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El Botox en el tratamiento de las lı́neas y

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surcos dinámicos e hipercinéticos faciales: Uso


complementario en cirugı́a estética facial
Steven Fagien, M.D.
Boca Raton, Fla.

La amplitud adquirida en nuestro conocimiento sobre locación de los tejidos blandos (piel, músculo y
la fisiopatologı́a de las lı́neas faciales, arrugas y surcos, ha grasa). A la inversa, los cambios cualitativos pre-
ampliado las opciones de tratamiento en una gran va-
riedad de defectos cosméticos faciales. La persistencia o cisarán un refuerzo de los tejidos blandos, medi-
recidiva de ciertas arrugas faciales confirma la escasez de ante técnicas mecánicas (dermabrasión), exfolia-
un pleno conocimiento de su origen. Los surcos de la zona ción quı́mica o mediante el láser o bien
glabelar de la frente (lı́neas del entrecejo) y las arrugas de mediante el aumento en una determinada zona
la zona del canto externo del ojo (“patas de gallo”) han
sido las lı́neas más populares que han demostrado ser, de
del tejido blando. Recientemente, se ha focal-
forma caracterı́stica, el resultado de la hipercinesia mus- izado la prevención mediante la protección solar,
cular local, pudiendo, algunas veces, obtener su elimina- los cuidados de la piel y una nutrición equili-
ción adecuadamente, desde el uso de la quimiodenerva- brada, ası́ como otros factores de riesgo entre los
ción hasta las substancias de relleno de los tejidos blandos, que se incluyen los componentes dinámicos e
pasando por el resurfacing cutáneo o la exéresis quirúrgica.
Los procedimientos en cirugı́a estética que no alcanzan hiperfuncionales de las arrugas faciales.
unos resultados satisfactorios, pueden ser debidos a un Los movimientos musculares faciales a largo
fallo en la consideración de otros factores causales entre plazo o hiperdinámicos (hipercinéticos, hiper-
los que incluimos la actividad hipercinética o dinámica funcionales) parecen contribuir en la etiologı́a
muscular, la cual puede contribuir en la etiologı́a de los
cambios visibles de los tejidos blandos y a una deficiencia
de la mayorı́a de las indeseables arrugas y sur-
en la durabilidad de los efectos obtenidos tras la cirugı́a. cos faciales. Fueron Pierard y Lapiere,1 quienes
La quimiodenervación mediante la toxina botulı́nica tipo establecieron por primera vez, tras sus obser-
A (Botox) ha demostrado ser útil, tanto en el tratamiento vaciones de microanatomı́a realizadas en cadá-
primario de determinadas arrugas faciales, ası́ como co- veres, el supuesto de que las arrugas faciales se
adyuvante en una serie de procedimientos estéticos facia-
les aplicados con el fin de obtener unos óptimos resulta- generaban, en parte, por la acción muscular.
dos. (Plast. Reconstr. Surg. 114 (Suppl.): 48S, 2004.) Se ha demostrado que la denervación focal de
determinados músculos faciales, mejora en
conjunto el aspecto facial, no solamente de-
Si diferenciamos en primer lugar, de forma bido a la eliminación temporal de las arrugas,
cuantitativa y cualitativa, los diversos cambios si no también al mejorar los cambios en la
acaecidos en los tejidos blandos faciales (a través malposición de los tejidos blandos externos y
de la valoración y del diagnóstico de la naturaleza posiblemente los resultados de determinados
de la patologı́a) se nos dará la posibilidad de procedimientos de cirugı́a estética facial que se
establecer un enfoque lógico en el rejuvenec- plantean en la actualidad.
imiento facial. Clásicamente, los cambios cuanti- El interés en la quimiodenervación y concre-
tativos y por malposición, han sido tributarios de tamente el uso de la toxina botulı́nica como
un tratamiento quirúrgico: la escisión o la reco- agente terapéutico aplicado para el debilita-

Del Centro de Cirugı́a Plástica Oftalmológica de Boca Raton. Recibido para su publicación el 1 de Septiembre de 1998; revisado el 27 de
Octubre de 1998.
El original ha sido publicado en la Plastic and Reconstructive Surgery en Febrero de 1999 (Plast. Reconstr. Surg. 103: 701, 1999).
DOI: 10.1097/01.PRS.0000124403.17493.0F
48S
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miento de determinados músculos esqueléticos del VII par craneal) en aquellos pacientes con
se remonta a los años veinte. Casi 30 años 12 años o más. A pesar de no estar aceptado
después, el oftalmólogo pediátrico Dr. Alan todavı́a por la FDA, concretamente en estos
Scott, en colaboración con el Dr. Edward J. casos, existen muchas experiencias en la uti-
Schantz2 prepararon toxina cristalizada, utilizada lización de varias aplicaciones clı́nicas de la
mediante inyección, con el fin de determinar su toxina botulı́nica, entre las que se incluyen el
efectividad en una debilitación temporal de los tratamiento del bruxismo, la tartamudez, la
músculos extraoculares consiguiendo, de esta rigidez muscular dolorosa, los dolores lumbo-
forma, cambios permanentes en la alineación sacros y de la espalda, las radiculopatı́as con
ocular.3 Ello fue la fuente de la toxina botulı́nica espasmos musculares secundarios, la vesı́cula
Tipo A hasta 1997, en que se comercializó como espástica, la acalasia, determinados temblores,
substancia ya preparada, el Botox (Allergan, Inc., tics involuntarios,8 dolores de cabeza tensiona-
Irvine, Calif.). Tras varios años de experimenta-
les, parálisis neuromuscular, entropion espás-
ción con este producto, finalmente se agotaron
tico del párpado inferior, regeneración aber-
las muestras, reformulándose nuevamente el Bo-
rante del nervio facial (tras parálisis de Bell,
tox tal y como se usa actualmente en todo el
mundo. etc.), nistagmus adquiridos, patologı́a corneal
Las toxinas del Clostridium botulinum se y tratamiento de la ambliopı́a junto con los
clasifican en ocho exotoxinas diferenciables efectos producidos por la oclusión4 y en cirugı́a
inmunológicamente entre sı́.4 La toxina del reconstructiva periorbitaria.
Tipo A es la que se obtiene de los cultivos Varios médicos experimentados han com-
con mayor facilidad y fue la primera que se probado la mejorı́a de las arrugas faciales en
consiguió en forma altamente purificada, es- aquellos pacientes que recibieron tratamientos
table y cristalizada. Su principal efecto en la con Botox ante una serie de trastornos faciales
parálisis muscular es debido a la inhibición espásticos (Fig. 1). Este descubrimiento, unido
en la liberación de acetilcolina a nivel de la al inicio de una mejor comprensión de las
placa muscular. El efecto paralizante de la bases anatómicas de varias arrugas de expre-
toxina se relaciona en función de la dosis, sión faciales, condujo al establecimiento de un
presentándose completamente a los 5–7 dı́as posible beneficio de la quimiodenervación
tras la inyección.5 El músculo denervado pre- aplicada a determinadas arrugas faciales.
senta histopatológicamente una atrofia del El tratamiento de las arrugas glabelares del
mismo y un cierto grado de cambios de entrecejo (Fig. 2) disfruta de una atención
desmielinización a nivel de la porción termi- prioritaria debido a la experiencia obtenida
nal nerviosa.4 La aparición de brotes axon- en los pacientes tratados de blefarospasmo
ales nerviosos, parecen ser una respuesta ha- esencial benigno, a los cuales se les aplicó
bitual a la quimiodenervación,6 pudiendo una inyección de toxina en la zona del en-
ocasionar una disminución de la real atrofia trecejo (corrugadores). Otra punto clave de
muscular clı́nica (y por consiguiente de los arrugas hipercinéticas que ha obtenido rápi-
efectos beneficiosos a largo plazo en deter- damente popularidad ha sido el tratamiento
minadas zonas). El estudio electromiográfico de las arrugas de la zona cantal externa (“pa-
de fibras aisladas demuestra una transmisión
tas de gallo”) ası́ como de los surcos horizon-
neuromuscular anormal en aquellos múscu-
tales de la frente. Recientemente, las aplica-
los situados en posición distal al punto de
inyección, a pesar de la ausencia de un de- ciones de la toxina se han extendido a la
bilitamiento clı́nico, lo cual indica que la asimetrı́a congénita o traumática facial, 10
difusión de la toxina puede ser significativa a asimetrı́a postquirúrgica de las cejas (incluy-
dosis mayores.5 Estos efectos y observaciones, endo las disquinesias) y a la parálisis facial,
respaldados por algunos buenos estudios ex- hipertrofia del m. orbicularis (en los párpados
perimentales, proporcionan un protocolo inferiores), arru-gas periorales, arrugas por
racionalizado en el uso del Botox en una hipermotilidad en la zona mediofacial, mal-
serie de trastornos. posición de los tejidos blandos y como trata-
En la actualidad, el Botox se acepta en el miento coadyuvante al lifting endoscópico de
tratamiento del estrabismo y del blé- la frente, resurfacing de la piel mediante el
farosplasmo asociado a distonı́as (incluyendo láser y agentes inyectados con el propósito de
el bléfarospasmo esencial benigno o trastornos un aumento de los tejidos blandos.11–13
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FIG. 1. (Izquierda) Imagen comparativa ampliada de la zona tratada de un paciente afecto de


una regeneración aberrante y permanente del nervio facial, tras una parálisis de Bell, con
relación a la zona no tratada en el lado izquierdo (derecha). Tras varios años de tratamiento con
Botox debido a su blefarospasmo unilateral, existe una notable asimetrı́a en su lado derecho
(rectángulo izquierdo). (Derecha) Zona sin tratamiento. La periórbita izquierda evidencia un
cambio cualitativo significativo (más arrugas) en comparación con el lugar que sı́ recibió
tratamiento (izquierda).

miento racional de quimiodenervación en una


serie de malestares inestéticos11,12,14 (Fig. 3).
El componente palpebral del m. orbicularis oculi
rodea la zona proximal y pretarsal del septo y
actúa básicamente como esfı́nter muscular de los
párpados, siendo el responsable del parpadeo y
de un ligero cierre de los ojos. Es antagonista
directo del músculo elevador del párpado supe-
rior. Una contracción forzada del componente
orbitario del músculo orbicular del ojo, conlleva
la formación de surcos concéntricos que se ini-
cian en el canto externo del ojo. Algunas fibras
del componente orbitario súperointerno, actúan
como depresoras de la porción interna de la ceja.
Estas fibras constituyen el denominado m. depres-
sor supercilii.13 La porción súperoexterna orbitaria
del m. orbicular actúa, parcialmente, como
depresora de la parte externa de la ceja. El m.
corrugator supercilii tiene como función la de arras-
trar la ceja hacia abajo y hacia dentro, lo que
conduce a la formación de las arrugas glabelares
verticales. El m. procerus, también en parte, dirige
el extremo de la ceja hacia dentro y hacia abajo,
ocasionando las arrugas transversales ubicadas
por encima del puente de la nariz. El antagonista
FIG. 2. (Arriba) Antes de ser tratada con el Botox, esta
principal de todos los músculos depresores de las
paciente presentaba unos marcados surcos en el entrecejo cejas, es el músculo frontal. El m. zigomático
(lı́neas glabelares), en especial con el movimiento. (Abajo) mayor dirige la comisura de la boca hacia arriba,
Una semana tras el tratamiento con Botox en la zona inter- hacia fuera (lateralmente) y hacia atrás, al reı́r,
ciliar. La paciente trata de arrugar el entrecejo. sonreı́r y masticar. Una de las funciones del m.
zigomático menor es la de actuar como elevador
ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA DE LAS ARRUGAS FACIALES del labio superior y, junto con el m. zigomático
mayor, contribuye a la formación del surco naso-
La perfecta comprensión de las relaciones ana- labial. La contracción forzada de ambos múscu-
tómicas y de las caracterı́sticas funcionales de una los zigomáticos al sonreı́r, ocasiona efectos sinér-
serie de músculos faciales en relación con los gicos en la zona periorbitaria, acentuados por la
tejidos vecinos, proporcionará las necesarias contracción del m. orbicularis oculi, lo cual realza
bases preliminares para establecer un trata- los surcos radiales situados a nivel del canto ex-
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siguiendo las indicaciones especı́ficas para las
diferentes concentraciones, que se describen
en el prospecto que se adjunta7; sin embargo,
la mayorı́a de las aplicaciones clı́nicas del Bo-
tox, actúan perfectamente en diluciones de 2.5
U por 0.1 cc, lo cual se obtiene fácilmente al
mezclar 4.0 cc de sol. salina con el vial. El uso
de solución salina con aditivos conservantes ha
sido preconizada por algunos autores,14 con la
esperanza de prolongar potencialmente la vida
media del producto una vez reconstituido; sin
embargo, se ha comprobado que el efecto del
conservante, las turbulencias que pudieran for-
marse durante la dilución o su zarandeo, pro-
duce una desnaturalización de esta toxina tan
delicada (lo cual conduce a una disminución
de su efectividad).
Una vez reconstituida, la toxina deberá apli-
carse lo más rápido que sea posible. El pros-
FIG. 3. Fig. 3. Anatomı́a muscular facial correspon- pecto adjunto aconseja que el producto sea
diente. utilizado dentro de las primeras 4 horas7; no
obstante, muchos profesionales han com-
terno del ojo, aumenta de forma notable las lı́- probado efectos positivos al utilizar el pro-
neas de tensión en la zona media de la cara, ducto dentro de los primeros 30 dı́as.14 En mi
aportando mayor redundancia a los tejidos experiencia, pasadas 48 horas tras la reconsti-
blandos del párpado inferior (al elevar la me- tución, se presenta un marcado descenso en la
jilla), que no se evidencia en fase de reposo. El m. efectividad clı́nica lo cual se puede traducir en
orbicularis oris es el responsable del cierre forzado un descenso en la intensidad de la parálisis
de la boca actuando como un esfı́nter de la localizada y en la duración de los efectos. Por
misma. La contracción de este músculo induce la otra parte, parece ser que la relativa estabilidad
formación de surcos que parten de forma radial de la toxina reconstituida podrá mantenerse
desde el borde del bermellón. Parcialmente, este mejor si se conserva en el refrigerador (no en
músculo actúa como antagonista de los músculos el congelador) e incluso se apunta la posibili-
elevadores del labio. Una correcta comprensión dad de que el producto se mantenga frı́o en
de la anatomı́a en los movimientos de expresión cualquier momento. En lo que yo sé, no exis-
facial es fundamental, no solamente para con- ten estudios que apoyen o rechacen opiniones
seguir un adecuado conocimiento en el trata- encontradas respecto a la duración de la po-
miento de las arrugas hipercinéticas faciales, sino tencia del producto tras la reconstitución de la
también para evitar las complicaciones que más toxina.
adelante expondremos. Al principio, los investigadores reco-
mendaban hasta 10 ó 20 unidades (o incluso
PREPARACIÓN Y DILUCIÓN más) por punto de inyección en determina-
La Toxina botulı́nica del tipo A, es una dos músculos de la mı́mica facial.15 Sin em-
toxina potente, pero lábil. Cada vial (propor- bargo, se pueden conseguir los mismos efec-
cionado por Allergan), contiene aproximada- tos con muchı́sima menos dosis de toxina
mente 100 U de toxina, en forma cristalizada. (2.5 unidades por punto) ası́ como mantener
La toxina deberá ser almacenada inmediata- la duración de una forma comparativamente
mente a su recepción en la nevera de la con- similar. En mi experiencia, esta dosis es efec-
sulta a una temperatura de -5°C o menor, cuan- tiva durante 4 a 6 meses como promedio.
do está en forma cristalizada. Con el fin de Estas dosis menores colocadas en pequeños
obtener su máxima potencia, la reconstitución volúmenes también sirven para reducir la
de la toxina deberá efectuarse justamente an- presentación de efectos indeseables y com-
tes de su aplicación mediante inyección. La plicaciones (ver más adelante). Concentra-
dilución deberá efectuarse cuidadosamente ciones menores de 2.5 U por 0.1 cc, produ-
mediante solución salina sin conservantes, cen asimismo un efecto de debilitación del
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ción sensiblemente superior (hasta 5.0 U por
punto), porque de lo contrario se traducirı́a en
una mejorı́a entre ligera a moderada de las
arrugas ocasionadas por hiperfuncionalidad, y
por descontado, en una menor duración de los
efectos. Con el fin de minimizar el trauma
fı́sico producido por la toxina, deberı́an uti-
lizarse jeringuillas con capacidad de 1 cc (jerin-
guillas de tuberculina) con aguja de 18G.

TÉCNICA DE INYECCIÓN: ZONA GLABELAR, CANTO


EXTERNO DEL OJO Y FRENTE

Como en todo tipo de tratamientos, los pa-


cientes aspiran a un máximo beneficio, con la

FIG. 5. A este paciente se le está aplicando un tratamiento


FIG. 4. Zonas aproximadas de inyección de Botox para con Botox para las arrugas verticales y glabelares del en-
una serie de arrugas y surcos faciales. Los puntos marcados trecejo. El profesional coloca el pulgar y el ı́ndice de la mano
con tinta azul oscuro muestran el lugar aproximado de inyec- opuesta alrededor del anillo orbitario con el fin de orientar
ción para los músculos corrugadores. Los puntos en azul claro, la zona de la periórbita y de mantener fija la cabeza del
el área a inyectar para el m. procerus. Mediante el debilita- paciente. Ello prevendrá una inyección intraorbitaria o un
miento selectivo o la parálisis de los depresores internos de sangrado producido por la inyección en el orificio supraor-
la ceja (m. corrugadores y procerus), la eliminación de los bitario. Durante la inyección, debe poder apreciarse el lı́-
surcos verticales de la frente (lı́neas glabelares del entrecejo) quido inyectado al observar una elevación de los tejidos
se conseguirá, con frecuencia, una elevación de la zona in- blandos situados más profundamente.
terna de la ceja. Los puntos rojos muestran, de forma aproxi-
mada, las zonas de inyección en el m. orbicular del canto
externo del ojo, con el fin de reducir o erradicar las llamadas
“patas de gallo”. Una inyección aplicada inmediatamente por
debajo de la zona externa de la ceja (punto de color naranja),
puede traducirse por una relativa elevación de la misma. Los
puntos verdes, en la zona malar, nos muestran aproximada-
mente el punto de inserción del m. zigomático mayor (ori-
gen). La quimiodenervación en esta determinada área podrá
ocasionar una reducción del surco nasolabial, una disminu-
ción de las arrugas hiperdinámicas de la sonrisa ası́ como un
menor volumen en el párpado inferior y en las arrugas de la
zona cantal externa.

músculo pero parece ser que ello dura mu-


cho menos tiempo.
Por otra parte, los hombres (o incluso las
mujeres que presentan clı́nicamente y de FIG. 6. A este paciente se le está aplicando un tratamiento
con Botox en la zona cantal externa y en la zona subciliar, con
forma evidente músculos hipertrofiados, en el fin de mejorar la elevación de la porción externa de la ceja.
particular los corrugadores o el músculo fron- Obsérvese que las inyecciones en esta zona se aplican en un
tal), necesitarán una dosis por punto de inyec- plano subcutáneo más que intramuscularmente.
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FIG. 7. (Arriba) Antes de ser tratada mediante el Botox a FIG. 8. (Arriba) Antes de ser tratada mediante el Botox a
nivel de las arrugas cantales externas. (Abajo) Una semana nivel de las arrugas frontales. Los puntos rojos indican los
tras la inyección de Botox a nivel del canto externo, tal y como puntos aproximados de inyección en esta paciente. Una se-
se indica en las Figuras 4 y 6. mana tras la inyección de Botox a nivel de la frente. Nótese
la ligera ptosis de las cejas consecuencia de este tratamiento.
mı́nima morbilidad y aparición de efectos co-
laterales. Antes de la aplicación del Botox, de- utilizo ningún monitor por electromiografı́a,
berá advertirse a los pacientes la conveniencia ya que lo encuentro incómodo e innecesario.
de suspender la ingesta de aspirinas o de cual- Sin embargo, la utilización del electromiógrafo
quier producto que favorezca el sangrado, de puede ser útil a tı́tulo de orientación general,
una forma similar a las instrucciones que se cuando uno inicia la quimiodenervación. Gran
dan a los pacientes que deben someterse a una cantidad de trabajos relativos a la aplicación
intervención quirúrgica. Esto, sin embargo, no cosmética de la toxina botulı́nica A describen e
es una condición indispensable, pero puede ilustran mediante figuras los puntos de inyec-
reducir e incluso eliminar las equimosis facia- ción en las arrugas que deben ser tratadas, más
les que podrı́an durar incluso semanas. En el que en los músculos tributarios del tratamiento
supuesto de que no aparezca equimosis alguna y que ocasionan las citadas arrugas.15 Las zonas
o bien que ésta sea mı́nima, los pacientes po- de la piel y los lugares de las inyecciones even-
drán reincorporarse al trabajo una hora tuales de toxina, pueden situarse sobre el su-
después de ser inyectados, pasando totalmente puesto vientre muscular o sobre la masa del
desapercibidos. mismo en aquellos músculos de la mı́mica fa-
Una vez colocada la toxina en una jeringa de cial responsables y no en el punto tı́pico de la
1 cc. con la aguja de 18G, ésta se substituirá por máxima depresión cutánea que en ocasiones
otra de 30G, corta. La utilización de anestesia puede estar situado a relativa distancia del
local es innecesaria teniendo incluso una con- músculo responsable. En el caso de músculos
traindicación relativa. Podrá aplicarse alcohol más anchos, o que se hallan ubicados en posi-
en el punto de inyección, pero deberá cuidarse ción más profunda, como es el caso del m.
en secarlo completamente antes de inyectar, corrugator supercilii se acostumbra, y es más efi-
con el fin de evitar cualquier efecto del mismo caz, el inyectar la toxina por debajo del mús-
sobre una toxina tan lábil. Personalmente, no culo frontal o del orbicular o bien directa-
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mente en el vientre de este músculo concreto. cerus), responderán de forma satisfactoria a
Generalmente, la colocación de cuatro o cinco una inyección más superficial y subcutánea de
puntos de inyección (Fig. 4), con una dosis Botox (Fig. 6).
total que oscila entre 2.5 a 5 U por punto de A diferencia de los demás amplios músculos
inyección, son suficientes al tratar de eliminar de la mı́mica facial que requieren contacto
la tonicidad muscular e impedir la contracción directo con la toxina, preferentemente en la
voluntaria de los m. corrugadores (Fig. 2). Una masa muscular, necesitando que se inyecte di-
aplicación más superficial, podrá ser efectiva rectamente en el interior del músculo, en el
en los músculos situados más superficialmente, músculo orbicular, relativamente delgado, pa-
pero no se conseguirá completamente el rece ser suficiente la inyección de la toxina en
efecto deseado. La familiarización que se tenga el tejido celular subcutáneo que se encuentra
con la correspondiente anatomı́a de los tejidos por encima del mismo, para poder obtener un
blandos faciales y la observación de los efectos efecto satisfactorio. Este hecho, no solamente
dérmicos y musculares que sobre las arrugas reduce la probabilidad de una evidente
formadas se evidencien al pedirle al paciente equimosis sino que, por otra parte, el efecto de
que frunza el ceño, nos facilitarán todo el pro- la inyección podrá mantenerse, al no reducirse
ceso. He observado que es útil el aislar el área por un potencial sangrado. Además, la inyec-
a tratar mediante la colocación del pulgar de la ción en el espacio subcutáneo, permite siem-
mano no dominante entre la ceja y el reborde pre una mayor difusión en la zona elegida del
orbitario superior (Fig. 5). Ello nos servirá para músculo, proporcionando una barrera de se-
estabilizar la cabeza del paciente y localizar la guridad respecto a las estructuras que se sitúan
zona a tratar, orientando al profesional sobre por debajo del mismo, en profundidad. Para
la localización del orificio supraorbitario y del las arrugas del canto externo (“patas de
paquete neurovascular, e impidiendo una gallo”), serán suficientes tres o cuatro inyeccio-
inyección accidental en la órbita. La aguja se nes, teniendo especial cuidado en no incidir
introducirá en el supuesto nivel de la masa sobre la zona pretarsal del m. orbicular, tanto
muscular de los m. corrugadores, inyectándose en el párpado superior como en el inferior
acto seguido la toxina. El m. orbicularis, más (Fig. 7). Esto se complementará mediante una
delgado (y eventualmente también el m. pro- inyección directa en la inserción temporal del

FIG. 9. (Izquierda) Paciente antes del tratamiento de un blefarospasmo rı́gido y asimetrı́a


facial/periocular. (Derecha) Una semana después del tratamiento mediante Botox, usado a dosis
bajas (1.0 U por punto de inyección).
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canto, cerca del reborde orbitario externo
(Fig. 4) y lejos del borde palpebral (Fig. 6). El
m. procerus puede ser tratado mediante una o
dos inyecciones justo debajo de la piel situada
en la arruga transversa del puente nasal. Este
plano superficial, evitará una inyección intraor-
bitaria.
Los surcos horizontales ocasionados por hi-
permotilidad en la frente,11,12,14,16 parece ser
que responden favorablemente tanto ante la
inyección de toxina colocada intramuscular-
mente, como la que se realiza subcutánea-
mente, probablemente debido a que el m.
frontal es el único activo en esta zona. En
algunos individuos, con el fin de evitar una
ptosis de las cejas, es preferible un debilita-
miento muscular más que una completa den-
ervación frontal. Estas inyecciones son más
efectivas si se colocan siguiendo un patrón re-
ticular uniforme,16 por lo que se inyectarán
nueve o más sitios a lo ancho de la frente (Fig.
8). En una lı́nea vertical que parte hacia arriba
de la porción media de la ceja, se situarán tres
o cuatro inyecciones, a cada lado de la frente.
Se darán puntos adicionales en la lı́nea vertical
de la zona frontal media. Ello permitirá debili-
tar focalmente el músculo frontal en la zona
interna de cada área muscular. Un tratamiento
completamente homogéneo de la frente, evita
áreas focales de función residual que podrı́an
ser evidentes al haber ausencia completa de
arrugas en las zonas adyacentes. Clásicamente, FIG. 10. (Arriba) Esta paciente deseaba un aspecto de
se administrarán 2.5 U (0.1 cc) en cada punto mayor simetrı́a en sus cejas. (Abajo) Una semana tras trata-
miento mediante Botox por encima de la frente con dos
de inyección. Las inyecciones por encima de la inyecciones de 2.5 U/0.1 cc en la zona frontal media. Ob-
zona externa de la ceja deberán reducirse o sérvese la consecución de la simetrı́a de las cejas ası́ como una
incluso evitarse, con el fin de minimizar el reducción focal concomitante de los surcos de la frente.
riesgo de una ptosis de la cola de la ceja. Con-
trariamente a la gran cantidad de trabajos que cientes cuyas arrugas hipercinéticas faciales
recomiendan permanecer de pie y reducir la han sido tratadas con Botox, se manifiestan ya
actividad fı́sica durante varias horas tras las los efectos al cabo de pocas horas. A pesar de
inyecciones,16 en mi experiencia no he visto que el tratamiento refleja inmediatamente la
necesario dar consejo alguno a mis pacientes capacidad temporal de la toxina en debilitar o
en este sentido. Podrán aplicarse maquillajes paralizar los músculos responsables del compo-
inmediatamente tras la aplicación de las inyec- nente muscular de las arrugas hipercinéticas
ciones. faciales, la teórica hipótesis (no probada aún)
A pesar de que, teóricamente, el efecto de la es que inyecciones repetidas en los mismos
toxina se describe como evidente a partir del músculos, a la larga pueden producir una es-
3° al 7° dı́a he tenido ocasión de comprobar pecie de atrofia inusual,17 que podrı́a limitar el
frecuentemente, una aparición del efecto más desarrollo de determinadas arrugas faciales en
temprana, en comparación con aquellos pa- pacientes jóvenes y posiblemente eliminar o
cientes a los que se les aplicó el Botox para el reducir, a la larga, las arrugas y los surcos ya
tratamiento de desarreglos espásticos palpe- formados.
brales y faciales, tales como el blefarospasmo Sin embargo, debido a la formación de
esencial benigno y el espasmo hemifacial. En brotes axonales6 (ya analizado con anterio-
ocasiones y por razones desconocidas, en pa- ridad), de hecho los pacientes acuden nueva-
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el tratamiento de la parálisis de Bell, en los
que, aunque no se produzca un defecto muy
significativo en su aspecto, puede ocasionar
molestias visuales apreciables en algunos pa-
cientes12,18 (Fig. 9). En ocasiones, pequeñas do-
sis ya son suficientemente efectivas, como p.e.
1.0 U o menos por punto de inyección, admin-
istrado en el m. orbicular pretarsal, de forma
similar al tratamiento que se utiliza en el ble-
farospasmo esencial benigno. 16 También
puede utilizarse el Botox con el fin de con-
seguir una simetrı́a en los casos de parálisis
facial unilateral, ya sea congénita o bien ad-
quirida, mediante el debilitamiento de los mús-
culos del lado contralateral.
Precisiones estéticas en las modificaciones de la
mı́mica facial
Las asimetrı́as de las cejas pueden observarse
en multitud de ocasiones tales como trauma-
tismos del nervio facial tras un lifting de la
frente u otros procedimientos quirúrgicos que
originen parálisis facial, pacientes con perma-
nente bleafroptosis ipsilateral (incluso tras
haber efectuado ya correcciones de la misma),
expresión asimétrica facial no patológica, etc.
Como una alternativa al lifting frontal en los
casos de ptosis acentuada de las cejas, se podrı́a
tener en consideración el practicar una
FIG. 11. (Arriba) Paciente antes del tratamiento mediante
Botox aplicado a la zona subciliar externa. (Abajo) Mediante
quimiodenervación de las cejas (en una zona
la inyección de Botox a nivel del canto externo y de la región concreta del músculo frontal) con el fin de
subciliar lateral, las arrugas cantales disminuyen y la cola de mejorar la simetrı́a en aquéllos que, aún
la ceja puede levantarse produciendo un agradable arco ex- negándose a que se les efectúe una interven-
terno en la misma. ción quirúrgica, desean un aspecto más simé-
trico (Fig. 10). Los puntos de inyección y el
mente para tratamientos adicionales una vez número de los mismos se aplicarán en función
que los músculos han recuperado casi comple- de dónde se desea que se produzca el efecto, y
tamente su función (es decir, la arruga ha rea- generalmente se administrarán dentro (o por
parecido), no siendo la verdadera atrofia mus- encima) del músculo frontal aproximada-
cular, a largo plazo, la única causa posible de mente 1.0 cm por encima de las cejas con el fin
mejorı́a en algunos pacientes que pueden ade- de evitar los músculos depresores de la misma.
más reflejar (parcialmente) alteraciones en los Se podrı́an conseguir cambios creativos,
patrones de la mı́mica facial y remodelado de tanto en la forma de las cejas como en su
los tejidos blandos situados por encima. situación o posición. Desde luego, se conoce
perfectamente que la inyección de Botox para
USOS AMPLIADOS DEL BOTOX EN CIRUGÍA el tratamiento de las arrugas glabelares en la
ESTÉTICA FACIAL zona del entrecejo, puede afectar en ocasiones
al músculo frontal medial adyacente (una
Trastornos del nervio facial inyección algo más potente debilita focalmente
Se ha demostrado también que la toxina el músculo frontal), produciendo una ligera
botulı́nica A se puede utilizar en una serie de ptosis de la porción interna de la ceja y en
variados trastornos cosméticos faciales. He en- ocasiones traduciéndose por un contorno más
contrado que es útil incluso en aquellos pocos agradable de la misma (especialmente en cejas
casos de regeneración aberrante del nervio fa- rectas). El contorno de la ceja incluso se podrá
cial (séptimo par craneal), por descontado tras acentuar al efectuar una ligera elevación ex-
Vol. 114, No. 5 Suplemento / EL USO DEL BOTOX EN CIRUGÍA ESTÉTICA FACIAL 57S

FIG. 12. (Izquierda) A esta paciente se le practicó, varios años antes, un lifting de la zona central
de la cara y de las mejillas, pero deseaba mejorar la apariencia de las mejillas y de las arrugas
cantales al sonreı́r. (Derecha) Tras ser tratada con Botox a nivel del canto externo y en la zona
proximal del m. zigomático mayor. Ello disminuirá el efecto de agrupación de piel a nivel del
párpado inferior y mejilla y atenuará las arrugas del canto externo, disminuyendo asimismo la
profundidad del surco nasolabial.

terna de la misma, mediante la inyección en el Deberán adoptarse consideraciones y pre-


componente externo orbitario (subciliar) del cauciones similares al pretender disminuir la
m. orbicularis, incrementando el efecto antago- tonicidad de los m. zigomático mayor y
nista de la porción lateral del m. frontal (Fig. menor. La función del m. zigomático mayor
11). Este sistema puede utilizarse al inyectar en no es sólo la de elevar la comisura de la boca
la zona de las “patas de gallo,” con ampliación al sonreı́r sino que también colabora en la
mediante inyecciones en el área cantal externa acentuación de las “patas de gallo,” que
(2.5 U/0.1 cc) de la zona externa subciliar pueden ser realmente exageradas en algunos
(Fig. 4). individuos. El m. zigomático menor tiene
La hipertrofia del m. orbicularis oculi a nivel como origen un punto semejante al del zigo-
de los párpados inferiores puede también tra- mático mayor insertándose algo más central-
tarse de forma efectiva utilizando concentra- mente en el labio superior. Ambos músculos,
ciones muy bajas de toxina (1.0 U/0.05 cc) cuando actúan, deprimen parcialmente el
aplicada en el visiblemente engrosado músculo surco nasolabial. Utilizando dosis bajas (2.5
subyacente. Las dosis bajas pueden ocasionar, U/0.2 cc) en la zona proximal (lejos de la
por regla general, un ligero pero aceptable boca) cercana al punto de origen muscular,
grado de retracción del párpado inferior. Se procurando inyectar la toxina lo más cercano
administrarán dos o tres inyecciones a nivel de posible al borde del m. orbicular en el pár-
la porción central del párpado inferior y del pado inferior (Fig. 4) se puede, en muchas
canto externo adyacente al área afectada. Sin ocasiones, atenuar su actividad a nivel de las
embargo, concentraciones más elevadas arrugas del canto externo y del surco nasola-
pueden ser causa de un evidente ectropion bial (Fig. 12). Una o dos inyecciones aplica-
paralı́tico o retracción palpebral, pudiendo asi- das en medio de la eminencia malar externa
mismo dañar la acción de bombeo nasolacri- obtienen generalmente el efecto deseado,
mal efectuada por el músculo orbicular, lo que sin incurrir en complicaciones tales como
producirı́a una epı́fora. parálisis del labio superior ipsilateral.
58S PLASTIC AND RECONSTRUCTIVE SURGERY, Suplemento 2004
el láser de CO2, habrán comprobado la pronta
recurrencia de las arrugas ubicadas en el pár-
pado inferior y en el canto externo del ojo. En
ocasiones, la reaparición de las arrugas en
aquellos pacientes en los que es altamente evi-
dente su presencia en el canto externo y en la
zona perioral, puede ser todavı́a peor, cual-
quiera que sea el método de láser resurfacing
utilizado (Fig. 14). Un tratamiento previo me-
diante el Botox puede mejorar notablemente
el efecto suavizante en la nueva piel tratada,
durante un tiempo lo suficientemente largo
para poder conseguir una permanente erradi-
cación de las arrugas (Fig. 15).
De forma similar, este método puede ser
beneficioso como pretratamiento en aquellos
individuos a los que se procederá a realizar un
lifting frontal con el fin de debilitar el vector de
fuerza inferior (porción orbitaria externa del
m. orbicularis oculi), con el fin de conseguir y
obtener un efecto permanente de la posición
de la ceja elevada (Fig. 16).
Los procedimientos de refuerzo en el trans-
curso de una suspensión cantal, tales como
una tira tarsal20 o una suspensión externa del
retináculo,21 pueden mejorarse mediante la
FIG. 13. (Arriba) Esta paciente presenta arrugas perio- inyección de Botox (2.5 U/0.1 cc) a lo largo
rales de forma permanente/recurrente, a pesar de haber sido
sometida con anterioridad a un peeling quı́mico. (Abajo) Tras
del canto externo, de forma similar a la de-
el tratamiento con Botox a nivel del borde del bermellón scrita para el tratamiento de las arrugas can-
(1.25 U/0.05 cc) repartidos en cuatro puntos a lo largo del tales lo cual, no solamente disminuirá las
labio superior y dos puntos en la unión del tercio central con arrugas de la zona, sino que también re-
el lateral del labio inferior (1.0 U por punto). Obsérvese la ducirá la función del m. orbicularis oculi en
suave reducción de las arrugas periorales ası́ como el pseudo-
aumento labial y la ampliación del arco de Cupido, sin haber
este punto que, parcialmente, podrá com-
efectuado otro tratamiento cutáneo alguno. prometer la posición y seguridad del canto
externo mediante contracciones musculares
Finalmente, el Botox ha demostrado ser útil repetidas (Fig. 16).
como tratamiento reductor de las finas arrugas
periorales (“arrugas del lápiz de labios” o
“código de barras”).11,12,19 Se inyectan aproxi-
madamente de 1.0 a 1.5 U de toxina cerca de
las finas arrugas verticales, por encima del m.
orbicular labial y cerca del borde del berme-
llón. Adicionalmente, se puede obtener un evi-
dente efecto estético con este tratamiento al
parecer que se han engrosado los labios
(pseudoaumento), debido a que se ocasiona
una relajación de la función muscular esfinte-
riana adoptando el músculo una posición más
evertida a lo largo del borde del bermellón
(Fig. 13).
FIG. 14. Este paciente acudió por presentar una gran can-
Mejorı́a de los resultados quirúrgicos mediante tidad de arrugas en la zona periocular, que le reaparecieron
la quimiodenervación tras serle aplicado un tratamiento de láser resurfacing. Nos
explicó que sufrió un proceso de curación prolongado, con
Aquellos profesionales que poseen una eritema concomitante, que le duró al menos 4 meses. El
cierta experiencia en la exfoliación mediante médico que lo trató, no le administró previamente Botox.
Vol. 114, No. 5 Suplemento / EL USO DEL BOTOX EN CIRUGÍA ESTÉTICA FACIAL 59S
arrugas. En segundo lugar se supone que,
teóricamente, se ampliará la duración del im-
plante dérmico al disminuirse el supuesto com-
ponente mecánico inflamatorio que podrı́a in-
fluir en la atrofia del implante. En tercer lugar,
también podrı́a reducirse simplemente la in-
mediata microextrusión en los puntos de
inyección, ocasionada por una actividad mus-
cular repetida. Este hecho puede observarse al
debilitar los depresores internos de la ceja an-
tes de administrar colágeno o grasa en la zona
glabelar, o también inyectando Botox en los
músculos elevadores y depresores del labio an-
tes de proceder a un aumento de los tejidos
blandos en el surco nasolabial o a un aumento
labial, respectivamente. Las dosis usadas en la
glabela son semejantes a las utilizadas en el
tratamiento primario de cualquier otra deter-
minada zona. Podrán aplicarse dosis inferiores
en los labios (1.25 U/0.1 cc) antes de proceder
a su aumento. La combinación de una quimio-
denervación y de un aumento de los tejidos
blandos (en particular con colágeno autólogo)
en estas áreas, ha demostrado presentar un
alto sinergismo.11,12,22

FIG. 15. (Arriba) Paciente con blefaroplastia palpebral Otras observaciones


completa, resurfacing de la piel cantal externa y de los pár-
No es raro comprobar una sensación gene-
pados inferiores mediante láser de CO2 y suspensión lateral
del retináculo. (Abajo) Cuatro meses después de la cirugı́a. Se ralizada (casi rayando en la euforia) de encon-
le administró Botox en el canto lateral, una semana antes de trarse mucho mejor, en aquellos pacientes que
ser operada. Antes de la cirugı́a, ya pudieron observarse unos han recibido Botox (no necesariamente en
resultados muy efectivos. La disminución de la tensión del una zona facial en particular, sino preferente-
párpado y del sistema de soporte del mismo, se solucionó
mente en aquéllos a los que se les inyectó en las
mediante una suspensión externa del retináculo con el fin de
prevenir una malposición del párpado inferior en el perı́odo cejas o en la frente o alrededor de las mismas).
postoperatorio precoz. Opino que ésto podrı́a deberse a una disminu-
ción de la contractura muscular (tensión), de
Otra aplicación muy frecuente del Botox es forma similar a lo que sucede en la contractura
la de ser utilizada en aquellos pacientes que muscular o en la tensión presente en las ce-
presentan anomalı́as del contorno de los faleas. Este hallazgo es constante y posible-
tejidos blandos o atrofia de los mismos, en los mente nos podrı́a sugerir unas aplicaciones
que se podrán obtener claros beneficios al uti- ampliadas de la toxina. La mayorı́a de los efec-
lizar conjuntamente ambas técnicas. Previa- tos de las distintas aplicaciones cosméticas del
mente al relleno de material, ya sea mediante Botox (de forma similar a las alteraciones fun-
cirugı́a o por inyección directa, se administrará cionales/espásticas), tienen una duración de
Botox aproximadamente 1 semana antes, con 4 a 6 meses. Debe advertirse a los pacientes
el fin de obtener una debilidad muscular local sobre la temporalidad de los efectos de la
o incluso una parálisis. A partir de entonces, quimiodenervación sobre sus arrugas por hi-
podrá realizarse en la zona paralizada o par- perfuncionalismo y que indudablemente
cialmente debilitada, una inyección de relleno necesitarán un tratamiento de mantenimiento.
dérmico, grasa subdérmica o un implante
quirúrgico (de material aloplástico o alo- Complicaciones
génico) (Fig. 17). La denervación producida Las reacciones adversas descritas en el uso
servirá, por lo menos, para tres propósitos. En general del Botox en las distintas aplicaciones
primer lugar, elimina o reduce el componente autorizadas, incluyen la blefaroptosis, la diplo-
dinámico/muscular de la formación de las pia, perforaciones del globo ocular, hemorra-
60S PLASTIC AND RECONSTRUCTIVE SURGERY, Suplemento 2004

FIG. 16. (Izquierda) Paciente antes de una blefaroplastia palpebral completa, lifting frontal,
resurfacing de la piel cantal externa y de los párpados inferiores mediante láser de CO2 y
suspensión lateral del retináculo. Una semana antes de la intervención, se le administró Botox
en la zona cantal externa, ampliándose a la zona subciliar externa. Asimismo, se realizó una
suspensión retinacular lateral, que eliminó la malposición del párpado inferior. El Botox uti-
lizado en el canto externo sirve para una multitud de propósitos, entre los que se incluyen
mejorı́a del resurfacing cantal externo, mejorı́a en la elevación de las cejas al minimizar el efecto
de los m. depresores de la cola de la ceja (porción orbitaria externa del m. orbicularis oculi) y
reducción de los efectos indeseables que este músculo puede ejercer sobre la integridad de la
cantoplastia.

gia retrobulbar, pupila de Adies, empeora- dos en la alergia/congestión (como son el


miento de la sintomatologı́a del “ojo seco”, Naphcon A, el Vascon A o el Opcon A), es
lagoftalmos, fotofobia, epı́fora, ectropion y beneficiosa en aquellos pacientes que presen-
queratitis por exposición conjuntival.7 Re- tan sı́ntomas significativos de una blefaroptosis
specto a las aplicaciones cosméticas del Botox, transitoria.
las complicaciones reseñadas incluyen la may-
orı́a de las descritas anteriormente además de CONCLUSIONES
efectos indeseados adicionales como son las El uso del Botox para el tratamiento de las
equimosis, ptosis y asimetrı́a de las cejas y caı́da arrugas y surcos hipercinéticos faciales, es
de la comisura bucal. Los efectos colaterales simplemente otra terapia primaria o coadyu-
indeseables tales como la blefaroptosis o una vante que puede ofrecerse a los pacientes den-
ligera retracción del párpado inferior (Fig. 10) tro del espectro de opciones terapéuticas en el
acostumbran a durar unas pocas semanas en la rejuvenecimiento facial completo. Los efectos
mayorı́a de los casos, hasta que la cantidad de indeseables podrán minimizarse, ası́ como
toxina que ha emigrado hasta el músculo implementar los efectos beneficiosos, me-
afectado se reduzca de forma significativa. Se diante un conocimiento a fondo de la anato-
ha comprobado que la utilización temporal de mı́a de los tejidos blandos faciales, una selec-
descongestionantes oculares, en forma de go- ción adecuada de los pacientes y una adminis-
tas, que contengan agentes adrenérgicos (con tración de las menores dosis efectivas en los
efectos colaterales coincidentes con aquellas mı́nimos volúmenes de aplicación. En la may-
gotas que inducen una contractura temporal orı́a de los casos, no es substitutivo de la ciru-
del músculo de Müller y del borde marginal gı́a, del resurfacing cutáneo, del aumento de los
del m. elevador del párpado superior), utiliza- tejidos blandos o del cuidado de la piel. No
Vol. 114, No. 5 Suplemento / EL USO DEL BOTOX EN CIRUGÍA ESTÉTICA FACIAL 61S
patentes con el fin de poder obtener un as-
pecto más juvenil.
Steven Fagien, M.D.
1000 NW 9th Court, Suite 104
Boca Raton, Fla. 33486

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