Está en la página 1de 6

Wendy Neira | Gabriel

La Falaz
Enriquez | Prosperidad | 4°

del Guano
“B”
ENSAYO

Durante la primera mitad del S.XIX el Perú vivió un periodo de “bonanza”


aparente, el Perú atravesaba un periodo de gran apogeo gracias a los provechos
económicos que trajo la comercialización del Guano… pero no olvidemos a que a
esta época se la llamo prosperidad Falaz… ¿Porque? Si bien el estado peruano
recibió grandes ingresos, con el dinero del guano se podía hacer de todo
(recordemos que en esos años el Perú fue el primer país de Latinoamérica en tener
sus vías ferroviarias, la primera potencia Marítima de Latinoamérica, etc.), pero
este enriquecimiento fue falaz debido a que no todos los Peruanos tenían acceso a
las ganancia generadas por la comercialización del Guano, solamente la clase alta
del Perú disfruto de este guano, la clase Criolla. Además fue falaz ya que en
ningún momento se preocuparon por administrar bien los ingresos, la mala
inversión de dinero, la corrupción que siempre ha existido; no se aseguró una
Prosperidad para las generaciones; toda la riqueza generada por el guano acabo
en puras deudas. Se acabó el guano, se acabó el dinero, quedaron solo
deudas debido a la absurda administración de dinero, de la riqueza obtenida (la
riqueza se convirtió en una deuda externa)…eso fue lo que paso.

Para entender mejor esta falsa prosperidad no tenemos que remontar al plano
internacional. ¿Qué factores dieron origen a este Boom Guanero?, y si el guano
costaba millones, ¿Por qué los países europeos pagaban tanto por el guano del
Perú? …la respuesta es simple: La Segunda Revolución Industrial.

En esa época de Segunda Revolución industrial, países como Gran Bretaña,


Francia, Alemania y EE.UU, compraban guano… Pero si esos países son industriales
¿Por qué compraban guano, si el guano es para la agricultura?… Fácil, en la
revolución Industrial se requería gran mano de obra, se tenía que alimentar a los
millones de trabajadores para ello tenía que haber una agricultura prospera, y el
guano de isla, aseguraba esto; aparte, países como EE.UU y Gran Bretaña
desarrollaban la industria textil y para desarrollar la industria textil, se necesitan
grande cantidades de cosecha de Algodón, y para contar con una gran producción
de algodón se necesita guano de isla. Por ello se un industrial textil necesitaba el
guano de isla.

Pero, ¿Acaso no existían otros fertilizantes mejores que el guano?, ¿Por qué venían
al pero solo para comprar este excremento sumamente caro?… El guano se
trataba sin lugar a dudas al mejor fertilizante natural que la humanidad conocía. El
guano tenía una alta concentración de Elementos químicos. Rivero de Ustariz,
arequipeño, quien realizó estudios de mineralogía y botánica junto a Alejandro Von
Humbolt, había publicado en Europa un estudio sobre el guano de las islas del
litoral peruano, destacando su alto contenido de fosfato como propiedad que
oxigena la tierra e incrementa la producción.

Se podría decir que en esos años, la naturaleza vino al rescate del Perú y financio
el futuro “éxito” de los gobierno de Castilla. Con esa inusual Bonanza, el Perú podía
recuperar el tiempo perdido: atraer la inversión e iniciar una vasta política de obras
públicas para modernizar el país. De esta manera se inició un crecimiento
orientado a la exportación y un periodo aparente de prosperidad aprovechado por
el Castillismo.

Toda esta riqueza obtenida por el guano fue disfrutada por lo Criollos del Perú.
Mientras que las otras que las clases bajas, como los esclavos (que aún habían
esclavos en el Perú) y los indígenas (que sin duda alguna eran la mayoría del Perú).
La población, en sí, no obtuvo la riqueza del guano: “…una burguesía, confundida y
enlazada en su origen y su estructura, con la Aristocracia, formada principalmente

PÁGINA 1
por los sucesores de los encomenderos y terratenientes de las colonias pero
obligada por su función a adoptar los principios fundamentales de la economía y
política liberal” -José Carlos Mariátegui. Siete Ensayos de Interpretación de la
Realidad Peruana.

Cuando se Habla sobre “Prosperidad Falaz” o “Boom Guanero”, la primera imagen


que se proyecta la mente es la imagen de Ramón Castilla. Después de la muerte
de Gamarra, Castilla asumió la presidencia del Perú, el Perú vivió un aparente
apogeo económico. Castilla vio una mano salvadora en el Guano. Pero el Perú no
tenía fondos para realizar la extracción de Guano, así que Castilla dijo ¿Quién tiene
dinero para la extracción de Guano?, y ese Guano extraído necesitaba ser
transportado a Europa, y Castilla dijo ¿Quién tiene dinero para el trasporte del
Guano?, como Perú no tenía capital (pues los inversionistas principales, los criollos
estaba quebrados, financiaron las batallas de independencia, San Martin y Bolívar
le pidieron cupos de Guerra), tuvo que buscarla en el extranjero. Rápidamente se
presentó un extranjero, un inglés, llamado A. Gibbs. El inglés dijo que invertiría en
Extracción y Transporte. Castilla y Gibbs hicieron un trato, por el trabajo de haber
invertido Gibbs gana una comisión de 6% de las ganancias, y el otro 94% lo
ganaba el estado Peruano. De esta manera el estado Peruano se lleva casi todo,
ese era un contrato que favorecía al Perú. Ese contrato lo llamaron el contrato por
consignación (1842-1866). Consistía en que el estado peruano utilizaba un
intermediario para comercializar el guano (entre Perú y Europa). Después de este
ciclo de exportación, con los ingresos obtenidos producto de la exportación del
guano, el 11% estaba destinado al pago de la deuda interna, el 20% destinado a la
construcción de ferrocarriles, el 29% a los gastos de burocracia civil, el 7% a la
supresión de las contribuciones de los indios y liberación de los esclavos, el 25% a
los gatos militares, y el 8% restante al pago de la deuda externa. Asimismo, “los
ingresos del guano le dieron al país, aparte de una relativa calma política, su
primer programa de obras públicas y de inversión en la educación; además, la
sistematización de los ingresos y egresos de organizarse de acuerdo a la técnica
de la época el presupuesto bienal .Los gobiernos de Castilla-y el paréntesis de
Echenique-coinciden con lo que Basadre llamó la ‘prosperidad falaz.

Más adelante, cuando los consignatarios ya no fueron solventes, se cambió el


sistema con la llegada del Presidente José Balta (1866), en el cual se hizo un trato
con la Casa de Dreyffus, que básicamente era un Monopolio, en el Contrato
Dreyffus, el estado peruano le entregaba todo el Guano a la Casa del mismo
nombre y esta pagaba una fuerte suma de Dinero. Esta fue la última forma de
vente de este periodo.

Si medimos la importancia del guano en la economía nacional podríamos decir que


cuando Castilla hizo el primer presupuesto para el bienio 1846-1847, la venta del
PÁGINA 2
fertilizante representaba el 5% de los ingresos totales; años más tarde, entre 1869
y 1875, el guano generaba el 80% del presupuesto nacional. Con esta relativa
bonanza se podía recuperar el crédito externo e implementar una política de obras
públicas para modernizar al país.

¿Qué hizo el Estado peruano con los ingentes recursos de la riqueza guanera? Los
estudios realizados por historiadores, economistas y sociólogos peruanos y
extranjeros llegan a la conclusión que casi el 20 % de los recursos provenientes del
comercio guanero fueron destinados al pago de deuda, tanto externa como
interna, siendo tristemente célebre el escandaloso caso del pago de la
Consolidación de la deuda interna durante el gobierno de Echenique. El 54% se
gastó en la expansión del Estado, es decir en el incremento de la burocracia civil y
militar (planillas y sueldos), el 20% en ferrocarriles improductivos, y el 7 % en la
sustitución del tributo indígena y la manumisión de los esclavos, es decir, suplir los
ingresos que el fisco dejaba de percibir por la supresión del tributo indígena e
indemnizar a los hacendados esclavistas con cuantiosas sumas de dinero por los
esclavos manumitidos en el segundo gobierno de Castilla. Verdaderamente
inverosímil e indignante.

En suma, la riqueza producida por el guano no contribuyó al desarrollo integral y


equilibrado del Perú. Significó el desarrollo del Estado centralista limeño y criollo
mediante el fortalecimiento de los aparatos del Estado. Significó profundizar
nuestra relación de dependencia económica-financiera respecto de los grandes
centros de poder mundial, en este caso encarnado por el imperialismo anglosajón.
Significó una inyección financiera para los hacendados costeños, pues ellos fueron
los principales beneficiados por la aplicación de la Ley de Consolidación de la
deuda interna y la manumisión de los esclavos. Significó el aislamiento y la
exclusión del indio con los esquemas económicos capitalistas del siglo XIX. En
suma, significó el fortalecimiento de una pequeña élite de poder en desmedro de
las mayorías sociales que jamás obtuvieron beneficio alguno con la riqueza
generada por la explotación de este recurso.

Hasta el estallido de la Guerra con Chile en 1879, el Perú exportó entre 11 y 12


millones de toneladas de guano que generaron una ganancia de 750 millones de
pesos. De ellos el estado recibió como propietario del recurso el 60%, es decir, una
suma considerable para convertirse a través de inversiones productivas en el
principal agente del desarrollo nacional.

Hacia 1870, las reservas del guano se habían agotado y el Perú no estaba
preparado para este colapso, cargado como estaba con la deuda externa más
grande de América Latina en el mercado de Londres. Fue entonces que el país
volvió a pasar de millonario a mendigo, sin nada que demostrar en términos de un
PÁGINA 3
progreso económico. El Perú no había podido convertirse en un país moderno con
instituciones civiles sólidas.

La razón de este fracaso ha sido explicada por la falta de una clase dirigente
peruana. Tanto los militares como los civiles surgidos bajo esta bonanza no
pudieron trazar un proyecto nacional coherente. Dirigieron su mirada hacia el
extranjero, apostaron por el libre comercio y compraron todo lo que venía de
Europa arruinando la escasa industria nativa. Se convirtieron en un grupo rentista
sin vocación por la industria. En especial los civiles no habrían podido convertirse
en una “burguesía nacional” decidida, progresista o dirigente. Aunque, es preciso
decirlo, hubo al interior de esta élite gente que, como Manuel Pardo, imaginaron un
desarrollo alternativo para el país. El resto del país, esto es, los grupos populares,
vivieron al margen de esta “prosperidad falaz” continuando en un mundo arcaico,
especialmente la población andina. En 1879, quebrado y dividido, el Perú tenía
pocas posibilidades de salir airoso en la Guerra del Pacífico.

Para con concluir, ¿cuál será la herencia que esta época de supuesta prosperidad
dejo a los gobiernos siguientes?…las deudas. Además, parece que la historia se
volviese a repetir porque, en la mayoría de los casos, el Perú no saca el máximo
beneficio de sus recursos y, al no poder explotarlos debidamente, termina siendo
un caos. Por lo tanto, la era del guano no solo sirve como un antecedente histórico,
político o económico, sino también como algo social; por consiguiente, se explotará
los recursos, pero sosteniblemente.

Bibliografía y Web-Grafía

 Historia de la República del Perú [1822-1933]


Tomo III, IV, V, VI
AUTOR: Jorge Basadre Grohmann
AÑO: 2015
EDITORIAL: El Comercio
 Mariátegui, José Carlos (1979). 7 ensayos de interpretación de la
realidad peruana. <https://books.google.es/books?
id=efuIDhzVsacC&printsec=frontcover&source=gbs_navlinks_s&hl=es#v=o
nepage&q&f=false> Venezuela: Fundación Biblioteca Ayacucho
 HISTORIA - Prosperidad falaz (2015)
< https://www.youtube.com/watch?v=PJVg01Sje34 > Profesor Daniel
Fasabi| Academias "ADUNI"
 LA PROSPERIDAD FALAZ DE RAMON CASTILLA (2010)
<http://lamodaeneltiempo.blogspot.pe>

 LA HISTORIA DEL PERU (Editado: 19 de julio 2016)

<https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_del_Per
%C3%BA#La_Era_del_Guano>

 SATIRA CON HISTORIA (2008)

PÁGINA 4
< http://larepublica.pe/22-06-2008/satira-con-historia > Diario La Republica

 LA PROSPERIDAD FALAZ (2007)

<http://sucesoshistoricos.blogspot.pe/2007/07/la-prosperidad-falaz.html >

 LA FALAZ PROSPERIDAD (2012)

<https://econoletras.wordpress.com/2012/10/19/la-falaz-prosperidad/>

PÁGINA 5

También podría gustarte