para de extrasístoles o con taquiarritmias.
intentar realizar una clasificación de las arritmias
cardiacas debemos conocer el significado de los prin-
cipales términos utilizados en arritmología que se SÍNCOPE Y PRESÍNCOPE
muestran en la Tabla 48-3. El síncope es una pérdida brusca de conscien-
Generalmente, la clasificación de las arritmias más cia de breve duración acompañada de la pérdida
comunes tiene en cuenta dos factores: a) la aparición del tono postural con recuperación completa sin
de latidos prematuros aislados , y de un ritmo bradi- secuelas neurológicas. El síncope se debe a una
cárdico o taquicárdico, y b) el posible origen de la disminución crítica o interrupción transitoria
arritmia. del flujo cerebral.
Una taquiarritmia es un ritmo regular o irregular El presíncope es una forma incompleta de sín-
con una frecuencia superior a 100 1pm. Por el contra- cope en la que el paciente experimenta obnubi-
rio una bradiarritmia es un ritmo regular o irregular lación (sin llegar a pérdida total de conciencia)
con una frecuencia inferior a 60 1pm. Cuando una e inestabilidad (pérdida de tono muscular). Las
taquiarritmia muestra un ritmo regular se denomina causas de síncope son múltiples y su diagnóstico
taquicardia. El origen de la arritmia es también una diferencial complejo (véase Cap. 47).
base para la clasificación. Se denominan arritmias su-
praventriculares aquellas que tienen su origen por en- Tanto las taquiarritmias como las bradiarritmias
cima de la bifurcación del haz de His, y ventriculares son capaces de dar lugar a síncope o presíncope debi-
las que tienen su origen por debajo de la bifurcación. do a la alteración hemodinámica que producen. De los
En el Capítulo 45 se recogen los principales hallazgos distintos tipos de arritmia, las que más frecuentemen-
ECG que permiten el diagnóstico de las arritmias. te se asocian a síncope son el bloqueo AV completo y
la taquicardia ventricular, seguidas de la disfunción
sinusal y las taquiarritmias supraventriculares.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Las arritmias pueden ser asintomáticas o dar lugar a DIAGNÓSTICO DE LATIDOS ECTÓPICOS
múltiples síntomas en función de la alteración hemo-
dinámica que producen, la patología cardiaca previa,
Y TAQUIARRITMIAS
la compensación circulatoria y la susceptibilidad de
cada paciente. De estos síntomas, los dos más típica- LATIDOS ECTÓPICOS
mente relacionados con la arritmia son las palpita- Se denominan latidos ectópicos, latidos prematuros
ciones y el síncope o presíncope. o extrasístoles a aquellos latidos aislados que se ori-
ginan en lugares diferentes al nodo sinusal. Se pue-
den producir en las aurículas, los ventrículos o en la
PALPITACIONES unión auriculoventricular.
Se define como la percepción no intencionada del la- Los extrasístoles auriculares presentan en el ECG
408 tido cardiaco que puede ser percibida y definida por
una onda P adelantada al latido sinusal, que puede ser
CAPITULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

Tabla Nomenclatura de las arritmias


Término Definición Ejemplos
Bloqueo Retraso o fallo en la propagación del impulso Bloqueo sinoauricular
Bloqueo auriculoventricular
Bloqueo de rama

Bradiarritmia Ritmo regular o irregular que da lugar a una Bradicardia sinusal


frecuencia ventricular media inferior a 60 1pm Ritmo de escape de la unión AV
Ritmo de escape ventricular
Fibrilación auricular con respuesta
ventricular lenta

Bradicardia Ritmo regular que da lugar a una frecuencia Bradicardia sinusal


ventricular inferior a 60 1pm Ritmo de escape de la unión AV
Ritmo de escape ventricular

Disociación AV Presencia de dos ritmos independientes en Bloqueo AV completo


aurículas y ventrículos Taquicardia ventricular

Escape Uno o dos impulsos consecutivos con Escape de la unión AV


origen en un marcapasos subsidiario que se Escape ventricular
pone en marcha como consecuencia de la
interrupción o bloqueo del ritmo de base

Ritmo de escape Tres o más latidos de escape consecutivos Ritmo de escape de la unión AV
Ritmo de escape ventricular

Extrasístole Complejo prematuro (se adelanta al ritmo de Extrasístole auricular


base) con origen en la aurícula, la unión AV Extrasístole de la unión AV
o los ventrículos
Extrasístole ventricular

Fibrilación Actividad eléctrica desorganizada, rápida Fibrilación auricular


e irregular que afecta a las aurículas o los Fibrilación ventricular
ventrículos

Flutter o aleteo Actividad eléctrica rápida (~ 250 1pm) y Flutter auricular


regular de las aurículas o los ventrículos Flutter ventricular
caracterizada por la ausencia de línea
isoeléctrica en alguna derivación del ECG

Paro Cese de la actividad eléctrica del corazón o Paro sinusal


parte del mismo Paro ventricular

Taquiarritmia Ritmo regular o irregular que da lugar a Fibrilación auricular


una frecuencia ventricular media superior Taquicardias; flutter
a 1001pm Fibrilación ventricular

Taquicardia Ritmo regular que da lugar a una frecuencia Taquicardia sinusal


superior a 100 1pm en aurículas o ventrículos Taquicardia auricular
Taquicardia de la unión AV
Taquicardia ventricular

Supraventricular Latidos o ritmos que se originan por encima Extrasístoles supraventriculares


de la bifurcación del haz de His Taquicardias supraventriculares

Ventricular Latidos o ritmos que se originan por debajo Extrasístoles ventriculares


de la bifurcación del haz de His Taquicardias ventriculares

409
Semiología y fisi opatolog ía de las enfermedades cardiovasculares

o no conducida a los ventrículos (ondas P ectópicas trocardiográfico se basa en la documentación de un


bloqueadas). Tras el extrasístole, se produce una pau- ritmo regular a frecuencias superiores a 100 1pm en el
sa en el ritmo que se denomina pausa compensadora, que las ondas P presentan los criterios electrocardio-
que en el caso de las auriculares suele ser incompleta gráficos de la P sinusal (P positiva en I, II y aVF). La
(el intervalo entre la P sinusal precedente y la qu e relación A-V es generalmente 1:1 .
sigue al extrasístole es inferior a dos ciclos sinusales). Las taquicardias auriculares focales se originan
Los extrasístoles de la unión se originan en áreas en áreas determinadas de las aurículas a partir de las
del nodo AV o haz de His. Se manifiestan electrocar- cuales la activación auricular se produce centrífuga-
diográficamente por producir ondas P prematuras re- mente. Electrocardiográficamente se caracterizan por
trógradas (P negativa en derivaciones inferiores), con la presencia de ondas P de morfología uniforme y dis-
o sin complejos QRS tinta a la sinusal, con una frecuencia entre 100 1pm y
Los extrasístoles ventriculares dan lugar a un lati- 250 1pm. Al contrario de lo que ocurre en el fluttter
do adelantado al ritmo de base con QRS ancho (0 ,12 auricular, las ondas P están separadas por intervalos
seg. o mayor) seguido de una pausa compensadora, isoeléctricos. La conducción AV puede ser 1:1 o pre-
que en este caso suele ser completa. sentar distintos grados de bloqueo AV, siendo el más
frecuente el bloqueo 2:1. El masaje del seno carotídeo
durante la taquicardia puede producir o incrementar
TAQUIARRITMIAS el grado de bloqueo AV y en ocasiones provoca el cese
de la misma.
La taquicardia auricular multifocal, también de-
TAQUICARDIAS SUPRAVENTRICULARES nominada ritmo auricular caótico, se caracteriza por
En un sentido amplio , podemos considerar taqui- la presencia de una taquicardia auricular con frecuen-
cardias supraventriculares (TSV) aquellas que no re- cias entre 100 1pm y 140 1pm con ciclos irregulares y
quieren para su mantenimiento estructuras situadas ondas P de tres o más morfologías distintas. Por la
por debajo de la bifurcación del haz de His. Como se irregularidad del ritmo, con frecuencia se confunde
muestra en la Tabla 48-4, dentro de esta definición con una fibrilación auricular.
pueden incluirse las taquicardias sinusales, auricu- El flutter o aleteo auricular es una taquicardia que
lares, de la unión AV y el flutter auricular. se caracteriza por una actividad auricular regular a
La taquicardia sinusal es un ritmo sinusal regular una frecuencia superior a 240 1pm con ondas auricu-
con frecuencia superior a 100 1pm. Existen dos meca- lares de amplitud y morfología constantes. La rápida
nismos de taquicardia sinusal: a) taquicardia debida actividad auricular da lugar a una ondulación con-
a un aumento del automatismo normal del nodo si- tinua de la línea de base (ondas F) que, en algunas
nusal secundario a estimulación simpática o inhibi- derivaciones electrocardiográficas, adopta un aspecto
ción parasimpática; b) taquicardia sinusal paroxística morfológico característico que ha sido descrito como
debida a reentrada sinoauricular. El diagnóstico elec- en «dientes de sierra» La relación A:V es variable,

Tabla Clasificación de las taquicardias supraventriculares


Tipo clínico-electrocardiográfico Mecanismo electrofisiológico
Taquicardia sinusal Aumento de automatismo sinusal normal
Taquicardia sinusal común Aumento crónico del automatismo sinusal
Taquicardia sinusal inapropiada Reentrada sinoauricular
Taquicardia sinusal paroxística
Taquicardia auricular focal Automatismo anormal
Reentrada focal
Actividad desencadenada
Taquicardia auricular multífocal Desconocido
Taquicardias de la unión AV Reentrada nodal
Paroxística Reentrada AV
No paroxística Aumento del automatismo de la unión AV
Flutter auricular Macrorreentrada auricular

410
CAPITULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

aunque en ausencia de medicación suele ser 2:1. La carotídeo la taquicardia no se modifica o bien se corta
respuesta típica al masaje del seno carotídeo es el bruscamente (Fig. 48-3).
incremento del bloqueo AV sin que se modifique la La taquicardia no paroxística de la unión es una
actividad auricular. forma poco frecuente de taquicardia debida al au-
El mecanismo electrofisiológico del flutter auri- mento de automatismo en focos de la unión AV. Se
cular típico es una macrorreentrada localizada en la caracteriza por ser una taquicardia regular con QRS
aurícula derecha en la que la onda reentrante gira en estrecho, con una frecuencia entre 100 1pm y 150
la aurícula en un sentido antihorario, con activación 1pm. Generalmente, la actividad auricular está diso-
craneocaudal de la pared lateral y caudocraneal en el ciada de la ventricular, con más complejos QRS que
septo interauricular. La activación pasa de la pared ondas P, aunque en raros casos se puede observar una
lateral a la septal a través del istmo cavotricuspídeo, relación AV 1:1
que constituye la zona de conducción lenta del cir-
cuito. La aurícula izquierda no participa en el circui-
to y su activación se produce pasivamente. FIBRILACIÓN AURICULAR
Las taquicardias de la unión AV son aquellas que
requieren estructuras de la unión AV para su manteni- Arritmia caracterizada por la pérdida de la activación
miento. Por su mecanismo electrofisiológico pueden cíclica y ordenada de las aurículas, que es sustituida
definirse tres grupos fundamentales: a) Taquicardias por una activación continua y desordenada en la que,
por reentrada nada] debidas a la disociación longi- simultáneamente, varias zonas de la aurícula son ac-
tudinal del nodo AV en dos vías , una lenta (vía alfa) tivadas por frentes de onda reentrantes migratorias.
y otra rápida (vía beta) (Fig. 48-2, A); b) taquicardias La consecuencia fundamental de la fibrilación auri-
por reentrada auriculoventricular que utilizan circui- cular (FA) es la pérdida de la función hemodinámi-
tos amplios en los que está incluida la unión AV junto ca de la aurícula. Por otra parte, al nodo AV llegan,
con vías accesorias de conducción, las aurículas y los irregularmente, múltiples impulsos (> 400/min). La
ventrículos (Fig. 48-2, B); c) taquicardias que se origi- mayoría de estos impulsos son bloqueados en el nodo
nan en focos de automatismo de la unión. AV pero, aun así, la respuesta ventricular es rápida
Los dos primeros mecanismos dan lugar a las ta- e irregular cuando la conducción auriculoventricular
quicardias paroxísticas de la unión. Son taquicardias (AV) está intacta (Fig. 48-4).
regulares de QRS generalmente estrecho y relación El diagnóstico electrocardiográfico de FA se basa
AV 1:1, con una P retrógrada que se inscribe coinci- en tres criterios: a) Ausencia de ondas P. b) Oscilación
diendo o tras el QRS. En respuesta al masaje del seno continua de la línea de base del ECG con la aparición

A: Reentrada nodal B: Reentrada AV

-
····►

Figura Mecanismo electrofisiológico de las taquicardias paroxísticas de la unión AV. En el panel A se


muestra la reentrada intranodal debida a la disociación longitudinal del nodo AV en dos vías, la alfa (vía lenta)
y la beta (vía rápida). En el panel B se muestra el mecanismo de reentrada AV que utiliza en sentido retrógrado
411
una vía accesoria de conducción. H: His; V: ventrículo.
O Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

MSC

• l

11

111ttttt7

f.
r
LJ
400ms
Figura Interrupción de una taquicardia por reentrada AV mediante el masaje del seno carotídeo (MSC).

de ondas completamente irregulares en su morfología QRS son estrechos, pero la presencia de una arritmia
y ciclo que son denominadas ondas f y representan de ciclos RR irregulares y QRS ancho sugiere la pre-
la actividad eléctrica amicular. c) Completa irregula- sencia de FA con bloqueo de rama (estructural o fun-
ridad de los ciclos ventriculares. Habitualmente los cional) o conducción a través de una vía accesoria AV.

TAQUICARDIAS VENTRICULARES
Más de tres latidos consecutivos con una frecuencia
superior a 100 1pm que se originen por debajo del haz
de His, constituyen una taquicardia ventricular (TV).
Por su duración la TV puede ser no sostenida y
sostenida. Una taquicardia no sostenida es aquella
que tiene una duración inferior a 30 s, mientras que
una TV sostenida es aquella que persiste durante más
de 30 s o que requiere cardioversión urgente por su
mala tolerancia hemodinámica. Por la morfología del
QRS durante la taquicardia , las TV se clasifican en
monomó1ficas y polimórficas. En las TV monomórfi-
cas (TVM) todos los QRS durante la taquicardia tie-
nen la misma morfología, mientras que en las TV po-
limórficas (TVP) la morfología de los complejos QRS
varía constantemente.
Figu ra El panel superior de la izquierda muestra Las principales características electrocardiográ-
esquemáticamente las ondas m igratorias de activación ficas de las taquicardias ventriculares monomórficas
auricu lar durante la fibrilación auricular. En el diagra- (TVM) son (Fig. 48-5 A): a) Taquicardia regular a una
ma escalonado de la derecha se puede observar cómo frecuencia superior a 100 1pm. b) El QRS está ensan-
la actividad rápida e irregular de la aurícula penetra en chado y generalmente tiene una duración de más de
el nodo AV (AV) donde la mayoría de los impulsos son 0,12 s. c) La morfología del QRS es aberrante. Para
bloqueados. Aun así, muchos alcanzan el ventrículo caracterizarla es conveniente distinguir si la morfo-
(V) dando lugar a una actividad ventricular rápida e logía es similar a un bloqueo de rama derecha (QRS
irregular. El ECG del panel inferior corresponde a un predominantemente positivo en Vl) o a bloqueo de
caso de fibrilación auricular. Obsérvese la ausencia de rama izquierda (QRS predominantemente negativo
ondas P, la presencia de oscilación irregular de la línea en Vl) y también la desviación del eje eléctrico en el
41 2
de base (ondas f) y la irregularidad de los ciclos RR. plano frontal.
CAPÍTULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

La TVP bidireccional es una taquicardia ventricu-


lar caracterizada por la alternancia latido a latido del
eje eléctrico del QRS que es visible en, al menos, una
derivación (Fig. 48-5 C). Generalmente, la morfología
. del QRS es semejante al bloqueo de rama derecha , y
. . 1
1
el eje frontal del QRS cambia casi 180º latido a latido .
~
n 11 ' La TV bidireccional se puede observar en pacientes
B
. ' con intoxicación digitálica.
1\
/1
I
"1 1 /\
1
1 1v .
~
/1

Algunos pacientes presentan TVP en las que se van


1
1 1 J V
produciendo cambios en la morfología del QRS, más
~ V V .• 1 •.:, . o menos irregulares , que no siguen ninguno de los
«patrones » anteriores . El término TVP inespecífico
podría ser aplicado a estos casos.

FIBRILACIÓN VENTRICULAR
Figura Tipos electrocardiográficos de taqui-
La oscilación completamente irregular de la línea de
cardia ventricular. El panel A muestra una taquicardia
base del ECG, sin que puedan reconocerse comple-
ventricu lar monomórfica; el panel B, una taquicardia
jos QRS, caracteriza la fibrilación ventricular (FV). El
polimórfica del tipo de «torsades de pointes»; el panel
mecanismo electrofisiológico es la reentrada aleatoria
C, una taquicardia polimórfica bidireccional.
caótica en el miocardio ventricular y su consecuencia
hemodinámica es la aparición de un paro cardiorres-
piratorio.
La relación AV durante la taquicardia puede ser
La FV aparece generalmente en el curso de cardiopa-
fundamentalmente de dos tipos: a) Disociación AV
tías (las mismas que dan lugar a TV) y puede ser con-
debida a la interferencia a nivel del sistema de con-
secuencia de la degeneración de una TV sostenida o
ducción AV de los frentes de onda ventricular (el de
aparecer sin TV previa. En la fase aguda del infarto agu-
la taquicardia) y auricular (habitualmente el ritmo
do de miocardio, la FV aparece como consecuencia de
sinusal); b) Captura auricular retrógrada por el frente
la isquemia (fibrilación ventricular primaria). También
de onda de la TV.
las TVP de las canalopatías pueden degenerar a FV.
Los mecanismos electrofisiológicos de las taquicar-
El tratanliento es la desfibrilación con choque de
dias ventriculares monomórficas pueden ser diver-
corriente continua (DC) a 200-400 J. Si no se dispone
sos, pero en la forma etiológica más común, la taqui-
de forma inmediata de un desfibrilador, el paciente
cardia ventricular que aparece tras el infarto agudo de
debe ser mantenido, hasta conseguirlo, mediante ma-
miocardio, el mecanismo fundamental es la reentrada
niobras de resucitación cardiopulmonar.
utilizando fibras de tejido sobreviviente en la zona
del infarto.
La variación continua de la morfología de los com- DIAGNÓSTICO DE LAS BRADIARRITMIAS
plejos QRS durante el acceso caracteriza las TVP. Las
TVP se pueden dar en pacientes con y sin cardiopatía Son bradiarritmias aquellos trastornos del ritmo en
estructural. En este último grupo , se ha demostrado los que existe una disminución anormal de la fre-
que la causa de cuadros arrítmicos familiares son mu- cuencia cardiaca. En condiciones normales el ritmo
taciones que afectan a genes que codifican proteínas cardiaco está determinado por la actividad del nodo
estructurales o reguladoras de los canales iónicos de sinusal, que se ubica en el techo de la aurícula dere-
la célula y constituyen los síndromes arritmogénicos cha, cerca de la desembocadura de la vena cava supe-
primarios o canalopatías (véase Tabla 48-2) . rior y que actúa como marcapasos fisiológico del co-
Electrocardiográficamente se pueden distinguir razón. Cuando disminuye su actividad o cuando esta
tres tipos de TVP: a) TVP tipo «torsades de pointes» no se transmite al resto de las estructuras cardiacas,
(TPs) . b) TVP bidireccional. c) TVP inespecífico. disminuye también la frecuencia ventricular. Estas
La TVP del tipo torsades de pointes es una taqui- alteraciones pueden originar una reducción del gasto
cardia muy rápida (200-250 1pm) que se caracteriza cardiaco y de la perfusión de los distintos órganos,
porque el eje eléctrico de los complejos QRS va cam- dando lugar a manifestaciones clínicas. Las causas
biando constantemente girando alrededor de la hipo- de estos trastornos pueden ser tanto intrínsecas como
tética línea isoeléctrica (Fig. 48-5 B) . La TVP del tipo extrínsecas y ocurren tanto en el propio nodo sinusal
TPs se da, fundamentalmente, en presencia de un como en la zona de unión de esta estructura al mio-
alargamiento patológico del intervalo QT (síndromes cardio auricular, o bien en los distintos eslabones del
de QT largo congénito o adquirido) y más raramente sistema específico de conducción cardiaco, es decir,
sin alargamiento del QT (algunos casos de síndrome el nodo auriculoventricular y/o las ramas del sistema
413
de Brugada). His-Purkinje.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovascu lares

DISFUNCIÓN SINUSAL auricular que le rodea puede deteriorarse dando


(ENFERMEDAD DEL NODO SINUSAL) lugar a un retraso en la conducción o al bloqueo
de la misma , que a su vez puede ser ocasional
El funcionamiento del nodo sinusal como marcapasos o permanente. La ausencia o la dificultad en
se debe al automatismo de sus células. La frecuencia la transmisión se origina por alteraciones en la
a la que se activan depende de varios factores relacio- zona que rodea al nodo sinusal, es decir, en la
nados con las características del potencial de acción; unión sinoauricular y/o por la baja amplitud de
uno de ellos es la pendiente de la fase diastólica. De los impulsos que se forman en el nodo sinusal,
manera fisiológica esta frecuencia puede ser inferior que es insuficiente para asegurar la transmisión.
a 60 1pm sin que represente un problema. Esto su- El retraso en la conducción corresponde al
cede durante el sueño o basalmente en las personas bloqueo sinoauricular de primer grado y no tie-
que realizan ejercicio físico intenso de manera habi- ne manifestaciones electrocardiográficas, ya que
tual. Entre las causas extrínsecas al nodo sinusal que en el ECG no existen indicadores del momento
provocan enlentecimiento de su actividad, además en el que se genera el impulso, es decir, el inicio
de la hiperactividad vagal, se encuentran diversos de la onda P corresponde ya a la activación auri-
fármacos como los betabloqueantes, o antiarrítmicos cular cuando el impulso ha llegado al miocardio
como la amiodarona, la propafenona o la flecainida, que rodea al nodo sinusal.
antihipertensivos, antagonistas del calcio (verapami- Cuando falla la transmisión desde el nodo
lo o el diltiazem) algunos antidepresivos y antipsi- sinusal a los tejidos que le rodean aparecen las
cóticos, o la digoxina, entre otros. También pueden manifestaciones electrocardiográficas del blo-
influir determinadas alteraciones endocrinas como el queo sinoauricular de segundo o de tercer gra-
hipotiroidismo, alteraciones electrolíticas como la hi- do . El bloqueo sinoauricular de segundo grado
percalcemia, la isquemia o las respuestas vegetativas se caracteriza porque alguno de los impulsos
inducidas por la hipertensión endocraneal. Por otra sinusales no es conducido a la aurícula, dando
parte, la disfunción sinusal puede deberse a altera- lugar a fallos en la aparición de ondas P en el
ciones del nodo sinusal, es decir, a causas intrínsecas, ECG convencional. A su vez existen dos tipos de
y entre ellas la más frecuente es la degenerativa, que bloqueo de segundo grado, el de Wenckebach y
conduce a una reducción de las células automáticas y el Mobitz II.
a la sustitución de las mismas por tejido fibroso. Estos En el Wenckebach sinoauricular existe un
hechos pueden corresponder a una exageración del alargamiento progresivo del tiempo de conduc-
proceso normal de envejecimiento, aunque también ción hasta que uno de los impulsos es bloqueado.
se han relacionado con la isquemia crónica, la hiper- En el ECG se observan manifestaciones indirec-
tensión arterial, enfermedades infiltrativas como la tas de este tipo de alteraciones y consisten en un
amiloidosis o la hemocromatosis, procesos inflama- acortamiento progresivo de los intervalos entre
torios como miocarditis y pericarditis, enfermedades las ondas P sinusales, hasta que se produce una
neuromusculares como la ataxia de Friedreich o en- pausa que corresponde al impulso bloqueado.
fermedades sistémicas como el LES y la escleroder- Esto se debe a que aunque los valores del tiempo
mia. En pacientes con cardiopatías congénitas, tras la de conducción entre el nodo sinusal y la aurícu-
cirugía cardiaca, puede generarse disfunción sinusal. la aumentan progresivamente, los incrementos
de cada tiempo de conducción con respecto al
Manifestaciones electrocardiográficas anterior son progresivamente menores.
El bloqueo sinoauricular tipo Mobitz II se ca-
Las principales manifestaciones electrocardiográficas
racteriza por la aparición de una pausa en las
de la disfunción sinusal son las siguientes:
ondas P sinusales cuya duración es múltiplo del
Bradicardia sinusal: El ritmo sinusal normal se ciclo sinusal de base. Se debe a la ausencia de
caracteriza por la presencia en el ECG de ondas P transmisión de uno o más impulsos, sin alarga-
positivas en DI y DII a una frecuencia compren- miento previo de los intervalos de conducción.
dida entre 60 1pm y 100 1pm. Existe bradicardia En el bloqueo sinoauricular de tercer grado, o
sinusal cuando la frecuencia de estas ondas P, de bloqueo completo, no se conduce hacia el tejido
características sinusales, es inferior a 60 1pm. La auricular ningún impulso originado en el nodo
bradicardia se considera que es intensa cuando sinusal y en el ECG no se registran ondas P si-
la frecuencia es inferior a 40 1pm. La bradicardia nusales. En estos casos la activación cardiaca se
puede ser asintomática y no necesarian1ente indi- mantiene porque actúan de marcapasos otras cé-
ca disfunción, ya que está presente en situaciones lulas con automatismo situadas en las aurículas
consideradas como fisiológicas. Asimismo, labra- o en el nodo auriculoventricular.
dicardia puede ser ocasional, transitoria o bien Paro sinusal. Consiste en la ausencia de forma-
puede persistir durante la mayor parte del día. ción de impulsos en el nodo sinusal. Puede ocu-
Bloqueo sinoauricular: La transmisión de los rrir de manera intermitente o persistente. Las for-
414
impulsos desde el nodo sinusal hacia el tejido mas intermitentes dan lugar en el ECG a pausas
CAPITULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

BLOQUEO AURICULOVENTRICULAR (BAV)


PAUSA SINUSAL
Consiste en la dificultad (retraso) o en la ausencia de
conducción entre aurículas y ventrículos. El fallo en
la transmisión puede ocurrir en uno, varios o todos
los impulsos que provienen de las aurículas y se pue-
de localizar en distintas zonas del sistema de conduc-
ción AV, tales como el nodo AV, el tronco del haz de
His o en las ramas del sistema de conducción. Si el
fallo solamente afecta a una de las ramas del sistema
de conducción la transmisión persiste a través de la
otra rama. Las manifestaciones electrocardiográficas
se agrupan en tres tipos o grados de bloqueo AV.

Figura Pausa sinusal de 3560 milisegundos


registrada durante la monitorización ECG ambulato- BLOQUEO AV DE PRIMER GRADO
ria con un sistema Holter. Se indica la duración (en
milisegundos) de los intervalos entre las activaciones En este caso la transmisión de los impulsos auricula-
ventriculares sucesivas. res hacia los ventrículos está conservada pero tienen
lugar con dificultad y por este motivo los intervalos
de tiempo entre la activación auricular y la ventricu-
entre las ondas P sinusales que no son múltiplos lar están prolongados. Estas alteraciones se manifies-
del ciclo sinusal (Fig. 48-6). Las pausas sinusales tan electrocardiográficamente con una prolongación
pueden verse favorecidas por la actividad vagal del intervalo PR, que en estos casos (en los adultos)
o por la presencia previa de taquiarritmias que es superior a 0,20 s (Fig. 48-7). Puede deberse a altera-
suprimen aún más la actividad automática del ciones en distintas zonas del sistema de conducción,
nodo sinusal. aunque en presencia de QRS estrecho la localiza-
Síndrome bradicardia-taquicardia: Una de las ción más frecuente es el nodo AV. Cuando se asocia
manifestaciones de la disfunción sinusal consis- a bloqueo de rama bifascicular, por ejemplo bloqueo
te en la sucesión de episodios de taquiarritmia completo de la rama derecha más hemibloqueo an-
por otros de bradicardia o paros sinusales. Las terior de la rama izquierda, suele indicar alteración
taquiarritmias suelen consistir en episodios au- generalizada del sistema específico de conducción y
tolimitados de fibrilación o flutter auricular y el riesgo de bloqueo trifascicular es alto.
los pacientes alternan los ritmos con activación La prolongación del intervalo PR puede estar pre-
ventricular rápida e irregular, que dan lugar a sente en un pequeño porcentaje de sujetos normales,
palpitaciones, con pausas sinusales al terminar por ejemplo en deportistas o en situaciones de hiper-
las taquiarritmias. tonía vagal. Diversos fármacos pueden prolongar el in-
tervalo PR, entre ellos la digoxina, los betabloqueantes,
Manifestaciones clínicas el verapamilo, el diltiazem o la amiodarona. Entre las
La disfunción sinusal puede manifestarse como una causas patológicas se encuentran el infarto de miocar-
bradicardia sinusal persistente, sintomática o no , o dio, las miocarditis, algunas miocardiopatías, cardio-
con alteraciones electrocardiográficas y clínicas que
se pueden presentar de forma intermitente. Alrededor
de una cuarta parte de los pacientes con alteraciones BAV 1." GRADO
electrocardiográficas están asintomáticos. Esto es más
A B = BC = CD = DE PR prolongado (> 0,20 s)
frecuente en las personas mayores con bradicardia si-
nusal persistente, aunque estos son más suceptibles NS i i J J J
a los efectos adversos de fármacos bradicardizantes. AU
\ \ \ \ \
Entre las manifestaciones clínicas más frecuentes se
encuentran el síncope y el presíncope. También pue- V
AV
s1 s1 s1 s1 \
1
den aparecer síntomas neurológicos inespecíficos por
alteraciones del flujo sanguíneo cerebral secundarias
a la bradicardia. La bradicardia excesiva y persistente .______, .______, .______,
PR > 0,20 s
también puede contribuir a la aparición de manifes-
taciones de insuficiencia cardiaca . Los episodios de
taquicardia-bradicardia dan lugar a palpitaciones se- Figura Esquema que representa el bloqueo AV
guidas o no de mareos, síncopes o presíncopes. Estos de primer grado. Abreviaturas: NS= nodo sinu sa l; AU
pacientes pueden presentar también episodios trom- = aurículas; NAV = nodo auricu loventricu lar; V= ven-
415
boembólicos. trículos.
S CCIO Sem iología y fisiopatología de las enferm edades cardiovasculares

patías congénitas como la comunicación interauricular ducción AV de forma que una o más ondas P se
tipo «ostium primum» o alteraciones electrolíticas. bloquean sin que exista alargamiento previo de
los intervalos PR. Este bloqueo puede ser inter-
mitente y se localiza en el sistema His-Purkinje.
BLOQUEO AV DE SEGUNDO GRADO Habitualmente se asocia a bloqueos de rama
y pu ede indicar un riesgo alto de bloqueo AV
Se caracteriza por un fallo intermitente en la trans- paroxístico de alto grado. Este tipo de bloqueo
misión de los impulsos auriculares hacia los ventrí- puede manifestarse o exacerbarse bajo la ac-
culos. Las manifestaciones electrocardiográficas con- ción de fármacos antiarrítmicos que alteran la
sisten en la presencia de algunas ondas P que no van conducción en el sistema His-Purkinje, como la
seguidas de un complejo QRS. procainamida. También puede ser originado por
Existen dos tipos de bloqueo AV de segundo grado el infarto agu do de miocardio de localización
(Fig. 48-8): anterior. Las formas crónicas se deben principal-
El bloqueo AV de segundo grado tipo Wencke- mente a procesos degenerativos (enfermedades
bach o Mobitz I se caracteriza por el alargamien- de Lev o de Lenegre), valvulopatía aórtica, car-
to progresivo de los intervalos PR hasta que una diopatía isquémica crónica o miocardiopatías,
onda P queda bloqueada (no va seguida de QRS). entre otras.
Tras esta onda P bloqueada se vuelve a repetir Cuando el bloqueo AV es 2/1, es decir, cuando cada
la secuencia con el alargamiento progresivo de onda P conducida va seguida por otra no conducida,
los intervalos PR hasta que ocurre un nuevo fa- no se puede precisar si se trata de un bloqueo tipo
llo en la transmisión. Esta secuencia se puede Wenckebach o Mobitz II.
representar mediante un cociente que expresa la
relación entre las ondas P y los complejos QRS,
situando en el numerador el número total de on- BLOQUEO AV DE TERCER GRADO
das P que forman la secuencia y en el denomi- O BLOQUEO COMPLETO
nador el número de P conducidas, es decir, las
que van seguidas de QRS. Este tipo de bloqueo En este caso existe una interrupción completa de
puede localizarse en distintas zonas del sistema la conducción AV de tal modo que ningún impulso
de conducción, pero es más frecuente en el nodo auricular es transmitido hasta los ventrículos (Fig.
AV. Las causas son similares a las del bloqueo 48-9). La activación ventricular se mantiene por la
AV de primer grado y también puede aparecer en activación de marcapasos subsidiarios, es decir, cé-
sujetos normales durante el sueño o durante la lulas provistas de automatismo situadas distalmente
hipertonía vagal. a la zona en la que se interrumpe la conducción. Las
El bloqueo AV de segundo grado tipo Mobitz
11 se caracteriza por el fallo brusco de la con-
BAV COMPLETO (3er GRADO) SUPRA-HISIANO
ORSesuecho Frecuenda ventric:<Aar • 40-50 latidos po, mlnulO
BAV 2° GRADO TIPO WENCKEBACH O MOBITZ 1 NS
AU \
T t
\
r r ,
AS> BC>CO PR progresivamente mayor hasta la P bloqueada

r r r 1 V \

NAV \

BAV COMPLETO (3er GRADO) INFRA-HISIANO


ORS ancho Frecuencia ventriclllar < 40 latidc>S po, minuto
BAV 2° GRADO TIPO MOBITZ 11
AB = BC =CD P bloqueada sin alargami4nto prov,o del PR
NS
AU \
l )
\ t 1
\
1
\\
t
\\ t\
NS r r
1'o;;
r
1
NAV \
V j.
\
f.
\
t. \, j. ,: j. ,
AU \
NAV \
V
1
s\ o......¡ o......¡ o......¡ o......¡ o......¡ o......¡ o......¡

Figura Esquema que rep resenta el bloqueo AV


co mp leto o de tercer grado. En la pa rte super ior se
Figura Esquema q ue rep rese nta los dos tipos representa el bloqueo en el nodo AV y en la inferior
de bloq ueo AV de segundo grado. Abreviaturas: NS= el bloqueo po r debaj o de la bifurcac ió n del haz de
nodo si nusa l; AU = aurícu las; NAV = nodo auricu lo- H is. Abreviaturas: NS= nodo sinusa l; AU = auríc ul as;
416 ve ntri cu lar; V= ventrícul os. NAV = nodo au ricu loventri cul ar; V= ventríc ul os.
CAPITULO 48 Trastornos del ritmo y de la conducción del corazón: mecanismos y diagnóstico

medad de Lyme, la hipertonía vagal, la hipoxia o las


BLO UEO AV 2:1 alteraciones electrolíticas. Diversos fármacos pueden
favorecerlo, entre ellos la digoxina, los ~-bloqueantes,
el verapamilo o el diltiazem. Entre las causas cróni-
cas se encuentran las enfermedades degenerativas de
Lenegre y de Lev, que son las más frecuentes en el
bloqueo AV infrahisiano. También pueden deberse
a la enfermedad de Chagas, alteraciones congénitas,
enfermedades reumáticas (artritis reumatoide, espon-
dilitis anquilopoyética), enfermedades infiltrativas
como la amiloidosis o la sarcoidosis, enfermedades
neuromusculares y causas iatrogénicas.

BLOQUEO AV PAROXÍSTICO
Se caracteriza por la aparición brusca de un bloqueo
AV completo, que va seguido al cabo de cierto tiempo
por la recuperación de la transmisión auriculoventri-
cular. Habitualmente, la conducción AV antes del ini-
cio del bloqueo paroxístico es normal, aunque puede
existir un bloqueo de primer o segundo grado asociado
a la presencia de bloqueo de rama. Generalmente tie-
nen una localización infranodal y suelen iniciarse con
extrasístoles auriculares o ventriculares. Con frecuen-
Figura Trazados electrocardiográficos en los
cia la conducción se restablece tras un latido de escape
que se observa un b loqueo AV 2:1 (parte superior) y
que presenta cierta relación temporal con las ondas P.
un bloqueo AV completo (pa rte inferior). En este ú l-
timo se aprecia la disociació n auriculoventricu lar. Se
ind ica la duración (en milisegundos) de los interva los MANIFESTACIONES CLÍNICAS
entre las activac iones ventr icu lares sucesivas.
DEL BLOQUEO AV
El bloqueo AV de primer grado no provoca alteracio-
manifestaciones electrocardiográficas consisten en nes hemodinámicas y, en general, es asintomático.
la presencia de un ritmo auricular (ondas P) que es Los bloqueos de segundo grado habitualmente tam-
independiente del ritmo ventricular más lento (com- bién son asintomáticos, aunque pueden progresar ha-
plejos QRS). En estos casos existe una disociación cia bloqueos sintomáticos de alto grado o paroxísticos,
auriculoventricular (Fig. 48-10). especialmente los infrahisianos. En los bloqueos com-
La zona de bloqueo puede localizarse en cualquier pletos, paroxísticos o no , las manifestaciones clínicas
punto del sistema de conducción AV y determina la habitualmente consisten en crisis de Stockes-Adams
frecuencia del ritmo de escape ventricular, así como (síncope o presíncope asociado a un pulso lento}, aun-
la morfología del QRS. Cuando el bloqueo ocurre en que si la frecuencia del ritmo de escape es relativa-
el nodo AV o en el tronco del haz de His el marca- mente alta y la pausa ventricular tras el inicio del blo-
pasos subsidiario suele estar localizado por encima queo no es prolongada pueden ser poco sintomáticos.
de la bifurcación del haz de His y por este motivo su Durante el bloqueo AV completo, la frecuencia del
frecuencia es mayor (40-50 1pm) que en los bloqueos ritmo de escape, la disociación AV y la disincronía de
más distales y el QRS suele ser estrecho, excepto si la activación ventricular determinan sus consecuen-
previamente existía un bloqueo de rama. Cuando el cias hemodinámicas. Este tipo de trastornos requiere
bloqueo ocurre distalmente al haz de His los marca- la implantación de marcapasos artificiales.
pasos subsidiarios están situados en alguna de las Los episodios sincopales se relacionan con la dura-
ramas o en las fibras de Purkinje, y en estos casos el ción del intervalo de tiempo durante el cual el pacien-
ritmo de escape es más lento y el QRS está ensancha- te está en asistolia. Este intervalo es el que transcurre
do presentando una duración mayor de 0,12 s. entre el momento en el que se pierde la conducción
Las causas de bloqueo AV completo son muy varia- y la aparición del ritmo de escape. También influye
das. Puede ser debido a isquemia, inflamación, infil- la frecuencia del ritmo de escape una vez estableci-
tración por diversas sustancias o a degeneración del do. Cuanto más distal es la zona de bloqueo, tal como
sistema específico, entre otras alteraciones. Entre las ocurre en los bloqueos infrahisianos, más prolongada
causas de bloqueo agudo se encuentran el infarto agu- suele ser la pausa y menor es la frecuencia del ritmo
do de miocardio, procesos infecciosos e inflamatorios de sustitución, y por este motivo son más frecuentes
417
como la fiebre reumática, las endocarditis, la enfer- los episodios sincopales que en los bloqueos nodales.
-149
Patología de las lesiones
valvulares del corazón
Jaime Merino Sánchez, Vicente Bertomeu Martínez, Vicente Bertomeu González

ESTRUCTURA Y FUNCIÓN
VALVULAR
CONCEPTO
Las válvulas cardiacas son estructuras
formadas por valvas, cuerdas tendi-
nosas, el anillo y músculos papilares.
Sirven para dirigir el flujo sanguíneo a
través de las cavidades cardiacas gracias
a que su apertura y cierre están ordena-
dos respondiendo a gradientes de pre-
sión. Las auriculoventriculares (mitral
en el lado izquierdo y tricúspide en el
derecho) dirigen el flujo de aurículas a
ventrículos y las sigmoideas (aórtica en
el lado izquierdo y pulmonar en el de-
recho) desde los ventrículos a la aorta y
arteria pulmonar, respectivamente.

LESIONES VALVULARES
CAUSAS Y CONSECUENCIAS
Se denomina valvulopatía a cualquier
afección de las válvulas cardiacas. La
Tabla 49-1 recoge las principales causas.
Las consecuencias de esa agresión son el
estrechamiento de la luz valvular (este-
nosis] y la insuficiencia o incapacidad de
su cierre completo, lo que facilita el flujo
retrógrado de sangre o regurgitación.

FISIOPATOLOGÍA GENERAL
DE LAS VALVULOPATÍAS
Las valvulopatías inducen cambios en
las presiones de las cavidades cardiacas
y también alteran el flujo sanguíneo la-
minar. Se expresan con síl).tomas (disnea,
síncopes, dolor, etc.) y signos (soplos,
alteración de tonos, aumento del tama-
ño cardiaco, etc.), unos derivan de la
propia lesión y otros de los mecanismos
418 de compensación; unos son retrógrados,
CAPITULO 49 Patología de las lesiones valvulares del corazón

Tabla Principales valvulopatías, hallazgos auscultatorios y otros útiles en su diagnóstico


Foco de máxima
Enfermedad Hallazgo auscultatorio Otros hallazgos
auscultación
Estenosis S. sistólico, eyectivo, Aórtico irradiado a Click sistólico.
aórtica romboidal carótidas Hay thri/1 (frémito)
Estenosis S. sistólico, eyectivo, Foco pulmonar Click sistólico en inspiración
pulmonar romboidal Puede aumentar en Desdoblamiento amplio del 2 .0 tono
inspiración Puede haber thri/1
Insuficiencia Holosistólico Foco mitral irradiado 3.0 ' tono y soplo diastólico en punta
mitral a axila Latido de punta hiperdiná mico
A veces thri/1
Insuficiencia Holosistólico Foco tricúspide Pulso evidente en venas del cuello
tricúspide Aumenta en Asociado a enfermedad pulmonar,
inspiración hipertensión pu lmonar o lesión mitral
Insuficiencia Diastólico precoz Foco aórtico y borde Intensidad aumenta con maniobra de
aórtica in decrescendo esternal izquierdo handgrip
Pulsos amplios
Insuficiencia Diastólico precoz Foco pulmonar Pulsos perifé ricos normales
pulmonar in decrescendo Se confunde con insuficiencia aórtica
Estenosis Tras chasquido de apertura Foco mitral, en punta Primer tono reforzado
mitral soplo diastólico con refuerzo
presistólico (si está en ritmo
sinusal)
Estenosis Mesodiastólico tras Foco tricúspide Aumenta con la inspiración (signo de
tricúspide chasquido de apertura Carvallo)
Suele asociarse a estenosis mitral

siendo la consecuencia del aumento de presión san- treptococo beta hemolítico del grupo A, que induce
guínea detrás de la lesión y otros anterógrados, por una respuesta inmune que lesiona la válvula (fusiona
disminución del flujo. Por ejemplo, la estenosis val- sus b ordes, retrae las cuerdas tendinosas y facilita que
vular aumenta la presión de las cavidades situadas se calcifique el aparato valvular) . El área de la válvu-
por detrás de la estenosis y, dado que según la ley la, que normalmente es de 4 a 5 cm 2 , puede quedar
de Laplace, la presión es proporcional a la tensión reducida a un orificio puntiforme; ello ocurre muy
desarrollada por la fibra muscular e inversamente al lentamente (Figs. 49-1 y 49-2).
radio de la cavidad, el aumento de la presión induce
a la hipertrofia de las paredes, lo que permite que la Fisiopatología
pared mantenga una tensión normal. En la insuficien-
cia valvular las fibras musculares , siguiendo la ley de Repercusiones retrógradas: La estenosis condi-
Starling, se dilatan para adaptarse a la sobrecarga de ciona un aumento de la presión en la aurícula
volumen impuesta por la regurgitación. izquierda, que se hipertrofia. Si posteriormente
fracasa , aumenta la presión venosa pulmonar y
la presión capilar pulmonar, responsable de la
PRINCIPALES VALVULOPATÍAS IZQUIERDAS disnea. A largo plazo se sobrecarga el ventrículo
derecho y puede aparecer insuficiencia cardiaca
ESTENOSIS MITRAL derecha (Cap. 46).
Repercusiones anterógradas: El volumen san-
Etiología guíneo que atraviesa la válvula mitral estenótica
Su principal causa es la fiebre reumática. Es una in- está disminuido y en fases avanzadas puede ha-
419
fección faringoamigdalar causada por cepas del es- ber reducción del gasto cardiaco.
SffCIO V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

1 La válvula afec- Manifestaciones clínicas


ta por un proceso La estenosis mitral es la valvulopatía más frecuente y
reumático muestra
engrosamiento y sus manifestaciones son la disnea progresiva, a veces
fusión de las v ~l hemoptisis y la aparición de arritmias, fundalmenta l-
a nivel de las mente fibrilación auricular, que la convierte en una
suras, as'
engros cardiopatía embolígena.
retracci En general, la disnea surge tras muchos años de la
de las c
dinosas. lesión reumática; se debe a la congestión pulmonar
causada por el fallo retrógrado y con frecuencia se
acompaña de tos. Si el orificio tiene más de 2 a 2,5 cm 2
aparece con el esfuerzo, ya que además de aumentar
las demandas, la taquicardia acorta el llenado diastóli-
co. Si es menor o igual a 1,5 cm 2 • aparece con el repo-
so. La disnea es progresiva, primero de esfuerzo, luego
de reposo y posteriormente con el decúbito (ortopnea)
e incluso aparecen crisis de disnea paroxística noc-
2 Con frecuencia se
producen depósitos de turna, porque el reposo nocturno favorece el retorno
3 Todo ello origina un
calcio en las valvas y estrechamiento del orifi- sanguíneo al corazón, se reabsorben los edemas y ello
en el anillo valvular, cio valvular, con reduc- conlleva una sobrecarga hidrosalina.
que progresivamente ción del área de apertura,
conducen a una gran En condiciones normales la presión oncótica del
que en el caso de una
rigidez de la válvula. estenosis mitral severa es capilar pulmonar es 5 mm Hg mayor que la hidros-
inferior a 1 cm2 • tática. Si esta, por el fallo retrógrado, aumenta, se fa-
vorece el paso de plasma desde el vaso al intersticio
Figura Cambios en la válvula mitral asociados a pulmonar y de este al alvéolo, generando edema agu-
una fiebre reum ática. do de pulmón y en ocasiones hemoptisis por rotura
de venas bronquiales.
El edema crónico favorece la fibrosis intersticial.
Esta protege al alvéolo de esa exudación a cambio de
aumentar la presión en la arteria pulmonar y dificul-
tar la oxigenación de los hematíes, ya que la barrera
alvéolo-capilar pasa de medir 0,8 micras hasta 16 mi-
cras . A largo plazo el aumento de presión en la arteria
pulmonar puede causar insuficiencia cardiaca dere-
cha (ingurgitación yugular, hepatomegalia de estasis
y edemas periféricos).

Tabla Principales causas


y mecanismos de las valvulopatías
Causas Mecanismos
Fiebre Hay una respuesta
reumática inmunológica inflamatoria
del endocardio valvular lo
cicatriza y altera
Endocarditis Daño directo por bacterias u
infecciosa hongos que asientan en el
endocardio
Lesiones El infarto de miocardio
isquémicas del puede afectar a los músculos
Figura Estenosis mitral. Dilatación de la aurí-
miocardio papilares y alterar su función
cula izquierda como consecuencia de la dificu ltad al Anomalías Alteración de la anatomía
flujo de salida de la sangre, con formación de trombos congénitas valvular a veces permiten
murales por estasis sanguínea en la aurícula izquierda, malposiciones (prolapsos)
responsable de fenómenos embó l icos, preferentemente
420 al SNC (ictus cardioembólico).
CAPITULO 49 Patología de las lesiones valvulares del corazón

La estrechez de la válvula mitral favorece el acú-


mulo retrógrado de sangre, que aumenta el tamaño
de la aurícula izquierda (Fig. 49-2), que facilita la
aparición de fibrilación auricular y con ella se pierde
la ayuda que esta cámara hace en la diástole al lle-
nado del ventrículo que empeora la disnea y puede
precipitar un cuadro de edema agudo y pulmón. El
enfermo percibe la fibrilación en forma de palpitacio-
nes. Su presencia favorece la estasis de sangre en la
aurícula y la génesis en ella de trombos. Estos pue-
den desplazarse en forma de émbolos y distribuirse
por la circulación sistémica, especialmente por los
vasos del sistema nervioso, donde pueden producir
manifestaciones de déficit neurológico en la zona que
ocluyen (ictus).

Exploración física Figura Estenosis mitral. Ecocardiograma transe-


sofágico en proyección de cuatro cámaras. Las valvas
Inspección: Puede existir cianosis en fases avan- anterior y posterior forman una cúpula durante la diásto-
zadas. Puede aparecer eritema violáceo en los le y reducen el orificio mitral. Nótese el desplazamien-
pómulos (chapetas malares) (Fig. 49-4). El pulso to apica l del orificio mitral (flecha ), que está alejado
arterial es con frecuencia arrítmico. Si hay fraca- del anillo valvu lar mitral normal (surco atrioventricu-
so derecho la presión venosa yugular puede estar lar). ad= aurícula derecha. ai = aurícula izquierda. vd
aumentada y si se mantiene el ritmo sinusal exis- = ventrículo derecho. v i=ventrículo izquierdo.
te una onda a yugular prominente.
Palpación: En el tórax , el latido de la punta se
aprecia a nivel paraesternal izquierdo, mejor en Exploraciones complementarias
la inspiración; señala el crecimiento del ventrí- En la Rx posteroanterior (PA) de tórax, a nivel del
culo derecho. Si el enfermo se coloca en decú- primer arco cardiaco del lado derecho, aparece un
bito lateral izquierdo se puede palpar un thrill doble contorno que expresa el crecimiento auricu-
diastólico en la punta. lar izquierdo (Al). El crecimiento de la orejuela iz-
Auscultación: Es mejor realizarla con el enfer- quierda se aprecia como un arco izquierdo entre el
mo en decúbito lateral izquierdo. Demuestra un ventrículo y la arteria pulmonar. Si hay hipertensión
primer ruido fuerte que expresa que la válvula pulmonar se expresa por el aumento de tamaño del
mitral está estenosada, rígida y que retumba al tronco de esa arteria y de sus principales ranrns en
cerrarse (Fig. 49-3). Si hay fibrilación auricular la radiología PA junto con un aumento del flujo de
su intensidad varía con la pausa precedente: las los vértices (redistribución) y puede haber edema
diástoles más largas ofrecen primeros tonos más intersticial (peribronquial y perivascular). También
fuertes. La sístole está limpia y tras el segundo pueden verse líneas perpendiculares a las pleuras en
ruido hay un chasquido causado por la apertura
brusca de la válvula hacia el ventrículo izquier-
do; desaparece si la válvula mitral se calcifica.
Cuanto más próximo está del segundo tono in-
dica que la estenosis es más grave. Hay un soplo
de llenado mesodiastólico generado por el paso
de sangre a través de la válvula mitral estenótica.
Su mayor duración indica mayor gravedad de la
estenosis. Se irradia a la axila y se acompaña al
final de la diástole de un arrastre presistólico,
creciente hacia el primer ruido (retumbo diastó-
lico). Está causado por la contracción auricular y
por tanto sólo es audible si existe ritmo sinusal.
Si hay hipertensión pulmonar aparecen los ha-
llazgos exploratorios propios (segundo tono pul-
monar reforzado y soplo diastólico de Graham
Steel), que se diferencia del de la insuficiencia
aórtica (Austin Flint) por la presencia del chas-
quido de apertura y la mayor intensidad del pri-
mer ruido .
S C 10 V Sem iología y fis iopatología de las enfermedades cardiovasculares

ambas bases pulmonares. Son las líneas B de Kerley,


expresión edema de los septos interlobulillares. Si la
presión aumenta los hilios se difuminan y aparecen Tabla Análisis conjunto de las
infiltrados alveolares , preferentemente perihiliares, causas y mecanismos de producción
que pu eden adoptar u na morfología en «alas de mari- de la insuficiencia mitral
p osa » en el edema agudo de pulmón.
El electrocardiograma demuestra la hipertrofia de Causas Mecanismos
la Al (onda P > de 0,1 0 s, bifásica en I, II y precordia-
les izquierdas). Si hay fibrilación las ondas P se susti- Fiebre reumática Por degeneración
tuyen por ondas f. Si hay hipertensión pulmonar hay mixomatosa del
aparato valvular
datos de aumento de tamaño de aurícula y del ventrí-
cu lo derecho con desviación del eje a la derecha. La Cardiopatía isquémica Por una
ecocardiografía en modo M y 2D muestran engrosa- que lesiona las cuerdas o miocardiopatía
miento de la válvula por la fibrosis y en su caso las músculos papilares dilatada
calcificaciones y su movilidad disminuida. La valva En enfermedades del Por las
anterior tiene disminuida la pendiente diastólica y la tejido conectivo (lupus calcificaciones
posterior, en vez de oponerse, acompaña a la ante- eritematoso sistémico, del anillo
rior en la diástole, con aparición de una imagen de artritis reumatoide)
«palo de hockey». La aurícula izquierda está dilatada Enfermedades congénitas Malformación
y puede demostrar trombos en su interior. Con Eco 2D asociadas a anomalías de y/o malposición
se puede medir el orificio mitral. Con Doppler color los tabiques auricular o durante el
se localiza la turbulencia generada por la estenosis y ventricular desarrollo
con Doppler pulsado y continuo se puede determinar embrionario
el gradiente diastólico y el área mitral, lo que informa
de la gravedad de la estenosis. El eco transesofágico
valora mejor que el transtorácico si hay trombos en la
aurícula izquierda. El cateterismo cardiaco , au nqu e
lida, hacia la aorta y la aurícula. El VI puede manejar
no es necesario para el diagnós tico , permite valorar
la presión de la aurícula izqu ierda (normal de 4 a 12 volúmenes m u y importantes sin aumentar su presión
mm Hg), el gradiente de la presión a través de la vál- telediastólica si se dilata . Esta situación puede man-
vula (normal 24/ 4 mm Hg) y la presión en la arteria tenerse durante varios años y posteriormente, por
pulmonar, y con ello la gravedad de la estenosis. Su el aumento del trabajo ventricular, la contractilidad
realización está indicada si las presiones en el ven-
trículo derecho son desproporcionadas con relación
a la estenosis estimada por ecografía Doppler, y es-
pecialmente si se plantea la cirugía en enfermos con
factores de riesgo de arteriopatía coronaria.

INSUFICIENCIA MITRAL
Etiología
Sus causas se recogen en la Tabla 49-3 (Fig. 49-5).

Fisiopatología
Hay una dificultad al cierre valvular completo que
puede estar causada por: a) deformidad, degenera-
ción y/o calcificación valvular; b ) dilatación de anillo
mitral; c) disfunción de los músculos p apilares, y d)
rotura de las valvas o de las cu erdas tendinosas (Fig.
49-6) .
Con esta lesión parte de la sangre fluye de forma
inadecuada del ventrículo a la aurícula izquierda.
La aurícula, en respuesta a esa sobrecarga diastólica
se dilata, pero durante algún tiempo no aumenta su Figura Insufic iencia mitra l. Imagen de cine-RM
presión ni la del círculo menor. La aurícula recibe la durante la sístole. Nótese un área de ausencia de seña l
sangre procedente del ventrículo y la que le llega por en la au ríc ul a izq uierda, por encima de la vá lvul a mi-
las venas pulmonares con un aumento de la precarga. tra l, que sugiere insuficiencia mi tral (flecha). ai = aurí-
422 En la sístole ventricular la sangre tiene una doble sa- cul a izquierda. vi = ventrícul o izqui erdo.
CAPÍTULO 49 Patología de las lesiones valvulares del corazón

Exploración física
Aurícula El pulso arterial suele ser de amplitud normal o pe-
izquierda queño y en general es hiperdinámico. En el pulso ve-
noso desaparecen la onda a y el seno x . En el tórax
la auscultación y la palpación demuestran una punta
Válvula desplazada hacia la izquierda con latido hiperdiná-
mitral
mico. A la auscultación se aprecia un soplo pansis-
tólico en foco mitral que se irradia hacia la axila, que
Cierre puede ser palpable (thrill}. Si hay una gran distensión
Insufi- valvular in- del ventrículo izquierdo el llenado es rápido y puede
ciencia suficiente aparecer un 3.ª' tono, e incluso un 4. tono, y también
0

de las que provo- un desdoblamiento amplio del 2. 0 ruido en el foco


valvas ca regurgi-
mitrales tación de pulmonar por acortamiento de la sístole ventricular
la sangre izquierda. Si hay prolapso puede oírse un soplo sis-
hacia la tólico tardío y un click meso o telediastólico. Por el
aurícula gran volumen sanguíneo que pasa a través de la mi-
izquierda tral en la diástole, a veces es posible oír un retumbo
diastólico , aunque no exista estenosis.
Figura Insuficiencia mitral.
Exploraciones complementarias
La Rx de tórax puede mostrar crecimiento de la au-
disminuye, aumenta la presión telediastólica y dis- rícula y el ventrículo izquierdo. En el ECG se com-
minuye la fracción de eyección y el gasto cardiaco , prueba el crecimiento de la aurícula y el ventrículo
apareciendo congestión pulmonar (Fig. 49-7). izquierdo con patrón de sobrecarga diastólica: ondas Q
prominentes, R altas y T positivas altas en precordia-
Manifestaciones clínicas les izquierdas; con frecuencia hay taquicardia sinusal
o fibrilación auricular. La ecocardiografía demuestra
Por la buena tolerancia del ventrículo izquierdo y la
el crecimiento de la aurícula y el ventrículo izquierdo,
discreta elevación de la presión media en la aurícula
la anatomía de la válvula y el anillo mitral y ayuda
izquierda es frecuente un periodo asintomático pro-
a definir la causa de la insuficiencia mitral. El eco
longado. En caso de insuficiencia mitral aguda es fre-
Doppler color pulsado y continuo demuestra la turbu-
cuente un edema agudo de pulmón. Si la insuficiencia
lencia sistólica sobre la aurícula izquierda y define si
mitral está producida por un prolapso de la válvula, el
hay valvulopatías asociadas o hipertensión pulmonar.
enfermo puede presentar palpitaciones, dolor toráci-
Permite diagnosticar el proceso con fiabilidad y valo-
co, síncopes o síntomas de disfunción autonómica.
rar la gravedad de la insuficiencia mitral, que
será severa si el área. Si el chorro de regur-
gitación es excéntrico la sonda transesofágica
lo localiza bien. El cateterismo cardiaco con
ventriculografía izquierda permite valorar
la fracción de eyección y semicuantificar el
volumen de regurgitación. Tiene interés si el
enfermo asocia además riesgo coronario.

ESTENOSIS AÓRTICA
Etiología
La enfermedad surge por una disminución
del área del orificio aórtico, que normalmen-
te mide de 3 a 4 cm 2 • Supone el 25 % de las
valvulopatías . Puede ser adquirida por en-
fermedad reumática o, en los ancianos, por
enfermedad degenerativa con calcificaciones
(lo más frecuente) (Fig. 49-8 y 49-9). Puede
ser congénita, habitualmente con malforma-
Normal Insuficiencia mitral,
reflujo hacia la aurícula izquierda ciones en las válvulas (bicúspide o unicúspi-
de). Algunas miocardiopatías pueden gene-
Figura Esquema visua l que muestra una insuficiencia rar una obstrucción subvalvular del flujo sin
mitral. que haya lesión en la valva.
423
SECCIO Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Hipertrofia
Válvulas concéntrica
fibrosas cal- ventrículo
cificadas ·erdo

Figura Estenosis aórtica ca lcificada.

Fisiopatología
La gravedad de la obstrucción se define por el ta-
maüo del orificio y el gradiente medio de presión Figura Estenos is aórtica ca lcificada.
transvalvular que genera. Es severa si es $ 1 cm 2 y
la presión~ 50 mm Hg, estando conservada la fuerza Exploración física
contráctil del ventrículo izquierdo. La estenosis difi-
culta el vaciado normal del ventrículo. Para vencer Pulso arterial: Debido a la dificultad para la eyección
el obstáculo aquel debe generar una gran presión y que alarga la sístole ventricular, el pulso es de ascen-
se hipertrofia. Esta hipertrofia permite una función so lento y cúspide redondeada (anácroto) . El pulso
sistólica mantenida largo tiempo. El volu men tele- venoso puede ser normal o mostrar una onda a gigan-
diastólico se mantiene por la potente contracción te por dificultad de la llegada de sangre al corazón
de la aurícula izquierda y el aumento de la presión derecho que está disminuido de tamaüo por la hiper-
telediastólica sin comprometer el volumen de eyec- trofia ventricular izquierda (efecto Bernheim). En el
ción. Pero la hipertrofia disminuye la distensibilidad tórax: A la palpación el latido de la punta es vigoroso
ventricular y compromete su llenado , lo que induce y no está desplazado. A la auscultación, tras un pri-
una disfunción diastólica. El aumento de presión en mer ruido normal se oye un clic de eyección causa-
la aurícula izquierda repercute retrógradamente y au- do por la apertura de la sigmoidea aórtica rígida que
menta la presión en el círculo menor. Además, con hace de diafragma; posteriormente se aprecia un so-
frecuencia hay taquicardia que acorta la diástole, lo plo mesosistólico eyectivo de forma romboidal , más
que disminuye el tiempo de llenado ventricular y el au dible en el foco aórtico e irradiado a carótidas . Hay
volumen de eyección. La hipertrofia del ventrículo un desdoblamiento invertido del segundo ruido por
izquierdo aumenta las demandas de oxígeno y pue- el alargamiento de la sístole del ventrículo izquierdo,
de precipitar manifestaciones de angina a pesar de que retrasa el cierre de las sigmoideas aórticas, pero
ser las coronarias normales. En fases avanzadas los a veces no se percibe. En ocasiones se oye un cuarto
ventrículos se dilatan y se produce una disfunción ruido por la disminución de la distensibilidad del
sistólica que puede llevar a la insuficiencia cardiaca ventrículo izquierdo
congestiva.
Exploraciones complementarias
Manifestaciones clínicas La Rx de tórax puede demostrar una dilatación post-
Aparecen cuando el área del orificio valvular se re- estenótica en la aorta ascendente por encima del arco
duce a un 1,5-1 cm2; esto sucede aüos después de su de la aurícula derecha. Otras veces se rectifica el con-
inicio, ya que el ventrículo izquierdo compensa du- torno izquierdo de la silueta por hipertrofia ventricu-
rante mucho tiempo. Las manifestaciones consistente lar. En el ECG hay un patrón de hipertrofia ventricular
en dolor precordial en el 50%-70 % de los casos; cua- izquierda con inversión de la onda T en precordiales
dros sincopales en el 15% -3 0 % , fundamentalmente izquierdas; a veces se asocia a bloqueo completo de
de esfuerzo y como expresión del bajo gasto cardia- rama izquierda. La taquicardia sinusual es frecuente
co; otras veces por arritmias. También aparecen las y a veces hay fibrilación auricular. La ecocardiogra-
manifestaciones retrógradas de insuficiencia cardiaca fía en modo M verifica la existencia de la hipertrofia
424
izquierda (disnea) y es una causa de muerte súbita. ventricular izquierda, y permite conocer la función
CAPÍTULO 49 Patología de las lesiones valvulares del corazón

sistólica del ventrículo izquierdo así como la anato- Válvula tricúspide Válvula mitral
mía valvular. El Doppler continuo permite calcular
la velocidad máxima del flujo aórtico, el gradiente
máximo y el área del orificio aórtico. La ecografía
transesofágica muestra la anatomía de la válvula y de
la aorta ascendente. El cateterismo cardiaco permite
conocer el gradiente de presión transvalvular y de-
muestra aumento de presiones en la aurícula izquier-
da y la telediastólica del ventrículo izquierdo (normal
de 130/70 mm Hg) así como la disminución del gasto valvas
cardiaco y el gradiente aórtico. Se reserva previo a aórticas
la cirugía de sustitución valvular para descartar una retraí-
das y
lesión coronaria asociada. fibrosas

INSUFICIENCIA AÓRTICA
Etiología Apertura valvu-
Puede estar causada por endocarditis reumática o in- lar; las valvas A
no llegan a ce-
fecciosa o por dilatación del anillo acompañando a rrar totalmente
malformaciones congénitas (enfermedad de Marfan)
o asociadas a lués (sífilis) (Fig. 49-lOA y B). Vá lvul a
mitral
Hipertrofia
Fisiopatología excéntrica
La válvula aórtica no cierra completamente y hay un marcada
del ventrículo
flujo retrógrado que pasa desde la aorta al ventrículo izquierdo
izquierdo durante la diástole, con lo que el volumen
de ese ventrículo aumenta. Al ventrículo izquierdo
llega el flujo retrógrado y el que le pasa de la aurícula
izquierda, por lo que la presión parietal aumenta, la
pared se hipertrofia, disminuye su distensibilidad y
con ello aumenta la presión telediastólica.

Manifestaciones clínicas
Las principales son: disnea progresiva, percepción de
latidos en la cabeza o cuello, angor, palpitaciones por
el latido hiperdinámico del ventrículo izquierdo y un
pulso arterial amplio (magnus y celer].

Exploración física
El pulso arterial es amplio , de ascenso rápido , vértice Figura Insuficiencia aórtica.
agudo y descenso rápido; a nivel carotídeo se expresa
con una gran expansión y vacian1iento (danza caro-
tídea]. A veces hay congestión y blanqueo sucesivo al ventrículo izquierdo que se oye mejor en la región
de los lechos ungueales (signo de Quincke]. A la aus- paraesternal izquierda, y mejor con el enfermo incli-
cultación sobre las arterias femorales se hace audible nado hacia delante y en apnea postespiratoria. Si la
un soplo en dos tiempos (signo de Duroziez]. La ca- insuficiencia aórtica es grave se puede oír en la punta
beza puede moverse de forma sincrónica con el pul- un soplo mesodiastólico y otro presistólico por este-
so (signo de Musset]. La TAS está muy elevada y los nosis mitral funcional (soplo de Austin Flint).
sonidos de Korotkof se oyen hasta casi O, es decir, la
TAD es muy baja y por tanto la tensión diferencial es
Exploraciones complementarias
muy amplia. En el tórax la inspección y la palpación
muestran la punta desplazada hacia abajo y hacia fue- La Rx de tórax muestra un aumento del ventrículo iz-
ra con latido hipercinético. La auscultación muestra quierdo y en ocasiones calcificaciones de las valvas.
un clic sistólico seguido por un soplo de eyección, El ECG muestra un patrón de hipertrofia ventricular
ya que por el gran volumen del ventrículo izquierdo izquierda: ondas R altas en precordiales izquierdas y
se induce una estenosis aórtica relativa o funcional; sobrecarga diastólica, con Q profunda, el segmento
hay un soplo diastólico precoz, descendente (in de- ST rectificado y T picuda en precordiales izquierdas.
crescendo) producido al pasar la sangre de la aorta La taquicardia sinusal es frecuente.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

pero que desaparece si hay fibrila-


ción auricular. A la auscultación
hay un soplo mesodiastólico de
llenado ventricular con chasqui-
do de apertura y soplo presistóli-
co romboidal en foco tricúspide
(cuarto espacio intercostal en la
línea paraesternal izquierda), el
cual aumenta en inspiración tras
la maniobra de Valsalva). Si se
asocia insuficiencia tricúspide
se añade w1 soplo pansistólico.

Figura Imagen bidimens iona l de flujo en co lor de la aorta torácica


Exploraciones complementarias
descendente durante la diástole. El flujo naranj a-rojo en la ao rta descendente La Rx de tórax muestra dilata-
durante la diástole indica flujo hac ia el transductor, es decir, flujo invertido ción de la aurícula derecha que
debido a in suficienc ia aórtica grave. Ao, aorta . se expresa por prominencia del
arco inferior derecho de la silue-
La ecografía en modo M y 2D informa sobre el es- ta cardiaca. A veces son visibles
tado de la válvula, del ventrículo izquierdo y la raíz los hallazgos correspondientes a otras valvulopatías
aórtica, así como de la función sistólica y diastólica. acompañantes. El ECG, si está en ritmo sinusal muestra
El Doppler pulsado continuo define el chorro de re- hipertrofia de la aurícula derecha , pero si está en fibri-
gurgitación (jet) y permite evaluar su gravedad. El lación es inespecífico. La ecocardiografía demuestra
estudio hemodinámico y la aortografía permiten el fibrosis y reducción de la apertura de las valvas.
registro de las presiones en aorta y ventrículo izquier-
do. Se reservan para los casos en que se precisa un INSUFICIENCIA TRICÚSPIDE
estudio coronario (Fig. 49-11 ).
Etiología
PRINCIPALES VALVULOPATÍAS DERECHAS Puede ser orgánica o funcional. La funcional lo es por
dilatación del anillo secundario a otra patología (hi-
ESTENOSIS TRICÚSPIDE
Etiopatogenia y fisiopatología
Dada la amplitud del anillo tricúspide su aparición Válvula tricúspide
de forma aislada o asociada a otra valvulopatía es ex- estenosada con
cepcional. Su principal causa es la fiebre reumática signos de engrosa-
que fusiona y engrosa las valvas y acorta las cuerdas, nuento y fibrosis
creando un obstáculo al llenado del ventrículo dere-
cho en diástole. Hay estasis retrógrada que se transmi- Ventrículo
te fácilmente a las cavas y ocasiona una insuficiencia derecho
cardiaca derecha (Fig. 49-1 2).

Manifestaciones clínicas
La estenosis tricúspide con frecuencia acompaña a
otras enfermedades: estenosis mitral o aórtica, y en
ese caso protege al pulmón de la congestión. Tras un
periodo asintomático prolongado aparece ingurgita-
ción de las venas del cuello, hepatomegalia congesti-
va y sensación de plenitud abdominal. Luego puede
aparecer ascitis y edemas maleolares. Si hay bajo
gasto cardiaco aparece disnea por agotamiento de los
músculos respiratorios, astenia e hipotensión etc.

Exploración física
El enfermo puede estar pálido, cianótico o con ictericia.
~ En el cuello se aprecia estasis yugular y pulso venoso Figura La este nosis tricuspídea provoca un
con onda a prominente que aumenta en inspiración, aumento de la presión auri cu lar derecha.
CAPÍTULO 49 Patología de las lesiones valvulares del corazón

Aurícula
---derecha
Arteria
pulmonar

Aurícula Válvula
derecha pulmonar

Válvula
tricúspide Insuficiencia tricuspídea:
insuficiente la válvula no cierra adecuadamente
y se produce regurgitación hacia
la aurícuia áerecha.
Ventrículo
derecho
Ventrículo
izquierdo

Figura Insuficiencia tricúspide.

pertensión pulmonar grave, valvulopatía mitral). La Exploraciones complementarias


orgánica suele acompañarse de algún grado de este- La Rx de tórax demuestra la dilatación de la aurí-
nosis y es permanente. Está causada frecuentemente cula y ventrículo derechos; el primer arco derecho
por endocarditis infecciosa en consumidores de dro- de la silueta está aumentado de ta.maño y la punta
gas por vía parenteral. cardiaca elevada, de forma que el corazón adquiere
morfología de zueco. El ECG expresa signos de creci-
Fisiopatología miento biauricular y del ventrículo derecho La eco-
Hay una sobrecarga de volumen en la aurícula y el cardiografía en modo M y ZD confirma la presencia
ventrículo derecho porque aumenta el volumen dias- de afectación de la tricúspide. En casos avanzados se
tólico. El ventrículo derecho, siguiendo la ley de Star- demuestra una dilatación del ventrículo derecho y el
ling, se dilata (Fig. 49-13). movimiento paradójico del tabique interventricular.
Con Doppler color se determina la importancia de
la regurgitación y con Doppler continuo se pueden
Manifestaciones clínicas
calcular las presiones sistólicas en arteria pulmonar.
Por el fallo retrógrado son semejantes a los de la
estenosis tricúspide: ingurgitación de las venas del
cuello, hepatomegalia, distensión abdominal por as- VALVULOPATÍAS PULMONARES
citis y edemas en extremidades inferiores. Si hay en-
docarditis infecciosa aparece fiebre y fragmentos de Etiología
las vegetaciones valvulares pueden desprenderse for- La estenosis y la insuficiencia pulmonar son las val-
mando émbolos sépticos que se alojan en el pulmón. vulopatías menos frecuentes. La estenosis suele ser
congénita o aún más raro por hipertrofia miocárdica
Exploración física que obstruye las áreas de salida del ventrículo dere-
cho o excepcionalmente por enfermedad reumática.
El enfermo puede estar cianótico o ictérico. En el cue- La insuficiencia pulmonar suele ser secundaria a hi-
llo muestra una onda v gigante en el pulso venoso por pertensión pulmonar grave por otra valvulopatía (Fig.
acúmulo retrógrado de la sangre que llega al ventrí- 49-14 y 49-15) .
culo derecho. La contracción del ventrículo derecho
puede transmitirse al hígado y este tiene expansión o
pulsación sistólica, y pueden existir ascitis y edemas Fisiopatología
en extremidades inferiores. La auscultación revela un En la estenosis pulmonar el orificio estrechado ori-
soplo pansistólico en el foco tricúspide que aumenta gina una sobrecarga para el ventrículo derecho que ~
en inspiración. debe hipertrofiarse para poder vaciar en la arteria
SECC"IO V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Válvula pulmonar estenosada;


las válvulas no pueden abrirse Manifestaciones clínicas
completamente J?Or retracción
de las mISmas Predominan las de la enfermedad responsable de la
valvulopatía. Si hay hipertensión pulmonar aparece
disnea, astenia y síncopes.

Exploración física
El ventrículo derecho puede palparse en el precordio
y la arteria pulmonar en el segundo espacio intercos-
tal derecho. El alargamiento de la sístole del ventrícu-
lo derecho puede hacer que el segundo ruido esté am-
pliamente desdoblado. Si hay hipertensión pulmonar
el componente pulmonar del segundo ruido aparece
reforzado. Si hay insuficiencia pulmonar es audible
un soplo diastólico semejante al de la insuficiencia
aórtica, pero en el tercero o cuarto espacio intercostal
izquierdo; tiene un tono alto y aumenta en la inspira-
ción (soplo de Gralwm Steel).

Figura Estenosis pulmonar. Se trata de una Exploraciones complementarias


estrechez a nivel del infundíbulo del ventrícu lo de- En la Rx de tórax la arteria pulmonar y el ventrículo
recho (zo na del ventrículo cercana a la arteria pul- derecho son prominentes . El ECG demuestra la sobre-
monar), an ill o, válvu la pulmonar o arteria pulmonar. carga del ventrículo derecho con trazado rSr'o rSR ' en
precordiales derechas . Si hay hipertensión pulmonar
se expresa con datos de hipertrofia del ventrículo de-
pulmonar. La insuficiencia pulmonar supone una so- recho . La ecocardiografía es diagnóstica. La ecocar-
brecarga de volumen para el ventrículo derecho por diografía Doppler color demuestra la regurgitación a
el volumen regurgitante. Se tolera bien durante años. la salida de la pulmonar.

Válvula de la
arteria pulmonar
insuficiente
Válvula
aórtica

Ventrículo
derecho Cierre con insufi ·
pulmonar

Figura In suficiencia valvular pu lmonar. En la hiperte nsión arteri al pulmonar, la elevada presión que
existe en la arteria pulmonar provoca insuficiencia pulmonar en la diásto le hacia el ventrícu lo derecho. En la
insufi ciencia de la válvula pulmonar la válvula no cierra totalmente en la diástole.
-150
Arteriosclerosis
Jaime Merino Sánchez, Reyes Pascual Pérez, Vicente Gil Guillén

RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL:
ESTRUCTURA DE LAS ARTERIAS
En las arterias se distinguen tres capas:
La íntima, que recubre la luz arterial
y está compuesta por una monocapa
de células endoteliales colocadas
sobre una membrana basal de tejido
conjuntivo. Debajo se sitúa una capa
de fibras elásticas, la elástica inter-
na, que está presente en las arterias
de medio o gran calibre y no existe
en los capilares.
El endotelio de las arterias supo-
ne un órgano de unos 100 g de peso
y de más de 500 metros cuadrados
de superficie; es una barrera selec-
tiva muy activa metabólicamente
yrecoge señales de la luz del vaso
y trasmite los mensajes a las capas
más internas de la pared, a las célu-
las del músculo liso (CML). La Tabla
50-1 recoge sus actividades.
La capa media: Se sitúa entre la lá-
mina elástica interna por dentro y la
lámina elástica externa por fuera. La
componen las CML (que forman una
capa única en las arterias musculares
de pequeño calibre y varias capas en
las arterias elásticas), las fibras elásti-
cas y colágenas y los proteoglicanos y
dermatansulfato. Las fibras elásticas
hacen progresar la onda del pulso y
en las arterias musculares las CML al
dilatarse o contraerse regulan el flujo.
Las células del músculo liso cuan-
do están en reposo mantienen un fe-
notipo contráctil, pero ante una agre-
sión del endotelio son capaces de
emigrar, proliferar y sintetizar gran
cantidad de componentes de la ma-
triz del tejido conjuntivo y múltiples
factores de crecimiento (entre ellos
el derivado de las plaquetas) tam-
bién liberan sustancias vasoactivas o
responden a agentes quimiotácticos,
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

factores fibrinolíticos) y hacer que el vaso no sea trom-


bogénico para las células sanguíneas (heparinoides); d)
Tabla Efectos de las principales regular la adhesión de las células a su nivel (vía molé-
sustancias producidas por el endotelio culas de adhesión), el paso de sustancias a su través,
y como liberan sustancias con actividad quimiotáctica
vascular
regulan sus propios mecanismos de reparación.
Regulan el Vasodilatadores: Las arterias además de distribuir la sangre desde el
tono vascular Óxido nítrico (NO) corazón a los diferentes órganos regulan el flujo san-
Prostanoides: prostaciclina guíneo a través de la liberación de sustancias vaso-
(PGl-2) dilatadoras como el óxido nítrico, la prostaciclina, o
Factor hiperpolarizante de las vasoconstrictoras como la endotelina y por responder
CML a otros estímulos hormonales o nerviosos; regulan la
presión arterial: activan la enzima conversora de la
Vasoconstrictores:
angiotensina (ECA), y responden a las catecolaminas
Endotelinas participan en la hemostasia vía Factor de Von Wille-
ECA (enzima conversora de brand, liberación de prostraciclina u otras con efecto
la angiotensina)
sobre la fibrinólisis , y actúan en el metabolismo de
Prostanoides: PGG-2 y PGH-2 los lípidos, al activar la lipoproteinlipasa.
Regulan la NO y PGl-2
hemostasia Heparán sulfato ENFERMEDADES DE LAS ARTERIAS
y la función
Antitrombina
plaquetaria Son muy diversas , dependiendo de los mecanismos
Proteínas C y S
lesionales y el tipo de vaso afecto. Incluyen las arte-
Trombomodulina
ritis en las enfermedades sistémicas, la arteriolone-
Factor Von Willebrand
crosis o necrosis fibrinoide en la hipertensión ace-
Factor Tisular
lerada o maligna, el daño de las arterias musculares
Fibrinólisis tPA o enfermedad de Monckeberg, pero nos interesa es-
Uroquinasa pecialmente la arteriosclerosis, que subyace a otras
PAl-1 muchas enfermedades y que son principal causa de
morbimortalidad de nuestra sociedad.
Adhesión VCAM , ICAM , selectina
celular
ARTERIOSCLEROSIS
Crecimiento Factor de crecimiento del
celular endotelio vascular
CONCEPTO Y TIPOS
Citocinas IL-1 , IL-6, IL-8
Es un término genérico que expresa endurecimiento
Transporte y Lipoproteinlipasa y engrosamiento de las paredes arteriales. La OMS la
metabolismo LDL-colesterol define como una combinación variable de cambios en
Detección de Receptores para LDL, hormo- la íntima de las arterias que acumulan localmente lí-
señales nas y mediadores vasoactivos pidos , hidratos de carbono complejos, células sanguí-
Canales iónicos neas , tejido fibroso y calcio; el proceso se desarrolla a
lo largo de décadas.
La arteriosclerosis es el sustrato lesiona! de las
enfermedades llamadas cardiovasculares (o mejor
vasculares), que son la primera causa de muerte en
y al tener receptores específicos son capaces de
los países desarrollados. Se la consideraba una enfer-
atraer a las lipoproteínas de baja densidad.
medad degenerativa e irreversible y en la actualidad
La adventicia: Continúa la lámina elástica exter- se acepta que es un proceso inflamatorio y reversible.
na. Está formada por colágeno, fibras elásticas, Representa una respuesta inflamatoria y fibroproli-
algunas CML y fibroblastos. Contienen los vasa ferativa a varios tipos de agentes lesivos que afecta
vasorum que irrigan la arteria y los vasa nervorun. fundamentalmente a las capas más internas de las
Las arterias, además de distribuir los flujos sanguí- arterias de medio y gran calibre.
neos, son órganos muy activos que realizan funciones
diversas. Las células endoteliales son capaces de: a) CAMBIOS ESTRUCTURALES
metabolizar glucosa y sintetizar ácidos grasos fosfolípi-
dos y triglicéridos; b) soportar el estrés del flujo, regu-
DE LA ARTERIOSCLEROSIS
lar de forma autocrina su propio calibre (vía óxido ní- La arteriosclerosis implica la aparición de cambios
trico) y la tensión arterial (óxido nítrico, prostaciclina progresivos en la estructura del vaso: estrías grasas,
430
y endotelina); c) mantener el vaso permeable (liberan placas fibrosas y lesiones complicadas (Fig. 50-1).
CAPITULO 50 Arteriosclerosis

a) Agres ión fun cional u o rgá nica Los mo nocitos se adh ieren Los monocitos pasa n al subendotelio,
sobre el endotelio. a la superfi cie endoteli al y se transforman en célul as espumosas
b) Pa rtículas de LDL-co lestero l liberan facto res quimiotácticos (estrías grasas), las partíc ulas de LDL-colesterol
ox idadas adhiriéndose y de crecimiento pasa n al subendotelio y se oxidan
e infiltrando la ínt ima
6 ,..&'"~

á(~e7~~'
~r~,~~
r:.r.a_~~~
.
\0r&:.'
)~ ! :·~ -
\;;~/
~ "~' 'ff ~
Fi sura o ul ceració n de la placa, Form ació n de la placa fibrosa Las célul as espumosas aumentan
adherencia de pl aquetas, ini cio con aparició n de necrosis y de tamaño y las célul as musculares
de un trom bo, ca lcificación c ri sta les de colestero l lisas pro li feran y son atraídas
al espacio subendoteli al

Figura •1 In icio y progresión de la arteriosclerosis.

Estrías grasas Ulceración y trombosis. Las placas al crecer con


Es su lesión más precoz; se inicia en la infancia, y en la frecuencia se ulceran, lo que favorece que se pro-
tercera década cubre el 30 % de la íntima de la aorta. duzca un trombo mural que al cicatrizar aumen-
Se expresa en forma de placas amarillentas, lineales, ta la estenosis, obstruye el vaso y causa isquemia
ligeramente elevadas, visibles macroscópicamente en el órgano que nutre. Tiempo después puede
en la luz aórtica. Al microscopio están formadas por recanalizarse.
acúmulos subendoteliales de células espumosas , que La placa favorece la aparición de turbulencias
son macrófagos emigrados desde la media, rellenos que facilitan la colisión de las plaquetas y su ac-
de lípidos y acompañados de linfocitos T. tivación; además la estasis circulatoria activa la
coagulación sanguínea. Si la placa se ulcera se
Placas fibrosas facilita la exposición a la sangre, al subendote-
lio y al Factor tisular, lo que activa las plaquetas
En su evolución muchas estrías grasas desaparecen y y la cascada de la coagulación. Las plaquetas
otras evolucionan a placas fibrosas. Son lesiones ele- activadas liberan tromboxano A2 , que favore-
vadas y están compuestas de una capa densa de CML, ce la formación de agregados plaquetarios y la
de algunos macrófagos , linfocitos T y de una matriz vasoconstricción, disminuyendo la luz del vaso
de tejido conectivo, que rodea una cantidad variable y favoreciendo la aparición de manifestaciones
de residuos celulares y lípidos intra y extracelulares clínicas. Los agregados pueden disolverse por
(«núcleo o core») entre los que abunda el ácido lino- la propia fuerza del flujo , pero otras veces la
leico; su progresión es variable, y en general lo hace coagulación activada forma una malla de fibrina
disminuyendo la luz del vaso , lo que predispone a la que los fija y generan un trombo más o menos
aparición de complicaciones. oclusivo. Esos trombos pueden liberar material
Otras placas se caracterizan por tener un núcleo en forma de émbolos, a la circulación sistémica.
(core) muy rico en lípidos (colesterol extracelular y La obstrucción producida por las placas pue-
sus ésteres), rodeado de un infiltrado inflamatorio de tener una expresión clínica en forma de is-
activo y una cubierta o capa de grosor muy fino y de quemia crónica o de cuadros agudos (por trom-
rigidez variable, formada por fibras de colágeno des- bosis de una placa ulcerada) en el territorio en el
organizadas y gran acúmulo de macrófagos. Tienen que se producen.
un gran riesgo de r otura o de trombosis; son placas Hemorragias: Se producen por la conexión con
vulnerables o inestables, con frecuencia son peque- la disección des vasa vasorum.
ñas y no obstruyen el flujo.
Calcific aciones: Si las lesiones de las arterias se
calcifican aumenta su rigidez.
Lesiones complicadas Aneurismas: Los cambios antedichos favorecen
431
Son las: la pérdida de elasticidad arterial. La capa media
CCION V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

siguiente la presente es 2,8 veces mayor. El ries-


go aumenta si el padre tuvo una complicación
Tabla Localización de las vascular antes de los 55 años , o la madre antes
lesiones y enfermedades asociadas de los 65.
a la arteriosclerosis Se han descrito marcadores genéticos que aumen-
tan el riesgo: entre los genotipos de la ApoE la presen-
En el corazón Todas las formas de cia del alelo E4. Ese hecho se asocia en ambos sexos
y vasos cardiopatía isquémica a tener concentraciones elevadas de LDLc, lo que au-
HTA sistólica y maligna menta el riesgo vascular; lo mismo que ser portador
En el riñón Insuficiencia renal crónica de las mutaciones ASP9 y ASN291 serina del gen de
Hipertensión vasculorrenal la lipoproteinlipasa.
En los vasos Infarto cerebral isquémico
cerebrales
Factores de riesgo modificables
Estenosis de las arterias
intra y extracraneales Dislipemia: Los lípidos implicados en el riesgo
Demencia multiinfarto aterogénico son: a) la elevación del LDLc (sus ni-
veles de seguridad varían según coexistan en esa
En la aorta Aneurismas de aorta persona otros factores de riesgo : hasta 160 mg/
torácica y abdominal
ml si no los hay, hasta 130 mg/dl si sólo hay uno
En las Arteriopatía periférica y si son varios o es diabético hasta 100 mg/dl);
arterias de las crónica b) el descenso de HDLc (< 40 mg/dl en hombres
extremidades y 45 mg/dl en mujeres); c) el aumento de trigli-
inferiores céridos (> 200 mg/dl); d) también, aunque con
En el fondo de Retinopatía isquémica menor implicación práctica, las elevaciones de
ojo la lipoproteína a (> 30 mg/dl) .
Hipertensión arterial: Es capaz de lesionar el
En los vasos Angina e infarto
mesentéricos mesentérico endotelio y favorecer la progresión de la arterios-
clerosis. Su presencia se asocia a un aumento de
las complicaciones cardio y cerebrovasculares,
existiendo una relación lineal entre las cifras e
presión arterial sistólica y/o diastólica y el riesgo
de complicaciones vasculares.
mayor posibilidad de presentar enfermedad vascular Tabaquismo: Favorece la arteriosclerosis. La
de origen arterioscleroso. Algunos son inmodificables nicotina provoca además taquicardia, elevación
(edad, sexo , o antecedentes familiares de esa enfer- de la presión arterial y vasoconstricción, y el
medad arteriosclerosa) , otros pueden modificarse o monóxido de carbono favorece la hipoxia, que
controlarse, y ello hace que desaparezca el riesgo que aumenta la migración de CML. Además favorece
aportan (hipertensión arterial , hipercolesterolemia, la poliglobulia y la viscosidad sanguínea.
tabaquismo). Los factores tienen tendencia a asociar- Diabetes mellitus: La hiperglucemia favorece la
se y si lo potencian el daño vascular. Con ellos se han glicosilación no enzimática de las LDL y otras
elaborado tablas que permiten definir el riesgo que proteínas del endotelio y favorece la prolifera-
alguien tiene de tener una complicación vascular en ción de CML. En el diabético la aterosclerosis
los próximos años (Fig. 50-3). es precoz y extensa; de hecho, las enfermedades
vasculares son su principal causa de muerte.
Factores de riesgo no modificables Además el diabético con frecuencia asocia varios
factores de riesgo.
Edad: Al envejecer se altera el metabolismo de la La presencia de diabetes incrementa tanto el
pared arterial y se favorece la lesión del endote- riesgo vascular que las actuaciones terapéuticas
lio y con ello el riesgo de enfermedad vascular. en el diabético deben ser más intensas, de modo
Sexo: La arteriosclerosis afecta más a los hom- que los objetivos de control de los niveles de lí-
bres. El riesgo de infarto de miocardio es hasta pidos o de las cifras de presión arterial son más
los 60 años en ellos muy superior al de las muje- exigentes.
res , tal vez porque hasta entonces tienen niveles Obesidad: La morbimortalidad por cardiopatía
de cLDL mayores y de cHDL menores que ellas. isquémica aumenta en sujetos con índice de
Carga hereditaria: Padecer una enfermedad co- masa corporal superior al 30 % y más aún si la
ronaria siendo joven es un marcador de enfer- obesidad es central o abdominal. La obesidad
medad coronaria para la descendencia. Si uno es un factor de riesgo que favorece que aparez-
de los padres sufre esta enfermedad antes de los can otros (HTA, diabetes mellitus, dislipenia);
434
60 años el riesgo relativo de que la generación se asocia con una resistencia aumentada a la
CAPÍTULO 50 Arteriosclerosis

Mujeres Hombres
!No fumadoras ! ! Fumadoras
Edad
180 4
160 3 3 4
140 65
120

180
160
140 60
SC-$,RE
>15%
10%-14%
5%-9%
2
3%-4%
55 1 2 2
2%
1 1 1
oí 1%
:t
E < 1%
.§_ 180 1 1 1 1 1 2 3 3 4
-~ 160 1 ~ 1 1 1 1 2 2 2
~
";;

140 1 1
120 1 1
·-·-·
·-·-·
50 1 1
1 1 1 1 1
1 1 2
10 años de
muerte cardiovascular
~ 180 1 1 1 1 1 f 1 1 1 f 1 1 1 1 1 2 2
"'e: 160 1 1 1 1 1 1 f f 1 1 1 1 1 1 1 1 1
-o
;;; 140 1 1 1 1 1 1 1 f f t
40 1 1 1 ,_,
~ 120 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1
,_,
45678 45678 45678 45678

Colesterol fmmoVLJ j
1 1 1 i
150 200 250 300
mg/Ol

Figura Tablas de Framingham para calcular el riesgo a 1O años de muerte cardiovascular.

acción de la insulina en los tejidos periféricos, dad sanguínea y la agregación plaquetaria. También
induce hiperinsulinemia que favorece que el serían factores de riesgo los niveles elevados de los
hígado produzca lipoproteínas ricas en trigli- factores VIII o VII, o los defectos de la actividad fi-
céridos y colesterol, y facilita el sedentarismo. brinolítica, afectando al inhibidor del activador del
Sedentarismo: La actividad física es beneficiosa, plasminógeno (PAi).
disminuye el riesgo vascular. El ejercicio aeró-
bico regular aumenta los niveles de HDLc, des-
ciende los de insulina y fibrinógeno y favorece DIAGNÓSTICO PRECOZ
la fibrinólisis. DE LA ARTERIOSCLEROSIS
La valoración del fondo de ojo permite apreciar cam-
Otros factores de riesgo vascular bios en las pequeñas arterias retinianas pero su corre-
Es difícil cuantificar la importancia del estrés o la lación con las lesiones en grandes vasos es baja. La
personalidad. Algunos estudios demuestran que los arteriografía permite definir la luz y la regularidad
sujetos hiperactivos tienen mayor riesgo de enferme- de la pared de los vasos, hasta en arterias de 0,5 cm de
dad coronaria (personalidad A). Se han descrito que diámetro, pero hemos señalado que las placas com-
se asocian a un incremento del riesgo vascular: la plicadas son frecuentemente pequeñas y escapan a la
hipertrofia del ventrículo izquierdo, el estrés oxida- valoración angiográfica.
tivo relacionado con determinadas infecciones cró- Las técnicas de ultrasonidos Doppler miden flujos
nicas (p. ej ., por Chlamydia pneumoniae o Helico- y reconocen el contorno arterial detectando placas.
bacter pylori) (véase más adelante). También lo son Son útiles en carótidas o femorales pero carecen de
los niveles elevados de homocisteína, que favorecen resolución en las coronarias. La tomografía por su-
la trombosis, y los niveles elevados de fibrinógeno. tracción digital permite obtener imágenes de los le-
Este sería un factor de riesgo independiente que chos vasculares de pequeño calibre, incluso en movi-
435
favorecería la trombosis por aumento de la viscosi- miento (como las coronarias).
SE. Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

En el diagnóstico precoz o en fase presintomática Un índice tobillo/brazo menor de 0,9 en


o preclínica de la arteriosclerosis se están utilizando cualquier persona define la existencia de enfer-
pruebas como (véase Tabla 50-3): medad arterial periférica.
Demostrar alteraciones en el flujo sanguíneo al
Pruebas que demuestran disfunción endotelial.
inducir isquemia miocárdica (presintomática).
Miden si existe una menor vasodilatación arte-
Son pruebas no invasivas que detectan isque-
rial en respuesta a la isquemia. Por ultrasonidos
mia silente, es decir, una enfermedad arterial
(US) se mide el diámetro basal y tras la isquemia
obstructiva en el territorio coronario, eviden-
de la arteria braquial. Si existe disfunción su ex-
ciable al inducir un estrés que puede ser el ejer-
pansión/dilatación se limita.
cicio o un test farmacológico.
Pruebas que muestran la alteración estructural
Unas son técnicas de imagen y otras regis-
en las arterias:
tros:
Medida del grosor de la íntima-media de la
- De imagen son la ecocardiografía de estrés
arteria m ediante ecografía. Se basa en que
en 2 D, la tomografía de perfusión mio-
cuando un haz de US encuentra zonas de dife-
cárdica por emisión de fotones simples
rente impedancia o densidad acústica produce
(SPECT) la gammagrafía y la RM.
un eco de rebote, lo que permite medir el gro-
- Registros: por electrocardiografía de es-
sor de la íntima-media; hay que recordar que
fuerzo y monitorización ambulatoria del
la lesión ateromatosa se inicia con el engro-
electrocardiograma.
samiento de la íntima. De forma no invasiva
se consigue visualizar la luz y las paredes de Pruebas serológicas que demuestran el estado
arterias como las carótidas, la aorta o las fe- proinflamatorio o protrombótico. Son sustan-
morales. Un valor mayor de 0,9 mm evidencia cias que por considerarse expresión de inflama-
lesión del vaso. ción o trombosis se han utilizado como marca-
Detección de placas en las carótidas o coro- dores de arterioesclerosis o de riesgo vascular
narias: con RM o TAC multicorte. Los nuevos (Tabla 50-4 ).
aparatos de Tac multicorte permiten hasta 250
cortes y tiempos de apnea menores de 8 s , lo
que permite visualizar arterias pequeñas y mó-
viles. P ero los hallazgos se limitan si hay calcio
u otros artefactos , lo que llega a excluir al 30 % Tabla Marcadores
de los enfermos.
La RM supone un progreso en esta valora-
de arteriosclerosis
ción, pero su uso está restringido por su menor Rasgo Marcadores
disponibilidad y su coste. PCR, albúmina,
Globales
Valorar la existencia de calcio en las corona- fibrinógeno,
rias. Para demostrarlo se puede usar un TAC leucocitos, SAA
multicorte o un TAC de haz de electrones. Para
cuantificar la extensión e intensidad del cal- Citocinas pro IL-1, IL-6, TNF alfa,
inflamatorias Resistina
cio se utilizan sistemas de puntuación (score)
en base a los percentiles hallados en la pobla- Citocinas IL-4, IL-6
ción sana. Se asume que es un marcador de antiinflamatorias
arteriosclerosis. Receptores de Receptor soluble de
Demostrar alteraciones en los flujos arteriales citocinas solubles y IL-1, deTNF alfa,
y/o detección de isquemia miocárdica inducible antagonistas antagonista del
receptor soluble de
o presintomática. IL-1
Índice (depresión) tobillo/brazo. Es una prueba Moléculas de Intracelulares
muy sencilla que permite detectar arterioscle- adhesión solubles 1, a
rosis a nivel de las arterias periféricas de las células vasculares,
extremidades inferiores. Con Doppler se mide P-selectina,
la PAS en ambas arterias braquiales, luego las E-selectina
pedias y tibiales posteriores. El índice derecho Enzimas degradantes Metaloproteinasas
es el cociente entre PAS más alta en pierna de la matriz 3y4
derecha y la PAS más alta en brazo derecho.
Es capaz de identificar estenosis ~ al 50 % de Resistina
los vasos de las arterias de las piernas con una SAA: proteína sérica del amiloide A.
sensibilidad del 90 % y una especificidad del
436
98%.
.;51
Fisiopatología y clínica de las
enfermedades isquémicas
miocárdicas
Mariano Valdés Chávarri, Eduardo Pinar Bermúdez, Francisco Marín Ortuño

CONCEPTO E IMPORTANCIA
Entendemos por síndrome isquémico co-
ronario (SC) a un grupo de enfermedades
cardiacas caracterizadas por la falta de
oxígeno en el miocardio debido a un flu-
jo coronario insuficiente. Su causa más
frecuente es la arteriosclerosis coronaria.
Su importancia se debe a que las enfer-
medades cardiovasculares constituyen la
primera causa de morbilidad y mortali-
dad del mundo occidental, y a que las
enfermedades isquémicas son hoy en día
la patología cardiaca más prevalente.

CLASIFICACIÓN
Clínicamente, se puede clasificar el SC
en crónico (SCC), representado por la
angina estable (AE), y agudo (SCA) , con
o sin elevación del segmento ST, (SCA-
CEST, SCASEST) representado por la
angina inestable (Al), el infarto agudo de
miocardio (IAM) con y sin onda Q y la
mue1te súbita.

ETIOLOGÍA
La arteriosclerosis coronaria es la causa
más frecuente de insuficiencia del flujo
coronario (más del 95% de los casos).
Existen otras causas menos frecuentes
(Tabla 51-1): a) la patología coronaria no
arteriosclerosa; b) causas de origen car-
diaco no coronario, y c) casos en los que
no hay patología cardiaca previa.

PATOGENIA
En situación normal, el aporte y la de-
manda de oxígeno al miocardio están en
437
equilibrio . El aumento de la demanda
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

pueden equiparar a «volumen telediastólico (VTD) »


y «tensión arterial (TA) », repectivamente. Cuanto ma-
Tabla Etiología del síndrome yor sea el VTD y la TA, mayor será el consumo y el
coronario isquémico gasto de oxígeno. Todas aquellas circunstancias que
aumenten la contractilidad, la frecuencia cardiaca, el
Arteriosclerosis coronaria volumen telesistólico (VTS) o la TA, incrementarán
Coronario no arterioscleroso
las demandas de oxígeno y tendrán que ser compen-
Enfermedades hereditarias, metabólicas, sadas con aumento del aporte.
disección espontánea
Anomal ías congénitas de las coronarias
Espasmo coronario
FLUJO CORONARIO
La compensación a un mayor consumo de oxígeno se
Cardiaco no coronario
realiza a través del aumento del flujo en la circulación
Desequilibrio entre aporte y necesidades:
estenosis aórtica, miocardiopatía coronaria. Ahora bien, la circulación coronaria tiene
hipertrófica obstructiva unas características propias que la diferencian de
Hipertensión pulmonar otras áreas vasculares. En primer lugar, la extracción
Embolias: endocarditis, trombos de oxígeno por el miocardio es siempre máxima aun-
intracavitarios que el músculo no esté isquémico. En segundo lugar,
al estar las arterias coronarias en un órgano contráctil,
No cardiaco
el flujo es preferentemente diastólico , ya que en la
Hematológico (p. ej., policitemia vera)
sístole el propio músculo comprime las coronarias y
Cocaína.
obstaculiza el paso de sangre.
La regulación del flujo coronario es, por tanto ,
vital para mantener la integridad y la función del
músculo cardiaco. Un primer control es metabóli-
provoca inmediatamente aumento del aporte, con lo co, mediante la síntesis y liberación de adenosina y
que el equilibrio se mantiene (Fig. 51-1 ). prostanoides qu e dilatan el vaso y hacen posible el
aumento del fl uj o. El segundo es endotelial, a través
de la síntesis y liberación óxido nítrico (ON), y pros-
DEMANDAS CARDIACAS taciclina que producen vasodilatación, y la endoteli-
Tres son los factores que aumentan las demandas na o el tromboxano, que inducen a vasoconstricción.
cardiacas: la contractilidad, la frecuencia cardiaca En circunstancias normales, con endotelio normal,
y el estrés de la pared. Una contracción más enérgi- predomina la vasodilatación (VD) sobre la vasocons-
ca o un mayor número de contracciones supone un tricción (VC).
mayor gasto energético . El estrés de la pared está en Un hecho de extraordinaria importancia es el flujo
relación con la precarga y la postcarga. La precarga miocárdico regional. La zona subendocárdica reune
es el volumen ventricular antes de la sístole con la dos características diferentes a la subepicárdica. Le
válvula aórtica todavía cerrada. A mayor volumen, llega menos sangre desde las coronarias epicárdicas
mayor será el esfuerzo que ha de hacer el músculo a medida que la arteria penetra en el músculo cardia-
y mayor el consumo de oxígeno. La postcarga es la co. Por otra parte, es la zona con mayor estrés por la
resistencia que el músculo cardiaco ha de vencer para propia proximidad a la cavidad ventricular. Ambas
vaciarse una vez que la válvula aórtica se ha abierto. condiciones conducen a que la zona subendocárdica
En la práctica clínica diaria, precarga y postcarga se consuma normalmente mayor cantidad de oxígeno .
Para compensar el aumento de las demandas , las ar-
terias se encuentran fisiológicamente más dilatadas
¿_
PRECARGA
que las zonas más epicárdicas, compensando y equi-
1 FLUJO CORONARIO ! ESTR tS DE PARED 1
POSCARGA librando sus necesidades de oxígeno. Pero al hacerlo,

'
disminuyen su capacidad de VD ante situaciones que
◄•F----•►
disminuyen el de flujo como ocurre en la arterios-
" APORTE 1 DEMAN~
clerosis coronaria, que no podrían compensarse con
más vasodilatación ya que estaban basalmente muy
/\
[ CONTRACTILIDAD 1 ~ F
- R-EC-UE- N-CI_A_CA_R-DI-ACA
~I
dilatadas. Estos hechos explican que el endocardio es
el territorio más proclive a la isquemia y que en la
clínica, los cambios que apreciamos muchas veces en
el electrocardiograma (ECG), descenso del ST, tradu-
Figura El síndrome isquém ico coronario. Fisio- cen precisamente ese fenómeno: isquemia de la zona
438
pato logía. subendocárdica.
CAPÍTULO 51 Fisiopatología y clínica de las enfermedades isquémicas miocárdicas

MECANISMOS DE LA ISQUEMIA dromes clínicos. En la angina estable (AE}, la placa es


poco vulnerable a la ruptura, con abundante conteni-
Tres son los mecanismos por los que el músculo car- do fibroso , escaso componente inflamatorio, cápsula
diaco puede sufrir isquemia: fibrosa ancha y centro necrótico lipídico escaso En la
Aumento de las demandas con una lesión coro- angina inestable (AJ) y el IAM, la placa es vulnerable,
naria obstructiva que impide el aumento de flujo propensa a la ruptura, blanda, con poca fibra y cáp-
compensador. Es la situación típica de la angina sula delgada, mayor cantidad de componente lipídico
estable. El efecto de la arteriosclerosis sobre el central y, al contrario de lo que podría sospecharse,
flujo depende del grado de estenosis. A partir de menos estenótica (40%-50 %) que la de la AE.
una estenosis > 70 %, aumenta mucho la resis- Dos aspectos diferencian claramente los SC agudos
tencia al flujo y éste se reduce. de los crónicos: la complicación de la placa (fisura
Disminución brusca del aporte sin aumento de o rotura de la cápsula fibrosa) y la presencia de un
las demandas: a) La más frecuente, por ruptura trombo que es predominantemente rojo, oclusivo y
de una placa con formación de un trombo más rico en fibrina en el 1AM con onda Q, mientras que en
o menos obstructivo, como es el caso típico de la Al y en el IAM sin onda Q es más rico en plaquetas,
la Al y el 1AM con o sin onda Q, y b) por un es- de apariencia gris y suboclusivo (Fig. 51-2).
pasmo coronario sin formación de trombo, como
puede ocurrir en la angina de Prinzmetal o angi-
na espástica, o con el uso de cocaína. ISQUEMIA Y NECROSIS
Un mecanismo mixto: diferentes grados de au- En la isquemia los cambios celulares son mínimos y
mento de demandas y disminución del aporte, que reversibles, persistiendo la integridad del sarcoplas-
se observa muchas veces en la práctica habitual. ma y el sarcolema. Lo que caracteriza el 1AM es la
necrosis, muerte celular y pérdida de miocitos. Este
proceso no se realiza de forma inmediata y total, sino
ANATOMÍA PATOLÓGICA gradual: comienza hacia los 20 minutos de una isque-
mia persistente y va evolucionando durante 6-9 horas,
PLACA ARTERIOSCLEROSA reclutando cada vez más miocitos de la zona isqué-
Aunque la arterioesclerosis es, como hemos visto, el mica, que se van necrosando, comenzando siempre
común denominador de los síndromes isquémicos, en las zonas de menor reserva (el subendocardio) y
las características de las placas varían según los sín- avanzando hacia el epicardio.

Placa «estable•

~ CML íntima «activada»

A M acrófago ~ CML media normal


\ ] Célul a espumosa (fa ctor tisul ar+} "

Figura La placa estable y vulnerable. Ambas se diferencian básicamente por la cantidad de lípidos y teji-
439
do fibroso. CML: célula muscular lisa.
SffC Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

Cuando la necrosis abarca todo el espesor del mús- la fuente de energía. Si el metabolismo de la glucosa
culo cardiaco , hablamos de IAM transmural, que suele produce 36 moléculas de ATP en presencia de oxíge-
manifestarse como IAM con onda Q y elevación pre- no, sólo consigue dos sin oxígeno, lo que acaba pro-
coz del segmento ST en el ECG (IAMCEST). Cuando duciendo la depleción de ATP. Cuando los depósitos
por el contrario no afecta a todo el grosor del múculo son menores del 30 % aparece el daño sarcolémico,
cardiaco, sino que se limita a la zona subendocárdica que se hace irreversible con niveles inferiores al 20 %.
hablamos de IAM no transmural, subendocárdico o Al aumentar la glucólisis anaerobia se acumula
sin onda Q, que se manifiesta inicialmente en el ECG lactato, se inhibe la betaoxidación y con mayores re-
sin elevación del segmento ST (IAMSEST) (Fig. 51 -3). ducciones de oxígeno, el transporte de acil-CoA, lo
A diferencia de la isquemia, en la necrosis se afecta que inhibe la formación de nuevos ésteres de ácidos
de forma irreversible la función cardiaca, estando en grasos CoA, y con el glicerol acumulado aumenta la
relación directa con la cantidad de músculo cardiaco síntesis de triglicéridos en el músculo. La síntesis
necrosado (necrosis del 5 %-10 % serán asintomáticas, proteica disminuye y aparece proteólisis en etapas
mientras que si son del 20 % desencadenarán insufi- tardías. Los tejidos acumulan calcio, que altera toda-
ciencia cardiaca, y shock si superan el 40 %) y con el vía más la producción de ATP en las mitocondTias
tiempo en que persista la obstrucción coronaria, sien- y se generan radicales libres, que lesionan las mem-
do la primera hora, la más importante porque en ella branas celulares, las mitocondTias y el retículo sarco-
se necrosan prácticanrnnte la mitad de los miocitos plásmico.
perfundidos por la arteria ocluida. De ahí la importan-
cia clínica de reperfundir inmediatamente el miocar-
dio mediante la apertura de la arteria responsable del CAMBIOS EN LA FUNCIÓN CARDIACA
1AM, bien por métodos mecánicos como la angioplas-
Como consecuencia del fallo metabólico las funcio -
tia primaria, o farmacológicos como la fibrinólisis.
nes miocárdicas resultan afectadas. La alteración de
La isquemia y la necrosis pueden afectar a cualquier
la función diastólica es más temprana que la sistólica,
pai-te del corazón, pero predomina en el ventrículo iz-
pudiendo estar en relación con la recaptación de Ca++
quierdo. Cuando se afecta el ventrículo derecho o las
por el retículo sarcoplásmico. Aunque el mecanismo
aurículas suelen combinar afectación izquierda.
por el que la isquemia altera la contractilidad no está
del todo aclarado, se cree que influye la falta de sensi-
FISIOPATOLOGÍA bilidad del retículo sarcoplásmico a la concentración
de calcio, la competición tt•/ca•• por los receptores
La isquemia miocáTdica se traduce en cambios del troponínicos y la disminución de los depósitos de
metabolismo cardiaco, de la func ión y del sistema ATP.
eléctrico, y finalmente se manifiesta en la clínica. Consecuentemente, se produce una alteración de la
contractilidad en el territorio de la arteria responsa-
ble de la isquemia o la necrosis, unas veces disminu-
CAMBIOS EN EL METABOLISMO CARDIACO yéndola (hipocinesia}, otras eliminándola totalmente
La primera consecuencia de la isquemia son las alte- (acinesia) y en otras, produciendo un movimiento
raciones metabólicas. La conversión de metabolismo paradójico (discinesia con movimiento paradójico,
aeróbico en anaeróbico dismin uye considerablemente se dilata en sístole en vez de acortarse), a pesar de
que el ventrículo pueda seguir teniendo una función
contráctil global normal por la hipercontractilidad
1AM compensadora de los segmentos no isquémicos. Lógi-
transmural camente, estas alteraciones serán mayores cuanto ma-
/ (ONDAQ)
yor sea la necrosis provocada, variando su expresión
clínica desde la asintomática, si la necrosis es muy
pequeña, hasta la insuficiencia cardiaca y el shock,
cuando la necrosis es extensa.
◊ Trombo
oclusivo En ocasiones, si la isquemia fue intensa y persis-
tente, aunque el flujo se recupere posteriormente,
/ Al
el músculo cardiaco queda «aturdido», sin función
Placa ri ca Rotura d e IAMNOQ contráctil durante horas o días por la depleción de las
en lípidos la placa fuentes de energía.
Si todas estas alteraciones ocurren de forma agu-
Trombo
da o subaguda, crónicamente la isquemia y la necro-
suboclusivo sis miocáTdica pueden provocar otras alteraciones.
Episodios repetidos de aturdimiento o situaciones
Figura Los síndromes agudos coronarios isqué- crónicas de una gran disminución de aporte, llevan
440 m icos. a ausencia total de función aunque conservando la
CAPÍTULO 51 Fisiopatología y clínica de las enfermedades isquémicas miocárdicas

vida celular («hibernación »); las fuentes de energía PRESENCIA DE MARCADORES DE NECROSIS
consiguen mantener la vida celular, a pesar de no
ser suficientes para otras funciones intrínsecas del Los marcadores miocárdicos de necrosis son los
músculo cardiaco. Por otra parte, tras la necrosis, la únicos capaces de establecer el diagnóstico inequí-
alteración funcional origina cambios conocidos como voco de IAM. Cuando hay necrosis , al romperse la
remodelado cardiaco. El músculo necrosado se infil- membrana celular se liberan al espacio extracelular,
tra de células inflamatorias, que acaban eliminando pasando luego a la sangre algunos componentes intra-
el tejido necrótico, sustituyéndolo por tejido cicatri- celulares como la mioglobina, la creatin-fosfoquinasa
zal sin la capacidad de relajación ni contracción del (CK), troponinas (TP), transaminasas y lactato deshi-
músculo sano. Ello conduce a la progresiva dilatación drogenasa (WH). La más específica es la CK con su
de la zona afectada del ventrículo y a la pérdida de la subfracción MB, que se eleva entre 6-8 horas y des-
geometría normal ventricular. Aumentan los volúme- ciende a valores normales entre las 36 y 48 horas. Las
nes telesistólico y telediastólico y progresivamente, TP son también hoy en día de uso rutinario, menos
dependiendo de la cantidad de músculo afectado, el específicas que la CK-MB , elevándose a las 6-8 horas
corazón evoluciona al desarrollo de insuficiencia car- y permaneciendo elevadas hasta 10 días . En ambos
diaca. casos, el valor aislado no es diagnóstico; su curva de
elevación y descenso es la que tiene valor diagnósti-
co. La elevación simultánea de CK-MB y TP, diagnos-
CONSECUENCIAS ELECTROFISIOLÓGICAS ticaría «macroinfartos » como ocurre en el 1AM con y
sin onda Q. La elevación aislada de TP sin CK-MB,
Los cambios iónicos inducidos, con acumulación
«microinfartos », como ocurre en algunos SCASEST,
intracelular de Na+, c1- y H 2 0, y sobre todo con re-
a los que por esta elevación, se les considera de alto
ducción de K+, originan cambios del segmento ST
riesgo.
Existe una disminución del potencial de reposo, de
su an1plitud, de la velocidad de fase O y de la dura-
ción de la excitabilidad y conducción, induciéndose FORMAS CLÍNICAS
taquiarritmias ventriculares tanto por automatismo
como por actividad desencadenada o por reentrada.
Experimentalmente, en fases tempranas (entre los 6 y
ISQUEMIA CRÓNICA: ANGINA ESTABLE,
30 minutos) , es frecuente la fibrilación ventricular de- DE ESFUERZO O DE DEMANDA
pendiente de la frecuencia. Tras un periodo de reposo Su síntoma más frecuente es el dolor. Los pacientes
eléctrico (entre las 6 y 72 horas), existe una fase de suelen describirlo como molestia opresiva más que
automatismo anormal con taquicardias ventriculares dolor o como sensación de losa o peso. Su localiza-
y ritmo idioventricular acelerado. Más tarde, y por un ción suele ser retroesternal, aunque con una mayor
mecanismo de reentrada, reaparecen la fibrilación y amplitud hacia los lados, pero puede localizarse tam-
las arritmias ventriculares, generalmente en relación bién en cualquier lugar del tórax, cuello, mandíbula,
con una función cardiaca muy deteriorada. extremidades superiores y parte alta del abdomen.
De igual forma , la isquemia produce generalmen- No suele tener mucha irradiación, a diferencia de
te descensos reversibles del segmento ST, mientras los síndromes agudos , pero cuando lo hace se suele
que la necrosis origina cambios en la onda T y seg- irradiar a ambos lados del tórax, hacia la parte alta,
mento ST, y aparición de ondas Q patológicas en el cuello y mandíbula y a los hombros y brazos, más
caso del 1AM con onda Q. característicamente hacia el brazo izquierdo por su
borde cubital (Fig. 51-4). La duración de la molestia
dolorosa suele oscilar entre 2 y 5 minutos (habitual-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS mente < 10 min). En todos los pacientes ha de existir
Por último aparecen los síntomas, el más frecuente de un desencadenante de la angina: cualquier tipo de
los cuales es el dolor de características isquémicas. A ejercicio, como andar deprisa, subir escaleras, co-
veces la isquemia puede no producir síntomas («is- ger peso, andar después de las comidas; situaciones
quemia silente»), sobre todo en pacientes diabéticos emocionales, temperaturas frías , etc. , son algunos de
y ancianos; otras veces en lugar de dolor, la isquemia los más frecuentes .
y sobre todo la necrosis pueden presentarse por sus En algunos pacientes, la angina se desencade -
consecuencias, como la insuficiencia cardiaca, el sín- na siempre con la misma intensidad de ejercicio
cope o la muerte súbita. (<rnmbral fijo »}, mientras que en otros, un mismo
Aunque no se conoce exactamente la razón por la ejercicio provoca el dolor a unas horas pero no a
que unos pacientes presentan dolor durante la isque- otras (<rnmbral variable»J. Otros pacientes lo no-
mia y otros no, el umbral doloroso de cada paciente, tan al comenzar el ejercicio ( «angina de primer
así como ciertos mediadores químicos como la sus- esfuerzo »), pero va desapareciendo al continuar el
tancia P y la adenosina, podrían estar en la base de su ejercicio. Además, los síntomas disminuyen e in-
explicación. cluso desaparecen totalmente al eliminar el factor
Semiología y fis iopatología de las enfermedades cardiovasculares

Tabla Gravedad de la angina


según la Sociedad Canadiense
de Cardiología
Grado 1
La actividad física ordinaria no produce angina.
Angina consecuencia de ejercicios extenuantes,
rápidos o prolongados.
Grado 11
Limitación ligera de la actividad ordinaria.
Puede andar en llano más de dos manza nas y
subir más de un piso de escaleras.
Angina al andar o subir escaleras rá pido;
comer; ejercicio; viento o frío ; estrés emocional ;
primeras horas del día.
Grado 111
Limitaciones manifiestas de la actividad
ordinaria.
Figura Irradiación del dolor isquémico co ro na-
ria. Angina al andar una o dos manzanas o subi r un
piso de escaleras.
Grado IV
desencadenante; por ello, los pacientes refieren que
Incapaz de llevar a cabo sin angina una
al pararse o suspender la actividad que la provocó, actividad física.
la molestia desaparece casi inmediatamente, como
máximo unos minutos después. Lo mismo sucede De forma ocasional, puede aparecer a ngina de
cuando el paciente toma nitroglicerina sublingual, reposo.
en cuyo caso la angina suele desaparecer incluso
antes (en 1 o 2 minutos). Con respecto a su intensi-
dad, aunque es variable, suele ser menor que en los
síndromes agudos.
En resumen, la angina estable se caracteriza por la
presencia repetitiva de una molestia que dura entre miento paradójico del segundo ruido por la expulsión
2 y 5 minutos, aparece cuando el paciente aumenta ventricular izquierda más lenta.
la demanda miocárdica de oxígeno y desaparece al
cesar la situación, lo que lo provocó (es decir, con re-
poso) o al tomar nitroglicerina.
SÍNDROME CORONARIO AGUDO (SCA)
Una clasificación clínica de uso habitual es la A diferencia de la AE, el SCA engloba varias en-
realizada por la Sociedad Canadiense de Cardiol o- tidades clínicas con distinto pronóstico y modo de
gía, que separa en cuatro grupos, de menor a mayor presentación: angina inestable (Al}, lAM no Q e lAM
gravedad, a los pacientes con síntomas de angina Q. Incluso en la Al existen diversas entidades reco-
(Tabla 51-2). gidas en la clasificación propuesta por Braunwald.
Con respecto a los signos, están ausentes en la gran Esta clasificación (Tabla 51 -3) se basa en la historia
mayoría de los pacientes al ser la angina de corta du- clínica (1-III), las circunstancias de aparición (A-C)
ración. Durante la crisis, el paciente puede presentar y la intensidad del tratamiento antiisquémico (1-3),
algunos signos que cobran importancia al aparecer y y su objetivo fue establecer un riesgo diferente para
desaparecer con la crisis, siendo el más importante las diversas situaciones clínicas y hacer posible un
el aumento de la frecuencia cardiaca y de la tensión lenguaje común para el diagnóstico y el tratamiento.
arterial. Además, podríamos encontrar un tercer o un Las características del dolor son similares a las de la
cuarto ruido cardiaco, un soplo sistólico de insufi- angina estable, con algunos matices. En general, la
ciencia mitral nuevo o mayor que el ya existente por intensidad, irradiación, duración y síntomas acompa-
la disfunción isquémica del músculo papilar, la dis- ñantes suelen ser mayores o más intensos en orden
minución de la intensidad del primer ruido cardiaco decreciente, en el 1AM Q, 1AM no Q y AL La intensi-
como índice de mala contractilidad, el desdobla- dad de color es mayor que en la AE y tiene mayor irra-
CAPITULO 51 Fisiopatología y cl ínica de las enfermedades isquémicas miocárdicas

Tabla Clasificación de Braunwald de la angina inestable


Por su presentación clínica
Clase 1
a) Angina de esfuerzo de reciente comienzo (menos de dos meses), en grado funcional 111 o IV de la SCC.
b) Angina de esfuerzo progresiva, con aumento del número o duración de los episodios o con menor umbral de
los factores desencadenantes.
c) Angina de esfuerzo grave, de 3 o más episodios al día.
Clase 11
a) Angina de reposo s ubaguda. Pacientes con uno o más episodios de angina en reposo durante el mes anterior,
aunque no en las 48 horas previas.
Clase 111
a) Angina de reposo aguda. Una o más crisis en reposo en las últimas 48 horas.
Por sus circunstancias clínicas
Clase A. Con presencia de factores precipitantes, cardiacos o no, como anemia, infección, fiebre, hipotensión,
taquiarritmia, tirotoxicosis o insuficiencia respiratoria.
Clase B. Sin factores precipitantes conocidos.
Clase C. Angina en las dos primeras semanas tras un infarto demostrado.
Por la intensidad del tratamiento
t El paciente no sigue tratamiento antiisquémico o este es insuficiente.
2. Aparición de angina estable crónica en presencia de tratamiento estándar (dosis convencionales de
betabloqueantes, nitratos y antagonistas del calcio).
3. Aparición de angina a pesar de dosis máximas toleradas de las tres categorías de tratamiento oral, incluso
nitroglicerina intravenosa.
Abreviaturas: SCC: Sociedad Canadiense de Cardiología.

diación, generalmente hacia el tórax superior, ambos La existencia de estas tres entidades clínicas no
lados del esternón, hombros y brazos (más frecuente- supone de ninguna manera que los pacientes tengan
mente hacia el brazo izquierdo y el borde cubital). Su que recorrer el camino progresivamente desde Al al
duración es mayor generalmente de unos 20 minutos 1AM Q pasando por el IAM no Q. De hecho, en más de
en la AI y en el IAM. la mitad de los casos, el IAM es la primera manifes-
Salvo en la Al del grupo l, no suele haber factores tación de cardiopatía isquémica, aunque un tercio de
precipitantes en la mayoría de los casos, aunque p ue- los pacientes pueden haber presentado síntomas de
de desencadenarse tras un ejercicio generalmente in- Al entre 1 y 4 semanas antes y un 20 % haber tenido
tenso; una situación emocional o por estrés crónico. síntomas en las 24 horas precedentes. Su aparición
Son por lo tanto anginas clasificadas preferentemente es más frecuente en las primeras horas de la mañana,
como de reposo, sin aumento de las demandas . Sólo al despertarse y por la noche entre las 20 y las 23 ho-
en la AI del grupo l, angina de reciente comienzo en ras, momentos con predominio claro de la actividad
clase funcional III-lV y en la angina progresiva, los simpática.
pacientes presentan la angina con una clara disminu- Con respecto a los signos, aunque no existen dife-
ción del umbral de ejercicio, de forma que con menor rencias con respecto a los señalados para la AE, suelen
ejercicio se desencadena la crisis, aumentando la fre- ser más frecuentes a medida que la necrosis y la alte-
cuencia, duración e intensidad de los ataques. Ade- ración funcional es mayor. Así, el paciente con IAM
más, el dolor no se calma con el reposo, salvo en la suele dar impresión de gravedad, se muestra ansioso,
Al, y sólo parcialmente con la nitroglicerina. Por úl- con sudoración fría profusa, afectado por un intenso
timo, pueden aparecer síntomas acompañantes como dolor, que se acompaña de disnea en los casos de in-
sudoración profusa (diaforesis), náuseas y vómitos o suficiencia cardiaca, y de hipoperfusión generalizada
443
disnea. con hipotensión, confusión, frialdad de extremidades
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

y oligoanuria en los casos de shock cardiogénico. La con esfuerzo físico o farmacológico cuando se
presión arterial y la frecuencia cardiaca pueden estar realiza una prueba de esfuerzo en un paciente
elevadas o disminuidas. La presión venosa yugular con angina estable el tiempo y la magnitud del
puede estar elevada cuando coexiste un IAM inferior descenso, del segmento ST, el tiempo de vuelta
con afectación de VD , y el pulso carotídeo nos dará a la normalidad, el comportamiento de la fre-
una idea del estado del VI, sobre todo si aparece pulso cuencia cardiaca y tensión arterial, la aparición
alternante o está disminuido en su amplitud. La aus- de clínica durante los cambios eléctricos, o de
cultación pulmonar puede ser patológica si aparece arritmias malignas y otros cambios del segmento
fallo ventricular izquierdo, con estertores localizados ST como la supradesnivelación, nos ayudan no
o generalizados en campos pulmonares. solo a objetivar la isquemia, sino a separar una
Basándose en datos clínicos, Killip propuso hace prueba positiva como de alto o bajo riesgo.
30 años una clasificación pronóstica del 1AM Q que Las técnicas de evaluación de la movilidad de
todavía seguimos utilizando, con una mortalidad que la pared miocárdica se basan en la alteración
varía entre el 2%-5 % para el Killip I hasta el 85%- regional miocárdica durante la isquemia, que se
90 % para el Killip IV. Los pacientes de la clase 1 normaliza al desaparecer esta. La ecocardiografía
no muestran crepitantes ni tercer ruido (S3); los de tras ejercicio o con fármacos (el más frecuente-
clase II presentan crepitantes en menos del 50 % de mente utilizado es la dobutamina) es actualmen-
los campos pulmonares y S3, y los de clase III edema te la técnica de imagen rutinariamente utilizada.
agudo de pulmón. La clase IV queda reservada para De nuevo , el número de regiones que se alteran y
los enfermos en shock cardiogénico. normalizan nos ayudarán no solo a diagnosticar
En la auscultación, el R1 puede estar disminuido o sino a establecer un pronóstico de la enfermedad
ser inaudible en algunos casos; el R4 es prácticamen- del paciente.
te constante en todos los IAM en ritmo sinusal y va Por último , las técnicas de perfusión se basan en
acompañado de un R3 si existe insuficiencia ventri- la aparición de un defecto reversible miocárdico
cular izquierda. Son frecuentes los soplos sistólicos, durante la isquemia, siendo la gammagrafía de
fundamentalmente los de insuficiencia mitral, causa- pe1fusión con talio o tecn ecio sestamibi las más
da en la mayoría de los casos por disfunción isqué- utilizadas.
mica de los músculos papilares o por dilatación del
ventrículo izquierdo, y en otras ocasiones por rotura
de un músculo papilar. También pueden auscultarse DIAGNÓSTICO Y PRONÓSTICO DEL SCA
soplos sistólicos por insuficiencia tricuspídea o por Aunque en los SCA prima el tratamiento urgente para
aparición de una comunicación interventricular. Es evitar la necrosis miocárdica, y con ello el deterioro
posible detectar un roce pericárdico hasta en un ter- de la función cardiaca, algunos aspectos diagnósticos
cio de los infartos transmurales , sobre todo a partir son esenciales (Tabla 51-4).
del segundo día, por la coexistencia de una pericar- El ECG es la prueba esencial en estos pacientes.
ditis. Básicamente, la primera diferenciación ha de ser si el
paciente tiene o no ascenso del segmento ST. En caso
positivo, lo normal es que el paciente presente un
VALORACIÓN DIAGNÓSTICA
IAMCEST en evolución y deba ser reperfundido de
DE LA ISQUEMIA Y LA NECROSIS forma inmediata para evitar la pérdida de miocitos.
Aunque la coronariografía permite visualizar una
DIAGNÓSTICO Y PRONÓSTICO obstrucción completa coronaria en cerca de 90 % de
EN LA ISQUEMIA CRÓNICA (AE) los casos, el diagnóstico definitivo de IAM es enzi-
mático. Consiste en la precoz elevación y posterior
Aunque las diversas técnicas utilizadas en el diag-
normalización de las cifras de CK-MB. Las troponinas
nóstico y pronóstico de isquemia han sido expuestas
corren parejas a la CK-MB , pero siempre tendrá que
en otro capítulo, es útil clasificarlas en tres grupos:
haber elevación de la CK-MB.
eléctricas, de movilidad y de perfusión. En el Capí-
De igual forma, aunque no podemos esperar a tener
tulo 45 se explica en detalle la utilidad del ECG en el
un diagnóstico ECG para comenzar el tratamiento, los
diagnóstico de estos procesos.
cambios se traducen inicialmente en aumento de la
Las técnicas eléctricas se basan en los cambios amplitud de la onda T, posterior elevación del seg-
del segmento ST del electrocardiograma. La mento ST junto a la elevación inicial de la onda T,
respuesta típica a la isquemia es el descenso progresiva aparición de onda Q, descenso del seg-
del segmento ST de al menos 1 mm y su recu- mento ST hasta su normalización en 1-2 días, inver-
peración a la normalidad al ceder la isquemia. sión de la onda T y lenta normalización de la misma,
Aunque estos cambios pueden observarse en un que puede tardar hasta 1 año .
electrocardiograma durante las crisis, la mayoría Si el ECG no demuestra elevación del segmento ST
de las veces requieren la inducción de isquemia (SCASEST), puede tratarse de una Al o un 1AM no
CAPÍTULO 51 Fisiopatología y clínica de las enfermedades isquémicas miocárdicas

Tabla Diagnóstico diferencial de los síndromes coronarios agudos (SCA)


Entidad
ECG inicial ECG final CK MB Tropon inas
clínica
SCACEST IAMQ Elevación ST Ondas Q Elevada Elevadas
SCASEST 1AM no Q No elevación ST Descenso ST y/o Elevada Elevadas
T negativa
Al alto riesgo No elevación ST Puede haber Normal Pueden estar elevadas
descenso ST o T
Al bajo riesgo No elevación ST Sin cambios Normal Normales
Abreviaturas: SCACEST: SCA con elevación del ST. SCASEST: SCA sin elevación del ST; Ai: angina inestable.

Q. Estos pacientes deben permanecer en observación DIAGNÓSTICO DE LA ARTERIOSCLEROSIS


al menos durante 24 horas. El ECG del paciente pue- CORONARIA
de ser normal (2/3 de los pacientes) o anormal, con
descenso del segmento ST o inversión de la onda T. Isquemia crónica (AE): Tras el diagnóstico de
Además de la monitorización eléctrica y de nuevos isquemia y su valoración como isquemia de alto
ECG repetidos cada 4-6 horas, se sacará sangre para la o bajo riesgo, en algunos pacientes se hace ne-
determinación de marcadores de necrosis miocárdi- cesario establecer definitivamente la causa de
ca: CK-MB y troponinas. Dado que tardan en elevarse, dicha isquemia. Este diagnóstico se realiza con
la negatividad inicial puede revertir en las determina- la tomografía axial computarizada multicorte y
ciones sucesivas. la coronariografía.
Si el paciente, junto una clínica compatible, pre- No estarían indicadas de entrada en pacientes
senta cambios electrocardiográficos o elevación de con isquemia objetivada, sino solo en aquellos
marcadores de necrosis , será considerado como un pacientes cuyo pronóstico fuera de alto riesgo o
en los de bajo riesgo cuyos síntomas no se ha-
SCASEST de alto riesgo, y además del tratamiento
yan controlado médicamente. Ambas pruebas,
farmacológico adecuado se indicará una coronario-
la primera no invasiva, la segunda invasiva,
grafía en las primeras 24-48 h . Si por el contrario,
considerada corno la prueba de referencia, nos
el ECG y los marcadores de necrosis siguen siendo
permitirán determinar el número de coronarias
negativos , antes del alta, pero nunca antes de las pri-
enfermas, la localización y el grado de estenosis
meras 24 horas , se indicará una prueba de esfuerzo coronaria con vistas a elegir posteriormente el
preferentemente combinada con valoración de la tratamiento más adecuado a cada caso.
movilidad de la pared (ecocardiografía de esfuerzo) , SCACEST (1AM Q): La coronariografía estaría
para valorar la posibilidad de isquemia inducida, y si indicada siempre si el tratamiento elegido es la
resultase positiva se indicaría también la realización realización de una angioplastia primaria (apertu-
de una coronariografía. ra rnécanica de la arteria responsable del IAM),
Las alteraciones eléctricas y enzimáticas juegan un tratamiento que por otra parte sería el conside-
papel fundamental , ayudándonos a distinguir las di- rado corno de primera elección. Además está
ferentes entidades clínicas. Desde el punto de vista indicada en todos los pacientes tratados con fi-
eléctrico, las alteraciones persistentes del segmento brinólisis, independientemente del resultado de
ST o de la onda T pueden aparecer tanto en la AI la misma, en el menor tiempo posible.
como en el IAM no Q. En la angina inestable de bajo SCASEST (Al, 1AM no Q): En los de alto ries-
riesgo, no habrá elevación de CK-MB o troponinas ni go, la coronariografía estaría siempre indicada
alteraciones eléctricas. En la AI de alto riesgo puede en las primeras 24-48 horas. La tomografía axial
haber cambios eléctricos coexistiendo o no con ele- computarizada multicorte podría estar indicada
vación de las troponinas, pero no con elevación de la en los pacientes de bajo riesgo antes de ser dados
CK-MB . Por último, en el IAM no Q, habrá cambios de alta, debiendo realizarse una coronariografía
eléctricos aunque sin Q patológica y elevación de am- si se demuestra lesión coronaria obstructiva con
bos marcadores de necrosis, CK-MB y troponinas. isquemia en dicho territorio.
-is2
Patología vascular
periférica
Jaime Merino Sánchez, José María Cuadrado Pastor, Jorge Peris García

CONSIDERACIONES
ANATOMOFISIOLÓGICAS
DE LA CIRCULACIÓN PERIFÉRICA
El flujo sanguíneo de una extremidad
viene determinado por la diferencia en-
tre la presión arteriovenosa; sobre ella
influyen un conjunto complejo de resis-
tencias y capacitancias. Las arterias son
vasos de baja capacitancia que se con-
tinúan con arteriolas , vasos que tienen
gran resistencia. Las venas son vasos de
gran capacitancia que ejercen resistencia
a la circulación en zonas de constric-
ción (p. ej., a nivel de las articulaciones
o del diafragma). En los lechos capilares
el flujo aumenta si lo hace la presión y
disminuye si aumentan las resistencias
proximales al lecho capilar.
Los linfáticos son formaciones tu-
bulares que se inician en el intersticio
constituidas por una monocapa de célu-
las endoteliales que carecen de membra-
na basal o que tienen múltiples fenestra-
ciones que permiten el paso fácil de pro-
teínas y partículas desde el intersticio a
la luz, lo que contribuye a su limpieza y
drenaje. Los capilares linfáticos se unen
unos con otros, aumentan de grosor, se
rodean de células de músculo liso (lo
que les permite cierta vasomotricidad),
hacen estación en los ganglios linfáticos
y acaban desembocando en el conducto
torácico y en el conducto lintático de-
recho.

INSUFICIENCIA ARTERIAL
Las arterias deben aportar la sangre que
446
sale del corazón a los diferentes órganos.
CAPITULO 52 Patología vascular periférica

Se califica de insuficiencia arterial si estos vasos no


son capaces de aportar el volumen sanguíneo nece-
sario para el correcto funcionamiento de los órganos. Tabla Causas de isquemia
En este capítulo nos referimos al déficit de aporte (is- arterial
quemia) a las extremidades en sus dos formas clíni-
cas: aguda y crónica. Aguda Crónica
El sustrato morfológico más habitual de la insufi-
Por embolias Arteriosclerosis
ciencia arterial es la presencia de arteriosclerosis, que
al ser un proceso sistémico es frecuente que estos en- Procedentes del Coartación aórtica
corazón:
fermos tengan otras manifestaciones de lesión arterial,
Fibrilación auricular Arteritis
habitualmente a nivel coronario o cerebrovascular. El
proceso afecta sobre todo a las grandes arterias: aorta Infarto de miocardio Irradiación
abdominal y poplítea (en el 30% de los casos), fe- Aneurisma ventricular
Endocarditis Enfermedad de
moral y poplítea (en el 90%) y tibial posterior (en el Buerger
40% -50%), sobre todo en las zonas de bifurcación. infecciosa
Es habitual que estos enfermos presenten factores de Prótesis valvular Enfermedad de
riesgo vascular: hipertensión, diabetes, tabaquismo, En aorta y grandes Takayasu
obesidad, etc. vasos
Displasia
Arteriosclerosis fibromuscular
Paradójica
INSUFICIENCIA ARTERIAL/ISQUEMIA Trombosis venosa
(TV) o embolismo
AGUDA con foramen oval
permeable
CONCEPTO Y CAUSAS
Por trombosis
Supone la disminución/supresión brusca del flujo ar- Arteriosclerosis
terial, habitualmente en las extremidades inferiores y Traumatismos
por la existencia de trombos o émbolos. La Tabla 52-1 vascular: catéteres y/o
muestra sus principales causas. compresión
Hipercoagulabilidad
(trombofilia):
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Síndrome de
hiperviscosidad (p. ej.,
Las clásicas son dolor en el/los músculo/s que que- policitemia vera
dan sin flujo arterial, frialdad, impotencia funcio- Hiperhomocisteinemia
nal dolorosa que limita la movilidad (claudicación
intermitente) y trastornos sensitivos: parestesias e
hipersensibilidad en la zona isquémica. El inicio
es brusco en las embolias y algo más tórpido en las
trombosis.
En la exploración, la extremidad isquémica que- tualmente los pacientes tienen afectados otros territo-
da fría, pálida y el pulso de la arteria obstruida está rios arteriales.
disminuido o ausente. Su diagnóstico es clínico y
se completa con la determinación del índice tobillo/
brazo o la realización de un eco-Doppler del vaso ETIOLOGÍA
sospechoso de estar afecto. La Tabla 52-2 expresa La causa fundamental es la arteriosclerosis; muy po-
las manifestaciones clínicas según la localización cas veces una tromboangeítis obliterante o enferme-
de la obstrucción y la Tabla 52-3 los criterios de gra- dad de Buerger (Fig. 52-1), que es una vasculopatía
vedad. inflamatoria oclusiva que afecta a arterias de medio
o pequeño calibre y las venas de la parte distal de las
extremidades superiores e inferiores. En general son
INSUFICIENCIA ARTERIAL/ISQUEMIA personas jóvenes y grandes fumadores.
CRÓNICA

CONCEPTO MANIFESTACIONES CLÍNICAS


Hay una disminución crónica del flujo arterial en las La isquemia crónica en las extremidades inferiores
extremidades por estenosis progresiva de esos vasos, cursa con dolor muscular provocado por el ejercicio,
con reducción del aporte sanguíneo a los tejidos; lo que mejora con el reposo (claudicación intermiten-
447
más frecuente en las extremidades inferiores. Habi- te]; la localización del dolor es más distal que la zona
Semiología y fisiopatolog ía de las enfermedades cardiovascu lares

Tabla Manifestaciones clínicas Tabla Valoración clínica


de la obstrucción arterial de la afectación en la isquemia arterial
en extremidades inferiores
Isquemia aguda Isquemia crónica
Manifestaciones ( clasificación ( clasificación
Lesión arterial de Rutherford) de la Fontaine)
clínicas
Oclusión aórtica Claudicación en 1. Leve; no hay 1. Asintomático
columna lumbar, muslo alteraciones de la
y cadera movilidad

Oclusión ilíaca Claudicación del glúteo, 2a. Disminución de 2. Claudicación


muslo y cadera la sensibilidad en intermitente
los dedos 2a. Leve, no
Estenosis ilíaca Soplo femoral y invalidante (> 150
disminución de pulsos m)
Oclusión Impotencia sexual 2b. Moderado o
hipogástrica bilateral grave, invalidante
(< 150 m)
Oclusión femoral Claudicación y atrofia
común y profunda de los músculos del 2b. Grave pero 3. Dolor en reposo
muslo reversible ,
disminución de
Oclusión femoral Claudicación sural la movilidad y
superficial y poplítea parálisis
Oclusión tibia! Claudicación sural y 3. Isquemia 4. Lesiones
y peronea pedal , dolor en reposo irreversible, isquémicas
y trastornos tróficos parálisis completa (úlceras o
gangrena)

obstruida. La Tabla 52-2 expresa estas relaciones. Ini- patía periférica. Para definir morfológicamente la
cialmente los pacientes están asintomáticos en reposo obstrucción se usan el eco Doppler, la arteriografía
y el ejercicio desencadena el dolor en la extremidad selectiva o la angio-RM.
ya que hace aumentar las necesidades nutricionales Se suelen identificar tres fases: asintomatica, de-
del músculo. Progresivamente se añaden parestesias tectada al explorar los pulsos, claudicación inter-
y frialdad en las extremidades. A veces aparecen úl- m itente e isquemia crítica (Fig. 52-3 ). La tabla 5 2-3
ceras isq uémicas, que con frecuencia se localizan en expresa los criterios de gravedad de la isquemia ar-
la porción distal de los dedos del pie, en las zonas de terial.
compresión del hueso (úlceras de decúbito) o entre
dos dedos. Las úlceras son dolorosas, cuando se mani-
pulan no suelen sangrar y habitualmente tienen bor-
des n ecróticos. También aparece en ocasiones edem a
que resulta de tener la extremidad suspen dida largo
tiempo (mejora el flujo sangu íneo arterial) para evitar
el dolor. Es más frecuente en hombres que en mujeres
(8: 1) y en sujetos con varios factores de riesgo para la
arteriosclerosis, especialmente el tabaquismo.
La valoración se realiza con la anamnesis (identi-
ficar los fac tores de riesgo) y la exploración física. Se
palpa mal el pulso en la arteria afecta, la extremidad
está fría, pálida, a veces cianótica, a veces puede te-
ner úlceras tórpidas, y desaparecen los anejos cu tá-
neos, especialmente el pelo; en casos extremos hay
n ecrosis (Fig. 52-2) y parte de la extremidad puede
despren derse.
Se completa con la valoración del índice tobillo/ Figura Isqu e mi a di g ita l (c ian os is de los pulpe-
brazo, del que un valor menor de 0,9 indica arteria- j os d e los dedos) e n la e n fe rm eda d d e Bu erger.
CAPITULO 52 Patología vascular periférica

Figura Gangrena seca del dedo del pie de ori-


gen aterosclerótico.

En la enfermedad de Buerger puede aparecer clau-


dicación de la extremidad afecta y necrosis de los
dedos de las manos y de los pies. El pulso braquial Figura Isquemia crítica del pie. Se observa ex-
suele estar normal y disminuido el radial y/o cubi- tensa cianosis; en la exploración destacaba la ausen-
tal (Fig. 52-1) . La exploración demuestra un signo de cia de pu lsos distales y la frialdad cutánea.
Allen positivo (Cap. 43).

causado por la ruptura del vaso. Suele ser máximo


OTRAS ENFERMEDADES desde el inicio y acompañarse de bajo gasto cardiaco
DE LAS ARTERIAS en el caso de un vaso de gran calibre: palidez, hipo-
tensión, etc. , o generan cuadros isquémicos en riñón
ANEURISMAS o extremidades, etc., y favorecen la aparición de in-
Concepto suficiencia aórtica. Son fuente de trombos y émbolos
y su rotura es una complicación grave. Otras veces
Son dilataciones de un segmento arterial de al me- se expresan como masas pulsátiles que comprimen
nos un 50 % de su diámetro, que afectan a las tres estructuras vecinas o provocan soplos.
capas (fusiformes}, o solo a una de ellas (saculares). Se diagnostican mediante la palpación, ausculta-
Si hay un trombo alojado en él, la luz del vaso puede ción, o las técnicas de imagen: ecografía, TAC, RM,
estar disminuida. Es importante valorar su localiza- y angiografía convencional o con sustracción digital
ción, tamaño , forma y etiología. Pueden localizarse (DIVAS).
en cualquier arteria , pero son muy frecuentes en la
aorta abdominal o torácica, ilíaca femoral, poplítea, y
en los vasos del polígono de Willis. FENÓMENO DE RAYNAUD (FR)
Concepto
Mecanismos de producción
Es una enfermedad vascular que cursa con episodios
En los de la aorta abdominal la arteriosclerosis es el
de isquemia producida por vasoconstricción reversi-
sustrato lesional más frecuente . En los de la aorta as-
ble, tras exposición al frío o a situaciones de estrés.
cendente lo es la degeneración de las fibras elásticas
La vasoconstricción es una respuesta normal al frío
y colágenas de la media arterial (enfermedad de Mar-
para conservar la temperatura. Aquí el reflejo, me-
fan , sífilis). En el polígono de Willis suelen deberse a
diado por el SN simpático, está exagerado. Es más
malformaciones congénitas. Los cambios en su luz fa-
frecuente en las manos que en los pies. La respuesta
vorecen que la sangre tenga un flujo turbulento y con
incluye tres fases: a) palidez en la partes acras de los
ello que se formen trombos en su interior; también
dedos en respuesta al vasoespasmo; b) cianosis, por
que las paredes del vaso se fisuren y rompan.
el flujo vascular detenido en los capilares, y c) en-
rojecimiento por vasodilatación reactiva subsiguiente
Manifestaciones clínicas al acúmulo de sustancias vasodilatadoras en el tejido
Muchas veces se descubren al utilizar técnicas de isquémico. Las crisis suelen ser bilaterales y tienen
imagen en fase silente. Pueden expresarse con dolor una duración breve.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovascu lares

Fisiopatología
Existe un aumento del tono simpático o mayor sen-
sibilidad o densidad de los receptores alfa-2 que res-
ponden a estímulos simpáticos. El endotelio vascular
está alterado, hay proliferación intimal y aumento de
liberación de sustancias vasoconstrictoras como el
tromboxano A2 y la endotelina.
Si estas manifestaciones son la única expresión de
la enfermedad se habla de FR primario frecuente en
mujeres, en la tercera década. Si acompañan a otras
enfermedades sistémicas (esclerodermia) se deno-
mina FR secundario, y es frecuente el desarrollo de
ulceraciones y alteraciones tróficas.

ENFERMEDADES DE LAS VENAS:


INSUFICIENCIA VENOSA
CONCEPTO
Existe insuficiencia venosa si existe dificultad en
el flujo sanguíneo contra la gravedad, es decir, si el Figura Trombofleb itis en el brazo.
retorno venoso se altera al estar de pie. Esto sucede
si han existido trombosis o recanalizaciones que han
lesionado las válvulas o si disminuye la contracción el uso de catéteres la afectación de la subclavia es
muscular. frecuente . En su patogenia se implican los mismos
factores que en las superficiales (estasis venosa, por
ejemplo por insuficiencia cardiaca, hipercoagulabili-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS dad , y lesiones de la pared venosa , como las varices) .
Dependen de si la instauración es aguda o crónica y En ocasiones hay una base genética que implica dis-
si afectan al sistema venoso profundo o al superficial. función en los sistemas valvulares de las venas; así,
si aparece en jovenes deben buscarse angiodisplasias.
Si la zona de trombosis incluye una válvula puede
PATOLOGÍA VENOSA AGUDA SUPERFICIAL: lesionarla de forma irreversible, originando un sín-
TROMBOFLEBITIS drome postflebítico.

CONCEPTO
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Se producen por obstrucción (trombosis) de una vena
superficial y se favorecen por: a) estasis circulatoria; Muchas son asintomáticas, otras cursan con dolor de
b) hipercoagulabilidad (acompaña a tumores); c) le- la zona afecta e hipersensibilidad cutánea, impoten-
siones del vaso (inserción de catéteres, agresión por cia funcional, calor y edema.
irritantes químicos), o d) vasculitis (enfermedad de Son muy frecuentes en las venas de las pantorrillas
Buerger). El trombo lo forman plaquetas y fibrina eng- y entonces aparece dolor al comprimir los gemelos o
lobando a hematíes y crece en la dirección contraria hay dolor en esa zona con la dorsiflexión del pie (sig-
al flujo sanguíneo. no de Homans). La Tabla 52-4 expresa las situaciones
en las que el riesgo de trombosis venosa profunda
aumenta.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Aparece dolor en reposo, distensión de la vena for-
mando un cordón rojo y caliente y sensibilidad dolo- COMPLICACIONES DE LA TROMBOSIS
rosa en ese compartimento muscular. La piel vecina VENOSA PROFUNDA
puede aparecer eritematosa, con edema (Fig. 52-4)
Son complicaciones locales las varices y el síndrome
postflebítico y generales el embolismo pulmonar.
TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)
CONCEPTO VARICES
Con frecuencia se localizan en las extremidades in- La estructura del sistema venoso en las extremidades
450
feriores: ilíacas, femorales y poplíteas, si bien con inferiores recuerda a una escalera de mano: las venas
CAPÍTULO 52 Patología vascular periférica

Tabla Factores que favorecen la


aparición de trombosis venosa profunda
Intervenciones quirúrgicas (ortopédica y
abdominal) . Situaciones de inmovilidad
prolongada
Tumores malignos
Insuficiencia cardiaca
Historia previa de trombosis venosa profunda
Toma de anticonceptivos
Situaciones de hipercoagulabilidad (síndrome
antifosfol ípido, déficit de proteínas C, S o
antitombrina, resistencia a la proteína C
activada), factor V Leiden, mutación del gen de
la protrombina
Obesidad

safenas constituyen uno de los puntales verticales, las


venas profundas situadas entre los músculos el otro,
y las múltiples venas perforantes son los travesaños.
Se llaman perforantes porque penetran la fascia para
drenar desde las venas superficiales a las situadas en
el compartimento muscular.
Todas las venas principales poseen válvulas qu e
permiten sólo el flujo centrípeto. La contracción mus-
cular comprime las venas y con la ayuda de las válvu- soporta mayor presión cuando las válvulas son insu-
las hace ascender la sangre. Cuando no hay actividad ficientes. También es frecuente la aparición de circu-
muscular la presión en el sistema profundo es menor lación colateral, que trata de sobrepasar el obstáculo.
que en el superficial y el flujo se establece desde las La exploración física debe hacer también en bipe-
venas superficiales a las profundas a través de las per- destación. Se buscan cordones , edema, alteraciones
forantes. del color y distribución. Son útiles las maniobras de
Las varices son venas superficiales dilatadas y tor- Schwartz, Trendelenburg o Perthes (véase Capítulo
tuosas que aparecen cuando se daña la estructura y 43). En su diagnóstico es muy útil el eco Doppler y
función de las válvulas venosas por una trombosis otras veces la flebografía y el angio-TAC o la angio-
profunda o en ocasiones por debilidad primaria de RM.
la vena safena, fundamentalmente en mujeres (Fig.
52-5). Cuando un trombo lesiona las válvulas las hace
incapaces de impedir el flujo retrógrado y la zona de
la vena situada distalmente soporta altas presiones,
las venas se distienden, las valvas de las válvulas se
separan y se hacen insuficientes. La oclusión de una
vena profunda o la incompetencia de las perforantes
hace que las venas superficiales se dilaten y actúen
como colaterales.

Manifestaciones clínicas
Aparece dolor sordo o sensación de peso en la zona
afecta, sobre todo si el enfermo está de pie, y mejora
si levanta la extremidad. Suele haber edema maleolar
causado por aumento de la presión hidrostática en la
vena, con estasis y aparición de úlceras en la zona an-
terior y superior al maléolo interno, ya que ese lugar 451
se drena por las ramas de la safena y es la zona que Figura Venas va ri cosas.
S CC 10 V Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

OTRAS COMPLICACIONES
Es frecuente la aparición de una dermatitis hiperpig- Tabla Causas de linfedema
mentada, con piel engrosada y de color marrón por
las extravasaciones sanguíneas repetidas y edema en Primarios Secundarios
el miembro afecto causado por la insuficiencia val- Congénitos Neoplasias
vular (síndrome postflebítico]. A veces el trombo se
fragmenta y circula hasta quedar bloqueado en un Hereditario familiar Cirugía (exéresis de
lecho capilar, con frecuencia en el pulmonar (embo- (enfermedad de ganglios)
lismo]. Milroy)
En el segmento ileofemoral, la obstrucción exten- Precoz (pubertad, Radioterapia
sa puede hacer que la extremidad aparezca pálida e síndrome de Meige)
edematizada. Si el edema es voluminoso los capilares Malformaciones Infecciones
pueden estar comprimidos y la pierna aparece pálida (S. de Turner o de (linfangitis)
(flegmasía alba dolens] y dolorosa. Otras veces apa- Noonan)
rece roja, cianótica y con dolor (flegmasía cerulea
dolens]. Parásitos- filariasis
Síndrome
postrombosis
ENFERMEDADES DE LOS LINFÁTICOS
Enfermedades
sistémicas:
CONCEPTO sarcoidosis, fibrosis
Los linfáticos se alteran por malformación u obstruc- retroperitoneal
ción de causa tumoral o inflamatoria y se expresa con
edema. Puede localizarse a cualquier nivel , pero es
más frecuente en las extremidades, sobre todo las
inferiores.
muestre un gran volumen , elefantiásica, se movilice
mal y haya trastornos tróficos.
LINFEDEMA Su diagnóstico se basa en los datos de la historia y
Consiste en la aparición de edema crónico, indoloro, la exploración. Los ganglios no suelen verse en la Rx
habitualmente en extremidades inferiores por insufi- convencional, se valoran mejor mediante TAC o RM,
ciencia del drenaje linfático locorregional y acúmulo lo que también ayuda a valorar los cambios en los
de la linfa en los tejidos blandos. Excepcionalmente tejidos vecinos, y el eco Doppler explora la partici-
es primitivo o de causa desconocida (por agenesia o pación del sistema venoso en el edema. Para estudiar
hipoplasia linfática; los hay hereditarios/congénitos) los vasos linfáticos excepcionalmente se utilizan las
o secundario a lesiones que obstruyen los linfáticos: linfografías: inyección de un agente radioopaco in-
linfangitis recidivante (bacteriana por estreptococos), troducido en los capilares linfáticos de los dedos del
tumoral por linfoma u otras neoplasias, o por agentes pie. En ocasiones se usa un coloide de tecnecio.
vivos (filariosis) (Tabla 52-5).

MANIFESTACIONES CLÍNICAS
El linfedema suele ser indoloro y se manifiesta con
sensación de pesadez en las extremidades. A la
exploración el edema no deja fóvea , de con-
sistencia elástico-leñosa y progresa desde la
zona distal a la proximal. Suele ser difuso ,
es asimétrico, no cede con el decúbito ni
tiene tendencia a ulcerarse. La piel está
indurada y no es posible deprimirla ni
pellizcarla (signo de Stemmer). Se dife-
rencia de la insuficiencia venosa crónica
porque en ella aparecen varices e hiper-
pigmentación o dermatitis por estasis.
En la evolución del linfedema hay fibro-
sis irreversible del tejido celular subcutá-
neo , lo que puede hacer que la extremidad
·153
Hipertensión e hipotensión
arterial
Jaime Merino Sánchez, Vicente F. Gil Guillén, Reyes Pascual Pérez

TENSIÓN ARTERIAL {TA).


RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL
CONCEPTO DE TA
La capacidad de los lechos arteriales
en el ser humano supera con mucho su
contenido (5 litros de sangre). Existen
mecanismos que ajustan la capacidad de
los lechos a su contenido. De la relación
entre ambos surge la TA (o presión arte-
rial, PA).
Poiseuille señaló que en tubos rígidos
la tensión es proporcional al flujo por
las resistencias. La TA depende del flujo
o gasto cardiaco (volumen sistólico por
frecuencia cardiaca) y de las resistencias:
Resistencias = 8ht por longitud del vaso/
radio a la cuarta potencia multiplicado
por la viscosidad. El diámetro del vaso es
muy importante para la regulación de la
TA, pues la velocidad del flujo sanguíneo
es directamente proporcional a la cuarta
potencia del radio del vaso.
La TA que genera la contracción car-
diaca alcanza su máximo durante la sís-
tole (TAS: tensión arterial sistólica), y su
nadir al final de la relajación diastólica
(TAD: tensión arterial diastólica). Así, la
TAS se influye por el volumen sistólico
y la resistencia elástica que a ese flujo
oponen los grandes vasos, y la TAD por
el volumen minuto y las resistencias en
las arterias periféricas.
En el normotenso el aumento del gasto
cardiaco (GC) se acompaña de una reduc-
ción de las resistencias periféricas y el
sistema se equilibra; si disminuye el GC
se incrementan las resistencias periféri-
cas. La tensión arterial es el resultado de
~
ese balance que se realiza en los lechos
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

vasculares y en el que intervienen muchos sistemas La PGIZ actúa sobre las células del músculo liso
de ajuste. vía AMPc. Produce una marcada vasodilatación
por lo que disminuyen las resistencias vascula-
res periféricas y aumenta el gasto cardiaco. La
MECANISMOS IMPLICADOS producción de prostaciclina se ve estimulada por
EN EL MANTENIMIENTO Y CONTROL DE LA TA la bradiquinina (BK), a través de los receptores
BZ, produciendo vasodilatación y aumento de la
Los principales elementos implicados serían: los le- secreción de renina.
chos vasculares, el SN, el riñón y el sistema renina,
Intermediarios de esta vía metabólica son un
angiotensina-aldosterona.
endoperóxido cíclico, la prostaglandina PGHZ ,
y el tromboxano AZ (T x A2), que estimulan la
LECHOS VASCULARES producción de angiotensina II y produce vaso-
constricción.
Hay una regulación local a partir de las sustancias li- Las quininas. La enzima ECA que transforma an-
beradas por el endotelio y otra central a nivel de los giotensina I en II es capaz también de inhibir la
barorreceptores situados en el arco aórtico y conec- transformación de la BK en quininas inactivas.
tados a los núcleos vasomotores. Los mecanismos de La BK actúa sobre los receptores El y BZ de la
control dep endientes del endotelio son: célula endotelial y favorece la producción de
El óxido nítrico (NO): Es un producto sinteti- prostaciclina.
zado a partir del aminoácido L-arginina, por la
actividad de la enzima sintasa del NO (NOS).
Actúa aumentando el GMP cíclico de las célu- SISTEMA NERVIOSO VEGETATIVO
las del músculo liso (CML) vascular, lo que dis- Y CATECOLAMINAS
minuye su tono y al relajarse el vaso se dilata. En el bulbo se localiza el centro vasomotor que recoge
Además , el NO produce vasodilatación renal, estímulos corticales (influencias psíquicas) , humora-
disminuye la secreción de renina, disminuye la les (niveles de PO 2 y de PCO 2 ) y mecánicos (de los
reabsorción del sodio y, por tanto, favorece la
barorreceptores del seno carotídeo y cayado aórtico) .
diuresis. El rozamiento de la sangre en el vaso
Su respuesta se produce a través de las terminaciones
es uno de los múltiples estímulos para liberar
nerviosas simpáticas de los vasos, lo que provoca su
NO por el endotelio y participa así en el control
contracción y el aumento de las resistencias vascula-
de la TA . La inyección de un inhibidor de la
res periféricas; tan1bién actúa regulando el gasto car-
NOS , la LNMA, aumenta la TA, en tanto que
diaco, vía frecuencia cardiaca, ya que interviene en el
añadir arginina aumenta los niveles de NO y
disminuye la TA. El NO también disminuye la ajuste simpático-parasimpático del corazón.
secreción de ADH. La activación del sistema nervioso simpático a ni-
Endotelina (ET): El endotelio produce este pép- vel renal estimula la retención de sodio, por modificar
tido vasoactivo que actúa sobre receptores es- la vasculatura renal y favorece la liberación de renina
pecíficos de las CML (ET-A), activa la fosfolipa- vía receptores ~1 -adrenérgicos.
sa C de su membrana, hace aumentar el calcio Por otra parte, las catecolaminas de la médula su-
intracitoplasmático y modifica su contenido en prarrenal inducen vasoconstrucción y aumento de la
sodio y potasio. Ello hace que se contraigan , frecuencia cardiaca.
que disminuya el calibre del vaso y aumenten
las resistencias vasculares periféricas . También
favorece la proliferación de esas células. En el
RIÑÓN
riñón la endotelina aumenta las resistencias Participa en la regulación de la TA por varios meca-
vasculares, disminuye el flujo sanguíneo renal nismos:
e inhibe la liberación de NO , prostaciclina y
del factor natriurético atrial. In vivo es capaz El volumen circulante depende de la cantidad de
de aumentar los niveles de renina, ADH, al- líquido y sal ingerida, siendo el riñón el encargado
dosterona , ACTH y cortisol. Se desconoce su de regular la excreción de líquidos y solutos. En los
implicación en la patogenia de la hipertensión normotensos el aumento de tensión arterial provoca
arterial (HTA) . un aumento de excreción urinaria de sodio tratando
Prostaglandinas: La prostaciclina (PGIZ) se pro- de ajustarla; en el hipertenso esta relación se mantie-
duce en las células endoteliales a partir de los ne pero está desplazada: para que eliminen una can-
fosfolípidos de sus membranas, por activación tidad de sodio semejante la TA debe incrementarse
de una fosfolipasa que libera un ácido graso más , o dicho de otra manera, las elevaciones de TA
poliinsaturado, el ácido araquidónico (AA), y en el hipertenso esta tiene menor compensación en la
este en el vaso se transforma en prostaciclina. eliminación de sodio por el riñón.
CAPÍTULO 53 Hipertensión e hipotensión arterial

También actúa a través de la síntesis de renina La AII también es capaz de activar la liberación de
en el aparato yuxtaglomerular. Esta sustancia es aldosterona en la corteza suprarrenal, mineralocorti-
un elemento clave del sistema renina-angiotensina- coide que actúa en el túbulo renal y retiene sodio y
aldosterona. La angiotensina II (AII) tiene actividad agua e incrementa el volumen circulatorio favorecien-
vasoconstrictora directa y libera aldosterona, que es do la elevación de la presión arterial.
capaz de retener sodio y agua. El angiotensinógeno puede producir AII utilizando
A la vez, en la médula produce sustancias vaso- vías alternativas a la ECA, como las vías de las enzi-
dilatadoras, fundamentalmente prostaglandinas y mas quimasa y catepsina A, cuya importancia real en
bradiquinina. En el túbulo distal y en las células in- el control de la tensión arterial no es bien conocida.
tersticiales medulares se produce PGE2 y D2 que son El sistema RAA ha sido descrito en otros tejidos como
importantes en la regulación del flujo sanguíneo a ni- las coronarias, vasos cerebrales o suprarrenales.
vel medular. La PGE2 es más potente que la PGl2 para Se sugiere que en la regulación de la tensión al-
aumentar el flujo renal y junto a la PGI2 puede inter- gunos sistemas actúan con rapidez como los endo-
venir el control del tono vascular a través de modular teliales y neurales, y otros como los renales, son de
la respuesta a aferencias vasoconstrictoras (estímulos actuación más lenta.
nerviosos). Además, la PGE2 estimulada por la vaso-
presina aumenta la permeabilidad al agua en el túbulo
contorneado distal y es, además, natriurética, ya que HIPERTENSIÓN ARTERIAL (HTA)
inhibe la reabsorción de sodio en el tubulo proximal,
rama ascendente del asa de Henle y túbulo colector. CONCEPTO
La vasopresina y el factor atrial natriurético influ-
Una persona es hipertensa cuando tiene de forma
yen en el manejo del agua y tienen efectos indepen- mantenida una TA por encima de los valores conside-
dientes en formas de hipertensión maligna.
rados normales. Se califica de enfermedad y expresa
una alteración de la homeostasis circulatoria. Es tam-
SISTEMA RENINA-ANGIOTENSINA- bién un signo exploratorio que acompaña a muchas
otras enfermedades. En condiciones normales la TA
ALDOSTERONA presenta variaciones fisiológicas durante todo el día:
La renina sintetizada en el aparato yuxtaglomerular disminuye durante la noche (ritmo nictanieral) y se
del riñón actúa sobre un polipéptido de síntesis hepá- eleva en respuesta al dolor y al estrés. Comienza a ele-
tica, el angiotensinógeno, y genera angiotensina I, que varse al levantarse y disminuye en las primeras horas
por la acción de la enzima conversora de la angioten- de la madrugada. La distribución de la TAS o la TAD
sina (ECA de los vasos) es transformada en angioten- en las poblaciones sigu e una distribución gausiana.
sina 11, que actúa sobre unos receptores específicos, Además, la presión o tensión arterial es una variable
ATl y AT2. Los efectos mejor conocidos son los de continua. Así el valor de TA que se considera normal
los ATl (Tabla 53-1) produciendo vasoconstricción y se establece mediante cosensos de organismos inter-
elevación tensional. nacionales situando un punto de corte por encima del
cual esos valores han demostrado ser nocivos para
sus portadores (Tabla 53-2).
Para definir como hipertenso a una persona es pre-
ciso que se realice una toma correcta, y se demuestren
valores elevados en tres determinaciones separadas
varios días. En la actualidad se definen valores de
Tabla Efectos de la angiotensina TAS ~ 140 y/o TAD ~ 90 mm Hg porque se supone
11 sobre los receptores AT1 que esas personas presentan un incremento de com-
plicaciones cardiovasculares, ello también sucede en
Aumenta la secreción de aldosterona los que tienen cifras de tensión arterial normal-alta.
Aumenta la secreción de renina
Produce vasoconstricción de la arteriola IMPORTANCIA DE LA HTA
eferente renal
Se debe : a) A su alta prevalencia. Su distribución
Aumenta la retención de agua y sodio
es universal. En los países occidentales afecta a un
Produce vasoconstricción perifé rica 20% de la población adulta. Ese porcentaje aumenta
al hacerlo la edad del sujeto. Se ha señalado que en
Produce proliferación de células del músculo
liso vascular colectivos de edad superior a 65 años el 60% es hi-
pertenso . b) A que su presencia se acompaña de una
Aumenta la actividad adrenérgica morbimortalidad aumentada por complicaciones
vasculares: infarto de miocardio, ictus o insuficien-
cia renal. c) Su coste sociosanitario es importante:
5 V Sem iología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

ingresos hospitalarios, consultas, medicamentos, ba-


jas laborales, etc. d) Con frecuencia se asocia a otros
factores de riesgo vascular. Tabla Definiciones y clasificación
A pesar de la sencillez de su diagnóstico y de dis- de las cifras de presión arterial (mm Hg)
poner de tratamientos eficaces, quedan muchos hiper-
tensos por diagnosticar, muchos de los diagnosticados Cifras Cifras
Categorías
siguen sin tratarse, y en gran medida los tratados no de TAS deTAD
están bien controlados.
Óptima < 120 y< 80
Normal 120-129 y 80-84
CLASIFICACIÓN DE LA HIPERTENSIÓN
ARTERIAL Normal alta 130-139 y 85-89

La HTA puede clasificarse atendiendo a varios crite- Hipertensión arterial


rios: fisiopatológico, etiológico o de gravedad.
grado 1 140-159 y/o 90-99

Criterio fisiopatológico grado 2 160-179 y/o 100-109


Según los mecanismos implicados en su aparición, grado 3 =!: 180 y/o =!: 110
la HTA puede ser sistólica aislada o sistólica y dias-
tólica. HTA sistólica aislada =!: 140 < 90

Sistólica: la TAS se influye fundamentalmente


por el volumen sistólico y la resistencia de los
grandes vasos elásticos. La alteración de estos
parámetros hace que el sujeto tenga TAS ~ 140
con TAD ~ 90 mm Hg. Esta forma de HTA acom- CAUSAS Y MECANISMOS IMPLICADOS
paña a situaciones con aumento del volumen de EN LA APARICIÓN DE LA HTA SECUNDARIA
eyección o sistólico: insuficiencia aórtica (au-
mento del volumen sistólico), estados circulato- De origen nefrológico
rios hiperquinéticos (fiebre, anemia, existencia La HTA acompaña a muchas enfermedades renales
de fístulas arteriovenosas, etc.) o en situaciones y su presencia agrava su pronóstico. El riñón puede
en las que disminuye la compliance de la aorta favorecer la aparición de HTA por: a) No ser capaz de
por aumento de la rigidez de las grandes arterias eliminar el sodio y el agua, como en la insuficiencia
(ancianos con arteriosclerosis). La HTA sistólica renal aguda (Cap. 57); b) a través del sistema renina-
aislada es muy poco frecuente en la población angiotensina-aldosterona . Por ejemplo, si hay isque-
anciana. mia del riñón este sistema se activa. Así sucede si
Sistólica y diastólica: expresa el aumento del hay una estenosis de la arterial renal; c) por defectos
gasto cardiaco, de la resistencia a nivel de las ar- en la producción de sustancias hipotensoras. Se ha
terias periféricas o de ambas; es la forma de HTA implicado en la elevación tensional que se produce
más frecuente . cuando a los hipertensos se les administran fármacos
que inhiben la cicloxigenasa (antiinflamatorios no es-
Criterio etiológico teroideos) y con ello la síntesis de las prostaglandinas
Según se conozca su origen puede ser: de la médula renal.

Esencial o primaria. Es la mas frecuente, afecta De origen endocrinológico


al 90 % -94% de los hipertensos en población ge-
neral y es el diagnóstico que tiene el 70 % -85 % Médula suprarrenal. En enfermedades locali-
de los atendidos en unidades de hipertensión ar- zadas en la médula como lugar de producción
terial. Su causa íntima no es bien conocida. de catecolaminas. Asientan tumores del sistema
Secundaria. En este caso la HTA es una compli- cromafín, derivados de la cresta neural (neu-
cación de otras enfermedades , que pueden ser roectodermo), los llamados feocromocitomas.
nefrológica, vascular, endocrinológica, neuroló- La hipertensión que producen es en ocasiones
gica o acompañar a la toma de fármacos. paroxística.
Corteza suprarenal. La hipertensión puede apa-
Según su gravedad recer por exceso de minerales o glucocorticoides.
Se define según los criterios de la ESH (European So- Mineralocorticoides. La producción excesi-
456 ciety of Hypertension) y la ESC (European Society of va de aldosterona o de desoxicorticostero-
Hypertension) (Tabla 53-2). na (DOCA) produce HTA por aumento de la
CAPITULO 53 Hipertensión e hipotensión arterial

reabsorción tubular de sodio, y de la volemia el gasto cardiaco. También puede provocarla el uso
secundariamente . El hiperaldosteronismo reiterado de descongestivos nasales que contienen
primario puede deberse a la existencia de un fenilpropanolona, o «adelgazantes » (su composición
adenoma (síndrome de Conn) , carcinoma o hi- a veces se desconoce y llevan derivados tiroideos y/o
perplasia. El exceso de DOCA puede aparecer anfetaminas. Es frecuente con el uso de estrógenos
acompañando a defectos enzimáticos congé- orales a dosis altas, aplicados en terapéutica hor-
nitos (1~-hidroxilasa, 170:-hidroxilasa) o más monal sustitutiva en las mujeres menopáusicas para
raros por tumores productores de DOCA. aumentar su masa ósea, o como anovulatorios. Los
Glucocorticoides. La producción excesiva de estrógenos favorecen la síntesis hepática de renina.
glucocorticoides (hiperplasia o tumor) (enfer- Los antidepresivos tipo IMAO en presencia de tira-
medad de Cushing) o su administración exóge- mina (presente en algunos quesos) libera adrenalina y
na excesiva puede producir HTA porque retie- aumenta la tensión arterial. Las pastillas de regaliz, y
nen sodio que aumenta el volumen plasmático. algún neutralizante de la acidez del jugo gástrico rico
en ácido glicirrínico (carbenosolona) producen hiper-
Tiroides. El hipertiroidismo se asocia con un au- tensión por aumento de la volemia. La ciclosporina,
mento de la actividad simpática que se expresa utilizada para evitar el rechazo de los trasplantes ,
con vasoconstricción y aumento de las resisten- también produce HTA dosis-dependiente por activi-
cias vasculares y del gasto cardiaco. dad del SN simpático.

De origen vascular
Se incluyen dos tipos: vasculorrenal y coartación de MECANISMOS IMPLICADOS EN LA GÉNESIS
la aorta. DE LA HTA ESENCIAL O PRIMARIA
HTA vasculorrenal: La estenosis de una arteria Que señalemos no conocer la causa final de la HTA
renal disminuye el flujo de ese riñón, lo que es esencial no significa que no se conozcan determina-
percibido en la mácula y ello estimula la produc- dos mecanismos implicados en su aparición. La HTA
ción de renina. A través de ella lo hace la angio- esencial surge de la interacción de una determinada
tensina y la aldosterona, lo que provoca HTA. La carga genética y factores ambientales . Estos parecen
causa más frecuente es, en las personas mayores, ser los más importantes:
la existencia de placas de ateroma y en los jóve-
nes la displasia fibromuscular de la íntima; en Factores endógenos
este caso predomina en las mujeres y más en el Herencia: Los datos disponibles parecen apoyar,
lado derecho. que HTA se hereda de modo poligénico . En su
Coartación aórtica: Es una malformación congé- apaTición intervienen muchos genes que interac-
nita poco frecuente en la que la aorta a partir de túan y que elevan la TA.
determinado nivel se estrecha generalmente por
debajo de la salida de la subclavia izquierda. Los El 70 %-80 % de los hipertensos esenciales tie-
vasos por encima de la estenosis sufren presiones nen antecedentes familiares de HTA. Si ambos
elevadas y por debajo disminuye el flujo. Se debe padres son hipertensos el riesgo de que sus hi-
sospechar en un hipertenso de 20-30 años con jos lo sean es 2,5 veces mayor que si ninguno
HTA sistólica claudicación intermitente de los lo es; la correlación de los valores de la TA es
miembros inferiores, diferencia de TAS> 30 mm muy alta entre gemelos univitelinos, más que
Hg entre brazos y piernas, y debilidad o ausencia entre los que no lo son.
de pulsos femorales. Hay modelos animales de HTA hereditaria; de-
terminadas especies de ratas pueden hacerse
De origen neurogénico espontáneamente hipertensas administrándo-
les sal y otras no: en las espontáneamente hi-
Son causas poco frecuentes de HTA. Puede haber pertensas se han descrito genes que modulan el
HTA acompañando a encefalitis, tumores, traumatis- metabolismo salino.
mos y en la fase aguda de un ictus isquémico extenso. En los humanos, la HTA es más grave en los
Se piensa que aparece porque se alteran los mecanis-
individuos de raza n egra, tal vez porque tienen
mos de control del centro vasomotor y se facilita la mayor facilidad para retener el sodio de la die-
emisión de impulsos presores. También acompaña a ta y su volumen plasmático está aumentado.
enfermedades que cursan con alteración del SN autó-
El síndrome metabólico o de Reaven es muy
nomo: Guillain-Barré, saturnismo o porfiria.
frecuente : asocia la presencia de la HTA con
otros rasgos como obesidad de tipo central,
Por uso de fármacos o tóxicos alteraciones lipídicas, resistencia aumentada a
La cocaína y las anfetaminas inducen una descarga la insulina e hiperinsulinemia que se asocia a
457
simpática que aumenta las resistencias periféricas y hiperactividad simpática.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

salina, lo que probablemente les predispone a la


HTA.
Tabla Algunos de los genes Cambios en las membranas. En hipertensos
implicados en fisiopatología de la HTA esenciales se han descrito anomalías de las mem-
esencial branas celulares que afectan al transporte iónico
a su través e influyen en el contenido de calcio
Sistema renina-angiotensina- libre intracelular, mediador final obligado de los
aldosterona factores que inciden sobre el tono vascular y que
aumenta la reactividad vascular. El aumento del
Gen de la enzima conversora de angiotensina calcio intracelular aumenta la respuesta a agentes
(ECA) vasoconstrictores. La alteración está presente en
Del angiotensinógeno (AGT) el 35%-50 % de los hipertensos esenciales, se ha
Del receptor AT1 de la angiotensina 11 demostrado en hijos normotensos de hipertensos
Manejo renal del sodio y probablemente se relaciona con la sensibilidad
a la sal en algunos de ellos.
Del canal epitelial del sodio (EnaC) Cambios hemodinámicos y neurogénicos. La hi-
De la alfa-aducina pertensión arterial en sus fases iniciales (sobre
De la kinasa-1 sérica regulada por todo en jóvenes) cursa con aumento de volumen
glucocorticoides (SGK-1) minuto , tal vez por aumento del tono simpático.
De la 11-beta-hidroxi-esteroide deshidrogenasa Con el tiempo este se normaliza, aunque la ten-
tipo 2 (11-beta-HSD2) sión se mantiene elevada, probablemente porque
Del péptido atrial natriurético se producen lesiones estables del vaso que au-
Función endotelial mentan las resistencias vasculares periféricas).
También se ha descrito en hipertensos límites
De la sintasa de óxido nítrico endotelial (eNOS) o incluso en familiares normotensos una res-
De los receptores de endotelina 1 (ET-1) puesta exagerada al estrés. Es posible que en el
Estrés oxidativo mantenimiento de la HTA se implique el sistema
nervioso simpático por un reajuste de los baro-
De la catalasa rreceptores a un nivel más elevado.
De la interleucina 6 Resistencia a la insulina. En un porcentaje de
hipertensos esenciales se demuestra una resis-
tencia a la acción periférica de la insulina e hipe-
rinsulinemia. Este hallazgo es más frecuente si la
hipertensión se asocia a diabetes y/o a obesidad.
La hiperinsulinemia favorece la aparición de hi-
Se han descrito algunos tipos de HTA raros pertensión: a) ya que es capaz de producir agu-
debido a defectos monogénicos (hiperaldoste-
damente retención renal de sodio y aumentar la
ronismo respondedor a glucocorticoides y la actividad simpática; b) tiene acción mitogénica
enfermedad de Liddle) y también algunos ge- y produce hipertrofia de las células del músculo
nes susceptibles (el del angiotensinógeno y el
liso, y c) modifica el transporte de iones a través
de la alfa aducina de las células endoteliales),
de las membranas y aumenta el calcio intrace-
parecen los más susceptibles. La Tabla 53-3 re-
lular en el tejido renal y en otros sensibles a la
coge una serie de genes que podrían estar im-
insulina.
plicados en la fisiopatología de algunos casos
de HTA esencial.
Factores ambientales
La edad: En las sociedades occidentales la TAD
Muchos de los factores ambientales implicados en la
aumenta hasta los 50 años , en que se estabiliza;
enfermedad están presentes sobre todo en los países
en el anciano aumenta sobre todo la TAS y la pre-
industrializados :
sión diferencial.
Papel del riñón: En general la hipertensión resul- Sal: Las poblaciones que tienen baja ingesta sa-
ta de cambios en el volumen plasmático, de las lina tienen niveles más bajos de tensión arterial.
resistencias periféricas o del gasto cardiaco. El Un 50 % de los hipertensos esenciales consi-
aumento de la tensión debe ser compensada en guen descender sus valores tensionales cuan-
el sano con una mayor excreción renal de sodio do realizan dieta sosa. Se habla de hipertensos
y agua a través de la inhibición del sistema re- «moduladores » frente a los restantes que no son
nina-angiotensina-aldosterona y la liberación de moduladores, ya que en ellos la sal no induce
péptido natriurético auricular. En la raza negra variaciones tensionales.
los normotensos tienen disminuida su capacidad La secreción de renina viene determinada por
458
de excretar sodio si se les hace una sobrecarga el volumen líquido del individuo y este se re-
CAPÍTULO 53 Hipertensión e hipotensión arterial

Tabla Repercusiones de la hipertensión arterial


Arterias Corazón Riñón Sistema nervioso
Cambios Alteración de la Disfunción diastólica Disminución del flujo Desviación de la curva
funcionales distensibilidad de autorregulación
Isquemia miocárdica Hiperpresión
de esfuerzo glomerular
Disfunción
endotelial
Cambios Disrupción de Hipertrofia Nefroangioesclerosis Edema cerebral
estructurales fibras elásticas ventricular izquierda
Se favorece la Microaneurismas
arteriosclerosis
Esclerosis hialina
vascular
Arteriosclerosis
Manifestaciones Trombosis Cardiopatía Microalbuminuria Accidente
clínicas isquemia isquémica cerebrovascular
agudo
Aneurismas Insuficiencia Proteinuria Demencia multiinfarto
cardiaca (o vascular)
Ruptura Muerte súbita Insuficiencia renal

laciona con la ingesta salina que modula la res- MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA HTA
puesta renal y adrenal a la angiotensina II. Y DE SUS COMPLICACIONES
Sobrepeso: Hay una relación clara entre el au-
mento de peso y la elevación de la tensión arte- En fases iniciales la HTA esencial es un proceso
rial; la prevalencia de hipertensión es mayor en asintomático u oligosintomático. El enfermo puede
los obesos; y cuando un obeso adelgaza su tensión quejarse de cefalea matutina, sensación de mareo e
arterial disminuye. En el obeso está aumentado inquietud. No hay relación entre estas manifestacio-
el volumen plasmático, el volumen minuto y so- nes y el nivel de elevación tensional. Cuando existe
bre todo la resistencia de los tejidos periféricos lesión vascular avanzada aparecen manifestaciones
a la acción de la insulina que se ha relacionado clínicas derivadas de sus complicaciones: disnea ,
con un aumento de la actividad simpatoadrenal. dolor precordial, claudicación intermitente, altera-
Consumo elevado y mantenido de alcohol: A ciones visuales (visión borrosa, escotomas). En fases
dosis bajas el alcohol produce vasodilatación avanzadas puede aparecer encefalopatía hipertensiva
periférica y tal vez aumenta la excreción renal o complicaciones vasculares (ictus o IAM).
de sodio y agua . El consumo excesivo aumenta La HTA secundaria puede presentar algunas ma-
la actividad simpática y el gasto cardiaco, au- nifestaciones clínicas que orientan a su diagnóstico:
mentando la tensión arterial y las resistencias crisis de piloerección en el feocromocitoma, facies de
periféricas. luna llena en el síndrome de Cushing, hipokaliemia
Estrés: Es capaz de inducir activación simpática en el hiperaldosteronismo, etc. La Tabla 53-4 recoge
(aumentar el gasto cardiaco y producir vasocons- las repercusiones de la HTA en los distintos órganos.
tricción). La exposición mantenida a situaciones
físicas o psicológicas adversas supone un factor
de riesgo para desarrollar HTA. Complicaciones
Tabaco: La tensión arterial no aumenta con el Unas derivan de factores hemodinámicos o sobrecar-
consumo del tabaco, sin embargo, el tabaco daña ga mecánica, y se expresan tanto en el corazón (hiper-
el endotelio de las arterias y potencia el efecto de trofia ventricular izquierda), el riñón (insuficiencia
459
la lesión que sobre ellas induce la HTA. renal) o los vasos (aneurismas, progresión de arte-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades cardiovasculares

riosclerosis). Al evolucionar, los vasos disminuyen el daño vascular. Los fundamentales son la
su elasticidad (distensibilidad), las arterias de resis- presencia de diabetes, dislipemias , tabaquismo,
tencia remodelan sus paredes y aumenta las resisten- obesidad, enfermedad cardiovascular previa en
cias periféricas. El ventrículo izquierdo se remodela el sujeto o antecedentes familiares de enferme-
e hipertrofia. dad cardiovascular precoz que aparece antes
La HTA daña las arterias, que sufren fenómenos de los 55 años en algunos de los familiares de
adaptativos funcionales y estructurales. La sobrecarga primer grado varones o antes de los 65 años en
de presión hace aumentar el grosor de la pared, pero algunos de los familiares femeninos de primer
disminuye su distensibilidad y se favorece la arterios- grado.
clerosis. Hay esclerosis en las arterias aferentes de los A continuación se debe proceder a calcular el
glomérulos (engrosamiento de la pared y depósitos riesgo vascular global de ese enfermo. Para ello
hialinos subendoteliales) y HTA maligna favorece la existen tablas de cálculo. Las más utilizadas se
aparición de necrosis fibrinoide, que se asocia a ma- han elaborado a partir de la población norteame-
nifestaciones graves de órganos diana (fondo de ojo, ricana de Framingham (ver Fig. 50-3) , y nos de-
riñón, corazón y SNC. La Tabla 53-5 expresa las prin- finen la posibilidad de que el sujeto tenga una
cipales complicaciones de la HTA. complicación cardiovascular mayor en los próxi-
mos 10 o 20 años. La valoración global del riesgo
nos define el pronóstico del enfermo y también
VALORACIÓN DE LOS HIPERTENSOS nos orienta sobre cuándo iniciar el tratamiento,
En el Capítulo 4 hemos señalado los criterios diagnós- la intensidad del mismo , y nos ayuda a fijar el
ticos de la hipertensión y los errores más frecuentes grado de control óptimo.
en su detección. Para el diagnóstico en algunos casos También debemos conocer si la HTA se asocia
es útil utilizar la llamada monitorización ambulatoria a alguna complicación orgánica (Tabla 53-5).
de la presión arterial (MAPA}, que utiliza un Holter, Para la valoración de los factores de riesgo asocia-
aparato que registra de forma programada (cada 20 o dos , la búsqueda de una causa o enfermedad primaria
30 minutos) y automática la tensión arterial, lo que para la HTA y la valoración de sus repercusiones es
permite su análisis ulterior. Permite conocer si se imprescindible realizar algunas pruebas o exploracio-
mantiene el descenso tensional nocturno fisiológico nes complementarias: hemograma, determinaciones
(> 10% respecto al registro diurno) o ha desapareci- bioquímicas, radiología de tórax y electrocardiogra-
do (enfermo no dipper), lo que implica mayor riesgo ma. A ellas siguen otras de forma más dirigida: eco-
vascular. cardiografía, determinaciones hormonales , etc. , que
Permite descubrir el llamado fenómeno de bata deben individualizarse y jerarquizarse en función de
blanca: elevación exagerada de la TA en situacio- la sospecha clínica.
nes de estrés, habitualmente en an1bientes hos-
pitalarios (HA de bata blanca). También ayuda
a conocer si el tratamiento es ineficaz, si existe EVOLUCIÓN
pérdida del ritmo nictameral, ayuda a detectar La HTA no controlada da lugar a las complicaciones
formas paroxísticas de hipertensión y si hay hi- expuestas en la Tabla 53-5. En algunos pacientes, en
potensión producida por el tratamiento. En cual- particular con HTA secundaria, se puede producir un
quier caso cada vez se usa más la automedida de cuadro de HTA maligna o acelerada con cifras de TAS
la TA (AMPA) por el enfermo en su ambiente. y TAD generalmente superiores a 200/130 mm Hg; el
Se define HTA por MAPA una tensión arterial fondo de ojo presenta hemorragias, exudados y ede-
superior a 125-130/80 mm Hg (TAS/TAD, medias
ma, la lesión renal avanza rápidamente , a veces hay
de 24 horas) y por AMPA superior a 130-135/85
encefalopatía y los cambios arteriales histológicos de-
mmHg.
muestran necrosis fibrinoide .
Debemos valorar la posible existencia de una
hipertensión curable, es decir, una forma secun-
daria de hipertensión. Esta debe sospecharse si: HIPOTENSIÓN ARTERIAL
a) La enfermedad aparece antes de los 30 años o
después de los 60 años. b) Si el sujeto carece de
CONCEPTO
antecedentes familiares de HTA. c) Si cursa con
gran repercusión orgánica. d) Si el tratamiento Supone una disminución de la tensión arterial por
habitual no consigue un buen control. e) Si ha debajo de los valores normales para la persona. La
desaparecido el ritmo nictameral. f) Si existe hipotensión es un signo que acompaña a múltiples
alguna manifestación propia de la enfermedad circunstancias; puede ser transitoria o estable, leve
primaria que la causa (p ej., feocromocitoma). o grave. Se define como hipotenso esencial al indi-
A continuación se debe valorar la existencia de viduo que de forma estable tiene una tensión arterial
460
otros factores de riesgo que puedan aumentar sistólica por debajo de 90 mm Hg sin signos de hi-
CAPITULO 53 Hipertensión e hipotensión arterial

Tabla Complicaciones Tabla Mecanismos y causas


de la hipertensión arterial de hipotensión arterial
Cerebrales Mecanismos Causas
Encefalopatía hipertensiva Depleción de Hemorragia
volumen Insuficiencia
Accidente isquémico transitorio
mineralocorticoide
Accidentes cerebrovasculares agudos (infarto Diarrea
cerebral)
Obstrucción al Tamponamiento cardiaco
Hemorragia (parenquimatosa y subaracnoidea) flujo sanguíneo Embolia pulmonar
Demencia Estenosis aórtica
Disección aórtica
Encefalopatía de Binswanger
Disfunción Arritmias
Renales cardiaca Infarto agudo de miocardio
Microalbuminuria Endocarditis
Insuficiencia cardiaca
Proteinuria
Insuficiencia renal
Cardiacas
Hipertrofia ventricular izquierda En general la hipotensión expresa una disminución
de las resistencias arteriales periféricas, del volumen
Disfunción diastólica y sistólica: insuficiencia cardiaco o de ambos .
cardiaca
Cardiopatía coronaria Manifestaciones clínicas
Oculares: fondo de ojo En la hipotensión arterial esencial puede existir aste-
nia, sensación de mareo y puede presentar síncopes.
Grado 1: Arterias afiladas y tortuosas No obstante, es frecuente que los sujetos se encuen-
Grado 11 : Cruces arteriovenosos tren asintomáticos.
La hipotensión ortostática aparece en personas
Grado 111: Exudados y hemorragias con tensiones arteriales normales en decúbito, pero
Grado IV: Edema de papila con caídas de TAS superior a 20 mm Hg, y/o TAD
de 10 mm Hg a los 3 minutos de ponerse en pie. En
Arteriopatía periférica condiciones normales , al incorporarse, la sangre de
Arteriopatía crónica: claudicación intermitente las extremidades inferiores debe ascender contra la
gravedad, la tensión arterial cae y estimula los baro-
Aneurisma de la aorta rreceptores que provocan una respuesta vasocons-
trictora, y un aumento de la frecuencia cardiaca. La
hipotensión ortostática se debe a un fracaso de estos
mecanismos. Habitualmente se expresa con fotopsias,
poperfusión ni respuesta cardiovascular compensa- cefalea, alteraciones visuales y sensación de mareo.
dora. Es frecuente en los ancianos, cuando hay depleción
de líquidos (por baja toma de diuréticos), por hipo-
tensores o bien por disfunción autonómica (p. eje. ,
Etiopatogenia diabetes mellitus, amiloidosis).
Las principales causas de hipotensión arterial clasifi- Si la hipotensión arterial se acompaña de hipo-
cadas según los mecanismos implicados en la misma perfusión tisular, aparece el cuadro clínico conocido
se expresan en la Tabla 53-6. como shock. Este proceso se estudia en el Capítulo 46.

461
Semiología de las
enfermedades del riñón
y de las vías urinarias
Jaime Merino Sánchez, Francisco Rivera Hernández

La diuresis (orina emitida en 24 h) oscila entre 1000


y 1500 ml; a través de ella al organismo elimina múl-
tiples sustancias resultantes de los metabolismos y
mantiene la constante del medio interno. La orina
es un ultrafiltrado del plasma, su densidad oscila de
1000 a 1040 (kg/m 3), su osmolaridad de 200 a 75 0
müsm/kg , y tiene escasos leucocitos , células o pro-
teínas. En ella hay metabolitos como creatinina, urea,
y en condiciones normales se retiene toda la glucosa
que flitra.
La capacidad de concentración del riñón de una
persona sana se calcula en 1200 müsm/kg de agua.
Los solutos a eliminar arrastran agua. Para deshacerse
de todos ellos se precisa elaborar un volumen de ori-
na no inferior a 400-600 ml/día. Dado que la diuresis
normal puede oscilar entre 500 y 2500 ml/día, se dis-
pone de un amplio margen de reserva.
Las alteraciones en la eliminación de volumen uri-
nario pueden producirse por defecto, oliguria, o por
exceso, poliuria.

OLIGURIA
CONCEPTO
Se define si la diuresis es inferior a 400 ml, y anuria si
es inferior a 100 ml. Si esta se prolonga en el tiempo
es incompatible con la vida.

FISIOPATOLOGÍA
La producción reducida de orina puede deberse a que
se ha reducido el filtrado glomerular o que hay un au-
mento en la reabsorción tubular del líquido filtrado .

Disminución del filtrado glomerular


Los factores implicados en la filtración glomerular
462
son: FG = K (prH - prCB-Po). Donde K es igual a
CAPITULO 54 Semiología de las enfermedades del riñón y de las vías urinarias

coeficiente de filtración , prH: presión hidrostática en


el capilar glomerular, prCB: presión en la cápsula de
Bowman, y Po: presión oncótica debido a las proteí- Tabla Etiología de la oliguria
nas.
El coeficiente de filtración se altera si se lesiona Prerrenales
la membrana basal del capilar glomerular (enferme- Hipotensión arterial
dades glomerulares) o si hay una disminución de la
Disminución del volumen sanguíneo
superficie de filtrado, por ejemplo, porque el número (hemorragias, quemaduras, sudoración
de nefronas intactas está disminuido (insuficiencia excesiva), sepsis, insuficiencia hepática,
renal crónica). anafilaxia, síndrome nefrótico
La presión hidrostática disminuye si hay insufi- Fallo de la bomba: insuficiencia cardiaca
ciencia circulatoria: bajo gasto cardiaco (insuficien- congestiva, infarto agudo de miocardio
cia cardiaca congestiva, valvulopatías, arritmias , in- Embolismo pulmonar
farto de miocardio , pericarditis, hipotensión arterial, Fármacos: IECA
shock, etc.), o depleción hídrica (deshidratación, dia- Obstrucción de la vena renal
rrea, etc.).
Si aumenta la presión hidrostática en la cápsula Renal
de Bowman se dificulta que el glomérulo filtre; ello Isquemia que causa necrosis tubular aguda
sucede si hay un obstáculo al flujo urinario que de Vasculitis
forma retrógrada la aumenta (uropatías obstructivas: Glomerulonefritis
obstrucción prostática, litiasis bilateral, obstrucción Hipertensión arterial maligna
de una sonda vesical, etc). Fármacos, antibióticos, indinavir
Toxicidad por metales pesados: mercurio,
Aumento de la reabsorción hídrica en los tú bulos platino
En el túbulo contorneado proximal se debe a fac- Contrastes radiológicos
tores mal conocidos. En el distal a un exceso de la Toxinas endógenas: mioglobina
actividad de la aldosterona que retiene sodio y con (rabdomiólisis)
ella agua. Esta situación corresponde al hiperaldos- Tumores: mieloma múltiple
teronismo que acompaña a situaciones asociadas a Tóxicos industriales: tetracloruro de carbono,
edema: cirrosis, insuficiencia cardiaca congestiva o etilenglicol
síndrome nefrótico. En estas circunstancias hay una Procesos inflamatorios: nefropatías
reabsorción excesiva del plasma que pasa al inters- intersticiales
ticio, con lo que disminuye el volumen plasmático Postrenal
eficaz que perfunde al riñón y por tanto la orina gene-
rada es escasa. También podría ser debido a exceso de Aumento de tamaño de la próstata.
la hormona antidiurética que favorece la retención de Obstrucción intratubular (ácido úrico, ácido
oxálico).
agua en el tubo colector.
Obstáculos intra y extraluminales: litiasis,
tumores, fibrosis, coágulos.
TIPOS DE OLIGURIA Y SUS CAUSAS
En clínica la oliguria se clasifica en prerrenal, renal o
postrenal (Tabla 54-1).
En las prerrenales el riñón está mal perfundi- tudiar la reabsorción tubular. Es útil para dife-
do y disminuye el filtrado glomerular, pero su renciar la insuficiencia renal aguda prerrenal de
funcionalismo se conserva y el riñón trata de la necrosis tubular aguda y para el diagnóstico
eliminar una mayor cantidad de solutos en un diferencial de hiponatremia renal o extrarrenal.
pequeño volumen urinario. La osmolaridad La excreción fracciona! de sodio se calcula de la
plasmática es normal (en torno a 300 müsm/kg siguiente manera:
de agua) y la de la orina está muy elevada (hasta FE Na = cantidad de sodio excretado/cantidad
750 müsm/kg).
de sodio filtrado =
El sodio urinario es un indicador de la capa-
cidad de reabsorción tubular, pero requiere el sodio urinario/sodio plasmático
conocimiento del balance total de sodio para su ------------- X 100
crea ti nin a urinaria/ crea tinina
correcta interpretación. Sin embargo, la excre- plasma ti ca
ción fracciona! de sodio (FE Na) mide la fracción
de sodio filtrado que es excretado finalmente En la insuficiencia renal aguda prerrenal la fun-
463
por la orina y tiene mejor sensibilidad para es- ción tubular está intacta y el túbulo reabsorbe Na
Semiología y fi siopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

en un intento de compensar la disminución del


flujo sanguíneo al glomérulo. Por tanto, la EF Na
es< 1 %. En la necrosis tubular el daño del túbu- Tabla Causas de poliuria
lo deteriora la capacidad de reabsorción y se pier-
de sodio por orina, por lo que la EF Na es >1 % OSMÓTICAS
Las oligurias renales se originan en un riñón da-
Mecan ismo Causas
ñado , que es incapaz de concentrar la orina. Por
ejemplo , en la necrosis tubular aguda. La excre- Por aumento Hiperglucemia
ción fracciona! de sodio es superior a uno. Pero de la carga Infusión de urea o manitol
conviene señalar que no debe valorarse si se han osmótica Insuficiencia renal crónica
administrado diuréticos de asa. Hiperparatiroidismo
En las postrenales hay oliguria porque la presión
aumentada en la cápsula de Bowman dificulta la Natriuresis Uso de diuréticos
filtración glomerular. Fase diurética de la necrosis
tubular
Glomerulonefritis pierde sal
EVALUACIÓN ACUOSAS
En la historia clínica es útil buscar si hay en- Mecanismo Causas
fermedades que dañan al riñón, exposición a
sustancias nefrotóxicas, infecciones recientes , Déficit de ADH Polidipsia psicógena o
enfermedades en las que se aporta poca sangre potoman ía
al riñón o que puedan bloquear el flujo urinario. Diabetes ins ípida verdadera
La exploración física permite valorar el grado de Traumatismos hipotalámicos
hidratación y el estado del aparato cardiovascu- ldiopática
lar para mantener el flujo renal. Debe buscarse Insensibilidad Diabetes ins ípida nefrogénica
si existe globo vesical, soplos de origen renal o de los túbulos Fármacos: litio, tetraciclinas
ascitis. La piel puede mostrar lesiones cutáneas a la ADH Enfermedades túbulo-
que se asocian a enfermedades propias del riñón intersticiales
(Capítulo 55).
En las pruebas complementarias, además de va-
lorar las características de la orina, su contenido
en proteínas, hemoglobina, densidad, osmolari-
dad, sedimento, presencia de cilindros, cristales
u otras sustancias, es muy útil valorar la osmo- Poliurias osmóticas: Surgen si hay necesidad
laridad urinaria y plasmática y el contenido en de eliminar un gran número de solutos. En el
sodio y creatinina en ambos medios, calculando plasma de los sujetos con poliuria osmótica
la EF Na. hay una gran cantidad de sustancias de alto
Los ultrasonidos ayudan a valorar el tamaño poder osmótico: glucosuria en los diabéticos
renal. Si están disminuidos se sugiere una enfer- mal controlados, urea si hay insuficiencia re-
medad crónica; en ocasiones se detecta la causa nal crónica, calcio en el hiperparatiroidismo
de la obstrucción (p. ej., hipertrofia de próstata o u otros solutos exógenos como manito!, etc.
la existencia de tumores o quistes). La TAC con- Son moléculas pequeñas que filtran muy bien
firma estos hallazgos . por el glomérulo y lo hacen arrastrando agua.
Esas sustancias osmóticamente activas no son
reabsorbidas en los túbulos , e impiden que se
POLIURIA reabsorba sodio y que pase al intersticio, con
lo cual la osmolaridad en él desciende y hace
CONCEPTO fracasar los mecanismos de contracorriente. La
Se define como una diuresis superior a 3 1 al día. Ha- diuresis osmótica resulta de una disminución
bitualmente hace aumentar el número de micciones de la reabsorción de agua en los túbulos de la
(polaquiuria). nefrona.
Poliurias acuosas: Aparecen si hay un trastorno
de los mecanismos renales de concentración de
FISIOPATOLOGÍA la orina. Es decir, aumenta la eliminación del
agua libre, la no fijada a los solutos, y cursan con
En la poliuria el volumen del plasma filtrado por el
orinas hipoosmóticas.
glomérulo es muy superior al que los túbulos reabsor-
ben (Tabla 54-2) . Según su causa las poliurias pueden Los principales mecanismos implicados en
464
clasificarse en: las poliurias acuosas son:
CAPITULO 54 Sem iología de las enferm edades del riñón y de las vías urinarias

Disminución de la osmalaridad intersticial. Si entonces se le administran 5 mU de ADH intra-


En las nefropatías intersticiales, fracasan los venosa, en la diabetes insípida verdadera la diuresis
mecanismos de contracorriente y la orina no se reduce y la osmolaridad urinaria aumenta ya que
se concentra. faltaba ADH, lo que no sucede en la diabetes insípida
El daño puede ser primario en el intersti- nefrogénica (hay ADH pero no se responde a ella).
cio o derivar de un lavado rápido del flujo, lo
que sucede en personas con compulsión por
beber gran cantidad de líquido (potomanía). DOLOR ORIGINADO EN EL APARATO
En ellas el volumen del filtrado en los túbulos GENITOURINARIO
es muy grande, circula rápido y no permite
que el sodio se reabsorba y aumente la osmo- DOLOR EN LA FOSA LUMBAR
laridad del intersticio. Además, el agua inge-
rida en exceso, a pesar de que la osmolaridad El dolor localizado en columna lumbar o fosas lum-
plasmática está disminuida (270-275 m ü sm/ bares habitualmente es de origen osteoarticular y fre-
kg), actúa sobre los receptores de volumen y cuentemente de naturaleza degenerativa. Cuando el
frenan la secreción de ADH, lo que favorece la dolor es de origen renal habitualmente es unilateral,
eliminación acuosa por los túbulos. se localiza en el ángulo costovertebral y tiene irradia-
Ausencia de los efectos de la ADH sobre el ción descendente. Acompaña a las litiasis renales, pie-
túbulo colector. Puede deberse a que esta no lonefritis, hematomas renales o riñones poliquísticos.
se produce o está disminuida, por ejemplo en El cólico nefrítico produce un dolor paroxístico por
tumores o traumatismos sobre el hipotálamo, distensión aguda del uréter secundario a obstrucción
que dan lugar a la llamada diabetes insípida del mismo. Puede durar de minutos a días. Suele ser
central. Diabetes significa etimológicamen- brusco y alcanza pronto el acmé. Suele ser intenso, y
te «correr agua». Otras veces las células del el enfermo no encuentra una postura que le mejore.
túbulo son insensibles a la acción del ADH: Se localiza en el ángulo costo-vertebro-lumbar y se
diabetes insípida nefrogénica, habitualmente irradia siguiendo el trayecto ureteral hacia genitales
por tóxicos (litio o tetraciclinas) o por defectos externos. Habitualmente se asocia a trastornos en la
congénitos. micción tipo polaquiuria, disuria o tenesmo, y a otras
manifestaciones generales como sudoración, náuseas
y vómitos.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS La exploración puede revelar hipersensibilidad
cutánea y defensa muscular en región lumbar. Si se
La poliuria induce una gran pérdida de orina, y esto
prolonga puede aparecer un íleo paralítico; si se aso-
genera sed (polidipsia). En las polidipsias psicógenas
cia a infección puede aparecer fiebre y escalofríos y
el fenómeno es el inverso : la gran ingesta acuosa in-
si tiene anuria es que el riñón funcionante y afecto
duce la poliuria.
era único. Son de gran ayuda para su diagnóstico

PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
EN LA VALORACIÓN DE LAS POLIURIAS
La historia clínica y el laboratorio son de gran ayuda
en el diagnóstico de las poliurias. Un cociente entre
la osmolaridad urinaria y la plasmática < 0,7 define
las oligurias prerrenales.
Para el diagnóstico de la causa o el mecanismo de
las poliurias acuosas nos valemos de la restricción
acuosa: el enfermo se somete a ayuno, con control
de pulso y tensión arterial cada 30 minutos y del peso
cada 6 horas. Cuando ha perdido un 3 % del peso ini-
cial o lleva 14 horas de seguimiento se le mide la os-
molaridad urinaria. En una persona sana la diuresis
disminuye a menos de 0,5 ml/min y la osmolaridad
urinaria aumenta a 700 mü sm/kg. Si padece diabetes
insípida, sea verdadera o nefrogénica completa, el
flujo urinario se mantiene en unos 0 ,5 ml/min y la
osmolaridad urinaria sigue baja (menor a 200 mü sm/
kg de agua).
Si el cuadro es incompleto el volumen de orina se
reduce algo y la osmolaridad aumenta discretamente.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

el examen de orina en busca de piuria, hematuria o


cristales, etc., y la radiografía simple de abdomen que
permite descubrir cálculos, que la ecografía define y Tabla Causas de polaquiuria
muestra además si hay dilatación de vías.
Irritación vesical
Lesión orgánica (infección del tracto urinario:
DOLOR PÉLVICO Y PERINEAL cistitis, litiasis vesical, tumores de vejiga)
Un dolor hipogástrico puede indicar irritación vesi- Lesión orgánica extravascular: apendicitis
cal, habitualmente por litiasis, tumor o infección. Si aguda
hay globo vesical puede ser intenso y con frecuencia Retención vesical incompleta crónica
se asocia a anuria. El dolor en periné, a veces irradia-
do al ano y al glande, acompaña a las lesiones prostá- Por obstáculo anatómico
ticas (prostatitis). Adenoma de próstata
Estenosis uretral
Inestabilidad vesical
DOLOR ESCROTAL
Neurológica: hiperreflexia espástica
Las epididimitis y las torsiones del cordón espermá-
Obstructiva: adenoma de próstata
tico producen dolor intenso que dificulta explorar al
enfermo por lo sensible que se encuentra la zona. Los Reducción anatómica de la capacidad
quistes en el cordón o el epidídimo habitualmente vesical
son indoloros y es el tacto el que provoca el dolor.
Anatómica: vejiga operada, radioterapia
Los tumores testiculares o los hidroceles suelen ser
indoloros. El dolor en las bolsas suele estar relaciona- Afecciones extravesicales: tumores vecinos
do con torsión del cordón espermático y con lesiones Inestabilidad de origen contráctil
del epidídimo.
Psicógena: ansiedad
Sensorial: contacto con agua fr ía
DOLOR EN LA URETRA Emocional
Las infecciones, especialmente por enfermedades de
transmisión sexual, suelen producir dolor. Muchas
veces se acompañan de secreción uretral. En la mu-
jer con frecuencia se asocia a dolor durante el coito en las que la capacidad de almacenaje en la vejiga
(dispareunia). está disminuida o la misma está irritada (infecciones,
tumores, litiasis), y en reabsorción de edemas, y po-
liurias.
POLAQUIURIA
Normalmente el número de micciones es de 4 a 6 du- DISURIA
rante el día y ninguna durante la noche, eliminándo-
se unos 200-300 ml en cada micción. Se denomina Es el dolor a la micción o la dificultad miccional; la
polaquiuria el aumento exagerado de la frecuencia de micción puede hacerse en varias etapas e incluso hay
las micciones, que generalmente superan las 6 al día sensación de ser incompleta.
y una durante la noche; habitualmente se asocian a Suele deberse a:
un volumen miccional disminu ido.
Muchas afecciones urológicas pueden causarla Obstrucción orgánica (adenoma, estenosis) o
(véase Tabla 54-3), pero a veces surge como una ma- funcional (hipertonía, disinergia vesicoesfinte-
nifestación funcional sin sustrato anatómico verda- riana/vejiga de lucha).
dero. Si hay poliuria el volumen urinario aumentado Hipocontractilidad vesical, que puede ser se-
suele acompañarse de polaquiuria. cundaria a una alteración de los músculos de la
vejiga, su inervación, o a insuficiencia de la con-
tracción del detrusor.
NICTURIA
El ritmo normal de eliminación de orina supone una SECRECIÓN URETRAL EN EL HOMBRE
mayor eliminación diurna; la producción nocturna
está disminuida y se almacena en la vejiga. Se habla Habitualmente se debe a inflamación uretral por una
de nicturia si la eliminación urinaria nocturna está infección causada por los gérmenes de las enferme-
aumentada: Hay nicturia en todas las circunstancias dades de transmisión sexual: Neisseria gonorrheae,
CAPÍTULO 54 Semiología de las enfermedades del riñón y de las vías urinarias

Chlamydia trachomatis, Ureoplasma urealityticum, Infecciones del tracto urinario: Presencia de


Mycoplasma vaginalis y herpes simple; en ocasiones bacteriuria patológica (más de 10 5 colonias por
acompaña a enfermedades sistémicas (síndrome de ml) o cultivo de agentes infecciosos. Se expresan
Reiter). con dolor a la micción, polaquiuria, tenesmo,
Si no se resuelve acaba complicándose dolor lumbar, fiebre y leucocituria.
con prostatitis, epididimitis, o causa Síndrome nefrítico agudo: Habitual-
estenosis uretral. Puede trasmitir- mente cursa con hematuria, protei-
se a la pareja y si ambos no se nuria, cilindros hemáticos, insufi-
tratan pueden causar en la ciencia renal, oliguria, edemas e
mujer una enfermedad in- hipertensión arterial.
flamatoria pélvica y a la Síndrome nefrótico. Se
larga infertilidad. expresa con proteinuria
Cuando hay secre- superior a 3,5 g en 24 ho-
ción la orina puede ras por cada 1,73 metros
ser maloliente. Se cuadrados de superficie
debe explorar el corporal e hipoalbumi-
meato urinario en nemia (inferior a 2,5 g
búsqueda de enro- por dl). Suele asociarse
jecimiento o ulce- a edemas y dislipemia
raciones y realizar (hipercolesterolemia e
un tacto rectal que hi pertrigliceridemia).
puede revelar una
Síndromes tubula-
próstata sensible,
res. Se traducen en alte-
irregular y dura.
raciones hidroelectrolí-
En ocasiones se
ticas, poliuria, nicturia
acompaña de ade-
y proteinuria de origen
nopatías inguina-
tubular.
les, sensibilidad en
el epidídimo o la Hipertensión arte-
próstata, y más rara rial: La elevación arterial
vez de presencia de suele favorecer el daño
artritis o lesiones cutá- renal produciendo microal-
neas. Si estas aparecen buminuria o proteinuria y
expresan que la enferme- elevación de la creatinina (in-
dad no está localizada a ni- suficiencia renal).
vel urológico. Insuficiencia renal aguda: Se
El examen de orina es útil, a manifiesta con oligoanuria y dismi-
veces en ella el test de los nitritos nución del filtrado glomerular.
es positivo, hay proteinuria y/o hema- Insuficiencia renal crónica. El filtrado
turia y leucocitos en el sedimento. El examen glomerular disminuye de forma lenta y progre-
en fresco de las secreciones puede ayudar a identifi- siva. Con ello suele haber poliuria, polidipsia,
car el germen causante; otras veces se precisa realizar anemia, hipertensión y osteodistrofia renal. Fi-
cultivos, y test serológicos que definan el proceso. nalmente aparece oligoanuria, alteraciones del
equilibrio ácido-base y cilindros en el sedimen-
to.
PRINCIPALES SÍNDROMES DE AFECTACIÓN Nefrolitiasis: Se expresa con cólicos renales y la
DEL APARATO URINARIO demostración de litiasis (cálculos) por técnicas
de imagen.
Se revisarán en los próximos capítulos y son:
Obstrucción del tracto urinario. Existirá anuria
Alteraciones urinarias asintomáticas: Presencia si es bilateral o en riñón único. En caso de litiasis
de proteinuria leve, piuria estéril o microhema- uretral es frecuente el dolor cólico renouretral,
turia. Clínicamente pueden pasar desapercibi- y en ocasiones se complica con datos clínicos y
das. analíticos de infección urinaria.

467
·155
Exploración física
en patología
gen itou ri na ria
Francisco Rivera Sánchez, Sara Anaya Fernández, Jaime Merino Sánchez

INTRODUCCIÓN
El riñón interviene en múltiples funciones (elimina-
ción de productos derivados del metabolismo, man-
tenimiento del equilibrio hidroelectrolítico o ácido-
base y función endocrina) por lo que las alteraciones
renales, fundamentalmente la insuficiencia renal,
hacen que se afecten numerosos órganos y sistemas.
A la inversa, muchas enfermedades ajenas al riñón
pueden repercutir de forma directa o indirecta sobre
las funciones renales. Todos los enfermos renales
deben tener una historia clínica y exploración física
completa, respetando el esquema clásico: inspección,
palpación, percusión y auscultación. Aunque se deba
prestar especial atención al riñón, al tracto urinario y
a los datos indirectos de enfermedad renal, todos los
sistemas deben ser cuidadosamente examinados.

ASPECTO GLOBAL DEL ENFERMO


La tolerancia a la insuficiencia renal indica su ca-
rácter agudo o crónico. Las formas agudas en ge-
neral son más sintomáticas que las formas de más
larga evolución o crónicas. Es importante valorar la
impresión subjetiva de gravedad por parte del médi-
co ya que muchas nefropatías, incluso en situación
terminal, pueden debutar de forma insidiosa (aste-
nia, anorexia, pérdida de peso, cambio de carácter,
insomnio).

CONSTANTES VITALES
PRESIÓN ARTERIAL
La medida de la presión arterial es muy importan-
te en los pacientes con enfermedad renal. Se debe
medir la presión arterial en dos posturas (decúbito
y sentado), anotando si existen diferencias. La pre-
sión arterial elevada (superior a 130/85 mm Hg) es
468 común en la mayoría de las nefropatías crónicas. En
CAPÍTULO 55 Exploración física en patología genitourinaria

las nefropatías agudas también puede aparecer hiper-


tensión, por sobrecarga hidrosalina o secundaria a la
enfermedad causal.
La hipotensión, en principio, debe orientar hacia
la contracción de volumen intravascular. La disminu-
ción de las cifras de presión arterial con respecto a
tomas previas o la diferencia de valores entre la posi-
ción supina y sentada (más de 10 mm Hg) orientan ha-
cia depleción hidrosalina. Algunas nefropatías tubu-
lointersticiales crónicas que causan pérdidas renales
de agua y sal pueden cursar también con hipotensión.
Figura Lesiones cutáneas en paciente con púr-
PULSO ARTERIAL pura de Schonlein-Henoch.

Hay que documentar la frecuencia cardiaca perifé-


rica, sus características y su ritmo. La taquicardia La aparición de livedo reticularis orienta hacia en-
acompaña a depleción hidrosalina, con frecuencia fermedad ateroembólica, síndrome antifosfolípido y
asociada a nefropatías, fiebre, anemia, hipertiroidis- algunas vasculitis. La presencia de tatuajes y secue-
mo e insuficiencia cardiaca. La bradicardia puede es- las de punciones venosas repetidas hacen pensar en
tar originada por hiperpotasemia tóxica o por bloqueo la presencia de infección por virus de hepatitis B, C
auriculoventricular. o VIH, que pueden asociarse a enfermedad renal. La
aparición de lesiones purpúricas en los dedos de los
FRECUENCIA RESPIRATORIA pies, con pulsos pedios normales, son características
ateroembólica purple toes (Fig. 55-2).
Puede estar elevada en la insuficiencia cardiaca iz-
La piel de un paciente con uremia crónica es seca,
quierda y el edema pulmonar, por retención hidro-
escamosa y pálida pajiza (por la anemia y acúmulo
salina o por la crisis hipertensivas. También hay ta-
de urocromos). En ocasiones hay equimosis, púrpura
quipnea en la acidosis metabólica con hiperventila-
o hematomas, así como lesiones de rascado por pru-
ción compensadora (respiración de Kussmaul).
rito. En casos de insuficiencia renal crónica evolucio-
nada pueden aparecer nódulos subcutáneos y úlceras
TEMPERATURA en partes distales por calcificaciones distróficas (de-
La fiebre aparece en procesos inflamatorios o infec- nominadas calcifilaxas) causadas por un hiperparati-
ciosos que pueden estar asociados a enfermedades roidismo terciario (Fig. 55-3). La presencia de estrías
renales. transversales en las uñas (líneas de Beau) pueden
indicar una enfermedad crónica grave o desnutrición.
Las hemorragias en astilla en los lechos ungueales su-
PESO Y TALLA gieren vasculitis o endocarditis . En la enfermedad de
Fabry se pueden visualizar pequeñas pápulas híper-
El peso y la talla permiten calcular el índice de masa queratósicas (angioqueratomas) de color rojo oscuro
corporal [peso (en kg)/talla (en m 2 )] y la superficie cor- en la piel, preferentemente en el área periumbilical.
poral. En situaciones de retención hidrosalina (síndro-
me nefrótico, síndrome nefrítico e insuficiencia renal
aguda o crónica) la ganancia de peso indica el grado
de retención de líquidos. En niños y adolescentes con
tubulopatías o insuficiencia renal crónica suele haber
retraso en el crecimiento y signos de raquitismo.

PIEL Y ANEJOS
En los pacientes deshidratados la piel se torna laxa y
aparece el denominado «signo del pliegue», que con-
siste en la persistencia del pliegue cutáneo después
de pellizcar la piel. La aparición de un exantema
en presencia de insuficiencia renal aguda no filiada
orienta hacia una nefritis intersticial inmunoalérgi-
ca, sobre todo si hay antecedentes de administración
reciente de fármacos. La presencia de púrpura pal-
pable en miembros inferiores y en partes declives es Figura «Purple toes» en un paciente con enfer- ~
típica de la vasculitis leucocitoclástica (Fig. 55-1). medad ateroembólica.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Figura Placa de calcifi laxis ulcerada con fondo Figura Examen del fondo de ojo en un paciente
necrótico en zona posterior de la pierna en un pacien- con hipertensión maligna (retinopatía hipertensiva gra-
te con enfermedad renal crónica en hemodiálisis. do IV con hemorragias, exudados y edema de papila).

Estos pacientes desarrollan insuficiencia renal por el dados algodonosos y en casos evolucionados edema
depósito tubular y glomerular de glucoesfingolípidos. de papila (Fig. 55-4). La retinopatía diabética consiste
en microaneurismas capilares que se observan como
CABEZA pequeñas manchas de color rojo alrededor de la mácu-
la, así como hemorragias puntiformes y exudados de
OJOS aspecto céreo; en la fase proliferativa se observan ca-
pilares neoformados en el humor vítreo, que pueden
El examen de los ojos aporta numerosos datos en los sangrar y provocar amaurosis. No es infrecuente que
pacientes con nefropatía. Pueden aparecer depósitos aparezca desprendin1iento de retina. También pueden
amarillentos de calcio en la esclerótica causados por observarse hemorragias y exudados en trastornos vas-
hiperparatiroidismo renal terciario. Unas líneas cur- culares como el lupus eritematoso sistémico (cuerpos
vas y delgadas de color blanco, por dentro de la unión citoides) y en la panarteritis nodosa.
esclerocorneal revelan la presencia de calcificaciones
perilimbales también causadas por hiperparatiroidis-
mo; estas líneas deben distinguirse del arco senil, que OÍDOS
es más ancho en el borde de la córnea y más notable en
La pérdida de audición se observa en el síndrome de
la parte superior e inferior. Los pacientes con vasculi- Alport, donde la hipoacusia es de percepción y afecta
tis pueden tener hemorragias subconjuntivales. El len- preferentemente a los sonidos de alta frecuencia. Los
ticono (deformidad del cristalino) y otras alteraciones
pacientes renales pueden presentar hipoacusia cuando
de la cámara anterior orientan hacia nefropatías here- precisan dosis elevadas de furosemida (ototoxicidad).
ditarias (síndrome de Alport, Marfan). No obstante, la
mayoría de estas alteraciones sólo se aprecian con la
lámpara de hendidura. Las cataratas son frecuentes CARA, BOCA Y GARGANTA
tras tratamientos con glucocorticoides y en diabéticos.
La hipertensión y la diabetes mellitus, factores El aspecto facial puede sugerir ciertas enfermedades,
asociados al desarrollo de nefropatías vasculares, como la esclerodermia, donde hay engrosan1iento y
inducen lesiones en la retina . El examen del fondo rigidez de la piel y telangiectasias múltiples. Estos pa-
de ojo con oftalmoscopio directo en estos pacientes cientes pueden presentar crisis renales caracterizadas
es de gran utilidad en la orientación diagnóstica. La por HTA grave y fracaso renal agudo. El tratamiento
retinopatía hipertensiva se caracteriza por estrecha- con esteroides favorece la típica facies cushingoide
miento generalizado de las arterias, ingurgitación (cara redondeada, como de «luna llena »). El examen
venosa, signos de cruce arteriovenoso (indentación o de la boca es importante para documentar el estado de
deflexión de las venas cuando se cruzan con las arte- la lengua, del paladar y de las encías, así como inves-
470 rias), afilamiento vascular, hemorragias en llama, exu-
tigar la presencia de úlceras (aftas) por vasculitis o Ju-
CAPÍTULO 55 Exploración física en patología genitourinaria

pus. Es importante destacar si existe faringoamigdali- así como cicatrices de laparotomía, por las im-
tis , en ocasiones asociado a ciertas glomerulonefritis. plicaciones que tienen a la hora de determinados
La sequedad de la mucosa oral aparece en estados de tratamientos como la diálisis peritoneal.
deshidratación y en situaciones de hiperventilación. La palpación bimanual de los riñones se hace
con el enfermo en decúbito supino, pidiendo
CUELLO que relaje la parte anterior del abdomen y res-
pire profundamente a intervalos regulares , con
Se debe valorar la presencia de bocio, presión venosa la cabeza apoyada en la almohada y los brazos
yugular y soplos carotídeos. descansando en la cama. Para palpar el riñón iz-
quierdo se coloca la mano derecha en la pared
TÓRAX anterior del abdomen en el flanco de ese lado,
con la punta de los dedos dirigida hacia la ar-
CORAZÓN cada costal, mientras que la mano izquierda se
coloca atrás, en la región lumbar del mismo lado;
La palpación de la punta cardiaca puede sugerir hiper- al mismo tiempo se presiona la mano izquierda
trofia cardiaca, generalmente asociada a hipertensión hacia arriba y la mano derecha hacia dentro pre-
arterial. En la auscultación, hay que buscar soplos pa- tendiendo que contacten (Fig. 55-5A). En condi-
tológicos sugerentes de valvulopatías o endocarditis, ciones normales el riñón izquierdo no se palpa y
que pueden ser causa de embolismo renal. La anemia puede confundirse con el bazo. La palpación del
es causa de soplos funcionales. La auscultación es riñón derecho es semejante al procedimiento del
muy útil para detectar roce pericárdico presente en riñón izquierdo, colocando la mano derecha en
las pericarditis y/o derrame pericárdico que aparece la parte anterior de la pared abdominal y la mano
en LES, vasculitis y uremia evolucionada. Finalmente izquierda en la porción posterior, en la región
hay que explorar la frecuencia central y si los tonos lumbar (Fig. 55-5B). El polo inferior del riñón
son rítmicos o no, y en este último caso valorar si exis- derecho , a diferencia del izquierdo, puede ser
te fibrilación auricular, que puede causar dolor lum- palpable durante la inspiración en sujetos delga-
bar agudo y hematuria por embolismo renal. dos y con el abdomen relajado. Si mediante estos
procedimientos palpamos con claridad una masa
podría tratarse de: riñón desplazado (o ptósico),
PULMÓN Y PLEURA
riñón ectópico, tumor renal o poliquistosis renal.
La auscultación pulmonar puede revelar la presencia Si la masa pertenece al riñón o está adherida a
de crepitantes, sugerente de edema pulmonar por so- él, se aprecia el denominado «peloteo lumbar»,
brecarga hidrosalina. La auscultación también puede que consiste en que cuando la mano abdominal
revelar roce pleural (pericarditis urémica) o semiolo- empuja la masa hacia detrás , la otra mano perci-
gía de derrame pleural (por insuficiencia cardiaca). be el impulso. La palpación dolorosa del borde
externo del recto mayor es típica de lesiones ure-
terales. La palpación renal indica casi siempre
ABDOMEN patología: hidronefrosis, quistes o tumores. La
En la inspección del abdomen hay que buscar superficie renal de contornos lobulados es muy
la presencia de hernias umbilicales o inguinales característica de los riñones poliquísticos.

Figura A) Palpación del riñón izq ui erdo; B) Palpación del riñón derecho.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

La percusión carece de interés en el paciente re-


nal con excepción de una maniobra muy útil, la
puñopercusión renal (o lumbar) que es dolorosa
en el riñón con pielonefritis aguda. Se realiza
suavemente, golpeando con el puño cerrado am-
bas fosas lumbares.
La auscultación debe buscar soplos en la zona
periumbilical, en los hipocondrios y también en
las regiones lumbares , presionado con firmeza
el diafragma del estetoscopio; para escucharlos
adecuadamente es importante que el paciente
contenga la respiración. Los soplos abdomina-
les, sobre todo en personas delgadas, pueden no
ser patológicos. Otras veces, son la expresión de
una estenosis de la arteria renal (uni o bilateral)
o de una ateromatosis aórtica evolucionada. La Figura Edema en reg ión pretibial que deja fó-
auscultación abdominal es obligada en pacientes vea en paciente con síndrome nefrótico.
con antecedentes de biopsia renal ante la posi-
bilidad de fístula arteriovenosa como complica-
ción de la punción.
APARATO LOCOMOTOR Y EXTREMIDADES
En la exploración articular la presencia de líquido
intraarticular, signos inflamatorios, deformidades
APARATO URINARIO INFERIOR y limitación de la movilidad. La presencia de tofos
Y GENITALES indica una alteración del metabolismo del ácido úri-
co. El raquitismo renal puede causar deformidad en
La valoración de la vejiga se hace por inspección y valgo o en varo de las rodillas, tumefacción de las
palpación del hipogastrio. En condiciones normales articulaciones costocondrales («rosario raquítico») y
la vejiga no es palpable. En pacientes delgados puede debilidad de los músculos proximales por la presen-
verse la vejiga distendida si presentan una obstruc- cia de miopatía.
ción baja. Cuando contiene orina y el enfermo no Los edemas son frecuentes en muchas enfermeda-
la puede eliminar puede palparse una masa oval de des renales. El edema es una manifestación clave del
superficie lisa en la región suprapúbica, pudiendo síndrome nefrótico, pero puede aparecer en el nefríti-
llegar hasta el ombligo, con bordes inferiores mal de- co, insuficiencia renal aguda o crónica, insuficiencia
limitados («globo vesical»}, lo que se confirma con la cardiaca y hepatopatías descompensadas.
percusión. La palpación de pulsos arteriales informa acerca
En hombres , el tacto rectal permite explorar la de la presencia de arteriosclerosis, complicación que
próstata y las vesículas seminales. La próstata se pal- aparece en el transcurso de la insuficiencia renal cró-
pa en la pared anterior del recto y, en condiciones nica y en la arteriopatía diabética.
normales , es indolora, de consistencia elástica y su-
perficie lisa, formada por dos lóbulos casi planos y
separados por un surco medio y de bordes laterales SISTEMA NERVIOSO
netos. Por encima y por fuera de la base prostática, Las manifestaciones de la encefalopatía urémica con-
el tacto rectal combinado con el hipogástrico permite sisten en irritabilidad y cambio de carácter, seguido
la búsqueda de las vesículas seminales, que normal- de asterixis, depresión, pérdida de memoria, deterio-
mente no son palpables si no existe un proceso in- ro del nivel de consciencia y coma. También pueden
flan1atorio. La hipertrofia prostática es frecuente en aparecer contracciones esporádicas de las extremida-
edades avanzadas y puede ser la causa de un empeo- des (mioclonías), así como calambres musculares ori-
ramiento de la función renal; la presencia de nódulos ginados por la uremia o las alteraciones electrolíticas.
de consistencia pétrea sugiere un carcinoma. Es con- Algunos pacientes con enfermedad renal crónica o
veniente examinar el meato uretral y el glande, pal- avanzada tienen una necesidad incontrolable de mo-
pando a continuación la uretra peneana para buscar ver continuamente sus piernas («piernas inquietas»),
la aparición de secreciones anormales. así como sensación de «pies calientes» que revelan
La exploración ginecológica debe ser completa y la existencia de neuropatía urémica evolucionada. La
en ocasiones pueden revelar una «pelvis congelada» presencia de disartria, mioclonías y demencia, en un
por procesos tumorales infiltrantes. Los caracteres paciente dializado, orientan hacia una intoxicación
sexuales secundarios deben ser explorados, ya que por aluminio en el líquido de diálisis. La neuropatía
la insuficiencia renal crónica retrasa la pubertad. El autonómica es especialmente manifiesta en la diabe-
edema en genitales (escroto) puede ser una manifes- tes mellitus evolucionada, con microangiopatía en
472 tación más de anasarca. otras localizaciones.
-156
Exploraciones
complementarias
en el diagnóstico
de las afecciones renales
y de las vías urinarias:
semiología de la orina
Víctor M. Valverde Contreras, Jaime Merino Sánchez

CÓMO ESTUDIAR UN PROBLEMA RENAL


Una anmnesis detallada y una exploración física cui-
dadosa son el punto de partida para orientar la selec-
ción de las pruebas a emplear para estudiar un pro-
blema renal. La utilización jerarquizada de estos re-
cursos proporcionará información sobre la existencia
de alteraciones funcionales o estructurales, el grado
de repercusión local o sistémica del proceso, definir
si es de carácter agudo o crónico y su pronóstico y
tratamiento.

ANÁLISIS DE LA ORINA
La orina es el resultado del procesamiento renal de
un gran volumen de plasma, que es depurado de
muchas sustancias. El riñón filtra alrededor de 125
mililitros de plasma por minuto (180 1/día) de los
que reabsorbe el 99 % , eliminando tan solo un ml/
minuto (1,5 1/día) de volumen concentrado con todas
las sustancias de desecho, que constituye la orina. El
análisis de la orina debe realizarse rutinariamente
en cualquier paciente, recogiendo orina a mitad de
micción. Es siempre preferible la primera muestra
de la mañana. El sondaje vesical y la punción supra-
púbica se reservan para situaciones especiales. La
muestra se analizará en un plazo inferior a dos horas
para impedir la colonización bacteriana, cambios de
pH o degradación de células y cilindros. Los princi-
473
pales hallazgos son:
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

COLOR Y ASPECTO DENSIDAD/OSMOLARIDAD


La orina es clara. Dependiendo de su concentración La densidad refleja el peso de los solutos disueltos .
variará de transparente o ligeramente amarillenta (di- La densidad de la orina es el peso de 1 ml de esta
luida) a marrón oscuro (muy concentrada). La turbi- comparada con 1 ml de agua·. La osmolaridad expresa
dez indica la presencia de células o cristales. Ciertos el número de partículas de soluto (osmoles) que con-
medicamentos o colorantes pueden alterar su colora- tiene este líquido por kilo de agua. Aunque la densi-
ción. Algunos de ellos tienen especial interés semio- dad puede medirse con tira reactiva, normalmente se
lógico (Tabla 56-1). hace con un urinómetro o refractómetro. La osmolari-
dad se mide con un osmómetro. Es preferible medir la
osmolaridad, ya que la densidad puede estar elevada
OLOR por la presencia de sustancias que no aumentan la
osmolaridad como glucosa, proteínas, contrastes yo-
La orina tiene un olor característico. Un olor intenso dados, etcétera.
a amoníaco sugiere infección por gérmenes capaces
Una osmolaridad superior a 800 miliosmoles (den-
de fermentar la urea produciendo amoníaco (bacte-
sidad 1020) indica una capacidad de concentración
rias ureasa positivas) y a acetona si estos compuestos
urinaria normal. La capacidad del riñón para concen-
están presentes, por ejemplo, en la descompensación
trar la orina tras una restricción acuosa o para diluirla
diabética.
tras una sobrecarga líquida se denomina estenuria.
Esta capacidad se altera en las nefropatías que afectan
al túbulo o al intersticio o si hay alteración en la pro-
VOLUMEN ducción de ADH o en la respuesta del túbulo a ella.
Se valora en un periodo de tiempo determinado (vo-
lumen recogido en 12 o 24 horas) . En un individuo
sano la diuresis diaria oscila entre 700 y 2500 ml, con PH
mayor cantidad durante el día que por la noche. Por la orina se eliminan cada día entre 50 y 100 mEq
de ácidos no volátiles resultantes del catabolismo,
fundamentalmente de las proteínas. La orina normal
es ligeramente ácida, pero su pH flu ctúa entre 4,5
Tabla Cambios en el color y 8. Las carnes la acidifican y los vegetales la alcali-
de la orina de interés semiológico nizan. Una muestra con un pH menor de 5,2 implica
una correcta capacidad de acidificación. En muestras
Color Patogenia probable dejadas largo tiempo a temperatura ambiente el pH
aumenta por la ureólisis inducida por la coloniza-
Amarillo Orinas concentradas
ción bacteriana. El pH de la orina se mide con tiras
Bilirrubina directa reactivas que al introducirse en ella cambian de
Tetraciclinas color; el cambio se compara con una tabla de color.
Rosado-rojizo Hematuria, hemoglobinuria También es posible medirlo con un aparato específi-
Porfirinas, rifampicina, co (pHmetro).
Anilinas En la acidosis metabólica, tras sobrecargas ácidas
Rojo congo, fenolflale ína (administración de cloruro amónico) o tras grandes
pérdidas alcalinas (diarrea) el pH baja. La orina tien-
Naranja Bilirrubina, piridina de a ser alcalina en las alcalosis respiratorias, tras la
Derivados del sen ingesta de bicarbonato, después de vómitos abu n -
Marrón Metahemoglobinemia dantes y cuando contiene gérmenes que desdoblan la
Bilirrubina, nitrofurantoína urea y generan amoníaco.
Pigmentos biliares
Pardo-negro Melanina PROTEINURIA
Ácido homogentísico
Verdoso-azulado Azul de metileno CONCEPTO
Blanquecino- Quiluria Se define como la presencia en la orina de cantidades
lechosa Piuria intensa patológicas de proteínas plasmáticas. Normalmente
puede haber hasta 150 mg/día de proteínas, de las
Incolora Poliuria que entre 10 y 15 mg son de albúmina, entre 40 y 50
Diuréticos en dosis altas mg de proteína tubular (proteína de Tamm-Horsfall)
474
y el resto otras proteínas de bajo peso molecular. La
proteinuria se cuantifica en mg/1 y se valora en mg/
CAPITULO 56 Exploraciones complementarias: semiolog ía de la orina

día, para lo cual es necesario conocer el volumen uri- este pH hace cambiar el color del indicador. Esta
nario. es una evaluación semicuantitativa. Las tiras son
La proteinuria se determina fácilmente con tiras muy sensibles a la albúmina. Aparecen falsos
impregnadas con azul de tetrabromofenol. El límite positivos en orinas muy alcalinas, concentradas
inferior de su sensibilidad está alrededor de 300 mg/1; o que contienen metabolitos de ciertos fármacos,
por ello la determinación de proteinuria con tira reac- y falsos negativos cuando existe proteinunia de
tiva en una orina normal debe ser negativa. Pueden cadenas ligeras.
darse falsos positivos con orinas muy alcalinas o Las muestras positivas deben confi rmarse y
concentradas, y falsos negativos con la presencia de cuantificarse . Para ello suele usarse el ácido sul-
proteinuria de cadenas ligeras de inmunoglobulinas fosalicílico, que es otro método semicuantitati-
(Bence-Jones). Las muestras positivas deberán ser vo pero más sensible porque precipita todas las
confirmadas con métodos de cuantificación como el proteínas. A 2 mi de orina se agregan 10 gotas
ácido sulfosalicílico (SSA) . del ácido al 20 % , y en presencia de proteínas
La eliminación de cantidades muy pequeñas de se forma un precipitado blanquecino, cuya tur-
albúmina, denominada microalbuminuria (30-300 bidez es proporcional a su contenido en ellas. Es
mgldía}, no es detectable con tiras reactivas ni con el un método sensible y exacto, pero con especifi-
ácido sulfosalicílico; se detecta mediante tiras reacti- cidad limitada. Puede haber falsos positivos con
vas específicas o por radioinmunoanálisis. La detec- fármacos como las sulfonamidas y la penicilina
ción de la microalbuninuria es un marcador precoz o los contrastes yodados.
de afectación renal en la diabetes o la hipertensión Para cuantificar la proteinuria se utilizan méto-
arterial y de lesión vascular (disfunción endotelial). dos espectrofotométricos basados en la reacción
La microalbuminuria debe confirmarse en tres deter- del biuret, la nefelometría y otros. La proteinu-
minaciones a días separados. Más de 300 mg/día se ria se expresa en gramos/24 h . La determinación
interpretan como proteinuria (o macroalbuminuria) y de proteinuria en orina de 24 h es el método de
más de 3,5 g/d definen la proteinuria en rango ne.Eró- elección para cuantificarla, pero para cribaje y
tico. evitar errores en la recogida de la muestra se usa,
como alternativa, el cociente mg de albumina/g
de creatinina en una muestra, preferentemente
PATOGENIA de la mañana. Valores mayores de 300 mg/g indi-
La barrera de filtración glomerular evita que las pro- can macroalbuminuria (proteinuria).
teínas del plasma pasen a la orina. Existe una barrera Para conocer el tipo de proteína que existe en
anatómica constituida por las células endoteliales la orina se usa la electroforesis: se colocan unas
de los capilares glomerulares, que tienen poros de gotas de orina sobre tiras de acetato de celulo-
1000 A y que limitan el paso de moléculas con peso sa y se someten a una corriente eléctrica que las
molecular superior a la albúmina (69 000 dalton); la hace migrar según su carga; se tiñen, y el patrón
membrana basal glomerular, compuesta por tejido de migración se compara con otro de referencia.
conjuntivo y diversos tipos de colágeno; y los podo- La inmunoelectroforesis es un método más so-
citos de las células epiteliales de la cápsula de Bow- fisticado que estudia las proteínas dependiendo
man. Además hay una barrera fisiológica, constituida de su carga y afinidad por diferentes anticuer-
por glucoproteínas aniónicas (sialoproteínas, sulfato pos dirigidos contra antígenos específicos. Suele
de heparán, aminoácidos dicarboxílicos, etc.) consti- utilizarse cuando se sospecha que la proteinuria
tuyentes de la membrana glomerular y que al estar está constituida por inmunoglobulinas, p . ej ., en
cargada negativamente repele a las proteínas anióni- el mieloma múltiple. La presencia de cadenas li-
cas (como la albúmina) que se filtran. Además, los geras de inmunoglobulinas en la orina se detecta
túbulos renales son capaces de reabsorber todas las mediante inmunoelectroforesis y se denomina
proteínas filtradas por el glomérulo siempre que no se proteinuria de Bence-Jones.
supere la capacidad de transporte tubular máximo .

TIPOS DE PROTEINURIA
ESTUDIO DE LA PROTEINURIA
Según su trascendencia, las proteinurias pueden ser
La proteinuria se detecta con tiras reactivas que orgánicas o permanentes y funcionales o intermiten-
cambian de color en contacto con las proteínas.
tes.
Su cuantificación se hace mediante cruces y
según el cambio de color (amarillo = O y verde Las proteinurias funciona les son intermitentes
intenso=++++). La tira está impregnada de una y suelen aparecer en procesos benignos como la
solución indicadora de pH y un amortiguador proteinuria postura], ortostática o lordótica, en
ácido que la mantiene en torno a 3. La capacidad cuya aparición están implicados cambios en la
475
de la albúmina de neutralizar hidrogeniones a hemodinámica renal con aumento de permeabi-
Semiología y fisi opatología de las enfermedades del aparato genitourinario

lidad vascular y que desaparecen con el decúbi- inmunoglobulinas. La selectividad de la protei-


to. También se incluye entre ellas la proteinuria nuria se puede medir mediante el aclaramiento
de grandes esfuerzos que aparece después de separado de la albúmina u otra proteína de peso
ejercicio físico y desaparece con el reposo, y la molecular similar como la transferrina y de una
proteinuria febril. También hay proteinuria fun- proteína de alto peso molecular como la IgG. El
cional en la insuficiencia cardiaca. Todas estas índice de selectividad (IS) de Cameron se expre-
proteinurias son de escasa cantidad y tienen sa mediante la siguiente fórmula: IS = IgG (or) x
buen pronóstico. Transferrina (plasm)/IgG (plasm) x Transferrina
Las proteinurias orgánicas o permanentes apa- (or). Así, una proteinuria será selectiva si tiene
recen en todas las determinaciones e implican un IS< 0,1, siendo proteinurias no selectivas las
patología. que cursan con IS > 0 ,2.
Según su origen, pueden clasificarse en prerrena-
les, renales o postrenales.
ETIOLOGÍA DE LA PROTEINURIA
La proteinuria prerrenal o por sobrecarga filtra-
da aparece cuando existen en el plasma grandes La Tabla 56-2 recoge las principales causas de pro-
cantidades de proteínas de bajo peso molecular, tein uria. El grado menor de proteinuria (inferior a
capaces de ser filtradas por el glomérulo y su- 300 mg/día y superior a 15 0 mg/día) se denomina mi-
perar la capacidad de reabsorción tubular. Suele croalbuminuria. La proteinuria superior a 3,5 g/día
deberse a la excreción de cadenas ligeras de in- se denomina nefrótica y aparece habitualmente jun-
munoglobulinas, como en el mieloma múltiple, to con hipoalbuminemia, hiperlipidemia y edemás
pero también a lisozima en la leucemia mielomo- constituyendo el síndrome nefrótico.
nocitica aguda, a mioglobina en la rabdomiólisis
o a hemoglobina en la hemólisis intravascular.
Hay proteinurias de origen glomerular, cuya ESTUDIO DEL SEDIMENTO URINARIO
presencia implica afectación de la barrera de
El sedimento urinario representa una biopsia exfolia-
filtración y expresa enfermedad glomerular y va
tiva del tracto urinario superior e inferior. El estudio,
acompañada de otras alteraciones urinarias.
para ser representativo, deberá ser estandarizado: re-
La proteinuria de origen tubular aparece en las cogida de orina a mitad de micción, centrifugado de
enfermedades tubulointersticiales en las que el
10/15 ml a 1500/3 000 rpm de 3 a 5 minutos, resus-
túbulo es incapaz de reabsorber todas las proteí- pensión del sedimento en 0,5 ml de orina y observa-
nas filtradas. La proteinunia tubular no suele ser
ción con el microscopio de una gota entre porta y cu-
de gran intensidad(< 2 g/día) y en general está
breobjeto con objetivos de pequeño y gran aumento.
constituida por proteínas de bajo peso molecular
(10 a 40 000 daltons). Un sedimento normal contiene solo algunas cé-
lulas, ocasionalmente algún cilindro hialino , pocos
Proteinurias postrenales. Debe tenerse en cuenta
que procesos inflamatorios, infecciosos, la litia- cristales y escaso material amorfo, y normalmente
sis urinaria y los tumores pueden producir pro- no habrá más de 1 a 3 hematíes/campo (uno a dos
teinuria de escasa cuantía originada en las vías
urinarias (pelvis, uréteres, vejiga).
Es también importante definir el índice de selecti-
vidad de la proteinuria (IS). Tabla Etiología de la proteinuria
Una proteinuria es selectiva cuando solo apa- Glomerular
recen en la orina albúmina o globulinas de bajo Glomerulonefritis primarias
peso molecular. Este tipo de proteinuria está Glomerulonefritis secundarias
causada por pérdida de la carga negativa de la Hipertensión arterial
membrana basal, como sucede en el síndrome Diabetes mellitus
nefrótico por lesión glomerular con cambios mí- Enfermedades por depósito (p. ej. , amilosis)
nimos.
Una proteinuria no selectiva indica la existencia Tubular
de una lesión orgánica intensa de las estructuras Alteraciones tubulares congénitas y
de la barrera de filtración de manera que, junto adquiridas
con la albúmina, pasan a la orina otras proteínas Aumento en la producción de cadenas
plasmáticas de elevado peso molecular. En las ligeras (mieloma)
proteinurias no selectivas, la albúmina represen- Lisozimuria (en leucemias)
ta menos del 85 % de las proteínas urinarias, y Mioglobina o hemoglobina
va acompaña de todas las globulinas del plasma,
476
incluidas las de alto peso molecular, como las
CAPÍTULO 56 Exploraciones complementarias: semiología de la orina

millones de hematíes/ 24 horas). En la h ematuria de tiras reactivas impregnadas con ortotoluidina


origen glomerular los h ematíes aparecen deformados que detectan tanto hematíes como hemoglobina
(dismórficos}, mientras que los originados en las vías o mioglobina. Un resultado positivo debe con-
urinarias conservan su aspecto ovoide habitual. firmarse siempre con el estudio del sedimento
urinario.
La presencia de hemoglobina libre en la orina
HEMATURIA (hemoglobinuria) es consecuencia de una he-
mólisis intravascular con hemoglobinemia. La
CONCEPTO demostración de hemoglobina libre en el plasma
es, en consecuencia, necesaria para confirmar
En condiciones normales la orina puede contener de el diagnóstico. La ruptura de los hematíes que
1-3 hematíes por campo. Valores superiores signifi- pasan por el glomérulo (hemólisis intrarrenal)
can hematuria (presencia de sangre en la orina), que o en la orina (hemólisis urinaria) , produce sólo
debe considerarse patológica. pequeñas cantidades de hemoglobina libre en la
La hematuria puede ser microscópica. En ella la orina y, en la práctica, hemoglobinuria es equiva-
orina es clara y los hematíes se identifican en el aná- lente a hemólisis intravascular con hemoglobina
lisis microscópico. En la hematuria macroscópica la libre en plasma. Las tiras reactivas no distinguen
orina es visiblemente roja y tiene más de 100 hema- entre hematíes, hemoglobina libre y mioglobina
tíes/campo. Para tener un diagnóstico de certeza de (producto de rabdomiólisis) .
hematuria esta puede cuantificarse en relación con el Se debe descartar que la presencia de hematíes
tiempo. Para ello se realiza un recuento de hematíes
en la orina lo sea por contaminación. La causa
con cámara (recuento de Addis}, que se expresa en
más frecuente suele ser la contaminación mens-
hematíes/minuto. Recuentos por encima de 10 000 trual.
hematíes/minuto son siempre diagnósticos de he-
También conviene localizar su origen . La hema-
maturia. Debe excluirse siempre la presencia de sus-
turia puede proceder de cualquier parte del trac-
tancias que tiñan la orina con apariencia de sangre
to urinario, desde el parénquima renal hasta la
(véase Tabla 56-1) y, por supuesto , no confundir la
uretra terminal. La localización de la hemorragia
contaminación urinaria con sangre que proceda de
se debe basar fundamen talmente en la historia
otra fuente , como el sangrado menstrual.
clínica y en las pruebas analíticas y radiológicas.
Cuando la hematuria procede del parénquima
PATOGENIA renal (lo que se denomina hematuria parenqui-
matosa}, es una hematuria total, que dura toda la
La presencia de sangre en la orina puede deberse a: micción y que no tiene coágulos por la presencia
de la urocinasa plasmática. Suele ser marrón o
Aumento de permeabilidad de la membrana
negruzca debido a la oxidación de la hemoglo-
basal glomerular, que favorece el paso de los
bina, y cuando es glomerular suele ir acompa-
hematíes a través de los lechos vasculares. Este
ñada de proteinuria y de cilindros hemáticos.
es el mecanismo de hematuria en las glomerulo-
La hematuria de las vías urinarias suele ser más
nefritis.
abundante que la glomerular y provoca una ori-
Lesión vascular fuera del glomérulo por afecta- na roja , aunque la oxidación de la hemoglobina
ción del aparato urinario con disrupción de la siempre tiende a virar su color a oscuro. En la lo-
mucosa, como infección vesical (cistitis), tuber- calización del origen resulta útil la prueba de los
culosis urinaria, litiasis o tumores. tres vasos: si la hematuria aparece al iniciarse la
Trastornos hemorrágicos por alteraciones de la micción, su origen puede ser uretral; si solo apa-
hemostasia que facilitan la ruptura vascular y el rece al final de la micción, el origen puede ser
paso de los hematíes a la orina. vesical, y si la hematuria es total (durante toda la
micción) puede ser renal , de pelvis o de uréter.
Establecer su causa . Las principales causas de
INTERPRETACIÓN Y VALORACIÓN hematuria se recogen en la Tabla 56-3.
DE UNA HEMATURIA
Importancia. La importancia de la hematuria n_o
Ante una hematuria, deben seguirse los siguientes
deriva solo de su cantidad, sino de su causa. Las di-
pasos: a) confirmarla; b) descartar que exista conta-
ferentes causas hacen que curse con diversas mani-
minación; c) localizar su origen, y d) establecer su
festaciones clínicas propias del proceso de base. Es
etiología.
muy importante tener en consideración la edad del
La confirmación de la hematuria supone veri- paciente: en la infancia predominan las infecciones
ficar la presencia de hematíes en el sedimento, urinarias o las glomerulonefritis; en el anciano son
excluyendo otras causas de orina pigmentada más frecuentes la hipertrofia prostática o las neopla-
477
(véase Tabla 56-1). En su detección se emplean sias vesicales. Debe tenerse en cuenta también que la
Semiología y fisi opatología de las enfermedades del aparato genitourinario

inflamatorio del tracto urinario. Sin embargo, leuco-


cituria no es sinónimo de infección: para que lo sea es
Tabla Etiología de la hematuria preciso que los estudios bacteriológicos demuestren
según lugar de origen gérmenes en orina (piuria). La presencia de leucocitos
exige descartar también una contaminación urinaria a
Parénquima renal partir de secreciones vecinas (vaginales).
Enfermedades glomerulares Otras veces pueden verse células epiteliales esca-
Enfermedades vasculares mosas que proceden de las vías urinarias y que no
Alteraciones de la membrana basal tienen significación patológica. Otras células que
glomerular (Alport) pueden detectarse en el sedimento urinario son las
Tumores células malignas, cuando algún tumor urotelial se
Malformaciones vasculares esfacela hacia la orina y eosinófilos en la nefropatía
Traumatismos tubulointersticial alérgica.
Enfermedades qu ísticas Un tipo especial de célula es la llamada de cuerpo
Nefritis intersticial graso oval, que representa células del epitelio tubular
Alteraciones de la coagulación llenas de ésteres de colesterol y que vistas con luz po-
larizada dan imágenes de «cruces de Malta»; apare-
Litiasis
cen en situaciones de proteinuria con lipiduria, como
Pelvis renal y uréteres en el síndrome nefrótico.
Litiasis
Traumatismo
Tumor CILINDROS RENALES
Vejiga
Infección CONCEPTO
Litiasis
Son estructuras alargadas, formadas en las luces
Tumor tubulares, que tienen como matriz la proteína de
Próstata Tamm -Horsfall secretada por las células tubulares y a
Adenoma las que pueden incorporarse diferentes células y com-
Infección ponentes de secreción. Se denominan con arreglo a
Neoplasia su composición y apariencia:
Uretra Cilindros hialinos. Son transparentes y están
Infección constituidos por proteína de Tamm-Horsfall.
Traumatismo Ocasionalmente se ven en orinas normales pue-
den aparecer tan1bién en procesos febriles o des-
ldiopática pués de ejercicio intenso.
Cilindros granulosos . Son cilindros hialinos a
los que se han incorporado inmunoglobulinas,
restos celulares y otras proteínas.
Cilindros granulares finos. Pueden verse en ori-
hematuria, además de ser expresión de un problema nas normales , sobre todo después de hacer ejer-
orgánico, puede complicarse con un cólico nefrítico cicio.
si algún coágulo obstruye la vía excretora, o con h i- Cilindros granulares anchos . Se forman en tú-
povolemia si la pérdida sanguínea es importante, con bulos distales dilatados y aparecen en la orina
anemia ferropénica si el sangrado es reiterado. de pacientes con insuficiencia renal evoluciona-
da.
Cilindros hemáticos. Tienen hematíes incorpo-
LEUCOCITURIA Y PRESENCIA DE OTRAS rados en su matriz o superficie. Son típicos de
CÉLULAS afectación glomerular, pero pueden verse en
nefropatías tubulointersticiales, en hipertensión
CONCEPTO acelerada o en el síndrome urémico hemolítico.
La presencia de cilindros hemáticos es un signo
Los leucocitos se reconocen por su citoplasma granu- patognomónica de hematuria parenquimatosa
lar y su polilobulación. Normalmente no hay más de renal.
1 a 3/campo. Se denomina leucocituria la presencia Cilindros leucocitarios. Son los que contienen
de leucocitos por encima de este valor o cifras ; valo- estas células y se observan en pielonefritis bacte-
res superiores a 5000 leucocitos por minuto; siempre rianas, pero también pueden formarse en nefro-
478
es patológica e implica la existencia de un proceso patías tubulointersticiales.
CAPITULO 56 Exploraciones complementarias: semiología de la orina

Cilindros de células epiteliales tubulares. Apa- glucosuria renal (escape tubular de glucosa con
recen en el curso de la necrosis tubular aguda. glucemia normal).
Cilindros grasos. Están constituidos por células Nitritos: En presencia de infección urinaria, los
tubulares con ésteres de colesterol; se forman en nitratos derivados de la dieta pueden ser con-
el síndrome nefrótico. vertidos en nitritos por bacterias ureolíticas. Los
Cilindros pigmentados. Han incorporado miog- resultados positivos deben ser confirmados con
lobina o hemoglobina a su matriz hialina; apare- sedimento y cultivo de orina.
cen en cuadros de hemólisis intravascular o de Cuerpos cetónicos: Se determinan con tiras reac-
rabdomiólisis. tivas y demuestran la presencia de cetoácidos:
ácido acetoacético y betahidroxibutírico. Su
No es infrecuente que en el sedimento aparezcan presencia indica cetonemia por movilización y
al mismo tiempo diferentes tipos de cilindros: es el consumo excesivo de grasas debido a falta de
denominado sedimento telescopado, que indica que hidratos de carbono. Los cuerpos cetónicos apa-
existe una enfermedad relevante del parénquima re- recen con el ayuno prolongado, con los vómitos
nal como la nefropatía lúpica. importantes y con la cetoacidosis diabética.
Pigmentos biliares : Hacen que la orina sea ama-
CRISTALES URINARIOS rilla o parduzca.
Otros compuestos químicos: Incluyen sodio,
cloro, potasio, calcio, fósforo, magnesio y sus-
CONCEPTO tancias como urea, creatinina, uratos , oxalato y
En la orina pueden observarse cristales de calcio, fos- múltiples fármacos o tóxicos. Su cuantificación
fato y ácido úrico, dependiendo de su concentración tiene gran importancia en el estudio de las diver-
y el pH urinario. Pueden aparecer en el sedimento no sas patologías renales.
por una eliminación aumentada , sino simplemente
por precipitación. Estos cristales pueden hacer que la
orina sea turbia. BACTERIAS: CULTIVO DE ORINA
La muestra de orina debe tomarse de forma correcta
y ser rápidamente procesada ya que en la uretra an-
TIPOS terior hay habitualmente bacterias que pueden mul-
En general tienen poco valor diagnóstico , con excep- tiplicarse en la orina dejada a temperatura ambiente.
ción de los cristales hexagonales de cistina, típicos Después del lavado meticuloso de los genitales ex-
de cistinuria. Los uratos están presentes en forma de ternos, la orina se obtendrá a mitad de micción. La
ácido úrico o de urato de sodio. La precipitación del muestra se transportará al laboratorio sin tardanza o
ácido úrico se facilita en un pH ácido, apareciendo en se almacenará durante el menor tiempo a 4 ºC. La tin-
el sedimento como arenillas rojizas. Son frecuentes ción del sedimento urinario por la técnica de Gram
en pacientes gotosos o en situaciones de metabolismo puede demostrar la existencia de bacterias . Su pre-
aumentado de nucleoproteínas, como leucemias. Los sencia puede ser debida a una contaminación, por lo
oxalatos aparecen unidos a calcio, mientras que los que debe confirmarse mediante el cultivo .
fosfatos suelen precipitar en orinas alcalinas como En la técnica habitual del cultivo, la orina se pone
fosfato amónico o fosfato amonicomagnésico (produ- en un portaobjetos recubierto con medios de cultivo
cidos por infección urinaria por bacterias que desdo- (agar CLED y MacConkey), y es incubada dentro de
blan la urea: Proteus o Pseudomonas). recipientes estériles. En otra modalidad técnica, la
orina se siembra con un asa calibrada en placas de
Petri recubiertas con medio de CLED y MacConkey.
COMPUESTOS QUÍMICOS DE LA ORINA La lectura se realiza a las 24 horas y los resultados son
interpretados con arreglo al crecimiento bacteriano.
Los principales son:
Recuentos de más de 10 5 microorganismos/ml
Glucosa (glucosuria): Para detectarla se usa una indican infección; no obstante, los recuentos infe-
tira reactiva que está impregnada con glucosa riores también deben ser valorados. La presencia de
oxidasa y un colorante indicador; es específi- múltiples microorganismos en la muestra sugiere
ca para la glucosa, por lo que no detecta otros contaminación. Un cultivo positivo en ausencia de
azúcares (pentosa, galactosa o fructosa). Normal- leucocituria deben ser considerado dudoso . Si se sos-
mente el túbulo renal reabsorbe toda la glucosa pecha tuberculosis se deben realizar un mínimo de
filtrada , por lo que su detección con tira reactiva tres cultivos en días consecutivos, con muestras de la
debe ser negativa. En la diabetes mellitus pue- mañana sembradas en medio de Lowenstein-Jensen.
de aparecer glucosuria con niveles plasmáticos Ocasionalmente es posible identificar micobacterias
de glucosa> 180-200 mg/dl. Si las muestras son con tinciones de Ziehl-Neelsen en el sedimento uri-
479
positivas se debe investigar si existe diabetes o nario. La existencia de leucocituria repetida sin in-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

fección demostrada obliga en nuestro medio a excluir polímero de fructosa, cumple estos criterios, pero
una infección tuberculosa. debe ser inyectada por vía intravenosa. El FG medido
Algunas uretritis y prostatitis agudas pueden tener por el C de inulina es de unos 120 ml/minuto por
cultivos negativos. Las manifestaciones clínicas sir- 1,73 m2, y aunque este procedimiento se utiliza en in-
ven de ayuda para establecer el diagnóstico. Así, si vestigación, a nivel clínico el C se calcula utilizando
hay infección del tracto urinario bajo (cistitis, pros- sustancias de origen endógeno, como la creatinina.
tatitis o uretritis), suele existir disuria y urgencia en
la micción. Si la infección es del tracto urinario alto
(pelvis y riñón) suele aparecer fiebre, escalofríos, do- Aclaramiento de creatinina (CCr) como indicador de FG
lor lumbar y afectación general. La creatinina (Cr) deriva de la creatina muscular y
tiende a mantenerse constante en cada individuo
(0,6-1 mg/dl en mujeres y 0,8-1,3 mg/dl en varones).
ESTUDIO DE LA FUNCIÓN RENAL Es filtrada por el glomérulo y secretada en pequeñas
cantidades a nivel tubular, por lo que sobreestima
Se incluyen pruebas que determinan la función de-
FG. Para medir el CCr se determina la Cr en sangre
puradora del riñón , las que valoran su capacidad
y orina y se cuantifica el volumen de orina en un
para la concentración, dilución y acidificación, así
periodo de tiempo, que generalmente es de 24 ho-
como otras funciones tubulares específicas.
ras. Los valores de CCr fluctúan entre 70 y 130 ml/
min para las mujeres , y 75 y 140 ml/min para los
MEDIDA DEL FILTRADO GLOMERULAR (FG) varones. La elevación de Cr en sangre representa, en
consecuencia, una disminución del FG. Debe
Aporta información bastante aproxi- tenerse en cuenta que el FG cambia con
mada de la capacidad del riñón la edad: es inferior al 50 % en los 2
para mantener los líquidos o 3 primeros meses de vida , se
corporales dentro de ran- incrementa progresivamente
gos compatibles con la hasta alcanzar valores nor-
vida. El aclaramiento males al cumplir un año
(C), empleado como y permanece constante
sinónimo de FG, hasta la cuarta década
se define como de la vida, en que
el volumen plas- empieza a dismi-
mático que que- nuir gradualmen-
da libre de una te (1 ml/minuto/
sustancia du- año).
rante un perio- El aclaramien-
do determina- to también pue-
do de tiempo. de medirse con
Así, el cálculo otras sustancias
del C se reali- endógenas como
za midiendo la la urea, sustancia
concentración procedente del ca-
plasmática (P) tabolismo proteico.
y urinaria (U) de Sin embargo, al in-
esa sustancia, y fluir en ella las varia-
conociendo el volu- ciones dietéticas y de
men de orina (V). Es- hidratación, aporta una
quemáticamente, el C se información menos exacta
representa por la ecuación que el CCr.
P x C=V x U Hay fórmulas para calcular el FG
a partir de la Cr, que pueden también dar
de donde puede deducirse que
información aproximada y no requieren reco-
C (ml/min) = V (ml/min) x U (mg/dl)/P (mg/dl) ger la orina de 24 h. Una de las más usadas es la
ecuación de Cockcroft Gault, que permite calcular el
Se expresa en ml/minuto, y su valor se relacio-
C a partir de la Cr. Tiene en cuenta la producción de
na con la superficie corporal de un adulto normal:
Cr en relación al peso, y la menor producción de Cr
1,73 m 2 •
en relación con la edad.
Las sustancias que se emplean para medir el FG
deben ser libremente filtradas por el glomérulo sin (140 - edad en años) x peso en kg
480
sufrir reabsorción o secreción tubular. La inulina, un C (ml/min) = _____7_2_x_C_r-ea-t-in-in_a_ _ __
CAPÍTULO 56 Exploraciones complementarias: semiología de la orina

El valor obtenido se relaciona con la superficie


corporal; en las mujeres hay que multiplicar por 0 ,85
para ajustar a su menor masa muscular.
Otra fórmula para calcular el aclaramiento (C) a
partir de la Cr, albúmina, sexo y raza es la del estudio
americano de Modification of Diet in Renal Disease
(MDRD):
C = 170 x Cr (-0,999) x edad (-0 ,170) x alb (0,318) x
x 0,765 si es mujer o 1,180 si es afroamericano
Ciertas web ofrecen su cálculo inmediato.

BIOPSIA RENAL
Mediante punción percutánea del riñón o a través
de una pequeña intervención quirúrgica puede ob-
Figura Glomérulo. lnmunofluorescencia. De-
tenerse tejido renal para ser sometido a estudio his-
pósito granular lgG.
tológico. Las técnicas deben incluir estudio con mi-
croscopia óptica y tinciones especiales; estudio con
inmun ofluorescencia empleando anticuerpos mar-
cados con contrastes fluorescentes dirigidos contra ciones precisas: la urografía intra venosa (UIV) es útil
inmunoglobulinas, factores del complemento y otros para el estudio de los sistemas colectores y las vías
antígenos y, finalmente, estudio con microscopia urinarias; la ecografía, para el estudio del parénquima
electrónica para detectar anomalías ultraestructurales renal y para descartar obstrucción; la tomografía com-
(Figs. 56-1 y 56-2). putarizada está indicada para el estudio de tumores
La clasificación morfológica de la patología renal renales, traumatismos , etc.
es de gran utilidad, pues aporta información diag-
nóstica y permite adoptar decisiones terapéuticas y
establecer el pronóstico. Las principales indicaciones
RADIOGRAFÍA SIMPLES DE ABDOMEN
y contraindicaciones de la biopsia renal se incluyen La radiografía de abdomen aporta información sobre
en la Tabla 56-4. la situación, el tamaño y la forma de ambos riñones.
En decúbito, el riñón izquierdo está a la altura de la
12.ª costilla, situándose el derecho ligeramente más
EXPLORACIONES RADIOLÓGICAS bajo que el izquierdo. El dián1etro longitudinal es de
Y TÉCNICAS DE IMAGEN unos 11 cm de alto por 6 cm de ancho y 3 cm de gro-
sor. Las diferencias de tamaño mayores de 1,5 cm
La radiología desempeña un papel importante en la
valoración de las enfermedades del riñón y de las vías
urinarias. Cada técnica de imagen tiene unas indica-

Tabla Principales indicaciones


y contraindicaciones de biopsia renal
1nd icaciones Contraindicaciones
Síndrome nefrítico Absolutas
Síndrome nefrótico Alteraciones de la
Anomalías coagulación
persistentes del Infección renal activa
sedimento urinario Hipertensión arterial
Enfermedad no controlada
sistémica con Relativas
repercusión renal Riñón único
Insuficiencia renal funcionante
aguda prolongada Hidronefrosis
Seguimiento del Quistes
trasplante renal (poliquistosis)
Figura Glomérulo normal. Microscopia óptica.
481
Hematoxi lin a eosina.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

entre ambos riñones pueden ser consideradas anor-


males. Con la radiografía simple se puede detectar
la presencia de calcio en los sistemas colectores, el
parénquima renal o la vejiga urinaria.

UROGRAFÍA INTRAVENOSA (UIV)


Se administra por vía intravenosa un contraste yoda-
do, que es concentrado y excretado por los riñones.
Al opacificarse riñones, uréteres y vejiga se obtienen
radiografías secuenciales. Esta prueba aporta no solo
información morfológica, sino tan1bién una evalua-
ción grosera de la función renal. La UIV permite ob-
tener en los tres primeros minutos una imagen ne-
frográfica . Esta fase proporciona la mejor definición Figura Ecografía renal normal. Ver texto.
de las alteraciones del parénquima. La opacificación
renal permite ver el tamaño, contorno, posición de
ambos riñones y áreas no funcionales que pueden ECOGRAFÍA RENAL
corresponder a quistes, neoplasias, abscesos , hema-
tomas , etc. El estudio ultrasonográfico aporta muchas ventajas en
la exploración renal: no requiere contrastes ni radia-
La opacificación debe ser sincrónica y simétrica
ciones ionizantes, no depende del grado de función
en ambos riñones. Con la UIV minutada (se obtienen
renal y permite la introducción de agujas eco dirigidas
placas oada minuto durante los primeros cinco mi-
para biopsias o drenajes. En el riñón se diferencian
nutos) se intenta precisar el momento en el que se
dos áreas ecogénicas distintas: el seno renal, que es
inicia la excreción de contraste por cada riñón. Este
una zona central hiperecogénica y que corresponde
procedimiento puede ser útil para detectar anomalías
al sistema colector, vasos, linfáticos y tejido fibroso y
vasculorrenales. A continuación el medio de contras-
adiposo, y alrededor del mismo el parénquima, que
te va concentrándose en la orina y se inicia el llenado
es hipoecogénico y de superficie lisa. (Fig. 56-3).
del sistema pielocalicial, apareciendo la fase pielográ-
fica . Los cálices presentan aspecto convexo, en forma La ecografía permite examinar las características
de copa, que representa la protrusión de la papila del parénquima y de posibles masas intrarrenales ,
renal. Si trazamos una línea que una los cálices, la de la vía urinaria más alta (. cálices, pelvis y porción
distancia hasta el contorno renal debe ser uniforme. proximal del uréter) y del espacio perirrenal. Existen
Una disminución localizada de esta distancia suge- tres patrones ecográficos principales: el quístico, que
rirá una lesión cicatrizal, mientras que su aumento corresponde a una masa bien delimitada, con ausen-
hará sospechar una masa renal. Esta exploración per- cia de ecos internos y morfología esférica u ovoide; el
mite descubrir malformaciones congénitas del apara- sólido, que normalmente corresponde a una n eopla-
to excretor, localizar una obstrucción y comprobar la sia, y el compuesto, que es un patrón líquido con ecos
dilatación generada por encima del obstáculo, obser- internos, mala delimitación y pared gruesa que se ob-
var la distorsión de los cálices causada por quistes o serva en hematomas, quistes infectados, tumores, etc.
tumores y visualizar cálculos radiopacos o defectos La ecografía tiene un gran valor en el diagnóstico
de repleción debidos a cálculos radiotransparentes , de la obstrucción del tracto urinario, siendo la explo-
neoplasias o coágulos. ración de elección cuando se sospecha. Permite tam-
bién la detección de cálculos, tanto radiopacos como
Además, la UIV permite explorar el trayecto urete-
radiotransparentes.
ral y la vejiga, mostrando cualquier área persistente
de estenosis o de falta de opacificación. El mismo Otra modalidad de técnica exploratoria basada en
contraste se puede aprovechar para examinar la ure- los ultrasonidos es la ecografía Doppler, que permite
tra durante la micción y para determinar la presencia analizar la dirección y velocidad del flujo sanguíneo,
o no de residuo vesical posmiccional (cistouretrogra- y es particularmente útil en la valoración de la pato-
fía miccional de eliminación}. logía vascular renal.
Las principales complicaciones de la UIV son la
reacción alérgica al contraste yodado y la nefropatía TOMOGRAFÍA COMPUTARIZADA (TC)
por contraste con insuficiencia renal aguda. La UIV
está relativamente contraindicada en casos de mielo- Ofrece imágenes de mayor precisión que la ecografía
ma múltiple, insuficiencia renal, diabetes , deshidra- y con la ventaja de poder diferenciar densidades , lo
tación y en el curso del embarazo. La introducción de que permite identificar tejidos específicos. Además,
nuevos medios de contraste no iónicos ha reducido tras la inyección intravenosa de contraste se puede
482
la frecuencia y gravedad de las reacciones adversas. estudiar la vascularización de dichos tejidos . La prin-
CAPÍTULO 56 Exploraciones complementarias: semiología de la orina

ANGIOGRAFÍA RENAL
Incluye tanto la arteriografía como la venografía
renal. El abordaje vascular se realiza mediante pun-
ción percutánea e introducción de catéteres en la luz
vascular. Se utiliza para detectar patología vascular
renal (arteriosclerosis, aneurismas, vasculitis, etc.),
después de traumatismos en los que se sospecha
daño arterial o existe un sangrado importante por el
tracto urinario, así como en la evaluación de masas
renales sospechosas de neoplasia y en el estudio de
determinadas complicaciones vasculares del riñón
trasplantado.
Como alternativa menos invasiva a esta técnica se
utiliza la angiografía digital. Con la angiografía in-
travenosa por sustracción digital (DIVAS) se pueden
obtener imágenes arteriales de gran calidad inyectan-
do pequeñas dosis de contraste por vía venosa. En la
radiología digital la imagen se obtiene por receptores
electrónicos de rayos X que se digitalizan mediante la
Figura TC abdominal con contraste. Corte
computarización de las señales. Las imágenes previas
ax ial que permite v isualizar la fase nefrográfica y las
a la inyección de contraste se sustraen de las poste-
arterias renales.
riores para un mejor contraste de las arterias renales.
Con la venografía renal se consigue la opacifica-
ción del área venosa mediante la inyección directa
cipal indicación de la TC es la detección y análisis de contraste a través de un catéter situado en la vena
de masas renales. Se debe realizar una TC ante toda cava (cavografía) o en las propias venas renales (fle-
masa renal que por ecografía no corresponda a un bografía renal). Esta técnica se utiliza para detectar la
quiste simple. Además, la TC es útil para estudiar la existencia de trombos o de invasión tumoral de las
extensión del carcinoma renal y para valorar procesos venas renales.
retroperitoneales que pueden afectar secundariamen-
te a los riñones y el aparato urinario. La TC también
permite detectar pequeños cálculos radiotransparen- RESONANCIA MAGNÉTICA (RM)
tes (Figs. 56-4 y 56-5).
Se basa en la interacción de los protones de los nú-
La angio-TC estudia la vascularización renal y per- cleos de hidrógeno contenidos en los tejidos orgáni-
mite el diagnóstico de estenosis críticas, aneurismas cos cuando se les somete a un campo magnético y a
y anomalías vasculares congénitas. ondas de radiofrecuencia. Las imágenes se obtienen
La evaluación del espacio pararrenal y perirrenal en función de la diferente densidad de hidrógeno de
se realiza con facilidad mediante TC, lo que puede los tejidos . Permite la valoración de la anatomía re-
ser de importancia en procesos inflamatorios (pione- nal y tiene las mismas indicaciones que la TC, con
frosis, abscesos perirrenales) y en traumatismos (he- algunas ventajas sobre ella: permite una correcta vi-
matoma subcapsular). El retroperitoneo, que incluye sualización de los vasos renales, aporta información
la glándula suprarrenal, también puede ser adecua- sobre la composición química de algunos tejidos y
damente valorado con TC, siendo posible visualizar evita el empleo de contraste IV no se irradia al pa-
tumores suprarrenales de tamaño superior a 1 cm. ciente.
Con la RM es posible el estudio de los vasos rena-
les empleando gadolinio como contraste (angio-RM)
(Figs. 56-6 y 56-7).

EXPLORACIONES ISOTÓPICAS
Mediante la inyección intravenosa de radioisóto -
pos se puede visualizar la morfología del riñón y
del aparato excretor, y obtener información acerca
de la función renal. Según el isótopo administrado
se pueden obtener datos sobre filtración glomerular
(DTPA, EDTA), flujo renal (PAH, OIH) o anatomía re-
Figura TC. Corte coronal. 483
nal (DMSA, CHA). Así, se usan:
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Figura Angio-RM. En el corte corona l de la Figura Angio- RM. Estructu ras vascu lares, pe l-
imagen se puede identificar el parénquima rena l (en v is renal y porció n proxi mal de uréteres. Se obse rva n
fase nefrográfica). además los gra ndes vasos como aorta abdo m inal e
i líacas .

Renograma isotópico Para detectar procesos inflamatorios se utiliza el


Es un registro temporal de la radiactividad acumu- citrato de Ga 67 • Su utilidad se relaciona con su acu-
lada en el riñón tras la inyección de un radioisótopo mulación en áreas de inflamación, siendo útil en la
de eliminación renal (ortoyodohipurato marcado con localización de abscesos. Las técnicas isotópicas con
1131 ). La curva obtenida muestra la relación entre la leucocitos marcados permiten evaluar las complica-
cantidad de isótopo que llega a través de la arteria ciones que pueden aparecer en el injerto renal.
renal y la cantidad excretada por la vía urinaria. Se
han descrito curvas características para los procesos
obstructivos que permiten distinguirlos de los paren- EXPLORACIÓN RETRÓGRADA DE LA VÍA
quimatosos. Está indicado principalmente en la sos- URINARIA
pecha de estenosis de la arteria renal y en las obstruc-
En la cistouretrografía retrógrada se inserta un ca-
ciones de la vía urinaria.
téter en el meato uretral y se inyecta contraste para
opacificar la uretra anterior. Después se puede intro-
Gammagrafía renal
ducir el catéter hasta la vejiga inyectando contraste
Proporciona una imagen de los riñones y las vías hasta que esta se distiende, y mediante radiografías
urinarias que permite estudiar la perfusión renal, la se pueden apreciar anomalías del contorno o defectos
acumulación en el parénquima y la excreción urina- de repleción.
ria de forma secuencial. Se utilizan el glucoheptonato Para investigar la presencia de reflujo vesicourete-
(GHA) , la dimetilenetiamina (DTPA) y el dimercapto- ral se le indica al paciente que orine, tomando placas
succinato (DMSA) marcados con Tc 99111 • de la vejiga, uréteres y uretra durante la micción (cis-
touretrografía miccional).
Angi ogammagrafía renal Una prueba con pocas indicaciones y no exenta de
Nos da una imagen de la aorta renal y del tronco prin- riesgos es la pielografía ascendente, en la que, por
cipal de las arterias renales tras la inyección de per- medio de un cistoscopio cateteriza el meato ureteral
tenectato marcado con Tc 99111 • Dada su baja resolución introduciendo contraste, lo que permite visualizar el
solo se emplea ante la sospecha de oclusión aguda uréter, la pelvis renal y el sistema colector. Se utiliza
de la arteria renal y en el seguimiento de la cirugía para descartar obstrucción o para definir la causa de
vascular del riñón y del trasplante renal. la misma.
·157
Patología general
de las enfermedades
glomerulares del riñón
Alberto Ortiz Arduán, Francisco Rivera Hernández

RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL:
FISIOLOGÍA GLOMERULAR
El glomérulo es la parte de la unidad funcional del
riñón (nefrona) donde se produce el filtrado glomeru-
lar. El glomérulo es un vaso especializado formado
básicamente por un ovillo de capilares interpuesto
entre las arteriolas aferente y eferente y articulado
sobre un eje central formado por el mesangio (Fig.
57-lA).
El mesangio contiene células mesangiales, con ca-
pacidad contráctil similar a las células musculares
lisas vasculares (en este sentido el capilar glomerular
podría ser considerado una arteriola) inmersas en la
matriz extracelular mesangial.
La barrera de filtración glomerular se interpone
entre la luz vascular y el espacio urinario y se com-
pone de: a) células endoteliales fenestradas; b) mem-
brana basal glomerular (MBG), y c) células epiteliales
(podocitos) adheridas a la MBG por prolongaciones
de su citoplasma (pedicelos). A su vez, la MBG consta
de lámina rara interna, lámina densa y lámina rara
externa. La barrera de filtración glomerular limita el
paso de solutos por tamaño, forma y carga eléctrica,
por lo que el ultrafiltrado del plasma resultante ape-
nas contiene albúmina u otras proteínas y no contie-
ne células sanguíneas. La barrera de filtración tiene
glicoproteínas aniónicas cargadas negativamente, lo
que limita la filtración de moléculas con una carga
negativa, como la albúmina.

NEFROPATÍAS GLOMERULARES:
CLASIFICACIÓN
Las nefropatías glomerulares son un grupo heterogé-
neo de entidades caracterizadas por alteraciones de
la función o de la estructura del ovillo glomerular.
Se clasifican en primarias, cuando hay una enferme-
485
dad aislada del glomérulo y secundarias o sistémicas
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

A Espacio urinario

Mesangio y célula
MBG mesa ngial
Capilar glo merular

Glomérulo normal

B e

Nefropatía de cambios mínimos


GN mesangial GN con semilunas -
proliferativa extracapilar

Glomeruloesclerosis focal Nefropatía membranosa GN aguda postinfecciosa - GN mesangiocapilar


y segmentaría proliferativa endocapilar (membranoproliferativa)

D Mesangial
Pedicelos del podocito

Subendotelial Subepitelial lineal en la MBG

MBG ~ ~
Endotelio fenestrado

Figura Estructura del gloméru lo sano y en diversas nefropatías glomeru lares. A) Morfología del ovi ll o
glomeru lar normal. Corte transversal ele un gloméru lo. B) Nefropatías glomeru lares no proliferativas, que cursan
con síndrome nefrótico. En la nefropatía de cambios mínimos los glomérulos son normales en microscopio óp-
tico. La glomeruloesclerosis focal y segmentaría se caracter iza por la presencia en algunos gloméru los de zonas
del glomérulo esclerosadas. La nefropatía membranosa se caracteriza por engrosamiento de la membrana ba-
sa l glomeru lar (MBG) como consecuenc ia del depósito subepite li al ele inmunocomplejos. C) Glomerulonefritis
proliferativas que cursan con hematuria, síndrome nefrítico o glomerulonefritis rápidamente progresiva. En la
glomerulonefritis mesangial existe un aumento del número de células mesangiales y ele la matriz asociado a de-
pósitos mesangiales que son de lgA en el caso ele la nefropatía lgA. La glomerulonefritis proliferativa extracapilar
se caracteriza por la presencia ele semilunas ce lul ares o fibrosas en el espacio urinario, que comprimen el ovillo
capi lar. La glomerulonefritis proliferativa endocapilar postinfecciosa se caracteriza por un infiltrado masivo por
neutrófilos. En la glomerulonefritis mesangiocapilar hay un aumento del número de células mesangiales y un
engrosamiento ele la pared capilar. D) Distintos patrones de depósitos inmun es en el gloméru lo.
486
CAPÍTULO 57 Patología general de las enfermedades glomerulares del riñón

cuando la afectación acontece en el contexto de una


enfermedad generalizada. La mayoría de las nefropa-
tías glomerulares primarias son de origen inmunoló- Tabla Clasificación histológica
gico y muchas cursan con inflamación glomerular, de las principales glomerulonefritis
por lo que se denominan glomerulonefritis (GN). El (GN) primarias
daño glomerular secundario, en el seno de una enfer-
medad sistémica, como la diabetes o la hipertensión, Nefropatías no proliferativas
suele cursar sin inflamación ni depósitos inmunes Cambios mínimos
glomerulares. Glomeruloesclerosis focal y segmentaría
A pesar de estas diversas etiologías, la traducción Nefropatía membranosa
clínica de las nefropatías glomerulares tiene un reper-
torio relativamente limitado, por lo que con frecuen- Nefropatías prol iterativas
cia es preciso realizar una biopsia renal para llegar al GN aguda postinfecciosa (proliferativa
diagnóstico de la patología causante del síndrome clí- endocapilar)
nico. Una clasificación clásica de las glomerulone- GN mesangial lgA (proliferativa mesangial)
fritis las divide en proliferativas y no proliferativas. GN mesangiocapilar
En las glomerulonefritis no proliferativas el número GN con semilunas (proliferativa extracapilar)
de células glomerulares es esencialmente normal
(Fig. 57-lB). Las glomerulonefritis proliferativas son
aquellas en las que existe un incremento en núme-
ro de células, tanto inflamatorias como glomerulares
(Fig. 57-lC).
La clasificación de las GN más aceptada es la his- SÍNDROMES POR AFECTACIÓN GLOMERULAR
tológica (Tabla 57-1). No obstante, etiologías muy
Las manifestaciones clínicas de las GN se entienden
dispares pueden originar la misma alteración
bien si relacionamos las modificaciones de
histológica y viceversa, una misma cau-
la estructura y de la función del glo-
sa puede provocar diferentes alte-
mérulo con su traducción clínica
raciones tisulares en el riñón .
(Tabla 57-2). Así, la lesión del
En el estudio morfológico ,
podocito o la pérdida de las
las técnicas convencionales
cargas negativas de la barre-
con microscopio óptico
ra de filtración glomerular
se deben complementar
permite que proteínas
con pruebas de inmu-
aniónicas, como la al-
nofluorescencia y mi-
búmina, atraviesen esta
croscopía electrónica.
barrera y aparezcan en
La inmunofluorescen-
la orina (proteinuria).
cia permite visualizar
Una lesión más grave
la morfología de los
de la barrera de filtra-
depósitos de material
ción produce proteinu-
inmune (granular o li-
ria y pérdidas urinarias
neal) e identificar sus
de hematíes y leucocitos.
componentes (clase de
La reducción del área de
inmunoglobulina, factor
filtración glomerular oca-
del complemento) así como
siona insuficiencia renal.
su localización (Fig. 57-lD).
Finalmente, las alteraciones
El microscopio electrónico iden-
del equilibrio glomérulo/tubular
tifica y localiza con mayor detalle
favorecen la retención de agua y sal,
los depósitos de material inmune, las
con formación de edemas y aparición de
alteraciones de la MBG y otras modificaciones
hipertensión arterial e insuficiencia cardiaca. La Ta-
u ltraestructurales.
bla 57-3 muestra las formas de presentación de las
La morfología de las enfermedades glomerulares es
principales nefropatías glomerulares.
muy dispar y varía desde la normalidad óptica de la
nefropatía de cambios mínimos al llamativo exceso
de células de la glomerulonefritis postinfecciosa. Los SÍNDROME NEFRÓTICO (SN)
factores que controlan la celularidad y el depósito de
matriz extracelular, denominados en conjunto me- El SN refleja un fracaso de la barrera de filtración
diadores de la inflamación, son comunes a muchas glomerular en su misión de evitar que se filtren las
enfermedades glomerulares, y, en general, a los pro- proteínas plasmáticas. Se define por dos hallazgos:
cesos de inflamación y fibrosis de otros órganos. a) proteinuria superior a 3,5 g/24 horas/1 ,73 m 2 > 40
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato gen itourinario

Edemas. La hipoalbuminemia disminuye la


presión oncótica del plasma, lo que favorece
Tabla Fisiopatología el paso de líquido desde el espacio intravascu-
de las nefropatías glomerulares lar al in tersticial, con formación de edema. La
disminución del volumen intravascular activa
Lesión funcional o Manifestación sistemas reguladores (sistema renina-angioten-
estructural del ovillo clínica o sina-aldosterona, secreción de hormona antidiu-
glomerular analítica rética, sistema nervioso simpático, disminu ción
de péptido natriurético atrial), lo que agrava la
Alteración de la Proteinuria
retención de agua y sodio y contribuye a perpe-
permeabilidad en la
barrera de filtración
tuar el edema. En ocasiones existe una retención
renal primaria de agua y sal, independien te de
Podocitopenia Proteinuria los sistemas reguladores citados. El edema del
Reducción del área Insuficiencia renal SN aparece inicialmente en partes declives y en
de filtración zonas laxas como los párpados; en fases evolu-
cionadas aparece en las serosas e incluso puede
Retención de agua Edemas evolucionar a anasarca.
y sodio Hipertensión La hiperlipemia guarda relación con el grado de
arterial
hipoalbuminemia , y su mecanismo más impor-
Insuficiencia renal tante es el aumento de la síntesis hepática de li-
Rotura de la barrera de Hematuria poproteínas. Está aumentado sobre todo el coles-
filtración Leucocituria terol plasmático, pero también los triglicéridos ,
las LDL y VLDL.
Hipercoagulabilidad, con tendencia a desarrollar
trombosis venosa (sobre todo de venas ren ales) y
menos frec uentemente arterial. La patogenia nes
multifactoria l, aunque destaca la disminu ción
mg/hora/m 2 en niños, y b) h ipoalbuminemia inferior
de antitrombina III (por pérdidas urin arias), una
a 3,0 g/dl. A continuación se detallan los principales
enzima qu e antagoniza la acción de la trombina.
mecanismos fisiopatológicos y que a la vez suponen
Tendencia a las infecciones , debida a hipogam-
su expresión clínica:
maglobulinemia por pérdidas urinarias de IgG y
La hipoalbum inemia es la consecuencia de la favorecida por la disminución de factores de la
pérdida urinaria de albúmina y del catabolismo vía alterna del complemento (B y D), que altera
tubular de gran parte de la albúmina filtrada. la opsonizacion de ciertos gérmenes.

Tabla Formas de presentación de las principales nefropatías glomerulares


Nefropatía glomerular
Síndrome Nefropatía glomerular primaria
secundaria
Nefrótico Cambios mínimos Nefropatía diabética
Glomeruloesclerosis focal y segmentaria Nefritis hípica
Nefropatía membranosa Ami loidosis
GN mesangiocapilar

Nefrítico GN postinfecciosa Nefritis lúpica


GN mesangiocapilar

Hematuria macroscópica recidivante Nefropatía lgA Alport

Glomerulonefritis rápidamente GN por Ac anti-MBG Vasculitis ANCA+


progresiva GN extracapilares con semilunas

Alteraciones urinarias asintomáticas Nefropatía lgA Nefritis lúpica, vasculitis


(proteinuriano no nefrótica y/o
hematuria microscópica)
CAPÍTULO 57 Patología general de las enfermedades glomerulares del riñón

Finalmente, las pérdidas de ciertas proteínas


transportadoras de hormonas tiroideas, de 25-hi-
droxicolecalciferol y de hierro pueden ocasionar, Tabla Participación de la
en raros casos, la aparición de hipotiroidismo, inmunidad en el desencadenamiento
hipocalcemia y anemia hipocrómica, respectiva- del daño glomerular
mente.
Inmunidad humoral
SÍNDROME NEFRÍTICO Anticuerpos frente a antígenos fijos
Es una manifestación de inflamación glomerular agu- Matriz extracelular
da. Se define en su forma más completa por hematu- Antígenos celulares
ria macro o microscópica de origen glomerular (o sea, Antígenos extrarrenales atrapados en el
con cilindros hemáticos o hematíes dismórficos en el glomérulo
sedimento urinario), oliguria, proteinuria moderada
Anticuerpos frente a antígenos solubles:
(no nefrótica) edema, hipertensión arterial e insufi- formación de inmunocomplejos
ciencia renal. En la circulación, con depósito posterior
en el glomérulo
In situ
GLOMERULONEFRITIS RÁPIDAMENTE
PROGRESIVA Inmunidad celular
Consiste en la pérdida progresiva de la función renal Regulación de la producción de anticuerpos
en el curso de días a semanas, asociada con signos de
inflamación glomerular, cuyo sustrato histológico es Efecto lesivo directo
una glomerulonefritis extracapilar con semilunas en
más del 50% de los glomérulos.

OTROS SÍNDROMES
no IV. El antígeno reconocido en muchas nefropatías
El resto de las formas de expresión clínica no son membranosas es el receptor tipo M para fosfolipasa
exclusivas de las GN. Incluyen alteraciones urina- A2 del podocito. Los anticuerpos frente a antígenos
rias asintomáticas (hematuria microscópica o protei- intrínsecos del glomérulo pueden ocasionar daño re-
nuria no nefrótica) que son hallazgos de laboratorio, nal por interferencia con la función del antígeno o
hipertensión arterial o insuficiencia renal crónica. por fijación de complemento que active la liberación
Finalmente, hay que señalar que estos síndromes de mediadores de la inflamación o la muerte celular.
renales, tanto en la forma inicial de presentación de Otros anticuerpos , al reaccionar con antígenos no
las GN como en su evolución, pueden combinarse glomerulares en la circulación forman inmunocom-
entre sí. plejos que pueden depositarse en el glomérulo, o se
unen localmente con antígenos previamente deposi-
tados en el glomérulo (formación in situ de inmuno-
FACTORES DESENCADENANTES complejos). Los inmunocomplejos también pueden
DEL DAÑO GLOMERULAR depositarse en el mesangio (por ejemplo, en la nefro-
patía IgA), en la pared capilar (nefropatía membra-
FACTORES INMUNOLÓGICOS nosa) o en ambas (nefropatía lúpica). El depósito de
inmunocomplejos desencadena daño glomerular por
La mayoría de las GN son formas de enfermedades dos mecanismos fundamentales : activación del com-
autoinmunes y en muchas de ellas hay pérdida de to- plemento y activación de receptores Fe.
lerancia a ciertos autoantígenos. Por tanto, la inmuni-
dad (humoral y celular) desempeña un papel funda-
Inmunidad celular
mental en el desencadenamiento de muchas formas
de daño glomerular (Tabla 57-4 y Fig. 57-2). Los linfocitos T regulan la respuesta inmune humo-
ral, pero existen menos datos sobre su participación
en la lesión directa del glomérulo . La participación
Inmunidad humoral de la inmunidad celular parece especialmente im-
En algunas GN existen depósitos locales de anticuer- portante en la GN rápidamente progresiva. En la ne-
pos que pueden reaccionar contra antígenos fijos de fropatía de cambios mínimos existen anomalías de la
la matriz extracelular o de las células glomerulares. función de los linfocitos T, pero se desconoce si son -----;¡sg
Los anticuerpos anti-MBG reaccionan con el coláge- patogénicas.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Depósito de anticuerpos l Células T sens;bm,adas

Complemento

esa ]
------.
~ mesangialeS, 'I
L PMN/plaquetas
_ Cé lul aspodocitos
] 1 Macrófagos

¡ ___ I=_ ¡
C _ox;dantes,pmteasas ~
¡ - i
~ ovmo glomemla,
+
1 ~ e Pmte;nuc;a

~ maturia, fibrina

Figura Mecanismos de daño glomeru lar. Esquema de los principales mecanismos inmuno lógicos de le-
sión de la barrera de fi ltración (PMN: neutrófil os polimorfonucleares).

ACTIVACIÓN INESPECÍFICA reguladores de la apoptosis y el ritmo de mitosis y


DE LA INFLAMACIÓN apoptosis. Además , la hiperglucemia condiciona la
aparición de productos de glicosilación avanzada de
En algunos casos puede causar o agravar el dafi.o glo- proteínas (AGE), que modifican la función o estabi-
merular. Por ejemplo, la inyección de lipopolisacári- lidad de proteínas y activan receptores específicos
do bacteriano («endotoxina » bacteriana) o de TNFa (RAGE) que median la producción de mediadores de
causa dafi.o glomerular y agrava la evolución de GN a la inflamación y de matriz extracelular.
nivel experimental.
Si bien no existe consenso sobre la capacidad del
factor nefrítico y de los anticuerpos frente al cito- FACTORES HEMODINÁMICOS
plasma de neutrófilos (ANCA) para causar dafi.o glo-
merular, ambos podrían ser ejemplos de activación Han sido implicados en la nefropatía hipertensiva y
inespecífica de la inflamación. El factor nefrítico es en la lesión glomerular de la nefrología diabética. El
un autoanticuerpo IgG que reacciona con la conver- aumento mecánico de la presión, el estiramiento y
tasa de C3 de la vía alterna, C3bBb, estabilizándola la hipoxia modifican la biología de distintas estirpes
frente a la disociación por el factor H. Esto favorece celulares.
una activación continuada del complemento en la
glomerulonefritis membranoproliferativa hipocom-
plementémica. TÓXICOS
De gran interés en patología renal es la verotoxina de
CAMBIOS EN EL MICROAMBIENTE CELULAR las cepas de E. coli, que causa síndrome hemolítico
urémico. Esta toxina se une a receptores glicolipídi-
~ La hiperglucemia modifica la producción de citoci- cos de la membrana celular, que son especialmente
nas y de matriz extracelular, la expresión de genes abundantes en las células endoteliales glomerulares
CAPITULO 57 Patología general de las enfermedades glomerulares del riñón

Tabla Algunos ejemplos de factores genéticos que influyen en el daño glomerular


Defectos genéticos causantes de síndrome nefrótico (SN)
Gen/proteína Fenotipo

N PHS 1/Nefrina SN congénito finlandés

NPHS2/Podocina SN recesivo resistente a esteroides

a-actinina-4 SN familiar autosómico dominante (glomeruloesclerosis focal y segmentaria familiar


tipo 1)

WT-1 Esclerosis mesangial difusa

Genotipos que influyen en el desarrollo/progresión de la nefropatía glomerular


Gen polimórfico Asociación sugerida

ECA Progresión de nefropatía lgA, diabética y glomeruloesclerosis focal y segmentaria,


desarrollo de nefroangiosclerosis, protección renal por IECA en nefropatías no
diabéticas

Myosin heavy chain 9 Mutación causa síndrome de Alport con trombopenia


(MYH9) Polimorfismos asociados a diversas formas de insuficiencia renal terminal (diabética,
hipertensiva, VIH) en la misma familia

expuestas al TNFa, penetra en la célula e inhibe la FACTORES GENÉTICOS


síntesis de proteínas.
Pueden ser causa de nefropatía glomerular, pero tam-
bién pueden influir sobre la predisposición al desa-
AGENTES INFECCIOSOS rrollo de lesión glomerular, la progresión de la misma
y la respuesta al tratamiento (Tabla 57-5).
Pueden producir toxinas (como la verotoxina) o des- Particularmente tienen los estudios de los polimor-
encadenar respuestas inmunes anómalas frente a an- fismos de genes (variantes de la normalidad) sobre la
tígenos microbianos (p. ej., glomerulonefritis postin- predisposición, progresión o respuesta al tratamien-
fecciosa o infección por el virus de la hepatitis C) que to . El polimorfismo que ha despertado más interés es
contribuyan al daño renal. En la glomeruloesclerosis el genotipo I/D (inserción/deleción) del enzima de
focal y segmentaría por VIH este virus infecta los po- conversión de la angiotensina (ECA) . El genotipo DD
docitos. se asocia a mayor actividad sérica y tisular de ECA y,
en general tiene un efecto deletéreo sobre la patolo-
gía renal.

MECANISMOS BÁSICOS
DE LAS LESIONES
En el daño glomerular se activan procesos de
regulación del número y fenotipo celular y
del depósito de matriz extracelular.

CÉLULAS
En las GN proliferativas aumenta el nú-
mero de células glomerulares y leucocitos,
pero la progresión del daño glomerular
se asocia a una disminución de las células
glomerulares intrínsecas. Además , estas y los
leucocitos están activados y aumenta su capa-
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Diversas citocinas participan en la lesión glomerular


(Tabla 57-6). Además de sus propiedades vasoactivas,
Tabla Citocinas y lesión la angiotensina II y la endotelina 1 son mitogénicas
glomerular para las células mesangiales e inducen la producción
de citoquinas (incluido el TGF-~1) y de matriz extra-
Promueven el daño glomerular celular.
Proinflamatorias: TN Fo:, 1L-1 ~
Fibrogénica: TGF- ~1
Mitogénica: PDGF MOLÉCULAS DE ADHESIÓN
Quimiotácticas: Quimiocinas Son un conjunto de ligandos/receptores que median
Angiotensina 11 la adhesión célula-célula y célula-matriz, activan la
Endotelina 1 transducción de señales intracelulares y modifican el
Protegen del daño glomerular comportamiento celular.
Antiinflamatorias: IL-4, IL-10

INMUNOGLOBULINAS
El depósito glomerular de inmunocomplejos puede
activar el complemento y los receptores para la Fe de
ciclad sintética de receptores y mediadores de la infla-
IgA e IgG presentes en células mesangiales y leucoci-
mación. En algunas nefropatías como la glomerulos-
tos, induciendo la expresión de citocinas proinflama-
clerosis focal y segmentaria y la nefropatía diabética
torias. El efecto activador de los ANCA sobre neutró-
disminuye el número de podocitos (podocitopenia)
filos está mediado por receptores Fe.
Las células glomerulares intrínsecas (mesangiales,
epiteliales y endoteliales) tienen una amplía capa-
cidad biosintética que incluye citoquinas, lípidos COMPLEMENTO
bioactivos, matriz extracelular, moléculas de adhe-
sión y otros mediadores de la inflamación. La activación del complemento puede tener lugar por
Los neutrófilos, monocitos/macrófagos y linfocitos la vía clásica o alternativa. Como consecuencia de la
infiltran y dafian el glomérulo En estadios crónicos activación del complemento se liberan fragmentos
predominan las células mononucleares (monocitos/ biológicamente activos y se ensambla un terminal co-
macrófagos y linfocitos T). Los macrófagos juegan un mún MAC (C5b-9). El MAC (complejo de ataque a la
papel en la formación de semilunas. membrana) es una estructura similar a un canal trans-
Las plaquetas activadas se depositan en las pare- membrana, que puede llegar a lisar la célula o causar
des capilares y pueden dañar el endotelio vascular y una lesión que conduce a la muerte por apoptosis o a
secretar mediadores de la inflamación. Los fibroblas- la secreción de mediadores de la inflamación. La acti-
tos infiltran el glomérulo en estadios avanzados del vación del complemento origina también fragmentos
daño glomerular. con propiedades quimiotácticas. El complemento y
sus receptores participan en el aclaramiento de inmu-
nocomplejos.
MATRIZ EXTRACELULAR
En las glomerulonefritis existen can1bios en las ca- OTROS MEDIADORES DE LA INFLAMACIÓN
racterísticas de la matriz extracelular. El ejemplo más
extremo es la esclerosis glomerular, en la que el glo- Otros mediadores que participan en el daño glomeru-
mérulo es sustituido por matriz extracelular anómala. lar incluyen: a) Lípidos, como factor activador de las
Tres procesos regulan la matriz extracelular glo- plaquetas (PAF) y eicosanoides (tromboxanos, prosta-
merular: síntesis, regulada de forma fundamental glandinas y leucotrienos) . b) Radicales de oxígeno y
por el TGF~l , degradación, dependiente de enzimas NO, y c) Sistema de coagulación intrínseco y extrín-
degradadoras de matriz extracelular, y finalmente de- seco, fibrinólisis y el sistema bradiquininas. El acú-
pósitos de material inmune. mulo de fibrina y de sus productos de degradación es
especialmente llamativo en las nefropatías glomeru-
lares con semilunas.
MEDIADORES DE LA INFLAMACIÓN
CITOCINAS EVOLUCIÓN DEL DAÑO GLOMERULAR
Son polipéptidos producidos por numerosas estirpes En el desarrollo del daño glomerular distinguimos va-
~ celulares que ejercen acciones autocrinas o paracrinas rias etapas. Por razones didácticas vamos exponerlas
mediadas por la activación de receptores específicos. por separado, aunque se solapen en el tiempo.
CAPITULO 57 Patología general de las enfermedades glomerulares del riñón

Depósito de anticuerpos

Inmunidad ce lular Activación del complemento

.
Glomerulonefritis
+-- Alteraciones
Activación de células intrínsecas glomerulares hemodiná micas
Aumento de la matriz mesangial ;
Lesión del podocito __,,,,

,,,

Infiltración leucocitos Citoci nas y fac tores de crecimi ento

Factores genéticos

Inflamación
persistente
l Remodelado del capilar glomerular
y de fa matriz
----+ Normalización de fa ceful ari dad
¡
Fibrosis Curación

Figura Mecanismos de inducción, resolución y progresión de la inflamación glomerular.

DESENCADENAMIENTO La resolución del daño glomerular puede ocurrir


como consecuencia de una maniobra terapéutica o
La causa de la lesión glomerular puede dañar directa- espontáneanrnnte, a través de factores endógenos con
mente las células o la matriz glomerular, pero su pro- propiedades antiinflamatorias y antifibróticas, que en
piedad más importante es la capacidad para inducir algún momento predominan sobre los que tienden a
la producción de otros mediadores de la inflamación mantener y ampliar el daño glomerular.
que amplifican el daño glomerular.

PROGRESIÓN Y FIBROSIS
AMPLIACIÓN Y MANTENIMIENTO
El daño glomerular puede evolucionar a un estadio
Como consecuencia del factor desencadenante de cicatrización glomerular, caracterizado por la des-
se producen tres respuestas que colaboran a ampli- aparición progresiva de las células glomerulares, y la
ficar y mantener el daño glomerular: a) Quimiotaxis aparición de matriz extracelular cicatriza!. La progre-
de leucocitos . b) Proliferación y lesión de células sión del daño glomerular puede ocurrir por la persis-
glomerulares. y c) Expansión de la matriz extrace- tencia de la causa que lo originó o por un fracaso de
lular. los mecanismos de reparación glomerular.
En la Figura 57-3 se representan los principales
mecanismos de inducción, resolución o progresión
RESOLUCIÓN de la inflamación glomerular.

La resolución del daño glomerular implica la restau-


ración de la celularidad y matriz normal. Este proceso LESIÓN TUBULOINTERSTICIAL
requiere: a) el remodelado de la matriz extracelular
por la liberación de plasmina y metaloproteinasas Todas las glomerulopatías crónicas progresivas se
de matriz y por el cese de la producción de matriz; asocian a una lesión tubulointersticial caracterizada
b) normalización de la celularidad glomerular, que por un infiltrado inflamatorio mononuclear, fibrosis
implica el cese de la quimiotaxis de leucocitos, y el intersticial y atrofia tubular.
eflujo (salida) o apoptosis de los ya presentes en el Entre los factores que pueden contribuir al daño
glomérulo . La normalización del número de células intersticial destacan el paso de mediadores de la in-
mesangiales requiere la proliferación cuando ha ha- flamación a los capilares que rodean a los túbulos,
bido pérdida de células o la apoptosis del exceso de la filtración de mediadores de la inflamación por el
células, y c) el remodelado de los capilares glomeru- glomérulo y el efecto tóxico de la proteinuria sobre ~
lares (angiogénesis). las células tubulares.
-158
Patología del túbulo,
intersticio y vasos
renales
Luis Ángel Jiménez del Cerro

RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL
EL TÚBULO, EL INTERSTICIO
Y LOS VASOS RENALES
El sistema tubular de la nefrona con sus diver-
sos segmentos (túbulo proximal, asa de Henle,
túbulo distal y túbulo colector), no es solo un
conducto pasivo por donde fluye el ultrafiltra-
do producido en el glomérulo, sino que cumple
múltiples funciones fisiológicas imprescindibles
para el mantenimiento de la homeostasis. Estas
funciones son la reabsorción de solutos y agua,
la secreción de aniones y cationes orgánicos, la
acidificación y alcalinización urinaria y la con-
centración y dilución de la orina (Fig. 58-1) .
Las células del túbulo renal son diferentes según
el segmento considerado, pudiéndose identifi-
car distintos tipos morfológicos, que reflejan la
especialización en diferentes funciones según el
tramo considerado.
Las células de la mayoría de los segmentos
tubulares tienen dos polos diferenciados . El
polo luminal, en contacto con el ultrafiltrado del
plasma formado en el glomérulo, cuyos solutos
y agua deben considerase funcionalmente fuera
del organismo, y el polo basolateral, en contacto
con el líquido intersticial peritubular, donde los
solutos y el agua ya están dentro del organismo.
Los solutos y el agua deben atravesar la célula
epitelial del túbulo por canales de difusión o me-
diante bombas y transportadores localizados en
la membrana, que son específicos para los diver-
sos solutos. Así, alcanzan el espacio peritubular
en los fenómenos reabsortivos o la luz tubular en
los secretores.
El intersticio renal comprende el espacio irre-
494 gular que rodea a las diferentes estructuras:
CAPITULO 58 Patología del túbulo, intersticio y vasos renales

Túbulo distal
Reabsorbe CI a (pegueña fracción)
Secreta potasio (med iados por aldosterona)
Secreta H•

Túbulo proximal
Reabsorbe CI a y agua (65%-75% del filtrado)
Reabsorbe bicarbonato (90%)
Reabsorbe glucosa y aminoácidos (casi totalmente)
Reabsorbe potasio, ca lcio, magnesio,
fosfato, urea y ác ido úrico
Secreta aniones y ca tiones orgánicos
Produce amonio Túbulo colector
Modificaciones finales de la orina
Reabsorbe CINa
Diluye o concent ra orina
Asa de Henle
(med iado por ADH)
Reabsorbe CINa (15%-25% del filtrado)
Secreta H• y H,
Mecanismo multipli cador por contracorriente,
Reabsorbe o secreta potasio
reabsorbiendo CINa en la rama
(ba lance final)
ascendente impermeable al agua

Figura Funciones tubulares correspo ndi entes a los diversos segmentos de la nefrona.

glomérulos, túbulos, vasos sanguíneos, vasos Los capilares glomerulares confluyen formando
linfáticos y nervios renales. Está compuesto por la arteriola eferente, que sale por el polo vascu-
diversas células intersticiales y una matriz ex- lar, con un comportamiento diferente según la
tracelular gelatinosa constituida por glucosami- ubicación de los glomérulos. En los más superfi-
noglicanos (sulfatados y no sulfatados), diversas ciales, la arteriola eferente, nada más abandonar
fibrillas de colágeno (tipos I y ID), fibronectina el glomérulo, se ramifica en una red de capila-
y el líquido intersticial. El volumen relativo del res ubicada en el intersticio en íntimo contacto
intersticio representa el 13% del volumen renal con los túbulos renales. Las arteriolas eferentes
total, pero se incrementa con la edad. Es esca- que provienen de los glomérulos yuxtamedula-
so en la corteza (7%-9%) y más abundante en res dan origen a los vasos rectos descendentes,
la médula, sobre todo en las papilas (30 %-40%). ramificándose en forma de malla, descendiendo
Las células intersticiales en la corteza son de dos hasta la medular interna acompañando a las asas
tipos. Las más abundantes son parecidas a fibro- de Henle, para posteriormente ascender.
blastos y en ellas tiene lugar la producción de El sistema venoso es más irregular. Las venas
la eritropoyetina, hormona que estimula la eri- interlobulmares reciben sangre de la red capilar
tropoyesis. Las menos numerosas son las células peritubular cortical y, por confluencia, dan ori-
dendríticas, que pertenecen al sistema mononu- gen a las venas arcuatas, que reciben también
clear fagocítico. la sangre de los vasos rectos. Las venas arcuatas
En la médula las células son de tres tipos. Las confluyen formando· las venas interlobulares,
más abundantes contienen lípidos y son una que abocan en la vena renal.
fuente importante de prostaglandinas. Las simi- El riñón recibe el 20%-25% del gasto cardiaco
lares a linfocitos probablemente tienen capaci- y su adecuado funcionamiento depende de que
dad fagocítica. Las células del tercer tipo están el flujo sanguíneo no se vea comprometido. Prác-
en relación con los vasos rectos descendentes y ticamente todo el flujo sanguíneo renal pasa por
su función es desconocida. los glomérulos y la mayor parte irriga la corteza.
El riñón está muy vascularizado. La arteria renal Menos del 10% está dirigido a la médula y sola-
se divide en diversas arterias segmentarias que mente 1 % a las papilas.
irrigan los diversos componentes del riñón. Estas
arterias no tienen anastomosis entre sus ramas a
ningún nivel. Se dividen en ramificaciones cada CAUSAS Y MECANISMOS LESIONALES
vez más finas, arterias interlobulares, arcuatas, DE LAS ENFERMEDADES RENALES
interlobulillares para dar lugar, finalmente , a las
arteriolas aferentes, las cuales penetran en el glo- Las causas que pueden afectar a los diversos campar- ~
mérulo para formar el ovillo capilar glomerular. timentos del riñón son muchas y diversas. Una causa
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

determinada puede afectar a diversas estructuras con- un efecto tóxico sobre las células tubulares renales y
dicionando diferentes manifestaciones clínicas y, por alteran de ese modo su función.
otra parte, una misma lesión puede estar producida En las tubulopatías adquiridas son los agentes in-
por causas diferentes, sin que exista una afectación volucrados los que dependiendo de su naturaleza y
específica para cada etiología. afinidad por las diversas estructuras tubulares, inter-
Los mecanismos patogénicos implicados en las le- fieren con su normal funcionamiento.
siones son diferentes según los procesos considerados
y, en ocasiones, no están suficientemente aclarados.
El riñón, dadas sus peculiares características anatómi- FISIOPATOLOGÍA
cas y funcionales, es un órgano muy vulnerable a ser Los trastornos específicos de la función tubular pue-
lesionado por procesos infecciosos, inmunológicos y den ser la consecuencia de alteraciones de la reab-
tóxicos. El importante flujo sanguíneo determina que sorción, de la secreción o de la falta de respuesta
el riñón puede recibir una gran cantidad de tóxicos si tubular a una hormona.
están presentes en la sangre. La reabsorción del agua
desde el líquido tubular trae como consecuencia un Las alteraciones de la reabsorción pueden pro-
aumento de la concentración del tóxico en los túbu- ducir: a) la pérdida de una sustancia por la orina
los, lo cual potencia la toxicidad epitelial. Asimismo, sin manifestaciones clínicas aparentes (glucosu-
el epitelio transporta muchas de estas sustancias, lo ria renal); b) pérdida de bicarbonato que condi-
que determina que a nivel intracelular pueden ob- ciona una acidosis tubular renal proximal; c) pér-
tenerse concentraciones elevadas del tóxico. En los dida de un nutriente fundamental que se agota
trastornos hereditarios los mecanismos implicados y no está disponible para su función fisiológica
son numerosos y diversos. (anünoaciduria); d) respuestas compensadoras a
esas pérdidas que producen enfermedad clínica
(raquitismo hipofosfatémico); y, por último, e)
ENFERMEDADES TUBULARES la sustancia que se pierde y está presente en la
O TUBULOPATÍAS orina en gran cantidad produce un daño directo
a nivel renal (cistinuria) .
CONCEPTO La alteración de la secreción del ión hidrógeno
conduce a trastornos metabólicos, como diversos
Son procesos en los que existe una disfunción tubu- tipos de acidosis tubular renal distal.
lar específica con afectación escasa o nula, al menos Las anomalías en la respuesta a una hormona
en las fases precoces, de la función glomerular. Estas se producen por una unión inapropiada de la
alteraciones pueden ser simples, afectando el manejo hormona con el receptor tubular (no existe dicho
renal de una única sustancia (glucosa, fosfato, etc.), o receptor o tiene una estructura alterada y no es
complejas, si están alterados varios mecanismos de reconocido), o porque, aunque la hormona esté
transporte. unida al receptor, está alterada la transmisión de
la señal hormonal intracelular y su acción no se
expresa. Dan lugar a diversas pseudoendocrino-
ETIOLOGÍA patías, situaciones en las que el enfermo tiene
La mayoría de las tubulopatías poseen una base ge- una determinada hormona pero sus efectos no se
nética, con diversos modos de transmisión posibles: expresan, como la diabetes insípida nefrogénica.
autosómico dominante , autosómico recesivo o unido
al cromosoma X. No obstante, existen algunas tubulo-
patías adquiridas secundarias a toxicidad por meta- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
les pesados, fármacos , sustancias químicas, cadenas El cuadro clínico de las tubulopatías es de una cierta
ligeras de inmunoglobulinas (mieloma múltiple) o pobreza semiológica.
asociadas a otras enfermedades (amiloidosis, drepa- Dado que muchos procesos de transporte en el
nocitosis, etc.). riñón están restringidos a segmentos específicos del
sistema tubular de la nefrona, se han establecido va-
rios patrones de disfunción tubular, como ayuda para
ETIOPATOGENIA la localización de la alteración y su diagnóstico.
Los trastornos genéticos pueden modificar la función La alteración de la función tubular proximal con-
tubular por dos mecanismos: a) por una alteración duce a una constelación muy característica de alte-
primaria o intrínseca de una función tubular especí- raciones bioquímicas. Existe una excreción urinaria
fica, y b) secundariamente a los efectos tóxicos sobre excesiva de los solutos filtrados en el glomérulo que
el túbulo de diversos metabolitos acumulados como fisiológicamente son reabsorbidos exclusiva o predo-
consecuencia de la anomalía genética, como por minantemente en el túbulo proximal (glucosa, ami-
ejemplo la galactosemia o la intolerancia a la fruc- noácidos, fosfato, bicarbonato y uratos), encontrando
tosa, procesos en los cuales los metabolitos ejercen glucosuria normoglucémica, aminoaciduria generali-
CAPÍTULO 58 Patología del túbulo, intersticio y vasos renales

zada, fosfaturia excesiva, pérdida urinaria de bicarbo-


nato (que a menudo se acompaña de un descenso del
mismo en sangre) e hiperuricosuria con o sin hipouri- Tabla Etiología de las nefropatías
cemia. Además, puede existir proteinuria de tipo tu- tubuloi ntersticia Ies
bular, constituida por proteínas de bajo peso molecu-
lar y cadenas ligeras de inmunoglobulinas. El cuadro Agudas
completo se conoce como síndrome de Fanconi. Hipersensibilidad a drogas (betalactámicos,
Las lesiones que afectan predominantemente a la antiinflamatorios, diuréticos, etc.)
nefrona distal (asa de Henle, túbulo distal y túbu- Procesos infecciosos (sepsis, infección,
lo colector) se expresan de modo diferente: a) como estreptocócica, leptospirosis, etc.)
diabetes insípida nefrogénica, con poliuria, nicturia Enfermedades sistémicas autoinmunes
y polidipsia, por la disminución de la capacidad de (LES, sarcoidosis, etc. )
concentración de la orina; b) como trastorno de la Crónicas
acidificación urinaria qu e conduce a una acidosis Tóxicos exógenos (analgésicos, litio, plomo)
metabólica crónica, o c) como pérdida de sal, con
Tóxicos endógenos (calcio, ácido úrico,
disminución del volumen del líquido extracelular, cadenas ligeras)
tendencia a la deshidratación e hipotensión arterial.
Obstrucción urinaria
En las alteraciones aisladas selectivas de una fun-
Anomal ías del tracto urinario
ción tubular renal concreta, se encuentra un exceso (reflujo vesicoureteral)
en la orina de la sustancia o sustancias que participan Anomalías del desarrollo (poliquistosis
en ese mecanismo de transporte de forma exclusiva. renal , enfermedad quística medular)
Infecciones
ENFERMEDADES TUBULOINTERSTICIALES Enfermedades inmunológicas
(NTI) Enfermedades infiltrativas
(p. ej., amiloidosis)
CONCEPTO Isquemia
Bajo este concepto se incluyen un grupo heterogéneo
de procesos qu e afectan primariamente a los túbulos y
al intersticio renal y, secundariamente, a otras estruc-
turas del riñón. Según su curso clínico y las lesiones
encontradas en la biopsia renal, se pu eden distinguir ETIOPATOGENIA
las formas agudas y las formas crónicas.
Las NTI agudas tienen un comienzo brusco y las La NTI aguda inducida por fármacos está mediada
lesiones en la biopsia renal se caracterizan por edema por mecanismos inmunológicos, más probablemente
in tersticial con infiltrado celular polimorfo. Las NTI celulares, aunqu e también destaca la respuesta in-
crónicas tienen un comienzo insidioso, estando pre- munitaria humoral con producción de inmunoglo-
sentes la fibrosis intersticial y la atrofia tubular en la bulina E o anticuerpos frente a la membrana basal
biopsia renal. En muchas ocasiones, la inflamación ca- tubular.
racterística de las NTI agudas se resuelve sin secuelas, La in filtración del intersticio por células es una
mientras que en otras puede progresar a NTI crónica. característica esencial en este tipo de enfermedades.
La mayoría de las células mononucleares infiltran-
tes son linfocitos T y las restantes monocitos, células
ETIOLOGÍA plasmáticas o eosinófilos. Ciertos fármacos y agentes
Las NTI agudas pueden deberse a diversos procesos infecciosos pueden provocar daño tubular no especí-
infecciosos y a enfermedades sistémicas autoinmune fico que favorece la síntesis de mediadores de la in-
(lupus, sarcoidosis, etc.), pero la mayoría están in- flamación o la expresión de neoantígenos que pueden
ducidas por fármacos, resultado de una reacción de desencadenar la respuesta inmunitaria. Asimismo, se
h ipersensibilidad, sobre todo a antibióticos betalactá- sabe que las células epiteliales del túbulo renal tienen
micos y a antiinflamatorios no esteroideos. capacidad para actuar como células presentadoras de
Las NTI crónicas pueden ser causadas por tóxicos antígeno.
exógenos o endógenos, obstrucción y alteraciones Los mecanismos efectores mediante los cuales las
del tracto urinario, anomalías del desarrollo, infec- células T producen las lesiones son básicamente la li-
ciones, enfermedades inmunológicas, enfermedades beración de linfocinas y otros mediadores que ampli-
infiltrativas e isquemia (Tabla 58-1). fican la respuesta y reclutan macrófagos, o la citotoxi-
Además, la afectación tubulointersticial crónica cidad mediada por células, liberando proteasas que
puede aparecer, acompañando a nefropatías glomeru- inducen la lisis de las membranas y la muerte celular,
lares o vasculares, siendo en muchas ocasiones la vía o mediante el sistema ligando de Fas-Fas (CD95) que
final común de todas las nefropatías crónicas.
497
induce apoptosis.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

En las NTI crónicas se cree que los mecanismos FISIOPATOLOGÍA


inmunológicos ejercen un papel en varias entidades.
En pacientes con reflujo vesicoureteral se ha propues- El intersticio renal desempeña un papel importante
to la hipótesis de que la lesión progresiva del túbulo en la función renal. Debemos considerar que los di-
puede hacer antigénica a la proteína de Tamm-Hors- versos procesos de intercambio que se realizan entre
fall (producida por las células de la ran1a ascendente los segmentos tubulares de la nefrona y el espacio vas-
del asa de Henle), y los anticuerpos producidos frente cular tienen lugar a través del intersticio por difusión.
a dicha proteína reaccionarían in situ. La infección Por tanto, las características estructurales y composi-
bacteriana acelera el daño tubulointersticial, esti- ción del intersticio influyen en dichos intercambios,
mulando la respuesta inflamatoria, la activación del reflejándose en modificaciones de la función tubular.
complemento, la liberación de los enzimas tóxicos de Vemos cómo túbulos e intersticio se comportan como
los granulocitos y la generación de radicales de oxí- una unidad funcional.
geno, lo que conduce al daño de las células renales y En las NTI las alteraciones de la función tubular
del intersticio. constituyen las manifestaciones más notables de la
En otras formas de NTI crónicas hay que basar la fisiopatología y su patrón de disfunción varía según
patogenia en la toxicidad directa del fármaco o de sus donde se asiente prioritarianrnnte la lesión. Algunos
metabolitos sobre diversas estructuras renales (nefro- procesos tienen predilección por la corteza y afectan
patía por abuso de analgésicos, litio), en alteraciones principalmente al túbulo proximal y al túbulo distal;
metabólicas (hiperoxaluria, cistinosis , etc.), en una otros por la médula y afectan al asa de Henle y al tú-
obstrucción mecánica al flujo de orina y en factores bulo colector (Fig. 58-2).
hereditarios. Las toxinas endógenas pueden causar Los trastornos de las funciones tubulares son pa-
daño directo de las células tubulares renales (cade- recidos a los existentes en las tubulopatías, pero en
nas ligeras), o pueden precipitarse en el intersticio estas los trastornos son específicos y exclusivos de
(calcio, ácido úrico) e iniciar un proceso de fibrosis una o más funciones de un determinado segmento
y cicatrización. tubular. En can1bio, en las NTI las alteraciones son
La fibrosis intersticial, que es el rasgo más caracte- más heterogéneas y pueden coexistir perturbaciones
rístico de las NTI crónicas, se debe a un incremento de los diferentes segmentos tubulares en diversas
del número de fibroblastos y al depósito de matriz combinaciones, dependiendo de la localización del
extracelular. Esta fibrosis está inducida por diversas daño , siendo posible encontrar tma considerable su-
citocinas entre las que destaca el factor de crecimien- perposición entre los diferentes grados de disfunción
to transformante P (TGF-PJ, citocina fibrogénica que tubular y medular.
aumenta la producción de matriz extracelular y dis- La lesión progresiva del intersticio destruye áreas
minuye la actividad de las enzimas degradadoras de extensas del tejido renal y como resultado produce
la misma. una disminución de la función renal.

Disfunción túbul o distal


Acidosis tubular distal
Hiperpotasemi a
Pérdida de sa l

Disfunción túbulo prox imal


Glu cosuri a normoglucémi ca
Aminoaciduri a
Fosfaturia excesiva
Bi ca rbonaturia
Uricosuri a
Proteinuria tubul ar

Afectación medular y papilar


Di abetes insípida nefrogéni ca
(poliuria, nicturia y polidipsia}

498 Figura Hallazgos semio lógicos posib les en las nefropatías tubu lointersticiales.
-159
Insuficiencia renal
aguda
Reyes Pascual Pérez, Jaime Merino Sánchez, Carlos Pérez Barba

CONCEPTO
En la insuficiencia renal aguda (IRA) se produce un
deterioro de rápida instauración de la función excre-
tora y hormonal del riñón. Suele presentarse con oli-
guria (disminución del volumen de orina por debajo
de 400 ml/día) o anuria (volumen de orina inferior a
100 ml/día). Sin embargo, en cierto número de enfer-
mos la diuresis es normal o incluso está aumentada,
situación que se denomina IRA no oligúrica. Cuan-
do se produce IRA se desarrolla uremia o azoemia,
denominación que designa la retención de productos
de desecho nitrogenados (urea y creatinina), que nor-
malmente son filtrados por el glomérulo y no se reab-
sorben en los túbulos renales.
Así, la IRA se define como una alteración funcional
o estructural del riñón con un rápido aumento (en
48 horas) en la concentración de creatinina sérica de
~0,3 mg/dl (26 ,4 micromol/1) desde el nivel basal, un
aumento del ~50 % en la concentración de creatinina
sérica o oliguria de menos de 0,5 ml/kg por hora du-
rante más de 6 horas. En cualquier caso, no existe en
la literatura médica una definición universalmente
aceptada de IRA.

ETIOLOGÍA
La IRA puede desarrollarse en una gran variedad de si-
tuaciones clínicas. Es un proceso bilateral, salvo en los
pacientes que solo poseen un riñón funcional. Se divi-
de en tres categorías: IRA prerrenal, IRA intrarrenal o
intrínseca e IRA postrenal (Tabla 59-1).

IRA PRERRENAL
Las causas que dan lugar a IRA prerrenal implican
una disminución de la perfusión eficaz del riñón sin
comprometer la integridad del parénquima renal. Se
resumen en la Tabla 59-2. De todas ellas la más fre-
cuente es la depleción de volumen. Se trata de una
situación reversible si se corrige su causa en poco
tiempo.
501
Semiología y fis iopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Tabla Principales causas Tabla Causas de IRA postrenal


de insuficiencia renal aguda
Obstrucción uretral
Prerrenal (60 %-70 %) Válvulas o estenosis uretrales
Obstrucción de sonda vesical
Renal o intrínseca (25 %-40 %)
Lesión de la célula tubular Obstrucción en el cuello de la vejiga
Isquemia e inflamación Hipertrofia prostática
Tóxicos Carcinoma de vejiga o de próstata
Nefritis intersticial aguda Vejiga neurógena
Glomerulonefritis aguda Agentes bloqueantes ganglionares
Postrenal (5%-10 %) Obstrucción ureteral bilateral o unilateral en
riñón único

lntraureteral: cálculos, tumores, coágulos ...


Extraureteral: compresión por adenopatías,
tumores, masas inflamatorias, fibrosis
retroperitoneal , ligadura accidental del
Tabla Causas de IRA prerrenal uréter o trauma durante cirugía pélvica

Depleción de volumen
Diuresis excesiva
tersticio, vaso o glomérulo . En este capítulo nos re-
Hemorragias
feriremos a la IRA que se produce en situaciones de
Pérdidas gastrointestinales isquemia, aunque también puede estar causada por
Pérdidas a tercer espacio (quemaduras, tóxicos renales. Estas causas conducen a una lesión
traumatismos, peritonitis, pancreatitis)
de la célula tubular renal denominada necrosis tubu-
Enfermedades cardiacas y vasculares lar aguda (NTA) . Se trata de un síndrome clínico en
Insuficiencia cardiaca congestiva el que se produce un deterioro progresivo y simultá-
Infarto agudo de miocardio neo de la función glomerular y tubular sin que exista
Taponamiento pericárdico una enfermedad glomerular, intersticial o vascular
Trombosis o embolia de la arteria renal comprobada, ni obstrucción del sistema excretor. Sus
causas se muestran en la Tabla 59-4. Las situaciones
Vasodilatación periférica que ocasionan una IRA prerrenal pueden causar una
Sepsis lesión renal isquémica dependiendo de su gravedad
Tratamiento antihipertensivo y duración. En estos casos la disminución del flujo
Aumento de resistencias vascu lares
sanguíneo renal es consecuencia de una disminución
del volumen sanguíneo total o de una redistribución
Cirugía
de la sangre fuera del riñón.
Anestesia
La administración de antibióticos, particularmente
Síndrome hepatorrenal
de aminoglucósidos, y la de contrastes intravenosos
Tratamiento con inhibidores de las son algunas de las principales causas de IRA en los pa-
prostaglandinas (p. ej., AINE)
cientes hospitalizados. La diabetes mellitus, la insufi-
ciencia renal crónica previa, la depleción de volumen,
la hipertensión arterial, las enfermedades vasculares
y la proteinuria aumentan el riesgo de desarrollarla.
1RA POSTRENAL
Se debe a una obstrucción del flujo de orina en cual- FISIOPATOLOGÍA
quier punto desde el túbulo colector a la uretra. Sus
En un breve periodo de tiempo (horas a semanas) hay
causas se recogen en la Tabla 59-3 y se trata de una
una reducción del filtrado glomerular total al dismi-
situación reversible si se corrige la causa.
nuir el filtrado en cada nefrona. La tasa de filtración
glomerular viene dada por la siguiente fórmula : tasa
IRA RENAL INTRÍNSECA O INTRARRENAL de filtración glomerular = Kr [(Pc-P 8 ) - (Tic-fln)l. donde
Kr = coeficiente de filtración, Pe = presión hidrostática
Las causas son múltiples y se clasifican según la le- glomerular, P 8 = presión hidrostática en la cápsula de
502
sión histológica primaria resida en los túbulos, in- Bowman, Tic = presión oncótica glomerular, TI 8 = pre-
CAPITULO 59 Insuficiencia renal aguda

Tabla Causas de IRA intrínseca


o renal
'f'p_
lsquémica + hidrostática
P. oncótica

Hemorragias
Trauma
Rabdomiólisis con mioglobinuria
Sepsis por gramnegativos Renina -t>t Aldosterona
Pancreatitis
Rea ~ orción I>
Nefrotóxica t ADH Na•
Reabsorc16 n I>
Antibióticos (aminoglucósidos, t H20
cefalosporinas)
Contrastes radiológicos yodados. Figura Mecanismos fisiopatológicos en la le-
Metales pesados (arsénico, mercurio, sión renal aguda prerrenal.
bismuto)
Disolventes orgánicos (tetracloruro de
carbono) giere que la arteriola aferente presenta una dilatación
Anticongelantes (etilenglicol). máxima con PAM de 70 mm Hg. La reducción de la
Anestésicos (enflurano) presión por debajo de este nivel disminuye de mane-
lnmunosupresores (ciclosporina). ra considerable la presión hidrostática glomerular y,
Antineoplásicos (estreptozotocina, por tanto, la tasa de filtración glomerular.
cisplatino, etc. Todos estos hechos favorecen el aumento de reab-
sorción de sodio en el tú bulo proximal, el incremento
de la concentración de renina plasmática, de la se-
creción de aldosterona y de la reabsorción de sodio
sión oncótica en la cápsula de Bowman. Cualquier si- en el tú bulo distal. La depleción de volumen estimula
tuación que altere alguno de los elementos anteriores asimismo la producción de ADH con el consiguiente
dará lugar a modificaciones en la filtración glomerular. aumento en la reabsorción de agua en el túbulo colec-
tor. También tiene lugar una redistribución de flujo
FISIOPATOLOGÍA DE LA IRA PRERRENAL desde la corteza a la médula. Por todo ello el paciente
con IRA prerrenal presentará una osmolaridad uri-
En esta forma de IRA disminuye la perfusión renal, naria alta con concentración baja de sodio. La urea
lo que produce una caída de la tasa de filtración glo- plasmática aumenta debido a su menor depuración y
merular, aunque menor que la reducción del flujo a un incremento de la reabsorción.
plasmático renal total. En una primera fase, el riñón Como consecuencia de lo previo aparecen:
puede adaptarse a la menor perfusión mediante me-
canismos intrínsecos de autorregulación y biosíntesis Oliguria.
de prostaglandinas vasodilatadoras (prostaglandina Concentración de Na+ urinario inferior a 20
F 2 y prostaciclina) que inducen una dilatación de la mEq/1; osmolaridad urinaria superior a 500
arteriola aferente, lo cual permite conservar la per- mOsmlkg.
fusión glomerular. Además, y debido a la acción de Aumento de la urea en sangre superior al de
la angiotensina II, de la vasopresina y del sistema creatinina; cociente urea plasmática/ creatinina
nervioso simpático, existe un aumento de las resis- plasmática superior a 10.
tencias en la arteriola eferente. De esta manera se con- Excreción fracciona] de Na+inferior a 1.
sigue mantener el flujo plasmático renal (a expensas Sedimento urinario normal.
del aumento de la fracción de filtración, la presión La perfusión renal puede disminuir lo suficiente
capilar glomerular y la tasa de filtración glomerular). como para que la reabsorción proximal de sodio sea
La vasoconstricción de la arteriola eferente produ- tan grande que limite el aporte de ClNa al asa ascen-
ce disminución de la presión hidrostática y aum.ento dente de Henle; en tal caso, la capacidad de concen-
de la presión oncótica postglomerulares y aumento tración renal se deteriora y se produce isostenuria.
de la presión hidrostática glomerular (Fig. 59.1) .
Cuando la presión de perfusión renal media se re-
duce de manera muy marcada, la tasa de filtración
FISIOPATOLOGÍA DE LA IRA POSTRENAL
glomerular y el flujo sanguíneo renal comienzan a La obstrucción hace que un alto porcentaje de enfer-
disminuir; la filtración glomerular cesa cuando la mos presente anuria.
presión arterial media (PAM) desciende por debajo Cuando existe una obstrucción brusca, se produce
503
de 50 mm Hg. Esta pérdida de la autorregulación su- un aumento de la presión intratubular que puede lle-
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

gar a superar la presión de filtración glomerular. Ini- Fase de inicio


cialmente se ponen en marcha mecanismos de com- Marca la transición desde la situación prerrenal has-
pensación con vasodilatación de la arteriola aferente. ta la lesión y disfunción de la célula tubular. Tiene
Si la obstrucción no revierte rápidamente se pierde lugar como consecuencia de la isquemia renal o del
la autorregulación, aumentan las resistencias vascu- daño producido por nefrotoxinas. La disminución
lares, y hay disminución de la perfusión de la arte- del flujo sanguíneo renal ocasiona una importante
ria renal. Ello conduce a un descenso de la filtración disminución de la presión hidrostática de filtración
glomerular y, como en el caso de la IRA prerrenal, a glomerular. En la mayor parte de los casos hay una
un aumento de la reabsorción tubular de sodio con vasoconstricción persistente de la arteriola aferente
elevación de la osmolaridad urinaria. del glomérulo, acompañada o no de vasodilatación de
En ocasiones el flujo urinario puede ser normal, la arteriola eferente (Fig. 59-3).
como resultado de la elevación de las presiones proxi- Entre los posibles mediadores de la vasoconstric-
males al lugar de la obstrucción. Cuando la obstruc- ción están la angiotensina II, el déficit de prostaglan-
ción es más gradual o se mantiene durante algún dinas o de calicreína, la disminución de la produc-
tiempo, se produce un deterioro de la función tubular. ción de óxido nítrico, el aumento de endotelina y la
Aumenta la concentración de sodio urinario por inca- existencia de sensores para solutos (sodio, cloro) en
pacidad para reabsorberlo, falta la respuesta frente a la la mácula densa.
ADH y hay isostenuria, como reflejo de la incapacidad Aunque el flujo sanguíneo y la presión en el le-
para concentrar la orina. El sedimento urinario es nor- cho capilar posglomerular que perfunde los túbulos
mal o muestra signos relacionados con la causa de la disminuyen, inicialmente los túbulos permanecen
obstrucción: leucocituria, hematíes, cristales, etc. intactos. Sin embargo, si la gravedad y la duración de
Al resolverse la obstrucción puede tener lugar una la isquemia aumentan, se produce una lesión tubular
diuresis postobstructiva por pérdidas de sodio, osmó- estructural y posterior deterioro funcional. La isque-
tica por urea, o por insensibilidad de la nefrona distal mia produce may or daño en la porción medular ter-
a la ADH (diabetes insípida nefrogénica). minal del túbulo proximal y en la porción medular de
la rama gruesa del asa ascendente de Henle, donde
FISIOPATOLOGÍA DE LA LESIÓN RENAL ocurren cambios morfológicos tales como pérdida del
borde ciliado, pérdida de la polaridad y redistribu-
INTRÍNSECA ción de integrinas y ATPasa de Na+/K+ a la superficie
En ella se pueden distinguir cuatro fases (Fig. 59-2): apical. En estos cambios probablemente intervienen
a) inicio, b) extensión; c) mantenimiento y d) recu- el calcio, los radicales libres de oxígeno, la depleción
peración: de purinas y la acción de la fosfolipasa A 2 • Más tarde,

[ Iniciación
J

L Isquemia renal
T j
--

Vasoconstricción intrarrenal
~ '
frotoxin~" 1

Lesión isquémica
,.◄1---- [ Exten sión mantenida

l_ Inflamación

Vasoconstricción
persistente
,//1-~M.._a_n-te- n- imient o

Obstrucción
tubular
L__
-----
-------- ---~---1~ r;,
atrización

Recuperación

504
Figura Diferentes fases de la les ión rena l intrínseca aguda.
CAPITULO 59 Insuficiencia renal aguda

+Angiotensina 11 Fase de mantenimiento


♦ óxido nítrico
♦ Endotelina
En ella persiste la vasoconstricción intral'l'enal y la
Déficit de isquemia medular, con la consiguiente disminución
prostaglandinas
del filtrado glomerular. La permeabilidad y la super-
ficie de la membrana glomerular disminuyen debido
a la isquemia o a la lesión por nefrotoxinas , dando
lugar a un descenso del coeficiente de ultrafiltración
Arteriola y de la tasa de filtración glomerular.
aferente
La necrosis del epitelio tubular y su exfoliación en
la luz, junto con la proteína de Tamm-Horsfall secre-
tada en la porción ascendente del asa ascendente de
Henle, dan lugar a la formación de cilindros celulares
que obstruyen la luz tubular. Esta situación aumenta
la presión hidrostática intratubular y del espacio de
Bowman, lo que disminuye la filtración glomerular.
El epitelio tubular dañado permite que parte del ul-
trafiltrado atraviese los espacios tubulares y salga al
Figura Fisiopatología de la lesión renal aguda intersticio renal a través de la membrana basal tubular
intrínseca. produciendo edema intersticial, que drena la circu-
lación por los vasos linfáticos y capilares (Fig. 59-3).
Tan1bién se produce daño en las células endoteliales
las células mueren como consecuencia de la necrosis de los capilares peritubulares, lo que conlleva un des-
y la apoptosis. Las células necróticas, junto con otras equilibrio entre la producción de sustancias vasodila-
viables, se agrupan en la luz tubular formando cilin- tadoras y vasoconstrictoras a favor de estas últimas.
dros, a los que obstruyen, y contribuyen a reducir el Esta situación da lugar a vasoconstricción, hipoperfu-
filtrado glomerular (Fig. 59-4) sión y expresión de moléculas de adhesión que inician
la infiltración leucocitaria, favorecida a su vez por las
Fase de extensión citocinas quimiotácticas y proinflamatorias generadas
Se produce vasoconstricción renal que mantiene la por las células tubulares isquémicas. Los leucocitos
hipoxia e inflamación, sobre todo a nivel de la unión liberan citocinas citotóxicas, especies reactivas de oxí-
corticomedular, donde se produce disfunción endote- geno y enzimas proteolíticas que lesionan las células
lial con adhesión leucocitaria. tubulares.
Como consecuencia de todo lo expuesto aparece:
Oliguria.
La concentración de sodio urinario está elevada

~ o--r
• .
a pesar de la disminución de la diuresis.
El cociente urea plasmática/creatinina plasmáti-
ca es inferior a 1 O.
';')--. Cuando el riñón pierde la capacidad de concen-
trar y diluir la orina (estenuria] se inicia una fase
Hlodc o en la que no puede alcanzar la máxima capaci-
polaricbd y ' -\{
-•~
:'e';~ • dad de concentración (hipostenuria}; si el daño
. o
..
O
avanza, el riñón dejará el plasma sin concentrar
.º· o . o. y la osmolaridad urinaria se igualará a la del
plasma (isostenuria).
Hay un aumento proporcional de urea y creati-
nina en plasma.
Como consecuencia de la isquemia renal existe
redistribución de flujo desde la corteza a la mé-
dula.
Dado que las nefronas medulares reabsorben
más Na+:
1 41// lntcgrinas_ _ _ l Aumenta la concentración de sodio en las
Obstrucción
1 • ATPasa ele N.t'/K• J células de la mácula densa que estimulan
1ubulir '------ -- la vasoconstricción de las arteriolas aferen-
tes adyacentes (feedback glomerulotubular),
Figura Evolución del daño y proceso de repa- comprometiendo aún más la perfusión y la
ración en el epitelio tubu lar en la lesión tubu lar aguda. 505
filtración glomerular.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

También aumenta la concentración de reni- a 6-6,5 mEq/1, momento en que aparecen alteraciones
na en las células yuxtaglomerulares, y como electrocardiográficas, como ondas T altas y picudas,
consecuencia, la concentración de angioten- ensanchamiento del complejo QRS y aumento del in-
sina, lo que contribuye a la vasoconstricción tervalo PR. Además, la hiperpotasemia produce debi-
de la arteriola aferente, con disminución de lidad muscular. En esta fase encontraremos también
la tasa de filtración glomerular e isquemia. hiponatremia por sobrecarga acuosa, y edemas si hay
El sedimento urinario muestra proteinuria aporte excesivo de agua y sal.
moderada o ligera, células tubulares renales, Otros trastornos presentes en esta fase son las alte-
cilindros granulosos y hematíes o cilindros raciones hematológicas: anemia normocrómica nor-
hemáticos. mocítica multifactorial, ya que puede estar producida
por disminución de la eritropoyesis, hemólisis extra-
Fase de recuperación corpuscular o sangrado gastrointestinal al que contri-
buyen la trombocitopenia, los defectos de la función
En ella tiene lugar la resolución de las alteraciones de las plaquetas y alteraciones de la coagulación. Hay
previas, con una recuperación paulatina de la fun- complicaciones cardiovasculares: insuficiencia car-
ción renal y la regeneración de las células del epi- diaca congestiva, hipertensión, arritmias y pericar-
telio tubular dañado. En este proceso se cree que ditis. Aparecen alteraciones neurológicas: alteración
intervienen diversos factores de crecimiento. Cuan- del nivel de consciencia, asterixis, hiperreflexia, con-
do se recupera el asa de Henle y se logra eliminar el vulsiones y/o, mioclonías, todas ellas debidas a la ac-
sodio al intersticio, la orina que llega al túbulo distal ción de la uremia sobre las células nerviosas; también
es normal; al disminuir la secreción de renina y la se producen trastornos gastrointestinales (náuseas,
liberación de angiotensina se dilatan las arteriolas vómitos).
aferentes y eferentes de los glomérulos. Sin embar-
go, durante algún tiempo el ajuste de la filtración y
la capacidad de reabsorción tubular se encuentran
alterados. Así los túbulos distales y colectores son
FASE DE RECUPERACIÓN
insensibles a la ADH y la orina es abundante y poco Se produce un aumento paulatino del filtrado glo-
densa (hipostenúrica). merular, la diuresis aumenta de forma progresiva y
puede aparecer poliuria intensa, excepto en los en-
fermos no oligúricos. Las alteraciones de la fase de
MANIFESTACIONES CLÍNICAS EN LA IRA mantenimiento pueden persistir en esta fase . Es im-
portante monitorizar el peso, la ingesta, las pérdidas
FASE INICIAL insensibles y la diuresis para ajustar el balance hí-
Comprende el intervalo entre el suceso precipitante drico y evitar tanto la deshidratación como la sobre-
y la aparición del fracaso renal que ya no es reversi- carga hidrosalina. La mejoría de la función renal se
ble por la manipulación de factores extrarrenales. Su produce en la primera o segunda semana de la fase de
reconocimiento es de vital importancia para intentar recuperación y puede continuar durante los 12 meses
corregir la causa subyacente y evitar la insuficiencia siguientes.
renal aguda. El hallazgo fundamental es la oliguria,
aunque existe un porcentaje de IRA no oligúricas,
sobre todo las secundarias a nefrotóxicos (p. ej., ami-
EVALUACIÓN DEL PACIENTE CON
noglucósidos). Como resultado de la disminución INSUFICIENCIA RENAL AGUDA
drástica del filtrado glomerular se produce uremia
progresiva. Los hallazgos del laboratorio se recogen ANAMNESIS
en la Tabla 59-5.
A todo paciente con sospecha de IRA se le debe rea-
lizar una historia clínica orientada a detectar las si-
FASE DE MANTENIMIENTO tuaciones que han podido precipitarla: enfermedad
sistémica previa, crónica o aguda, traumatismos, uro-
Se inicia poco después del suceso desencadenante y
patía obstructiva, reacción a fármacos (ciclosporina,
dura de 10 a 14 días, aunque puede variar desde pocas AINE, IECA, etc.), intoxicaciones, depleción de lí-
horas a 6 u 8 semanas. En un 50 % de los casos persis-
quidos, episodios de sangrado, sepsis, cirugía previa,
te la oliguria y en unos pocos la diuresis es inferior a anestesia en pacientes hospitalizados, etc.
100 ml/día. En este periodo disminuye la eliminación
de productos nitrogenados , agua y electrólitos; au-
mentan en sangre el nitrógeno ureico, la creatinina, el EXPLORACIÓN FÍSICA
potasio, el fósforo , el magnesio y el ácido úrico. Hay
acidosis metabólica e hipocalcemia. La hiperpotase- Se buscan signos de depleción de volumen (pérdida
506
mia es asintomática hasta alcanzar valores superiores de peso, hipotensión postural, disminución de la
CAPÍTULO 59 Insuficiencia renal aguda

turgencia cutánea, signo del pliegue, sequedad de se deben buscar calcificaciones renales, de la vía
las mucosas, etc.) ; signos de sangrado (tacto rectal urinaria o en las arterias renales.
en busca de melenas, presencia de equimosis o pe- Ecografía renal. Es una exploración de gran uti-
tequias que sugieran trastorno en la coagulación, le- lidad en el estudio de la IRA. Muestra el tamaño
siones cutáneas orientativas de procesos sistémicos y contorno de los riñones y de la vejiga, y la exis-
o alérgicos); y signos de insuficiencia cardiaca o he- tencia de dilataciones u obstrucciones de la vía
patopatía avanzada con ascitis y edemas. excretora.
Se debe descartar la existencia de una obstruc- Tomografía axial computarizada (TAC) sin con-
ción urinaria, sugerida por el hallazgo de un globo traste y resonancia nuclear magnética (RNM).
vesical en la palpación abdominal. El tacto rectal nos Pueden ayudar en el diagnóstico de uropatía
informa del tamaño de la próstata. En ocasiones, se obstructiva. La angiorresonancia es útil para va-
pueden palpar los riñones o detectar la presencia de lorar una enfermedad vascular renal.
masas pélvicas. Angiografía renal convencional o con sustrac-
ción digital. Sirve para evaluar probables causas
vasculares de IRA: embolias, disección arte-
LABORATORIO DE BIOQUÍMICA rial, etc.
La Tabla 59-5 reproduce los hallazgos de laboratorio
útiles para diferenciar los distintos tipos de IRA.
OTROS ESTUDIOS
Gammagrafía renal. Como la angiografía, es útil
ESTUDIOS RADIOLÓGICOS en el diagnóstico de procesos vasculares.
Radiografía simple de abdomen . Sirve para eva- Cistoscopia. Es necesaria en ocasiones para el
luar el tamaño renal. Los riñones disminuidos de diagnóstico etiológico de una IRA postrenal.
tamaño orientarán hacia una insuficiencia renal Biopsia renal. Proporciona información sobre
crónica; si son normales o grandes es más proba- causas renales de IRA (glomerulonefritis aguda ,
ble que se trate de un proceso agudo. Además, vasculitis, etc.)

Tabla ·5 Hallazgos del laboratorio en la insuficiencia renal aguda (IRA)


Índice IRA prerrenal IRA renal o intrínseca
Sodio urinario (mEq/1) < 10 > 20

Osmolaridad urinaria (mOsm/kg) > 500 < 350

Densidad >1020 < 1010

BUN orina/BUN plasma >8 <3

Cr orina/Gr plasma > 40 < 20

Fracción de excreción de sodio (FE Na)* < 1 > 1

. u~ < 1 > 1
Indice de insuficiencia renal - - -
Uc/Pc,

Urea plasmática
> 10 < 10
Creatinina plasmática

Sedimento urinario normal cilindros, células: leucocitos,


células tubulares

sodio urinario/sodio plasmático


*FE Na = cantidad de sodio excretado/cantidad de sodio filtrado=------ - - - - - - - - x 100
creatinina urinaria/creatinina plasmatica

507
·160
1nsuf iciencia
renal crónica
Jaime Merino Sánchez, Francisco Rivera Hernández,
Víctor M. Valverde Contreras

CONCEPTO
La insuficiencia renal crónica (IRC) supone la pér-
dida progresiva e irreversible de las funciones del
riñón. Es un proceso orgánico cuyo sustrato lesional
es la esclerosis renal. Es progresivo y afecta a todas
las funciones renales. Así, se alteran: a) su capaci-
dad depuradora ; b) el mantenimiento del equilibrio
ácido -base e hidromineral; c) la regulación de la
presión arterial; d) la síntesis de hormonas, y e)
otras actividades metabólicas como la activación de
la vitamina D.

FISIOPATOLOGÍA
El deterioro de la función renal progresa de forma
imperceptible, pero a nivel conceptual podemos dis-
tinguir tres fases, de límites convencionales e impre-
cisos:

FASE DE COMPENSACIÓN COMPLETA


Cada riñón alrededor de un millón de nefronas. La
enfermedad afecta de forma progresiva a un núme-
ro cada vez mayor de ellas. Antes de expresarse la
insuficiencia estos órganos van perdiendo su reserva
funcional. La teoría de la «nefrona intacta» expresa
que las nefronas intactas reciben un mayor flujo san-
guíneo y mayor presión sobre el capilar glomerular,
con lo que aumentan su filtrado glomerular y con él
su capacidad funcional y su tamaño (Fig. 60-1).
Así, el filtrado glomerular global se mantiene a ex-
pensas de aumentar el que recibe cada nefrona intac-
ta, pero comienza a declinar cuando esta capacidad
de compensación se agota. Una disminución del fil-
trado glomerular hasta 50 ml/minuto no se acompa-
508
ña de manifestaciones clínicas.
CAPITULO 60 Insuficiencia renal crónica

ya que al disminuir el filtrado el fosfato sérico au-


Mecanismos Hipertensión arterial, diabetes, arterios-
lesiona les clerosis
menta y disminuye el calcio ionizado, lo que favorece
la liberación de PTH. Esta aumenta la excreción renal
de fosfato y disminuye la de calcio; también aumenta
Pérdida de Aumento del flujo plasmático glomerular la extracción del calcio del hueso. Otro tanto sucede
nefronas en las restantes con el potasio sérico, que se mantiene a nivel normal
1 Aumento de la presión en arteriola afe-
rente glomerular
a expensas de aumentar la secreción de aldosterona.

Mecanismos Factor de crecimiento transformante beta


de Mayor actividad del SRAA FASE DE DESCOMPENSACIÓN O DE UREMIA
compensación
Citocinas
Recibe este nombre al considerar que las manifes-
Moléculas vasoactivas taciones clínicas derivan del acúmulo en el plasma
Adap~ dóo Hipertrofia glomerular de las sustancias que deben excretarse en la orina,
Aumento de función tubular especialmente los metabolitos de las proteínas y los
aminoácidos. Es una fase avanzada en la que se hacen
Expresión Proteinuria
clíni a manifiestas en clínica las alteraciones funcionales. El
Hipertensión arterial
número de nefronas es muy reducido, ya no se pue-
Retención de metabolitos
den mantener el equilibrio interno y los metabolitos
Fase final Esclerosis glomerular se acumulan en el organismo de forma progresiva. El
aclaramiento es inferior a 15-30 ml/min. Por debajo
Figura Fisiopato logía de la in suficiencia renal de 10 ml resulta difícil la supervivencia sin trata-
c rón ica. SRAA: sistema renina-a ngiotensi na aldostero- miento sustitutivo del riñón (hemodiálisis, diálisis
na. peritoneal o trasplante renal.)
La Tabla 60-1 recoge la forma en que un organismo
internacional clasifica las fases de la insuficiencia re-
nal.
FASE DE RETENCIÓN COMPENSADORA
La hiperfiltración mantenida favorece el daño de glo-
mérulos intactos por glomeruloesclerosis. El aumento
ETIOLOGÍA
de fl uj o acaba produciendo una glomerulo-esclerosis La Tabla 60-2 recoge las principales causas.
focal. La hiperfiltración se ve favorecida por la hi-
pertensión y la proteinuria, que aceleran el fracaso
renal. La proteinuria favorece la atrofia de los túbulos EPIDEMIOLOGÍA
proximales y la fibrosis intersticial. Hay liberación La IRC es un proceso grave. Se calcula que la padecen
del factor de crecimiento transformante beta, endo- de 60 a 80 personas por millón de habitantes, su nú-
telina y angiotensina II, y se favorece la fibrogénesis, mero aumenta con la edad de la población
la proliferación mesangial y los cambios vasculares.
Al avanzar la insuficiencia renal y disminuir las
nefronas funcionantes se acumulan sustancias en
plasma, aumentando su carga osmótica, y al filtrarse
arrastra una mayor carga acuosa. Se origina una diu- Tabla Estadiaje
resis osmótica que favorece la pérdida de solu tos a de la insuficiencia renal crónica
expensas de aumentar el volumen líquido eliminado.
Ante un mismo nivel de aclaramiento de creatinina Filtrado
(C = U x V/P) las sustancias eliminadas pueden au- Estadio glomerular {FG} Descripción
mentar (U x V) a condición de qu e lo haga la concen- {ml/min/1,73 m 2}
tración plasmática de esas sustancias (P) . Más de 90 Daño renal
El aumento del volumen a eliminar induce un trán- con FG normal
sito rápido a través de los túbulos e impide que el so-
2 60-89 IRC ligera
dio pase desde la porción ascendente del asa en Henle
al intersticio, lo que evita que este se haga hiperosmo- 3 30-59 IRC moderada
lar y en consecuencia que la orina pueda concentrarse.
4 15-29 IRC grave
En esta fase el aclaramiento está entre 50 y 15 ml/
min, hay hipostenuria (orina con osmolaridad baja) 5 Menos de 15 o Estadio
y en el plasma se acumulan algunos metabolitos de diálisis terminal
forma estable. Hay otros mecanismos de compensa- Adaptado de la National Kidney Foundation.
ción: las glándulas paratiroides ayudan a mantener
constantes los niveles plasmáticos de calcio y fósforo
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

hepatopatías, su síntesis disminuye, independiente-


mente del daño renal.
Tabla Etiología de la insuficiencia Entre los compuestos guanídicos, la creatinina de-
renal crónica riva del metabolismo muscular. Sus valores normales
son más estables (de 0,8 a 1,2 mg/dl) y su aclaramien-
Nefropatía diabética (30 %) to es de 120 ml/min. Debe corregirse por la edad y la
masa muscular del sujeto. Por las dificultades de re-
Hipertensión arteria (25 %)
cogida de orina de 24 h a veces se usa como indicador
Glomerulonefritis crónicas (15 %): amiloidosis, de función renal solo el nivel de creatinina plasmáti-
lupus eritematoso sistémico, enfermedad de ca. Debemos recordar que el filtrado puede disminuir
Wegener) al 50 % sin que haya retención de creatinina. La crea-
Enfermedades urológicas (6 %): uropatía tinina se convierte en sarcosina y metilguanidina.
por reflujo-pielonefritis crónica, toxicidad En general, la urea y la creatinina cuando se retienen
farmacológica, litiasis, mieloma. no son tóxicas; a la elevación de urea es atribuible a la
Poliquistosis renal (4 %) anorexia, los vómitos y la cefalea. Los efectos nocivos
de la uremia se relacionan más con compuestos de 500
Enfermedades vasculares (vasculitis, etc.) a 2000 daltons. Entre los implicados han sido la gua-
nidina, que en animales de experimentación produce
convulsiones y temblores. El ácido indolacético y el
escatol, que derivan del triptófano, se conjugan con
sulfatos en el hígado y generan sustancias que se acu-
La insuficiencia renal afecta a un 30 % de los dia-
mulan en la IRC. De la degradación de aminoácidos
béticos tipo 1 o tipo 2 y se ve favorecida si se asocia
aromáticos se originan fenoles, que son capaces de de-
hipertensión, microalbuminuria o retinopatía.
primir la conducción nerviosa. También se acumulan
fosfatos, más si hay destrucción tisular, y ácido úrico,
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Y BIOQUÍMICAS que deriva del metabolismo de las nucleoproteínas,
que puede precipitar en forma de cristales en las ar-
ticulaciones dando lugar a crisis de gota o en la orina
REPERCUSIONES SOBRE LA ORINA en forma de litiasis úrica. En la IRC también aumentan
Los mecanismos fisiológicos que permiten excretar la PTH, insulina, glucagón, hormona luteinizante y la
solutos obligan a diluirlos, por lo que estos enfermos prolactina y no solo por disminución del catabolismo
excretan grandes volúmenes de orina (poliuria), y ese renal sino por aumento de la secreción glandular.
volumen impide que el intersticio renal sea hipertó-
nico, por lo que se pierde la capacidad de concen-
tración de la orina (estenuria). La orina eliminada es REPERCUSIONES SOBRE EL METABOLISMO
hipoosmolar (hipostenuria). En fases avanzadas la HIDROMINERAL
densidad urinaria asemeja a la del plasma, en torno
a 1010, (isostenuria). Ese volumen se elimina durante En las fases en que hay poliuria el enfermo debe beber
el día y la noche (nicturia). Según la causa de IRC la gran cantidad de líquidos; si no lo hace tiende a la
orina puede mostrar diversas alteraciones: microal- depleción de volumen. En condiciones normales la
buminuria, proteinuria, hematuria, etc. cantidad de Na+ filtrado por el glomérulo se reabsorbe
en los túbulos y se excreta menos de un 1 % . Cuando
el filtrado glomerular disminuye también lo hace la
REPERCUSIONES SOBRE LA SANGRE: carga de sodio filtrada, pero, aún así, es mayor de lo
que debe excretarse cada día. El resultado depende,
UREMIA por tanto, del equilibrio entre filtración glomerular y
Las manifestaciones clínicas no guardan relación con reabsorción tubular. En la IRC hay un capital mayor
los niveles plasmáticos de urea. Las sustancias que no total de sodio y agua en el organismo, aunque varía
pueden eliminarse se acumulan. Algunas de ellas se según la etiología del proceso. Esta expansión del vo-
utilizan para valorar el grado de disfunción renal. Así lumen extracelular favorece la hipertensión arterial.
sucede con la urea, que supone el 80 % del nitrógeno Habitualmente la ingeta de agua ajusta la natremia a
total excretado. Su concentración normal es de 20 a valores normales.
40 mg/dl y expresa su síntesis hepática por desamina- Con un filtrado glomerular normal, cada día se
ción de aminoácidos. Pero su concentración plasmá- filtran 700 milimoles de K+, que se reabsorben en el
tica no es un buen marcador ya que se influye por el túbulo contorneado cortical: el K+ aparece en la orina
catabolismo proteico: 100 g de proteínas generan 35 y refleja el manejo en los tubos colectores corticales
g de urea. En casos de gran catabolismo o si su meta- en respuesta a la aldosterona, y éste en general se
bolismo está acelerado (p. ej., hemorragia digestiva) conserva en la IRC. En las fases iniciales puede haber
sus niveles aumentan mucho y por el contrario, en las hipopotasemia por aumento en su secreción tubular,
CAPÍTULO 60 Insuficiencia renal crónica

pero al avanzar la IRC (CCr < 10 ml/min). hay hiper- a mensajeros citoplásmicos, en general proteínas fija-
potasemia, a pesar de que el potasio corporal total doras de GTP, que hacen expresar el RNA mensajero
está disminuido. A ello contribuye que: de esas proteínas. En la IRC hay cierta resistencia de
acción de la PTH, ya que se altera la regulación de la
El metabolismo diario genera entre 60 y 80 m.Eq/
síntesis de la hormona y la expresión del RNAm está
día de H+, que no pueden eliminarse en la orina;
disminuida.
si hay IRC se acumulan y favorecen la acidosis
metabólica. El exceso de H+ se intercambia a tra- En ocasiones las paratiroides se hacen autónomas ,
vés de las membranas celulares entrando en las independientes del estímulo de la hipocalcemia y se
células y saliendo el K+ al plasma. produce el llamado hiperparatiroidismo terciario, en
También contribuye la disminución en la capaci- el que siguen hiperactivas a pesar de que el sujeto
dad de secreción tubular de potasio. tiene norma o hipercalcemia.
El fosfato está sometido al control de la hormona
La hiperpotasemia se expresa con niveles plas- paratiroidea, que induce su eliminación urinaria. En
máticos elevados (normal 4,5 rnEq/litro) debilidad la IRC aumenta en el plasma porque está disminuido
muscular y alteraciones en el ECG, que pueden variar su filtrado glomerular. El aumento de la concentración
desde la presencia de ondas T picudas al desarrollo de fosfato influye en la mayor producción de PTH,
de fibrilación ventricular. ya que disminuye la producción renal de calcitriol y
Hay tendencia a la hipocalcemia, que se debe a que: hace que disminuya el calcio iónico plasmático.
La vitamina D debe activarse a través de dos hi- Al disminuir el filtrado glomerular el magnesio en
droxilaciones sucesivas, una hepática y otra re- el plasma aumenta, y ello puede implicar alteracio-
nal, y esta falla. Al no haber 1,25 OH 2 vitamina D nes de la conducción neuromuscular y del miocardio.
activa, la absorción intestinal del calcio dismi- En el ECG alarga el PR e inhibe la aparición de tetania
nuye (ya que también lo hace su proteína aco- inducida por la hipocalcemia.
pladora intestinal) y con ello el calcio en orina
también disminuye. REPERCUSIONES SOBRE EL EQUILIBRIO
Los fosfatos contenidos en los alimentos tienden
a unirse con el calcio a nivel intestinal, que está
ÁCIDO BASE
aumentado, y se generan compuestos de fosfato Hemos comentado cómo el metabolismo diario gene-
cálcico insolubles que tienden a eliminarse por ra H+ que debe eliminarse por el riñón en forma de
las heces. amonio (amoniogenesis tubular) , y ello no es posible
La acidosis metabólica evita que el calcio se de- en las fases finales de la IRC y favorece la aparición
posite sobre la matriz ósea. de acidosis metabólica. No obstante, el H+retenido es
Aunque en general la hipocalcemia se tolera bien amortiguado por las sales del hueso.
por la acidosis, se expresa por: La capacidad de producir amoniaco disminuye
aún más si hay hiperpotasemia debido a una menor
Niveles bajos en plasma (menores a 8,5 mg/dl). reabsorción de sodio en el túbulo contorneado proxi-
La hipocalcemia facilita la conducción nervio- mal, y por ello a una menor utilización de ATP. Se usa
sa, lo que hace que pueda aparecer el signo de menos glutamina como fuente de energía y por ello
Chvostek: el golpeteo a nivel de la salida del se produce menos amoniaco en el túbulo proximal.
nervio facial en el maxilar induce la contracción El bicarbonato disminuye (por debajo de 23 mEq/
del orbicular de la boca y el signo de Trousseau: dl) porque lo hace el filtrado glomerular y también
la compresión con el manguito de la toma de la porque se dañan los túbulos. Ello supone una menor
tensión en el brazo induce una contracción es- reabsorción y un aumento de su eliminación. A los
pástica mantenida de los músculos de la mano, hidrogeniones acumulados se añaden otros aniones
es decir con un espasmo del carpo. no excretados (CJ-, PO/ , SO/ y bicarbonato]. Hay ca-
Más raro es que aparezcan crisis de tetania: con- rencia de cationes básicos, algunos eliminados por el
tracciones espasmódicas de grupos musculares, intestino. Todo ello aumenta el anión Gap (Capítulo
habitualmente distales. 77). Se dice que es una acidosis metabólica con anión
En la hipocalcemia el ECG demuestra prolonga- Gap (superior a 20 milimol/1 y descenso recíproco del
ción del intervalo QT. bicarbonato). pero no se expresa hasta que la creatini-
La hipocalcemia genera una respuesta compensa- na plasmática es mayor a 5-6 mg/ dl.
dora de las glándulas paratiroides, con aumento en
la producción hormonal (hiperparatiroidismo secun- REPERCUSIONES SOBRE ÓRGANOS
dario por hiperplasia de las paratiroides), que dismi- Y APARATOS
nuye la reabsorción renal de fosfato y aumenta la li-
beración del calcio del hueso tratando de normalizar Se observan generalmente solo en pacientes con IRC
sus niveles plasmáticos. La PTH se une a una proteína terminal que no se consideran candidatos para técni- ~
específica situada en la membrana celular conectada cas de depuración renal (p. ej., hemodiálisis).
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Aparato digestivo e.iones en el eje hipotálamo-h.ipofisar.io. En la mujer


La urea se acumula en las mucosas. En la boca y por disminuyen los niveles de estrógenos, lo que favorece
la acción de ciertas bacterias se generan vapores de la aparición de amenorrea e infertilidad. En el hombre
NH 3 , que confieren al enfermo un aliento ur.inoso (fé- hay displasia de las células germinales y descenso de
tor o halitosis urémica) y un sabor metálico. Son fre- los niveles de testosterona con pérdida de la libido,
cuentes la estomatitis, la lengua seca y las parot.id.it.is. impotencia y oligospermia. En general la FSH y la LH
En el estómago se genera amoniaco que induce una están aumentadas, ello junto con hiperprolactinemia
gastritis y se favorecen las úlceras mucosas, que con y resistencia gonadal a dichas hormonas. Suele haber
frecuencia sangran. La colonización por Hel.icobac- anomalías de la función tiroidea con rasgos de hipo-
ter pylor.i está aumentada. Aparece anorexia, a veces función: la T3 libre y la unión de la T4 a la globulina
náuseas y en ocasiones hay sangrado, que se favorece están disminuidas .
por alteraciones de la función de las plaquetas. Suele El metabolismo de los principios .inmediatos se
haber estreñimiento, pero se han descrito diarreas por altera: la glucemia basal suele estar normal o aumen-
enteritis amoniacal. tada pero disminuye la tolerancia a la sobrecarga oral
de hidratos de carbono. Al eliminarse la insulina por
Aparato respiratorio el riñón sus niveles suelen estar aumentados en la
Puede haber sequedad traqueal y tos. La acidosis IRC y los requerimientos de insulina en diabéticos
metabólica se expresa con respiración de Kussmaul. disminuye.
A veces hay pleuritis exudativa. Los enfermos están El metabolismo lipídico también se altera: aparece
más expuestos a sobre.infecciones, tal vez por déficit hipertrigliceridemia y aumento de la lipoproteína (a);
de la respuesta inmunitaria a nivel pulmonar. los niveles de colesterol suelen ser normales y tam-
bién se ha descrito disminución del colesterol ligado
Aparato circulatorio aHDL.
En la fase final el volumen plasmático aumenta. Ello También se acelera un catabolismo proteico por
favorece la aparición de .insuficiencia cardiaca, a la aumento de degradación de amoniácidos de cadena
que contribuyen la hipertensión y la anemia. Con ramificada en el músculo esquelético.
frecuencia hay hipertrofia ventricular .izquierda. Hay
depósito de urea en la serosa pericárdica (pericarditis
urém.ica) que se expresa con dolor, roce a la ausculta- ALTERACIONES HEMATOLÓGICAS
ción y alteraciones electrocardiográficas: acortamien- En la IRC suele haber anemia normocít.ica y normocró-
to del PR y elevación difusa del segmento ST. La HTA mica de origen multifactorial: a) está favorecida por la
se favorece por la retención de volumen (sodio y clo- menor producción de eritroproyetina renal; b) a ella
ro) y los niveles inapropiadamente elevados de reni- se añaden déficits nutricionales por anorexia; c) suele
na para un volumen extracelular que está expandido. haber un aumento de pérdidas hemáticas por hemorra-
La HTA favorece la hipertrofia ventricular izquierda. gias; d) en general el medio agresor facilita la hemólisis
Por la fibrosis miocárdica (depósito de urato , oxálico de los hematíes; e) el enfermo utiliza mal el hierro ya
y calcio) se favorece la disfunción diastólica. que está inmerso en un proceso inflamatorio crónico.
En la IRC el riesgo card.iovascular está muy aumen- La presencia de anemia aumenta el gasto cardiaco
tado y también lo hacen las complicaciones cardio- y favorece la aparición de angina y de insuficiencia
vasculares. cardiaca congestiva,
Sobre la hemostasia, la IRC altera las funciones
Manifestaciones neuromusculares
plaquetarias de adhesión y agregación, lo que se
Son varias y sus mecanismos son bien conocidos. En expresa con una prolongación del tiempo de hemo-
las fases iniciales se altera la capacidad de concentra- rragia. A causa de los niveles aumentados de ácido
ción, y puede existir somnolencia diurna e .insomnio. guanidosuccínico disminuye la actividad del factor
A ellas se añade debilidad muscular, parestesias y ce- 3 plaquetario, y tan1bién se altera la producción de
falea. En una segunda fase hay pérdida de memoria, prostaciclina y factor VIII. El número de plaquetas,
errores en el juicio e irr.itab.il.idad neuromuscular con el tiempo de coagulación de protrombina y el tiempo
presencia de calambres y m.ioclonías. de tromboplastina parcial activado son normales. Por
En fases avanzadas hay aster.ix.is (alteraciones del tanto, se favorece la tendencia al sangrado, sobre todo
tono muscular que se expresa en las manos en forma en piel y mucosas (púrpuras}, pero también las epis-
de temblor aleteante), estupor, convulsiones y coma. taxis y los hematomas o los sangrados en cualquier
También aparece neuropatía somática, inicialmente órgano.
sensitiva y posteriormente motora. El número de leucocitos es normal pero hay altera-
ción de las funciones granulocíticas, de los monoc.i-
Sobre el sistema endocrino tos y los linfocitos. Hay atrofia linfoide y l.infopenia.
Se ha comentado la aparición de h.iperparat.iro.id.ismo Por ello se altera la inmunidad celular (retardada) y
512 secundario. Suele haber disfunción ganada] y altera- la humoral. Al enfermo se le debe considerar inmu-
CAPITULO 60 Insuficiencia renal crónica

nocomprometido. La aparición de fiebre en respuesta


a las infecciones está disminuida, tal vez por efecto
directo de las toxinas sobre el hipotálamo. Tabla Factores implicados
en la progresión de la insuficiencia
renal crónica
APARATO LOCOMOTOR
Hipertensión arterial no controlada
Las manifestaciones clínicas sobre el hueso son poco
frecuentes (10 % de los casos), pero sus alteraciones Depleción de volumen o hipotensión arterial
radiológicas o histológicas lo son más (del 40% al Uso de sustancias nefrotóxicas
50 % ). Pueden deberse al déficit de vitamina D activa,
con aparición de raquitismo en el niño u osteomala- Infecciones sobreañadidas
cia en el adulto. En los sujetos tratados con diálisis se Uropatía obstructiva
relaciona con la toxicidad del aluminio ya que este
afecta negativamente a la mineralización. Los enfer- Insuficiencia cardiaca congestiva
mos con IRC son propensos a fracturas que consoli- Alteraciones electrolíticas
dan lentamente por la osteítis o la osteomalacia. La
malnutrición y la acidosis favorecen la aparición de Dietas hiperproteicas
los cambios óseos. Hiperpotasemia
Otras veces las manifestaciones óseas se deben a
un hiperparatiroidismo secundario, que reabsorbe Hiperlipidemia
calcio y produce una osteítis fibroquística. Esta es
una osteodistrofia de recambio rápido en la que se
demuestra un aumento del número y tamaño de los
osteoclastos, depósito desordenado del colágeno y Ciertos genes se implican en ello. Se conocen
recambio óseo acelerado. algunos polimorfismos del gen que controla la
Si el producto calcio-fósforo aumenta, precipitan síntesis del enzima conversor de la angiotensina
formando hueso en los tejidos blandos, que dan lugar (ECA), ya que la deleción D/D aumenta el riesgo
a lesiones condensantes u osteosclerosis. de la progresión.
También se ha descrito el fenómeno llamado calci- Las dietas hiperproteicas favorecen la hiperfil-
filaxia, que expresa la aparición de lesiones necróti- tración y hace progresar las lesiones.
cas localizadas en los tejidos blandos y en las extre- La hiperlipemia favorece la glomeruloesclerosis.
midades, y debidas a la oclusión vascular de las ar- La hipertensión arterial favorece la esclerosis
teriolas sucutáneas por calcificaciones. Hay necrosis glomerular, los inhibidores de la enzima de con-
isquémica del músculo y la piel. versión enlentecen la progresión de la insufi-
Además, en la IRC se ha señalado una miopatía ciencia renal.
proximal que se asocia a la osteítis fibroquística y La hipotensión arterial o la depleción de volu-
produce alteraciones de la marcha. men disminuye el filtrado glomerular y reagudi-
za una IRC.
El hiperparatiroidismo terciario favorece el de-
PIEL pósito de calcio en el parénquima.
Se acumulan urocromos que junto con la anemia dan En general, el buen control de los diferentes facto-
a la piel un color amarillo pajizo. La piel está seca, lo res enlentece el deterioro de la función renal.
que favorece el prurito. Los enfermos con IRC pueden fallecer por acidosis
metabólica e hiperpotasemia que induce fibrilación
ventricular, o por hemorragias sobre órganos vitales.
PROGRESIÓN DE LA INSUFICIENCIA RENAL La insuficiencia cardiaca congestiva favorece la apa-
CRÓNICA rición de edema agudo de pulmón, y también muy
frecuente la aparición de complicaciones vasculares
La progresión es muy variable de unos individuos a (angina, 1AM, ictus}, responsables de la mitad de las
otros. La Tabla 60-3 muestra los principales factores causas de fallecimiento en pacientes con IRC termi-
implicados: nal.
·161
Patología general
de las enfermedades
de las vías urinarias
y la vejiga. Litiasis renal
Reyes Pascual Pérez, Francisco Rivera Hernández, Sara Anaya Fernández

RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL
El tracto urinario inferior, formado por la vejiga, la
uretra y las estructuras adyacentes tiene como misión
almacenar y evacuar periódicamente la orina. Se trata
de un proceso complejo en el que participan el siste-
ma nervioso autónomo y el somático. Durante la fase
de llenado la vejiga se relaja, con acumulación de ori-
na a baja presión. Durante la fase de vaciado la vejiga
se contrae y se relaja la uretra.
Los nervios pélvicos e hipogástricos, mediante
fibras simpáticas y parasimpáticas, son los respon-
sables de la inervación eferente del detrusor, el es-
fínter liso y músculo del trígono y la uretra proximal.
En la médula espinal hay tres núcleos con fibras afe-
rentes y eferentes encargados de controlar la micción
(Fig. 61-1).
El parasimpático eferente se origina en el núcleo
parasimpático sacro (S2-S4) y, mediante raíces ner-
viosas anteriores, forma los nervios pélvicos que iner-
van la pared vesical y el músculo detrusor.
El simpático eferente proviene del núcleo simpá-
tico espinal, situado en las metámeras D10-L2. Las
fibras atraviesan los ganglios simpáticos lumbares y
paravertebrales; donde establecen sinapsis y forman
el nervio presacro, que a nivel de la primera vértebra
sacra y anterior a la aorta se divide en dos ramas, que
son los nervios hipogástricos que inervan el cuello
vesical y el trígono.
El nervio pudendo surge de las metámeras S2-S4
y, mediante inervación somática, inerva el músculo
estriado perineal y el esfínter estriado.
La inervación sensitiva (rama aferente) se inicia
en receptores submucosos, uniformemente distri-
~
buidos en la vejiga, el tejido muscular y la uretra. El
CAPÍTULO 61 Patología general de las enfermedades de las vías urinarias y la vejiga. Litiasis rena l

Área motora del detrusor


Acción voluntaria
Cerebro

Coordinador
úcleo
pontino

úcleo
parasimpático Músculo
detrusor
úcleo
somático

externo
Ano

Figura Inervación del aparato urinario inferior.

o Receptores co linérgicos /\ Receptores~ ,_,, Receptores a


nervio pudendo vehiculiza los impulsos propiocep-
tivos. Figura Distribución de los neurorreceptores en
Las funciones efectoras (rama eferente) se realizan el aparato urinario inferior.
gracias a ciertos neurotransmisores que se unen a los
neurorreceptores. Estos receptores son de tres tipos:
alfa -adrenérgicos, beta-adrenérgicos y colinérgicos. El dolor del cólico nefrítico se debe a la dilatación
En la pared vesical predominan los receptores coli- aguda del uréter por encima de una obstrucción de
nérgicos y beta-adrenérgicos, y en el trígono y el cue- la vía urinaria. Las causas más comunes son la litia-
llo vesical los alfa-adrenérgicos (Fig. 61 -2) . Por tanto, sis, los coágulos u otros elementos formes (papilas
durante la fase de llenado predomina el estímulo renales desprendidas, etc.). Este dolor es intenso, de
alfa-adrenérgico, con contracción del cuello vesical carácter cólico, se irradia hacia los genitales por los
que asegura la continencia. Durante la fase de vaciado flancos y suele ir acompañado de náuseas y vómitos.
predomina la estimulación colinérgica, que contrae La fiebre sólo aparece si se produce una infección
el cuerpo vesical y relaja el tramo de salida al contra- (pielonefritis).
rrestar el estímulo alfa-adrenérgico. La disuria consiste en la micción dolorosa, con
La micción es un acto reflejo pero regulado por la sensación de ardor, y suele ir acompañada de tenes-
voluntad. Cuando se acumulan unos 200-3 00 ml de mo (necesidad imperiosa de orinar que persiste una
orina en la vejiga (presión superior a 20 cm de H 2 O), vez finalizada la micción), polaquiuria y dolor en el
se desencadena un estímulo parasimpático que con- hipogastrio y en el meato urinario. Se produce por
lleva la contracción del músculo detrusor vesical y la irritación de la vejiga y de la uretra, así como por la
relajación del esfínter interno. En un adulto normal presencia de cálculos en el extremo distal del uréter y
se almacenan 350-400 ml de orina, aunque la necesi- en la estenosis de la uretra posterior. Las causas más
dad de orinar puede surgir con 150-250 ml. frecuentes son las infecciones, la litiasis y el carci-
El área 4 de la corteza cerebral y algunos núcleos noma vesical. La disuria en el inicio de la micción
hipotalámicos (núcleo pontino) regulan el control orienta hacia un origen uretral de la misma y la final
voluntario de este reflejo (que madura a los 2-3 años hacia un origen vesical.
de edad), mediante la contracción-relajación del ner-
vio pudendo externo.
A continuación se indican las principales altera- POLAQUIURIA
ciones fisiopatológicas de las vías urinarias bajas.
Es el aumento de la frecuencia de las micciones, que
MANIFESTACIONES CLÍNICAS en general son de escaso volumen. Se considera po-
laquiuria la emisión de más de 6 micciones al día. La
DOLOR polaquiuria se origina por hiperestimulación de los
órganos que inician la micción. Se debe a:
El dolor originado en las vías urinarias puede ser alto
(cólico nefrítico) o bajo (disuria). Disminución de la capacidad vesical.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Obstrucción urinaria infravesical (adenoma de uretral unos milisegundos antes de la contracción del
próstata, valvas uretrales, estenosis, etc.). detrusor. Si la contracción mantenida del detrusor se
Infecciones (cistitis). produce con normalidad, la vejiga se vacía completa-
Litiasis. mente. El control voluntario de la micción depende
de las conexiones neurales entre la corteza cerebral y
NICTURIA el tronco. Para que la coordinación entre el detrusor y
el esfínter uretral sea precisa es necesario que el siste-
Consiste en la interrupción del sueño por el deseo im- ma nervioso autonómico y somático entre la vejiga y
perioso de orinar. La nicturia tiene las mismas causas la uretra esté indemne. Las alteraciones de la fase de
que la polaquiuria, y además puede estar originada por: vaciado se relacionan con:
Reducción de la capacidad vesical (infiltración Detrusor acontráctil, cuando no se puede con-
tumoral, microvejiga por radioterapia, etc.). traer después de llenada la vejiga. Se produce
Aumento del volumen de la diuresis (poliuria) . por lesiones medulares altas o bajas.
Redistribución de edemas (insuficiencia cardia- Obstrucción mecánica infravesical o hiperactivi-
ca, hepatopatía, síndrome nefrótico). dad esfinteriana.
Obstrucción del cuello vesical por enfermedad Disinergia detrusoesfinteriana, con vejiga que
prostática. almacena gran cantidad de orina y dificultad en
la relajación del esfínter; puede complicarse con
URGENCIA MICCIONAL reflujo vesicoureteral e hidronefrosis.
Es el deseo imperioso de orinar. En general está produ-
cido por inflamación del tracto urinario inferior como VEJIGA NEURÓGENA
cistitis y en las enfermedades prostáticas. La disuria, Es el término clínico que designa las alteraciones
la polaquiuria, la urgencia miccional y el tenesmo de las funciones que intervienen en el control de la
suelen tener una causa común de naturaleza infeccio- micción. En la Tabla 61-1 se recoge la clasificación
sa u obstructiva y habitualmente se presentan juntas. de la International Continence Society, basada en la
evaluación de la función del detrusor, de la uretra y
SÍNTOMAS OBSTRUCTIVOS la sensación mediante pruebas urodinámicas . La Ta-
bla 61-2 muestra las principales causas de disfunción
Los principales son: dificultad o la fuerza en el inicio vesical neurógena.
de la micción, disminución del calibre o la fuerza del
chorro urinario , micción intermitente, interrupción
del chorro y goteo postmiccional. ENURESIS
Es la incontinencia que aparece después de los 3-4
INCONTINENCIA URINARIA años de edad. Suele tener un origen psicógeno, sobre
todo cuando es nocturna. No obstante siempre hay
Consiste en la pérdida involuntaria de orina. Se pro- que descartar una alteración de las vías urinarias.
duce por alteraciones en las fases de llenado y/o de
vaciado vesical.
RETENCIÓN URINARIA
Disfunción en la fase de llenado Es la incapacidad para vaciar completamente la veji-
Se implica en varios tipos de incontinencia: ga urinaria. Cuando es total o absoluta aparece anuria
De urgencia, cuando hay necesidad imperiosa de y cuando es parcial se acumula orina progresivamen-
orinar. Se produce por hiperactividad del detru- te en la vejiga dando lugar al llamado globo vesical.
sor o por hipersensibilidad de la mucosa vesical, Cuando la retención crónica hace que la vejiga alcan-
así como por causas neurológicas (mielomenin- ce una determinada presión, puede aparecer inconti-
gocele, tumores cerebrales). nencia, denominada de rebosamiento.
De esfuerzo (de estrés), tras ejercicio físico o au-
mento de la presión intraabdominal (tos, risa).
Se debe a alteraciones de la inervación del esfín-
REFLUJO VESICOURETERAL
ter o a debilidad del suelo pélvico (gestaciones Durante la micción las uniones ureterovesicales son
previas). competentes y se cierran para que la orina salga al
Por rebosamiento, por hiperdistensión vesical, exterior completamente a través de la uretra, sin re-
obstrucción infravesical o lesiones medulares. troceder por los uréteres. El reflujo vesicouretral con-
siste en la fuga de orina de forma retrógrada desde la
Disfunción en la fase de vaciado vejiga hacia los uréteres y la pelvis renal durante la
micción. Este reflujo puede estar ocasionado por:
El vaciado vesical depende de la integridad de las
516 funciones neuromusculares que relajan el esfínter Alteración congénita de la unión ureterovesical.
CAPÍTULO 61 Patología general de las enfermedades de las vías urinarias y la vejiga . Litiasis renal

Tabla Clasificación de la disfunción vesical neurógena


Detrusor Uretra Sensación
Normal
Hiperactivo Normal Normal
Inestable Hiperactiva Hipersensitiva
Hiperrefléxico Sincrónica con el detrusor Hiposensitiva
Hipoactivo Asincrónica con el detrusor
No contráctil Falta de relajación del cuello vesical
Arrefléxico Disinergia del esfínter externo

Desestructuración vesical (microvejiga, obstruc- UROPATÍA OBSTRUCTIVA


ción infravesical, etc.).
Se define como la detención del flujo urinario en las
Es causa de infecciones urinarias repetidas y de vías por obstrucción.
pielonefritis crónica que puede desembocar en una Las causas pueden ser orgánicas (cálculos, tumo-
insuficiencia renal crónica. res , malformaciones congénitas, hipertrofia prostáti-
ca o fibrosis retroperitoneal) y funcionales, por tras-
tornos en el vaciamiento vesical. Hay que señalar qu e
las lesiones más b ajas ocasionan obstru cción de am-
Tabla Causas de disfunción bos uréteres . Las consecuencias de ello pueden ser:
vesical neurógena a) infección urinaria; b) hidronefrosis; oc) nefropatía
(afectación del parénqu ima renal).
Congénitas La nefropatía poruropatía obstructiva puede ser fun-
Espina bífida cional u orgánica. En la funcional que aparece en pro-
Agenesia sacra cesos agudos hay un aumento de la presión intratubu-
Malformaciones arteriovenosas medulares lar con transmisión retrógrada, lo que también puede
Malformación de Arnold-Chiari ocasionar vasoconstricción intrarrenal y, finalmente,
disminución de la filtración glomerular.
Adquiridas
La traducción clínica de la uropatía obstructiva
Traumáticas (traumatismos cerebrales,
medulares, plexos nerviosos) puede consistir en:
Inflamatorias (neuropatía diabética, Disminución de la capacidad de concentración
neuropatía alcohólica, síndrome de urinaria, con aparición de una diabetes insípida
Guillain-Barré, mielitis transversa,
mielopatía por déficit de vitamina B12 ) nefrogénica parcial o completa.
Disminución de la capacidad de acidificación
Infecciosas (herpes zóster, poliomielitis,
tabes dorsal) urinaria.
Vasculares (ictus, s índrome de la arteria Fibrosis intersticial crónica progresiva, con desa-
espinal anterior) rrollo de insuficiencia renal crónica (nefropatía
Tumores (primarios del SNC o túbulo intersticial).
metastásicos) Atrofia renal.
Enfermedades degenerativas (Parkinson,
esclerosis múltiple, s índrome de VALORACIÓN DEL PACIENTE CON
Shy-Drager, demencia)
Lesiones oseocartilaginosas vertebrales
ALTERACIÓN DE LAS VÍAS URINARIAS
(hernias discales, escoliosis, osteoporosis, La evaluación correcta de un paciente con alteración
espondilitis anquilopoyética, artritis
reumatoide) de vías urinarias debe incluir:
Miscelánea (miastenia gravis, hidrocefalia Historia clínica, con especial énfasis en los an-
con presión normal , parálisis cerebral) tecedentes y síntomas urológicos y neurológicos.
Exploración general: palpación ab dominal
517
en busca de globo vesical, tacto rectal y, en las
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

mujeres, exploración pélvica para comprobar si Cistomanometría. Mide las presiones in-
existen tumoraciones que desplacen o compri- travesicales mediante un catéter vesical.
man la vía urinaria. Exploración neurológica, Simultáneamente se mide la presión intra-
fundamentalmente de las metámeras relaciona- abdominal mediante un catéter rectal.
das con el ciclo miccional y exploración de la
sensibilidad, sobre todo de las metámeras sacras
y toracolumbares, motricidad, reflejos cutáneos LITIASIS URINARIA
superficiales, profundos y viscerales. La litiasis renal o nefrolitiasis se define como la pre-
Realizar determinadas pruebas de laboratorio: cipitación en el tracto urinario de ciertas sustancias
urea y creatinina séricas, sedimento urinario y que se eliminan normalmente por la orina y dan lugar
cultivo de orina si se sospecha infección. a formaciones sólidas en forma de cuerpos cristalinos
En ocasiones será preciso proceder al sondaje organizados de distinta composición y tamaño . Los
vesical para valorar el contenido de la vejiga y la cálculos pueden ser transportados por el flujo uri-
existencia de residuo postmiccional. nario a través del sistema colector. En ocasiones son
Técnicas de imagen. Las más empleadas son: demasiado grandes para pasar a través del infundí-
Radiografía simple de abdomen. Puede po-
bulo, los uréteres o la uretra, y originan una uropatía
ner de manifiesto litiasis radiopacas y calci- obstructiva. Algunos cálculos pueden formarse en la
ficaciones pélvicas (p. ej., miomas). vejiga.
La litiasis del tracto urinario es una patología muy
Ecografía renal y pélvica. Es un método no
frecuente en países desarrollados, con una prevalen-
invasivo que permite determinar el volumen
cia aproximada del 4 % en España, siendo más fre-
residual de orina y la existencia de altera-
cuente en varones. El primer episodio de nefrolitiasis
ciones del tracto urinario superior, vejiga,
suele aparecer a los 30-60 años en varones y a los 20-
pelvis y próstata. Por ejemplo, detecta litia-
30 años en mujeres. Los factores de riesgo de presen-
sis de pequeño tamaño (menos de 2 mm) y
los radiotransparentes. Su alta sensibilidad tar litiasis renal se resumen en la Tabla 61-3.
y especificidad y la ausencia de radiación la
convierten en la primera técnica de imagen
a realizar.
TIPOS DE CÁLCULOS
Urografía intravenosa. Informa sobre la El 80 % de los cálculos renales están compuestos de
morfología y función del tracto urinario calcio, principalmente en forma de oxalato cálcico
superior e inferior y de la vejiga, y sobre la y, con menos frecuencia, de fosfato cálcico. El 20 %
existencia de complicaciones como hidrone- restante están compuestos de ácido úrico, cistina o
frosis, litiasis u otras. Visualiza los cálculos fosfato amónico-magnésico (estruvita). Existen tam-
radiotransparentes. Por el riesgo que com- bién cálculos mixtos (Figura 61-3a). Las caracterís-
porta el contraste intravenoso se utiliza cada ticas de cada tipo de cálculo se resumen en la Tabla
vez con menor frecuencia. Sin embargo, la 61-4.
pielografía retrógrada inyectando el con-
traste en los uréteres mediante un catéter a PATOGENIA
través de la uretra y la vejiga, puede ser una
técnica necesaria para completar el estudio En concentración baja, las sales de calcio, oxalato,
de la naturaleza de las lesiones. fosfato y otros minerales se encuentran diluidas en la
Tomografia computarizada. Proporciona orina. Si aumenta la concentración y se supera la ca-
datos de la localización de la obstrucción y pacidad de saturación de la orina, estas sales precipi-
de la naturaleza, tumoral o de otro origen del tan y forman los núcleos de los cristales sobre los que
problema. posteriormente se formarán los cálculos . En la orina
RM. Está indicada en el estudio de la patolo- también existen sustancias que inhiben la formación
gía del cono medular y en niños con disfun- de cristales (la más importante es el citrato) y sustan-
ción neurógena vesical congénita. cias que favorecen la precipitación (como la sustan-
Cistouretrografía miccional seriada. Valora cia A y algunas proteínas ácidas). Así, en presencia
la morfología del tracto urinario inferior, la de una concentración elevada de sales, descenso de
funcionalidad del cuello vesical y el esfínter citrato en orina (hipocitraturia) o presencia de sus-
estriado y la existencia de complicaciones tancias promotoras, aparecerán los núcleos de los
(litiasis, reflujo vesicoureteral, divertículos, cristales. Posteriormente se van agregando cristales
etc.). hasta formar el tamaño definitivo del cálculo. En este
Exploración urodinámica:
proceso influye el pH de la orina, de modo que cuan-
do es ácido se favorece la formación de los cálculos
Uroflujometría. Mide el volumen de orina de úrico y cistina, mientras que el pH alcalino favore-
518
que se expulsa por unidad de tiempo. ce la precipitación de litiasis de fosfato. El descenso
CAPÍTULO 61 Patología general de las enfermedades de las vías urinarias y la vejiga. Litiasis renal

de síntomas urinarios, como disuria, polaquiuria y


tenesmo , sobre todo si la litiasis se sitúa en el tercio
Tabla Factores favorecedores inferior del uréter. Cuando se consigue la expulsión
de la formación de cálculos renales del cálculo en la orina, ceden los síntomas.
En algunos casos la litiasis renal resulta asintomá-
Anatómicos: tica o sólo aparece hematuria (macro o microscópi-
De origen renal: De origen ureteral: ca) . En otras ocasiones menos frecuentes, la litiasis
Riñón en Megauréter se manifiesta como dolor lumbar leve, o se descubre
herradura Duplicidad ureteral en el estudio de una infección urinaria o de un modo
Riñón en esponja Reflujo vesico- incidental.
Poliquistosis ureteral Las complicaciones más comunes son la obstruc-
renal Ureterocele ción urinaria (con deterioro de la función renal en
Ectopia renal Ureterohidronefrosis pacientes monorrenos) y la infección (pielonefritis
Quistes sinusales aguda) que puede dar lugar a una sepsis o evolucio-
o caliciales nar a pionefrosis (retención de orina purulenta en la
Megacálices pelvis renal), perinefritis o absceso perirrenal (por
Divertículo extensión de la infección al tejido perirrenal) o una
calicial pielonefritis xantogranulomatosa (sustitución del pa-
Hidronefrosis rénquima renal por tejido fibroadiposo) en pacientes
congénita con litiasis coraliforme, tras años de evolución de in-
Étnicos: más frecuente en raza blanca fección renal subclínica mantenida. Los cuadros de
nefrolitiasis de repetición o persistentes pueden dar
Geográficos: más frecuente en USA, Japón y lugar a pielonefritis crónica y nefritis tubulointersti-
Europa Occidental cial crónica, con deterioro de la función renal a lo
Socioeconómicos: más frecuente en largo de años y que puede evolucionar a IRC terminal.
sociedades desarrolladas
Genéticos: 45 % de los casos tienen base DIAGNÓSTICO
hereditaria, sobre todo asociada a hipercalciuria
Anamnesis
Climáticos: más frecuente en climas cálidos
Deberemos preguntar sobre antecedentes familiares,
Dietéticos : ingesta
de purinas, proteínas historia previa de cólicos renales o la presencia de facto -
animales, suplementos cálcicos, vitamina C, res favorecedores de litiasis urinaria (dieta, ingesta de
disminución de ingesta hídrica líquidos, anomalías anatómicas renales o ureterales).
Metabólicos: obesidad, gota, (hiperuricemia),
hipercalcemia, (hiperparatiroidismo primario) Exploración física
hipercalciuria, hipocitraturia, diabetes mellitus
En la exploración física, durante el episodio agudo de
Otros: infecciones urinarias de repetición , cólico renal, nos encontraremos un paciente con in-
fármacos (indinavir, aciclovir, sulfadiazina, quietud, sudoración y palidez. La puñopercusión del
triamterene) , ejercicio físico intenso
lado afecto resulta dolorosa. Es importante medir las
constantes vitales (presión arterial, frecuencia cardia-
ca y temperatura) para detectar complicaciones como
infección o sepsis.
del volumen de orina también facilita la formación
de cálculos. Pruebas de laboratorio
Hemograma: Puede orientar sobre la existencia
SÍNTOMAS de infección subyacente, con la presencia de leu-
cocitosis y neutrofilia.
El cuadro característico de los cálculos renales es el Coagulación: Su alteración orienta h acia la pre-
cólico nefrítico o reno ureteral. Se produce cuando el sencia de sepsis urinaria.
cálculo renal se mueve de la zona de formación y si- Bioquímica : Con determinación de urea y crea-
gue el flujo urinario hasta una zona del tracto urinario tinina para conocer la función renal. así como
en la que queda anclado e impide el flujo de orina. iones sodio y potasio.
Aparece entonces dolor lumbar en la región del riñón Análisis de orina: Con determinación del pH, de-
afecto, de intensidad creciente en horas, irradiado tección de hematíes y leucocitos con tira reactiva
por el trayecto ureteral y hacia la región genital. El y realización de sedimento urinario, que permi-
dolor puede acompañarse de sudoración, palidez, an - tirá visu alizar cristales (Fig. 61-3b), hematíes,
519
siedad, náuseas, vómitos e íleo paralítico y, también leucocitos y bacterias.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato genitourinario

Tabla Tipos más comunes de cálculos renales y sus principales características


Tipo de Aspecto en el Aspecto
Causas
cálculo sedimento urinario radiológico
Oxalato Hiperparatiriodismo primario Forma de pesa, Radiopaco
cálcico-fosfato Acidosis tubular renal bipiramidal , como sobre
cálcico
Sarcoidosis doblado o aguja
Otras causas de hipercalciuria y/o
hipercalcemia
Hiperoxaluria: Origen dietético, entérico o
metabólico
Fármacos: Acetazolamida, vitamina
D, laxantes, uricosúricos, triamterene,
sulfamidas
Hipocitraturia secundaria acidosis
sistémica (acidosis tubular renal , empleo
de acetazolamida o tiazidas, diarrea)
ldiopática (50-60 %)
Ácido úrico pH urinario ácido(< 5): Diarrea crónica, Cristales con múltiples Radiotransparente
hipoamoniuria famil iar formas, con frecuencia
Aumento ingesta de purinas romboidales o como
Incremento de l recambio celular: rosetas, de color
Procesos mieloproliferativos, s índrome amarillento o marrón
de lisis tumoral, psoriasis rojizo
Hiperuricosuria endógena con
hiperuricemia y gota
Cistina Cistinuria: Trastorno de herencia Forma hexagonal Radiotransparente
autosómica recesiva con alteración del
transporte intestinal y tubular de cistina
Estruvita Infección urinaria por bacterias Como «tapas de ataúd » Radiotransparente
(fosfato amonio productoras de ureasa (Proteus ,
magnésico) Klebsiella )

Cultivo de orina si se sospecha infección sobrea- pechamos hiperparatiroidismo primario (h ipercalce-


ñadida. La orina debe recogerse en condiciones mia, hipofosfatemia, hipercalciuria).
de asepsia y antes de iniciar tratamiento antibió-
tico. Pruebas de imagen
Cu ando es p osible, an álisis mo1focon stitucio-
Radiografía simple de abdomen: Permite de-
nal del cálculo con técnicas cristalográficas óp-
tectar cálculos radiopacos (cálcicos) y definir
ticas o espectroscopia de infrarrojos , así como
morfología, tamaño, localización y número de
la visualización de las características macroscó-
litiasis (Fig. 61 -4) . Por su sencillez y rapidez, es
picas.
la primera prueba a realizar.
La realización de un estudio metabólico está in di- Ecografía abdominal (Fig. 61-5 ): Detecta litiasis
cado en pacientes menores de 30 años , monorrenos , de pequeño tamaño (inferiores a 2 mm) y radio-
con historia familiar de litiasis o si hallamos cristales transparentes (cistina, ácido úrico) y permite la
de cistina en el sedimento. Este estudio, que se debe observación de algunas anomalías anatómicas
realizar al menos tres semanas después del episodio o complicaciones, como obstrucción urinaria o
agudo, incluiría a dem ás del análisis rutinario de ori- ab scesos. En ocasiones no consigue visu alizar y
n a, cu antificación en orina de 24 horas de creatinina, diagnosticar cálculos alojados en uréter si n o h ay
ácido úrico, calcio, fósforo, oxalato, citrato y cistina. dilatación de la vía urinaria.
Los valores normales se recogen en la Tabla 61 -5. La Urografía intravenosa: Permite visualizar cálcu-
520
determinación de PTH en sangre es obligada si sos- los radiotransparentes y evaluar la morfología y
CAPÍTULO 61 Patología general de las enfermedades de las vías urinarias y la vejiga. Litiasis renal

Figura A) Múltiples litiasis de 0,5 mm y 5 mm compuestas por fosfato amónico magnésico y carbonato
cálcico. B) Cristales de estruvita en sedimento urinario (por cortesía de las Oras. Carrasco y Agarrado, Laboratorio de Análisis
Clínicos, Hospital General de Ciudad Real).

función renal y del tracto urinario (dilatación de


la vía urinaria).
Tabla Valores normales en orina TAC helicoidal sin contraste: Hoy en día está
sustituyendo a la urografía intravenosa por la
Hombres Mujeres sencillez de su realización y porque permite un
estudio más completo y de mayor resolución del
Ácido úrico < 800 mg/día < 750 mg/día
riñón y vías urinarias. Permite la localización
Calcio < 300 mg/día < 250 mg/día del cálculo (radiopaco y radiotransparente) y su
repercusión sobre el tracto urinario.
Oxalato < 45 mg/día < 45 mg/día Otras exploraciones urológicas, como uretro-
cistografía retrógrada y ureteropielografía ascen-
Citrato > 320 mg/día > 320 mg/día dente o descendente están indicadas solamente
en casos de dudas diagnósticas, cálculos radio-
transparentes o alergia a contrastes yodados.

I
o

Figura Ecografía renal que muestra riñón de-


Figura Radiografía simple de abdomen. Litiasis recho con imágenes ecogénicas en los tres grupos ca-
coraliforme que ocupa cálices y pelvis de riñón dere- liciales correspondientes a múltiples litiasis cá lcicas
cho (flecha). Se observa también litiasis a nivel de uré- (flecha continua) con sombra acústica posterior (flecha
ter lumbar (círcu lo). Por cortesía del Dr. Pinar Ruiz, Servicio de discontinua). Por cortesía del Dr. Pinar Ruiz, Servicio de Radio- 521
Radiodiagnóstico, Hospital General de Ciudad Real. diagnóstico, Hospital General de Ciudad Real.
-162
Introducción a los síndromes
endocrinos y metabólicos
José Antonio Amado Señaris, José Manuel Olmos Martínez

GLÁNDULAS ENDOCRINAS
Las glándulas endocrinas liberan su
secreción, las hormonas, directamen-
te a la sangre, que ejercen sus efectos
a distancia. Las hormonas son men-
sajeros químicos que inducen efectos
específicos en determinados tejidos. La
acción de las hormonas sólo se pone de
manifiesto cuando interactúan con un recep-
tor celular específico, tras lo cual se desencadena una
reacción metabólica particular.
Hacia principios del siglo xx se identificaron las
glándulas endocrinas «clásicas» (tiroides, suprarre-
nales, gónadas, hipófisis, paratiroides, islotes pan-
creáticos). Hoy sabemos que no todas las hormonas
circulantes proceden de estas glándulas. Así, por
ejemplo, el intestino, el riñón, el sistema nervioso
central, el corazón, el sistema reticuloendotelial, el
tejido adiposo o el endotelio vascular elaboran sus-
tancias con efectos considerados típicamente hormo-
nales.
Además se ha demostrado la existencia de una mi-
ríada de sustancias de efecto específico que ejercen
una acción básicamente local (paracrina), no a dis-
tancia. Estas sustancias son producidas por múltiples
células no relacionadas entre sí y se denominan ci-
tocinas. Muchas de ellas son factores de crecimiento
locales, aunque modulan no sólo el crecimiento sino
también la función de numerosos tejidos y órganos.
La secreción de algunas citocinas está sometida a una
regulación que interactúa con el sistema endocrino
clásico. Así, la interleucina 1 activa la liberación de
ACTH, que a su vez aumenta los niveles de corti-
sol, que finalmente frenan la producción de más
interleucina 1.
Las citocinas actúan generalmente a nivel
local, pero en ocasiones se producen en tal
cantidad que superan los mecanismos
de control local, circulan en la sangre
y producen efectos a distancia. Por
522
ejemplo, la interleucina 1 liberada
CAPÍTULO 62 Introducción a los síndromes endocrinos y metabólicos

por los monocitos como respuesta ante una infección del tiroides, sino de la desyodación hepática de la T4)
local puede provocar fiebre a través de un mecanis- y de su aclaramiento metabólico. Muchas hormonas
mo hormonal, y la proteína relacionada con la PTH circulan en la sangre unidas en gran parte a proteí-
[PTHrP] producida por una neoplasis es capaz de ac- nas transportadoras , de manera que solo una pequeña
tivar los osteoclastos a distancia, provocando hiper- fracción circula libre. La fracción libre es la única dis-
calcemia. ponible para su transferencia inmediata a los tejidos y
El sistema endocrino no tiene una continuidad es, por tanto, la única biológicamente activa.
anatómica, como el aparato digestivo; no obstante, la Para que una hormona pueda actuar sobre una cé-
localización de las glándulas no es caprichosa. Así, lula, primero ha de unirse a un receptor. Los recepto-
por ejemplo, los islotes pancreáticos se sitúan en el res de las hormonas polipeptídicas se localizan en las
sistema portal para liberar la insulina directamente membranas celulares y utilizan segundos mensajeros
al hígado , su principal órgano diana, en el periodo intracelulares (AMPc, GMPc, fosfoinositoles, calcio,
posprandial. La respuesta de las diversas glándulas se etc.), que modulan la actividad enzimática celular,
coordina entre sí y con el sistema nervioso; por ejem- mientras que los receptores de las hormonas tiroideas
plo, si disminuye la glucosa por el ayuno se inhibe o de los esteroides se localizan en el núcleo celular
la secreción de insulina, se estimula la de glucagón y y modulan la actividad de diversos genes. Depen-
aumenta el apetito. diendo del número y de la afinidad de los receptores
La respuesta endocrina está autorregulada, ya que disponibles , una determinada cantidad de hormona
existe un sensor que detecta el descenso de cualquier podrá provocar un efecto más o menos intenso.
hormona circulante y pone en marcha los mecanismos
para que la concentración de esa hormona se norma-
lice por ejemplo, si baja la T4 en sangre la hipófisis SÍNDROMES ENDOCRINOS
promueve la liberación de TSH, que estimula el tiroi-
Los grandes síndromes que afectan al sistema endo-
des para que se normalice la T4. Está también jerarqui-
crino pueden clasificarse dentro de los siguientes
zada, ya que otorga prioridad a unas constantes sobre
grupos (Fig. 62-1):
otras; por ejemplo, en la deficiencia de vitamina D se
extrae calcio del hueso para mantener la calcemia,
aun a expensas de que este se haga más frágil. SÍNDROMES DEBIDOS A ALTERACIONES
La función del sistema endocrino es el manteni-
miento de la homeostasis (estabilidad del medio in- EN LA FUNCIÓN DE LAS GLÁNDULAS
terno) frente a los continuos cambios que proceden O DE SUS HORMONAS
tanto del exterior como del interior del organismo. En la Tabla 62-1 se recogen las bases moleculares co-
La reacción frente a los cambios depende no solo del nocidas de los síndromes de disfunción endocrina.
sistema endocrino sino también del sistema nervio- Con el fin de unificar la terminología, llamaremos
so. Existen áreas del sistema nervioso (hipotálamo, glándulas endocrinas primarias a aquellas que produ-
médula suprarrenal) en las que confluyen estímulos cen las hormonas que van a ser activas en los órganos
y respuestas neurales y hormonales, que se compor- diana periféricos: tiroides, suprarrenales, gónadas,
tan como auténticos transductores neuroendocrinos. paratiroides y células ~ de los islotes pancreáticos.
El hipotálamo, además , es el responsable del ritmo La concentración plasmática de las hormonas se-
circadiano de la secreción hormonal, que permite al gregadas por las tres primeras está regulada por las
organismo adaptarse a los cambios externos con cier- correspondientes hormonas tróficas de la hipófisis
ta antelación. (glándula secundaria), que a su vez están reguladas
El sistema endocrino regula: por las hormonas del hipotálamo (glándula terciaria),
Numerosas constantes del medio interno, ne- todo ello mediante un complejo mecanismo de retroa-
cesarias para una normal actividad metabólica: limentación. La secreción de la PTH y de la insulina
tensión arterial; volumen circulante; osmolali- es independiente del sistema hipotálamo-hipofisario
dad; concentración de calcio, glucosa, iones y y responde a las modificaciones de los sustratos re-
otros sustratos metabólicos y hormonales, etc. gulados (calcio ionizado y glucosa en sangre, respec-
La utilización y el almacenamiento de la energía. tivamente). La secreción de los mineralocorticoides
El crecimiento y desarrollo, tanto físico como suprarrenales está regulada preferentemente por el
psíquico. eje renina-angiotensina.
La reproducción: diferenciación sexual en el
embrión, pubertad en el niño, actividad sexual Hipofunción glandular
y gametogénesis en el adulto, embarazo, parto y
Primaria, por destrucción de la glándula prima-
lactancia.
ria o por bloqueo en la síntesis de la hormona
La concentración plasmática de una hormona de- (por ejemplo, la atrofia del tiroides que produce
pende de la secreción glandular, la producción pe- hipotiroidismo o el hipotiroidismo inducido por
523
riférica (por ejemplo, la T3 circulante deriva no soio fármacos antitiroideos); en este caso, aumentan
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Glándula
Hipofunción endocrina Hiperfunción

Destrucción órgano } Genes Sustratos Tumor secretor


Síntesis hormona anormal Hiperplasia
{ Anticuerpos estimulantes
~
-1 ->{
Bloqueo síntesis
Prohormona

Bloqueo conversión producci_ón ectópica


1atrogenia

Estimulación ( ~~ ) / ición

Catabolismo l Catabolismo

Anticuerpos bloqueantes } Anticuerpos estimuladores


Antagonistas - Receptor { Mutación activadora
-
Receptor anormal ~

Síntesis anormal
- - -
+
Moléculas
efectoras
Mutación activadora

+
Destrucción del órgano - Célula di~ - Hipersensibilidad tisular

T
Efecto biológico

Figura Etiopatogenia de los síndromes endocrinos.

los niveles circulantes de la hormona trófica que carecen de receptores , tienen receptores anor-
hipofisaria (TSH en el ejemplo), en un intento males o aun teniendo receptores normales, estos se
de elevar la producción de la glándula secretora hallan bloqueados por alguna sustancia (por ejemplo,
afectada. la resistencia a los andrógenos por anomalías en los
Secundaria, por destrucción no de la glándula receptores o la diabetes mellitus debida a anticuerpos
secretora primaria, sino de la hipófisis (por ejem- bloqueantes de los receptores de la insulina).
plo, un tumor hipofisario que destruye las célu- Finalmente, puede ocurrir que la secreción hormo-
las secretoras de TSH). nal y los receptores sean normales, pero la maquina-
Terciaria , por destrucción del hipotálamo que, ria metabólica posreceptor sea anormal, de manera
al no producir las hormonas liberadoras, impide que también se produce un síndrome de hipofunción
que se liberen las hormonas tróficas hipofisarias, con niveles elevados de hormona en sangre (por
lo que lleva a atrofia de la glándula diana , por ejemplo, el pseudohipoparatiroidismo debido a ano-
ejemplo, un tumor hipotalámico que destruye malías de la proteína G que transduce la información
los núcleos productores de LHRH. En todos estos del receptor de la PTH a la adenilato ciclasa). A veces
casos hay hipofunción debida a hiposecreción una situación de hipofunción compensada, con poca
glandular. expresividad clínica, puede descompensarse brusca-
mente si aumentan las demandas o el catabolismo de
Pero también puede aparecer hipofunción acom- la hormona por algún factor exógeno (por ejemplo,
pañada de hipersecreción glandular. Así, cuando la descompensación de una insuficiencia suprarrenal
se produce una hormona estructuralmente anormal, por fármacos que producen inducción enzimática en
esta no interactúa adecuadamente con su receptor, de el hígado , con lo que aumenta el catabolismo de los
manera que las células diana de esa hormona se com- esteroides).
portan como si les faltase; por ejemplo, el enanismo
debido a secreción de una hormona de crecimiento
anormal. Hiperfunción glandular
En otras ocasiones la glándula produce adecuada- Primaria: la glándula produce excesiva cantidad
mente una hormona de características estructurales de hormona de forma autónoma (por ejemplo, un
524
normales, pero sus células diana no responden por- adenoma suprarrenal productor de cortisol).
CAPÍTULO 62 Introducción a los síndromes endocrinos y metabólicos

bronquial que sintetiza ADH o un granuloma sarcoi-


deo que produce calcitriol, el metabolito activo de la
Tabla Moléculas cuya alteración vitamina D) puede originar un síndrome de hiperfun-
puede provocar un síndrome ción de origen ectópico . La toma de hormonas , con
de disfunción endocrina fines terapéuticos o no , también origina un cuadro
indistinguible de la hiperfunción glandular, pero con
Hormona o citocina inhibición de la secreción propia (por ejemplo, el tra-
tamiento con corticoides a dosis farmacológicas origi-
Proteína transportadora de hormonas na un síndrome de Cushing, con inhibición de todo
Receptor hormonal o proteína coadyuvante del el eje hipotálamo-hipófiso-adrenal). En este caso,
receptor una brusca supresión de las hormonas que toma el
paciente puede desencadenar una insuficiencia glan-
Molécula implicada en la transducción de señal.
dular repentina, ya que la normalidad del eje puede
Factor de transcripción esencial para el tardar en recuperarse.
desarrollo de una glándula En otras ocasiones se aprecia un cuadro de aparen-
Proteína implicada en la migración embriológica te hiperfunción glandular con hormonas circulantes
de las futuras células endocrinas normales, debido a un aumento de la actividad de sus
receptores (es el caso del hipertiroidismo que desen-
Enzima implicada en la síntesis o en la cadena un cuadro de aparente hiperactividad simpá-
regulación de la secreción hormonal
tica por aumento de los adrenoceptores, mientras que
Enzima implicada en la acción de una hormona. los niveles de catecolaminas en sangre son normales,
o de las mutaciones activadoras del receptor de la
Molécula esencial para la síntesis hormonal
(p. ej., yodo) TSH que producen un adenoma tóxico).

Proteínas implicadas en el crecimiento de las


células endocrinas Asociación de hipo e hiperfunción glandular
Factores reguladores de la función inmunológi-
ca relacionada con las glándulas endocrinas Ocurre cuando una glándula primaria (por ejemplo,
las suprarrenales) produce poca cantidad de una
h ormona esen cial (cortisol) debido a la caren cia de
una enzima (la 21-hidroxilasa), lo que induce una
excesiva estimulación de la glándula por la hormona
La circulación de inmunoglobulinas estimu- trófica (ACTH) , que en este caso sólo puede estimular
lantes con efectos muy similares a los de las la secreción de otras hormonas cuya síntesis no está
hormonas tróficas hipofisarias puede desenca- bloqueada (andrógenos).
denar una hiperfunción glandular (por ejemplo,
el hipertiroidismo de la enfermedad de Graves-
Basedow).
SÍNDROMES DEBIDOS A ALTERACIONES
Secundaria: existe hiperplasia de la glándula MORFOLÓGICAS EN LAS GLÁNDULAS
primaria y aumenta su secreción a consecuencia
de una excesiva estimulación por la hormona ENDOCRINAS O EN SUS ÓRGANOS DIANA
trófica hipofisaria (por ejemplo, un adenoma hi-
pofisario secretor de ACTH), por una hormona Una exploración física elemental puede demostrar
el crecimiento de cualquier glándula endocrina pal-
trófica no hipofisaria (por ejemplo , el hiperal-
pable (tiroides , testículo) o de sus órganos diana
dosteronismo secundario a la activación del eje
(mamas, próstata) . Estas alteraciones morfológicas
renina-angiotensina), o por persistencia de bajas
también pueden ser el hallazgo casual de un estu dio
concentraciones del sustrato metabólico regula-
ecográfico, de una TAC o de una RM (nódulo supra-
do (por ejemplo, el hiperparatiroidismo secun-
rrenal, tumor hipofisario). Pueden ir acompañadas
dario a hipocalcemia mantenida por déficit de
vitamina D). de hiperfunción (por ejemplo, un adenoma hipofisa-
rio secretor), hipofunción (por ejemplo, tiroiditis de
Terciaria: el hipotálamo produce excesiva hor-
Hashimoto) o normofunción glandular (por ejemplo,
mona liberadora que activa, a su vez, a la hormo-
bocio simple).
na trófica hipofisaria (por ejemplo, descargas hi-
Finalmente, es preciso recordar que algunas alte-
potalámicas de CRH que producen hiperfunción
raciones morfológicas de los órganos diana son hor-
de las células hipofisarias secretoras de ACTH, y
monodependientes (ginecomastia, determinados tu-
subsiguiente síndrome de Cushing).
mores de mama o de próstata, etc.), por lo que puede
La producción de hormonas en determinados tu- modificarse su crecimiento modulando las hormonas
mores o granulomas (por ejemplo , un carcinoma correspondientes.
-163
Manifestaciones clínicas
de los síndromes endocrinos
y metabólicos
Jesús González Macias, José Antonio Amado Señaris

INTRODUCCIÓN
Las hormonas y los sustratos metabó-
licos regulados por ellas influyen en
la función de prácticamente todos los
órganos y tejidos. Por consiguiente,
los síntomas y signos derivados de los
síndromes endocrino-metabólicos gene-
ralmente son múltiples y muy variados, abar-
cando desde manifestaciones inespecíficas como la
astenia, la sudoración o el adelgazamiento, hasta sín-
tomas muy característicos de disfunción hormonal
como el gigantismo, la ausencia de desarrollo sexual
o la galactorrea. En algunos casos el aspecto externo
de un paciente endocrino es tan peculiar que permite
identificar el síndrome a primera vista (acromegalia,
hipertiroidismo, etc.). Por otro lado, la realización de
análisis de rutina permite detectar síndromes endo-
crinos (hipotiroidismo, hiperparatiroidismo) en indi-
viduos asintomáticos antes de que aparezca el cuadro
clínico florido.

PRINCIPALES MANIFESTACIONES
EN LAS ENFERMEDADES ENDOCRINAS
Y METABÓLICAS
TUMORACIÓN (BULTOMA) EN LA REGIÓN
ANTEROINFERIOR DEL CUELLO
Puede deberse a bocio (aumento de tamaño del
tiroides). El bocio puede desarrollarse en días
(hemorragia intratiroidea), meses (adenoma o
carcinoma) o años (bocio simple, bocio nodu-
lar). Puede ir acompañado de síntomas loca-
les (dolor, disnea, adenopatías regionales,
etc.) o de manifestaciones clínicas de dis-
función tiroidea. En la tiroiditis puede
aparecer dolor en la región tiroidea,
526 sin que el enfermo note un bocio.
CAPITULO 63 Manifestaciones clínicas de los síndromes endocrinos y metabólicos

POLIURIA Y POLIDIPSIA secuencial de los caracteres sexuales secundarios y


de la capacidad procreativa. En las niñas, alrededor
Estos síntomas forman parte de diversos síndromes de los 10 años aparece el vello pubiano y se acelera
endocrinos (diabetes mellitus, diabetes insípida , hi- el crecimiento, debido al aumento de los andrógenos
perparatiroidismo primario, hiperaldosteronismo suprarrenales (adrenarquia o pubarquia). Luego ma-
primario, etc.). También aparecen en enfermedades dura el eje hipotálamo-hipófiso-ovárico y comienza
no endocrinas (insuficiencia renal crónica, etc.). El la producción de estrógenos (gonadarquia}, con lo
cuadro puede evolucionar hacia deshidratación e que empieza el desarrollo mamario (telarquia), se
insuficiencia renal aguda. El aumento de la diuresis estrogeniza la vagina y se acelera más la velocidad
puede ser discreto o llamativo (hasta 14 1 en la diabe- de crecimiento. Aproximadamente dos años después
tes insípida). Suele acompañarse de nicturia y, en los del inicio del desarrollo puberal aparece la menar-
niños puede provocar enuresis nocturna. quia (primer sangrado menstrual) y uno o dos años
después se detiene el crecimiento por cierre de las
epífisis.
SÍNTOMAS RELACIONADOS CON LA ESFERA En los niños la pubertad comienza con el incre-
REPRODUCTIVA mento de tamaño de los testículos (aproximadamente
unos seis meses después del inicio de la telarquia en
Genitales externos ambiguos las niñas), seguido del desarrollo del vello pubiano y
en el nacimiento del falo, y de la aceleración del crecimiento. La apa-
Esta situación puede deberse a la presencia de góna- rición del primer semen con capacidad fecundante se
da masculina y femenina en el mismo individuo, a denomina espermarquia .
que un varón sea inadecuadamente masculinizado, En la pubertad precoz los caracteres sexuales se-
o a que se dé un proceso de masculinización en una cundarios aparecen antes de los 8 años en las niñas y
hembra. El resultado son unos genitales que no se antes de los 9 años en los niños. La pubertad precoz
diferencian claramente en sentido masculino o fe- puede acompañarse de capacidad procreativa o no.
menino, adoptando una morfología intermedia. Por En el primer caso se debe a maduración de todo el
ejemplo, puede haber un pene con la apertura uretral eje hipotálamo-hipófiso-gonadal (pubertad precoz
localizada en su cara inferior (hipospadias}, que re- completa). En el segundo caso se producen hormonas
cuerda la entrada de la vagina; o un escroto bífido, sexuales con independencia de que madure el eje, de
que recuerda unos labios mayores fusionados. Para manera que el niño no tiene capacidad procreativa
describir estas situaciones deben evitarse los térmi- (pubertad precoz incompleta) . La pubertad precoz in-
nos de hermafroditismo y pseudohermafroditismo. completa puede ser isosexual (se produce la hormona
correspondiente a su sexo) o heterosexual (se pro-
duce la hormona correspodiente al otro sexo, lo que
Pene pequeño o microfalo lleva a feminización en el niño o a masculinización
Es frecuente observar en los niños obesos un pene en la niña). La aparición precoz de vello pubiano, sin
aparentemente pequeño, pero que en realidad es de el resto de los caracteres sexuales secundarios, se de-
tamaño normal, solo que está «enterrado » en la grasa nomina pubarquia precoz. Más rara vez se aprecia te-
del pubis. Más raro es el microfalo auténtico por defi- larquia precoz aislada. La pubertad puede retrasarse
ciencia o resistencia a los andrógenos. pero aparecer finalmente (pubertad retrasada}, o ser
la primera manifestación de un hipogonadismo. Co-
rresponden a esta categoría las niñas cuya pubertad
Criptorquidia no se ha iniciado a los 12 años y los niños que no la
Se define como la presencia de testículos intraabdo- han iniciado a los 14 años.
minales permanentemente ausentes de la bolsa escro-
tal. Se debe diferenciar de los testículos en ascensor
(testículos ausentes de bolsas solo cuando se produce Ginecomastia
un reflejo cremasterino que los lleva al interior del Es el crecimiento del tejido glandular mamario en un
abdomen). La criptorquidia puede deberse a anorquia varón. Puede ser unilateral o bilateral, y con frecuen-
(inexistencia de testículos) o a testículos de locali- cia va acompañada de molestias locales. Se debe a
zación intraabdominal permanente. Los testículos un aumento en el índice estrógenos/andrógenos cir-
intraabdominales pueden ser disgenésicos y con el culantes. Es muy frecuente su aparición en el periodo
tiempo evolucionar hacia el hipogonadismo o a un peripuberal, sin que ello traduzca patología. Se ve
tumor germinal. además en el hipogonadismo primario, en la cirrosis
hepática y por la ingesta de fármacos (p. ej., espiro-
lactona y otros). Se debe diferenciar la ginecomastia
Trastornos en la aparición de la pubertad verdadera del depósito de grasa en el tejido perima-
La pubertad se debe a una maduración del eje hipo- mario en los niños obesos (lipomastia}, situación en
527
tálamo-hipófiso-gonadal, que produce un desarrollo la que el tejido glandular es normal.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Aparición de un bulto en los testículos años en jóvenes que no han menstruado previamen-
Puede deberse a un hidrocele (acúmulo de líquido en te (amenorrea primaria). Puede deberse a embarazo,
la túnica vaginal del testículo) o a procesos inflama- hipogonadismo o a trastornos uterinos o vaginales.
torios o tumorales del testículo. Ha de diferenciarse La presencia de reglas poco frecuentes se denomina
del varicocele (dilatación de las venas del plexo pam- oligomenorrea. La existencia de ciclos menstruales
piniforme). de corta duración se denomina polimenorrea. La
metrorragia (sangrado entre periodos menstruales)
puede deberse a hiperestrogenismo o a enfermedades
Atenuación de los ca racteres sexuales secunda rios del útero (mioma, carcinoma, etc.). Algunas mujeres
Disminución de la necesidad de afeitarse, atrofia de sanas pueden tener un pequeño sangrado a mitad del
genitales externos, etc., en el hombre, y atrofia mama- ciclo. La dismenorrea es la presencia de reglas más
ria, amenorrea, etc., en la mujer. Expresa un hipogo- dolorosas de lo habitual. Debe diferenciarse del dolor
nadismo. de ovulación, que ocurre a mitad del ciclo. El sín-
drome premenstrual se caracteriza por la aparición
Disminución de la libido recurrente, en el periodo premenstrual, de una cons-
La causa más frecuente de disminución de la libido telación de cambios físicos y psicológicos (hinchazón
(deseo sexual) es la psicológica. Si la disminución va de mamas y de abdomen, trastornos de la conducta,
acompaña de ausencia o atenuación de los caracteres etc.) que dificultan la vida normal y las relaciones de
sexuales secundarios se debe a hipogonadismo. la mujer. La menopausia precoz es la que ocurre antes
de los 40 años.
Disfunción eréctil o impotencia
Hirsutismo
Es la incapacidad para alcanzar y mantener la erec-
ción hasta completar el acto sexual. La causa más Se define como la presencia de vello terminal en áreas
frecuente es también la psicológica. Puede deberse a típicamente androgénicas , como la cara o el tronco ,
hipogonadismo (en cuyo caso se asocia a estos sínto- en una mujer.
mas), a enfermedad obliterativa de las arterias ilíacas Debe diferenciarse de la hipertricosis, en la que hay
o a neuropatía autonómica. Estas dos últimas causas aumento del vello corporal en las áreas no androgé-
se ven con frecuencia en la diabetes mellitus. Otros nicas (extremidades) . El hirsutismo es más frecuente
trastornos de la eyaculación (precoz, retardada o re- en determinadas razas o familias, sin que en ellas se
trógada) suelen tener causas psicológicas o neuroló- considere patológico, ya que su valoración depen-
gicas. de de actitudes estéticas y culturales. El hirsutismo
puede deberse a hiperandrogenismo o a hipersensi-
Dispareunia bilidad de los folículos pilosos a los andrógenos en
presencia de pequeñas elevaciones de los andrógenos
Coito doloroso en la mujer o la incapacidad para circulantes (hirsutismo simple). El hirsutismo en chi-
alcanzar y mantener la erección hasta completar el cas jóvenes puede provocar trastornos emocionales y
acto sexual. Puede deberse a causas psicológicas o a frecuentemente se acompaña de acné, que obedece a
hipoestrogenismo. Otros síntomas de disfunción se- las mismas causas. Cuando hay un gran exceso de an-
xual en la mujer (vaginismo , etc.) suelen ser de causa drógenos (carcinoma suprarrenal u ovárico) se puede
psicológica. producir una virilización (aparece voz grave, hirsu-
tismo grave, amenorrea, atrofia mamaria e hipertrofia
Trastorn os menstruales del clítoris).
La existencia de ciclos menstruales normales es un
indicador fiable de un normal funcionamiento del eje Esterilidad
hipotálamo-hipófiso-ovárico y del aparato reproduc-
Se define como la incapacidad para la concepción de
tor de la mujer. La menstruación normal viene defi-
una pareja que copula sin protección durante 1 año.
nida por los siguientes parámetros: menarquia a los
Puede deberse a:
10-15 años (media 12); menopausia a los 45 -53 años
(media 50); frecuencia entre 21 y 40 días (media 28); Trastornos del semen, como la azoospermia (se-
duración de 2 a 7 días, cantidad de 30 a 100 ml. La men sin espermatozoides), acompañada o no de
menopausia es el cese permanente de la regla. El cese datos de hipoandrogenismo.
definitivo de la regla sólo se puede precisar con exac- Ausencia de ovulación (puede haber ciclos ano-
titud a posteriori, ya que la menopausia ocurre dentro vulatorios, con menstruación cíclica, pero sin
de un periodo, el climaterio, en el que aparecen irre- ovulación).
gularidades menstruales. La amenorrea es la ausencia Incapacidad para la unión del óvulo y el esper-
de menstruación de al menos 3 ciclos de duración en matozoide por motivos inmunológicos o pura-
mujeres que menstruaban previamente (amenorrea mente anatómicos.
528
secundaria) o la ausencia de menstruación a los 16 Incapacidad para la nidación del huevo.
CAPÍTULO 63 Manifestaciones clínicas de los síndromes endocrinos y metabólicos

Galactorrea es la hemianopsia bitemporal (pérdida del hemicam-


Se define como la secreción láctea espontánea o tras po visual externo de ambos ojos), aunque en fases
expresión manual de la mama. más tempranas puede apreciarse cuadrantanopsia
Puede ser unilateral o bilateral. Rara vez se ve en (pérdida de un cuarto del campo).
los varones . Se debe a un aumento de los niveles cir-
culantes de prolactina que, actuando sobre las mamas Exoftalmos
estimuladas previamente por estrógenos y progeste-
rona, provoca un incremento de la secreción láctea. Se debe diferenciar el exoftalmos verdadero (el ojo re-
Es fisiológica en el final del embarazo y en el periodo basa hacia delante los límites de la órbita) del ojo no
de lactancia puerperal. Debe diferenciarse de la emi- saliente, pero con retracción del párpado superior y
sión de otros líquidos por el pezón (telorrea). escaso parpadeo, que proporciona un aspecto simi-
lar. La causa más frecuente de exoftalmos verdadero ,
unilateral o bilateral, acompañado o no de hipertiroi-
dismo, es la enfermedad de Graves-Basedow, si bien
SÍNTOMAS RELACIONADOS puede deberse a otros trastornos no endocrinos de
CON EL CRECIMIENTO la cavidad orbitaria. El exoftalmos puede ocasionar
Enanismo diplopía (visión doble), dolor ocular y cefalea. La
incapacidad para cerrar el ojo (lagoftalmos) durante
Se define como el enlentecimiento o detención del el sueño nocturno puede originar una lesión de la
crecimiento que desemboca en una talla final corta. esclerótica y de la córnea por falta de hidratación, y
Se ve en algunos síndromes endocrinos (hiposo- también puede alterar la visión.
matotrofismo, panhipopituitarismo, hipotiroidismo,
hipercortisolismo}, pero las causas más frecuentes no
son endocrinas. Estrabismo y diplopía
Se debe a oftalmoplejía por parálisis de los nervios
Aceleración del crecimiento oculomotores, los pares craneales III, IV y VI. Puede
Se puede ver en el hiperandrogenismo y en el hiper- deberse a una diabetes mellitus (mononeuropatía) o
estrogenismo en niños, y puede llevar a una talla final a tumores pituitarios que compriman estos nervios,
corta por cierre prematuro de los cartílagos de cre- aunque existen muchas otras causas.
cimiento. Los adenomas hipofisarios productores de
hormona de crecimiento asociados a hipogonadismo
ocasionan una aceleración del crecimiento sin cierre SÍNTOMAS RELACIONADOS CON EL
de los cartílagos de crecimiento, que da como resulta-
do una talla final alta (gigantismo hipofisario). Otras METABOLISMO DEL CALCIO Y DEL HUESO
enfermedades no endocrinas pueden provocar una
talla alta (p. ej., enfermedad de Marfan). Tetania
Es una manifestación de la hipocalcemia, que produ-
Deformidades óseas ce contractura muscular espontánea. Su forma típica
es el espasmo carpal (mano de comadrón) o carpope-
Las de la acromegalia son muy típicas. Crecen los dal. Rara vez aparece estridor laríngeo. La hiperven-
huesos planos (frontal, mandíbula), lo que produce tilación, generalmente en pacientes ansiosos con una
una facies característica. Además , crecen las partes función respiratoria normal, provoca alcalosis me-
acras (manos, pies) y aparecen cambios en los tejidos tabólica y descenso del calcio ionizado en ausencia
blandos (lengua, cartílagos, piel). de enfermedad endocrina, lo que produce tetania. La
alcalosis metabólica también puede producir tetania,
aunque con menor frecuencia. No se debe confundir
SÍNTOMAS OCULARES la tetania con el tétanos (cuadro de contractura mus-
cular debido a la toxina del Clostridium tetani), en el
Disminución de la agudeza visual que los niveles de calcio son normales.
La causa más frecuente de amaurosis (pérdida de la
visión) en el mundo occidental es la diabetes melli-
tus (retinopatía diabética, catarata) . Otros síndromes Litiasis renal o nefrolitiasis
endocrinos (hipoparatiroidismo) también producen Los cálculos renales cálcicos pueden deberse a hiper-
catarata y disminución de la visión. calciuria (aislada o asociada a enfermedades endo-
crinas como el hiperparatiroidismo primario). Debe
diferenciarse la litiasis renal cálcica de la nefrocalci-
Disminución del campo visual nosis, que es el depósito de sales cálcicas en el inte-
Puede provocarla un adenoma hipofisario que com- rior del parénquima renal. La nefrocalcinosis también
529
prima el quiasma óptico. La clínica más característica puede deberse a hiperparatiroidismo.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Fracturas óseas espontáneas o desencadenadas CAMBIOS EN LA PIEL


por traumatismos mínimos
La hiperpigmentacion cutaneomucosa puede
Suelen deberse a pérdida de la resistencia a los trau- deberse a insuficiencia suprarrenal primaria, a
matismos del hueso, generalmente por osteoporosis, síndrome de Cushing por secreción ectópica de
que en ocasiones es secundaria a trastornos endo- ACTH o a síndrome de Nelson; no obstante, la
crinos (hiperparatiroidismo, Cushing, hipertiroidis- hiperpigmentación más frecuente en nuestro
mo).
país es la de origen familiar.
La hemocromatosis (exceso de depósito de hie-
Dolor óseo rro) proporciona a la piel un color grisáceo.
Rara vez es de causa endocrina. Puede ser difuso (os- La piel es seca en el hipotiroidismo; gruesa y
teomalacia o hiperparatiroidismo) o local (fractura) . sebácea en la acromegalia; fina y sudorosa en el
hipertiroidismo; atrófica, pletórica, con estrías
vinosas y con equimosis en el síndrome de Cus-
hing.
SÍNTOMAS RELACIONADOS
El feocromocitoma , a través de la liberación
CON EL APETITO brusca de noradrenalina, puede producir pali-
Puede encontrarse anorexia (pérdida del apetito) en dez cutánea por vasoconstricción, piloerección y
diversas enfermedades endocrinológicas, lo que no sudoración. En el climaterio aparecen los típicos
tiene mucho interés semiológico. Más interés tiene sofocos (sensación repentina de calor en la cara
tener en cuenta que en algunas endocrinopatías pue- y parte superior del cuerpo, con o sin vasodila-
de aumentar el apetito (polifagia): es el caso de la tación).
diabetes mellitus , el hipertiroidismo y el insulino- La pérdida de vello pubiano y axilar en una mu-
ma. jer puede deberse a insuficiencia suprarrenal o a
panhipopituitarismo.
En la diabetes pueden verse múltiples lesiones
cutáneas (dermopatía diabética, necrobiosis li-
SÍNTOMAS RELACIONADOS poidea, infecciones diversas].
CON LA MODIFICACIÓN DEL PESO CORPORAL En las hiperlipemias aparecen depósitos lipídi-
cos (xantomas] y xantelasmas.
Adelgazamiento Las porfirias determinan sensibilización de la
Puede deberse a síndromes endocrinos que producen piel a la luz del sol, con lesiones cutáneas de
anorexia , pero tan1bién se puede perder peso siendo tipo am polloso y erosivo que pueden determinar
el apetito normal o zonas cicatrizales y atróficas.
estando aumenta-
do (p. ej., en el
hi pertiroi dismo,
OTROS DATOS SEMIOLÓGICOS
diabetes mellitus
con mal control Existe una serie de síntomas inespecíficos o de deter-
metabólico), si minados aparatos (digestivo, etc.), que habitualmente
predomina el ca- no se deben a causas endocrinas, pero que en ocasio-
tabolismo sobre el nes si lo hacen, pudiendo incluso constituir el único
anabolismo. La ma- síntoma guía de un síndrome endocrino. Entre ellos
yor parte de las veces señalan1os los siguientes:
el adelgazamiento no es
de causa endocrina. Astenia (fatigabilidad fácil)
Exceso de peso Aunque la astenia no suele ser de causa endocrina,
pueden provocarla numerosos síndromes endocrino-
Puede ser debido a aumen- metabólicos . El qu e lo hace más típicamente es la
to de la grasa corporal (obe- insuficiencia suprarrenal, pero puede verse en otros
sidad), del tejido muscular varios (diabetes mal controlada, los que cursan con
(atletas) o del líquido extra- trastornos hidroelectrolíticos .. .).
celular (edema, que rara vez es de causa endocrina).
La obesidad se debe a un exceso de ingesta caló-
rica en relación con el gasto energético. Menos del Trastornos digestivos
5 % ,endocrina (insulinoma, síndrome de Cushing). Puede haber náuseas, vómitos y dolor abdominal en
El mixedema es un tipo particular de edema que se la cetoacidosis diabética, la insuficiencia suprarrenal
530
ve en el hipotiroidismo. aguda y el hiperparatiroidismo.
CAPÍTULO 63 Manifestaciones clínicas de los síndromes endocrinos y metabólicos

Puede aparecer estreñimiento en el hipotiroidismo, EXPLORACIÓN FÍSICA


el hiperparatiroidismo y el feocromocitoma, y diarrea EN LAS ENFERMEDADES ENDOCRINAS
en el hipertiroidismo y en la diabetes mellitus (cuan-
do produce neuropatía autonómica). Y METABÓLICAS
La acromegalia o el hipotiroidismo producen ma- Ya se ha señalado la importancia que tiene la valo-
croglosia. ración del pulso, de la tensión arterial, del estado
emocional y de consciencia, de la voz y de la piel y
Trastornos respiratorios faneras.
El bocio voluminoso puede provocar disnea por com- A continuación se señalan signos que más pueden
presión y traqueal. La obesidad, el hipotiroidismo y aparecer en estos pacientes y que deben ser buscados
la acromegalia pueden producir un síndrome de ap- durante la exploración general.
nea del sueño.
TALLA
Trastornos cardiovasculares
La incidencia de hipertensión arterial y cardiopatía Es un dato fundamental. Ha de compararse con los
isquémica está aumentada en muchas enfermedades patrones de normalidad para la edad y el sexo co-
endocrino-metabólicas. El feocromocitoma es una rrespondiente. Estos patrones se recogen en diversos
causa de hipertensión de aparición abrupta o episó- gráficos y tablas (Fig. 63-1). Se considera que una
dica. persona es anormalmente alta o baja cuando su talla
La insuficiencia suprarrenal produce hipotensión se encuentra por encima de la del percentil 97 o por
característicamente. El hipotiroidismo puede produ- debajo de la del percentil 3. Resulta útil elaborar una
cirla también. gráfica evolutiva de las tallas anuales en los niños, ya
Los síndromes endocrino-metabólicos pueden que permite valorar la velocidad de crecimiento (en
provocar insuficiencia cardiaca por diferentes meca- cm/año) y el percentil en el que crecen. La velocidad
nismos: alto gasto -hipertiroidismo-, miocardiopatía de crecimiento es distinta según la edad y grado de
-acromegalia, feocromocitoma, hipocalcemia-, o a desarrollo puberal. La curva de crecimiento sirve para
través el desarrollo de hipertensión arterial o de in- determinar cuándo comenzó a acelerarse o a detener-
farto agudo de miocardio. se este. Este registro también es útil en los adultos, ya
que estos pueden perder altura, por ejemplo, por una
El exceso de catecolaminas, la disfunción tiroidea
osteoporosis. En algunos síndromes endocrinos de-
y las alteraciones del potasio sérico pueden provocar
diversos tipos de arritmias.
ldlld
180
50
Trastornos neurológicos
Numerosos trastornos endocrinos pueden provocar
170
160 cJ 3
150
cuadros de estupor o coma (coma diabético -cetoaci- 140
dosis diabética, coma hiperosmolar hiperglucémico 130
no cetósico-, hipercalcemia, hipotiroidismo, hipo- 120
glucemia, hiponatremia). Es posible observar con - 110
vulsiones por hipoglucemia, hipocalcemia o hipona- 100
tremia. El hipertiroidismo es una de las causas del 90
temblor. 80 Edad (años)
2 3 4 5 6 7 8 9 10 111 2 13 14 15 16 17 18
cm
Trastornos musculares 190
Percentil
Tal la
Diferentes síndromes endocrino-metabólicos produ- 180
97
cen debilidad muscular progresiva indolora acom- 170
50
pañada de atrofia muscular (miopatía en el Cushing 160
150 3
o el hipertiroidismo), predominantemente en las
140
cinturas escapular y pelviana. El hipotiroidismo
130
produce lentitud en la contracción y relajación mus- 120
cular. 110
100
Trastornos psiquiátricos 90
80
Son muy frecuentes y variados y conviene identifi-
2 3 4 5 6 7 8 9 10 1112 13 1415 16 17 18
carlos ya que son potencialmente curables (p. ej., el
hipotiroidismo es una de las causas de demencia en
Figura Curvas de crecimiento en niños y niñas. 531
los mayores y de retraso mental en los niños].
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

ben medirse las proporciones corporales, la distancia na, se debe determinar el índice cintura abdominal/
pubis-suelo (segmento inferior), la distancia pubis- cintura de cadera. Se considera cintura abdominal el
calota (segmento superior) y la envergadura (distan- perímetro abdominal a la altura aproximada del om-
cia entre las puntas de los dedos cuando se extienden bligo y cintura de cadera el perímetro a la altura de
los brazos en cruz). La proporción segmento supe- las caderas (bitrocantérea). Un índice superior a 1 en
rior/segmento inferior disminuye desde un valor de hombres o a 0,9 en mujeres define la obesidad androi-
aproximadamente 1 ,7 en el recién nacido hasta algo de, que va unida a resistencia a la insulina y aumento
menos de 1 en los adultos, en los que el índice enver- del riesgo cardiovascular. La circunferencia de la cin-
gadura/talla también se acerca a 1. En el enanismo tura abdominal también tiene valor por sí misma: si
por hiposomatotrofismo las proporciones segmen- es > 95 cm en varones o > 82 cm en mujeres indica
tarías se mantienen normales. En el hipogonadismo situación de riesgo. En la obesidad simple la grasa se
de aparición prepuberal no tratado (eunucoidismo), distribuye por todo el organismo, pero en la obesi-
la proporción segmento inferior/segmento superior dad asociada al hipercortisolismo, la grasa se localiza
y envergadura/talla es superior a 1, debido a que la preferentemente en el tronco (obesidad centrípeta),
ausencia de cierre de las epífisis por la falta de tes- mientras que las extremidades aparecen adelgazadas
tosterona permite un crecimiento desproporcionado por atrofia muscular y del tejido adiposo.
de las extremidades. En el hipotiroidismo congénito Junto a los aspectos estáticos del peso, deben con-
las extremidades son desproporcionadamente cortas. siderarse los dinámicos, o variaciones del peso a Jo
largo del tiempo. Pérdidas del 5 % en pocos meses
suelen deberse a una causa grave, y pérdidas superio-
PESO res al 10 % indican malnutrición. Es preciso recordar
que los cambios de peso que se producen en unos
La simple inspección visual del paciente nos puede días suelen ser debidos a modificaciones en el balan-
dar idea de si tiene un peso adecuado para su talla. ce hídrico.
No obstante, la comprobación del peso es un dato El aumento de peso puede ser secundario a una
objetivo esencial que no debe faltar en la historia enfermedad endocrina, como insulinoma, hipotiroi-
clínica. Al igual que para la talla, existen patrones dismo y síndrome de Cushing. La pérdida de peso
de normalidad de peso en función de la talla, la es- de causa endocrina puede deberse a hipotiroidismo,
tructura corporal y el sexo. Las alteraciones del peso feocromocitona o a diabetes mellitus con mal control
pueden deberse a cambios en la grasa, en el conteni- glucémico (es muy característica de la cetoacidosis
do proteico (músculo) o en el agua corporal, lo que diabética como debut de la diabetes).
traduce un trastorno en la composición corporal. Los
trastornos del agua corporal se estudian en el capítu-
lo correspondiente. En cuanto al contenido proteico, EVALUACIÓN DEL ESTADO NUTRICIONAL
se considera anormal su déficit (generalmente asocia- Además del peso y su relación con la talla, otros pa-
do a disminución del contenido graso, por ejemplo rámetros antropométricos permiten evaluar también
en la desnutrición), mientras que su exceso suele ser el estado nutricional. Los dos más conocidos son el
indicativo de una gran actividad física (atletas). A tra- pliegue cutáneo a nivel del tríceps braquial (expo-
vés de estudios epidemiológicos se sabe que cuando nente de la cuantía del tejido adiposo)
el exceso de peso por aumento de tejido graso es su- y el perímetro o la circunferencia
perior al 20 % , aumenta el riesgo para la salud. Para del brazo (exponente de la
conocer el peso adecuado para una talla determinada
se emplea el índice de masa corporal, o índice de
Quetelet, resultante de dividir el peso entre la
talla al cuadrado. Cuando el peso se expresa
en kg y la talla en metros, el valor normal es
de 20-25 kg/m 2 • Cifras entre 25 y 30 se
consideran sobrepeso, y por encima de
30 se habla de obesidad. Cifras inferio-
res a 18,5 indican desnutrición.
En los varones obesos el exceso de
grasa se localiza preferentemente en el
interior del abdomen (obesidad androi-
de o «en manzana»}, mientras que en las
mujeres obesas la grasa suele acumularse más en
la zona subcutánea de la cadera (obesidad gine-
coide, o «en pera»J. Las mujeres hirsutas suelen
presentar obesidad androide. Con el fin de obje-
532
tivar el tipo de obesidad que presenta una perso-
CAPITULO 63 Manifestaciones clínicas de los síndromes endocrinos y metabólicos

masa muscular y, por tanto, del metabolismo protei-


co).
Al margen de las medidas antropométricas -y de
otros estudios analíticos que se detallan en la sección
siguiente-, en la evaluación del estado nutricional
puede ser útil la evaluación de las manifestaciones
clínicas de la malnutrición:
La hipoproteinemia puede determinar edemas,
en ocasiones importantes. El pelo, en los estados de
malnutrición, es frágil y quebradizo, y se desprende Figura Xantelasmas.
con facilidad. La coloración del pelo puede presentar
alternancia de zonas normales (nutrición correcta)
con zonas decoloradas (malnutrición), configurando en la propia piel o en estructuras vecinas, como los
el «signo de la bandera». En el ojo, la falta de vitami- tendones o el periostio. Los xantelasmas son un tipo
na A puede producir pérdida del brillo de la córnea, especial de xantomas que se localizan en los párpa-
con posible evolución a xeroftalmía (sequedad del dos, próximos al ángulo interno del ojo (Fig. 63-2).
ojo) y queratomalacia (reblandecimiento y necrosis Aparecen como placas ligeramente elevadas de color
de la córnea), y alteraciones de la conjuntiva bulbar amarillento. Son característicos de la hipercolestero-
(manchas de Bitot, o pequeñas manchas irregulares lemia, pero pueden aparecer también en personas con
blancoamarillentas con aspecto de espuma de jabón). niveles de lípidos normales, sobre todo en los ancia-
Además, produce hiperqueratosis folicular (su aspec- nos. También son típicos de la hipercolesterolemia
to recuerda el de la «piel de gallina»). La falta de ribo- los xantomas tuberosos -que aparecen como nódulos
flavina produce vascularización del limbo corneal y preferentemente en codos y rodillas (Fig. 63-3)-, los
una lesión húmeda y enrojecida en el ángulo externo xantomas tendinosos -que son infiltraciones grasas
del ojo. Asimismo, produce lesiones seborreicas alre- de los tendones que se manifiestan como engrosa-
dedor de la boca, la nariz y las orejas, y agrietamiento mientos o nódulos en los tendones, preferentemente
en los ángulos de la boca (queilitis comisura! o rága- de los extensores de los dedos y del de Aquiles-, y los
des -«boqueras» en el lenguaje coloquial-). La fa lta xantomas planos. Estos últimos consisten en lesiones
de niacina (pelagra) da lugar a una coloración ama- que apenas hacen relieve, de color amarillo-anaran-
rillo-grisácea y a un aspecto escamoso de las zonas jado, localizadas sobre todo en las palmas de las ma-
descubiertas de la piel. La falta de vitamina C (escor- nos. El aumento intenso de triglicéridos puede dar
buto) produce petequias. Además, las encías aumen- lugar a xantomas eruptivos, que consisten en pápulas
tan de tamaño y sangran, y los dientes se pierden con amarillentas con un halo eritematoso, que aparecen,
facilidad. El déficit de varias vitaminas del grupo B en pocas semanas, más frecuentemente en las nalgas,
produce diversos trastornos neurológicos. La fa lta de la espalda y la cara extensora de brazos y muslos.
calcio y vitamina D puede traducirse en osteoporosis
y osteomalacia (con fracturas) y miopatía. La falta de
hierro puede dar lugar a la aparición de fisuras en las CABEZA
comisuras bucales (r6ga des) y también produce una El crecimiento facial de huesos planos es característi-
deformación en cuchara de las uñas (coiloniquia]. cos de la acromegalia.
La lengua puede reflejar varios déficits nutricionales Con respecto a los ojos, se debe explorar la agudeza
(atrofia o hipertrofia de las papilas, coloración rojiza y el campo visual, el cristalino (catarata) y el fondo
o violácea) .

TEMPERATURA BASAL
Su medición secuencial permite identificar una ele-
vación al comenzar la segunda fase del ciclo mens-
trual en las mujeres con ciclos normales, mientras
que tal elevación no se produce en las mujeres sin
fase luteínica. Esta elevación se debe al efecto de la
progesterona sobre los centros termorreguladores hi-
potalámicos.

PIEL
Las hiperlipemias dan lugar a la aparición de xanto- Figura Xantomas tendinosos (dedos) y tubero-
533
mas o tumoraciones debidas al depósito de lípidos sos (codos).
SECCIÓN VIII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

de ojo (hemorragias, exudados, edema de papila). En peso. La consistencia puede ser variable, desde blan-
el hipertiroidismo existe escaso parpadeo -signo de da (bocio simple) a pétrea (carcinoma, fibrosis). Pue-
Stellwag-, retracción del párpado superior (se eviden- de ser doloroso al tacto (tiroiditis, hemorragia). Puede
cia una banda blanca de esclerótica por encima del ser uninodular, multinodular o difuso, y puede ir
iris al mirar horizontalmente hacia delante -signo de acompañado de adenopatías cervicales (carcinoma).
Dalrymple-J y retraso en la movilización del párpa- La presencia de un frémito o de un soplo sobre el
do superior cuando el ojo mira hacia abajo (la banda tiroides sugiere aumento de la vascularización (enfer-
blanca se hace más evidente -signo de Van Graefe-). medad de Graves).
Estos trastornos debidos a simpaticotonía pueden
dar la impresión de que estamos en presencia de un
exoftalmos, pero solo se puede hablar de este cuando
MAMAS
existe protrusión ocular (proptosis]. Para objetivar La exploración de las mamas puede demostrar ano-
este dato se mide la distancia desde el borde lateral malías morfológicas o galactorrea espontánea o con la
de la órbita a la córnea, mediante unos instrumentos expresión manual. La exploración manual ha de ha-
denominados exoftalmómetros (valores normales: 15- cerse desde la periferia de la glándula hacia el pezón,
20 mm). La incapacidad para la convergencia de los siguiendo la dirección de los canalículos.
globos oculares debida a insuficiencia de los múscu-
los rectos internos se denomina signo de Moebius, y
también es típica de la oftalmopatía infiltrativa de la
SISTEMA NERVIOSO Y EXTREMIDADES
enfermedad de Graves. Interesa resaltar la presencia de alteraciones sensiti-
El anillo corneal consiste en un depósito de coles- vas en calcetín y ausencia de reflejos osteotendinosos
terol en los bordes de la córnea, fundamentalmente en la polineuropatía diabética; de temblor y reflejos
en el superior y el inferior, propio de las situaciones exaltados en el hipertiroidismo; de enlentecimiento
de hipercolesterolemia, aunque puede observarse en de la fase de relajación de los reflejos en el hipotiroi-
ausencia de la misma (por ejemplo, es frecuente en dismo, y de dificultad para levantarse desde la posi-
personas ancianas - «arco senil»-). ción en cuclillas en la miopatía del hipercortisolismo.
En los pacientes en los que se sospecha hipocal-
cemia debe valorarse el signo de Trousseau (dejar el
CUELLO manguito con una presión superior a la TA sistólica
durante varios minutos, para ver si aparece la «mano
El tiroides es fácilmente accesible a la inspección y a de comadrón» -flexión de la muñeca y la articulación
la palpación, por lo que se explora rutinariamente en metacarpofalángica, extensión de las interfalángicas
todos los enfermos. La inspección permite visualizar y aproximación de los dedos, con oposición del pul-
una masa cervical o cicatrices operatorias que indi- gar-).
quen cirugía previa. Las masas tiroideas, como todas
las que están incluidas dentro de la fascia traqueal,
se mueven hacia arriba y abajo al tragar, mientras que GENITALES EXTERNOS
las otras masas cervicales no lo hacen. Los bocios con
fijación anormal a estructuras extratiroideas (cáncer, En los recién nacidos se busca la existencia de geni-
fibrosis, etc.), en cambio, no se mueven. Al tragar tales ambiguos y se palpan los testículos y el escroto
también se ve si un bocio tiene extensión intratoráci- en los varones (descartar criptorquidia). En el pene de
ca. En los pacientes con grandes bocios intratorácicos un varón se pueden evidenciar anomalías anatómicas
que comprimen la cava superior se puede ver circu- como el hipospadias (abertura congénita de la uretra
lación colateral subcutánea hacia el territorio de la en la cara inferior del pene). En el periodo peripu-
cava inferior e ingurgitación yugular, que empeora al beral se debe identificar el estadio evolutivo de las
levantar los brazos -signo de Marañón-. mamas y del vello pubiano en las niñas, y de los geni-
La palpación se hace mejor desde atrás, con el pa- tales externos y del vello pubiano en los niños, com-
ciente sentado y con el cuello ligeramente flexiona- parándolos con los patrones de desarrollo puberal
do. En muchas personas un tiroides normal puede ser establecidos en las escalas de Tanner. En los varones
palpable, pero no visible. Utilizando las yemas de los adultos se valora el tamaño del pene y se palpan el
dedos de ambas manos el explorador debe localizar el escroto y los testículos. Se determinan las dimensio-
cartílago cricoides y definir los límites de los lóbulos nes testiculares (el diámetro longitudinal es de 3,5-
laterales y del istmo. A veces el tiroides puede pare- 5,5 cm y el volumen, valorado por el orquidómetro de
cer grande en la inspección, pero al palparlo resulta Prader, normalmente es superior a 15 ml). Se buscan
en realidad normal. Esto puede deberse a que esté si- anomalías testiculares (bultos, criptorquidia, consis-
tuado sobre el cartílago tiroides (pseudobocio). Debe tencia anormal, dolor con la palpación, etc.) En las
valorarse el tamaño del tiroides, su consistencia y la mujeres con hirsutismo se valora el tamaño del clíto-
presencia de nódulos. El tamaño puede oscilar desde ris (si mide más de 1 cm se habla de clitoromegalia y
un discreto aumento hasta un bocio de varios kilos de se debe pensar en hiperandrogenismo severo).
·164
Técnicas diagnósticas
en los síndromes endocrinos
y metabólicos
José Antonio Amado Señaris, José Antonio Riancho Moral

ESTUDIOS HORMONALES
Los laboratorios clínicos disponen hoy
de técnicas suficientemente sensibles
y específicas para medir las concentra-
ciones de la mayoría de las hormonas o
de sus metabolitos en los diferentes fluidos
biológicos (sangre, orina, etc.), con lo que se puede
cuantificar la función de las distintas glándulas en-
docrinas. Las determinaciones hormonales pueden
hacerse por métodos biológicos, químicos o de en-
lace competitivo. El radioinmunoensayo (RIA}, un
método de enlace competitivo que emplea isótopos
radiactivos, y los métodos derivados de él, permiten
determinar fácilmente la concentración de diferentes
hormonas en pequeños volúmenes de muestra (Tabla
64-1).
Al interpretar los resultados de una determinación
hormonal es necesario tener en cuenta diversos he-
chos:
Algunas hormonas se liberan de forma pulsátil, lo
que produce variaciones transitorias bruscas en sus
concentraciones en sangre. Este fenómeno es muy
evidente en las gonadotropinas; por ello, ante resul-
tados dudosos se deben hacer varias determinaciones
seriadas (generalmente tres, separadas entre sí 20
minutos). El estrés de la venopunción puede elevar
repentinanente la concentración del cortisol plasmá-
tico y de otras hormonas como la prolactina.
Algunas hormonas tienen un ritmo circadiano
de secreción muy marcado (por ejemplo, el cor-
tisol alcanza sus cifras más altas de madrugada,
duplicando las cifras del final de la tarde), por
lo que debe anotarse la hora de obtención de
las muestras o, mejor aún, realizar siempre
a la misma hora la extracción de san-
gre (generalmente por la mañana y en
ayunas, para evitar interferencias de
los alimentos). Por el contrario, las
- SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla Determinaciones utilizadas para valorar la función endocrina


Determinación

Hipotálamo-adenohipófisis Hormona de crecimiento


Pro lactina
ACTH , ~3-LPH , ~-endorfina
Gonadotrofinas (LH, FSH), subunidad alfa
TSH
Somatomedina C y sus proteínas transportadoras
Hipotálamo-neurohipófisis ADH , oxitocina, neurofisinas
Osmolalidad urinaria
Tiroides T4 libre y TSH
T4 total , T3 total , TBG, anticuerpos antitiroideos, tiroglobulina
Yoduria
Captación tiroidea de yodo radiactivo
Corteza suprarrenal Cortisol y ACTH
Aldosterona y renina
17-0H progesterona, 11 desoxicortisol, DHEA-S
Cortisol libre urinario
17-hidroxicorticoides urinarios
17-cetosteroides urinarios
Médula suprarrenal Adrenalina, noradrenalina
Catecolaminas urinarias
Metanefrinas
Ácido vanilmandélico
Testículos Testosterona y LH , FSH, inhibina
Ovarios Estradiol, progesterona, FSH, LH , prolactina, inhibina
Células C del páncreas Glucosa e insulina
Paratiroides Calcio y PTH
Células C del tiroides Calcitonina

concentraciones de T4 se mantienen relativamente Hay otros factores que pueden interferir en los re-
constantes a lo largo del día. sultados (enfermedades no endocrinas, m edicamen-
Algunas hormonas (por ejemplo, la T4) circulan tos , errores del laboratorio, etc.). Un resultado hor-
unidas en gran parte a proteínas transportadoras, monal no acorde con los datos clínicos debe repetirse
de manera que sólo la hormona libre es biológica- antes d e ser aceptado como correcto.
mente activa . Si es posib le, deb e determinarse la hor- Cada laboratorio debe establecer los valores de
mona libre. Si la determinación valora la hormona normalidad para su población y para la técnica que
total (unida más libre), debe tenerse en cuenta que utilice.
este resultado puede estar falseado p or cambios en Puesto que las concentraciones plasmáticas de casi
los niveles plasmáticos de las proteínas transporta- todas las hormonas están reguladas por un mecanis-
doras. mo de retroalimentación, resulta mucho más fidedig-
Algu nas hormonas (por ejem p lo, la ACTH o la no medir los pares hormonales de cada sistema (T4
ADH) se degradan fácilmente in vitro, por lo que libre-TSH, cortisol-ACTH, aldosterona-renina, testos-
es n ecesario u tilizar los tubos, anticoagulantes, sus- terona-LB). De esta manera no solo se identifica la
tancias estabilizadoras y métodos de centrifugación, existencia de hiper o hipofunción, sino que se puede
~
congelaci ón y almacenamiento adecu ados. localizar su origen (Fig. 64-1). Así, una T4 libre baja
CAPÍTULO 64 Técnicas diagnósticas en los síndromes endocrinos metabólicos

A= Hipofunción de la glándul a primaria.

B = Hipofunción de la glándul a secun-


dari a.

C = Hipofunción de la glándul a primaria


compensada por hiperestimul a-
ción de la glándul a secundari a.
"' Intervalo de
E
o
z
normalidad D = Hiperfunción de la glándul a secun-
dari a o resistenci a a la hormona
de la glándula primari a.

E = Hiperfunción de la glándul a primari a.


"'
·;¡,
F = Autonomía secretora de la glándul a
co
primaria compensada mediante
supres ión de la glándul a secundaria.

Alta Normal Baja

CO NCENTRACIÓN PLASM ÁTICA DE LA HO RMONA


DE LA GLÁNDULA PRIMARIA (p. ej ., Tul )

Figura Tipos de disfunción endocr ina.

con TSH alta localiza la causa de hipotiroidismo en el rio, cuando se sospecha una hiperfunción glandular
tiroides, mientras que una T4 libre baja con una TSH se utilizan pruebas de supresión (Tabla 64-3). En las
baja localiza la causa a nivel central. Este método, pruebas de estimulación se inyecta una hormona
además, permite detectar disfunciones glandulares trófica y se valora la respuesta de la hormona diana
sutiles (por ejemplo, una T4 libre en cifras bajas de la (p. ej ., se inyecta ACTH y se mide la respuesta del
normalidad, con una TSH alta, indica cierto grado de cortisol). En otros casos se administra una sustancia
insuficiencia del tiroides compensada parcialmente que activa la liberación de una hormona particular
por la elevación de la hormona trófica correspondien- cuyas cifras basales son muy bajas o variables (p. ej. ,
te, la TSH, que no se detectaría midiendo solo la T4 la clonidina provoca una liberación de la hormona de
libre). crecimiento) o se utilizan estímulos fisiológicos que
Las determinaciones de hormonas en orina de 24 normalmente liberan la hormona (p. ej., el sueño o el
h informan sobre la secreción integrada diaria. Así, ejercicio en el caso de la hormona de crecimiento).
por ejemplo, la determinación de cortisol libre en Algunas pruebas de estimulación valoran la respues-
orina es un índice muy fiable de la función corticosu- ta global de un eje; así, al dar metopirona se inhibe la
prarrenal, mientras que una determinación aislada de 11-hidroxilasa suprarrenal, con lo que baja la concen-
cortisol en sangre puede estar falsamente elevada por tración de cortisol plasmático, que estimula la libera-
el estrés de la punción venosa. ción de ACTH. La ACTH estimula las suprarrenales,
En la orina se pueden determinar algunos metabo- pero estas sólo pueden segregar 11-desoxicortisol, ya
litos hormonales que dan una idea aproximada de la que su paso a cortisol está bloqueado por la metopiro-
función glandular, como por ejemplo los 17-hidroxi- na. Si el 11-desoxicortisol plasmático se eleva, indica
corticoides o el ácido vanilmandélico. Estas determi- que el eje funciona globalmente bien, pero si no se
naciones se utilizan cada vez menos porque se dispo- eleva, no se puede localizar el origen del problema.
ne de técnicas para medir las propias hormonas. También se pueden utilizar pruebas de estimulación
Cuando se sospecha una anomalía en los recepto- para valorar si existe resistencia a la acción de una
res, estos pueden medirse en células fácilmente acce- hormona (p . ej ., se inyecta PTH y se mide la respuesta
sibles (eritrocitos, linfocitos, etc.); no obstante, esta del AMPc o del fosfato en la orina) .
determinación sólo se realiza en un reducido número En las pruebas de supresión se administra una
de laboratorios especializados. hormona o una sustancia que normalmente produce
Cuando los resultados de una determinación hor- una retroalimentación negativa y se comprueba si se
monal aislada, o del par hormonal, no son suficien- produce la respuesta esperada (p. ej ., se administra
temente discriminativos, se suelen utilizar pruebas dexametasona y se comprueba si baja la ACTH y el
dinámicas. Cuando se sospecha una insuficiencia cortisol; se administra glucosa y se comprueba si baja
glandular o se quiere valorar la reserva funcional la hormona de crecimiento; o se administra un suero
de una glándula o de un eje endocrino, se emplean salino y se comprueba si baja la aldosterona) . La au-
pruebas de estimulación (Tabla 64-2). Por el contra- sencia de supresión indica autonomía glandular.
SE'CCIÓl\i VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla Pruebas de estimulación en los síndromes endocrinos


Glándula u órgano Estímulo Respuesta medida
Hipotálamo-hipófisis Hipoglucemia insulínica Hormona de crecimiento ACTH y cortisol
Metopirona 11-desoxicortisol, ACTH , 17-0H-corticoides
Levodopa, arginina, clonidina, Hormona de crecimiento
ejercicio, sueño, propranolol, GHRH
Hormona de crecimiento Somatomedina C
Clomifeno Gonadotrofinas
Deprivación de agua Osmolaridad urinaria, ADH
TRH TSH
LHRH Gonadotrofinas
Tiroides CRH ACTH , cortisol
TSH Captación de yodo radiactivo
Suprarrenales ACTH , tetracosáctido Cortisol y precursores.
Metopirona 11-desoxicortisol y 17-0H-corticoides
Furosemida/deambulación Renina, aldosterona
Testículos Gonadotrofina coriónica Testosterona.
Células ~ del páncreas Glucosa Glucosa, insulina, péptido C
Glucagón Insulina, péptido C
Paratiroides EDTA/calcitonina PTH
Células C del tiroides Calcio, pentagastrina Calcitonina.
Riñón PTH Fosfaturia, AMPc urinario.
Vasopresina Osmolalidad urinaria.

La función testicular se valora no sólo mediante las fía simpl e p u ede aportar datos indirectos sobre la
determinaciones hormonales sino también con el es- m orfol ogía de algunas glándulas (agrandamiento de
tudio del líquido seminal, ya que pu ede haber anoma- la silla turca en los tumores de la hipófisis , d espla-
lías de este sin trastornos h ormonales . La presencia zamiento de la tráquea por un b ocio , masa m edias-
de cromatina sexual, el cariotipo y el estudio de los tínica en el b ocio intratorácico , calcificaciones de
genitales internos (ecografía, histerosalp ingografía , las glándulas suprarrenales , etc.), y puede poner en
laparoscopia) son pruebas esenciales en los trastor- evidencia los efectos de las hormonas sobre órganos
nos de la diferenciación sexual. diana (trastornos de la madu ración ósea, osteítis fi -
La valoración morfológica de las glándulas o de brosa del hiperparatiroidismo , fracturas costales del
sus órganos diana puede realizarse mediante eco- hi percortisolismo ).
grafía (tiroides, páncreas, suprarrenales , gónadas , Una vez realizado el estudio funcional y anatóm i-
mamas, próstata), TAC o RM (hipotálamo, hipófisis, co de las glándu las endocrinas , a veces es necesario
tiroides, pán creas, gónadas, suprarrenales, próstata, realizar una punción-biopsia con aguja fina (tiroi-
e tc .) o gammagrafía (tiroi d es, suprarrenales, p ara- des, suprarrenales, gónadas), con el fin de llevar a
tiroides, páncreas [insulinoma], órganos en qu e se cab o un estudio citol ógico. Este es tudio da u na idea
producen tumores neuroendocrinos). La ecografía de la naturaleza de la lesión (tumoral, inflamatoria,
establece el tamaño de la glándula, identifica la etc .), si bien la información definitiva sólo se ob-
existencia de nódulos y su estructura (líquida o tiene mediante el estudio anatomopatol ógico de la
sólida) y la presencia de calcificaciones. La gam- pieza.
magrafía informa sobre la anatomía funcional de las Finalmente, es de destacar que los avances de la
glándulas (i dentifica dentro o fuera de la glándu la biología molecular en las últimas décadas permiten
los acúmul os celulares con capacidad para captar h oy el diagnóstico molecular de mu chas d e las enfer-
el material radiactivo suministrado) . La radiogra- medades endocrinas mediante el estudio del DNA de
CAPÍTULO 64 Técnicas diagnósticas en los síndromes endocrinos metabólicos

Tabla Pruebas de supresión en los síndromes endocrinos


Glándula Agente supresor Respuesta medida
Hipotálamo-hipófisis Glucosa Hormona de crecimiento
Dexametasona ACTH , cortisol
Tiroides T4 Captación tiroidea de yodo radiactivo
Suprarrenales Dexametasona Cortisol, ACTH
Suero salino Aldosterona, renina
Captopril Aldosterona, renina
Clonidina Noradrenalina
Células ~ del páncreas Ayuno Glucosa, insulina
Paratiroides Calcio PTH

los linfocitos (si la mutación afecta a todas las células veles se modifiquen solo con la restricción proteica o
orgánicas) o de las células tumorales (si la mutación energética. Proteínas distintas de la albúmina utiliza-
se aprecia solo en estas células). Una vez que se ha das con esta finalidad son la transfeITina y la preal-
identificado el síndrome (p. ej. , diabetes insípida búmina [o transtiITetina). La transferrina está impli-
nefrogénica) y se sospecha, por los datos clínicos y cada en el transporte del hierro , y la prealbúmina en
exploratorios convencionales, la posible proteína el de hormona tiroidea y retino! (de ahí el nombre:
afectada (receptor de la ADH), se puede estudiar el transti(roxin)retin(ol). Además de en la desnutrición,
DNA que la codifica para establecer si es anormal. La la primera puede modificarse en los trastornos del
lista es numerosa y se amplía continuamente, a me- metabolismo del hierro, y la segunda en las enfer-
dida que se conoce la etiología de las distintas enfer- medades hepáticas y en la inflamación aguda. En los
medades. Este tipo de estudios permite diagnosticar estudios de malnutrición probablemente es más útil
mutaciones desde antes del nacimiento y planear el la segunda.
tratamiento antes de que las lesiones sean graves o Como índice de la cantidad de proteínas muscula-
irreversibles. res se ha utilizado la excreción de creatinina en 24 h.
La creatinina deriva del metabolismo de la creatina,
muy abundante en el tejido muscular. A diferencia de
VALORACIÓN ANALÍTICA DEL ESTADO los índices anteriores , sus resultados deben referirse a
NUTRICIONAL la normalidad para una persona de la misma talla (ín-
dice cretinina/altura) y el mismo sexo, lo que compli-
Se realiza mediante un conjunto de pruebas que están ca su uso. Valores inferiores al 80 % de la normalidad
fundan1entalmente orientadas a evaluar el contenido indican malnutrición moderada , y valores inferiores
proteico del organismo. La más frecuente es la deter- al 60 %, malnutrición grave.
minación de la albúmina sérica, que constituye un Tan1bién se han utilizado como índices del estado
buen índice de las reservas de proteínas viscerales. nutricional diversas pruebas inmunológicas, entre
Presenta el inconveniente de que puede alterarse por ellas la cifra total de linfocitos y las pruebas cutáneas
otras razones (aumento en la deshidratación y dismi- de hipersensibilidad tardía . Los antígenos empleados
nución en la reacción de fase aguda de las inflamacio- habitualmente son la estreptocinasa-estreptodornasa,
nes , en las hepatopatías y en diversas enfermedades el virus de la parotiditis, candidina y el derivado pro-
que cursan con pérdida de proteínas). En ausencia de teico purificado (PPD) de la tuberculina. La principal
éstas, cifras de albúmina inferiores a 3 g/dl indican limitación de estos estudios radica, lógicamente, en
malnutrición proteica. La hemivida de la albúmina que pueden alterarse por razones ajenas a la malnu-
es de 16-18 días, lo que la convierte en un marcador trición.
relativamente lento. Junto a las pruebas anteriores, dirigidas a valorar el
Idealmente, una proteína utilizada para evaluar el estado nutricional desde el punto de vista proteico,
estado nutricional debe tener una vida media corta y existen también pruebas específicas para determina -
una concentración plasmática baja, debe poseer una dos nutrientes: vitamina A , vitamina B 12, vitamina D
tasa de síntesis rápida pero de intensidad moderada, [se mide su metabolito, la 25 OH vit. D}, ácido fálico
y una tasa catabólica constante, de forma que sus ni- y hieITo, entre otros.
-165
Patología general del hipotálamo
y la hipófisis
José Antonio Amado Señaris, José Manuel Olmos Martínez

RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
DEL HIPOTÁLAMO
El hipotálamo es una región del cerebro
que regula una gran cantidad de proce-
sos vitales. Está situado debajo del tálamo y
detrás del quiasma óptico, y conecta con la hipófisis
mediante el tallo pituitario (o hipofisario) . El hipotá-
lamo es una encrucijada de circuitos neuronales en
la que se integran informaciones procedentes de la
corteza cerebral, del sistema nervioso autónomo, del
sistema nervioso periférico y de la sangre (glucemia,
concentraciones de hormonas circulantes, osmola-
lidad, temperatura). De su actividad deriva una res-
puesta nerviosa y endocrina (mediada por las hormo-
nas hipofisarias). Funcionalmente se diferencia un
hipotálamo endocrino, constituido por neuronas con
efectos endocrinos, y un hipotálamo no endocrino,
con funciones vegetativas. El hipotálamo endocrino
consta del sistema adenohipofisotrófico o parvicelu-
lar y el sistema hipotálamo- neurohipofisario o mag-
nocelular (Fig. 65-1).
El hipotálamo adenohipofisotrófico descarga las
hormonas hipotalámicas liberadoras o inhibidoras de
la función de las células de la hipófisis anterior en la
eminencia media, desde donde son transportadas a
la adenohipófisis mediante un sistema portal venoso
que sigue el tallo pituitario. La actividad de las neu-
ronas adenohipofisotróficas está regulada por las
neuronas de los tractos superiores, por las concen-
traciones plasmáticas de las propias hormonas
hipotalámicas (retroalimentación ultracorta),
de las hipofisarias (retroalimentación corta)
y de las periféricas (retroalimentación lar-
ga), y por diversos sustratos metabólicos
circulantes (glucosa, ácidos grasos li-
bres, etc.). El objetivo de este sistema
540 de circuitos es mantener las concen-
CAPITULO 65 Patología general del hipotálamo y la hipófisis

de la ADH. La sed, además , es necesaria para que el


organismo pueda reponer las pérdidas extrarrenales
(a) llipolilamo
de agua. El sistema ADH-sed está concebido para re-
gular primariamente la osmolaridad plasmática, no el
volumen circulante, ya que, si hay hiperosmolaridad,
aunque haya exceso de volumen sigue liberándose
ADH y existiendo sed. El riñón normalmente filtra
200 1 de plasma al día, de los que el 90 % se reabsor-
ben isoosmóticamente en la porción proximal de la
nefrona. Del volumen restante, hasta 19 1 se pueden
reabsorber como agua libre en la nefrona distal, de-
pendiendo de los niveles de ADH. La capacidad de
la ADH para retener agua depende de la existencia de
un adecuado gradiente osmolar en la médula renal, ya
que la osmolaridad urinaria máxima está limitada por
la osmolaridad medular máxima (1200-1400 müsm/
kg). También se puede liberar ADH por causas no os-
móticas. Así, cuando se producen descensos graves
(b) Hipófisis del volumen circulante o de la tensión arterial (de
anterior
más del 10 % ) se activan los receptores volumétricos
y de presión del corazón y las grandes arterias, y por
vía refleja se provoca liberación de ADH. Cuando hay
hipovolemia, la liberación de ADH se mantiene aun-
Hormonas
tr6ficas, hormona
del crecimiento,
prolactinn

Oxitocina,
ADH
que produzca descensos de la osmolaridad, ya que en
estas circunstancias el organismo otorga prioridad al
mantenimiento del volumen. La sensación nauseosa
es un estímulo extremadamente potente para liberar
ADH.
Figura Anatomía y secreción hormonal del eje La oxitocina se sintetiza principalmente en el NPV
hipotá lamo-hipofisario. y activa la contracción del miometrio. Durante la lac-
tancia la estimulación de los pezones inicia un reflejo
neuroendocrino de liberación de oxitocina, que faci-
traciones de las hormonas periféricas dentro de las lita la eyección de la leche.
cifras normales.
El sistema hipotálamo-neurohipofisario está cons-
tituido por neuronas cuyos cuerpos se localizan en los EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL
núcleos supraóptico (NSO) y paraventricular (NPV) y DEL HIPOTÁLAMO
cuyos axones descargan en la red capilar de la neuro-
hipófisis la hormona antidiurética o ADH y la oxito- En el ser humano es imposible hacer una exploración
cina, que se liberan directamente a la sangre y tienen funciona l directa del sistema adenohipofisotrófico,
efectos sistémicos. La ADH o arginina vasopresina ya que tal exploración exigiría medir la concentra-
(AVP) es un nonapéptido cíclico cuya función prin- ción de hormonas hipotalámicas en el sistema portal
cipal es mantener la osmolaridad plasmática dentro (las concentraciones de estas en la sangre periférica
de límites normales (280-288 m ü sm/kg). Cuando se son muy bajas y pueden proceder de otros lugares,
produce una elevación del 1 %-2 % en la osmolalidad además del hipotálamo) . En la hipofunción hipotalá-
(por aumento de la concentración de sodio o de otras mica, las hormonas hipofisarias en sangre están ba-
sustancias que no atraviesan libremente la membrana jas (excepto la prolactina), pero esto también podría
celular), los osmorreceptores del hipotálamo anterior, deberse a un trastorno hipofisario. Si la hipofunción
cercanos pero distintos del NSO, informan a este para pituitaria es secundaria a un fallo hipotalámico, la
que libere ADH. La ADH provoca un aumento de la administración de la hormona hipotalámica exógena
reabsorción de agua libre en el túbulo renal, para es capaz de provocar una respuesta de la hormona
compensar el aumento de la osmolaridad plasmática. hipofisaria correspondiente, mientras que si el fallo
Si a pesar de la ADH la osmolaridad sigue elevándo- está en la propia hipófisis no se produce ninguna res-
se, se produce un aumento de la sed (la osmolalidad puesta. Esta respuesta puede ocurrir con una única
plasmática mínima que desencadena la sensación de dosis de hormona hipotalámica (p . ej., en el hipo-
sed, aproximadamente 295 müsm/kg, es más alta que tiroidismo hipotalámico, en el que la TRH produce
la que desencadena la liberación de ADH). La sed es, una clara respuesta de la TSH en tiempos tardíos) o
por tanto, un mecanismo de defensa contra la des- puede exigir múltiples dosis (p. ej., en el hipogona-
541
hidratación cuando se han agotado las posibilidades dismo hipotalámico las células gonadotrofas están
SECCIÓN VII Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla -1 Hipotálamo endocrino. Secreción hormonal y lugar de síntesis


Neuronas productoras Hormona producida
Hipotálamo adenohipofisotrófico

Núcleo paraventricular CRH (hormona liberadora de corticotropina).


Núcleo arqueado GHRH (hormona liberadora de somatotrofina).
GHRELINA (otra hormona liberadora de GH , mayoritariamente sintetizada, en
el estómago).
Núcleo paraventricular TRH (hormona liberadora de tirotropina), que estimula también la liberación de
prolactina
Neuronas dispersas LHRH o GnRH (hormona liberadora de gonadotrofinas).
Área periventricular anterior GHRIH o somatostatina (hormona inhibidora de la liberación de somatotrofina,
que también inhibe la secreción de TSH y de diversas hormonas intestinales)
Varias áreas Dopamina (inhibe tónicamente la secreción de prolactina)
Sistema hipotálamo-neurohipofisario

Núcleo supraóptico ADH


Núcleo paraventricular Oxitocina

atrofiadas por la fa lta de LHRH y necesitan un es- e hipofunción hipotalámica se ve en algunos tumores
tímulo repetido para liberar gonadotrofinas). La re- hipotalámicos que producen exceso de alguna hor-
sonancia magnética nuclear y la TAC identifican las mona y, al crecer, destruyen áreas que producen otras.
lesiones presentes en el área h ipotalamo-hipofisaria. Algunas enfermedades dañan sólo áreas hipotalámi-
La hiperfunción pituitaria debida a lesión hipotalá- cas específicas y producen un síndrome muy defini-
mica resulta imposible de diferenciar por métodos do (p. ej., la diabetes insípida debida a anomalías en
bioquímicos de la que es debida a lesión hipofisaria, el gen de la ADH), mientras que lesiones extensas del
pero los estudios de imagen permiten diferenciar los hipotálamo pueden alterar globalmente su función.
tumores hipotalámicos de los hipofisarios. En gene- Algunos procesos afectan a la vez al hipotálamo y a
ral, se acepta que la hiperfunción pitu itaria cuya ana- la hipófisis, y en ocasiones resulta difícil discernir si
tomía patológica demuestra hiperplasia es de origen la disfunción es de uno u otro origen. Las áreas endo-
hipotalámico, mientras que los adenomas pituitarios crinas del hipotálamo se localizan cerca de la línea
únicos son tumores primarios de la hipófisis. media, mientras que las áreas vegetativas se sitúan
La exploración funcional del sistema hipotálamo- lateralmente. Las lesiones situadas cerca de la línea
neurohipofisario podría hacerse midiendo la ADH y media producen disfunción endocrina; en cambio,
la oxitocina en sangre, pero la determinación de estas para que haya una disfunción vegetativa han de es-
hormonas es difícil. Los efectos de la ADH pueden tar afectadas ambas áreas laterales, ya que si la lesión
valorarse indirectamente midiendo la respuesta de la es unilateral la zona no dañada puede compensar las
osmolaridad plasmática y urinaria a un estímulo que funciones de la lesionada. De ahí que la disfunción
normalmente eleva ambas, como la prueba de restric- vegetativa sea mucho menos frecuente y más grave
ción h ídrica. que la endocrina.

CLASIFICACIÓN DE LOS SÍNDROMES SÍNDROMES DEBIDOS A DISFUNCIÓN


HIPOTALÁMICOS DEL HIPOTÁLAMO ADENOHIPOFISOTRÓFICO
La afectación del hipotálamo puede producir hipo-
función, hiperfunción o una mezcla de ambas, a las HIPOFUNCIÓN DEL HIPOTÁLAMO
que pueden añadirse manifestaciones derivadas del ADENOHIPOFISOTRÓFICO
«efecto ocupante de espacio» que producen las lesio-
nes hipotalámicas (hipertensión intracraneal, altera- Abarca desde el déficit aislado de una h ormona has-
542
ción de la vía óptica, etc. ). La mezcla de hiperfunción ta la deficiencia global de todas ellas. La deficiencia
CAPITULO 65 Patología general del hipotálamo y la hipófisis

aislada puede ser la primera manifestación de una La fisiopatología dependerá en cada caso de las
lesión hipotalámica evolutiva que posteriormente disfunciones hormonales que provoque y de la exis-
puede producir nuevos déficits hormonales e incluso tencia de lesiones ocupantes de espacio que lesio-
trastornos del hipotálamo no endocrino. nen la vía óptica o que originen hipertensión intra-
craneal.
Insuficiencias aisladas de las hormonas hipotalámicas
Insuficiencia de la GHRH. Provoca hiposomato- HIPERFUNCIÓN DEL HIPOTÁLAMO
trofismo , ya que falta el principal estímulo para ADENOHIPOFISOTRÓFICO
la secreción de GH. Es la causa más frecuente del
enanismo hipofisario idiopático (en realidad, el La hiperfunción primaria del hipotálamo se manifies-
problema está en el hipotálamo, no en la hipófi- ta como una hiperfunción hipofisaria. La insuficien-
sis) y de la talla baja por deprivación emocional. cia de las glándulas endocrinas hipofisodependientes
Insuficiencia de la TRH. Provoca un hipotiroi- produce una hipersecreción compensadora de las
dismo con TSH detectable, pero biológicamente hormonas hipotalámicas liberadoras.
poco activa. Exceso de GHRH: Hay tumores hipotalámicos
Insuficiencia de la LHRH. Provoca un hipogo- productores de GHRH que originan hiperplasia
nadismo hipogonadotrófico. Aparece en deter- de las células somatotropas y acromegalia, aun-
minadas malformaciones del hipotálamo, como que es una causa muy infrecuente de esta. Se ha
la enfermedad de Maestre de San Juan-Kallmann demostrado también la producción ectópica de
(hi pogonadismo asociado a a11osmia, en el cual GHRH en tumores carcinoides.
se produce agenesia del bulbo olfatorio y ausen- Exceso de LHRH: Algunos tumores hipotalámi-
cia de migración de las neuronas productoras cos producen LHRH e inducen la aparición de
de LHRH a su situación anatómica normal) , en pubertad precoz.
la malnutrición y en diversos trastornos fun- Exceso de CRH : Algunos tun1ores hipotalámicos
cionales (amenorrea psicógena, por exceso de poco frecuentes pueden originar un síndrome
ejercicio, por estrés etc.). En el síndrome de de Cushing. Existen tumores que producen ec-
Frohlich o adiposogenital se combinan hipogo- tópicamente CRH (carcinoides, etc.) y originan
nadismo hipogonadotrófico y obesidad, debido un síndrome de Cushing al estimular las células
a un tumor del área hipotálamo-hipofisaria que corticotrópicas. En el estrés y en la depresión
lesiona el centro hipotalámico de la saciedad y existe un aumento de secreción de la CRH hipo-
las neuronas productoras de LHRH o las células talámica.
gonadotróficas.
Exceso de somatostatina: No se han descrito so-
Insuficiencia de la CRH. Provoca una insuficien- matostatinomas en el hipotálamo , pero sí en los
cia suprarrenal con ACTH indetectable. Aparece islotes pancreáticos. Una causa iatrogénica es el
cuando se suspende bruscamente un tratamiento tratamiento con somatostatina o sus derivados.
crónico con corticoides en dosis farmacológicas .
Exceso de la dopamina: Se produce con la utili-
Insuficiencia de la somatostatina. Es una causa zación terapéutica de fármacos dopaminérgicos
poco frecuente de acromegalia. (bromocriptina y análogos). Provoca una inhibi-
Insuficiencia de la dopamina. Provoca una hi- ción de la secreción de prolactina.
perprolactinemia, debida a la desaparición de la
inhibición que supone la dopamina sobre las cé-
lulas lactotrofas. Es la hipofunción hipotalámica SÍNDROMES DEBIDOS A DISFUNCIÓN
aislada más frecuente. Una causa habitual son
los fármacos que inhiben la síntesis neuronal de
DEL SISTEMA HIPOTALÁMICO-
dopamina o antagonizan sus efectos (fenotiazi- NEUROHIPOFISARIO
das, benzamidas, reserpina, etc.) .
HIPOFUNCIÓN DEL SISTEMA HIPOTALÁMICO-
Insuficiencia de múltiples hormonas hipotalámicas NEUROHIPOFISARIO
Numerosos procesos pueden afectar de forma más o Diabetes insípida
menos global al hipotálamo: a) malformaciones con-
Se debe a una insuficiente actividad de la ADH so-
génitas; b) trastornos metabólicos (ictericia neonatal bre los túbulos colectores del riñón, lo que origina
prolongada) ; c) hipertensión intracraneal; d) procesos
una incapacidad para reabsorber agua libre; por ello
vasculares (hemorragia, infarto); e) procesos tumora-
aparece poliuria, que a su vez provoca wrn polidipsia
les (tumores hipofisarios o del área paraselar, metás-
compensadora.
tasis , etc.); f) procesos infecciosos (meningitis, ence-
falitis, etc.); g) procesos granulomatosos (sarcoidosis, Etiopatogenia. La diabetes insípida central o
543
etc.); h) cirugía; i) traumatismos, y j) radioterapia. neurogénica surge por una incapacidad del hi-
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

potálamo para producir ADH, y ello puede ocu- la diabetes insípida central pero sí en la forma
rrir por daño selectivo del núcleo supraóptico nefrogénica. La capacidad de respuesta varía
(procesos autoinmunitarios, anomalía en el gen según la reserva funcional que quede de ADH;
de la ADH) o por daño difuso del hipotálamo. de ahí que la duración de la prueba sea variable.
La afectación aislada de la neurohipófisis (p. ej., Al final de la prueba se inyecta vasopresina y,
por un traumatismo), sin lesión de las neuronas si la osmolalidad urinaria se eleva, se confirma
del núcleo supraóptico, no origina diabetes in- la diabetes neurogénica; en la diabetes nefro-
sípida. génica, en cambio, la osmolaridad no varía. En
La diabetes insípida nefrogénica o resistente la dipsomanía la osmolalidad plasmática basal
a la ADH se debe a que el túbulo renal no res- es baja, mientras que en la diabetes insípida es
ponde a la ADH, mientras que el sistema hipotá- alta. La restricción de líquidos en la dipsomanía
lamo-neurohipofisario funciona correctamente. provoca un discreto aumento de la osmolalidad
La diabetes insípida nefrogénica puede aparecer urinaria, que está limitado por el hecho de que
por: 1) mutación en el gen del receptor tubular la osmolalidad máxima de la médula renal es
de la ADH; 2) mutación en el gen del transpor- menor de lo normal, pero una restricción pro-
tador de agua a través de la membrana celular longada puede normalizar nuevamente el gra-
(aquaporina); 3) enfermedades sistémicas que diente osmolar de la médula.
lesionan el túbulo colector (amiloidosis, etc.); 4)
alteraciones metabólicas que perturban el efecto Síndrome de hipofunción de la oxitocina
de la ADH, como la hipercalcemia o la hipopo-
tasemia; 5) sustancias que lesionan difusamente Puede provocar una lactancia inadecuada.
los túbulos renales (p . ej,. tetraciclinas) o inter-
fieren con el efecto de la ADH (demeclociclina,
litio). HIPERFUNCIÓN DEL SISTEMA
Fisiopatología y semiología. Cuando la secre- HIPOTÁLAMO-NEUROHIPOFISARIO
ción de ADH se reduce , no se reabsorbe sufi-
ciente agua libre en el túbulo colector y apa- Síndrome de secreción inadecuado ADH
rece poliuria. La pérdida de agua libre origina Existe un exceso de secreción de ADH que no se su-
un aumento en la osmolalidad plasmática que, prime completamente como respuesta a la hipoos-
a su vez, activa el centro de la sed, por lo que molaridad. Debe diferenciarse de la hipersecreción
aparece polidipsia. Si la ingesta de agua permi- adecuada de ADH que ocurre en presencia de hipe-
te compensar las pérdidas urinarias se alcanza rosmolaridad, hipovolemia o hipotensión arterial, en
una situación de equilibrio, pero si el enfermo las que la secreción de ADH ejerce un papel compen-
no bebe lo suficiente se produce deshidratación. sador.
Debe diferenciarse la diabetes insípida de la
potomanía, dipsomanía o polidipsia psicógena Etiopatogenia. La ADH en exceso puede deber-
(un trastorno mental que lleva al enfermo a in- se a: a) daño hipotalámico (meningitis, encefa-
gerir grandes cantidades de agua, de manera que litis, hemorragia subaracnoidea, trauma craneal,
se produce una hipoosmolalidad plasmática que etc., o a un trastorno idiopático de la liberación
inhibe la ADH y origina una poliuria compensa- de ADH en ausencia de otras enfermedades);
dora). La poliuria y la polidipsia de la diabetes bJ secreción ectópica tumoral (carcinoma bron-
insípida son de intensidad variable (3-20 1/día), quial, pancreático, etc.) o por enfermedades in-
según la capacidad de producción de ADH. Una flamatorias pulmonares (neumonía, tuberculosis ,
restricción de líquidos origina sed intolerable y etc. ); c) fármacos con efecto ADH (vasopresina,
deshidratación rápida. La orina es muy diluida oxitocina), fármacos que liberan ADH (nicotina,
(osmolalidad de menos de 200 müsm/kg), con etc.) o fármacos que potencian los efectos de la
una osmolalidad plasmática en los límites nor- ADH sobre el túbulo renal (carbamacepina), y
males altos. d) síndromes endocrinos que producen concen-
En la diabetes insípida una prueba de de- traciones inapropiadamente elevadas de ADH o
privación hídrica durante 8-16 h provoca un incapacidad tubular para eliminar el agua libre
pequeño descenso de la diuresis y un ligero (hipocortisolismo, hipotiroidismo).
aumento de la osmolalidad urinaria (no más su- Fisiopatología y semiología. La ADH excesiva-
perior a 500 müsm/kg, a diferencia de los más mente alta induce antidiuresis (aumento de la
de 900 müsm/kg que se alcanzan normalmen- retención de agua en el riñón), pero este hecho
te), al tiempo que aumenta la osmolalidad en sólo tiene trascendencia si la ingesta de agua es
sangre y el enfermo desarrolla sed intolerable, superior a las pérdidas, en cuyo caso el exceso
se deshidrata y pierde peso. La prueba puede de agua se acumula y causa una progresiva di-
complementarse con la determinación simultá- lución de los solutos en el plasma y en todos los
544
nea de ADH en plasma, que no se elevará en componentes líquidos del organismo (síndrome
CAPÍTULO 65 Patología general del hipotálamo y la hipófisis

hipoosmolar o de intoxicación acuosa) . Cuando convulsiones y deterioro progresivo del nivel


la expansión del agua corporal supera el 10 % de consciencia, que puede llegar hasta el coma.
comienza a aumentar la excreción de sodio debi- Si la hiponatremia se instaura muy lentamente,
do a una menor reabsorción de este en el túbulo puede no haber síntomas neurológicos. Aunque
proximal (por supresión del eje renina-angio- el agua corporal total esté aumentada, no hay hi-
tensina aldosterona y aumento de las hormonas pertensión arterial ni edema. Es característica la
natriuréticas peptídicas). Esta natriuresis tiende hiponatremia con hipoosmolaridad plasmática
a mejorar la hipervolemia, pero agrava la hipo- en presencia de orinas no diluidas al máximo.
natremia. La ingesta de sal no mejora el cuadro, La determinación de ADH plasmática demuestra
ya que aumenta la volemia y nuevamente se unos niveles excesivamente altos para la osmola-
produce natriuresis. Si el balance hídrico de los ridad existente. El enfermo no tiene por qué pre-
días siguientes sigue siendo positivo, el cuadro sentar oliguria, ya que el problema no es cuánta
empeora progresivamente, mientras que si el ba- orina se emite sino cómo es el balance hídrico (el
lance se hace negativo la osmolaridad tiende a paciente puede tener poliuria, pero si la ingesta
normalizarse. de agua es mayor que las pérdidas, la antidiure-
El síndrome de intoxicación acuosa de instau- sis es inapropiada).
ración aguda o subaguda produce un trastorno
del funcionamiento del sistema nervioso central,
dependiente del edema cerebral que se origina SÍNDROMES DEBIDOS A DISFUNCIÓN
por transferencia de agua desde el plasma hi- WDEL HIPOTÁLAMO NO ENDOCRINO
poosmolar al interior de las neuronas para equi-
librar la osmolalidad entre ambas partes de la En la Tabla 65-2 se recogen las principales manifes-
membrana celular. Por todo ello, aparece cefalea, taciones de disfunción del hipotálamo no endocrino.

Tabla Manifestaciones no endocrinas de lesión hipotalámica


Regulación de la temperatura
Hipertermia (lesión del hipotálamo anterior) . Hipotermia (lesión del hipotálamo posterior). Poiquilotermia
(lesiones extensas)
Comportamiento alimentario
Hiperfagia, obesidad (lesión del centro de la saciedad).
Anorexia, afagia (lesión del centro del hambre)
Regulación de la ingesta de agua
lngesta compulsiva de agua (rara vez de causa hipotalámica, generalmente de causa psíquica). Adipsia
(lesión del centro de la sed). Hipernatremia e hiponatremia (lesión del osmorreceptor hipotalámico, que
mantiene una osmolalidad demasiado elevada o demasiado baja)
Sueño y consciencia
Hipersomnia o inversión del ritmo del sueño (lesión de la unión hipotálamo-mesencéfalo). Hiperactividad,
ausencia de sueño (lesiones del hipotálamo anterior)
Función psíquica
Irritabilidad (lesiones del hipotálamo caudal). Alucinaciones, miedo (estimulación del hipotálamo posterior)
Sistema nervioso autónomo
Arritmias cardiacas (estimulación del hipotálamo anterior). Hipersecreción gástrica (lesión bilateral del
hipotálamo anterior)
Ritmos biológicos
Pérdida de los ciclos día-noche (lesión de la proyección retinohipotalámica). Pérdida del ritmo circadiano
(lesión del núcleo supraquiasmático)
·166
Patología general
de la hipófisis anterior
o adenohipófisis
José Antonio Amado Señaris, Fernando Pazos Toral

RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
La hipófisis, o glándula pituitaria,
está situada dentro de la silla turca del
hueso esfenoides y se une al hipotálamo
mediante el tallo pituitario. La hipófisis se
compone de una parte anterior, o adenohipófisis, y
de una parte posterior, o neurohipófisis. La adenohi-
pófisis supone el 80 % del peso de la glándula y se
origina a partir de una evaginación del ectodermo de
la cavidad oral primitiva, la bolsa de Rathke. La neu-
rohipófisis es una continuación del hipotálamo. Las
paredes laterales de la silla turca están muy próximas
a los senos cavernosos que contienen la arteria caró-
tida y los nervios craneales motor ocular común (III),
patético (IV) y motor ocular externo (VI). La pared
anteroinferior de la silla turca separa la hipófisis del
seno esfenoidal. Delante del tallo pituitario se locali-
za el quiasma óptico, y encima, la eminencia media
y el tercer ventrículo del cerebro. La mayor parte del
flujo sanguíneo de la adenohipófisis llega a través del
sistema portal, que se origina en la eminencia media
y la porción proximal del tallo pituitario. No existen
conexiones nerviosas entre el hipotálan10 y la adeno-
hipófisis. La conexión se realiza mediante las hormo-
nas hipotalámicas por vía vascular. La adenohipófi-
sis se comporta como un amplificador de las señales
(neurohormonas) que se originan en el hipotálamo.
Las células adenohipofisarias se clasifican en
eosinófilas (se tiñen con colorantes ácidos y pro-
ducen hormona de crecimiento o prolactina),
basófilas (se tiñen con colorantes básicos y
contienen glucoproteínas, como las gona-
dotrofinas , la TSH o la pro-opiomelano-
cortina) o cromófobas (no se tiñen). Sin
embargo, resulta más adecuado dife-
renciarlas, en función de la hormona
peptídica segregada, en somatotrofas
CAPITULO 66 Patología general de la hipófisis anterior o adenohipófisis

11
l
Péptido Fragmento ACTH (1-39) [3-LPH
señal ami no/ term inal

D
y-MSH
Dcx-MSH
□ ~I__l~I___.
cx-LPH [3-endo rfina
(1-13)


[3-M SH

Figura Moléculas derivadas de la pre-pro-opiomelanocortina. MSH: hormona estimulante de melanoci-


tos . LDH: lipotropina. ACTH: corticotropina.

(producen somatotrofina y constituyen el 50 % de las preparar las mamas para la lactancia. Esto se debe a
células secretoras de la hipófisis), lactotropas (produ- que los estrógenos estimulan la hiperplasia de las cé-
cen prolactina (PRL) y suponen el 25 % de las células lulas lactotropas. Durante las primeras semanas tras
hipofisarias) , tirotropas (TSH), gonadotropas (LH y el parto, la estimulación de las mamas por el lactante
FSH) y corticotropas (ACTH). desencadena un reflejo neuroendocrino que promue-
La secreción de hormona de crecimiento (GH) o ve una marcada liberación de PRL.
somatotrofina depende de las concentraciones hipo- La ACTH o corticotropina se libera a partir de
fisarias de GHRH y GHRIH (de origen hipotámico) y una molécula precursora, la pro-opiomelanocortina
de ghrelina (de origen gástrico). La somatotropina es- (POMC). La POMC puede dividirse en distintos frag-
timula el crecimiento de la mayor parte de los tejidos mentos , según la maquinaria enzimálica de la célu-
corporales (cartílago, hueso , vísceras, etc.) y además la que la procese (Fig. 66-1). En la hipófisis , la ma-
ejerce profundos efectos metabólicos. Es necesaria yor parte de la POMC se metaboliza hacia ACTH y
para el crecimiento longitudinal de los huesos en la ~-endorfina. En otras especies existen dos hormonas
vida extrauterina. Promueve la diferenciación de los con actividad estimulante de los melanocitos (MSH):
condrocitos y estimula la secreción de somatomedina la a -MSH (cuyos 13 aminoácidos son idénticos a los
C, o factor de crecimiento insulínico (FCI-1 o IGF-1 13 primeros de la ACTH) y la ~-MSH, que también
Insulin-like growth factor 1), en el cartílago, el hueso comparte varios aminoácidos en idéntica posición
y el hígado. El FCI-1 estimula el crecimiento de los con la ACTH. Debido a esta semejanza molecular, la
condrocitos recién diferenciados por la somatotrofina ACTH tiene efectos estimulantes de los melanocitos.
en el cartílago de conjunción. Así se produce el creci- La CRH y la vasopresina estimulan la secreción de
miento longitudinal de los huesos. La mayor parte del ACTH, mientras que los glucocorticoides la inhiben
FCI-1 procede del hígado y circula unido a una serie (véanse los capítulos 13 y 68).
de proteínas transportadoras. La hormona de creci- La TSH y las gonadotrofinas FSH y LH son gluco-
miento tiene efectos anabólicos, lipolíticos y diabeto- proteínas constituidas por dos subunidades, la subu-
génicos directos. Aumenta la captación de aminoáci- nidad o:, que es idéntica para las tres hormonas , y la
dos por las células y la síntesis proteica, produciendo subunidad ~. de la que depende la actividad biológica
un balance nitrogenado positivo. Aumenta la movili- de cada una de ellas (véanse los capítulos 67 y 69) .
zación de grasas del tejido adiposo y la oxidación de
los ácidos grasos en los tejidos periféricos. Por todo
ello, promueve un cambio en la composición orgáni- EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL
ca (aumento del tejido muscular, disminución del te- DE LA ADENOHIPÓFISIS
jido adiposo). Además , produce insulinorresistencia
a nivel posreceptor; lo que origina hiperinsulinemia. La somatotrofina (GH) se segrega de forma pulsátil
La PRL actúa en el posparto promoviendo la secre- y errática. Por esta razón, una determinación aislada
ción de leche en las mamas previamente estimuladas de somatotrofina en sangre no es un buen índice de
por las hormonas sexuales. La secreción de PRL de- la actividad secretora de las células somatotrofas. La
pende de las concentraciones portales de varias sus- secreción de hormona de crecimiento es suprimida
tancias; así, la TRH estimula su secreción, mientras por la hiperglucemia y estimulada por los aminoáci-
que la dopamina la inhibe. El efecto inhibitorio de dos y la hipoglucemia. Durante el sueño se producen
la dopamina es el predominante. Los niveles de PRL picos secretorios, especialmente en los niños. Para
547
aumentan gradualmente a lo largo del embarazo, para valorar si existe deficiencia de somatotrofina se debe
- SECCION VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

hacer una prueba de estimulación, como el ejercicio


físico, la combinación de propranolol y ejercicio, la
hipoglucemia insulínica, etc. En realidad, estas prue-
bas valoran la capacidad de respuesta de las células
somatotrofas, pero no su secreción fisiológica. Para
estudiar la secreción real deben hacerse múltiples de-
terminaciones plasmáticas, especialmente durante el
sueño, y cuantificar la secreción integrada (nocturna
o de 24 h). Las concentraciones plasmáticas de FCI-1
o IGF-1 y su proteína transportadora-3 (IGF-BP3)
indican la respuesta periférica de los tejidos a la so-
matotrofina. Para valorar si existe exceso de somato-
trofina es necesario hacer una prueba de supresión,
que consiste en administrar glucosa y comprobar si
se produce el descenso fisiológico en la concentra-
ción de somatotrofina; si esto no ocurre o aparece una
elevación paradójica, existe una secreción autónoma Figura Adenoma hipofisar io.
de esta hormona. También puede valorarse el exce-
sivo efecto periférico de la hormona de crecimiento
midiendo el FCI-1 y su proteína transportadora, que trofas, mutación en el gen de la somatotrofina),
estarán aumentados. hipotalámicas (por deficiencia de GHRH; véase
En general es suficiente una única determinación Capítulo 65 dedicado al hipotálamo), o a resis-
de PRL en sangre con fines clínicos, aunque el estrés, tencia periférica a las acciones de la hormona
el coito y la manipulación mamaria previa pueden de crecimiento, como en el enanismo de Laron
elevar sus cifras. (en el que hay una mutación en el receptor de la
La exploración funcional de la ACTH, la TSH y las hormona de crecimiento, de manera que esta no
gonadotrofinas se expone en los capítulos dedicados puede ejercer sus efectos) o en la malnutrición
a las glándulas suprarrenales, tiroides y gónadas (Ca- (en la que la somatotrofina no es capaz de provo-
pítulos 67, 68 y 69). car una elevación del FCI-1).
La administración intravenosa simultánea de in- Fisiopatología y semiología. La deficiencia de
sulina, TRH y LHRH permite valorar globalmente la somatotrofina intraútero no produce trastornos
respuesta hipofisaria, ya que normalmente debe ele- en el crecimiento fetal (que depende de la insuli-
varse la ACTH, el cortisol y la somatotrofina (por la na y de otros factores). El niño nace con una talla
hipoglucemia), la TSH y la PRL (por la TRH) y la LH y normal. En el periodo posnatal la somatotrofina
la FSH (por la LHRH). Se puede utilizar GHRH y CRH es esencial para el crecimiento, de manera que
en lugar de insulina, para evitar los efectos desagra- éste se detiene y aparece un enanismo con ex-
dables de la hipoglucemia. tremidades bien proporcionadas, a diferencia
La morfología de la hipófisis puede valorarse indirec- de lo que ocurre en el hipotiroidismo o en otros
tamente a través de la repercusión que tienen los tumo- procesos. La maduración del hueso se retrasa. La
res hipofisarios sobre la silla turca en la radiografía sim- falta de somatotrofina hace que el tejido adiposo
ple de cráneo, aunque la TC y la resonancia magnética tienda a acunmlarse en la cara, el tronco, etc.,
nuclear son las pruebas más concluyentes (Fig. 66-2). lo que confiere a estos niños una apariencia de
«querubines». Asimismo, la falta de somatotro-
fina hace que sean hipersensibles a la insulina.
SÍNDROMES DE INSUFICIENCIA La deficiencia de somatotrofina en un adulto que
ADENOHIPOFISARIA (HIPOPITUITARISMO) ya ha terminado de crecer provoca hipersensibi-
lidad a la insulina, propensión a la osteoporosis
La insuficiencia puede ser selectiva de una hormona y menor trofismo muscular y visceral.
concreta, de varias hormonas o de todas ellas (panhi-
popituitarismo). La deficiencia aislada de una hormo- Hipoprolactinemia aislada
na hipofisaria puede ser la primera manifestación de
una lesión hipotalámica o hipofisaria en evolución. Ocurre en la rara ausencia congénita de células lac-
totropas y en los tratamientos con fármacos dopami-
nérgicos. Produce una agalactia (falta de producción
HIPOPITUITARISMOS SELECTIVOS de leche en el periodo posparto, donde normalmente
debería aparecer).
Hiposomatotrofismo aislado
Etiopatogenia: Puede deberse a causas hipofi- Insuficiencia aislada de ACTH, TSH o gonadotrofinas
548
sarias (ausencia congénita de células somato- Se estudian en los Capítulos 67, 68, y 69.
CAPÍTULO 66 Patología general de la hipófis is anterior o adenoh ipófisis

INSUFICIENCIA DE MÚLTIPLES HORMONAS adecuadas de cortisol plasmático; de ahí que la


HIPOFISARIAS (PANHIPOPITUITARISMO) poliuria pueda no manifestarse si a la falta de
ADH se suma la de ACTH. Además de las ma-
Etiopatogenia nifestaciones referidas, aparece una hipofunción
adenohipofisaria, pero, a diferencia de lo que
Trastornos intrínsecos de la hipófisis. La hipófi- ocurre en el hipopituitarismo por destrucción
sis puede no formarse bien por mutación de di- de la hipófisis , se produce hiperprolactinemia,
versos factores de transcripción necesarios para debida a la desaparición de los efectos de la do-
el normal desarrollo de las células hipofisarias, pamina sobre la hipófisis .
o puede ser dañada por mecanismos vasculares Trastornos hipotalámicos (véase el Capítulo 65).
(necrosis isquémica, como la que ocurre en la
enfermedad de Sheehan o en la apoplejía pitui-
Fisiopatología y semiología
taria) , por invasión tumoral (tumores primaria-
mente intraselares o extraselares), por procesos Dependiendo de las hormonas afectadas, el enfer-
granulomatosos (tuberculosis, etc.), infiltrativos mo presenta una mezcla variable de hipotiroidismo,
(hemocromatosis, etc.), o autoinmunes (hipofisi- hipoadrenalismo e hipogonadismo secundarios, hi-
tis) o por causas iatrógenas (cirugía, radioterapia). posomatotrofismo y alteraciones en los niveles de
Si la lesión se limita a la hipófisis , no aparece prolactina. En el hipopituitarismo, además, es muy
diabetes insípida. La enfermedad de Sheehan es frec uente la aparición de manifestaciones debidas a
una necrosis pituitaria isquémica desencadenada lesión ocupante de espacio en el área hipotálamo-
por una hemorragia masiva durante el parto (la hipofisaria (cefaleas por compresión del diafragma
hipófisis es muy vulnerable a la hipotensión en selar, hemianopsia bitemporal por compresión del
este momento, ya que durante el embarazo se ha quiasma óptico, hipertensión intracraneal por creci-
duplicado su tamaño). La apoplejía pituitaria es miento tumoral hacia el III ventrículo).
una necrosis isquémica de la hipófisis que por lo
general se asienta sobre un tumor hipofisario que
ha crecido rápidamente y cuya vascularización, SÍNDROMES DE HIPERFUNCIÓN
en un momento dado, es insuficiente para nutrir- ADENOHIPOFISARIA (HIPERPITUITARISMOS)
lo. Además del hipopituitarismo, suele aparecer
hemorragia subaracnoidea. El craneofaringioma La hiperfunción adenohipofisaria suele deberse a un
es un tumor no secretor que se asienta sobre los proceso intrínseco de la hipófisis, que segrega autó-
restos embriológicos de la bolsa de Rathke . Los nomamente hormona h ipofisaria en exceso; más rara
adenomas secretores pueden provocar hiperpi- vez se debe a un proceso intrínseco del hipotálamo,
tuitarismo aislado (por ejemplo, acromegalia) con exceso de la hormona hipotalámica estimula-
sumado a hipopituitarismo por destrucción de la dora o defecto de la hormona inhibidora. Pueden
hipófisis normal. aparecer acompañados de manifestaciones de lesión
Síndrome de la hipófisis desconectada (sec- ocupante de espacio en el área hipotálamo-hipofi-
ción del tallo hipofisario) Se produce cuando saria.
se destruye el tallo pituitario (traumatismo cra-
neal, cirugía, lesión ocupante de espacio, etc.), HIPERSOMATOTROFISMO
de manera que la adenohipófisis se queda sin
estímulos tróficos y la neurohipófisis degenera. Es un síndrome debido a una excesiva actividad de la
La manifestación más frecuente y llamativa es hormona de crecimiento sobre el organismo.
la diabetes insípida debida a falta de ADH, cuya
presencia depende de la altura a la que se pro- Etiopatogenia
duce la sección del tallo pituitario: si la sección La causa más frecuente de hipersomatotrofismo es
ocurre cerca del hipotálamo la diabetes insípida el adenoma hipofisario secretor de hormona de cre-
es inevitable (porque se produce una degenera- cimiento. A veces el adenoma es capaz de segregar
ción neuronal retrógrada) , mientras que su inci- somatotrofina y prolactina, e incluso otras hormonas.
dencia es menor si ocurre más abajo (porque no Otra causa es la hiperplasia de las células somatotro-
degeneran las neuronas productoras de ADH). En pas debida a hipersecreción de GHRH.
algunas secciones agudas se produce una típica
respuesta trifásica: inicialmente poliuria debida
a la falta de liberación de ADH, seguida de se- Fisiopatología y semiología
creción inadecuada de ADH debida a necrosis Si el hipersomatotrofismo aparece en niños con los
de la neurohipófisis , para luego producirse una cartílagos de crecimiento abiertos, produce gigantis-
diabetes insípida definitiva por degeneración mo hipofisanio, que se caracteriza por un crecimiento
de las neuronas productoras de ADH. Para que desmesurado, al que posteriormente se asocian rasgos
549
aparezca poliuria deben existir concentraciones acromegálicos.
SECCIÓN VIII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

HIPERPROLACTI NEM IA
Se trata de un síndrome debido a una excesiva activi-
dad de la prolactina (PRL). Es la hiperfunción pitui-
taria más frecuente. Su forma más característica es el
síndrome de amenorrea-galactorrea.

Etiopatogenia
■ Trastorno intrínseco de la hipófisis: adenoma
hipofisario secretor de PRL (prolactinoma). o
adenomas mixtos, secretores de PRL y otra hor-
mona, generalmente somatotrofina.
■ Deficiencia de dopamina: aparece en el síndrome
de la hipófisis desconectada (sección del tallo
hipofisario). en los trastornos hipotalámicos y en
el tratamiento con fármacos antidopaminérgicos.
■ Exceso de TRH: aparece en el hipotiroidismo
primario.
■ Activación patológica del reflejo de la succión
mamaria en pacientes con herpes zóster inter-
costal.

Fisiopatología y semiolog ía
En las mujeres el exceso de PRL, actuando sobre unas
mamas estimuladas por estrógenos y progesterona,
provoca galactorrea, generalmente bilateral. En los
Figura 66• Facies acromegá lica. varones la galactorrea es infrecuente. El exceso de
PRL puede producir insuficiencia luteínica. Cuando
el exceso de PRL es marcado , se altera la secreción
de gonadotrofinas, por lo que aparece amenorrea: de
Si el hipersomatotrofismo aparece en adultos con ahí el nombre de síndrome de amenorrea-galactorrea.
los cartílagos de crecimiento cerrados, provoca una Si el cuadro se prolonga mucho y aparece hipoestro-
acromegalia (crecimiento de las partes acras o dista- genismo, puede desaparecer la galactorrea. En los
les), ya que no puede haber crecimiento longitudinal varones, el exceso de PRL produce también un hipo-
de los huesos. Sin embargo, el exceso de somatotro- gonadismo hipogonadotrófico, aunque a veces puede
fina produce un crecimiento óseo a partir del perios- apreciarse exclusivamente disminución de la libido e
tio, tanto en los huesos planos como en los largos. impotencia (atribuidos a un efecto central de la PRL).
También aumentan de tamaño los cartílagos, las vís-
ceras y, en general, el tejido conectivo del organismo.
Se produce un ensanchamiento de las manos y de los HIPERFUNCIÓN DE LA ACTH
pies, debido al crecimiento perióstico de los huesos,
Aparece en el estrés, en el síndrome de Cushing de
al aumento del tejido conectivo y al engrosamiento
origen hipotalárnico, en la enfermedad de Cushing y
de la piel. La mandíbula se hace prominente (prog-
en el síndrome de Nelson (tumor originado a partir de
natismo) y los dientes se separan (diastema}, los pó-
las células corticotropas, que aparece tras extirpar las
mulos, los senos frontales, los cartílagos nasales, las
suprarrenales y que se manifiesta por una gran hiper-
orejas y la lengua también aumentan de tamaño, con pigmentación).
lo que los rasgos faciales se hacen más toscos (Fig.
66-3) . Las cuerdas vocales se ensanchan y la voz se
hace ronca. La piel se hace gruesa, edematosa, grasa y HIPERFUNCIÓN DE LA TSH
puede existir hirsutismo). Aparece insulinorresisten-
cia, que puede desenmascarar una diabetes mellitus
Y DE LAS GONADOTROFINAS
latente. Véanse los Capítulos 67 y 69.

550
-167
Patología general
del tiroides
José Antonio Amado Señaris, José Manuel Olmos Martínez

RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
El tiroides está constituido por dos
lóbulos conectados por un istmo que
cruza por delante de la tráquea. Las
hormonas tiroideas (HT) que se anali-
zan en este capítulo, son la tiroxina o
T4 y la T 3 (Fig. 67-1), aunque el tiroides
también produce calcitonina. La T3 re-
versa (rT 3 ) deriva de la T4 , pero carece de
efectos hormonales. La unidad básica del ti-
roides es el folículo, que está constituido por células
cuboidales que producen y rodean el coloide, cuyo
componente fundamental es la tiroglobulina (Tg), la
molécula precursora de las HT.
La síntesis de HT está regulada enzimáticamente y
precisa de un oligoelemento esencial, el yodo, que se
obtiene de la dieta (Fig. 67-2). El yodo se ingiere en
forma de yoduro en los alimentos marinos , en la sal,
o disuelto en el agua, y es atrapado por el tiroides
mediante un transportador de membrana específico
cuya actividad está regulada por la TSH. El yoduro
es organificado enzimáticamente, uniéndose a los re-
siduos tirosilo de la Tg. Estos tirosilos reciben una o
dos moléculas de yodo y se acoplan dos a dos para
formar T3 o T 4 • La Tg, con las HT en su interior, es
almacenada en el coloide. Cuando la concentración
de T 4 baja en sangre, se libera TSH que promueve la
endocitosis del coloide. Las enzimas lisosómicas di-
gieren las gotas de coloide y liberan la T4 y la T3 a la
circulación. Una pequeña cantidad de Tg sale a la cir-
culación como tal y es detectable en sangre. La T 4 se
produce exclusivamente en el tiroides, mientras que
de la producción diaria de T3 menos de 1/3 procede
directamente del tiroides; los 2/3 restantes deri-
van de la desyodación periférica de la T 4 • Las
HT circulan en sangre unidas a proteínas, de
las cuales la más importante es la globulina
transportadora de la tiroxina (TBG). Sola-
mente el 0,04 % de la T4 plasmática cir-
cula libre y está disponible para ejercer
sus efectos inmediatamente. El 0,4 %
551
de la T3 está libre.
SECCIÓN VII Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

I 1 NH,

O 0
3

OH O 1/ - ~ CH,- C~- COOH


5
1 1
Anillo externo Anillo interno
l -3, 5, 3', 5' TETRAYODOTIRONINA o T,

' DESYODASA \ 5 DESYODASA


(activación) \ 1inactivación)

º"º ºº
/
1 1 I 1 NH 2

O 0
3
1
OH O 1/ - ~ CH,-C H-COOH

1
CH,;LOH 1
5

l -3,3',5' TRIYODOTIRONINA o T, l -3,3',5' TRIYODOTIRO NINA, T, INVERSA o rT,

Figu ra Hormonas tiro ideas.

Aunque tanto la T4 como la T3 son capaces de unir- bre la hipófisis, aunque también está modulada por
se a los receptores de las lwrmonas tiroideas, la afi- factores hipotalámicos. La TRH aumenta la síntesis,
nidad de éstos es 10 veces mayor para la T 3 que para la glicosilación y la liberación de TSH. La TSH no
la T 4 • Los receptores tras unirse a las HT se fijan al glicosilada que se produce en ausencia de TRH es me-
DNA, con lo que modulan la síntesis de determinadas nos activa que la glicosilada.
proteínas. Las HT tienen efectos sobre casi todos los Tanto la T 4 como la T3 sufren una serie de desyoda-
tejidos del organismo. Aumentan la termogénesis y ciones enzimáticas. Las 5' desyodasas retiran el yodo
el consumo de 0 2 y son necesarias para la síntesis de en posición 5' y por ello convierten la T 4 en T3 y la
muchas proteínas, de ahí que sean esenciales en los rT 3 en 3',3 T 2 • La 5'desyodasa tipo 1 se localiza en el
periodos de crecimiento y para la organogénesis del hígado , riñón y tiroides y su función es suministrar
cerebro. También influyen en el metabolismo de los T3 al plasma a partir de la T4 • Existen tejidos en los
hidratos de carbono y de los lípidos. que toda la T3 nuclear deriva directamente de la T3
La secreción de TSH está regulada básicamente por plasmática (hígado, tejido esquelético, corazón) . La 5'
la retroalimentación negativa que ejercen las HT so- desyodasa tipo 2 se localiza en la hipófisis y el sistema
nervioso central, entre otros tejidos.
Esta enzima convierte la T 4 intrace-
lular en T3 y su función es mantener
la concentración nuclear de T3 en los
tejidos en los que está presente, aun-
1.[ Atrapci""mi e~
que las cifras plasmáticas de T 3 sean
bajas. Cuando baja la concentración
Núcl eo plasmática de T4 , aumenta la activi-
celul ar dad de esta enzima, ya que la normal
8. Recicl aje ocupación de los receptores en tales
del yodo no tejidos es esencial. La 5 desyodasa
hormonal
convierte la T4 en rT 3 y la T3 en 3' ,3
T 2 , es decir, es una vía de inactivación
de las hormonas tiroideas.

6. Endoc
3. Organi zación EXPLORACIÓN
ANATOMOFUNCIONAL
DE LA GLÁNDULA TIROIDEA
Las HT regulan el metabolismo basal,
de ahí que la cuantificación del mis-
mo fuese la primera técnica que se uti-
552 Figura Síntesis de las horm onas tiro ideas. Tg: tirog lobu li na. lizó para valorar la función tiroidea.
CAPITULO 67 Patología general del tiroides

Hoy sólo se usan pruebas que valoran directamente la circulantes suele deberse a una hiperfunción del ti-
función tiroidea. La captación de yodo radiactivo por roides (hipertiroidismo en sentido estricto). Otras ve-
el tiroides es otra prueba clásica, aunque poco usada ces se debe a destrucción del tiroides con liberación
por su inespecificidad. La captación está aumentada de HT, producción ectópica de HT o administración
en algunos tipos de hipertiroidismo (enfermedad de exógena excesiva de HT (tirotoxicosis sin hiperfun-
Graves, adenoma tóxico , etc.) y en aquellas circuns- ción del tiroides). De todas las glándulas endocrinas
tancias en las que se eleva la TSH en presencia de solo el tiroides y la neurohipófisis contienen grandes
un tejido tiroideo funcionante (deficiencia de yodo, depósitos de hormona preformada susceptibles de
deficiencia de las enzimas necesarias para la síntesis ser liberados en cantidad suficiente para producir
de HT, etc.) . La captación está disminuida en el hipo- un exceso de hormonas circulantes. La T 4 plasmática
tiroidismo , en algunas formas de hipertiroidismo (ti- elevada procede exclusivamente del tiroides (excepto
roiditis , subaguda de administración excesiva de HT) en la producción ectópica o en la sobreingesta de T4 ),
y en las personas que reciben cantidades elevadas pero la T3 elevada suele deberse a hipersecreción ti-
de yodo. Antes de administrar yodo radiactivo a una roidea sumada a conversión extratiroidea de T4 a T3 .
mujer ha de excluirse la presencia de un embarazo. Si está bloqueada esta conversión (por ejemplo, por
Con el yodo radiactivo se puede obtener una ima- ~-bloqueantes) se puede elevar solo la T4 (T4 -tirotoxi-
gen de las zonas del tiroides (o de fuera de él) que lo cosis). Rara vez el tiroides produce solo exceso de T3 ,
captan (gammagrafía tiroidea). Este método nos reve- mientras que la T4 es normal (T 3-tirotoxicosis). En el
la la anatomía funcional del tiroides. Así, podemos hipertiroidismo subclínico (T 4 o T3 libres en la zona
encontrar tiroides aumentados de tamaño que captan alta de la normalidad, pero con TSH indetectable) la
difusamente el yodo (bocio difuso), de localización hipófisis detecta en esa persona un exceso de HT y
aberrante (tiroides intratorácico), con un área que no suprime la secreción de TSH. Esta situación puede
capta yodo (nódulo frío), con un área que capta más aparecer en las fases iniciales de lo que va a ser luego
yodo que el resto del parénquima (nódulo caliente) un hipertiroidismo clínico, o mantenerse sin cambios.
o con múltiples nódulos de captación variable (bo-
cio multinodular). La administración de TSH recom- ETIOPATOGENIA
binante aumenta la captación de yodo en el tejido
tiroideo normal y en los cánceres diferenciados de Hipertiroidismo primario
tiroides . La ecografía permite medir el tamaño y la El exceso de HT se debe a una enfermedad primaria
vascularización del tiroides, identificar la existencia del tiroides , con lo que éstas se elevan en sangre y
de nódulos intra o extratiroideos y definir sus carac- suprimen la producción de TSH. Las enfermedades
terísticas (sólido, quístico, calcificado). También se causales son (Fig. 67-3):
puede realizar una punción-aspiración del tiroides,
que suministra información citológica. La enfermedad de Graves-Basedow o bocio difuso
La función tiroidea se valora midiendo la T4 libre, tóxico, que es la causa más frecuente de hipertiroi-
que es la fracción biológicamente activa, y la TSH. dismo. Es una enfermedad de etiología autoinmu-
Una T 4 libre alta indica tirotoxicosis (salvo interfe- ne en la que se producen inmunoglobulinas contra
rencias en la determinación o el raro síndrome de re- el receptor de la TSH que estimulan la producción
sistencia a las hormonas tiroideas). Una T4 libre baja de HT y el crecimiento difuso del tiroides. La gam-
indica hipotiroidismo. La TSH estará en cifras muy magrafía tiroidea demuestra la existencia de un
bajas en pacientes hipertiroideos y en cifras elevadas bocio con captación difusa. A veces se produce
en pacientes con hipotiroidismo primario . Si se en- hipertiroidismo sin bocio. Otras manifestaciones
cuentra una T 4 libre normal con una TSH suprimida autoinmunes de la enfermedad, independientes
debe medirse además la T3 libre, ya que puede tratar- del hipertiroidismo, son el exoftalmos endocri-
se de una T3 -tirotoxicosis. La determinación de tirog- no u oftalmopatía endocrina infiltrativa (por de
lobulina sérica es útil para valorar la evolución posto- anticuerpos contra el tejido orbitario periocular,
peratoria de los cánceres diferenciados de tiroides . que se inflama y produce una protrusión de uno
La determinación de anticuerpos antitiroglobulina o ambos globos oculares) y la rara dermopatía in-
y antitiroperoxidasa valora la presencia de fenóme- filtrativa o mixedema pretibial (induración de la
nos autoinmunitarios en el tiroides. La presencia de piel pretibial, por depósito de mucina).
anticuerpos estimulantes del tiroides es típica de la El adenoma tiroideo tóxico (enfermedad de
enfermedad de Graves. La excreción urinaria de yodo Plummer) es un tumor benigno del tiroides que
(yoduria) es un indicador fiable de la ingesta de yodo. se manifiesta como un nódulo único que produ-
ce HT en exceso. El resto del tiroides se atrofia al
suprimirse la producción de TSH. La gammagra-
TIROTOXICOSIS OSÍNDROME HIPERTIROIDEO fía tiroidea demuestra un nódulo caliente, mien-
tras que el resto del tiroides no capta yodo.
La tirotoxicosis es el síndrome debido a una excesiva El bocio multinodular tóxico se debe a un cre-
cimiento policlonal de las células tiroideas, que
553
acción de las HT sobre el organismo. El exceso de HT
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

se manifiesta con múltiples


TRH
nódulos de diferente tamaño,
consistencia y actividad fun-
cional, que globalmente pro-
ducen HT en exceso. La gam-
magrafía demuestra múltiples
áreas con captación variable.
! TSH : TSH
Las tiroiditis pueden producir
tirotoxicosis por destrucción
del tiroides con salida de HT
a la sangre (tiroitidis subaguda
de De Quervain); el tiroides ~~
inflamado no capta yodo ra- G) ~
diactivo, o capta poco e irregu-
Adenoma
larmente. Enferm edad de Graves
tiroideo tóxico
(lgs estimulantes del tiroides)
El hip ertiroidismo inducido
por yodo aparece al admi-
nistrar yodo a pacientes con
bocio multinodular cuya pro-
ducción de HT era baja preci-
samente por la falta de yodo.

Hipertiroidismo secundario a exceso


de TSH
Adenomas hipofisarios producto-
res de TSH, muy poco frecuentes.

Hipertiroidismo por gonadotrofina


coriónica
Los tumores trofoblásticos, como el
coriocarcinoma, producen grandes
cantidades de esta hormona, mo-
lecularmente emparentada con la
TSH
TSH, que puede activar el receptor G) M eca nismo
tiroideo normal de la TSH. inicial

Tirotoxicosis por secreción ectópica


de HT
Puede verse en el rarísimo struma
ovarii (teratomas ováricos que con- Adenoma hipofi sa rio secreto r de TSH
tienen tejido tiroideo ectópico fun-
cional). En este caso se suprime la Figura Bases etiopatogénicas del hipertiroidismo.
TSH y el tiroides se atrofia.

Tirotoxicosis por ingesta de


hormonas tiroideas en exceso
lismo, por lo que se produce un balance nitroge-
Puede deberse a error en la dosis o a ingesta de HT nado negativo. Además, aumenta la sensibilidad
con fines manipulativos -hipertiroidismo facticio-. de los tejidos a la acción de las catecolaminas,
probablemente debido a una potenciación de los
receptores adrenérgicos.
FISIOPATOLOGÍA Y SEMIOLOGÍA El predominio del efecto catabólico tiende a pro-
El exceso de HT induce un aumento global del ducir adelgazamiento, aunque este puede verse
metabolismo, con una elevación del gasto ener- minimizado si se desarrolla polifagia.
gético, de la producción de calor y del consumo La piel se hace fina, aumenta la caída del pelo, y
de 0 2 • Aumenta la síntesis proteica, pero en con- las uñas se vuelven frágiles y tienden a separarse
554
junto predomina el catabolismo sobre el anabo- del lecho ungueal (onicolisis).
CAPÍTULO 67 Patología general del tiroides

Aparece intolerancia al calor, preferencia por los extraídas rápidamente del plasma por la hiperac-
ambientes frescos, y la piel está caliente y sudo- tividad de la lipoproteinlipasa, de manera que
rosa. los triglicéridos plasmáticos tienden a bajar. La
La hipersensibilidad a las catecolaminas produ- síntesis hepática de colesterol aumenta, pero se
ce una facies característica, con la mirada fija eleva en mayor proporción la excreción biliar de
y brillante debida a disminución del parpadeo. colesterol y la captación de LDL en los tejidos
Este dato de simpaticotonía es común a todos los periféricos, de manera que el colesterol plasmá-
tipos de hipertiroidismo y debe diferenciarse de tico desciende. En general aumenta la oxidación
la oftalmopatía infiltrativa, exclusiva de la enfer- de los ácidos grasos.
medad de Graves. Se produce un elevado consumo de vitaminas
El exceso de HT activa la motilidad intestinal (riesgo de hipovitaminosis B).
(aumenta el número de deposiciones] y acelera
el catabolismo hepático de diferentes fármacos y Modalidades peculiares de tirotoxicosis
hormonas (cortisol, insulina). En los ancianos el hipertiroidismo puede presen-
Existe un aumento de la actividad cardiovascular tarse como adelgazamiento y debilidad muscular
debido al aumento de las necesidades tisulares sin otros síntomas (hipertiroidismo apático) que
de nutrientes y de 0 2 , a la necesidad de disipar puede hacer sospechar una neoplasia. Otras ve-
el exceso de calor producido y a la hipersensibi- ces aparece como una insuficiencia cardiaca sin
lidad cardiaca a las catecolaminas. Aumenta la respuesta al tratamiento habitual.
frecuencia cardiaca y pueden aparecer arritmias La crisis tirotóxica o tormenta tiroidea es una
(taquicardia sinusal, flutter o fibrilación auricu- situación rara y muy grave en la que aparecen
lar). Aumenta el gasto cardiaco, lo que puede exagerados todos los síntomas y signos del hi-
desencadenar una insuficiencia cardiaca en pa- pertiroidismo. Generalmente se debe a una brus-
cientes con cardiopatía preexistente. ca elevación de las HT.
En el sistema neuromuscular el exceso de HT se El hipertiroidismo subclínico puede ser un ha-
va a manifestar como nerviosismo, irritabilidad, llazgo casual de laboratorio en una persona
insomnio, trastornos mentales que pueden osci- asintomática, o producir nerviosismo, insomnio,
lar desde la ansiedad al delirio, temblor fino dis- arritmias o pérdida de masa ósea.
tal, exageración de los reflejos osteotendinosos
y debilidad de los músculos de las cinturas por
miopatía metabólica. HIPOTIROIDISMO, INSUFICIENCIA TIROIDEA
A veces se produce disnea debida a la hiperven- O SÍNDROME HIPOTIROIDEO
tilación (provocada por el aumento del consumo
de 0 2 y por la ansiedad) y a una discreta miopa- Se origina por una insuficiente acción de las HT sobre
tía de los músculos respiratorios. Debe diferen- el organismo. Se debe habitualmente a un descenso en
ciarse de la disnea que puede provocar un bocio la secreción de HT, lo que produce unos niveles bajos
voluminoso al estenosar la vía respiratoria. de T4 y T3 en plasma. Si solo está descendida la T3
plasmática, mientras que la T4 es normal, no se puede
Se producen otros trastornos metabólicos: hablar de hipotiroidismo (esta anomalía generalmente
se debe a un trastorno de la desyodación periférica de
Puede aparecer polidipsia para compensar las la T4 -ver abajo-). Existe un escaso número de familias
pérdidas de la sudoración. con resistencia a las hormonas tiroideas, en las que
Puede desencadenarse procesos latentes como aparecen las manifestaciones típicas del hipotiroidis-
una diabetes (aumenta la glucogenólisis y la glu- mo, mientras que la T4 , T3 y TSH plasmáticas están
coneogénesis y la degradación de la insulina) o elevadas (de hecho, el tiroides es hiperfuncionante).
una insuficiencia suprarrenal (aumenta la degra- El hipotiroidismo se llama también mixedema
dación del cortisol). («edema mucinoso»), ya que se produce un acúmulo
Se aprecia un aumento relativo de la actividad generalizado de mucopolisacáridos hidrófilos en el
osteoclástica sobre la osteoblástica, que origina tejido subcutáneo, que provoca un edema especial
una pérdida de masa ósea (propensión a la os - que no deja fóvea (no se debe confundir con el mixe-
teoporosis) y salida neta de calcio de los huesos. dema pretibial de la enfermedad de Graves-Basedow).
Este exceso de calcio se va a eliminar por la orina
(hipercalciuria). En algunos casos la eliminación
urinaria de calcio es incapaz de compensar el ETIOPATOGENIA
calcio que sale de los huesos y aparece hipercal-
cemia. Hipotiroidismo primario
Las HT en exceso aumentan directamente la li- Se debe a una alteración primaria del tiroides, que es
pólisis en el tejido adiposo y potencian las hor- incapaz de sintetizar HT. El descenso en la T4 circu- ~
monas lipolíticas. Las partículas VLDL van a ser lante induce una elevación de la TSH plasmática. Es
Semiología y fisiopato logía del sistema endocrino y del metabolismo

pacidad de crecimiento, lo que lleva a un bocio


multinodular. Generalmente, la elevación de la
TSH intenta compensar una insuficiente pro-
ducción de HT (por ejemplo, en la deficiencia de
yodo , en los tratamientos con fármacos antitiroi-
deos, etc.). El bocio endémico debido a deficien-
cia de yodo en la alimentación afecta a más de
200 millones de personas en el mundo. Cuando
se ingiere insuficiente yodo las HT tienden a ba-
jar y la producción de TSH aunrnnta. La TSH alta
produce bocio y eleva la capacidad del tiroides
para captar el poco yodo circulante, con lo que
la situación se equilibra, pero si la deficiencia de
yodo es extrema aparece un hipotiroidismo. Otro
tipo de bocio debido a TSH es el raro adenoma
hipofisario secretor de TSH.
Estimulación por inmunoglobulinas que se unen
al receptor tiroideo de la TS, como las TSI (in-
munoglobulinas estimuladoras del tiroides) y
remedan sus efectos. Hay inmunoglobulinas que
sólo estimulan el crecimiento del tiroide.s, sin
modificar su función , mientras que otras esti-
mulan el crecimiento y la función, provocando
hipertiroidismo (enfermedad de Graves).
Crecimiento autónomo de las células folicula-
res. Puede manifestarse como una hiperplasia
policlonal, que evoluciona hacia la multinodu-
laridad. También puede adoptar un patrón de
nódulo único, benigno o maligno. Algunos ade-
nomas surgen por una mutación en el receptor (o
en los mediadores posreceptor) de la TSH, que
Figura Bocio gigante, indicativo de cronicidad provocan estimulación continua del crecimiento
(años o décadas) circu lación venosa prominente. celular. En los carcinomas se han detectado mu-
taciones en diversos oncogenes.
El tiroides puede aumentar por causas infla-
matorias (tiroiditis), infiltrativas (amiloidosis),
SÍNDROME BOCIOSO tumorales (metástasis) , o porque aparecen otras
lesiones ocupantes de espacio (hemorragias ,
Cuando el tiroides aumenta de tamaño hablamos de
quistes, etc.).
bocio o estruma. El tiroides puede llegar a pesar más
de 1 kg (Fig. 67-5) , lo que indica su enorme capaci-
dad de crecimiento. Debe diferenciarse el bocio de FISIOPATOLOGÍA Y SEMIOLOGÍA
otros procesos extratiroideos que producen masas en
el cuello (adenopatías , quistes o tumores laríngeos, Según la causa que lo produzca el bocio puede ser
etc.). normo- , hipo- o hiperfuncionante. El bocio puede
provocar trastornos en la vía aérea (apnea del sue-
ño, ronquera nocturna, estridor, disnea, etc.) , pare-
ETIOPATOGENIA (BOCIOGÉNESIS) sia o parálisis del nervio recurrente (voz bitonal por
parálisis de las cuerdas vocales) y rara vez disfagia.
El bocio puede producirse por:
También puede producir trastornos emocionales por
Estimulación excesiva por la TSH, que va a ori- motivos estéticos o por cancerofobia. El bocio intrato-
ginar en principio un bocio difuso , si bien una rácico produce rara vez un síndrome de compresión
estimulación crónicamente mantenida puede de la cava superior. El bocio debido a cáncer de tiroi-
seleccionar ciertos clones celulares con más ca- des suele metastizar en las adenopatías cervicales.

558
-;&a
Patología general de las cápsulas
suprarrenales y el sistema cromafín
José Antonio Amado Señaris, José Manuel Olmos Martínez

RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
Las glándulas suprarrenales están
constituidas por dos estructuras di-
ferentes: la corteza, que supone el
90 % del peso y produce esteroides, y
la médula, que produce catecolaminas.
En la corteza se distinguen tres zonas: a) la
glomerulosa, que produce mineralocorticoides como
la aldosterona; b) la fasciculada, que supone el 70 %
de la corteza y produce preferentemente glucocorti-
coides como el cortisol, y c) la reticulm~ que produce
andrógenos (dehidroepiandrosterona y su sulfato, y
androstendiona).
Todos los esteroides adrenales derivan del coleste-
rol, a través de unas vías metabólicas reguladas enzi-
máticamente (Fig. 68-1). La ACTH activa la colesterol
desmolasa, que promueve la conversión de colesterol
en pregnenolona e inicia la síntesis de esteroides. La
zona glomerulosa carece de la enzima 17-hidroxilasa,
por lo que es incapaz de producir cortisol y andróge-
nos.
Cuando el cortisol en sangre desciende por debajo
de una cifra predeterminada se estimula la secreción
de ACTH, que activa la producción de cortisol, hasta
que se restituye la concentración inicial. Los niveles
fisiológicos de cortisol varían a lo largo del día, alcan-
zándose las cifras más altas de madrugada y las más
bajas al final de la tarde (ritmo circadiano, regulado a
nivel central). Además, cualquier situación de estrés
activa el sistema CRH-ACTH, con lo que aumenta la
cortisolemia. El cortisol ejerce sus efectos a través
de su receptor nuclear, regulando la expresión
de distintos genes. El cortisol es esencial para
la vida, ya que es necesario para que el me-
tabolismo celular pueda desarrollarse. Por
otro lado , aumenta la gluconeogénesis y
la síntesis de glucógeno y produce in-
sulinorresistencia, con lo que tiende
a elE¡var la glucemia. Además, es ne-
559
SECCIÓN VII Semiología y fisiopato logía del sistema endocrino y del metabolismo

,~ E
a?º:6 a?~H t#ª
Coleslcrol

t
O

2 .►
oSú-º 4
I►
~º:o s1
HO
sb ►
HO
0

se ►
HO "-

HO

HO
Preg~nolona
3

ªi oOH
O.,,.

2.

Oo
dsn iogestcrona

,,;
3

"-t ,.,o
-OH
4~
?1~º~xi_~ ~rti~1er~na

~º:o
o'- ,,;
OH
~ ►
d?'
o'

'
~<:?rtic_!?'Sl_~_«:>:na

,,;
?;. H i-;oxicorticoslerona o' _1idos1erona
M INERALOCORTICOIDES
j

17-Hidroxi- 17-Hidroxi- 11-0esoxicortisol


pregnenolona progesterona

2
GLUCOCORTICOIDES
3b O Tu¡ O

H:uSP oetSP •7aSP"


OH


71 Enzimas implicadas:
HO "'- 1. Coleslerol desmolasa
Dchidrocpi- Dehidroepi- ó."· Estrena 2. 3P-hidroxiesleroide deshidrogenasa
androstcrona androstcrona Andr~¡rendiona 3a. 17-hidroxilasa
sulía10
6 6t' 3b. 17, 20-desmolasa
4. 21-hid roxilasa

"ºo56,et95 :~
5a. 11-hidroxilasa
5b. 18-hidroxi lasa
Se. 18-aldehído sintetasa
6. 17-cetosteroide reductasa
6 '-
Androstendiol
Testosterona Estradiol J 7. Aroma tasa
8. 3P-hidroxiesteroide su lfotransferasa
ANDRÓGENOS ESTRÓGENOS

Figura Biosíntesis de las hormonas esteroideas.

cesa.ria para frenar la respuesta tisular frente al estrés diana de la aldosterona se encuentra una enzima que
y la inflamación. convierte el cortisol en cortisona, la cual es incapaz
La aldosterona, tras unirse a su receptor nuclear, de activar el receptor mineralocorticoide. El efecto
promueve la síntesis de proteínas que facilitan el fundamental de la aldosterona es aumentar la reab-
transporte de sodio a través de las membranas celu- sorción de sodio en el túbulo contorneado distal y
lares. El cortisol es capaz de activar el receptor mine- facilitar la salida de potasio de las células tubulares
ralocorticoide exactamente igual que la aldosterona, a la orina. La función de la aldosterona es mantener
pero normalmente no lo hace porque en las células un volumen circulante adecuado (Fig. 68-2). Cuando

i
~-----.
Volumen circulante
,J, Presion de perfusión de la
arteriola aferente rena l

i Liberación de ren ina

J. ,
~
\ Hígado .
i Reabsorción Ang 1otensinogeno
i Excreción~ ular de Na /
Jt"

e
re naldeK \ \

Concentración _ _ ¿
Plasma·t 1
·ca de K H
i

¡,~
Aldosterona

ACTH
(+)
A

{
. . ~
ng1otensina
II
Angiotensina 1

'lt::,_ ~~~~:~tidora de
la angiotensina

Vasoconstricción

560 Figura Regu lación de la secreción de aldostero na.


CAPÍTULO 68 Patología general de las cápsulas suprarrenales y el sistema cromafín

desciende la presión de perfusión de las arteriolas respuesta. La hipoglucemia insulínica, la vasopresi-


aferentes del riñón se libera renina. La renina es una na y la CRH son estímulos que liberan ACTH, por lo
enzima que convierte el angiotensinógeno circulan- que en condiciones normales provocan un aumento
te en angiotensina I. La angiotensina I se transforma de esta y de cortisol en plasma. Los anticuerpos anti-
en la angiotensina II por la acción de la enzima con- 21-hidroxilasa son positivos en la insuficiencia su-
vertidora de la angiotensina, que se encuentra en las prarrenal primaria de causa autoinmune.
células del endotelio vascular. La angiotensina II es Las pruebas de supresión son útiles para valorar
un potente agente vasoconstrictor y el principal es- una posible hiperfunción glucocorticoide. La prueba
tímulo para la secreción de aldosterona. La ACTH de Nugent consiste en administrar 1 mg de dexameta-
aumenta transitoriamente la síntesis de aldosterona. sona por vía oral a las 23 horas tomando una muestra
La hiperpotasemia también estimula directamente la de sangre para cortisol a las 8 horas del día siguiente.
secreción de aldosterona, mientras que la hipopotase- Normalmente la dexametasona a estas dosis inhibe la
mia la inhibe. secreción de la ACTH y por tanto del cortisol, que
Los andrógenos suprarrenales son 17-cetosteroi- desciende a cifras inferiores a 5 µg/dl. En el hipercor-
des (tienen un grupo cetónico en el carbono 17), y tisolismo no se aprecia este descenso. La dexameta-
pueden medirse en orina. La androstendiona y la sona también puede administrarse a dosis de 0,5 mg
dehidroepiandrosterona se producen también en cada 6 horas para valorar si descienden las cifras de
las gónadas, mientras que el sulfato de dehidroe- cortisol libre en orina (si no descienden se trata de un
piandrosterona es de producción adrenal exclusiva. hipercortisolismo).
Como andrógenos tienen una débil actividad (el an-
drógeno más activo es la testosterona, que en condi-
ciones normales no se produce en las suprarrenales). FUNCIÓN MINERALOCORTICOIDE
Su secreción está estimulada por la ACTH. Son los
responsables de la aparición del vello axilar y pubia- Puede valorarse midiendo la aldosterona en plasma
no en la pubertad. o en orina, o la actividad de renina plasmática, que
es la angiotensina I generada a partir de la acción de
la renina circulante sobre el angiotensinógeno. Las
EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL cifras normales de estas hormonas varían de acuerdo
DE LA CORTEZA SUPRARRENAL con la cantidad de sal de la dieta, de la posición del
enfermo (deambulación o decúbito supino) y de la
hora del día (ritmo circadiano). Si la aldosterona y la
FUNCIÓN GLUCOCORTICOIDE ARP están persistentemente elevadas, se debe a un
Una determinación aislada de cortisol o ACTH en hiperaldosteronismo secundario, mientras que si la
sangre tiene poca utilidad, ya que sus cifras varían aldosterona está elevada pero la ARP está suprimi-
mucho a lo largo del día (picos por secreción episó- da se trata de un hiperaldosteronismo primario. La
dica, cambios circadianos, influencia del estrés, etc.). deambulación, sola o asociada a un diurético como
Si la muestra se extrae por la mañana, a las 8 horas, la furosemida, disminuye el volumen circulante y
sin estrés, la concentración plasmática de cortisol es aumenta la concentración de aldosterona y ARP en
de 10-25 µg/dl, mientras que por la noche (23 horas) sujetos sanos, pero en el hiperaldosteronismo pri-
suele ser inferior a 6 µg/ dl. La excreción urinaria de mario no se eleva la ARP. La infusión de suero salino
cortisol libre durante dos o tres días seguidos indica (2 1 en 4 horas) normalmente suprime la secreción
la secreción integrada de esta hormona. En ausen- de aldosterona, excepto en el hiperaldosteronismo
cia de estrés unas cifras persistentemente anorma- primario .
les indican disfunción suprarrenal. La secreción de
cortisol también se puede valorar haciendo tomas de
sangre a lo largo del día para ver si las cifras oscilan FUNCIÓN ANDROGÉNICA ADRENAL
de acuerdo con el ritmo circadiano (en el hipercor-
tisolismo es característica la pérdida del ritmo cir- Para valorarla se mide el sulfato de dehidroepian-
cadiano). Las determinaciones de 11-desoxicortisol drosterona en sangre. Los otros andrógenos pueden
y 17-hidroxiprogesterona en plasma son útiles para proceder de las gónadas.
detectar alteraciones en la función de las enzimas
11-hidroxilasa y 21-hidroxilasa respectivamente, ya
que se acumulan en sangre al no poder metabolizarse EXPLORACIÓN ANATÓMICA
(Fig. 68-3).
DE LAS GLÁNDULAS SUPRARRENALES
Las pruebas de estimulación son útiles para valo-
rar una posible hipofunción glucocorticoide. Un bolo La ecografía, la TAC y la RM valoran la morfología
i.v. de tetracosáctido (los 24 primeros aminoácidos de de las glándulas suprarrenales. La gammagrafía con
la ACTH) eleva el cortisol plasmático en las perso- colesterol marcado con yodo radiactivo ofrece una
561
nas sanas, pero en la insuficiencia suprarrenal no hay imagen de la anatomía funcional de la corteza su-
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

A
,~AC
-

Colesterol
TH
-- --u -<· ....••..•...• .......

........

~ ..
Pregnenolona ----i-► Progesterona •ro ·l ► 11_- Desox i- --->Corti costerona · • ► Aldosterona :
_;;¡ cortI costerona '
·¡¡
e
-o
:i:
17-0H -Pregnenolona 17-0H-Progesterona
-;i-, 11 -D~sox i-
cortl sol
· •••••► Corti so l

~
Dehidroepiandrosterona
~
Androstendiona

~
Testosterona
Consecuencias del bloqueo de la 21-hidrox ilasa
i Cortisol
J, Aldosterona

-u
i Andrógenos

B
__......,...
AC
. TH
..... ◄·····················
1
Colesterol
..
······ ......
~ :., __..__ 11 -Desoxi- ......._ ......._ :
. '
Pregnenolona ----►► Progesterona ____,.....- corticosterona....,...... Corti costerona ....,......A ldosteron~

17 Hidrox il asa
y' 1 1
y
17-0H-Pregnenolona 17-0H-Pregnenolona • ···• ►11 - Desox i - .
corti sol . ••• • ► Cort1 sol ..... -

y y
Dehidroepi androsterona Androstendi ona

y
Testosterona

Consecuencias del bloqueo de la 17-hidroxilasa


J, Corti sol
J, Andrógenos y estrógenos
i Mineralocortico ides

Figura A) Consecuencias del bloqueo de la 21-hidroxi lasa. B) Consecuencias del bloqueo de la 17-hi-
droxil asa.

prarrenal, ya que es captado selectivamente por ella. que el resto de la suprarrenal y la suprarrenal contra-
Así, por ejemplo, en el hipercortisolismo por exceso lateral no captan, ya que están atrofiadas por la fal-
de ACTH se observa una captación difusa de ambas ta de ACTH (Fig. 68-4). El término «incidentaloma»
suprarrenales, mientras que en el hipercortisolismo suprarrenal indica el hallazgo casual de un tumor
por adenoma suprarrenal hiperfuncionante se obser- suprarrenal cu ando se estudia el abdomen de un pa-
562 va una captación localizada en el adenoma, mientras ciente con pruebas de imagen buscando otra patolo-
CAPÍTULO 68 Patología general de las cápsulas suprarrenales y el sistema cromafín

Cortisol ACT: J
66Funcionamiento Adenoma Adenoma Hipersecreción
normal del eje suprarrenal secretor hipofisario secretor hipotalámica
de cortisol deACTH deCRH

v0 ''
''
/

~
Corticoides
exógenos
CRH

(!)

óeo ACTH
exógena
ACTH ectópica
- - - - - - - - - - - - - _j
Figura Bases etiopatogén icas del hipercortisolismo.

gía (biliar, hepática, pancreática etc.). Puede ser uni o la causa que produzca la destrucción de las supra-
bilateral, quístico o sólido, benigno o maligno, y pue- rrenales.
de asociarse o no a disfunción adrenal, tanto cortical
como medular.
SÍNDROME DE INSUFICIENCIA SUPRARRENAL
GLOBAL
SÍNDROMES DE HIPOFUNCIÓN
(O INSUFICIENCIA) Etiopatogenia
CORTICOSUPRARRENAL
Insuficiencia suprarrenal primaria (enferme-
Son los síndromes producidos por una insuficiente dad de Addison) . Se debe a una enfermedad
actividad de las hormonas corticosuprarrenales so- intrínseca de las suprarrenales. Las causas más
bre sus órganos diana. La hipofunción suprarrenal frecuentes son la tuberculosis y la adrenalitis
puede ser: a) global, en la que existe déficit de todas autoinmune. La tuberculosis destruye la corteza
las hormonas suprarrenales, incluso las de la médu- y la médula y provoca una deficiencia hormo-
la, o b) selectiva, en la que existe deficiencia de una nal global. La adrenalitis autoinmune afecta
hormona concreta, por ejemplo el hipoaldosteronis- selectivamente a la corteza suprarrenal, sin que
mo aislado. También existen situaciones en las que se produzca destrucción de la médula. Origina
se aprecia insuficiencia de alguna hormona acom- inicialmente una deficiencia selectiva de corti-
pañada de exceso de otra (por ejemplo, hipocorti- coides, si bien las bajas concentraciones intra-
solismo asociado a hiperandrogenismo adrenal, ver medulares de cortisol acaban provocando una
más adelante). La insuficiencia suprarrenal puede deficiente producción de adrenalina. También
ser aguda, cuando la deficiencia hormonal se ins- pueden destruir las suprarrenales otros procesos
taura de forma brusca, o crónica, cuando se instaura infecciosos (hongos, etc.), vasculares (síndrome
lentamente. La insuficiencia suprarrenal crónica fue de coagulación intravascular diseminada, den-
descrita por Addison en pacientes que tenían des- tro del cual el debido a sepsis meningocócica
truidas las suprarrenales; el término enfermedad de produce una insuficiencia suprarrenal aguda
Addison se utiliza hoy para referirse a la insuficien- -síndrome de Waterhouse-Friderichsen-), o
563
cia suprarrenal primaria crónica, cualquiera que sea infiltrativos (amiloidosis, etc.), la cirugía (su-
SECCION VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

prarrenalectomía bilateral), las metástasis bila-


terales, o los fármacos que inhiben las enzimas
implicadas en la síntesis de cortisol (ketocona-
zol, etc.), que aceleran el catabolismo del corti-
sol (rifampicina, etc.) o que son tóxicos para las
células adrenales (mitotane). La infección por el
VIH puede inducir una insuficiencia suprarre-
nal por varios mecanismos (tuberculosis u otras
infecciones, fármacos, etc.). Son causas congé-
nitas de insuficiencia suprarrenal primaria las
anomalías en el desarrollo de las suprarrenales
(agenesia, etc.), las alteraciones de las enzimas
implicadas en la síntesis de cortisol y las ano-
malías en el receptor de la ACTH (resistencia
familiar a la ACTH). Figura Hiperpigmentación de los pliegues de
Insuficiencia suprarrenal secundaria. Se debe a manos en la enfermedad de Addison.
un trastorno hipofisario que impide la secreción
de ACTH. Puede tratarse de una deficiencia ais-
lada de ACTH o formar parte de una insuficien-
cia pituitaria más compleja . el síndrome de insuficiencia suprarrenal global,
aun en ausencia de estrés.
Insuficiencia suprarrenal terciaria. Se debe a
un trastorno hipotalámico que impide la secre- El exceso mantenido de ACTH circulante
ción de CRH. La causa más frecuente es la ad- es el primer fenómeno que aparece en la insu-
ministración crónica de dosis farmacológicas de ficiencia suprarrenal primaria crónica y es el
corticoides, que inhiben la síntesis de CRH y por responsable de la aparición de hiperpigmenta-
tanto la de ACTH, lo que atrofia las suprarrena- ción (Fig. 68-5) . Diversas moléculas derivadas
les. Si a estos pacientes se les suspende brusca- de la pro-opiomelanocortina (la precursora de
mente la medicación desarrollan una insuficien- la ACTH) estimulan los melanocitos, de ahí que
cia suprarrenal aguda, ya que la normalización su exceso provoque un aumento de la melanina
del eje hipotálamo-hipofisario-adrenal puede en la piel. Este proceso sólo ocurre cuando la
tardar meses en alcanzarse. elevación de la ACTH es crónica. La hiperpig-
Resistencia familiar a los glucocorticoides. Es mentación de Addison es generalizada, pero se
muy rara. Se debe a una mutación en el gen del hace más evidente en las áreas expuestas a la
receptor de los glucocorticoides. luz (cara, cuello , manos). a la presión, o al roce
(codos, rodillas, área del sostén o del cinturón,
La insuficiencia suprarrenal aguda puede pro-
superficie interna de los labios y mucosa oral).
ducirse por: a) agudización de una insuficiencia
La hiperpigmentación suele desaparecer con el
crónica, desencadenada por cualquier tipo de
tratamiento hormonal sustitutivo y la normali-
estrés (infección, traumatismo, etc.) o por la uti-
zación de la ACTH.
lización de fármacos antiadrenales; b) aparición
de un proceso agudo que destruye las suprarre- La deficiencia de cortisol provoca una disfun-
nales (hemorragia) o la hipófisis (apoplejía). o c) ción celular generalizada con manifestaciones
supresión brusca de un tratamiento crónico con generales vagas en las cuales puede jugar tam-
corticoides. bién un papel la falta de aldosterona: a) cansan-
cio y debilidad muscular generalizada que em-
peora a lo largo del día y mejora con el reposo;
Fisiopatología y semiología b) pérdida de peso, debida a anorexia y a dismi-
Insuficiencia suprarrenal primaria crónica. nución del líquido extracelular; c) molestias gas-
Cuando se produce una destrucción lenta de trointestinales mal definidas (náuseas, vómitos,
las suprarrenales, a medida que la secreción de dolor abdominal); d) tendencia a la hipogluce-
cortisol y aldosterona va disminuyendo, se eleva mia (debida al descenso de la gluconeogénesis
de forma compensadora la ACTH, con lo que se y al aumento de la sensibilidad a la insulina); y
mantiene la secreción hormonal, pero hay una e) trastornos psiquiátricos.
reserva suprarrenal baja. El paciente puede ha- La deficiencia de mineralocorticoides pro-
cer una vida normal, pero cualquier estrés pue- voca un aumento de las pérdidas urinarias de
de desencadenar una insuficiencia suprarrenal Sodio y una retención renal de potasio e hidro-
aguda. Cuando se ha destruido el 90 % de la geniones, que induce depleción hidrosalina, hi-
glándula, los mecanismos compensadores son ponatremia, hiperpotasemia y acidosis hiperclo-
incapaces de mantener unos niveles adecuados rémica. La disminución del volumen circulante
564
de esteroides y se hace clínicamente evidente origina hipotensión ortostática o mantenida.
CAPÍTULO 68 Patología general de las cápsulas suprarrenales y el sistema cromafín

Algunos enfermos desarrollan apetencia por los dosterona, que realmente se encuentra elevada
alimentos salados, cuya utilidad compensadora en sangre. Puede ser congénita (mutación en el
es evidente. receptor de la aldosterona , mutación en los ca-
La deficiencia de andrógenos suprarrenales nales de sodio dependientes de la aldosterona)
en la mujer (especialmente en la postmenopáu- o secundaria a fármacos (espironolactona, etc.) .
sica, sin andrógenos ováricos) produce disminu-
ción del vello axilar y pubiano, y de la libido. Fisiopatología y semiología
En el varón la astenia justifica una disminución
de la libido, pero los testículos siguen liberando Las consecuencias de la falta de aldosterona ya se han
testosterona y mantienen la virilización. La falta explicado previamente.
de andrógenos suprarrenales puede tener efectos
negativos sobre la función inmunológica y la ca-
lidad de vida. SÍNDROMES MIXTOS DE HIPO
Insuficiencia suprarrenal secundaria o tercia- E HIPERFUNCIÓN SUPRARRENAL
ria crónica: Se diferencian de la anterior en que:
a) no se produce hiperpigmentación, dado que El más frecuente asocia hipocortisolismo, hipoal-
las concentraciones de ACTH son indetectables; dosteronismo e hiperandrogenismo. Aparece en la
b) las alteraciones hidroelectrolíticas son me- hiperplasia suprarrenal congénita por deficiencia de
nores, ya que la aldosterona está relativamente la 21-hidroxilasa, en la que la incapacidad para pro-
conservada a través de la estimulación del eje ducir cortisol provoca una elevación de los niveles de
renina-angiotensina, y c) pueden aparecer otros ACTH que estimula en exceso la síntesis de andróge-
datos de enfermedad hipotalámica o hipofisaria. nos suprarrenales (Fig. 68-3).
Insuficiencia suprarrenal aguda: La ausencia
brusca de cortisol y aldosterona provoca náu-
seas, vómitos, dolor abdominal , deshidratación,
SÍNDROMES DE HIPERFUNCIÓN
hipotensión grave, hiperpotasemia e hipogluce- CORTICOSUPRARRENAL
mia. Es una urgencia médica que conlleva mor-
talidad. SÍNDROME DE HIPERCORTISOLISMO
Se debe a una excesiva actividad de los glucorticoi-
SÍNDROME DE HIPOALDOSTERONISMO des sobre las células del organismo.
AISLADO
Etiopatogenia del hipercortisolismo crónico
Se caracteriza por una deficiencia aislada de aldoste- o síndrome de Cushing (Fig. 68-4)
rona, sin que esté afectada la secreción de los gluco-
corticoides o los andrógenos. El hipercortisolismo puede ser: a) primario: adeno-
ma suprarrenal, carcinoma suprarrenal, hiperplasia
Etiopatogenia: suprarrenal no debida a ACTH; b) secundario: mi-
croadenoma hipofisario secretor de ACTH o enferme-
Hipoaldosteronismo primario. Se debe a un de- dad de Cushing; c) terciario: hipersecreción hipotalá-
fecto intrínseco de la zona glomerular que impi- mica de CRH, tumoral o no; d) por secreción ectópica
de la secreción de aldosterona, aun en presencia de ACTH (carcinoma bronquial de células pequeñas,
de niveles altos de renina y angiotensina. Se pue- etc.), e) por secreción ectópica de CRH carcinoides, y
de ver en las fases iniciales de una insuficiencia f) iatrogénico o facticio por adiministración crónica
suprarrenal primaria. de ACTH o corticoides en dosis farmacológicas.
Hipoaldosteronismo debido a falta de angio- La causa más frecuente de síndrome de Cushing
tensina. Puede ser hiperreninémico o hiporre- es la iatrogénica, y dentro de las causas puramente
ninémico. La forma hiperreninémica aparece en endocrinas la más frecuente es la enfermedad de Cus-
los pacientes que reciben fármacos inhibidores hing. El hipercortisolismo debido a ACTH origina
de la enzima convertidora de la angiotensina o una hiperplasia difusa de ambas suprarrenales, que
antagonistas del receptor de la angiotensina II. podría evolucionar con el tiempo hacia una hiperpla-
La forma hiporreninémica se debe a un trastorno sia nodular. El adenoma y el carcinoma suprarrenal
del aparato yuxtaglomerular o a fármacos inhi- se manifiestan como una masa suprarrenal unilateral
bidores de la secreción de renina (aliskerén) . La acompañada de atrofia de la glándula contralateral
causa más frecuente es la diabetes mellitus de debido a la supresión de la ACTH por el exceso de
larga duración, asociada a neuropatía autonómi- cortisol. El hipercortisolismo inducido por ingesta
ca e insuficiencia renal. exógena de corticoides produce una atrofia de ambas
Pseudohipoaldosteronismo. Se debe a resisten- suprarrenales debido a la desaparición del efecto tró-
565
cia de los órganos diana a los efectos de la al- fico de la ACTH.
SECCIÓN VII Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Fisiopatología y semiología cortisol aparece expansión del volumen circulante,


con h ipertensión arterial que puede llevar a insufi-
El exceso crónico de corticoides produce redistribu- ciencia cardiaca y/o hipopotasemia. La inmunosu-
ción de la grasa corporal y aumento del catabolismo presión corticoidea provoca enmascaramiento de las
proteico. La grasa tiende a acumularse en la cara, el reacciones inflamatorias y de la fiebre, reactivación
cuello, el tronco y el abdomen. Las extremidades de infecciones crónicas como la tuberculosis y pro-
adelgazan, ya que pierden tejido adiposo y los mús- pensión a las micosis.
culos se atrofian, debido al catabolismo proteico. En los casos de síndrome de Cushing debidos a
Todo ello configura una obesidad de localización elevación de la ACTH se puede encontrar h iperpig-
troncular o central. La cara adquiere un aspecto re- mentación y aumento de la secreción de andróge-
dondeado «en luna llena » e hiperémico, especial- nos, lo que produce hirsutismo e irregularidades
mente en las mejillas . El acúmulo de grasa provoca menstruales. También se puede apreciar una hiper-
un cuello ancho y aparentemente corto (cuello de secreción marcada de andrógenos en los adenomas y
búfalo] y unas fosas supraclaviculares prominentes. especialmente en los carcinomas suprarrenales, en
En los niños el estado catabólico provoca una deten- los que puede aparecer una virilización de rápida
ción del crecimiento . Otras manifestaciones debidas evolución. El síndrome de Cushing asociado a car-
a hipercatabolismo son: piel atrófica y frágil, retraso cinomas con secreción ectópica de ACTH no suele
en la cicatrización de las heridas, aparición de estrías acompañarse de obesidad, ya que la anorexia tumo-
purpúricas o vinosas por debilidad de la piel, sobre ral origina adelgazamiento, aunque puede apreciar-
todo en las zonas en que se acumula grasa (abdo - se hiperpigmentación, hipopotasemia e intolerancia
men, mamas , caderas, axilas) (Fig. 68-6), debilidad a la gl ucosa.
y atrofia muscular (especialmente marcada en los
músculos de la cintura pelviana) y osteoporosis por
inhibición de la actividad osteoblástica y aumento SÍNDROME
de la osteoclástica (aplastamientos vertebrales, frac- DE HIPERMINERALOCORTICISMO
turas patológicas en las costillas, necrosis aséptica
de fémur o húmero, callo de fractura exuberante) . Se caracteriza por un excesivo efecto mineralocorti-
La pérdida de masa ósea provoca h ipercalciuria, coide.
que a su vez puede inducir litiasis renal. Aparece
intolerancia a la glucosa e hiperinsulinismo, que Hiperaldosteronismo primario o síndrome de Conn
puede evolucionar a una diabetes mellitus . El hiper-
cortisolismo produce insomnio, labilidad emocio- Etiopatogenia: Las causas más frecuentes son:
nal , depresión aumenta, etc. La tensión intraocular a) hiperplasia idiopática bilateral de la capa
aumenta. Debido al efecto mineralocorticoide del glomerulosa, que produce de forma autónoma
excesivas cantidades de aldos terona; b) tumor
adrenal secretor de aldosterona (generalmente
adenoma, rara vez carcinoma); c) hiperaldos-
teronismo primario familiar remediable con
dexametasona (síndrome de Sutherland), muy
infrecuente, en el que la aldosterona se sintetiza
ectópicamente en la capa fasciculada bajo la in-
fl u encia de la ACTH.
Fisiopatología y semiología: El exceso de aldos-
terona produce un aumento de retención de so-
dio en el riñón, con expansión del volumen cir-
culante e hipertensión arterial en grado variable.
El exceso de volumen circulante bloquea la pro-
ducción de renina y activa la secreción de diver-
sos péptidos natriuréticos . La retención de sodio
es contrarrestrada por el fenómeno de escape,
por el que esta se detiene, alcanzándose una si-
tuación de equilibrio con una discreta expansión
del volumen. Debido a este fenómeno rara vez
se evidencia edema. Otra consecuencia del ex-
ceso de aldosterona es la hipopotasemia debida
a la pérdida renal de potasio. La hipopotasemia
puede ser moderada o severa, e induce alcalosis
Figura Estrías abdom inales roj o vinosas en un metabólica, resistencia tubular a la ADH (poliu-
566
pac iente co n síndrome de Cus hi ng. ria) y debilidad muscular.
CAPÍTULO 68 Patología general de las cápsulas suprarrenales y el sistema cromafín

Hiperaldosteronismo secundario (hiperreninémico) SÍNDROMES DE HIPERANDROGENISMO


Etiopatogenia: Ocurre en todas aquellas situa- O HIPERESTROGENISMO SUPRARRENAL
ciones en que aumenta la concentración de re- Véase en Patología de las gónadas, Capítulo 69.
nina en sangre, lo que origina un aumento de la
angiotensina II que a su vez estimula la secre-
ción de aldosterona. Lo producen dos tipos de MÉDULA SUPRARRENAL Y EL SISTEMA
situaciones: a) los trastornos que disminuyen el SIMPATOCROMAFÍN
volumen circulante efectivo: hipovolemia, insu-
ficiencia cardiaca congestiva, cirrosis hepática,
ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA
síndrome nefrótico, tubulopatías pierde sal, etc.
y b) algunas alteraciones renales que provocan El sistema simpatocromafín (SSC) es una unidad
hiperreninismo per se: hipertensión vasculorre- funcional constituida por la médula suprarrenal y
nal, hipertensión acelerada, tumor secretor de las neuronas postganglionares del sistema nervioso
renina, etc. simpático (SNS), cuyos mediadores son las catecola-
Fisiopatología y semiología: El hiperaldos- minas. Las neuronas postganglionares del SNS libe-
teronismo provoca retención renal de sodio ran noradrenalina (NA) a partir de sus axones, con
y pérdida de potasio. En la hipovolemia real lo que regulan la actividad de los numerosos órganos
(hemorragia, pérdidas hidrosalinas , etc.), el que inervan (Fig. 68-7). La NA actúa sobre las células
hiperaldosteronismo intenta mantener el volu- cercanas a las terminales nerviosas en donde alcanza
men circulante. En los otros procesos que se concentraciones muy elevadas. En condiciones nor-
acompañan de un volumen circulante efectivo males sólo una pequeña fracción de la NA liberada
bajo (insuficiencia cardiaca, etc.) hay una re- por los axones entra en la circulación, y no llega a
tención mantenida de sodio y expansión pro- alcanzar concentraciones suficientes para compor-
gresiva del líquido extracelular, que sin embar- tarse como una hormona con efectos a distancia. La
go se acumula a nivel extravascular, por lo que concentración de NA en sangre es por tanto un índice
aparecen edemas. La TA es normal-baja. En los de la actividad simpática global.
procesos renales , por el contrario, se expande El sistema cromafín es un conjunto de células deri-
el volumen circulante y aparece hipertensión vadas de la cresta neural, ricas en catecolaminas. Las
arterial. catecolaminas se oxidan en contacto con cromato po-
tásico y las células adquieren un color marrón oscuro,
de ahí que se denominen cromafines. El sistema ero-
Hipermineralocorticismos no debidos a aldosterona
Etiopatogenia: a) adenoma suprarrenal secretor
de desoxicorticosterona (un esteroide mineralo-
Médula
corticoide); b) fármacos con efecto mineralocor- suprarrenal
ticoide directo (fluorprednisolona); e) deficiencia
congénita o inhibición (por regaliz o carbenoxo-
lona en dosis altas) de la enzima que convierte el
cortisol en cortisona (11-beta esteroide deshido-
genasa, y d) hipercortisolismo.
Fisiopatología y semiología: Aparecen todas las
manifestaciones de hiperaldosteronismo pri-
mario antes comentadas (hipertensión, hipopo-
tasemia) , pero la inhibición de la renina por el
exceso de volumen circulruüe bloquea la síntesis
de aldosterona, cuya concentración plasmática
desciende.
Terminal nerviosa

Pseudohiperaldosteronismo
El síndrome de Liddle se debe a un aumento de la
reabsorción de tubular de sodio, causado por una
mutación activadora del gen del canal de sodio que
fisiológicamente está regulado por la aldosterona. Es
un cuadro familiar muy raro, indistinguible del hipe-
raldosteronismo primario, que no se debe a hiperal- Figura
;z]~" de noradrena lina Célula diana

Funcionamiento del sistema simpato-


567
dosteronismo o hipermineralocorticismo. cromafín.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

mafín está bajo el control de las neuronas simpáticas


preganglionares y segrega catecolaminas a la sangre
de forma coordinada con la liberación de NA en las Tabla Efectos de la activación
terminaciones nerviosas simpáticas, cuando se activa de los receptores adrenérgicos
el SNS central. En los adultos la mayoría de las célu-
las cromafin es se localizan en la médula suprarrenal, RECEPTORES a 1 , segundos mensajeros:
pero también se encu entran pequ eños nidos extraa- (elevación de Ca++ intracelular, inositol
drenales en los ganglios simpáticos. Existen célu las trifosfato y diacilglicerol):
con reacción cromafín positiva situadas en el cuerpo Vasoconstricción (piel, coronarias,
carotídeo o en el glomu s yugular que n o perten ecen territorio esplácnico)
a este sistema, aunqu e pueden dar lugar a tumores Relajación intestinal y contracción de
secretores de catecolaminas. esfínteres
La médula suprarrenal es la fuen te principal de Contracción uterina
adrenalina (A) circulante, que , a diferencia de la NA, Dilatación pupilar
es una hormona tradicional. La médula suprarrenal RECEPTORES C½ (segundo mensajero:
en condicion es basales sólo produce el 2-8 % de la descenso de AMPc intracelular):
NA circulante, pero en algunas situaciones (por ejem- Vasoconstricción
plo, h ipoglucemia) aumenta notablemente su produc- Agregación plaquetaria
ción, de manera que en este caso la NA tien e efectos Inhibición de la secreción de insulina
h ormonales y su concentración en sangre se convierte
en un índice de la actividad de todo el SSC. Existe RECEPTORES ~1 (segundo mensajero:
una tercera catecolamina, la dopamina, que es un pre- aumento de AMPc intracelular):
cursor de las anteriores y que es liberada a la sangre Estimulación de la actividad cardiaca
tanto en el sistema simpático como en el cromafín. (cronotropa, batmotropa, dromotropa,
inotropa)
La síntesis de catecolaminas está regulada enzi-
Lipólisis
máticamen te y sigue la secu encia: tirosina ➔ dihi-
Relajación intestinal
droxifenilalanina (DOPA) ➔ dopamina ➔ NA ➔ A.
Muchas células meduloadrenales contienen todas las RECEPTORES ~2 (segundo mensajero:
enzimas y liberan A como su principal producto de aumento de AMPc intracelular):
secreción. Las neuronas postganglionares y un 20 % Broncodilatación
de las células meduloadren ales carecen de la enzima Vasodilatación (músculos, coronarias)
necesaria para transformar la NA en A y segregan NA. Relajación uterina
Las células secretoras de A se sitúan en la unión corti- Estimulación de la secreción de insulina,
comedular, ya que necesitan altas concentraciones de glucagón y renina
cortisol. La semivida de las catecolanü nas en plasm a Estimulación directa de la glucogenólisis
es muy corta (1 -2 minutos). La NA y la A se transfor-
man en normetanefrina y metanefrina respectivamen-
te, cuyo metabolito final es el ácido vanilmandélico.
Los efectos de las catecolaminas se produ cen a tra-
vés de la activación de los diversos receptores adre-
n érgicos localizados en la membrana de las células La localización anatómica del tejido crom afín pue-
diana (Tabla 68-1 ). Existen receptores presinápticos , de hacerse mediante ecografía, TAC, RM o gammagra-
postsinápticos y extrasináp ticos. Tanto la A como la fía con metayodobencilguanidina marcada con I-131
NA interactúan con to dos los receptores, de manera (MIBG), wrn sustancia que es captada selectivamente
que la respu esta de un órgano depende básicamente por las células cromafines. En la RM los feocrom ocito-
del tip o o subtipo de receptor más abundante en ese mas producen una señal muy intensa que los diferen-
tejido. cia de otros tumores suprarren ales. La gamm agrafía
con MIBG su ele ser útil para identificar los paragan-
gliomas. La arteriografía adrenal está desancon sejada
EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL en los feocromocitomas ya qu e puede desencaden ar
una crisis hipertensiva.
DEL SISTEMA SIMPATOCROMAFÍN
La determinación de catecolaminas (adrenalina, no-
radrenalina, dopaminal, metanefrinas o ácido vanil- SÍNDROME DE HIPERACTIVIDAD
mandélico en orina de 24 h oras o de unas horas tras CATECOLAMÍNICA O SÍNDROME
una crisis hiperten siva indica la secreción integrada HIPERADRENÉRGICO
de catecolaminas durante ese periodo de tiempo y
generalmente está muy elevada en los pacientes con Se debe a una excesiva actividad de las catecolaminas
568
feocromocitomas. sobre sus células diana. Debe diferenciarse la h iper-
CAPÍTULO 68 Patología general de las cápsulas suprarrenales y el sistema cromafín

secreción de catecolaminas de una excesiva respues- dicamentos , maniobra de Valsalva, etc.) o aparecer
ta de los receptores adrenérgicos a las catecolaminas, erráticamente. Si el tumor tiene una hipersecreción
como ocurre en el hipertiroidismo. sostenida de catecolaminas provoca una hipertensión
arterial mantenida, que puede verse agravada por la
aparición de crisis hipertensivas. La reducción del
ETIOPATOGENIA volumen plasmático puede originar una falsa poli-
globulia. En algunos pacientes aparece una miocar-
La hipersecreción catecolamínica puede ser prima- diopatía catecolamínica, que puede acompañarse de
ria o secundaria a activación del sistema simpático. arritmias cardiacas. Rara vez se produce una discine-
La hipersecreción primaria de catecolaminas puede sia apical transitoria del ventrículo izquierdo (síndro-
originarse en la médula adrenal o fuera de ella. Las me de Tako-tsubo o «del corazón partido»J. La hiper-
causas adrenales son: tensión brusca (por producir infarto de miocardio o
hemorragia cerebral) o las arritmias pueden provocar
El feocromocitoma, un tumor generalmente be-
una muerte súbita. En los periodos intercríticos , si no
nigno, que supone el 90 % de los casos de este
se segregan catecolaminas, el paciente puede estar
síndrome; el feocromocitoma puede ser esporá-
normotenso. Los raros tumores que producen prefe-
dico o familiar.
rentemente adrenalina pueden provocar hipertensión
La hiperplasia adrenomedulm~ una causa rara.
típicamente sistólica, crisis hipotensivas y arritmias
La hipersecreción primaria de catecolaminas de diversas. Los tumores secretores de dopamina tam-
origen extraadrenal incluye: bién pueden producir hipotensión. La estimulación
de los receptores a 2 y ~2 produce un intestino adiná-
Los paragangliomas o feocromocitomas extraa-
mico y por tanto estreñimiento pertinaz. El exceso de
drenales, tumores que se originan en células cro-
catecolaminas puede provocar trastornos psiquiátri-
mafines, generalmente en el abdomen.
cos.
Los neuroblastomas y los ganglioneuromas (tu-
Finalmente, las catecolaminas originan cambios
mores de los ganglios simpáticos).
metabólicos:
Los tumores cromafines (paragangliomas) del
arco aórtico, del cuerpo carotídeo o del glomus Hiperglucemia, debida a inhibición de la secre-
yugular. La hipersecreción secundaria de cateco- ción de insulina, aumento de la secreción de glu-
laminas forma parte de la respuesta fisiológica al cagón, aumento de la glucogenólisis por efecto
ortostatismo o al estrés. hepático directo e insulinorresistencia, aunque
solo aparece diabetes en los casos genéticamente
condicionados.
FISIOPATOLOGÍA Y SEMIOLOGÍA Aumento de la termogénesis , que se puede acom-
pañar de intolerancia al calor y pérdida de peso.
Los feocromocitomas producen habitualmente NA , Efecto lipolítico y cetogénico.
pero los tumores adrenales pequeños pueden segre-
gar más A. Muchos neuroblastomas producen gran-
des cantidades de metabolitos inactivos, por lo que SÍNDROMES DE HIPOACTIVIDAD
no inducen un síndrome de hiperactividad catecola- CATECOLAMÍNICA
mínica, aunque la excreción de ácido vanilmandélico
puede ser muy elevada. La ausencia de médula adrenal (pacientes sometidos
En más de la mitad de los feocromocitomas la hi- a suprarrenalectomía bilateral que reciben corticoides
persecreción de catecolaminas aparece bruscamente a dosis sustitutivas) es perfectamente compatible con
y es muy intensa, con lo que se activan los receptores la vida, ya que el SNS es suficiente para garantizar un
extrasinápticos a-adrenérgicos vasculares y aparece funcionamiento normal del organismo.
una crisis hipertensiva (sistólica y diastólica) más Sin embargo la hipoactividad catecolamínica pue-
o menos transitoria, con elevaciones tensionales, a de producir dos síndromes, el síndrome de hipoten-
veces , muy importantes. Simultáneamente aparece sión ortostática hipoadrenérgica (debido a pérdida
cefalea opresiva, sudoración profusa, palpitaciones, del mecanismo reflejo que libera NA cuando se adop-
palidez, náuseas y vómitos, temblor, agotamiento, ta bruscamente la postura erecta) y el síndrome de
ansiedad, sensación de muerte inminente y/o do- hipoglucemia sin síntomas adrenérgicos provocado
lor abdominal, todo ello debido a la hiperactividad por agentes hipoglucemiantes en diabéticos con neu-
adrenérgica. La crisis puede ser desencadenada por ropatía autonómica, que ante una hipoglucemia son
diversas situaciones (frío, ingesta de alimentos o me- incapaces de liberar A y NA.

569
-169
Patología general
de las gónadas
José Antonio Riancho Moral, José Antonio Amado Señaris

GÓNADAS MASCULINAS
OTESTÍCULOS
RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL
Los testículos producen los esperma-
tozoides y una parte del líquido semi-
nal (secreción exocrina}, y hormonas
esteroideas -andrógenos, estrógenos,
progestágenos- y peptídicas -inhibina-
(secreción endocrina). Se sitúan en el escro-
to, ya que necesitan una temperatura inferior a la del
organismo para que se produzca una espermatogéne-
sis normal. Los espermatozoides se producen en los
túbulos seminíferos. Este proceso lo inicia la FSH y
se mantiene por las elevadas concentraciones de tes-
tosterona intratubular.
Dentro de los túbulos existen unas células no ger-
minales, las células de Sertoli, que son esenciales
para la espermatogénesis. Estas células producen la
inhibina, que regula la secreción de FSH. Fuera de
los túbulos se encuentran las células intersticiales
de Leydig, cuya secreción más importante es la tes-
tosterona (T), aunque también producen andrógenos
débiles y estrógenos.
La secreción de T está regulada por la LH, mediante
un mecanismo de retroalimentación negativa. La sín-
tesis de T está regulada enzimáticamente (Fig. 69-1).
En algunos tejidos (próstata, genitales externos) la T
ha de ser transformada enzimáticamente (mediante la
5 cx-reductasa) en 5-dihidrotestosterona (5-DHT) para
ejercer sus efectos. La T, pero no la 5-DHT, puede ser
convertida en estradiol a través de la aromatasa en
las gónadas o en tejidos periféricos (tejido adiposo,
hueso). El estradiol en el varón es necesario para
aumentar la masa ósea y para cerrar los cartí-
lagos de crecimiento en la pubertad, y para
inhibir la secreción de gonadotrofinas. La
T, la 5-DHT y la inhibina son necesarias
para la diferenciación sexual masculina
y la T para mantener la maduración
570
sexual a partir de la pubertad.
CAPITULO 69 Patología general de las gónadas

en el niño con criptorquidia bilateral para comprobar


si existe tejido testicular funcionante (si existe debe
elevar la Ten sangre).
El estudio del semen (espermiograma o seminogra-
OH ma) es fundamental en la esterilidad masculina. Se
COLESTEROL valora el volumen de eyaculado (normal: 2-5 ml), la
concentración de espermatozoides (normal: más de
Colesterol desmol asa
15-20 millones/ml), el porcentaje de espermatozoides
PREGNENOLONA
3P OH Esteroide móviles (normal: más del 60 % ) y el porcentaje de es-
.
deshidrogenasa

PROGESTERONA
Suprarrenal es
o
gónadas
permatozoides morfológicamente normales (normal:
más del 60 %), así como las características bioquími-
17 Hidroxilasa cas del líquido seminal. Se habla de aspermia cuando
no hay semen, oligozoospermia cuando el número de
1 7 OH PROGESTERONA espermatozoides del semen está reducido , azoosper-
¡ 17, 20 Desmolasa mia cuando no existen espermatozoides, astenozoos-
permia cuando está reducida su movilidad, terato-
ANDROSTENDIONA zoospermia cuando existen muchos espermatozoides
1 7P OH Esteroide anormales , y necrozoospermia cuando están muertos.
deshidrogenasa
La ecografía testicular informa de la estructura ana-
Gónadas
preferentemente
tómica del testículo y de las vías genitales. La biopsia
testicular puede ser útil en los pacientes con inferti-
lidad. En los pacientes con hipogonadismo primario
o~ es esencial el estudio de la cromatina sexual y del
TESTOSTERONA cariotipo. Menos del 2 % de las células de los varones
So: re d uctaí
normales presentan un cuerpo de Barr, ya que tienen
_ , ~ Aromatasa un único cromosoma X, que no se inactiva. La presen-
cia de cromatina sexual positiva en un varón indica la

Oqy \ OH
Tejidos
periféricos
existencia de un cromosoma X en exceso. El cariotipo
identifica con exactitud las anomalías cromosómicas

,~
preferentemente existentes.
5 DIHIDRO- ~ 7
TESTOSTERONA

OH _¿ HIPOFUNCIÓN TESTICULAR
1 7P ESTRADIOL
O HIPOGONADISMO
Figura Metabolismo de los andrógenos en el Incluye la hipofunción global (endocrina y exocrina a
varón. la vez), la hlpofunción exocrina aislada (infertilidad
sin hipoandrogenismo), y las rarísimas hipofunciones
endocrinas aisladas (síndrome de hipoestrogenismo
EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL en el varón y síndrome del eunuco fértil).
DE LAS GÓNADAS
Hipofunción testicular global
Debido a la estimulación pulsátil de la LH, la secre-
ción de T, aunque de forma más amortiguada, también Etiopatogenia
es pulsátil y por ello una muestra aislada de sangre Hipogonadismo primario. La lesión causal se lo-
puede no ser totalmente representativa. La FSH se ele- caliza en los testículos. La causa más frecuente
va en aquellos procesos en los que hay daño de las es el síndrome de Klinefelter. Otras causas son
células de Sertoli. El estradiol plasmático en los hom- procesos inflamatorios (orquitis de la parotiditis,
bres se origina en su mayor parte por aromatización tuberculosis , etc.), congénitos (anorquia, etc.),
de la testosterona en los tejidos periféricos. En los traumáticos, vasculares (torsión testicular) las
hlperandrogenismos o hlperestrogenismos la determi- ganadotropas hipofisarias, iatrogénicos (cirugía,
nación de gonadotropina coriónica indica si estos se radioterapia, fármacos). En el hipogonadismo
deben a secreción ectópica (tumoral) de esta hormona. primario la T está baja, mientras que las gonado-
Cuando se administra un bolo i.v. de LHRH los ni- tropinas están elevadas
veles de LH se elevan. La FSH también se eleva, pero Hipogonadismo secundario. Se debe a una lesión
en menor proporción. El test de clomifeno valora la de las células gonadotropas hlpofisarias, de ma-
integridad funcional del eje hipotálamo-hipófiso- nera que no hay respuesta gonadotrofínica a la
gonadal. Esta sustancia bloquea los receptores de los LHRH.
estrógenos y estimula la secreción de LH. La gonado- Hipogonadismo terciario. Se debe a una le- -m
tropina coriónica estimula la secreción de T y se usa sión hipotalámica que impide la producción de
S C(ION VII Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabolismo

LHRH. La estimulación repetitiva con pulsos de De causa testicular: aplasia de las células germi-
LHRH exógeno produce una normalización del nales, varicocele, testículos criptorquídicos, etc.
eje hipófiso-gonadal. El síndrome de Maestre de De causa hipofisaria: deficiencia aislada de FSH).
San Juan-Kallmann (Capítulo 65) es la segunda Por andrógenos exógenos (anabolizantes) o en-
causa en frecuencia de hipogonadismo masculi- dógenos (hiperplasia suprarrenal congénita), que
no tras el síndrome de Klinefelter. inhiben las gonadotrofinas y la espermatogéne-
sis, pero mantienen la virilización.
Fisiopatología y semiología
Por obstrucción del epidídimo o del deferente
Las consecuencias del hipogonadismo en el feto se (malformación congénita, infección, etc.). Las en-
describen después y en el Capítulo 10. fermedades sistémicas graves, los baños prolon-
Si el hipogonadismo se produce en un niño prepú- gados en agua caliente, los xenoestrógenos y otros
ber (por ejemplo, por una castración traumática) no factores pueden alterar la calidad del semen.
se aprecian manifestaciones hasta que se alcanza la
edad teórica de la pubertad, en la que se detecta la
ausencia del desarrollo de los caracteres sexuales se- SÍNDROMES DE HIPERANDROGENISMO
cundarios. Si no se trata con andrógenos sustitutivos EN EL VARÓN
aparece un fenotipo característico (eunucoidismo): El hiperandrogenismo es la expresión de un excesivo
extremidades largas (ya que no se cierran las epífisis), efecto de los andrógenos sobre el organismo. Para que
falta de crecimiento de los genitales externos, voz ocurra es necesaria la presencia de andrógenos en can-
aguda persistente, distribución infantil de la grasa, tidades excesivas y receptores androgénicos funcionan-
escaso desarrollo de la masa muscular y ósea, falta tes. Sus manifestaciones son distintas según la edad.
de aparición del pelo en las áreas androgénicas e in-
diferencia por la actividad sexual. La infertilidad es Etiopatogenia
habitual. Se exceptúan los raros individuos que pade-
cen el síndrome del eunuco fértil, en el que la esper- El exceso de andrógenos puede ser de causa:
matogénesis es normal. En este sínclrnme la secreción Testicular: tumor de células de Leydig secretor
de LH es anormal, incapaz de estimular la secreción de testosterona.
de testosterona, pero pese a ello la espermatogénesis Hipotalámica : maduración precoz del eje hipo-
es normal. tálamo-hipófiso-gonadal, de modo que la libera-
Si el hipogonadismo aparece en un adulto que ya ción de LHRH activa la producción de gonado-
había alcanzado el desarrollo sexual pleno, se aprecia trofinas y estas de T; esta causa lógicamente sólo
una lenta atenuación de algunos caracteres sexuales se expresa en los niños.
(disminuye la necesidad de afeitarse y el deseo y la Suprarrenal: hiperplasia suprarrenal congénita
actividad sexual, se pierde masa muscular y ósea, por deficiencia de la 21-hidroxilasa.
puede aparecer ginecomastia, etc). La voz ronca no se Por secreción tumoral ectópica de gonadotrofina
vuelve aguda, ya que el can1bio inducido en la larin- coriónica, que estimula la producción de T en
ge por los andrógenos es permanente. Se desarrolla los testículos.
esterilidad. Exógena: utilización de fármacos con actividad
androgénica o gonadotrofínica.
Síndrome de hipoestrogenismo en el varón
Es un trastorno muy infrecuente, cuyas causas son: Fisiopatología y semiología
Mutación en el gen de la aromatasa (la T no pue- Hiperandrogenismo en el niño prepúber
de transformarse en estradiol). Si se debe a un tumor de las células de Leydig
Mutación en el gen del receptor de los estrógenos aparece una tumoración en un testículo y el niño
(hay resistencia a la acción de estos). Como con- desarrolla precozmente los caracteres sexuales
secuencia de la falta de estrógenos no se cierran secundarios (virilización, aceleración del creci-
los cartílagos de crecimiento, la masa ósea no miento, aumento de la masa muscular y ósea -
aumenta en la pubertad y las gonadotropinas en niños hercúleos-). La T está elevada en sangre,
sangre están aumentadas. mientras qu e las gonadotrofinas permanecen ba-
jas, por lo que el testículo contralateral se mantie-
Síndrome de esterilidad sin hipoandrogenismo ne prepuberal. No se produce espermatogénesis
Es un trastorno selectivo de la función exocrina del (se necesita la FSH, que no está elevada) . Este es
testículo, sin que el individuo presente manifestacio- un ejemplo de pseudopubertad precoz isosexual.
nes de hipoandrogenismo. Puede ser una forma leve Si se debe a una maduración precoz del eje
(o inicial) de presentación de muchos de los tipos de se desarrollan todos los caracteres sexu ales
hipogonadismo ya señalados (síndrome de Klinefel- secundarios;se produce espermatogénesis y ca-
ter, radioterapia, etc.). La esterilidad sin hipoandro- pacidad fecundativa. Esta es una pubertad precoz
572 genismo puede ser:
verdadera.
CAPITULO 69 Patología general de las gónadas

Si se debe a causa suprarrenal o exógena se desa-


rrollan los caracteres sexuales secundarios, pero CICLO HIPOFISARIO
los testículos permanecen atróficos y no se pro- , r ,

duce espermatogénesis (pseudopubertad precoz


isosexual).
:
1
1
:\:
1
1
1
1

: : +---
1 1 1
LH
Hiperandrogenismo en el adulto FSH
'j :
Puede manifestarse como exacerbación de la libido ) ~'
y conductas agresivas. Se pueden observar diferentes ~· : 1
anomalías testiculares: tumoración en el testículo -en
CICLO OVÁ RI CO
el tumor de células de Leydig-, atrofia testicular y oli-
gospermia -en el uso de andrógenos exógenos-.

SÍNDROME DE HIPERESTROGENISMO
EN EL VARÓN
Se debe a un exceso de actividad estrogénica. Puede
ser de causa:
Testicular (tumor de células de Leydig secretor CI CLO E DOMETRIAL
de estrógenos).
Suprarrenal (tumor). 1
1

) í:_.?.
1

,n,-...
Por secreción ectópica de gonadotrofina corióni-
ca (que en algunos casos induce secreción prefe-
: '14"U
1
1
ij¡ :~
1 1
1
1
1
u~
1 1 1
rente de estrógenos). 1 1 1
-F-A -SE-F~O-L-IC
_U_L_A_R_~~- FA
_S_E_L_U_T_
E~ÍN-ICA
_ __
Iatrogénica .
Por conversión periférica de andrógenos inacti-
vos a estrógenos activos (síndrome de resistencia
a los andrógenos). ll l Pico de E,
- - - - - ~ P ico de LH
1 MENSTRUACIÓ 1
J f \_ O vul ación

El hiperestrogenisrno induce ginecomastia (estimu-


E, = ESTRADIOL
la el crecimiento del tejido mamario), atrofia testicu-
Pr = PROG ESTERO A
lar, de los genitales externos y de la próstata, pérdida
de la libido e impotencia.
Figura Ciclo menstrual.

OVARIOS
aumentan los niveles de estrógenos (E) y de inhibina,
que inhiben la secreción de la FSH, de manera que
RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL ya no se reclutan más folículos para este ciclo. Los
Los ovarios también tienen una doble secreción, en- folículos reclutados se atresian (degeneran) , excepto
docrina (estrógenos, progesterona, andrógenos , in- uno de ellos, que es seleccionado para ovular (folícu-
hibina, etc.) y exocrina (óvulos). Al llegar la época lo dominante). De forma paralela al crecimiento del
fértil , con el inicio de cada ciclo diversos folículos folículo dominante se elevan los niveles de los E. Los
comienzan un proceso madurativo que solo llegará a niveles de la LH son bajos en la primera parte de la
culminar uno de ellos. El folículo maduro o folículo fase folicular, pero se elevan a partir de la fase medio-
de Graaf está constituido por un oocito, las células folicular debido al efecto de retroalimentación posi-
de la granulosa y las células de la teca. Las células de tiva que producen los E. Los E son los responsables
la teca estimuladas por la LH producen andrógenos. de la estimulación de la proliferación del endometrio
Las células de la granulosa estimuladas por la FSH y del estroma uterino (endometrio proliferativo) , de
producen progesterona y convierten los andrógenos la aparición de un moco cervical más elástico y con
en estrógenos a través de la aromatasa. cristalización arborescente («en hojas de helecho ») y
El ciclo menstrual se define como el tiempo que de la proliferación y queratinización del epitelio vagi-
transcurre entre el comienzo de dos menstruaciones nal. Los E estimulan también el sistema ductal mama-
sucesivas (Fig. 69-2). Se divide en una fase folicular o rio. Justamente antes de la ovulación los niveles de E
proliferativa y una fase luteínica o secretoria. La ma- se elevan marcadamente e inducen un pico secretorio
duración de un determinado número de folículos en de la LH. La elevación de la LH inicia la luteinización
realidad se inicia unos días antes de la menstruación, de las células de la granulosa. El pico de la LH pre-
cuando se produce una elevación en los niveles de la cede en 10-12 horas la ovulación. Tras la ovulación
FSH. A medida que los folículos empiezan a crecer el folículo se transforma en el cuerpo lúteo, que dura
- SECCIÓN VII Semiología y fis iopatología del sistema endocrino y del metabolismo

aproximadamente 14 días y cuya función es segregar precozmente un embarazo. El clomifeno estimula la


progesterona para preparar al endometrio previamen- secreción de gonadotrofinas en los hipogonadismos
te estimulado por los estrógenos para que acepte el hipotalámicos funcionales , mientras que no produce
huevo fertilizado. La progesterona frena la prolifera- respuesta si la causa es hipofisaria u ovárica.
ción del endometrio, cambia la configuración de las La ecografía pélvica informa de las posibles lesio-
glándulas uterinas que se hacen tortuosas y aumen- nes del ovario, trompas, útero, etc., al igual que la TC
tan su secreción (fase secretoria del ciclo) , relaja el o la RM. La histeroscopia y la laparoscopia son prue-
miometrio, disminuye la cantidad y la elasticidad del bas cruentas para valorar estas áreas. La cromatina
moco cervical e inhibe la queratinización del epitelio sexual negativa en una mujer sugiere la existencia de
vaginal. Si no se produce embarazo el cu erpo lúteo se un síndrome de Turner, pero en los casos de hipo-
transforma en una cicatriz fibrosa (corp us albicans) y gonadismo primario es aconsejable hacer un estudio
su pérdida de función induce la menstruación. Los E cromosómico, ya que este método permite conocer la
tienen efectos extragenitales: a) aumentan la síntesis anomalía cromosómica exacta.
hepática de las globulinas transportadoras de hormo-
nas; b) aumentan las partículas HDL y VLDL circu-
lantes y bajan las LDL (aumentan los triglicéridos y
HIPOFUNCIÓN O HIPOGONADISMO OVÁRICO
disminuyen el colesterol); c) aumentan la síntesis de Puede manifestarse como un hipogonadismo global
angiotensinógeno; d) frenan la actividad osteoclásti- (hipofunción endocrina y exocrina) o como una hipo-
ca, y e) en la pubertad aceleran el crecimiento lineal función endocrina o exocrina aislada.
y el de la cintura pelviana, cierran las epífisis y au-
mentan la masa muscular y los depósitos de grasa. El
efecto sistémico mejor conocido de la progesterona es
SÍNDROMES DE HIPOESTROGENISMO
elevar la temperatura basal. Expresa la falta de acción de los E sobre el organismo
femenino.

EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL Etiopatogenia


DE LOS OVARIOS El hipoestrogenismo puede deberse a:
La presencia de ciclos menstruales n ormales im- Hipogonadismo primario. Indica una lesión pri-
plica una función secuencial n ormal de todo el eje maria de los ovarios. Se incluyen aquí el síndrome
h ipotálamo-hipófiso-ovárico y del tracto genital. Las de Turner (véase Cap. 10), el fallo ovárico prema-
características del moco cervical, de la citología vagi- turo , generalmente de origen autoinmune, la ciru-
nal y del endometrio expresan la actividad hormonal gía, la radioterapia, etc. La menopausia revela una
de cada fase del ciclo . Las cifras de gona dotrofinas, forma fisiológica de hipogonadismo primario cau-
de estradiol y de progesterona en sangre son varia- sada por el agotamiento de la dotación ovárica de
bles no solo por su pulsatilidad, sino también porque folículos , debido a la progresiva atresia de estos.
cambian cada día a lo largo del ciclo, lo que dificulta Hipogonadismo secundario . Se debe a una le-
la interpretación de una muestra aislada. Una FSH sión hipofisaria (véase Hipófisis, Cap. 66).
persistentemente elevada indica hipofunción ovárica Hipogonadismo terciario. Se debe a una disfun-
primaria. Un índice LHIFSH elevado en una paciente ción hipotalámica (véase Hipotálamo, Cap . 65 ).
h irsuta y amenorreica sugiere un síndrome de ovarios
poliquísticos. Unas gonadotrofinas bajas indican le- Fisiopatología y semiología
sión hipotalámica o hipofisaria. La respu esta de la hi-
pófisis puede valorarse mediante la prueba de LHRH. Las consecuencias de la falta de E dependen del mo-
La determinación de prolactina es útil para establecer mento en que aparecen:
la hipofunción ovárica debida a hiperprolactinemia. La falta de E en el periodo fetal o en la niña pre-
Si se administra progesterona a una muj er ameno- púber no produce manifestaciones.
rreica y se produce hemorragia, indica que el útero los caracteres sexuales secundarios estrógeno-de-
estaba sometido a la acción de los estrógenos. Si no se pendientes (telarquia, menarquia), aunque pue-
produce hemorragia la paciente tenía un a cantidad de de producirse la pubarquia, que depende de los
estrógenos insuficiente para estimular el endometrio andrógenos suprarrenales. La ausencia de regla
(o existe una obstrucción a la salida de la menstrua- a los 16 años se denomina amenorrea primaria.
ción) . La evolución de la temperatura basal, del moco No se produce la típica aceleración puberal del
cervical y de la citología vaginal sirve para valorar la crecimiento, no cambia la estructura de la pelvis,
secreción de progesterona, aunque también se pue- ni aumentan los depósitos de grasa.
den medir sus cifras en sangre. La determinación de En la mujer adulta aparece amenorrea secunda-
andrógenos plasmáticos sirve para identificar un hi- ria y atenuación de los caracteres sexuales secun-
perandrogenismo. La determinación de la subunidad darios estrogenodependientes (atrofia mamaria,
f3 de la gonadotrofina coriónica permite reconocer sequedad vaginal con coitos dolorosos , cambio
CAPITULO 69 Patología general de las gónadas

en la flora vaginal, etc.). Además se produce una menstruales ni capacidad procreativa en todas
pérdida acelerada de masa ósea, ya que aumenta las otras causas).
la actividad osteoclástica, y aumento del riesgo El hiperestrogenismo produce hemorragias ute-
cardiovascular (aumentan las partículas LDL, ba- rinas disfuncionales (metrorragias) , ya que el
jan las HDL y se produce disfunción endotelial). endometrio se mantiene en fase proliferativa,
Finalmente, la caída brusca de E es responsable descamándose irregularmente. Puede aparecer
de los típicos sofocos de la menopausia. también amenorrea y esterilidad. Aumenta el
riesgo de carcinoma endometrial, de trombosis ,
Hipofunción luteínica de hipertensión arterial, de cardiopatía isquémi-
Todas las causas de hlpoestrogenismo producen ade- ca y de cáncer de mama.
más ausencia de cuerpo lúteo y por tanto falta de
progesterona, aunque puede encontrarse hlpofunción Hiperfunción luteín ica
luteínica aislada con una producción normal de E, Es de origen ovárico (luteoma, quistes de cuerpo
por ejemplo, en el estrés o la hiperprolactinemia. Se lúteo). Produce un cuadro de pseudoembarazo (au-
caracteriza por una segunda fase del ciclo corta, con mento del útero y de las mamas con amenorrea)
una insuficiente producción de progesterona, de ma-
nera que el endometrio no está adecuadamente pre-
parado para la nidación del huevo (esterilidad). Síndrome de hiperandrogenismo en la mujer
Etiopatogenia
Hipoandrogenismo en la mujer El exceso de andrógenos puede proceder del ovario
El hipoandrogenismo global en la mujer apare- (síndrome de ovarios poliquísticos o de Stein-Le-
ce cuando dejan de producir andrógenos tanto los venthal, tumores ováricos secretores de andrógenos
ovarios como las suprarrenales (por ejemplo, en el como el arrenoblastoma, etc.) o de las suprarrenales
hipopituitarismo). Se manifiesta con disminución e (tumores, hiperplasia suprarrenal congénita, síndro-
incluso desaparición del vello pubiano y axilar y de me de Cushing). El síndrome de ovarios poliquísticos
la libido. La falta selectiva de andrógenos ováricos, si se caracteriza por una hipersecreción de andrógenos
existe, no tiene expresión clínica. a partir de las células de la teca, que muchas veces
adoptan una estructma quística. Los andrógenos se
Hipoproducción de óvulos convierten periféricamente en parte en E, que se man-
La forma aislada es característica de los ciclos ano- tienen altos y pierden su ciclicidad, de modo que la
vulatorios (sin ovulación). Puede acompañarse o no paciente deja de ovular (anovulación crónica). Los E
de hipofunción luteínica o hiperandrogenismo. Se crónicamente elevados cierran el círculo vicioso al
manifesta por esterilidad. También aparece en el hi- provocar una hipersecreción mantenida de LH que
pogonadismo global, en cuyo caso hay amenorrea. estimula las células de la teca para que produzcan
más andrógenos. La FSH, por el contario, se mantiene
SÍNDROMES DE HIPERFUNCIÓN OVÁRICA baja, por lo que no se produce maduración folicular.

Síndromes de hiperestrogenismo Fisiopatología y se miología

Etiopatogenia
Las consecuencias del hiperandrogenismo son la apa-
rición de trastornos menstruales, acné, hirsutismo , y
El hiperestrogenismo puede ser de origen: en los casos graves amenorrea y virilización (atrofia
Ovárico (tumor de la granulosa, tecoma). mamaria, hirsutismo grave, voz ronca, hipertrofia
Hipotalámico (maduración precoz del eje hipo- muscular, hipertrofia del clítoris, etc.).
tálamo-hi pófiso-ovárico).
Suprarrenal (tumor). Hiperproducción de óvulos
Iatrogénico (fármacos con actividad estrogénica). Normalmente con cada ovulación se emite un óvulo,
Por secreción ectópica de gonadotrofina corióni- pero pueden emitirse varios. Este fenómeno puede ser
ca. esporádico, puede tener una base familiar o deberse
Por transformación periférica a partir de andró- a tratamientos de esterilidad (clomifeno, gonadotrofi-
genos procedentes del ovario o de las suprarre- nas, etc.). Puede dar lugar a embarazos múltiples.
nales (obesidad, síndrome de ovarios poliquísti-
cos, etc.).
Fisiopatología y semiología DIFERENCIACIÓN SEXUAL
En las niñas prepuberales produce una pubertad
precoz auténtica (causas hipotalámicas) o una
FISIOLOGÍA DE LA DIFERENCIACIÓN SEXUAL
pseudopubertad precoz (aparición de telarquia, Es un proceso secuencial que comienza al establecer- 57!
aceleración del crecimiento, etc., pero sin ciclos se el sexo cromosómico, sigue con el desarrollo del
SECCION VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

sexo gonadal y culmina con el desarrollo del sexo fe- cromosomas X en sus células gonadales (el ca-
notípico (genitales internos y externos) . Una vez que riotipo clásico es 47XXY, aunque pueden encon-
el niño nace se establece el sexo legal (hombre o mu- trase otros -48XXXY, 48XXYY, etc.-). La presen-
jer). Luego , los condicionantes genéticos , hormona- cia del cromosoma Y provoca la diferenciación
les y el ambiente definen la orientación psicosexual testicular de la gónada, que produce suficientes
(sexo psicológico). Al llegar la pubertad se desarrolla hormonas para promover un fenotipo masculino
el sexo hormonal, con lo que aparecen los caracteres normal. El sexo legal y psicológico es masculino.
sexuales secundarios. Uno de cada 500 varones presenta este síndrome.
Varios genes del cromosoma Y (especialmente el La presencia de un cromosoma X en exceso es
SRY) determinan la diferenciación de la gónada pri- dañino para la espermatogénesis y para la fun-
mitiva hacia testículo, aún en presencia de cromo- ción endocrina a medio plazo. Por ello, los testí-
somas X. El testículo comienza a producir hormonas culos son más pequeños de lo normal. Al llegar la
hacia las 8 semanas. Hasta entonces el embrión tiene pubertad puede aparecer ginecomastia (debida a
los duetos de Wolff, que son los precursores de los exceso de estrógenos de origen testicular) y virili-
genitales internos masculinos (vesículas seminales, zación incompleta. En algunos casos la pubertad
deferente y epidídimo) y los duetos de Müller, que es normal y el síndrome se manifiesta exclusiva-
son los precursores de los genitales internos femeni- mente como infertilidad o como un hipogonadis-
nos (trompas de Falopio, útero y parte superior de la mo de aparición tardía. En el periodo postpuberal
vagina). Los genitales externos masculinos o femeni- la testosterona en sangre está normal-baja o baja,
nos, surgen, en cambio, por diferenciación de unos el estradiol suele estar algo elevado y las gonado-
precursores anatómicos comunes. El testículo produ- trofinas están elevadas.
ce la regresión de los duetos mullerianos a través de El síndrome de Turner se produce cuando la do-
la hormona inhibidora de los duetos mullerianos y, tación cromosómica es 45X, 45X y un microcro-
poco después , la diferenciación de los duetos wolffia- mosoma X, un mosaico de células 45X-46XX u
nos a través de la T. La diferenciación de los genitales otras variedades. El desarrollo del ovario precisa
externos está mediada por la 5-DHT que se sintetiza de los dos cromosomas X, de al1í que no existan
in situ a partir de la T. células germinales ováricas al nacimiento. Las
En los embriones femeninos la ausencia del gen gónadas se convierten en unas cintillas fibrosas
SRY hace que predominen los factores de transcrip- (cintillas ováricas) y se desarrolla un fenotipo
ción que convierten la gónada indiferente en ovario inequívocamente femenino. El sexo legal y psi-
(el mejor conocido es el WNT4). Los genitales inter- cológico es femenino. Suelen aparecer diversas
nos se originan a partir de los duetos mullerianos , anomalías congénitas (talla corta, cuello alado ,
mientras que los duetos wolffianos degeneran espon- cardiopatía congénita del tipo coartación aórtica,
táneamente al no recibir el influjo de la testosterona etc.), debidas a la ausencia de los genes del cro-
(aunque tienen receptores androgénicos que pueden mosoma X que falta. Al llegar la pubertad no se
ser estimulados por los andrógenos). El ovario fetal produce la telarquia ni la menarquia. Los datos
produce E, pero estos no son necesarios para la dife- hormonales son los típicos del hipogonadismo
renciación sexual femenina. primario.
Síndrome 45X/46XY o disgenesia gonadal mixta.
TRASTORNOS DE LA DIFERENCIACIÓN El fenotipo gonadal y los genitales externos son
muy variables (Fig. 69-3).
SEXUAL (TOS) Síndrome 46XX/46XY (quimerismo) o TDS ovo-
El nacimiento de un recién nacido con genitales más testicular. Coexiste una gónada masculina de
o menos ambiguos genera ansiedad e incertidumbre un lado con una femenina del otro, o aparece
en su familia y puede ser debido a numerosas causas, un ovotestes, una gónada que histológicamente
no bien conocidas. El Consenso de Chicago de 2006 tiene características masculinas y femeninas a la
generó una nueva clasificación de estos trastornos vez. La diferenciación fenotípica depende de la
que evita términos mitológicos, difíciles de entender secreción hormonal predominante de la gónada
o peyorativos como hermafroditas, pseudohermafro- de cada lado.
ditas o estados intersexuales. Los TDS se clasifican
desde entonces como: Trastornos de la diferenciación sexual (TDS)
con cariotipo XV
Síndromes debidos a anomalías del sexo cromosómico Hay una insuficiente virilización en el individuo con
Son trastornos en la diferenciación sexual debidos a cariotipo 46XY. Pueden deberse a:
anomalías en los cromosomas visualizables en el ca-
Trastornos en la diferenciación del testículo. En
riotipo.
muchos de ellos se desconoce la causa, pero se
El síndrome de Klinefelter se produce cuando un cree que se deben a mutaciones en alguno de los
embrión tiene un cromosoma Y y al menos dos numerosos genes implicados en la diferenciación
CAPÍTULO 69 Patología general de las gónadas

Los defectos en el receptor de los andrógenos.


La forma más severa es el síndrome de femi-
nización testicular. Se debe a un trastorno
congénito en el receptor de los andrógenos,
que produce resistencia a la acción de estos,
pese a que el testículo segrega adecuadamen-
te T. El uso durante el embarazo de fármacos
que bloquean los receptores androgénicos
(espironolactona, flutamida) pueden reme-
dar en parte este síndrome. Se produce una
regresión de los duetos mullerianos, pero no
se virilizan adecuadamente los genitales in-
ternos ni externos. Los genitales externos son
inequívocamente femeninos, pero la vagina
es corta y ciega. No hay ningún tipo de geni-
Figura Genitales ambiguos en la disgenesia
tales internos. El sexo legal y psicológico es
gonada l.
femenino . Al llegar la pubertad se evidencia
amenorrea, el vello andrógeno-dependiente
(pubis, axila, cara) no aparece o es muy esca-
so y se desarrollan las mamas (por el efecto
de la gónada primitiva hacia el testículo. La mu- de los E derivados periféricamente de la T).
tación en el gen SRY produce una disgenesia go- En las formas de resistencia menos severa a
nadal completa (síndrome de Swyer o síndrome los andrógenos se producen unos genitales
de sexo cambiado, ya que con cariotipo 46 XY externos con virilización parcial.
tienen fenotipo femenino sin gónada funcional).
Dentro de los trastornos de la diferenciación del Síndrome de persistencia de los duetos mulle-
testículo se incluyen también los TDS 46XY con rianos. Se debe a ausencia de producción de la
ovotestes y los individuos con anorquia congéni- hormona inhibidora de los duetos mullerianos ,
ta bilateral (síndrome de los testículos desvane- mientras que la T es normal. Los genitales son
cidos], que en algún momento de su desarrollo masculinos , pero persisten restos de los duetos
tuvieron testículos funcionantes , que provocaron mullerianos, generalmente en una hernia ingui-
una diferenciación de los genitales externos ha- nal. El sexo legal y psicológico es masculino. La
cia varón, pero luego desaparecieron. virilización puberal es normal.
Defectos en la síntesis de testosterona, provoca-
dos por: Trastornos de la diferenciación sexual (TDS)
Anomalías congénitas o uso de fármacos du- con cariotipo XX
rante el embarazo que bloquean las enzimas Se caracterizan por la virilización en grado variable
implicadas en la síntesis de testosterona. de un embrión 46XX. Pueden deberse a.
Hipoplasia o aplasia congénita de las célu-
las de Leydig. No hay trastorno en la sínte- Trastornos en la diferenciación del ovario . Se
sis de la hormona inhibidora de los duetos deben a defectos en los factores de transcripción
mullerianos. Se produce una regresión de los que gobiernan la diferenciación de la gónada in-
duetos wolffianos y mullerianos, asociada a diferenciada hacia el ovario. Pueden generar dis-
genitales externos femeninos. El sexo legal y genesia gonadal, ovotestes o incluso testículos.
psicológico es femenino. Exposición indebida a andrógenos durante los
periodos críticos de la diferenciación sexual.
Defectos en la acción periférica de los andróge-
Estos andrógenos pueden ser exógenos (fármacos
nos. Existen dos tipos:
androgénicos), del propio feto (p. ej., deficiencia
La deficiencia congénita de 5-a reductasa. La de aromatasa, por lo que la placenta y el feto no
falta de esta enzima impide la formación de aromatizan los andrógenos suprarrenales que
5-DHT, lo que provoca una insuficiente viri- produce el feto femenino, de manera que se virili-
lización de los genitales externos. No existen za tanto este como la madre durante el embarazo)
genitales internos femeninos (ha habido una o de la madre (p. ej .. en mujeres con síndrome
regresión de los duetos mullerianos). La pro- de hiperandrogenismo suprarrenal u ovárico).
ducción de testosterona es normal y se viri- Generalmente aparecen unos genitales externos
lizan adecuadamente los duetos wolffianos. ambiguos. Rara vez hay derivados de los duetos
Al llegar la pubertad se puede producir una wolffianos (se necesitan concentraciones locales
masculinización incompleta de los genitales extremadamente altas de andrógenos) . El sexo le-
577
externos. gal y la orientación psicosexual es variable.
-170
Patología general
de las paratiroides
y del metabolismo del calcio
Jesús González Macias, José Antonio Amado Señaris

RECUERDO FISIOLÓGICO
CALCIO Y FOSFATO
El cuerpo humano contiene aproxima-
damente 1000 g de calcio, de los cuales
el 99 % se encuentra en el esqueleto y el
1 % restante fuera de él. Las funciones del
calcio son múltiples: interviene en la regulación de la
excitabilidad celular, en la contractilidad muscular,
en procesos de secreción celular, en diversos fenóme-
nos enzimáticos (entre ellos, el de la coagulación) y,
desde luego, en la función mecánica de soporte que
desarrolla el esqueleto.
El calcio sérico se encuentra en tres formas: como
ion libre (50 %), unido a proteínas (40 % ) y formando
complejos con otros componentes del suero, como
el citrato y el fosfato (10 % ). El primero y el tercero
constituyen el calcio ultrafiltrable (60 % ). La fracción
iónica libre es la que tiene mayor importancia desde
el punto de vista biológico y la que está sometida a re-
gulación. En cuanto al calcio unido a las proteínas, el
90 % lo está a la albúmina y el resto a las globulinas.
La unión a las proteínas disminuye en las situaciones
de acidosis y aumenta en las de alcalosis. La cifra total
de calcio sérico es de 8 ,5-10 ,5 mg/dl (2,1-2,6 mmol/1)
Dado el alto porcentaje de calcio unido a la albúmi-
na, las modificaciones de la albuminemia repercuten
sobre la calcemia total. Se calcula que cada gramo de
albúmina fija 0,8 g de calcio. Por ello, cuando la cifra
de albúmina es anormal, debe considerarse como
cifra total de calcio la resultante de realizar una
corrección, según las indicaciones señaladas en
la Tabla 70-1 .
El aporte dietético de calcio debe ser, al
menos, de 1000 mg/día. Los alimentos que
proporcionan mayor cantidad de calcio
son la leche y sus derivados. La can-
tidad absorbida oscila normalmente
578
entre 100 y 250 mg/día. El principal
CAPÍTULO 70 Patología general de las paratiroides y del metabolismo del calcio

hormona. El resultado global de la acción de la PTH


es un aumento de la calcemia y una disminución de
Tabla Corrección de la cifra la fosfatemia .
de calcio sérico por la de la albumina La PTH actúa sobre un receptor asociado a proteí-
na G, llevando a cabo su efecto mediante el sistema
Albuminemia < 4 g/dl adenilato ciclasa. Tras la inyección de PTH se produ-
Sumar a la cifra de calcemia real 0,8 mg/dl ce un aumento del AMPc urinario, que es seguido de
por cada g/dl que la concentración de un aumento de la fosfaturia. Todo ello puede cuanti-
albúmina sea inferior a 4 (o sus fracciones ficarse con fines diagnósticos.
correspondientes) Existe una proteína que en su extremo aminoter-
Albuminemia > 4 g/dl minal es similar a la PTH. Esta proteína se denomina
Restar a la cifra de calcemia real 0,8 mg/dl proteína relacionada con la PTH o PTHrP. Se une al
por cada g/dl que la concentración de mismo receptor que la PTH (PTHRl), y se considera
albúmina sea superior a 4 (o sus fracciones que es responsable de la hipercalcemia paraneoplá-
correspondientes) sica. No parece que desempeñe ningún papel en la
Calcemia real = la proporcionada por el laboratorio
regulación de la homeostasis cálcica, aunque segura-
mente sí lo hace en la homeostasis esquelética. La Fi-
gura 70-1 ofrece una visión integrada de la regulación
del Ca y P.

factor regulador de la absorción intestinal de calcio es VITAMINA D


la 1,25 (OH) 2 vitamina D, que la estimula.
El riñón filtra al cabo del día una gran cantidad de Existen dos formas de vitamina D: el colecalciferol o
calcio, de la que sólo se elimina por la orina alrede- vitamina D3 , propia del reino animal, y el ergocalcife-
dor del 1-2 % (en torno a 100-250 mg/día). La mayor rol o vitamina D2 , propia del vegetal. Ambas son igual-
parte de la reabsorción de calcio tiene lugar a nivel mente activas en el hombre. La vitamina D3 se sinteti-
proximal. La que se produce en el segmento distal za en la piel por la acción de la luz ultravioleta sobre
de la nefrona es estimulada por la hormona parati- su precursor, el 7-dehidrocolesterol. También puede
roidea. adquirirse con la dieta. La absorción intestinal tiene
La concentración normal de fosfato sérico es de lugar por vía linfática, dada su naturaleza liposoluble.
3,0-4,5 mg/dl, y es ultrafiltrable el 90 % . La vitamina D sufre en el hígado una hidroxilación en
el C-25 transformándose en 25 OH colecalciferol o 25
OH vitamina D, también denominado calcidiol. En el
HORMONA PARATIROIDEA (PTH) riñón sufre una segunda hidroxilación en el C-1 en
posición a , merced a la acción de la la-hidroxilasa
Es una hormona de 84 aminoácidos, cuya porción ac- renal, dando lugar al 1,25 (OH) 2 colecalciferol, 1,25
tiva es la aminoterminal (fragmento 1-34). El princi- (OH) 2 vitamina Do calcitriol (Fig. 70-2). El metabolito
pal factor regulador de la síntesis y secreción de PTH fundamentalmente activo es la 1,25 (OH) 2 vitamina
es el calcio iónico. Su descenso las estimula y su ele- D. La 25 OH vitamina D, es también activa, aunque
vación las frena . La secreción de PTH es inhibida por
menos que el calcitriol.
la 1,25 (OH) 2 vitamina D, no solo porque aumenta la
La vitamina D y sus metabolitos circulan unidos a
calcemia, al estimular la absorción intestinal de cal-
una proteína transportadora específica (DBP, vitamin
cio, sino porque actúa directamente sobre las células
D Binding Protein). La 25 OH vitamina Des la forma
paratiroideas, disminuyendo su actividad.
La PTH regula los niveles de calcio y fosfato en la
sangre actuando de forma directa sobre el hueso y
el riñón y de forma indirecta sobre el intestino. En
PTH
el hueso favorece la liberación de calcio y fosfato al
estimular a los osteoclastos (curiosamente, no actúa ~
sobre ellos directamente, sino a través de los osteo-
blastos, que son las células que tienen receptores
~ & s(OHJ,D
-------•
1 Días 1
Hueso Riñón ► Intestino
para ella; los osteoblastos forman sustancias, como el
RANKL y el M-CSF, que transmiten a los osteoclas-
tos las órdenes de la PTH). En el riñón estimula la
"-----------
'y
_________,,;
reabsorción de calcio e inhibe la de fosfato, actuando {+)
sobre las células del túbulo renal. La acción intes-
tinal, consistente en el estímulo de la absorción de
calcio y de fosfato, se efectúa a través de la 1,25 (OH) 2 Figura Visión integrada de la homeostasis fas-
579
vitamina D, cuya síntesis renal es estimulada por la focálcica.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

VISIÓN INTEGRADA DE LA HOMEOSTASIS


Alimentos FOSFOCÁLCICA
(vitamina D de la dieta) Luz UV
El principal factor regulador de la calcemia es la PTH.
La regulación a corto plazo tiene lugar a través de sus
efectos renales y óseos. El efecto intestinal (mediado
Piel
por el calcitriol) alcanza su máxima repercusión ha-
7- dehidrocolesterol
cia las 24-48 h .
La fosfaturia inducida por la PTH facilita el desa-
rrollo de su efecto hipercalcemiante. Efectivamente,
la acción de la PTH sobre el hueso y sobre el intestino
promueve la entrada en sangre de fosfato; si no tuvie-
ra lugar al mismo tiempo el efecto fosfatúrico, ello
elevaría la fosfatemia; a su vez, la elevación de la fos-
Aumenta con la PTH fatemia aumentaría al producto P x Ca, lo que haría
Disminuye con el Ca, el P y la 1,25(0H) 2 D que se depositara fosfato cálcico en los tejidos. Este

~
depósito supondría la salida de calcio de la sangre y,
con ello, el efecto hipercalcemiante de la hormona se
1,25 (OH)2D3 vería disminuido (Figura 70-1).

Figura Metabol ismo de la vitamina D.


TRASTORNOS DE LA HOMEOSTASIS
DEL CALCIO
Se clasifican en dos grandes apartados: hipercalce-
que presenta mayor afinidad por ella y, por tanto, la mia e hipocalcemia. Dos de sus causas más represen-
que se encuentra en mayor concentración en la san- tativas son, respectivamente, el hiperparatiroidismo
gre. La concentración plasmática de 25 OH vitamina y el hipoparatiroidismo.
D se considera el mejor índice del estado nutricional
del organismo con respecto a esta vitamina.
Las necesidades de vitamina D del organismo pa- HIPERCALCEMIA E HIPOCALCEMIA
recen satisfacerse con la simple exposición a la luz
solar, si esta es adecuada. El aporte dietético es un HIPERCALCEMIA
buen complemento, pero insuficiente si no se da di-
cha exposición. Se considera que las necesidades de
Concepto
vitamina D se sitúan en torno a las 800-1000 UI dia- Consiste en la elevación del nivel sérico de calcio por
rias. encima del límite superior de la normalidad (10 ,5
Los efectos mejor conocidos de la vitamina D son mg/dl).
los referentes a su acción sobre el intestino, donde
estimula la absorción del calcio y del fosfato. Los Etiopatogenia
efectos sobre el hueso se conocen peor. Facilita la Es útil clasificar las causas de hipercalcemia de acuer-
mineralización del mismo, al elevar el producto do con la concentración sérica de PTH (Tabla 70-2),
fosfocálcico por favorecer la absorción intestinal de distinguiendo las hipercalcemias que cursan con PTH
calcio y fosfato. Por otra parte, al inhibir la secreción alta y las que lo hacen con PTH baja. En el primer caso
PTH protege al hueso de la acción osteorresortiva de es la propia PTH elevada la causa de la hipercalcemia.
esta. En el segundo, la hipercalcemia -de un origen inde-
pendinte a la PTH- inhibe la secreción de la misma,
CALCITONINA por lo que su concentración sérica disminuye.
El ejemplo más característico de hipercalcemia por
Es una hormona producida por las células parafoli- aumento de PTH es el hiperparatiroidismo primario,
culares del tiroides o células C. Su principal efecto sobre el que volveremos después.
biológico es inhibir la resorción ósea osteoclástica. Entre las hipercalcemias con PTH disminuida,
Tiende a disminuir la calcemia, lo cual se pone clara- la más importante es sin duda la hipercalcemia de
mente de manifiesto en presencia de hipercalcemia; los procesos malignos. Junto al hiperparatiroidismo
sin embargo, cuando la calcemia es normal, el des- primario, es responsable del 90 % de las hipercalce-
censo de calcemia que produce es pequeño. De ahí mias (cada uno de los dos tipos de proceso determina
que es más una hormona antihipercalcemiante que aproximadamente la mitad de los casos). Desde el
hipocalcemiante. Su secreción es inhibida por la hi- punto de vista etiopatogénico, la hipercalcemia de los
580
pocalcemia y estimulada por la hipercalcemia. procesos malignos suele clasificarse en tres grandes
CAPÍTULO 70 Patología general de las paratiroides y del metabolismo del calcio

secuencia es la calcificación de partes blandas por la


precipitación de fosfato cálcico; c) las derivadas de un
Tabla Principales causas aumento de la concentración de calcio en la orina,
de hipercalcemia por filtrarse en exceso en el glomérulo (litiasis renal).
Manifestaciones de mecanismo menos claro son
Con PTH elevada la poliuria (atribuida a una «inhibición de la acción
Hiperparatiroidismo primario de la ADH »), la úlcera péptica (que algunos autores
atribuyen a un aumento de la gastrinal, la hiperten-
Con PTH disminuida
sión (que se ha atribuido a una vasoconstricción) y la
Frecuentes pancreatitis. Si efectivamente la hipercalcemia pro-
Hipercalcemia maligna duce vasoconstricción, el desarrollo de la misma en
Infrecuentes las arterias renales podría facilitar la aparición de una
Intoxicación por vitamina D insuficiencia renal aguda, también propiciada por la
Sarcoidosis (y enfermedades deshidratación a que podría conducir la poliuria.
granulomatosas en general)
Otras Manifestaciones
El desarrollo de las manifestaciones de la hipercalce-
mia guarda relación no solo con su intensidad, sino
también con la velocidad a la que se instaura. Gene-
grupos: la llipercalcemia humoral maligna (HHM), la ralmente, no aparecen manifestaciones hasta que la
hipercalcemia de las enfermedades hematológicas y concentración sérica de calcio es superior a 12 mg/dl.
la hipercalcemia metastásica. La HHM es un síndro-
Sistema nervioso. Las manifestaciones neuroló-
me paraneoplásico debido a la producción de PTHrP
gicas consisten fundamentalmente en alteracio-
por el tumor. La hipercalcemia de los tumores hema-
nes de la consciencia (de la somnolencia al coma)
tológicos (mieloma) está fundamentalmente vincu-
y de la función motora (debilidad muscular) .
lada a la producción local de citocinas que resorben
Aparato digestivo. La elevación de la calcemia
hueso (TNF, IL-1, IL-6). La hipercalcemia metastásica
da lugar a anorexia, vómitos y estreñimiento. En
se debe a la producción de sustancias estimuladoras
las formas crónicas pueden desarrollarse pan -
de los osteoclastos (probablemente las mismas citoci-
creatitis y ulcus péptico.
nas e incluso la PTHrP liberada in situ) por parte de
Aparato circulatorio. Se pueden producir blo-
las células tumorales de las metástasis.
queos y arritmias cardiacas.
Existen otras muchas formas de hipercalcemia con
En el ECG se observa típica-
PTH disminuida, aunque la incidencia de cada una
mente un acortamiento
de ellas es baja. Mencionaremos dos relacionadas con
en el intervalo QT (Fig.
la vitamina D: la intoxicación por la misma, y la hi-
70-3). No está clara la
perproducción de 1,25 (OH) 2 D en algunas enferme-
relación entre hiper-
dades granulomatosas (sarcoidosis) .
calcemia e hiper-
Los mecanismos que pueden causar hipercalcemia
tensión.
son el aumento de la resorción ósea, de la absorción
intestinal de calcio y de la reabsorción renal. En gene-
ral, interviene más de uno de ellos, ya que de ser solo
uno el responsable, el organismo puede compensarlo
con cierta facilidad. El principal mecanismo de com-
pensación es la eliminación renal de calcio, por lo
que si dicho mecanismo no actúa (insuficiencia renal,
aumento de la resorción tubular calcio), el desarrollo
de hipercalcemia se ve facilitado. Si la entrada de cal-
cio en sangre es masiva, los mecanismos de compen-
sación pueden verse sobrepasados.

Fisiopatología
Entre las manifestaciones cuyo mecanismo es conoci-
do cabe mencionar las siguientes: a) las derivadas de
una disminución de la excitabilidad neuromuscular
(lo que da lugar a alteraciones neurológicas, cardia-
cas y digestivas); b) las derivadas de un aumento del
producto fosfocálcico, especialmente frecuentes si la
concentración de fosfato también está elevada (la con-
SE"CCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocri no y del metabolismo

Tabla Causas más frecuentes


de hipocalcemia
Con PTH baja
Hipoparati roidismo
Con PTH alta
Insuficiencia renal
Hipocalcemia: prolongación del QT a expensas del segmento ST Falta de actuación de la vitamina D
Pancreatitis aguda
Intoxicaciones (enemas de fosfato... )
J~ Pseudohipoparatiroidismo
1-, t Otras
tt±
t /',. r- L,--, írl
f
+~
f++ V -t
Hipercalcem ia: acortamiento del QT a expensas del segmento Sl Etiopatogenia
Al igual que en la hip ercalcemia, las causas de hi-
Figura A lteraciones del ST en la hiper e hipo- pocalcemia pueden sistematizarse de acuerdo _con
ca lcem ia. la concentración sérica de PTH (Tabla 70-3) . Dicha
concentración es baja cuando la causa de hipocalce-
mia es una disminución en la secreción de la propia
PTH. Cuando la causa es de otra naturaleza, la secre-
Riñón. La incapacidad para concentrar la orina
ción de PTH aumenta con carácter compensador, y
que produce la hipercalcemia conduce a poliu- sus niveles séricos son altos («hiperparatiroidismo
ria, con polidipsia y nicturia. Si las pérdidas de secundario»).
agua no se reponen, puede aparecer deshidrata-
La disminución de PTH da lugar al hipoparatiroi-
ción e insuficiencia renal. Con ello se agrava la
dismo , que estudiaremos más adelante junto con el
hipercalcemia, ya que la disminución del filtra-
pseudohipoparatiroidismo (trastorno caracterizado
do glomerular deja al organismo sin uno de sus
por resistencia periférica a la PTH). La falta de PTH
principales mecanismos de defensa frente a ella,
determina descensos de la calcemia a valores de 5-6
la eliminación del calcio por la orina.
mg/dl, pero nunca mayores. Con frecuencia es sinto-
La litiasis producida por el depósito de sales
mática.
cálcicas en las vías urinarias da lugar a episodios
De las hipocalcemias con PTH alta, la más fre-
de cólico renal. Los cálculos son visibles en la
cuente es la asociada a insuficiencia renal, que no
radiografía simple de abdomen. También lo son
suele ser intensa ni sintomática. Otra causa de hi-
las calcificaciones que pueden producirse en el
pocalcemia en general leve es la debida a falta de
parénquima renal (nefrocalcinosis].
vitamina D (véase Osteomalacia en Cap. 103) . La
Alteraciones bioquímicas. Por definición, está pancreatitis aguda puede cursar con hipocalcemia,
elevada la calcemia. La fosfatemia tiende a estar lo que es signo de mal pronóstico. Los mecanismos
disminuida cuando la causa de la hipercalce- por los que se produce hipocalcemia en la pancrea-
mia es un aumento de PTH o de PTHrP, puesto
titis no están claros, pero parece que uno de ellos es
que ambas producen fosfaturia . En los demás el depósito de calcio en los tejidos grasos, lesiona-
casos tiende a estar elevada, ya que la propia
dos por las enzimas liberadas por el páncreas, lo que
hipercalcemia inhibe la PTH y, por tanto, la fos- da lugar a la formación de sales cálcicas de ácidos
faturia. grasos, o jabones. Las hipocalcemias más intensas se
producen por la presencia en el organismo de sus-
tancias qu e quelan el calcio, como fosfato (enemas).
HIPOCALCEMIA En estos casos la calcemia puede bajar por debajo
del umbral de 5-6 mg/dl antes mencionado para la
Concepto falta de PTH.
Se define como la disminución del calcio sérico por La hipomagnesemia intensa produce hipocalce-
debajo del límite inferior de la normalidad (8,5 mg/ mia, por dificultar tanto la secreción como la actua-
dl). ción de la PTH.
CAPÍTULO 70 Patología general de las paratiroides y del metabolismo del calcio

Fisiopatología dos, flexión de muñeca y codo) (Fig. 70-4). En las


extremidades inferiores , hay flexión plantar de
Efectos de mecanismo conocido. Los principales
los dedos , arqueamiento del pie y contracción de
efectos de la hipocalcemia guardan relación con
los músculos de la pantorrilla. Si el espasmo se
un aumento de la excitablidad neuromuscular.
produce simultáneamente en las manos y en los
El fenómeno de mayor importancia derivado de
pies, se habla de espasmo carpopedal. No suele
la hipocalcemia es la tetania. Consiste en una
haber contractura de los músculos de la cara. El
contracción muscular tónica, secundaria a la
espasmo es doloroso. Puede producirse espasmo
descarga espontánea de las fibras motoras de los
glótico, que determina disnea y estridor laríngeo.
nervios periféricos. Aunque se trata de un fenó -
Por afectación de la fibra muscular lisa puede
meno puramente motor, el término tetania se uti-
aparecer disfagia, dolor abdominal, cólico biliar
liza también, por extensión, para referirse a otros
y broncospasmo.
fenómenos derivados de la descarga espontánea
En ocasiones, la tetania puede ponerse de
de fibras nerviosas no motoras. En el sistema
manifiesto mediante diversas maniobras. Una
nervioso central, el aumento de la excitabilidad
de ellas consiste en percutir el nervio facial por
puede traducirse en convulsiones.
delante del pabellón auricular, lo que da lugar
La hipocalcemia probablemente es capaz de
a la contracción de la musculatura facial, con
disminuir la contractilidad muscular, sobre todo
participación de un número de músculos mayor
en el miocardio, dando lugar a insuficiencia car-
o menor según la intensidad del proceso (des-
diaca.
viación de la comisura bucal, apertura del ala
Efectos de mecanismo mal conocido. Incluyen
de la nariz, contracción del ángulo externo del
las cataratas, la calcificación de los ganglios ba-
ojo). El fenómeno se conoce como signo de Ch-
sales y los trastornos de la dentición. A diferen-
vostek. Otra de las maniobras se conoce como
cia de lo que ocurre con las manifestaciones neu-
signo de Trousseau, y consiste en la provocación
romusculares , estas alteraciones no son propias
de isquemia en el brazo durante unos minutos
de la hipocalcemia aguda, sino de la crónica.
(insuflando el esfigmomanómetro por encima
de la presión sistólica). En caso de respuesta po-
Manifestaciones clinicas sitiva, el enfermo acaba presentando la «mano
Manifestaciones neurológicas. La más frecuente de comadrón» (Fig. 70-4). La tetania se produce
es la tetania, que habitualmente tiene lugar en con más frecuencia en pacientes con hipocalce-
forma episódica. El ataque típico comienza con mia aguda que con calcemias bajas mantenidas.
parestesias en la punta de los dedos de la mano Merece la pena recordar que puede producirse
y alrededor de la boca, que más tarde aumentan tetania con calcemia normal en pacientes con
de intensidad y se desplazan en sentido proxi-
mal; al mismo tiempo aparece sensación de ten-
sión en los músculos de las extremidades y de
la cara. Posteriormente se establecen espasmos
musculares, siguiendo el mismo patrón que las
manifestaciones sensitivas. La mano suele adop-
tar la forma de mano en comadrón o de partero
(aducción del pulgar, flexión metacarpofalángi-
ca, extensión interfalángica con los dedos uni-

Figura Mano en comadrón durante la realiza-


ción de la prueba de Troussea u. ~
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

alcalosis, porque en esa situación aumenta la riza por la aparición de quistes óseos y de resorción
unión del Ca++ a las proteínas, descendiendo su subperióstica.
concentración.
Otras manifestaciones neurológicas son las Fisiopatología y manifestaciones
convulsiones y en la hipocalcemia crónica se
Los efectos de la actuación excesiva de la PTH pue-
pueden observar calcificaciones de los ganglios
den sistematizarse en dos grandes apartados: los re-
basales que pueden acompañarse de parkinso-
lacionados con la hipercalcemia y los relacionados
nismo.
con la alteración ósea.
Manifestaciones circulatorias. El aumento de
excitabilidad facilita la aparición de arritmias. Manifestaciones derivadas de la hipercalcemia.
En el ECG se puede observar una prolongación Acaban de exponerse.
del intervalo QT a expensas del segmento ST Manifestaciones derivadas de las alteraciones
(Fig. 70-3). óseas. Pueden clasificarse en dos grupos:
Otras manifestaciones clínicas. La hipocalcemia Derivadas del aumento del recambio óseo.
mantenida durante la infancia puede dar lugar a El aumento del recambio óseo facilita la
trastornos de la dentición, con pérdida prematu- pérdida de masa ósea, lo que conduce a os-
ra de las piezas dentarias. teoporosis y un aumento en la incidencia de
Alteraciones bioquímicas. La concentración sé- fracturas .
rica de calcio siempre es baja. La fosfatemia tien- Osteítis fibrosa quística. Puede cursar con
de a disminuir cuando la concentración de PTH dolor óseo y, debido a las lesiones quísticas,
está aumentada y a elevarse cuando es deficitaria con fracturas.
(hipoparatiroidismo). Los niveles séricos de la
PTH varían con la causa. Hiperparatiroidismo asintomático. Es necesario
En pacientes con hipocalcemia es interesante tener en cuenta que , pese al elevado número de
conocer la cifra de magnesio, ya que la depleción manifestaciones que pueden observarse en él, la
del mismo puede dificultar la corrección de la mayor parte de las veces el hiperparatiroidismo
cifra sérica de calcio. es asintomático.
Alteraciones bioquímicas . Hay hipercalcemia,
hipofosfatemia, hipercalciuria e hiperfosfaturia.
HIPERPARATIROl □ ISMO Los niveles de PTH están aumentados.
E HIPOPARATIROl □ ISMO
HIPOPARATIROIDISMO
HIPERPARATIROIDISMO
Concepto Concepto
Es el estado de hiperfunción paratiroidea que se debe Se conoce como hipoparatiroidismo el estado de hi-
a un aumento de secreción de la hormona. Cuando pofunción paratiroidea. Habitualmente se debe a una
dicho aumento es consecuencia de la hipocalcemia, disminución de la secreción de PTHpor lesión de las
se denomina secundario. Cuando no se debe a tal es- glándulas paratiroides, aunque en algún caso concre-
tímulo, recibe el nombre de primario, y su causa más to -poco frecuente- puede deberse a resistencia de
frecuente es el adenoma paratiroideo. Las considera- los órganos efectores. Esta última situación se conoce
ciones que figuran a continuación se refieren exclusi- como pseudohipoparatiroidismo.
vamente al hiperparatiroidismo primario.
Patogenia
Patogenia La falta de acción de la PTH se traduce en hipocal-
El exceso de PTH da lugar a hipercalcemia e hiper- cemia e hiperfosfatemia. El hueso tiende a una situa-
calciuria. Pese a que la PTH estimula la reabsorción ción de recambio óseo bajo, pero ello no tiene una
tubular distal de calcio, se produce hipercalciuria trascendencia clínica.
porque la hipercalcemia hace que se filtre por el glo-
mérulo un exceso de calcio que no puede compensar Fisiopatología y manifestaciones
el aumento de reabsorción. Sus consecuencias se limitan a las derivadas de la hi-
Debido al acoplamiento existente entre destruc- pocalcemia.
ción y formación óseas, el incremento de la resorción Desde el punto de vista bioquímico, tanto el hipo-
ósea producido por la PTH va seguido de un aumen- paratiroidismo como el pseudohipoparatiroidismo se
to de la formación. El resultado es un aumento del caracterizan por hipocalcemia e hiperfosfatemia. La
recambio óseo. Excepcionalmente, la destrucción no PTH, por definición, está disminuida en el hipopara-
va seguida de formación, y se produce una osteopatía tiroidismo, mientras que en el pseudohipoparatiroi-
584 denominada osteítis fibrosa quística, que se caracte- dismo está elevada.
·171
Patología general
del crecimiento
José Manuel Olmos Martínez, José Antonio Amado Señaris

FISIOLOGÍA DEL CRECIMIENTO


El crecimiento normal es un proceso
largo y complejo por el cual un óvulo
fecundado llega a convertirse finalmente en
un ser humano adulto normal. En la evolución del
crecimiento influyen numerosos factores: genéticos,
hormonales, metabólicos, nutricionales, psicológicos
y ambientales. En el crecimiento pueden diferenciar-
se dos periodos, cuya regulación es diferente.
El crecimiento intrauterino, si no hay anomalías
genéticas fetales, depende fundamentalmen-
te del débito materno (la madre aporta a través
de la placenta los nutrientes y las condiciones
metabólicas necesarias para que el feto pueda
crecer, y marca el espacio intrauterino disponi-
ble para acomodarlo). Las hormonas fetales más
influyentes en este periodo son la insulina y los
factores de crecimiento similares a la insulina.
La somatotrofina y las hormonas tiroideas son
poco importantes para el crecimiento intraute-
rino, ya que, en ausencia de ambas, los recién
nacidos tienen un peso normal (aunque el desa-
rrollo cerebral se ve alterado en el cretinismo).
El crecimiento extrauterino depende de la do-
tación genética del niño: si el resto de las con-
diciones son adecuadas, este tenderá a alcanzar
la talla media de sus padres. Además, se nece-
sita un correcto aporte nutricional, un entorno
emocional adecuado y una función hormo-
nal normal. La hormona de crecimiento
y las hormonas tiroideas son esenciales
para el crecimiento posnatal. Llegada
la pubertad, se produce una acelera-
ción del crecimiento mediada por
585
las hormonas sexuales. El estirón
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla -1 Influencia de diversos síndromes endocrinos sobre el crecimiento


Síndrome Crecimiento lineal Edad ósea Talla final
Hipersomatotrofismo Aumenta No aumenta o lo hace Aumenta
ligeramente
Hiposomatotrofismo Disminuye Se retrasa Disminuye
Hipertiroidismo Aumenta ligeramente Aumenta ligeramente Varía poco
Hipotiroidismo Disminuye Se retrasa Disminuye
(extremidades cortas)
Hipercortisolismo Disminuye Se retrasa Disminuye
Hiperandrogenismo/ Aumenta Aumenta Disminuye
Hiperestrogenismo
Hipoandrogenismo/ Aumenta en las Se retrasa Aumenta (hábito
Hipoestrogenismo extremidades eunucoide)
Diabetes mellitus mal Disminuye Variable Disminuye
controlada

puberal cierra los cartílagos de crecimiento y de tectar si en algún momento se produce una detención
esta manera se alcanza la talla final definitiva. o desaceleración. Además , se debe registrar la evolu-
En general , un crecimiento normal indica una ción de las proporciones esqueléticas y del peso.
situación de buena salud del niño, ya que cual- La maduración ósea (o edad ósea) se valora me-
qu ier enfermedad tiende a detenerlo. diante una radiografía de la mano , que se compara
con los patrones de normalidad. La edad ósea de un
niño normal suele ser coherente con su edad cronoló-
EXPLORACIÓN DEL CRECIMIENTO gica. Teniendo en cuenta la edad, la talla, la edad ósea
y la talla de los padres, se puede hacer una predicción
El crecimiento intrauterino se valora mediante la
de la estatura final que va a alcanzar el niño.
ecografía, que permite medir los diámetros de la ca-
Llegado el periodo peripuberal, se valora el estadio
beza, el tamaño de las extremidades, el desarrollo es-
de desarrollo de los caracteres sexuales secundarios,
qu elético y visceral, etc.
comparándolos con los patrones establecidos para
El crecimiento extrauterino se valora midiendo
cada edad y sexo, con el fin de determinar si la edad
la talla en las sucesivas con sultas y comparándola
de aparición de la pubertad es la que corresponde.
con los patrones de normalidad para su edad y sexo.
Las pruebas de laboratorio que se emplean para
Generalmente, hacia los dos años de edad el niño se
valorar los trastornos del crecimiento son comple-
sitúa en el percentil en el que va a crecer a lo largo
jas, dependiendo de la posible causa desencadenan-
de su vida qu e, como ya se ha dicho, en ausencia de
te del proceso (estudio cromosómico, determinacio-
factores patológicos, depende básicamente de la dota-
nes bioqu ímicas u hormonales en sangre y orina,
ción genética heredada de sus padres. Así, los niños
etc.).
normales nacidos a término que son relativamente
pequeños al nacer, experimentan una aceleración de
la velocidad de crecimiento hasta colocarse en el per-
centil que les corresponde en función de su dotación HIPOCRECIMIENTO
genética (representada por la talla media parental)
antes de los 2 años. Lo contrario ocurre en los niños
que nacen con más talla de la que corresponde a su HIPOCRECIMIENTO (O RESTRICCIÓN
dotación genética. Se calcula que dos tercios de los DEL CRECIMIENTO) INTRAUTERINO
niños normales cambian de percentil desde el naci-
Puede deberse a:
miento hasta los 2 años .
La gráfica de crecimiento sirve también para cuan- Anomalías fetales: anomalías cromosómicas
586
tificar la velocidad de crecimiento anual y para de- y genéticas, infecciones intrauterinas como la
CAPÍTULO 71 Patología general del crecimiento

rubéola o la toxoplasmosis, malformaciones con- dismo, hipercortisolismo, diabetes mellitus mal


génitas de órganos vitales como los riñones, etc. controlada) (Tabla 71.1).
Anomalías placentarias: implantación anormal Enfermedades crónicas graves (pulmonares,
de la placenta, trastornos vasculares, etc. cardiacas, renales, intestinales, etc.}, que por sí
Enfermedades de la madre: desnutrición, enfer- mismas producen hipocrecimiento, y cuyo trata-
medades vasculares, malformaciones uterinas, miento puede retrasar todavía más el crecimien-
ingesta de tóxicos como alcohol, tabaco, opiá- to (p. ej., los corticoides en el asma) .
ceos, cocaína, etc. Se considera que los neonatos Trastornos nutricionales (malnutrición, malab-
cuyo peso es inferior al percentil 10 presentan sorción, etc.).
hipocrecimiento intrauterino. Deprivación emocional (niños que viven en un
ambiente familiar adverso: «enanismo psicoso-
Se diferencian dos tipos de hipocrecimiento intra- cial»).
uterino: el simétrico (en el que están afectados por
igual el peso, la longitud y el perímetro cefálico},
Enfermedades esqueléticas diversas, que origi-
nan un enanismo con desproporción de miem-
que produce un crecimiento posnatal lento, y el asi-
bros o anomalías esqueléticas visibles (displa-
métrico (esqueleto pequeño para la edad gestacional,
sias óseas congénitas, como la acondroplasia o
con reducción desproporcionada de la cantidad de
tejido blando), que probablemente se debe a malnu- el raquitismo).
trición intrauterina y que produce retraso grave del El enanismo es armonioso (están afectadas por
crecimiento. Se ha sugerido que esta última forma igual las extremidades superiores e inferiores) en la
puede condicionar resistencia a la insulina en la mayoría de los casos descritos, salvo en el hipotiroi-
vida adulta, así como propensión al síndrome me- dismo no tratado, en el que las extremidades son ex-
tabólico. cesivamente cortas, y en las displasias óseas.
El hipocrecimiento intrauterino debe diferenciarse Los niños que desarrollan hiperandrogenismo o
de la prematuridad (nacimiento antes de la semana hiperestrogenismo antes de la pubertad presentan
37 de gestación). Los neonatólogos consiguen hoy inicialmente una aceleración del crecimiento, junto
en día que sobrevivan prematuros de menos de 1 kg. con cierre prematuro de los cartílagos de crecimiento,
Los prematuros sanos más grandes pueden alcanzar pero la talla final es baja.
su talla normal a los 2 años, pero los que nacen con
un peso extremadamente bajo pueden no alcanzar su
percentil hasta los 8 años de edad.
HIPERCRECIMIENTO

HIPOCRECIMIENTO POSTNATAL HIPERCRECIMIENTO INTRAUTERINO


Suele deberse a anomalías en los genes implicados en
(FETOS MACROSÓMICOS)
el crecimiento o a trastornos en los factores intrínse- Puede deberse a:
cos y extrínsecos necesarios para el crecimiento (hor-
monales, nutricionales, metabólicos, psicológicos, Causas genéticas: talla familiar alta, otras enfer-
etc.). Las causas más frecuentes son: medades con malformaciones complejas.
Diabetes mellitus materna: la hiperglucemia ma-
Baja estatura familiar. terna provoca un aporte excesivo de glucosa al
Retraso constitucional en el crecimiento y en el feto, que reacciona liberando insulina, que au-
desarrollo sexual (niños en los que el crecimien- menta el anabolismo fetal.
to es lento pero más prolongado de lo normal, ya
que la pubertad también se retrasa); estos niños
alcanzan, sin embargo, la talla final predicha por
la talla media de los padres. HIPERCRECIMIENTO POSTNATAL
Retraso en el crecimiento intrauterino (niños pe- Puede deberse a:
queños para su edad gestacional}, aislado u oca-
sionalmente asociado a malformaciones comple- Causas genéticas: talla familiar alta o enferme-
jas (p. ej., síndrome de Russell-Silver, síndrome dades con malformaciones complejas, como el
de Noonan). síndrome de Weaver, el síndrome de Marfan y la
Anomalías cromosómicas o genéticas (síndrome homocistinuria.
de Turner, síndrome de Prader-Willi, etc.}, en ge- Hipersomatotrofismo (gigantismo hipofisario).
neral con malformaciones complejas e hipocre- Eunucoidismo.
cimiento desde el periodo intrauterino. Aceleración temporal del crecimiento del hiper-
Enfermedades endocrinas en las que se bloquea tiroidismo, hiperandrogenismo o hiperestroge-
587
el anabolismo (hiposomatotrofismo, hipotiroi- nismo.
-172
Patología general
del metabolismo
de los hidratos de carbono
José Antonio Amado Señaris

FISIOLOGÍA
DE LA REGULACIÓN
DE LA GLUCEMIA
La glucosa es una de las principales
fuentes de energía para las células. Las
neuronas la captan directamente de la san-
gre por un mecanismo independiente de la insulina
y es la única fuente energética que utilizan en condi-
ciones fisiológicas. Ya que la captación neuronal de
glucosa es proporcional a la glucemia, es necesario
mantener esta por encima de unas cifras mínimas
que garanticen un funcionamiento cerebral normal.
El ser humano alterna periodos de alimentación, en
los cuales puede entrar directamente glucosa a la
sangre desde el exterior, con periodos de ayuno , en
los que la glucosa procede del hígado. Los mecanis-
mos reguladores mantienen la glucemia a lo largo del
día entre 70 mg/dl (fase de ayuno) y 140 mg/dl (fase
postprandial), mientras que la concentración de otros
sustratos energéticos oscila mucho más.
La ingesta de alimentos estimula la secreción de
insulina e inhibe la de glucagón (Fig. 72-1). La ele-
vación de la insulina en la vena porta facilita la cap-
tación de glucosa procedente de los alimentos por el
hígado e inhibe la producción hepática de glucosa. La
glucosa captada por el hígado se almacena como glu-
cógeno. Además , la elevación de la insulina aumenta
la captación, oxidación y depósito de glucosa en los
tejidos muscular y adiposo. En esta fase la glucosa
se convierte en el principal sustrato energético
del organismo. La insulina, además , suprime la
lipólisis y activa la lipogénesis en el tejido adi-
poso, y facilita la captación de aminoácidos
por las células y la síntesis de proteínas.
En el periodo de ayuno determinados
tejidos (cerebro, células sanguíneas,
médula renal) continúan consumien-
588 do glucosa, de manera que esta tien-
CAPÍTULO 72 Patología general del metabolismo de los hidratos de carbono

Hígado

1 1
1 \
\ \
\ ' '------► Músculo
-------►

Alimentación

Cerebro

Tejido
adiposo
Situación hormonal: i insulina
J. hormonas contrainsul ares
• Lugar de acción de las hormonas

Figura Regulación de la glucem ia tras la ingesta.

de a bajar en sangre, con lo que se produce un des- glucosa. La glucosa procede del catabolismo del glu-
censo de la insulina y una elevación del glucagón y cógeno hepático durante las primeras 12-24 horas de
de otras hormonas hiperglucemiantes (Fig. 72-2). La ayuno, pero, a medida que este se agota, se activa la
hipoinsulinemia aumenta la producción hepática de gluconeogénesis. Los principales sustratos gluconeo-

Hígado

Al anina
Piruvato
Lactato
Gl icerol
'\
Glucosa I
plasmática 4 ....- - - -

'
Cuerpos Áci dos
cetóni cos grasos
1 libres

Cerebro

Tejido
Situación hormonal: J. insul ina adiposo
i hormonas contrainsul ares
• Lugar de acc ión de las hormonas

Figura Regulación de la glucemia en la fase de ayuno. 589


SECCIÓI\I VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

génicos son el glicerol (procedente de la lipólisis en La glucemia plasmática basal (en ayunas de 8 ho-
el tejido adiposo) y el lactato, el piruvato y la alani- ras) es superior a 125 mg/dl en dos días distintos.
na (procedentes del músculo esquelético y del tracto Aparecen los síntomas clásicos de la DM (véase
esplácnico). El músculo capta muy poca glucosa du- abajo) asociados a una glucemia a cualquier hora
rante este periodo (debido a las bajas concentraciones del día superior a 199 mg/dl.
de insulina) y utiliza como combustible principal los La glucemia a las dos horas de un test de toleran-
ácidos grasos libres (AGL). Estos AGL proceden de la cia oral a 75 g de glucosa es superior a 199 mg/dl.
lipólisis del tejido adiposo que origina el descenso de La realización del test ha de hacerse en pacien-
la insulinemia. Parte de los AGL se convierten en el tes ambulatorios, sin enfermedades agudas y en
hígado en cuerpos cetónicos, que sirven como sustra- condiciones estandarizadas.
to energético para el músculo, siempre y cuando haya La HbAlc es superior al 6,4 %.
unas cantidades mínimas de insulina circulante que
permitan su captación. Se considera que una persona está en riesgo de pa-
La secreción de insulina por las células /3 depende decer diabetes si se da cualquiera de las siguientes
de la actividad de una enzima, la glucocinasa, que circunstancias:
actúa como un glucorreceptor. Las células ~ son to- La glucemia plasmática basal está entre 100 y
talmente permeables a la glucosa, que se transforma 125 mg/dl (esta situación se denomina altera-
en glucosa-6-fosfato por la acción de la glucocinasa. ción de la glucemia en ayunas).
El consumo de fosfato intracelular, proporcional a la La glucemia plasmática a las 2 horas de ingerir
glucemia y a la actividad de la glucocinasa, desen- por vía oral 75 g de glucosa está entre 140 y 199
cadena una serie de cambios metabólicos que, final- mg/dl (esta situación se denomina intolerancia a
mente, inducen la liberación de insulina. la glucosa oral).
La HbAlc está entre el 5,7 y el 6,4 %.
EXPLORACIÓN ANATOMOFUNCIONAL Estos pacientes pueden evolucionar hacia la nor-
DEL METABOLISMO DE LOS HIDRATOS malidad, mantenerse en esta situación o avanzar ha-
DE CARBONO Y DEL PÁNCREAS ENDOCRINO cia una diabetes dependiendo de factores intrínsecos
(causa de la diabetes) o extrínsecos (evolución del
La prueba más sencilla es la determinación de la con- peso o del grado de sedentarismo, uso de fármacos,
centración de glucosa en suero o plasma (glucemia) etc.). En todo caso estos pacientes tienen además un
obtenido a partir de sangre venosa, cuyas cifras nor- riesgo cardiovascular aumentado con respecto a la
males en ayunas son 80-100 mg/dl y normalmente población sana.
no superan los 140 mg/dl tras las comidas. También Normalmente no existe glucosa en la orina. Cuan-
se puede medir la glucemia en una gota de sangre do se eleva la glucemia aumenta la glucosa filtrada en
capilar (obtenida por punción del pulpejo de los de- el glomérulo; si la carga de glucosa filtrada supera la
dos). mediante tiras reactivas acopladas a un aparato capacidad de reabsorción del túbulo aparece glucosa
(glucómetro) . Los diabéticos deben hacerse varias en orina (glucosuria). Sin embargo, no suele existir
determinaciones a lo largo del día (antes y después una buena correlación entre la glucemia y la gluco-
de las comidas). para tener una idea real de cuáles suria medidas simultáneamente, por lo que esta úl-
son las oscilaciones de su glucemia y modificar el tima determinación no se considera útil para evaluar
tratamiento según estas, ya que en ellos la glucemia el control metabólico de la diabetes. Hay además dos
existente en un momento determinado no refleja ne- situaciones en las que puede existir glucosuria sin
cesariamente cómo son sus niveles a lo largo del día , hiperglucemia (glucosuria renal familiar -tubulopa-
especialmente en la diabetes tratada con insulina. tía en la que hay una incapacidad para reabsorber la
Con el fin de evaluar la repercusión de la glucemia glucosa, pero la homeostasis glucídica es normal-) o
sobre el organismo se puede medir la concentración con pequeñas elevaciones de la glucemia (embarazo).
de algunas proteínas que son glicosiladas de forma La presencia de cuerpos cetónicos en la orina in-
no enzimática, es decir, en función de la glucemia dica déficit de insulina, que puede ser ligero (en la
existente. De ellas, la que se utiliza habitualmente es situación de ayuno) o intenso (en la cetoacidosis dia-
la hemoglobina glicosilada o HbAlc, que en sujetos bética).
normales representa entre el 4-5,6 % de la Hb total. La secreción de insulina puede estimarse mi-
Se estima que el porcentaje de HbAlc circulante es diendo sus niveles plasmáticos. Ello no es útil para
el reflejo del promedio de las glucemias existentes el diagnóstico de la diabetes mellitus, dado que en
durante las 6 a 9 semanas anteriores a su determina- estos pacientes la secreción de insulina es muy varia-
ción (este periodo depende de la vida del hematíe en ble. No obstante, puede ayudar a establecer si se trata
la circulación). de una diabetes tipo 1 o 2 (véase abajo). También es
Se considera que una persona tiene una diabetes útil la determinación de los niveles de péptido C ba-
mellitus (DM) cuando se da cualquiera de las siguien- salmente y en respuesta a la administración de gluca-
590
tes circunstancias: gón. El péptido C es segregado equimolecularmente
CAPÍTULO 72 Patología general del metabolismo de los hidratos de carbono

con la insulina, no se destruye al pasar por el hígado forma que aparece en adultos, de comienzo
y aunque sus efectos biológicos son discutidos, cons- menos brusco (DM tipo LADA, del inglés «late
tituye un buen indicador de la capacidad secretora autoinmune diabetes of the adult»), que puede
de insulina del páncreas. Además, su determinación confundirse inicialmente con una DM tipo 2. Al
no está interferida por la presencia de anticuerpos debutar la DM1 se detectan anticuerpos contra
antiinsulina. La determinación de insulina, por su antígenos de las células ~' aunque la destruc-
parte, es muy útil en la evaluación de las hipoglu- ción de estas células no está mediada por an-
cemias de ayuno, para distinguir los casos mediados ticuerpos sino por autoinmunidad celular. Más
por insulina (insulinoma, administración exógena de del 90 % de estos pacientes presentan antígenos
insulina) de los que no lo son. En el estudio de los de histocompatibilidad HLA-DR3 , DQB1 *0201
síndromes hipoglucémicos del ayuno se realizan de- o DR4, DQB1 *0301, mientras que otros alelos
terminaciones seriadas de glucosa e insulina durante protegen frente a la enfermedad. Estos pacientes
una prueba de ayuno de 48-72 horas, para ver si se presentan una tendencia a padecer otros proce-
produce hipoglucemia asociada a hiperinsulinemia sos autoinmunes organoespecíficos. Un peque-
inapropiada. Otro tanto puede hacerse en las hipo- ño número de casos de DM1 no parecen debidos
glucemias reactivas tras la administracion de glucosa a destrucción autoinmune de los islotes (forma
o alimentos. idiopática].
El diagnóstico específico de otras alteraciones del Insuficiente secreción de insulina, que es inca-
metabolismo de los hidratos de carbono, como las paz de compensar la resistencia a la insulina de
glucogenosis, debidas a deficiente actividad de algu- los tejidos periféricos (deficiencia relativa de in-
na de las enzimas que intervienen en su metabolismo, sulina). Es característica de la DM tipo 2 (DM2),
puede requerir la realización de biopsias y estudio de que supone del 90-95 % de los casos de DM. La
la actividad enzimática o estudios del gen correspon- mayoría de estos pacientes tienen sobrepeso u
diente. obesidad y suelen ser sedentarios (Fig. 72-3). Esto
El estudio morfológico del páncreas endocrino, origina una resistencia a la insulina en los tejidos
cuando se sospecha un insulinoma, por ejemplo, pue- periféricos (tejido adiposo, músculo, hígado) que
de realizarse mediante pruebas de imagen como la obliga a aumentar la secreción de insulina para
ecografía (que puede hacerse incluso intraoperatoria mantener la glucemia normal. La resistencia a la
colocando la sonda sobre el propio páncreas), la TAC, insulina de los obesos se debe a múltiples facto-
la RM o la gammagrafía con octreótido marcada con res (altos niveles de ácidos grasos libres circu-
yodo radiactivo (que se fija en los tejidos que tienen lantes, liberación de adipocinas que aumentan la
receptores para somatostatina como las células ~ del resistencia a la insulina, almacenamiento del ex-
páncreas). ceso de lípidos en el hígado y el músculo, etc.).
Es posible que en algunos pacientes no obesos
la resistencia a la insulina se deba a mutaciones
DIABETES MELLITUS genéticas. Sea cual sea el mecanismo, si la perso-
na es capaz de mantener una hipersecreción de
La diabetes mellitus (DM) es un síndrome complejo, insulina adecuada para compensar la resistencia
que se origina cuando la glucemia o la HbA1c superan periférica frente a esta hormona, la glucemia se
los límites referidos previamente, en el que se afecta mantiene normal, pero con el tiempo la sobre-
no solo el metabolismo de los hidratos de carbono, carga de las células ~ provoca que la secreción
sino también el de los lípidos y el de las proteínas. Si de insulina vaya siendo cada vez menor, a lo
el tratamiento no consigue normalizar la glucemia, a largo de los años , desarrollando finalmente una
lo largo de los años aparecen complicaciones cróni- DM. Estos pacientes pueden tratarse con dieta y
cas peculiares del síndrome (microangiopatía, neuro- ejercicio, asociados o no a antidiabéticos orales,
patía, macroangiopatía). aunque al final pueden precisar insulina para
alcanzar un control metabólico adecuado. Gene-
ralmente afecta a adultos de más de 40 años y
ETIOPATOGENIA DE LA DIABETES MELLITUS suele evolucionar insidiosamente durante años
Destrucción autoinmunitaria de las células ~ de sin que se diagnostique, al ser poco sintomática.
los islotes pancreáticos (deficiencia absoluta de Reaven sugirió una hipótesis etiopatogénica, hoy
insulina) . Es la llamada diabetes mellitus tipo en día controvertida, que considera que la resis-
1 (DM1). Supone el 10 % de los casos de DM. tencia a la insulina y el hiperinsulinismo reacti-
La ausencia de células ~ provoca una caren- vo, además de alterar la homeostasis glucídica,
cia absoluta de insulina e hiperglucemia grave son responsables de la aparición de una serie de
sintomática, que si no se trata con insulina es trastornos en estos pacientes, que, en conjunto,
mortal ya que evoluciona hacia la cetoacido- aumentan marcadamente el riesgo cardiovascu-
sis. Es típica de niños y adolescentes, aunque lar (hipertensión arterial, dislipemia, disfunción
591
puede desarrollarse a cualquier edad. Hay una endotelial, aumento de factores procoagulantes,
SECCIÓN Vil Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Sa lida de Depósito Incapacidad de las


Ba lance Aumento
lípidos a ectóp ico > Resistencia cé lulas~ para
energético del tejido
tej idos de líp idos a la insu lina responder secretando
positivo adiposo
no grasos (ej. hígado) insulina

1. Inflamación crónica
local de bajo grado
(> citocinas HI PERG LUCEM IA
inflamatorias)
2. > leptina, > resistina
3. < adiponectina

Figura Regulación de la glucemia en la fase de alimentación.

inhibición de la fibrinólisis, etc.), configurando fármacos o agentes químicos (glucocorticoides,


así el llamado síndrome X o síndrome metabó- ácido nicotínico, tiazidas, inhibidores de las
lico. proteasa en el paciente con VIH, etc.), que au-
Insuficiente secreción de insulina, que es inca- mentan la resistencia a la insulina o inhiben su
paz de compensar la resistencia a la insulina secreción.
de los tejidos periféricos durante el embarazo Otras formas raras de DM. Asociada a rubéola
(diabetes gestacional) . El embarazo produce re- congénita, por anticuerpos antirreceptor insu-
sistencia a la insulina y puede desenmascarar línico, asociada a síndromes genéticos comple-
una DM, que hasta entonces no se había mani- jos, etc.
festado. La diabetes suele desaparecer pasado
el embarazo, pero indica una menor capacidad
secretoria de las células~ que puede evolucionar FISIOPATOLOGÍA Y SEMIOLOGÍA
años después hacia una típica DM2 . DE LA DIABETES MELLITUS
DM debida a defectos genéticos específicos de
Los trastornos metabólicos de los diversos tipos de
la célula ~- En algunas familias se hereda con
carácter autosómico dominante una forma de DM se deben a la deficiencia de insulina. Muchos pa-
DM no insulinodependiente, y los síntomas apa- cientes con DMl o DM2 , pese al tratamiento , suelen
recen en la infancia (DM tipo MODY, del inglés presentar trastornos metabólicos crónicos, derivados
«maturity-onset diabetes in the young»). Di- de la incapacidad de los tratamientos actuales para
versas mutaciones monogénicas (al menos seis mantener una glucemia normal las 24 horas del día.
genes identificados) provocan una diabetes tipo Los enfermos con DMl que no reciben insulina evo-
MODY. Se ha desmostrado una menor actividad lucionan rápidamente hacia una descompensación
de la glucocinasa. La hipoactividad de esta enzi- metabólica aguda llamada cetoacidosis diabética.
ma exige concentraciones de glucemia más altas Los pacientes con DM2 pueden presentar también
descompensaciones metabólicas agudas, como la si-
para liberar insulina, es decir, se produce una
elevación en el «glucostato » insular. En otros tuación hiperglucémica hiperosmolar no cetósica o la
casos la DM se debe a mutaciones de ADN mi- acidosis láctica.
tocondrial y se transmite por herencia materna.
■ DM debida a defectos genéticos de la acción de Trastornos metabólicos cró nicos
la insulina. Se origina por mutaciones en el gen La deficiencia de insulina produce un aumento de la
del receptor de la insulina o de otros mediadores producción hepática de glucosa y una disminución
postreceptor. de su utilización periférica (que lógicamente se mani-
DM debida a trastornos que afectan al páncreas fiesta más en los periodos postprandiales) . Estos dos
en su conjunto, tanto exocrino como endocrino procesos provocan una elevación de la concentración
(pancreatitis, carcinoma pancreático, pancrea- plasmática de glucosa (hiperglucemia) . La hiperglu-
tectomía, hemocromatosis, fibrosis quística). cemia origina un aumento de glucosa en el filtrado
DM asociada a enfermedades endocrinas (acro- glomerular, que va a ser reabsorbida en los túbulos re-
megalia, síndrome de Cushing, feocromocitoma, nales , pero, si la carga de glucosa filtrada supera la ca-
592
glucagonoma, hiperaldosteronismo primario), pacidad tubular máxima de reabsorción, aparece glu-
CAPÍTULO 72 Patología general del metabolismo de los hidratos de carbono

cosa en la orina (glucosuria). La glucosuria facilita el de las partículas HDL circulantes y la aparición de
crecimiento bacteriano (y a las infecciones urinarias) partículas LDL pequeñas y densas, muy aterogénicas.
y conlleva una diuresis osmótica, que se manifiesta En la insulinopenia grave aumenta la proteólisis y
como poliuria, cuya intensidad es variable. La poliu- aunque los pacientes se alimenten bien desarrollan
ria a su vez desencadena una polidipsia secundaria. un balance nitrogenado negativo. El catabolismo pro-
Estos síntomas generalmente son muy evidentes en la teico grave mantenido produce detención en el creci-
DMl , mientras que en la DMZ pueden faltar. miento en los niños , retraso en la cicatrización de las
Cuando la insulinopenia es severa, como en la heridas y alteraciones de la inmunidad que facilitan
DMl , los pacientes presentan además polifagia. El las infecciones.
aumento de la ingesta de alimentos se atribuye a un
intento de compensar el catabolismo originado por la
Descompensaciones metabólicas agudas
falta de insulina, aunque la ausencia de esta impide
que se cumpla el objetivo, por lo que los pacientes Cetoacidosis diabética (CAD)
paradójicamente pierden peso. El adelgazamiento es Es una situación grave caracterizada por hipergluce-
un síntoma de deficiencia grave de insulina en un mia severa y acidosis metabólica debida al acúmulo
diabético. Polidipsia, poliuria y polifagia constituyen de cuerpos cetónicos. Puede deberse a:
las tres «P» de la diabetes (síntomas clásicos o cardi-
nales de la DM). Ausencia de secreción endógena de insulina (en
La deficiencia de insulina activa la lipólisis en el la DMl, la CAD es una forma frecuente de pre-
tejido adiposo , lo que produce un aumento de los sentación de la diabetes).
AGL circulantes, que empeora la hiperglucemia al Insuficiente administración de insulina en la
interferir con el consumo de glucosa en el músculo DM1.
y en el hígado (ciclo de Randle). La llegada de AGL Aumento de las necesidades de insulina (infec-
al hígado aumenta la síntesis de partículas VLDL , ción, infarto, etc.) , tanto en la DMl como en la
que además tienden a acunmlarse en sangre debido DMZ. La causa fundamental de la CAD es una
a la inadecuada acción de la lipoproteinlipasa, una carencia grave de insulina, que asocia un exceso
enzima endotelial insulinodependiente. La elevación de hormonas contrainsulares, especialmente de
de las VLDL en sangrn, a su vez, induce un descenso glucagón (Fig. 72-4).

f A lanina
Pi ruvato

Ac idosis
metaból ica

1 Hedor cetósico Pérdida de


agua y electro litos

• Luga r ele acció n


ele las ho rm onas Poliuri a

Figura Cetoacidosis diabética.


Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

La carencia de insulina aumenta marcadamente la mento de la osmolaridad plasmática resultante de la


producción hepática de glucosa, que no pu ede ser uti- hiperglucemia produ ce salida de agua de las células
lizada en los tejidos periféricos . Todo ello condiciona y origina una deshidratación intracelular, cuya ma-
una gran hiperglucemia (más de 400 mg/dl). que a su nifestación más clara es una disfunción del sistema
vez origina poliuria y polidipsia de varios litros/día. nervioso central (estupor, coma, convulsiones). No
Pese al efecto compensador de la polidipsia, de forma existe una explicación definitiva para la ausencia
progresiva se produce deshidratación y depleción de de cetoacidosis en esta situación. Tradicionalmente
electrolitos, que puede evolucionar hacia una insufi- se señala qu e hay suficiente insulina circulante para
ciencia renal. frenar la cetogénesis.
El aumento de la lipólisis hace que los AGL que
llegan en gran cantidad al hígado se transformen sin Acidosis láctica
control en cuerpos cetónicos, ya que no existen unas Es una acidosis metabólica grave debida a acúmulo
cantidades mínimas de insulina para regular el proce- de ácido láctico en el organismo. Aunque rara en la
so. El metabolismo de los AGL promueve un marcado DM, puede producirse por varias causas. El músculo,
incremento de acetil CoA en la mitocondria, que ex- cerebro y otros tejidos producen normalmente lactato
cede la capacidad de ser oxidado hacia CO 2 en el ciclo (glucólisis anaerobia). El hígado , los riñones y el cora-
de Krebs, por lo que dos moléculas de acetil CoA se zón normalmente lo consumen, pero pueden conver-
condensan para formar acetoacetato, que a su vez se tirse en grandes productores de lactato en situaciones
reduce a ~-hidroxibutirato o se decarboxila a acetona. de hipoxia tisular. Los diabéticos con lesiones vas-
Estas sustancias constituyen los cuerpos cetónicos, culares graves que condicionan hipoxia tisular son,
aunque el ~-hidroxibutirato no es una cetona. Los por ello, proclives a desarrollar una acidosis láctica
cuerpos cetónicos liberados a la sangre no pueden en cualquier situación que provoque hipoxia (shock,
ser utilizados por el músculo debido a la ausencia de insuficiencia cardiaca o respiratoria, etc.). especial-
insulina, de manera que aparece hipercetonemia y ce- mente si están tratados con metformina, que a su vez
tonuria. El acetoacetato y el ~-hidroxibutirato son áci- aumenta el acúmulo de ácido láctico.
dos y su acúmulo provoca una acidosis metabólica,
que va a desencadenar una respiración de Kussmaul Complicaciones orgánicas tardías derivadas del mal
(respiración frecuente y profunda). La acidosis puede
control metabólico crónico de la diabetes (Fig. 72-5)
producir vómitos (que empeoran la deshidratación y
la pérdida de electrolitos). disfunción miocárdica y La microangiopatía diabética
cerebral (aunque rara vez se llega al coma) . Los ce-
La microangiopatía (lesión de vasos pequeños) adop-
toácidos se eliminan como sales sódicas o potásicas ta dos formas: la retinopatía y la nefrop atía. Un
por la orina, aumentando la pérdida electrolítica. La
control metabólico estricto de la diabetes previene la
acetona puede ser eliminada por vía pulmonar y es la
aparición de la microangiopatía, lo cual indica que la
responsable del típico olor a manzanas de estos pa- hiperglucemia u otras alteraciones metabólicas ínti-
cientes.
mamente relacionadas con ella son esenciales para su
Descompensación hiperglucémica hiperosmolar no cetósica desarrollo. Entre ellas destacan10s:
Es una situación muy grave, caracterizada por una La glicosilación no enzimática de las proteínas
hiperglucemia extrema sin cetoacidosis, que provoca (Fig. 72-6 ). La glucosa puede reaccionar con los
un síndrome hiperosmolar. La producción hepática grupos amino de las proteínas, sin necesidad
máxima de glucosa no causa glucemias superiores a de la presencia de una enzima. Esta reacción
500 mg/dl si se mantiene una diuresis adecuada. Por produce una cetoamina estable, cuya cantidad
tanto, solo se puede llegar a esta situación cuando depende de la concentración de glucosa del
se suma además una incapacidad para excretar la medio y del tiempo de exposición de la pro-
glucosa. El proceso aparece típicamente en ancia- teína a la glucosa. Un ejemplo de cetoamina
nos con DM2 en los cuales un proceso intercurrente es la HbA 1 c o hemoglobina glicosilada, qu e se
(infección, infarto, etc.) aumenta la producción de forma en el interior de los eritrocitos y refleja
glucosa al activar las hormonas de estrés, todo ello el promedio de la glucemia a la qu e ha estado
acompañado de una ingesta de líquidos insuficien- sometida la hemoglobina durante la vida del
te. En estas condiciones la pérdida de agua inducida hematíe. Muchas otras proteínas (albúmina,
por la diuresis osmótica produce una progresiva re- apolipoproteínas, etc.) sufren una glicosilación
ducción del volumen extracelular, que origina una no enzimática. Las cetoaminas que se forman
insuficiencia renal prerrenal con oliguria progresiva. en moléculas de vida media larga como el co-
La glucemia puede elevarse hasta cifras extremas lágeno, la mielina o diversas proteínas del cris-
(más de 1000 mg/dl). ya que disminuye la excreción talino, sufren complejos reordenamientos mo -
de glucosa y se diluye en un volumen extracelular leculares a lo largo de años, que los convierten
menor. La deshidratación en este proceso es mucho en productos de Maillard o productos fin ales
594
más marcada que en la cetoacidosis diabética. El au- de glicosilación avanzada (PFGA). Los PFGA
CAPÍTULO 72 Patología general del metabolismo de los hidratos de carbono

HIPERGLUCEMIA
t
Aumento de glucosa intracelular e n tejidos no dependientes de insulina
(p. ej., endotelio vascular)

...
i Glicosilación
IJi.
i Sorbitol •
Í DAG
....
i Radicales
no enzimática intracelular -l. libres de
de proteínas Í PCC (j3 y y) oxígeno

\ I
I /
"Disfunción" de las células,. vasculares"
(endotelio capilar, células musculares lisas, etc.)

k
Trastornos ►
i Permeabilidad
t
ÍTGFb

Í PAl-1 i NF- kj3
del flujo capilar -l. (Í Fibrinólisis) (inflamación
capilar i Colágeno de bajo grado)
vascular

Figura Efectos intracelulares de la hiperglucemias sobre los vasos sanguíneos. DAG: diacilglicerol. PCC:
proteín cinasa C. TGFb: factor de crecimiento transformante . NF-kls: factor nuclear KB.

una vez formados son estables durante toda la necesidad de la insulina, la hiperglucemia au-
vida de la proteína y no desaparecen , aunque menta las concentraciones intracelulares de glu-
se normalice la glucemia. Los PGFA alteran la cosa, que se transforma en sorbitol. El sorbitol
estructura del colágeno vascular, de la mielina
no sale fácilmente de las células, por lo que si
y del cristalino.
se acumula en grandes cantidades produce daño
El acúmulo de sorbitol intracelular (Fig. 72-7) . osmótico. Este fenómeno está implicado en la
En los tejidos en los que la glucosa penetra sin patogenia de la catarata diabética. La síntesis de

1. [ FASE INICIAL

H O
"c //
1
(CHOH)4
1
----:---..
~ " 0- 0 - 0-

1
0- 0 / -+ " o- o- r- o- o/
(H,OH) NH H
11 1
CH CH,
Glucosa 1 1
Proteína (CHOH), C=O
1 1
CH, OH (CHOH),
Base de 1
Schiff CH,OH
Compuesto de
Amadori

2. GLICOSILACIÓ AVANZADA

Compuesto de Compuesto de Producto final de


Amadori + Amadori ___. glucosilación
avanzada
(enlace intermolecular)

Figura Gl icosilación no enzimática.


Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

H-C=O H, - C- OH H, - C- OH
1 1 1
H-C-OH H-C-OH AD- NADH
C=O
NADPH NADP-
1 1 1
OH-C-H
1
H-C-OH
\J OH - CH
1
H- COH
\J )1,
OH-C-H
1
H-C - OH
1 ALDOSA 1 SORBITOL 1
H-C-OH REDUCTASA H-COH DESHIDROGENASA H- C- OH
1 1 1
CH,OH CH,OH CH,OH

o - Glucosa Sorbitol o - Fruclosa

Figura La vía de l sorbito l.

sorbitol consume NAD+lo cual produce también retinianos, que provocan áreas de hipoxia tisular,
una disfunción celular. que liberan factores de crecimiento, que inducen la
La activación de las proteínacinasas C (PCC). formación de neovasos. En el glomérulo renal el cre-
Es una consecuencia del aumento de glucosa en cimiento de la matriz mesangial obstruye la luz de
los tejidos no insulinodependientes, ya que esta los capilares y provoca una insuficiencia renal termi-
activa directamente la síntesis de diacilglicerol nal. Mientras que la gran mayoría de diabéticos acaba
(DAG), que es un mensajero lipídico intracelular, padeciendo una retinopatía, solo algunos desarrollan
que a su vez activa las PCC ~ y 8, que modifican nefropatía, lo cual indica que la DM es una condición
la respuesta de las células vasculares en la re- necesaria pero no suficiente para que aparezca nefro-
tina, glomérulo renal, etc., aumentando la per- patía. La asociación de otro factor a la DM parece ser
meabilidad, expresando genes de inflamación y la responsable del trastorno renal. Este factor parece
facilitando la oclusión vascular. estar condicionado genéticamente (propensión a la
La activación de la vía de las hexosaminas, tam- hipertensión arterial, disfunción de enzimas necesa-
rias para regular la permeabilidad capilar).
bién consecuencia directa de la hiperglucemia.
A través de esta vía se generan mediadores que
regulan la activación de diversos genes de las cé- Semiología de la retinopatía diabética. La prime-
lulas vasculares (PAI-1, TGF-~). ra anomalía reconocible es una dilatación uniforme
Finalmente, el exceso de glucosa intracelular
de los capilares . Esta dilatación suele ser funcional
produce una gran liberación de radicales libres
y se acompaña de un aumento de la permeabilidad
de oxígeno desde las mitocondrias, que a su vez capilar. En algunos capilares se produce oclusión vas-
inducen diversas disfunciones celulares, ante- cular, que desencadena dilataciones de los capilares
(microaneurismas). La rotura de capilares anormales
riormente citadas.
origina pequeñas áreas de hemorragia en la retina, y
La patogenia de la microangiopatía diabética es el aumento de la permeabilidad capilar permite el
multifactorial y muy compleja. Aunque el trastorno escape de componentes plasmáticos a la retina, pro-
metabólico afecta a todo el organismo, determinados vocando exudados duros. Las lesiones descritas hasta
órganos se ven más afectados por sus características al10ra caracterizan la retinopatía no proliferativa, en
anatómicas y funcionales. La hiperglucemia induce la que no hay disminución de la agudeza visual. Si
en determinados tejidos (retina, glomérulo renal) un el proceso oclusivo sigue avanzando se produce is-
aumento de la producción de factores vasodilatores quemia retiniana (exudados algodonosos) y aparecen
locales, que producen un descenso de las resistencias neovasos que intentan mejorar la isquemia retiniana,
arteriolares, con lo que aumenta el flujo y la presión pero estos neovasos son anormales, pueden romper-
capilar. Este fenómeno produce hip erfiltración, con se y provocar graves hemorragias intrarretinianas o
escape transcapilar de albúmina. La permeabilidad fibrosarse y provocar tracciones y desprendimientos
capilar no se ve frenada por el engrosamiento progre- de retina (retinopatía proliferativa). En esta fase se
sivo de la membrana basal producido por la glicosila- puede llegar a la ceguera.
ción no enzimática del colágeno, porque ésta ha per- Semiología de la nefropatía diabética. Al poco
dido su estructura normal. La matriz mesangial renal tiempo de aparecer la diabetes se aprecian cambios
se expande, ya que sufre fenómenos de glicosilación en el riñón. Aumenta la tasa de filtración glomeru-
y atrapamiento de moléculas plasmáticas. El aumento lar y el tamaño del riñón y de los glomérulos. Lue-
de la permeabilidad capilar produce edema proteiná- go se instaura un largo periodo silente en el que no
ceo en la retina y proteinuria en el riñón. Finalmente, hay evidencia clínica de disfunción renal, pero, a los
aparecen fenómenos de microtrombosis en los vasos 10-15 años del debut de la enfermedad, en un grupo
CAPÍTULO 72 Patología general del metabolismo de los hidratos de carbono

de enfermos empieza a detectarse albuminuria entre ra una expresión cutánea de la microangiopatía. La


30-300 mg/día (microalbuminuria). que finalmente se retracción palmar de Dupuytren y las contracturas
convierte en proteinuria (más de 300 mg/día). Simul- articulares de los dedos se atribuyen a glicosilación
táneamente se observa una elevación de la presión del colágeno.
arterial y finalmente aparece una insuficiencia renal La diabetes mal controlada durante el embarazo
crónica. aumenta el riesgo de macrosomía malformaciones
fetales, mortalidad fetal y morbilidad y mortalidad
Las neuropatías diabéticas perinatal.
La DM puede provocar una afectación neurológica
diversa. La más frecuente es la polineuropatía distal,
preferentemente sensitiva (véase Capítulo 95). Pueden SÍNDROME HIPOGLUCÉMICO
verse también mononeuropatías, como la parálisis de
los pares craneales oculomotores y neuropatía auto- Se produce cuando la glucemia desciende a cifras in-
nómica (denervación cardiaca, gastroparesia, diarrea, feriores a 40-50 mg/dl, lo que provoca una disfunción
vejiga atónica, impotencia, etc.). La polineuropatía se cerebral, que puede llegar al coma.
debe a causas metabólicas (acúmulo de sorbitol, defi-
ciencia de mioinositol). mientras que la mononeuro-
patía suele ser de causa vascular (microinfartos por
afectación de los vasa nervorum). ETIOPATOGENIA
La hipoglucemia puede ocurrir por una salida excesi-
La macroangiopatía diabética
va de glucosa de la sangre (utilización celular o pér-
Es una arteriosclerosis de aparición más precoz (afec- didas externas) o por una entrada deficitaria (dismi-
ta incluso a las mujeres premenopáusicas, que nor- nución de la ingesta o escasa producción endógena).
malmente están protegidas frente a la arteriosclero- Hay situaciones con un marcado consumo de glucosa
sis), de distribución generalizada y con afectación de (ejercicio, embarazo, tumores) o pérdidas de glucosa
arterias más distales que la que ocurre en la población (glucosuria renal, embarazo), pero solo se produce hi-
no diabética. La DM además puede provocar una le- poglucemia cuando el hígado es incapaz de producir
sión histológica diferenciable de la arteriosclerosis, la suficiente glucosa para satisfacer las demandas peri-
esclerosis de la media o de Mi:inckeberg, que afecta féricas.
más a las arterias de mediano calibre, especialmente La hipoglucemia puede deberse a alteraciones de
en los miembros inferiores. Se caracteriza por depó- las hormonas reguladoras de la glucosa, en las enzi-
sito de calcio y de tejido conectivo en la capa media mas necesarias para sintetizar glucosa o en los sus-
arterial, lo que provoca una falta de distensibilidad tratos gluconeogénicos. Las alteraciones hormonales
de las arterias., incluyen el exceso de secreción o de acción de la
La macroangiopatía se manifiesta como cardiopatía insulina y la falta de hormonas contrarreguladoras.
isquémica (el infarto agudo de miocardio es la prime- Los trastornos enzimáticos pueden ser congénitos o
ra causa de muerte en la DM). trombosis cerebrovas- secundarios a enfermedad hepática. Los trastornos de
cular o isquemia de miembros inferiores, que muchas los sustratos se deben a incapacidad para movilizar o
veces lleva a la necesidad de amputación. utilizar estos.
La patogenia de la arteriosclerosis es multifactorial El síndrome hipoglucémico puede diferenciarse
(véase Capítulo 50). En la DM se asocian una serie de desde el punto de vista etiopatogénico en:
factores que aceleran su evolución:
Hipoglucemias de ayuno o postabsortivas (apa-
Disfunción endotelial. recen durante los periodos de ayuno).
Aumento de la proliferación de las células mus- Hipoglucemias reactivas o postprandiales (ocu-
culares lisas vasculares por la hiperglucemia, la rren después de las comidas).
hiperinsulinemia y el sorbitol. Hipoglucemias debidas a causas exógenas.
Dislipemia, glicosilación no enzimática y oxida-
ción de las lipoproteínas. Dentro de las hipoglucemias de ayuno se encuen-
Mayor incidencia de hipertensión arterial. tran:
Propensión a la trombosis (hiperactividad pla- El hiperinsulinismo endógeno del insulinoma
quetaria, aumento de los factores procoagulan- (tumor de las células ~ del páncreas que libera
tes) y disminución de la fibrinólisis. excesivas cantidades de insulina).
El cáncer (tumores malignos que consumen ex-
cesiva glucosa y producen factor de crecimiento
OTRAS COMPLICACIONES DE LA DIABETES similar a la insulina tipo II -IGF-II-, el cual acti-
La catarata diabética (opacificación del cristalino) va los receptores de la insulina).
se debe a glicosilación de las proteínas y a acúmu- La falta de una o varias hormonas contrainsula-
597
lo de sorbitol. La dermopatía diabética se conside- res (hormona de crecimiento, cortisol, glucagón).
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

La hepatitis fulminante . OTROS TRASTORNOS DEL METABOLISMO


La sepsis (aumento del consumo de glucosa me- DE LOS HIDRATOS DE CARBONO
diado por las citocinas).
La caquexia (falta de sustratos). Se incluye aquí un grupo heterogéneo de enfermeda-
des hereditarias en su mayoría, debidas a anomalías
El ejercicio muy intenso y prolongado. en diversas enzimas o proteínas necesarias en el meta-
En la infancia son causa de hipoglucemia el hi- bolismo de los hidratos de carbono. Su expresión clí-
perinsulinismo transitorio del hijo de madre dia- nica es muy variada. Muchas de ellas son infrecuen-
b ética y determinadas deficiencias congénitas de tes. Los trastornos de las disacaridasas intestinales
enzimas implicadas en la producción de glucosa. se estudian en el capítulo del Aparato Digestivo. Las
anemias hemolíticas por trastornos de las enzimas
Dentro de las hipoglucemias reactivas se encuen- eritrocitarias relacionadas con el metabolismo de la
tra la hipoglucemia de los gastrectomizados, en quie- glucosa se estudian en la sección de Hematología.
nes se produce una respuesta insulínica exagerada, Las glucosurias no diabéticas son un grupo de tras-
descoordinada con la entrada de glucosa. También tornos en los que se detecta un azúcar en orina (me-
se puede producir un desajuste en la liberación post- lituria), en ausencia de diabetes mellitus. Dentro de
prandial de insulina con hipoglucemia reactiva, de ellas se encuentran la glucosuria renal (se debe a in-
causa desconocida. capacidad del túbulo renal para reabsorber la glucosa
Las hipoglucemias por causas exógenas son las fisiológicamente filtrada a través del glomérulo) y las
más frecuentes y suelen deberse a excesivas dosis de meliturias sin glucosuria (fructosuria, pentosuria, ga-
insulina o sulfonilureas, o al consumo de etanol en lactosuria, etc.) en las que se excreta un azúcar que no
ayunas , que inhibe la gluconeogénesis. puede ser metabolizado hacia glucosa por ausencia
de la enzima correspondiente. Las meliturias pueden
ser benignas o formar parte de un trastorno más com-
FISIOPATOLOGÍA Y SEMIOLOGÍA plejo con graves alteraciones orgánicas, dependiendo
de la enzima afectada. Así, por ejemplo, en la defi-
La respuesta endocrina a la hipoglucemia se carac- ciencia de fructosa-1-fosfato-aldolasa o intolerancia
teriza por una inhibición en la secreción de insulina hereditaria a la fructosa la ingesta de este azúcar
(cuando la hipoglucemia no sea debida a hiperin- inhibe la gluconeogénesis y produce hipoglucemia,
sulinismo) y una rápida elevación en las concentra- mientras que en la deficiencia de galactosa-1,6, fosfa-
ciones de glucagón , adrenalina, hormona de creci- to-uridiltransferasa la incapacidad para metabolizar
miento y cortisol. El efecto hiperglucemiante a corto la galactosa produce hepatopatía crónica, cataratas y
plazo se debe a las dos primeras hormonas, mien- retraso mental.
tras que el efecto de las dos últimas es más lento. Las glucogenosis son otro grupo de trastornos enzimá-
El glucagón y la adrenalina producen un aumento ticos en los que, como su nombre indica, se acumula
de la glucogenólisis y de la gluconeogénesis y una glucógeno en diferentes órganos debido a la incapaci-
disminución del consumo periférico de glucosa, con dad para metabolizarlo. Existen básicamente dos tipos
lo que la glucemia tiende a subir. El glucagón es im- de glucogenosis: en unas se afecta preferentemente el
portante para esta respuesta, aunque en su ausencia hígado y el riñón (p. ej., en la glucogenosis tipo I o
la adrenalina es capaz de corregir la hipoglucemia enfermedad de van Gierke por deficiencia de glucosa-
eficazmente. 6-fosfatasa, en la que se produce hepatomegalia, hipo-
Cuando la glucemia cae por debajo de 55 mg/dl se glucemia, retraso de crecimiento, etc.), mientras que
producen síntomas de discreta neuroglucopenia (di- en otras se afecta más el músculo esquelético (p. ej.,
ficultad para concentrarse, disminución de las habili- en la glucogenosis tipo V o enfermedad de McArd-
dades psicomotoras complejas, incoordinación, cefa- le por deficiencia de la fosforilasa, que se caracteriza
lea). Cuando la glucemia cae por debajo de los 40 mg/ por una incapacidad para metabolizar el glucógeno
dl se activa el sistema simpatocromafín, que produce muscular; debido a ello durante el ejercicio aparecen
sudoración, temblor, palpitaciones, palidez, visión calambres, debilidad y dolor muscular, acompañado
borrosa y sensación de hambre. Las otras respuestas de salida de mioglobina y enzimas musculares a la
hormonales no producen síntomas. Si la respuesta sangre, mientras que característicamente no se produ-
neuroendocrina es incapaz de normalizar la glucemia ce salida de lactato).
aparecen síntomas de neuroglucopenia severa (alte- Las mucopolisacaridosis son otro grupo de enfer-
raciones del comportamiento, automatismos, confu- medades en las que se acumulan mucopolisacáridos
sión, convulsiones y finalmente coma). Las hipoglu- en diferentes tejidos debido a trastornos enzimáticos.
cemias graves y prolongadas pueden dejar secuelas Se afectan sobre todo los cartílagos, el hueso, la cór-
neurológicas irreversibles. nea y el sistema nervioso central.

598
·173
Patología general
del metabolismo lipídico
Jesús González Macias, José Luis Hernández Hernández

RECUERDO FISIOLÓGICO
ASPECTOS BIOQUÍMICOS
Los lípidos plasmáticos están consti-
tuidos por los ácidos grasos libres, los
triglicéridos, el colesterol y los fosfolí-
pidos. Los ácidos grasos son transpor-
tados en la sangre unidos a la albúmina.
Los triglicéridos , el colesterol y los fosfolípidos
son transportados conjuntamente, constituyendo, en
unión de un componente proteínico, las denomina-
das lipoproteínas.
Las lipoproteínas son partículas esféricas en las
que se distingue una región central, ocupada por mo-
léculas hidrófobas, y otra superficial, integrada por
moléculas con grupos polares, lo que les permite es-
tar en contacto con el agua. Los lípidos alojados en el
centro de las lipoproteínas son ésteres de colesterol y
triglicéridos. Los de la superficie son colesterol libre
y fosfolípidos. En la superficie se disponen, además,
las moléculas proteínicas (que denominamos apopro-
teínas o apolipoproteínas}. Las lipoproteínas se cla-
sifican en cinco grupos principales, de acuerdo con
su tamaño, densidad, movimiento electroforético y
composición de lípidos y proteínas:
Quilomicrones.
Lipoproteínas de muy baja densidad o VLDL
(del inglés very low density lipoprotein) .
Lipoproteínas de densidad intermedia o IDL (in -
termediate density lipoprotein) .
Lipoproteínas de baja densidad o LDL (low
density lipoprotein).
Lipoproteínas de alta densidad o HDL
(high density lipoprotein).
Los triglicéridos están formados por un
esqueleto de glicerol y tres ácidos grasos,
de longitud y saturación variables. Se
utilizan como fuente de energía. En ~
parte proceden de la dieta y en parte
SE Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

se sintetizan en el hígado. Se acumulan en el tejido relacionados con el metabolismo de las lipopro-


adiposo. teínas: la apo B-100 y la apo E son ligandos del
El colesterol tiene un papel estructural (forma par- receptor de las lipoproteínas LDL (por ello de-
te de las membranas celulares) y además se utiliza nominado también receptor B-100:E), y la apo E,
para la síntesis de ácidos biliares y de hormonas es- además, del receptor hepático de las partículas
teroideas. Su origen es en parte exógeno (dieta, que que después denominaremos residuales y de las
aporta unos 400 mg/día) y en parte endógeno (síntesis intermedias.
intracelular, que supone unos 600 mg/día). La enzi-
ma limitante de la síntesis endógena de colesterol es
la 3-hidroxi-3-metil-glutaril coenzima A (HMG CoA) ASPECTOS METABÓLICOS
reductasa.
Los fosfolípidos tienen, por una parte, una misión El transporte de los lípidos por las lipoproteínas pue-
estructural (membrana celular), y por otra, constitu- de considerarse integrado por tres sistemas: el siste-
yen los precursores de los que derivan mensajeros ma de los quilomicrones, el sistema VLDL-IDL-LDL y
inter e intracelulares (eicosanoides, inositolfosfato, el sistema de las HDL . El primero puede calificarse de
diacilglicerol). exógeno, en el sentido de que permite la absorción in-
Existen diversos tipos de apoproteínas (A, B, C, D testinal de los triglicéridos y el colesterol procedentes
y E), dentro de alguno de los cuales se distinguen, a de la dieta. El segundo, de endógeno, porque está al
su vez , varios subtipos. Sus funciones son varias: servicio de la distribución por el organismo del co-
lesterol y los triglicéridos secretados por el hígado. El
Estructural, en las propias lipoproteínas: La tercero se califica también de inverso, ya que permite
apoproteína B (apo B), de la que la forma apo el transporte hasta el hígado de los lípidos proceden-
B-100, es la proteína estructural de las lipopro- tes del resto del organismo.
teínas VLDL, IDL y LDL, y la forma apo B-48 de
los quilomicrones; la apoproteína A-I (apo A-IJ,
es la proteína estructural de las HDL. Sistema de los quilomicrones (Fig. 73-1)
Actuación como cofactores para enzimas espe- Los ácidos grasos y el colesterol absorbidos desde la
cíficas relacionadas con el metabolismo de las luz del intestino son esterificados en las células de
lipoproteínas: la apo A-I activa la lecitín-coles- la pared intestinal para formar triglicéridos y ésteres
terol-aciltransferasa (LCAT}, y la apo C-11 , la de colesterol. Ambos (los primeros en mayor propor-
lipoproteinlipasa (LPL) . ción) constituirán el núcleo de los quilomicrones.
Actuación como ligandos para receptores es- Una vez formados, los quilomicrones son vertidos a
pecíficos, presentes tanto en el hígado como en la linfa, desde donde alcanzan el torrente sanguíneo.
las células de los tejidos periféricos, también Ya en él, se incorporan a los quilomicrones algunas

Alimentos

Quilomi crón

INTESTINO

CÉLULA PERIFÉRICA

Figura Visión esquemática del metabolismo de las lipoproteínas que contienen apo B: a la izqu ierda, el
sistema de los lípidos exógenos o de los quilomicrones, y a la derecha el sistema de los lípidos endógenos o de
las VLDL-IDL-LDL. Los quilomicrones, procedentes del intestino, se transforman bajo la acción de la LPL (lipo-
proteinlipasa) en «residuos », que son retirados por el hígado. Las VLDL, procedentes del hígado, se transforman
sucesivamente en IDL y LDL bajo la acción primero de la LPL, y después de la LH (lipasa hepática). Las LDL son
600
retiradas por las célu las de los tejidos. Además, las IDL y las LDL pueden ir al hígado.
CAPITULO 73 Patología general del metabolismo lipídico

apoproteínas, como la C-II y la E, desde otras lipo- de este tipo de lipoproteína. Como consecuencia de
proteínas (las HDL). A través de la sangre, los quilo- estas dos acciones , el colesterol regula su propia con-
micrones se ponen en contacto con los tejidos. En la centración en las células. Por último , el colesterol ac-
superficie de los capilares de estos existe una enzi- tiva en el retículo endoplasmático la enzima acil-co-
ma, la LPL, que es activada por la insulina segregada lesterol-acil-transferasa, con lo que el colesterol libre
tras la ingesta, y que requiere para su actuación la se esterifica y almacena en la célula (el colesterol no
presencia de apoproteína C-II. La LPL hidroliza los esterificado es extremadanrnnte tóxico).
triglicéridos de los quilomicrones , transformándolos En el metabolismo del receptor LDL debe tenerse
en ácidos grasos libres y glicerol. Los ácidos grasos en cuenta, además de lo mencionado más arriba, la
libres son captados por las células tisulares para ob- existencia en el ambiente extracelular del enzima
tener energía y, en el caso de los adipocitos, para PCSK9, capaz de unirse a él facilitando su degrada-
volver a sintetizar a sus expensas triglicéridos , que ción.
quedan almacenados como reserva energética. Al Además de a través de su receptor, las LDL pueden
tiempo que los quilomicrones van vaciándose de su entrar en las células por otros mecanismos. Los ma-
contenido, algunos componentes de su capa superfi- crófagos y las células endoteliales poseen unos recep-
cial son transferidos a las HDL. Lo que queda de los tores («scavenger» o depuradores) que reconocen las
quilomicrones constituye lo que se denomina quilo- LDL oxidadas. Estos receptores no tienen regulación
micrones residuales (o remanentes). Estos quilomi- homeostática.
crones residuales son retirados de la sangre por el
hígado , cuyas células poseen un receptor específico Sistema de las HDL (Fig. 73-2)
para ellos. La apo E del quilomicrón residual actúa
como proteína de reconocimiento del receptor. Los Se considera que la misión de estas lipoproteínas es
quilomicrones son retirados del plasma rápidamente el transporte «inverso» del colesterol desde los te-
(4 horas), por lo que no deben estar presentes en la jidos periféricos al hígado, que puede reutilizarlo o
sangre de una persona que se encuentre en ayunas. bien eliminarlo por la bilis.
Las HDL se forman en el hígado y en el intestino.
En su forma «naciente» presentan una morfología
Sistema VLDL-IDL-LDL (Fig. 73-1) discoide. Su superficie adquiere colesterol libre de
De forma análoga al intestino, el hígado sintetiza un las células de los tejidos, bien por simple transferen-
tipo de lipoproteínas de gran tamaño y baja densi- cia, bien tras su unión a un receptor específico. Una
dad, muy ricas en triglicéridos: las VLDL. Su diáme- vez en la superficie de la HDL, este colesterol libre es
tro es algo menor y su densidad algo mayor que la de esterificado por la enzima lecitín-colesterol-aciltrans-
los quilomicrones. Tras ser vertidas a la sangre, las ferasa (LCAT), activada por la apo A-I. El colesterol
VLDL reciben, como los quilomicrones , apo C y E de esterificado pasa a disponerse en el interior de la
las HDL.
Las VLDL sufren también en el seno de los capila-
res la acción de la LPL, hidrolizándose sus triglicéri- Intestino
dos a glicerol y ácidos grasos libres, que pasan a las Hígado
células de los tejidos. Al irse vaciando de triglicéri-
dos, se transforman en IDL, que van al hígado; allí
pueden ser retiradas por los h epatocitos a través de ~ inación
los receptores que reconocen la apo E, o continuar de colesterol
HDL con la bilis
experimentando la pérdida de sus triglicéridos, aho- /
ra bajo la acción de una enzima denominada lipasa
h epática. La pérdida de triglicéridos transforma las
IDL en LDL. Estas apenas poseen ya triglicéridos, Sistema
o
siendo el colesterol su componente fundamental. Las inverso (HDL)
LDL son finalmente retiradas de la circulación por el
receptor LDL de las diversas células del organismo .
Los receptores LDL, tras unirse a la lipoproteína,
se invaginan, formando una vesícula. Desde ella la
lipoproteína es transferida a un lisosoma, volviendo Tejidos
1~
•• ••
el receptor a la superficie celular. La lipoproteína es
digerida por las enzimas, liberándose colesterol no Figura Vis ión esquemática del metabolismo de
esterificado. Este colesterol libre inhibe, a través del las lipoproteínas HDL. Procedentes del hígado y del
factor de transcripción SREBP, la enzima HMG-CoA intestino, las HDL «nacientes » se ponen en contac-
reductasa, con lo que se frena la síntesis del coleste- to con los tej idos (incluida la pared de los vasos ), de
rol endógeno. En segundo lugar, inhibe la formación donde recogen moléculas de colesterol para llevarlas
de receptores LDL y, por tanto , la captación celular al hígado.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

las VLDL, respectivamente. Por otra parte, puede


disponerse de un buen índice de las HDL mediante

Colesternl y Tejidos
~ Colesternl
la determinación de colesterol después de retirar,
por precipitación, las lipoproteínas que contienen la
apo B (es decir, las del sistema VLDL-IDL-LDL). En
resumen, el denominado peifil lipídico se establece
determinando el colesterol total, los triglicéridos to-

0 -L
-CAT___. tales y el denominado HDL-colesterol, o simplemente
HDL-c.
Pese a que el colesterol total se considera un buen
índice de las LDL, puede obtenerse un índice más
preciso de estas calculando el llamado LDL-colesterol
o LDL-c. Ello se lleva a cabo mediante la fórmula de
HDL naciente HDL madura Friedewald, solo aplicable si la cifra total de triglicé-
ridos es inferior a 400 mg/dl:
Figura Mecanismo de captación del colesterol
de los tejidos por las HDL. Inici almente de morfología LDL-c = colesterol total - (HDL-c + [triglicéridos/5])
discoide, su superficie adquiere co lesterol libre de las
cé lul as de los tejidos. Una vez en la superficie de la Los valores medios de colesterol encontrados ha-
HDL, el co lestero l libre es esterificado por la enzima bitualmente en la población se sitúan por encima de
lecitín-colesterol-aciltransferasa (LCAT), activada por las cifras consideradas más saludables. Por lo tanto,
la apo A-1 , pasando al interior de la lipoproteína, que aunque constituyan «la norma» en sentido estadísti-
adquiere una configuración esferoidea. co, no pueden considerarse normales en términos de
salud. De ahí que haya cierta confusión al referirse a
la normalidad de las cifras plasmáticas de colesterol.
partícula, que adquiere una configuración esferoidea Así, aunque en algunas recomendaciones se señale
(Fig. 73-3) . La partícula resultante puede ser retirada el límite superior de la normalidad en 240 mg/dl, se
por el hígado, o puede ceder el colesterol acumula- consideran valores deseables los inferiores a 200 mg/
do a otras lipoproteínas (transferencia catalizada por dl. Respecto a los triglicéridos, puede considerarse
la proteína transferidora de ésteres de colesterol o normal una cifra inferior a 200 mg/dl. No obstan-
CETP). Este transporte inverso es clave para impedir te, también es deseable un valor menor: inferior a
la acumulación del colesterol en los macrófagos de la 150 mg/dl. El HDL-c debe ser superior (como hemos
íntima arterial («células espumosas ») y, por tanto , es visto, se trata de una lipoproteína protectora; en con-
uno de los principales mecanismos antiaterogénicos secuencia, lo anormal es un valor bajo de la misma)
de las HDL. a 40 mg/dl en hombres y a 50 mg/dl en mujeres. El
LDL-c debe ser inferior a 130 mg/dl si no existen fac-
Otras lipoproteínas tores de riesgo cardiovascular, aunque se recomienda
En la circulación existe un derivado de las LDL de- que, en pacientes con riesgo cardiovascular alto , sea
nominado lipoproteína (a) [Lp(a)]. Está constituida inferior a 100 mg/dl (e incluso menor de 70 mg/dl en
por una partícula LDL, en la que aparece, unida a la sujetos de muy alto riesgo) .
molécula apo B, una proteína denominada apo (a), de Algunos autores consideran de gran interés utilizar
estructura similar al plasminógeno. La Lp(a) puede como punto de referencia el cociente colesterol total/
interferir con la fibrinólisis, favorecer los depósitos HDL-c, también llamado índice de Castelli, que no
de lípidos en la íntima arterial y estimular el creci- debe ser superior a 5 en varones y a 4,5 en mujeres.
miento de las células musculares lisas, por lo que el La relación LDLc/HDLc o el cociente apo Blapo Al
aumento de su concentración plasmática se considera son otros índices que empiezan a considerarse de uti-
un factor trombogénico y aterogénico. lidad en la valoración del paciente con enfermedades
del metabolismo de los lípidos por lo que se refiere a
su predisposición a desarrollar enfermedad vascular
EXPLORACIÓN DEL METABOLISMO arteriosclerótica.
DE LOS LÍPIDOS El estudio del metabolismo de los lípidos debe
completarse con la inspección del plasma obtenido
El estudio del metabolismo lipídico debería consistir en ayunas, momento en que, como ya se ha menciona-
en la determinación de las lipoproteínas. Sin embar- do , no deben existir quilomicrones en él, y su aspecto
go, dicha determinación es difícil. No lo es, en cam- debe ser traslúcido. Cuando los valores de triglicéri-
bio, la de colesterol y triglicéridos, cuyas concentra- dos son superiores a 400 mg/dl, el plasma presenta
ciones totales , cuando se miden en ayunas (momento un aspecto latescente. El comportamiento de esta la-
en que no debe haber quilomicrones), son un buen tescencia permite deducir el tipo de lipoproteína que
602
exponente de dos tipos de lipoproteínas: las LDL y contienen los triglicéridos en exceso. Si tras dejar re-
CAPITULO 73 Patología general del metabolismo lipídico

hipertrigliceridemia e hiperlipemia mixta (aumento


de triglicéridos y colesterol).
Las hiperlipoproteinemias fueron clasificadas
por Fredrickson en cinco tipos , denominados con
los correspondientes números romanos: I-V. El II fue
posteriormente desdoblado por la OMS en lla y lib.
Esta clasificación inicialmente tuvo mucho éxito, por
considerarse que describía enfermedades diferencia-
das. Posteriormente se ha visto que esto no siempre
es así, por lo que se ha abandonado. No obstante, su
terminología continúa siendo utilizada con frecuen-
cia, si bien debe entenderse como de valor puramente
descriptivo: nos dice qué tipo de lipoproteína está
elevado, pero no qué enfermedad tiene el paciente,
con alguna excepción.

CAUSAS DE LAS HIPERLIPEMIAS


Las hiperlipemias, de acuerdo con su causa, pueden
clasificarse en primarias y secundarias. Las primeras
son de carácter genético, pudiendo el tipo de herencia
ser monogénica o poligénica. En la expresión de las
Figura Suero de paciente dislipémico obtenido hiperlipemias de carácter poligénico, lógicamente,
en ayunas tras 12 h de reposo a 4°C. Se observa una juegan un papel trascendente los factores ambienta-
capa cremosa superior, formada por quilomicrones les. Las hiperlipemias secundarias se deben a factores
que flotan, y otra latescente inferior, debida a VLDL en principio ajenos al metabolismo de los lípidos,
que permanecen en suspensión. A la izquierda, suero pero que acaban repercutiendo sobre él (Tabla 73-1).
contro l.
Hiperlipidemias primarias
Herencia monogénica. Los trastornos monogemcos
pueden conducir al aumento de las lipoproteínas por
posar el plasma (12 ha 4°) se forma una capa cremosa
superior, y el resto del suero se hace transparente, se varios mecanismos:
trata de quilomicrones. Si tras el reposo continúa el Aumento en su producción. Es el caso de la de-
aspecto latescente, ello puede deberse a un exceso de nominada hiperlipemia familiar combinada, en
VLDL o de partículas residuales de los quilomicrones que está aumentada la síntesis de las lipoproteí-
e IDL. Si conserva el aspecto latescente difuso , pero nas del sistema VLDL-IDL-LDL, lo que da lugar
además aparece la capa cremosa superior, contiene a un incremento tanto de los triglicéridos como
quilomicrones y VLDL (Fig. 73-4). del colesterol (pueden estarlo aquellos, este, o
ambos en distintos miembros de una familia , o
en un mismo enfermo en distintos momentos de
AUMENTO DE LOS LÍPIDOS PLASMÁTICOS su vida).
El aumento de los triglicéridos plasmáticos, del
colesterol plasmático o de ambos , se conoce como
hiperlipemia o hiperlipidemia; el aumento de las li-
poproteínas (quilomicrones, VLDL, IDL, LDL o HDL),
Tabla Causas
como hiperlipoproteinemia. En realidad, se trata
del mismo fenómeno contemplado desde distinta de las hiperlipemias primarias
perspectiva, ya que los lípidos forman parte de las
Monogénicas
lipoproteínas. Dado que es más fácil determinar los
Aumento de producción
lípidos que las lipoproteínas, en la práctica se utili-
za más el concepto de hiperlipemia. En la actualidad Disminución del aclaramiento
está difundiéndose tan1bién el término de dislipemia, Alteración del receptor o el ligando
que en sentido estricto engloba tanto las alteraciones Alteración del enzima o el coenzima
debidas a aumento como a disminución de los lípidos Mecanismo desconocido
o de alguna de sus fracciones. Poligénicas
Desde un punto de vista práctico, las hiperlipe-
mias se clasifican en tres tipos: hipercolesterolemia,
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Disminución en su aclaramiento. Se puede de- noinsaturados). Otro factor ambiental de importancia


ber a: es el ejercicio físico.
a) Un trastorno de los receptores celulares
de las lipoproteínas. Por ejemplo, dismi- Hiperlipidemias secundarias
nución de los receptores LDL, que impide
que las LDL se metabolicen adecuadamen- Son muy numerosas, y en ocasiones pueden coincidir
te, por lo que su concentración en plasma con hiperlipemias genéticas, dando lugar a cuadros
aumenta. El trastorno se denomina hiper- de especial gravedad. Algunas tienden a aumentar
colesterolemia familiar. Recientemente se fundamentalmente el colesterol (hipotiroidismo, sín-
ha descrito una variante por aumento de drome nefrótico, colestasis) y otras los triglicéridos
actuación de la proteína PCSK9, que indu- (diabetes mellitus, obesidad, alcoholismo, insuficien-
ce la degradación del receptor. cia renal crónica) .
b) Un trastorno de las apoproteínas que ac- El síndrome metabólico es una entidad cuya lo-
túan como ligando de los receptores. Por calización precisa en la clasificación de las hiperli-
ejemplo, el defecto de apoproteína B-100, pemias no está bien definida. En él, una situación
en que disminuye la afinidad de las LDL de obesidad -de tipo abdominal- conduce a resis-
por su receptor, lo que da lugar a un cua- tencia a la insulina (o diabetes franca), dislipemia e
dro similar al anterior. Otro ejemplo es el hipertensión arterial. La dislipemia no solo consiste
de la disbetaliproteinemia (o enfermedad en aumento de los triglicéridos (VLDL), sino dismi-
de la beta ancha, o hiperlipoproteinemia nución de las HDL.
tipo III}, en que existe una alteración de la
apoproteína E que dificulta la retirada de
las IDL y de los quilomicrones residuales. CONSECUENCIAS DEL AUMENTO
c) Un trastorno de los enzimas que catabo-
lizan las lipoproteínas. Por ejemplo, el
DE LOS LÍPIDOS PLASMÁTICOS
déficit de LPL, en que existe un aclara- Se pueden agrupar en dos grandes apartados: por
miento insuficiente de los quilomicrones una parte, las relacionadas con el depósito de lipa-
(quilomicron emia familiar) [por razones proteínas en la pared vascular; por otra, todas las
desconocidas , el aclaramiento de las demás.
VLDL no disminuye , al menos durante la
infancia]. Consecuencias relacionadas con el depósito de
d) Un trastorno de las apoproteínas que ac- lipoproteínas en la pared vascular: La arterios-
túan como coenzima. Por ejemplo, el dé- clerosis se establece desde el momento en que la
ficit de apoproteína C-II, coenzima de la concentración de los lípidos responsables (fun-
LPL, que determina un cuadro similar al
anterior.
Mecanismo desconocido.
Es el caso de la hipertri-
gliceridemia familim~ que
puede ser moderada (con
aumento solo de VLDL) o
grave (con aumento de VLDL y
quilomicrones).
Herencia poligénica. El ejemplo es
la hipercolesterolemia poligénica, re-
sultado de la interacción de múltiples
factores genéticos con factores ambien-
tales . Estos están representados funda-
mentalmente por la dieta. Los niveles de
colesterol en sangre se elevan con la in-
gesta de colesterol y, sobre todo, con la de
ácidos grasos saturados. En cambio, tienden
a disminuir con la de ácidos grasos insatura-
dos. Los ácidos grasos saturados y el colesterol se
encuentran en las grasas animales; los ácidos grasos
insaturados en algunos aceites vegetales, como el de
girasol y de maíz (poliinsaturados), o el de oliva (mo-
CAPÍTULO 73 Patología general del metabolismo lipídico

damentalmente el colesterol) aumenta por enci- génica, al menos en la hiperlipemia familiar


ma de las cifras consideradas normales desde el combinada.
punto de vista saludable (200 mg/dl; véase an- Quilomicrones. No son aterogénicos.
tes , a propósito de la definición de normalidad), HDL. Las HDL no solo no son aterogénicas ,
existiendo una relación directa y continua entre sino que son protectoras frente al desarrollo
ambos. de arteriosclerosis.
Otras: En gran medida, aunque no exclusivamen-
te , se relacionan con el depósito de lipoproteínas El mecanismo último por el que las lipoproteínas
en otros tejidos (p. ej. , anillo craneal o xante- aterogénicas (fundamentalmente, como se ha dicho ,
lasmas). Este segundo tipo de consecuencias las LDL) desarrollan su efecto nocivo sobre la pared
requiere aumentos marcados (las relacionadas arterial, radica en el depósito de su colesterol en la
con el colesterol, elevaciones superiores a los misma, debajo del endotelio, y en su oxidación. Esta
350 mg/dl; las relacionadas con los triglicéridos, oxidación da lugar, en primer lugar, a un aumento de
elevaciones del orden de los 1000 mg/dl). su depósito, por unirse a los receptores scavenger,
no sometidos a regulación. Por otra parte, las LDL
Los lípidos y la arteriosclerosis oxidadas hacen que se liberen moléculas que alteran
la función del endotelio, lo que facilita la entrada
La patogenia de la arteriosclerosis excede la mera
de monocitos, que fagocitan el exceso de colesterol,
intervención de los lípidos, por lo que en otro lugar
transformándose en células espumosas. La activación
se estudian tanto sus aspectos patogénicos como sus
de las células monocito-macrófago libera citocinas,
manifestaciones (ver Capítulo 50). Conviene, sin em-
que estimulan la llegada y proliferación de células
bargo, hacer aquí algunos comentarios respecto al pa-
musculares de la media. El resultado es la formación
pel de los lípidos en su génesis.
de la placa de ateroma.
LDL. La LDL constituye el arquetipo de lipopro- Los mecanismos por los que las lipoproteínas an-
teína determinante de enfermedad coronaria, tiaterogénicas (HDL) desarrollan su efecto protector,
responsable de la morbimortalidad de la hiper- son varios. Tradicionalmene se ha atribuido al hecho
colesterolemia poligénica, de la familiar (altera- de que llevan a cabo un transporte centrípeto de co-
ción del receptor LDL) y de la debida a trastorno lesterol, retirándolo de la periferia (arterias) para lle-
de la apoproteína B-100 . Dentro de las LDL son varlo al hígado , desde donde puede excretarse. Pero
más aterogénicas las más pequeñas y de mayor hoy se sabe que, además, llevan a cabo otras funcio-
densidad (fenotipo B) que las más grandes y me- nes igualmente importantes, consistentes en interferir
nos densas (fenotipo A). También es más aterogé- otros procesos de la aterogénesis, como la oxidación
nica la variante Lp(a). de las LDL y el proceso inflamatorio inducido por
IDL y remanentes de los quilomicrones. Las las citocinas que sigue a su depósito. De acuerdo con
lipoproteínas intermedias y remanentes (IDL, ello, en la valoración del riesgo vascular que puede
quilomicrones residuales) son altamente ate- tener un paciente determinado desde el punto de vis-
rogénicas, y la enfermedad caracterizada por ta de su metabolismo lipídico, debe tenerse en cuenta
su exceso (disbetalipoproteinemia o hiperli- no solo si las LDL están elevadas, sino también si las
poproteinemia tipo ID) presenta una elevada HDL están disminuidas. Si actuamos terapéutica-
incidencia de enfermedad arteriosclerosa co- mente solo sobre las primeras, es posible que persista
ronaria, carotídea y de los vasos de las extre- cierto grado de riesgo vascular, que es atribuible, al
midades. menos en parte, a las segundas (responsables por ello
La disbetalipoproteinemia es un proceso en gran medida del denominado riesgo cardiovascu-
muy infrecuente, de manera que la inmensa lar residual).
mayoría de las veces es la LDL la lipoproteína Puesto que las lipoproteínas implicadas en el de-
implicada en el desarrollo de la arteriosclero- sarrollo de arteriosclerosis son las que contienen más
sis. colesterol, no debe extrañar la relación existente en-
VLDL. Respecto a las VLDL, existen claras tre la intensidad de la enfermedad y los niveles de
dudas respecto a su trascendencia aterogéni- colesterolemia. Los estudios de población indican
ca. Algunos autores la defienden con base en que hay una relación directa y exponencial entre el
estudios epidemiológicos que han señalado la colesterol plasmático y el riesgo de enfermedad ar-
existencia de relación entre sus niveles y el teriosclerótica que , como acabamos de mencionar,
desarroiio de enfermedad arterioscierosa, pero se estabiece desde ei momento en que ei colesterol
otros piensan que ello es debido a la presencia aumenta por encima de 200 mg/ml. Con valores de
de factores de confusión, ya que tales aumen- 250 mg/ml el riesgo es el doble que con 200 mg/ml,
tos de VLDL tienden a coexistir con cifras ba- y con cifras de 300 mg/ml, entre 3 y 4 veces más. En
jas de HDL (lipoproteína protectora) y con el procesos caracterizados por cifras de 300-500 mg/dl ,
fenotipo B de las LDL. No obstante, es posible a los 60 años ha sufrido un infarto de miocardio el
que las VLDL mantengan su capacidad atero- 50 % de los varones.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla Manifestaciones de las hiperlipemias. La consecuencia principal es la


arteriosclerosis, debida fundamentalmente a exceso de LDL (hipercolesterolemia) , y
presente tanto en formas de herencia poligénica como mendeliana. Las demás son propias
de las formas monogénicas , bien de hipercolesterolemia , bien de hipertrigliceridemia.

Arteriosclerosis Otras
(hipercolesterolemia) Hipercolesterolemia Hipertrigliceridemia

Xantomas Pancreatitis aguda


Xantelasmas Xantomas eruptivos
Anillo corneal Lipemia retinalis
Hepatoesplenomegalia
Crisis de dolor abdominal

Otras consecuencias Consecuencias debidas a lipoproteínas ri cas


en triglicéridos (fundamentalmente quilomicrones,
Son propias de las hiperlipemias heredadas con pa-
y ocasionalmente VLDL)
trón de herencia monogénica.
Pancreatitis aguda. Aunque la mayor parte de
Consecuencias debidas a lipoproteínas ricas en colesterol las pancreatitis agudas se deben a razones aje-
de los sistemas endógeno (LDL , IDL) y exógeno (remanentes
nas al metabolismo de los lípidos, una pequeña
de los quilomicrones (Tabla 73-2)
proporción de ellas puede deberse a un aumento
Anillo corneal (Fig. 73-5) consiste en el depósito de de las lipoproteínas ricas en triglicéridos. El me-
colesterol en los bordes de la córnea, fundamental- canismo no se conoce bien. Se ha sugerido que
mente en el superior y el inferior. Los xantelasmas la lipasa pancreática actúa sobre los triglicéridos
(Fig. 63-2) son depósitos de colesterol en los párpa- dentro de los capilares pancreáticos, determi-
dos , en general en su parte interna. Ambos pueden nando la formación de ácidos grasos lesivos para
aparecer en ausencia de hipercolesterolemia (el ani- el páncreas. Otros autores lo atribuyen a fenóme-
llo corneal, en concreto, es relativamente frecuente nos isquémicos pancreáticos promovidos por el
en ancianos normolipémicos -arco senil-). Los acúmulo de lipoproteínas de gran tamaño en los
xantomas (Fig. 63-3) (Fig. 73-6) son tumoraciones de vasos.
contenido lipídico localizadas en otros lugares . Por Junto a la pancreatitis aguda, pueden darse otras
su localización se clasifican en tendinosos (tendones manifestaciones:
de los extensores de los dedos , tendón aquíleo) y cu-
táneos (dermis y tejido subcutáneo). Estos últimos, a Xantomas eruptivos. Consisten en pequeños
su vez, de acuerdo con su morfología, se clasifican nódulos anrnrillentos, de aparición brusca (fe-
en xantomas tuberosos, cuyo tamaño puede variar de nómeno al que deben su nombre), con frecuen-
unos pocos milímetros (tipo pápula) a unos centíme- cia dispuestos sobre una base eritematosa. Son
tros (tipo tubérculo) y que se localizan en planos de
extensión y glúteos, y xantomas planos, que se loca-
lizan en las palmas de las manos , la cara, el cuello y
el tronco.

606
CAPÍTULO 73 Patología general del metabolismo lipídico

debidos a la fagocitosis de las lipoproteínas los lípidos tisulares de forma primaria. Comentamos
por los macrófagos de la piel. Suelen apare- algunas de ellas:
cer en los planos de extensión y en la región
glútea.
Lipemia retinalis. El término describe la to- ENFERMEDADES LISOSOMALES
nalidad blanquecina de los vasos de la retina DE LOS LÍPIDOS, O LIPOIDOSIS
que aparece cuando los triglicéridos superan
las cifras referidas , y que se debe al aspecto En ellas la alteración radica en una anomalía del ca-
latescente que proporciona el exceso de lipo- tabolismo lisosómico de los lípidos. Se trata de en-
proteínas ricas en triglicéridos. fermedades genéticas raras, como la enfermedad de
Hepatoesplenomegalia. Debida a fagocitosis de Gaucher.
las lipoproteínas por los macrófagos del híga-
do y el bazo, con acumulación de triglicéridos ENFERMEDADES DEL TEJIDO ADIPOSO
en los mismos. Por la misma razón, pueden
observarse «células espumosas » (macrófagos Lipodistrofias
cargados de lípidos) en la médula ósea. Consisten en un cambio en la distribución de la grasa
Crisis de dolor abdominal. Cursan sin eleva- corporal, con zonas en que disminuye {lipoatrofia]
ción de la amilasa sérica, por lo que parecen y zonas en las que se acumula. Esto último tiende a
independientes de la papcreatitis. ocurrir en el tórax y parte alta de los brazos, propor-
El conjunto de pancreatitis, xantomas eruptivos, li- cionando un aspecto hercúleo. La atrofia es particu-
pemia retinalis y hepatoesplenomegalia se denomina larmente llamativa en la cara, donde produce marca-
síndrome quilomicronémico, en razón de que, para das alteraciones estéticas; es frecuente en enfermos
que se den todos estos fenómenos simultáneamente, de infección por VIH sometidos a determinados tra-
es preciso el aumento de los quilomicrones. tamientos antirretroviriales. Cursan con anomalías
metabólicas del tipo de resistencia a la insulina, hi-
perglucemia e hipertrigliceridemia.
HIPOLIPOPROTEINEMIAS
Lipomatosis
La hipoalfalipoproteinemia o disminución de las
HDL puede ser de causa genética o, más probable- Consiste en la aparición de masas de tejido adiposo
mente , ambiental, secundaria a obesidad o sedenta- {lipomas] en diversas localizaciones, tanto subcu-
rismo. Como ya se ha comentado, constituye un fac- táneas como profundas. También puede cursar con
tor de riesgo de arteriosclerosis, y suele cursar con anomalías del metabolismo de la glucosa y de los
aumento de las VLDL. lípidos.
La hipo/abetalipoproteinemia se debe a una falta
de síntesis de las apoproteínas B, lo que determina Hígado graso
que no se puedan absorber las grasas ni las vitaminas Es una situación frecuente derivada de un desequili-
liposolubles. Es muy rara. brio entre la síntesis de triglicéridos y su eliminación
en forma de VLDL. No se trata de una enfermedad es-
pecífica, sino de un trastorno que pue-
ENFERMEDADES POR DEPÓSITO de darse acompañando a diversos pro-
DE LOS LÍPIDOS TISULARES cesos, tales como la diabetes, la obesi-
dad (es frecuente en el «síndrome •
Nos hemos ocupado hasta ahora metabólico ») y el
de las alteraciones de los lípidos alcoholismo.
plasmáticos, que de forma se-
cundaria pueden dar lugar al
depósito tisular de los mis-
mos (arteriosclerosis). Exis-
ten, además , enfermedades
en las cuales están alterados
-174
Patología general del metabolismo
de las proteínas plasmáticas
y los aminoácidos
José Manuel Olmos Martínez, Jesús González Macías

PROTEÍNAS PLASMÁTICAS
INTRODUCCIÓN
El plasma sanguíneo contiene una gran
cantidad de proteínas (alrededor de 7 g/
dl) que desempeñan múltiples funciones.
La mayor parte de las proteínas plasmáticas son
sintetizadas en el retículo endoplásmico de los hepa-
tocitos , pero pueden proceder de otros muchos oríge-
nes (linfocitos, glándulas endocrinas, etc.).
El catabolismo de las proteínas plasmáticas tiene
lugar en el tubo digestivo y en el riñón, así como en
las células de los tejidos, especialmente en las del hí-
gado. El glomérulo permite la filtración de proteínas
de peso molecular inferior al de la albúmina (e inclu-
so una pequeña cantidad de albúmina) , de las cuales
la inmensa mayoría son reabsorbidas en los túbulos
proximales por pinocitosis.

EXPLORACIÓN
En el estudio de las proteínas plasmáticas pueden
considerarse diversos aspectos.

Determinación de las proteínas totales


Constituye el estudio más elemental. Actualmente
suele realizarse mediante métodos automatizados.

Electroforesis
Consiste en colocar una muestra de suero sobre
un soporte inerte (generalmente una tira de
agar) y someterlo a un campo eléctrico. Las
proteínas se desplazan con distinta veloci-
dad según su carga eléctrica y, al teñirse
con un colorante adecuado, se obtienen
cinco bandas («proteinograma») que
~
pueden leerse mediante un siste-
CAPITULO 74 Patología general del metabolismo de las proteínas plasmáticas y los aminoácidos

las proteasas generadas al lesionarse los tejidos.


g/dl % La ceruloplasmina es una proteína que contiene
.., cobre y se comporta como una oxidasa. Las hap-
Prot. total es 7 100
toglobinas poseen la propiedad de fijar y formar
Albúmina 4 60
complejos con la hemoglobina libre, impidiendo
a , globulina 0,3 3 -6
que se elimine por el riñón.
a, globulina 0,5 5- 9
Las p globulinas constituyen el cuarto compo-
~ globulina 12 - 16
nente. Pueden subdividirse en dos fracciones: p1
y globulina 1,2 15 - 19
y p2. Dentro de las p1 globulinas se encuentran
la transferrina, la hemopexina y las lipoproteí-
nas de baja densidad (LDL). La primera es una
glicoproteína que puede ligar dos átomos de
hierro libre y transportarlos a la médula ósea, en
donde se utilizarán para la síntesis de la hemog-
lobina. La segunda fija el hemo procedente de la
escisión de la hemoglobina (que permanece libre
en el plasma cuando se libera a él en tal cantidad
que satura la haptoglobina) y lo transporta al hí-
gado, en donde se transformará en bilirrubina. A
la fración p2 pertenecen las proteínas del siste-
Albúmina a, a, y ---- ma de complemento.
La última fracción está constituida por las
Figura Proteinograma. gammaglobulinas, también denominadas in-
munoglobulinas , de las que existen cinco clases
(IgG, IgA, IgM, IgE, IgD} y varias subclases (4
ma óptico. La representación gráfica de esta lec tura de las IgG y 2 de las IgA}. Son sintetizadas por
permite construir una curva con cinco picos. El área las células plasmáticas y los linfocitos B como
correspondiente a cada pico (dependiente de su altu- respuesta a un estímulo antigénico. Algunas in-
ra y de su anchura) es proporcional a la cantidad de munoglobulinas tienen movilidad beta e incluso
proteínas contenidas en cada banda. A excepción de alfa. En la región de las gamma se desplaza la
la primera fracción (la albúmina), cada una de las res- proteína C reactiva , cuya producción aumenta
tantes fracciones (al globulina, 0'.2 globulina, P glo- en la inflamación aguda.
bulina y gammaglobulina) está integrada por varias Finalmente, conviene señalar que cuando se uti-
proteínas distintas que coinciden, no obstante, en su liza plasma en vez de suero, aparece otra banda
movilidad electroforética (Fig. 74-1). en las regiones beta y gamma que corresponde al
fibrinógeno y que dificulta la interpretación del
La albúmina es la primera fracción electroforé- proteinograma.
tica. Se trata de una proteína sintetizada en el
hígado que posee un peso molecular de 69 000
daltons y una vida media de 20 días. Su con- lnmunofijación
centración es de unos 4 g/dl y sus funciones son Combina la separación electroforética de las proteínas
múltiples : mantenimiento de la presión oncóti- y su reacción inmunológica con los correspondientes
ca, transporte de diferentes sustancias endóge- anticuerpos (Fig. 74-2). Para ello, se colocan al menos
nas y exógenas, aporte energético, etc. cinco muestras del suero en cinco líneas separadas
La mayor parte de la segunda fracción (al glo- y, tras realizar la electroforesis, se lleva a cabo una
bulina) está constituida por la O'.l -antitripsina, precipitación en cada línea, con cinco anticuerpos
glucoproteína capaz de inhibir a numerosas en- dirigidos contra los principales componentes de las
zimas proteolíticas. También las lipoproteínas cadenas pesadas (anti-gamma, anti-alfa, anti-mu) y
de alta densidad (HDL) emigran electroforéti- contra los dos componentes de las cadenas ligeras
camente en esta región. Existen, junto a la pro- (anti-kappa y anti-lambda). Este procedimiento se
pia O'.l antitripsina, una serie de proteínas con utiliza para identificar las denominadas «para.proteí-
movilidad al-, como el orosomucoide, la proteí- nas» y para averiguar el tipo de cadenas ligeras y pe-
na sérica A asociada al amiloide (SAA)-, cuya sadas que contienen estas inmunoglobulinas. Puede
concentración aumenta de forma notable en los realizarse también en muestras de orina.
procesos inflamatorios agudos.
Las 0'.2 globulinas constituyen una fracción muy
heterogénea. La 0'.2 macroglobulina, proteína de Cuantificación de las inmunoglobulinas
gran peso molecular, se encuentra en muy pe- Suele llevarse a cabo mediante técnicas de nefelome-
609
queña cantidad, e interviene en la inhibición de tría, que miden el grado de turbidez producido por
5fCCION VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

+ s
s s s s s
o o

-
o o o o

Alb

a,

a,

ELF - G A M K
-
L

0 Anticuerpos frente a cadenas pesadas y ligeras

Figura lnmunofijación: gammapatía monoclonal lgG-La mbda. S: suero; ELF: electroforesis; G: anticuer-
pos frente a cadenas pesadas gamma; A: antic uerpos frente a cadenas pesadas alfa; M: anti cuerpos frente a ca-
denas pesadas mu; K: anticuerpos fre nte a cadenas li geras kappa; L: anticuerpos frente a cadenas ligeras lambda.

la reacción antígeno-anticuerpo (anticuerpos especí- DISPROTEINEMIAS


ficos frente a las distintas inmunoglobulinas).
Las alteraciones en la distribución de las distintas
Valoración de las crioglobulinas fracciones electroforéticas pueden ser aisladas o
múltiples.
Estudia la existencia de prepitación de las proteínas
séricas en ambiente frío (4 ºC).
Alteraciones aisladas
Hipoalbuminemia. La disminución en la con-
ALTERACIONES DE LAS PROTEÍNAS centración plasmática de albúmina se observa
PLASMÁTICAS cuando existe un trastorno en la síntesis o un
aumento en la destrucción de esta proteína. La
Vamos a clasificarlas, para su estudio, en cuatro insuficiencia hepática, la malnutrición, la ma-
apartados: a) hiper e hipoproteinemias; b) dispro- labsorción y la reacción de fase aguda (véase
teinemias; c) paraproteinemias, y d) crioglobuline- Inflamación) constituyen buenos ejemplos de la
mias. primera situación, mientras que la destrucción
exagerada puede deberse a un aumento en su
catabolismo, o a pérdidas excesivas por el riñón
AUMENTO Y DISMINUCIÓN (síndrome nefrótico), el tubo digestivo (entero-
DE LAS PROTEÍNAS TOTALES patía pierde proteínas), la piel (quemaduras ex-
tensas), etc. Su principal consecuencia es la apa-
El incremento en la concentración de proteínas (hi- rición de edemas (por disminución de la presión
perproteinemia) se debe habitualmente al aumento oncótica) .
de las inmunoglobulinas, mientras que la disminu- Déficit de al-antitripsina . Se trata de un trastor-
ción (hipoproteinemia) de la cifra total de proteínas no congénito que se caracteriza, desde el punto
suele ser debida a un déficit de albúmina y, con me- de vista electroforético, por una marcada dismi-
nor frecuencia, de gammaglobulinas. Por tanto , am- nución de las al globulinas. Cursa con trastor-
bas situaciones deberían considerarse dentro de lo nos pulmonares (enfisema panacinar) y, en oca-
que hemos definido como disproteinemias. De hecho, siones, hepáticos (cirrosis).
las hiperproteinemias e hipoproteinemias que no se Hipogammaglobulinemia. La disminución en
acompañan de modificaciones electroforéticas suelen las gammaglobulinas suele deberse a un déficit
ser falsas, y reflejan la existencia de una hemocon- de IgG, dado que esta fracción constituye el 80 %
centración, en el caso de las primeras, o de una hemo- de las gammaglobulinas. Puede tratarse de un
~
dilución, en el de las segundas. trastorno congénito o adquirido.
CAPITULO 74 Patología general del metabolismo de las proteínas plasmáticas y los aminoácidos

Hipergammaglobulinemia. El aumento en las las gamma, aunque ocasionalmente puede con-


y globulinas puede guardar relación con distintas fundirse con una banda monoclonal (véase des-
situaciones -inflamación crónica, hepatopatías, pués).
enfermedades autoinmunes, neoplasias linfoides Inflamaciones crónicas. En los procesos infla-
B- y generalmente se acompaña de otras altera- matorios crónicos (infecciones, enfermedades
ciones, por lo que se considerarán más adelante. autoinmunes, etc.), el aumento en las al y a2
globulinas se acompaña de un incremento po-
Alteraciones múltiples (patrones electroforéticos) liclonal en las gammaglobulinas que guarda
relación con la estimulación persistente de las
Inflamaciones agudas. En la denominada «reac-
células inmunes (Fig. 74-3).
ción de fase aguda de la inflamación» se produ-
Hepatopatías crónicas. Suele apreciarse una dis-
ce una disminución de la síntesis de albúmina,
minución en la albúmina asociada a un aumento
junto a un aumento de la síntesis de los llamados
policlonal de las beta y gan1maglobulinas , con
«reactantes de fase aguda ». Éstos forman parte
aparente fusión de ambas fracciones («puente
de las fracciones al y a2 (al-antitripsina, pro-
beta-gamma») (Fig. 74-3). El descenso de la al-
teína SAA, a2-macroglobulina, ceruloplasmina,
búmina se debe a la disminución de su síntesis
haptoglobinas) y, en algún caso, de las p globuli-
por el hígado enfermo, en tanto que el aumento
nas (componente C3 del complemento). Se con-
de las inmunoglobulinas obedece a que los an-
figura así un patrón electroforético caracterizado
tígenos procedentes del intestino eluden el hí-
por una discreta disminución de la albúmina y
gado (circulación colateral) o no son depurados
un aumento de las al y a2 globulinas (Fig. 74-3).
adecuadamente por las células de Kupffer, por lo
Tan1bién puede verse tardíamente en la zona de
que alcanzan el sistema inmune, y lo estimulan.
las beta una banda correspondiente al C3. La
proteína C no suele dejarse notar en la zona de Síndrome nefrótico. La pérdida de proteínas (es-
pecialmente albúmina) por la orina y el aumento
en la síntesis hepática de a2 macroglobulina y
de betalipoproteínas explicaría el patrón electro-

L
forético que es característico en estos pacientes:
reducción de la albúmina y, en menor medida,
de las al y gammaglobulinas, junto con un au-
mento en las a2 y p globulinas (Fig. 74-3).
Alb a,a, ~ y
@
PARAPROTEINEMIAS
(GAMMAPATÍAS MONOCLONALES)

LL ® ©
Dicho término define una situación caracterizada por
la presencia en el proteinograma de una banda estre-
cha y densa, que se conoce como banda o componen-
te monoclonal, o simplemente banda o componente
M (de monoclonal) (Fig. 74-3). Esta denominación se
debe a que la proteína responsable de dicha banda
es producida por células pertenecientes a un único
clon. Las células son de estirpe linfocitaria B, y la
proteína, por tanto , una inmunoglobulina. El hecho
de que las inmunoglobulinas, en general, aparezcan
en el proteinograma en la zona de las gamma, justi-
@ ® fica la denominación de «gammapatía monoclonal».
La denominación de «paraproteinemia» se debe a que
inicialmente se consideró que se trataba de proteínas
anormales («diferentes » de las normales). Hoy se
sabe que son estructuralmente normales. El dato que
las define es su homogeneidad (todas las moléculas
son idénticas, puesto que proceden del mismo clon
celular), que , al hacer que se acumulen en el mismo
punto, determina la estrechez de la banda.
Figura Ejemplos de proteinogramas: normal Las gammapatías monoclonales pueden observarse
(A); inflamación aguda (B); inflamación crónica (C); en diversas situaciones, de las que las más típicas son
hepatopatía crónica (D); síndrome nefrótico (E), y pa- el mieloma (en el que las paraproteínas pertenecen a ~
raproteinemia (F). las subclases IgG, IgA, IgD e IgE, o bien son cadenas
SECCION VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

ligeras) y la macroglobulinemia de «mixtas» y son propias de procesos


Waldenstrom (IgM). En ocasiones autoinmunes y linfoproliferati-
los linfocitos sólo segregan fragmen- vos y de la infección por el virus
tos de las cadenas de la hepatitis C. Cuando no hay
pesadas («enferme- una causa conocida se las suele
dad de las cadenas designar como «criglobulinemia
pesadas», y, a, µ o mixta esencial».
8). Algunas perso- La presencia de cantidades eleva-
nas, generalmen - das de crioglobu-
te mayores de 60 linas puede de-
años, pueden presentar una terminar la apa-
gammapatía monoclonal en rición de trastor-
ausencia de síntomas («gan1- nos circulatorios,
mapatía monoclonal de signi- especialmente en
ficado incierto »). los vasos perifé-
Cuando se detecta una ban- ricos y tras la exposición
da monoclonal en el al frío, debidos a cambios
proteinograma , en la viscosidad sanguínea y a
debe realizarse fenómenos oclusivos. Más frecuentes son las
una inmunofi- manifestaciones de vasculitis (por su compor-
jación para co- tamiento como complejos inmunes).
nocer el tipo de
cadenas pesa-
das y ligeras de PROTEÍNAS TISULARES: ENFERMEDADES
la paraproteína. POR AGREGACIÓN PROTEICA
Además, esta debe O PLEGAMIENTO PROTEICO ANORMAL
cuantificarse. Por
último, dado que La agregación proteica inadecuada normalmente es
los fragmentos de prevenida por un complejo mecanismo de control,
las inmunoglobu- encargado de que el plegamiento de las proteínas sea
linas formadas por el correcto. En algunas circunstancias, sin embargo,
cadenas ligeras se filtran por el glomérulo, debe in- el plegamiento se lleva a cabo de forma inadecuada,
vestigarse la presencia de estas en la orina (proteinu- y algunas proteínas consiguen agregarse dentro de las
ria de Bence-Jones]. células o alrededor de ellas.
La presencia de paraproteínas en la sangre puede
tener diversas consecuencias. El aumento de la visco-
sidad sanguínea dificulta la circulación, provocando AMILOIDOSIS
alteraciones oculares (pérdida de visión, hemorragias
en el fondo de ojo), neurológicas (cefalea, ictus) y Con este término se designan una serie de enfermeda-
cardiacas (insuficiencia cardiaca): es el síndrome de des caracterizadas por el depósito extracelular de una
hiperviscosidad. El «revestimiento » de las plaquetas sustancia, denominada amiloide por haberse consi-
y de los factores de coagulación por las proteínas anó- derado, cuando se describió, que tenía características
malas puede dar lugar a una diátesis hemorrágica, y tintoriales similares a las del almidón. Las proteínas
la presencia de cadenas ligeras en los túbulos renales que se incluyen bajo este nombre tienen en común
puede causar insuficiencia renal. La disminución de que, sea cual sea su secuencia de aminoácidos, adop-
las restantes inmunoglobulinas favorece también la tan una estructura similar, altamente ordenada, que
aparición de infecciones. Puede producirse amiloido- las hace insolubles, y que se suele denominar «con-
sis (véase más adelante). figuración plegada beta» . Es característica de ellas su
avidez por el rojo Congo. La sustancia amiloide es
resistente a la proteólisis y a la fagocitosis, por lo que
CRIOGLOBULINEMIAS no puede eliminarse de los tejidos.
Según los órganos afectados, las amiloidosis se han
Las crioglobulinas son proteínas que precipitan de clasificado en sistémicas (con depósito en cualquier
forma reversible con el frío. Pueden ser de tres tipos: parte del organismo) y locales (en un órgano). A las
tipo I (inmunoglobulina monoclonal, generalmente sistémicas pertenece en primer lugar la amiloidosis
IgM y en menor medida IgG, propia de procesos linfo- primaria, por acumulación de proteínas derivadas
proliferativos); tipo II (inmunoglobulina monoclonal de las cadenas ligeras de las inmunoglobulinas; en
IgM mas policlonal IgG) y tipo III (inmunoglobulinas la terminología moderna se conoce como amiloidosis
612
policlonales IgG e IgM). Las tipo II y III se denominan AL, de Amiloide y cadenas Ligeras; se asocia con fre-
CAPITULO 74 Patología general del metabolismo de las proteínas plasmáticas y los aminoácidos

cuencia al mieloma. En segundo lugar lo hace la ami- Los trastornos del metabolismo de los aminoáci-
loidosis secundaria, por acumulación de la proteína dos se conocen con el nombre de aminoacidopatías
amiloide A, derivada de un reactante de fase aguda y son probablemente los exponentes más caracterís-
conocido como proteína SAA o proteína sérico aso- ticos de los errores congénitos del metabolismo (las
ciada al amiloide; en la terminología actual esta for- aminoacidopatías adquiridas tienen menor interés).
ma de amiloidosis se conoce como AA , de proteína
Amiloide A; es inducida por procesos inflamatorios
crónicos. En tercer lugar cabe señalar las amiloidosis AMINOACIDOPATÍAS POR BLOQUEO
familiares (amiloidosís AF}, entre las que destacan las METABÓLICO
debidas a acumulación de transtirretina (ATTR).
Dependiendo de los órganos en que se deposita el En estas situaciones, las manifestaciones clínicas
amiloide, la clínica es muy variable. El riñón es uno derivan tanto de la ausencia del producto final como
de los órganos más típicamente afectados, con desa- de la acumulación de precursores y productos cola-
rrollo de proteinuria. En el corazón el depósito de terales. Comentaremos los ejemplos más característi-
amiloide determina una miocardiopatía restrictiva. cos.
También es característica la polineuropatía.
Dentro de las que afectan a un órgano específico Errores congénitos del metabolismo
cabe señalar en primer lugar el sistema nervioso cen- de los aminoácidos aromáticos
tral. Son ejemplo las enfermedades por priones y la En la Figura 74-4 se señalan diversos puntos de blo-
enfermedad de Alzheimer. Otras formas organoespe- queo enzimático en la cadena metabólica de la tirosi-
cíficas son la endocrina (depósito de anülina en la na, con sus consecuencias.
diabetes), la cutánea y la senil (transtirretina).
El bloqueo en el metabolismo de la fenilalani-
na da lugar al acúmulo de la misma (hiperfe-
AGREGACIÓN PROTEICA INTRACELULAR nilalaninemia), la cual, junto a sus derivados,
ejerce un efecto tóxico directo sobre el cerebro,
Diversas enfermedades, algunas muy frecuentes, se provocando en su forma clásica (fenilcetonuria)
deben a agregación proteica intracelular. En algunos un trastorno grave en el desarrollo mental de los
casos el fenómeno es similar al que acabamos de co- niños afectados.
mentar para la amiloidosis, teniendo el agregado pro-
El déficit de la oxidasa del ácido homogentísico
teico características estructurales e incluso tintoriales
provoca la acumulación del mismo, dando lugar
similares a las que acabamos de comentar para la sus-
al aumento de su derivado el alcaptón (la enfer-
tancia amiloide. En otras ocasiones el fenómeno no
medad se llama alcaptonuria) , que por una parte
guarda relación con ella.
posee una alta afinidad por el cartílago, en donde
Entre las enfermedades debidas a agregación pro-
se deposita (ocronosis), lesionándolo (artrosis), y
teica intracelular destacan varios procesos neurode- por otra, confiere a la orina un color negruzco
generativos. De ellos, en unas ocasiones las proteínas
característico.
se agregan en el núcleo (corea de Huntington, ataxia
El déficit de tirosinasa impide que la tirosina se
espinocerebelosa) y en otras en el citoplasma (enfer-
transforme en melanina, por lo que los sujetos
medad de Parkinson).
afectados suelen carecer de pigmento melánico
Fuera del sistema nervioso debe citarse la mutación
en los melanocitos de la piel y de los ojos (albi-
de la al-antítripsina, que determina la formación de
nismo)
polímeros de la molécula en el interior del hepatoci-
to, al que lesionan, conduciendo a la cirrosis. A este
grupo de trastornos pertenece también la enfermedad Errores congénitos del metabolismo de otros
fibrosa quística aminoácidos
Trastornos del ciclo de la urea. Dan lugar a que
FISIOPATOLOGÍA DE LOS AMINOÁCIDOS se acumule el amonio producido durante el ca-
tabolismo proteico, al no poderse transformar
Los aminoácidos se absorben en el intestino a partir en urea, lo que da lugar a una encefalopatía
de las proteínas ingeridas con la dieta. Algunos pro- aguda o crónica, similar a la encefalopatía he-
ceden exclusivamente de la absorción intestinal (ami- pática.
noácidos esenciales), mientras que otros pueden ser Homocistínuria. Es una enfermedad del metabo-
también sintetizados por el organismo (aminoácidos lismo de la metionina que da lugar a acumula-
no esenciales). Circulan en la sangre y, tras filtrarse ción de homocisteína en sangre y orina. Además
en los glomérulos renales, son reabsorbidos casi en de causar anomalías al nacimiento (alteraciones
su totalidad en el túbulo proximal. El catabolismo se del desarrollo esquelético y del cristalino que re-
lleva a cabo en el hígado y en los músculos , y suele cuerdan el síndrome de Marfan), en la vida adul-
producirse mediante reacciones de transaminación. ta facilita la aparición de enfermedad vascular
SECCIÓN VI Semiología y fis iopatología del sistema endocrino y del metabolismo

2 2

Fenil alanina foos;na -[]+ DOPA -!]+ M elan;na


3

Ácido OH ----------- -• 4-0H-


fenill ac tato
fe nilpi rúvi co ------- .... __
4 1 --- . 4-0H-

,+
Aci do
fe n i !- lacta to

homogentís ico
1
5

Ácido
malei lacetoacético --
1
-- ----- .._ Su cci nil
"t ___,.. acetoaceta to
Ácido fumaril _________ :
1
acetoacéti co ,
6 •
Succ inil

✓\
acetona

Fumarato Acetoace tato

Bl oqueo
enz imático
---.►~ Vía
normal
-- ► Vía
altern ativa

Bloqueo enzimático y en fermedad que determina :


1: Fenilalanina hidroxilasa: Fenilcetonuria
2. Tirosinasa: Albinismo
3. 4- Hydrox ifeni I piruvato dioxigenasa: Tirosinemia tipo 111
4. Tirosina aminotransferasa: Ti ros inemia tipo 11
5. Oxidasa del ácido homogentísico: Alcaptonuria
6. Fumaril acetoacetasa: Tirosi nemi a tipo 1

Figura Ej emp lo de co nsecuenc ias del b loq ueo enzimático en una cadena metabó lica de amin oác idos.
M etabo l ismo de la tiros in a: defectos enzimáticos y erro res del meta bo lismo de los amin oác idos aro máticos.

(tanto arterial - arteriosclerosis- como ven osa Cursan con un aumento en la eliminación urinaria de
- tromboembolismo-) y osteoporosis. un determinado aminoácido o de un grupo de ami-
noácidos que comparten un mecanismo de transporte
común y cuya reabsorción , por tanto, está afectada
AMINOACIDOPATÍAS POR DEFECTO conjuntamente. Un ejemplo es la cistin uria, un tras-
torno en la reabsorción tubular de los aminoácidos
EN EL TRANSPORTE dibásicos (cistina, ornitina, arginina y lisina) que
Aparecen como consecuencia de un defecto prima- provoca un notable aumento de su con centración en
rio en los mecanismos de transporte de los aminoá- la orina. La cistina, que es la menos soluble de estas
cidos en la mucosa intestinal y en el túbulo renal. sustancias, puede precipitar y originar cálculos.
·175
Fisiopatología del metabolismo
del ácido úrico, de las porfirinas
y del hierro
José Manuel Olmos Martínez, José Antonio Riancho Moral

FISIOPATOLOGÍA DEL ÁCIDO


ÚRICO
INTRODUCCIÓN
El ácido úrico constituye el producto
final del metabolismo de las purinas, o
bases purínicas, en el ser humano.
Las bases purínicas (adenina y guani-
na) proceden de la degradación de los áci-
dos nucleicos ingeridos con la dieta y de la destruc-
ción de las propias células del organismo. Además, se
pueden sintetizar endógenamente a partir de ribosa-5
fosfato y ATP (síntesis de novo).
El catabolismo de las purinas se lleva a cabo a
través de la oxidación de la adenina y la guanina a
hipoxantina y xantina. Posteriormente, tras la acción
de la enzima hipoxantina oxidasa, se forma el ácido
úrico (Fig. 75-1).
En el pH del medio interno (plasma, tejidos), el
ácido úrico se encuentra disociado, y el anión co-
rrespondiente (urato) asociado al catión extracelular
predominante (sodio). En cambio, en la orina, por ser
habitualmente el pH más bajo, no se encuentra diso-
ciado, sino en forma de ácido úrico propiamente di-
cho. Estas diferencias tienen importancia en relación
con la tendencia a la precipitación del urato sódico
en los tejidos del organismo, y del ácido úrico en el
interior de las vías urinarias.
El urato es filtrado por el glomérulo y reabsorbido
en su mayor parte desde la luz tubular. Aproximada-
mente el 80 % del ácido úrico urinario deriva de su
secreción posterior.

HIPERURICEMIA
Concepto
Se considera que existe un aumento en la
concentración de uratos en el suero (hi-
peruricemia) cuando se supera el límite
de solubilidad del urato monosódico
en el plasma: 7 mg/dl.
SECCIÓN VII Sem iología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

Ácidos Ácidos Síntesis Por disminución de la eliminación


nucle icos nucleicos endógena Otras formas secundarias se deben a una reducción
de la d ieta tis ulares
en la eliminación de ácido úrico. En este caso, la ra-
L_
Síntesis
Vía
r
,,,-- PURINAS
- __ J
zón puede ser una disminución de la filtración glo-
merular (insuficiencia renal), o una disminución en
su secreción tubular. Ejemplo de esto último es la pre-
rescate ~
HPGRT* Hº
+. sencia de sustancias que se eliminan por el túbulo in-
1poxant1na terfiriendo con dicha secreción, como algunos fárma-
Catabolismo +~, +, Xantino cos (diuréticos) y diversos metabolitos (ácido láctico,
Xa nti na oxidasa
cetoácidos) . Otro tanto ocurre en algunas nefropatías
(poliquistosis renal).
L.
ÁCIDO ÚRICO
+
El alcohol facilita el desarrollo de hiperuricemia
por mecanismos mixtos.
Excreción
i
RIÑÓN In testino
Patogenia y manifestaciones clínicas
Las manifestaciones de la hiperuricemia derivan del
depósito tisu lar de urato monosódico o de la precipi-
(25%}
tación del ácido úrico en la orina. En el depósito del
Figura Metabolismo de las purinas. urato monosódico influyen más factores que la sim-
ple sobresaturación del plasma o de los tejidos por el
mismo. También la precipitación de cristales de ácido
úrico en las vías urinarias está influida por numero-
Etiología sos factores. Por ello, la hiperuricemia no siempre es
La mayor parte de las veces la causa de la hiperu- sintomática. La hiperuricemia no siempre cursa con
ricemia es desconocida, designándose esta situación hiperuricosuria, ya que puede deberse a la retención
como hip eruricemia primaria. En otras ocasiones renal del ácido úrico.
la hiperuricemia es consecuencia de la presencia
Gota aguda
de determinados factores conocidos (enfermedades,
fármacos , estilo de vida ... ), hablándose entonces de El depósito de cristales de urato en las partes blandas
hiperuricemia secundaria. Los mecanismos que pue- de las articulaciones desencadena una reacción infla-
den dar lugar a la h iperuricemia son un aumento de matoria aguda (artritis aguda). El fenómeno central
la producción de ácido úrico o una disminución de estriba en la fagocitosis de los cristales de urato mo-
su eliminación por el rifión. nosódico por los leucocitos polimorfonucleares, con
liberación de enzimas lisosomales y radicales libres
de oxígeno. En el proceso están implicados los me-
Hiperuricemia primaria
diadores químicos de la inflamación: complemento,
Es un proceso patogénicamente heterogéneo , funda- quininas, prostaglandinas, etc. El descenso del pH en
mentalmente debido a una disminución de la elimi- el foco inflamatorio reduce aún más la solubilidad
nación renal de ácido úrico . de los uratos , cerrando así un círculo de fagocitosis y
precipitación de cristales.
Hiperuricemia secundaria Habitualmente, los episodios gotosos agudos afec-
Por aumento de producción tan a una sola articulación (monoartritis}, y de ma-
nera especial a la articulación metatarsofalángica del
De las formas secundarias, unas se deben a un au- primer dedo (podagra}.
mento de la producción de ácido úrico , como es el
caso del incremento del catabolismo de las purinas Gota tofácea crónica
que tiene lugar en diversas neoplasias (síndrome de El urato monosódico puede depositarse también en
lisis tumoral, bien por aumento del recambio celular, otros tejidos, como los cartílagos (pabellón auricular),
bien por destrucción de las células tumorales como el tejido celular subcutáneo y los tendones , dando
consecuencia del tratamiento), de la ingesta de dietas lugar a unas formaciones nodulares de contenido
ricas en purinas (vísceras) y del aumento en la degra- blanquecino que se denominan tofos (Fig. 75-2). El
dación del ATP (alcoholismo). depósito en el cartílago articular provoca una reac-
Existen además algunos raros trastornos metabóli- ción inflamatoria crónica que erosiona el cartílago y
cos hereditarios que determinan también un aumen- el hueso subcondral, deformando las articulaciones y
to en la síntesis de purinas: el déficit de hipoxanti- limitando su movilidad (artritis gotosa crónica).
na-guanina-fosforribosiltransferasa (síndrome de
Lesch-Nyhan) y la hiperactividad de la enzima fos- Afectación renal
forribosil-pirofosfato sintetasa, enzima que cataliza la Los cristales de urato monosódico pueden depositar-
616
síntesis endógena de purinas. se en el tejido intersticial del rifión, dando lugar a la
CAPÍTULO 75 Fisiopatología del metabolismo del ácido úrico, de las porfirinas y del hierro

Aumentados ALA
en las formas
neurológicas PGB

Aumentados PORFIRI ÓGE OS PORFIRINAS


en las formas {uro, copro, proto) {uro, copro)
cutáneas

PORFIRI AS
{proto)

HEMO

Figura Metabolismo de las porfirinas. ALA, áci -


do deltaaminolevulínico. PBG, porfobilinógeno.

Figura Paciente hiperuricémico con tofos en


las manos, particu larmente evidente en el dedo índi- vados de estos metabolitos que se hallan en exceso .
ce. En la parte interna de la articulación interfalángica En general, se consigue así mantener una producción
distal del dedo medio se aprecia un pequeño tofo en de hemo adecuada.
que la piel deja entrever el tono blanquecino del de- En los trastornos en que el defecto enzimático se
pósito de urato. asienta en los primeros pasos de la cadena metabó-
lica, algunos factores (ingesta de determinados medi-
denominada nefropatía crónica por uratos, que pue- camentos, por ejemplo) inducen crisis, caracterizadas
de desembocar en una insuficiencia renal crónica. por un fracaso en el mantenimiento de la síntesis del
En situaciones de marcada hiperuricemia, precipitan hemo (que disminuye). y por un aumento marcado
cristales de ácido úrico en los túbulos colectores (lu- de los dos primeros productos de la cadena metabó-
gares de máxima acidificación de la orina). provocan- lica (ácido deltaaminolevulínico, o ALA, y porfobi-
do una insuficiencia renal aguda (nefropatía aguda linógeno, o PBG). Clínicanrnnte tiene lugar un cua-
por ácido úrico]. dro caracterizado por manifestaciones neurológicas:
polineuritis, crisis de dolor abdominal y alteraciones
Litiasis úrica psiquiátricas (síndrome confusional, alucinaciones).
La hiperuricemia puede cursar con un aumento de En los trastornos en los que el defecto enzimático
ácido úrico en la orina y precipitación del mismo en asienta en lugares más avanzados de la cadena me-
la pelvis renal o en los uréteres , dando lugar a litiasis tabólica, se acumulan porfirinógenos y sus derivados,
úrica. Debe tenerse presente, sin embargo, que la li- las porfirinas. Las manifestaciones características en
tiasis úrica no siempre se debe a hiperuricemia y con estos procesos son cutáneas (lesiones ampollosas y
frecuencia ni siquiera cursan con hiperuricosuria. En erosivas sin traumatismos que las justifiquen, en las
estos casos, obviamente, la precipitación del ácido zonas descubiertas de la piel, debidas a un aumento
úrico se debe a otra razón. de fragilidad de la misma por inducir las porfirinas
En ocasiones, tras establecerse un cristal de ácido depositadas en ella fenómenos de fotosensibilidad)
úrico inicial que actúa como núcleo, precipitan en (Fig. 75-4). Las porfirinas urinarias pueden propor-
torno a él sales de oxalato cálcico, dando lugar a un cionar a la orina una coloración oscura, de aspecto
cálculo de naturaleza diferente. colúrico. Por otra parte, el PGB , de por sí incoloro,
cuando se encuentra elevado en la orina puede hacer
que esta, al cabo de cierto tiempo de emitida y en con-
FISIOPATOLOGÍA DEL METABOLISMO tacto con la luz solar, se oscurezca.
DE LAS PORFIRINAS
PORFIRIAS FISIOPATOLOGÍA DEL HIERRO
Las porfirias son un grupo heterogéneo de enferme-
dades caracterizadas por existir en ellas un trastorno METABOLISMO DEL HIERRO
enzimático en la vía metabólica que da lugar a la sín-
Los 4 g de hierro que contiene el cuerpo humano se
tesis del hemo (Fig. 75-3). En virtud de un mecanis-
distribuyen en tres compartimentos:
mo de retroalimentación negativo, el déficit de hemo
estimula los primeros pasos metabólicos de la cade- Compartimento funcionante , constituido por el
na, lo que da lugar a un exceso de los metabolitos hierro de la hemoglobina (2,5 g) y otras proteínas
situados por delante del defecto enzimático. También tisulares que contienen hierro , como la mioglo-
617
se acumulan productos metabólicos colaterales, deri- bina y los citocromos (400 mg).
SECCIÓN VIII. Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

circula hasta los tejidos donde va a ser utilizado. Las


células de estos poseen receptores para la transferrina
(rTf). Como el hierro libre es tóxico , se deposita en
los tejidos unido a proteínas; en primer lugar, a la fe-
rritina, que, cuando se acumula, forma agregados que
se transforman en hemosiderina, en la cual el hierro
queda fijado con mayor firmeza.
La síntesis de DMT 1, rTf y ferritina son reguladas
por el contenido de hierro de las células. En este proce-
so juega un importante papel una proteína sintetizada
por los hepatocitos -hepcidina- que actúa inhibiendo
la acción de la ferroportina . La respuesta de la h ep-
cidina es modulada a su vez por otras dos proteínas
intracelulares, la lwmojuvelina y la HFE. Esta última
es deficitaria en la hemocromatosis (Fig. 75-5).

EXPLORACIÓN DEL METABOLISMO


DEL HIERRO
Compartimento funcionante: Se valora determi-
nando la concentración de hemoglobina en la
sangre (12-16 g/dL).
Compartimento circulante: Se valora midiendo
en el suero la concentración de hierro o sidere-
mia (50-150 µg/dl), así como la de la proteína que
Figura Paciente con porfiria. Se observa en el lo transporta (transferrina; 100-200 µg/dl). Esta
dorso de la mano una lesió n erosiva producida en au- se mide frecuentemente como capacidad total
sencia de traumatismos que la justifiquen, como co n- de fijación (CTF} del hierro (250-400 µg/dl). No
secuencia de un aumento de fragilidad de la piel de- interesa tanto la sideremia en sí misma como su
terminado por el depósito cutáneo de porfirinas. relación con la CTF (cociente sideremia/CTF o
índice de saturacion de la transferrina, IST), que
Compartimento circulante, constituido por el en condiciones normales oscila entre 25-50 %.
hierro que es transportado en el plasma unido a Compartimento de reserva: Se mide cuantifican-
la proteína transferrina (3 -5 mg). do la ferritina sérica (15-300 ng/ml), que es un
Compartimento de reserva (1 g), en que el hierro buen índice de los depósitos de hierro. La princi-
se encuentra ligado a proteínas, en forma de fe- pal limitación de la ferritina estriba en que, con
rritina y hemosiderina, en los órganos de depósi- independencia de la situación del metabolismo
to (hígado, bazo, médula ósea). del hierro, aumenta en dos tipos de situaciones:

La mayor parte del hierro utilizado por el


organismo procede fundamentalmente de
la hemoglobina de los hematíes destruidos ,
de manera que la cantidad que se precisa Hepcidi na
que ingrese desde el exterior es muy peque-
ña (la necesaria para compensar los 0,5-1 ,5 ....•·············· .................. Hepatocito
mg de pérdidas diarias). La absorción se
realiza en el duodeno y en la primera por-
ción del yeyuno. Para ello se requiere que
se transforme de la forma oxidada en que
se encuentra en los alimentos (Fe+++J, a la
Fe ++ / trans-
forma ferrosa (Fe++), lo que ocurre en el es- ferrina
_.. Ferritina
tómago gracias a su pH ácido. Una vez en
el intestino, el hierro pasa al interior de los Hemosiderina
enterocitos con el concurso de una proteína Enterocito Circulación
transportadora (DMT 1, de divalent metal DMT1 Célula tisular
transporter 1). Posteriormente, gracias a la Fe rroportina
acción de un transportador denominado Receptor de la transferrina
ferroportina, los enterocitos ceden el hie-
618 Figura Metabolismo del hierro.
rro a la transferrina plasmática, con la que
CAPÍTULO 75 Fisiopatología del metabolismo del ácido úrico, de las porfirinas y del hierro

las hepatopatías que cursan con citólisis (por el de hemosiderosis a sobrecargas de hierro de carác-
liberarse desde los hepatocitos) y los procesos ter secundario (p. ej. , en pacientes politransfundidos).
inflamatorios (por ser un reactante de fase agu-
da) . También se puede valorar el hierro de los Etiología
depósitos directamente, bien de forma cualitati- Formas genéticas. La variedad más común de
va (tinción de Perls), bien de forma cuantitativa hemocromatosis hereditaria se debe a una ano-
(determinando la cantidad de hierro presente en malía de la proteína HFE (C282Y) que disminuye
el hígado por gramo de tejido seco). los niveles de hepcidina, con lo que la ferroporti-
El estudio habitual del metabolismo del hierro inclu- na queda liberada en su efecto transportador del
ye la sideremia (con la CTF y el IST) y la ferritina sérica. hierro a través del enterocito. Existen además
otras formas de hemocromatosis genética, descri-
tas posteriormente, y denominadas globalmente
DÉFICIT DE HIERRO «hemocromatosis hereditarias no HFE »
Etiología Formas secundarias (hemosiderosis]. Pueden
Ingreso insuficiente. Suele deberse a déficit de deberse a un aumento de la absorción intestinal
absorción (síndrome de malabsorción, gastrecto- de hierro estimulado por un aumento crónico de
mía -la falta de ácido dificulta la transformación actividad eritropoyética (talasemia). o al aporte ex-
de la forma férrica en ferrosa-). Es raro que se cesivo por vía parenteral (transfusiones repetidas).
deba a falta de aporte con los alimentos.
Aumento de consumo. Puede tener lugar en el Fisiopatología y manifestaciones
crecimiento, el embarazo y la lactancia. La acumulación de hierro en las células de los pa-
Pérdida excesiva. Es la causa más frecuente. rénquimas lesiona estos, seguramente porque cuando
Suele producirse por hemorragias del aparato di- queda superada su capacidad de unión a las proteínas
gestivo, debiendo tenerse en cuenta las pérdidas se producen radicales libres de oxígeno. En el hígado
pequeñas y repetidas, que pasan inadvertidas (el órgano más frecuentemente afectado) se desarrolla
(«pérdidas microscópicas »). En la mujer pueden cirrosis. La afectación pancreática puede dar lugar a
producirse también por el aparato genital (mens- diabetes, que se suele calificar de «bronceada» por el
truación abundante). color oscuro que suele presentar la piel en la hemo-
cromatosis (Fig. 75-6). También puede desarrollarse
Fisiopatología y manifestaciones hipogonadismo. La afectación del corazón determina
insuficiencia cardiaca. El color oscuro de la piel no se
El déficit de hierro repercute en primer lugar sobre debe al hierro depositado en ella, sino porque induce
los depósitos, que se agotan . Posteriormente repercu- la producción de melanina.
te sobre el hierro funcionante, tanto el tisular como Desde el punto de vista analítico, la sideremia está
el ligado de la hemoglobina. La disminución de he- elevada y la CTF disminuida, por lo que el IST está au-
moglobina por falta de hierro constituye la anemia mentado (superior al 50 %). La ferritina está muy ele-
ferropénica. La falta de hierro funcionante tisular se vada (en general, por encima de los 1000 ng/ml). En
traduce en astenia, así como en trastornos tróficos de la forma primaria de la enfermedad se debe confirmar
la piel y sus anejos (pelo frágil y quebradizo , uñas la presencia de la mutación genética, para evitar su
cóncavas -coiloniquia-), y de las mucosas (glositis, confusión con otros procesos (hepatopatías crónicas).
ulceraciones en las comisuras bucales -rágades-, al-
teración de la mucosa faringoesofágica , con disfagia
-síndrome de Plummer-Vinson-) .
Desde el punto de vista analítico, los enfermos tie-
nen sideremia baja con CTF elevado (aumenta la pro-
teína transportadora para aprovechar todo el hierro
disponible) , lo que supone un índice de saturación
bajo (menor del 15 %). La ferritina plasmática está
disminuida (inferior a 15 ng/ml).

SOBRECARGA DE HIERRO
La hemocromatosis es un síndrome que aparece como
consecuencia del depósito de hierro en las células
parenquimatosas de los tejidos. El término hemoside-
rosis se utiliza a veces como sinónimo, sin que exis-
ta una definición precisa del mismo. En general, se
prefiere reservar el término hemocromatosis para el Figura Color bronceado de la piel en la hemo-
619
depósito de hierro debido a enfermedades genéticas, y cromatosis.
·176
Fisiopatología de los trastornos
del metabolismo hidrosalino
y del potasio
Jesús González Macías, José Antonio Riancho Moral

RECUERDO
ANATOMOFUNCIONAL
COMPARTIMENTOS ACUOSOS
DEL ORGANISMO
El agua es el componente más abundante del organis-
mo. Se encuentra distribuida en dos compartimentos,
el intracelular y el extracelular, que están separados
por las membranas celulares. En total, representa el
60 % del peso corporal, correspondiendo un 40 %
al primero y un 20 % al segundo. El compartimento
extracelular está dividido a su vez en dos espacios,
intersticial e intravascular, cuya contribución al peso
del organismo es del 16 % y el 4 %, respectivamente.
El espacio intravascular, constituido por el plasma,
está separado del intersticio por la pared capilar. El'
volumen contenido en el espacio intravascular se co-
noce con el nombre de volemia, que viene a ser sinó-
nimo del volumen de sangre que se encuentra en el
aparato circulatorio.

OSMOLALIDAD
La difusión de las moléculas de un solvente desde
un compartimento hacia otro que contiene el soluto a
mayor concentración, y respecto al cual la membrana
que separa ambos compartimentos no es permeable,
se denomina ósmosis. La presión que habría que
aplicar para anular el desplazamiento del solven-
te se conoce como presión osmótica. Los solutos
generadores de ósmosis se denominan solutos
osmóticaniente activos.
La intensidad de la presión osmótica
que ejerce una solución es directamen-
te proporcional a la concentración de
partículas del soluto. Si este es un
620
compuesto no ionizado (glucosa),
CAPÍTULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

la presión osmótica es función del número de mo- tivamente, hipertónicos e hipotónicas, e inducen
léculas presentes. Si el soluto se ioniza (NaCl), es desplazamiento de agua a través de la membrana de
función del número total de partículas iónicas (Na+ las células : las hipertónicas hacen que las células
más c1-). pierdan agua y, por tanto, que disminuya su tamaño;
Un osmol está constituido por 6 x 10 23 partículas las hipotónicas, que capten agua y, por tanto, que su
osmóticamente activas. Una solución que contenga 1 tamaño aumente.
osmol disuelto en 1 kg de agua constituye una solu- El sodio, aunque hemos visto que es el principal
ción 1 osmolal. Una solución de 1 osmol por litro de determinante (junto con sus aniones acompañantes)
solución (no de disolvente) constituye una solución de la osmolalidad plasmática, en realidad sí puede
1 osmolar. Es preferible la utilización de unidades atravesar la membrana celular. Otro tanto le ocurre al
osmolales a la de unidades osmolares, aunque en la potasio, principal responsable, también con sus anio-
práctica médica la diferencia es de escasa trascen- nes acompañantes, de la osmolalidad intracelular. La
dencia. El osmol resulta excesivamente grande para razón por la que, pese a ello, son osmóticamente acti-
expresar la actividad osmótica de los líquidos corpo- vos , es que son transportados activamente a través de
rales , por lo que, en general, se emplea como unidad la membrana celular, de forma que tanto la concentra-
el miliosmol. ción del uno como la del otro a ambos lados de dicha
membrana son muy distintas.
El movimiento del disolvente inducido por fuer-
COMPOSICIÓN DE LOS LÍQUIDOS zas osmóticas tiene lugar con gran rapidez, por lo
ORGÁNICOS que puede considerarse que los dos compartimentos,
intra y extracelular, están siempre en equilibrio os-
La distribución del agua entre los compartimentos mótico.
extra e intracelulares está determinada por sus con- La osmolalidad plasmática puede medirse directa-
tenidos osmóticamente activos. Los solutos osmóti- mente con un osmómetro, pero puede también calcu-
camente activos más abundantes en los líquidos del larse de forma aproximada mediante la fórmula:
organismo son los iones. La composición iónica del
compartimento extracelular y la del intracelular son Osmolalidad plasmática (mosm/kg) =
diferentes. En el compartimento extracelular, el catión
más abundante es el sodio, y los aniones más abun- = 2 x [Na+] mEq/1 +
dantes el cloro y el bicarbonato. En el intracelular, [glucosa] mg/dl [urea] mg/dl
el catión más abundante es el potasio, y los aniones +--------+------
18 6
más abundantes, las proteínas y los fosfatos orgáni-
cos. La composición iónica de los líquidos orgánicos La concentración de Na+ aparece multiplicada por
suele expresarse en miliequivalentes/litro (mEq/1).
dos para incluir la de sus correspondientes aniones;
Un miliequivalente de un ion monovalente (Na+, c1-J
las concentraciones de glucosa y urea aparecen divi-
desarrolla la actividad osmótica correspondiente a 1 didas por 18 y 6 (un décimo de su peso molecular)
mosm. Si el ion tiene dos o tres valencias, la actividad
para transformar la expresión de su concentración de
se reduce a la mitad o a la tercera parte. mg/dl en mosm/kg. En algunas ocasiones (intoxica-
La osmolalidad del plasma es de unos 290 mosm/ ción por metanol, etanol, etc.), existen en el plasma
kg. El 90 % de esta actividad se debe al Na+ y sus sustancias osmóticamente activas distintas de las re-
aniones acompañantes. Aproximadamente un 5 % cogidas en la fórmula. En tales casos hay una clara
se debe a la glucosa y otro 5 % a la urea. Las pro- discrepancia entre el valor de la osmolalidad medido
teínas contribuyen normalmente con menos de 2 directamente (osmómetro) y el calculado mediante
mosm/kg. la fórmula citada. De acuerdo con ello, cuando la di-
La urea se difunde libremente a través de la pared ferencia entre los valores proporcionados por ambos
celular. Por tanto , aunque contribuye a la osmola- métodos es superior a 10 mosm/kg, debe pensarse
lidad plasmática total, no desarrolla ningún efecto que están presentes sustancias osmóticamente activas
desde el punto de vista del intercambio del agua anormales.
entre el interior y el exterior de las células. Este
hecho indica que debe distinguirse la osmolalidad
plasmática absoluta y la osmolalidad plasmática efi- ESPACIO INTERSTICIAL Y ESPACIO
caz respecto al interior de las células. Los osmoles INTRAVASCULAR. PRESIÓN ONCÓTICA
correspondientes a las sustancias que atraviesan la
membrana celular se denominan osmoles ineficaces. La membrana capilar que separa los espacios inters-
La osmolalidad plasmática eficaz se conoce como ticial e intravascular es permeable al agua y a la ma-
tonicidad. Una solución isotónica tiene la tonici- yor parte de los solutos . Solamente las moléculas de
dad del plasma normal , y no produce movimiento cierto tamaño (fundamentalmente proteínas) no atra-
de agua a través de la pared celular. Las soluciones viesan libremente dicha membrana. En consecuencia,
621
con tonicidad mayor o menor se denominan respec- solo estas moléculas generan presión osmótica en el
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

interior y el exterior del capilar. Esta forma particular Cuando se modifica el balance del agua del orga-
de presión osmótica dependiente de las proteínas en nismo, ello implica, en primer lugar, un cambio en el
relación a la membrana capilar se denomina presión peso corporal. Por otra parte, si la modificación del
oncótica. El valor de la presión oncótica plasmática balance del agua no se ha visto acompañada de una
es de unos 28 mm Hg (unas 200 veces menor que la modificación proporcional del balance del sodio, se
presión osmótica plasmática). altera la concentración de este en el agua de los líqui-
La actividad osmótica de las proteínas plasmáti- dos orgánicos, en concreto en el plasma (natremia).
cas no suele expresarse en términos de osmolalidad El balance de una sustancia con respecto a la to-
(mosm/kg), sino en términos de presión (mm Hg). talidad del organismo, se denomina con frecuencia
Ello permite compararla con la presión hidrostática, balance externo . En oposición a él, los cambios de re-
el otro gran factor que regula la distribución de líqui- parto de dicha sustancia entre los distintos comparti-
do a ambos lados de la membrana capilar. mentos del organismo permiten hablar de un balance
interno. Por ejemplo, en condiciones normales entra
en las células la misma cantidad de agua que sale de
VOLUMEN CIRCULANTE EFICAZ ellas. Si por alguna razón se desplazara preferente-
mente del interior al exterior de las células o vicever-
El término se refiere a un aspecto funcional del espa- sa, se habría roto el balance interno.
cio intravascular. Puede definirse como el contenido
del árbol arterial en cuanto determinante de la pre-
sión de perfusión tisular y, por tanto, de la perfusión Regulación del balance del agua
eficaz de los tejidos. Es percibido por los receptores El agua ingresa en el organismo en forma de bebida
de presión, de los que existen tres sistemas principa- o de alimentos (como agua preformada o producida
les: a) los receptores del cayado aórtico y el seno ca- por el metabolismo de los principios inmediatos).
rotídeo, que regulan la actividad del sistema nervioso Se elimina fundamentalmente por la orina, aun-
simpático; b) los receptores de las arteriolas aferentes que una cantidad significativa lo hace a través de
glomerulares, que regulan la actividad del sistema la piel (perspiratio insensibilis y sudoración) y los
renina-angiotensina-aldosterona, y c) los receptores pulmones. El volumen mínimo de orina requerido
auriculares, que regulan la liberación del péptido para eliminar los productos de desecho del meta-
atrial natriurético. bolismo es de unos 600 ml. Junto con los 800 ml
Aunque el volumen circulante eficaz, en general, que se pierden por la perspiratio insensibilis y los
se modifica de forma paralela al volumen extracelu- pulmones (pérdidas insensibles) y los 100-200 ml
lar, no siempre lo hace así. Por ejemplo, en algunas que se pierden por las heces, constituyen las deno-
ocasiones el espacio extracelular total aumenta a ex- minadas pérdidas obligadas (1500-1600 ml). El agua
pensas del espacio intersticial, mientras que el volu- proporcionada por los alimentos (agua preformada
men intravascular (y, por tanto, el volumen circulante y agua metabólica) suele suponer unos 1200 ml. Por
eficaz) está disminuido. tanto, para mantener el balance de agua se requie-
También tiende a haber paralelismo entre el volu- ren al menos 400 ml de agua de bebida. Por razones
men intravascular y el volumen circulante eficaz, pero culturales, en realidad la ingesta de agua suele ser
hay excepciones a ese comportamiento general. Así, muy superior, de manera que lo habitual es que, para
es posible que el volumen intravascular sea normal o mantener el balance de agua, el organismo tenga que
mayor de lo normal, pero que la presión de perfusión eliminar una cantidad de la misma superior a la que
del árbol arterial (y en consecuencia, el volumen cir- suponen las pérdidas obligadas. Ello se lleva a cabo
culante eficaz) esté disminuida , como ocurre en las eliminando orina diluida, que puede considerarse
situaciones en que están disminuidas las resistencias constituida por dos componentes: uno formado por
periféricas. una solución con la misma concentración de solutos
que el plasma, y otro formado exclusivamente por
agua (agua libre).
REGULACIÓN DE LA CANTIDAD DE AGUA El balance del agua del organismo está regulado
Y SODIO DEL ORGANISMO. BALANCE mediante el control de su ingesta y de su excreción.
La ingesta está determinada por la sed, y la excreción
DE AGUA Y DE SODIO por la hormona antidíurétíca (ADH). Tanto la sed
El término balance se refiere al estado de equilibrio como la secreción de ADH están, a su vez, determina-
de un sistema biológico respecto a una sustancia, de das por la osmolalidad plasmática.
forma que la cantidad de ella que entra en el sistema Los can1bios de osmolalidad actúan a través de
durante un periodo determinado es igual a la que sale unos osmorreceptores situados en el hipotálamo.
de él durante ese mismo periodo. Si los ingresos su- El control de la excreción de agua por la ADH se
peran las pérdidas, se dice que el balance es positivo. lleva a cabo mediante la regulación de la reabsorción
Si las pérdidas superan los ingresos, se dice que el en el túbulo colector del agua libre producida en el
622
balance es negativo. segmento diluyente de la nefrona. La reabsorción
CAPÍTULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

máxima de agua determina diuresis de unos 600 ml/ Otros factores. En el control de la reabsorción
día . La inhibición máxima de reabsorción de agua de- tubular de sodio intervienen también factores
termina diuresis de hasta 20 1/día. humorales locales (protaglandinas, angiotensi-
La sed y la secreción de ADH pueden ser también na II) y factores físicos (presiones hidrostática
estimuladas por disminuciones del volumen cir- y oncótica de los capilares peritubulares). Su
culante eficaz. La sensibilidad de la respuesta a los acción parece poco trascendente en condicio-
cambios en la osmolalidad es mayor que la sensibili- nes normales.
dad de la respuesta a los cambios en el volumen cir-
culante eficaz (es decir, la ADH responde a cambios
porcentualmente menores de la osmolalidad que del REGULACIÓN DE LA OSMOLALIDAD
volumen circulante). Sin embargo, el efecto de los
can1bios en el volumen circulante es más potente, de Se lleva a cabo mediante el control del balance
forma que, a partir de una cierta modificación del vo- acuoso. Las variaciones en la osmolalidad plasmáti-
lumen circulante eficaz, si ambos estímulos actúan ca, como ya se ha señalado, son detectadas por los
en sentido contrario, el organismo antepone el man- osmorreceptores hipotalámicos. Sus aumentos esti-
tenimiento del volumen extracelular al ajuste de la mulan la sed y la secreción de ADH, lo que lleva a
osmolalidad. desarrollar un balance de agua positivo, que diluye
los líquidos orgánicos, corrigiéndose el exceso de os-
En resumen, el balance acuoso se regula habitual-
molalidad. Ocurre lo contrario cuando disminuye la
mente a través de la osmolalidad. En condiciones ex-
osmolalidad.
tremas interviene el volumen circulante eficaz.

Regulación del balance de sodio REGULACIÓN DEL VOLUMEN


El principal mecanismo implicado en la regulación INTRACELULAR
del balance de sodio es el control de su excreción re-
nal (natriuresis}, que está en íntima relación con el El principal factor determinante del volumen intra-
volumen circulante eficaz. celular es la osmolalidad (tonicidad) p lasmática. Las
A diferencia de lo que ocurre con la regulación del disminuciones de la osmolaridad plasmática dan lu-
balance de agua, no existe un mecanismo similar al gar a la entrada de agua en las células y a la consi-
de la sed para regular la ingesta de sodio. Los facto- guiente expansión de su volumen. Por el contrario,
res que intervienen en la regulación de la excreción los aumentos de la osmolalidad plasmática dan lugar
urinaria de sodio son múltiples, y pueden englobarse a una salida de agua de las células y a una disminu-
en dos apartados: los relacionados con la filtración ción de su volumen. Puesto que el volumen intracelu-
glomerular y los relacionados con la reabsorción tu- lar se regula a través de la osmolalidad, y esta, según
bular. Ambos tipos de factores , sin embargo, no son hemos visto en el punto anterior, a través del balance
independientes. acuoso , la regulación del volumen intracelular, en de-
finitiva, tiene lugar a través de cambios en el balance
Filtrado glomerular. Determina la carga de sodio acuoso (Fig. 76-1).
que llega al interior del túbulo. Su repercusión
en la natriuresis se ve amortiguada por el fenó -
meno de balance glomerulotubulm~ en virtud del REGULACIÓN DEL VOLUMEN
cual el túbulo proximal tiende a reabsorber una EXTRACELULAR
gran proporción de la cantidad filtrada (alrede-
dor del 75 %). Se regula fundamentalmente a través del balance del
Reabsorción tubular. Es el principal mecanismo sodio, ya que al no entrar este en las células, el agua
regulador de la excreción renal de sodio. Inter- que le acompaña para mantener la isotonicidad que-
vienen en ella diversos factores : da localizado en dicho espacio.
Aldosterona. Reabsorbe sodio en el segmento
distal de la nefrona. Su secreción es estimu-
lada por el sistema renina-angiotensina. A su Balance acuoso
vez, la secreción de renina es estimulada por
la disminución del volumen circulante eficaz it
O smolalidad
e inhibida por el aumento del mismo a través
de los receptores de presión del aparato yuxta- it
glomerular. Volumen intracelul ar

Péptido auricular natriurético. Se comporta


como un factor antialdosterona. Su secreción Figura El ba lance ac uoso, a través de la osmo-
está controlada por receptores de presión ex- lalidad del líq ui do extracelular, determi na el vo lumen
in tracelular. 623
trarrenales.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla -1 Trastornos del metabolismo hidrosalino


Tipos de trastornos Causas Fisiopatolog ía
Trastornos del balance del agua

Balance positivo SIADH Expansión del EIC


Insuficiencia renal
Balance negativo lngesta escasa de agua Contracción del EIC
Pérdida de agua
Diabetes insípida
Pérdidas insensibles
Trastornos del balance del agua y
del sodio

Balance positivo de ambos Insuficiencia renal Expansión del EEC (1)

Estados edematosos (insuficiencia El EIC puede aumentar o


cardiaca, hipertensión portal) disminui r según predomine el H20
o el Na• en el balance positivo

Balance negativo de ambos Pérdida de cualquier líquido al Contracción del EEC


exterior o a «tercer espacio» El EIC varía según la [Na•] que se
alcance
EEC =Espacio extracelular; EIC =Espacio intracelular.
(1) En los «estados edematosos" está aumentado el espacio intersticial, pero el volumen circulante eficaz está disminuido.

Las variaciones del balance acuoso repercuten pérdidas. Ello es muy difícil que ocurra si exis-
sobre el volumen extracelular, pero con menor in- te una función renal normal. Puede producirse,
tensidad. La razón es que se reparten entre los dos excepcionalmente, en casos de ingesta de canti-
espacios intra y extracelular, de los que este supone la dades de agua superiores a los 15-20 1/día (po-
mitad de aquel (de forma que sólo un tercio de lamo- tomanía). Lo habitual es que el balance p ositivo
dificación del balance afecta al espacio extracelular). de agua se deba a la existencia de alteraciones
Pueden intervenir otros mecanismos compensadores en su eliminación renal, sin restricción propor-
que vamos a comentar. cional de su ingesta. Aparece, básicamente, en la
secreción in apropiada de A DH (SIADH) (véase
Cap . 65), en que un exceso de esta hormona di-
CLASIFICACIÓN FISIOPATOLÓGICA ficulta específicamente la eliminación renal de
DE LOS TRASTORNOS DEL METABOLISMO agua. Es p osible también en la insuficiencia re-
HIDROSALINO nal, aunque lo habitual en este caso es que h aya
simultáneamente un balance positivo de sodio y,
La que aquí se propone se basa en distinguir, por una por tanto , el trastorno resultante sea mixto. Oca-
parte, trastornos puros del balance de agua, y por otra, sionalmente desarrollan un balance positivo de
trastornos mixtos de los balances de agu a y sodio (Ta- agua pers onas qu e reciben suero glucosado en
bla 76-1 ). Los trastornos puros del balance del sodio cantidades excesivas; la razón es que la glucosa
prácticamente no existen, como tendremos ocasión se metaboliza a C0 2 , que se elimina, y H 2 0 , que
de comentar. se retiene.
Fisiopatología. Cu ando se establece un balance
de agua positivo, la repercusión inicial tiene
TRASTORNOSDELBALANCEDELAGUA lugar sobre el espacio extracelular, el cual dilu-
ye. La hipoosmolalidad consiguiente determina
Balance positivo de agua
la entrada de agua en el interior de las células.
Etiología. Por definición, el balance de agua se De esta forma, el agua retenida se reparte entre
624
hace positivo cu ando sus ingresos superan sus los dos espacios, extra e intracelular, que que-
CAPITULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

Tabla Manifestaciones de los trastornos del metabolismo hidrosalino


Trastornos Factor determinante Manifestaciones
Aumento del EEC Retención de Na+ (y H2O) a) Aumento del espacio intersticial: edema
b) Aumento del espacio intravascular: aumento de presión
arterial , sobrecarga circulatoria
Disminución del EEC Pérdida de Na+ (y H2O) a) Disminución del espacio intersticial
signo del pliegue
disminución de la presión intraocular
b) Disminución del espacio intravascular
debilidad, ortostatismo (aumento de la frecuencia
cardiaca, disminución de la presión a rterial)
uremia prerrenal
sed
Aumento del EIC Retención de H2O Anorexia, ná useas, vómitos
Íleo paral ítico
Debilidad, calambres
Coma, convulsiones
Disminución del EIC Coma, convulsiones, sed
Sequedad de piel y mucosas
Manifestaciones generales Cambio de peso (aumento con balances positivos y
disminución con balances negativos)
Sed con balances negativos (sobre todo de agua, pe ro
también de agua y sodio si disminuye suficientemente el
volumen circulante eficaz)
EEC =Espacio extracelular; EIC =Espacio intracelular.

dan expandidos y diluidos . De la expansión de Desde el punto de vista analítico, se observa


uno y otro espacio, tiene mayor trascendencia hiponatremia e hipoosmolalidad plasmática.
fisiopatológica la del espacio intracelular (fun-
damentalmente en el cerebro, donde da lugar al Balance negativo de agua
denominado, inapropiadamente, «edema cere-
bral»), ya que determina la aparición de mani- Etiología. El balance negativo de agua pura -o
festac iones clínicas cuando la correspondiente desh idratación- p u ede tener lugar por dos ra-
expansión extracelular es asintomática. zones : impedimento de la ingesta de agu a y au-
Manifestaciones. Las manifestaciones derivadas mento de las pérdidas de la misma. Lo primero
de la expansión del espacio intracelular son va- ocurre en situaciones de falta de disponibilidad
gas e inespecíficas. Algunas corresponden a la de agua o por enfermedades que dificultan el
esfera digestiva: anorexia, náu seas, vómitos. En desarrollo de la sensación de la sed o su satis-
ocasiones se desarrolla un íleo paralítico. Suelen facción (coma, estenosis esofágica, alteración
añadirse trastornos m u sculares (debilidad y ca- primaria del centro de la sed - ancianos-, etc.).
lambres) . El resto de las manifestaciones son fun- La segunda situación se produce cuando hay
damentalmente neurológicas. Consisten en cefa- una falta de producción o de actuación de la
lea, depresión del nivel de conciencia e incluso ADH (diabetes insípida, véase Cap . 65), y cuan-
coma. Son también posibles las convulsiones. El do están aumentadas las pérdidas insensibles
síndrome clínico derivado del desarrollo de un de agua (hiperventilación, aumento de tempe-
balance positivo de agua suele denominarse in- ratura).
toxicación acuosa. El aumento del agua corporal Fisiopatología. La depleción acuosa repercute
va acompañado, lógicamente, de un aun1ento de inicialmente sobre el espacio extracelular, cuyo
625
peso (Tabla 76-2). volumen disminu ye y cuya concentración de so-
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

lutos aumenta. El consiguiente incremento de la mentalmente en dos tipos de enfermedades: a) las


osmolalidad determina la salida de agua de las que cursan con insuficiencia renal, y b) una serie
células. El resultado final es que tanto la dismi- de situaciones caracterizadas por la presencia de
nución de volumen como el aumento de osmola- edema (insuficiencia cardiaca, cirrosis). En estas
lidad acaban afectando a ambos compartimentos, últimas , probablemente como consecuencia de
intra y extracelular. Tiene mayor trascendencia una disminución inicial del volumen circulan-
fisiopatológica la contracción del espacio intra- te eficaz, están estimulados los mecanismos de
celular que la del extracelular, aunque esta tam- retención renal de agua y sodio. En presencia de
bién puede determinar manifestaciones clínicas. una función renal normal es muy difícil que lle-
Manifestaciones. La contracción del espacio in- gue a desarrollarse un balance positivo de sodio,
tracelular da lugar a manifestaciones fundamen- dada la gran capacidad que tiene el riñón para
talmente neurológicas, tales como depresión del eliminarlo (constituyen una excepción los casos
nivel de conciencia, convulsiones y coma. La en que el sodio se aporta por vía parenteral en
disminución del volumen intravascular da lugar forma de solución salina perfundida con excesi-
a sensación de debilidad y signos circulatorios va rapidez).
de hipovolemia, de los cuales el mejor estable- En el hiperaldosteronismo primario, en que,
cido se refiere a los cambios postulares en la dado el efecto de la aldosterona, cabría esperar
frecuencia cardiaca y la tensión arterial al pasar una retención de sodio, se establece un fenóme-
de la dino a la ortoposición, que pueden acom- no de escape que impide que dicha retención
pañarse de síncope. La contracción del espacio progrese. Por tanto , el hiperaldosteronismo pri-
intersticial determina sequedad de mucosas , y la mario no puede considerarse causa genuina de
sudoración cesa. La turgencia cutánea disminu- balance positivo de sodio y agua.
ye, apareciendo el «signo del pliegue», o persis- En las consideraciones que siguen nos vamos
tencia excesiva de un pliegue cutáneo producido a centrar fundamentalmente en la fisiopatolo-
por pellizcamiento de la piel (en realidad, aun- gía y las manifestaciones de las situaciones de
que se trata de un signo clásico, su valor diagnós- balance positivo de agua y sodio por retención
tico es escaso). La deshidratación puede facilitar renal, ya que son las que constituyen el ejemplo
el desarrollo de hipertermia, particularmente más genuino del mismo, al ser el balance posi-
en los niños, facilitada por estar disminuidas la tivo el fenómeno primario, y la modificación de
transpiración y la sudoración, formas de luchar los espacios sobre los que dicho balance reper-
el organismo contra el calor. cute (intravascular e intersticial), el fenómeno
Si el centro de la sed funciona adecuada- secundario. En los estados edematosos la situa-
mente, esta aumentará (polidipsia). Si también ción es diferente, ya que en ellos hay una altera-
funcionan adecuadamente el sistema hipotála- ción de dichos espacios previa a la retención de
mo-hipofisario y el riñón, la orina será escasa y agua y sodio. Dicho de forma muy esquemática,
concentrada (ADH). Disminuye el peso corporal. se produce inicialmente una redistribución de
Desde el punto de vista analítico, existe hiper- líquidos entre los dos espacios, con acúmulo
natremia e hiperosmolalidad plasmáticas. La dis- en el intersticial (y por tanto edema) y dismi-
minución del volumen plasmático puede hacer nución -o tendencia a ella- en el intravascular.
que aumente las concentración de albúmina y he- Esto último se traduce en una disminución del
moglobina. El hematocrito no se modifica, ya que volumen circulante eficaz, que conduce a la
el volumen plasmático y el eritrocitario disminu- retención de agua y sodio por el riñón. Dicha
yen de forma proporcional. Si la disminución del retención intenta compensar la disminución
volumen intravascular hace que descienda el fil- del espacio intravascular, sin conseguirlo, por-
trado glomerular, aumentará la urea plasmática. que el trastorno primitivo hace que el líquido
retenido salga también al espacio intersticial,
produciéndose más edema y cerrándose un cír-
TRASTORNOS MIXTOS DEL BALANCE culo. De los estados edematosos (insuficiencia
DE AGUA Y DE SODIO cardiaca, hipertensión portal, síndrome nefró-
tico) se habla con más detenimiento en otros
Los trastornos del balance de sodio no aparecen nunca lugares del libro.
de forma aislada, sino acompañados de un trastorno si- Fisiopatología (Fig. 76-2). Cabe distinguir tres
multáneo del balance de agua. La proporción en que se situaciones, de acuerdo con la proporción de so-
gana o se pierde agua y sodio es, sin embargo, variable. dio y agua retenidos:

Balance positivo de agua y de sodio Ganancia proporcional de agua y sodio.


Supone un incremento del espacio extrace-
Etiología. La retención de cantidades anormales lular, sin repercusión sobre el intracelular,
626
de sodio (y con ello de agua) se produce funda- dada la isotonía de la solución retenida.
CAPÍTULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

Ganancia Ganancia Ganancia


Na•> H,O proporcional Na•< H,O

i
Hiperosmol alidad
a• y H,O
(l sotonía)

/ ,□H
Salida H,O Componente H,O libre
de EIC a EEC isotóni co l'
/ Hipo~m
r lidad

l
Disminución EIC Aumento EEC Aumento EIC

Figura Cambios fisiopatológicos en relación con la proporción ele Na+ o agua retenidos. EEC: espacio
extracelular. EIC: espacio intracelular.

Balance positivo del sodio superior al del na edema . La expansión del espacio intravascu-
agua. En primer lugar, el balance positivo lar puede dar lugar a un aumento de la presión
de sodio y agua supone por sí mismo un arterial y venosa (distensión yugular). La sobre-
aumento del espacio extracelular; pero ade- carga circulatoria que supone (el corazón debe
más, por ser mayor el balance de sodio que bombear una mayor cantidad de sangre en el
el del agua, se producen otros fenómenos: se mismo tiempo y a un espacio con mayor presión)
establece inicialmente un aumento de la na- puede dar lugar a la aparición de signos de insu-
tremia y, por tanto, de la osmolalidad plas- ficiencia cardiaca, fundamentalmente izquierda
mática, que estimula la sed y la secreción (edema agudo de pulmón). La retención de agua
de ADH; la consiguiente retención de agua que acompaña al sodio determina un aumento
supone una mayor expansión del volumen del peso.
extracelular; por otra parte, la osmolalidad Se pueden o no desarropar las manifestacio-
extracelular elevada hace que tienda a salir nes de expansión o contracción del espacio in-
agua del interior de las células, con dismi- tracelular, dependiendo del comportamiento del
nución del espacio intracelular y aumento mismo.
del extracelular. Desde el punto de vista analítico, la expansión
Balance positivo de sodio inferior al del del volumen intravascular se traduce en una di-
agua . Se puede considerar que la solución lución de los elementos plasmáticos y sanguí-
ganada está constituida por un componente neos , con la consiguiente disminución de sus
de agua pura, que se reparte entre los espa- concentraciones (albúmina, hemoglobina). La
cios extra a intracelular, aumentándolos, y natremia es variable.
por un componente isotónico, que perma-
nece en el espacio extracelular, expandién- Balance negativo de agua y sodio
dolo. (depleción hidrosalina)
Como se deduce de lo expuesto, el fenómeno Etiología. La posibilidad de un balance negativo
fisiopatológico fundamental del síndrome del de sodio por falta de aporte de este es inexis-
balance positivo de sodio y agua es la expansión tente, dada la enorme eficacia con que el riñón
del volumen extracelular. Además, el espacio in- puede retenerlo. A la depleción de sodio se llega
tracelular puede modificarse según la tonicidad siempre por pérdida de un líquido corporal. Las
del líquido retenido. pérdidas suelen clasificarse en renales y extra-
La expansión del espacio extracelular afecta rrenales. Las pérdida renales más frecuentes son
a sus dos componentes. Cuando es lenta, reper- las debidas a diuréticos; cabe señalar también
cute fundamentalmente sobre el espacio inters- las de algunas nefropatías tubulointersticiales y
ticial. Cuando es rápida, no da tiempo a que el las del hipoaldosteronismo. Las pérdidas extra-
líquido se acumule en el intersticio, por lo que rrenales son de naturaleza variada: pueden de-
sobrecarga el espacio intravascular. berse a fluidos digestivos (vómitos y diarreas), a
Manifestaciones. El aumento del líquido en el exceso de sudoración, a hemorragias (el plasma
627
espacio intersticial constituye lo que se den.ami- en definitiva no es sino una solución salina de
SfCCIÓN VI Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

Pérdida Pé rdida
Por ello, en la evolución del balance negativo
proporcional Na•< H, O de agua y sodio algunos autores distinguen dos
Na• y H, O fases : una primera de natremia normal (o inclu-
/ so aumentada) y una segunda de hiponatremia.

"'Tª' /
Componente
isotó nico
H, O libre

i
Como es lógico, si llega a desarrollarse esta se-
gunda fase hiponatrémica (Fig. 76-3), podrán
aparecer manifestaciones de hiperhidratación
Disminución EEC Hiperosmola ridad celular.

i
Aumento de la sed y la A DH
i
Disminución EIC
Una situación especial es la de la insuficiencia
suprarrenal, en que la secreción de ADH no solo
está aumentada por la disminución del volumen
i
Hiponalremia - - - - . Aumento EIC
circulante eficaz, sino porque es estimulada por
la CRH, cuya secreción deja de estar inhibida por
el cortisol.
Figu ra Cambios fis iopatológicos en re lación En resumen , el fenómeno fisiopatológico fun-
con la pérd ida de Na+ o agua en el organismo. damental de la depleción salina es la disminu-
ción del volumen extracelular. Si además se alte-
ra la tonicidad plasmática, ello repercutirá sobre
el espacio celular.
Manifestaciones . La disminución del espacio
agua), o al desarrollo de un «tercer espacio». En
extracelular afecta tanto al compartimento in-
este caso, el líquido corporal no se pierde al exte-
tersticial como al intravascular. Lo primero da
rior, sino que queda «secuestrado» en un espacio
lugar a disminución de la turgencia de la piel
distinto del intra y del extracelular (de ahí el tér-
(signo del pliegue), y sequedad de piel y muco-
mino de «tercero »); un ejemplo es la obstrucción
sas . La disminución del espacio intravascular
intestinal, en que se acumula líquido en las asas
determina debilidad y signos de hipovolemia:
intestinales.
cambios posturales de la frecuencia cardiaca
Ningún líquido del organismo posee una con-
(aumento con el ortostatismo) y disminución de
cenuación de sodio superior a la de plasma. Por
la tensión arterial, que se hace más patente si el
tanto , solamente son posibles pérdidas equiva-
paciente pasa de la clinoposición a la ortoposi-
lentes de agua y de sodio, o pérdidas de líquidos
ción.
proporcionalmente más ricos en agua que en
Las pérdidas del agua acompañante del sodio
sodio.
dan lugar a una disminución del peso. El pacien-
Fisiopatología (Fig. 76-3). De acuerdo con los ti-
te suele tener sed, aunque esta sensación puede
pos de líquidos que puede perder el organismo,
estar ausente en caso de hiponatremia.
las situaciones a que dichas pérdidas dan lugar
Si se desarrolla hiponatremia (segunda fase),
son de dos tipos:
pueden aparecer manifestaciones de aumento
Pérdida proporcional de agua y sodio. Esta del espacio intracelular (calambres, alteración
pérdida repercute exclusivamente sobre el es- del nivel de consciencia) .
pacio extracelular, cuyo volumen disminuye. Las alteraciones analíticas son las propias
La naturaleza isotónica del trastorno hace que de la disminución del espacio extracelular: au-
el espacio intracelular no se altere. mento de la concentración de albúmina y de he-
Pérdida proporcionalmente mayor de agua moglobina, por hemoconcentración, y aumento
que de sodio. El líquido perdido puede con- de la concentración de la urea por disminución
siderarse mezcla de una solución isotónica y del filtrado glomerular. La concentración sérica
de agua pura. La pérdida de la primera tiene de sodio, de acuerdo con lo expuesto, suele ser
las consecuencias comentadas en el apartado normal en la primera fase (aunque puede estar
anterior: contracción del espacio extracelular. elevada), y baja en la segunda.
La pérdida del segundo supone un aumento de Las figuras 76-4 y 76-5 resumen la fisiopato-
osmolalidad, con salida de agua del espacio in- logía y la manifestaciones de las alteraciones de
tracelular, que se contrae, y estímulo de la sed. los espacios intra y extracelular.
En cualquier caso, si la depleción de volu-
men extracelular es intensa, la disminución del
volumen circulante eficaz hace que se estimule CLASIFICACIÓN CLÍNICA DE LOS
la retención de agua (ADH, sed) con indepen- TRASTORNOS HIDROELECTROLÍTICOS.
dencia del estado osmótico , produciéndose hi- HIPONATREMIA E HIPERNATREMIA
ponatremia. Es un ejemplo de situación en que
el organismo sacrifica el mantenimiento de la Como se deduce de lo comentado hasta ahora, hay
628
osmolalidad al mantenimiento del volumen. cuatro grandes síndromes clínicos: aumento del espa-
CAPITULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

intracelular y la hipernatremia disminución del mis-


El balance acuoso repercute sobre el EIC mo). Conviene, por ello, que nos detengamos en el
El balance de Na+ repercute sobre el EEC estudio de las alteraciones de la concentración plas-
mática del sodio.
• Balance (+) de agua ➔ i EIC
• Balance (-) de agua ➔ J, EIC
• Balance (+) Na ➔ i EEC HIPONATREMIA
* con ganancia proporcional de agua ➔ 0 EIC Se define como una la concentración sérica de sodio
* con ganancia excesiva de agua ➔ i EIC inferior a 130 mEq/1. Aunque en general cursa con hi-
* con menor ganancia de agua ➔ J, EIC poosmolalidad, algunas situaciones hiponatrémicas
• Balance (-) Na ➔ J, EEC no son hipoosmolales (en cambio, todas las situacio-
* con pérdida proporcional de agua ➔ 0 EIC nes hipoosmolales son hiponatrémicas).
* con pérdida excesiva de agua ➔ J, EIC Etiopatogenia (Tabla 76-3): Desde el punto de
* con ganancia posterior de agua ➔ i EIC vista práctico, las situaciones de hiponatremia se
suelen clasificar en tres grupos, de acuerdo con
Figura Resumen fisiopato lógico de la repercu- la presencia de edemas o de signos de deshidra-
sión de los distintos tipos de trastorno del ba lance de tación:
agua y sodio sobre los espacios intra y extracelular. Con presencia de edemas. Las posibilidades
etiológicas son de dos tipos:
- Insuficiencia cardiaca y cirrosis. Por dife-
cio intracelular, disminución del espacio intracelular, rentes razones, en ambas puede existir una
aumento del espacio extracelular y disminución del disminución del volumen circulante efecti-
espacio extracelular; además, son posibles distintas vo, lo que estimula la secreción de ADH, que
combinaciones de las alteraciones intra y extracelu- al retener agua diluye el medio interno (ade-
lares. La cuantificación de estos espacios es difícil más , la disminución del volumen circulante
de realizar en la práctica clínica. Sin embargo, de la
situación del espacio intracelular puede tenerse in-
formación indirecta a través de las alteraciones de la
concentración del sodio plasmático, ya que son estas
alteraciones las principales causas de su modifica- Tabla Causas de hiponatremia
ción (la hiponatremia produce aumento del espacio y de hipernatremia
Hiponatremia
ESPACIO Con presencia de edemas
Extracelular Intracelular Estados edematosos (insuficiencia cardiaca,
• Intersticio: Edema ■ Anorexia, náuseas vómitos cirrosis)
• Espacio intravascular: • Debilidad muscular, calambres
sobrecarga circulatoria:
Insuficiencia re nal
• Disminución del nivel de
Con disminución de la volemia
t · i Presión venosa yugular
• Riesgo de edema pulmonar
• Dilución albúmina
consciencia (coma}
■ Riesgos de convulsiones
■ Hipoosmolalidad
Pérdida de fluidos orgánicos (diarrea,
sudoración, etc.)
(hiponatremia}
y hemoglobina Diuréticos
Insuficiencia suprarrenal
• lntravascular: Hipovolemia • Náuseas, vómitos
• Disminución del nivel de
Sin edemas ni disminución de la volemia
• Debilidad
• Hipotensión, síncope consciencia (incluso coma} SIADH

l • Taquicardia
• J, diuresis y natriuresis
([Na] < 20 mEq/1}
• Riesgos de convulsiones (niños}
• Sed
• Hiperosmolalidad
Hipotiroidismo
Hipernatremia
i urea (casi siempre hipernatremia }
i [albúmina] y [hemoglobina] lngesta insuficiente de agua
• Intersticio (¿ ?}
Pérdidas de agua
• Posible signo del pliegue
• Sequedad de mucosas Diabetes insípida y otras situaciones con
• Sed
alteración de la función estenúrica
Hiperventilación
Pérdidas de líquidos hipotónicos (diarreas,
Figura Resumen de las manifestaciones de las sudoración)
alteraciones de los dos espacios, intra o extracelular,
por aumento o disminución de los mismos.
SECCION VI Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

efectivo da lugar a retención de sodio por el tuación excepcional es la hipernatremia por


riñón, fenómeno responsable de los edemas). perfusión endovenosa de soluciones de sodio
- Insuficiencia renal. Puede conducir a la re- hipertónicas. Desde el punto de vista práctico,
tención de agua y sodio, lo que produce ede- las causas de hipernatremia pueden clasificarse
mas. Si la retención de agua excede a la de en dos grandes grupos:
sodio, habrá hiponatremia.
Ingesta insuficiente de agua. Se observa funda-
Con disminución de la volemia. Es la situación mentalmente en personas con trastornos de la
propia de la depleción hidrosalina (diarrea, su- consciencia (por lo que no pueden responder a
doración profusa, etc.) que llega a determinar los estímulos de la sed) y en ancianos (en los
una disminución del volumen circulante efec- que el centro de la sed funciona con frecuencia
tivo capaz de estimular la secreción de ADH, de forma deficitaria).
con la subsiguiente retención de agua y desa- Aumento de las pérdidas de agua. Ocurre en
rrollo de hiponatremia (lo que hemos deno- las siguientes situaciones:
minado «segunda fase de la depleción hidro-
salina»). También las tiazidas , que producen - Diabetes insípida (central o nefrogénica) y,
una pérdida de sodio con disminución del vo- en general, todas las situaciones en que está
lumen circulante efectivo capaz de estimular alterada la capacidad del riñón para concen-
la ADH, pueden dar lugar a esta situación. Un trar la orina (hipercalcemia, diuresis osmó-
caso especial es la insuficiencia suprarrenal, tica, etc.).
que facilita la pérdida de sal y, al mismo tiem- - Pérdidas de agua por los pulmones (hiper-
po, cursa con dificultad para la eliminación de ventilación)
agua. - Pérdidas de agua y sodio con mayor propor-
Sin edemas ni datos de disminución de la ción de aquella (pérdidas digestivas -como
volemia. Esta situación suele conocerse como las diarreas infecciosas y osmóticas, pero no
«hiponatremia con volumen extracelular nor- las secretoras-, sudor), antes de que la secre-
mal », aunque en realidad puede haber un dis- ción de ADH retenga agua y restaure, o inclu-
creto aumento del mismo, que no se traduce so disminuya, la osmolalidad.
en ninguna manifestación clínica. Se debe a un Fisiopatología y manifestaciones: La hiperna-
balance positivo de agua pura. El prototipo lo tremia constituye una situación hiperosmolar
constituye la secreción inapropiada de ADH o y, por tanto, se acompaña de salida de agua
SIADH. También el hipotiroidismo puede cur- del interior de las células. Las manifestaciones
sar con una hiponatremia de volumen extrace- son, pues, las comentadas como propias de la
lular normal, en la que está implicada la ADH. disminución del espacio intracelular. Con afán
compensador aumentan los iones y los osmo-
Fisiopatología y manifestaciones: La hiponatre-
litos dentro de las células, por lo que dichas
mia determina la entrada de agua en las células, manifestaciones son más frecuentes en los pro-
por lo que sus manifestaciones son las propias
cesos agudos. La aparición de síntomas graves
de la expansión intracelular. Su intensidad varía requiere concentraciones de Na+ superiores a
con la rapidez de la instauración del trastorno.
158 mEq/1.
Cuando tiene lugar lentamente, da tiempo a que
las neuronas «adapten » su osmolalidad perdien-
do en parte iones como el Na+ y el K+, y en par- Otras situaciones hiperosmolares
te solutos orgánicos denominados «osmolitos », El aumento de la glucemia puede determinar un cua-
con lo que no llega a desarrollarse sintomatolo- dro de hiperosmolalidad, que se estudia en el Capí-
gía. En general, sólo por debajo de 125 mEq/1 de tulo 72. En tal caso, la natremia no solamente no está
Na+ comienzan a aparecer náuseas y mal estado aumentada , sino que, como acabamos de ver, está dis-
general; entre 120 y 110 mEq, aparece cefalea y minuida (hiponatremia hipertónica).
trastorno de la consciencia; por debajo de 110,
convulsiones y coma.
FISIOPATOLOGÍA DEL METABOLISMO
DEL POTASIO
HIPERNATREMIA
Se define como una concentración sérica de sodio su- INTRODUCCIÓN
perior a 145 mEq/1. Indica siempre hiperosmolalidad,
El 90 % del K+ del organismo se encuentra en el com-
si bien no todas las situaciones de hiperosmolalidad
partimento intracelular, donde constituye el catión
se deben a hipernatremia.
predominante, con una concentración de 150 mEq/1.
Etiopatogenia: Su causa está casi siempre vin- En el espacio extracelular, su concentración normal
630
culada a un balance negativo de agua. Una si- es de 3,5-5 mEq/1.
CAPÍTULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

La relación potasio intracelular-potasio extracelu- ne de energía para mantener el funcionamiento de la


lar es de la máxima importancia en el mantenimiento bomba, el K+ aumenta en el exterior de la célula. Tal
del potencial de reposo de las membranas celulares. es el caso de la hipoxia.
Cambios en este potencial alteran la capacidad de la La distribución de potasio intra y extracelular está
célula para despolarizarse. La mayor parte de las ma- regulada principalmente por el equilibrio ácido-base
nifestaciones a que dan lugar los cambios agudos en del organismo, la osmolaridad extracelular y diversas
la concentración sérica de potasio están relacionadas hormonas.
con cambios en el potencial de membrana. Dada la
alta diferencia de concentraciones del potasio den- Equilibrio ácido-base. Las situaciones de acido-
tro y fuera de la célula, se comprende fácilmente sis tienden a cursar con una salida del potasio
que los cambios que , en términos absolutos , pueda intracelular al espacio extracelular, en intercam-
experimentar el potasio extracelular, son de mayor bio con hidrogeniones. Lo contrario (entrada de
importancia que los que pueda experimentar el in- potasio en el interior de las células) ocurre en la
tracelular. alcalosis.
Osmolaridad. Los aumentos bruscos de osmola-
ridad plasmática también determinan la salida
Balance de potasio de potasio del interior de la célula. La razón es
La ingesta habitual de potasio es de unos 100 mEq/24 que dicho aumento de fuerza la salida de agua,
h . De ellos, aproximadamente un 90 % se elimina por que arrastra el potasio.
la orina, y el 10 % restante por vía digestiva , con las Hormonas. Las hormonas principalmente im-
heces. Alimentos ricos en potasio son la carne, los plicadas en la distribución del potasio son la
vegetales y ciertas frutas (cítricos, plátanos). El pota- insulina y las catecolaminas. Ambas favorecen
sio se filtra libremente en el glomérulo, se reabsorbe la entrada de potasio en el interior de las células.
prácticamente por completo en la nefrona proximal y
Otro factor que influye en la distribución del K+ es
es secretado en la nefrona distal (túbulo contorneado
el ejercicio físico, que facilita su salida de la célula.
distal y colector). La nefrona distal también puede
reabsorber potasio. Normalmente, la excreción uri-
naria de potasio está determinada por su secreción Cambios en la distribución y el balance
distal. La secreción renal de potasio está regulada por de potasio
diversos factores: Las modificaciones en la concentración sérica de po-
Aldosterona. Su aumento estimula la excreción tasio pueden ser el resultado de una alteración en su
de potasio. distribución (entre los espacios intra y extracelular),
Hiperpotasemia. Igualmente, estimula la elimi- o de una alteración en su balance. Esta doble depen-
nación urinaria de potasio. dencia hace que la relación entre la potasemia y el
contenido total de potasio del organismo sea variable.
Llegada de Na+al túbulo distal . Tras reabsorber-
se, aumenta la electronegatividad intraluminal,
lo que facilita la secreción de potasio (cargas po- Mecanismos compensadores de las alteraciones
sitivas) desde el interior de las células. de la homeostasis del potasio
Llegada de cargas negativas al túbulo distal. Fa- Existen dos mecanismos compensadores :
cilita la excreción de potasio por aumentar tam-
bién la electronegatividad intraluminal. Está au- Modificaciones en la redistribución del potasio:
mentada en las situaciones en que el glomérulo El balance negativo va seguido de una salida de
filtra cargas negativas no reabsorbibles (aniones potasio al exterior de las células, a fin de evitar
orgánicos, como los cetoácidos o el ácido lácti- el desarrollo de hipopotasemia. Por el contrario,
co). Un efecto similar tiene el HC0 3-, que a este el balance positivo va seguido del paso de po-
nivel se reabsorbe en pequeña cantidad. tasio al interior celular, para evitar el desarrollo
Flujo urinario. El flujo urinario «lava» de potasio de hiperpotasemia. Estos movimientos del pota-
la superficie tubular de la célula, facilitando el sio a través de la membrana celular constituyen
mantenimiento de un gradiente del mismo entre un mecanismo de intervención inmediata, pero
el interior de la célula y la luz del túbulo. transitoria, y son más eficaces frente al balance
negativo que al positivo, ya que la salida de po-
tasio del interior de la célula al exterior (en el ba-
Distribución interna del potasio lance negativo) tiene lugar a favor del gradiente
Entre las células y el espacio extracelular se establece del mismo, mientras que la entrada de potasio en
un intercambio de cationes merced a la bomba Na+/K+ el interior de la célula (en el balance positivo) se
ATPasa dependiente, que bombea K+ al interior y Na+ hace contra gradiente.
al exterior, de forma que se mantienen los gradientes Actuación del riñón: Al contario que el mecanis-
transmembrana de ambos. La entrada de K+ se realiza mo de redistribución, el riñón interviene a largo
en competición con H+. Cuando la célula no dispo- plazo, pero de forma definitiva, y se opone mejor
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

a la hiperpotasemia (eliminando K+) que a la hi-


popotasemia (reteniéndolo).
Tabla Causas de hipopotasemia
HIPOPOTASEMIA Por balance negativo
La hipopotasemia se define como una concentración Aumento de las pérdidas
sérica de potasio inferior a 3 ,5 mEq/1. Digestivas:
Intestinales
Causas de hipopotasemia (Tabla 76-4) Gástricas
Renales:
Hipopotasemia por balance negativo: El desa-
Diuréticos
rrollo de un balance negativo de potasio es relati-
vamente frecuente , debido a que el riñón es poco Acidosis y alcalosis metabólica
eficaz conservándolo. Ante una situación de dé- Hiperaldosteronismos
ficit de potasio, tarda unas dos semanas en desa- Tubulopatías
rrollar su máxima capacidad de retención y, aun Falta de aporte
así, experimenta unas pérdidas de 5-15 mEq/1
Por redistribución
y día. El mecanismo que evita que las pérdidas
de potasio se traduzcan inicialmente en una si- Alcalosis
tuación de hipopotasemia que ponga en peligro Parálisis periódica hipopotasémica
la vida radica en el compartimento intracelular, Otras
que permite la salida del potasio.
Hipopotasemia por aumento de las pérdidas
de potasio. Estas pérdidas pueden producirse
por el aparato digestivo o por el riñón. Ambos
tipos pueden distinguirse fácilmente midiendo sio por mecanismos similares (fenómeno de
la eliminación urinaria de potasio (superior a 20 lavado, aumento de la oferta distal de sodio
mEq/1 en el segundo caso e inferior en el prime- en la diuresis osmótica y en la salina).
ro). Excepcionalmente, también pueden produ-
cir hipopotasemia pérdidas producidas por el Hiperaldosteronismo y situaciones similares.
sudor. Como es sabido, la aldosterona estimula la
Pérdidas digestivas. Pueden ser de dos tipos: secreción tubular de potasio. Junto al hiper-
aldosteronismo primario (véase capítulo co-
Pérdidas de contenido intestinal, rico en po- rrespondiente a la patología de las glándulas
tasio (diarreas, laxantes, íleo -en que , si bien suprarrenales), existen diversas situaciones
el contenido intestinal no se pierde al exterior, que se comportan de forma similar. Unas co-
queda retenido en un «tercer espacio » fuera rresponden a trastornos en la síntesis de las
del medio interno-). hormonas suprarrenales y otras a diversas
Pérdidas de jugo gástrico (vómitos, aspiración tubulopatías. Cuando el hiperaldosteronis-
gástrica), de menor contenido en potasio, pero mo se produce como respuesta a un déficit
cuya eliminación al exterior determina alcalo- de volumen circulante eficaz, al que el orga-
sis metabólica, con aumento de la llegada de nismo reacciona aumentando la secreción de
bicarbonato al túbulo distal, que también faci- aldosterona , se habla de hiperaldosteronismo
lita la pérdida de potasio (véase más arriba). secundario. En él, aunque la aldosterona tien-
Pérdidas renales. Causadas por: de a eliminar potasio , es posible que la propia
disminución del volumen circulante eficaz
Diuréticos y situaciones de poliuria. determine una disminución de filtrado glo-
- Diuréticos. Todos los diuréticos , con excep- merular y una retención de Na+ en el túbulo
ción de los denominados «retenedores de proximal, que impiden que este catión llegue
potasio», producen una pérdida de potasio a los tramos distales de la nefrona, por lo que,
en la nefrona distal. Los mecanismos son al no poderse intercambiar con K+, este no se
diversos (fenómeno de «lavado » al aumen- elimina.
tar el flujo urinario, mayor oferta de Na+a la Acidosis y alcalosis metabólicas. La acidosis
nefrona distal por inhibir su reabsorción en metabólica producida por ácidos orgánicos
tramos más proximales). (lactato, cetoácidos, salicilatos) de aniones
- Poliuria. Las situaciones de poliuria en ge- poco reabsorbibles facilitan las pérdidas de
neral (de las que, en realidad, la administra- potasio, al aumentar dichos aniones la electro-
ción de diuréticos puede considerarse una negatividad de la luz tubular. En la alcalosis
632 variante) determinan una pérdida de pota- metabólica, por una parte está facilitada la en-
CAPITULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

trada de K+de la sangre al interior de las células mEq/1. Pueden afectar a diversos órganos, pero las
de la nefrona distal, al no existir hidrogeniones más importantes se refieren al músculo y al sistema
con los que competir; por otra parte, el aumen- nervioso.
to del bicarbonato plasmático que caracteriza
Debilidad muscular . La hipopotasemia puede
el trastorno, hace que un exceso del mismo se
cursar con debilidad muscular y parálisis, en
filtre en el glomérulo y alcance el túbulo distal,
relación con la alteración del potencial de mem-
comportándose a este nivel como un anión de
brana que determina. La debilidad muscular
reabsorción difícil.
suele empezar en las extremidades inferiores,
Otras causas. Pese a que, en general, la enfer- asciende a las superiores y puede afectar a la
medad renal tiende a determinar una retención musculatura respiratoria y a la de los pares cra-
de potasio (insuficiencia renal) , en algunas cir-
neales. El paciente puede fallecer por insuficien-
cunstancias (tubulopatías) ocurre lo contrario cia respiratoria. Otras manifestaciones neuro-
(p. ej. , acidosis tubular renal). La hipomagne- musculares son tetania, parestesias y calan1bres.
semia produce pérdidas urinarias de potasio También en el músculo liso puede haber paresia
por un mecanismo desconocido. (íleo paralítico).
Hipopotasemia por falta de aporte: Aunque la Alteraciones cardiacas. Son posibles diversos
eficacia del riñón en la retención de potasio sea tipos de arritmias, desde extrasístoles auricu-
menor que en la de sodio, la cifra correspondien- lares a fibrilación ventricular, pasando por un
te a las pérdidas obligadas es suficientemente bloqueo auriculoventricular. En el ECG se altera
pequeña como para ser holgadamente aporta- fundamentalmente la repolarización, con apla-
da por la dieta. Sin embargo, en situaciones de namiento o inversión de la onda T, depresión del
ayuno prolongado sí es posible que se produzca segmento ST y, ocasionalmente, aparición de la
hipopotasemia. Debe recordarse a este respecto onda U (Fig. 76-6).
el caso de los enfermos mantenidos con fluido- Otras manifestaciones, son:
terapia parenteral a los que inadvertidamente no
se les administran suplementos de potasio. Rabdomiólisis (lesión de la membrana de las cé-
Hipopotasemias por redistribución o transloca- lulas musculares). El mecanismo determinante
ción. Puede ser causada por: de esta lesión no se conoce bien.
Disfunción renal . La hipopotasemia crónica difi-
Factores hormonales. La insulina puede pro- culta, por razones no bien conocidas, la capaci-
ducir hipopotasemia por facilitar la entrada de dad renal de concentrar la orina, lo que da lugar
potasio en las células. El efecto es más claro a una poliuria discreta. Además, facilita la reab-
si simultáneamente existe hiperglucemia. La sorción de bicarbonato, y por tanto la alcalosis
estimulación betaadrenérgica puede dar lugar metabólica.
a ligeros descensos del potasio sérico. Aumento de la producción de amonio. La hipo-
A lcalosis metabólica. En esta situación, la potasemia aumenta la producción de amonio en
bomba Na+/K+-ATPasa introduce en las células las células renales. Este aun1ento podría precipi-
potasio con preferencia a los H+, que quedan tar una situación de encefalopatía en enfermos
fuera oponiéndose a la elevación del pH. Es con una cirrosis hepática.
posible que desempeñe algún papel el propio
bicarbonato (que al filtrarse aumenta la elec-
tronegatividad intraluminal), ya que en la al- HIPERPOTASEMIA
calosis respiratoria el fenómeno es de menor
intensidad. Se define como una concentración de potasio sérico
Parálisis periódica hipopotasémica. Se trata de superior a 5 mEq/1.
una rara enfermedad de naturaleza desconoci- Antes de referirnos a la hiperpotasemia propiamen-
da en la que se producen episodios bruscos de te dicha, conviene comentar el concepto de «falsa hi-
hipopotasemia acompañados de profunda de- perpotasemia» o «pseudohiperpotasemia», propia de
bilidad muscular situaciones de leucocitosis o trombocitosis extremas.
Respuesta de la anemia megaloblástica a la Se debe a que, durante la coagulación de la sangre
administración de B12• Supone un aumento de para la obtención del suero, sale K+ de los leucocitos
masa celular, con la consiguiente entrada de y las plaquetas (por tanto , la hiperpotasemia no se ob-
potasio al compartimento intracelular. serva si se anticoagula la sangre para obtener el plas-
ma). También puede aumentar falsamente el potasio
(esta vez, tanto en suero como en plasma) si durante
Manifestaciones la extracción se produce hemólisis, por la liberación
Su aparición guarda relación con la magnitud del de K+ del interior de los hematíes destruidos . Otra
trastorno y con su velocidad de instauración. Son causa de elevación espuria o falsa son los movimien-
633
raras con valores de potasemia superiores a 2,5 tos repetidos de apertura y cierre de la mano antes de
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

triamterene). También pueden producir hiper-


potasemia diversas alteraciones tubulares.
Tabla Causas de hiperpotasemia
Hiperpotasemia por redistribución o translocación
Por balance positivo
Acidosis metabólica. El aumento de H+ fuera de
Exceso de aporte las células favorece su entrada en ellas, inter-
Disminución de las pérdidas cambiándose por K+, que sale al medio extrace-
Insuficiencia renal lular. Por otro lado, el exceso de H+ en las células
Hipoaldosteronismo del túbulo renal distal hace que la reabsorción
Otras de Na+ tienda a realizarse en intercambio con él,
con preferencia a hacerlo en intercambio con K+,
Por redistribución con lo que este se retiene. Por ambos mecanis-
Acidosis metabólica mos, las situaciones de acidosis tienden a provo-
Parálisis periódica hiperpotasémica car hiperpotasemia. Sin embargo, como ya se ha
Síndrome de lisis celular señalado a propósito de las hipopotasemias, la
Otras acidosis metabólica producida por ácidos orgá-
nicos (cetoácidos, salicilatos, lactato) puede cur-
sar con hipopotasemia por ser sus aniones poco
reabsorbibles y, por tanto, aumentar la electrone-
gatividad celular, con la consiguiente salida de
la extracción de sangre, tras colocar el manguito de K+ al líquido tubular. El resultado final es difícil
compresión venosa. de prever.
Hiperglucemia por déficit de insulina. Dado que
Causas de hiperpotasemia (Tabla 76.5) la insulina promueve la entrada de potasio en
Hiperpotasemia por balance positivo las células, esta se ve dificultada cuando falta la
hormona.
Exceso de aporte. Solo excepcionalmente se Parálisis periódica. Además de la forma hipopo-
produce hiperpotasemia por exceso de aporte en tasémica, existe una parálisis periódica hiperpo-
presencia de una función renal normal, dada la tasémica.
capacidad del riñón para eliminar potasio. Un Síndrome de lisis celular. También se produce
ejemplo lo constituye la administración excesiva hiperpotasemia cuando existe una rápida des-
de K+ por vía endovenosa (situación que puede trucción celular, de forma que los componentes
conducir rápidamente a la muerte). del citosol, como el K+, salen al medio extracelu-
Disminución de la eliminación: lar. Ocurre así, por ejemplo, cuando se destruyen
Insuficiencia renal. La insuficiencia renal muchos hematíes (hemólisis), células muscula-
aguda constituye la causa más grave de hiper- res (rabdomiólisis), o células tumorales (al co-
potasemia, dado que el riñón es el principal menzar un tratamiento con quimioterapia).
mecanismo frente a ella. De hecho, ante una Otros ejemplos . Cabe incluir aquí el ejercicio fí-
hiperpotasemia de cierta intensidad (7 mEq/1) sico intenso, la inhibición betaadrenérgica y la
debe pensarse en la insuficiencia renal como utilización de otros fármacos (intoxicación digi-
causa de la misma. La insuficiencia renal cró- tálica, succinilcolina, arginina) .
nica sólo produce hiperpotasemia en las fases
avanzadas. Manifestaciones
Hipoaldosteronismo. El ejemplo típico es la
Consisten fundanrnntalmente en debilidad muscular
enfermedad de Addison. Deben recordarse,
y anomalías en la conducción cardiaca.
además , por la frecuencia de su uso, los fárma-
cos que interfieren el normal funcionamiento Debilidad muscular: Guarda relación con la alte-
del sistema renina-angiotensina-aldosterona ración que supone la hiperpotasemia en el poten-
(inhibidores de la enzima convertidora de la cial de membrana, que se aproxima al valor um-
angiotensina, espirolactona, etc.). Existe una bral, llegando a sobrepasarlo. La consecuencia es
situación de hipoaldosteronismo atribuido a que no puede generarse el potencial de acción,
una secreción defectuosa de renina, por ello desarrollándose debilidad muscular o parálisis.
denominado «hipoaldosteronismo hiporreni- Las manifestaciones empiezan por las extremi-
némico », que es propio de diabéticos con in- dades inferiores, para ascender a las superiores.
suficiencia renal crónica moderada. La musculatura respiratoria y la correspondiente
Otros ejemplos. Deben mencionarse otros diu- a los pares craneales suelen estar respetadas. En
réticos, además de la espirolactona, que actúan general, la debilidad muscular no empieza hasta
634
en el túbulo distal reteniendo K+ (amiloride, que la potasemia es de 8 mEq/1.
CAPÍTULO 76 Fisiopatología de los trastornos del metabolismo hidrosalino y del potasio

Arritmias cardiacas: Constituyen el principal posteriormente, pérdida de la P. El QRS no solo


riesgo de muerte, ya que pueden conducir a la fi- se ensancha, sino que progresivamente pierde su
brilación ventricular. Cuando la potasemia es de perfil definido, de manera que se continúa con la
alrededor de 6 mEq/1, se altera la configuración T determinando un trazado sinusoidal próximo
de la T, que se hace picuda. El intervalo QT se al de la fibrilación ventricular (Fig. 76-6). Final-
acorta. Más adelante, aparecen trastornos de la mente, puede desarrollarse esta. La contractili-
despolarización con ensanchamiento del QRS y, dad miocárdica no se ve afectada.

QRS
Aee~sa ncha 11 ~ 11
T A ! 1
p acumir
e aplan
a \ )\ ada \

y
j
y
/'\. 1\ I\_ .,.. 1\ / "\ /'\. /
"PR
se Arolong;
>------ >-- Normal (3,5-5 mEq/ 1) 7 fo---

1 1 1 1 1
6,5-7 mEq/1 +

• ~
- - +~

'! 11
Q RS
T
" e íusio , a a /'\
- ,,
<.JK:
, ñsan
;t ;
\_ '\ / \_ /\ ) \_
\ V
~
- 8-9 mEq/ 1 ·t ¡

t
1 1 1 ; t .t-t
.. •' 1
t 11
"! 1 •
¡\ Onda {\ {\

I\_" / \ ¡I~~i!;'; ,\_" I \


\/ \J v t-
t
Hiperpotasemia
~ 10 mEq/1 1·
- + ,. •+
Cam b ios electrocard iográficos ,._ ,.

1 1 1
' •·
ree istrados en la derivación 11

.. 11
QRS 11 ~ 1
A.. ensanc a ~ ~ /\ .,. \ Í'
--.L), \ /V'
T
u
alla
/\. \ /V'
, - -,--
QT
1
orm:.I

Normal (3,5-5 mEq/1) -:--


e aplan
t- + 1 1 1 1 1
s 3 mEq/1
1 1 1 1·
- 1
1 l 11
QRS - i·t'
1-- S(

en a e.ha
u
~
\ aplar gante
1 .../'\
"
ST
"
de~ciende S 2 mEq/1 t t~t-

t- f
-- .. 1 r .. 1
1
' 11
QRS
anc o
A A
u

A
~ T
,...,
promin ~nle

i'\ /'\ \- _, '\


ST plan
descie de
Hipopotasemia al menos mm
Cambios electroca rd iográficos S 1 mEq/1
reg istrad os en la derivació n 11 1 1 1

Figura ECG de hipopotasemia e hiperpotasemi a.


-177
Patología general
del metabolismo ácido-base
José Antonio Riancho Moral, Jesús González Macias

INTRODUCCIÓN
CONCEPTOS BÁSICOS
Un ácido es una sustancia capaz de
ceder un hidrogenión (H+), y una base,
una sustancia capaz de captarlo. La
acidez de un líquido viene dada por
su concentración de H+ ([H+]). En el
líquido extracelular esta concentra-
ción es de aproximadamente 40 nmol/1
(0 ,00004 mEq/1). Con frecuencia, dicha con-
centración se expresa en términos de pH, o logaritmo
en base 10 y cambiado de signo (o logaritmo de la
inversa) de la concentración de H+, expresada esta a
su vez en mol/1. Así, por ejemplo, para una solución
que tenga una [H+] = 10-7 mol/1 , será:
1
pH = log, o [H+] = - log10 [H+] = - log10 10 - 7 = 7

SISTEMAS BUFFER O AMORTIGUADORES


Un ácido débil es un ácido que tiende a disociar-
se y, por tanto , a ceder H+. La sustancia resultante
de la cesión del H+ es la base conjugada del ácido:
AH""' A- + H+. La solución en agua de un ácido débil
tiende a amortiguar los cambios de la [H+] que puedan
producirse en el medio , ya que, si se añaden H+, la
reacción se desplaza a la izquierda, eliminándolos, y
si se retiran se desplaza a la derecha , regenerándolos.
Los sistemas ácido-base conjugada con esta capa-
cidad de amortiguación se denominan tampones o
amortiguadores (buffers, en inglés). En los líquidos
orgánicos se comportan de esta manera diversos sis-
temas: ácido carbónico/bicarbonato (H 2C03 /HC0 3- ),
fosfatos (H 2PQ 4-/HCQ 4 =J y diversas proteínas (H
proteína/proteína). Otro tanto cabe decir de la
hemoglobina y de las sales del hueso.
En virtud de la ley de acción de masas ,
[W] = k [HA]/[K]. y por tanto que:
1 1 [K]
--=-x---
636 [H+] k [AH]
CAPITULO 77 Patología general del metabolismo ácido-base

La transformación logarítmica de dicha ecuación hipoventilación es sinónimo de hipercapnia, e hiper-


proporciona la ecuación de Henderson-Hasselbach: ventilación de hipocapnia. Por tanto, las alteraciones
pH = pK + log [K]/[HA], que es aplicable a todos los de la ventilación modifican el pH.
sistemas amortiguadores del organismo. Puesto que Por otra parte, las modificaciones del pH actúan
todos ellos se refieren al mismo valor de [H+], puede sobre el centro respiratorio, alterando la ventilación,
escribirse que: y por tanto, induciendo cambios secundarios en la
PaCO 2. Cuando la [H+] aumenta , el centro respiratorio
[H2CÜ3] [H2PÜ4) [H prot]
[W]=k1 se estimula, aumenta la ventilación, y disminuye la
[HCQ 3-J = k2 = k3 = =
[HPO4=] [proC] PaCO 2; con ello lo hace el cociente PaCOz/[HCO3-J, y,
[HHb] [H apatita] en definitiva, la [H•]. Por el contrario, si la [H+] dismi-
=~ [Hb-J = ks nuye, se deprime el centro respiratorio y aumenta la
[apatita-J PaCO 2, con lo que se eleva el cociente PaCO2/[HCO3-J
Es decir, todos los sistemas amortiguadores están y, por tanto, la [H+]. El organismo dispone así de un
en equilibrio entre sí, de manera que basta conocer un segundo sistema de defensa (junto a los tampones)
sistema para definir la [H+] y, por tanto, la situación frente a las desviaciones del pH.
ácido-base. Por las razones que veremos enseguida, se
prefiere a estos efectos el sistema bicarbonato.
El H 2Co 3- procede de la unión de CO 2 y H 2O, y se
disocia a su vez en H+ y HCO 3-. El riñón desempeña un papel crucial en la regulación
de la concentración del HCO 3-. En el glomérulo se fil-
tran diariamente grandes cantidades de bicarbonato
(unos 4000 mEq/día). Este debe ser reabsorbido des-
El CO 2 se encuentra disuelto en solución en una pués, para evitar su pérdida por la orina. Las mem-
cantidad que depende de su presión parcial. Por tan- branas de las células tubulares no son permeables al
to, la cantidad de H2CO 3 depende a su vez de la PaCO 2. bicarbonato, por lo que este no se puede reabsorber
De ahí que la ecuación [W] = k [H2CO 3]/[HCQ 3-J acos- directamente como tal. La reabsorción requiere la ex-
tumbre a escribirse [W] = k' PaCO 2/[HCQ 3-J_Si la [H+] creción previa de H+, que se une al bicarbonato para
se expresa en nanomoles, la PaCO 2 en mm Hg y la formar H 2CO 3. Este se descompone después en CO2
[HCQ 3-J en mEq/1, k' es igual a 24. De donde [W] = 24 y H 2O, reacción catalizada por la enzima anhidrasa
PaCO 2/[HCQ 3-J (en condiciones normales PaCO2 = 40 carbónica, que es muy abundante en las células de los
mm Hg, y [HCO3-J = 24 mEq/1). De dicha ecuación se túbulos renales. El CO 2 atraviesa la membrana celular
deduce que el estado ácido-base del organismo queda y penetra en la célula, donde se produce la reacción
definido por dos cualesquiera de los tres valores (pH, inversa: se une a H 2O para volver a formar H2CÜ3,
PaCO 2, [HCO 3-J), dado que, conocidos dos de ellos, que se descompone en HCQ 3- y H+. El HCQ 3- termina
puede obtenerse el tercero. pasando a los capilares peritubulares. El resultado
La PaCO 2 está regulada estrechamente por la fun- neto de todo este proceso es, pues, la reabsorción de
ción ventilatoria. La [HCQ 3-J lo está por el riñón. HCQ 3-. La mayor parte del HCQ 3- filtrado en el glomé-
Estos hechos, además de su abundancia, son los fac- rulo se reabsorbe en el túbulo proximal; el resto, en la
tores que determinan que el sistema del bicarbonato nefrona distal.
sea el amortiguador preferido para definir el estado Por este mecanismo se generan unos 4000 mEq/día
del equilibrio ácido-base. Como se verá, ello tiene de HCO 3- y de H+, a fin de reabsorber los 4000 mEq de
un valor adicional de carácter didáctico, ya que per- HCQ 3- filtrados por el glomérulo.
mite clasificar los trastornos de dicho equilibrio en Además, las células tubulares renales producen
dos grupos: los debidos a alteraciones en la PaCO2 (es al cabo del día unos 50-100 mEq de HCQ 3- e H+ con
decir, en el H 2CO 3), y los debidos a alteraciones en la una función diferente: la de regenerar el HCQ 3- que se
concentración de ácidos distintos del carbónico, tam- consume durante el día en el metabolismo normal del
bién denominados ácidos fijos o no volátiles. Como organismo. Efectivamente, como resultado de este se
se explicará más adelante, aquellos alteran primaria- producen al día unos 50-100 mEq de H+, que se unen
mente el numerador, y estos alteran primariamente el a una cantidad equivalente de HCO 3-. Este HCO3-
denominador de la ecuación: consumido debe regenerarse, y lo hace precisamente
PaC0 2 en las células tubulares renales, corno consecuencia
[W] = 24 [HCQ 3-J de la reacción entre el CO 2 y el H 2O, que da lugar a
HCQ 3- y a H+. El HCO 3- pasa a la sangre, sustituyendo
al consumido por los H+ producidos en el metabo-
lismo. Los H+ pasan a la luz tubular, donde pueden:
VENTILACIÓN Y PAC02 a) unirse a aniones fosfato (que pasan de HPÜ4= a
Las alteraciones de la ventilación modifican la PaCO2, H2PO 4-); b) unirse a amoniaco (que se convierte en ion
que se eleva si aquella disminuye, y desciende si amonio: NH 3 ➔ NH4 ); c) quedar libre, determinando ~
aumenta. En términos prácticos, puede decirse que el pH de la orina.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

El comportamiento renal es regulado por la situa- días el riñón. Como luego se verá, hay, sin embargo,
ción del equilibrio ácido-base del organismo. En las situaciones en las que es precisamente una alteración
situaciones de acidosis , cuando aumenta la [H+] en el de esos sistemas de regulación la que desencadena un
medio interno, aumenta su secreción en los túbulos trastorno del equilibrio ácido-base.
renales, con lo que se incrementa la reabsorción de
HCQ 3- y aumenta la síntesis de nuevas moléculas de
HC0 3- en las células tubulares. Todo ello ayuda a in- CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS
crementar la [HC0 3-J y a amortiguar el exceso de áci- DEL EQUILIBRIO ÁCIDO-BASE
dos. Los fenómenos contrarios ocurren cuando dismi-
nuye la [H+]. De ahí que el funcionamiento normal del La concentración de H+ puede alterarse por aumento
riñón sea imprescindible para mantener el equilibrio o por disminución. Los aumentos de H+dan lugar a
ácido-base a largo plazo. situaciones conocidas con el nombre de acidosis; las
disminuciones a situaciones conocidas con el nombre
de alcalosis. A su vez, y de acuerdo con la ecuación
AMORTIGUADORES INTRACELULARES de Henderson-Hasselbach, cada una de estas dos alte-
raciones puede deberse a una modificación primaria
Los más importantes son el de los fosfatos y el de las de la presión de C0 2 (PaC0 2) o de la concentración
proteínas. Cuando aumenta la concentración de H+ en de bicarbonato. Las alteraciones debidas a cambios
el medio extracelular, parte de ellos penetra en el in- en la pC0 2 (aumento o disminución) se califican de
terior de las células (lo que, para equilibrar las cargas, respiratorias; las alteraciones debidas a cambios en
favorece la salida desde ellas al exterior de cationes HCQ3- (aumento o disminución) de metabólicas.
como el Na+ y el K+), donde se tamponan con fosfatos De acuerdo con ello , pueden distinguirse cuatro
y proteínas. A la inversa, cuando la concentración de situaciones (Fig. 77-1) .
H+ del medio extracelular disminuye, salen H+ desde
el interior de las células, lo que ayuda a corregir la Aumento de la [H+] por aumento de la PaC0 2
alteración. (a cidosis respiratoria) .
Aumento de la [H+] por disminución de la
[HCQ 3-J (acidosis m etabólica).
ACTUACIÓN COMBINADA DE LOS Disminución de la [H+] por disminución de la
MECANISMOS DE REGULACIÓN PaC0 2 (alcalosis respiratoria).
Disminución de la [H+] por aumento de la [HCQ 3-
Aunque por razones didácticas describimos de for- ] (alcalosis m etabólica) .
ma separada los diversos sistemas de regulación del pC02
equilibrio ácido-base , todos ellos funcionan de forma Teniendo en cuenta que [H+] = k [HC0 _ ] , de lo
coordinada y contribuyen al mantenimiento del pH anterior se deduce que: 3

del medio interno dentro de la normalidad, si bien lo


hacen con una secuencia temporal diferente. Supon-
gamos, por ejemplo, que el organismo se ve brusca-
mente sometido a una carga de radicales ácidos (como Paco,
JH+) = K - - -
ocurriría si administráramos una infusión intraveno- JHCQ3-¡
sa de HCl, que se disocia en H+y c1-J. En una primera
línea de defensa, y de forma inmediata, los amortigua-
dores extracelulares eliminarían parte de los H +. Así,
parte de ellos se uniría a moléculas de HC0 3-, para
formar H 2C0 3 , que después se transformaría en C0 2 y
H 20 ; otros se unirían a aniones HP0 4 =, que pasarían
a H 2PQ4 - ; otros lo harían a grupos coo- de las proteí-
nas , que pasarían a COOH. Algunos H+ entrarían en
las células, donde.actuarían los amortiguadores intra- e Acidosis ) e Alcalosis )
celulares. Por otro lado, durante los minutos y horas
siguientes, el aumento de la [H+] estimularía el centro ✓ ~ ✓ i
~
denom inador
i nu merador J, denom in ador J, numerador
respiratorio, de forma que aumentaría la ventilación (i PaCO 2) (J, HCO,-) (J, PaCO 2 ) (i HCO 3- )
pulmonar y la eliminación de C0 2. A lo largo de los
1-4 días siguientes, el riñón aumentaría la secreción
de H+ y la reabsorción y generación del HC0 3-, con
i i i i
Acidos is Acidosis Alca losis Alca los is 1
lo que se repondría el HC0 3- que se h abría ido con- resp iratoria metabó lica resp iratori a metabó li ca
sumiendo en el tamponamiento de los H+. Así pues,
ante una alteración del equilibrio ácido-base, actúan
en minutos los sistemas de amortiguación, al cabo de Figura Clasificación de los trastornos de equi-
~
unas horas el aparato respiratorio, y después de unos librio ácido-base.
CAPÍTULO 77 Patología general del metabolismo ácido-base

En la acidosis respiratoria el cociente ([H+]) au- (fase aguda) y después de la misma (fase crónica). En
menta porque aumenta el numerador (PaC0 2) cambio, en los trastornos metabólicos, compensados
En la acidosis metabólica el cociente ([H+]) por el aparato respiratorio, no cabe tal distinción, al
aumenta porque disminuye el denominador iniciarse la compensación rápidamente.
(HCQ 3- ) Según se ha señalado más arriba, las modificacio-
En la alcalosis respiratoria el cociente ([H+]) dis- nes en la [H+] se deben a cambios en el numerador
minuye porque disminuye el numerador (PaC0 2) o el denominador del quebrado PaC0 2/[HCQ 3-J (Fig.
En la alcalosis metabólica el cociente ([H+]) dis- 77-2). De ello se deduce que los fenómenos compen-
minuye porque aumenta el numerador (HC0 3- ) sadores deben inducir cambios en el otro componen-
te del quebrado que tengan lugar en el mismo sen-
Hemos dicho antes que el valor normal de PaC0 2 es tido, de forma que el cociente tienda a mantenerse.
de 4 0 mm Hg, y el valor normal de la concentración Por ejemplo, si en la acidosis respiratoria sube ini-
de HC0 3-, de 24 mEq/1 (puede ser algo superior según cialmente la PaC0 2 (numerador), la compensación
la técnica de medida). De acuerdo con ello, en la aci- deberá conseguir un aumento de [HCQ 3-J (denomina-
dosis y alcalosis respiratorias, por definición, el valor dor). De la misma manera, si en la acidosis metabóli-
de la PaC0 2es mayor o menor, respectivamente, de 40 ca desciende inicialmente la [HCQ 3-J (denominador),
mm Hg/1. Y en la acidosis y una alcalosis metabólica, la compensación deberá conseguir un descenso de
la concentración de HCQ 3- es menor o mayor de 24 la PaC0 2 (numerador). Razonando en el mismo sen-
mEq/1. tido, si en la alcalosis respiratoria baja inicialmente
El pH estrictamente normal es de 7,40 (correspon- la PaC0 2(numerador), la compensación consistirá en
diente a una concentración de H+ de 40 nmol/1), con hacer descender la [HC0 3-J (denominador); y si en la
unos límites de normalidad de 7,35 y 7,45. Una aci- alcalosis metabólica sube inicialmente la [HCQ 3-J (de-
dosis compensada sería aquella en la que el pH está nominador), la compensación consistirá en aumentar
entre 7,35 y 7,40. Una alcalosis compensada sería la PaC0 2 (numerador).
aquella en que el pH se sitúa entre 7,40 y 7,45 . Por Por lo tanto, podemos concluir que las modifica-
debajo de 7,35 la situación se describiría como de ciones que experimentan la PaC0 2 y la [HCQ 3-J en
acidosis descompensada, y por encima de 7,45, de los trastornos del equilibrio ácido-base pueden ser
alcalosis descompensada. de dos tipos: primarias (es decir, determinantes del
trastorno) y secundarias (es decir, desarrollados con
COMPENSACIÓN DE LOS DISTINTOS afán compensador). La intensidad que pueden llegar
TRASTORNOS DEL EQUILIBRIO ÁCIDO-BASE. a alcanzar los can1bios secundarios (compensadores)
VALORES DE LA pCO 2 Y EL [HCO 3-] de la PaC0 2 y la [HCQ 3-J son menores que los que
pueden darse en los cambios primarios (determinan-
Como ya se ha visto, el organismo se opone a la des- tes del trastorno original). Por ejemplo, en una aci-
viación del pH mediante la intervención de diversos dosis metabólica pueden alcanzarse cifras de [HCQ 3-J
mecanismos: amortiguadores (intra o extracelula- inferiores a 10-14 mEq/1, cosa que no ocurre en los
res}, aparato respiratorio y riñón. Los primeros es- descensos de [HCQ 3-J compensadores de una alcalo-
tán disponibles tanto en el caso de que el trastorno sis respiratoria (lo que es de utilidad para el manejo
sea respiratorio como metabólico, si bien, en caso de los pacientes, ya que el simple conocimiento de
de que el trastorno sea respiratorio, el amortiguador que un enfermo presenta estos valores, confirma la
C0 2/ [HCQ 3-J no puede intervenir, por estar él mismo primera posibilidad y elimina la segunda). Inversa-
implicado en el origen del proceso. Tampoco puede mente, cifras de [HCQ 3-J superiores a 40-45 mEq/1
intervenir el aparato respiratorio como órgano com- son propias de una alcalosis metabólica, pero no de
pensador, por la misma razón de que es precisamente la compensación de una acidosis respiratoria. Cifras
su alteración lo que está dando lugar a estos. Algo de PaC0 2 superiores a 55-60 mm Hg son propias de
similar ocurre con el riñón y los trastor-
nos metabólicos, que tienen en su origen
precisamente en alteraciones de la fun- ACIDOSIS AC IDOSIS ALCALOSIS ALCALOSIS
ción renal. En tales casos, el riñón no RESPIRATORIA METABÓLICA RESPIRATORIA METABÓLICA
puede intervenir de forma compensado-
ra. Sí puede hacerlo, en cambio, cuando Fenómeno i numerador .J. denominador .J. numerador i denominador
inicial (Í PaCO2 ) (.1 HCO3-) (.1 PaCO2) (Í HCO 3 ·)
el origen es extrarrenal.
Una diferencia esencial entre la com-
i
pensación respiratoria y la renal es que
la primera se pone en marcha mucho Compensación i denominador
antes (horas) que la segunda (días). Por
ello, en los trastornos respiratorios, com-

(Í HCO3-) (.1 PaCO 2)
i
.J. numerador .J. denominador
(.1 HCO,-)
t
i numerador
(Í PaCO2 )

pensados por el riñón, cabe distinguir Figura Mecanismos de compensación de los trastornos de ~
dos fases : antes de dicha compensación equilibrio ác ido-base.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

una acidosis respiratoria, pero no de la compensación Este descenso ocurre rápidamente, por lo que en este
de una alcalosis metabólica (entre otras cosas, hipo- caso no se distinguen dos fases, previa y posterior a
ventilaciones mayores -necesarias para elevar más la conseguir la compensación. La proporción PaCO 2 /
PaCOc conducirían a hipoxemia). [HCQ 3-J (en este caso invertimos el orden del quebra-
En los trastornos puros del equilibrio ácido-base do, ya que el orden de modificación de sus dos ele-
(es decir, si no se interfiere algún factor que impida mentos es el contrario de los trastornos respiratorios)
la compensación, en cuyo caso, como veremos más es de 1,2 (es decir, por cada mEq que desciende el
adelante, suele hablarse de «trastornos mixtos ») los bicarbonato, la PaCO 2 disminuye 1,2 mm Hg).
cambios que se producen en la PaCO 2 y la [HCQ 3-J
-unos primarios y otros compensadores- tienden a
guardar unas proporciones características. De no dar- ALCALOSIS METABÓLICA
se las mismas, iliJbemos pensar que hay otro proceso Por definición, tanto el pH como la [HCQ 3-J tienden a
sobreañadido. Estas proporciones pueden variar de aumentar. Para compensarlo, se eleva la PaCO 2 • El au-
unos a otros trastornos. mento es inmediato, por lo que tampoco en este caso
se distinguen las fases previa y posterior a conseguir
la compensación. La proporción PaCO 2 /[HCQ 3-J es de
ACIDOSIS RESPIRATORIA 0,6 (es decir, por cada mEq que aumenta el bicarbo-
Por definición, el pH tiende a disminuir, y la PaCO 2 nato, la PaCO 2 se eleva 0,6 mm Hg). En la Figura 77-3
(cuya retención es el fenómeno inicial) está elevada. El se resumen las cifras referidas una vez conseguida la
bicarbonato lo está tan1bién, dado que el rifión tiende compensación.
a retenerlo, por razones compensadoras. Una vez con- Antes de concluir este apartado de la compensa-
seguida la compensación (a los 3-5 días), la relación ción de las alteraciones del equilibrio ácido-base
[HCQ 3-]I PaCO 2 es de 0,4 (es decir, por cada mm Hg debe insistirse en que es necesario no confundir los
que aumenta la PaCO 2 , aumenta 0,4 mEq/1 la [HCO 3- ]) . conceptos de compensación y de corrección del tras-
Antes de que se produzca la compensación, y aun- torno. En la compensación se mantienen las modifi-
que a este hecho, por razones didácticas, no nos he- caciones de la PaCO 2 y la [HCQ 3-J, aunque se eviten
mos referido hasta ahora, también está aumentada la desviaciones del pH fuera de los límites. La correc-
[HCO 3-J. La razón de este aumento es que el CO 2 rete- ción del trastorno implica su reversión; por ejemplo,
nido se une al agua para formar ácido carbónico, que si una enfermedad bronquial había dado lugar a una
se escindirá en H+ (causante de la disminución del acidosis respiratoria por retención de CO 2 , la com-
pH) y HCO 3- . La proporción [HCQ 3-J/PaCO 2 en este pensación supone un aumento de bicarbonato, mien-
momento -antes de la compensación- es inferior: 0,1. tras la corrección implica que la PaCO 2 y el propio
bicarbonato vuelvan a la normalidad.

ALCALOSIS RESPIRATORIA
Por definición, el pH tiende a aumentar, y la PaCO 2 ACIDOSIS METABÓLICA
(cuya eliminación exagerada es el fenómeno inicial) Puede definirse como una disminución primaria de
está descendida. El bicarbonato lo está también, dado la concentración de bicarbonato. Tal disminución
que el riñón tiende a eliminarlo, por razones com- puede deberse a:
pensadoras. Una vez conseguida la compensación,
la relación [HCQ 3- ]/ PaCO 2 es de 0,4 (es decir, por Pérdidas directas de bicarbonato (por el aparato
cada mm Hg que disminuye la PaCO 2 , disminuye 0,4 digestivo -diarrea- o por el riñón).
mEq/1 la [HCOa-D- Un incremento en el aporte o una disminución
Análogamente a lo que ocurría en la acidosis res- en la eliminación de ácidos (cuyo H+ consume
piratoria, antes de que se produzca la compensa- HCQ 3- al unirse a él para formar H2 O y CO 2 ).
ción, también está disminuida la [HCQ 3-J. La razón
de esta disminución es que el descenso de CO 2 da
lugar a la disociación del ácido carbónico en CO 2
Proceso responsable Cambio ini cial Camb io compensador
y agua; para regenerar el ácido carbónico consumi-
do se unen los hidrogeniones al bicarbonato, con lo Acidosis metabóli ca J, 1 mEq/ 1 HCO 3- J, 1,2 mm Hg pCO 2
que descienden tanto aquellos (lo que motiva la al-
calosis) como este. La proporción [HCQ 3-J/PaCO 2 en Alcalosis metabó li ca i 1 mEq/1 HCO 3- i 0,6 mm Hg pCO,

este momento -antes de la compensación- es de 0,2. i i 0,4 mEq/1 HCO,-


Acidosis respiratoria 1 mm Hg pCO 2

Alcalosis respiratoria J, 1 mm Hg pCO 2 J, 0,4 mEq/ 1HCo,-


ACIDOSIS METABÓLICA
Por definición, tanto el pH como la [HCQ 3-J tienden Figura Proporción HC03-/pC0 2 esperada tras
640
a disminuir. Para compensarlo, desciende la PaCO 2 • la compensación.
CAPÍTULO 77 Patología general del metabolismo ácido-base

CAUSAS tener lugar por el intestino (diarrea, ya que el líquido


intestinal es rico en bicarbonato) o por el riñón (aci-
Es útil clasificar las causas de la acidosis metabólica dosis tubular renal tipos I y II).
con arreglo al denominado hiato aniónico o intervalo Las acidosis metabólicas con hiato aniónico alto se
aniónico (anión gap en la terminología inglesa). Por deben a la adición o la retención de un ácido, ya que
tal se entiende la diferencia entre las concentraciones el anión del mismo sustituye al anión bicarbonato.
de los iones positivos (Na+ y K+) y de los iones ne- Son ejemplos la cetoacidosis (adición de cuerpos ce-
gativos habitualmente determinados en sangre (el- y tónicos), la acidosis láctica (adición de ácido láctico),
HC0 3-J. Dada la escasa cuantía de la concentración de la insuficiencia renal avanzada (retención de sulfato,
K+, en general el intervalo aniónico se define como la fostato y otros ácidos endógenos) y determinadas in-
diferencia entre la concentración de Na+y las de c1-y toxicaciones (p. ej., ingesta en cantidades excesivas
HC03-. de ácido acetilsalicílico).
Hiato aniónico = [Na+] - ([c1-1 + HCQ 3-))
CONSECUENCIAS
En condiciones normales , su valor es de 8-14
rnEq/1. Está constituido por los aniones plasmáticos Las manifestaciones clínicas de la acidosis metabó-
que no son medidos en las determinaciones de rutina lica son prácticamente inexistentes hasta que el pH
(sulfato, fosfato y, fundamentalmente , proteínas car- desciende por debajo de 7,3. A partir de entonces,
gadas negativamente). comienzan a establecerse alteraciones con riesgo vital
Hay dos tipos de acidosis metabólicas: aquellas en cuando el pH se sitúa en torno a 7.0.
que el HCQ 3- descendido es sustituido, en términos Aparato respiratorio. La acidosis estimula el cen-
de cargas negativas, por el c1-, y aquellas en que es tro respiratorio , determinando hiperventilación.
sustituido por otros aniones. En las primeras, el hiato La respiración profunda y suspirosa (respiración
aniónico es normal, y en las segundas está aumenta- de Kussmaul) (Fig. 77-5) es un signo conocido de
do (Fig. 77-4) . la acidosis metabólica.
Las acidosis metabólicas con hiato aniónico nor- Aparato circulatorio. La disminución del pH
mal se deben a la pérdida de [HCQ 3-J, ya que para deprime el inotropismo cardiaco y causa vaso-
compensar la pérdida de cargas negativas que ello su- dilatación. Al principio, el fenómeno es com-
pone, el riñón retiene c1-. La pérdida de HCQ 3- puede pensado por un aumento en la secreción de ca-
tecolaminas, pero finalmente los vasos dejan de
responder ante ellas , disminuyendo la tensión
arterial e incluso desarrollándose una situación
A de shock.
Sistema nervioso. La acidosis grave se asocia a
Hiato
HCO,- aniónico menudo con un grado variable de alteración de la
conciencia, siendo posible la aparición de coma.
Normalidad 7 Aparato digestivo. Puede haber náuseas y vómi-
Acidosis tos.
metabóli ca
hipercl orémi ca

B
Hiato
HCO,- aniónico c 1-
L _ _ _ _ _ _ __
ormalidad
Acidosis me-
tabólica con
hi ato ani ónico
elevado +-- Total ca rgas nega tivas ~

Figura Representación esquemática de los ti-


Respiración normal
pos de acidosis metabólica de acuerdo con los valores
Respiración acidótica
del hiato aniónico y de la concentración de e1-. En A
de Kussmau l
el hiato aniónico se mantiene normal, y la concentra-
ción de c1- aumenta. En Bel hiato aniónico se eleva y
la concentración de e1- se mantiene normal. En ambas
situaciones la concentración de HC03- está disminui- Figura Respiración normal y respiración de ~
da, que es lo que define la acidosis metabólica. Kussmaul.
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Homeostasis del K+. La acidosis, por sí misma , de alguna sustancia precursora que da lugar a
tiende a cursar con hiperpotasemia, por un me- aquel en el transcurso de su metabolismo (lac-
canismo complejo que puede simplificarse se- tato).
ñalando que produce un desplazamiento del K+ Ganancia aparente. No se debe a un aumento
del interior al exterior de las células. Sin embar- de la cantidad total de bicarbonato del orga-
go, por mecanismos ajenos a la propia acidosis, nismo, sino a un aumento de su concentración
diversas acidosis metabólicas tienden a cursar en el medio interno por pérdida al exterior de
con hipopotasemia. Tal es el caso de las acido- líquidos pobres en él (habitualmente ricos en
sis debidas a ácidos de aniones no reabsorbibles ClNa) . Por ello, se habla de alcalosis por con-
en el túbulo renal , que , al aumentar en éste la tracción. La determinan fundanrnntalmente
electronegatividad, favorecen la salida de K+; el los diuréticos, aunque también pueden hacerlo
de las diarreas, porque con el fluido intestinal los vómitos.
se pierde K+; y el de la acidosis tubular renal I
y II.
Factores mantenedores
Leucocitos. La acidosis grave puede cursar con
leucocitosis intensa. Impiden la eliminación renal de bicarbonato, y son
Riñón. La acidosis determina un pH urinario principalmente tres:
bajo (se reabsorbe bicarbonato de modo compen-
Disminución del volumen circulante efectivo.
sador), excepto en la acidosis tubular I (distal) y
Determina un aumento de la reabsorción renal
II (proximal).
proximal de Na+ y, con él, de bicarbonato. En el
túbulo distal la reabsorción está promovida por
ALCALOSIS METABÓLICA el hiperaldosteronismo secundario propio de la
situación. Su intervención sólo puede desarro-
Es un trastorno caracterizado por un aumento prima- llarse si llega suficiente Na+ a esta región del tú-
rio de la concentración de bicarbonato, que puede bulo, lo que es difícil que ocurra en la disminu-
tener lugar de forma directa, o indirecta, a través de ción del volumen circulante efectivo (por dismi-
una pérdida de H+. nución de la filtración glomerular y aumento de
la reabsorción proximal), salvo que el enfermo
esté siendo tratado con diuréticos.
CAUSAS Depleción de cloro. Normalmente, en el túbulo
renal se reabsorbe c1- en intercambio con HC0 3- .
Antes de entrar a analizar sus causas, conviene re-
En esta situación no hay c1- disponible , por lo
cordar que el riñón tiene una gran gran capacidad
que no puede intercambiarse con HC0 3- , que se
para eliminar bicarbonato , de forma que para que
retiene.
se desarrolle una alcalosis metabólica es necesario
que, junto al factor (o factores) que inicialmente au- Depleción de potasio. La falta de K+ da lugar a
menta el bicarbonato («factor iniciador»), exista otro retención de HCQ 3- probablemente por diversos
(u otros) que impida su eliminación renal («factor mecanismos, uno de los cuales estriba en el ma-
mantenedor»). Por ello , la alcalosis metabólica se da nejo tubular del K+ en relación con el H+. Cuan-
en situaciones en las que coexisten ambos tipos de do uno disminuye, se elimina preferentemente
factores. el otro (en este caso H+, cuya secreción conlleva
retención de HC0 3- ).
Factores iniciadores
Tipos
Pérdida de tt+:
Desde un punto de vista clínico, los procesos que cur-
Por el estómago . Vómitos o aspiración de la san con alcalosis metabólica suelen dividirse en dos
secreción gástrica. grupos, dependiendo de que cursen o no con hipovo-
Por el riñón. Diuréticos, hiperaldosteronismo lemia y de que se corrijan o no con la administración
primario. de suero salino (ClNa):
Debe tenerse en cuenta que por cada H+ verti- Alcalosis metabólica con hipovolemia o «sensi-
do a la luz del estómago o a la del túbulo renal, bles a la sal» (se corrigen con la administración
pasa un HCQ 3- al medio interno, ya que ese H+
de suero salino, que expande la volemia y aporta
procede de la disociación de una molécula de cloro).
H2C0 3 en H+y HC0 3- .
Ganancia de HC0 3-:
Las producidas por vómitos. En ellas el factor
iniciador es la pérdida de H+, contribuyendo la
Ganancia auténtica. Es rara, y suele deberse no «contracción» por pérdida de un líquido pobre
tanto al aporte de bicarbonato mismo , como al en bicarbonato. Los factores mantenedores son
CAPITULO 77 Patología general del metabolismo ácido-base

tanto la pérdida de volumen como la deple-


ción de cloro. Trastornos metabólicos
Las producidas por diuréticos. Los mecanis-
Trastornos respiratorios
mos son similares. "A agudos y crónicos
I
a.
Alcalosis metabólicas sin hipovolemia o «resis-
tentes a la sal» (puesto que en estas situaciones
no existe hipovolemia ni déficit de c1-, este tipo
de alcalosis no se corrige con la administración
de suero salino).
Administración excesiva de bicarbonato.
Exceso de hormonas con actividad mineralo-
I
7

"V
a.
~ )
corticoide (hiperaldosteronismo, síndrome de PaCO2 < 40 PaCO2 > 40
Cushing). Los mineralocorticoides estimulan
la reabsorción de Na+ en el túbulo distal, inter-
Figura Nomograma de los trastornos metabó-
cambiándose por H+ y K+. La secreción exce-
licos y resp iratorios del equ i librio ácido-base: en los
siva de H+ inicia la alcalosis , y la pérdida de
trastornos puros los valores de los parámetros que de-
K+ induce hipopotasemia, factor que ayuda a finen dicho equilibrio se encuentran en una u otra de
mantenerla. A este grupo de alcalosis pertene- las zonas sombreadas : de no ser así, el trastorno es
cen también algunos trastornos tubulares poco mixto.
frecuentes (como el síndrome de Bartter o de
Gitelman).

Las consecuencias de las alcalosis metabólicas


CONSECUENCIAS guardan relación, fundamentalmente con un aumen-
Con aumentos discretos del pH, el paciente está asin- to de la excitabilidad neuromuscular (tetania). Se han
tomático. En las formas graves, sin embargo, aparecen descrito arritmias cardiacas.
diversas manifestaciones.
Tetania. Debida a un aumento de la excitabilidad TRASTORNOS MIXTOS DEL EQUILIBRIO
neuromuscular que, en parte, se debe a que la ÁCIDO-BASE
alcalosis disminuye el Ca++ al unirlo a las proteí-
nas y, en parte, a un efecto directo de la propia Se definen como tales aquellas situaciones en que
alcalosis. coexisten dos o más trastornos. En esos casos, la re-
Arritmias. lación entre el pH, la PaC0 2 y la concentración de
Hipopotasemia. La falta de disponibiliad de H+ HCQ 3- es diferente de la propia de los trastornos ais-
hace que se elimine K+ en su lugar. De otro lado, lados, como hemos señalado más arriba. Ello puede
la mayor parte de las causas de alcalosis metabó- reconocerse mediante las cifras del cociente «modifi-
lica producen hipopotasemia por sí mismas. cación de la PaC0 2 /modificación de la [HC0 3-J» a que
antes nos referimos (Fig. 77-3) o mediante nomogra-
mas, como el de la Figura 77-6.
ACIDOSIS RESPIRATORIA Dependiendo del tipo de trastornos que se sumen,
el resultado puede ser una acentuación de la altera-
Consiste en un aumento primario de la PaC0 2 • El
ción del pH o una neutralización de la misma. Un
mecanismo responsable de dicho aumento es una hi-
ejemplo de lo primero es el edema agudo de pul-
poventilación alveolar. Sus causas son, por tanto , las
món, en donde a una acidosis metabólica (láctica),
de esta o, si se prefiere, las de la insuficiencia respi-
por defecto de perfusión tisular, se puede añadir
ratoria global, expuestas en otro capítulo. Las conse-
una acidosis respiratoria por fracaso ventilatorio.
cuencias son las que se indican en esa misma lección
En cambio, en la intoxicación por ácido salicílico, la
con respecto a la hipercapnia. Si el pH desciende por
acidosis metabólica que supone su propio exceso se
debajo de 7,1, se produce vasodilatación periférica
puede ver neutralizada por la alcalosis respiratoria
con hipotensión y arritmias.
que determina al estimular el centro respiratorio por
sí mismo.
ALCALOSIS RESPIRATORIA En algunos trastornos mixtos, las determinaciones
de pH, PaC0 2 y [HCQ3-J parecen corresponder a tras-
Consiste en una disminución primaria de la PaC0 2 • tornos puros. Se trata de aquellos casos en que los
El mecanismo responsable es una hiperventilación trastornos que se suman son de la misma naturaleza,
alveolar. Sus causas son, pues, las de esta, y se estu- aunque de sentido inverso (p. ej. , acidosis metabólica
643
dian en el capítulo correspondiente. y alcalosis metabólica).
-178
Patología de los trastornos
de la nutrición
José Cabezas-Cerrato, David Araújo Vilar

OBESIDAD
CONCEPTO
La obesidad es una situación caracteri-
zada fundamentalmente por el aumen-
to del tejido adiposo (TA, constituido
por grasa en un 80 % ), lo que se traduce
generalmente en un aumento de peso
del sujeto. Sin embargo, en algunas si-
tuaciones el sobrepeso puede no deberse
al mayor contenido de grasa, sino a un esque-
leto y a un desarrollo muscular prominentes (caso de
los culturistas). En otras situaciones, por el contrario,
el exceso de grasa (de predominio troncular) puede
coincidir con un peso normal; tal es el caso del sín-
drome de Cushing. Pese a estas consideraciones, en
la población general la obesidad y el exceso de peso
caminan juntos y obedecen a una masa corporal exce-
siva, constituida por grasa en un porcentaje variable
según el grado de obesidad (Tabla 78-1).

PREVALENCIA
Se trata de una condición en continua expanswn
(Fig. 78-1); probablemente excediendo, de acuerdo
con recientes estimaciones, los 1.600 millones de in-
dividuos con sobrepeso en todo el mundo. La OMS ,
a mediados de los noventa, consideró la situación
como la de una epidemia mundial no infecciosa. Su
prevalencia es particularmente elevada en los paí-
ses industrializados. En algunos de ellos , como en
EE.UU, los datos más recientes indican que aproxi-
madamente el 65 % de la población de más de 20
años tiene un Índice de Masa Corporal (IMC) ;: :
25 , y el 34 % un IMC ;: : 30; situación que sería
responsable, directa o indirectamente, de unos
350.000 muertes/año.

OBESIDAD COMO SÍNDROME


El trastorno que nos ocupa cumple con
644 los tres requisitos fundamentales del
CAPITULO 78 Patología de los trastornos de la nutrición

% de ad ul tos obesos
en la población

■ 30-40%

Figura La expansión mundia l del sob repeso-obesidad es bastante ho mogénea en los países industria liza-
dos, con la excepción de Estados Unidos y Arabia Saudí que ocupan el primer luga r en número y grado.

síndrome bien caracterizado: la etiología múltiple des industrializadas, en las que el estrés psicosocial,
(Tabla 78-3), la existencia de mecanismos patogenéti- la disponibilidad de alimentos y el sedentarismo faci-
cos y fisiopatológicos comunes, y unas consecuencias litan la adquisición de energía y reducen el gasto, lo
clínicas semejantes. que tiene corno resultado el depósito del superávit en
forma de grasa.
Etiología La importancia del componente genético se pone de
manifiesto cuando observamos que la obesidad po-
Las formas secundarias de obesidad suponen menos
del 1 % del total. Su grado es, además, discreto , si
exceptuamos las de causa hipotal6mica o algunas de
las raras formas monogénicas. En el hipotiroidismo la
obesidad es infrecuente y puede existir un aspecto de Tabla Clasificación del sobrepeso
edema facial y en ocasiones generalizado por mixede- y la obesidad según el IMC
ma, por acúmulo de mucopolisacáridos hidrófilos. En
el síndrome de Cushing el aumento del tejido adiposo Peso insuficiente< 18,5
tampoco suele ser importante, y en muchos casos no Peso normal 18,5-24,9
existe.
Sobrepeso grado 125-26,9

Mecanismos patogenéticos Sobrepeso grado 11 27-29,9

La grasa es una forma biológica muy económica de Obesidad grado 130-34, 9


depositar energía. En esencia, la obesidad, como la Obesidad grado 11 35-39,9
hemos definido , es el resultado de la perturbación del
balance energético con carácter positivo (Fig. 78-2). Obesidad grado 111 (mórbida) 40-49,9
En la génesis de la obesidad «común » intervienen Obesidad grado IV (extrema)*> 50
múltiples genes de susceptibilidad junto a factores
• Este nuevo grado se establece para enfatizar que en él el único
ambientales complejos. Estos factores ambientales tratamiento viable es la cirugía bariátrica.
pueden explicarse a través de determinantes psicoló-
gicos, sociales y económicos propios de las socieda-
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

Tabla Oficina de Estadística Tabla Clasificación etiológica


de la UE (Eurostat): La obesidad de la obesidad
en Europa
ldiopática (99%)
% de personas
(> 15 años) con Secundaria (1 %):
Hombres Mujeres
sobrepeso Genética: Síndrome de Willi-Prader, déficit de
u obesidad leptina y su receptor, etc.
1. Alemania 66,8 53,0 De origen neuroendocrino:
2. Reino Unido 66,2 56,6 Integrante del síndrome hipotalámico
3. Malta 65,6 50,3 Hipotiroidismo
4. Grecia 61 ,4 47,3
Síndrome de Cushing
5. Austria 59,4 28,9
6. Hungría 58,4 47,7 Ovario poliquístico
7. España 57,1 41,3 Hipogonadismo
8. Bélgica 47,7 36,2 lnsulinoma
9. Países Bajos 47,3 37,2 Déficit de GH
10. Rumania 45,8 38,1
Pseudohipoparatiroidismo
11. Francia 44,5 30,4
12. Letonia 44,0 46,3 Farmacológica (antidepresivos tricíclicos,
13. Estonia 42,7 45,4 ciproheptadina, litio y derivados
buti rofenón icos)

see un carácter familiar evidente, aunque no siempre actividad física habitual depende del mismo en un
es posible distinguir entre lo que es propiamente ge- 25 %. Es decir, que la susceptibilidad de un indivi-
nético y lo que depende de lo aprendido en el am- duo para hacerse obeso , en determinadas condiciones
biente familiar. El estudio de determinadas variables de comportamiento alimentario y estilo de vida, de-
antropométricas, la medición de la grasa corporal y pende de su dotación genética en buena medida.
los tres componentes principales del gasto energéti- Los «estudios de asociación » de los últimos años
co: gasto energético en reposo (GER}, efecto térmico están permitiendo aislar genes que aparecen con es-
inducido por los alimentos (ETA) y gasto energético pecial frecuencia entre los pacientes obesos . Entre
inducido por la actividad física (GEAF) ha aportado ellos se encuentran las mutaciones detectadas en ge-
datos relevantes indicativos de que la susceptibilidad nes aislados (gen de la leptina, del receptor-4 de la
individual para la obesidad con la sobreingesta de melanocortina y otros), eso sí, responsables de una
alimentos depende, en buena medida, del genotipo; y minoría de casos de obesidad.
que para un determinado contenido corporal de grasa Los avances más sugestivos los están proporcio-
la variabilidad individual en el depósito intraabdo- nando las investigaciones realizadas en el marco del
minal está bajo control genético en un 30 %; depen- estudio «Mapa de Genes de la Obesidad Humana »
diendo el 70 % del grado de obesidad y del sexo (más que en su último informe aporta el hallazgo de 253
frecuente en el varón); que las diferencias individua- grupos de genes relacionados con la obesidad.
les en GER, GEAF y ETA dependen del genotipo en Además el gen FTO (Fat mass and Obesity-associa-
más del 40 % ; y que hasta la propia diferencia en la ted gen) puede ser responsable del 22 % de obesidad
en la población general. Este gen también muestra
una fuerte asociación con la diabetes.
Entradas - Gasto ----)1,► D e pó s ito No obstante, el extraordinario incremento regis-
«E» «E» «E»
trado en las últimas décadas en la prevalencia de

\ I "· ,,!
sobrepeso/obesidad ha de deberse a factores ambien-
tales, no a la dotación genética mucho más estable.
Desde el punto de vista estructural, existen dos
Genes/ Ambiente tipos de obesidad: la obesidad hipertrófica y la obe-
sidad hiperplásica. En la primera, los adipocitos sim-
Figura El balance energético está regulado plemente aumentan de tamaño, mientras que en la
por los genes y el ambiente en sus dos componentes: segunda se incrementa su número.
las entradas (ingesta) y el gasto energético (pérdidas). Existen tres periodos en la vida del individuo en
E: Energía. los que la obesidad es particularmente frecuente: el
CAPITULO 78 Patología de los trastornos de la nutrición

primer año de vida, entre los 4 y los 12 años, y duran- de vista antropométrico) a dos tipos de obesidad:
te la gestación. Dado que el número de adipocitos au- la obesidad ginoide (OB -G) y la obesidad androide
menta con rapidez durante las dos primeras décadas (OB-A). En la primera la expansión se localiza pre-
de la vida , con una tasa de renovación del 10 % anual dominantemente en el tejido subcutáneo del abdo-
en la edad adulta, y puesto que su función fundamen- men inferior, nalgas y muslos , dibujando una silueta
tal consiste en depositar cualquier exceso de energía que recuerda a la de la pera (de ahí la denominación
en forma de grasa, hasta hace treinta años se creía que «obesidad tipo pera» que también se le da). En la se-
la obesidad infantil (hiperplásica) sería un condicio- gunda, destaca el depósito graso intrabdominal, sub-
nante absoluto de obesidad en el adulto. Hoy sabe- cutáneo troncular y mediastínico, que conforma, a su
mos que la obesidad infantil y la sobrevenida en la vez, una silueta que recuerda a la de la manzana (de
pubertad predicen la obesidad en el adulto sólo en un donde la denominación «obesidad tipo manzana»).
30 % de los casos. La mayor parte de las obesidades
aparecen al final de la pubertad, y en concreto des- Mecanismos fisiopatológicos
pués de los 30 años. Con frecuencia , su inicio coin-
cide con la gestación en la mujer, y con un cambio La obesidad se va constituyendo insensiblemente a lo
hacia hábitos más sedentarios en el hombre; aumenta largo de muchos años , debido a la base de unas muy
de grado hasta los 50 años , se estabiliza entre los 55 y discretas desviaciones positivas del balance energéti-
los 65 años, y disminuye después. Excepcionalmente co (Fig. 78-4). El proceso no continúa indefinidamen-
se inicia en los ancianos y, cuando lo hace, obedece a te, sino que tiende a alcanzar un nuevo equilibrio en
alteraciones muy intensas del balance energético. En el balance energético (Fig. 78-5) .
cualquier caso, lo común es que la obesidad se instau- Una vez instaurada la obesidad, el músculo, el
re lentamente, a lo largo de muchos años. hígado y el tejido adiposo se hacen resistentes a
De las consideraciones anteriores se infiere que la acción de la insulina. El adipocito segrega una
la obesidad instaurada durante la infancia y puber- serie de factores responsables de esta resistencia a
tad es estructuralmente hiperplásica, y la del adul- la insulina (ácidos grasos, TNF a y leptina, lo que
to, hipertrófica. Sin embargo, puesto que la máxima conlleva cinco consecuencias fis iop atológicas im-
dotación adipocítica en el adulto se ha estimado en portantes:

o
40-60 x 10 9 , y dado que el contenido de triglicéridos Una menor captación muscular de aminoácidos
por adipocito oscila entre 0,4 y 0,6 µg, no es posible (de ahí la hiperaminoacidemia).
alcanzar una obesidad grave sin hiperplasia
adipocítica. Por eso, en el adulto , la obesi-
dad de grado III y IV (mórbida y extrema) Cél,la madce embcóooa,la
es de carácter mixto: hipertrófica e hiper-
plásica. Se estimaba que esto se conseguía
aprovechando el potencial mitótico del
adipocito existente en la edad adulta bajo el ¡
estímulo más efectivo para ello: la ingesta Célula madre del mesénquima
excesiva de alimentos , con la colaboración
de la acción paracrina de múltiples media-
dores que estimularían la proliferación de
preadipocitos procedentes de las células del
estroma. Estudios más recientes nos ofre-
cen un escenario más acabado y complejo .
La expansión del tejido adiposo (TA) en el
Adipoblasto
sobrepeso y obesidad camina en íntima re- Preadipoci to ' 1 Preadipocito
lación con la expansión vascular local. La
razón estriba en que los vasos sanguíneos no
bla nco ____l____ pardo

solo constituyen un vehículo nutricio para


el TA, sino que el «pool intramural de peri-
citos » se diferencia en adipoblastos y estos
A i
en preadipocitos precursores tanto del TA
blanco como pardo (Fig. 78-3) . Es decir, que
el potencial hiperplásico del TA adiposo es- Ad ipocitos blancos Aclip ocitos pa rdos
taría así asegurado en todas las edades de la
vida. Figura Origen de los adipocitos: el «poo l intram ural de
Con independencia de todo ello, el TA peri citos » se diferencia en ad ipoblastos y estos en preadipocitos
se expande predominantemente en el teji- precurso res ta nto del tejido adiposo (TA) b lanco como pardo,
do subcutáneo, en el intrabdominal y en el asegurando así el potencial hiperplás ico del TA adiposo a lo lar-
647
mediastínico, dando lugar (desde el punto go de toda la vida.
SECCIO VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

4
✓ Varón 50 años; T: 180 cm; P: 100 kg; IIMC, 30,91 - Sobrepeso/obesidad - - - t
✓ 10 años antes, 70 kg; IIMC, 21,61
✓ Ganancia, 30 kg t. adiposo 180% grasa; 24 kg = Ganancia Ponderal Nuevo
216 000 Kca l = 59 Kcal/día equilibrio

~t-
Ba lance energético (BE)/d ía
Entradas «E» _ Gasto «E» x 1o años e::, 30 kg
2359 Kcal 2300 Kcal' 11
~2,5%
'-----
(1} Corresponde a datos obtenidos en un gran número ele individuos

con obesidad de grado I y 11

Figura Puede observarse cómo una pequeña


desviació n positiva en el ba lance energético (BE) dia-
rio de 59 Kca l (un sim ple 2,5 %), al cabo de 1O años -<
¡....:
supu so ga nar 30 kg o, lo que es lo mismo, pasar de
un IMC de 21 ,6 (normal) a otro de 30,9 (obes idad de
grado 1).
Tiempo ===:> años

Una mayor lipomovilización adipocítica (con un Figura Se representa la evo lu ción habitual de
nivel más elevado de ácidos grasos no esterifi- un individuo desde una situación de peso normal y
cados]. eq uili br io ponderal a otra de sobrepeso/obesidad. Ob-
Un mayor débito hepático de glucosa. sérvese que la ganancia pondera l no es in definida,
Una menor captación muscular de glucosa (la sino que tiende a un nu evo equi librio energético en
fracción promovida por la insulina). el que el ingreso ele energía y el gasto ele la misma se
Una hiperinsulinemia reactiva. igualan a un nivel superior al inicia l. Obsérvese tam-
Este cuadro metabólico se completa con la hiper- bién que en el obeso aumentan no so lamente los de-
trigliceridemia endógena (VLDL), el descenso de las pós itos de grasa, sino tambié n los de proteínas, agua
lipoproteínas de baja densidad (HDL) y, con menor y glu cógeno (por este orden). BE: Balance Energético;
frecuencia, la elevación de las LDL más pequeñas y CC: Composic ión Corpora l; TA: Tejido Ad iposo.
densas, que son más aterógenas . La situación sería
más grave aún si el adipocito no segregara también
algún factor protector, como la adiponectina, que al tre 21 y 24 ,9 kg/m 2 ) . Para IMC de 25 -30, 30-40
modular negativamente la expresión de los receptores y> 40, el riesgo de muerte se califica de «bajo »,
scavenger en el macrófago, reduce su transformación «moderado » y «alto », respectivamente. Existe
en «células espumosas » en la íntima arterial. un retraso de al menos 10 años antes de que los
Así pues, la distribución corporal predominante efectos sobre la mortalidad se hagan estadística-
de la grasa no es un mero carácter morfológico des- mente evidentes. Para un mismo grado de sobre-
criptivo, sino que entraña diferencias fisiopatológi- peso, la mortalidad es mayor en el hombre que
cas importantes . Así, la grasa abdominal es menos en la mujer, lo que se debe en gran medida a la
sensible al efecto antilipolítico de la insulina, de mayor frecuencia , en el primero, de la distribu-
modo que los ácidos grasos liberados se vierten di- ción abdominal de la grasa. Aunque el principal
rectamente hacia el hígado a través de la vena porta, condicionante de la mortalidad es la patología
donde bloquean la captación hepática de la insuli- cardiovascular, no son desdeñables estos otros:
na (que, desde la célula ~. llega al hígado también a colecistopatía, pancreatitis y cáncer de endome-
través de la vena portal, dando como resultado una trio, de mama y de próstata.
hiperinsulinemia superior, en este tipo a la existente Obesidad e hipertensión arterial. La HTA esen-
en la OB-G. cial es el doble de frecuente en los individuos
jóvenes (20-39 años) con sobrepeso, y un 50 %
Consecuencias clínicas superior en individuos de entre 40 y 64 años
también con sobrepeso. El Estudio Framingham
La obesidad es una importante fuente de enfermedad
mostró que bastaba un sobrepeso del 20 % para
y de complicaciones, que no solo deterioran la cali-
que la prevalencia de HTA se incrementara muy
dad de la vida del obeso, sino que a veces la acortan.
significativamente.
Veamos algunas de ellas.
Obesidad y alteraciones en la respiración. Las
Obesidad y mortalidad. Diversos estudios epi- alteraciones respiratorias en la obesidad resultan
demiológicos han puesto en evidencia que la de la combinación de la disminución de la ven-
tasa de mortalidad general se incrementa a partir tilación por razones mecánicas (acumulación de
648
de un determinado IMC considerado óptimo (en- grasa abdominal y torácica), y de la inadecuación
CAPITULO 78 Patología de los trastornos de la nutrición

Genes de - - - ~ _ _ Ambiente:
suceptibi lidad Envejeci miento
Obesidad
Tabla Depósitos energéticos
Al terac ión
-o l ~- - - - - •mitocondri al en un hombre tipo de 70 kg de peso
-o Sustratos
1 "/_____ +
-o'ü"'
·¡¡
o
energéticos
Cantidad Calorías

il GBNITG
oQ.
:.:::;
Tisulares
Grasa
Proteínas
15 kg
6 kg
141 000
24000
Glucógeno:
~ - - - - - DM Tipo 2 Muscular 150 g 600
Hepático 75 g 300
Figura La obesidad actuaría a dos niveles, en
Total calorías 165900
la interfase genética y en el ambiente: la resistencia a
la insulina (RI ) y la disfunción mitocondrial. Aunque la Circulantes:
cautela se impone, se ha ido perfilando una hipótesis Glucosa (espacio 20 g 80
unitaria explicativa de la RI y de la disfunción de la extracelular)
célula p (dCP) y del desarrollo progresivo de la diabe- AGNE (plasma) 0,3 g 3
tes mellitus, pasando por el estado prediabético (GBN TG (plasma) 3g 30
ITG) GBA: Glucemia basal alterada . ITG: Intolerancia
Total calorías 113
a la glucosa.
AGNE: ácidos grasos no esterificados
TG: triglicéridos
entre la ventilación y la perfusión. La mayor par-
te de las alteraciones (y, desde luego, las más gra-
ves) se presentan en la obesidad de grado ID y IV.
Obesidad y diabetes mellitus [DM]. La DM tipo 2
se presenta asociada a la obesidad en el 80 % de proteínas transportadoras). Sólo el aporte excesivo de
los casos, y siempre precediendo la primera a la proteínas hace que el exceso nitrogenado se elimine
segunda (Fig. 78-6). en forma de urea y el energético se almacene como
grasa. Las grasas, por el contrario, son hidrófobas.
De aquí que 1 gramo de tejido adiposo produzca tan
FISIOPATOLOGÍA DEL AYUNO solo un 20 % menos de calorías que la combustión de
1 gramo de triglicéridos. Ello significa que el tejido
FORMAS DE DEPÓSITO ENERGÉTICO adiposo está constituido por grasa en un 80 %. Desde
el punto de vista biológico, por tanto, la grasa es lo
Todo el caudal energético animal y humano se en- forma más económica de almacenamiento energético
cuentra almacenado en forma de glúcidos, proteínas con la que cuenta el organismo animal.
y grasas. La eficiencia energética de estos depósitos
es muy diferente, cualitativa y cuantitativamente (Ta-
blo 78-4) . El principal sustrato oxidable en el hombre CAMBIOS METABÓLICOS DURANTE EL AYUNO
es la glucosa (la combustión completa de 1 gramo de Los cambios metabólicos que acompañan a la de-
glucosa proporciona 4 calorías); ahora bien, la forma privación de alimentos en régimen de libre ingesta
animal glucídica de depósito no es la glucosa, sino el líquida tienen como finalidad mantener la homeos-
glucógeno, y este precisa entre 3 y 4 gramos de agua y tasis y la vida del individuo durante largos periodos
sus electrólitos, por gramo, para depositarse intrace- de tiempo. Ello se consigue mediante un conjunto de
lularmente. En consecuencia, 1 gramo de glucógeno, adaptaciones sucesivas, que vamos a analizar.
depositado en solución hidroiónica, sólo puede pro-
porcionar entre 1 y 2 calorías. Por tanto, y en lo que se
refiere al peso, los depósitos glucídicos son altamente Cambios en la composición corporal
ineficientes desde el punto de vista energético. En El aspecto más llamativo del ayuno prolongado es la
cuanto a las proteínas, son igualmente hidrófilas, y pérdida de peso; pérdida rápida en los primeros días
se encuentran en la célula en un ambiente hidroióni- y más lenta en los sucesivos. Benedict (1915) había
co que les es imprescindible; así pues, es válido para observado que, durante los primeros días de ayuno, la
ellas el mismo razonamiento que para los glúcidos. pérdida de peso era desproporcionadamente elevada
Además, las proteínas no constituyen una reserva con relación al gasto energético. Se ha estudiado el
energética, sino que su misión es plástica (proteínas valor calórico global de la reducción ponderal duran-
estructurales) y reguladora (enzimas , hormonas y te el ayuno , y se ha hallado que este valor difiere con-
SECCIÓN VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

siderablemente según dicha reducción sea medida en actuaría como un transformador metabólico : for-
los primeros diez días o más tardíamente. Al prin- mando glucosa a partir de sus precursores y de
cipio la pérdida es de unas 2000 kcal/kg, y de 8000 los aminoácidos (neoglucogénesis) y sintetizan-
kcal/kg después de varias semanas. Esta diferencia se do cetoácidos a partir de los AGNE y aminoáci-
explica por el hecho de qu e en los primeros días el dos-cetoformadores.
organismo pierde una mezcla de glúcidos, proteínas,
La respuesta metabólica y endocrinológica al
grasas y electrólitos, mientras que después (hasta que
ayuno prolongado comprende dos fases . Aunque
las reservas de grasas se agoten) el 90 % de las calo-
es difícil hacer una separación clara entre una y
rías consumidas proceden de la oxidación de la grasa.
otra fase, la primera ocupa los 7-10 primeros días,
Como es lógico, la composición corporal se modifica
para pasar luego, insensiblemente, a la segunda.
profundamente durante el ayuno prolongado, dismi-
En términos generales, la finalidad de la primera
n uyendo notablemente el compartimento graso y en
fase consiste en mantener la producción de glucosa
much o menor grado el celular, mientras que apenas
para el abastecimiento cerebral (lo que, agotadas las
quedan restos de glucógeno . El compartimento óseo
despensas glucídicas , se consigue reduciendo la uti-
se modifica poco, y aumenta proporcionalmente el
lización extracerebral de glucosa e incrementando la
espacio extracelular. La pérdida de masa celular es
neoglucogénesis). El 20 % de la glucosa producida
desigual en los diferentes órganos.
por el hígado en esta etapa es captada por las células
sanguíneas y la médula renal, para ser degradada a
Metabolismo en reposo
lactato en la vía glicolítica. El piruvato y el lactato
La disminución del metabolismo en reposo se detecta pasarán al hígado (y en menor grado, al riñón) donde
muy pronto durante el ayuno/semiayuno. Así el se- serán convertidos en glucosa (ciclo de Cori).
miayuno se acompaña de un descenso mantenido del El músculo, el corazón, el riñón y otros tejidos pe-
consumo de oxígeno. Esta disminución obedece a la riféricos no captan glucosa en cantidades apreciables
inhibición de la termogénesis, directamente relacio- a menos que se administre glucosa y/o insulina, o que
nada con el tanto por ciento de descenso de la masa se realice ejercicio físico. Su fuente energética, por
grasa. Es muy llamativa la ralentización de muchas tanto, son los AGNE y los cetoácidos . En esta prime-
de las funciones orgánicas y, muy fundamentalmen- ra etapa, la producción hepática de glucosa procede
te, la disminución de la masa celular de órganos tan de la glucogenólisis (viable tan solo hasta el segundo
activos metabólicamente como el intestino, el pán- día) y de la neoglucogénesis a partir del glicerol, el
creas y el propio hígado. Además, no debe olvidarse piruvato, el lactato y los aminoácidos glucoformado-
la importancia que tiene el cambio detectable en el res. Hay que subrayar que la eficacia neoglucogénica
metabolismo de las hormonas tiroideas. En efecto, del hígado se aproxima al 100 % durante el ayuno. La
durante el ayuno, el nivel circulante de T3 disminu- energía necesaria para todo el proceso neoglucogéni-
ye, al tiempo que se eleva la rT3, inactiva metabólica- co procede de la oxidación de los ACNE.
mente, elevación que parece deberse a la inhibición
de la deyodasa I y al retraso en el aclaramiento meta-
bólico de la propia rT3. NEOGLUCOGÉNESIS HEPÁTICA A PARTIR
DE LOS AMINOÁCIDOS
Cuantía , origen y destino de los combustibles durante
el ayuno En mayor o menor grado, todos los aminoácidos, ex-
cepto la leucina, han demostrado su potencial glu-
Si se tiene en cuenta que los depósitos de glucóge-
coformador. Sin embargo, considerando el músculo
no están prácticamente agotados al segundo día de
como el principal depósito proteico, los aminoácidos
ayuno, quedan dos fuentes principales de energía: los
liberados desde él en mayor cuantía, durante el ayu-
triglicéridos adipocíticos y las proteínas, particular-
no o semiayuno, son la alanina y la glutamina. Pero
mente las musculares. En cuanto a los patrones de
mientras que el destino de la glutamina es el intestino
utilización de los combustibles, existen cuatro:
y el riñón, donde interviene en los mecanismos de
La combustión total de la glucosa a CO2 y H 2 O, a transporte intestinal y en la amoniopoyesis respecti-
cargo del cerebro. vamente, el destino de la alanina es el hígado, donde
El metabolismo de la glucosa por la vía glucolíti- se transforma en glucosa. La neoglucogénesis h epáti-
ca a piruvato y lactato por las células sanguíneas ca resultante es una función del flujo de alanina que
y la médula renal. le llega. Estos hechos condujeron al concepto del «ci-
La utilización directa de ácidos grasos no este- clo de la glucosa-alanina» (Fig. 78-7), según el cual la
rificados (AGNE) por el músculo, el corazón, el alanina sería utilizada en el hígado para formar gluco-
riñón y otros tejidos periféricos. sa, y ésta lo sería en el músculo para formar alanina.
La cetogénesis hepática a expensas de los AGNE La finalidad de los cambios adaptativos durante la
y aminoácidos-cetoformadores, que serán con- primera fase de ayuno es la de mantener la produc-
sumidos también por el músculo, el corazón, el ción de glucosa para abastecer las necesidades cere-
650
riñón, el cerebro y la médula espinal. El hígado brales; hemos visto que esto se logra reduciendo la uti-
CAPÍTULO 78 Patología de los trastornos de la nutrición

HÍGADO ESPACIO EXTRACELULAR MÚSCULO

GLUCOSA

í
AA

Figura Ciclo de alanina-glucosa (véase texto).

lización extracerebral de glucosa e incrementando la CONTROL HORMONAL DE LA ADAPTACIÓN


neoglucogénesis a partir, sobre todo, de las proteínas. METABÓLICA AL AYUNO
La finalidad de la segunda fase del ayuno/semiayuno
consiste en preservar las proteínas celulares puesto Existe común acuerdo en que el descenso glucémico
que, de continuar el proceso degradativo proteico de de tan solo 10-15 mg/dl durante el ayuno constitu-
la primera, existiría riesgo vital y efectivamente, al ye la principal señal para los cambios metabólicos
prolongarse el ayuno la proteólisis se enlentece, como analizados. Cuando la glucemia desciende, disminu-
lo demuestran dos hechos: la excreción urinaria de ye también la secreción de insulina y se eleva la de
urea y la liberación muscular de aminoácidos dismi- glucagón, modificándose el cociente insulina/gluca-
nuye, siendo especialmente notable esta disminución gón. La consecuencia es la estimulación de la gluco-
para la alanina. Es decir, pese al agotamiento total genólisis, la lipólisis, la cetogénesis, la proteólisis y la
del almacén glucídico, la neoglucogénosis desciende neoglucogénesis. Aparte de ello, y como vamos a ver
considerablemente en la segunda fase del ayuno/se- después, la hiperglucagonemia hace al túbulo renal
miayuno. ¿Cómo abastecer, entonces, las necesidades refractario a los mineralocorticoides; de ahí procede,
energéticas cerebrales, que se aproximan a los 150 al menos en parte, la natriuresis y la poliuria. Exis-
gramos de glucosa en las 24 horas? La respuesta se ten muchas dudas sobre el papel ejercido por otras
obtuvo al demostrarse que el cerebro, en esta etapa, hormonas. Así, el papel desempeñado por los gluco-
consume cetoácidos en cantidades tan considerables corticoides en el ayuno parece solamente permisivo.
como para abastecer el 50-60 % de sus requerimien- En cuanto a la hormona somatotropa, su influencia,
tos energéticos totales. La finalidad del descenso de la si es que existe alguna, es muy escasa. Sobre el papel
neoglucogénesis hepática a partir de los aminoácidos de los cambios inducidos en las hormonas tiroideas ,
es, como ya se ha señalado, la preservación de las pro- véase lo dicho anteriormente.
teínas orgánicas. Pero, ¿cuál es el mecanismo íntimo
que conduce a este descenso? Todo parece indicar que
el elemento limitante de la neoglucogénesis hepática METABOLISMO HIDROMINERAL
durante la inanición prolongada no es otro que la dis-
minución de las disponibilidades de alanina. Ahora Desde el primero o segundo día de ayuno se incre-
bien, ¿por qué es menor la liberación muscular de menta la diuresis y la excreción renal de sodio, de
alanina? Quizá su explicación radique en el hecho de potasio y de magnesio, alcanzándose para el sodio un
que los cetoácidos inhiben la oxidación muscular de máximo al cuarto día, y descendiendo después hasta
los aminoácidos de cadena ramificada (valina, leuci- estabilizarse hacia el décimo día, aproximadamente.
na e isoleucina) . Es decir, los cetoácidos tendrían una En cuanto a la excreción renal de calcio y fósforo,
acción dual (Fig. 78-8): como sustratos oxidables por se mantiene a lo largo de todo el periodo de ayuno ,
651
el cerebro y como señal reconocible por el músculo. alcanzando su máximo entre la tercera y quinta se-
SECCIOl\i VII Semiología y fisiopatología del sistema endocrino y del metabolismo

UTILIZACIÓ 1 UTILIZACIÓN DE
t CEREBRAL DE
CETOÁCIDOS
T GLUCOSA

/ ~ MEOSTASIS DE
CETOÁCIDO; y ]
L LA GLUCOSA

♦ LIBERACIÓN
MUSCULAR DE -----+ T
I PRODUCCIÓ DE
GLUCOSA
/
L___.
CONSERVACIÓN
DE PROTEÍNAS
ALANINA

Figura Los cetoácidos (en particular el ~-hidroxibutírico, por su importancia cuantitativa) tendría n un
doble cometido durante el ayuno prolongado: el de aportar energía al SNC, sustituyendo así a la glucosa, y el de
su capacidad para ser reconocido por el músculo y frenar así la salida de aminoácidos. Como resultado final el
ahorro de proteínas musculares y una homeostasis de la glucosa más moderada (véase texto).

mana. Aunque la excreción de calcio oscila entre los a los mineralocorticoides está promovida por el
400 y los 500 mg en 24 horas, las reservas óseas son glucagón.
suficientes para hacer prácticamente imperceptibles La excreción renal de potasio y de magnesio co-
los cambios en este compartimento. rren parejas durante el ayuno, y parecen estar
¿Cuáles son los mecanismos reponsables de la na- condicionadas por el aumento del catabolismo
triuresis y de la excreción aumentada de potasio y proteico, la acidosis y la propia hipersecreción
magnesio? de aldosterona , que solo perdería eficacia en su
acción sobre la reabsorción tubular de sodio.
La excreción renal de sodio durante el ayuno
puede dividirse en tres fases bien caracterizadas: Un hallazgo importante, relativo al potasio duran-
a) fase natriurética, que se inicia el segundo día te el ayuno, es que de la tercera parte a la mitad del
y se prolonga, aproximadamente, hasta el sép- amonio excretado por la orina se debe a la depleción
timo/décimo, con un máximo al cuarto día; b) potásica, como lo demuestran los hechos siguientes:
fase de conservación de sodio, que se prolonga a) la administración durante el ayuno de cloruro po-
hasta el final del periodo de ayuno, y c) fase anti- tásico reduce a la tercera parte la excreción urinaria
natriurética, que se inicia con la realimentación de amonio; lo mismo ocurre cuando se administra bi-
hidrocarbonada. carbonato potásico; b) la administración de bicarbo-
nato potásico alcaliniza la orina y reduce la excreción
La natriuresis es dependiente de los glúcidos
de amonio a cantidades inapreciables, lo que supone
y de la insulina, puesto que su administración
un ahorro diario de 2 g de N.
origina un potente efecto antinatriurético. Ha
De todo ello pueden extraerse dos conclusiones:
podido observarse que la administración de una
dieta isocalórica sin glúcidos, o con una reduc- Que la natriuresis del ayuno/semiayuno obedece
ción a 50 g/día, reproduce el efecto natriurético a la refractariedad tubular renal a los mineralo-
del ayuno. También la pérdida renal de sodio es corticoides promovida por la hipersecreción de
independiente de las grasas, y escasamente de- glucagón, y que la misma tiene por objeto neu-
pendiente de las proteínas. tralizar la hiperproducción aniónica, de obligada
Entre los siete y los diez primeros días de ayuno excreción urinaria.
se registra un incremento progresivo en la se- Que la pérdida nitrogenada debida al aumento
creción de renina y aldosterona. La observación de la amoniogénesis renal puede ser virtualmen-
conjunta de ambos hechos (hipernatriuresis, te eliminada mediante la suplementación de po-
pese a la hipersecreción de aldosterona) condu- tasio y la alcalinización de la orina.
jo a pensar, lógicamente, que durante el ayuno
el túbulo renal era refractario a la acción de los
mineralocorticoides. La refractariedad tubular
MALNUTRICIÓN ENERGÉTICO-PROTEICA
para la aldosterona equivale al 60 % de su efecto Entendemos por tal un grado variable de depleción
habitual. de estos dos compartimentos corporales: el de las re-
La glucagonemia se eleva a más del doble al servas energéticas (Tabla 78-4) y el constitutivo pro-
cuarto día (coincidiendo con la excreción máxi- teico (músculo y vísceras). La expresividad clínica
ma de sodio), para luego decrecer y volver al puede ser muy amplia: suele estar presidida por la
nivel basal al séptimo. Se ha podido demostrar delgadez (a veces extrema), pero también suelen estar
652
que la reducción de la sensibilidad tubular renal presentes otros muchos síntomas y signos derivados
CAPITULO 78 Patología de los trastornos de la nutrición

Es muy raro que el incremento aislado de las nece-


sidades energéticas conduzca a malnutrición energé-
Tabla Las ocho grandes tico-proteica; y cuando así ocurre, es discreta, como
categorías causales de malnutrición en el ejemplo paradigmático: el hipertiroidismo. La
energético-proteica razón estriba en que se incrementa concomitante-
mente el apetito. Se trata de un mecanismo adaptati-
1. Falta de alimentos vo que pretende compensar el mayor gasto energético
condicionado por la hipersecreción tiroidea. Por eso,
2. Ayuno voluntario o terapéutico cuando el aumento de apetito no se produce (en el
3. Anorexia nerviosa anciano, muy frecuentemente) puede producirse la
depleción energético-proteica de grado intenso.
4. Obstáculos (en el tramo superior del aparato
Los efectos combinados de más de una categoría
digestivo) que impiden la masticación o la
ingesta de alimentos, o ambas merecen una consideración especial. Una situación
paradigmática es la enfermedad neoplásica. En ella
5. Gastroparesia y gastrectomía concurren los siguientes mecanismos:
6. Síndrome de maldigestión/malabsorción Anorexia.
7. Incremento en la actividad metabólica Incremento en la actividad metabólica celular
(fiebre, activación del sistema inmunocompeten-
8. Efectos combinados de más de una te , síndrome endocrino paraneoplásico).
categoría
Incremento de las necesidades (energético-pro-
teicas, en vitaminas y minerales) al aumentar la
masa celular (tumor primitivo y metástasis).
Formación por el tumor de sustancias con acti-
del déficit vitamínico y mineral y de la alteración del vidad lipomovilizadora y proteolítica (factor de
sistema de competencia inmunológico en su compo- necrosis tumoral, también llamado «caquecti-
nente celular linfocítico. Es decir, en la malnutrición na»).
energético-proteica es la inmunidad celular, adquiri- Maldigestión/malabsorción por efectos de la
da o adaptativa, la que resulta principalmente afec- cirugía (gastrectomía; resección o derivación in-
tada. testinal; creación de fístulas, etc.), de la radiote-
rapia y de los citostáticos.
CAUSAS
Pueden agruparse en distintas categorías (Tabla EXPRESIVIDAD CLÍNICA
78-5). Algunas de ellas son tan evidentes que no nece-
sitan ser comentadas, pero otras sí. Así ocurre con la En la malnutrición energético-proteica bien constitui-
anorexia, entendida aquí en un doble sentido: como da existe una triple depleción: la del compartimento
pérdida del apetito presente en muchos trastornos (al graso, la del proteico y la del hidroiónico. Por ello, la
frente de los cuales se encuentran muchas neoplasias clínica derivada es muy diversa. A ella hay que aña-
malignas), y como actitud anormal frente a la ingesta dir la correspondiente a diversos déficits vitamínicos,
de alimentos, propia de la anorexia nerviosa. Se trata de ácidos grasos esenciales y de algunos minerales, y
de situaciones radicalmente distintas. En la primera a las complicaciones, en particular infecciosas; de al1í
(o verdadera pérdida de apetito), la situación presen- que la nómina de síntomas y signos sea muy extensa,
ta escasos altibajos , en estrecha relación con la evolu- si bien, a efectos prácticos pueden agruparse de la for-
ción de la enfermedad y su tratamiento (radioterapia ma siguiente:
y citostáticos). En la segunda, la actitud del paciente
(casi siempre mujer) frente a la comida puede ser su- Reducción global del peso y de la masa corporal
mamente cambiante. Nunca se trata de una verdadera Puesto que el peso se reduce el IMC disminuye. El
pérdida de apetito, sino de una actitud anómala fren- adelgazamiento es siempre el signo más evidente de
te a los alimentos derivada de otra no menos anómala malnutrición energético-proteica.
frente al propio peso.
La gastroparesia y la gastrectomía (con o sin sec- Reducción del tejido adiposo subcutáneo
ción del nervio vago) conducen a la malnutrición
energético-proteica a través de mecanismos pareci- Disminución del pliegue cutáneo en la valoración del
dos: en ambas circunstancias el estómago ha dejado estado nutricional.
de ser eficaz como «estación de espera y mezcla» en
el proceso digestivo. La regurgitación y el vómito son Disminución de la masa muscular
frecuentes, así como los episodios de diarrea. En am- Produce una pérdida general de fuerza y amitrofia en
653
bas, la reducción del apetito es también frecuente. la exploración física.
SECCIÓN VII Semiología y fi siopatología del sistema endocrino y del metabol ismo

MALNUTRICIÓN ENERGÉTICO-PROTEICA

lnmun osupresión Dep leción de proteínas


Depl eción de
muscul ares
enzimas digestivas

1
Di arrea
Debilitamiento de
músculos respiratori os
(hipoventilación)

!
Atelectasia

~
! -------........
1
Figura La qu iebra de la inmunidad q ue con ll eva la ma lnutri ción e nergético-proteica conduce frec ue nte-
me nte a la mue rte por infeccio nes. Las comp licac iones infeccionsas más frecuentes son la diarrea, la neumonía
y la sepsis.

Reducción del compartimento hidroiónico del juvenil; pero son sobre todo , la hiperquerato-
Las manifestaciones de deshidratación (en la piel, sis y las hemorragias perifoliculares localizadas
pérdida de su turgencia; en las mucosas , sequedad; en la cara anterior del tórax, el antebrazo , los
hipotensión, en particular ortostática) pueden coexis- muslos, las piernas y el sacro, las auténticas mar-
tir con edema, debido a la reducción de la presión cas distintivas del déficit de esta vitamina en el
oncótica del plasma por hipoalbuminemia. adulto malnutrido.

La diarrea
Déficits vitamínicos
Déficit de riboflavina: fisuras verticales (quei- Por maldigestión/malabsorción es frecuente, de-
losis) en los labios y en los ángulos de la boca bido a la destrucción de las enzimas intestinales.
(estomatitis angular), dolorosas y susceptibles de Una vez iniciada la depleción proteica visceral,
ser infectadas por Gandida albicans; alteraciones las proteínas que primero se degradan son las de
en la piel, semejantes al acné , en sus áreas más ri- la superficie del epitelio intestinal y las enzimas
cas en glándulas sebáceas: surcos nasogenianos, pancreáticas, de vida media muy corta. Frecu ente-
alas de la nariz, pabellones auriculares y párpa- mente, pues, en la malnutrición energético-protei-
dos. También es un signo típico de este déficit la ca existe diarrea.
lengua depapilada, lisa y de color rojizo (lengua
magenta). Infecciones
Déficit de vitamina A : destaca la hiperquerato- Son frecuentes y graves, hasta el extremo de consti-
sis folicular, la sequedad corneoconjuntival (que tuir la forma habitual de fallecimiento del paciente
puede conducir a la queratomalacia) y, en los malnutrido (Fig. 78-9). La sepsis tiene como evento
casos avanzados , las características manchas de condicionante fundamental la inmunodeficiencia
Bitot, blancogrisáceas , de forma ovalada, locali- celular. La aparición de neumonía se encuentra fa-
zadas en la conjuntiva. cilitada además por la debilidad de la musculatura
Déficit de vitamina C: es típico el cabello ralo y respiratoria, que favorece el desarrollo de atelecta-
654
quebradizo , y la presencia de acné indistinguible sias, la retención de secreciones pulmonares.
·179
Semiología clínica y exploración
en hematología

INTRODUCCIÓN
La semiología de las enfermedades de la sangre y
órganos hematopoyéticos es muy expresiva des-
de el punto de vista clínico y biológico. El
estudio de la sangre periférica es muy
accesible y permite interpretar con
facilidad las alteraciones y com-
prender el proceso fisiopatológico y
seguir su evolución.
La alteración de cada línea celular
del sistema hematopoyético genera
un tipo de expresión clínica relacio -
nado con el déficit funcional de las
células, con su excesiva proliferación
o con las alteraciones cuantitativas o
moleculares de las proteínas que inter-
vienen en los procesos hematopoyéti-
cos. En líneas generales estos procesos
responden a los siguientes mecanis-
mos:

Alteraciones de células germi-


nales hematopoyéticas. Alteraciones de las proteínas que in-
tervienen en los distintos procesos hema-
Aplasia de células pluripo-
topoyéticos (hemoglobinogénesis y coagula-
tentes o comprometidas en una ción).
línea celular determinada (apla-
sia medular, eritroblastopenia). Defecto cuantitativo de la síntesis proteica.
Alteración clonal que origina displasia (sín- Defecto cualitativo de la estructura molecu-
drome mielodisplásico). lar de las proteínas.
Alteración clonal que origina proliferación
mieloide o linfoide (leucemias y linfomas).
HEMATOPOYESIS
Destrucción de hematíes en sangre periférica o
en el sistema reticuloendotelial (hemólisis intravas- La médula ósea es el lugar de proliferación y madu-
cular y extravascular) por ruptura o por secuestro ori- ración celular, cuya autorrenovación, a partir de un
ginado por alteraciones moleculares de la membrana, grupo de células germinales primitivas multipoten-
de la hemoglobina o del sistema enzimático. También tes , asegura la producción permanente de los elemen-
pueden intervenir mecanismos inmunes, por agentes tos maduros que se encuentran en la sangre periféri-
655
vivos o por mecánicos. ca. Este proceso se denomina hematopoyesis.
Semiología y fis iopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

realizar análisis de «rutina», que ponen de manifiesto


cuadros silentes de anemias hereditarias, linfocitosis
absolutas propias de la leucemia linfática crónica, Tabla Valores normales
leucocitosis con mielemia característica de la leuce- de determinaciones básicas
mia mieloide crónica y anemia o bicitopenia sugesti- eritrocitarias y de índices corpusculares
va de síndromes mielodisplásicos .
La historia clínica debe incidir en la historia fami- Hombre Mujer
liar, ya que un grupo de enfermedades hematológicas, 12
anemias hemolíticas constitucionales y trastornos de N.º hematíes (x 10 /1) 5,4 ± 1,5 4, 8 ± 1,2
la hemostasia pueden tener una naturaleza heredita- Hb (g/dl) 14,5 ± 2 13,5 ± 2
ria.
Hto (%) 45 ± 5 42 ± 5

VCM (ti) 88 ± 10
MÉTODOS DE ESTUDIO HEMATOLÓGICO
HCM (pg) 29,5 + 2,5
Se basan en el estudio cuantitativo de la concentra-
ción de cada uno de los elementos celulares de la CHCM (g/dl) 32,5 ± 2,5
sangre, y en el examen microscópico de la morfología 9
Reticulocitos (x 10 /1) 20-100
celular.
La valoración de las células se puede determinar
mediante métodos manuales o, con mayor frecuen-
cia, de forma automática o semiautomática. Los
métodos manuales se basan en el recuento mediante el tiempo de hematíes en la médula ósea, y produce
microscopio de células en un hemocitómetro con una unos hematíes de volumen más reducido. Las altera-
dilución conocida. Los métodos automáticos son una ciones del ADN eritroblástico modifican la división
forma más precisa de recuento , ya que analizan un de estas células y ocasionan macrocitosis.
número mucho mayor de células. Existen dos grandes
Hematocrito (1/1) x 1000
tipos de contadores celulares : contador de incremen- VCM =
to de impedancia, que detecta el cambio de resisten- N.º hematíes (x 10 12 /l)
cia eléctrica causado por el paso de las partículas, y Normal: 90 ± 10 fl
contadores ópticos, que detectan cambios cuando la
partícula pasa a través de un haz de luz, general mente La HCM indica la cantidad media de hemoglobi-
láser. na de cada hematíe y varía en el mismo sentido del
VCM. Las anemias hipocromas se expresan por una
reducción de la HCM por debajo de 26 pg; ello impli-
ESTUDIO DE LA SERIE ERITROIDE ca un trastorno en la hemoglobinogénesis.
Las determinaciones básicas son el número de he- Hb (g/dl) x 10
matíes por unidad de volumen, la concentración de HCM = - - - - - - -12-
h emoglobina y el hematocrito. La concentración de N.º hematíes (x 10 /1)
hemoglobina es el método de elección para establecer Normal: 29 ± 2 pg
la presencia de anemia. Se determina convirtiendo la
hemoglobina en metahemoglobina (conversión del La CHCM indica la concentración de Hb en el he-
hierro del hem de estado ferroso a estado ·férrico), y matíe medio.
después a cianmetahemoglobina, que absorbe la luz a
Hb (g/dl)
540 nm. La concentración de Hb varía de forma loga- CHCM = - - - - - - -
rítmica, en función de la absorción de luz a 540 nm. Hematocrito (1/1)
De las determinaciones anteriores derivan los ín- Normal: 34 ± 2 g/dl
dices eritrocitarios , que describen las características
genéricas de la mayor parte de los eritrocitos. Son de Con la excepción de la esferocitosis hereditaria y
gran utilidad para el diagnóstico y clasificación de los algunos casos de drepanocitosis, la CHCM no excede
trastornos anémicos. Los índices eritrocitarios son el de 37 g/dl, ya que esta concentración mayor condicio-
volumen corpuscular medio (VCM), la cantidad cor- na cristalización. La disminución de la CHCM tradu-
puscular media de hemoglobina (HCM) y la concen- ce hipocromía.
tración corpuscular media de hemoglobina (CCMH),
que se detallan en la Tabla 79-1 y en la Figura 79-2. Recuento de reticulocitos. El reticulocito es un
Según el VCM, las anemias se clasifican como eritrocito inmaduro que contiene ARN ribosómico; se
normocíticas, microcíticas o macrocíticas, cuando el puede teñir mediante precipitación por ciertos colo-
VCM es normal, :,; 80 fl, o ~ 100 fl, respectivamente. rantes supravitales, como el azul de cresil brillante.
658
El defecto de la síntesis de hemoglobina enlentece Antes de pasar a eritrocito maduro, el reticulocito se
CAPÍTULO 79 Semiología clínica y expioración en hernatología

Tabla Alteraciones morfológicas de los hematíes


Alteración Característica. Procesos en los que aparecen
Tamaño
Anisocitosis Variación anormal en el diámeiro de los hemaifes.
Cualquier anemia intensa.
Macrocitosis Aumento del VCM.
Anemia megaloblástica. hepatopatía. anemia regenerativa intensa.
hipotiroidismo, recién nacido.
Microcitosis Disminución del VCM.
Alteración de hemoglobinización (íerropenía. anemia siderob!ástica. talasemia.
intoxicación con plomo).
Color
Hipocromía Reducción del contenido de hemoglobina.
Alteración de la hemoglobinización.
Policromato!ilia Hematíes jóvenes con ARN (reticulocitosis¡.
Anemias regenerativas.
Forma
Esq u istocitos Pequeños y fragmentados.
Anemia microangiopática.
Poiquilocitos o dacriocitos Prolongación elongada en una zona en forma de pera o lágrima
Cualquier anemia intensa, frecuente en míelofibrosis.
Esferocitos Forma redondeada y pequeño tamafio. sin aclaramiento central, volumen
normal.
Esferocitosis hereditaria, anemia hemolítica inmunitaria.
Ovalocitos Forma de huevo.
Anemia megaloblástica.
Eliptocitos Forma alargada.
Eliptocitosis hereditaria.
Dianocítos Área central y periferia oscura, y anillo claro entre ambas.
Hepatopatías, talasemias. hemoglobinopatías.
Drepanocitos Forma larga y estrecha en semiluna.
Drepanocitosis.
Estomatocitos Hendidura en región central.
Estomaiocitosis hereditaria.
Acantocitos Hematíes espiculados. Déficit de ¡·Hipoproteína.
Hepatopatías. Déficit de piruvatocinasa.
Inclusiones
Cuerpos Howell-Jolly Corpúsculos redondos procedentes de la degradación de; núcleo de
eritroblastos.
Hipoesplenismo, anemia perniciosa.
Anillos de Cabot Restos de membrana nuclear del eritroblasio que fOíman un anillo.
Anemia perniciosa, intoxicación con piorno.
Punteado basófilo Ribosomas que forman agregados con tinción panóptica.
Saturnismo, talasemias.
Cuerpos de Pappenheimer Grumos de hemosiderina.
o siderocitos Sobrecarga férrica.
Cuerpos de Heínz Inclusiones por precipitación de hemoglobina anormai.
Talasemia, anemias hemolíticas congénitas.
Parásitos Plasmodium talciparum. Bartonel/a bacíihform,s.

661
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos


ºººº
oo
0 C08og
Figura
'
o
Q..
o 0 00

, ºº~
a
Alteraciones morfológicas de los hematíes. A. Hematíes normales y un leucocito polinuclear neu-
trófilo. B. Reticulocitosis en anemia hemolítica. C. Microcitosis con hipocromía en anemia ferropénica. D. Dre-
panocito en anemia fa lciforme.

Estudio del metabolismo del hierro Índice de saturación:


Sideremia
Sideremia: hierro plasmático unido a la trans- . X 100
ferrina. Valor normal: 50-150 µg/dl. Transferrma
Transferrina: se mide por la capacidad total de Normal: 20%-50 %
esta proteína de ligar el hierro. El hierro satura Ferritina: contiene hierro rápidamente movili-
en un 20%-50 % la transferrina. Normal: 280- zable, y representa la unidad de las reservas en
360 mg/dl. el sujeto normal. Normal: 12-200 ng/ml.

100 Lisis 100


(% )
80

'o
"'
-o
60
:~tí 50
40
~
"'
~

0 20

o
0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8
10 20 30 40
CINa(%)
Días
- esferocitosis hereditaria rango normal
51
• Valores corregidos para la elución del Cr eritrocitario

Figura Representación de la vida media eritro- Figura Test de fragilidad osmótica de los hema-
citaria con hematíes marcados con 51 CR. Acortamiento tíes a soluciones hipotónicas. Comienzo más precoz
662 de la vida media eritrocitaria en la anemia hemolítica. de la hemólis en la esferocitosis hereditaria .
CAPÍTULO 79 Semiología clínica y exploración en hematología

DIRECTO

•••
Hematíes del enfermo •
(con autoanticuerpos
o comp lemento)
+
Suero de Coombs
(a ntiglobulin as)

Aglutinación
(Test posit ivo)

INDIRECTO

--
Hematíes no rm ales - - +
<>
<>
o
o
<> O Suero del enferm o
<> (co n au toanticu erpos
o co mpl em ento)


••••
Hematíes
se nsibi lizados
+
Suero de Coombs
(a ntiglobu linas)

Aglutinación
(Test positivo)

Figura 7 • Test de Coombs directo e indirecto.

Protopo1firina libre de los hematíes : aumen- - Interpretación del aclaramiento de Fe:


ta en las anemias ferropénicas. Normal: 30 Alargado: insuficiencia medular.
(15 -80) µg/dl. Acortado: anemia ferropénica; hemólisis.
- Incorporación del Fe a los h ematíes:
Estudios de ferrocinética: la transferrina se
Reducida: aplasia medular.
marca con Fe y se inyecta por vía intravenosa.
Eritropoyesis ineficaz: aclaramiento normal
La reducción plasmática de Fe se hace según
con reducción de la incorporación por aborto
dos curvas exponenciales, la primera rápida,
in trame dular.
cuyo Tl/2 es 60 a 90 minutos. El Fe se fija a
continuación en los eritroblastos, que sinte- Estudios relacionados con el déficit de vitamina
tizan hemoglobina, y se incorporan a los he- B12 y ácido fólico
matíes recién formados , apareciendo en la cir-
Déficit de vitamina B12 •
culación desde el 2. 0 día y alcanzando al 10. 0
día una meseta del 80-90 % de la radiactividad - Determinación sérica de vitamina B12 : la cifra ~
inyectada (Fig. 79-7): normal es de 200-500 ng/1.
Semiología y fisiopatología de la sa ngre y órganos hematopoyéticos

ACLARAMIENTO INCORPORACIÓN

100 B

50 75

m~
Q) Q)
u..
m~
o
Q) a, en
-o~ "O .!!1
-o "' -o 1ií
"'E
-o en -jg E
-- "'
>- · ;;; Q)
50
:.:,C.. :.¡::¡ .e
uc uc
<( Q) <( Q)

25

O 20 40 60 80 100 120 140 o 2 4 6 8 10 12 14


Tiempo (min) Días

Fi~ura _ Estudio de fe~rocinética con 59_Fe. A lterac iones del aclaramiento del hierro y de su incorporación.
A. a_claram_1ento lento ?el hierro,_B: acl_aram 1ento rápido del hi erro. A: incorporación ráp ida de hi erro a los he-
mat1es, B: incorporac1on lenta e insuf1c1ente de hi erro a los hematíes.

- Test de Schilling: en un sujeto normal, más ESTUDIO DE LA SERIE LEUCOCITARIA


del 5 % de la radiactividad ingerida (cocia-
nocobalamina) se encuentra en la orina de 24 Recuento de leucocitos y fórmula leucocitaria.
horas. Cuando hay un defecto de factor intrín- Al igual que con el resto de las células sanguí-
seco, la vitamina B12 radiactiva no se absorbe neas, el recuento se puede realizar mediante téc-
y la eliminación en orina es entre 0-2 %. ' nicas manuales o, más habitualmente, de forma
- Prueba de supresión de la deoxiuridina (DV): automática o semiautomática.
normalmente, una preincubación de célu- La fórmula leucocitaria es el recuento por-
las medulares con DV suprime la incorpo- centual de los distintos tipos de leucocitos. El
ración de timidina tritiada al ADN. Cuando método más frecuente es el manual, mediante
hay un defecto de vitan1ina B, 2 o ácido fálico, la observación de una extensión de sangre al
la conversión de deoxiuridilato en timidilato microscopio tras la tinción de tipo panóptico
no se realiza correctamente, y el efecto su- (May-Grünwald-Giemsa, Wright). El estudio mi-
presor de la DV sólo es parcial. La anomalía croscópico permite no solo realizar el recuento
se corrige añadiendo derivados fálicos o co- diferencial, sino detectar alteraciones morfológi-
balan1ínicos en caso de déficit de ácido fáli- cas, que en ocasiones son específicas de ciertos
co o de vitamina B12 , respectivamente. trastornos y que se resumen en la Tabla 79-3. En
- Determinación de anticue1pos antifactor in- los últimos años se han introducido diversos
trínseco: se encuentran elevados en la ane- métodos de recuento diferencial automático, que
mia de Biermer (a. perniciosa). tienen en cuenta, de forma simultánea, el tama-
ño celular, la forma nuclear y, en ocasiones, la
- Pruebas terapéuticas: la administración
tinción celular.
de 1 µg i.m. de vitamina B12 o ácido fálico
Las variaciones deben evaluarse en cifras ab-
(5 mg diarios) entre 4 y 6 días, produce una
solutas.
crisis reticulocítica que aparece entre el 3.º
Estudios funcionales de los granulocitos. Se rea-
y 8. º día en los déficits respectivos de cada
factor. lizan pruebas para valorar la actividad quimio-
táctica, la fagocitosis o la capacidad bactericida.
La determinación de anticuerpos antineutrófilos
Déficit de ácido fólico
permite confirmar un mecanismo autoinmune
- Determinación de ácido fálico plasmático (N: en el estudio de ciertas neutropenias.
6-20 ng/ml) y ácido fálico eritrocitario (N: Estudio del fenotipo linfocitario. La identifica-
664
160-700 ng/ml). ción con anticuerpos monoclonales de los linfa-
CAPITULO 79 Semiología clínica y exploración en hematología

Tabla Leucocitos: valores Tabla Mielograma


normales
Límites de
Valor medio Extremos normalidad
9 9
X 10 /1 X 10 /1 (%)
Leucocitos 7,2 3,8-11 Serie neutrofílica total 49,2-65,0
Neutrófilos 4,4 2,0-7,5 Mieloblastos 0,2-1,5
Eosinófilos 0,2 0,04-0,4
Promielocitos 2, 14,1
Basófilos 0,05 0,01-0, 1
Mielocitos 8,215,7
Linfocitos 2,7 1,5-4,0
Metamielocitos 9,6-24,6
Monocitos 0,5 0,2-0,8
Bandas 9,5-15,3

Segmentados 6,0-1 ,2

Serie eosinofílica total 1,2-5,3


citos B y T permite estudiar el fenotipo de los di-
Mielocito 0,2-1,3
versos síndromes linfoproliferativos y su altera-
ción en los déficits inmunitarios primitivos. En Metamielocito 0,4-2,2
la línea linfocitaria B los marcadores son CD19, Bandas 0,2-2,4
CD20 y slg y en la línea linfocitaria T CD3, CD7,
CDl, CD2 , CD4, y esta diferenciación se realiza Segmentados 0-1,3
mediante el estudio de marcadores inmunológi- Basófilos y mastocitos 0-0,2
cos. El cociente CD4/CD8 (colaborador/supresor)
Serie eritroblástica total 18,4-33,8
es normalmente de 1-2. El límite inferior de cé-
lulas CD4+ es 400 mm 3 ; estos datos tienen valor Proeritroblasto 0,2-1,3
pronóstico en el síndrome de inmunodeficiencia
Eritroblastos basófilos 0,2-1 ,3
adquirida por VIH).
Eritroblastos policromatófilos 17,9-29,9

Eritroblastos ortocromáticos 0,4-4,6


ESTUDIO DE LA MÉDULA ÓSEA
Linfocitos 11, 1-23, 1
El mielograma se realiza a partir del aspirado extraí-
do de la médula ósea, mediante una evaluación de Células plasmáticas 0,4-3,9
los distintos elementos y de sus características mor- Monocitos 0-0,8
fológicas. La proporción entre la serie mieloide y la
Megacariocitos 0-0,4
eritroide es de 3:1 (Tabla 79-4).
En la médula ósea, mediante la tinción de Peris, Histiocitos y células
0-0,9
se puede estudiar el hierro eritroblástico y el que se reticulares
encuentra en los depósitos. También se puede demos-
trar la presencia de parásitos u obtener material para
cultivos bacteriológicos o citogenéticos. El estudio de
ciertas células, particularmente en las leucemias, se La biopsia medular permite estudiar, sobre un ci-
realiza mediante técnicas citoquímicas o inmunoló- lindro óseo, las células y la estructura de la médula
gicas. ósea. Es fundamental en el estudio de la aplasia me-
El estudio del mielograma se utiliza particularmen- dular, así como para identificar la infiltración de los
te para evaluar: linfomas y en los síndromes mieloproliferativos para
La aplasia medula1~ cuando hay una reducción evaluar la fibrosis de la médula.
muy importante de células.
Las enfermedades propias de la médula ósea
con sus atipias celulares, como sucede en las
ESTUDIO DEL GANGLIO LINFÁTICO
leucemias agudas y crónicas, y los síndromes En los linfomas es fundamental el estudio histopa-
mielodisplásicos. tológico para establecer el diagnóstico y su clasifica-
La infiltración de la médula ósea por células he- ción. El estudio inmunológico define el fenotipo de
matopoyéticas, como es el caso de los linfomas, los linfomas y mediante citogenética y biología mole-
o extrahematopoyéticas, como las metástasis de cular se caracterizan las alteraciones cromosómicas y
los tumores sólidos (Fig. 79-8). los oncogenes implicados.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Figura Estudio morfológico de la médula ósea. A. Médula ósea normal. B. Megaloblastos característicos
de la anemia por déficit de vitamina B12 . C. Leucocito polisegmentado y macrocitosis en anemia megaloblástica.
D. Síndrome mielodisplásico con alteraciones de las células mieloides, leucocitos neutrófilos con escasa granu-
lacion. E y F. Células blásticas en leucemia aguda.

ESTUDIO DE LAS PROTEÍNAS PLASMÁTICAS En las gammapatías monoclonales aparece una


banda M intensa, homogénea, en la región de las
Tienen particular importancia en hematología la gammaglobulinas (Fig. 79-9).
transferrina, la haptoglobina, la transcobalamina y las Inmunoelectroforesis: se identifica un tipo espe-
inmunoglobulinas. cífico de inmunoglobulina o de cadena ligera por
El estudio de las inmunoglobulinas se aplica prin- migración y precipitación, frente a un anticuer-
cipalmente a los déficits inmunitarios y a las gam- po específico.
mapatías monoclonales. Determinación cuantitativa de las inmunoglobu-
Electroforesis de las proteínas (proteinograma): linas.
permite separar en acetato de celulosa o agaro- Crioglobulinas: son inmunoglobulinas que pre-
sa diversas fracciones proteicas, según su mo- cipitan con el frío y se detectan a ± 4 ºC en el
666
vilidad eléctrica, y cuantificarlas (Tabla 79-5). laboratorio. Son de tipo IgG e IgM, rara vez IgA.
CAPITULO 79 Semiología clínica y exploración en hematología

Tabla Valor de las fracciones Tabla Alteraciones citogenéticas


de las proteínas plasmáticas y oncogenes implicados en leucemias
Albúmina 32-56 g/1 52-65 % Alteración
Enfermedad Oncogén
Alfa-1-globulina 1-4 g/1 2,5-5 % cromosómica

Alfa-2-globulina 4-12 g/1 7-13 % LMC t (9;22) o Ph BCR-ABL

Betaglobulina 5-11 g/1 8-14 % LAM-M2 t (8;21 ) AML 1/ETO

Gammaglobulina 5-16 g/1 12-22 % LAM-M3 t (15;17) PMURAR

lgG 900-1500 mg/dl LAM-M4 con inv 16 CBF~-


eosinófilos MYH11
lgA 140-290 mg/dl
LAL-B (L3) !(8;14) myc/lgH
lgM 70-250 mg/dl
LAL-T t(1;14) o TAL/TCR
lgD 3-4 mg/dl deleción del
gen TAL
lgE 0,01-0,04 mg/dl
Leucemia del (13q) RB
linfática trisomía 12
crónica Del(11q) ATM

Ph: cromosoma Filadelfia.


CARIOTIPO Y ESTUDIOS MOLECULARES
El estudio del cariotipo mediante la técnica de ban-
das permite dis tinguir alteraciones cromosómicas,
El reordenamiento de los genes de las inmunoglo-
que son características en diversas leu cemias y lin-
bulinas permite definir el patrón monoclonal o poli-
fomas. Por otra parte, la evolución y aparición de
clonal en la célula linfoide presuntamente alterada.
diversas alteraciones cromosómicas in dica mal pro-
nóstico. Las alteraciones citogenéticas se expresan
El estudio mediante técnica de PCR (reacción en
como cambios numéricos (mon osomías y trisomías) cadena de la polimerasa) detecta oncogenes implica-
o cambios estructurales (translocaciones, deleciones, dos en leucemias y linfomas (Tablas 79-6 y 79-7).
in versiones).

Tabla Alteraciones citogenéticas


y oncogenes implicados en linfomas
Normal
J Linfoma
Alteración
Oncogén
cromosómica
Linfoma t(14;18) bcl-2
folicular
Linfoma del t(11 ;14) bcl-1
manto
Gammapatía
policlonal Linfoma MALT t(11 ;18) AP12 y
y MALT1
Linfoma t(8;14),t(2;8) y myc
Burkitt t(8;22)
Linfoma t(2;5) ALK
anaplásico
Gammapatía Linfoma Cromosoma 3 bcl-6
monoclonal B difuso
de células
grandes

Figura El ectrofores is de las prote ínas séricas.


Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

La técnica de microarrays permite analizar la situa- sis primaria y en la coagulación intravascular


ción de miles de genes en un solo experimento y de diseminada (CID). El dímero D se forma por
esta forma se pueden conocer las bases moleculares, la acción de la plasmina sobre la fibrina esta-
particularmente de las hemopatías malignas, con uti-. bilizada por el factor XIII, y reconoce la activa-
lidad pronóstica y que son lugares diana para ciertos ción de la coagulación a un estadio más precoz
tratamientos. y propio de la CID, y no de la fibrinólisis pri-
maria.
Estudios funcionales de la agregación de las
EXPLORACIÓN DE LA HEMOSTASIA plaquetas con ADP, adrenalina, colágeno, ácido
Las pruebas básicas son las siguientes: araquidónico y trombina. Análisis de las glico-
proteínas de la membrana plaquetaria.
Tiempo de sangría: el método de Ivy se realiza Estudio con ristocetina: se utiliza para el estudio
mediante una incisión en el antebrazo. El tiempo de la enfermedad de Willebrand (vWF: Co, cofac-
de sangría es inferior a 95 minutos. Se alarga en tor de la ristocetina). Para evaluar los subtipos de
trombopenias, trombocitopatías y en la enferme- esta enfermedad es necesaria la determinación
dad de Willebrand. del antígeno Willebrand (vWF: Ag) , del factor
Estudio de las plaquetas: normal , 150-450 x VIII coagulante (FVIII: C) y de los multímeros en
109/1. Su morfología se valora en el frotis de san- plasma del vWF.
gre periférica. Prueba de adhesión plaquetaria.
Tiempo de tromboplastina parcial activado Anticuerpos antiplaquetarios: son positivos en
(TTPA): valora la vía intrínseca, se alarga por el más del 80 % de las trombopenias autoinmunes,
déficit de los factores VIII, IX, X y V. y predominan las IgG.
Tiempo de protrombina (índice de Quick): valo- Estudio de factores específicos.
ra la vía extrínseca, se alarga por el déficit de los
factores II, VII, X y V. Factores de la coagulación: XII, XI, VIII, IX, X,
Tiempo de trombina : se alarga por déficit impor- y VII.
tante o alteración de la estructura del fibrinóge- Inhibidores naturales: antitrombina III, proteí-
no , presencia de heparina e hiperfibrinólisis. nas C y s.
Determinación de fibrinógeno. Factores de la fibrinólisis: plasminógeno, alfa-
Productos de degradación del fibrinógenolfi- 2antiplasmina, inhibidor del activador hístico
brina (PDF): aparecen en cuadros de fibrinóli- del plasminógeno (PAI) .

668
·180
Patología de la serie roja: Anemias
Javier García-Conde Bru

SÍNDROME ANÉMICO

CONCEPTO

El término anemia se define por la


disminución de la concentración de
hemoglobina por debajo de 13 g/
dl en el hombre, y de 12 g/dl en la
mujer. Las variaciones del volumen
plasmático modifican la concentra-
ción de hemoglobina, acentuando
una anemia verdadera o creando una
falsa anemia (aporte hídrico parenteral
excesivo, síndrome edematoso, esple-
nomegalia voluminosa, embarazo o
paraproteinemia como la enfermedad
de Waldenstrom). Por el contrario, una
hemoconcentración puede enmascarar
una anemia verdadera.

La cifra de hematíes no es un
criterio adecuado para definir una
anemia, ya que como sucede en la
~-talasemia minar, es compatible un
CLASIFICACIÓN
descenso de la hemoglobina con una Se establece a partir del mecanismo fisiopa-
cifra normal o alta de hematíes, microci- tológico de regeneración, para definir posterior-
tosis e hipocromía. Por otra parte, el número mente el mecanismo patogénico y, por último, la
de hematíes puede disminuir y su volumen aumentar causa específica de la anemia. Los síntomas y signos,
(macrocitosis) sin que exista disminución de hemog- y de forma especial las pruebas biológicas, sirven
lobina o del hematocrito. para situar cada caso en el contexto que ocupa en la
clasificación. La Tabla 80-1 recoge los distintos tipos
El carácter fisiopatológico de una anemia viene de- de anemias.
finido por la capacidad regenerativa o hiporregenera-
tiva de la médula ósea. El criterio más práctico para
definir esta situación consiste en la determinación de FISIOPATOLOGÍA
la cifra absoluta de reticulocitos o la cifra de reticu-
locitos corregida. Las anemias regenerativas tienen La función principal del glóbulo rojo es el transpor-
una hiperreticulocitosis superior a 100-150 x 10 9 /1, te, por la hemoglobina, del 0 2 desde los pulmones
que es responsable de una cierta macrocitosis y de a los tejidos , así como de una parte del C0 2 • El 0 2 ~
policromatofilia. se une a la hemoglobina en los pulmones, en donde
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla Clasificación fisiopatológica de las anemias


REGENERATIVAS
Pérdida aguda de sangre <x-talasemia:
Anemia aguda poshemorrágica Homocigótica o Hb Bart
Hiperdestrucción de hematíes (hemó!isis) Doble heterocigocia o Hb H
Corpusculares Forma silente
Alteraciones de la membrana: Rasgo talasémico
Esferocitosis hereditaria (esferocitos)
Extracorpusculares:
- Eliptocitosis congénita (eliptocitos)
Agentes tóxicos:
Síndrome de Mcleod (acantocitos)
- Químicos: hidrógeno arseniado, cloratos
- Déficit de glicoforina C (eliptocitos)
Origen animal: venenos de serpientes
Hidrocitosis congénita (estomacitos)
Agentes infecciosos:
Hemoglobinuria paroxística nocturna
Bacterianos (Clostridium perfringens)
Déficits enzimáticos:
Parásitos (paludismo, bartolenosis)
- Piruvatocinasa
Causas mecánicas:
- Glucosa 6-fosfato deshidrogenasa
Valvulopatías
- Pirimidina 5-nucleotidasa
- Microangiopatías
Alteraciones de la hemoglobina:
Hemoglobinuria de la marcha
a) Alteraciones cualitativas o hemoglobinopatías
estructurales: Inmunológicas:
Síndromes falciformes (hemoglobina S) a) lsoanticuerpos

Hemoglobinas inestables (hemoglobina Zurich, Transfusiones


Koln) Enfermedad hemolítica del recién nacido
Hemoglobinas con aumento de afinidad por el 0 2 b) Autoanticuerpos
(producen poliglobulia) Calientes
Metahemoglobinemias congéticas (hemoglobinas Fríos
M: producen cianosis y poliglobulia) Anemia hemolítica por criaglutininas
Hemoglobinopatías que se expresan como Hemoglobinuria paroxística a frigore
talasemias (hemoglobina Lepare y Constant
c) Anemias hemolíticas por fármacos:
Spring)
Mecanismo hapteno (penicilina)
b} Alteraciones cuantitativas o síndromes
talasémicos: Mecanismo autoanticuerpo (r,-metildopa)
f:Halasemia: Mecanismos complejos inmunitarios
(quinidina)
f3-talasemia majar u homocigótíca
Hiperesplenismo
f3-talasemia minor o heterocigótica
fHalasemia intermedia

ARREGENERATIVAS o HIPORREGENERATIVAS
Alteraciones en la célula germinal hematopoyética Defecto de la incorporación del hierro (anemia
(insuficiencia medular): sideroblástica)
Cuantitativas: Defecto de la distribución del hierro
Global: (enfermedades crónicas)
Aplasias medulares Defecto del transporte de hierro
(atransferrinemia congénita)
Selectiva:
Alteraciones del ADN:
- Eritroblastopenias
Déficit de vitamina B1 2
Cualitativas (dismielopoyesis):
Déficit de ácido fálico
Síndromes mielodisplásicos
Defecto de otros principios de la eritropoyesis:
Infiltración de la médula ósea y desplazamiento de las
células hematopoyéticas Déficit de eritropoyetina
Defectos de los factores eritropoyéticos: Déficit de hormonas tiroideas
Alteraciones de hemoglobinogénesis: Déficit de andrógenos
Déficit de hierro (anemia ferropénica)
670
CAPITULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

está prácticamente saturada, y se libera en los tejidos, Adaptación eritrocitaria:


donde la P0 2 es baja (= 30 mm Hg) y, por tanto , la
Aumento de la producción de eritropoyetina
hemoglobina está poco saturada. Esta función oxige-
por efecto de la hipoxia sobre el «sensor de
nadora de la hemoglobina se mide por la curva de
0 2 » en la médula renal. Actúa a nivel de los
disociación de la hemoglobina, en función de la P0 2 •
eritroblastos.
La P50 representa la presión parcial de 0 2 , para la cual
Disminución de la afinidad de la hemoglobina
el 50 % de la hemoglobina está oxigenada. El valor de
por el 0 2 , con una liberación óptima del oxí-
la P 50 varía en sentido inverso a la afinidad; un valor
geno a los tejidos al disminuir la Pa0 2 • La P 50
aumentado de P50 indica una menor afinidad de la
aumenta. Sobre esta situación influyen un au-
hemoglobina por el 0 2 • La P 50 normal es de 27 mm Hg.
mento del 2-3 difosfoglicerato y el efecto Bohr
Esta curva tiene forma sigmoide (Fig. 80-1) , en la que
por acidosis láctica.
cuando la P0 2 es elevada la saturación es del 100 %,
y esta disminuye con el descenso de la P0 2 • El 2-3
difosfoglicerato reduce la afinidad de la hemoglobina MECANISMOS FISIOPATOLÓGICOS
por el 0 2 y desplaza hacia la derecha la curva de di-
sociación. También se produce este mismo efecto por DE LAS ANEMIAS
la disminución del pH, al originarse un aumento del La disminución de la hemoglobina, y por tanto la hi-
ácido láctico por la hipoxia (efecto Bohr). poxia, puede deberse a dos mecanismos:
Los mecanismos de adaptación ante la anemia es-
tán relacionados con la existencia de hipoxia. Depen- A um ento de pérdidas con increm ento compen-
den de la intensidad, la brusquedad de instauración y sador de la actividad m edular (reticulocitos
la adaptación individual a la hipoxia, a los que pue- aumentados):
den añadirse factores relacionados con la edad y el Hemorragia aguda: pérdida por salida al exte-
estado cardiocirculatorio y respiratorio. rior de sangre, con reducción de la hemoglobi-
na, y mecanismo compensador por la médula
Adaptación cardiovascular:
ósea.
Redistribución del volumen sanguíneo en terri- Hemólisis: destrucción aumentada de hema-
torios preferentes (cerebro, corazón) mediante tíes intra o extravascular, con mecanismo com-
vasoconstricción en otras áreas. pensador de regeneración medular.
Aumento del volumen cardiaco por acelera-
Disminución de la producción medular con reti-
ción de la frecuencia.
culocitos reducidos:
Adaptación respiratoria:
Aplasia medular: disminución selectiva o glo-
El aumento de la frecuencia respiratoria no bal del pool germinal hemapoyético. El meca-
es eficaz, al estar saturada de 0 2 la hemo- nismo puede ser también de origen inmunita-
globina. rio.

100 Oxi-Hb ....... ... ... .. .


1' pH}menor \, .......... ... .... ... ..
90 ,j,
DPG loberac,ón O, ....... •· ........... ..

80
,j, Temp .-······· ••.• ·(

~
g_..
..o
70 / / // º='"' Puentes de estabilidad
~ 60
c5Q)
50
i 2-3 DPG
""O
e 40

·¡::::;
_:'/.:·./ =~•{,j1', pH
e
:::,
30 .. liberación O, DPG
'f' Temp
~ 20
V>
10 /~/
10 20 30 40 50 60 70 80 90 100
P0 2 (mm Hg)
-1 t-¡¡- t
músculo en tejidos en
111 t
alvéolo Oxihemoglobina Deoxihemoglobina
ejercicio reposo pulmonar

Figura Curva sigmoide normal de disociación de la hemoglobina y desp lazamiento patológico hacia la ~
izquierda. Efecto del 2-3 DPG, (2-3 difosfoglicerato) del pH y de alteraciones molecu lares de la hemoglob ina.
Semiología y fis iopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Figura A) Pa lidez conjuntiva ! en ap las ia de la medu la ósea; B) Coi loniquia en anemia ferropénica; C)
Lengua depapi lada en anem ia por déficit de vitamina B 12 ; D ) Icteric ia por anemia hemolítica en un paciente con
esferocitos is hereditar ia.

Diseritropoyesis: alteración de la célula germi- sanguínea; ictericia con hiperbilirrubinemia no


nal, que origina eritropoyesis ineficaz e insufi- conjugada cuando hay hemólisis.
ciencia medular. Signos cardiovasculares: taquicardia en reposo
Desplazamiento de la célula germinal: célu- o con pequeños esfuerzos, palpitaciones, soplo
las hematopoyéticas o extrahematopoyéticas sistólico funcional, episodios de angina en pa-
anormales, o fibrosis que desplaza la hemato- cientes coronarios, insuficiencia cardiaca, ede-
poyesis normal. ma de miembros inferiores; en ocasiones, calam-
Insuficiencia de factores de la eritropoyesis: bres nocturnos.
Signos respiratorios : disnea de esfuerzo y, en
- por déficit de eritropoyetina. ocasiones, de reposo.
- déficit de hierro o alteración de las cadenas Signos neurológicos: vértigo, presíncope, trastor-
de globina: trastorno de la hemoglobinogéne- nos visuales, acúfenos.
sis. Síntomas generales: astenia y fatigabilidad.
- disminución de vitamina B12 o ácido fálico:
alteración del ADN.

SÍNDROME HEMOLÍTICO
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
CONCEPTO
Son consecuencia de la hipoxia y de la tolerancia in-
Se denomina hemólisis al acortamiento de la vida
dividual, derivada de la intensidad y de la capacidad
de los hematíes. Las anemias hemolíticas son las que
de adaptación cardiocirculatoria, en relación con la
resultan de un aumento de la destrucción eritrocita-
rapidez de instauración de la anemia y con la situa-
ria que sobrepasa la capacidad de compensación me-
ción del paciente (Fig. 80-2).
dular.
Signos cutaneomucosos: palidez, particular- Los hematíes normales sobreviven en la circula-
mente en conjuntivas y palmas de las manos, y ción 110 ± 10 días . Cada día se destruye, aproxima-
672
frialdad de la piel por redistribución de la masa damente, el 1 % de la masa eritrocitaria total que es,
CAPITULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

a su vez, reemplazada por un número semejante de Lisis osmótica: debido al efecto osmótico de la
nuevos hematíes. En situaciones de máxima estimu- hemoglobina, el hematíe tiende a tomar agua del
lación, la médula ósea puede aumentar la producción medio externo. Esta tendencia se contrarresta
eritroide hasta ocho veces y, por tanto, no aparece habitualmente mediante el funcionamiento de la
anemia, a no ser que la supervivencia media de los bomba sodio-potasio. Si este mecanismo no rea-
hematíes sea menor de 15 o 20 días. Sin embargo, liza su función de forma adecuada, el agua pene-
existen situaciones clínicas en las que el acortamien- tra en la célula, provocando un cambio esférico
to de la vida de los hematíes se asocia a una mayor o de la forma y rotura de la membrana, que puede
menor depresión medular (p. ej., déficit de B, 2 ). ser reversible o irreversible.
Citólisis inducida por complemento: la unión de
ciertos anticuerpos y antígenos de la membrana
DESTRUCCIÓN ERITROCITARIA FISIOLÓGICA entrocitaria induce la activación y fijación de
complemento sobre la superficie del hematíe.
Una vez que el hematíe pierde el núcleo y los ribo- Si se activa el complejo terminal lítico (C5 hasta
somas, finaliza su capacidad de síntesis proteica. A C9), reacciona con la membrana, produciendo
partir de ese momento, los hematíes sufren cambios una lesión en forma de poro que permite la lisis
metabólicos derivados de su actividad enzimática osmótica del hematíe o la liberación del conteni-
limitada. Progresivamente, disminuye su actividad do celular.
glucolítica y, por tanto, la disponibilidad de ATP, es El papel de este mecanismo es limitado en
lo que origina la disfunción de la bomba sodio-pota- la destrucción fisiológica de los hematíes, pero
sio y la menor deformabilidad celular. Asimismo, dis- es la causa principal en ciertas anemias, como
minuye la actividad de la vía de las pentosas-fosfato la hemoglobinuria paroxística nocturna, y en
y, como consecuencia, disminuye su resistencia al la reacción transfusional por incompatibilidad
daño oxidativo, lo que provoca, finalmente, can1bios ABO.
irreversibles en la estructura y función de la hemoglo- Desnaturalización de la hemoglobina: si los
bina. Estos cambios hacen que el hematíe llegue a ser mecanismos de defensa contra el daño oxidati-
inviable y desaparezca de la circulación. Se conocen vo disminuyen, la hemoglobina desnaturalizada
diversos mecanismos de destrucción de los hematíes precipita, formando cuerpos de Heinz. La forma-
senescentes. Entre los más importantes se incluyen ción de estas inclusiones induce la destrucción
los siguientes: del hematíe, ya que al ser menos flexibles, son
atrapados en el bazo y sufren fagocitosis total o
Fragmentación: cuando los hematíes atraviesan parcial. Además, los cuerpos de Heinz se pueden
la microcirculación pierden fragmentos de mem- adherir a la membrana, provocando un aumento
brana eritrocitaria, lo que provoca una mayor de la permeabilidad y la susceptibilidad a la lisis
dificultad para atravesar la microvasculatura; osmótica.
finalmente, son atrapados y destruidos por los En conjunto, y mediante algunos de estos me-
macrófagos del sistema endotelial situados en el canismos, aproximadanete el 90 % de la destruc-
hígado, en la médula ósea y, sobre todo, en el ción de hematíes normales se realiza sin libera-
bazo. Los macrófagos del bazo son, por su situa- ción de hemoglobina al plasma, y se denomina
ción anatómica, los detectores más sensibles de lisis extravascular. Solo el 10 % de la destrucción
cualquier alteración eritrocitaria. El bazo posee normal se produce en el espacio intravascular.
un complejo sistema vascular. El flujo sanguíneo
a través de la pulpa roja es lento, y la proporción
de plasma está reducida. Este medio exige al he- CLASIFICACIÓN
matíe un esfuerzo metabólico mayor. Finalmen- Las anemias hemolíticas se han clasificado desde di-
te, para volver a la circulación venosa, los hema- versos puntos de vista, fundamentamente los siguien-
tíes deben pasar a través de pequeños orificios (2 tes:
a 3 micras de diámetro) de la pared sinusoidal.
Si los hematíes contienen cualquier inclusión Sitio donde tiene lugar predominantemente la
(cuerpos de Howell-Jolly, cuerpos de Heinz, si- hemólisis: hemólisis intravascular, extravascular
derocitos), estos son detectados y eliminados, o mixta.
dejando que el hematíe vuelva a la circulación. Mecanismo genético: anemias hemolíticas ad-
quiridas y hereditarias.
Eritrofagocitosis: indica la ingestión de hematíes
Etiología: anemias hemolíticas por defecto in-
completos por parte de neutrófilos, monocitos
trínseco del hematíe, o intracorpusculares, y
circulantes o macrófagos fijos. Este mecanismo
anemias por defecto extrínseco, o extracorpuscu-
de destrucción eritrocitaria se observa en distin-
lares.
tas anemias hemolíticas, especialmente de tipo
inmunológico y, como fenómeno inespecífico, Ninguna de estas clasificaciones, por separado, es 771"
en algunas enfermedades sistémicas. totalmente satisfactoria, debido a que existen entida-
Semiología y fis iopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

HEMÓLISIS

Hemoglobina libre plasmática

Hemólisis extravascular en SRH Hemólisis intravascular


AUMENTO ERITROPOYESIS D ESTRUCCIÓN ER ITROCI TA RIA

CÉLULA SRE -------+, FE


t
! HAPTOGLOB INA

Bilirrubina indirecta Ferriti na ! Glomérulo


METAHEMOG LOB INA Célu las tubulares
l
Conjugación ác. glucorónico
Hemosiderina
Transferri na i * Hemos iderinuria

,_ lUrobi li nógeno --+ Urobi lina


HEMOPEXINA ----+ HÍGADO

+ Albumina
t
Hemoglobina
= Metalbúmina t no conjugada
!
10% Riñón VCM aumentado LDH aumentada
Reticu locitosis

-
l
Hepatocito
Eritroblastosis
medular

Figura Destrucc ión eritroc itar ia en el sistema retic ul oendoteli al -SRE- (hemó li sis extravascu lar) y en los
vasos (hemó lisis intravascu lar) .

des en las que el defecto es combinado. En la clasifi- La intoxicación por plomo produce diversas in-
cación según el sitio de hemólisis, ambos grupos se hibiciones enzimáticas que inducen un defecto
diferencian básicamente por las distintas secuencias intrínseco del hematíe.
metabólicas de la hemoglobina (Fig. 80-3 ). La hemó-
lisis intravascular se asocia clásicamente con hemog-
lobina libre en plasma y en orina, y hemosiderinuria. DIAGNÓSTICO
Sin embargo, si la hemólisis extravascular es rápida
e intensa, la función macrofágica se satura; pu eden El diagnóstico de un estado hemolítico no se basa en
aparecer hemoglobinemia y el resto de signos de he- el resultado de una prueba aislada, sino en el con-
mólisis intravascular, aunque, en general, de menor junto de datos de la historia clínica, exploración
intensidad. A pesar de todo, esta clasificación es de y procedimientos diagnósticos dirigidos a estable-
utilidad clínica, ya que ciertas anemias hemolíticas cer, en primer lugar, la existencia de un aumento
se asocian con más frecuencia a uno y otro patrón. de la hemólisis y, a continuación, a determinar la
causa.
Desde el punto de vista clínico, la clasificación
más útil es la que tiene en cuenta el mecanismo gené-
tico , que a su vez tiene gran relación con la etiología Datos clínicos
del proceso. En general, los defectos intrínsecos son Se debe preguntar sobre los siguientes aspectos ge-
heredados, y los intrínsecos son adquiridos, aunque nerales :
existen excepciones:
Historia familiar de anemia, ictericia, esplenec-
La hemoglobinuria paroxística nocturna (HPN) tomía o colecistectomía: su presencia sugiere un
es una enfermedad adquirida, caracterizada por origen hereditario de la anemia hemolítica. Si
un defecto intrínseco del hematíe (mutación del la alteración se presenta en varias generaciones
gen PIG-A), aunque la hemólisis la desencadena consecutivas orienta hacia trastornos heterocigo-
una causa extrínseca (el complemento del pro- tos de las hemoglobinas inestables. La ictericia
pio paciente). suele ser intermitente en intensidad o aparición.
En las hemólisis inducidas por quemaduras ex- La esplenomegalia puede ser una causa de ane-
tensas se produce un defecto intrínseco del he- mia hemolítica, o ser el resultado de la destruc-
674
matíe. ción excesiva de hematíes.
CAPÍTULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

Origen racial: puede orientar hacia determinadas


alteraciones de la síntesis o estructura de la he-
moglobina o déficits enzimáticos.
Viajes recientes a zonas tropicales: orienta sobre Tabla Datos de laboratorio que
hemólisis inducidas por agentes infecciosos. establecen el diagnóstico de hemólisis
Medio de trabajo o hábitos especiales: puede
sugerir determinadas intoxicaciones o hemólisis Signos de aumento de destrucción
por traumatismos repetidos (hemoglobinuria de eritrocitaria
la marcha). Aumento del catabolismo de la hemoglobina
Relación entre episodios hemolíticos e ingesta Bilirrubina
de determinados alimentos o fármacos , exposi- Aumento de urobilinógeno fecal y urinario
ción al frío , reposo nocturno o ejercicio.
Enfermedades previas o signos y síntomas que Signos de hemólisis intravascular.
sugieren una enfermedad asociada, en especial Hemoglobinemia
síndromes linfoproliferativos, enfermedades sis- Disminución o ausencia de haptoglobina
témicas autoinmunes, neoplasia y enfermedades Hemoglobinuria y hemosiderinuria
cardiacas o renales. Metalbuminemia y descenso de
hemopexina
Los datos aportados por la exploración física son
muy variables, y dependen de la intensidad y dura- Aumento de actividad de láctico
ción de la hemólisis. A los signos clásicos de palidez e deshidrogenasa (LDH) en suero
ictericia, con o sin esplenomegalia, se pueden asociar: Disminución de la supervivencia eritrocitaria
deformidades esqueléticas por expansión del espacio
medular por hiperplasia eritropoyética, en caso de Signos de aumento compensador
hemólisis crónicas de inicio en la infancia; presencia de la eritropoyesis
de úlceras maleolares en hemólisis crónicas; cianosis Reticulocitosis
asociada a metahemoglobinemias estructurales o he-
moglobinopatías con escasa afinidad por el oxígeno. Hiperplasia eritroide en médula ósea
La presencia de púrpura puede indicar la existencia Alteraciones morfológicas en sangre periférica
de trombopenia, déficit de factores de la coagulación
o trastornos vasculares.

Datos de laboratorio
Los trastornos hemolíticos se caracterizan por signos
de destrucción aumentada de hematíes que, junto con bina que se alcanzan dependen tanto de la
los relacionados con el aun1ento compensador de la velocidad de formación como de la capacidad
eritropoyesis, indican la presencia de hemólisis. En hepática para excretarla. Por este motivo , no
la Tabla 80-2 se resumen los datos de laboratorio en es un índice sensible de hemólisis. La cifra de
los trastornos hemolíticos, que se desarrollan a con- bilirrubina indirecta suele ser inferior a 5 mg/
tinuación. dl.
Aumento de urobilinógeno fecal y urinario.
Signos de destrucción aumentada de los hematíes Una vez en el intestino, la bilirrubina es trans-
formada, por la acción de la flora bacteriana,
Aumento del catabolismo de la hemoglobina
en urobilinógeno , que se elimina en las heces
Bilirrubina. En la hemólisis extravascular, las como urobilina. Aproximadamente el 10-20 %
células reticuloendoteliales transforman la del urobilinógeno se reabsorbe a través del ci-
hemoglobina en biliverdina, y finalmente en clo enterohepático, y se excreta por la orina o
bilirrubina. Durante esta degradación se gene- vuelve al intestino.
ra monóxido de carbono, que se elimina con La eliminación de urobilinógeno fecal está
la respiración. La bilirrubina es transportada aumentada en los estados hemolíticos. Sin
por la albúmina plasmática hasta el hígado, embargo, su cuantificación requiere una reco-
en donde se conjuga con el ácido glucurónico lección exacta de la muestra durante tres días,
para formar bilirrubina directa, que se excreta y un procesamiento laborioso, por lo que rara
en el intestino delgado como parte del líquido vez se realiza.
biliar. La hiperbilirrubinemia de los estados El urobilinógeno urinario también aumen-
hemolíticos es de tipo indirecto. Los niveles ta en situaciones de hemólisis; es una prueba
que se alcanzan son variables; en un porcen- simple y clínicamente útil, pero también pue-
taje significativo de casos (25-50 %), dichos de aumentar en caso de disfunción hepática y ~
niveles son normales. Los niveles de bilirru- en presencia de grandes hematomas.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Dado quo la formación de urobilinógeno servar en recién nacidos, cuando existe insufi-
dependt; d!! la flora íntestirrnl, sus nivelos en ciencia hepatocelular y en casos raros de défict
orina o hecns pueden sor folsanrnnte bajos en hereditario.
pacientes tratados con antibióticos de amplio La haptoglobina es un reaclante de faso agu-
tlspectro. La prnsoncia de valores normales no da y aumflnta en diversos trastornos inflanrn-
oxluyu la hnrnólisis. lorios. Puede fijar oxihernoglobina y motahe-
moglobina, pero no mioglobina. cleoxilrnmog-
Signos ele hemólisis intravascular
lobina, hemoglobina de Bart ni hemoglobina
En caso de hom(Jlisis intravascular aguda e
H.
intensa piwdr, aparncer CElfoloa, dolor lumbar y
HemoglobinurÍa. Cuando so supera la capaci-
abdominal, esrnlofríos. lfobrn y mal estado gene-
dad de fijación de la haptoglobina, los dímeros
ral. Aparnco anemia rápidamente progresiva y en
de hemoglobina no fijados (PM 32 000) se fil-
ocasiones insuficiencia renal aguda debida a la
tran en el glomérulo renal. Tras la filtración,
hemoglobinuria.
los tfltránrnros y d írneros de hemoglobina
Tanto l)Jl las hmm\lisis intravasc:ularos como
vuelven a equilibrarse en el túbulo renal. Las
un las cxtrnvasc:ularns de gnrn intnnsiclad. se
células del lúbulo renal proximal roabsorhnn
libera lwmoglobinn clirnc:lanrnntH a la sangro,
y catalizan fa mayor parte de la hemoglobina
dondu s¡¡fre un procoso catabólico diferente al
(o metalrnrnoglobina) filtrada, impidiendo su
extravnscular (Fig. /lO-:l) v produce alteraciones
aparición en la orina. Solamente se supera el
de laboratorio características.
dintel renal y aparece hemoglobinuria cuan-
f fomoglohinemiu. El plasma uormal contiene do la hemoglobina libre en plasma supera los
aproximadanrnnlü 0.3 rng/dl do hemoglobina 150 mg/dl. Se pueden rea!Jsorber hasta 5 g de
libro. Si alcanza ni mies du 10-20 mg/dl, el hemoglobina filtrada por día sin que aparezca
plasma toma una coloruci(111 ámbar: si el ni- hernoglobinuria.
Vlll supera los :'íO mg/dl. ns c:laramonte rojizo. La globina y el horno son rápidamente me-
Cnn nivelus supmiorcs a 100 rng/dl. se puede tabolizados en las células del túbulo renal. El
cuantificnr dirnctnnrnnlu por nl método dula hinrro lib0rado ele la hemoglobina so deposita
cianomntahemoglohina. L,r lrnrnoglohina libre en r➔ stas células (en forma de forritina v hemo-
sn oxida rápidarnento v pasa a rnntahemoglo- sidorina), dosde cloncln se absorbe lentamente a
lJina, adoptando ul plasma un color rojo-ma- la sangre o so oxcnlta rm la orina, al closcarnarse
rronáceo, las células tubulares. La lrnmosidorina se suele
IH,'winur:írín o auscn(:i11 do lwptoglobina. La detectar concentrando el sedimento urinario y.
!rnptogloliitin es una o:::~globulina. sintntizacla lras hacer una nxtensión, se Uüu con azul dfl
t,11 ol hígado: Sll encuentra (ll1 el plasma con ni- Prusia. En individuos normales no se dotecta
vnltlS dn :rn - 200 mgídl. Esta glucoproteína sn hemosiderinuria.
u1w n la lwrnoglobina libre formando un com- Tras un episodio hemolítico intravascular
plejo soluble y oslabln (lwmoglobina-haptoglo- agudo, la Jrnmosiclerinuria tarda on aparnc:cr
bina), que irnpidn la eliminación de bemoglo- unos días v persiste durnntu un tiempo des-
binn por l:i orina. El telnímero de hemoglobina pués de cesar la hemólisis, Por tnnto. la pre-
(o.;,-í-lJ libro, ns inestable trn el plasma y Sfl sencia dEl l10111osidorinuria indica la presencia
,1sncia en dos medias mol6culns donominaclas do hemoglobinemia recinnte. incluso cuando
dínrnros Cl.-r:1 (e,,,-~'.'. - 2(1.~). que se unen rápida- no esté acompafi.ada ele hemoglobinuria. En
mente a la lwploglobina. El complojo haptoglo- los trastornos hemolíticos intravasculares cró-
liina-dínwro dH hemoglobina ns captado rápi- nicos, la lrnmosiderinurin es un elato constan-
damente por células del sistoma mononucloar te, mientras que la homoglobinuria suele ser
fogocítico situnclas un divnrsos círganos. funda- intermitcmte.
mnntalnrnnto el hígado, en rlondo la hemoglo- La pérdida crónica de hierro por Hsta vía
binn sufrn la transformación a bilirrubina. No puede ocasionar un estado forropénico. El
se: proclucn un nmnunto dci la sínlnsís hepática grado do bornosiderinuria es proporcional a la
en rn.~puosta a Ja lrnmcílisis, por lo que, si la cuantía de Ja hemoglobinuria.
hernólisis us intonsa. ol nivel de; haptoglobina La lrnmoglobinuria c:onfiure a la orina un co-
dísminuvn o SH hace indelnctable, ,v se puode lor rojo marrón oscuro, si contiene una propor-
utiiizar corno índice d<o hemó!isis. El nivel du ción importante de metahemoglohina.
haptoglobina punde sur indutcctable si la he- La hemoglobinuria se debe diferenciar de
mivicJ¡¡ eritroc:itaria mudida con ·' 1Cr es igual otras situaciones, entre las que se incluye la
o menor dc1 17 días. Cuando cesa un episodio porfirinuria, la eliminación de ciertos fárma-
agudo de bemólisis. la cifra de lrnptoglobina cos y la mioglobínuria. Solo la rnioglobinuria y
plasimítica se normaliza rm 2-4 días. Nivolos la hernoglobinuria dan resultados positivos en
~
bajos dü haploglobina lnmbién su ptrnden ob- las pruebas do hematuria. La difornncia entro
CAPÍTULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

ambas se puedo determinar m,,diante mótodos patrón de isonnzimas se inviortP, predominando


ns¡wctrofoiomútrico,-;. Clínícanwntn. sn pumlun la LDH-2.
difcrnnciélr do form,1 más s<mcilla. ya qui) tm Disminución ele la supervivencia eritrocitaria
la miog\obinuria ol plasma es do color normal.
La demostración de un acortamiento de la su-
y los ni\·cles du haptoglobina \' bilirrubina
pnrvivencia critroc:ilaria es la prueba más dinicta
plasmática son normalns. Esto se dnlw H q1rn la
dn un nstado hemolítico. Parn c!titermínnr la su-
haptoglobina no se une a la rnolóc:ula de rniog-
pervivnncia eritrocitari,1 se utiliza el marcajB iso-
lohina y. al ser 11lla mo!()culo rnlí1tivamente pe-
tópico de lrnrnalfos con °1Cr, qnc permite en estos
c¡um'ía, os eliminada rápidanrnnte por vía renal.
casos dctnctar una rnduccíón de la vida mndia do
:Welo/humínemio y descenso du lwmopexírw. los mi trocitos :v los lugares de destrucción.
Ln hnmoglobina librn en el plasma no unida n En todo caso. estos nstuclins no son ncccsarios
la haptoglobina Sil oxida do forma irroversíblc en In mayor part(, de los pacientes con mwmía
a mP1alinmoglobina. Esta molécula ;;e dísrJcia hmnolitlc:a. va quP la presencia dn hmnólisis sp
de fnrma nnzimMica en hemo y globína. El puede c,stah!Pcer nrndinnto dalos clínicos v pnw-
herno oxidado se ¡rnPde unir a dos rno l6culas has analíticas snncillas. Los nstndins de supcrvi-
fi jadnra,.; el<, hmno: vonciii ¡rneclcm :mr do utilidad cuando hay dudas
Albúmina: para formar nwtalhúmina. Si ln sobro si existe o no lrnmólisis. y parn d1m10strar
hmnnglobinomia pmsi;;to durantu una o más si ni efecto c., intracnlular. nxtrncelular o mix1o,
horas. In nwlalbúmina formada se acmrnila así como su intensidad.
on ol plasma. que adquiere tmu coloraci<in
marrón dorndu. Sn punde cuantificar nw- Signos de aumento compensador de la erítropoyesis
dianln la prueba dn Schumm. La d()tmmi-
nación dn motalbuminmnía es una prur:ha lielículocítosis. El rncum1to do rnliculocítos c,s
rnlalivnnrnnln insnnsiblc para nl diagnóstico la prueba do rutina más útil, de fornrn aislada.
cln hrnnólisis inlrnvasculm, porque para quo parn eslablecor la prHsnncia dn hmnólisis. Sn
aparnzcn ns prnciso qun la \rnmólisis hava debe utilizar la cifra de rnticulocitos corrngicll1
sido intensa v mantenida. Sin nmbargo. (pon:nnlajc absoluto dn rnliculocítos n índice dn
cmmdo apan:cn. es diagnóstica do homólisis producción rnl icu locítaria). La nxislencia dn un
intnn·,1scular. /\.dnmús. dado que la metalhú- IPR (índicu de producc:ícín do rntic11locitos) ma-
mínn no su filtra en ul glomórnlo rnnal nor- yor de :i, con un nivol de hilirrubina normal o
mal. circula en ¡,] plasma durnnto periodos nlnvado, indicn. nn general. ln presencia cln un
dc•J tiempo rnlntívamnntu prolongaclos. v os nstnclo hmnolítico.
útil para nl diagnóstico do lwmólísis mod()- Hipe1p/11sia urilroicle en lo módulo 6seo. Como
rnda o intonsa, horas o incluso días dBspu<is rospuesta l'rnnte a la homólisis Sl) prnducn una
do] epi:mdio hnmolítico agudo. hipmplasia mitroidn. En las hmrnílisis modorn-
das o intnnsas se pueden observar altorm:imw,
lfomo¡rnxina: <Js una ¡~, globulinn sinloliza-
clisuritropov6licas qun rnctwrdan ciertos signos
dn nn el hígado v prnsente en el plasmn de
nwgalohlásticos. Hay un m.1mnnto dn los rnq1w-
adultos normalos en una r:onr:entrnciún de
rimim1tos dn úc:ido fólir:o durante, lns hnm6lisis
50-100 mg/cl l. Fija BI bnnm. una vez agola-
crónicas, y si hay dnpleción dn los clnpósitos se
da la haptoglobína. formando un complnjo
obsmvan cambios megaloblásticos en la m<iduln.
hnmo-lwmope-:inn, que ns captado por los
El Pstuclio medular dcrnunstrn un índice rnie-
hepntocitos. Una vnz separada do] lwrno. la
]0(1ritroüfo menor ele! normal (:.l:1). El grado d(,
hemopexina se liborn de nuevo al plasma.
hiperplasia erilropovétic:a depende de varios
El duscenso do hcmopexina indica homó- factores: la intensidad do la aiwmia. el aporte
lic:is intravascular intensa. Rara Ynz ol niv,il nducundo d1: foctores hmrnilínír;os. nn nspecíal
dn hemopexína se hacu inclnlí-,ctablc. ele hiPrro. v la duración de la hernóhsis.
En general, se cmmtífir:a por inmunodifu- El aporte de hierro a la médula císea pro] i fo.
sión radial. No es un rnac:tantf, dn fase aguda. ratíva está aunwntado en las homólisis cxtravas-
pnro puede aumonlar en la cliabott1s mellitus cularns. Sin embargo. on cimtas hemóli;;is intrn-
y nn las infecciones. vascularns la pérdida du himro crónica pnede
ocasionar .forropenia y la subsiguíEJnte limitación
Aumento de actividad ele láctico deshidrogena• de la eritropoyr1sis.
sa (LDH) Cuando la bomr:ílisis se rnantient' durnntn lar-
La elevación ele los niveles de LDH es por:o HS· gos periodos ele tiempo y el aporte de himTo ns
p<'icífica. ya que puede ohsmTarsc en caso de le- adecuado, la eritropovesis aumenta hasta ni ni les
sión de diversos órganos. entre ellos el hígado y de hemoglobina similares. Esta diferencia r!:fleja
ol corazón. Los niveles séricos pueden aumentar. la distinta disponibilidad ele hinrro en uno v otro ~
especialnrnntH en la hemólisis íntravascular. El tipo de anemias.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

En las anemias hemolíticas crónicas pueden La presencia de hematíes fragmentados o es-


aparecer las denominadas crisis aplásicas, que, quistocitos es muy frecuente en diversas ane-
en realidad, suelen ser eritroblastopenias se- mias hemolíticas; sin embargo, los esquitocitos
lectivas transitorias. En la sangre periférica se en gran número se observan en las hemólisis
caracteriza por reticulocitopenia marcada. Gene- de origen cardiaco y microangiopáticas.
ralmente, se asocian a infecciones virales y sobre Además de las alteraciones morfológicas de la
todo al denominado agente relacionado con el serie roja, en las anemias hemolíticas se puede
parvovirus (parvovirus-like agent, PVLA), que observar leucocitosis neutrófila con cifras de
tiene tropismo por las células en rápida división. hasta 15 x 10 9 /1, y trombocitosis. La existencia
La hiperpiasia eritropoyética de las hemóli- de leucopenia o trombocitopenia, o ambas, no
sis crónicas hereditarias requiere expansión de es frecuente, y debe hacer pensar en anemia
la médula ósea hemopoyética, y produce desa- hemolítica autoinmune o asociada a lupus eri-
parición o disminución de la grasa medular, en- tematoso sistémico.
sanchamiento radiológico de los espacios medu-
lares (con adelgazamiento de la cortical del crá- ALTERACIONES DEL METABOLISMO
neo y de otros huesos planos) y extensión de la DEL HIERRO
hemopoyesis a lo largo de los huesos largos. Las
alteraciones esqueléticas inducidas por la hiper- Se producen por diversos mecanismos:
plasia eritroide se pueden detectar en la explora-
Disminución de la síntesis de hemoglobina:
ción física , y se detallan en capítulos posteriores.
Alteraciones morfológicas en la sangre perifé- Disminución de hierro (ferropenia).
rica. Algunas son generales (pueden verse en Alteración de la distribución (anemia inflama-
cualquier anemia hemolítica), mientras que otras toria).
predominan son diagnósticas de ciertos tipos de Disminución de la síntesis de cadenas de glo-
hemólisis. bina (talasemia) .
Trastorno de incorporación de hierro (anemia
Los reticulocitos se observan en el frotis como sideroblástica).
macrocitos redondos , con citoplasma de colo- Trastorno de transporte de hierro (atranferrine-
ración ligeramente azulada, por lo que se les mia congénita).
denomina policromatófilos. En anemias mo- Anticuerpos antirreceptor de transferrina.
deradas o intensas, el número de reticulocitos
puede ser lo suficientemente grande como Sobrecarga de hierro con signos de daño tisular
para elevar el volumen corpuscular medio de (hemocromatosis).
forma significativa.
La anemia ferropénica es , posiblemente, la enfer-
La presencia de punteado basófilo, por precipi- medad más frecuente que existe actualmente en el
tación de ribosomas, se puede observar en mu- mundo , ya que se produce por tres causas de gran
chos tipos de anemia, pero es prominente en incidencia: enfermedades del aparato digestivo, tras-
las ~-talasemias y en la intoxicación por plomo. tornos ginecológicos e ingesta crónica de ácido acetil-
Si la hemólisis es aguda, se pueden observar salicílico o de otros AINE.
eritroblastos en la sangre. El número suele ser
escaso; sin embargo, puede ser significativo,
especialmente en recién nacidos con enferme-
FERROPENIA
dad hemolítica. Se debe a una depleción de hierro , y las causas más
La presencia de esferocitos sugiere anemia he- frecuentes son las siguientes:
molítica. Los esferocitos son hematíes pequeños Aumento de las necesidades: crecimiento, mens-
y de mayor densidad que los normales, ya que truación, embarazo, lactancia.
son esféricos en lugar de bicóncavos. Pueden Dieta pobre en hierro (raro) .
aparecer en diversos estados hemolíticos, pero Malabsorción.
son más numerosos en hemólisis por esferoci- Pérdida de hierro por hemorragias.
tosis hereditaria. Aunque aparecen como hiper-
crómicos, su hemoglubina corpuscular media En la mujer: causas ginecológicas y digestivas.
(HCM) es normal. La esferocitosis es una de las En el hombre: causas digestivas.
pocas causas de elevación de concentración de Se expresa clínicamente por trastornos digestivos,
hemoglobina corpuscular media (CHCM). alteraciones epiteliales con uñas deformadas y que-
La presencia de dianocitos en proporción sig- bradizas (coiloniquia), fragilidad del cabello, glositis
nificativa suele indicar la existencia de altera- atrófica y estomatitis angular. La disfagia ferropénica
ciones de la síntesis o estructura de la hemog- se debe a la absorción de la porción alta del esofa-
lobina, ictericia obstructiva o hepatitis. go por células denudadas del epitelio y se denomina
CAPITULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

síndrome de Plummer-Vinson (disfagia y ferropenia)


o de Paterson-Kelly (cuadro radiológico con estrecha-
miento de la luz del esófago). 1ormal

El diagnóstico de este síndrome comprende: VCM


y CCMH reducidos (microcitosis e hipocromía), si-
deremia e índices de saturación de la transferrina y Hemocromatosis
Aplas ia medul ar ...,__ _ _ __.____,
ferritina descendidos, capacidad de saturación de la
transferrina elevada y hierro de depósito mediante
A nemia
tinción de Perls en la mélula ósea también reduci- ferropénica F--....1..,__ _ _ _ _ _ _ _ ____,
do (Fig. 80-4). La protoporfirina intraeritrocitaria
está elevada. En la Tabla 80-3 se exponen las diferen-
Anemia
cias entre anemia ferropénica, anemia de los procesos infl amatoria ,.____....L.,__ _ ___,
inflamatorios y anemia sideroblástica. En la Figura
80-5 se muestran diversos parámetros biológicos al-
o 100 200 300 400 500
terados con niveles progresivos de déficit de hierro.
D Sideremi a
µgldL

HIPERFERRITINEMIAS
La ferritina constituye un sistema de depósito de hie-
D CST
IST = Sideremi a
CST

rro no tóxico; la que se detecta en niveles elevados


procede de localizaciones hepática y esplénica. Figura Niveles de sideremia, capacidad de sa-
La hiperferritinemia es siempre patológica, pero no turación de transferrina (CST) e índice de saturación de
siempre refleja una sobrecarga de hierro. Por ello, se transferrina (1ST) en los d iferentes trastornos del meta-
pueden distinguir dos grupos: bolismo del hierro.
Hiperferritinemia con sobrecarga férrica:
Hemocromatosis de causa genética. La determinación de ferritina debe solicitarse en
Sobrecargas de hierro secundarias: los siguientes casos:
- Cirrosis enólicas. Ante una hemocromatosis, para completar el
- Anemias crónicas: eritroblastopenia. Hemó- diagnóstico y valorar, junto al IST, el ritmo de las
lisis crónica. sangrías que se deben realizar.
- Intoxicación alcohólica crónica. En el estudio de la anemia con hiposideremia,
Hiperferritinemia sin sobrecarga férrica: para delimitar el mecanismo de reducción del
hierro o el trastorno de su distribución.
Síndromes inflamatorios.
Citólisis:
- Neoplasias. HEMOCROMATOSIS
- Hepatopatías.
Es un trastorno hereditario del metabolismo del hie-
Síndrome hemofagocítico rro que se caracteriza por un aumento de la absorción

Tabla Diagnóstico diferencial entre las anemias ferropénica , inflamatoria


y sideroblástica
Anemia ferropénica Anemia inflamatora Anemia sideroblástica
VCM H N No i
Hipocromía ¡¡¡ No aparece Doble población
Sideremia ,l,,J,,J, H ¡¡¡
1ST < 16 % N N
Ferritinemia H ¡¡ No i
1ST: índice de saturación de la transferrina.
679
Semiología y fisiopatolog ía de la sangre y órganos hematopoyéticos

Disminución Eritropoyesi s Anemi a


Normal
reservas Fe defi ciente Fe deficiente Fe

~ ~
Depósito Fe +
Transporte Fe +

Fe erit rocitario +

Depósito Fe
médula 1- 3 + 0-1+ o o
Ferritina sérica
(µgil) 50- 200 <20 <15 <15

TIBC ( µg/ dl) 300-360 >360 >380 >400

IS (µg/ dl) 50-150 NL <50 <30

Saturación (% ) 30- 50 NL <20 <10


Sideroblastos
médula(%) 40- 60 NL <10 <10
Protoporfirina
eritrocitaria 30-50 NL >100 >200
(µg/ dl)
Morfología Microcítica/
eritrocitaria NL NL NL
Hipocrómica

Figura Va lores de laboratorio en las d isti ntas fases de carencia de h ierro, hasta expresar los que corres-
ponden a la anemia ferropénica .

de hierro y por el depósito de este en parénquimas origina anemia. La IL-10 sobreexpresa y aumenta el
como el hígado , el páncreas, el corazón y el riñón. receptor de transferrina, que permite incorporar más
Conduce a diabetes, miocardiopatía, cirrosis y, even- hierro a los monocitos. TNFo: induce la activación de
tualmente, fracaso de otros órganos. las células macrofágicas ocasionando una lesión de la
La primera alteración biológica es el aumento de la membrana de los hematíes y una degradación de los
transferrina; posteriormente aumenta la ferritina y el hematíes senescentes. El TNFa inhibe la producción
índice de saturación de la transferrina. En la patoge- de eritropoyetina y la diferenciación y proliferación
nia de las hemocromatosis está implicado el gen HFE de progenitores eritropoyéticos. La expresión de fe-
y aparecen dos mutaciones, en C282Y y en H63D. rritina aumenta por acción de TNFo:, IL-1, IL-6, IL-10
y lipopolisacáridos, que de esta forma contribuyen
al depósito y retención de hierro en los macrófagos.
Estos mecanismos constituyen los hechos biológicos
ANEMIA DE ENFERMEDADES CRÓNICAS de la anemia de las enfermedades crónicas inflama-
INFLAMATORIAS torias, sintetizadas en los siguientes mecanismos
patogénicos:
Es un proceso con un mecanismo inmune que con-
siste en la activación por causas diversas de los lin- Reducción de la concentración de hierro circu-
focitos T(CD3), monocitos y macrófagos, los cuales lante, y como consecuencia menor disponibili-
producen citocinas efectoras como el interferón y, dad de este para la eritropoyesis.
interleucinal, interleucina6, interleucinalO y TNFa, Reducción renal de la eritropoyetina.
que producen cambios en la homeostasis del metabo- Reducción de la diferenciación y proliferación
lismo del hierro. de progenitores eritropoyéticos.
La IL-6 estimula la expresión hepática de hepcidi- Exceso de depósito de hierro en macrófagos
na (proteína reguladora de mecanismos de fase agu- (Fig. 80-6).
da) que inhibe la absorción duodenal de hierro. El
interferón y aumenta la expresión del trasportador-1 Las causa de anemia de enfermedades crónicas
de metales a los macrófagos , estimula la captación se relaciona con infecciones, cáncer, enfermedades
de hierro , inhibe la eritropoyetina producida en el autoinmunes, como artritis reumatoide y lupus eri-
riñón, así como a los progenitores eritropoyéticos; tematoso , y enfermedades crónicas del riñón e infla-
680
como consecuencia se altera la eritropoyesis y se matorias.
CAPITULO 80 Patología de la serie roja: Anemias

El ácido fólic o circula en el plasma como me-


TFa til-THF y su concentración oscila entre 3-20 µg/1.
Activación
linfocitos T
(CD3+J
.
Monoc1tos
EPO
+
Í
-
IL-l O
IL-G
~
Hepcidina
lnterferón ~
En los hematíes se encuentra en cantidad más ele-
vada, entre 160-700 µg/1, y representa las reservas
de folato , siendo un valor más real para definir la
hipofolatemia. El metil-THF, que deriva del THF,
Fe Médula ~
ósea Hematíes actúa como coenzima en la transformación de mo-
BFU/CFU
nofosfato de deoxiuridina (d-UMP) a monofosfato
r de deoxitimina de TMP, que es necesario para la
lnterferón y
síntesis de ADN.
Figura Mecanismos patogén icos de la anemia
Las causas más importantes de déficit de vitamina
de las enfermedades crónicas inflamatorias.
B12 son (Fig. 80-8) :

Dieta insuficiente (vegetarianos).


Déficit de factor intrínseco:
PATOLOGÍA CAUSADA POR EL DÉFICIT
DE VITAMINA B12 O DE ÁCIDO FÓLICO Anemia de Biermer o perniciosa.
Gastrectomía.
Defecto funcional del factor intrínseco:
El déficit de vitamina B12 (cobalamina) impide el
Alteración de la susceptibilidad al medio áci-
paso de homocisteína a metionina, de manera que
do .
ésta no puede intervenir en el metabolismo del ácido
fálico, particularmente en la transformación del me- Pérdida de afinidad por el receptor intestinal.
tilentetrahidrofolato, que es un cofactor imprescindi- Alteraciones en la luz del íleon:
ble en la síntesis del ADN. La vitamina B12 se absorbe
en el íleon mediante receptores específicos a los que Insuficiente actividad proteásica.
se une el complejo factor intrínseco-vitamina B12 . Su Competencia por la vitamina B1 2 .
valor normal en el suero es de 708 ± 124 pg/ml. El fac- - Estasis: síndrome de asa ciega (proliferación
tor intrínseco se produce en el estómago y se une a la bacteriana).
vitanüna B, 2 en el duodeno, donde ha pasado ligada a - Parásitos: Ancylostoma duodenale o Diphy-
proteínas R (Fig. 80-7). lobotrium latum.

TS
dUMP ~ dTMP AD

Mecanismos implicados
en el déficit de ácido fólico

Folatos de la dieta MetilénTHF DHF

Defecto
ingesta
Exceso Metil-THF
THF Formil-THF
consumo
Formato
Defecto
absorción -----------
Met i 1-Cb l

Alteración
síntesis Homocisteína
í Metionina 5AM

Ácidos
grasos Propionil • Metilmalonil Succinil
Ado-Cbl CoA
CoA CoA

------- ----
Figura Metabolismo del ácido fálico y cobalamina (vitamina B12 ). Cbl: cobalamina, interviene en el paso
de homocisteína a metionina y de meti l-tetrahidrofolato a tetrahidrofolato que en forma de metilen-THF actúa
sobre la síntesis de ADN. TS: timidilato sintetasa; 5AM: S-Adenosi lmetionina, interviene en el mantenimiento de
la mielina.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

ALIMENTOS
ALTERACIONES COBALAMINAS
r DE LA INGESTA Cbl

Reducción
de la ingesta

Déficit de
factor i ntrí ns eco -R

/'----~ --'
·- -~
pepsina

Cbl-TC II

ALTERACIONES
DEL TRANSPORTE
R
Cbl-TCII 1

1 ~ ~~::::.:==------, @Dl m1
• PLASMA

1
¡AITERACIONES
[Q_E '!- ABSORCIÓN
1 A lterac iones de los receptores del íleon

Figura Mecanismo de las alteraciones del metabo lismo de la coba lam ina (Cbl). FI: factor intrín seco; R:
proteína R: HCI: acido clorhídrico: TC 11 : transcobalamina 11.

Alteraciones de la mucosa del íleon: na es fina y reticulada, expresiva de una alteración


madurativa.
Resecciones quirúrgicas o derivaciones.
Enfermedad de Crohn, esprúe, tuberculosis. Los pacientes presentan anemia, que acompaña a
Medicamentos: neomicina, AZT, metotrexato, la sintomatología originada por la causa del proceso,
5-FU, difenilhidantoína. (alteraciones en las comisuras bucales con lengua
Congénitas: síndrome de Immerslund (altera- depapilada dolorosa y lisa). Es característico del dé-
ción del receptor B, 2 en el íleon). ficit de vitamina B, 2 un proceso de desmielinización
de los cordones laterales y posteriores de la médula
Las causas más importantes de déficit de ácido fó -
espinal (degeneración combinada subaguda) con de-
lico son las siguientes:
generación progresiva de axones, que produce una
Dieta insuficiente. neuropatía periférica con alteraciones variables de la
Alcoholismo crónico y cirrosis hepática. sensibilidad superficial y/o profunda.
Hiperconsumo: embarazo, prematuros , síndro-
me hemolítico crónico, hipertiroidismo, proce- El diagnóstico hematológico se realiza sobre los
sos inflamatorios crónicos. siguientes criterios: anemia macrocítica, reticulo-
citopenia, hipersegmentación de los granulocitos
Malabsorción: por alcohol, anticomiciales, es-
con médula ósea rica en eritroblastos grandes (mega-
prúe, enfermedad inflamatoria intestinal y resec-
loblastos) con alteraciones nucleares que componen
ción quirúrgica amplia del intestino delgado.
en los hematíes en sangre periférica los cuerpos de
Los déficit de vitamina B12 y de ácido fólico in- Howell-Jolly y los anillos de Cabot. Las determina-
ciden sobre el núcleo del eritroblasto y alargan el ciones de vitamina B, 2 y folatos están descendidas
tiempo de duplicación, y por tanto de duración, de en cada una de las alteraciones . A este estudio se
la fase S. Por este motivo, el tamaño es superior al debe añadir el correspondiente a la causa del tras-
normal (eritropoyesis megaloblástica) y la cromati- torno.
·181
Síndrome poliglobúlico
y eritrocitosis

CONCEPTO
Las poliglobulias o eritrocitosis comprenden
un conjunto de procesos patológicos carac-
terizados por un aumento del volumen
globular eritrocitario superior al 25 %
del valor normal establecido. Estas
poliglobulias son las consideradas
como absolutas o verdaderas (Fig.
81-1).
El aumento de la cifra de hema-
tíes, del hematocrito y de la hemog-
lobina no son datos suficientes para
definir correctamente una poliglobulia
verdadera. Estos tres parámetros son
medidas que se expresan en relación
con su concentración, y varían tanlo
con el aumento del volumen de he-
matíes como con la disminución del
volumen plasmático. No obstante,
cuando el hematocrito es superior
al 60 % en el varón y al 55 % en la
mujer, y la hemoglobulina superior a
18,5 g/dl en el varón y 16,5 g/dl en ETIOPATOGENIA
la mujer, se puede considerar que ello
Los mecanismos por los que se produce un
puede corresponder a un aumento del
aumento del volumen globular absoluto son los
volumen globular absoluto.
siguientes:
La pseudopoliglobulia microcítica se caracteri-
za por una elevación del número de hematíes, con he- Proliferación clonal adquirida de la célula ger-
matocrito normal, hemoglobina normal o descendida minal pluripotente dependiente de mutación en
y volumen corpuscular medio disminuido, que suele V617F que activa JAK2, con mayor expresión
corresponder a una talasemia minar. en la producción de hematíes (policitemia vera
La poliglobulia relativa puede derivar de una dis- PV).
minución del volumen plasmático, que origina un Mutaciones en el receptor de la eritropoyetina
aumento espúrio, en términos absolutos, de la he- (EPO) que producen una mayor sensibilidad a la
moglobina y del hematocrito, sin un aumento del vo- acción de la EPO.
lumen globular absoluto. En este grupo se encuentra Mutaciones congénitas en las proteínas (PHD2,
la poliglobulia originada por el tratamiento con diu- HIF) que están implicadas en el mecanismo del
réticos, por sudoración profusa o la ocasionada por sensor de oxígeno encargado de mantener la eri-
683
diarrea cuantiosa (deshidratación). tropoyesis en respuesta a la hipoxia.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla Causas de eritrocitosis


Eritrocitosis primarias
Congénita:
Mutaciones del receptor de la
eritropoyetina
Adquirida:
Policitemia vera (mutaciones JAK2)
Eritrocitosis secundarias
Congénitas:
Normal Poliglobulia Pseudopoliglobulia
verdadera Alteraciones en el mecanismo del sensor
de oxígeno:
D Plasma D Células - Mutación del gen VHL
- Mutaciones PHD2
- Mutaciones HIF-2a.
Figura Relación entre volumen de hematíes,
Otros defectos congénitos:
volumen plasmático y volemia total.
- Alta afinidad de la hemoglobina por el
oxígeno
Mutaciones en las cadenas ex o ~ de la hemo- - Déficit de difosfoglicerato mutasa
globina que alteran la afinidad de esta por el 0 2 , Adquiridas:
con liberación reducida de este en los tejidos Mediadas por eritropoyetina:
produciendo hipoxia y por consiguiente mayor - Hipoxia central:
liberación de EPO. El déficit del enzima 1,3 di- • Enfermedad pulmonar crónica
fosfoglicerato (DPG) mutasa reduce la formación • Comunicaciones vasculares
de 2,3-DPG y como consecuencia se origina una cardiopulmonares derecha-izquierda
reducida liberación de 0 2 por aumento de afini- • Intoxicación por monóxido de carbono
dad de la hemoglobina por el 0 2 • • Eritrocitosis del fumador
Eritrocitosis debida a una hipoxia central que • Síndromes de hipoventilación
origina aumento de liberación de EPO. incluyendo la apnea obstructiva del
Procesos que producen hipoxia local en el riñón, sueño
con aumento de la producción de EPO. • Eritrocitosis de las alturas
Producción patológica de EPO por ciertos tumo- - Hipoxia local:
res. • Estenosis de la arteria renal
Administración terapéutica de EPO o andrógenos. • Enfermedades renales avanzadas
Se considera apropiada la producción de EPO • Hidronefrosis
como respuesta a la hipoxia. La producción de EPO • Enfermedad poliquística del riñón
no relacionada con un mecanismo hipóxico se deno- • Eritrocitosis postrasplante renal
mina inapropiada o patológica. La Tabla 81-1 muestra Producción inapropiada de
la clasificación etiopatogénica de las eritrocitosis. eritropoyetina:
-Tumores:
• Hemangioblastoma cerebelar
ERITROCITOSIS PRIMARIA • Meningioma
• Carcinoma/adenomas de las
POLICITEMIA VERA paratiroides
• Carcinoma hepatocelular
Es un proceso que se caracteriza por una prolifera-
• Cáncer renal (hipernofroma)
ción clonal adquirida de una célula pluripotente, que
• Feocromocitoma
conduce a un cuadro mieloproliferativo con posible
aumento de granulocitos , plaquetas y, fundamental- • Leiomiomas
mente , de hematíes. Eritrocitosis asociada a fármacos:
La PV es un cuadro clonal mieloproliferativo junto - Eritropoyetina
con la trombocitemia esencial, la leucemia mieloide - Andrógenos
crónica y la mielofibrosis idiopática. Estos procesos Eritrocitosis idiopática
pueden trasformarse en leucemia aguda (LA). En la
PV la trasformación a LA se produce entre el 1 % y el
684
13 %, según los tratamientos empleados.
CAPITULO 81 Síndrome poliglobúlico y eritrocitosis

JAK2WT JAK2WT
si n EPO con EPO

p 11

J_
No señal ST{ l Pl3K
~MAPK ST{ l Pl3K
~MAPK

Hemoglobina normal Eritrocitos is

Figu ra Mecanismo fisiológico del funcionamiento de JAK2 y de la alteración cuando se encuentra la


mutación JAK2 V617F. STAT, Pi3K y RAS-MAPK son cinasas transcriptoras de señalización consecuencia de la
fosforilizacion de JAK2.

En el 90 % de las PV se encuentra la mutación de este proceso, y por consiguiente se origina una


V617F de JAK (Fig. 81-2) que cambia la proteína final eritrocitosis.
en el aminoácido 617, que en lugar de ser valina es
fenilalanina. El JAK forma parte de la vía de señaliza-
ción de JAK-STAT que utilizan los receptores de cito- ERITROCITOSIS SECUNDARIAS: CONGÉNITAS
cinas tipo I como el receptor de la EPO. La activación
de este sistema permite la penetración en el núcleo ALTERACIONES EN EL MECANISMO
celular y allí activan genes implicados en la prolife- DEL SENSOR DE OXÍGENO
ración, diferenciación y en la supervivencia. La mu- El sensor de oxígeno está formado por unas proteínas
tación en V617F afecta a un aminoácido situado en que se encargan de mantener la eritropoyesis como
el dominio JH2 que tiene actividad pseudocinasa y respuesta a la hipoxia. Las mutaciones se producen
como consecuencia se produce una activación cons- en el gen VHL, que conduce a un cambio en el ami-
titutiva de la proteína JAK2. Esta mutación provoca noácido Arg200Trp, en el gen PHD2 en donde aparece
una ganancia en función con activación permanente un cambio arginina a histidina en el codón 3 71 y en el
de esta vía de trasducción de señales. Los progeni- gen HIF2A con cambios glicina a triptófano.
tores eritropoyéticos en la PV crecen sin el estímulo
de la EPO, a diferencia de la eritrocitosis reactivas,
debido a la hipersensibilidad al factor de crecimiento HEMOGLOBINAS CON ALTA AFINIDAD
insulina-like (IGF-1). Ello indica que la activación de POR EL 02 Y DÉFICIT DE DIFOSFOGLICERATO
JAK2 es independiente de la acción de EPO.
MUTASA
Ambas alteraciones conducen a una alta afinidad de
MUTACIONES CONGÉNITAS EN EL RECEPTOR la molécula de hemoglobina por el oxígeno, lo cual
DE LA EPO origina hipoxia, aumento de la producción de EPO y
por lo tanto eritrocitosis.
La unión de la EPO a su receptor en la superficie Estas alteraciones se producen en 90 tipos de he-
de la célula eritroide desencadena una cascada de moglobina e implican tanto a los genes de las cadenas
reacciones en la que se autofosforiliza JAK2 activán- a como p. La difosfoglicerato mutasa (DPGM) cataliza
dose el factor de transcripción 5 (STAT5) que inicia el paso de 1,3 difosfoglicerato a 2,3 difosfoglicerato
la transcripción y proliferación de los precursores (2,3 DPG) que origina una hemoglobina de baja afi-
eritroides formando hematíes. Las mutaciones del nidad por el 0 2 • El déficit de DPGM confiere a la he-
receptor de la EPO pueden afectar entre 57 y 127 moglobina una elevada afinidad por el 0 2 con desvia-
aminoácidos que permiten la activación de la eritro- ción a la izquierda de la curva de saturación, hipoxia
poyesis pero no el fenómeno de «cierre» o control y eritrocitosis.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

ERITROCITOSIS SECUNDARIAS: ADQUIRIDAS La secreción de EP0 se regula por un sensor de 0 2


situado en el riñón, que responde ante situaciones
MEDIADAS POR EPO. SECRECIÓN que comprometen la liberación de 0 2 en los tejidos ,
tales como anemia, hipoxemia arterial, aumento de la
APROPIADA DE EPO afinidad de la hemoglobina por el 0 2 y reducción de
Son la consecuencia de una hiperproducción de eri- flujo circulatorio. La respuesta consiste en un aumen-
tropoyetina como respuesta a la hipoxia por secre- to de EP0 que conduce a un aumento de eritrocitos y,
ción apropiada de EP0, que conduce a eritrocitosis. por tanto , a poliglobulia.
La causa de la hipoxia puede ser central por enfer- La isquemia local renal , por lesiones en este órgano
medades pulmonares, cardiacas o por un déficit de (estenosis arterial, hidronefrosis o rechazo de un in-
0 2 debido a la altura o a apnea obstructiva del sueño. jerto), puede conducir también a un aumento de EP0
La hipoxia local afecta al riñón y la originan distintos y a eritrocitosis.
procesos que se expresan por un elevada producción Cuando la alteración radica en un trastorno prolife-
de EP0 y como consecuencia eritrocitosis. rati vo de la médula ósea, la EP0 suele estar disminui-
Cuando el aumento del volumen globular se debe a da , posiblemente como consecuencia de la acción del
una hipoxia, la prueba fundamental es la determina- aumento del volumen globular y de la hipersensibili-
ción de la saturación arterial de 0 2 , que establece una dad de las células germinales a esta hormona.
relación directa , en situaciones estables, con la cifra El aumento del volumen globular como respuesta
de hemoglobina. También deben ser objeto de estu- a una secreción apropiada de eritropoyetina por la
dio la determinación de gases arteriales (enfermedad hipoxia aumenta la capacidad de transporte de 0 2 y
pulmonar o derivación cardiaca derecha-izquierda), reduce la hipoxia hística, estableciéndose un nuevo
el estudio de la P50 , la curva de desviación en 0 2 de la equilibrio con hematocrito elevado. Asimismo, se
hemoglobina, así como déficit de 2,3 DGP, alteracio- detecta un aumento de 2,3 DPG, que disminuye la afi-
nes moleculares de la hemoglobina y cuantificación nidad de la hemoglobina por el oxígeno y dificulta la
de la EP0. cesión de este a los tejidos.
En los fumadores se encuentra alterado el trans- Si la masa eritrocitaria aumenta lo suficiente para
porte de oxígeno debido a que transforman parte de que la concentración hística de 0 2 esté por encima del
la oxihemoglobina en carboxihemoglobina al inhalar umbral de estimulación del sensor de oxígeno, se su-
monóxido de carbono. prime la secreción de EP0. Cuando la concentración
hística de 0 2 no alcanza este nivel, persiste el aumen-
PRODUCCIÓN PATOLÓGICA DE EPO . to de eritropoyetina, y continúa incrementándose la
masa globular a pesar de los efectos perjudiciales que
SECRECIÓN INAPROPIADA DE EPO ocasiona (Fig. 81-3) .
Varios tumores (Tabla 81-1) producen de forma pato- Cuando la masa eritrocitaria es excesiva, aumenta
lógica EP0. El tejido tumoral aumenta la expresión de la viscosidad de la sangre, que crece de forma expo-
mARN y la proteína EP0. La extirpación del tumor nencial cuando el hematocrito es superior al 60 % y
permite observar el descenso de EP0 y la desapari- además tiene una relación con episodios de oclusión
ción del exceso de hematíes. vascular. Por encima de este nivel, se altera la función

ERITROCITOSIS IDIOPÁTICA ico,


.J,o, Secreción
En este grupo se incluyen eritrocitosis de las cuales se i Hb de alta inapropi ada
afinidad
desconoce la causa. La EP0 puede encontrase dismi- poro,
Hi~ xia /
nuida en un tercio de los casos y aumentada en dos Proliferación Aumento de la Aumento de la
tercios. célula germinal - + masa globul ar -+- eri tropoyelina

Eritrocitosis i
i
Vi scosidad
FISIOPATOLOGÍA Leucoci tos is t
Trombocitos is Vasodil atación
La poliglobulia verdadera se caracteriza por un au- Espl enomega lia t
Fibrosis Lenti ficaci ón
mento del volumen eritrocitario, que se origina por M etapl asia mi eloide ci rcul atoria
los siguientes mecanismos: t
Alterac iones:
• Cardi acas
Aumento primario de la proliferación de proge- • Ci rcul atori as
nitores eritrocitarios de la médula ósea. • De la coagul ación
Aumento de la eritropoyetina para compensar la
inadecuada oxigenación hística central o local. Figura Mecanismos fisiopato lógicos de las po-
Secreción inapropiada de eritropoyetina sin res- liglobulias: prol iferación clona l, aumentro de la masa
puesta a la hipoxia hística. globular y aumento de la producción de eritropoyetina .
CAPITULO 81 Síndrome poliglobúlico y eritrocitosis

AUMENTO DEL VOLUMEN GLOBULAR E HIPERVISCOSIDAD

p;,rym·"°'~ ~ sosyroag,ladóc
Entremra Aumento tra baJo. car dºraco Vaso dºI ·, e hºrpoxra
, atacron · -¡¡e1angrectas,as
· ·
Alteración de la contractilidad Cefalea , Hemorragias
cardiaca vértigos, acúfenos, Trombosis
Episodios de angor somnolencia, Alteración cualitativas
alteración visión, de las plaquetas
fondo de ojo:
vasos dilatados, escotomas y
visión borrosa

Figura Manifestaciones clínicas de las poliglobulias derivadas del trastorno fisiopatológico.

cardiaca, el transporte de 0 2 , el flujo circulatorio y, trato, en la exploración del fondo de ojo, la pre-
como consecuencia de ello, también la liberación de sencia de vasos dilatados, tortuosos, con aspecto
0 2 en los tejidos. hiperémico e incluso con alguna imagen de he-
Las poliglobulias producen diversas manifesta- morragia retiniana.
ciones clínicas que derivan fisiopatológicamente del La repercusión del trastorno circulatorio sobre
aumento absoluto del volumen globular y de la altera- el sistema muscular y sobre el encéfalo produce
ción circulatoria que ocasiona (Fig. 81-3). astenia, debilidad y fatiga.
Es frecuente observar trastornos en vasos pe-
queños y en la coagulación de la sangre. Estos
SÍNDROME CLÍNICO Y EXPLORACIÓN trastornos se deben a una vasodilatación que
Las manifestaciones clínicas son consecuencia del origina telangiectasias y, en ocasiones, hemorra-
aumento de la masa globular sobre la circulación en gias o trombosis, debidas a la hiperviscosidad
distintos territorios (Fig. 81-4). y a la trombocitosis. También puede detectarse
un trastorno cualitativo de las plaquetas, carac-
terizado por una reducción de la agregación de
SINTOMATOLOGÍA las plaquetas con defecto adquirido del pool de
depósito; aumento de la beta-tromboglobulina y
La piel y las mucosas presentan un aspecto ro- acortamiento de la supervivencia. En la trombo-
jizo característico, principalmente llamativo en sis de la PV interviene la formación de agregados
mejillas, orejas, labios, nariz y conjuntivas, que leucoplaquetarios (ALP) que actúan sobre las
parecen como «inyectadas con sangre » . células endoteliales. Las proteínas P-selectina
El corazón necesita aumentar el trabajo cardiaco y trombospondina de las plaquetas dan lugar a
ante el incremento de la masa globular y de la que la P-selectina se una a la membrana de los
viscosidad. Esto puede desembocar en trastornos leucocitos formando ALP que alteran las células
de la contractilidad cardiaca, descompensando endoteliales.
a ciertos pacientes que, por su enfermedad pul- El aumento de la proliferación celular produce
monar obstructiva, presentaban hipertensión hiperuricemia, uricosuria e incremento de LDH.
pulmonar o hipertensión sistémica. En los pacientes con PV, al haber un aumento del
La lentificación circulatoria y el propio au- recambio de los granulocitos, se elevan las trans-
mento del trabajo cardiaco pueden repercutir so- cobalaminas, sobre todo la III (la I aumenta en la
bre la circulación coronaria y originar isquemia, leucemia mieloide crónica), la vitamina B12 , así
que se expresa con dolor de tipo anginoso. como la capacidad de unión de la vitamina B1 2
La congestión cefálica con vasodilatación e hi- no saturada.
poxia es la causa de ciertas manifestaciones,
como cefalea, vértigos , aturdimiento, acúfenos
o somnolencia. EXPLORACIÓN
Pueden aparecer trastornos de la visión, con
disminución de la agudeza visual, escotomas y La exploración de un hematocrito elevado, como ex-
687
visión borrosa o diplopía, que tienen como sus- presión más elemental de un síndrome poliglobúlico,
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla Datos biológicos más Tabla Criterios diagnósticos


importantes en la policitemia vera propuestos por la OMS (2008) para
la policitemia vera
Trastorno clonal adquirido con mutación
JAK2 predominantemente en progenitores Criterios mayores
eritroblásticos.
Hemoglobina> 18 g/dl en varones y> 16,5 g/dl
Hemoglobina 2 20 g/dl, hematíes 2 6 x 109/1, en mujeres o masa eritrocitaria > 25 % del valor
hematocrito 2 60%, leucocitos 2 12-20 x 109/1, normal
plaquetas 2 400-600 x 109/1. reticulocitos
normales o aumentados. Presencia de mutaciones en el gen JAK2
(V617F o mutaciones del exón 12)
EPO suele estar disminuida.
Criterios menores
Crecimiento in vitro de colonias eritroides sin
EPO. Biopsia de médula ósea con hiperplasia trilineal

Ferritina muy baja por agotamiento de los Niveles séricos de EPO bajos
depósitos de hierro.
Crecimiento endógeno de colonias eritroides in
Aumento de vitamina 8, 2 al proporcionar más vítro
transcobalamina I los leucocitos.
Para el diagnóstico se requieren dos criterios mayores
El aumento del metabolismo celular y uno menor o bien el primer criterio mayor y dos de los
proporciona una elevación de FAG (fosfatasa criterios menores.
alcalina granulocitaria), LDH y ácido úrico.

Jclontificnr ln causa de una poliglohulia secunda-


ria con secrnción inapropíncla de EPO.
requiern la utilización de unas pruebas básicas y de Definir una eritroc:itosis idiopática.
una secuencia do otros test, para llngar al diagnóstico Cuando el homator:rilo es supmior al 55 '¼, en Ja
etiológico. mujer y al 60 '¼, cm el hombre. la sangrn fluye con cim-
ta dificultad al extnrnrla, y, al clnterrninar la VSG, ésta
Pruebas fundamentales. Actuación para diagnosticar no su pcH'a 1-2 mm cm la prinwrn hora.
correctamente un síndrome poliglobúlico
Pma ostablecor que existe una poliglobulia vor-
Sospecha de poliglohulia: mediante la elovacicín dadera. Jo quo es muy probable c:on estas cifras
cl(il bematocrito, lrnmoglobina y número de he- de hematocrito. <is necesario comprobar que la
matíes. 1rn1sa total do lrnmatíos. mediante determinacio-
Definición ele poliglobulia verdadera: volunrnn nes con "Cr, os supmior o igual a 32 rnl/kg en la
globular elevado. mujer _v :rn ml/kg en el hombre.
Definición de poliglobul ia hi póxica: saturación El paso siguiente consiste en confirmar o des-
arterial de 0 2 reducida. Eritropoyetina mrnrnnta- cartar una PV, cuyo criterio más importante ns
da. ol hallazgo do la mutación en JAK2, además ele
Valoración molecular de la hemoglolJina y deter- normalidad on la saturación arterial ele O, (92 %).
minación do 2,3 DPG. La determinación do EPO plasmática muestra va-
Definición ele policitemia n:ra (PV): presencia lores bajos. alrndodor de "J 7 mU/ml (normal= 30
de la mutación en JAK2. EPO reducida y salu- mlJ/ml), mientras que en las poliglobulias secun-
racicín arterial cfo 0 2 de la lrnmoglobina normal darias se encwmtra elevada, nn torno a 93 mU/ml.
(Tablas 81-2 y 81-3), A continuación. y Iras clrciscartar una PV, sn inten-
Definición ele poliglohulias que cursan sin hí- tarán idnntificar las causas ele las poliglobulías
poxia Y c:on secreción inapropiada do EPO. sncundarias.
La eritrocilosis idiopática es rara y cursa solo
Estos criterios hacen accmsej¡¡h]ú maliznr lo explo-
con flritroci tosis.
ración (Fig. 81-5) de un síndrome poliglohúlico en
cuatro etapas: Las pruebas más significativas son las siguientes:
Definir que la poliglobulia os verdadera. Dntmminación de la carboxihemoglohina, que,
Diferenciar la PV de las policitemia,s secundarias si está elevada, orienta hacia la poliglobulia del
con hipoxin, fumador.
CAPÍTULO 81 Síndrome poliglobúlico y eritrocitosis

>5%
Fumador • Poliglobulia por tabaquismo

Aumento
hematocrito
ormal • Poliglobulia
Volumen
relativa
~ lobular
Aumentado ~ Saturación Hb-61

ormal
Reducida • Poliglobulia hipóxica

Estudio síndrome Reducción Hb P50
mieloprol iferativo Aumento ele afinidad Exploración renal
de la Hb por 0 2
Policitemia vera
Enfermedades renales
JAK/2 Hemoglobinopatías
Reducción 2-3 DPG
Reducción EPO Aumento EPO

Figura Actuaciones para diagnosticar correctamente un síndrome po liglobú li co.

Evaluación de la saturación arterial de 0 2 , cuya sis de la hemoglobina) para la fijación del 0 2 , o


disminución sugiere hipoxia y, por tanto, insu- para la interacción con el 2,3 DPG, o a un defecto
ficiencia respiratoria y cortocircuito cardiaco en 2,3 DPG mutasa.
derecha-izquierda. TAC abdominal, para descubrir una lesión renal
Determinación de la curva de afinidad de la que origina poliglobulia.
hemoglobina por el 0 2 • Un desplazamiento a la Exploración de otros órganos en los que ciertos
izquierda, con una P50 disminuida (normal = 27 tumores son causa de poliglobulia (ovario, útero,
mm Hg) indica una mayor afinidad de la hemog- hígado y cerebelo).
lobina por el 0 2 , como consecuencia de una alte- Determinación de eritropoyetina: reducida en la
ración molecular de la hemoglobina (electrofore- PV y aumentada en las poliglobulias secundarias.
·l82
Patología general
de las alteraciones
de los leucocitos
Manuel Giralt Reich , María Rosario Caballero Gabas

INTRODUCCIÓN
Las células sanguíneas (hematíes, leucocitos y pla-
quetas) se producen fundamentalmente en la
médula ósea mediante un proceso conoci-
do como hematopoyesis, a partir de un
precursor común indiferenciado
(stem cell o célula progenitora
pluripotente) que, normalmen-
te , se encuentra en un tejido
muy especializado: el tejido he-
matopoyético . La localización
de este tejido en el organismo
humano varía con el desarrollo
intra y extrauterino, aunque en el
adulto normal se encuentra fun-
damentalmente en la médula ósea
roja y en los órganos linfoides. La
médula ósea tiene una enorme ca-
pacidad de producción, estimán-
dose que se producen a la hora
10 11 eritrocitos y 10 8 - 10 9 leuco-
citos . Esta producción normal
puede ser muy amplificada por
un aumento de requerimientos.
La célula germinal pluripoten- reciba. El primer precursor comprometido hacia
cial posee una elevada capacidad la línea mieloide se conoce también como unidad
de autoduplicación, englobándose formadora de colonias esplénicas, CFU-S (colony
desde el punto de vista funcional en un forming unit-spleen). La diferenciación hacia la línea
compartimento de células pluripotentes, mieloide se inicia a partir de la unidad formadora
cuyas características morfológicas se desconocen. de colonias mieloide (CFU-M) que, a través de un
La existencia de la célula germinal se ha demostrado estadio intermedio, la CFC-GEMM (colony forming
mediante cultivos de médula ósea en laboratorio. Tras cell, gran u1ocyte-eryth roi d-eosin ophil-m on ocyte-m a-
un primer grado de diferenciación, la célula madre se cro ph age}, pasa a otros precursores con un mayor
transforma en una célula todavía primitiva, pero ya grado de diferenciación, como la CFC-GM (granulo-
comprometida hacia una determinada línea celular. cito-macrofágica), la CFC-Eo (eosinófila), la CFC-Bas
El primer precursor primitivo más indiferenciado y (basófila) , la BFU-E (burst forming unit-erythroid] y
no comprometido se denomina CFC-LM (colony for- la CFC-E (eritroide), y la CFC-Meg (megacariocitaria)
ming cell lymphocytic-myeloid o célula formadora (véase Fig. 79-1). Estos pasos sucesivos se facilitan
de colonias linfoides y mieloides), que derivará pos- mediante una serie de factores de crecimiento hema-
teriormente hacia la línea linfoide (de linfocitos E y topoyético (hematopoietic growth factors, HGF), de
690
T) o mieloide, según los estímulos hormonales que los cuales los más importantes son la eritropoyetina,
CAPÍTULO 82 Patología general de las alteraciones de los leucocitos

el G-CSF y el GM-CSF (colony stimulating factors de leucocitos sobre un total de 100, o como mucho
granulocítico y granulocítico-macrofágico), la trom- 200, elementos. Sin embargo, existen dos problemas
bopoyetina (c-Mpl ligand) y las interleucinas. que limitan el valor de la fórmula convencional. En
Estos pasos sucesivos darán lugar a tres tipos de primer lugar, el error de replicación (es decir, la dife-
elementos formes: 1) las células nucleadas (leucocitos rencia que existe en la medida de diez alícuotas de la
o glóbulos blancos), con funciones eminentemente misma muestra) es importante: hasta el 100 % de las
defensivas; 2) las células anucleadas (hematíes o gló- células visualizadas en proporción inferior al 10 % y
bulos rojos), con funciones de transporte de oxígeno, superior al 25 % para las células más comunes, como
y 3) fragmentos citoplasmáticos de megacariocitos los neutrófilos y los linfocitos. En segundo término, la
(plaquetas o trombocitos), con funciones básicamente variación intraobservador es igualmente importante
vinculadas a la hemostasia. para distinguir entre segmentados y franjas o entre mo-
nocitos, linfocitos atípicos y linfocitos. La apreciación
de variaciones en la fórmula puede ser debida más a la
LEUCOCITOS técnica que a la existencia de diferencias reales.
Constituyen un grupo de células relacionadas con la Esta situación ha cambiado radicalmente con la in-
defensa del organismo a través de dos sistemas: fa- troducción de los recuentos automatizados. Los con-
gocitosis e inmunidad. Los neutrófilos y los mono- tadores electrónicos ofrecen la posibilidad de anali-
citos son los fagocitos; los linfocitos participan en la zar cientos de células y reducen significativanrnnte
inmunidad mediada por células (linfocitos T) o hu- la variación estadística. Además, el aparato realiza
moral (linfocitos B). Estas células pueden estudiarse la diferenciación con arreglo a unos criterios estable-
mediante examen microscópico de una extensión de cidos, eliminando la variación intraobservador. Sin
sangre teñida; sin embargo, en el laboratorio se reali- embargo, las determinaciones automáticas, aunque
za un recuento automático con autoanalizadores ca- han mejorado mucho la realización de la fórmula, no
paces de realizar recuentos de la cifra de leucocitos y son perfectas, y en algunos casos se sigue recurriendo
de los distintos subtipos (fórmula) . al estudio de las poblaciones leucocitarias mediante
microscopia convencional. La mayor limitación de
los aparatos automáticos es la dificultad de identifi-
GRANULOCITOS cación de poblaciones celulares inferiores al 1 % . Por
Se denominan así por presentar gránulos citoplasmá- ello, se recomienda el estudio morfológico sobre fro-
ticos. Se subclasifican, según la apetencia de estos tis en los enfermos de nuevo diagnóstico en los que el
gránulos por las mezclas de azul de metileno y eosina aparato nos indique alguna anormalidad (alarmas) y
(colorantes empleados en las tinciones ordinarias de en todas las enfermedades hematológicas primarias (a
extensiones de sangre), en tres grupos: neutrófilos, pesar de que, incluso en estas, solamente aparecerán
basófilos y eosinófilos. El núcleo es multilobulado y alteraciones en un reducido número de casos).
no presenta nucléolos. Se denominan también poli-
morfonucleares debido a las distintas configuracio-
nes que puede adoptar el núcleo. CRITERIOS DE NORMALIDAD
Y VARIACIONES FISIOLÓGICAS
MONOCITOS En la Tabla 82-1 se ofrecen las cifras normales de leu-
Son células de citoplasma abundante de color gris cocitos y subtipos. A diferencia de los glóbulos rojos,
azulado, con núcleo de localización central redondo cuyos valores permanecen relativamente constantes,
o arriñonado. Su tamaño es algo mayor que el de las ,, los leucocitos sufren variaciones importantes a lo
anteriores. largo del tiempo. La realización de determinaciones
seriadas en sujetos normales revela que neutrófilos
y linfocitos pueden experimentar variaciones de un
LINFOCITOS 10 % a lo largo del día, variaciones que en los eosi-
Son células de citoplasma variable que, en ocasiones, nófilos y monocitos están próximas al 20 % . La va-
puede ser muy escaso (linfocitos pequeños) o relati- riación de recuentos entre semanas puede alcanzar el
vamente abundantes (linfocitos grandes). El citoplas- 25 % para los neutrófilos y eosinófilos, sigue próxima
ma es de color azul pálido, sin gránulos o con algún al 20 % para los monocitos y es algo inferior al 15 %
gránulo aislado. El núcleo es redondo y de cromatina para los linfocitos.
homogénea.
GRANULOCITOS
PROBLEMAS EN LOS RECUENTOS
DIFERENCIALES DE LEUCOCITOS GRANULOCITOPOYESIS
Cuando se realiza una fórmula al microscopio, se de- Los granulocitos son células maduras y altamente di- ---¡;g,--
termina una proporción relativa de los distintos tipos ferenciadas que tienen un vida muy breve (unas po-
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

yesis a través de mecanismos complejos. Los factores


de crecimiento más empleados son la eritropoyetina
Tabla Leucocitos: valores (de especial aplicación en la anemia de la insuficen-
normales cia renal crónica) y el G-CSF (para la reducción del
periodo de granulocitopenia, especialmente en las
Valor medio Extremos inducidas por quimioterapias agresivas). La reciente
9 9
X 10 /J X 10 /1
síntesis de trombopoyetina conlleva unas aplicacio-
Leucocitos 7,2 3,8-11 nes potenciales que, por el momento, están siendo
llevadas ya a la clínica.
Neutrófilos 4,4 2,0-7, 5

Eosinófilos 0,2 0,04-0,4


DISTRIBUCIÓN PERIFÉRICA
Basófilos 0,05 0,01-0,1
Y SUPERVIVENCIA
Linfocitos 2,7 1,5-4,0
Los granulocitos intravasculares se dividen por igual
Monocitos 0,5 0,2-0,8 entre las células que circulan libremente (compar-
timento circulante) y las células que se adhieren al
endotelio de la microcirculación (compartimento
marginal) (Fig, 82-1). Los granulocitos se mueven
libremente entre ambos compartimentos, que cinéti-
cas horas). Se producen en la médula ósea a partir de camente se comportan como uno solo. Los estímulos
una célula germinal comprometida, distinguiéndose que alteran el flujo sanguíneo a través de la micro-
dos compartimentos funcionales: el mitótico o proli- circulación inducen el paso de células del compar-
ferativo , que comprende mieloblastos, promielocitos timento marginal al circulante , produciendo una
y mielocitos, y el compartimento posmitótico o ma- leucocitosis transitoria. Existe un movimiento muy
durativo, integrado por los metamielocitos, bandas y activo de los granulocitos desde la médula ósea a la
segmentados. El compartimento posmitótico contiene sangre y desde es ta a los tejidos (unos 25 00 millones
aproximadamente el doble de células que el mitótico, por hora en una persona de 70 kg) . La superviven-
y proporciona u na reserva granulocitaria dispuesta cia de los granulocitos en los tejidos es desconocida,
para una rápida liberación en caso necesario. Dicha aunque se supone breve.
liberación puede producirse a las pocas horas del es- Cu ando se realiza un recuento de leucocitos, sola-
tímulo (p. ej., en la inflamación aguda) (Fig. 82-1) . El mente se miden los granulocitos del compartimento
tiempo total de maduración (desde el mieloblasto al circulante. En la concentración de los granulocitos en
segmentado) es de 12-13 días. La mitad del tiempo se sangre intervienen tres factores principales: a) la rapi-
consume en el compartimento mitótico. A nivel del dez de salida de los granulocitos desde el comparti-
mieloblasto se produce una división, una o dos a ni- mento de reserva hasta la sangre; b) la proporción de
vel del promielocito y dos a nivel del mielocito. neutrófilos que existen en los compartimentos margi-
Existe una serie de factores de crecimiento hemato- nal y circulante; y c) la rapidez con que los granu loci-
poyético, conocidos inicialmente como CSF (colony tos abandonan la sangre.
stim ulating factors , factores estimuladores de colo-
nias) que tienen una gran influencia en la hematopo-
FUNCIÓN DE LOS GRANULOCITOS
NEUTRÓFILOS

1
e e Célul as germinale~
Es la de englobar y destruir las bacterias que penetran
en la piel y las mucosas del organismo (fagocitosis).

ro
Compartimento
mitótico
~ Cuando la granulocitopoyesis está alterada y la con-
centración de neutrófilos en sangre es inferior a 0,5
~ x 10 9 /1, el sujeto corre el riesgo de sufrir una infec-
'"'
~
ción grave por microorganismos que habitualmente
Compart1 mentoj H se encuentran en el colon, la boca o la piel. En algu-
posmitótico Compartimento nas enfermedades, los granulocitos pueden fagocitar
t
1L _ de reserva complejos inmunes o materiales cristalinos (p, ej,:
.tl
v ,
~
y
partimento margina
c~~partimento ci rculan
cristales de ácido úrico en la gota).
Para que la función fagocitaria sea eficaz, los granu-
locitos deben:
Tejidos
Adherirse al endotelio de las células poscapila-
Figura Co mp artim entos fun c ion ales de los res .
692 gran ul ocitos.
Emigrar a través de ellas,
CAPITULO 82 Patología general de las alteraciones de los leucocitos

Acumularse y agregarse en algún lugar de los Los tejidos linfoides periféricos, en los que se
tejidos. distribuyen las células T y B inmunológicamente
Reconocer los microorganismos mediante la op- competentes (ganglios linfáticos, bazo, anillo de
sonización (las opsoninas mejor conocidas son Waldeyer, acúmulos submucosos de linfocitos
la IgG y C3). en el tubo digestivo -placas de Peyer- y en los
Generar mediadores que recluten nuevos granu- tractos respiratorio y urinario).
locitos y participen en la destrucción microbiana.
Los linfocitos y los granulocitos difieren funda-
Fagocitar microorganismos u otras partículas.
mentalmente en sus ciclos vitales. Los granulocitos
Generar productos intermediarios metabolitos
no pueden dividirse, tienen una supervivencia corta
del oxígeno, como el anión superóxido (0 2) y el
en los tejidos y deben ser reemplazados continuanrnn-
peróxido de hidrógeno (H20 2),
te por nuevos granulocitos procedentes de la médula.
Sufrir una desgranulación con liberación de mie-
Los linfocitos liberados de los tejidos centrales a los
loperoxidasa en la vesícula fagocitaria (fagosoma).
periféricos, particularmente los linfocitos T, pueden
La respuesta inflamatoria comprende todas estas sobrevivir como células quiescentes inmunocompe-
fases; los efectores de la fagocitosis y la destrucción tentes durante largos periodos de tiempo.
microbiana son también los efectores de la inflama-
ción. Si bien la respuesta inflamatoria contribuye al
control de la infección microbiana, puede producirse ALTERACIONES LEUCOCITARIAS
igualmente una importante alteración tisular por la
toxicidad de los metabolitos del oxígeno y la potencia Las alteraciones más importantes de los leucocitos se
de las enzimas lisosomales; unos y otras, al liberarse reflejan en la Tabla 82-2.
de los granulocitos activados , pueden atacar los cons- Estas alteraciones pueden ser cualitativas y cuan -
tituyentes de los tejidos vecinos. titativas. Las alteraciones cuantitativas son, con mu-
cho, las más frecuentes. Las alteraciones cualitativas
pueden afectar a cualquiera de los grupos de leucoci-
COMPONENTES DEL TEJIDO LINFOIDE tos. Las más importantes son los déficits funcionales
Y FUNCIONES DE LOS MISMOS de los granulocitos (granulocitopatías) y de los lin -
focitos (inmunodeficiencias}, y la hiperactividad de
Los linfocitos están constituidos fundanrnntalmente
estos últimos (estados de hiperinmunidad).
por tres tipos de células :
Los linfocitos T (derivados del timo) , que están
implicados en los procesos de inmunidad celu-
lar y en la regulación de la síntesis de anticuer- Tabla Tipos de alteraciones
pos. leucocitarias
Los linfocitos B (derivados de la médula), que
participan únicamente en los procesos de res- Cualitativas
puesta humoral y son los precursores de las cé- De los granulocitos (granulocitopatías)
lulas plasmáticas, las principales células forma- De los linfocitos
doras de anticuerpos. Por defecto: inmunodeficiencias
Los linfocitos NK (natural killer) capaces de ata- Por exceso: autoinmunidad
car determinadas células diana sin que se pro-
duzca un reconocimiento previo por el antígeno. Cuantitativas
De capital importancia en los linfocitos T y B son Por exceso
los receptores que median el reconocimiento del Leucocitos is
antígeno: el receptor T (TCR) para los primeros y Neutrofilia
el receptor B (BCR) para los segundos. Los linfo- Linfocitosis
citos NK carecen de receptores antígeno-especí- Eosinofilia
ficos; la especificidad del reconocimiento celular Monocitosis
corre a cargo de señales inhibitorias transducidas Basofilia
por receptores que reconocen las moléculas del Por defecto
complejo mayor de histocompatibilidad clase I.
Leucopenia
Los tejidos linfoides comprenden: Neutropenia
Linfopenia
El compartimento de células germinales de la
médula ósea, fuente de los precursores primiti- Eosinopenia
vos de estas células. Monocitopenia
Los tejidos linfoides centrales: el timo, que pro- Basopenia
cesa los precursores a células T, y la médula ósea,
que procesa los precursores a células B.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

ALTERACIONES CUALITATIVAS ALTERACIONES CUANTITATIVAS


DE LOS LEUCOCITOS DE LOS LEUCOCITOS
Tanto por aumento (leucocitosis) como disminución
ALTERACIONES CUALITATIVAS (leucopenia}, son mucho más frecuentes en la prácti-
DE LOS GRANULOCITOS ca que las alteraciones cualitativas.
Granulocitopatías congénitas Generalmente, la leucocitosis se produce como
consecuencia del aumento de neutrófilos (le ucocito-
Existen múltiples alteraciones, todas ellas muy raras , sis neutrófila) o de linfocitos (leucocitosis con linfoci-
con un espectro clínico sumamente variable que abar- tosis) ; las leucocitosis eosinófilas deben considerarse
ca desde los procesos asintomáticos, como el déficit igualmente, aunque sean algo menos frecuentes . Las
de mieloperoxidasa y la anomalía de Pelger-Huet, leucopenias se producen habitualmente como con-
hasta los cuadros con infecciones muy graves, como secuencia del descenso de neutrófilos (neutropenia).
el déficit de adhesión leucocitaria y la enfermedad Debe evitarse el empleo de términos tales como lin-
granulomatosa crónica. El tratamiento es sintomáti- focitosis o neutropenia relativas, que no correspon-
co, y en determinados casos puede recurrirse al tras- den a alteraciones reales y son fuente de confusión.
plante de médula ósea. Hay que evitar, pues, manejar cifras leucocitarias en
El déficit de adhesión leucocitaria se debe a la porcentajes, y emplear en su lugar cifras absolutas;
ausencia total de expresión de integrina leucocitaria esto resulta sumamente sencillo en la práctica, dado
por síntesis defectuosa o ausente de la cadena ~- La que en las hojas de resultados de los recuentos se faci-
herencia es autosómica recesiva. Se producen infec- litan las de cada uno de los tipos de leucocitos.
ciones indolentes y necróticas de los tejidos blandos,
especialmente en la piel, las mucosas y el tracto gas-
NEUTROFILIA
trointestinal. El diagnóstico se realiza mediante feno-
tipaje leucocitaria. Se define como una cifra de neutrófilos > 7,5 x 10 9 /1.
La enfermedad granulomatosa crónica se produce La causa más frecuente de la neutrofilia es la infección.
por déficit total o parcial de oxidasa leucocitaria. La En estos procesos existe un estímulo para aumentar
herencia está ligada al sexo (60 % ) o es autosómica la producción medular de granulocitos y acelerar su
recesiva (4 0 %). Existe un déficit de actividad mi- maduración y posterior paso a la sangre. Cuando una
crobicida. Se producen infecciones recurrentes de infección es muy grave, se produce un agotamiento
microorganismos catalasa positivos, como Staphilo- de las reservas medulares y, como consecuencia, una
coccus aureus, bacilos gramnegativos o Aspergillu s. leucopenia (una infección con leucopenia tiene mal
El diagnóstico se realiza por la ausencia de redu cción pronóstico). También puede producirse neutrofilia en
del nitroazul de tetrazolio (NBT) . las necrosis tisulares (infarto de miocardio), altera-
La deficiencia específica en gránulos neutrófilos ciones metabólicas (cetoacidosis diabética y uremia),
tiene, asimismo , una herencia autosómica recesiva. traumatismos y quemaduras. Una leucocitosis intere-
Existe déficit de quimiotaxis y de actividad microbi- sante desde el punto de vista práctico es la tabáquica,
cida. que se produce en los grandes fumadores (más de dos
El síndrome de Chediak-Higashi, de transmisión paquetes diarios). En la Tabla 82-3 se reflejan las cau-
autosómica recesiva, se caracteriza por albinismo sas más importantes de neutrofilia.
oculocutáneo y presencia de gránulos gigantes en los El aumento de neutrófilos puede ser moderado o
granulocitos y sus precursores. Existe un déficit de importante; generalmente se acompaña de aparición
quimiotaxis y actividad microbicida. de elementos en franja (cayados o bandas). Cuando la
neutrofilia es importante, pueden aparecer mielocitos
o incluso mieloblastos . La aparición de elementos in-
Granulocitopatías adquiridas maduros (generalmente bandas) se conoce como des-
Con la aparición de técnicas para el estudio de la fun- viación izquierda . Cuando la leucocitosis excede de
ción granulocitaria, se han descrito numerosas alte- 50 x 10 9 /l en ausencia de proceso leucémico, se habla
raciones adquiridas (alcoholismo, nefropatías, diabe- de reacción leucemoide.
tes, malnutrición, etc.), asociadas o no a la presencia Estas alteraciones deben distingu irse de la leu-
de infecciones de repetición. coeritroblastosis, es decir, la aparición de elemen-
tos granulocitarios inmaduros (mielocitos e incluso
mieloblastos) acompañados de eritroblastos, general-
ALTERACIONES CUALITATIVAS mente con anemia (anemia leucoeritroblástica). Esta
(FUNCIONALES) DE LOS LINFOCITOS alteración es muy característica de la invasión de la
médula ósea por tumores (tumores sólidos no hema-
Pueden manifestarse por exceso, produciendo cua- topoyéticos o linfomas).
dros de autoinmunidad, o por defecto , ocasionando La neutrofilia puede ir acompañada de otras altera-
694 diversos tipos de inmunodeficiencias.
ciones del hemograma (Tabla 82 -4 ).
CAPITULO 82 Patología general de las alteraciones de los leucocitos

Tabla Causas más frecuentes Tabla Alteraciones combinadas


de neutrofilia del hemograma
Secundarias Anemia y neutrofilia
Infección (principalmente bacteriana, Infecciones crónicas
absceso, sepsis) Inflamación
Inflamación Anemia hemolítica
Tabaquismo Neoplasias
Hemorragia aguda
Neutrofilia de estrés Aumento del hematocrito y neutrofilia
Traumatismos y quemaduras Policitemia vera
Alteraciones metabólicas (cetoacidosis Trombocitosis y neutrofilia
diabética, insuficiencia renal crónica,
eclampsia, etc.) En pacientes sintomáticos (infecciones,
inflamación, neoplasias)
Necrosis tisular (infarto de miocardio, etc.)
En pacientes asintomáticos (trombocitemia
Fármacos (corticoides, litio, factores de esencial)
crecimiento -G-CSF, etc.)
Neoplasias no hematológicas Trombocitopenia y neutrofilia
Golpe de calor Sepsis bacteriana
Estimulación medular {hemólisis)
Asplenia e hiposplenia Neutrofilia con desviación izquierda
Fisiológicas (neonatos, gestantes, Sepsis
parturientas y puérperas, ejercicio Síndrome mieloproliferativo crónico
extenuante, etc.)
Monocitosis y neutrofilia
Primarias Gestación, asplenia, infecciones e
Hereditaria inflamación, depresión, tratamiento
Crónica idiopática esteroideo
Síndromes mieloproliferativos Leucemia mielomonocítica crónica*
Enfermedad mieloproliferativa fam iliar
Alteraciones congénitas y reacción
leucemoide
Síndrome de Down
Las neutropenias pueden ser de origen central o
periférico. Dentro de las centrales se distinguen las
neutropenias por defecto de producción (neutrope-
NEUTROPENIA nias hipoplásicas), por granulocitopoyesis ineficaz (la
producción medular de granulocitos es normal o au-
Es el descenso de la cifra de neutrófilos, y en la prác- mentada, pero se produce una muerte intramedular)
tica se usa como sinónimo de granulocitopenia, es o por liberación disminuida (la médula libera escasos
decir, el descenso de la cifra de granulocitos, ya que elementos funcionalmente anormales). Las neutrope-
aquellos suponen más del 95 % de estos. Se define nias periféricas pueden ser por exceso de destrucción
habitualmente como neutropenia una cifra de neutró- (inmunológicas, infecciones graves) o por alteracio-
filos inferior a 1,5 x 10 9 /l; entre 1,5 y 1,0 x 10 9 /1 la nes de reparto (aumento del compartimento marginal
neutropenia es moderada, y entre 1,0 y 0,5 x 10 9 /1, con relación al circulante). Esta clasificación cinética,
importante. A nivel clínico, una neutropenia impor- aunque clara, es poco útil en la práctica diaria porque
tante entraña una especial vulnerabilidad a las infec- algunos procesos participan de más de un mecanismo
ciones, incluso a las más banales. La agranulocitosis y porque no existe una idea clara del mecanismo de
(neutrófilos < 0,5 x 10 9 /1) es la forma más grave de la otros.
neutropenia. Por lo general, la neutropenia es asinto- Las neutropenias más frecuentes en la práctica se
mática y carece de trascendencia clínica por sí mis- originan por la toma de fármacos. Existe un gran nú-
ma; en cambio, la agranulocitosis es un proceso grave mero de sustancias capaces de inducir neutropenia o
caracterizado por angina necrótica e infecciones; su agranulocitosis; en la Tabla 82-6 se recoge una lista de
curso puede ser autolimitado, pero a veces es mortal. los grupos más frecuentes. El perfil clínico de estos
En la Tabla 82-5 se refleja el grado de toxicidad he- casos corresponde a una mujer de edad media, con
matológica inducida por la quimioterapia, hecho de tendencias compulsivas o depresivas y consumo ha-
la máxima importancia para reducirla o suspenderla. bitual de tranquilizantes, hipnóticos o antidepresivos.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla - Grado de toxicidad hematológica


Elemento Grado 1 Grado 2 Grado 3 Grado 4 Grado 5
Neutrófilos (x 109/1) > 1,5* 1,0-1 ,5 0,5-1 ,0 < 0,5 Muerte por citopenia
Plaquetas (x 10 /1) 9
> 75* 50-75 25-50 < 25 Ídem
Hemoglobina (g/1) > 100* 80-100 65-80 < 65 Ídem
9
Linfopenia (x 10 /1) > 0,8* 0,5-0,8 0,2-0,5 < 0,2 Ídem
"Hasta el límite inferior de la normalidad

Independientemente de este contexto , aunque infecciones bacterianas graves y muy a menudo por
próximas a él, se encuentran las neutropenias por anomalías somáticas en piel, cerebro, corazón y otros
hipermarginación, en las cuales no existe ningún an- órganos. En buena parte de ellas se conocen los genes
tecedente de ingesta de fármacos, pero coinciden las mutados responsables (Fig. 82-2) .
restantes características clínicas . En la Tabla 82- 7 se Otra entidad primaria es la neu tropenia cíclica,
recogen las causas más importantes de neutropenia. caracterizada por alternancia de cifras normales de
La neutropenia es una alteración muy frecu ente granulocitos y de granulocitopenia, manifestándose
en la práctica diaria, aunque muy a menudo se trata en forma de ciclos variables de uno a otro caso. Las
de una falsa neutropenia por empleo de los valores infecciones son de gravedad variable.
porcentuales de neutrófilos (las mal llamadas neutro-
penias «relativas ») o por desconocimiento de los cri-
terios de normalidad. La agranulocitosis, en cambio LINFOCITOSIS
tiene afortunadamente una presentación infrecuente. Un recuento de linfocitos> 4,0 x 10 9 /l puede aparecer
Las neutropenias pueden ser congénitas (prima- en distintos procesos (Tabla 82-8) . En algunas infec-
rias) o adquiridas (secundarias) . ciones bacterianas (tos ferina) o víricas (monon ucleo-
Las primarias son muy raras y comprenden un sis infecciosa, citomegalovirus, hepatitis, infección
numeroso grupo de entidades, a menudo poco deli- por VIH, etc.), se describe como hallazgo habitual un
mitadas clínicamente como la ne utropenia congénita au mento de estos elemen tos que morfológicamente
grave, la neutropenia congénita ligada al cromosoma pueden ser normales o inmaduros. Estos últimos son
X, el sín drome de Chediak-Higashi y el sín drome de
Hermansky-Pudlak entre otras. Se caracterizan por

Tabla Causas más importantes


de neutropenia
Tabla Grupos de fármacos
capaces de producir agranulocitosis Secundarias
Posinfecciosa
Antitiroideos Inducida por fármacos
Fenotiazinas Familiar benigna
Crónica benigna de la infancia
Sulfamidas Autoinmune
Antibióticos (derivados penicilínicos semisintéticos, lsoinmune
cefalosporinas) Asociada a alteraciones inmunológicas
Asociada a alteraciones metabólicas
Fármacos cardiovasculares (procainamida,
quinidina, captopril) Por hipermarginación
Nutricional
Antiepilépticos
Primarias
Antiinflamatorios
Cíclica
Miscelánea (cimetidina, antidiabéticos orales, Otras (Chediak, Kostmann, mielocatexis,
hidroclorotiazida) etc.)
CAPÍTULO 82 Patología general de las alteraciones de los leucocitos

INFECCIONES
RECURRENTES

1
Historia, explorac ión,
hemograma, morfología sa ngre periféri ca

lnmunoglobulinas y compl ementos

Tromboci-
Neutrófilos Alt. mor-
top eni a,
1,5-0,5 X 10 /1
9
fológicas
eccema
1 1

Neutropenia S. Wiskott S. Chediak


Déficit de Défi cit de Hiper-
Aldri ch Higashi
inmuno- compl e- lgE
globulinas mento
Estudio
ele la función
granulocitaria

Reevaluación
Nitroazul de
Otros defectos
tetrazolio

1
Quimiotaxis, Enfermedad
opsonización granulom atosa
cróni ca

Figura 82• Evaluación de un paciente con infecciones recurrentes (+ anormal o positivo; - normal o negativo).

células mononucleares con aumento de basofilia cito- EOSINOFILIA


plasmática y aparecen, sobre todo , en la mononucleo-
sis infecciosa y en las infecciones por citomegalovi-
Teniendo en cuenta la proporción de eosinófilos en la
rus y por VIH, entre otras. Corresponden a linfocitos
sangre, puede encontrarse eosinofilia (eosinófilos >
activados , aunque morfológicamente muestren una
0,5 x 10 9 /1) sin aumento (lo más frecuente) o con au-
cierta semejanza con los monocitos.
mento de la cifra total de leucocitos. La eosinofilia es
característica de los estados alérgicos y las parasito-
sis. En nuestro medio no deben olvidarse la hidatido-
LINFOPENIA sis y la triquinosis. Entre las causas menos frecuentes
conviene señalar la toxicidad a fármacos y las neo-
Un número de linfocitos< 1,5 x 10 9/l aparece en situa- plasias. Una eosinofilia importante nos hará pensar
ciones de inmunodeficiencia (entre ellas, el síndrome en un síndrome hipereosinófilo. En la Tabla 82 -10 se
de inmunodeficiencia adquirida) , tratamientos inmu- relacionan las situaciones que con mayor frecuencia
697
nosupresores y radiaciones ionizantes (Tabla 82-9). van acompañadas de eosinofilia.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Ta bla Causas más frecuentes Tabla Causas más habituales


de linfocitosis de eosinofilia
Infecciones agudas Secundarías
Víricas (mononucleosis, citomegalovirus, Alergias (asma, urticaria, fiebre del heno,
VIH, rubéola, hepatitis, herpes, etc.) eccema, etc.)
Tos ferina Parasitosis (hidatidosis, ascariasis, filariasis,
Linfocitosis infecciosa triquinosis, etc.)
Bacterianas (escarlatina, TBC, etc.)
Infecciones crónicas (TBC, brucelosis, sífilis,
Protozoos (paludismo, etc.)
toxoplasmosis, etc.)
Intestinales (colitis ulcerosa, Crohn ,
Hipersensibilidad a fármacos celiaquía, esprúe, etc.)
Síndromes linfoproliferativos (leucemia linfática Carcinomas
crónica, tricoleucemia, otros) Eosinofilia pulmonar (Léiffler, etc.)
Toxicidad a fármacos
Linfocitosis a linfocitos granulares
Primarias
Hemopatías (síndrome hipereosinófilo,
linfomas)

MONOCITOSIS
Una monocitosis importante (especialmente en una
persona anciana) nos hará pensar en un sinclrome cia de estas células en la médula ósea y en la sangre
mielodisplásico . Las monocilosis infecciosas o neo- periférica, en las leucemias, y con afectación ganglio-
plásicas son, por lo general , moderadas. No hay que nar en los linfomas.
olvidar las monocitosis que aparecen con frec u encia La clasificación de estos procesos se h a beneficiado
en las neutropenias (función vicariante) o en la fase enormemente de los progresos qu e se han produci-
de recuperación de una agranulocitosis (Tabla 82-11) . do en la tip ificación del origen celular gracias a los
estudios de: a) anticuerpos monoclonales empleando
citómetros de flujo; b) de la citogenética, y c) de la
LEUCOCITOSIS PROLIFERATIVAS biología molecular.
El tratamiento actual de estos procesos consiste
La mayor parte de las neoplasias hematológicas está en una quimioterapia intensiva citorreductora (even-
producida por la expansión clona! de una única cé- tualmente erradicativa) complementada, en m u chos
lula, en la que se ha producido una mutación somáti- casos con trasp lante de células progenitoras. Las te-
ca de un alelo en un gen normal (protooncogén) que rapias inhibidoras de la acción de la tirosinqui nasa
gobierna la maduración y división celular. Este gen bcr/abl (ima tin ib , dasatinib) h an su pu esto u n cambio
mutado (oncogén) estimula una proliferación celular radical en el tratamiento d e la leucemia mieloide cró-
inadecuada que lleva al desarrollo de la neoplasia. n ica, haciendo desaparecer prácticamente del m ismo
Esta proliferación celular cursa morfológicamente
con diferentes tipos de atipias, así como con presen-

Tabla Causas más frecuentes


de monocitosis
Ta bla Causas más prevalentes
Infecciones
de linfopenia
Bacterianas (TBC, brucelosis, etc.)
Tratamiento inmunosupresor Protozoos (paludismo, leishmaniasis, etc.)
Víricas (citomegalovirus, etc.)
Inmunodeficiencias (especialmente infección
Neoplasias
VIH)
Carcinomas, leucemias monocíticas, etc.
Radiaciones ionizantes Tratamiento con citocinas
Otras (enfermedad de Hodgkin, aplasia Recuperación de una agranulocitosis
medular, etc.) Neutropenias
CAPITULO 82 Patología general de las alteraciones de los leucocitos

el trasplante de médula ósea. La terapia génica sigue


siendo una opción de futuro muy prometedora.

NEUTROFILIAS
La leucocitosis neutrófila es un hecho habitual en el
contexto de los síndromes mieloproliferativos cróni-
cos (SMPc). Es el dato más llamativo, desde el punto
de vista morfológico, en la leucemia mieloide crónica
(LMC) , mientras que en la policitemia vera (PV) , la
mielofibrosis (MF) y la trombocitemia esencial (TE)
ocupa un lugar menos relevante. Se acompaña con
frecuencia de basofilia (la basofilia es poco frecuen-
te fuera de estos cuadros) y, más raramente, de eosi-
nofilia. El cromosoma Filadelfia [t(9;22)(q34;qll)] y el
gen de fusión BCR/ABL son los marcadores del 90 %
de los casos de LMC; los restantes SMPc carecen de
marcadores específicos. La esplenomegalia es el ha-
llazgo clínico más relevante: es gigante en la MF y
moderada en la PV y la TE. Figura Alteraciones cuantitativas de los leu-
cocitos: A) Neutrofilia en leucemia mieloide crónica.
B) lnfocitosis en leucemia lin fática crónica). C) Mono-
LINFOCITOSIS citosis en síndrome mielodisplásico. D) Eosinofilia en
La presencia de linfocitosis en sangre periférica por síndrome hipereosinófilo.
linfocitos maduros en número superior a 5.000/mm 3
es típica de la leucemia linfoide crónica (LLC). La al- Las lesiones cutáneas y la esplenomegalia, en las
teración citogenética más frecuente en la LLC es la primeras, y la hipertrofia gingival, en las segundas,
trisomía 12 y reordenamientos de los cromosomas 13 son los elementos clínicos más relevantes.
y 14. Las adenopatías en la LLC y la esplenomegalia
en otros síndromes linfoproliferativos crónicos son
los elementos clínicos más destacables (Fig. 82-3). CÉLULAS BLÁSTICAS
En los linfomas, la proliferación linfoide se localiza Las leucemias agudas se constituyen a expensas de
por lo general a nivel ganglionar (y por tanto , sin leu- una población blástica (inmadura) que muy a me-
cocitosis), siendo la propagación a estructuras extra- nudo resulta difícil de adscribir, desde el punto de
ganglionares o a la sangre un elemento de pronóstico vista morfológico, a la línea mieloide o linfoide. De
desfavorable. Los linfomas se caracterizan por prolife- aquí que los estudios de anticuerpos monoclonales ,
raciones ganglionares de desigual tamaño, así como, citogenética y biología molecular hayan contribuido
eventualmente, por esplenomegalia (recuérdese que el a tipificar mejor estos procesos. Debe recordarse que
bazo es, a efectos prácticos, un ganglio grande). En la una leucemia aguda suele cursar con leucocitosis,
enfermedad de Hodgkin no se han detectado marca- pero que en determinadas formas (leucemia promie-
dores específicos; en los linfomas no Hodgkin deben locítica) la leucopenia es frecuente.
destacarse: en el linfoma de Burkitt el gen MYC, gene- En las leucemias mieloides agudas (LMA) se han
ralmente vinculado a la t(8;14); en el linfoma folicular, demostrado anomalías citogenéticas numéricas o es-
la t(l4;18)(q32;q21) correspondiente al gen BCL2; en tructurales en el 45 % de casos. Los marcadores más
el linfoma del manto, los genes BCL1 o PRAD1 con precisos se encuentran en la leucemia promielocítica
la t(11;14)(p23;q35), y el linfoma anaplásico, con la con la translocación t(15:17)(q21:q22), que aparece en
t(2;5)(p23;q35). el 80 % de los casos, y que responde bien al ácido
Desde un punto de vista práctico podemos dividir transretinoico (ATRA). La quimioterapia obtiene la
los linfomas en agresivos e indolentes. En los prime- remisión en más del 50 % de los casos de LMA.
ros la quimioterapia es muy eficaz y son potencial- En las leucemias linfoides agudas (LLA) destacan
mente curables; los segundos son de lenta evolución, la t(9;22), propia del 25 % de las LLA del adulto y del
responden a la quimioterapia pero son frecuentes las 5 %, de las infantiles; la t(8;14), que aparece en las
recaídas y la tasa de curación es menor. formas tipo Burkitt, y las t(1;19)(q23;p13) y su varian-
te l(17;19)(q21 ;p13), que se demuestran en un 5 % de
todas las LLA pediátricas.
MONOCITOSIS En la LLA del niño el tratamiento es muy eficaz y
Aparecen como hecho propio de la leucemia mielo- consigue la curación en la mayoría de los casos; por
monocítica crónica y como población acompañante el contrario, la LLA del adulto tiene un pronóstico ------¡;gg
de algunas leucemias monocíticas agudas. sombrío.
-183
Síndromes adenomegálicos.
Semiología del bazo
Jordi Sierra Gil

SISTEMA LINFÁTICO

ESTRUCTURA Y FUNCIÓN DEL SISTEMA


LINFÁTICO
Comprende los vasos linfáticos, los
ganglios, el bazo, las amígdalas , las
adenoides y el timo. También
hay tejido linfoide en las placas
de Peyer del íleon terminal, en
los islotes linfoides de la muco-
sa del aparato respiratorio y en
las células reticuloendoteliales
del hígado. Una extensa red de
vasos linfáticos acompaña a los
vasos sanguíneos con la misión
de transportar la linfa del espacio
intersticial a los ganglios linfáti-
cos. Los vasos linfáticos drenan
diferentes regiones del organismo,
en grupos de ganglios linfáticos
regionales (Fig. 83-1). Los con-
ductos linfáticos eferentes salen
de los ganglios y convergen en
conductos de mayor diámetro ,
hasta formar el conducto linfáti- B y, además, contienen los centros germinales,
co derecho y el conducto torácico. áreas ricas en células plasmáticas, macrófagos y
El primero de ellos drena la linfa de linfocitos activados, que intervienen en la síntesis
la porción superior y derecha del cuer- de anticuerpos. Los folículos linfoides están rodea-
po hasta la vena subclavia derecha, mientras que el dos por un manto de linfocitos T, que se conoce como
conducto torácico recoge el resto y desemboca en la área paracortical. Por debajo de la corteza, y ocupan-
vena subclavia izquierda. Es importante recordar que do el centro del ganglio, se halla la medular. La arqui-
la grasa absorbida por el intestino delgado no fluye tectura del ganglio facilita una filtración eficaz de la
por la circulación portal, sino que los quilomicrones linfa, y promueve la migración interna de las células
formados por los enterocitos son absorbidos por los linfoides, sobre todo linfocitos y macrófagos.
linfáticos mesentéricos, que drenan al conducto torá- Los antígenos llegan a los ganglios por los conduc-
cico, y de este pasan a la circulación sistémica. tos linfáticos aferentes. Una vez en los ganglios, son
Los ganglios linfáticos están formados por tres zo- procesados en la zona cortical por los macrófagos.
nas anatómicas diferentes : los folículos linfoides, la Las células dendríticas intervienen en el fenómeno
región paracortical y la medular (Fig. 83-2). Los folí- de presentación de antígenos a los linfocitos, que res-
700 culos linfoides se sitúan cerca de la cortical del gan- ponden mediante la proliferación en el área cortical,
glio; están constituidos por acúmulos de linfocitos ya sea de linfocitos B con capacidad de producir an-
CAPITULO 83 Síndromes adenomegálicos. Semiología del bazo

Linfáticos aferentes

Seno subcapsular

Vénula
poscapilar

Folícu lo linfoide
secundario

Folícu lo linfoide

Figura Estructura del ganglio linfático.

EXPLORACIÓN
Exploración clínica

ganglios linfáticos La exploración de los ganglios linfáticos se realiza


gonglios---/lif=:.=a;:J::~~l agregados mediante la inspección y la palpación. Cuando los
linfáticos
inguinales
ganglios están muy aumentados de tamaño , pueden
verse con claridad en la inspección. Cuando los gan-
glios están infectados , suelen estar aumentados de ta-
maño y con signos inflamatorios (linfadenitis). Due-
len al ser palpados, y la piel que los cubre puede es-
tar roja e inflamada. Cuando los conductos linfáticos
que se dirigen a un grupo de ganglios sufren también
un problema inflamatorio (linfangitis), pueden verse
ciertas líneas rojas y delgadas que se originan en un
área distal de inflamación, como por ejemplo, una
herida cutánea que actúe como puerta de entrada. La
palpación de los ganglios linfáticos debe hacerse con
la punta de los dedos, aplicando una presión lige-
ra sobre la zona y moviendo los dedos para percibir
cualquier adenopatía subyacente. Los ganglios nor-
males no son habitualmente palpables salvo en los
niños, de modo que la presencia de adenomagalias,
es decir, adenopatías palpables y aumentadas de ta-
Figura •1 Territorios ganglionares. maño, indican un fenómeno patológico.
En la palpación de las adenopatías debe evaluarse
su tamaño, consistencia, movilidad, adherencia a te-
ticuerpos, o de linfocitos T antígeno-específicos. De jidos subyacentes y presencia de signos inflamatorios
este modo , los ganglios linfáticos sirven para integrar (Tabla 83-1). Además , debe estudiarse el área de dre-
todos los elementos necesarios para iniciar la res- naje, para intentar detectar, en su caso, el origen del
puesta inmune. Un aumento en el número y tamaño foco inflamatorio. La presencia de adenopatías dolo-
de los folículos linfoides, secundario a esta respuesta, rosas indica, en general, una infección, aunque a ve-
dará lugar a la aparición de adenopatías. Las funcio- ces la puerta de entrada puede estar oculta (por ejem-
nes del sistema linfático pueden resumirse en: plo, la existencia de pequeñas heridas de los pliegues
situados entre los dedos de los pies) . La afectación
Drenaje del espacio intersticial. neoplásica de los ganglios, ya sea por tumores del sis-
Presentación de antígenos y activación de linfo- tema linfático o secundaria a la extensión de tumores
citos. epiteliales, no suele ser dolorosa. Los ganglios neo-
Producción de anticuerpos y fagocitosis. plásicos pueden presentar un tamaño que varía entre
Servir de vía de absorción de los quilomicrones. los límites de la palpación, o pueden llegar a ser de
Semiología y fis iopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla Características diferenciales de las adenopatías, según su causa


Características Benignas Malignas lnflamatorias/lnfeccciosas
Fijación a la piel + + +++
Fijación al músculo + +++ +
Edema en la piel +++
Eritema en la piel +/- +++
Temperatura de la piel +++
Dolor +/- +++
Consistencia + +++ ++
Fluctuación + ++
Bordes definidos +++ +

hasta 4-5 centímetros de diámetro. Su consistencia no TC en el estudio de las adenopatías ilíacas de peque-
suele ser blanda, sino firme; es gomosa o elástica en ñ o tamaño. La tomografía con emisión de positrones
los linfomas y llega a ser dura o pétrea en las metásta- (PET] es útil para detectar adenopatías con actividad
sis por carcinoma. La fijación a los tejidos subyacen- tumoral. Para una óptima identificación es útil com-
tes sugiere también afectación neoplásica. binar la PET y la TC y fu sionar las imágenes.
Otro aspecto fundamental, que debe definirse en el La biopsia ganglionar es un procedimiento diag-
examen del sistema ganglionar, es si la presencia de nóstico fundamental para confirmar o establecer el
adenopatías está limitada a un área o región o si, por diagnóstico definitivo de muchos procesos patológi-
el contrario , se trata de adenopatías generalizadas . cos que cursan con adenopatías. La biopsia debe rea-
Es frecuente encontrar en el examen clínico ruti- lizarse sin retraso, excepto en pacientes con adenopa-
nario de un individuo, una o varias adenopatías de tías relacionadas con procesos infecciosos, como la
pequeño tamaño , móviles y no dolorosas. El signifi- mononucleosis infecciosa u otros cuadros derivados
cado de tales adenopatías es difícil de evaluar. Antes de un fo co infeccioso localizado, como amigdalitis
de iniciar estudios diagnósticos más complejos a fin o caries bucodental. Sin embargo, la persistencia de
de averiguar la causa, es razonable repetir el examen adenopatías aumentadas de tamaño sin signos infla-
varias semanas después. Si tras este periodo no apa- matorios su ele relacionarse con enfermedades po-
recen signos o síntomas nuevos, ni se modifica el ta- tencialmente graves, que requieren un diagnóstico
maño de los ganglios, pueden estar en relación con de certeza de cara a la indicación de un tratamiento
un proceso previo ya curado y tratarse de adenopatías adecuado.
«residuales».

Exploraciones complementarias PATOLOGÍA GENERAL DE LOS GANGLIOS


La detección de adenomegalias en áreas no accesibles LINFÁTICOS
a la exploración física, como el mediastino o el espacio
retroperitoneal, puede llevarse a cabo mediante técni- MECANISMOS Y CAUSAS
cas de imagen. La radiografía simple de tórax puede
La presencia de adenopatías suele indicar la existen-
demostrar la presencia de adenopatías mediastínicas
cia de un proceso patológico subyacente que convie-
como un ensanchamiento mediastínico de bordes po-
ne investigar. Según la naturaleza responsable de la
licíclicos; sin embargo, la tomografía axial computa-
proliferación subyacente, las adenopatías pueden
rizada (TC] es más sensible, y detectará adenopatías
deberse a una de las causas siguientes:
mediastínicas de pequeño tamaño, no visibles en la
radiografía simple. Las adenopatías retroperitoneales Proliferación reactiva de linfocitos y macrófa-
no son accesibles a la palpación, y la TC es la técnica gos. Aparece en las enfermedades infecciosas
de imagen más sensible para su detección , sobre todo y en las de base inmune. Entre las primeras,
si se localizan en el área paraaórtica. La linfografía se considerarán las infecciones bacterianas
702 pedía bilateral puede aumentar la sensibilidad de la (amigdalitis estreptocócicas), por micobacterias
CAPITULO 83 Síndromes adenomegálicos. Semiología del bazo

Figura A. Esquema presentando bazo normal y bazo aumentado de tamaño (esplenomega lia) B. Ade-
nopatías cervicales en joven con enfermedad de Hodgkin. C. Radiografía que muestra ensanchamiento me-
diastínico en linfoma. D. TAC en un linfoma retroperitoneal y con desaparición de la masa tumoral después de
quimioterapia. E. Imagen histopatológica de enfermedad de Hodgkin con células de Reed-Sternberg. F. Imagen
histopatológica de linfoma folicular.

(tuberculosis ganglionar o escrófula), fúngicas foproliferativos crónicos, tales como la leucemia


(histoplasmosis), virales (mononucleosis infec- linfática crónica y los linfomas (Fig. 83-3). Las
ciosa, citomegalovirus, rubéola, síndrome de in- neoplasias del sistema macrofágico (histiocito-
munodeficiencia adquirida, etc.), y parasitarias sis) son menos frecuentes.
(toxoplasmosis). Entre las enfermedades de base Proliferación neoplásica de tejido no linfoide.
inmune con adenopatías se hallan las enferme- Las neoplasias epiteliales suelen extenderse a los
dades del colágeno, la enfermedad del suero, la ganglios linfáticos encargados del drenaje regio-
sarcoidosis y algunas reacciones a fármacos (hi- nal, dando lugar a adenopatías de consistencia
dantoínas). dura o pétrea, adheridas con frecuencia al tejido
Proliferación neoplásica de linfocitos y macró- subyacente. Así, los tumores del área de cabeza ]O;
fagos. Los más frecuentes son los síndromes lin- y cuello (cavidad oral, tiroides, faringe, laringe)
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

dan lugar a adenopatías cervicales. El cáncer pacientes con neoplasias pélvicas, en las que tiene
de mama produce metástasis preferentemente lugar un bloqueo de la circulación linfática.
en adenopatías axilares y de la cadena mamaria De cara al diagnóstico etiológico, la primera consi-
durante la fase inicial, y posteriormente se ex- deracion que se debe tener en cuenta ante un paciente
tienden a la zona supraclavicular. El melanoma con adenopatías es la edad. La hiperplasia reactiva
también puede manifestarse con metástasis gan- del tejido linfoide ante procesos benignos de tipo
glionares que afectarán una determinada zona, inflamatorio o infeccioso es propia de la infancia y
dependiendo del drenaje linfático del tumor menos frecuente en la edad adulta. En cambio, la pro-
primitivo. Así, los melanomas de los miembros babilidad de que unas adenopatías periféricas sean
inferiores causarán metástasis, inicialmente, en expresión de un proceso neoplásico aumenta con la
los ganglios inguinales. edad.
Enfermedades de depósito. La presencia de ma- Otros aspectos de interés en el diagnóstico de las
crófagos cargados de esfingomielina (enferme- adenopatías son el momento de su aparición, y si se
dad de Niemann-Pick) o de cerebrósidos (enfer- trata de un proceso localizado en una determinada
medad de Gaucher) da lugar a poliadenopatías, región ganglionar, o por el contrario de un problema
entre otras manifestaciones, y es consecuencia extendido a múltiples áreas ganglionares. Así, un au-
de alteraciones del metabolismo de los lípidos. mento progresivo de los ganglios durante varias se-
manas, si se asocia con fiebre, escalofríos, sudoración
nocturna o adelgazamiento, sugiere una enfermedad
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Y DIAGNÓSTICO sistémica grave como una infección crónica por mi-
cobacterias o un síndrome linfoproliferativo crónico.
En su crecimiento, las adenopatías pueden dar lugar La evaluación de un paciente con adenopatías re-
a fenómenos compresivos, dependiendo de las es- gionales depende del patrón de drenaje linfático y de
tructuras con las que se relacionan. Las adenopatías los procesos patológicos que con mayor frecuencia
mediastínicas pueden provocar un síndrome medias- afectan a ese área. Por ejemplo, las adenopatías su-
tínico, con disnea y estridor por estenosis traqueal, praclaviculares de consistencia dura suelen indicar
disfagia por compresión esofágica, o edema facial y la presencia de una neoplasia intratorácica o abdo-
en esclavina por obstrucción de la vena cava superior. minal; sin embargo, las occipitales aisladas su elen
Si comprimen raíces nerviosas, dan lugar a un dolor relacionarse con procesos infecciosos del cuero ca-
con características de radiculopatía. Si comprimen belludo.
las venas producen un edema de carácter venoso, que La Tabla 83 -2 esquematiza la aproximación diag-
deja fóvea el presionar. Sin embargo, cuando compro- nóstica inicial ante un paciente con adenomegalias
meten el drenaje linfático de un miembro dan lugar localizadas en un área determinada. Una vez comple-
a linfedema, como es típico en el brazo en pacientes tados los pasos diagnósticos que en ella se indican,
con cáncer de mama o en los miembros inferiores de debe procederse a la biopsia ganglionar.

Tabla Aproximación diagnóstica previa a la biopsia ganglionar en pacientes con


adenopatías localizadas
LOCALIZACIÓN DE LAS ADENOPATÍAS

Primer paso Segundo paso Tercer paso


Cervicales Evaluar cavum , boca, encías, Estudio virus ES, En caso de tabaquismo, y si es
laringe, conducto auditivo CMV y toxoplasma mayor de 40 años, hacer triple
externo y tiroides endoscopia: cavum , esófago
y bronquios para descartar un
carcinoma epidermoide
Axilares Evaluar celulitis, enfermedad Examinar la mama Descartar la presencia de
por arañazo de gato o con mamografía un melanoma en el miembro
tularemia superior o en el tronco
Supraclaviculares Realizar biopsia de entrada. Excluir un melanoma
e inguinales Evaluar celulitis o del miembro inferior
enfermedades venéreas
CAPÍTULO 83 Síndromes adenomegá licos. Semiología del bazo

Inmunológica: de eliminación de microorganis-


mos y partículas antigénicas captadas y fagocita-
das por las células macrofágicas, y de generación
de respuestas hormonales y celulares. Es funda-
mental para la síntesis de IgM.
Hemo caterética : de secuestro y eliminación
de células sanguíneas normales senescentes,
o anormales y defectuosas . Esta función es de
particular importancia para los hematíes, ya
pulpa
esplénica
que el bazo es capaz de reconocer los hematíes
que tienen alteradas sus propiedades físicas, o
inducir esta alteración al extraer del hematíe,
sin destruirlo, partículas o inclusiones rígidas
(cuerpos de Heinz, cuerpos de Howell-Jolly).
En uno y otro caso, el hematíe pierde su capa-
cidad de deformación, necesaria para atravesar
Bazo-- la red sinusoidal, y queda secuestrado en un
ambiente hipóxico , hipoglucémico y acidótico,
que favorece su fagocitosis y destrucción. Con
respecto a los leucocitos , debe contemplarse
Figura Loca lización y estructura del bazo.
también un aumento de la marginación en los
vasos esplénicos, así como una acumulación de
las plaquetas.
BAZO Hematopoyética: es normal en el feto hasta el
quinto mes, pero puede producirse en el adulto
como un fenómeno patológico en la metaplasia
RECUERDO ANATOMOFISIOLÓGICO mieloide.
El bazo es un órgano impar situado en la cavidad Reguladora de la circulación portal: el bazo ac-
abdominal, en el hipocondrio izquierdo. Su límite túa como una esponja capaz de almacenar hasta
superior es el diafragma y el inferior no rebasa las 1,5 1 de sangre. En situaciones de hipovolemia
últimas costillas. Tiene un aspecto ovalado y su eje y bajo el efecto de la noradrenalina, el bazo,
mayor se dirige de arriba hacia abajo, de fuera hacia tras un fenómeno de vasoconstricción, puede
dentro y de atrás hacia delante y tiene un tamaño de verter a la circulación un amplio volumen de
unos 12 cm de largo y 7 cm de ancho. Como detalle reserva.
anatómico característico, presenta una escotadura en
su cara anterior, lo que nos permite reconocerlo en
la palpación abdominal, cuando está aumentado de EXPLORACIÓN
tamaño.
Por su estructura linforreticular, el bazo pertenece Exploración clínica
al sistema linfático. Desde el punto de vista macroscó- La palpación abdominal, con el paciente en decúbito
pico destacan tres componentes fundamentales (Fig. supino o en decúbito lateral derecho , permite detec-
83-4): a) una cápsula conjuntiva que lo recubre, y de tar desde pequeñas puntas de bazo hasta una esple-
la que salen las trabéculas conectivas por las que tran- nomegalia que puede llegar hasta la fosa ilíaca. Todo
sitan nervios , vasos linfáticos y las ramificaciones de bazo palpable indica la existencia de esplenomega-
la arteria y la vena esplénica; b) la pulpa blanca; c) la lia, y puede considerarse patológico, con excepción
pulpa roja . La pulpa blanca consiste en una serie de de los desplazamientos que puede sufrir el bazo por
nódulos (folículos de Malpighi), formados por linfo- el crecimiento de masas vecinas . Hay una pequeña
citos B, con centros claros germinales. De las arterias proporción de individuos jóvenes en los que la esple-
trabeculares salen arterias centrales, envueltas en un nomegalia no tiene significación patológica aparente.
manguito de linfocitos T; de ellas parten las arterias La relación entre el tamaño adquirido por el bazo y el
foliculares, que atraviesan los corpúsculos de Mal- proceso patológico subyacente se muestra en la Tabla
pighi). La pulpa roja está formada por los sinusoides 83-3.
esplénicos, una intrincada red vascular donde vierten Ante una masa palpable en el hipocondrio iz-
su sangre las arterias penicilares, ramas terminales de quierdo debe establecerse el diagnóstico diferencial
las arterias centrales. La red vascular aparece rodeada con nefromegalias, tumores de cola del páncreas o
de un tejido laxo integrado por células reticulares y retroperitoneales. Con excepción de los quistes y los
macrófagos (cordones de Billroth) . El bazo tiene una tumores del bazo, que pueden alterar su conforma-
estructura de filtro sanguíneo, lo que le permite desa- ción normal, las demás causas de esplenomegalia de-
705
rrollar sus funciones, que son las siguientes: terminan un crecimiento uniforme del bazo, es decir,
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Exploraciones complementarias
Están destinadas a confirmar la esplenomegalia y a
Tabla Aproximación diagnóstica obtener datos complementarios que orienten hacia
previa a la biopsia ganglionar en un diagnóstico etiológico. La radiografía simple de
pacientes con adenopatías localizadas abdomen puede dibujar bien la silueta esplénica. La
ecografía permite medir el tamaño del bazo y rati-
Centímetros ficar, de una forma sencilla, la sospecha de esple-
bajo el Diagnóstico probable nomegalia. Aporta también datos sobre la homoge-
reborde costal neidad o heterogeneidad del tejido esplénico, que
pueden ser confirmadas por la mayor resolución de
1-4 cm Infección
la TC.
Hipersensibilidad
El estudio con isótopos radiactivos (Tecnecio 99)
Lupus eritematoso
sistémico permite obtener una gammagrafía que confirme la es-
plenomegalia, y mostrar un aumento de la actividad
Endocarditis bacteriana
del sistema reticuloendotelial.
4-8cm Cirrosis hepática Cuando la esplenomegalia es la única manifes-
Leucemias agudas tación de enfermedad, la aproximación al diagnós-
Púrpura trombocitopénica tico etiológico precisa de un estudio histológico. La
autoinmune punción-aspiración esplénica no suele realizarse,
Esferocitosis ya que puede complicarse con la rotura del bazo y
Policitemia vera el consiguiente shock hipovolémico, riesgo que dis-
Tesaurismosis minuye si se realiza bajo control laparoscópico que
Sarcoidosis además de añadir información del aspecto macros-
Metástasis cópico, ofrece mayor seguridad en la punción. La
esplenectomía puede plantearse en ocasiones para
Más de 8 cm Leucemia mieloide crónica obtener un diagnóstico de certeza.
Leucemia linfoide crónica
Linfomas
Tricoleucemia PATOLOGÍA GENERAL DEL BAZO
Mielofibrosis
Paludismo Las enfermedades del bazo se manifiestan por un au-
mento del tamaño del mismo, que se conoce como
esplenomegalia. Desde el punto de vista funcional , se
puede distinguir entre el aumento o la disminución
de sus funciones: hiperesplenismo o hipoesplenismo.

conservando sus características anatómicas, lo que


permite buscar en la exploración una serie de detalles ESPLENOMEGALIA
con interés semiológico. Así pues, si la masa palpable
Mecanismo y causas
es el bazo:
El aumento del tamaño del bazo se produce por el
Se movilizará con la respiración.
aumento de tamaño de sus elementos constituyentes:
Su eje mayor estará dirigido hacia abajo y aden-
células y sangre. Puede deberse a:
tro.
Puede palparse un borde anterior abollonado. Proliferación reactiva de linfocitos y macrófa-
Anula el área de timpanismo de Traube. gos. El estímulo antigénico produce hiperplasia
de los folículos linfoides y formación de centros
A diferencia de las nefromegalias, en casos de es-
germinales que reflejan la generación de linfoci-
plenomegalia gigante es difícil introducir la mano que
tos T y B. Este es el mecanismo de la esplenome-
palpa por debajo de las últimas costillas. La desapari-
galia que ocurre en:
ción del timpanismo del espacio de Traube suele ser
indicio de esplenomegalia, aunque a veces se debe a Enfermedades infecciosas, sobre todo las pro-
estados de repleción gástrica o a un desplazamiento ducidas por agentes con especial tropismo por
extrínseco de la cámara gástrica. La superficie de pal- las células del sistema mononuclear: fiebre
pación es lisa y generalmente indolora. tifoidea, brucelosis, leishmaniasis, paludismo,
El aumento del volumen del bazo puede ocasionar tuberculosis, mononucleosis infecciosa y he-
molestias o sensación de tensión en el hipoconsrio patitis aguda, entre otras.
izquierdo. Otras veces el dolor es más vivo o pun- Enfermedades de base autoinmune, como el
zante debido a la existencia de infartos esplénicos o lupus eritematoso sistémico, el síndrome de
inflamación de la cápsula. Felty y la enfermedad de Still.
CAPITULO 83 Síndromes adenomegálicos. Semiología del bazo

Proliferación neoplásica de linfocitos y macró- mía normaliza las citopenias secundarias al hi-
fagos: es la esplenomegalia que se aprecia en los peresplenismo.
síndromes linfoproliferativos (leucemias y linfo-
mas) o en las histiocitosis malignas. Fisiopatología
Acumulación de lípidos en los macrófagos, como
Aunque no toda esplenomegalia cursa con hiperes-
consecuencia de trastornos metabólicos congéni-
plenismo, este último es una consecuencia del creci-
tos, tesaurismosis o enfermedades de depósito,
miento del bazo. Al existir una hiperplasia de la pul-
como la de Gaucher.
pa roja, se favorece la alteración de las propiedades
Hiperplasia funcional del sistema monocito-ma- reológicas y la fagocitosis de los hematíes, dando lu-
crófago esplénico, como consecuencia del estí- gar a anemia. Con respecto a los leucocitos y las pla-
mulo continuado para la fagocitosis de hematíes quetas, los primeros pueden marginarse y retenerse
y plaquetas: anemias hemolíticas corpusculares en los sinusoides, mientras que las plaquetas pueden
o autoinmunes, o trombopenias autoinmunes. acumularse en ellos, produciéndose, respectivamen-
Hematopoyesis extramedular por aparición de te, leucopenia y trombopenia. Otro factor que puede
focos hemopoyéticos en el bazo, como conse- contribuir a la citopenia periférica es la hemodilu-
cuencia de: ción, pues al estar aumentada la cantidad de sangre
Un aumento de la demanda eritropoyética que almacenada en el territorio portal, se crea una situa-
rebasa los límites de la médula ósea, como en ción de hipovolemia eficaz; ello estimula al riñón a
los síndromes linfoproliferativos. retener sodio y agua, lo que provoca una expansión
Verdadera metaplasia, como en la metaplasia del volumen circulatorio.
mieloide agnogénica u otros síndromes mie-
loproliferati vos, en los que la médula ósea es
sustituida por tejido fibroso. HIPOESPLENISMO
Acumulación de sangre, en cualquiera de las for- Con este nombre se designa una serie de altera-
mas de los síndromes de hipertensión portal, o ciones hematológicas e inmunes que aparecen como
como consecuencia de una alteración hemodiná- consecuencia de la ausencia congénita del bazo, de
mica que determina una situación de hiperaflu- su extirpación quirúrgica o de su destrucción por
jo, como en el síndrome de Banti. radioterapia o tras infartos repetidos.
Lesiones quísticas y tumorales del bazo: quistes
congénitos del bazo, quistes hidatídicos, heman- Fisiopatología
giomas, angiosarcomas y sarcomas primitivos Alteraciones hematológicas.
del bazo o tumores metastásicos de estirpe epi-
telial. En los hematíes aparecen alteraciones morfo-
Infiltración por sustancia amiloide, que produce lógicas: alteraciones de su superficie, forma
el característico aspecto macroscópico del bazo de diana (dianocitos), inclusiones (cuerpos de
en sagú (granular blancogrisáceo). Howell-Jolly) o partículas de hierro. Expresan
la pérdida de la función hemocaterética, que
retira de la circulación las células imperfectas
HIPERESPLENISMO y degranula otras.
Leucocitosis y trombocitosis transitoria, que
En una situación clínica caracterizada por: traduce el secuestro de leucocitos y plaquetas
Esplenomegalia. en el bazo, que es compensado por la médula
Citopenias sanguíneas con afectación de una, ósea, de tal forma que al faltar el bazo, esta «hi-
peractividad» hemopoyética mantiene un au-
dos o las tres series.
mento transitorio de los elementos circulantes.
Médula ósea con celularidad normal o aumen-
tada. Los elementos sanguíneos circulantes son Riesgo de infecciones graves, sobre todo las
morfológica y funcionalmente normales; en oca- provocadas por gérmenes capsulados, como el
siones, debe excluirse la agresión extraesplénica Haemophilus influenzae y el neumococo, conse-
sobre los mismos, en general anemias y trombo- cuencia de la pérdida de la fagocitosis esplénica
penias de tipo autoinmunitario. La esplenecto- y del déficit de IgM.
-l84
Síndrome hemorrágico
Vicente Vicente García, Vanesa Roldán Schilling

INTRODUCCIÓN
La hemorragia es una complicación frecuen-
te que acompaña un amplio número de
situaciones clínicas. En numerosas
ocasiones el sangrado no es atri-
buible solamente a una agresión
vascular, sino que puede ser
manifestación de un desequi-
librio del sistema hemostático.
Este sistema es un mecanismo
de defensa del organismo que
tiene varios cometidos: mante-
ner permeable la luz vascular, es-
tablecer el tapón hemostático en
caso de lesión vascular y, por úl-
timo, generar la lisis del coágulo
de fibrina en caso de obstrucción
vascular. El sistema hemostático
tiene dos compartimentos, uno
de carácter celular, integrado
fundamentalmente por pla-
quetas y endotelio, y otro de
carácter plasmático donde par-
ticipan proteínas procoagulantes
generadoras de fibrina, proteínas
inhibidoras que ejercen una regula- frecuentes. Los defectos hereditarios suelen ser oca-
ción sobre el sistema procoagulante, y sionados por una única anomalía de una proteína del
otras proteínas con función fibrinolítica. sistema de coagulación, o por un trastorno en los me-
El desequilibrio entre ellos se expresa clínicamente canismos de adhesión o agregación plaquetaria. Por
por manifestaciones antagónicas, como un síndrome el contrario, las anomalías adquiridas suelen tener
hemorrágico o un estado de hipercoagulabilidad. una fisiopatología compleja, en la que participan ge-
El síndrome hemorrágico constituye un motivo fre- neralmente los compartimentos celular y plasmático
cuente de consulta médica; en cuanto a la enferme- del sistema hemostático. La historia clínica, con una
dad tromboembólica, que es la expresión clínica del detallada exploración física, constituye la principal
estado de hipercoagulabilidad, es la causa de muerte herramienta para el estudio del síndrome hemorrági-
más importante en países occidentales. En este capí- co. La exploración biológica del sistema hemostáti-
tulo abordaremos la expresión clínica y biológica del co debe utilizarse como una ayuda complementaria
síndrome hemorrágico. que, en bastantes ocasiones, nos permitirá definir
Las diátesis hemorrágicas se clasifican en congé- con precisión el nivel y gravedad del trastorno he-
708
nitas y adquiridas, siendo las adquiridas mucho más morrágico.
CAPÍTULO 84 Síndrome hemorrágico

ASPECTOS GENERALES DEL SISTEMA plasmáticos de carácter enzimático, que tienen como
HEMOSTÁTICO objetivo último la formación de una malla de fibrina
para la consolidación del tapón plaquetario. El final
La integridad endotelial constituye el factor antitrom- del proceso tiene lugar con el paso de una proteína
bótico más importante del organismo. Cuando tiene soluble plasmática, el fibrinógeno, a una insoluble,
lugar una lesión vascular, además de producirse una la fibrina. El conjunto de reacciones enzimáticas que
vasoconstricción reactiva, se dan las circunstancias dan lugar a este fenómeno están integradas en el sis-
apropiadas para que las plaquetas interaccionen con tema de la coagulación sanguínea.
proteínas adhesivas presentes en el subendotelio vas- Con independencia de que exista o no una lesión
cular. En un primer momento, las plaquetas se adhie- vascular, determinadas proteínas plasmáticas que
ren al subendotelio por la interacción del complejo circulan de forma inactiva (zimógenos) pueden sufrir
glicoproteico lb/IX/V presente en la membrana pla- modificaciones tras recibir estímulos de activación
quetaria con el factor Von Willebrand (FvW) del su- apropiados, convirtiéndose en enzimas activas. Ello
bendotelio vascular. Esta primera interacción adhesi- las capacita para continuar una secuencia enzimática
va plaqueta-subendotelio se ve reforzada por la unión que tiene como objetivo final la generación de fibrina
adicional de otros receptores plaquetarios , como la de intravascular. Los zimógenos a los que hacemos refe-
las glicoproteínas Ia/Ila y IIb/IIIa, con el colágeno y rencia, y otras proteínas que actúan como cofactores
el fibrinógeno subendotelial, respectivamente. El fe- facilitando la secuencia enzimática, son conocidos
nómeno de adhesión plaquetaria produce, de forma como factores de coagulación.
inmediata, una transmisión de señal intracelular que
condiciona un cambio en la conformación del recep- NOMENCLATURA DE LOS FACTORES
tor plaquetario Ilb/IIIa, dando lugar a la activación
plaquetaria que propicia la interacción de las plaque-
DE COAGULACIÓN SANGUÍNEA
tas con proteínas plasmáticas como fibrinógeno , FvW, La Fig. 84-1 muestra una representación esquemáti-
fibronectina y vitronectina. A su vez, esas interaccio- ca del sistema clásico de la coagulación sanguínea.
nes facilitan la unión plaqueta-plaqueta que conlleva La designación de los factores de coagulación con un
al fenómeno de activación, secreción y agregación número romano indica el orden cronológico en que
plaquetaria, con la formación final del tapón plaque- fueron descubiertos, y no se debe confundir con su
tario . orden de participación en la reacción enzimática. El
En paralelo a esos acontecimientos de carácter factor III corresponde al factor tisular (FT); el factor
eminentemente celular, se producen otros fenómenos IV se identifica con los iones calcio, imprescindi-

VÍA INTRÍNSECA VÍA EXTRÍNSECA


Sistemas de contacto Factor tisular
( Kg, Pk, FXII, FXI)

IX
\ IX a Vlla
I VII

VIiia~ /

1 VÍA FINAL COMÚN


X Xa

11 ------+ Trombina (lla)



Fibrinógeno (1) Fibrina (la)

i FXllla
Fibrina estabilizada

Figura Representación esquemática del sistema enzi mático de la coagu lación sa nguínea. Pk: preca licreí-
na. Kg: Kin inógeno. 709
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Tabla Coagulopatías congénitas


Prevalencia
Deficiencia Tipo de herencia
(x 106)
Fibrinógeno
Afibrinogenemia Autosómica recesiva/intermedia. < 0,5
Hipofibrinogenemia Autosómica recesiva/dominante. < 0,5
Disfibrinogenemia Autosómica dominante, en raros casos recesiva. < 0,5
Protrombina (FIi) Autosómica recesiva incompleta. < 0,5
Proacelerina (FV) Autosómica recesiva incompleta. < 0,5
FVII Autosómica intermedia. < 0,5
FVIII Recesivo ligado al sexo. 60-100
FIX Recesivo ligado al sexo. 10-20
FX Autosómica recesiva incompleta. < 0,5
FXI Autosómica recesiva incompleta.
FXII Autosómica recesiva. ?
FXIII Autosómica recesiva/recesiva incompleta < 0,5
Factor de Von Willebrand Autosómica dominante/recesiva. 1O 000-30 000
Precalicreína Autosómica dominante/recesiva. ?
Kininógenos de alto y bajo peso molecular Autosómica recesiva. ?
Deficiencias combinadas de factores
FV + FVIII Autosómica recesiva. < 0,5
FIi + FVII + FIX + FX Autosómica recesiva. < 0,5

bles para que tenga lugar la secuencia del sistema guínea. El factor tisular, componente fundamental de
de coagulación y cuya presencia en el organismo es la vía extrínseca, es el punto clave en la iniciación del
obligada. Con el nombre de factor VI se designó una sistema de la coagulación sanguínea. La diferencia es-
proteína cuya existencia no pudo confirmarse poste- tablecida de las dos vías de activación del sistema de
riormente. Cuando queremos representar la forma ac- la coagulación sanguínea se ha convertido más en un
tivada de un factor, se coloca una «a» a la derecha del hecho académico que real. Las dos vías confluyen en
número romano: por ejemplo, FXa. La mayor parte de un camino único para generar trombina, que es cono-
los factores de coagulación han sido descubiertos al cido como vía final común. Para que vaya adelante la
caracterizar el elemento responsable de una diátesis cascada enzimática es necesaria la presencia de cal-
hemorrágica congénita (Tabla 84-1). cio y fosfolípidos (Fig. 84-1).
La activación de la vía extrínseca de coagulación
se produce cuando el factor tisular es secretado por
SISTEMA DE LA COAGULACIÓN SANGUÍNEA distintos elementos celulares (como monocitos, pro-
mielocitos, células tumorales , etc.) o liberado por
La formación del trombo obliga al paso de una proteí- lesión celular, y entra en contacto con el contenido
na soluble del plasma como el fibrinógeno a una ma- plasmático.
lla de fibrina. Ello está condicionado por la genera- La activación de la vía intrínseca de la coagula-
ción plasmática de una enzima serinproteasa de gran ción sanguínea se produce cuando la sangre entra en
actividad, conocida como trombina. La trombina, que contacto con superficies extrañas, por la presencia de
habitualmente no se encuentra en el plasma, circula determinadas sustancias (por ejemplo, endotoxinas),
de forma inerte como protrombina. El estímulo res- o por otros mecanismos capaces de desencadenar la
ponsable de la generación de trombina puede origi- secuencia del sistema enzimático de coagulación al
narse por la activación de, al menos, dos secuencias activar una serie de factores identificados como pro-
o vías enzimáticas, conocidas clásicamente como sis- teínas de la fase de contacto. La activación tanto del
710
temas extrínseco e intrínseco de la coagulación san- sistema intrínseco como del extrínseco contribuye a
CAPITULO 84 Síndrome hemorrágico

la generación del complejo protrombinasa, siguien- tema hemostático se encuentre en el compartimento


do la activación por la «vía final común» (Fig. 84-1). celular (endotelio/subendotelio y plaquetas) o en el
que tendrá como destino la generación de trombina y plasmático (factores de la coagulación y fibrinólisis).
la consecuente formación de fibrina. Finalmente, la La alteración del compartimento celular se expresa
participación del FXIII facilita la estabilización de habitualmente por una tendencia hemorrágica en la
la fibrina formada . La antitrombina y el sistema de la piel y las mucosas, mientras que las alteraciones de
proteina C son los dos mecanismos inhibidores más los factores plasmáticos (anomalías habitualmente
importantes con función reguladora del sistema de la conocidas como coagulopatías), aparecen como he-
coagulación sanguínea. En el próximo capítulo hare- morragias musculares o articulares. A continuación
mos referencia a estas proteínas inhibidoras. haremos referencia a los términos que habitualmente
El mecanismo enzimático encargado de mantener se utilizan en la práctica clínica para definir las ma-
permeable el sistema vascular, «limpiando » la fibrina nifestaciones más frecuentes (Fig. 84-2).
que se deposita en los vasos, es el sistema fibrinolí- Las petequias consisten en pequeñas manchas ro-
tico. Este sistema es mucho más sencillo que el de jas, como cabezas de alfiler, diseminadas por el cuer-
la coagulación sanguínea. Su activación a través de po. Su presencia denota extravasación de sangre de
diferentes proteínas activadoras, especialmente del vasos sanguíneos intactos. Las petequias se relacionan
factor activador del plasminógeno, que se sintetiza con una situación de trombopenia , ya que el número
preferentemente en el endotelio vascular, ocasiona el normal de plaquetas es crucial para mantener la in-
paso del zimógemo plasminógeno a su forma activa tegridad vascular. Cuando las petequias confluyen,
plasmina, originando la lisis de fibrina. la lesión se denomina púrpura. Su etiología también
se relaciona con la trombopenia. La intensidad de las
lesiones no guarda relación con el número de plaque-
EXPRESIÓN CLÍNICA DE LAS DIÁTESIS tas circulantes; no obstante, las lesiones más intensas
HEMORRÁGICAS aparecen cuando el recuento de plaquetas es inferior
a 20 x 109/1. En determinadas situaciones en que hay
SEMIOLOGÍA patología de la pared vascular, pueden surgir lesiones
en la piel similares a las que aparecen acompañando
En numerosas ocasiones el tipo de manifestaciones a la trombopenia en ausencia de esta. Estos cuadros
hemorrágicas depende de que la alteración del sis- se conocen como púrpuras vasculares. Muchos de

Figura A. Gingivorragia. B. Petequ ias en extremidad superi or desencadenadas por presión en el antebra- -----=rff
zo. C. Cuad ro purpúrico hemorrágico. D. Flictenas hemorrágicas en cavidad oral.
Semiología y físiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

ellos tienen una caraclc-Jrística semiológica importante trastornos clínicos. Siempre hay que plantear si el
que los diferencia de los estados trornbopénicos; con- trastorno lrnmorrágico está relacionado con un foclor
siste en una ligera protrusión de la lesión en la piel local, como úlcera péptica o hemorroides, o si, por el
de mmrnra que se puede decir que buena parle de las contrario, nos encontramos ante un dejeclo hemostcí-
púrpuras vasculares «se palpan)), a diferencia ele las tico generalizado.
secundarias a trombopenias, que solamente «se ven)). Se debe ponderar adecuadamonte lo gmvedad
La equimosis corresponde a un área limitada, más del cuadro hemorrágico. Algunos enfermos, al estar
o mfllrns extensa, de sangre extravasada proveniente habituados desde hace aüos a una lenc!Emcia hemo-
de un vaso como resultado de una lesión traumática. rrágica (por ejemplo mujeres con menorragia o pm-
La equimosis suele aparecer en las anomalías vascu- sonas con epistaxis frecmnlles desde la inl'anc:ia por
lares y en los trastornos plaquetarios. padecer una enfermedad ele Von Willebrand). po-
El hematoma es la expresión de una gran equimo- drían minimizar la existencía do esta complicación.
sis que infiltra el 1ejido subcutáneo o el músculo. y En cambio, otros tiErndon a amplificar Ja manifesta-
qm, produce una deformidad de la región anatómica. ción hernornígica. como en ocasiones se comprueba
Es normal que la piel adquiera una coloración más ante pacientes que refieren un sangrado para ellos
oscura. Cuando la hemorragia ocupo uno covíclod or- excesivo, y que debe entenderse como normal en si-
ticulw; do Jugar n la henwrtrosis. La hemarlrosis es- tuaciones traumáticas como la extracción dentaria o
pont{mea es siempre anormal. y us un buen indicador la amigclnlectomía. En tocios los casos es irn portan-
de una coagulopatía severa. te n,rificar el comportamiento del sistema hemos-
Las hemorragias en las mucosas (como episto:ds o tálico ante situac:ionos que suponen un trauma. Es
hemorragia nasal, p,ingivorragia o hemorragia gingi- muy importante preguntar a (H;tos enfermos por la
val, menormgiu o hemorragia uterina prolongada, y la existencia de complicacionos hernorrágicas relacio-
hemorragia gastrointesinal) pueden traducir, además nadas con intervonciones quirúrgicas previas, par-
de una lesión loc:al. una alteración vascular, trom- tos, amigdalectomía, extracciones dentarias. etc. En
bocito¡rnuia o trombucitopatfo, o la existencia de la todos eslos caso;; os importan to obtuner información
enfornrndacl cfo Von Willebrand. La hematuria (sangre lo más exacta posible acerca do la duración de la
en orina) puede aparecor en múltiples situaciones no hemorragia y, en su caso, de los procedimientos ex-
rnlacionadas con una altoración del sistoma hemos- traordinarios llovadus a cabo, como haber recibido
tático, como la litiasis renal y el carcinoma renal o transfusiones de sangre.
nisicnl, pero también aparece en coagulopatfos graves La eniluación c:orrecla de la hemorragia tras la ex-
como la hemofilia, y en onformos con dosis excesiva lracción de11tal nxigú conou-ll' el número y tipo de pie-
de anlicoagulanles orales. Otros tipos de hemorragia 7.llS extraídas, si se aplicó taponamiento local o sutura.
corno la hemopti.'iis o sangre en el esputo, la hc-mwte- y si fue necesario n,lvur al denl isla por el problema
nwsís o sangro un el \'Órnito, la melena o sangre dige- hemorrágico. Las oxtracciones dentarias pueden utili-
rida en las heces, y la rectorragia o sangre fresca en zarse como un bwm índict, de la situación del sistema
las heces, aunque son situaciones claram1mle patoló- hemostático, ya que el ríroa sangrante reside cm una
gicas, normalmente t iernm umi causa anatómica local, zona ósea rígida no comprimiblu. La persistencia he-
y ante ellas se clobe planlear el estudio encloscópico o morrágica después de la extracción clr1 un incisivo es
radiológico oportuno. mucho más signi!'icativa que la observada después de
extraer un molar. La ausencia de hemorragia excesiva
en difernntus extracciones dentarias sugieren la exis-
lcmcia de un buen sistema hemost::ítico.
Se debe intentar aclarnr si nos oncontnimos ante La Jocoli;wción y la cnmclel'Ízoción de los ma-
un verdodero síndrome hernorrcígico o si solamento nifestociones hemorrcígicos ayudan a establecer el
se trata de una sen.,ación de songmdo subjetiva del diagnóstico. La presencia ele lesiones purpúricas son
paciente (objetivar la tendencia a In hemorragia); si sugestivas de➔ una anomalía cuantitati\'a de las pla-
el síndrome henwrrágico es adquirido o, por el con- quetas y. en ocasiones. de lesión endotelial. En estos
tnirio, tiene un componente hereditario (estudio de casos. y en la cmfornrndad de Von Willebrancl. también
antocc-identes personales y familiares); y si la sinlo- suelen aparecer hemorragias en las mucosas, como
matología sugiere una alteración del compartimento epistaxis, gingi vorragias, menorragins y hemorragias
celular. plasmático o mixto del sistema hemostático gastrointeslinales. Las epistaxis pueden aparecer cm
(localización y caracterización de la hemorragia). personas con un sistema hemostático normal, pues en
Aclcm1ás. es preciso averiguar si oxiste una si tu ación numorosas ocasiones se debnn a erosiones locales o a
clínica acompaüan1e (estudio de posible patología de un clima excesivamente frío y seco. En estos casos la
b,1se) y aclarar la posible ingesta ele fármacos que pue- hemorragia se suc➔ le producir solamente por uno de
da explicar parcial o totalmente las manifestaciones los dos orificios nasales. En cuanto a la evaluación
hemorrágicas que presenta el enfermo. de menorragias y hemorragias gastrointestinales ais-
La hemorragia o la tencltmcia lrnrnorrágica es nna ladas. hay que tener presente que casi siempre son
712 manifestación frecuente de un amplio número de secundarias a lesiones locales. Las hemorragias sub-
CAPITULO 84 Síndrome hemorrágico

cutáneas, musculares, articulares y retroperitoneales,


y la hematuria, son frecuentes en las coagulopatías.
Si aparecen espontáneamente, se vinculan casi en Tabla Trombopatías adquiridas
su totalidad con coagulopatías congénitas graves,
especialmente con hemofilia A o B. La aparición de Trastornos no hematológicos
inhibidores espontáneos contra el factor VID de la Uremia
coagulación puede dar lugar a cuadros similares. En Hepatopatía
los casos de alteración plaquetaria, una lesión tisular Circulación extracorpórea
ocasiona una complicación hemorrágica que puede Hipotiroidismo
durar horas, pero que una vez resuelta no se suele Enfermedades del tejido conectivo
reproducir. En cambio, las complicaciones hemorrá- Síndrome de inmunodeficiencia adquirida
gicas en las coagulopatías tienden a aparecer inclu-
so horas después del episodio traumático, y pueden Trastornos hematológicos
reaparecer varios días después de finalizada la hemo- Patología de la ce// stem
rragia. Síndromes mieloproliferativo
La edad de las primeras manifestaciones hemo- Síndromes mielodisplásico
rrágicas es un dato importante para determinar el Leucemias agudas
origen congénito o adquirido de la anomalía. En los Hemoglobinuria paroxística nocturna
enfermos con trombopatías o coagulopatías graves Disproteinemia
de carácter congénito, las primeras manifestaciones Mieloma múltiple
hemorrágicas se presentan en los primeros meses Macroglobulinemia de Waldenstrom
después del nacimiento, y por lo general se mantie- Púrpura trombopénica idiopática
nen durante toda la vida. Las deficiencias leves o in-
cluso moderadas pueden pasar inadvertidas durante Fármacos
la infancia, y ponerse de manifiesto en situaciones Antiagregantes
traumáticas como una intervención quirúrgica o ex- Antiinflamatorios
tracciones dentarias. En esos casos se debe estable- lndometacina
cer si el defecto es congénito o adquirido; para ello Sulfinpirazona
sirve de ayuda conocer con detalle los antecedentes AAS
hemorrágicos de los familiares del enfermo. El tipo Antibióticos
de herencia de las distintas coagulopatías congénitas Penicilinas y cefalosporinas
se refleja en la Tabla 84-1. Hay que tener presente que Nitrofurantoína
la existencia de antecedentes hemorrágicos en dife- Dextrano
rentes miembros de una familia es un dato de gran
valor para establecer el diagnóstico de una anomalía
congénita. Ahora bien, una historia sin antecedentes
familiares de hemorragias no excluye la posibilidad
de un trastorno congénito, especialmente si el nú-
mero de miembros familiares de los que se consigue
plaquetaria. En otras ocasiones puede aparecer una
información es reducido.
vasculitis medicamentosa, como sucede a veces con
En la valoración de los procesos hemorrágicos es
la administración de alopurinol, sulfamidas y altas
importante tener en cuenta la presencia de enferme-
dosis de arabinósido de citosina. La sobredosis de
dades de base o situaciones clínicas específicas. Las
anticoagulantes orales ocasiona complicaciones ca-
hepatopatías, la insuficiencia renal, el hipotiroidismo, racterísticas de una coagulopatía grave: hematuria,
las enfermedades del tejido conectivo, la circulación
hematomas y hemorragias musculares o en el sistema
extracorpórea, y los síndrnmes mieloproliferativos y
nervioso central.
mielodisplásicos, entre otros, condicionan, por me-
canismos diferentes y complejos, cierta propensión
a las hemorragias. La Tabla 84-2 muestra diferentes SÍNDROMES HEMORRÁGICOS CONGÉNITOS
situaciones clínicas que pueden ir acompañadas de
alteraciones funcionales de las plaquetas. Las diátesis hemorrágicas congénitas tienen una pre-
La anamnesis debe incluir una referencia detallada valencia baja (Tabla 84-1). Las coagulopatías reflejan,
al uso de fármacos y a la posible exposición a agentes en la mayor parte de los casos, la anomalía cuanti-
tóxicos. Existe una larga relación de medicamentos tativa o cualitativa de una proteína implicada en
cuya administración se asocia con trombopenia y el sistema hemostático, habiéndose encontrado un
púrpura. La aspirina y otros antiagregantes plaqueta- número importantes de diferentes anomalías mole-
rios, la mayor parte de los antiinflamatorios no este- culares responsable de cada coagulopatía congénita.
roideos y otros muchos fármacos alteran, por diferen- Excepcionalmente, la manifestación hemorrágica que
713
te mecanismo y con intensidad variable, la función acompaña a las coagulopatías congénitas puede tra-
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

ducir un defecto múltiple de factores de coagulación. De todas las coagulopatías de carácter hereditario,
Las trombo palías son expresión de alteración del fun- las nuís frecuentes y posiblemente las mejor caracte-
cionalismo plaquetario en uno ele los siguientes ni- rizadas son las que tradicionalmm1ie se han conoci-
veles: adhesión al subenclotelio, activación, secreción do como hemofilias A y B, así como la enfermedad
y/o agregélC:ión plaquetaria o defecto de interacción de Von \Villebmnd. La hemofilia A es expresión de
con las proteínas de la coagulación (Tabla 84-3). una anomalía congénita del factor VIII (FVIII) de la
coagulación sanguínea. La hemofilia B correspon-
de a un déficit del factor IX. La enformedad de Von
Willebrand manifiesta una alteración cuantitativa o
cualitativa ele una proteína que ejerce un papel pre-
ponderante en el mecanismo de adhesión plaquetaria
Tabla Clasificación funcional
al suhendotelio vascular. conocida como factor Von
de las trombopatías congénitas Willebrand (FvW). que también tiene el papel dn
Defectos de adhesión transporte plasmático del FVIII. Las hemofilias A y
plaqueta-subendotelio B presentan un patrón hereditario recesivo ligado al
Síndrome de Bernard-Soulier (anomalía sexo, hecho que explica que solamente padezcan la
GPlb/lX). enformeclad los varones. mientras que las mujeres son
Anomalía de la glicoproteína VI (defecto de portadoras de la doficinncia. El rosto de las coagulo-
adhesión al colágeno). palías congénitas se heredan de forma dominante o
Anomalía de las glicoproteínas la-lla recesiva. residiendo el error genético cm un autosoma;
(defecto de adhesión al colágeno). por tanto, el defecto puede darse tanto en los varones
Defectos de activación e interacción corno en las mujeres.
plaqueta ria Excepto ¡m las deficíencicrn congénitas de la moyor
Tromboastenia de Glanzmann (anomalía parte de los prolehws implicmlas en lo fase de con-
GP llb/llla). tacto (FXII. precalicreína, cininógenos de alto y bajo
Defectos de receptores de los inductores de peso molecular) y en un buun mímoro de nltnraciones
agregación. del fibrinógeno (hipo y disfíbrinogenemias), que cur-
Alteración del receptor adrenérgico. san sin rnanifostaciones clínicas. el rasgo que define
Alteración del receptor de tromboxano A2. las coagulopatfos congénitas ns la hemorragia. Los
Defectos de secreción plaquetaria
síntomas pueden aparocor en los primeros meses do
Anomalía de gránulos plaquetarios (storage
\·ida coincidiendo con algún pequeño trauma, antu el
pool disease. SPD). que se produce una respuesta hemorrágica. principal-
Deficiencia de los gránulos u (síndrome de mnnte cm forma do hematoma, exagerada respecto a la
la plaqueta gris). causa responsable. La localización de la hemorragia
Deficiencia de los gránulos o. os generalmente nrnscular o articular, y en ocasiones
Deficiencia de los gránulos n y o. nn el sistema norvioso contral. En general. la frecuen-
cia e inttmsidad do] cuadro hemorrágico se relacio-
Anomalías en la vía metabólica del ácido
nan con los niveles funcionales circulantes de la pro-
araquidónico
tdna deficitaria. En las homofilias A y 13 si los niveles
Deficiencia de la ciclooxigenasa.
do los factores son indntectables (< 1 '¼,). se clasifica
Deficiencia de la tromboxano sintetasa.
como homofilia grn\·o. Los nivnlos detectables inferio-
Alteración en la liberación de ácido res al 5 % definen la forma moclllracla. Cifras entre el
araquidónico.
5 y el 50 % corrnspondnn a la forma leve. En las coa-
Otros defectos gulopatías congénitas, los miembros de una misma
Defecto en la movilización del calcio.
fornilia que presentan el dofocto plasmático suelen
tenor ni\'tJ]ns smnejantes clnl factor de coagulación. El
Defecto en el metabolismo del fosfatidil
inositol. diagnóstico\' la tipificación ele una coagulopatía con-
génita exigen ln realización clr1 cliforentes pruebas de
Defecto en la fosforílación de la miosina.
hemostasia. así como la determinación específica de
Defecto de la interacción proteínas de la actividad funcional de los factores de coagulación
coagulación-plaquetas
y la caracterización específica de la actividad funcio-
Anomalía de la interacción factores Va-Xa/ nal do los factores de coagulación y la caracterización
plaquetas.
do la anomalía genética.
Otras trombopatías Entre las lromhopatías congénitas (Tabla B4<1). el
Síndrome de Hermansky Pudlak. síndrome de Bernard-Soulier y la tromboastenia de
Síndrome de Chedíak-Higashi. Glanzmann son las más representativas por su flori-
Anomalía de May-Hegglin. da sintomatologín lrnmornígica. El síndrome de Ber-
nard-Soulier es la HXpresión de una anomalía cuan-
714
titativa o cualitativa del mayor receptor de aclhosión
CAPÍTULO 84 Síndrome hemorrágico

plaquetaria, el complejo glicoproteico Ib/IX/V, mien- zación y entrenamiento de la persona responsable de


tras que la tromboastenia de Glanzmann manifiesta su realización. Aunque suele arrojar resultados nor-
una deficiencia del principal receptor implicado en males en las distintas coagulopatías, puede ser una
el mecanismo de la agregación plaquetaria, la glico- prueba útil en el diagnóstico de alteraciones cualita-
proteína llb/Illa. A diferencia de las coagulopatías tivas plaquetarias y en el de la enfermedad de Von
congénitas, en las trombopatías hereditarias son muy Willebrand.
raras las hemorragias de localización muscular o arti- La caracterización de las trombopatías congénitas
cular; generalmente se manifiestan con episodios de exige aplicar un procedimiento específico de diag-
intensa hemorragia en las mucosas , como epistaxis, nóstico, como el estudio de la agregación plaqueta ria
gingivorragias, hemorragias del tracto gastrointes- con diferentes agonistas. La ausencia de agregación
tinal, menorragia e incluso hemorragia cerebral. En plaquetaria ante distintos inductores como el ADP, la
muchas ocasiones la menarquia constituye el punto adrenalina y el colágeno, es el rasgo que define a la
de partida de una situación permanente caracterizada tromboastenia de Glanzmann; en cambio, el síndrome
por graves complicaciones hemorrágicas. Las restan- de Bernard-Soulier se caracteriza por la falta de aglu-
tes trombopatías congénitas, aunque pueden presen- tinación ante la ristocetina con niveles plasmáticos
tar tendencia a la hemorragia, cursan con manifesta- normales de factor Van Willebrand. En la enfermedad
ciones clínicas moderadas o leves, o incluso sin ellas. de Van Willebrand también existe una aglutinación
anormal ante la ristocetina pero, a diferencia de lo
que ocurre en el síndrome de Bernard-Soulier, hay
DIAGNÓSTICO BIOLÓGICO una alteración adicional del factor Van Willebrand
DE LAS DIÁTESIS HEMORRÁGICAS del plasma. El PFA es un método que facilita el diag-
nóstico de estos cuadros, estudiando la adhesión pla-
La información que se obtiene por medio de la histo- quetaria a filtros específicos recubiertos de proteínas
ria clínica es la de mayor valor para orientar el diag- con capacidad adhesiva.
nóstico de una diátesis hemorrágica. Se debe intentar Los estudios de agregación plaquetaria serán tam-
establecer si el defecto es localizado o generalizado, bién útiles para la caracterización de otras trombopa-
congénito o adquirido, expresión de un trastorno del tías , como la enfermedad de almacenamiento plaque-
compartimento celular, plasmático o mixto; también tario (storage pool disease, SPD), que se distingue por
se debe intentar precisar la naturaleza y grado de la la ausencia de segunda onda de agregación plaqueta-
anomalía. La confirmación diagnóstica quedará esta- ria utilizando como agonistas ADP y adrenalina. Este
blecida con la realización de las pruebas de hemos- hecho también se observa en ciertas trombopatías
tasia. adquiridas, como las que se presentan en todas las
El recuento plaquetario, el análisis del frotis de personas que están en tratamiento con ácido acetil-
sangre periférica y el tiempo de hemorragia son las salicílico.
primeras pruebas que hay que realizar de forma ruti- En los últimos años se han incorporado técnicas que
naria ante la sospecha de una anomalía plaquetaria. identifican antígenos de superficie celular utilizando
El valor normal de plaquetas oscila entre 150-400 x la citometría de flujo. Se trata de técnicas diagnósticas
10 9 /1. Por encima de 50 x 10 9 /l no suelen presentar- rápidas, seguras y sencillas, que permiten identificar
se manifestaciones hemorrágicas importantes; por pacientes con anomalías de receptores plaquetarios,
debajo de esta cifra el riesgo se incrementa, aunque como ocurre en la tromboastenia de Glanzmann y en
no existe una correlación entre el número de plaque- el síndrome de Bernard-Soulier. Además, las técnicas
tas circulantes y la presencia o la intensidad de las de citometría pueden detectar enfermedades de alma-
manifestaciones hemorrágicas. La detección de una cenamiento plaquetario usando la mepacrina como
trombopenia exige repetir el recuento con otro anti- marcador de gránulos celulares. En estos casos, la mi-
coagulante, como el citrato trisódico o la heparina , croscopia electrónica es fundamental para establecer
y examinar el frotis de sangre periférica. De esta for- el diagnóstico definitivo.
ma se descartará la pseudotrombocitopenia debida al Las pruebas sistemáticas de coagulación están di-
EDTA, anticoagulante que motiva aglutinación pla- señadas para detectar anomalías en los factores pro-
quetaria in vitro. Dicha circunstancia es responsable coagulantes que participan en las vías enzimáticas de
de hasta el 2 % de las trombopenias observadas en la coagulación sanguínea. Entre estas pruebas figuran
enfermos hospitalizados. El análisis del frotis facili- los tiempos de tromboplastina parcial activada, pro-
tará la identificación de los agregados plaquetarios trombina y trombina (Tabla 84-4). La correcta realiza-
y también la de plaquetas que tienen un volumen ción e interpretación de las pruebas de coagulación
aumentado, como ocurre invariablemente en el sín- exige una cuidadosa extracción sanguínea y la mezcla
drome de Bernard-Soulier y en un número amplio inmediata de la sangre con anticoagulante citrato en
y poco caracterizado de anomalías conocidas como la proporción adecuada.
megatrombocitopenias. El tiempo de tromboplastina parcial activado
El tiempo de hemorragia, también conocido como (TTPA) se realiza añadiendo al plasma un activador
715
tiempo de sangría, es una técnica que exige estandari- de la fase de contacto que inicie la reacción de la vía
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

míforo o recombinanto, enriquecido con calcio. La


presencia de factor tisular ac1ivarú al FVIL que a su
Tabla Interpretación de las vez activaní al FX siguiendo la secuencia clu la vía
pruebas sistemáticas de coagulación final común de la coagulación sHoguínea. Un tiem-
po de protrombina anormal sugiere una deficiencia
Prolongación aislada del tiempo de cln alguno de los siguientes factores: VII, X. V. II o fi-
tromboplastina parcial activada (TTPA) brinógeno. Dado que estos factores de coagulación. a
Con historia personal o familiar hemorrágica excepción dol factor V. se sintetizan preferentemente
Hemofilia A en el hígado, el tiempo do protrombina es una pnrnba
Hemofilia B especialmente➔ útil y s,rncilla para la detocción y se-
Déficit de FXI guimiento de la insuficiencia hepática.
lnhibidor adquirido anti-FVIII El tiempo de trombina se realiza afiadicmdo trom-
Sin historia personal y familiar hemorrágica bina directamente al plasma. Su prolongación refleja
Déficit de FXII anomalías cuantitativas o cualitativas del fibrinóge-
Déficit de precalicreína no, la existencia de sustancürn que impiden la acción
Déficit de kininógeno do la trombina sobrEJ su sustrato, o un trastorno nn
Anticoagulante lúpico la polimerización de la fibrina. como en los casos de
Prolongación del TTPA y del tiempo presencia de heparina n ele productos ele degradación
de sangría clul fibrinógeno.
Enfermedad de Von Willebrand En muchas ocasiones. el dato necesario para diag-
nosticar un trastorno congÁnitn de coagu !ación es la
Prolongación del TTPA y el tiempo closificAción de la actividad funcional de los factores
de protrombina (TP) de coagulación. bien por métodos coagulométricos o
Deficiencia de uno o más de los siguientes por sustratos cromogénicos. Además. la exclusión de
factores: Fil. FV, FX y FI anomalías moleculares en la mavor parte du las coa-
Insuficiencia hepática gulopatías congÁnitas y en algunas adquiridas, exige
Antivitaminas K (p. ej .• acenocumarol) investigar el contenido antigéníco de lo proteína cfr-
Tratamiento fibrinolítico culrmte. bien por mModos de in111unoprecipitacíón o
Coagulación intravascular diseminada
por el método RLISA. La dnterminacíón del tiempo
Heparina
de protrombina utilizando trornboplastina chi distinta
Prolongación aislada del tiempo procedencia es du utilidad on la detección y caracteri-
de protrombina zación dn variantos rnoluculares del FIX y FVIL
Deficiencia de FVII El diagnóstico corrocto de In cmfermmlad de Von
Willebrand prncisa. ademüs do la rnalízacíón de las
Prolongación del tiempo de trombina
pruebas rutinarias ya comentadas, la dosificación de
Heparina
la actividad funcional dd FVITL el estudio de agluti-
Hipofibrinogenemia/disfibrinogenemia
nación plaquetaria con ristocntinn v la delnrminación
Coagulación intravascular diseminada
antig{!nica y funcional del faclor Von Willebrand. El
Hepatopatía
estudio dn la odhesión plaquetoria a unos filtros de-
Tratamiento fibrinolítico
terminados en la pruehn PFA ayuda tambión al diag-
Pruebas rutinarias normales con historia nóstico. La caracterización definitiva del sub1ipo du
y antecedentes hemorrágicos enformeclad se Jlevaní a cabo identificando la estruc-
Sospecha de deficiencia de FXIII tura multim6rica dul FvvV.
Sospecha de deficiencia de (X2-antiplasmina La idontificación do un inhihidor círculcmte en el
plwmw so pone de manifiesto cuando el tiempo de
tromboplastina parcial activada del enfermo no se
corrige tras la adición ck, plasma normal. después do
un periodo do incubación de una o dos lloras a :3TC.
intrínseca, como el caolín, en presencia de fosfolípi- La detección de producto.e; do degradación del fi-
dos y calcio. Esta pnrnba explorará toda la vía intrín- brinógeno/fibrina. junto con otros parámetros ya co-
seca y la vía final común. Los valores normales no mentados, especialmente los nivolus ele fibrinógeno,
excluyen una deficiencia de los factores VII y XIII. puede ser útil cm el estudio de la coagulación intra-
El liempo de protrombína su realiza aüadiundo vascular disom inacla o de los estados de hí¡rnrfibri-
al plasma un extracto tisular (factor tisular), ele ma- nólisis.

716
-185
Síndrome de hipercoagulabilidad.
Enfermedad tromboembólica

INTRODUCCIÓN
El término hipercoagulabilidad ha sido emplea-
do para describir un desorden del sistema
hemostático que condiciona una predis-
posición para formar coágulos, favo-
reciendo el desarrollo de eventos
trombóticos. Las causas responsa-
bles son muy numerosas , y entre
ellas es posible diferenciar unas
de carácter hereditario (trombofilia
hereditaria) y otras, generalmente de
patogenia compleja, que son adqui-
ridas. En cualquier caso, la trombosis
es el producto final de una comple-
ja interacción de distintos factores ;
de ahí la dificultad para definir con
precisión su base fisiopatológica. La
enfermedad tromboembólica es la
primera causa de muerte en los paí-
ses occidentales.

MECANISMOS REGULADORES
DE LA COAGULACIÓN teasas , principalmente los factores Xa y Ila
SANGUÍNEA (trombina). Es el anticoagulante natural más
importante, y su papel se ve extraordinariamente
Como hemos visto en el capítulo anterior, el potenciado en presencia de la heparina.
sistema hemostático es un mecanismo de defensa del La Proteína C es una glucoproteína vitamina
organismo cuya finalidad es mantener la integridad K-dependiente, de síntesis mayoritariamente he-
del árbol vascular. Para que la activación del sistema pática, que cuando se activa se transforma en PC
hemostático quede limitada y su papel sea protector y activada (PCa), y que ejerce una función anticoa-
no lesivo para el organismo, disponemos de una serie gulante al inhibir los factores Va y Villa. La PC es
de inhibidores fisio lógicos de la coagulación. Los in- activada en la pared vascular por la trombina en
hibidores más importantes son la antitrombina (AT), presencia de la trombomodulina (glucoproteína
la proteína C (PC), la proteína S (PS) y el inhibidor estructural de membrana de la célula endotelial).
de la vía extrínseca o inhibidor del factor tisular (Fig.
La Proteína S actúa como cofactor de la PC, ya
85 -1).
que favorece la interacción de la PC con las su-
La antitrombina es una molécula de síntesis perficies celulares. La PS se encuentra unida en ~
hepática cuya finalidad es inhibir distintas serinpro- el plasma a una proteína del sistema del comple-
Semiología y fisiopatolog ía de la sangre y órganos hematopoyéticos

Endotelio

Endotelio

Figura Contro l del sistema de coagulación por sus inhi bidores naturales: antitromb in a (AT) y los inhib ido-
res implicados en el sistema de la proteína C. TM: trombomodulina . PS: proteína S. PC: proteína CtPA: activador
tisu lar del plasminógeno. uPA: activador del plasmi nógeno tipo uroqu inasa. PA l-1: inhibidor del activador del
p lasm inógeno 1. TFP1: inhibidor del factor tisu lar. FT: factor tisu lar. Fg: fibrinógeno. PK: preca l icreína. k: ca li-
creína .

mento, el factor C4bP, y únicamente su fracción La plasmina resultante de la activación del plasminó-
libre es eficaz desde el punto de vista hemostá- geno tiene capacidad lítica principalmente sobre el
tico. fibrinógeno y sobre la fibrina , generando así los deno-
El inhibidor de la vía extrínseca tiene como mi- minados productos de degradación del fibrinógeno y
sión bloquear al factor Vlla unido al factor tisular de la fibrina .
y al factor Xa. La capacidad de activación de la fibrinólisis por la
conocida «vía intrínseca de activación del plasminó-
geno», que implica a la fase de contacto de la coagu-
SISTEMA FIBRINOLÍTICO lación sanguínea (factor XII, kalicreína y cininógeno
de alto peso molecular), es escasa. La principal acti-
Una vez establecido el trombo , el organismo cuenta vación fisiológica del plasminógeno viene dada por el
con un mecanismo protector encargado de disolver- activador tisular del plasminógeno (t-PA), de origen
lo, denominado sistema fibrinolítico. Al igual que el endotelial, y por la prourocinasa; ambas moléculas
sistema hemostático, cuenta con mecanismos tanto producen una importante activación del plasminóge-
activadores como inhibidores, a fin de mantener el no en la superficie de la fibrina.
equilibrio idóneo para el organismo. El principal inhibidor de la plasmina es la
La enzima que se genera con la activación de la fi- a2-antiplasmina . Solo la plasmina que consiga esca-
brinólisis es la plasmina, a partir del plasminógeno, par al bloqueo de este inhibidor tendrá actividad fi-
que es el zimógeno de este sistema. El plasminógeno brinolítica. El t-PA puede ser inhibido por una familia
es una proteína de síntesis hepática, de una sola cade- de proteínas conocida como inhibidores del activador
na, con un elevado peso molecular (90 000 daltons). del plasminógeno (PAI-1) (Fig. 85-1). Un defecto del
CAPÍTULO 85 Síndrome de hipercoagulabilidad. Enfermedad tromboembólica

de trombina a nivel local, en segundo lugar la


trombina activa las plaquetas e induce genera-
ción de fibrina, progresivamente el trombo va
creciendo (tercera etapa) y finalmente se produ-
ce la oclusión del vaso.
Daño de la Flujo alterado
pared del vaso (estasis) Alteración de la pared vascular. El endotelio
normal actúa como un potente anticoagulante
Factores
que
evitando la formación de trombos a nivel de la
( 't>lllriilll\'('11 pared del vaso. Esto lo hace por dos mecanis-
,1 l.1 trllmho-.i-. mos fundamentalmente : el endotelio es rico en
heparansulfato, glicosaminoglicano que cataliza
la acción de la antitrombina para que inhiba la
Alteración de las
proteínas
trombina y al factor X activo; y el segundo im-
de coagulación plica la trombomodulina, proteína presente en la
membrana endotelial que activa a la proteína C
y da lugar a la inhibición de los factores V y VIII
activos. El endotelio también es capaz de produ-
Figura Componentes de la tríada de Virchow cir t-PA para activar la fibrinólisis . El daño en-
en la patogenia de la trombosis venosa. dotelial representa un papel fundamental en la
etiopatogenia de la trombosis arterial, mientras
que su protagonismo en la trombosis venosa es
sistema fibrinolítico facilitará la formación y persis-
menor.
tencia del trombo. Por el contrario, un defecto en su
Alteración en los componentes de la sangre. La
control ocasionará un estado prohemorrágico.
disminución de la actividad de los inhibidores
de la coagulación (antitrombina, PC y PS) y del
PATOGENIA DE LA ENFERMEDAD activador tisular del p lasminógeno, la activación
mantenida de factores de la coagulación y au-
TROMBOEMBÓLICA VENOSA (ETV) mento de los inhibidores de la fibrinólisis, son
Ya en 1856 Virchow estableció la tríada clásica, toda- factores que favorecen la aparición de un estado
vía en vigor, que interviene en la patogenia de la ETV de hipercoagulabilidad o protrombótico.
(Fig. 85-2): alteraciones de la pared del vaso, enlen-
tecimiento del flujo sanguíneo y alteraciones de las
proteínas del sistema de la coagulación. La aparición FACTORES DE RIESGO RELACIONADOS
de una trombosis en el compartimento vascular viene CON LA ENFERMEDAD TROMBOEMBÓLICA
condicionada por la interacción de estos tres factores . VENOSA
En la trombosis arterial, son la alteración de la pared
vascular y la activación plaquetaria los principales El conocimiento de los factores de riesgo implicados
factores implicados, mientras que en la trombosis ve- en la génesis y desarrollo de la trombosis venosa es
nosa los factores más relevantes son la estasis circula- fundanrnntal para poder realizar una profilaxis eficaz.
toria y la alteración de los componentes plasmáticos. En muchas circunstancias patológicas se sumarán,
en mayor o menor proporción, los tres factores que
Esta.sis. Es el principal factor predisponente de hemos comentado a propósito de la patogenia de la
trombosis venosa. Se produce por el enlenteci- ETV. Existen distintas clasificaciones de los factores
miento de la corriente sanguínea, el cual se pro- de riesgo; con fines didácticos estableceremos cuatro
duce por diversos factores, de los cuales el más grandes grupos: 1) de índole general; 2) asociados
importante es la inmovilización, de ahí también a intervenciones quirúrgicas o técnicas in vasivas;
que la trombosis venosa sea más frecuente en 3) asociados a condiciones o procesos médicos, y
miembros inferiores. La obstrucción venosa, la 4) trombofilia congénita.
disminución de la presión por dilatación vascu-
lar o el aumento de la viscosidad, entre otros fac-
tores, predisponen a la formación de trombosis. DE ÍNDOLE GENERAL
La estasis venosa ocurre en el caso de varices,
en personas de edad avanzada, durante la ges- Historia previa de tromboembolismo venoso .
tación, en inmovilizaciones prolongadas, etc. La Haber padecido previamente una ETV se asocia
hiperviscosidad aparece fundamentalmente en a un mayor riesgo de desarrollar un nuevo proce-
poliglobulias y disproteinemias. Se ha postulado so trombótico. Cuando se suprime el tratamiento
que la trombosis ocurre en cuatro etapas : prime- anticoagulante en pacientes que han sufrido un
ro se produce estasis vascular con depósito de episodio de ETV, la frecuencia de recidivas es
719
los elementos formes de la sangre y generación unas 50 veces superior que la incidencia en la
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

población general, sobre todo si el episodio i¡u-


frido fue idiopático.
Edad. El riesgo de desarrollar una ETV aumen- Tabla 1 Situaciones médicas
ta exponencialmente con la edad, ya que con asociadas a un estado
el tiempo se van acumulando factores de riesgo de hipercoagulabilidad
trombótico.
Inmovilización prolongada. La estasis venosa Neoplasias
es un factor muy importante en la formación
Sepsis
del trombo. A partir de 8 horas de inmovili-
zación, el débito venoso se reduce a la mitad. Infecciones (víricas, bacterianas, otras)
Estar más de tres días inmovilizado en cama
Embarazo y preeclampsia
se puede considerar como un factor de riesgo
relevante. La inmovilización superior a una se- Síndrome nefrótico
mana aumenta seis veces el riesgo de padecer
Anticonceptivos orales
un episodio trombótico , de tal forma que en
el encarnamiento prolongado la incidencia de Lupus eritematoso sistémico y otras
trombosis es del 80 % frente al 15 % cuando es enfermedades del tejido conectivo
inferior a una semana. Hemoglobinuria paroxística nocturna
Obesidad. La obesidad interviene en la patogenia
trombótica al interaccionar con otros factores. Trombocitopenia inducida por heparina
Presencia de venas varicosas. Es un factor bien Leucemia aguda
definido de riesgo trombótico, que aumenta con
la inmovilización y la obesidad. Insuficiencia cardiaca congestiva
Síndrome de hiperviscosidad

INTERVENCIONES QUIRÚRGICAS Púrpura trombótica trombocitopénica


OTÉCNICAS INVASIVAS Diabetes mellitus
Cirugía y traumatología . La cirugía constituye el Administración de complejo protrombínico
factor de riesgo más importante en el desarrollo Tratamiento quimioterápico (L-asparaginasa,
de la ETV. Se ha atribuido este factor de riesgo mitomicina, etc.)
a un estado de hipercoagulabilidad sanguínea
debido a la liberación de factor tisular en el acto Síndrome de lisis tumoral
quirúrgico y a una disminución de la actividad
fibrinolítica después de la cirugía. La estasis san-
guínea debido a la inmovilización, así como el
daño local que se produce en los vasos de los
miembros inferiores, como por ejemplo, en la
COND ICIONES O PROCESOS MÉDICOS
cirugía ortopédica, son factores que contribuyen Se encuentran reflejadas en la Tabla 85-1 . A continua-
a la patogenia trombótica, de tal forma que sin ción detallamos las más frecuentes:
profilaxis antitrombótica, en la cirugía ortopédi-
ca de cadera y rodilla la incidencia de ETV al- Embarazo. Implica un riesgo seis veces mayor
canza el 50 % . El 20 % de las trombosis que se de desarrollar wrn ETV. Durante el embarazo,
producen en la cirugía de cadera se localizan en parto y posparto intervienen múltiples factores
la vena femoral, estando en más del 90 % de los que pueden contribuir al episodio trombótico: la
casos sobre la vena del mismo lado de la inter- compresión de la vena ilíaca izquierda, procesos
vención; cuando ocurren en venas de la panto- hemorreológicos (como la hemoconcentración
rrilla, se distribuyen por igual en ambos miem- que se produce en el postparto) y, a nivel bioló-
bros. La cirugía mayor abdominal y la pelviana gico, un incremento en los niveles plasmáticos
(ginecológica y urológica) también constituye un de los factores de la coagulación (fibrinógeno,
especial grupo de riesgo, con incidencias de ETV factor Von Willebrand y los factores VII, X y XII),
que alcanzan el 30 %. trastornos en la fibrinólisis y descenso de algu-
Cirugía endoscópica . Para realizar cirugía lapa- nos inhibidores fisiológicos de la coagulación.
roscópica se insufla aire en la cavidad peritoneal, La clínica trombótica se presenta especialmente
lo que provoca estasis venosa en las extremida- durante el tercer trimestre de la gestación y en el
des inferiores, ya que la presión de la insuflación posparto, en particular si el parto ha tenido lugar
dificulta el relleno de las venas pélvicas y retor- por cesárea y si se trata de mujeres mayores de
no venoso. La cirugía artroscópica de rodilla tie- 35 años. La incidencia más alta de tromboembo-
720 lismo pulmonar (TEP) se registra en la primera
ne un riesgo de ETV de un 10-15%.
CAPITULO 85 Síndrome de hipercoagulabilidad. Enfermedad tromboembólica

semana después del parto , aunque el riesgo se contra estructuras fosfolipídicas unidas a deter-
puede extender hasta seis semanas después. minadas proteínas. Los principales anticuerpos
Anticonceptivos orales y terapia hormonal sus- antifosfolípidos son el anticoagulante lúpico, los
titutiva. En las mujeres que toman anticoncep- anticuerpos anticardiolipina y los anticuerpos
tivos orales, el riesgo de desarrollar una ETV se antibeta-2glicoproteína I.
incrementa en tres veces. El riesgo se multiplica
si se asocia a una situación que predisponga a
la aparición de trombosis, como intervenciones TROMBOFILIA CONGÉNITA
quirúrgicas o un estado de trombofilia heredita-
Se incluyen dentro del concepto de trombofilia los
ria.
casos que cumplen las siguientes características:
Enfermedades cardiológicas. La incidencia de
trombosis espontáneas en pacientes jóvenes (menores
TVP en pacientes con infarto de miocardio, que
de 40 años), de localización o presentación inusual o
no han recibido tratamiento anticoagulante, va-
con antecedentes familiares de trombosis (Fig. 85-3)
ría entre un 20 % y un 40 %. La insuficiencia
. Las alteraciones congénitas claramente relacionadas
cardiaca congestiva constituye un factor de ries-
con la ETV son la deficiencia de AT, el déficit de pro-
go independiente para ETV. Las neumopatías
teína C y de proteína S, la resistencia a la proteína C
crónicas que dan lugar a insuficiencia cardiaca
activada y la mutación 20210A/G de la protrombina.
derecha también se incluyen en este grupo. El
descenso de la presión venosa central, la inmo- Deficiencia de AT. Se trata de la primera trom-
vilidad y la estasis venosa intervienen en la pa- bofilia congénita identificada (año 1965) y la de
togenia de la ETV en este subgrupo de pacientes. mayor riesgo trombótico, aunque existe una no-
Enfermedades neurológicas. La incidencia de table heterogeneidad en su presentación clínica.
trombosis es mayor en el miembro que está pa- La relevancia fisiológica de este anticoagulante
ralizado; en una lesión de la médula espinal con explica que la alteración de un solo alelo del gen
paraplejía, la incidencia de trombosis es similar de la AT (defecto en heterocigosis) incremente
en ambos miembros. La incidencia de TEP se in- de forma significativa el riesgo trombótico (10-50
crementa al aumentar el periodo de reposo. veces), mientras que la deficiencia homocigota
Neoplasias. La aparición de complicaciones sea incompatible con la vida. La deficiencia de
trombóticas es un hecho frecuente en pacientes AT es un trastorno hereditario de transmisión
con cáncer. Frecuentemente aparecen en lugares autosómica dominante. Se estima que la preva-
inusuales. La presencia de episodios trombóticos lencia del defecto es de un 0,3 % de la pobla-
relacionados con una neoplasia se conoce como ción general. El riesgo trombótico asociado a la
síndrome de Trousseau. Existen bases biológicas deficiencia de AT es alto (se incrementa entre 10
que explicarían este fenómeno: la presencia de y 50 veces) aunque la muy baja incidencia del
material procoagulante proveniente del tumor, la déficit de este anticoagulante en la población
inhibición de la fibrinólisis y la generación de general (0,02 %) explica que sean pocos los pa-
diferentes alteraciones en el sistema hemostáti- cientes con trombosis venosa que presenten esta
co que predisponen a la trombosis, por ejemplo, trombofilia congénita (0,5-3 %). Sin embargo, la
activación plaquetaria, aumento del fibrinógeno elevada prevalencia de la trombosis venosa (el
y generación de trombina, descenso de la con- 70 % de pacientes con deficiencia de antitrombi-
centración de antitrombina, aumento del PAI-1, na suelen desarrollar trombosis tempranas, antes
etc. Los mecanismos de compresión o de inva-
sión directa de venas por parte del tumor predis-
ponen también a la aparición de trombosis. Las
neoplasias más frecuentemente asociadas a ETV
son los adenocarcinomas secretores de moco
(tubo digestivo, páncreas, pulmón, ovario), y los
tun10res primarios del sistema nervioso central.
Anticuerpos antifosfolípidos. El síndrome an-
tifosfolipídico es un trastorno autoinmune y
sistémico de hipercoagulabilidad caracterizado
por trombosis venosas o arteriales recurrentes
~ ~ Histori a de trombosis, no estudiados •
y/o historia obstétrica adversa (pérdidas fetales,
prematuridad o preeclampsia) junto con la pre- [:] 0 Estudiados normales
O O No estudiados • Fallecidos
sencia de anticuerpos antifosfolípidos. Se inclu-
ye dentro de los estados de hipercoagulabilidad
■ • Pacientes con ETV

secundaria o adquirida. En la patogenia inter-


vienen anticuerpos antifosfolípidos, que son un Figura • Árbo l genealógico característico de una
721
grupo heterogéneo de autoanticuerpos dirigidos fam ili a con trombofi li a hereditaria.
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

de los 50 ar1os, pero no antes de la pubertad), con deficiencia ele PS. La sospecha diagnóstica
e,! nito riesgo absoluto de trombosis venosa aso- debe surgir cuando aparece dolor localizado con
ciado (8,1 veces más riesgo de sufrir un evento eritema intenso a los pocos días de iniciar el tra-
trombótico en familiares afectos comparados con tamiento anticoagulante oral.
familiares no afectos). y la elevada tasa de recu- Deficiencia de proteína S, Como cofactor de
rrencia de la ETV 1:m portadores (20-30 '¾,) justifi- la proteína C, el déficit de proteína S afecta al
ca claramente su estudio tanto en pacientes con mecanismo an ticoagulante de la proteína C,
trombosis venosa como cm familiares de sujetos por lo que la expresión fenotípica y clínica de
con deficiencia de antitrombina. la ckJficiencia de ambas proteínas son similares
Hay varios subtipos de la clHficiencia: e implican un importante riesgo trombótico.
Aproximadamente, el 60-80 '¼, ele la proteína S
Tipo 1: Su fenotipo biológico se manifiesta con
en plasma forma un complejo con una proteína
una disminución proporcional on los nin,IHs
reguladora del complemento (C4b-BP), La defi-
antigénico v funcional de la proteína, hasta
valores de aproximadamente el 50 '¾, de los ciencia ele PS congénita se considera un defecto
hereditario con un patrón autosómico dominan-
normales. Es expresión de un defecto congé-
te, La incidencia de la doficiencia ele PS en la
nito en la síntosis de la proteína. debido a que
población general es muy baja. Existen distintos
el alelo mutado no se traduce o no se secrnta.
tipos de dt,ficit:
Normalmente son los casos con mayor diátesis
trombótica. El tipo I cursa con nivnles antigénicos de pro-
Tipo 11: Corresponde a una anomalía funcional teína S total y libre reducidos. Por supuesto,
de la AT, los paci@tes tienen niveles plasmá- limrnn baja actividad funcional. Suponen la
ticos de proteína cc-Jrcanos a la normalidad, mayoría de los casos de déficit de proteína S.
aunque solo ni 50 % es funcional. El riesgo El tipo Ir. o también llamado Ila, presenta una
asociado con ol tipo ff es variable, y dependo concnntración de proteína S librn baja debido
en gran medida del lugar donde so encuentra al mmrnnto de proteína S unida a C4b-BP.
la alteración molecular. Por último, ol tipo m cursa con niveles anti-
Prevalencia y subtipos de deficiencia de proteí- génicos (totales y libres) normales, pero baja
na C. La deficiencia de PC es un trastorno he- actividad cofnctor dEJ la proteína C activada. Es
reditario do transmisión autosórnica dominante la más rara.
ligado también a un mayor riesgo trombólico en
La concentración de PS aumenta con la edad,
el territorio venoso. Como para la AT, la mayoría
y e➔ s ligernnrnnle superior ()11 hombres. Situacio-
de pacientes tienen un solo alelo alterado, mien-
nes corno ol embarazo, los tratamientos anticon-
tras que la deficiencia homocigota (extraorclina-
cepliYos orales y la terapia hormonal sustitutiYa
rimnente infrecuente) causa púrpura fulminante
reducen los nivoles circulantes de la proteína.
cm nnonatos. siendo este un cuadro clínico muy
gravo. Al igual qmi para la Kf, existen dos tipos Resistencia a la proteína C activada. El factor
de deficiencia: V (PV) Leiden es el resultado de una mutación
puntual que modifica la arginina localizada en el
En la cfo Tipo 1, que es la más frecuente, existe
primer sitio ele ruptura proteolítica del FV acti-
una disminución paralela de la actividad fun-
vo (FVa) por la proteína C activada (Arg506Gln).
cional y do la concentración plasmática de la
La consecuencia funcional de este cambio gené-
proteína. con niveles en torno al 50 %.
tico es un FVa más resistente a la inacti vación
En la do Tipo lllos niveles de PC son normalus,
por la proteína C activada, y que provoca que el
pero con una reducida actividad funcional.
tiempo cln tromboplastina parcial activado de
La expresión clínica de la deficiencia de PC un portador no se prolongue tras la adición de
es muy variable. La prevalencia de oste defecto proteína C aclivada; lo que se denomina resis-
congénito es también infrecuente en población lnncia a la protnína C. El hecho do que persista
sana (0,2-0,3 '¼,) y aumenta en pacientes con sin inaclivar FVa cm plasma da lugar a una mayor
trombosis rnnosa (2-4 %). El riesgo trombótico generación de trombina, y por tanto, un mayor
asociado es alto (de 10 a 15 veces), los estudios riesgo trombótico, El tipo ele herencia de esta al-
familiaros muestran un riesgo absoluto también teración es autosórnico dominante, habiéndosH
elevado (7,3 veces) v una elevada tasa do recu- clciscrito individuos homocigotos, Esta alteración
rrencia de eventos trombóticos (60 %). En casos se encucmtra en un 5 % de la población normal y
poco frncuentes so ha comprobado quo el inicio entre un 10-20 '¼, de enfermos con ETV. La mu-
de la terapia anticoagulante oral ocasiona un tación aumenta 5 a 10 veces el riesgo ele sufrir
cuadro de necrosis cutánea. En el 30 '¾, de esas si- una trombosis en los portadores heterocigotos
tuaciones existe una deficiencia heterocigota de respecto a la poblnción normal. y 20 vecos en el
72:Z
PC, aunque también se han descrito en pacientes caso dc-J los homocigotos.
CAPITULO 85 Síndrome de hipercoagulabilidad. Enfermedad tromboembólica

Mutación de la protrombina 20210A. Es un ploración (dolor en la pantorrilla que aparece con la


cambio genético (G por A) en la posición 20210 dorsiflexión del pie). Habitualmente el dolor se loca-
(región 3' no codificante) del gen que codifica liza en la pantorrilla, el muslo o la región sacroilíaca.
la protrombina. Este polimorfismo genético se El diagnóstico clínico de la TVP es poco sensible
asocia a una discreta elevación en los niveles de y específico, es decir, no todo paciente con sintoma-
protrombina y se hereda de forma autosómica tología trombótica necesariamente sufre de ella, y en
dominante. La incidencia en la población gene- ocasiones pacientes con TVP están asintomáticos;
ral es del 3 %, y del 6-9 % en los pacientes con de ahí la importancia de objetivar la trombosis con
trombosis; por tanto, el riesgo relativo de trom- un método diagnóstico fiable. La baja sensibilidad
bosis en portadores es 3-4 veces mayor que en no se debe a que en algunos casos no se produce una
portadores, riesgo que asciende a 10-20 en caso obstrucción completa al flujo venoso (el trombo no
de homocigosis. ocluye totalmente el vaso o existen vasos colaterales)
La identificación de una alteración trombofíli- ni aparece inflamación de la pared del vaso.
ca implica un mayor riesgo trombótico, pero no El diagnóstico diferencial desde el punto de vista
necesariamente es la causa responsable del desa- clínico incluye: procesos que produzcan compresión
rrollo de la trombosis o implica que el portador de la vena ilíaca (hematomas, tumores o abscesos) ,
vaya a tener obligadamente un evento trombóti- celulitis, venas varicosas, linfedema, síndrome pos-
co. De hecho, el riesgo trombótico de cada defec- flebítico e insuficiencia cardiaca.
to es variable, fundamentalmente por el carácter La semiología del TEP incluye disnea, que suele
multigénico y multifactorial de la trombosis ve- ser de reposo y de inicio agudo, aunque en ocasiones
nosa. Por ello, el análisis de trombofilia no pue- es de presentación más insidiosa. Los pacientes pue-
de entenderse de forma aislada, sino teniendo en den presentar dolor pleurítico y a veces hemoptisis,
cuenta especialmente la historia clínica personal especialmente en los casos con infarto pulmonar. Los
y familiar del paciente estudiado. Su diagnósti- casos de TEP masivo pueden condicionar síncope y/o
co permite identificar sujetos con mayor riesgo shock. Hasta un 70 % de los pacientes con TEP tienen
trombótico que puedan beneficiarse de estrate- una TVP en el momento del diagnóstico.
gias profilácticas y terapéuticas dirigidas a evitar
el desarrollo de episodios de trombosis .
DIAGNÓSTICO
OTRAS ALTERACIONES DE TROMBOFILIA Debido al gran porcentaje de falsos positivos y nega-
tivos , para un diagnóstico correcto es preciso realizar
PRIMARIA una serie de pruebas objetivas.
Recientemente se ha sugerido que niveles elevados
mantenidos de algunos factores de coagulación, como
FVIII o FIX, pueden llevar asociado un mayor ries- PRUEBAS DE LABORATORIO
go de trombosis , pero estas observaciones todavía no Dímero D. Es la proteína que se genera y se libera
han sido trasladadas a la práctica clínica. También se al torrente circulatorio por acción de la plasmina
han identificado algunas otras raras anomalías aso- sobre la fibrina polimerizada. El interés de este
ciadas con trombosis, como ciertas disfibrinogene- test radica en que tiene un alto valor predictivo
mias congénitas, déficit del cofactor II de la heparina, negativo, esto es, los pacientes con niveles nor-
antil.rombina Cambridge, etc. males de dímero D es muy improbable que ten-
gan TVP o TEP. Su efectividad se combina con la
escala de Wells, la cual combina la presencia de
CLÍNICA síntomas compatibles junto con los factores de
riesgo (inmovilización, neoplasia , cirugía, pará-
La expresión clínica de los estados de hipercoagula- lisis), de tal forma que una baja probabilidad ob-
bilidad, tanto primarios como secundarios, se carac- tenida en dicha escala con un dímero D negativo
teriza por la localización trombótica preferente en el descarta enfermedad tromboembólica.
territorio venoso, especialmente en las extremidades
inferiores, tanto a nivel vascular periférico como pro-
fundo, con o sin TEP asociado. No obstante, también MÉTODOS DE IMAGEN DIAGNÓSTICOS
pueden afectarse en ocasiones otras áreas, como la
mesentérica o la cerebrovascular.
DE LA TVP
La semiología de la TVP deriva de la obstrucción Ultrasonidos o ecografía con Doppler. Esta
del flujo venoso y la inflamación perivascular. Se ca- técnica mide la velocidad del flujo sanguíneo
racteriza por calor, dolor, edema, eritema de la piel e venoso y arterial, así como el reflujo que pue-
impotencia funcional. En la TVP de miembros infe- de aparecer en caso de insuficiencia valvular, y
723
riores , la maniobra de Homans es positiva en la ex- determina las presiones del sistema. El diagnós-
Semiología y fisiopatología de la sangre y órganos hematopoyéticos

Figura Angio-TC. Tombos is en la bifurcac ión


de la arteria pulmonar.

radiográfica. Permite visualizar todo el sistema


venoso profundo y muestra la localización exac-
ta del trombo y su forma , tamaño y adherencia.
Figura Flebografía de trombosis ve nosa pro- Es un procedimiento invasivo y entraña el riesgo
funda femoropop litea, se observa la obstrucción vas- de desprendimiento de un segmento del trombo,
cu lar y la circu lación co latera l generada. con el consiguiente riesgo de TEP. Ello ha moti-
vado que su utilización rutinaria haya descendi-
do de forma muy notable. (Fig. 85-4).
tico se establece ante la falta de compresión de
la vena afectada por el transductor. Actualmente
es el método más utilizado para el diagnóstico
deTVP. MÉTODOS DIAGNÓSTICOS DEL TEP
Flebografía. Es un método invasivo, y ha sido Gammagrafía pulmonar. Se realiza con par-
la referencia para contrastar la eficacia de otros tículas de albúmina marcadas, y se valora su
métodos. La prueba consiste en introducir en el distribución en el lecho vascular. Si es normal,
sistema venoso profundo material de contraste, se excluye el embolismo pulmonar. También se
que en caso de que exista una obstrucción vas- utiliza la gan1magrafía de ventilación-perfusión,
cular mostrará la falta de relleno en una placa en la que la albúmina se combina con un aerosol
o gas marcado, para valorar así
la ventilación pulmonar.
Angio-TC helicoidal. Se
trata de una angiografía por
tomografía computarizada
helicoidal, utiliza contraste
y permite ver el árbol ar-
terial pulmonar al menos
hasta ramas subsegmen-
tarias. Actualmente es el
procedimiento diagnóstico
de elección y ha sustituido
a la gammagrafía pulmonar
(Fig. 85-5) .
Angiografía pulmonar. Al
igual que la flebografía ,
constituye una exploración
de referencia. Es una técni-
ca invasiva por eso se utili-
za sólo en casos especiales.
CAPÍTULO 85 Síndrome de hipercoagulabilidad. Enfermedad tromboembólica

ESTUDIO DE LABORATORIO matriz extracelular en un intento de estabilizar la pla-


DE PACIENTES CON PROBABLE TROMBOFILIA ca; ello lleva a la formación de una placa fibrosa que
va estenosando la luz del vaso.
HEREDITARIA La placa ateromatosa puede crecer lentamente
Los estudios biológicos no se deben realizar en la fase durante años y producir una estenosis o incluso la
aguda de la trombosis ni bajo la influencia de trata- oclusión total de la arteria. Es posible que el estrés
mientos anticoagulantes, que podrían interferir en la hemodinámico producido en áreas de estenosis y en
cuantificación de estas proteínas. Por otro lado, si se puntos de ramificación contribuya a la fisura de la
objetiva alguna alteración es interesante realizar un placa. Actualmente, el mecanismo de aparición de
estudio familiar, con la finalidad principal de preve- los distintos síndromes agudos coronarios (angina
nir la ETV en situaciones de riesgo protrombótico. inestable, infarto de miocardio y muerte súbita) se
Todas las pruebas deben realizarse en plasma pobre trata de explicar, por la existencia de distintos gra-
en plaquetas, de sangre obtenida en citrato sódico. Es dos en el desarrollo del trombo sobrepuesto a la placa
necesario que en las muestras plasmáticas se realicen ateromatosa. En los enfermos que desarrollan angina
los tiempos de protrombina y tromboplastina parcial inestable la ruptura o fisura de la placa es menos in-
activada (TTPA) para descartar la relación con anti- tensa, formándose un coágulo lábil. La labilidad de
coagulantes. Aconsejamos llevar a cabo las siguientes un trombo flotante da lugar a una oclusión arterial
determinaciones: prueba biológica de la resistencia intermitente. En cambio, en el infarto se cree que el
de la PC activada o factor V Leiden; actividad funcio- acontecimiento inicial sería una ruptura más profun-
nal de AT, PC y PS y determinación antigénica de las da de la placa que daría lugar a un trombo menos lá-
concentraciones de proteína S total y libre. También bil y fijo, no desplazable. En muchos casos de muerte
se debe realizar el estudio genético de la protrombina súbita, probablemente la rapidez e intensidad de la
20210 y la determinación de anticuerpos antifosfolí- rotura de la placa y el trombo oclusivo resultante con-
pidos. ducen a una isquemia y una inestabilidad eléctrica
del corazón de consecuencias fatales.
Los factores de riesgo, que tradicionalmente se han
PATOGENIA DE LA TROMBOSIS ARTERIAL asociado con la patogenia de la trombosis arterial son
la hipertensión, la hipercolesterolemia, el tabaquis-
Como hemos visto, la patogenia de la ETV es mul- mo y la diabetes.
tifactorial. En cambio, la trombosis arterial se pro- Si bien los anticoagulantes, antivitamina K y he-
duce casi siempre en el contexto de arteriosclerosis, parina, son las herramientas terapéuticas habituales
la cual va asociada a la cardiopatía isquémica, arte- en la enfermedad tromboembólica venosa, los anti-
riopatía periférica y/o enfermedad cerebrovascular. agregantes plaquetarios son los fármacos de mayor
La trombosis arterial suele desarrollarse en una su- utilidad en la prevención de episodios trombóticos
perficie vascular dañada. En una placa ateromatosa arteriales, lo que tiene su base fisiopatológica en la
susceptible de fisura o rotura, el contenido suben- composición del trombo, que es rico en fibrina en
dotelial irrumpe en la sangre circulante, iniciando el caso de la ETV, y en plaquetas en la trombosis ar-
bruscamente el proceso de la activación plaquetaria terial.
y de la coagulación sanguínea, que da lugar al coá-
gulo intravascular o trombo con alto contenido de
plaquetas.
La disfunción endotelial es el origen de la en-
fermedad aterosclerótica, y se produce como
consecuencia de la acción de los factores
de riesgo cardiovascular sobre el endote-
lio alterando la homeostasis vascular y
generando una respuesta inflamatoria
con la expresión de moléculas de ad-
hesión, citocinas y factores quimio-
tácticos que promueven la migración
de leucocitos al espacio subendote-
lial. Si el estímulo continúa, se pro-
duce la acumulación de macrófagos,
linfocitos T y mastocitos que favore-
cen el crecimiento de la placa de ate-
roma al facilitar la migración y prolife-
ración de células musculares lisas desde
la capa media. Estas células contribuyen
al aumento de producción de colágeno en la
-186
Exploración física
de los enfermos neurológicos.
Pruebas complementarias para
su diagnóstico
Manuela Lema Bouzas, María Dolores Dapena Bolaño

INTRODUCCIÓN
A pesar del continuo desarrollo de nuevos procedi-
mientos diagnósticos, la herramienta esencial para un
diagnóstico neurológico correcto continúa siendo la
exploración clínica. Dada la complejidad de la mis -
ma, se realizará de una forma ordenada y sistemática
y como continuación de una la anamnesis dirigida.
Con los síntomas recogidos en la historia clínica y
los signos obtenidos en la exploración se procurará
establecer un diagnóstico sindrómico, que conducirá
al diagnóstico de localización (anatómico o topográ-
fico) . El diagnóstico de la enfermedad puede dedu-
cirse si añadimos los datos derivados del modo de
comienzo, evolución, afectación de otros órganos o
sistemas, antecedentes personales y familiares y da-
tos de laboratorio. Si es posible determinar la causa,
obtendremos el diagnóstico etiológico. Finalmente, la
valoración del pronóstico, del grado de incapacidad
y del carácter temporal o permanente de esta, propor-
cionará el diagnóstico funcional.
La exploración neurológica nunca será completa
si no se acompaña de una exploración general, que
puede mostrar alteraciones asociadas a enfermedades
neurológicas (soplo carotídeo, arritmia cardiaca, sig-
nos cutáneos de enfermedades neuroectodérmicas,
etc.).

EXPLORACIÓN NEUROLÓGICA
ESTADO MENTAL
Lo primero que debemos evaluar es el estado de
consciencia, que puede ser normal (el paciente está
despierto, alerta, atento a lo que le rodea y al exa-
minador) o puede presentar un estado de conciencia
disminuido (somnoliento, letárgico, estuporoso - res-
ponde sólo al dolor- o comatoso, no responde ni a la
estimulación dolorosa-).
CAPÍTULO 86 Exploración física de los enfermos neurológicos. Pruebas complementarias para su diagnóstico

Una vez objetivado el estado de consciencia pasa- del pac.iente con el del examinador, para lo cual
remos a analizar la función cognitiva, que será más o este se sitúa frente al paciente, que debe mirarlo
menos exhaustiva dependiendo del motivo por el que frontalmente , y mueve los dedos desde la peri-
el paciente es evaluado. Como mínimo valoraremos feria del campo visual hacia el interior. Cada ojo
la orientación en persona, tiempo y espacio, memoria se examina por separado. Se valorará si existe
a corto plazo (repetir tres palabras y recordarlas a los desatención visual, evaluando los dos hemicam-
5 minutos), atención (días de la semana al revés) , cál- pos al mismo tiempo y comprobando que se per-
culo (series de 7 desde 100), pensamiento abstracto ciben ambos estímulos a la vez. En el fondo de
(refranes) y fluencia verbal (animales en 1 minuto o ojo se observa la papila óptica, las alteraciones
palabras que empiecen por p). de la retina y sus vasos; si es necesario se puede
En caso necesario, se puede recurrir a baterías dilatar la pupila con un agente midriático, pero
neuropsicológicas para estudiar con detenimiento las este procedimiento no debe utilizarse en enfer-
funciones cerebrales superiores. mos en los que la semiología pupilar pueda ser
importante (pacientes en coma o con signos de
afectación de tronco cerebral). Se explora el ta-
FUNCIÓN ESPECÍFICA DE LOS HEMISFERIOS maño y alineación de las pupilas, el reflejo foto-
CEREBRALES motor directo y consensual y la respuesta a la
acomodación (II, III). En pacientes que no están
La función más importante del hemisferio dominante completamente alerta se usa el «test de ame-
es el lenguaje, que incluye la compresión, repetición, naza », acercando los dedos desde cada campo
nominación, lectura y escritura. La afectación en los temporal y al mismo tiempo observando si hay
mecanismos receptivos, expresivos o integradores del respuesta de parpadeo .
lenguaje es lo que constituye la afasia que se clasifica III, IV, VI: Los movimientos de los músculos
en distintas categorías dependiendo del patrón del extraoculares son controlados por los pares cra-
déficit del lenguaje (fluidez, compresión, parafasias, neales III, IV y VI, que inervan los músculos rec-
etc.). La alteración en la articulación del lenguaje se tos interno, superior e inferior y el oblicuo su-
conoce como disartria . perior (III), oblicuo inferior (IV) y recto externo
Las lesiones del hemisferio no dominante tienen (VI). Los movimientos son explorados en las seis
que ver fundamentalmente con la interpretación de posiciones de la mirada, pidiéndole al paciente
estímulos aferentes diferentes del lenguaje, como la que siga nuestro dedo, al mismo tiempo que le
orientación visuoespacial y la percepción del hemi- preguntamos si ve doble (o diplopía; esta per-
cuerpo contralateral en el espacio (las lesiones del cepción es más sensible que los resultados de la
hemisferio dominante también pueden producir ano- exploración) y observaremos si se desencadena
malías en esas áreas pero son generalmente enmas- algún tipo de nistagmus (oscilación rítmica de
caradas por la afasia). Estas alteraciones pueden ob- los ojos) mientras sigue nuestro dedo con la mi-
jetivarse en diversas formas como escribiendo letras rada.
o nú_m eros sobre la piel (grafestesia), identificando V: La sensación de la cara es conducida por el
objetos colocados en la mano (estereognosia), ver si nervio trigémino (V) y exploraremos sus tres ra-
se olvida de vestir ese lado del cuerpo o no come más mas sensitivas tocando con un algodón de forma
que la comida de la mitad del plato (negligencia), es- simultánea en ambos lados, en la frente (Vl),
timulación doble, etc. mejilla (V2) y mandíbula (V3) preguntándole
si la sensibilidad es la misma en los dos lados.
Procedemos del mismo modo con la tempera-
PARES CRANEALES (Fig. 86-1)
tura y con un algodón tocamos ambas córneas
I: Se comprobará la olfación en cada ventana y preguntamos si siente igual, al mismo tiempo
nasal con los ojos cerrados, utilizando para ello que observamos la respuesta de los párpados. La
sustancias aromáticas de fácil identificación rama motora se explora observando la simetría
(café, por ejemplo). La apreciación de un olor de la apertura y cierre de la boca y si hay una
(aunque el paciente no reconozca la sustancia de ligera debilidad intentando abrir la boca contra
prueba), es suficiente. resistencia o intentado desplazar la mandíbula
II: Para determinar la agudeza visual se pide lateralmente.
al paciente que reconozca letras de diferentes VII: La motilidad facial depende del nervio fa-
tamaños. En defectos graves, se valora si pue- cial. Observaremos la simetría de las hendiduras
de contar los dedos a un metro de distancia o de los párpados y de los surcos nasogenianos y le
simplemente distinguir la luz. El campo visual pediremos que arrugue la frente , cierre los ojos,
(porción de espacio en el que los objetos son vi- enseñe los dientes y mueva los labios. Una lesión
sibles durante la fijación de la mirada en una supranuclear (por ejemplo, hemisférica) preser-
dirección) puede valorarse con la prueba de vará los movimientos de la frente y producirá
confrontación o comparación del campo visual una ligera debilidad del cierre de los ojos, con la
EC O Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

11 por
11 por (nervio óptico)
(nervio o
Estructura
óptico) nerviosa que
111 por (nervio oculomotor) o trans mite las
Nervio responsable de transmitir 1:is órdenes
motoras a la ma)'Or pane de la musculatura ocu lar. 1por (nervio olfatorio)
Parte de los ¡>ethínculos cercbr-.th.~ )' ~ imrodu,c en
la aa,•idad orbi1aria a tra,•65 de la hendidura
esfenoida!; una ,·ez allí. reparte sus 1erminacioncs
ner,,•íosas a los diferentes múscu los de la zona. 111 por (nervio oculomotor)

IV por (nervio trocleor) @ IV por (n e r v io trodeor) Recibe su nombre por el largo


V por lr.l)'«to intracrane:il que rt31i:z.a, desde su origen, en la C2ra
(nervio trigémino) posterior del mcscncéfalo hllSta su rerminación, dentro ele la
Se origina de la parte lateral de la protuberancia y cavidad o rbitaria, en el músculo oblicuo ma)'Or del ojo, de
consra de una miz CU )'O funcionamiento es responsable.

V por
(nervio trigémino)

VI por (nervio
nacimiento del obducens) @
nervio, y, a parti r de
él. emergen las 1rcs
mmas de que consta: el
nen•io oftálmico. el maxilar
superior y el mandibular. Reci~ las scns;aciones
de la cara, la órbita. la ca\'idad bucal )' la.-. fosas
nasales. y 1ransmite las órdenes motoras a los
músculos de la masticación.

VI por (nervio obducens) @


Nervio exclusi,-ameme motor. que VIII por (nervio
parte del surco que sep;1ra la
procubemncia del bulbo rac¡uídeo )' vestibulococleor) fJ N ervio sensitivo que panc
se diri.!,;C hacia la cavidad orbit-aria. del surco bulboprotubcrancial y penc1ra en el
Desde allí emite ramas a.l músculo conducto audüi\'o imerno. Transmite sensaciones
recto 1:m:ral del ojo. auditi,•as y otras de tipo ¡x>Sturnl que ayudan a
mamener el equilibrio.
VII por
(nervio facial) IX por (nervio glosoforíngeo)

VIII por
(nervio
vestibulococleor)
XI por
(nervio accesorio
o espinal) 0
IX po
(nervio glosoforíngeo) XII por
XI por (nervio XII por
(nervio (nervio hipogloso)
accesorio o espino!)
X por Nervio sensit i,·omotor hipogloso) o
fo rmado por la unión de erv10 motor
(nervio vago) c¡ue ¡,a ne de la
Nervio scnsiti\'omotor Y.t rias ramas nervi~ que
p.mcn del bulbo rnc¡uícleo región 1:m:rnl del
que se ori1-:ina en el bulbo y u= dirige
bulbo raquídeo, por )' de la m(-dula espinal.
Unll vez formado un solo hacia delante
cleb.ijo del p,"lm inenmr gran
glosofnrin~eo. De 11ll í .S."lle de nervio. emite una rama
p;1rn los músculos trapecio parte de la
la C'a\'idad craneal por el foramen m usculatur.1.
rasgado pos1erior )' cruza y esternocleidomastoideo)'
un.1 mma que se une 111 lingual.
venicalmentc el cuello y el 16r.u: )'
llc~-a hasu el abdomen. regiones en las que se divide en neumog.íst rico.
multitud de ramas nerviosas.

Figura Loca li zac ión y fun c iones de los pares cra nea les.

parte inferior de la cara más afectada, mientras La comprobación del gusto en los 2/3 anteriores
que en una lesión periférica (o del núcleo}, la he- de la lengua puede ayudar a localizar la lesión
mifacies completa estará flácida y los párpados en el trayecto del facial , así como la existencia
abiertos. Los movimientos faciales emocionales de disacusia (inervación del músculo estapedio
728
se observan mientras el paciente habla y sonríe. del oído medio).
CAPITULO 86 Exploración física de los enfermos neurológicos. Pruebas complementarias para su diagnóstico

VID: La función auditiva se explora con cuchi- el lado sano), la posición de la úvula y el refle-
cheos o provocando un ruido suave (frote de jo faríngeo (aferente el IX y eferente el X). y la
dedos) ante cada oído, para comprobar posibles función sensitiva se explora tocando con un bas-
asimetrías. El paciente no oye el frote de los de- toncillo de algodón sobre cada lado del paladar
dos se realizan los siguientes test: a) test de Rin- blando. Las cuerdas vocales se examinan con un
ne (colocamos un diapasón de 512 Hz sobre la espejo de otorrinolaringólogo si hay sospecha de
mastoides hasta que el sonido ya no se perciba su parálisis.
y seguidamente cerca del oído. Si la pérdida de
audición es neurosensorial, la conducción aérea XI: El nervio accesorio inerva el músculo ester-
es mayor que la ósea y el paciente volverá a oír el nocleidomastoideo, que se explora haciendo ro-
tono del diapasón); b) Test de Weber, colocando tar la cabeza hacia el lado contrario mientras se
el mismo diapasón en el medio de la frente , se opone resistencia contra la mandíbula del lado
oirá más en el oído afectado si se trata de una contralateral al que queremos explorar; y el tra-
sordera de conducción y en el contralateral si pecio, que se explora pidiendo al paciente que
la pérdida es neurosensorial. La función vesti- eleve los hombros, también contra resistencia.
bular se estudiará si existen mareos , vértigo o XII: El nervio hipogloso se explora inspeccio-
evidencia de nistagmus, por ejemplo con el test nando la lengua para evidenciar atrofia o fasci-
de Nylen-Bárány (Dix-Hallpike) para el vértigo y culaciones y luego mandando protruir la misma.
nistagmus posicional. En caso de parálisis de uno de los hipoglosos , la
IX-X: Ambos nervios se exploran conjuntamen- lengua se desviará hacia el lado débil. Para com-
te, observando la simetría de la elevación del probar claramente la debilidad se le mandará
paladar (cuando hay parálisis se desvía hacia mover rápidamente la lengua para los dos lados.

Figura Parálisis de los nervios craneales: A) Parálisis del nervio motor ocular común: midriasis en pupila
izquierda y conservación de la mirada en abducción B) Parálisis del motor ocular externo: la mirada extrema en
abducción muestra incapacidad de la desviación del globo ocular derecho, C) Parálisis del hipogloso derecho
con desviación de la lengua hacia lado izquierdo, D) Parálisis del facial superior derecho: desaparición de arru-
gas en frente derecha y parálisis de facial inferior derecho: reducción del pliegue nasogeniano derecho, flacidez
de mejilla derecha y desviación comisura bucal hacia lado derecho.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

FUNCIÓN MOTORA unión neuromuscular (miastenia gravis), se explorará


la fatigabilidad mediante maniobras que la provoquen.
Depende de la integridad funcional del músculo, de
la unión neuromuscular, del nervio periférico y del
sistema nervioso central. Los componentes del SNC REFLEJOS
que participan son los sistemas piramidal y extrapi- Un reflejo tendinoso profundo es la reacción de un
ramidal, las neuronas motoras inferiores del tronco músculo que es pasivanrnnte estirado por la percusión
cerebral, la médula espinal y el cerebelo. de su tendón. Mide la integridad de la vía aferente y
Las variaciones del tono muscular (resistencia de un eferente de los nervios periféricos y de los controles
músculo a un movimiento pasivo a nivel de una arti- inhibidores centrales. Los reflejos osteotendinosos se
culación) producirán aumento (hipertonía) o disminu- exploran y se comparan en ambos lados: bicipital (C5-
ción (hipotonía). Los movimientos pasivos de flexoex- C6), tricipital (C7-C8), estilorradial, rotuliano (L3-L4)
tensión o pronosupinación de una extremidad per- y aquíleo (Sl-S2), en situación de relajación o con
mitirán detectar hipertonías (espasticidad piramidal maniobras facilitadoras por contracción voluntaria de
o rigidez extrapiramidal); los de balanceo sirven para otros músculos (maniobra de Jendrassik) (véase Cap.
comprobar el mayor desplazamiento de un miembro 87). Se examinan los reflejos cutáneos superficiales
hipotónico. Se debe comprobar la presencia de rigidez abdominales y plantares. El reflejo plantar normal
de la nuca y, en su caso, de otros signos meníngeos. consiste en la flexión plantar de los dedos. La res-
Un movimiento coordinado debe tener una ampli- puesta extensora (signo de Babinski) es patológica e
tud, dirección y fuerza adecuadas al fin propuesto. indica afectación de la vía corticoespinal o piramidal.
Observaremos al paciente mientras se desnuda, reco- Otros reflejos patológicos aparecen cuando se afec-
ge un objeto, desabrocha botones, etc. La existencia ta la neurona motora superior y por lo tanto hay una
de alteraciones en la coordinación se puede confir- pérdida de inhibición. No son por sí mismos signos
mar con pruebas formales, como dedo-nariz, dedo- de enfermedad y pueden estar presentes en personas
dedo-nariz para las extremidades superiores, o con la normales. Son, por ejemplo, el reflejo de aducción
prueba talón-rodilla para las inferiores. Posteriormen- cruzada (golpeando el tendón aductor del muslo, jus-
te, se valorará la existencia y tipo de temblor u otros to por encima y medial a la rodilla); sólo el miembro
movimientos involuntarios. Se examinará el tamaño golpeado responde, a no ser que haya una lesión de
muscular (distribución de atrofias o hipertrofias), así neurona motora superior, entonces ambos miembros
como sus movimientos intrínsecos (fasciculaciones), aducen y pueden hacer un movimiento en tijera;
la respuesta a la percusión (miotonía), la sensibilidad, también el reflejo mandibular, que cuando está exal-
la consistencia y la presencia o no de contracturas. tado es sugestivo de lesión bilateral por encima de
la protuberancia media (se realiza colocando el dedo
La fuerza muscular global se evalúa colocando en
índice del explorador sobre el mentón, que debe estar
máxima contracción el grupo muscular que se explora
relajado, y golpeamos hacia abajo con el martillo de
e intentando vencer la resistencia opuesta por el pa-
reflejos). El clonus es una contracción repetitiva, rít-
ciente o, por el contrario, poniéndolo en mínima con-
mica, involuntaria, inducida por un estiramiento pa-
tracción y siendo el paciente el que trata de vencer la
sivo, repentino, de un músculo o de su tendón. Unas
resistencia opuesta por el explorador; se comprueba
así la flexión y extensión de los brazos, antebrazos, cuantas oscilaciones pueden obtenerse en personas
normales, pero 5 o más son anormales.
manos, dedos, muslos, piernas y pies, comparando
ambos lados. Si la debilidad es mínima, es útil realizar Los «signos de liberación frontal » son una se-
la maniobra de Mingazzini, observando si un miem- rie de reflejos primitivos que pueden considerarse
bro extendido horizontalmente se mantiene contra la como adaptativos para el niño (prensión, succión,
gravedad o desciende antes que el opuesto, añadien- hociqueo, glabelar, etc.) pero que desaparecen con
do pequeños desplazamientos pasivos bruscos. La la maduración cerebral. Cuando hay una disfunción
debilidad piramidal se valora mejor con la extensión cerebral difusa (especialmente del lóbulo frontal) , se
del antebrazo y de los dedos; al contrario, la fuerza liberan de su mecanismo inhibitorio.
del bíceps y del puño es un índice menos sensible de
afectación piramidal. Cuando con los ojos cerrados se
le manda mantener ambos miembros superiores con SENSIBILIDAD
las manos hacia arriba y un lado es más débil, poco a Con la cooperación del paciente, al que se le darán
poco la mano del lado débil irá pronando. unas sencillas instrucciones, se exploran sucesiva-
La intensidad de una paresia se puede valorar con mente la sensibilidad táctil (algodón), dolorosa (al-
una escala de O a 5 : O = ausencia total de contracción; filer), artrocinética (movimiento articular), vibratoria
1 = mínima contracción sin movimiento; 2 = movili- (diapasón) y, a veces, la térmica (tubos con agua a
dad a favor de la fuerza de gravedad; 3 = movilidad distintas temperaturas), comparando puntos simé-
contra gravedad; 4 = movilidad contra resistencia, 5 tricos y anotando la distribución de las áreas de hi-
no = normal. En caso de sospecha de enfermedad de la poestesia o hiperpatía. Se comprueba la grafestesia,
CAPÍTULO 86 Exploración física de los enfermos neurológicos. Pruebas complementarias para su diagnóstico

la discriminación de dos puntos y la estereognosia. con un gel conductor, de los cuales parten cables o
Puede buscarse dolor con la presión selectiva o con el derivaciones conectadas por separado con el aparato
estiramiento del nervio ciático por elevación pasiva de registro, amplificación y trazado sobre papel con-
de la pierna extendida (signo de Lasegue). tinuo. Las amplitudes de las ondas varían entre 10
y 60 microvoltios. Se registran de modo simultáneo
de 8 a 32 o más pares de electrodos (derivaciones) y
POSTURA Y MARCHA en determinadas combinaciones topográficas (monta-
jes). Se pueden utilizar procedimientos de activación
Se observa la actitud general del paciente, el manteni-
para facilitar la detección de anomalías, como la hi-
miento de la bipedestación con ojos abiertos y cerra-
perventilación durante tres minutos, la estimulación
dos, la deambulación y los giros (especialmente antes
luminosa intermitente o el registro durante el sueño.
de que el enfermo se sienta observado), la capacidad
Es posible controlar simultáneamente los episodios
para caminar sobre los talones o las puntas de los
clínicos mediante una videograbación sincronizada.
pies y colocando un pie inmediatamente delante del Además, existen procedimientos para el registro am-
otro (punta-talón). La inestabilidad al cerrar los ojos
bulatorio continuo durante 24 horas , relacionando
(signo de Romberg) indica una alteración de la sensi- los síntomas con las modificaciones del EEG, y para
bilidad profunda. Se observa si existen tipos de mar-
establecer mediante ordenadores mapas de actividad
cha característicos de: hemiplejía («de segador», con eléctrica topográfica cerebral.
circunducción de la pierna hacia afuera y hacia ade-
El EEG puede mostrar diversos tipos de actividad,
lante), paraparesia espástica (pasos pequeños con las
caracterizados por la frecuencia , amplitud, morfolo-
piernas rígidas, incluso cruzándose «en tijera»), par-
gía, cantidad, reactividad, variabilidad, topografía y
kinsonismo (festinación, o aceleración involuntaria
relaciones de fase de las ondas.
de la marcha, actitud en flexión, ausencia de braceo),
corea (irregularidades por irrupción de movimientos Los ritmos se denominan alfa cuando su frecuen-
involuntarios), ataxia de origen sensitivo (taloneante) cia está entre 8 y 12 Hz o ciclos por segund.os, beta
o cerebelovestibular («de ebrio », con amplia base de si es mayor de 13 Hz, theta si está entre 4 y 7 Hz y
sustentación e irregular, lateropulsión), polineuro- delta si es menor de 4 Hz. El EEG normal de un adul-
patías (estepaje, elevando el muslo para compensar to en estado de vigilia y relajado registra ritmo alfa
el «pie caído ») y miopatías («de pato », con balan- en regiones occipitales y parietales, que se atenúa al
ceo pélvico y exageración de la lordosis lumbar) . La abrir los ojos o por la actividad mental, mientras que
marcha apráxica (falta de habilidad para ejecutar un en la región frontal predomina el ritmo beta, y en la
programa motor aprendido), se produce cuando hay temporal, el theta.
un daño cerebral difuso y especialmente cuando se El EEG puede ser anormal por la presencia y la dis-
localiza en los lóbulos frontales. A veces hay trastor- tribución de frecuencias aberrantes y configuraciones
nos mixtos de la marcha (por ejemplo, combinación de ondas anormales.
de espasticidad y ataxia). Como expresión de histeria, El EEG es esencial para el estudio de los pacientes
se observan marchas con iITegularidades extravagan- con sospecha de epilepsia, para valorar muerte cere-
tes e incongruencias, o incapacidad para permanecer bral y para estudios del sueño (polisomnografía); tam-
en pie y caminar, aunque conservando una movilidad bién es importante para valorar los efectos cerebrales
normal de las piernas en decúbito (astasia-abasia). En de muchas enfermedades metabólicas y monitorizar
los ancianos es frecuente el bloqueo de la marcha por la actividad cerebral en pacientes anestesiados. En
miedo a las caídas (síndrome FFF: fear to further fall). algunas enfermedades, como la encefalopatía espon-
giforme subaguda (enfermedad de Creutzfeldt Jakob) ,
es una prueba definitoria de laboratorio.
MÉTODOS COMPLEMENTARIOS
Electromiografía
NEUROFISIOLOGÍA CLÍNICA El término de electromiografía, en sentido estricto,
Las pruebas neurofisiológicas detectan alteraciones significa específicamente el registro de la actividad
de la función del sistema nervioso. Las más utiliza- eléctrica del músculo. Actualmente se conoce con
das en la práctica clínica son la electroencefalogra- este nombre la evaluación electrodiagnóstica comple-
fía , la electromiografía, el estudio de la conducción ta, incluyendo los estudios de conducción ne1viosa.
nerviosa, los potenciales evocados y la estimulación La electromiografía de aguja consiste en el examen
transcraneal de la corteza motora. funcional de la actividad eléctrica de las fibras mus-
culares. Se evalúa la actividad en reposo y durante la
contracción voluntaria. Exceptuando la actividad de
Electroencefalografía (EEG) inserción y los potenciales de placa motora (PPM) , la
Es el registro sobre el cuero cabelludo de la actividad presencia de cualquier tipo de actividad espontánea
eléctrica espontánea del cerebro. Para llevarlo a cabo en reposo es anormal. Durante la contracción mus-
se colocan una serie de pequeños discos metálicos cular se observan potenciales de acción, denomina-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Tllll:\L /\ 1) 1\c tívitbd 111uscul;1r espo111:i,wa

100 ¡t\'
f-------------{

100 ms
m
Figura Ejemplo de electmmiograma en reposo, que demuestra activid,1d muscular espont,1nea (ondas
positivas, íibrilacionesl en un paciente con neuropatía ele tipo axonal.

dos potenciales de unidad rnolora. que corresponden muchu menores quo los motores. por lo que se nece-
a la actividad generada por una unidatl motora. Al sitan técnicas clC:J premecliación continua de la sofial
aumentar la intensidad de la conlrncción, los poten- (similar a los potencialus evocados).
ciales de unidad motora aumentan en frecuencia (su- Los resultados dt, estos estudios do conducción
mación temporal) y en cantidad (sumac:ión espacial) nerviosa y S()nsitini nos aportan información cuan-
hasta llegar a constituir un patrón de i11tmform1cia. titativa exprusada corno amplitud ele los potencia-
La uctfricfod espontcíneu cmormol ¡rnedt➔ sm con- les. volocidades dn c:onclucci(ín y latencias distales,
tinua o cles1rnc:adenada por los movimientos dn Ju e información cualitativa con la forma y clispEn-sión
aguja de registro, la contracción voluntaria, la pnrcu- dt➔ las ondas clu los impulsos ulúclrícos nerviosos y
sión muscular o la nstimulaciém édéc:trica. Consislu en musculares.
pot,rnciahis de fibrilación. ondas positivas. descargas La presenci,1 do bloqueos o onlentecimienlos ()11
repetitivas, fasciculacio11es, mioquímias y miotonías la conducciém avucla a localizar una lesión en un
(Fig. 86<1). nervio. En las n:mmpotías nxonoles existo una dis-
El análisis do los componentes individuales de los minución du amplitud o ,1u,.;encü1 dn los potenciales,
potenciales du unidad motora (mediante electrodos mientras c¡ue la velocidad do conducción está conser-
de fibra única) permite analizur ol jítter o variabilidad vada o solo ligurarnonte unlenlucida. En las neuropa-
de latencia entre componentes ele una misma unidad tíos desmielini½cmles está disminuida la vulocidacl de
motora, ele interús en ul estudio de procesos quu afec- conducción (Tabla 86-l). Por consiguiente, la prueba
tan a la lransrnísí(ín neuromusculnr como la rniastunia os útil para ol diaguóstico y pronóstico ele 11Hmomm-
grnvis. ropatfos (incluida In parálisis facial), compresiones
La ecilimuloci(m de w1 1w1-vÍO motor iuduco po- do raíct,s o nervios (hurnias discalos, canal del carpo).
tenciales do ucción que se pueden registrar con elec- polineuropatías agudas o crónicas, neuropatías here-
trodos do superficie o de aguja (potencial ele acción ditarias. ele. (Fig. 80-4). También se pt10du detectur
muscular compuesto). Si r:,stimulnmos en un punto una fatigabílidad anormal después de c,stímulos rnpn-
proxinrnl .\' otro más distal del nervio y rngistramos tidos (miasiunia).
la respuesta cm un mismo músculo podemos calcu-
lar la vdociclad du conducción motora, dividiendo
la distancia entro los puntos de cstimulación por l,1
Potenciales evocados
latencia (tiempo quo transcurre entre la estimulación La estimulm:ión dc; órganos do los sentidos o do los
y la contracción muscular) cliferoncial entrn las dos nnrvios puriforicos evoca uua rüiipuesta eléctrica ün
respuestas. Los potenciales du acción sensitiva son ol área cortical rnceplorn correspondiente y en un n (,.

Tabla Patrones electroneurográficos en las neuropatías periféricas


Potencial Actividad muscular
Latencia Velocidad
evocado en reposo
Neuropatías Normal o Normal o Morfología normal, Fibrilaciones. ondas
axonales aumentada disminuida amplitud baja positivas

Neuropatías Aumentada Disminuida Polifasia, duración Silencio muscular


desmielinizantes aumentada,
amplitud normal
CAPITULO 86 Exploración física de los enfermos neurológicos. Pruebas complementarias para su diagnóstico

> Codo 29 mA
1,00mV 1/0

> E- tenar 6mA


2,00 mV 1/0

J
'- L l. L 1. .1 .,____J

5,0 ms/Div
VCM . MEDIANO

Figura Estudio de conducción nerviosa motora (VCM, velocidad de conducción motora) en el nervio
med iano. La detección se realiza en el músculo abductor corto del pulgar mediante electrodos de superficie. Los
puntos de estimu lación proxima l y distal se reflejan en la figura (flechas). VCM :51 mis (norma l).

mero de «estaciones» de relevo subcorticales, pero no RADIOLOGÍA Y NEUROIMAGEN


podemos colocar electrodos cerca de estas estaciones
subcorticales, ni detectar potenciales de solo unos Radiografías simples de cráneo
pocos microvoltios, por lo que son necesarios méto- Aunque su utilidad es limitada, pueden demostrar al-
dos computarizados de premediación para solventar teraciones del propio hueso craneal, como osteomieli-
esta dificultad. tis y tumores osteolíticos u osteoblásticos (metástasis,
La interpretación de estos potenciales se basa en la mieloma, histiocitosis); permiten observar hiperóstosis
prolongación de las latencias de las ondas, después localizadas (meningiomas), agrandamiento de orificios
del estímulo, las latencias interondas y las asimetrías (por ejemplo, del meato auditivo interno en neurinoma
en el tiempo de aparición de las mismas. Una latencia acústico) o de la silla turca (adenomas hipofisarios). En
se define como anormal cuando se desvía 2,5-3 des- la hipertensión intracraneal pueden mostrar erosión de
viaciones estándar de la media. Las an1plitudes de las las apófisis clinoides posteriores, separación de suturas
ondas son menos informativas. (en niños) o aumento de las impresiones digitales en la
Los estímulos utilizados pueden ser visuales, audi- tabla interna del cráneo. Pueden verse calcificaciones
tivos o sensitivos. anormales en tumores (craneofaringiomas, oligoden-
Los potenciales evocados visuales miden la res- drogliomas) o desplazamientos laterales de la glándula
puesta en la corteza cerebral a estímulos visuales, pineal calcificada. También proporcionan información
después de un periodo de latencia. Sus alteraciones acerca de anomalías congénitas (platibasia), trauma-
no son específicas, puesto que pueden deberse a dis- tismos (fracturas, cuerpos extraños) o enfermedades
tintas lesiones de la vía óptica en diferentes niveles, endocrinometabólicas (hiperparatiroidismo). En la ac-
aunque en un contexto clínico adecuado apoya el tualidad ha sido reemplazada por otras técnicas neuro-
diagnóstico de esclerosis múltiple. rradiológicas en la mayor parte de los casos señalados.
Los potenciales auditivos del tronco encefálico se
generan por la activación secuencial de la vía audi- Angiografía cerebral
tiva ante estímulos acústicos; se ha sugerido que las
La inyección de un medio de contraste radiopaco per-
primeras cinco ondas se generan en estructuras del
mite la visualización radiológica del sistema vascu-
tronco cerebral, y la interpretación clínica de los po-
lar, en sus fases arterial, capilar y venosa. Se utiliza
tenciales se basa principalmente en las latencias de
en el diagnóstico de aneurismas, malformaciones ar-
las ondas I, III y V. La presencia de la onda I y la nor-
teriovenosas, estenosis arterial, disecciones arteriales
malidad de su latencia miden la función del nervio
y angeítis (Fig. 86-5) . La angio-RM ha sustituido a la
auditivo.
angiografía como técnica inicial para el estudio de la
Los potenciales evocados somatosensoriales son vascularización cerebral.
medidos en varios niveles de la vía sensitiva (nervio
periférico, médula, tronco encefálico, tálamo y corte-
za cerebral) tras la estimulación de nervios sensitivos , Tomografía computarizada
y sirven para confirmar lesiones en las vías somáticas Las distintas densidades o coeficientes de atenuación
733
de tipo sensitivo. de los tejidos que atraviesan los rayos X pueden ser
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Figura Angiografía cerebral. Aneurisma de la


arteria comunicante anterim.
Figura Tomografía computarizada cerebral.
Infarto extenso en el lerritorio ele la arteria cerebral
represen lados en imágenes rnecl iante su anál í sis por media izquierda 1irnagen hipodensa).
ordenador. Se distinguen así el hueso, la sustancia
gris y blanca del cerebro, el líquido cefalorraquídeo
y los vasos sanguíneos. La invocción intravenosa
de contrasto radiológico intensifica las imágenes y ckmsidad con los tejidos normales). infartos cerebra-
permite distinguir mejor estructuras normales o pa- les, edema cerebral, lesiones inflamatorias localiza-
tológicas vascularizaclas; también puede inyectarse das, malformaciones. atrol'ias cerebrales o cerebe-
contraste Em los espacios subaracnoicleos (mielografía losas, etc. (Figs. 86-6 y 86-7). Es una técnica segura
asistida por TC). ante la presencia ele material metálico, distingue con
La TC identifica la densidad ele la sangre extravasa- nitidez la sangre en el momento del sangrado y Gs ac-
da en el parénquima cernbral o espacios normalmente cesible en un mayor número ele centros que la RM.
ocupados por el líquido cefalorraquídeo (ventrículos,
cisternas subaracnoicleas), las hiclrocefalias, tumores Imagen por resonancia magnética
(por su efecto expansivo, con compresión y despla- Dentro ele un campo magnético uniforme, una so-
zamiento ele otras estructuras, o por la diferencia de rin de pu ]sos de radiofrecuencia produce un campo
perpendicular al principal: los núcleos ele hidrógeno
(protones) absorben energía y son desviados de su
órbita. y nielvrm desde el estado ele excitación al de
reposo: se provocan señalos que son captadas por un
rnceptor y transformadas en iirnígenes de gran detalle
morfológico, en múltiples planos. La resolución se
mejora utilizando un medio ele contraste paramagné-
tico (gaclolinio).
Tiene la ventaja de reproducir imágenes en cual-
quier plano, usa energía no ionizante y tieno mayor
resolución quo la TC, para diferentes estructuras y
órganos. no solo a nivel del SNC.
La RM es de gran utilidad en el reconocimiento ele
la anatomía normal y de las lesionos que alteran las
propiedades físicas de los tejidos; las colecciones lí-
quidas (edema, quistes) dan cambios particularmente
nítidos ele la señal. El calcio no emite señal. Los te-
jidos próximos al hueso (fosa craneal posterior. mé-
dula) son visibles con menos artefactos que en la TC.
La sangre circulanto se ve como un vacío de señal,
Figura Tomografía computarizada cerebral. lo cual permite visualizar los vasos. Ha mostrado ser
734
Hemorragia en el putamen (imagen hiperdensa). superior a la TAC en el diagnóstico ele esclerosis rnúl-
36 Exploración física de los enfermos neurológicos. Pruebas complementarias para su diagnóstico

Figura lrn,1gen de: resonancia magnet1ca. Se Figura Imagen de resonancia magnética en un


aprecian varias im,ígenes nodulares de hipcrscñal en corle sagital dt> la íos,1 craneal posterior y el raquis
la sustancia hlc1nca de los centros semiovc1les. Corres- cervical. Existe un,1 extensa cavidad extendida longi-
ponde c1 un paciente con esclerosis múltiple. tudinalnwntt· en el centro ele la médula cervíuil co-
rrespondiente ;1 una siringomiclia.

tiple. infartos de: tronco cornbral. gliornas i11filtra11tf;s lares a In TC v la R:VL Ln;; alteracionos producidas
du bajo grado do malignidad. microadunomns hipofi- Pll los pnlronos do flujo. 0 2 v glucosa nos pormil(m,
saríos. siringorniclia. tumores mmlulares. etc. (Figs. ontrn otras patologías, distinguir tumores dn necrosis
8H-B y BfHJ). por radiación. focos (ipilnptógenos. etc.; mús rocinn-
La tm:nología r!P los métodos de obtonción de imá- lomuuln so nsliÍ usando nn enfornrndadns degmwra-
genes por n;son,rncia mag116tica estú nvolucionando tivas como la cnformedad de i\lzlrninwr y l¡¡ E. de
do nHmera con;;trn1to. La RM do difusión es clu muv Parkinson.
corto ti()Jnpo d1, obtención y tienun rnlor crucial para La tomografía compulnrizaclu do omisión de ttn solo
la índic:nción de lrntmniento tromlmlítico m1 ]ns c1a- fotón (SPECT). ha nvolucirmmlo a partir del PET; uti-
pas tempranas dn lu patología vascular isquémica liza radioliganclos qun SD incorporan a compolJ(mtes
(dos horas o monos desde ni inicio de ln isquemia), biológicamrm!o activos. Sn utiliza fundmrnmtalnwnlc
apareciendo como una seiial bríllanlí:; debido a la ros- para localiznr focos epiloptógunos im pacinntes can-
trícción do la difusión do agua on la zona isquúmicn. didntos n cirugía. ya quo es posible inyectar el isóto-
unida u la RM potenciada en ¡rnrfitsión. puede avu- po en ol rnomonto de una crisis. qun rúpidamente se
darnos para comprobar si hay áreas cuya isquemia no localizará cm el cerebro dn forma proporcional al flujo
sea irreversible y por tanto factibles de ser rncupnra- de sangre cln cada zona (elevada en el foco do descar-
clas con dicho tratamiento. ga) _v. dHclo q un el radíoligando es estable cluranto una
En caso de qun sospechemos una vasculitís puede hora. hacer el estudio posteriormente.
ser muy útil la técnica de ECO dn gradiente. que nos
puede mostrar sangre o los productos dn digestión do Ecografía-Doppler
la misma.
El efecto Doppler se refiero a la propiedad de los ul-
trasonidos de cambinr de frecuencia cuando la fuente
Tomografía de emisión de positrones que los emito üStú en movimiento y esto cambio de
y tomografía computarizada de emisión frecuencia es mayor cuanto más rápido sea el flujo.
de un solo fotón (PET y SPECT). El transductor encargado dn emi Iir los ultrasonidos
La tomografía por mnisión ele positrones (más cono- detecta esos cambios ele frecuencia y los puede codi-
cida por PE]~ sus siglas un iJ1gl(1s). miclu la ccrnurn- ficar en forma de color (ecografía DoppJer color). Con
lracíón regional de trazadores radiactivos adminis- esta lócnica podemos modir la velocidad del flujo de
trados sist6micmnente. cuya concentración se deter- las arterias inlracranoales (Doppler transcraneal). mo-
mina mndiante detcicturns externos \' se visualizan. nitorizar la terapia fibrinolítica y tambi6n se utiliza
nrncliante imágenes tomogrúficas. por técnicas simi- para el estudio do las estenosis carotídoas.
-187
Patología general de la función
motora, tono y reflejos
Manuel Noya García, Alfonso Castro García

FUNCIÓN MOTORA
CONCEPTO
Los trastornos de la función motora originan sínto-
mas frecuentes en pacientes con enfermedades del
sistema nervioso, que pueden consistir en pérdida
o disminución del movimiento voluntario (parálisis
o paresia), incoordinación o torpeza (ataxia) o apa-
rición de movimientos espontáneos involuntarios.
También existen alteraciones debidas a la incapaci-
dad para realizar actividades motoras complejas de
modo sucesivo y ordenado (apraxia). Frecuentemen-
te, las alteraciones motoras se acompañan de modifi-
caciones en el tono muscular y en la actividad de los
reflejos osteotendinosos.

BASES ANATOMOFISIOLÓGICAS
El sistema motor está constituido por una vía des-
cendente desde la corteza cerebral, que controla el
movimiento voluntario, los núcleos motores de los
nervios craneales y las neuronas motoras de las as-
tas anteriores de la médula espinal, que inervan a los
músculos, los ganglios basales y el cerebelo. Ademas,
en el control del movimiento intervienen impulsos
aferentes que se proyectan a estas estructuras para
proporcionar información acerca de las posiciones
relativas del cuerpo y la longitud o tono muscular.
El sistema piramidal o corticoespinal se origina en
las neuronas motoras superiores de la corteza cere-
bral, situadas en la circunvolución precentral (Fig.
87-1) (delante del sulcus centralis o cisura de Rolan-
do); cada una de las vías piramidales contiene aproxi-
madamente un millón de fibras. En la corteza cerebral
existe una distribución topográfica determinada de
las neuronas motoras: el área de la extremidad infe-
rior se sitúa en la parte más alta de la circunvolución
y hacia la superficie medial del hemisferio; el movi-
miento del miembro superior ocupa partes medias
736 del girus, y el área correspondiente a la cara, la len-
CAPÍTULO 87 Patología general de la función motora, tono y reflejos

medio) y la protuberancia hasta el bulbo raquídeo, en


Tronco donde forman sendas prominencias anteriores («pi-
n"""-"-,.,..,____ Miembro superior
rámides »). A su paso por el tronco cerebral, las fibras
A~- -1!H';i0 ' ~,>
corticobulbares del tracto piramidal se cruzan al lado
opuesto en distintos niveles, para terminar en los nú-
cleos motores de los nervios craneales.
lenticular La mayor parte de las fibras restantes (corticoespi-
;:,.,---~'--Cápsula
nales) se cruzan al lado opuesto en la parte inferior
interna del bulbo para formar el haz piramidal cruzado, que
desciende a lo largo de los cordones laterales de la
médula espinal (contralateral al hemisferio cerebral
Tá lamo y Mesen céfalo de origen). Una parte menor de las fibras no se cruza,
N. caudado (pedúnculos y forma el haz piramidal directo, situado en los cor-
cerebrales) dones anteriores de la médula.
Las fibras de la vía piramidal establecen sinapsis
Protuberancia con neuronas internunciales en la sustancia gris (cen-
tral) de la médula espinal, que las conectan con las
neuronas motoras inferiores de las astas anteriores,
que son las encargadas de transmitir finalmente el
Bulbo raquídeo impulso a los músculos voluntarios, a través de las
Decusación de raíces anteriores y de los nervios motores. Estas neu-
ronas , denominadas alfa, constituyen la «vía final
Haz corticoespina l común» de toda actividad motora. Otras neuronas de
Médula espinal
lateral las astas anteriores, denominadas gamma, inervan las
Haz corticoespinal directo fibras intrafusales del huso muscular, que interviene
en el control reflejo del tono muscular.
El movimiento organizado que se inicia en la
Figura Vía de la moti li dad vo luntaria (corti-
corteza cerebral es más complejo que la simple ac-
coespina l). Las fib ras origi narias en la corteza motora
tivación de un músculo. Los movimientos de grupos
precentra l (lóbulo frontal) descienden por el centro se-
musculares agonistas van acompañados de actividad
mioval a la cápsu la interna, en cuya rodi ll a se sitúan
de músculos sinérgicos y fijadores de una postura,
las correspondientes a los núcleos motores de los pa-
así como de la relajación proporcional de los mús-
res cranea les (haz corticobulbar), que van cruzándo-
culos antagonistas. Las neuronas internunciales re-
se a los distintos niveles (mesencéfa lo, protuberancia,
ciben impulsos de muchas neuronas piramidales e
bulbo). La vía corticoesp inal se decusa en su mayor
influyen en muchas neuronas motoras inferiores, al
parte a nivel de las pirámides bulbares para formar el
tiempo que reciben también impulsos sensoriales de
haz corticoespinal lateral, situado en los cordones la-
los husos musculares o receptores de la distensión
terales ele la médula, mientras que el haz corticoes-
muscular, que informan continuamente de la posi-
pina l directo sigue por los cordones anteriores de l
ción y son origen de una serie de reflejos espinales.
mismo lado. Ambos haces terminan en las neuronas
Además, a ellas llegan otras informaciones proceden-
motoras inferiores de las astas anteriores de la médu-
tes del ojo y del laberinto, a través de las vías vesti-
la, directamente o con neuronas intercaladas, y son
buloespinales. Finalmente, están también sometidas
acompañados por fibras corticorreticuloespinales.
a influencias del cerebelo y del sistema extrapirami-
dal.

gua y la faringe, las partes más bajas; la superficie de INERVACIÓN DE MÚSCULOS DEL TRONCO
la representación motora de la mano y los labios es
mucho mayor que la que corresponde al tronco o a los
Y EXTREMIDADES
miembros inferiores. La activación de estas neuronas Los axones de las neuronas motoras alfa de cada
origina movimientos de las extremidades contralate- segmento de la médula espinal salen por las raíces
rales; el movimiento de la laringe y la faringe tiene anteriores y dejan la columna por los agujeros inter-
control bilateral. vertebrales; después se dividen en ramos anteriores
Las fibras originadas en la corteza motora pasan (ventrales) y posteriores (dorsales), que inervan los
por la corona radiata y convergen en la cápsula in- músculos de las extremidades y el tronco, respecti-
terna, donde forman un haz compacto, situado entre vamente. En los plexos braquial y lumbosacro, los
el tálamo y el núcleo caudado en su parte medial, y axones se redistribuyen y agrupan en nervios periféri-
el núcleo lenticular en su parte lateral. La vía pirami- cos. Desde un mismo nivel espinal las fibras pueden
dal desciende por los pedúnculos cerebrales (cerebro alcanzar distintos nervios periféricos, y a la inversa:
IÓN Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

un nervio periférico puede recibir fibras de varios nen a la fuerza de la gravedad. Se explora observando
segmentos espinales. Cada nervio periférico se sub- la reacción muscular frente a movimientos pasivos.
divide en ramas que llegan a uno o varios músculos.
Es necesario conocer estos hechos anatómicos para
distinguir, en la práctica clínica, si una lesión está lo- BASES ANATOMOFISIOLÓGICAS
calizada en un segmento espinal, una raíz nerviosa,
un plexo, un nervio periférico, una de sus ramas o en Cuando un músculo es distendido, se estimulan los
el propio músculo (Tabla 87-1). receptores de distensión, particularmente los husos
musculares, que originan estímulos aferentes que
desencadenan un reflejo de contracción parcial. Una
TOPOGRAFÍA DE LAS PARÁLISIS distensión súbita, como la que tiene lugar cuando se
exploran clínicamente los reflejos , origina una con-
La debilidad motora de un grupo de músculos o la tracción rápida, mientras que la distensión prolonga-
disminución de la fuerza de contracción voluntaria da o sostenida despierta una respuesta en forma de
se denomina paresia, y la pérdida completa de mo- contracción tónica.
vilidad, parálisis. Si afecta a una extremidad, habla- El receptor de la distensión en el músculo es el
mos de monoparesia o monoplejía; paraplejía es la huso muscular, situado en paralelo a las demás fibras
parálisis de ambos miembros inferiores, hemiplejía, musculares (extrafusales). Cuando es distendido, se
la parálisis de la mitad derecha o izquierda del cuer- emiten impulsos a través de las fibras aferentes gru-
po, tetraplejía , la de las cuatro extremidades. En raras po la, que contactan de modo monosináptico con las
ocasiones se emplea el término diplejía para referirse neuronas motoras alfa; estas se descargan y causan
a parálisis bilaterales (facial o braquial). contracción muscular. Otras fibras aferentes del huso
muscular se denominan grupo II, y ejercen efectos in-
hibitorios sobre las motoneuronas extensoras y efec-
TONO MUSCULAR
tos facilitadores sobre las motoneuronas flexoras (Fig.
87-2).
CONCEPTO Cerca de los tendones se encuentran los órganos
El tono de un músculo es la respuesta que muestra tendinosos de Golgi, conectados a aferentes del grupo
a una distensión pasiva; se pone de manifiesto en el Ib , sensibles a la contracción activa y a súbitos incre-
mantenimiento de posturas, entre ellas las que se opo- mentos en la tensión.

Tabla Esquema de un examen motor breve


Raíz Nervio Músculo Acción
C5 Circunflejo Deltoides Abducción del hombro
C6 Musculocutáneo Bíceps Flexión del codo
C7 Radial Tríceps Extensión del codo
C8 Mediano Flexor de dedos Flexión de dedos
01 Cubital lnteróseos dorsales Abducción de dedos
L1 Femoral Psoas ilíaco Flexión de cadera
L2 Obturador Aductores Aducción del muslo
L3 Femoral Cuádriceps Extensión de rodilla
L4 Poplíteo externo Tibial anterior Dorsiflexión del tobillo
L5 Poplíteo externo Extensor del dedo gordo Dorsiflexión del dedo gordo
S1 Poplíteo externo Gemelos Flexión plantar del pie
S2 Poplíteo externo Flexor de dedos Flexión plantar de dedos del pie

738
CAPÍTULO 87 Patología general de la función motora, tono y reflejos

Vía corticoespinal
Vía reticuloespinal
Vía vestibuloespinal

Médula
espinal Neurona
~ ~ --- t- i-t- - internuncial

1---il--+--- - Fibras Ia
Motoneurona
- -- t
gamma
- - Fibras lb
Motoneurona
alfa - - --i-,
1- -+-- - Fibras 11

=:::§€§~'{':':_~~~~~~~~ ~ ~---ZSrgano
tendinoso
de Golgi
Fibras extrafusales Huso muscular

Figura Orga nización del arco reflejo muscu lar. Las neuronas motoras alfa de l asta anter ior de la médu la
esp in al inervan las fibras muscul ares y reciben información del huso muscu lar, a través de las fibras la, y del
órgano tend inoso de Golgi, a través de las fibras lb. La d istens ión del huso muscu lar provoca la descarga de las
motoneuro nas alfa (reflejo monosin áptico). Las f ibras 11 so n aferentes de reflejos flexores. La función de las moto-
neuronas alfa y gamma está influida por las vías corticoesp ina l, reticu loespinal y vestibuloespinal.

Las motoneuronas gamma inervan los husos mus- flácida pierde en los miembros afectados toda resis-
culares y regulan su sensibilidad a la distensión. Su tencia a la movilización pasiva; el miembro elevado
acción durante el movimiento consiste en causar con- por el observador cae bruscamente al ser soltado y
tracción de las fibras del huso muscular de manera permanece aplastado y deformado sobre la cama. Los
que sigan actuando como sensores aferentes durante grados menores de hipotonía se reconocen por una
la contracción. mayor oscilación en los desplazamientos pasivos, en
El tono muscular está regulado por fibras reticu- comparación con el lado sano, o por el signo del rebo-
loespinales que acompañan a la vía piramidal y que te (véase Cerebelo).
tienen u n efecto inhibitorio sobre el reflejo de dis- El aumento del tono muscular o hipertonía puede
tensión, mientras que la vía vestibuloespinal lateral adoptar distintas formas. Una de ellas es la espasti-
tiene un efecto facilitador. cidad, producida por lesiones de las vías piramida-
les y reticuloespinales, que originan un aumento de
la excitabilidad de las motoneuronas alfa y gamma,
ALTERACIONES EN EL TONO MUSCULAR liberadas de las influencias inhibitorias; los mús-
La hipotonía o flacidez es la disminución del tono. culos de los miembros afectados muestran mayor
Se produce cuando está interrumpido el arco reflejo resistencia a la distensión pasiva, especialmente al
espinal responsable del tono , por lesión de la vía afe- inicio del intento de movilización; la resistencia
rente o eferente (nervios periféricos, raíces nerviosas, cede repentinamente al continuar el movimiento
médula espinal), por disminución de la actividad efe- (signo «de la navaja »). Frecuentemente está acom-
rente gamma, como ocurre en el síndrome cerebeloso, pañado de clonus, fenómeno consistente en que la
o por lesiones agudas del cerebro o médula espinal distensión sostenida de un músculo despierta una
que suprimen transitoriamente toda actividad refleja serie de contracciones y relajaciones repetidas, a ve-
739
(shock espinal o cerebral) . El paciente con parálisis ces inagotables; se explora preferentemente en los
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

músculos cuádriceps femoral y gemelos (clonus de FUNDAMENTOS FISIOPATOLÓGICOS


rótula y tobillo).
Otra forma de hipertonía, denominada rigidez, La actividad refleja del sistema nervioso consiste en
se observa en pacientes con enfermedades de la una respuesta automática (involuntaria) despertada
sustancia nigra y los ganglios basales; en esta situa- por un estímulo. En todo arco reflejo hay un receptor
ción predomina la descarga de neuronas alfa sobre del estímulo, una vía aferente o centrípeta, una co-
las gamma. Esta rigidez «extrapiramidal » puede ser nexión entre neuronas (uni o multisináptica). una vía
uniforme a través de todo el ángulo del movimiento eferente o centrífuga, que transmite la respuesta, y un
pasivo (rigidez plástica o en tubo de plomo] o bien órgano efector, el músculo. La actividad refleja mus-
ser una rigidez en rueda dentada, cuando cede y se cular ejerce un importante papel en el mantenimiento
reanuda intermitentemente, por lo regular debido a de la postura y la ejecución del movimiento.
asociación con temblor (como en la enfermedad de Los reflejos de distensión muscular son una de las
Parkinson). formas más simples de reflejos. La distensión o esti-
En los estados de distonía hay contracción simultá- ramiento de un músculo provoca su contracción. Tal
nea de músculos agonistas, antagonistas y sinergistas, como hemos visto (véase Tono). El receptor de la dis-
y la parte del cuerpo afectada queda virtualmente fija tensión es el huso muscular; los impulsos originados
en una posición anormal; está muy aumentada la des- al ser distendido pasan a lo largo de fibras aferentes
carga de motoneuronas alfa y alterada la inhibición del grupo la, cuya neurona tiene una sinapsis con la
de músculos antagonistas. neurona motora alfa situada en las astas anteriores de
Finalmente, la rigidez de descerebración aparece la médula, y que se descarga ante el estímulo, hacien-
con lesiones graves del cerebro medio, acompañadas do que el músculo se contraiga de modo rápido (res-
de pérdida de consciencia, que liberan al tronco en- puesta fásica). Las otras fibras aferentes del grupo II
cefálico, al cerebelo y a la médula espinal del con- ejercen principalmente efectos inhibitorios sobre las
trol cerebral; los reflejos de distensión tónicos están neuronas motoras extensoras, y efectos facilitadores
incrementados, así como la descarga eferente gamma sobre las neuronas motoras flexoras, es decir, actúan
a los músculos extensores; los mecanismos son me- como aferentes de reflejos flexores, lo cual se hace
diados por las vías reticuloespinal y vestibuloespinal; evidente en situaciones de espasticidad. Las neuro-
los cuatro miembros están extendidos rígidamente y nas motoras gamma, también situadas en las astas
puede haber retracción del cuello e incurvación de la anteriores de la médula, inervan el huso muscular y
espalda hacia atrás (opistótonos). regulan su sensibilidad a la distensión o estiramiento.
Los controles supraespinales de las neuronas motoras
alfa y gamma se ejercen a través de las vías corticoes-
REFLEJOS pinal, vestibuloespinal, reticuloespinal y rubroespi-
nal.
CONCEPTO
La exploración clínica de los reflejos consiste en la EXPLORACIÓN DE LOS REFLEJOS
búsqueda de respuestas motoras involuntarias ante MUSCULARES
estímulos aplicados por el examinador. Los reflejos
musculares se originan por estiramiento muscular, Debe procurarse que el paciente esté Jo más relajado
mientras que en los reflejos superficiales el estímulo y cómodo posible; las palabras «relájese» o «no me
es aplicado a la piel. Estos reflejos están presentes en ayude» contribuyen a la pasividad, lo mismo que la
los individuos sanos pero, en determinadas condicio- distracción con preguntas. Es necesario obtener un
nes patológicas, su actividad está disminuida o abo- grado apropiado de tensión muscular mediante lapo-
lida o, por el contrario, incrementada. Es importante, sición adoptada pasivamente, ya que el reflejo no se
en la valoración de cualquier paciente, detectarlos e obtendrá si el músculo está excesivamente tenso o de-
interpretarlos correctamente, e integrarlos con el res- masiado relajado; en general, se adopta una posición
to de la exploración y con la historia clínica. Los re- de semiflexión de la articulación correspondiente. La
flejos musculares son el resultado de una distensión aplicación del estímulo se hace con el martillo de re-
brusca de un músculo, por tracción o estiramiento flejos, percutiendo en el punto de elección para cada
provocados por la percusión en determinados puntos. reflejo. Puede facilitarse la obtención de los reflejos
En todos los casos, es la tracción muscular en puntos mediante maniobras que provoquen un aumento ge-
electivos lo que provoca la respuesta refleja, aunque neral del tono gamma, por la contracción activa de un
sea percutiendo un tendón o el periostio (se les de- grupo muscular distante; así, para examinar los re-
nomina también reflejos ostestendinosos, ROT); las flejos de una extremidad superior se pide al paciente
únicas zonas reflexógenas están dentro del músculo; que apriete los dientes, cierre el puño del lado opues-
las ampliaciones del área de estímulo eficaz pueden to o aproxime fuertemente las rodillas; y mientras
llamarse «aumento de la zona de provocación o del se exploran los reflejos de los miembros inferiores,
740 área reflexógena». el paciente puede hacer una contracción voluntaria
CAPÍTULO 87 Patología general de la función motora, tono y reflejos

fuerte y sostenida para separar las manos enlazadas con la pierna levemente flexionada y abducida
por los dedos en flexión (maniobra de Jendrassik). La o rotación externa de la cadera; también puede
estimación de la actividad del reflejo se hace valo- explorarse con el enfermo arrodillado sobre una
rando el estímulo mínimo necesario para activarlo , silla, dejando los pies sin apoyo por fuera de
la velocidad de contracción y relajación, el grado de su borde; se percute el tendón de Aquiles o la
acortamiento muscular y la fuerza de contracció_n , y planta del pie a fin de distender los músculos
se gradúa reiterando las observaciones. gemelos. Interviene el nervio tibial y su nivel es
Teóricamente se pueden obtener reflejos de disten- Sl (en parte, 15 y S2).
sión muscular de casi todos los músculos accesibles,
pero en la práctica sólo algunos tienen interés semio-
lógico. SEMIOLOGÍA DE LOS REFLEJOS
El reflejo mandibular se obtiene percutiendo MUSCULARES
sobre un dedo del explorador que presiona la Por sí mismas, la hiperactividad o la ausencia de re-
mandíbula hacia abajo manteniendo semiabierta flejos tendinosos no son necesariamente anormales.
la boca del paciente; se contraen así los múscu- Ocasionalmente, algunos individuos sin evidencia de
los maseteros y temporales . Este reflejo está me- enfermedad muestran ausencia de reflejos o hiperre-
diado por la rama mandibular del nervio trigé- flexia. La significación clínica de estas desviaciones
mino; su nivel de integración es protuberancia!. de la normalidad debe interpretarse estableciendo
En condiciones normales la respuesta es débil y comparación entre reflejos simétricos. Las respuestas
difícil de observar; si se obtiene con facilidad, en cuanto a amplitud de los reflejos son distintas en
indica incremento de su actividad. Se observa cada persona, pero en condiciones normales son si-
en síndromes bipiramidales, como la esclerosis métricas. Sus alteraciones pueden ser generalizadas
lateral amiotrófica y la parálisis pseudobulbar. o localizadas exclusivamente en uno o más grupos
El reflejo bicipital se explora con el brazo semi- musculares.
flexionado percutiendo sobre un dedo apoyado
sobre el tendón del bíceps. Está mediado por el
nervio musculocutáneo, y su nivel medular co- Disminución de los reflejos musculares
rresponde a C5-C6.
Los reflejos se deprimen o están abolidos por
El reflejo braquiorradial o estilorradial se ob- alteraciones funcionales en cualquier parte del
serva manteniendo el brazo en semipronación arco reflejo, con la excepción de los husos mus-
y flexión , y percutiendo sobre la extremidad culares, puesto que no se conocen clínicamente
distal del radio; se ve o se palpa la contracción daños selectivos de estos.
del músculo estilorradial o supinador largo. Está
mediado por el nervio radial; su nivel correspon- La actividad fusimotora mantenida por las neu-
de a C5-C6. ronas motoras gamma de los husos musculares
El reflejo tricipital se examina con el brazo semi- se deprime inicialmente en casos de lesiones
agudas del sistema nervioso central, tales como
flexionado, percutiendo el tendón del tríceps por
encima del olécranon y cerciorándose de que se shock medular o procesos cerebelosos agudos .
diferencia el verdadero reflejo de la contracción Las fibras aferentes se alteran en enfermedades
local de fibras musculares por percusión directa de los nervios periféricos (polineuropatías y le-
de las mismas. Está mediado por el nervio radial, siones localizadas de nervios sensitivos, como
y su nivel predominante es C7 (en parte Ca y C6). atrapamientos, traumatismos o compresiones) ;
El reflejo flexor de los dedos se observa como un se acompañan de alteraciones de la sensibili-
movimiento de flexión de los mismos con aduc- dad. Las lesiones de las raíces posteriores (ra-
ción del pulgar, al golpear sobre la superficie diculopatías, hernias discales, compresiones
palmar de los dedos de la mano semiflexionados tumorales, tabes dorsal) cursan habitualmente
en posición de supinación. Su nivel es predomi- con dolor y alteraciones objetivas de la sensi-
nantemente ca. bilidad.
En el reflejo rotuliano se contrae el músculo Las neuronas motoras del asta anterior de la mé-
cuádriceps femoral al percutir sobre el tendón dula se dañan en la poliomielitis aguda y en la
rotuliano con la rodilla levemente flexionada de enfermedad de la neurona motora; cursan con
modo pasivo, elevándola con una mano apoyada parálisis, atrofia muscular y fasciculaciones.
en el hueco poplíteo. Interviene en este reflejo el Las fibras eferentes se alteran en las lesiones de
nervio femoral , y su nivel es predominantemen- las raíces anteriores y plexos nerviosos, mono-
te 13-14 (en parte, 12). neuropatías y neuropatías periféricas. Se asocian
El reflejo aquíleo se denomina también del trí- a paresias de distribución característica en los
ceps sural. Para explorarlo se realiza, con el en- grupos musculares inervados por determinadas
741
fermo acostado , una dorsiflexión pasiva del pie, raíces o nervios.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

En los propios músculos, las diversas rniopatías personas ancianas, obesas o con paredes abdo-
originan hipo o arreflexia. minales flácidas por multiparidad o cirugía, a
La disminución de los reflejos musculares puede veces sólo es posible obtenerlos cuando tienen
deberse a contracción excesiva de los antagonis- significación patológica.
tas, por defecto de relajación o rigidez extrapira- Reflejo cremastérico. Se estimula la piel de la
midal. En el hipotiroidismo los reflejos muscula- cara interna del muslo en su porción más alta
res están enlentecidos. y se observa la contracción del cremáster con
ascenso del testículo del mismo lado. Es más pa-
Aumento de los reflejos musculares tente en niños. Se altera de modo unilateral en
lesiones corticoespinales.
La causa más común de hiperreflexia es la lesión Reflejo anal. El esfínter externo se contrae con
de las neuronas motoras superiores de cualquier estímulos de la piel perianal. Se pierde en lesio-
origen (patología vascular cerebral, tumores, es- nes de la cauda equina (raíces sacras 4. ª y 5.ª).
clerosis múltiple, esclerosis lateral amiotrófica, Reflejo bulbocavernoso. Contracción de este
etc.). músculo del periné al aplicar una presión sobre
Las lesiones hemisféricas unilaterales provoca- el glande. Corresponde a los segmentos S2-S3-
rán hiperreflexia en las extremidades contrala- S4.
terales, asociada a hemiparesia, espasticidad y Reflejo plantar. Se trata de uno de los reflejos
signo de Babinski. más importantes en la exploración neurológi-
Las lesiones bilaterales producen hiperreflexia ca. El estímulo de la parte externa de la planta
en ambos lados, y afectan a extremidades supe- del pie, desde el talón hacia la base del quinto
riores y/o inferiores, dependiendo del nivel de dedo, produce normalmente la flexión plantar
la lesión. de los cinco dedos (respuesta plantar en flexión
También se observa hiperreflexia en estados de o normal). La respuesta anormal consiste en la
ansiedad, después de realizar ejercicio físico y extensión dorsal del dedo gordo, en ocasiones
en la tirotoxicosis. acompañada de separación «en abanico» de los
Por otra parte, en pacientes con lesiones de la demás dedos (respuesta plantar en extensión o
neurona motora superior es frecuente apreciar un signo de Babinski), y es indicativa de lesión cor-
aumento en el área reflexógena, debido a una hi- ticoespinal estructural, en cualquier punto des-
perexcitabilidad de husos musculares distantes; de la corteza motora contralateral a la columna
por ejemplo, puede obtenerse el reflejo rotuliano ipsilateral de la médula espinal. Sin embargo,
percutiendo a lo largo de la superficie anterior esta respuesta es normal en los primeros 18 me-
de la tibia; este fenómeno da lugar en ocasiones ses de vida y puede encontrarse como alteración
a la aparente «inversión » de un reflejo, tal como funcional después de una crisis epiléptica, du-
la extension paradójica del brazo cuando se per- rante el sueño y en situaciones de coma. Puede
cute el tendón del bíceps, debido en realidad a la ir acompañada de flexión de la rodilla, e incluso
provocación del reflejo tricipital. de la cadera; en lesiones medulares graves hay
respuestas masivas, con evacuación de vejiga
e intestino. También puede obtenerse el reflejo
REFLEJOS CUTÁNEOS (O SUPERFICIALES) con otros estímulos, como presión sobre el borde
tibial anterior, golpeteo sobre la base del dedo
Se originan por un estímulo sobre la piel que da lugar
gordo, flexión forzada del quinto dedo, estímulo
a una respuesta motora; generalmente son reflejos po-
de la piel dorsal del pie, etc. En el primer año de
lisinápticos, y en ellos interviene más de un segmen-
vida la dorsiflexión del dedo gordo forma parte
to. Tienen importancia clínica los siguientes:
de una respuesta protectora (nociceptiva) incon-
Reflejos cutáneos abdominales superiores, me- trolada que afecta a todos los músculos flexores
dios e inferiores . La estimulación de la piel del de la extremidad inferior, entre ellos el extensor
abdomen origina contracción de los músculos hallucis longus (tibial anterior) y otros flexores
subyacentes, con desviación del ombligo hacia dorsales del pie y los dedos que actúan fisioló-
el estímulo. La disminución o pérdida unilateral gicamente como músculos flexores. Cuando el
de estos reflejos es indicativa de lesión de la vía niño aprende a permanecer de pie, los reflejos
corticoespinal del mismo lado; su abolición es flexores son inhibidos por una vía reticuloespi-
relativamente temprana en casos de esclerosis nal, de modo que las vías flexoras pueden ser
múltiple, mientras que pueden conservarse en usadas para movimientos voluntarios tales como
otras enfermedades avanzadas de las mismas caminar. El daño de la neurona motora superior
vías, como la esclerosis lateral amiotrófica. Una libera los reflejos flexores, de tal manera que el
lesión segmentaria de la médula espinal a nivel dedo gordo se extiende.
dorsal puede reconocerse por estar presentes los Otros reflejos patológicos de liberación son el
742
reflejos superiores y abolidos los inferiores. En palmomentoniano, el glabelar, el de hociqueo,
CAPÍTULO 87 Patología general de la función motora, tono y reflejos

el de succión y los de prensión y persecución. El golpear la falange distal del dedo medio. Los reflejos
de mayor interés clínico es el reflejo de prensión cutáneos abdominales y cremastérico a menudo están
de la mano , provocado al rozar la palma, y que abolidos en el lado correspondiente a la parálisis.
reaparece como consecuencia de lesiones del ló- Si aparece atrofia muscular, es moderada y debida
bulo frontal contralateral. a desuso. No se observan fasciculaciones, y no hay
El reflejo corneal y otros reflejos del tronco ce- signos de denervación en el electromiograma.
rebral son analizados en el capítulo correspon-
diente, junto con los nervios craneales.
SÍNDROME DE LA NEURONA MOTORA
INFERIOR
SÍNDROMES CLÍNICOS
Las lesiones de la neurona motora inferior originan
debilidad muscular de grado variable, hasta la pa-
SÍNDROME DE NEURONA MOTORA SUPERIOR rálisis completa, y se acompañan precozmente de
(CORTICOESPINAL O PIRAMIDAL) atrofia por denervación de los músculos, en una dis-
La lesión de la vía piramidal da lugar a debilidad tribución que depende de los niveles: lesión de un
motora de grupos musculares amplios, más que in- nervio aislado, un plexo, una raíz motora, uno o más
dividuales , debido a la proximidad de las fibras , es- segmentos medulares o enfermedad difusa de moto-
pecialmente en la cápsula interna. En este nivel, una neuronas.
lesión (frecuentemente vascular) afecta a todas las El tono disminuye , en proporción con el grado de
fibras corticoespinales y corticobulbares , originando debilidad muscular. Los reflejos musculares están
hemiplejía del lado opuesto del cuerpo. Los movi- abolidos o disminuidos de acuerdo con el grado de
mientos bilaterales de la parte superior de la cara, daño del arco reflejo; es de destacar que en la esclero-
mandíbula, faringe, laringe, cuello y tórax , están sis lateral amiotrófica (ELA) pueden estar incremen-
poco o nada afectados. La paresia de la mitad inferior tados por ir asociados a lesión de la neurona motora
de la cara se reconoce por el aplanamiento del surco superior.
nasolabial o por una ligera caída de la comisura bu- Como consecuencia del desuso y de la afectación
cal; los movimientos emocionales de la cara (p. ej ., del sistema nervioso autónomo (control vasomotor),
durante la risa) pueden ser normales, al efectuarse se producen cambios tróficos en la piel (frialdad, cia-
por vías no piramidales. En las extremidades supe- nosis, fragilidad de uñas) y los huesos (osteopenia).
riores están más afectados los músculos abductores Las fasciculaciones son contracciones espontáneas
y los movimientos finos de los dedos, y en las in- de una o más unidades motoras, visibles a través de
feriores predomina la alteración de los flexores (de la piel en un músculo que está aparentemente en
la cadera y del pie). El miembro superior tiende a reposo; se trata de contracciones irregulares de fas-
mantenerse flexionado y en aducción, y la pierna, en cículos musculares aislados. Son indicativas de de-
extensión; si es posible la marcha, el enfermo realiza nervación, con incremento de la sensibilidad de las
una circunducción de la pierna en la cadera (marcha fibras a la acetilcolina circulante; su causa principal
de segador). es la ELA y, con menor frecuencia, la poliomielitis,
Inmediatamente después de una lesión cerebral la siringomielia o la polineuropatía. En personas sa-
aguda, los miembros están flácidos, pero en el curso nas, especialmente en estados de tensión, pueden ob-
de los primeros días o semanas el tono se incrementa servarse fasciculaciones benignas, no acompañadas
de modo progresivo y aparece espasticidad, más pro- de atrofia o debilidad, y que por lo general afectan
nunciada en los aductores del hombro , flexores del repetidamente al mismo fascículo. La fibrilación es
codo y dedos , pronadores de la mano, extensores de un término electromiográfico que se refiere a la acti-
la cadera y rodilla y flexores plantares del pie. vidad eléctrica espontánea en fibras musculares in-
Después de la fase aguda inicial, aparece hiperre- dividuales por denervación , no visible a través de la
flexia muscular y con frecuencia clonus. piel. Las mioquimias son ondulaciones irregulares de
El signo de Babinski, o respuesta en extensión del fibras musculares superficiales, generalmente en los
reflejo plantar, es característico de las lesiones de la párpados o la cara; aunque en general son benignas,
neurona motora superior; en la mano puede observar- pueden constituir un signo de patología orgánica en
se el signo o reflejo de flexión de los dedos obtenido al la vía eferente correspondiente.

743
·188
Patología general de los núcleos
basales. Movimientos anormales
y síndrome parkinsoniano
Manuel Noya García, Alfonso Castro García

CONCEPTO
Los núcleos basales del cerebro constituyen parte del
sistema extrapiramidal, y complementan la función
de la vía piramidal para controlar el tono , la postura
y el movimiento.
El sistema extrapiramidal consiste en todas las
vías motoras descendentes que no pasan por las pi-
rámides del bulbo raquídeo. Las fibras extrapirami-
dales nacen en múltiples áreas de la corteza cerebral,
especialmente en el área sensitivomotora (alrededor
de la cisura de Rolando), y se proyectan a los núcleos
o ganglios basales, y de aquí al tronco cerebral y a la
médula espinal. La actividad del sistema extrapiranü-
dal se expresa finalmente por las vías reticuloespinal
y vestibuloespinal, que conectan en las astas anterio-
res de la médula espinal con neuronas internunciales
y neuronas motoras inferiores.
El sistema extrapiramidal es responsable del man-
tenimiento de la postura erecta y de los movimientos
axiales (cuello y tronco) y proximales de las extre-
midades. La posición en pie supone un reflejo que
resiste la fuerza de la gravedad. Puede ser modificada
voluntariamente por la actividad corticoespinal (pi-
ramidal) , para situarse en la posición adecuada para
los movimientos planeados. Durru1te la marcha regula
automáticamente la extensión de los miembros supe-
riores («braceo ») y la flexión de los miembros infe-
riores.
También desempeña un papel esencial en el ini-
cio del movimiento, de tal modo que sus alteracio-
nes dan lugar a acinesia (incapacidad para iniciar el
movimiento) o bradicinesia (pobreza y lentitud de
movimientos).
Ejerce una influencia controladora del balance en-
tre la actividad de las neuronas motoras alfa y gamma,
y como consecuencia de sus enfermedades se produ-
cen anomalías del tono muscular o temblor.
Algunas de las enfermedades que afectan al siste-
744
ma extrapiramidal pueden producir la liberación de
CAPÍTULO 88 Patología general de los núcleos basales. Movimientos anormales y síndrome parkinsoniano

mecanismos inhibitorios , dando lugar a la aparición des, como la enfermedad de Parkinson o la enferme-
de determinados tipos de movimientos involuntarios. dad de Huntington.
Los dos síndromes extrapiramidales más caracte- De todos los circuitos descritos, el motor es el mejor
rísticos son el acinético-rígido (parkinsoniano) y el estudiado y es el más importante en la patogenia de
hipercinético-hipotónico (corea). los trastornos del movimiento . Ello ha llevado a for-
mular un modelo de funcionamiento de los ganglios
basales, según el cual el estriado, núcleo principal de
RECUERDO ANATOMOFUNCIONAL entrada al circuito, transmite el flujo de información
que recibe de la corteza a los núcleos de salida de
Los ganglios basales se localizan en el diencéfalo y los ganglios basales, sustancia negra pars reticulata
en el meséncefalo, anatómicamente independientes, y globo pálido medial, a través de una vía directa y
aunque fisiológicamente relacionados. Comprenden de una vía indirecta. Las dos vías se originan en di-
el estriado (caudado, putamen, accumbens y tubércu- ferentes subconjuntos neuronales del estriado, y en
lo olfatorio), el globo pálido, con su porción interna el modelo permanecen funcionalmente segregados.
(Gpi) y externa (Gpe), el núcleo subtalámico (NST) y En la vía directa, las neuronas estriadas gabaérgicas,
la sustancia negra pars compacta (SNc) y pars reticu- que contienen dinorfina como neuromodulador y ex-
lata (SNr) (Fig. 88-1). presan receptores de dopamina Dl , proyectan mono-
Los ganglios basales funcionan como componentes de sinápticamente a la sustancia negra pars reticulata y
una familia de circuitos que tienen su origen en áreas al globo pálido medial. En la vía indirecta, la salida
corticales específicas. Se han descrito cinco circuitos del estriado alcanza los núcleos diana a través de una
córtico-estriado-pálido-tálamo-corticales, organiza- ruta más compleja. Un subconjunto diferente de neu-
dos en paralelo a lo largo de todos los ganglios de ronas gabaérgicas que contienen encefalina y expre-
la base y que están funcionalmente segregados. Son san receptores D2 , proyectan al globo pálido lateral
el circuito moto1~ el límbico, el oculomotor, el orbito- que envía proyecciones gabaérgicas al núcleo subtalá-
frontal o prefrontal y el cingular anterior. mico. Este, a su vez, envía eferencias glutamatérgicas
Por este motivo, los ganglios basales intervienen, ade- a los núcleos de salida y al globo pálido lateral. Desde
más de en el control motor, en la modulación de otras dichos núcleos de salida, inhibidores, salen proyec-
funciones corticales, como las emocionales y las cog- ciones gabaérgicas que alcanzan los núcleos ventral
nitivas. Esto explicaría la asociación de trastornos del lateral y ventral anterior del tálamo. Estos núcleos
movimiento y alteraciones cognitivas, oculomotoras talámicos envían proyecciones glutamatérgicas a la
y afectivas que aparecen en determinadas enfermeda- corteza motora, cerrando así el circuito (Fig. 88-2).
La consecuencia funcional de tal organización es
que, de acuerdo con este esquema, la activación de
la vía directa o de la vía indirecta conduce a cam-
bios opuestos en la red de salida del circuito de los
ganglios basales. La activación de las neuronas ga-
baérgicas estriadas que peitenecen a la vía directa
causa inhibición de las neuronas gabaérgicas de los
núcleos de salida . Ello conduce a una desinhibición
de los núcleos talámicos que están bajo el control in-
hibidor de las proyecciones de los núcleos de salida.
Al contrario, la activación de las neuronas estriadas
que proyectan al globo pálido lateral, en la vía indi-
recta, determina la inhibición del globo pálido lateral
y; como consecuencia, la desinhibición del núcleo
subtalámico. La activación del núcleo subtalámico,
Figu ra Representación esquemática de las que es glutamatérgico, incrementa la actividad de los
principales conexiones entre los núcleos basales (sis- núcleos de salida. En consecuencia, su control inhibi-
tema extrapiramidal ). Desde el punto de vista funcio- dor sobre el tálamo motor resulta reforzado.
nal, el caudado y el putamen constituyen el núcleo El resultado de todo ello es una organización del
estriado. Existe un circuito córtico-estriado-tálamo- circuito más articulada, en la cual el núcleo subta-
cortical relacionado con la programación y control del lámico pasa a ocupar un papel preponderante y, en
movimiento. La vía nigroestriada (cuyo neurotransmi- cierto modo, independiente.
sor es la clopamina) degenera en la enfermedad ele Par-
kinson. Las fibras del caudado y putamen se proyectan
a través del pálido al tálamo, y ele aquí a la formación MOVIMIENTOS INVOLUNTARIOS
reticular, con efecto sobre el tono muscular. El núcleo
subtalámico se proyecta por una vía inhibidora sobre Aunque no todos los movimientos involuntarios se
745
el pálido. deben a enfermedades de los ganglios basales, su apa-
SECCION Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

(mioclonos de acción). Por el origen de la actividad


Normal
anormal se clasifican en corticales, subcorticales,
corticosubcorticales, medulares y periféricos. Las
enfermedades más frecuentemente responsables de
mioclonos son las epilepsias mioclónicas· familiares
(como el síndrome de Ramsay Hunt y la enfermedad
de Lafora}, los espasmos del lactante (síndrome de
West}, la epilepsia mioclónica juvenil, el síndrome
epiléptico de Lennox-Gastaut, la encefalopatía es-
pongiforme subaguda (enfermedad de Creutzfeldt
Jakob}, la panencefalitis esclerosante subaguda, la
encefalitis herpética, encefalopatías metabólicas y
tóxicas (insuficiencia renal, litio] y la hipoxia cere-
bral.
Dopamina

BALISMO
Figu ra Organización funciona l de la red de Consiste en una serie de movimientos coreicos in-
c ircuitos de los ganglios basales. GPi: globo pálido voluntarios amplios de músculos proximales, con
parc ial interna; Gpe: globo pálido porción externa; desplazamiento de extremidades, sin propósito, vio-
SNc: sustancia negra, pars compacta; SNr: sustancia lentos y agotadores, generalmente de las dos extremi-
negra, pars reticulata; NST: núcleo subta lám ico. Los dades de un mismo lado (hemibalismo}, de comienzo
tonos de los rectángulos y de las flechas ind ican los agudo, que se produce como resultado de lesiones
neurotransmisores (g lutamato, GABA y dopamina) vasculares del núcleo subtalámico de Luys contrala-
implicados en los distintos niveles. teral o sus conexiones o de pequeños infartos múlti-
ples . En algunos casos puede ocurrir bilateralmente
rición es característica de las disfunciones del siste- (bibalismo) como consecuencia de infartos !acunares
ma extrapiramidal. Los analizamos: bilaterales de los ganglios basales.

TIC COREA
El tic o espasmo de hábito es un movimiento brusco Son movimientos involuntarios con cierto grado de
que aparece de modo irregular, pero recurrente, con organización y propósito, intermitentes y cambiantes,
mayor frecuencia en los músculos perioculares, cara a veces incorporados al movimiento voluntario, con el
y hombros , del cual el sujeto es consciente. De hecho , cual interfieren, al igual que pueden dificultar la voz,
se realiza de modo voluntario y puede inhibirse du- el ciclo respiratorio o la deglución. Frecuentemente
rante un cierto tiempo, pero al ejecutarlo el paciente consisten en aumento de la gesticulación facial, pro-
obtiene alivio de una tensión que , de otro modo, es trusión de labios y lengua, desviación de comisura
intolerable. Se relaciona con la ansiedad, y en algu- bucal y movimientos irregulares en partes distales de
nos pacientes con neurosis obsesivo-compulsiva son las extremidades. Cesan durante el sueño. Se deben
múltiples. Los tics se hacen tan habituales que se rea- a alteraciones orgánicas o funcionales del estriado
lizan de modo casi involuntario. En la enfermedad de (habitual del núcleo caudado). Sus causas son la co-
Guilles de la Tourette, que se inicia en la infancia o en rea de Sydenham (expresión de fiebre reumática), la
la adolescencia, los tics son múltiples, incluyen rui- enfermedad de Huntington (de herencia autosómica
dos faríngeos y se asocian a lenguaj e procaz y altera- dominante y asociada a demencia progresiva), ciertos
ciones de la conducta, déficit de atención y trastorno fármacos (especialmente la L-DOPA, así como las fe-
obsesi vo-com pulsi vo. notiacinas, bien como discinesia facial aguda reversi-
ble o como discinesia tardía progresiva}, la parálisis
cerebral, la encefalitis, el lupus eritematoso sistémi-
MIOCLONO co, la tirotoxicosis y diversas encefalopatías.
Son contracciones súbitas y breves de un grupo mus-
cular (a veces pequeño, otras veces extenso), irregu-
ATETOSIS
lares en ritmo y amplitud. Los mioclonos obedecen
a diversas causas y mecanismos. Por su distribución En ella los movimientos involuntarios tienden a
pueden ser focales, multifocales o generalizados; por afectar a músculos más proximales y son más len-
su presentación los hay espontáneos e inducidos por tos, con un carácter «reptante» y de mayor amplitud
746
estímulos sensoriales o por movimientos voluntarios que los movimientos coreicos; reciben el nombre de
CAPÍTULO 88 Patología general de los núcleos basales. Movimientos anormales y síndrome parkinsoniano

«espasmo móvil» o fluctuaciones de la postura en las neurodegenerativos. Entre las secundarias que deben
extremidades y la cara. Es habitual la posición con ser diagnosticadas precozmente está la distonía de
el brazo pronado, la muñeca y articulaciones meta- la enfermedad de Wilson, debido a que responde a
carpofalángicas flexionadas y los dedos extendidos o tratamiento.
abducidos, así como la inversión y la flexión plantar También pueden clasificarse según las caracte-
del pie. Frecuentemente el paciente exhibe al mismo rísticas clínicas. En algunos pacientes la distonía es
tiempo movimientos coreicos y atetósicos, lo que fluctuante, tanto que puede ser asintomática durante
puede calificarse como coreoatetosis. Se asocia a le- la mañana y muy intensa por la tarde y noche como
siones del putamen. Puede ser bilateral y debida a es el caso de la distonía que responde a la DOPA.
lesiones congénitas. Otro tipo son las distonías paroxísticas, caracteriza-
das por un inicio repentino o por la exacerbación de
los movimientos distónicos de segundos a horas de
DISTONÍA duración.

Es un trastorno neurológico caracterizado por con-


tracciones musculares involuntarias que pueden ser TEMBLOR
sostenidas (tónicas), espasmódicas (rápidas o clóni-
Es un movimiento oscilatorio y rítmico por con-
cas), estructuradas o repetitivas, que preferentemente
tracciones alternantes de un grupo muscular y sus
dan lugar a torsión y a otras posturas o movimientos
antagonistas. El temblor afecta habitualmente a las
anormales.
extremidades superiores, pero también puede afectar
Pueden afectar a cualquier músculo del organismo
a miembros inferiores, cabeza, tronco, mandíbula,
e inicialmente no aparecen en reposo. Se manifiestan
lengua y cuerdas vocales.
con movimientos voluntarios. El diagnóstico de dis-
tonía se complica por la coexistencia de temblor. Los
pacientes con distonía pueden presentar dos tipos de Clasificación
temblor: postura! (similar al temblor esencial) y dis- El temblor puede clasificarse por su fenomenología,
tónico. distribución, frecuencia o etiología. Fenomenológi-
Las distonías pueden clasifi- camente los temblores se dividen en dos
carse de acuerdo a su edad grandes categorías: temblor de repo-
de comienzo: las distonías so y temblor de acción.
de comienzo en la edad El temblor de reposo se pre-
infantil suelen gene- senta cuando la parte del
ralizarse, mientras cuerpo afectada no realiza
las que comienzan ningún movimiento . Dis-
en la vida adulta minuye o desaparece
suelen permane- durante la contracción
cer focales o seg- muscular y durante el
mentarias. Por su movimiento.
distribución: en fo- El temblor de ac-
cales, multifocales, ción ocurre con la
segmentarías, generali- contracción volunta-
zadas y hemidistonía. Las ria de los músculos y
distonías foca les son las más puede subdividirse en
frecuentes y están representadas postura!, cinético, tem-
por el blefaroespasmo, la distonía blor asociado a una tarea
cervical, la distonía oromandibular, la distonia específica o posición-específi-
laríngea y la distonía de miembros (ocupacional). ca (task-specific tremar) y tem-
Por su etiología, cuando la distonía se produce como blor isométrico.
un trastorno neurológico aislado se clasifica como Dentro de los temblores de acción el más
distonía primaria (clásicamente distonía de torsión frecuente es el temblor postura!, y los más
idiopática). La distonía primaria puede ser esporádi- representativos son el temblor fisiológico y que pue-
ca o hereditaria. Las distonías secundarias origina- de ser exagerado por situaciones de estrés, ansiedad o
das por un factor estructural o metabólico específico a la ingesta de bebidas estimulantes, como café, cola,
suelen cursar con síntomas neurológicos adiciona- la fatiga o determinados fármacos. La frecuencia de
les . Suelen comenzar repentinamente y se mani- estos temblores oscila entre 8-1 0 Hz. Como norma
fiestan en reposo desde el principio, y las causas general este tipo de temblor no interfiere en las acti-
frecuentes son traumatismos craneales, encefalitis, vidades de la vida diaria.
ictus, exposición a determinados fármacos o toxinas El temblor postural qu e interfiere en las activi- ---=rif7
y en asociación con diversos trastornos sistémicos y dades de la vida diaria es el más representativo de
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

una entidad denominada temblor esencial que clá- ASTERIXIS


sicamente se denominó benigno, pero en ocasiones
puede provocar una grave discapacidad. Se localiza No es estrictamente un temblor, sino una incapaci-
con más frecuencia en miembros superiores, aunque dad para sostener una postura contra la gravedad
puede estar presente en otras partes del cuerpo como (mioclonía negativa); la inhibición episódica del tono
miembros inferiores, cabeza, mentón o incluso afec- muscular origina un «temblor aleteante » de las manos
tar a la voz. Casi la mitad de los pacientes pueden extendidas. La asterixis puede manifestarse como un
tener una historia familiar con un patrón autosómico proceso focal o generalizado. La asterixis unilateral
dominante. Puede agravarse en diversas situaciones, se suele deber a lesiones focales del hemisferio con-
por fármacos o por entidades como la tirotoxicosis, el tralateral, mientras que la asterixis bilateral general-
feocromocitoma o la hipoglucemia. mente es el resultado de una disfunción metabólica,
El temblor cinético puede verse cuando se inicia como la encefalopatía hepática, la insuficiencia renal
un movimiento voluntario (temblor inicial) , durante (uremia) y la encefalopatía hipercápnica.
el curso del movimiento (temblor dinámico) y cuan-
do la parte afectada se acerca al objetivo, p. ej. , en la
maniobra dedo-nariz o dedo-dedo (temblor terminal
ACATISIA
denominado temblor de intención). Consiste en una inquietud motora o incapacidad
El temblor cinético es el más representativo de las para permanecer quieto, que hace que el paciente
lesiones o enfermedades que afectan al cerebelo o a cambie continuamente de postura o sienta necesidad
sus conexiones. El término temblor cinético describe de caminar o de realizar movimientos alternativos
con más exactitud la oscilación que ocurre durante el sobre sus pies mientras permanece en bipedestación.
movimiento de un miembro , que el término clásico Se presenta de modo agudo o como trastorno crónico.
denominado «temblor intencional» que resulta más Puede observarse en algunos síndromes parkinsonia-
antiguo. Es un temblor proximal con una frecuencia nos, pero especialmente en relación con tratanüentos
de 2-3 Hz. Está influenciado por factores mecánicos que bloquean los receptores de dopamina (derivados
tales como la inercia o el peso. La amplitud suele in- fenotiacínicos o haloperidol). No debe confundirse
crementarse a medida que se aproxima al objeto, pero con estados de ansiedad o agitación psicomotora de
una vez alcanzado cesa. Los pacientes con lesiones otras causas.
cerebelosas pueden presentar además de temblor ci-
nético , temblor postura! y titubeo. El temblor cinético
puede ser unilateral por lesiones cerebelosas ipsila- SÍNDROME PARKINSONIANO
terales, o bilateral si se debe a lesiones bilaterales,
fármacos o tóxicos. Este temblor puede ser producido En su forma completa, está constituido por cuatro
por varias causas: vasculares , tumorales, infecciosas, componentes cardinales: bradicinesia, temblor de
desmielinizantes como la esclerosis múltiple, fárma- reposo, rigidez y alteración de los reflejos posturales
cos como el valproato sódico y tóxicos como el alco- (Fig. 88-3). Otros trastornos motores asociados son se-
hol y metales pesados cundarios a la combinación de los anteriores, y entre
Los temblores asociados a una tarea específica o ellos destacan la hipomimia (inexpresividad facial),
reducción del parpadeo, hipofonía, disartria, disfa-
posición (task-specific trernors) específica ocurren
gia, sialorrea, estreñimiento, urgencia e incontinencia
durante o son marcadamente exacerbados por una
urinaria, postura flexionada , marcha a pequeños pa-
actividad específica, como por ejemplo durante la es-
sos y pérdida de balanceo de las extremidades supe-
critura (temblor primario de la escritura) o mientras
se habla o se canta (temblor de la voz). Determinadas riores al caminar. Frecuentemente el inicio es unilate-
ral, cuando se trata de una enfermedad de Parkinson
posiciones específicas pueden desencadenar temblor,
como mantener los brazos en posición de alas o soste- con predominio de uno de los síntomas cardinales;
el temblor es el más común, pero no imprescindible
ner una cuchara o una taza delante de la boca cerrada.
para el diagnóstico (Tabla 88-1). En los parkinsonis-
Los pacientes con temblor esencial u otros temblores
mos plus, los síntomas y signos generalmente son si-
de acción habitualmente aumentan durante una acti-
vidad específica. métricos y bilaterales desde su inicio.
Los temblores isornétricos ocurren durante una La bradicinesia consiste en lentitud para iniciar
contracción voluntaria de los músculos que no está y efectuar movimientos, y a ella se deben la ma-
acompañada por un cambio de posición de la parte yor parte de las manifestaciones del síndrome
del cuerpo afectado, como contraer el muslo o mien- parkinsoniano: pobreza de movimientos, pérdi-
tras se mantiene de pie (temblor ortostático). da de expresión facial (hipomimia), disminución
Los temblores también se pueden clasificar de de movimientos asociados (por ejemplo, braceo
acuerdo a la distribución anatómica, cuando afecta durante la marcha o parpadeo), disminución de
a la cabeza, lengua, voz y tronco. Cuando está presen- los movimientos de deglución (con sialorrea se-
te en los miembros debe describirse a qué parte del cundaria), dificultad para realizar movimientos
748
miembro afecta el temblor. alternativos rápidos, escritura lenta con letra
CAPÍTULO 88 Patología general de los núcleos basales. Movimientos anormales y síndrome parkinsoniano

Tabla Síndrome parkinsoniano


Síntomas Bradicinesia
cardinales Temblor de reposo
Rigidez
Alteración de los reflejos
posturales
Otros Hipomimia facial
síntomas Reducción del parpadeo
Hipofonía
Disartria
Disfagia
Sialorrea
Estreñimiento
Urgencia e incontinencia urinaria
Postura en flexión
Marcha a pequeños pasos
Pérdida de balanceo de las
extremidades superiores al
caminar

Figura Im agen de un pac iente con situac ió n


postura! característica de enfermedad de Parkinson:
rigidez y lentitud de movimientos. actividad mental. También aumenta con la mar-
cha. En la enfermedad de Parkinson el inicio es
unilateral y en los demás síndromes parkinso-
pequeña (micrografía), cambio en la voz (lenta, nianos generalmente es menos frecuente, de baja
monótona: hipofonía), marcha a pequeños pa- intensidad, no es el típico de contar monedas
sos, incluso episodios de «congelación» o blo- y es de comienzo simétrico (Tabla 88-2) . Cuan-
queo del movimiento , o «imantación» al suelo. do el síndrome parkinsoniano es secundario a
El temblor característico es lento (3-5 Hz) y de fármacos, el temblor de reposo puede estar aso-
reposo, y cuando afecta a los dedos de la mano ciado a temblor postural y no solo en miembros
hace que el paciente adopte una actitud como sino también en el mentón o la cabeza.
de contar monedas. Con frecuencia son movi- La rigidez es una hipertonía muscular distinta
mientos de pronosupinación del antebrazo (el de la espasticidad del síndrome piramidal; la
temblor esencial suele ser de flexoextensión). resistencia a la movilización pasiva de una arti-
Suele disminuir o desaparecer al mantener una culación es uniforme a lo largo del movimiento
postura antigravitatoria o al hacer actividades, (cualidad «plástica» o «en tubo de plomo ») e
aunque suele aparecer al poco tiempo. Como to- independiente de la rapidez con que se efectúe
dos los temblores se exacerba con el estrés y la la maniobra exploratoria; la coexistencia con el

Tabla Temblor de reposo


Enfermedad de Parkinson Síndromes parkinsonianos
Comienzo asimétrico Comienzo simétrico
Desaparece con movimientos voluntarios Síntoma poco relevante dentro del proceso
Típico: pronación-supinación Baja intensidad
Aumenta con el estrés y con la actividad mental A veces asociado a otros tipos de temblores: postura!,
Aumenta con la marcha cinético

749
c;fCCION Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

temblor le imprime la sensación de «rueda den- por la vía piramidal como temblor. Las conexiones
tada ». Los reflejos musculares no se modifican, con la sustancia reticular promueven la rigidez a
y la respuesta del reflejo plantar es normal. través de la hiperactividad de las neuronas motoras
Las alteraciones de los reflejos posturales son alfa y gamma. El tratamiento con levodopa, que se
responsables de la posición encorvada o cifosis transforma en dopamina por acción de la DOPA des-
del paciente, que tiende a caer y es incapaz de carboxilasa, o con agonistas de los receptores de do-
hacer movimientos correctores normales para pamina, alivia las manifestaciones de la enfermedad;
mantener el equilibrio y la posición erecta; pue- Otras enfermedades degenerativas del sistema
de caminar aceleradamente hacia delante (fes- nervioso que afectan a los núcleos basales pueden
tinación) o mostrar tendencia a caer hacia atrás cursar con síndrome parkinsoniano, frecuentemente
cuando permanece en pie (retropulsión). asociado a síntomas y signos de disfunción de otras
Las causas del sín- estructuras («síndrome
drome parkinsoniano parkinsoniano plus»). En-
son variadas. La enfer- tre ellas figuran la parálisis
medad de Parkinson supranuclear progresiva
es un trastorno dege- (con alteraciones de los
nerativo progresivo de mecanismos de la mirada),
la sustancia nigra, de la atrofia olivopontocere-
causa desconocida. La belosa (con signos cerebe-
población neuronal en losos) o la degeneración es-
este área disminuye, y triatonígrica. Puesto que en
las neuronas restantes estos casos existen lesiones
muestran cuerpos de estructurales de los núcleos
inclusión en su cito- basales, con pérdida de los
plasma (cuerpos de receptores para la dopa-
Lewy) . Es necesaria
mina, no hay respuesta al
una pérdida de más del
tratamiento con levodopa.
80 % para que aparez-
Pueden cursar con síndro-
can manifestaciones
me parkinsoniano lesiones
clínicas. También se
ven afectadas las cé- de la sustancia negra o el
lulas que contienen estriado causadas por en-
melanina del locus cefalitis, intoxicaciones
coeruleus y del núcleo por monóxido de carbono,
motor dorsal del vago . traumatismos (boxeadores)
Se altera el control de y, excepcionalmente, por
los ganglios basales a infartos o tumores.
través de la vía nigroes- Es frecuente el síndro-
triada por deficiencia me parkinsoniano debido
de su neurotransmisor, a medicamentos que blo-
la dopamina, y hay una quean los receptores dopa-
hiperactividad relativa de los mecanismos colinérgi- minérgicos o producen depleción de dopamina ; entre
cos en el estriado. Ello permite que ciertos impulsos ellos figuran el haloperidol, los derivados fenotiazíni-
sincrónicos rítmicos pasen por la vía corteza cere- cos (clorpromacina, metoclopramida, etc.), la reserpi-
bral-ganglios basales-tálamo-corteza, y se propaguen na, la metildopa, la cinaricina y la flunaricina.

750
·189
Patología general de la sensibilidad
y del dolor. Cefalea
Rogelio Leira Muiño, José Castillo Sánchez

SENSIBILIDAD GENERAL
CONCEPTO
La sensibilidad es la función específica del sistema
nervioso a través de la cual el hombre se hace cons-
ciente de su entorno y de su propio organismo.

TIPOS DE SENSIBILIDAD
Hay diversos tipos de sensibilidad y pueden clasifi-
carse de maneras diferentes. El estudio de los diferen-
tes tipos de sensibilidad es de gran utilidad para de-
terminar la localización y las causas de las enferme-
dades neurológicas. Para estos fines, separaremos la
sensibilidad general, que trataremos a continuación,
de la que constituye los cuatro sistemas sensoriales
especiales, el olfato, la vista, el gusto y el oído, que se
comentarán con los pares craneales correspondientes
(Tabla 89-1).
La sensibilidad general puede ser somática, proce-
dente de la piel y estructuras muscu loesqueléticas, y
visceral.
En la sensibilidad somática se incluye la sensi-
bilidad supe1ficial o exteroceptiva, la sensibilidad
profunda o propioceptiva, y una sensibilidad combi-
nada o cortical, en la que se precisan elementos de la
sensibilidad superficial y profunda, que se analizan y
sintetizan en la corteza parietal.
En la sensibilidad superficial se incluyen la sensi-
bilidad térmica, la dolorosa superficial y la táctil su-
perficial. La sensibilidad profunda engloba la artro-
cinética, o sensibilidad para percibir los movimientos
activos o pasivos de las articulaciones; la vibratoria o
palestesia, el sentido de la presión o piesestesia, y el
dolor profundo ocasionado por la presión de estruc-
turas situadas por debajo de la piel.
La sensibilidad combinada o cortical comprende
751
la estereognosia, o facultad para identificar la forma y
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Tabla Tipos de sensibilidad


General Somática Superficial Térmica
Dolorosa superficial
Táctil superficial
Profunda Artrocinética
Vibratoria (o palestesia)
Piesestesia (o presión)
Dolorosa profunda
Cortical Estereognosia
Barognosia
Topognosia
Grafoestesia
Discriminación espacial
Visceral
Sistemas sensoriales especiales Olfato
Visión
Gusto
Oído

naturaleza de los objetos a través del tacto; la barog- Aunque no hay una especificidad de los receptores
nosia, o capacidad para diferenciar pesos; la topog- pru:a cada tipo de sensación, sí existe una sensibili-
nosia, que permite localizar en el cuerpo los diversos dad preferencial de cada receptor para ciertos tipos
estímulos; la grafoestesia, o habilidad para reconocer de estímulos. Las terminaciones nerviosas libres res-
letras o números escritos sobre la piel, y la discrimi- ponden al dolor, al calor y al frío. Algunas termina-
nación espacial, o capacidad para diferenciar entre el ciones lo hacen solo frente a una modalidad, y otras
estímulo de uno o dos puntos aplicados simultánea- frente a dos o tres estímulos; estos son los llamados
mente en una parte del cuerpo. receptores polimodales. Las terminaciones nervio-
La sensibilidad visceral o interoceptiva recoge las sas libres surgen de fibras delgadas, de axones poco
sensaciones procedentes de las vísceras, y proporcio- mielinizados (fibras A-ó) o sin mielina (fibras C). Las
na información sobre el dolor, espasmo o distensión fibras A-ó conducen el dolor de transmisión rápida y
de estos órganos. Habitualmente lo hace de forma el frío, mientras que las fibras C son las encargadas de
más difusa y difícilmente localizable respecto a sen- la transmisión lenta del dolor (persistencia del dolor
sibilidades somáticas. después del estímulo) y el calor (Tabla 89-2).
En la parte superficial de la piel, además de las
terminaciones nerviosas libres, y cerca de la unión
BASES ANATOMOFISIOLÓGICAS entre la dermis y la epidermis, se localizan recep-
DE LA SENSIBILIDAD GENERAL tores especializados para ser sensibles a diferen-
tes aspectos de los estímulos táctiles. Estos son los
El cuerpo humano presenta gran cantidad de recep- discos de Merkel, situados en la piel lampiña, y las
tores para la sensibilidad somática, situados tanto en células de Me1*el y los corpúsculos de Meissner en
la superficie cutánea como en su interior. La estimu- la piel vellosa. Alrededor de los folículos pilosos se
lación de estos receptores origina impulsos que son encuentran terminaciones nerviosas sensitivas, que
conducidos al sistema nervioso central a través de responden a pequeños desplazamientos del pelo.
vías aferentes o sensitivas. Los receptores cutáneos Todos los receptores terminales sensitivos de super-
son más numerosos y conducen la sensibilidad para ficie están inervados por fibras mielínicas de media-
el tacto, el dolor, el calor y el frío, mientras que los nas a grandes, del grupo de las A-~, y transmiten el
profundos nos informan sobre la posición de nuestro tacto ligero.
cuerpo y de la sensibilidad para la vibración o para Situado más profundamente en la dermis se en-
752
los cambios de presión. cuentra otro mecanorreceptor, que es el corpúsculo
29 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

Tabla Receptores sensitivos y sus características


Tipo de receptor Localización Fibras Sensibilidad preferente
Terminaciones nerviosas libres Superficial c Dolor de transmisión lenta
Calor

Superiicial A-o Dolor de transmisión rápida


Frío

Corpúsculo de Meissner Superficial A-f3 Tacto

Disco de Merkel Superficial A-f3 Tacto

Terminaciones del folículo piloso Superiicial A-fi Tacto

Corpúsculo de Pacini Profunda A-~ Vibración

Receptores articulares Profunda c Dolor de transmisión lenta


A-0 Dolor de transmisión rápida
A-13 Presión y vibración

Órgano tendinoso de Golgi A-u Distensión

do Puóní, dnstinmlo a sm1ular los cambios rüpidos dn \Jras 1\-u) procnd1mlns dn los huso:-; m11sutlnros (órga-
prnsi(m-cnntaclo: csla es la rnz(m por la que la sensa- nos tn11di1iosos do Golgi) so disponen en la rngirín nw-
ción do lllla prnsi(Jn constante aplicarla sohm la piel s(; dinl: h1s fibras dn los roct1ptows CJ1(:apsulados (fibras
dflsvanuce pronto. El corpúsculo de Pacini nst(i biun 1\-f3). q1w conducnn la sonsaci(rn dn tacto. \"ibraci<Ín y
adaptado para rocibir ostímulos \·ilJratnrio;; nípidos. y presión sn localizan on el centro: on In partn nuís !aln-
nst;í inervado por fibras miolini7,adas dnl tipo 1\-f3. rnl se onr:uenlrnn las fibras mús dnlgudas. f'irnmwnln
En las nrtír:ulucionns. ha_,. vurios tipos de rnc:np- mi1;]inizadus (l'iliras ,.\-o) o mninlínicas (l'ihras C). qun
lores sc:nsorialos que so purncon il los reccptorns do tnmsmiten ,;] dolor y In sm1sación tfamicn (Fig. B\l-l ).
In pifd con excop<:ión dnl cí1gw10 towlinnsn du (;o/gi. El asla posterior o sensitiva dn la m(id1ila nspinnl
srn1sibln a la dislnnsió11 e inurvndo por grandes fibras está formada por capas o ],íminns. I.ns fibras aminlí-
miclínicas (l'íliras A-o:). nir:us (f'ilm1s C) tnrrninan nn la sustancia gelatinosa
Con independencia de l,1 sPnsibilidad prnl'PrP1H:i,d (c:npa II) v la,; film1s A-6 nn la cnpa nrnrginnl (rnpa
do los distinlos receptores su¡wrficinlns y profundos. 1). mmqrn; algunns llngan a la partn lateral de la capa
la sensación percibida por el sishima nervioso cen- V. La~ f'ibrns rninlínícas ;\-f3 ¡rnsan alrndndor cJ,,j nsta
tral cleptmde rnÁs bien del tipo defíbm estimulada. dn posterior. algunas ascienden por las columnas pos\n-
la frer:uoncin do la nstinrnlac:ión \' dR !a intensír/ad v riores \' o1rns terminan 1111 las capas lfl y IV. Lns fihras
f'Xlensión do ln misnrn. Así. por ejmnpln. 1111 Pstínrnlo 1rnís gruesas (fibras J\-~), qun lkvan snnsibiliclad pro-
dn presión o \'ibración. si ns sufíc:inntenwntc frccwm- funda irnplicmln en el conirol motor. terminan en !as
le. intonso v cxtnnso origina una sensación dolorosa, capas VI-VIII. Esli1s fibrns ascienden hilateralnwnle
a ¡rn¡,:nr rh no cstinrnlar ini<:ialnwntn tnrminar:ínnes por los hoces espínocorebelosos untnrinre:-,' _1: pnsterio-
nerviosas libros. ms hasta la parle antmior del cernbclo (pal()ncnrdw-
La informor:ión recogida por los rnceptorns se tm118- lo). donde tnrmínan (Fig. BD-2). Por esta razón. nsle
mite. a /mnis rle los 1w1Tios peri/iirir:os sensilíFos. o Jo tipo dn smrnibilirlad no es conscinnte.
médufo espinal. Lns ncrvios f:ensitivos penetran en la De la médula espinal. la informaciún sensitiva lle-
müdula m;pinal por la raíz poslPrior. y lo hacen exclu- ga al encéfalo a través ele dos vías ascendentes: los
sivanwntn fibras aferentes. que constitunm la prolon- lwr:es espínotolcímíc:os y el síslumo lmnniscol (Fig.
gación central chi las células de los ganglios espinalHs. BD<l). Las fibras que llnvan la sensibilidad dolorosa y
En la médula. esta información tiene dos clc>slinos: !6rrnic,! crnzan Em In m1'.id11la Pspinc1I lu lí11m1 nwdin ,.
uno rnlacionado con los reflejos (que s,i expondrá en ascienden por el haz espinotolárnico hitmnl hasta el
otro capítulo), y otro hacia los centros superiores del núcleo v,mtral ~- posterolaleral del tálamo. Parte ele
sistema rrnrvioso cnntrnl. las fibras qun llevnn sensibilíclad tdctil tnmbi6n c:m-
En las raíces posteriores. las fibrns sensitivas se z¡m la módula nspinal. y!'(~ silúan Pn tJ! /im: espino-
753
ordmrnn. dn forma qiw las mielínicas mÁs gruesas (fi- tolámíc:o on/Arior. quP sube conj11nt,mJ1mte con el hnz
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

espinotalámico lateral hasta el tálamo. Las fibras que ordenada, que conserva las relaciones de la superficie
llevan la sensibilidad artrocinética, vibratoria, el sen- corporal.
tido de la presión y el resto de las fibras transmisoras Del tálamo salen las terceras neuronas sensiti-
del tacto no hacen relevo en las astas posteriores de la vas, denominadas talarnocorticales, hasta la corteza
médula, y se incorporan en los cordones posteriores cerebral sensitiva, situada en la circunvolución pos-
hasta los núcleos que se encuentran situados en la trolándica, en las áreas 1, 2, 3a y 3b de Brodmann.
parte posterior del bulbo raquídeo. De aquí sale una Estas neuronas mantienen en la corteza cerebral el
segunda neurona, que se cruza a la posición contrala- orden presentado en el tálamo, y adoptan la forma de
teral y asciende por el lemnisco medial hasta llegar al homúnculo invertido (Fig. 89-1), y además, se distri-
núcleo ventral posterolateral del tálamo. buyen espacialmente según el tipo de sensibilidad: la
sensibilidad propioceptiva de los órganos tendinosos
Todas las fibras ascendentes de las vías de la sen- de Golgi termina en el área 3a, el dolor y la tempera-
sibilidad terminan en el tálamo, que es la puerta de tura en el área 3b, el tacto en el área 1, y la sensibili-
entrada a la corteza cerebral (Fig. 89-1). La llegada de dad postural en el área 2 .
los estímulos sensitivos al tálamo permite ya una per- La llegada a la corteza cerebral permite la percep-
cepción consciente de los mismos, aunque poco di- ción diferenciada de las distintas cualidades y locali-
ferenciada . Las fibras espinotalámicas y lemniscales zaciones del estímulo. Las lesiones de la corteza sen-
terminan en un grupo de células situadas en la parte sitiva disminuyen las sensibilidades táctiles, térmicas
lateral del núcleo posterior ventral del tálamo. En y dolorosas , aunque no las suprimen por completo;
esta localización, las fibras adoptan una disposición sin embargo, desaparece la discriminación cualitativa
y espacial de estos estímulos.
La sensibilidad interceptiva procedente de las vís-
ceras es de esencial importancia en la clínica. Algu-
nas vísceras son sensibles a estímulos directos y otras
no; la estimulación directa de las vísceras huecas no
produce dolor. Sin embargo, el espasmo , la inflama-
ción, la presión o la distensión pueden originar dolor,
' posiblemente por la afectación de los tejidos que las
p rodean. Las fibras viscerales aferentes acompañan a
los nervios somáticos, penetran en la médula por las
~ raíces posteriores y siguen las mismas vías de la sen-
Ca r sibilidad somática general.
>-- -- mo
sterolateral
occrcbelo

{\ Víscera ALTERACIONES DE LA SENSIBILIDAD


Las alteraciones pueden ser negativas, que reflejan
una disminución de la función sensitiva, o positi-
vas, relacionadas con un aumento de la actividad de
spinocerebeloso
rior
los receptores o de las vías de la sensibilidad. Los
espi nocerebeloso pacientes refieren habitualmente los síntomas nega-
rior tivos como adormecimiento, acorchamiento o ausen-
cia del tacto, mientras que para los positivos utilizan
términos muy variados que van desde la sensación
de dolor al hormigueo , pinchazos, tensión, presión,
quemazón o ardor. Los fenómenos negativos habi-
tualmente se acompañan de alteraciones demostra-
das en la exploración neurológica, mientras que es
frecuente el hallazgo de una exploración normal en
los pacientes que refieren síntomas positivos de la
Ha z espino- ...J--1--.l--i,,'rtt
sensibilidad.
talámico El conjunto de síntomas positivos que refiere el
anterior A - ex paciente (trastornos subjetivos) recibe la denomina-
~ A- ~ ción de parestesias. En la exploración neurológica
A- y
e se pueden demostrar (trastornos objetivos) muchos
tipos de alteración de la sensibilidad. La hipoestesia
indica la disminución de la percepción de diversos
754 estímulos sensitivos y la anestesia la ausencia com-
Figura Vías prin cipales de la sens ibilidad. pleta de sensación. La hipoalgesia y la analgesia se
CAPITULO 89 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

refieren a la disminución o ausencia de la percep- Nervios periféricos


ción del dolor. Se denomina disestesia a la apre- La lesión completa de un nervio periférico ocasiona
ciación alterada de cualquier tipo de estímulo. La una anestesia para todo tipo de sensibilidad en el te-
hiperestesia es la percepción exagerada en respuesta rritorio de su inervación cutánea. Con mayor frecuen-
a estímulos ligeros; la hiperalgesia es similar con cia, se producen disfunciones sensitivas selectivas
respecto a ligeros estímulos dolorosos y la alodinia que afectan a las fibras nerviosas más delgadas o a
supone la percepción de dolor tras aplicar estímulos las más gruesas . En las neuropatías de fibras delga-
no dolorosos. Se denomina hiperpatía a la situación das (C y A-o) hay una disminución de la sensibili-
en la que un paciente no percibe ligeros estímulos dad térmica y dolorosa, con sensaciones disestésicas
pero , al aumentar la intensidad de los mismos , la y un grado variable de afectación de la sensibilidad
sensación se hace exageradamente desagradable y táctil, con conservación de la sensibilidad profunda.
molesta. Sin embargo, las neuropatías de fibras más gruesas
(A-~ y A-o:) se caracterizan por una disminución de
TOPOGRAFÍA DE LAS ALTERACIONES la sensibilidad artrocinética y vibratoria, y arreflexia,
mientras que las sensibilidades táctiles, térmicas y
DE LA SENSIBILIDAD dolorosas son normales; estos pacientes suelen pre-
Los diferentes tipos de la sensibilidad permiten loca- sentar parestesias pero no disestesias.
lizar con bastante precisión la ubicación de la lesión, El diagnóstico del tipo de afectación del nervio
lo que es de gran utilidad para el diagnóstico neu- periférico dependerá de la distribución cutánea de
rológico. Los patrones generales de afectación de la la alteración de la sensibilidad (Figs. 89-2 y 89-3) .
sensibilidad son los siguientes: Esta alteración puede estar limitada a un solo territo-

Corona radiada Área de la pierna

Cuerpo calloso ,_
Área de
- la cabeza

Cápsula
interna

. par craneal 111


leo de rafe
isco espinal

emnisco externo
V emnisco interno
VII
Pirámi
Fase. espinotecal y fase.
IX ---~'- - - - - espinotalámico lateral y
- ventral que forman
Núcleo de la raíz el lemnisco espinal
raquídea trigém .
(sustancia gelat. de Rolando)
(dolor y temperatura)

Médula espinal dorsal


Fase. espinotalámico lateral
Fase. dorsolateral (dolor y temperatura cruzada)
de Lissauer

Figura Sensibi lidad de discriminación tácti l y sensibi lidad profunda. 755


Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

lir ele la región dorsal. Bsllí 1. 2 o :3 nspacios


nüís alto que la vértebra correspondiente.
Por ejemplo, el segmento medular D:-l nstá
a la altura de la vértebra D2, y el segmento
Cuerpo call¡¡so medular L3 a nivel de la vértebra D12.

1\rc·a de
i,1 c:ilieLJ Médula espinal
La sección meclulur completo originarú una
pérdida ele todo tipo de sensibilidad por de-
bajo de la lesión. Si la sección ufectu a lo mi-
tnd de Ju médula, se producirá una pérdida
do la sensibilidad profunda del mismo lado
dula lesión. y am,stesia para la sensibilidad
térmica y dolorosa del otro lacio. ambas por
dB!mjo del nivel de In sección medular.
La lesÍÓn de los cordonus posteriores con-
diciona la ausencia homolatnral de la s¡msi-
bilidacl vibratoria y artrocinética, con con-
servación del resto ele las sensibilidaclus.
Estos pacientes presentan una disminución
Lcmnísco irHl:1 ntJ en la presión dr:J los movimümtos ele las ex-
trnmidad(lS afoctaclus u irrnstabilidad un la
marcha. que so acnn lúa al cerrar los ojos:
esta alteración se conoce con el nombre do
ntnxiu srmsorinl.
La ofer:toció11 ele Ju 1·fo espinotulámico la-
F:isc teral es responsable de otro tipo de disocia-
ción de la sensibilidad. con pérdida exclu-
siva de la sunsación de dolor y temperatura.
por debajo y contralalural a la lesión medu-
lar. Si se lesionun Jus fihms que cruzan del
asta posterfor de Ju méclulu espinal ol hoz
espinotnlámico luturul, se originarú el mis-
mo tipo de disociación de la sensibilidad.
Figura Sensibilidad dolorosa, térmica y táctil superficial. pero ele fornrn IJilatnral y suspendida. es
clticir, afoclnndo solamente a lus segmentos
med u larns implicados por la lesión.
rio cutáneo (mononeuropatfos}, o a varios territorios
cutánuos disumínados (111011011eurítís múlUple). En
muchas onfernrndades quo afectan a los nurvios peri- Tronco encefálico
f(,ricos. estos so lesionan de forma sí métrica y distal, A nivel del bulho roc¡uídeo, ol haz espinotalúmico y el
debido a que los axones lmgos son más vulnmables lmnnisco medial van separados. En esta localización
que los más cortos; este trastorno recibe ul nombre do se afecta más frecuontmmmto ni haz espinolateral, y
polineurop11tío. se origina pérdida do la sensibilidad al dolor y a la
tomperatura en 0;] mismo lado ele la cara, y contrala-
Raíces nerviosas posteriores teral un el resto del cuerpo. Si la Josión se locnliz11 en
estruclums superiores del tronco encefáUco, so oca-
La lesión do estas raíces origina dolor, parestesias o
siorn1 una pérdida conlralntural de todo tipo ele sensi-
su presión de tocio tipo de sensibilidad en los cler-
biliducL habitualmente acompañ8da do afectación do
matomas correspondientes. Obsérvese qun la distrÍ-
pares c:rammlos del mismo lado de la lesión.
bución cutáneu ele lo sensibj}jdacl correspondiente a
las raíces posteriores es muv diforonle de la recogida
por los nervios periféricos. lo quo ticmc; un gran valor Tálamo
diagnóstico (Figs. 8H-l y 89<l). La lesión de las vías de la sensilúliclad en el tálomo
Parn localizar con exactitud la lesión ele la raíz ner- origina una disminució11 o ausencia c:ontralatoral en
viosa, es necesario recordar que en el adullo la mé- la cara y cuerpo do todas las modalidades de la SflllSÍ-
dula espinal es mús corta que la columna Vtfftebral, y bilidad. Esta pérdida de la sensibilidad se acompaña
alcanza sólo hasta la primera o segund8 vértebra lum- nn ocasiones ele disestesias, h.iperpulía o dolor espon-
756
bar. Esto quiere decir que el segmento medular. a par- táneo en ol hemicuerpo afectado.
CAPÍTULO 89 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

Corteza cerebral La sensibilidad térmica se estudia con los tubos


La afectación de la corteza parietal sensitiva, si es rellenos de agua fría, o trocitos de hielo y agua
extensa, origina una desatención sensitiva del hemi- caliente por encima de 40 ºC. En primer lugar, es
cuerpo contralateral (heminegligencia), en la que el necesario cerciorarse de que el explorador nota
paciente prescinde de ese hemicuerpo como si fuese los cambios de temperatura, y de que la diferen-
extraño. Se suele mantener la sensibilidad al tacto , cia de temperatura permanece apreciable duran-
dolor, temperatura, artrocinética y vibratoria, pero te toda la exploración. Es conveniente explorar
está abolida la discriminación espacial, la grafestesia puntos simétricos, y no aplicar los estímulos
(reconocer un símbolo trazado sobre la piel), la topog- muy seguidos, para evitar confusiones en las
nosia (localizar un estímulo con los ojos cerrados), la respuestas.
barognosia (reconocimiento de la presión o el preso) Para la sensibilidad articular se movilizan las
y la estereognosia (identificar objetos con los ojos ce- articulaciones, sobre todo las de las manos y
rrados). En ocasiones, este cuadro se puede acompa- pies, flexionándolas y extendiéndolas. El ex-
ñar de crisis epilépticas parciales sensitivas simples, plorador debe coger la extremidad por las su-
o secundariamente generalizadas. perficies laterales, para evitar imprimir presión
en el sentido del movimiento. Al enfermo se le
preguntará si el movimiento de la extremidad se
SEMIOLOGÍA DE LOS TRASTORNOS hace hacia arriba o hacia abajo. La exploración
DE LA SENSIBILIDAD de la vibración se iniciará demostrándole al pa-
ciente el efecto del diapasón sobre el esternón y
La exploración de la sensibilidad constituye uno de
posteriormente, con los ojos cerrados, colocarlo
los aspectos más complejos de la exploración neuro-
en los resaltes óseos de las extremidades inferio-
lógica, pero también es la que suele ofrecer al clínico
res y superiores. Se debe preguntar al paciente
más datos para la precisa localización de una lesión
si nota la vibración del diapasón y que nos diga
en el sistema nervioso. La diferente dificultad que
cuándo termina la misma, una vez que el explo-
puede plantear la exploración de la sensibilidad de-
rador detenga el diapasón con la mano.
pende del nivel de consciencia y cooperación del pa-
ciente, de su capacidad de observación, de su ausen- Para la percepción del dolor profundo se aplica
una compresión digital creciente en el talón de
cia de capacidad de sugestión y, en gran medida, de la
paciencia del explorador. Debe explicarse al paciente, Aquiles o en los músculos de la pantorrilla o se
hiperextienden las articulaciones de las manos.
con órdenes sencillas y concretas, lo que se espera de
Debe excluirse cuidadosamente la posibilidad
él; la prueba se realizará cerrando los ojos del pacien-
de la existencia de estructuras inflamadas, como
te y se evitará que sea muy prolongada, continuándo-
la, si es preciso, en otro momento. una flebitis, antes de realizar esta exploración.
La exploración de la discriminación espacial se
Para la exploración física de la sensibilidad general
realiza con un compás o dos palillos, siempre
se requieren varios algodones o un pincel de fibras
que el estímulo en los dos puntos sea simultáneo
muy finas, un diapasón que vibre 128 veces por mi-
y no doloroso. Es necesario recordar la enorme
nuto, dos tubos de ensayo para agua fría y caliente,
variabilidad que existe en la superficie corporal
y varios palillos de madera desechables. También se
para diferenciar dos puntos de contacto. En un
deberá disponer objetos comunes de material, forma
sujeto normal, en la espalda no se discriminan
y pesos diferentes (una llave, un bolígrafo, monedas,
etc.). contactos separados varios centímetros, mien-
tras que en la palma de la mano, esta diferen-
El tacto superficial se explora con el algodón o cia no supera a pocos milímetros. Para realizar
con un pincel, haciéndolo correr en el sentido esta exploración, al paciente se le aplicarán uno
de los pelos del cuerpo. Debe pedirse al pa- o dos estímulos, con separaciones variables.
ciente que diga «sí» al notar el estímulo, o que También se estimulará al paciente de forma si-
simplemente nos indique el lugar del contacto. métrica, y deberá indicar si percibe el estímulo
También se debe tocar dos o tres veces seguidas, en el lado derecho, izquierdo, o en ambos En las
y se preguntará al enfermo cuántas veces se le lesiones parietales corticales existe una desaten-
ha estimulado. Para explorar el dolor superficial ción sensitiva que provoca el desconocimiento
se utiliza un palillo afilado, con una técnica si- del estímulo si este se aplica simultáneamente
milar a la seguida para el tacto superficial. Es en ambos hemicuerpos, pero se percibe si se
útil combinar an1bas exploraciones e indicar al efectúan por separado, aunque sea en el lado
paciente que nos diga si se «toca» o se «pincha», afectado.
una vez realizado el estímulo. Es importante que La identificación de figuras trazadas sobre la
el enfermo conteste inmediatamente después de piel se realiza con el dibujo de círculos, cuadra-
recibir el pinchazo, para poder diagnosticar una dos o triángulos, o números, sobre las manos o
apreciación retardada del dolor, característica cara del paciente. En los pacientes en los que
757
de algunas neuropatías periféricas. no se detecta alteración de la sensibilidad su-
5ECCION Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

perficial o profunda, y si se sospecha una lesión las fibras sensitivas de un nervio periférico. Este re-
parietal, se debe explorar la estereognosia, o gistro es factible mediante técnicas de promediación
capacidad de reconocer objetos con el tacto. Se y an1plificación computarizadas, y permite detectar
deben utilizar objetos comunes, conocidos del lesiones en los diversos puntos de la vía sensitiva,
enfermo, y comenzar por la mano supuestamen- desde el nervio periférico hasta la corteza sensitiva
te afectada, y posteriormente en el lado normal. contralateral. Ver figs. 89-4 a 89-6.
En ocasiones, las alteraciones de la sensibilidad
halladas en una exploración, correctamente reali- PATOLOGÍA GENERAL DEL DOLOR
zada, no son compatibles con la distribución anató-
mica de la sensibilidad. Estos casos deben evaluarse CONCEPTO Y TIPOS DE DOLOR
con gran cuidado. Pueden deberse a interpretaciones
erróneas del paciente o a una recogida equivocada El dolor es una compleja función del sistema nervio-
de los datos por parte del explorador. Otras veces so periférico y central, que constituye el síntoma de
pueden corresponder a enfermedades psiquiátricas, enfermedad más frecuente que padece el hombre. El
reacciones de conversión, o simplemente simulación. dolor puede definirse como una sensación molesta de
Algunos de estos pacientes refieren alteraciones de una parte del cuerpo, ocasionada por causas y meca-
la sensibilidad en todo un hemicuerpo, incluyendo nismos diferentes, y habitualmente acompañada de
vista y oído; otras veces, las alteraciones de la sen- una experiencia emocional desagradable.
sibilidad del hemicuerpo terminan justo en la línea El dolor, según su duración, se clasifica en agudo
media, al desconocer que hay una zona de unos 2 cm y crónico.
en la que se intercambian fibras sensitivas de ambos El dolor agudo suele ser referido por los pacien-
hemicuerpos. tes con precisión sobre su carácter, localización
Las pruebas complementarias utilizadas para el y duración, y se acompaña de manifestaciones
estudio de la sensibilidad comprenden la determina- de hiperactividad del sistema nervioso vegetati-
ción de los potenciales de acción sensitivos mediante vo, con taquicardia, sudoración y palidez.
técnicas de electroneurografía (estudios de conduc- El dolor crónico, con una duración superior
ción nerviosa) y el análisis de los potenciales evoca- a los 3 meses, pierde estas características y se
dos somatosensoriales o somestésicos. hace más impreciso. El dolor crónico se debe
Los estudios de conducción nerviosa sensitiva habitualmente a alteraciones estructurales del
consisten en la estimulación de un nervio sensitivo o organismo, y se acompaña de un mayor o me-
mixto mediante un estimulador eléctrico, y posterior nor componente psicológico. En otros casos, el
registro del potencial de acción sensitivo mediante dolor crónico no tiene ninguna base orgánica, y
electrodos de superficie aplicados sobre el trayecto se origina en pacientes con enfermedades psi-
del nervio. Pueden realizarse de forma ortodrómica quiátricas, como una manifestación más de su
(en la misma dirección de la conducción nerviosa, enfermedad.
hacia la médula espinal) o antidrómica (en sentido
Según su origen, el dolor puede ser:
inverso a la conducción nerviosa fisiológica). La ve-
locidad de conducción nerviosa sensitiva (en metros/ Somático si se produce por estimulación de los
segundo) se obtiene dividiendo la distancia (en milí- receptores periféricos; este dolor puede ser agu-
metros) entre el punto de estimulación y el de registro do o crónico, pero siempre bien localizado.
por la latencia (en milisegundos). que es el tiempo El dolor visceral se origina por estimulación de
que tarda en aparecer el potencial de acción sensiti- los receptores de las vísceras, y se caracteriza
vo. Además de la velocidad de conducción nerviosa, por sensación de dolor profundo, de espasmo.
se evalúan otros parámetros, como la amplitud, du- No suele ser bien localizado, y a veces apare-
ración y configuración del potencial de acción sensi- ce referido a áreas de la piel (dermatomas) dis-
tivo. La velocidad de conducción nerviosa sensitiva tantes de la víscera afectada (Fig. 89-7), pero
obtenida en estos estudios representa la velocidad suplidas por fibras aferentes, que penetran por
de conducción de las fibras mielínicas más gruesas las mismas raíces posteriores y convergen en
(fibras A-a). La amplitud del potencial de acción sen- las mismas neuronas en las astas posteriores de
sitivo traduce el número de fibras mielínicas gruesas la médula espinal (p. ej., la manifestación de
estimuladas. Estos estudios son de gran utilidad para afectación cardiaca se presenta como dolor en el
determinar si la sintomatología sensitiva se debe a hombro y brazo izquierdo).
una alteración del nervio periférico, o a una lesión El dolor neuropático se origina por afectación
distal al ganglio de la raíz posterior. directa de los receptores periféricos, de los ner-
Los potenciales evocados somatosensoriales con- vios o del sistema nervioso central; es intenso,
sisten en el registro de las modificaciones de la ac- como una sensación ardiente o disestésica, y se
tividad bioeléctrica del sistema nervioso central acompaña de otras alteraciones de la sensibili-
758
producidas por la estimulación eléctrica repetida de dad en el área cutánea correspondiente.
CAPÍTULO 89 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

C7

Figura y Inervación segmentaría de la piel, con la distribución radicular y territorios correspon-


dientes a nervios periféricos. 1, nervio trigémino; 2, auricular magno; 3, occipital mayor; 4, occipital menor;
5, transversal del cuello; 6, supraclavicular; 7, auricular; 8, ramas de nervios cervicales y dorsales; 9, ramas
latera les; 1O, ramas dorsales; 11 , ax ilar; 12, ramas latera les; 13, intercostobraquiales; 14, cutáneo braquial pos-
terior; 15, cutá neo braquial; 16, cutáneo antebraquial posterior; 17, cutáneo antebraquial lateral; 18, cutáneo
antebraquial medial; 19, radial; 20, cub ital; 21, mediano; 22, hipogástrico; 23, femorogenital; 24, inguinal; 25,
obturador; 26, glúteo; 27, lumbares; 28, sacros; 29, femorocutáneo lateral; 30, femorocutáneo posterior; 31, fe-
moral; 32, peroneo comú n; 33, peroneo superficial; 34, safeno; 35, sural; 36, peroneo profundo; 37, safeno; 38,
plantar lateral; 39, plantar medial.

MODULACIÓN DEL DOLOR nas, la respuesta a estímulos más altos tiene una gran
variabilidad, casi individual. El estado emocional, la
Las vías ascendentes del dolor ya han sido comenta- distracción, sugestión, el efecto placebo o el efecto de
das en este mismo capítulo. Las terminaciones ner- otros estímulos aplicados sobre la piel, modifican la
viosas libres están constituidas por fibras finamente percepción del dolor. Esto demuestra la existencia de
mielinizadas (A-a) que conducen el dolor de trans- mecanismos de modulación del dolor.
misión rápida, y fibras amielínicas (C) encargadas de
la transmisión lenta del dolor. La estimulación de las Un primer mecanismo de control del dolor está
fibras C origina la liberación de un polipéptido deno- localizado en el asta posterior de la médula es-
minado sustancia P, que actúa como neurotransmisor pinal. La estimulación simultánea de las fibras
en las sinapsis del asta posterior de la médula. C y de las fibras mielinizadas A-P inhibe o dis-
Aunque el umbral para la percepción del dolor, es minuye la liberación de la sustancia P, y «cierra
decir, el mínimo estímulo capaz de producir dolor, la puerta» a la transmisión del dolor. Esto es la
es aproximadamente el mismo para todas las perso- base de una experiencia fácilmente constatable:
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Nervios cutáneos medial


e intermedio
del muslo

N. cutáneo
lateral de
la pantorri lla

N. peroneo
superficial

Ramas posteriores de los


nervios sacros y coccígeos
N. cutáneo
N. hemorroidal inferior perforan te
N. peroneo Nervio calcá neo med ial N. iliohipogástrico Nervios pl antares
profundo medial y lateral

Figura Territorios cután eos de los nervios perifér icos, cara per ineal.

el masaje o la presión sobre una zona dolorida ESTRUCTURAS CRANEALES SENSIBLES


alivia la molestia (Fig. 89-7). AL DOLOR Y VÍAS DE LA SENSIBILIDAD
Un segundo mecanismo lo constituye el sistema DOLOROSA DE LA CABEZA
de control descendente del dolor o sistema en-
dorfínico. Muchas neuronas contienen opioides Con la probable excepción de los núcleos del rafe
endógenos o endorfinas, o poseen receptores medio , el parénquima cerebral es casi en su totalidad
para los mismos. Estas neuronas constituyen un insensible al dolor, lo cual explica la baja incidencia
sistema de control del dolor, que comienza en la de la cefalea como síntoma aislado de inicio en los
sustancia gris que rodea al acueducto de Silvia. procesos expansivos intracraneales. En la migraña y
Estas neuronas son excitadas por estímulos do- otras cefaleas, por lo tanto, el dolor es consecuencia
lorosos procedentes de la corteza cerebral. Una de la activación de los receptores nociceptivos «peri-
vez excitadas, y a través de neuronas de proyec- féricos» extracerebrales .
ción, estimulan las neuronas del núcleo mag- Las estructuras craneales sensibles al dolor son:
no del rafe, situado en el bulbo raquídeo. Las Piel, tejido celular subcutáneo, músculos , arte-
neuronas del rafe utilizan la serotonina como rias extracraneales y periostio craneal.
neurotransmisor, y se proyectan hacia el núcleo Ojos, oídos, cavidades nasales y senos parana-
espinal del trigémino y la sustancia gelatinosa sales.
del asta posterior de la médula espinal. En este Grandes senos venosos intracraneales, sobre
punto liberan las endorfinas que bloquean la todo el seno cavernoso.
acción de la sustancia P y disminuyen la trans- Duramadre en la base del cerebro y arterias den-
misión del dolor. tro de la duramadre y la piaracnoides, particular-
mente los segmentos proximales de las arterias
cerebral anterior y cerebral media y la porción
CEFALEA intracraneal de la arteria carótida interna.
La arteria meníngea media y las arterias tempo-
CONCEPTO rales superficiales.
Los nervios óptico, motores oculares, trigémino,
Es el dolor experimentado en una parte o en toda la glosofaríngeo, vago y las tres primeras raíces cer-
cabeza, y constituye el padecimiento más frecuente vicales (la primera raíz cervical no es constante).
del ser humano. La cefalea, como síntoma, es secun- Estructuras tales como el hueso craneal, las cu-
daria a múltiples procesos causales, y obedece a di- biertas meníngeas en la convexidad del cerebro,
760
versos mecanismos de producción. el epéndimo ventricular, los plexos coroideos,
CAPITULO 89 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

C2

CJ
CA
C5

Cl
TI
12 ce
,.
TJ

TS

T7
18
19
TIO
Tll
T12

ce

C7

Figura Distribución de los dermatomas medu lares.

las venas piales y el parénquima cerebral son ral. El dolor procedente de la porción intracraneal de
insensibles al dolor. la arteria carótida interna y de las partes proximales
de la arteria cerebral anterior y media se siente en el
Los estímulos dolorosos, cualquiera que sea su na- globo ocular y en el área temporoorbitaria. Las estruc-
turaleza, son transmitidos al sistema nervioso central turas infratentoriales transmiten el dolor a través del
por medio del nervio trigémino y, en menor medida, nervio glosofaríngeo, vago o por las tres primeras raí-
por el nervio facial, el nervio glosofaríngeo, el nervio ces cervicales, y el paciente lo localiza en la región
vago y las tres primeras raíces cervicales. El nervio occipital o parte superior de la nuca.
trigémino, particularmente la primera rama, recoge
los estímulos dolorosos de la frente, órbita, fosa cra- La sensibilidad general procedente de la cabeza si-
neal anterior y media y de la superficie del tentorio. gue unas vías diferenciadas de la del resto del cuerpo.
Las ramas esfenopalatinas del nervio facial llevan los La parte sensitiva del V par craneal, o nervio trigémi-
impulsos desde la región nasoorbitaria. Los nervios no, recoge la sensibilidad de la piel de toda la cara,
glosofaríngeo y vago y las tres primeras raíces cervi- parte del cuero cabelludo, las mucosas de la boca,
cales transmiten los impulsos dolorosos procedentes cavidades nasales y senos paranasales, los dientes y
de la superficie inferior del tentorio y del conjunto de gran parte de la duramadre.
la fosa posterior. El tentorio es, por lo tanto, el límite El ganglio de Gasser (ganglio del trigémino) es si-
entre las dos grandes zonas de inervación sensitiva milar a los ganglios espinales; contiene el cuerpo de
cefálica, la trigeminal y la cervical. las neuronas que recogen la sensibilidad de los recep-
Un aspecto importante a considerar es el lugar tores correspondientes a las fibras C, A-8 y A-~, y la
donde es apreciado el dolor procedente de las es- transmiten al núcleo sensitivo principal del trigémi-
tructuras sensibles. En general, el dolor originado por no (tacto y presión) y al núcleo espinal del trigémino
las estructuras sensibles de la tienda del cerebelo y (dolor y temperatura). Las fibras más gruesas (A-ex),
supratentoriales son transmitidas por la primera rama que transmiten la sensibilidad propioceptiva de la
del trigémino, y el dolor es referido a la región frontal , musculatura de la masticación, no tienen su cuerpo
temporal o parietal. Así, los impulsos dolorosos que neuronal en el ganglio de Gasser, sino en el núcleo
nacen de la distensión de la arteria meníngea media mesencefálico del trigémino, donde se comunican
se proyectan a la región retroocular y al área tempo- con el núcleo motor del V par y con ambos tálamos.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

El núcleo espinal dol trigérnino constituye la pro-


longación de las capas I y II del asta posterior de la
médula espinal; rncogn la totalidad de las fibras que Tabla Causas del dolor crónico
conducon la sensibilidacl térmica y dolorosa. v parte
de las fihrns que transmiton impulsos ele lacto y pre- Enfermedades médicas
sión. En este núcleo lnrminan. además, fibras sensiti- Neoplasias
vas ele; las pares craneales VII, fX y X, que conducen la Enfermedades osteoarticulares
sensibilidad térmica v dolorosa de la parte posterior Enfermedades neurológicas
clnl conducto auditivo, do] torcio posterior de la len- Del SNP: Polineuritis, dolor regional
gua. de la faringe y de la laringe. Las neuronas que na- complejo, muñón de amputación,
cnn do nsto núcleo cruzan el bulbo v ascienden hasta arrancamiento de plexos y raíces, herpes
el mícloo wmtrol posteronwdíol del tálamo. acompa- zóster, postradioterapia
ñando al haz llSpinotalámico. Del SNC: Tabes dorsal, aracnoiditis
En la protuberancia, se rrncmmtra el núcleo sensi- espinal, lesiones del tracto espinotalámico
(poscordectomía, paraplejías, síndrome
tivo principal dnl trigémino, donde terminan los im-
de Wallenberg, infartos o hemorragias
pulsos periféricos corrusponcli1mtes a las sensaciones talámicas y corticales), esclerosis múltiple
dn lacto y prnsión, ele forma equivalente a los cordo-
nes posteriorns de In médula. Dnl núcleo sensitivo Enfermedades psiquiátricas
principal dul V ¡wr cruzan nnuronas que ascienden Neurosis y psicosis depresiva
junto al lomnísco medial hasta el núcl¡m ventral pos- Neurosis de renta
tnrornedial dol tülamo. Un pelqtw110 númoro do fibras Síndrome de Munchausen
aferentes del V par no se cruzan, y ascienden por el
De causa desconocida
mismo lado a lrnvés del lemnisco dorsal del trigómi-
no. v son rusponsablos do la ruprusuntac:ión cortical
bomolateral de la sensibilidad cln In cara.

ETIOLOGÍA bitis de los semos inlrac:raneales. la isquemia cerebral.


Como a cualquiur otro nivol corpornL el dolor ele ca- las enfermedades ele los ojos, oídos. nariz y boca y de
beza propiamente dicho pued,i ser secundario a: la articulación temporomandibular, y las neuralgias
craneales.
Dilatación. distensión o tracción rle las arterias
Aunque chísicamente sn engloba a la migraña
cnmcalt1s sensibles al dolor.
como una cefalea vascular. se sabe que la migrafia
Tracción o dnsplazamionto do las estructuras ve-
no esléí proclucicla por un simple incremento del
nosas inlrncrnnmdus o ele las cubiertas duralns.
flujo cerebral hornolateral. Se ha demostrado que en
Comprnsión. tracción o inflamación de los pares
la fase dolorosa dü la migrafia tiene lugar una vaso-
craneales o do las raíces espinales.
dilatación de las arterias craneales extracnrebrales
Espasmo o i nflamac:ión de los músculos cranea-
(arterias leptonrnníngeas), así como una inflamación
les o cervicales.
estéril de estas arterias secundaria a la liberación
Irritaci(m nrnníngea,
local ele péptidos algogénicos. Ambos fenómenos
Incrnnwnto ele la presión intracranoal.
son consecuencia de la activación del denominado
Peri urbación do lns provrn:ciones serotoninérgi-
sistema trigeminovascular. Este sistema nstá com-
cns intracerobrnles.
puesto. en su porción eferente, por el núcleo salival
La cefalm1 se origina por Iros mecanisrno8 funcla- superior y la parte parasimpática del nervio facial,
nrnntales: altnración del lucho vascular, contracción responsables de la liberación del póptido intestinal
muscular persistente. o por tracción o inflamación vasoactivo (VIP) y por el propio nervio trigémino
de las estructuras sensibles (Tabla B\J-3). Las cefaleas en su brazo eferente. que libera retrógradamente
vasculares comprenden Jn migrm10, lo cefalea en ra- el pépticlo relacionado con el gen do In calcitonina
cimos ( de Hortrm) .v los cojóloos vasculares que apa- (CGRP). La pors cudolis del núcleo espinal del tri-
recen duranto la fiebre, consumo de tóxicos (alcohol, gémino constituye el auténtico centro de control de
tabaco, etc.). insufic:innda respiratoria, enfermedades la actividad de este sistema. Tanto el fenómeno de la
metabólicas, ele. Las cefaleas originadas por contrac- vasodilatación de los vasos leptomeníngeos como la
ción muscular persistente constituyen el grupo más inflamación vascular estéril oslün controlados por el
numeroso: son debidas n situaciones de ansiedad o sistema de mmrolransmisión serotoninérgica. Se ha
clHpresi.ón y, con menor frecwmcia. a oslooarlritis dn comprobado que al menos dos subtipos de receptores
las primeras vértebnrn cervicales. Las cefaleas por serotoninérgicos 5-HTL los subtipos 5HT1B (locali-
tracción o inflamación incluycm las masas intracra- zados en la pared de los vasos leptomeníngeos) y los
nnales (tumorns. abscesos, hemorragias), las infoccio- 5HT1D (localizados en las terminales presinápticas
nes (meningitis), las arterilis craneales. las trombofle- de la primera rama del trigémino) son capaces de
CAPÍTULO 89 Patología general de la sensibilidad y del dolor. Cefalea

Tabla Clasificación de las


cefaleas
Migraña
Cefalea tensional
Cefalea en racimos y otras cefaleas
trigeminoautonómicas
Otras cefaleas primarias inusuales (tos,
ejercicio, cefalea punzante)
Cefalea atribuida a traumatismo craneal o
cervical
Cefalea atribuida a trastorno vascular
craneal o cervical
Cefalea atribuida a trastorno no vascular
craneal
Cefalea atribuida a consumo o supresión de
sustancias
Cefalea atribuida a infección
Cefalea atribuida a trastorno de la
homeostasis
Figura TC cerebral de un tumor cerebral.
Cefalea o dolor facial atribuido a trastorno
del cráneo, cuello, ojos, oídos, nariz, senos,
dientes, boca u otras estructuras faciales o
craneales Cefaleas crónicas o de larga evolución (habi-
Cefalea atribuida a trastorno psiquiátrico tualmente incluyen las cefaleas por contracción
muscular y la migraña).
Neuralgias craneales y causas centrales de Cefaleas recientes (pueden ser debidas a causas
dolor facial
tóxico-vasculares, o por mecanismo de tracción
Otros tipos de cefalea, neuralgia craneal y o inflamación de las estructuras sensibles al do-
dolor facial central o primario lor).
Cambio de características de una cefalea cróni-
ca (sugiere la aparición de una nueva causa en
un paciente con cefalea crónica) .
revertir estos mecanismos responsables de la cefalea Las cefaleas recientes, o el cambio de característi-
migrañosa. cas de una cefalea crónica, obligan muchas veces a
la realización de exploraciones complementarias. La
presencia de una arteria craneal engrosada y dolorosa
SEMIOLOGÍA exige la búsqueda de elevación de la velocidad de se-
dimentación globular y de anemia, y la realización de
El estudio de los pacientes con cefalea comprende la una biopsia de la arteria temporal para descartar una
descripción de las características del dolor y una ex- arteritis de células gigantes. La asociación de fiebre y
ploración física general y neurológica completa. En la
signos de irritación meníngea indican la realización
mayoría de las ocasiones, estos procedimientos son de una punción lumbar y el análisis del líquido cefa-
suficientes para el diagnóstico correcto del síntoma lorraquídeo por sospecha de meningitis. La existen-
y de la enfermedad que lo motiva, sobre todo en las cia de focalidad neurológica motora y/o sensitiva en
cefaleas crónicas o de larga evolución. la exploración o la asociación del dolor de cabeza con
Las cefaleas pueden ser clasificadas en 14 grupos crisis epilépticas, alteración psíquica o edema de pa-
(Tabla 89-4). Cada uno de estos grupos tiene, a su vez, pila motiva la realización urgente de una TC cerebral
varios subgrupos de cefaleas hasta englobar unas 180 por sospecha de un tumor cerebral (Fig. 89-8). Con
posibles causas de cefaleas. menos frecuencia, puede ser necesaria la realización
El perfil evolutivo de las cefaleas permite estable- de otras técnicas diagnósticas, como la angiografía ce- ------,-rr
cer tres grupos de indudable importancia clínica: rebral o una RM.
-190
Patología general del cerebelo
y del sistema vestibular.
Ataxia y vértigo
Manuel Noya García, José María Prieto González

CEREBELO Y ATAXIA. CONCEPTO


El cerebelo es responsable de modular la información
sensorial acerca de la posición relativa en el espacio
de la cabeza, el tronco y las extremidades (recibida
fundamentalmente de sensores de la distensión mus-
cular y del laberinto) y de relacionarla con los im-
pulsos motores procedentes del cerebro y del tronco
encefálico, a fin de coordinar los movimientos con
la mayor precisión. Sus principales funciones son el
control del tono muscular, de la postura y del movi-
miento (Tabla 90-1).
Se denomina ataxia a la incoordinación de la ac-
tividad motora, resultante de un control inseguro en
la dimensión y precisión del movimiento. La ataxia
puede deberse a un defecto en la información senso-
rial propioceptiva o laberíntica, o a trastornos de la
función del cerebelo o de sus conexiones.
El mantenimiento del equilibrio y la capacidad
para caminar son funciones íntimamente relacio-
nadas.

FUNDAMENTOS ANATOMOFISIOLÓGICOS
El cerebelo, desde el punto de vista anatómico, está
compuesto por dos hemisferios laterales y una es-
tructura de unión en la línea media, el vermis cere-
beloso. Filogenética.mente, y desde el punto de vista
funcional , se divide en un lóbulo floculonodular o
arquicerebelo, y un corpus cerebelli, a su vez con
dos partes: el lóbulo anterior o paleocerebelo y el
lóbulo posterior o neocerebelo. El arquicerebelo está
conectado principalmente con los núcleos vestibu-
lares; el lóbulo anterior, con las vías espinales, y el
lóbulo posterior, con la corteza cerebral.
La c01teza cerebelosa se divide en una capa exter-
764 na llamada molecular (donde se encuentran células
CAPITULO 90 Patología general del cerebelo y del sistema vestibular. Ataxia y vértigo

similar correspondiente a la cabeza y al cuello


es aportada por la vía cuneocerebelosa. La vía
Tabla Principales manifestaciones espinocerebelosa ventral, con información de
de enfermedad del cerebelo los husos musculares y los receptores cutáneos,
conecta con el paleocerebelo a través de los pe-
Ataxia dúnculos superiores.
lncoordinación de movimientos Una vía eferente del paleocerebelo conecta,
Descomposición del movimiento a través del núcleo fastigial, a los tractos ves-
Dismetría tibuloespinal y reticuloespinal, que ejercen un
Hipermetría efecto modulador sobre la actividad del huso
Temblor intencional muscular.
Disdiadococinesia El neocerebelo constituye la mayor parte de los
Ataxia de la marcha hemisferios cerebelosos. Recibe aferentes cons-
Hipotonía muscular tituidas por ramas colaterales de las neuronas
Signo del rebote piramidales y de las fibras pontocerebelosas
musgosas, que se originan en los núcleos protu-
Reflejos pendulares
beranciales contralaterales. Sus fibras eferentes
Disartria
se inician en las células de Purkinje, se proyec-
Nistagmus tan a los núcleos dentados (oliva cerebelosa),
Vértigo salen por los pedúnculos cerebelosos superio-
Desviación de los ojos, diplopía res , cruzan la línea media y alcanzan el núcleo
rojo y el núcleo ventrolateral del tálamo , con
conexiones que vuelven a la corteza cerebral
frontal (circuito córtico-ponto-cerebelo-denta-
do-rubro-cortical). El neocerebelo interviene en
en cesta, células estrelladas y fibras paralelas proce- la regulación y ajuste fino de los movimientos
dentes de las células granulares), una capa de células de los miembros, al proporcionar un mecanis-
de Purkinje y otra capa granular, con células granula- mo de feedback para el control del movimiento
res y células de Golgi II. Situados profundamente en activo; también interviene en la programación
la sustancia blanca del cerebelo, existen una serie de del movimiento y en el control postura!.
núcleos bilaterales, denominados globoso, embolifor- Con una doble decusación de sus vías , cada
me, dentado (u oliva) y fastigial. hemisferio cerebeloso regula la actividad motora
Existen amplias conexiones entre estas estructuras: del lado ipsilateral del cuerpo.
fibras de asociación entre distintas partes de la corte-
za cerebelosa entre sí y con los núcleos cerebelosos,
fibras de proyección del cerebelo al tronco cerebral y SÍNDROME CEREBELOSO
a la médula espinal, y viceversa, y fibras comisurales
Las alteraciones de la función del cerebelo originan
entre ambos hemisferios cerebelosos .
una serie de manifestaciones clínicas que pueden
El arquicerebelo está conectado con los núcleos agruparse como un síndrome característico, con cier-
vestibulares a través del pedúnculo cerebeloso tas variaciones que dependen de la localización y na-
inferior. Sus funciones conciernen particular- turaleza de las lesiones. Revisaremos las principales
mente al equilibrio y al control de los movi- características clínicas, sus peculiaridades topográfi-
mientos del ojo y los reflejos posturales del cue- cas y sus causas (Tabla 90-2).
llo y músculos axiales del cuerpo. Las lesiones
de esta localización originan desequilibrio sin
vértigo (ataxia troncal) y nistagmo. MANIFESTACIONES
El paleocerebelo recibe información por aferen-
tes de la médula espinal a través de los pedún- Hipotonía
culos cerebelosos superior e inferior, y también En las lesiones unilaterales del cerebelo el tono mus-
de la oliva inferior (o bulbar) por la vía olivo- cular se reduce en las extremidades del mismo lado,
cerebelosa. Los impulsos procedentes de los y en las lesiones extensas se reduce de modo gene-
husos musculares y de los órganos tendinosos ralizado. La hipotonía se pone de manifiesto por la
de Golgi llegan a las neuronas de la columna de disminución de la resistencia a movimientos pasivos.
Clarke (lateral en la sustancia gris de la médula Con el paciente en pie y con los brazos colgando, si
espinal, desde los segmentos Dl a L2), en donde se imprimen sacudidas alternativas en los hombros se
se origina la vía espinocerebelosa dorsal, cuyas aprecia un mayor desplazamiento pasivo del miem-
fibras alcanzan la corteza cerebelosa a través del bro superior del lado afectado. Con los brazos ex- ~
pedúnculo cerebeloso inferior. La información tendidos , el miembro afectado se desplaza más ante
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

una breve presión realizada por el explorador. Con el


paciente acostado, los músculos de la pierna afectada
Tabla Etiología del síndrome aparecen más flácidos en la palpación, la elevación
cerebeloso brusca de➔ la rodilla empujada desde el hueco poplí-
teo provoca mayor desplazamiento, y la pierna puede
Anomalías congénitas o del desarrollo ser flexionada pasivamente hasta tocar fácilmente la
Agenesia cerebelosa región glútea con el talón del pie.
Malformación de Amold-Chiari Como consecuencia de la hipotonía. puede ob-
Malformación de Dandy-Walker
servarse una respuesta de varias oscilaciones de la
pierna cuando se e➔xplora el reflejo rotuliano con las
Impresión basilar
piernas colgando librnmente por fuera de la camilla
Platibasia (reflejos pendulares).
Atrofia degenerativa También es conse➔cuencia de la hipotonía el rntraso
Degeneraciones cerebelosas hereditarias en la detención de un movimiento, que origina el sig-
Degeneraciones espino-cerebelosas (ataxia
no del rebote: el explorador se opone al movimie➔ nto
de Friedreich y otras) activo de flexión del brazo y, al liberarlo bruscamen-
Atrofia olivopontocerebelosa (atrofia
te, el paciente➔ puede golpear su hombro con la mano
multisistémica tipo C) (debe evitarse que lo haga en la cara).
Degeneración cerebelosa paraneoplásica

Enfermedades vasculares Ataxia


Infarto La incoordinación de➔ los movimientos se evidencia
Hemorragia cerebelosa hipertensiva en las e➔ xtre➔ midades como torpeza en su e➔ jecución
Enfermedades desmielinizantes (por ejemplo. ve➔stirse. e➔ scribir, abrochar botones), y
recibe distintas denominaciones. aunque el mecanis-
Esclerosis múltiple
mo fisiopatológico es el mismo.
Tumores La descomposición del movimiento consiste en
Meduloblastoma realizarlo a saltos, como fragmentado en sus distin-
Astrocitoma tas partes, en lugar de harnrlo ele modo continuo y
Neurinoma del acústico armónico. La dismetría e➔s la alteración en e➔l orden,
Hemangioblastoma
rngularidad, grado y fuerza ele un movimiento: se ex-
plora con las maniobras dedo-nariz y talón-rodilla.
Metástasis
Durante estas pruebas se aprecia el temblor inten-
Meningiomas de fosa craneal posterior cional: pUEide no haber temblor en reposo o al co-
Infecciones mienzo dnl movimiento, pero aparece una oscilación
Abscesos grosera cuando el dedo se aproxima a su diana. La
Ataxia aguda postinfecciosa de la infancia
hipermetría es un desplazamiento excesivo durante
un movimiento voluntario. La dischadococinesio e➔s
Leucoencefalopatía multifocal progresiva
la incapacidad para hacer movimientos alternativos
Enfermedades por priones (Kuru. (por ejemplo, pronación y supinación ele las manos,
Creutzfeldt-Jakob)
o golpeteo sucesivo ele las manos) con regularidad y
Infección por VIH rapidez.
Meningoencefalitis por Lístería
monocytogenes

Intoxicaciones
Disartria
Alcohol La pronunciación se hace irrngu]ar, fragmentada: las
Prímidona palabras se arrastran (voz escandida). Responde➔ a los
Fenitoína mismos mecanismos de la ataxia.

Enfermedades endocrinas y metabólicas


Hipotiroidismo Alteración de la marcha
Deficiencia de vitamina E La ataxia de la marcha origina irregularidad durante
Agentes físicos la misma. con separación de las piernas para ampliar
Traumatismos
la base de➔ sustentación y vacilaciones. especialmente➔
inestabilidad durante los giros, cambios de dirección
Golpe de calor
o detención brusca (marcha de ebrio). Los grados
me➔ nores pueden ponerse de manifiesto por la inca-
pacidad para caminar en línea recta tocando alttmrn-
CAPÍTULO 90 Patología general del cerebelo y del sistema vestibular. Ataxia y vértigo

tivamente los dedos de un pie con el talón del otro CAUSAS DEL SÍNDROME CEREBELOSO
(marcha en tándem].
En las lesiones cerebelosas unilaterales el pacien- Los síndromes cerebelosos, dependiendo de su etio-
te tiende a desviarse hacia el lado afectado (Jatero- logía, pueden presentarse en forma pura o asociados
pulsión). Si el paciente intenta caminar describiendo a manifestaciones de otras lesiones del sistema ner-
un círculo alrededor de un punto, primero en un vioso (de tronco encefálico, hemisferios cerebrales,
sentido y después en el contrario, se desvía hacia el médula espinal) o a hipertensión intracraneal. Sus
centro en una dirección, y hacia fuera en la otra. El causas más importantes son las siguientes:
intento de caminar repetidamente entre dos puntos Anomalías congénitas o del desarrollo. Age-
(adelante atrás) origina desplazamientos en forma de nesias del cerebelo, malformación de Arnold-
estrella. Chiari (posición descendida de las amígdalas
cerebelosas y del bulbo raquídeo por debajo
del límite del foramen magno), síndrome de
Alteración de la postura y equ ilibrio Dandy-Walker (trastorno del desarrollo del
Al permanecer derecho con los pies juntos, el pa- vermis cerebeloso con dilatación o comunica-
ciente tiende a oscilar o a caer hacia un lado (hacia ción de la cisterna magna y el cuarto ventrícu-
el de la lesión en procesos unilaterales), o hacia ade- lo), impresión basilar y platibasia (deformidad
lante o atrás. Esta inestabilidad es independiente de de la fosa craneal posterior por invaginación
mantener los ojos abiertos o cerrados, a diferencia de la apófisis odontoides a través del foramen
de la que se da en las alteraciones de los nervios magnum).
periféricos o los cordones posteriores de la médula Atrofias cerebelosas. Degeneraciones cerebe-
espinal, en que la pérdida de sensibilidad postural losas y espinocerebelosas familiares , de co-
es compensada por la visión, y el enfermo pierde el mienzo en la infancia o adolescencia (como la
equilibrio al cerrar los ojos, lo que constituye el sig- ataxia de Friedreich) o en la vida adulta (atrofia
no de Romberg. olivopontocerebelosa); degeneraciones cerebe-
También es habitual observar que la cabeza se losas paraneoplásicas (secundarias a un tumor
mantiene en posición rotada, con el occipucio hacia maligno a distancia); degeneración cerebelosa
el lado afectado del cerebelo, y con asimetría en la alcohólica (con afectación selectiva de la su-
altura de los hombros . perficie anterosuperior del cerebelo , en la línea
media).
Tumores. Meduloblastomas, ependimomas (lí-
Nistagmo nea medial, astrocitomas sólidos o quísticos,
metástasis, hemangioblastomas (en hemisferios
El nistagmo, o trastorno de los movimientos oculares cerebelosos), meningiomas, neurinomas acústi-
caracterizado por oscilaciones rítmicas , es debido a la cos (en la vecindad del cerebelo, el cual com-
afectación de las conexiones vestibulares del cerebe- primen).
lo; generalmente se acentúa al desviar los ojos en la Enfermedades desmielinizantes . Esclerosis
dirección del lado afectado. múltiple, con placas localizadas en el cerebelo
y sus conexiones.
Enfermedades vasculares. Hemorragias intra-
LOCALIZACIONES CEREBELOSAS cerebelosas hipertensivas, infartos cerebelosos
(oclusiones de las arterias cerebelosas poste-
En las lesiones del lóbulo floculonodular (arquicere- roinferior o PICA, anteroinferior o anterior, o del
belo] predomina la ataxia de la marcha y del tronco, sistema arterial vertebrobasilar).
incluso en ausencia de cualquier otro signo clínico y Infecciones. Absceso de cerebelo (frecuente-
con normal coordinación del movimiento de las ex- mente originado por otitis media), encefalitis
tremidades. víricas (leucoencefalopatía multifocal progre-
Las lesiones del lóbulo anterior o paleocerebelo (lí- siva, varicela, síndrome de ataxia aguda de la
nea media cerebelosa) originan ataxia de la marcha y infancia postinfeccioso), virus lentos (kuru, en-
de las extremidades inferiores, con escasa afectación fermedad de Creutzfeldt-Jakob), meningoence-
de los miembros superiores. falitis por Listeria monocytogenes, infecciones
Las lesiones unilaterales del neocerebelo o lóbulo en el síndrome de inmunodeficiencia adquiri-
posterior (hemisferios] originan en los miembros del da.
mismo lado hipotonía, dismetría, disdiadococine- Intoxicaciones. Alcohol, anticonvulsivantes (fe-
sia, hipermetría, reflejos pendulares y lateropulsión. nitoína, primidona).
Las enfermedades bilaterales de estas estructuras Enfermedades endocrinas y metabólicas. Hipo-
causan ataxia de las cuatro extremidades (ataxia tiroidismo, déficit de vitamina E.
apendicular). Agentes físicos. Golpe de calor, traumatismos.
SECCION Semio logía y fis iopatología de las enfermedades del sistema nervioso

SÍNDROME VESTIBULAR Y VÉRTIGO

FUNDAMENTOS ANATOMOFISIOLÓGICOS Tabla Causas comunes de vértigo


Laberíntico
En el mantenimiento de la postura y el equilibrio ejer- Síndrome de Meniere
ce un papel esencial la rama vestibular del VIII par
Laberintitis aguda
craneal, cuyo otro componente es la rama coclear,
Intoxicaciones (salicilatos, aminoglucósidos)
iniciada en el caracol y concerniente a la audición.
Cinetosis (mareo del movimiento)
En cada laberinto se distinguen el utrículo, el sáculo
y los tres canales semicirculares, el anterior vertical, Vértigo postura! benigno
el posterior vertical y el horizontal, dispuestos en- Nervio vestibular
tre sí en planos que forman ángulos rectos. El canal Tumores de ángulo pontocerebeloso
vertical posterior está en plano vertical paralelo al (neurinoma)
del canal vertical anterior del otro lado. Cuando la Meningitis basal
cabeza se inclina 30°, hacia delante de la vertical, los Neuronitis vestibular
canales laterales están en posición horizontal. Los
canales semicirculares responden a la aceleración Tronco cerebral
angular. Enfermedades vasculares
Los otolitos en el utrículo y el sáculo señalan lapo- Tumores
sición estática de la cabeza en el espacio y responden Esclerosis múltiple
a aceleración lineal. Cerebelo
Los cuerpos neuronales correspondientes al ner-
Hemorragia
vio vestibular residen en los ganglios vestibulares de
Scarpa, en el conducto auditivo interno. Sus prolon- Impulsos propioceptivos
gaciones centrales pasan junto al nervio coclear, al Vértigo cervicogénico
borde inferior de la protuberancia; el nervio vestibu-
lar termina en los núcleos vestibulares, que tienen
cuatro partes principales conectadas con las astas
anteriores de la médula espinal por la vía vestibu-
loespinal, con los núcleos de la motilidad extrínseca
del ojo por el fascículo longitudinal medial, y con
el lóbulo floculonodular del cerebelo y la formación El vértigo puede originarse en las distintas partes
reticular. que intervienen en el mantenimiento del equilibrio:
El mantenimiento del equilibrio y la postura, así
Trastornos visu ales. Como el nistagmo opto-
como el reconocimiento de la posición del propio cinético que aparece al mirar objetos en movi-
cuerpo en el espacio, dependen de impulsos visuales
miento, o en sujetos con diplopía, por alteración
(retina-corteza del lóbulo occipital), impulsos labe- de la información procedente de la retina y de
rínticos (sistema vestibular) e impulsos propiocepti-
los receptores propioceptivos de los músculos
vos de articulaciones y músculos del cuello, tronco y
oculares extrínsecos.
extremidades.
Trastornos cerebrales. Aunque este origen es
poco común y debe interpretarse con prudencia;
se describe vértigo como componente de la dis-
SÍNDROME VESTIBULAR función cerebral en la migraña, en crisis epilép-
ticas y en tumores del lóbulo temporal.
Las alteraciones del sistema vestibular ongrnan Alteraciones de los impulsos propioceptivos.
vértigo, trastorno del equilibrio y de la marcha y Como los originados en la columna y en los
nistagmo. Frecuentemente están asociados con alte- músculos cervicales (un diagnóstico del cual se
raciones de la audición, por la relación anatómica y abusa erróneamente).
funcional con la rama coclear (auditiva) del VIII par Patología cerebelosa. Cuando se alteran las co-
craneal. nexiones vestibulares del lóbu lo floculonodular.
El vértigo se define como una percepción anormal Las lesiones hemisféricas rara vez cursan con
de movimiento del cuerpo en relación con el entor- vértigo, excepto los hematomas cerebelosos.
no, o viceversa, generalmente con sensación de giro; Patología del tronco cerebral. (lesiones vascula-
el paciente puede tener la impresión de oscilar o de res, esclerosis múltiple, tumores) . Generalmente
caer, y de hecho es común la pérdida real del equi- con vértigo persistente, asociado a otros sínto-
librio. Se acompaña frecuentemente de postración, mas; engloba los ataques isquémicos transito-
náuseas, vómitos y otros síntomas vegetativos (pali- rios o infartos del territorio vertebrobasilar y la
768 dez, sudoración). arteria cerebelosa posteroinfenor (síndrome de
CAPITULO 90 Patología general del cerebelo y del sistema vestibular. Ataxia y vértigo

Wallenberg). Son discutibles los casos de vértigo duración y velocidad del nistagmo (el compo-
atribuidos a compresión de arterias vertebrales nente rápido del mismo se dirige hacia el lado
por espondilosis cervical. opuesto al irrigado con agua fría); se repite la
Alteraciones laberínticas . Las formas más fre- maniobra en el otro lado, y luego se hace lo
cuentes de vértigo, que tiende a presentarse en mismo con agua caliente a 44 ºC, que en sujetos
ataques agudos de horas de duración, y muchas normales induce nistagmo hacia el mismo lado.
veces asociado a percepción de ruidos como Durante esta prueba pueden ocurrir dos tipos
zumbido o maquinaria (acúfenos) y sordera. El de alteraciones (a veces de modo combinado),
laberinto se daña en procesos inflamatorios o llamadas «paresia de canal» y «preponderancia
infecciosos agudos (laberintitis), por efecto de direccional».
fármacos (salicilatos, aminoglucósidos), enfer-
medades vasculares y enfermedad de Méniere Paresia de canal (o conducto semicircular) .
(degeneración del órgano espiral de Corti y dila- Viene indicada por la ausencia de respuesta a
tación del sistema endolinfático). la irrigación de un oído; se observa en lesiones
Patología del nervio vestibular. Componente periféricas del sistema vestibular (laberinto o
del VIII par craneal, se afecta en tumores del nervio vestibular).
ángulo pontocerebeloso (neurinoma del acústi- Preponderancia direccional. Descubre un de-
co), o meningitis; por las relaciones anatómicas sequilibrio latente en la función vestibular; el
estrechas es fácil que se alteren simultánea- nistagmo es más intenso y más duradero en
mente la división coclear del VIII par y el ner- una dirección, cualquiera que sea el conducto
vio facial. La neuronitis vestibular se presenta estimulado. Se observa preferentemente hacia
bruscamente con vértigo intenso y prolongado el lado de una lesión cerebelosa y hacia el lado
durante días, sin sordera y con un curso auto- opuesto en lesiones de la vía vestibular en el
limitado. interior del tronco cerebral.
Vértigo postura} benigno. Los episodios de vér- En pacientes comatosos, la ausencia de nis-
tigo son breves pero se presentan de modo cró- tagmo al instilar agua helada en un oído indica
nico, desencadenados por movimientos rápidos disfunción grave de los núcleos vestibulares
de la cabeza, a veces en direcciones específicas; protuberanciales.
su patogenia es incierta: quizá se deba a un pro-
ceso degenerativo de los otolitos de utrículo y Pruebas posicionales. Se analiza la presentación
sáculo. de nistagmo o vértigo con movimientos bruscos
Mareo del movinúento. Vértigo que ocurre du- pasivos de la cabeza. El paciente se sienta en
rante un viaje en barco, automóvil, etc. Depende una camilla y su cabeza es rotada 30º a 40° por
de la sensibilidad a la estimulación repetida de el explorador; a continuación se acuesta rápida-
los canales semicirculares. mente con la cabeza llevada a 30º por debajo del
plano horizontal. Normalmente no se produce
nistagmo , pero sí aparece en el vértigo postura!
PRUEBAS DE FUNCIÓN VESTIBULAR benigno, dirigido hacia el oído más bajo (el afec-
En la exploración complementaria de la función ves- tado por la disfunción de otolitos), después de
tibular se utilizan dos pruebas: un periodo de latencia, y desaparece en menos
de un minuto. El nistagmo puede reaparecer al
Pruebas calóricas. Se llevan a cabo observando sentarse de nuevo. Frecuentemente se acompa-
la respuesta a la instilación sucesiva de agua ña de vértigo subjetivo. Existe una adaptación
fría y agua caliente en los conductos auditivos por la cual la repetición de la maniobra puede
externos. El paciente debe situarse acostado , ser ineficaz. Algunos pacientes con lesiones del
con el cuello flexionado en un ángulo de 30° tronco encefálico y cerebelo muestran nistagmo
con el plano horizontal y mirando recto al fren- sin latencia y persistente, que se reproduce al
te; en esta posición los canales horizontales reiterar la prueba, y con dirección variable de-
están verticales. Se irriga el oído primero con pendiendo del movimiento cefálico; este nistag-
agua a 30 ºC durante 40 segundos, y se mide la mo no suele ir acompañado de vértigo.

769
·191
Patología general de la corteza
cerebral. Síndromes cerebrales
lobares. Afasias, apraxias, amusias,
agnosias. Demencia
Manuel Noya García, Manuel Arias Gómez, Susana Arias Rivas

CONSIDERACIONES ANATOMOFUNCIONALES
Dentro de la cavidad craneal se aloja el encéfalo, que
se compone de cerebro, tronco cerebral y cerebelo,
y constituye la porción superior y capital del siste-
ma nervioso central (SNC). El cerebro lo conforman
dos hemisferios que, unidos por varias comisuras (el
cuerpo calloso es la más importante) y separados por
la cisura interhemisférica, están compuestos de sus-
tancia gris (corteza cerebral y núcleos grises) y sus-
tancia blanca.
La corteza cerebral es la parte externa de los he-
misferios cerebrales y presenta en su superficie varias
cisuras (surcos profundos) que delimitan distintos
lóbulos; otros surcos más pequeños separan, dentro
de los lóbulos, las circunvoluciones. La cisura de Ro-
lando marca el límite entre el lóbulo frontal y el pa-
rietal; debajo de la cisura de Silvia se sitúa el lóbulo
temporal y, en su profundidad, está el lóbulo de la
ínsula; las circunvoluciones angular y supramarginal
configuran la encrucijada entre los lóbulos parietal,
temporal y occipital (Fig. 91-1). Esta división en lóbu-
los deriva de antiguas concepciones anatómicas, pero
sigue conservando un valor no sólo didáctico sino
también localizador de ciertas funciones , que se deta-
llarán más adelante. La atención, ideación y vigilia no
tienen una localización cerebral precisa.
La corteza cerebral, que contiene entre 20 y 30 mil
millones de neuronas, fue dividida por Brodmann en
47 áreas (Fig. 91-1). La citoarquitectura del córtex no
es homogénea: el neocórtex es, desde un punto de
vista filogenético, la porción cortical más moderna y
se estructura en seis capas, que están bien diferen-
ciadas en ciertas zonas (córtex homotípico) y menos
diferenciadas en otras (córtex heterotípico, propio de
las áreas asociativas). El paleocórtex y el arquicórtex,
no que conforman el sistema límbico y el rinencéfalo, no
CAPÍTULO 91 Patología general de la corteza cerebral

Las lesiones de la corteza motora producen gra-


dos variables de debilidad contralateral (paresia
si es incompleta o plejía si es total) , que puede
ser, según su distribución, facial, faciobraquial ,
hemicorporal o restringida a una extremidad. La
debilidad se acompaña de signos piramidales
(respuesta plantar extensora o signo de Babins-
ki, hiperreflexia y espasticidad) . Algunas lesio-
nes de la cara interna de los lóbulos frontales
(tumores, infartos bilaterales de las arterias cere-
brales anteriores) producen debilidad de ambas
piernas (paraparesia o paraplejía), que pueden
remedar lesiones medulares. En caso de crisis
comiciales, se producen movimientos de mayor
o menor extensión, que ocasionalmente siguen
un patrón secuencial por la activación cortical
del homúnculo , denominado jacksoniano (en
honor de H. Jackson), en el que las sacudidas se
extienden de la mano al antebrazo, brazo, hemi-
tórax y miembro inferior.
Figura Áreas funciona les de Brodmann. El área premotora (6 de Brodmann) está situada
por delante del área motora y es la encargada,
en conjunción con el área motora suplementa-
ria, de ensamblar los programas motores para
poseen una citoarquitectura tan homogénea y tienen generar distintos patrones de movimiento. Sus
relación con la memoria, las emociones y la olfacción. lesiones dan lugar a apraxia motora y a apraxia
En la corteza cerebral existen diversos tipos de neu- de la marcha, con dificultades en el inicio, falta
ronas (piramidales, estrelladas, fusiformes , granula- de movimientos asociados e inestabilidad en los
res ... ), que se organizan en capas y mantienen una giros.
compleja disposición de conexiones (sinapsis) entre El área 8 (oculomotora) coordina los movimien-
sí, con otras áreas corticales y con las restantes partes tos oculares sacádicos horizontales, que hacen
del SNC (ganglios basales, tronco encefálico, cerebelo mirar rápidamente hacia el lado opuesto. La le-
y médula espinal). Existen sinapsis de dendritas con sión del área oculomotora frontal produce des-
los cuerpos neuronales, de axones con dendritas y de viación de la mirada hacia el lado lesionado; lo
colaterales axonales recurrentes , unas directas y otras contrario ocurre en las crisis comiciales.
a través de interneuronas. Estas sinapsis utilizan di- El área 44 (área de Broca), situada en el pie de
versos neurotransmisores como GABA (sinapsis inhi- la tercera circunvolución frontal ascendente , es
bitorias), glutamato (sinapsis excitadoras), acetilcoli- el área motora del lenguaje. Su lesión produce
na, serotonina, dopamina , noradrenalina, opioides y afasia motora, que se describirá en el apartado
cannabinoides endógenos, etc. de los trastornos del lenguaje.

SÍNDROMES LOBARES
Corteza prefrontal
LÓBULO FRONTAL La corteza dorsolateral prefrontal interviene en fun-
ciones cognitivas y su lesión da lugar a déficit en el
Área motora , premotora y oculomotora
razonamiento abstracto, planificación y tareas ejecu-
En el área motora (4 de Brodmann), localizada tivas. La corteza cingular, situada en la parte medial
por delante de la cisura de Rolando , se sitúan de los lóbulos frontales, pertenece al sistema límbico
las motoneuronas superiores, cuyos axones des- e interviene en las emociones y el comportamiento
cienden por la vía piramidal y acaban haciendo social. La corteza orbitofrontal, situada en la porción
sinapsis con las motoneuronas inferiores de los basal de los lóbulos frontales, interviene en la motiva-
núcleos motores del tronco y del asta anterior ción, control de impulsos y en la olfacción; su lesión
medular. La corteza motora es la efectora del mo- da lugar a apatía y, en lesiones extensas y bilaterales,
vimiento voluntario. En ella existe una represen- causa mutismo acinético. Las lesiones prefrontales
tación somatotópica (homúnculo de Penfield) de pueden dar lugar tan1bién a trastornos del control de
las distintas regiones corporales, cada una con esfínteres y, en muchos pacientes se observan reflejos
su particular cuota de extensión, según su capa- regresivos o de liberación (de prensión o grasping, de
771
cidad y precisión motriz. chupeteo, palmomentoniano) .
Semiología y fis iopatología de las enfermedades del sistema nervioso

cuato, que conecta el área de Wernicke con el En la miastenia gravis, enfermedad autoinmune de
de Broca; cursa con dificultad para la repeti- la unión neuromuscular, puede haber disartria que
ción. empeora a lo largo del día o al hablar un rato; algo si-
La desconexión de las áreas auditivas con el área milar puede ocurrir en la arteritis de células gigantes,
de Wernicke da lugar a sordera verbal (no se que determina claudicación isquémica mandibular y
interpreta el lenguaje hablado) y la de las áreas de la lengua en algunos casos. Finalmente, la debili-
visuales a alexia (no se interpreta el lenguaje es- dad muscular de las miopatías (p . ej., polimiositis)
crito). también puede cursar con disartria.
Las afasias transcorticales se producen por le-
siones cercanas que aíslan las áreas primarias
del lenguaje; pueden ser sensitivas, motoras o AMUSIAS
mixtas y se parecen a la afasia de Wernicke, Bro-
El lenguaje musical es un tipo particular del lenguaje,
ca o mixta, pero con la peculiaridad de que la
presente en todas las culturas, que posee un procesa-
repetición está preservada.
do cerebral autónomo. Ritmo , tono , timbre , melodía
La afasia nominal suele presentarse en lesiones y sentimiento musical tienen representaciones dife-
parietotemporales, aunque muchas veces no renciadas en el cerebro. La musicalidad es una de las
tiene una localización precisa y cursa con difi- funciones cerebrales con mayor componente innato
cultad para denominar objetos y personas, por lo y tal cualidad atañe, sobre todo , al hemisferio no do-
que el paciente tiene un lenguaje con neologis- minante, mientras que los aspectos analíticos y los
mos y circunloquios. aprendidos en la educación musical tienen relación
La entonación del lenguaje (prosodia) y sus con el hemisferio dominante.
aspectos emocionales dependen del hemisferio Hay sujetos con amusia congénita que, siendo
no dominante y se perciben y producen respec- incapaces de percibir y producir secuencias rítmi-
tivamente en las áreas homólogas a las de Wer- cas sencillas y melodías muy populares , hablan
nicke y Broca. perfectamente y no tienen ningún tipo de agnosia
auditiva.
Otras personas (1/10.000) están dotadas de oído
DISARTRIA absoluto que les permite reconocer la altura de cual-
Es un trastorno motor de la articulación del lenguaje, quier sonido sin la referencia de ningún otro.
cuya producción central en el área de Broca es nor- También se han descrito casos de sujetos con afa-
mal (mentalmente el disártrico habla bien). Puede sia motora que son capaces de cantar. El sentimiento
producirse por afectación de las neuronas motoras musical es independiente de los otros componentes y
superiores o de sus axones , que a través de los haces puede perderse por lesiones cerebrales focales .
corticobulbares inervan las neuronas motoras inferio-
res de los núcleos del tronco. En este caso suele haber
también incontinencia emocional con risa y llanto APRAXIAS
espasmódicos y disfagia; esta situación se denomina
parálisis pseudobulbary su principal causa son infar- La apraxia se define como la dificultad o incapaci-
tos !acunares bilaterales. dad para realizar un acto motor con propósito, sin
presentar el paciente debilidad, alteración sensitiva,
Otra causa de disartria son las lesiones o la dis-
falta de coordinación y movimientos o posturas anor-
función de los ganglios basales o de sus conexiones,
males. Tales actos se realizan unas veces con objetos
como ocurre en los parkinsonismos y también en
(por ejemplo, cepillado de los dientes) y otras sin
infartos !acunares; en tal situación la disartria suele
ellos (por ejemplo, decir adiós con la mano) . Es por
acompañarse de hipofonía (baja intensidad de fona-
tanto , una pérdida de destrezas motoras adquiridas
ción).
que necesitan de secuencias de movimiento diversas
La afectación del cerebelo y de sus conexiones da y precisas.
lugar a un tipo particular de disartria con separación
Según la disfunción cerebral encargada del alma-
de las sílabas (palabra escandida); la disartria cere-
cenaje, evocación y ensamblaje de los distintos patro-
belosa por intoxicación etílica puede considerarse la
nes motores , se distinguen varios tipos de apraxias.
variedad más frecuente de disartria, pero múltiples
No deben considerarse apraxias los defectos de utili-
enfermedades como la esclerosis múltiple, ataxias he-
zación de objetos derivados de fallos en el reconoci-
reditarias y enfermedades vasculares pueden también
miento de los mismos (agnosias).
causar disartria cerebelosa. La afectación de los nú-
cleos motores de los pares VII, IX, X y XII o de los pro- Apraxia ideatoria: Se produce sobre todo por
pios nervios por enfermedades degenerativas, vascu- disfunción parietal posterior dominante (áreas 5
lares o de otra naturaleza da lugar también a disartria, y 7 de Brodmann) y afecta a ambas partes del
que se asocia a debilidad, atrofia y fasciculaciones de cuerpo. Existe un fallo en la representación
la musculatura correspondiente. mental precisa del acto motor a ejecutar, que se
CAPITULO 91 Patología general de la corteza cerebral

traduce en dificultad o incapacidad para realizar La apraxia de la marcha es debida a lesiones


tanto la pantomima de una determinada acción frontales , sobre todo del área motora suple-
compleja (clavar un clavo, utilizar una llave para mentaria; además de infartos y tumores, una
abrir un candado) como para realizar el mismo de sus causas principales es la hidrocefalia
acto con el objeto, aunque el paciente sepa bien normotensiva, que cursa además con inconti-
para qué sirve. nencia de esfínteres y deterioro cognitivo.
Apraxia ideomotora: Este tipo de apraxia da lu- La apraxia orofacial es una de las variedades
gar a dificultad para realizar gestos simples (sa- más frecuentes de apraxia, en la que el sujeto
ludo militar, despedirse con la mano, realizar la tiene dificultad para soplar, silbar, echar un
señal de la cruz ... ). El enfermo es consciente de beso, lamerse los labios, etc. Se produce por
su fracaso en la selección y combinación de las lesiones operculares frontales.
secuencias de movimiento más elementales. Clá- La apraxia de construcción es un trastorno
sicamente, la apraxia ideomotora se atribuye a derivado generalmente de una disfunción pa-
una desconexión de las regiones parietales don- rietal no dominante, que produce dificultades
de se produce la apraxia ideatoria con las regio- para colocar en el marco espacial adecuado las
nes premotoras frontales. La apraxia ideomotora distintas partes de un objeto; puede objetivarse
lleva siempre implícita una dificultad para la en el dibujo de un objeto tridimensional (dibu-
imitación de gestos. jo de un cubo) (Fig. 91-2).
Apraxia motora (mielocinética): En este caso la La apraxia de la apertura palpebral da lugar
disfunción reside en las áreas premotoras fronta- a retardo o dificultad para abrir los ojos, con
les y se traduce en una falta de fluidez en la eje- ausencia de contracción del orbicular de los
cución de tareas motoras perfectamente aprendi- párpados, fenómeno que sí ocurre en el blefa-
das, de modo que el sujeto pierde sus habilida- roespasmo , una variedad frecuente de distonía
des más reconocidas. Hay problemas tanto para focal.
el inicio como para la terminación. Se explora,
entre otras pruebas, con las alternancias motoras El síndrome de la mano ajena no es propiamente
(palma-borde-puño), y las alternancias gráficas una variedad de apraxia: una extremidad, general-
de Luria (Fig. 91-2). mente la superior, realiza movimientos sin control (la
Otras variedades de apraxia: mano se mete en el bolsillo, se coloca detrás de la
cabeza, desabrocha la camisa ... ), aunque el enfermo
La apraxia del vestirse produce dificultades es consciente de ello pero no puede dominarla. Se
en la selección y modo de ponerse las distintas produce en lesiones frontales, parietales y también
prendas y suele ser consecuencia de lesiones del cuerpo calloso; en este último caso pueden obser-
del hemisferio no dominante. varse conflictos intermanuales.

AGNOSIAS
La agnosia puede definirse como un fallo en el re-
conocimiento que no puede ser atribuido a defecto
sensorial elemental, déficit de atención, deterioro
mental, dificultad para denominar o expresarse y
falta de familiaridad con el estímulo presentado.
Tal como se ha descrito en los síndromes lobares,
hay distintas variedades de agnosia, según el tipo
12 de estímulo sensorial o sensitivo (agnosias visua-
les, auditivas, sensitivas ... ). Ya se han comentado
anteriormente la agnosia visual del síndrome de
'-J 3 Anton, la sordera verbal pura, la asomatognosia, la
asimultagnosia, la anosognosia y la asteorognosia.
Podemos completar esta lista añadiendo dos tipos
particulares de agnosia: una de carácter auditivo,
6
la agnosia auditiva, en la que el sujeto conserva la
capacidad de escuchar los sonidos, pero por afecta-
Fi gura Algunas pruebas de la exploración ción de las áreas secundarias auditivas ha perdido
neuropsicológica básica. Dibujo del cubo (apraxia la capacidad de reconocerlos; la segunda de carácter
constructiva). Alternancias gráficas y motoras de Luria visual , la prosopagnosia que, por afectación tempo-
(apraxia mielocinética). Test del dibujo del reloj (criba- ral no dominante, da lugar a incapacidad para reco-
775
do de deterioro cognitivo). nocer los rostros familiares.
SECCIÓN Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA tivo en al menos dos funciones superiores (memoria,


razonamiento abstracto, funciones visuoespaciales,
lenguaje, praxias) con repercusiones sobre la vida
Las funciones intelectuales y cognitivas son impres- personal, familiar, social o profesional.
cindibles para poder realizar una vida normal y satis- Los pacientes con demencia suelen conservar un
factoria en el plano personal, familiar, profesional y estado de alerta y conciencia normal durante bastante
social. Cuando un individuo con desarrollo cognitivo tiempo de su evolución. Esto no ocurre en delirium o
síndrome confusional, en el que predominan los tras-
tornos de la atención y del nivel de conciencia.
Las demencias se han clasificado, según su etiolo-
gía, en tratables y no tratables (reversibles e irre-
versibles) . También por su semiología clínica se
han separado las demencias corticales de las
subcorticales. En las demencias degenera-
tivas, uno de los mecanismos patogéni-
cos implicados es el procesado anormal
de proteínas, que se depositan en for-
mas insolubles en el cerebro y consti-
tuyen marcadores patológicos de cada
una de ellas; en base a esto se habla de
amiloidopatía-taupatía en la enferme-
dad de Alzheimer (EA), sinucleopatía
en la enfermedad de Parkinson y en la
demencia por cuerpos de Lewy difusos,
taupatía en muchos casos de demencia
frontotemporal y prionopatía en la enfer-
medad de Creutzfeldt-Jakob.
La enfermedad de Alzheimer (EA) es la de-
mencia degenerativa más frecuente y constituye
uno de los principales problemas de salud pública en
el mundo desarrollado, ya que su incidencia aumenta
casi exponencialmente a partir de los 65 años . El de-
previo normal presenta una alteración objetiva en terioro de memoria a corto plazo es su manifestación
una o más funciones cognitivas, que no repercute en inicial más frecuente . Tal como ocurre en la mayoría
su situación vital, hablamos de deterioro cognitivo li- de las demencias, más tardíamente aparecerán tras-
gero. La demencia se caracteriza por deterioro cogni- tornos emocionales y de conducta que son los que

Tabla Principales causas de demencia


Demencia degenerativa primaria Demencia vascular Demencia secundaria
Enfermedad de Alzheimer Infarto cortical extenso Neoplasia
Demencia frontotemporal Infartos múltiples Infección crónica: VIH , lúes,
criptococosis
Demencia con cuerpos de Lewy Infarto estratégico
difusos Hematoma subdural
Encefalopatía de Binswanger
Enfermedad de Huntington Hidrocefalia normotensiva
CADASIL*
Parálisis supranuclear progresiva Hipotiroidismo
Angiopatía amiloide
Atrofia multisistémica Déficit de B,2
Vasculitis
Leucodistrofias Alcoholismo
Hemorragia
Traumatismo craneoencefálico
Enf. de Creutzfeldt-Jakob
• CADASIL: angiopatía subcortical con infartos y leucoaraiosis de herencia autosómica dominante.
776
CAPÍTULO 91 Patología general de la corteza cerebral

Tabla Test del MMSE (Mini Mental State Examination) de Folstein


Función que valora Tipo de prueba Puntuación
Orientación temporal Decir: año, estación. fecha, día, mes. o, 1, 2, 3. 4,5

Orientación espacial Decir: ciudad. provincia, país, hospital, planta. O. 1.2. 3,4. 5
Memoria de fijación Repetir 3 palabras /caballo, peseta. manzana) 3 veces º· 1, 2. 3
Atención y cálculo Restar de 100 hacia atrás de 7 en 7 (cinco veces) o. 1.2,3,4,5
Memoria de evocación Recordar las 3 palabras anteriores o. 1.2, 3
Lenguaje: denominación Mosirar lápiz y reloj y que los nombre o. 1. 2
Lenguaje: repetición «Ni sí ni no ni peros,, o. 1
Lenguaje: comprensión Órdenes: "tome el papel con su mano derecha; dóblelo o. 1,2,3
por la mitad y deposítelo en el suelo»

Lectura de orden escrita y cumplirla «Cierre los ojos»


º· 1
Escritura de frase o, i

Copiar un dibujo Pentágonos entrelazados o, 1


lnterpretacición: Puntuación máxírno 30. Deterioro cognitivo en personas escolarizadas si es< 24.

más preocupan y nbmm u] mmlio familiar. En los cs- Tabla Dl-3. Turnbi(,n es dn fácil aplicación el test
ladius finales. nl pacinnlo con drnncnciu prnsonla un d¡,J roloj (dibujar un rnloj con todos los números
estado do mutismo y acinosia con desc:onnxión r:así y lm, nrnrrncillus pnrn q11tJ marqrrn las JO horas y
total do su modio. al qut, so nsoc:inn dificultades para 10 rninulos) (Fig. 01-2).
la deglución: la rwumlmía por aspirac:i(111 (?S una de Valorar lus rn¡mn:usiones del deleríom c:ognítivo
lm: cau:,;as frecuentes de muortn. /entnwístn _,· 1:ue8/io11urios).
Ln demencia de origen vasculm· es ln sBgunda cm1-
Henlízor un estudio etiológico, que incluiní una
su dn demern:ia trns In Er'\: ambas cnm¡rnrtnn factorns
analítica gonr,ral (f'unci6n tiroidea. valoros só-
do riesgo ves habitual encontraron nuc:ropsias lusíu-
ric:os do vitwninn 13,., v ácido fólico, y pruebas
nos de las dos mitídaclos. En lo Tohlo fn-2 se dolulln
smolcígicas para la lúes) v un ostudio de rrnu-
uuu cír1sífícución eliopU.!;li11in1 lle lus 1l1!I11C!nr·ic1s.
roimagun. prnforiblenwnte un estudio do mso-
Parn Ri díagnóslir:o df1 un síndronrn dn demencia
nancin magnética (RM) cumbral o. lm su dnfocto,
deben scguirsR varios pasos:
dr, tomografía axial com pu larizada (T,-'\C). El
Asegumr con lo explomr:ió11 clínica y 11/!Ul'Opsi- examen del líquido cefalorraquídeo v ,,1 elec-
r:ológh:o quu el pw:ienle presenlo cletr:,rioro r:oµ- troencefalograma sp reservan para casos selec-
nitivo y en c¡uú donúnios; el test más senr:il]o y cionados. mientras qw" la biopsia cnrnbral es Llll
univRrsalmente empleado corno cribado de dP- procrnlimíenlo excepcional y restringido a casos
lnrinro cognitivo es el lvfini-Mt!n/o/-Stote-Exwni- puntuales dn díagnrí<-:lico inc:inrto y con posibili-
nolíon (MMSE) rh: Folsloin. quo so detalla en la dadns terapéuticas.

777
-192
Patología general del estado
de consciencia. Sueño.
Epilepsia. Coma
Manuel Noya García, Manuel Arias Gómez, Francisco Javier López González

EL SUEÑO Y SUS ALTERACIONES


FUNDAMENTOS FISIOLÓGICOS
Los seres humanos pasan durmiendo una tercera
parte de su vida. La alternancia entre la vigilia (estar
despiertos) y el sueño (inconsciencia fisiológica re-
versible) depende de una función encefálica deno-
minada ritmo circadiano, que está presente en diver-
sas especies animales (mamíferos, aves y reptiles).
El núcleo supraquiasmático , perteneciente al hipo-
tálamo anterior, es el generador del ritmo circadia-
no, que, además de coordinar otros centros que in-
tervienen en la alternancia sueño-vigilia, regula im-
portantes funciones homeostáticas (secreción hor-
monal, temperatura, presión arterial). Las alteracio-
nes del sueño, presentes entre el 10 % y el 15 % de
la población, se asocian a un incremento del riesgo
de patologías como hipertensión, ictus y enferme-
dad coronaria.
La técnica principal de estudio en los trastornos
del sueño continúa siendo la polisomnografía, que
consiste en un registro continuo y simultáneo del
electroencefalograma (EEG) , electromiograma, mo-
vimientos oculares, respiración, ritmo cardiaco, pre-
sión arterial y pulsioximetría (Fig. 92-1).
El sueño normal tiene dos fases. La primera, deno-
minada sueño no-REM (rapid eye movements), consta
de tres estadios de profundidad creciente, caracteri-
zados por ondas lentas de alto voltaje en el EEG. La
segunda, o sueño REM, se acompaña de movimien-
tos rápidos de los ojos e hipotonía en el resto de los
músculos; en el estudio de EEG se observan ondas de
alta frecuencia y bajo voltaje, indicativas de intensa
actividad neuronal.
El polisomnograma normal muestra una arquitec-
778
tura del sueño estructurada en 4 a 6 ciclos de sueño
CAPÍTULO 92 Patología general del estado de consciencia. Sueño. Epilepsia. Coma

El ciro ncera1oi,ama
E ec!Joencera10¡,ama

.,...."""'"'-"''".,...._~,v....-w'-v-~......,,.\,/""v~...._~ Ojo izquierdo

Y . . , - ~ • ~ , ; v , . , - v J . , . , . . . _ J V - Ñ ' . , - r - OJO d lt(hO


E eclromiograma m ruin

,...._._....,..., .,.......,•..,.1►
...,~• i.:J....... El e ~ard1ograrn:1
/'
./\/.., Flujo aéreo

Mov,m1en:ostor cocos

V
.,__ _ _ _ _~__,,,,_,.,__.,.....,__,,""· ._,_,,_,,,,_,_ _,-.;, ..,.......,_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ Sonido
f\ N
ov,mientosabdomn es

Sa 1ac1óne1e 02
,.,'lll•<tt••••••••99tttt'l'ltttt-, ., .. • • • • • • • • ' t f l l • " J ' J , , f f 9 ' J l " J 9 •
,;,:~····•''''' , , • • • • • • • • ,...... • • • • • • ,:,,:!: ....... , , , . ... , .

E clromiograma p rna izd

Figura Estudio polisomnográfico en el que se registran en diversos canales, electroencefalograma, movi-


mientos oculares, electrom iograma, movimientos respiratorios, electrocardiograma y saturación de oxígeno.

no-REM, entre los que se intercalan, a intervalos de mover la vigilia (Fig. 92-2). Neuronas colinérgicas de
60 a 90 minutos, periodos de sueño REM, que du- núcleos del tegmento pontino facilitan la entrada en
ran de 10 a 20 minutos y suponen un 20 % de la sueño REM.
cantidad de sueño total. Durante el sueño no-REM
disminuye la frecuencia cardiaca y respiratoria , la
temperatura corporal y el consumo de oxígeno. En CLASIFICACIÓN DE LOS TRASTORNOS
cambio, durante el sueño REM tienen lugar la ma-
yoría de los ensueños y además se activa el sistema DEL SUEÑO
nervioso autónomo (fluctúan la frecuencia cardiaca Insomnio
y la presión arterial) , se producen erecciones y varía
el ritmo de secreción de diversas hormonas (antidiu- El término hace alusión a una disminución en la
rética, de crecimiento , prolactina, gonadotrofinas, duración, profundidad o capacidad restaurativa del
corticotropa y cortisol). sueño, que puede ser idiopática o secundaria a ansie-
dad, depresión, dolor, parestesias nocturnas , abuso
El estado de vigilia es mantenido por el sistema
de cafeína, fármacos (anfetaminas, broncodilatado-
reticular activador ascendente (SRAA), un entrama-
res) , y supresión de alcohol, sedantes e hipnóticos;
do de núcleos y conexiones situados en el tegmento
en raras ocasiones se debe a enfermedades orgánicas
protuberancial y mesencefálico, que se proyectan
de los centros del sueño, algunas de ellas de carácter
sobre los núcleos reticulares talámicos, que, a su
familiar como el insomnio familiar fatal, enfermedad
vez, activan la corteza cerebral de manera difusa. La
hereditaria producida por ciertas mutaciones en el
alternancia entre vigilia y sueño está regulada por
gen de la proteína priónica.
un mecanismo de «flip -flop », que facilita una tran-
sición suave de uno a otro estado. La activación del
núcleo preóptico ventrolateral hipotalámico (VLPO)
Trastorno del sueño relacionado con problemas
disminuye la producción de monoaminas por parte
respiratorios
de ciertos núcleos del tronco (Jocus coeruleus, nú-
cleo tuberomamilar, núcleos del rafe) y facilita el De todos ellos, el más importante es el síndrome de
sueño; al aumentar paulatinamente la actividad de apnea del sueño (SAS}, que se caracteriza por apneas
tales núcleos monoaminérgicos se inhibirá el VLPO (ceses repetidos del flujo aéreo en las vías respira-
y se producirá la vigilia; la hipocretina (también de- torias durante periodos superiores a 10 segundos),
nominada orexina) actúa como contrapeso al inducir que se producen durante el sueño. Un registro poli-
779
la actividad monoaminérgica en el sueño para pro- somnográfico de 30 o más apneas durante 6 horas de
Semiología y fi siopatología de las enfermedades del sistema nervioso

1 Orexina 1

N. preóptico
ven trola lera 1 Vigilia

1 N. monoaminérgicos 1

1 N. monoaminérgicos 1

N.preóptico
Sueño
ventrolateral

Figura Meca ni smo de «flip-flop »: en vigi lia pesa más la actividad monoaminérgica que mantiene inhi bi-
do al núcleo preóptico ventro lateral (VPLO); lo contrar io oc urre durante el sueño; la orexi na actúa como contra-
peso, aunque no tiene acció n directa sobre el núcleo VP LO hipotalámico.

sueño es su principal criterio diagnóstico. Las apneas ducidos generalmente por emociones fuertes o estí-
originan hipoxia y numerosos despertares, y de ahí mulos súbitos y sorpresivos), parálisis del inicio del
la somnolencia diurna. También aumentan el riesgo sueño o del despertar (pérdida transitoria del tono
de arritmias cardiacas y se asocian a hipertensión muscular con incapacidad para moverse, que se da
y cardiopatía. Se distingue un SAS de tipo central, en los periodos intermedios entre el sueño y la vigi-
causado por disfunción del centro respiratorio y/o lia), y alucinaciones hipnagógicas e hipnopómpicas
sus conexiones; uno tipo obstructivo, en el cual hay (alucinaciones visuales o auditivas, respectivamente,
obstrucciones transitorias de las vías respiratorias al- al inicio y al final del sueño). Este síndrome es de-
tas mientras persiste la actividad rítmica del centro bido a entrada súbita en sueño REM con hipotonía
respiratorio y los movimientos ineficaces de los mús- muscular parcial o completa y se produce por pérdi-
culos respiratorios; y uno de tipo mixto. Los pacien- da de células hipotalámicas productoras de hipocre-
tes con SAS suelen ser muy roncadores. Hiperplasia tina. En los humanos la principal etiología es un pro-
de adenoides y amígdalas, macroglosia, mixedema, ceso autoinmune, aunque también han sido descritas
micrognatia y obesidad (síndrome de Pickwick con formas parciales en enfermedades como la esclerosis
hipoventilación alveolar) producen SAS de tipo obs- múltiple.
tructivo. La malformación de Arnold-Chiari, la luxa- El exceso de sueño, que incluye la somnolencia
ción atlantoaxoidea y el síndrome de Prader-Willi son durante las horas del día y el quedar dormido en si-
causa de SAS de tipo mixto. tuaciones inapropiadas, puede ser manifestación de
enfermedades cerebrales, especialmente lesiones del
Hipersomnias de origen central no debidas a alteración hipotálamo y el mesencéfalo (tumores, infartos, trau-
matismos, encefalitis letárgica, tripanosomiasis), o de
del ritmo circadiano ni relacionadas con trastornos
alteraciones funcionales (abuso crónico de alcohol,
respiratorios
sedantes, agonistas dopaminérgicos utilizados en la
El síndrome de Gelineau, en su forma completa, está enfermedad de Parkinson, hipotiroidismo).
constituido por la combinación de narcolepsia (ata- El síndrome de Kleine-Levin, una hipersomnia
ques breves de sueño irresistible durante el día, o periódica, se presenta en varones adolescentes y se
somnolencia excesiva y persistente), cataplejía (epi- asocia a trastornos de conducta, con hipersexualidad
780
sodios de pérdida de tono muscular con caídas, in- y bulimia.
CAPITULO 92 Patología general del estado de consciencia. Sueño. Epilepsia. Coma

Trastornos del ritmo circadiano la dopamina a su transportador y a sus receptores.


El ritmo circadiano sueño-vigilia se altera en perso- Otros trastornos de este grupo son los calambres, el
nas que modifican sus horarios (por trabajos en tur- bruxismo y los movimientos periódicos de las pier-
nos rotatorios, deseo voluntario, desempleo , enferme- nas durante el sueño.
dad o viajes aéreos intercontinentales). Algunas per-
sonas tienen ritmos biológicos menores de 24 horas
y sienten la necesidad de acostarse más temprano y EPILEPSIA
despiertan antes de lo que es normal para la mayoría
(«patrón alondra», o síndrome de fase de sueño ade-
lantada}, mientras que otras tienen ciclos más largos
CONCEPTO DE CRISIS EPILÉPTICA
que los normales, por lo que se retirarán más tarde Y DE EPILEPSIA
y dormirán también hasta más tarde («patrón búho», Una crisis epiléptica es la manifestación clínica de
o síndrome de fase de sueño retrasada); la imposi- una descarga hipersincrónica anormal y excesiva de
ción de horarios convencionales conducirá a pertur- una población de neuronas corticales. La enfermedad
baciones. Este grupo de trastornos puede producir epiléptica y los síndromes epilépticos se caracterizan
una combinación de fatiga , somnolencia, insomnio y por la repetición espontánea de crisis epilépticas,
reducción en la capacidad de atención y vigilancia, que no se deben a una agresión aguda del sistema
con su secuela de toma de decisiones erróneas y acci- nervioso.
dentes. Algunos de estos trastornos tienen un origen
genético y se producen por mutaciones en los genes
de las proteínas que intervienen en el control del rit-
mo circadiano. FISIOPATOLOGÍA
En la génesis de las crisis epilépticas son necesarios
Parasomnias dos mecanismos íntimamente relacionados: primero,
la descarga cerebral excesiva e hipersincrónica de un
Son alteraciones de la función del sistema nervioso gmpo de neuronas, después, la propagación de dicha
asociadas a ciertos periodos del sueño o al despertar. descarga por circuitos neuronales a estructuras más
El sonambulismo, los automatismos del sueño, los o menos distantes del foco epileptógeno. La epilep-
terrores nocturnos, las pesadillas, las mioclonías de togénesis es el mecanismo por el que las neuronas
inicio del sueño y los paroxismos sensoriales son las desarrollan la tendencia a provocar crisis. El estado
parasomnias más frecuentes. hiperexcitable de las neuronas epileptógenas puede
El trastorno de conducta durante el sueño REM ser consecuencia del aumento de la neurotransmisión
(REM behavior disorder [RBD]) se caracteriza por sináptica excitadora (mediada por el glutamato), de
movimientos violentos de las extremidades, verba- la disminución de la neurotransmisión inhibidora
lizaciones, agitación , agresiones o caídas , por libera- mediada por el ácido ga.mma-amino-butírico (GABA).
ción de actividades estereotipadas durante el sueño de una alteración de los canales iónicos controlados
REM, en lugar de la pérdida normal del tono mus- por voltaje (Na+, Ca 2+ y K+) o de una alteración de las
cular. concentraciones iónicas intracelulares o extra.celula-
Las enfermedades producidas por depósito de res que favorecen la despolarización de la membrana
a-sinucleína (Parkinson, atrofia multisistémica, en- celular.
fermedad por cuerpos de Lewy difusos) son su causa La descarga neuronal en el foco epileptógeno va
principal y, con cierta frecuencia, el RBD antecede a aunientando progresivamente en amplitud y frecuen-
otras manifestaciones clínicas. cia. Al exceder cierto punto de intensidad, se sobre-
pasa la influencia inhibitoria de las neuronas vecinas
y la descarga se extiende a otras regiones corticales
Alteraciones del sueño relacionadas y subcorticales relacionadas, por conexiones sináp-
con trastornos del movimiento ticas corticosubcorticales. La excitación puede dise-
El síndrome de piernas inquietas afecta a más del minarse a la corteza cerebral contralateral (por vías
2 % de la población. Los pacientes presentan al acos- interhemisféricas) y a los núcleos subcorticales (gan-
tarse o reposar unas sensaciones desagradables (pin- glios basales, tálamo y núcleos reticulares del tronco
chazos, parestesias, frialdad , calor ... ) en las piernas , cerebral).
que les obligan a moverlas o incluso levantarse y El cese de la crisis puede ser por agotamiento de las
caminar, lo que impide o retrasa el sueño. Este sín- neuronas del foco epileptógeno, pero también puede
drome, que puede ser idiopático (historia familiar) intervenir un mecanismo activo de inhibición.
o secundario a fármacos y a diversas enfermedades, La descarga sincrónica repetida de las neuronas
se asocia a menudo a niveles bajos de ferritina y se epileptógenas las hace más susceptibles a nuevas
atribuye a un trastorno del almacenaje de hierro en descargas en el futuro , un fenómeno conocido como
781
los ganglios basales , que dificultaría la unión de kindling (efecto de «encendido»).
SEC ó Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

CLASIFICACIÓN DE LAS CRISIS EPILÉPTICAS


Clasificación etiológica Tabla Etiología probable
Podemos clasificar las epilepsias y síndromes epi- de la epilepsia en función de la edad
lépticos en tres grupos:
Edad
Idiopáticas o criptogénicos: no hay ningún pro- Etiología
(años)
ceso subyacente, salvo la generación de las crisis
por parte de la corteza cerebral. 25-40 Trauma
Sintomáticas: existe una patología responsable Tumores primarios del SNC
de la aparición de las crisis. Etilismo crónico
Drogas de abuso
La etiología de la epilepsia varía en relación a la
Epilepsia secundaria a daño
edad del paciente. Así, en la infancia predominan cerebral temprano
los casos idiopáticos (una gran parte con un patrón Malformaciones vasculares
de herencia reconocido). La patología originada en el
Infecciones del SNC
periodo prenatal y perinatal va a ser más relevante en
las epilepsias de inicio infantil que en las epilepsias 41-60 Tumores primarios del SNC
de inicio en la edad adulta. En el adulto joven (menor Etilismo crónico
de 40 años), los traumatismos craneoencefálicos su- Trauma
ponen la primera causa de crisis epilépticas, pasando Enfermedad cerebrovascular,
a ser los tumores del sistema nervioso central la causa incluida la vasculitis
fundamental entre los 40-60 años. Finalmente, en el
> 60 Enfermedad cerebrovascular
paciente mayor de 60 años es la patología cerebrovas- isquémica
cular la primera causa responsable de crisis epilépti-
Tumores cerebrales primarios
cas (Tabla 92-1) .
Tumores metastásicos

Clasificación clínico-fisiopatológica
Se distinguen dos tipos básicos de crisis:
Parciales, que se caracterizan por su inicio en
una parte concreta de la corteza cerebral; sus las corrientes de calcio tipo Ten las neuronas talámi-
manifestaciones clínicas resultan muy diversas cas, mediante un mecanismo GABAérgico).
y básicamente se dividen en simples, cuando la
conciencia está preservada, y complejas, cuan-
do la conciencia se afecta en mayor o menor
SEMIOLOGÍA CLÍNICA DE LAS CRISIS
grado; ambas pueden evolucionar secundaria- EPILÉPTICAS
mente a una crisis epiléptica generalizada (Ta- Las manifestaciones clínicas, relatadas por el propio
bla 92-2). paciente o por algún testigo de la crisis, u observada
Generalizadas, que comienzan de forma simul- directamente durante la monitorización con vídeo-
tánea en ambos hemisferios cerebrales.; las más EEG, se comentan a continuación:
frecuentes son las crisis de ausencias, las mio-
clónicas y las tonicoclónicas (Tabla 92-3 ).
Auras
En las crisis epilépticas parciales, donde se impli- Consisten en sensaciones anormales de naturaleza
ca a una región localizada o a un grupo celular de epiléptica que no producen manifestaciones objeti-
un área específica, el mecanismo se inicia con la des- vas. Son breves y pueden ocurrir de forma aislada o
polarización prolongada producida por un cambio precediendo a otro tipo de crisis. Las auras pueden
en la conductancia del calcio que da como resultado ser:
descargas de potenciales de acción múltiples depen-
dientes del sodio. Esta despolarización paroxística Sensitivas, que consisten en parestesias con una
es el correlato intracelular de las puntas interictales, distribución somatotópica específica, general-
que es la característica de los registros de EEG en los mente en la parte distal de las extremidades y
pacientes con epilepsia. alrededor de la boca.
En las epilepsias generalizadas primarias, la causa Visuales, que son ilusiones o alucinaciones vi-
puede ser una alteración en los ritmos oscilatorios suales simples.
normales que caracterizan a los circuitos de las neu- Auditivas, que consisten en ilusiones o alucina-
ronas piramidales neocorticales y a las neuronas del ciones auditivas, que pueden estar localizadas en
782
núcleo reticular del tálamo (controla la actividad de el espacio o no.
CAPÍTULO 92 Patología general del estado de consciencia . Sueño. Epilepsia. Coma

Tabla Clasificación de las crisis parciales

Tipos de crisis Patrón EEG crítico

Parcial simple Con signos motores Descarga


(preservación Motoras focales sin evolución jacksoniana contralateral focal
del nivel de Motoras focales con evolución jacksoniana (no siempre se
conciencia) ven en el EEG de
Versivas
superficie)
Posturales
Fonatorias (vocalizaciones o bloqueo del lenguaje)
Con síntomas sensoriales
Somatosensitivas
Visuales
Auditivas
Olfatorias
Gustativas
Vertiginosas
Con síntomas autonómicos
(Sensación epigástrica ascendente, palidez, sudoración,
enrojecimiento, piloerección .. )
Con síntomas psíquicos
Disfásicas
Dismnésicas (deja-vu, jamais-vu)
Cognitivas (estados on íricos, distorsiones de la percepción
temporal)
Afectivas (miedo, ira)
Ilusiones (macropsia)
Alucinaciones estructuradas (música, escenas vividas)
Parcial Parcial simple seguida de afectación de consciencia Descarga unilateral
compleja Sin automatismos o bilateral difusa o
(con afectación Con automatismos focal en regiones
del nivel de temporales o
conciencia) Con afectación inicial del nivel de consciencia frontotemporales
Sin automatismos
Con automatismos
Parcial que Parcial simple que evoluciona a generalizada Descarga focal
evoluciona a unilateral o bilateral
generalizada Parcial compleja que evoluciona a generalizada que evoluciona
Parcial simple que evoluciona a parcial compleja y después a a descarga
generalizada generalizada

Olfatorias, en las que se p er cibe u n olor inexi s- sen sación d e miedo o «déja vu » («y a vi v ido») o
tente, en gen eral d e carácter desagradable. «jamais vu » («jamás v i v ido»).
Gustativas, en las que el paciente n ota un sabor A bdominales, que consist en en una sensaci ón
anormal, generalmente d esagrad able. epigástrica anor mal, en gen eral d esagradable, que
A utonómicas, caracter izadas por sensaciones suele subir hacia el pecho o hacia la garganta.
que su gi eren acti v ación d el sis tema n ervioso au-
tón om o (palpitaciones , sensación d e escalofríos,
etc.).
Crisis dialécticas
Psíquicas, que son sensaciones compl ejas que se La princip al m ani festación es l a alteraci ón de la cons-
783
acom pañan d e una viven ci a d eterminada, como ci en ci a, definid a como l a dism i nuci ón total o p arci al
Semiología y físiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Tabla Escala de Glasgow del coma


Apertura de los ojos Mejor respuesta motora Respuesta verbal

4. Espontánea 6. Obedece órdenes 5. Orientado


3. A las órdenes 5. Localiza dolor 4. Desorientado pero conversa
2. Al dolor 4. Respuesta en flexión 3. Sólo emite palabras

1. Sin respuesta 3. Flexión anormal (decorticación) 2. Sólo emite sonidos incomprensibles


2. Respuesta en extensión (descerebración) 1. Sin respuesta
1. Sin respuesta
Interpretación: coma profundo, puntuación mínima 3 puntos; paciente consciente y orientado 15 puntos.

respiratorias, pares craneales y el ciclo vigilia-sueño Síndrome de cautiverio


sueleu estar conservados. Habitualmente el estado Se produce una desconexión del sistema motor por
vegetativo persistente está causado por lesiones ta- lesiones bilaterales ele la parte anterior ele la protu-
lámicas o por daño subcortical o cortical difuso (hi- berancia, por lo que el SRAA y los núcleos del III par
poxia. isquemia. traumatismo craneoencefálico). pero están preservados. El paciente está consciente, pero
con preservación del SRAA. cuadripléjico y anártrico: puede comunicar su capa-
cidad de comprender mediante el parpadeo o con mo-
Estado de mínima consciencia vimientos verticales de los ojos. No es propiamente
una alteración de la conscioncia, sino un diagnóstico
Es difícil de distinguir del anterior, pero cm esle caso
diferencial de situaciones como el estado vegetativo
el paciente puede mantener cierto contacto con su en-
o el coma.
torno y responder ante estímulos emocionales o ante
preguntas sencillas. En los estudios de neuroimagen
funcional se encuentran áreas corticales con función ETí Ci"
LlÜ
preservad a.
Siguiendo a Plum y Posner, distinguimos dos tipos do
Estado confusional coma, los producidos por procesos es/ructurales y los
difusos y metabólicos (Tabla 92-5).
El paciente tiene disminución de la atención, por lo
que no se concontra y so distrae con facilidad: su me- Lesiones estructurales supratentoriales: estas
moria ns1éí alterada y muestra algún grado de deso- patologías generan un aumento de la presión in-
rientación nn espacio y tiempo. Este estado clínico tracraneal provocando la compresión del tron-
suole ser fluctuante. Además. en algunos estados con- co del encéfalo contra el tontorio (herniación),
fusionales, el paciente muestra excitación. agitación lesionando así ol SR.AA. También se afecta este
psicomotora, hiperactividad del sistema nervioso au- directamente e➔ n las lesiones profundas bilatera-
tónomo (sudoración. taquicardia), temblores y aluci- les a nivel talámico.
naciones. El término delirium es sinónimo de síndro- Lesiones estructurales infratentoriales: lesio-
me confusional agudo, aunque se emplea más para nan directamente el SRAA por compresión di-
denominar las situaciones de síndrome confusional recta, son de evolución rápida y suelen acom-
agudo con agitación. pafi.arse ele signos de afectación del tronco (vías
largas y/o pares craneales).
Procesos metabólicos o difnsos: que consti-
Mutismo acinético o coma vigil tuyen el 70 '¾, de➔ los casos de coma: se afr-,cta
El paciente permanece inmóvil, con apariencia exter- de forma difusa la corteza cerebral y el SRAA.
na de estar alerta, y puede seguir objetos con la mi- Gcmmalmente son de instauración progresiva y
rada. pero no habla, no se mueve espontáneamente no hay signos neurológicos de localización (con
ni responde a ostímu los exte➔ rnos. Se observa en las excepciones), pero pueden encontrarse signos
lesiones próximas al torcer ventrículo. en lesiones meníngeos y manifestaciones extraneurológicas
frontales bilateralos o en el dafio cembral difuso se- correspondientes a la enfermedad causal p. ej ..
786
cundario a hipoxia o parada cardiaca (estado apálico). ascitis en la insuficiencia hepática.
CAPITULO 92 Patología general del estado de consciencia. Sueño. Epilepsia. Coma

Ta bl a Pri ncipales causas de co ma


Lesiones localizadas Lesiones difusas
Lesiones supratentoriales Hipoxia, isquemia
Hematoma epidural o subdural Hemorragia subaracnoidea, hemorragia intraventricular
Hipertensión intracraneal Hipoglucemia
Infarto cerebral Alt. hidroelectrolíticas y del equilibrio ácido-base
Trombosis de senos venosos Déficit vitamínico
Neoplasias y abscesos Enfermedades renales, hepáticas, pulmonares,
Empiema subdural endocrinas, sistémicas
Apoplejía hipofisaria Drogas, fármacos, tóxicos
Infecciones: meningitis, encefalitis, sepsis, priones,
Lesiones infratentoriales Leucoencefalopatía multifocal progresiva
Hematoma epidural o subdural Crisis comicial, estado postcrítico
Hipertensión intracraneal Otras: adrenoleucodistrofias, gliomatosis cerebri,
Infarto vertebrobasilar Marchiafava-Bignami
Migraña basilar
Neoplasias y abscesos
Enfermedades desmielinizantes: esclerosis
múltiple, mielinólisis central pontina,
encefalomielitis aguda diseminada

MUERTE CEREBRAL Hallazgos neurológicos que deben concurrir durante


30 minutos, pasadas al menos 6 horas desde
Desde un punto de vista biológico, la muerte se defi- el comienzo de la agresión que dio lugar al coma:
ne por su contrario, es decir, por «ausencia de signos
de vida ». La muerte del individuo sólo viene determi- Coma de etiología conocida y de carácter irre-
nada por el cese irreversible de su actividad cerebral; versible. Debe haber evidencia clínica o por
esta puede ser debida a una parada cardiorrespirato- neuroimagen de lesión en el SNC compatible
ria o a una agresión directa del cerebro. En este últi- con la situación de muerte encefálica.
mo caso, el cese de la actividad encefálica conlleva el Apnea persistente tras una prueba de desco-
paro cardiorrespiratorio. El estado de muerte cerebral nexión de 10 minutos del aparato de ventilación
indica lesión cerebral grave que va a condicionar una artificial.
parada cardiorrespiratoria a corto plazo. El diagnós-
Pupilas intermedias con ausencia del reflejo
tico precoz de muerte cerebral ha cobrado una gran
fotomotor y de los otros reflejos del tronco
importancia debido a los trasplantes de órganos. Para cerebral (oculocefálico, oculovestibular, cor-
el diagnóstico de muerte encefálica se siguen habi-
neal, ciliospinal y tusígeno). Ausencia de res-
tualmente unos criterios, que se resumen en los apar- puesta cardiaca a la inyección i.v. de 2 mg de
tados siguientes.
atropina.

Requisitos previos que excluyen


la posibilidad de sentar un diagnóstico Criterios adicionales
de muerte cerebral: Trazado isoeléctrico en el EEG registrado al me-
Pacientes en coma de origen desconocido, o de nos durante 30 minutos.
origen tóxico o medicamentoso. Ausencia de circulación cerebral, comproba-
Hipotermia o shock previos al coma. da mediante angiografía convencional o eco-
Niños menores de 2 años. doppler transcraneal.

787
-193
Patología general de los nervios
craneales y del tronco del encéfalo
Manuel Noya García, Julio Pardo Fernández

FUNDAMENTOS
El tronco del encéfalo está constituido por el cere-
bro medio, cuya parte anterior son los pedúnculos
cerebrales, la protuberancia (o puente) y el bulbo
raquídeo; embriológicamente, el primero deriva del
mesencéfalo, y los dos últimos (con el cerebelo), del
rombencéfalo. Por el tronco del encéfalo pasan nume-
rosas fibras mielinizadas ascendentes y descendentes
que unen diferentes partes del cerebro y la médula
espinal.
En el mesencéfalo existen núcleos, como la sus-
tancia negra y el núcleo rojo, relacionados con el sis-
tema motor extrapiramidal. Otro núcleo del bulbo,
la oliva (o núcleo olivar inferior), se conecta con el
cerebelo y participa en la coordinación del movi-
miento .
Los núcleos de los cuerpos geniculados del mes -
encéfalo forman parte de las vías visual y auditiva, y
los núcleos grácil y cuneado del bulbo son estaciones
intermedias en la vías sensitivas somáticas.
A lo largo del tronco del encéfalo se sitúan los nú-
cleos de los pares craneales; al igual que en la médula
espinal, los núcleos motores tienden a estar situados
en la parte anterior, y los núcleos con funciones sensi-
tivas, en la posterolateral. A diferencia de la continui-
dad que tiene la sustancia gris de la médula espinal,
en el tronco del encéfalo los núcleos de los nervios
craneales están separados entre sí, aunque existen
múltiples vías que los conectan.
La porción central del tronco del encéfalo con-
tiene un sistema neuronal disperso que constituye
la formación reticular, con funciones activadoras e
inhibidoras relacionadas con el estado de vigilia, el
sueño, la consciencia, los impulsos sensitivos y el
movimiento. Otras áreas especializadas son los cen-
tros respiratorio, cardiaco y del vómito.
El primer par craneal o nervio olfatorio tiene
788 sus células ganglionares situadas en la mucosa
CAPÍTULO 93 Patología general de los nervios craneales y del tronco del encéfalo

nasal; sus impulsos llegan a la corteza del uncus La lesión del nervio olfatorio origina anosmia o
del lóbulo temporal. pérdida de olfato; cuando es unilateral, puede ser
El segundo par craneal o nervio óptico es en rea- debida a meningiomas del surco olfatorio o a otros
lidad una evaginación del diencéfalo. tumores de la región frontal. Una causa frecuente
Los pares craneales tercero (motor ocular co- de anosmia bilateral son los procesos inflamatorios
mún}, cuarto (troclear o patético) y sexto (motor locales (rinitis). Otras causas son los traumatismos
ocular externo o abducens) son nervios motores y las meningitis; en el síndrome de Maestre de San
de los ojos; el tercero contiene fibras que regulan Juan-Kallmann la anosmia aparece asociada a hipo-
los reflejos pupilares. gonadismo por deficiencia de LHRH.
El quinto par craneal (nervio trigémino) tiene Se denomina parosmia a la sensación anormal, de-
una raíz motora que inerva los músculos de la sagradable, del olfato; generalmente se debe a depre-
masticación, y una raíz sensitiva (cuyas neuro- sión grave, pero puede estar originada por lesiones
nas están situadas en el ganglio de Gasser) que orgánicas. Las alucinaciones olfatorias no son raras
transmite la sensibilidad de la cara. en las epilepsias originadas en el lóbulo temporal
El séptimo par craneal (nervio facial) inerva los (crisis uncinadas).
músculos faciales y, a través de la cuerda del
tímpano, transmite la sensación del gusto de los
dos tercios anteriores de la lengua. NERVIO ÓPTICO (11 PAR)
El octavo par craneal (cocleovestibular o acústi-
co) tiene una división coclear o auditiva y otra La luz estimula a los conos y bastones de la retina ,
vestibular, relacionada con el control de la posi- transmitiendo impulsos a las fibras de células gan-
ción y el equilibrio. glionares que entran en el nervio óptico. La visión
El noveno par (glosofaríngeo) conduce el gusto central es función de una parte especializada de la
del tercio posterior de la lengua y es motor para retina, la mácula, situada en el lado temporal o ex-
músculos constrictores de la faringe. terno de la papila óptica. En el quiasma óptico, las
El décimo par (vago) inerva a los músculos del fibras de la mitad nasal de cada retina se cruzan en
velo del paladar, faringe y laringe; contiene ade- aspa; las fibras de la mitad temporal, no (Fig. 93-1).
más fibras parasimpáticas destinadas al corazón, Cada tracto óptico lleva fibras de la mitad temporal
pulmones y aparato digestivo. de la retina del mismo lado y de la mitad nasal de
El par XI (espinal) inerva los músculos del cue- la retina contralateral. Es decir, los impulsos de los
llo (esternocleidomastoideo y trapecio). campos visuales derechos de cada ojo son transporta-
El par XII (hipogloso) es el nervio motor de la dos por la vía óptica izquierda, que continúa hasta el
lengua. cuerpo geniculado lateral; en este se origina la radia-
ción óptica (o vía genículo-calcarina), que atraviesa
Las estructuras del tronco del encéfalo y los nervios el lóbulo temporal hasta alcanzar la corteza visual
craneales están tan íntimamente relacionadas entre sí primaria o receptiva, situada en la cisura calcarina
desde el punto de vista anatómico, que las lesiones del lóbulo occipital; está rodeada por áreas corticales
de esta región fácilmente afectan a varias funciones de asociación, donde se reconocen e interpretan las
simultáneamente; con frecuencia se combinan signos sensaciones visuales. Las fibras más bajas de la radia-
uni o bilaterales de vías largas motoras y sensitivas ción óptica, procedentes de los cuadrantes inferiores
junto a parálisis de pares craneales, dependientes del de la mitad de la retina correspondiente, pasan sobre
nivel de lesión. el borde superior del asta temporal del ventrículo la-
teral (asa de Meyer).
NERVIO OLFATORIO (1 PAR) Otras fibras aferentes de la retina y de los múscu-
los de la acomodación pasan por el nervio óptico y
En la mucosa nasal residen neuronas bipolares cuyos llegan al cuerpo geniculado lateral y a los tubérculos
aferentes forman los filamentos olfatorios y atravie- cuadrigéminos superiores del cerebro medio; de aquí
san la lámina criboides del etmoides hasta el bulbo salen fibras para un centro hipotalámico simpático y
olfatorio, situado en la base de los lóbulos frontales; para los núcleos de los nervios III, IV y VI. Estas vías
se divide en estrías olfatorias laterales y mediales y son responsables de la constricción de la pupila en
conecta con la corteza olfatoria de los lóbulos tempo- respuesta a la luz, de la acomodación a la distancia,
rales; la comisura anterior conecta las vías olfatorias la convergencia y el seguimiento de objetos móviles
de los dos hemisferios. con los ojos.
El olfato se explora por separado en cada ventana Es importante recordar las relaciones anatómicas
nasal con varias sustancias aromáticas (café, tabaco, del quiasma óptico: por detrás, está en contacto inme-
menta), pero no con irritantes como amoníaco (que diato con la pared anterior del tercer ventrículo; por
estimulan el nervio trigémino) . Existe relación entre delante se halla la arteria comunicante anterior, que
el olfato y el gusto, que, combinados, dan la sensa- une las dos arterias cerebrales anteriores; debajo se
789
ción de sabor. sitúa la hipófisis en la silla turca; a ambos lados están
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

CAMPOS VISUALES

OJO IZQ UIERDO OJO DERECHO


CAMPOS VISUALES
Izquierdo Derecho

1 O- Ceguera monocul ar

2 OO Hemianopsia nasal
derecha

OO
oo
3 Hemianopsia bitemporal

4 Hemianopsia homónima
contralateral
5
~ ~ Cuad,ranlan~psi? superior
5 U U
oo
Rad iac ión - - -"'' homonima 1zqu1 erda
óptica
Corteza Hemianopsia homónima
6 contra lateral
occi pital

Figura Vías ópticas y defectos del campo visual producidos por sus lesiones. Las fibras correspon-
dientes a la mitad nasal de cada retina (que transportan los impulsos procedentes del campo temporal ) se cruzan
en aspa en el qui asma óptico, mientras que las de la mitad temporal de la retina (campo visualnasal ) siguen en
el mismo lado. Las lesiones completas de la vía óptica situadas por delante de los cuerpos geniculados laterales
y tubérculos cuadrigéminos superiores del mesencéfalo interrumpen el arco del reflejo fotomotor directo, pero
en el mismo ojo se mantiene el reflejo fotomotor consensual. En la ceguera debida a lesiones ele las radiaciones
ópticas o la corteza occipital no se alteran los reflejos fotomotores directos y consensuales de ambos ojos.

las arterias carótidas internas, en el punto en que se visuales. Los escotomas centrales corresponden
dividen en cerebrales medias y anteriores. a alteraciones de la mácula o de las fibras pro-
En el examen clínico del II par se estudian la cedentes de la misma, que son las más sensibles
agudeza visual, los campos visuales y el fondo de a lesiones y pueden dañarse selectivamente
ojo. en n euritis ópticas o compresiones del nervio;
originan una importante pérdida de agudeza
La agudeza visual se mide independientemente visual.
para cada ojo por medio de una carta de tipos
(Snellen). Depende sobre todo de la visión cen- La lesión de un nervio óptico provoca ceguera uni-
tral o macular y de las fibras del nervio óptico lateral.
procedentes de la mácula; también se altera por En el quiasma, los tumores que lo comprimen desde
defectos de refracción o de los m edios transpa- abajo (como, por ej emplo, los adenomas hipofisarios)
rentes del ojo. El 8 % de los varones tienen dal- afectan en primer lugar a las fibras procedentes de
tonismo, o dificultad para distinguir los colores las porciones nasales inferiores de las retinas, origi-
(trastorno h ereditario ligado al cromosoma X). nando defectos en los campos temporales superiores
En lesiones mínimas de las vías visuales pue- de ambos ojos, que desembocan en una hemianop-
de dañarse precozmente la visión para el color sia bitemporal. Las compresiones asimétricas desde
rojo. arriba o las laterales (tumores, aneurismas) producen
Los campos visuales pueden examinarse de alteraciones variables; por ejemplo, un defecto del
modo orientativo rápido por confrontación con campo nasal de un ojo que progresa a ceguera com-
los del propio explorador y, más detalladamen- pleta unilateral y, después , defecto del campo tempo-
te, con pantallas especiales. La demostración de ral contralateral.
defectos campimétricos tiene gran valor para el La lesión completa de un tracto óptico por detrás
diagnóstico topográfico (Fig. 93-1). Los defectos del quiasma origina hemianopsia homónima contra-
circunscritos se denominan escotomas; normal- lateral (pérdida de visión en el campo nasal del ojo
mente, existe una mancha ciega correspondien- ipsilateral y del campo temporal contralateral), gene-
790 te a la papila óptica, donde no hay receptores ralmente asimétrica (incongruente).
CAPITULO 93 Patología general de los nervios craneales y del tronco del encéfalo

Las lesiones de las radiaciones ópticas dan lugar nervio atraviesa el núcleo rojo y sale entre los pedún-
también a hemianopsia homónima contralateral, culos cerebrales y la protuberancia, se dirige hacia
pero frecuentemente son defectos incompletos (cua- delante, muy próximo a la arteria comunicante poste-
drantanopsias}, dependiendo de la localización exac- rior, y penetra en la pared lateral del seno cavernoso
ta. Las lesiones del lóbulo temporal afectan al asa de y, desde ahí, en la órbita por la hendidura orbitaria
Meyer y causan cuadrantanopsia homónima superior superior. A él se unen fibras simpáticas procedentes
contralateral, mientras que las lesiones del lóbulo pa- de ganglios cervicales a través del plexo que rodea a
rietal tienden a originar cuadrantanopsia homónima la arteria carótida interna.
inferior. La parálisis del III par origina ptosis palpebral,
En las lesiones de la corteza visual hay hemianop- parálisis de todos los músculos oculares extrínse-
sia homónima contralateral simétrica (congruente}. cos, excepto el recto externo y el oblicuo superior (el
ojo se desvía hacia afuera), y dilatación de la pupila
En el examen del fondo de ojo se observa el (midriasis), sin respuesta refleja a la luz o la acomo-
aspecto de la papila óptica. Sus principales al- dación . Sus causas pueden ser lesiones vasculares o
teraciones son el papiledema, importante signo tumorales del mesencéfalo, aneurismas de la arteria
de hipertensión intracraneal, pero que también
comunicante posterior, compresiones por tumores o
puede ser causado por neuritis óptica (papilitis), procesos inflamatorios en el seno cavernoso o lesión
y la atrofia óptica, resultado de una degenera- isquémica del propio nervio (oftalmoplejía diabéti-
ción de las fibras del nervio óptico, y que se ma- ca).
nifiesta por palidez de la papila óptica. En el pa-
El IV par tiene su núcleo a nivel del tubérculo
piledema aumenta el tamaño de la mancha ciega
cuadrigémino inferior; sus fibras se cruzan en aspa y
y se retraen los campos visuales periféricos. En
salen por la parte posterior del techo del mesencéfalo;
la atrofia óptica hay una grave disminución de
rodea al pedúnculo cerebral para hacerse anterior y
la agudeza visual. La papila es normal en casos
penetra en el seno cavernoso y en la hendidura orbi-
de neuritis óptica retrobulbar, pese a la ceguera
taria superior. Sus lesiones causan parálisis del mús-
o escotoma central; sus principales causas son la
culo oblicuo superio1~ con dificultad para mirar hacia
esclerosis múltiple, la isquemia del nervio ópti-
abajo y afuera.
co (incluyendo la debida a arteritis temporal o
de células gigantes), los tóxicos (alcohol, tabaco, El VI par tiene su núcleo en la protuberancia, cerca
plomo, alcohol metílico), los fármacos (etambu- del suelo del cuarto ventrículo, rodeado por las fibras
tol), el déficit de vitamina B12 (anemia pernicio- del nervio facial; se dirige hacia delante, cruza el lem-
sa), la sífilis y las enfermedades degenerativas nisco interno y la vía corticoespinal, sale por el borde
del sistema nervioso (atrofia óptica hereditaria inferior de la protuberancia, pasa hacia delante sobre
de Leber). la punta de la porción petrosa del hueso temporal y
sigue al seno cavernoso y la hendidura orbitaria supe-
El estudio de los potenciales evocados visuales
rior. Sus lesiones paralizan el músculo recto externo,
permite detectar lesiones subclínicas de las vías
por lo que no puede llevarse a cabo la abducción del
ópticas (p. ej., en la esclerosis múltiple).
ojo. Las causas de parálisis del VI par son similares
a las del III par; a ellas hay que añadir las petrositis
NERVIOS MOTOR OCULAR COMÚN, PATÉTICO secundarias a infecciones del oído. Es frecuente que
resulte afectado en pacientes con hipertensión intra-
Y MOTOR OCULAR EXTERNO craneal (signo falso de localización).
(PARES 111, IV Y VI)
Los movimientos del globo ocular son efectuados MOVIMIENTOS CONJUGADOS DE LOS OJOS
por los músculos recto superio1~ recto inferior, rec-
to interno, recto externo, oblicuo superior y oblicuo Los movimientos de los ojos se realizan de modo
inferior. El recto externo está inervado por el VI par; simétrico y sincrónico (movimiento conjugado o
el oblicuo superior, por el IV par (también llamado mirada}. Se denominan movimientos sacádicos
troclear o patético), y los restantes músculos, por el a los que permiten la rápida fijación de la imagen
IIl par, que también inerva al elevador del párpado de un nuevo objeto sobre la mácula, y movimientos
superior y controla los músculos intrínsecos de la de persecución a los movimientos, más lentos, que
pupila. Se denomina estrabismo a la falta de parale- mantienen sobre la mácula la imagen de un objeto
lismo del movimiento ocular, y diplopía a la visión que se mueve. La vía de los movimientos sacádicos
doble resultante de la parálisis de uno o más múscu- en el plano vertical se inicia en áreas frontales (re-
los oculares. lación con movimiento voluntario), pasa por la cáp-
El ID par tiene su núcleo por delante del acueduc- sula interna, se cruza en aspa y llega al mesencéfalo,
to, al nivel del tubérculo cuadrigémino superior del mientras que la vía de los movimientos sacádicos en
mesencéfalo; el núcleo parasimpático de Edinger- el plano horizontal alcanza la formación reticular
Westphal controla la contracción de la pupila. El paramediana de la protuberancia. Los movimientos
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

de persecución se controlan por vías originadas en dirección del componente rápido; puede ser horizon-
áreas occipitales (relación con estímulos visuales y tal, vertical o rotatorio.
seguimiento reflejo). La coordinación de acciones El nistagmo puede ser:
de los nervios motores del ojo se establece a través
Optocinético, provocado como fenómeno nor-
del fascículo longitudinal medial, que también los
mal al seguir con la mirada una serie de objetos
relaciona con el sistema vestibular, permitiendo la
que se mueven en el campo de visión; esta res-
fijación visual durante desplazamientos rápidos de la
puesta se altera en lesiones de la corteza parie-
cabeza (reflejos vestibulooculares).
tooccipital.
Los trastornos de los movimientos conjugados Vestibular, por desequilibrio entre los dos sis-
oculares pueden ser supranucleares, nucleares e in- temas vestibulares, cada uno de los cuales ejer-
franucleares; los primeros no causan diplopía. Las le- ce un efecto tónico para dirigir los ojos al lado
siones frontales producen alteraciones de la mirada opuesto; el componente rápido se dirige hacia
horizontal; en muchos ictus, además de hemiplejía el lado de la lesión (véase síndrome vestibular).
se produce desviación de los ojos hacia el lado de Cerebeloso, especialmente en las lesiones que co-
la lesión, debido a la acción no contrarrestada de la nectan el cerebelo con los núcleos vestibulares.
corteza cerebral opuesta; el estímulo irritativo de una Por debilidad de los músculos oculares (sujetos
crisis epiléptica focal hace girar la cabeza y los ojos sanos en la mirada lateral extrema, fatiga).
hacia el lado contrario (crisis versiva). En el parkinso-
nismo postencefalítico ocurren crisis oculógiras. Las
lesiones de la protuberancia (vasculares, esclerosis PUPILAS
múltiple, encefalopatía de Wernicke) alteran la mira-
da conjugada. La parálisis de la mirada vertical y de En condiciones normales, las pupilas son iguales en
la convergencia se produce en el síndrome de Parin- cuanto a tamaño, regulares en su perímetro, y reaccio-
aud por lesiones en el tectum (especialmente pinealo- nan a la luz y a la acomodación. Su tamaño depende
ma) y en la parálisis supranuclear progresiva (enfer- de las acciones del músculo dilatador, controlado por
medad degenerativa con signos parkinsonianos). La la inervación simpática, y del constrictor o esfínter,
oftalmoplejía internuclear es un síndrome originado de inervación parasimpática. Se denomina anisocoria
por lesión del fascículo longitudinal medial; al inten- a la desigualdad en el tamaño de las pupilas, miosis
tar la mirada lateral no se produce aducción de un al estado de constricción y midriasis al de dilatación
ojo, mientras aparece nistagmo en el ojo opuesto que pupilar.
se abduce; puede ser bilateral; su causa más frecuente La vía simpática dilatadora de la pupila se inicia
es la esclerosis múltiple. El síndrome del uno y medio en el hipotálamo, desciende a lo largo del tronco del
se caracteriza por parálisis de la mirada hacia el lado encéfalo y hace sinapsis con células de las columnas
de la lesión junto a oftalmoplejía internuclear al mi- intermediolaterales de la médula espinal a nivel C8,
rar al lado contrario. La opsoclonía consiste en movi- Dl y D2, de donde salen fibras simpáticas preganglio-
mientos rápidos de los ojos en múltiples direcciones nares por las raíces anteriores y ramos blancos, hasta
(encefalitis vírica y paraneoplásica). el ganglio simpático cervical superior (ganglio estre-
llado), donde tiene lugar otra sinapsis. Las fibras pos-
ganglionares siguen un trayecto ascendente próximo
NISTAGMO a la arteria carótida; las que controlan la función va-
somotora y la sudoración de la cara siguen a la arteria
Se trata de un trastorno de los movimientos ocula- carótida externa, y las responsables de la dilatación
res consistente en oscilaciones rítmicas , repetidas e pupilar, a la carótida interna hasta el seno cavernoso,
involuntarias de los ojos, causado por desigualdades donde se unen a la rama oftálmica del nervio trigé-
en el tono de sus músculos. Puede estar presente con mino.
los ojos en reposo, pero aparece más frecuentemen- La lesión de esta vía en cualquier punto de su tra-
te cuando son movilizados; en algunos pacientes yecto origina el síndrome de Bernard-Horner, consis-
se acompaña de una sensación de movimiento del tente en miosis , enoftalmos, ptosis parcial del párpa-
entorno (oscilopsia). Algunas veces el nistagmo es do superior y, si la lesión es proximal a la bifurcación
pendular, con oscilaciones aproximadamente iguales carotídea, anhidrosis de la mitad de la cara.
en las· dos direcciones del movimiento, debido a una La vía parasimpática constrictora de la pupila se
pérdida de visión central y reflejos tónicos originados inicia en el núcleo de Edinger-Westphal y, formando
en la retina. Se observa por motivos congénitos, en parte del III par, llega al ganglio ciliar, donde estable-
personas que han perdido la visión en edades tem- ce una sinapsis; las fibras posganglionares constitu-
pranas de la vida y en quienes han trabajado muchos yen los nervios ciliares.
años en condiciones de escasa luz ambiental (mine- El reflejo fotomotor consiste en la contracción pu-
ros). El nistagmo más frecuente es de sacudidas (o pilar como respuesta ante un estímulo luminoso. La
fásico), con desviación de los ojos en una dirección y vía aferente del reflejo comienza en la retina, sigue el
792
reposición más rápida hacia la otra; se designa por la nervio óptico y el tracto óptico, pero no va destinada
CAPITULO 93 Patología general de los nervios craneales y del tronco del encéfalo

al cuerpo geniculado lateral, sino que llega a la re- El nervio trigémino tiene dos raíces. La mayor es la
gión pretectal en la parte posterior del mesencéfalo; sensitiva; aparece en la parte lateral de la protuberan-
ahí se establece contacto con los núcleos del tercer cia (límite con el pedúnculo cerebeloso medio) y en
par de ambos lados; la vía eferente es conducida por el vértice del hueso petroso temporal forma el ganglio
el III par. Al estimular con la luz la retina de un ojo, de Gasser, en el que residen las neuronas sensitivas.
se produce contracción pupilar del mismo lado (refle- Al ganglio de Gasser llegan las tres ramas del V par.
jo fotomotor directo}, y también contralateral (reflejo La primera rama (oftálmica) llega desde la órbita por
fotomotor consensual). la hendidura orbitaria superior, y pasa por la pared la-
El reflejo de acomodación consiste en la constric- teral del seno cavernoso; transmite la sensibilidad de
ción pupilar asociada a la convergencia de los ojos la nariz, la frente, el cuero cabelludo, los senos fron-
para la visión cercana; en esta respuesta interviene tales, la hoz del cerebro y la córnea. La segunda rama
una vía desde la corteza occipitoparietal al núcleo de (maxilar superior} transmite la sensibilidad del labio
Edinger-Westphal. superior y la piel de la mejilla; como nervio infraor-
Las lesiones unilaterales del nervio o tracto ópti- bitario, penetra en la órbita, sale por la hendidura or-
co causarán la pérdida de reflejo fotomotor directo y bitaria inferior, alcanza la fosa pterigopalatina y entra
consensual (además de ceguera); la pupila responde, en el cráneo por el agujero redondo. La tercera rama
en cambio, a la estimulación luminosa de la retina (mandibular) aporta la sensibilidad de la piel que
contralateral. Las lesiones de la vía óptica por detrás cubre la mandíbula, parte de la oreja, la mucosa de
de los cuerpos geniculados (radiaciones ópticas y la boca, dos tercios anteriores de la lengua y la dura-
corteza occipital) no alteran los reflejos fotomotores madre de la fosa craneal supratentorial; penetra en el
directos y consensuales de ambos lados. cráneo por el agujero oval. La raíz motora del trigémi-
Las lesiones del III par (con la notable excepción no (unida a la rama mandibular) inerva los músculos
de la oftalmoplejía diabética) causan midriasis de de la masticación (temporal, masetero, pterigoideos),
la pupila correspondiente, con abolición del reflejo el vientre anterior del digástrico, el milohioideo, el
fotomotor tanto directo como consensual (por ilumi- tensor del tímpano y el tensor del paladar.
nación del ojo opuesto); pero al iluminar el ojo del El reflejo corneal se explora tocando la córnea con
lado afectado se producirá reflejo consensual en la un algodón; la vía aferente del reflejo es la primera
pupila contralateral. rama del trigémino. La respuesta normal, cuya vía
El reflejo de acomodación se pierde en las lesiones eferente es el nervio facial, consiste en un cierre de
de las fibras constrictoras de la pupila (III par); rara ambos párpados.
vez ocurre de modo aislado. El reflejo mandibular tiene sus vías aferente y efe-
El signo de Argyll Robertson consiste en pupilas rente en la tercera rama (véase Reflejos musculares).
pequeñas, irregulares, desiguales, con pérdida del re- Las lesiones periféricas del nervio trigémino (neu-
flejo fotomotor y conservación del reflejo de acomo- rofibromas, meningiomas, herpes zóster) originan do-
dación; se observa en la neurosífilis. lor, parestesias y pérdida de sensibilidad en el área de
En la pupila de Adie (pupila tónica) hay dilatación distribución correspondiente. El reflejo corneal está
de una pupila con reacción muy perezosa a la luz y abolido (en cambio, si el nervio facial está intacto, se
acomodación. Frecuentemente se asocia a arreflexia producirá parpadeo al explorar el reflejo cornea! del
(síndrome de Holmes-Adie). lado sano). Si existe alteración motora, la mandíbula
El tan1año y los reflejos pupilares se ven influidos se desvía hacia el lado afectado al abrir la boca contra
por enfermedades locales (iridociclitis, sinequias) y resistencia, debido a la acción desigual de los múscu-
por fármacos de aplicación local o por vía general. los pterigoideos.
En la valoración de las respuestas pupilares se re- Las lesiones centrales del trigémino causan altera-
curre en ocasiones a la instilación de agentes mióti- ciones disociadas de la sensibilidad en la cara. Una
cos o midriáticos. lesión del núcleo principal protuberancia! causa la
pérdida de sensación táctil, pero se conserva la ter-
moalgésica, que depende del núcleo espinal. Lo con-
NERVIO TRIGÉMINO (V PAR) trario ocurre en lesiones bulbares.
El trastorno más frecuente que afecta al V par es
El nervio trigémino es sensitivo y motor. Su núcleo la neuralgia del trigémino, caracterizada por dolores
sensitivo está dividido en tres partes: núcleo princi- paroxísticos recurrentes de origen idiopático.
pal (parte lateral de la protuberancia; recibe sensibi-
lidad táctil y postura!); núcleo espinal (situado en la
parte lateral del bulbo y médula espinal Cl y C2; reci- NERVIO FACIAL (VII PAR)
be sensibilidad dolorosa y térmica) y núcleo mesen-
cefálico (situado en el nivel más alto; recibe aferentes El núcleo motor del nervio facial está situado en la
de los músculos); se conectan con el tálamo por una parte lateral de la protuberancia, desde donde sus
vía próxima al lemnisco interno. El núcleo motor está fibras se dirigen hacia atrás formando un asa que ro-
en la protuberancia, por dentro del núcleo principal. dea al núcleo del VI par, y vuelven hacia delante para
e; C(I N Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

salir por la parte inferior y externa de la protuberan- facial. En la proximidad del ganglio geniculado se
cia. Cruza el ángulo pontocerebeloso junto al nervio separan del tronco principal, constituyendo el ner-
intermediario de Wrisberg y al VIII par, penetra en el vio petroso superficial mayor, que alcanza el ganglio
conducto auditivo interno y sigue un trayecto den- pterigopalatino y controla la secreción de la glándu-
tro del hueso petroso temporal llamado canal facial o la lagrimal. Otras fibras secretomotoras se unen a la
acueducto de Falopio, que, en la proximidad del oído cuerda del tímpano para dirigirse a las glándulas su-
medio, forma un ángulo o rodilla (genu}, donde se si- blingual y submaxilar.
túa el ganglio geniculado. Da una pequeña rama que Los datos anatomofisiológicos mencionados permi-
inerva al músculo estapedio (cuya función es aumen- ten localizar con precisión el lugar donde se produ-
tar la tensión en la cadena de huesecillos del oído cen las lesiones del nervio facial (Figs. 93-2 y 93-3).
medio para proteger de ruidos intensos), y después
sale del cráneo por el agujero estilomastoideo, cruza La parálisis facial central, supranuclear o
la glándula parótida y se distribuye en ramas por los de neurona motora superior, frecuentemente
músculos faciales, el vientre posterior del digástrico acompañada de parálisis de las extremidades
y el estilohioideo. del mismo lado (hemiplejía). afecta al movi-
Al núcleo motor facial llegan fibras supranucleares miento voluntario de la parte inferior de la cara,
de dos orígenes: a) vía corticobulbar (piramidal), que pero no a los músculos frontal y orbicular de los
controla la motilidad voluntaria; la parte correspon- párpados, por su control bilateral. Además, sue-
diente a la mitad inferior de la cara recibe esta vía cru- len ser normales los movimientos faciales reac-
zada de la corteza motora frontal del lado opuesto; la tivos a emociones.
parte superior de la cara (músculos frontal y orbicular La parálisis facial nuclear (por lesiones vascu-
de los párpados) recibe fibras de ambos hemisferios; lares o tumorales de la protuberancia) frecuen-
b) vía extrapiramidal, que controla el movimiento temente se asocia a déficits de vías largas y a
emocional de la cara (expresión). afectación del VI par.
El componente sensitivo y las fibras secretomoto- La parálisis facial periférica, o de neurona mo-
ras del facial constituyen el nervio intermediario. Las tora inferior, origina la pérdida del movimiento
fibras aferentes, cuyas neuronas residen en el ganglio
voluntario y emocional en todos los músculos
geniculado, transmiten el gusto de los dos tercios an- faciales del lado afectado (tanto superiores
teriores de la lengua a través del nervio lingual, una
como inferiores). Al intentar cerrar los párpa-
rama de la división mandibular del trigémino, que se dos, el globo ocular gira y se descubre la escleró-
anastomosa con otro nervio , la cuerda del tímpano. tica (fenómeno de Bell}; la posición descendida
También recibe sensibilidad cutánea de una pequeña
del párpado inferior separa el punto lagrimal del
área de la pared anterior del conducto auditivo ex- fondo de saco conjuntival, y se deslizan las lá-
terno. Su terminación central es el núcleo del tracto
grimas al exterior (epífora).
solitario en el bulbo.
Las fibras secretomotoras eferentes se originan en Si la lesión es proximal al nervio petroso superfi-
el núcleo salivar superior, próximo al núcleo motor cial mayor, se ve afectada la secreción lagrimal. Entre

- - - - - Protuberancia
~ ~
~ ~""7"=. __ _ - - Núcleo mo_tor fac ial
Glándula
Núcleo sa livar
lagrimal
~ ',1 - ----- superior
Núcleo del tracto
solitario
ervio petroso superficial - -\
mayor "\
Ángulo pontocerebeloso
Ganglio geni culado
Conducto auditivo interno
Nervio - - - - - - - - - - Peña sco
lingual Músculo estapedio
Lengua
Agujero estilomasto ideo
Cuerda
del tímpano

~ Figura Nervio facial. El nivel donde se produce una les ión del nervio fac ial puede determinarse por los
síntomas asoc iados y por la afectación o no de las fibras secretoras, gustativas y del músculo estapedio.
CAPITULO 93 Patología general de los nervios craneales y del tronco del encéfalo

movimiento de enseñar los dientes (sincinesias}, o se-


creción lagrimal ante estímulos gustativos (lágrimas
de cocodrilo).

NERVIO ACÚSTICO (VIII PAR)


El octavo par contiene dos grupos de fibras: la rama
coclear o auditiva y la rama vestibular, relacionada
con funciones de equilibrio y postura.
Los cuerpos neuronales correspondientes al nervio
coclear (primera neurona de la vía auditiva) están
situados en el ganglio espiral; sus prolongaciones pe-
riféricas están en contacto con las células del órgano
espiral de Corti del oído interno. Las prolongaciones
Figura Diferen ciac ión de la parálisis facial centrales pasan, con el VIII par, a través del conduc-
centra l y periférica. Las neuronas del núcleo facial co- to auditivo interno y del ángulo pontocerebeloso
rrespondiente a los músculos fronta les y orbicu lar de (en relación con el nervio facial), para penetrar por
los párpados reciben fibras supranucleares de ambos el borde inferior de la protuberancia y realizar una
hemisferios cerebrales, mientras que las correspon- sinapsis con los núcleos cocleares del bulbo (segun-
dientes a los músculos de la mitad inferior de la cara da neurona). De aquí salen fibras (cuerpo trapezoide)
sólo tienen control voluntario del hemisferio cerebral que cruzan al núcleo olivar superior, o siguen por el
opuesto. Por consiguiente, las lesiones de la neurona lemnisco lateral hasta el tubérculo cuadrigémino in-
motora inferior (periférica) afectan a todos los movi- ferior (tercera neurona). De ahí, la vía se proyecta al
mientos del mismo lado de la cara (entre ell os los de la cuerpo geniculado interno (cuarta neurona), que , a su
frente y párpados), mientras que las lesiones centrales vez, conecta con la corteza auditiva en la circunvolu-
(vía piramidal ) só lo a la mitad in ferior contra latera l, ya ción temporal superior. Existen múltiples decusacio-
que los músculos fronta l y orb icu lar de los párpados nes que conectan ambas vías auditivas, por lo que la
conservan el control de la corteza cereb ral ipsi latera l. audición tiene representación bilateral en la corteza
cerebral (Fig. 93-4).
Las principales manifestaciones de lesión del ner-
sus causas figuran los tumores del ángulo pontocere- vio coclear son los acúfenos y la sordera.
beloso (neurinoma del acústico). Los acúfenos (tinnitus) consisten en la sen-
Si la lesión es proximal al nervio del estapedio se sación de ruido (pitido, timbre, maquinaria),
producirá hiperacusia o intensificación molesta de la continuo o intermitente, unilateral o bilateral;
percepción de ruidos. Una causa es el herpes zóster pueden ser muy molestos y originar privación
del ganglio geniculado (síndrome de Ramsay Hunt, de sueño y ansiedad. Entre sus causas figuran
con vesículas en el conducto auditivo externo). el neurinoma del acústico, el síndrome de Mé-
Si la lesión es proximal a la cuerda del tímpano niere, la toxicidad por salicilatos o antibióticos
(fracturas de peñasco, infecciones del oído medio),
se pierde el gusto en los dos tercios anteriores de la
hemilengua.
Estos síntomas acompañantes de la parálisis facial
no existen en lesiones a nivel del agujero estilomas-
toideo o parótida. La causa más frecuente es la pará- ircunvolución
lisis idiopática de Bell; otras causas son las polineu- temporal
superior
ropatías , la diabetes, la sarcoidosis, la enfermedad de
Lyme y la lepra. Cuerpo
geniculado
En el síndrome de Melkersson-Rosenthal existe la medial
parálisis facial recurrente asociada a edema facial y
lengua plicata (fisurada).
La parálisis facial periférica bilateral aparece en
la polineuropatía del síndrome de Guillain-Barré.
Existe debilidad de los músculos faciales, no debida
a lesión neurógena, en la miastenia gravis y diversas
miopatías. Figura Vía auditiva. Es multisináptica y con
La reinervación anómala durante la recuperación múltiples decusaciones y conexiones entre ambos la-
de una lesión del nervio facial puede originar el dos. La audición de cada oído tiene representación
795
cierre de los párpados cuando el paciente realiza el bilateral en la corteza del lóbulo temporal.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

aminoglucósidos, la isquemia coclear y diversas nerviosas. En el caso de la sordera de conducción, la


enfermedades del oído medio. prueba de Rinne es anormal o negativa (la conducción
La sordera (hipoacusia) puede tener diversos aérea está alterada, pero no la ósea). Sin embargo, esta
orígenes. Las ondas sonoras son inducidas me- prueba puede ser engañosa en la sordera neurosenso-
cánicamente por vibraciones, que se transmiten rial o nerviosa grave, por existir conducción del soni-
como ondas de presión a través de los medios do a través del hueso al oído normal.
aéreo, líquido o sólido. Pasan por el conducto La exploración de la sordera debe completarse con
auditivo externo, membrana del tímpano, cade- la audiometría, prueba cuantitativa en que se mide
na de huesecillos, perilinfa y endolinfa coclear, el umbral de audición a diversas frecuencias, con lo
antes de alcanzar los receptores auditivos o cé- que se obtienen patrones característicos de sordera,
lulas pilosas ciliadas del órgano de Corti, sen- entre ellos los tipos mixtos. Además, existen técnicas
sibles a desplazamientos. Se denomina sordera para estudio del fenómeno de reclutamiento, el decai-
de conducción a la originada por lesiones en el miento tonal y los potenciales evocados auditivos del
pabellón auricular, conducto auditivo externo, tronco del encéfalo.
membrana timpánica o en la cadena de hueseci-
llos; sordera neurosensorial (o perceptiva) a las
lesiones del órgano de Corti y sordera nerviosa o NERVIO GLOSOFARÍNGEO (IX PAR)
de transmisión a la debida a lesiones del nervio
coclear. El glosofaríngeo es un nervio sensitivomotor. Surge
de una serie de raíces en la superficie lateral del bul-
Las causas comunes de sordera de conducción son bo, sale del cráneo por el agujero yugular, junto a los
el bloqueo del conducto auditivo externo (cerumen) o pares X y XI, y en el cuello está próximo a la vena
de la trompa de Eustaquio, la alteración del tímpano, yugular y la arteria carótida. Sus fibras motoras nacen
la otitis media y la otosclerosis (inmovilización de del núcleo ambiguo; inerva al músculo estilofaríngeo.
huesecillos en la ventana oval por crecimiento óseo Las fibras sensitivas, cuyas células están situadas en el
anormal). ganglio petroso, transmiten la sensibilidad del tercio
Son causas de sordera neurosensorial los tras- posterior de la lengua, paladar blando, amígdalas y
tornos congénitos, el trauma acústico, la enfermedad pared posterior de la faringe, y terminan en el núcleo
de Méniere, la toxicidad medicamentosa, las infec- del tracto solitario. Las fibras secretorias parten del
ciones víricas (laberintitis aguda), la otitis interna, núcleo salivar inferior y llegan a la glándula parótida.
la presbiacusia y la obstrucción de arteria auditiva Se explora, junto con el nervio vago, comprobando
interna. la movilidad del velo del paladm; la sensación en la
La sordera de transmisión se produce por lesiones faringe y el reflejo faríngeo o constricción faríngea,
del nervio coclear secundarias a meningitis, trauma- con náuseas, al tocar con un depresor de lengua la
tismos, enfermedades hereditarias o tumores (neuri- pared lateral de la faringe.
noma del acústico y otros situados en el ángulo pon- El nervio glosofaríngeo puede ser comprimido (si-
tocerebeloso) . multáneamente con los pares X y XI) por tumores de
El estudio clínico de la función auditiva se inicia la región del agujero yugular o de base de la fosa pos-
comprobando el umbral para la audición de la voz, terior y parte superior del cuello (tumores del glomus
cuchicheada mientras se bloquea con un dedo el oído yugular, etc.). Existe también una neuralgia del glo-
opuesto. En la prueba de Weber se aplica la base de sofaríngeo, con dolor paroxístico intenso en la boca,
un diapasón vibrando sobre el centro de la cabeza o faringe y oído desencadenado por actos como tragar,
la frente. Normalmente el sonido parece percibirse en toser, o beber líquidos fríos.
la línea media. El sonido se percibe mejor en el lado
sano, en el caso de hipoacusia nerviosa o neurosenso-
rial, mientras que en la sordera de conducción se oye NERVIO VAGO (X PAR)
en el oído afectado (Weber lateralizado). Este hecho
es debido a que, en las sorderas nerviosas, se reduce El nervio vago sale del bulbo por una serie de raíces en
tanto la conducción ósea como la aérea, mientras que el borde anterior del pedúnculo cerebeloso inferior, y
en los defectos de conducción se reduce la aérea y au- pasa a través del agujero yugular en relación con la
menta relativamente la ósea. En la prueba de Rinne se arteria carótida y pares IX y XI. Sus fibras motoras
aplica el diapasón sobre la apófisis mastoides, mien- derivan del núcleo ambiguo en el bulbo e inervan a
tras se tapa el oído correspondiente con el dedo; se los músculos del paladar, la faringe y la laringe, es-
instruye al paciente para que indique cuándo deja de tos últimos por medio de las ramas llamadas nervios
oír el sonido, y entonces se sitúa el diapasón delante laríngeos recurrentes. El recurrente derecho guarda
del conducto auditivo. Normalmente, la conducción relación con la arteria subclavia, mientras que el iz-
aérea es mejor que la ósea, y el sujeto vuelve a per- quierdo forma un asa alrededor del arco aórtico. Del
cibir el sonido (prueba de Rinne normal o positiva). núcleo dorsal del vago, situado por delante del suelo
Lo mismo ocurre en las hipoacusias de percepción o del cuarto ventrículo, salen fibras eferentes hasta los
CAPÍTULO 93 Patología general de los nervios craneales y del tronco del encéfalo

ganglios parasimpáticos del plexo vago que inervan dula. Sale del bulbo entre la oliva inferior y la pirá-
las vísceras torácicas y abdominales. Las fibras sensi- mide, y deja el cráneo a través del canal hipogloso.
tivas que viajan por el X par recogen sensibilidad de Inerva todos los músculos intrínsecos de la lengua,
la duramadre de la fosa craneal posterior y parte del así como el tiroihioideo y el infrahioideo.
oído externo, y terminan en el núcleo sensitivo del V Las lesiones del hipogloso causan parálisis, atrofia
par. Las fibras que transmiten la sensación de la larin- y fasciculaciones en la mitad correspondiente de la
ge, la tráquea y las vísceras torácicas y abdominales lengua, que se desvía hacia el lado paralizado cuan-
terminan en el núcleo del tracto solitario. do se enseña fuera de la boca, debido a la acción no
Las lesiones unilaterales del núcleo ambiguo o del contrarrestada del músculo geniogloso del lado sano.
nervio vago, en su parte proximal a la rama faríngea, Las lesiones bilaterales provocan disartria y disfagia.
causan parálisis parcial del velo del paladar, que no Son causa de parálisis del hipogloso las lesiones
se eleva en el lado afectado, por lo que la úvula se des- nucleares por enfermedad de la neurona motora, la
vía hacia el lado sano. Si la parálisis del paladar es siringobulbia, la poliomielitis y los infartos. El propio
bilateral, aparece voz nasal (gangosa) y hay reflujo de nervio se lesiona en fracturas, metástasis o enferme-
líquidos hacia la cavidad nasal durante la deglución. dad de Paget del hueso occipital, platibasia, meningi-
El reflejo faríngeo está abolido. La parálisis unilateral tis y tumores. Se produce afectación supranuclear del
de la laringe se reconoce por cambio en el tono de movimiento de la lengua en la parálisis pseudobulbar
voz; en la laringoscopia se aprecia que la cuerda afec- (disartria espástica sin atrofia), por lesión bilateral de
tada está próxima a la línea media. La parálisis bilate- la vía piramidal.
ral de la laringe origina disfonía, estridor y dificultad
para toser. La parálisis aislada de una cuerda vocal
frecuentemente se debe a lesión del nervio recurren- PARÁLISIS MÚLTIPLES DE LOS NERVIOS
te (por aneurismas de la aorta, carcinoma bronquial, CRANEALES
adenopatías mediastínicas o cirugía tiroidea. Excepto
por la taquicardia, en algunas afecciones bilaterales La parálisis simultánea de varios nervios craneales
del vago (polineuropatías), no hay síntomas viscera- se observa en la mononeuritis craneal múltiple, que
les en las lesiones de este nervio. puede ser idiopática, una variante de síndrome de
Son causas de lesión nuclear del vago la enferme- Guillain-Barré, o sintomática de mononucleosis in-
dad de la neurona motora (parálisis bulbar progre- fecciosa, otras infecciones víricas, diabetes, sarcoido-
si va), la poliomielitis, la si.ringobulbia y los infartos sis o granulomatosis de Wegener.
bulbares. El tronco nervioso es dañado por tumores Con frecuencia, varios nervios craneales del mismo
de la fosa posterior o de la región cervical alta. lado se ven afectados por una misma lesión, fuera del
tronco cerebral, a veces de modo sucesivo, dando lu-
gar a síndromes específicos. Los más importantes se
NERVIO ESPINAL presentan en la Tabla 93-1. Los estudios radiológicos,
(XI PAR O NERVIO ACCESORIO) y especialmente la imagen por resonancia magnética,
facilitan su diagnóstico.
Una parte del XI par, el nervio accesorio central (o
bulbar), nace de la porción inferior del núcleo ambi-
guo y se une al vago en el agujero yugular; la mayor
parte (nervio accesorio espinal) se origina en las astas SÍNDROMES DEL TRONCO CEREBRAL
anteriores de los segmentos cervicales primero a quin- Los núcleos de los nervios craneales, sus conexiones,
to, asciende a través del agujero occipital y después y las vías largas ascendentes y descendentes (pira-
sale del cráneo por el agujero yugular. Es puramente midal, extrapiramidal, cerebelosas, sensitivas) están
motor, e inerva los músculos esternocleidomastoideo estrechamente relacionados en la anatomía del tronco
y trapecio (junto a ramas de los nervios cervicales se- del encéfalo, por lo que las lesiones de esta región
gundo, tercero y cuarto). frecuentemente afectan a varias estructuras. Es habi-
Se producen lesiones unilaterales del nervio espi- tual que originen parálisis de nervios craneales de un
nal en tumores, adenopatías y cirugía del cuello. La lado (señalando el nivel de la lesión) y signos motores
parálisis del esternocleidomastoideo causa dificultad o sensitivos bilaterales o contralaterales (síndromes
para rotar la cabeza hacia el lado opuesto. La pará- alternos) (Tabla 93-2).
lisis del trapecio origina incapacidad para elevar el Además, en las lesiones del tronco del encéfalo se
hombro del mismo lado; la atrofia de estos músculos producen con frecuencia alteraciones de la conscien-
puede reconocerse por inspección y palpación. cia, por lesión de la formación reticular, así como al-
teraciones posturales y del tono en las extremidades.
NERVIO HIPOGLOSO (XII PAR) La postura de decorticación se origina por sección
funcional del tronco del encéfalo por encima del nú-
El nervio hipogloso es motor; su núcleo equivale a cleo rojo; la desinhibición de los núcleos rojos y ves- --=¡gr
una extensión bulbar de las astas anteriores de la mé- tibulares aumenta el tono de los músculos flexores de
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Tabla Síndromes extraaxiales de parálisis múltiple de pares craneales


Nombre localización Pares afectados Causas
Foix Hendidura orbitaria superior 111, IV, V (rama oftálmica), VI Tumores, aneurismas,
o pared lateral del seno síndrome de Tolosa-Hunt
cavernoso

Jacob Espacio retroesfenoidal 11,111, IV,VVI Tumores

Gradenigo Vértice del peñasco V, VI Petrositis, meningioma

S. del ángulo A. pontecerebeloso, VII, VIII, a veces V y IX Neurinoma del acústico,


pontocerebeloso conducto auditivo interno tumores

Vernet Agujero yugular IX, X, XI Tumores (glomus)

Collet-Sicard Espacio laterocondíleo IX, X, XI, XII Tumores, adenopatías


posterior

Villaret Espacio retroparotídeo IX, X, XI, XII Tumores, adenopatías

Tapia Espacio retroparotídeo X, XII, a veces XI Tumores, traumatismos

las extremidades supmiores y de los músculos exten- núcleos vestibulares, por lesiones localizadas entre
sores de las extremidades inferiores, a través de las el núcleo rojo y los vestibulan,s, y tanto las extremi-
vías rubroespinal y vestibuloespinal. En la postura dades superiores como las inferiores permanecen en
de descerebración predominan los estímulos de los extensión forzada.

Tabla Principales síndromes del tronco cerebral


Nervio craneal
Nombre localización Vías afectadas Signos
afectado
Weber Base del 111 Piramidal Oftalmoplejía, hemiplejía
mesencéfalo contralateral

Claude Tegmento del 111 Pedúnculo cerebeloso Oftalmoplejía, ataxia


mesencéfalo superior cerebelosa contralateral

Benedikt Tegmento del 111 Ped. cerebeloso sup., Oftalmoplejía, ataxia,


mesencéfalo núcleo rojo, piramidal signos piramidales y
temblor contralaterales

Millard-Gubler Base de la VII, VI Piramidal Parálisis facial, hemiplejía


o Foville protuberancia contralateral, parálisis del
recto externo

Avellis Tegmento del X Espinotalámica Parálisis de paladar


bulbo y cuerda vocal,
hemianestesia
contralateral

Wallenberg Tegmento lateral Núcleo espinal V, Espinotalámica lateral, V, IX, X, XI, Hormer,
del bulbo IX, X, XI simpát. pupilodilatadora ataxia cerebelosa
espinocerebelosa, olivo ipsilateral, hipoestesia
ce re be losa termoalgésica
contralateral

~
·194
Patología general
de la médula espinal
Manuel Rodríguez-Yáñez, José Castillo Sánchez

CONCEPTO
La médula espinal es la parte del sistema nervioso
central que ocupa el canal vertebral. Desde el punto
de vista funcional, es un órgano segmentario y un sis-
tema cordonal. Como órgano segmentario interviene
en la integración de actividades reflejas, somáticas y
vegetativas; como sistema cordonal cuenta con haces
ascendentes y descendentes agrupados en los cordo-
nes anteriores , laterales y posteriores. En este capítu-
lo se abordará la médu la como sistema cordonal; los
reflejos se exponen en otro capítulo.

ANATOMÍA
La médula espinal es un cilindro que se extiende, en
el adulto, desde el borde superior del atlas al borde
inferior de la primera o segunda vértebra lumbar (Fig.
94-1); continúa hacia arriba con el tronco del encé-
falo, y el extremo caudal recibe el nombre de cono
terminal. A partir del cono terminal, el canal raquí-
deo se encuentra ocupado por raíces nerviosas hasta
el cóccix, lo que constituye la cola de caballo. En dos
zonas, la médula presenta un ensanchamiento, que se
corresponde con la inervación de las extremidades:
de C4 a D1 , las raíces forman el plexo braquial, y de
12 a S3 , el plexo lumbosacro. En el adulto , la médula
espinal mide unos 45 cm de largo y su peso aproxi-
mado es de unos 30 g.
La médula espinal se divide en 8 segmentos cervi-
cales, 12 dorsales, 5 lumbares, 5 sacros y 1 coccígeo.
A partir del tercer mes de vida intrauterina, el canal
raquídeo crece más que la médula espinal, por lo que
cada segmento medular en el adulto se encuentra en
posición más cefálica que la correspondiente vérte-
bra, con una distancia que aumenta en dirección cau-
dal (Fig. 94-1).
En la médula espinal, la sustancia gris está dis-
puesta en forma de H, y está rodeada por una capa de
fibras o sustancia blanca (Fig. 94-2). La sustancia gris
está formada por los cuerpos celulares y dendritas de
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Las láminas II y III constituyen la sustancia gela-


tinosa, formada por pequeñas neuronas encarga-
das de la regulación de los impulsos aferentes a
la médula espinal.
La lámina N, o núcleo propio del asta posterior,
es una colección de neuronas que se proyectan
hacia otras estructuras sensitivas.
Las láminas V y VI contienen neuronas que re-
ciben impulsos de fibras aferentes y que trans-
portan información propioceptiva. Desde Dl a
13, la lámina VI contiene un grupo de grandes
células, conocido como la columna de Clarke,
que se proyecta hacia el cerebelo a través del haz
espinocerebeloso posterior.
Las láminas VII y VIII, ya situadas en el asta an-
terior, contienen intraneuronas implicadas en el
control motor, así como neuronas que se proyec-
tan hacia las regiones motoras del cerebro.
Las láminas IX y IXM contienen los cuerpos
celulares de las neuronas motoras que inervan
los músculos somáticos (en la lámina IXM, los
músculos del tronco y cuello, y en la lámina IX
los músculos de las extremidades). La lámina X
contiene neuronas que se proyectan hacia el otro
lado de la médula espinal, e incluye los núcleos
Pl exo comisurales anterior y posterior.
lumbosacro
En los segmentos dorsales y sacros se encuentra la
columna celular intermediolateral, que no se conside-
ra parte del asta anterior ni posterior, y contiene las
neuronas del origen de las fibras vegetativas.
Las fibras que recorren la sustancia blanca pueden
dividirse en ascendentes, descendentes y propioes-
pinales, compuestas por fibras que conectan entre sí
distintos niveles de la propia médula (Fig. 94-2). Las
vias ascendentes comprenden los fascículos delgado
Figura Médula esp in al. Relación entre los seg-
y cuneiforme, que forman parte del sistema lemnis-
mentos medulares y los cuerpos vertebrales.
cal y conducen la sensibilidad discriminativa fina.
Las sensaciones menos discriminativas, el dolor y la
temperatura, son transportadas por los haces espino-
las neuronas medulares y de los axones procedentes talámicos anterior y lateral. Otras vías implicadas en
de ella o que terminan a este nivel. Se encuentra más la actividad refleja y en el control motor comprenden
desarrollada en los engrosamientos cervical y lumbar, los haces espinocerebelosos anterior y posterior, espi-
donde se localizan los cuerpos neuronales de los que noolivar, espinotectal y espinorreticular.
dependen las funciones motoras y sensitivas de las Las vías descendentes están compuestas por el
extremidades superiores e inferiores. haz corticoespinal o piramidal directo y cruzado, y
La sustancia blanca está constituida por los axones el rubroespinal, que controlan los músculos de las
de los haces de fibras que discurren longitudinalmen- extremidades. Los haces reticuloespinales anterior y
te. La sustancia blanca aumenta progresivamente de lateral, el vestibuloespinal y el tectoespinal controlan
volumen en los niveles superiores, según se van inte- los movimientos, e incluyen fibras que modulan la
grando las fibras. transmisión de los impulsos sensitivos a los centros
La sustancia gris de la médula espinal se divide superiores.
en un asta posterior, que se encuentra implicada en
la sensibilidad, y un asta anterior, que contiene los
cuerpos celulares de las neuronas motoras. La sustan- VASCULARIZACIÓN DE LA MÉDULA ESPINAL
cia gris se subdivide, según su citoarquitectura, en 10
Tiene lugar a través de tres arterias que la recorren
láminas (Fig. 94-2).
longitudinalmente: la arteria espinal anterior y dos
La lámina I es una capa fina de células grandes, arterias espinales posteriores (Fig. 94-3). Las tres ar-
800
que da origen a la vía de la sensibilidad dolorosa. terias están comunicadas por las arterias circunflejas
CAPÍTULO 94 Patología general de la médula espinal

FASCÍCULO
CUNEIFORME FASCÍCULO DELGADO
HAZ
ESPI O CEREBELOSO
POSTERIOR

HAZ PIRAMIOAL
CRUZADO

HAZ
RUBROESPI Al

HAZ
COLUMNA
ESPINOCEREBELOSO CELULAR
A TERIOR 1 T ERMEDIOLATERAL
HAZ RETI CULOESPI AL -
LATERAL
HAZ ESPINOTALÁMICO
LATERAL
H AZ
ESPI OTECTAL
HAZ
ESPINOOLIVAR
HAZ
HAZ PIRAMIDAL
ESPINOTALÁMICO
DI RECTO
A TERIOR HAZ HAZ
TECTOESPI Al
VESTIBULOESPI ALHAZ

RETICU LOESPI Al
ANTERIOR

Figura Médula espinal. A la derecha se representa la división de la sustancia gris en 1O láminas (números
romanos). A la izquierda se pueden observar los haces ascendentes (punteados) y descendentes (rayados) de la
sustancia blanca.

que rodean a la médula, y emiten ramas perforantes nen de las arterias intercostales de la aorta y, a nivel
terminales que irrigan la periferia medular. De la arte- de la región lumbar, procede de la arteria radicular
ria espinal anterior penetran en la médula sucesivos magna de Adamkiewicz. El mayor aporte sanguíneo
pares de arterias comisurales (izquierda y derecha), que recibe la arteria espinal anterior procede de las
que irrigan la porción central de la médula. La arte- arterias vertebrales y de la arteria de Adamkiewicz,
ria espinal anterior y sus ramas irrigan fundamental- por lo que la región dorsal es la más vulnerable a los
mente las astas anteriores, los haces espinotalámicos trastornos medulares isquémicos. Las arterias espina-
laterales y parte de las vías piramidales. Las arterias les posteriores reciben el aporte sanguíneo de las ra-
espinales posteriores irrigan las astas y los cordones mas radiculares posteriores de las arterias vertebrales,
posteriores. intercostales y lumbares.
La arteria espinal anterior discurre a lo largo de
toda la médula en la línea media. El aporte de sangre ETIOPATOGENIA
que recibe la arteria espinal anterior depende, en la
porción más alta, de ramas de la arteria vertebral. En Los procesos que originan enfermedades de la médula
la región dorsal recibe ramas radiculares que provie- espinal pueden hacerlo de forma segmentaria o sisté-
mica. Las lesiones segmentarias afectan a zonas más o
menos extensas de la médula, de forma más o menos
.__ _ arterias espinales
ramas de la arteria
posteriores
completa y por un mecanismo de compresión o de
destrucción de las estructuras nerviosas. Cuando las
red ._~ :-.,;..i,-v'.:..'.::
arteria radicular lesiones segmentarias de la médula se originan por
peri medular compresión, se suelen acompañar de afectación de
arteria radicular las raíces nerviosas sensitivas o motoras. Las lesiones
;").:"llf;;:!!~,:'.~;:!-anterior sistémicas afectan a estructuras de la médula espinal,
tanto de la sustancia blanca como gris, a veces a lo
:-----rama espinal
de la arteria largo de todo su recorrido; estas lesiones sistémicas
intercostal se originan por degeneración del sistema nervioso , o
posterior
son secundarias a alteraciones metabólicas o tóxicas
(Tabla 94-1).

Las causas principales de las lesiones segmen-


tarías son las malformaciones medulares y ra-
Figura Vascu larización medular. quídeas, los traumatismos, las enfermedades
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Tabla Etiología
de las enfermedades medulares
Lesiones segmentarias
Malformaciones
Traumatismos. radiaciones. descargas
eléctricas
Enfermedades degenerativas de la columna
vertebral
Tumores
Enfermedades vasculares de la médula

Lesiones sistémicas
Enfermedades de neurona motora
Enfermedades metabólicas
Tóxicos
Síndromes paraneoplásicos

Figura Siringomielia. RM medular. Se aprecia la


degenerativas clu la columm1 vertohrnl. los tumo-
cavidad que se extiende desde Cl hasta C6. Se asocia a
rns, las mielilis y las enformoclaclns vascularos
una malforn1Jción de Arnold-Chiari tipo 1 ( descenso de
de la m<idula.
amígcblas cerebelosas a trav6s del fornmen magnum).
La sírinp,omielfo es la malformación medular
más frecmmte. Se origina por dilatación del con-
ducto opendirnario. debido n un fallo congénito
de la apertura de los agujeros de Luschka y Ma-
gendie: otras veces os adquirida v secundaria a
traumatismos o tumores modulares (Fig. 94-4).
Los traumatismos vertebrales originan lesiones
rnedularos a través de dos mecanismos. fractura
y/o luxación vertobrnl. y constituyen la causa m,'ís
frecuentn de paraplejía y tetraplejía. Con menor
frecuencia. la médula espinal se puede afectar
por mdinción o después de descargas eléctricas.
La espondi/o::;is ce1Yicol 1:Js una enforrnoclad de-
genora t iva que afocta a la mitad inforior do las
vértebras cmvicales. y es la causa mús frecuente
de mielopatía por compresión. Esta compresión
es debida a la prolrusión ele los osteofitos en el
canal medular v a la hipertrofia del ligamento
amarillo (Fig. 94-5). Los fumare::; intrnrmquídeos
pueden ser intra o extranrndulares: los tumores
inlrnmudulares invaden y destruyen haces y es-
tructuras do la sustancia gris. mientras quo los
tumores extranrndulares comprimen la médula y
las raíces nerviosas (Fig. 94-G). Los miehtis son
procesos inflamatorios de la rn<\dula espinal,
quo originan necrosis de segmentos de sustancia
gri:,; v blanca; pueden ser de causa infecciosa,
como la poliomielitis. la sífilis. la tuberculosis
u otros microorganismos, o no infecciosa. como Figura Mielopatía cervical espondilótica. RM
la esclerosis múltiple. Las enfermedades rnBcu- medular. Puede verse la protrusión ele los osteofitos,
lores pt!E)den ocasionar síntomas por isquemia discos intervcrtebrales v ligamentos amarillos hacia el
e infarto medular (mielomalacia), casi siempre canJI medular.
CAPÍTULO 94 Patología general de la médula espinal

Figura Tumor medu lar dorsal. Lesión ovoidea


hi pertensa en la RM medu lar. El estud io anatomopato-
lógico correspondió a un meningioma. Figura Malformación arteriovenosa medu lar.
Angiografía se lectiva.

debido a una obstrucción trombótica o embóli- B 12 que causa una degeneración combinada subaguda,
ca de una zona de la arteria espinal anterior. En con afectación de los cordones laterales y posteriores
otras ocasiones, la lesión medular es secundaria de la médula espinal. La administración intratecal de
a hemorragia (hematomielia) o a compresión por metotrexato, citostático utilizado en el tratamiento
una malformación arteriovenosa (Fig. 94-7). En de leucemias y linfomas, puede originar una mielo-
sujetos sometidos a una descompresión brusca patía tóxica , transitoria o permanente, con necrosis y
pueden aparecer en la sangre burbujas de nitró- gliosis medular. En linfomas, y en carcinomas pulmo-
geno, que son atrapadas por los vasos espinales, nares de células, se pueden desarrollar mielopatías
y originar lesiones isquémicas medulares, sobre como síndrome paraneoplásico.
todo a nivel dorsal alto, y, más frecuentemente ,
afectando a los cordones posteriores.
Las lesiones medulares sistémicas se deben a FISIOPATOLOGÍA
un grupo de enfermedades caracterizadas por
Cuando se lesiona la médula espinal se produce un
afectación de las motoneuronas, a alteraciones
daño irreversible, debido al desencadenamiento de
metabólicas o deficitarias, al resultado de la ac-
diferentes mecanismos que originan la muerte neuro-
ción de tóxicos, o bien pueden aparecer como
nal. Estos mecanismos han sido estudiado fundamen-
manifestación de síndromes paraneoplásicos.
talmente en los casos de traumatismos medulares. En
Las enfermedades de la neurona motora son un estas situaciones se origina una lesión inicial, seguida
grupo de procesos degenerativos de las motoneuro- de una serie de lesiones secundarias por excitotoxici-
nas de la médula espinal, y también del tronco del dad, isquemia e inflamación, que originan un mayor
encéfalo y de la corteza motora. La forma más fre- daño neuronal.
cuente es la esclerosis lateral amiotrófica, en la que Generalmente, la lesión traumática se produce por
se produce una destrucción de las neuronas en el un impacto seguido de una compresión persistente.
asta motora y un adelgazamiento y fibrosis de la vía El trauma mecánico inicial tiende a dañar principal-
piramidal. Entre las mielopatías metabólicas, la más mente la sustancia gris central, posiblemente debido
representativa se origina por el déficit de la vitamina a que esta posee una consistencia más blanda y con
803
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

mayor vascularización que la sustancia blanca. Esta neurona motora). El reconocimiento de los sín-
lesión primaria va seguida de una serie de procesos tomas diferenciales, patrón de debilidad, atrofia
secundarios que contribuyen a un mayor daño neuTo- y fasciculaciones, tiene un valor importante en
nal. Inicialmente se produce la liberación de grandes el reconocimiento de la topografía de la lesión.
cantidades de glutamato, que originan un daño exci- La vía piramidal se interrumpirá desde el bor-
totóxico. El glutamato actúa sobre receptores AMPA, de superior de la lesión, y la segunda neurona
originando la entrada en la célula de sodio y agua, motora solamente se afectará en los segmentos
siendo responsable de la formación de edema citotóxi- medulares dañados (Tabla 94-2).
co, y sobre los receptores NMDA, activando la entrada Los síntomas sensitivos son comunes y notables
de calcio dentro de la célula, lo que desencadena una en las lesiones medulares, y pueden ser de tres
cascada isquémica que origina la muerte neurnnal, de- tipos: dolor local, afectación sensitiva radicular
bido a la activación de fosfolipasas, proteinquinasas y y por interrupción de las vías largas. El dolor
endonucleasas que lesionan los fosfolípidos de mem- local es una manifestación inicial frecuente, que
brana, proteínas y ácidos nucleicos. La lesión traumá- puede preceder al comienzo de los síntomas
tica también se acompaña de una serie de alteraciones motores, incluso durante varios meses. La alte-
vasculares. Por un lado se producen pequeñas áreas ración sensitiva radicular, debida a la afectación
de hemorragias o petequias, y por otro se originan zo- de las raíces posteriores, tiene un extraordinario
nas de isquemia debido al vasoespasmo secundario al valor en la localización de la lesión de la mé-
trauma directo, el desarrollo de trombosis intravascu- dula. La raíz C2 se encarga de la porción pos-
lar y las alteraciones en la autorregulación. Finalmente terior del cuero cabelludo, los segmentos C5 a
se produce una respuesta inflamatoria que se inicia a Dl recogen la sensibilidad del brazo y mano, de
las pocas horas y se mantiene durante días. Esta res- 12 a S2 inervan las extremidades inferiores, y
puesta estimula la liberación de citocinas inflamato- de S3 a S5 la región perineal (Tabla 94-3). En el
rias que inducen una alteración de la permeabilidad límite superior de la pérdida de la sensibilidad
vascular, responsable de un edema vasogénico, y de suele haber una zona de hiperestesia. La afec-
radicales libres que aumentan el daño neuronal. tación de las vías sensitivas largas produce un
amplio espectro de síntomas, como sensación
de adormecimiento, hormigueo, escozor o entu-
SEMIOLOGÍA
Las lesiones medulares producen una combinación
de síntomas y signos motores, sensitivos, vegetativos,
esfinterianos y alteración de los reflejos, que depen- Tabla Afectación motora según
derán de la localización de la lesión y de la extensión el nivel de la lesión medular
de la misma.
Segmentos
Los síntomas motores más característicos de las Grupos musculares
medulares
lesiones medulares son la paraplejía, o parálisis
de las extremidades inferiores y de la parte in- C3, C4 Diafragma
ferior del tronco, y la tetraplejía, o parálisis de C5, C6 Abductores del hombro y
las cuatro extremidades y tronco. Estos síntomas flexores del codo
comienzan con torpeza en los movimientos, di-
ficultad para caminar o para manejar objetos, y C6, C7 Extensores de la muñeca
va progresando hasta la parálisis completa de C6, c7, ca Extensores del codo
las extremidades. Las lesiones altas se inician
con la afectación del brazo ipsilateral, seguida ca, 01 Intrínsecos de la mano
por la pierna del mismo lado, la pierna contra- D7-D1 2 Flexión del tronco
lateral y, por último, el brazo contralateral. El
perfil evolutivo de la aparición de los síntomas L2, L3 Aductores de la cadera
medulares nos ayuda en la determinación de la L3, L4 Extensores de la rodilla
causa. En ausencia de traumatismo, el comienzo
agudo sugiere una lesión vascular; el desarrollo L4, L5 Flexores dorsales del tobillo
subagudo, en días, aparece en las mielitis infec- L5, S1 Extensores del primer dedo
ciosas o no infecciosas, y la evolución crónica del pie
es más sugestiva de los tumores de la médula
S1 , S2 Flexores del primer dedo del
espinal. pie
Los síntomas motores en las lesiones medula-
res se producen por una combinación de afecta- S2, S3, S4 Esfínter anal
ción de la vía piramidal (primera neurona mo-
804
tora), y de las astas y raíces anteriores (segunda
CAPÍTULO 94 Patología general de la médula espinal

Tabla Afectación sensitiva según Tabla Integración segmentaria


el nivel de la lesión medular de los reflejos
Segmento Segmento
Zona afectada Reflejos
medular medular
Zona anteroexterna del hombro C5 De estiramiento muscular
y brazo
Mandibular V par
Pulgar C6
Bicipital C5, C6
Dedo medio C7 Radial C5, C6
Dedo meñique ca Tricipital C6, c7, ca
Zona inte rna del brazo D1 Hoffmann c7, ca, D1
Pezon es D4 Rotuliano L2, L3, L4
Apófisis xifoides D6 Aqu íleo L5, S1 , S2
Ombligo D10 Superficiales

Pubis D12 Corneal V y VII par

Zona interna de la ext remidad L2 , L3, L4 Cutáneo abdominal medio D9-D11


inferior
Cutáneo abdominal inferior D11-L 1
Primer dedo del pie L4 Cremastérico L1 , L2
Dorso del pie L5 Plantar L5, S1 , S2
Zona externa del pi e S1 Anal S2-S4
Zona posterior del muslo S2

Zona perin eal S3, S4, S5

facilitan la aparición de trastornos tróficos de la


piel y u lceraciones por decúbito.
Los trastornos esfinterianos y la impotencia se-
mecimiento; pero a diferencia de la afectación xual en el varón son síntomas frecuentes en las
radicular, tienen poco valor para la localización lesiones medulares. En las lesiones intramedu-
de la lesión. La interrupción de los haces es- lares, los trastornos esfinterianos son precoces
pinotalámicos origina disestesias, percepción y suelen preceder a la instauración de los sínto-
anormal de las sensaciones de frío o calor, hi- mas motores, mientras que en las lesiones extra-
perestesia o hiperpatía. Los síntomas derivados medulares, la retención o incontinencia urinaria
de la afectación de los cordones posteriores y el estreñimiento son posteriores al comienzo
también comprenden parestesias, sensación de de los síntomas motores y sensitivos.
hinchazón de las extremidades o de cinturón Los reflejos se alteran en las lesiones medulares,
alrededor de las extremidades o del tronco; la dependiendo del tipo de lesión y de la evolución
pérdida de información propioceptiva origina de la misma. La arreflexia indica la interrupción
torpeza de las manos o las piernas (ataxia sen- del arco reflejo; aparece en las lesiones segmen-
sitiva) . Un síntoma característico de la lesión tarías de la médula, por la afectación a n ivel
de los cordones posteriores son las intensas pa- de las raíces o astas anteriores. Esta arreflexia
restesias que recorren la médula después de la tiene un importante valor en la localización de
flexión forzada del cuello (signo de Lhermitte). las lesiones medulares (Tabla 94-4). La actividad
La exploración de los distintos tipos de sensibi- normal de los reflejos de estiramiento muscular
lidad permitirá conocer con exactitud los haces indica el equilibrio entre los impulsos inhibido-
sensitivos afectados. res y activadores que alcanzan la motoneurona
Los síntomas vegetativos se originan por lesión inferior; por eso, las lesiones medulares de la
de la columna intermedia de la sustancia gris motoneurona superior producen un aumento de
medular, y ocasiona la pérdida del tono vasomo- los reflejos de estiramiento muscular, debido a
805
tor, sudoración y piloerección; estas alteraciones la pérdida del efecto inhibidor procedente de
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

los centros motores superiores a través de la vía la afectación de las vías largas (sensitiva o motoras).
piramidal. Este cuadro habitualmente se debe a tumores extra-
medulares.
Los síntomas de afectación medular que hemos
descrito se agrupan produciendo un número limi-
tado de síndromes medulares de gran valor clínico
(Fig. 94-8). Los más significativos son los que se indi- SÍNDROME DE LA LESIÓN COMBINADA
can a continuación. DE LOS CORDONES POSTERIORES Y LA VÍA
PIRAMIDAL
SÍNDROME CORDONAL POSTERIOR Originado por el déficit de la vitamina B12 • Se carac-
teriza por un síndrome cordonal posterior asociado
Origina pérdida del sentido postural por debajo de la a paraparesia espástica, con hiperreflexia y signo de
lesión, con ausencia de la sensibilidad a la vibración Babinski bilateral.
y signo de Romberg. La función motora y el resto de
las sensibilidades están conservadas. En ocasiones
presentan hipersensibilidad dolorosa. La causa más
frecuente es la tabes dorsal. SÍNDROME DE LA LESIÓN COMBINADA
DE LOS CORDONES POSTERIORES, VÍAS
ESPINOCEREBELOSAS Y VÍAS PIRAMIDALES
SÍNDROME RADICULOMIELOPÁTICO
Al síndrome cordonal posterior y piramidal se le aso-
Está caracterizado por la presencia de una lesión ra- cia ataxia de la marcha y de extremidades superiores.
dicular (sensitiva o motora) localizada por debajo de Este cuadro clínico es característico de la ataxia de
Friedreich y otras ataxias espinocerebelosas.

SÍNDROME DE ASTAS ANTERIORES


Característico de la poliomielitis y de las atrofias
espinales crónicas. Clínicamente se presentan como
parálisis segmentaría fláccida , con gran atrofia y arre-
flexia.

Figura Síndromes medulares: 1) cordonal pos-


terior; 2) radiculomielopático; 3) lesión combinada de
cordones posteriores y vía piramidal; 4) lesión combi-
nada de cordones posteriores, vías espinocerebelosas
y vía piramidal; 5) astas anteriores; 6) lesión combina-
da de astas anteriores y vía piramidal; 7) síndrome me-
dular anterior; 8) síndrome medular central; 9) hemi-
sección medular o síndrome de Brown-Séquard; 1O)
806
sección medu lar completa.
CAPÍTULO 94 Patología general de la médula espinal

SÍNDROME DE LA LESIÓN COMBINADA DE HEMISECCIÓN MEDULAR O SÍNDROME


ASTAS ANTER IORES Y VÍAS PIRAMIDALES DE BROWN-SÉQUARD
En la que se combina la atrofia muscular fláccida de Es de origen traumático. Hay pérdida de la función
las lesiones del asta anterior con la parálisis espástica motora y de la sensibilidad postural en el lado sec-
de las lesiones de la vía piramidal. Este síndrome es cionado, y de la sensibilidad termoalgésica en el lado
característico de la esclerosis lateral amiotrófica. opuesto.

SÍNDROME MEDULAR ANTERIOR SÍNDROME DE SECCIÓN MEDULAR


COMPLETA
Originado por infarto en el territorio de la arteria
espinal anterior. Ocasiona una pérdida bilateral de Por causa traumática o inflamatoria (mielitis trans-
la función motora y de la sensibilidad dolorosa por versa). Origina un shock medular con parálisis flácci-
debajo del segmento lesionado, con sentido postura} da completa y abolición de todo tipo de sensibilidad,
conservado. supresión de las funciones esfinterianas, impotencia
sexual y trastornos tróficos. Tras unos días o semanas
aparecen los automatismos espinales con espastici-
SÍNDROME MEDULAR CENTRAL dad progresiva y recuperación de las funciones vesi-
cal y rectal, pero sin control voluntario. Las secciones
Este síndrome puede aparecer en la siringomielia, he- medulares por encima de C3 son mortales por insufi-
matomielia, tumores intramedulares y en el infarto he- ciencia respiratoria.
modinámico por hipotensión arterial (infarto frontera
entre la irrigación periférica y central de la médula).
Se produce un trastorno disociado de la sensibilidad, SÍNDROME DEL CONO MEDULAR
solamente en los segmentos afectados, con pérdida Y COLA DE CABALLO
de la sensibilidad termoalgésica y conservación de la
Está causado fundamentalmente por tumores o por
táctil, postural y vibratoria. Si el proceso afecta a las
patología discal. Origina una lesión radicular con do-
astas anteriores , se produce parálisis fláccida, atrofia
lor en el territorio del nervio ciático y pérdida de sen-
y arreflexia en los grupos musculares afectados por
sibilidad, distribuida de forma segmentaria según las
la lesión medular; si se extiende en sentido lateral,
raíces afectadas. Si el proceso se encuentra en el cono
se acompaña de trastornos vegetativos y lesión pira-
medular se produce una pérdida de la sensibilidad
midal, con paresia espástica por debajo de la lesión.
en silla de montar. También se produce incontinencia
esfinteriana, impotencia sexual y ausencia de reflejo
anal.
El estudio de un paciente con sospecha de lesión
medular comienza con la exploración general en
busca de deformidades esqueléticas, disrafismo o
manifestaciones cutáneas de neurofibromatosis o an-
giomas cutáneos. La asociación de fiebre , dolor a la
presión sobre una apófisis vertebral y un síndrome
radicular son sugestivos de un absceso espinal extra-
dural o epidural. La radiografía simple de columna
vertebral es la primera prueba complementaria a rea-
lizar en estos pacientes. La resonancia magnética se
ha convertido en la técnica de elección para el estu-
dio de la patología medular, relegando a un segundo
lugar a la mielografía. La angiografía espinal puede
ser necesaria cuando se sospecha la presencia de una
malformación arteriovenosa. El estudio del líquido
cefaloITaquídeo debe hacerse con precaución, ya que
la punción lumbar puede descompensar a pacientes
con compresión del espacio subaracnoideo; el estu-
dio bioquímico, citológico y microbiológico ayuda al
diagnóstico de algunos procesos. La electroneuromio-
grafía y los potenciales evocados somatosensoriales
pueden ayudar a demostrar lesiones de neurona mo-
tora inferior, o de las vías sensitivas ascendentes de la
médula espinal.
807
-195
Patología general del sistema
nervioso periférico y autónomo
Manuela Lema Bouzas, Julio Pardo Fernández

SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO


CONCEPTO
El sistema nervioso periférico (SNP) comprende to-
das las estructuras neurales situadas por fuera de las
membranas piales de la médula espinal y del tronco
encefálico; por esta razón, el primer y segundo par
craneal se consideran parte del sistema nervioso cen-
tral. En la médula espinal, las partes del SNP situadas
dentro del canal raquídeo reciben el nombre de raíces
nerviosas. Se denominan pares craneales los nervios
que salen de la superficie ventrolateral del tronco en-
cefálico.

RECUERDO ANATOMOFISIOLÓGICO
La raíz nerviosa dorsal posee un engrosamiento oval
denominado ganglio espinal. Después de atravesar la
duramadre, las raíces se unen para formar los nervios
espinales . Existen 31 pares de nervios espinales (8
cervicales, 12 dorsales , 5 lumbares, 5 sacros y 1 coc-
cígeo). Estos nervios espinales están conectados con
el sistema nervioso autónomo mediante los ramos
comunicantes, que portarán fibras nerviosas simpá-
ticas eferentes y aferentes. Después, los nervios espi-
nales se dividen en ramos centrales y dorsales, que
contienen fibras de ambas raíces nerviosas y un nú-
mero variable de fibras simpáticas (Fig. 95 -1). Estos
nervios periféricos, excepto en la región dorsal, don-
de conservan su identidad individual como nervios
intercostales, se reúnen en diferentes patrones para
formar los plexos nerviosos cervical (Cl-C4}, braquial
(C5-D1}, lumbar (L1-L4) y sacrococcígeo (L4-cola de
caballo).
Los nervios periféricos están constituidos por axo-
nes amielínicos y mielínicos que tienen sus cuerpos
neuronales en las astas anteriores, ganglios de la raíz
dorsal o en los ganglios simpáticos. Las vainas axo-
808
nales de tipo mielínico o amielínico están cubiertas
CAPITULO 95 Patología general del sistema nervioso periférico y autónomo

Periostio
Espacio epidural: plexo venoso
vertebral interno posteri or
Du ra madre espinal
EsRac io subdural
:""!!~~k" Espacio subaracnoideo
R. posterior del

Ganglio sensitivo del . espinal


R. posterior del tronco del . espina l
Ganglio sensitivo del . espinal Epineurio
R. anterior del tronco del . espinal
R. comuni ca nte del tronco del . espinal
R. anteri or del . esp inal R. meníngea del tronco del . espinal

Figura Disposición anatómica de las raíces nerviosas y nervios espinales.

por las células de Schwann, aunque en muy poca encuentra rodeada por tejido conectivo denominado
proporción en el caso de fibras amielínicas. En las epineuro.
fibras nerviosas mielinizadas, el axón está rodeado La irrigación de los nervios periféric os está for-
de forma segmentaría (internódulos) por múltiples mada por una extensa red arteriolar anastomótica
capas de membranas de la célula de Schwann. Entre longitudinal, situada en el epineuro, y conectada
estos segmentos existen porciones cortas de axón con otra red anastomótica capilar localizada entre los
con escasa o nula vaina de mielina, denominados fascículos de axones que constituyen el nervio. Este
nódulos de Ranvier (Fig. 95-2). Esta estructura se sistema es muy eficaz, por lo que resulta difícil que
la obstrucción de un solo vaso nutricio provoque al-
teraciones en el nervio; para ello será necesaria una
lesión vascular más extensa.
La extraordinaria longitud de los axones en algu-
nos nervios periféricos plantea problemas para el
transporte de sustancias sintetizadas en el cuerpo
de las neuronas. Existe un transporte axonal rápido,
para sustancias claves, que llega a alcanzar velocida-
des de 400 mm/día; otras sustancias se mueven por
transporte axonal lento, a una velocidad de 1 a 4 mm/
día. Este sistema es bidireccional: además de estos
dos flujos anterógrados , existe un sistema retrógrado
que transporta materiales desde la periferia hasta el
cuerpo celular.
La velocidad de conducción nerviosa en los axones
amielínicos es lenta (1 m/s), y tiene lugar por transmi-
sión de una onda continua de despolarización (poten-
cial de acción) que se desplaza a lo largo del axón. En
las fibras nerviosas mielinizadas, la mielina aumenta
la resistencia transversal de los internódulos, mien-
tras que la resistencia de los nódulos se mantiene
normal; esto condiciona que el potencial de acción
avance a saltos y sea mucho más rápido , llegando a
velocidades de 60-70 mis.

ETIOPATOGENIA
Los trastornos de la función del SNP pueden ser se-
cundarios a la afectación primaria de los cuerpos neu-
Figura Estructura de una fibra nerviosa miel in i- ronales (neuronopatías}, de los axones (axonopatías
809
zada. o neuropatías axonales}, de la mielina (mielinopatías
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

patías adoptan una distribución predominante-


/~
\:: :(
\f
(<ti )~---...
.--,...1,,,,. j~
---y mente distal, tanto en el sentido periférico como
en los axones que se dirigen hacia las columnas

~ ~
medularos (dying-bGck o muerte relrógrada).
Aunque en las axonopatías generalizadas la le-
w sión inicial es distal, como efocto secundario
se produce una alteración del cuerpo neuronal
,¡,
9j,i (;\ ,,,,
oíl
(Fig. 95-3D).

~
tl¡p 1:,
'º v:. La afectación de la vaina de mielina del nervio
,,.!o
D

1
l 010
'
,O o:D
periférico puede producirse de forma directa
º'º
1
o:o ,,,
P¡• O!O
o¡o
º:o" o por interferencia con la función ele la célula
¡\
01
o\c, \\~ íl; ''º
~: t
¡, ele Schwann. La lesión do estas células puede
1 o\o olº o o 1

/\ ll e 1) E F deberse a procesos inflamatorios de base inmu-


nológica (síndrome de Guillain-Barré). interfe-
Figura Tipos ele afectación ele las fibras nervio-
rencia con fll melabolismo proteínico celular
sas en los distintos tipos ele neuropatía. A, fibra normal;
(neuropatía diftérica), corn presión mecánica,
B, neuronopatías; C, clegene1·ación walleriana; D, axo-
o a enformedades hernclitarias. La consecuen-
nopatía genera I izada; E, clesmiel inización selectiva; F,
cia de la lesión de las células de Schwmm es
neuropatía combinada (axonopatÍil y desmielinización).
una desmielinizoción selectiva, con conserva-
ción del axón (Fig. 95-3E). La desmielinización
puede estar limitada a la región de los nódulos
o neuropatías desnüelinizanles) o del tejido conecli- de Ranvier (desmielinización paranodular). o
vo que rodeo ol nervio (Fig. 95-3). afectar a los segmentos internodulares (cles-
mielinización segmentaría). En ambos casos,
En las neuronopatías se lesiona inicialmente la distribución de la lesión es ele predominio
el cuerpo neuronal y luego se produce una de- distal. La remielinizoción es un proceso lento.
generación, tanto en sentido anterógrado como que va originando una capa de mielina fina. La
retrógrado. de los axones y vainas de mielina disminución dol grosor de la vaina de mielina
(Fig. 95-3B). En estos procesos, pueden verse condiciona una lentificación ele la velocidad de
afectadas las neuronas motoras del asta anterior conducción nerviosa, que puede llegar a ser in-
(neuronopatía motora) o las neuronas sensitivas forior a 1 O m/s.
del ganglio espinal (neuronopatía sensitiva). Las El tejido conectivo y los vasos nutricios que ro-
nfmronopatías motoras se presentan en trastor- dean al nervio periférico pueden ser afectados
nos hernditarios (atrofias musculares espinales), por una gran cantidad ele procesos (conectivopa-
procesos degenerativos esporádicos (esclerosis tías, enforrnedades metabólicas, aterosclerosis),
lateral amiotrófica) v las neuronopatías sensiti- originando lesiones combinadas por alteración
vns en neoplasias (mmropatía paraneoplásica) o del axón y ele las vainas de mielina (Fig. 95-:lF).
por exposición a sustancias tóxicas (compues- La recuperación dependerá ele la intensidad de
tos orgánicos de mercurio, hiporvitaminosis por la lesión axonal.
piricloxina). La recuperación es difícil cm estos
casos.
Ln afectación primaria de los axones puede sc"r
focal o generalizada.
Las axonopatías focales suelen ser el resulta- Las enfermedades del SNP (neuropatías periféri-
do ele traumatismos o de necrosis por isquemia. cas) se pueden clasificar según diferentes criterios.
En estos casos. se origina una degeneración del Dependiendo de la lesión anatomopatológica, las
axón distal a la lesión, conocida con el nombro neuropatías periféricas pueden sor neuronopatías,
de degeneración walleriana (Fig. 95-3C). La re- axonopatÍas focales o difusas (neuropatíos oxonale8)
cuperación del nervio con una axonopatía focal o mielinopotías /nmiropatías desmielinizontes); en
es muy lenta (1-2 mm por día), y habitualmente ocasiones, las lesiones son mixtas.
incompleta. Según su distribución topográfica, las neuropa-
En las axonopatías generalizadas, la lesión tías periféricas se clasifican en mononeuropatías,
del axón es el resultado dn interforencias crn- mononeuropotías múltiples y polineuropotías. La
zimáticas que bloquean los sistemas ele aporte losión aislada ele una raíz o de un nervio periférico
energético. Como las enzimas son sintetizadas se denomina mononeuropGtía, y se suele producir
en el cuerpo neuronal y luego son transportadas por procesos que producen un clafio local, como los
por los axones, la probabilidad de una lesión traumatismos o el atrapamiento nervioso (Fig, 95-4).
7rfC) axonal será mayor al cmmEmtar la distancia con En ocasiones. se producen varias losionos aisladas
el cuerpo neuronal. Por tal razón, estas axono- en diversos nervios, bien de forma simultánea o se-
CAPITULO 95 Patología general del sistema nervioso periférico y autónomo

cuencial; este proceso recibe el nombre de mononeu-


ropatía múltiple, y está relacionado a menudo con
vasculitis y diabetes mellitus. El trastorno difuso,
bilateral y predominantemente distal del SNP recibe
el nombre de polineuropatía; si afecta también a las
raíces nerviosas se denomina polirradiculoneuropa-
tía. Las polineuropatías y polirradiculoneuropatías
se producen por procesos sistémicos que afectan al
SNP, metabólicos, carenciales, tóxicos o inmunoló -
gicos.
Clínicamente, las neuropatías periféricas se clasi-
fican por el curso evolutivo (agudas, subagudas, cró-
nicas y recurrentes) o por el tipo de fibras afectadas
(motoras, sensitivas o mixtas).

SEMIOLOGÍA
Consisten en la tríada de manifestaciones motoras y/o
sensitivas, con una determinada distribución y carac-
terísticas , y una alteración de los reflejos musculares.
También podrán estar presentes síntomas o signos
de afectación del sistema nervioso autónomo, que se
describen al final del capítulo. En la Tabla 95-1 se
detallan los diversos síntomas y signos «positivos» y
«negativos» de las neuropatías periféricas.

Alteraciones motoras
La debilidad o parálisis que aparece en las neu-
Figura Parálisis de los nervios cubital y radial ropatías periféricas puede ser debida a la degene-
(mano caída). ración del axón o a un bloqueo de la conducción

Tabla Síntomas positivos y negativos de neuropatía periférica


Síntomas y signos Negativos Positivos
Motores Debilidad Fasciculaciones
Hipo/arreflexia Calambres
Hipotonía Mioquimias
Piernas inquietas
Sensitivos

Fibras gruesas -1, Sensibilidad vibratoria, táctil, artrocinética Parestesias


Hipo/arreflexia Disestesias
Ataxia
Fibras finas -1, Sensibilidad algésica y térmica Dolor urente
Dolor paroxístico
Dolor lancinante
Autónomos Hipotensión ortostática Hipertensión
-1, Sudoración i Sudoración
Impotencia
Retención urinaria
811
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervíoso

por desrniolinización. Habitualmente, el patrón de cambios tróficos (mal perforan te plan lar, artropa-
ele afectación es de predominio distal y comien- tía dn Charcot).
za en los pies. El paciente tiene dificultad para Las parestesias son una forma ele alteración st➔ nsi­
elevar la punta do los pies, por lo que camina tiva subjetiva frecuente en los pacientes con neuropa-
flexionando exngeradamente las rodillas. con un lía periférica. y en ocasionns se acompañs de una rns-
tipo de marcha denominada estepaje. Mús ado- puesta excnsiva y muy molosta al tscto (hiperpatía).
lante se afectan los músculos ele la mano. Con En algunos tipos de 1rnuropatías (diabética, urémica,
menos frncuencia, las neuropatías periféricas alcohólica). las parestesias y la hiperpatía son espe-
cursan con debiliclacl ele los músculos proxima- cislmente intensss e incapacitantes, y so manifiestan
les (amiotrofia diabética. neuropatía porfírica) o como sensación de pie urente.
con afnctación selnctiva ele las nxtremidades su- Con mnnor frecuencia, algunos nnformos refieren
periorns (neuropatfa arniloidna. neuropatfa por que las molestias qmi sienten en los pies y en las
plomo). En algunas ocasiones. se produce una piernss sn alivian con ni movimionto (síndrome de
afoctación ele todos los músculos de las extre- piernas inquietas).
rnidaclns y del tronco. originúndose una paráli- La aparición dn dolor espontóneo en el territorio
sis dn ls musculaturn respiratoria (síndrome de periférico ele un nervio se observa en algunas rnono-
Guillain-Barré). nemopatías (neuralgia del trigémino): en ocasiones,
La atrofia muscular us mús intensa y temprana el dolor aparece do forma secundaria íl traumatismos
en las neuropalías por degeneración axonsl que en algún tronco nervioso o plexo (mediano, tibia],
un las dnbidas a desmielinización segmentaría. plexo braquial), y se agrava por foclores emocionales;
La prnsencia dn fasciculaciones, por contrac- este cuadro recibn el nombre de causalgia o síndrome
dún espontúnea de unidades motoras aisladas. de dolor regional complejo tipo II.
es mós cmacterística de la lesión do las astas
anteriores do la médula (esclerosis lateral smio- Alteración de los reflejos musculares
trófica), pero puede aparecer tambión en las La disminución de la intfmsidad de [¡¡ respuestn de
neuropatías periféricas. los reflejos nrnsculares es el signo mús precoz y más
Otras rnanifestsciones motoras menos l'rncucm- conslanln de lss nouropatías periféricas. La dismi-
tos son los calambres, o la aparición de rigidez nución (hiporreflexia) o abolición (arreflexia) de
muscular en relación con un síndrome de acti- los reflejos no guarda relación con In intensidad de
vidad continua de fibras musculares (síndrome ls afoct8C:ión motora o sensitiva. La disminución de
do Isaac o nnuromiotonía), originsclo por descar- los rnfhijos os mós intensa on las neuropatías on las
gas n1pet itivas tl!l las fibras nmviosas motoras qun uslán afoct,1dss las fibras con cspas mielínicss
(mioc¡uimias o descargas neuromiotónícas). mús gruosas. En las nnuropatías de fibras arnielínicas.
o con capa fina ele mielina. los rnflejos est,111 presen-
Alteraciones sensitivas tes. incluso con abolición ele la scmsibilidad térmica
Las altoracionns de la sensibilidad presentes cm las y dolorosa. De acuerdo con la distribución de las al-
neuropatías periféricas también prndominan en las teraciones motoras y S(msiti\·as. nl reflejo aquílno es
partes distales cln los nervios. y en las polineuro- ni que so ve sfectado mús tempranamente. En los an-
patías adoptan la distribución en guante y calcetín. cianos es frocuontfl una abolición del reflejo aquíleo.
En la mayor parte ele las neuropatías, la altflnic:íón incluso un ausencia de onformedad fkll SNP.
sensitiva engloba a todos los tipos do sensibilidad.
sunque no con la misma intonsídad: la snnsibilidad Estudio de una neuropatía periférica
vibratoria s1rnle ser la más afectada. En otros casos, Comienza con ls anamnosis y la exploración neuro-
se produce una al'ectación irnloctíva do algunos tipos lógica. Las pnrnbas diagnósticas complementarias
do sensibiliclsd. Si se lesionan las fibras mielínicas comprenden el e8tudio efor:tromiográfíco (electro-
más grandes. ni pacinnte presenta abolición de ln miografía do aguja y estudios de conducción nnr-
sensibilidad artrocinótirn. vibratoria y túctil profun- vioss motora y sensitiva). que permite confirnrnr el
da. diagnóstico ele una lesión nerviosa periférica, nsts-
Ls pérdida ele la sensibilidad postura[ puede con- blecer ol tipo de fibras afoctsdas (motoras, snnsitivas
dicionar la aparición do ataxia (ataxia sensitiva), mo- o ambas), la cronicidad y actividsd del proceso y,
vimümtos involuntarios de las extremidadc,s superio- sobre todo, diforenciar entrn neuropatías axonales y
nis (pseudoatetosis) o de temblor intencional. dosmie]inizantes.
En las lesiones de las fibras amielínicas o escasa- En caso de lesiones axonales, existirá una marcada
mente minlinizsdas predominn la abolición de las disminución de la amplitud de las respuestas evoca-
sensibilidad térmica y dolorosa y de la función autó- das motoras y/o sensitivas, con preservación do las
noma (véase mús adelante). En estas últinrns ncrnropa- velocidades de conducción nerviosa, mientras que
tfos, la abolición del dolor y la presencia ele alteracio- lm, neuropatías desmiolinizsnles sn caracterizan por
812
nns de la función autónoms condiciona la presencia una intensa disminución de la velocidad dn conduc-
CAPÍTULO 95 Patología general del sistema nervioso periférico y autónomo

M edi ano derecho di stal

Medi ano derecho prox imal


>
2,00 mV
15 ms/Div

Figura Estudio de conducción nerviosa motora en el nervio mediano derecho, característico de una neu-
ropatía desmielinizante, con marcada dism inución de la velocidad de conducción nerviosa (12 m/s), y preserva-
ción de la amplitud del potencial evocado motor.

ción nerviosa (Fig. 95-5), con relativa preservación de milotegmental y el fascículo longitudinal dorsal.
la amplitud. En las axonopatías, la electromiografía, Estas vías conectan con la formación reticular del
de aguja mostrará, además, acusados cambios neuro- mesencéfalo y terminan en los núcleos de los pares
génicos. craneales y neuronas situadas en el asta intermedio-
En las polirradiculoneuropatías, el líquido cefa- lateral de la médula espinal (Fig. 95-6). La estimu-
lorraquídeo presenta aumento de la concentración lación del hipotálamo anterior produce un aumento
de proteínas y ausencia de células (disociación albu- de la actividad parasimpática, que favorece la actitud
minocitológica). La biopsia del nervio sural (nervio de reposo y recuperación (bradicardia, hipotensión
sensitivo ubicado en las extremidades inferiores) arterial, aumento del peristaltismo intestinal, saliva-
puede ser de utilidad para el diagnóstico etiológico ción, contracción de la vejiga, contracción pupilar e
de algún tipo de neuropatía periférica, sobre todo en hipopnea), mientras que la estimulación del hipotá-
casos de sospecha de vasculitis, sarcoidosis o ami- lamo posterior origina un aumento de la actividad
loidosis. simpática y facilita la defensa y la actividad (taqui-
cardia, hipertensión, disminución del peristaltismo
intestinal y de la contracción de la vejiga, dilatación
SISTEMA NERVIOSO AUTÓNOMO pupilar e hiperpnea).
Las fibras del SNA tienen una neurona preganglio-
CONCEPTO nar y otra posganglionar, e inervan la musculatura
lisa de todos los órganos, el músculo cardiaco y las
El sistema nervioso autónomo (SNA) regula todos los glándulas. Las fibras preganglionares son mielínicas,
órganos viscerales del cuerpo humano, y sus respues-
dejan las raíces espinales como ramos comunicantes
tas son independientes de la voluntad. El SNA y el blancos y establecen sinapsis en los ganglios. Las
SNP están íntimamente vinculados por sus neuronas fibras posganglionares son amielínicas , y se reúnen
aferentes y componentes centrales, y múltiples fibras con los nervios espinales a través de los ramos comu-
del SNA se ubican en los nervios periféricos. Desde nicantes grises. Algunas fibras simpáticas atraviesan
el punto de vista anatómico y funcional , el SNA se los ganglios y establecen sinapsis en ganglios más
divide en simpático y parasimpático. periféricos (Fig. 95-7). Las fibras periféricas parasim-
páticas tienen sus núcleos centrales en el tronco del
encéfalo, en los núcleos de los pares craneales III,
RECUERDO ANATOMOFISIOLÓGICO
VII, IX y X, y en la médula espinal sacra. Las fibras
El hipotálamo es el componente central superior de periféricas simpáticas tienen sus núcleos en las astas
integración del SNA. A su vez, el hipotálamo recibe intermediolaterales de la médula torácica y lumbar
influencias de la corteza cerebral (frontal premotora) superior.
y del sistema límbico, que abarca el hipocampo, la Las fibras eferentes del SNA, simpáticas y parasim-
amígdala, las áreas olfatorias y el área septal. El hi- páticas, inervan un mismo órgano y ejercen sobre él
potálamo organiza la información sensorial para in- efectos antagónicos , a través de neurotransmisores di-
ducir pautas de comportamiento en relación con la ferentes: la acetilcolina en las terminaciones parasim-
preservación del individuo (satisfacción del hambre, páticas, y la noradrenalina en las simpáticas. A nivel
sed y necesidades sexuales) y el mantenimiento de la ganglionar, el neurotransmisor de las fibras simpá-
homeostasis (funciones metabólicas). ticas y parasimpáticas es la acetilcolina. Los efectos
El control del SNA por el hipotálamo se realiza antagónicos que produce la liberación de los distintos
a través de la hipófisis y de vías nerviosas descen- neurotransmisores se consigue por la estimulación
813
dentes directas, no cruzadas, que siguen el haz ma- en la musculatura lisa de diferentes receptores. La
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Haz circunflejo
(de Meynert)

Figura Control del SNA por el hipotálamo. Vías nerviosas descendentes directas y control hormonal.

estimulación de los receptores a (a 1 , y a 2 ) produce ETIOPATOGENIA Y CLASIFICACIÓN


vasoconstricción, relajación intestinal y dilatación
pupilar, mientras que el estímulo de los receptores Las manifestaciones clínicas de las enfermedades que
cursan con alteración del SNA se deben más a me-
~ origina vasodilatación, relajación bronquial (~ 2 ) y
nudo a una insuficiencia que a una hiperfunción de
aumento de la contractilidad cardiaca (~ 1 ).
dicho sistema.
Los trastornos autonómicos pueden aparecer solos,
asociarse a otros cuadros clínicos o ser secundarios a
Tronco simpático otras enfermedades (Tabla 95-2).
con ganglios Las disfun cion es autonómicas aisladas aparecen
paravertebrales
en la insuficiencia autonómica pura o hipotensión
Nervio ortostática crónica idiopática, y en trastornos auto-
nómicos , agudos o subagudos, que pueden ser origi-
nados por infecciones víricas o alteraciones inmuno-
lógicas.
En otras ocasiones, la insuficiencia autónoma
acompaña a enfermedades neurológicas, como la
omunica hte enfermedad de Parkinson o el parkinsonismo o el
1
1 idiopático o con cuerpos de inclusión de Lewy, o se
i presenta asociada a manifestaciones piramidales, ex-
comunica nte / !
Tronco bl anco Fibra tra piramidales y cerebelosas (atrofia multisistema).
parasimpático posganglionar Con mayor frecuencia, la disfunción autónoma es un
proceso secundario a otras lesiones del sistema ner-
vioso central (lesiones hipotalámicas y de la médula
espinal) o periférico (síndrome de Guillain-Barré,
neuropatía diabética o amiloidea), a fármacos (ansio-
líticos, antidepresivos, hipotensores, citostáticos), a
tóxicos (alcohol, mercurio) o de origen genético (neu-
ropatías sensitivas y autónomas hereditarias).

Pa red
intestinal SEMIOLOGÍA
Los primeros síntomas que presentan los pacientes
814 Figura Disposición anatómica del SNA. con disfunción autónoma suelen ser leves, insidio-
CAP[TULO 95 Patología general del sistema nervioso periférico y autónomo

autónomas. La evaluación de la función autónoma se


realizará con pruebas de función cardiovascular, pu--
Tabla Trastornos del sistema pilares y de sudoración. La polisomnografía (moni-
nervioso autónomo torización de diversos parámetros biológicos durante
el sueño, además del electroencefalograma) puede ser
l. Aislados de utilidad para descartar causas orgánicas de impo-
Insufici encia autónoma pura (hipotensión tencia, ya que permite el registro de las erecciones
ortostática crónica idiopática) fisiológicas que normalmente ocurren en la fase REM
Disautonomías agudas y subagudas del sueño.
11. Asociados a otros cuadros clínicos
Con parkinsonismo Pruebas de función cardiovascular
Con atrofias multisistema La maniobra de Valsalva evalúa globalmente el arco
111. Secundarios reflejo barorreceptor. Consiste en la realización de
Lesiones en el sistema nervioso central una espiración forzada con la glotis cerrada, para lo-
Neuropatías periféricas (diabetes, grar un aumento de la presión intratorácica. Los tra-
amiloidosis, síndrome de Guillain--Barré) zados directos de la presión arterial recogidos al rea-
Fármacos lizar la maniobra de Valsalva muestran normalmente
Tóxicos cambios característicos de la presión sanguínea y de
la frecuencia cardiaca: hay una subida brusca inicial
IV. Neuropatías sensitivas y autonómicas de la presión sanguínea, equivalente al incremen-
hereditarias (NSAH), 1--V to de la presión intratorácica (fase 1); después, debido
a la caída del volumen de expulsión, hay un descenso
gradual de la presión sanguínea y un aumento de la
frecuencia cardiaca (fase 2); al disminuir la presión
intratorácica, hay una brusca caída de la presión san-
sos en su presentación y de difícil diagnóstico. Las guínea, y durante unos pocos latidos, la tensión dife-
manifestaciones predominantes son las derivadas de rencial puede hacerse muy pequeña, debido a la aspi-
la hipotensión ortostática. Se producen por isquemia ración de gran parte de la sangre dentro del reservorio
cerebral inducida por la postura erecta; los pacientes venoso pulmonar (fase 3); antes de que la fisiología
presentan episodios de mareos, síncopes, amaurosis de la circulación vuelva a la normalidad, la presión
ceguera transitoria, sensación vertiginosa y, a veces, sanguínea aumenta por encima del nivel original, la
convulsiones. La pérdida de consciencia suele ser presión diferencial se ensancha y disminuye la fre-
brusca, sin pródromos. El dato fundamental de la ex- cuencia cardiaca (fase 4), debido principalmente a un
ploración física en estos pacientes es la disminución reflejo vasoconstrictor originado por la baja presión
de la presión arterial sistólica y diastólica al adoptar diferencial, que estimula los barorreceptores aórticos
la posición erguida, sin que vaya acompañada de la y carotideos durante el periodo de sobrecarga. La au-
normal aceleración de los latidos cardiacos. sencia de la fase 4 de la respuesta a la maniobra de
La anhidrosis, o incapacidad para sudar, es otra Valsalva es el hecho característico de la hipotensión
manifestación que puede presentarse en pacientes ortostática crónica idiopática.
con disfunción autónoma; puede ser generalizada o Otras pruebas pueden determinar el lugar afectado
afectar a un determinado territorio corporal (p. ej., la del arco barorreceptor (Fig. 95--8). La prueba de hiper-
mitad de la cara en las lesiones de los ganglios simw-- ventilación demuestra una reducción de la presión
páticos cervicales). La impotencia sexual es frecuente arterial después de una hiperventilación mantenida
en los varones. La nicturia se atribuye a la mejor per- durante 15 segundos, e indica el correcto funciona-
fusión renal que tienen durante el decúbito. También miento del centro vasomotor del bulbo. Al introducir
pueden presentar incontinencia o retención urinaria . las manos del paciente en agua helada durante un mi-
La presencia de anisocoria o de un síndrome de Hor-- nuto , se produce un aumento de la presión arterial;
ner completo (ptosis, enoftalmos y miosis) indica la la alteración de la prueba presora por el frío indica
afectación del ganglio simpático cervical superior, una lesión en las fibras eferentes simpáticas. El es-
del ganglio cilioespinal o de la vía simpática central trés producido por una sustracción seriada produce
en el tronco encefálico. También puede existir estre- un aumento de la presión arterial, y la anulación de
ñimiento o diarrea. la respuesta ante esta prueba de cálculo localiza la
lesión en las vías eferentes simpáticas del centro va-
EXAMEN DE LA FUNCIÓN AUTÓNOMA somotor bulbar. La prueba de la fenilefrina, después
de la administración intravenosa de 25-50 microgra-
Es complicado, por la superposición de los síntomas mos, produce un aumento de la presión arterial si los
y por los mecanismos neuronales, hormonales o quí- a-receptores de la pared arteriolar están intactos, y
815
micos, que compensan muchas de las disfunciones origina una disminución de la frecuencia cardiaca si
Semiología y fi siopatología de las enfermedades del sistema nervioso

VÍAS EFERENTES

MAN IOBRA DE
VALSALVA

Prueba ele función global del


arco reflejo barorreceptor

Figura Arco reflejo barorreceptor y pruebas uti lizadas para la eval uación de su función.

las vías eferentes del arco barorreceptor están ínte- simpática posganglionar, la adrenalina produce mi-
gras. La administración de 0,03 mg/kg de atropina por driasis, y si existe una denervación parasimpática, la
vía intravenosa origina un aumento de la frecuencia metacolina origina miosis. La instilación de cocaína
cai·diaca y de la presión arterial; la prueba de la atro- origina midriasis en la pupila normal y ningún efecto
pina se altera por la lesión de las fibras eferentes car- en la lesión simpática .
diacas del vago. La ausencia de respuesta hipertensi-
va tras la prueba de la tiramina (1-3 mg i.v.) indica
un bloqueo de la liberación de noradrenalina en las Pruebas de sudoración
terminaciones nerviosas simpáticas. El bloqueo de la respuesta de la sudoración y del flujo
vascular en la palma de la mano, tras aumentar 1 ºC
la temperatura corporal, indica lesión de las vías sim-
Pruebas de función pupilar
páticas eferentes, desde el hipotálaino hasta la super-
La instilación ocular de gotas de adrenalina y cocaína ficie corporal. La ausencia de respuesta a la pilocar-
permite evaluar la inervación simpática de la pupila, pina localiza la lesión en la inervación de las propias
mientras que la metacolina valora la lesión parasim- glándulas sudoríparas. Después de la inyección de
pática. La adrenalina y la metacolina carecen de efec- metacolina intradérmica, se origina sudoración, que
to sobre la pupila normal; en casos de denervación se bloquea en las lesiones posganglionares completas.

816
l96
Patología general de las meninges
y el líquido cefalorraquídeo.
Síndrome meníngeo. Hidrocefalia.
Hipertensión intracraneal
Manuela Lema Bouzas, José María Prieto González

MENINGES
Son las tres membranas que cubren el cerebro y la
médula espinal, denominadas duramadre (la más
externa), aracnoides (intermedia) y piamadre (la más
interna). La duramadre es gruesa, dura y fibrosa (pa-
quimeninge), y está adherida a la superficie interna
de los huesos craneales; se prolonga en septos que
constituyen la hoz del cerebro, el diafragma de la silla
turca, la tienda del cerebelo (o tentorium) y la hoz del
cerebelo. La hoz del cerebro, situada en la cisura in-
terhemisférica, contiene en su borde superior el seno
(venoso) longitudinal o sagital superior, y en su borde
libre el seno sagital inferior. A través del diafragma
selar pasa el infundíbulo hipofisario, y debajo de este
se sitúa la hipófisis en el seno esfenoidal. La tienda
del cerebelo es el límite entre la fosa craneal superior
e inferior; su parte posterior limita a los senos trans-
versos, y su parte anterior contiene los senos petrosos
superiores; la porción central anterior es un borde
libre que rodea al tronco del cerebro. La unión de la
hoz del cerebro con la tienda del cerebelo contiene el
seno recto , que se une a los senos transversos en la
prensa de Herófilo.
La aracnoides y la piamadre constituyen las me-
ninges blandas (leptomeninges); la piamadre está
íntimamente unida a la superficie cerebral y penetra
en los surcos del encéfalo y la médula; además, ro-
dea a las raíces nerviosas y continúa en el neurilema.
El espacio situado entre la piamadre y la aracnoides
se denomina espacio subaracnoideo, y contiene el
líquido cefalorraquídeo; este espacio se expande en
determinadas localizaciones, formando cisternas; las
principales son la cisterna magna (entre el cerebelo y
las partes superior y posterior de la médula espinal,
comunicada con el cuarto ventrículo por el agujero de
Magendie), cisterna cerebelobulbar, pontina, interpe- 817
sE. e o~ Semiología y fisi opatología de las enfermedades del sistema nervioso

duncular, del quiasma óptico, de la lámina termina- El endotelio vascular que constituye la barrera he-
lis, del cuerpo calloso y superior (entre la parte supe- matoencefálica impide que entren en el líquido ce-
rior del cerebelo y lámina cuadrigémina). El espacio falorraquídeo sustancias de gran tamaño molecular,
subaracnoideo penetra en vainas que acompañan a pero pueden difundir componentes de pequeño peso
las arterias penetrantes en la sustancia cerebral, cons- molecular.
tituyendo los espacios de Virchow-Robin. El espacio
subaracnoideo está atravesado por finas trabéculas
que unen la piamadre con la aracnoides. FUNCIONES
Las principales funciones del LCR son:
FISIOLOGÍA DEL LÍQUIDO Proporcionar un soporte físico y protección al
CEFALORRAQUÍDEO (LCR) cerebro y a la médula espinal contra presiones
externas.
VOLUMEN Controlar el entorno químico del sistema nervio-
so central, incluido el pH, que está en equilibrio
El volumen total del LCR es de 130 ml a 150 ml; de con el pH del líquido extracelular del sistema
ellos, 75 ml están en las cavidades intracraneales nervioso e influye en el control de la ventilación
(sistema ventricular y espacio subaracnoideo, con pulmonar y del flujo sanguíneo cerebral.
sus cisternas), y el resto, en el espacio subaracnoideo Actuar como vehículo para la excreción de pro-
que rodea a la médula espinal y raíces de la cola de ductos de la actividad metabólica cerebral.
caballo, hasta el nivel de la segunda vértebra sacra. El Servir para el transporte intracerebral de algu-
volumen de cada ventrículo lateral se estima en 7 ml nas hormonas y neurotransmisores.
y el del tercero y el cuarto ventrículo en 1 ml.

COMPOSICIÓN
FORMACIÓN , CIRCULACIÓN Y ABSORCIÓN
El LCR normal es claro e incoloro. Contiene de O a
El LCR se forma principalmente en los plexos coroi- 4 células por ml, y estas son mononucleares (linfo-
deos de los ventrículos cerebrales, por un proceso de citos). El contenido de proteínas es de 15-45 mg/dl
transporte activo, no por simple difusión, y es segre- en el líquido obtenido por punción lumbar, mientras
gado a la cavidad ventricular; en los plexos coroideos, que si el líquido se obtiene por punción ventricular o
la sangre capilar está separada de la luz ventricular cisternal los valores son menores (5 -15 mg/dl y 15-25
por un endotelio, una membrana basal y el epitelio mg/dl, respectivamente). La proporción de inmunog-
coroideo. Hay también una formación extracoroidea lobulina Ges del 5 % al 12 % de las proteínas totales.
en el cerebro y la médula espinal (secreción transe- La concentración de glucosa es de 50-80 mg/dl (2,9-
pendimaria). Desde los ventrículos laterales, el LCR 4,6 mmol/1), más de la mitad de la glucemia determi-
pasa, por los agujeros de Monro, al tercer ventrículo, nada simultáneamente.
y de aquí, por el acueducto de Silvia, al cuarto ven-
trículo; este comunica con las cisternas subaracnoi-
deas por el agujero de Magendie en la línea media y PRESIÓN
por los agujeros de Luschka a ambos lados. El LCR
fluye entonces hacia abajo y arriba por el espacio La presión normal del LCR, medida durante la pun-
subaracnoideo de la médula espinal, y asciende sobre ción lumbar en un adulto acostado y relajado, es de
la convexidad de los hemisferios cerebrales. La ma- 60-180 mm del líquido (de 200 a 250 mm si está sen-
yor parte de su absorción se hace en las vellosidades tado) . La presión asciende al toser o al comprimir las
aracnoideas, consistentes en extensiones del espacio venas yugulares (maniobra de Queckenstedt).
subaracnoideo rodeadas de epitelio de aracnoides y
endotelio de los senos venosos, principalmente el
longitudinal superior. El mecanismo reabsortivo de- PUNCIÓN LUMBAR
pende de las diferencias en las presiones hidrostática
y coloidosmótica entre el LCR y la sangre venosa en La médula espinal termina a nivel de la primera vér-
los senos durales. Las vellosidades aracnoideas hi- tebra lumbar, por lo cual se puede insertar una aguja
pertrofiadas por la edad se llaman granulaciones de estéril por debajo de este nivel (habitualmente, entre
Pacchioni, y llegan a producir erosión en la tabla in- 14-15 o 15-Sl) sin temor de lesionar la médula; las
terna del cráneo. raíces nerviosas pueden ser tocadas y desplazadas
La velocidad de formación de LCR, así como la de por la aguja, con riesgo mínimo de lesión (Fig. 96-
reabsorción, se estima en 0,35 ml por minuto (es de- lA).
cir, 500 ml al día), lo cual quiere decir que se renueva La punción lumbar está indicada con los siguientes
818
tres veces al día. fines:
CAPITULO 96 Patología general de las meninges y el líquido cefalorraquídeo

Figura A. Punción lumbar para el estudio del líquido cefalorraquídeo. B. Papiledema por hipertensión
endocraneal. C. Signos de irritación meníngea en la sospecha de meningitis aguda.

Obtención de LCR con propósito diagnóstico, la tienda del cerebelo, con distorsión del cerebro me-
principalmente para demostrar cambios indica- dio. Siempre que se realiza la punción lumbar debe
tivos de inflamación meníngea o presencia de medirse la presión del LCR (aunque rara vez esta me-
sangre en el espacio subaracnoideo, así como dida es la única indicación del procedimiento); si la
para obtener muestras para análisis microbioló- manometría revela una presión inesperadamente alta,
gico. es prudente retirar la aguja sin extraer líquido. Otra
Extracción de LCR para tratamiento de la hiper- contraindicación para la punción lumbar son las in-
tensión intracraneal benigna. fecciones locales de la piel en el área de punción.
Introducción de anestésico local (raquianeste- En determinadas ocasiones puede estar indicada la
sia), contraste radiológico (para mielografía), punción de un ventrículo lateral (por el ángulo de la
radioisótopos (ventriculocisternografía) o fár- fontanela en niños o un agujero de trépano en mayo-
macos (antibióticos, quimioterapia). res) o de la cisterna magna.
Medida de presión y dinámica del LCR. Otras posibles complicaciones de la punción lum-
bar son cefalea pospunción (algunas veces por hipo-
La punción lumbar está contraindicada ante la pre- tensión intracraneal), infección, daño traumático de
sencia o sospecha de hipertensión intracraneal, reve- una raíz nerviosa y dolor local.
lada por papiledema (Fig. 96-lB) u otros síntomas su-
gestivos, al menos hasta que estudios de neuroimagen
excluyan una lesión ocupante de espacio (tumor, abs- ALTERACIONES EN LA COMPOSICIÓN
ceso, hematoma). El riesgo de la punción lumbar es DEL LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO
provocar o agravar hernias de amígdalas cerebelosas
a través del foramen magnum con compresión mortal El aspecto del LCR puede ser: claro (normal o
819
del bulbo raquídeo, o del lóbulo temporal a través de aumento de linfocitos), turbio (indicativo de
CCIO Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

aumento del número de células polinucleares, (tuberculosis, herpes , etc.), y además con ma-
por meningitis bacteriana), xantocrómico (color yor rapidez.
amarillo por presencia de oxihemoglobina, bi-
lirrubina, metahemoglobina o muy alto conte-
nido en proteínas) o hemático. En este último ALTERACIONES EN LA CIRCULACIÓN DEL
caso puede ser debido a punción traumática o LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO: HIDROCEFALIA
a verdadera presencia de sangre en el espacio
subaracnoideo; en el primer caso la contamina- La hidrocefalia es un aumento del volumen del LCR
ción por sangre del LCR disminuye a medida asociado a dilatación de los ventrículos cerebrales
que fluye (un segundo tubo contiene menos (Fig. 96-2), lo cual puede ser debido a un incremento
sangre que el primero); en el segundo caso, la en su producción, un defecto en la reabsorción o, más
tinción hemática es uniforme y, además, si es frecuentemente, a obstrucciones al flujo normal.
centrifugado se observa xantocromía en el so- La única causa conocida de sobreproducción de
brenadante. LCR es el papiloma de plexo coroideo; en este
El número de células normal es de menos de tumor a menudo hay, además, un mecanismo
4 por ml. La presencia de números mayores obstructivo.
(pleocitosis) generalmente indica inflamación La disminución en la absorción de LCR ocurre si
meníngea. Pueden ser polinucleares neutrófilos se bloquean las vellosidades aracnoideas como
(meningitis agudas, a veces otras situaciones), consecuencia de inflanrnción o de una concen-
eosinófilos (parasitosis del sistema nervioso) , tración muy alta de proteínas del mismo , o por
linfocitos (meningitis por virus , tuberculosis , dificultad para el drenaje de los senos venosos
hongos, sarcoidosis, sífilis, esclerosis múltiple) (trombosis de senos laterales o sagital, trombosis
o células neoplásicas (linfomas, leucemias, me- yugular o de cava superior).
ningitis carcinomatosa, gliomas). La obstrucción en la circulación del LCR puede
Las proteínas se elevan de modo moderado e tener lugar dentro o fuera del sistema ventricu-
inespecífico en muchas enfermedades; aumen- lar. La obstrucción intraventricular se denomi-
tos importantes (más de 100 mg/dl), o hiperpro- na hidrocefalia no comunicante, y puede tener
teinorraquias, se observan en polineuropatías lugar a nivel de un foramen de Monro, o en el
(especialmente en el síndrome de Guillain-Ba- tercer ventrículo, el acueducto, el cuarto ven-
rré) y en bloqueos del espacio subaracnoideo por trículo o los agujeros de Magendie y Luschka,
tumores medulares y hernias discales, mientras a causa de anomalías congénitas (estenosis de
que se mantiene normal el número de células acueducto, infecciones intrauterinas), tumores
(disociación albuminocitológica). En las menin- (especialmente de la línea media: pinealomas,
gitis, se elevan las proteínas en proporción a la meduloblastomas del vermis cerebeloso) o pro-
pleocitosis. cesos inflamatorios del epéndimo que tapiza
En algunas circunstancias hay elevación se- la superficie ventricular (meningitis). La obs-
lectiva de las gammaglobulinas del LCR, y es- trucción extraventricular da lugar a la llamada
pecíficamente de la IgG; su principal valor diag- hidrocefalia comunicante: existe libre comuni-
nóstico es en la esclerosis múltiple, enfermedad cación entre el sistema ventricular y el espacio
en la que también pueden demostrarse bandas subaracnoideo , pero este está bloqueado por
oligoclonales por electroforesis y presencia de
adherencias en la base del cerebro consecutivas
proteína básica de mielina. a meningitis, hemorragia subaracnoidea, trau-
La glucosa muestra una concentración muy
matismos o cirugía, o por malformaciones como
baja o virtual ausencia en meningitis puru-
la de Arnold Chiari (descenso de amígdalas ce-
lentas , es baja en las meningitis tuberculosa
rebelosas y bulbo por debajo del agujero occipi-
y la carcinomatosis meníngea y normal en
tal) . Es frecuente la asociación de hidrocefalia
meningitis linfocíticas víricas benignas . En la
congénita con mielomeningocele.
diabetes la glucosa es alta, en proporción a la
glucemia. En las hidrocefalias congénitas o iniciadas en la
En el LCR se realizan estudios microbiológi- infancia, antes del cierre de las suturas craneales, se
cos: tinción de Gram para bacterias, Ziehl- produce aumento del tamaño cefálico (como puede
Neelsen o auramina para micobacterias tinta comprobarse con medidas de su perímetro en com-
china para criptococos; técnicas de anticuer- paración con el desarrollo normal); se retrasa el de-
pos fluorescentes , cultivos (entre ellos, medios sarrollo psicomotor y frecuentemente se observan
de Lowenstein y Sabouraud para tuberculosis signos piramidales por compresión de las vías cor-
y hongos, respectivamente), y test serológicos ticoespinales y atrofia óptica secundaria al aumento
para sífilis (VDRL, FTA) y otras infecciones de presión intracraneal. En adultos con hidrocefalia
(VIH, Borrelia, Brucella, etc.). Las técnicas de adquirida, generalmente aparece hipertensión in-
820
PCR permiten realizar diagnósticos etiológicos tracraneal, aunque en algunos casos de hidrocefalia
CAPITULO 96 Patología general de las meninges y el líquido cefalorraquídeo

Figura Dilatación de los ventrículos cerebrales asociada a hidrocefalia.

comunicante hay mecanismos compensatorios que Cuando se produce el aumento de tamaño pro-
conducen al síndrome de hidrocefalia con presión gresivo de una masa intracraneal, tiene lugar una
normal o baja (caracterizado por demencia, incon- reducción del volumen de LCR y sangre, desplaza-
tinencia urinaria y ataxia de la marcha, sin papile- dos de modo compensatorio, hasta un límite más allá
dema). Esta situación debe diferenciarse de la hi- del cual se incrementa la presión intracraneal. En el
drocefalia ex vacuo secundaria a atrofia difusa de estadio inicial compensado puede no haber manifes-
la corteza cerebral por enfermedades degenerativas taciones clínicas. A medida que aumenta la presión,
(demencia tipo Alzheimer). el paciente presentará síntomas, de modo progresivo ,
con alteración de consciencia, cambios circulatorios
y, finalmente, coma profundo, respiración irregular y
SÍNDROME DE HIPERTENSIÓN muerte.
INTRACRANEAL A medida que aumenta el volumen intracraneal,
la presión intracraneal asciende en forma de curva
El encéfalo, a diferencia de las demás vísceras , está exponencial, de tal modo que en fases avanzadas
incluido en una caja inextensible, la cavidad craneal, pequeños incrementos volumétricos elevan extraor-
cuyo volumen total ha de mantenerse constante. Los dinariamente la presión. La monitorización continua
componentes de la cavidad craneal son el parénqui- de la presión intracraneal muestra tres tipos de ondas
ma nervioso y sus cubiertas, los vasos sanguíneos y periódicas añadidas a la línea basal de presión, de-
la sangre que albergan, y el líquido cefalorraquídeo. bidas al pulso arterial, al ciclo respiratorio y otra, de
El aumento de cualquiera de ellos lleva implícita la mecanismo desconocido (onda X).
disminución del volumen ocupado por los otros. Las principales consecuencias de la hipertensión
La presión intracraneal puede aumentar como intracraneal son las siguientes:
consecuencia de: a) lesiones que ocupan espacio
(tumores, abscesos , hematomas); b) hidrocefalias; c)
edema cerebral difuso . En numerosas ocasiones estos PAPILEDEMA
mecanismos se superponen; así, un tumor ocupa vo-
lumen por sí mismo , se acompaña de compresiones El edema de las papilas ópticas es el signo más im-
venosas y edema peritumoral, y causa hidrocefalia portante de la hipertensión intracraneal (Fig. 96-1B).
obstructiva. El nervio óptico es una extensión directa del sistema
Además de los tumores y otras masas intracranea- nervioso central y está rodeado por espacio suba-
les, existen diversas causas de hipe1tensión intracra- racnoideo (la piamadre y la aracnoides se fusionan
82 1
neal (Tabla 96-1}. con la esclerótica); por consiguiente, la elevación de
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

en la resistencia para extender la rodilla con el muslo ALTERACIONES DEL LÍQUIDO


flexionado sobre el abdomen (Fig. 96-lC).
CEFALORRAQUÍDEO
La misma significación tiene la adopción de una
postura en gatillo (decúbito lateral con flexión de ex- Dependiendo de la etiología, se encontrarán modifi-
tremidades y extensión de cabeza) o de trípode (sen- caciones en l a presión, el aspecto y el contenido del
tado con tronco y cabeza extendido y apoyo en ambos LCR (Tabla 96-2).
miembros superiores extendidos hacia atrás).

Tabla Alteraciones del LCR en los síndromes meníngeos


Células Proteínas Glucosa Microbiología
Normal 0-4 mi , linfocitos 15-45 mg/dl 50-80 mg/dl Negativa
Hemorragia Hematíes y Elevadas Disminuida Negativa
subaracnoidea leucocitos
Meningitis aguda Pleocitosis Elevadas Disminuida Agente etiológico por
bacteriana polimorfonuclear tinción de Gram o por
cultivos positivos
Meningitis aséptica Pleocitosis Normal o Normal o disminuida Negativa
linfocítica elevadas
Meningitis bacteriana Pleocitosis Elevadas Normal o disminuida Cultivos negativos o
parcialmente tratada linfocítica o positivos. Serología
polimorfonuclear positiva
Meningoencefalitis Pleocitosis Elevadas Normal Negativa
polimorfonuclear
o linfocítica
Meningitis Pleocitosis Elevadas Disminuida Tinción Ziehl-Neelsen .
tuberculosa linfocítica Cultivos positivos. PCR
positiva
Sífilis Pleocitosis Elevadas Normal Cultivos negativos.
linfocítica Serología positiva
Carcinomatosis Pleocitosis. Elevadas Disminuida Negativa
meníngea Células
neoplásicas
Meningitis por Pleocitosis Elevadas Disminuida Tinción con tinta china.
hongos linfocítica Cultivos positivos
Síndrome de Pleocitosis Elevadas Normal Negativa. Serología
inmunodeficiencia linfocítica VIH positiva
adquirida

824
·197
Patología general
de la circulación cerebral
Miguel Blanco González, José Castillo Sánchez

CONCEPTO
El cerebro es un órgano de gran requerimiento ener-
gético, que consume casi exclusivamente oxígeno y
glucosa. En condiciones normales, el flujo sanguíneo
del cerebro está íntimamente relacionado con las ne-
cesidades neuronales de oxígeno; el consumo de oxí-
geno en las diferentes partes del sistema nervioso de-
pende de la densidad de las neuronas y del estado de
su activación funcional. El cerebro humano consume
-en estado de vigilia y en reposo- 3,35 ml de oxígeno
por cada 100 gramos de tejido cerebral y minuto (6
ml en la corteza y 2 ml en la sustancia blanca).
La glucosa es el nutriente casi exclusivo del cere-
bro, y los requerimientos cerebrales son de 75 mg a
100 mg cada minuto; el 90 % es completamente me-
tabolizada (vía aerobia), y el 10 % restante es trans-
formada en piruvato en condiciones anaerobias. Una
pequeña proporción de la glucosa es derivada para
la síntesis de una reserva limitada de glucógeno, que
solamente es capaz de suministrar energía al cere-
bro durante 1-3 minutos. Únicamente en situaciones
extremas pueden ser utilizados por el cerebro otros
nutrientes, como los cuerpos cetónicos o los aminoá-
cidos.
El flujo sanguíneo cerebral global, en situación de
vigilia y en reposo, es de 54 ml/100 g/minuto; en la
corteza cerebral se eleva a 80 ml/100 g/minuto. En
condiciones fisiológicas el cerebro extrae del 30 % al
40 % del oxígeno sanguíneo y del 10 % al 15 % de la
glucosa; esto significa que el cerebro precisa aproxi-
madan1ente 1000 ml de sangre oxigenada y con glu-
cosa, lo que representa la quinta parte del volumen/
minuto cardiaco, para un tejido que constituye menos
del 13 % del peso corporal.
Como consecuencia de estas elevadas demandas
energéticas y de oxígeno, el sistema nervioso central
es especialmente vulnerable a las alteraciones de la
825
circulación cerebral, de ahí que la patología vascular
10 Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

cerebral sea una de las enfermedades neurológicas de los hemisferios cerebrales. El sistema carotídeo
más frecuentes. Aunque existen mecanismos fisiopa- de uno y otro lado está interconectado a través de la
tológicos comunes a las diversas enfermedades vascu- arteria comunicante anterior, y se anastomosa con el
lares del cerebro, otros son diferentes, lo que justifica territorio vertebro basilar a través de las arterias comu-
que estudiemos por separado la fisiopatología de la nicantes posteriores. De esta forma, se constituye el
isquemia cerebral, del edema cerebral en la isquemia polígono de Willis en la base del cerebro, que es una
y de las hemorragias cerebrales. excelente red anastomótica que asegura una correcta
irrigación del sistema nervioso central. Este sistema
de vascularización intracraneal va a tener anasto-
ANATOMÍA VASCULAR DEL CEREBRO. mosis con ramas de la carótida externa a través de
SÍNDROMES NEUROVASCULARES arterias orbitarias y leptomeníngeas permitiendo un
aporte de flujo colateral en situaciones de isquemia.
Las oclusiones arteriales, por trombosis o embolias, y
en menor grado las hemorragias, producen síndromes
característicos para cada territorio arterial, denomina- ARTERIA CARÓTIDA
dos síndromes neurovasculares. El conocimiento de
estos síndromes permite al clínico la localización de El punto donde con mayor frecuencia se va a produ-
la lesión, y en muchos casos, el establecimiento de cir la oclusión de la arteria carótida va a ser inme-
una hipótesis patogénica con bastante exactitud. diatamente por encima de la bifurcación donde se
El cerebro se irriga por cuatro arterias principales: inicia la carótida interna. Excepcionalmente, puede
dos arterias carótidas y dos arterias vertebrales (Fig. obstruirse a nivel de la arteria carótida primitiva. El
97-1). síndrome clínico originado por la obstrucción de la
La arteria carótida interna irriga el ojo a través de arteria carótida interna es muy variable, y va des-
la arteria oftálmica, y luego se divide en las arterias de que el paciente se encuentre asintomático hasta
cerebral anterior y media, que irrigan los dos tercios la clínica de un infarto masivo, que afecta a todo el
anteriores del hemisferio cerebral, los ganglios basa- territorio de la arteria cerebral media y anterior. Sin
les y la cápsula interna. embargo, el cuadro clínico más habitual es el corres-
Las arterias vertebrales se unen para formar la ar- pondiente a la afectación del territorio de la arteria
teria basilar, cuyas ramas irrigan el tronco encefáli- cerebral media; esto se debe a que la arteria cerebral
co y el cerebelo, y luego se divide en las dos arterias anterior se irriga a través de la comunicante anterior,
cerebrales posteriores, que irrigan el tercio posterior mientras que las arterias comunicantes posteriores
(más delgadas y de mayor longitud) son me-
nos eficaces a la hora de abastecer a la cerebral
media.
Por tanto, los síntomas habituales de la oclu-
sión de la arteria carótida interna son la hemi-
plejía y la hemihipoestesia contralateral, junto
con afasia si el afectado es el hemisferio domi-
nante. El cuadro clínico será más intenso se-
gún el nivel de la obstrucción; cuanto más alto,
mayor afectación. Un síntoma característico es
la ceguera monocular transitoria (amaurosis
fugax), que en una cuarta parte de los pacien-
tes con obstrucción sintomática de la carótida
interna precede a la instauración de la lesión
neurológica. La ceguera es transitoria por las
abundantes ramas colaterales que existen en
la órbita. La cefalea supraorbitaria es frecuen-
te en estos pacientes. Otros síntomas y signos
originados por la obstrucción carotídea son los
síncopes al levantarse bruscamente, la atrofia
arteria carótida común del nervio óptico y de la retina; la claudicación
mandibular. La auscultación del cuello revela,
en ocasiones, un soplo que indica la existencia
de estenosis carotídea; es necesario diferen-
ciarlo de los soplos cardiacos irradiados. En las
obstrucciones completas no existe soplo en el
territorio afectado, pero sí lo puede haber en la
826
Figura Troncos supraaórticos. carótida sana, por exceso de flujo.
CAPITULO 97 Patología general de la circulación cerebral

Corteza motora
Corteza motora Corteza sensitiva A. parietal anterior
Área motora sec;:undari a / Corteza sensitiva A. rolándica
A. ca llosomarginal I 'i>: Centro ocular
)&;:· A. peri callosa anterior

Corteza
visual

......_ A. calcarina

A. orbitaria A. temporal
posterior
A. coroidea posterior
A. temporal anterior
A. cerebral anterior A. cerebral posterior
Rama inferior

Figura Ramas superficiales de la arteria cere- Figura Estructuras irrigadas por las ramas su-
bral anterior y estructuras corticales irrigadas. Superfi- perficiales y profundas de la arteria cerebral media.
cie medial del hemisferio cerebral.
como síntoma inicial, sin embargo, el desarrollo de
ARTERIA CEREBRAL MEDIA edema cerebral en los días siguientes a la oclusión
arterial suele condicionar una disminución del nivel
Es la rama más voluminosa de la arteria carótida inter- de consciencia.
na. Se origina en la cara medial del lóbulo temporal; La afectación de la rama superior de la arteria ce-
sus ramas superficiales irrigan la corteza cerebral del rebral media origina un déficit sensitivomotor contra-
lóbulo frontal, ínsula, lóbulo parietal y lóbulo tempo- lateral de predominio faciobraquial (por afectación de
ral; sus ramas profundas irrigan parte de la cápsula la corteza). desviación conjugada de la mirada hacia
interna y los núcleos caudado y lenticular. Las ramas el lado de la lesión y afasia motora pura (si es en el
superficiales se originan a partir de la bifurcación del hemisferio dominante). En el síndrome de la rama
tronco principal de la arteria, en una rama superior y inferior predomina la hemi o cuadrantanopsia homó-
otra inferior (Fig. 97-2). De la rama superior salen las nima contralateral y la afasia sensitiva si se afecta el
arterias orbitofrontales, la prerrolándica, la rolándica hemisferio dominante; en este caso, también se puede
y la parietal anterior; la rama inferior da lugar a la originar una sordera pura para las palabras. Si la is-
arteria parietal posterior, angular, temporal posterior quemia en el lóbulo temporal es extensa, puede apa-
y temporal anterior. Las ramas profundas son las len- recer un estado confusional con agitación. La oclusión
ticuloestriadas y, en la mayor parte de los casos, la de las ramas profundas de la arteria cerebral media
arteria coroidea anterior (que también puede salir de origina una hemiplejía contralateral, y en las lesiones
la carótida interna). extensas, una hemianopsia homónima contralateral.
Las estructuras irrigadas por las ramas superficia- Excepcionalmente, se han descrito casos de hemico-
les de la arteria cerebral media son la corteza motora rea y hemibalismo, por afectación de los núcleos de
y sensitiva, las áreas del lenguaje de Broca y Wernic- la base.
ke, las radiaciones ópticas y el lóbulo temporal y de la
ínsula. Las ramas perforantes irrigan parte del núcleo
caudado, el putamen y el globo pálido, el brazo poste- ARTERIA CEREBRAL ANTERIOR
rior de la cápsula interna y parte del lóbulo temporal;
la arteria coroidea anterior penetra en los ventrículos Nace en la bifurcación de la carótida interna, en la par-
laterales e irriga el plexo coroideo, donde se anasto- te medial de la cisura de Silvio; se dirige hacia dentro
mosa con la arteria coroidea posterior (Fig. 97-3). y delante hasta llegar a la línea media (Fig. 97-4) . En
La obstrucción del tronco común de la arteria cere- este punto, la arteria se incurva introduciéndose en
bral media (porción Ml) puede producir la lesión de la cisura interhemisférica, y se une con la del lado
todo el territorio irrigado, pero sobre todo de las ra- opuesto a través de la arteria comunicante anterior.
mas profundas, que son arterias terminales sin anasto- La arteria cerebral anterior da unas ramas superficia-
mosis corticales. les, que salen después de la anastomosis con la arteria
El cuadro clínico clásico es la hemiplejía y hemia- comunicante anterior, y unas ramas profundas (ramas
nestesia contralateral, hemianopsia homónima con- estriadas mediales) que salen del segmento proximal
tralateral, desviación conjugada de la cabeza y ojos a la comunicante anterior. Las ramas superficiales
hacia el lado de la lesión, y anosognosia y desaten- irrigan los tres cuartos anteriores de la cara medial
ción somatosensorial contralateral. Si la obstrucción del hemisferio cerebral, y son la arteria orbitaria, la
corresponde al hemisferio dominante, se añade afasia frontopolar, la pericallosa (en la rodilla del cuerpo
827
global. La pérdida de consciencia rara vez aparece calloso) y la callosomarginal. Las ramas penetrantes,
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

succión, y rigidez paratónica contralateral a la lesión.


La afectación del cuerpo calloso puede originar un
cuadro de apraxia de los miembros izquierdos (o del
lado no dominante), con agrafia y anomia táctil , por
Núcleo un síndrome de desconexión interhemisférica entre
ca udado - A. lenticuloestriadas la corteza sensitivomotora derecha y las áreas del len-
Pulamen - -'<--:;i;r-',IJ. guaje en el hemisferio izquierdo.
Pálido
La oclusión bilateral de las ramas distales, por un
origen común de ambas arterias cerebrales anteriores,
interna - A. coroidea
anterior o como consecuencia de cirugía sobre la arteria co-
municante anterior, da lugar a una paraparesia con
Tálamo alteración sensitiva de tipo cortical y alteración esfin-
Rama inferior teriana. Se pueden asociar alteraciones del comporta-
miento , como abulia, lentitud y falta de espontanei-
dad, tendencia a la inmovilidad y, en casos extremos,
mutismo acinético.
La afectación de las ramas profundas, fundamen-
Figura Ramas superficiales de las arterias cere- talmente de la arteria de Heubner, puede originar
brales anterior y posterior. Superficie medial del hemis- una ligera debilidad braquial contralateral, por afec-
ferio cerebral. tación de la parte anterior de la cápsula interna, y
excepcionalmente, coreoatetosis u otras discinesias
que a veces constituyen un núcleo común denomi- transitorias. La obstrucción de la arteria de Heubner
nado arteria recurrente de Heubner, vascularizan el del hemisferio dominante también puede originar
brazo anterior de la cápsula interna y la parte anterior trastornos del lenguaje del tipo de la afasia motora
del caudado y putamen (Fig. 97-5). transcortical, caracterizada por la ausencia del len-
guaje espontáneo, pero manteniendo la capacidad de
La obstrucción de la porción más proximal de la repetir palabras.
arteria cerebral anterior suele ser bien tolerada al es-
tablecerse el flujo a través de la arteria comunicante
anterior. La oclusión distal se caracteriza por debili- ARTERIA CEREBRAL POSTERIOR
dad e hipoestesia del miembro inferior contralateral;
el déficit es de predominio distal, debido a la distri- El tronco basilar finaliza constituyendo sus ramas
bución topográfica somatotópica característica de la terminales, que son las arterias cerebrales posterio-
corteza sensitivomotora. En la fase aguda, también res derecha e izquierda (Fig. 97-6). Al poco tiempo de
puede aparecer una desviación de la cabeza y ojos
hacia el lado de la lesión, e incontinencia urinaria.
Es frecuente la presencia de reflejos de prensión y - - A. CEREBRAL ANTERIOR

A. CEREBRAL MEDIA
Ramas superficiales
*
/ A. COMUN ICANTE
POSTERIOR
111 par - - --4,~i:\...,A
A. CEREBRAL
POSTERIOR
A. CEREBELOSA
V par SUPERIOR
VI par - -c-+- 1
VII par
Vlll par =""'"-..ir---'#.
A. CEREBELOSA - -->.,...I,
ANTEROI FERIOR

A. CEREBELOSA
POSTEROI FERIOR
A. ESPINAL A TERIOR

A. VERTEB RAL

Figura Terri torio correspondie nte a la arteri a Figura Arterias del tronco encefálico y polígo-
828
cerebral anter ior. no de Willis* .
CftPÍTULO 97 Patología general de la circulación cerebral

e, :, :::5::_:~.·.··
rt't!u1l~d· / ... .
~~···::;;;:j::r;;:;(i:"''
--~~) Id!. , :-,pínut,!1ér;1;( o
-.."·---::\_;',\'1c:t'U dui mo:rn
~t u!,:r <rnn;.'i·,
·--~-. lb:< ;c:.J10

··~}i::7;,-,u:~:';:·:.;~:~::::;' 1

r\,F"" f'(:_,(l(.H'.{ tdO_'.-/


.::e(elna/c:-
:-,. Fí:'!1(•('.¡J.;::
;', (¡, !~•()
~~. \:v\ hvr
!'; 1i/'

\/ J
Figura Cor\(' del rnesend?íalo <1 nivel del nC1-
c!eo del 111 pdr nc1rwal. Síndromes vasculares c!P las
Figura R,m1as penetrante~ ele la ,irlería Cl'rebral r,1mas proíunclas de l,1 arlC'rí<1 cercllr,11 posterior.
posterior. Corte coronal de los hernisíeríos ccn.:hrc1k·s y
nwscncéíalo. Ln ohstruu:ión ríe lus wú1rius lr1Junwper(nrr111les
(Fig. q7_7) origina los signos subtalámicos, (m los qtm
prmlorninan los signos extrapirnrnidalcs cnntrula!orn-
nacm, cada mm de ollas se mrnslomusa con lci artería
lus (hmnibalismo o bemicornoatetosis). con nfoctaci(rn
caníticl,1 intnrnn modianlo la C(JI11Uniurn!¡: postnrior.
motora o sensitiva contrnlalnrnl. El síndrome talümi-
La artoria cornbrnl posterior sn dirígo hacía aftwrn y
r:D. o dn Déjnri1w y Roussy, sn produce por injúrto en
atrús. rodeando ol JH·idtínculo cnclmil y ni mus<mc:6-
folo y Hituúnclmm por encima dul ton torio. hasta llegar
o] territorio e/u /ns orterius tolumo.~tmículrulus (Fig.
H7-7). El cuadro clínico ns o! d() una hernimrnstusia
u la cisura culc:arina. dondo tcrmina. En su travm:to.
completa contralatnral. con )l()miparesía y bmnianop-
omite rnmas superficiales\' profunclus.
sia homónima colllrnla!(lrillos. Dospu(1s ele unas snma-
Las rwnas profundos (Fig. 97-7) se inici¡¡n justo clus-
nas. el pacitmlo comienza a rm:u¡rnrm la snnsibilidad
pués du In bifurc:ac:itín do] tronco do la basilar con lns
v dosmrolla dolor. parestesias e hipcrpnlía en el he-
artorias inturpodunr:ulares. q1w irrigan al núcluo rojo.
rnicuorpu afer:tmlo que puede persistir durante aíios.
la sustancia nogrn. la zona medüil de los pedúnculos
La odusión e/u /ns mmos c:orlícolus tumpomles,
cernhrnlos. los ntídoos d<ll fil y !V pm craneal. la sus-
sobrn todo si las losionos son bilaterales. origina un
lancin rnlicular. la drn:usación do los pedúnc11los ct,rn-
síndrome amnésico fobulatorio dn KorsakoiI Lu olJs-
holosos. el foscículo longitudinal modial y el lemnisco
trw:c:íón ele /ns mmas occípíf(l/ns (Fíg. D7-\l) originan
medial. Unas ramas pnrmnmlimrns inlnr¡rndunculares
um1 lwmi¡¡11opsia homónima cunlralatnral: a veces. In
irrigan la parte !atora! de los pedúnculos cerebrales.
los tubórculos c:uadrig<\mínos, la glcíndula pi nea!. Las
nrtorias talarno¡rnrfornntos surgen más dislnlnwnte.
corca do lns arterias comuniurntos postorioros. P irri-
gm1 ln parto inferior. medial y nnleríor del tálamo~, lus
núcleos sublalómicos. Las arterias lalamogeniculaclas
irrigan ln ¡rnrte r:entrnl y posterior ch,! túlamo.
Lus mmas cortícnles (Fig. 97-4) ele la mleria c(,n,-
brnl posterior son las artmias coroidoas posteriores,
la arteria pnricallosa posterior. las arterias lemporalos
anterior\. posterior y la artcrin oc:cipila! y rnlcuriua.
Estas ramas posteriores irrigan la parte posterior de
los plexos cornideos _v cuerpo calloso. la parte inferior
y medial dnl lóbulo temporal y el lóbulo occipital.
Lo ofec/m:íó11 ele los arterias interpedunculurns ori-
gina cuadros clínicos con panílisis nculomotora (III
par) ipsilateral y hemiplejía contralaternl (síndronw ele
Weber). o con cornoatntosis. hemianm:tesia o temblor
con1ralatnrn!es (síndrome ck, Benedíkt). o con ataxia
r:erebelosa contralateral (síndro1m1 de Claucle). Otras
veces. los pacientes presentan parálisis de la mirada
vertical (síndrome ck Parinaud, por afoctación de los
tubérculos cuadrigéminos). o estupor o coma (por le- figura Territorio vascular hemisférico corres-
829
sión de la sustancia reticular ascendente) (Fig. 97-B). pondiente a la artería cerebral posterior.
10 Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

alteración del campo visual es incompleta, y afecta arteria cerebral


más a los cuadrantes superiores. La visión central o posterior
macular no suele estar afectada, debido a la colatera- arteri a cerebelosa
lización del polo occipital a través de ramas de la ar- superior
teria cerebral media y anterior. Otro síntoma habitual mesencéfalo
es la percepción de alucinaciones visuales. Además,
las lesiones occipitales originan otros síntomas, que arteria cerebelosa
arteria basil ar anteroinferior
difieren si se originan en el hemisferio dominante, no cerebelo
dominante o si son bilaterales. La enfermedad occipi-
tal no dominante puede producir la visión deformada
de los objetos (metamorfopsia), la persistencia de la
imagen después de retirado el estímulo (palinopsia), :..7~cilllÍ~ - arteri a cerebelosa
arteri a vertebral posteroinferior
o la visión múltiple de un objeto (poliopía). En el ló- bulbo raquídeo
bulo occipital dominante, se añade alexia (incapaci-
dad para leer), agnosia visual (no reconocimiento de Figura -1 Irrigación del cerebelo.
los objetos por la vista) y ceguera para los colores. Si
la lesión occipital es bilateral, también pueden pre-
sentar ceguera cortical, prosopagnosia (incapacidad
para reconocer caras), anosognosia visual o síndrome Millard-Gubler), con hemiplejía y anestesia para la
sensibilidad vibratoria y artrocinética contralatera-
de Anton (no reconocimiento de la ceguera por un
paciente que no puede ver), y el síndrome de Balint les, y parálisis ipsilateral del VI y VII pares cranea-
(incapacidad para dirigir la mirada voluntaria, ataxia les. En ocasiones, también se origina oftalmoplejía
internuclear ipsilateral por afectación del fascículo
óptica con incapacidad para dirigir la mano por la vis-
ta, y desatención visual). En la lesión bilateral de los longitudinal medial, por ejemplo en la oftlamople-
lóbulos occipitales, los campos visuales se reducen y jía internuclear derecha el paciente no puede acti-
va1· el músculo recto interno del ojo izquierdo, sin
adoptan la forma de visión por «cañón de escopeta».
embargo, como no hay lesión nuclear ni periférica
en la convergencia el músculo recto interno funcio-
ARTERIA BASILAR na normalmente y el ojo derecho muestra nistagmo
monoocular. La afectación del VI par craneal y del
Tras fusionarse las dos arterias vertebrales en el surco fascículo longitudinal medial puede originar el sín-
bulboprotuberancial, se constituye la arteria basilar, drome del uno y medio , con parálisis completa de los
que recorre la superficie anterior de la protuberancia movimientos del ojo ipsilateral e imposibilidad pa1·a
por la línea media hasta llegar al mesencéfalo, donde la abducción del otro ojo.
se divide en las dos arterias cerebrales posteriores. Si se ocluyen las ramas circunferenciales cortas
Durante su recorrido origina unas ramas paramedia- dan lugar a un síndrome protuberancial lateral, con
nas, en número de 7 a 10, que irrigan la zona media afectación del V, VII y VIII pars craneal ipsilatera-
de la protuberancia, que incluye la vía piramidal, el les, anestesia térmica y dolorosa contralateral, y un
lemnisco medial, el fascículo longitudinal medial, síndrome cerebeloso ipsilateral. En ocasiones, por la
los núcleos del VI y VII par craneal y las fibras pon- afectación de fibras pontocerebelosas, se puede pro-
tocerebelosas. Las ramas circunferenciales cortas, de ducir mioclono palatino, del diafragma o de los mús-
5 a 7, irrigan la parte lateral de la protuberancia, con culos laríngeos.
el V y VIII par craneal y el haz espinotalámico, y los
pedúnculos cerebelosos superior y medio. Las ramas
circunferenciales largas son las arterias cerebelosas
S. uno y medio IV ventrículo
superiores y anteroinferiores (Fig. 97-10) Pedúnculo
7
cerebeloso superi or
El cuadro clínico por obstrucción de la arteria
Haz espinocerebeloso
basilar (Fig. 97-11) puede originarse por la oclusión anteri
de la propia arteria basilar, habitualmente en el ter-
cio inferior, debido a una placa ateromatosa, o a una
·@=l.~,;\;1\-H az
oclusión de las arterias vertebrales. Si la oclusión es
espinotalámico
de origen embólico, el émbolo suele localizarse en la
bifurcación de la arteria basilar, o más frecuentemen-
Lemn isco
te, en una arteria cerebral posterior. El flujo retrógrado medial
procedente de las arterias comunicantes posteriores
modificará la intensidad del cuadro clínico originado Vía piram idal
S. Millard-Gubler

en la arteria basilar.
~ La oclusión de las ramas paramedianas origina Figura Corte medio de la protuberancia. Sín-
un síndrome protuberancial medial (síndrome de dromes vascu lares de la arteria basilar.
CAPITULO 97 Patología general de la circulación cerebral

La lesión bilateral de la base de la protuberancia de las arterias vertebrales es insuficiente para contri-
origina un síndrome del cautiverio , caracterizado buir a la irrigación del bulbo raquídeo. Las lesiones
por consciencia y movimientos oculares verticales isquémicas de las arterias vertebrales se producen
normales , anartria, disfagia y tetraplejía. El paciente fundamentalmente por arterioesclerosis, que se loca-
comprende todo, pero es incapaz de moverse o comu- liza con más frecuencia en el origen de las arterias
nicarse, excepto a través de los movimientos oculares vertebrales y en la proximidad a su confluencia en la
o del parpadeo. El síndrome del techo de la basilar arteria basilar.
consiste en la oclusión del extremo distal de la arteria La obstrucción de la arteria subclavia en una zona
basilar, y origina un infarto bilateral del mesencéfalo, previa al origen de la arteria vertebral puede originar,
tálamo, lóbulos occipitales y zonas mediales de los en situaciones de gran requerimiento de flujo san-
lóbulos temporales. guíneo del brazo (por ejemplo, al moverlo de forma
La oclusión de la arteria cerebelosa superior ori- intensa durante un tiempo), un síndrome del robo de
gina un síndrome cerebeloso ipsilateral y anestesia la arteria subclavia, que es una inversión del flujo en
para la sensibilidad térmica y dolorosa contralateral; la arteria vertebral ipsilateral para vascularizar el bra-
en ocasiones, también mioclono palatino. La afecta- zo, produciendo isquemia parcial del territorio de la
ción de la arteria cerebelosa anteroinferior originará arteria basilar.
un síndrome cerebeloso ipsilateral, con anestesia tér- Durante su trayecto intracraneal, la arteria vertebral
mica y dolorosa cont::ralateral y afectación ipsilateral da origen a la arteria espinal anterior y a las arterias
del VII y VIII par craneal. espinales posteriores, responsables de la irrigación de
la médula cervical. Después, origina múltiples ramas
perforantes, que vascularizan la parte anteromedial
ARTERIA VERTEBRAL del bulbo (parte de la oliva inferior, pirámide bulbar,
lemnisco medial y núcleo y trayecto del XII par cra-
Se ongma en la primera porción de la arteria sub- neal). De la parte más distal de la arteria vertebral sale
clavia, dirigiéndose hacia atrás y hacia arriba, para la arteria cerebelosa posteroinferior (PICA), que irriga
situarse delante de la apófisis transversa de la sép- la parte lateral del bulbo (parte de la oliva inferior,
tima vértebra cervical, y posteriormente introducirse haz espinotalámico, haces espinocerebelosos, núcleos
en el agujero de la sexta. Desde aquí, se dirige hacia espinales del V par craneal, sensitivo del VII o núcleo
el cráneo a través de los agujeros transversos de las solitario, motor del IX y X o núcleo ambiguo, haz sim-
vértebras cervicales, entre ellos el axis. Atraviesa la pático descendente, pedúnculo cerebeloso inferior,
duramadre y penetra en el cráneo a través del agujero núcleo vestibular y fascículo delgado y cuneiforme)
occipital. Tras rodear el bulbo por su parte anterola- y la parte inferior del cerebelo.
teral, se fusiona con su homónima del lado opuesto La obstrucción de las ramas pBiforantes (Fig. 97-12)
para formar la arteria basilar. origina un síndrome bulbar medial, caracterizado por
En una proporción considerable de sujetos, las dos hemiplejía y alteración de la sensibilidad propiocep-
arterias vertebrales son asimétricas, y en un 10 % , una tiva contralateral, y parálisis ipsilateral de la mitad

IV ventrículo

S. bulbar
lateral
Fascículo
cuneiforme
Núcleo dorsal
Pedúncu lo ~,~"hoc-...~--..,,..-+-- del vago
cerebeloso r ,~ "t--::!!~'+- Núcleo y tracto
inferior espinal del nervio
trigémino
l laz
espinocerebeloso - - -~ Núcleo del
posterior tracto sol itario
Haz simpático
descendente
Núcleo del
hipogloso

Núcleo ambiguo

Nervio hipogloso (XII)


S. bul bar
medial Pirámide

Figura Corte medio del bulbo . Síndromes vasculares correspondientes a las arterias vertebrales.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

de la lengua. La oclusión de la arteria cerebelosa pos-


teroinferior, en su porción proximal, origina un sín-
drome bulbar lateral o síndrome de Wallenberg, en el Tabla Etiopatogenia del daño
que se puede presentar alteración de la sensibilidad vascular en la circulación cerebral
térmica y dolorosa contralateral excepto en la cara,
que es ipsilateral (síndrome cruzado sensitivo), ataxia Oclusión del vaso Ruptura del vaso
de la marcha (por afectación de los haces espinocere-
belosos o de los pedúnculos cerebelosos) ipsilateral,
D D
ISQUEMIA HEMORRAGIA
alteración de la sensibilidad propioceptiva (fascículo
delgado y cuneiforme) ipsilateral, disfagia, afonía y Trombosis lntracerebral
disminución del reflejo faríngeo ipsilateral, síndrome Aterosclerosis Hipertensión arterial
de Horner (haz simpático) ipsilateral, nistagmo , vér- Hemopatías Malformaciones
tigo y náuseas (núcleo vestibular) y pérdida del gusto Fibrodisplasia vasculares
(núcleo solitario) ipsilateral. La obstrucción distal de muscular Diátesis
la arteria cerebelosa posteroinferior da lugar a un in- Arteritis hemorrágica
farto del cerebelo y de la porción posterior del bulbo, Disecciones Traumatismo
con ataxia, vértigo , náuseas , vómito, nistagmo y, en Lipohialinosis craneoencefálico
(TCE)
ocasiones, hipo persistente.
Tumores
intracerebrales
ETIOPATOGENIA DE LAS ENFERMEDADES Vasculitis
CEREBROVASCULARES Embolia Subaracnoidea
Origen cardiaco Aneurismas
Las enfermedades cerebrovasculares se clasifican en Origen arterial TCE
dos grandes grupos, según su mecanismo etiopato- Origen venoso Malformaciones
génico: lesiones isquémicas y hemorrágicas . En las vasculares
lesiones isquémicas , las manifestaciones clínicas Arteritis
pueden ser transitorias o persistentes. Las lesiones Hemopatías
isquémicas transitorias recib en el nombre de ata-
ques isquémicos transitorios (AIT) , y son trastornos Disminución PPC
episódicos y focales de la circulación cerebral, de l. cardiaca
comienzo habitualmente brusco , que determinan la Hipotensión arterial
aparición de alteraciones neurológicas subjetivas y PPC: presión de perfusión cerebral
obj etivas , de breve duración (generalmente unos mi-
nutos), y con recuperación completa de la función
neurológica alterada , como máximo en el curso de
una hora. El infarto cerebral es el conjunto de mani-
festaciones clínicas neurológicas que aparecen como En contraste con la trombosis , en la embolia cere-
consecuencia de la isquemia cerebral en un determi- bral el material que obstruye el vaso procede de otra
nado territorio encefálico, determinando una lesión parte del sistema cardiovascular, sobre todo del co-
irreversible y un déficit neurológico de más de 24 razón, y se origina por una alteración de las válvulas
horas de duración. cardiacas, el endocardio, o se aloja en las cavidades
La isquemia cerebral puede originarse por tres me- auriculares o ventriculares. Otras veces, el émbolo
canismos diferentes (Tabla 97-1 ): trombosis, embolia procede de fragmentos de placas de ateroma de ar-
y dism inución de la perfusión cerebral. Utilizamos el terias más distales , o puede originarse en el sistema
término trombosis para referirnos a la obstrucción del venoso y llegar al cerebro a través de defectos cardia-
flujo sanguín eo debido a u n proceso oclusivo origi- cos congénitos.
nado como consecuencia de la alteración de la pared El tercer mecanismo que puede originar una is-
de una arteria. Esta alteración se debe fundamental- quemia cerebral es la disminución de la presión de
mente a la arterioesclerosis, que afecta a los troncos perfusión cerebral. Las causas más frecuentes son la
su praaórticos y a las grandes arterias intracraneales. insuficiencia cardiaca y la hipotensión arterial. En es-
La hipertensión arterial también puede originar una tos casos, la lesión cerebral es más difusa y bilateral.
degeneración hialina de las arterias perforantes. Otras Las lesiones hemorrágicas son la hemorragia intra-
veces , el coágulo se forma en la luz arterial debido cerebral y subaracnoidea. La hemorragia intracerebral
a trastornos hematológicos, como la policitemia, la o hematoma parenquimatoso es una colección hemá-
trombocitosis o una trombofilia. Con menor frecuen- tica dentro del parénquima encefálico, condicionado
cia, la trombosis cerebral es secundaria a una displa- por una rotura vascular, con o sin comunicación ven-
sia fibromuscular, a una arteritis o a la disección de tricular, o a los espacios aracnoideos , o a ambas. La
832 la pared arterial. hemorragia intracerebral está originada habitualmen-
CAPITULO 97 Patología general de la circulación cerebral

te por la hipertensión arterial. Con menos frecuencia , mg/dl. Mientras el cerebro consume los escasos de-
puede ser secundaria a diátesis hemorrágicas, malfor- pósitos de glucosa y glucógeno, la situación es rever-
maciones vasculares o a degeneración amiloide. sible, sin secuelas neurológicas. Al cabo de algún
La hemorragia subaracnoidea es la extravasación tiempo , el cerebro comienza a metabolizar otras sus-
de sangre en el espacio subaracnoideo; debe deno- tancias , y aparecen lesiones estructurales, que con-
minarse primaria, haciendo referencia a que el san- sisten en una necrosis neuronal cortical selectiva,
grado ocurre primaria y directamente en el espacio con conservación del tejido glial.
subaracnoideo, y diferenciarla de aquellas situaciones
en que la hemorragia subaracnoidea es secundaria al
sangrado en otras localizaciones, como el parénqui- FACTORES HEMODINÁMICOS
ma cerebral o el sistema ventricular. La rotura de un
aneurisma es la causa más frecuente de hemorragia El flujo sanguíneo cerebral es una variable dependien-
subaracnoidea; otras causas son las malformaciones te del gradiente de presión de la perfusión sanguínea y
arteriovenosas y las diátesis hemorrágicas. de la resistencia vascular, y esta depende, a su vez, de
la viscosidad de la sangre y del diámetro de los vasos
sanguíneos. Estas variables se pueden afectar de forma
FISIOPATOLOGÍA DE LA CIRCULACIÓN compleja durante el desarrollo del infarto cerebral. La
CEREBRAL presión de perfusión viene determinada por la dife-
rencia entre la presión media de las arterias cerebrales
La disminución del flujo cerebral es el resultado de y la presión intracraneal y venosa. Como en condi-
la alteración del equilibrio de múltiples factores he- ciones fisiológicas la presión venosa y la intracraneal
modinámicos, y puede conducir a la aparición, en las son muy pequeñas, la presión de perfusión cerebral es
neuronas y en la glía, de una serie concatenada de al- equiparable a la presión sanguínea de las arterias de
teraciones metabólicas y bioquímicas que concluirán mediano tamaño. La presencia de hipertensión intra-
con la necrosis celular. craneal de cualquier etiología, trombosis de las venas
La hipoxia, la hipoglucemia, las alteraciones del o senos durales o respiración artificial, modifica sus-
flujo sanguíneo cerebral y el estado de la circulación tancialmente la presión de perfusión cerebral, y puede
colateral son los factores que pueden condicionar la condicionar la aparición de infartos cerebrales.
aparición del infarto. Una hipoxia con cifras de pa0 2 En situaciones fisiológicas , la regulación del flujo
inferiores a 40 mm Hg origina confusión, y coma por sanguíneo cerebral es independiente de variaciones
debajo de los 20 mm Hg. La presencia de hipogluce- amplias de la tensión arterial, gracias a un complejo
mia intensa produce alteraciones funcionales y es- mecanismo que recibe el nombre de autorregulación
tructurales en el sistema nervioso central; concentra- de la circulación cerebral, en el que intervienen fac-
ciones de glucosa inferiores a 20 mg/dl originan tores miogénicos, bioquímicos, neurogénicos y pepti-
confusión, y el coma aparece por debajo de los 10 dérgicos (Fig. 9 7-13).

200
~

]
e
8 150
e:
-¡;¡
.0Q)
ormotenso
t 100
u
o
Q)
,:::::s
00
; so
"'
o
·s
¡¡:

0 '"o"_ _ _ _""'s'"o"_ _ _ _1,...,0'"0"_ _ _ _1_so,,------,2,...,o...,.o-----,,-2.,,.


so,,...
Presión arterial media (mm Hg)

Figura Autorregu lac ión de la circu lación cerebra l normal, en pacientes normotensos, hipertensos y en el ~
tejido isquémico.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

En los pacientes hipertensos, la curva de autorre-


cc/100 g/mln
gulación se desplaza hacia la derecha y, en conse- 100
cuencia, los límites superior e inferior de la auto-
90
rregulación se desplazan hacia presiones arteriales
80
medias más altas.
Pese al mecanismo de autorregulación, en condi- 70

ciones fisiológicas la presión de perfusión se adapta 60


Ventana terop6utica
a las necesidades metabólicas cerebrales, mediante 50
la regulación funcional del flujo cerebral. Esta regu- 40
lación determina una estrecha relación entre la con-
30
centración de la paC0 2 y el flujo sanguíneo cerebral; Pe
20
entre márgenes de paC0 2 comprendidos entre 35
Infarto
y 60 mm Hg, cada mmHg de aumento de la paC0 2 10

supone un incremento del 4 % del flujo sanguíneo o


Tiempo
cerebral.
Las alteraciones de la paC0 2 también modifican el
mecanismo de la autorregulación. Durante la hiper- Figura La pen umbra isq uém ica.
capnia, la resistencia de los vasos cerebrales es menor,
el flujo sanguíneo cerebral más elevado y la meseta de
la autorregulación más estrecha.
En situaciones de isquemia cerebral, se produce
una alteración en los mecanismos de autorregulación ranas son capaces de recuperar su función normal.
y de regulación funcional del flujo cerebral. El meca- Esto constituye la base racional del tratamiento del
nismo de autorregulación desaparece en el territorio ictus isquémico.
isquémico, y la presión de perfusión se hace depen- El cerebro se protege contra la isquemia focal me-
diente de la tensión arterial (esta falta de regulación diante la circulación colateral, que constituye un fac-
aparece con disminuciones superiores al 40 % del tor adicional de seguridad en la vascularización del
flujo cerebral). Esta dependencia es más intensa con cerebro. Las principales anastomosis están situadas
la disminución que con el aumento de la tensión ar- entre las dos arterias carótidas primitivas, entre la
terial, debido a que en el tejido isquémico del lecho carótida externa y la arteria vertebral, entre la caró-
vascular los vasos están dilatados al máximo; una tida externa y la circulación intracraneal a través de
disminución de la presión arterial no puede, en este la arteria oftálmica, entre la circulación intracraneal
caso, compensarse con una mayor reducción de la re- por el polígono de Willis y a través de las anastomosis
sistencia vascular. leptomeníngeas.
El área con abolición del mecanismo de autorregu- La topografía de las lesiones isquémicas varía se-
lación en la isquemia cerebral focal es mayor que la gún el mecanismo fisiopatológico del infarto cerebral.
zona de falta de reactividad al C0 2 ; esto origina, en la Si el flujo cerebral está globalmente reducido por hi-
periferia del infarto, un desequilibrio entre el control potensión sistémica o por estenosis múltiples de las
hemodinámico y metabólico responsable de la circu- arterias extracerebrales, se produce la isquemia en la
lación de lujo. En la circulación de lujo existe un flujo periferia del territorio vascular. Esta situación de fallo
cerebral aumentado por encima de los requerimientos hemodinámico se ha denominado ley del campo más
tisulares de 0 2 , lo que da lugar a una extracción de distante , y los infartos aparecen en las zonas situadas
oxígeno reducida y a la aparición de una red de sangre entre dos territorios vasculares (territorios frontera):
venosa. entre los territorios de la arteria cerebral anterior y
La obstrucción de un vaso sanguíneo cerebral media, media y posterior y en la periferia de los gan-
ocasiona un gradiente isquémico que da lugar a una glios de la base en el área terminal de las arterias len-
isquemia intensa en el centro del territorio vascular, ticuloestriadas (Fig. 97-15).
y a una isquemia menos intensa en la periferia del Los infartos en el territorio de la arteria cerebral
mismo. Las células del núcleo isquémico , con un media pueden estar situados cerca del tronco prin-
flujo inferior al umbral de infarto, mueren en pocos cipal o en el centro de su territorio vascular. Si el
minutos. En la zona periférica, con un flujo por de- tronco principal de la arteria está ocluido y existe
bajo del umbral de isquemia, se originan alteracio- territorio de la situación hemodinámica, la totalidad
nes de la actividad funcional de las neuronas, pero del territorio vascular se infartará; por el contrario, si
conservando una actividad metabólica mínima que la circulación colateral es adecuada, solo se necrosará
permite la supervivencia celular durante unas horas. el territorio más próximo al tronco principal de la ar-
Esta zona se ha denominado área de penumbra is- teria. Si el tronco principal de la arteria cerebral me-
quémica (Fig. 97-14) . La importancia de la penumbra dia o posterior presenta una importante estenosis, el
isquémica radica en que si se consigue precozmente infarto aparecerá en el centro del territorio vascular,
una revascularización del tejido isquémico las neu- ya que la zona más próxima se irrigará por la propia
CAPITULO 97 Patología general de la circulación cerebral

vez instaurada la isquemia condiciona una excesiva


acidosis. El mecanismo por el cual la acidosis agrava
el daño cerebral está mediado , probablemente, por la
formación de radicales libres.
La isquemia origina una pérdida de la reserva
energética de la neurona y una imposibilidad para la
síntesis de ATP En estas circunstancias la célula no
es capaz de mantener la diferencia de potencial de
membrana ya que se interrumpe el funcionamiento
de la bomba Na+/K+; esto lleva a un aumento de las
concentraciones de Na+ intracelular y K+ extracelu-
lar, y consecuentemente a una despolarización de la
membrana. Este hecho condiciona la apertura de los
canales de caz+ voltaje-dependientes y el desbloqueo
de los canales de caz+ receptor-dependientes. Estos
Figura Topografía del infarto cerebral en rela- mecanismos duplican la concentración de caz+ intra-
ción con el mecanismo fisiopatológico y el estado de celular y condicionan la liberación excesiva degluta-
la circulación colateral. A, obstrucción de una arteria mato y otros aminoácidos excitadores.
con buena circulación colateral; B, obstrucción de una La estimulación por el glutamato del receptor
arteria con mala circulación colateral; C, estenosis de AMPA aumenta la despolarización de la membrana
una arteria con buena circulación colateral; D, infartos al incrementar la concentración de Na+ intracelular,
en territorio frontera. lo que ocasiona edema celular citotóxico. La estimu-
lación de los receptores NMDA es responsable del
aumento de la concentración del Caz+ intracelular y
de la puesta en marcha de la cascada isquémica de-
arteria estenosada, y la periferia por las colaterales pendiente del Caz+ que originará la muerte celular.
funcionantes. Los infartos !acunares se originan por El aumento de la concentración de Ca 2+ intracelu-
la obstrucción de arterias terminales, sin colaterales, lar es un factor clave en los procesos que conducen
situadas en los ganglios de la base o en el tronco ce- al daño celular irreversible, al activar enzimas (pro-
rebral. teincinasas, proteasas, fosfolipasas, endonucleasas,
proteinfosfatasas y sintasas del óxido nítrico) y con-
dicionar la expresión de varios genes de respuesta in-
FACTORES BIOQUÍMICOS mediata. La excesiva activación de las enzimas con-
tribuye a la lesión celular; las fosfolipasas originan
El cerebro obtiene su energía de la oxidación de la destrucción de las membranas y edema mitocondrial,
glucosa, que es su única fuente de energía, y utiliza y las proteasas son capaces de alterar diversos compo-
vías metabólicas comunes al resto del organismo. In- nentes del citoesqueleto.
cluso en ausencia de aporte de glucosa, sus niveles se
Las características bioquímicas del sistema nervio-
mantienen a través de un proceso de neoglucogénesis so, entre ellas su elevada concentración de lípidos y
(convirtiendo aminoácidos en glucosa) y por la inhi- sus altos requerimientos metabólicos, lo hacen parti-
bición del consumo de glucosa en otros órganos. El
cularmente sensible a la lesión mediada por radicales
cerebro es capaz de almacenar pequeñas cantidades libres. En la isquemia cerebral, la formación de radi-
de glucosa en forma de glucógeno que, en situaciones
cales libres de 0 2 puede exceder la capacidad antio-
de disminución del flujo sanguíneo cerebral, suple xidante de la neurona, ocasionando alteraciones de
la falta de glucosa durante 2-3 minutos. Durante la algunos constituyentes celulares. Estos radicales son
isquemia el consumo de glucosa se incrementa nota-
el anión superóxido, el radical hidroxilo, el peróxido
blemente y se deplecionan los niveles de glucógeno de hidrógeno, el óxido nítrico y el peroxinitrito (Fig.
con más rapidez. Sin embargo, la verdadera amenaza
97-16).
en la isquemia es la falta de Üz.
El fallo energético ocasionado por la disminución
del flujo sanguíneo cerebral es responsable de la le- FISIOPATOLOGÍA DEL EDEMA CEREBRAL
sión celular a través de dos mecanismos: el desarrollo
de acidosis y la entrada de calcio iónico (Caz+) en la El edema cerebral es la causa más frecuente de
célula. El fallo energético activa la glucólisis anaero- muerte en la enfermedad cerebrovascular aguda , y
bia con producción de ácido láctico reduciendo el probablemente sea responsable de parte de las se-
pH intra y extracelular. La cantidad de ácido lácti- cuelas neurológicas. El edema que aparece durante
co formado depende de la cantidad de depósitos de la isquemia cerebral es el resultado de la acumula-
glucosa y glucógeno en el momento de instaurarse ción de líquido en el interior de las células, en el
la isquemia. La persistencia de hiperglucemia una intersticio celular o en ambos. En el primer caso, re-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Idus isquémico

Disminución del flujo cerebral


+
Depleción de energía

\13!N Mfü•hJe@#A MICROCIRCULACIÓN

1
l
!
Fallo de bomba Na•/K•

Apertura de los
anales iónicos

Despolarización de la membrana
Inflamación

l
------- '-----...
Citoci nas

~,,1~'""'
Liberación de glutamato Apertura de cana les de

l
Estimulación ele receptores
Ca'• voltaje depend ientes

/ ~ ( _ Edema vasogénico
AMPA NMDA
¡ \ Aumento ele Ca 2•
Entrada ele Na•
intrace lul ar

I
Edema citotóxico

Act ivación de NO sintasa,
lipasas, proteasas y ----..__ • Genes ele respuesta inmediata

¡ ~

~
endonucleasas /
Apoptosis

Daño ce lular irreversi ble ~


Factores de crecimiento Reparación celular

Figura Cambios bioquímicos en la isquemia cerebral.

cibe el nombre de edema citotóxico y en el segundo Si la reperfusión tiene lugar después de 6 horas de
de edema vasogénico. El edema cerebral isquémico isquemia se agrava el edema, ya que el aumento de
es el resultado de una compleja combinación de la presión hidrostática origina la aceleración de la
mecanismos citotóxicos y vasogénicos, que depen- extravasación de líquidos del compartimento vas-
de del tipo , extensión, duración e intensidad de la cular.
isquemia cerebral. La persistencia de la isquemia cerebral en un te-
La glía y las neuronas son más sensibles a la isque- rritorio vascular conduce a la alteración de la barre-
mia que el endotelio capilar, por lo que el edema cere- ra hematoencefálica y al desarrollo de un edema va-
bral isquémico es inicialmente citotóxico y se origina sogénico. Esta acumulación de líquido en el espacio
por dos mecanismos: alteración de la permeabilidad intercelular se debe a la extravasación de proteínas
celular y aumento de la osmolaridad intracelular. La al parénquima cerebral a través de la barrera hema-
alteración de la permeabilidad celular es consecuen- toencefálica alterada. La extravasación de proteínas
cia del fallo energético, incapaz de mantener las bom- y el edema extracelular osmótico discurren a lo lar-
bas de intercambio iónico, y la osmolaridad aumenta go de las fibras de las neuronas hasta la sustancia
como consecuencia de la liberación de glutamato y de blanca, donde se acumulan. Este desplazamiento
la acumulación de productos de degradación. Ambos hacia la sustancia blanca se consigue por un meca-
mecanismos conducen a la incorporación de Na• y nismo de difusión y, más activamente, a través de
agua al interior de la célula. gradientes de presión hidrostática. Días después del
Estos cambios pueden ser reversibles si la dura- comienzo de la isquemia, la acumulación de proteí-
ción de la isquemia no es prolongada o si la dismi- nas en la sustancia blanca todavía es más pronun-
nución del flujo no es total. La reperfusión después ciada que en el propio territorio isquémico, donde
de un corto periodo de isquemia normaliza la acti- la mayor parte de las proteínas han sido destruidas
836 vidad metabólica celular y el volumen del edema. por enzimas proteolíticas. Esta topografía del edema
CAPITULO 97 Patología general de la circulación cerebral

vasogénico, con predominio en la sustancia blanca, falia. El vasoespasmo puede originar a su vez isque-
contrasta con el edema citotóxico que se localiza mia, edema e infarto cerebral.
preferentemente en la sustancia gris del territorio
vascular afectado.
SEMIOLOGÍA DE LOS TRASTORNOS
DE LA CIRCULACIÓN CEREBRAL
FISIOPATOLOGÍA DE LA HEMORRAGIA Las enfermedades cerebrovasculares comprenden to-
CEREBRAL dos los trastornos del sistema vascular que producen
isquemia, hemorragia o infartos cerebrales. Constitu-
La hemorragia intracerebral puede ir precedida de yen el problema neurológico grave más frecuente del
lesión de las pequeñas arterias penetrantes, por de- mundo. La forma habitual de presentación es el ictus,
generación lipohialina o por la presencia de microa- definido como la presentación brusca y no convulsi-
neurismas, o tener lugar en arterias sanas, por un va de un déficit neurológico focal. El pe1fil temporal
brusco aumento de la tensión arterial. En cualquiera del ictus se caracteriza por el comienzo repentino y
de las situaciones, la pérdida de sangre por estas arte- dramático del cuadro clínico, y por su tendencia a
rias origina un aumento de la presión localizada que, la regresión posterior de los síntomas, en los casos
a su vez, lesiona las arteriolas circundantes. De esta no mortales. La forma de comienzo ha condiciona-
forma va aumentando el volumen de la hemorragia. do el uso de otros términos, poco apropiados, como
Otras veces, un traumatismo, discrasias sanguíneas el de accidente cerebral vascular. Aunque de forma
o alteraciones degenerativas o adquiridas de la pa- menos frecuente, las enfermedades cerebrovasculares
red vascular originan la pérdida de sangre inicial; pueden presentarse con un curso subagudo o incluso
a partir de aquí evoluciona como en la hemorragia crónico; otras veces, la enfermedad cerebrovascular
hipertensiva. es clínicamente silente, y constituye un hallazgo de
Al aumentar el tamaño de la hemorragia, se pro- exploración.
duce un aumento de la presión intracraneal. Esta hi- Los trastornos de la circulación cerebral producen
pertensión intracraneal condiciona una hipertensión una combinación de síntomas y signos neurológicos
arterial necesaria para perfundir el cerebro, que no que dependerán de su extensión y de la localización
refleja necesariamente el nivel previo de las cifras de del territorio vascular afectado. Estos síndromes neu-
la tensión arterial. La disminución de la tensión arte- rovasculares ya los hemos estudiado en un apartado
rial, conveniente para que el paciente pare de sangrar, anterior.
debe conseguirse lentamente y con precaución, para El estudio de un paciente con sospecha de enferme-
que el paciente no desarrolle isquemia en zonas no dad cerebrovascular comienza con la anamnesis para
dañadas por la hemorragia. la identificación de los factores de riesgo vascular.
El empeoramiento, que a menudo presentan los La exploración neurológica identificará el territorio
pacientes después de la hemorragia inicial, puede vascular afectado y evaluará la intensidad del daño
deberse a la persistencia del sangrado o al desarro- neurológico.
llo de edema perilesional. El efecto masa originado Las pruebas diagnósticas complementarias ayu-
por la hemorragia y por el edema puede producir dan a completar el diagnóstico etiológico y lesional
un desplazamiento de las estructuras cerebrales o de la alteración de la circulación cerebral. El estudio
herniaciones. Estos desplazamientos pueden causar hematológico, las pruebas de coagulación y la bio-
áreas de infarto, originadas por la compresión de al- química sanguínea en todos los pacientes, y el estu-
gunos troncos arteriales. Es frecuente que este infarto dio inmunológico, microbiológico y determinaciones
se produzca por compresión de las ramas tempora- hormonales en pacientes seleccionados ayudarán a
les de la arteria cerebral posterior al pasar sobre la demostrar la etiología de muchas de las enfermedades
tienda del cerebelo, o de la arteria cerebral anterior cerebrovasculares. La radiología de tórax y el estudio
al pasar por debajo de la hoz del cerebro. También cardiológico es obligado en todos los pacientes, ya
se pueden originar hemorragias secundarias en el que puede demostrar el origen del ictus o la presencia
tronco encefálico, por distorsión de las arterias pene- de complicaciones durante la fase aguda del mismo.
trantes originada por la herniación de las amígdalas El examen neurovascular no invasivo mediante
cerebelosas . El sistema ventricular también puede el estudio Doppler carotídeo y transcraneal permite
afectarse, dando lugar a áreas de hidrocefalia locali- detectar lesiones estenosantes en los troncos supraa-
zadas y asimétricas. órticos y alteraciones del flujo en las principales arte-
La salida de sangre al espacio subaracnoideo oca- rias intracraneales, y seleccionar a pacientes para un
siona un síndrome meníngeo por irritación química posterior estudio angiográfico.
de las meninges, y una hipertensión intracraneal. Des- La tomografía computarizada (TC) y la resonancia
pués de la hemorragia inicial, los riesgos que pueden magnética (RM) son las técnicas de neuroimagen fun-
aparecer en estos pacientes se deben a la posibilidad damentales para el diagnóstico de las enfermedades
de un nuevo sangrado, de vasoespasmo o de hidroce- cerebrovasculares. Las lesiones isquémicas son visua-
SEC ION Semiología y fisiopatología de las enfermedades del sistema nervioso

Figura TC cerebral , cortes axiales. A, se aprecia una imagen hipodensa trapezoidal y extensa a nivel del
territorio correspondiente a la arteria cerebral media derecha. B, imagen hipodensa en brazo posterior de cápsula
interna derecha que corresponde a un infarto lacunar.

Figura RM cerebral. A, secuencia de difusión (DWI ) en la que se aprecia la zona (hiperintensa) de tejido
con edema citotóxico. B, imagen de perfusión (PWI) en la que se aprecia el área isquémica. C, imagen FLAIR en
la que se observa el tamaño final del infarto.

lizadas en la TC en forma de una zona hipodensa o infarto cerebral el tejido no recuperable. La secuen-
de baja atenuación, habitualmente después de las pri- cia de perfusión (RM-PWI) muestra el área cerebral
meras 24 a 48 horas del inicio del cuadro clínico (Fig. hipoperfundida. Superponiendo las imágenes de RM-
97-17) . Las lesiones hemorrágicas son visualizadas, DWI y RM-PWI podemos identificar la zona de cere-
desde el inicio del cuadro clínico, en forma de una bro isquémico sin daño celular irreversible o, lo que
zona hiperdensa o de alta atenuación. La resonancia es lo mismo , el área de penumbra isquémica. Otras
magnética (RM) (Fig. 97-18) en secuencia de difusión secuencias de RM permiten realizar reconstrucciones
(RM-DWI) identifica el tejido con edema citotóxico, angiográficas 3D que permiten identificar estenosis,
lo que nos permite ver en los primeros minutos del malformaciones, etc.
.;ga
Manifestaciones clínicas
del aparato locomotor
José Luis Hernández Hernández, Jordi Casademont Pou, Joan Miquel Nolla Solé

MÚSCULO
El síntoma más frecuente y característico de las enfer-
medades musculares es la debilidad. Otras manifes-
taciones posibles son la fatigabilidad, el dolor mus-
cular y la emisión de orina oscura (mioglobinuria).
Además, el músculo puede presentar una variedad de
fenómenos motores involuntarios, aunque la mayor
parte de ellos son un reflejo de su denervación, y no
propiamente de una enfermedad muscular.

DEBILIDAD
Se define como la falta de fuerza que se percibe
desde el comienzo del movimiento. Puede tener
diversos orígenes, además del muscular: central
(cerebro, médula espinal). de la motoneurona del
asta anterior, del neivio periférico o de la unión
neuromuscular.
La debilidad de origen muscular suele ser
simétrica, y afectar sobre todo a los músculos
proximales de las extremidades (cintura esca-
pular o pelviana). Es habitual que los pacientes
refieran dificultad para subir o bajar escaleras,
levantarse de una silla y peinarse. Cuando la
debilidad de la musculatura pelviana es mar-
cada, para levantarse del suelo necesitan apo-
yar sucesivamente las manos en el mismo
suelo, en las rodillas y en los muslos; da
la sensación de que «trepan sobre sus
piernas», fenómeno que se conoce
como signo de Gowers. La debili-
dad en la musculatura pelviana
provoca un defecto en la fijación
de la pelvis al caminar que hace
que esta se balancee lateralmente a
semejanza de un ánade o pato, de
ahí que se conozca como marcha
anserina. La debilidad de los
músculos paraespinales contribu-
Semiología y fis iopatología de las enfermedades del aparato locomotor

les del tobillo provoca un pie caído, situación que se


compensa con una excesiva flexión de la rodilla y la
Tabla Interrogatorio específico cadera al andar. Ocasionalmente, la debilidad adopta
de la debilidad muscular una distribución peculiar, afectando a los músculos
f aríngeos, los oculares o los distales de las extremida-
Cabeza y cuello des. En la Tabla 98-1 quedan recogidos diversos actos
Ptosis (caída de los párpados) motores en que típicamente se pone de manifiesto la
Diplopía (visión doble) debilidad m uscular, y qu e por tanto deben figurar en
Dificultad para masticar la anamnesis de los pacientes con este trastorno.
Debilidad facial (silbar, sorber con una paja, Normalmente la debilidad es indolora, y frecuen-
hinchar un globo) temente cursa con atrofia muscular. Además, va
Dificultad para tragar (regurgitación de acompañada de una disminución de los reflejos os-
líquidos por la nariz) teotendinosos, aunque su completa desaparición es
Debilidad del cuello (dificultad para un fenómeno tardío. En las miopatías la debilidad
contrarrestar la inercia al circular en coche) evoluciona de forma subaguda o crónica y, solo ex-
cepcionalmente, cuando hay u na necrosis muscular
Hombros
masiva o una alteración electrolítica grave (parálisis
Realizar tareas con los brazos levantados
periódicas), lo h ace de forma aguda.
(peinarse, afeitarse, limpiar cristales)
Debe tenerse en cuenta que los enfermos con fre-
Antebrazos y manos cuencia utilizan la palabra debilidad para referirse a
Abrir botellas, latas, puertas ... cualquier limitación de la actividad motora como fa-
tigabilidad o astenia por lo que es importante precisar
Cadera
estos aspectos en la anamnesis.
Dificultad para correr y saltar
La diferenciación de la debilidad muscular deberá
Subir y bajar - en casos de debilidad de
cuádriceps- escaleras establecerse con las enfermedades de las moton euro-
nas, que con frecuencia cursan con afectación bulbar,
Dificultad para incorporarse estando
sentado (del aseo y sillas) fasciculaciones y piramidalismo, lo que permite su
diferen ciación con relativa facili dad. No su cede lo
Piernas y pies mismo con los trastornos de los nervios periféricos .
Dificultad para andar en terrenos irregulares En la Tabla 98-2 se reflejan las diferencias más n ota-
bles entre los procesos miógenos y ne urógenos . Las
afecciones de la unión neuromuscular se caracterizan
por presentar una clínica fluctuante de debilidad, y
sobre todo por fatigabilidad.

ye a que el enfermo adopte una posición de hiper-


lordosis lumbar, y la debilidad de los cuádriceps a
bloquear las rodillas en retroflexión para prevenir
FATIGABILIDAD
qu e se flexione esta articulación involuntariamente. La fatiga es la sensación de cansancio aparecida con
La debilidad distal en los m ú sculos flexores dorsa- el ejercicio, que se acompafia de impotencia mus-

Tabla Diferencias en las manifestaciones clínicas entre miopatía y neuropatía


Miopatía Neuropatía
Debilidad Proximal Distal
Alteración de la sensibilidad No Sí, distal
Reflejos osteotendinosos Disminuidos pero presentes hasta Pérdida precoz
fases tard ías
Prote ínas en LCR Normales Elevadas si hay afección radicular
Biopsia muscular Cambios miopáticos: necrosis, Atrofia neurógena
inflamación ...
CAPÍTULO 98 Manifestaciones clínicas del aparato locomotor

cular. Fatigabilidad anormal es el término que suele aunque en ocasiones los pacientes aquejan mialgias o
utilizarse cuando la fatiga aparece de forma precoz, debilidad muscular que raramente puede llegar a ser
o tras un ejercicio mínimo, para diferenciarla de la generalizada. Puede complicarse con insuficiencia
fatiga fisiológica que aparece tras la realización de un renal aguda causada por la obstrucción de los túbulos
ejercicio intenso. También debe diferenciarse de la renales por la mioglobina.
astenia, sensación de cansancio no relacionada con el
ejercicio. Todas las miopatías cursan en mayor o me-
nor grado con fatigabilidad, pero las que la presentan MOVIMIENTOS MUSCULARES ESPONTÁNEOS
de forma más característica son las debidas a defectos
Pueden ser de origen propiamente miógeno o tener
en la transmisión neuromuscular o los defectos me-
un origen neurógeno.
tabólicos.

De origen miógeno
DOLOR MUSCULAR Mioquimias: son contracciones de tipo tetánico
(y por tanto prolongadas) de sucesivas unidades
La inervación sensitiva muscular está relacionada motoras, de forma que el músculo parece mover-
fundamentalmente con fascias, tendones y vasos in- se debajo de la piel como un «campo de trigo
tramusculares, por lo que el dolor no es un síntoma ondulado por el viento ». Son movimientos muy
particularmente frecuente en las miopatías y sí, en poco frecuentes , hallados sobre todo en miopa-
cambio, en situaciones en las que se ven involucradas tías secundarias a enfermedades endocrinas.
estas otras estructuras. Contracciones involuntarias dolorosas: son
Distinguimos dos situaciones en función de que el contracciones potentes, que duran de minutos a
dolor aparezca en reposo o tras el ejercicio. horas, y que en general aparecen tras un ejerci-
cio intenso o en condiciones de isquemia. Son
En reposo: es propio de las situaciones en las
típicas de las miopatías por trastornos de la ob-
que se produce una inflamación o infección
tención de energía.
(polimiositis, miositis infecciosa), hematoma,
Miotonía: se manifiesta como una relajación len-
absceso , infarto o necrosis muscular por tóxicos.
ta y dificultosa tras una contracción máxima. Se
El dolor puede ser local o difuso, de intensidad
debe a descargas repetitivas de potenciales de
variable, y va acompañado de hipersensibilidad
acción, debidas a una excesiva irritabilidad de
durante la palpación. Otras condiciones asocia-
las membranas musculares. Su presencia es ca-
das a dolor de reposo son los calambres.
racterística de los síndromes miotónicos.
De esfuerzo: aparece cuando fracasa la irrigación
muscular, bien por obstrucción arterial (claudi- Estos movimientos musculares espontáneos de-
cación de la marcha) , o porque la energía mus- ben diferenciarse de otros movimientos involunta-
cular generada no satisface las necesidades del rios de la musculatura estriada, cuyo origen no es
músculo, como en determinadas miopatías me- muscular:
tabólicas.
De origen neurógeno
Junto a estas circunstancias, puede aparecer una
sensación dolorosa que el paciente identifica como Fasciculaciones: son contracciones breves, es-
muscular en situaciones en que están afectadas dis- pontáneas, repetitivas y no dolorosas de grupos
tintas estructuras del tejido conectivo (polimialgia de fibras pertenecientes a la misma unidad mo-
reumática), e incluso en algunas ocasiones en que no tora. A menudo no tienen trascendencia clínica
se identifica ninguna alteración (fibromialgia). (periorbiculares), pero en ocasiones son expre-
sión de denervación, generalmente por lesión de
la segunda motoneurona. No deben confundirse
EMISIÓN DE ORINA OSCURA con las fibrilaciones , que son contracciones de
fibras individuales que no pueden apreciarse
Si es secundaria a enfermedad muscular, o mioglo- clínicamente, sino únicamente por electromio-
binuria, traduce la eliminación renal de mioglobina. grafía.
Aparece en los casos de rabdomiólisis , o lesión de la Calambres: son contracciones musculares clíni-
membrana de las células musculares, y cursa con li- camente indiferenciables de las contracciones
beración al plasma de mioglobina, creatincinasa (CK) involuntarias dolorosas de origen muscular. La
y otras enzimas y proteínas intracelulares. Puede diferencia reside en que mientras que durante
aparecer en el curso de muchos procesos patológi- un calambre el electromiograma muestra activi-
cos, desde traumatismos a intoxicaciones, pasando dad eléctrica, pues su origen es neurógeno, en
por infecciones o incluso ejercicios intensos en per- las contracciones de origen muscular se registra
841
sonas poco entrenadas. Suele ser poco sintomática, silencio eléctrico.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

Tetania: es una contracción sostenida que ocurre


principalmente en los músculos distales de las
extremidades. Un ejemplo típico es el espasmo Tabla Tipos de dolor articular
carpopedal (flexión de la muñeca y articulacio-
nes metacarpofalángicas con extensión de las Tipos de Síntomas
Características
interfalángicas y aducción de los dedos), que dolor acompañantes
aparece en situaciones de alcalosis (hiperventi-
Inflamatorio Continuo, en Rigidez matutina
lación) y de hipocalcemia. Refleja una situación reposo Afección
de hiperexcitabilidad tanto del nervio como de sistémica
la membrana muscular.
Espasmos o calambres ocupacionales (del infor- Mecánico Relación con el No
mático, del pianista, etc.). Se caracterizan porque ejercicio
el paciente puede hacer uso de toda su muscula- Psicógeno Impreciso Astenia matinal
tura sin problema, excepto para la función que
Relación Otros síntomas
desencadena la contractura. Se trata de formas con factores de origen
localizadas de distonía. emocionales psicógeno

ARTICULACIONES
El dolor es el síntoma por el que consultan la mayoría
de los enfermos que padecen alguna afección articu-
cibe el enfermo sea consecuencia del compromiso
lar. Los demás síntomas y signos son casi siempre
de una articulación. Así, en el esqueleto periférico
manifestaciones acompañantes.
debe tenerse en cuenta la posibilidad de que exista
afección de los elementos paraarticulares (bolsas,
DOLOR ARTICULAR tendones), y en el esqueleto axial se contemplará la
posible afección de las víscera torácicas o abdomi-
En su evaluación, el primer aspecto que hay que con- nales .
siderar es su localización, ya que no siempre existe El dolor es continuo en la artritis reumatoide y en
una correspondencia topográfica entre la zona en que las demás enfermedades articulares inflamatorias;
el enfermo percibe el dolor y la proyección cutánea de este dolor que persiste en reposo se denomina «in-
las estructuras articulares afectadas. Las articulacio- flamatorio » (Tabla 98-3). En la artrosis (enfermedad
nes de localización cercana a la superficie provocan articular degenerativa), el dolor cede con el reposo
un dolor que sólo sobrepasa ligeran10nte su respecti- y se exacerba al iniciar el movimiento (dolor «me-
va proyección cutánea. En cambio , las articulaciones cánico »); no obstante, en las fases avanzadas de la
de localización profunda pueden proyectar el dolor enfermedad puede convertirse en persistente. En
hacia zonas más o menos alejadas en sentido distal la fibromialgia , enfermedad caracterizada por una
(«dolor referido »). Así, el dolor que se origina en las alteración en la modulación de las sensaciones ál-
articulaciones del hombro puede abarcar la cara ex- gicas por parte del sistema nervioso central, que se
terna del brazo, llegando, si es de gran intensidad, asocia con frecuencia a trastornos psíquicos y en la
hasta la mano. El dolor originado en las articulacio- que, característicamente, existe indemnidad de las
nes sacroilíacas puede extenderse por la nalga, cara estructuras musculoesqueléticas, el dolor es difuso
posterior del muslo y pantorrilla. El dolor que proce- e impreciso en su comienzo y en su localización y
de de la articulación coxofemoral puede percibirse en carácter.
la nalga , la ingle, la cara posteroexterna del muslo o
la cara anterior de la rodilla. Los procesos que afectan
a la columna cervical baja pueden ocasionar dolor en TUMEFACCIÓN
el brazo y región escapular y pectoral. Las afecciones
de la columna dorsal pueden determinar dolor en el Es el aumento del volumen de una articulación como
cinturón torácico o toracoabdominal, o bien proyec- consecuencia del engrosamiento de la formación cap-
tarlo directamente sobre la cara anterior del tórax. sulosinovial o de la acumulación de líquido intraar-
Las afecciones de la región dorsolumbar pueden tra- ticular.
ducirse por dolor en las fosas lumbares. Por su parte,
ciertas alteraciones de las dos últimas vértebras lum-
bares pueden manifestarse como dolor en la ingle o la
DEFORMACIÓN
nalga, induciendo a centrar erróneamente la atención Es toda alteración de la forma de una articulación
sobre la cadera. como consecuencia de variaciones en su volumen o
El segundo aspecto que se debe considerar estriba en la posición respectiva de los elementos óseos (Fig.
842
en la necesidad de confirmar que el dolor que per- 98-1).
CAPITULO 98 Manifestaciones clínicas del aparato locomotor

EDEMA PERIARTICULAR
Su presencia indica que se ha producido una exten-
sión de la inflamación al tejido que rodea la articu-
lación. Al igual que el rubor, es propio de las artritis
infecciosas y de las microcristalinas.

RIGIDEZ MATUTINA
Es una sensación de engrosamiento y torpeza en dis-
tintas regiones articulares, pero esencialmente en
las manos , que se nota al despertar por la mañana
y persiste durante minutos o incluso horas. Es muy
frecuente en la artritis reumatoide. Su duración se
relaciona con el grado de actividad de la enfermedad.

ALTERACIÓN DE LA MOVILIDAD
La disminución de la movilidad pasiva es un sig-
no de afección articular. La ausencia total de movi-
miento articular se denomina anquilosis; aparece
como consecuencia de la fusión de los elementos
óseos de una articulación, circunstancia que se
produce en el curso clínico de algunas artropatías
Figura Artritis reumatoide avanzada. Anquilo- inflamatorias de carácter destructivo. El bloqueo
sis, desviación cub ita l de las articu laciones metacar- consiste en la fijación súbita de la articulación en el
pofa lángicas y deformidad en cue llo de cisne de los curso del movimiento, con imposibilidad transitoria
dedos. de volver a su posición normal; se produce en caso
de ruptura meniscal o cuando existen cuerpos libres
intraarticulares. Se considera que una articulación
es hiperlaxa cuando la amplitud del movimiento en
todos los planos es superior a la que se considera
DERRAME ARTICULAR normal; indica la presencia de una menor tensión
de la cápsula y de los ligamentos. La hiperlaxitud
Es aquella situación en la que el líquido articular debe diferenciarse de la in estabilidad articular, en la
alcanza una cantidad suficiente como para que sea que la amplitud del movimiento en algún plano es
detectable clínicamente. Es un signo común de las superior a la normal.
artropatías inflamatorias y degenerativas. La pre-
sencia de líquido articular en cantidad apreciable
permite su extracción («artrocentesis ») y su examen, RUIDO ARTICULAR
que proporciona información valiosa para orientar el
diagnóstico. En determinadas situaciones los movimientos arti-
culares, habitualmente silenciosos, pueden provocar
ruidos. Los chasquidos son ruidos de tono alto, de
RUBOR breve duración y que aparecen una sola vez por movi-
miento; por lo general se producen porque un tendón
También se conoce como eritema. Es el enrojecimien- se engancha y se suelta bruscamente. Los crujidos son
to de la región cutánea que cubre una articulación; ruidos de tono más bajo y múltiples en cada movi-
indica la existencia de una inflamación intensa de la miento; son frecuentes en las artrosis. Los roces son
articulación, con participación del tejido subcutáneo ruidos débiles, prolongados, motivados por el desli-
periarticular. Se observa esencialmente en las artritis zamiento de dos superficies rugosas.
infecciosas y en las microcristalinas.

HUESO
AUMENTO DEL CALOR LOCAL
Las enfermedades óseas con frecuencia son asintomá-
Es otro signo de inflamación. Ligeros aumentos pue- ticas; en ese caso el diagnóstico se realiza de modo in-
den observarse también en la enfermedad articular cidental en un estudio radiológico solicitado por otro
843
degenerativa. motivo. Cuando el enfermo presenta síntomas, estos
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

suelen consistir en dolor, fracturas o deformidades. traumatismo que las genera, ya que se deben a una
Otras manifestaciones (alteraciones de la movilidad, disminución de la resistencia del hueso. A veces se
etc.) son raras. las denomina «fracturas por fragilidad ». La disminu-
ción de la resistencia del hueso puede deberse a ra-
zones claramente aparentes (disminución de la masa
DOLOR ÓSEO ósea, presencia de lesiones líticas), pero otras veces es
Las características del dolor óseo varían con su me- paradójica, como en el caso de osteopatías que cursan
canismo determinante. Puede distinguirse un dolor con un aumento de la densidad ósea (osteopetrosis,
vivo, bien localizado, y otro sordo, difuso. El prime- enfermedad de Paget). En estos casos, la fragilidad se
ro es propio de las fracturas. Tiene especial interés debe a que la estructura ósea, aunque hiperdensa, es
cuando aparece en la espalda, como consecuencia de anormal. Pueden distinguirse tres tipos de fracturas
un aplastamiento vertebral (en general, por osteopo- patológicas:
rosis). Puede quedar circunscrito a la zona del aplas-
Las que ocurren en las extremidades y se pro-
tamiento o irradiar en cinturón o hacia las piernas,
ducen con la colaboración de un factor desen-
según la vértebra aplastada asiente a nivel torácico o
cadenante (caída). Suele tratarse de fracturas
lumbar. La irradiación suele deberse a un mecanis-
completas, y son similares a las fracturas no
mo de dolor referido, aunque en ocasiones el aplas-
patológicas, producidas en un hueso de resis-
tamiento vertebral origina una compresión radicular.
tencia normal como consecuencia de un trau-
El dolor sordo puede aparecer de forma espontá-
matismo.
nea o estar precipitado por factores desencadenantes.
Dolor espontáneo existe, por ejemplo, en la enferme- Los aplastamientos vertebrales, que en general
dad de Paget, seguramente debido a que el aumento se desarrollan sin un factor desencadenante cla-
de volumen y la deformidad del hueso, propios de ro, simplemente bajo la acción de la sobrecarga
la enfermedad, estimulan las terminaciones nerviosas que producen en la columna las actividades de
del periostio. Entre los ejemplos de dolor precipitado la vida diaria.
por factores desencadenantes merece citarse el de la Las fracturas por insuficiencia, o fisuras resul-
osteomalacia, en que la bipedestación puede provo- tantes de la actuación de pequeñas sobrecargas
car dolor en la columna lumbar y las extremidades mecánicas sobre huesos de resistencia anormal.
inferiores, tal vez por estimulación perióstica al de- En el caso concreto de la osteomalacia, reciben
formarse el hueso bajo la acción del peso corporal. el nombre de pseudofracturas o fracturas de Loo-
En las enfermedades óseas metabólicas, además ser-Milkman.
del dolor propio de la lesión, pueden existir dolores
como consecuencia de la aparición de complicacio-
nes. Por ejemplo, la osteopatía puede repercutir sobre DEFORMIDADES
una articulación vecina, determinando artrosis de la Cabe citar, en primer término , las debidas a las frac-
misma, o puede dar lugar a la compresión de una es-
turas. Así, el acuñamiento de las fracturas medio-
tructura nerviosa próxima.
torácicas da lugar a cifosis, y el hundimiento de las
Las osteopatías metabólicas -quizá con excepción vértebras lumbares, a una aproximación del tórax a
de la osteomalacia- no suelen producir dolores óseos la pelvis, con desaparición de la cintura; en ambos
generalizados, que abarquen todo el esqueleto o la casos la talla disminuye. En segundo lugar, puede
mayor parte de éste. Si aparecen, debe pensarse en producirse deformidad por aumento del tamaño de
otras causas.
los huesos (por ejemplo, en la enfermedad de Paget es
característico, aunque infrecuente, el aumento del ta-
maño del cráneo) . En tercer término, pueden desarro-
FRACTURAS
llarse deformidades por deformación del hueso bajo
Las fracturas de las enfermedades óseas son, por de- la acción de una sobrecarga mecánica (incurvación de
finición , patológicas; es decir, inapropiadas para el los huesos largos).

844
·199
Exploración física
del aparato locomotor
Jordi Casademont Pou, Joan Miquel Nolla Solé, José Manuel Olmos Martínez

EXPLORACIÓN MUSCULAR
La exploración física de los pacientes con enferme-
dades musculares se basa en seis aspectos fundamen-
tales (Tabla 99-1): inspección, palpación, percusión,
exploración de reflejos osteotendinosos, fuerza mus-
cular y fatigabilidad. Al igual que el interrogatorio, la
exploración debe hacerse de forma sistemática y es
recomendable hacerla por grupos musculares.

INSPECCIÓN
Permite evaluar la presencia de atrofia o hipertrofia
muscular, y la existencia de movimientos musculares
espontáneos. Un aspecto que siempre debe evaluar-
se es la postura en reposo del paciente, ya que una
correcta interpretación de la misma proporciona, en
ocasiones, más información sobre el grado de debi-
lidad de un paciente que la propia exploración de
la fuerza.

PALPACIÓN Y TONO MUSCULAR


La palpación permite apreciar al tacto la consis-
tencia del músculo. Cuando el tejido muscular
se ve reemplazado por tejido graso o fibroso,
su consistencia proporciona una sensación
parecida a la de palpar caucho. Cuando está
denervado su consistencia es flácida. El tono
hace referencia al grado de resistencia que
ofrece una extremidad al movimiento
pasivo. Sus alteraciones son debidas
fundamentalmente a lesiones del
sistema nervioso central o perifé-
rico y no a lesiones primariamen-
te musculares.

PERCUSIÓN MUSCULAR
La percusión directa de un mús-
845
culo puede poner de manifiesto
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

Tabla Exploración física Tabla Escala del Medical


de los músculos Research Council para valorar
la fuerza muscular
Inspección
Tamaño O Ausencia de contracción
Atrofia
1 Indicios de contracción
Hipertrofia
Movimientos musculares espontáneos 2 Movimiento activo si se elimina la gravedad
Mioquimias 3 Movimiento activo contra la gravedad
Contracciones involuntarias dolorosas
Miotonía 4 Movimiento activo contra la gravedad y
resistencia
Palpación 5 Fuerza normal
Sensibilidad
Consistencia
Tono
Percusión objetiva. Dado que la fuerza es variable de unos indi-
Miotonía viduos a otros, es importante comparar los músculos
Mioedema débiles con el lado contralateral y con otros músculos
Reflejos osteotendinosos
del propio individuo.
Existen varios sistemas de medición de la fuerza,
Medición de la fuerza desde los que evalúan funciones globales (andar diez
Escalas de habilidades metros, subir a un taburete, etc.), hasta otros que uti-
Escala del Medical Research Council lizan miómetros electrónicos. En la práctica clínica,
Fatigabilidad
uno de los más útiles es el propuesto por el Medica]
Research Council, (Tabla 99-2) que debe realizarse
por grupos musculares (flexionar la cabeza, levantar
los brazos, etc.).
La disminución de fuerza se denomina paresia, y
dos respuestas. Una es la miotonía de percusión, o su pérdida, plejía.
contracción mantenida, incontrolable, con relajación
retardada, de los procesos miotónicos. Con frecuencia, FATIGABILIDAD
se explora en la eminencia tenar, donde provoca una
abducción del pulgar, pero también puede provocarse Se explora forzando la contracción de un músculo
en otros músculos, e incluso en la lengua. La otra es el hasta que claudica. Un ejemplo típico es pedir al pa-
mioedema, fenómeno poco común, caracterizado por ciente que mire hacia arriba de forma prolongada; en
la aparición de una depresión seguida de un protusión condiciones patológicas, los párpados caen -ptosis-.
muscular en el lugar de la percusión, que se observa Otro es pedir al paciente que hable de forma conti-
en la miopatía hipotiroidea fundamentalmente. nuada; si presenta fatigabilidad anormal, su voz se
vuelve nasal y dificultosa. Se puede solicitar que el
paciente mantenga los brazos en cruz, o haga flexio-
EXPLORACIÓN DE LOS REFLEJOS nes. En muchas ocasiones, la clínica es poco mani-
OSTEOTENDINOSOS fiesta, y se debe recurrir a pruebas electrofisiológicas
para poner de manifiesto el defecto.
Deben registrarse como ausentes, disminuidos, nor-
males o exaltados, y evitar la anotación con un nú-
mero variable de cruces, por ser origen de confusión. EXPLORACIÓN ARTICULAR
En las enfermedades musculares, lo habitual es su
disminución, con desaparición únicamente en fases Debe ser sistemática y completa. Aunque el enfermo
avanzadas. Su ausencia de forma precoz es más carac- refiera síntomas localizados en una sola articulación,
terística de los procesos neurógenos. deben explorarse todas.

MEDICIÓN DE LA FUERZA FASES DE LA EXPLORACIÓN


Permite comparar diferentes enfermos y, a su vez, eva- Una buena pauta consiste en la exploración en fases
846 luar la evolución de cada uno de ellos de una forma sucesivas con el paciente en tres posiciones distintas.
CAPÍTULO 99 Exploración física del aparato locomotor

En bipedestación
En esta posición se buscan alteraciones de la estática
y de las extremidades inferiores, y se inspeccionan
los pies. También se explora la movilidad de la co-
lumna vertebral.

En posición de sentado
Se examina sucesivamente la columna cervical, las
articulaciones temporomandibulares, los hombros, la
columna dorsal, los codos, las muñecas, las manos,
los tobillos y los pies.

En decúbito
Con el enfermo en decúbito supino se exploran las
rodillas, las caderas (maniobras del plano anterior) y
las articulaciones sacroilíacas. Con el paciente en de-
cúbito prono se evalúa el dolor con la presión de las
apófisis espinosas dorsales y lumbares, y se efectúan
las maniobras del plano anterior de las caderas .

TÉCNICA DE EXPLORACIÓN Figura Maniobra I para la investigación del de-


La técnica comprende la inspección, la palpación y la rrame de la rodilla: choque rotuliano. Maniobra 11 para
exploración de la movilidad. En cada articulación se la investigación del derrame de la rodilla.
investiga la presencia de tumefacción, deformación,
derranrn, movilidad pasiva, dolor con la presión so-
bre la interlínea articular y otras zonas articulares y
Es característico el arco doloroso que se inicia a los
dolor con el movimiento. También se evalúa si existe
90° de la abducción del hombro en la tendinitis del
atrofia de los músculos regionales. En la Figura 99-1
supraespinoso.
se exponen las maniobras para la exploración del de-
rrame en la rodilla. Los diferentes signos y síntomas pueden presentar-
Para la exploración de la movilid ad pasiva en se combinados de diferente manera, y en número va-
cada articulación, se considera la posición de par- riable en cada articulación, pero la presencia de uno
tida y unos movimientos elementales. La amplitud solo de ellos es suficiente para concluir que se está
de cada uno de estos movimientos viene dada por ante una artropatía.
el ángulo que forman entre sí las dos ramas articu-
lares al final de la ejecución del movimiento. En la
columna se exploran por separado los segmentos EXPLORACIÓN ÓSEA
cervical, dorsal y lumbar. En la columna cervical
se exploran los movimientos de flexión-extensión, Se centra fundamentalmente en la inspección, que
laterales y rotaciones; en la dorsal, solamente las está orientada a detectar las deformidades expuestas
rotaciones; en la lumbar, la flexión-extensión y las en el tema anterior. Pueden corresponder a las extre-
flexiones laterales. midades (incurvación de los huesos largos) o al tron-
La exploración de la movilidad activa debe com- co (cifosis, distancia entre la última costilla y la cresta
pletarse con la exploración de la movilidad contra ilíaca). La disminución de la talla por aplastamientos
resistencia (es decir, oponiendo resistencia a los mo- vertebrales tiene lugar, lógicamente, a expensas del
vimientos que el paciente intenta realizar); si esta denominado «segmento superior» (calota-pubis), que
maniobra provoca dolor, suele traducir una lesión disminuye respecto al «inferior» (pubis-suelo) . En
muscular o tendinosa. condiciones normales, estas medidas (que deben eva-
Se utiliza el término «arco doloroso» para designar luarse con el enfermo en decúbito) son iguales.
la aparición, en el curso del movimiento articular, de La palpación y la percusión son útiles para esta-
dolor en parte del mismo , siendo el resto indoloro. blecer la existencia de zonas dolorosas. Fundanrnn-
Generalmente, la afección de la cápsula o de la sino- talmente, se exploran en este sentido la columna y
vial motivan una limitación global de todos los mo- los huesos deformes. En la osteomalacia, la presión
vimientos; en la afección ligamentosa o tendinosa es sobre la caja torácica (costillas y esternón) puede ser
84Í
solamente en uno o dos sentidos. dolorosa.
-1100
Exploraciones
complementarias
en las enfermedades
del aparato locomotor
Joan Miquel Nolla Solé, Jordi Casademont Pou, José Antonio Riancho Mor.

ENFERMEDADES MUSCULARES
PRUEBAS BIOQUÍMICAS
Las más utilizadas son la determinación de las en-
zimas musculares, en particular la creatincinasa o
creatinfosfocinasa (CK), de la que existen tres isoen-
zimas: la CK-MM, la más abundante y específica del
músculo esquelético; la CK-BB más característica del
sistema nervioso central, y la CK-MB , cuya elevación
sugiere una lesión miocárdica. Otras enzimas son la
aldolasa, también muy específica del músculo esque-
lético, y las transanlinasas y la láctico-deshidrogena-
sa, de menor especificidad, pues también se elevan
en lesiones hepáticas y de otros tejidos. Cuando hay
lesión muscular también se pueden elevar proteí-
nas no enzimáticas como la mioglobina o troponi-
nas , o incluso iones corno el potasio. La elevación
de estas moléculas en sangre se debe a la ruptura
o alteración de la permeabilidad de las membra-
nas de las células musculares.
Las tiras reactivas de orina elaboradas para
detectar «hematuria » en los análisis rutinarios
de orina, en realidad detectan el grupo hemo,
compartido por la hemoglobina y la mioglo-
bina. Por lo tanto, también pueden resultar
positivas en la mioglobinuria; si el sedimen-
to realizado sirnultánean1ente descarta la
presencia de hematíes, dicha positivi-
dad indicaría la existencia de lesión
muscular.

PRUEBAS FUNCIONALES
Se trata de un conjunto de procedi-
mientos en los que se somete al
paciente a una actividad física
concreta y reglada y, simultánea-
R8 mente, se evalúan una serie de
CAPITULO 100 Exploraciones complementarias en las enfermedades del aparato locomotor

parámetros bioquímicos, ya sea en la sangre o en el evaluar metabolitos y moléculas como el ATP, lo


aliento. La más clásica es la del ejercicio isquémico que podría convertirla en una técnica muy útil
del antebrazo. Consiste en solicitar al paciente que en el diagnóstico de miopatías metabólicas.
realice un ejercicio intenso con el antebrazo, habiendo
colocado previamente un manguito de presión en el
brazo insuflado hasta impedir el flujo de sangre arte- ELECTROMIOGRAFÍA (EMG)
rial. Debido al estado de anoxia tisular, el ejercicio del
antebrazo debe realizarse fundamentalmente por la Es una técnica imprescindible para el estudio de
vía anaerobia, con un aumento muy marcado del áci- las enfermedades neuromusculares. Consiste en la
do láctico en sangre venosa. En los defectos metabóli- detección mediante electrodos de superficie, o agu-
cos de la vía glucolítica, este aumento no se produce. jas insertadas en el músculo, de los potenciales de
acción, tanto de nervio como de músculo. Mediante
unos registros gráficos y auditivos es posible detec-
TÉCNICAS DE IMAGEN tar la actividad en reposo y con las contracciones
musculares. En las miopatías, los potenciales que
La radiología simple de partes blandas única- se obtienen son de pequeña amplitud y duración,
mente nos permite ver calcificaciones o presen- puesto que hay una reducción en el número de fibras
cia de aire (enfisema subcutáneo) en situaciones musculares intactas. En los trastornos de la unión
muy particulares. neuromuscular los potenciales son normales, pero
La ecografía visualiza adecuadamente las fibras disminuyen en amplitud tras la estimulación repe-
musculares y los septos fibrosos que las separan. titiva del nervio. El patrón neurógeno responde a la
Además, distingue la fascia muscular, los vasos , denervación, con actividad espontánea en forma de
los nervios y la grasa. Es de particular utilidad fibrilaciones y descargas de alta frecuencia y poten-
en las lesiones traumáticas (visualiza los hema- ciales aumentados de amplitud y duración. Algunas
tomas traumáticos) y permite detectar la atrofia , entidades concretas, como la distrofia miotónica o la
la hipertrofia y la pseudohipertrofia muscular, miastenia gravis, presentan unos patrones tan carac-
así como la presencia de calcificaciones. terísticos que prácticamente permiten un diagnóstico
La tomografía computarizada (TC) es útil en el definitivo.
diagnóstico de las lesiones musculares y tendino-
sas, particularmente de las traumáticas, cuando
no se puede realizar una resonancia magnética. BIOPSIA MUSCULAR
La resonancia magnética (RM) es una técnica No siempre es necesaria para obtener un diagnóstico,
muy adecuada para detectar el edema del múscu- y a medida que los estudios genómicos y molecula-
lo, su infiltración por grasa y la presencia de res se vayan desarrollando, es de prever que lo sea
neoplasias (sarcomas). Algunas miopatías tienen menos. Se trata de un procedimiento sencillo que
una distribución peculiar de los músculos afec- puede realizarse por punción o a cielo abierto, con
tos y la RM puede sugerir el diagnóstico. Tam- anestesia local. Se debe escoger un músculo afecto
bién se utiliza para escoger el músculo a biopsiar pero no excesivamente dañado , y en el que no se haya
en pacientes con miopatías inflamatorias. realizado recientemente un estudio EMG, que podría
Aunque no se trate propiamente de una técnica provocar cambios inespecíficos. Permite realizar es-
de imagen, la espectroscopia por RM permite tudios histológicos (Fig. 100-1), con tinciones para

Figura Distrofia muscular de Duchenne. Variabilidad en el tamaño de las fibras, con fibras hipercon-
tracturadas (aster iscos) y otras, más pequeñas, de aspecto basofílico, en regeneración (flechas). El tejido conecti-
vo está aumentado y hay focos de tejido adiposo (espacios en blanco). Tricrómico de Gomori.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

las enzimas presentes en los diferentes tipos de fibras Resonancia magnética (RM): Su ventaja reside
musculares (histoquímica), con anticuerpos dirigidos en la gran resolución de imagen que proporcio-
contra diversas estructuras o tipos celulares presen- na. Es útil en los mismos procesos citados al
tes en la muestra (inmunohistoquímica) y valorar la hablar de la TC y, además, en el estudio de las
ultraestructura· mediante el microscopio electrónico. lesiones internas de las articulaciones (patología
También permite realizar estudios moleculares para de los ligamentos y de los meniscos), en la necro-
la detección de determinadas proteínas en distrofias sis aséptica de las epífisis y en las enfermedades
musculares. de las partes blandas.
Gammagrafía: En patología osteoarticular se uti-
liza habitualmente como isótopo el tecnecio-99.
ESTUDIOS GENÓMICOS Y MOLECULARES Permite detectar lesiones óseas y articulares en
A medida que se va conociendo la etiología de mu- fase prerradiológica. Presenta el inconveniente
chas enfermedades musculares, especialmente las de su inespecificidad: no distingue entre infla-
de origen genético , el diagnóstico ideal radica en la mación, tumor o necrosis.
identificación del defecto molecular que las causa.
Los estudios moleculares y genéticos son complejos y
caros, por lo que habitualmente están limitados a las
ARTROSCOPIA
enfermedades más prevalentes. Permite explorar directamente las estructuras inter-
nas de la articulación. Con la aparición de la RM, ha
quedado un tanto relegada como técnica diagnóstica.
ENFERMEDADES ARTICULARES Es muy útil para guiar la biopsia sinovial.

TÉCNICAS DE IMAGEN
EXÁMENES DE LABORATORIO
Radiografía: Es la técnica de imagen fundanrnn-
tal, imprescindible en la mayoría de casos. Cabe distinguir dos tipos de pruebas: las inespecí-
Prácticamente no existen imágenes patogno- ficas y las específicas. Las primeras engloban todos
mónicas; siempre deben subordinarse los datos aquellos exámenes útiles para poner de manifiesto
radiológicos al juicio clínico. Por otro lado , es la existencia de un proceso inflamatorio y monito-
preciso tener en cuenta que una exploración ra- rizar su evolución, pero que no sirven para precisar
diológica normal no descarta la existencia de una su naturaleza; son pruebas que evalúan la «reacción
enfermedad articular. Además, siempre existe un de fase aguda». Las pruebas específicas son aquellas
periodo de latencia entre el inicio de las manifes- cuya positividad tiene valor para reconocer la presen-
taciones clínicas y la aparición de los primeros cia de una enfermedad determinada.
signos radiológicos.
Cuando sea posible, se realizarán proyeccio- Pruebas inespecíficas: reactantes de fase aguda
nes de frente y de perfil. Asimismo, es conve-
Velocidad de sedimentación globular (VSG): Es
niente realizar un estudio bilateral en las articu-
la determinación más utilizada para evaluar la
laciones simétricas, con el fin de poder estable-
reacción de fase aguda. Es una prueba sencilla
cer comparaciones.
y barata con la que se evalúa de forma indirecta
La lectura de las radiografías debe ser sistemá-
la concentración de las proteínas de fase aguda,
tica. Deben evaluarse los bordes de la superficie
cuya concentración varía en más de un 25 %
articular, la posición respectiva de los segmentos
durante el proceso inflamatorio (proteína C reac-
óseos, la amplitud de la interlínea y las partes
tiva, fibrinógeno , proteína amiloide sérica A y
blandas periarticulares.
ceruloplasmina, entre otras). La VSG depende de
Ecografía: Es la técnica de elección en la valora-
la agregabilidad de los hematíes, que es mayor
ción de la patología de las partes blandas (bolsas,
cuando aumenta la concentración plasmática de
tendones). Permite confirmar la existencia de
proteínas de fase aguda.
derrame en articulaciones profundas, fundamen-
Proteína C reactiva: Debe su nombre a la ca-
talmente en la cadera, y poner de manifiesto la
pacidad de precipitar con el polisacárido C del
existencia de daño estructural (erosiones) en la
neumococo. Se detecta en pequeñas cantidades
artritis reumatoide con anterioridad a que sean
en los sujetos normales y aumenta rápidamente
evidentes en las radiografías.
cuando existe un estímulo inflamatorio.
Tomografía computarizada (TC): Es especial-
mente útil en la evaluación de las enfermedades
de la columna (discopatías, estenosis de canal Pruebas específicas
medular, tumores, infecciones) y suele utilizarse Factor reumatoide (FR): Son autoanticuerpos
como guía para la práctica de punciones diag- dirigidos contra el fragmento Fe de la inmunog-
nósticas. lobulina G (IgG). Habitualmente son anticuerpos
CAPITULO 100 Exploraciones complementarias en las enfermedades del aparato locomotor

de clase IgM, aunque pueden detectarse isotipos ción del calcio y el fosfato, de las denominadas «hor-
IgG, IgA e IgE. El FR es característico de la ar- monas calciotropas » y de los llamados «marcadores
tritis reumatoide, se detecta en un 70-90 % de del recambio óseo ».
los pacientes y constituye uno de los criterios de
clasificación de esta enfermedad. No obstante, y El calcio y el fosfato en sangre son normales en
con menor frecuencia, se detectan en individuos enfermedades como la osteoporosis (salvo en
sanos (la prevalencia aumenta con la edad), en algunas formas secundarias de la misma) y la
pacientes afectados por otras enfermedades del enfermedad de Paget, y tienden a estar descen-
tejido conectivo como el lupus eritematoso sisté- didos en la osteomalacia, por disminución de su
mico, e incluso en pacientes afectados por infec- absorción intestinal.
ciones, neoplasias o enfermedades pulmonares Por hormonas calciotropas se entienden la hor-
y hepáticas. mona paratiroidea, la calcitonina y la vitamina
Anticuerpos antipéptidos citrulinados cítricos: D. La calcitonina no tiene utilidad en el diag-
Son anticuerpos frente a las proteínas citruli- nóstico de los enfermos con osteopatías metabó-
nadas. Su sensibilidad para el diagnóstico de licas. La hormona paratiroidea suele ser normal
la artritis reumatoide oscila entre el 60% (fases en la osteoporosis (aunque puede tender a estar
iniciales) y el 75% (enfermedad establecida); su ligeramente elevada, sobre todo si hay falta de
especificidad se sitúa en el 95%. La detección vitamina D), así como en la enfermedad de Paget.
de estos anticuerpos es especialemente útil a la Está elevada en la osteomalacia debida a déficit
hora de establecer el diagnóstico de certeza en de vitamina D, ya que la hipocalcemia estimu-
los pacientes que presentan una poliartritis de la su secreción. Lógicamente, lo está también
inicio reciente. en una enfermedad hoy infrecuente, la osteítis
Anticuerpos antinucleares: Son anticuerpos di- fibrosa quística, puesto que su causa es precisa-
rigidos contra autoantígenos localizados en el mente el aumento de esta hormona (hiperpara-
núcleo celular. Son positivos en el 95-100 % de tiroidismo) . De la vitamina D interesa su meta-
los pacientes con lupus eritematoso sistémico, bolito, la 25-OH-vitamina D, cuya concentración
aunque no son específicos de esta enfermedad. en sangre está disminuida en las situaciones de
Con frecuencia variable se observan en pacien- carencia de la misma (osteomalacia y algunos ca-
tes afectados por otras conectivopatías como el sos de osteoporosis).
síndrome de Sjogren, la esclerosis sistémica o la Los marcadores del recambio óseo son sustan-
artritis reumatoide. cias que indican la actividad formadora o des-
HLA B27: Este antígeno de histocompatibilidad tructora del hueso. Se clasifican, por tanto, en
se asocia con las espondiloartropatías (espondi- marcadores de formación y marcadores de des-
litis anquilosante y artritis reactiva, entre otras). trucción.
No obstante, su prevalencia en la población sana
se sitúa en un 5-10 %. Marcadores de formación son la fosfatasa al-
Examen del líquido articular: Suele practicarse calina, la osteocalcina y el PlNP (propéptido
una evaluación macroscópica (cantidad obte- del procolágeno 1). Probablemente el más útil
nida con la artrocentesis, color, transparencia, es el último. La fosfatasa alcalina se altera tam-
viscosidad), un estudio microscópico (recuento bién en las enfermedades hepatobiliares (en
celular, análisis citológico, detección de crista- realidad hay una fosfatasa alcalina ósea y otra
les) y un análisis microbiológico (cultivos y, en hepática, pero las técnicas de rutina no las dis-
ocasiones, tinciones). tinguen).
Biopsia sinovial: Es útil en aquellos casos en que Los marcadores de destrucción más utilizados
no ha sido posible obtener un diagnóstico con hoy día son el CTX (telopéptido e-terminal
la valoración clínica y la práctica de exámenes del colágeno tipo 1) y NTX (telopéptido N-ter-
complementarios no agresivos, y la anatomía minal). La hidroxiprolina está prácticamente
patológica puede ser característica (artritis tu- abandonada.
berculosa, fundamentalmente). Habitualmente
se realiza mediante artroscopia. Por definición, los marcadores de recambio
óseo están aumentados cuando lo está este -el
recambio-, como es el caso de los pacientes con
osteomalacia, enfermedad de Paget u osteítis fi-
brosa quística, así como el de una alta propor-
OSTEOPATÍAS METABÓLICAS ción de pacientes con osteoporosis. En estas sue-
len utilizarse los marcadores más sofisticados
PRUEBAS DE LABORATORIO (PlNP, CTX), mientras que en la enfermedad de
Los estudios analíticos tienen interés en las osteopa- Paget y en la osteomalacia se prefiere simple-
tías metabólicas desde tres puntos de vista: evalua- mente la fosfatasa alcalina.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

TÉCNICAS DE IMAGEN
La radiografía permite poner de manifiesto de-
formidades , fracturas y patrones radiológicos
más o menos característicos de diversos proce-
sos: aplastamientos vertebrales en la osteoporosis
(Fig. 100-2); líneas de Looser, en la osteomalacia;
trabeculación grosera y anormal con ensancha-
miento de la cortical, en la enfermedad de Paget.
La gammagrafía ósea con tecnecio unido a bis-
fosfonatos detecta focos de actividad osteoblás-
tica, incluso cuando no son visibles radiológica-

Figura Fracturas vertebrales osteoporóticas


(flechas).

mente. Tiene gran interés en la enfermedad de del fémur y el extremo distal del radio , que son
Paget, en la que permite descubrir los lugares los lugares que se fracturan con más frecuencia
afectados sin necesidad de realizar un estudio en la osteoporosis. Esta es la enfermedad en que
radiológico de todo el esqueleto. También existe la densitometría encuentra su utilidad funda-
captación en las fracturas. mental.
Densitometría ósea: Para determinar con exac- Biopsia ósea: Desde el punto de vista diagnós-
titud la masa ósea, la radiografía convencional tico su interés principal guarda relación con la
no es suficientemente sensible ni reproducible. osteomalacia, ya que constituye el único proce-
Se requieren técnicas especiales, que se conocen dimiento que permite comprobar un aumento de
globalmente con el término de densitometría la anchura del osteoide, dato característico de
ósea, ya que evalúan la densidad mineral del la enfermedad. Estudios más sofisticados per-
hueso. Existen varios procedimientos, pero los miten evaluar la velocidad de mineralización o
utilizados con mayor frecuencia se basan en la las superficies de destrucción y de formación
determinación de la absorción de la energía emi- («histomorfometría ósea »). La biopsia ósea suele
tida por una fuente de rayos X. Suele evaluarse realizarse en el hueso ilíaco con una técnica de
en la columna lumbar, la extremidad proximal trepanación.

ssr-
·1101
Patología general de las
enfermedades musculares
Jordi Casademont Pou

INTRODUCCIÓN
El músculo esquelético cumple diversas funciones
biológicas: es el reservorio más importante de pro-
teínas del organismo, actúa como órgano termogé-
nico y es el elemento efector de la unidad motora,
que tiene como misión desarrollar la fuerza necesaria
para mantener la postura y efectuar los movimientos
corporales.
El músculo está compuesto de h aces de fibras mus-
culares dispuestas en paralelo al eje longitudinal del
mismo.
Se pueden diferenciar diversos tipos de fibras en
función del tipo de contracción predominante que
producen (Fig. 101-1):
Las de tipo 1, de metabolismo fundamental-
mente aeróbico y de contracción «lenta».
Las de tipo 2, de metabolismo más anaeróbi-
co y de contracción más «rápida ».
Se trata de células multinucleadas cuya
membrana y citoplasma reciben el nombre ,
respectivamente, de sarcolema y sarcoplasma.
Este último contiene las miofibrillas, o elemen-
tos contráctiles integrados por un conjunto
muy complejo de proteínas fibrilares entre
las que destacan la actina y la miosina, que
confieren al músculo su aspecto «estriado»
(Fig.101 -2). Las miofibrillas están unidas
al sarcolema mediante una proteína
llamada distrofina. En el sarcolema
también se han ido identificando
diversas familias de proteínas
que permiten mantener la forma
de las fibras musculares mediante
su relación con el citoesqueleto y la
matriz extracelular. El sistema de
tú bulos transversos («sistema T»)
consiste en una invaginación del
853
sarcolema, y es el responsable de
Sem iología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

Banda l. Formada por Banda A. Formada por


filamentos finos filamentos gruesos de miosina
Banda Z
~

"'
'

miosina

banda Z

Figura Imagen al microscopio electrónico.


Figura Biopsi a muscu lar. Las fibras muscul a- La alte rn ancia de sa rcómeros formados por la combi-
res tienen un a forma po li gona l y es posib le distingui r nac ión de fil amentos de actina y miosi na da el aspecto
dos tipos fundamenta les: las de tipo 1, osc uras en esta estri ado al mu scul oesquelético.
tinción, de metaboli smo fu ndamenta lmente aerób ico,
y las de tipo 2, más claras, de metabolismo predo-
yendo la denominada unidad motora. Los músculos
minantemente anaeróbico. Ti nción ATPasa miosínica
que llevan a cabo movimientos muy precisos (los ex-
preincubada a pH 4,6.
traoculares, por ejemplo), tienen un gran número de
unidades motoras , y cada unidad controla un número
pequeño de fibras musculares para garantizar así su
precisión.
la propagación del potencial de acción hacia el inte-
rior de la célula. El retículo sarcoplásmico es un siste- La neurona motora, bajo la influencia de estímulos
ma de túbulos y cisternas que rodea a las miofibrillas provenientes de centros superiores, emite un impul-
y que almacena calcio en su in terior. so nervioso que se transmite por el axón h asta lle-
gar a la unión neurom uscular o placa motora. Allí
se libera acetilcolina al espacio intersináptico , lo
que provoca un aumento de la permeabilidad de la
CONTRACCIÓN MUSCULAR
membrana muscular que genera un nuevo potencial
Las fibras musculares reciben los impulsos n erviosos de acción. La despolarización del sarcolema produce
desde las neuronas motoras del asta anterior a través un aumento del Ca++ citoplasmático libre, que se une
de los nervios periféricos. Cada neurona motora iner- a la troponina e induce un cambio de conformación
va varias fibras musculares (entre 10 y 15 0), constitu- de la tropomiosina (Fig. 101 -3). La tropomiosina así

En presenc ia d e Ca++ En ause nc ia de ca++


c itop las m ático c itop las m ático

Fi lamento
} fi no

Tropomiosi na
Troponina · Ca'•

}
Filamento
gru eso lrFi lamento
grueso
--------------
Figura Co ntracción y relajación muscu lar. Cua ndo el Ca++ citop lasmático libre se une a la troponi na, se
produce un camb io en la co nfo rmac ión de la tropom ios in a de manera que permite el co ntacto entre la miosina
(fil amento grueso) y la acti na (fil amento fino), generándose co ntracción. Cuando el ca++ libre disminu ye, la tro-
854
pomiosi na ocupa el lugar de contacto entre la actina y la miosin a y se prod uce re lajación.
CAPITULO 101 Patología general de las enfermedades musculares

modificada actúa sobre la actina , permitiendo que de acetilcolina debido a una reacción autoinmune
interaccione con la miosina, iniciándose el desli- dependiente de las células T.
zamiento de la una sobre la otra y, en definitiva, la El síntoma más característico es la fatigabilidad
generación de fuerza mecánica. Al cesar el estímulo, anormal de la musculatura, que se recupera tras el
la membrana se repolariza , el calcio libre disminuye reposo. Del estudio analítico destaca la posible exis-
su concentración por medio de una ATPasa situada tencia de anticuerpos contra receptores de la acetil-
en el retículo sarcoplásmico y por la acción del inter- colina. La electromiografía ofrece unos registros muy
cambiador Na+-ca++ situado en la membrana cito- característicos cuando se provoca la estimulación
plasmática, y se produce la relajación muscular. Este repetitiva de los nervios.
proceso de recaptación del calcio también requiere Una prueba de gran interés es la administración de
energía, por lo que, cuando esta es deficitaria, la re- un fármaco inhibidor de la acetilcolinesterasa, que
lajación se lleva a cabo con dificultad. Un ejemplo mejora la fuerza del paciente (prueba del Tensilon®).
paradigmático es el rigor mortis que se produce tras
la muerte del individuo.
TRASTORNOS DE LA EXCITABILIDAD
SÍNDROMES DE LA PATOLOGÍA MUSCULAR DE LAS MEMBRANAS
Los potenciales de reposo y acción de las membra-
Desde un punto de vista fisiopatológico , pueden nas musculares dependen de la integridad de varios
establecerse cuatro grandes síndromes musculares tipos de proteínas que forman parte de las mismas
caracteriazados por la alteración de la transmisión (bombas y canales iónicos fundamentalmente), y de
neuromuscular; de la excitabilidad de las membra- las concentraciones de iones en los espacios intra y
nas musculares, de la contractilidad muscular y de extracelular. Los describimos:
los mecanismos de obtención de energía.
Trastornos de las proteínas de la membrana
TRASTORNOS DE LA TRANSMISIÓN Miotonía. Se caracteriza por una prolongación
NEUROMUSCULAR de la contracción muscular una vez iniciada, con
una relajación lenta y dificultosa. Los pacientes
Los defectos de la transmisión del impulso pueden suelen referir dificultad para soltar los objetos
obedecer a trastornos congénitos, paraneoplásicos o una vez cogidos con fuerza (por ejemplo, soltar
autoinmunitarios. Estos últimos la mano tras un saludo). La miotonía puede pro-
(miastenia gravis) son los más vocarse en la exploración física por percusión.
frecuentes y se deben a una La forma más frecuente es la distrofia miotónica
disminución de los receptores o enfermedad de Steinert.
Canalopatías: Incluyen diversas formas debidas
a defectos en los canales de Na+ o Ca++. Su dis-
función dificulta los procesos de despolariza-
ción y repolarización de las membranas, provo-
cando episodios de debilidad muscular que
motivan que este grupo de enfermedades
también reciba el nombre de parálisis
periódicas. Los pacientes presentan, de
forma brusca y en general en periodos
de reposo tras un ejercicio físico, y en
ocasiones, tras una ingesta rica en hi-
dratos de carbono, pérdida de fuerza que
pueden oscilar desde una debilidad discreta
hasta cuadriparesia. La exploración física es
normal fuera de las crisis. A efectos prácticos,
suelen diferenciarse según cursen con hipo o hi-
perpotasemia durante las crisis .

Trastornos de la concentración de los iones


extracelulares
Los más frecuentes son:
Hipopotasemia: condiciona una disminución en
855
la excitabilidad de las membranas. Los pacientes
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

refieren debilidad muscular, que puede llegar a da lugar a una alteración estructural. La clasificación se
ser intensa. Suele deberse a algunos fármacos (p. suele hacer en base a criterios clínicos y moleculares.
ej. , diuréticos de acción proximal) o bien a un
Distrofinopatías: Como su nombre indica, su
hipoaldosteronismo primario.
defecto reside en la distrofina. La ausencia de
Hipocalcemia: en este caso se produce un estado distrofina se asocia a una miopatía grave (distro-
de hiperexcitabilidad de las membranas, tanto
fia de Duchenne}, mientras que su disminución
musculares como de las células nerviosas. Ello produce una enfermedad más leve (distrofia de
se traduce en la aparición del fenómeno de teta-
Becker) . Un aspecto característico es que la mus-
nia, y su expresión más característica, los espas-
culatura se ve sustituida por tejido fibroso y adi-
mos carpo-pedales.
poso, adoptando un patrón de pseudohipertrofia
muy característico en las pantorrillas.
Distrofias de cinturas: Se deben a la alteración
TRASTORNOS DE LA CONTRACCIÓN del muy complejo grupo de proteínas con fun-
MIOFIBRILAR ciones relacionadas con la estabilización de la
Se trata del más heterogéneo de los síndromes muscu- distrofina y del sarcolema. Existe debilidad y
lares. Viene definido por la dificultad de las proteínas atrofia de las cinturas escapular y pelviana.
contráctiles para generar una fuerza suficiente para Distrofia facio -escapulo-humeral: Recibe este
provocar una contracción muscular normal. Concep- nombre por la típica distribución de la debilidad
tualmente el defecto puede residir en el propio apara- muscular. Se trata de una enfermedad con un de-
to contráctil miofibrilar o en cualquiera de las proteí- fecto genético que perturba la cromatina y activa
nas que lo anclan a la membrana o que estabilizan a la expresión de toda una serie de genes vecinos
esta en relación a la matriz extracelular. En ocasiones no necesariamente relacionados con el músculo.
se desconoce el mecanismo íntimo por el que deja de
generarse energía mecánica. Se considera que las pro- Miopatías congénitas
teínas contráctiles claudican porque no se sintetizan Son miopatías definidas en base a hallazgos anatomo-
adecuadamente (problemas genéticos , desnutrición) patológicos. Sus manifestaciones son precoces tras
o se degradan en exceso (problemas genéticos, inac- el nacimiento, el patrón clínico variado y suelen ser
tividad, enfermedades consuntivas, exceso de calcio poco evolutivas.
intracelular).
Desde el punto de vista clínico, este grupo de enfer-
medades cursa con debilidad de distribución funda- Miopatías inflamatorias
mentalmente proximal por afectación de la muscula- Son miopatías adquiridas, de base no genética. La in-
tura de las cinturas escapular y pelviana. La debilidad flamación es de naturaleza autoinmune, y da lugar
de la cintura escapular produce sobre todo dificultad a una debilidad muscular subaguda de cinturas con
para elevar los brazos y los hombros (peinarse, por dolor a la palpación. Se pueden clasificar en derma-
ejemplo), mientras que la debilidad pelviana da lugar tomiositis, por alteración de la inmunidad humoral
a la marcha anserina (de pato) y a una maniobra de (por anticuerpos) y frecuentemente existe, además,
Gowers positiva. Aunque con menos frecuencia, pue- una afección de la piel (Fig. 101-4), y en polimiositis,
de existir debilidad de la musculatura facial , ocular,
faríngea, o incluso distal , configurando determinados
síndromes característicos. La debilidad puede ser
progresiva (distrofias) o cursar en brotes (miopatías
inflanrntorias). Los reflejos distales (aquíleos) suelen
estar conservados, y amortiguados los proximales
(bicipitales y rotulianos). Las enzimas musculares
se elevan y el EMG muestra el característico patrón
miopático. La biopsia muscular es de gran interés ,
ya que frecuentemente proporciona el diagnóstico.
Con la descripción en los últimos años de las múl-
tiples proteínas que forman parte de las miofibrillas
e intervienen indirectamente en su mantenimiento y
estabilización, frecuentemente se debe recurrir a es-
tudios inmunohistoquímicos o de tipo genómico. Las
enfermedades más significativas de este grupo son:
Figura Pápulas de Gottron. Se trata de lesio-
Distrofias musculares nes papuloeritematosas descamativas, situadas en el
Constituyen un grupo muy heterogéneo de enfermeda- dorso de las manos y en las zonas interfalángicas, muy
856
des de base hereditaria en las que el defecto genético sugestivas de una dermatomiositis.
CAPITULO 101 Patología general de las enfermedades musculares

en la que la agresión autoinmune se debe a linfoci- del déficit energético, influye en la clínica el efecto
tos T citotóxicos. Existe una tercera forma incluida mecánico del depósito intracelular del metabolito
aquí por el hallazgo de infiltrados inflamatorios en que no puede degradarse. Frecuentemente es nece-
la biopsia, pero cuyo significado es incierto. Es la lla- sario recurrir a estudios genéticos para establecer el
mada miositis por cuerpos de inclusión , en la que se diagnóstico definitivo.
pueden identificar depósitos de proteínas de degene-
ración, y en la que la reacción inflamatoria posible- Las formas más relevantes son:
mente sea secundaria.
Alteraciones del metabolismo
TRASTORNOS DE LOS MECANISMOS de los hidratos de carbono
DE OBTENCIÓN DE ENERGÍA Los carbohidratos constituyen una fuente de energía
particularmente importante al inicio del ejercicio, y
La célula muscular obtiene la energía necesaria para su déficit da lugar a una intolerancia al comienzo del
sus diversas funciones fundamentalmente a partir del ejercicio que suele mejorar tras un pequeño reposo,
glucógeno (vía glucolítica, fundamentalmente anae- cuando se ponen en marcha los mecanismos de ob-
robia) y de los ácidos grasos (vía aerobia) . Existe una tención de energía aeróbicos . Es el llamado fenóme-
vía final común a las dos anteriores, la fosforilación no del «second wind ». Un ejemplo de este tipo de
oxidativa, que se realiza en la matriz mitocondrial. alteraciones es el déficit de miofosforilasa, conocido
Estas miopatías cursan clínicamente con fatigabilidad como enfermedad de McArd/e, en la que existe un
fácil; es decir, los pacientes presentan un cansancio déficit en la conversión de glucógeno en glucosa. Los
desproporcionado para el ejercicio realizado, que les pacientes con estos trastornos presentan frecuentes
obliga a suspender la actividad (intolerancia al ejer- calan1bres musculares.
cicio). Si se exceden en la actividad física aparecen
calambres, dolor muscular o mioglobinuria. Algunas
formas cursan con déficit muscular permanente, con
Alteraciones en el metabolismo de los lípidos
atrofia y debilidad en reposo. En este caso, además La oxidación de los ácidos grasos para obtener ATP
es un mecanismo energético de importancia en ejer-
cicios mantenidos . La clínica de dolor, calambres e
incluso mioglobinuria, suele aparecer tras ejercicios
sostenidos, en ocasiones coincidiendo con un ayuno.
Las formas más conocidas son el déficit de carnitina
y de carnitina palmitoil tmnsferasa, necesarias para
el transporte de los ácidos grasos hacia el interior de
la mitocondria.

Alteraciones mitocondriales
El eslabón final en la obtención de energía en la
célula lo constituye la cadena respiratoria mitocon-
drial. Un fallo en las diferentes enzimas que compo-
nen esta cadena da lugar a una disfunción muscular
(miopatía mitocondrial), aunque el defecto rara-
mente se circunscribe al músculo. Así, puede haber
disfunción neurológica, hepática, cardiaca, renal , y
de prácticamente todos los tejidos que tienen mi-
tocondrias. Por ello, frecuentemente se considera
mejor denominarlas citopatías mitocondriales.
Las manifestaciones clínicas pueden ser muy
complejas y polimorfas. El paciente pue-
de presentar intolerancia al ejercicio, y
desarrollar acidosis láctica como conse-
cuencia de la puesta en marcha del meta-
bolismo anaeróbico que intenta compensar
la insuficiencia de los mecanismos oxidativos
mitocondriales. Un ejemplo es el síndrome MELAS
(miopatía mitocondrial, encefalopatía, acidosis lác-
tica y episodios «stroke-like »). La biopsia muscular
muestra unas alteraciones mitocondriales que son
857
diagnósticas.
-1102
Patología general de las
enfermedades articulares
Joan Miquel Nolla Solé

ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA
TIPOS DE ARTICULACIONES
Por su estructura se distinguen tres tipos de articula-
ciones: diartrosis, anfiartrosis y sinartrosis.
Las diartrosis están constituidas por las superfi-
cies óseas articulares, el cartílago hialino que las
recubre y la formación capsulosinovial; además ,
en algunas articulaciones existe un menisco o
fibrocartílago . La cápsula se extiende de uno a
otro borde de las superficies articulares de los
extremos óseos . Consta de una capa externa o
estrato fibroso , formado por tejido conectivo
denso, y de una capa interna, denominada mem-
brana sinovial, que al llegar al hueso se refleja
sobre él hasta alcanzar el cartílago articular. La
membrana sinovial presenta un gran número de
vellosidades que protruyen en la cavidad articu-
lar; en ella se disponen unos pocos mililitros
de líquido, cuyas funciones son lubrificar la
articulación y facilitar sus movimientos. Las
diartrosis están dotadas de gran movilidad;
en ellas se engloban la mayor parte de las
articulaciones de las extremidades, así
como las articulaciones interapofisanas de
la columna.
Las anfiartrosis o sínfisis son articula-
ciones que tienen escasa movilidad. El
espacio situado entre ambos cartílagos
articulares está ocupado por un disco o
un fibrocartílago, como ocurre en las
articulaciones intersomáticas de la
columna. No hay cavidad arti-
cular o, a lo sumo, hay una
hendidura en el espesor del
fibrocartílago , como sucede
en la sínfisis del pubis, en las
articulaciones sacroilíacas y en la
articulación manubrioesternal.
Las sinartrosis o suturas es-
tán formadas por superficies
858 óseas unidas por tejido fibra-
CAPITULO 102 Patología general de las enfermedades articulares

so o cartilaginoso. A este tipo de articulaciones


p ertenecen las de la cara y el cráneo. Carecen de
movimiento y no tienen patología propia.
Alrededor de la articulación se sitúan diversas es-
tructuras blandas, tales como músculos , ligamentos,
bolsas y tendones; el lugar de unión de los ligamentos
y los tendones en el hueso se denomina entesis.

CARTÍLAGO
El cartílago es una estructura hialina que ejerce fun-
ciones de amortiguación. Está compuesto por una ma-
triz extracelular y por un pequeño número de células,
los condrocitos, responsables de la síntesis y del man-
tenimiento de la matriz extracelular; esta última está
compuesta de proteoglicanos, colágeno y agua.
Histológicamente, en el cartílago se distinguen
cuatro zonas: a) superficial, en la que los condrocitos
tienen una forma alargada y plana; b) media, en la que
los condrocitos adoptan una forma globular; c) pro-
funda , en la que los condrocitos son iguales que en la
zona media, pero su número es menor, y d) calcifica-
da , que contacta con el hueso subcondral.

MEMBRANA SINOVIAL
En ella se distinguen dos sustratos histológicos: la
Figura Artrosis de cadera. Pinzam iento y es-
capa de tejido conjuntivo, que está en contacto con el
clerosis articular.
estrato fibroso de la cápsula, y la capa de células de
revestimiento, también denominadas sinoviocitos. La
capa de tejido conjuntivo está compuesta por una ma- avanza y aparecen fisuras verticales en la zona media
triz de fibras de colágeno y contiene vasos sanguíneos y profunda. Al mismo tiempo se produce una esclero-
y linfáticos, nervios, mastocitos, fibroblastos , macró- sis del hueso subcondral y una formación reactiva de
fagos y células mesenquimales. Los sinoviocitos son hueso en los márgenes de las articulaciones (osteofi-
células de tamaño variable, distintas en cuanto a su tos); en las epífisis óseas, cerca de la superficie arti-
forma , orientación y número; sintetizan los compo- cular, pueden formarse pseudoquistes o geodas. Si la
nentes de la matriz extracelular y regulan el recambio enfermedad evoluciona, el cartílago articular puede
de líquido sinovial, el flujo sanguíneo sinovial y el llegar a desaparecer; en esta situación se produce el
metabolismo del cartílago articular. contacto de los extremos óseos (Fig. 102-1).
En paralelo a la degeneración del cartílago, se pro-
duce una reacción inflamatoria de la sinovial, con
SÍNDROMES ARTICULARES una ligera infiltración celular y proliferación vascu-
Existen dos patrones de reacción: la degeneración lar. Tradicionalmente se consideraba que la inflama-
articular, o artrosis, y la inflamación articular, o ar- ción sinovial se producía en fases muy tardías de la
tritis. enfermedad artrósica. En la actualidad se considera
que está presente ya en las fases más tempranas y que
contribuye a la degradación cartilaginosa.
ARTROSIS
Es el término que se emplea en nuestro país para Etiopatogenia
designar a la enfermedad articular degenerativa. En
De forma inexorable, con la edad se producen cam-
ocasiones se utiliza el término osteoartritis por analo-
bios degenerativos. Comienzan ya hacia los 20 años,
gía con la denominación inglesa. Es una enfermedad
y avanzan progresivamente; no obstante, solo en un
muy prevalente, que constituye la causa más frecuen-
porcentaje relativamente pequeño de casos aparece-
te de afección articular. En la artrosis, la lesión inicial
rán manifestaciones clínicas atribuibles a la artrosis.
acontece en el cartílago; secundariamente resultan
Los factores de riesgo en relación con el desencade-
afectadas las estructuras óseas vecinas y la formación
namiento de una artrosis clínica son:
capsulosinovial.
La primera alteración que se produce es la degene- Generales: sexo, edad, raza y determinantes ge-
859
ración de la zona superficial del cartílago. El proceso néticos.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

Locales: obesidad, enfermedad o lesión articular las raícos fülf\'iosas o la mi'.idula. Los osteofilos do los
previa, microtraumatismos repetidos. trastornos cuerpos vertebrales o de las articulaciones interapofi-
metabólicos y alteraciones ele la ostfü ica. sanas también pueden contribuir a la compresión de
las estructuras nerviosas.
Con independencia del factor causal, en la artrosis
Lus articulflciones que resultan afectadas con mayor
existe un desequilibrio nntro los procesos fisiológicos
frecuencia en la artrosis son las interfalángicas de las
de degradación v los procesos de reparación de lama-
manos, trapeciometacarpianas, caderas. rodillas. in-
triz cartilaginosa extracfllular. Es decir, existe un pre-
terapofisarias y las intersomátícas vertebrales. cervi-
dominio do los procesos catabólicos del condrocito
cales y lumbares,
sobre los procesos anabólicos. Las enzimas proteolí-
ticas, Jundanu-mtalrnentn las metaloproteasas, proce- Exploraciones diagnósticas complementarias:
dentes del condrocito y do las células sinoviales. son
Rodiológicamente, la degeneración del cartílago ar-
las principales efectoras del proceso destructivo; tam-
ticular se expresa por una disminución de la amplitud
bién algunas citocinas, esencialmente la interleucina
del espacio articular, más acusada en las zonas de ma-
1. interleucina 6 y el factor de necrosis tumoral alfa,
yor presión. La esclerosis subcondral se traduce en un
contribuyen al proceso catabólico.
aumento de la densidad radiológica. Los osteofitos apa-
recen en las radiografías corno prominencias situadas
Manifestaciones clínicas en los bordes de las superficies articulares. También
Las principales son el dolor y la deformación. El car- son detectables radiológicamente las geoclas epifisarias.
tílago hialino está desprovisto do terminaciones ner- No existe elevación de los reactanles ele fose agu-
viosas, por lo que su degeneración no causa dolor. La da. El líquido articular es transparente y la c:elulari-
formación capsulosinovial, los ligamentos, los mús- dad es escasa,
culos y la médula ósea, sí tienen terminaciones sen-
sitivas; su estímulo puede. por tanto, producir dolor.
La formación capsulosinovial parece tener un pa-
Es el término que se utiliza en la práctica para de-
pel predominante cm la génesis del cuadro álgico de
signar la afección articular que acontece como con-
la artrosis. bion por la sinovitis reactiva. bien por las
secuencia ele la inflamación de la membrana sinovial
tensiones que sufre como consecuencia de la progre-
(sinovitis).
siva incongruencia de las superficies articularos que
se produce en la artrosis. Los ligamentos, igualmente Etiopatogenia
sometidos a tensiones en las fases avanzadas de la on-
fermeclad, y los músculos. que reaccionan contrayén- En la artritis. la reacción inflamatoria se produce en la
dose, también contribuyen a la aparición del dolor, sinovial como respuesta ante mecanismos de agresión
Habitualmente. o! dolor que se observa en la artro- dirnrsos (infocciones, depósito de cristales y reacciones
sis tiene caraclnrísticas que se califican de «mec,íni- inmunológicas. entre otros). En algunas enfermedades
cas»: aparoce con el movimiento y la sobrecarga dn (las denominadas artropatías destructivas). la reacción
la articulación y cede con el reposo. Sólo en fases inflamatoria sobrepasa los límites do la sinovial y pro-
avanzadas adopta un palrón inflamatorio (persisten- ducu. socundariamcmte. lé)siones en el cartílago y en
cia con el reposo). los oxtremos óseos de la articulación. No obstante.
La destrucción de las superficies articulares y la buena parte de las enfermedades arliculares inflama-
formación de los oslcmfitos determinan h1 aparición torias no causan destrucción osteoc:artilaginosa y, por
dtl deformaciones. En los dedos de las manos, tales tanto, no doterminan manifestaciones radiológicas.
deformaciones se traducen en nódulos ele Heberc!en La respuesta inj1anwtoria se puede dividir en tres
(articulaciones interfalángicas distales) y ele Bou- foses:
chorc! (articulaciones interfalángicas proximales). Inicial. en la quo se producen cambios hemo-
La inmovilidad por el dolor causa atrofia muscular. dinámicos, fundamentalmente por la acción de
La incongruencia articular es la responsable de los sustancias vasoactivas como las prostaglanclinas.
crujidos que pueden constatarse ni movilizar la arti- la serotonina y la histamina; existe una vasodila-
culación. Cuando la sinovitis es relevante, se pueden tación arteriolar que explica los signos clínicos
observar las manifestaciones propias de la inflama- cfo aumento local ele temperatura y eritema.
ción: tumefacción, derrame articular y calor local; no Intermedia, caracterizada por un aumento de la
so constata eritema ni ndema periarticular. permeabilidad vascular, que determina derrame
La artrosis do las articulaciones vertebrales intnrso- y flxpl ica la tumefacción.
méiticas presenta algunas peculiaridades. El disco está Final, caracterizada por una infiltración leuco-
constituido por un anillo fibroso y un núcleo pulpo- citaria: la vasodilatación arteriolar determina es-
so. Los fenómenos degenerativos tienden a desplazar tasis sanguínea, la distribución ordonada ele los
el núcleo pulposo hacia atrás (protrusión), e incluso leucocitos so pierde, y estas células se acercan a
es posible que llegue a salir del disco a través ele fi- la pared vascular, se adhieren a las células endo-
860 Sl1ras del anillo fibroso (hernia), pudiendo comprimir teliales y, finalmente, pasan entre ellas.
CAPÍTULO 102 Patología general de las enfermedades articulares

Los primeros leucocitos que llegan al foco infla- Exploraciones diagnósticas complementarias:
matorio son los neutrófilos; después acuden los mo-
En las artritis, los reactantes de fase aguda están
nocitos y los linfocitos. La infiltración celular está
elevados. El líquido articular es translúcido u opaco
regulada por moléculas de adhesión, como las selec-
(no permite leer a través de él), y la celularidad está
tinas y las integrinas, cuya aparición está controlada
aumentada.
por citocinas, esencialmente las interleucinas 1 y 6 y
el factor de necrosis tumoral alfa, segregadas por los
macrófagos Clasificación
La lista de enfermedades que causan artritis es muy
amplia. No obstante, un gran número de ellas tie-
Manifestaciones clínicas
ne una prevalencia muy baja. Es útil establecer una
En la artritis el dolor es de ritmo inflamatorio, es decir, aproximación en términos de grupos nosológicos y
persiste con el reposo. Es consecuencia de la estimu- dividir las enfermedades articulares inflamatorias en
lación de las terminaciones sensitivas de la membra- artritis infecciosas, artritis microcristalinas, espon-
na sinovial y de la distensión capsular que produce diloartropatías y enfermedades del tejido conectivo .
el derrame articular; en las artropatías destructivas,
Artritis infecciosa
las incongruencias articulares también contribuyen al
cuadro álgico. Es un proceso inflamatorio originado por la coloniza-
ción de la articulación por parte de un microorganis-
En la exploración física se observa tumefacción y
mo. Artritis séptica se utiliza a menudo como sinó-
derrame articular, aumento local de la temperatura y
nimo de artritis infecciosa, pero en puridad debería
limitación de la amplitud del movimiento articular;
reservarse para la artritis ocasionada por gérmenes
en ocasiones también existe eritema periarticular (Fig.
piógenos.
102-2). En las artropatías destructivas pueden obser-
Cualquier microorganismo puede colonizar una
varse deformaciones como consecuencia de la varia-
articulación. Las artritis infecciosas producidas por
ción de la posición respectiva de los elementos óseos.
gérmenes piógenos son las más frecuentes aunque, en
Con independencia de dónde refiera el enfermo los
España, el Mycobacterium tuberculosis y la Brucella
síntomas, deben explorarse todas las articulaciones del
melitensis desempeñan todavía un papel muy rele-
organismo. Cuando solo existe compromiso de una ar-
vante.
ticulación, se emplea el término monoartritis; cuando
La artritis infecciosa se establece, por lo general,
están efectadas dos, tres o cuatro, se utiliza el término
por vía hematógena. La sinovial está muy vasculariza-
de oligoartritis, y cuando existe afección de cinco o
da, lo que favorece la colonización de la articulación
más articulaciones, se emplea el término poliartritis.
en caso de bacteriemia. Los microorganismos pueden
Además del número de articulaciones afectadas, es también alcanzar la articulación, tras maniobras diag-
útil evaluar si la afección es o no simétrica, si existe nósticas o terapéuticas que comportan la punción de
o no compromiso concomitante de las articulaciones la articulación, tras intervenciones quirúrgicas o por
del esqueleto axial y cuál es la duración del proceso; contigüidad a partir de un foco vecino de osteomie-
una artritis se considera «aguda» si su duración es litis.
inferior a seis semanas y «crónica» cuando sobrepasa La afección suele ser monoarticular. Se afectan
este tiempo. fundamentalmente las grandes articulaciones de las
extremidades inferiores (rodilla, cadera) y de las su-
periores (hombro, muñeca). La enfermedad se presen-
ta de forma aguda, con fiebre más o menos elevada,
dolor de características inflamatorias y alteración del
estado general. Los signos y síntomas inflamatorios
suelen ser muy evidentes.
El líquido sinovial es turbio, o claramente purulen-
to. En su cultivo se aísla el germen con una frecuencia
que varía con la naturaleza del mismo.
Las artritis víricas suponen una forma especial de
artritis infecciosa, en tanto que se expresan en for-
ma de poliartritis, tienen un curso autolimitado y no
producen destrucción articular. El parvovirus Bl9, el
virus de la rubéola y los virus de la hepatitis B y C son
los agentes responsables más habituales.
Artritis microcristalinas
Figura Tumefacción y enrojecimiento en una Los cristales que tienen importancia clínica son los
artritis de tobillo. de urato monosódico y los de pirofosfato cálcico.
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

La enfermedad provocada por Ell depósito de cris-


tales de urato monosódico en las articulaciones reci-
be el nombre de gota; por lo general, se acompaña de
hiperuricemia. El inicio es extraordinariamente súbi-
to («ataque,>). el dolor es ele naturaleza inflamatoria
y muy intenso. Las manifestaciones locales de infla-
mación son muy acusadas. La región articular que se
afecta con mayor frecuencia es la metatarsofalángica
del primer dedo (podagro). En el líquido sinovial se
observan cristales de urato monosódico.
El curso clínico de la enfermedad por depósito de
cristales de pirofosfato cálcico remeda al de la gota
(«pseudogota» ). Las articulaciones que se comprome-
ten con mavor frecuencia son las rodillas v las muñe-
cas. En las ~-acliografías se aprecian calcifi~acíones en
forma de una banda que sigue de cerca el contorno de
la epífisis y se corresponde con el cartílago hialino
(condrocalcinosis). en particular en las rodillas v en
el ligamento triangular del carpo. En el líquido ;ino-
vial se observan cristales de pirofosfato cálcico.

Esp on di Ioartro palías


Esto término engloba a un grupo de onfermeclades
reumáticas de etiología desconocida con afectación
de artículacionos axiales (sacroilíacas, columna verte- Figura Espondilitis anquilosante. Imagen ra-
bral) y periféricas (patrón oligoarticular v asimétrico) diológica ele "cai'ía de bambú,,.
que se acompaña de entesitis (inflamación de la zona
ele inserción de los tendones, ligamentos y cápsula
articular en el hueso). Es característica la asociación
con el antígeno de histocompatibilidacl HLA B27 v las manos y de los pies. de forma poliarticular y
la presencia concomitante de afección mucocu Láne,;, simétrica. La rigidez articular después de la in-
ocular, intestinal y genitourinaria. La espondilitis an- actividad es un síntoma rn uy frecuente ( «rigidez
quilosante os la @ticlad paradigmática del grupo (Fig. matutina». al despertar por la mañana). Con el
102-3). paso del tiempo se produce una proliferación
La manifestación clínica más característica es el sinovial que adopta la estrnctura de un tejido ele
síndrome sacroíliaco, que se expresa en forma ele do- granulación muy vascularizaclo («pannus») que
lor ele naturaleza inflamatoria en las nalgas, que pmi- invade y destruye el cartílago hialino y más tarde
de irradiarse hasta las rodillas. La afectación de la co- el hueso.
lumna vertebral se traduce en lurnbalgia. En la radio- El lupus eritematoso sistémico puede afectar a
grafía de columna se constata una osificación reactin1 gran cantidad de órganos v sislomas. Existe afec-
en los extremos anteriores ele los cuerpos vertebrales, tación articular en un 90 '¾, ele los pacientes. No
por enlesitis l:ll1 la inserción del anillo fibroso elísea]: siempre se manifiesta por artritis; en ocasiones,
con el tiempo. la osificación tiendo a formar un puen- únicamente existen artralgias. Se comprometen
te entre dos vértebras contiguas (sindesmofito). esencialmente las pequeñas articulaciones de las
manos y de los pies.
Enfermedades inflamatorias del tejido conectivo La polimialgia reumática es una enfermedad
do nombre un tanto equívoco, dado que la afec-
También se denominan colagenosis, enfermeda-
des del colágeno o conectivopalías. Constituyen un ción no es muscular, sino que es consecuencia
grupo heterogéneo de enfermedades do base autoin- de la inflamación ele las articulaciones, las bol-
mune. en las que. además del compromiso articular. sas serosas y los tendones. Se afectan la cintura
escapular (hombros). la pelviana (caderas) v el
c"xisten manifestaciones derivadas de la afección con-
comitante de otras estructuras en las que predomina cuello (columna cervical). Determina una 1;1ar-
el tejido conectivo. Las enforrnedacles 1rnís represen- cada impotencia funcional pero. dado que afecta
tativas de este grupo son la artritis reumatoide. el lu- a articulaciones profundas, no suele observarse
pus eritematoso sistémico y la poli mialgia reurrnítica. tumefacción. En aproximadamente un 40 % de
los casos va acompañada de una vasculHis cra-
La artritis reurnatoide es una enfermedad pre- neal que afecta fundamentalmente a la arteria
dominantemente articular que afecta funda- temporal (arteritis ele 1a temporal o ele células
mentalmente a las pequeñas articulaciones de gigantes).
-i103
Patología general
de las osteopatías
metabólicas
Jesús González Macias, José Antonio Riancho Moral

FISIOLOGÍA ÓSEA
ESTRUCTURA Y COMPOSICIÓN
El hueso está constituido sobre una matriz orgánica
en la que se deposita mineral óseo. La matriz orgáni-
ca está formada por fibras de colágeno y por material
interfibrilar. El mineral está compuesto fundamental-
mente por calcio y fosfato, en forma de cristales de
hidroxiapatita.
La disposición de las fibras de colágeno permite
distinguir dos tipos de hueso:
Uno en el que las fibras se orientan de forma irre-
gular (hueso plexiforme).
Otro en el que lo hacen de forma que en una
capa se orientan en un sentido y en las capas
vecinas en otro, lo que da lugar a que el hueso
se estructure en láminas (hueso laminar), Este
hueso es el propio de la edad adulta.
Dentro del hueso laminar cabe distinguir dos
subtipos. En primer lugar, el hueso cortical o
compacto, en el que las láminas se disponen en
paquetes cilíndricos de láminas concéntricas
(sistema de Havers), adosados unos a otros. En
segundo lugar, el hueso esponjoso o trabecular,
en que las láminas tienen una configuración se-
milunar y forman - de ahí el nombre- trabé-
culas que se entrecruzan, dejando huecos en
los que asienta el tejido hematopoyético. El
tejido óseo cortical se dispone en la super-
ficie de los huesos, y el trabecular, en el
interior de los mismos. El cortical,
además, constituye la totalidad de
la diáfisis de los huesos largos.

UNIDADES DE REMODELACIÓN
El hueso está sometido a un pro-
ceso continuo de renovación
(conocido como remodelación), ~
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

mente después de los osteoclastos, y exactamente en


el mismo sitio, se conoce como acoplamiento, fenó-
• Finali dad: mantenim iento del hueso meno que consiste, por tanto, en la adecuación tem-
en co nd iciones adecuadas poroespacial de la acción de ambos tipos de células.
• Nº de un idades:> 1.000.000
Cada vez que se activa una unidad de remodela-
~
• Tasa de recambio anual: ción aparece una zona en que se pierde hueso tran-
@~ • hu eso trabec ular: 25-30%
sitoriamente (desde que empieza a ser destruido
~ • hueso cortica l: 3-4%
por los osteoclastos, hasta que es formado por los
osteoblastos) . El conjunto de todas las zonas que se
encuentran en esta situación de pérdida transitoria

~ de hueso se conoce como espacio óseo en remode-


lación.

Fi gura Trabécula ósea que muestra tres uni-


BALANCE ÓSEO
dades de remode lación. La superior está en fase de Se denomina balance óseo de una unidad de remo-
resorción, observándose los osteoclastos (célula mul- delación la diferencia entre la cantidad de hueso des-
tinucleadas) en azul. La inferior derecha está en fase truido y la cantidad de hueso formado. Lógicamente,
de formación (aparecen los osteoclastos cuboidales en para que no haya variaciones en la masa ósea total
rojo). A la izquierda aparece una unidad que ha fina- debe ser igual a cero (Fig. 103-3). Cuando la cantidad
lizado la fase de formac ión ósea, pero no la de mine- formada es inferior a la destruida, se dice que el ba-
ra lización. (Aparece representado el osteoide en gris). lance es negativo.

mediante la sucesión de fenómenos de destrucción y


de formación que se establecen en zonas microscópi- VELOCIDAD DE RECAMBIO ÓSEO
cas, bien delimitadas , y distribuidas por todo el es-
queleto (unidades de remodelación) (Fig. 103-1). Las El aumento del número de unidades de remodelación
células que llevan a cabo la destrucción ósea son los determina un incremento en la velocidad de reno-
osteoclastos, y las encargadas de la formación, los os- vación ósea, dando lugar a una situación conocida
teoblastos. Parte de los osteoblastos quedan enterra- como aumento del recambio óseo (Fig. 103-3). Dicha
dos en el hueso a medida que lo forman, transformán- situación cursa con una disminución de la masa ósea
dose en osteocitos. Otra parte queda en la superficie por dos mecanismos diferentes:
ósea, tapizando el hueso recién formado (osteoblastos
de supe1ficie o células de revestimiento) (Fig. 103-2) .
El hecho de que los osteoblastos actúen inmediata-

Osteoblastos
de revestimiento
Osteoblastos
de formación
'-------ª_____ !S~it~adón no,mal

'-------------1B__,a(ance negadvo
1)=::::=~1• .,)=:::=::=:{•••)=::::=s--

Osteocito

Fig ura Existen dos tipos principales de cé-


lulas óseas: los osteoclastos (en azul ) y las de estir- Figura La figura representa los dos grandes
pe osteoblástica. Estas pueden ser de varios tipos: el mecanismos determinantes de la osteoporosis: el ba-
osteob lasto formador de hueso (cuboida l, en gris); el lance negativo (tras la fase de resorc ión sólo se restitu-
osteoblasto de revestimiento (aplanado, en amarillo); ye parte del hueso destruido) y el aumento del recam-
y el osteocito (en el seno del huesos, y en conexión bio (fundamentalmente debido a un incremento en el
864
con sus vecinos). número de unidades de remodelación).
CAPÍTULO 103 Patología general de las osteopatías metabólicas

En primer lugar, porque el aumento en el nú-


Preos oblasto Preosteoclasto
mero de unidades de remodelación supone un
incremento del espacio óseo en remodelación
(Si posteriormente el número de unidades en
remodelación disminuye, el espacio óseo en re-
modelación lo hace también, de manera que las
pérdidas óseas debidas a este componente son
reversibles) .
En segundo lugar, si el aumento en el número
de unidades se desarrolla cuando éstas se en-
cuentran en balance negativo, ello significa un
incremento en el número de lugares en que se
establecen pérdidas óseas; a diferencia de las
anteriores, estas pérdidas óseas son definitivas.
Figura Los tres factores locales más impor-
La coincidencia de los dos mecanismos puede
tantes en la regulación de la actividad de la unidad de
determinar que las pérdidas óseas sean muy acusa-
remodelación ósea son el RANKL (B-caten in a se pone
das, como ocurre con la depleción de estrógenos que
la unidad en marcha); el sistema Wnt-P-catenina (prin-
caracteriza la menopausia (3-4 % de pérdida anual
cipal factor estimulador de la formación ósea), y la
durante los 5-7 años siguientes a la misma) . Convie-
esclerostina, que determina el momento en que debe
ne recordar que las pérdidas debidas al aumento del
dejar de formarse hueso.
espacio en remodelación se recuperan si administra-
mos un fármaco que disminuya el recambio.

ambos controlados por los osteocitos. Efectivamente,


MINERALIZACIÓN los osteocitos, desde su localización en el seno del
El hueso nuevo formado en las unidades de remo- hueso, pueden detectar la necesidad de renovación
delación no está mineralizado inicialmente, y recibe del mismo. Cuando lo hacen, producen RANKL, que
en esta fase el nombre de osteoide. Tras un perio- atrae a los preosteoclastos y da lugar al desarrollo de
do de maduración (en torno a 10 días), comienza a osteoclastos maduros y activos. Por otra parte, cuan-
mineralizarse. Como es lógico, se mineraliza antes do detectan que la unidad de remodelación debe fina-
el osteoide que se depositó primero, de manera que lizar su actuación, producen esclerostina, que inhibe
la mineralización avanza de la profundidad a la a los osteoblastos.
superficie. Hasta que la mineralización se comple- Otro punto crucial en la regulación de la unidad de
ta, en los cortes histológicos es visible una banda remodelación es el momento en que cesan en su acti-
de osteoide. Una mineralización correcta depende, vidad los osteoclastos y comienza la de los osteoblas-
entre otros factores, de la dotación de vitamina D tos. Este fenómeno es debido por una parte a la sín-
del organismo, de la disponibilidad de fosfato y de tesis por los osteoclastos de sustancias que estimulan
la disponibilidad de una enzima (fosfatasa alcalina) a los osteoblastos (p. ej. proteínas Wnt) (Fig. 103-4),
que elimina a un inhibidor de la mineralización (pi- y por otra a la liberación desde el hueso destruido de
rofosfato). La vitamina D actúa sobre los osteoblastos sustancias que también estimulan a los osteoblastos
y, además, facilita la absorción intestinal de calcio y (p. ej ., TGF~). Algunas de estas sustancias además in-
fosfato. hiben a los osteoclastos (Wnt, TGF~l-

REGULACIÓN DE LA REMODELACIÓN ÓSEA EVOLUCIÓN DE LA MASA ÓSEA A LO LARGO


DE LA VIDA
En ella intervienen múltiples factores. Pueden ser ge-
nerales o locales, y aumentar o disminuir la actividad La masa ósea aumenta durante el desarrollo, consi-
de los osteoclastos. Por ejemplo, la actividad de los derándose que permanece estabilizada a partir de los
osteoclastos es estimulada por el RANKL (factor lo- 20 años. En la cuarta década de la vida se instaura
cal) y por la PTH (factor sistémico), e inhibida por la un balance negativo en las unidades de remodelación
osteoprotegerina u OPG (factor local) y los estrógenos de aproximadamente el 3 % por unidad, responsable
(factor sistémico) . La actividad de los osteoblaslos de que, con la edad, se pierda un 0,5-1 % de masa
es estimulada por las proteínas Wnt (factor local) e ósea anualmente (Fig. 103-5). Por otra parte, la me-
inhibida por la esclerostina (factor local); también es nopausia determina un incremento del recambio
estimulada por la sobrecarga mecánica. óseo. El resultado es una pérdida anual de masa ósea
Merecen mención especial los momentos de ini- del 3-4 % durante los años siguientes a la misma. La
865
cio y finalización de la unidad de remodelación, acumulación de las pérdidas óseas producidas en las
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

minución de la masa ósea que acaba repercutiendo


sobre los elementos determinantes de su resistencia
mecánica: trabéculas , que se adelgazan e incluso
desaparecen, y cortical, que se adelgaza. La desapa-
rición de las trabéculas tiene especial importancia,
porque la pérdida de la continuidad del entramado
trabecular (desconexión trabecular) impide que la
carga mecánica pueda repartirse entre todas ellas.

ETIOLOGÍA
20 40 60 80
Al desarrollo de la osteoporosis contribuyen muchos
Años
factores , unos de carácter genético, y otros adquiri-
dos (entre los que se incluyen, por ejemplo, el conte-
Figura Evolución de la masa ósea a lo largo nido en calcio de la dieta, el grado de ejercicio físico,
de la vida. Se observa que en la mujer, tras la m e- diversas enfermedades y tratamientos, etc.). La masa
nopausia, se produce una marcada pérdida de masa ósea que tiene un individuo en un momento determi-
ósea (un a acentuac ión de esta faci lita el desarrollo de nado de su vida puede representarse por Q = I - (a
osteoporosis). + b + c), en que Q = masa ósea, I = valor máximo
de masa ósea alcanzado al finalizar el desarrollo, a
= pérdidas debidas a la edad, b = pérdidas debidas
múltiples unidades de remodelación que incesante- a la menopausia, y c = pérdidas debidas a otros fac-
mente se ponen en marcha, acaba haciendo que algu- tores. Se pretende con ello sistematizar los factores
nas trabéculas no solamente se adelgacen, sino que se que determinan pérdida de masa ósea en tres grandes
perforen e incluso lleguen a desaparecer. apartados, dos de los cuales (la edad y la menopau-
sia) se califican de «obligados », mientras que todos
los demás (resumidos en c) se califican de «esporá-
SÍNDROME OSTEOPORÓTICO dicos», en el sentido de que se dan sólo en algunas
ocasiones.
CONCEPTO Como se deduce de lo anterior, con frecuencia
coinciden varios factores en la determinación del
La osteoporosis es un trastorno caracterizado por un desarrollo de osteoporosis. Sin embargo, es costum-
aumento de la fragilidad del hueso debido a una <lis- bre clasificar la osteoporosis desde el punto de vista
etiológico en primaria y secundaria según cuál
sea el factor etiológico predominante. Suele
hablarse de osteoporosis primaria cuan-
do el principal factor involucrado en
su desarrollo es la edad (osteoporo-
sis senil) o la menopausia (osteo-
porosis posmenopáusica}, y de os-
teoporosis secundaria cuando el
principal factor involucrado es un
factor esporádico (tabaco, alcohol,
dieta pobre en calcio, falta de vita-
mina D, etc.). capaz por sí solo de
generar osteoporosis (en general, se
trata de enfermedades -hipertiroi-
dismo- o tratamientos farmacológi-
cos -corticoides-) . Con frecuencia,
los factores esporádicos se limitan
a intensificar una osteoporosis de-
terminada por la edad o la meno-
pausia.

PATOGENIA
Los factores que aceleran la pér-
866
dida de masa ósea actúan unas veces
CAPÍTULO 103 Patología general de las osteopatías metabólicas

íl D
D ºoq ~

o~~ ~
íl
D O
íl
íl ~
D Ü + L _
J i
Normal Osteoporosis

Figura D isminución de la masa ósea con alteración de la estructura: adelgazamiento y pérdida de las
trabéculas, y adelgazamiento de la cortical con aumento de su porosidad.

incrementando el balance negativo de las unidades Otros estudios. La densitometría revela la dismi-
de remodelación (menor actividad de los osteoblas- nución de densidad ósea.
tos o mayor de los osteoclastos), y otras aumentando
su número (aumento del recambio). Ejemplos de lo
primero son la edad y los corticoides. Ejemplo de lo SÍNDROME OSTEOMALÁCICO
segundo es la menopausia (y también la edad avan-
zada). La mayor parte de estos factores desarrollan su Como se ha señalado, la mineralización del osteoi-
efecto deletéreo a través del sistema RANKL/OPG y de tiene lugar de la profundidad a la superficie, y se
probablemente de la vía Wnt. lleva a cabo después de que el osteoide experimenta
un fenómeno de maduración que tiene una duración
de unos 10 días. Ello significa que, hasta que la mi-
FISIOPATOLOGÍA Y MANIFESTACIONES neralización se completa, en los cortes histológicos, a
nivel de las unidades de remodelación, es visible una
Aspectos clínicos. La disminución de la masa banda de osteoide. Si el hueso se deposita a la veloci-
ósea, con desaparición de algunas trabéculas y dad habitual, pero la mineralización está enlentecida,
adelgazamiento de las restantes y de la cortical, el grosor de dicha banda de osteoide será mayor de
aumenta la fragilidad del hueso (Fig. 103-6). El lo normal. En esto consiste la osteomalacia: un en-
proceso es asintomático hasta que se producen lentecimiento de la mineralización del osteoide, con
las fracturas. Cuando se establecen estas, apa- un aumento de grosor del mismo, lo que en definitiva
recen dolor y deformidades. Las fracturas más supone que la cantidad total de osteoide del hueso
frecuentes son las de la extremidad proximal del en un momento determinado es superior a la normal.
fémur («fracturas de cadera»), más relacionadas La principal causa de osteomalacia es la falta de
con el componente senil de la enfermedad, y las vitamina D. Existen algunas otras causas más raras, de
vertebrales, que lo están principalmente con el las que la más importante es la depleción de fosfatos.
componente postmenopáusico (no todas las frac- Los principales motivos para que se produzca una
turas vertebrales guardan relación con la meno- carencia de vitamina D disminuye la absorción intes-
pausia; de hecho, también pueden producirse en tinal de calcio y fosfato (con la consiguiente menor
el varón). Estas últimas producen disminución disponibilidad de ambos para su depósito en la matriz
de la talla y cifosis (Fig. 103-7). ósea) o falta su actuación sobre los osteoblastos.
Aspectos analíticos. El laboratorio convencional La osteomalacia cursa con dolor óseo sordo, difu-
no suele detectar alteraciones significativas. so, que afecta fundamentalmente a la espalda y las
Aspectos radiológicos. La radiografía pone de extremidades inferiores. La razón es que el exceso de
867
manifiesto las fracturas (Fig. 103-7). osteoide hace que el hueso sea más blando, de mane-
Semiología y fisiopatología de las enfermedades del aparato locomotor

Figura En la parte izqu ierda se recoge el cambio en la morfología corpora l a que conduce la osteopo-
rosis: como consecuencia del aplastam iento de las vértebras torácicas, cifosis; como consecuencia del ap lasta-
miento de las vértebras lumbares, aprox imación de las costillas a los ilí acos, con prom inenc ia abdomina l. En la
parte derecha se recogen algunas imágenes radiológicas de fracturas-ap lastamietno vertebrales.

ra que se deforma al soportar peso, y la deformación ENFERMEDAD DE PAGET


estimula las terminaciones nerviosas del periostio. A
veces la deformación determina la aparición de inte- Esta enfermedad de Paget en determinadas zonas del
rrupciones de la cortical por bandas translúcidas, que esqueleto (a diferencia de las anteriores, es una enfer-
se llaman líneas de Looser (o de Looser-Milkman). Por medad focal) se produce una exaltación del recambio
razones poco claras, tal vez relacionadas con la falta óseo, a lo que se añade que el hueso recién forma-
de fosfato, puede añadirse un cuadro miopático. do es anormal. El hueso formado con frecuencia es
En la osteomalacia por falta de vitamina D los aná- plexiforme, sus trabéculas no se disponen de forma
lisis revelan una tendencia a la hipocalcemia y la adecuada, y la cortical es más gruesa de lo normal. El
hipofosfatemia (ligeras), con un aumento de fosfata- tejido óseo resultante, aunque puede tener aumenta-
sa alcalina probablemente debido a que el recan1bio da su densidad, es frágil. Según exista un único foco o
óseo está exaltado, en respuesta a una elevación reac- más de uno, la enfermedad se califica de monostótica
tiva de la PTH. Lógicamente, la cifra de 25 -hidroxi o de poliostótica. Su causa es desconocida.
vitamina D está descendida. Las lesiones óseas, además de poder dar lugar a
La osteomalacia es una enfermedad de adultos. fracturas, pueden ser dolorosas y causar deformida-
Cuando el trastorno se instaura en la infancia, a las des. El aumento del recambio óseo hace que la fosfa-
alteraciones señaladas para la osteomalacia se añade tasa alcalina esté elevada. Sin embargo, la calcemia y
un desarrollo inadecuado del esqueleto. El resultado la fosfatemia no se alteran. Es típico de los focos de
es un cuadro que se conoce como raquitismo. remodelación que capten en la gammagrafía ósea.

868

También podría gustarte