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Traducción:

Berth (Taikutsu)
Corrección:
Presi5
Prologo
La Chica Mira su Propio Reflejo en el
Espejo
31 de marzo.

Hoy es el último día de esa persona… de mi hermano, en esta escuela.

“Me veo terrible”.

Mi rostro reflejado en el espejo se veía terrible, con una expresión deprimente.

La razón era sencilla. Probablemente se debe a que ayer no pude dormir bien.

Cuántas veces, o más bien, cuánto tiempo en total fue el que gasté en hablar
con mi hermano desde que entré a esta escuela.

Seguramente fueron sólo unas pocas horas en todo un año.

Qué relación tan miserable. No me podría quejar si alguien dijera que éramos
incluso menos que amigos.

Éramos hermano y hermana. Estábamos en una relación cercana, y a la vez


distante, nada parecido a cualquier otro pariente sanguíneo.

“¿Realmente voy a dejar ir a mi hermano manteniendo esta relación hasta el


final?” Le pregunté a mi reflejo en el espejo.

Por supuesto, no hubo respuesta.

Lo que estaba allí era simplemente mi deprimente rostro mirándome desde el


otro lado del espejo.

La verdad es que ni siquiera tenía que preguntarme de qué me estaba quejando.

Había muchas cosas de las que hablar con mi hermano.

No quería que nos despidiéramos de esta forma.

Eso es lo que siempre estuve pensando, durante todo un año.

Pero al final, nunca pude hablar con él apropiadamente.

Pero… ahora mismo la situación es otra. Ahora podía verlo cara a cara, así que
simplemente tenía que ir y hablarle.
Tenía que hablarle, y despedirlo como era debido.

“… No, no es eso”

Ahora mismo, no estaba calificada ni siquiera para despedirlo.

Era cierto, hubo un cambio en nuestra relación.

Finalmente pude hacer que mi hermano me mirara como era debido.

Sin embargo…

En todo este año, no pude mostrarle a mi hermano cuánto he evolucionado.

Incluso si voy a despedirlo ahora, no creo que se alegre mucho.

Más bien, lo único que lograría es hacer que se preocupe por su incompetente
hermana menor.

No puedo permitir que se despida de sus 3 brillantes años, llevándose consigo


ese sentimiento.

En ese caso, ¿no sería mejor simplemente no ir a verlo? Llegué hasta esa
conclusión.

Después de todo, no podía ir y darle problemas sólo por mi tonto egoísmo…

“No, eso tampoco. No hay forma de que esa sea la respuesta correcta, ¿verdad?”
Le pregunté una vez más a mi reflejo.

No tengo nada digno para mostrarle.

Pero eso no quería decir que huir fuera la solución.

Si lo despedía, diciéndole con confianza, “estaré bien”, el problema se


solucionaría.

En ese caso, ¿qué es lo que debería hacer?

¿Qué es lo que debo hacer?

Ya no me queda demasiado tiempo para decidirme.

Si tan solo hubiera notado mi estupidez más rápido…

Si tan solo la hubiera notado el día que ingresé a este lugar…

“Supongo que… no tiene sentido arrepentirme de algo que ya pasó…”

Eran alrededor de las 8 de la mañana.


Al medio día de hoy, mi hermano finalmente dejaría esta escuela.

“¿Qué hago…? ¿Qué debo hacer…?”

Y si solo le muestro mi yo de siempre… pensé.

Pero mi yo actual no era la misma yo de siempre.

Ahora mismo era una torpe hermana menor que no puede hacer nada más que
tratar de alcanzar a su hermano.

Sentí como si mi reflejo en el espejo se hiciera uno con la yo de hace un tiempo.

“Yo… ¿quién soy en realidad?”

Sí.

La figura en el espejo era yo, y al mismo tiempo no era yo.

“… Una impostora”.

Ahora mismo, no era más que una impostora.

Ahora que lo pienso, he sido una impostora por gran parte de mi vida.

He estado escondiendo mi verdadero yo desde que tengo memoria.

Una impostora, una hermana menor que no hace más que tratar de alcanzar a
su hermano.

Mi apariencia, mi personalidad, mis logros, todo eso era por y para mi hermano.

Era una figura falsa, creada solo para que él me elogiara, para que me
reconociera.

Pero, como era obvio, no había forma de que él reconociera a una impostora
como yo.

No, eso no, no es del todo verdad. Sin lugar a duda, la yo de estos últimos años
ha sido mi verdadera yo.

No puedo llamarme una impostora.

Aunque no lleve tanto tiempo en este mundo, puedo asegurar que la yo que me
ha acompañado durante gran parte de mi vida, es mi verdadera yo.

Así he sido siempre, y no me arrepiento.

Pero…
“Lo que yo quería mostrar… lo que yo siempre he querido que mi hermano viera
es…”

Lo que quería demostrarle a esa persona era una única cosa.

Y ahora, me di cuenta de lo que es.

“… Gracias, impostora, y a la vez mi yo real”. Dije, agachando mi cabeza frente


a mi reflejo en el espejo.

Mi largo cabello se sacudió.

Luego levanté la cabeza y aparté la mirada del espejo.

Ya basta de estar enfrentándome con mi pasado.

No tengo tiempo para eso.

Todavía tenía algo que hacer, algo que sólo yo podía hacer.

Algo de lo que finalmente, y al último momento, me di cuenta.

El último regalo que puedo hacerle a mi hermano, para que se marche sin
ninguna preocupación.
Capítulo 1
Graduación
24 de marzo, ceremonia de graduación.

Este era el día del gran evento donde despedía a todos los estudiantes de tercer
año que habían aprobado sus cursos exitosamente.

Para cualquier otro estudiante podría ser un evento pasajero como cualquier
otro, pero la verdad, había cosas destacables en el de este año.

Primero, lo que llamaba la atención era cómo había terminado todo entre el
hermano de Horikita y Nagumo.

Todavía no sabía a ciencia cierta el resultado final que había dejado la gran, y
extensa batalla, que ambos libraron.

¿El hermano Horikita se graduará de la clase A? ¿O acaso no lo hará por la


intervención de Nagumo?

Supongo que los resultaron se dijeron en algún momento de ayer que era día
libre, pero como tenía cosas que hacer, no di ni un solo paso fuera de mi
habitación.

De cualquier forma, es seguro que hoy también dirán los resultados.

Sin mencionar que, a decir verdad, me interesa un poco ver cómo es realmente
una ceremonia de graduación.

Ya sea una ceremonia de graduación o de clausura, mi corazón late de emoción


por experimentarlas por primera vez.

Luego de que llegara la hora de ir a la escuela, cerré mi habitación con llave y


me dirigí hacia ella.

“Buenas”.

En medio del ascensor me encontré con Keisei el cual me saludo, y le devolví el


saludo.

Dado que había estudiantes de diferentes clases por aquí, ambos pasamos por
el vestíbulo en silenció, saliendo al exterior de los dormitorios.

“Hombre, subimos a la clase C para finalmente volver al punto de inicio. Aunque


para serte sincero, no me dolió tanto”. Murmuro Keisei, viendo al cielo, como si
quisiera desaparecer en medio de él.
La clase C que perdió en el examen especial al final de año, volvió a la clase D.

Muchos de los estudiantes quedaron en shock, pero lo bueno es que el oponente


era la clase A. Debido a que me había convertido en la torre de comando,
guardando puntos de protección, pude cumplir mi objetivo como soporte. Gracias
a ello muchos dijeron: “Bueno, qué se le va a hacer” o “al menos dimos una
buena pelea”.

Aunque caímos nuevamente a la clase D, en términos de puntos de clase, la


verdad no teníamos un numero para nada malo.

Puntos de clase provisionales del mes de marzo:

La clase A dirigida por Sakayanagi: 1131 puntos.

La clase B dirigida por Ichinose: 550 puntos.

La clase C dirigida por Horikita: 347 puntos.

La clase D dirigida por Ryuuen: 508 puntos.

Estas cifras por supuesto eran solo las del mes de marzo.

Los puntos de clases se fijan a principios de cada mes, y a su vez las clases
cambian. Por ello, ahora mismo la clase D sigue estando en el puesto de la clase
C. Cuando Ryuuen y los demás vuelvan a la clase C, tendrán casi los mismos
puntos de clase que la clase B.

Si llegamos bien a abril habrá un enorme cambio de clases.

Aunque, no había que olvidar que en esta escuela los puntos de clase eran
fácilmente manipulables en ciertas situaciones.

Por ejemplo, en la clase de Ichinose hay muchos estudiantes serios, mientras


que en la de Ryuuen no se puede decir lo mismo.

Es probable que existan cambios en los puntos de clase incluso por problemas
con la vida estudiantil de alguna de las clases.

Es seguro que ahora mismo los de la clase B están mojándose los pantalones
por los nervios.

Aunque para ellos, la única salvación era Ichinose, quien había logrado proteger
desesperadamente esa clase durante todo un año.

Sin embargo, era cierto que había una muy notable diferencia de tan solo 42
puntos.

Las posibilidades de que Ryuuen obtenga el pase para la clase B en los próximos
exámenes son demasiado altas.
Pero si miramos el hecho de que volvimos a la clase D, se vería como si
fuéramos dejados muy atrás. Pero no había que olvidar la entrega de puntos de
clase de abril y mayo del año pasado.

En abril del año pasado, todas las clases empezaron con 1000 puntos.

Por supuesto, eso no le daba ninguna ventaja a la clase A, al igual que ninguna
desventaja a la clase D.

Por eso si lo pensamos de otra forma, el estar aquí ahora mismo era de hecho
una gran oportunidad.

El problema, es que en la clase D usamos todos nuestros puntos de clase en un


solo mes.

Y como resultado…

Puntos de clase de mayo del año pasado:

Clase A dirigida por Sakayanagi: 940 puntos.

Clase B dirigida por Ichinose: 650 puntos.

Clase C dirigida Ryuuen: 490 puntos.

Clase D dirigida por Horikita: 0 puntos.

Todas las clases disminuyeron sus puntos en mayo. Por eso, era correcto decir
que el duelo empezó desde ese punto.

Al ver eso, de nuevo nos damos cuenta que nuestra clase obtuvo 347 puntos en
un año.

Los puntos totales se reducirán por algún que otro problema estudiantil al igual
que algún retraso, pero igual eso nos dejaría con unos 330 o 340 puntos al final
de todas formas.

Viendo todo eso de esa forma, ésta era la clase que más puntos había obtenido
en un año, superando por mucho a los 191 puntos que la clase A había obtenido.

Eso por ahora podría considerarse un gran éxito considerando que los puntos
cayeron hasta 0 en la primavera del año pasado, pero, ahora con la promoción
a segundo año, tenía que darles muchas más actividades a mis compañeros de
clase.

De lo contrario no sería fácil cerrar la brecha de puntos con las clases superiores.

Había que aumentar la capacidad de liderazgo de Horikita y Hirata, al igual que


las capacidades individuales del resto de estudiantes.
En base a eso, sería más que realista poder pelear con las clases superiores.

Luego de que la gente a nuestro alrededor comenzó a reducirse, Keisei abrió la


boca y dijo.

“No te preocupes. Casi nadie de la clase te culpó o te culpa por esto”.

Dijo él, supongo que pensó que estaba dudando de si era un buen líder o no.

Por supuesto, no es que me importara eso, pero de todas formas respondí a las
palabras de Keisei.

“Ya veo”.

Tal vez él pensó que esas palabras me servirían de consuelo, pero la verdad es
que también podían ser usadas de forma diferente.

En pocas palabras, significa que también, hay algunos estudiantes que no están
conformes conmigo.

“Pues… no todo puede ir perfecto. Además, no es que tú hayas tenido la culpa,


más bien nosotros debimos haberle dado ese rol a alguien más capacitado”.

De cierta forma es como si de todas formas me estuvieran culpando. Las


personas son seres irrazonables. Una vez se convencen de algo, al rato ya se
están quejando de ello.

Después de todo, no es nada raro que se estén quejando, aludiendo que fue por
culpa “de la diferencia de líderes” con la clase A.

“Ten esos ánimos arriba, incluso si llega algún idiota a reclamarte, ¿de acuerdo?
Tú tenías el punto de protección, y no es como si cualquier persona pudiera ser
líder”. Dijo Keisei dándome algo de apoyo, aunque ya de por sí estaba
asegurándome que algún estudiante iba a meterse conmigo.

“Lo más probable es que así sea, aunque también hay casos como el de
Ryuuen”. Dije, y Keisei sonrió levemente, girando su cabeza de derecha a
izquierda.

“Ese tipo es un caso especial. Hacer cosas irrazonables es parte de su estilo, de


hecho. Con sólo decir que la aparición de Ryuuen, quien no tenía ni un solo punto
de protección, fue sorpresa para la clase B, y más que suficiente para que se
retirara”.

Si miramos solo la superficie, sí, era tal y como decía Keisei.

Sin embargo, la verdad era algo diferente. Todo eso era una estrategia para que
Ryuuen alcanzara la victoria.

Su presentación y actos descuidados sólo eran el comienzo.


“… Kiyotaka, ¿puedo preguntarte algo?” Dijo Keisei luego de que termináramos
el tema del que hablábamos.

“¿Por qué no le dijiste a Horikita que intenté conciliar con Katsuragi por mi
cuenta?”

Keisei propuso una estrategia a Horikita para poder vencer a la clase A, la cual
consistía en aliarse con Katsuragi del grupo derrotado por Sakayanagi. Sin
embargo, considerando los riesgos, Horikita decidió rechazar esa propuesta.

Pero Keisei no se dio por vencido y trató de hacerlo por cuenta propia. Por
supuesto, él falló.

Aunque bueno, no es como si nos afectara mucho que él hubiera fallado.

A la final Katsuragi no cooperó y el daño fue casi nulo.

“No es que hayamos recibido gran daño por eso, ya qué importa”.

Aunque sé perfectamente que para Keisei ese no era el punto importante.

Aun sabiendo eso, traté de soltar un par de palabras de consuelo.

“La verdad es que hubiera sufrido más daño si hubiera sido alguien como
Sakayanagi o Ryuuen”.

Keisei quien tenía un gran sentido de la responsabilidad no podía dejar de


culparse por un futuro que nunca sucedió.

Por su tono, creo que él mismo quería a hablarle a Horikita sobre el tema con
Katsuragi.

“… Sí, de todas formas, ya se lo dije a Horikita. Pensé que debía asumir la


responsabilidad de eso”. Dijo él, diciéndome sinceramente que había confesado
todo.

“Kiyotaka, ¿tenías alguna corazonada de que Katsuragi no iba a traicionar a la


clase A?”

Preguntó él sin rodeos.

“No estaba convencido. Pero ya había posibilidades de que se echara para atrás,
¿no?”

“Pues… supongo que sí, pero…”

Claro que, no diré si esas posibilidades eran del 50 %, o del 1 %.

“La razón por la que no se lo dije a Horikita fue simplemente porque no se me


pasó por la cabeza. En ese momento estaba demasiado concentrado en tratar
de desempeñar bien el papel de torre de control. En ese sentido, yo también soy
responsable. Tal vez todo hubiera salido mejor si te hubiera ayudado en la
alianza con Katsuragi, así que ambos somos culpables”.

Luego de que ambos nos disculpáramos, finalmente nos salimos del tema de
Katsuragi.

“Culpa de ambos, ya veo. Aunque, de todas formas, ya reflexioné sobre mi pobre


juicio. Era más que obvio que conciliar con Katsuragi no era buena opción si
pensaba en los riesgos que eso traería”.

No podía hacer como si eso nunca hubiera pasado, pero podía superarlo.

“Si de pobre juicio hablamos entonces también soy culpable. Después de todo,
no dije nada en ese momento”.

“Me alivia un poco que me digas eso”.

Muchos de los estudiantes se vieron envueltos en este examen, pero Keisei trató
desesperadamente de ganar.

“Además, creo que ya aprendiste la lección esta vez, ¿no? Ese tipo de
estrategias no funcionan de forma tan simple”.

Hay muchas cosas que se pueden aprender de los fracasos.

Aunque usar ese conocimiento o no depende mucho de la persona.

“… Es cierto. Sólo tenía las intenciones de ganar en mi cabeza, tanto que ni


siquiera veía lo que había frente a mis ojos. Di bastante pena perdiendo la razón
de esa forma”. Suspiró él, reflexionando de a poco.

Lo de contar con Katsuragi ciertamente fue algo ingenuo, pero el intento es digno
de alabar.

“Y en fin, a la final, ¿qué fue lo que dijo Horikita al respecto?”

“Ella no me culpó de nada, incluso cuando toda la clase hubiera recibido un gran
daño, ella no me culpó. Es más, incluso me dijo que quería escuchar más de mis
ideas en los próximos exámenes. Claro que también me dijo que deje de actuar
por cuenta propia, como es obvio”.

Al parecer Horikita pensó de la misma forma.

Las personas van creciendo a medida que fallan. No puedes tomar el rol de líder
si tan solo te enfocas en conseguir resultados.

Claro que, las personas que sólo viven cometiendo fallos, sin aprender de ellos,
son abandonados por el resto en algún momento.
“Te seré sincero. Hasta ahora no había estado de acuerdo en que Horikita
estuviera en una posición de líder. Admito que sus habilidades de liderazgo y
sabiduría son excelentes, pero no me gustaba su actitud, era como si siempre
nos menospreciara”.

En eso estoy de acuerdo. Al menos hasta ahora, no es del tipo de líder moral
como lo es Hirata o Ichinose.

Ella es más del tipo que consigue un nuevo enemigo al mismo tiempo que un
aliado.

“Pero… me di cuenta que soy bastante igual. Nunca creí necesario hacer algún
deporte… y por supuesto, también he menospreciado a uno que otro idiota. Por
eso creo que estamos en las mismas”.

Cuando recién ingresamos a esta escuela, Keisei era del tipo que despreciaba a
los que no podían estudiar por su cuenta.

Después de todo, él pensaba que estudiar o no estudiar era lo que decidía si un


estudiante era bueno o un fracaso total.

“No eres el mismo del año pasado. Cambiaste mucho en todo este año”.

“Sí, de hecho, hasta yo me sorprendo de lo mucho que he cambiado. Por


supuesto, sigo creyendo que el estudio es lo más importante. Pero también
entendí que el ejercicio, la comunicación, y los amigos, son algo muy importante.
Horikita también ha cambiado de la misma manera. Ahora se ve mucho más
cercana, más confiable”.

Keisei no se llevaba tan bien que digamos con nadie que no fuera parte del grupo
Ayanokouji. Sin embargo, verlo elogiar a Horikita con tanta sinceridad, da a
entender cuánto confía en ella y en los demás ahora.

“Supongo que tienes razón”.

No me quedó más que simplemente estar de acuerdo.

Tomó un año, pero luego de tanta interacción directa, pude comenzar a entender
más de la estudiante llamada Horikita Suzune.

Ella fue aceptada de a poco desde aquella vez de la votación de la clase.

La razón de eso no está en alguna estrategia bien planeada o en su habilidad de


liderazgo.

Todo se debía a que el corazón de hielo de Horikita, poco a poco se fue


derritiendo. Era debido a ese muro, que todo lo que decía ella parecía que
estuviera menospreciando a los demás estudiantes, y que pensara que los
débiles debían ser abandonados por ser débiles. Era un pensamiento casi igual
que el de Keisei.
“Por supuesto, no creo que todo lo que diga Horikita sea lo correcto. Si en algún
momento llega a equivocarse pienso decírselo y reclamárselo. ¿Estoy acaso
equivocado?” Dijo Keisei decidido.

Básicamente su posición era de confiar en ella hasta donde pudiera, y dudar


cuando tuviera que hacerlo.

“No, estás en lo correcto. Es así como debería ser toda la clase”.

No importaba qué tan confiable fuera Horikita, ella seguía siendo una estudiante
de este lugar.

Por eso, es seguro que en algún momento u otro cometerá algún gran fallo.

Es por ello que, en esos momentos, siempre es bueno que haya uno o más
estudiantes dispuestos a objetar.

Hablar cara a cara, en la misma posición y cooperar para encontrar una solución
juntos.

Eso era algo que las clases de Sakayanagi o Ryuuen no podían hacer.

Más bien, ahora mismo nuestra clase estaba a punto de ser una similar a la de
Ichinose.

Pero lo importante es cerrar la brecha entre ambas clases a nuestra propia


manera.
1
Gimnasio.

Allí, todos los estudiantes y maestros se reunieron.

Todos los interesados, e incluso los adultos que casi nunca solían mostrarse al
público, ahora estaban reunidos observando cuidadosamente la ceremonia de
graduación.

Este era el momento en que los alumnos de tercer año, estaban a punto de dar
un nuevo paso hacia el comienzo de una nueva etapa.

Aquellos que seguirán estudiando, aquellos que conseguirán empleo, incluso los
que se quedarán varados.

Todos ellos abandonarán aquí su estatus de menores y saldrán a la sociedad


como adultos.

En ese momento, pensé.

En 2 años, ¿de qué forma estaré parado en ese mismo lugar, en esta misma
situación?

Al mismo tiempo que me doy cuenta lo inútil que era pensar en eso ahora.

Incluso si ya hay un camino dictado, había muchas cosas que podía hacer a
medida que avanzaba. Por eso quería creer que, todo lo que he aprendido y
aprenderé aquí, me va a servir en lo que me queda de vida.

“Muy bien, ahora me encantaría invitar a aquí al representante de los graduados,


quien ha estado en la clase A estos 3 años”.

Dijo el presentador por medio de su micrófono.

Y en ese momento, más que antes, el gimnasio fue ocupado por el silencio.

“Representante de la clase A…”

Había una posibilidad de que el estudiante que estuvieran a punto de llamar no


fuera Horikita Manabu, ni siquiera algún compañero de clase.

Si eso pasaba, significaba que las clases habían cambiado luego del último
examen especial.

Es seguro que todos los estudiantes en este momento se sentirían sumamente


nerviosos ahora mismo.
Pues, aparte de estar en esta escuela, el objetivo más grande era graduarse en
la clase A.

“… Horikita Manabu-kun, un paso al frente”. Al escuchar ese nombre es seguro


que Horikita se alivió.

No sabía cuánto había intervenido Nagumo, pero al parecer el hermano de


Horikita logró graduarse en la clase A sin problemas.

Mientras avanzaba dignamente, caminando hacia el podio, era observado por


los estudiantes y demás personas presentes.

“En este hermoso día de primavera con aroma a ciruelas, nosotros, los
graduados, recibimos con honor esta ceremonia de graduación—” Y así, su
discursó empezó.

Él fue diciendo poco a poco sus agradecimientos por la ceremonia y demás.

Luego, habló del día en que ingresó a la escuela hace 3 años.

“…El día en que ingresé a esta academia de educación avanzada, sentí que era
muy diferente a cualquier otra. Sentí una gran responsabilidad por el futuro que
me aguardaba, y hasta el día de hoy, recuerdo claramente el firme compromiso
que hice conmigo mismo hace 3 años”.

Lentamente, y al ritmo de sus palabras, la tranquilidad iba fundiéndose con el


lugar.

Ahora era muy diferente al él de hace un año cuando ingresó, a cuando actuaba
como el presidente del consejo estudiantil.

Podía sentir claramente ese cambio a medida que su discurso progresaba.

Claro que no sólo se limitaba al hermano de Horikita, sino a todos los estudiantes
que he conocido.

“Por decisión propia, y como representante del consejo estudiantil, tuve la


oportunidad de compartir palabras con ciertos estudiantes de primer año el año
pasado”.

El hermano de Horikita cambió el tema, como si se entrelazara con mis


pensamientos.

“Por ende, desde aquí puedo ver cuánto han crecido en comparación al año
pasado”.

El año pasado, él había cambiado aquel aire de dudas que teníamos.

Cambió todo aquello que los estudiantes en aquel tiempo no pudieron ver.
Por ende, ahora mismo, ningún estudiante estaba siquiera susurrando.

Y el hermano de Horikita, miró a todos con unos ojos reconfortantes, como


cualquier otro estudiante a punto de graduarse.

“Y por eso creo que los estudiantes de segundo año, y los de tercer año que
serán los que guíen a los de nuevo ingreso, seguirán demostrando su
crecimiento y habilidades mientras protegen la moral y la doctrina de nuestra
escuela”.

Y así, luego de algunos minutos, el discurso fue llegando a su fin.

“Prometo que las cosas que aprendí aquí, y que me servirán en mi vida venidera,
serán lo más preciado para mí”.

Y nuevamente, Horikita vio a los demás estudiantes.

“Luego de un año, o tal vez dos, para aquellos que buscan respuestas, llegará el
momento en que puedan entenderlas”.

Aquellos que buscan respuestas. Se refiere, en pocas palabras, al líder de la


clase A quien va a graduarse próximamente.

Con segundo año, se refiere seguramente a Nagumo.

Y los de primer año se refiere a quienes todavía están en plena batalla. Tal vez
Horikita, tal vez Ichinose, Ryuuen o quizás Sakayanagi.

O tal vez alguien más, un nuevo líder.

Ya había pasado la primera de 3 etapas de esta vida escolar, pero tan solo era
la primera.

Era seguro que muchos estudiantes se nos unirán, y otros nos dejarán
cambiando de clases.

Pero, aun así, el líder que sobreviva a todas las batallas por venir, se parará allí
en la próxima graduación.

Y así, el hermano de Horikita finaliza su discurso de manera lenta, pero fluida.

“… Estoy realmente agradecido por estos 3 años. Muchas gracias”. Y así, todo
estuvo a punto de acabar.

Luego de eso fueron los agradecimientos a los estudiantes, maestros y a la


escuela misma.

Al acabar su discurso de forma brillante, la ceremonia de graduación avanzó al


siguiente paso.
2
Luego de que la ceremonia de graduación terminara, los estudiantes restantes
salimos primero del gimnasio, y nos dirigimos a nuestras respectivas aulas.

En poco tiempo se llevaría a cabo una fiesta de despedida donde participarían


los alumnos graduados, todos los maestros y los padres de los graduados.

La fiesta de despedida al parecer es donde los estudiantes y sus padres se


saludan y hablan con sus maestros.

Los estudiantes restantes podían de hecho, regresar a sus dormitorios, pero los
que tenían club se quedaron, al igual que otros estudiantes que esperaban a sus
amigos graduados de tercer año.

Tal vez iban a darles algún regalo de despedida, un ramo de flores o incluso una
que otra confesión.

Había varios estudiantes que estaban nerviosos, otros callados, otros alterados.

“Bien. Lo que voy a decir ahora bien lo podría decir mañana en la ceremonia de
clausura, pero resumamos brevemente este semestre”.

Dijo Chabashira-sensei luego de esperar un poco a que los estudiantes se


sentaran.

“Primero, debo elogiarlos por su buena pelea contra la clase A en los exámenes
finales. Incluso los demás maestros estaban sorprendidos por su crecimiento”.

Aunque perdimos, incluso la dura Chabashira-sensei nos elogió.

“No se parecen en nada a los pequeños niños que ingresaron hace un año, por
eso debo elogiar su crecimiento”.

“Sensei, pero caímos de nuevo a la clase D, ¿sabe? Hicimos el ridículo”.

Dijo Ike frustrado.

“Ciertamente, volvieron al inicio. Pero aun así crecieron. Ahora están cerca de
las otras clases, no sólo en puntos, sino que también en habilidades”.

“A decir verdad me asusta que nos elogie así. ¿Qué está tramando?”

No es de extrañar que Sudou diga eso si es esta maestra quien nos elogia.

Es más, luego de esto bien podría decir que hará un examen sorpresa.

“No planeo nada, eso es lo que realmente pienso. Ya han pasado 4 años desde
que soy maestra, y ustedes son la segunda clase a la que me asignan, pero
puedo decir que ya superan por mucho a la anterior clase D de la que estuve a
cargo. Claro que, lo mismo puedo decir de las otras clases. Que sigan
avanzando, y subiendo de clase se verá de ahora en adelante y dependerá
únicamente de su esfuerzo y habilidades”.

Con un sonido de “toom” Chabashira-sensei golpeó levemente la pizarra.

“Mañana es la ceremonia de clausura. No recibirán clases, pero no se olviden


que deben asistir a la escuela”.

Y así, la clase se dividió luego de escuchar las palabras de Chabashira-sensei.

No sabía cuántos estudiantes estarían esperando a los de tercer año, pero me


pregunto qué harán los familiares.

Con eso me refiero obviamente, a la hermana del presidente del consejo


estudiantil y al líder de la clase A de tercer año.

Horikita aún estaba mirando fijamente a la pizarra.

De seguro estaba pensando en muchas cosas ahora mismo.

Sentí como si estuviera en un buscaminas, pero tomé algo de valor y le hablé.

“¿No vas a ir?”

“¿A qué te refieres?”

“Vamos, ya sabes”.

“Si te refieres a que, si no voy a ir a ver a mi hermano, entonces no, no iré”. Dijo
Horikita y luego desvió la mirada.

Así que… no piensa ir.

“Ya lograste que te hablara con normalidad hace poco, ¿no?”

“Sí, pero ¿y eso qué te importa? Nosotros tenemos nuestros propios


problemas”.

Aunque en lo personal creo que ahora eres la única que sigue cargando ese
problema.

“Si pierdes esta oportunidad puede que no sea fácil conseguir otra”.

“Yo…”

Aunque esté descongelándose, la parte más problemática sigue estando fría.


Supongo que así de dura debe haber sido la relación de estos dos en todos estos
años.

“En cualquier caso, yo iré”.

“¿Eh? ¿Vas a ir a ver a mi hermano?” Horikita se sorprendió, y no la culpo. Yo


mismo sé bien que no me gusta involucrarme tanto con la gente.

“Nunca me llevé bien con él, pero igual, puede que esta sea la última vez que lo
vea”.

Por eso no está del todo mal despedirlo.

“Ya veo…”

“¿Tienes algo que decir acerca de eso?”

“No realmente. Eres libre de encontrarte con quien se te dé la gana”.

No diré nada acerca que claramente se está preguntando por qué debo ir yo.

En cualquier caso, me levanté.

Ahora mismo casi todos los maestros estaban apresurados, dirigiéndose hacia
el lugar la fiesta de despedida.

Lo mismo hace Tsukishiro, no hay forma de que ese hombre no participe en ese
tipo de cosas.

“¿A dónde vas?”

“A matar el tiempo por ahí. Dado que está la fiesta de despedida, dudo que tenga
oportunidad de verlo ahora mismo. ¿Y si vamos los dos luego a despedirlo?”

“… Lo pensaré. Aunque no sé cuánto tiempo vaya a durar esa reunión”.

Dijo que no planeaba ir, pero ahora se lo replanteó.

“Ni idea. Una hora, o tal vez dos”.

En realidad, el programa decía que era una reunión de 90 minutos, pero puede
que tarde más.

Aprovechando eso, haré un par de cosas que debo hacer.


3
Desde aquí, la escena se remonta hasta 23 días atrás.

La misma noche del día en que acabamos el examen final, llamé a cierta
persona.

“Buenas noches, habla Sakayanagi”. Era una voz madura.

No obstante, no llamé a la estudiante Sakayanagi Arisu, sino a su padre.

El director de nuestra academia quien había sido suspendido debido a una


trampa de Tsukishiro.

Fue el director quien contestó, pero al parecer él no conocía mi número.

“Lamento mucho molestarlo a esta hora. Un gusto hablarle luego de mucho


tiempo, soy Ayanokouji”.

Me presenté para darle a entender quién era.

“¿Eh? ¿Ayanokouji...? Ya veo, Ayanokouji-kun”. Respondió el director,


reconociéndome por mi voz y apellido.

Decidí rápidamente hablar para que no pensara que lo llamé sólo para molestar
o por alguna travesura.

“Lamento mucho esta llamada repentina”.

“No, no, simplemente estoy algo sorprendido. ¿Cómo sabes mi número?”

“Se lo pregunté a su hija. Me dijo que este era el número que usaba cuando
contactaba con las personas del instituto”.

El otro día mientras regresaba de hacer el examen se lo pregunté a Sakayanagi


y ella me lo dijo en 2 respuestas rápidas.

“También me dijo que este era el número que usaba para contactarla”.

No creo que sea el tipo de padre condescendiente, pero eso no cambiaba el


hecho de que se trataba de su querida hija.

Eso fue lo que pensaba, por eso es que me sorprendí por su reacción.

“¿Arisu te dijo eso…? Pero yo no le había dado este número a ella”.

Dijo él, refutando mientras se sorprendía.


“¿Dónde pudo haberlo conseguido?” Dijo el director como si estuviera sonriendo
amargamente al otro lado del teléfono. Tal parece que no estaba mintiendo.

“¿Su número por lo general está oculto o lo mantiene en secreto?”

“Los maestros lo tienen, por supuesto. Y los involucrados con el instituto, pero
depende de quién sea…”

En tal caso, obtenerlo en sí no debería ser tan difícil. Puede que Sakayanagi lo
haya visto en algún lado y lo haya memorizado. Pero hay algo que me llama la
atención. El director Sakayanagi era un hombre imparcial incluso con su querida
hija, no es el tipo de padre que haría lo que su hija le dijera si esta lloraba
mientras se lo pedía. En ese caso, ¿por qué ella se tomaría la molestia de
guardar este número? Dudo mucho que sea para mandarle informes o
simplemente chatear.

Además, cuando me dijo el número de teléfono, me lo dijo bastante alegre.

O puede que tal vez haya predicho que algún día estaría en problemas y era
posible que fuera a preguntarle el número de su padre.

“En fin… ¿cómo se supone que deba reaccionar?” Al parecer eso era mucho
más importante para él que el hecho del cómo había conseguido su número.

Pero al menos sé muy bien que un contacto directo de un estudiante no es muy


bienvenido que digamos.

“¿Hay alguna regla que diga que un estudiante no pueda contactarlo?”

Primero quería sacarme esa duda de la cabeza.

Si me dice que no es algo permitido, la verdad será difícil continuar con la


conversación.

“Sí, ciertamente no la hay. Además, que no es como si quisiera rechazar esta


llamada en primer lugar”.

Así al fin puedo continuar.

“Aunque personalmente, quisiera terminar esta llamada lo más rápido posible.


¿Qué necesitas de mí?” Parecía algo preocupado, pero no era razón para
sentirme culpable.

Además, ahora sé que no hay ningún tipo de castigo por llamar al director.

“Director Sakayanagi, ahora mismo se encuentra penalizado por presunto


fraude. En primer lugar, ¿eso es cierto?”

“Esa es una pregunta bastante personal, y algo que un estudiante no preguntaría


normalmente. Al menos en lo personal no creo que sea un tema adecuado de
hablar entre un estudiante y su director”. Dijo él, evadiendo la pregunta no de
forma ruda, sino cortés y calmada.

Pero esa pregunta es algo directamente relacionado al tema principal.

Iré un poco más persuasivo.

“¿Podría responderme?”

“… Ayanokouji-kun. No sé exactamente lo que buscas al preguntar eso, pero no


puedo responderte. Tú sabes bien la razón, ¿no es así?”

“¿Porque no es algo que un estudiante deba escuchar?”

“Exacto. No es algo en lo que un estudiante deba involucrarse”.

Ahora el director estaba en una situación y posición especial. Una en lo que no


era muy fácil hablar de estos temas con un estudiante.

Por eso, puedo asegurar que evadir mi pregunta es la reacción más común en
este caso.

“Entiendo muy bien eso. Sin embargo, debo saberlo a como dé lugar”.

Parece ser, que primero será necesario que el director conozca en qué situación
me encuentro.

“No sé en qué problemas estás metido, pero sigues siendo un estudiante. Y en


eso, no importa si eres Ayanokouji y yo Sakayanagi, ¿puedes entender eso?”
Explicó el director Sakayanagi de forma tranquila y educada, no era como si
estuviera regañando a un niño o algo por el estilo.

Debido a esa reacción, podía darme cuenta de que era un hombre bien formado.

“Por supuesto. De forma personal, mi relación con usted no es más que la de


estudiante y maestro, no hay nada más. Mejor dicho, no debe haber nada más”.

Después de todo, soy el que más desea que no se forme un lazo entre ambos.

“En ese caso, ¿no sería mejor terminar ya esta llamada? Haré como si nunca
hubiera existido—”

“No, si lo hago, no seré capaz de remover al “parásito” que encontré”.

Con sólo esa palabra, dejé que el director Sakayanagi intuyera la situación para
finalmente comenzar de verdad esta conversación.

“¿Dices que hay un “parásito” entre nosotros?”


“Sí. Ese parásito es el director adjunto Tsukishiro”. Dije, yendo al punto
directamente ya que no ganaba nada con irme por las ramas.

“… ¿Qué sucede con Tsukishiro-kun?” Preguntó él, pero su tono de voz cambió
sin lugar a duda.

Él no se sorprendió mucho de que el parásito al que me refería haya sido


Tsukishiro, pues es seguro que incluso él ya tenía una corazonada al respecto.

“El director Tsukishiro actuó por su cuenta, saboteando un examen a gran escala
que era para enfrentar a todos los estudiantes con sus habilidades. Supongo que
ya sabe sobre eso, ¿o no? Director Sakayanagi”.

“No veo a qué quieres llegar. ¿Dices que Tsukishiro-kun intervino en el


examen…?” El director Sakayanagi simplemente estaba actuando como si no
supiera nada.

Él no sabe mis intenciones, así que es una reacción más que normal y
entendible.

“El asunto de las denuncias de fraude en su contra también fue orquestada por
el director adjunto Tsukishiro. La razón de ello, supongo que es porque sintió que
su posición neutral le estaba estorbando”.

El director Sakayanagi se quedó pensando un momento al otro lado del teléfono.

Aun si tenía una conexión con la habitación blanca, seguía siendo un estudiante.

En pocas palabras, no era la persona más adecuada para escuchar los asuntos
de los adultos.

No obstante, todo cambia si todo pasa alrededor de mí.

No, pero la verdad es que el director Sakayanagi ya debió darse cuenta de eso
desde hace mucho.

Sin embargo, ni él ni nadie más podía hacer algo al respecto hasta que hubiera
un daño real.

“¿Por qué Tsukishiro-kun haría eso? En primer lugar, él está en una posición
más elevada. No hay razón para que me haya tendido una trampa y así echarme,
al igual que no veo razón para que hubiera ido a la escuela solo para sabotear
un examen”.

Esto era la última cosa que quería confirmar.

Confirmar, para poder decidir si podía confiar y compartir información con él.

“El objetivo de Tsukishiro es literalmente sacarme de la escuela. Para eso vino


hasta este instituto”.
Era mejor dejar bien claro las cosas que había entendido hasta ahora.

“Esa es una declaración muy delicada en caso de no tener pruebas”.

“Estoy de acuerdo. Sin embargo, no tengo demasiado tiempo para negociar con
usted. Ese hombre no se detendrá y hará todo lo que pueda para conseguir lo
que busca”.

Todo esto depende también de cuánto sabe el director de mi padre.

Si sólo tienen una relación corta entonces será complicado convencerlo.

Pero, a juzgar por todas sus reacciones durante esta llamada, ya más o menos
sabía la respuesta.

El director Sakayanagi lo conocía bien, y estaba muy al tanto de las intenciones


de mi padre.

“¿Sensei… tu padre, realmente haría todo esto sólo para llevarte de regreso?”

Esa misma pregunta puede ser utilizada como la respuesta perfecta en este
momento.

Después de todo, nunca dije que mi padre estuviera detrás de las acciones de
Tsukishiro.

Ni siquiera tenía que confirmarlo, era más que seguro que estaban conectados.

“Dijiste que saboteó el examen final, ¿no? ¿Tienes alguna prueba?”

Como era de esperarse, el director Sakayanagi no sabía cómo se estaba


manejando el examen final desde las sombras.

De haberlo sabido, de seguro hubiera hecho algo al respecto, o al menos lo


hubiera intentado.

“Ahora le hablaré sobre eso”.

En el examen final, Tsukishiro tomó el control del sistema del instituto para
manipular las respuestas.

Él nos quitó una victoria para hacerme perder los puntos de protección.

Sólo una misera victoria, pero seguía siendo una victoria.

Pero eso era algo que afectaba a toda la escuela.

Con sólo esa victoria, nosotros hubiéramos podido estar justo debajo de las
clases superiores.
Así, mientras iba explicando la situación, sus respuestas se fueron haciendo
cada vez más débiles.

Esto era porque había quedado más que claro que él realmente usaría cualquier
tipo de método solo para expulsar a un estudiante.

Pero aquí no acababa el asunto.

Esto también significaba que luego de expulsar al estudiante Ayanokouji


Kiyotaka, las cosas realmente empezarían desde ahí.

“Y eso es lo que sucede actualmente. ¿Me cree?” En casos normales, esto sería
tomado como una simple estupidez dicha por un estudiante.

Pero el director Sakayanagi conocía a mi padre, sabía de mi pasado.

Él llegaría a la misma conclusión luego de escuchar todo esto.

Incluyendo cosas que ni siquiera le he dicho todavía.

“Sinceramente es difícil de creer que se haya infiltrado en la escuela solo para


expulsarte. Ya había escuchado del nuevo sistema, pero no imaginé que sería
para algo como eso…” Según sus palabras, era por el bien de los estudiantes y
la institución, pero en realidad era uno de los métodos para echarme.

“Entonces quiere decir que realmente no le importa nada excepto echarte de la


academia. Sí, creo que ya entiendo el motivo de tu llamada. No es algo de lo que
un estudiante pueda encargarse después de todo”.

Sabía que el director iba a decir eso una vez entendiera la situación.

“En ese caso, ¿viniste a pedir mi ayuda, no es así?”

“Algo así”. Lo admití con sinceridad.

Ojo por ojo, y diente por diente.

La única manera de pelear contra alguien del lado de la academia, era haciendo
que otra persona de ese lado peleara por ti.

Además, Tsukishiro estaba en la posición de director ahora mismo. No era


alguien a quien pudiera siquiera enfrentarme.

“Pero, antes que nada, quiero preguntar algo… o no, más bien confirmar algo”.

“¿Sí?”

Me preparé mentalmente para responder a lo que podía y también a lo que no


podía.
“Enfrentar a Tsukishiro quien incluso es capaz de alterar las calificaciones de los
exámenes es algo muy complicado en la posición en la que estás. Entiendo por
lo que me has contando, que optaste por pedirme ayuda porque estás en
problemas, y consideras que será complicado seguir enfrentándote a él de esta
forma. Pero lo que me llama la atención es que, aun así, suenas bastante
calmado”. Él prosiguió.

“Puede que estés malinterpretando las cosas por lo que me gustaría dejarlo
claro. Ahora mismo no tengo la confianza, ni la posición adecuada para poder
ayudarte”.

Entiendo lo que quiere decir.

El director Sakayanagi no podía simplemente deshacerse de Tsukishiro con un


par de palabras y ya.

Sí, eso era lo que yo esperaba, y era por eso que lo llamé.

Si realmente fuera por eso, entonces estaba llamando a la persona equivocada.


Eso es lo que él trataba de decir.

“Ahora mismo se me ha retirado de mi cargo por un presunto fraude. En pocas


palabras, ni siquiera he podido arreglar mi propia situación. No creo que sea
adecuado apoyarte en mí ahora mismo”.

Era debido a eso, que él ahora mismo estaba dejando bien en clara la situación,
pues él no sentía preocupación viniendo de mí.

“Sí, ciertamente tendría razón si mi llamada hubiera sido en ese sentido”.

“… ¿Qué quieres decir?”

“Hasta ahora he vivido mi vida escolar enfatizando mi creencia de que no debo


resaltar. Decidí pasar mis 3 años aquí, viviendo la vida de un estudiante común
y corriente”.

Ese es el sentimiento que me ha seguido hasta aquí todo un año, desde que
ingresé a este lugar.

“Por primera vez en la vida me puse una meta, y estoy haciendo todo lo posible
para conseguirla”.

“… Sí. Eso lo sé muy bien, y es por eso que te permití ingresar”.

No conocía realmente el por qué, pero estaba realmente agradecido por ese
favor.

“Sin embargo, si el director adjunto sigue haciendo de las suyas, esas metas se
acabarán. Esta vez me salvé por mis puntos de protección, pero es posible que
la próxima no me vaya tan bien y termine expulsado”.
Tsukishiro por supuesto usará todo el poder que su posición actual le dé para
poder meterse conmigo.

Y un enfrentamiento a medias, no sería rival para el fraude de la escuela.

En pocas palabras, no podía seguir con la misma postura de siempre.

“Pero es por eso que decidiste pedirme ayuda, ¿no? ¿O me equivoco?”

“La razón de mi llamada, no es para que usted detenga a Tsukishiro. Sí él usará


todo a su favor para poder atacarme, entonces yo haré lo mismo. Como
resultado, puede que toda la escuela quede envuelta en este ajetreo”.

“Ya veo. En pocas palabras, el verdadero motivo de tu llamada es…”

“Sí. En caso de que ocurra algo imprevisto, necesito alguien que me sirva de
apoyo”.

No estaba hablando de apoyo para eliminar a Tsukishiro, si no apoyo para


cuando ya lo haya hecho.

Por ejemplo, cuando alguien viene a apuñalarte y en vez de eso tú lo apuñalas


a él con su propio cuchillo, necesitas a alguien que diga que eso definitivamente
fue en legítima defensa.

Es por eso que, en este caso, en ese momento, será necesaria la ayuda de
alguien de la escuela.

Y mi as bajo la manga cuando eso pase, debe ser el director Sakayanagi.

Una vez logré sacar a la luz las cosas que hizo Tsukishiro, Sakayanagi regresaría
a su cargo de director. Para resumirlo, este asunto sería una pieza para eliminar
las sospechas sobre él y a su vez, mi regalo de bienvenida de vuelta.

Sin embargo, supongo que tendrá algunas dudas en especial en si debería de


confiar en un niño.

Por eso es importante deshacerse de esas dudas también.

“Pero ¿realmente podrás detener a Tsukishiro? No es por nada, pero no creo


que un simple estudiante…”

“Sí, entiendo que su puesto de director es un problema. A diferencia de los


estudiantes, él no puede ser expulsado con un examen, y allí está la gran
diferencia”.

Además, como casi nunca aparece en público, es difícil atacarlo.

Era un tramposo que solo aparecía cuando quería atacar a alguien.


“Bueno, por el momento no puedo atacarlo directamente, por lo que veré la
manera de hacerlo salir”.

“¿Y podrás superar sus ataques?”

“Primero, hay varias cosas que tenemos que hacer. Lo primordial es expandir
nuestras defensas”.

Si estaba siguiendo las ordenes de ese hombre, entonces Tsukishiro no debería


tener tanto tiempo de sobra.

No tiene sentido que yo me siga quedando uno o dos años más. Por lo que, si
quería acabar con esto, debía ser por lo menos al final de las vacaciones de abril.
Ese mes sería el punto de ataque. Si supero ese mes y contrataco poniendo a
Tsukishiro contra la pared, de seguro será expulsado. Después de todo, intentará
a hacer una locura una vez se dé cuenta que no tiene marcha atrás.

“El tiempo límite es su mayor debilidad actualmente”.

Y en ese momento ya estaré listo para desafiarlo en plena forma.

“Esas no son palabras que un estudiante debería dirigirle a una autoridad de su


escuela. Es seguro que cualquier otra persona se enojaría al escuchar esto,
pero… sabiendo que eres el hijo de sensei, se siente extraño”.

“Sé cómo comportarme con personas que realmente merecen respeto. No


obstante, no tengo intención de perdonar a un adulto que mete sus sucias manos
en una legítima lucha entre estudiantes”.

El director Sakayanagi no respondió a eso, pero era más que claro que estaba
de acuerdo.

“Entiendo que no puedes perdonarlo. Pero, ¿cómo piensas detener la


intervención de Tsukishiro-kun?” Básicamente, que cómo extenderé nuestras
defensas, eso es lo que quería preguntar.

Por supuesto, ya sabía lo que tenía que hacer.

Si quería detener los fraudes, no me quedaba más que usar a las personas que
mandaban en la escuela.

“Primero es indispensable conseguir apoyo de parte de la escuela con personas


que no estén de acuerdo con Tsukishiro. Fortaleciendo la vigilancia sobre él,
podemos adelantarnos a sus movimientos. Será más fácil para nosotros poder
actuar”. No dejar que el oponente tenga tiempo de descansar. Eso era, en
cualquier juego o pelea, una táctica indispensable.

No era necesario alguien con mucho poder, simplemente alguien con el valor
suficiente para oponérsele.
“Sí, también pienso que no podemos hacer nada si no tenemos preparado eso
primero”.

Parece que el director ya entendió lo que buscaba.

No sé las circunstancias de la escuela. Por eso, tampoco sabía quién era de fiar
y quién no.

Tampoco de si había alguien capaz de hacerle frente a una persona importante


de una organización importante como lo era Tsukishiro.

No podía sacar cuentas a ciencia cierta de los maestros con más probabilidades
de hacerle frente.

El director Sakayanagi se puso a pensar el otro lado del teléfono.

Él era la persona que ahora mismo más comprendía, que nuestro destino a partir
de ahora dependía de a qué persona elegir.

“Ya sabes todo acerca de Chabashira, ¿no es así? Ella es a quien se le encargó
que velara por ustedes”.

“Sí, además ya parece saber un poco de nuestra situación”.

“Sí. Es una mujer que entiende muy bien circunstancias poco realistas como la
nuestra”. Eso lo sé, pero el problema es si puedo usarla o no.

“Yo tampoco puedo ignorar a alguien que sabe acerca de mí. Si podemos
ponerla de nuestro lado, ganaríamos al maestro adecuado también, por lo que
es la mejor opción en este momento”.

Nadie creería que un padre haría que sacaran a Sakayanagi de su cargo,


manipularía los exámenes y todo para hacer que expulsen a su hijo. Pero si era
a Chabashira-sensei a quien le contara los detalles, el resultado sería otro.

“En ese caso…”

Luego de pensar por un rato, el director Sakayanagi obtuvo su respuesta.

“Creo que el mejor candidato sería Mashima-sensei a cargo de la clase A de


primer año. Él está a cargo de los exámenes de primer año y además, para él
los estudiantes son la prioridad. Es un profesor esplendido que piensa primero
en los estudiantes”.

“Pero me pregunto si es alguien capaz de aceptar la realidad de este tema tan


poco realista”.

“Eso no lo sé… puede que no lo acepte de inmediato. Pero en cuanto se dé


cuenta que es real, no hay duda de que estará del lado de los estudiantes, eso
te lo aseguro. Él es un profesor firme a sus creencias y devoto a los estudiantes”.
Si no se le ocurre nadie más supongo que no me puedo quejar.

Es más, de hecho, parece buena idea tener al lado a un maestro de ese tipo.

“Por supuesto, también puedo asegurarte lo mismo con Chabashira, y no creo


que sea tan complicado conectar todo para convencerlos”.

“Entiendo, entonces será Mashima-sensei. Primero trataré de hablar con


Chabashira-sensei y luego con él”.

“Pero no será tan sencillo. Recuerda que dentro de la escuela hay muchas
personas, hay cámaras de seguridad en todos los rincones, así que debes
pensar bien el lugar y el momento”.

Tsukishiro no me vigila las 24 horas, pero tampoco sería raro que tuviera a un
par de personas vigilándome. Si trato de hablar en privado con el profesor
Mashima está claro que llamaremos la atención.

No sé en qué lugar se encuentra Tsukishiro por lo general, pero puede moverse


libremente hasta cierto punto. No sería nada gracioso que me agarrara con las
manos en la masa.

“Si pudiera darme algún consejo tal vez me podría mover más inteligentemente”.
Le pedí consejos al director Sakayanagi, pues era la persona que más sabía
sobre el instituto de educación avanzada al igual que la situación por la que
estábamos pasando.

“Si piensas actuar de inmediato… creo que tendrías una oportunidad durante la
fiesta de despedida que realizarán los maestros a los alumnos de tercer año
luego de la ceremonia de graduación. Tsukishiro definitivamente participará. Ya
sea que le guste o no, debe cumplir con sus responsabilidades”.

“Porque si no se comporta como un director, las críticas de la escuela hacia él


sólo aumentarán”.

“Exacto”.

Para poder actuar con libertad, él tenía que demostrar que estaba hecho para el
trabajo de director.

En pocas palabras, ese era el momento en que su vigilancia disminuía.

“Pero en ese caso los maestros de primer año no participarían también?”

“Las reuniones de despedida son de aproximadamente una hora, pero este año
se tiene planeado dejarla abierta por al menos 90 minutos. No creo que nadie
sospeche si un maestro sale por unos 20 o 30 minutos. Sería bastante normal
que uno o dos salieran y todavía quedarían muchos de los de tercer año”.
En ese caso, la oportunidad perfecta para hablar con ellos, eran luego de la
ceremonia de graduación, durante la reunión de despedida.

“Y respecto al lugar… podrías usar la sala de recepción. Allí no hay cámaras, así
que sería el lugar perfecto”.

Así no habría registro ni evidencia de con quién me reuniría.

Después de todo, no creo que sea buena idea invitar a un maestro al dormitorio
de un estudiante.

“Estoy de acuerdo con eso”.

Así estuve de acuerdo en actuar de acuerdo a ese plan.

“Primero es eso. Yo contactaré con Chabashira, pero serás tú quien decida qué
tanto le contarás. Si aun así no puedes convencerla, no quedará de otra que
darse por vencido”.

“Eso es más que suficiente”.

Si el director Sakayanagi les hablaba, ni Chabashira-sensei ni Mashima-sensei


se negarían a escuchar.

Podría decir de hecho, que obtuve la mayor asistencia que puedo obtener con
una llamada.

“Nuevamente, lamento mucho haberlo molestado a estas horas de la noche”.

“No te preocupes… Ah, sólo una cosa más de mi parte, tal vez sea algo sin
importancia”.

“¿Algo sin importancia?”

“Para serte sincero, me alegró mucho que vinieras a mi escuela con la esperanza
de una vida escolar común y corriente. Pero, ¿ya has pensado en lo que harás
luego de graduarte? Algo que quieras hacer, un camino que quieras recorrer”.
Preguntó el director Sakayanagi.

“No sé qué tanto sepa usted sobre eso, pero ya tengo decidido mi destino”.

“… A qué te refieres…”

Esa reacción era más que suficiente.

“Luego de graduarme, lo más seguro es que volveré a la habitación blanca y


continuaré mi camino de líder. Después de todo, es por eso que ese hombre me
ha criado todo este tiempo”.
Luego de que me gradúe ya no tendré ninguna barrera que pueda protegerme.
De seguro viviré un tiempo en un apartamento barato hasta que me ataquen por
la noche o me secuestren para llevarme a la habitación blanca, eso no es tan
complicado para ellos.

“Aceptas ese destino, y aun así… aun sabiendo lo que te espera, decidiste seguir
en la escuela”.

“Es por eso que planeo proteger mis 3 años en este lugar”.

Para resumirlo, era como un capricho de un niño hacia su padre.

Estoy ignorando las ordenes de mi padre y haciendo lo que quiero hacer.

“Realmente deseo que la vida escolar que te queda en mi escuela sea una que
jamás puedas olvidar”.

“Muchas gracias, ese es el plan”.

Terminé la llamada con el director Sakayanagi y luego suspiré.

Todavía tenía mis dudas acerca de hasta qué punto podía confiar en él, pero al
menos puedo hacerlo en el asunto de Tsukishiro.

Otra de las ventajas que tenía, es que él tiene una hija y estudia en el mismo año
que yo.
4
Toda la conversación que había tenido con el director Sakayanagi había sido el
día de ayer.

Y hoy, ahora mismo me dirigía hacia la sala de recepción asignada.

Por supuesto, no es como si ya tuviera una reunión programada.

Pero, de todas formas, llegué hasta la puerta de la sala de recepción.

Puede que ya haya alguien aquí adentro, al igual que puede que sea yo el
primero.

“Con permiso”.

Toqué, y al entrar, me encontré con Chabashira-sensei.

Ella estaba parada cerca de la ventana y sin moverse, sólo me miró.

“Veo que llegaste rápido, Ayanokouji. Creo que todavía quedan 10 minutos antes
del tiempo estimado”.

“Creo que llegué apenas a tiempo. Más bien usted es quien llegó bastante
temprano por lo que veo”.

Chabashira-sensei habló eligiendo cuidadosamente sus palabras mientras


miraba con atención mi reacción.

Puedo hacerme más o menos una idea de qué fue lo que pensó cuando el
director Sakayanagi le habló sobre lo de ayer.

Aunque el sofá de la sala estaba desocupado, por alguna razón se formó un


ambiente en el que ninguno de los dos podíamos sentarnos.

“¿Y Mashima-sensei?”

“Hablé con él, pero no hubiera sido muy inteligente que viniéramos al mismo
tiempo. De cualquier forma, esta vez sí que has hecho algo peculiar, Ayanokouji.
¿No que querías una vida escolar normal y pacifica?”

Bueno, supongo que puedo seguirle la conversación a Chabashira-sensei


mientras espero a Mashima-sensei.

“Me sorprende que pueda decir eso siendo la primera quien trató de perturbarla”.

“Sin importar las circunstancias, esa no me parece una actitud que debas tomar
ante un profesor. ¿No piensas arreglarla?”
“Me vuelve a sorprender, no puedo creer algo tan descarado viniendo de una
profesora que no se comportó como tal”.

Intentó chantajear, amenazar a un estudiante para que subiera a la clase D a


una clase superior. Debido a eso le guardo una fuerte inquietud… no, más bien
desagrado.

Chabashira-sensei desvió su mirada, molesta.

“Eso es cierto, no puedo negarlo”.

Supongo que así de fuerte eran sus deseos porque llegáramos a la clase A.

Supongo que era inevitable que me usara de manera tan abierta antes de que el
director Sakayanagi pusiera su confianza en ella, pero debió haber alguna otra
mejor manera de hacerlo.

No… la verdad es que, a veces pienso que el resultado hubiera sido el mismo
fuera cual fuera el método.

La actitud de Chabashira-sensei tampoco hubiera cambiado en absoluto si la


hubiera convencido.

Aunque a diferencia del primer año, ahora las cosas habían cambiado
drásticamente.

“Tú me odias, eso lo sé. Pero en ese caso, ¿por qué decidir decírmelo a mí?”

Al parecer no le resultó tan extraño que la llamáramos para este asunto.

Dejando de lado de que pudo servir como pieza para atraer a Mashima-sensei,
ciertamente bien podríamos haberla dejado fuera de esto.

Por eso, me parecía natural que quisiera saber la razón de por qué no lo hicimos.

“Antes que nada, sí, es cierto que no me agradas para nada”.

“Así parece”.

Sin importar qué es lo que sienta o piense, tenía que usar todo lo que tuviera a
mi alcance.

Después de todo, eso está muy aparte del tema de si me agrada o no.

Ahora que sé que la presencia de Chabashira-sensei aumentará que las


probabilidades de que Mashima-sensei cooperé, al menos un poco…

“¿Cuánto te dijeron?”
“Por el momento, que le hablará a Mashima-sensei y organizará la reunión en
esta sala. Aparte de que tenía algo importante que decirnos y quería nuestra
ayuda, eso vendría a ser todo…”

Entonces todavía no les dijo nada acerca de Tsukishiro.

Parece que el director planeó dejarme todo eso a mí.

“¿Y bien? ¿Exactamente qué es lo que quieres de nosotros?”

“Lo diré cuando llegue Mashima-sensei. Sería una molestia tener que repetirlo”.

“No sé qué es lo que vas a decirnos, pero si quieres pedir ayuda, ¿no sería bueno
empezar a cambiar esa actitud?” Dijo Chabashira-sensei mostrándose ahora a
la ofensiva a diferencia de hace un rato.

“Obedeceré las órdenes del director Sakayanagi, pero entiendes que esas
órdenes no son absolutas, ¿verdad?”

“¿Realmente te molesta tanto mi actitud?”

“Sí, y mucho. Podrás ser alguien realmente destacable, pero sigues siendo un
estudiante de primer año, ¿entiendes? Además de que quedaste muy por detrás
de la clase de Sakayanagi en la competencia entre clases. En pocas palabras,
no pudiste mostrar las habilidades que tanto esperaba ver”.

Entonces simplemente te decepcionaste a ti misma por ver que no era una


persona tan habilidosa como esperabas.

“Tenía planeado pasar por alto ciertas palabras y actos dependiendo de tu


habilidad, pero ya todo está decidido, por lo que eso cambia mucho las cosas”.
El ideal de Chabashira-sensei no se cumpliría hasta que derrotara a Sakayanagi
de la clase A.

Por eso no podía no quejarse al ver como ella seguía estando por delante de mí.

Chabashira-sensei es una profesora, pero el tema de esta vez se salía mucho


de lo que podía hacer un maestro.

Por eso era natural pensar que dependiendo de lo que le diga, podía rechazarlo.

Además, que también existía la posibilidad de que luego fuera a parar del lado
de Tsukishiro.

No importaba si seguía actuando como si estuviera fuera de su control, eso sólo


traería el efecto contrario.

Por eso suspiré, suspiré aliviado de que al menos tenía un poco de sabiduría en
mí.
“Entiendo. En ese caso trataré de arreglarlo, Chabashira-sensei”.

“¿Qué?” Chabashira-sensei se sorprendió de la rapidez y sencillez con la que


me di por vencido.

De seguro no pensó que lo hiciera con tan solo esa pequeña resistencia que
acababa de mostrar.

Lo hice porque se conecta con lo que estaba a punto de decirles, pero también
para tener una posibilidad de protegerme en caso de cualquier cosa.

Pero la verdad es que, con solo esa posibilidad, todavía no era capaz de confiar
plenamente en Chabashira-sensei.

Ella de seguro estaba imaginándose que en mi interior me estaba burlando de


ella.

Por eso, decidí recordarle que yo era una ventaja necesaria para la clase D.

“Simplemente tuve un cambio de idea. Desde abril trataré de llegar a la clase A


en serio”.

“¿Qué disparates estás diciendo? ¿Qué es lo que estás tramando? Por


supuesto, incluyendo el hecho de habernos llamado aquí”.

“Estoy hablando en serio. Planeo estar fuera de la clase D o C para finales del
segundo año. Dado que la diferencia de puntos es abismal, dudo mucho que
pueda llegar a la clase A en mi segundo año… Pero tenga por seguro que la
clase B será mía”.

Eso además era lo que Chabashira-sensei deseaba más que ninguna otra cosa.

Que la clase D subiera a la clase A.

Un logro que nadie nunca había conseguido en esta escuela.

“Así que por fin te llegó tu momento de iluminación… sin embargo no me sirve
una promesa verbal”.

“En eso tiene razón. ¿Pero no le parece que sería bueno tener un boleto para
llegar a la clase A?” Ya sea que ese boleto sea falso o verdadero, es mejor que
nada.

“Te lo dije antes. Perdiste contra la clase A en los exámenes finales. Fueron 3
victorias y 4 derrotas, pero una derrota sigue siendo una derrota. La suerte a
veces tiene mucho que ver en este tipo de exámenes, pero no voy a dejar que
uses eso como excusa”.

Eso sólo enfatiza mucho el hecho de que tenía demasiadas esperanzas puestas
en mí.
“No importa contra quién, o en qué examen sea, tú ibas a salir vencedor. Esas
eran mis expectativas”.

Más que nada parece una ilusión bastante egoísta que expectativas.

“Hoy, luego de nuestra reunión se dará cuenta de la verdad, y del por qué pasó
eso…”

“¿La verdad…?”

“Si luego de escuchar todo lo que tengo que decir, y aun así no confía en mis
habilidades, entonces puede hacer lo que quiera”.

“Qué es lo que quieres de—” Chabashira-sensei trató de preguntar lo que quería


decir, pero sus palabras se vieron interrumpidas por la puerta la cual fue tocado
con fuerza.

“… Adelante”. Al responder, Mashima-sensei entró a la habitación.

“Parece que ya están reunidos”.

Pero…

“Buenos días”.

Junto a él, estaba Sakayanagi Arisu.

Al parecer estaba acompañando a Mashima-sensei, lo cual la hacia una invitada


para nada esperada.

Yo no la llamé, y no creo que Mashima-sensei lo haya hecho.

“Soy de la clase A. Por eso a nadie le parecería raro que yo estuviera con
Mashima-sensei”. Dijo Sakayanagi tomando la iniciativa.

“Ella ya sabía que Chabashira-sensei me había contactado, por eso la traje


pensando que también tenía algo que ver en todo esto …”

Supongo que fue el director Sakayanagi quien le dijo a su hija sobre lo que
habíamos hablado.

Al parecer, sólo por si acaso, pudo haber llamado a su hija para confirmar que
realmente fue ella quien me dio su número.

Eso lo entendía bien, pero, ¿qué tenía que ver eso con su presencia en este
lugar? ¿Quería tomar parte de esto de alguna forma, o acaso sólo lo hacía por
curiosidad?

Muy probablemente se trataba de lo segundo.


“No hay problema, ya me lo esperaba”. De cualquier forma, respondí de esa
forma, dándole la bienvenida al invitado extra.

Sakayanagi me miró y puso una pequeña sonrisa.

Luego de eso ella cerró la puerta de la sala, sin mirar ni una sola vez a
Chabashira-sensei.

Al parecer Chabashira-sensei seguía tratando de entender por qué Sakayanagi


estaba aquí también.

Aunque bueno, supongo que Mashima-sensei estaba tratando de hacer lo


mismo.

De cualquier forma, con esto, las personas que necesito ya están todas aquí.

Ahora tenía que usar adecuadamente el limitado tiempo que tenía a mi favor.

“Ayanokouji-kun, al parecer tienes algo que decirme. Dado que usaste incluso al
director Sakayanagi para contactarme y hacer que me fuera de la fiesta de
despedida… supongo que es algo importante, ¿no?”

“De eso hablaré ahora”.

Antes que nada, incité a ambos a que se sentaran.

Sin embargo, Mashima-sensei hizo que Sakayanagi se sentara primero.

“Con su permiso”.

Luego de que Sakayanagi quien tenía una discapacidad en sus piernas, se


sentara, Mashima-sensei simplemente se quedó de pie con los brazos cruzados.

Bien, parece ser que se sentara luego de que examine de qué se trata todo. Y
Chabashira-sensei por supuesto le siguió el juego.

Así, las miradas de los 3 se concentraron en mí.

El tiempo que podían estar afuera de la fiesta de despedida era de 20 a 30


minutos. Un tiempo más que limitado.

Planeaba hablarles sobre todo de forma directa, pero me pregunto cuánto tiempo
les tomará entenderlo.

Después de todo, la situación no era tan realista como para que pudiera ser
entendida en una o dos conversaciones.

Dado que había poco tiempo, decidí empezar de una vez por todas el caso de
Tsukishiro.
“Lamento haberlos llamado en un momento tan inoportuno, pero tengo que
decirles algo de suma importancia acerca del director sustituto Tsukishiro”.

“… ¿Del director sustituto Tsukishiro? ¿A qué te refieres?” Dijo Mashima-sensei


curioso dado que la historia comenzó desde un punto el cual no se esperaba.

Si un estudiante dijera alguna locura sin fundamento esa reacción sería la más
valida y normal.

Chabashira-sensei tampoco parecía entender de qué iba todo, por lo que miró
hacia la persona más inusual en esta habitación, a Sakayanagi. Ella recibió su
mirada y la devolvió junto a una misteriosa sonrisa.

Yo sé mucho más que ustedes dos.

Eso era lo que su expresión decía a simple vista, y es algo que Sakayanagi
siempre hacía.

“Ahora mismo está sucediendo algo que sacude los pilares de esta escuela y
que no puede ser pasado por alto. Por eso, quisiera pedir que colaboren conmigo
en secreto para poder solucionar ese problema”.
“Vine aquí porque dijeron que tenían algo importante que decirme, pero…
¿acaso me están haciendo una cámara oculta o algo por el estilo? Chabashira-
sensei”.

Preguntó Mashima-sensei en busca de respuesta pensando en que podíamos


estarle jugando una broma.

“No le estamos jugando ninguna broma. ¿O acaso me cree que soy igual a
Hoshinomiya-sensei?”

“En eso tiene razón, pero sigo sin ver el punto de esta conversación. Ahora
mismo estamos en medio de la fiesta de despedida”. La reunión de despedida
era un momento importante para que los maestros interactúen por última vez con
los graduados.

En pocas palabras, no era momento para escuchar los delirios de un niño.

“¿Qué es lo que está haciendo Ayanokouji-kun?”

“Ni idea, eso es lo que yo quisiera saber. Tal y como se lo dije ayer, simplemente
estoy aquí por órdenes del director Sakayanagi, por eso también quiero entender
qué está pasando”.

Ambos pusieron una mirada de duda, así que decidí seguir avanzando.

“Si ahora mismo dijera que la razón de la suspensión por supuesto fraude del
director Sakayanagi, y las cosas que el director sustituto Tsukishiro está
haciendo en esta escuela se deben a mí, Mashima-sensei, ¿qué pensaría?”

“¿Qué?”

La situación no avanzó mucho realmente incluso luego de entrar al tema


principal.

Es más, las sospechas de Mashima-sensei hacia a mí seguían creciendo.

“Pensaría que no tiene sentido. ¿Por qué serías tú la causa?”

Por supuesto, esa era la reacción normal.

Era difícil creer que todo el sistema de la escuela estaba siendo modificado sólo
para molestar a un solo estudiante.

Como pensaba, primero debo hablar sobre el tema de los exámenes finales.

“Lo explicaré desde el principio—” En cuanto decidí hablar sobre los exámenes
finales, Sakayanagi levantó su mano.

“Si no es mucha molestia, si hablarás de todo eso, ¿podría empezar yo?” Dijo
Sakayanagi como si hubiera estado esperando esto.
“Sakayanagi, habías dicho que sabías de que se trataba esto, ¿no?”

“Así es. O al menos un poco más de lo que ustedes dos saben”. Luego ella se
movió de inmediato. En este caso era mejor que alguien que conocía la situación
hablara de esto, pues así le daría más credibilidad para la gente alrededor. Luego
de asentir, Sakayanagi vio a Mashima-sensei.

“Eso significa que el director Sakayanagi te dijo todo, ¿no es así?”

“No. Esto es algo que yo sé de forma personal. Ayanokouji-kun es… sí, para que
lo entiendan mejor, Ayanokouji-kun es como mi amigo de la infancia”. Explicó
Sakayanagi de forma alegre. Tenía un par de cosas que decir sobre eso, pero,
en cualquier caso, al parecer eso era algo sorprendente para los dos maestros
frente a nosotros.

“Amigos de la infancia… la verdad estoy sorprendida, no pensé que esa fuera su


relación”.

La primera en reaccionar fue Chabashira-sensei por lo que Sakayanagi agregó.

“Sí, pero a duras penas es algo parecido. En cualquier caso, les explicaré”.

Luego de eso cortó con el tema de los amigos de la infancia y comenzó a explicar
la situación.

“Hace unos días se realizó el examen final del año. Creo que es correcto asumir
que ambos recuerdan que pelee contra Ayanokouji-kun como representantes de
nuestras respectivas clases. Y, como resultado de mi última victoria en el
ajedrez, la victoria fue mía”.
Esa es la verdad que se dio a conocer a la escuela.

“¿Y qué hay con eso?”

Y como era de esperarse, Mashima-sensei no dudaba de ese resultado.

“Y si de casualidad… ¿alguien hubiera intervenido en ese duelo? ¿Y luego,


debido a eso, el duelo sufrió un gran cambio y como consecuencia el resultado
cambió drásticamente? ¿No cree que es un gran problema que no puede
ignorarse?”

“Los exámenes se realizan con una vigilancia estricta, no pudo haber ningún
problema”.

“Eso pensé, pero, ¿a qué le podemos llamar exactamente estricto? ¿Ustedes


dos estuvieron ausentes durante ese examen no es así?”

Debido a que los maestros responsables de sus respectivas clases estaban


ausentes mientras estás rendían las pruebas, Chabashira-sensei y Mashima-
sensei estuvieron a cargo de las clases de Ichinose y Ryuuen. En pocas
palabras, no vieron el examen.
“Lo que realmente pasó es que en el duelo de ajedrez yo perdí, Ayanokouji-kun
fue el vencedor”.

“¿Ayanokouji-kun ganó en el juego de ajedrez? Qué estás diciendo, yo vi los


resultados. Por supuesto, también el proceso”.

Quien reaccionó a eso fue en realidad, Chabashira-sensei en vez de Mashima-


sensei.

Era entendible que le interesara eso. Después de todo, fue por esa derrota que
regresamos nuevamente a la clase D.

“¿Aún no lo entienden?” Preguntó Sakayanagi a ambos maestros, como si


estuviera probándolos.

“¿Qué estás tratando de decir? ¿Acaso insinúas que el director sustituto


Tsukishiro modificó los resultados del juego de ajedrez? Luego de los exámenes
tuvimos una reunión con los maestros Sakagami y Hoshinomiya y ninguno de
ellos reportó un error”.

“Él no cambió los resultados, cambió el proceso. Si siguen atados a su sentido


común no podrán ver la realidad de este asunto. Las ordenes de los lideres no
llegaban a los estudiantes como eran debido, y luego de que incluso eran
revisadas por el lado de la escuela, eran mandadas nuevamente por los
intercomunicadores. Este sistema es perfecto para prevenir fraudes, pero al
mismo tiempo le permite a la escuela modificar todo a libertad”.

Y así Sakayanagi siguió hablando poco a poco, como si les dijera a ambos,
“¿ahora ya lo entienden?”.

En ese momento y por primera vez, Mashima-sensei comenzó a cuestionarse


sobre los actos del director sustituto Tsukishiro y los resultados del examen.

“Este tipo de examen con equipos a gran escala debió parecerles curioso incluso
a ustedes. Y es que, en realidad, todo eso fue parte del plan del director sustituto
Tsukishiro para poder intervenir en los exámenes de forma más rápida y
eficiente”.

Sakayanagi mezcló exquisitamente un par de mentiras y trucos.

Después de todo, los detalles del plan de Tsukishiro sólo él mismo las sabía.

Por eso, aunque todavía no estaba confirmado por completo, ella dio su
interpretación de los hechos de forma que sonaba a una realidad y no a una
especulación.

Aquellas palabras no tenían huecos argumentales, y de seguro los maestros ya


le creían.
Sin mencionar que, dado que Sakayanagi no se detuvo en sus palabras, ni
Chabashira-sensei ni Mashima-sensei pudieron intervenir debido a toda la
información que estaban recibiendo en sus cabezas. Sus cerebros habían
comenzado a procesar todo como verdad.

“El último movimiento que él hizo y la orden que recibió Horikita-san… es decir,
la última orden que la maquina dio, fue manipulada. Si la orden dicha por
Ayanokouji-kun en la última jugada hubiera llegado de forma correcta,
definitivamente hubiera sido yo quien perdiera. ¿Ahora entienden lo que quiero
decir?” Dijo Sakayanagi con una pequeña sonrisa, como si estuviera poniendo a
prueba la capacidad de entendimiento de ambos profesores.

Ella estaba forzándolos a llegar a una sola respuesta, como si estuviera


diciéndoles, “¿pueden entender algo tan simple como esto, no es así?”.

“¿Dices que el director sustituto Tsukishiro… manipuló todo desde las sombras?”

“Sí. Después de todo los puntos de protección que tenía Ayanokouji-kun eran
una molestia para él quien trata de expulsarlo”. Ambos profesores quedaron en
silencio.

Sin embargo, de inmediato Mashima-sensei habló.

“¿Lo que dice Sakayanagi es cierto? Ayanokouji-kun”.

“Sí, está en lo correcto”.

“Dado que ambos dicen lo mismo, debo admitir que sí muestra cierta credibilidad.
Después de todo, como maestro de la clase A creo entender bien la personalidad
y forma de pensar de Sakayanagi. Incluso si hubiera pensado en dejar ganar a
Ayanokouji, lo único que hubiera tenido que hacer era abandonar el juego y el
examen. Pero no veo qué pueda ganar ella elevando la posición de Ayanokouji-
kun y disminuyendo la suya propia”. Él no creía que Sakayanagi, la líder de la
clase A de primer año, pudiera mentir hasta el punto de perder a propósito.

Pero tal y como dice Mashima-sensei, si por alguna razón ella quisiera dejarme
ganar, solo tenía que retirarse del examen, esperar a que se acabara el tiempo
o cualquier otra forma.

No había motivo para hacerlo de esta forma, arreglando una reunión y diciendo
algo poco creíble.

“Sin embargo. Aunque entiendo lo que quieren decir, no hay forma de que un
tercero pueda verificar que eso es realmente cierto, ¿o me equivoco?” Las
palabras de Sakayanagi también podían ser tomadas por un disparate del cual
no sería raro que se rieran de ello, pero Chabashira-sensei dijo.

“No es algo muy creíble… ¿usted qué piensa, Mashima-sensei?” Preguntó


Chabashira-sensei con una expresión dudosa, pidiéndole su opinión a Mashima-
sensei.
“Pues no mucho. No es algo que pueda tomar como real con solo estos
materiales sobre la mesa”. Dijo Mashima-sensei quien estaba a punto de
retroceder, pero Chabashira-sensei lo detuvo.

“En lo personal, creo que lo que dicen estos dos tiene mucha credibilidad. Desde
que el director sustituto Tsukishiro llegó, esta escuela se está tornando rara”.

“No puedo aceptar esa opinión si tan solo se basa en sus sentimientos de
desagrado por el director sustituto Tsukishiro. Lo mismo si es porque cree que
su clase debió ganar”.

Dijo Mashima-sensei de forma ruda hacia Chabashira-sensei quién se puso del


lado de los estudiantes.

Y luego también nos habló a nosotros.

“Supongo que tienen algún tipo de evidencia, ¿no?”

“En pocas palabras, Mashima-sensei. ¿No piensa creernos con tan solo nuestro
testimonio, estoy en lo correcto?”

“… Así es”.

Es muy poco probable que una persona que comete actos indebidos desde las
sombras dejé pruebas que demuestren sus acciones.

Por eso era obvio que no reaccionaría incluso si le habláramos de eso.

“Para ser sincero, no creo que haya una razón válida para que el director
sustituto Tsukishiro llegué a tal punto solo para poder expulsar a un niño”.

“Ya veo”.

“Por supuesto, no quiero dudar de los estudiantes. Sé perfectamente que


ustedes no son tontos como para venir hasta aquí solo a decir mentiras sin
sentido. Pero la evidencia de este caso es demasiado escasa”.

Mashima-sensei no estaba convencido. Quería creernos, pero no tenía los


elementos suficientes para poder hacerlo.

“¿Quién rayos eres, Ayanokouji-kun? Primero explícame eso”.

Era cuestión de tiempo para que Mashima-sensei preguntara eso.

El director Sakayanagi fue suspendido por cargos de fraude y en su lugar


enviaron al director sustituto Tsukishiro.

Y lo más importante, es que Tsukishiro actuaba solo para poderme expulsar,


metiendo sus manos y alterando incluso un examen tan importante como era el
examen de final de año. Por supuesto que era algo difícil de creer.
Eso me llevaba a, ¿debía ahora explicarlo yo? ¿O dejárselo a otra persona?

Mientras pensaba en ello, Mashima-sensei vio a Chabashira-sensei.

“¿Le crees a Ayanokouji-kun?” Le preguntó Mashima-sensei a Chabashira-


sensei quien había dicho que nuestras palabras tenían credibilidad.

“Para ser totalmente sincera… solo un poco”. Dijo ella mirándome ahora a mí,
pero la ignoré.

La verdad no sería mala idea revelar la poca información que Chabashira-sensei


tenía sobre mí ahora mismo.

“El día del examen de admisión, vi los resultados de Ayanokouji. Fue una nota
bastante rara de 50 puntos en todas las materias”.

“50 puntos en todas… ¿es decir que las alineó a propósito?”

“Creo que si investigas un poco sobre eso encontraras la respuesta por ti mismo”.

“Fufu, veo que hiciste algo bastante interesante de buenas a primeras”.

“Pero aun así eso no prueba nada. Ciertamente en casos normales ningún
estudiante se daría el lujo de hacer eso en un examen de ingreso, pero es posible
hacerlo si tienes ciertas habilidades académicas. Además, que nuestro sistema
de evaluación de puntos en los exámenes de ingreso es muy simple”.

“Todavía hay más. Cuando Ayanokouji-kun fue admitido, el director Sakayanagi


me dijo que Ayanokouji era un estudiante especial”.

“¿El director dijo eso…? ¿En ese caso esa es la razón de porque estás aquí?”
Chabashira-sensei asintió y luego habló de lo que escuchó en ese momento.

“Sí, porque él mismo me pidió que yo como encargada de su clase, le reportara


cualquier inconveniente que pasara alrededor de Ayanokouji. El padre de
Ayanokouji Kiyotaka es una persona con mucha autoridad. Y lo más importante
de esto, es que él no quería que su hijo ingresara a esta escuela. Es por eso que
el director Sakayanagi me dijo que autorizó su ingreso, pero con mucho
esfuerzo”.

“¿Entonces permitió su ingreso sin el consentimiento de su padre? Veo que


hasta el director Sakayanagi comete disparates”.

Para los chicos comunes y corrientes, la autorización de sus padres era lo


primordial al ingresar por primera vez a un instituto.

Aunque la educación hoy en día era obligatoria, el mundo no era tan sencillo
como para que los niños hicieran las cosas como les diera la gana.
“Mi padre conoce al papá de Ayanokouji-kun. Por eso es que él hizo eso,
preocupado por la situación en la que Ayanokouji-kun se encontraba. Pero aquí
es donde viene el problema más grande. Usando al director sustituto Tsukishiro,
hizo que suspendieran a mi padre por cargos falsos, para así poder expulsar a
Ayanokouji-kun”.

Eso era lo que más le llamaba la atención a Mashima-sensei.

“Así que su padre pidió que lo expulsaran a la fuerza… y entonces decidió usar
al director sustituto Tsukishiro”.

Aquello era imposible de lograr si no era alguien con una autoridad inmensa.

“Creo que bastaba con mandar una queja formal a la escuela en vez de
molestarse en hacer eso”.

“Su padre ya ha contactado con él y con el director Sakayanagi”.

“En pocas palabras, ¿ya te ha dicho a ti mismo que tienes que abandonar la
escuela?”

“Así es. Ya he tenido una reunión con mi padre y el director Sakayanagi antes
en esta habitación. Puede revisar las cámaras de seguridad en el pasillo para
confirmar que es real”.

“En tal caso, y si todavía estás aquí significa que el director Sakayanagi rechazó
el pedido de expulsión, ¿no?”

“Así es”.

Preguntó Mashima-sensei y Chabashira-sensei asintió.

“El director Sakayanagi decidió respetar la voluntad de sus estudiantes. Luego


de eso todo se calmó… pero no pensé que el padre de Ayanokouji fuera a enviar
a Tsukishiro sólo para que expulsara a su hijo”. Dijo Chabashira-sensei y
Sakayanagi estuvo de acuerdo con ella.

“Era inevitable. Después de todo usted no sabía nada de lo que estaba


ocurriendo”.

“Aunque veo que tú sí que sabes mucho sobre eso”.

“Por supuesto. A diferencia de usted, yo sé mucho sobre Ayanokouji-kun, mucho


más de lo que se imagina”. Dijo Sakayanagi agregando información innecesaria
en este momento. “Creo que puede darse cuenta de ello al ver cómo él no ha
rechazado mi presencia en este lugar incluso cuando no estaba planeado que
viniera, ¿no es así?” Sakayanagi sonrió orgullosa por decir una realidad que no
podía negarse.
“Creo que por fin voy entendiendo un poco la historia. Al menos con respecto a
que su padre intenta sacarlo de aquí, les creo”. Aunque Mashima-sensei ahora
entendía la situación, todavía no estaba del todo convencido.

“Pero… no sé cuánto poder o autoridad tenga el padre de Ayanokouji-kun, pero


¿por qué hace todo esto sólo para que lo expulsen? Allí es donde falta realismo”.

“Eso es porque Ayanokouji-kun posee unas habilidades maravillosas, algo que


ninguna persona común posee”.

“Vi los resultados de las pruebas del otro día. Ciertamente las habilidades
aritméticas y la memoria fotográfica que mostró en el ajedrez son significativas.
Pero en esta escuela hay alumnos excelentes con dotes iguales, no creo que
sea razón suficiente para tratarlo como alguien especial”.

“Mashima-sensei. No voy a culparlo por tratar de buscar una manera de


convencerse a sí mismo. Pero ¿podría por favor entender ya la situación? Mi
padre tiene un ojo puesto en él desde mucho antes de que ingresara a esta
escuela, y el director sustituto Tsukishiro está haciendo todo lo posible para tratar
de expulsarlo. Esa es la única e innegable verdad”.

Mashima-sensei cerró sus ojos con los brazos cruzados.

“La respuesta ya debería estar dentro de su cabeza. Y las pruebas solo hay que
buscarlas a partir de ahora”.

Luego de un rato con los ojos cerrados, él los abrió y nos miró a los 3 restantes.

“Sí… al menos aceptó hasta la parte de que su padre intenta expulsarlo a la


fuerza. Sin embargo, no es suficiente para prestarles mi ayuda. ¿Sabes por
qué?” Mashima-sensei sabía muy bien que nosotros simplemente estábamos
contando lo que había en la punta del iceberg.

“No tienes intención de contármelo todo, ¿no?”

Luego de que organizara en su cabeza toda la conversación, al parecer se había


dado cuenta de que había cosas que no quería que se hicieran públicas.

La verdad es que, si no hubiera sido capaz de notar eso, el que estaría en


aprietos sería yo.

“Tiene razón. Creo que no sirve de nada, o mejor dicho, no tiene sentido
contarlo”.

Ningún adulto podría entender lo que yo dijera acerca de la habitación blanca.

Pero si lo piensan un poco, es claro que ese hombre está haciendo algo extraño.

Además, que no importaba si lo decía en voz alta aquí, nunca llegarían a la


verdad de la habitación blanca.
Porque apenas alguien sepa sobre ello, ellos se encargarán de borrar
exhaustivamente toda prueba.

Es por eso que no tenía sentido gastar recursos en tratar de tomar medidas en
eso.

“¿Qué harás si me rehúso a ayudar?”

“No lloraré o me quejaré por ello, pero supongo que haría todo lo posible para
responder a los ataques de Tsukishiro. Aunque estando del lado de la escuela,
será fácil para él manipular los exámenes. De hecho, ya demostró poder hacerlo
en la prueba de selección de eventos”.

La verdad es que era algo casi imposible de detener siendo solo un estudiante.

Ahora sólo queda ver si Mashima-sensei es la clase de persona que puede pasar
eso por alto…

“¿Me estás poniendo a prueba? Ayanokouji-kun… pues bien. Haré todo lo


posible para asegurarme de que el director sustituto Tsukishiro no pueda alterar
los resultados de las pruebas ya sea normales como en los exámenes
especiales, eso te lo garantizo”.
Y así durante la discusión, finalmente logré que Mashima-sensei se pusiera de
mi lado.

“Mashima-sensei, está consciente de que eso no será fácil, ¿verdad?”

A diferencia de Mashima-sensei quien ya había aceptado, Chabashira-sensei


todavía tenía cosas qué decir.

“Incluso si todo lo que dicen es cierto, en el peor de los casos nosotros también
estaremos en peligro por entrometernos”.

Entendía lo que ella quería decir.

Ponerse en contra de Tsukishiro era básicamente algo de vida o muerte.

No era alguien ante quien oponerse solo por un mero sentido de la justicia.

“Todavía no es que les crea todo lo que me han dicho. Pero en caso de que sea
cierto, es algo sumamente delicado. La escuela no tiene permitido ni debería
modificar los resultados de los exámenes de forma ilegal, y si lo han hecho, habrá
que investigar más a fondo”.

“Pero, ¿no cree que no debería involucrarse en asuntos tan problemáticos, y


menos ahora mismo? Esta mañana le han dado una queja por el incumplimiento
de una regla durante la prueba de selección, ¿no es así?” Sakayanagi reaccionó
a esas palabras ya que le llamaron la atención.

“¿Violación de las reglas? ¿Qué fue lo que hizo?”


“No tengo por qué decírselos”.

“¿Es por el problema que hubo en el contenido de los exámenes de las clases D
y B? De todas formas, tarde o temprano iba a llegar a nuestros oídos. Además
de que, si tiene que ver con los actos ilegales del director sustituto Tsukishiro,
sería mejor que dijera todo sobre eso. Luego sólo causará más problemas, ¿no
cree?”

“Pero que esto no salga de esta sala”.

Dijo Chabashira-sensei en lugar de Mashima-sensei quien no tenía intenciones


de hablar al respecto.

“Yo se los diré. En la prueba de selección de eventos de la clase D contra la


clase B, el último evento seleccionado fue el Judo de la clase D. Mientras que de
los estudiantes de la Clase D se eligió a Yamada Albert. Debido a esto, Ichinose
de la clase B perdió toda voluntad de pelear y su clase no eligió a nadie para
participar”.

“Supongo que es entendible. Dudo mucho que alguien de primer año pueda
ganarle a Yamada-kun en Judo”.

“Ichinose debió tener a algún estudiante listo para participar en el evento de


Judo. Pero a la final todo se decidió de manera aleatoria. Todos pudieron darse
cuenta que eso fue algo extraño”. Si se pasaban del tiempo estimado, elegirían
de forma predeterminada a un estudiante que no hubiera participado en ningún
evento.

Por supuesto, eso no se limitaba a los hombres, sino también a las mujeres.

“Me parece bien que admitieran la derrota con sinceridad, pero ya sabemos
cómo es la fraternal clase B. Había posibilidad de que algún estudiante hiciera
su mayor esfuerzo para poder ayudar a Ichinose-san”.

Sin importar que haya sido hombre o mujer, Albert lo hubiera golpeado sin
contenerse. Y si eso sucedía, habría causado un gran accidente.

“Es por eso que, bajo su propio juicio, Mashima-sensei descalificó a la clase B.
Y eso al parecer no le gustó al director sustituto”. Y por eso lo penalizaron. Ya
veo, ciertamente era algo en contra de las reglas.

“Para mí eso y esto son cosas iguales. Si siento que los estudiantes están en
peligro lo detendré a como dé lugar. Si hacen algo incorrecto, los corregiré. ‘Qué
maestro no respetaría las cosas que él mismo le está enseñando a sus
alumnos?” No importaba si eso le costaba su propia suspensión o despido, él no
se iba a arrepentir de eso.

“Así que ya tomó su decisión”.

“Tomé mi decisión desde que decidí convertirme en maestro”.


Cualquiera podría decirlo, pero Mashima-sensei tenía el talento y perseverancia
necesaria para cumplir su palabra.

“Si eso es lo que… bueno, si eso es lo que ha decidido, entonces no tengo nada
más qué decir”.

“Supongo que podemos dar por finalizadas las negociaciones”. Me dijo


Sakayanagi y yo asentí.

Chabashira-sensei también se echó para atrás dándose cuenta que sería inútil
tratar de persuadir a Mashima-sensei.

“Si eso es lo que ha decidido Mashima-sensei entonces yo también ayudaré.


¿Estás de acuerdo con eso, Ayanokouji?”

“Mientras más aliados mucho mejor para mí”.

“En ese caso aquí acaba esta conversación, y no se dirá nada más fuera de esta
sala. ¿Están de acuerdo?”

“Por supuesto”. Ni Mashima-sensei ni Chabashira-sensei han visto realmente los


actos ilegales de Tsukishiro.

Por eso, mientras más maestros ponga de mi lado, mayor será la información
que pueda recibir de ellos.

Pero claro, si Tsukishiro se da cuenta que estamos tratando de revelar sus


intenciones, entonces se pondrá más alerta.

“Yo también, por el momento estaré de tu lado, Ayanokouji-kun”.

“Sakayanagi. Entiendo que sepas muy bien las circunstancias de Ayanokouji-


kun, pero sería un problema que lo trates de manera especial por eso”.

“¿Qué está diciendo? Tratarlo de manera especial es algo natural. No, más bien
es un derecho”. Argumentó ella en contra de Mashima-sensei.

“… ¿Un derecho?”

“Así es. Aunque estemos dentro de un sistema donde nuestras clases tengan
que pelear una contra otra, hay muchas circunstancias mezcladas al mismo
tiempo. Estudiantes que traicionan a su propia clase por el bien de sus amigos o
parejas, intercambios de información a cambio de dinero, o incluso amenazas.
Incluso hay cosas donde por una sola emoción se forman poderosas alianzas
que transcienden el límite de una clase. ¿Esta institución siempre ha sido así, o
me equivoco? De hecho, sucede lo mismo en la sociedad si lo vemos de una
forma general, ¿no es así?” Sakayanagi argumentaba que todos tenían a alguien
al cual mirar de manera especial, y no había nadie quien pudiera o tuviera
derecho a negárselo.
“Incluso si decidiera abandonar por completo a todos los de la clase A, y
simplemente dedicarme a salvar a Ayanokouji-kun, ustedes como maestros no
tendrían la culpa de nada. Pero al mismo tiempo, los únicos que podrían
reprochármelo serían los estudiantes que habría sacrificado por ello”.

Mashima-sensei no reaccionó para nada a las palabras de Sakayanagi aun


cuando todavía estaba molesto por eso.

“Aunque… que esa forma especial de verlo sea algo de su agrado ya es otro
tema”.

“¿Qué quieres decir?”

“Que mantendré mi postura hasta deshacernos del sustituto, luego de eso ya


será otro asunto. Además de que aplastaré sin piedad a la clase D si considero
que es una molestia para la clase A”.

“Ya veo. Así está bien”.

Esta vez Mashima-sensei aceptó las palabras que venían acompañadas de una
fuerte voluntad.

“Antes de terminar, ¿realmente no tienen ninguna prueba de las irregularidades


que está haciendo el director sustituto Tsukishiro?”

“Incluso si hubiera a estas horas ya la habrá eliminado por completo. Sería inútil
tratar de recuperarla”. Él no haría algo tan estúpido como dejar pruebas de lo
que hizo.

“En ese caso no queda más que esperar a su próximo movimiento”. Los
maestros por supuesto sabían más que nosotros de los exámenes que nos
esperaban en segundo año.

Por ende, será mejor dejarles a Mashima-sensei y Chabashira-sensei el pensar


cómo podría actuar Tsukishiro.

“Ya van a pasar 30 minutos. No podemos estar todo el tiempo fuera de la fiesta
de despedida. En todo caso, ustedes que son estudiantes salgan primero, luego
saldremos nosotros uno después del otro”.

“Entendido”.

Junto a Sakayanagi, salimos al mismo tiempo de la sala hacia el pasillo.

Luego, comenzamos a caminar.

“Aunque fue una decisión drástica, tener a Mashima-sensei de tu lado será una
gran ventaja, ¿no crees? Siendo el encargado de los de primer año, él estará
más cerca que nadie del director sustituto Tsukishiro”.
“Sí. Aunque no me sirve por completo para detenerlo, es más que suficiente para
disuadirlo un poco”.

“Aunque, que su sentido de justicia demasiado grande es lo que me preocupa.


Eso es claramente una desventaja”.

“Tienes razón. Aunque es confiable, eso sería su única falla”.

“Si se mete muy profundo donde no debe sin lugar a duda terminará con el cuello
en el piso. Aunque bueno, de ser ese tipo de persona, eso pasaría de una forma
u otra tarde o temprano”.

Aunque estuviéramos hablando de eso, Sakayanagi se veía muy contenta.

“Veo que te diviertes”.

“Por supuesto, es divertido. ¿Tú no te estás divirtiendo, Ayanokouji-kun?”

“Quién sabe. A decir verdad, en mi caso solo es problemático. En tu caso—”

“Exacto, vine porque se veía divertido. ¿Acaso estoy siendo inoportuna?” Admitió
Sakayanagi de inmediato.

“No realmente. Gracias a ti, persuadir a Mashima-sensei fue más sencillo. Te lo


agradezco”.

“Me alegra escucharlo”.

Ella me vio y sonrió.

“Además, no puedo permitir que las tontas interrupciones de la escuela se metan


siempre en nuestras batallas”. Sakayanagi realmente estaba muy indignada y
enojada por lo que Tsukishiro había hecho.

Por eso, ella se involucrará en esta pelea y haré todo lo posible para expulsarlo
de este lugar.

“El enemigo está desprevenido, por eso es la mejor oportunidad para librarnos
de él”.

Desde el punto de vista de Tsukishiro, nosotros éramos meros estudiantes de


preparatoria. Él estaba subestimando enormemente lo que podíamos hacer.

Ese era su punto ciego.

“Ayanokouji-kun, por el momento, esforcémonos juntos para deshacernos del


director sustituto Tsukishiro”.

“En ese caso, te tomaré la palabra”. Ni siquiera tenía que pensar en si confiar en
ella o no.
Después de todo, ya comprendía más que suficiente la personalidad de
Sakayanagi.
5
Luego de que los dos estudiantes se marcharan.

Mashima-sensei y Chabashira-sensei estaban intercambiando opiniones en la


sala donde se habían quedado.

“Todavía hay algo que no logro comprender”.

“Entiendo eso, Mashima-sensei. Pero eso no cambia el hecho de que lo que dice
Ayanokouji es cierto”.

“Meter las manos incluso en el sistema escolar solo por un estudiante…” No


importa cuán realista ahora le parezca, Mashima no dejaba de lamentarse de
que no sea algo fácil de entender.

“¿Qué piensas de Ayanokouji tú que lo has observado por todo un año?”

“Esa pregunta es un tanto complicada”.

Dado que no podían quedarse demasiado tiempo, los dos decidieron salir al
minuto de que Ayanokouji y Sakayanagi se fueran.

“A primera vista, es alguien descuidado y con poca motivación. El tipo de


estudiante que veríamos en cualquier lado”.

Es seguro que esa es la misma impresión que los demás maestros de las otras
clases debían tener de él.

Su presencia era realmente pequeña, a duras penas recordarían su nombre y su


rostro.

“Sin embargo, esa habilidad para comportarse con los adultos, y esos ojos que
pareciera que vieran a través de ti, no son los de un simple niño”.

“Todavía no lo creo por completo”.

“Ciertamente. Además, eso es todo lo que puedo decir de él en este primer año”.

“Sólo han pasado unos pocos años, pero en mi tiempo en esta academia, pero
por lo que he visto, Horikita Manabu y Nagumo Miyabi son los estudiantes que
más sobresalientes me han parecido”.

“Por supuesto, no negaré eso”.

Ambos tenían un excelente nivel académico, atlético y un indiscutible carisma.

“Sin embargo, no me parecía que los estudiantes de primer año estuvieran


siquiera cerca de esos dos. Por supuesto, hay casos de estudiantes con
habilidades comparables, pero no lo son todos. Desde ahora, veré cuánto de eso
tiene Ayanokouji-kun”.

“¿Eso tiene algo que ver con lo que pasará a partir de ahora?”

“No, no tiene nada que ver. No importa qué tipo de estudiante sea Ayanokouji-
kun, no permitiré que el director sustituto Tsukishiro haga lo que le plazca.
Además, esto es sólo mera curiosidad”.

“Curiosidad… qué expresión tan poco inusual de usted ha usado. Sin embargo,
yo estoy haciendo lo mismo”.

Chabashira era otra de las personas que no podían dejar de desear conocer más
a fondo a Ayanokouji.

Aunque quisiera responder eso, la realidad es que tampoco podía hacerlo.

“Santo cielo, qué problema más molesto nos han traído”.

Dijo Mashima algo cansado mientras se cruzaba de brazos.

“Un profesor debería mantener una distancia considerable de los alumnos, no


deberíamos construir una relación, menos una así de rara”.

“Pero por eso mismo, debemos deshacernos de Tsukishiro lo más rápido


posible”.

“Expulsarlo… ¿y de verdad acabará todo con eso?”

“¿A qué se refiere?”

“Nada nos asegura que incluso luego de sacar sus acciones a la luz, no enviarán
a otra persona a que haga lo mismo. Si eso sucede no hay duda de que ese
problema personal de Ayanokouji-kun afectará a toda la escuela… y en el peor
de los casos a todo el año escolar”. Dijo Mashima preocupado.

Pero por supuesto, aun si eso pasara, él no abandonaría a ningún estudiante.

“Me preocupa que la escuela terminé como un pantano lleno de pirañas”.

“En eso tiene razón”.

De pasar eso, los estudiantes no podrían recibir una valoración como era debida.

Y eso era algo que, como maestro, debían evitar a toda costa.

“De ser posible, me encantaría que eso no llegara a pasar”.

Ambos maestros se imaginaron los problemas por venir, desando al mismo


tiempo que no sucedieran.
6
Luego de matar el tiempo hablando con los profesores y Sakayanagi, me
acerqué hasta el gimnasio.

Ya quedaba poco tiempo para que la fiesta de despedida terminara y los


estudiantes de tercer año salieran.

Así que, el objetivo ahora era esperar a que eso pasara.

Los estudiantes de primer y segundo año comenzaron a acercarse, nerviosos


mientras llegaba el momento.

Parece que hoy había incluso estudiantes los cuales querían expresarle a sus
respectivos senpais, varios sentimientos que no pudieron en este tiempo.

¿Cuántas personas habría exactamente? Al menos yo veía 100 estudiantes.

Y allí un poco alejada de ese grupo, encontré a una conocida.

“Así que viniste después de todo”.

Le hablé a Horikita que estaba parada cerca del grupo de personas y esta me
miró con la misma mirada de siempre.

“… ¿Y? ¿No puedo?”

“No es eso. De hecho, me hace pensar en ti de forma diferente”.

“¿Pensar de manera diferente? Sí que dices cosas raras en estos momentos”.

“Simplemente pensé que la tú de antes no vendría hasta aquí en estos


momentos”.

Pero Horikita respondió a mis halagos de forma insatisfactoria.

“¿Tú crees? Yo soy yo, no he cambiado en absoluto”. Ella negaba su


crecimiento, o tal vez su autoevaluación.

Aunque, viéndolo bien más que negarlo, simplemente parecía no querer


aceptarlo delante de otras personas.

Luego de que terminara la reunión, la puerta se abrió finalmente.

Parece que así la ceremonia de graduación llegó a su fin.

Este era ahora el único y último lugar donde los graduados podían intercambiar
palabras con los demás estudiantes.
Luego de separarse, los estudiantes de tercer año comenzaron a salir uno
después del otro.

La mayoría de ellos estaban contentos, pero una parte de ellos no tanto.

Tal vez era por el sentimiento de nostalgia al dejar la escuela, o tal vez la
frustración de no haberse podido graduar en la clase A.

Aunque de ser lo segundo, era extraño que la mayoría de los estudiantes no


estén tan deprimidos.

Sólo vi unos cuantos, pero incluso los estudiantes que no se graduaron en la


clase A estaban alegres.

“¿Qué es lo que piensas?” Le pregunté a Horikita sobre eso.

“Tal vez piensen que, aunque no pudieron cumplir su sueño, al menos podrán
abrir un camino por su cuenta. Ya sea en estudios o trabajo, siempre puedes
conseguir algo bueno mientras tengas las habilidades suficientes, sin necesidad
de tener un privilegio a tus espaldas”. El camino de sus vidas no terminaba aquí,
sólo continuaba.

Por ende, la mayoría de los estudiantes aceptaron la realidad frente a sus ojos,
decidiendo continuar sus caminos hacia un buen futuro… ya veo.

En ese sentido, no sería extraño que estuvieran alegres en este momento.

De entre todos los estudiantes, había algunos que se dirigieron directamente a


los dormitorios. Pero la mayoría se quedaron en este lugar.

Siento como si quisieran ver los arañazos, o mejor dicho, los logros que habían
conseguido en estos 3 años.

Entre los estudiantes graduados, también vi al ex presidente del consejo


estudiantil, Horikita Manabu.

Era el momento perfecto dado que todavía no estaba conversando con nadie.

Si la gente se reúne alrededor de él es casi seguro que Horikita no se acercará


para nada.

Horikita había esperado este momento, pero no dio ni un solo paso.

“Deberías ir con él”.

“Eso ya lo sé”.

Dije algo obvio. Era claro que ella estaba esperando aquí para hablar con su
hermano.
Pero ya estando delante de esa oportunidad, su cuerpo no se movía en absoluto.

Y mientras ella seguía así, un estudiante, luego otro, luego otro, comenzaron a
acercarse al hermano de Horikita.

Llegué a la conclusión de que esta actitud de ella no terminaría nunca, por lo que
tomé otras medidas.

Le di un pequeño golpe en la espalda a Horikita para que dejará su vacilación y


avanzara.

“O-Oye, ¿qué haces?”

“Ve y usa tu privilegio de hermana menor”.

Le insistí, pero Horikita no movió sus pies que parecían ya estar pegados
fuertemente al suelo.

“… Siento que no sería muy normal que a estas alturas vaya corriendo hacia mi
hermano”.

“No hay nada de malo en que vayas a hablarle, más si es ahora”.

“No es normal, no lo es para nada”. Dijo ella, insistiendo que no necesitaba


acercársele.

Esto me recuerda a la trampa de la otra vez, y el tiempo un poco después de que


ingresáramos a esta escuela donde ella llevaba una comida casera hecha por
ella.

En ese momento, ella miraba a Horikita Manabu de esta forma. Triste, y desde
la distancia.

Aunque haya crecido en pequeñas partes, su corazón seguía siendo el mismo


de aquella vez.

Algunas partes al parecer eran difíciles de cambiar incluso con mucha


experiencia y crecimiento de por medio.

Eso fue lo que pensé al ver esa expresión de debilidad nuevamente, pero…

“Pero no me malinterpretes. No es que me haya acobardado. Simplemente vine


aquí para… porque quería saber cómo han sido estos 3 años para mi hermano”.

“Ya veo”.

O sea que hablar no lo era todo. Eso me parece bien también.

Luego 2 personas más se acercaron al hermano de Horikita.


“Tu hermano sí que es popular”.

Un hombre que mantuvo su posición de presidente del consejo estudiantil al igual


que su lugar en la clase A por años. Obviamente iba a ser alguien solicitado.
Pensé que no tenía ninguna relación con los estudiantes de primer año, pero
muchos de ellos también se le acercaban a hablar.

Luego poco a poco el pequeño circulo se fue haciendo más grande, y los
estudiantes iban pasando de graduado a graduado.

El hermano de Horikita fue saludando a un estudiante tras otro con una sonrisa
amigable.

Sentí que al final de los finales, pude ver un rostro diferente de él. Pude ver una
atmosfera diferente de él, liberada, como si le quitaran un gran peso de encima.

Horikita estaba viendo a su hermano sin pestañear, sin alejar la mirada ni un


segundo.

Y así… cierto estudiante se acercó a él.

Era el nuevo presidente del consejo estudiantil, Nagumo Miyabi de la clase A de


segundo año.

Y cerca de él estaba el vicepresidente Kiriyama, Mizowaki, Tonokawa y Asahina.

El ambiente no se volvió pesado, más bien era como si estuviera pasando algo
único.

“Felicidades por tu graduación, Horikita-senpai”.

Nagumo se acercó al hermano de Horikita con una sonrisa y un amigable saludo


de felicitaciones.

Él por su parte tampoco se molestó en absoluto y recibió a Nagumo.

“Cielos, no esperaba menos de ti Horikita-senpai. Al final no pude ni tocarte los


talones”.

“No es cierto. La verdad ni yo mismo sabía qué iba a pasar. Si tengo que decir
una razón de tu derrota, eso es porque no estamos en el mismo año escolar.
Aunque hiciste todo lo posible para interferir, la diferencia todavía era grande”.

No importa cuán bien haya peleado, todavía no podía traspasar la barrera de los
años de estudio.

Dado que no podía participar tampoco en los exámenes de su mismo año, eran
pocas las cosas que podía hacer.
Pero sí realmente quería aplastarlo, había muchas formas de hacerlo, aunque
no estuvieran en el mismo año. Como lo hacía Ryuuen.

Sin embargo, nadie piensa que Nagumo haría algo similar.

“Bueh, es cierto. Aaaah, por qué tuve que nacer un año más tarde”.

No era insatisfacción, sino simplemente lamento por no tener la misma edad.

“Como ves, así es como soy yo hasta el final, pero, aun así, ¿podría estrechar tu
mano?”

“Por supuesto, no tengo razón para negarme”.

El hermano de Horikita también estaba de buen humor, y así, ambos se dieron


un apretón de manos.

Por unos momentos fluyó un cómodo silencio entre ambos.

Había muchas cosas que ambos, como presidentes del consejo estudiantil,
podían entender sin necesidad de hablarlo.

“Recuerda que a partir de ahora te espera un gran año por delante. Pasa tus
días en esta escuela de una manera satisfactoria”. Ese fue su consejo como
estudiante veterano, y por supuesto, no hubo ningún tipo de amenaza o
desprecio hacia Nagumo.

Más que eso, le estaba diciendo que disfrutara su vida escolar.

“Por supuesto. Aunque ya no estés por aquí, disfrutaré del poco tiempo que me
queda. Convertiré esta institución en una verdadera preparatoria de educación
avanzada, y ya tengo todo listo para lograr eso”. El hermano de Horikita aceptó
esas palabras de frente y asintió.

“Estabas lamentando ser un estudiante de un año menor, pero puede que yo


esté haciendo lo mismo. La verdad me da lástima no poder ver qué cosas
lograrás hacer a partir de ahora. Todavía hay un montón de cosas que tal vez
hubiera entendido si te hubiera puesto más atención”.
¿Tú crees? La verdad creo que sólo en esto no estoy del todo de acuerdo”.

Había quienes intentaban proteger las reglas de la escuela y quienes intentaban


romperlas.

Dado que cada quien tiene su propia manera de pensar, los conflictos son algo
natural.

“Además, no habrá problema. Ya sabes, Horikita-senpai, todavía están aquí los


estudiantes menores que dejaste”. Dijo él, mirando hacia nosotros… más bien a
Horikita quien estaba viendo desde la distancia.

Ella estaba parada al lado mío por lo que noté claramente como se tensó un
poco.

“Mientras tu hermana menor esté aquí, luego puedes escuchar todo de ella”.

Aunque se gradúe, dado que son hermanos, tarde o temprano se volverán a


encontrar.

Y en ese momento puede preguntarle todo lo que vivió, o mejor dicho, va a vivir
en esta escuela. Eso es lo que Nagumo quería decir.

“Supongo que tienes razón”.

Ambos asintieron y luego separaron sus manos.

“Muchas gracias por todo”.

“Lo mismo digo”.

El ex presidente del consejo estudiantil, Horikita Manabu y el actual presidente


del consejo estudiantil Nagumo Miyabi.

Al final, la historia entre ellos se cerró con un final feliz y tranquilo.

Luego de eso Nagumo se alejó para no estorbar al resto de estudiantes. Una


reunión así entre los dos presidentes del consejo estudiantil era algo magnifico
de ver, pero al mismo tiempo, era algo complicado de interrumpir.

Nagumo se alejó poco a poco y en vez de eso se acercó a Horikita que estaba
viendo desde mi lado.

Con él también vino Asahina Nazuna, una estudiante de segundo año. Los otros
estudiantes que creo eran parte del actual consejo estudiantil desaparecieron
para ir a saludar a los otros graduados.

“Escuchaste todo, ¿no es así? Asegúrate de disfrutar muy bien tu tiempo aquí.
Emm veamos, tu nombre era…”.
“Horikita… es decir, Suzune”. Respondió Horikita algo consternada todavía.

Si fuera la misma de siempre no estaría comportándose así, pero supongo que


este es el efecto de haber escuchado la conversación que él había tenido con su
hermano mayor.

Mientras tanto Nagumo parecía estar disfrutando un poco de la situación y luego


miró hacia atrás.

Por supuesto, era obvio, pero estaba mirando a Horikita Manabu.

A la persona con la que peleó una y otra vez sin medir los riesgos.

Ahora mismo estaba hablando con los otros estudiantes menores, mientras
algunos de ellos le estaban dando regalos o ramos de flores.

“Suzune, tu hermano es una persona increíble. Mantente orgullosa”. Dijo él,


volviendo a ver a Horikita.

“Por supuesto, estoy orgullosa de él”. Ella le devolvió la mirada y respondió


vívidamente.

“Por cierto, si quieres preguntarme algo puedes hacerlo ahora. La verdad me


siento muy bien ahora mismo”.

“… En ese caso le tomaré la palabra”. Dijo Horikita preguntándole una única cosa
a Nagumo.

“¿No se arrepiente?”

“¿Arrepentirme?”

“Lo pregunto porque no lo veo deprimido, ni arrepentido de nada”.

Supongo que se refería a la conversación de ambos y el apretón de manos de


hace un rato.

Lo preguntaba porque Nagumo parecía alegrarse desde el fondo de su corazón


de que Horikita Manabu hubiera logrado graduarse en la clase A.

Pero desde el exterior, la relación entre estos dos presidentes del consejo
estudiantil era diferente.

Nagumo peleó contra Horikita Manabu una y otra vez, tratando de que lo
degradaran de la clase A.

Pero no lo logró, por eso Horikita Suzune estaba preguntándole si no estaba


arrepentido.
Pero creo que, por eso mismo, porque no lo está, es que Nagumo puede celebrar
que Horikita Manabu se haya graduado en la clase A.

A pesar de que pudo superar todas las luchas que él le dio.

“No creo que sea sencillo ganarle a Horikita-senpai, de hecho, no es alguien a


quien le pueda ganar. ¿No lo crees?”

“Pues... sí eso es cierto, pero…”

“Horikita-senpai también reconoció a Miyabi”. Dijo Asahina y Miyabi la miró.

“¿Perdí? ¿Exactamente en qué perdí Nazuna?”

“¿Eh? Pues a la final Horikita-senpai se graduó en la clase A, ¿no? Eso es una


derrota”. Respondió Asahina como si fuera algo que ni siquiera valiera la pena
preguntar.

Sin embargo, Nagumo refutó su equivocación al escucharla.

“Ciertamente si miras solo los resultados, permití que se graduará en la clase A.


Pero ¿eso qué tiene que ver con una derrota?”

“Pues… para mí eso es una derrota, ¿no? ¿No creen?” Dijo Asahina
preguntándole a Horikita.

Pero ella no respondió y simplemente escuchó las excusas de Nagumo.

“Ciertamente me batí en un duelo con él, pero no era algo en el que buscara
ganador o perdedor. Incluso si Horikita-senpai hubiera caído a la clase B su
reputación no hubiera cambiado en absoluto después de todo, ¿no? Después de
todo su fuerza e inteligencia no tiene nada que ver con la clase en la que está”.
Dijo él, pero Asahina no parecía satisfecha con esa excusa.

“¿Aún no lo entiendes? Entonces veámoslo así. ¿En este duelo qué perdí?
¿Perdí reputación? Claro que no, e incluso sigo estando en la clase A como
presidente del consejo estudiantil. Entonces ¿exactamente qué fue lo que
perdí?”

“Ya… pero…”

“En primer lugar, yo soy de segundo año, él de tercero, no hay condiciones para
que sea una lucha oficial”.

No es que no entienda lo que quería decir. Pero aun sabiendo que no podía
establecer una lucha oficial, Nagumo siguió molestando a Horikita Manabu.

“Por eso, sólo lo ataqué una y otra vez para que me reconociera… no, para
obligarlo a reconocerme”.
Y en ese sentido, hoy finalmente el hermano de Horikita había reconocido a
Nagumo.

Aunque bueno, creo que él ya había evaluado sus habilidades desde el inicio.

Pero simplemente no podía reconocer sus formas de hacer las cosas.

Es por eso que Nagumo también quería que él lo reconociera no solo a él si no


a sus métodos.

“La verdad eso me parece algo que una dama enamorada diría”.

“Es posible. De todas formas, ya escuché más o menos qué es lo que él hará
luego de esta graduación. Basta con seguirlo luego de que me gradúe”.

Realmente no podía ver rastro de depresión, arrepentimiento ni nada de eso en


el rostro de Nagumo.

Es más, creo que disfrutó hasta el final sus momentos con el hermano de
Horikita.

“Luego de graduarte… ¿en serio vas a hacer eso? ¿Seguir a Horikita-senpai


hasta la misma carrera?”

“Al menos por ahora, ese es el plan”.

“Haah, así que realmente te gusta Horikita-senpai”.

“Ya no tengo enemigos dentro de los estudiantes de segundo año, y por


supuesto tampoco entre los de primer año. Por eso, sólo queda hacer una cosa.
Meterme dentro del mecanismo de esta escuela y hacerla al menos un poco más
divertida”.

La duración del mandato de Nagumo como presidente del consejo estudiantil ya


iba llegando a la mitad.

Pero, aun así, hasta la fecha no ha habido nada nuevo por parte de él.

Al parecer finalmente comenzaría a moverse luego de que Horikita Manabu se


graduara y él pasara a tercer año.

Por supuesto, ahora no podía ni imaginarme qué era lo que iba a hacer.

“Dejando eso de lado. La verdad no pude entender para nada tu valía en todo
este año, Ayanokouji”.

Y luego por primera vez en este día Nagumo me miró.

Esa mirada era diferente a la que puso con el hermano de Horikita, la mirada de
ahora era literalmente, una de “aburrimiento”.
“Eso quiere decir que no soy la gran cosa”. Dije, pero al parecer mi negación hizo
que Nagumo sospechara más.

Sin embargo, mientras se quede como un simple interés, no importa realmente.


Mientras se quede en ese punto, no voy a necesitar darle un susto.

“Bueno, de cualquier forma, será algo que sabré en abril. Si realmente eres
alguien habilidoso, pelearemos, aunque no nos guste”.

Con la retirada del hermano de Horikita, ahora los estudiantes de la escuela


estaban bajo Nagumo.

Aunque sea el presidente del consejo estudiantil, es dudoso hasta qué punto
pueda influir en las decisiones de la escuela. Pero lo que sí era seguro es que
muchas cosas serían diferentes al primer año.

“¿Quiere decir que, eliminará las peleas entre clases?” Preguntó Horikita al
llamarle la atención las palabras de Nagumo.

“Quisiera hacerlo si estuviera en el rango de lo posible, pero es bastante poco


probable. La escuela no lo quiere admitir”. Dijo Nagumo suspirando mientras se
bajaba de hombros.

“Sin embargo, cambiaré muchas cosas para exponer las habilidades personales
de cada estudiante. Los estudiantes más sobresalientes deben estar en una
clase más alta, ¿no lo crees?”

En cuanto a eso Horikita no dijo nada, no lo negó, y tampoco asintió.

“Además de agregar un par de cosas interesantes que harán que los de primer
año quieran estar más conectados con todos los estudiantes, incluso con los de
tercer año… Si la escuela lo acepta, es muy probable que tenga que pelear
contigo también”.

Aunque diga eso, desde su punto de vista yo no era nadie de importancia.

Pero, aun así, en alguna parte de sus instintos, estaba siendo cauteloso y trataba
de adivinar quién yo era realmente.

“Miyabi, ¿no deberíamos irnos ya? Todavía hay senpais a los que quieres
saludar, ¿no? Vámonos”.

“Tienes razón, no puedo pasarme todo el día hablando con los de primer año”.

Y así, Nagumo y Asahina se fueron a ver a otros senpais aparte de Horikita


Manabu.

“Hah… en serio es agotador hablar con ese tipo de gente”.

“Es el presidente del consejo estudiantil después de todo”.


Aunque nos separé solo un año, era como alguien encima de las nubes para
nosotros.

“Yo me voy. Ya hice lo que tenía que hacer”.

Al final parece que no va a hablar con su hermano.

“¿Estás segura? Puede que mañana mismo se vaya de la escuela”.

“Eso… no tienes que decírmelo, ya lo sé…”

Horikita se dio la vuelta y comenzó a caminar mientras seguía cargando con un


dilema con el que no podía hacer nada.

“¿Te quedarás?”

“Sí, sólo un rato más”.

“Ya veo… adiós”.

Le llamaba la atención qué es lo que iba a hacer, pero me dio la espalda y


regresó a los dormitorios.

Para pasar el rato, comencé a mirar a Horikita Manabu y al resto de estudiantes


de tercer año.

No es que me interesara realmente. Pero ya que estaba aquí, decidí quedarme


a ver esto un poco más.

Todo, para imaginar a mi yo, 2 años en el futuro que tal vez esté en esta misma
situación.

Y así mientras veía todo con interés, uno, luego otro, comenzaron a regresar a
sus respectivos dormitorios.

Así hasta que todos se habían marchado.

Horikita Manabu quien al parecer ya había terminado con su sesión de saludos


me encontró y se acercó.

“¿Todavía estabas aquí?”

El hermano de Horikita sabía muy bien que no era propio de mí estar en este
lugar.

“¿Me estabas esperando?”

“Algo así”.
Y por supuesto, también sabía muy bien que no es que estuviera hablando con
algún senpai de tercer año.

“Puede que esta sea la última vez que hablo contigo después de todo. Y bien,
¿cuándo saldrás de la escuela?” Decidí no gastar más el tiempo y preguntar lo
más importante.

Eso es porque si responde que de inmediato, tendría que ir a llamar a Horikita.

“El 31 en la tarde. Un bus estará esperando a las 12:30”.

Entonces en una semana. No es de un día para otro, pero tampoco es que sea
mucho tiempo.

“Parece que Suzune ya se fue”.

“Sí, por ahora dijo que quería ver el resultado de tus deslumbrantes 3 años”.

Ambos miramos a la dirección de los dormitorios. Pero como era de esperarse,


Horikita ya no estaba por allí.

“Ya veo”.

La verdad no podía leer ninguna emoción de alegría o tristeza en él debido a su


expresión.

Pero si no hacía que se reunieran, ambos tomarán su propio rumbo sin siquiera
haber hablado.

Mientras me preocupaba por eso…

“Si pudieras, quisiera que le digas algo a Suzune de mi parte. Que estaré
esperando en la entrada al medio día del 31”.

“¿Por qué no se lo dices tú en persona? Aún tienes tiempo”.

Es más, si tiene intención de verla entonces eso acelera las cosas.

Horikita de seguro también vendría volando si se lo dijera.

“No lo hago porque de seguro no aceptará verme tan fácilmente. Pero confío en
que tú la puedes convencer”.

“Puede ser todo lo contrario, ¿sabes? Puede que definitivamente no vaya si se


lo digo yo”. Porque tiene un montón de lados con carácter fuerte.

“Si lo hace entonces significa que esa es su decisión final y nada más”.

“¿Estás seguro que quieres que lo haga?” Pregunté por si acaso, pero él
respondió sin dudar.
“Sí, cuento contigo”.

Bueno, si no me va a culpar por lo que pueda pasar entonces está bien, no tengo
por qué rechazarlo.

Además de que, si le digo esto, Horikita irá a verlo sí o sí.

Con esto, su deshielo finalmente irá comenzando.

“Hubiera querido hablar un poco más contigo, pero lastimosamente ya tengo


otros planes”.

Al parecer irá a ver a varios estudiantes menores.

O tal vez simplemente quiere olvidarse de ser hermano, presidente y demás


responsabilidades, y pasar al menos este día como un alumno común y corriente.

“Además no es como si te interesara crear una charla larga y sin sentido, ¿no es
así?”

“Sí, para nada”.

No importaba si ya no había mucha gente, el solo hecho de estar aquí con el ex


presidente del consejo estudiantil me haría resaltar.

“Si estás disponible, me gustaría que tú también vinieras a despedirme el 31”.

“No soy bueno con las despedidas en masa”.

“No te preocupes. No tengo planeado llamar a nadie más que a ti y Suzune”.

En ese caso, asentí con la cabeza y acepté su propuesta.

“Gracias”. Dijo eso y luego el hermano de Horikita se alejó de mí.

Él es el único con el que puedo hablar decentemente de los de tercer año, pero
dado que ya se iba a ir, no tenía nada más que decirle.

Supongo que va siendo hora de irme también.

“Ayanokouji-kun, ¿te importa si voy contigo?”

En medio de eso, Hirata se acercó y me habló.

Ya lo había visto hace un rato saludando a varios alumnos de tercer año.

“¿Ya vas de regreso?”


“Sí. Aunque haya terminado la ceremonia, de todas formas, ellos todavía estarán
por aquí durante unos días más. Además, que igual iré a despedir personalmente
a las personas con las que soy más cercano”.

Bueno, estábamos hablando de Hirata, era obvio que había recibido varias
invitaciones para eso.

Los estudiantes graduados de tercer año podían quedarse en las instalaciones


hasta el 5 de abril.

Claro que ese tiempo también era para completar todos sus preparativos y dejar
la escuela.

El tiempo restante es bastante corto. Aunque supongo que la mayoría ya debería


tener sus cosas personales listas para irse.

Dado que no tenía razón para decir no, decidí regresar a los dormitorios junto a
Hirata.
7
Iba de regreso a los dormitorios con Hirata, pero cuando pasamos por la tienda
de convivencia él me miró.

Luego de eso volvió a mirar al frente haciendo como si nada hubiera pasado.

Eso es lo que Hirata ha estado repitiendo una y otra vez en estos pocos minutos
que llevamos caminando.

Desde hace un rato que parecía estar buscando la oportunidad para entablar
una conversación, pero…

Finalmente pareció decidirse y habló.

“La verdad es que… quiero hablarte de algo, Ayanokouji-kun”.

Dijo Hirata de una manera un tanto afligida.

Por un momento pensé que iba a hablar sobre el examen final del año, pero
parece que no era eso.

“¿Hay algo que te esté inquietando?”

“Creo… sí, creo que es eso”.

Lo aceptó luego de pensárselo por unos segundos.

“No sé si seré de ayuda, pero dímelo”.

No me sentía molesto ni mal porque Hirata confiara en mí.

Pero, en ese momento no pude ni imaginarme el tipo de consejo que pediría.

Él estaba de esta misma forma con el caso de la expulsión de Yamauchi, pero


no parecía ser ese el caso tampoco.

Después de todo, para él, pudo haber sido algo hiriente, pero no lo suficiente
como para estar pensado en eso hasta hora.

Para hoy, él ya debería haber digerido bien ese asunto e incluso superado por
su propia cuenta.

“Puede que parezca algo sorprendente, pero…”

Comenzando así, él continuó.

“Yo, a decir verdad, no sé si puedo ser apasionado con los temas de amor… o
más bien, no sé mucho acerca de eso”.
Sí, fue bastante sorprendente de hecho.

Pensar que llegaría el día en que Hirata me pidiera a mí consejos de amor.

“¿A qué te refieres?”

Por ahora decidí escuchar toda la historia.

Lo animé a que continuara.

“Siento que es porque nunca tuve la oportunidad de enamorarme realmente de


ninguna chica…” Confesó Hirata un tanto avergonzado.

“En pocas palabras, ¿dices que es porque nunca has salido con alguien?”

“Dejando de lado el trato con Karuizawa-san, sí, se podría decir eso”.

No parecía sorprendente, pero la verdad es que sí lo era.

Hirata trataba a los hombres y mujeres de la misma forma, pero cualquiera


imaginaría que tenía 1 o 2 experiencias amorosas.

Aunque la relación de novios con Kei no cuenta. Los dos solo actuaban como
novios para poder detener un poco el bullying que le hacían a Kei.

Pero, si dice que no se ha enamorado de una chica…

“¿Quieres decir que ahora mismo no estas enamorado de nadie?”

“Supongo que no…”

Ver a todas las chicas de la misma forma es una ventaja, pero qué extraño…

“¿Y qué hay de Mi-chan?”

Mi-chan era una de las chicas que deseaba fuertemente avanzar en su relación
con Hirata.

Y claro, ha mostrado claros sentimientos de amor por él.


“No pude decírselo, no pude decirle que no llegaríamos más lejos”.

Mi-chan le había dicho que podían comenzar como amigos.

Luego de eso, ir desarrollándose poco a poco, y por supuesto convertirse en


novios como ella deseaba.

El problema es que a Hirata no le interesaba eso, ni lo quería.

Y por supuesto, aceptar la propuesta de Mi-chan sin sentido no sería bueno para
ella a la larga.

Supongo que de eso se trata.

Así que esto era de lo que estaba preocupado, de lo que dudaba.

“Sé muy bien que debo decírselo frente a frente, pero es complicado”.

Es consciente de lo complicado que era decírselo sin herirla.

“Supongo que… estoy contradiciéndome”.

“Exacto”.

Es por su gentileza, amabilidad que él siempre está rodeado de este tipo de


problemas.

“Pero eso es sólo lo que está pasando ahora, ¿no? Nadie sabe lo que pasará
más adelante, ¿no crees?”

El romance no es algo que uno pueda controlar a libertad. Es algo que


simplemente aparece de la nada, en cualquier momento.

… Probablemente.

“Claro, entiendo que existe esa posibilidad, pero…”

Quería decir entonces que, desde su punto de vista, no veía una relación más
allá de amigos con Mi-chan.

Aunque tampoco es que esté disconforme con su apariencia externa o


personalidad.

Por supuesto, el amor no sólo se trataba de esos dos aspectos, se trataba de


muchas otras cosas.

“Creo que, probablemente mi respuesta… sería un no rotundo”.

Aunque decía no saber qué hacer, Hirata mismo trataba de sacar una respuesta
de manera forzada.
En ese caso, sólo tengo una cosa que decir.

“Díselo a la cara y con sinceridad. Lo que desea Mi-chan es que la relación


avance”. Lo miré a los ojos y le dije eso.

Dudar en una respuesta significaba tener que hacer esperar a Mi-chan.

En ese caso, lo mejor era dejar las cosas claras lo más rápido posible.

Si luego de eso, Mi-chan seguía pensando en Hirata ya era asunto de ella.

Sin embargo, Hirata nuevamente dudó.

“… ¿Y si termina herida?”

“Hacerla esperar cuando ya tienes una respuesta clara la herirá más. ¿No
crees?”

Nuevamente lo miré a los ojos.

Él me miró por un momento, pero nuevamente desvió la mirada.

“S-Sí. Tienes razón, creo que eso es lo que debo hacer…”

Hirata asintió dos y tres veces como para tratar de convencerse a sí mismo.

Y nuevamente llegó a una conclusión.

“Me alegro haberlo consultado contigo, Ayanokouji-kun. Ahora por fin tengo el
valor para hablar con ella. Si no estoy preparado para que resulte herida,
entonces simplemente estaré huyendo”.

Al parecer logró obtener otra respuesta.

“¿Podrás decírselo?”

“No sé si es la mejor idea, pero creo saber cómo decírselo de forma en que
ninguno resulte herido”. Dijo Hirata poniendo ambas cosas en una balanza.

Quedarse callado, o darle una respuesta a Mi-chan.

Y al final entendió que lo segundo era lo mejor para Mi-chan, así que sus dudas
desaparecieron.

Anteriormente esto le hubiera tomado más tiempo para encontrar una respuesta
adecuada.

Llegar a una solución donde “no lastime a la otra persona” es complicada, y los
sentimientos y pensamientos hace que eso se transforme en un laberinto.
Luego de resolver esa duda, Hirata todavía parecía querer decir algo más.

“¿Qué sucede?” Decidí preguntarle.

“Pues, verás… ¿puedo… llamarte Kiyotaka-kun a partir de ahora?”

“¿Eh?”

No me imaginé que el tema fuera a cambiar de dirección por completo.

“Y si es posible… me gustaría también que tú me llamarás por mi nombre”.

¿Se refiere a que quiere que nuestra relación de amigos dé otro paso?

Así como una vez pasó con Keisei, Akito, Haruka y Airi.

“Claro, si no te importa”.

Al responderle, Hirata mostró una gran sonrisa de alegría.

“¿En serio? ¿De verdad?”

“Sólo es llamarnos por nuestros nombres, ¿no? No es nada raro si es contigo,


Hirata… no, Yousuke-kun”.

Que dos chicos, o un chico con otra chica jóvenes se llamen por su nombre no
es nada raro.

“Sí, ciertamente. Luego de ese incidente, no es nada raro”.

El incidente al que se refiere al caso de bullying a su amigo en secundaria y su


intento de suicidio.

“Desde aquel momento… me asusta acortar la distancia con la gente. Puedo


tratar a toda la gente de la misma forma, pero por eso mismo, soy incapaz de
tener a alguien realmente importante a mi lado”.

Habían pasado 2 años desde aquel incidente, pero al aparecer desde entonces,
él ha llamado a todas las personas por su apellido.

Y tenía razón, pues él hasta ahora había tratado a todos los


estudiantes de la misma forma.

Incluso con Yamauchi el cual fue expulsado de la clase y de la


escuela por todos los demás.

Con eso nuevamente, y esta vez por cuenta propia, había logrado romper otro
muro.
De entre todos los estudiantes que habían evolucionado en este año, el que más
cambió fue Hirata.

“Por eso, realmente te lo agradezco… Kiyotaka-kun”.

Su mirada nuevamente regresó a mí. Era la mirada de alguien que intentaba


expresar algo.

“Se vuelve un poco vergonzoso que me lo agradezcas”.

Eso fue lo que realmente pensé al sentir una incomodidad que no podía
explicar.
Capítulo 2
Cita con Hiyori
Luego de que terminaran la ceremonia de graduación y la ceremonia de
clausura, finalmente empezaron las vacaciones de primavera.

Los estudiantes olvidaron las guerras entre clases y se les dio un pequeño
respiro.

Por supuesto, no se nos permitía salir del campus, pero no sentíamos ningún
inconveniente, debido a todas las instalaciones que había.

Una de ellas y la principal era el Keyaki Mall. Era un lugar importante no sólo
para el personal que trabajaba ahí, sino que también para los estudiantes.

No hacía falta explicarlo a estas alturas, pero tenía de todo. Cafeterías, tiendas
de electrónica, karaokes, etc.

Además de que si realmente había algo que querías conseguir y no estaba aquí,
podías pedirlo por correo una vez hicieras una solicitud y la aceptaran.

Podías vivir una vida libre y en paz hasta donde tus puntos personales te lo
permitieran.

Por suerte, los estudiantes de primer año no tenían problemas con eso esta vez.

Incluso la clase más baja, la clase D había recibido docenas de miles de yenes
el 1 de abril.

Si se comparaba con la mesada diaria de los estudiantes de preparatoria de todo


el país, la diferencia era mucho más que clara.

Pero aun así, todavía había estudiantes en casos especiales.

Por decir un ejemplo; yo.

Debido a cierto trato con mi compañera Kushida, tenía que darle la mitad de mis
puntos.

Al principio tenía ya todo planeado, pero ahora la situación había ido cambiando.

En cualquier caso, decidiré sobre mi trato… no, sobre mi relación con ella
durante estas vacaciones.

Veamos si toma el camino que preví o toma una decisión diferente.

Lastimosamente, ya no soy yo quien tiene que tomar la decisión.


Bueno, de cualquier forma, las vacaciones apenas acababan de iniciar, así que
no había necesidad de entrar en pánico.

Arreglé las mangas de mi ropa y terminé de alistarme para salir.

Pensé en pasar al menos la mitad de las vacaciones tranquilo en mi habitación,


pero hoy tenía que verme con cierta persona. Pensé que todavía faltaría algo de
tiempo hasta que me contactara, pero lo hizo más rápido de lo que esperaba.

Luego de que esa persona me contactara, yo por mí parte llamé a otra persona.

“Supongo que esta es la última confirmación…”

Era el primer día de las vacaciones así que tuve que optar por cambiar varios
planes, pero no había problema.

Después de todo, los contactos de hoy, eran realmente importantes.

No para este día claro, pero sí para cierto día, al final de estas vacaciones de
primavera.
1
Hoy era finales de marzo, con un sol fuerte desde temprano.

Era la temporada cuando las flores de cerezo comenzaban a crecer, por lo que
pronto todo estaría lleno de cerezos.

Aunque todavía era temprano para el tiempo estimado, aquella estudiante ya


estaba esperando en el lugar acordado.

“Buenos días, Ayanokouji-kun”.

Me encontré con Hiyori en su espléndida ropa de salir frente al Keyaki Mall.

“Llegas temprano”.

“Por supuesto. Fui yo quien te llamó, no podía hacerte esperar ni un minuto”. Dijo
Hiyori con una cálida sonrisa en su rostro.

“Lamento mucho que mi invitación haya sido tan repentina”.

“Igual no tenía nada planeado para las vacaciones, no te preocupes. Más bien—

“Ayer finalmente llegó un nuevo libro a la biblioteca”. Dijo ella mostrándome el


bolso que cargaba con una gran sonrisa.

Era una sonrisa mucho más alegre que antes.

Era obvio, después de todo Shiina Hiyori de la clase C de primer año, era una
lectora que amaba los libros más que a nada.

“Por eso quise leerlo y compartir mis opiniones contigo lo más pronto posible”.

Los libros que Hiyori y yo amamos son difíciles de conseguir en centros


comerciales o tiendas de conveniencia.

Y dado que tampoco tienen versiones electrónicas, no quedaba más que


ordenarlos.
Podía ordenarlos para sí misma, pero era mejor hacerlo para la biblioteca, así
más gente los vería. Y de esta forma, ella apreciaba mucho tener a alguien con
quien hablar sobre libros.

“Hay más de los que pensé”.

Las mesas de esta cafetería estaban llenas de estudiantes.

Como se esperaba de las vacaciones de primavera. Este tipo de lugares estarían


llenos dependiendo de la hora.

Por fortuna, los asientos del mostrador estaban vacíos, por lo que nos dirigimos
allí.

“No suelo encontrarme con alguien de esta forma en medio de unas vacaciones,
así que se siente un tanto nuevo”. Dijo Hiyori en su ropa de salir.

Ciertamente, al menos nosotros, no solíamos encontrarnos en días libres.

“Supongo que tienes razón”. Respondí mientras al mismo tiempo sentía una
experiencia nueva.

“Para empezar rápido… ya tengo unos cuantos libros listos, ¿podrías verlos?”
Dijo ella alegremente, tratando de sacar uno de los libros.

Pero antes de hacerlo, se detuvo y levantó el rostro como si hubiera recordado


algo.

“Ah, cierto. ¿Puedo preguntarte algo antes de empezar con los libros?”

En cuanto estaba a punto de hablar sobre algo, escuché una gran voz viniendo
desde atrás.

“Mierda, sabía que estaría lleno. ¿Es que acaso no hay ningún asiento libre?”
Una voz familiar, quejándose del número de mesas en la cafetería comenzó a
acercarse.

“¿Qué tal aquí?”

“Sí, me parece bien”.

Mientras veía eso, dos estudiantes se sentaron a mi lado.

En cuanto vi a esos dos estudiantes, me di cuenta que eran mis compañeros de


clase Ike y Shinohara.

Al parecer estaban en medio de una conversación, por lo que no se dieron cuenta


de nosotros y siguieron hablando.
Hasta hace poco me di cuenta que la distancia entre ambos se iba cerrando,
pero al parecer, eso seguía progresando.

“Emm… son Ike-kun y Shinohara-san, ¿verdad?”

No estábamos a una distancia suficiente como para escuchar de lo que


hablaban, pero la escandalosa voz de Ike llegaba a nuestros oídos.

“Me sorprende que los recordaras”.

“Ha pasado un año después de todo. Hasta yo he conocido a muchos


estudiantes de otras clases”. Dijo Hiyori con sus ojos resplandeciendo de orgullo.

Por alguna razón ambos nos quedamos en silencio y tratamos de escuchar la


conversación de Ike y Shinohara.

“Este mes hemos vuelto a la mesada de 30 mil”.

“No te quejes. El oponente era la clase A era obvio que no íbamos a ganar”.

“Ya sé, pero vamos, que el próximo mes tendremos que regresar otra vez a la
clase D, ¿no? Qué asco”.

Dijo Ike lamentándose mientras recordaba los resultados del examen final.

“Pero bueno… igual ya sabemos la razón por la que perdimos”.

“Qué dices, ¿acaso culpas a alguien?”

¿Acaso dirán mi nombre? Por un momento pensé en eso…

“Yo, yo tengo la culpa”.

Shinohara se sorprendió por esas palabras y luego exclamó.

“O sea, creo que fui una de las razones por las que perdimos. Pero hablando en
serio, creo que si toda la clase hubiera sido más cooperativa hubiéramos ganado,
¿no? Aunque el oponente fuera la clase A, les dimos una buena batalla”.

“Bueno tal vez tengas razón. Pero me sorprende que esas palabras salgan de tu
boca, Ike”.

“No me llames por mi apellido, Shinohara”.

“Es mi venganza, tu hace rato estás llamándome por mi apellido”.

Y así siguieron hablando de lo académico mientras de vez en cuando lo


mezclaban con discusiones sin sentido.
“Cuando entremos a segundo año creo que me esforzaré más. No sólo en los
estudios, sino también los deportes”.

“Ahhh, ohhh, ¿de verdad? La verdad no creo que lo cumplas”.

“Por supuesto que no podré lograrlo de inmediato. Pero igual pienso esforzarme”.

Parecía que esas palabras no se debían a una simple ocurrencia.

“Entonces te preguntaré, ¿por qué?”

“… Ken y Haruki”.

Ellos junto a él, eran los 3 que mejor se llevaban en la clase, hasta el punto de
ser llamados los 3 idiotas.

Recordé como al poco tiempo de haber ingresado yo también era cercano a ese
grupo, pero al final terminé alejándome.

O mejor dicho, ellos mismos me alejaron.

“Ese Ken, aunque no se le da nada bien, últimamente está estudiando, ¿sabes?


También escucha las clases atentamente y pensé que sólo estaba fingiendo,
pero se está volviendo mucho más inteligente”.

“Y sus calificaciones también parecen mejorar por lo que veo”.

“Sí, exacto. Poco a poco sigue mejorando y sin mencionar que ya es muy bueno
en los deportes. Eso me hace sentir como si yo no pudiera ganar en nada y me
quedara atrás”.

“Ya veo. Tiene sentido, después de todo está ganándote en los estudios ahora”.

Si hacíamos competir a Sudou y a Ike en estudios y deportes, era muy probable


que Sudou ganase.

“Él… sin duda a alguna, seguirá creciendo en este nuevo año”.

Él sentía la alegría de que un gran compañero siguiera desarrollándose, pero a


la vez el miedo de ser dejado atrás.

Pero, el factor más importante que provocaba ese miedo era…

“A este paso, el próximo candidato a la expulsión seré yo”.

“Ike…”

Era una verdad innegable que los estudiantes con puntajes más bajos en la clase
serían los más cercanos a ser expulsados.
Uno de ellos fue Yamauchi, quien tenía un montón de problemas con su
personalidad, y ahora Ike sentía que él sería el próximo.

“No da ni risa, esto no es algo que yo diría”.

“Pues, sí tienes razón… pero la verdad es que yo estoy igual”.

Shinohara tampoco tenía tan buenas calificaciones y no era del tipo que tuviera
talentos ocultos.

Lo único que los diferenciaba era su género, pero estaban en la misma posición.

“Y tampoco puedo reírme de los que sí se están esforzando”.

Shinohara asintió con fuerza a esas palabras.

“Cuando pasemos a segundo año yo también me esforzaré más. Definitivamente


no perderé contra ti, ¿está claro?”

“No tienes que decírmelo, yo tampoco perderé”.

Supongo que sería correcto decir que la relación entre los dos iba por buen
camino.

Más adelante es posible que muchos más estudiantes aprendan de estos dos y
sigan esforzándose.

Si alguien va adelante, tiene que haber otro que le siga el paso. Ese tipo de
relación es muy importante.

“Y bueno, Shinohara…”

“¿Hm?”

Luego, la voz de Ike que estaba sentado a mi lado cambió a un tono serio, pero
en un sentido diferente.

“Bueno… es que, quería hablarte de otra cosa. ¿Podrías escucharme un


momento?”

“¿Qué sucede?”

“Bueno es que, ya sabes. Nosotros somos como amigos, pero solemos pelear a
menudo... pero, aun así, yo... Bueno…”

En ese momento Hiyori y yo nos vimos el uno al otro.

Dado que éramos como terceros aquí, pudimos entender lo que él quería decir
mucho antes de que se lo dijera a la otra persona.
Era posible que una nueva pareja comenzara en este lugar. Ese era el ambiente
que se sentía.

“Q-Quieres…”

“¡Ah!”

Antes de que Ike, con esfuerzo, continuara sus palabras, Shinohara gritó.

Aunque el lugar era amplio seguía siendo un local escolar. Las cosas y personas
alrededor entraban a la vista, aunque no quisieran.

Shinohara que estaba sentada al lado de Ike pudo notarnos.

Siguiendo esa mirada de sorpresa, Ike se giró y también nos vio.

Y, al cruzar miradas…

“¡¿A-A-A-Ayanokouji?!”

Su reacción fue mucho más grande de la que había imaginado, pero se había
percatado de que lo vimos a punto de confesarse.

“¡¿Q-Qué estás haciendo aquí?!”

“Pues… simplemente tomar un café, ¿hay algún problema con eso?”

“N-No es eso, ¡pero al menos saluda o algo! ¡No te quedes en silencio!”

No, de hecho, creo que hubiera sido peor que los saludara en medio de esa
situación.

Además, el que debería saludar sería él, yo ya estaba acá después de todo.

“No escuchaste de lo que estábamos hablando, ¿o sí?”

“¿De qué estaban hablando?”

Luego él desvió la mirada mirando nuevamente al mostrador.

“N-No es nada”.

Luego de vernos intercambiar esas palabras, Shinohara se interesó por otra


cosa.

“… Eh, Ayanokouji-kun, ¿estás saliendo con Shiina-san?” Preguntó Shinohara al


darse cuenta que no estaba solo.

Claro que, era obvio pensar en eso si ven a dos jóvenes sentados tomando un
café juntos.
“No es eso. ¿Y ustedes?”

“Ah, no, claro que no. No es lo que parece”. Dijo Shinohara negando la relación
en un segundo.

Sin embargo, a Ike no le agradó eso y dijo.

“E-Es cierto Ayanokouji, no te equivoques, ¿de acuerdo? ¿Quién saldría con esta
fea?”

“¡¿Qué?! ¡¿A quién le dices fea?!”

“¡A ti, ¿a quién más?!”

¿Por qué empiezan a pelear por eso?

Las dos personas se pusieron de pie, rompiendo el buen ambiente que habían
tenido hasta hace un rato.

“¡Aaaah, ya me harté!”

“Lo mismo digo. ¡Y eso que incluso me tomé la molestia de darte algo de mi
tiempo en estas vacaciones!”

“¿Qué? Perdón, ¿qué? Si fui yo la que te habló por lastima”.

“Pero ¿qué dices? ¡Eres de lo peor!”

Pensé que se volverían a sentar, pero ambos se fueron a otro lugar mientras
peleaban.

Todo se vino abajo incluso desde antes del nacimiento de una nueva pareja.

“¿Estarán… bien?” Murmuro Hiyori algo contrariada por el cambio repentino de


la situación.

“Tal vez…”

Sólo en esto lo lamento por él, por su mala suerte.

De ser posible desearía que se reconciliaran lo más rápido posible.

“Por cierto, ¿qué ibas a decir hace un rato?”

“Aaah sí, cierto, cierto. Por coincidencia, es algo parecido a lo que estaban
hablando ellos dos”.

¿Algo parecido? Al escuchar eso no pude evitar fruncir el ceño.


¿Acaso se me va a declarar? Pensé por un momento en algún lado de mi cabeza,
pero de inmediato negué esa posibilidad.

“Quería preguntarte algo acerca de los exámenes finales”.

Cierto, Ike y Shinohara en un principio estaban hablando de eso.

“¿Qué cosa?”

“Disculpa de antemano si estoy equivocada, te lo preguntaré directamente.


Ayanokouji-kun, ¿fuiste tú quien cambió a Ryuuen-kun?” Dijo ella mirándome no
con malas intenciones, sino con pura curiosidad.

Ahora que recuerdo, desde el momento que la conocí hasta ahora, Hiyori
siempre ha sido bastante perspicaz.

“En cualquier otro caso te diría, “¿a qué te refieres?” pero no creo que sea
necesario”.

Fingir que no sabía nada era inútil, por ende, esa era mi respuesta.

Además de que, si hubiera hecho eso, es seguro que los ojos de Hiyori no la
hubieran dejado convencerse de esa respuesta.

“Es verdad. Aunque pensé que tal vez lo entenderías de inmediato sin necesidad
de dar muchas explicaciones”.

Cambié a Ryuuen.

Cualquier persona no sabría a qué se refiere con esas palabras.

Y las personas que lo harían, serían las que entendieran la situación a la que se
refiere, o en sí, la persona que supuestamente había cambiado.

“¿Por qué lo crees?” Le pregunté a Hiyori, sólo por curiosidad sin intenciones de
desviar el tema.

Además de que la razón que la hacía estar tan convencida, parecía ser
interesante.

“Simplemente ordené las piezas del rompecabezas poco a poco. Ryuuen-kun


desde hace un tiempo que estaba obsesionado con tu clase, pero de un
momento a otro se rindió. La razón parecía ser la rebelión de Ishizaki-kun, pero
no parecía ser suficiente. Me convencí de ello una vez que Ishizaki-kun e Ibuki-
san se alejaron de él”.

Entonces Hiyori estaba uniendo todas esas piezas sin siquiera haberme dado
cuenta. Y así comenzó a sospechar del tema de Ryuuen.
“Lamento mucho si mis palabras te molestan de alguna manera. La verdad es
que estaba muy dudosa de si debería hablar de esto hoy, pensé que tal vez te
molestaría que te dijera algo sobre eso. Pero sin importar cuál sea la verdad, me
doy cuenta a simple vista que no te agrada mucho hablar sobre eso”.

“Entonces aun sabiendo eso, tomaste tu decisión y decidiste hablarlo”.

Esto estaba a un nivel muy diferente de nuestras conversaciones habituales, ella


vino aquí sabiendo eso muy bien.

“Si esto hace que dejemos de ser amigos… estoy segura de que me arrepentiré
mucho. Realmente, definitivamente me arrepentiré de no poder volver a hablar
de esta forma contigo, Ayanokouji-kun”.

En tal caso simplemente bastaba guardarse esa conversación en su interior.


Pero aun así, ella decidió decírmelo, hoy, y en este momento.

“Pero si no me meto más en este asunto, siento que no podremos seguir


avanzando”.

“¿Seguir avanzando?” Al preguntarle eso, Hiyori abrió su boca con sorpresa. Al


parecer le sorprendió lo que ella misma había dicho.

“Sí… la verdad es que, a pesar de haberlo dicho, ni siquiera yo puedo entenderlo


bien”. Dijo Hiyori mostrando un rostro un tanto confundido.

“Disculpa… ¿ya escuchaste de la pelea entre mi clase y la clase B?”

“Sólo el resultado”.

Sólo eso, no sabía ningún otro detalle.

Hiyori aprovechó el momento para cambiar de tema y comenzar la historia de


cómo ganaron.

“Ya veo. Ciertamente es una manera de hacerlo un tanto problemática”.

“Ciertamente la forma de actuar de Ryuuen-kun está llena de problemas. Pero


ahora pienso que tal vez, sea un mal necesario para poder avanzar más en las
clases. ¿Estaré siendo muy hipócrita?”

“Al menos desde mi punto de vista no pienso criticarlos por eso”.

Incluso si no peleaban como era debido, y lo hacían de una forma un tanto sucia,
eso traería la victoria a su clase.

Ese tipo de gente, de vez en cuando, eran necesarias en la sociedad.

Por eso, para un tipo de batalla solitaria y para nada bien vista, se necesitaba
tener una mente fuerte que no pudiera alterarse con facilidad.
“Sin embargo es innegable que usamos un método peligroso. Ahora mismo de
seguro hay estudiantes de la clase B preguntándose acerca de eso. Pero, no
creo que encuentren evidencias concretas de eso. Después de todo, nos
encargamos de las cámaras de seguridad y otras evidencias”.

Esta escuela tenía muchas cámaras de seguridad.

Pero por supuesto no estaban en todos lados. No había cámaras en los baños o
lugares privados como karaokes.

Si la clase de Ichinose se quejara sobre esto, de seguro investigarían, pero no


encontrarían nada. Empezando de esa forma, seguir avanzando sería difícil para
ellos.

“Fue una lucha de 5 victorias. Más bien, ¿no sería correcto llamarlo una victoria
perfecta?”

“¿Perfecta? Yo no lo creo. Esa manera de pelear sólo abrió más agujeros en


nuestra clase”

“En ese caso, ¿dices que pudieron conseguir 6 o más?”

“5 fueron suficientes. No, más bien fueron más de la cuenta. Fue por eso que
tuvimos que usar la estrategia peligrosa de Ryuuen-kun”. Dijo Hiyori recordando
el examen y analizando la situación de aquel momento.

Y luego, me dijo cómo habían ganado.

“Digamos que el hostigamiento a los estudiantes de la clase B fue buena


estrategia, pero hacer cosas que luego tuvieran repercusiones con su salud es
claramente malo. Da igual que se haya usado porque en la clase B hay muchas
personas sobresalientes, no es algo que pueda aceptar”.

Al escuchar eso, tuve la misma impresión que Hiyori. Además de entender que
la chica delante de mis ojos había vivido una vida diferente a la mía. Ella era
alguien parecida a mí, y a la vez no lo era.

Pero su manera de pensar, y argumentación, ciertamente eran parecidas a las


mías.

Por eso mismo es que me pregunté algo al escucharla.

“Hiyori, te enteraste de esa estrategia antes de que Ryuuen la realizara. Pero


incluso así no la detuviste, ¿verdad?”

“¿Crees que él es el tipo de persona que obedecería caso sólo porque se lo diga
yo?”

Puede que lo escuchara si Ishizaki o Ibuki se lo hubieran dicho, pero aun así,
dudo mucho que se hubiera echado para atrás.
Él simplemente se reiría y los ignoraría sin siquiera escuchar lo que los demás
decían.

“Es cierto. ¿Crees que había una manera de detenerlo?”

Pensé que debía saber qué tanto pensó en eso y qué tanto hizo para evitarlo.

Intuitivamente ella de seguro ya lo sabía, y es por eso que estaba aquí hoy.

“Tal vez si alguien similar a él… no, si alguien con habilidades muy superiores a
las de él se lo decía, de seguro se habría detenido”.

De nada serviría que ella se lo dijera, pero si era alguien a quien Ryuuen
reconocía como su igual o superior, entonces cambiaría de opinión. Es por eso
que ella me estaba contando todo esto “a mí”.

“Hiyori, ¿te puedo encargar algo?” Dije, usando una palabra para dejar algo en
claro como casi nunca solía hacerlo.

Después de todo, pensé que con esto era suficiente en este caso. A diferencia
de los otros estudiantes, Hiyori no usaría su posición actual para traerme
problemas. Ella a estas alturas debería de entender bien por qué Ryuuen, la
persona que consideran su líder, no se mete conmigo.

“¿Qué cosa?”

Aun así, Hiyori no cambió su actitud, me miró de la misma forma gentil de


siempre.

“Dile a Ryuuen que, si hubiera sido yo, habría conseguido más de 5 victorias de
una mejor manera”.

“… Sí, recibido. Le haré llegar tu mensaje a como dé lugar”. Dijo ella, uniendo
ambas manos y sonriendo como si me estuviera agradeciendo.

Ryuuen tenía una buena aliada dejando de lado a Ibuki e Ishizaki.

Si tan solo Hiyori pudiera controlar a esas 3 personas, es seguro que se harían
mucho más fuertes.

Y así, la conversación de los exámenes finales con Hiyori terminó.

“Y bueno…”

Lo más normal sería irnos ya a este punto, pero todavía quedaba lo más
importante.

“Si quieres llévatelo y léelo a gusto”.

Ella nuevamente abrió su bolso y sacó un libro.


Originalmente este era el tema principal de la reunión de hoy.

“¿Pero estás segura? Lo tomaste prestado a tu nombre, ¿no?”

“Ya tengo el permiso de mi profesor. No es que esté realmente bien, pero no hay
problema si lo devuelvo a tiempo”.

Bueno no era raro que ella tuviera uno que otro privilegio, después de todo, era
como una estudiante de honor en la biblioteca.

Luego de que leyera un poco el libro y al rato de despedirnos…

“Parece que tendré que cambiar un poco mi evaluación de ella”.

Para mí Hiyori no era más que otra compañera de grado, si exageraba un poco
más, una amiga con los mismos gustos, eso era todo.

Luego de despedirme de Hiyori y que pasara un buen rato más, me reuní con
Kei que había venido al Keyaki Mall.

“… ¿Qué quieres?”

Apareció Kei, pero con solo una palabra cualquiera podría darse cuenta que
estaba de mal humor.

“¿Y si te sientas?”

La incité a que se sentara en la misma silla en la cual Hiyori estaba sentada hace
un rato, pero con solo darle una mirada ella se negó. Era como si estuviera
viendo un lugar sucio.

“Si nos ven tomando algo juntos de seguro saldrán con rumores raros”. Dijo ella
mientras desviaba la mirada.

No creo que un tercero piense que estemos hablando si solo se sienta al lado
mío.

“¿Y qué hay de malo con eso?”

“Es muy malo. No, sería mejor que te dieras cuenta que es muy fácil para la
gente levantar rumores si ven descuidadamente a un chico junto o una chica. En
serio no entiendes nada de nada”.

Es como si estuviera diciendo que yo estaba haciendo eso.

“¿Y bien? ¿Qué es lo querías?”

“Lo siento, se me olvidó. Te volveré a llamar cuando me acuerde”.

Ya había hecho lo que tenía que hacer con Kei.


“Qué rayos pasa con eso, en serio, qué desagradable… ya me voy”.

Ella se dio la vuelta mientras suspiraba con enojo.

Claro que yo simplemente me quedé viéndola sin tratar de detenerla.

El ánimo de Kei era malo, claramente estaba enojada, pero así está bien.

Después de todo, todo lo que hice, fue con el propósito de hacerla enojar.
Capítulo 3
Oveja Perdida
Antes de darme cuenta ya estábamos a un día de empezar abril, era el 30 de
marzo de las vacaciones de primavera.

En estos días no había tenido realmente nada que hacer, por lo que la mayoría
del tiempo la gasté descansando en mi habitación.

Pensé que así recibiría el nuevo año escolar de forma pacífica, pero…

Al levantarme un poco antes de las 8 de la mañana, me di cuenta que había


llegado un mensaje.

El remitente era Ichinose Honami de la clase B. El mensaje decía que quería


verme un día de estos durante las vacaciones.

Por lo que, al parecer no podré disfrutar de forma pacífica lo que queda de


vacaciones.

Al parecer, cualquier día estaba bien, pero quería además que llevara a Horikita.

Guiándome por esas palabras, me daba cuenta que yo era el extra y Horikita la
principal.

De igual forma, podía imaginarme de qué se trataba.

De seguro era sobre los resultados de los exámenes finales. Ella debió reunir
alguna información por su cuenta, pero debería estar queriendo saber cómo
logramos 3 victorias sobre la clase A. Además de otras cosas relacionadas a
cuando empezáramos el segundo año.

Posiblemente todo se trate de la relación de amistad entre nuestra clase y la


clase B.

¿Seguiremos de esa forma o pelearemos como enemigos? De seguro quería


confirmar eso.

La verdad, ambas son mucho más probables que una sola de ellas.

Además, que de ser la segunda, habrá que hablarlo bien durante las vacaciones
de primavera.

“La condición de Ichinose está de vuelta, o tal vez no…”

Pensé en la chica a la cual no había visto ni una sola vez desde que empezamos
las vacaciones de primavera.
¿Acaso los resultados de los exámenes finales todavía están causando estragos
en su interior?

2 victorias y 5 derrotas. Fue una derrota bastante dolorosa para la clase B.

Aunque nosotros volvimos a caer a la clase D, la diferencia de puntos con ellos


no era tan grande.

Cambiar de clases con ellos era más que posible con tan solo un examen
especial más. Por eso, dado que estábamos pisándole los talones, era necesario
hablar.

La relación de cooperación que establecimos desde el primer año, no es para


nada algo malo.

Si seguíamos con esta vaga relación de amistad, su fatiga mental también se


reduciría.

Sin embargo, ya era claro que, en un futuro próximo, esta relación no haría más
que estorbar a ambas clases.

En cuanto alguno de los dos lados se encuentre ya en una brecha demasiado


estrecha, la relación de cooperación sería forzada a romperse.

Sin mencionar que bien podría ser mediante a lo que llamaríamos una “traición”.

En todo caso, para dejar eso bien en claro tanto la clase baja como la clase alta
tenía que establecer pautas para lo que se venía.

Si le cuento a Horikita sobre el mensaje de Ichinose ella de seguro pensará lo


mismo.

Entonces no sería una simple conversación, si no un importante punto de


inflexión para el futuro.

Si Ichinose demuestra que ya no tiene la capacidad para mantener todo esto, es


seguro que Horikita cortará los lazos de inmediato.

Lo único que podía decir ahora mismo, es que tenían que discutir eso a como
diera lugar.

El problema ahora, era el momento. Hoy no tendría problema, pero no sabía si


era lo mismo para Horikita.

Después de todo, el hermano de Horikita se iba a marchar de aquí el 31.

El tiempo que le quedaba era corto, y de seguro estaba dudando en si hablar


con su hermano o no.
Por eso, no sería raro que hoy quisiera hacer las paces por completo con su
hermano.

Claro que, que su hermano esté de acuerdo con eso o que Horikita realmente
vaya a verlo son dos cosas distintas.

En fin, le escribiré a Horikita.

De paso le escribiré, “¿lograste hablar con tu hermano?” y se lo enviaré.

En cuanto le envié el mensaje diciendo de forma resumida que Ichinose quería


verla, ella me respondió en unos cuantos segundos.

“Cuando ella quiera”. Respondió ella. Pero vamos, ¿cómo que cuando quiera?

Me preguntaba qué tipo de respuesta me daría si le dijera que día es mañana,


pero sólo la haría molestar así que me contuve.

Además, con su respuesta se me hacía más que claro que quería ignorar
cualquier tipo de cosa que tuviera que ver con su hermano.

“¿Entonces qué tal el 2 de abril?” De cualquier forma, traté de ser considerado y


dejar libre el día de hoy y mañana.

“Hoy estoy libre”. Respondió ella, resumiendo en un solo mensaje, que no tenía
que ser considerado con nada.

Es difícil hacer que se encuentre con su hermano, pero podría simplemente


responder que hoy tenía planes.

Aunque lo más difícil ahora, era hacerle creer que realmente tenía planes hoy.

“Cierto. Sería mejor solucionar todo este asunto lo más rápido posible”. Si me
ponía en contra sólo sería más complicado luego, por lo que por el momento
decidí seguirle el juego.

Luego de la reunión, bien podría quedar tiempo para que hable con su hermano
por la tarde.

“… No, ni yo me lo creo”. Era demasiado seguro que estos hermanos no se


reunirían si no hasta mañana cuando él se marchara.

Le envié mi respuesta a Horikita y decidí ir con ella a ver a Ichinose el día de


hoy.

Luego de eso, ambos nos encontraríamos con Ichinose en una cafetería en el


segundo piso del Keyaki Mall.
1
Con la llegada de abril, la temperatura del ambiente había comenzado a subir.

Ahora eran las 9:30 de la mañana. Decidimos hacer la reunión lo más pronto
posible dado que el pronóstico del tiempo había declarado una fuerte lluvia luego
del medio día.

Como todavía tenía algo de tiempo, fui caminando lentamente por el centro
comercial, tomando un ascensor.

En este lugar solía encontrarme con varios estudiantes, más ahora que
estábamos en vacaciones.

Con esto me refiero a por supuesto, compañeros de clase, al igual que otros
estudiantes de segundo año.

Aunque no era el tipo de persona que tenía muchos conocidos, si caminaba un


poco por el exterior, casi siempre me encontraba con una o dos personas
conocidas.

Sin embargo, ya para esta fecha no veía a ninguno de los estudiantes graduados.

Ya el primer día de abril los únicos que se verían, era a los estudiantes de
segundo año, por lo que todo estará tranquilo por un tiempo.

Mientras pensaba en eso, me topé con una compañera de grado que había
parado el ascensor también.

“Otra vez, tú…”

Dijo ella con una cara de desagrado y tomando mayor distancia de mí. Se trataba
de Ibuki Mio, de la clase D de primer año.

De alguna manera me imagino a Ibuki tramando una que otra cosa durante estas
largas vacaciones.

Y de seguro ella también se estaba imaginando lo mismo de mí.

Además de que, como estábamos en el ascensor, estábamos ambos solos en


un espacio cerrado.

“Estamos en vacaciones, no es nada raro que nos encontremos por aquí”.

“Tienes un punto, sí… pero no quiero seguir involucrándome contigo”.

“Lo sé”.
Después de todo, ella demostró un tremendo desagrado la última vez, cuando
fue a mi habitación.

Ella de seguro nunca habría ido si no fuera porque Ishizaki la llevó a la fuerza.

Aunque me odiara, ella era el tipo de persona que haría un pequeño sacrificio
por Ryuuen.

Esa era su forma de demostrar que aun con la personalidad que tenía Ryuuen,
él era alguien indispensable para su clase.

Dado que no tenía más opción que subir, entré al ascensor donde estaba Ibuki.

“Sólo espero que no se vuelva a detener…”

“Ah sí, eso ocurrió la última vez”.

Eso había sido en las vacaciones de verano. El ascensor en el que estaba con
Ibuki se había detenido y nos quedamos encerrados como consecuencia.

Estábamos alerta por estar en una situación similar, pero ya no creía realmente
que pudiera volver a pasar.

Al llegar al primer piso, Ibuki se apresuró a bajar.

Al parecer ella también se dirigía al centro comercial.

“¿Estás segura de esto? Ya sabes, caminar a mi lado”. Le pregunté eso dado


que bien podía adelantar el paso para alejarse de mí.

“¿Por qué yo? Más bien tú deberías caminar más rápido y alejarte”.

No quería estar cerca de mí, pero tampoco quería ser ella quien se retirara.

Debo decir que esa parte de ella nunca cambia, esa parte que odia perder.

Sin embargo, también me parecía raro que tuviera que ser yo el que se alejara.

Yo no tenía problemas realmente con estar cerca de Ibuki, además de que, si


apresuraba el paso, llegaría más temprano de lo planeado al centro comercial.
Sin mencionar el desperdicio de esfuerzo.

Al final, ambos seguimos caminando al mismo ritmo.

Estábamos a 5 minutos de los dormitorios, por lo que pronto nos separaríamos


de todas formas.

“Qué bien que Ryuuen haya vuelto, ¿no?”

“Cállate, cierra la boca, no me hables”.


Este ambiente no permitía ni siquiera una charla corta. En fin, abandonaré el plan
de decir cosas sin sentido.

Dado que íbamos juntos, decidí seguirle el ritmo y cerrar la boca.

Y así seguimos caminando en una atmosfera medio tensa.

“¡Hey Ibuki, espera ahí!”

Al poco tiempo después, una gran voz llegó desde nuestra espalda.

Era una voz conocida, la voz de Ishizaki de la clase D de primer año.

Una de las personas más cercanas a Ryuuen y el que solía actuar bastante junto
a Ibuki.

Dado que a menudo se involucraba conmigo, últimamente habíamos podido


hablar con normalidad.

Ibuki no se giró, ni cambió su expresión, y sólo siguió caminando. Tal vez no lo


escuchó… qué va, claro que lo escuchó.

“¡Oye espera! ¡Que esperes dije!”

“¿Quieres callarte? No grites de esa forma”.

“Lo hago porque no respondes…. ¿Oh? ¿Ayanokouji? Hey, no me digas que


ustedes están, ya saben… ¿en una cita?” Dijo Ishizaki quien venía siguiéndonos,
y al escuchar eso Ibuki casi de inmediato lo pateó en la rodilla.

“¡Agg! ¡Qué mierda haces!”

“Tú bien sabes la razón. Más bien, aléjate, me estás sofocando”.

“Oh vamos, qué importa. Si igual en un rato tenemos planeado reunirnos todos”.

Al parecer este encuentro entre ambos ya estaba programado.

“¿Y Ryuuen también?”

“Pero por supuesto… ah… no…” Al responder mi pregunta sin darse cuenta,
Ishizaki se quedó con la boca abierta por haber dicho algo que no debía.

“Idiota”.

Por alguna razón, ambos iban a encontrarse aquí, pero por separado.

Pero no era tan difícil imaginar la razón si el nombre de Ryuuen estaba


involucrado.
Por eso se iban a encontrar en secreto.

“B-Bueno ¿qué más da? Igual no sirve de nada ocultárselo a Ayanokouji”. Trató
de excusarse, pero Ibuki no dejó de ver a Ishizaki con la misma expresión ruda
de siempre.

“Como que no. Si al final, nunca subiremos de clase si no derrotamos a este tipo
primero”.

“Pues sí, pero…”

No era una conversación que debieran estar teniendo conmigo aquí cerca.

No creía completamente en el regreso de Ryuuen, pero tampoco creo que haya


problemas si estos dos se quedan así como si nada.

Y la razón por la que se iban a reunir en secreto, posiblemente se debía a que


nadie todavía sabía del regreso de Ryuuen.

Ryuuen ya había renunciado a su cargo, por lo que era difícil que sus
compañeros de clase lo volvieran a reconocer.

Además de que Ishizaki había sido reconocido como el hombre que derrotó a
Ryuuen.

“Oye, Ayanokouji”.

“¿Hmm?”

En medio de mis pensamientos, Ishizaki me habló.

“Se me ocurrió la forma más efectiva de subir a la clase A, ¿no quieres


unírtenos?” Fueron unas palabras tan poco esperadas que no sabía cómo
responder.

“Veamos, de qué se trata esa forma efectiva”.

¡Bien! Dijo Ishizaki dándose un pequeño golpe en su pecho.

“Deberías venir a nuestra clase. Si lo haces nuestro ascenso a la clase A estaría


asegurado”.

“¿Qué? Tú… ¿qué estás diciendo?”

“Piénsalo bien. Si Ayanokouji une fuerzas con Ryuuen no habrá quien los
derrote. Podríamos derrotar a Ichinose, incluso a Sakayanagi”.

Al parecer esa era la forma más efectiva que se le ocurrió a Ishizaki.

Nah, nah, qué va… negó Ibuki.


Pero, si uno fuerzas con Ryuuen…

“No suena tan mal”.

“Oye… ¿lo dices en serio?” Dijo Ibuki mirándome de forma desagradable.

“¿Verdad que sí? Te daríamos la bienvenida si te unes a nosotros. Además,


aunque no lo parezca, tienes buena compatibilidad con Ryuuen. Hasta a Albert
le agradas, la vez pasada cuando hablamos sobre ti estaba bastante
emocionado”.

Era la primera vez que escuchaba que le agradaba a Yamada Albert.

Es más, ¿realmente podía interpretar eso como si realmente le agradara?

Aunque nunca me he involucrado con él, el único caso sería el de la terraza aquel
día. ¿Tal vez le habré agradado luego de la pelea de ese día? Aunque en lo
personal, creo que quiere buscar la oportunidad de desquitarse.

“¿En serio eso fue lo que dijo él?” Preguntó Ibuki.

“Lo pude sentir en la piel, es la intuición de un hombre”.

Qué intuición tan poco confiable.

Si voy a la clase de Ryuuen es bastante probable que termine tratando de


golpearme.

En todo caso, eso fue lo que Ishizaki pensó por sí mismo y lo emocionó a sí
mismo de la misma forma.

Recibí la oferta con gratitud y respondí de forma seria.

“La verdad es que es imposible. Además, ¿qué haríamos con los 20 millones de
puntos que se necesita para cambiar de clase?”

Aunque le ganaron a la clase B en los exámenes finales, no tenían tantos puntos


ahorrados.

“Pues, ya sabes, Ryuuen-san hará algo al respecto”.

“No hay forma de que pueda hacer algo al respecto, idiota”.

“¿Tú crees? Yo la verdad creo que Ryuuen-san nos ayudaría si es para que
Ayanokouji se nos una”.

“Pues yo no creo que te preste ni un solo punto”.

En eso estaba de acuerdo con Ibuki. Ryuuen no era ese tipo de hombre que se
dejaba llevar.
Él no trataría de llegar a la clase A pidiendo mi ayuda. Su orgullo como hombre
se lo impediría.

No, para ser más preciso, no quería parecer un hombre que se daba por vencido
fácilmente.

“Tenerlo de enemigo me resulta más divertido que como aliado, así que por
ahora no”.

Ese punto hubiera sido importante antes del problema de los puntos privados.

“Ya veo. Mierda, y eso que era un buen plan”.

“Tú también eres igual de raro que él. ¿Realmente es tan divertido estar de
enemigos?” Dijo Ibuki riéndose entre dientes, aunque no me miró ni una sola
vez.

“Por supuesto. Me divierte imaginar qué es lo que va a hacer”. Dije de forma


honesta, e Ibuki simplemente desvió la mirada con desagrado.

No me gusta llamar la atención, eso es claro, pero bien podría darle una
revancha a Ryuuen.

Pero para eso, primero necesitaba que él se desarrollara un poco más.

Necesito que me muestre que puede ganar en contra de Horikita, Ichinose y


Sakayanagi.

Así en poco tiempo, fuimos llegando al centro comercial.

“Lo siento Ayanokouji, hasta aquí te podemos acompañar. Sería algo molesto
que alguien nos viera contigo”.

No sabía dónde iban a reunirse, pero el hecho de intercambiar opiniones era algo
bueno.

Decidí aceptar sin peros la considerada despedida de Ishizaki.

Luego de separarme de Ishizaki e Ibuki en la entrada del centro comercial, entré


por otra puerta.

La verdad nunca pensé, ni en mis sueños, que llegaría a hablar hasta este punto
con Ishizaki. Mientras que con Ibuki sentí que nuestra relación ha ido decayendo
a comparación al primer año, pero eso es otro cambio.

“Ha pasado un año…”

El entorno a mi alrededor cambió mucho en el transcurso de un año.


Ahora soy capaz de hablar de frente con personas de otras clases como Ryuuen
o Sakayanagi.

Por supuesto, también había muchos otros.

Sólo un año, pero un año es un año.

La prueba indiscutible, es el pasar de ese tiempo.

Ahora podía experimentar claramente el pasar del tiempo, algo de lo que no


entendía ni me daba cuenta cuando era un niño.

En estos momentos, recordaba a mi yo en estos tiempos del año pasado.

Era el día antes de la ceremonia de ingreso a la institución de educación


avanzada, en ese momento disfruté de un momento de tranquilidad sin que nadie
se diera cuenta. No sentía nada, y no llamaba la atención. En especial… la de
ese hombre, pues si se hubiese dado cuenta de eso en aquel momento, de
seguro habría interferido.

Varios fueron los factores que me ayudaron ese día. Por ejemplo, si hubiera
estado cerca de mí ese día, de seguro se habría dado cuenta.

Pero dado que es un hombre ocupado jamás regresaba a casa. Tenía un


vigilante sobre mí, un empleado, pero vivía el 70 o 80% del año en un hotel.

Yo también, aunque estaba en casa, no es como si sintiera algún tipo de


familiaridad con ese lugar.

Dado que viví la mitad de mi vida en la habitación blanca, esa cosa sólo era como
un lugar temporal. No tenía ninguna diferencia a un hotel.

“La habitación blanca…” Él aún no se ha rendido. No, más bien, debe estar
teniendo una fuerte resistencia.

Es más que claro que en este año ha reiniciado las actividades sin yo siquiera
saberlo.

Mientras yo sea necesario para la habitación blanca, algún día tendré que volver
allí.

Este problema vendrá en 2 años más adelante como mucho. Por supuesto, si es
que puedo sobrevivir 2 años más en esta escuela…

De todas formas, no es muy bueno estar pensando en eso por ahora.

Nada cambia el hecho de que estaba en una situación en la cual ni siquiera me


hubiera imaginado hace un año.

Además de tener recuerdos invaluables ya grabados fuertemente en mí.


Llegué a la entrada norte del centro comercial.

La mayoría de puestos estaban abiertos a las 10 de la mañana en días regulares,


pero como estábamos en vacaciones, ahora abrían desde las 9.

La cafetería del segundo piso donde nos íbamos a encontrar también abre a las
9.

“Esto es realmente gratificante…”

Actuar como yo quiera y disfrutar de una vida estudiantil libremente. Convivir y


conversar con compañeros de clase, e incluso arreglar reuniones como la de
hoy.

De alguna manera todavía se sentía poco realista.

Pero si dijera que todavía no estaba complacido, sería mentira.

Claro, había un montón de cosas problemáticas junto a esta vida estudiantil. Pero
estas también han cambiado mucho con el paso de los meses.

Por ejemplo, ya he aceptado bastante bien la presencia de la chica que estaba


acercándose justo por delante de mí.

Sí… el yo de ahora, era como otra persona comparada al yo del “exterior”.


Llegado a ese punto me detuve de pensar en eso, y comencé a pensar en otra
cosa.

Ahora trataré de concentrarme en el punto de la reunión de hoy.

“Veo que llegaste más rápido que yo, y eso que todavía faltan 20 minutos. ¿Tan
aburrido estabas?” Dijo Horikita mirando sin sentido a su teléfono. Por supuesto,
hoy ella usaba ropa casual.

“Lo mismo puedo decir de ti que llegaste esos 20 minutos antes”.

Esto prueba que ninguno de los dos tenía algo realmente importante que hacer
en estas vacaciones.

Ninguno de los dos hablamos de nada en especial, por lo que nos dirigimos al
lugar de la reunión.

“Parece que también sabes de qué tratará la reunión de hoy”. Dijo ella, viendo
que no le dije nada en especial.

Por supuesto, es correcto. Pero trataré de hacerme el tonto.

“¿Qué quieres decir?”

“¿Realmente piensas hacerte el tonto aun sabiéndolo ya?”


“No, la verdad no sé de qué estás hablando. ¿De qué hablarás con Ichinose?”
Pensé que podía hacerla hablar si hacía que sacara ese tema a la fuerza, pero…

“¿Realmente no lo sabes? Si lo sabes y sólo te estás haciendo el tonto no te lo


perdonaré, ¿sabes?”

“… Bien. Cálmate”.

Viendo como Horikita me veía como si estuviera a punto de morderme, detuve


mi fachada.

“Hasta cierto punto creo que sé. Tampoco es que sea algo tan complicado de
adivinar”.

“Si no es tan complicado de entender como dices, entonces sería mejor que
dejarás de actuar como si no lo supieras”. Respondió ella de forma totalmente
natural.

Supongo que no hay ningún sentido en hacer que le estalle la cabeza a Horikita,
y menos aquí.

“¿Acaso me estabas probando?”

“Lo estás pensando demasiado”.

“¿De verdad lo crees?” Dijo ella adivinando la razón de mis palabras… aunque
no, más que eso, era que ella ahora entendía mi manera de actuar.

Este tipo de trucos superficiales ya no servían con Horikita.

Dejar que siga descifrando mi forma de ser no es bueno, así que dejé el tema.

“Olvida eso… ya llegamos”. Cambié de inmediato el tema dado que vi a Ichinose


esperando en la entrada de la cafetería.

Todavía faltaban como 10 minutos, por lo que Ichinose también había venido
temprano.

“Puede que ella también tenga mucho tiempo libre al igual que nosotros”.

No parecía que acabara de llegar, pero tampoco sabía cuánto tiempo


exactamente llevaba ahí.

“Como crees. En su caso sólo es demasiada respetuosa, o muy responsable,


mejor dicho. Supongo que no quería hacernos esperar”.

Si eso dice Horikita entonces supongo que eso será.

“Supongo que esa es la evaluación que tienes de Ichinose”.


“Sí, aunque al principio pensé que sólo era una hipócrita actuando como una
buena chica”. Dijo ella, diciendo lo que pensaba sin pelos en la lengua, de la
forma más directa posible.

“Pero ya en este año, tuve que cambiar mi perspectiva. Ella es una persona
amable y honesta en toda regla”.

Aunque había muchas personas que actuaban como buenas personas, eran
muy pocas las que realmente lo eran.

La gran mayoría, hasta cierto grado, tiene su corazón podrido de una manera u
otra. Pero no había duda que de entre todos, Ichinose era una verdadera buena
persona.

“Me pregunto ¿qué vida habrá tenido para comportarse de esa manera?”

Eso es lo que me pregunto yo también.

“El problema es, que ser una buena persona para ella es un arma, pero a la vez
su más grande debilidad”. Dijo Horikita y luego suspiró mientras nos íbamos
acercando a ella.

Mientras más buena persona seas, más fácil será que una mala persona te use.

“¿Crees que no debería ser tan buena persona?”

“Si vives solo por tu cuenta en una montaña no creo que haya problema. Pero
en este mundo competitivo, lo mejor es deshacerse de ese tipo de debilidades lo
más rápido posible”.

“Ya veo”.

“Pero en su caso, seguro permanecerá tal y como está hasta el final”.

Incluso en desventaja, Ichinose seguiría siendo una persona amable, eso es lo


que Horikita quería decir.

“Pero en lo personal creo que Ichinose sabe distinguir correctamente el bien del
mal. Si algo pone en peligro a sus compañeros de clase, de seguro estaría
preparada para hacer lo que sea por ellos”.

“Eso espero. De cualquier forma, ya dejemos ese tema”.

Horikita cambió a una expresión seria para poder empezar la reunión que íbamos
a tener.

Dejó de hablarme y luego saludó a Ichinose.

“Ichinose-san, llegaste rápido. ¿Acaso te hicimos esperar?”


“Buenos días Horikita-san, Ayanokouji-kun. No, no, para nada. Yo también justo
acabo de llegar”. Respondió ella con la frase que cualquiera diría en este caso.
Pero, ¿realmente habrá llegado hace poco?

De cualquier forma, fuimos recibidos por la misma sonrisa de siempre de


Ichinose en su ropa casual.

“Será fácil conseguir asientos si llegamos a esta hora”. Dado que era temprano,
los estudiantes estaban dispersos, sentados en cualquier parte.

“Bien, bien, vamos, pidan lo que quieran. Yo invito hoy”. Dijo ella dando un
pequeño golpe en su propio pecho y ofreciéndose a pagar todo.

“No creo que eso sea… uno de sus materiales de negociación, ¿no?”

Horikita por un momento se puso alerta, pues ya hubo un caso en el que intentó
sacar ventaja de esta manera anteriormente.

“Ella no es tú, así que no lo creo”.

“Aunque no me gusta la forma en que lo dices… supongo que tienes razón”.

Tal y como ella lo había dicho hace un rato, estábamos tratando con Ichinose.

Era poco probable que hiciera algo como eso ahora.

Y de cualquier forma, si intentará tomar alguna ventaja, de seguro Horikita haría


algo para recuperarla.

“En ese caso te tomaré la palabra”.

“Por supuesto. Adelante Horikita-san, pide lo que quieras”.

Alentada de esa forma por Ichinose, Horikita ordenó primero.

En mi caso, había algo que todavía me preocupaba por lo que decidí hablarle a
Ichinose en voz baja y por eso me le acerqué.

Hoy como siempre, aunque un poco más leve, tenía un fresco olor a naranja.

“Ichinose, ¿todo bien con tus puntos privados?”

Estaba agradecido de que quisiera invitarnos algo, pero ahora, dado que alguien
de la clase B iba a ser expulsado, los puntos de clase deberían ser 0.

Antes de llamarnos, de seguro ella pensó en el dinero que iba a usar para
invitarnos algo, pero de todas formas me preocupaban los puntos que le
quedaban.
“Ah, sí. No hay problema. Luego de pagar todo lo de hoy deberían quedar unos
3000 puntos todavía, no creo que haya problema”.

Pronto comenzará abril.

Si realmente le quedaba esa cantidad entonces debería poder arreglárselas sin


problemas.

Aun así, sus puntos privados debieron llegar a 0.

Al darse cuenta del motivo de mi pregunta, Ichinose agregó.

“¿Conoces a Nishikawa-san de la clase A? Bueno, le vendí un secador de pelo.


Le dije que necesitaba el dinero a como diera lugar para poder pasar este mes.
Los demás chicos de la clase están trabajando duro de la misma forma”.

Aunque el sistema de la escuela te dé objetos de forma gratuita para poder


sobrevivir en el peor de los casos, todavía había momentos en los que se
necesitaba tener un poco de ahorros.

Si este tipo de intercambios son más efectivos y baratos que comprar en una
tienda, entonces está bien.

“Por eso no te preocupes Ayanokouji-kun. Tú también pide lo que quieras,


vamos, vamos”. Dijo Ichinose alegremente, poniéndose detrás de mí y dándome
un par de golpecitos en la espalda.

Sí, era cierto que, si yo era el único que me preocupaba por eso aquí, eso no le
alegraría mucho.

Luego de que Horikita terminara de ordenar, decidí ordenar solo un café.

Los 3 después de eso tomamos nuestras órdenes en la recepción y nos movimos


hasta una mesa en la esquina de la cafetería.

Era mejor hablar de todo ahora ya que no había muchos estudiantes. Las dos de
seguro pensaban en lo mismo, pero Horikita fue la primera en hablar.

“¿Esta reunión es para hablar de los exámenes finales, o de lo que pasará a


partir de abril?”

Horikita ya parecía haber predicho el tema que Ichinose quería hablar hoy, sin
siquiera habérmelo preguntado.

“Ajaja, correcto. Es sobre eso”. Respondió Ichinose en medio de una risa, pero
su mirada era seria.

Parecía entender bien que esta reunión no sería para discutir algo sencillo o a la
ligera.
“¿Acaso no debí llamarlos?”

“Claro que no. Yo también pensé que esto sería necesario en algún momento,
de hecho, te agradezco que nos hayas llamado. Es difícil arreglar una cita con
alguien tan popular como tú”.

“Claro que no, es más, estoy sumamente aburrida en estas vacaciones así que
llámenme cuando quieran”. Respondió ella con una pequeña sonrisa.

Pero a través de esa expresión, vi como si quisiera ocultar algo doloroso.

Es decir, como si realmente tuviera planes, pero a la vez como si los hubiera
rechazado todos.

La causa de eso, por supuesto, Horikita también ya debía saberla.

“Parece que tuviste problemas en los exámenes finales”. Le dije a Ichinose.


Posiblemente este no era un tema muy adecuado para cambiar la conversación,
pero aun así, decidí hacerlo.

Incluso si hacíamos todo lo posible para no tocar esa herida, teníamos que
tocarlo tarde o temprano.

En ese caso, lo mejor era hacerlo de la forma más rápida para que solo duela al
principio.

Aunque Horikita me miró de forma ruda. Posiblemente ella planeaba irse por las
ramas un poco más.

Sin embargo, al darse cuenta del cambio de conversación de inmediato cambió


otra vez de expresión.

“Aaah… sí, perdimos completamente. La verdad no nos esperábamos esa


estrategia de Ryuuen-kun”. Dijo ella, recordando eso mientras suspiraba y giraba
su cabeza de derecha a izquierda.

Ella sintió una pequeña frustración, pero de inmediato suspiró para separar esos
sentimientos de ella.

“Yo realmente no conozco los detalles. ¿Cuál fue la causa?”

“La causa es clara, obviamente fue por mi culpa”. Ichinose por supuesto, nunca
culpó a ninguno de sus compañeros de clase.

Por lo que como era obvio, respondió que todo se debió a ella quien era la líder
en el examen.

“No he visto los resultados del examen de forma directa, pero se me hace difícil
pensar que tú cometas un gran error”.
“Me estimas demasiado. La verdad todo fue culpa mía por entrar en pánico en
un momento como ese…”

Horikita quiso alabarla, pero Ichinose siguió culpándose.

Dejando eso de lado, era obvio que había estado en pánico.

Ella había estado preocupada desde que Ryuuen se volvió a mostrar, así que
supongo que arrastró esa preocupación hasta el examen.

“Había pensado que el líder era Kaneda-kun, eso fue lo primero que alteró todo”.

“No es de extrañar que pensaras eso. Después de todo él fue una vez el líder de
la clase, además de que un estudiante sin puntos de protección no actuaría como
líder. Eso era lo que todos pensábamos a excepción de Ryuuen-kun”.

Exacto. Ni siquiera yo o Sakayanagi pensamos que Ryuuen volvería a aparecer.

Por eso era entendible que Ichinose se sorprendiera por eso.

Si perdía, sería expulsado. Ryuuen era el único que daría una batalla con eso en
juego.

“Por eso, nada cambia el hecho de que la culpa la tengo yo por no mantener la
compostura al final”.

Ella pensó que sería Kaneda, pero al final fue Ryuuen quien apareció.

Si eso no tuviera que ver conmigo me compadecería de ella. Pero las cosas que
un líder podía hacer eran limitadas.

Sin embargo, en ese examen donde la comunicación entre clases estaba


permitida, él logró acorralar bien a Ichinose con una sola conversación.

“Escuché que su clase dio una buena pelea contra la clase A”. Volviendo al tema,
Ichinose nos elogió.

El problema aquí ahora, es que fue Ichinose quien me pidió pelear contra la clase
A. Por supuesto, Horikita no sabía eso. Horikita me dio instrucciones para que
peleará contra la clase D. Pero como resultado, al final eso no fue posible, o al
menos eso tiene entendido ella.

Dependiendo de cómo avance esto, podrían salir más contradicciones por lo que
eso sería un problema.

De cierta forma fue buena idea reunirme con Ichinose de esta manera por
adelantado. El problema es que había hecho como si hubiera sido Horikita quien
me pidió que peleara contra la clase A.
Ichinose pensó que fueron las ordenes de Horikita las que me hicieron pelear
contra la clase A.

Mientras que Horikita piensa que no tuve más remedio que hacerlo porque perdí
en la lotería de selección. Ahora me encontraba en una etapa en la que ninguna
de las dos sabía la verdad.

Y no es como si pudiera tapar la conversación a la fuerza para que no se dieran


cuenta.

Hubiera arreglado esto de antemano como siempre solía hacerlo. O al menos


actuar de manera precavida para que no notaran nada.

Pero en un pequeño momento de reflexión, decidí abandonar esa idea.

Entonces, ¿por qué no hago nada ya llegado a este momento? Eso es porque
quiero ver qué tanto ha crecido Horikita.

“Una derrota es una derrota, y eso que te molesté tanto para que me dieras la
oportunidad de pelear contra ellos. Si la clase B se hubiera enfrentado a la A, el
resultado pudo haber sido diferente”.

Al escuchar esas palabras casuales salir de mi boca, Horikita me miró por un


instante.

Por supuesto, ni siquiera era necesario pensar en la razón de esa mirada.

“¿A qué te refieres con que te dejó pelear contra la clase A?” Eso es lo que su
mirada estaba diciendo.

Pero ella no dijo nada al verme hablar de esa manera tan casual.

Además, que su mirada fue tan natural que ni siquiera Ichinose sospecharía de
ella solo por haberme visto un instante.

Sin mencionar que era la prueba de que entendía que eso no era lo importante
ahora mismo.

La Horikita de hace un año tal vez me hubiera dicho ahora mismo, “¿qué quieres
decir?”, haciendo dudar incluso a Ichinose.

Si no se hubiera dado cuenta de eso, seguramente habría hecho preocupar a


Ichinose.

Su nivel de comprensión y juicio han aumentado bastante. O mejor dicho, se han


esclarecido bien.

Con Horikita guardando silencio, ahora Ichinose solo pensaría en “lo sabía, fue
Horikita” y nada más.
Con esto también puedo disminuir mi presencia en las otras clases.

“Al final, por culpa de mi deseo egoísta, fue que los involucré en una dura pelea”.
Dijo Horikita disculpándose mientras me seguía el juego.

“Eso también es nuestra responsabilidad, no necesitas disculparte Horikita-san”.

La batalla contra la clase D con quienes claramente no tenían buena


compatibilidad terminó en 2 victorias para la clase B y 5 derrotas.

Debido a eso, la clase B perdió todos sus puntos de clase.

“Después de todo, nosotros hicimos todo. Quien ganó la lotería fue Kaneda-kun
de la clase D, y él seleccionó a la clase B. En eso no hay problema”.

Es cierto. Si solo miramos el resultado es tal y como ella dice.

La batalla entre la clase B y D era inevitable.

“Por eso no es algo de lo que ustedes deban preocuparse… yo… tendría que
haber hecho una mejor estrategia para ganar. Ahora estoy muy consciente de
eso”. Eran palabras alentadoras, pero no sabía hasta qué punto eran reales.

“Si te parece bien, ¿podrían decirme qué tipo de evento y estrategia fue la que
ustedes usaron? Por supuesto, a cambio nosotros te daremos más detalles de
lo que hicimos”.

De seguro Horikita ya sabía más o menos de qué se trataba por los rumores que
todos decían.

Pero lo que pasó entre ambos líderes es algo que solo ellos saben.

En respuesta a eso, Ichinose asintió.

Ella dijo el evento que ellos eligieron, y el evento que Ryuuen y los demás
eligieron. Luego el orden de los eventos y la forma en la que Ryuuen atacó.

Y al final, los puntos en los que ganaron, y los puntos que los hicieron perder.

La clase D de Ryuuen usó un sistema táctico en el que todos los eventos recaían
en algún tipo de evento de artes marciales. Lo cual por supuesto era algo
bastante desfavorable para la clase B.

“No me esperaba menos de él. Fue una manera de pelear precisa para que ellos
pudieran resurgir”.

“Supongo que ni siquiera nosotros podríamos haberles hecho frente”.


“Cierto… de los chicos, posiblemente el único que hubiera podido conseguir una
victoria sería Sudou-kun. Aunque no, más bien, eso también sería complicado
frente a Yamada-kun”.

Si Koenji se pusiera serio en ese tema entraría a la lista, pero Horikita no lo dijo.

De las chicas, dejando de lado a Horikita, no parecía haber alguna otra de


confianza.

“Supongo que la estrategia de Ryuuen-kun podría derrotar incluso a la clase A”.

“En eso estoy de acuerdo”.

La suerte de una buena lotería. Si Ryuuen tiene un poco de suerte, es posible


que derrote a cualquier clase.

Pero en general, la tasa de victoria era más alta cuando se enfrentaba a la clase
B.

Esa era evidencia de que los tuvo en la mira desde el principio.

“Pero la clase B eligió muchos más eventos. ¿Por qué sólo consiguieron 2
victorias entonces?”

La estrategia de Ryuuen era buena, pero al mismo tiempo dependía mucho de


la suerte.

Ichinose tuvo cierto porcentaje de victoria dado que eligieron 4 de los eventos
que la clase B había seleccionado.

“… Sí”.

Por supuesto Horikita no sabía nada al respecto, ni siquiera yo sabía cómo


terminó así por lo que preguntamos…

¿La estrategia de Ryuuen, exactamente de qué se trató? Eso era, tener a los
estudiantes preocupados, sin darles tiempo de descansar.

Él hizo que las personas de su clase se acercaran a la fuerza a ellos y los


estresaran.

Y como era obvio, el día de la prueba muchos faltaron por estar cansados o
enfermos debido al estrés.

Pero, luego de que Ichinose nos dijera todo eso, ella agregó al final.

“Perdimos en los eventos que yo misma elegí, y no fui capaz de responder de


forma ingeniosa a su estrategia. Es mi culpa como líder”. Dijo ella, culpándose
directamente a ella misma y no a Ryuuen.
“Entonces la razón de la enfermedad y el cansancio de varios estudiantes…”

Por supuesto, Horikita ya sabía muy bien que esa era la estrategia de Ryuuen.

“Es sin duda obra de Ryuuen-kun. Algunos chicos enfermos me dijeron que el
día anterior al examen Ishizaki-kun y otros chicos los molestaron en el karaoke”.

Así que el karaoke. Ese era uno de los pocos lugares donde los estudiantes no
eran vigilados.

Los encontraron ahí y los molestaron de alguna manera. La verdad fue una
estrategia bastante arriesgada.

“Y no crees que debiste poner una queja a la escuela?”

Ya había pasado una semana desde que terminó el examen final. Por eso, como
es obvio ya la comida y bebidas estaban digeridas. Incluso si había evidencia de
compras de alguna medicina en la farmacia, nada aseguraba que fueran usadas
en los chicos de la clase B.

“Presentar una queja no es nada malo. Incluso si no pudieron hacer nada esta
vez, la escuela revisará más el caso al próxima. Por supuesto, si vuelven a hacer
una locura como esa, pueden terminar expulsados”.

Si resultaba ser verdad sería un caso importante y la escuela no se quedaría de


brazos cruzados.

“Es posible. Pero de todas formas, no voy a reportar nada sobre esto”.

Pero Ichinose negó esa posibilidad. Ya había pasado una semana desde el
examen, y era claro que sus compañeros de clase debieron haberle pedido
muchas veces que reportaran esto. Pero aun así había decidido no hacerlo.

“¿Por qué? ¿Realmente quieres quedarte con los brazos cruzados? Aunque
estos métodos se vean como una pequeñez, son capaces de alterar
enormemente los resultados de los exámenes”. Dijo Horikita, quien alegaba que
debía haber algún tipo de evidencia en alguna parte.

Dependiendo de la gravedad del caso, esto no terminaría en una simple


suspensión.

Pero mientras más tiempo pase más difícil será reportar esto.

“Si quieres, yo te puedo ayudar”.

Horikita no era de las que se quedaban con los brazos cruzados en estos casos,
y por eso es que se lo estaba exigiendo a Ichinose.
“Muchas gracias Horikita-san. Pero no creo que vaya a reportar esto. No tengo
ninguna prueba, además… quiero concentrarme en ser una mejor líder ahora
mismo”.

“¿A qué te refieres?” Preguntó Horikita.

“La verdad es que me considero alguien con suerte”.

Hasta hace unos momentos Ichinose tenía una expresión depresiva, pero poco
a poco la energía iba regresando a sus ojos.

Como si un engranaje roto tratará de girar a la fuerza.

“Si algo como esto hubiera ocurrido al final del segundo año, o en algún momento
importante de tercer año, no sabría cuánto daño hubiéramos recibido. Pero al
menos por el momento estamos bien”. Asintió ella mirándonos con sus
energéticos ojos.

En este momento de seguro yo era el único que podía ver un brillo en sus ojos.

“La derrota de esta vez decidimos tomarla entre todos los estudiantes de la clase,
y la usaremos para la próxima ocasión”.

“Ya veo. En ese caso, como persona de otra clase, no tengo por qué decir nada
más”.

“Cierto”.

Por el momento así iba terminando la conversación sobre las clases B y D.

Ya escuchamos sobre el examen entre Ichinose y Ryuuen así que ahora era
nuestro turno.

Pero antes de eso, Horikita me dio un vistazo para confirmarlo.

Básicamente estaba diciendo, “tú eras el líder, ¿por qué no lo dices tú?”

Por eso como líder al igual que Ichinose, le dije los eventos que teníamos al igual
que el resultado. Aunque lo dije de forma resumida y discreta claramente.

Qué tipo de evento era, cómo ganamos y cómo perdimos.

Por supuesto, no le dije sobre el problema que sucedió al final.

“Ya había escuchado el resultado, pero parece que realmente fue una buena
pelea”.

“Aunque a la final perdimos en el séptimo evento de Sakayanagi, el ajedrez, y


así terminó todo, supongo”.
Fue sólo un juego de ajedrez. Si decía que era un evento en el que me sentía
confiado dudo que intenté averiguar más sobre eso. Además, que como perdí
contra Sakayanagi de seguro se conformará con esa respuesta.

“Lo único bueno… si se le puede llamar así, es que simplemente tuvimos una
reducción de 30 puntos. No podemos darnos el lujo de quedarnos demasiado
atrás de las clases superiores”.

“Ustedes realmente se están fortaleciendo, nosotros no podemos quedarnos


atrás tampoco”. Respondió Ichinose de forma sencilla y honesta al vernos como
posibles futuros rivales.

“Así es. Nuestra clase se vuelve más fuerte cada día”. Dijo Horikita llena de
confianza, e Ichinose asintió al verla decir eso.

“Aprovechando la oportunidad, hay algo que quiero decirte, Ichinose-san, ¿está


bien?”

“Sí”.

A partir de aquí, la segunda mitad, era la verdadera conversación.

No fue Ichinose quien la empezó, sino Horikita.

“Para serte totalmente sincera, quisiera terminar nuestra relación de cooperación


a partir del próximo año”.

Esa fue la propuesta inesperada de Horikita… o tal vez no tan inesperada, pues
Ichinose se veía muy tranquila.

“Pensé que se trataría de eso”.

“Perdimos contra la clase A en los exámenes finales y eso nos hará caer de
nuevo a la clase D. Sin embargo, que hayamos perdido en el ranking no quiere
decir que también perdimos en el contenido. De hecho, creo que vamos bastante
bien”.

“Es cierto. Considerando que ya habían caído en 0 puntos, puedo decir que tu
clase es la que más puntos ha conseguido luego de eso. Además, aunque
perdieron, fue contra la clase A y solo con 4 derrotas, y 3 victorias…”

Era algo fácil de entender si hacíamos un pequeño calculo, por eso Ichinose
también lo sabía muy bien.

Al igual que los números del resultado eran diferentes por muy poco, no hubiera
sido raro que al final cualquiera de los dos ganásemos.

Dejando de lado la intromisión de Tsukishiro, creo que teníamos muchas


posibilidades de ganar.
“Pero, ¿no creen que podríamos seguir manteniendo esta relación de alguna
buena forma?” A diferencia de Horikita, Ichinose no estuvo de acuerdo de
inmediato con la disolución.

“Por ejemplo, ¿qué tal si volvemos a hablar cuando ambas clases tengan más
puntos de clase?”

“Es una buena propuesta. Pero sigo pensando que sería mejor terminar aquí”.

Se necesitan 2 cosas para una relación de cooperación estable.

Una era que la diferencia de puntos sea demasiado grande.

Y otra que la clase superior en esta cooperación sea estable.

El año pasado por el mes de mayo había una diferencia de 650 puntos. Durante
todo ese año la clase B mantuvo sus puntos estables y por eso es que no hubo
ninguna dificultad en nuestra cooperación.

Sin embargo, ahora no había ninguna de esas cosas. En este año logramos
conseguir 300 puntos mientras que la clase B bajó sus números increíblemente.
La diferencia se ha cerrado demasiado.

Por eso, ahora ninguna de esas dos condiciones necesarias se está cumpliendo.

“El próximo año tengo planeado pasar sobre la clase B, y mantener nuestros
puntos estables para lograr pasar sobre la clase A también”. Dijo Horikita con
una fuerte mirada lo que hizo que Ichinose se sintiera un poco nerviosa.

“… Sí, ya veo”.

Ella en pocas palabras estaba diciendo que derrotaría a Ichinose, y a toda la


clase B a la que ella pertenecía.

Y como es obvio, si va a hacer eso, no tiene sentido seguir cooperando.

Las relaciones a medias como estas debían ser rechazadas en ese caso, pues
solo serían un estorbo.

“¿Estás de acuerdo? Ayanokouji-kun”.

“Si, es como dices. Además, es la decisión correcta si queremos subir a la clase


A”. Preguntó Horikita y yo asentí. Su decisión era la correcta.

Ichinose por su parte cerró los ojos y suspiró.

“Ichinose-san, estoy agradecida contigo que nos ayudaste cuando nosotros no


podíamos hacer nada por nosotros mismos. Pero… aunque nos odies, a partir
de ahora seremos enemigos”.
Ichinose aceptó firmemente la resolución de Horikita.

“Por supuesto que no los odio. Además, ya éramos enemigos desde el principio,
y nuestra cooperación solo era temporal. Es más, soy yo la que está agradecida”.
Dijo Ichinose abriendo lentamente sus ojos. Por supuesto, su mirada, la mirada
dirigida a Horikita no era de odio o resentimiento.

“Entonces, a partir del segundo año volvemos a ser enemigos”.

“Así es”.

Ichinose extendió su mano y Horikita la tomó, dándose un apretón de manos.

Ya debería haber varios cálculos e información dentro de su cabeza. Las


fortalezas de la clase B, así como también sus debilidades.

Qué hacer para derrotarlos, y cómo hacerlo.

E Ichinose también debería ser capaz de ver la fuerza de nuestra clase.

Por eso, ahora debía de pensar en cómo poder frenarnos.

Y así, nuestra corta conversación llegó a su fin.

El resultado fue que a partir de abril comenzaríamos una gran batalla a gran
escala contra la clase B.
2
Aunque terminamos de hablar, Ichinose decidió quedarse un rato más.

La relación de amistad y cooperación se había terminado. Por eso de seguro


tenía que tomarse un tiempo para saber qué hacer a partir de ahora.

Por eso, decidimos irnos primero. Caminamos, y comenzamos a bajar las


escaleras.

“Espera un momento”. Luego de bajar las escaleras, Horikita me detuvo


hablándome desde atrás.

Intenté girarme, pero Horikita respondió, deteniéndome.

“No des la vuelta, quiero preguntarte algo”. Pidió ella.

Decidí no pensar mucho en la razón y como reacción a ese tono serio de su voz,
no me di la vuelta.

“¿Qué pasa ahora?”

“Qué pasa ahora… sí, eso es lo que yo quiero preguntarte”. Dijo ella. Su voz
enojada golpeaba mi espalda.

“Ni idea qué quieres decir”. Traté de hacerme el tonto, pero a Horikita no le
importó eso y entró al tema de forma directa.

“Usaste a Ichinose-san y la clase B para poder pelear contra la clase A, ¿no es


así?”

“Ah, eso”.

“¿No crees que hubiera sido malo si no te hubiera seguido el juego?”

“Sí, pero lo hiciste muy bien”.

“Pues… sí, porque pensé que luego todo se tornaría molesto. Ahora, ¿me
puedes explicar de qué se trata todo esto?”

“Pues Ichinose ya lo dijo. Kaneda usó la lotería para pelear contra la clase B. Así
que no importa lo que yo hubiera hecho en secreto, el resultado no cambió”.

“Lo que te estoy preguntando es por qué decidiste pelear contra la clase A sin
consultarnos antes”.

“Porque esa era la mejor manera de ganar”.


“Pues a mi parecer hubiera sido mucho mejor pelear contra la clase de Kaneda-
kun y Ryuuen-kun no crees?”

“Era posible que entonces ellos nos hicieran lo mismo que le hicieron a la clase
B. En ese caso solo podríamos contar contigo y Sudou”.

“Lo que estás diciendo es consecuente. No hay duda que debimos pelear contra
la clase D”.

Me di cuenta que ella avanzó un pasó hacia mí por la distancia de su voz.

Aun así, no habló más fuerte.

“¿Crees que estoy equivocada?”

“No. Es cierto que pelear contra la clase A fue una gran desventaja, eso no lo
voy a negar”.

“Entonces dejaré de lado que hayas ignorado mi advertencia. Quiero saber por
qué elegiste a la clase A”.

Supongo que no puede dejar ese tema sin resolver incluso si deja de lado que
haya actuado por cuenta propia.

“¿Tú por qué crees? ¿Por qué crees que actué en secreto y tomé esa decisión?”
Intenté cuestionarla con una pregunta que obviamente no responderá
correctamente.

Después de todo, era imposible que alguien que no sabía de mi relación con
Sakayanagi o la habitación blanca, pudiera responder a esta pregunta.

“Si tengo que usar los materiales que he entendido hasta ahora… supongo que
la respuesta está en lo que dijiste, que era “la mejor forma de ganar”. Luego, por
qué la clase B y D debían ser excluidas, y por consecuencia por qué la clase B
debería ser la eliminada”.

No tenía por qué actuar en secreto, después de todo estábamos en una relación
de cooperación con la clase B.

Era poco probable que Ichinose decidiera pelear contra nosotros sin antes haber
roto ese trato.

“El problema es la clase D. Sin lugar a duda esa sería la clase a la que
hubiéramos elegido para pelear… pero en realidad la clase B que fue la que
peleó contra ellos y perdieron a gran escala gracias a que cayeron en la trampa
de Ryuuen-kun. Si hubiéramos entrado en el mismo campo, no sé cómo
hubiéramos salido de esa batalla”.

Hubiera sido igual, o incluso hubiéramos estado mucho más desfavorecidos,


esas posibilidades no podían descartarse.
“Todos pensaban en la clase B como un oponente sencillo. Pero por eso mismo
tú viste eso sospechoso”.

Probablemente ese era el mejor razonamiento hasta ahora.

“Entonces, ¿ya habías predicho que Ryuuen-kun volvería y también que elegiría
esos eventos?”

“Pensé que era probable, sólo eso. Por eso use a la clase B como un pequeño
sacrificio”.

“Incluso si lo que dices es verdad, aun así, debiste consultármelo”.

“Supongo que sí”. Respondí con sinceridad, no lo negué.

El hecho de que actuara por mi cuenta no era una buena razón.

“Pero… me pregunto si esa es la verdadera razón”.

“¿A qué te refieres?”

“En la votación de clase, obtuviste muchos votos de la clase A y por eso te


pusieron como líder en primer lugar. Luego obtuviste los puntos de protección.
Sin embargo, luego como un líder que evitó ser expulsado, decidiste pelear
contra la clase A… ¿es esto simple coincidencia? A mi parecer… es como si
todo hubiera sido planeado por ti y por Sakayanagi-san…”

Esas palabras sí que fueron coincidencia, sin embargo, ya estaba empezando a


notar que había algo entre Sakayanagi y yo.

“No importa… creo que igual estoy exagerando. No hay pruebas de nada en lo
que acabo de decir, olvídalo”. Dijo Horikita convenciéndose a sí misma.

“Dejando eso de lado quiero preguntártelo de nuevo. Tienes pensado ascender


a la clase A, ¿no?”

“Te lo acabo de decir hace un rato”.

“Sí. Pero no sé si es lo que realmente quieres. Desde el día de ingreso hasta


hace relativamente poco, te vi muy reacio a subir de clase”.

“Las personas cambian. De hecho, tú has cambiado mucho desde que


ingresaste aquí”.

En realidad, sí comencé a pensar en ascender a la clase A, pero supongo que


no puedo culparla por no creerme. Después de todo, no soy muy cooperador que
digamos, mucho menos con Horikita.

Si me fijo en su punto de vista, ciertamente yo era una persona de lo más


inquietante.
“Cierto. Las personas cambian… también sus perspectivas”.

Aun teniendo una que otra insatisfacción, ella se convenció a sí misma con esas
palabras.

Pero por supuesto, la conversación no terminaría aquí.

“Nuestra clase ha evolucionado. Definitivamente somos mucho más fuertes


ahora, pero aún no es suficiente. Tú eres sumamente indispensable para
ascender hasta la clase A”.

“¿En pocas palabras?”

“Hasta ahora siempre te has contenido tanto en estudios como en las actividades
físicas. Ciertamente no hasta el grado de ser un estorbo, pero tampoco nos eres
de mucha ayuda”.

Qué ruda. Pero sí, desde su punto de vista yo no había conseguido un resultando
favorable para nada.

“¿Podrías ya dejar esa fachada atrás? Quisiera que a partir de ahora dieras todo
de ti en todo lo que esté por venir. Eso es lo que demostrará tu verdadera
voluntad por ascender a la clase A”.

Esto no era una amenaza, pero tampoco un favor.

Era más bien una provocación para ver cómo actuaba. Su tono picante, bueno
era su encanto de siempre.

“Me niego”.

“Lo sabía”.

Ella sonrió y suspiró al mismo tiempo como si ya hubiera sabido mi respuesta de


antemano.

“Sólo eres palabras. En realidad, no piensas poner el mínimo esfuerzo para


ascender a la clase A”.

“Al menos no por ahora”. Le respondí a Horikita siguiendo el ritmo de sus


palabras.

Sin embargo, ella necesita algo de tiempo para procesar qué tipo de significado
tenían las palabras que acababa de decirle.

“… ¿Eh? ¿Por ahora?”

Ella definitivamente no esperaba cooperación de mi parte.


Pero la verdad es que estaba dispuesto a hacer un poco más de esfuerzo de vez
en cuando.

“Tengo mis propias circunstancias que me han perseguido desde el comienzo


del primer año. Si doy todo de mí apenas comience el nuevo año, no sólo los
compañeros de clase… si no que toda la escuela hablará sobre ello, y lo que
menos quiero es llamar la atención”.

“Admito que eres alguien dotado, pero veo que tienes una gran autoestima. Si
nos fijamos solo en los estudios, todavía estoy yo, Yukimura-kun y estudiantes
muy sobresalientes de otras clases como Ichinose-san y Sakayanagi-san,
¿sabes? ¿Crees que puedes estar al mismo nivel?” Dijo Horikita con sarcasmo,
diciendo que no entraba en esa lista.

“Ciertamente, si hablamos en el sentido de cerrar una brecha, serías el centro


de atención, pero creo que, si te estableces en un 10 o 20% superior de nuestro
año, todos se acostumbrarían rápido. No es nada raro que un estudiante obtenga
buenos resultados en un examen de un día para otro”.

Parece que ahí terminaba el razonamiento de Horikita.

Sí, si ese razonamiento fuera tal y como ella lo dijo, no habría problema.

Pero dado que no era precisa, la conversación todavía no terminaba.

“Lo siento Horikita, pero dudo mucho que en nuestro año haya alguien que se
me pueda comparar”.

Aunque todavía no cuento a los estudiantes que siguen creciendo y los que son
poco serios pues no pueden demostrar sus habilidades.

“… Qué palabras tan presumidas dices”. Dijo Horikita sin poder aceptar mis
palabras.

“Que mi hermano te haya puesto la vista encima no prueba nada. A final de


cuentas, no me has mostrado ni una sola vez de lo que eres realmente capaz”.

“¿Entonces todos estos días no han sido suficiente?”

“¿Tienes pruebas de que puedes estar en el primer puesto en estudios? No, más
que eso. Para probar todo lo que acabas de decir, necesitas ser el primero en
todo. Aunque estuviste en un evento importante, a la final perdiste en el ajedrez
contra Sakayanagi-san. Pero claro, también admito que debió de ser un juego a
un nivel increíblemente alto. Pero aun así, una derrota es una derrota. Por eso
me sorprende que puedas decir que no hay nadie en el primer año que se te
compare”.

“Horikita, tómalo como tú quieras. Igual, puede que lo que haya dicho sea solo
ego”.
“Ves, al final huyes siempre de esa manera. Sólo eres un mentiroso con poca
seriedad”.

“En ese caso, ¿estarías satisfecha solo con esa impresión?” Dije, y Horikita se
quedó en silencio.

Si estaba satisfecha con ese pobre razonamiento entonces la conversación se


acabaría aquí mismo.

Por eso, di un paso más.

“… Déjame comprobarlo”. Respondió ella con un tono fuerte.

“¿Qué cosa?”

“Tus habilidades. Sé hasta cierto punto que eres inteligente y atlético, pero es
como si viera una nube, no hay una forma precisa. Tus habilidades siguen sin
ser claras”.

Entonces quería medir eso con sus propias reglas.

“Quiero saber si tus habilidades de verdad son merecedoras de que las estés
ocultando”.

“¿Y estás segura que puedes medir eso con precisión?”

“Estoy plenamente convencida de que puedo sacar una mejor calificación que tú
en un examen escrito, y si peleo en serio incluso ganarte en cualquier pelea”.

Es cierto que Horikita ha obtenido notas más altas que yo de forma regular en
este año.

Incluso si los hombres tienen ventaja en lo que es velocidad, entiendo muy bien
a qué se refiere con estar segura de ganar en una pelea que combina varias
técnicas. Después de todo, incluso enferma, le había dado una buena pelea a
Ibuki.

Además que, debió ver sin lugar a duda el pequeño enfrentamiento que tuve con
su hermano cuando ingresamos a la escuela.

Y aun sabiendo eso, tenía la confianza de decir que podía ganarme.

“En ese caso, ¿cómo lo probarás?”

“Formas hay muchas. Bien podríamos tomar un examen escrito en mi habitación


o en la tuya”.

La razón por la que no quería que me diera la vuelta era porque quería negociar
de esta manera, solo con mi voz. Si 2 personas cruzaban sus miradas, era
posible que varias emociones se transmitieran lo cual sería desventajoso en una
negociación.

Ella estaba en alerta, cautelosa de no formar una batalla psicológica conmigo.

“No me molestaría aceptar, pero es demasiado unilateral. Yo no gano nada


realmente”.

“¿Crees que es cuestión de ganar o perder? Sé que estás escondiendo tus


habilidades, así que bien podría decir eso y hacer que dejarás de ocultarlo,
¿sabes? Sin mencionar que últimamente estás recibiendo mucha atención.
¿Realmente crees poder hacerte el tonto esta vez?”

Como amenaza es demasiado débil. Si ella lo piensa bien y considera que eso
sería desventajoso, no haría nada de eso.

Pero, creo que este es una buena línea de trabajo para el crecimiento de Horikita.

Me quedé pensando por largo tiempo, y luego le respondí a Horikita.

“En ese caso hagamos esto. Escojamos una materia en específico de cualquier
examen a partir de abril y compitamos por quien saca el puntaje más alto. En
caso de que saque 100 puntos, al menos podré poner de excusa que me
concentré en estudiar solo esa materia”.

Era una excusa que debía funcionar a la perfección si no sacaba 100 puntos en
otras materias.

“Es una manera muy débil para medir tus capacidades… pero ¿estás seguro que
quieres hacerlo en público?”

“Sí, porque tengo que pensar en algo si llego a perder. En ese caso tendría que
sacar un puntaje alto en todas las materias así que debo hacer una estrategia
para eso”.

“Está bien, acepto. Pero ¿cómo elegiremos la materia?”

“Puedes elegir la que quieras. También puedes elegir el día, y no me importa si


eliges el contenido de la materia siempre y cuando me lo digas el día anterior al
examen”.

“Ya veo… en caso de que ganes sin previo aviso tendría que hacer como si
hubieras estudiado la materia todo el día anterior. En ese caso no sospecharía
de que sacaras un puntaje alto”.

Con esto Horikita debería satisfacerse un poco.

“Si yo gano eso demostraría que tus habilidades no eran para tanto, pero de
todas formas tendrías que poner todo de ti de aquí en adelante, ¿estás de
acuerdo?”
“Sí. Pero si yo gano tendrás que cumplir un favor de mi parte”.

“Es cierto, sería injusto si no fuera así. ¿Qué es lo que quieres?”

“Quién sabe, todavía no pienso en eso”.

“… ¿Y no crees que es injusto? Si guardas silencio aquí luego podrás pedir


incluso alguna locura”.

“¿Ya estás dado por hecho que vas a perder? Y eso que sonabas tan optimista
a la hora de pedírmelo”.

“Qué confiado estás…”

“No tienes por qué sobreesforzarte. Si no estás segura de ti misma podemos


hacer como si esto nunca ocurrió”.

Si decía eso era más que claro que Horikita no se echaría para atrás.

“Está bien. Si pierdo haré cualquier cosa que digas. ¿Así está bien?”

“Más que suficiente. Trato hecho”.

Y así, decidí competir con Horikita en el examen más cercano del próximo año
escolar.

Horikita volvió a caminar hasta ponerse a mi lado.

Y luego siguió adelante y bajó las escaleras primero.

“Estaré ansiosa por ese duelo”.

Por supuesto, Horikita tomaría todas las medidas necesarias para ganar este
reto.

Aunque bueno, yo haré lo mismo de siempre.

Me quedé parado sin moverme, mirando a Horikita desde atrás mientras se


marchaba con una firme voluntad.

“Bueno, qué sigue en la lista de quehaceres de hoy”.

Al principio, pensé en regresar directo al dormitorio, pero cambié de opinión.

Estaba un poco preocupado por Ichinose.

Dijo que regresáramos primero, por lo que supongo que tendrá sus cosas que
pensar en privado. Mientras pensaba eso, vi a cierto hombre.

Pero al parecer, no nos encontramos por pura coincidencia.


Luego, comencé a bajar lentamente las escaleras como si estuviera siguiendo
esa mirada.
3
Eran las 11:30 del mismo día.

Baño de hombres en el segundo piso del centro comercial.

Allí, dos hombres estaban parados.

Uno de ellos era Ryuuen, quien había abandonado su puesto de líder, pero luego
regresó al escenario.

Él no estaba aquí por pura casualidad. Él había sido llamado por el otro chico,
Hashimoto Masayoshi a este lugar poco concurrido.

“¿Y bien? ¿De qué maldades quieres hablarme hoy?”

“No digas esas cosas. Simplemente te llamé para hacerte un pequeño resumen
de este año”. Dijo Hashimoto en un tono evasivo.

Sin embargo, a Ryuuen no le molestaba en absoluto alguien que tenía esta


atmósfera desde tan temprano en la mañana.

Pero al mismo tiempo, tampoco es que le gustara.

De hecho, le gustaba la gente a la que podía entender fácilmente, o las que


tenían una personalidad tonta como Ishizaki o Ibuki.

Pero claro, Hashimoto tampoco confiaba en Ryuuen y tampoco creía que él lo


hiciera. Su relación se debía simplemente a sus propios intereses.

Pero ambos sabían que esto también podía llegar a ser una fuerte conexión.

“Al parecer hiciste trizas a la clase B en el examen final. ¿Puedo tomar eso como
tu completa resurrección?”

“Quién sabe. A final de cuentas, fue solo un capricho”. Dijo Ryuuen con una
sonrisa, respondiendo de forma irresponsable.

“¿Capricho? En ese caso, qué capricho más tenebroso. No irás a enfrentar a la


clase A solo por capricho también, ¿verdad?”

No quiero pelear contra ti, es lo que decía Hashimoto entre líneas, levantando
sus manos como en señal de rendición.

“¿Tanto te importa lo que yo haga?”

“Tocaste el fondo y nuevamente estás en la cima, claro que me importa lo que


hagas”.
Básicamente él estaba preocupado por la persona quien podía entrometerse en
su camino.

“¿Acaso viniste a vigilarme por órdenes de Sakayanagi?”

“Por desgracia no puedo responder a eso”. Dijo Hashimoto de forma poco


precisa. Pero Ryuuen sabía muy bien que no había forma de que Sakayanagi no
estuviera involucrada en esto. Por eso Ryuuen decidió mencionar a Sakayanagi
y ver cómo reaccionaba Hashimoto.

“¿Y bien? ¿Qué harás ahora?”

“Nada que te importe”. Respondió Ryuuen mientras reía con la nariz.

Hashimoto que tenía su cuerpo en una posición rígida, se preparó para


reaccionar ante cualquier cosa.

Aunque él mismo fue el que pisó este lugar por voluntad propia, este era un baño
donde no había nadie más. Sin mencionar que tampoco había cámaras de
seguridad que lo pudieran salvar en caso de algo. Bien podría haber grabado
todo, o al menos el sonido con su celular, pero eso sería demasiado y si Ryuuen
lo descubría, su pequeña relación desaparecería.

“¿Realmente crees que ganarás haciendo la estrategia de doble espía?”

La presión que él transmitía mientras reía era mucho más grande que la de una
persona ordinaria.

“Ja. Tienes una gran presión incluso luego de tu caída”. Dijo Hashimoto
alegrándose al mismo tiempo que se sentía algo de impaciencia.

La clase A era sólida. Sin embargo, la situación cambiaba de acuerdo a los


caprichos de Sakayanagi.

Y en medio de esos momentos, la clase que podría ir contra ellos y ganar, sería
la de Ryuuen. Por eso era obvio mantenerlo vigilado.

Por eso es que Hashimoto no pudo negar una cosa.

“Lo siento Ryuuen, pero no pienso detenerme solo con 2 clases”.

“Jaja, y eso qué significa”.

“Creo que es un poco temprano, pero…” Hashimoto sacó su teléfono y le mostró


la pantalla a Ryuuen.

Luego de probarle que no estaba grabando, él comenzó a llamar a alguien.

El tiempo que duró la espera de la llamada fue poco.


Por eso Ryuuen se dio cuenta que la otra persona estaba a la espera de esta
llamada.

“Ven. El lugar es el mismo que te dije el otro día”. Dijo él a la otra persona y la
llamada terminó.

“¿A quién crees que llamé Ryuuen?”

“Ni idea”.

“Fue a Ayanokouji”. Dijo Hashimoto, pero Ryuuen no se inmutó.

Por eso, el plan de Hashimoto por averiguar algo en medio de un descuido se


echó a perder.

Sin embargo, todavía era muy pronto para rendirse.

“¿No puedes adivinar la razón de por qué llamé a Ayanokouji para que viniera?”

“Para nada”. Respondió Ryuuen, pero siguió. “¿Realmente fue a él a quien


llamaste? A mí no me lo parece”. Dijo él resolviendo el truco de Hashimoto de
forma sencilla.

“…Tch, sabía que una mentira a medias no iba a servir”.

Hashimoto esperaba que al mencionar a Ayanokouji, Ryuuen reaccionara de una


manera diferente.

Sin embargo, Ryuuen tenía la cara de alguien molesto por ver a una pequeña
criatura.

“De qué mierda es que hablas desde hace rato. ¿Acaso tienes algo entre manos
Hashimoto?”

Para Ryuuen, Hashimoto quien le estaba tomando demasiada importancia a


Ayanokouji es el que se veía sospechoso.

Eso por supuesto no era para nada actuado.

Pero, aun así, Hashimoto no podía quitarse de encima la sensación de


desconfianza hacia Ayanokouji y Ryuuen.

Después de todo, Ryuuen quien siempre se comportaba como si fuera un rey no


creía que Ishizaki y el resto fueran a retirarse con tanta facilidad.

Además, que en cada acción de Sakayanagi se veía la sombra de Ayanokouji


por detrás de ella.

Ahora, si tan solo conseguía algo más, un poco de información, su convicción


podría cambiar.
“Al que llamé fue…”

Luego pisadas se acercaron al baño donde ambos estaban.

Y fue un estudiante quien entró de repente.

“¿Ah? Oh, mira al tipo que decidiste llamar, Hashimoto”.

El chico que apareció frente a Ryuuen y Hashimoto fue Kanzaki Ryuuji de la


clase B de primer año.

Así, 3 personas que normalmente no solían hablar, se reunieron en este sitio.

“Pues él me dijo que quería verte a como diera lugar. Por eso sólo actué como
un intermediario”.

“¿Y bien? ¿Y qué recibiste a cambio?”

“¿Acaso no es obvio? Una conexión con la clase B”.

“Sakayanagi fue la que disparó contra Ichinose, en pocas palabras son


enemigos. ¿De verdad crees que Kanzaki va a ser tu conexión?”

“Sí, lo creo. ¿No es así, Kanzaki?”

“Hashimoto, que quede claro que no confío en ti. Pero creo que podemos
colaborar”.

“¿Lo ves?”

Si sus intereses eran los mismos, entonces no era nada raro que incluso Kanzaki
colaborara con Hashimoto.

Luego Hashimoto puso su mano sobre el hombro de Kanzaki mientras reía sin
parar.

“Vamos, escucha lo que tiene que decirte. Hazlo por mí”.

“Ya veo. Entonces con esto te referías a que no terminaría solo con 2 clases”.

Hashimoto hasta el momento no había tenido interés en ninguna otra clase


aparte de la de Ryuuen.

Pero una vez Ryuuen se echó para atrás, decidió cambiar de objetivo y eligió a
Kanzaki.

“Sí. Y creo que luego haré algo para conectarme con la clase de Ayanokouji”.
Dijo Hashimoto. A él no le importaba cuál clase ganase, pero siempre actuaba
de una manera en la que al menos él pudiera salvarse.
Pero, ya el interés de Ryuuen a este punto estaba con Kanzaki y no con
Hashimoto.

“Espero que lo que sea que me vengas a decir no sea aburrido, ¿entiendes?”

“No sé qué es lo que esperas, pero no es nada para complacerte”. Dijo Kanzaki
sin temerle ni un poco a Ryuuen y luego continuó.

Él vino hasta aquí por cuenta propia para hablarle de algo.

“Quería hablarte del resultado del examen de fin de año”.

“¿Qué, viniste a lamentarte por la derrota?”

“Lo siento por ti Ryuuen, pero al menos yo no creo que haya perdido”. Declaró
con fuerza, y Hashimoto comenzó a silbar por la tensión.

“Conseguiste la victoria gracias a una táctica sucia, solo eso. Espero que no lo
olvides”.

La queja de Kanzaki era entendible. Después de todo, hubiera sido una batalla
reñida en caso de que si hiciera apegada a las reglas. Pero sin embargo, Ryuuen
se llevó la victoria usando una táctica sucia e injusta.

“Qué ridiculez. ¿Viniste hasta aquí solo para decir eso?”

Para Ryuuen eso no era ni limpio ni sucio.

Una victoria es una victoria, y la derrota de Kanzaki era un hecho innegable.

“Además, ¿a qué te refieres con táctica sucia? ¿Que yo haya sido el líder?”

“No te hagas el tonto. Me refiero al golpe bajo a los estudiantes de la clase el día
anterior al examen. A eso me refiero”.

Hashimoto comenzó a aplaudir, divirtiéndose, ya que él no conocía los detalles


completos de lo que había pasado en el examen.

“Ahora sí entiendo por qué está tan enojado. Sí que te pasaste esta vez Ryuuen”.

“Pero déjame decirte, que ese tipo de estupideces no volverán a funcionar contra
la clase B”.

“Jaja. ¿Estás diciendo que Ichinose lo impedirá? ¿O acaso irán de llorones a la


directiva?”

“No. Eso sería una pérdida de tiempo”. Kanzaki refutó de inmediato. Al parecer
hasta él pensaba que la amable Ichinose no podría lograr eso.

“¿Entonces quién lo impedirá?”


“Yo lo haré”. Respondió Kanzaki de inmediato, y Ryuuen de inmediato pensó en
2 cosas.

Estaba mintiendo… o talvez…

“Eres sólo el seguidor de Ichinose, ¿qué podrías hacer tú?” Dijo él para poder
despejar esa duda y al mismo tiempo, ver la decisión que Kanzaki había tomado.

“Ciertamente en este año he estado al lado de Ichinose, ayudándola. Pero eso


es porque cuando ingresamos a este lugar, vi en ella un poder de liderazgo y
trabajo en equipo muy diferente al de los otros estudiantes. Mi forma de pensar
sobre ella no ha cambiado incluso ahora. Sin embargo, su pobre forma de actuar
ante situaciones críticas y otras debilidades no son buenas para momentos
decisivos”.

“¿Oh? Mira, y eso que pensé que ibas a decirme alguna estupidez, y resultó ser
algo bastante interesante. Quién pensaría que alguien de la amigable clase B
podría pensar en esas cosas”.

“Pero…” dijo Ryuuen. “No me sirve que sólo sueltes palabrería. Hasta un perro
puede decir algo mejor”.

“En ese caso intenta hacer lo mismo de nuevo y te lo probaré”.

Hashimoto colaboró con Kanzaki sólo para tener una conexión con la clase B.
Pero, al verlo decir esto, él pensó que tal vez podía hacer mucho más de lo que
se había imaginado.

“Si así lo quieres. Por mí está bien, la próxima los aplastaré de una forma peor”.

“No sé qué tipo de trucos sucios vayas a usar, pero espero que sepas que a
diferencia de Ichinose, yo no tendré piedad. Si no quieres pelear en tu propio
campo, lo haremos de otra forma”.

“Sólo espero que no resulte ser una clase de mierda”. Dijo Ryuuen mientras
sonreía.

Seguido de eso, Hashimoto agregó.

“Todo resultó ser interesante, ¿no? Si necesitas otra cosa no dudes en decirlo,
Kanzaki”. Le dijo Hashimoto a Kanzaki. Hashimoto pensó que Kanzaki se iría
apenas terminar sus asuntos con Ryuuen.

Sin embargo, él caminó y se acercó a Hashimoto.

Luego él transmitió una atmosfera intimidante, tal vez para no quedarse atrás de
estos 2.

Y así, luego de hacerlo, Kanzaki dijo otra frase intimidante.


“Espero que estés listo, Ryuuen”. Dijo él, saliendo del baño primero.

“Jajaja, qué miedo, ah qué miedo”.

“Y ahora, ¿de qué forma vas a aplastar a la clase B?”

“Ni idea”. Dijo Ryuuen sonriendo para despistarlo, pero al mismo tiempo recordó
algo totalmente diferente.

Algo que ocurrió tan solo una hora antes de esta conversación con Hashimoto y
Kanzaki.
4
Luego de separarme de Ichinose y Horikita estaba a punto de regresar al
dormitorio. Pero, al ver a Ryuuen lo seguí hasta un pasillo en el que casi no
pasaba gente.

Dado que había una distancia considerable entre ambos, podía mantenerme en
incognito para las otras personas, sin que se dieran cuenta que estaba hablando
con él”.

“¿Ishizaki te dijo que estaba aquí?”

“Sí, me tomé la molestia de venir a buscarte personalmente”.

En ese caso su conversación con Ishizaki y el resto terminó hace una hora, o la
había terminado a medias.

En cualquier caso, los ojos de Ryuuen ahora tenían mucha más energía que
antes.

“Creo que sabes mi número de todas formas. ¿No hubiera sido mejor
contactarme de esa forma?”

“Pensé que sería mejor hablarte cara a cara en vez de usar esa tontería”.

En ese caso escucharé lo que tenga que decir en el poco tiempo que me queda.

“¿Qué quisiste decir con eso?”

Con eso, se refiere al mensaje que le mandé con Hiyori, que yo lo hubiera hecho
mejor y hubiera conseguido las 5 victorias completas. Parece que ella cumplió
su papel a la perfección.

Como pensaba, él entró en contacto conmigo apenas escuchar ese mensaje.

“Pues tal y como lo dije, yo lo hubiera hecho mejor”.

“Usaré los trucos que se me dé la gana”.

“Pues no quiero que te conformes con eso. Si algo te vuelve a salir mal te pueden
expulsar de esta escuela, y eso sí sería una lástima”.

Mis palabras salieron de forma bastante natural, pero al parecer no se


transmitieron a Ryuuen.

“Jaja, ¿a qué estás jugando? Dices cosas bastante raras para ser el tipo que
perdió miserablemente contra Sakayanagi”.
“Ciertamente, nuestra clase perdió contra Sakayanagi. Dado que era el líder en
ese momento no puedo excusarme. Pero claro que, si quieres saber quién es
mejor, Sakayanagi o yo, tendrás que pelear directamente con ella”.

“Ja… ¿me estás subestimando?”

La sonrisa de Ryuuen desapareció en un instante y luego se acercó a mí.

“Me ganaste ya una vez, no hay forma de que seas inferior a Sakayanagi”.

En ese caso las palabras de hace un momento, fueron mera provocación.

“Me alegra que me veas de esa forma, pero ¿realmente piensas eso, aun sin
haberme contenido en ese examen?”

“Lo siento, pero no te creo. Se me hace más creíble que hubieras tomado el
examen como un simple juego, o que te hayas involucrado en algún tipo de
accidente a pensar que realmente fuiste en serio e igual perdiste. Es más, estaría
más que convencido si me dijeran que la escuela arregló todo para que la clase
A ganara”.

No es del todo correcto, pero su intuición es casi perfecta.

Posiblemente Ryuuen sea el único en toda la escuela que podría dar un punto
de vista tan profundo como este.

Él tenía esa convicción certera, una que sólo podía lograrse al haberse
enfrentando directamente conmigo.

“¿Y bien? Ahora que regresaste, ¿qué planeas hacer? Ryuuen”.

“Deja de querer hacerme regresar a la fuerza. Todavía quiero descansar un poco


más”.

En pocas palabras, Ryuuen quiere decir que su participación a gran escala


todavía estaba por venir.

“Pero… cuando termine de descansar, supongo que aplastaré a Ichinose y


Sakayanagi para calentar un poco”.

“Veo que has cambiado bastante de mentalidad”.

“Jajaja, cierto, hasta yo estoy sorprendido. Nunca pensé que querría la revancha
contigo tan rápido”.

“Ya veo”.

La serpiente estaba despertando de su hibernación.


Y cuando ese momento llegara, ni la clase B ni la clase A podrían ignorarlo
mucho más.

A Sakayanagi no le molestaría en absoluto, pero no sería raro que cualquiera de


los dos ganase.

“Para mí eso es lo mejor. Si vences a Sakayanagi e Ichinose no podría pedirte


mucho más. Así yo también puedo llegar a la cima de forma tranquila”.

Eso es debido a que esto era una parte importante y necesaria para que
lleguemos a la cima.

“Pensé que no te importaba para nada la posición de las clases”.

“Ahora es diferente. Para el próximo año, esta clase tendrá una posición más
alta. La tendré incluso si para ese momento ya no estoy”.

“¿Ah?”

Al parecer le llamó la atención la última parte de lo que dije.

“A partir de ahora seré objetivo de varias personas, eso no sería raro. Pero
cuando pase, tratarán de alguna manera de expulsarme, ¿no crees?”

Si Tsukishiro se lo propone, puede salir con muchos otros trucos a los cuales
todavía no puedo responder.

Puede hacer cosas imposibles de evitar si toma sus propios riesgos.

Pero por supuesto, por eso estoy haciendo todo esto, para que no le sea sencillo
hacerlo.

“Tranquilo. Si hay alguien que vaya a hacer que te expulsen, ese seré yo”.

Esa vitalidad en sus palabras era algo típico de Ryuuen.

“Pero…” Dijo Ryuuen, tratando de decir algo, pero de repente desapareció de mi


vista.

Rápidamente acortó la distancia entre ambos y dirigió su brazo justo hacia mi


cara.

“¡Haaah!”

Su puño pasó justo al lado de mi vista, y luego puso su pie derecho justo delante
de mí, pero eso es una trampa. El verdadero golpe iba a venir con el pie
izquierdo.

Por supuesto, esquivé eso también y tomé algo de distancia de Ryuuen.


“Ja, te tomé completamente desprevenido y ni siquiera así. Maldito monstruo”.

“Qué movimientos tan llamativos”.

Aunque era un lugar privado, todavía había montones de cámaras de seguridad


en este centro comercial.

Por supuesto, los estudiantes solían armar problemas, por lo que los ignoraban
hasta cierto punto. Pero en el caso de Ryuuen ellos vendrían corriendo a revisar
qué sucedía.

“Es lo que me pedía mi corazón, que te diera un buen golpe”.

Aun en hibernación, una serpiente te puede morder por puro instinto.

“¿No intentarás devolverme el golpe?”

“Quiero evitar los riesgos de enfrentarme contigo aquí. Además, aún no es el


momento para hacerlo”.

“Ja, esa es la confianza del más fuerte de la que tanto hablan. Si lo dices tú
suena tan real que no deja de emocionarme”.

Sus ojos brillaban con la misma intensidad que antes… no, con mayor
intensidad.

No pareciera que hubiera estado hundido por varios meses.

“Tienes muchas cualidades importantes Ryuuen. Por eso crece, y desarróllate


más”.

Ryuuen golpeó la pared a su lado con su puño cerrado, al parecer no le gustó


mucho esa manera de decirlo.

“¿Que crezca? ¿Y desde cuándo te convertiste en mi maestro o algo por el


estilo?”

“Sólo digo la verdad. Está bien hacer trucos sucios, engaños, o incluso cosas
ilegales de vez en cuando para ganar. Pero no hagas algo que pueda estorbarte
a ti mismo”.

“¿Aah?”

“Escuché que hiciste que Ishizaki y el resto usaran laxante en la sala de karaoke.
Es una buena jugada, pero el problema es que si hubieran dejado rastro de
comida o bebidas la escuela lo habría sabido y sería razón más que suficiente
para expulsarte. E incluso si ignoraran eso, haría que la escuela estuviera más
al pendiente de tus movimientos. Lo único que te salvó es que Ichinose no te
haya reportado”.
“Ya sé cómo tratar por mí mismo con la gentil Ichinose”.

“En ese caso de seguro es una estrategia débil. Por eso es que nunca podrás
alcanzarme”.

“… Qué hablador”.

Ryuuen nuevamente se acercó a mí. Pero no parecía que estuviera a punto de


atacarme como hace rato.

Incluso si lo dije con esa intención escondida, no sería complicado esquivarlo,


pero…

“Eres libre de escuchar o no mi consejo. Pero lo que te digo es que si sigues así
jamás conseguirás tu revancha”.

¿Cómo atrapar la provocación del enemigo? Esto era otra prueba para Ryuuen.

Pero él comenzó a golpear la pared con su puño mientras lo bajaba lentamente,


como para que su corazón se calmase.

“Por ahora escucharé tu maldito consejo. Pero un día ten por seguro que te
aplastaré”.

“Qué buena decisión Ryuuen. No me importaría dejar la escuela si eres tú el


responsable de hacerlo”.

Al parecer Ryuuen escuchó mis palabras con seriedad, mientras que en su


interior por supuesto, estaba irritado.

Con esto, las estrategias que Ryuuen invente, seguro serán más inteligentes.

El camino por el segundo año realmente que se está haciendo difícil de imaginar.

Ryuuen devorará a Sakayanagi y subirá a la clase A. O tal vez Sakayanagi


impedirá que eso pase.

¿O acaso Ichinose actuará en medio de una ola de enojo por todo lo sucedido?

Me pregunto ahora, ¿cómo entrará Horikita en medio de esos 3?

Pero lo que es seguro es que pronto, podré ver un paisaje muy diferente al de
primer año.
5
Esto fue algo que sucedió antes de aquella escena en el baño.

Luego de ver a Kanzaki marcharse, Ryuuen dijo.

“Regreso al juego. Ciertamente me pasé con la clase B, pero tuve mi momento


de reflexión”. Eso él lo aceptaba. Era algo que aceptar sí o sí para poder
derrotar a Ayanokouji.

“Pues fue una victoria aplastante, siempre pensé que utilizaste un truco sucio.
Entonces, ¿ahora pelearás tal y como desea Kanzaki? ¿Limpiamente?”

“Ja. ¿Y yo cuándo dije eso?”

“¿Ah?”

“Hice eso porque Ichinose es demasiado blanda, y es esa personalidad de ella


la que me da demasiadas oportunidades de hacerlo. Por eso es que debiluchos
como Kanzaki vienen de esa manera”.

“… Ya veo”.

En lo que había que reflexionar no era en haber usado un truco sucio. Sino de
su lado blando.

“La próxima vez los dividiré más y los aplastaré con todo”.

No importa qué dijera Kanzaki, Ryuuen no planeaba cambiar su modo de hacer


las cosas.

Y si de verdad estaba ocultando sus garras, era algo que se iba a descubrir con
el tiempo.

“En este año has madurado bastante Ryuuen. Qué bueno que decidí continuar
en contacto contigo. Ya puedo ver a una posible Sakayanagi derrotada”.

Y así con mucha precaución, Hashimoto iba acercándose a la clase B.

Para él, no importa cuál clase ganara, lo único que importaba es que él se
graduara en la clase A.
6
Después del medio día, comenzó a caer repentinamente una lluvia que
fácilmente pasaba los 30mm.

Sin preocupación alguna por regresar al dormitorio, me quedé caminando por el


centro comercial.

Aunque dado que esto seguía siendo parte de la escuela, incluso con una lluvia
así de fuerte, no era difícil regresar al dormitorio.

Esto es debido a que en cualquier tienda se puede alquilar un paraguas para los
estudiantes.

Si se entregaban de vuelta en el tiempo límite, no te cobrarían nada. Es por eso


que muchos estudiantes en la mañana salían corriendo de sus habitaciones sin
paraguas para llevar menos peso.

Aunque, al parecer hoy había una excepción.

En realidad, incluso con paraguas, era posible que me mojara un poco en esta
lluvia.

“No parece que se vaya a detener hoy”.

Tal y como lo predije, el pronóstico decía que la lluvia duraría desde el mediodía
hasta la mañana del día siguiente.

Cada vez que eso pasaba, el grupo Ayanokouji comenzaba a chatear acerca de
la lluvia y otros temas. Y al parecer la conversación de hoy justo acababa de
comenzar.

“¿Qué hago ahora?” Al final, no respondí y decidí dejar los mensajes en visto.

Comencé a ver el grupo de chat de forma despreocupada con mis ojos puestos
en la pantalla.

Y luego solo de la nada, mire hacia la lluvia al otro lado de la ventana.

Una pérdida de tiempo, un momento de improductividad.

De vez en cuando este tipo de momentos estaban bien.

Decidí no regresar a la cafetería, simplemente me senté en uno de los bancos y


pasé un rato ahí sin hacer nada.

Pero claro, no es como si fuera a hacer esto por horas.

Decidí regresar a los 20 o 30 minutos luego de escuchar el sonido de la lluvia.


Pasé mi tarjeta de estudiante por la maquina y alquilé un paraguas.

La parte de abajo, o al menos hasta mis rodillas se mojarán, pero algo es algo.

Luego de eso, salí y decidí regresar directo al dormitorio. Pero apenas poner un
pie afuera, encontré a una estudiante. Encontré a Ichinose parada en medio de
la lluvia sin un paraguas.

Parece que aún seguía por aquí.

Pero no parecía estar acompañada, ella estaba sola.

Luego de separarse de nosotros, es posible que haya pensado en muchas


cosas.

“Supongo que trata de asimilar todo…”

Pero por lo que puedo ver, todavía no parece que lo haya asimilado bien.

Si va a su dormitorio sin paraguas, es obvio que se mojará toda.

Por un momento pensé que algún amigo había ido por su paraguas, pero parece
que tampoco era eso.

Dejarla sola puede ser lo correcto… pero estaba un poco preocupado por lo que
podía pasar luego de todas las pruebas por las que estaba pasando la clase B.
Decidí regresar y tomar otro paraguas.

Luego de volver y salir nuevamente, tal y como pensé, Ichinose estaba


caminando bajo la lluvia.

Pero no parecía dirigirse a los dormitorios. Ichinose estaba caminando en la


dirección contraria, hacia la escuela.

Y claro, sin ningún paraguas.

Podría simplemente ignorar haberla visto…

Pero terminé persiguiendo a Ichinose con el otro paraguas en mi mano.

El sonido de la lluvia era tan fuerte que ella no podía escuchar mis pisadas.

Tampoco creo que me escuche si la llamo en el mismo tono de siempre.

Luego, Ichinose llegó a un punto en el camino donde se podía ver el edificio de


la escuela. No se podía ver a otra gente alrededor en medio de esta lluvia, por lo
que Ichinose alzó la mirada hacia el cielo.

Se sentía como si no le fastidiara mojarse por la lluvia, más bien era como si así
lo deseara.
Ahora qué estará sintiendo, ¿qué estará pensando?

No era tan complicado adivinarlo.

No sería del todo malo dejarla mojarse hasta que se sintiera satisfecha, pero le
dará un resfriado.

Si se resfría, su corazón y mente se debilitarán al mismo tiempo. Y eso para


Ichinose ahora mismo, no era nada bueno.

“Te resfriarás si te quedas parada todo el día ahí”.

Me acerqué, levantando un poco la voz hacia Ichinose.

“… Ayanokouji-kun”. Dijo Ichinose un poco sorprendida y luego se giró. De


seguro no creyó que alguien estuviera justo a su lado.

“… Sí”. Respondí levemente, pero no se movió.

No le importó que estuviera mojándose, ella solo volvió a observar el cielo.

“Regresa tú primero. Ahora tengo ganas de estar en la lluvia por un rato”. Dijo
Ichinose al acercarme a una distancia en la que podía oír bien su voz.

“Ya veo”.

Aunque no era una lluvia en la que fuera bueno “estar un rato”.

Si la dejo aquí, de seguro no se moverá por una o dos horas.


Pero tampoco estaba en una situación en la que pudiera persuadirla.

Por eso, no quedaba más que usar un método un poco más rudo.

Había un método para afrontar a Ichinose.

Bajé mi paraguas y luego lo cerré.

Luego en un abrir y cerrar de ojos la lluvia comenzó a mojarme desde el pelo


hasta mis pies.

“¿A-Ayanokouji-kun?”

“Te acompañaré un rato”.

Como es obvio, Ichinose no pudo ignorar ese movimiento repentino mío.

“¿Por qué…?”

“Supongo que también quiero mojarme sin razón alguna”.

En pocas palabras, una razón contraria a la de Ichinose que sí tenía una para
dejarse empapar por la lluvia.

Y así me mojaba debajo de la lluvia más y más con los 2 paraguas en la mano.

Fue una experiencia extraña.

“Te vas a resfriar, ¿sabes?”

“Tú también”.

“Pero a mí no me importa. De hecho, creo que sería bueno tener un pequeño


resfriado”.

Ya veo. Entonces tiene sentido que quiera estar tanto tiempo debajo de esta
lluvia.

“Bueno, entonces yo haré lo mismo”. Respondí eso e Ichinose se sorprendió.


Está claro que no diría algo como, “entonces resfriémonos juntos”.

“Claro que no. Ayanokouji-kun, tú deberías de irte ya. Además, tienes un


paraguas ahí”.

“No creo que sirva de mucho volver a abrir el paraguas ahora”.

Después de todo ya estoy empapado hasta los calzoncillos.

“Hmm, eso no es justo”.


“Lo siento”.

Si ella no regresa, yo tampoco lo haré. Esa era la amenaza que le estaba


haciendo a Ichinose.

“… Está bien. En ese caso, volvamos”.

“En ese caso—” Intentó tomar un paraguas, pero la detuve.

“Igual ya estamos mojados, vámonos así”.

“Jaja, es cierto”.

Los dormitorios estaban a unos minutos, así que no haría gran diferencia.

Por eso ambos caminamos bajo la lluvia.

Pensé que lo mejor sería regresar en silencio, pero Ichinose suspiró.

“Siento que, siempre te muestro un lado lamentable de mí… qué vergüenza...”

“Un lado lamentable… sí, puede que tengas razón”.

Hubo un momento en que se perdió a sí misma cuando estuvo a merced de


Sakayanagi.

“Y eso que delante de otras personas siento que puedo estar mucho más seria.
Me pregunto por qué será…”

“Los lados vergonzosos o lamentables sólo se muestran a personas en las que


realmente confías. O al menos eso es lo que creo”.

En primer lugar, dudo que alguien pueda mostrar esa faceta delante de alguien
a quien odia.

Aunque sea mentira, las personas suelen mostrar un lado fuerte, mientras que
su lado débil sale a relucir en la soledad.

“Creo que eso fue muy egocéntrico, olvídalo”.

“No… la verdad creo que tienes razón. Al menos para mí, eres una persona
realmente confiable. Por eso sin darme cuenta, siempre dejo salir ese lado de
mí. Pero… siento que en esos momentos, tú siempre estás a mi lado”.

“Bueno, eso ya sería coincidencia”.

“Sí, realmente lo siento”.

“No tienes por qué disculparte. No creo que sea nada malo, aunque si los otros
estudiantes lo saben, de seguro se enojarían”.
Ichinose era una chica realmente popular en toda la escuela.

Si alguien escuchara esta conversación, en especial un chico, se moriría de


envidia.

“Si quieres, puedes mostrarme ese lado tuyo cuando quieras”.

“Eso significa que—” Dijo Ichinose, pero se detuvo y comenzó a mover la cabeza
de un lado a otro nerviosa.

“C-Claro que no. No puedo seguir mostrándote este lado de mí, qué vergüenza”.

Aunque la temperatura comenzaba a aumentar, todavía hacia algo de frío.

Luego, finalmente llegamos frente a la entrada de los dormitorios, debajo de la


lluvia donde no se veía ni a una sola persona.

Estamos a solo unos pasos del lobby, pero Ichinose volvió a detenerse.

“Mejor… sí, mejor si tú regresas primero Ayanokouji-kun”.

“¿Y qué vas a hacer tú?”

“Estaré aquí un poco más… ahora no quiero regresar a mi habitación”. Dijo ella,
negándose a regresar.

Aunque fue una decisión con una resolución más fuerte que la de hace un rato.

“Aun así deberías volver”.

Si está bajo la lluvia sí, podría distraerse un poco. Pero eso no llevará a una
solución lógica.

Pero Ichinose no me hizo caso.

“Pero… aun así no… no quiero volver todavía”.

“Ya veo. Entonces yo también me quedo”.

Ichinose se vio desconcertada por mi insistencia.

“Si voy sola a mi habitación de seguro comenzare a pensar en muchas cosas…


en demasiadas cosas, por eso no quiero regresar”.

No creo que Ichinose siga adelante incluso si me sigo quedando con ella bajo la
lluvia.

En ese caso, no queda más que intentar con otro método.

“¿Entonces por qué no vienes a mi habitación?”


Ichinose se me quedó viendo fijamente por aquella propuesta inesperada.

“No creo que te pongas a pensar tanto en eso si tienes a alguien con quien
hablar”.

“Pero… estoy empapada…”

“De cualquier forma yo estoy igual, no es que importe mucho. Pero, si aun así
decides quedarte aquí, te acompañaré las horas que hagan falta”.

“Ayanokouji-kun, aunque no lo pareces eres bastante persistente”.

“Posiblemente”.

Y así, ambos entramos a los dormitorios.

Por suerte a esta hora, y en este momento, no había nadie en los pasillos.

Subimos al elevador hacia mi habitación en el cuarto piso.

“Entra”.

“¿Realmente estás seguro?”

“Sí”.

“… Lo siento, y gracias”.

Ichinose entró a la habitación y dejé que se sentara donde quisiera. El suelo era
frío, y todavía cargaba su ropa mojada lo que no era del todo bueno para su
salud. Traté de encender la calefacción para que no se enfriara más y luego le
di una toalla para que se secara.

“¿Y qué tal si me lo cuentas con tranquilidad?”

“¿Contar qué?”

“Lo que estás pensando ahora, de qué estás dudando, todo eso”.

“Eso… n-no, claro que no”.

Por un momento se sorprendió, pero luego rechazó mi oferta.

“Yo hasta ahora me he apoyado demasiado en ti Ayanokouji-kun. Creo que…


eres la persona que más me ha ayudado, por eso, hablarte de eso sería
demasiado lamentable, muy vergonzoso”.

Ichinose Honami es una chica débil.

Pero siempre ha mantenido su lado respetable como líder.


Y esa era una de las cosas necesarias para ser un líder. Algo necesario para
pensar en que todo estará bien si siguen a esa persona.

Algo que un líder tiene que demostrar siempre a las personas por debajo de él o
ella.

“Ayanokouji-kun, creo que ya has conocido más que suficiente el tipo de persona
que soy”.

“Sí, eso puede que sea cierto. Pero sólo el tipo de persona que es Ichinose
Honami de forma personal, todavía no sé qué problemas y dudas tengas como
líder de la clase B”.

“Pero si te enteras de eso…”

Ichinose ocultó su rostro con la toalla, evitando a toda costa ser sincera con ella
misma.

Como si estuviera ocultando su expresión para evitar que yo la viera.

“¿No confías en mí?”

“¿Eh?” Reaccionó ella, aún con la toalla en su cara.

“Si es por eso, entonces no tienes que responderme. De hecho, estaba


equivocado en preguntártelo en primer lugar”.

“No es eso. De hecho, creo que ahora mismo eres la persona en la que más
confío…”

Será eso verdad, o tal vez mentira. En todo caso no era algo que importase
ahora.

De cualquier forma, ya tenía decidida mis siguientes palabras para Ichinose.

“Me halagas, pero ¿por qué lo dices? Puede que sólo me esté aprovechando de
tu gentileza, ¿sabes? Ya te conté hace tiempo lo que sucedió con Sakayanagi,
aunque no por completo, ¿verdad? ¿Y si solo estoy haciendo lo mismo de esa
vez?”

Era algo que ocurrió no hace demasiado tiempo.

Un pasado que quería mantener oculto, un error cometido una sola vez en
secundaria.

Aun si era por el bien de su hermana, le dijo a Sakayanagi de la clase A, su


enemiga, de los robos que había cometido. Lo dijo a pesar de que era algo que
ella nunca le hubiera dicho ni a su único y más confidente amigo.

Eso fue algo que una buena persona jamás haría.


“Nunca le diría mis secretos a alguien con quien todavía no sé si me llevaré bien”.

Claro que eso cambia si existe algún factor de por medio.

Pero lo que hizo Ichinose realmente fue algo sin sentido.

De hecho, lo hizo a propósito aun sabiendo que eso la afectaría a ella misma.

“Por eso, ¿qué harías si vuelve a suceder eso?”

“Pues, a decir verdad, no me gustaría para nada”. Dijo ella, tomando un mechón
de su flequillo para luego secarlo con la toalla.

“Ya veo. Entonces no hay problema. Siempre y cuando estés reservada en esas
cosas, no preguntaré más”.

“Ah, no es eso… sí es cierto que estaría en problemas si sucede algo como la


otra vez. Pero tú eres diferente”.

“Soy de otra clase. En ese sentido también soy tu enemigo, ¿no?”

“Pero no quiero decir que eres mi enemigo tan a la ligera”.

“Aunque no quieras decirlo eso no cambia el hecho de que sea verdad”.

“Pero…”

Todavía insatisfecha, Ichinose continuó.

“No eres mi aliado… pero sí alguien en quien puedo confiar”.

Al darle la vuelta al asunto de esa forma, sólo dejaba en claro que no le gustaba
la palabra enemigo.

El agua que puse a hervir ya casi estaba lista.

“Tengo café, café con leche y también cocoa”.

“Entonces… un poco de cocoa”. Dijo Ichinose sonriendo débilmente, por lo que


asentí y puse cocoa.

Espero que con esto pueda calentar un poco su cuerpo.

Al cabo de no mucho, la lluvia se detuvo, y los rayos del sol se pudieron volver a
ver abriéndose paso entre las nubes.

Ichinose vio por un momento el clima afuera, y luego me miró nuevamente, con
una pequeña sonrisa.

Poco a poco y luego de eso, Ichinose comenzó a hablar de lo que sentía.


“Cuando entré a la clase B y conocí a todos mis compañeros, estaba segura de
que ganaríamos lo que fuera. Puede que sólo estuviera cegada por la confianza,
pero realmente estaba rodeada de buenos compañeros, eso fue lo que pensé y
claro, lo sigo pensando”. Dijo Ichinose confirmando su modo de pensar
nuevamente.

“Pero el problema era yo, la líder. Si hubiera actuado de una mejor manera, ahora
mismo la clase B tendría un montón de puntos”.

“No estoy de acuerdo. Al menos yo creo que indudablemente eres una persona
dotada”. Dije, pero ella negó eso con la cabeza.

“Me di cuenta de esto nuevamente hoy cuando hablé con Horikita-san. Ella ha
crecido mucho en todo este año, y no solo ella, Ryuuen-kun y Sakayanagi-san
también. Todos los demás líderes se vuelven cada vez más fuertes”.

Ella no creía que estuviera creciendo a diferencia de todos a su alrededor que


iban tomando la delantera.

Eso era lo que sentía y por eso estaba perdiendo la confianza en sí misma.

Eso sólo se volvía más fuerte al estar contando y acumulando todos los errores
de la clase como si fueran suyos.

“Realmente…. ¿Realmente seré capaz de ganar?”

“Ganar o no, ya veo…”

“Quiero escuchar tu opinión Ayanokouji-kun. ¿Puedes responderme con


sinceridad?”

“Si eso es lo que quieres”.

Sí, Ichinose quería una respuesta ahora. Pero la verdad todavía nada estaba
claro. El futuro es incierto, y ella todavía tiene muchas posibilidades.

Además, que sé muy bien, que Ichinose no es el tipo de alumna que se rendiría
tan fácilmente.

“Pronto empezaremos el segundo año. En otras palabras, un nuevo año nos


espera”.

“Sí…”

“En este nuevo año, trata de ver hasta dónde puedes llegar con tus compañeros.
En ese camino, habrá cosas felices, tristes, y momentos de frustración. Pero aun
así, sigue adelante, no te detengas”.

Eso es lo que, por ahora, Ichinose Honami, líder de la clase B, puede hacer.
Era seguir viviendo los días que ha estado viviendo hasta ahora, sin cambiar
nada.

Creyendo en sus compañeros, esa era la única forma de lograr atravesar estas
batallas y el arma más poderosa de la clase B.

“Entonces… eso significa que… ¿en un año obtendré la respuesta que quiero?”

Ahora mismo ninguno de los dos podía ver a su yo en un año.

Es seguro que por eso mismo se siente insegura.

“Tengo miedo. Tengo miedo de lo que yo en un año… pueda decirte en un año…


tengo miedo”.

La clase B empezó un buen año escolar en esta institución de educación


avanzada.

Con ayuda de todos sus compañeros, su clase logró proteger su posición en todo
este año.

Ella ha estado viviendo su vida escolar con la ayuda de sus compañeros,


superando todos los obstáculos de manera equilibrada.

Pero, en un abrir y cerrar de ojos, fue atacada por la realidad.

La realidad que Ichinose Honami vio, fue aquella escrita con la palabra “Horikita”.

“Yo…”

“Ya sé. Entiendo que no vas a aceptar eso como respuesta”.

Ichinose desvió la mirada.

Después de todo, no le respondí a su pregunta de que si ella iba a poder ganar


de ahora en adelante.

Pero en primer lugar, ni siquiera tenía que responder.

Ahora mismo ya se comenzaba a ver una gran diferencia entre las clases. Si lo
miraba de forma objetiva, era casi seguro que la clase B caería a una clase
inferior en el próximo año.

Eso es lo que Ichinose no podía dejar de pensar, lo que la mantenía insegura.

Ella estaba temblando. Temblando y no de frio, ella temblaba de miedo.

“¿Qué hago…? ¿Qué debería hacer…?”


Lo que es seguro es que ella, definitivamente no le mostraría este lado tan débil
a otro estudiante.

Especialmente a sus compañeros de clase.

Es fácil para mi decirle palabras gentiles ahora mismo. Sería pan comido
meterme en su corazón estando en este estado, hablándole calmadamente y
consolándola. Es más, podría incluso hacer mía aquella piel detrás de su ropa
mojada.

Me moví un poco y luego Ichinose naturalmente me miró.

Luego me senté al lado de ella. Ella trató de desviar su mirada, pero no la deje
hacerlo.

“¿A-Ayanokouji-kun…?”

Extendí mi mano derecha, tocando delicadamente su cabello mojado y luego


puse la palma de mi mano en su mejilla.

Frío, suavidad, pero a la vez un pequeño calor se transmitía a través de mis


dedos.

Luego moví mi dedo lentamente, hasta ponerlos en los labios de Ichinose.

Así, su cuerpo que estaba temblando comenzó a calmarse al igual que sus
labios.

En casos normales ella tomaría distancia y trataría de alejarse de mí, pero en


este caso ella no huyó.

“Qué extraño… y a la vez misterioso, esa es la clase de persona que eres,


Ayanokouji-kun”.

“Puede ser”.

Dejé de hablar y me miré frente a frente con Ichinose. No hice nada más, sólo
eso.

“Ichinose, ¿crees que podemos volver a encontrarnos de esta forma el próximo


año?”

“… ¿A qué te refieres?” Los ojos de Ichinose me vieron fijamente, sin siquiera


intentar escapar de mi mano.

“Me refiero a que quiero volver a estar así el próximo año, sólo tú y yo, solos”.

En cierto sentido, eso pudo haber sonado como una confesión de amor.

Pero aquí se acabó. Alejé mi mano de Ichinose y luego tomé distancia.


“Sobrevive a este nuevo año y reencuéntrate conmigo. ¿Puedes prometérmelo?”

“Yo…”

Dudó por un instante.

“Pero puede que para ese momento yo… mi clase ya esté…”

“No importa. Sólo quiero volver a verte este mismo día el próximo año”.

Ichinose cerró sus ojos y asintió levemente.

“Cuando llegue ese momento prometo decirte las palabras que ahora mismo
estaba pensando expresarte”.

“Sí. Gracias… Ayanokouji-kun”.

La energía que había perdido aquellos ojos, poco a poco comenzaba a regresar.

“Yo también lo prometo. No importa qué se interponga en mi camino, avanzaré


y llegaré a la clase A”.

Y ahora, ella puso la mejor sonrisa de todas las que había puesto hasta ahora,
sellando así nuestra promesa del próximo año.

De seguro podremos cumplirla siempre y cuando ambos estemos aun aquí para
ese entonces.

Ichinose Honami seguirá dirigiendo la clase B. Ahora me pregunto, hasta donde


llegarán.

Aunque haya mucho pesimismo de intermedio, aun nadie conocía el futuro.

Pero… si veo que están a punto de caer, entonces yo los “ayudaré” a que
realmente caigan.
Capítulo 4
De un Hermano para una Hermana
A la mañana siguiente ya era 31 de marzo, un día especial para mí.

Sí, hoy era el día en que Horikita Manabu se despedía de esta escuela.

El tiempo de reunión era aproximadamente al medio día.

Pero de todas formas, salí temprano como siempre, y llegué hasta la puerta
principal.

Tal vez no les habían dicho a los otros estudiantes de cursos menores del día de
su partida, pues por aquí cerca sólo estaba yo y nadie más.

Esperé pacientemente, matando el tiempo mientras veía a los demás


estudiantes dirigiéndose al centro comercial.

Ahora que lo pienso, hace un año que llegué aquí por primera vez, pasando por
esta misma entrada.

Era un lugar un tanto cercano, pero a la vez lejano.

Aunque se podía salir en bus debido a exámenes o actividades de clubes, por lo


general la única manera de realmente salir de aquí era graduándose.

Dado que no había un sistema que te permitiera repetir el año, tenías que elegir
de qué forma saldrías de este lugar durante los 3 años de estudios.

“Ahora que lo veo, últimamente sólo pienso en esas cosas”.

Ahora que estaba por subir a segundo año, estaba pensando mucho en mi yo
del pasado.

Luego de un rato, y 20 minutos antes del tiempo acordado, el hermano de


Horikita llegó.

Luego de verme, él miró de reojo a su alrededor.

No hacía falta ni preguntarse qué era lo que esa mirada suya buscaba.

“Lastimosamente tu hermana aún no llega”.

“Ya veo”.

Ahora mismo eran las 11:40.


No es como si estuviera atrasada o algo por el estilo.

Pero considerando que de todas formas sólo quedaba poco tiempo, no estaría
mal que llegara más temprano.

Luego de la conversación con Ichinose el otro día. Recuerdo que incluso en ese
momento Horikita se veía bastante confiada en lo que estaba haciendo.

Así que, que haya ocurrido algo imprevisto también era una posibilidad.

“¿Quieres que la llame?” Le sugerí.

Al decirle eso debería ser más fácil para él pedirme ese favor.

“No, no es necesario”.

Sin embargo, él rechazó calmadamente mi oferta.

“Si se enfermó o le pasó algo ella de seguro te lo hubiera dicho con anticipación”.

“O puede que sólo se haya quedado dormida”.

Eso sí que no era algo que ella haría, pero todavía era una posibilidad.

“Incluso si es eso, no hay necesidad de despertarla”.

Parece que si no viene a verlo en el día en que se va de este lugar, entonces es


igual a decir que no vale nada para ella.

Pero aun siendo su último día, ni él ni ella cambiaban su actitud.

“Bueno, estará bien. De todas formas, aún queda tiempo”.

Era más que posible imaginársela a ella estando nerviosa preparándose en su


habitación hasta el último minuto.

“Dejando de lado lo de Suzune, no esperaba que tú llegaras tan rápido”.

“Creí que tú también lo harías”.

La reunión era al medio día, y por supuesto, todavía quedaba algo de tiempo
para que salieran los buses a partir de ahí.

Pero hoy sería la última vez que hablaban. Por supuesto, era obvio pensar que
tanto él como Horikita tenían cosas que hablar.

Y tal como lo esperaba, él llegó 20 minutos antes.

Aunque para mala interpretación nuestra, la persona central en todo esto,


Horikita, estaba ausente.
Pero de cualquier forma, ya que no estaba, nos tocaba a hablar a ambos de
alguna cosa.

Aunque tal y como era obvio, sería un desperdicio de tiempo dada la situación.

Luego de pensar por un rato, le hablé de algo que me había llamado la atención
últimamente.

“Lo siento. Creo que debí haber hecho al menos algo más por ti con el asunto
del consejo estudiantil”.

El hermano Horikita había venido hasta a mí para consultarme sobre cómo


detener los movimientos de Nagumo Miyabi.

Pero en esos momento quería vivir una pacifica vida escolar, al menos mucho
más que ahora, por eso no me interesó mucho el tema. A lo mucho fue conocer
el vicepresidente Kiriyama pero eso era todo.

Al final, llegamos hasta aquí sin siquiera haber hecho algo para que Kiriyama se
moviera.

“Todo es mi culpa, yo tampoco debí haber intentado forzarte a que hicieras algo,
así que no te preocupes”.

Para el Horikita mayor, él ya era de las personas que dejarían la escuela.

Ahora estaba en una posición en la que realmente no tenía que preocuparse por
lo que podría o no podría pasar.

“Aun así, me gustaría decirte esto una vez más. A mis ojos, la política de esta
escuela es positiva. Aunque juzguen a los estudiantes por sus habilidades, hay
oportunidades más que suficientes para que las clases más bajas puedan ganar,
aunque ninguna de las batallas que viví aquí fueron fáciles”.

“Pues la verdad cuesta creerle a alguien que estuvo en la clase A por 3 años
seguidos”.

“Sí, pero se podría decir que es porque no se dan cuenta de la verdadera esencia
de las cosas. Por supuesto, hay muchas cosas que la escuela podría y debe
mejorar, pero trata de recordarlo. En el examen especial en la isla desierta, la
escuela preparó escenarios en el que incluso las clases inferiores ganaron a las
clases superiores, ¿no?”

A los estudiantes no se les pedía mucho sólo en las pruebas escritas, sino en los
exámenes especiales y otro tipos de pruebas.

En el caso de la isla desierta por supuesto, no era muy complicado ganarle a la


clase A o B, lo mismo con los exámenes de final de curso. Claro que dependía
mucho de la suerte, pero eso también era prueba de que las clases inferiores
podían estar por encima de las clases superiores.
“La suerte es un factor determinante en una victoria o derrota. Es algo
sumamente necesario para que las clases inferiores, aun inexpertas, puedan
ganarles a las clases superiores. Pero al mismo tiempo, para las clases
superiores eso es inaceptable, hasta el punto de lo desagradable”.

La consideración de parte de la escuela hacia las clases inferiores provocaba el


resentimiento hacia las superiores.

El sistema de la escuela que beneficia a la clase entera, otorgando la oportunidad


de reunir hasta 20 millones de puntos privados en un marco separado, al final
era otra de sus consideraciones para las personas con habilidades más pobres.
Aunque claro, cada clase tenía estudiantes sobresalientes, los cuales peleaban
entre sí una y otra vez para llegar arriba del otro.

Nagumo al igual que nosotros también experimentó los exámenes de primer año,
y fue donde se le ocurrió su idea.

En pocas palabras, implementar un sistema mucho más meritocrático, y donde


el esfuerzo y habilidades individuales sobresalieran.

Un sistema donde el que estaba arriba pudiera llegar a la cima, y el que estaba
abajo hasta lo profundo.

“Ahora que lo pienso, puede que Nagumo no estuviera del todo equivocado”.

Aunque al igual que el anterior sistema, hubo muchas quejas, también muchos
estudiantes lo respaldaron.

Y la mayoría de los que estuvieron de acuerdo eran estudiantes de segundo año.


Por supuesto, no todos lo apoyaban porque les parecía bien, había otros que lo
hacían porque no tenían de otra. Si todos eran estudiantes sobresalientes,
entonces todas las clases debían seguir peleando entre sí.

“No te parece que hay mucha diferencia de puntos privados en los de segundo
año?”

“Sí. De hecho, la clase A de Nagumo ahora tiene 1491 puntos, y la clase B 889.
La clase C tiene 280 puntos y la clase D 76 puntos”.

Teniendo en cuenta el periodo de un año, se podía decir que la clase A ya estaba


muy por encima del resto.

Y en medio de eso, Nagumo comenzó a hablar por la salvación de las clases


bajas.

Claro, con 76 puntos era algo imposible de lograr.

“Es obvio que consiguiera tantos seguidores. Si no puedes subir con tu clase,
entonces para llegar a la clase A no queda otra opción que hacerlo por
meritocracia individual”.
“Puede que así sea. Pero no cambia el hecho de que muchos no estuvieron
contentos con su intención”.

Si había mucha diferencia de habilidades, de talentos, nacerían inevitablemente


las disputas entre compañeros.

En pocas palabras, podrías convertirte en el enemigo de todos a tus alrededor.

El Horikita mayor… no, Horikita Manabu pensaba que la manera absoluta era
mediante la cooperación de clases.

A su vez, veía que era la única forma de llegar a avanzar hacia el futuro.

“¿Y qué diferencia hay con la actualidad? Al final todas las clases están
insatisfechas a excepción de la clase A”.

Sólo se podía tratar de adivinar los ideales de Nagumo, pero si se implementara


un sistema donde las personas avanzaran por merito individual, entonces se
rescatarían a unas 40 personas más unos cuantos más por clase.

“Sí, por ejemplo—”

Traté de decir, pero el hermano Horikita lo dijo antes.

“Usar todos los puntos de la clase B o inferior, y usarlos todos para apostar
boletos para la clase A”.

Pensamos exactamente lo mismo, así que asentí.

Entre la clase B y D había 120 estudiantes sin contar a los expulsados.

Si reunían todos los puntos privados podrían superior la cantidad de 20 millones.


No, de hecho, podrían llegar a los 40 o 60 millones de puntos.

Claro que dudo mucho que todos apoyen ese tipo de juego de azar. No conozco
muy bien en el sistema actual, pero hasta hace poco se podía cobrar los puntos
retenidos al momento de la graduación. Por eso había estudiantes a los que no
les importaba graduarse en la clase D dado que igual conseguirían algo de
dinero. Pero, si uno tenía las condiciones para poder subir, y también el apoyo,
entonces podía hacerlo. Si no pueden subir con toda la clase, no estaría mal
apostar por subir de forma individual.

De esa forma la cantidad de estudiantes que irían a la clase A subiría.

Era la única oportunidad para poder avanzar a la clase A donde la diferencia de


puntos con las demás clases era abismal.

“¿No hablaron de eso en tu grado?”


“Mentiría si te dijera que no. Pero a final de cuentas, nadie lo hizo. La clase A y
B estaban compitiendo entre sí, y la B y D no tenían suficientes puntos para
hacerlo”.

Eso me recordaba a los estudiantes de la clase D de tercer año con los que hablé
el año pasado. Ellos parecían necesitar puntos, y era normal, pues era
complicado obtenerlos si seguían acumulando derrota tras derrota.

Un espiral de derrotas, uno en el que tenías que pasar meses viviendo en 0s.

“Hasta ahí no habría tanto problema. Pero Nagumo planeaba involucrar incluso
a su clase A. En pocas palabras, era poner en peligro a sus propios
compañeros”.

De darse el caso, había posibilidades de que estudiantes con pobres habilidades


en la clase A pudieran ser reemplazados y dejaran la escuela.

Eso era obvio, pues claramente las demás clases no iban a permitir que solo la
clase A no participara en ese sistema. Pues la intención era tratar igualmente de
la clase A, a la clase D.

“No tengo ni idea hasta dónde pensaba hacerlo, pero sí que necesitó valor para
sugerir eso”.

“Supongo que se aburrió de tanto ganar. Esa sería la razón principal,


considerando que ingresó al consejo estudiantil sólo para distraerse”.

Si tenía habilidad y apoyo nadie podía quejarse.

“Las clases deben ser uno para todos y todos para uno, y no creo que se deba
exceder de eso”.

“Entonces por eso no puedes consentir las acciones de Nagumo”.

No asintió, pero el Horikita mayor aceptó mis palabras.

Entiendo bien su argumento, pero no podría decidir quién estaba en lo correcto.

Además…

“Por ahora, observaré lo que Nagumo esté tratando de lograr. Si dice que puede
convertir a todo los grados, no, a toda la escuela en una institución más
meritocrática, entonces no voy a negar que podría tratar de experimentarlo”.

No mentí, simplemente le dije lo que sucedería de ahora en adelante.

“Ya veo. Entonces irás incluso más alto de lo que yo llegué”.

“Tampoco exageres”.
Además, que no tengo planes, ni tampoco intención de tratar de detener a
Nagumo.

En ese caso, no estaría mal tratar de ver el escenario que él está tratando de
construir.

Después de todo, ya experimenté bastante el año que el Horikita mayor trató de


proteger a toda costa.

“No soy una persona tan sorprendente como piensas”.

“No, lo lamento, pero no te creo”. Dijo él, rechazando con fuerza mi humilde
comentario.

“Parece que tu valoración sobre mí no ha descendido nada todavía”.

“Lo haría si tuvieras algo que mereciera que lo hiciera”.

En ese caso, su opinión sobre mí no ha cambiado nada en todo el año.

Su calificación no ha cambiado, sin saber nada de mí, y sin tratar de saberlo.

“No puedo entenderlo. ¿Qué se supone que tengo para que me reconozcas?”

Lo único que él sabía y que ningún otro estudiante más sabe es el pequeño juego
de puntajes que hice en el examen de ingreso, y aquello que hice cuando traté
de detener la violencia contra su propia hermana menor.

Aparte de eso, sólo quedaba el hecho de que había sido más rápido que él en la
carrera de relevos.

Pero en general, no debería saber hasta dónde llegan mis habilidades, ya sean
académicas como deportivas.

“Tengo confianza que hasta cierto punto puedo reconocer las habilidades de la
otra persona. Mediante mi intuición y valoración personal, claro”.

Pues eso es algo bastante abstracto y poco concreto.

La verdad es que me sorprende pue pueda seguir valorándome de esa forma.

“¿Y qué es lo que dice tu intuición de mí entonces? Dímelo al menos como regalo
de despedida”.

Me dio un poco de curiosidad así que se lo pregunté.

Pensé que no sería malo comparar mi yo actual con el que él pensaba que era.

Además, al tratarse de él, respondería con total sinceridad sin agregar nada
innecesario.
“Pues, veamos…”

Luego de una pausa, Horikita Manabu recordó al yo que había estado viendo
durante este año.

“Te veo como alguien bastante alejado de una experiencia de vida común y
corriente. La brecha de eso, no sé hasta donde pueda llegar. Eres una persona
sumamente talentosa, sin mencionar tu habilidad para la estrategia.
Sinceramente, hasta ahora eres el único con el que realmente no quisiera
competir”.

Vaya evaluación. Aunque si lo decía por pura intuición entonces no estaba tan
alejado de la realidad.

“En pocas palabras, ¿levantarías la bandera blanca contra mí?”

“Eso es otra cuestión. No importa si tu oponente es perfecto en todo, siempre


hay una manera de ganar”.

La verdad me alivié un poco por su respuesta.

“Más en este tipo de escuela donde se pelea por clase. Siempre habrá un límite
en la capacidad de cada persona”.

“Supongo que sí. Pero eso es lo que lo hace divertido”.

“Ayanokouji, ¿en qué tipo de ambiente creciste? Es bastante claro que no eres
del tipo de persona talentosa que nació con todo eso. Y tampoco estás a un nivel
a donde solo la educación familiar te pueda llevar”.

“Tú tampoco tienes una familia tan normal que digamos, ¿no?”

Supongo que como alguien que sirvió como presidente de la élite de este lugar
debía saber bien cómo se ascendía.

“No es como si hubiera estado arriba desde el principio. Hubo un tiempo en el


que pasé por dificultades. Pero aun así, superé eso con esfuerzo. Desde ese
entonces, hasta ahora y para siempre”. Dijo el Horikita mayor, explicando su
forma de llegar a la cima.

“Si tomamos esa lógica entonces podría decir que he hecho el mismo esfuerzo
o mucho más para ascender”.

“… Supongo que sí”.

Siguiendo su lógica, para ganarle a alguien que pone esfuerzo en sus acciones,
entonces deberás hacer el mismo o mucho más esfuerzo.

Sí bien esa era una de las respuestas, no era la única.


Horikita Manabu sacó su teléfono y luego me mostró la pantalla donde estaba su
número.

Luego de eso cambió la pestaña y mostró otro número.

“Recuerda bien estos dos números. Uno es el mío, y el otro es de Tachibana. Si


necesitas ayuda en algo luego de nuestra graduación escríbenos. Si no puedes
recordarlos escríbelos, pero asegúrate de borrarlos luego”.

El contacto con las personas del exterior estaba prohibido, aun si era por
teléfono.

Y de todas formas, contactos muy desorganizados sólo son un problema para


mí.

Luego de asentir, memoricé los 2 números de 11 dígitos.

No creo que llegue el día en que tenga que usar estos números para algún
asunto personal, pero tampoco estaba de más recordarlos.

“Ahora que recuerdo, no te lo había preguntado. ¿Qué harás a partir de ahora?”

Dado que me dio su número, supongo que quería mantener un contacto incluso
luego de su graduación.

“Ah, sobre eso…” Trató de decir el hermano Horikita, pero se detuvo al ver la
hora en su teléfono.

“Te lo diré luego de que tú te gradúes. Ya va siendo hora de irme”.

En nada sería ya medio día.

En otras palabras, la hora en la que se supone debía encontrarse con su


hermana.

Pero no podía ver a esa hermana por ningún lado.

La expresión de él era como siempre, pero por alguna razón podía sentir algo de
soledad viniendo de él.

“¿No deberías escribirle al menos?”

La verdad era impensable que no viniera por un simple descuido.

Tuvo que haber pasado algo, y era poco probable que pudiera haberse quedado
dormida.

“No… mejor no”.

Respondió él, no queriendo llamarla incluso si algo había sucedido.


Ahora sé muy bien que él no odiaba a su hermana menor.

“No tienes por qué ser tan reservado. No sería malo que de vez en cuando que
seas tú el que se acerque a ella”.

“Temo porque un simple momento de emoción mía pueda perjudicar el desarrollo


de mi hermana. No habría problema si se tratara de algún accidente, o que se
quedara dormida. Pero si ella no quiere verme, porque llegó a la conclusión que
eso no la haría crecer, entonces no debo estorbarle más”.

“¿Crecer sin verte? ¿Realmente crees que ella es ese tipo de hermana menor?”

“Es Suzune quien decide eso, no yo”.

Él no mostraba sus sentimientos, más bien no era nada sincero consigo mismo.

“Veo que sigues sin mostrar un lado dulce hacia ella”.

Aunque en lo personal creo que es ahora cuando debería hacerlo.

Habían pasado de las 12, un minuto más para ser exactos.

Pensé que iría directo hacia la puerta, pero aún no comenzaba a caminar.

Eso sólo significaba que, aunque no quería mostrar un lado condescendiente, lo


estaba haciendo al final.

“Quiero confirmar algo contigo. Considéralo una preparación para tu


graduación”. Dijo él mientras me miraba fijamente.

Yo por mi parte asentí, sólo para darle el gustó por última vez.

“Si es algo que puedo responder, adelante”.

Era seguro que él se dirigiría directo a la salida luego de esta conversación.

“¿Por qué vives escondiendo tus propias habilidades, tus propios talentos?”

No era como si no me esperaba esa pregunta, pero sí que fue directa.

“Porque no me gusta llamar la atención, supongo”.

“¿Y realmente vas a seguir haciéndolo aun si eso significa esconder tu verdadero
yo?”

“Quién sabe. La verdad no he pensado mucho sobre ello”.

Cuando ingresé a esta escuela, sólo quería tener una vida estudiantil común y
corriente. Pero al escuchar esta pregunta, no voy a negar que tengo mis dudas.
“Simplemente decidí vivir como otro estudiante cualquiera, común y corriente.
Aunque en lo que va del año hubo muchos giros y vueltas, y momentos en los
que tuve que hacer lo que tuve que hacer”.

“Entonces ¿vas a seguir haciendo lo mismo de ahora en adelante?”

“Ni idea. Últimamente muchos me tienen en la mira, así que también puede que
actúe un poco más en serio a partir de ahora”.

La verdad había muchas cosas que todavía no sabía, pero al menos traté de
responderle con sinceridad.

Pero al escuchar, ¿qué responderá el hermano Horikita?

“Últimamente en todo lo que pienso es en qué fue lo que hice, y qué más pude
llegar a hacer en esta escuela”. Dijo él, mirando al edificio de la escuela a lo lejos.

“¿Pude crecer, pude desarrollar mis habilidades? O tal vez todavía hay muchos
más aspectos en los que debería de crecer… ese tipo de cosas”.

En otras palabras, ha vivido su tiempo en un entorno casi completamente


diferente al mío.

Por eso pudo llegar a ser presidente del consejo estudiantil.

“Pero para ti, ¿realmente será satisfactorio vivir una vida estudiantil mientras
intentas esconderte?”

“Al menos es una opción si quiero estar tranquilo”.

“Puede ser. ¿Pero acaso no viniste a este lugar para poder lograr algo? Si ese
es el caso, sinceramente creo que debería apoyarte en todo lo que pueda”.

“Así que lograr algo… lastimosamente, eso es algo que solamente personas
deslumbrantes como tú pueden lograr”.

Fue mi respuesta, pero no parecía que convenciera mucho al Horikita mayor.

“Si no puedes lograr algo en la escuela, entonces sólo logra algo con los
estudiantes. Deja una huella, un rastro en las memorias de los estudiantes, algo
que nunca olviden que hubo un estudiante llamado Ayanokouji Kiyotaka”.

Grabar mi existencia en el corazón de alguien más.

Nunca había pensado en eso.

“Estoy agradecido de que intentes que mi hermana crezca más, pero una de las
cosas que he entendido en este año, es que eso no es todo lo que puedes llegar
a hacer. Tienes la fuerza de un titan, pero por eso… no me decepciones”.
Ese fue el regaño, y a la vez motivación que dio como el presidente del consejo
estudiantil y la vez un senpai de la preparatoria de educación avanzada.

“Si quieres buscarte a ti mismo en medio de unas ataduras, mira a tu alrededor,


y en el tiempo de 3 años, trata de quedar en la memoria de las personas que te
rodean”.

“Quedar en la memoria de alguien, ya veo. Aunque en 2 o 3 años puede que ya


esté expulsado”.

“Aun si por algún problema llegan a expulsarte, creo que eres capaz de dejar
una huella en las personas en los años que te quedan. Si en 3 años, logras que
al menos alguien piense que fue bueno tener a Ayanokouji Kiyotaka en esta
escuela, entonces es lo mismo que haber logrado algo. Eso es lo que yo pienso”.
Repitió él. Por alguna razón sentí como esas palabras se iban quedando en mi
corazón poco a poco.

“Ya veo… sí, lo pensaré”. Eso fue lo máximo que pude responder, al menos por
ahora.

“Eso es suficiente. No soy yo el que tiene que dar con una respuesta, eres tú,
Ayanokouji.

No sólo sobre eso, o el consejo estudiantil de Nagumo, o sobre su hermana, o


sobre la escuela en sí.

Al final de cuentas yo era quien decidía.

Este mundo está lleno de semillas en crecimiento. Y en todas partes, hay pistas
para que uno pueda seguir avanzando, y llegando a lo más alto.

Por ejemplo, esta conversación con el hermano Horikita es una de ellas.

Si sigo viviendo escondido dentro de esta escuela, ciertamente no estaré


conforme. Memorias. Recuerdos en los que podría divertirme. Sí, al principio eso
era más que suficiente.

Por eso había vivido un año bastante silencioso en esta escuela.

Pero ahora puede que esa no sea la respuesta correcta.

Debe haber una razón por la que vine a este lugar.

Sí, exacto.

“Al final, terminé dándote un sermón. No era mi intención, lo siento”.

“No. De hecho, fueron buenas palabras de un senpai para su kouhai”.


No tenerte más por aquí la verdad será bastante solitario en varios sentidos.
Quise decir eso, pero lo reconsideré.

“Ja… parece que ambos mostramos un lado no tan propio de nosotros”.

Hay veces que las personas pueden hablar de forma diferente precisamente
porque saben que estarán a cierta distancia a partir de ese momento.

Al igual que también existen ocasiones en las que se pueden entender incluso
sin palabras de por medio.

“Ya va siendo hora de irme”. Dijo él, luego de darse cuenta que su hermana no
vendría pues ya eran pasadas de las 12:10.

Luego, vio por última vez a los dormitorios de primer año, de esta renombrada
escuela que estaba a punto de abandonar.

Era la dirección desde la cual debería haber venido su hermana.

Nadie hubiera podido anticipar este desenlace.

Pero, ¿esa es realmente la respuesta a la que llegaste? Horikita. No pude evitar


preguntarme eso.

Admito que tuvo una relación bastante complicada con su hermano. Pero fuiste
tú misma la que sufrió por años para tratar de arreglarlo. Y finalmente, estuviste
muy cerca de encontrar el camino correcto para hacerlo.

Metí mi mano en mi bolsillo y tomé mi teléfono.

¿Debería hacer que estos dos se encuentren así sea a la fuerza? No importa si
es un momento, o sólo una mirada, si esto se convierte en algo que Horikita
pueda usar para desarrollarse, debería tomar medidas forzadas…

No… también hay posibilidad de que resulte en todo lo contrario.

Eso podría causar una grieta en la relación a punto de recuperarse de ambos


hermanos. Verse el uno al otro, querer verse el uno al otro, es algo que se hará
dependiendo de los sentimientos de ambos después de todo.

No es algo en lo que otra persona deba meterse.

“Lo siento. Mi hermana te sigue causando problemas”.

El Horikita mayor se disculpó levemente, como si se hubiera dado cuenta lo que


estaba pensando.

“No tienes por qué disculparte”.


Finalmente él dio la espalda, y el hombre que había tenido el liderazgo de los
estudiantes por 3 años, se iba lentamente de la escuela.

“Estoy orgulloso que durante estos 3 años, siempre he seguido adelante, sin
mirar atrás, sin detenerme”.

Ese fue su resumen.

Las últimas palabras que él dejaba de sus 3 años en este lugar.

“En ese tiempo perdí a muchos compañeros de clase. Al igual que otros amigos
en clases diferentes”.

No se sentía ni una sola pizca de alegría viniendo de él por haberse graduado


en la clase A.

Por supuesto, tampoco se sentía pena.

Simplemente estaba reflexionando todas las cosas que había vivido.

“Como resultado, para esta graduación ya habían 24 expulsados. 13 solo en el


periodo del tercer año”.

No sabía si esa cantidad era mucha o poca para ese año.

Pero entre los de segundo año como Nagumo y compañía, creo que hubo 17
expulsados en los exámenes de invierno.

“Ustedes los de primer año tuvieron 3, ¿no?”

No podía imaginar cuán estricto se volvería todo a medida que vayamos


avanzando en los grados.

“Es normal que estudiantes que no puedan cumplir con sus tareas sean
expulsados, ¿no?”

“Exactamente. Es cierto que los estudiantes expulsados son aquellos que no


pudieron cumplir con los estándares de este lugar. Sin embargo, de vez en
cuando entre ellos también se van estudiantes prometedores”.

Protegiendo a alguien, o simplemente siendo derrotado por alguien mucho más


habilidoso.

Pero aun así, no es nada raro que un estudiante al que no esperarías que
expulsaran resultara expulsado.

“Muchos protestan y se quejan del sistema de esta escuela. No obstante yo estoy


sumamente agradecido”.
La escuela solía expulsar a estudiantes, a sus compañeros injustificadamente.
El Horikita mayor no negaba eso.

“En esta escuela están los jóvenes que llevarán a japón a un futuro mejor. Claro
que, nada asegura que de 100 estudiantes 100 sean elegidos para ese papel.
Lo mismo aplica para cualquier escuela o puesto de trabajo”.

Pero no se trata simplemente de que sean o no para el papel, sino que su fracaso
o éxito se decide por medio de todo tipo de resultados.

“Comprendí muy bien el ideal de esta escuela. Por eso, siento en lo profundo de
mí que no voy a olvidar eso incluso luego de irme de este lugar”.

Eso significa lo mucho que se ha desarrollado como persona.

Pero, ¿cuántos estudiantes de su mismo grado podrían llegar a esta misma


altura?

“Se acabó el tiempo”.

La puerta. La gran entrada estaba justo delante de nosotros.

Pero antes, él me miró una vez más.

“Puede que no sea lo que desees, pero me gustaría que te encargaras de


Suzune en mi lugar”.

Luego de recibir esas palabras, él me extendió su mano derecha.

“¿Puedes darme tu mano?”

“Sí”.

Alcé mi mano y le di un apretón a la que él extendió hacia mí.

Un apretón de manos es un acto en el que dos personas se dan la mano.

Sentí como si su mano que apretaba la mía tuviera una extraña fuerza en ella.

Y así, luego de unos segundos ambos alejamos nuestras manos.

“Espero que nos volvamos a ver, Ayanokouji”.

Se despidió, acercándose a la puerta.

Una vez saliera de este lugar, ya nada se podía hacer.

La única manera de volver a verlo sería luego de 2 años, o tal vez si me


expulsaran.
Pero de todas formas, yo no volveré a ver a este hombre nunca más.

“¡Nii-san!”

Alguien gritó por detrás de mí.

Es claro que todos en esta situación podíamos decir de quién era la voz.

Al escuchar esa voz, el Horikita mayor se detuvo.

Parece que llegó apenas a tiempo.

Ya era pasado del medio día, y estaban alejados por unos pocos metros.

SI hubiera llegado al menos 1 minuto más tarde, no hubiera podido ver su rostro
antes de salir de aquí.

Cuando su hermano se giró al verla, me di cuenta por primera vez la fuerza que
había en sus ojos. La verdad era algo que no me esperaba, al menos no sólo
porque llegara su hermana.

Claro que eso fue lo que yo pensé. Pero tal parece que no era el caso.

O creo que la forma correcta de decirlo sería; no era la única razón.

La verdadera razón de su sorpresa la entendí de inmediato.

“Pero qué…”

La Horikita que había llegado tarde y seguía faltándole el aliento por haber venido
corriendo, se paró a mi lado.

Pero en este momento para Horikita yo no era más que una parte del escenario
a su alrededor.

Su vista no se dirigió a mí ni una sola vez.

Luego, ella comenzó a acercarse a su hermano mientras trataba de recuperar el


aliento.

“Lamento… ¡lamento mucho llegar tarde!”

Dijo ella, disculpándose mientras agachaba su cabeza.

¿Por qué te tardaste? Debería ser la pregunta aquí.

“No…”

Pero parece que para él ahora mismo, eso no era necesario.


Después de todo, la razón estaba a la vista.

Él estaba confundido, o tal vez asombrado.

Había un gran cambio en la Horikita de hoy con la de ayer.

Sí, esa era la razón.

La razón por la cual el Horikita mayor se dio cuenta que su hermana no había
crecido ni un poco, desde el primer día de escuela.

Pero ahora, Horikita Manabu estaba atónito al ver a su hermana.

De hecho, hasta yo mismo lo estaba.

Este era el último día para ellos, su despedida.

Era claro que Horikita estaba preparada para llegar tarde a este momento.

Pero su hermano no la culpó, no la regañó.

“Parece que finalmente cambiaste”. Dijo su hermano, sintiéndose un poco


aliviado de ver a su hermana llegar a tiempo.

“¿Realmente crees… que he cambiado?”

“No… déjame corregirlo. Parece que regresaste a la persona que solías ser,
Suzune”.

Sí. No era un inicio, era un retroceso.

“Aunque me tomó 1 año… no, de hecho, muchos más”.

Respirando poco a poco, Horikita iba respondiendo a las dudas de su hermano.

“¿Por qué no lo hice antes, por qué no pude regresar a mi yo de antes mucho
más rápido? Es lo que digo sin dejar de culparme por ello”.

Poco a poco, paso a paso, Horikita iba acercándose a su hermano.

“¿Y qué es lo que piensas ahora?”

“Me pregunto lo mismo… No voy a mentir. Incluso yo sigo confundida”.

Horikita no pudo conectar bien sus palabras.

Pero su hermana simplemente se quedó esperando por esas palabras,


mirándola relajadamente.
“Pero hay algo de lo que sí estoy segura. Yo siempre… siempre… he tratado de
alcanzarte. Pero la yo que hacía eso ya no está”.

La Horikita Suzune que vivía solo por su hermano. La persona que era buena en
los estudios, en los deportes, y todo para que su hermano se fijara en ella.

“En ese caso, te pregunto algo. Ahora que dejaste de perseguirme, ¿qué es lo
que harás a partir de ahora?” Fue la pregunta de su hermano.

Horikita tomó un respiro y prosiguió.

“La verdad ya estoy cansada de perseguir la espalda de alguien. De ahora en


adelante seguiré, y perseguiré mi propio camino”.

Ahora mismo, ella lo único que había hecho era escapar de su propia vacilación.

Finalmente había logrado ver lo que está a su alrededor.

Y aun así, no detuvo sus pasos.

“y TAMBIÉN…”

Caminar su propio camino con sus propios pies. Parece sencillo, pero es
realmente complicado.

Pero para su hermano, decir eso era el mejor regalo de despedida que podía
recibir.

Aunque Horikita no parecía estar conforme con sólo eso.

“… Estoy segura que de ahora en adelante puedo caminar hacia adelante, por
mí y por mis compañeros”.

Convirtiéndose en la guía, la líder de los que estaban a su alrededor.

Ese era el pensamiento más importante para ser un líder.

“Y al mismo tiempo, junto con ellos aprenderé muchas otras cosas en esta
escuela para seguir mi propio camino”.

Hace un año cuando la conocí por primera vez, no pensé que llegaría a
desarrollarse tanto.

Para mí era una estudiante nueva, un tanto malcriada y a la vez más inteligente
que la mayoría a su alrededor. Una compañera que se sentaba al lado mío.

Alguien con habilidades individuales, para bien o para mal, esa era mi impresión
sobre ella.
“Ya veo. Entonces, finalmente… lograste volver a la Suzune que hasta ahora
estaba escondida sólo en mis recuerdos”.

Por eso es muy diferente a mí. Y tal vez por esa misma razón Horikita Manabu
ya se había dado cuenta.

Él, quien conoce mejor que nadie el potencial de su hermana, y la persona que
siempre creerá en ella.

El Horikita mayor bajó un momento su equipo, y luego se acercó a su hermana.

Todo, para librarse un poco de aquella distancia que los separaría a partir de
ahora.

Ambos ya estaban lo suficientemente cerca como para que sus manos se


tocasen.

“Sabes cuál es la razón principal por la que te traté así todo este año?”

“… No”.

Seguramente ella aún no entendía bien las intenciones ni los sentimientos de su


hermano.

Lo único que había hecho era liberarse de la maldición que ella se había
autoimpuesto.

Y sin saberlo, al mismo tiempo se vio obligada a abrir algo parecido a un cofre
del tesoro.

Pero no tenía la respuesta clave del por qué su hermano la rechazaba, del por
qué la alejaba de él.

“Realmente me preocupo por ti”.

“¡¿—?!”

Y darle la llave a esa respuesta era lo último que su hermano podía darle.

“Desde que eras una niña sentí un gran potencial en ti. Aunque eras inmadura,
te vi como una joya deslumbrante. Con el tiempo, esa joya se fue puliendo más
y más, hasta que finalmente tenía la certeza de que tenía las habilidades
suficientes para superarme”.
Y finalmente, dio el último paso.

Ya estaban a sólo una corta distancia de tocarse el uno al otro.

“Sin embargo, de un momento a otro fuiste atrapada en una ilusión de mí mismo.


Creíste que eras inferior a mí, creyendo por tu cuenta que era imposible
alcanzarme, tirándote a un abismo por tu propia cuenta. Pero aun así, elegiste
seguir persiguiéndome. Esa elección fue algo que no pude aceptar por más que
lo intentara”.

Perseguir la sombra de su hermano, y querer estar a su lado.

Ciertamente no es un mal deseo.

De hecho, se podría decir que era un espléndido objetivo.

Pero dicho de otra forma, que su meta sea estar al mismo nivel que su hermano,
de cierta forma era la peor elección para ambos.

Pues ella sería la hermana que quiere alcanzar a su hermano, y él el hermano


que quiere que ella llegue mucho más allá.

Eso fue lo que creó una gran brecha entre estos hermanos.

“Sé más fuerte que los demás, sé más noble que los demás”.

Su hermano la tomó en sus brazos, lenta y gentilmente.

Como buen hermano, él la abrazó con fuerza, a ella que estaba haciendo todo
lo posible para mantenerse en pie.

Y luego, acarició suavemente el cabello que ella “acababa de cortarse”.

“Nii-sa—”

“De ahora en adelante estarás bien. Ahora mismo tengo la certeza de eso”.

Yo tampoco no tengo palabras que decir aquí.

“Por muchos años he guardado silencio, queriéndome disculparme a toda costa”.

“¿Disculparte…?”

Sin saber a qué se refiere, ella simplemente preguntó vagamente con su rostro
en el pecho de su hermano.

“Yo soy la razón de nuestra problemática relación que hemos vivido hasta ahora”.

“¿A qué te refieres…?” Preguntó ella.

“Hace mucho, ¿recuerdas que dije que me gustaban las personas con el cabello
largo? Pues mentí”.

“¿Eh? ¡¿E-En serio?!” Dijo ella sorprendida.


“Recuerdo que te gustaba tener el cabello corto. Pero quería verificar a toda
costa si realmente eras capaz de dejar crecer tu cabello sólo para complacerme,
aun a costa de perder tu propio estilo”.

Y el resultado, es que ella dejó crecer su cabello para adaptarse al gusto de su


hermano.

Por eso al verla por primera vez en esta escuela él se dio cuenta al instante. Se
dio cuenta que su hermana, Horikita Suzune, no había cambiado en lo más
mínimo.

Él había encontrado nuevamente—pero con mucha desilusión—a la hermana


que sólo trataba de alcanzar a su hermano.

Ni siquiera tuvo que confirmar si era buena en los estudios o deportes.

“… Perdóname por mentirte”.

“… Eres muy cruel, Nii-san”.

“No tengo palabras que devolver”.


De seguro, él no supo cómo corregir su error en todo este año.

O tal vez, sólo para poder notar el cambio que él siempre creyó que su hermana
tendría en algún punto.

“Te perdono, perdono tu mentira. De seguro gracias a eso es que estoy aquí”.

Al entender eso, ella también no hizo más que perdonarlo con una sonrisa.

Él abrazó los hombros de su hermana, viéndola fijamente.

Mientras tanto ella, le dirigió a su hermano la mejor sonrisa que pudo formar en
ese estado.

Y al hacerlo, su hermano también, saliéndose de su actitud normal, le devolvió


la sonrisa.

Claro, no es como si fuera un hombre que nunca hubiera sonreído en su vida.

Pero de lo que estoy seguro, es que esa sonrisa en efecto, era la más gentil que
había hecho hasta ahora.

Esta sonrisa era otra de las cosas que nunca más volvería a ver.

Sólo un año más.

Si tan sólo hubiera podido compartir con Manabu un año más.

De seguro habría podido comprender más a plenitud la clase de persona que es


Horikita Manabu.

Y gracias a ello, puede que hubiera logrado cambiar un poco.

Eso se me hace realmente lamentable.

“Suzune, en 2 años te estaré esperando afuera de estas puertas. En ese


momento quiero que me muestres cuánto has crecido”.

“Sí. Daré mi mayor esfuerzo, luchando hasta el final”.

Ahora mismo no había nada que impidiera el crecimiento de Horikita.

De ahora en adelante, ella debería poder seguir su camino, avanzando hasta


donde ella quisiese.

“Ayanokouji, también estaré impaciente de verte de nuevo”.

Por eso, en cierta parte de mi cabeza, llegué a pensar que tal vez él y yo nos
sentíamos de la misma manera ahora mismo.
“Puedo decir lo mismo”.

Asentí fuertemente a sus sentimientos, aun sabiendo que eso era algo que no
iba a ser posible.

“Ya es hora”.

Ya casi eran las 12:30.

El bus de esa hora ya estaba llegando justo por delante de nuestros ojos.

Aunque con pena, ambos comenzaron a separarse.

“Hasta la próxima”. Dijo eso, y el Horikita mayor pasó por la salida.

Y así, un hombre se retiró de este lugar.

Horikita se quedó viendo su espalda, mirándolo fijamente sin siquiera pestañear.

En ese momento sentí como si Horikita Manabu no sólo dejara una guía para su
hermana, sino también para mí.
1
Ambos nos quedamos viendo en la misma dirección, hacia la salida mientras la
espalda del Horikita mayor, estaba tan lejos que no se podía ver más.

Pero, no era momento para quedarse absorto en los sentimentalismos por


siempre.

Traté de hacer que Horikita se moviera con mis palabras, pues ella estaba rígida.

“Estará algo solitario sin él por aquí”.

“… Sí”.

No es como si fuera una despendida para siempre, pero sí que no podría verlo,
ni escuchar su voz en los dos años que tenía por delante.

Aun así, la expresión de Horikita era rígida, tan fuerte al igual que noble, como
siempre.

“Ayanokouji-kun, te doy las gracias… realmente fuiste de ayuda hoy”.

“¿Tú crees? A decir verdad, pensé que sólo fui un estorbo”.

“Por supuesto que no. Si no hubieras estado hablando con él, de seguro no
habría llegado a tiempo. Por eso, gracias”. Dijo Horikita, dándole las gracias a un
hombre al que claramente no le correspondía estar aquí.

Sin embargo, ella no me miró. Seguía viendo hacia el frente, sin siquiera
pestañar.

“Además que, me habría sentido triste que yo fuera la única que lo despidiera en
este día…”

Aunque su camino lo eligió él mismo, eso no cambiaba el hecho de que sería


uno algo solitario.

Por eso, al menos se debía despedirlo, con una cantidad mucho más grande de
estudiantes.

Pero de seguro, eso también era por el bien de su hermana.

Él trató de no acercarse a los demás, todo para que fuera más fácil para Horikita
enfrentarse a ella misma.

Aunque no sé cuánto de esto había estado en los cálculos de ese hermano.

“Al final, parece que también formé algún tipo de relación con tu hermano. Pero
ciertamente me hubiera gustado hablar con él un poco más”.
Al principio no era algo que quisiera tanto claramente, pero ahora sí pienso que
debí haberlo escuchado un poco más. Como suelen decir, el arrepentimiento
llega tarde.

Ambos comenzamos a regresar a los dormitorios.

“Ahora que lo veo, sí que cortaste ese cabello”.

Hasta ayer estaba igual que siempre. Por lo que tampoco era difícil imaginar que
se lo había cortado bastante rápido hoy en la mañana al despertar. Supongo que
fue una decisión de último momento.

“Cuando era niña me gustaba tenerlo de esta manera. Pero ahora se siente algo
raro”.

Aun así, no podía darse el atrevimiento de manchar el escenario de despedida


de su hermano. Por eso se veía que había elegido un atuendo lo más
decentemente posible para despedirlo.

Como resultado, Horikita ganó.

“¿Pero no hubiera sido mejor tomar acciones por adelantado? Si sentías que no
ibas a poder tener tiempo para verlo, entonces bien podrías haberme usado para
detenerlo”.

Si me lo hubiera pedido habría podido cooperar un poco más.

Pero en este caso tuvo suerte de que perdimos un poco el tiempo hablando…

“¿Realmente hubieras aceptado amablemente a ayudarme si te lo pedía?”

“Pues considerando qué día es hoy, sí”.

“Lo dudo… o eso quisiera decir. Pero la verdad es que sí traté de hacerlo”. Dijo
Horikita.

Traté de verificarlo revisando mi celular. Pero tal y como imaginé, no había


ningún registro de llamadas por parte de ella.

“Supongo que estaba demasiado apresurada. Olvidé el teléfono cuando fui a


cortarme el cabello, y justo lo recordé cuando el corte ya había empezado. En
serio, qué lamentable de mi parte”.

En pocas palabras, no había nada que hacer al respecto.

Después de todo resultó más rápido que viniera corriendo a la salida que ir a su
habitación a tomar su teléfono.

“Qué torpe”. Dijo ella, burlándose de sí misma.


“Eso sólo significa lo importante que era este día para ti”.

La verdad se me hacía divertido imaginarla corriendo apresuradamente al


peluquero.

Incluso Horikita que solía actuar siempre de manera planificada podía cometer
errores al estar apurada.

“Cortar mi cabello fue mi manera de ponerle un fin a esto”.

“¿Y no se te pasó por la mente los gustos de tu hermano?”

“Claro que sí. Pero solamente quería regresar a la yo que era antes. El problema,
es que la yo que perseguía a mi hermano, y la yo que trataba de regresar a lo
que era antes, estaban en sincronía. Aunque en ese sentido pensé que podría
expresarme mejor con él”.

Entonces fue lo mejor que se le ocurrió.

Como ya me había acostumbrado todo un año al verla con su cabello largo,


ahora verla de esta forma se sentía bastante extraño.

“¿Y qué tal? ¿Qué se siente haber regresado a la tú de hace muchos años?”

“Pues, es una pregunta complicada. Ciertamente me gusta el cabello corto que


tenía cuando era pequeña. Pero al tener el cabello largo por tantos años,
desarrollé cierto afecto. La verdad es que es complicado”.

El cabello corto que amaba de pequeña, y el cabello largo que había aceptado
ahora en el presente.

Pero no importa su pasado o presente, ambas eran parte de la persona llamada


Horikita Suzune.

“Ahora mismo tengo la certeza de poder aceptar ambas partes de mí”. Dijo ella,
tocando la punta de su cabello recién cortado con su dedo.

“Por eso pensaré todo desde 0 otra vez, buscaré qué es lo que no puedo ver
ahora mismo. Veré qué tanto puedo crecer hasta el momento de graduarnos, o
si realmente no puedo seguir creciendo a partir de ahora. Si sigo creciendo, mi
cabello también tardará al menos 2 años en volver a estar igual de largo que
antes… sí, justamente en la época de la graduación”.

Horikita había aceptado a su yo del pasado a la vez que a su yo del presente.

“Pero de lo que estoy segura es que, no importa el largo de mi cabello. Al final


pude encontrarme con mi hermano dignamente”.

La verdad estoy ansioso por saber lo que pasará ahora que se ha cortado ese
cabello.
Al final de los finales, Horikita Manabu se fue dejándole un gran regalo. No
obstante, pensé que ella sólo se desarrollaría con una gran ayuda, lo cual puede
que termine siendo un error.

“¿Es absurdo no?” En realidad, debía haber muchas cosas de las que ella quería
hablar, sentimientos que quería expresar los cuales no entrarían en una sola
hora, ni tampoco en un solo día de conversación.

“Ciertamente. Porque básicamente estás pidiendo que te esperemos hasta la


graduación”.

Luego de la graduación uno podía contactar con el exterior todo lo que quisiera.

En ese momento, ella será capaz de hablar todo lo que quiera con su hermano.

“Todo lo que pasó hoy es un gran regalo para mí. Pedir más sería imperdonable”.

Qué cambió más rápido.

Sí, un cambio, aunque superficial.

Está tratando de cambiar al mismo tiempo que trata de guardar la calma en su


cabeza.

Sin embargo, no es nada fácil hacer eso con sus sentimientos.

“Pero… hasta aquí está bien”. Dijo Horikita, deteniéndose, inmóvil, sin siquiera
voltear.

No hacía falta decir que no podía ver su rostro.

O, lo correcto sería decir que, no podía mirarlo.

“¿Qué sucede?” Pregunté haciéndome el tonto, aunque ya sabía lo que pasaba

Si Horikita estuviera tranquila como siempre de seguro se habría dado cuenta de


eso.

Pero ahora, Horikita no se veía para nada tranquila.

“Tomaré un desvío… luego regresaré a mi habitación”.

Indirectamente me estaba diciendo que me fuera.

“¿Un desvío?”

Incluso si le pregunto a dónde va, ella no me va a responder.

“No, más bien, sólo será un paseo”.


Pero sus respuestas venían acompañas de una pequeña voz, una voz
perturbada.

“¿Te acompaño?”

“No, gracias”.

Y con esa respuesta ambigua, Horikita caminó sin voltear.

Pero no parecía dirigirse al centro comercial, mucho menos a la tienda.

Estaba caminando sin rumbo, o tal vez tratando de buscar un lugar desolado.

De seguro, porque no iba a poder aguantar hasta llegar a los dormitorios.

Aun así, la perseguí.

Obviamente, dado que ella quería estar sola, no se iba a sentir tranquila conmigo
siguiéndola.

“¿Por qué… estás siguiéndome?” Sin girar, sin verme, ella preguntó.

“Quién sabe, ¿por qué tú crees?”

“Si no hay un motivo entonces no me sigas”.

Entiendo que no quiera que la siga, pero de todas formas, no me detuve.

Después de todo, me acuerdo perfectamente de todas las cosas que Horikita me


ha hecho pasar en este año.

“Sí tengo una razón. Sólo quiero molestar un poco,”.

“… ¿Qué estás diciendo? No entiendo qué quieres decir”.

“Ah, bueno. Entonces te lo volveré a decir”.

“No tienes que hacerlo”.

“No, te lo diré de todas formas”. Hablé lentamente, tratando de derribar esa


última línea de aguante que quedaba en los sentimientos de Horikita.

“¿No crees que, en momentos tristes, es mejor no aguantar nada y tan solo
llorar?” Fueron mis palabras.

Sí, eso fue lo único que dije.

“… ¿No escuchaste lo que te estaba diciendo?”

“Te escuché. Estás feliz de haberte despedido de tu hermano, ¿no?”


“Así es. Eso hice, y estoy conforme con eso. ¿Por qué debería estar triste
entonces?”

“No hay forma de que estés conforme con eso. Es cierto que podrás volverlo a
ver en 2 años. Pero las personas no son tan fáciles de convencerse de algo ellos
mismos”.

El sueño que la chica había estado teniendo por siempre, fue retrasado 2 años
más.

No es como si no se sintiera mal por ello, pero ahí no acababa.

“Yo… estoy satisfecha. Estoy satisfecha”.

“Si lo estás entonces, ¿por qué no volteas?”

Horikita seguía dándome la espalda.

Sólo negó con su cabeza, rechazando mi petición.

“No quiero. ¿Por qué tendría que mirarte?”

“Pregúntatelo a ti misma”.

Le volví a hablar a Horikita quien apresuraba el paso para tratar de escapar de


mí.

“Puedes llorar, llora”.

Se reencontró con su hermano luego de 2 años, y fue rechazada.

Tuvo una batalla solitaria estando enferma en una isla inhabitada.

Se ganó el odio de su clase en las votaciones.

Pero en ningún momento, ella lloró

“Y-Yo…”

Ella trató de seguir caminando, pero al final se detuvo.

Ella se esforzó, se esforzó mucho hasta que finalmente pudo conectar con su
hermano.

Si él estuviera aquí todavía, de seguro mañana ellos se llevarían tan bien como
para reír juntos.

Sin embargo, su hermano ya no estaba. Había salido por esa puerta, para
embarcarse en un nuevo viaje.
La próxima vez que lo viera, será en 2 años.

“Para… para…” Su voz comienza a romperse poco a poco.

Pero Horikita debe seguir luchando en esta academia en todos esos meses están
por venir.

“¡Simplemente, es inevitable…!”

Aunque se resistía, lo que ella había estado guardando todo este tiempo salía
poco a poco de sus ojos.

Justo ahora, que recordaba la despedida con su hermano.

“¡Ahora que—! ¡¡Ahora que finalmente me di cuenta de mi error…!!”

Una a una, iban saliendo de sus ojos hasta llegar al suelo.

Ella tapó su rostro con ambas manos, aceptando las lágrimas que no dejaban de
salir.

“¡Pero nuevamente tengo que estar separada de mi hermano…!”

De seguro ella hubiera querido ir con él, perseguirlo hasta el otro lado de la
salida.

Pero sin hacerlo, simplemente vio la espalda de su hermano marchándose.

“Sí. Debes sentirte sola”.

“¡Sola… me siento sola…!”

La chica frente a mí lloró, lloró como una niña pequeña.


Las lágrimas se desbordaban de sus ojos, y aun así Horikita trataba de
aguantarlo.

Si no hubiera llegado a esta escuela, ella de seguro habría seguido


persiguiendo a su hermano a donde sea y cómo sea.

Lo habría visto cuando quisiera, y hablado cuando quisiera.

“Ahora puedes llorar cuanto quieras. Pero luego de eso, podrás mostrarle a tu
hermano cuánto has crecido desde su partida. Justo ahora, en este momento,
ha empezado tu cambio”.

No había motivo para apresurarse. Quedaban 2 años. En 2 años, de seguro


ella crecerá excepcionalmente.

Es seguro que su hermano está esperando eso también.

“¿No es así? Manabu—”

Mi voz que ya no podía llegar al receptor, fue absorbida por el viento del
principio de la primavera.
2
Horikita dejó de llorar luego de dejar desbordar sus emociones por un rato.

Sin embargo, seguía sentada sin decir nada, todavía sin recuperar sus fuerzas.

Me paré a su lado, esperando ese momento pacientemente.

Por suerte no había nadie más por aquí, o al menos yo no veía a ningún otro
estudiante cerca.

“Qué bien, ¿no?”

“Nada de ‘qué bien’. Para mí es más que humillante que hayas visto eso…”

Planeaba consolarla un poco, pero como imaginé, no es nada fácil.

“Me lo imagino”.

Por eso es que quería estar sola después de todo. Estando sola no habría podido
verla.

“Pero ya no tiene sentido pensar en eso. Tendré que ser optimista”.

“¿Optimista?”

“… Pensar que, al menos fue una suerte que hubieras sido tú quien me vio hacer
eso. Eso es lo que pensaré:”

Sí, ella dijo eso, suspirando aliviadamente desde el fondo de su corazón.

Tiene sentido. Hubiera sido mucho más incómodo si fuera otro estudiante quien
la hubiera visto.

“Bien. Ya regreso, iré a contarle a Keisei y a los demás”.

Saqué mi celular y la apunté con la cámara.

“¿Quieres que te mate aquí y ahora?” Dijo ella sumamente enojada, por lo que
guardé de nuevo mi celular.

“Quisiera enseñarles a tus aburridas bromas lo que es TPO”. (NT: Time, Place,
Ocassion. Tiempo lugar y ocasión, hace referencia a considerar el momento y el lugar
para hacer o decir ciertas cosas).

Si está lo suficientemente energética como para reclamar por eso, entonces ya


no hay de qué preocuparse.

“… Me recuerda a lo que pasó al principio de este año”.


“Sí”.

Aunque no es en el mismo lugar, la situación era algo similar a la vez que


hablamos los dos solos esa noche.

Esa vez que Horikita estaba decaída luego de su reencuentro con su hermano.

“¿Por qué siempre termino de esta manera cuando estás presente?”

Aunque que lo mencionaba. Por alguna extraña razón había formado una
extraña relación con Horikita desde que entré a esta escuela.

Y al parecer, a ella no le agradaba nada esa idea.

“¿Por qué no me muestras un lado así tuyo de vez en cuando?” Dijo Horikita,
pensando que era injusto.

“¿Que no viste uno hace poco? Ya sabes, mi derrota contra Sakayanagi en el


juego de ajedrez”.

“No puedes llamar a eso un fallo. Fue sólo una derrota”.

Parece que no estaba conforme con eso.

“Pues entonces tendrás que estar esperando uno en el segundo año”.

“Parece que así será. No queda de otra, lo meteré en mi lista de deseos de este
segundo año”.

Parece que se vengará a toda costa de que la haya visto llorar.

Ahora que lo pienso. Su impacto visual sigue siendo igual de fuerte incluso con
el cabello corto.

“Te aseguro que muchos se sorprenderán al verte”

En nuestra clase, había quienes trataban de cambiar su imagen poco a poco,


pero esto ya estaba a otro nivel.

“Que se sorprendan todo lo que quieran. No me interesa”.

No me interesa, no me importa lo que piensen los demás. Eso es lo que decía.

Pero seguro que el primero en reaccionar a esto será Sudou.

Todavía quedan unos días de vacaciones, y en eso puede que se extienda el


chisme, pero…

No, de hecho, desde mañana todos sabrían de esto si hubiera algún otro testigo
a la vista.
“¿Recuerdas el desafío del que hablamos el otro día?”

“Por supuesto”.

“Si yo gano tienes que cumplir uno de mis favores. Ya se me ocurrió algo”.

“Ohh… pensé que esperarías un poco más antes de decírmelo, para agotarme
mentalmente”.

“No, en serio no tenía planeado algo tan bajo. Simplemente no se me había


ocurrido nada”

A pesar de sospechar un poco de mí, ella escuchó mi deseo.

“Si yo gano, entonces entrarás al consejo estudiantil”.

“… Recuerdo que ya me lo habías pedido”.

Para ser más preciso, le había preguntado si estaba interesada en el consejo


estudiantil.

En ese momento, su hermano estaba en la llamada por lo que al final terminó


diciéndole que lo decidiera por voluntad propia y luego fue rechazada
nuevamente.

“Sí. ¿Aceptas la condición?”

“No me interesa en lo más mínimo unirme al consejo estudiantil, pero está bien…
si es que ganas lo haré”. Dijo Horikita, dejando entre visto que no iba a perder.

“Pero aun así, ¿qué te asegura que me dejarán entrar?”

“No te preocupes. Nagumo le da la bienvenida a quien sea”.

Muy diferente al método que utilizaba Manabu.

Además, que al tratarse de la hermana menor de su predecesor, entonces


Nagumo no se atrevería a rechazar su ayuda.

“¿Y puedes decirme la razón por la que quieres que entre al consejo?”

“Es un secreto. Te lo diré cuando pierdas”.

“Qué molesto. ¿De verdad no puedes decir al menos eso?”

“¿Ya estás pensando de nuevo que vas a perder?”

“… No es eso. De todas formas, ganaré, así que es lo mismo escuchar ahora


que escucharla después. Además, que si pierdes, puede que jamás me digas la
razón”.
Es cierto. Nada le aseguraba que estuviera dispuesto a decir mis razones en
caso de que perdiera.

“Tu hermano siempre tuvo un ojo puesto en Nagumo Miyabi. Creo que con eso
deberías entenderlo”.

“En pocas palabras, ¿quieres que sea la vigilante del consejo estudiantil?”

“Así es”.

“¿Entonces mi hermano te pidió eso a ti?” Dijo ella mirándome algo insatisfecha.

“¿Pues no te parece obvio? Después de todo no tenían una muy buena relación
que digamos”.

Si la hubieran tenido desde el inicio, de seguro él se lo habría dicho a ella sin


pensárselo 2 veces.

“Deja de actuar tan humilde. No hay duda de que tú eres la persona que más le
agrada a mi hermano en esta escuela. De lo contrario jamás te habría invitado a
que lo despidieras hoy… pero me sigo preguntando, ¿por qué a alguien como
tú?”

Horikita se quejó al mismo tiempo que se ponía de pie.

“Ya me harté. De hecho, creo que te sacaré de mi mente por un momento”. Dijo
ella cansada, refiriéndose que de otra forma no iba a aguantar más mi compañía.

“Antes de eso. Horikita, hay otra cosa de la que quiero hablarte”.

“¿Y ahora qué? ¿Otra vez saldrás con una tontería?”

“Sobre Kushida. Le diré lo que estoy planeando y los detalles de la situación”.

No se esperaba que cambiara a ese tema de inmediato, por lo que ella me


preguntó confundida.

“¿Qué situación?”

“Hice cierto trato con Kushida para evitar que se saliera de control”.

El contrato consistía en entregarle la mitad de mis puntos privados cada mes


para que pudiera protegerse. Al hacer eso, Kushida ignoraría cada una de mis
acciones.

“Dios… ¿es que eres idiota? A quién se le ocurre formar un trato tan absurdo
como ese”.

“Lo hice para ganarme su confianza”.


“¿Y no crees que te pasaste? Entregar la mitad de tus puntos privados cada mes
es una locura”.

“Porque pensé que sólo eso llamaría su atención. Aunque bueno, ahora mismo
dudo que tenga tanta confianza en ella misma luego del sermón que le diste en
público”.

En vez de sentirse insatisfecha conmigo, podría ser que sus dudas comenzaran
a resurgir.

“Dios… en serio estoy comenzando a dudar de si eres inteligente, o solo un


estúpido”.

Entiendo sus palabras, y su asombro. Pero no me importa realmente.

“¿Y entonces? ¿Por qué me lo dices a mí?”

“Hice ese ridículo trato porque no pensé que me afectaría en el futuro”.

“Dices que no te afecta en nada perder la mitad de tus puntos privados cada
mes?”

“No. Me refiero porque si Kushida, que es la que tiene la otra parte del trato,
termina siendo expulsada, entonces no habría ningún riesgo para mí”.

Al escuchar eso, ella se detuvo.

Y nuevamente, me miró con esa mirada penetrante suya.

“¿Te das cuenta lo que acabas de decir? ¿Acaso bromeas?”

“Planeaba hacer que expulsaran a Kushida. No, de hecho, aún creo que debe
ser expulsada”.

“No bromeas… ¿cierto?”

“Sí. Pensaba deshacerme de Kushida en el verano”.

Sólo que la situación dio un giro y no tuve la oportunidad de hacerlo.

“Pero… si me dices esto, significa que la situación cambió, ¿verdad?”

“Sí. De hecho, quiero dejarte la decisión a ti”.

No iba a hacer nada. Sólo dejaría que Horikita decidiera qué hacer con Kushida.

Es por eso que le estoy contando todo esto.

“¿No crees que es ridículo? Al menos yo no tengo motivos para hacer que la
expulsen. De hecho, sería tonto dejar que otro compañero de clase se vaya”.
Lo sabía. Parece que ahora tiene las cosas más claras en ese sentido.

“No obstante tampoco pienso tener una manera de pensar tan dulce como la de
Hirata-kun. Siempre habrá estudiantes en la línea de sacrificios. Claro que, la
lista irá cambiando dependiendo de sus contribuciones”.

En pocas palabras, no estará en contra si de nuevo se tiene que repetir una


votación interna para expulsar a alguien de la clase.

“¿Y si fuera Kushida la que se para en esa línea?”

“Por supuesto, será candidata a ser expulsada de la escuela”.

No parece que estuviera mintiendo.

“Pero dudo mucho que ella sea la que se pare en esa línea”.

“Lo sé. La contribución que hace Kushida a la clase es considerable a simple


vista”.

Siendo considerablemente buena en las materias y en los deportes, se


encontraba en una posición casi intocable. Claro que, su imagen cayó un poco
con la expulsión de Yamauchi, pero no fue nada fatal.

“Pensé que tú te podías encargar de eso, por eso te lo dije. Pero, a medida que
vayas creciendo y te conviertas en el centro de la clase, Kushida seguirá siendo
un estorbo”.

Pues es la que sabía acerca del pasado de Kushida. Eso era una verdad
innegable.

“Entonces por eso planeaste deshacerte de ella por adelantado”.

“Así es. Tú también sabes bien que no es alguien que pueda estar de tu lado
sólo hablándole con sinceridad, ¿no?”

“No voy a negar eso. Sé muy bien que una persuasión a medias o discusión no
tiene sentido con ella”.

Y aun sabiendo eso, ella acepta a Kushida.

Hasta hace poco hubiera tomado eso como simple inexperiencia, pero ahora es
un poco diferente.

“Entonces no tengo nada más qué decir”.

“No me digas que… ¿planeabas ir contra Kushida-san en una votación de


clase?”
“Eso es absurdo. Aunque ella haya ayudado a Yamauchi, todavía tiene la
confianza de muchos chicos de la clase”.

“Ya veo. Sí, tiene sentido. Además, que tampoco vi que hicieras algo al
respecto… en todo caso, ya que me hablaste de esto, ¿estás seguro que quieres
dejarme el derecho total de decidir qué hacer?”

“Sí. Prometo no hacer nada”.

Que ella concluya qué decisión tomar a partir de ahora.

“¿Me lo dices porque crees que ahora puedo superar ese obstáculo?”

“Por desgracia no. Como te acabo de decir, todavía pienso que sería mejor
expulsar a Kushida”.

“Tiene sentido. ¿Y entonces?” Al preguntarme la razón por primera vez me puse


a pensar sobre ello.

“¿Ni tú lo sabes?”

“Veamos… supongo que, porque lo que estoy haciendo ahora mismo, no es muy
eficiente”.

Quedarme callado y hacer que expulsen a Kushida es la decisión correcta


considerando todo lo que se vendrá de aquí en adelante.

Pero no lo hice.

En vez de eso, se lo estaba confiando a Horikita.

Y la razón.

¿Cuál es la razón?

“Supongo que… quiero ver cómo te enfrentarás a ese obstáculo”.

La verdad ni yo confiaba en la respuesta que di, pero eso era todo lo que se me
ocurría.

“O eso creo”.

“Dejémoslo así entonces. Ya a este punto sé muy bien que debo confiar al menos
un 50% en lo que dices”.

Luego de eso, Horikita comenzó a caminar.

“Yo ya me voy. ¿Tú qué harás?”

“Me quedaré aquí un rato”.


Luego de una pequeña despedida, Horikita se fue a los dormitorios.

Puede que recuerde todo de nuevo en la noche y se ponga a llorar otra vez, pero
por el momento debería estar bien.

Dejando eso de lado, recordé lo acontecido con Ichinose el día anterior.

Luego pensé en Sakayanagi, Ryuuen y el crecimiento de Horikita.

Qué emoción. En serio qué emoción esperar la batalla de las 4 clases.

Además, ¿hasta qué punto podré llegar a cambiar en este nuevo año?

Hay muchos factores que pueden ayudar a mi propio crecimiento.

Por ejemplo, las palabras que me dejó Manabu, todavía seguían en mi mente.

‘’Conviértete en alguien que sea recordado por los estudiantes’’

“Qué regalo de despedida tan grande me dejó…”

Ahora, ¿qué es lo que puedo hacer para dejar mi presencia en los recuerdos de
los estudiantes? Tal vez algo que los haga crecer, que los haga desarrollar sus
propias habilidades.

Luego, cuando esos estudiantes desarrollados compitan entre ellos, una gran
cantidad llegará hasta lo más alto.

Al imaginarme a mí en esa posición… creo que podría llamar a esto, estar


emocionado. No podía evitar sentir una gran emoción y expectativa.

Sin darme cuenta, en algún lado de mi cabeza se disparó de inmediato el análisis


de fuerza de cada clase.

Los resultados que vería luego de un año.

Y las clases que todavía necesitan algo para desarrollarse.

Todas ellas tenían grandes debilidades, y un fuerte torrente de emociones debido


a ellas.

Pero a diferencia de ellos, yo sentí como mi corazón se iba helando poco a poco.

“Lo que busco, son días pacíficos… o eso es lo que creo”.

Ahora y por primera vez, sentí como si mi corazón tuviera un filtro.

Soy consciente de que mis pensamientos, al igual que mis emociones se


desarrollaron en este año.
No, de hecho, lo siguen haciendo.

Estoy seguro de que el desarrollo de mis emociones sigue su curso.

O al menos eso es lo que me digo a mí mismo.

Pero no funciona.

Es como si mi yo no aceptará esos pensamientos.

¿Acaso el revestimiento que sellaba mi interior dejó de funcionar? Al pensar en


ello, no podía evitar pensar al mismo tiempo los pensamientos oscuros ligados
a esa ansiedad.

Yo…

Yo me pregunto si, todavía estaré en esta escuela todo el próximo año. Al


preguntarme eso, aquella misma indescriptible oscuridad… me envuelve por
completo.
Capítulo 5
La Sospecha de Matsushita
El 3 de abril, cuando las vacaciones de primavera llegaban a su fin, yo,
Matsushita Chiaki, decidí algo.

“Efectivamente, esto me interesa”.

Desde el examen de fin de año hasta ahora, este sentimiento se había quedado
atascado en mi corazón.

Eso fue causado por la existencia de un compañero de clase llamado Ayanokouji


Kiyotaka.

Recientemente, comencé a prestarle mucha atención. Aun así, si se lo contara


a alguien más, probablemente dirían que es amor, o un flechazo o algo así.

Ese definitivamente no era el caso.

Podría declarar aquí mismo, que definitivamente no era amor o algo similar.

En cambio, comencé a estar atenta a Ayanokouji-kun.

Si le dijera eso a cualquiera de mis compañeros de clase, probablemente


inclinarían la cabeza en confusión.

Pero ya estoy en el proceso de usar mi propio método para obtener la respuesta.

Para que comprendan lo que estaba sintiendo, primero, tendré que presentarme
y hablar sobre qué tipo de persona soy.

Nací en una familia moderadamente rica, y mis padres fueron muy amables
conmigo y me criaron en un entorno sin restricciones, pura libertad.

Comprarían lo que quisiera y, a cambio, yo obtenía resultados sobresalientes en


las clases escolares y de matrícula.

Establecimos una excelente relación entre nosotros, ya que yo respetaba su


excelencia y ellos respetaban la mía.

Además, fui bendecida con una apariencia atractiva, aunque digo que no es
demasiado bueno.

Si alguien más supiera de todo esto, probablemente sentiría envidia.

Crecer, experimentar varias relaciones románticas y, finalmente, casarse con un


hombre financieramente capaz.
Aunque mi vida podría no ser la mejor, se la consideraría muy afortunada.

Además, tenía muchas perspectivas para mi vida futura.

Aunque había considerado varias opciones, calculé que trabajar como asistente
de vuelo en una aerolínea internacional o en una empresa importante no sería
tan malo.

Sin embargo, desde que logré ingresar a esta escuela, tuve que apuntar más
alto.

Estudiar en el extranjero en una universidad prestigiosa, luego trabajar en una


embajada, y luego en la ONU... gradualmente pude ver que eso sucedería.

Mi vida transcurría sin problemas y ya había un camino pavimentado por delante


para una vida sin fallas.

Sin embargo, mi primer error de cálculo fue después de que ingresé a esta
escuela. Solo graduándome de la Clase A podré tener mi futura educación
superior deseada y oportunidades de empleo.

En otras palabras, graduarse de la Clase B o inferior no tendría ningún valor.

Por supuesto, tenía bastante confianza en mis propias habilidades para asegurar
el camino hacia el futuro deseado.

Pero… graduarse de la Clase B o inferior resultaría ser un obstáculo.

Y sería muy probable que me etiquetaran como “una estudiante que no se


graduó de la Clase A”, una etiqueta con la que sería un dolor de cabeza lidiar.

La gran diferencia entre las ventajas y desventajas de su impacto en el futuro,


era un aspecto negativo para mí, quien buscaba estabilidad.

El siguiente error de cálculo fue no ser asignada a la Clase A. En cambio, me


asignaron a la Clase D. Esto significaba que tenía una gran desventaja conmigo.

No estaba muy preocupada cuando entré por primera vez a la escuela. Sin
embargo, fue esa negligencia la que me llevó a la ruina.

En un mes, nuestros puntos de clase se agotaron e inmediatamente nos


hundimos al final de la clasificación.

“Pensando en esto con calma... ¿todavía había una posibilidad en ese


entonces...?”

Sí. Aunque inicialmente nos ubicaron en la Clase D, el punto de partida fue el


mismo para todas las clases.
Si hubiéramos entendido la situación durante el primer mes, entonces
deberíamos haber podido ascender a las clases altas.

Aunque puede ser un comienzo terrible, después de un año, los puntos de clase
también han aumentado.

Hubo un tiempo en el que incluso llegamos a la Clase C. Todavía era posible


apuntar a las clases altas...

“No, eso es imposible”.

Aunque me di cuenta desde el principio, la diferencia en la habilidad básica entre


las clases era incluso mayor de lo que había imaginado. Tarde o temprano, la
brecha se ensancharía inevitablemente.

Dio la casualidad de que este año salió muy bien. La brecha en las habilidades
de mi clase en comparación con otras clases era demasiado grande. Si ese
hecho no cambiaba, las posibilidades de llegar a la Clase A eran muy cercanas
a 0.

Aunque no quería seguir repitiendo esto, estaba segura de que era uno de los
mejores estudiantes de mi grado.

Si lo miramos desde una perspectiva más amplia, debería estar dentro del 10%
superior del año. A pesar de eso, no me hice un nombre en la Clase D. En
cambio, estaba en algún lugar cerca de la mitad de la jerarquía, solo porque
decidí ocultar mi fuerza.

Por supuesto, no retendría la clase cuando fuera importante, pero no me gustaba


destacar demasiado. Además, mi grupo de amigos estaba formado por personas
con habilidades considerablemente bajas.

La mitad de los estudiantes de la Clase D pertenecían al 10 ~ 20% inferior de


este año académico.

Si mostraba descuidadamente mis verdaderas habilidades en ese entorno, otros


podrían comenzar a sentirse celosos. También es posible que se confíe
demasiado en mí, lo que provocaría todo tipo de molestias. Esto era algo que
quería evitar.

Además, incluso si de repente hiciera todo lo posible por la clase, nuestra


situación no cambiaría mucho. Para bien o para mal, solo era una excelente
estudiante, pero no una genio.

Además, no era del tipo que actuara como alguien que toma la iniciativa en las
cosas.

Solo eso…
Aunque no esperaba cosechar lo que no sembré, aún quería graduarme de la
Clase A.

Si eso fuera posible, quería seguir una ruta fácil que condujera a un futuro
estable.

Para lograr eso, necesitaba hacer que todos los estudiantes de la Clase D
trabajaran el doble de duro...

Mirando hacia atrás en el último año, ya calculé que sería imposible, y me rendí
a medias.

De hecho, había algunos estudiantes talentosos en mi clase.

Como Horikita-san, Hirata-kun y Kushida-san. También había estudiantes


inteligentes como Yukimura-kun y Mii-chan.

Pero esto no era suficiente. De hecho, la mayoría de los estudiantes nos estaban
reteniendo. Si lo sumaras, nuestra clase todavía estaría en un estado negativo.

Si hubiera solo 2 o 3 estudiantes más en un nivel similar a los que mencioné


anteriormente… ¡qué frustrante!

Sí... Eso era correcto.

Ese pensamiento me atormentó hasta que Ayanokouji-kun apareció justo frente


a mis ojos.

Aunque esto era solo una conjetura unilateral, sospechaba que Ayanokouji-kun
podría ser el mismo tipo de persona que yo.

Siempre sentí, desde el principio, que él solo quería una vida que le perteneciera
a sí mismo, que esa era la razón por la que ingresó a esta escuela.

Incluso comparado conmigo, él no tenía tanto deseo de éxito, y no le importaban


las categorizaciones de Clase A o Clase D.

Pero a pesar de eso, tenía un gran poder.

Si mi suposición era correcta...

Incluyéndome a mí, la Clase D tendría 2 cartas más para jugar.

Si ese es el caso, dependiendo de cuán activos fuéramos, determinaría si era


posible apuntar a las clases altas.

Recientemente, estos pensamientos han estado dando vueltas por mi mente.

¿Por qué pensé que era ese tipo de persona?


En lugar de decir que me basé en pruebas, hubo algunas cosas sobre él que
destacaron.

A veces, Karuizawa-san intentaba captar la mirada de Ayanokouji-kun, además


de que la pequeña distancia entre ellos se había acortado.

Al principio, pensé que lo estaba pensando demasiado, pero inmediatamente


después, de repente rompió con Hirata-kun, lo que confirmó mis sospechas.

Ella se sintió atraída por Ayanokouji-kun.

Karuizawa-san, quien pensaba que salir con un buen hombre era un signo de
alto estatus, eligió a Ayanokouji-kun.

¿Por qué? ¿Fue porque es guapo? No, no creo que sea tan simple.

Si ese fuera el caso, habría sido más conveniente para Karuizawa-san mantener
su relación con Hirata-kun, quien era más popular.

Entonces… ¿fue porque Ayanokouji-kun tenía la fuerza suficiente para


compensar su falta de popularidad?

Esa fue la conclusión a la que llegué.

Si ese es el caso, sorprendentemente varias cosas comenzarían a encajar.

Ayanokouji-kun tenía una especie de relación con la líder de la clase, Horikita-


san, así como también con Hirata-kun. No había duda de que ambos estudiantes
lo tenían en alta estima. Además de eso, también parecía estar cerca de
Ichinose-san.

Y anteriormente, durante el festival deportivo, tuvo su intensa carrera contra el


presidente del consejo estudiantil Horikita, ahora que lo pienso, fue realmente
extraño.

Además de eso, Sakayanagi-san organizó la totalidad de la Clase A para darle


puntos de protección.

Pensamos que fue seleccionado al azar para que Yamauchi-kun fuera


expulsado, pero después de eso, cuando asumió el papel de torre de control y
participó en la competencia, llamarlo coincidencia sería demasiado vago.

Con tantas de estas piezas conectadas, todos deberían haber entendido la


misteriosa existencia de Ayanokouji-kun.

Sin embargo, la mayoría de los estudiantes no lo sabían.

Pero eso es comprensible, porque básicamente nunca mostró su verdadero


poder en público. Aunque ser capaz de correr rápido es una habilidad
sobresaliente, con esa habilidad, solo podría ascender en la jerarquía de la clase
durante la escuela primaria.

Para los estudiantes de secundaria... No, a medida que se avanza hacia la edad
adulta, las habilidades de comunicación se vuelven cada vez más importantes.

La mayoría de los estudiantes que tenían un alto estatus, a menudo tenían


habilidades sobresalientes y habilidades de comunicación.

La falta de una de esas habilidades cambiaría por completo la impresión que


causaba en los demás.

Era solo un estudiante que corría muy rápido, pero tenía una presencia débil.
Esa es la impresión que mucha gente tenía de Ayanokouji-kun.

Si también tuviera buenas habilidades sociales, Ayanokouji-kun estaría en una


posición relativamente más alta en la clase.

Aunque dependía de su personalidad, él podría haber sido, junto con Hirata-san,


una de las joyas gemelas de la clase.

Pero esto no era más que una situación hipotética, o más bien, una completa
tontería.

Era como decir que si Sudo-kun es inteligente, o fácil de llevarse bien con él, o
que Yukimura-kun tiene una gran habilidad atlética, esas eran cosas que solo
podían suceder en otra dimensión.

La prioridad más alta para nuestra clase era la “capacidad escolar”, seguida de
la “capacidad física”.

Era muy probable que Ayanokouji-kun cumpliera con ambos requisitos.

Además, las habilidades de Ayanokouji-kun en esas dos categorías podrían


incluso haber superado las de Hirata-kun, un tesoro enterrado esperando a ser
desenterrado.

Por supuesto, este pensamiento se basaba un poco en lo que yo quería que


fuera.

Si realmente fuera así, entonces se convertiría en una fuerza significativa que


podría mejorar la clase.

En realidad, incluso si él solo estuviera al mismo nivel que yo, no me quejaría.

La razón por la que presté atención a Ayanokouji-kun fue por su influencia sobre
el examen de fin de año.

Hubo una pregunta que no pude resolver durante el evento de aritmética mental
flash, pero Ayanokouji-kun la respondió correctamente.
Este fue uno de los golpes decisivos que me dio confianza en esto.

Quiero comprender el misterio detrás de su fuerza.

Y si su fuerza es verdadera—no hay razón para no hacer uso de ella.

Tanto su habilidad escolar como su habilidad física eran similares a las mías,
estaba segura de ese punto.

A juzgar por cómo había estado viviendo tras bastidores durante un año, es
posible que los métodos ordinarios no lo convenzan.

Sin embargo, tenía confianza en mi capacidad para evaluar a los demás y en mi


capacidad para la guerra psicológica. Debido a esto, tenía la ventaja.

Hacerle pensar que yo quería ponerme en contacto con él por curiosidad, sacarle
su verdadera naturaleza y luego hacer que coopere.

Y actuará como una señal para nuestro contraataque el próximo año.

“… Es una broma”.

La idea de ascender a la Clase A era atractiva. Pero la razón por la que estoy
actuando ahora no es solo por eso. El aburrimiento también era un factor.

No solo buscaba estabilidad, seguía las huellas de la vida, también quería


experimentar la emoción de la vida. Quiero perseguir este factor misterioso que
otros estudiantes no tienen. Esta era la razón principal por la que quería
establecer contacto con Ayanokouji-kun.

Cambié mi atuendo, ya que hoy me reuniría con mis amigas en el centro


comercial Keyaki.

En estos días, me enfocaba en la multitud desordenada, en busca de la figura


de Ayanokouji-kun.

Sin embargo, la posibilidad de un encuentro accidental con él en la escuela era


considerablemente baja.

No lo vi en absoluto durante la primera mitad de estas vacaciones de primavera,


una pérdida de tiempo.

Quería obtener pistas.

La curiosidad y el deseo condujeron mi mirada a estos días sin mi permiso.


1
“¡Matsushita-san! Aquí~”

“Buenos días~”

11 en punto.

Me reuní con Shinohara-san y Satou-san, el grupo habitual.

Durante las vacaciones de primavera, nos reuníamos ociosamente todos los días
para charlar alegremente sobre varios temas inocentes.

Aunque no odiaba esto, me sentía un poco aburrida. He estado actuando como


una buena estudiante durante el último año y buscaba entusiasmo.

Como resultado, decidí traerles un tema más interesante.

“Shinohara-san, ¿has hecho algún progreso con Ike-kun?”

Tenía la intención de deshacerme de este aburrimiento pinchándola un poco.

“Espera, ¡¿ehhh?! Nonono, ¿con él?”

Shinohara-san lo negó apresuradamente, pero esto no pudo ocultar que estaba


conmocionada.

La mirada de Satou tenía un sorprendido “¿de verdad quieres empezar este


tema?” Esa expresión, mezclada con un poco de emoción, también fue muy
interesante.

Era evidente que Shinohara-san e Ike-kun se habían acercado en los últimos


meses, ya que rumores como este ya se habían extendido.

Aunque intentaron ocultarlo, la escuela era un lugar diminuto.

Si una pareja tuviera una cita, los demás los verían fácilmente.

“Pensé que ya era hora de que nos lo dijeras, ¿verdad?”

“Yo, te dije que era imposible... Mira, ¿es de Ike de quien estamos hablando…?
¡Es el modelo de un típico perdedor!”

Las palabras que Shinohara-san usó al negar esto eran realmente ciertas. Con
solo mirar sus atributos, pertenecía a los rangos inferiores entre los chicos.

Era bajo, tenía problemas académicos y carecía de habilidades de


comunicación. Desde mi punto de vista, era una persona con un sinfín de
defectos. Sin embargo, el amor no se puede medir a partir de esos factores.
Siempre existía la posibilidad de que una persona se sintiera atraída por un
hombre inútil, era como encontrarse inesperadamente en medio de un accidente
de tráfico.

Y considerando el estado de Shinohara-san en la clase, incluso podrían ser


adecuados el uno para el otro, y no son tan diferentes como ella aseguraba.

“Esto no es bueno, te gusta, pero él no sabe nada de esto”.

Los ojos de Satou-san se iluminaron ante el hecho de que estábamos hablando


de amor, sonriendo a Shinohara-san.

“Como dije, no es así”.

“No hay necesidad de negarlo, solo queremos escuchar tus verdaderos


pensamientos sobre esto, ¿verdad?”

Frente a Shinohara, que no estaba dispuesta a admitirlo, usé a Satou-san para


incitarla.

“¡Sí, también estoy muy interesada! ¡¡Cuéntanos, cuéntanos!!”

En momentos como este, era conveniente que Satou-san hiciera lo que yo quería
simplemente dándole pistas simples. No era el tipo de persona que pensaba
profundamente. No hace falta decir que esto tenía un efecto negativo en su
capacidad académica.

Aunque era una evaluación muy dura, no significa que la odiara.

Tanto Shinohara-san como Satou-san eran amigas cercanas e indispensables.

Si alguna vez se sintieran preocupadas, las ayudaría y las escucharía.

Por supuesto, si tuvieran la misma habilidad para igualarme, sería aún mejor.

Shinohara-san, que ignoraba por completo lo que estaba pensando, comenzó a


hablar sobre su relación con Ike-kun.

“Recientemente, siempre he estado discutiendo con él por estupideces.


Entonces, honestamente, realmente no hay mucho progreso”.

Shinohara-san negó con la cabeza, suspirando.

Sin embargo, ella nunca dijo que no hubiera absolutamente ningún desarrollo.

“Después de todo, ambos tienen personalidades que no son tan sencillas; si


volvieran a intentarlo, habría un cambio”.

Aunque eran una buena pareja, siempre había conflictos entre ellos con respecto
a cosas raras.
Siento que mientras pasen eso, la relación entre ambos mejoraría de inmediato.

“Suficiente de mí, ¿qué hay de ti, Matsushita-san? ¿Te gusta alguien?”

“¿Yo?”

Shinohara-san hizo esa pregunta, tal como esperaba.

Sería más exacto decir que la induje a preguntarme esto.

“Nos dijiste antes que, si salías con alguien, sería un senpai”.

Pareciendo como si acabara de recordar algo, Satou-san complementó la


pregunta de Shinohara-san. No importa quién sea el tema de la conversación,
siempre que se trate de relaciones, será bienvenido. Las chicas somos así.

“Sí. Sin embargo, si cumple una determinada condición, está bien incluso si no
es un estudiante de último año”.

Controlaba lo que ambas estarían pensando y llevaba lentamente la


conversación en la dirección que yo quería. Sin embargo, no es tan difícil como
podría parecer. Esto sucede comúnmente en la vida cotidiana. Se trataba
simplemente de si nos dábamos cuenta o no.

“Ohh——, ¿entonces has cambiado de opinión?”

Satou-san, obviamente no dejaría de lado este tema, ya que era la primera vez
que lo escuchaba.

“Mis estándares no han bajado ni nada. Tanto su apariencia como su


personalidad deben ser de primera clase. Y.... también sus antecedentes
familiares. También quiero que sus padres hayan recibido un alto nivel de
educación y logros”.

No importa cuán grandes sean los logros de su hijo, siempre y cuando sus
padres no lo cumplan, entonces no cumplía con mis estándares.

“Alguien que tenga un buen trasfondo familiar... ¿podría ser alguien como Koenji-
kun, o algo así?”

Shinohara-san preguntó, dubitativa.

“¿Ehh~? Aunque su apariencia ciertamente no es mala, ¿no es un poco...?”

Después de escuchar el nombre de Koenji-kun, Satou-san se mostró un poco


indecisa. La evaluación de Koenji-kun dentro de la clase era considerablemente
baja. La razón era muy simple, principalmente por su excentricidad la cual es
una molestia para la clase. Sin embargo, se podría decir que existe una gran
diferencia entre su estatus dentro y fuera de la clase.
Desde la perspectiva de los forasteros, la evaluación de Koenji-kun sería
perfecta, sin importar si estuviéramos hablando de su apariencia o sus
antecedentes. También tenía un lado muy caballeroso. Por eso, no es
sorprendente que las chicas de todos los años escolares estén interesadas en
él. En términos de capacidad académica, aunque no se lo toma en serio, aún se
podía ver la profundidad de su verdadero poder. Se podría decir que era una
persona muy rara que cumplía con todas las condiciones enumeradas
anteriormente. Creo que Koenji-kun ocupa el primer lugar dentro de nuestra
clase, si estamos hablando solo de habilidad.

Sin embargo, otras cosas también están claras cuando se trata de él.

No era el tipo de persona a la que otras personas pudieran persuadir para que
actuara.

Un bicho raro más allá de la imaginación.

Desde el principio, supe que tratar de hablar con él, era inútil.

En este caso, comparado con Sudo-kun e Ike-kun, él era incluso… No… se


podría decir que era la carga más grande para la clase.

“Koenji-kun, no hay oportunidad. Hablando de esto, ya ni siquiera lo considero


humano”.

Después de escuchar mi evaluación de él, las dos se echaron a reír.

“Si se pone serio, definitivamente superará a Hirata-kun en popularidad, pero sé


que definitivamente no se pondrá serio”.

Esta fue mi evaluación.

Shinohara-san y Satou-san estaban totalmente de acuerdo conmigo.

Él era el espécimen raro que me enseñó que incluso si alguien tuviera un solo
defecto, su evaluación podía pasar de 100 a 0 en un instante.

Comenzando por la relación entre Ike-kun y Shinohara-san, hasta mi hombre


ideal, pasé a la siguiente etapa.

“Hablando de eso, Satou-san, ¿qué hay de ti y Ayanokouji-kun?”

“¿Eh…? ¿Por qué, por qué me preguntas sobre esto?”

Después de que le hicieran una pregunta inesperada, Satou-san se puso rígida.

Shinohara-san, quien parecía como si acabara de recordar algo importante, giró


su mirada hacia Satou-san. Durante las vacaciones de invierno, Satou-san nos
dijo algo. En ese momento, nos contó sobre su amor por Ayanokouji-kun y se
preguntó si debería confesárselo. En ese entonces, al igual que con Ike-kun y
Shinohara-san en este momento, planeaba simplemente disfrutar viéndolos
progresar, mientras los apoyaba desde la distancia.

“Eso... no es como...”

Queriendo negarlo, Satou-san vaciló.

Y cuando me di cuenta, Satou-san se había detenido abruptamente mientras


hablaba de Ayanokouji-kun.

Por supuesto, con respecto a lo que esto significaba, Shinohara-san y yo no


abordamos este tema, sabiendo claramente lo que significaba.

Probablemente la rechazó, o ella cambió de opinión. En resumen, mientras


Satou-san no tuviera la intención de hablar, teníamos que tener cuidado de no
hablar sobre este tema.

Sin embargo, si quería saber más sobre Ayanokouji-kun, esto no era algo que
pudiera evitar.

“¿Pueden... ustedes dos mantener esto en secreto?”

Ella habló.

Shinohara-san y yo, seguras de que íbamos a escuchar algo extremadamente


interesante, le dimos una palmada en los hombros.

“¡Por supuesto!”

Parte 2

Y así, nos mudamos a un café para escuchar los problemas de Satou-san.

Luego también hicimos los preparativos para permitirle expresar sus


preocupaciones libremente.

Esta preparación entre nosotras, las chicas, era necesaria para permitir que la
otra parte lo contara.

A diferencia de los chicos, que se apresuran directamente a la solución, las


chicas comenzamos por buscar afirmación.

Esta no era una mala forma de abordar las situaciones.

“En realidad yo…. Ya me le confesé a Ayanokouji-kun...”

Después de escuchar esto, yo, junto con Shinohara-san, casi escupimos el té


que estábamos bebiendo.

“¿Eh? ¡¿Eh?! ¿De verdad? ¡¿Cuándo?!”


Shinohara-san, quien pensaba que estaba por delante en términos de relaciones
con los chicos, no pudo evitar preguntar.

Aunque ya asumí que algo había sucedido entre ellos, nunca pensé que hubieran
progresado tanto.

Pero, por otro lado, el resultado de eso era claro.

Si los dos estuvieran saliendo, definitivamente nos lo habría dicho.

Incluso si ella fuera demasiado tímida para decírnoslo, yo definitivamente lo


habría notado.

Dado que ese no era el caso, eso significaba...

“Fui rechazada”.

Por lo que parece, había pasado algún tiempo desde que fue rechazada. No
pude sentir ningún signo de ansiedad ni vacilación en sus palabras.

Ese debería ser el resultado de llorar muchas veces, ya que, en este momento,
parecía que solo quería seguir adelante.

Si ese fuera el caso, probablemente se confesó durante las vacaciones de


invierno.

Sin embargo, esto pudo deberse a que la presionamos para que confesara
prematuramente. Si ese fuera el caso, realmente la hemos decepcionado.

“¡Seriamente! ¡Ayanokouji-kun, ¿es estúpido?!”

Una confesión de una chica, especialmente de una chica tan impecablemente


guapa como Satou-san.

Shinohara-san parecía sorprendida y furiosa por el hecho de que Satou-san


había sido rechazada.

“¿Por qué? ¿Por qué te rechazaron?”

“… Fue simplemente un problema con sus emociones. Dijo que no era culpa mía
pero que no podía salir conmigo”.

Shinohara-san puso una mano en su frente, incrédula.

“¿Es eso porque ya tiene a alguien que le gusta? ¿Tal vez sea alguien como
Horikita-san?”

Cuando traté de confirmar esto con Satou-san, ella negó con la cabeza.
Siempre que se mencionaba a Ayanokouji-kun, la sombra de Horikita-san
siempre estaba al acecho.

Pero recientemente, su existencia se había vuelto cada vez más frecuente en la


clase.

Había rumores de que Ayanokouji-kun y Horikita-san mantenían un estrecho


contacto. Ese tipo de rumores habían estado circulando por un tiempo.

Sin embargo, debido a que no había evidencia, la gente finalmente dejó de hablar
de ello.

“Dijo que habría sido lo mismo si hubiera sido una confesión de Horikita-san o
Kushida-san”.

Como era de esperar, esos dos no parecían estar tan unidos.

“Nonononono, ¿qué—?”

Ignorando el nombre de Horikita-san, Shinohara-san se sorprendió al escuchar


que se mencionaba a Kushida-san.

“Entonces podemos confirmar esto, es un tonto sin ningún interés en el amor...


Esto me asusta...”

Pude entender cómo llegó a esa conclusión. Sin embargo, Satou-san no pareció
estar de acuerdo.

“Si no se siente atraído por las chicas lindas... entonces eso significa que ya tiene
a alguien que le gusta, ¿verdad?” Dije esto mientras miraba directamente a
Satou-san, pero ella desvió la mirada y asintió.

A la persona que te gusta, le prestas más atención que a nadie.

La persona que mejor percibió a Ayanokouji-kun debió ser Satou-san.

“Supongo que a Ayanokouji-kun... le gusta Karuizawa-san”.

Satou-san dijo esto mientras miraba hacia otro lado.

“Estás bromeando, ¿no? ¿Es esto cierto? ¿Hu-huh? ¿En serio? ¡¿Karuizawa-
san?!”

Shinohara-san y yo intercambiamos miradas una vez más.

Si alguien desprevenido se enterara de esto, definitivamente pensaría que esta


sería una pareja extremadamente inesperada.

Fingí estar sorprendida. Sin embargo, en el fondo, ya lo había aceptado como


un hecho.
Esto se debió a que mi suposición era completamente idéntica a la de Satou-
san.

“Sí. De hecho... a Karuizawa-san probablemente también le guste Ayanokouji-


kun... Eso es lo que pienso”.

“¿Podría ser que la ruptura de Karuizawa-san con Hirata-kun esté relacionada


con todo esto?”

Con respecto a mi pregunta, Satou-san, que no estaba del todo segura de sí


misma, asintió.

Esto significaba que ella también lo pensaba.

“¿De salir con Hirata-kun a Ayanokouji-kun? Esto… lo siento, pero no puedo


entenderlo”.

No creo que esto fuera algo que Shinohara-san, quien eligió a Ike-kun, pudiera
decir.

“No es tan inesperado. Yo... también creo que Ayanokouji-kun es mejor”.

“¿Aún te gusta...?”

“Realmente quiero olvidarme de eso, pero no importa lo que haga, simplemente


no puedo apartar la mirada de él...”

Ella se dio cuenta de esto después de encontrarse mirando a Ayanokouji-kun día


tras día.

Aunque sentí un poco de pena por Satou-san, sus palabras fueron una buena
referencia para mí.

“Hablando de eso... sigo escuchando el nombre de Ayanokouji recientemente”.

Shinohara-san no pudo evitar decir aquello.

“Como cuando se convirtió en la torre de control de nuestra clase. Ah, también


cuando Sakayanagi-san le dio puntos de protección”.

Satou-san, estaba pensando lo mismo, también mencionó el hecho de que


Ayanokouji-kun estaba en el centro de estas situaciones.

“Realmente parece que no puedo entender. ¿Por qué tiene que ser Ayanokouji-
kun? Aunque de acuerdo con la declaración de Horikita-san, puede que todo
haya sido una coincidencia”.

También me parecía difícil de creer.


Sin embargo, incluso si tuviera una conversación con estos dos, dudo que
podamos llegar a una conclusión.

“Bueno, ahora que lo pienso, es una estrategia realmente inteligente. Con solo
darle puntos de protección, automáticamente sería elegido como sacrificio en
situaciones similares al examen de fin de año. Si esta fue la intención de
Sakayanagi-san desde el principio, entonces tendría sentido”.

Di una explicación que tenía sentido hasta cierto punto y cambié el tema.

“¡Ahh, así que ese es el caso...!”

Si Sakayanagi-san eligiera a Ike-kun sobre Ayanokouji kun, definitivamente sería


mucho más fácil ganar.

Por supuesto, existía la posibilidad de que quisiera enfrentarse a alguien


inesperado y, como resultado, eligió a Ayanokouji-kun.

De todos modos, por ahora, es mejor dejar este asunto a un lado.

A Karuizawa-san le gustaba Ayanokouji-kun, y a Ayanokouji-kun le gustaba


Karuizawa-san.

Con solo aprender eso, podría decir que había obtenido mucha información hoy.

Usando esto como una forma de romper, ahora debería poder considerar formas
de acercarme a él.

“Pensé que los estándares de Karuizawa-san para un hombre eran los mismos
que los míos”.

“¿Entonces estás diciendo, Ayanokouji-kun, es realmente fuerte?”

“Él solo puede correr rápido, ¿verdad?”

“Pero, en lugar de decir que es inteligente, ¿no sientes que lo sabe todo?”

Satou-san nos preguntó.

“No, no siento eso”.

Shinohara-san inmediatamente lo negó, pero decidí ponerme del lado de Satou-


san.

“De hecho, no se parece a los otros chicos raros, da una impresión confiable”.

“¡Sí, sí!”
Satou-san, quien supuestamente fue rechazada, todavía era muy feliz cuando
escuchaba elogios para Ayanokouji-kun. Lo suficientemente feliz para que sus
ojos brillaran.

Parecía que todavía le gustaba Ayanokouji-kun.

“¿No es solo porque no le gusta hablar?”

“Ike-kun es todo lo contrario, no deja de hablar”.

“Bien, bien, incluso si le digo que se calme, sigue hablando”.

Aunque Shinohara-san dijo que no estaba satisfecha con él, no se veía así.

“Así que…”

Justo cuando Satou-san estaba a punto de empezar a hablar de nuevo, mi


mirada captó la figura de Ayanokouji-kun.

Estaba demasiado absorta en la conversación y no me di cuenta.

“Oh, lo siento. ¿Puedo hacer una llamada?”

Después de pedir su permiso, ambas aceptaron alegremente.

“Puede llevar bastante tiempo, así que contácteme si pasa algo”. Después de
decir esto, fingí hacer una llamada mientras me alejaba.

No mucho después, vi la figura de Ayanokouji-kun.

Como dicen, debes golpear mientras el hierro esté caliente.

Mientras todavía estaba en la línea de visión de Satou-san y Shinohara-san, no


podía actuar apresuradamente, así que seguí a Ayanokouji mientras fingía estar
en mi teléfono.

Me sentí un poco incómoda acerca de si podría seguir a alguien sin que nadie
me notara.

Cuánto espacio debe haber entre nosotros para que se considere seguro o
inseguro.

Si me atrapaban siguiéndolo, definitivamente estaría alerta, así que quería fingir


que era una coincidencia.

Si pierdo la oportunidad en estas vacaciones de primavera, probablemente no lo


vería hasta que empecemos la escuela como estudiantes de segundo año.

Si pudiera ponerme en contacto con él temprano, por supuesto, aprovecharía


esa oportunidad.
Afortunadamente, no había nadie alrededor de Ayanokouji-kun.

Justo cuando estaba a punto de saludar a Ayanokouji-kun… Inmediatamente me


escondí porque vi a alguien acercándose a él.

“¡Esa persona parece ser... el nuevo director!”

Por alguna razón, esa persona parecía estar conversando con Ayanokouji-kun.
Qué combinación tan interesante. Quizás se pueda obtener nueva información
estando aquí.

Si su tema fuera sobre la “fuerza”, poder escuchar su conversación no sería un


mal resultado.

“Su conversación con el nuevo director está tardando un poco...”

Ya han pasado 10 minutos. Si solo estuvieran intercambiando cumplidos, esto


se consideraría demasiado largo.

¿Podría ser que Ayanokouji-kun y el director son conocidos? Parecían estar


cerca, pero Ayanokouji-kun estaba inexpresivo como siempre.

“No entiendo…”

Quizás se conocían, pero también parecía que era la primera vez que se
encontraban, hablando de muchas cosas.

Solo por sus movimientos, no parecía haber ninguna historia entre ellos.

Si me acercara un poco más, podría escuchar el contenido de su conversación.


Pero eso sería bastante peligroso.

Aunque podría fingir ser un transeúnte, eso no me dejaría forma de esconderme,


así que parece que la mejor opción era quedarme aquí.

Después de observarlos por un tiempo... su larga conversación llegó a su fin


abruptamente.

Por lo que parece, el director parecía volver con los adultos que lo acompañaban,
no muy lejos de aquí.

¿Qué hará Ayanokouji-kun? ... Comenzó a moverse.

Como si nada hubiera pasado, comenzó a caminar en cierta dirección. Tenía la


esperanza de obtener algunas pistas de su conversación con el director.
Pero parece que fue en vano... ya me he rendido en mi plan original de hablar
con Ayanokouji-kun.

Debo esperar hasta estar mejor preparada antes de hacer cualquier cosa.

Lo seguiré un poco más, y si no encuentro nada, regresaré a donde estaban


Shinohara-san y Satou-san.

Mientras alcanzaba a Ayanokouji-kun, que acababa de doblar la esquina,


comencé a pensar en mi próximo movimiento.
3
Ese día, vine al centro comercial Keyaki solo.

Como se acercaba al final de las vacaciones de primavera, y más cerca del


nuevo semestre, planeaba comprar ropa nueva y otras cosas relacionadas.

Eso es lo que planeé hacer originalmente, pero la situación había cambiado.

El primer cambio anormal vino detrás de mí.

Inmediatamente después de eso, otro cambio me llamó la atención desde el


frente.

“¿Puedo tomarme un poco de tu tiempo?”

Esto comenzó cuando decidía dónde comprar, y de repente me encontré con


cuatro adultos.

Tres de ellos parecían trabajadores de construcción por sus ropas, sosteniendo


portapapeles.

Sin embargo, la otra persona era Tsukishiro, quien vestía traje y aplaudía
mientras se acercaba a mí.

Después de que dejé de caminar, Tsukishiro miró a las tres personas detrás de
él.

“Sobre el trabajo de construcción, simplemente sigan el plan que establecimos


anteriormente”.

Después de que Tsukishiro dio estas instrucciones, los otros adultos se alejaron.

“Ayanokouji-kun, parece que estás disfrutando de las vacaciones de primavera,


como todos los demás”.

Originalmente pensé que me hablaría con suavidad, pero cuando abrió la boca,
el sarcasmo brotó.

“¿Tiene asuntos conmigo, director en funciones Tsukishiro?”

“Oh no, parece que no soy bienvenido”.

Tsukishiro obviamente lo sabía, pero deliberadamente habló un poco más alto.


Aunque no era lo suficientemente fuerte para que lo escuchara un transeúnte,
era suficiente para demostrar que fue a propósito.

“Es porque charlar con el director atraería una atención no deseada. Creo que
un estudiante impotente como yo debería acechar en las sombras”.
Quería saber cuál era su intención lo antes posible.

Al mismo tiempo, también me preocupaba la situación con Matsushita, quien me


seguía por detrás.

“Te volveré a preguntar, ¿qué asuntos tienes conmigo?”

Aunque, a esta distancia, no debería poder escuchar el contenido de nuestra


conversación. Pero aún podría hacer que ella especulara innecesariamente.

“Respecto a cuál es mi asunto, te lo diré cuando quiera. Puede que le resulte


difícil de aceptar, pero intenta aguantar. ¿Te importa?”

Es imposible que Tsukishiro realmente se preocupara por mis sentimientos.

Es mejor decir que deliberadamente quiso detener nuestra conversación, ya que


este era un lugar donde las multitudes iban y venían.

“Entiendo. Tómese su tiempo”

“Bueno. Comencemos hablando del clima”.

*Clap*

Tsukishiro aplaudió al decir esto, pero inmediatamente después, entrecerró los


ojos.

Si esto se hizo para ver mi reacción, parecía demasiado superficial.

No era posible afectarme solo con eso.

“Es una broma. Tengo algo que hacer justo después, así que iré directo al grano”.

Tsukishiro fue bastante claro sobre esto.

Era muy obvio que trataba de provocarme.

Sin embargo, parecía que tenía algo que decir.

La escuela y el alumno. Pase lo que pase, su posición no se puede revertir.

Mientras aún fuera estudiante, no podría rebelarme contra él. Tsukishiro me


mostraba eso.

“¿Qué tal esto? Regresa con tu padre con estas vacaciones de primavera como
tus últimas vacaciones”.

A Tsukishiro no le importaba el lugar en el que hablábamos, aunque el contenido


de la conversación fuera bastante profundo.
Sin embargo, incluso si esta conversación fuera escuchada por los otros
estudiantes, no sería un problema para él.

Aunque pudiera ser malo para mí, no causaría ningún daño a este hombre.

Habiendo dicho eso—

“Debes querer simplemente ignorarme y alejarte. Sin embargo, es mejor que no.
Tengo que retener mi puesto de director. Si me tratas con frialdad, cambiaré mi
manera de ser para corresponder a eso”.

Como si estuviera leyendo mis pensamientos, Tsukishiro sonrió.

“Desafortunadamente para ti, no tengo la intención de abandonar esta escuela


voluntariamente”.

“¿Temes tanto volver a la Habitación Blanca?”

“Estoy disfrutando de mi vida aquí en esta escuela y quiero graduarme de aquí


como un estudiante normal. No hay otra razón para mi comportamiento”.

“Esta es realmente una buena escuela. Con los enormes subsidios asignados
por el gobierno, incluso construyeron un centro comercial como éste. Aquí se
gastan cientos de millones de yenes cada año, como agua del grifo. Pero la
mayoría de los ciudadanos de este país son estúpidos, después de escuchar
que estos fondos se estaban utilizando para educar a los niños, aceptaron
precipitadamente”.

Tsukishiro suspiró y recorrió con la mirada el interior del centro comercial Keyaki.

“Debido a esto, tengo innumerables cosas con las que tengo que lidiar. Ahora
soy el director de esta escuela y por eso estoy tan ocupado”.

Tsukishiro tenía que actuar como un presidente competente en la superficie, por


lo que había muchas cosas que tenía que hacer.

“Volviendo a esto, esa chica que te sigue, ¿no es Matsushita Chiaki de tu clase?”

Tsukishiro dijo esto en voz baja, mientras mantenía su mirada en mí.

“Aunque fue solo un momento, la vi escondida detrás de la pared. Parece que


eres bastante popular”.

Aunque la mirada de Tsukishiro no debería haber estado sobre mí en ese


momento, estaba observando con mucha atención. Es decir, que incluso
mientras hablaba con los otros adultos, seguía prestando atención a su entorno.

“No esperaba que memorizaras los nombres de los estudiantes de mi clase tan
rápido”.
“Ya que ella es tu compañera de clase, no es nada especial”.

Parece que su forma de atacarme era sacudir mi psique.

“Apuesto a que esto se debe al hecho de que ella te vio dar esa respuesta en el
evento de aritmética mental flash. ¿No te sientes cada vez más restringido? Es
evidente que quieres pasar tu vida en esta escuela como un estudiante normal,
pero ahora es cada vez más difícil hacerlo”.

Se sentía como si estuviera tratando de forzarme a tener la impresión de odiar


la escuela.

“Puedo soportarlo, si tus ataques son solo en este nivel”.

“Para ser honesto, no me importa lo que hagas. Más bien, estoy bastante
molesto por cómo pierdo un tiempo precioso lidiando con este asunto”.

“En ese caso, ¿por qué no haces las maletas y te rindes? Nadie te está
obligando”.

“Porque tu padre no lo permitirá. Si lo desobedezco, no podré sobrevivir en este


mundo. Después de todo, yo también quiero ascender en la escala social”.

Tsukishiro no dejó la conversación así, y en cambio continuó hablando sobre el


tema.

“No me mires con una cara tan sorprendida. Querías mi excusa, así que la tienes,
¿no?”

“Bien, eso es cierto”.

“He visto lo que lograste en la Habitación Blanca. Realmente eres un niño


extraordinario. Tienes poco más de 16 años, pero tu capacidad es
definitivamente anormal. Incluso los adultos que te rodean no pueden igualar tu
mente, cuerpo o habilidad. Estás fuera del alcance de ellos”.

Tsukishiro acortó la distancia entre nosotros y una amable sonrisa apareció en


su rostro.

“De todos modos, pasaste un año en esta escuela sin muchos problemas. ¿Por
qué no dejarlo ir? Esa es la decisión más madura”.

Quería decir que debería tomar mis recuerdos del año pasado y volver a la
Habitación Blanca así.

“Todavía soy un niño, después de todo. No planeo dejar esto tan fácilmente”.

“Je, ¿de verdad crees que puedes escapar de mí?”

“Planeo resistirme hasta el final”.


“Hay un viejo refrán que dice que la rana en el fondo del pozo no conoce el
océano. Parece tener una tendencia a sobreestimarse a sí misma. Aunque te
doy una oportunidad, no aprecias mi amabilidad”.

Tsukishiro abrió los brazos a la ligera.

“Aunque no sé cómo es en esta escuela, definitivamente no eres el número 1.


Entre los estudiantes de la Habitación Blanca después de ti, ha habido varios
estudiantes que son iguales, o incluso más poderosos que tú. Debes entender
que eres solo otra persona producida en masa”.

“Si ese es el caso, no hay necesidad de prestarme atención, ¿verdad?”

“Si no fueras el hijo de ese hombre, eso sería cierto. Tu padre realmente quiere
llevarte a un dominio superior. Incluso si parece una persona fría, ese hombre
sigue siendo tu padre. Cree firmemente que eres una existencia que puede
convertirse en un modelo y liderar a las masas”.

Tsukishiro no ocultó su insatisfacción hacia ese hombre, pero eso fue para
mostrarme el alcance de su poder y posición en este momento.

“Acerca de la existencia de la Habitación Blanca, ¿qué opina, Director?”

“¿Qué pienso yo?”

“Tus pensamientos sobre si la existencia de la Habitación Blanca es necesaria o


no”.

Como no iba a doblar la rodilla en esta posición, quería que me dijera esto.

“No estoy obligado a responder”.

“Después de escuchar tu respuesta, mis pensamientos pueden cambiar”.

“Esta es solo mi propia opinión, pero está bien. Si esto es todo lo que necesitas
para cambiar de opinión, será demasiado fácil”.

A pesar de saber que probablemente estaba mintiendo, Tsukishiro estuvo de


acuerdo.

“Si quieres hablar de esa instalación, es necesario comprender su historia.


¿Sabías que la Habitación Blanca se construyó hace 20 años?”

“Por supuesto. Después de todo, soy parte de la cuarta generación”.

“Sí. Como sabes, la Habitación Blanca comenzó desde el primer año de vida de
la primera generación, y anualmente se forman nuevas generaciones. Cada
generación es educada bajo diferentes líderes y recibe la educación
correspondiente. Luego, se verifica qué grupo tuvo la educación más efectiva.
Aunque solo 19 generaciones han sido nutridas debido a la interrupción del año
pasado... Cientos de niños han sido entrenados bajo el sistema educativo de la
Habitación Blanca”.

Los niños de diferentes generaciones no se han visto. Aunque estaban en la


misma instalación, no conocían la apariencia ni los nombres de nadie más.

“Parece que conoces bastante la Habitación Blanca”.

“Solo un poco, solo un poco”.

Tsukishiro era una figura estrechamente relacionada con mi padre, esta


conversación lo hizo obvio.

Debe haberlo dicho para hacerme entender eso.

A veces, parecía como si fuera una persona pequeña e irrelevante. Pero si


cambiaras de perspectiva, verías que era una persona importante.

Podía cambiarse a sí mismo en consecuencia, según la situación.

Por esta razón se le dio la gran responsabilidad de ser un espía.

“Todos los niños pueden crecer hasta cierto nivel. Sin embargo, intentar superar
ese nivel nunca ha sido posible. La evidencia está en esta instalación, que ha
estado funcionando durante casi 20 años, y ni un solo niño ha podido alcanzar
el objetivo. Eso es cierto para todos excepto para ti, pero eso fue hace solo 2
años”.

¿Cuánto dinero se había invertido en la Habitación Blanca?

Unos cientos de millones de yenes no deberían ser suficientes.

Resultó que fui el único que alcanzó ese objetivo. No pude evitar sentir que este
proyecto era un desperdicio.

“¿Qué hay de las personas que se volvieron talentosas? ¿Qué están haciendo
esos niños ahora?”

La parte de la que no sabía nada.

¿Qué estaba haciendo la gente de mi generación después de haberse ido? Eso


era algo de lo que no tenía ni idea.

Tsukishiro pareció estar un poco sorprendido, pero comprendió de inmediato.

“Efectivamente, es imposible que sepa a dónde fueron los niños que dejaron las
instalaciones. Esos niños crecieron maravillosamente y contribuyeron a la
sociedad; si eso hubiera sucedido, es algo por lo que estar agradecido. Pero
hasta ahora, la mayoría de los niños criados en esa instalación tienen sus propios
problemas, por lo que no se les puede dar un buen uso. No durarán en ese
entorno, sus corazones ya han sido dañados.

Tsukishiro continuó, adoptando una mirada impotente. “Recibir una educación


completa desde el nacimiento. Si esto se puede lograr, Japón experimentaría un
crecimiento que el mundo nunca antes ha visto. Sin embargo, esto no es tan
simple. Bajo la influencia de varios factores misteriosos, el crecimiento de las
personas varía enormemente. Es imposible cultivar el éxito utilizando el mismo
método en todos. Pero aun así, hemos logrado producir resultados tangibles.
Tomemos como ejemplo la quinta y sexta generación, entre los que
sobrevivieron hasta el final, hay algunos con el potencial de producir grandes
resultados. Todo lo que queda es perfeccionar el sistema, y

después de eso, la Habitación Blanca puede ser un activo indispensable en el


futuro. El plan de tu padre es muy estúpido... y también muy aterrador”.

Después de que Tsukishiro hablara indirectamente, finalmente llegó a una


conclusión.

“En resumen, esto es lo que siento por la Habitación Blanca. Es estúpida y


aterradora”.

“Gracias por ese discurso, me he beneficiado enormemente”.

“La demoníaca cuarta generación. Con la deserción de todos los estudiantes


debido a su educación excesivamente dura, resultó que solo sobrevivió uno, el
estudiante que logró aprobar el curso final con facilidad. También te veo como
una valiosa muestra. Para no desacreditar ese brillante récord, creo que sería
mejor que regresaras a casa”.

Tsukishiro sacó su teléfono y me lo entregó.

“Llama a tu padre ahora y dile que quieres dejar los estudios. Este es el mejor
método para proteger tu ego y también actuará como compensación al amor de
tu padre por ti”.

“Director en funciones Tsukishiro, lo que dijo no contenía mentiras, dejó la verdad


perfectamente clara”.

Ya sea hablando de la Habitación Blanca o de mí.

Y así, Tsukishiro dejó escapar una sonrisa.

“Mi propia descripción de ti, director en funciones Tsukishiro, es que eres un


hombre que oculta sus emociones poniéndose una máscara de hierro. Sin
embargo, a partir de la conversación de hoy, sentí que te habías quitado esa
máscara”.
En otras palabras, manipula deliberadamente las impresiones que otras
personas tienen de él para dar un sentido de autenticidad al contenido de la
conversación.

Por tanto, sus palabras no eran creíbles. En cambio, eran algo así como
mentiras.

En el nivel de ese hombre, no había necesidad de mezclar la verdad con


mentiras.

Debería ser fácil para él jurar que el negro era blanco y que el blanco era negro.

Es decir, incluso si su declaración no consistiera en nada más que mentiras,


podía decirlo de una manera que sonaba cierto.

“Parece que no hay forma de ganarse tu confianza”.

“Lo siento”.

“Caramba…”

“Director en funciones Tsukishiro, ¿no es mejor rendirse ahora? Si no me obliga


a abandonar los estudios, perderá la confianza de mi padre. Incluso si recibe un
regaño, diría que sería una buena elección detenerse en esta etapa, o podría ser
humillado”.

“Gracias por tu preocupación. Sin embargo, esas palabras son inútiles, porque
no fallaré”.

Aunque no sabía cuál era la verdad en sus palabras, Tsukishiro dejó escapar
una sonrisa aterradora.

“Además, soy un adulto. No le temo al fracaso momentáneo, aunque tú, por


casualidad, me obligues a salir de esta escuela, no importa. Simplemente me
enviarán a realizar otro trabajo. De todos modos, la humillación no es tan
importante”.

“Ayudaste a mi padre porque le tenías miedo y, sin embargo, dices que no tienes
miedo al fracaso. ¿Cuáles de esos son tus verdaderos pensamientos?”

“Sí, cuáles serán”.

Tsukishiro, había estado luchando durante décadas en la cima.

La evaluación de su máscara de hierro podría necesitar ser más alta de lo que


pensé originalmente.

Desde que fue enviado por ese hombre, no era una persona impulsiva y sin tacto.
Lo sabía a ciencia cierta.
“Si no puedes aceptarlo, no se puede evitar. En lugar de eso, lucharemos”.

“Sí”.

Tsukishiro finalmente pareció estar satisfecho y se distanció de mí.

“Ya es hora. Sería de mala educación hacer esperar a los demás”.

Quizás se refería a los adultos que se fueron primero.

“Pero como no planeas abandonar la escuela, a partir de hoy tu vida en esta


escuela será difícil”.

“Aunque quiero vivir una vida escolar pacífica, parece que no hay forma, seré
consciente de eso”.

Tsukishiro sonrió, y justo cuando estaba a punto de irse, hizo una propuesta.

“¿Quieres jugar un juego que sería ventajoso para ti?”

“¿Un juego?”

“Cuando comience el próximo semestre, haré que un niño de la Habitación


Blanca se inscriba como estudiante de primer año”.

Originalmente estaba pensando en lo que iba a decir, y al final, lo que dijo fue
inesperado.

“¿Está bien que me digas algo como esto?”

“No hay problema. Deberías haber pensado en la posibilidad de que ese tipo de
cosas sucedieran de todos modos. Nuestra intención era darle a este niño un
ultimátum final, así que, si descubres la identidad de este niño, lo expulsaré”.

Esta era una decisión que no necesitaba tomar yo mismo.

Memoricé lo que dijo Tsukishiro, pero no tenía la intención de creerle en absoluto.

“Parece que no me crees. ¿Crees que es posible que envíe a cuatro o cinco
personas aquí? Esta escuela no es tan laxa en sus políticas como para que envíe
a varias personas, estás pensando demasiado al respecto”.

“Si dijeras que era una persona o cien, no lo creería en absoluto”.

Si tuviera la intención de enviar gente aquí, ese hombre enviaría a tantos como
quisiera.

Tenía claro que él era ese tipo de persona.

“Eso podría ser cierto”.


“Pero, ¿cómo puedo ganar en este pequeño juego tuyo?”

“Hay un total de 160 estudiantes de primer año que ingresarán a la escuela el


próximo año. Si puedes encontrar al estudiante de la Habitación Blanca para
fines de abril, me rendiré. ¿Qué te parece? Haré una excepción y romperé las
reglas con esa condición, ¿eh?”

Si esto fuera cierto, de hecho, se consideraría una excepción que infringe las
reglas.

Pero si el problemático Tsukishiro se marchaba, mi carga se reduciría.

“No hay forma de que pueda creer eso”.

“Puedes dudar si quieres, no hay mucho daño”.

Si ignoramos el posible daño al estado mental, es cierto que no había ningún


riesgo en él.

No habría ninguna pérdida si simplemente aceptara el desafío.

“Entiendo. Jugaré tu pequeño juego y aceptaré tus palabras en la superficie. Y


pareces bastante confiado en la capacidad del estudiante de la habitación
blanca. Yo también confío en una cosa”.

“¿Eh? ¿Qué cosa?”

“La rana en el fondo del pozo no conoce las profundidades del mar, pero conoce
la altura del cielo”.

“Entonces estás diciendo... que por el tiempo has pasado en ese pequeño mundo
conocido como la Habitación Blanca, eres capaz de entender la profundidad de
ese lugar más que nadie, ¿eso es lo que quieres decir?”

Fue la educación que recibí en la Habitación Blanca lo que me dio esta


inquebrantable confianza.

No importa a cuántos niños se les enseñara de la misma manera, nadie podría


llegar a este nivel.

Ya sea que se trate del estudiante de tercera generación del año anterior o del
estudiante de quinta generación más joven, esto se mantenía igual.

Frente a Tsukishiro, que seguía lanzándome miradas tentativas, continué.

“Definitivamente hay personas que son incluso más excelentes que yo en este
mundo. Después de todo, hay 7 mil millones de humanos viviendo en el planeta.
Pero la Habitación Blanca es diferente”.

En ese mundo, no había nadie mejor que yo.


Y con esa confianza, di esa respuesta.

“Esos ojos, son exactamente iguales a los de tu padre. Esos ojos horribles que
contienen una profunda oscuridad. La profundidad de tus ojos es lo único que
esos otros excelentes estudiantes de la Habitación Blanca no pueden imitar”.

Parecía que Tsukishiro entendió que no tenía sentido continuar la conversación,


así que se dio la vuelta y comenzó a alejarse.
4
Después de que se fue, volví a vagar por el centro comercial Keyaki por un rato.

Olvidar temporalmente la situación con Tsukishiro estaría bien por ahora.

El problema era la Matsushita que ocultaba su presencia y se escondía detrás


de mí.

Aunque podría simplemente ignorarla, sería un problema si ella hiciera correr la


voz sobre la situación entre el Director Interino y yo.

Después de confirmar que Matsushita todavía me seguía, decidí esperar una


oportunidad.

¿Por qué me estaba siguiendo? Necesitaba confirmar la razón de eso.

Aunque esto era poco probable, también debo considerar la posibilidad de que
ella estuviera trabajando para Tsukishiro.

No sé si me siguió desde el principio o en algún momento después.

Solo desde este punto, la distinguí claramente.

Si hubiera otros temas que tuviera que considerar, sería dónde debería hablar
con ella.

Eran las vacaciones de primavera en el centro comercial Keyaki, y todavía era


de mañana, el momento con más gente.

Si hablara con ella aquí, destacaríamos demasiado.

Mientras planeaba cómo iniciar la conversación, decidí resolver este asunto lo


antes posible.

Una cosa por la que estar agradecido es el hecho de que Matsushita era mi
compañera de clase.

Incluso si nuestra conversación fuera vista por otros, se consideraría como una
conversación normal entre compañeros de clase.

Acelerando un poco y doblando la esquina, me preparé para emboscar a


Matsushita.

Si no me seguía hasta aquí, usaría a Kei para lidiar con esto.

Después de unos 10 segundos, Matsushita dobló la esquina para alcanzarme.

“¡¿Whoah?!”
Parecía que no esperaba que la estuviera esperando aquí, dejando escapar una
voz de sorpresa.

Si no me estuviera siguiendo, no habría hecho una reacción tan exagerada.

“¿Qué asuntos tienes conmigo?”

Le pregunté eso, mientras Matsushita colocaba su mano sobre su pecho para


calmar su intenso latido.

“¿A qué asuntote refieres? ... Aunque eso es lo que me gustaría decir, parece he
sido expuesta”.

Parece que después de ver mi actitud, decidió que usar una excusa al azar en
esta situación no funcionaría.

Pero, ¿por qué me siguió de todos modos?

Esa parte era lo que realmente importaba.

Si solo quería saludarme normalmente, no había necesidad de que se ocultara


y me siguiera.

“Bueno, hay una razón, así que te seguí, Ayanokouji-kun”.

Después de que Matsushita confirmara que no había nadie alrededor, admitió


que me estaba siguiendo.

Mi relación con Matsushita no era muy profunda.

Pero si observaras el comportamiento de Matsushita, descubrirías que estaba


bastante alerta. Probablemente esto se debía a que no quería que se vieran sus
pensamientos reales, lo que también explicaría la razón por la que quería
seguirme.

“¿Cuál crees que es la razón por la que te sigo?”

Esta no fue solo una pregunta simple, obviamente fue un ataque psicológico.

Parecía que realmente quería preguntarme algo después de esto.

“No lo sé, no entiendo esto en absoluto. ¿Cuándo empezaste a seguirme?”

No le diría nada cuando me di cuenta de que me seguía.

Mientras respondía a sus preguntas, yo también le hice preguntas.

“Justo ahora, cierto—”

“¿Justo ahora?”
Para evitar que Matsushita hiciera preguntas adicionales, le hice otra pregunta.

Si tuviera la oportunidad, definitivamente me preguntaría “¿Cuándo se dio cuenta


Ayanokouji-kun?”

“Cuando eso... Oh cierto, cuando estabas hablando con el director en funciones


Tsukishiro”.

Matsushita mezcló mentiras, pero también admitió que me vio hablando con el
director en funciones Tsukishiro.

Poco después, Matsushita bajó ligeramente la comisura de la boca. Parece que


se dio cuenta de su error.

En realidad, ya había preparado una trampa aquí, si ella tuviera curiosidad sobre
mi relación con el director en funciones Tsukishiro, no tendría más remedio que
preguntarme al respecto.

“Te vi hablando con el director en funciones Tsukishiro, ¿qué pasó realmente?”

“Parece que el centro comercial Keyaki está a punto de ser renovado, por eso
les preguntaba a los estudiantes con qué instalaciones estaríamos contentos si
se construyeran, y preguntas similares. Simplemente eligió preguntarme por
casualidad”.

“¿Oh? Ya veo…”

Matsushita, quien afirmó haber comenzado a seguirme durante mi conversación


con el director en funciones Tsukishiro, podría haber planeado usar la
información de lo que sucedió antes de la conversación a su favor. Sin embargo,
tuvo el efecto contrario. Dado que vio a los trabajadores siguiendo al director
interino Tsukishiro, lo más probable es que me creyera.

“Entonces, ¿cuál es tu pregunta?”

“No tengo ninguna pregunta. Hay algunas cosas en mi mente”.

Después de decir esto, Matsushita comenzó a revelar la verdadera razón para


seguirme.

“Sobre el examen de fin de año... Ayanokouji-kun era la torre de control,


¿verdad?”

Eso es todo. Habiendo escuchado esta frase, entendí la razón por la que
Matsushita quería contactarme.

“Durante el evento de aritmética mental flash, la respuesta que me diste fue


exactamente la misma que la que dio Koenji-kun”.

Sería difícil decir que esto sucedió por casualidad.


“Durante la escuela secundaria, hice bastante aritmética mental, así que soy
bastante bueno en eso”.

“Yo también, pero no estás en el nivel de ‘bastante bueno’, creo que eres lo
suficientemente bueno para participar a nivel nacional”.

Tan pronto como terminé de hablar, Matsushita respondió de inmediato.

Parecía que no le gustaba el hecho de que bloqueé su primer movimiento.

“Ese es solo un evento en el que soy relativamente bueno. Para ser honesto, he
participado en competencias nacionales antes”.

“… ¿En serio?”

“Sí, parece que la aparición repentina de un evento en el que soy bueno llevó a
tu malentendido”.

“Pero, ¿no deberías haber mencionado esto antes?”

“Eso es cierto, pero ¿conoces mi personalidad? No soy alguien que pueda


anunciar esto en medio de la clase. Además, recibí un punto de protección por
casualidad, lo que me llevó al puesto de torre de control. Sin mencionar que
nuestro oponente era Sakayanagi-san de Clase A. Incluso si soy bueno en
aritmética mental flash, no sé cuánto podría ayudar, así que me sentí incómodo”.

La falta de confianza en uno mismo equivale a una mala capacidad de


comunicación. Esa era la impresión que tenían mis compañeros de mí.

“Eso…. podría ser cierto”.

Aunque sintió que era verdaderamente digno de confianza, Matsushita no quiso


aceptarlo y lo llevó al siguiente paso.

“Yo... lo vi. La escena de Ayanokouji-kun y Hirata-kun, hablando juntos en un


banco”.

Debería estar hablando del momento en que Hirata estaba deprimido luego de
la votación de la clase.

No tenía ojos en mi espalda, así que no sabía que alguien estaba mirando.

Sin embargo, no había necesidad de entrar en pánico por esto.

Incluso si alguien vio esa escena en ese momento desde la distancia, no sería
algo tan inesperado.

“Aunque me quedé en la distancia porque pensé que me descubrirían si me


acercaba, creo que lo vi llorar”.
Al presenciar esa escena y procesar rápidamente lo que significaba, parecía que
recopiló una cierta cantidad de datos.

Las intenciones de Matsushita gradualmente se hicieron obvias.

A juzgar por sus palabras y sus acciones, creer que no tenía nada que ver con
Tsukishiro debería estar bien.

“En aquel entonces, al siguiente día, Hirata regresó a clase, así que ¿no debería
ser más que una simple coincidencia?”

Pensé que era una estudiante corriente, pero era inesperadamente aguda.

No servía de nada que me estuviera contando estas cosas.

No parecía que estuviera aquí porque no podía guardarse esos pensamientos


para sí misma.

Aunque podría etiquetarse como pura curiosidad...

Por sus acciones sutiles, se podía ver que esto era solo una simulación, por lo
que, en otras palabras, ella tenía su propia razón personal para involucrarse en
esto. A juzgar por las palabras y acciones de Matsushita hoy, que eran lógicas,
esto no sería un capricho repentino. En cambio, ella habría planeado esto con
anticipación para ponerse en contacto conmigo y luego plantear este tema. Tal
vez su decisión de actuar hoy fue porque me vio vagando solo por el centro
comercial Keyaki.

“Aritmética mental flash a nivel nacional, más tu velocidad de carrera, y además


de eso, consolar a Hirata durante la votación de clase. Al considerar todos estos
puntos... Ayanokouji-kun, ¿te estás conteniendo? De hecho, ya sea académica
o físicamente, eres más capaz de lo que estás mostrando, ¿verdad?”

Este fue un contacto deliberado conmigo, que tenía una existencia débil, estaba
tratando de sacarme algo de información.

Parece que trató de contactarme porque dudaba de mis habilidades.

Esto fue completamente diferente de la impresión que tuve de Matsushita, quien


había sido mi compañera de clase durante un año.

Rápidamente llegué a una conclusión, decidiendo abordar el tema principal.

“¿Estás haciendo esto porque quieres que te ayude a alcanzar la Clase A?”

“... ¿Entonces lo admites?”

Parecía que Matsushita sintió una cierta cantidad de pavor después de mi


sencilla confesión.
“Parece que de hecho me estoy conteniendo”.

“¿Por qué? ¿No es bueno obtener buenas calificaciones en esta escuela?”

Matsushita, que creía que tenía la ventaja, comenzó a cuestionarme y criticarme.

“Es porque no me gusta... llamar la atención. Si de repente mis calificaciones


subieran, ¿no tendré que ayudar a enseñar a los demás? No soy muy bueno
haciendo eso. Lo mismo ocurre con el atletismo”.

“Entonces de eso se trata”.

Similar a Matsushita que escondía sus habilidades. Probablemente hubo


algunas partes de mi excusa que eran iguales con ella, lo que resultó en que ella
pudiera entender mi punto. Así que creyó en mis palabras.

“Por favor, haz más contribuciones a la clase en el futuro. Si realmente tienes


esa fuerza, quiero que la uses. Esto es para llevar a nuestra clase a la victoria.
Si tu fuerza es genuina y si tienes lo que se necesita para ser un líder, puedo
responder por ti, Ayanokouji-kun”.

Sus pensamientos eran similares a los de Horikita. Si tienes la fuerza, úsala


honestamente.

“Yo también lo creo”.

“¿Eh?”

Parecía que no esperaba que cooperara voluntariamente con ella, así que
Matsushita dejó escapar un sonido de sorpresa.

“Pero, por favor, no esperes demasiado de mí. Ya he ejercido alrededor del 70-
80 % de mi fuerza total. Incluso con todas mis fuerzas, no tengo la misma
capacidad académica o atlética que Hirata”.

De ahora en adelante, tenía la intención de dejar de lado mi vida escolar.

En este momento, tengo que ser aceptado por Matsushita hasta cierto punto.

Al contarle cómo escondí mis habilidades, le dio la impresión de que no tenía


más secretos.

Entonces, sin siquiera tener que decírmelo, noté que Matsushita también estaba
ocultando su fuerza.

Por supuesto, también se sentiría como si estuviera en una posición dominante


en esta guerra psicológica, pensando que ya había calculado mi fuerza
provisional.
“Espera, justo ahora, dijiste que estabas usando el 70-80 % de tu fuerza... ¿Es
eso cierto?”

No debería haber nada a lo que Matsushita pudiera hacer referencia para


confirmar que mi fuerza estaba por encima de Hirata-kun. Sin embargo, me
pidieron que confirmara si era cierto o no.

“Mhm”.

Aunque asentí con la cabeza para confirmarlo, Matsushita no pareció aceptarlo.

“Entonces, ¿qué hay de la situación con Karuizawa-san?”

“¿Qué quieres decir?”

“... El hecho de que ella rompió con Hirata-kun debería tener algo que ver
contigo”.

“¿Dónde escuchaste eso?”

“Eso es lo que creo personalmente... creo que tiene que haber algún tipo de
conexión”.

Parecía que Matsushita ya había hecho una investigación bastante exhaustiva


de antemano, y es por eso que simplemente no podía aceptarlo.

La confianza en la expresión de Matsushita desapareció de repente.

“¿Por qué Karuizawa-san cree que eres tan especial... tanto que la llevó a romper
con Hirata-kun? Por favor dime por qué”.

“La razón de eso, eh...”

Como estaba por debajo de Hirata en estatus, los motivos de Karuizawa eran
difíciles de aceptar.

“¿Vas a decir que ella no te ve como alguien especial?”

“... Supongo que sí”.

Al escuchar lo que dije, Matsushita asintió suavemente mientras lo aceptaba.

“Efectivamente, tú, Ayanokouji-kun, necesitas ser más—”

“No... ¿Cómo debería decir esto? Siento que estás malinterpretando algo”.

“¿Malinterpretando? Pero te lo pregunté porque tengo mucha confianza en esto”.

“Es cierto que mi relación con Karuizawa-san... no es normal”.


“Es por eso que quería saber acerca de tu verdadera fuerza, Ayanokouji-kun”.

“Eso no—”

“Ya llegamos a esta parte, así que ¿por qué no me lo dices de todos modos?”

“Ese no es el caso, ¿cómo puedo decir esto? Es un poco difícil expresarlo con
palabras”.

Mientras tartamudeaba, mi mirada se escapó y se centró en un lugar lejano.

Frente a Matsushita, quien todavía se negaba a dejar pasar esto, tuve que seguir
hablando.

“Es un poco difícil de decir. No, bueno, en realidad no... Bueno, siento que es
simplemente por la influencia de cómo le transmití a Karuizawa que me gustaba.
En lugar de decir que soy especial para ella, es mejor decir que tiene una especie
de conciencia extraña hacia mí”.

“¿Eh...?”

“... ¿Eh?”

Los dos nos miramos.

“¿No es porque Karuizawa-san notó tu fuerza y

por eso cree que eres especial?”

“Eso no debería estar relacionado en absoluto”.

“Pero, no creo que sea tan simple como para que transmitir tus buenas
intenciones hiciera que alguien más piense que eres especial”.

Acorté la distancia entre Matsushita y la agarré por los hombros.

Parecía que Matsushita no esperaba que la agarrara de repente y no pudo evitar


quedarse estupefacta.

Atrapé firmemente su mirada y dije esto.

“Matsushita, me gustas. Por favor, sal conmigo”.

“¡¿Qué—?!”

El cerebro de Matsushita probablemente entró en pánico por un momento, pero


rápidamente solté mis manos.

“Si alguien se confiesa así, no importa cuál sea el resultado, ¿podrías ignorarlo?”
“E-Es una broma, ¿no? Pero eso tiene sentido... ya veo”.

Si dejo que lo experimente directamente, podría hacerle entender lo que dije


antes sin que ella lo sepa.

Después de una confesión tan seria del sexo opuesto, siempre y cuando no
fueras extremadamente reacio a ellos, serías algo consciente de ellos hasta
cierto punto. Esto era obvio.

“Creo que su ruptura con Hirata fue completamente una coincidencia. Y solo le
comuniqué mis sentimientos después de que se separaron de todos modos”.

Debido a que todavía no me había confesado, Matsushita no tenía forma de


confirmar la veracidad de la secuencia de hechos.

“... Así que eso es todo, esa es la situación. Lamento haberte seguido”.

“Tengo una solicitud, lo mío con Karuizawa-san…”

“Lo sé. No se lo diré a nadie, pase lo que pase”.

No se puede decir que aceptó mi respuesta al 100%.

Pero este asunto se puede detener por un tiempo, ya que le he proporcionado


bastante información.

Después de todo, el asunto entre Kei y yo, ella no podía simplemente hablar
casualmente de eso con nadie.

Si algo relacionado con esto me hacía infeliz y me negaba a cooperar, solo


lastimaría a la propia Matsushita.
Epilogo
La Juventud Está a Punto de Florecer
La situación con Matsushita el otro día, y antes de eso, el problema con Horikita
e Ichinose. Además del establecimiento de una relación cooperativa con el
presidente Sakayanagi, Chabashira-sensei y Mashima-sensei.

Además, la conversación con el director en funciones Tsukishiro. Pasaron


muchas cosas a mi alrededor durante las vacaciones de primavera.

En primer lugar, tenía que estar atento a Tsukishiro. A diferencia de los otros
problemas, ignorarlo solo haría que todo empeore. Lo siguiente que sé, es que
podría estar recibiendo un aviso de abandono.

Por lo tanto, ahora mismo, lo único que puedo hacer es cooperar con los
profesores para tratar de responder a eso.

Esa persona dijo que alguien de la habitación blanca se estaría inscribiendo en


esta escuela. Aunque esto no es algo que esté garantizado, la posibilidad es alta.

Tsukishiro no puede entrar casualmente a los pasillos o aulas en el momento


que quiere, por lo que solo puede atacarme por medios indirectos, como los
exámenes.

Pero los estudiantes por otro lado, sin importar si son los pasillos o las aulas,
pueden moverse libremente.

En cualquier momento, pueden crear un entorno para entrar en contacto


conmigo, dándoles la oportunidad de expulsarme. Además, son más
beneficiosos ya que podrían recopilar más información.

Si lo dicho se convierte en realidad, este sería considerado el mayor cambio a


mi alrededor.

Luego, están Horikita y Matsushita, los llamados ‘problemas internos’ de la clase.


Cuestionaron mis verdaderas habilidades y también quieren aprender más sobre
mi potencial.

Aunque Horikita decidió competir contra mí uno a uno, no había nada que hacer
a partir de ahora. Lo mismo era cierto para Ichinose, eso es un asunto para el
futuro.

Por ahora, solo tengo que preocuparme por las batallas del próximo año y hacer
lo que sea necesario, con calma.

Sin embargo, estas eran solo las cosas que han sucedido a mi alrededor.
En cuanto a mis propios cambios, fueron mínimos.

Sí, eso fue hasta hoy.

Las vacaciones de primavera también están llegando a su fin, con solo dos días
para el final.

Antes de que los estudiantes dieran la bienvenida a la batalla que se avecinaba,


disfrutando del último día de descanso, comencé a tomar una firme resolución
mientras buscaba un gran cambio.

Si quería seguir adelante, tenía que hacerlo ahora.

Eran poco más de las 6 en punto y el sol recién empezaba a ponerse. Este era
el momento en que el día se convierte en noche.

Dicho esto, hay algo que quiero preguntarles a todos.

Por ejemplo, si hubiera alguien del sexo opuesto que les gusta, ¿cómo podrían
abrir un camino hacia una confesión?

Si fueras guapo o hermosa, entonces podrías cortar todos los rincones y


confesarte de inmediato.

Siempre y cuando contestaran: “¡Yo siento lo mismo!” Entonces sería digno de


celebración.

Sin embargo, no muchas personas cumplen esas condiciones. Tienen complejos


de inferioridad cuando se trata de su complexión, personalidad y aspecto físico.

Estos tres factores pueden obstaculizar el camino hacia una confesión.

En resumen, usar una “confesión” como puerta de entrada a una relación no es


un asunto tan simple.

Debido a esto, tendría que dejar volar mi imaginación seriamente y pensar


mucho para aumentar la tasa de éxito de la confesión.

¿La tasa de éxito es del 10 % o del 20 %? ¿O podría ser, digamos, del 50 %?

Habrá ocasiones en las que alcanzaría el 80-90 %, o la tasa de confesión podría


incluso acercarse al 100 %, pero no podemos estar seguros.

Aun así, seguiríamos sintiéndonos incómodos.

Porque tendríamos miedo de que, si la confesión falla, podría afectar


enormemente nuestra relación actual con la otra parte.

Aunque la cantidad de personas a las que no les importa esto y simplemente


siguen adelante no es pequeña, para los estudiantes, la escuela es todo lo que
tienen. Por lo general, temen la posibilidad de que sus relaciones que se han
construido dentro del pequeño mundo conocido como escuela sean destruidas.

Por lo tanto, pensarán en lo que se puede hacer para aumentar la tasa de éxito,
incluso en un 1 %.

Luego comenzarían a esforzarse en aumentar la tasa de éxito.

En primer lugar, comienzan con lo que pueden, como cambiar su peinado de


forma que le guste a la otra persona, vestirse bien o hacer ejercicio. También es
posible adoptar estrategias como comer juntos o hacer un regalo.

Usando todos los medios para aumentar la probabilidad.

La probabilidad puede aumentar del 1 % al 99 %, pero si sale mal, las


posibilidades pueden reducirse del 99 % al 1 %.

Para comprender los sentimientos del otro, tienes que esforzarte al máximo.

Ese es el proceso previo a una confesión.

Entonces, en cuanto a mí, lo había experimentado de todos modos.

Pensando y preocupándome como otros hombres y mujeres.

Sin embargo, esas cosas no se limitan al amor.

En términos generales, todas las cosas tienen una especie de probabilidad


invisible, y eso cambia todos los días de acuerdo con varios fenómenos. Al igual
que estudiar más para ingresar a la escuela o la universidad, cambiaría las
posibilidades de ser aceptado.

Y el grado en que uno comprende este principio podría cambiar enormemente la


comprensión de la situación.

Los exámenes y las confesiones son solo la etapa intermedia. Incluso si lo logras,
no marca el final.

Sería mejor decir que sucederán más cosas después de eso.

Si sufres un revés antes de graduarte, podrías ser expulsado y también podrías


romper debido a una infidelidad o la violencia.

Así era como pensaba acerca del futuro. Un mes después, medio año después,
un año después.

A veces, pueden suceder cosas inesperadas, por eso no me gusta actuar de


repente.

Es más, todo estaría relacionado con mis acciones previas.


Pero, volvamos al tema principal.

De hecho, todo lo que he hecho hasta ahora, ha sido cambiar una “cierta
probabilidad”.

No hace falta decir que obviamente, se trata de aumentar la tasa de éxito.

En cuanto a cuál era la tasa de éxito, tal vez se revele hoy.

Si mis predicciones son correctas, ya era hora de que alguien se pusiera en


contacto conmigo.

El teléfono que sostenía comenzó a sonar

Apareció un número de 11 dígitos en la pantalla de mi dispositivo.

El número que no estaba registrado en mi teléfono pertenece a Karuizawa Kei.

“Soy yo, lamento haberte hecho esperar”.

Después de que llamó varias veces, finalmente la atendí.

Hace 30 minutos, llamé a Kei, pero ella no respondió. Ahora, ella devolvía la
llamada.

“No importa eso, ¿qué pasa?”

“Suenas un poco insatisfecha”.

“Realmente no. No es insatisfacción, solo quería confirmar algo contigo”.

“¿Se trata de que no me comuniqué contigo después de llamarte?”

El día que me encontré con Hiyori, llamé a Kei, pero al final, no le dije nada.

En ese momento, solo le dije que la contactaría cuando lo recordara.

Al final, no la contacté a propósito hasta el final de las vacaciones de primavera.

“Pareces entender entonces, ¿qué? ¿Solo querías molestarme?”

“Sobre ese asunto, ¿podemos reunirnos y hablar de eso?” Dije esto y corté el
tema.

“¿Eh?”

“¿Recuerdas lo que dije que te diría si lo recordaba? Lo acabo de hacer.


¿Podrías venir?”
“Dios mío... Siempre me llamas cuando te place... supongo que está bien. No
asumo ninguna responsabilidad si alguien me ve, ¿de acuerdo?”

En este momento, había mucha gente entrando y saliendo del dormitorio.

La probabilidad de que Kei fuera vista entrando en mi habitación era muy alta.

“No te preocupes por eso”.

Le dije que no importaba si la veían y le pedí que viniera.

“Entendido. Ah, tengo algo planeado para las 7 p.m., así que no puedo permitir
que te tomes demasiado tiempo, ¿de acuerdo?”

“Será breve. Probablemente entre 10 y 20 minutos”.

“Entonces no hay problema, nos vemos más tarde”.

Después de decir esto, Kei colgó.

Ahora, comencemos.

He hecho mis preparativos. Miré alrededor de mi habitación, que estaba más


ordenada que antes.

Por una vez, me miré al espejo.

Frente a mi reflejo con una mirada tan seria, inmediatamente aparté la mirada.
1
Kei, luciendo infeliz, estaba sentada en mi habitación.

Con su apariencia ordenada, realmente parecía que tenía planes para después.

“Así que… ¿de qué se trata?”

Kei me miró, con una expresión infeliz, mientras yo estaba en silencio.

Después de llamarla, no pude quedarme callado.

“¿Qué quieres decir?”

“Eh, ¿qué quiero decir? ¿No dijiste que recordabas lo que querías decir?”

“Ahora que lo dices, sí, supongo que es cierto”.

“……”

“……”

Al escuchar mis vagas palabras, la mirada de disgusto en los ojos de Kei se


intensificó.

“Es por eso que te pregunto, ¿qué quieres?”

“Bueno, no es necesario que te apresures”.

“Te lo acabo de decir. A las 7 en punto, salgo a comer con mis amigas en el
centro comercial Keyaki. ¿Lo entiendes?”

“Aún hay mucho tiempo, está bien”.

“Esto me está dando un mal presentimiento, ¿sabes? Estás diciendo tonterías”.

Hacia mí, que actuaba de manera diferente a lo habitual, Kei comenzó a


sospechar un poco.

“…Oh, por cierto. Tengo algo que debo decirte, ¿de acuerdo?”

Desde que me quedé en silencio, Kei comenzó a quejarse.

“¿Algo que debes decirme?”

Para ser honesto, no sabía lo que Kei quería decir, así que le pregunté sin
rodeos.

“Satou-san sospecha de mi relación contigo, ¿sabes?”


Satou... No hemos tenido mucho contacto recientemente, pero ella es una
compañera de clase a la que le gustaba.

“Pensé que podría empezar a odiarme después de que la rechacé. ¿Por qué lo
dices?”

“Ella cree que podría haber terminado con Hirata-kun para salir contigo. Trató de
preguntarme sobre eso de una manera indirecta”.

Es decir que incluso si no lo dijo de frente, sus palabras podrían entenderse de


esa manera.

“Lo negué, por supuesto, pero no estoy segura de cuánto me creyó”.

“Ya veo. Algo similar ocurrió de mi lado”.

“¿Qué? ¿Algo similar?”

“Matsushita sospechaba un poco de ti y de mí. Preguntó si estábamos saliendo


o no”.

Le informé de la conversación de hace unos días, pero después de escucharla,


el rostro de Kei se puso pálido.

“¿Qué? ¿Qué? De ninguna manera, ¿verdad? ¿De verdad? ¿No estás


bromeando?”

Asentí para decir que no estaba bromeando, luego le expliqué toda la historia.

Las cosas que le dije fueron sobre cómo Matsushita también escondía sus
verdaderas habilidades, sobre sus observaciones que plantearon dudas sobre
nuestra relación y sobre sus dudas con respecto a mi verdadera fuerza.

“¡E-Espera un poco! ¡No puedo seguir el ritmo de esto!”

Kei, que tenía dolor de cabeza, se puso la mano en la frente.

“Creo que se está poniendo muy mal, un poco... ¿tienes algo bajo la manga?”

Después de comprender la situación, Kei me preguntó qué pensaba al respecto.


No, estaba buscando una solución.

Dado que esto estaba parcialmente relacionado con el motivo por el que la llamé,
es mejor decírselo honestamente.

“Creo que está bien ignorarlo”.

“¡No, no, eso no es bueno! Y nuestra relación... ¡tampoco es nada especial para
empezar!”
“¿Entonces estás diciendo que no te gusta que la gente piense que hay una
relación entre nosotros cuando obviamente no hay nada? Incluso si Matsushita
difunde ese rumor, ¿por qué no dejar que lo haga?”

“¿Eh? Dejarla decir lo que quiera... ese tipo de cosas no se pueden ignorar.
Deberías ir rápidamente a hablar con ella y decirle que no hay nada entre tú y
yo”.

“Ir a hablar con Matsushita ahora, solo sería contraproducente”.

“Deberías haberlo sabido desde el principio, ¿no? ¿Por qué hacer una mentira
tan tonta?”

“No importa cómo lo explique, no cambiaría nada. Satou sospecha que hay algo
entre nosotros, ¿verdad? Como ella es cercana a Matsushita, eventualmente le
dirá que nuestra relación no es normal. No, la posibilidad de que ella se moviera
después de que se lo dijeran es bastante alta”.

Debe verse que ella solo vino a contactarme después de que se enteró de la
situación por parte de las estudiantes que la rodeaban.

“…Puede que tengas razón…”

Después de eso, mi contacto con Kei era inevitable.

Incluso si lo negara enérgicamente esta vez, la próxima vez transformaría sus


dudas en confianza.

Si la otra persona sabía que estaba mintiendo, podría difundir la noticia.

En ese caso, atraer al enemigo a tu lado durante la etapa inicial sería más
beneficioso para acciones futuras.

Pero lo que a Kei le molestaba no parecía ser esto.

“Pero... si alguien dice que rompí con Hirata-kun, bueno, para salir contigo, los
rumores se esparcirían no solo en la clase, sino en toda la escuela, lo que sería
una gran molestia, ¿sabes?”

“¿Por qué debería preocuparte eso?”

“Escúchame. Si existiera un rumor así, me afectaría de ahora en adelante”.

Kei expresó implacablemente su insatisfacción, hablando sin parar.

“No importa de qué género seas, si tienes un escándalo con el sexo opuesto, las
posibilidades de que alguien se te acerque serán mucho menores. ¿No
entiendes?”

Kei sostuvo su dedo índice frente a mí.


“¿Entonces estás diciendo que quieres encontrar un nuevo novio y que estoy en
el camino?”

“… Exactamente”.

Desde la perspectiva de un tercero, se podía entender lo que decía. Al igual que


cuando se reveló que a Sudo le gustaba Horikita, le resultó más difícil acercarse
a Horikita. Algo como eso.

“¿De verdad lo entiendes? ¿Me estás escuchando?”

Kei continuó, pensando que todavía no entendía.

“Tú ... ¿eres cercano cerca de esta chica Shiina?”

“¿Shiina? Ah, ¿te refieres a Hiyori?”

“Hiyo—”

Ella era una de las personas a las que llamaba por su primer nombre.

Por supuesto, también llamaba a Kei, Haruka y Airi por sus nombres de pila.

Ella debería saber esto de primera mano.

Sin embargo, parecía que Kei no esperaba que yo tuviera este tipo de relación
con alguien fuera de nuestra clase.

“Somos bastante unidos, después de todo, ambos tenemos el pasatiempo de


leer libros para despejar nuestras mentes”.

Después de decirle eso a Kei, su rostro cambió de color.

“Eh... entonces tienen los mismos pasatiempos. Leer libros… hmm… hmmm.
Eso es completamente lo opuesto a mí”.

De hecho, Kei y Hiyori tenían personalidades completamente diferentes. Ella


misma lo sabía.

“¿Y…?”

“... No, quiero decir... ¡Argh! ¡Olvidé lo que iba a decir!”

Kei se enojó, levantó los brazos y miró hacia otro lado.

Y luego rápidamente comenzó a hablar, queriendo mantenerse tranquila.

“Si los rumores sobre tu y yo se extienden, quiero decir, sería más difícil para ti
acercarte a Shiina-san, ¿verdad?”
“Ya veo. Sin duda, esa es una posibilidad”.

Admití esto, y luego Kei se puso de pie.

“No es que me importe realmente. Eres libre de acercarte a quien quieras”.

Después de decir esto, Kei se dio la vuelta.

“Lo siento, pero, ¿podríamos… dejar esta charla para más tarde? Quiero llegar
al centro comercial Keyaki un poco antes. Puede que también vengan algunos
chicos de otras clases. Voy a ahuyentar los rumores, así que necesito motivarme.
No tengo tiempo para tratar contigo”.

“¿Motivarte?”

“Estoy buscando un nuevo novio desde que rompí con Hirata-kun. ¿Tienes algún
problema?”

“Para nada”.

“… ¿Ves? Por eso me voy ahora”.

Parece que me excedí con mis bromas.

Yo también me levanté. Kei pensó que la iba a despedir.

“Estoy bien”.

Enfrentando el tono de fuerte rechazo, grité el nombre de Kei.

“Kei”.

“¿Ahora qué?”

“Es solo que, si no te gusto, está bien que sigas ignorándolo”.

“¿Eh?”

Después de mostrar su sorpresa, prestó atención a lo que iba a decir a


continuación.

“¿Saldrías conmigo?”

“¿Eh?”

Kei frunció el ceño, sin comprender, rebosante de dudas, me miró.

“¿Qué estás diciendo? O, ¿ir a dónde?”

(Nota de TL, en japonés, “Sal conmigo” y “Ven conmigo” se pronuncian igual).


Parecía que ella entendió que quería que me acompañara, así que preguntó eso.

“No me refiero a eso. Quiero saber si saldrías conmigo”.

“No, quiero decir, realmente no... entiendo... estoy...”

No había necesidad de seguir hablando. Miré a Kei a los ojos y Kei lo aceptó. No
había considerado la situación en la que éramos tan cercanos. Pero entre
nosotros dos, solo era necesario unir nuestras miradas para transmitir nuestros
sentimientos.

“¡E-ai, eh, qué, ¿qué?! ¡¿Qué pasa con esa broma, eso es de mal gusto incluso
para ti...?!”

“No es una broma”.

“¡Pe-Pero! ¡Justo ahora, estabas insinuando que te gustaba Shiina-san!”

“Ésa era la broma”.

“Pero... el otro día...”

“Eso fue simplemente, bueno. Quería probar si te pondrías celosa o no,


supongo”.

Llamar a Kei al café, permitiéndole presenciar la escena entre Hiyori y yo juntos.

No había necesidad de hacer eso.

Pero, esta era una forma de hacerle ver que todavía no estaba tan acostumbrado
al romance.

“Si esto es una broma, esta es tu última oportunidad para retractarte... Lo sabes,
¿no?”

Con dudas en su corazón, esta no era una pregunta a la que pudiera


simplemente decir sí o no.

“Por supuesto que no es una broma. ¿Puedo escuchar tu respuesta?”

“… ¡¿Y-y-y-y-y-me estás preguntando eso?!”

“Como dije antes, puedes ignorarme, rechazarme, puedes hacer lo que quieras”.

“¡No dije que te iba a ignorar! ¡¿P-pero, por qué?!”

“¿Por ‘por qué’ te refieres a?”

“Bueno, es decir, yo... quiero decir... por cierto, ¿por qué hoy...?”
La pregunta anterior no estaba clara, por lo que solo pude responder a la última.

“¿Por qué hoy? No puedo darte una buena razón para haber elegido este día,
pero tengo una buena razón para confesarme, quería evitar que te convirtieras
en la novia de alguien más”.

“Entonces, ¿te refieres a... a ti, te gusta... como... yo?”

Las preguntas emitidas por Kei contenían fuertes emociones que no había visto
antes.

Quería, en este momento, o en el momento anterior, dar una respuesta firme.

“Sí, me gusta Karuizawa Kei”.

Uno de los principales acontecimientos de la vida escolar, es confesarse.

El momento fugaz en el que expresas tus verdaderas emociones.

A la pregunta de Kei, ¿mi respuesta fue realmente sincera?

Originalmente, el acto de confesarse a alguien, el único motivo que uno tendría,


sería el amor, una acción que convertía a alguien que te gusta en alguien que te
pertenece.

“¿Y tú respuesta es?”

La batuta en mi mano había sido entregada a Kei, y todo lo que tenía que hacer,
era esperar su respuesta.

La caótica Kei ordenó sus sentimientos dentro de su mente, y luego hizo todo lo
posible para mover su mirada hacia atrás, ya que inconscientemente se había
desviado.

“—T-Te dejaré salir... conmigo”.

“¿Puedo tomarlo como que yo también te gusto?”

“¡¿Quieres que lo diga?!”

Aunque entendí su confusión, era una parte indispensable de la confirmación.

Solo después de recibir una respuesta definitiva, la relación entre los dos puede
cambiar realmente.

“Sí, quiero que lo hagas”.

La urgí así, y Kei, aunque estaba sorprendida, no lo rechazó.

“...”
No había una tercera persona escuchando, ni hubo un contrato sellado entre
nosotros.

Solo nosotros dos lo sabemos, es una conversación solo entre nosotros dos, y
es entre los dos que acordamos ayudarnos mutuamente.

“¿No puedes responder?”

Si ella no podía responder, entonces tenía que cambiar lo que deberíamos hacer,
pero…

“Espera un segundo. ¡Justo ahora mi cerebro está hecho un caos...!”

Kei estiró sus manos abiertas, para que dejara de sentirme ansioso, esperando
un poco.

Mirando a Kei, decidí esperar tranquilamente a que llegara ese momento.

Después de un rato, Kei me miró con determinación en sus ojos.

“… Bueno, ¡argh! Eso, cómo lo digo...”

Aunque tomó una decisión, aún le costaba un poco organizar las palabras y
pronunciarlas.

Debido a que sentía que ella era inefablemente linda en ese estado, no me sentí
deprimido a pesar de que me hizo esperar tanto por su respuesta.

“Para ti... básicamente, yo...”

Aunque fue extremadamente difícil reunir el valor para hacerlo, Kei no intentó
apartar la mirada.

Esto podría ser una prueba de la determinación de Kei.

La fuerza de Karuizawa Kei era que, una vez que tomaba una decisión, la llevaría
a cabo hasta el final, sin importar la situación.

“… ¿Bueno, ya sabes? Quiero decir, ya sabes... yo, me gusta... un poco... un


poco, un poco...”

La voz de Kei se volvió más y más suave, tartamudeando, pero persistiendo en


revelar sus sentimientos.

“Yo también... me gustas... me enamoré de... Es frustrante, pero... ¡Lo admito, lo


admito!”

No sé por qué estaba enojada, pero aun así, reveló sus sentimientos hacía mí.

Estiré mis brazos y sostuve suavemente los brazos de Kei.


“¡Espera! ¡No me digas que, ¿quieres que nos besemos?!”

La reacción de Kei fue incluso más fuerte que cuando le dije que me gustaba.

Incluso si nos besáramos ahora, no creo que Kei se opusiera, pero no quería
hacerlo ahora.

“No. No haré eso. Aún no”.

¡¿No aún?!

En otras palabras, después de eso, la escena de nuestro beso entraría en su


visión.

Al imaginar esa escena, Kei estaba inmóvil, como si estuviera congelada.

Abracé a Kei en ese estado.


Esta era una prueba de que mi relación con Kei había dado un gran paso hacia
adelante.

“Esto debería estar bien, ¿verdad?”

“B-Bueno, si es solo esto...”

Incluso si no veía la cara de Kei, lo entendí.

Kei en este momento debe sentirse confundida, ansiosa y feliz.

La expresión de su rostro tenía que mostrar un sentimiento que era imposible de


expresar con solo una sonrisa u otros métodos.

“Oye, ¿no has crecido un poco?”

“Puede que lo haya hecho”.

Antes de venir a esta escuela, medía 176 cm de altura. Crecer durante este año
no es un gran problema.

Lo mismo era cierto para los otros estudiantes.

La gente crece.

Son criaturas a las que les encanta aprender.

Eso es instinto.

Es como aprender a andar en bicicleta o a nadar.

Al igual que aprender a usar los palillos y a beber con una pajilla.

También estaba aprendiendo a enamorarme a través de Kei.

Esto era algo que no había aprendido en mi vida hasta ahora.

También era algo que no se podía aprender en la habitación blanca.

E impulsaba mi mente inquisitiva.

Además, había una razón importante por la que elegí a Kei.

Este amor era necesario para el futuro crecimiento de Karuizawa Kei.

De cara al próximo año, su relación conmigo sería extremadamente importante.

La forma de supervivencia de Kei, como un parásito adherido a un anfitrión,


fracasaría algún día.
Para evitar que esto sucediera, esta etapa era necesaria.

Yo—

Yo en este momento, ¿qué expresión tengo?

¿Estoy sonriendo?

¿O hay una expresión tímida en mi rostro?

¿O tal vez una sonrisa confusa?

No lo sabía.

El yo de ahora, no sabía qué expresión estaba usando.

—No.

De hecho, lo sabía.

La expresión que tenía ahora.

Sabía en lo que estaba pensando ahora y también sabía lo que planeaba hacer.

Mientras aprende, la gente se alegra del proceso.

Ya sea estudiando, en atletismo o juegos, es lo mismo.

Te sientes feliz cuando progresas.

Lo mismo pasa con el amor.

Aun no entiendo el amor.

No sé qué es el apego y no entiendo qué es el afecto.

Y no entiendo la relación entre hombres y mujeres.

La vergüenza y la felicidad que sentí esperando el resultado, ese tipo de cosas


tampoco las tenía claras.

En un futuro cercano, definitivamente aprendería las respuestas a esas


preguntas.

Pero nada cambiaría.

Simplemente aprender, crecer y seguir adelante.

En otras palabras, Kei era como un libro de texto sobre el sexo opuesto para mí.
Y cuando terminara de leerlo, su “propósito” se habría cumplido.

O…

¿Me esperaba un futuro diferente?

No apartarme de su lado, convirtiéndome en una existencia insustituible para


ella.

No lo sabía.

Había una parte de mí que esperaba eso, y una parte de mí que entendía que
no era posible.

Entonces, oremos.

Orando en este momento, sosteniendo a una persona importante en mis brazos


y sonriendo.

Rezando, como un joven estudiante, jurando que la atesoraré.

Abracé suavemente a Kei, rezando en silencio.

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