Conclusión

Ya habiéndonos inmersos dentro de este entorno de la ética y la bioética, comprendimos

que son disciplinas filosóficas, de origen ancestrales, casi desde que la humanidad existe.
Entendemos que la ética abarca amplios aspectos de nuestra sociedad, y que viene, por tanto, a
constituir una pieza fundamental en nuestro quehacer como ciudadanos. En consecuencia, del
amplio estudio de la ética, y su implicación en el ser humano, surge el concepto de bioética. Así la
bioética asume un rol principal dentro de un mundo de disciplinas científicas, cuyo objetivo es
preservar la integridad del ser humano, en su totalidad, lo que incluye lo ético, lo moral, lo social,
lo ambiental, siempre girando alrededor de un centro objetivo, la preservación de la salud del
individuo. Es menester, mantener un estudio continuado de la ética y la bioética, acorde con el
desarrollo científico, y los cambios sociales, políticos, culturales y ambientales que afectan
continuamente a la sociedad y al individuo, como consecuencia de su evolución constante en este
mundo contemporáneo en que existimos.