Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
n^:B
una realidad.
horizontes de la Patria.
II
midable contendor
Trece días le bastan á Bolívar para efectuar tales aprestos :
II
crueldad.
IV
posición.
hicieran de parte
oiria con gusto todas las proposiciones que se
base reco
del gobierno español, siempre que tuviesen por
el
siciones de Morillo.
" La guerra, pues, dice Baralt, al apreciar en su historia
como al Congreso, les dio los títulos que por sus grados y
VI
teridad.
rias.
VII
Revolución, no se le ocultan al
ciaciones habia cobrado la
derivar de un
Libertador las ventajas inmensas que podía
pernicioso á sus contrarios por lo que
estado de cosas tan ;
el generalísimo español, se
interna hacia Ca-
paba áTrujillo ;
VIII
IX
XI
de Abril de 182 1.
A pesar de las bajas sufridas por el ejército español, La Torre
POR EDUARDO BLANCO. MS
contaha todavía con ii.ooo soldados resueltos, disciplmadot
y aguerridos.
cuartel general.
nuevo.
rOR EDUARDO «LAN'CO. »»$
XII
I>eligroso contendor ;
por lo que obrando con acierto, se pro-
pendientes.
21 VENEZUELA HEROICA
ardimiento su paso es
: el del huracán : fuerza en Tacarígua los
po de San Mateo.
Alarmado La Torre, por los efectos de aquella audaz acome-
XIII
cuartel general.
XIV
acontecimientos humanos.
Aquel canipo que la temeridad presumia arrebatarnos, era
nuestro, nos pertenecía por derecho de victoria. Su nombre
estaba escrito al lado de los más altos y magníficos triunfos
fué propicio.
prolongada lucha !
XV
sombra.
Tan luL-go como el ejército español se hubo establecido en
CaraboL o con todo el parque y material de guerra indispen-
VINFZUELA HEROICA
ción de Páez.
pos de su ejército.
que venia desde Achá(;uas, llega al fin i San Carlot ; i ooo in-
de abrir operaciones.
XVI
Desde las galeras del Tinaco hasta las orillas del Cojédes
espacio (jue nuestras tropas ocupaban, un víctor inmenso y pro-
XVII
de escabel.
"
Libertador.
aaS VENEZUELA HEROICA
XVIII
apodo de Primero.
La 2? regíala el General Cedeño, el bravo de los bravos, como
le llamó el Libertador, y el Coronel JúJas TaJeo Piñango ; y
contaba en sus filas los batallones " Tiradores," mandado por
el fogoso Héras ;
" Boyacá " ilustrado en el campo á que debia
su nombre, á las órdenes de Flegel y de Smitli ; " Vargas "
del Libertador, la cual lormaban los batallones " Rifles " que
XIX
ral)obo.
XX
pasillo formado
primera por una abertura natural, especie de
por la separación de las dos extremidades de aqueU.i
caprichosa
la planicie
cadena de colinas que sirven como de antemural á
por la vía de San Carlos.
XIV
á la llanura.
ejército.
lentitud. Sólo se oyen
Trascurre un hora con desesperante
de las trepas realistas y los rugidos de su vigorosa
los fuegos
es ti silencio en nuestras
filas'
artillería. Profundo y solemne
tiempo corre, la impaciencia se au-
la quietud angustiosa ; el
vanguardia al enemigo, es
Aquella primera réplica de nuestra
señal de acometer y las dos divisio-
para los otros cuerpos la ;
atropelladamente por la
nes de Cedeño y de Plaza se lanzan
XXII
•""""' '"""*'""'
pucolo rsm«»"-l-^.- '""="'"
v.c.or.a en
contranos,
Z llegaron á mezclarse; y
entonces, rotas las
bayonetas y des-
XXIII
en muro de granito.
existen :
y el resto de la oficialidad ha sido herida. La Legión
se levanta y acomete ; y en el sitio donde á pié firme hubiera
242 VENEZUELA HEROICA
roja arena.
XXIV
caballería.
'^^
POR EDUARDO BLAMCO.
a.,uc«a carga, no
rechazad, i -".-•
.. a n,om.n.o :
J"-' a
jomada, todos los cuen.os cnem.go.
noncr en riego la
oponer.
!"1 con calurosa decU.on.
.'ie. s61o ,.uede
rrn.n,erodelan.as.„o«.c...s.nen..argo.,aer.cu^^^^^^^^
s
exceptuar los ).-fcs j ofic.aks le i
encontrados escuadrones.
en
de su caballeHa que
Páez reúne, entre tanto, los trozos
el mayor
la llanura. Su ansiedad por allegar
.amenté salen á
alentadora d su diezma
:!. sin pnvar de su presencia
veni.inosa que lan -
nU.a., s'e descubre en la rapidez
así se
para acudir á todas partes,
su impetuoso caballo por
rojo penacho baudo
,r entre eUevuelto torbeUmo su
inestinguible. alma
liento, cual una
llama errante, veloz,
:;
de la batalla,
provocadora del incendio.
inquietante especativa
que sufren
De pronto, en medio i la
¡44 VENEZUELA HEROICA
apodo de ^^
el primero." (•)
XXV
XXVI
de su historia inmortal.
ya fugitivos compañeros.
:
XXVII
XXVIII
empero, algo aun más terrífico que el bote de las lanzas, los
relámpagos, " Araure " y " La Victoria", "San Mateo", " Vigi-
rima", " El Juncal " y " San Félix", " Boyacá " y " Las Quese-
de millares de víctimas.
El ejército de Fernando el Deseado estaba vencido, y ven-
cido sin gloria. Kmpcro, la vergüenza de a<iuel abatimiento
XXIX
2 52 VENEZUELA HEROICA
XXX
su disco, Valencej.
(") En comprobación
del enérgico carácter del Coronel Don Tomas
García, cuéntase que mandando en una parada el ejercicio de fuego á un
:
bandados.
Revueltos, confundidos, dejando el campo cubierto de des-
generosos pechos.
XXXI
na ; revive la lucha.
fatigados batallones.
apetito.
midable garra sobre el sangriento flanco que incita su
nuestros llaneros acome-
Siguiendo su acostumbrada táctica,
otra
para ganar distancia y embestir
ten, chocan y rotroceden
García
ve/ con más violencia. Entre una y otra acometida.
XXXII
los
De esta suerte, siempre acosadosy siempre resistentes,
de la llanura y ganar
Granaderos españoles, logran salir al fin
laaccidentadarutadeValencia, donde con menos riesgo pue-
ponen en juego
frente á nuestros escuadrones;
allí
den hacerle
salvadas del desastre, y ora apoyados
dos piezas de artillería
ten con tal furia que espanta. Muí caro paga Valencey su
intrepidez y arrogancia, de sus compactas filas .ve arrebatar sus
bala que los echa por tierra y al espantado bruto que, sordo á
ios reclamos de la espuela, esquiva el fuego de la fusilería 6 §§
POR EDUARDO BLANCO. 259
pañoles.
cuando García sintió gravitar sobre sus
Oh ! fué entonces
valor
completa ruina de La Torre y que asombrado ante
el
pertinaces,
creciente y la inagotable fortaleza de sus contrarios
XXXIII
¡
Destino, quién pudiera penetrar tus arcanos !
cae sin vida sobre las bayonetas enemigas sin haber dado cima
á aquella su temeraria empresa.
Con aquella catástrofe, los contrapuestos lidiadores, á la par
IB
262 VENEZUELA HEROICA
XXXI 7
i
Así, tus hijos, patria mia, supieron batallar por conquistar
su libertad é independencia !
¡ y así murieron los que plugo al
llo
"
; minutos después estaba muerto.
ta independencia de Colombia.
Hacia siete años que Bolívar no franqueaba las puertas de
colonias de América.
XXXV
é intereses, riñeran con sin igual bravura eni prot de sus Ima-
deras.
Una misma religión, idénticas costumbres, igual carácter,,
noble y generoso en los arranques de genial expansión, á la
vez que temible en las apasionadas manifestaciones de cólera