Está en la página 1de 5

Paralelo entre coordinación fina y gruesa

Anyeli Martínez Domínguez

Ficha:
2282096

Instructora:
Dolly Astrid Beltrán

Servicio Nacional de Aprendizaje


Tecnología en Gestión de Mercados

Meta
Villavicencio
2022
Introducción

Desde la perspectiva de la psicomotricidad, hay 2 tipos de motricidad: fina y gruesa.


La motricidad fina se refiere a las acciones que implican pequeños grupos musculares de
cara, manos y pies, concretamente, a las palmas de las manos, los ojos, dedos y músculos
que rodean la boca. Es la coordinación entre lo que el ojo ve y las manos tocan.
Estos músculos son los que posibilitan: la coordinación ojo-mano, abrir, cerrar y mover los
ojos, mover la lengua, sonreír, soplar, hacer nudos en los cordones, agarrar un objeto,
recortar una figura, etc.
La motricidad gruesa es aquella relativa a todas las acciones que implican grandes grupos
musculares, en general, se refiere a movimientos de partes grandes del cuerpo o de todo el
cuerpo.
Así pues, la motricidad gruesa incluye movimientos musculares de: piernas, brazos, cabeza,
abdomen y espalda. Permitiendo de este modo: subir la cabeza, gatear, incorporarse,
voltear, andar, mantener el equilibrio.
La motricidad también abarca las habilidades para moverse y desplazarse, explorar y
conocer el mundo que le rodea y experimentar con todos los sentidos (olfato, vista, gusto y
tacto) para procesar y guardar la información del entorno que nos rodea.
Así pues, el ámbito de la motricidad está relacionado, mayormente, con todos los
movimientos que de manera coordinada realizan las personas con pequeños y grandes
grupos musculares, los cuales, son realmente importantes porque permiten expresar la
destreza adquirida en las otras áreas y constituyen la base fundamental para el desarrollo
del área cognitiva y del lenguaje.

Justificación

Este trabajo tiene como finalidad conocer la motricidad fina y gruesa y así tener la
conciencia de las malas posturas que optamos a la hora de sentarnos o en nuestra rutina
diaria en casa y que estas a largo plazo las consecuencias que pueden tener para nuestra
salud y de los daños irreparables que podría ocasionar a nuestro cuerpo, aunque el tomar
conciencia no solo nos beneficia en nuestra salud física sino también mental, ya que tener
una buena postura y un ambiente adecuado en nuestro espacio de trabajo facilita en
aprendizaje y economiza tiempo.

Objetivo general
Realizar un estudio de las actividades que desarrollo a diario utilizando la coordinación fina
y gruesa en mi área de trabajo, y las posibles rutinas que puedo realizar en una pausa activa
que beneficia mi salud.

Objetivos específicos
1. Realizar una rutina de pausas activas sencillas que pueda poner en práctica en mi
oficina.
2. Establecer las posturas adecuadas durante mi día.
3. identificar las posturas al sentarme en mi oficina y al levantar objetos.

Paralelo
COORDINACIÓN FINA COORDINACIÓN GRUESA
Cortar papel con tijeras Correr
Observar documentación Caminar
Tocar objetos Subir escaleras
Calcular distancias Sonreír
Escribir Coger cosas con la mano
Manipulación de hojas en archivos Mover la cabeza
Coordinación mano-ojo Estar de pie

Rutinas coordinación fina:


Escribir: dibujar o colorear
Manipulación de hojas: tocar elementos solidos o con texturas rusticas.
Caminar: dar pasos de forma relajada uno tras otro, permitiendo un movimiento natural y
flexible de los pies.

Rutina coordinación gruesa


Sentarse: sentarse en el borde de la silla mientras doblas las piernas juntas, mantener los
brazos a los lados de tal manera que las manos estén en el asiento de la silla.
Manteniendo la posición anterior también podemos ejercitar los cuádriceps, con las rodillas
todavía dobladas estiramos una pierna mientras la otra esta recogida, mantenemos esta
posición unos segundos y luego volvemos a la postura inicial, podemos hacer unas 15
repeticiones por cada pierna.

Forma correcta de sentarse

 Las plantas de los pies apoyadas en el suelo, con los pies paralelos y al mismo nivel.
De no llegar al suelo porque la silla es demasiado alta, usar un reposapiés. Los pies
nunca deben quedar colgando.
 Rodillas flexionadas a 90º, es decir, tienen que formar un ángulo recto con los fémures.
Entre el asiento y la parte posterior de la rodilla ha de haber un espacio para no
comprimir la zona poplítea y evitar así problemas circulatorios o nerviosos.
 Evitar cruzar las piernas, porque hacerlo provoca compresión en los vasos sanguíneos,
así como la alteración de los puntos de presión en un glúteo más que en el otro.
 Repartir el peso en ambos fémures, sin apoyar el peso en el cóccix y manteniendo los
glúteos al fondo de la silla
 La espalda, apoyada en el respaldo, ajustando su posición en la zona lumbar.
 Mantener en lo posible los hombros relajados colocando los antebrazos sobre la mesa
o las manos sobre el regazo.
 La cabeza recta. La zona cervical tiene que quedar alineada con el resto de la columna.
Si desplazamos la cabeza hacia delante aumenta la exigencia muscular en esta zona,
acrecentando la presión en los discos intervertebrales, así como el incremento del
cansancio muscular.

Si usas ordenador debes sentarse así:

 Es recomendable que la máquina esté situada justo delante. Si no se puede evitar tenerlo
en un lateral de la mesa, hay que evitar en lo posible la torsión de la columna.
 El teclado debe quedar a unos 10 cm hacia dentro del borde de la mesa.
 La distancia entre los ojos y la pantalla ha de ser de unos 50-60 cm
 La parte superior de la pantalla ha de quedar a la altura de los ojos, si está más alta o
baja se crea tensión en la zona cervico-dorsal.
 La iluminación también es muy importante. La luz externa no puede iluminar
directamente la pantalla. La luz que emite la pantalla debe regularse mediante el brillo
y el contraste.

Forma correcta de levantar algo del suelo

 Para ayudar a prevenir el dolor y una lesión en la espalda al agacharse o levantar algo:
 Separe las piernas para darle al cuerpo una amplia base de apoyo.
 Párese lo más cerca posible del objeto que va a levantar.
 Doble las rodillas, no la cintura o la espalda.
 Apriete los músculos del estómago a medida que levanta el objeto o lo baja.
 Mantenga el objeto lo más cerca que pueda del cuerpo.
 Levante los objetos lentamente, usando los músculos de las caderas y las rodillas.
 Cuando se ponga de pie con el objeto, no se incline hacia adelante.
 No tuerza la espalda mientras se agacha para alcanzar, levantar o cargar un objeto.
 Póngase en cuclillas a medida que descarga el objeto, usando los músculos de las
rodillas y las caderas. Mantenga la espalda derecha cuando se ponga en cuclillas.

Conclusiones
 La motricidad se relaciona con todos los movimientos que de manera coordinada y
voluntaria realiza todos los seres humanos y grandes grupos de músculos.
 La motricidad fina es muy importante para poder experimentar con el entorno que
nos rodea y para ir adquiriendo una mayor capacidad intelectual.

 La motricidad gruesa es vital para el desarrollo integral, incluyendo los


movimientos de brazos, piernas, espalda, abdomen, etc.

 Una buena postura en el trabajo ayuda a evitar muchas enfermedades al futuro.

También podría gustarte