(1) Una gran fe

(Andy Stanley)
INTRODUCCIÓN
¿Algunas vez has pensado qué tan diferente sería tu visión de la vida si tú fueras una persona poseedora de
una fe absoluta de que Dios está contigo? Si nunca antes habías meditado esto, ahora es un buen momento
para hacerlo. ¡Vamos! Si tú fueras una persona poseedora de una fe absoluta de que Dios está contigo,
¿cómo responderías a las dificultades en tu vida?, ¿a las tentaciones?, ¿a las cosas buenas? Si tú supieras con
certeza que Dios está presente en todo aspecto de tu vida, y que pase lo que pase, detrás de cada evento
Dios está trayéndote siempre una bendición, aunque a veces no puedas verla, ¿tu visión de la vida sería
distinta? Imagina, siente en cada fibra de tu ser lo que representaría para ti y para tu vida el que tú tuvieras
una fe PERFECTA.

PREGUNTAS PARA ESTUDIO EN GRUPO

Comience leyendo la historia del Centurión que tenía un siervo enfermo. Se encuentra en Mateo 8:5-10.

1. ¿Conoces personas con una fe en Dios tan grande que incluso a veces llegas a catalogarla de increíble?
¿Qué piensas que hace que su confianza en Dios sea tan fuerte?

2. ¿Cómo describirías la relación entre obediencia y confianza?

3. Si te remontas a tu infancia, ¿cuál era la relación entre confianza y obediencia? ¿Confiabas en tu papá y tu
mamá? ¿Cómo es que esa confianza (o falta de ella) afectaba tu respuesta a la autoridad de tus padres?

4. ¿Qué es más importante en una relación: la confianza o la obediencia? Responde esta pregunta en el
contexto de varios tipos de relaciones. Si eres padre de familia, ¿cómo responderías a esta pregunta en
relación a tus hijos? ¿Qué hay en el contexto del matrimonio?

5. Andy habla de cinco formas en que Dios hace CRECER tu fe. ¿Cuáles recuerdas? De estas cinco, ¿cuál ha
tenido un mayor impacto en tu confianza en Dios? ¿Por qué?

6. ¿Ha habido un momento en tu vida en el que tu confianza (o fe) en Dios haya tocado fondo? ¿Estarías
dispuesto a compartir tu historia con tu grupo? Si es así, por favor describe los acontecimientos que te
llevaron a casi o completamente perder tu fe. Cuéntanos también qué fue lo qué te llevó a recuperarla.

7. Basado en los comentarios expresados en esta sesión, ¿qué consejo le darías a un amigo que ha perdido
su fe o cuya fe se encuentra debilitada?

8. Basado en tu experiencia personal, si algún amigo cercano te contara con tristeza que en un tiempo
pasado él o ella fue una persona llena de fe, pero que hoy la ha perdido, ¿qué preguntas le harías? ¿Qué
consejo o consejos le darías?

PROFUNDIZANDO EN EL TEMA
Los sermones vienen en todos los colores y sabores. Sería difícil decir cuántos sermones se predican en el
mundo día tras día. Pero a pesar de las diferencias existe algo en común, y si escuchas con atención podrás
comprenderlo. Dios te dice lo mismo una y otra vez en la mayoría de los sermones: “Confía en mí”. Eso no

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quiere decir que el mensaje de la Biblia sea superficial y simplista. Por el contrario, confiar en Dios es algo
muy profundo y eso es lo que Dios te pide, que confíes en Él. Confiar en Dios es súper sencillo cuando las
cosas te están saliendo bien, cuando todo pinta de maravilla en tu vida. Para eso no necesitas tener mucha
fe, pero cuando la vida se complica, cuando parece que todo está al revés, ¿tu fe te lleva a mirar por encima
de las circunstancias poniendo tu confianza en Dios y dependiendo de Él? ¿O pones tu confianza en algo
más?

En las próximas semanas, vamos a hablar acerca de los cinco catalizadores que Dios utiliza para construir el
tipo de fe que Dios quiere que tú tengas.

Por lo pronto, en esta semana reflexiona sobre cuáles han sido en tu vida los eventos y las relaciones que
más han fortalecido o construido tu fe. ¿Cómo han afectado éstas tu confianza en Dios?

RENUEVA TU MENTE
Al oír esto, Jesús se asombró y dijo a quienes lo seguían:
- Les aseguro que no he encontrado en Israel a nadie que tenga tanta fe

Mateo 8:10 (NVI)

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