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INDIVIDUO Y FAMILIA

TALLER: FAMILIA Y CULTURA

PRESENTADO POR
LAURA VALENTINA GRISALES QUINTERO

PRESENTADO A

LIC. CAROLINA CENTENO PEREA

TRABAJO SOCIAL

FACULTAD DE HUMANIDADES
UNIVERSIDAD DEL VALLE, SEDE ZARZAL

2022
Elementos de las fotografías
(1950-1970)
Marcadas costumbres religiosas/católicas
Características regionales: región montañosa, fría y rural a más
de 1.900-2000 m.s.n.m.
Culturales Vestimenta: las mujeres llevaban vestidos o faldas largas,
cabello largo (hasta la cintura). Mientras que los hombres
llevaban pantalón con camisa, ruanas y botas
Comidas: animales silvestres como guatines, zarigüeyas y
gurres. También sancocho y natilla de maíz

Postura: las mujeres se encuentran por lo general sentadas, sus


esposos de pie, posando la mano sobre el hombro de ella y
Actividades, oficios y alrededor de ellos sus hijos pequeños.
posturas Generalmente en las fotografías aparecían tres generaciones:
abuelos, padres y numerosos hijos.
Actividades y/o oficios: laborando el campo, cocinando en
fogón de leña, paseo en el rio comiendo sancocho, soleando a
los bebes, manejado el jeep willys

Socioeconómicos Estrato bajo.

Reuniones y viajes familiares o con amistades (paseo de olla)


Motivos de las Eventos sociales, generalmente de carácter religioso: bautizos,
fotografías matrimonios y confirmaciones
Nacimiento de hijos

(1970-2000)

Culturales Costumbres religiosas/protestantes


Vestimenta: tanto hombres como mujeres usan pantalones
bombachos, cabello abultado, chaquetas de jean o camisetas de
rayas (estilo hippie)
Actividades, oficios y
posturas Estudiando, bailando en discotecas y bares; montando
bicicleta, trabajando con compañeros de oficina, entre otros.

Socioeconómicos Estrato medio

Viajes con parejas y amigos


Motivos de las Primer dia de clases
fotografías Graduaciones
Cumpleaños: 15 años

(2000-Actualidad)

Vestimenta: mujeres con blue jeans, faldas cortas, smoking


Hombres: pantaloneta, pantalón, camisas…
Culturales Actividades: viendo películas, visitando a un amigo u amiga,
jugando con los más pequeños, celebrando halloween,
recibiendo regalos en navidad
Religión: catolicismo light
Socioeconómicos Estrato medio

Motivos de las Dejar plasmado un bonito paisaje (en el álbum hay más fotos
fotografías de paisajes que de personas)
Nos sentíamos felices
Amigos y familiares reunidos

- ¿Cómo explicarían lo que usted piensa y siente sobre el ser familia?

En opinión, son lazos inquebrantables que no necesariamente tienen que ser de afectividad,
pero sí de compromiso hacia los otros. Dentro de este mismo circulo, inconscientemente se
les impone a los miembros de la familia seguir una serie de conductas, normas y
costumbres que debe adoptar poco a poco mientras crece y se constituye como adulto para
que la sociedad lo pueda aceptar dentro de sus parámetros de normalidad.

- ¿Qué aspectos ideológicos de la sociedad occidental identifica en el álbum?

 Las familias son monógamas


 Patrivirilocalidad en abuelos
 Sociedad patriarcal (machista) con roles predefinidos dependiendo del sexo. Esto se
acentúa más en ese entorno rural.
 Religión católica
Autobiografía de mi familia

Don Gerardo, mi abuelo se crío entre cultivos de café, plátano y lulo, en medio de
numerosos hermanos en una de las tierras más frías en cercanías del Choco. Con ruana al
hombro y en sus manos tarjadas cargaba un azadón, laborando las tierras desde sus
tempranos siete años; conoce lo que es la primaria y aprende a medio leer y escribir para
defenderse a pesar de los castigos crueles que le imponía su profesora por llegar tarde. Su
padre convencido de que su hijo iba a ser un respetable cura emprende ese sueño en
búsqueda de esa formación, lo que no prevé es que debía vender todos sus bienes materiales
y media alma en lo que le quedaba de vida. Renunciando a ese sueño, su hijo empieza el
trabajo de chofer en un jeep willys llevando a la gente a vender su cosecha en la plaza de
mercado, principiando lo que sería uno de los primeros transportes a motor en esa zona,
dejando en el pasado lo de andar a lomo de mula. Al mismo tiempo, se dedica en sus
tiempos libres a tocar serenatas para los enamorados, de las que mi abuela no se salvó. El
papá de mi abuelo funda una parte del pueblo, donando tierras de su finca para la
construcción de la primera escuelita y ofrece yegua y media (la más vieja) para transportar
materiales. Lastimosamente al padre de mi abuelo, esa alma noble le aqueja la lepra y se
convierte más adelante en la causa de su muerte.
Ambos viven la violencia entre godos y cachiporros a flor de piel. De niña mi abuela ve
constantemente como pasan mulas cargando cadáveres y en medio de su inocencia pregunta
por qué esos hombres montan de esa manera tan rara las bestias. Mientras que mi abuelo y
su familia siendo fuertemente conservadores, pasan noches de terror escondiéndose debajo
de la cama en una de las regiones rurales más liberales del Norte del Valle, y con miedo a
fallar a la respuesta de la pregunta: ¿ustedes de qué partido son?. Para terminar de dañar el
orgullo familiar, la oveja negra de la familia era apodado “lamparilla”, perteneciente a una
disidencia llamada “las chusmas”, robaban, mataban y causaban terror en el pueblo.
Paradójicamente, Gerardo conoce a la que seria mi abuela: Rosalba, una liberal de 14 años
huérfana que vive explotada laboralmente por su hermano que es profesor y que la llenaba
de promesas falsas, al prometerle a ella que no se quedaría solo con la primaria, sino que le
ayudaría a terminar su educación, ella quería estudiar medicina y se le daba muy bien curar
las peores heridas. Sin embargo, el destino fue otro y mi abuelo pide la mano de Rosalba, él
por amor y ella no solo por amor, también para escapar del maltrato de su hermano. Siendo
fielmente católicos, los hijos de la familia de godos y cachiporros se unen en sagrado
matrimonio, cuan romeo y julieta, pero con el “final feliz” y con 14 años de diferencia.
Pasan a vivir con la familia de mi abuelo. Don Gerardo se convierte en el consorte
económico, mientras que ella se encargara de la crianza y labores en una familia ajena a
ella. Viendo la situación de extrema pobreza y que a mi abuelo no le alcanza para comprar
alimentos básicos, ni haciendo recorridos de pueblo en pueblo, ni con las canciones que
toca en las parrandas de borrachos. Entonces a Rosalba le toca hacer labores del campo y
sembrar hortalizas para vender en un sistema de intercambio con los tenderos. Cuando se
medió acomodan, ella se inscribe en el “bachiller virtual” de la época que consistía en
sintonizar la emisora en determinados horarios para escuchar las clases y mandar por medio
del correo las respuestas a los trabajos y exámenes. Sin embargo, entre las labores del
campo y de la casa; la crianza de sus hijos y el bachiller termina por desistir de esta última.

Alrededor de sus vida, procrean 7 hijos, de los cuales tres mueren a temprana edad, uno por
accidente, el otro por enfermedad y el ultimo por un trabajo de parto difícil el cual asistía la
partera del pueblo, algo que los deja marcados, no olvidaran aún despues de transcurrir 50
años.

Dejan las labores del campo y se mudan a un caserío en donde terminan sumidos en las
ventas de helados, dulces y buñuelos que les proporciona mayores utilidades para la
subsistencia. Posteriormente, expanden su negocio incluyendo todo tipo de artículos:
lencería de paño para mujeres y zapatos para cachaquear los domingos. Por otro lado,
empiezan a crear lazos de amistad en su nuevo hogar. Estas mismas personas los hacen
dudar de la religión católica y convertir al protestantismo testificando que era una
verdadera fuente de cambio espiritual. Tanto es, que se van caminando tres horas ida y
vuelta cada semana para escuchar las palabras de represión y enseñanza del pastor.
Cambian sus vestimentas por unas más sobrias, compran una biblia más grande y la querida
costumbre del cigarrillo en mi abuelo se acaba. El auge fue sorprendente cuando llega el
primer televisor al caserío, poder ver a través de una imagen la representación de las
novelas románticas que antes solo podían escucharse por la radio mientras hacían sus
quehaceres, fue como magia el cambio. Macgiver para los niños y la novela “la fiera” para
las señoras; los señores aún se encontraban un poco escépticos con el entretenimiento. Pero
el asombro incluyo a todos cuando pavimentan la calle principal del caserío. Mi madre,
única hija de mis abuelos, llega a un punto de tensión en su adolescencia, se cuestiona
acerca de querer pasar la vida lavando los pantalones mugrosos a sus hermanos y prender
cada dia a las 5 a.m. el fogón de leña. Le exige entre lágrimas a su madre educación,
terminar por lo menos su bachillerato. Entre muchas dificultades, cumple su deseo de
educarse. En la flor de su juventud comienza la época de romance: ahorraba para llamar a
sus novios por telecom y se enviaban cartas de más de dos hojas. En ese contexto, se siente
la época del narcotráfico en Colombia. Al mismo tiempo, viven un poco la época de
desplazamientos y extorsiones por parte de las disidencias. Escuchan relatos y rechazan
rotundamente volver a una violencia que, aunque la hayan vivido toda la vida, nadie se
termina por acostumbrar tanto de forma directa como indirecta. Así que su mejor opción es
Álvaro Uribe Vélez, un candidato que garantiza combatir los secuestros y la violencia.

Mi mamá se profesionaliza, empieza a trabajar y se independiza. Sin embargo, al poco


tiempo de haber cumplido 22 años queda embarazada de mí. A diferencia de sus hermanos
que son casados, se convierte en madre soltera, algo un poco inusual. Sus padres le
ayudaron a criarme mientras ella trabajaba. No éramos pobres, pero tampoco ricos,
teníamos exactamente lo necesario. Dos años despues, se incorpora otro integrante de la
familia: mi padrastro. Nos convertimos por ese tiempo en una familia extensa: mis abuelos
y la nueva conformación de la familia de mi madre. Aun vivíamos en el contexto rural, en
donde era normal ver cerdos y ganado en la calle como si fuesen otros transeúntes más.
Mis abuelos no me dejaban dormir hasta tarde los domingos porque debía ponerme alguno
de los vestidos de flores que tenia en el armario para asistir a culto. No me caía bien el
pastor, hablaba mucho de cosas que no entendía, nos decía que todos éramos pecadores, yo
no recordaba haber matado o robado algo. Así que a veces, para salvarme del discurso de
siempre utilizaba mi táctica de fingir estar enferma, a veces funcionaba y me quedaba
viendo episodios completos de los hermanos Grimm. El abuelo conservaba la finca y
ciertos en periodos que no tenía clases, pasaba el tiempo allí con ellos. Ellos tenían cultivos
de granadilla, plátano y caña. Mi abuelo cazaba gurres y zarigüeyas; mi abuela las
condimentaba y las pitaba un buen rato para que ablandara la carne, nunca fui capaz de
probarlas. El frio en la noche era inaguantable, así que los viejos se ponían las ruanas y yo
una cobija. Se hablaba muchísimo del Choco, ya que vivíamos cerca y había familiares
viviendo allí, nunca tuve la oportunidad de ir, pero siempre llevaba en mi imaginación que
era algo muy tropical, y de tanto probar el chontaduro quería conocer el lugar en donde se
originaba, a partir de allí tenía la percepción de que ese lugar debía ser un paraíso terrenal.
A mis 7 años, me convierto en hermana y a mis 14 también.
En mi preadolescencia la familia se reestructura, así que solo quedamos mis papás y mis
hermanos, tuvimos que adaptarnos, aprender a ser ese nuevo tipo de familia y entendernos
entre discordancias. No seguimos siendo creyentes de nada y compartíamos tiempo en la
noche, cuando los mayores ya podían descansar del trabajo.
Mi familia es ese punto de retorno al que uno siempre puede volver cuando desee y
necesite, como ese tiempo de descanso durante el duro partido. Son las personas con las
que se lleva más tiempo conviviendo. Han sido las personas más pacientes en mi proceso
de vida, de las que cada dia puedo llegar a aprender algo ejemplar. Claramente hay
desencuentros y tensiones como en todo: diferentes formas de pensar, de ser y de sentir.
Hay ciertos patrones que se deben seguir y si se sale un poco de ellos, la armonía puede
dejar de estar para darle paso al conflicto.
Tenía muchísimas prenociones acerca de lo que significa ser familia, haciendo este análisis,
consultando entre mis abuelos, padres, fotografías y esculcando entre mis propios recuerdos
me doy cuenta de que son una parte importante de lo que soy y seguiré siendo, llevo un
pequeño trozo de cada uno en mi constitución y que así quiera cambiarlo, hay cosas que se
quedan plasmadas para siempre. En los profesional, me abre un campo de visión enorme:
reconocer al otro y que detrás de él hay una historia de vida con diferentes componentes y
uno de ellos es el familiar, una historia que lo predispone incluso antes de nacer. Otra cosa,
es que los lazos de consanguinidad no necesariamente crean automáticamente lazos
afectivos, que darle esa posición a una persona se mide en cuanto al tiempo compartido
entre ambos y que importancia reconocemos de ese tiempo, cariños forjados y
comprensión. Además, pensar que cada familia es una diminuta parte del núcleo de la
estructura de la sociedad y cada una de ellas ha aportado para crear lo que hoy conocemos,
hace reflexionar que esa institución es la que más se debe cuidar y que tal vez actualmente
hay muchas que proporcionan a sus miembros más violencia, atropellos e invisibilización
que aprendizajes nutritivos que ayuden al crecimiento personal reciproco.

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