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Aplicaciones de la teorı́a de perturbación: la estructura fina e “hiperfina” del átomo de

hidrógeno

Las interacciones más importante en los átomos se deben a las fuerzas electrostáticas de
Coulomb, que se incorporan en el conocido hamiltoniano para el átomo de hidrógeno,
P~ 2 P~ 2 q2 1 P~ 2 e2
H0 = + V (R) = + = − .
2µ 2µ 4π0 R 2µ R
Los términos representan a la energı́a cinética del átomo en el marco de referencia en reposo con el
centro de masa y la energı́a de interacción electrostática entre el electrón y el protón.

Este hamiltoniano es en realidad solo aproximadamente válido, porque no toma en cuenta


los efectos relativistas. Se ignoran en particular los efectos magnéticos relacionados con el espı́n
electrónico y del protón. El error cometido al ignorar estos efectos es ciertamente pequeño, en
especial para el átomo de hidrógeno que no es tan relativista. Además el momento magnético del
protón es muy pequeño.

Sin embargo, la precisión alcanzada con experimentos de espectroscopı́a hace posible que se
observen efectos asociados a las correcciones relativistas. Se puede escribir el hamiltoniano del
sistema de la forma
H = H0 + W,
donde W << H0 , y estudiar el efecto con la teorı́a de perturbaciones. Se verá que esta perturbación
es responsable de una “estructura fina” y también de una “estructura hiperfina” en los niveles de
energı́a asociados a H0 . La estructura hiperfina del estado base del átomo de hidrógeno, por ejemplo,
ha sido medida con 12 cifras significativas, y las razones entre algunas frecuencias atómicas se han
medido hasta con 18.

1. El hamiltoniano de la estructura fina

El concepto de espı́n se obtiene naturalmente cuando se trabaja con una ecuación que satisfaga
los postulados de la relatividad especial y la mecánica cuántica. Tal ecuación se llama la ecuación
de Dirac, que también predice la existencia de positrones.

La manera formal en la que se puede obtener el término de perturbación asociado a las cor-
recciones relativistas consiste en partir de la ecuación de Dirac para el electrón en el potencial del
protón (que se asume que es muy masivo y está fijo en el origen), asumiendo que el sistema es poco
relativista. Se obtendrı́an naturalmente los operadores de espı́n y una expresión para el hamiltoni-
ano en la que W aparece como una expansión en serie en potencias de v/c. No se estudiará en este
curso la ecuación de Dirac ni su expansión aproximada en términos de v/c, simplemente se dará el
resultado, que es
P~ 2 P~ 4 1 1 dV (R) ~ ~ ~2
H = me c2 + + V (R) − + L · S + ∆V (R) + ...
2me 8m3e c2 2m2e c2 R dR 8m2e c2
≡ me c2 + H0 + Wmv + WSO + WD + ...
donde se ha introducido el sı́mbolo usado más adelante para cada término en el orden respectivo
en que aparecen. Se observan de primero la energı́a en reposo del electrón, me c2 , y el hamiltoniano
no relativista, H0 (aunque nótese que aparece la masa me del electrón, y no la masa reducida del
sistema pues se ha asumido que el protón tiene masa infinita y está fijo en el origen, si se quisiera
corregir esto habrı́a que agregar correcciones a los términos que ya de por sı́ son perturbaciones;
el problema no se arregla de forma tan fácil como haciendo el cambio de me por µ). Los otros
términos se denominan términos de estructura fina1 .

1.1. Origen de Wmv

Considérese la expresión para la energı́a relativista total para una partı́cula clásica de masa
me y momento p~, p
E = c p~2 + m2e c2 .
En términos de la velocidad, el momento de la partı́cula es
me~v
p~ = q ,
2
1 − ~vc2

por lo que
|~
p| |~v |
= γ,
me c c
con γ el factor de Lorentz. Se puede entonces realizar una expansión en potencias de |~
p|/me c, que
será una cantidad pequeña si |~v |/c es pequeño,
p~2 p~4
E = me c2 + − + ...
2me 8m3e c2
p4 /8m3e c2 , cuya versión cuántica, Wmv , aparece en el hamiltoniano
y se encuentra el término −~
mostrado.

Orden de magnitud. Se desea estimar el orden de magnitud de Wmv /H0 ,


~4
p 2
p~2 |~v |2

Wmv 8m3e c2 1
≈ ~2
= ∼ ∼ ,
H0 p 4m2e c2 c2 137
2me

pues para el átomo de hidrógeno se sabe que v/c ∼ α = 1/137. Como H0 ∼ 10 eV entonces
Wmv ∼ 10−3 eV.

1
En realidad es posible resolver de forma exacta la ecuación de Dirac para un electrón en un potencial de Coulomb.
Sin embargo, el enfoque de perturbaciones es muy útil para entender el significado fı́sico de las interacciones dentro
del átomo, lo cual es también importante cuando se estudian átomos con muchos electrones, para los que no se puede
escribir una ecuación equivalente a la de Dirac.
1.2. WSO : acople de espı́n-órbita

El electrón se mueve a una velocidad aproximada de ~v = p~/me en el campo electrostático


creado por el protón. Según la relatividad especial aparece entonces, en el marco de referencia en
movimiento con el electrón, un campo magnético dado aproximadamente por (ignorando un factor
de Lorentz)
~ 0 = − 1 ~v × E,
B ~
c2
en primer orden en v/c.

Como el electrón posee un momento magnético intrı́nseco


~
~ S = qS
M
me
interactúa con el campo magnético, y la energı́a correspondiente se puede escribir de la forma

W 0 = −M ~ 0.
~S ·B

En términos de la energı́a potencial, el campo eléctrico se puede escribir de la forma

~ = − 1 dV (r) ~r ,
E
q dr r
2
donde V (r) = − er . Por lo tanto se obtiene que (aproximando la relación entre el momento y la
velocidad de la forma p~ = me~v )
B~ 0 = 1 1 dV (r) p~ × ~r.
qc2 r dr me

El operador cuántico asociado a la energı́a serı́a


!
~
qS 1 1 dV (R) P~
0 ~
W = − · 2 ×R
me qc R dR me

y como
P~ × R
~ = −L,
~
1 1 dV (R) ~ ~ e2 1 ~ ~
W0 = L · S = L · S.
m2e c2 R dR m2e c2 R3

Se encuentra, con excepción de un factor de 1/2, el término de “espı́n-órbita” WSO , y representa


la interacción entre el momento magnético del espı́n electrónico y el campo magnético que “ve” el
electrón en su movimiento en el campo electrostático del protón.

El factor de 1/2 corresponde a la famosa precesión de Thomas, un efecto relativista debido


a que el movimiento del electrón no es rectilı́neo. Luego de un cálculo algo engorroso con las
transformaciones de Lorentz en el movimiento acelerado del electrón, se puede demostrar que el
espı́n precesa en el marco de referencia del laboratorio (ver el Jackson). Obviamente en mecánica
cuántica relativista, usando la ecuación de Dirac, el resultado correcto sale directo.
~ yS
Orden de magnitud. Como L ~ son del orden de ~, se tiene que

e2 ~2
WSO ≈
m2e c2 R3

por lo tanto
e2 ~2
WSO m2e c2 R3 ~2
≈ e2
= .
H0 m2e c2 R2
R

R es del orden del radio de Bohr, a0 = ~2 /me e2 , por lo que


2
e4

WSO 1
≈ 2 2 = α2 = .
H0 ~ c 137

1.3. WD : el término de Darwin.

En la aproximación semirelativista, la interacción del electrón y el campo de Coulomb no es


local: el electrón se ve afectado por todos los valores del campo en una zona centrada en la posición
~r y cuyo tamaño es del orden de la longitud de onda de Compton ~/me c del electrón (de hecho en
la versión completamente relativista de Dirac la interacción sı́ es local; la diferencia surge al usar
la aproximación semirelativista).

Hay que “promediar” el valor del potencial en la zona donde el electrón se “extiende”. Por
ejemplo, supóngase que la energı́a potencial del electrón, en lugar de ser igual a V (~r) sea igual a
Z
d3 ρ
~ f (ρ)V (~r + ρ
~)

donde f (ρ) es una función cuya integral vale uno y que solo adquiere valores apreciables dentro de
un volumen del orden de (~/me c)3 , centrado en ρ ~ = 0.

Si se expande la función V (~r + ρ


~) alrededor de ρ~ = 02 , el primer término, luego de hacer la
integral, darı́a
V (~r),
que serı́a una buena aproximación si V (~r) no varı́a apreciablemente dentro del volumen en cuestión
y d3 ρ
R
~) ≈ V (~r).
~ f (ρ)V (~r + ρ

El término de orden uno es igual a cero, dada la simetrı́a esférica de f (ρ), pues involucra
términos que contienen a f (ρ) multiplicada por las componentes de ρ ~. El término de segundo

2
V (~r + ρ ~ + P3
~ · ∇V
~) = V (~r) + ρ 1 ∂ ∂
i,j=1 2 ρi ρj ∂xi ∂xj
V + ...
orden contiene a las derivadas de orden dos del potencial V (~r) y funciones cuadráticas de las
componentes de ρ~ multiplicadas por f (ρ), e integradas en ρ
~. Por eso el término de segundo orden
es del orden de
~
∆V (~r),
me c2
es por esta razón que el término WD tiene la forma dada antes.

Orden de magnitud. Reemplazando V (R) por −e2 /R, se tiene que


2 πe2 ~2 ~
 
2 ~ 1
WD = −e ∆ = δ(R),
8m2e c2 R 2m2e c2

usando una expresión para el laplaciano de 1/R en términos de la función delta.

Al calcular el valor promedio de esta expresión en algún estado cuántico, se obtiene

πe2 ~2
|ψ(~0)|2 ,
2m2e c2

en términos del valor de la función de onda en el origen. El término de Darwin afecta entonces solo
a los estados s, que son los únicos para los que ψ(~0) 6= 0.

Usando que la integral de |ψ(~0)|2 en un volumen del orden de a30 es igual a uno, se tiene que

1 m3 e6
|ψ(~0)|2 ≈ 3 = e6
a0 ~

lo cual da el orden de magnitud para el término de Darwin,

WD ≈ me c2 α4 .

Como H0 ≈ me c2 α2 ∼ 511000/(137)2 eV, se ve que


 2
WD 1
≈ α2 = .
H0 137

Por lo tanto todos los términos de la estructura fina son del orden de 104 veces más pequeños
que el hamiltoniano no relativista.

2. El hamiltoniano de la estructura “hiperfina”

El protón es una partı́cula que, además de masa, Mp , y carga, qp = −q, posee un espı́n de 1/2,
como el electrón. Se denotará como
I~
la correspondiente observable de espı́n. Al igual que para el electrón, con el espı́n I~ se asocia
un momento magnético, M ~ I . Sin embargo, la razón giromagnética (la razón entre el momento
magnético y el momento angular) del protón es distinta de aquella del electrón,
~ I = gp µn I/~
M ~

donde µn es el magnetón nuclear de Bohr


qp ~
µn =
2Mp
y el factor gp ≈ 5, 58569, que está relacionado con la distribución de quarks en el protón, según el
modelo estándar.

Debido a la presencia de la masa del protón en el denominador de µn , esta cantidad es ∼ 2000


veces más pequeña que el magnetón de Bohr (µB = q~/2me ). A pesar de que los momentos
angulares del protón y el electrón son iguales, los efectos del magnetismo nuclear son mucho menores
que los del magnetismo electrónico.

En el átomo de hidrógeno el electrón se mueve no solo en el campo electrostático del protón, si


no que también en el campo magnético creado por M ~ I . Sean A
~ I (~r) y UI (~r) los potenciales vectorial
y escalar asociados a este campo electromagnético. Considérese el hamiltoniano de un electrón en
esta situación,
!
1 ~ ~
S  
H= ~ I (R)]
[P − q A ~ 2 + qUI (R)
~ − 2µB · ∇~ ×A ~ I (R)
~ ,
2me ~

que toma en cuenta la energı́a de acople entre el momento magnético asociado al espı́n y el campo
~ ×A
magnético ∇ ~ I . Como se verá más adelante, los efectos del campo magnético del protón son
del orden de mil veces más pequeños que los efectos relativistas, por lo que se justifica el uso del
hamiltoniano no relativista.

Un potencial escalar U (~r) en general puede escribirse como la suma de términos asociados
con los momentos multipolares eléctricos de la distribución de cargas, en este caso el núcleo, o
especı́ficamente el protón para el hidrógeno (ver el complemento EX ). El momento de orden k = 0
está asociado con una energı́a potencial
Zq 2
V0 (~r) = qU0 (~r) = −
4π0 r
con Z = 1 para el protón. El hamiltoniano sin perturbaciones, para el átomo de hidrógeno, es igual
precisamente a
P~ 2 ~
H0 = + V0 (R).
2me

Cualquier contribución de una desviación a la simetrı́a esférica en la distribución de carga del


núcleo podrá contribuir a la estructura hiperfina de un átomo. Según la teorı́a del complemento
EX los multipolos eléctricos superiores para el protón son nulos. Por lo tanto, para el átomo de
hidrógeno el potencial V0 (~r) es en realidad el potencial visto por el electrón3 . Esto es válido para el
átomo formado por un electrón y un protón, y ya no lo serı́a para isótopos como el deuterio, para el
que debe tomarse en cuenta un hamiltoniano hiperfino de cuadrupolo eléctrico. Los elementos de
matriz de los momentos dipolares serán nulos o no dependiendo del momento angular del sistema,
que incluye al espı́n nuclear, por lo tanto la necesidad de incluir o no tales correcciones depende
del valor del espı́n nuclear (el espı́n nuclear del deuterio, por ejemplo, es I = 1).

El potencial vectorial asociado a un dipolo magnético con momento dipolar magnético M ~I


(debido a su espı́n, como en el caso eléctrico, el protón no tiene multipolos magnéticos de orden
superior, siendo el más bajo el dipolar en el caso magnético) es

~
~ I (~r) = µ0 MI × ~r .
A
4π r3

Manteniendo los términos lineales en A ~ I en el hamiltoniano (al ser tan pequeño se justifica la
aproximación) se observa que el término de la estructura hiperfina serı́a
!
q ~ ~ ~ ~
S
Whf = − [P · AI (R) + A~ I (R)
~ · P~ ] − 2µB ·∇~ ×A~ I (R)
~
2me ~

~ I (~r) mostrada anteriormente.


utilizando la expresión para A

Primero se calcula el término


 
~ ~ ~ ~ ~ ~ µ0 ~ ~ ~ 1 1 ~ ~ ~
P · AI (R) + AI (R) · P = P · (MI × R) 3 + 3 (MI × R) · P
4π R R

~ I conmutan
Manteniendo el orden de los operadores que no conmutan, y como las componentes de M
~ y P~ se puede ver que
con las de R

~ I × R)
(M ~ · P~ = (R
~ × P~ ) · M
~I = L
~ ·M
~I

donde
~ =R
L ~ × P~

es el momento angular orbital del electrón.

Como 1/R3 (o cualquier función de R por la simetrı́a rotacional) es un escalar,


 
~ 1
L, 3 = 0
R

3
Acá no interesa el potencial del núcleo en el interior del mismo. La expansión multipolar es válida en el exterior.
Dentro del núcleo la forma del potencial es distinta, y ya se ha hablado del desplazamiento de los niveles atómicos
debido al “efecto volumen”.
entonces
~ ~
1 ~
(M I × ~ · P~ = L · MI .
R)
R3 R3
Análogamente
~ ~
P~ · (M ~ 1 = −M
~ I × R) ~ 1 = MI · L
~ I · (P~ × R)
R3 R3 R3
pues
−P~ × R
~ = L.
~

Entonces se tiene la contribución del siguiente término al hamiltoniano de la estructura hiper-


fina
~ ~
L
Whf ≡−
q ~ ~ ~
[P · AI (R) + A ~ · P~ ] = − µ0 q 2 MI · L
~ I (R)
2me 4π 2me R3
µ0 ~ I · (L/~)
M ~
=− 2µB 3
4π R
~ I y el campo magnético
que corresponde al acople entre el momento magnético nuclear M

~
~ L = µ0 q L
B
4π me r3
creado por la corriente asociada a la rotación del electrón (el resultado es análogo al valor del campo
magnético en el centro de un aro circular de corriente i = q/T debido a una carga con masa en
movimiento circular, µ0 i/2r). Nótese que B ~ L es antiparalelo a L ~ debido a la carga negativa q.

Nota: La presencia del término 1/R3 en la expresión para Whf L podrı́a llevar a pensar que

existe una singularidad en el origen y que algunos elementos de matriz de este operador podrı́an
ser infinitos. En realidad eso no sucede: considérese el elemento de matriz hφk,l,m |Whf L |φ 0 0 0 i,
k ,l ,m
donde |φk,l,m i y |φk0 ,l0 ,m0 i son estados estacionarios del átomo de hidrógeno sin perturbaciones. La
dependencia radial de las funciones de onda es de la forma

Rk,l (r) ∼ Crl

cuando r → 0. Tomando en cuenta la presencia del término r2 dr en el volumen diferencial, la


dependencia radial en cuestión serı́a
0 0
rl+l +2−3 = rl+l −1 .

~ hace que hφk,l,m |W L |φk0 ,l0 ,m0 i sea igual a cero cuando
Además, la presencia del operador hermı́tico L hf
0
l o l0 valgan cero. Por lo tanto el menor valor para l + l0 serı́a dos y rl+l −1 serı́a finito en el origen.
2.1. Acople con el espı́n electrónico

Falta estudiar el último término de Whf . Desde un punto de vista fı́sico se sabe que el protón
posee cierta extensión espacial y su “magnetismo” se esparce sobre algún volumen muy pequeño.
En el tratamiento que se verá acá se usará un protón de tamaño finito pero, para simplificar, sin
embargo, como este tamaño es despreciable con respecto al radio de Bohr, al final del cálculo puede
hacerse tender a cero la extensión del protón. Se verá que esto no introduce singularidades en los
elementos de matriz que eventualmente deben calcularse, además de que permite tomar en cuenta
el efecto del campo magnético dentro del protón sin necesidad de conocer la forma precisa de dicho
campo.

Se modela al protón como una esfera de radio ρ0 en el origen. El magnetismo del protón crea,
en un punto distante, un campo magnético que se puede calcular al atribuirle al protón un momento
~ I , que se escogerá paralelo al eje z,
magnético M
~ I = MI ẑ.
M
El campo fuera del protón es puramente dipolar (siendo una partı́cula de espı́n 1/2, no posee
~ I ×~
~ I (~r) = µ0 M r
multipolos de órdenes superiores). Sacando el rotacional del vector potencial A 4π r3 se
obtienen las componentes del campo fuera del protón
µ0 xz
Bx = 3MI 5
4π r
µ0 yz
By = 3MI 5
4π r
µ0 3z − r2
2
Bz = MI
4π r5

Dentro del protón, el campo magnético interior, que se denotará como B ~ i , depende de la
distribución magnética, pero se asumirá que es uniforme. Por simetrı́a debe ser paralelo a M~ I y,
por lo tanto, paralelo al eje z (aunque el campo fuese más complicado, los cálculos que siguen se
pueden generalizar). La figura 1 muestra el modelo descrito.

Para calcular el campo interior B ~ i , considérese el flujo del campo total a través de una superficie
cerrada que está formada por el plano xy y un hemisferio centrado en el origen y de radio infinito.
Este flujo es igual a cero. Conforme r → ∞, la magnitud del campo disminuye con una dependencia
de la forma 1/r3 , y el flujo a través del hemisferio es igual a cero.

Si Φi (ρ0 ) es el flujo a través de un disco en el plano xy, centrado en el origen, de radio ρ0 , y


Φe (ρ0 ) el flujo a través del resto del plano xy, entonces
Φi (ρ0 ) + Φe (ρ0 ) = 0.
Es posible calcular Φe (ρ0 ) fácilmente pues en el plano xy (con z = 0) la única componente no nula
del campo está en z. Usando Bz (z = 0),
Z ∞  
µ0 1 µ0 2π
Φe (ρ0 ) = 2π rdr − MI 3 = − MI .
ρ0 4π r 4π ρ0
Fig. 1.— Campo magnético creado por el protón. Fuera del protón el campo es el de un dipolo.
Dentro del protón se asume, como primera aproximación, que el campo interior es uniforme, B ~ i.
Como se ve en los cálculos, el término de contacto en el hamiltoniano surge de la interacción entre
el momento magnético de espı́n del electrón y este campo interior.

Por otro lado,


Φi (ρ0 ) = πρ20 Bi ,
de donde se obtiene entonces que
µ0 2
Bi = MI 3 .
4π ρ0

Ya se ha calculado entonces el campo creado por el protón en todo punto del espacio. Se puede
calcular la parte que falta del operador Whf , o sea la de interacción con el espı́n electrónico
! !
~
S ~
S
−2µB ~ ×A
·∇ ~ I (R)
~ = −2µB ~i + B
· (B ~ dip ).
~ ~

Usando el campo exterior (dipolar) se obtiene el operador


 
dip µ0 2µB MI XSx + Y Sy + ZSz Sz
Whf =− 3Z − .
4π ~ R5 R3
~ I paralelo al eje z, el resultado general serı́a
Como se usó un M
!
~ ~ ~ ~
dip
Whf =
µ0 2µB 1 ~ I − 3 (S · R)(MI · R)
~ ·M
S
4π ~ R3 R2
~I y M
y representa la interacción de dipolos entre dos momentos magnéticos M ~ S = 2µB S/~.
~

Este operador es válido, en principio, para la región r ≥ ρ0 , es decir, debe aplicarse a la parte
de las funciones de onda que satisfacen esa condición. Sin embargo, en el modelo usado acá se
hará ρ0 → 0, lo que implicarı́a que se terminará aplicando este operador en todo el espacio, lo cual
podrı́a traer problemas de convergencia. Sin embargo, se puede ver que las integrales involucradas
en los elementos de matriz de este operador no muestran problemas en el origen: considérese el
elemento de matriz
dip
hφk,l,m, |Whf |φk0 ,l0 ,m0 ,0 i ,
para el que ahora se consideran los ı́ndices  y 0 que denotan los valores propios ~/2 y 0 ~/2 de Sz .
En particular, considérese la integral radial asociada a este elemento. Cerca del origen la función a
0 0
integrar tiene una dependencia radial de la forma rl+l +2−3 = rl+l −1 . Se puede demostrar (ver el
complemento BXI ), que los elementos de matriz no nulos se obtienen para l + l0 ≥ 2, y entonces no
hay divergencia en el origen. Por esta razón es posible hacer el lı́mite ρ0 → 0 y usar la expresión
dip
para Whf en todo el espacio.

Contribución del campo interior. El operador asociado al último término se llama el “término
c , cuyos elementos de matriz en la representación {|φ
de contacto”, Whf k,l,m, i} son

c 2µB µ0 2
hφk,l,m, |Whf hφk,l,m, |
|φk0 ,l0 ,m0 ,0 i = − MI Sz |φk0 ,l0 ,m0 ,0 i
~ 4π ρ30
Z Z Z
µ0 2µB MI 0 2
=− h|Sz | i 3 d3~r φ∗k,l,m (~r) φk0 ,l0 ,m0 (~r)
4π ~ ρ0 r≤ρ0

Considérese ahora que ρ0 → 0. El volumen de integración, 4πρ30 /3, también tenderá a cero, y
el resultado serı́a
µ0 2µB MI 2 4πρ30 ∗
c
hφk,l,m, |Whf |φk0 ,l0 ,m0 ,0 i = − h|Sz |0 i 3 φk,l,m (~r = 0) φk0 ,l0 ,m0 (~r = 0)
4π ~ ρ0 3

µ0 2µB MI 8π ∗
=− h|Sz |0 i φ (~r = 0) φk0 ,l0 ,m0 (~r = 0).
4π ~ 3 k,l,m
Como
Z Z
φ∗k,l,m (~r = 0) φk0 ,l0 ,m0 (~r = 0) = 3
d ~r φ∗k,l,m (~r) φk0 ,l0 ,m0 (~r) δ(~r) = ~ k0 ,l0 ,m0 i
d3~r hφk,l,m |~ri h~r|δ(R)|φ

~ k0 ,l0 ,m0 i
= hφk,l,m |δ(R)|φ
entonces el operador asociado al término de contacto serı́a
!
µ0 8π ~ ~
2µB S
c
Whf =− MI · ~
δ(R).
4π 3 ~
A pesar de que el volumen que contiene al campo magnético interno tiende a cero cuando
ρ0 → 0, Whf c permanece finito pues ese campo interno tiende a infinito de la forma 1/ρ3 , y es
0
posible entonces usar el lı́mite ρ0 → 0 por simplicidad.

Nota: el operador δ(R)~ es una función del operador R~ que, dada su acción entre dos estados,
~
como por ejemplo hφ|δ(R)|ψi = φ∗ (0)ψ(0), se puede escribir simplemente como el operador de
~ = |~r = 0i h~r = 0|.
proyección δ(R)

El elemento de matriz hφk,l,m, |Whfc |φ 0 0 0 0 i es distinto de cero solo si l = l0 = 0, pues esa


k ,l ,m ,
condición es necesaria para que las funciones φk,l,m (~r = 0) y φk0 ,l0 ,m0 (~r = 0) sean distintas de cero
en el origen: el término de contacto existe solo para los estados s. Esto no sorprende debido a que
el electrón debe estar cerca del núcleo, o sea, cuando las funciones de onda del electrón y el protón
coinciden en el espacio.

El término de contacto describe entonces la interacción del momento magnético del espı́n
electrónico con el campo magnético dentro del protón.

Nótese también que al estudiar el acople entre M ~ I y el momento angular orbital del electrón
se asumió que
~
A~ I (~r) = µ0 MI × ~r
4π r3
en todo el espacio. Es decir se ignoró el hecho de que el campo magnético tiene una forma distinta
dentro del protón (que implica otro comportamiento para el vector potencial). Podrı́a pensarse que
debe existir entonces un término de contacto orbital, Whf L . En realidad esto no es ası́. El término

P~ · A
~I + A~ I · P~ producirı́a, usando una forma apropiada para el vector potencial de un campo
uniforme (como por ejemplo A ~I = R
~ ×B ~ i /2), un operador proporcional a

~ = µ0 MI 2 Lz .
~i · L
B
4π ρ30

Considérense los elementos de matriz de tal operador en la representación {|φk,l,m i}. Como
aparece Lz , debe darse que l, l0 ≥ 1. La función radial a integrar entre 0 y ρ0 se comporta de la
forma
0
rl+l +2 ,
y por lo tanto tiende a cero al menos tan rápido como lo hace r4 . Por lo tanto, a pesar de la
presencia del término 1/ρ30 , la integral se hace cero en el lı́mite cuando ρ0 → 0.

2.2. Resumen

Usando el hecho de que el momento magnético del protón es proporcional a su momento


~
angular I, !
~
I
~ I = gp µn
M ,
~
se obtiene entonces finalmente la expresión para el hamiltoniano de la estructura hiperfina sumando
WhfL , W dip y W c ,
hf hf
" #
µ0 2µB µn gp I~ · L
~ (I~ · R)(
~ S ~ · R)
~ I~ · S
~ 8π ~ ~ ~
Whf =− +3 − 3 + I · S δ(R) .
4π ~2 R3 R5 R 3

Este operador actúa tanto en el espacio de estados del electrón como en el del protón.

Se puede escribir también de la forma


 
µ0 q ~ ~ 1 ~ ~ ~ ~ 8π ~ ~ ~
Whf = − L · MI + 3 (3(MS · n̂)(MI · n̂) − MS · MI ) + MS · MI δ(R) ,
4π me R3 R 3

donde n̂ es un vector unitario en la dirección del protón al electrón.

El resultado presentado acá solo es válido para un espı́n nuclear I = 1/2. Para valores mayores
de I, como I = 1, deben considerarse términos como el momento cuadrupolar eléctrico que se le
suma al potencial V0 (~r) y actúa sobre las variables orbitales del electrón. Para I > 1 otros momentos
nucleares, eléctricos o magnéticos, estarán presentes en el hamiltoniano, y el hamiltoniano en general
es complejo. En la práctica, sin embargo, debido al tamaño tan pequeño del núcleo, comparado
con la extensión de las funciones de onda del electrón, las contribuciones de órdenes superiores son
muy pequeñas y difı́ciles de observar experimentalmente.
c es independiente de la hipótesis usada para el campo (un
Por otro lado, el resultado para Whf
dipolo en el exterior y un campo uniforme en el interior). En las integrales de los elementos de
matriz, la contribución del campo interior se ve reflejada en el valor en el origen de las funciones
de onda y la integral del campo interior en una “esfera que encierra al núcleo”. Como el flujo
del campo total es cero en una superficie cerrada, la integral del campo en dicha esfera puede
expresarse como una integral fuera de esta, donde el campo es dipolar (si I = 1/2). Si I > 1/2 y
existen contribuciones además de la dipolar, se puede demostrar que el campo interior no produce
nuevas contribuciones (solo el dipolo magnético posee un término de contacto).

Por último, para átomos pesados en las que las dimensiones del núcleo no se pueden despreciar
en comparación con la extensión de las funciones de onda electrónicas (cuando no es cierto que
ρ0 /a0 → 0), deben realizarse correcciones al hamiltoniano. En particular, debe agregarse un término
a Whfc que depende de la distribución espacial del magnetismo nuclear. Esto resulta interesante

pues al estudiar la estructura hiperfina de átomos pesados se puede obtener información sobre la
variabilidad del magnetismo dentro del núcleo.

2.3. Órdenes de magnitud

Whf introduce cambios en las energı́as que son pequeños comparados con los de Wf , y por eso
se le llama el hamiltoniano de la estructura hiperfina. El orden de magnitud de los primeros dos
términos de Whf es similar, igual a

q 2 ~2 µ0 e2 ~2
= .
me Mp R3 4π me Mp c2 R3
e2 ~2
Como WSO ≈ m2e c2 R3
, se ve que estos términos son ∼ 2000 veces más pequeños que WSO .

Sobre el término de contacto, también es ∼ 2000 veces más pequeño que el término de Darwin,
~ Por cierto, este operador que es función de R
que también contiene la función δ(R). ~ actúa sobre
las funciones de onda y hace que sus valores en el origen sean los relevantes en los cálculos de las
energı́as.

3. La estructura fina del nivel n = 2

Se puede demostrar que la estructura fina no elimina la degeneración del orbital 1s (hay
degeneración en 1s por la presencia de los espines). Por lo que se mostrará como aplicación acá el
caso del nivel n = 2.

La energı́a del átomo de hidrógeno sin perturbar solo depende del número cuántico n. Los
niveles 2s (n = 2, l = 0) y 2p (n = 2, l = 1) tienen la misma energı́a,
EI 1
− = − µc2 α2 .
4 8
Si no se toma en cuenta el espı́n, 2s posee solo un estado y 2p tres estados diferentes que difieren
en el valor propio mL ~ de la componente Lz del momento angular orbital (mL = 1, 0, −1).

Debido a los espines del protón y del electrón, la degeneración del nivel n = 2 es mayor de
lo que se podrı́a pensar cuando estos no se toman en cuenta. Las componentes Sz e Iz de los dos
espines pueden adquirir dos valores: mS = ±1/2, mI = ±1/2, por lo que una base posible para el
nivel n = 2 está dada por los kets
1 1
{|n = 2; l = 0; mL = 0; mS = ± ; mI = ± i}
2 2
para el orbital 2s, de dimensión igual a 4, y
1 1
{|n = 2; l = 1; mL = −1, 0, +1; mS = ± ; mI = ± i}
2 2
para el orbital 2p, de dimensión 12.

El nivel de energı́a n = 2 tiene entonces en total un grado de degeneración de 16.

Para conocer el efecto de la perturbación W en este nivel de energı́a hay que diagonalizar la
matriz de 16 × 16 que representa a la restricción de W en este nivel. Los valores propios de esta
matriz serı́an las correcciones en primer orden a la energı́a y los estados propios correspondientes
serı́an los estados propios del hamiltoniano en orden cero de la perturbación.
Como Whf es ∼ 2000 veces menor que Wf , obviamente debe estudiarse primero el efecto que
tiene Wf en el nivel n = 2. Se verá que la degeneración se elimina parcialmente y a la estructura
que aparece se le llama estructura fina. Whf puede luego eliminar la degeneración restante en los
niveles y causar una estructura “hiperfina”. Acá se estudiará como ejemplo el caso del nivel n = 2
y los cálculos pueden generalizarse para otros niveles.

3.1. Propiedades de la matriz asociada a Wf

Como se verá, es posible descomponer a la matriz que representa la restricción del operador

P~ 4 1 1 dV (R) ~ ~ ~2
Wf = Wmv + WSO + WD = − + L · S + ∆V (R)
8m3e c2 2m2e c2 R dR 8m2e c2

como una serie de submatrices cuadradas de dimensiones menores, lo que facilita la determinación
de los valores y vectores propios.

Al observar el operador Wf se notan algunas propiedades:

-Wf no actúa sobre las variables de espı́n del protón. El operador no depende de I,~ por lo
que el espı́n del protón puede ignorarse en el estudio de la estructura fina y la dimensión de la
matriz a diagonalizar por lo tanto baja de 16 a 8. Cualquier grado de degeneración encontrado
debe entonces luego multiplicarse por dos.

-Wf no enlaza los orbitales 2s y 2p. El operador L ~ 2 conmuta con las componentes de L,~
también conmuta con R porque solo actúa en las variables angulares, conmuta con P~ 2 , y conmuta
~ porque no actúa en las variables de espı́n. Por lo tanto L
con S ~ 2 conmuta con Wf .

Los estados 2s y 2p son estados propios de L~ 2 con valores propios distintos, 0 y 2~2 . Como
~ 2 , Wf ] = 0, Wf no posee elementos de matriz entre un estado 2s y uno 2p: la matriz de 8 × 8 que
[L
representa a Wf dentro del nivel n = 2 puede descomponerse en una matriz de 2 × 2 asociada a 2s
y otra de 6 × 6 asociada a 2p. De forma esquemática,
 
... ... 0
... ... 
 
(Wf )n=2 =  ... ... ... ...
 
 
0 ... ... ... ...
... ... ... ...

Se puede también entender la forma del operador Wf en este subespacio según los resultados del
~ se cambia por −R
complemento FII : en una reflexión R ~ (y R no cambia), P~ por −P~ , L
~ por L
~ y
~ por S.
S ~ Entonces Wf es invariante y por lo tanto es un operador par. Wf posee elementos de
matriz nulos entre estados de paridad opuesta, como 2s y 2p.

A continuación se verá la representación matricial en cada orbital.


3.2. Representación matricial de Wf en el orbital 2s

Al ignorar de momento al espacio de estados del espı́n nuclear, se tiene que la dimensión del
orbital 2s serı́a igual a dos, dados los dos valores posibles ms = ±1/2 de Sz . Ni Wmv ni WD
dependen de S. ~ Las matrices que representan a estos dos operadores en el subespacio 2s son por
lo tanto múltiples de la matriz unidad, con coeficientes de proporcionales igual a, respectivamente,

P~ 4
hn = 2; l = 0; mL = 0| − |n = 2; l = 0; mL = 0i
8m3e c2
y
~2
hn = 2; l = 0; mL = 0| − q∆V (R)|n = 2; l = 0; mL = 0i .
8m3e c2

Como
P~ 4 = 4m2e [H0 − V ]2 ,
~2
P 2
donde H0 = 2me + V es el hamiltoniano sin perturbar y V = − eR , se tiene entonces que

1
Wmv = − [H0 − V ]2 .
2me c2
Se puede obtener el valor promedio de este operador en un estado |φn,l,m i de la forma
1
< Wmv >n,l,m = − [(En )2 + 2En e2 < 1/R >n,l +e4 < 1/R2 >n,l ]
2me c2
con
EI 1
En = −
2
= − 2 α2 me c2
n 2n
2
y α = e /~c la constante de la estructura fina.

Como el operador R no actúa sobre la parte angular, el valor promedio de la j−ésima poten-
cia Rj se puede calcular fácilmente usando las integrales de las funciones radiales del átomo de
hidrógeno sin perturbar, Z ∞
< Rj >n,l,m = rj+2 |Rn,l (r)|2 dr.
0
Para el orbital 2s se tiene que
 
−3/2 r
R2,0 (r) = 2(2a0 ) 1− e−r/2a0 .
2a0
El resultado es
13 4
< Wmv >2s = − α me c2 .
128

Por otro lado, como ∆(−1/r) = 4πδ(~r) se tiene que

~2
< WD >n,l,m = 4πe2 |φn,l,m (~r = 0)|2
8m2e c2
Esta expresión se anula si φn,l,m (0) = 0, o sea si l 6= 0 (o sea, es distinta de cero solo para los

orbitales s). En el caso en cuestión, como Y00 = 1/ 4π,

~2 2
< WD >2s = e |R2,0 (0)|2
8m2e c2
1
< WD >2s = me c2 α4 .
16
Se puede ver el cálculo de estas y otras integrales en el complemento BXII .

Finalmente, el cálculo de los elementos de matriz de WSO involucra números de la forma

hl = 0, mL = 0|Lx,y,z |l = 0, mL = 0i = 0

que son iguales a cero pues l = 0. Por lo tanto

< WSO >2s = 0.

El efecto de los términos de la estructura fina en el orbital 2s es desplazar la energı́a con


respecto al valor sin perturbar en una cantidad igual a

5me c2 α4
< Wmv >2s + < WD >2s = − .
128

3.3. Representación matricial de Wf en el orbital 2p

Como L ~ solo actúa en las variables angulares y conmuta con R y P~ 2 (siendo que este último
~ 2 ), los operadores Wmv y WD conmutan con las componentes
depende de tales variables a través de L
~ (Wmv y WD son operadores escalares). Por lo tanto, estos operadores no tienen elementos de
de L
matriz entre los estados propios de Lz con valores propios distintos. Además, como Wmv y WD no
actúan en las variables de espı́n, se sigue entonces que las matrices que representan a Wmv y WD
en el subespacio 2p son diagonales y, de hecho, proporcionales a la identidad.

Se puede calcular la constante de proporcionalidad,

P~ 4 0 1 e2
hn = 2, l = 1, mL | − |n = 2, l = 1, mL i = − hn = 2, l = 1, mL |(H0 + )|n = 2, l = 1, m0L i
8m3e c2 2me c2 R
1 1 1
=− 2
δmL m0L [(E2 )2 + 2E2 e2 < >2,1 +e4 < 2 >2,1 ]
2me c R R
7
< Wmv >2p = − me c2 α4 .
384

Además,
< WD >2p = 0
pues WD es proporcional a δ(R) ~ y solo será distinto de cero si l = 0 (para l ≥ 1 las funciones de
onda valen cero en el origen).

Para el término WSO del acople de “espı́n y órbita”, deben calcularse los elementos de matriz
1 ~ = 2; l = 1; s = 1 ; mL ; mS i
hn = 2; l = 1; s = ; m0L ; m0S |ξ(R)L
~ · S|n
2 2
con
e2 1
ξ(R) = .
2me c R3
2 2

Usando la representación {|~ri} se puede separar la parte radial del elemento de matriz de la parte
angular y de espı́n, obteniéndose una expresión de la forma
1 ~ = 1; s = 1 ; mL ; mS i
ξ2p hl = 1; s = ; m0L ; m0S |L
~ · S|l
2 2
donde el factor numérico es

e2
Z
1 1
ξ2p = |R21 (r)|2 r2 dr = me c2 α4 .
2m2e c2 0 r3 48~2

~ ·S
El problema se reduce a la diagonalización del operador ξ2p L ~ y se sabe que esto es posible
con un cambio de base. Sea
J~ = L
~ +S ~

el momento angular total y sea


1
{|l = 1; s = ; J; mJ i}
2
~ 2, S
la base de vectores propios comunes de L ~ 2 , J~2 y Jz . Como l = 1 y s = 1/2, los valores posibles
de J son J = 1 + 1/2 = 3/2 y J = 1 − 1/2 = 1/2.

Para ver mejor por qué es posible la diagonalización, nótese que

J~2 = L
~2 + S
~ 2 + 2L
~ ·S
~

⇒ ξ2p L ~ = 1 ξ2p (J~2 − L


~ ·S ~2 − S
~ 2)
2
y por lo tanto
 
~ ~ 1 1 2 3 1
ξ2p L · S |l = 1; s = ; J; mJ i = ξ2p ~ J(J + 1) − 2 − |l = 1; s = ; J; mJ i .
2 2 4 2

~ ·S
Los valores propios de ξ2p L ~ dependen por lo tanto solo de J y no de mJ y valen

1
−ξ2p ~2 = − me c2 α4 para J = 1/2, y
48
1 1
ξ2p ~2 = me c2 α4 para J = 3/2.
2 96

El nivel de energı́a del orbital 2p tiene un grado de degeneración original igual a seis (este
orbital está asociado al producto tensorial del espacio l = 1, con tres dimensiones, con el espacio
s = 1/2, de dos dimensiones). Esta degeneración es eliminada parcialmente con WSO : se obtiene
un nivel con un grado de degeneración igual a cuatro correspondiente a J = 3/2, y un nivel con
degeneración igual a dos asociado a J = 1/2. La degeneración 2J + 1 de cada estado J es una
degeneración esencial, relacionada con la invariancia rotacional de Wf (si el hamiltoniano conmuta
con J~2 y Ji , lo cual refleja una simetrı́a, los 2j + 1 estados con m = −j, ..., j y el mismo valor de j
tienen la misma energı́a).

La escogencia de esta nueva base, más adecuada para WSO , también será adecuada para Wmv
y WD , pues en el subespacio 2p se representan como matrices múltiplos de la identidad, y la matriz
identidad es invariante en un cambio de base.

3.4. Resultados para el nivel n = 2

Notación espectroscópica: Las correcciones a la energı́a dependen de un nuevo número cuántico,


J, debido al término de acople espı́n-órbita.

Para el nivel 2s, con l = 0, se tiene J = 1/2, y para el nivel 2p se tiene que J = 1/2 o J = 3/2.
Se agrega el subı́ndice J a la notación nl para un orbital dado (donde, como es usual, l se reemplaza
con s para l = 0, p para l = 1, d para l = 2, f para l = 3, ...). Por lo tanto el nivel n = 2 del átomo
de hidrógeno da lugar a los niveles

2s1/2 , 2p1/2 , 2p3/2 .

Se pueden calcular finalmente los desplazamientos de estos niveles con respecto a la energı́a
sin perturbar asociada al nivel n = 2, que vale E2 = −µc2 α2 /8. Los resultados obtenidos son

1. El nivel 2s1/2 se encuentra por debajo de E2 en una cantidad (sumando < Wmv >2s y
< WD >2s )
5
− me c2 α4 .
128
2. Como < WD >2p = 0 y < Wmv >2p = −7me c2 α4 /384, y sumando el valor obtenido con
~ ·S
ξ(R)L ~ para J = 1/2, se ve que el nivel 2p1/2 está asociado a un cambio de la energı́a igual
a  
7 1 5
− − me c2 α4 = − me c2 α4 .
384 48 128
Por lo tanto se ve que los niveles 2s1/2 y 2p1/2 tienen la misma energı́a. Esta degeneración se
considera accidental (sucede por coincidencia y no debido a una simetrı́a).
3. El nivel 2p3/2 se encuentra con un desplazamiento de
 
7 1 1
− + me c2 α4 = − me c2 α4 .
384 96 128

El cambio en −7me c2 α4 /384 desplaza al nivel 2p como un todo, y se debe a Wmv (y también
a WD ), mientras que el acople espı́n-órbita es responsable de la separación de los niveles 2p1/2 y
2p3/2 .

La lı́nea Lyman α (2p → 1s) del átomo de hidrógeno contiene en realidad dos lı́neas cercanas:
2p1/2 → 1s1/2 y 2p3/2 → 1s1/2 , separadas en energı́a por

(5 − 1) 1
me c2 α4 = me c2 α4 ,
128 32
esta es la “estructura fina” de la lı́nea. Nótese que para el estado base, 1s (cuya estructura fina no
se ha estudiado acá), con l = 0 y s = 1/2, el valor de J es igual a 1/2 (solo hay un valor posible para
J). Wf por lo tanto no elimina la degeneración de este estado: solo hay un nivel de estructura fina,
1s1/2 . Por eso se ha estudiado acá el nivel n = 2 como aplicación para el efecto del hamiltoniano
de la estructura fina.

La figura 2 muestra un esquema de los resultados.

Otra cosa que se puede aclarar es que los niveles de energı́a con el mismo valor de J (en este
caso 1/2) tienen la misma energı́a, pero esto no solo es cierto en primer orden de la perturbación,
sigue siendo válido para todos los órdenes (como se puede ver con la solución exacta dada por la
ecuación de Dirac)4 .

Sin embargo, se observa en realidad un fenómeno conocido como el desplazamiento de Lamb,


que elimina la degeneración de los niveles 2s1/2 y 2p1/2 , en contradicción con los resultados obtenidos
con la ecuación de Dirac. Esto se debe a la existencia de fluctuaciones cuánticas electromagnéticas
en el vacı́o, debidas a la naturaleza cuántica del campo electromagnético, que acá no se ha consid-
erado, e inducen un acople con el átomo. El estudio de este fenómeno, descubierto en 1949, ha sido
clave en el desarrollo de la electrodinámica cuántica moderna.

4. La estructura “hiperfina” del nivel n = 1

Como es más sencillo, se estudiará ahora el efecto de Whf en el nivel 1s, debido a que Wf no
elimina la degeneración del mismo, y los resultados de esta aplicación especial se pueden extender
a los niveles 2s1/2 , 2p1/2 y 2p3/2 .

  p −2 −1/2
4
La solución es En,J = me c2 1 + α2 n − J − 1
2
+ (J + 1/2)2 − α2 , que podrı́a expandirse en poten-
cias de α para obtener el resultado de acá. Nótese que la energı́a no depende de l, solo de J y n.
Fig. 2.— La estructura fina del nivel n = 2 del átomo de hidrógeno. El nivel se divide en tres
subniveles con la acción de Wf , cuyos desplazamientos calculados en primer orden se indican acá.

~ e
El grado de degeneración del nivel 1s es igual a cuatro, pues las componentes Sz e Iz de S
~
I pueden adquirir los valores asociados a mS = ±1/2 y mI = ±1/2. No hay degeneración orbital,
pues l = 0. Una base posible en este nivel está dada por los vectores
1 1
{|n = 1; l = 0; mL = 0; mS = ± ; mI = ± i}
2 2

4.1. No hay estructura fina en el nivel 1s

Como se ha dicho antes, el término Wf no elimina la degeneración del nivel en cuestión. WD y


Wmv no actúan sobre mS ni mI , y se representan en el subespacio 1s por matrices que son múltiplos
de la identidad. Se encuentra que
5
< Wmv >1s = − me c2 α4
8
1
< WD >1s = me c2 α4 .
2
Para los elementos de matriz de WSO se deben calcular cantidades como

hl = 0; mL = 0|Lx,y,z |l = 0; mL = 0i
que claramente valen cero pues l = 0, por lo tanto

< WSO >1s = 0.

En conclusión, Wf simplemente desplaza el nivel 1s como un todo en una cantidad igual a


 
5 1 1
− + me c2 α4 = − me c2 α4 ,
8 2 8

sin subdividir el nivel. Como se ha dicho antes, esto debe ser ası́ pues J solo puede adquirir un
valor, J = 1/2, dando lugar a un solo nivel 1s1/2 .

4.2. Representación matricial de Whf en el nivel 1s

Los términos de Whf que no sean el de contacto no contribuyen a la estructura hiperfina. Los
elementos de matriz de
µ0 q ~ ~
− L · MI
4π me R3
contienen factores “angulares” de la forma

hl = 0; mL = 0|Lx,y,z |l = 0; mL = 0i

que son nulos, al igual que se dijo antes.

Con respecto a la interacción entre dipolos, donde aparece un término proporcional a

~ · I~ − κ(I~ · n̂)(S
S ~ · n̂),

donde κ es una constante, y es posible demostrar también que tiene elementos de matriz nulos.
Una forma de demostrar esto (que se ve con más detalle en el complemento BXI ) es por medio
del siguiente procedimiento: sean θ y φ los ángulos polares del vector n̂. Se procede a escribir
(I~ · n̂)(S
~ · n̂) en términos de θ, φ, Sz , Iz , S± e I± . Las integrales asociadas a los elementos de matriz
tendrán integrales de la forma Z
Y00∗ Y2q Y00 dΩ

con q = 0, 1, −1, 2, −2, que dan cero.

Con respecto al término de contacto, los elementos de matriz son de la forma


2µ0 ~
hn = 1; l = 0; mL = 0; m0S ; m0I | − ~ I δ(R)|n
MS · M ~ = 1; l = 0; mL = 0; mS ; mI i .
3
En la representación {|ri} se pueden separar las partes orbital y de espı́n de estos elementos de
matriz y escribirlos de la forma
A hm0S ; m0I |I~ · S|m
~ S ; mI i
donde A es un número dado por

q2 gp ~
A= 2
hn = 1; l = 0; mL = 0|δ(R)|n = 1; l = 0; mL = 0i
30 c me Mp

q2 me −3 1
 
gp 1 2 4 me 2 4
= |R10 (0)| = gp me c α 1 + .
30 c2 me Mp 4π 3 Mp Mp ~2
me −3
El factor (1 + Mp ) aparece porque la masa reducida se encuentra dentro de R10 (0).

El problema se transforma en un problema de dos espines 1/2 bajo una interacción de acople

A I~ · S.
~

Sea entonces
F~ = S
~ + I~

el momento angular total (lo cual es válido porque el momento angular orbital es nulo, aunque
~ +S
formalmente el momento total serı́a L ~ + I),
~ y considérese la base de estados

1 1
{|s = ; I = ; F, mF i}
2 2
~ 2 , I~2 , F~ 2 y Fz = Iz + Sz . Como s = I = 1/2, los
formada por los vectores propios comunes de S
valores posibles para F son F = 0 y F = 1.

En esta base el operador A I~ · S ~ se representa con una matriz diagonal (a diferencia de la


~ 2 , I~2 , Sz e
representación en la base {|s = 1/2; I = 1/2; mS ; mI i} de vectores propios comunes de S
Iz ), pues
~ = A (F~ 2 − I~2 − S
A I~ · S ~ 2)
2
y los vectores {|s = 1 ; I = 1 ; F ; mF i} ≡ |F, mF i son vectores propios de A I~ · S,
2 2
~

2
~ |F, mF i = A~ [F (F + 1) − I(I + 1) − S(S + 1)] |F, mF i ,
A I~ · S
2
y los valores propios dependen de F y no de mF , y serı́an iguales a

A~2 A~2
 
3 3
2− − = para F = 1, y
2 4 4 4

A~2 3A~2
 
3 3
0− − =− para F = 0.
2 4 4 4

La degeneración de grado cuatro del nivel 1s se elimina parcialmente con Whf : se obtiene un
nivel asociado a F = 1 con degeneración igual a tres y otro nivel con F = 0 sin degeneración. La
degeneración de grado 2F + 1 asociada al nivel F = 1 es esencial y se relaciona con la invariancia
de Whf ante las rotaciones del sistema.
4.3. Niveles de energı́a

Primero se vio que por el efecto de Wf la energı́a del nivel 1s baja en una cantidad me c2 α4 /8
con respecto al valor sin perturbar, −µc2 α2 /2. Luego Whf divide al nivel 1s1/2 en dos niveles
“hiperfinos”, separados por una diferencia en energı́a de A~2 ; a esta cantidad se le llama a menudo
la “estructura hiperfina del estado base”. Esta subdivisión se observa en la figura 3.

Fig. 3.— La estructura “hiperfina” del nivel n = 1 del átomo de hidrógeno. J solo puede adquirir
el valor 1/2. Cuando se toma en cuenta el acople hiperfino Whf , el nivel 1s1/2 se divide en dos,
asociados a F = 1 y F = 0. La transición F = 1 → F = 0 (o viceversa) tiene una frecuencia
que se ha medido experimentalmente con 12 cifras significativas (ni en el modelo usado acá, por
supuesto, y ni usando las teorı́as más avanzadas es posible explicar las cifras). La lı́nea de emisión
F = 1 → F = 0 es muy usada en astronomı́a y corresponde a la famosa lı́nea de 21 cm del hidrógeno
atómico generada espontáneamente en la transición de los átomos (la frecuencia equivalente es
≈ 1420 MHz; y la energı́a asociada a la transición es ∼ 6 órdenes de magnitud más pequeña que la
energı́a del estado base del hidrógeno).
4.4. Efecto de Whf en el nivel n = 2

Se podrı́a demostrar que Whf subdivide a los niveles 2s1/2 , 2p1/2 y 2p3/2 de la estructura fina
en una serie de niveles hiperfinos, que corresponden a todos los valores de F separados por una
unidad, que se encuentran entre J + I y |J − I|. Para 2s1/2 y 2p1/2 se tiene que J = 1/2, entonces
F = 0, 1. Para el nivel 2p3/2 , J = 3/2 y por lo tanto F = 1, 2, como se ve en la figura 4.

Fig. 4.— La estructura “hiperfina” del nivel n = 2 del átomo de hidrógeno. La separación S
entre los niveles (inicialmente degenerados) 2s1/2 y 2p1/2 es el desplazamiento de Lamb debido a las
fluctuaciones cuánticas del vacı́o, y es alrededor de diez veces más pequeño que la separación debida
a la estructura fina, ∆E, entre los niveles 2p1/2 y 2p3/2 (∼ 1057, 8 MHz versus ∼ 10969, 1 MHz).
Cuando se toma en cuenta el término Whf cada nivel se divide en dos subniveles hiperfinos, cada
uno asociado a un valor del número cuántico F . Las separaciones hiperfinas son aproximadamente
iguales a 23,7 MHz para el nivel 2p3/2 , 177,56 MHz para el nivel 2s1/2 y 59, 19 MHz para el nivel
2p1/2 (la figura no está a escala).
5. El efecto Zeeman en el nivel n = 1

~ 0 , paralelo
Supóngase que se coloca al átomo de hidrógeno en un campo magnético uniforme, B
al eje z. Este campo interactúa con los diferentes momentos magnéticos del átomo: los momentos
~L = q L
magnéticos orbitales y de espı́n del electrón, M ~ yM~ S = q S,
~ y el momento magnético
2me me
~I = − qgp ~
del núcleo, M 2Mp I.

El hamiltoniano de Zeeman, WZ , puede entonces escribirse de la forma

~ 0 · (M
WZ = −B ~L +M
~S +M
~ I ) = ω0 (Lz + 2Sz ) + ωn Iz ,

donde
q
ω0 = − B0
2me
es la frecuencia de Larmor y
q
ωn = gp B0 .
2Mp
Como Mp >> me entonces
|ω0 | >> |ωn |.

En realidad, al expandir el operador [P~ − q A(


~ R)]
~ 2 se obtiene, además de la interacción con el
momento magnético asociado al movimiento orbital del electrón (paramagnetismo), otro término
(diamagnético) cuadrático en B0 . Este término no actúa en las variables de espı́n y tan solo desplaza
el nivel 1s como un todo. Este término es de hecho despreciable con respecto al hamiltoniano
estudiado acá y fue analizado en el complemento DVII , donde más bien se ignoró el efecto de los
espines.

Acá se estudiará el efecto de WZ en el estado base, 1s, del átomo de hidrógeno. Para el nivel
n = 2 el cálculo es algo más complicado pues este nivel presenta una estructura fina al igual que la
hiperfina mientras que el nivel 1s solamente posee estructura hiperfina.

Por otro lado, aún con los campos magnéticos más fuertes disponibles en el laboratorio, WZ
resulta ser mucho más pequeño que la separación entre el nivel 1s y los otros niveles, por lo que su
efecto puede estimarse con la teorı́a de perturbaciones.

La importancia relativa de WZ depende del valor del campo magnético. Si B0 es suficientemente


grande, el hamiltoniano WZ puede llegar a ser del mismo orden de magnitud que Whf , o incluso
mayor. Si B0 es un campo muy débil, entonces WZ << Whf .

Hay que diagonalizar el operador


WZ + Whf
dentro del nivel n = 1. Deben calcularse elementos de matriz de la forma

hn = 1; l = 0; mL = 0; m0S ; m0I |ω0 (Lz + 2Sz ) + ωn Iz |n = 1; l = 0; mL = 0; mS ; mI i .


La contribución de ω0 Lz es nula pues l y mL valen cero. Como Sz e Iz actúan solo sobre las
variables de espı́n, se puede separar la parte orbital del elemento de matriz, que serı́a igual a

hn = 1; l = 0; mL = 0|n = 1; l = 0; mL = 0i = 1

de la parte de espı́n.

En conclusión, por lo tanto, ignorando los números cuánticos n, l, mL en la notación, debe


diagonalizarse el operador
AI~ · S
~ + 2ω0 Sz + ωn Iz ,

que actúa solo en los grados de libertad de espı́n. Se podrı́a usar la base {|mS , mI i} o la base
{|F, mF i}.

A partir de ahora, en este cálculo, se ignorará el último término (ωn Iz ) que es despreciable con
respecto a 2ω0 Sz (en una aplicación para otro sistema en el complemento CXII se hacen los cálculos
cuando no es posible despreciar el momento magnético de una de las partı́culas). Se diagonalizará
entonces el operador
AI~ · S
~ + 2ω0 Sz .

Sin embargo, a pesar de que es posible diagonalizarlo exactamente, se estudiarán primero los
resultados para campos fuertes y débiles usando la teorı́a de perturbación:

~ω0 << A~2 es el caso de campo débil y se considera a 2ω0 Sz como una perturbación

~ω0 >> A~2 es el caso de campo fuerte y se considera a AI~ · S


~ como una perturbación.

Para estudiar el caso de campos intermedios, cuando

~ω0 ≈ A~2 ,

se recurrirá a la diagonalización exacta de los dos operadores, que servirá además para verificar los
resultados de los casos anteriores.

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