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INFECCION URINARIA

DEFINICION:
Una infección de las vías urinarias es una infección que se produce en cualquier parte del sistema urinario:
los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. La mayoría de las infecciones ocurren en las vías urinarias
inferiores (la vejiga y la uretra).
Estas infecciones son comunes cuando entran bacterias a la uretra, generalmente de la piel o el recto, e
infectan las vías urinarias.

CLASIFICACION:
Las infecciones urinarias se pueden clasificar en función de su evolución y la coexistencia de factores de
riesgo, o de su localización anatómica concreta en el tracto urinario. 

- ITU no complicada: las que ocurren en mujeres sanas no gestantes con síntomas de vía urinaria baja
(cistitis) o de vía urinaria alta (pielonefritis). Pueden ser esporádicas o recurrentes. 

- ITU complicada: ITU en pacientes que presentan alguna de las condiciones que determinan mayor riesgo
de evolución desfavorable. Son las que ocurren en mujeres gestantes, hombres, obstrucción,
inmunosuprimidos, insuficiencia renal, trasplante renal.

- ITU asociada a catéter: ITU en presencia de catéter urinario permanente, sin evidencia de otras fuentes de
infección. Se define por una muestra de orina de catéter, o en muestra de orina obtenida 48h después de
retirado el catéter.

- ITU recurrente: recurrencias de ITU (no complicada o complicada), con una frecuencia de = 3 ITUs/año ó  =
2 ITUs en los últimos 6m.

- Urosepsis: disfunción orgánica que causa riesgo vital debido a una ITU. 


Por su localización anatómica, nos encontraremos con:
- ITU de vía urinaria baja: uretritis, cistitis, prostatitis.
- ITU de vía urinaria alta: pielonefritis, prostatitis

Por lo general, se consideran infecciones urinarias no complicadas a la cistitis o la pielonefritis que se


producen en mujeres adultas premenopáusicas sin ninguna anormalidad estructural o funcional de las vías
urinarias, que no están embarazadas y no tienen otras enfermedades significativas que pudiesen conducir a
resultados más graves. Además, se consideran que las infecciones urinarias no son complicadas incluso
cuando afectan a las mujeres menopáusicas o pacientes con diabetes bien controlada. En los hombres, la
mayoría de las infecciones urinarias se producen en niños o pacientes de edad avanzada, se deben a
anomalías anatómicas o a instrumentación, y se consideran complicadas.

Las infecciones urinarias complicadas pueden afectar a cualquier sexo, a cualquier edad. Generalmente se


considera que la cistitis o la pielonefritis no cumplen con los criterios para considerarse no complicadas. Una
infección urinaria se considera complicada si el paciente es un niño, una mujer embarazada o si:
 El paciente tiene una anormalidad estructural o funcional de las vías urinarias y obstrucción del
flujo de orina
 Una enfermedad concomitante que aumenta el riesgo de adquirir la infección o resistencia al
tratamiento, como diabetes mal controlada, enfermedad renal crónica o inmunodepresión
 Instrumentación o cirugía reciente de las vías urinarias

ETIOLOGIA
Las ITUs pueden estar causadas por una gran variedad de patógenos, incluyendo bacterias gram negativas,
bacterias gram positivas y hongos. 
En general, se suele aislar un único patógeno en la mayoría de los casos, excepto en casos de anomalías
estructurales del aparato urinario o en pacientes con cateterización crónica de la vía urinaria
(polibacterianas). La bacteria más frecuentemente aislada es la E. Coli uropatógena, tanto en ITUs no
complicadas (75%) como en ITUs complicadas (65%). La infección por E. coli aumenta la probabilidad de
recurrencia en 6 meses. Proteus, Klebsiella y Corynebacteria urealyticum son bacterias productoras de
ureasa, por lo que favorecen la aparición de litiasis infecciosa.
En ITUs no complicadas otros gérmenes causantes son: Klebsiella pneumoniae, Staphylococcus,
Enterococcus faecalis, Streptococcus del grupo B, Staphylococcus aureus y Candida spp. 
En ITUs complicadas, por detrás de E coli (65%), los patógenos más frecuentes son: Enterococcus spp, K.
pneumoniae, Candida spp, S. aureus, y Streptococcus del grupo B.  

CISTITIS
Es una inflamación superficial de la pared vesical, caracterizado por la aparición de un infiltrado
inflamatorio, edema e hiperemia de la mucosa (exceso de sangre) , si la infección progresa pueden aparecer
hemorragias focales o difusas y exudado purulento.

FISIOPATOLOGIA:
• Ascenso de los microorganismos desde el meato urinario hasta la vejiga. En condiciones normales
las vías urinarias son estériles, solo la uretra distal esta colonizada por flora cutánea o vaginal.
• El mecanismo de colonización por E.coli se realiza por la presencia en el urotelio de receptor
específicos para la fijación de determinadas cepas de E.coli provistas en su superficie de filamentos
de naturaleza proteica denominadas fimbrias.
• Una vez que está en la vejiga el microorganismo el posterior desarrollo de la infección está
relacionado con la densidad de población bacteriana presente en la orina y la potencia de virulencia
del microorganismo.
• El mecanismo de defensa de la vejiga se realiza con las Micciones ya que se realiza un efecto de
barrido de bacterias en la vejiga cuando hay un vaciado completo de esta, de lo contrario cuando
quedan residuos la densidad de bacterias en orina aumenta rápidamente hasta el umbral crítico.
• La uretra femenina es corta, por lo que el paso de los microorganismos al interior de la vejiga es
frecuente, especialmente durante el coito.
• En el varón la cistitis obedece con frecuencia a la manipulación instrumental de la uretra o a la
existencia de una prostatitis crónica ya que el varón posee una uretra más larga y contiene una sal
de zinc secretada por la próstata que ejerce efecto bactericida.

CAUSAS
El sistema urinario comprende los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. Todos ellos son importantes
para eliminar los desperdicios del cuerpo. Los riñones, filtran el desperdicio del cuerpo y regulan las
concentraciones de muchas sustancias. Los tubos denominados «uréteres» transportan la orina desde los
riñones hasta la vejiga, donde se almacena hasta que sale del cuerpo a través de la uretra.

CISTITIS BACTERIANA : Las infecciones de las vías urinarias suelen ocurrir cuando las bacterias que se
encuentran fuera del cuerpo ingresan en las vías urinarias a través de la uretra y comienzan a multiplicarse.
La mayoría de los casos de cistitis se producen por Escherichia coli (E. coli).
Las infecciones bacterianas de la vejiga pueden aparecer en las mujeres como resultado de las relaciones
sexuales. No obstante, incluso las jóvenes y mujeres que no son sexualmente activas están expuestas a
infecciones urinarias más leves, ya que la zona genital femenina a menudo alberga bacterias que pueden
causar cistitis

CISTITIS NO INFECCIOSA: Aunque las infecciones bacterianas son la causa más frecuente de la cistitis,
diversos factores no infecciosos también pueden hacer que se inflame la vejiga. Algunos ejemplos son los
siguientes:
 Cistitis intersticial: La causa de esta inflamación crónica de la vejiga, también denominada
«síndrome de vejiga dolorosa», es poco clara. La mayoría de los casos se diagnostican en mujeres.
La afección puede ser difícil de diagnosticar y tratar.
 Cistitis inducida por los medicamentos: Ciertos medicamentos, especialmente los de quimioterapia
ciclofosfamida , pueden producir inflamación de la vejiga cuando sus componentes descompuestos
son expulsados del cuerpo.
 Cistitis por cuerpos extraños: El uso prolongado de un catéter puede predisponerte a sufrir
infecciones bacterianas y daños de los tejidos, dos situaciones que pueden provocar inflamación.

MANIFESTACIONES CLINICAS
Los síntomas de una infección de vejiga pueden incluir:
• Disuria (Malestar, dolor o ardor al orinar)
• Polaquiuria (Necesidad de orinar con más frecuencia de lo normal)
• Tenesmo vesical(Deseo de orinar, que puede presentarse incluso con la vejiga vacía)
• Hematuria (La sangre en la orina)
• Presión o retorcijones en la ingle o la parte inferior del abdomen

FACTORES DE RIESGO
Algunas personas son más propensas que otras a padecer de infecciones recurrentes de vejiga o de las vías
urinarias. Las mujeres son uno de esos grupos. Ya que tenemos una uretra más corta, lo que acorta la
distancia que deben viajar las bacterias para alcanzar la vejiga.
Las mujeres que presentan un mayor riesgo de infección de las vías urinarias son aquellas que:
 Son sexualmente activas: Como resultado del coito, las bacterias se pueden impulsar por la uretra.
 Usan ciertos tipos de anticonceptivos. Las mujeres que usan diafragmas presentan mayor riesgo de
una infección.Los diafragmas que contienen agentes espermicidas aumentan más el riesgo.
 Están embarazadas: Los cambios hormonales durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de
una infección.
 Han experimentado la menopausia: Los niveles alterados de hormonas en mujeres
posmenopáusicas se asocian a menudo con las infecciones de las vías urinarias.

DIAGNOSTICO
El diagnóstico de la cistitis es clínico, sin embargo para confirmar el diagnostico se realiza un examen general
de orina para buscar leucocituria “presencia de leucocitos (glóbulos blancos) en la orina”( no especifica de la
infección de vías urinarias).
Urocultivo que permite identificar microorganismos causal y se expresada en UFC (unidades formadoras de
colonias) donde los valores por encima de 10 mililitros cúbicos de UFC, es indicativo de cistitis.

DIAGNOSTICO DIFERENCIAL: cuando el único síntoma es la disuria es necesario diferenciar entre:


En varones: uretritis y prostatitis.
En mujeres: uretritis, cervicitis , vulvo-vaginitis.

TRATAMIENTO
El tratamiento es antibiótico y debe hacerse, si es posible, de forma selectiva, eligiendo el mejor de aquéllos
a los que el germen es sensible (debe hacerse por tanto cultivo de orina y antibiograma). 
 Infección que aparece por primera vez. Los síntomas pueden mejorar incluso al primer día de
tomar antibióticos. Sin embargo lo normal es que la paciente deba tomar antibióticos de tres días a
una semana, según la gravedad de los síntomas. Es importante que los tratamientos con
antibióticos sean terminados con las dosis recomendadas por el especialista, además de asegurarse
de que la infección haya desaparecido por completo.
 Infecciones recurrentes. Si el paciente sufre infecciones urinarias recurrentes es posible que se
recomiende un tratamiento más largo con antibióticos.
URETRITIS
Es la inflamación (hinchazón e irritación) de la uretra, el conducto que transporta orina desde el cuerpo.

CAUSAS
La uretritis puede estar causada por bacterias, hongos o virus (por ejemplo, el virus del herpes simple).
Las infecciones de trasmisión es una causa frecuente de uretritis. Microorganismos de transmisión sexual
(como la Neisseria gonorrhoeae, que produce la gonorrea) pueden extenderse hacia la uretra durante el
acto sexual con una pareja infectada. La Chlamydia y el virus del herpes simple también se transmiten
habitualmente por vía sexual y pueden producir uretritis. El microorganismo de la gonorrea es el que causa
más frecuentemente uretritis en los hombres. Este microorganismo puede infectar la uretra de las mujeres,
aunque son la vagina, el cuello uterino, el útero, los ovarios y las trompas de Falopio los que tienen mayor
probabilidad de ser infectados. Trichomonas, un tipo de parásito microscópico, también produce uretritis en
los hombres. La uretritis también puede ser causada por otras bacterias que suelen causar infecciones de las
vías urinarias, como Escherichia coli.

MANIFESTACIONES CLINICAS
Tanto en hombres como en mujeres la micción suele ser dolorosa y la necesidad de orinar se vuelve más
frecuente y urgente. A veces no aparecen síntomas. En los hombres, cuando la causa es gonorrea o clamidia,
suele existir secreción por la uretra, que por lo general es de color verde amarillento y espesa cuando está
implicado el gonococo, y puede ser de color claro y menos espesa cuando los causantes son otros
microorganismos. En las mujeres, la secreción es menos frecuente.

En hombres : hematuria , disuria, secreción del pene, fiebre, sesibilidad, prurito o inflamación en el área de
la ingle o del pene , dolor durante la relación sexual o la eyaculación.

En mujeres: flujo vaginal, dolor en el abdomen, polaquiuria.

FACTORES DE RIESGO
Ser una mujer en edad reproductiva
Ser hombre entre 20 y 35 años
Tener parejas sexuales multiples
Comportamiento sexual de alto riesgo (como relaciones sexuales anales sin condon)
Antecedentes de enfermedades de transmisión sexual (ETS)

DIAGNOSTICO
Ex. De laboratorio.
 Toma de secreciones ueterales: que es la extracción sin aseo previo y con un hallazgo de 5
leucocitos polimorfonucleares es positiva de uretritis
 Ex. De orina: la presencia de piuria (>5 globulos blancos por campo en muestra centrifugada) es un
indicador sensible en presencia de uretritis.
 Cultivo: en la uretritis gonocócica se utilizan en casa en que deje didas al diagnóstico , para
descartar organismos resistentes.

TRATAMIENTO
El tratamiento de la uretritis se realiza con antibióticos. La terapia de elección dependerá de la bacteria
causante de la infección por transmisión sexual. Por lo general se recomienda ceftriaxona y azitromicina en
los casos de uretritis gonocócicas. En los casos de uretritis no gonocócicas para tratar los gérmenes más
frecuentes, la clamidia y la mycoplasma, se recomienda azitromicina y doxiciclina.
Como se consideran infecciones de trasmisión sexual es muy importante tras el diagnóstico de la
uretritis, estudiar y tratar a la pareja sexual del paciente. No obstante, la infección puede ser asintomática
en algunos casos por lo que puede “que la pareja sexual haya tenido ya la infección pero se haya resuelto”. Y
es que hay veces que se resuelve espontáneamente sin necesidad de tratamiento. Hay que recordar, sin
embargo, que aunque la infección curse sin síntomas eso no impide que se pueda transmitir, y de ahí la
importancia de realizar un tratamiento.
La terapia antibiótica suele tener una eficacia por encima del 95% de éxito.

PROSTATITIS
La prostatitis es la inflamación de la glándula prostática que por lo general se asocia con inflamación. La
prostatitis con frecuencia provoca dolor o dificultad al orinar, además de dolor en la ingle, la zona pélvica o
los genitales. Las infecciones bacterianas son la causa de algunos casos de prostatitis. Este problema puede
ser causado por una infección bacteriana, la cual comienza rápidamente siendo aguda , mientras que la
prostatitis prolongada o crónica dura 3 meses o más. Sin embargo esta no es una causa común.

La glándula prostática, está ubicada justo debajo de la vejiga en los hombres. Rodea la porción superior del
conducto que drena la orina desde la vejiga (uretra). La próstata y otras glándulas sexuales producen el
líquido que transporta los espermatozoides durante la eyaculación (semen).

TIPOS
Por lo general, hay cuatro tipos de prostatitis:
 Prostatitis bacteriana aguda: una infección bacteriana que suele estar acompañada de síntomas
repentinos y graves, suele tener como causa cepas comunes de bacterias. Es posible que la
infección se haya diseminado desde otras partes del aparato urinario o reproductor.
 Prostatitis bacteriana crónica: una infección bacteriana continua o recurrente que suele estar
acompañada de síntomas menos graves, generalmente se debe a la misma causa que la infección
bacteriana aguda. Puede presentarse cuando el tratamiento de una infección aguda no es lo
suficientemente largo o no elimina todas las bacterias.
 Prostatitis crónica o síndrome de dolor pélvico crónico: dolor pélvico continuo o recurrente y
síntomas en las vías urinarias sin signos de una infección, no se conoce bien. Según estudios, es
posible que intervengan varios factores en conjunto. Entre estos se incluyen infecciones previas,
disfunción del sistema nervioso, disfunción del sistema inmunitario, estrés psicológico o actividad
hormonal irregular.
 Prostatitis inflamatoria asintomática: signos de inflamación de la próstata sin síntomas, cuya causa
se desconoce, se suele detectar al realizar exámenes por otras afecciones médicas y no se trata.

MANUFESTACIONES CLINICAS
• Dolor en la parte baja de la espalda
• Molestias perineales o testiculares
• Disuria ligera
• Piuria microscópica (pus en la orina)
• Dificultad con la micción, como goteo o vacilación urinaria
• Eyaculación dolorosa
• Fiebre
• Escalofríos

DIAGNOSTICO
 Examen digital del recto. En este procedimiento, se inserta un dedo cubierto con un guante y
lubricado en el recto para detectar si la próstata está inflamada.
 Análisis de orina. Se proporciona una muestra de orina que se analizará para determinar la
presencia y el tipo de infección bacteriana.
 Análisis de sangre. Las muestras de sangre pueden analizarse para detectar signos de infección y
otros problemas de la próstata.
 Prueba de espécimen prostático. En algunos casos, se masajea suavemente la próstata durante un
examen rectal para que se libere líquido prostático hacia la uretra. Luego, mediante la obtención de
una muestra de orina se podrá expulsar y analizar el líquido prostático y determinar la presencia de
bacterias.

TRATAMIENTO
En la prostatitis aguda antibióticos bactericidas adecuados para bacterias gram negativos, administrados por
vía parenteral.
En la prostatitis crónica, antibióticos que penetren bien en el tejido prostático (liposolubles). Difunden
adecuadamente al líquido prostático, se recomienda tobramicina, netilmicina, trimetoprim, doxiciclina, ,
fosfomicina y ceftriaxona entre otros. Por lo general de 6 a 12 semanas.

PIELONEFRITIS AGUDA
La pielonefritis es una infección urinaria se define como la presencia de gérmenes en la orina.
Habitualmente son bacterias, es una infección bacteriana de uno o ambos riñones. Puede llevar a la sepsis y
al fallo múltiple del órgano. La pielonefritis es una causa frecuente de formación de cicatrices en los riñones
y puede llevar a la pérdida parcial de la función renal, especialmente en pacientes que tienen infecciones
recurrentes.

MANIFESTACIONES CLINICAS
Los síntomas típicos incluyen fiebre, escalofríos, dolor de espalda o vientre, náuseas y vómitos. Otros
síntomas incluyen pérdida del apetito, orinar con frecuencia, sangre en la orina y orina con olor inusual
Síntomas más habituales:
 Picor y escozor miccional.
 Aumento de la necesidad de miccionar.
 Fiebre.

DIAGNOSTICO
Las pielonefritis se diagnostican mediante el cultivo de la orina en medios de crecimiento apropiados. Se
exige que en el cultivo haya bacteriuria significativa, un concepto que incluye todas estas condiciones que
son:
 El crecimiento de más de 100.000 ufc (unidades formadoras de colonias centímetro cúbico) en un
paciente sintomático o no.
 El crecimiento de 100 ufc de E. Coli en una mujer con síntomas.
 El crecimiento de más de 1000 ufc. en un varón sintomático.
 Cualquier crecimiento de gérmenes en orina obtenida por punción suprapúbica.
 El crecimiento de 100 ufc. en paciente con sonda vesical.
 Existe una condición especial de bacteriuria significativa, es la denominada bacteriuria
asintomática, que se define como el crecimiento de más de 100.000 colcc. en dos cultivos
consecutivos en cualquier paciente asintomático.

TRATAMIENTO
Se recomienda cefalosporina de amplio espectro: ( ceftriaxona, cefotaxima) con o sin aminoglucósido.
Fluoroquinolonas: (ciprofloxacina, levofloxacina, ofloxacina).
Aminoglucosidos: asociado con ampicilina.
Por lo general 14 dias

ITUS
FACTORES DE RIESGO
Algunas personas tienen mayor riesgo de contraer una infección urinaria. Las infecciones urinarias son más
comunes en las mujeres porque la uretra de las mujeres es más corta y está más cerca del recto. Esto facilita
la entrada de bacterias a las vías urinarias.
Otros factores que pueden aumentar el riesgo de contraer infecciones urinarias son:
 Una infección urinaria anterior.
 Actividad sexual.
 Cambios en las bacterias que viven dentro de la vagina (flora vaginal). Por ejemplo, la menopausia o
el uso de espermicidas pueden causar estos cambios.
 Embarazo.
 Edad (los adultos mayores y los niños pequeños tienen más probabilidades de contraer infecciones
urinarias).
 Problemas estructurales en las vías urinarias, como agrandamiento de la próstata.
 Mala higiene, por ejemplo, en los niños que están aprendiendo a ir al baño.

PREVENCION
BAÑO E HIGIENE: EJEMPLO
 Escoger toallas sanitarias en lugar de tampones, los cuales algunos médicos creen que llevan a que
las infecciones sean más probables. Cambie la toalla cada vez que use el baño.
 No usar duchas ni aerosoles o polvos de higiene femenina. Como regla general, no usar ningún
producto que contenga perfumes en la zona genital.
 Mantener la zona genital limpia. Especialmente después de la actividad sexual.
 Limpiarse de adelante hacia atrás después de usar el baño.
 Evitar los pantalones apretados
 Beber muchos líquidos, 2 a 4 cuartos de galón (2 a 4 litros) cada día.
 No beber líquidos que irriten la vejiga, como el alcohol y la cafeína.
 Control medico

CASO CLINICO
Marianela, de 19 años, estudiante de publicidad, concurre a la guardia por disuria, polaquiuria y tenesmo
vesical, mantiene vida sexual activa. Refiere que hace 2 años presento los mismos síntomas con hematuria
macroscópica, a los 3 dias de haber tenido relaciones sexuales. Tiene antecedentes de candidiasis vaginal.
Niega antecedentes familiares y personales de enfermedad renal y diabetes. El examen físico es normal, la
puñopercusion es negativa y hay ausencia de dolor a la palpación de la zona pubiana.
TA: 120/70 mmHg.
Hematocrito: 36% GB (globulos blancos) 8.000/mm3 milimetro cubico
Urea: 47 mg/dL (miligramo – decilitro)
Creatinina: 0,9 mg/dl (miligramo – decilitro)
Leucocitos: 8 a 10 por campo de 400 x y hematíes 2 a 4 por campo de 400x .
Se solicito muestra de urocultivo. Fue tratada empíricamente con antibiótico por vía oral y a las 48 horas se
recibió el resultado del urocultivo con desarrollo de E. coli >10 a la 5 UFC/mL (unidad de colonias formadoras
– mililitro)

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