¿Cómo afectó en la evaluación de Mercados el COVID – 19?

Las empresas, tras la pandemia del COVID – 19, tuvieron que incorporar
nuevos procesos para detectar y evaluar anomalías en el comportamiento de
los consumidores y del mercado en general.
Por lo cual, para evaluar los mercados en plena crisis, primero se empezó por
identificar las ramificaciones potenciales de las tendencias de hábitos con el fin
de reconocer determinados productos u oportunidades comerciales.
El siguiente paso es categorizar los cambios de demanda, es decir, si es
probable que sean a corto o largo plazo y si eran tendencias existentes antes
de la pandemia o si surgieron desde que comenzó. Para luego evaluar que
tendencias seguir y cuáles moldear de manera más agresiva.
El impacto que ha tenido el COVID – 19 en los hábitos de los consumidores y a
su vez en la oferta y la demanda, ha llevado a que las empresas reevalúen sus
oportunidades de crecimiento basados en la nueva normalidad,
reconfigurando sus modelos de negocios para aprovechar mejor las
oportunidades nacidas de las tendencias y reasignando su capital de manera
más eficaz.

¿Regresando a la presencialidad todo será igual?

No, y esto se debe a que la pandemia de COVID – 19 ha perturbado
considerablemente el consumo mundial, obligando y permitiendo a las
personas desaprenderse de viejos hábitos y adoptar otros nuevos, incluso
amplificando y acelerando hábitos existentes como las compras electrónicas
en plataformas digitales. Por lo cual, las empresas han tenido que desarrollar
una compresión sistemática del cambio de hábitos de los consumidores
intentando adaptarse así a las nuevas tendencias, sabiendo diferenciar entre
las temporales y las duraderas.