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Région - Dyzmaal Kivutar

En la extensión de los continentes se encuentran numerosos misterios, riquezas, ruina, bellas


maravillas y las peores pesadillas. Mientras la especie humana continúa su lento y constante
avance hacia afuera de las pequeñas islas que la constreñían, se ha dado cuenta que, con toda
seguridad, su aparentemente benigno encarcelamiento ha sido una bendición, pues en los
territorios de afuera aguarda un mundo para el que el ser humano natural no podría sobrevivir.

Ese es el caso de Dyzmaal Kivutar. También llamado "The lushly hell" or "somber wilderness",
es bosque de extensión y una variedad nunca antes vista. Se estima que tendrá miles de
yaacht, nunca bordeando la costa, siempre tierra adentro.

• Las primeras expediciones fueran brutalmente torturadas, y no fue hasta diez y siete años
después que la expedición número cincuenta y dos tuvo un fin positivo, logrando escapar mal
herido uno solo de los expedicionarios, que trajo consigo información importante.
   • Dentro, una combinación de árboles y hongos anormalmente enormes tapa casi por
completo todo rastro de luz.
   • Dentro, tanto la flora como la fauna resultaron ser letales en extremo. De hecho, la
expedición no pudo adentrarse más que unos cuantos metros, pues un batallón de raíces y
esporas atraparon a todos los expedicionarios menos uno, pudiéndose escuchar sus peticiones
de auxilio y auyidos de agonía mientras el único superviviente corría lanzando tajos con ambas
manos hacia las raíces y demás plantas de enorme tamaño. El joven llamado Edmoh Rolerk
relató haber visto lo que parecían escarabajos del tamaño de un niño corriendo hacia ellos,
tomando por sorpresa a los hombres que estaban tomando muestras y haciendo bocetos,
cuando les emboscaron las raíces y esporas.
   • Durante cierta expedición, una sacerdotisa noksiana llamada Flur Dalcórt fue atacada con
menos dureza que sus pares, y luego de no resistirse a un breve tiempo de tortura, fue dejada
en libertad, pudiendo renquear fuera del infierno verde, aún siendo observada por criaturas que
dibujaría y describiría apenas fuera socorrida por el equipo médico en el campamento.
     • Entre las criaturas que dibujó, estaban:
        • Un gran gato repleto de flores en su lomo y cabeza, exento de ojos.
        • Una variante del escarabajo gigante ya conocido, aportando que la estatura de estos era
más bien la de una mujer alta, gracias a un cuerno enorme segmentado como hoja de maple.
        • Los árboles que parecían reptar con casi inperceptibles movimientos fuera de su camino.
        • Los hongos gigantes también demostraban capacidad motris, ejecutando un leve un
contoneo como de caderas.
   • Después de éste incidente, Delacórt, junto con un grupo reducido de escolapios
desarrollaron la teoría de que solo aquellos que no pelearan a la naturaleza serían capaces de
entrar y no correr peligro; pensamiento que enseguida degeneró en un ambientalismo extremo,
clamando por erradicar la impureza y maldad, no solo del ser humano, sino de todas las
especies que cambiaban el orden natural del mundo, y llamando a una revolución para dejar de
explotar los recursos del mundo y regresar a cuando los seres humanos vivían en su faceta
más salvaje: pura. El grupo ambientalista y sus proclamas fueron desestimadas como locura,
no sin razón, y se les expulsó de la academia, extenidendose un edicto hacia las naciones
aliadas para ignorar al grupo radical. Igualmente, no tuvieron suerte con naciones no aliadas.
No fue hasta que sus ideas empezaron a propagarse por algunos miembros de la academia
humana, su mensaje llegó a los oídos de la regente de la prestigiosa casa Molher, encargada
de fabricar y distribuir todo tipo de telas y perfumes, que los ambientalistas encontraron una
fuente de ingresos exorbitantes y una voz fuerte para la discipacion de su ideología. Aún así, a
sabiendas de la fuerte oposición que tenían sus ideas en el mundo humano, Molher dedicó
buena parte de sus recursos a organizar en el mayor secretismo numerosas expediciones
hacia tierra mala.
• Dyzmaal Kivutar fue olvidada por la mayoría de la gente, ignorada por los exploradores y los
empresarios, quienes veían en esa parte del continente pérdidas solamente. Fue una enorme
sorpresa cuando doce años después de la última expedición oficial, una partida de caza
pertenecientes a una empresa dúbrina se topó con lo asombroso: la muralla. Tanto tiempo
había pasado, y los límites de Dyzmaal ahora estaban rodeados por una muralla de unos siete
metros allá hasta donde abarcaba la vista. Mezcla de formidables ladrillos y pedruscos de gran
tamaño con gruesos árboles intercalados. No se tardó mucho en correr la noticia, y las
autoridades se hicieron presentes, encontrando un recibimiento hostil por parte de las criaturas
al otro lado de la muralla. Espionage encontró estructuras de distintos estilos humanos, y una
serie de humanoides parte planta.
• Esa ciudad se nombró El Anillo, y es un lugar donde un selecto grupo de seres humanos ha
sido capaz de adentrarse un poco en Dyzmaal Kivutar y han desentrañado algunos de los
secretos que esconde ese infierno verde.
• La mezcla de carne y planta es algo común.
• Las ciencias y la magia de ese lugar se centra en el uso de todos los materiales de dentro de
la tierra mala: tónicos, aumentos, drogas, alucinógenos y magia basada en plantas.
• Después de que los humanos se asentaran, numerosas criaturas humanoides empezaron a
aparecer dentro de la tierra mala, y muchos personajes relacionados han salido al mundo,
realizando actos notables.

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