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MODELOS DE LOCALIZACION-ASIGNACION Y EVALUACIÓN


MULTICRITERIO PARA LA LOCALIZACIÓN DE INSTALACIONES NO
DESEABLES LOCATION-ALLOCATION ....

Conference Paper · January 1995

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2 authors:

Joaquin Bosque-Sendra Franco-Maass Sergio


University of Alcalá Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM)
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Serie Geográfica, 1995, n° 5, pp. 97-112

MODELOS DE LOCALIZACION-ASIGNACION
Y EVALUACIÓN MULTICRITERIO PARA LA LOCALIZACIÓN
DE INSTALACIONES NO DESEABLES

Joaquín Bosque Sendra'


Sergio Franco Maass^

Resumen: Tras un análisis de los diversos modelos problema de gran importancia práctica y de
de localización-asignación establecidos para situar, fuerte contenido geográfico. Nos referimos
de modo óptimo, las instalaciones no deseables:
maxisum, maximin y "complementario-anticobertu- en concreto a la cuestión de dónde situar
ra"; y de discutir el problema del transporte de los los edificios en los que se ofertan muy
residuos tóxicos y peligrosos, se plantea un proce- diferentes servicios a la población, la cual,
dimiento por etapas para buscar una solución ade- en unos casos, debe desplazarse hasta ese
cuada a este problema, utilizando para ello técnicas punto para poder usar el servicio (comer-
de evaluación multicriterio.
cios, escuelas, hospitales, etc), en otras
Palabras clave: Instalaciones no deseables. Modelos ocasiones, se debe distribuir el servicio
de localización-asignación. Evaluación multicriterio. desde ese punto a toda la población (esta-
SIG. ciones de bomberos o de ambulancias, etc).
LOCATION-ALLOCATION MODEL AND
MULTICRTTERIA EVALUATION IN LOCA- En cualquier caso, podemos esque-
TION OF OBNOXIOUS FACILITY matizar, desde un punto de vista espacial,
el problema de la siguiente manera (Bosque
Abstract: After an analysis of location-allocation Sendra, 1992, p. 226-227):
models for imdesirable facilities: maxisum, maxi- a) Las instalaciones donde se ofer-
min, and "complementary anticover", and a discus-
sion of transpon problem of toxic garbage, we tan los servicios constimyen hechos de
propose a procedure step by step to fmd the best tamaño puntual (en términos relativos) a los
solution for the location of undesirable facilities, cuales se debe otorgar una localización
using multicriteria methods. concreta en un espacio bidimensional.
b) La población reside concentrada
Key words: Undesirable facilities. Location-alloca-
tion model. Multicriteria evaluation. GIS.
en muchos puntos de esa superficie espa-
cial. Existe por ello una distribución espa-
INTRODUCCIÓN cial úregular de la demanda del servicio en
cuestión.
La localización en el territorio de c) Los movimientos entre demanda
las instalaciones de los distintos tipos de y oferta se pueden producir de maneras
servicios y equipamientos sociales es un diversas sobre el espacio, aunque lo más

Departamento de Geografía, Universidad de Alcalá. Su actividad se realiza dentro del proyecto


AMB94-1017 de la COMISIÓN INTERMINISTERIAL de CIENCIA y TECNOLOGÍA.

Facultad de Geografía, Universidad Autónoma del Estado de México.


98
general es que se encaucen por la red de ante su proximidad espacial: desde la
comunicaciones (calles, carreteras, etc). oposición a que tales servicios se instalen
en las cercam'as de su domicilio, reacciones
En este contexto el problema geo- sintetizadas en las expresiones "No en mi
gráfico se resume en contestar a la siguien- patio trasero" (NIMBY en las siglas ingle-
te pregunta: ¿En qué punto o puntos se sas, 'Not in My Backyard') o "Uso del
deben colocar las instalaciones para que suelo localmente indeseable" (LULU,
atiendan de modo adecuado a la población 'Locally Unwanted Land Use'), hasta la
demandante?. Para ello es preciso conside- negativa absoluta a la creación de tales
rar, junto a otros elementos que después centros en ningún lugar, al considerar, por
mencionaremos, el tipo de efecto (extema- ejemplo, que es necesario llevar a adelante
lidad espacial) que cada instalación produce políticas de reciclado absoluto y nula pro-
en su entorno inmediato. Realmente un ducción de residuos (BANANA, 'Build
centro de servicios produce siempre dos Absolutely Nothing at AU Near Anybody').
efectos, uno positivo: resulta más sencillo Lo cierto, en cualquier caso, es la impor-
y barato usar ese servicio a los que viven tancia cada vez mayor de las reacciones y
cerca (extemalidad espacial positiva); y resistencias de la población a este tipo de
otro negativo: aparición, por ejemplo, de instalaciones, no solo en los países anglosa-
aglomeración de personas o de congestión jones (de lo que son buena prueba las
del tráfico rodado, las molestias que todo mencionadas siglas de uso común en estos
ello ocasionan pueden considerarse un países) sino, igualmente, las actitudes cada
efecto molesto y repelente para la pobla- vez más manifiestas en España de protestas
ción (extemalidad espacial negativa). No firente a estos temas, la prensa diaria mues-
obstante, podemos, sin demasiadas dificul- tra ejemplos evidentes de ello (una pequefiía
tades, clasificar las instalaciones de servi- muestra son las noticias publicadas los
cios en dos grandes tipos: a) las deseables, siguientes días: EL PAÍS, miércoles 1 de
aquellas en que predominan las extemalida- noviembre de 1995; ABC, viernes 12 de
des positivas: escuelas, hospitales, comer- agosto de 1994, entre otros muchos).
cios, cines, etc y b) las no deseables, en las
que las extemalidades negativas son predo- Existe una amplia literamra que
minantes. En este último caso se encuen- trata de diversas formas estas cuestiones,
tran, sobre todo, los lugares donde se en este texto se analiza una parte de ella, la
procesan los residuos que la sociedad pro- que se refiere a los modelos matemáticos
duce: vertederos de residuos sólidos urba- de localización-asignación que se han ido
nos, centros de tratamiento de residuos construyendo para tratar de buscar una
industriales (tóxicos y peligrosos); los posición "óptima" para este tipo de instala-
centros para el tratamiento de personas con ciones. En Moon y Chaudhry (1984) y
problemas (cárceles, centros contra la Erkut y Neuman (1989) se pueden encon-
drogadicción, etc) o las propias centrales trar dos revisiones detalladas sobre el tema.
nucleares, etc. Por otra parte, se ofrece un planteamiento
metodológico concreto para el análisis de la
La población reacciona con protes- cuestión usando los mencionados modelos
tas y oposición a qué estas últimas instala- de localización-asignación y técnicas de
ciones se sitúen en sus proximidades; es evaluación multicriterio (Barredo, 1996;
decir, las instalaciones no deseables produ- Barredo y Bosque, 1995)
cen numerosas reacciones de la población
99
LOS MODELOS DE LOCALIZACION- ción; la eficiencia espacial para garantizar
ASIGNACIÓN los menores costos económicos, sociales y
ambientales y la justicia espacial en su
Los Modelos de localización-asig- emplazamiento con respecto a la población
nación son un conjunto de procedimientos afectada, así como a los sectores de la
matemáticos que intentan buscar soluciones sociedad que demandan los servicios.
al problema de donde simar centros de
servicios (en sentido amplio) de manera Criterios a considerar: efíciencia y justi-
que se optimicen ciertos valores considera- cia espacial
dos importantes a la hora de que los usua-
rios utilicen dichos servicios (Bosque y Los modelos de localización-asigna-
Moreno, 1990). Esto implica, por lo tanto, ción hasta ahora definidos consideran dos
definir primero las magnitudes que son magnitudes: la eficiencia espacial de la
relevantes para el empleo de las instalacio- localización de los centros de servicio y la
nes por la población y después formular justicia espacial de su distribución en el
una expresión matemática de dichas mag- territorio (Bosque Sendra, 1992, p. 227).
nitudes, de tal manera que el modelo obten-
ga un óptimo de su valor, mínimo o máxi- La efíciencia espacial se refiere al
mo, dependiendo del tipo de servicio a volumen global de desplazamientos que el
localizar. conjunto de la demanda debe efecmar para
utilizar las instalaciones y trata de medir el
La mayoría de los modelos han sido coste, en tiempos de recorrido o distancias,
diseñados para determinar la localización que la población se verá obligada a recorrer
óptima de una o varias instalaciones desea- para poder utilizar los servicios (Bosque
bles (usualmente idénticas), de tal manera Sendra, 1992, p. 227). Esta distancia evi-
que se obtenga su mejor distribución espa- dentemente tiene un coste monetario, más
cial a partir de minimizar los costos o o menos fácil de medir, y que se busca
tiempos totales de transporte (Bosque y reducir lo más posible. La eficiencia puede
Moreno, 1990). Más recientemente se ha medirse también en función de los benefi-
abierto una línea de investigación dedicada cios netos y, en términos de economías de
a determinar la óptima ubicación para escala, será mayor en la medida en que se
aquellas instalaciones que, a pesar de su logre el tamaño y emplazamiento que maxi-
carácter imprescindible, son consideradas mice el consumo del servicio (McAllister,
no-deseables ya que, como hemos indicado, 1976).
representan riesgos a la salud o, más en
general, inciden en el deterioro de la cali- La justicia espacial se refiere a la
dad de vida de la población localizada en accesibilidad diferencial de un servicio a
sus proximidades (Stevens, 1985). los distintos grupos de la población, es
decir, al grado de igualdad en la distribu-
La localización de instalaciones no- ción de los servicios que presta cada insta-
deseables, tales como reactores nucleares o lación entre la población. La justicia espa-
plantas de tratamiento de residuos, es una cial depende en este caso de la mayor o
tarea compleja que implica tomar en menor facilidad de acceso y depende de la
consideración aspectos de muy diversa variabilidad de las distancias que separan a
índole: el impacto real y percibido que cada individuo de la instalación más próxi-
dichas instalaciones ejercen sobre la pobla- ma, del tamaño de la oferta existente en
100
dicha instalación y de la disponibilidad La búsqueda de la eficiencia espa-
temporal de los servicios (Bosque, 1992, cial no es únicamente un problema de
págs. 223 y 227). La justicia espacial tiene distancias sino que implica considerar la
especial relevancia en el caso de servicios magnitud de las instalaciones. Maximizar la
ofertados por la Administración Pública, es eficiencia espacial, tomando en considera-
decir, que son financiados por toda la ción criterios de economías de escala,
población que, por lo tanto, tiene iguales significaría, generalmente, el estableci-
derechos a usarlos en las mismas condicio- miento centralizado de grandes instalacio-
nes de acceso. nes con menores costos relativos de cons-
trucción y operación. Existe, sin embargo,
Efícacia y justicia espacial en las instala- una importante tendencia a plantear la
ciones no deseables localización dispersa de instalaciones no-
deseables de menores dimensiones que, con
¿Cómo se expresan estos criterios una distribución más justa aunque menos
en el caso de las instalaciones no desea- eficiente, permitan hacer frente a toda una
bles?. La manera concreta de establecer las serie de problemas: la complejidad de
magnitudes anteriores de eficiencia y justi- manejo de una instalación intensiva de
cia espacial es muy diferente si nos referi- grandes dimensiones; las consecuencias de
mos a instalaciones deseables o no desea- eventos catastróficos a gran escala, a pesar
bles. Para el caso de las segundas el pro- de sus bajas probabilidades de ocurrencia;
blema se puede plantear en estos términos: los riesgos, reales y percibidos, implícitos
en el transporte a grandes distancias de
La efíciencia espacial de ciertas residuos tóxicos y peligrosos y la inequidad
instalaciones no deseables, como las plantas en el emplazamiento (Ratick y White,
de tratamiento de residuos, depende de dos 1988).
tipos de distancias: la que separa las insta-
laciones citadas de los productores de La justicia espacial en la localiza-
residuos, que los deben transportar hasta ción de instalaciones no-deseables se mide,
allí y que, evidentemente, estarán interesa- básicamente, por el grado en que la pobla-
dos en que los costes de transportes sean ción de una región determinada comparte
reducidos (al margen de que cuanto más los riesgos y molestias que dichas
largos sean los transportes más fácil es la instalaciones representan. La localización
aparición de accidentes que pueden ser muy más justa es aquella en que existan las
peligrosos en algxmos tipos de residuos); y, menores diferencias en la forma en que los
por otra parte, la distancia que separa las diversos sectores de la población se ven
instalaciones de la población, que, tal como afectados por el emplazamiento de una
ya se ha indicado, desearía estar cuanto instalación.
más lejos mejor de dichas emplazamientos.
En este tipo de problemas, por lo tanto, la A pesar de su indiscutible relevan-
eficiencia es una cuestión multicriterio que cia en el proceso de localización de instala-
debe buscar una solución de compromiso ciones no-deseables, la justicia espacial es
entre la minimización de las distancias un concepto difícil de medir y más
entre productores e instalaciones y la maxi- complicado de aplicar. Aunque general-
mización de las distancias entre la pobla- mente tiende a estimarse mediante estánda-
ción y las instalaciones. res mínimos sociahnente impuestos (distan-
cias críticas entre la población y las instala-
101
ciones) o mediante la maximización de la tancia a los centros productores de resi-
distancia entre la población y las instalacio- duos. Desde el punto de vista de maximizar
nes (Morrill y Symons, 1977), es necesario la distancia a la población, existen dos
profundizar en el desarrollo de nuevos variantes principales:
procedimientos que lo consideren adecua-
damente. . Modelos que establecen límites
mínimos de distancia, denominados mode-
Un aspecto importante a considerar, los anti-cobermra. Permiten definir la
en la localización de centros de tratamiento alternativa de localización que incluye,
de residuos, es el problema del transporte dentro de un radio prefijado alrededor de
de los residuos lo que genera el estableci- cada instalación no-deseable, a la menor
miento de una red no-deseable de comuni- población posible.
caciones y que afecta tanto la eficiencia
como la justicia espacial. Las rutas de . Modelos de maximización. Buscan
transporte de residuos producen un riesgo maximizar las distancias, mínimas o pro-
importante a la población, que puede ser medio, entre la población y las instalacio-
incluso mayor que el producido por los nes no-deseables. Los modelos de maximi-
propios centros de tratamiento. Esto impli- zación pueden ser, a su vez, modelos
ca buscar la máxima eficiencia en términos maximin o anti-centro que buscan maximi-
de la menor distancia y la mayor facilidad zar la distancia mínima entre población e
de acceso entre centros productores e insta- instalaciones y modelos maxisum o maxian
laciones, así como la máxima justicia espa- que pretenden maximizar la distancia total
cial en términos del menor riesgo a la entre población e instalaciones. Estos mo-
población a lo largo del recorrido. delos parten de considerar la distancia entre
la población y un conjunto de sitios candi-
MODELOS DE LOCALIZACIÓN- datos para la localización de instalaciones,
ASIGNACIÓN, PARA INSTALACIO- pero también pueden considerar la distancia
NES NO-DESEABLES, QUE SOLO entre instalaciones ya existentes y los sitios
CONSIDERAN LA DISTANCIA candidatos a recibir nuevos centros de
tratamiento de residuos, con lo que pueden
En la literatura sobre estos temas es utilizarse como una medida, muy aproxi-
posible encontrar diversas formulaciones de mada, de la justicia espacial.
procedimientos matemáticos para encontrar
la localización óptima de instalaciones no- Modelos de localízación-asignación basa-
deseables. La mayoría de los modelos, sin dos en "limites mínimos" o de cobertu-
embargo, consideran exclusivamente la ra/antícobertm-a
distancia entre centros poblados y sitios
candidatos a recibir una instalación no- Parten de establecer "zonas prohibi-
deseable, y parten del supuesto de que das" para el emplazamiento de instalaciones
"cuanto más lejos se localice una instala- alrededor de cada lugar de residencia de la
ción con respecto a la población, mejor". población. Estos modelos han sido desa-
Dichos modelos se caracterizan por utilizar rrollados a partir del concepto "set cove-
únicamente una definición simplificada de ring" o conjunto de zonas que cubren la
eficiencia espacial que considera la maxi- demanda de la población de un servicio
mización de la distancia a la población pero deseable sin que sea necesario recorrer para
que omite el objetivo de minimizar la dis- ello una distancia mayor a un límite máxi-
102

mo, normalmente coincidente con el valor . El número de instalaciones a localizar


del "alcance espacial" del bien o servicio - Una instalación
en cuestión (Bosque, 1992, p. 224). En el - Varias instalaciones
caso de instalaciones no-deseables, se
aplica el concepto inverso, es decir, el . El tipo de interacciones consideradas
planteamiento anti-cobertura, donde la - Únicamente interacciones entre la pobla-
población debe estar situada, en su totali- ción (V) y nuevas instalaciones (X):
dad o en su mayor parte, fuera de una D(V,X)
distancia en tomo a cada instalación. Dicha - Únicamente interacciones entre nuevas
distancia se considera que establece la instalaciones (X): D(X,X)
existencia o no de un riesgo o molestia para - Interacciones D(V,X) y D(X,X)
la población derivado de la actividad de la
instalación no-deseable. Es posible plantear . £1 tipo de objetivos planteados
el mismo concepto formulando un umbral - Objetivo único
de distancia en tomo a cada lugar de resi- - Multiobjetivo
dencia de la población (ver fígura 1).
A pesar de que se han formulado un
gran número de modelos, la mayoría pue-
U calidades den considerarse como casos particulares
• Instalacu ncs de modelos más generales de maximiza-
,^ <í»»«»"2^«/ ción basados en la solución de problemas
\ ^ de tipo maximin y maxisum:
bk ^ '"
A. El problema maximin busca definir
\.^^ff
r-^^*^
w \ V. \ Sitio más la máxima distancia mínima entre la pobla-
V^3 »<1 icuado ción y la o las instalaciones a ubicar.

B. El problema maxisum busca encon-


Figura 1 trar el valor máximo de la suma de las
distancias entre la población y la o las
Modelos de localizadón-asignación basa- instalaciones a ubicar.
dos en la maximización de la distancia
Modelos maximin para la localización de
La mayoría de los modelos para el una o varias instalaciones
emplazamiento de instalaciones no-desea-
bles buscan optimizar im valor conjunto de El problema maximin busca deter-
la distancia (entre instalaciones y la pobla- minar la ubicación óptima de vma o varias
ción). instalaciones, mediante maximizar la dis-
tancia mínima entre cada lugar de residen-
Erkut y Newman (1989), presentan cia de la población y la instalación no-
una lista general de criterios de clasiñca- deseable más próxima (Drezner y Weso-
ción de los modelos de localización. Dicho lowsky, 1983; ver figura 2). El modelo
esquema considera diversos criterios entre maximin puede considerar interacciones
los que es posible destacar: entre la población y nuevas instalaciones
(V,X) o interacciones entre las nuevas
103
instalaciones (X,X). Estos modelos se Maximizar la Junción objetivo z:
pueden expresar matemáticamente: z < [ m i n d {x . , X) ]
l<i<n
A. Encontrar uno o varios puntos de una
región, de tal manera que se maximicen las
distancias mínimas (d) ponderadas (w) por Este problema, conocido como p-
la población residente en el punto i, entre maximin-min con términos D(X,X) o p-
el conjunto de puntos de residencia de la dispersion, parte de considerar que no
población (v¡) y las nuevas instalaciones existen instalaciones y busca encontrar la
PC), donde i = 1, 2, ... , n, son los puntos óptima localización en el emplazamiento de
de residencia de la población. un conjunto de nuevas instalaciones no-
deseables. Dado que se busca maximizar el
Maximizar la función objetivo z número de instalaciones a localizar en
forma dispersa en una región determinada,
: < [ m i n w. d {v. f X) como una medida de justicia espacial, sería
l£i<n recomendable incluir el manejo de límites
mínimos en distancia, es decir, aplicar
Este problema, también conocido conjuntamente el problema anti-cover.
como p-anti-center (Moon y Chaudry,
1984), puede considerarse como la versión Modelos maxisum para la localización de
maximin del problema p-center en los una o varías instalaciones
modelos minimax utilizados para la locali-
zación de instalaciones deseables. El problema maxisum busca deter-
minar la localización óptima de una o
SitK menos ' j .
1.2
varias instalaciones, mediante el cálculo de
¿7 LocalilaJcs
O In.<;tal3ciones
a 1 :cua 1( ¿ la máxima distancia total, mínima o prome-
dio, entre un conjunto de sitios alternativos
d™, = 5.7
y el conjunto de centros de población (ver
figura 3). Al igual que en el problema
maximin, el modelo maxisum puede consi-
<^ Sitk más derar tanto interacciones entre la población
¡2.4 a 1 :cua 1( y las nuevas instalaciones (V,X) como
O
r
interacciones entre las nuevas instalaciones
(X,X). Estos modelos se pueden expresar
Figura 2 matemáticamente:

Una segunda variante es la siguien- A. Encontrar uno o varios puntos en una


te: región, que maximice la suma de las dis-
tancias (d), mínimas o promedio, pondera-
B. Encontrar uno o varios puntos en una das (w¡, población residente en el lugar i),
región, de tal manera que se maximicen las entre el conjunto de puntos de residencia de
distancias mínimas (d) entre cada punto (x¡) la población (v) y las nuevas instalaciones
del conjunto de posibles instalaciones (X), (X), donde i = 1, 2, ... , n, son los centros
donde i = 1, 2, ... , n, son los lugares de residencia de la población.
candidatos a recibir una instalación.
104
Maximizar la función objetivo z: Este modelo p-maxisum-sum, tam-
bién conocido como p-defense, permite
n determinar el patrón de localización que
maximice la dispersión promedio entre
z<[Y, w.d {v^, X) ] instalaciones.
1=1
Modelos combinados basados en la ma-
2I>'=35.6 « .
ximización de varias distancias
¿y Locali ia les
O Instalaciones •..-7 -líi
d., Kuby (1987), realizó un estudio
d., comparativo entre los criterios maximin (p-
d.,
dispersion) y maxisum (p-defense). De
k* ^
dicho estudio se desprende que el modelo
< - ^ p-dispersion, más fácil de resolver y de
..-' aplicabilidad general, provee una solución
Xya =. 24.0 '((g'
Siti> menos c de,
SitK más
adecuad!
con los puntos regularmente distribuidos en
iássiaái
la región, permite pensar en una mayor
Figura 3 justicia espacial para la localización de
instalaciones no-deseables. El modelo p-
defense, más complejo y de aplicabilidad
El modelo más conocido es el p- muy especializada, genera una solución en
maxian (Moon y Chaudry, 1984), que que los puntos tienden a distribuirse hacia
puede considerarse la versión maxisum del la periferia de la región considerada (fre-
modelo p-me<iwno (Bosque Sendra, 1992, cuentemente en forma agrupada) y tiene la
p. 227), originalmente desarrollado para ventaja de considerar todas las distancias y
localizar un determinado número de instala- no únicamente las distancias mínimas.
ciones deseables (p) en una red, de tal
manera que se minimice el promedio pon- Es evidente que todo modelo ideal
derado de las distancias de recorrido de la de dispersión de instalaciones debería
población a la instalación más cercana. considerar ambos problemas en un enfoque
combinado que permita preservar la distan-
Una variante del anterior es el cia maximin al tiempo que maximiza la
modelo siguiente, que considera las distan- distancia promedio entre instalaciones.
cias entre las propias instalaciones:
B. Encontrar los puntos en una región, de Si se parte de considerar simultá-
tal manera que se maximice la suma de las neamente los modelos anti-cover, maximin
distancias (d), entre cada instalación (x¡) y y maxisum, es posible plantear una serie de
el conjunto de instalaciones existentes (X), modelos combinados. Los más relevantes
donde i = 1,2, ... , n son las instalacio- mencionados en la literatura son: el modelo
nes. anti-center-maxian que busca maximizar la
suma de las distancias ponderadas, minimi-
Maximizar la función objetivo z: zando la proximidad entre localidades e
instalaciones y; el modelo dispersion-defen-
n se, que busca localizar las instalaciones
X) ] maximizando las distancias, mínima y
(X, promedio, entre ellas (Moon y Chaudry,
i =l
105
1984). A pesar de su evidente relevancia, espacio matemático formado por los dos
estos no han sido suficientemente desarro- ejes de la gráfica, esta distancia matemática
llados y existen muy pocos ejemplos de puede servir para ordenar y cuantificar la
aplicación. validez de cada punto del territorio para
recibir una instalación, de este modo es
MODELOS MULTICRITERIO EN posible identificar los lugares más adecua-
RELACIÓN A LA EFICIENCIA ESPA- dos para resolver el problema.
CIAL: DISTANCIAS A LOS PRODUC-
TORES Y A LA POBLACIÓN POTEN- Con el mismo procedimiento es
CIALMENTE AFECTADA posible añadir otros criterios complementa-
rios que se consideren de importancia (y
Un tipo diferente de modelos son que actúan como restricciones absolutas a
aquellos que planteándose como único la localización de una instalación en ese
objetivo optimizar la eficiencia espacial de lugar), así se puede mencionar ciertos
la configuración de las instalaciones, miden aspectos del medio físico, por ejemplo, la
este objetivo con dos criterios diferentes y litología existente en los puntos candidatos,
complementarios/conflictivos: el ya cono- y su capacidad de recibir los residuos
cido, la distancia a la población residente, peligrosos y mantenerlos aislados del entor-
y que, por lo tanto, se ve afectada por las no (Figura 4).
instalaciones y, por otro lado, la distancia
desde las instalaciones a los productores de
PUNTO
sustancias a ser tratadas en estos centros. (más at ccuad< s)
lAJA
X O
• IDF.AL
o o
O ci X

En este caso no se ha desarrollado, —: ^ X ° '*° o o


<§ X
al menos en la literatura disponible, ningu- 0
° O X
X

o ; Adecnados
na formulación operativa, pero es fácil Vi X,

~ X
X
X X X: Ni> Vilidos
o
utilizar las técnicas de evaluación multicri- ALTA
j u r LitoloKÍa

terio para hallar un conjimto de soluciones BAJA


fmcnus JiccuaUts)
DISTANCIA A LA
POBLACIÓN
ALTA
(másai ;cuad< s)

a la cuestión que, además, están ordenadas Análisis del Punto Ideal coi Dos Criterios
en cuanto a su validez. Para ello, se puede
utilizar el enfoque planteado en Barredo y Figura 4
Bosque (1995), el cual, adaptado a este
problema, facilita que, empleando el análi-
sis del punto ideal, se obtenga una ordena- EL PROBLEMA DEL TRANSPORTE
ción cuantitativa de todos los lugares de un
área en cuanto a su capacidad de aceptar La localización de plantas de trata-
una instalación de este tipo empleando miento de residuos industriales, tóxicos y
como criterios los dos citados (ver figura peligrosos, es una tarea altamente comple-
4). Como es fácil de visualizar en la figura ja, que transciende la mera utilización de
citada, la mejor solución para el problema modelos de maximización de la distancia
es situar las instalaciones en los puntos a entre puntos de demanda/población residen-
mínima distancia de los productores y, te e instalaciones. El manejo de residuos
simultáneamente, a la máxima distancia de implica considerar los efectos derivados de
la población, este lugar es el denominado su transporte a lo largo de una red y condu-
"punto ideal" en la figura. Cualquier otro ce a replantear la relación entre justicia y
lugar se sitúa a una distancia de él, en el eficiencia espacial, que deberán estimarse
106
tomando en consideración las característi- £1 problema del camino más corto
cas de la red de transporte utilizada.
El problema del camino más corto
Como se ha mencionado anterior- asume que la localización de las instalacio-
mente, la mayor o menor eficiencia espa- nes ha sido previamente definida y a partir
cial está dada, fundamentalmente, por los de esto, busca determinar la ruta más corta
costos del transporte de los residuos y para a lo largo de la red que conecta los diver-
evaluarla se requiere de la representación sos puntos de demanda. Esto se expresa
matemática de una red que considere, más matemáticamente como:
que las distancias euclidianas entre puntos
de producción e instalaciones, propiedades Minimizar lafiínción
la Junciónobjetivo
objetivoz z
tales como la distancia real de recorrido, el
tiempo promedio de desplazamiento y las
z = mi:n E
^__^
jj
lid,. X i j
características físicas de la ruta utilizada. ÍGN.

La justicia espacial se expresa como Donde dij es la distancia más corta


el grado en que la población comparte los desde el nodo / hasta el nodo j y Xij = 7
riesgos y molestias derivados del traslado y cuando el tramo (i,j) pertenece al itinerario
disposición de los residuos tóxicos y peli- que los une en la a red y Xij=0 cuando el
grosos. Su evaluación debe considerar, por tramo (i,j) no pertenece al itinerario (Cu-
lo tanto, los riesgos reales y percibidos que rrent, ReVelle y Cohon, 1984). Dentro de
impactan tanto a la población que habita a los diversos procedimientos mencionados
lo largo de la red no-deseable como al por Bosque (1992, p. 217) para la obten-
conjunto de usuarios de la misma. La ción del camino más corto, destaca el
justicia espacial, no puede definirse única- método planteado por Dantzig que consiste
mente como una función de distancia a en un método heurístico para comparar las
partir de la red sino que deberá incluir, distancias de todos los caminos posibles
entre otros elementos, una medida de entre el punto de origen y el punto de
ponderación en función de la carga vehicu- destino.
lar promedio de cada tramo.
La Ruta Óptima: la ruta práctica y la
Los principales trabajos que han ruta menos peligrosa
abordado la tarea de evaluar la red de
transporte como parte del problema de la La localización de instalaciones no-
localización de instalaciones, se basan deseables es multiobjetivo por naturaleza,
exclusivamente en la búsqueda de la mayor no puede abordarse en forma simplista
eficiencia espacial en témúnos de costos de como un problema de distancias mínimas e
transporte y han estado dirigidos a determi- incluye determinar la ruta óptima entre
nar el camino más corto entre el sitio puntos de demanda e instalaciones. La
preseleccionado para localizar una instala- selección de la ruta óptima constituye un
ción y los puntos de demanda a ser atendi- serio conflicto entre la ruta práctica, es
dos (Current, ReVelle y Cohon, 1984). decir, la rata de menor costo (considerando
distancias, límites de velocidad y prefe-
rencias históricas) y la rata menos peligro-
sa, es decir, la que impone el menor riesgo
a la mayor población posible (y que implica
107
considerar conjuntamente el riesgo a la aporte para analizar la relación justicia-
población residente en las proximidades de eficiencia en la definición de una ruta
la red y el riesgo a los usuarios de la red, óptima de transporte de residuos peligrosos
ver figura 5). y parte de calcular, para todas las rutas
posibles, el costo y riesgo total. Como
resultado del análisis comparativo, los
autores citados han logrado obtener algunas
conclusiones que pueden tener relevancia
general:

• A medida que aumenta la distancia


entre puntos de origen y destino, la
corta longitud del recorrido y la veloci-
(disl = IH.7) c
dad promedio de la ruta práctica
tienden a ser menores que los
Figura 5 obtenidos para la ruta menos peli-
grosa. La menor distancia de las
De acuerdo a Glickman y Sontag rutas prácticas contribuye a que el
(1995), la definición de la ruta óptima índice de población expuesta al
depende del análisis comparativo costo- riesgo, aunque mayor que para las
riesgo entre las diversas rutas alternativas rutas menos peligrosas, no resulte
de una red que conecta puntos de demanda muy elevado.
e instalaciones. Esto implica estimar el
riesgo total (R) de cada alternativa, medido • La relación costo-riesgo tiende a ser
como la suma de las frecuencias de acci- mayor para las rutas cortas que para
dentes (fi) por la consecuencias de cada las rutas largas. Esto implica que
accidente (c), ocurridos en cada tramo de cuando origen y destino están muy
la ruta (i=l,..,n): cercanos, sería más costoso minimi-
zar el riesgo a partir de redefinir la
ruta.
R^ílf, • Las rutas de menor riesgo tienden a
ser casi el doble de largas (medidas
en Km) que las rutas prácticas pero
Lafi-ecuencia(f¡), se obtiene como requieren más del doble de tiempo
el producto de la tasa histórica de acciden- para ser recorridas. Esto se debe
tes para camiones de carga, la longimd del principalmente a los menores limi-
tramo y la probabilidad de vertido de un tes de velocidad.
residuo como efecto del accidente. Las con-
secuencias (Cj), se estiman como el produc- • Aunque las rutas de menor riesgo
to entre el impacto posible del accidente y tienden a reducir la exposición de la
la densidad de población a lo largo del tra- población, no se reduce elriesgoen
mo. la misma proporción dado que este
puede verse afectado por la mayor
El método propuesto por Glickman distancia y el tipo de carretera.
y Sontag (1995), representa un importante
108
Es evidente que la determinación de para adoptar la decisión locacional y conse-
una ruta óptima no puede ser una mera guir un resultado aceptable para todos y sin
selección entre ruta práctica y ruta menos graves problemas (Kunreuther, Fitzgerald
peligrosa. La determinación de la ruta y Aarts, 1993).
menos costosa podría representar im riesgo
muy elevado para la población, la selección Este documento se centra en dos
de la ruta menos peligrosa, por su parte, cuestiones: a) los pasos del procedimiento
podría ser muy poco realista en función de de decisión para situar una instalación no-
los altos costos y de los problemas deriva- deseable y b) las características más apre-
dos de las deficiencias de infraestructura, la cidas de la solución adoptada. En cuanto a
menor transitabilidad y los mayores tiem- la primera cuestión, el credo se puede
pos de recorrido. resumir en lo siguiente: 1° Es necesario
establecer un mecanismo de amplia partici-
A partir de estas conclusiones se pación popular, 2° buscar el consenso entre
desprende que la ruta óptima no necesaria- los diferentes interlocutores, 3° intentar
mente es la más corta pero tampoco necesa- establecer la confianza de todos en el pro-
riamente es la de menor riesgo. Es evidente ceso desarrollado, 4° buscar sitios acepta-
la necesidad de profundizar en el desarrollo bles a través de ofertas voluntarias, 5°
de modelos que consideren: el riesgo, real favorecer un proceso competitivo entre los
o percibido, impuesto a la población a lo diversos lugares candidatos, 6° establecer
largo del recorrido; las características y un cronograma de trabajo realista y 7°
distribución de la población; las caracterís- mantener múltiples opciones durante todo
ticas de las diversas vialidades; las condi- el proceso. Evidentemente la existencia de
ciones medio-ambientales regionales y las lugares voluntarios para la localización de
características y cantidad de residuos a instalaciones no deseables se basa en las
transportar. importantes compensaciones económicas y
de otro tipo que se les ofrece.

MODELOS DE LOCALIZACIÓN A- Por su parte, en cuanto a los resul-


SIGNACIÓN PARA INSTALACIONES tados deseados, el credo locacional se
NO DESEABLES QUE CONSIDERAN concreta en: 1" debe existir acuerdo en que
LA REACCIÓN DE LA POBLACIÓN Y la instalación a localizar es necesaria, 2°
SU PERCEPCIÓN DEL RIESGO PRO- escoger la solución que mejor resuelva el
VOCADO POR LAS INSTALACIONES problema, 3** garantizar que se aplican las
más estrictas normas de seguridad, 4°
En numerosos estudios se han trata- delimitar con claridad todos los aspectos
do las actimdes de rechazo de la población negativos de la localización para establecer
a las instalaciones no deseables y como la adecuadamente la compensación, 5** esta-
Administración, la encargada de planificar blecer un paquete de compensaciones de
este tipo de centros, debe acmar ante ellas. modo que el lugar elegido considere que es
Un buen ejemplo es el establecimiento en preferible recibir la instalación que no
los Estados Unidos de América de un recibirla, 6° especificar con claridad las
denominado credo de la localización de acciones a realizar en casos de emergencia
instalaciones en el año 1990 (Facility Sit- o cambios en el futuro de la instalación y
ting Credo), en el que se enumeran las de su peligrosidad y 7° buscar la equidad
condiciones y los pasos que se deben seguir espacial en la distribución de instalaciones.
109
Lo que consideramos más importan- afecte a este tipo de grupos más débiles y
te es la necesidad del consenso por los sensibles (Malczewski, 1991).
posibles afectados y la búsqueda de una
equidad o justicia espacial en la localiza- Finalmente, se han construido mo-
ción de las instalaciones. En lo posible, los delos de localización-asignación para este
modelos de localización-asignación más tipo de instalaciones que incluyen en su
realistas y apropiados deberían incluir formulación algunos elementos de la per-
algunos o todos estos aspectos. cepción del riesgo que provocan estas
instalaciones entre la población (Ratick y
En nuestro país no se ve muy claro White, 1988). Uno de ellos, el denominado
que se utilice un procedimiento semejante "Complementario-anticobertura", parte del
en cuanto a la búsqueda de las localizacio- modelo anticobertura pero le añade deter-
nes de este tipo de instalaciones, basta con minar como incide el número de instalacio-
comprobar las polémicas en la prensa entre nes establecidas en cuanto a la mayor o
las empresas públicas dedicadas a ello y las menor equidad para la población, buscando
organizaciones ambientalistas. optimizar el número de instalaciones y su
posición en el espacio de modo que se
Un segundo enfoque de interés para consiga un alto grado de equidad espacial
la solución de esta problemática es la y, por lo tanto, un menor grado de resis-
realización de estudios que pretenden deter- tencia de la población. Se parte del supues-
minar que características espaciales y am- to de que el grado de equidad depende, en
bientales tienen los lugares que son acepta- buena medida, del número y distribución
dos por la población para situar en ellos de las instalaciones (la equidad aumenta en
este tipo de instalaciones no deseables la medida en que aumenta el número de
(Opaluch y otros, 1993). Llevando a cabo otras áreas con instalaciones similares,
para ello encuestas donde se presentan a la siempre y cuando dichas instalaciones estén
población esquemas de posibles emplaza- suficientemente alejadas como para evitar
mientos con distintas combinaciones de riesgos a la población) y que el riesgo
situaciones, ya sea respecto a cercanía a la percibido es más que proporcional a la
población y a centros de especial sensibili- escala o magrútud de las instalaciones (el
dad (escuelas, hospitales) o en cuanto a riesgo percibido se considera una función
temas ambientales (zonas de bosque o de del riesgo real y aumenta rápidamente con
cultivos, etc), el objetivo es averiguar la el tamaño de la instalación). Dicho modelo
gradación que la población encuestada permite identificar patrones de localización
establece en la influencia de estos factores que pueden minimizar la oposición de la
para utilizar esta información en la búsque- población derivada de posibles objeciones
da de emplazamientos que provoquen el en cuanto a la equidad y tamaño de las
mínimo posible de resistencia. instalaciones. Un grave problema de este
enfoque es su olvido del tema de la eficien-
En tercer lugar, se ha planteado cia espacial, en relación sobre todo a la
considerar la interacción entre instalaciones distancia a los productores, y, por lo tanto,
no deseables y grupos de población espe- no considera, en absoluto, los riesgos
cialmente sensibles (niños, ancianos, enfer- provocados por los transportes de los resi-
mos, etc) y los centros que los atienden duos.
(guarderías, residencias de jubilados, hos-
pitales,etc) para evitar en lo posible que se
lio

UN PROCEDIMIENTO PARA DETER- seleccionan exclusivamente zonas imper-


MINAR LOCALIZACIONES ÓPTI- meables, alejadas de los cursosfluviales,y
MAS/ADECUADAS DE INSTALACIO- otras semejantes. De este modo, los crite-
NES NO DESEABLES rios de este tipo actúan como factores
limitantes o restrictivos de la instalación de
La consideración de todas las cues- este tipo de centros.
tiones y los procedimientos antes mencio-
nados, y, en especial, el hecho constatable - Criterios que miden la eficiencia
de la multiplicidad de los factores que espacial: 1° a los productores de residuos,
afectan a la determinación de estas locali- a través de minimizar la distancia/coste de
zaciones, conduce a considerar la urgente recorrido ponderado por la cantidad de
necesidad de relacionar los modelos de residuos a transportar desde cada punto
localización-asignación hasta ahora utiliza- origen; 2° a la población, maximización de
dos en la búsqueda de soluciones con nue- la distancia/coste de recorrido a cada centro
vos procedimientos que permitan tener en poblado, ponderado por la población resi-
cuenta de modo más completo la variedad dente en cada punto del territorio.
de factores incidentes, en este sentido
ocupan un papel importante, como ya - Un tercer tipo de criterios que
hemos mencionado, los métodos de evalua- pueden intervenir en el cálculo forman un
ción multicriterio y su uso dentro de un nuevo factor limitante que asegure que no
SIG como un verdadero Sistema de Ayuda se instale ningún centro a menos de una
a la Decisión Espacial. distancia mínima de los lugares de residen-
cia de la población (Modelo anti-cobertura)
En este sentido proponemos un y, por otro lado, otra restricción que impi-
procedimiento organizado en las siguientes da la posición de centros de este tipo dentro
etapas: del radio de influencia de lugares especial-
mente sensibles (hospitales, residencias de
1** Utilizar la Evaluación Multi- jubilados, guarderías, etc).
Criterio y, en concreto, el Análisis del
Punto Ideal (Barredo, 1996; Barredo y Este análisis permite establecer una
Bosque, 1995) para encontrar un primer jerarquía de los lugares más adecuados para
conjunto de soluciones al problema. Consi- situar estos centros. De este modo, se ha
derando para ello tres tipos de criterios: a) obtenido una primera solución, aunque sea
ambientales, b) los que miden la eficiencia todavía poco refinada y precisa, no obstan-
espacial de las localizaciones de instalacio- te, en muchos casos podemos confiar baste
nes y c) los que consideran la posible con esto para ofrecer a los planificadores y
interacción entre las instalaciones no de- decisores unas alternativas bien fundamen-
seables y otros tipos de centros especial- tadas para que ellos, añadiendo otros crite-
mente sensibles (ver figura 4). rios, resuelvan definitivamente la cuestión.

- Criterios ambientales. En concre- 2° En caso de necesitar soluciones


to, factores tales como la hidrografía, más detalladas y con mayor resolución
litología, etc, permiten eliminar las zonas espacial, los lugares determinados hasta el
que no presentan un mínimo de condiciones momento se pueden convertir en "candida-
físicas para recibir los residuos y conser- tos" sobre los cuales se pueden utilizar los
varlos aislados del resto del medio. Se modelos de localización-asignación antes
111
comentados, pero que funcionan mucho tos candidatos, una de ellas alcanzada con
más eficazmente al partir de un conjunto los modelos de localización-asignación y la
reducido de lugares candidatos a recibir los otra a partir de los movimientos de los
centros. Su papel consiste en determinar residuos, la decisión final debería estar
cual es la combinación más correcta, (ópti- influida por ambas valoraciones.
ma) de estos lugares, en la cual simar los
centros buscados. Dos planteamientos 3° En esta etapa final, nuevamente
complementarios será necesario considerar las técnicas de evaluación multicriterio
en este momento: podrían ayudar a diferenciar entre los
lugares candidatos, empleando como datos
a) Por un lado, utilizar algunos de de entrada las dos valoraciones de ellos
los modelos localización-asignación exis- obtenidas con los dos métodos mencionados
tentes para seleccionar la combinación de (etapa 2), a lo que se podría añadir otras
lugares candidatos más idónea y "óptima". cuestiones diferentes que se consideren de
En este caso se puede usar alguno de los interés (costes diferentes de la construcción
diferentes tipos de modelos mencionados en de las instalaciones, o de la expropiación
los apartados previos, en especial los deno- de los terrenos, problemas políticos especí-
minados maxisimi y maximin. No obstante, ficos de cada lugar candidato, etc). Eviden-
dada la importancia de la equidad espacial temente, y dada la magnimd de las infor-
y de la percepción que la población tiene maciones disponibles sobre los lugares
del problema, puede ser de mayor interés preseleccionados, resultarían de gran utili-
emplear el modelo de localización-asigna- dad los procedimientos denominados "pro-
ción denominado "Complementario anti- gramación compromiso" o de "responsabi-
cobermra", que ha sido creado para tener lidad compartida entre los grupos afecta-
en cuenta estos elementos. dos", que se describen con cierto detalle en
los trabajos de Massan (1980 y 1993).
b) Por otro lado, una fase simulta-
nea y/o alternativa a la anterior es la dis- En cualquier caso, el procedimiento
cusión de los resultados iniciales, los pun- planteado proporciona una amplia gama de
tos "candidatos" definidos en la etapa 1, resultados y ordenaciones cuantitativas de
considerando el problema de las rutas los distintos puntos del espacio, en cuanto
"óptimas" entre lugares productores y a su capacidad para recibir una instalación
centros de tratamiento. Para ello, sería no deseable, información que puede ser
necesario analizar las características de las considerada con facilidad en un proceso de
rutas de mínimo recorrido y las de mínimo decisión final realizado por los políticos y
riesgo que unen cada uno de los lugares responsables administrativos, que son, en
candidatos preseleccionados con los puntos definitiva, los que adoptan la solución
de producción, de este modo, sería posible definitiva en una sociedad democrática.
considerar este factor, el tamaño del riesgo
producido al trasladar los residuos hacia
uno u otro de los lugares candidatos y, con Bibliografía
ello, calcular cuales resultan más adecuados
desde este punto de vista. BARREDO CANO, J.I. (1996): Sistemas de
información geográfica y evaluación multicriterio en
la ordenación del territorio. Madrid, Ed. RA-MA.
Con las dos enfoques anteriores,
obtendríamos dos valoraciones de los pun-
112

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