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ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL

JURISPRUDENCIA
CIVIL PATRIMONIAL
ANÁLISIS Y CRÍTICA La doctrina de los actos propios entre el negocio
JURISPRUDENCIAL jurídico y el contrato. Historia de una importación
impracticable e injusta 111

ENTRE CORCHETES Si una donación es declarada nula. ¿Procede la


COMENTARIOS Y ANOTACIONES
restitución automática de los bienes donados? 138

BUZÓN DE ÚLTIMAS Las disposiciones del Código Civil sobre el fin ilícito
JURISPRUDENCIAS en un acto jurídico. ¿Son aplicables a una demanda
procesal? 145

TENDENCIAS JURISPRUDENCIALES Acción pauliana 148

LA DOCTRINA DE LOS ACTOS PROPIOS


ENTRE EL NEGOCIO JURÍDICO

¡ Análisis y crítica
jurisprudencial
Y EL CONTRATO
Historia de una importación
impracticable e injusta
Rómulo MORALES HERVIAS(*)

El autor, luego de efectuar un análisis histórico-comparativo acerca del origen


de la doctrina de los actos propios, y tras criticar las aproximaciones al tema
que suele efectuar un sector de la doctrina nacional, así como su posible incor-
TEMA poración a nuestro ordenamiento, concluye que ella resulta inaplicable entre
RELEVANTE nosotros, pues ya existen soluciones jurídicas a los problemas relevantes que
formula, así como porque promueve soluciones injustas y ajenas a nuestro
sistema jurídico.

CASACIÓN Nº 150-2004 fecha, producida la votación correspondiente de acuerdo


AREQUIPA a ley, emite la presente sentencia:
Lima, veintidós de julio de dos mil cinco 1. MATERIA DEL RECURSO

LA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y SO-


Es materia del presente recurso de casación la sentencia
CIAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE de vista de fojas ochocientos cincuentitrés, su fecha ocho
LA REPÚBLICA de agosto de 2003, expedida por la Segunda Sala Civil de
VISTOS; con los acompañados, vista la causa el día de la la Corte Superior de Justicia de Arequipa que, confirmando

(*) Abogado. Magíster por la Universidad di Roma “Tor Vergata”. Profesor Honorario de la Universidad Particular de Chiclayo.
Diplomado en Derecho Romano; y en Derecho de los Consumidores y de la Responsabilidad Civil por la Universidad di
Roma “La Sapienza”. Profesor de Derecho Civil en la Pontificia Universidad Católica del Perú y en la Universidad de Lima.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 111


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

la sentencia de fojas setecientos noventiséis, su fecha cua- dólares americanos como se ha consignado en el citado
tro de octubre de dos mil dos, declara fundada la demanda documento. 2.4. Que anteriormente han celebrado un acto
incoada por don Oswaldo Emigdio Yánez Cárdenas y doña similar, por el cual la sociedad conyugal Yánez-Llerena
Adelaida Nanci Llerena de Yánez, en los seguidos contra transfirió vía compraventa el predio rústico, a favor de la
don César Augusto Verano Serruto y doña Luz María sociedad conyugal Verano-Romero pactando la posibili-
Romero Rodríguez, sobre nulidad de acto jurídico y otro. dad de retrotraer el inmueble en el plazo de siete meses,
habiendo la sociedad conyugal Yánez-Llerena ejercido tal
2. FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DE- derecho, readquiriendo la propiedad del inmueble sub-
CLARADO PROCEDENTE EL RECURSO materia. 2.5. Que la modalidad de contrato de compra-
Mediante resolución obrante a fojas treintiséis del cuader- venta con pacto de retroventa, hipoteca y mutuo son utili-
nillo de casación, de fecha doce de marzo de dos mil cua- zados por el demandado con frecuencia, pues este se dedi-
tro, se ha declarado procedente el recurso de casación inter- ca a efectuar préstamos de dinero, contando para ello con
puesto por César Augusto Verano Serruto por la causal pre- intermediarios entre los que se encuentran doña Betty
vista por el inciso 2 del artículo 386 del Código adjetivo, Contreras Peña y don Luis Rivera Medina. Tercero: Efec-
relativa a la inaplicación de normas de derecho material. tuado un análisis de autos se tiene lo siguiente: 3.1. En el
asiento 3c) de la ficha número 23311 (fojas cinco) apare-
3. CONSIDERANDOS ce inscrita la escritura pública de fecha doce de abril de
Primero: Don César Augusto Verano Serruto, en efecto, mil novecientos noventa y cinco, por la cual la sociedad
denuncia la inaplicación de los numerales 140 y 1361 del conyugal Yánez-Llerena transfiere, vía compraventa, a
Código Civil, precisando que el acto jurídico –cuya nuli- favor de la sociedad conyugal Verano-Romero el predio
dad se pretende– contiene la declaración legal y válida de rústico de su propiedad denominado “Los Pacaes”, signa-
la voluntad que las partes manifestaron y que debe presu- do como unidad catastral número 10424, ubicado en el
mirse legalmente la veracidad de lo contenido, pactado y Distrito Santa Isabel de Siguas, Provincia de Arequipa,
declarado en el documento, no debiéndose anular un acto por el precio de nueve mil setecientos dólares americanos.
por hechos no probados, yéndose en contra del orden sus- En dicho acto la sociedad conyugal Verano-Romero (com-
tantivo. Segundo: Conforme aparece del escrito de de- pradora) concedió a la sociedad conyugal Yánez-Llerena
manda de fojas treinta, la sociedad conyugal conformada (vendedora) el derecho de retroventa por un plazo impro-
por don Oswaldo Emigdio Yánez Cárdenas y doña Ade- rrogable de siete meses contados a partir de la suscripción
laida Nanci Llerena de Yánez (en adelante la sociedad con- del contrato. Dicha transferencia fue inscrita el día diecio-
yugal Yánez-Llerena) pretende se declare la nulidad del cho de abril de mil novecientos noventa y cinco. 3.2. En el
acto jurídico de compraventa con pacto de retroventa con- asiento 4c) de la citada ficha (fojas seis) aparece inscrita
tenido en la escritura pública de fecha treinta de noviem- la escritura pública de fecha veintiuno de setiembre de mil
bre de mil novecientos noventicinco (obrante a fojas dos), novecientos noventa y cinco por la cual la sociedad con-
así como la nulidad del instrumento que lo contiene y la yugal Yánez-Llerena readquirió la propiedad del predio
inscripción registral respectiva. Como pretensión subor- rústico antes señalado, por haber ejercido el derecho a re-
dinada pretende se declare la resolución del citado contra- trotraer el inmueble, al devolver a los compradores (socie-
to. Dirige la demanda contra la sociedad conyugal confor- dad conyugal Verano-Romero) la suma de nueve mil sete-
mada por don César Augusto Verano Serruto y doña Luz cientos dólares americanos, correspondientes al precio del
María Romero Rodríguez (en adelante la sociedad conyu- inmueble. Dicho acto fue inscrito el día veintiocho de se-
gal Verano-Romero). Sostiene lo siguiente: 2.1. Que el acto tiembre de mil novecientos noventicinco. 3.3. Por escritu-
jurídico cuya nulidad se pretende es simulado pues en rea- ra pública de fecha treinta de noviembre de mil novecien-
lidad se ocultaba un contrato de mutuo celebrado entre tos noventicinco, obrante a fojas dos, la sociedad conyu-
don César Augusto Verano Serruto, en calidad de mutuante, gal Yánez Llerena transfirió nuevamente, vía compraven-
a favor de doña Claudia Yánez Llerena, en calidad de mu- ta, a favor de la sociedad conyugal Verano-Romero el mis-
tuaria, por la suma de siete mil dólares americanos. Que la mo inmueble (predio rústico “Los Pacaes”), por el precio
sociedad conyugal Yáñez-Llerena celebró el acto subma- de nueve mil dólares americanos. En la cláusula quinta de
teria con la finalidad de garantizar el cumplimiento de las la citada escritura pública la sociedad conyugal Verano-
obligaciones derivadas del mutuo. Agrega que el monto Romero (compradora) concedió a la sociedad conyugal
de nueve mil dólares americanos consignado en el docu- Yánez-Llerena (vendedora) el derecho de retroventa por
mento correspondía a siete mil dólares americanos por un plazo improrrogable de tres meses contados a partir de
concepto de capital y dos mil dólares americanos por con- la suscripción del contrato. Dicho título fue inscrito en el
cepto de intereses, que se debían devolver al mutuante. asiento 5c) de la ficha tantas veces mencionada, con fecha
2.2. Que la entrega del dinero se efectuó con posteriori- siete de diciembre de mil novecientos noventicinco (fojas
dad a la suscripción del documento de litis, pues es prác- seis). 3.4. Según el documento denominado “informe téc-
tica de los prestamistas asegurarse primero la satisfacción nico sobre tasación de un predio rústico” el valor del in-
del crédito para posteriormente entregar el dinero, costum- mueble submateria asciende a ochenticinco mil doscien-
bre submateria. 2.3. El valor real del inmueble materia de tos nuevos soles o su equivalente en dólares treintiún mil
transferencia –cuya nulidad se pretende– es de treintiún novecientos diez dólares americanos, esto es, tres veces
mil novecientos diez dólares americanos y no nueve mil más del precio pactado por las partes en el contrato de

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ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
compraventa con pacto de retroventa. Cuarto: De lo ex- cientos nueve, el referido título fue presentado por don
puesto precedentemente se infiere que las partes no tenían Luis Fernando Rivera Medina, quien consignó como do-
la voluntad de transferir el predio rústico submateria, pues micilio: “Santo Domingo 407E, Ofic. 302, Cercado”. 5.5.
no parece lógico que la sociedad conyugal Verano-Rome- Finalmente, la escritura pública materia de nulidad fue
ro adquiera la propiedad del predio rústico por escritura presentada por doña Betty Contreras Peña, quien señaló
pública del doce de abril de mil novecientos noventicinco, domicilio en “Santo Domingo 407E, Ofic. 302”, confor-
la pierda por escritura pública del veintiuno de setiembre me aparece del formato número 049420 obrante a fojas
de mil novecientos noventicinco y la vuelva a adquirir por trescientos cuatro. 5.6. Finalmente, aparece a fojas tres-
escritura pública del treinta de noviembre de mil nove- cientos veintiocho que con fecha dos de diciembre de mil
cientos noventicinco, concediéndole –una vez más– la po- novecientos noventicinco (a los dos días de elevado a es-
sibilidad a los vendedores para que ejerzan el derecho de critura pública el acto de compraventa con pacto de retro-
retrotraer el inmueble. Por otro lado, tampoco es lógico, venta, materia de nulidad) se efectuó, en la cuenta de aho-
que la sociedad conyugal Yánez-Llerena transfiera su pro- rros moneda extranjera número 9651459-44, de propie-
piedad en la tercera parte de su precio. Quinto: De otro dad de don César Augusto Verano Serruto, un retiro en
lado, se llega a la conclusión que la demandada, sociedad efectivo por la suma de siete mil dólares americanos, lo
conyugal Verano-Romero, se dedica, a través de interme- que concuerda con la alegación vertida por los deman-
diarios, a prestar dinero. En efecto, ello se encuentra acre- dantes. Sexto: En consecuencia, se encuentra acreditado
ditado con los siguientes medios probatorios: 5.1. Las pu- que las partes en realidad querían celebrar un contrato de
blicaciones en el diario “El Pueblo”, sus fechas veintidós, mutuo, sin embargo, celebraron un contrato de compra-
veintitrés y venticuatro de noviembre de mil novecientos venta con pacto de retroventa. En consecuencia, estando
noventicinco, obrantes a fojas dieciocho, diecinueve y vein- acreditada la simulación con la que actuaron las partes, la
te, respectivamente, donde se ofrece préstamos en dinero aplicación de las normas contenidas en los artículos 140 y
en las siguientes direcciones: “Santo Domingo 103” y 1361 del Código Civil en nada cambiarían el sentido de la
“Santo Domingo 407E, Ofic. 302”. 5.2. En el asiento 3d) decisión adoptada por las instancias de mérito.
de la ficha número 164043 (fojas trece-catorce) aparece
inscrita la escritura pública de mutuo con garantía hipote- 4. DECISIÓN
caria de fecha ocho de agosto de mil novecientos noventi- 4.1. Declararon INFUNDADO el recurso de casación in-
cinco (que en copia corre a fojas trescientos once y si- terpuesto a fojas ochocientos sesenticinco y subsanado a
guientes), por la que don César Verano Serruto concede a fojas ochocientos setentisiete por don César Augusto Ve-
la sociedad conyugal compuesta por don Juan Bautista rano Serruto, contra la resolución de vista de fojas ocho-
Benavides Callani y doña Dominga Huanca Vilca de Be- cientos cincuentitrés, su fecha ocho de agosto de dos mil
navides, un préstamo por la suma de ocho mil dólares tres.
americanos por el plazo de seis meses, fijando un interés
de dos punto cinco por ciento mensual. En el mismo acto, 4.2. CONDENARON al recurrente al pago de las costas
los mutuarios constituyen hipoteca a favor del mutuante a y costos originados en la tramitación del recurso, así como
fin de garantizar el cumplimiento de la citada obligación. a la multa de dos Unidades de Referencia Procesal URP,
Nótese que, conforme aparece del formato número 33890 en los seguidos por don Oswaldo Emigdio Yánez Cárde-
obrante a fojas trescientos catorce, el referido título fue nas y otra, sobre nulidad de acto jurídico y otro.
presentado por don Luis Fernando Rivera Medina, quien 4.3. DISPUSIERON la publicación de la presente reso-
consignó como domicilio “Santo Domingo 407E, Ofic. lución en el diario oficial El Peruano, bajo resposabili-
302”. 5.3. En el asiento 2c) de la ficha número 70921 (fo- dad; y los devolvieron.
jas quince) aparece inscrita la escritura pública de com-
praventa con pacto de retroventa de fecha veinte de abril SS. VASQUEZ CORTEZ; CARRIÓN LUGO; ZUBIATE
de mil novecientos noventicinco, celebrada por la socie- REINA; GAZZOLO VILLATA; FERREIRA VILDOZOLA
dad conyugal conformada por don Carlos Roberto Álva-
rez Arce y doña Jeanett Petrosinia Fernández Zegarrade EL VOTO SINGULAR DEL SEÑOR VOCAL SUPRE-
Álvarez a favor de la sociedad conyugal Verano-Romero. MO FERREIRA VILDOZOLA ES COMO SIGUE:
5.4. En el asiento 8d) de la ficha número 6328 (fojas die- VISTOS; con los acompañados; y, CONSIDERANDO:
ciséis) aparece inscrita la escritura pública de mutuo con Primero: Que por resolución de fojas ochocientos seten-
garantía hipotecaria de fecha veinticinco de setiembre de tiocho se concedió el recurso de casación y, mediante re-
mil novecientos noventicinco, por la que la sociedad con- solución obrante a fojas treintiséis del cuadernillo forma-
yugal compuesta por don Leocadio Nina Arana y doña do en este Supremo Tribunal, de fecha doce de marzo de
Elizabeth Mirayba Díaz Meza de Nina, constituyen hipo- dos mil cuatro, fue declarado procedente por la causal de
teca sobre el inmueble de su propiedad a favor de César inaplicación de los artículos 140 y 1361 del Código Civil,
Verano Serruto, a fin de garantizar hasta por la suma de razón por la cual es menester analizar sus fundamentos.
trece mil dólares americanos, el cumplimiento de las obli- Segundo: Que, el proceso que motiva la interposición del
gaciones derivadas de mutuo a cargo de don Agapito Nina recurso casatorio es uno de nulidad de acto jurídico que
Arana y doña Julia Apaza de Nina. Nótese que, conforme aunque las instancias de mérito la han enmarcado dentro
aparece del formato número 57082 obrante a fojas tres- de la causal por simulación relativa, razones que a conti-

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 113


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

nuación se exponen, permiten establecer que no se trata impugnado manifestaron su voluntad de manera autóno-
en realidad de uno de nulidad por simulación absoluta ni ma aunque aparente, además que en el supuesto de ser
tampoco relativa. Tercero: Que, refiere Compagnucci de simulación absoluta las partes no habrían querido ese ni
Caso, citando a Ferrara, que “la simulación es la declara- ningún otro negocio jurídico pues solo hubieran pretendi-
ción de un contenido de voluntad no real, emitida cons- do ocultar la realidad precedente, aspecto que tampoco se
cientemente y de acuerdo entre partes, para producir con condice con lo actuado pues, las instancias de mérito han
fines de engaño la apariencia de un negocio jurídico que dejado establecido que en lo que en realidad ocultaba el
no existe o es distinto de aquel que realmente se ha lleva- contrato de compraventa con pacto de retroventa era un
do a cabo” (Rubén H. Compagnucci de Caso. El Nego- contrato de mutuo. Noveno: Que, pensamos por otro lado
cio Jurídico. Editorial Astrea. Buenos Aires. 1992). que tampoco se dan los supuestos base para la causal de
Cuarto: Que, la simulación absoluta, conforme al artícu- simulación relativa por cuanto, si bien tras aquel contrato
lo 190 de Código Civil resulta ser cuando las partes crean de compraventa con retroventa se escondía en realidad
la apariencia exterior de un acto jurídico, del cual no quie- un contrato de mutuo, sin embargo, conforme ha quedado
ren los efectos, por lo que el acto nada tiene de real; en establecido, las mismas partes con anterioridad habían ya
efecto, como refiere Lohman Luca de Tena: “En la simu- suscrito un contrato de compraventa con pacto de retro-
lación absoluta el acto efectivamente se celebra y objeti- venta en los mismos términos; de lo que se advierte en el
vamente tiene realidad existencial y fenoménica, sin em- presente caso una dosis razonable de buena fe en la parte
bargo los intervinientes no tienen deseo ni intención ver- demandada, lo que en su momento no fue cuestionado por
dadera respecto de su contenido y función, pues no quie- el demandante pues nada dice al respecto, por lo que exis-
ren que surta eficacia definitiva y auténticamente vincu- te un precedente razonable para pensar que, en este caso,
lante con el contenido y los efectos típicos de tal nego- de igual modo existió buena fe de uno de los contratantes;
cio”. Quinto: Que, en cambio para que se configure la además que la acción para invocar la simulación relativa
simulación relativa prevista por el artículo 191 del citado había prescrito a los dos años si tomamos en considera-
Código deben existir dos actos en los que intervenga la ción que el acto cuya nulidad se pretende data del treinta
voluntad de las partes: el acto oculto que es el que contie- de noviembre de mil novecientos noventicinco, habién-
ne la voluntad real y el acto aparente que es el que en dose interpuesto la demanda en enero de mil novecientos
definitiva se celebra, o como refiere el propio Compag- noventa y ocho, por aplicación de lo dispuesto en el inci-
nucci de Caso citando a Ferrara, en la obra citada: “En la so 4 del artículo 2001 del Código Civil. Décimo: Que,
simulación relativa, la figura aparente del negocio sirve con relación al tema de la buena fe, debemos detenernos
para engañar al público, pero detrás de esa falsa aparien- un momento en la denominada Teoría de los Actos Pro-
cia se esconde la verdad de lo que las partes han querido pios, la que consiste en el proceder de un sujeto que obje-
realizar y sustraer al conocimiento de terceros”, se habla tivamente crea confianza en otros y que mantendrá ese
en consecuencia de dos negocios, uno ostensible y mani- comportamiento de forma tal que viene a constituir una
fiesto que es el que se muestra, pero que es fingido, y otro suerte de promesa de una futura actuación coherente con
que tiene el verdadero carácter. Sexto: Que, en el caso de un acto que ya se ha realizado; situación que según se
autos, conforme aparece de los términos de la demanda, la observa, resulta ser una derivación directa del principio
sociedad conyugal Yánez Llerena pretende se declare la de buena fe, según la disposición regulada en el artículo
nulidad del acto jurídico de compraventa con pacto de 1362 del Código Civil, dentro del capítulo de los contra-
retroventa contenido en la escritura pública de fecha treinta tos en general, el cual establece que los contratos deberán
de noviembre de mil novecientos noventicinco, así como negociarse, celebrarse y ejecutarse según las reglas de la
de la nulidad del instrumento que lo contiene y la inscrip- buena fe y la común intención de las partes. Décimo Pri-
ción respectiva. Dirige la demanda contra la sociedad con- mero: Que, siguiendo a Alejandro Borda sobre el tema en
yugal conformada por los esposos Verano-Romero. Séti- comento, en citación a Díez-Picasso refiere: “Cuando una
mo: Que, sin embargo según ha quedado establecido a lo persona ha suscitado en otra, con su conducta, una con-
largo del proceso, hecho que no ha sido desmentido por fianza fundada –conforme a la buena fe– en una determi-
las partes, anteriormente las mismas partes habían cele- nada conducta futura, no debe defraudar la confianza sus-
brado un acto similar por el que la sociedad conyugal citada y resulta inadmisible toda actuación incompatible
Yánez-Llerena había transferido vía compraventa el mis- con ella, esto es, la confianza no se deposita en una apa-
mo predio rústico a favor de la sociedad conyugal Vera- riencia jurídica sino en la obligatoriedad de comportarse
no-Romero, pactando la posibilidad de retrotraer el refe- coherentemente”; por lo que, prosigue el autor argentino,
rido bien en el plazo de siete meses, habiendo ejercido la “Sería ir contra los propios actos atacar de nulidad un con-
sociedad conyugal Yánez-Llerena tal derecho en una opor- trato cuando le resulta incómodo o perjudicial si lo ha
tunidad, readquiriendo la propiedad del citado bien. Oc- considerado válido por años y se ha beneficiado de él, por
tavo: Que, por tanto, en el caso de autos no podría darse lo que no resulta posible invocar la nulidad de un contrato
la figura de la nulidad por simulación absoluta por cuanto cuando ha dejado de beneficiarlo, porque ha de tenerse en
ella, conforme a lo anotado, requiere la inexistencia de cuenta que el contrato siempre es el mismo (…), por ello
voluntad para celebrar el acto jurídico, situación que no debe declararse inadmisible la pretensión de colocarse en
se advierte en el sublite por cuanto las partes en conflicto contradicción con su conducta anterior deliberada y jurí-
en el contrato de compraventa con pacto de retroventa dicamente relevante, más allá que de dicha pretensión si

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ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
fuera tomada individualmente sea legítima y pueda ejerci- la calificación indebida de la demanda y se prosigue
tarse; lo que ocurre es que resulta inadmisible cuando se cuando el a quo a fojas doscientos cuarenta y siete den-
toma como punto de referencia la primera conducta por- tro de la fijación de los puntos controvertidos señala
que –en definitiva– la regla venire contra factum pro- entre otros: “Establecer si procede la nulidad del con-
prium limita los derechos subjetivos, fundándose en el trato de compraventa con pacto de retroventa de fecha
deber de actuar coherentemente, (…) y ello es así por 30 de noviembre de mil novecientos noventicinco y por
cuanto no solo la buena fe sino también la seguridad qué causal”, cuando lo más razonable resultaba en todo
jurídica se encontrarían gravemente resentidas si pu- caso, solicitar que el demandante establezca de manera
diera lograr tutela judicial la conducta de quien traba precisa el petitorio de su demanda, la que fue admitida
una relación jurídica con otro y luego procura cance- por la causal de nulidad absoluta por simulación, lo que
lar parcialmente sus consecuencias para aumentar su eventualmente impidió el ejercicio de la defensa de for-
provecho. Nadie puede ponerse de tal modo en con- ma pertinente. Asimismo, se advierte que las instancias
tradicción con sus propios actos ejerciendo una con- de mérito, al margen que han establecido inadecuada-
ducta incompatible con la asumida anteriormente” (La mente la nulidad del acto jurídico invocado dentro de
Teoría de los Actos Propios. Alejandro Borda. Edi- la causal de simulación relativa por las razones expues-
ciones Abeledo Perrot. Buenos Aires. Argentina tas, no se han pronunciado en absoluto dentro de dicho
2000). Décimo Segundo: Que la postura doctrinaria contorno, por la subsistencia o no del contrato de mu-
anteriormente descrita, aunque no se encuentra muy tuo conforme correspondía a la causal resuelta, fallan-
enraizada en nuestra jurisprudencia, lo que no sucede do contra el principio de congruencia al resolver por la
en otras latitudes como en la Argentina, y al margen nulidad relativa cuando la demanda fue por la causal
que ella no se encuentra regulada en nuestro sistema de nulidad absoluta. Décimo Quinto: Que, finalmen-
jurídico, creemos pertinente su adecuación al caso su- te, en cuanto al recurso de casación, al margen de los
blitis, por cuanto ayudaría a dilucidar muchas contro- presupuestos de la causal declarada procedente –inapli-
versias sobre este tipo de casos y en el entendido que la cación de los artículos 140 y 1361 del Código Civil–,
norma jurídica, como señala Marcelo López Mesa, “No no encajan dentro del sistema de simulación absoluta
es tan solo un mandato de sentido y alcance inalterable, ni el de simulación relativa por lo aquí expuesto, y aun
que siempre exige una misma interpretación, sino que cuando no se haya denunciado otras causales que bien
por el contrario admite muy diversas aplicaciones en pudieron haber servido para un mejor análisis del the-
función de las circunstancias siempre cambiantes de la ma decidendum y por la inidoneidad del recurso al no
realidad social y en el entendido que el juzgador puede corresponder a la Sala casatoria suplir a las partes fren-
dar a una norma o conjunto de normas, la interpreta- te a los errores cometidos o no señalados oportunamen-
ción que parezca más adecuada al momento en que vive” te en la tramitación del proceso, por cuanto ello signifi-
(La Doctrina de los Actos Propios en la Jurispru- caría incurrir en una flagrante desnaturalización ya no
dencia. Marcelo J. López Mesa. Ediciones De Pal- del recurso de casación, sino del sistema casatorio. Por
ma. Buenos Aires. Argentina 1997, página 15). Dé- cuyos fundamentos MI VOTO es porque se declare IN-
cimo Tercero: Que, en el caso de autos, el recurrente FUNDADO el recurso de casación interpuesto a fojas
no podría ahora alegar una mala fe respecto de la otra ochocientos sesenticinco y subsanado a fojas ochocien-
parte por cuanto conforme a lo anotado, existía un pre- tos setentisiete por don César Augusto Verano Serruto,
cedente contractual entre las mismas partes el cual no en consecuencia, NO CASAR la sentencia de vista de
fue impugnado oportunamente por el demandante, por fojas ochocientos cincuentitrés, su fecha ocho de agos-
lo que mal podría ahora acogerse el demandante a la to de dos mil tres, se CONDENE al recurrente al pago
invocación de nulidad de acto jurídico al presumirse de las costas y costos originados en la tramitación del
respecto de la otra parte buena fe contractual. Décimo recurso, así como a una multa de dos Unidades de Re-
Cuarto: Que, asimismo, el demandante lejos de encau- ferencia Procesal URP, y se DISPONGA la publica-
sar adecuadamente el petitum de su demanda, no ha ción de la presente resolución en el diario oficial El
cumplido con precisar de manera específica dentro de Peruano; y los devolvieron.
qué causal se encuentra la nulidad absoluta del acto
jurídico invocado, incertidumbre que se continua con SS. FERREIRA VILDOZOLA

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 115


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

ANÁLISIS Y CRÍTICA
JURISPRUDENCIAL

I. INTRODUCCIÓN fue el mismo. Los argentinos imitaron a los españoles y


La decisión de escribir este artículo nació de varios hechos los chilenos imitaron a los argentinos. Los peruanos no
concretos. El hecho de conocer una propuesta normativa, que fuimos indiferentes como lo veremos a continuación.
en lugar de aclarar las cosas las complicaba, que importaba
Así las cosas, en las Novenas Jornadas Nacionales de
la doctrina de los actos propios con la etiqueta de regla de
Derecho Civil organizadas por la Universidad Nacional
derecho y de principio general del Derecho (¡!). También el
de Mar de Plata de la República de Argentina en 1983, la
hecho de saber que la misma se estaba utilizando en sede
Comisión Nº 8 aprobó las siguientes consideraciones so-
judicial y arbitral sin reparar en sus consecuencias prácticas
bre la doctrina de los actos propios(3).
en el futuro. Otro hecho fue escuchar cómo los alumnos y los
abogados hablaban de tal doctrina sin mucha convicción. La “1) El principio jurídico que desestima pretensiones con-
seguridad inicial que mostraban al inicio era impresionante tradictorias respecto de conductas anteriores, se plasma
pero luego de algunas preguntas mínimas se perdían en ex- en la regla venire contra factum proprium non valet.
plicaciones estériles y al final confesaban que lo habían es-
cuchado de sus profesores o lo habían leído superficialmen- 2) Dicha regla encuentra fundamento en la buena fe obje-
te. La bibliografía iberoamericana en general no ayudaba a tiva, en la doctrina de la apariencia, y en otros institutos
clarificar el contenido de la doctrina. Ante ello tuvimos que jurídicos de cuño semejante.
convertirnos en exploradores de diferentes sistemas jurídicos 3) No es invocable cuando la ley regula la solución expre-
y en particular concentrarnos en algunas familias jurídicas. sa para la conducta objetivamente contradictoria, sea im-
No había otra manera de afrontar el estudio de esta doctrina. pidiéndola o permitiéndola, o en general cuando la varia-
A lo largo de la redacción descubrimos muchas verdades ción de esa conducta está justificada por las circunstan-
ocultas que las revelaremos paulatinamente. cias del caso, o hay intereses sociales prevalentes.
La doctrina de los actos propios nació en el Derecho Ro- 4) El pedido de desestimación de la pretensión posibilita
mano y ha tenido un desarrollo amplio en los tribunales la aplicación de oficio de la regla venire contra factum
europeos. Se ha dicho que en el Perú “la teoría de los actos proprium non valet en razón del jura novit curia, si no
propios ha sido y es una doctrina utilizada de manera recu- hubiera menoscabo para el derecho de defensa en juicio.
rrente en procesos judiciales y arbitrales en los últimos diez
años”(1). En realidad, honestamente no podemos corroborar 5) Los requisitos de su aplicación son los siguientes:
matemáticamente lo expresado pero el voto singular de la a) Una situación jurídica preexistente.
sentencia que comentaremos es un buen pretexto para estu-
diar una doctrina muy poco estudiada en nuestro medio, la b) Una conducta de sujeto, jurídicamente relevante y efi-
cual es muy importante conocerla bien para conocer si es caz, que suscite en la otra parte una expectativa seria de
aplicable o inaplicable en nuestro sistema jurídico. comportamiento futuro.

Cuando empezamos a indagar jurídicamente sobre esta c) Una pretensión contradictoria con dicha conducta, atri-
doctrina comprobamos que la causa de su imitación es el buible al mismo sujeto.
“deseo de apropiarse de las atribuciones ajenas, cuando 6) Es invocable como defensa y también para fundar en
estas atribuciones están cargadas de una cualidad que nin- ella la existencia de un derecho.
guno sabe analizar, y que todos llaman ‘prestigio’”(2). Los
alemanes empezaron a imitar las doctrinas inglesas y lue- 7) El retraso desleal en el ejercicio de un derecho está com-
go los españoles los imitaron. En Sudamérica el fenómeno prendido dentro de la admisibilidad propia de la figura”.

(1) CASTILLO FREYRE, Mario. “Ni urgente, ni necesario; más bien: defectuoso, Comentarios muy críticos al Anteproyecto
oficial de Reforma del Código Civil de 1984”. Con la participación de Verónica Rosas Berastain. Palestra. Lima, 2005.
Pág. 38.
(2) SACCO, Rodolfo. “La comparazione”. En: Sistemi giuridici comparati. UTET. Turín, 1996. Pág. 30.
(3) En: http://www.garridocordobera.com.ar/pagina_nueva_94.htm (Acceso el 2 de febrero de 2006).

116
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
Estas conclusiones son en realidad importaciones de una tradicción existente entre la anterior conducta y la nueva
doctrina que muchas veces se recoge sin saber su conteni- pretensión. c) La identidad de sujetos que se vinculan en-
do ni su aplicación. Un ejemplo claro lo tenemos con una tre ambas conductas”(5).
reciente doctrina. En ese sentido y con absoluta seguridad
Se dice que se protege la confianza por un comportamien-
se ha dicho que la “teoría de los actos propios es una regla
de derecho, derivada del principio general de la buena fe, to coherente mediante la declaración de inadmisibilidad
que sanciona como inadmisible toda pretensión lícita, pero de la pretensión legítima por existir una contradicción con
objetivamente contradictoria con respecto al comporta- la conducta anterior. Buena pregunta hace Sacco sobre lo
miento anterior efectuado por el mismo sujeto. Se funda comentado: “El deber de coherencia –lo sabemos– nace
en la confianza que se despierta en otro sujeto de buena fe de un acto inicial creador de confianza. ¿Pero debemos
a raíz de una primera conducta realizada. Esta buena fe decir que todo acto o toda confianza crean el deber de
quedaría vulnerada si fuese admisible aceptar y dar curso coherencia?”(6). Por su supuesto que no. Así que los requi-
a la posterior pretensión contradictoria”(4). sitos necesarios formulados son incomprensibles.

Si la doctrina fuera una regla de derecho debería especifi- Este intento de sistematizar la doctrina de los actos pro-
carse los hechos y los efectos jurídicos aplicables a tal pios es inútil y por eso es imperativo resistematizar tal
doctrina. Pero no se entiende el sentido de acumulación doctrina.
de conceptos que forma parte de su discurso. Se habla del Sin embargo, esta doctrina lastimosamente ha influencia-
principio general de la buena fe (¡!), de sanción de in- do en nuestro medio. Lo preocupante es que incluso se ha
admisibilidad (¡!), de toda pretensión lícita objetivamente propuesto una modificación normativa al Título Prelimi-
contradictoria respecto de un comportamiento anterior (¡!), nar de nuestro Código Civil (en adelante CC).
confianza de tal comportamiento en un sujeto de buena fe
(¡!), y vulneración de tal buena fe por el ejercicio de la Un ejemplo lo tenemos cuando se explica una solución
pretensión contradictoria (¡!). jurídica en un caso concreto: “El arrendador después de
haber generado una confianza en el arrendatario (permitir
La doctrina argentina que comentamos intenta vanamente la demora en el pago de la merced conductiva), posterior-
determinar los hechos y los efectos jurídicos que expli- mente, no puede contradecir su conducta anterior solici-
quen la concretización de la doctrina de los actos propios: tando la resolución del contrato de arrendamiento por in-
“El fundamento de la teoría de los actos propios es la pro- cumplimiento del pago de la merced conductiva, más aún
tección de la confianza –conforme a la buena fe– en un si el arrendatario venía ejecutando sus prestaciones (pago
comportamiento coherente. Esto es importante destacar: de la merced conductiva) de buena fe. En este caso, cabe
el valor de guardar un comportamiento coherente obliga a aplicar la teoría de los actos propios, ya que no es lícito
declarar inadmisible la pretensión de colocarse en contra- pretender ejercer un derecho y que este tenga validez res-
dicción con la propia conducta anterior deliberadamente pecto de una conducta que ya existe y que se ha realizado
y jurídicamente relevante, más allá de que dicha preten- de buena fe”(7).
sión tomada individualmente sea legítima y pueda ejerci-
tarse” y de esta manera los tres requisitos necesarios para Como se podrá comprobar se incurre en yerros concep-
que pueda aplicarse la teoría de los actos propios serían: tuales inadmisibles. ¿Se estará refiriendo al acto ilícito en
“a) Una conducta anterior relevante y eficaz. b) El ejerci- materia de responsabilidad(8)? Se dice que no es lícito re-
cio de una facultad o de un derecho subjetivo por la mis- solver el contrato y por ello el derecho de resolver no es
ma persona que crea la situación litigiosa debido a la con- válido porque ya existe una conducta anterior que generó

(4) BORDA, Alejandro. “La teoría de los actos propios y el silencio como expresión de la voluntad”. En: Contratación
contemporánea, Teoría general y principios. Al cuidado de Atilio Aníbal Alterini, José Luis de los Mozos y Carlos Alberto
Soto. Palestra Editores. Lima, 2000. Pág. 72.
(5) Op. cit. Págs. 72-73.
(6) SACCO, Rodolfo. “Il fatto, l´atto, Il negozio”. Con la colaboración de Paola CISIANO. En: Trattato di diritto civile diretto
da Rodolfo Sacco. UTET Giuridica. Turín, 2005. Pág. 253.
(7) SOTO COAGUILA, Carlos. “Teoría de los actos propios”. En: Hechos de la justicia. Nº 5. Enero-Abril, 2005: http://
hechosdelajusticia.org/quinta/4.rtf (acceso: 31 de enero de 2006). Pág. 2. También: Id., “El Título Preliminar del Código
Civil peruano: ¿Reforma o enmiendas?”. En: El Código Civil del siglo XXI (Perú y Argentina). Ponencias presentadas en
el II Congreso Nacional de Derecho Civil, “Encuentro de las Comisiones de Reforma de los Códigos Civiles de Perú y
Argentina”. Organizado por la Comisión de Reforma de Códigos del Congreso de la República en la Ciudad de Arequipa
en agosto de 1999. Tomo I. Ediciones Jurídicas. Lima, 2000. Pág. 162.
(8) Sobre el acto ilícito: LEÓN, Leysser L. “Responsabilidad extracontractual (Apuntes para una introducción al estudio del
modelo jurídico peruano)”. En: La responsabilidad civil, líneas fundamentales y nuevas perspectivas. Editora Normas
Legales. Trujillo, 2004. Págs. 43-46.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 117


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

confianza. ¿La validez se refiere al derecho de resolver el para ver cómo los juristas de varios sistemas reconstruyen
contrato? ¿Toda conducta anterior genera confianza en los hechos según sus categorías”(15).
efectuar una conducta de buena fe? La licitud es un requi-
También justificamos el uso del método comparado por el
sito que se aplica al fin o a la causa conforme se puede
uso actual de la doctrina de los actos propios en nuestra
comprobar de una lectura sistemática de los numerales 4(9)
jurisprudencia judicial(16), en los tribunales arbitrales e
y 8(10) del artículo 219; y del artículo V(11) del Título Pre-
incluso en los organismos estatales que supervisan la in-
liminar del CC. De allí que la ilicitud se refiere al acto en
versión privada(17).
su momento constitutivo no en cuanto a los efectos jurídi-
cos subsiguientes al acto(12). El derecho de resolver un con- Veremos cómo la doctrina de los actos propios se desarro-
trato es un mecanismo de protección que otorga el ordena- lló en sistemas jurídicos del common law y luego influen-
miento jurídico si se producen determinados hechos jurídi- ció en algunos países del civil law como Alemania y Es-
cos diversos al hecho jurídico constitutivo del contrato. En paña de una manera diversa. Sudamérica no estuvo au-
el caso concreto era innecesario aplicar la doctrina de los sente de tal influencia.
actos propios. Bastaba invocar el argumento de que el con-
trato se había modificado por comportamientos concluyen- II. HISTORIA DE LA DOCTRINA DE LOS ACTOS
tes o mediante manifestaciones de voluntades tácitas(13). PROPIOS
El origen de la doctrina de los actos propios se encuentra
Es importante resaltar que el primer estudio sistemático
en la exceptio doli que implicaba un mecanismo de defen-
escrito en nuestro medio es el de Ortiz(14) y la sucesiva
sa del demandado según el cual podía oponer el dolo de la
doctrina peruana no ha tenido en cuenta tal exhaustivo
contraparte cometido al momento en que se celebró el ne-
estudio sobre una doctrina compleja de entender.
gocio o al momento que se ejercía la acción. Específica-
La pregunta que formulamos es la siguiente: ¿Es aplica- mente la exceptio doli generalis seu praesentis (excep-
ble o inaplicable la doctrina de los actos propios en el ción de dolo genérico o presente) se oponía al comporta-
Derecho Civil peruano? miento doloso que tenía “un contenido contrario a la bona
fides –es decir al genérico deber de comportarse según los
Para dar respuesta a nuestra pregunta usaremos el método cánones de la corrección– en el momento en que se ejercía
comparado mediante un análisis operacional que consiste la acción”(18).
en conocer el contenido de los conceptos y además en ve-
rificar su aplicación en una realidad jurídica concreta. Este Talamanca pone un ejemplo. En el caso que “Cayo pro-
análisis es importante porque “las categorías jurídicas meta, sin especificación de causa (v. § 114), a Ticio 10.000
son diversas de sistema a sistema y el comparatista debe sestercios (monedas), porque Ticio se compromete a dar
dirigirse a un análisis factual de las situaciones jurídicas un crédito de igual suma a Estico, esclavo de Cayo, que

(9) Artículo 219 del CC.- El acto jurídico es nulo:


4. Cuando su fin sea ilícito.
(10) Artículo 219 del CC.- El acto jurídico es nulo:
8. En el caso del artículo V del Título Preliminar, salvo que la ley establezca sanción diversa.
(11) Artículo V del CC. - Es nulo el acto jurídico contrario a las leyes que interesan al orden público o a las buenas costumbres.
(12) Quizá la confusión nace de la doctrina argentina descrita: BORDA. Op. cit. Pág. 74: “En efecto, ese derecho subjetivo
podría ser lícitamente ejercido si no hubiera existido la primera conducta; pero por ella es que su ejercicio resulta inadmi-
sible”.
(13) Invitamos a informarse a quien desconozca el concepto de manifestación y declaración: SCHLESINGER, Piero. Voz
“Dichiarazione” (Teoria generale). En: Enciclopedia del Diritto. Tomo XII. Giuffrè Editore. Varese, 1964. Págs. 371-384.
SCALISI, Vincenzo. Voz “Manifestazione”. En: Enciclopedia del Diritto. Tomo XXV. Giuffrè Editore, Varese, 1975.
Págs. 442-533. CASTIGLIA, Giuseppe. Voz “Manifestazione” (Diritto Civile). En: Enciclopedia giuridica, Istituto de la
Enciclopedia Italiana, Istituto Poligrafico e Zecca dello Stato. Volume XIX. Roma, 1990. Págs. 1-6.
(14) ORTIZ CABALLERO, René. “La doctrina de los actos propios en el Derecho civil peruano”. En: Derecho. Facultad de
Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Nº 41. Diciembre. Lima, 1987. Pág. 275.
(15) MATTEI, Ugo y MONATERI, Pier Giuseppe. “Introduzione breve al diritto comparato”. CEDAM. Padua, 1997. Pág. 11.
(16) En un caso se cita una sentencia argentina. Luego comprobaremos que la doctrina argentina ha importado un concepto
ajeno a nuestro sistema jurídico bajo argumentos confusos: DE TRAZEGNIES, Fernando. “La verdad construida: Algunas
reflexiones heterodoxas sobre la interpretación legal”. En: Themis, Revista de Derecho. Nº 51. Publicación editada por
alumnos de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Lima, 2005. Pág. 40.
(17) Así lo informa : DE TRAZEGNIES. Op. cit. Pág. 40.
(18) TALAMANCA, Mario. “Istituzioni di Diritto Romano”. Giuffrè Editore. Milán, 1990. Pág. 239.

118
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
ejercita una actividad en Sicilia, y si tal suma no es entre- his words or conduct) voluntariamente induce a otros a
gada, Ticio puede exigirla sobre la base de la stipulatio creer en la existencia de un determinado estado de hecho,
(acción fundada en base a la formulación abstracta de la y se comporta sobre esta base (on that belief), de modo
verborum obligatio): Cayo puede hacer valer contra él la que altera su posición inicial, no se le permite a la primera
exceptio doli generalis, porque Ticio se comportó contra persona alegar en relación a la segunda que al momento
la buena fe”(19) porque no cumplió con otorgar un crédito de los hechos subsistía un estado de hecho diverso”(23).
al esclavo de Cayo.
El caso Pascoe v. Turner, A. C., (1979), 1 W.L.R. 431: “El
Esta exceptio doli generalis seu praesentis está descrita propietario de un inmueble en que vivía, en convivencia
en el siguiente paso del Digesto “por hechos sobreveni- con su pareja; el primero hace pensar a la segunda que la
dos o circunstancias concomitantes contra la pretensión convivencia será eterna, y que la casa le será legada; la
formulada por el actor en juicio”(20): conviviente reestructura costosamente el inmueble; el pro-
pietario decide que no quiere más en casa a su pareja y le
“Ulpiano; Comentarios al Edicto, libro LXXVI.- Respec-
requiere que se retire; por otro lado ella pudo hacer valer
to a la primera especie, por cuyas causas tiene lugar esta
el proprietary estoppel, y se le reconoció un derecho so-
excepción, estas son las cosas que se pueden tratar. Si al-
bre la casa”(24).
guno hubiere estipulado de otro sin causa, y después ejer-
citara la acción de esta estipulación, le perjudicará cierta- Entonces, el “estoppel se concede porque el damnificado
mente la excepción de dolo malo; porque aunque él al tiem- esperaba un determinado comportamiento del dañador,
po en que estipulaba no hubiera hecho nada con dolo malo, y este comportamiento no se realiza. El dañador sujeto a
se ha de decir, sin embargo, que obra con dolo el que cuan- la medida del estoppel ha incumplido un comportamiento
do se contesta a la demanda persevera en pedir en virtud que por el contrario le es requerido. La fuente que impone
de esta estipulación. Y si cuando se interpusiera tuvo justa aquel comportamiento consiste en su acto, primer elemento
causa, se considera, sin embargo, que ahora no tiene nin- de la secuencia en que interviene la confianza, y en el su-
guna justa. Por consiguiente, también si estipuló que ha- cesivo detriment del damnificado”(25).
bía de prestar dinero, y no lo prestó, aunque fue cierta la
Otro aplicación del estoppel es “el promissory estoppel,
causa de la estipulación, la cual, sin embargo, o no se ve-
‘quintaesencial criatura del common law’, recogido en el
rificó, o se extinguió, se habrá de decir que perjudica la
Restatement (Second) of Contracts, Section 90, a través
excepción” (D. 44.4.2.3).
del cual, los jueces han concedido protección a la parte
En el siglo XII los antiguos juristas ingleses crearon el que confía en las promesas realizadas por la otra durante
estoppel el cual “es un remedio procesal, con el cual una las tratativas, mediante el resarcimiento de reliance inter-
parte se opone a una demanda de la contraparte, en virtud ests, identificados, en este caso, con los ‘gastos efectua-
de las circunstancias que en primera presentación podre- dos con la razonable previsión en que iba a lograrse una
mos reducir al carácter desleal o infiel de la demanda o a determinada ventaja con la celebración del contrato’. Un
la contradicción entre el contenido de la demanda y la caso célebre en la jurisprudencia estadounidense, que ilus-
confianza de la parte que ejercita el remedio”(21). Este con- tra cuán severa –si no pintoresca– puede ser la protección
cepto en términos generales se ha diversificado como “el de los intereses de las partes durante la fase de las tratati-
promissory estoppel, el proprietary estoppel, el estoppel vas, es la sentada en el caso Texaco Inc. v. Pennzoil Co. El
by representation, el estoppel by convention, el estoppel pleito surgió porque Texaco frustró, en su propio favor, la
by record o casi by record, el estoppel by deed, el estop- compra de un paquete accionario de la empresa Getty Oil,
pel in pais dicho también estoppel by conduct, etc”(22). que esta ya había negociado, en un nivel muy avanzado, a
tal punto que existía un agreement in principle, con
Sacco incluye dos casos ingleses para entender el estoppel.
Pennzoil. En dicha oportunidad, Texaco fue considera-
El caso Pickard v. Sears (1837), 6 Ad & E. 469: “Cuando da responsable por tortius interference, es decir, por
una persona, con sus palabras o su comportamiento (by haber instado al incumplimiento contractual a Getty Oil,

(19) TALAMANCA. Op. cit. Págs. 239-240.


(20) BURDESE, Alberto. “Manuale di diritto privato romano”. Quarta edizione. Ristampa della quarta edizione. UTET. Turín,
1998. Pág. 505.
(21) SACCO. Op. cit. Pág. 228.
(22) Id. Pág. 228.
(23) Id. Pág. 230.
(24) Id. Pág. 230.
(25) Id. Pág. 231.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 119


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

en perjuicio de Pennzoil, y fue condenada al pago de una la excepción de ser ese ejercicio contrario a la buena fe”(30).
cantidad astronómica a título de actual damages y puniti-
Enneccerus deduce las siguientes proposiciones de esta
ve damages”(26).
excepción:
Sacco justifica la existencia del estoppel que “tiene, en
“a) Cuando la invocación de una excepción por el deu-
los países del conmon law, una razón de existir que falta
en los países romanistas. El contrato inglés consta de una dor es contraria a la buena fe, se da contra él una re-
promesa y de una consideration, y el derecho inglés siem- plicatio doli porque no quiere cumplir como manda
pre ha tratado el problema de las técnicas capaces de sal- la buena fe (§ 242). Así, por ejemplo, la excepción de
vaguardar la relevancia de las promesas sin consideration prescripción puede ser desvirtuada por replicatio doli,
en los casos en que el promisario merece una protec- cuando en virtud de conversaciones sobre la cuantía
ción”(27). de una pretensión, por él no discutida, el deudor ha
determinado al demandante a omitir la presentación
En Alemania y en 1912 Riezler escribe una monografía en tiempo de la demanda.
intitulada “Venire contra factum proprium” con la fórmu-
la Nemo contra factum proprium venire potest. Riezler b) Cuando el deudor quiere hacer valer una excepción,
reconoce que este critierio se origina “de la exceptio doli que le compete, en términos que no son conformes a
generalis del derecho romano, y que ha recibido su formu- la buena fe, se da una replicatio doli contra él. Así lo
lación (…) por obra de los glosadores”(28). reconoce expresamente el § 320 ap. 2(31) en cuanto a
la excepción non adimpleti contractus, pero aun sin
Sucesivamente la doctrina y la jurisprudencia alemanas esta disposición resultaría ya del § 242.
incorporan un concepto nuevo no usado por los países del
common law. Ese concepto era la buena fe objetiva regu- c) Obra contra la buena fe el que exige aquello que in-
lada en una cláusula normativa general. mediatamente tiene que restituir (dolo facit, qui petit,
quod redditurus est, L. 8. D. de doli exc. 44, 4).
Al estudiar la exceptio doli generalis Enneccerus aseveró
que de acuerdo al parágrafo 242(29) del Código Civil ale- d) El principio en virtud del cual se excluye la invoca-
mán, “cabe oponerse al ejercicio de un derecho aduciendo ción de un defecto de forma, y que más arriba (§ 145

(26) LEÓN, Leysser L., “La buena fe en la negociación de los contratos: apuntes comparatísticos sobre el artículo 1362 del
Código Civil peruano y su presunto papel como fundamento de la responsabilidad precontractual”. En: Themis, revista de
Derecho. Nº 49. Publicación editada por los alumnos de la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del
Perú. Lima, 2004. Pág. 132.
(27) SACCO. Op. cit. Pág. 231.
(28) Id. Pág. 232.
(29) Parágrafo 242 del Código Civil alemán. El deudor está comprometido a efectuar la prestación como exigen la fidelidad y
la buena fe en atención a los usos del tráfico.
(30) ENNECCERUS, Ludwig. “Derecho Civil (Parte General), Tratado de Derecho Civil”. Décimo tercera revisión por Hans Carl
Nipperdey. Traducción de la 39ª edición alemana con estudios de comparación y adaptación a la legislación y jurisprudencia
españolas por Blas Pérez González y José Alguer. Primer tomo. Volumen segundo. Bosch. Barcelona, 1935. Pág. 481.
(31) Parágrafo 320 del Código Civil alemán.
1. El que está obligado por un contrato bilateral puede negar la prestación que le incumbe hasta la efectuación de la
contraprestación, a no ser que esté obligado a cumplir la prestación anticipadamente. Si la prestación ha de realizarse
para varios, puede ser negada a cada uno la parte que le corresponda hasta la efectuación de toda la contraprestación.
No se aplica la disposición del parágrafo 273, párrafo 3.
2. Si por una parte ha sido cumplido de manera parcial, no puede negarse la contraprestación, siempre que la negativa,
según las circunstancias, en especial en razón a lo relativamente insignificante de la parte atrasada, contrariase a la
fidelidad y a la buena fe.
La Ley de Modernización del Derecho de obligaciones ha modificado la norma en los siguientes términos:
Parágrafo 320. Excepción de incumplimiento contractual.
(1) Aquel que está obligado, en base a un contrato de prestaciones correspectivas, puede negarse a cumplir su obligación
si es que no se ha ejecutado la contraprestación, pero no en el caso en que estuviese obligado a ejecutar su prestación
primero. Si la prestación debe ser ejecutada frente a varios puede ser negada a cada uno de ellos la parte que les
corresponda, hasta que obtenga la contraprestación total.
(2) Cuando una de las partes hubiese ejecutado su prestación de manera parcial la contraprestación no puede ser negada
en la medida en la cual, según las circunstancias y en particular en razón de la proporcionalidad debida, tal hecho
contrastaría con la buena fe.

120
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
III 3) hemos derivado del deber de indemnizar, lo sub- En las obligaciones genéricas si “el acreedor se ha negado
sumen algunos bajo la excepción de dolo. definitivamente y de un modo consciente a recibir la cosa
separada, no le es lícito hacer valer en lo sucesivo su dere-
e) Los derechos pueden caducar por su no ejercicio (in-
cho a la misma, porque con ello se pondría en contradic-
fla § 209 IV).
ción consigo mismo en términos que no admite la buena
f) A nadie es lícito hacer valer un derecho en contradic- fe (venire contra factum proprium)”(36).
ción con su anterior conducta, cuando esta conducta,
También en la “compensación de la deuda de juego o
interpretada objetivamente según la ley, las buenas cos-
apuesta declarada por el deudor y asimismo la compen-
tumbres o la buena fe, justifica la conclusión de que
sación convencional, han de ser tratadas como un pago.
no se hará valer el derecho, o cuando el ejercicio pos-
El intento del deudor de destruir la extinción voluntaria
terior choque contra la ley, las buenas costumbres o la
de la deuda, hecha mediante un subrogado del cumpli-
buena fe (prohibición del venire contra factum pro-
miento equiparado al pago, representaría una infracción
prium, estoppel en el derecho inglés)”(32).
de la buena fe, un venire contra factum proprium inadmi-
Es importante indicar que la mayoría de la literatura jurí- sible”(37).
dica española, argentina, chilena y peruana fundamenta la
La doctrina de los actos propios tuvo un desarrollo en la
doctrina de los actos propios solamente citando el último
Verwirkung o la caducidad, por la ausencia del ejercicio
literal (f) de las aplicaciones de la exceptio doli generalis
de derecho, la cual tiene varias aplicaciones en Alemania.
que Enneccerus desarrolla.
Si “uno espera para ejercitar sus derechos tanto tiempo
Pero Enneccerus explica más sobre esta excepción:
que su silencio (no sin culpa) despierta en la otra parte la
“Puede haber venire contra factum proprium cuando el confianza legítima de que el derecho ya no será ejercitado
acreedor no conocía su derecho, pero había de exigírsele y, según los principios de la buena fe que imperan en el
este conocimiento. Esta caducidad no se apoya, como la tráfico de la vida, el ejercicio posterior es considerado como
renuncia, sobre una voluntad de abandono del derecho desleal, cabe oponerse al mismo mediante excepción pe-
(y, por tanto, no ha lugar a impugnación por error), sobre rentoria. Así ocurre especialmente cuanto ciertas relacio-
una declaración de voluntad, sino inmediatamente sobre nes extraordinarias confieren a uno de los interesados re-
una norma del derecho positivo y en contra de la voluntad cursos legales extraordinarios, como la revalorización, pero
del interesado. Esto representa un progreso práctico y dog- también puede aceptarse, bajo determinadas circunstan-
mático frente a la ficticia ‘renuncia tácita’”(33). cias del caso concreto y no es lícito en ningún caso des-
atender los legítimos intereses del acreedor. Tratándose de
Otra aplicación: “Si ambas partes o una de las que cum- negocios de tráfico de la vida económica diaria puede, en
plen conocen la invalidez por razón de forma, el remedio ciertas circunstancias, admitirse la caducidad más pronto
está en el § 814(34). Pero aplicando en lo que corresponda que respecto a las particiones entre herederos, la venta de
el pensamiento del § 814 y en atención a la prohibición empresas, los mutuos a largo plazo, las inversiones patri-
del venire contra factum proprium, se niega la posibili- moniales”(38).
dad de invocar el defecto de forma a aquel que, conocien-
do la nulidad por razón de forma, haya aceptado la presta- Sobre la “Verwirkung” dice “el Bundesgerichtshof (Tri-
ción de la otra parte”(35). bunal Supremo Federal) en BGH (Bundesgerichtshof) 25,

(32) ENNECCERUS. Op. cit. Pág. 482.


(33) Id. Pág. 482.
(34) Parágrafo 814 del Código Civil alemán. Conocimiento de lo indebido: deber de decoro y deber moral.
Lo entregado con la finalidad de cumplimiento de una obligación no puede ser repetido, si el que realiza la entrega, sabía
que no estaba obligado a la prestación o si la prestación correspondía a un deber moral o a una consideración a tomar por
decoro.
(35) ENNECCERUS. Op. cit. Pág. 121.
(36) ENNECCERUS, Ludwig. “Derecho de obligaciones, Tratado de Derecho Civil”. Décimo tercera revisión por Heinrich
Lehmann. Traducción de la 35ª edición alemana con estudios de comparación y adaptación a la legislación y jurispruden-
cia españolas por Blas Pérez González y José Alguer. Segundo tomo. Volumen primero. Librería Bosch. Barcelona, 1933.
Pág. 481.
(37) ENNECCERUS, Ludwig. “Derecho de obligaciones, Tratado de Derecho Civil”. Décimo tercera revisión por Heinrich
Lehmann. Traducción de la 35ª edición alemana con estudios de comparación y adaptación a la legislación y jurispruden-
cia españolas por Blas Pérez González y José Alguer. Segundo tomo. Volumen segundo. Bosch. Barcelona, 1935. Pág. 453.
(38) ENNECCERUS. Op. cit. Pág. 485.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 121


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

51 y ss., acertadamente: “En el concepto jurídico de la cual el titular de un derecho ya no puede ejercitarlo por su
Verwirkung se sitúa en primera línea la conducta del titu- conducta. En cambio, la renuncia tácita es un negocio ju-
lar. Con la Verwirkung se declara inadmisible el retraso rídico unilateral compuesto de una declaración unilateral
desleal en el ejercicio de derechos frente al obligado. Esto de voluntad.
quiere decir que la conducta del titular debe enjuiciarse
Existe un desarrollo jurisprudencial de la Verwirkung por
desde puntos de vista objetivos. En esa medida, es decisi-
la incorrección de la valoración de la conducta jurídica-
vo que el obligado, en una valoración objetiva, pueda de-
mente relevante como declaración de voluntad conforme
ducir de la conducta del titular que este ya no quiere ejer-
a la buena fe. En la doctrina alemana ha desempeñado un
citar más su derecho, de modo que, por tanto, aquel puede
organizarse de manera que no necesita contar con el ejer- papel importante la sentencia RG (Reichsgericht o Tribu-
cicio del derecho por parte del titular (RGZ 155, 152). nal Supremo del Reich) 134, 195 y ss:
Para una valoración objetiva semejante, que solo debe es- “En un contrato de arrendamiento de un inmueble se acor-
tar orientada por el principio de la buena fe, no puede im- dó una renta base “con los suplementos que legalmente
portar la declaración de voluntad subjetiva del titular. La procedan”. La arrendadora calculó la renta nada más ce-
Verwirkung se puede producir también en contra de la lebrar el contrato y durante más de cuatro años no cobró
voluntad del titular, puesto que es decisiva la valoración los suplementos. El Reichsgericht admitió que en virtud
objetiva orientada por la buena fe, y no la declaración de del bajo cálculo de la renta a lo largo de los años, el con-
voluntad subjetiva del titular. En esto se manifiesta la di- trato se había convertido en un arrendamiento por la mera
ferencia jurídica entre la Verwirkung y la renuncia tácita renta base. En la sentencia se dice literalmente sobre los
(RGZ 134, 270). Sin embargo, para la admisión de una concretos cálculos de la renta: Cada negocio individual
Verwirkung, es además necesario que el obligado, en aten- además de la eficacia que le es propia, satisfacer el mon-
ción a la conducta del titular, se haya organizado contan- tante de las rentas tomando por base una determinada re-
do con que este ya no va a hacer uso del derecho que le gla para cada periodo, produce aquí como consecuencia
corresponde y que precisamente por eso no pueda conci- añadida, en toda la relación arrendaticia, la apariencia de
liar con las exigencias de la buena fe que el titular a pesar un estado jurídico correlativo, que al continuar la cadena
de todo quiera hacer valer su derecho (RGZ 158, 108). se refuerza cada vez más y finalmente conduce a la acep-
Bajo este punto de vista, la prestación ya no puede ser tación de un contrato conforme al § 157(41)’(42)”.
exigible al obligado. Esto quiere decir que para [el] su-
puesto de hecho de la Verwirkung también importa la con- Flume indicó que tal “decisión no se puede compartir. El
ducta del obligado y que precisamente esta también debe RG quiso decir que había que mantener la renta más baja.
examinarse y juzgarse en todo caso bajo el punto de vista Como no encontró ninguna norma jurídica en la que pudie-
de la buena fe”(39). ra apoyar la sentencia, buscó refugio en el supuesto contra-
to forzando su hipóstasis gracias al § 157. De este modo la
Es importante poner en resalto que la conducta tomada en
aceptación de la existencia de un contrato tácito o de una
cuenta al inicio no es una declaración de voluntad sino un
renuncia tácita en muchas sentencias ha sido el recurso para
acto valorado objetivamente conforme a la buena fe.
sustituir conforme a Derecho a la norma jurídica”(43).
Por eso, Flume expresa que la “Verwirkung es una conse-
Flume nos explica que una “conducta solo puede ser jurí-
cuencia jurídica, que se produce ex lege como efecto jurí-
dicamente relevante en virtud de una norma que establez-
dico involuntario de una conducta”. Con razón en la cita-
ca para ella una consecuencia jurídica. Junto a las normas
da sentencia del BGH se contrapone la Verwirkung a la
jurídicas que establecen reglamentaciones para concretos
“renuncia tácita”, que es una verdadera declaración de
supuestos de conductas, se encuentra el principio general
voluntad en el sentido de configuración autónoma priva-
de la Verwirkung. El principio de la Verwirkung expresa
da(40) como también lo afirmaba Enneccerus.
nadie que pueda hacer valer un derecho o una posición
Aquí Flume diferencia con claridad lo que es la doctrina jurídica cuando, dada su conducta, el ejercicio de los mis-
de los actos propios consistente en un acto unilateral (con- mos es contrario a la buena fe y, con ello, contrario a la
ducta jurídicamente relevante) y el efecto legal según el idea del Derecho”(44).

(39) FLUME, Werner. “El negocio jurídico”. Traducción de José María Miquel González y Esther Gómez Calle. 4ª. ed., no
modificada, Fundación Cultural del Notariado. Madrid, 1998. Págs. 158-159.
(40) FLUME. Op. cit. Pág. 159.
(41) Parágrafo 157 del Código Civil alemán. Los contratos han de interpretarse como exigen la fidelidad y la buena fe, en
atención a los usos del tráfico.
(42) FLUME. Op. cit. Págs. 159-160.
(43) Id. Pág. 160.
(44) Id. Pág. 160.

122
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
De tal manera, la “conducta jurídicamente relevante no negocial, puede ser contrario a la buena fe que una de ellas
es, como tal, jurídicamente decisiva simplemente porque después no admita que valga el negocio e invoque su nu-
conforme al tráfico tenga para otro un sentido determina- lidad. Esto solamente rige, sin duda, cuando, al margen de
do, sino que la conducta alcanza relevancia jurídica sola- la conducta de las partes, la imposición de la nulidad del
mente porque, dada la conducta precedente, el actual ejer- negocio, conforme al sentido de la norma que la establez-
cicio de derechos y posiciones jurídicas es contrario a la ca, sea susceptible de Verwirkung”(49).
buena fe. En consideración a la conducta precedente el
Asimismo, la Verwirkung es usada cuando el ejercicio del
actual ejercicio de derechos y posiciones jurídicas en
derecho o de posiciones jurídicas es contrario a la buena
un venire contra factum proprium. Con razón dice el
fe. Como explica Flume, el “veredicto de contravención a
BGH 25, 52, que con la Verwirkung debe “excluirse el
la buena fe, en el caso de la Verwirkung, presupone la
ejercicio del derecho con retraso desleal frente al obli-
evidencia de que si se admitiera el ejercicio del derecho o
gado”. La anterior falta de ejercicio del derecho no es
de posiciones jurídicas a pesar de la conducta anterior, la
desleal, la omisión como tal no es contraria a la buena
idea de la justicia sería vulnerada. Si se aplica de esta
fe. Pues nadie está obligado a hacer valer su derecho.
manera el principio de la buena fe en relación con la Verwir-
Mas quien no ejercita su derecho de manera que el obli-
kung, entonces esta es un supuesto normativo excepcio-
gado “no tenga por qué contar con el ejercicio del dere-
nal, y se elimina el peligro de que el juez se arrogue la
cho por parte del titular” (así, el BGH, op. cit., p. 52),
facultad de configurar positivamente relaciones jurídicas,
puede contravenir la buena fe si, a pesar de todo, des-
como si a él le compitiera sustituir por medio de la senten-
pués ejercita su derecho”(45).
cia la configuración de estas que es propia de la autono-
Por el contrario, “el acreedor no está obligado a aclarar al mía privada”(50).
deudor si él exigirá todavía el incumplimiento del contrato.
Estas aseveraciones de Flume serán ignoradas por la doc-
El acreedor no puede en absoluto contrariar la buena fe por
trina de los actos propios en España y en Sudamérica como
no informar al deudor de si hará o no uso de sus derechos.
lo veremos más adelante.
Pero es posible que el acreedor que haya dejado al deudor
en la incertidumbre durante mucho tiempo, actúe en contra Retomando el análisis de la sentencia RG134, 195 y ss,
de la buena fe al hace valer después su derecho”(46). tal sentencia estableció que el “contrato sobre la fijación
de la renta se había convenido de modo que a la cantidad
La Verwirkung no solamente se aplica a los derechos de
base de 5.000 marcos había que añadir los complementos
crédito sino también a los derechos potestativos, “por ejem-
legales. Según opinión del Reichsgericht solo se trataba
plo, derechos de impugnación, resolución y denuncia”(47).
de decidir qué consecuencias jurídicas resultaban de que
“La Verwirkung del ejercicio de derechos absolutos es
a lo largo de cuatro años solamente se hubiera satisfecho
importante sobre todo a propósito de patentes, marcas y
como renta, en virtud del cálculo efectuado por el arren-
otros derechos de propiedad industrial e intelectual, y en
dador, la cantidad base. Conforme a la exposición prece-
el Derecho de la competencia”(48).
dente, lo único que importa es si el arrendador, después de
También la Verwirkung impide invocar un defecto menor que hubiera descubierto su error sobre el cálculo de la renta,
de un negocio jurídico. En efecto, la jurisprudencia ale- contravenía la buena fe con su exigencia de que se paga-
mana ha aplicado la Verwirkung cuando “existen defectos ran además del importe base los complementos legales.
de los negocios que tienen menor importancia, así por ejem- Consta que se había convenido la suma más alta, concre-
plo: un negocio jurídico requiere una autorización que no tamente la cantidad base de 5.000 marcos más los com-
ha sido concedida, acuerdos de los socios o de órganos de plementos legales: esto debía ser vinculante conforme a la
una persona jurídica que no han sido tomados con las determinación concorde de las partes”(51). Flume comenta
mayorías requeridas por los estatutos, en un negocio jurí- que el “arrendador había calculado mal el importe de la
dico no se ha observado la forma exigida por la Ley, etc. renta solamente en virtud de un error durante los primeros
Para esta clase de defectos, la jurisprudencia ha aceptado cuatro años. ¿Solo por este error debía estar vinculado el
que cuando las partes del negocio admiten su validez, en es- arrendador durante 30 años –esa era la duración del con-
pecial cuando hayan procedido conforme a la reglamentación trato– a percibir la renta en la cuantía inferior?”(52).

(45) Id. Págs. 160-161.


(46) Id. Pág. 161.
(47) Id. Pág. 161.
(48) Id. Pág. 161.
(49) Id. Págs. 162-163.
(50) Id. Pág. 164.
(51) Id. Págs. 164-165.
(52) Id. Pág. 165.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 123


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

Siguiendo el análisis de la sentencia RG134, 195 y ss, el 1. La inadmisibilidad de la conducta contradictoria (“ve-
“Reichsgericht llegó a la resolución, en la que afirma esto, nire contra factum proprium”). A nadie le es lícito hacer
solamente por entender que, conforme a la buena fe, sur- valer un derecho en contradicción con su anterior con-
gió un contrato por los sucesivos pagos del arrendatario ducta, cuando esa conducta, interpretada objetivamente
con arreglo al cálculo equivocado del arrendador con una según la ley, según las buenas costumbres o la buena fe,
renta correspondiente al importe equivocado. Frente a esto, justifica la conclusión de que no se hará valer el derecho,
es cierto que se puede admitir que el arrendador por el o cuando el ejercicio posterior choque contra la ley, las
tiempo de los cuatro años transcurridos hasta la interposi- buenas costumbres o la buena fe. Así, por ejemplo, el com-
ción de la demanda, haya decaído en su derecho de exigir prador, después de haber subido el precio de la mercan-
los complementos. Incluso, si circunstancias especiales así cía, no debe alegar en perjuicio del vendedor un contrato,
lo exigen, quizá se pueda interponer al arrendador el trans- sin antes había hecho creer justificadamente al vendedor
curso de un plazo antes de que pueda reclamar la comple- que no le vincularía el contrato”(59).
ta renta convenida”(53). Aunque Flume añade, y concorda-
“2. La inadmisibilidad de la persecución jurídica contra
mos, que “no se puede justificar que el arrendador en los el deudor puede resultar de la desaparición del fundamen-
siguientes casi 26 años no pueda obtener la renta pactada, to negocial o de su existencia, cuando la exigencia del
solo porque durante cuatro años haya calculado la renta cumplimiento sea incompatible con la buena fe. En tales
demasiado baja al arrendatario: Si se plantea la cuestión casos la limitación objetiva por la buena fe del mandato
como contravención de la buena fe, no se podría mantener legal de cumplir la prestación no conduce a una libera-
la decisión del Reichsgericht”(54). ción del deudor, o a la concesión de un derecho a retirarse
Siguiendo con el derecho alemán, Lehmann explicaba que del contrato, sino a una atenuación o limitación de la obli-
la cláusula normativa general de la buena fe regulada en el gación, lo que frecuentemente no será posible sin el am-
parágrafo 242 del Código Civil alemán se aplica a la ex- paro judicial”(60).
ceptio doli generalis. La fórmula “de la ‘exceptio doli’ El “culpable o causante del defecto de forma, o el que
decía: ‘si in ea re nihil dolo malo Ai. Ai .factum sit neque haya disfrutado durante largo tiempo de las ventajas del
fiat’. Las palabras ‘factum sit’ se dirigen, como ‘exceptio contrato nulo por defecto de forma, deberá soportar el tra-
doli specialis’, contra el logro doloso de la pretensión (en tamiento que correspondería si el contrato se hubiese con-
especial contra el engaño). Las palabras “exceptio doli cluído [sic] válidamente”(61). Estos casos fueron otras apli-
generalis”, contra la vulneración del sentimiento jurídi- caciones jurisprudenciales alemanas del venire contra fac-
co, de la equidad contenida en la pretensión que se intenta tum proprium(62).
hacer valer como derecho”(55). Añadía que la “limitación
del ejercicio del derecho que se desprende de los §§ 226(56), La Verwirkung se aplicó a la caducidad por la demora
826(57) y 242 resulta del deber que contiene todo derecho del ejercicio del derecho. Pero “la demora no es sufi-
de no ejercitarlo en contradicción con el fin o con la bue- ciente. Lo decisivo es que, de acuerdo con el conjunto de
na fe”(58). circunstancias y la peculiaridad de la relación jurídica,
se haya despertado en la otra parte la confianza legítima
Luego Lehmann nos enseña que la “ciencia y la jurispru- de que el derecho ya no será ejercitado, y, por consi-
dencia han considerado como más importantes exigencias guiente, el ejercicio posterior tendría como consecuen-
de la buena fe las siguientes: cia un perjuicio injusto para el obligado, perjuicio que

(53) Id. Pág. 165.


(54) Id. Pág. 165.
(55) LEHMANN, Heinrich. “Parte general”. Vol. I. Traducción de la última edición alemana con notas de Derecho español por
José Mª Navas. Editorial Revista de Derecho privado. Madrid, 1956. Pág. 162.
(56) Parágrafo 226 del Código Civil alemán. El ejercicio de un derecho es inadmisible si únicamente puede tener la finalidad
de causar daño a otra persona.
(57) Parágrafo 826 del Código Civil alemán. Quien dolosamente causa a otro un daño de forma que atente contra las buenas
costumbres, está comprometido para con él al resarcimiento del daño.
(58) LEHMANN. Op. cit. Pág. 162.
(59) Id. Págs. 162-163.
(60) Id. Pág. 163.
(61) Id. Pág. 329.
(62) Estas soluciones modifican sustancialmente una norma del Código Civil alemán: Parágrafo 125. Un negocio jurídico que
falta a la forma prescrita por la ley es nulo. La falta de la forma determinada por negocio jurídico, en la duda, tiene
igualmente por resultado la nulidad.

124
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
no hubiera sufrido de haberse ejercitado oportunamente de los actos propios con la que exige proteger la confianza
el derecho”(63). depositada en la apariencia. En definitiva, ambas son de-
rivación del principio todavía más general que exige pro-
En Italia, Sacco ha descrito la doctrina de los actos pro- teger la buena fe”(70).
pios magistralmente y ha encontrado su aplicación en la
responsabilidad precontractual. En el caso de la mala fe Siguiendo parcialmente las enseñanzas de la doctrina ale-
en la tratativa contractual regulada en el artículo 1337(64) mana, Puig dice a propósito de la doctrina de los actos pro-
del Código Civil italiano: “la ilusión creada, la informa- pios en relación con el silencio y con el transcurso del tiem-
ción falsa no comprometería la responsabilidad del sujeto po que “no se trata de la apreciación de actos concluyentes
si el hecho de crear la ilusión, de informar falsamente, no y reveladores de que ha existido declaración de voluntad,
ocasionan lesiones injustas”(65). Si el “artículo 1338(66) es sino que la buena fe exige imponer las mismas consecuen-
aplicable a la creación de la ilusión de una futura presta- cias de la voluntad declarada, a pesar de que esta no existió.
ción –o en una presente situación, ilustrada por una mani- Por tanto, se trata de un resultado impuesto por la misma
festación tangible– el artículo 1338 contiene en sí mismo razón fundamental a que responde la regla venire contra
el potencial que justifica la responsabilidad por incohe- factura proprium non valet, a saber, el principio de protec-
rencia”(67). ción dispensado a los actos realizados de buena fe y con-
fiando en apariencias”(71). La pregunta que debió hacerse
Sacco concluye que “el deber de coherencia se basa no Puig es si tal doctrina era aplicable a su sistema jurídico.
tanto en la voluntad autónoma sino en la responsabilidad
por la confianza”(68). Díez-Picazo desarrolló la doctrina de los actos propios
como derivación inmediata del principio general de la
En España, para Puig el aforismo venire contra factura
buena fe(72). Los presupuestos de esta doctrina son los si-
proprium non valet equivalía a que “a nadie ha de estar
guientes:
permitido ir contra sus propios actos” y por consiguiente
afirmó que la doctrina del estoppel “coincide con nuestro “1. Que una persona haya observado, dentro de una deter-
concepto de la doctrina de los actos propios”(69). Mezclan- minada situación jurídica, una cierta conducta jurídica-
do la doctrina del estoppel y el desarrollo de Enneccerus mente relevante y eficaz.
propone los siguientes requisitos aplicables a la doctrina
2. Que posteriormente esta misma persona intente ejerci-
de los actos propios:
tar un derecho subjetivo o una facultad, creando una si-
“a) Una conducta determinada de un sujeto, tuación litigiosa y formulando dentro de ella una determi-
nada pretensión.
b) que haya engendrado una situación contraria a la rea-
lidad, eso es, aparente y, mediante tal apariencia, suscep- 3. Que entre la conducta anterior y la pretensión posterior
tible de influir en la conducta de los demás, y exista una incompatibilidad o una contradicción, el senti-
do que de buena fe hubiera de atribuirse a la conducta
c) que sea base de la confianza de otra parte que proce- anterior.
dido de buena fe y que, por ello, haya obrado de una ma-
nera que le causaría un perjuicio si su confianza quedara 4. Que en ambos momentos, conducta anterior y preten-
defraudada. No resulta difícil, por tanto, enlazar la doctrina sión posterior, exista una perfecta identidad de sujetos”(73).

(63) LEHMANN. Op. cit. Pág. 523.


(64) Artículo 1337 del Código Civil italiano de 1942. Tratativas y responsabilidad precontractual.- En el desenvolvimiento de
las tratativas y en la formación del contrato, las partes deben comportarse según la buena fe.
(65) SACCO. Op. cit. Pág. 255.
(66) Artículo 1338 Código Civil italiano de 1942. Conocimiento de las causas de invalidez.- La parte que conociendo, o
debiendo conocer la existencia de una causa de invalidez del contrato, no da noticia de ello a la otra parte queda obligada
a resarcir el daño causado a esta, por haber confiado, sin su culpa, en la validez del contrato.
(67) SACCO. Op. cit. Pág. 255.
(68) SACCO. Op. cit. Pág. 437.
(69) PUIG BRUTAU, José. “Estudios de Derecho Comparado. La doctrina de los actos propios”. Ediciones Ariel. Barcelona,
1951. Pág. 105.
(70) PUIG BRUTAU. Op. cit. Pág. 112.
(71) PUIG BRUTAU. Op. cit. Pág. 121.
(72) DÍEZ-PICAZO PONCE DE LEÓN, Luis, “La doctrina de los propios actos. Un estudio crítico sobre la jurisprudencia del
Tribunal Supremo”. Casa Editorial Bosch. Barcelona, 1962. Pág. 139: “Si la buena fe, considerada objetivamente, en sí
misma, es un modelo o un arquetipo de conducta social, hay una norma jurídica que impone a la persona el deber de
comportarse de buena fe en el tráfico jurídico”.
(73) DÍEZ-PICAZO PONCE DE LEÓN. Op. cit. Pág. 143.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 125


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

Para Díez-Picazo el efecto jurídico de la doctrina de los Si se “otorgan todas estas facultades al juez (todas discre-
actos propios es la inadmisibilidad de una pretensión que cionales e incontrolables), se coloca en un estado de inde-
se “traduce pues, desde un punto de vista sustantivo, en fensión a las partes, que siendo siempre en el proceso al
una facultad del convenido de rehusar legítimamente el menos dos, ciertamente por lo menos una será aventajada
comportamiento exigido y, desde el punto de vista proce- y otra perjudicada, lo que equivale a decir pérdida de
sal, en una desestimación de la demanda”(74). imparcialidad de juez”(78).
Este planteamiento es inédito porque ni los propios ale- A pesar de que la jurisprudencia española es muy antigua y
manes lo habían pensado. Pero allí no queda su propues- abundante, Miquel reconoce que la misma “opera en ocasio-
ta. Sorprendentemente nos dice que “cuando se ha obser- nes con un concepto de los actos propios que los equipara
vado un comportamiento incompatible con el ejercicio de prácticamente a los negocios jurídicos, desconociendo de este
la acción de impugnación de un negocio jurídico ineficaz, modo lo específico de esta doctrina. Frecuentemente formula
este comportamiento no produce solo inadmisibilidad de la esencia y requisitos de los actos propios en términos que
la posterior pretensión de impugnación, sino que sana el equivalen a verdaderas definiciones del negocio jurídico”(79).
entero negocio”(75). Sin embargo, antes nos había indica- Las consecuencias jurídicas de aplicar la doctrina de los ac-
do que para que la doctrina de los actos propios sea apli- tos propios “puede determinar una paralización del ejercicio
cable “es necesario, precisamente, que los actos ejecuta- del derecho o facultad de que se trate, pero puede significar
dos no constituyan declaración de voluntad o negocio ju- su pérdida definitiva si ya es imposible ejercitarlo según las
rídico vinculante por sí mismo, porque en tal caso la suje- exigencias de la buena fe. Si se toma en sentido amplio la
ción a lo declarado, la vinculación al negocio es un efecto doctrina de los actos propios puede fundar también el naci-
normal de esta figura, sin necesidad de traer a colación el miento de un derecho de otra parte”(80).
valor de los actos propios”(76). Textualmente el lector pue-
En Argentina, Borda sigue el marco teórico propuesto fun-
de comprobar la incongruencia de las afirmaciones en
damentalmente por Díez-Picazo. Expresa que como deri-
ambas citas.
vación lógica de la necesidad de guardar un comporta-
Lo más grave del planteamiento de Díez-Picazo es la po- miento coherente es que se sanciona la conducta contra-
sibilidad de que los jueces arbitrariamente puedan decla- dictoria que contraviene el principio general de la buena
rar inadmisibles las demandas mediante el uso de la doc- fe. Por ello, debe declararse inadmisible la pretensión de
trina de los actos propios. Para él “no existe inconvenien- colocarse en contradicción con su conducta anterior deli-
te y puede perfectamente el problema [¿puede el juez de- berada y jurídicamente relevante, más allá de que dicha
cidir la desestimación tomando como ‘ratio decidendi’ una pretensión si fuera tomada individualmente sea legítima y
base distinta?] ser reconducido al principio ‘iura novit pueda ejercitarse. Lo que ocurre es que resulta inadmisi-
curia’. Lo cual nos permite sostener que, solicitada por el ble cuando se toma como punto de referencia la primera
demandado la desestimación de la pretensión, cualquiera conducta, por que –en definitiva– la regla venire contra
que haya sido el fundamento invocado, el juez puede, de factum proprium limita los derechos subjetivos fundán-
oficio, fundar esta desestimación en el carácter contradic- dose en el deber de actuar coherentemente(81).
torio de la demanda, aunque este problema no haya sido
Borda sostiene que “lisa y llanamente, la conducta con-
abordado por las partes”(77).
tradictoria puede y deber ser valorada por el tribunal, in-
Es importante recordar lo que nos advertía Flume del pe- cluso aunque no haya mediado pedido de parte; y ello es
ligro de otorgarle al juez “la facultad de configurar posi- así porque no se trata ni de una prueba ni de una presun-
tivamente relaciones jurídicas, como si a él le compitiera ción, ni de un dato indiciario, sino, de que no es admisible
sustituir por medio de la sentencia” aplicando la Verwir- que se premie la conducta contradictoria, porque se viola-
kung. Rescatamos las siguientes sabias expresiones: ría el principio general de la buena fe”(82). Esta doctrina

(74) Id. Pág. 248.


(75) Id. Pág. 248.
(76) Id. Pág. 196.
(77) Id. Pág. 251.
(78) ARIANO DEHO, Eugenia. “Prueba y preclusión (Reflexiones sobre la constitucionalidad del proceso civil peruano)”. En:
Problemas del proceso civil. Jurista Editores. Lima, 2003. Pág. 66.
(79) MIQUEL GONZÁLEZ, J. M.ª. Voz “Acto propio”. En: Enciclopedia jurídica básica. Vol. I. Editorial Civitas. Madrid,
1995. Pág. 204.
(80) Op. cit. Pág. 206.
(81) BORDA, Alejandro. “La teoría de los actos propios”. Abeledo-Perrot. Buenos Aires, 1986. Pág. 69.
(82) Op. cit. Págs. 130-131.

126
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
“actúa como una defensa, sea al contestar la demanda, sea Para Fueyo la “doctrina de los actos propios es un princi-
al contestar la reconvención, sea al alegar o expresar agra- pio general de derecho, fundado en la buena fe, que impo-
vios o al contestar estos” y también es “utilizable al de- ne un deber jurídico de respeto y sometimiento a una si-
mandar o al reconvenir”(83). tuación jurídica creada anteriormente por la conducta del
mismo sujeto, evitando así la agresión a un interés ajeno y
Morello y Stiglitz incurren en el error de Puig al afirmar
el daño consiguiente”(88) y los requisitos son: “A) Una
que existe “similitud de sttopel [sic] angloamericano, la
conducta anterior relevante y eficaz; B) El ejercicio de
Verwinkong [sic] alemana y el clásico venire contra fac-
una facultad o de un derecho subjetivo por la misma
tum proprium, dadas sus afinidades en la práctica consti-
persona, quien, al actuar, crea una situación litigiosa por
tuyen, por consiguiente, una regla de auténtico valor uni-
aparecer una contradicción entre ambas conductas, aten-
versal que limita el ejercicio de los derechos subjetivos
tándose de este modo a la buena fe esencialmente, aunque
o facultades”(84). (¡!) En el plano procesal aseveran que el
en ocasiones particularmente a la ley o a las buenas cos-
demandado o el reconvenido pueden “neutralizar mediante
tumbres. C) Una pretensión nacida de la segunda conduc-
la propuesta que formula la objeción una defensa que sir-
ta que, de admitirse, repercutiría en derechos adquiridos
ve como causa justa de desestimación” y que en “la sen-
por terceros o bien causaría daño”(89).
tencia de mérito y a condición de preservar el principio de
bilateralidad y el marco de congruencia, –dentro de los Es comprobable que las doctrinas española y sudamerica-
poderes deberes razonables del juzgador y con sustento na se apartaron totalmente de los marcos teóricos del esto-
en el iura curia novit– cabe declarar de oficio la existen- ppel, del Nemo potest contra factum proprium venire y
cia de la doctrina del propio acto”(85) (¡!). de la Verwirkung. La doctrina sudamericana no fue indi-
ferente a tal importación frustrada.
En Chile, Ekdahl indica los requisitos de la doctrina de
los actos propios: “A. Es imprescindible la conducta ante- III. LA DOCTRINA DE LOS ACTOS PROPIOS EN
rior de un sujeto, la que debe reunir ciertas condiciones: EL CÓDIGO CIVIL
ser válido, eficaz y relevante. Será esta conducta la que En 1996 De la Puente justificó la incorporación de la doc-
genere una situación determinada, susceptible de influir trina de los actos propios al amparo del artículo 1362(90)
en la conducta de terceros. B. El sujeto que realizó la con- del CC y en particular “en el caso de ejecución contrac-
ducta debe formular una pretensión a través del ejercicio tual se trata de una buena fe objetiva, que obliga a actuar
de un derecho subjetivo, que ha de ser contradictorio con con lealtad”(91) pero más adelante dice que dentro “de la
el sentido objetivo que de la conducta anterior se deriva. concepción subjetiva de la buena fe cabe perfectamente la
C. La contradicción ha de causar grave perjuicio a los ter- doctrina de los actos propios, pues quien ha tenido una
ceros que, confiando en el sentido objetivo que de la con- conducta anterior jurídicamente relevante y eficaz debe,
ducta vinculante se infiere, han variado o alterado de al- por un lado, adecuar su conducta posterior a la observada
guna forma su posición jurídica. D. Por último, la con- anteriormente y, por otro lado, crea en la contraparte la
ducta anterior y la pretensión posterior deben ser ambas confianza de que continuará conduciéndose de la misma
atribuidas a una misma persona, es decir, se requiere iden- manera, salvo que las circunstancias cambien”(92).
tidad de sujetos”(86). Ekdahl sigue el planteamiento proce-
sal de la doctrina de los actos propios desarrollado por En 1998 Ortiz expresó que la doctrina de los actos pro-
Morello y Stiglitz(87). pios apunta “a un tipo de situaciones en las que siendo

(83) Id. Pág. 131.


(84) MORELLO, Augusto y STIGLITZ, Rubén S. “La teoría del acto propio”. En: Dinámica del contrato. Enfoques. Librería
Editora Platense. La Plata, 1985. Pág. 79.
(85) Op. cit. Pág. 80.
(86) EKDAHL ESCOBAR, María Alejandra. “La doctrina de los actos propios, El deber jurídico de no contrariar conductas
propias pasadas”. Editorial Jurídica de Chile. Santiago de Chile, 1989. Págs. 38-39.
(87) Op. cit. Pág. 120.
(88) FUEYO LANERI, Fernando. “Instituciones de Derecho Civil moderno”. Editorial Jurídica de Chile. Santiago de Chile,
1990. Pág. 310.
(89) Op. cit. Pág. 313.
(90) Artículo 1362 del CC.- Los contratos deben negociarse, celebrarse y ejecutarse según las reglas de la buena fe y común
intención de las partes.
(91) DE LA PUENTE Y LAVALLE, Manuel. “La doctrina de los actos propios”. Disertación para su incorporación a la
Academia Peruana de Derecho”. En: Anuario de la Academia Peruana de Derecho. Gaceta Jurídica Editores. Lima,
1996. Pág. 163.
(92) Op. cit. Pág. 166.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 127


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

legal, o ajustada a derecho, la común interpretación o apli- b) que ese sujeto actúe de tal manera que genera una si-
cación de una declaración de voluntad negocial, esta pro- tuación de apariencia diversa a la (real) situación o
vee una acción u omisión injusta, en tanto esa acción u relación jurídica;
omisión contradice la conducta previamente observada y
c) que un tercero, de buena fe, establezca una relación
las expectativas que, de buena fe, se habían generado a
jurídica con el sujeto que generó la situación de apa-
partir de ella”(93), es decir, “no se puede actuar de buena fe
riencia, debido, justamente, a esa situación; y,
contra la conducta generada de buena fe. La buena fe causa
de exoneración de la culpa, por otro lado, sí beneficia al d) como consecuencia de ello, el sujeto que creó la situa-
eventual perjudicado con el acto contrario al propio por- ción de apariencia no puede hacer valer la real situa-
que la exoneración que puede oponer aquel nace de la bue- ción o relación jurídica, vale decir, no puede ir en con-
na fe atribuida al tenedor del derecho subjetivo, en el senti- tra de sus propios actos”.
do de que no ejercería el derecho”(94). Es claro que Ortiz
sigue el marco teórico alemán en el sentido de excepción. No se entiende la incorporación del tercero dentro de los
Ello se corrobora cuando dice que la buena fe “será una requisitos que se propone.
directiva objetiva, que podrá seguir el intérprete, juez o fun- En el 2004, se dice que los artículos 168(97) y 1362 del CC
cionario, para encauzar el estándar buena fe y oponerlo, tienen en común la relevancia para la doctrina de los actos
por vía de excepción, a la pretensión injusta”(95). propios ya que “ambos se refieren al principio de la buena
En el 2003, Espinoza(96) hace mención que el principio de fe y que los actos o conductas de las partes posteriores a la
los actos propios es conocido también con el aforismo celebración del acto jurídico o del contrato no deben ser
venire contra factura proprium non valet (vale decir “que contradictorias entre ellas mismas, caso contrario, se estaría
a nadie ha de estar permitido ir en contra sus propios ac- lesionando el principio de la buena fe y consecuentemente,
tos”). Añade que “el fundamento de este principio está se configurarían los elementos necesarios para que se de la
muy estrechamente relacionado con la doctrina que exige figura jurídica de la Doctrina de los Actos Propios”(98).
dar protección jurídica a la buena fe manifestada en la Es una contradicción si se dice que la buena fe es un prin-
confianza depositada en la apariencia”. Se ha afirmado, cipio. Nos adherimos a la aseveración en el sentido que
incluso, que la teoría de los actos propios puede ser in- “los principios generales del derecho, para ser tales, no
cluida dentro de las fuentes de las obligaciones. Compar- tienen necesidad de estar recogidos en ninguna norma; de
to la definición de este principio, cuando se sostiene que lo contrario, hasta podría dudarse de que se está hablando
“apunta a un tipo de situaciones en las que siendo legal, o de principios”(99). Tampoco hay una conexión entre los
ajustada a derecho, la común interpretación o aplicación artículos 168 y 1362. En efecto “es imprescindible esta-
de una declaración de voluntad negocial, esta provee una blecer que los artículos 168 y 1362 no tienen ninguna
acción u omisión injusta, en tanto esa acción y omisión
vinculación que vaya más allá del empleo de un mismo
contradice la conducta previamente observada y las ex-
término. En la primera de dichas normas se impone un
pectativas que, de buena fe, se habían generado a partir de
criterio para la interpretación del negocio jurídico; en la
ella”. En efecto, para que se configure un supuesto en el
segunda, se establece una regla de comportamiento que
que se aplique el principio de los actos propios, tienen que
tiene que ser observada en la negociación, celebración y
darse las siguientes condiciones:
ejecución de los contratos, al mismo tiempo que se eleva
a) un sujeto que se encuentre en una situación o relación la buena fe a condición de fuente de integración del regla-
jurídica determinada; mento contractual” (100).

(93) ORTIZ CABALLERO. Op. cit. Pág. 275.


(94) Id. Pág. 278.
(95) Id. Pág. 284.
(96) ESPINOZA ESPINOZA, Juan. “Los principios contenidos en el Título Preliminar del Código Civil peruano de 1984,
Análisis doctrinario, legislativo y jurisprudencial”. Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Lima,
2003. Págs. 472-473.
(97) Artículo 168 del CC.- El acto jurídico debe ser interpretado de acuerdo con lo que se haya expresado en él y según el
principio de la buena fe.
(98) FERNÁNDEZ FERNÁNDEZ, César Aníbal. “La doctrina de los actos propios y su aplicación en la legislación peruana”.
En: Revista Jurídica del Perú. Setiembre-Octubre. Nº 58. Editorial Normas Legales. Trujillo, 2004. Pág. 200.
(99) LEÓN, Leysser L., “La reforma del Código Civil vista en serio”. En: El sentido de la codificación civil. Estudios sobre la
circulación de los modelos jurídicos y su influencia en el Código Civil peruano. Palestra Editores. Lima, 2004. Pág. 305.
(100) LEÓN. “La buena fe en la negociación de los contratos: apuntes comparatísticos sobre el artículo 1362 del Código Civil
peruano”. Op. cit. Pág. 143.

128
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
En el 2005, O´Neill ha expresado que el propósito prácti- esta justificación no es suficiente porque como veremos
co de la doctrina de los actos propios “es evitar situacio- no se sabe qué significa y peor aún no se sabe cómo se
nes injustas. El sentido de la justicia está impregnado en aplica tal “principio de los actos propios”. La norma pro-
la formulación de la doctrina de los actos propios, pues puesta pretende unificar todos los problemas y las solu-
con ella se pretende tutelar la confianza que determinada ciones de la doctrina de los actos propios.
conducta suscitó en quien condujo sus actos amparándo-
Los fundamentos de esta propuesta también incurren en
se en ella”(101) y luego dice que el “sustento de la doctrina
un simplismo impracticable como lo dice la propia expo-
de los actos propios es el principio de la buena fe porque
sición de motivos:
su propósito es fomentar que las personas actúen de modo
coherente, sancionando a quienes incurran en contradic- “La Comisión ha decidido introducir la teoría de los actos
ciones”(102). O´Neill sostiene que “la pretensión contradic- propios solo para los casos en los que alguien hace valer
toria no tiene que ser ejercitada necesariamente mediante la un derecho para sí. No en otros supuestos de hecho.
interposición de una demanda, sino también al proponer
excepciones o al contestar la demanda y reconvenir”(103). El derecho de que se trate va a ser enfrentado a otro sujeto.
La norma tal como está establecida señala que cuando el
De Trazegnies manifiesta que el “contratante no puede titular del Derecho hizo confiar razonablemente a su con-
crear una apariencia frente a la otra parte y después actuar traparte que no ejercitaría tal derecho, luego no puede pre-
contrariamente a ella, porque ello constituye una falta con- tender cambiar su línea de conducta y ejercitarlo.
tra la buena fe [adecuada representación que cada parte
realiza de su propio punto de vista frente a la otra, es un Así definida, la regla de los actos propios es una excep-
principio general del derecho que no puede ser eludido en ción al principio del ejercicio libre de los derechos y se
ninguna de las relaciones jurídicas, cualquiera que sea la funda en que la actuación de las personas debe ser consis-
rama del Derecho o el tipo de relación formada o por for- tente frente a los otros para generar relaciones jurídicas y
marse]”(104). humanas, de paz y no de conflicto.

En nuestro ambiente jurídico ha estado circulando una Como la doctrina de los actos propios es una restricción al
propuesta normativa de la doctrina de los actos propios. ejercicio de los derechos, su aplicación tendrá que confor-
marse a la norma establecida en el artículo IV(106) de este
El artículo VI del Anteproyecto de Enmiendas al Código Título Preliminar”.
Civil de 2005(105) dice lo siguiente:
¿Qué quiere decir que alguien quiere hacer valer un dere-
“No es lícito hacer valer un derecho en contradicción con cho para sí? ¿Qué implica que ese alguien hizo confiar
una conducta anterior, cuando en razón de ella otro sujeto razonablemente a su contraparte que no ejercitaría tal de-
haya tenido motivo justificado para confiar razonablemente recho? ¿Si lo ejercita es ilícito? ¿Cómo se podrá oponer la
en que no se ejercerá tal derecho”. contraparte? ¿En qué casos se aplicará si su aplicación es
restrictiva?
En la exposición de motivos del Anteproyecto de Enmien-
das al Código Civil de 2005 se indica que la propuesta Se ha objetado esta propuesta porque dejaría “la puerta
“contiene una norma nueva en nuestros Títulos Prelimi- abierta para que sea utilizada incluso en supuestos de nu-
nares, introduciendo el principio de los actos propios, cons- lidad, anulabilidad e ineficacia. Si ya es grave su intro-
titutivo del Derecho contemporáneo y que, si bien no ne- ducción, más grave es su tremenda extensión”(107). Esta
cesitaba formalización escrita para ser aplicado, es bueno crítica presupone que la norma propuesta contiene clara-
que conste en un Código actualizado”. Se dice que es un mente los hechos y los efectos jurídicos correspondientes a
principio a pesar de ser en realidad una doctrina. Asimismo, la doctrina de los actos propios. Por el contrario, la norma

(101) O´NEILL DE LA FUENTE, Cecilia. “El cielo de los conceptos jurídicos’ versus La solución de problemas prácticos. A
propósito de la doctrina de los actos propios”. En: Themis, revista de Derecho. Nº 51. Publicación editada por alumnos de
la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Lima, 2005. Pág. 44.
(102) Op. cit. Pág. 47.
(103) Id. Págs. 50-51.
(104) DE TRAZEGNIES. Op. cit. Págs. 38-39.
(105) En: http://www.minjus.gob.pe/ (acceso el 31 de enero de 2006).
(106) Artículo IV del Anteproyecto de Enmiendas al Código Civil.- Aplicación de las normas legales
Las normas legales que establecen excepciones a una regla general, que restringen derechos o que establecen sanciones, se
aplicarán estrictamente a los casos previstos por ellas, sin que pueda realizarse interpretación extensiva ni aplicación
analógica.
(107) CASTILLO FREYRE. Op. cit. Pág. 38.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 129


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

propuesta es inaplicable porque simplemente no se entien- que socialmente se considera como arquetipo”(111). Este
de. ¿Qué es un derecho en contradicción? ¿La licitud es concepto mixto de buena fe se concreta en la propuesta
aplicable a un “derecho de contradicción”? ¿En qué casos siguiente:
alguien tiene un motivo justificado para confiar razona-
“Artículo V.- Buena fe
blemente en que no se ejercerá tal derecho?
Los derechos se ejercen y los deberes se cumplen confor-
A pesar de la vaguedad de la norma propuesta se ha afir-
me a la buena fe”.
mado que “la propuesta de norma incluye los tres elemen-
tos necesarios para que opere la doctrina: (i) una conducta Las propuestas sobre la doctrina de los actos propios y la
anterior que generó confianza; (ii) una pretensión (‘ejer- buena fe fueron transcritas textualmente con los mismos
cicio de un derecho’) contradictoria con esa conducta; y, argumentos en otro documento(112).
(iii) la identidad de los sujetos. Es importante enfatizar
que para el proyecto de norma la confianza tiene que ha- Ahora tales normas propuestas forman parte de las “pro-
ber sido “razonablemente” vulnerada, lo cual confirma, puestas de reformas urgentes al Código Civil y su exposi-
en nuestra opinión, que el principio de la buena fe inspira ción de motivos” que han sido difundidas para su debate
la aplicación de la doctrina desde una perspectiva objeti- según la Resolución Ministerial Nº 043-2006-JUS de 3
va”(108). De acuerdo a este marco teórico la doctrina de los de febrero de 2006(113). Lo curioso de estas nuevas pro-
actos propios se convierte en una regla de Derecho “Na- puestas es el cambio que ha sufrido la exposición de mo-
die puede ir válidamente contra sus propios actos”(109). No tivos sobre el concepto de buena fe.
entendemos cómo se aplica la validez al comportamiento Antes de la publicación de la resolución ministerial men-
anterior. cionada, la exposición de motivos del Anteproyecto de
Enmiendas al Código Civil de 2005 decía que la buena fe
Es difícil saber el origen de la norma propuesta sobre los
era un concepto objetivo y más adelante se decía que tam-
actos propios. Sin embargo, hay una fuente que nos puede
bién puede ser subjetivo:
ayudar a entender su origen.
“El artículo V contiene una nueva disposición que consa-
De acuerdo a las indagaciones realizadas la propuesta so-
gra la buena fe objetiva en atención a que se trata de un
bre la doctrina de los actos propios aparece publicada en
principio consustancial a nuestro Derecho y a nuestra tra-
1998. Se fundamenta así:
dición jurídica. La Comisión pretende, con esta norma,
“Si después de cierto tiempo de haberse producido la que la buena fe pueda ser siempre invocada a favor de una
relación jurídica las partes se comportan de tal manera correcta y limpia aplicación del Derecho.
que fijan una forma de entender las cosas, no pueden
El efecto hermenéutico de este artículo consiste en intro-
actuar de otra manera a la que supuestamente ya estaba
ducir la buena fe en toda norma que contenga un derecho
establecida. Para que quede tipificada la situación se
o un deber. Quien es el titular de ellos, siempre deberá
requiere que la razonabilidad sea de la confianza antes tener buena fe al obrar y, consiguientemente, siempre po-
que del motivo, puesto que este último puede ser por drá exigirla. Los jueces, al decir Derecho, también debe-
cualquier causa, además de aplicar el principio de la rán tomar a la buena fe como una regla siempre aplicable.
buena fe”(110).
La buena fe es un principio de relación entre sujetos de
Para el ponente la “buena fe puede entenderse en sentido Derecho. Una persona solo tiene buena fe frente a una
subjetivo y objetivo. El primero se refiere a la intención contraparte. Esto diferencia a la buena fe de la ausencia
de las personas o a su creencia en el obrar. Es el caso del de dolo o de culpa: estos dos elementos son internos del
poseedor ilegítimo, que tiene buena fe cuando cree en su sujeto que actúa y se analizan dentro de su propio yo. La
legitimidad, bien sea por ignorancia o error. En sentido buena fe es una exteriorización hacia el otro y consiste en
objetivo se juzga la conducta del individuo y se estima actuar limpiamente frente a él”.
que tiene buena fe cuando dicha conducta se ajusta a lo
que es recto y honesto. La buena fe es en ese sentido lo Ahora se excluye la mención expresa de “buena fe objeti-
que se llama un ‘estándar jurídico’, es decir, una conducta va” y ahora se convierte en un principio:

(108) O´NEILL DE LA FUENTE. Op. cit. Pág. 54.


(109) Id. Pág. 45.
(110) LOHMANN, Juan Guillermo. “Reforma del Título Preliminar”. En: Reforma del Código Civil peruano, Doctrina y en-
miendas, Instituto de Investigación Jurídico-Notarial. Gaceta Jurídica. Lima, 1998. Pág. 58.
(111) Op. cit. Pág. 57.
(112) SOTO COAGUILA, Carlos. “El Título Preliminar del Código Civil peruano: ¿Reforma o enmiendas?”. Págs. 153-165.
(113) Publicada en el diario oficial “El Peruano” el 5 de febrero de 2006 y también en la página web del Ministerio de Justicia
(www.minjus.gob.pe).

130
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
“La buena fe es un principio consustancial a nuestro dere- aplicable, el juez se pronuncia según el Derecho consue-
cho y a nuestra tradición jurídica. La comisión pretende, tudinario, y en defecto de costumbre, según las reglas
con esta norma, que la buena fe pueda ser siempre invocada que él establecería si actuara como legislador’”(114).
a favor de una correcta y limpia aplicación del Derecho.
Sin duda la propuesta normativa constituye un trasplante
El efecto hermenéutico de este artículo consiste en intro- jurídico siguiendo la ley del mínimo esfuerzo que “ex-
ducir la buena fe en toda norma que contenga un derecho plica también con evidencia la importancia de la lengua
o un deber. Quien es el titular de ellos, siempre deberá en las imitaciones jurídicas. Se imita importando modelos
tener buena fe al obrar y, consiguientemente, siempre po- expresivos en lenguas que se conocen. No se hace de nin-
drá exigirla. Los jueces, al decir Derecho, también debe- guna manera investigación racional de la mejor regla, se
rán tomar a la buena fe como una regla siempre aplicable. importa la regla expresada en un lenguaje jurídico cono-
cido”(115).
La buena fe es un principio de relación entre sujetos de
Derecho. Una persona solo tiene buena fe frente a una Otra afirmación equivocada es criticar una solución jurí-
contraparte. Esto diferencia a la buena fe de la ausencia dica alemana sin conocer el uso de la cláusula normativa
de dolo o de culposidad: estos dos elementos son internos general de la buena fe objetiva. Erróneamente se declara
del sujeto que actúa y se analizan dentro de su propio yo. al respecto que el “respeto a la ley y a los contratos es lo
La buena fe es una exteriorización hacia el otro y consiste que brinda seguridad jurídica a las personas y a la socie-
en actuar limpiamente frente a él”. dad en su conjunto. Por el contrario, interpretar el silencio
de una persona como la renuncia al ejercicio de un dere-
En ambas exposiciones de motivos se dice que la buena fe cho subjetivo en virtud de la teoría de los actos propios, es
es un principio y a la vez una regla. impropio y equivocado. De realizar esta clase de interpre-
Concordamos con las críticas realizadas a la propuesta taciones solo generaremos el caos jurídico y una fuerte
sobre la buena fe expuesta contundentemente por León: inseguridad jurídica”(116). ¿Acaso no se producirá un caos
jurídico y una inseguridad jurídica regulando la doctrina
“Es indefendible, entonces, la idea de incorporar el llama- de los actos propios en nuestro sistema jurídico?
do ‘principio general de la buena fe’ al título preliminar
del Código Civil, como se leía en algún proyecto de refor- Hasta aquí la historia de la propuesta explica muchas co-
ma, con el enunciado: ‘los derechos se ejercen y los debe- sas. La mayoría de las doctrinas española, argentina, chi-
res se cumplen conforme a la buena fe’. Esta línea o pro- lena y peruana (la mayoría) tomó muy parcialmente una
puesta no tiene nada de original. Es una poco feliz adapta- cita de Enneccerus y se leyeron superficialmente las obras
ción –que dice ‘deberes’ donde debería decir ‘obligacio- de Puig Brutau y de Díez-Picazo. Para rematar se combi-
nes’– del artículo 2, 1er. párrafo del título preliminar del nó todo con las doctrinas y las jurisprudencias española,
Código Civil suizo de 1907: ‘Chacun est tenu d’exercer argentina y chilena. La norma propuesta es el resultado de
ses droits et d’exécuter ses obligations selon les règles de una combinación incomprensible y una prueba de la au-
la bonne foi’, esto es, ‘cada cual está obligado a ejercer sencia de conocimientos de qué se entiende por doctrina
sus derechos y ejecutar sus obligaciones según las reglas de los actos propios y cómo se ha aplicado en otros siste-
de la buena fe’. Tal norma que sirvió de inspiración para mas jurídicos.
el artículo 7, 1er. párrafo del título preliminar del Código
IV. DETERMINACIÓN DE LOS PROBLEMAS ABOR-
Civil español, en una reforma que tuvo lugar en 1974: DADOS POR LA DOCTRINA DE LOS ACTOS
‘los derechos deberán ejercitarse conforme a las exigen- PROPIOS. UTILIDAD O INUTILIDAD DE LA
cias de la buena fe’. Claro que el legislador suizo –y lo DOCTRINA DE LOS ACTOS PROPIOS
que sigue es algo que no se puede ignorar– tuvo la sensa- El Nemo potest contra factum proprium venire en Alema-
tez de establecer, en el mismo título preliminar de su Có- nia consistía en varios comportamientos y situaciones. El
digo Civil (y en su primer artículo, 2 párrafo) que: ‘a dé- primer comportamiento comportaba “hacer creer de ha-
faut d’une disposition légale applicable, le juge pronon- ber renunciado o de querer renunciar a una ventaja que el
ce selon le droit coutumier et, a défaut d’une coutume, derecho le ofrece”(117). Para algunos este comportamiento
selon les règles qu’il établirait s’il avait à faire acte de era un verdadero negocio jurídico y si es así la “doctrina
legislateur’, esto es, que ‘en defecto de una disposición de la prohibición de contradicción se convertirá superflua,

(114) LEÓN, Leysser L. “La reforma del Código Civil vista en serio”. Pág. 308.
(115) MATTEI y MONATERI. Op. cit. Pág. 44.
(116) SOTO COAGUILA. Op. cit. Págs. 4-5. Id. “El Título Preliminar del Código Civil peruano: ¿Reforma o enmiendas?”.
Pág. 164.
(117) SACCO. Op. cit. Pág. 232.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 131


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

la confianza del damnificado cesará de estar condiciona- derecho y acción que se halle en contradicción con una
da a su prestación”(118). Por eso, este primer comportamien- conducta y forma de comportarse anterior, contradictoria
to no es un negocio jurídico sino una “acción voluntaria, e incompatible con dicho ejercicio. A todo ello cabe aña-
que se podrá llamar Willensbetätigung [actos sin declara- dir que cuando en determinada relación jurídica uno de
ción]”(119). Luego de este comportamiento nace una situa- los sujetos actúa de manera que produce en el otro una
ción de confianza sin culpa en el damnificado. La “con- fundada confianza de que, por la significación de su dere-
fianza debe ser calificada por un daño sufrido por el dam- cho subjetivo (artículo 7.1 CC) y convierte en inadmisi-
nificado (por ejemplo el damnificado realiza gastos, ble la pretensión de que resulte contradictoria con dicha
convencido de poder recuperar o de poder cobrar un co- precedente forma de proceder”.
rrespectivo)”(120). Al final, debe haber un comportamiento
La sentencia citada resuelve un caso en que una parte des-
del dañador que se contradice con su primer comporta-
conoció las conclusiones de un dictamen de un arquitecto
miento. Esta retractación “debe ser desleal, si ella genera a pesar de la existencia de un contrato de obra formaliza-
consecuencias intolerables”(121). do en un documento privado. En una cláusula se estipuló
Para que opere la Verwirkung debe existir un comporta- que las partes aceptaban y se sometían al “contenido del
miento omisivo que se traduce en la inercia prolongada en dictamen que en su día emita el arquitecto, sin que pueda
el tiempo de no ejercer un derecho. La doctrina alemana se efectuarse recíprocamente reclamación”. El comportamien-
divide en dos posiciones. Este comportamiento es “un acto to de reclamar se interpretó como un comportamiento con-
(concluyente o tácito) de disposición, según el cual renun- trario al comportamiento de adhesión al contrato de obra.
cia eficazmente al derecho. Entonces, la inercia del titular ¿Era necesario aplicar la doctrina de los actos propios para
es un negocio, y perfecciona el hecho jurídico [fattispecie] resolver el caso concreto? ¿No bastaba interpretar el con-
extintivo del derecho. O, el intérprete debe buscar los ele- trato y declarar jurídicamente quién tenía la razón jurídi-
mentos que, juntos a la inercia, completen el hecho jurídico ca? Pensamos que la aplicación de la doctrina de los actos
[fattispecie] de la Verwirkung. Y naturalmente, la confian- propios puede afectar el ejercicio del derecho a una tutela
za del sujeto del deber adquiere un lugar importante”(122). efectiva mediante la aplicación de la declaración judicial
o arbitral de inadmisibilidad y peor aún en un Código Pro-
En España es abundante la jurisprudencia sobre la doctri- cesal como el nuestro “inspirado en una ideología autori-
na de los actos propios. A modo de ejemplo citaremos un taria que ha llegado, incluso, a impedirles impugnar (o
párrafo de una sentencia(123): “diferirles” la impugnación que es lo mismo) de muchas
“La doctrina de los actos propios requiere, entre otros ex- trascendentes resoluciones judiciales expedidas durante
tremos actos concluyentes para crear, modificar o extin- el desarrollo del proceso, dejándolas totalmente a merced
guir la relación jurídica. La esencia vinculante del acto de un (probable) arbitro judicial”(124). Nuestra preocupa-
propio en cuanto significativo de la expresión del consen- ción no es infundada. La propia sentencia dice más ade-
timiento, es que se realice con el fin de crear, modificar o lante que “debe impedirse que la parte que se considere
extinguir algún derecho, con exigencia de que origine un perjudicada por esa decisión de fondo pueda de nuevo
nexo causal eficiente entre el acto realizado y su incompa- plantearse la misma ante los tribunales, cuestionándose
tibilidad con la conducta posterior y fundamento en un así el objetivo que la cuestión del arbitraje pretende con-
comportamiento voluntario, concluyente e indubitable, de seguir”. Como vemos, en el caso concreto se impide ejer-
cer el derecho de impugnar judicialmente una decisión
tal modo que defina de modo inalterable, la situación del
arbitral. Además, la sentencia considera que la sola mani-
que lo realiza (SSTS 12-7-1990 [RJ 1990,5856],5-3-1991
festación de voluntad de celebrar el contrato con la otra
[RJ 1991, 1718],4-6-1992 [RJ 1992, 4999], 12-4-1993
parte comporta la renuncia a ejercer el derecho de cuestio-
[RJ 1993, 2995] Y 20-5-1993 [RJ 1993, 3809]). Es decir
nar el contenido del dictamen por razones jurídicas fun-
que la conocida doctrina de que nadie puede ir contra sus
dadas.
propios actos ‘contra actum proprium veniere qui non
potes’, califica y tilda de inadmisible el ejercicio de su Otro caso español es paradigmático(125):

(118) WIELING. Venire contra factum proprium und Verschulden gegen sich selbst, Arch. F. civ. Praxis, 1976, 334, tr. It. Favale,
in Rass. dir. ci, 1994, 409. Citado en SACCO. Op. cit. Pág. 233.
(119) SACCO. Op. cit. Pág. 233.
(120) DETTE. Venire contra factum proprium nulli conceditur. Berlín, 1985. Pág. 68. Citado en SACCO. Op. cit. Pág. 233.
(121) DETTE. Op. cit. Pág. 65. Citado en SACCO. Op. cit. Pág. 233.
(122) SACCO. Op. cit. Pág. 235.
(123) Sentencia de la Audiencia Provincial de Córdova de 22 de diciembre de 1999.
(124) ARIANO DEHO, Eugenia. “En defensa del derecho de impugnar en el proceso civil (Vicisitudes de una garantía «incom-
prendida)”. En: Problemas del proceso civil. Jurista Editores, Lima, 2003. Pág. 230.
(125) Sentencia del Tribunal Supremo de 10 de abril de 2003.

132
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
“Desde el fallecimiento de D. Domingo, padre de actora y sentido que de buena fe hubiera de atribuirse a la conduc-
demandadas, han venido disponiendo ellas de las fincas ta precedente”.
en la forma en que posteriormente se adjudicaron; el 28
Esta sentencia corrobora nuestra objeción para aplicar la
de julio de 1989 la actora obtuvo una copia del testamento
doctrina de los actos propios en nuestro sistema jurídico.
que su padre otorgó en 1984 y desde 1946 los capítulos
La sentencia transcrita aplica la doctrina de los actos pro-
de 1941 estaban inscritos en el Registro de la Propiedad
pios para impedir, mediante la declaración de inadmisibili-
de Boltaña; aún más, en el momento del otorgamiento de
dad, el ejercicio del derecho de solicitar la nulidad del testa-
la aceptación de herencia de 1995, los capítulos matrimo-
mento porque la demandante aceptó “previamente con to-
niales se encontraban en el despacho del notario, puesto
tal conocimiento de causa y libertad”. ¿Existió manifesta-
que en lo menester se hizo referencia a ellos en tal escritu-
ción de voluntad de negarse en el futuro a pedir la nulidad
ra, y en ese momento bien pudo la recurrente solicitar un
del testamento? ¿Acaso no tiene el derecho de pedir la nuli-
aplazamiento de la firma hasta quedar debidamente im-
dad de un negocio jurídico a pesar de haber prestado su
puesta, informada y asesorada del contenido y alcance de
manifestación de voluntad de aceptación del testamento?
aquella disposición testamentaria, información y asesora-
miento que a buen seguro el propio notario autorizante le Nuestra tesis es la siguiente. La doctrina de los actos pro-
habría facilitado, pero sin embargo no tuvo reparo en pro- pios se desarrolló en los países del common law mediante
ceder a la firma del documento. Por todo ello, en modo el estoppel sin el uso del concepto de la buena fe objetiva
alguno puede invocarse la existencia de error y mucho (Treu und Glaube, literalmente, “fidelidad”, Treue, y “fe”,
menos el dolo que la recurrente atribuye indebidamente a Glaube). El uso de dicho concepto fue retomado por los
la contraparte. alemanes al desarrollar las diversas formas de ejercicio de
la exceptio doli generalis seu praesentis (excepción de
Lo expuesto nos conduce a afirmar que la aplicación que dolo genérico o presente) del Derecho Romano.
realizó el Tribunal de Instancia del principio de los actos
propios resulta obligada y correcta en cuanto le llevó a Un caso similar sucede en materia de responsabilidad por
afirmar que la recurrente actuó contra sus propios actos al ruptura de las tratativas en los países del common law en
pretender la nulidad de un testamento que aceptó con to- que se prescinde del uso de la cláusula normativa general
tal conocimiento de causa y libertad, sin que pueda pre- del deber de buena fe precontractual(126).
tender que haya sobrevenido posteriormente circunstan- Es paradójico, pero los alemanes al desarrollar la doctrina
cia nueva sobre las que ya conocía y tuvo en cuenta al de los actos propios nunca la relacionaron con los proble-
tiempo de la aceptación y división de la herencia de su mas jurídicamente relevantes de la responsabilidad prene-
fallecido padre. gocial. Un ejemplo claro es Medicus para quien “el § 242
Téngase en cuenta que el principio general de Derecho tiene que completar también el referido plan de valori-
que afirma la inadmisibilidad de venir contra los propios zación, en particular, llenar lagunas. Se trata, preferente-
actos, al que incluso se hacía referencia en el texto de Las mente, de los casos de aplicación de la exceptio doli (ex-
Partidas, supone un límite del derecho subjetivo o de una cepción de dolo) del derecho común: el ejercicio de los
facultad, como consecuencia de la buena fe y de la exi- derechos es improcedente cuando falta la buena fe.
Ejemplos son, la prohibición de la contradicción con-
gencia de la observancia de una coherencia en el ámbito
sigo mismo (venire contra factum proprium), que a la
del tráfico jurídico y siempre que concurran los presu-
vez, protege la confianza en el tráfico jurídico; y el su-
puestos o requisitos exigidos por la doctrina para su apli-
puesto especial de prescripción. Además se incluyen
cación:
ahora las reglas, de que nadie por su propia conducta
a) En primer lugar, que los actos propios sean inequívo- contraria a ley o a la costumbre, puede derivar una ac-
cos, en el sentido de crear, definir, fijar, modificar, extin- ción (turpitudinem suma allegans nemo auditur; vid.:
guir o esclarecer sin duda alguna una determinada situa- Parte especial § 127 II, 4b) y que nadie puede reclamar lo
ción jurídicamente afectante a su autor y, asimismo, b) que de inmediato se le ha restituido (dolo agit qui petit
que exista una incompatibilidad o contradicción según el quod redditurus est)”(127). Estas expresiones de Medicus

(126) LEÓN. “La buena fe en la negociación de los contratos: apuntes comparatísticos sobre el artículo 1362 del Código Civil
peruano”. Op. cit. Págs. 131-132. “Esta singularidad del common law inglés, es decir, su tradicional desconfianza frente al
criterio de la buena fe, representa uno de los puntos críticos en los actuales intentos de los académicos empeñados en la
uniformización del derecho contractual europeo. En Estados Unidos, la buena fe precontractual tampoco es considerada
como un deber general en la negociación de los contratos”.
(127) MEDICUS, Dieter. “Tratado de las relaciones obligacionales”. Volumen I. Edición española de Ángel Martínez Sarrión.
Bosch. Casa Editorial. Barcelona, 1995. Pág. 77.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 133


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

forman parte del capítulo de la buena fe como princi- circunstancias en cuya virtud su obrar es un ‘acto con-
pio general y en particular la buena fe como norma jurí- cluyente’” (132). En cambio, la conducta jurídicamente
dica. En cambio, Medicus estudia la culpa en las nego- relevante no es una declaración porque no tiene como
ciaciones del contrato en otro capítulo sin referencia a la finalidad configurar relaciones jurídicas.
doctrina de los actos propios(128).
Los comportamientos en la doctrina de los actos propios
También Flume diferencia entre la Verwirkung por con- “una vez efectuados, impiden al interesado venire contra
ducta, en especial la Verwirkung por “guardar silencio”, factum proprium [actuar contra un hecho propio anterior].
frente a la culpa in contrahendo como supuesto de he- En esos comportamientos, bien puede faltar al interesado
cho normativo de una conducta jurídicamente relevan- una voluntad destinada a las consecuencias vinculantes
te. Según la teoría de la culpa in contrahendo “lo que de su comportamiento; pero el hecho de deberlas conocer
ocurre es que por el comienzo de las negociaciones con- y prever tiene lugar –según la evaluación judicial y jurídi-
tractuales se constituyen ex lege deberes, cuya viola- ca– en la conciencia efectiva”(133).
ción conduce al deber de indemnizar los daños”(129). Así
La Verwirkung en el ordenamiento alemán es un instituto
las cosas, Flume tiene muy nítida la diferencia entre
que comporta la pérdida del derecho por la inercia del ti-
negocio jurídico que es “una reglamentación privada”
tular prolongada en el tiempo. Pero en el ordenamiento
y la conducta jurídicamente relevante que “aunque pro-
jurídico italiano es inaplicable porque no existe ningún
duzca los mismos efectos jurídicos que una regulación
instituto jurídico que se le asemeje. Si “el titular del dere-
jurídico-negocial, no es una reglamentación, sino que
cho no lo ejercita por un tiempo inmemorable, que induz-
es regulada, es el supuesto de hecho normativo de una
ca al sujeto pasivo la confianza sin culpa en mérito al de-
regulación ex lege, que se produce en virtud de una
finitivo no ejercicio del derecho, no puede sucesivamente
valoración jurídica de la conducta”(130). La “conducta
ejercitarlo: el ejercicio configuraría un abuso (el abuso es
jurídicamente relevante no es una configuración crea-
el “ejercicio contrario o también extraño a la función de la
dora de relaciones jurídicas, en que incluso no es una
situación subjetiva”)(134), un comportamiento incorrecto,
reglamentación, sino que es el Ordenamiento jurídico
desleal. No obstante en el ordenamiento italiano no existe
el que determina, a consecuencia de una valoración ju-
un instituto parangonable a la Verwirkung, que se basa en
rídica, los efectos jurídicos de la conducta”(131). Por lo
la buena fe en sentido objetivo”(135).
tanto, la conducta jurídicamente relevante no es una
declaración de voluntad ni tampoco una declaración de En efecto, en Italia la doctrina de los actos no se aplica
voluntad tácita. Así, el “‘acto concluyente’ es una de- según la fuente citada. Gazzoni nos dice que este “institu-
claración de voluntad o un negocio de voluntad, es la to (denominado en Alemania Verwirkung [Patti, D, XIX,
prueba de la configuración jurídico-negocial. Mas so- 722]) no halla espacio en nuestro ordenamiento a pesar de
lamente es una reglamentación jurídico-negocial cuan- las posibles señales de los artículos 833(136), 1175(137) y
do el que actúa concluyentemente es consciente de las 1375(138) y al abuso del derecho coligado al venire contra

(128) MEDICUS. Op. cit. Págs. 58-65.


(129) FLUME. Op. cit. Pág. 167.
(130) Id. Pág. 149.
(131) Id. Pág. 150.
(132) Id. Págs. 152.
(133) BETTI, Emilio. Voz Negozio giuridico. En: Novissimo Digesto Italiano Diretto da Antonio Azara e Ernesto Eula. Tomo
XI. UTET. Turín, 1965. Pág. 211. También en: Id. “Reflexiones sobre la noción de negocio jurídico”. En: Teoría general
del negocio jurídico, 4 Estudios Fundamentales. Traducción y edición al cuidado de Leysser L. León, Ara Editores. Lima,
2001. Pág. 40.
(134) PERLINGIERI P. y FEMIA. “Dinamica delle situazioni soggettive”. En: Manuale di diritto civile. Edizioni Scientifiche
italiane. Nápoles, 1997. Pág. 83.
(135) PERLINGIERI P. y MINERVINI, E. “Prescrizione e decadenza”. En: Manuale di diritto civile. Edizioni Scientifiche
italiane. Nápoles, 1997. Págs. 83 y 332.
(136) Artículo 833 del Código Civil italiano de 1942. Actos de tolerancia.- El propietario no puede realizar actos que no tengan
otro fin que la de perjudicar o de causar molestia a otros.
(137) Artículo 1175 del Código Civil italiano de 1942. Comportamiento con arreglo a la lealtad.- El deudor y el acreedor deben
comportarse con arreglo a las reglas de la lealtad [correttezza].
(138) Artículo 1375 del Código Civil italiano de 1942. Ejecución de buena fe.- El contrato debe ser ejecutado con arreglo a la
buena fe.

134
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
factum proprium”(139). Además es ignorada por la juris- “2) Un contrato por escrito que contenga una estipula-
prudencia italiana(140). ción que exija que toda modificación o extinción por
mutuo acuerdo se haga por escrito no podrá modificar-
Scalisi nos dice que el “fundamento de los efectos jurídi- se ni extinguirse por mutuo acuerdo de otra forma. No
cos que el comportamiento produce sin que el sujeto lo
obstante, cualquiera de las partes quedará vinculada por
quiera y, sobre todo, lo sepa, se basa en el principio de la
sus propios actos y no podrá alegar esa estipulación en
confianza (Vertrauens-Prinzip) y más en particular de la la medida en que la otra parte se haya basado en tales
prohibición del venire contra factum proprium, que es
actos”.
expresión de la regla de la buena fe”(141).
También el artículo 2:105 de los Principios de Derecho
Pensamos que Scalisi da un argumento demoledor para la
Europeo de los Contratos: Cláusula de integridad (Mer-
inaplicación de la doctrina de los actos propios al decir ger clause):
que “basta solamente demostrar que el esquema de la ma-
nifestación de voluntad no juega en tales casos ningún rol “(4) Las declaraciones o el comportamiento de una parte
y que por eso su intervención no solo es impropia sino pueden provocar la pérdida del derecho a alegar una cláu-
inútil”(142). sula de integridad si la otra parte se ha basado en ellos de
manera razonable”.
El hecho jurídico que es tomado en cuenta para aplicarle
el segundo hecho jurídico que se contrapone al primero El artículo 2:106 de los Principios de Derecho Europeo de
carece de la calidad de manifestación de voluntad. Si el los Contratos: Estipulación de modificación por escrito:
primer hecho jurídico no constituye una manifestación de
“(2) Las declaraciones o el comportamiento de una parte
voluntad no cabe aplicarle efectos jurídicos tomando en
pueden provocar la pérdida del derecho a alegar dicha
cuenta esa calidad porque no existe un “acto de elección y
cláusula si la otra parte se ha basado en ellos de manera
de decisión, y esto es como explicación de una libre y
razonable”.
autónoma determinación del privado”(143).
El artículo 1.8 de los Principios sobre los Contratos Co-
De acuerdo con lo expresado es razonable que en los
merciales Internacionales (Unidroit) de 2004: (Compor-
contratos las partes estipulen cláusulas de estilo a fin
tamiento Incoherente):
de evitar malas aplicaciones de la doctrina de los actos
propios: “Una parte no puede actuar en incoherencia contra una
creencia que ella ha causado a la otra y según la cual esa
“El solo hecho que alguna de las partes no ejerza algunos
otra parte ha actuado en su detrimento, fiándose razona-
de los derechos que le confiere el contrato no podrá inter-
blemente y en su desventaja”.
pretarse, en ningún caso, como una renuncia a tal dere-
cho, el cual se mantendrá vigente en tanto subsista el he- Sacco manifiesta que estas normas “prefieren hacer de la
cho que le dio origen. Cualquier renuncia a derechos con- prohibición de contradecirse un principio general, o al
feridos por el contrato deberá ser expresa y por escrito”. menos mencionando el estoppel y el principio de la
buena fe. Y las decisiones de las cortes tribunales re-
La doctrina de los actos propios se basa en el deber de
curren regularmente al principio de coherencia”(144).
actuar coherentemente. Actualmente existen normas de
Es claro que estas normas tienen una clara influencia
comercio internacional según las cuales vinculan a las
de las doctrinas y de las jurisprudencias anglosajonas
partes por sus actos propios. Por ejemplo el numeral 2 del
y alemana.
artículo 29 de la Convención de las Naciones Unidas so-
bre los contratos de compraventa internacional de merca- Por otro lado, la doctrina nacional ha invocado algunas
derías de 1980 dice lo siguiente: normas del CC que probarían que la doctrina de los actos

(139) GAZZONI, Francesco. “Manuale di diritto privato”. X edizione aggiornata e con riferimenti di dottrina e di giurispruden-
za. Edizioni Scientifiche Italiane. Nápoles, 2003. Pág. 116.
(140) Op. cit. Pág. 974.
(141) SCALISI, Vincenzo. “Il negozio giuridico tra scienza e diritto positivo, Teoria, Manifestazione, Astrazione, Inefficacia”.
Giuffrè Editore. Milán, 1998. Pág. 176.
(142) Op. cit. Pág. 177.
(143) Id. Pág. 178.
(144) SACCO. Op. cit. Pág. 246.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 135


J URISPRUDENCIA CIVIL PATRIMONIAL

propios está regulada(145). Un ejemplo es el artículo 229(146) En la sentencia bajo comentario, la sociedad conyugal
el cual regula la posibilidad de plantear la excepción de Yánez Llerena pretende se declare la nulidad del contrato
oposición de la nulidad si una parte alega la nulidad de un de compraventa con pacto de retroventa contenido en la
acto pero una de las partes que celebró el acto ocultó su escritura pública de 30 de noviembre de 1995, así como
incapacidad. Se ha dicho que en “doctrina nacional, se de la nulidad del instrumento que lo contiene y la inscrip-
califica esta situación como de una exceptio doli. Desde ción respectiva. Dirige la demanda contra la sociedad con-
mi punto de vista, se trata de un aplicación del principio yugal conformada por los esposos Verano-Romero. Este
de los actos propios, la exceptio doli es una excepción que hecho jurídico se contradice, según el vocal ponente, con
‘legitima para enervar, repeler o detener la pretensión del hechos jurídicos que consistían en la celebración de con-
titular del derecho’. En este supuesto, es el incapaz que, tratos similares entre las mismas partes por el que la socie-
aparentado ser capaz, ha inducido a un tercero a celebrar dad conyugal Yánez-Llerena había transferido vía com-
un acto y, como consecuencia de ello, el ordenamiento praventa el mismo predio rústico a favor de la sociedad
jurídico le impide al incapaz ‘ir en contra de sus propios conyugal Verano-Romero, pactando la posibilidad de re-
actos’. Sin embargo, exceptio doli o actos propios, el re- trotraer el referido bien en el plazo de siete meses, habien-
sultado sería el mismo. No hacer valer una situación in- do ejercido la sociedad conyugal Yánez-Llerena tal dere-
justa”(147). Nosotros disentimos de tal afirmación. Tal nor- cho en una oportunidad, readquiriendo la propiedad del
ma regula claramente los hechos y los efectos jurídicos bien. En realidad el contrato de compraventa con pacto de
abstractos y por eso no es necesario aplicar la doctrina de retroventa era un contrato simulado y el contrato de mu-
los actos propios. tuo era el contrato disimulado.
La doctrina de los actos propios, que se concreta en un Se ha dicho que la única conexión entre la simulación y la
acto inicial creador de confianza, “ha tardado y tarda de doctrina de los actos propios es “la protección de terceros,
hallar una definición óptima”(148). frente a un negocio simulado, actúa a base de la posibili-
dad que aquellos tienen de impugnar la apariencia del ne-
De acuerdo a nuestra tesis de la inaplicabilidad de la doc-
gocio resultante de la simulación; mientras que, en la doc-
trina de los actos propios en nuestro sistema jurídico, las
trina de los actos propios y en la de estoppel, se trata de la
normas jurídicas que aparentemente regulan tal doctrina
situación opuesta, a saber, de tener que estar y pasar por lo
en realidad determinan claramente los hechos y efectos
realizado, aunque haya sido simulado, siempre que haya
jurídicos correspondientes sin necesidad de aplicarla. Si
bastado para crear una apariencia engañosa frente a terce-
las propias normas contienen todos sus elementos no se
ros. Pero si se prescinde de considerar el interés de estos,
entiende porqué debemos aplicar una doctrina impracti-
surge la duda de si, en semejante caso, podrán las partes
cable e injusta en nuestro sistema jurídico.
que se confabularon para realizar una simulación invocar
entre ellas la doctrina de los actos propios. Creemos lo
V. ANALIZANDO LA JURISPRUDENCIA
más procedente negarlo”(150). Concordamos con estas ex-
La simulación ha sido mal regulada en el Código Civil presiones solamente en cuanto a la ausencia de vincula-
peruano. Como lo hemos sostenido(149) el legislador esta- ción entre la simulación y la doctrina de los actos propios.
bleció efectos diferentes a las simulaciones absoluta y re-
lativa. El acto simulado es nulo en el caso de la simula- Aplicar la doctrina de los actos propios para negar el ejer-
ción absoluta y el acto simulado es ineficaz en el caso de cicio del derecho de pedir la nulidad o la ineficacia com-
la simulación relativa. Existe una evidente contradicción. porta una desnaturalización de la misma en un sistema
Esto se corrobora cuando se establece que únicamente la jurídico que ya ofrece soluciones jurídicas a los proble-
simulación absoluta es nula. mas relevantes que plantea tal doctrina.

(145) Increíblemente se dice lo siguiente: SOTO COAGUILA. “Teoría de los actos propios”. Op. cit. Pág. 5: “La teoría de los
actos propios no se encuentra regulada en el Código Civil, lo que desde luego no impide su aplicación por los operadores
del Derecho mediante una correcta interpretación del principio general de la buena fe”. Aquí si podemos aplicar la cohe-
rencia. Se aplica una doctrina aunque no esté regulada sin decirnos cómo (¡!).
(146) Artículo 229 del CC.- Si el incapaz ha procedido de mala fe ocultando su incapacidad para inducir a la celebración del
acto, ni él, ni sus herederos o cesionarios, pueden alegar la nulidad.
(147) ESPINOZA ESPINOZA. Op. cit. Págs. 474-475.
(148) SACCO. Op. cit. Pág. 437.
(149) MORALES HERVIAS, Rómulo. “Contrato simulado, Historia de una confusión entre su nulidad y su ineficacia”. En:
Normas Legales. Análisis jurídico. Tomo 346. Editora Normas Legales. Trujillo, marzo, 2005. Págs. 101-113.
(150) PUIG BRUTAU. Op. cit. Pág. 106.

136
ANÁLISIS Y CRÍTICA JURISPRUDENCIAL
VI. CONCLUSIONES soluciones jurídicas a los problemas relevantes que for-
6.1. La doctrina de los actos propios nació en el Derecho mula tal doctrina. Además su aplicación conllevará a de-
Romano a través de la exceptio doli generalis seu praesen- negar el ejercicio de los derechos reconocidos por el orde-
tis (excepción de dolo genérico o presente). Los países del namiento jurídico.
common law la desarrollaron mediante el estoppel sin el
La doctrina de los actos propios promueve normas jurí-
uso del concepto de la buena fe objetiva. El uso de dicho
dicas extrañas a nuestro sistema jurídico a través de
concepto fue retomado por los alemanes y para ello usa-
“enunciados jurídicos que no están en contradicción va-
ron el remedio de la estoppel del Derecho inglés mediante
lorativa con otras disposiciones o con principios básicos
la prohibición del venire contra factum proprium que com-
del ordenamiento, pero que tampoco pueden ser recon-
porta la prohibición de actuar contra un hecho propio an-
ducidos a una idea jurídica general y que, por ello, que-
terior a través de la cláusula general normativa de la bue-
dan valorativamente aislados en el seno del ordena-
na fe objetiva. También los alemanes desarrollaron la
miento jurídico”(151). Tenemos fe que estas palabras con-
Verwirkung o la pérdida del derecho por la inercia del ti-
tundentes de Canaris lleguen a las mentes y a los corazo-
tular de no ejercitarlo durante un tiempo inmemorable.
nes de los operadores jurídicos peruanos, y se conven-
6.2. La inaplicabilidad de la doctrina de los actos propios zan que la doctrina objetada por nosotros además de ser
en el Derecho Civil peruano se justifica porque ya existen impracticable es injusta.

(151) CANARIS, Claus-Wilhelm. “El sistema en la jurisprudencia”. Traducción de Juan Antonio García Amado. Fundación
Cultural del Notariado. Madrid, 1998. Pág. 148.

DIÁLOGO CON LA JURISPRUDENCIA Nº 89 137

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