LECCIÓN 2

El ayuno
mueve montañas
Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio; afligí con ayuno mi alma, y mi oración
se volvía a mi seno. —Salmos 35:13

El ayuno es un principio bíblico que hasta cierto
punto se ha perdido entre los creyentes. Sin em-
bargo, hay una iglesia remanente que entiende la
necesidad de orar y ayunar. El ayuno es el arma que
Dios nos ha dado para superar los desafíos de los
tiempos que vivimos. Hoy hablaremos del ayuno, su
importancia y los beneficios que tiene en nuestras
vidas.
¿QUÉ ES EL AYUNO?
Es la abstención voluntaria de alimentos con fines
espirituales, a fin de buscar la presencia de Dios y
profundizar nuestra relación con Él.
¿QUÉ DEBEMOS HACER
MIENTRAS AYUNAMOS?
Tu tiempo de oración con Dios es lo que desata
el poder que tiene el ayuno.
Humillarnos y arrepentirnos delante de Dios.
Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre
es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se con-
virtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré
desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré
su tierra. —2 Crónicas 7:14
El ayuno implica un proceso de examinar las
áreas de nuestra vida que necesitamos cambiar
y arrepentirnos. Para arrepentirse es necesario ser
humilde, y la humildad es un acto de la voluntad.
Cuando nos humillamos y buscamos el rostro de
Dios, Él nos escucha, nos perdona y nos sana.

Buscar a Dios a través de la oración Presentar nuestras peticiones delante de Dios.

y la intimidad.
Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada
la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Pa-
dre que ve en lo secreto te recompensará en público.
—Mateo 6:6
¿QUÉ OCURRE CUANDO AYUNAMOS?
Ayunar sin orar es simplemente pasar hambre.
Aparta una hora cada día, en un lugar donde no
te interrumpan y puedas estar a solas con Dios.
Haz una lista de peticiones de oración que quie-
res que Dios responda. Ora diariamente mientras
ayunas por tus peticiones, creyendo que el rom-
pimiento viene.
Nos volvemos más hambrientos
y sensibles a Dios.

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 52 LECCIONES DE VIDA 12

Si alguna vez perdemos el hambre de Dios y Su
presencia, el ayuno es la forma más rápida de re-
cuperarla. A medida que dedicamos tiempo para
orar y buscar de Dios, Su presencia se hará más
real para nosotros.
Mostramos a Dios nuestra dependencia de Él.
montañas que no se moverán hasta que ayu-
nemos y oremos. Al hacerlo, toma tiempo para
hablarles a esas montañas, en cada área de tu
vida —ya sean físicas, mentales, emocionales,
espirituales o financieras— y declara que son
removidas

El ayuno es un acto de humildad que hacemos

ante Dios para mostrarle que sin Él no podemos
hacer nada. Mucha gente, sin saberlo, vive su vida
dependiendo de su familia, de sus amigos, de su
trabajo, de su negocio y del gobierno. El ayuno es
la forma más segura de garantizar que siempre
estamos dependiendo de Dios.

Recibimos instrucción divina para

las decisiones de la vida.

Hay muchas instrucciones y una sola instrucción OBJETIVOS

divina. Las primeras vienen del hombre, mientras
que la otra proviene de Dios. El hombre tiene mu-
chos planes, pero solo Dios conoce Sus caminos
divinos. El ayuno es la manera más rápida de recibir
instrucciones de Dios para nuestra familia, negocio,
ministerio y propósito. Detrás de cada instrucción
divina hay un milagro esperando por suceder.
Aceleramos las respuestas a nuestras oraciones.
En estos últimos tiempos, el ayuno es el medio
que Dios usa para acelerar las respuestas a nues-
tras oraciones. Cuando ayunamos, las peticiones
que suelen tomar años para ser respondidas, to-
marán meses; las que usualmente toman meses,
tomarán semanas; las que toman semanas, se
cumplirán en días; y las que toman días se redu-
cirán a horas.
Activamos el poder de Dios
para mover montañas.
Las “montañas” representan los poderes de-
moníacos que vienen contra un creyente. Hay
Aprender sobre el poder del ayuno.
PREGUNTAS FINALES
¿Qué es el ayuno?
¿Qué debemos hacer mientras ayunamos?
¿Qué sucede cuando ayunamos?
ACTIVACIÓN
El líder hará el llamado a la salvación.
Guiará al pueblo para que se una al ayuno
congregacional y presentará el ayuno como grupo
ante el Señor.
Orará y declarará sobre las personas las cosas
poderosas que se enseñaron en la clase.
DIEZMOS Y OFRENDAS
Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio
que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que
era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y
muerto, aún habla por ella. —Hebreos 11:4
Dios te trajo aquí para activar tu fe y provocar un movi-
miento en tus finanzas. Tus diezmos y ofrendas son un
acto de fe y un sacrificio a Dios. La ofrenda que siembras
hoy sacará tus finanzas del estancamiento y traerá vida
sobre ellas.

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