Está en la página 1de 1

¡Hola!

Mi nombre es T, y me han animado desde la Clínica a compartir con vosotros mi testimonio de


Anorexia. Todo empezó cuando tenía 13 años. Comencé a controlar lo que comía, me sentía intimidada
en la escuela, donde todas me llamaban gorda.

Esto ocurrió al mismo tiempo en el que mis padres decidieron separarse. Recuerdo que me sentía
triste y que no tenía control sobre mi vida.

"Dejé de comer porque mi cuerpo era lo único que podía controlar en mi vida".

Fue así como empecé a comer menos y a hacer mucho ejercicio, me puse muy enferma. No podía
caminar o hablar con mis amigos. Ni siquiera podía estar despierto durante mucho tiempo, mis huesos
se estaban desintegrando, tenía anemia, una serie de dolencias, esta “Es una enfermedad dura que
te convierte en un monstruo” es una batalla diaria de una familia con un adolescente.

Por eso estuve bajo tratamiento en la Clínica CTA y a pesar que mis padres estaban separados
aprendimos muchas cosas, entre ellas a comunicarnos entre nosotros, a disfrutar, valorar mí
alrededor, y a comer. Me dieron el alta, pero sobre los 16 años caí con Bulimia esta vez. Fue muy duro
volver a aceptar que tenía otro trastorno alimentario. Sin darme cuenta volví a usar la comida como
vía de escape a mis problemas y frustraciones, exigencias con los estudios y ahora con ganas de salir
y pasarlo bien. Me costó aceptar que tenía Bulimia, pero lo hice y me centré en curarme dejando de
lado los estudios universitarios. Aquí aprendí a ponerme límites, a elegir, a escucharme, a quererme
y a ser feliz. Aprendí a quererme viéndome en el espejo, a verme cada día y gustarme. Esto último
fue lo más difícil.

Dejé el tratamiento de Bulimia cuando realmente me sentía muy bien conmigo misma, que no fue con
mi peso “ideal”. ¿Porque me fui sin un peso “ideal”? Porque llegó un momento en que no necesitaba
ningún peso para ser feliz, sólo un peso sano, el peso ideal pasó a otro plano.

No hubo ni un solo día en el que no me levantara pensando “hoy va a ser un buen día” y un nuevo día
pasaba en el que me esforzaba por estar bien y usaba todas las estrategias que había aprendido con
el equipo de CTA. Ahora la mayoría de veces estoy feliz, me quiero, me cuido, me valoro, y me esfuerzo
todos y cada uno de los días porque siempre sea así.

¡¡Mucho ánimo y espero que este testimonio de la Anorexia y Bulimia os haya servido!!

También podría gustarte